Está en la página 1de 7

INTRODUCCION A LA SOCIOLOGIA

MAX WEBER
1864 – 1920

1.- Biografía

Weber nació en Erfurt, Turingia en Alemania, siendo


el mayor de los siete hijos de Max Weber (padre), un
prominente político del Partido Liberal Nacional en la
época de Bismarck, y su esposa Helene Fallenstein, una
calvinista moderada.

Estudió Derecho, Economía, Filosofía e Historia en


Heidelberg y Estrasburgo, y en 1889 obtuvo un doctorado
en leyes. Trabajó como abogado y luego se desempeñó
como profesor. Primero lo fue en Berlín (1892), más tarde
enseñó economía política en las universidades de Friburgo
(desde 1894) y de Heidelberg (desde 1897).

Con Simmel y Tonnies fundó, en 1910, la Sociedad


Alemana de Sociología.

Retomó la docencia universitaria en 1918, en las


Universidades de Viena y Munich. Formó parte de la
delegación alemana para la negociación de la paz en
Versalles y de la comisión que tuvo a su cargo redactar la
Constitución de Weimar. Todo ello poco antes de su
fallecimiento, acaecido el 14 de junio de 1920.
2.- Contexto Histórico

En marzo de 1848, la revolución estalló en Alemania estas


fueron una ola de manifestaciones populares que se
generalizaron en varias regiones de Europa en el primer
semestre de dicho año, ya que tras el Congreso de Viena
de 1815, las monarquías fueron restauradas en todos los
estados donde las Guerras Napoleónicas habían instalado
otros regímenes. Se instauró el principio de legitimismo
dinástico, por el cual las monarquías absolutistas que
habían sido sustituidas por el dominio napoleónico fueron
restablecidas. Este nuevo orden se impuso sin tener en
cuenta la opinión pública, lo que dio paso a un fervor
nacionalista y liberal que, junto con el desarrollo
industrial, provocó el surgimiento de movimientos
revolucionarios.

Una de las consecuencias fue que los estados de la


Confederación Germánica (que estaban constituidas por
pequeños estados regidos aun bajo el criterio monárquico)
formaran el primer Parlamento alemán en Fráncfort del
Meno, Asamblea Nacional alemana creada durante las
revoluciones de 1848, que trató de unir Alemania en una
manera democrática y donde se trabajo en la constitución
alemana.

Después de la discusión acerca de los derechos civiles, la


asamblea se fraccionó. A la derecha aparecieron los
federalistas conservadores, que propugnaban un estado
federal con amplios poderes para los monarcas. Hacia el
centro político, estaban los federalistas constitucionales,
que favorecían un estado federal con una monarquía
sometida a la constitución. A la izquierda estaban los
unitaristas moderados, que deseaban un estado
centralizado con una monarquía responsable ante el
parlamento. Más a la izquierda, los unitaristas
republicanos, partidarios de una república centralizada.

En octubre 1848 empezaron las deliberaciones para una


constitución. Los resultados se presentaron en abril de
1849. La constitución significó una síntesis de la tradición
(el imperio, la monarquía, el estado federal) y el progreso
(el derecho al voto universal, asamblea electa).

El parlamento exigió que, como emperador alemán, el rey


de Prusia tendría que renunciar a su carácter divino y
concebirse a sí mismo como ejecutor de la voluntad del
pueblo, exigencia ésta que el monarca rechazó en 1849,
impidiendo de esta forma que se realizara la unificación
alemana.

En la década de 1860 el Canciller Otto von Bismarck


favoreció en Prusia al ejecutivo contra el Parlamento. La
cuestión del poder político externo se resolvió con la
Guerra de las Siete Semanas en 1866, en el sentido de la
«pequeña Alemania» (porque excluía a Austria).

El estado, conocido desde entonces como Alemania, se


constituyó el 18 de enero de 1871, cuando se proclamó el
Imperio alemán bajo la hegemonía de Prusia (Imperio
Austro-Húngaro, II Reich). Así se alcanzó uno de los
objetivos de la Revolución de 1848: la unificación
alemana.

El nuevo Imperio era una verdadera autocracia en la que el


Reichstag (cámara baja del Parlamento) era elegido por
sufragio universal e igual, en el que participaban todos los
varones mayores de 25 años (en Prusia y en otros Estados
federados siguió vigente el sufragio desigual, dependiente
de los ingresos). Por consiguiente, puede hablarse de una
democratización parcial de Alemania ya en el siglo XIX.

Bismarck permaneció 19 años al frente del Gobierno.


Durante ese tiempo combatió a la izquierda de la
burguesía liberal, al catolicismo político, y en particular, al
movimiento obrero. Instituyó una legislación social
incluso ejemplar para esta época pero la clase obrera
estaba excluida (jubilación obligatoria, seguridad social y
un accidente para los trabajadores).

Tras el final de la Primera Guerra Mundial en 1918, se


disolvió el Imperio, ya que Alemania resultó derrotada a
pesar de sus avances iniciales. El Emperador Guillermo II
fue obligado a abdicar y tras la Revolución de Noviembre,
al Imperio le sucedió la República de Weimar, la cual se
constituyo en la ciudad de Weimar donde se celebraron
elecciones. Esto dio paso al inicio de la República de
Weimar, la cual a pesar de no tener éxito fue la primera
democracia parlamentaria alemana, lo que condujo a la
extinción de la monarquía y a una profunda crisis
económica. La fragilidad de la república instituida en 1919
contribuyó a la expansión de movimientos radicales de
izquierda y de derecha y facilitó sobre todo el
fortalecimiento de los nazis.
3.- Weber y la política alemana.

En 1912, Weber intentó organizar un partido político


de izquierda que combinase social-demócratas y liberales,
pero su intento fracasó debido al miedo que muchos
liberales sentían hacia los ideales revolucionarios de los
social-demócratas.

En 1917 Weber escribió una serie de artículos de


prensa titulados "Parlamento y Gobierno en una Alemania
reconstruida". Estos artículos exigían reformas
democráticas en la Constitución del Imperio Alemán de
1871.

Weber argumentó que los problemas políticos de


Alemania se debían esencialmente a un problema de
liderazgo. Otto von Bismarck había creado una
constitución que preservaba su propio poder, pero
inhabilitaba a otro líder poderoso para sucederlo. En enero
de 1919, Weber era un miembro fundador del Partido
Democrático Alemán.

Por su paradójica utilización en las medidas


socializantes tanto de la socialdemocracia como del
nacionalsocialismo, las contribuciones del liberalismo de
Max Weber a la política alemana siguen siendo sujeto de
controversia.

Weber dejó la política debido a los conflictos con la


derecha en 1919 y 1920, cuando muchos colegas y
estudiantes lo despreciaron por su discurso y posición de
izquierda asumido durante la revolución alemana de 1918
y 1919. En efecto, hubo estudiantes de derecha que
llegaron a realizar protestas frente a su casa.

Weber abogaba por la democracia como una


herramienta para elegir líderes fuertes. Weber veía la
democracia como una forma de liderazgo carismático
donde la "demagogia imponía su deseo sobre las masas".
Por esta razón, la izquierda europea es muy crítica con
Weber, por "haber preparado el terreno intelectual para la
posición de liderazgo de Adolf Hitler", aunque no
intencionadamente.
4.- Idea de lo social en Weber.

Individuo y sociedad.
La sociología de la acción social.
Los cuatro tipos de acción social.
Intereses y conflicto social.

5.- Epistemología y metodología weberiana.

Individualismo metodológico.
La explicación en sociología: causalidad e intención;
la racionalidad y los “efectos no buscados” de la
acción.
Los tipos ideales.

6.- El proceso de racionalización social occidental.

La racionalidad, sus diversos sentidos y sus


paradojas.
El “desencantamiento” del mundo y la “jaula de
hierro”.
La diferenciación de esferas de valor.

7.- La sociología de la religión.


Economía y valores: ideas e intereses.
La ética protestante y el espíritu del capitalismo.

También podría gustarte