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Asignatura: Odontogeriatría
Dra. Mónica Liberato Orjuela
“Yo tenía 80 años y vivía con mi hijo de 53, cuando un día, decidió que abusaría
sexualmente de mí. Él estaba furioso, me golpeó y me violó.”
INTRODUCCIÓN
La población adulta mayor está en un aumento rápido y progresivo a nivel mundial, lo cual
asocia del mismo modo un incremento progresivo de abuso y maltrato en la vejez, afectando
fuertemente la calidad de vida de esta población. Los tipos de abuso más frecuentes son el
físico, psicológico, económico y la negligencia. El Ministerio de Salud encontró que el 12%
de las personas mayores han sufrido maltrato en Colombia, el 12% reportaron maltrato
psicológico, 3,4% maltrato físico, 1,5% financiero y 0.3% sexual; el maltrato físico se
presenta más en estratos 1 y 2 y el financiero con mayor frecuencia en estratos 5 y 6, según
la Encuesta Nacional de Salud, Bienestar y Envejecimiento-SABE-2015.
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VIOLENCIA SEXUAL EN EL ADULTO MAYOR EN COLOMBIA
La OMS define la violencia sexual como “todo acto sexual, la tentativa de consumar un acto
sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados o las acciones para
comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante
coacción por otra, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier
ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo”. El adulto mayor es altamente vulnerable a
ser víctima de abuso sexual, ya que generalmente tienen capacidad disminuida para
defenderse a sí mismos, dependen en su mayoría de la asistencia de otros, tienen rutinas
predecibles, viven solos o en un asilo, tienen demencia o impedimentos de la capacidad
intelectual, generalmente son dominados económica y psicológicamente.
Ahora, el abuso sexual en el adulto mayor no está directamente relacionado con el deseo
sexual, por lo que los adultos mayores no son necesariamente menos susceptibles a ser
víctimas de abuso sexual, el motivo de este es el deseo de ejercer poder y control sobre otros,
humillar y hacer menos a la víctima; los perpetradores más comunes de abuso sexual en
ancianos incluyen amigos, familiares, auxiliares de enfermería, asistentes de hogares de
ancianos y otros tipos de proveedores de atención que se quedan solos para ofrecer algún tipo
de cuidado o ayuda a la persona mayor.
El abuso y la explotación sexual en el adulto mayor usualmente tiene tres categorías: Abuso
doméstico, abuso institucional y el abuso perpetrado por desconocidos.
Ahora, las cifras existentes de los casos denunciados de abuso sexual en Colombia y en el
mundo no dan cuenta de la real magnitud del fenómeno de la violencia sexual en el adulto
mayor, ya que las personas mayores que han sido abusadas sexualmente en su mayoría no
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presentan una denuncia formal, ya que en muchas ocasiones no les creen, o les revictimizan
a la hora de recibir la denuncia, a esto sumarle los roles de poder entre la víctima y el
victimario, la violencia económica, psicológica y física; y los que logran superar todo esto y
se deciden a denunciar, el caso generalmente termina en otorgar total impunidad para el
abusador.
Para este ensayo tomé 4 informes del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias
Forenses, cada uno de 2015, 2016, 2017 y 2018. Durante esos 4 años se presentaron un total
de 93.517 de los cuales el 0,32% corresponde a adultos mayores entre los 64 años y los 80 o
más años. En 2015, se presentaron 73 casos de abuso sexual en ancianos desde los 64 años y
los 80 años, de los cuales 66 fueron mujeres y 7 fueron hombres. Para 2016 se presentaron
un total de 68 casos de abuso sexual en ancianos en el mismo rango de edad anterior, de los
cuales 59 fueron mujeres y 9 fueron hombres. En 2017, se presentaron un total de 67 casos
de abuso sexual en ancianos, de los cuales 62 fueron mujeres y 5 fueron hombres. Y para
2018 se ve un aumento dramático, ya que se presentaron un total de 93 casos de abuso sexual
en ancianos, de los cuales 85 fueron mujeres y 8 fueron hombres.
2017
2016
2015
0 10 20 30 40 50 60 70 80 90
Mujeres Hombres
En la gráfica anterior se ve una leve disminución de los casos de abuso sexual en 2016, luego
vuelve a aumentar un poco en 2017 y en 2018 ya se ve un aumento mucho más grande que
en los demás años, en el cual las mujeres se ven más afectadas que los hombres en todos los
años que estamos revisando, pero mucho más en 2018. Las edades en las que más se
presentaron casos de abuso sexual son entre los 60 y los 64 años, siendo 102 el total de casos
de los cuales solo mujeres son 89. También se presentaron altas cifras de abuso sexual en las
edades entre los 80 años o más, siendo 65 el total de casos, de los cuales solo mujeres son
65, y recordemos que estas cifras es lo más cercano que podemos tener acerca de la violencia
sexual en el adulto mayor, porque no se ha contado las víctimas de violencia sexual que no
han realizado una denuncia.
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La Coalición contra la Violación de Pensilvania (PCAR), es una de las coaliciones más
activas en la evaluación de todos los tipos de abuso sexual, incluido el abuso sexual a
personas mayores el cual no es un fenómeno infrecuente ni aislado. Dicha organización se
dedica a educar al publico sobre el abuso sexual de personas mayores mediante la realización
de algunos de los estudios de investigación mas detallados en los EE.UU. sobre el tema del
abuso sexual de personas mayores. La investigación realizada por la Coalición contra la
Violación de Pensilvania sigue las siguientes estadísticas:
• Las mujeres tienen 6 veces más probabilidades de ser víctimas de abuso sexual a
personas mayores que los hombres.
• Solo aproximadamente el 30% de las víctimas de abuso sexual mayores de 65 años
reportan el abuso a las autoridades.
• Alrededor del 83% de las victimas de abuso sexual a personas mayores residen en un
centro de atención institucional, como un hogar de ancianos.
• El 27% de las victimas de abuso sexual de ancianos ocurrieron en su propio hogar o
en el hogar de los perpetradores y el 80% de las veces, el autor del abuso sexual era
el cuidador del anciano, de los cuales el 67% el abusador era miembro de la familia.
• Alrededor del 76% de las victimas mayores de abuso sexual han tenido su incidente
presenciado por otro.
Esto nos deja un panorama super grave y desalentador, entendiendo que cada día la población
anciana va creciendo exponencialmente a nivel mundial, y los riesgos que estas personas
tienen son altísimos, así que se tienen que implementar políticas públicas efectivas para la
protección del adulto mayor a todo tipo de violencia, pero más específicamente a la violencia
sexual de la que ellos son mucho más vulnerables.
TIPOS DE ABUSADOR
Es bien sabido por todos que el abuso sexual es un problema que no tiene edad, es decir, que
en todas las edades y etapas de la vida se puede ser víctima de violencia sexual. En Colombia
y en el mundo la mayor cantidad de abusos sexuales se los llevan las niñas y adolescentes,
luego las adultas jóvenes y mayores y por último las ancianas. Pero ¿por qué alguien querría
abusar sexualmente de una anciana? La respuesta a esta pregunta no debe enfocarse en la
víctima, ya que el abuso no depende inherentemente de ella, por lo que debemos enfocarnos
en el abusador, en las dinámicas del abuso y hacer una revisión psicológica del abusador. El
problema de fondo es la motivación por la que se comete el abuso y la preferencia por abusar
a personas mayores que a jóvenes, por ejemplo.
En este sentido, podemos hacer una caracterización de los abusadores según el motivo por el
que realizaron dicho abuso y las razones para preferir y elegir a una mujer anciana; para ello,
existen 3 categorías: El oportunista, la ira generalizada y la sexualización; y el de la
sexualización está subdividida en otras dos categorías el sádico y el no sádico.
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El motivo oportunista se refiere a un tipo de violador impulsivo, que no muestra ninguna
preparación o planificación para perpetrar el abuso, por lo general, estas personas no se
preocupan por la comodidad o bienestar de la víctima, ya que la violación es únicamente para
la gratificación sexual del agresor y, además, es de forma inmediata, por lo que no conlleva
a que el agresor tenga alguna fantasía o ritual desarrollado.
El motivo de ira generalizada se refiere a que el grado de fuerza y violencia utilizado en este
tipo de agresión es excesivo, la violencia y el maltrato son un componente integrado del
asalto aún cuando la víctima es obediente y puede causar lesiones graves e incluso, la muerte.
La base central de esta agresión es la violencia y la fuerza usada durante la agresión, no la
violación en sí.
Algunas señales físicas a las que debemos estar atentos son las lesiones en el área genital,
ropa interior que está rasgada, manchada o ensangrentada, dificultad para caminar o sentarse,
moretones o lesiones en las extremidades del cuerpo, pérdida de peso, enfermedades venéreas
o infecciones genitales inexplicables. En cuanto a señales emocionales debemos estar atentos
cuando el adulto mayor tiene miedo o rechazo a estar solo con la persona que los cuida,
depresión, confusión, enojo, comportamientos asociados a la demencia tal como mecerse,
morderse y chuparse el dedo. También debemos estar alertas a los comportamientos del
posible abusador, como, por ejemplo, dar a los ancianos demasiado medicamento, negarse a
que el anciano esté solo/a con sus visitantes y negarse o retrasarse para que el anciano no
tenga visitas.
Ahora, si se identifica que un adulto mayor está siendo abusado sexualmente es super
importante proporcionarle apoyo emocional a ese anciano, protegerlo contra el abusador,
proporcionarle apoyo médico y apoyo legal si así lo desea la víctima.
CONCLUSIONES
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Referencias
- http://taasa.org/wp-content/uploads/2015/05/BR_Seniors_SPAN_2014.pdf
- https://www.nursinghomeabusecenter.com/elder-abuse/types/sexual-abuse/
- https://www.nsvrc.org/sites/default/files/Elder_Sexual_Assault_Technical-
Assistance-Manual.pdf
- https://www.ncjrs.gov/pdffiles1/nij/grants/216550.pdf
- file:///C:/Users/laura/Downloads/FCE-Elder-Sexual-Abuse.pdf
- https://news.un.org/es/story/2019/06/1457811