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MARPLATENSE DE
PSICOLOGIA
LA PSICOLOGIA COMO PROMOTORA
DE DERECHOS:
Hacia la interdisciplinariedad de las
prácticas en los escenarios actuales
4, 5 Y 6 de diciembre de 2014
Facultad de Psicología
Universidad Nacional de Mar del Plata
Mar del Plata, Buenos Aires, Argentina
AUTORIDADES DE LA FACULTAD DE
PSICOLOGIA DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL
DE MAR DEL PLATA
ISBN 978-987-544-617-5
PERSONALIDAD PAG. 1
MESA 2:
PAG. 31
PSICOANÁLISIS Y PROBLEMAS DE LA PSICOLOGÍA I
MESA 3:
PAG. 48
PSICOANÁLISIS Y PROBLEMAS DE LA PSICOLOGÍA II
MESA 4:
PAG. 68
UN MAR DE MITOS
MESA 5:
PAG. 90
SALUD MENTAL COMUNITARIA
MESA 6:
PAG. 106
FILOSOFÍA
MESA 7:
PAG. 128
DISCAPACIDAD
MESA 8:
PAG. 149
LEY Nº 26657
MESA 9:
PAG. 174
SALUD MENTAL
MESA 10:
PAG. 187
PSICOLOGÍA DEL DEPORTE Y TRANSITO
MESA 11:
PAG. 210
DEONTOLOGÍA PROFESIONAL
MESA 12:
PAG. 237
ÉTICA Y DEONTOLOGÍA
MESA 13:
PAG. 262
ÉTICA PROFESIONAL
MESA 14:
PAG. 287
VIOLENCIA DE GÉNERO
MESA 15:
PAG. 305
BIOETICA
MESA 16:
PAG. 326
NUEVOS DESARROLLOS
MESA 17 Y 18:
PAG. 350
GÉNERO Y SUBJETIVIDAD
MESA 19:
PAG. 395
PSICOLOGÍA DE LOS GRUPOS
MESA 20:
MESA 21:
PAG. 444
HISTORIA DE LA PSICOLOGIA I
MESA 22:
PAG. 475
PROBLEMÁTICAS ACTUALES EN EL ÁMBITO EDUCACIONAL
MESA 23:
PAG. 497
HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA III
MESA 24:
PAG. 522
HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA IV
MESA 25:
PAG. 577
CIENCIA BÁSICA Y APLICADA I
MESA 26:
PAG. 595
DESARROLLOS EN CIENCIAS BÁSICAS Y APLICADAS I
MESA 27:
PAG. 611
ADULTOS MAYORES
MESA 28:
PAG. 642
EJERCICIO ROFESIONAL EN PSICOGERONTOLOGÍA
MESA 29:
PAG. 670
DEBATES SOBRE SALUD MENTAL I
MESA 30:
PAG. 698
DEBATES SOBRE SALUD MENTAL II
MESA 31:
PAG. 722
SALUD MENTAL Y DEBATES ACTUALES
MESA 32:
PAG. 746
ABORDAJES DE LAS PROBLEMÁTICAS EN SALUD MENTAL V
MESA 33:
PAG. 776
FORMACIÓN UNIVERSITARIA I
MESA 34:
PAG. 798
MOMENTOS VITALES
MESA 35:
PAG. 828
MOMENTOS VITALES- NIÑEZ Y JUEGO
MESA 36:
PAG. 853
MOMENTOS VITALES
MESA 37:
PAG. 881
PROBLEMAS SOCIALES- VIVIENDA
MESA 38:
PAG. 909
PROBLEMAS SOCIALES- BULLYING
MESA 39:
PAG. 933
PROBLEMÁTICAS SOCIALES
MESA 40:
PAG. 959
PROBLEMÁTICAS SOCIALES- MEMORIA
MESA 41:
PAG. 987
PROBLEMÁTICAS SOCIALES
MESA 42:
PAG. 1025
PROBLEMÁTICAS SOCIALES- ESTUDIANTES
MESA 43:
PAG. 1057
FORMACIÓN UNIVERSITARIA II
MESA 44:
PAG. 1088
DEBATES INTERDISCIPLINARIOS EN PSICOLOGÍA LABORAL
MESA 45:
PAG. 1110
DEBATES INTERDISCIPLINARIOS EN PSICOPEDAGOGÍA
MESA 46:
PAG. 1137
DEBATES INTERDISCIPLINARIOS EN CLÍNICA
MESA 47:
PAG. 1160
DEBATES INTERDICIPLINAIOS EN AREAS OCUPACIONALES
MESA 48:
PAG. 1182
DEBATES INTERDICIPLINARIOS EN AREAS OCUPACIONALES
MESA 49:
PAG. 1212
PRÁCTICAS INTEGRALES
MESA 50:
PAG. 1230
ORIENTACIÓN VOCACIONAL
MESA 51:
PAG. 1252
PSICOANÁLISIS
ANTECEDENTES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
2
VI Congreso Marplatense de Psicología
3
VI Congreso Marplatense de Psicología
4
VI Congreso Marplatense de Psicología
En síntesis, los diversos estudios muestran de manera consistente la relación que existe
entre la práctica deportiva, en particular en corredores, y la PR:
En este trabajo, se utilizó una versión adaptada para corredores en general de la Escala de
Personalidad Resistente en Maratonianos (EPRM) para evaluar la PR en corredores. La versión
original de dicha escala es el cuestionario Personal Views Survey (PVS) (Madi, 1997) para la
evaluación de la PR en la población en general, de la cual existe también una versión española
(Godoy Izquierdo y Godoy, 2004). Se adaptó en su contenido al contexto deportivo, en
particular el maratón, modificando el léxico y los enunciados de los ítems para que reflejasen
aspectos relacionados con esta especialidad. Para ello, se respetó el contenido de cada
enunciado (con el fin de que correspondiese al mismo componente que el instrumento original)
y en el sentido (directo o inverso) de cada ítem (Jaenes, Godoy & Román, 2008).
Adicionalmente, se administró el AEP (Ledesma, Sanchez y Díaz-Lázaro, 2011), para
analizar las relaciones existentes entre PR y el MCF, y una breve encuesta de datos
demográficos y relacionados con la actividad (tiempo que lleva entrenando y compitiendo,
distancia y tipos de carreras preferidas, etc.).
METODOLOGÍA
Participantes
Se trabajó con una muestra de 302 participantes, 123 fueron mujeres (40,7%) y 179
hombres (59,3%). Las edades estaban comprendidas entre 18 y 66 años (X: 36,9; d.s.: 9,9).
173 participantes eran de la ciudad de Mar del Plata (57,3%), 37 de Tandil (12,9%), 10 del
partido de la Costa (3,3%), 8 de Miramar (2,6%), y 74 de otras localidades (24,5%).
Instrumentos.
Escala de personalidad resistente para corredores (EPRC).
Modificación de la EPRM (Jaenes, Godoy & Román, 2008). Instrumento para abordar el
estudio del constructo “personalidad resistente” en el ámbito deportivo, en particular para
corredores. Se contesta en formato de respuesta tipo Likert con cuatro alternativas de
respuesta, desde 0 (“totalmente en desacuerdo”) a 3 (“totalmente de acuerdo”).
Listado de Adjetivos para Evaluar la personalidad (AEP).
Se trata de un instrumento que mediante 67 adjetivos descriptivos evalúa el perfil de
personalidad de acuerdo a los cinco factores del modelo. El instrumento fue desarrollado y
validado en la ciudad de Mar del Plata (Ledesma, Sánchez & Díaz-Lázaro, 2011; Sánchez &
Ledesma, 2007 y 2013). Los adjetivos son presentados a los sujetos y estos deben responder
cuanto lo describen, en una escala Likert que va de 1 (“no me describe en absoluto”) a 5 (“me
describe tal como soy”).
Adicionalmente, se administró una encuesta de datos demográficos
RESULTADOS
5
VI Congreso Marplatense de Psicología
Se preguntó a los participantes desde cuanto tiempo se entrenan de manera regular, las
respuestas oscilaron entre 6 meses y 30 años (X: 5,2; d.e.: 5,5).
Se preguntó además por la cantidad de competencias en la que se participó en el último
año. Las respuestas fueron de “ninguna” a 35 (X: 6,7; d.e.: 5,8).
119 corredores (39,4%) dijeron preferir las carreras de calle, 97 (32,1%) las de aventura, y
86 (28,5) manifestaron que les resultaba indistinto.
189 de los participantes (62,6%) entrenaban con algún equipo, mientras que 113 (37,4%) lo
hacía de manera individual. Los corredores que participaron en este trabajo y su pertenencia a
algún equipo se detallan en la siguiente tabla.
Respecto a las distancias preferidas (se podía optar por más de una repuesta) 142
participantes (47,0%) eligió la Media Maratón, 140 (46,4%) los 10K, 68 (22,5%) 15K, 61 (20,2%)
eligió la Maratón entre sus distancias preferidas, 23 (7,6%) la Ultramaratón (más de 42 K), y 40
(13,2%) optaron por distancias menores a 10K.
2. Diferencias de medias.
Se obtuvieron los valores medios y los desvíos estándar en las cinco dimensiones del MCF
para la muestra de corredores. En la siguiente tabla se muestran dichos valores y los de
población general (Sanchez y Ledesma, 2013). Se observan diferencias significativas en todas
las dimensiones excepto Amabilidad. Sin embargo, esas diferencias sólo resultan
considerables, de acuerdo al tamaño del efecto medido por la d de Cohen, en Responsabilidad
(con mayor puntuación para la población de corredores) y en Neuroticismo (con mayor
puntuación para población general).
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Los resultados anteriores muestran de manera moderada y significativa que los corredores
tienden a tener una personalidad con mayor Responsabilidad y a ser emocionalmente más
estables comparados con la población general.
3. Correlaciones.
Se obtuvieron las correlaciones entre los tres aspectos de la Personalidad resistente y las
dimensiones del MCF. Los resultados se muestran a continuación.
7
VI Congreso Marplatense de Psicología
Como se observa en la tabla 5 el coeficiente Alfa para toda la escala es aceptable. Del
mismo modo, los Alfa de los distintos componentes resultan adecuados, considerando que el
Alfa depende de la cantidad de ítems de la escala. Sin embargo, ciertos ítems disminuyen
dichos coeficientes: el 14 y el 18 en la escala total, el 29 de Compromiso, el 14 y el 22 en
Desafío, y el 18 en Control.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
De la Vega, R.; Rivera, O. & Ruiz, R. (2011) Personalidad resistente en carreras de fondo:
comparativa entre ultra fondo y diez kilómetros. Revista de Psicología del Deporte, 20, 2, 445-
454.
García-Naveira, A.; Ruiz Barquín, R. & Pujals, C. (2011) Diferencias en personalidad en función
de la práctica o no deportiva, nivel de competición y categoría por edad en jugadores de fútbol
desde el modelo de Costa y McCrae. Revista de la Psicología de Deporte, 20, 1, 29-44.
Godoy-Izquierdo, D. y Godoy, J.F. (2004). Propiedades psicométricas de la versión española de
la escala para la evaluación de la dureza. “Personal Views Survey” (P.V.S.). Psicología
Conductual, 1, 34 -77. Godoy Izquierdo, D. & Godoy, J.F. (2002) La personalidad resistente:
una revisión de la conceptualización e investigación sobre la dureza. Clínica y Salud, 13, 2, 135-
162.
Jaenes, J.; Godoy, D. & Román, F. (2008) Elaboración y validación psicométrica de la Escala de
Personalidad Resistente en Maratonianos (EPRM). Cuadernos de Psicología del deporte, 8, 2,
59-81.
James Sánchez, J.; Godoy Izquierdo, D. & Román González, F. (2009) Personalidad resistente
en maratonianos: un estudio sobre el control, compromiso y desafío de corredoras y corredores
de maratón. Revista de Psicología del Deporte, 18, 2, 217-234.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Ledesma, R.; Sánchez, R. & Díaz-Lázaro, C.M. (2011) Adjective Checklist to Assess the Big
Five Personality Factors in the Argentine Population. Journal of Personality Assessment, 93, 1,
46-55.
Maddi, S.R. (1997). Personal Views Survey II. En C.P, Zalaquett & R.J. Wood (Ed).Evaluating st
ress: A book of resources (pp. 293‐09). Lanham, MD, Scarecrow Press, Inc. Peñacoba, C. &
Moreno, B. (1998) El concepto de Personalidad Resistente. Consideraciones Teóricas y
Repercusiones Prácticas. Boletín de Psicología, 58, 61-96.
Sánchez, J.C.; Godoy D. & Román F J. (2008) Elaboración y validación psicométrica de la
Escala de Personalidad Resistente en Maratonianos (EPRM). Cuadernos de Psicología del
Deporte, 8, 2, 59-81.
Sánchez Jaenes, J.C. (2009) Personalidad resistente en deportes. Revista Andaluza de
Medicina del Deporte, 2, 3, 98-101.
Sánchez, R. & Ledesma, R. (2007) Los cinco grandes factores: cómo entender la personalidad
y como evaluarla. En A. Monjeau (Ed.) Conocimiento para la transformación (pp 131-160).
Ediciones Universidad Atlántida Argentina, Mar del Plata.
Sánchez, R. & Ledesma, R. (2013) Listado de Adjetivos para Evaluar Personalidad:
propiedades y normas para una población argentina. Revista Argentina de Clínica Psicológica,
22, 2, 147-160.
10
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
La danza nace con la propia humanidad, siendo un fenómeno universal que está presente en
todas las culturas. Es considerada como la expresión de arte más antigua, siendo múltiples las formas
expresivas y artísticas que ha adoptado a lo largo de la historia (García Ruso, 1997). La Psicología de
la danza, como disciplina científica y englobada dentro de la psicología de las artes escénicas, supone
a la psicología aplicada al ámbito de la danza, dirigiendo su atención a bailarines y comprendiendo sus
circunstancias e intentando optimizarlas para su mayor beneficio.
El Ballet es el estilo de danza más rígido y duro en enseñanza que existe. La técnica del mismo es
muy rígida, y requiere mucho entrenamiento, para alcanzar de esta manera una gran competencia.
Frecuentemente se ejerce mucha presión sobre sus estudiantes y profesionales. Los movimientos y
las líneas son suaves, buscan la delicadeza, aunque se ejerza una fuerza considerable en cada paso.
De todos los estilos, pareciera que es el que más sacrificios exige a un bailarín (Maya, 2001)
En este trabajo se evaluará la personalidad de las alumnas de la Escuela Municipal de Danzas
basándonos en el Modelo de los Cinco Factores, y utilizando como instrumento el Listado de Adjetivos
para Evaluar la Personalidad [AEP] (Ledesma, Sanchez, & Díaz, 2011; Sánchez & Ledesma, 2007 y
2013) el mismo fue diseñado en Argentina y permite evaluar los distintos factores de la personalidad
del modelo.
El Modelo de los Cinco Grandes Factores de Personalidad (MCF) desarrollado por Costa y
McCrae (Costa & McCrae, 1999; John & Srivastava, 1999; McCrae & Costa, 1990; Sanchez &
Ledesma, 2007) postula que la gran parte de los rasgos de personalidad pueden ser englobados en
cinco grandes factores, y que los mismos no varían entre diferentes culturas. El MCF define a los
rasgos de la personalidad como entidades internas, estables, endógenas y determinadas
biológicamente (Romero, 2002).
Las “cinco grandes” dimensiones del modelo (y sus polos opuestos) son: Extraversión
(Introversión), Amabilidad (Oposicionismo), Responsabilidad (Negligencia), Neuroticismo (Estabilidad
emocional), y Apertura a la experiencia (Convencionalismo). El factor Responsabilidad, tiene que ver
con el grado de organización, persistencia, control y motivación en la conducta dirigida a metas. Por
otra parte, la Extraversión está ligada a la cantidad e intensidad de las interacciones interpersonales, el
nivel de actividad y la necesidad de estimulación. El Neuroticismo remite a la tendencia a experimentar
emociones negativas y pensamientos irracionales; a la capacidad para controlar impulsos y situaciones
de estrés, su opuesto es la estabilidad. La amabilidad evalúa la capacidad para establecer vínculos
psicosociales y la disposición a preocuparse por los demás. En casos extremos, el polo negativo se
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VI Congreso Marplatense de Psicología
asocia a la psicopatía. Por último, la apertura a la experiencia evalúa la presencia de una imaginación
activa, sensibilidad estética, capacidad de introspección y curiosidad intelectual, el polo opuesto se
relaciona con el convencionalismo, el dogmatismo y el apego a lo tradicional (Sanchez & Ledesma,
2007).
En base a los datos de investigaciones precedentes se podría decir que las diferencias existentes
entre los rasgos de personalidad entre quienes se dedican a bailar ballet y quienes no, probablemente
son resultado de un proceso de autoselección, entendiendo por esto que el ballet atrae a personas que
poseen ciertas características de personalidad (Bakker, 1987). Esta hipótesis implicaría que el perfil de
personalidad estereotipado surgido como resultado de dichos trabajos, sería conveniente para los
bailarines. Es probable que aquellos bailarines que más se parecen a ese perfil continúen sus
estudios, mientras que los que menos se asemejan sean más propensos a abandonarlos. A su vez, se
podría sostener que resultan necesarias determinadas características de personalidad para dedicarse
a esta disciplina, o que al menos éstas serían un factor predisponente para la práctica de la actividad.
Además, se debe tener en cuenta que los requisitos de la danza clásica generan el mismo tipo de
factores estresantes en diferentes culturas (Hamilton & Hamilton, 1994). Los bailarines de ballet clásico
están expuestos a niveles elevados de estrés y ansiedad en su vida profesional. Teniendo en cuenta lo
anterior, no es extraño que los bailarines consideren el control sobre sí mismos como una de las
características esenciales del bailarín profesional (Wulff, 2001).
Aunque un grupo de ballet puede ser caracterizado como un equipo, el ballet es generalmente
considerado como una actividad individual. Esto llevaría a la predicción de que los bailarines de ballet
serían, en promedio, más introvertidos que los grupos de control de los no bailarines de un rango de
edad similar (Bakker, 1991). El elevado nivel de neuroticismo, que refleja el potencial de excitación
emocional (McCrae & Costa, 1990), podría ser ventajosos para los bailarines ya que les posibilitaría
aprender a hacer frente adecuadamente a los estímulos que provocan ansiedad, enojo, etc. mientras
que podría ser perjudicial para aquellos que no lo han hecho. Hay una tendencia a que los bailarines
sean más ansiosos que los no bailarines. La ansiedad alta podría debilitar el desempeño en una tarea
compleja y novedosa, pero podría facilitar una tarea bien aprendida o por aprender (Bakker, 1991).
Con respecto a la alta emotividad se dan explicaciones tales como que los bailarines deben ser
sensibles al significado emocional de la música y la coreografía y a su vez ser capaces de transmitir
esto a otras personas. El ser sensibles y emocionales podría ser un rasgo favorable para quienes se
dedican a la danza, tales características son comprendidas dentro del factor Apertura a la experiencia.
Por otro lado, un estudio reciente sugirió que la presencia de ciertas características tales como
bienestar, emotividad e inteligencia emocional, se asocian positivamente con la capacidad de bailar
ballet. Motivación, expresividad, adaptabilidad y felicidad fueron las correlaciones positivas más fuertes
de la capacidad de baile. Curiosamente, control de la emoción y manejo del estrés mostraron
asociaciones negativas en la habilidad de baile (Petrides, Niven & Mouskounti, 2006). Aunque hay
alguna evidencia de que la "subcultura ballet" tiende a atraer a personas con perfiles específicos de
personalidad (Bakker, 1991), Petrides, Niven y Mouskounti (2006) sugieren que no hay datos
convincentes sobre la dirección de esta relación, que se piensa generalmente como el resultado de un
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VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVO GENERAL
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
MUESTRA
Se trabajará con una muestra de entre 60 y 80 estudiantes de danza clásica de entre 18 y 30 años
de sexo femenino de la Escuela Municipal de danza clásica Norma Fontenla, y con tres profesores y
dos bailarines profesionales.
INSTRUMENTOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
cinco puntos. Este instrumento nos permitirá obtener diferentes rasgos o características de
personalidad prevalentes en los bailarines de ballet de acuerdo al modelo de los “cinco grandes”.
2) Cuestionario de relevamiento de datos para obtener información acerca de la trayectoria de las
estudiantes y sus datos sociodemográficos.
3) Entrevista semiestructurada destinada a 3 profesores de danza y 2 bailarines profesionales para
indagar su visión acerca de sí mismos, de las estudiantes y de su profesión.
DISEÑO DE INVESTIGACIÓN
HIPÓTESIS
- Las bailarinas de danza clásica suelen presentan un perfil de personalidad caracterizado por altos
niveles de Responsabilidad, Introversión, Neuroticismo, Amabilidad y Apertura a la experiencia.
- Existen diferencias en los perfiles de personalidad entre las bailarinas de ballet y la población general
del mismo grupo etáreo.
APORTES DE LA INVESTIGACIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Bakker, F.C. (1991). Development of personality in dancers: a longitudinal study. Personality and
Individual Differences, 12, 7, 671-681.
Bakker, F.C. (1987). Personality differences between young dancers and non-dancers. Personality
and Individual Differences, 9, 1, 121-131.
Dunleavy A. 0. & Rees C. R. (1979) The effect of achievement motivation and sports exposure upon
the sports involvement of American college males. International Journal of Sport Psychology, 10, 92-
100.
García Ruso, H. (1997). La danza en la escuela. Barcelona: Inde.
Hamilton L.H.; Hamilton G.W. (1994). Occupational stress in classical ballet: The impact of different
cultures. Med Probl Perform Art 9:35-38,
Maya, I. (2001). ¿La danza determina la personalidad del bailarín? Recuperado de
http://www.ileanamaya.wordpress.com/tag/ballet
John, O. & Srivastava, S. (1999). The Big Five trait taxonomy: History, measurement, and the oretical
perspectives. En L. A. Pervin y O. P. John (Eds.), Handbook of personality: Theory and research (pp.
102-138). New York, Guilford.
Petrides, K.; Niven, L. & Mouskounti, T. (2006). The trait emotional intelligence of ballet dancers and
musicians. Psicothema 2006. Vol. 18,(supl.), pp. 101-107.
Ledesma, R.; Sanchez, R. & Díaz-Lázaro, C. (2011). Adjective Checklist to Assess the Big Five
Personality Factors in the Argentine Population. Journal of Personality Assessment, 93, 46-55.
McCrae, R. & Costa, P. (1990). Personality In Adulthood. A Five-Factor Theory Perspective. New
York: Guilford Press.
Romero, E. (2002). Investigación en psicología de la personalidad: Líneas de evolución y situación
actual. Boletín de Psicología, 74, 39-78.
Sanchez, R. & Ledesma, R. (2013). Listado de Adjetivos para Evaluar Personalidad: Propiedades y
normas para una población argentina. Revista Argentina de Clínica Psicológica, 22,2, 147-160.
Sanchez, R. & Ledesma R. (2007). Los cinco grandes factores: cómo entender la personalidad y
cómo evaluarla. En A. Monjeau (Ed.), Conocimiento para la transformación. Serie Investigación y
Desarrollo (pp. 131-160). Mar del Plata: Ediciones Universidad Atlántida Argentina.
Wulff, Helena (1998, reprinted 2001). Ballet across Borders: Career and Culture in the World of
Dancers. Oxford: Berg.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
ANTECEDENTES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
es difícil que puedan realizar una introspección necesaria para concretar cualquier tipo
de psicoterapia que pretenda descubrir los mecanismos profundos de su trastorno.
Para evaluar la alexitimia se utilizará la Escala Toronto de Alexitimia consensuada para
Latinoamérica (LAC TAS-20) (Bagby, Parker, Fernández Jiménez, Pérez San Gregorio,
Lunazzi, 2011), instrumento de reciente aparición, versión modificada del TAS-20. Para evaluar
los “Cinco Grandes” se utilizará el Listado de Adjetivos para Evaluar la Personalidad (AEP)
(Ledesma, Sanchez y Díaz-Lázaro, 2011; Sanchez y Ledesma, 2013)
Se espera con la siguiente investigación poder precisar cuál es la relación existente entre la
Alexitimia y los Cinco Grandes Factores de la Personalidad para poder ampliar el campo de
conocimiento entre estas dos variables, y su utilidad en futuras investigaciones que requieran
conocimiento sobre esta relación. A su vez, el presente trabajoresulta de utilidad clínica, para
profesionales que trabajen desde diferentes corrientes teóricas. Adicionalmente, se dispondrá
de datos sobre el funcionamiento de la LAC-TAS-20 en nuestro contexto.
Por lo anterior, los objetivos de este trabajo son los siguientes:
- Analizar las relaciones existentes entre los Cinco Grandes Factores de la Personalidad y
la Alexitimia.
- Evaluar el funcionamiento de la LAC-TAS-20 en nuestro contexto.
METODOLOGÍA
Participantes
Formaron parte de esta investigación 300 participantes dela ciudad de Mar del Plata,
seleccionados de manera no probabilística intencional. El rango de edades fue de entre 18 y 68
años (X: 34,9; d.e.: 11,7), y fueron mujeres (65,3%) y 104 hombres (34,7%). 12 (4,0%) tenían
educación primaria completa, 92 (30,7%) educación secundaria (completa o incompleta), 149
(49,7%) educación universitaria (completa o incompleta), y 47 (15,7%) educación terciaria
(completa o incompleta). La participación fue anónima y voluntaria, y mediante consentimiento
informado. Los datos fueron analizados con SPSS 15 y Vista-CITA.
Instrumentos
Para evaluar la alexitimia se utilizó la Escala Toronto de Alexitimia consensuada para
Latinoamérica (LAC TAS-20) (Bagby, Parker, Fernandez Jimenez, Perez San Gregorio,
Lunazzi, 2011) y para evaluar los Cinco Grandes de la Personalidad el Listado de Adjetivos
para Evaluar la Personalidad (AEP) (Ledesma, Sanchez y Díaz-Lázaro, 2011; Sanchez y
Ledesma, 2013).
Escala Toronto de Alexitimia consensuada para Latinoamérica(LAC-TAS-20). La escala
presenta 20 ítems donde el sujeto debe indicar su respuesta en una escala Likert que va de
“muy de acuerdo” (5) a “muy en desacuerdo” (1). La escala evalúa tres factores: F1: dificultad
para identificar sentimientos y distinguirlo de sensaciones corporales que acompañan la
activación emocional, F2: dificultad para describir sentimientos a otras personas, F3:
18
VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
Se obtuvieron los valores medios, los desvíos estándar y el coeficiente de fiabilidad Alfa
para la escala de Alexitimia y para los tres factores por separado. Los valores se muestran en la
Tabla 2.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Como se observa en la tabla anterior, los Alfa fueron aceptables para la escala en general y
para el Factor 1, resultando bajos para los otros factores.
Finalmente, se obtuvieron las medias y los desvíos estándar para los factores el los “cinco
grandes” a los efectos de poderlos compara con los de población general (Sanchez y Ledesma,
2013). Como se observa en la Tabla 3, dichos valores fueron coincidentes por lo que puede
sumirse que la muestra que participó en este trabajo es representativa de población general.
DISCUSIÓN
La muestra que formó parte de esta investigación presenta un perfil de personalidad muy
similar al de población general. Por tanto, los resultados obtenidos, en principio, pueden
extrapolarse a toda la población.
Se obtuvieron correlaciones inversas bajas, aunque significativas, entre laAlexitimia y la
Amabilidad. En particular, resultaron elevadas las correspondientes al Factor 1 (dificultad para
identificar sentimientos y distinguirlos de las sensaciones corporales que acompañan la
activación emocional) y el Factor 2(dificultad para describir sentimientos a otras personas).
Estos resultados indican que las personas con elevada Alexitimia tienden a mostrar dificultades
en su relación con los demás, por tanto, no mostrarían en alto grado rasgos tales como
confianza, altruismo, actitud conciliadora, modestia, o sensibilidad social. Pareciera que la
dificultad para expresar afectos dificulta en algún grado la interacción social
Otra correlación negativa significativa es la del Factor 2 de AlexitimiaconExtraversión, por lo
cual la persona con alto puntaje en este factor se mostraría más bien poco sociable,
introvertida, con poca asertividad y con dificultades para iniciar y mantener conversaciones.Las
20
VI Congreso Marplatense de Psicología
dificultades para expresar sentimientos a otras personas (lo que mide el Factor 2) se
relacionarían conla tendencia al aislamiento o al retraimiento, propias de la baja Extraversión.
Por último,cabe destacar la relación entre la escala total de Alexitimia y principalmente
elFactor 1 conNeuroticismo. Así, la persona con alta Alexitimia tendría la tendencia a ser más
inestable emocionalmente, en particular aquella con dificultades para para identificar
sentimientos y distinguirlos de las sensaciones corporales.
Respecto a la fiabilidad de la escala, el valor hallado resulta adecuado, al igual que el
correspondiente al Factor 1; los otros dos factores obtuvieron bajos índices de confiabilidad lo
que amerita un estudio más profundo.
Estos resultados deberían ampliarse incluyendo muestras más numerosas, análisis del
funcionamiento de los ítems, y análisis factorial. Por ejemplo, el ítem 4 (“Soy capaz de describir
mis sentimientos con facilidad”), entre otros, disminuye el coeficiente Alfa de la prueba al igual
que el del Factor 2 al que pertenece. Profundizar estos análisis dará por resultado un mayor
conocimiento del funcionamiento de la prueba en nuestro medio.
Referencias Bibliográficas
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y como evaluarla. En A. Monjeau (Ed.), Conocimiento para la transformación (pp. 131-160). Mar
del Plata: Ediciones Universidad Atlántida Argentina.
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ANTECEDENTES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El Inventario Tipo D.
Para este trabajo se construyó un instrumento de acuerdo al marco teórico de la
Personalidad Tipo D: el Inventario Tipo D [ITD]. El ITD consta de 20 ítems, 10 corresponden
a AN y 10 a IS, con ítems que preguntan en la dirección de la escala y otros que preguntan
en sentido inverso. Se espera que el ITD sea una definición operacional adecuada del
constructo Personalidad Tipo D.
METODOLOGÍA
Participantes
Se trabajó con dos muestras, una de población general y otra de pacientes cardíacos.
Muestra general: seleccionada de forma no probabilística y por conveniencia; 247
participantes de la ciudad de Mar del Plata formaron parte de esta muestra, con edades
comprendidas entre 18 y 70 años (media 35,3; d.e. 14,1). 157 fueron mujeres (63,6%) y 90
hombres (36,4%). 20 de estos participantes (8,1%) referenciaron alguna enfermedad
cardiovascular, siendo la más destacada la hipertensión (N=14). Los cuestionarios fueron
autoadministrados de manera individual.
Muestra pacientes cardíacos: Muestra no probabilística de 24 participantes con algún
TIC, con edades comprendidas entre 42 y 78 años (media 60,6; d.s. 9,3). 7 fueron mujeres
(29,2%) y 17 hombres (70,8%). Los trastornos más referenciados fueron infarto (6
participantes; 25%), hipertensión (5; 20,8%), y preinfarto (5; 20,8%).
Instrumentos.
Inventario Tipo D: instrumento diseñado para este trabajo, consta de 20 ítems, 10
corresponden a AN y 10 a IS. Dentro de cada escala 5 ítems preguntan en la dirección de la
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VI Congreso Marplatense de Psicología
escala (por ejemplo, “Me irrito con frecuencia” en la escala de AN) y 5 preguntan en sentido
inverso (por ejemplo, “Soy una persona optimista” en la misma escala). Los ítems se puntúan
en una escala Likert de 5 puntos que va de 0 (falso) a 4 (verdadero). En este trabajo se
analizaron las propiedades psicométricas y la estructura factorial del ITD.
Listado de Adjetivos para Evaluar la Personalidad: El AEP (Ledesma, Sanchez &
Díaz-Lázaro, 2011; Sanchez & Ledesma, 2007 y 2013) consta con 67 adjetivos descriptores
de rasgos de personalidad de acuerdo a los lineamientos del modelo de los Cinco Grandes
Factores. El instrumento se responde de acuerdo a una escala Likert de cinco puntos de
acuerdo a cuanto describe cada adjetivo a la persona que responde el listado.
RESULTADOS
Al realizar una rotación con el método Normalización Quartimax aparecen tres factores
principales que explican el 34,5% de la varianza. El primer factor se corresponde con IS; AN
se reparte entre los factores 2 y 3, correspondiendo los ítems invertidos (o de “afectividad
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VI Congreso Marplatense de Psicología
positiva”) al factor 2 y los ítems directos al factor 3. En la Tabla 2 se muestran los 3 factores
con sus ítems y sus cargas respectivas.
Tabla 2. Factores e ítems por factor.
Ítem Escala Factor 1 Factor 2 Factor 3
1 AN ,615
2 AN ,718
3 IS ,604 ,326
4 IS ,383
5 AN ,790
6 AN ,477
7 IS ,493
8 IS ,582
9 AN ,463
10 AN ,700
11 IS ,658
12 IS ,454
13 AN ,311 ,255
14 AN ,595
15 IS ,439
16 IS ,622
17 AN ,424 ,303
18 AN
19 IS ,683
20 IS ,437
En la tabla siguiente se observa que la población con TIC obtuvo valores superiores en
AN e IS, sin embargo dichas diferencias no son significativas y el tamaño del efecto dado por
la d de Cohen resulta de pequeña magnitud, si bien IS muestra una magnitud más elevada.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Negativa
Inhibición 1,28 0,68 1,57 0,67 0,010 0,39
social
DISCUSIÓN
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Los análisis preliminares resultan positivos para el ITD si bien aparecen ciertos aspectos
que deben pulirse en el instrumento. Sin embargo, los resultados resultan prometedores por
lo que habilitan a continuar con estos desarrollos para contar con un instrumento válido y
confiable para evaluar la Personalidad Tipo D en nuestro contexto.
El análisis factorial muestra en principio un factor que se correspondería con el
constructo Tipo D; 18 de los 20 ítems del Inventario cargan en este factor, con cargas que
van de 0,70 a 0,25. Al analizar la rotación aparecen tres factores que se corresponden con
las escalas del instrumento, si bien la escala de AN aparece desdoblada en dos factores, uno
con los ítems que preguntan en sentido positivo de la escala y otro con los ítems que
preguntan en sentido negativo. En el factor 1 aparecen 9 de los 10 ítems de IS, con cargas
de 0,68 a 0,44; dos ítems de AN aparecen en este factor (con cargas de 0,42 y 0,31). En el
segundo factor aparecen 4 de los 5 ítems invertidos de AN con altas cargas en general (de
0,48 a 0,72); el ítems 3 (de IS) también aparece en este factor pero con menor carga. En el
factor 3 cargan los 5 ítems directos de AN con cargas que van de 0,26 a 0,79; el ítem 4, que
no cargaba en su escala, IS, aparece aquí.
Los coeficientes Alfa fueron satisfactorios (mayores a 0,70 en las dos escalas y de 0,82
para el instrumento total), si bien dos ítems, uno de cada escala, bajan los coeficientes
respectivos. Ambos ítems, además, no cargan en los factores correspondientes en el análisis
factorial. Dichos ítems son el 4 (“Prefiero que los demás no sepan cómo me siento”), de la
escala de IS, y el 18, (“Me siento capaz de enfrentar los diferentes problemas de la vida”), de
la escala de AN. Estas dos circunstancias, baja relación del ítem con el resto de la escala y
carga en otro factor distinto al teóricamente esperado, indicarían que ambos ítems deberían
ser reemplazados o modificados. Quizá, el ítem 4 evalúe cómo se siente la persona
(característica de la AN) más que IS como se esperaba. Respecto al ítem 18, por otro lado,
quizá no resulte tan clara la relación entre AN y enfrentar los problemas de la vida, de hecho,
este ítem no tuvo cargó en ningún factor apareciendo como único ítem en un quinto factor
que explica el 2,8% de la varianza.
Las diferencias entre las medias de ambas escalas entre población general y población
con TIC estuvieron por debajo de lo esperado, si bien en ambos casos los pacientes
cardíacos puntuaron más alto, con una diferencia moderada de acuerdo al tamaño del
efecto. Hay que recordar que no todos los pacientes cardíacos podrían tener Personalidad
Tipo D ya que otras personalidades también se relacionan con la aparición y curso de los TIC
(por ejemplo, la Personalidad Tipo A). Contar con una muestra mayor de personas con TIC
permitirá avanzar en esta cuestión, sobre todo si se cuenta con información adicional de la
personalidad del paciente brindada por personas cercanas o por los cardiólogos
intervinientes.
De acuerdo a la literatura, se encontraron fuertes relaciones entre la Personalidad Tipo
D y las dimensiones de los “cinco grandes”. En particular, resultan elevadas las relaciones
esperadas entre AN y Neuroticismo (0,58) y entre IS y Extroversión (-0,69). Estas relaciones
se condicen con las reportadas en la literatura. También se hallaron correlaciones inversas
moderadas entre AN e IS con Amabilidad, hallazgo también reportado en la literatura. En
particular, la evidencia es más convincente respecto a la relación entre AN y Oposicionismo
(De Fruyt et al., 2002), si bien el presente trabajo ambas escalas se relacionaron con dicho
factor (AN 0,34 e IS 0,30) coincidiendo con los resultados reportados por Svansdottir et al.
(2013) (AN 0,35 e IS 0,27). Respecto a la muestra con TIC la relación inversa entre AN y
Amabilidad se muestra un poco más fuerte (-0,38), no resultando así con IS (-0,19). En
resumen, este trabajo reporta evidencia respecto a la baja de Amabilidad en las personas
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VI Congreso Marplatense de Psicología
con alta AN. Podría sostenerse, en principio, que la combinación AN, IS y Oposicionismo
resulta un posible predictor de la enfermedad cardiovascular. Esta muestra, además, mostró
una moderada correlación inversa entre IS y Responsabilidad (-0,49), lo que posiblemente
signifique que la presencia del propio trastorno cardiovascular dificulta la expresión de la
Responsabilidad, si bien esta hipótesis debería chequearse en otros trabajos.
Adicionalmente, se encontró una correlación moderada entre AN e IS (0,47) lo que estaría
dando cuenta de una superposición entre ambas dimensiones y la existencia de un único
constructo (Tipo D). Finalmente, y también de acuerdo a la literatura se observó una relativa
independencia entre AN e IS con Apertura a la experiencia.
En resumen, los resultados resultan satisfactorios para el instrumento, si bien deberían
realizarse algunos ajustes. En particular, los ítems 4 y 18 deberían modificarse ajustándolos
al marco teórico a los efectos de una mejor inclusión en sus respectivas escalas.
Este trabajo debería completarse evaluando a una muestra más amplia de población
general cuidando de que la media de edad de los participantes se aproxime más a la media
de edad de la población con TIC. Del mismo modo, debería ampliarse la muestra de esta
última población contando además con datos extras (informes de informantes clave) que
permitan detectar a aquellos pacientes con probable personalidad Tipo D. Contar con estos
datos permitiría afianzar el funcionamiento del instrumento, paso previo para su uso en
tareas de investigación y de evaluación psicológica con esta población en particular. Así, la
disciplina contará con un instrumento válido y confiable para utilizar en un área de sumo
interés dada su relación con la salud de la población en general.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
DESARROLLOS
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Durante las primeros años de vida, el niño varón no sentirá vergüenza, culpa o
represión en sus exteriorizaciones sexuales hacia su madre, en cambio durante el
transcurso por el Complejo de Edipo experimentará la intrusión del padre-varón y la
angustia le avisará que mantener ciertos deseos tendrá un precio: pérdida de los genitales
ante la satisfacción prohibida entrando al Complejo de Castración que signará su
desenlace. La angustia de castración, pequeña señal en el aparato, activará la represión y
tomará su fuerza de investiduras de objeto resignadas (Freud, 1936). El destino del factor
sexual, de la sexualidad infantil, es lo que va a determinar la presencia o no de pavores
como reacción a lo hipertrófico pulsional.
Los niños que tienden al estado de angustia tienen una pulsión sexual hipertrófica
o prematuramente desarrollada, o suscitada por los mimos excesivos. En esto el niño se
comporta como el adulto: tan pronto como no puede satisfacer su libido, la muda en
angustia. (Freud, 1905, pág204). La sexualidad infantil rodea a las personas que cuidan al
niño y la angustia que no es originariamente más que la añoranza de la persona amada
afirma Freud (1907).
Las zoofobias infantiles son tan comunes como el pavor nocturnus y en el análisis
casi siempre se las puede desenmascarar como un desplazamiento de la angustia, desde
los progenitores al animal. El Complejo de Edipo como complejo nuclear de las neurosis
hace al desplazamiento de la angustia y al temor frente a que el caballo muerda por
ejemplo en el caso Hans como castigo por su deseo de hacer desaparecer al padre,
competidor y rival (Freud, 1913). La angustia neurótica, enigmática al decir de Freud,
pasa la posta a la realista, ya que el niño proyecta al exterior un peligro que se encarna en
un objeto exterior, de ese modo, tener miedo a "monstruos", "animales salvajes",
"esqueletos" o "zombis" no es más que una representación psíquica de, bien de una
personificación del padre o la madre, o de un castigo no menos temido. En ese caso, el
superyo como cicatriz del complejo de Edipo, contiene la fuerza de las primeras
investiduras de objeto resignadas, que revestido del amor parental si lo hubo, podrá
suavizar su aspereza.
Un breve ejemplo clínico: un niño que interrumpe su dormir a mitad de la noche
por temer a "lo que se imagina". Desde hace años padece esta inquietud que preocupa y
angustia, además a su entorno familiar. Poder trabajar con los motivos de la angustia a
edades tempranas incluye la presencia de los padres en el dispositivo de la escucha
analítica, los que prestando sus palabras colaboran a definir un malestar que se relaciona
inconscientemente con ellos como eslabones de la cadena simbólica del parentesco a la
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VI Congreso Marplatense de Psicología
que pertenecen y habitan. Otro ejemplo de la vida corriente, existen canciones infantiles
para dormir terroríficas. La que dice así: "Duérmete niño, duérmete ya, que viene el coco y
te comerá" pone de manifiesto cuestiones de valor. La figura del coco es la de un
personaje que se lleva a los niños que no quieren dormir (en Portugal, España y en otros
lugares de América), nosotros hemos aceptado la versión "cuco". Deviene de coco (fruto
con tres orificios que representan la boca y dos ojos) la palabra "cabeza" ("estar mal del
coco", "se rompió el coco"). Lo externo se hace interno y viceversa. Como en el ejemplo
clínico anterior, el niño que teme a lo que se imagina, nos encontramos que muchos
pavores devienen de percepciones íntimas subjetivas. Así como la angustia neurótica se
proyecta al exterior en un objeto fóbico (transmudándose en angustia realista), del mismo
modo podemos afirmar que la angustia traumática devenida de eventos inesperados y
sorpresivos, durante el análisis, son elaborados alrededor de mandatos superyoicos. Por
último encontramos un nexo entre trauma y superyo, entre exterior e interior, o debemos
decir con mayor corrección que el superyo ejerce un efecto traumático constante sobre el
aparato anímico. Por último, una pintura de Goya intitulada Que viene el Coco (1797)
ilustra figuras del pavor no puro o pesadillesco, casualmente se trata de una figura tercera
que irrumpe entre el narcisismo madre-hijo (¿Padre interdictor o terrible?, ¿Superyo
feroz?, ¿Madre estragante?, ¿monstruo?, ¿trauma? Y van… las figuras del goce se
extienden aunque no son infinitas).
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CONCLUSIONES
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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Amorrortu editores. Buenos Aires: 1978.
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Buenos Aires: 1986.
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Amorrortu editores. Buenos Aires: 1986.
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Kargieman, Buenos Aires, p.125.
-Wikipedia. Enciclopedia libre.File:BrooklynMuseum.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Podríamos encarar el estudio de los sueños del Hombre de los Lobos de varias
maneras: el sueño repetitivo y programático de los Lobos, que es el enfoque más
clásico y trillado, las transformaciones del significante lobos en los sueños, qué nos
dirían de la función del padre y sus modificaciones, el cambio en los sueños que
diagnostica Ruth Mack Brunswick (1928) luego de sus intervenciones sobre la posición
narcisista del Hombre de los Lobos respecto de Freud y el valor del último sueño con
lobos, al menos en esta cura, como revelador del delirio hipocondríaco y persecutorio
del paciente ruso.
Nos interesa mostrar a los sueños como una verificación fundamental, aunque
no la única, de la modificación –o no- de la posición inconsciente del sujeto, de los
efectos verdaderamente analíticos de las intervenciones del analista. Pero, retomando
el párrafo anterior, podemos preguntar: ¿pueden los sueños dar cuenta de la
estructura clínica en juego como plantea Ruth Mack Brunswick es su texto (1928)?
Recordemos lo que escribe Freud en Sobre algunos mecanismos neuróticos en los
celos, la paranoia y la homosexualidad
Nuestra terminología de las neurosis es inaplicable a lo reprimido; no se lo
puede llamar histérico, ni neurótico obsesivo, ni paranoico. En cambio, la otra
parte del material sometido a la formación del sueño, los pensamientos
preconscientes, puede ser normal o llevar en sí el carácter de una neurosis
cualquiera (…) Por tanto, un sueño puede corresponder sin más a una fantasía
histérica, a una representación obsesiva, a una idea delirante, vale decir,
destilarse como tal en su interpretación (1922 [1921]: 223).
Intentaremos estudiar esa significación del sueño en el famoso caso freudiano.
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la autonomía del yo, la idea de que hay una problemática más existencial, más
exclusivamente yoica, desligada de lo pulsional o de la castración.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
41
VI Congreso Marplatense de Psicología
1
Freud, S.: Tomo VII. Ed. Amorrortu, Bs. As. 2000, pág. 101
2
Freud, S.: Tomo XII. Ed. Amorrortu, Bs. As. 1993. pág. 152
42
VI Congreso Marplatense de Psicología
3
Freud, S.: Tomo XXIII. Ed. Amorrortu, Bs. As. 2004, pág. 243-4
4
Freud, S.: Tomo XXIII. Ed. Amorrortu. Bs. As. 2004, pág. 253
5
Lacan, J.: Escritos 1. Siglo veintiuno editores, Bs. As. 1991, pág 214
43
VI Congreso Marplatense de Psicología
6
Lacan, J.: Seminario 11. Ed. Paidós, Bs. As. 1999, pág 149
7
Lacan, J.: Seminario 11. Ed. Paidós, Bs. As. 1999, pág 239
8
Freud, S.: Tomo XVII. Ed. Amorrortu, Bs. As. 2003, pág 97
9
Mac Brunswick, R.: Suplemento a la “Historia de una neurosis infantil” de Freud (1928) en El Hombre
de los Lobos por el Hombre de los Lobos. Ediciones Nueva Visión. Bs, As. 1976, pág 181
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VI Congreso Marplatense de Psicología
material del paciente. Algo de esto el paciente parece querer retener. Dice Lacan:
“Freud se deja implicar en una especie de culpabilidad a la inversa: le da una renta: el
sujeto ahora ha pasado al rango de momia psicoanalítica mientras que ya no llegaba a
la asunción de su persona. El paranoico se cree el objeto del interés universal y el
sujeto construye su delirio narcisista. La realización narcisista está ayudada y
sostenida por la acción de Freud, quien ha invertido el don del dinero” 10 En 1922
sucede un acontecimiento que tendrá consecuencias subjetivas: llegan las joyas
familiares. No se lo dice a nadie, excepto a su mujer por temor a perder la ayuda de
Freud. Se produce un cambio llamativo en su carácter: crece su avidez por el dinero
que recibía de Freud. Rasgos de deshonestidad e inescrupulosidad se hacen
presentes y contrastan con su carácter anterior. Un año más tarde se produce la
primera operación de Freud.
El paciente señala que su aspecto lo impacta. Luego se sabe la gravedad de la
enfermedad de Freud. Este encuentro con la barradura del padre no será sin efectos.
Ese mismo año llega su madre con una verruga en la nariz.
En 1924 aparece el síntoma de la enfermedad actual: preocupación por su
nariz, nunca había estado satisfecho con la misma. Recuerda que era objeto de burlas
en la escuela. Había tenido un catarro nasal en la pubertad que le había producido
llagas en la nariz y en los labios, el mismo médico lo va a tratar cuando tiempo
después contrae gonorrea. Se encuentra un grano en la nariz y se lo rasca, luego va al
espejo y en el lugar donde se encontraba el grano, encuentra un profundo agujero.
Esto lo precipita a mirarse al espejo todo el tiempo esperando que el agujero se cierre
y empieza a sentir que todo el mundo miraba el agujero de su nariz. Luego de 6 meses
los síntomas se calman.
En 1925, para Pascuas reaparecen los síntomas nasales (hace coincidir la
aparición de sus síntomas con las fiestas religiosas, él nace en Navidad)
Cabe mencionar que mientras se analizaba con Freud lo atendía un
dermatólogo, el Dr X, quien lo trataba por las glándulas sebáceas obstruidas. En estas
nuevas circunstancias vuelve a ver al Dr. X, quien le extirpa glándula sebácea. Pero
luego encuentra que no mejoró. Le aplica la electrólisis y no mejora, en realidad
empeora, le deja unas cicatrices permanentes. El medico dice: “No hay mas nada que
hacer”.A partir de ahí se convierte en su enemigo, conformándose otra serie paterna:
el es pasivo como en la escena primaria.
Finalmente en 1926 consulta con Freud quién lo deriva a Ruth Mack Brunswick.
“Durante el análisis su actitud era hipócrita”, dice: no hablaba de lo que le
sucedía con su nariz, si bien se pasaba por la sala de espera mirándosela todo el
tiempo en el espejo, eludía cualquier mención de Freud y sólo tenía palabras de elogio
para el psicoanálisis y para ella como analista. De esta posición va a ser conmovido
por una circunstancia del destino. El Dr X fallece repentinamente y se lo comunica la
analista, a lo que exclama: “Dios mío ya no podré matarlo nunca más!” la analista lo
induce a hablar y aparece una ideación paranoico querellante: el daño que X le había
hecho sólo podía ser equiparado con la muerte. Se opuso con energía a reconocer
que X era un sustituto de Freud y acentuo el carácter no profesional de su relación
con este. La analista consideraba que “No era posible progresar en el tratamiento
10
Lacan, J.: “El Hombre de los Lobos” Notas de seminario -1952- (Versión no corregida por el autor)
Trad.: Rodríguez Ponte, R.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
mientras siguiera combinando sus dos técnicas de satisfacción: por un lado culpando a
Freud por la pérdida de su fortuna, para poder aceptar de ese modo la ayuda
financiera, y por el otro manteniendo su posición de hijo favorito.” 11 Es decir, el
paciente continuaba satisfaciendo en el tratamiento con Ruth su transferencia con
Freud, esto condujo a que la analista en una maniobra técnica muy riesgosa lo lleve a
confrontarse con su posición real con Freud, la ausencia total de relación social o
personal entre ellos, el hecho de ser uno más de los pacientes sobre los que Freud
escribió, entre otras cuestiones.
Esta intervención produjo cambios en la relación transferencial, en sus sueños
apareció la hostilidad hacia la analista y el deseo de volver al análisis con Freud, si
bien estaba seguro de que la analista supervisaba el tratamiento con Freud y recibía a
través de ella todo el saber y la experiencia de Freud. Cuando la analista le
desconfirma esta creencia irrumpe el odio hacia Freud. A continuación tiene un sueño
donde el padre aparece castrado. La analista aclara que el deseo de muerte del padre
no surge de la rivalidad edípica masculina, sino del amor pasivo, insatisfecho,
rechazado del hijo. Y continúa diciendo: “La expresión del deseo de muerte contra
Freud resumía los resultados de mi ataque a la megalomanía que sobrecompensaba
al paciente. A partir de entonces el análisis progresaba y el deseo de muerte
reapareció en todas sus manifestaciones. El padre castró al hijo y por esa razón debía
ser asesinado.”12La megalomanía había tenido una función protectora de su manía
persecutoria, que aparecía con toda su virulencia: el Dr X, los dentistas, Freud mismo
lo habían tratado mal, la profesión médica en su conjunto estaba en contra del
paciente. Este desmejora sensiblemente hasta que en determinado momento empieza
a instalarse una franca mejoría que se ve confirmada en la producción de varios
sueños, uno de transferencia donde se vislumbra un cambio de posición de la analista
y los otros donde emerge la posibilidad de asumir su masculinidad. De esto último la
analista no puede dar cuenta sólo atribuirlo al arduo trabajo de reelaboración
(durcharbeiten) en todo su proceso analítico.
Para concluir queremos destacar cómo la reproducción de la neurosis en la
cura a través de la neurosis de transferencia, como se observa en el historial, hacen
converger la posición del analista con la acción traumática de los padres, esta
posición nos conduce a una consideración ética de la que los analistas no nos
podemos desentender. La reelaboración de la neurosis de transferencia nos convoca a
la paciencia en términos de Freud, cuando del agieren del paciente se trata, paciencia
que quizá sea una forma de nombrar el acto del analista. Reelaborar el tiempo que sea
necesario hasta que la transferencia quede finalmente desmontada, de lo contrario
esos restos transferenciales van a continuar produciendo síntomas cuya causa se
encontrarán en esa relación transferencial. Otra de las cuestiones que consideramos
se desprenden de este trabajo es la de las maniobras en la transferencia, en este caso
puntual cuando el paciente encuentra una satisfacción sustitutiva en la cura misma. En
el Hombre de los Lobos se manifiesta con el fantasma de ser el “hijo favorito” de
Freud. Como fantasma implica un velo pero al mismo tiempo un modo de gozar. El
11
Mac Brunswick, R.: Suplemento a la “Historia de una neurosis infantil” de Freud (1928) en El Hombre
de los Lobos por el Hombre de los Lobos. Ediciones Nueva Visión. Bs, As. 1976, pág 199
12
Mac Brunswick, R.: Suplemento a la “Historia de una neurosis infantil” de Freud (1928) en El Hombre
de los Lobos por el Hombre de los Lobos. Ediciones Nueva Visión. Bs, As. 1976, pág 201
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCION
LIBERTAD Y SUJETO
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enunciado y tiene que ver con la enunciación, con el deseo que allí opera. De ahí que
lo que aporte el análisis debe restituir el corte que la fantasía esconde, la cicatriz que
deja la soldadura entre la fantasía y lo autoerótico. Hacer lugar al corte en el saber,
saber habitado por un vacío y reducido a la impotencia para dar cuenta de lo que él
intenta obturar. Esto permite pensar a la libertad como aquello que el silencio ofrece,
como aquello que la falla en el saber habilita, margen de indeterminación que no sería
posible sin el determinismo: ¿cómo situar los silencios sino están bordeados por la
“superproducción” de palabras, de significaciones? Entonces la libertad no es anterior
a la apropiación de aquello que viene dado, sino su efecto, consecuencia de aquello
que afecta la consistencia de la determinación causal que de ninguna manera deviene
en autonomía de un yo libre. (Haimovich, 2011)
CONCLUSIÓN
Hemos situado al fantasma como el lugar que inscribe la falla en el Gran Otro,
habilitando, dejando un margen para la libertad. Del “rescate” de esta falla, de este
silencio, en el análisis emergerá un sujeto en una posición diferente. Por eso
consideramos central retomar una preciosa indicación que Lacan hace en el Seminario
sobre “Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis” : “No es inútil hacer
notar de paso -por metafísico que pueda parecer, pero nuestra técnica en fin se vale
frecuentemente, como de algo sobreentendido de por sí, de la expresión liberar alguna
cosa- no es inútil señalar que es ahí donde se ventila la cuestión de este término que
bien merece la calificación de fantasía -la libertad. De lo que tiene que liberarse el
sujeto es del efecto afanísico del significante binario, y si lo examinamos más de
cerca, veremos que efectivamente no se trata de otra cosa en la función de la libertad”
(Lacan, 1964, 227). Aquí distingue lo que sería la «fantasía de libertad», calificada casi
de ensueño diurno, lugar donde el yo se sueña amo, de la «función de la libertad».
Leemos la «función de la libertad» en esta frase como lo que posibilita rescatar al
sujeto del efecto afanísico del significante binario que implica al saber, efecto
mortificante pero inevitable para su constitución. Entonces: ¿qué salva al sujeto de
esta alienación? Justamente aquello que vehiculiza el significante mismo: la falta,
castración, falta de saber sobre el goce, ese silencio que inscripto en el fantasma
habilita la puesta en juego del deseo, e implica una articulación del deseo como deseo
del Otro.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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DESARROLLO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En la época en que el padre parece estar en desplome ¿cuáles serán los efectos
subjetivos en las nuevas formas de familia, en quién recaen las funciones de paternidad?
Y ¿Qué escombros acarrea a la clínica?
Llegan a la consulta por no saber cómo seguir, portando sus inhibiciones, síntomas o
angustias, tironeados y tironeadas por el exceso de mandatos: de igualdad de los sexos, de
precariedad de los contratos de trabajo, de consumo generalizado, de estar “todo bien”, y por otro
lado, por la falta de modelos, en un mundo donde los lazos han perdido consistencia y el mínimo
conflicto divide y expulsa a un desenlace de soledades.
En declinación, el padre devaluado comparece allí donde convergen discursos que dan
cuenta de esta figura. Lectura de los efectos de esta caída en lo social, lo político, lo psicológico,
algo que viene sucediendo durante todo el siglo XX, desde cuando la ciencia prescinde de su
nombre garante, muerto por decreto nietzscheano y falta de necesidad; padre que sufre su declive
más abrupto desde hace más de medio siglo. Lacan nos lo recuerda en La familia (1)
reconociendo como logro social la igualdad de derechos entre el hombre y la mujer, su influencia
en la caída de la imago paterna, y el relajamiento y/o complejización de los lazos familiares.
Este consenso acerca de un tal padre hoy que ya no es el que era, revela una ficción: el
supuesto de la vieja novela familiar, en que un día sí fue un tal patriarca, sostén del hogar,
representante de la ley, padre de familia, hombre potente y jefe protector.
Formas en que nuestra época condiciona el ejercicio de la paternidad, el cuestionamiento
desde los estudios sociales a la sociedad patriarcal con menoscabo de la legitimidad de su
autoridad, el empuje a la igualdad de los sexos, ese significante amo de esta época, va de la
mano de la caída de los salarios haciendo que se requiera doble ingreso por unidad de vivienda,
hasta los mandatos al consumo generalizado del discurso capitalista (2) que avanza en el
sometimiento de todos y todas a extensas exigencias laborales que devienen organizadoras de
tiempos y prácticas de vida familiar.
Desafíos de la clínica hoy, que requieren inscribir en la mirada histórica un diagnóstico del
estado presente de los discursos.
Hoy se impone el discurso de la ciencia, (3) esa ideología que así como hace posible todo
lo imaginable, en la misma medida suprime al sujeto singular, por un sujeto cartesiano asexuado,
que resulta funcional a la dictadura del capital sobre todos: todos trabajadores, todos
consumidores.
Esta universalización global y uniformizante es efecto de la ciencia de la mano del dominio
de los productos de la economía, la publicidad unisex “para todos lo mismo” que encubre las
diferencias, esto afecta al padre, a la madre, así como afecta a la pareja sexual.
Se genera una mortificación de y por parte de los instrumentos, el discurso capitalista ata
nuestros cuerpos como siempre pero peor, masivamente, vivimos una proletarización total, donde
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el cuerpo deviene instrumento que hay que mantener, chequear, calcular su resistencia del
material, el cuerpo deviene capital. En estas condiciones pierde el amor, en una degradación
generalizada, se pierde la ternura, se pierde el miramiento, se desliga la transmisión de bienes y
lazos familiares. (4)
Nuevos mandatos pesan sobre la mujer, a salir de la casa y entrar en los dispositivos de
alienación en el mercado de trabajo, la mujer es movida a acceder a todos los puestos, a cumplir
con todas las tareas, con el consiguiente impacto en las subjetividades.
La sociedad que se ofrece permisiva, sin embargo pesa con su exigencia de perfección
sobre los padres, la mujer que sea madre y femenina, sexuada; el hombre que desee y elija una
mujer, y que como padre indique el camino, prohíba cuando sea el caso, sostenga su palabra, y
se someta él también a la ley.
Para orientarnos en una sociedad en crisis de autoridad, bajo el semblante de un padre
decadente, podemos atender a los efectos inconscientes de la función paterna como nos llegan a
la clínica, en su novedad y en forma de nuevos roles paternos, nuevos modos de sufrir, eludiendo
caer en un familiarismo interpretativo que confunda en los psiquismos cuestiones estructurales
con históricas.
Para hablar del Padre hoy, vamos a tener que hablar de sexualidad, de pareja y de
engendrar, vamos a tener que abrir diálogo con los estudios de género, la revolución biológica y el
matrimonio igualitario, porque los estudios movilizan desligar las representaciones masculinas y
femeninas de su supuesto correlato biológico; la técnica biológica hace posibles la fertilización
asistida, donación de óvulos, semen y vientre a préstamo, y la proliferación de diferentes formas
de emparejarse está siendo reconocida por la ley en todo el mundo. Sociología, Antropología,
Medicina y Derecho confluyen en su desarrollos y convocan a hablar de nuevas cuestiones.
Desafío para el psicoanálisis, el dar cuenta de las relaciones entre sexo y reproducción hoy,
cuando hace un siglo “Tres ensayos...”, en posición adelantada, aprende de la clínica y teoriza la
sexualidad como un plus que excede las pulsiones de auto conservación así como las funciones
de reproducción.
3.- Lacan, J., Psicoanálisis: Radiofonía & televisión, Anagrama, Barcelona, 1997, p.58.
Desafío de revisar a la luz de los tiempos y re definir dado el caso hasta el mismísimo
Edipo. Pensar Edipo más allá del apego a la novela familiar en que: el padre separa mediante su
deseo, a la madre, de su relación exclusiva con el niño...Padre, se trata más bien de una función
que encarna quien hace de modo que el niño no sea todo para la madre...que siga siendo mujer
para él, que le falte algo, función que debe ser asumida por “alguien”. Y madre, función de madre
es la de quien da cuidados, palabras y amor, y que puede ser mujer, u hombre. Bleichmar propone
que esta función consiste en la prohibición de apropiarse del cuerpo del niño para gozo del adulto.
Es el interdicto del gozo sexual intergeneracional.
¿En qué formas afectan estos cambios históricos en las condiciones de vida habitual, a las
formas del funcionamiento psíquico? ¡Qué discursos significan, instituyen hoy a la familia, el
padre, la madre? Si las instituciones son mediadoras que promueven identificaciones, ¿qué
adultos son significativos en las nuevas subjetividades?
En la clínica el debilitamiento del padre se diversifica, llega por los dichos de las mujeres,
llega por defecto, por sus efectos, aparecen las quejas, enojos y reclamos, pocos también
comparecen, algunos desean ser padres, hay diversidad, versiones de padres. Lacan ironizó las
carencias paternas “entre el padre tonante, el padre bonachón, el padre todo-poderoso, el padre
humillado, el padre engolado, el padre irrisorio, el padre casero, el padre de picos pardos, etc” (5)
serie propuesta a continuación de la indagación acerca del lugar del Nombre del Padre en la
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madre, en cuanto en relación a la ley, sobre los efectos devastadores que puede desencadenar la
autoridad paterna.
En la clínica aparecen extremos que plantean su imposible, y entre ambos, algunos padres
posibles. Cada vez más mujeres se encuentran separadas de sus parejas criando hijos
pequeños. Solas, o asistidas más o menos por su familia de origen, estas mujeres sostienen y
crían a sus hijos.
¿Los padres? Extremo es el padre ausente, el que no da cuidados, no da reglas, no da presencia
ni alimenta: el que dimite, no responde, renuncia, abandona, se va y no vuelve...o el que es
expulsado, excluido, o se le oculta su condición de genitor; en el otro extremo resurge la figura del
padre amo que retorna con virulencia a imponer su presente, es el que tiene familia en tanto
posesión suya, exige, reglamenta, es la ley, no la habilita sino que es. Se debe hacer lo que él
dice porque él lo dice. Él sostiene, él pone las reglas.
En medio, series de padres (y madres) heterosexuales y/u homosexuales, que sostienen
como pueden estas nuevas paternidades, juntos o separados, desean ser padres, aman y cuidan
a sus hijos, biológicos y/o adoptivos. Con las fluctuaciones que provienen de su singular
sufrimiento. El psicoanálisis sostiene la ocasión de su diferencia.
5.- Lacan J. Escritos II 1966 Siglo XXI editores 2002 Pág 559
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INTRODUCCIÓN
En El último Foucault (Abraham, 2003) encontramos la referencia a un término clave para pensar
nuestras hipótesis. Se trata de la parresia que supone “el decir verdad”. Sin embargo la verdad foucaultiana
será en la parresia una verdad en co(m)posibilidad entre el discurso y los actos. La parresia muestra una
génesis pre-filosófica de la verdad, pero este decir veraz que supone un derecho en términos políticos
entraña siempre un gran riesgo. El parresiasta, quien dice la verdad, puede decirla por ser quien es.
Analizaremos luego las consecuencias de este “ser quien es” para la verdad. En El orden del discurso,
Foucault señala la diferencia entre decir la verdad para que ese discurso fuera creído, es decir dentro del
orden de la persuasión, de aquel que debía serlo porque era verdadero. Esta distinción marca un punto de
partida claro que desde la filosofía clásica ubicamos entre el orden del sofista por un lado, y el decir del
filósofo por otro.
El discurso será verdadero por lo que dice y deja de importar quien lo dice. Discurso recortado de la
contingencia de su enunciación. Foucault señala una distinción entre el retórico y el parresiasta. El
parresiasta dice la verdad porque es alguien que es capaz de decirla por ser quien es, mientras que el
retórico hace verdad estrictamente discursiva. El parresiasta dice una verdad que alcanza y que involucra
factores extra-discursivos necesariamente. Aparece una cuota de terrenalidad, un más allá del registro
discursivo (Abraham, 2003, p.45).
En este sentido podríamos pensar cuál es la palabra que se autoriza en tanto verdad, qué es lo que
autoriza a alguien a sostener esa palabra. ¿Qué palabra se da en el testimonio? ¿Quién puede decir algo
que soslaye la enunciación y se articule a otra cosa? ¿Por qué alguien es capaz de decir la verdad por ser
quién es? ¿Qué implicaría ese ser quién es?
La escena judicial se presenta como una instancia decisiva para pensar estos interrogantes. El que
dice, el que da testimonio, como sobreviviente o como víctima ¿dice su verdad? ¿Qué verdad dice? ¿Quién
es el sujeto del testimonio? ¿Cuál es la relación del sujeto a su palabra? En principio sostenemos que
alguna palabra debe ser dicha. Existen sin embargo artilugios jurídicos que siguiendo nuestra primer
hipótesis se ubicarían más del lado del orden retórico. Ubicamos por ejemplo el caso de un alegato de la
defensa que se presenta como cierre de una de las escenas judiciales que forman parte de los juicios por
delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico-militar en Argentina (1976-1983). La
pretensión de la defensa es la de trazar una analogía entre los terroristas que atentaron contra Napoleón en
aquella París de 1858 y los desaparecidos y detenidos en Argentina.
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En todo caso, la relación que podríamos ubicar con el hecho señalado por la defensa, que resultaría
relevante al motivo de ese juicio sería entre Napoleón y el gobierno de facto en tanto víctimas de un
terrorismo a la luz de las leyes que contextualizan ambas escenas históricas. Para más precisión, la
respuesta del gobierno de facto a lo que ellos consideraron un problema para el Estado. De este modo
estaríamos siendo coherentes con la acusación que pesa. No se está juzgando a las víctimas de terrorismo
de Estado, no está puesto el foco en la conducta de las víctimas; el juicio no pretende ser una
reivindicación ideológica, sino un acto de justicia.
El imputado (un otro distinto del decir veraz), acusado de cometer delitos de lesa humanidad, se
niega en su debido momento a declarar amparado en el derecho constitucional que le brinda esa
posibilidad. Lo más cerca que estuvo de una declaración fue durante el espacio procesal que utilizó para
decir sus palabras finales. Al igual que sus abogados, él justifica sus actos en los actos de los otros. No
niega lo que dicen los testigos, no puede negarlo y al no hacerlo reivindica los dichos que lo acusan. Su
testimonio, lejos de exculparlo, confirma los delitos por los que se lo imputan. En los juicios no se está
determinando la culpabilidad o inocencia de quienes sufrieron torturas y tormentos, lo que se pretende
establecer es si esos tormentos existieron y quienes los ordenaron y ejecutaron. Por ser los implicados
representantes del Estado, esos crímenes, al ser probados, son considerados bajo la figura de terrorismo
de Estado. Incluso a partir de la declaración de los acusados, la palabra verdadera del sobreviviente se
erige como prueba. Habrá que indagar desde dónde se sostiene esa relación entre la palabra y la verdad.
Santos (Abraham, 2003) señala una pregunta que motivo la indagación de Foucault en los últimos
años de su vida: ¿cómo una relación con la verdad constituye subjetividad? “El acento se pone aquí, en
que a partir de Descartes, el sujeto es un lugar de la verdad ya constituido en contraposición a un sujeto
que se forma y se vuelve otro en relación con la verdad. Devenir lo que se es, es lo olvidado en el juego
cartesiano” (Abraham, 2003, p.45). Lo olvidado, lo es, respecto de la concepción de “sujeto” que podríamos
leer en el mundo antiguo.
El planteo se presenta ligado a la distinción que Foucault hace entre el saber y el conocer. “Llama
saber al proceso por el cual un sujeto sufre una modificación por aquello mismo que conoce, o por el
trabajo que efectúa para conocer. Es lo que permite a la vez modificar el sujeto y construir el objeto. Es
conocimiento el trabajo que permite multiplicar los objetos cognoscibles, desenvolver su inteligibilidad,
comprender su racionalidad pero que mantiene la fijeza del sujeto que conoce” (Abraham, 2003, p.45). El
concepto de conocimiento que Santos ubica como una ruptura cartesiana implica la posibilidad de un sujeto
inmodificable. De un sujeto que emerge como objeto de conocimiento, una operación que atribuye al sujeto
la fijeza del objeto. Este supuesto sujeto es el que se pretende convocar en la escena jurídica. Sujeto
poseedor de un saber -en contraposición a lo que Foucault ubica cómo saber que transforma
precartesiano-, “sin experiencia, sin experimentación y sin riesgo que, coagula una fijeza desconocida por
los antiguos” (Abraham, 2003, p.46). Este saber conducirá a una concepción de verdad que guarda relación
con el enunciado verdadero en tanto constatable con los hechos. Así la consideración de un enunciado
verdadero implicará la verificación de su correspondencia con los hechos fácticos que han sido aislados.
Tales hechos susceptibles de descripción objetiva existen entonces más allá del sujeto sin transformarlo.
Desde esta perspectiva toma valor la crítica de Foucault a la hermenéutica tradicional en su curso
Hermenéutica del sujeto. En tanto la hermenéutica implica la operación de interpretación sobre un objeto
acabado desde un sujeto inmodificable. La verdad dice Foucault, es creadora, no sólo porque la verdad es
creada, sino porque es ella la que crea un cierto tipo de individuo. Decir la verdad entraña un peligro. Hay
un poder ínsito en la verdad porque justamente la verdad se hace en una intervención. Singularidad de la
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verdad que se dice siempre en situación, que implica modificaciones en quien la dice, en quienes la
escuchan. Se produce una verdad en tanto esa producción no fue calculada y no está supeditada a
relaciones de dominación. El parresiasta dice todo, la parresia es el hablar francamente que no sólo
significa decir la verdad, sino hablar abiertamente, sin dobleces.
La escena que circunscribe el proceso penal no brinda el espacio para el libre discurrir. El debido
proceso tiene como objetivo determinar la culpabilidad o inocencia de quienes resultaron imputados. Hay
una parte que defiende y otra que culpabiliza. Cada una armará sus dichos en función de su objetivo final.
No hay allí un decir libre. Hay un decir supeditado a una intención. En términos foucaultianos y desde esta
perspectiva no hay parresia allí. Sin embargo ese decir que se inscribe en la escena judicial, comporta un
valor de intervención que para el sobreviviente supone efectos de verdad.
Si bien el libre decir no está contemplado dentro del marco jurídico, que tiene ciertas normas, hay
una peculiaridad en ese libre decir que hace al parresiasta. Una de las características del parresiasta, era el
de ser alguien que es capaz de decir la verdad por ser quién es. Es ese ser quien se es, lo que autoriza la
palabra verdadera. En este sentido si alguien porta la autoridad por sobre los demás para decir algo sobre
la experiencia vivida es el sobreviviente. Sobreviviente de su propia muerte, aquel que torció su destino
fatal: el superstes (Agamben, 1999). Quién circunstancialmente perdió la posibilidad de decir, porque el
horror es mudo, quién fue reducido a cuerpo viviente desubjetivado, perdió también la facultad de la
palabra. Y por esa impotencia de decir que encarnó, es que tiene la posibilidad de hablar dando existencia
a esa imposibilidad. Dice Agamben haciendo referencia a Foucault y su concepción de la figura del autor,
“si en la relación entre lo dicho y su tener lugar, el sujeto del enunciado podía (…) ponerse entre paréntesis,
porque se había producido ya la toma de la palabra, la relación entre la lengua y (…) el archivo, exige una
subjetividad que atestigua, en la posibilidad misma de hablar, una imposibilidad de la palabra. Por eso se
presenta como testigo y puede hablar por aquellos que no pueden hacerlo” (Agamben, 1999, p.153). El
parresiasta que no esconde nada, que habla francamente, tampoco esconde la imposibilidad de decir. Algo
de la verdad entonces se transfigura como imposible.
En la Antigüedad la parresia nace anudada al orden democrático. Señala Santos que la posibilidad
de hablar francamente es un derecho que concierne a todo ciudadano ateniense. Es el derecho a decir en
la asamblea y es a la vez el derecho a ser creído. Es el derecho a la paridad, a ser un ciudadano par de
cualquier otro (Abraham, 2003, p.49). A partir del orden democrático, es en el marco que circunscribe la ley
donde un ciudadano cualquiera, puede hacer uso de ese derecho. Es en primer lugar el Estado quien debe
establecer las coordenadas para que ese derecho a decir sea usufructuado por el ciudadano y esa palabra
dicha tenga validez.
La parresia es por otra parte, la construcción de un sí mismo que obligue a los demás a creer en lo
que esa persona dice. Uno debe transformarse en un sujeto de verdad. Es porque alguien dice lo que cree
que se establece el vínculo con los otros (aspecto compositivo entre los actos y el decir). Es entonces en
esta distinción donde la parresia se opone a la retórica (orden de la verdad meramente discursiva).
(Abraham, 2003, p.49)
LA HUELLA DE LA VERDAD
En la escena judicial podemos ubicar la figura del retórico en los abogados. Su esfuerzo radica en
persuadir a quienes tienen la facultad para tomar una decisión. No encontramos lo que Foucault ubica
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VI Congreso Marplatense de Psicología
como la dimensión de la verdad en ninguna de las posiciones opuestas que sostienen los abogados, ni en
el que acusa, ni el que defiende, donde parecen recortar el relato en función de un objetivo específico.
Ninguna postura partidaria nos conducirá en este sentido hacia la verdad. La condición del decidor de
verdad depende de ciertas prácticas que implican una transformación del sí mismo. Se instituye un saber
ligado a la transformación de sí. El parresiasta es un sujeto que no permanece igual al conocer sobre sí
mismo, sino que se transforma en virtud del propio conocimiento. Esto implica un proceso para el propio
sujeto en el cual lo no calculado acontece.
Foucault representa esta transformación en una figura de la mitología griega, Ion, quien pertenece
primero al orden divino -era hijo de Apolo- siendo la parresia algo a lo que en esa condición no accede, y a
lo que accede cuando se sabe hijo de Creusa –hija de Erecteo, primer rey de Atenas. Es su filiación
materna a una madre humana en contraposición a un padre divino, lo que le garantiza la posibilidad de
decir la verdad. Eurípides en su tragedia, insiste en el carácter humano de la verdad que opone
explícitamente a la divinidad que oculta y muestra a su antojo. F. Santos señala que ubicar al Ion como “la
pieza en que la verdad pasa de los Dioses a los Hombres, de Delfos a Atenas, implica una calidad de
hombres distinta de cualquier otra: el hombre libre” (Abraham, 2003, p.51).
Y agrega que es posible que la verdad advenga a este mundo por este nuevo estatuto de la
condición humana. Es Creusa quien habla, quien acusa a Apolo y Apolo quien se mantiene silente. Creusa
fue víctima del poder de Apolo. Y es ella quien habla y al hablar inaugura una dimensión de la verdad
absolutamente otra que la verdad revelada por Apolo mediante el oráculo. “En vez de la ambigüedad de
una verdad a interpretar, Creusa señala hechos que constituyen una trama donde la verdad está fuera de
toda interpretación. Dice lo que ha sido y al decirlo estatuye un estado de cosas diferentes del que es”
(Abraham, 2003, p.51). Ella no sabe del futuro, pero al decir lo que fue establece un futuro distinto para Ion,
es decir, lo crea.
Quien habla francamente de los hechos, del modo en que sobrevivió a su propia muerte, quien
habla de sí mismo, de su propio cuerpo es quien está autorizado, es en quien se puede articular algo de la
palabra verdadera. Esos cuerpos silenciados son la roca dura de la escena judicial. Desde allí se construye
el saber que transforma al sujeto. Los que saben sobre lo que ocurrió, aunque no puedan decirlo todo. Hay
una verdad de esos cuerpos parlantes en su proceso de subjetivación; cuando el hombre afirma lo que es
contra el querer ser- un- animal- para- la- muerte al que lo expuso la circunstancia. La subjetivación hace al
hombre (Badiou, 2000, p.40) y en ese hacerse hombre, desde esa humanidad que se reconquista en el
decir franco sobre sí mismo –un decir que indefectiblemente es en posición de testisi-, al igual que ocurre
con Creusa, es desde donde se abre la dimensión para establecer un futuro distinto al que podría haber
sido.
CONCLUSIÓN
Este trabajo nos permitió recorrer algo de esa dialéctica imposible entre la vivencia y cierto orden de
transmisión en el marco de un testimonio. Esa imposibilidad del horror de lo inenarrable no nos limita para
ubicar allí cierto efecto de verdad que porta el decir mismo. El testigo está afectado por una imposibilidad
que parece sortearse por la vía del desdoblamiento del testigo, donde se requiere de una separación que lo
torne posible. Poder hablar, poder dar testimonio sobre el horror, produce un efecto de subjetivación.
Aunque la experiencia no pueda ser descripta, la construcción que de ella se haga supone ya un valor de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
verdad sostenida en la palabra. Tomar la palabra supone la ajenidad de la palabra, en la medida en que la
palabra proviene del otro. El superviviente tiene un saber sobre la muerte que pierde como saber cuando
habla de ello. (Gutiérrez, 2013)
Foucault en 1984 ubica cuatro modos de veridicción (Abraham, T. 2003) la del profeta, la del sabio,
la del técnico o enseñante y la del parresiasta. Aunque cada una de estas formas del decir veraz tendrá
características que le son propias, hay algo que comparten: lo imposible de la transmisión. ¿En qué
condiciones la palabra es alojada? La transmisión del testimonio no es sin el otro. Pero el modo de
transmisión habla del carácter ficcional de la toma de la palabra. No se puede transmitir la historia sino es
por vía ficcional. Algo de lo verdadero que se ubica más allá de lo cierto.
Este orden ficcional se inscribe bajo una ética de la palabra, espacio de conjunción entre el plano de
la ética, de la política y de la verdad. Podemos concluir entonces que este decir verdad está en un lugar de
resistencia, esta verdad que no es adecuación, supone un modo de resistencia frente al poder. Foucault
señala que la parresia se puede organizar en lo que llama un juego parresiástico, porque requiere del otro.
Aquel a quien el individuo se dirige para decir la verdad, si acepta este juego necesario, debe aceptarla por
ofensiva que sea para sus opiniones. “El juego de la parresia se establece a partir de esa suerte de pacto.
La parresia es el coraje de la verdad en quien habla y asume el riesgo, pero es también el coraje del
interlocutor que acepta recibir como cierta la verdad ofensiva” (Foucault, 2009).
La palabra del testigo perturba, incomoda al oyente, lo que se relata resulta increíble. Si bien, la
escena judicial impone ciertas condiciones a ese decir, es la única vía posible para introducir la palabra
verdadera en el orden de la polis.
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Agamben sobre el testigo. Esta torsión supone el cambio de posición de superstes a testis en el proceso de testimoniar.
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Crímenes de Lesa Humanidad. Derivaciones Jurídicas y Subjetivas. Programación Científica 2011-2014. Secretaría de
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Mar del Plata, es una localidad que atrae y seduce por su belleza patrimonial,
encarnada en un espacio-tiempo, urbano-paisajístico, nombrada por muchos como la “Perla del
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calzón, medias con sandalias o zapatillas y una capa con que se cubrían al salir del mar para
cubrir los cuerpos mojados (Kaczan G, 2012) En esa época la tez blanca era signo de distinción,
por lo que solo se utilizaban productos de tocador que aportaran a su hidratación manteniendo
su estado e imagen natural. Además, esta transformación se vio reflejada en costumbres que
pasaron de la tez blanca y los rostros cubiertos por sombreros y velos a la tez coloreada,
bronceada. Proporción, armonía, simetría son los ejes fundamentales para la conformación de
una anatomía que puede exhibirse, mostrarse. Las representaciones sociales determinan los
cánones de belleza distanciando los valores del binomio belleza-fealdad, e instituyendo
estereotipos ideales y su antítesis: lo imperfecto, lo defectuoso (Kaczan, 2013).
A partir del año 1972 el Gobierno Nacional instituye la celebración de la “Fiesta Nacional
del Mar”, donde la joven seleccionada se constituye en “representante de nuestra ciudad”, este
rito tiene otra connotación ya que las jóvenes galardonadas asumen la responsabilidad de
presidir los actos de Inauguración de la temporada y adquiere trascendencia excediendo el
ámbito local, En la actualidad la elección de la Reina se realiza entre 12 residentes de la ciudad
de Mar del Plata, la ganadora asume la responsabilidad enfocada en la promoción turística de la
localidad en acontecimientos nacionales e internacionales, cuyo exponente principal es el mar,
fuente de mitos, cuna de interpretaciones fantásticas: “quise formar parte de esta fiesta y
presentarme para la selección hasta que lo decidí y luego me eligieron reina del mar. Durante un
año que representé a la ciudad viví intensamente el reinado. Llevé nuestra ciudad y su mar a
otras festividades y encuentros”. ( entrevista a Reina del Mar 2013), desde esta perspectiva la
Reina se transforma en embajadora, es el “rostro de la anfitrionidad”.
Este ritual de consagración de una “Reina” se realiza año tras año, es un imaginario
instituido y ha aportado a la constitución de una sociedad y con ella su historia. La creación y
evolución de esta ciudad turística no es un hecho independiente sino que se obedece a un
contexto político institucional más amplio, donde es nombrada y apropiada en base a sus
diferentes ritos de institución (Bourdieu, 1985). Rito que, desde su ceremonia fundacional en el
año 1910 ha recorrido el camino de transición de la “Villa balnearia aristocrática” hasta la “ciudad
de masas” que perduraría hasta la década de los años 80.
El entorno paisajístico, la elección como destino del turismo moderno, la consideración
de ver a la naturaleza como ideario vacacional ha influenciado en las últimas décadas. Mar del
Plata posee una costa peculiar que se manifiesta en diferentes niveles en su altitud y con bahías
y puntas que le otorgan una belleza natural, a ello se suma una nueva manera de vinculación
con el mar, con la osadía de enfrentar cada ola, especialmente en situaciones de fuertes vientos,
bravura de sus aguas a través de la práctica del surf. Evadirse de lo formal, la ciudad, sus
rutinas, es otro ideario para estos deportistas. La orientación de ciertos destinos por sobre otros,
en los años 60, pueden deberse a variadas situaciones, se fomentaba los beneficios de los
baños de mar, el sol como poseedor de vitaminas y revitalizador. Posiblemente esta necesidad
también influyó en la elección de ese tipo de actividades, siendo el origen de las prácticas en
contacto con el mar, cada día, lo que derivaría en cierta forma en la práctica cada vez más
difundida de este deporte.
En la ciudad que nos muestra la belleza, el atractivo, lo natural como lo deseable, el mar
es el hilo capitonee que va entrelazando la vida, los mitos, los sueños, los imaginarios que se
manifiestan a nuestro alrededor. La oferta natural de playas, con orientaciones diferentes
70
VI Congreso Marplatense de Psicología
propicia que el mismo día, familias enteras y especialistas surferos puedan practicar o aprender
en las numerosas escuelitas que existen para dar los primeros pasos en el mar, tomar las tablas,
y seguramente intentar luego correr una ola.
El sur es buscado cada año para sus primeros acercamientos. Ofrece extensas playas,
siendo Waikiki la más conocida y difundida por los primeros campeonatos de marplatenses en
los 70’ y desde ese momento por la primera escuelita del surf en Mar del Plata.
Es en estas playas que el pionero del surf comenzó a practicar el deporte y a enseñarlo.
Sus sueños de contacto con el mar cada día, tuvo su máxima respuesta cuando construye su
vivienda en la playa, una cabaña que desde sus amplios ventanales se observa en continuo, sin
línea de finalización entre las rocas y el agua, las ondulaciones del mar. Moviéndose de pie,
imitando cada una de las figuras en el aire, como si estuviera sobre un tabla, en la ola elegida,
nos relata mirando al mar profundamente y emocionado mientras habla: “Cada cresta de ola,
única, diferente a la anterior y a las que se encaminan a la orilla, presenta al que practica este
deporte un desafío constante que pone a prueba su planificación estratégica. Tenés que decidir,
pensar la maniobra, ves la ola que viene, son milésimas de segundos, el tiempo no pasa…y
estas en el otro continente, el mar” (entrevista al pionero del surf en Mar del Plata, playa Waikiki)
Un atractivo singular que se suma a la línea costera es que entre estas puntas existen playas de
arena de suave rellenamiento y hacia el norte y el sur, existen costas de acantilados que le dan
una impronta diferente al resto de las playas. Su contacto con el mar por casi 40 kilómetros, la
constituye en un escenario perfecto para las prácticas de deportes acuáticos. Nuestra costa
posee vientos que permiten según las playas en que se encuentran, formar olas para surfear con
características diferenciadas en tamaño y consistencia: “podemos afirmar que lo que se
experimenta en sí mismo tiene relación con el entorno, con las maneras de vivenciar lo
acontecido y luego establecer en el recuerdo la fuerza para transmitirlo. La aprehensión
sensorial de un contorno así no sólo se simplificaría sino que también se ampliaría y
profundizaría. Una ciudad como esta seria una ciudad que pudiera aprehenderse con el tiempo
como una pauta de gran continuidad” (Linch, 2008)
La orientación de la línea costera y el tipo de playas, con presencia de rocas o fondo de
arena ofrecen variadas oportunidades a principiantes o especialistas que tomarán cada “ola
perfecta para ser corrida”. ”. Estas características, sumadas a la práctica por cinco décadas de
manera continua por muchos nativos y visitantes nacionales e internacionales, fueron muy
relevantes como fundamentos en la presentación de solicitud de nuestra ciudad como “Capital
Nacional del surf” 1
Como una situación evidente, el tipo de playas varía entre el norte y el sur de la ciudad.
Las playas más reconocidas por el tipo de olas hacia el norte son Playa Cardiel y Estrada,
donde suelen llegar hasta los dos metros y son consideradas muy buenas por los habitantes de
ese sector marplatense, así también La Roca que tiene un point de excelente calidad de olas.
En el sector céntrico, muy bueno en los primeros años del surf en la ciudad, la situación se
modificó con la construcción de las escolleras y en la década del 90’, con el refulado de arena
que cambió notablemente no sólo la forma de cada playa sino además la profundidad y el
declive natural. La punta que ofrece Cabo Corrientes, tenía las olas mejores hasta la
construcción de la escollera que cambió la corriente al cortarla, era la elegida por los más
avezados.
1
H. Cámara de Diputados de la Nación Presidencia 2906-D-13 OD 2466 –
71
VI Congreso Marplatense de Psicología
Unos metros hacia el sur, La Maquinita y Mariano presentan los mejores tubos, ideales
para expertos, que superando la imponente rompiente que produce el afloramiento de las rocas,
toman esas largas y rápidas olas. Tradicional, desde hace muchos años, La Paloma en la Zona
de Acantilados, es una de las playas más buscadas por las olas con gran fuerza y de formas
perfectas, donde se encuentran los que aman el surf y lo practican desde su experiencia.
Kevin Linch (2008) sugería que si en cada instante hay más de lo que la vista puede
ver, más de lo que el oído puede oír,[…] Nada se experimenta en si mismo, sino siempre en
relación con sus contornos, con las secuencias de acontecimientos que llevan a ella, con el
recuerdo de experiencias anteriores. (Kevin Linch, 1960, p.9)
La ciudad privilegia algunas interpretaciones, algunos episodios de su vida, y olvida
otros. Pero además de su propia memoria colectiva y pública, la ciudad es el escenario de
múltiples memorias privadas que sobre ella discurren. Son las memorias en la ciudad, enlazadas
y fundidas en la historia de la ciudad que más importa al sujeto que recuerda. (Durán, M. Á,
2008, p. 48)
Mar del Plata es una ciudad símbolo que despierta el deseo de conocerla, el anhelo de
vivenciar esa experiencia de veraneo que todos ansían tener. Genera sueños de nuevos
impactos sensoriales, imágenes perdurables en la vida de cada visitante, visiones hermosas que
superan a los lugares de procedencia del que las registra.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Este trabajo se fundamenta en los aportes de las teorías contemporáneas del sujeto1 y
anuda tres ejes problemáticos en los cuales se basamenta el recorrido del estado de la
cuestión: los mitos y ritos de los grupos de jóvenes, el cuidado humano, y el imaginario festivo
de una ciudad dionisíaca con sus pautas de consumo de la nocturnidad y la transgresión
incrementadas por la afluencia del turismo nacional. La investigación posee un diseño
cualitativo, basada en la técnica de entrevista colectiva por medio de grupos de discusión con
protocolo de interpelación (Golpe/Zunino: 2009, 2013), con el objetivo de indagar los
imaginarios juveniles sobre el cuidado de sí en el escenario marplatense2.
A lo largo de las últimas décadas diversos autores se han abocado al estudio de la
juventud en Argentina3. Como toda categoría constituida socialmente, posee una dimensión
simbólica, contemplando sus aspectos fácticos, materiales, históricos y políticos en los que
toda producción social se desenvuelve. (Margulis; 1996). Estos aspectos fácticos se refieren no
sólo a la edad vinculada con lo biológico o la estadística, sino a una edad procesada por la
historia y la cultura: las generaciones, (Margulis; 1996). Al referirnos a la juventud es necesario
tener en cuenta el concepto de moratoria social (Erikson; 1970) y el de moratoria vital
(Margulis; 1996). La moratoria vital se identifica con esa sensación de inmortalidad propia de
los jóvenes, asociada con la temeridad de algunos actos gratuitos, conductas autodestructivas
que juegan con la salud (que se vive como inagotable), la audacia y el arrojo en desafíos, la
recurrente exposición a accidentes, excesos, sobredosis. (Margulis; 1996). Siguiendo a
Douglas (1996), la aceptabilidad del riesgo y con ello la “inmunidad subjetiva”, están en
estrecha relación con la vida cotidiana, con los símbolos, mitos y los rituales de los jóvenes,
como producto cultural. En este sentido “los mitos”, (Castoriadis, 1988); juegan un papel
1
(Foucautl; 1967, 1978, 1979, 1988, 1994; Castoriadis ,1975,1986, 1987, 1992, 1993, 1994,1996; Kristeva,1976, 1977, 1982, 1985, 1989, 1990,
1995; Butler,1999, 2002, 2004, 2009, 2011;Exposito, 2004,2006, 2013; Bleichmar, 1999, 2002, 2005, 2008, 2012).
2
Se aplicará un plan de triangulación intrametodológica de datos según los grupos de jóvenes por género, clases de
edad, nivel de educación y religiosidad para encontrar patrones diferenciales de mitos y delinear perfiles tipológicos
rituales que vulneran o propician el cuidado de sí. La muestra es determinística por cuotas y alcanza un total de
N=120 sujetos entre 15 y 18 años, residentes en la ciudad de Mar del Plata. La misma quedará integrada por un total
de 12 grupos de 10 personas cada uno, seleccionada por cuotas según los siguientes criterios: clase de edad,
condición social, sexo, nivel de educación y formación religiosa. Los datos tomados hasta el momento y en los
cuales basó este trabajo, refieren a 6 grupos de sujetos de ambos sexos de clase media y alta pertenecientes
escuelas de la ciudad de Mar del Plata.
3
Entre ellos se destacan: (Auyero, 1992, 1993; Braslavsky, 1984, 1986, 1989; Chaves, M. 2004, 2005, 2006, 2009,2010; Margulis,
1994,1996, 2000 y Deutsche Bank, 1993,1999).
73
VI Congreso Marplatense de Psicología
4
Asimismo, durante el año 2013, dos de los miembros de este grupo, publicaron investigación realizada en la ciudad de Tres
Arroyos, denominada Voces disidentes que es el antecedente directo en donde se enmarca esta beca de estudiante; el mismo
indagó un N:150 sujetos de una escuela pública que manifestaron diversas enunciaciones sobre el autocuidado en base a métodos
cualitativos con grupos de adolescentes, con el objetivo de indagar los imaginarios juveniles sobre el autocuidado, en base a los
modos de decir/representar y hacer/sentir que manifiestan según su identidad de género, su pertenencia a grupos de edad y su
inscripción en el espacio social.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
con su propio sistema de creencias sobre las maneras de hacer, y los modos de ser, lo que le
otorga matices regionales, generacionales y epocales.
DISCUSIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
oferta de libertad ilimitada, la sociedad y con ella los medios de comunicación, generan una
cosmovisión de inseguridad y desconfianza hacia el otro, que limitan y dificultan su incipiente
capacidad de tomar decisiones. “Es una etapa difícil por los medios de comunicación que te
bombardean y después salís nervioso a la calle, eso más las dificultades de la etapa
adolescente”
Otro grupo de sujetos, comenta que ser joven, más allá de ser una etapa para disfrutar,
significa un momento de responsabilidad por el futuro. En relación a lo antedicho, surge
nuevamente la exigencia de tomar decisiones que ellos creen serán determinantes para su
futuro, generando de esta forma una gran ansiedad y cierto malestar e incertidumbre por la
inseguridad de sus pensamientos. “Es un momento de formación y de tomar un rumbo en la
vida y para el resto de la vida”. Esta dificultad de tomar decisiones, que ellos creen son de gran
importancia, se ve condicionada también por los obstáculos que presenta la sociedad “Un
momento complicado para nosotros, por los obstáculos que presenta la sociedad”. Entre ellos
destacan la inseguridad, la violencia social y sobre todo la mirada que ellos creen tiene la
sociedad sobre la juventud. “La sociedad, los medios, generalizan la figura del joven que no
tiene respeto por su vida, ni por nada, y no es siempre así”. Dicen que la sociedad no permite
que ellos se diviertan, sostienen que es una sociedad paranoica.
Significaciones sobre el Cuidado de sí
A partir de los datos obtenidos en los grupos de discusión, se ha observado como
primera instancia de análisis el lugar preponderante otorgado a la función de los padres, en
relación al cuidado de sí. “Me están cuidando para el día de mañana poder cuidarme solo”, “mis
viejos me guían”, “mis viejos me incentivan a cuidarme”. Este punto resulta interesante, ya que
no sólo denota la necesidad y el sostén de la figura de los padres en el cuidado propio de los
jóvenes, sino que resalta y de manera insistente, la diferencia con las realidades de otros
jóvenes que no cuentan con el apoyo de sus familias. En este sentido es que los sujetos
destacan que la condición para cuidarse resulta ser que los padres mismos cuiden de ellos, y
reconocen y compadecen las dificultades de aquellos jóvenes, en los cuales el apuntalamiento
intersubjetivo por parte de las figuras familiares, se encuentra ausente. “Algunos padres
modernos no se hacen cargo de sus hijos que saben que se drogan”.Resulta de particular
importancia reconocer que los jóvenes se enfrentan a diferentes grados de libertad que
desorientan, rozan la incontinencia y la falta de apuntalamiento, generando un movimiento sin
espacio de transición entre la familia y la sociedad. Frente al panorama social actual que nos
ofrece un escenario de inseguridad, violencia y consumo desmedido, los jóvenes reconocen
sus dificultades para cuidarse por sí mismos, apelando a la contención y sabiduría de los
padres, que operan como límite externo, “en un futuro se lo voy a agradecer”. Asimismo
cuidarse para los jóvenes pasa por saber manejar las libertades otorgadas, ya que señalan que
“la sociedad te incita a hacer cosas malas y los padres no siempre están”. “Los chicos no saben
qué hacer con esa libertad; si a los chicos les das soga, la terminamos rompiendo”.
Por otro lado, los sujetos señalan que cuidarse, es cuidarse del otro desconocido, de
esta forma comentan que una de las maneras de cuidar de si es compartiendo siempre con
gente conocida, con el grupo de pares. “Tenés que cuidarte constantemente del otro”, “Es
importante relacionarse con la misma gente” .De esta manera los grupos de pares configuran
un aspecto de gran importancia en la formación de las identidades juveniles. Los sujetos se
76
VI Congreso Marplatense de Psicología
sienten protegidos y sostenidos por los grupos de pares, que permiten tolerar las soledades e
incertidumbres, propias del pasaje a la autonomía respecto de los lazos de familia. “Yo si pierdo
a mis amigos en el boliche, me siento desprotegido”, “si los otros te ven solo te atacan”,“Nos
cuidamos mucho entro nosotros”, “El problema del verano es que viene mucha gente
desconocida a descontrolarse”.
Sin embargo, es necesario destacar que cuando el grupo deviene pertenencia decisiva
para los jóvenes, formar parte de los mismos puede tonarse alienante y desarrollar conductas
que pongan en cuestión el cuidado de sí. La pertenencia, la necesidad de constituirse en el
grupo de pares, que permite la recomposición identificatoria y la salida del núcleo familiar,
puede transitar de un espacio de protección y resguardo de los otros desconocidos a un
espacio en donde se diluyen las singularidades, las creencias, el cuidado y el propio
pensamiento, llevando a conductas de que generan riesgos constantemente.
“No tomar alcohol y perder la consciencia de todo porque es una etapa para
experimentar”. Equilibrio que en muchas ocasiones pierden “No nos cuidamos, es una
carrera de ver quien hace más cosas perjudiciales”, “Si me equivoco puedo volver a
empezar" .“Tenemos menos consciencia del peligro”, “a mí no me va a pasar nada”,“
Creemos que la sabemos todas, no nos cuidamos, total que perdemos”, “Es normal
ver en una previa gente que quiebre. O que se reciban a cualquier persona
desconocida en las casas. Que las amigas se dejen solas. O tomar cosas que no
sabes. Además de la violencia”.
Los jóvenes sostienen que cuidarse es poder elegir y al mismo tiempo manifiestan las
dificultades en estas elecciones. “Cuidarse es poder elegirlas personas con las cuales te
relacionas”, “No dejarse llevar y plantarse”, “Tener cuidado con la identificación a una imagen”,
“No estar con cualquier persona para ser copado”. Asimismo sostienen que cuidarse es
respetarse y respetar a los demás. “El cuidado de si pasa por cuidarse a uno mismo y a los
otros. Cuidarse es querer y quererse”. En este sentido, reconocen las dificultades de poder
elegir en esta etapa la cual consideran un momento para probar. Manifiestan la dificultad de
lograr el equilibrio entre probar, pertenecer y cuidarse al mismo tiempo.
CONSIDERACIONES FINALES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
1
La misma se encuentra enmarcada dentro del sistema de becas de investigación que ofrece la
Universidad Nacional de Mar del Plata, en su categoría de Iniciación. El proyecto se denomina
“aspectos valorativos del cuidado comunitario de personas envejecientes” y tiene como objetivo
principal:”. El mismo, forma parte del proyecto de investigación denominado “Mitos de anfitrionidad
y ritos de institución de un lugar emblemático en el imaginario argentino” del grupo de investigación
Estudios de Comunidad, de la Facultad de Psicología de ésta unidad académica.
79
VI Congreso Marplatense de Psicología
de una gran heterogeneidad y según el último censo nacional del año 2010 su cifra
asciende a 614.350 habitantes.
En este apartado lo que nos interesa analizar son las cuestiones que han
determinado que Mar del Plata se haya convertido en lo que podríamos denominar una
ciudad imaginada, que mediante múltiples actos poiéticos se ha convertido en una
verdadera usina de figuraciones que cimentan las narrativas nacionales en torno a ella y
que traspasa ampliamente sus fronteras. Figuraciones que se enlazan con los planteos de
Benedict Anderson en torno al concepto de nación cuando dice que una comunidad es
“imaginada porque aun los miembros de la nación más pequeña no conocerán jamás a la
mayoría de sus compatriotas, no los verán, ni oirán siquiera hablar de ellos, pero en la
mente de cada uno vive la imagen de su comunión.” (1993:23). Por estas razones es que
se ha convertido en una ciudad emblemática2, ciudad de acogida y receptora de las
prácticas migratorias del otoño de la vida3 (Golpe, 2000). A partir de las distintas
investigaciones que realizó el grupo de investigación, se pudo establecer que los motivos
por los cuales Mar del Plata se constituyó en una ciudad ideal para migrar, por parte de
las personas de 60 años y más, eran:
“[…] a) Las condiciones objetivas ecológicas y la infraestructura de la ciudad; b) La
producción cultural que ha logrado la ciudad, en lo referente a espectáculos
nacionales e internacionales y actividades lúdicas (casino); c) los sistemas de
atención geronto-geriátrica con los que cuenta la ciudad; la oferta programática
destinada para la tercera edad que permiten generar redes de apoyo social; d) la
existencia de espacios generacionales donde realizar prácticas sociales de
amenidad en el espacio público; e) la capacidad de acumulación de bienes de
capital económica en el mercado inmobiliario de la ciudad;f) Por migración de redes
sociales de proximidad (parentesco o amistad); por la estructuración de relaciones
sociales en el espacio de acogida.” (Golpe, 2001, 196)
Así se pudo comprobar los motivos por los cuales los sujetos envejecientes,
migraban a la ciudad de Mar del Plata luego de su retiro laboral. Así surge la
institucionalización social de la figuración ‘Me jubilo y me voy a Mar del Plata’, lugar
imaginado como como un espacio de acogida.
2
Según Golpe (2000): “Mar del Plata ha sido elevada a la categoría de ciudad emblemática,
porque conjuga la memoria, el encuentro y la ficción. La perceptualidad de la ciudad que los
turistas y las prácticas migratorias estaciónales han convertido a la "ciudad real" que es Mar del
Plata dentro de la memoria colectiva argentina, en un espacio significativo, incorporado de los
habitus de grandes conglomerados de agentes sociales, se encuentra incorporada, objetivada e
institucionalizada como la Ciudad Feliz y representa el sueño de gran parte de los argentinos de la
época del turismo social.”
3
Estas se refieren a “las acciones de movilidad territorial de la población de adultos mayores de 60
años que buscan espacios de acogida donde desarrollar un estilo distintivo de vejez” (Golpe, 2000)
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VI Congreso Marplatense de Psicología
4
Es una escala tipo Likert, compuesta por 20 preguntas que indagan sobre las valoraciones acerca del
cuidado de sujetos envejecientes en el contexto local. La misma fue confeccionada por el grupo Estudios de
Comunidad en el año 2013. Se realizó para su validación un pre-test de 200 casos, a partir del cual se
realizaron una serie de modificaciones en función de las respuestas de las personas.
81
VI Congreso Marplatense de Psicología
Tabla II Mar del Plata es una de las comunidades argentinas con menor
discriminación hacia los adultos mayores
N° %
DE ACUERDO 116 35%
MEDIANAMENTE DE ACUERDO 116 35%
EN DESACUERDO 99 29,9%
TOTAL 331 100,0
Podemos observar en la tabla la ausencia de variaciones significativas en las
respuestas. Si tomamos en consideración la variable socioeconómica, notamos que en las
clases sociales más vulnerables el grado de concordancia alcanza el 42,8% frente al
25,6% de desacuerdo. En los estratos medios observamos que prima el desacuerdo con
un 35,9% (el nivel de acuerdo es del 28,3%), y en las clases sociales altas, el porcentaje
de acuerdo y desacuerdo es el mismo 28,8%. Por otro lado, si tomamos como eje
analítico la edad, observamos que la franja poblacional que más acuerda con esta
premisa es la de 15-19 años (con un 40,4%), los de 40-49 años (con un 47,2%) y la de
50-59 años (con un 43,3%), y los mayores índices de desacuerdo los encontramos en la
población de 20-29 años (con un 35,59%) y en la de 30-39 años (con un 34,6%). Por
último, se observa las respuestas presentan una leve variación según el sexo del
consultado, así los varones concuerdan en un 38,6%, frente al 31,8% de las mujeres.
3. Consideraciones finales.
82
VI Congreso Marplatense de Psicología
En tal sentido, y como corolario, nos interesa ofrecer dos reflexiones sobre los modos
en que dicho imaginario se han instalado. El primero, se enlaza con los planteos que
realiza Eliza Pastoriza cuando dice que Mar del Plata fue una conquista para los
trabajadores y que el mismo “era presentado como un lugar donde se conocen los
argentinos, lo que acentuaba su carácter nacional” (2012:3-4). Pensamiento que nos lleva
a entender los motivos por los cuales para los estratos sociales vulnerables y medios Mar
del Plata se convierte en ese lugar al que ‘hay que llegar’ y ‘hay que conocer’ (Pastoriza,
2012) y, podemos decir ahora a partir de los resultados de nuestras investigaciones que
es el lugar en el que ‘hay que envejecer’.
La segunda cuestión, y relacionada con el anterior, nos lleva a plantear la noción de
tiempo (es decir la dimensión en la que todo ente se coloca (Berti, 2011:28) y sus
implicancias en el sujeto, a través de su impacto en la memoria5 (entendida como una
afección del paso del tiempo, es decir, de cómo percibimos el pasado). Noción que nos
permite entender los procesos mediante los cuales el imaginario logra encarnarse en las
subjetividades y cristalizar sus sentidos, que adquiere diferentes matices a través del
tiempo. Si nos remitimos nuevamente a los datos de la investigación podemos observar
cómo la pertenencia a determinada generación, deja entrever un mayor nivel de
encarnación de esa figuración de Mar del Plata, como la ciudad en la que hay que
envejecer.
A modo de cierre, y como decíamos al inicio de esta ponencia, el abordaje de los
mitos, imaginarios sociales y sus figuraciones supone, para el investigador, no sólo
vislumbrar su potencial creador, sino también (a través de la comparación de relatos)
hilvanar los modos en que se produce y reproduce, ya que “sólo permanece vivo si sigue
siendo contando, de generación en generación, en el transcurso de la existencia
cotidiana.” (Vernant, 1999:4).
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
5
La memoria según Aristóteles “no es ni una sensación ni un juicio, sino un estado o afección de
uno de los dos cuando ha pasado un tiempo. No hay memoria del ahora en el ahora, como ya se
ha dicho, sino que de lo presente hay sensación, de lo venidero expectativa, y de lo ocurrido
recuerdo.” (Aristóteles, acerca de la generación y la corrupción. Tratados breves de la historia
natural, 1987:235 [449b24-30]
83
VI Congreso Marplatense de Psicología
GOLPE, L. & BIDEGAIN, L. (2003) Edaísmo y Apoyo Social: Una mirada interdisciplinaria
sobre el proceso de envejecimiento en un enclave geróntico argentino. Ed. Suárez.
PASTORIZA, E. (2011) La conquista de las vacaciones. Buenos Aires: Edhasa
PASTORIZA, E. (2012) Hotelería estatal en la Argentina peronista. El caso del complejo
vacacional de Chapadmalal (1944-1955). Ponencia en el XI Congreso de Historia
Contemporánea Granada, setiembre de 2012.
VERNANT, J.-P.(1982) Mito y sociedad en la Grecia Antigua.(Trad. esp. del orig. fr. de
1974). Madrid.
COLOMBANI, C. (2006) Una aproximación al mito como dación de sentido. Conferencia
pronunciada en el Ciclo de Debates LHIA, Río de Janeiro, Noviembre
84
VI Congreso Marplatense de Psicología
85
VI Congreso Marplatense de Psicología
sido adoptada como sustantivo común cuyo sentido es la persona que acoge a otra en
su casa o a su mesa y de buen grado comparte lo suyo.
EL MITO DE ANFITRIONIDAD
CARAS Y CONTRACARAS EN EL IMAGINARIO MARPLATENSE
Mar del Plata es considerada por los argentinos como una ciudad emblemática,
lugar dónde en un principio la aristocracia argentina llegaba en épocas estivales para
mostrar sus ropas y “buenas” costumbres, tiempo más tarde el giro político que implicó
la apertura del balneario a los sectores populares de la nación, implicaría sin duda un
cambio en la subjetividad de los marplatenses. Mar del Plata, “la felíz”, recibe a miles y
miles de turistas cada año. Con la llegada del turismo de masas, quienes habitan el
espacio local se encuentran en calidad de supuestos “anfitriones” de los veraneantes.
Resulta interesante, entonces, profundizar sobre la opinión de los propios
marplatenses en cuanto a la llegada del turismo de masas y el rol que se espera de la
comunidad.
Incluiremos dos gráficos dónde se presenta el comportamiento de la muestra
en cuanto a dos ítems específicos. Las atribuciones correspondientes son: 1) “la
comunidad de Mar del Plata es buena anfitriona del turismo de masas” y 2) “mientras
los turistas dejen dinero los marplatenses estamos dispuestos a recibirlos como
anfitriones”.
Tabla I La comunidad de Mar del Plata es buena anfitriona del turismo de masas
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VI Congreso Marplatense de Psicología
N° %
Válido Muy de acuerdo 45 12,8
s
De acuerdo 147 41,8
Medianamente de 101 28,7
acuerdo
En desacuerdo 37 10,5
Muy en desacuerdo 22 6,3
Total 352 100,0
Tabla II Mientras los turistas dejen dinero, los marplatenses estamos dispuestos a
recibirlos como anfitriones
N° %
Válido Muy de acuerdo 62 17,6
s De acuerdo 101 28,7
Medianamente de 69 19,6
acuerdo
En desacuerdo 83 23,6
Muy en desacuerdo 37 10,5
Total 352 100,0
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VI Congreso Marplatense de Psicología
88
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
- BARTHES, R.: El mito hoy en Mitologías. Siglo XXI. Buenos Aires, 1980.
- CASTORIADIS, C.: La institución imaginaria de la sociedad. Buenos Aires: Tus
Quests.2011.
- FREUD, S. Obras Completas. Madrid: Biblioteca Nueva. 1973.
- GOLPE, L. I. y BIDEGAIN L. M. (comp.): Mar del Plata: Perfiles migratorios e
imaginarios urbanos, Buenos Aires, Adip-Tusquets, 1998.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Este trabajo pretende dar cuenta del desafío que significó una Consulta sobre los Imaginarios
de Salud Mental Comunitaria en la ciudad de Mar del Plata, como giro para las prácticas de
formación académica en el campo de la Psicología. Como toda historia nuestro giro tiene un motivo
y un comienzo. A partir del 2 de diciembre de 2010 que se promulga en la Argentina de la Ley
26.657, titulada Derecho a la Protección de la Salud Mental. Disposiciones complementarias; en este
marco se reconoce a la salud mental “como un proceso determinado por componentes históricos,
socio-económicos, culturales, biológicos y psicológicos, cuya preservación y mejoramiento implica
una dinámica de construcción social vinculada a la concreción de los derechos humanos y sociales
de toda persona.”
La Cátedra de Psicología Institucional y Comunitaria de la Facultad de Psicología de la
Universidad Nacional de Mar del Plata, comenzó a dar un giro en su Propuesta de Trabajo Docente,
su primera estrategia fue comenzar con un dispositivo de debate durante las cursadas de 2012 a
2013, acerca de Ley 26.657 y los derechos de las personas con padecimiento mental: el Derecho a
la intimidad, el Derecho a vivir en comunidad, el Derecho a la atención sanitaria adecuada, el
Derecho a mantener los vínculos familiares y afectivos, el Derecho a la no-discriminación, el Derecho
a la información sobre su estado de salud, el Derecho a la autonomía personal, el Derecho a la
identidad, la sustitución de la exclusión del sistema de encierro y aislamiento por una política de
inclusión social e integración en el marco de los Derechos Humanos cimentado en una propuesta
interdisciplinaria e intersectorial, donde el psicólogo participa conjuntamente con profesionales afines
al campo específico. En marzo de 2014 se produjo un gran giro en nuestros haceres, ya no sólo
abordábamos un dispositivo de debate sino que decidimos ir más allá y preguntarle a la ciudadanía
su opinión. Así fue que decidimos seguir las Recomendaciones a las universidades públicas y
privadas correspondientes al Acta Nº 6/14 en su ANEXO III, correspondiente al artículo 33º de la
Ley Nacional nº 26657, pues contiene ciertos lineamientos que resultaron fundamentales para dar
nuestro giro en la propuesta académica: 1) “la adopción del enfoque y las herramientas que
promuevan el empoderamiento colectivo y la participación comunitaria, sin perjuicio del rol
indelegable del Estado, para el diagnóstico y solución de las problemáticas de salud mental de las
comunidades y la promoción de la autonomía de las personas en su relación con el sistema de
salud”; 2) “la inclusión de contenidos curriculares que problematicen las concepciones, creencias y
prejuicios sustentadas por los distintos grupos sociales y en especial del colectivo de profesionales,
así como las prácticas que se desprenden de ellas”; 3) “desarrollar y promover la formación de los
futuros profesionales en los principios de la intersectorialidad, el conocimiento de distintas
herramientas que el estado y la sociedad civil emplean en los procesos de gestión y el fortalecimiento
de las redes sociales, por considerárselos una modalidad que permite favorecer los procesos de
inclusión social a partir del abordaje comunitario y territorial”; 4) “revisar la terminología empleada en
la formación de los futuros profesionales de la salud mental, su origen, fundamentos, aplicación y
significaciones asociadas, para que resulte acorde a las convenciones internacionales de referencia
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En base a estos basamentos se diseñó una Consulta Comunitaria sobre Salud Mental en la
ciudad de Mar del Plata. La misma se desarrolló entre mayo y junio en el marco de la cursada 2014.
La conformación de los grupos de trabajo estuvo integrado por los 7 miembros equipo docente de la
Cátedra de Psicología Institucional y Comunitaria y 158 estudiantes de 4to año de la carrera de
Psicología. La muestra estuvo conformada por 56 barrios urbanos de la ciudad, de acuerdo al patrón
comunitario de segmentación social: 11 barrios de sector residencial de mayores ingresos, 26 barrios
de sector residencial de ingresos medios y 19 barrios de sector residencial de menores ingresos. Se
consultaron 1155 hogares: 220 de clase alta, 562 de clase media y 373 de clase baja, que llevaron a
cabo un total de 7 equipos de campo.
El referencia al enfoque teórico, partimos del concepto de imaginario social creado por
Cornelius Castoriadis para referirnos al estilo de concebir el mundo singular, que le es propio a una
sociedad particular, en un momento histórico. Esta noción posee la condición de versatilidad y
profundidad necesaria para comprensión de las sociedades modernas. Dicho concepto, alude a la
producción ontológica de un modo particular de ser, e instituye la corporización de un “magma de
significaciones imaginarias sociales”, (Castoriadis, 2011: 16) que regula los discursos, las prácticas,
los deseos y los sentires de un conjunto identitario de sujetos. La existencia de imaginarios sociales
se puede rastrear en las singularidades de la historia de la humanidad a partir de la presencia de la
institucionalización de leyes, creencias, mitos, y rituales para cada colectivo específico. Los amplios
desarrollos vinculados al imaginario social y su operatividad nos permiten contar con un nuevo
recurso para la investigación en el campo de la salud mental comunitaria y la comprensión de sus
significaciones. A continuación presentaremos la Tabla I con siete significaciones de dicho
imaginario, que nos permitirá realizar una lectura analítica de la consulta.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En primer lugar, y desde una lectura sobre las significaciones comunitarias sobre la salud
mental que fueron halladas en la consulta, algunas cuestiones nos resultan interesantes: el 40,9 %
que la vincula el bienestar del ser humano, considera que se logra integrando los niveles biológico,
psicológico y social; el 8, 3 % que se refiere al malestar del ser humano lo ubica como signado a “la
cabeza” como lugar vinculado a cuestiones neurológicas o psiquiátricas, y no asocia las situaciones
del padecimiento con cuestiones psicosociales.
En segundo lugar, nos parece importante mencionar la singularidad de los atributos internos
de cada una de estas significaciones: de los 250 de sujetos que atribuyen que la salud mental es un
“valor primordial del ser humano” encontramos tres tipos de argumentos para fundamentar esta
significación: 42,8% piensa que es “lo más importante en la persona”, el 41,2% que es “la base de
todo en la vida”, y el 16% estima que es “lo fundamental que gobierna el cuerpo”. Con respecto los
472 sujetos que argumentan que la significación de la salud mental se vincula con el bienestar del
ser humano hallamos cuatro tipos de argumentaciones: el 46,7% considera que es “estar bien de la
cabeza para pensar”; el 25,2 % plantea que es “estar bien para lograr el equilibrio con uno mismo”; el
21,4% sostiene que es “estar bien para lograr la armonía con la sociedad”; y el 6,8% señala que es
“estar bien para lograr una integración corporal.” De los 96 sujetos que relacionaron la significación
de la salud mental con el malestar del ser humano hallamos cuatro tipos de argumentaciones: el
78,9% considera que es “estar mal de la cabeza para pensar”; el 10,5% señala que es “estar mal
para lograr una integración corporal.”; el 6,3% sostiene que es “estar mal para lograr la armonía con
la sociedad”; y el 4,2 % plantea que es “estar mal para lograr el equilibrio con uno mismo”. De los 154
sujetos que asocian la significación sobre la salud mental como un campo profesional hallamos tres
tipos de argumentaciones: el 78,6% lo vincula al conocimiento; el 16,2% lo relaciona con el
tratamiento; y el 5,2% lo asocia con las políticas públicas. De los 81 sujetos que vinculan la
significación una minoría social problemática con la salud mental, se caracterizan dos tipos de
divisiones el 45% los identifica como “los anormales” y el 55 % como “los estigmatizados”. Por un
lado se encuentran los enunciados referidos a la locura, la peligrosidad, la conflictividad, la
irritabilidad o las adicciones a las drogas y al alcohol. Por el otro lado, se identifica a los jóvenes y a
los viejos como grupos portadores de la mayor situación problemática, ya sea por la rebeldía de los
primeros, como por la senilidad de los segundos. De los 55 sujetos que vinculan la significación de la
salud mental con un problema social que atañe a todos se refiere al reconocimiento del lugar de toda
la ciudanía el 40 % lo considera un tema para la inclusión de las personas con problemas de salud
mental y 60 % a las situaciones que generan malestar en la cultura. De los 47 sujetos que asocian la
salud mental con un tema espinoso, el 80% comprende a quienes argumentan que se trata de algo
delicado y muy complejo; y el 20% sostienen que resulta muy triste hablar de eso pues se trata de
drama difícil de definir.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Por otra parte nos interesa demostrar cómo se estructuran las significaciones acerca de la
salud mental según la segmentación social de los barrios consultados, para ello realizaremos una
lectura de la Tabla II.
En base a una lectura de la pregnancia de las significaciones entre los segmentos sociales,
se desprende de la Tabla II que: a) mientras los sujetos de segmentos altos vinculan la salud mental
principalmente con “el bienestar del ser humano”, los segmentos medios lo asocian con “el campo
profesional” y los segmentos bajos lo relacionan “el malestar del ser humano”; b) por otra parte,
mientras la significación de la salud mental asociada a “un valor primordial para el ser humano” se
mantiene casi constante en los tres segmentos, la relación con la significación de “una minoría social
problemática” asciende notablemente en los segmentos bajos; así como también son más elevadas
las significaciones referidas a “un problema social que nos atañe a todos” y a “un tema espinoso”
dentro del segmento bajo, respeto a los demás segmentos sociales. Se trasunta que las situaciones
de salud mental están condicionadas por el estilo de vida que de los conjuntos sociales, según los
expresan estas narrativas de comunidad respecto al bienestar o malestar vivido y sentido.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
ocurre cuando entendemos la historia de la salud mental hecha pensamiento, hecha cuerpo, hecha
narración y transformada en proyecto comunitario para generar estrategias de intervención y nuevos
modos de formación de profesionales concientes de los imaginarios de salud mental de su sociedad,
de sus situaciones problemáticas y de sus propuestas de cuidado.
A partir de transitar este recorrido pudimos reflexionar sobre las alternativas de intervención
orientadas a afrontar la torsión simbólica de las cuestiones de salud metal comunitaria, a partir de las
situaciones de la vida humana y anudados a imaginarios sociales. En tal sentido, la caja de
herramientas proveniente de las experiencias de salud metal comunitaria en nuestra región, nos
permitió desarrollar nuevas estrategias formativas para poder diseñar proyectos que estén orientados
a la promoción y prevención de la salud comunitaria, desde enfoques y perspectivas de innovación
respetando la mirada de los agentes sociales y sus lógicas de acción participativa para la
transformación de sus realidades problemáticas.
Al finalizar la cursada la Cátedra organizó una Jornada sobre Salud Mental Comunitaria
abierta a toda la ciudad y sus instituciones a fin de presentar una Muestra compuesta por 56 posters
realizados por los estudiantes sobre su labor de campo en cada barrio. Este evento contó con
numerosa audiencia de público general y expertos en la temática, así como con la presencia de los
medios de comunicación, que posteriormente difundieron el trabajo de forma masiva. El rol de los
estudiantes como protagonistas académicos y transmisores activos del conocimiento emanado de la
comunidad fue otro de los pilares de este desafío en el campo de la Psicología.
En tal sentido, la modalidad pedagógica propiciada fue un importante entrenamiento para los
estudiantes, a partir de aplicar un conjunto sistematizado de tecnologías evaluativas y dispositivos
de intervención. Este giro académico significó la apertura de un espacio de reflexión comprensiva y
debate crítico sobre los modos de pensar la salud mental comunitaria y las maneras profesionales de
saber/hacer y ‘dar cuenta de sí’ en el desempeño de cada uno de los escenarios contemporáneos
atravesados por las identidades sociales, las formaciones discursivas, las miradas de género y las
estrategias de fortalecimiento que se fueron desarrollando en la Argentina.
La estrategia de intervención educativa, incentivó el fortalecimiento de competencias
específicas en Salud Mental Comunitaria en la adopción de un enfoque de derechos, la inclusión
social y la interdisciplina como ejes transversales para la formación, extensión e investigación. De tal
modo nos trazamos una planificación estratégica durante el lapso de tres años de forma
mancomunada entre el equipo docente, los estudiantes, los líderes sociales de las sociedades
vecinales, de los sindicatos, de partidos políticos, de colegios profesionales, directivos de
organizaciones no gubernamentales, directivos de instituciones educativas con el propósito de dotar
de competencias a los actores participantes para optimizar la calidad de vida de la ciudadanía,
empoderar su condición de salud mental como sujetos de derecho y de deseo, estrechar lazos
Universidad/Comunidad y formar psicólogos comprometidos con las necesidades y problemas de su
realidad circundante.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
profesionales que puedan dar respuestas a las nuevas demandas y desafíos que se
plantean en la sociedad vinculados al campo de la salud mental.
En este contexto, se realizo una “práctica externa”, la cual se refiere al conjunto de
actuaciones que un estudiante realiza en un contexto natural relacionado con el ejercicio
de una profesión. Si bien como menciona García Jiménez (2006) el contacto con la
profesión puede desarrollarse de diversas formas, las prácticas externas están diseñadas
no tanto para una práctica profesional en sentido estricto, sino como una oportunidad de
aprendizaje. Esta práctica formativa significa en los docentes trabajar para que los
estudiantes puedan poner en práctica los conocimientos teóricos adquiridos a través de
una intervención destinada a problematizar sus saberes y haceres en el área de la salud
mental. Todo profesional y en especial el psicólogo, necesita enfrentarse a la realidad
social en la que se encuentra inmerso, reflexionar sobre el cuidado, apoyo social, respeto,
y participación familiar necesarios para la formación del sujeto, el sostenimiento de su
salud y su recuperación cuando se enferma. De esta manera con el propósito de evaluar
los imaginarios acerca de la salud mental en la comunidad marplatense, se desarrolló una
práctica formativa que consistió en una Consulta en donde se administró en 1155
hogares, un cuestionario cualitativo con tres ejes de indagación en 56 barrios de la
ciudad. Los mismos fueron: ¿Qué significa para Ud. la salud mental?; ¿Qué tipo de
problemas de salud mental le parece a Ud. que padece la gente en la actualidad? y
¿Cómo considera Ud. que se debería cuidar a la gente con problemas de salud mental?
Esta consulta fue realizada por los estudiantes, acompañados por sus docentes,
los días sábados y domingos durante los meses de mayo y junio del presente año. Los
resultados fueron analizados cualitativamente y se construyeron categorías acerca de los
ejes de indagación. La formación de los estudiantes para un abordaje comunitario implica
dotarlos de compromiso ético, flexibilidad para adaptarse a distintas situaciones,
capacidad de análisis y síntesis, crítica y autocrítica y fundamentalmente trabajo en
equipo. La participación en este tipo de actividades, genera conciencia social y favorece la
reflexión acerca de la posibilidad de cambio. Se trabaja la propia implicación, como
también la consideración y respeto por las posiciones o puntos de vista que sustentan
otros, constituyendo un principio de responsabilidad y ética fundamental en la profesión
de psicólogo comunitario. Finalmente los resultados se divulgaron en posters, que
contenían las categorías construidas para cada eje, y testimonios que ejemplificaban las
opiniones de los diferentes barrios consultados.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
destaca que el cuidado surge cuando la existencia de otro adquiere importancia para uno
entonces se desplaza la preocupación hacia uno y el otro toma prevalencia. Menciona
que el cuidado incluye dos significados íntimamente ligados: el primero, la actitud de
desvelo, de atención hacia el otro; y el segundo, la preocupación, la inquietud, la
involucración, porque supone una implicación afectiva con el otro cuya condición moviliza
la acción. Finalmente es interesante incluir la concepción que Leininger (Golpe & Yuni,
2012) sostiene sobre el concepto de Cuidados Culturales al cual define como: los valores,
las creencias y los modos de vida que se han aprendido subjetiva u objetivamente y que
asisten, sostienen, facilitan o habilitan a otros individuos o grupos a conservar el bienestar
y la salud con el fin de avanzar en su condición humana y en el modo de vida, o de
afrontar la enfermedad, o las incapacidades, o la muerte.
Teniendo en cuenta el rol del psicólogo comunitario, trabajar sobre las
concepciones del cuidar, es fundamental y estratégico, es una forma de introducir a los
alumnos en el campo de la implicación afectiva con el otro y de la involucración requerida
para trabajar con la comunidad ejerciendo la función de facilitador promoviendo el
empoderamiento.
A continuación se presentan las categorías que se construyeron a partir de los
testimonios que respondían a como se debería cuidar a las personas con problemas en la
salud mental.
1. CON APOYO PROFESIONAL de Psicólogos, Médicos, Psiquiatras, y acompañamiento
terapéutico. Esta categoría alude a todas aquellas respuestas que mencionaban que las
personas con problemas en su salud mental deberían ser tratadas por alguno de estos
profesionales.
2. CON APOYO AFECTIVO DE LAS REDES SOCIOFAMILIARES. En este caso los
sujetos manifestaban que el cuidado debería ser desde la familia, fortaleciendo los
vínculos, y fomentando la escucha, comunicación y contención.
3. CON APOYO DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS. Incluye aquellos testimonios
que consideran a la educación como la principal herramienta de cuidado. Esta
recomendación se relaciona con la necesidad de incrementar el conocimiento de la
población sobre los trastornos mentales, sus variadas formas de tratamiento y los lugares
para consultar. La educación es un instrumento estratégico para generar una cultura
amigable hacia la problemática de la salud mental. (Levav, 2003)
4. CON APOYO RELIGIOSO. Son aquellas respuestas en donde la gente menciona a la
religión y a Dios como medios para el cuidado de los sujetos con problemas de salud
mental.
5. CON APOYO DE LA COMUNIDAD. Generando inclusión social, concientización, buen
trato, esparcimiento, recreación
6. CON APOYO DE LAS OBRAS SOCIALES. En estas respuestas se destaca el mal
funcionamiento de las obras sociales, por lo que una forma de cuidar seria un
funcionamiento eficiente, de manera que se puedan cubrir las necesidades de atención de
los sujetos que lo requieran
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFLEXIONES FINALES
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Boff, L. (2009) Saber Cuidar: El nuevo paradigma ético de la nueva civilización. Elementos
conceptuales para una conversación. Disponible en
http://www.fundacionparalareconciliacion.org/documentos/upload/02052012_430pm_4fa1
a7870c3e7.pdf
Garcia Jimenez, E. (2006) Practicas externas. En Metodología de enseñanza y
aprendizaje para el desarrollo de competencias. Madrid. Alianza Editorial
Golpe,L & Yuni, J. (2012) Cuidado de personas mayores. Dones, responsabilidad y
compromiso. Catamarca. Argentina Encuentro Grupo Editor.
Fernández, S. (1999) “La red como alternativa al desarrollo comunitario”. en Dabas, E. y
Najmanovich D. (comp.) Redes, el lenguaje de los vínculos. Hacia la reconstrucción y el
fortalecimiento de la sociedad civil Buenos Aires. Paidos
Itzhak Levav (2003) Salud mental: una prioridad de la salud pública Revista de la Maestría
en Salud Pública ISSN: 1667-3700 · Año1 Nº 2 ·
Malvárez, S. (2007) El reto de cuidar en un mundo globalizado. Texto & Contexto
Enfermagem, vol. 16, núm. 3, julho-setembro, pp. 520-530,
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VI Congreso Marplatense de Psicología
100
VI Congreso Marplatense de Psicología
Entre los hallazgos de la consulta, podemos observar que los vinculan con situaciones de
padecimiento humano que vulneran dicha salud, sean tanto psiquiátricos como neurológicos o
psicobiológicos y psicoafectivos.
En las narrativas al referirse a las situaciones del padecimiento humano que vulneran la salud
mental los sujetos de la comunidad identifican las siguientes cuestiones psiquiátricas: depresión,
bipolaridad, esquizofrenia, locura, trastorno de ansiedad, adicciones, autismo, pedofilia, psicosis,
paranoia, ataque de pánico, toc-psicopatía. En referencia a las cuestiones neurológicas los
sujetos consultados aluden a: Mal de Alzheimer, Mal de Parkinson, demencia, retrasos
madurativos, epilepsia, ACV. Con respecto a las cuestiones psicocobiológicas hacen referencia a
problemas genéticos, problemas crónicos y discapacidades adquiridas. Finalmente las personas
se refieren a cuestiones psicoafectivas entre las que incluyen: nerviosismo, agresividad, miedos,
soledad, duelos, inseguridad, estrés, celos, envidia, odio
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El sujeto de la psiquiatría, el enfermo mental, fue construido por la medicina mental como un
objeto de conocimiento positivo y ocultó su dimensión de sujeto social y político. La nueva ley se
Salud mental Nº 26.657 busca restablecer ese sujeto social y político e intenta establecer su
intervención práctica en el mismo plano en que se producen sus problemas. Se trata de actuar en
los sectores del tejido social donde se producen las fracturas de la relación humana para ayudar
a recuperar el lazo social, la solidaridad grupal, la asunción colectiva de los problemas. La
deducción del objetivismo medico retornado pro esta vía, fue que el efecto beneficioso y corrector
de los psicofármacos nos habría de brindar un conocimiento del mecanismo bioquímico que
originaba estos estados. La psiquiatría avanzo confundiendo la bioquímica de las emociones con
la etiología de las enfermedades. Cuando las mismas no explicarían las causas emocionales.
En segundo lugar manifiestan que los problemas de salud mental están relacionados con
situaciones de vinculación humana que vulneran dicha salud., como son las psicogrupales,
psicocomunitarios y psicoinstitucionales. Entre las cuestiones psicogrupales hacen alusión a
problemas con la familia, las amistades, los grupos de pares cercanos de su entorno. Con
respecto a las cuestiones psicocomunitarios nos relatan los conflictos vivenciados entre vecinos
del barrio y como el temor por la inseguridad y la violencia urbana transforma las condiciones de
vida social y los rituales cotidianos. En lo atinente a .psicoinstitucionales hacen referencia a las
dificultades encontradas al vincularse con los otros en las esferas educativas, laborales, legales,
de salud, sindicales o política. En relación a los vínculos se observa que los consultados hacen
referencia a las fallas en los vínculos familiares por falta de contención, preocupación y falta de
dinero.
Lo esencial según Fromm (1976) no es el instinto de vida o instinto de muerte (Freud, 1915)
sino el instinto de vinculación: el hombre necesita sentirse integrado en algún sistema (familiar,
laboral, etc.). Pero además, simultáneamente el hombre ha tenido que ir armonizando las
tendencias del "yo" para conseguir ese "equilibrio inestable" que es la salud psíquica. Es decir, la
salud mental debe conjugar un doble movimiento: la sintonización consigo mismo y una
interrelación adecuada con el entorno. Cuando alguna de estas posiciones falla, se produce la
angustia, que puede llegar a la autodestrucción. Hay un padecimiento social emergente:
trastornos funcionales, trastornos psicosomáticos, pérdida de vínculos sociales.
Estos padeceres son la expresión de las condiciones de vida que imponen el desarrollo
tecnológico, los ritmos de producción y la pérdida de vínculos humanos en la concertación de las
ciudades industriales. Las respuestas de los problemas de salud mental a esto debe ser no la de
rellenar los huecos con mas psicología sino encontrar los medios para ayudar a conjurar sus
efectos en el sufrimiento concreto de los individuos. Nos resulta importante destacar que la
mayoría de los consultados sobre los problemas de salud mental manifestó descreer en las
instituciones, y que ellas tienen efectos en la mencionada salud. Debe pasarse de un trabajo
terapéutico sobre el individuo a un reconocimiento de la comunidad. Con respecto a la educación
manifestaron que la falta de respeto, los límites y los problemas de reconocimiento del otro
genera problemas de salud mental.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Por último algunos consultados hacen referencia a que los problemas de salud mental están
relacionados con situaciones de malestar cultural que vulneran la salud mental. Mencionan
cuestiones como la discriminación, la violencia de género, la corrupción, el .consumismo, la
delincuencia, las adicciones, la vulneración de derechos del sujeto, DDHH, DD de las minorías,
etc.
Las principales causas del deterioro de la salud mental radican en las condiciones de vida y el
medio ambiente en general, la pobreza, la desigualdad social y la distribución desproporcionada
de los recursos en función de las necesidades.
El diagnóstico de la consulta en lo referente a los problemas de salud mental es coherente
con la nueva Ley Nacional de Salud Mental Nº 26.657, puesta en vigencia a partir del 5 de
noviembre de 2010, que retoma la definición de “padecimiento mental”, pensamos que esta
definición forma parte de una concepción del campo de la salud mental determinado por
procesos históricos, socio-económicos, culturales, psicológicos y biológicos. Desde esta
perspectiva, la salud mental está vinculada a los derechos humanos y sociales (art.3º). Quienes
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VI Congreso Marplatense de Psicología
defienden esta forma de definición del sufrimiento en el campo de la salud mental, argumentan
que la atención es un derecho que no debiera estar sólo reservado a las personas con
“enfermedad mental”, sino a todo aquel que, por diferentes factores o circunstancias en algún
momento de la vida, transita una crisis que requiere atención, pero que no constituye,
necesariamente, un cuadro patológico. Como así tampoco debiera esperarse a su aparición para
el abordaje profesional.
Los resultados de esta consulta comunitaria nos permitirán seguir avanzando en el tema
que nos ocupa con los alumnos de las próximas cursadas en el marco de una planificación
estratégicas que anude Universidad/Comunidad de modo estrecho y participativo, con
sistemáticas devoluciones a las audiencias sociales participantes.
Con respecto a la formación del rol del psicólogo se tratará de recuperar para las prácticas
terapéuticas las dimensiones políticas y sociales presentes en la determinación del daño mental,
y para fundar una intervención tendiente a corregir los circuitos colectivos de causación.
Estas prácticas estarán dirigidas hacia una nueva configuración, cambiando las funciones
terapéuticas a una intervención más dirigida a grupos humanos o comunidades: familia, grupos,
escuela., ya que ellas serán el nuevo campo de intervención. Tendiendo a la interdisciplinariedad,
no una practica hegemónica, sino una integración de técnicas heterogéneas y en equipos
interdisciplinarios. Es necesario actuar sobre la perspectiva profesional en esos dos sentidos. Se
requiere la formación de nuevos agentes sociales formados e Salud mental capaces de manejar
técnicas de abordaje comunitario. Se trata de generar espacios de participación colectiva, de
modo que la comunidad misma sea un agente activo en la discusión de sus problemas de
bienestar/malestar y sus maneras de cuidarse y cuidar a otros. Adentrarnos en la lógica de las
políticas públicas vinculadas a los procesos de salud/enfermedad/tratamiento en un marco de
inclusión social y respeto por los DDH.
Este trabajo mancomunando nos permitió generar diversas competencias transversales
en los estudiantes a fin de orientarlos para comprender los distintos modelos de comunidad, la
dinámica relacional de los conjuntos barriales, y los procesos psicológicos y psicosociales
emergentes que acontecen de acuerdo a la segmentación social; construir una perspectiva ética
del de investigación/acción participativa (IAP) ante las situaciones problemáticas que vulneran la
salud mental comunitaria; entrenarlos en una caja de herramientas a fin de saber definir ,afrontar
y manejar situaciones de necesidades y problemáticas que se generan en el nivel comunitario;
posibilitar el aprendizaje de destrezas y habilidades para poder liderar y potenciar un cambio
social planificado en la comunidad dentro del campo de la salud mental; orientar a los estudiantes
para el diseño, ejecución y evaluación de programas comunitarios de intervención psicosocial con
equipos interdisciplinarios de salud mental; potenciar los instrumentos para trabajar la salud bio-
psicosocial, y salud mental comunitaria; potenciar los recursos personales y aptitudes
individuales para desempeño con calidad del rol de psicólogo comunitario en diferentes campos
de prevención y promoción de la salud mental en el marco de los nuevos lineamientos de la
legislación argentina.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Freud, Sigmund, Obras Completas, (1995)Vol. XIV, Pulsiones y destinos de pulsión, Amorrortu,
6a. reimpresión, Buenos Aires, título original: Triebe und Triebschikcsale, 1915, traducido
inicialmente como "Los instintos y sus vicisitudes"
Fromm, Erich, (1976) Psicoanálisis de la sociedad contemporánea. México. Fondo de cultura
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y Debate, primavera-verano, Buenos Aires.
Ministerio de Salud de la Nación Argentina, (2010) Ley Nacional de Salud Mental Nº 26657 ,
Buenos Aires
Stolkiner, A. (1994), “Tiempos posmodernos: ajuste y salud mental” en O. Saidón y P.
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I)
Michel Foucault escribe en“Hermenéutica del Sujeto” que “la filosofía es una
forma de pensamiento que intenta determinar las condiciones y los limites del acceso del
sujeto a la verdad” (1982: 38). El pensamiento científico tal como lo conocemos en la
actualidad es una particular forma de acercamiento, de relación de los sujetos con lo
verdadero, modo que conoce sus inicios en el renacimiento de la mano de René
Descartes.
La propuesta cartesiana habla de un Sujeto que es él mismo, en tanto ser dotado
de razón (la cosa mejor repartida del mundo), fundamento de conocimiento. Es decir un
sujeto racional, consciente y voluntarista. Y de una verdad inmutable, eterna y a la que se
accede mediante el cógito.El acceso a lo verdadero sólo se da por la vía del
conocimiento. Descartes (1637) unifica la actividad del pensamiento, entendida entonces
como actividad cognitiva voluntaria y consciente con la noción de conocimiento y ella a su
vez, con la noción de verdad. En correspondencia con esta unificación, propone un
método cuyo modelo es el de la matemática “me complacía sobre todo en las
matemáticas a causa de la certidumbre y evidencia de sus razones” (1989: p.8), es decir
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II)
La complejidad
¿Qué significa complejo? si en un intento de aproximación buscamos en el diccionario
encontramos por ejemplo: complicado, confuso, enredado, lioso, dificultoso, problemático.
Podríamos decir que la posmodernidad tiene que ver con una lectura de la
realidad, o un pensamiento acerca de ella en estos términos. Implica asumir que bajo la
simplicidad aparente de los fenómenos subyace lo real problemático. Dice Morin(2004)
“La complejidad nos aparece, ante todo, efectivamente como irracionalidad, como
incertidumbre, como angustia, como desorden”, pero no hablamos de caos, de puro
desorden; hablamos de una lógica, masuna lógica de otro tipo.
Se refiere a una complejidad organizada. A un “enredamiento de un número
increíble de interacciones”(Morin, 2004: 3)confrontados a una doble temporalidad: la de
la dispersión, de la descomposición, la desintegración, y por otra parte, simultáneamente,
de la constitución permanente.
Este pensamiento es tomado de la termodinámica: El universo físico se constituye
mediante la organización (soles, sistemas solares, galaxias) al mismo tiempo que se
produce mediante la desorganización (dispersión de la materia y pérdida de la energía).
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Ana María Fernández (1997) nos invita adoptar un criterio de indagación crítica:
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1
El teorema de Gödel ha demostrado los límites de la demostración lógica en el seno de sistemas
formalizados complejos; estos comportan al menos una proposición que es indecidible, lo que hace que el
conjunto del sistema sea indecidible- Esto puede generalizarse: “ todo sistema conceptual suficientemente
rico incluye necesariamente cuestiones que no puede responder desde sí mismo”.- (Morin,2004: 12).
109
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III)
Conclusión
El presente trabajo intenta pensar la idea del sujeto desde otro lugar que no sea el
cartesiano ni racional. Los argumentos que sostienen esta hipótesis son los siguientes: 1)
El sujeto cartesiano entendido como cógito pensante es el sujeto de la incertidumbre para
Morin. Esto significa que el cógito debe interpretarse e interpelarse como constituyéndose
en lo múltiple permanentemente. 2) El sujeto, en este sentido, se resignifica como ser
complejo. Esto implica pensar al sujeto como productor y producto de nuevas realidades.
3) Apoyando la posición de Morín y Ana María Frnández, el sujeto de la práctica científica
debería articularse a partir de este complejo en constante multideterminación.
Hay que estar listos para repensar sin cesar el estado del mundo - dice Morín
(2011: 29). Partiendo de esta idea es que reflexiono nuestra posición y nuestro
compromiso en tanto profesionales, hombres y mujeres de ciencia de cara a este mundo
vertiginoso, mudable, ambivalente en el que nada está dado de antemano y nada
permanece por demasiado tiempo. No podremos saberen el sentido de acceder a una
verdad, pero podemos “hacer vibrar”, podemos facilitar, sostener, intentar que suceda
“algo”, algo con lo que ir trabajando, posibilitando despliegues, aperturas, relanzamientos
de diversas líneas de sentido.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Benevidez, R. (2002) Grupo y Producción en Paisajes del dolor, senderos de
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I)
Encontramos una puntuación interesante, que funciona como marco (o bien como
horizonte) para establecer una vinculación entre fenomenología y psicoanálisis, en una
afirmación de Duportail (2010): “En lo que hace a la cuestión de la subjetividad, la
fenomenología sigue siendo una referencia indispensable para prevenir al psicoanálisis de
la tentación del dogmatismo realista, es decir del platonismo de las estructuras” (Duportail,
2010, p90). La vía o el punto de encuentro entre ambos discursos lo constituiría la
topología del ser en el mundo trazada por Merleau Ponty.
Ahora bien, en el marco del trabajo reconstructivo que nos proponemos la
apropiación o la lectura realizada en particular por Merleau-Ponty nos invita a realizar un
contrapunto desde algunas nociones que se encuentran en los textos fundacionales del
psicoanálisis. Siguiendo a Duportail, la subjetividad encarnada es un concepto fructífero
en lo que comporta de crítica a la intencionalidad husserliana y el carácter trascendental
del yo. Este, considerado superador del cartesianismo, queda afectado por su propia
adhesión a un carácter intelectual, despojado de objetividad. El sujeto encarnado opera
contra lo dualismos, afirmando una unidad en la carne, en lo originario, en el sentir. Este
incluye para Merleau-Ponty su aspecto inconsciente pero, en una tesis postulada por
Duportail, excluye la dimensión del conflicto psíquico, subsidiario de la censura psíquica.
Y esta exclusión es la barrera a una homologación posible con el inconsciente freudiano.
Exploraremos este argumento a partir del capítulo de La interpretación de los sueños
denominado “Psicología de los procesos oníricos”, deteniéndonos en particular en la
construcción del concepto de deseo inmortal que Freud postula como creador del sueño,
fuerza impulsora, motor y de su encuentro con una barrera generadora de conflicto. El
caso es que el producto psíquico es tan indisociable del deseo como de su
“obstaculización” o del conflicto que este genera.
El sueño, afirma Freud con decisión, es siempre un deseo por realizar (Freud,
1966: p529). Pero se trata de un deseo que se presenta siempre desfigurado, no
reconocido en su manifestación inicial, en virtud de la “influencia de la censura psíquica”.
Freud se ocupa en este capítulo de la explicación psicológica para la formación de tales
productos psíquicos, indagación que lo conduce a la postulación de una particular
“localidad psíquica”. Notemos que esta es sugerida por la observación de Fechner acerca
de que los sueños se desarrollan en una escena distinta de aquella en que se
desenvuelve la vida de representación. Y el intento de Freud por avanzar en su
intelección es realizado a través de un esquema que intenta representar “la complicada
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función psíquica total” (p532). Este esquema es formulado en analogía con los aparatos
captadores de imágenes de su época (telescopio, primeras cámaras fotográficas,
microscopio) y la localidad psíquica en juego “corresponderá entonces a un lugar situado
en el interior de este aparato, en el que surge uno de los grados preliminares de la
imagen”, que en los aparatos son “puntos ideales”. Notemos que, para ubicar una
localidad psíquica, Freud se vale de un modelo que no arraiga dicha localidad en una
materialidad.
Respecto al esquema, su expansión se ubica “entre percepción y conciencia”,
estas no coinciden y se encuentran mediadas por el sistema de inscripciones entre los
que circulan o se obstaculizan las fuerzas psíquicas. Los puntos de obstáculo son los que
revelan a Freud, en la construcción del esquema, la necesidad de diferenciar el aparato
psíquico en sistemas, dado que la formación desfigurada del sueño requiere considerar la
existencia de dos instancias psíquicas, una crítica de la otra. Esta instancia crítica
“mantiene con la conciencia relaciones más íntimas que la criticada”, situándose entre
ambas como una pantalla. La instancia crítica no es la conciencia pero ejerce sobre ella
sus influjos, ya que puede excluir del acceso consciente a las percepciones o a las huellas
mnémicas con las que entra en conflicto. Asimismo, su ubicación cerca de la motilidad
explica que en el estado de dormir el relajamiento de la censura solo pueda llevar a un
camino regresivo que culmina en un investimento alucinatorio de las huellas mnémicas.
Mientras que en la vida despierta es la instancia censuradora la que “decide sobre nuestra
actividad voluntaria y consciente” (Freud, 1966, p536). Esta breve reconstrucción nos
muestra el carácter evanescente y subsidiario de la conciencia freudiana, en tanto la
misma: i. no coincide con el polo perceptual del aparato psíquico, ii. se encuentra
gobernada por una instancia crítica y iii. está sujeta a engaños autogenerados, como la
alucinación.
Pero no es menos importante para Freud la justificación del propósito del soñar1: la
realización de deseos. Más aún cuando existen sueños que podrían ser una objeción
para este fin, vg. los sueños de angustia, los sueños punitivos, en general los sueños de
carácter displacentero. El examen de la procedencia de los deseos muestra el predominio
de aquellos inconscientes. El deseo inconsciente se encuentra siempre en actividad, es
inmortal. Es este el que proporciona la fuerza impulsora del sueño y es, además, infantil
(tesis que Freud formula a partir del estudio de las psiconeurosis).
La formulación de instancias psíquicas separadas, enfrentadas en conflicto, es la
clave para la comprensión del lugar del deseo en el soñar aún en contradicción con el
contenido manifiesto y el sentir del soñante. El deseo inconsciente puede ser
contradictorio con la instancia crítica, su satisfacción puede implicar un conflicto con ésta
y resultar el desarrollo del afecto de angustia como una expresión de esta contradicción
en el soñante. Pero el carácter indestructible, inmortal del deseo es un elemento
estructural no reductible al sentido histórico del vivenciar del sujeto. Se trata de las
condiciones mismas de generación del deseo: la búsqueda de la identidad de percepción
1
Sentido y propósito son dos dimensiones con las que Freud aborda la intelección del síntoma, por ejemplo
en conferencia 17 y 18. Este último se refiere a un para qué.
116
VI Congreso Marplatense de Psicología
de una primera huella, una primera marca de la experiencia de satisfacción que suprimió
la excitación interior. Pero la necesidad (vital) resurgirá y el impulso para la nueva carga
de la huella de la satisfacción es justamente el deseo. Realización del deseo es entonces
la reaparición de la percepción que no suprime la excitación más que momentáneamente.
Este funcionamiento primario será relevado por el acto del pensar, apropiado para la
supervivencia.
El deseo se configura, entonces, como una fuerza impulsora indestructible pero
cuya expresión se ve interferida, necesariamente interferida, podríamos decir, por los
propósitos vitales del sujeto. La relación entre deseo y censura que evidencia el sueño
muestra su paradoja constitutiva: el sujeto encuentra el impulso en el deseo más a
condición de que este haya sido modificado en su funcionamiento primario, o haya sido
desviado, interdicto de su realización alucinatoria.
“En la mayoría de los sueños hallamos un centro que posee una especial intensidad
sensorial. Este centro constituye regularmente la expresión directa de la realización de
deseos” (Freud, 1966: p.543). El deseo se dice en su expresión sensorial y es este
aspecto ¿encarnado? del deseo uno de los que pueden hacer interlocución con la
fenomenología, pero teniendo presente el obstáculo de que en Freud lo inconsciente no
es sin instancia crítica que lo delimita.
En síntesis, el aparato psíquico que Freud esquematiza en su obra fundacional
implica ya una distinción clara entre percepción y conciencia, a la vez que el intento por
pensar una instancia psíquica como un espacio virtual (lo que dará pie a considerarlo
según otra topología). Además considera la noción constitutiva del conflicto en relación a
la fundación de una instancia psíquica distinta de la conciencia; conflicto cuya expresión
es la desfiguración de lo percibido (ej. sueño) y el afecto angustioso que surge cuando el
enmascaramiento es insuficiente. El motor de la actividad psíquica y del conflicto es el
deseo, considerado como impulso a la recuperación de la identidad de percepción de una
vivencia primaria de satisfacción.
II)
Así, podemos destacar la posición de M. Henry respecto a la cuestión del
inconsciente freudiano en referencia al cógito cartesiano. Este cruce entre el psicoanálisis
y la filosofía se sostiene en hipótesis necesarias pero no suficientes para explicar la
relación entre lo consciente (Descartes) y lo inconsciente (Freud). Los argumentos desde
el punto de vista filosóficos, son los siguientes: la historia del inconsciente es la historia de
la incapacidad de la metafísica para hacerse cargo de lo único que importa: la vida y los
fenómenos. El exponente fundante de este argumento que sostiene Henry es Descartes.
El cógito cartesiano se determina por lo que se aparece y por lo que es él mismo. En este
sentido, el ser y el aparecer se yoizan construyendo una interiorización a partir de un
comienzo (el yo) que piensa en la diferencia (realidad/ sueño; cógito/ res extensa, etc.).
Esta reducción al cógito no permite reflexionar sobre lo que aparece puesto que ésta se
reduce a una conciencia que piensa. La tesis de M. Henry es la siguiente: la propia visión
del mundo que vierte la conciencia posibilita pensarnos en términos de conciencia pero no
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III)
La cuestión del inconsciente y lo percibido se origina en el análisis filosófico-
fenomenológico del sujeto en el mundo. En este sentido, la tensión entre conciencia-
mundo y sujeto de la percepción y mundo percibido resultan cruciales para la
comprensión de algunos mecanismos del inconsciente planteados por Freud. Merleau-
Ponty es otro de los exponentes fenomenólogos que trabaja estas tensiones a partir de
algunas cuestiones referidas al inconsciente en Freud. Su lectura de Freud parte de la
crítica a la representación, así como a la dicotomía entre la mente y el cuerpo, o entre el
idealismo intelectualista y el naturalismo mecanicista. En base a ellas propone una
reelaboración filosófica del inconsciente, al que localizará en la misma conciencia
percipiente (Duportail; 2010). Dicha interpretación se inscribe en el contexto de
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IV) CONCLUSIÓN
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
Franz Fanon (1925-1961) nació en Martinica, Departamento Francés que forma parte
de las llamadas Antillas Menores en el Mar Caribe. Realizó su formación universitaria en
Francia donde obtuvo el título de médico y se especializó en psiquiatría. Se desempeño
como director de psiquiatría en el hospital en Blida, en Argelia, que luego abandonó para ir a
Túnez y sumarse al proceso de liberación nacional en Argelia (Wallerstein, 2009). En su
obra se encuentran claras huellas de los debates intelectuales (freudo-marxismo,
fenomenología, hermenéutica, existencialismo) de una época signada por fuertes
transformaciones sociales (guerra fría, movimientos de liberación nacional) pero sobre todo
lo que marcó su narrativa fue su experiencia de vida como negro antillano en Francia.
El trabajo de Fanon comenzó a tomar relevancia a partir del prólogo realizado por
Jean-Paul Sartre para el texto “Los condenados de la tierra” (1983 [1961]). Hoy es uno de
los antecedentes más citado por los estudios subalternos, poscoloniales y decoloniales que
surgieron con fuerza a finales de los años ochenta y principios de los noventa en torno al
problema de la subjetividad y marginalidad. Sin embargo, no se ha dado la misma relevancia
al primer libro de Fanon “Piel negra, mascaras blancas” (2009 [1952]), publicado casi 10
años antes que su obra mas popular. En dicho texto, Fanon plantea un estudio
psicoanalítico-marxista del problema colonial, realizando lecturas críticas de sus influencias
teóricas (Freud, Adler, Jung, Lacan) y produciendo apropiaciones particulares de filósofos
europeos como Hegel, Husserl, Heidegger, Merleau-Ponty, Jaspers y Sartre. Sin embargo,
la influencia central en la vida de Fanon fue Aimé Cesaire, pensador de origen antillano,
quien acuño el concepto de negritud (Cesaire, 2007).
El presente trabajo busca explorar en el texto de Franz Fanon “Piel negra, mascaras
blancas” (2009 [1952]) los puntos de diálogo entre psicoanálisis y pensamiento decolonial,
haciendo especial énfasis en el concepto de sociogénenia.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
“¿Por qué escribir este libro?”, comienza preguntándose Fanon (2009), y responde:
“el negro no es un hombre (…) Hay una zona de no-ser”. Por lo cual, su objetivo es: “nada
menos que liberar al hombre de color de si mismo” (pp. 41-42). Con el fin de superar el
complejo de inferioridad del negro el autor encuentra la necesidad de una interpretación
psicoanalítica del problema, propone por medio del análisis la destrucción de un “complexus
psico-existencial” que se ha apelmazado a partir de la división racial entre blancos y negros.
En el texto de Fanon encontramos una apropiación del psicoanálisis al servicio de su
pensamiento de lo colonial. Su lectura y el uso que hace de nociones psicoanalíticas revela
un conocimiento actualizado del estado de los trabajos de esta disciplina y nos resulta
revelador de un pensamiento que puede ejercer una crítica desde su perspectiva política a
la vez que puede recuperar aportes específicos de la psicopatología analítica para pensar el
o los problemas de la relación entre blancos y negros y, más especialmente, el racismo.
El complejo de inferioridad de los antillanos estudiado por Fanon (2009) se empresa
de forma privilegiada en el lenguaje, ya que: “hablar es existir para el otro (…) Hablar es
emplear determinada sintaxis, poseer la morfología de tal o cual idioma, pero es, sobre todo,
asumir una cultura, soportar el peso de una civilización (...) Todo idioma es una forma de
pensar” (pp. 49, 54). En consecuencia, para el negro colonizado hablar la lengua de la
metrópoli es adquirir la cultura del colonizador, es blanquearse, ser mas humano, menos
bestia, dejar de ser niño. Aquí se produce una división, un desajuste, entre el antillano
blanqueado que vuelve de Francia, considerado “casi un semidios”, y la colectividad que lo
vio nacer.
A través del análisis de obras literarias, Fanon (2009) aborda las relaciones entre la
negra y el blanco; entre el blanco y la negra, mostrando como se constituyen por medio de
las narrativas mitos de blanqueamiento como forma de salvación, de evolución: “Yo no
quiero ser reconocido como negro, sino como blanco. Pero (este es un reconocimiento que
Hegel no ha descrito), ¿quién puede hacer esto, sino la blanca? Amándome, ella demuestra
que soy digno de un amor blanco” (p. 79)
Fanon sostiene que el complejo de inferioridad (Adler) es producto de un doble
proceso: económico y por interiorización o “epidermización” de dicha inferioridad. Por lo
cual, la desalienación implica ambos aspectos. El término alienación, por una parte, da
cuenta de la vertiente marxista de su pensamiento y es un concepto que encontramos
reinterpretado por Fanon (2009) de acuerdo a concepciones psicoanalíticas, tal como él
asume: “el negro, esclavo de su inferioridad, y el blanco, esclavo de su superioridad, se
comportan ambos según una línea de orientación neurótica. Eso nos ha llevado a
plantearnos su alienación atendiendo a las descripciones psicoanalíticas” (p.76)
Podríamos considerar además que esta aplicación del psicoanálisis a la situación del
negro requiere su articulación marxista, por cuanto el mismo Fanon (2009) encuentra que la
singularidad de la realidad del negro debe ser considerada en su materialidad:
Cada vez que leemos una obra de psicoanálisis, que discutimos con nuestros
profesores, que conversamos con enfermos europeos, nos sorprende la
inadecuación entre los esquemas correspondientes y la realidad que nos ofrecía el
negro. Progresivamente hemos llegado a la conclusión de que hay una sustitución
de dialéctica cuando se pasa de la psicología del blanco a la del negro (p. 139).
La dialéctica a la que alude Fanon se hace perceptible también en su procedimiento, el
que revaloriza la interpretación que da lugar al sujeto a la vez que cuestiona que no se
asuma la situación concreta y real del negro. Es el caso del comentario acerca de
“Psicología de la colonización” de Octave Mannoni, al cual le dedica un capítulo. De acuerdo
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VI Congreso Marplatense de Psicología
a la lectura de Fanon, Mannoni reparte complejos para explicar las posiciones del
colonizador y del colonizado (a uno le corresponde una sobrecompensación, al otro un
complejo de dependencia). Fanon objeta la afirmación de Mannoni de que el complejo de
inferioridad preexiste a las condiciones coloniales y que el negro se vería en consecuencia
enfrentado a una decisión trágica: la dependencia o la inferioridad. En tanto para Fanon el
racista-explotador crea al explotado.
El blanco que llegó a Madagascar trastrocó los horizontes y los mecanismos
psicológicos. Todo el mundo lo ha dicho, la alteridad para el negro no es el negro,
sino el blanco (…) El blanco desembarcando en Madagascar provoco una herida
absoluta. Las consecuencias de esta irrupción europea en Madagascar no son
únicamente psicológicas, pues, como todo el mundo ha dicho, existen relaciones
internas entre la conciencia y el contexto social. (pp. 101-102)
Como psicoanalista, Fanon (2009) se plantea su tarea a nivel social como individual.
Su posición terapéutica puede ser enunciada en los siguientes términos:
El negro no debe volver a encontrarse ante este dilema: blanquearse o desaparecer,
sino que debe poder tomar consciencia de una posibilidad de existir; dicho aún de
otra manera, si la sociedad le plantea dificultades a causa de su color, si yo constato
en sus sueños la expresión de un deseo inconsciente de cambiar de color, mi
objetivo no será disuadirlo aconsejándole guardar las distancias; mi objetivo, por el
contrario, será, una vez aclarados los móviles, ponerle en disposición de elegir la
acción (o la pasividad) frente a la verdadera fuente de conflictos, es decir, frente a
las estructuras sociales (p 104).
La crítica a Mannoni pone de manifiesto esta tensión en la que se mueve su análisis y
lo deja en una frontera entre psicoanálisis y acción política. Fanon (2009) asume que la
particularidad cultural del antillano lo pone fuera de las condiciones estructurales que el
psicoanálisis considera propias del humano en tanto ser hablante: “Se olvida a menudo que
la neurosis no es constitutiva de la realidad humana. Se quiera o no, el complejo de Edipo
no está cerca de ver la luz entre los negros” (p. 139). Es más, propone otra determinación
para el padecimiento neurótico en caso de colonización, al reconducirlo a un resultado de la
situación cultural.
En este punto, considerando a la familia como “objeto y circunstancia psíquica”
(Lacan), Fanon (2009) argumenta que en el caso del negro no existe una relación estrecha
entre la estructura familiar y la estructura nacional, como sucede en Europa.
El joven antillano es un francés llamado en todo momento a vivir con sus
compatriotas blancos. Pero la familia antillana no tiene prácticamente ninguna
relación con la estructura nacional, es decir, francesa, europea. El antillano debe
entonces elegir entre su familia y la sociedad europea; dicho de otra forma, el
individuo que asciende hacia la sociedad (la blanca, la civilizada) tiende a rechazar
la familia (la negra, la salvaje) en el plano de lo imaginario. (p. 138)
Para analizar esta cuestión, Fanon recurre al concepto de “Inconciente colectivo” de
Jung, haciendo la salvedad que su origen no es biológico sino una “imposición cultural
irreflexiva”, dentro de la cual, los europeos relacionan el color negro al mal, el pecado, el
hambre, la guerra. Esto produce una auto-esclavización del negro antillano, una
ambigüedad entre su inconciente colectivo europeo blanco y su negritud.
El trabajo con las ideas y conceptos psicoanalíticos adquiere otro vigor, creemos, en el
análisis que realiza ya no del negro sino de las particularidades de la negrofobia.
Justamente toma la estructura del síntoma fóbico y la incidencia de la sexualidad en la
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formación sintomática y la aplica a una interpretación de lo que le ocurre a los demás con el
negro. Por ejemplo:
Porque el negro tiene una potencia sexual alucinante. Es el término exacto: es
necesario que esa potencia sea alucinante. Los psicoanalistas que reflexionan sobre
la cuestión encuentran con bastante rapidez los engranajes de toda neurosis. La
inquietud sexual es aquí predominante. Todas las mujeres negrófobas que hemos
conocidos tenían una vida sexual anormal. Sus maridos las tenían abandonadas;
eran viudas y no se atrevían a reemplazar al difunto; estaban divorciadas y dudaban
ante una nueva inversión objetual. Todas dotaban al negro de poderes que los otros
(marido, amantes episódicos) no poseían. (p. 143)
Esto implica una actividad negadora sobre el cuerpo del negro, que produce una
sobre-determinación desde el exterior provocando el derrumbe del esquema corporal y da
lugar a un esquema epidérmico-racial:
La vergüenza y el desprecio de mi mismo. La nausea. Cuando se me quiere, se me
dice que es a pesar de mi color. Cuando se me odia, se añade que no es por mi
color... Aquí o allí soy prisionero de un círculo infernal. Doy la espalda a esos
escrutadores de antes del diluvio y me aferro a mis hermanos, negros como yo.
Horror, ellos me rechazan. Ellos son casi blancos. Y además quieren casarse con
una blanca. Tendrán niños ligeramente morenos... (p. 116)
Podemos objetar la lectura de la sexualidad reducida a los términos genitales. Pero
Fanon (2009) agrega otra hipótesis, a partir de un trabajo de Lacan, que nos llama la
atención por el conocimiento que demuestra del autor en una época en que Lacan aún
estaba comenzando con el dictado de su seminario.
“Tendría ciertamente interés, apoyándose en la noción lacaniana de estadio del
espejo, preguntarse en qué medida la imago del semejante edificada en el joven
blanco a la edad que sabemos no sufrirá una agresión imaginaria con la aparición
del negro. Cuando se ha comprendido el proceso descrito por Lacan, no hay duda
de que el verdadero Otro del blanco es y sigue siendo el negro. Y a la inversa.
Solamente que, para el blanco, el Otro se percibe sobre el plano de la imagen
corporal, absolutamente como el no-yo, es decir el no identificable, el no asimilado.
Para el negro, hemos demostrado que las realidades históricas y económicas
cuentan”. (p. 145)
A la vez, Fanon (2009) enuncia una valoración ambivalente del psicoanálisis:
Como reacción contra la tendencia constitucionalista de finales del siglo XIX, Freud,
mediante el psicoanálisis, pedía que se tuviera en cuenta el factor individual.
Sustituía una tesis filogenética por la perspectiva ontogenética. Veremos que la
alienación del negro no es una cuestión individual. Junto a la filogenia y la
ontogenia, esta la sociogenia (p. 45).
Maldonado Torres (2009) encuentra en la “sociogenia” de Fanon una perspectiva de
análisis que busca integrar los procesos individuales y la estructura social, al tiempo que se
presenta como crítica a la aplicación de modelos metodológicos provenientes de las ciencias
naturales y propone repensar las ciencias humanas y sociales:
Hay algo dramático en eso que se ha convenido llamar las ciencias del hombre.
¿Deben postular una realidad humana tipo y describir las modalidades psíquicas,
teniendo solo en cuenta las imperfecciones? ¿O no deberían mejor intentar sin
descanso una comprensión concreta y siempre nueva del hombre? (Fanon, 2009, p.
52)
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en tensión, una identidad implosionada, una falla ontológica que hablita el espacio para una
nueva narrativa tenaz. En este marco, De Oto agrega que:
La epidermis funciona como sensor y organizador de la experiencia social de los
sujetos coloniales. En tal sentido, el dominio de una ontología social deviene
imposible en tanto hay una marca que funciona de manera exterior y previa a todo
relato: la raza (…) El colonialismo escinde los cuerpos de sus opciones. Los separa
de la posibilidad histórica de su existencia (pp. 26-27)
REFLEXIONES FINALES
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INTRODUCCIÓN.
MARCO TEÓRICO.
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Giro lingüístico.
En filosofía aporta herramientas conceptuales para amplificar la toma de conciencia
acerca de los efectos de los actos de habla sobre las entidades extra lingüísticas.
Asimismo fortalece la objeción contra las pretensiones del cientificismo y su vecino
moral: la falacia naturalista. Dicho giro filosófico consiste esencialmente en la toma de
conciencia del papel constitutivo que el lenguaje tiene sobre ciertas entidades de la
realidad (Lafont 1993); en el caso que nos ocupa, la construcción de lo que se
referencia como «familias discapacitadas/ y o pobres», son producto de actos de habla
(Austin, Searle) que la constituyen como entidad real del mundo humano.
Se constituye así una realidad, que, mediando la recaída en la inmediatez (Samaja
1993), se aparece —incluso ante sus propios constructores— como existiendo en sí y
previa a toda construcción. Esta ceguera ante los propios efectos de la palabra emitida
converge con la falacia naturalista (Ley de Hume confusión de lo que es con lo que
debe ser). Se pasa entonces, inadvertidamente, de una construcción a su reificación
como cosa preexistente: en el caso que nos ocupa, la supuesta discapacidad/y o
pobreza como propiedades objetivas de personas o grupos portadores de alguna
diferencia no valorada positivamente por el colectivo dominante.
En palabras de Angelino, M. (2009): “Se trata entonces de desnaturalizar los
supuestos en los que se asienta el discurso hegemónico sobre la normalidad y sobre
la discapacidad, de reconocer que aquello que se nos presenta como natural es
producto de un conjunto de interacciones materiales y simbólicas históricamente
situadas. Esto posibilita socavar la autoridad de las clasificaciones establecidas y de
los poderes a ellas asociados.”
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CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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(cariotipo, baja talla, desajustes hormonales, ansiedad social, baja autoestima, entre
otros), ninguno de ellos explica completamente las dificultades sociales observadas,
constituyéndose en una de las áreas de mayor vulnerabilidad. Por su parte, Mazzocco
(2006) considera que los problemas en el funcionamiento social podrían ser
secundarios a disfunciones en otras áreas como déficit en el procesamiento
afectivo/facial, en el funcionamiento ejecutivo o a un repertorio limitado de
comportamientos sociales.
De lo expuesto se desprende cierta confluencia en los autores al hablar de la
presencia de un déficit en el funcionamiento social, pero no así en los factores que lo
ocasionan o que lo influyen a lo largo de su desarrollo. Partiendo de la idea que la
forma en que los padres perciben a estas niñas y adolescentes puede ser relevante a
la hora de estudiar las dificultades psicosociales de esta población y sus
condicionantes, la investigación que se presenta en este trabajo puso el foco sobre un
fenómeno de gran importancia en el ambiente social de todo ser humano en
desarrollo: la percepción parental.
La psicología cognitiva social entiende a la percepción como un proceso en el
que el individuo es activo a la hora de percibir el mundo tanto material como social, ya
que entre el estímulo y la respuesta media un proceso de interpretación. Siguiendo a
Vander-Zander (1990), cuando el sujeto “atribuye a otras personas rasgos estables y
disposiciones permanentes, se juzga más capaz de comprender el comportamiento de
aquéllas y predecir su acción futura, y utiliza estas ideas para orientarse en la
interacción con ellas” (p. 62). La teoría de rasgos centrales propone que a través de la
selección de un rasgo de la persona que se convierte en central, puede organizarse el
resto de sus características en relación a ese rasgo (Asch, 1946). Estos mecanismos,
a través de los cuales una persona construye sus impresiones de los otros, generan
también otro efecto: un sesgo cognitivo, prejuicio cognitivo o predisposición cognitiva,
alteraciones en la mente humana que son difíciles de eliminar y que llevan a una
distorsión de la percepción, a una distorsión cognitiva, a un juicio impreciso o a una
interpretación ilógica (Kahneman & Tversky, 1972).
Tomando como base estos principios que se aplican a la percepción de las
personas en general, se intentó abordar el caso particular de la percepción de padres
con respecto a sus hijas (en adelante percepción parental), diagnosticadas con ST,
problemática que aparece actualmente en un estado de vacancia con respecto a su
estudio. La hipótesis central es que el ST puede considerarse un rasgo central,
organizador de la percepción que podría dar lugar a conductas sobreprotectoras Se
entiende por sobreprotección una “protección excesiva que puede ser traducida como
una forma de agresión de los padres hacia los hijos, ya que el mensaje que dan
aquéllos a estos es que no los consideran capaces de hacer las cosas por sí mismos”
(Caso-Espina, 2006, p. 34).
METODOLOGÍA
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RESULTADOS PRELIMINARES
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DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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CONCLUSIÓN
En este trabajo nuestro interés se centró en el análisis del rol y cualidad de las
instituciones y los dispositivos que se ofrecen para el abordaje de los sujetos con
discapacidad que residen en ellas.
Pensamos que tanto las capacidades como las discapacidades de los seres
humanos están condicionadas por diferentes factores, sean ellos orgánicos,
cognitivos, ambientales, afectivos, sociales, culturales. Por lo tanto, cualquier enfoque
que no contemple todas las variables, estaría proponiendo una parcialidad.
Pero posiblemente, ninguna institución pueda por sí misma resolver todos los
aspectos inherentes a esta temática.
Ante el ingreso de un sujeto a la vida institucional consideramos necesario
abordarlo desde los diferentes aspectos que lo atraviesan, generando un entramado
que lo sostenga, ayudándolo a transitar este pasaje del ámbito familiar al institucional.
147
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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biológicos, con o sin expresión de causa, como así también a revocar posteriormente
su manifestación de voluntad.
La ley establece también las limitaciones del principio de autonomía que
aunque debe respetarse como norma considera situaciones en que las personas
puedan no ser autónomas (niños, discapacitados) o presenten una autonomía
disminuida (estado vegetativo, daño cerebral) en cuyo caso será necesario justificar
por qué no existe autonomía o por qué ésta se encuentra disminuida.
En algunos casos cuando el paciente no es capaz de comprender los
componentes y opciones que le son presentadas, sus familiares o representantes
designados pueden servir para tomar decisiones por el individuo.
Se debe tener en cuenta el estado de enfermedad y vulnerabilidad del paciente
como recortes de su autonomía y la de su familia en la toma de decisiones. El
consentimiento informado expresado en condiciones de validez1 es considerado la
máxima expresión de este principio de autonomía, constituyendo un derecho del
paciente y un deber del equipo de salud, pues las preferencias y los valores del
enfermo son primordiales desde el punto de vista ético y suponen que el objetivo del
médico es respetar esta autonomía porque se trata de la salud del paciente.
En este contexto se promueve en el año 2011 la ley de Salud mental 26657
que en su artículo 1 declara:
La presente ley tiene por objeto asegurar el derecho a la protección de la salud
mental de todas las personas, y el pleno goce de los derechos humanos de aquellas
con padecimiento mental que se encuentran en el territorio nacional, reconocidos en
los instrumentos internacionales de derechos humanos, con jerarquía constitucional,
sin perjuicio de las regulaciones más beneficiosas que para la protección de estos
derechos puedan establecer las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En su artículo 5 esclarece la necesidad de evaluar el campo de la salud mental
desde una perspectiva interdisciplinaria, abordaje que la bioética ha considerado
insustituible.
ARTÍCULO 5º.- La existencia de diagnóstico en el campo de la salud mental
no autoriza en ningún caso a presumir riesgo de daño o incapacidad,lo que sólo puede
• 1
Los requisitos fundamentales para que el CI sea válido son:
• El sujeto y/o el familiar responsable debe tener información suficiente para tomar una decisión
adecuadamente sustentada.
• El consentimiento debe ser realizado por el sujeto y/o el familiar y/o tutor de forma voluntaria y
sin presiones,
• El sujeto y/o el familiar o tutor que otorga el consentimiento debe tener competencia y capacidad
suficientes.
• Si el sujeto es vulnerable, quien lo represente no debe serlo también.
• El consentimiento informado debe ser expresado fehaciente y formalmente respondiendo a la
legalidad vigente.
• El consentimiento informado que resulte de un proceso gestado en relaciones simétricas, debe
tener una forma externa (verbal y/o escrita).
• El consentimiento informado debe ser obtenido con suficiente antelación a la realización del
procedimiento.
• f) Información Sanitaria. El paciente tiene derecho a recibir la información sanitaria necesaria,
vinculada a su salud. El derecho a la información sanitaria incluye el de no recibir la
mencionada información.
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CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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METODOLOGÍA
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RESULTADOS
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Por otro lado, aquellas referencias con una vida media inferior, corresponden a
dimensiones que de por sí son novedosas. Por ejemplo la dimensión Pacientes, la
cual ha adquirido un énfasis particular los últimos años en el marco del paradigma de
la Autonomía, el cual considera a los pacientes esencialmente como sujetos de
derecho.
CONSIDERACIONES FINALES
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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DESARROLLLO
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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MÉTODO
Procedimiento
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Moya y Di doménico (2012), en el que se señala a Sigmund Freud como el autor más
nombrado en los programas correspondientes al ciclo básico de formación en
Psicología, en la Universidad Nacional de Mar del Plata, la Universidad Nacional de La
Plata y la Universidad de Buenos Aires.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
TABLA 1
Comparación por años entre Programas de asignaturas que componen el ciclo
de formación profesional Facultad de Psicología, UNLP (2013-2014), respecto a las
categorías de Salud Mental. (Expresado en frecuencias).
4t 5to 6t T
o Año Año o Año otal
SALUD 1
MENTAL 24 25 69 18
INTERDISCIP 4
LINA 3 27 18 8
6
COMUNIDAD 7 41 18 6
DERECHOS 13 1
HUMANOS 9 4 3 46
2
ADICCIÓN 0 4 17 1
POLÍTICAS
PÚBLICAS 2 1 2 5
PREVENCIÓ 9
N 4 54 38 6
INCLUSIÓN 2
SOCIAL 0 17 3 0
15 10 3
FREUD 7 74 6 37
20 24 40 8
Total 6 7 4 57
Según lo observado en la Tabla 1 el tratamiento de los Derechos Humanos
presentaría el segundo lugar, mientras que Prevención y Salud Mental el tercer y
cuarto lugar respectivamente. Podemos observar como la presencia de estas
categorías aumenta a la vez que transcurre el ciclo específico de formación
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TABLA 2
Comparación por años entre Programas de asignaturas que componen el ciclo
de formación profesional Facultad de Psicología, UNLP 2013-2014, respecto a las
categorías de Salud Mental (Expresado en frecuencias).
L T
A B C D E F G H I J KL L MotalN
SALUD 1 2 4 1 1
MENTAL 74 0 2 1 0 0
4 0 1 69 0 4 18 0
INTERDISC 1 4
IPLINA 0 2 0 1 0 0 5
4 0 8 3 0 5 18 9
COMUNIDA 1 1 1 1 6
D 0 3 2 2 0
3 0
1 7 0 04 0 26 2
DERECHO 1 1
S HUMANOS 0 2 5 2 0 0 2 2 0 0 033 0 046 0
1 2
ADICCIÓN 0 0 0 0 0 1 0 1 0 2 14 1 11 0
POLÍTICAS
PÚBLICAS 0 2 0 0 0 0 0 1 0 0 0 0 0 0 2 5
PREVENCI 5 2 9
ÓN 0 0 0 0 4 0 3
1 0 0 04 0 66 8
INCLUSIÓN 1 2
SOCIAL 0 0 0 0 0
5 0 2
0 0 0 0 2 00 1
1 2 7 3 5 1 3
FREUD 26 01 2 8 3 000 4 13 5 337 1
1 2 2 1 3 1 7 2 4 5 2 2 2 8
Total 30 6 8 93 8 06
4 0 9 4 4 56 7 3 57
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NOTAS
1
Los psicólogos en el ámbito público: Ayer y Hoy. Salud- Desarrollo Social-
Seguridad y Justicia. (SO26) Director: Pérez, Edith Alba. Entidad que acredita:
Secretaria de Ciencia y técnica UNLP.
2
Programas 2014 correspondientes a las siguientes asignaturas: Psicopatología
I (2013), Psicología Institucional (2014), Seminario de Psicología Experimental (2014),
Psicopatología II (2013), Fundamentos, Técnicas e Instrumentos de la Exploración
Psicológica (2014), Psicodiagnóstico (2014), Psicología Preventiva (2013), Psicología
Educacional (2014), Psicoterapia I (2014), Psicoterapia II (2012), Psicología clínica de
adultos y gerontes (2014), Psicología clínica de niños y adolescentes (2012),
Psicología Forense (2014), Psicología Laboral (2014), Orientación Vocacional
(2014).Facultad de Psicología. Universidad Nacional de La Plata. Planes de estudio
1984/ modificaciones 2012.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
FUENTES
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INTRODUCCIÓN
En el año 2010 fue sancionada la Ley N° 26.657, la primera ley nacional de Salud
Mental en nuestro país. Como toda legislación es producto de una puja intereses, actores,
círculos de poder, en otras palabras, tiene una génesis que merece ser tenida en cuenta.
A su vez, también tiene efectos, prescribe comportamientos posibles, reconoce aspectos,
prohíbe acciones, etc.
Lo que tiene interés para nosotros es el papel de los psicólogos- y de la psicología-
en lo que a esta ley respecta. ¿Cuánto influyo para su sanción? ¿En qué condiciona su
aplicación nuestro ejercicio profesional? ¿Cómo impacta en las poblaciones destinatarias
de nuestros servicios?
Ahora bien, también sabemos han pasado 4 años de su sanción y que
recientemente ha sido reglamentada. Mucha agua ha corrido bajo el puente, por lo que no
ahondaremos en los aspectos técnicos de la misma que ya son conocidos por muchos.
Sino más bien en aquellos desafíos que como comunidad educativa, y profesionales (o
futuros) tenemos en relación a esta nueva legislación y aquellas perspectivas en torno a la
configuración del campo de la salud mental.
Una de las cuestiones que nos interesa abordar en el presente apartado es en qué
grado esta Ley ha sido producto de la presión de movimientos sociales, de grupos
organizados, de comunidades profesionales, etc. Considerando a la misma como base
para el reconocimiento de derechos de los usuarios de la Salud Mental y, en este sentido,
como un instrumento que implica la ampliación de ciudadanía, no sería para nada
absurdo pensar que pudo haber sido una conquista luego de un largo proceso de
movilización.
Dentro del proceso de la Ley podemos marcar diferentes sucesos: sus debates
previos, su sanción por parte del Congreso Nacional el 25 de Noviembre de 2010, su
promulgación el 2 de diciembre de dicho año, su reglamentación casi tres años después,
el 28 de Mayo de 2013, y el 9 de Octubre de ese año tiene lugar el lanzamiento del Plan
Nacional de Salud Mental.
174
VI Congreso Marplatense de Psicología
EL ROL DE LA PSICOLOGÍA
175
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESAFÍOS Y PERSPECTIVAS
Formación:
El presente es un eje fundamental en lo que a acciones futuras y capacitación
refiere. En primer lugar podemos hablar del desafío de la curricularización de la ley y
lo relativo a la misma, entendiendo a esto como ir más allá del mero hecho de incluirla
176
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIÓN
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
- Vainer, A. (2012): “Las dos luchas en Salud Mental” en Topia Revista, Abril.
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INTRODUCCIÓN
179
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Como señalan Kuras de Mauer y Resnizky (2011), si bien a lo largo de los más de
cuarenta años de recorrido se fue escribiendo y legitimando el rol del AT, recién en la presente
década se está sancionando la legalidad de su práctica. El crecimiento y la demanda del AT
puede ser pensado en relación a los efectos de su incorporación en diferentes dispositivos e
instituciones, efectos que no sólo hacen referencia a la dimensión de su eficacia.
En los últimos años se ha avanzado en la profesionalización del rol, creándose las
primeras tecnicaturas y definiéndose un marco legal a partir del cual comenzaron a
establecerse sus incumbencias en algunas provincias del país. De todos modos, aún no hay
una legislación que ordene a nivel del territorio nacional la práctica del AT. La posibilidad de
contar con tecnicaturas reconocidas a nivel ministerial ha posibilitado, entre otras cosas,
avanzar en la definición de las incumbencias del rol, las cuales operan ordenando,
diferenciando y recortando el quehacer de este recurso humano, aspectos significantes para ir
sancionando su identidad.
A modo de ejemplo, el Programa de la Tecnicatura en Acompañamiento Terapéutico
dictada por la Universidad Católica de Cuyo da cuenta de que el técnico en Acompañamiento
Terapéutico se integra a equipos interdisciplinarios no como un recurso más, sino como un
agente que potencia los alcances de la dimensión terapéutica. Es un agente de salud con
vocación asistencial que ofrece al paciente una gama de experiencias en el ámbito de la
cotidianeidad, por lo que en su formación deben abordarse saberes propios del área
psicológica, biológica y social, además de técnicas de intervención específicas del rol.
De todos modos, las tecnicaturas en curso en la Argentina se dictan casi exclusivamente
en instituciones privadas, quedando por lo pronto relegadas las universidades nacionales en la
formación de Acompañantes Terapéuticos. Si bien se han emprendido gestiones para poder
desarrollar estas propuestas en el ámbito público, aún resulta muy dificultosa tal empresa.
Considerando el lugar fundamental y el indudable prestigio que han tenido y siguen
teniendo en el país la educación y la salud pública, cabe interrogar sobre los motivos de tal
relegamiento y postergación. Más aún, como señala Zaffaroni (1998) al pensare a la
universidad como un ámbito de producción de conocimiento científico y producción de
contenidos culturales, comprometida con la sociedad de su tiempo e íntimamente vinculada con
sus necesidades.
Ante la creciente oferta de cursos de formación de las más diversas modalidades y
características, se impone repensar y ordenar la formación de los Acompañantes Terapéuticos.
Como señalan Dragotto y Frank (2012) la formación debe incluir contenidos teóricos de diversas
disciplinas y aquellos específicos del propio campo, al mismo tiempo que prácticas
institucionales y espacios de supervisión. Esta propuesta se fundamenta en que el
Acompañamiento Terapéutico es una práctica intrínsecamente compleja, atravesada por
múltiples discursos (psicológico, psicoanalítico, psiquiátrico, entre otros), cuestión que invita a
sus actores a repensar y posicionarse en lugares diferentes de acuerdo a los equipos de trabajo
en los que se desempeñen.
En esta coyuntura se podría considerar un importante avance a nivel provincial, el
reconocimiento de algunos espacios de formación en Acompañamiento Terapéutico en el
181
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DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Acta Nº 6/14. Anexo III. Recomendaciones a las Universidades públicas y privadas Artículo 33
Ley Nº 26.657. Comisión Nacional Interministerial en Políticas de Salud Mental y
Adicciones.
Decreto 603/20132. Reglamentación Ley Nº 26.657. Publicación en Boletín Oficial 29/05/2013
Dragotto, P., & Frank, M. (2012). Ética y acompañamiento terapéutico. En: Acompañantes.
Conceptualizaciones y experiencias en A.T. Buenos Aires: Brujas.
Galende, E. (2008). Psicofármacos y Salud Mental: la ilusión de no ser. Buenos Aires: Lugar.
182
VI Congreso Marplatense de Psicología
Kuras de Mauer, S., & Resnizky, S. (2011). El acompañamiento terapéutico como dispositivo.
Buenos Aires: Letra Viva.
Ley Nacional de Salud Mental Nº26657 (2010). Boletín oficial de la República Argentina.
Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina.
Plan de Estudio de la Tecnicatura en Acompañamiento Terapéutico (2010). Universidad
Católica de Cuyo. Argentina. R.M. Nº 329/10 Ministerio de Educación de la Nación.
Rossi, G. (2010). Acompañamiento terapéutico. Lo cotidiano, las redes y sus interlocutores.
Buenos Aires: Polemos.
Zaffaroni, R.E. (1998). En busca de las penas perdidas. Buenos Aires: Ediar.
183
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
184
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
lesiones causadas por el tránsito, sin embargo, las cifras siguen siendo elevadas como
para poder anunciar que la situación está en franco retroceso.
En 2010, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclama el periodo
2011- 2020 “Decenio de Acción para la Seguridad Vial”, cuyo propósito es estabilizar y
reducir las cifras de la siniestralidad vial a nivel mundial, impulsando diversas
actividades a nivel nacional, regional y mundial.
La OMS en 2011, estableció el Plan Mundial para el Decenio de Acción para la
Seguridad Vial 2011–2020 (Sminkey, 2011), para orientar los empeños a nivel local y
nacional en búsqueda de lograr la anhelada meta del Decenio de Acción para la
Seguridad Vial, el cual establece cinco pilares que proponen diversas actividades e
indicadores para evaluar el progreso en cada uno de los ámbitos: Primer Pilar: Gestión
de la seguridad vial; Segundo Pilar: Vías de tránsito y movilidad más segura; Tercer
Pilar: Vehículos más seguros; Cuarto Pilar: Usuarios de vías de tránsito más seguras;
Quinto Pilar: Respuestas tras los accidentes. Puntualmente, el Cuarto Pilar impulsa la
confección de programas integrales para mejorar el comportamiento de los usuarios
de las vías de tránsito a partir de la sensibilización y educación.
Urry (2006), incorpora la dimensión social en el siniestro vial para
diagnosticarlo con mayor precisión y poder establecer medidas de acción. La causa de
la siniestralidad parece encontrarse dentro del concepto de factor humano, es decir, la
causa está asociada al comportamiento de la persona.
Según Treat et al. (1979), el factor humano (conductor y peatón) se presenta
como causa suficiente y eficiente de la coalición entre un 84 % hasta el 93%; el estado
de la ruta (firme, señalización, carriles, peralte, arcén, intersecciones, pasos a nivel,
etcétera) y el vehículo (seguridad pasiva y seguridad pasiva) al ser examinados y
evaluada su incidencia, oscila entre un 3% y un 12%.
Es relevante el aporte de la psicología al continuum destreza-aptitud-
conocimiento-actitud, tener en cuenta la actitud del conductor en el transito es un nivel
superador de los modelos anteriores; tomar en cuenta la actitud del conductor, es decir
su comportamiento, implica conocer un aspecto del comportamiento general del
mismo, comprendiendo que si un ciudadano es responsable y respetuoso con la
normativa será un conductor responsable y evitará los incidentes y siniestros en la
conducción, a diferencia de un ciudadano irresponsable, egoísta, agresivo, el cual
reflejará lo mismo al volante (Izquierdo & Torres, 2009). Los modelos analíticos del
comportamiento del conductor en relación a la seguridad han sufrido modificaciones
debido a no alcanzar a explicar dicha conducta como así tampoco el aumento de la
siniestralidad vial; es decir, la destreza en el manejo del automóvil era un requisito
fundamental y los siniestros eran consecuencia de la impericia del conductor; la
escasa comprobación de este fenómeno evidenció que los siniestros no
correlacionaban con la habilidad del conductor (Izquierdo & Torres, 2009).
Consecuentemente, es acertado afirmar que un error cometido por un usuario
de la vía pública puede provocar una colisión, sin embargo, ello no implica que esa
sea inexorablemente la única causa, o la causa principal (Izquierdo & Torres, 2009);
empero, también se señala al concepto de factor humano como un “cajón de sastre”.
Es decir, el factor humano aporta componentes válidos para aprehender
sistémicamente el problema pero es sólo un elemento más pues también debe
188
VI Congreso Marplatense de Psicología
integrarse al factor social, la interacción social y, más aún, los valores sociales
(Izquierdo, Torres & Martínez, 2013).
El objetivo del presente trabajo es describir y comparar las diferencias en la
atribución causal de los siniestros viales según peatones y conductores, género y zona
de residencia, siendo estos actores y factores involucrados en el Sistema Tránsito y
Seguridad Vial.
MÉTODO
Diseño
La presente investigación plantea un diseño ex post-facto, comparativo.
Participantes
Los participantes fueron seleccionados por medio de un muestreo no
probabilístico accidental, durante los meses marzo y agosto del año 2013. La muestra
del estudio estuvo compuesta por 500 jóvenes estudiantes universitarios de la
Universidad de Buenos Aires en sus sedes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Estuvo integrada de la siguiente forma: 125 de la Facultad de Psicología, 125 de la
Facultad de Ciencias Económicas, 125 de la Facultad de Derecho y 125 de la Facultad
de Ingeniería. El 48,9% fueron mujeres y el 51,1%, hombres. La edad promedio fue de
26,34 (DT=5,55; Max.=37, Min.=19). El 76,2% reside en la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires y el 23,8% en el Gran Buenos Aires (Conurbano).
Instrumento
Escala Creencias sobre las Causas de los Siniestros Viales (ECCSV- RA1A,
Petit, 2014): Consta de 8 enunciados con un formato de respuesta tipo Likert de 6
puntos, que oscila desde 1= totalmente en desacuerdo a 6= totalmente de acuerdo.
Evalúa las actitudes hacia las causas de los siniestros viales. A mayor puntuación
mayor atribución como causa de los siniestros viales. La fiabilidad original de la escala
fue de Alfa de Cronbach= .86.
Procedimiento
Los participantes contestaron voluntariamente, de forma anónima, un
cuestionario auto-aplicado entregado personalmente en jornada de clases, y en sus
respectivas aulas de la Facultad, y respondido sin límite de tiempo en el momento.
Resultados
El factor «factor psicosocial» incluye 5 ítems relativos a la causa de los
siniestros viales debido al comportamiento de los conductores de auto y peatones pero
también de los agentes de control de tránsito.El factor «factores sin control» incluye 3
ítems relativos a la causa de los siniestros viales debido a factores sin control por parte
los usuarios.En la Tabla 1, se detallan la media y la desviación típica de los ítems de la
escala ECCSV-RA1A.
Tabla 1
Media y Desviación Típica de los ítems de la escala ECCSV-RA1A
Desv.
Ítems Media
típica
1. El accidente de tránsito es consecuencia del inadecuado
4,32 1,22
comportamiento de los conductores
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Tabla 4
Prueba t de Student para muestras independientes de los factores “factor psicosocial”
y “factores sin control” de la escala ECCSV-RA1A, entre el grupo que reside en CABA
y en el Conurbano.
Media
Variables t
Total CABA Conurbano
4,08 3,96 4,47
Factor psicosocial - 6,33**
(,71) (,72) (0,56)
2,59 2,67 2,34
Factores sin control 2,44*
(1,18) (1,22) (0,98)
*p< .05; **p< .001. Entre paréntesis aparecen las desviaciones típicas.
En la Tabla 5, se presentan los resultados de las diferencias en los factores
“factor psicosocial” y “factores sin control” de la escala ECCSV-RA1A entre el grupo
conductor y peatón, encontrándose diferencias estadísticamente significativas. El
grupo que no posee licencia para conducir (peatón), presentó puntuaciones medias
más altas en el “factor psicosocial” en comparación con los conductores, atribuyéndole
la causa de la siniestralidad vial al comportamiento de los personas. Contrariamente,
el grupo de conductores puntuaron más alto en los “factores sin control”, por lo cual,
consideran que la causa de la siniestralidad es fruto del azar.
Tabla 5
Prueba t de Student para muestras independientes de los factores “factor psicosocial”
y “factores sin control” de la escala ECCSV-RA1A, entre el grupo conductor y peatón.
Media
Variables t
Total Conductor Peatón
4,08 3,98 4,24
Factor psicosocial - 3,47**
(,71) (,79) (,53)
2,59 2,70 2,42
Factores sin control 2,33*
(1,18) (1,23) (1,06)
*p< .05; **p< .01. Entre paréntesis aparecen las desviaciones típicas.
DISCUSIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Agencia Nacional de Seguridad Vial (2011). Informe sobre víctimas 2011. Extraído el
20 Junio, 2014.
http://observatoriovial.seguridadvial.gov.ar/documentos/estadistica/victimas/2011/2011
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Faith, N. (1997). Crash: the limits of car safety. Londres: Boxtree.
Izquierdo, J. & Torres, R. D. (2009). Hacia una sociología de la seguridad vial: Del
“factor humano” al “factor social”. Praxis sociológica, 13, 148-172.
Izquierdo, J., Torres, R. D. & Martínez, L. (2013). Control social del tráfico y
empoderamiento social. Grupos de riesgo: jóvenes y mayores. Barataria.
Revista Castellano-Manchega de Ciencias sociales, 16, 161-176.
Jacobs, G., Aeron, A. & Astrop, A. (2000). Estimating global road fatalities. London:
Transport Research Laboratory.
Murray, C. J. L. & López, A. D. (1996). Global health statistics: acompendium of
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Harvad School of Public Health.
Naciones Unidas (2010). Mejoramiento de la seguridad vial en el mundo. Extraído el 2
Mayo, 2014 de http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/64/255
Organización Mundial de la Salud (2004). Informe mundial sobre prevención de los
traumatismos causados por el tránsito. Ginebra: Organización Mundial de la
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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193
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
1
La II Copa Mundial de Fútbol tuvo lugar en Italia entre el 27 de Mayo y el 10 de Junio
de 1936. Mussolini, inexperto y desinteresado de los temas del fútbol, aceptó el
consejo de sus asesores de acercarse al más popular de los deportes para tener
llegada a las grandes masas. Italia, con no pocas presiones a árbitros y jugadores
propios y contrarios, consigue la Copa del Mundo que le permite a Mussolini
consolidar la primera dictadura fascista instaurada en su país.
2
La 11° edición de los Juegos Olímpicos de verano se llevaron a cabo en Berlín,
Alemania, entre el 1 y el 16 de Agosto de 1936 en momentos en que Hitler era
Canciller de Alemania. Hitler se valió de esta instancia deportiva para proyectar la
ilusión de una Alemania tolerante y pacífica. El estadio olímpico fue colmado por
100.000 espectadores que aplaudían y vitoreaban el gobierno nazi. Mientras tanto, la
crueldad del régimen nazi seguía operando en los campos de concentración, en la
“limpieza étnica” y en el racismo exacerbado.
3
Los detalles del Mundial 78 son desarrollados en el cuerpo de este escrito.
194
VI Congreso Marplatense de Psicología
tres dictaduras del siglo XX que se apropiaron de las subjetividades que se despliegan
en los eventos deportivos y de los valores que representa el deporte para la política
cuando ésta lo necesita. Las tres mencionadas intentaron, a través del deporte, no
solo encumbrar los éxitos de sus atletas sino también silenciar los horrores del
genocidio que tras ellos se cometían. En nuestro país, y centrándonos en el ámbito del
fútbol, los intereses arriba señalados han sido la vía regia para la aparición de las
denominadas barras bravas.
Los primeros hechos que trascienden sobre violencia en el fútbol en Argentina
datan de principios del siglo XX. En un partido disputado en Julio de 1916 se producen
desmanes en las tribunas debido a la sobreventa de entradas: se venden 40.000
entradas para la asistencia a un estadio que contaba con una capacidad de 20.000
asistentes. El partido, la final entre Argentina y Uruguay del entonces llamado
Campeonato Sudamericano, fue suspendido por los incidentes producidos en la
tribunas que fueron incendiadas (La Nación, 1994).
El primer partido disputado en la era del fútbol profesionalizado, en 1931, entre
los clubes Boca Juniors y River Plate, finaliza con disturbios cuando los asistentes al
evento comienzan una verdadera batalla campal tras la expulsión de tres jugadores de
River que se niegan a retirarse del campo deportivo.
En 1924 se produce el primer asesinato relacionado con el fútbol argentino. En
noviembre de ese año, tras disputarse el último partido en Uruguay del Campeonato
Sudamericano, se produjeron incidentes frente al hotel donde se alojaba el
seleccionado argentino, interviniendo en la pelea hinchas uruguayos e hinchas y
jugadores argentinos. Durante los incidentes, el argentino José Lázaro Rodríguez
disparó contra Pedro Demby, quien fallecería el día después. Rodríguez logró escapar
y regresar a la Argentina, gracias a la ayuda de jugadores argentinos, en un buque
que partió una hora antes de lo programado y no fue interceptado por la policía. La
policía uruguaya logró identificarlo gracias a una fotografía publicada en el diario
argentino Crítica, en donde se lo veía cenando con jugadores argentinos. Fue detenido
el 24 de ese mes, pero nunca fue deportado. Sin embargo, los incidentes que
provocaron las primeras muertes en un estadio de fútbol argentino se remontan al 14
de mayo de 1939 en un partido entre Lanús y Boca. El problema empezó con una
pelea entre jugadores y derivó en una gran disputa entre hinchas; se registraron dos
muertes. (Ibíd.)
Hasta aquí mencionamos lo que podríamos denominar pre-historia de la
violencia en el fútbol. La historia moderna, tal como plantea Alabarces, se comienza a
escribir en 1958:
La muerte de Alberto Linker, decía, es el punto de partida de una historia
donde la violencia adquirirá otros sentidos. Linker es asesinado el 19 de
Octubre de 1958 en un Velez-River por una granada de gases arrojados
por la policía. (…) en un editorial de La Razón se habla por primera vez
de la existencia de barras fuertes, públicas y conocidas. (2004: 21)
A partir de aquí se pueden plantear tres momentos clave en la conformación de
las barras bravas.
195
VI Congreso Marplatense de Psicología
4
256 a la fecha.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Han sido varios los juicios que distintos miembros de distintas barras han
tenido, y tienen, en su haber. Juicios sin fin y sin condena, a la fecha no se ha podido
demostrar, desde lo legal, que constituyen una verdadera organización que cuenta con
fuertes vínculos con diferentes actores sociales. Esto último se plasma en los dichos
de un dirigente entrevistado: “En el club descubrimos que varios de la barra vendían
drogas en la confitería del club. Fuimos a la policía y pusieron dos agentes a seguirlos
y cuidar la zona. A los dos meses esos policías eran socios de los hinchas”
(Comunicación personal).
La creación de la ONG Hinchadas Unidas Argentinas, en el año 2009, abre el
tercer momento del acontecer histórico de las barras bravas en el que sus vínculos
con las dirigencias futbolísticas y políticas quedan cabalmente registrados,
institucionalizados.
Hinchadas Unidas Argentinas (HUA) tiene como antecesora la ONG Nuevo
Horizonte para el mundo. Dicha ONG es una asociación civil sin fines de lucro con
personería jurídica (Mat. 31399) desde el año 2006 y su objetivo es promover un fútbol
más armónico, patrocinando un acuerdo de paz entre barras bravas, a las que llama
hinchadas, proponiéndose transformar a sus referentes (barras bravas) en líderes
positivos. Sin embargo, tres de los barras integrantes de Nuevo Horizonte para el
mundo, toman el proyecto y lo trasladan a quien sería el dirigente máximo de HUA,
situación que es vivida como traición por los miembros de Nuevo Horizonte. Escriben
en la página web de Nuevo Horizonte:
Aprovechamos la oportunidad para advertirle a los directivos y/o
apoderadas del Hinchadas Unidas Argentinas que se abstengan de
continuar divulgando, reproduciendo, emitiendo, y/o haciendo circular de
cualquier otra forma, contenidos, en cualquier soporte, que son propiedad
de la Asociación Civil Nuevo Horizonte para el mundo, mat. 31399, atento
a no encontrarse autorizados para ello de ninguna manera. Asimismo, les
recordamos que existen canales lícitos de vinculación institucional, para
los cuales nos encontramos siempre receptivos, que, no sólo no han
intentado, sino que en todo momento han vulnerado en modo ostensible.
Muchachos de HUA: sigan soplando la vuvuzela!!!! (2010: párr. 5)
Hinchadas Unidas Argentinas (HUA) nace en el año 2009 a partir del proyecto
del dirigente Marcelo Mallo, quien menciona que tiene la finalidad de crear esta ONG
para trabajar contra la violencia en el fútbol y lograr erradicarla. Para este fin se unen
diversas barras bravas del fútbol, entre ellas: Independiente, Huracán, Lanús, Tigre,
Rosario Central, Argentinos Juniors, Chacarita, Godoy Cruz, Gimnasia y Esgrima de
La Plata, Tristán Suarez, Colón y Vélez.
En varios estadios de fútbol se pudieron observar banderas de HUA con
simbología que remitía a la afinidad con el partido kirchnerista 5. En relación a esto, y
según el expediente N° 0251-D-2010 de la Honorable Cámara de Diputados de la
Nación (Comi, Piemonti e Iglesias, 2010: párr. 11), Mallo declaró en una entrevista
telefónica con la agencia de noticias DyN que:
5
Sin embargo, en los últimos tiempos, las banderas de HUA aparecen en los estadios
con el nombre de Francisco de Narvaez, opositor de la línea kirchnerista.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIÓN
6
Cabe consignar que algunos miembros de HUA no fueron admitidos en Sudáfrica y
una treintena de los 250 que pudieron viajar fueron deportados por el gobierno
sudafricano a los pocos días de estar allí por protagonizar situaciones de violencia y
peleas.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
violencia organizada. Si bien la violencia estuvo desde los inicios del fútbol, la
aparición de las barras bravas exacerbó la agresión que se desplegaba antes, durante
y después de cada partido. De este modo, se concluye que la actual violencia en el
fútbol es organizada, no reductible a la ejercida por un grupo de inadaptados, al
desenfreno de la pasión popular o al reflejo de la violencia social. Las barras bravas le
otorgan a la violencia futbolística una racionalidad que, en el mismo acto, les da la
materialidad de una organización. Hoy en día, todos los clubes de fútbol, sean de la
categoría que sean, tienen en su interior un grupo de personas que conforman esa
organización llamada barra brava. A todas ellas les caben las apreciaciones hasta aquí
realizadas.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
200
VI Congreso Marplatense de Psicología
Este perfil recoge las principales cualidades psicológicas de los deportistas que han alcanzado el
éxito en su deporte, es decir, que han conseguido desarrollar al máximo sus capacidades
deportivas (González, 1992; Williams, 1991).
Podríamos establecerlo en los siguientes aspectos:
Motivación alta. Son deportistas que han tomado la decisión de poner el deporte como
objetivo prioritario (compromiso) en su vida, al menos durante el tiempo que dure la carrera
deportiva. Y trabajan en el deporte con el máximo esfuerzo y dedicación, sabiendo que es el
trabajo diario el que les va a permitir alcanzar el éxito en su deporte. E igualmente saben de la
importancia para llegar a alcanzar su verdadero potencial deportivo de irse planteando objetivos
deportivos realistas, tanto de resultado como de ejecución, para que supongan un reto para él y va
evaluando su progreso de acuerdo a su consecución.
Nivel óptimo de activación
Se trata de saber cuál es el nivel de tensión adecuado para rendir deportivamente al mejor
nivel, dentro de las posibilidades propias. Considerando este nivel de tensión o activación dentro de
un continuo en el que los extremos son los más perjudiciales para el rendimiento deportivo. Siendo
éstos, la excesiva relajación por una parte y, por otra, la ausencia total de relajación o máxima
excitación. Lo cual implica el dominio del deportista tanto de estrategias de relajación (las cuales
aplica cuando se siente nervioso) como de activación (que aplica cuando se encuentra demasiado
relajado).
Alta competitividad
La competitividad se entiende como el entusiasmo y el gusto por competir. Y se suele
estudiar como la diferencia que existe en el deportista entre la motivación por obtener el éxito y la
motivación para evitar el fracaso. De forma, que existe una correlación inversa entre ambas, a
mayor motivación por alcanzar el éxito menor motivación por evitar el fracaso, y viceversa.
Seguridad y confianza en las capacidades propias. Los buenos deportistas creen verdadera y
objetivamente en su capacidad para ir consiguiendo las metas que se van proponiendo.
Control de los pensamientos internos
La Psicología ha evidenciado a lo largo de los años la frase: “así se piensa, así se actúa”.
De forma, que los buenos deportistas tienen un diálogo interno (pensamientos) positivo, que
controlan y utilizan en su beneficio.
Autoconocimiento
Capacidad de apreciación y percepción objetiva de sus propias destrezas. Para progresar
en la práctica deportiva hay que partir del conocimiento de los puntos fuertes y débiles personales.
Capacidad de concentración y control de la atención
Tanto en entrenamientos como en competición. Los grandes deportistas saben en cada
momento donde tienen que dirigir su atención para sacar el mayor beneficio de los entrenamientos
y rendir a su mejor nivel en los partidos.
Uso de la imaginación o ensayo mental (visualización).
201
VI Congreso Marplatense de Psicología
Las principales diferencias que nos podemos encontrar en las características psicológicas
entre las jóvenes y los jóvenes que juegan al fútbol, se refieren a aspectos específicos de la
motivación (que pasaremos a exponer a continuación). Ya que en lo referente al resto de las
características psicológicas que menciona el perfil psicológico del deportista con éxito no se
observarían tales diferencias; de forma, que si se hace un análisis del fútbol femenino y del
masculino las características psicológicas necesarias para triunfar en uno y en otro, en general, son
la mismas, p. ej. estar concentrado/a durante todo el partido, no dejar que la presión interna
(pensamientos), el público o el marcador te influyan negativamente en tu rendimiento, entre otras.
La motivación de las futbolistas La motivación es un concepto muy amplio que puede englobar
muchos aspectos de la conducta de un deportista.
Aunque existen muchos modelos teóricos que engloban distintas clasificaciones de la
motivación. Vamos a utilizar el que más práctico parece para este momento, siendo éste el que
clasifica la motivación en interna y externa.
202
VI Congreso Marplatense de Psicología
203
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
LA FORMACIÓN ARBITRAL
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.
LA ATENCIÓN EN EL ARBITRAJE DEL BÁSQUET
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Vale aclarar que todas las intervenciones de este programa deberán estar bajo
la supervisión profesional del psicólogo del deporte a cargo. A continuación se
presentarán una seria de técnicas útiles para el aspirante a árbitro con el fin de
optimizar las habilidades psicológicas intervinientes en su labor:
Atención
Expansión de la Conciencia (Gauron, 1984)
Desarrollo del auto habla. (De Diego y Sagredo 1992)
Concentración
Visualización, entendida por (Weinberg y Gould, 1995)
El uso de palabras clave. (Guallar, A. y Pons, D. 1994)
El control visual (Boutcher, S. 1992)
La concentración en el presente. (Weinberg y Gould, 1996)
Motivación
Técnica del establecimiento de metas. (Dreikurs, E. 2000)
Los incentivos. (Roberts, G.C., Kleiber, D.A. Y Duda, J.L. 1981).
Arousal emocional
Smith (1980), en Weinberg y Gould (1996) presenta el SMT, un programa de
destrezas concebido para enseñar a una persona una respuesta de
afrontamiento específica e integrada, mediante el uso de componentes
cognitivos y de relajación, a fin de controlar el arousal emocional.
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CONCLUSION
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Damos cuenta de nosotros mismos únicamente porque se nos interpela en cuento a seres
a quienes un sistema de justicia y castigo ha puesto en la obligación de rendir cuentas.
Este sistema no está presente desde el principio; se instituye, en cambio, con el paso del
tiempo y a un gran costo para los instintos humanos.
(Judith Butler, 2009)
INTRODUCCION
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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METODOLOGÍA
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RESULTADOS
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de que en la currícula, un quinto de los programas está compuesto por registros que
responden a la formación ética- deontológica.A esto corresponden dos lecturas:
Por un lado, que este es un porcentaje significativo, ya que estos contenidos no
son del dominio específico que las distintas asignaturas tratan, sino complementarios.
Por otro, no se ha realizado una evaluación de lo que han marcado los
docentes los docentes como bibliografía relacionada con la temática. A raíz d esto, no
puede aseverarse que este nivel, evidenciado como aceptable y hasta elevado de
inclusión de las temáticas en las asignaturas, sea tal. Y tampoco que la inclusión de
los mismos en los PTED implique que se dicten durante las cursadas, ni tampoco que,
de ser así, los alumnos los incorporen en el marco de las mismas.
Es por esto que se propuso una segunda parte de esta investigación, que la
continua y la amplía, en la cual se evaluará la perspectiva de los alumnos en cuanto a
la recepción de las temáticas ético-deontológicas al interior de las asignaturas de la
currícula de la carrera.
Esto permitirá una visión más completa de la situación de la formación ético-
deontológica en la carrera de psicología de la UNMDP, dando lugar a la posibilidad de
realizar un análisis complementario entre los que los docentes indican brindar como
formación y los que los alumnos indiquen haber recibido con respecto a la misma.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La Psicología Como Promotora de Derechos
“Hacia la interdisciplinariedad de las practicas en los escenarios actuales “
El presente trabajo abogará por conjugar dos dimensiones: la enseñanza con ética
y el desarrollo de valores en la experiencia de vida universitaria. Difícilmente puede haber
un aprendizaje ético de la profesión si, paralelamente, no hay un desarrollo en valores en
la propia institución. La formación de un profesional competente no es posible al margen
de una formación ética. La profesionalidad comprende además de competencias, tanto
teóricas como prácticas, una integridad personal y una conducta profesional ética.
(Bolivar, 2005)
224
VI Congreso Marplatense de Psicología
La Psicología Como Promotora de Derechos
“Hacia la interdisciplinariedad de las practicas en los escenarios actuales “
al referente ya existente: la profesión de base (E. N. Gómez Gómez 2002) Este hecho
obliga a interrogarnos sobre eficacia de la labor docente, amerita plantear desde qué lugar
ejerce su labor en el aula universitaria y qué fines persigue.
Indagar sobre los motivos por los cuales los docentes ingresan a la vida
universitaria implica adentrarse en cuestiones complejas, ya que allí aparecen conectados
múltiples aspectos: propósitos, intenciones, intereses, necesidades y pasiones que
gravitaron en la decisión. El motivo es el componente dinámico que impulsa la acción; se
trata de un elemento ligado a las prácticas que se realizan. Según plantea Bourdieu
(1994) los significados dan sentido a las acciones, por ende las motivaciones permiten
explicar las acciones aunque no se trate de acciones racionales, y ellas pueden ser
referidas por el sujeto a través de una reflexión sobre su propia acción, evitando la
simplificación que supone plantear la actividad educativa como objeto separado de las
condiciones personales en que la desarrollan sus actores.
El interés del trabajo radica en destacar algunas situaciones derivadas de
dificultades detectadas por los docentes en el encuentro con los estudiantes, con el
cumplimiento de metas, emisión de productos académicos y de gestión de quienes siguen
definiéndose por su profesión netamente disciplinar. Estas situaciones ocasionan
tensiones y, a veces, contradicciones que ponen en duda el logro de los fines
institucionales, planteando dilemas éticos.
Aunque no se abordará expresamente la formación de estudiantes, el análisis
derrama sus implicancias, dada su necesaria vinculación con el trabajo de los profesores,
quienes desempeñan funciones fundamentales para que los procesos formativos
cristalicen según los propósitos institucionales y satisfagan las demandas sociales.
El problema inicial se presentó a partir de la siguiente pregunta: ¿Cómo configuran
la identidad académica los docentes de la UNMDP?En función de esta pregunta inicial
surgieron algunos objetivos específicos tendientes, por un lado, a develar la importancia
que adquiere en la construcción de la identidad docente, las razones que fundan las
decisiones de ingresar a la docencia. En segundo lugar, explorar aquellas
representaciones disciplinares que tensionan con la construcción de la identidad docente;
entre otros.
En función de estos objetivos derivados de aquella investigación, surgen otros
para el presente trabajo:
Problematizar la función docente actual en función de la misión de la universidad y
su compromiso social.
Reflexionar acerca de la necesidad de profesionalizar la docencia universitaria.
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La Psicología Como Promotora de Derechos
“Hacia la interdisciplinariedad de las practicas en los escenarios actuales “
1
“Si se entiende que el aprendizaje no está asegurado en la transmisión de contenidos sino en las operaciones que hace el
alumno con las herramientas que se le ofrecen, educar no puede ser sinónimo de enseñar, informar o entrenar, como
tampoco es necesariamente un proceso relativo a la universidad como institución social. Educar es formar e instruir, en
donde la instrucción permanece en un nivel intelectual y la formación se inserta en la personalidad, manifestándose en la
conducta del sujeto, alterando su subjetividad. Es decir, la formación comparte con la instrucción el ofrecimiento de
uncontendido, pero excede a la simple adquisición de conocimientos en el sentido que convierte la materia transmitida en
un elemento libremente disponible y fecundo espiritualmente” (Caro, A.2014)
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La Psicología Como Promotora de Derechos
“Hacia la interdisciplinariedad de las practicas en los escenarios actuales “
CONCLUSIONES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La Psicología Como Promotora de Derechos
“Hacia la interdisciplinariedad de las practicas en los escenarios actuales “
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
230
VI Congreso Marplatense de Psicología
Julia Kristeva en las obras de San Agustín, Ignacio de Loyola y Sade. (Kristeva, 2001).
Salvo este último caso (que lo hace parcialmente) los anteriores estudios citados se
centran en los cambios sociales que dan lugar a una categoría mental o social
determinada, pero no la analizan, a la inversa, como elemento constitutivo de la
subjetividad, y en su carácter de singularidad irreductible.1
Asimismo la noción de intimidad, como bien del ámbito subjetivo individual y
estructural del estado democrático, es un tema de problematización dentro del campo
jurídico, donde distintos autores analizan como la emergencia de un nuevo paradigma
sociológico basado en la creación y distribución de la información la amenazan
(Saldaña, 2007, Alcaraz, 2007, Nino, 1992). Esta perspectiva jurídica, si bien
comparte en un punto la necesidad del análisis singular de cada situación (en tanto
que para que el ideal ético de justicia se ponga en acto, requiere que el sujeto le
otorgue una significación a la sanción Geréz Ambertín, 2006) se pretende como válida
para todo sujeto, analizándolos como iguales, borrando sus diferencias y dejando de
lado la perspectiva que nos interesa indagar.2
Por nuestra parte, creemos que la pregunta sobre la pertinencia de la noción de
intimidad, sobre los cambios que sobre ella se han producido, en ocasiones opacan la
diferencia que se debe establecer entre el lugar esencial que la intimidad tiene en la
constitución subjetiva y la variabilidad de la zona u objetos sobre los cuales se
deposita. Creemos que el psicoanálisis ha mostrado ser una teoría fructífera, no solo
para el tratamiento del sufrimiento humano, sino para analizar la subjetividad
contemporánea, la cual consideramos puede ser analizada con el operador que
consideramos es la noción de intimidad que nos proponemos indagar en la obra
freudiana.
231
VI Congreso Marplatense de Psicología
tema que el de delinear justamente una noción de lo íntimo de esta naturaleza. Esta
convicción nos ha llevado a proponer situar varios puntos en la obra freudiana. El
primero que nos hemos planteado indagar es la teoría del trauma, en tanto sostiene
que este produce una extrañeza en el sujeto que lo padece. Algo que atañe al sujeto,
que lo compromete sintomáticamente, en su padecimiento, aparece como extraño
para el propio sujeto. No está de más aquí aclarar que para Freud el trauma se
constituye en dos momentos y está ligado a la contingencia del encuentro (García,
2005; Braunstein, 2012). Teniendo el trauma en Freud como condición la sorpresa y la
extrañen elemento extraterritorial dentro del propio territorio del sujeto. Jacques Lacan
llamará a eso extimidad, algo topológicamente extraño, una tierra extranjera interna.
Metáforas que culminarán en lo siniestro, traducido por los franceses como
“inquietante familiaridad”, porque lo inquietante no es lo que tiene de extraño sino lo
que tiene de familiar. Una característica esencial de lo sexual siempre es su
presentación como una familiaridad inquietante. Dicho así, el trauma no es algo
extraño que se enquista, sino algo familiar que se ha vuelto extraño en el encuentro
con un acontecimiento exterior. El concepto de trauma de lo siniestro son dos formas
de trabajar los aportes freudianos a la noción de intimidad. (Freud,
En relación al concepto de superyo, las investigaciones llevadas adelante por
Marta Geréz Ambertín (Geréz Ambertín, 1993; 1999; 2008) dan cuenta de una
dirección cercana al trabajo que nos proponemos. Geréz Ambertín analiza el superyo
en sus relaciones con la pulsión de muerte y el goce, fuera de la clásica versión
normalizadora del superyo como heredero del complejo de Edipo. Asimismo, analiza
las relaciones entre culpa y superyo proponiendo un análisis desde lo simbólico, lo
imaginario y lo real, dando lugar a la culpa como inconsciente, la culpa como
sentimiento y finalmente la necesidad de castigo. Como hemos señalado más arriba,
una de nuestras hipótesis inciales, sugiere que el superyo es una de las versiones
privilegiadas de lo íntimo en la teoría freudiana.
El análisis del estado de la relación entre los sujetos, o del lazo social, nos
permite focalizar fundamentalmente en la relación imaginaria, ya que es en base a la
constitución de la propia imagen, tomada siempre en segundo término de la imagen de
otro, que los sujetos se vinculan con los demás. Por otro lado, cualquier consideración
acerca del odio y la envidia en los vínculos con los demás, no debería desconocer el
origen de la constitución yoica para dar cuenta de estos fenómenos. (Freud,
1908/2003; 1914/2003; Lacan, 1949/1987).
Asimismo y fortaleciendo la idea de pensar estas cuestiones dentro del campo
señalado, como han destacado Zizek, Santner & Reinhard el semejante es un
elemento indispensable de cualquier teoría política. (Zizek, Santner & Reinhard, 2010).
232
VI Congreso Marplatense de Psicología
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236
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
1
En el 2° artículo de la Ley Nacional de Salud Mental, se indica que este documento forma parte integrante de
la misma.
237
VI Congreso Marplatense de Psicología
238
VI Congreso Marplatense de Psicología
2
Todas las citas presentes hasta el final del párrafo corresponden a Gracia (2012).
3
Se habla aquí de actos autónomos (como el acto de consentir cierto curso terapéutico o la
participación en una investigación) puesto que los autores diferencian los mismos de las personas
autónomas. Éstas son quienes usualmente actúan autónomamente, pero no siempre; justamente,
algunos de sus actos pueden ser heterónomos, y del mismo modo algunos de los actos de
personas heterónomas pueden ser autónomos.
239
VI Congreso Marplatense de Psicología
240
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VI Congreso Marplatense de Psicología
242
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
El eje central de esta presentación es una pregunta respecto de la práctica del
Psicoanálisis en las instituciones de salud mental. Si bien no es una pregunta nueva,
no siempre se ha referido a las mismas cuestiones. Hace algunos años, apuntaba a la
factibilidad de practicar el psicoanálisis en los dispositivos públicos, fuera del
dispositivo original. Algunas posiciones sostenían que era imposible la práctica
psicoanalítica fuera del consultorio, mientras que para otras sí era posible concebirla
más allá de las coordenadas materiales del encuadre. Con el correr del tiempo,
múltiples espacios de formación y clínica dieron cuenta de la eficacia del psicoanálisis
en diferentes ámbitos y su valioso aporte al campo de la Salud mental, disipando aquel
cuestionamiento. Al mismo tiempo, cabe señalar –para no simplificar
inadecuadamente esta cuestión– que una continua producción teórica muestra el
carácter dilemático que adquieren algunas variables institucionales en articulación con
la práctica psicoanalítica, tales como los tiempos establecidos por la institución, la
cuestión de la gratuidad, el establecimiento de diagnósticos sobre la base de otros
marcos teóricos, sólo por nombrar algunas. Si bien en la actualidad estas
problemáticas ya no cuestionan la práctica misma del psicoanálisis en las
instituciones, sostienen la necesidad de reflexionar sobre ellas.
Lo mismo sucede –y éste es el foco de nuestro trabajo– con el cruce entre la
lógica general propia del lenguaje institucional y la lectura singular que cada caso
requiere: ¿cuáles son las situaciones dilemáticas más frecuentes y relevantes con las
que se topa el psicoanalista al intentar sostener la lógica singular en las instituciones?,
¿cuáles son las peculiaridades de la práctica del psicoanálisis frente a los discursos
institucionales y sus normas?, ¿cómo articular el abordaje general propio del discurso
institucional con la dimensión clínica que releva la singularidad de cada caso?
Cabe señalar que entre los discursos institucionales y la dimensión clínica se
establecen diferencias relativas al estatuto de los sujetos en juego, que profundizan
esas preguntas. Habrá que considerar que en los dispositivos públicos de salud
mental, los profesionales son convocados en tanto agentes de salud. Este rol es
establecido institucionalmente y articulado a un proyecto político del Estado en materia
de salud, que se organiza en leyes jurisdiccionales y pautas institucionales tendientes
a objetivos sociales, políticos y sanitarios. En la coyuntura socio-política y cultural
actual en que la salud mental inaugura un nuevo paradigma conceptual y jurídico, se
hace necesaria una adecuación de las prácticas institucionales y la creación de
nuevos dispositivos, pero sobre todo un cambio de concepción.
243
VI Congreso Marplatense de Psicología
Hacia fines de 2009 fue sancionada la ley sobre los Derechos del Paciente en
su Relación con los Profesionales e Instituciones de la Salud (ley 26.529) y en
diciembre de 2010 se sancionó la Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657, normativa
que acentúa el enfoque de derechos para todos los sujetos con padecimiento psíquico
(López, 2012). La nueva legislación apunta a resguardar los derechos del destinatario
de las prácticas en salud, quien históricamente quedaba indefenso frente a quienes
detentaban el saber científico (ya fueran médicos, psicólogos, psiquiatras, etc.). La
internación, entendida como último recurso terapéutico, el consentimiento informado y
la inclusión de las toxicomanías en el campo de la salud mental son algunas de las
novedades de la nueva ley, reglamentada en 2013.
Las transformaciones jurídicas interesan al campo de la salud mental en
general, puesto que el Derecho tiene incidencia concreta y efectiva en la regulación
del ejercicio profesional, no sólo a través de las leyes sociales y las pautas
deontológicas, que toman de aquéllas su fundamento, sino también a través de los
sistemas normativos de los ámbitos institucionales en los que el profesional de la salud
despliega sus prácticas, que están fuertemente sustentados en el ordenamiento
jurídico y en la noción de sujeto de derecho (Salomone, 2007).
Cabe destacar que no solo el campo jurídico, sino también algunos sectores de
la comunidad psicoanalítica se han interesado en el enfoque de derechos, cuestión
que se advierte en múltiples esfuerzos por articular las problemáticas de Derechos
Humanos con la perspectiva del Psicoanálisis (Aramburu, 2000; Delgado, 2011;
Laurent, 2000; Lo Giúdice, 2005). Solo por citar un ejemplo, el psicoanalista francés
Eric Laurent (2000) con su concepción del “analista ciudadano” plantea la necesidad
fundamental de compromiso de los analistas frente a los debates sobre políticas de
salud mental. De este modo, formula una articulación entre la responsabilidad referida
a la dimensión clínica de la práctica, relativa al sujeto del padecimiento psíquico, con
una responsabilidad profesional en consonancia con el contexto socio-político1. Señala
así que la posición ética que propone el psicoanálisis no es incompatible con una
concepción de analista comprometido social y políticamente.
Consideramos que una particularidad del momento actual de la salud mental en
Argentina es que este discurso institucional que, naturalmente recorta los problemas
de un modo general, es también un discurso muy valorado socialmente en tanto se
aceptan por amplia mayoría a los derechos humanos como un ideal normativo y
conceptual, y como fundamento de esta nueva concepción. Esta circunstancia impide
el gesto espontáneo de soslayar ese otro discurso. Al mismo tiempo, acompañamos la
siguiente advertencia: “Ciertamente la globalización de los derechos del hombre en
pos de hallar una lengua universal barre y borra las diferencias” (Domínguez, 2008: p.
230). El desafío reside, precisamente, en sostener una lectura singular incluso con
relación a pautas que promueven ideales de salud y derechos a los cuales ningún
psicoanalista podría oponerse.
Planteada la importancia de ambos campos y sus diferencias discursivas,
conviene señalar también que tal articulación puede resultar dificultosa. En ocasiones,
1
Resulta interesante destacar que, según se ha podido relevar (proyectos de investigación UBACyT;
Salomone et al.), en ocasiones el resguardo de los derechos del sujeto jurídico entra en contradicción con
el resguardo del sujeto del padecimiento psíquico. Estas situaciones resultan un campo fecundo para la
generación de dilemas éticos.
244
VI Congreso Marplatense de Psicología
en los dispositivos públicos de salud, las pautas que regulan la práctica de los
llamados agentes de salud no resultan acordes a su función ni a los principios de la
misma2. El peso de tal denominación genera una posición paradojal puesto que surge
una tensión entre el analista, orientado por una política del deseo, y el agente de
salud, representante de las políticas públicas y promotor de los Derechos Humanos. Al
respecto, es interesante el planteo del psicoanalista Marcelo Barros, quien sostiene
que “allí donde [el practicante] actúa como médico, psicólogo, psicopedagogo, no está
actuando como analista (…). No siempre el analista actúa como tal, y a veces se ve
forzado a ello. Eso no constituye un problema siempre y cuando esté advertido de la
diferencia y pueda preservar su función” (Barros, 2009, p. 29).
Por otra parte, habrá que considerar asimismo esos otros aspectos de los
discursos institucionales no tan dignos de valoración. El psicoanalista francés Franck
Chaumon (2008) señala que, en general, se les dirige a los profesionales de la salud
mental una demanda de operar sobre el sufrimiento individual, al tiempo que se les
supone el deber de someterse a las exigencias y los valores de la época, fuertemente
arraigados en una lógica uniformizante que entra en contradicción con ese pedido.
Es interesante el planteo de Chaumon, entre otras cosas, porque destaca en
relación al sujeto tanto la singularidad de su palabra como la individualidad de sus
derechos subjetivos en tanto “usuario”, como modos alternativos a la lógica que
promueve el enfoque estadístico de la clínica –tal el uso del Diagnostic and Statistical
Manual of Mental Disorders, DSM3, en sus propios términos–, que surge de la gestión
de las poblaciones y de los flujos financieros de las instituciones hospitalarias.
El enfoque singular que propone Chaumon resulta la pieza fundamental de las
intervenciones en salud mental, puesto que apunta a lo específico de nuestra tarea.
La función, articulada a la lectura clínica, supone intervenciones que contemplen una
dimensión subjetiva más allá del reducido espectro del rol adjudicado
institucionalmente (Salomone, 2011) y de las pautas y procedimientos que las
instituciones establecen –sean éstas judiciales, educativas, hospitalarias u otras–. En
consonancia con esta perspectiva, la psicoanalista Adriana Rubinstein plantea que: “el
analista considerado por la salud pública como un “recurso de salud”, como terapeuta,
toma allí su lugar, proponiendo una cura que rompe con los criterios de salud para los
cuales es llamado, ofreciendo una alternativa para el sujeto, la alternativa del deseo”
(Rubinstein, 2004, p. 29). En un sentido similar, Pablo Fridman señala que “el
psicoanálisis no es, en sí, un aporte a la salud mental o a la psiquiatría, sino más bien
la apertura a una dimensión no contemplada en la lógica del discurso científico: la
dimensión subjetiva” (Fridman, 2011, p. 35).
En resumen, el encuentro entre la dimensión clínica de la práctica –centrada en
el sujeto del padecimiento psíquico y la lectura singular– con los discursos
institucionales y sus marcos normativos, fundados en la noción de sujeto del derecho y
propiciadores de un abordaje general (Salomone, 2006), suponen simultáneas
intersecciones discursivas que impiden una referencia directa y unívoca. Cómo un
psicoanalista articule su función con los discursos institucionales no es algo previsto
2
Se ha identificado en investigaciones previas (Michel Fariña, J. J, 1992-2010; Salomone, G. Z., 2008-
2014) una serie de situaciones en que el encuentro entre las pautas normativas –deontológicas, jurídicas,
organizacionales o institucionales– con lo propio de la función profesional adquiere un carácter dilemático,
tanto en términos deontológicos como clínicos.
3
De uso corriente en nuestros dispositivos públicos de salud.
245
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247
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
MARCO TEÓRICO
Los cambios profundos que se están produciendo en el siglo que vivimos tanto a nivel
económico, como social y cultural no dejan de afectar considerablemente el campo laboral
248
VI Congreso Marplatense de Psicología
Tal como lo plantean Charria Ortiz, Sarsosa Prowesk y Arenas Ortiz (2011) se pueden
agrupar bajo el concepto de competencia “el saber ser (automotivación, iniciativa y trabajo
colaborativo con otros), el saber conocer (observar, explicar, comprender y analizar) y el
saber hacer (desempeño basado en procedimientos y estrategias)”, adquiriendo el
concepto una complejidad que impide reducirlo a cualquiera de las dimensiones
mencionadas, ya que supone la conjugación constante de ellas.
A su vez se han planteado, desde diferentes contextos, algunas clasificaciones de las
competencias, entre ellas destacamos la sostenida por Ruiz y colaboradores (2008),
quienes agrupan en competencias generales o transversales y competencias específicas.
Las competencias específicas por otro lado o técnicas (Álvarez, Gómez y Ratto, 2004)
son aquellas que permiten al individuo desempeñarse en las actividades propias de su
profesión, y se relacionan con un conocimiento técnico y especializado.
249
VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
Nota: en el presente gráfico vemos que los profesionales no se sienten preparados para
enfrentar los problemas de su práctica profesional en un 60%.
250
VI Congreso Marplatense de Psicología
Nota: Los psicólogos consultados han señalado cinco problemáticas como recurrentes en
la práctica: 16% problemas institucionales; 23% problemas vinculados a los síntomas
actuales; dificultades para el trabajo interdisciplinario 23%; el estado de precariedad
laboral del trabajo del psicólogo 22% y finalmente afrontar el tratamiento de patologías
graves en un 16%.
251
VI Congreso Marplatense de Psicología
252
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Finalmente, a la hora de definir los rasgos de un buen profesional los egresados optan por
responder fundamentalmente desde un deber ser que ha sido inculcado en toda la
253
VI Congreso Marplatense de Psicología
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255
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Desde la época colonial, la actual Argentina, tuvo problemas para organizar un sistema
normativo coherente y justo, que provea de estabilidad social (Academia Nacional de la Historia,
1999; Waldmann, 2003). Desde este momento histórico, nacería un desprecio por las leyes,
asociado al rechazo del orden español percibido como abusivo, ilegítimo y corrupto (Academia
Nacional de la Historia, 1999; Daros, 2004; Hernández, 2005).
En la actualidad, la percepción de transgresión ciudadana continúa siendo alta. Según el
Latinobarómetro (2011a) los argentinos creen que el 71.4% de sus conciudadanos respeta poco o
nada la ley y que los ricos (62.4%) y los políticos (59%). Sin embargo, diversos autores plantean
que la transgresión en este país no se reduce a grupos específicos sino que el incumplimiento
normativo es un fenómeno endémico y responde a una cultura de la transgresión (Beramendi,
2014, Beramendi y Zubieta, 2013, 2014; De Biase, 2010; Nino, 2005; Puy, 2011; Zommer, 2006).
Esta tendencia general a la ilegalidad denota un problema sistémico y generalizado que no
puede entenderse de manera aislada o monocausalmente sino que debe ser comprendido a nivel
social a partir de un análisis de la percepción del sistema normativo entendido como organismo
complejo que comprende las normas, las instituciones y a los agentes que las promueven,
respaldan y controlan, así como de las creencias y prácticas en relación a ellas (Beramendi, 2014;
Beramendi y Zubieta, 2014). Esta propuesta considera tres variables fundamentales para
comprender el funcionamiento del sistema normativo: la percepción de legitimidad, la percepción de
transgresión y la percepción de debilidad normativa (Beramendi, 2014; Beramendi y Zubieta, 2014).
La percepción de legitimidad es una evaluación que se realiza sobre la percepción de
justicia en la organización de las instituciones y la gestión de las autoridades. Básicamente, esto
conduciría a que las personas tiendan a aceptar voluntariamente que algo es “correcto” o “justo”, lo
que promueve la estabilidad de cualquier estructura institucional (Tyler, 2000).
La percepción de transgresión hace referencia a las creencias y conductas sociales
relacionadas con el incumplimiento negativo. La percepción de transgresión se consolida cuando
las personas creen que la inobservancia normativa es una creencia compartida y naturalizada en la
sociedad, donde el incurrir en el incumplimiento normativo se transforma en un hábito, que convive
con la baja percepción de control y sanción, y con sistemas normativos individuales que guían la
conducta de las personas (Beramendi, 2014; Beramendi y Zubieta, 2013).
La debilidad normativa surge de la percepción de que en las instituciones conviven y se
superponen normas, muchas veces contradictorias entre sí. Las normas formales u oficiales de una
institución son atendidas circunstancialmente o son reconocidas, pero no ejercen un poder real.
Esto posibilita que las personas negocien las normas, ya que no hay un único criterio, y el poder
real no está en la norma en sí sino en quien la aplica. La transgresión normativa se convierte en un
256
mecanismo adoptado, y naturalizado, por el funcionamiento institucional, lo cual hace que las
personas, según la circunstancia, deban incurrir en dichas estrategias para poder interactuar con
las instituciones (Beramendi y Zubieta, 2013, 2014).
Los objetivos de este estudio son validar la Escala de Percepción del Sistema Normativo
(EPSN, Beramendi y Zubieta, 2013) y analizar los resultados de la escala ESPN en población
general para el contexto argentino.
MÉTODO
Participantes
La muestra estuvo compuesta por 508 participantes, población general, el 68.9% mujeres,
con un promedio de edad de 32.73 años (DE= 11.81, Min= 18, Máx= 78). El 58.1% reside en la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el 35% en el Gran Buenos Aires, el 5.9% en una Provincia de
la Argentina y un 4% que no aclaró la ciudad sino hizo referencia al país.
Instrumento
Escala de Percepción del Sistema Normativa (EPSN, ver ANEXO): la escala mide la percepción
sobre el sistema normativo, que se lo comprende, como un organismo complejo que comprende las
normas, las instituciones y a los agentes que las promueven, respaldan y controlan, así como las
creencias y prácticas de los ciudadanos sobre las normas. Esta escala está compuesta por 20
ítems que se organizan en 3 dimensiones que evalúan concretamente la Percepción de Falta de
Legitimidad, la Percepción de Transgresión y la Percepción de Debilidad Normativa. Las
respuestas se presentan en un formato de escala tipo Likert de 7 puntos, donde 1 indica
(totalmente en desacuerdo) y 7 (totalmente de acuerdo), puntuaciones elevadas darían cuenta de
un sistema social permeable a la transgresión normativa. Las características psicométricas se
detallan en el apartado de resultados de este estudio dado que su análisis constituye el objetivo del
mismo.
Procedimiento
Se realizó un cuestionario auto-administrado que contenía el consentimiento informado para
participar de la investigación. Para su aplicación se utilizaron dos modalidades que permitieron
acceder a una muestra más heterogénea: versión papel y versión electrónica. En la primera versión
se recolectaron 375 cuestionarios, mientras que en la segunda versión se obtuvieron 133 casos.
RESULTADOS
Para poner a prueba la bondad de ajuste de la escala EPSN, se realizó un análisis factorial
confirmatorio con el método de Máxima Verasimilitud Robusto (Figura 1). Considerando los índices
que proponen Hooper, Coughlan y Mullen (2008) como se exhibe en la Tabla 1, se puede
establecer que el modelo propuesto arroja un muy buen ajuste.
-FIGURA 1 AQUÍ-
-TABLA 1 AQUÍ-
257
Al analizar los índices de confiabilidad se observan niveles altos en la escala EPSN (α =
.89), al igual que en las dimensiones Percepción de Falta de Legitimidad (α= .84) y Percepción de
Transgresión (α = .84); mientras que la dimensión Percepción de Debilidad Normativa (α = .62)
registró niveles aceptables de confiabilidad (Santisteban Requena, 2009).
Según los hallazgos, los participantes poseen altos puntajes en la Escala de Percepción del
Sistema Normativo (M= 5.32, DE= .90, R= 6), indicando que hay una percepción negativa del
funcionamiento normativo. Los puntajes más altos se ubicaron en la dimensión Percepción de Falta
de Legitimidad (M= 5.56, DE= 1.03), seguida por la de Percepción de Transgresión (M= 5.36, DE=
1.13), y finalmente la Percepción de Debilidad Normativa (M= 5.02, DE= 1.13).
Al comparar a la muestro según el sexo de los participantes, se halló que las mujeres
perciben de manera más negativa al sistema normativo (Tabla 2). Asimismo, se observa que a
mayor edad las participantes poseen puntajes más elevados en la dimensión Percepción de
Debilidad Normativa [r(506)= .09, p< .05] y el puntaje total de la escala EPSN [r(506)= .10, p< .05].
-TABLA 2 AQUÍ-
Otra variable que generó diferencias significativas fue el posicionamiento ideológico de los
participantes. Para analizar esta variable se la recategorizó en 3 valores: izquierda, centro y
derecha, encontrándose, en general, una diferenciación más significativa entre los grupos de
izquierda y derecha, aunque los participantes de centro se diferencian mayormente de los
participantes de derecha (Tabla 3).
-TABLA 3 AQUÍ-
DISCUSIÓN
258
poseen una mirada más incrédula sobre el funcionamiento de la sociedad (Zubieta, Fernández, y
Sosa, 2012; Zubieta, Muratori y Mele, 2012).
Otra variable que generó diferencias es el autoposicionamiento ideológico de los participantes. A
pesar que los resultados no son los esperables, ya que históricamente la tendencia en la literatura
indica que las personas de izquierda son más críticas con el sistema, estos datos coinciden con los
hallazgos obtenidos en estudios locales en los últimos años en los que quienes se auto-posicionan
ideológicamente más hacia la derecha son más críticos con el Gobierno que quienes se posicionan
más cerca de la izquierda, supuestamente porque el Gobierno responde un modelo que se ajusta a
una políticas de izquierda progresista (Latinobarómetro, 2011b).
A partir de estos resultados se observa la necesidad de continuar indagando la percepción
ciudadana sobre el funcionamiento normativo y analizar su relación con diversas variables psico-
sociales como la desmoralización social, valores y los axiomas sociales, entre otras.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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Aires: Planeta.
Beramendi, M. & Zubieta, E. (2013). Norma perversa: transgresión como modelado de legitimidad.
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Beramendi, M. & Zubieta, E. (2014). Construcción y Validación de la Escala de Percepción del
Sistema Normativo. Revista Mexicana de Psicología, 31(2), 124-137.
Beramendi, M. (2014). Percepción del sistema normativo, transgresión y sus correlatos
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Anexo
Escala Percepción del Sistema Normativo
259
1. En este país, los organismos públicos son poco eficientes
2. Las autoridades no se preocupan en representar los intereses de la población
3. En este país las autoridades abusan del poder
4. Si no hay control de la autoridad la gente tiende a hacer lo que le resulta conveniente
5. En este país es raro que se lleven a cabo juicios justos
6. La gente confía en las autoridades porque son justas y eficaces
7. En las instituciones argentinas, hay una norma oficial que coexiste con otra norma informal que
es la que la gente reconoce y respeta
8. Las autoridades de las instituciones están por encima de las normas de las mismas
9. En las instituciones siempre hay una vía formal que se debería seguir y una vía irregular que
agiliza los procesos
10. En la Argentina, muchas normas son arbitrarias y sin sentido
11. Los argentinos siempre encuentran la manera de transgredir las normas
12. La gente tiende a transgredir porque sabe que no va a ser sancionada
13. En la Argentina, la mayoría de los ciudadanos tienen sus necesidades básicas satisfechas
14. En este país las Instituciones son confiables
15. En este país, se puede comprar la justicia
16. La gente piensa que siempre puede transgredir la norma
17. El Estado distribuye equitativamente la riqueza y los bienes entre sus ciudadanos
18. En las Instituciones argentinas hay mucha corrupción
19. La gente piensa que lo normal es incumplir las normas porque todos lo hacen
20. En la Argentina parece que cada uno tiene su propio sistema de normas
Tablas y Figura
Tabla 1
Estadísticos de bondad de ajuste para la EPSN
χ2/gl CFI IFI NFI NNFI SRMR RMSEA
*
EPSN 2.86 .97 .97 .96 .97 .06 .06
Nota: EPSN= Escala de Percepción del Sistema Normativo
*
p< .001
Figura 1
Análisis Factorial Confirmatorio de la escala EPSN
260
Ítem 1
Ítem 2
Ítem 3
.47
.66 Ítem 5
.72
.48 Ítem 6
DPFL .41
.18 Ítem 13
.45
.36 Ítem 14
.35
.57
Ítem 15
.75 Ítem 17
Ítem 18
Ítem 4
EPSN
Ítem 11
.58 .37
.64 Ítem 12
DPT .57
.52 Ítem 16
. 53
.54 Ítem 19
.77
Ítem 20
Ítem 7
.35 Ítem 8
DPDN .57
.53 Ítem 9
.52
Ítem 10
Tabla 2
Diferencia de medias de la EPSN y sus dimensiones según el sexo de los participantes
SEXO t gl p M DE
Hombre -4.041 506 .001 5.29 1.14
DPFL
Mujer -4.041 506 .001 5.69 .95
Hombre -2.282 506 .05 5.20 1.13
DPT
Mujer -2.282 506 .05 5.44 1.12
Hombre -3.416 506 .001 4.77 1.21
DPDN
Mujer -3.416 506 .001 5.14 1.06
Hombre -3.944 506 .001 5.09 .97
EPSN
Mujer -3.944 506 .001 5.42 .84
Nota: PFL= Percepción de Falta de Legitimidad, PT=Percepción de Transgresión, PDN=Percepción
de Debilidad de la Norma, EPSN= Escala de Percepción del Sistema Normativo.
Tabla 3
Prueba ANOVA de posicionamiento político en EPSN
Posicionamiento Posicionamiento Posicionamiento
F g.l p
de Izquierda de Centro de Derecha
DFL 5.27a 5.64b 6.01c 21.069 2,505 .001
a a b
DPT 5.15 5.38 5.84 14.546 2,505 .001
ab cb
DPDN 4.83 5.01 5.28 7.183 2,505 .01
EPSN 5.08a 5.37b 5.73c 13.387 2,505 .001
Nota: PFL= Percepción de Falta de Legitimidad, PT=Percepción de Transgresión, PDN=Percepción
de Debilidad de la Norma, EPSN= Escala de Percepción del Sistema Normativo.
a
En cada fila, los promedios con distinto superíndice son significativamente diferentes según la
prueba post-hoc Scheffe con p< .01.
261
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Participamos en estas Jornadas como integrantes del Tribunal de Disciplina del
Colegio de Psicólogos del Distrito I, Bahía Blanca, circunstancia que nos ubica en una
posición distinta de la pertenencia a un espacio de formación profesional con un marco
teórico referencial determinado.La Institución de referencia es el Colegio Profesional en
una de sus tareas más complejas, así lo sentimos los que integramos este Tribunal. La
simple pronunciación de términos como: tribunal, disciplina, códigos, causas, sentencias,
nos descoloca respecto de nuestra práctica clínica habitual en la que no juzgamos, ni
sancionamos. Es decir nos remite a los imposibles freudianos: analizar, educar y quizás
disciplinar.
Aun así y teniendo presente esta calidad paradojal de lo normativo en el ámbito
psicológico, los Tribunales de Disciplina trabajan y disponen como instrumentos legales
de: La ley de Ejercicio Profesional N° 10306, el Código de Ética de la Provincia de
Buenos Aires, sus reglamentos correspondientes y el Código de Ética Nacional de la
Federación de Psicólogos de la República Argentina.
En esta oportunidad acotaremos a los contenidos de uno de los artículos, el Art.
43.- Es responsabilidad inherente al ejercicio profesional del Psicólogo:
a) La actualización periódica y permanente de sus conocimientos como garantía de
responsabilidad e idoneidad que contribuya al prestigio de la profesión y a la optimización
del servicio que brinda.
b) La realización de una psicoterapia personal que garantice la preservación de su salud y
la de aquellos con quienes trabaja.
c) La supervisión del trabajo realizado.
Y desde estas tres responsabilidades desplegaremos, haciendo pie en la experiencia
tribunalicia, dos aspectos que nos interpelan:
Las dificultades en la formación del Profesional en dilemas éticos
La conjunción u obstáculo entre los recorridos históricos: personales,
universitarios y profesionales en nuestra época.
262
VI Congreso Marplatense de Psicología
Con respecto a los códigos de ética profesional debemos destacar algunos puntos
importantes:1) Establecen una serie de pautas que regulan nuestra práctica, funcionando
como una referencia anticipada a situaciones posibles y por venir y2) Resumen el
conocimiento alcanzado en el campo profesional hasta cierto momento, lo cual funciona
como fundamento de las normativas. El campo normativo, afectado de la lógica de lo
particular, tiende a configurarse y a funcionar en tanto universo (lo mismo podemos decir
de la dimensión moral en sentido amplio). Los códigos (como las leyes y/o las normativas
institucionales) deben expedirse con respecto a todos los casos posibles, en todas las
circunstancias posibles, para todos los sujetos posibles. El campo normativo debe valer
para todos. La norma ordena, pero la condición es que ordene más allá del cada uno;
hace homogéneos a los “cada uno” en un “todos”. Es así entonces que, frente al caso, el
campo normativo muestra su inconsistencia. Si bien la norma tiende a alcanzar a todos
los casos posibles, la confrontación con un caso determinado nos obliga a analizar su
pertinencia(Salamone,1997) .
263
VI Congreso Marplatense de Psicología
una mirada crítica sobre aquellos otros aspectos que degradan lo humano condicionando
su práctica y, por lo mismo, poniéndola en riesgo ( Salamone 1997).
El código de ética fue tratado desde el comienzo de las reuniones iniciales del
Consejo superior, se recorrieron los modelos que ya regían en otros países y otras
provincias y prevaleció la decisión de titularlo así: la ética como palabra, más amplia que
deontología, parece una diferencia sutil pero señala también una idea básica que lo
sustenta. Lo deontológico, igualmente presente, es decir regular mediante normas,
diferenciar lo que se debe hacer y lo que no, lo correcto o incorrecto. La ética se orienta a
la moral, la morada, el lugar que habitamos y cómo lo habitamos, instala una pregunta
acerca de nuestro morar en el ámbito psicológico. Ámbito especial y particularmente
complejo si se extiende al compromiso con otros lugares más allá de la privacidad del
consultorio privado.
Es decir había que regular y de alguna forma sancionar, el código otorga los instrumentos
para hacerlo, advirtiendo que si bien la responsabilidad en la práctica supone una
racionalidad, una conciencia de lo que se dice o hace y sus consecuencias, enuncia en
alguno de sus artículos los recursos de formación disponibles; si lo leen no es medieval,
inquisitorio sino procurador de posibilidades siendo sus objetivos:
• Asegurar el correcto y regular ejercicio de la profesión, en resguardo de la salud psíquica
de la población.
• Estimular la armonía y solidaridad profesional.
• Promover la actitud responsable, lúcida y comprometida frente al ser humano concreto y
sus condiciones, que aparece como el objeto fundamental de nuestra práctica
El Psicólogo cada vez que es tal, en el cada vez de su práctica pone en juego una
ética , la existencia de un código es no sólo un referente cuyo conocimiento trata de
evitar la puesta en marcha de una causa, el Tribunal preferiría no trabajar, sino un
interrogante sobre ese morar o habitar. El dilema ético se juega en cada intervención, por
supuesto que algunas situaciones son más complejas que otras y con consecuencias más
severa. Es en este punto en el que la tríada enunciada en el art 43 puede resultar eficaz,
a fin de que no prevalezca el juicio o prejuicio personal, la sola experiencia, ante una
toma de decisión.
La cuestión ética debe centrarse sobre el dilema que enfrenta cada profesional en
lo que se refiere a su postura ante a) el código profesional b) las normativas
institucionales y c) las propias convicciones de principio. La emisión de juicio sobre
otro/Otro tiene que considerar la posibilidad del equivoco de quien los emite.
De allí que el camino de la construcción de una ética inherente a la práctica no
pueda hacerse desde la imposición externa sino desde la reflexión interna, la construcción
del propio “estar-en-el-mundo” que ayude a reconocer al Otro como interlocutor válido en
esa construcción.
264
VI Congreso Marplatense de Psicología
265
VI Congreso Marplatense de Psicología
desprende una política no rebajada a discutir las reglas administrativas o la gestión de las
normas, sino al sentido primero de la política que es un saber hacer allí donde hay una
falla estructural. La ética la entendemos como ineludible a la experiencia y alude al
posicionamiento en relación a las circunstancias vitales e implica la incomodidad de falta
de respaldo normativo. Más bien se trata de “la invención de un nuevo criterio sin
antecedentes” (Calo, 2008). Tanto del colega “causado” como del Tribunal.
Con lo cual hemos venido instalando entre nosotros y conjuntamente con
miembros de otros Tribunales, una suma de interrogaciones que bien vale desplegar aquí:
1) ¿Se plantea la ética como una posición subjetiva o como observancia a normas?
Podría pensarse que este orden que establecemos da indicios de cómo se llega a
una posición ética profesional. Es interesante constatar cómo se juega dicha posición en
la encrucijada de un acto en la práctica y en nuestro trabajo como miembros del Tribunal.
Los dictámenes no siempre han resultado condenatorios, no obstante hemos observado
la recurrencia de una misma respuesta del colega al momento de comunicarle dicho
dictamen, sancionatorio o no.En la instancia de comunicación, que elegimos sea personal,
el pensar, discernir, reflexionar sobre la acción profesional en tanto movimiento o
desplazamiento más allá de lo instituido, parecieran no presentarse en el colega, como
efecto del largo proceso disciplinario.Dos pares extrañados.
La reflexión sobre estas tópicas y el recorrido en los seis años de trabajo, tal vez
puedan orientarnos a delimitar un nudo que damos en llamar “el mutuo extrañamiento” del
colega ante el proceso y su resultado, y el nuestro ante su ajenidad en el efecto.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
266
VI Congreso Marplatense de Psicología
267
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
En el año 2010 entró en vigencia en todo el territorio de los Estados Unidos una
nueva versión del código de la American Psychological Association, que incluyó algunas
enmiendas tendientes a evitar cualquier interpretación de sus normas y principios que
permitiera justificar o defender la violación de los Derechos Humanos. La modificación del
documento –aún en vigencia– fue el resultado de largos debates y discusiones al interior de
la Asociación en razón de la participación de psicólogos norteamericanos en el centro de
detención de Guantánamo1.
La situación permite reflexionar sobre varias cuestiones, tales como la promoción y
resguardo de los Derechos Humanos en el ejercicio de la profesión, la relación entre la ética
profesional y la ley social vigente, la responsabilidad profesional, los fundamentos de las
propias normas deontológicas, la posición a adoptar frente a ellas, entre otras.
Nos detendremos en el análisis de dos problemas específicos: a) el referido a los
eventuales conflictos que pueden surgir entre las normativas deontológicas y las
disposiciones legales y b) entre las normativas deontológicas y las disposiciones
institucionales y organizacionales. Nos interesan especialmente, puesto que, además de
tomar relevancia en razón de la situación mencionada, constituyen situaciones dilemáticas
que se presentan en nuestra práctica con cierta asiduidad y que suelen generar
interrogantes.
Tomemos en cuenta que el ejercicio profesional encuentra diversas fuentes de
pautas normativas: 1. Las normativas deontológicas; 2. Las leyes sociales vigentes; 3. Las
normativas institucionales/organizacionales; 4. Los Derechos Humanos.
Entre los principios comunes que rigen la deontología a nivel mundial destaca la
protección de los derechos humanos, en tanto inspiración última de las normas
deontológicas y jurídicas que regulan el ejercicio de la profesión. Todos los códigos vigentes
en la actualidad instan a adherir a los principios establecidos en la Declaración Universal de
los Derechos Humanos (Salomone, 2007), por lo que la práctica legítima se enmarca en la
íntima relación entre las nociones de Estado de Derecho, sujeto de derecho y democracia.
1
La cárcel de Guantánamo, situada en la base naval estadounidense en la Bahía de Guantánamo, fue creada
inmediatamente después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, en el marco de la guerra contra el
terrorismo declarada en todo el mundo por los Estados Unidos.
268
VI Congreso Marplatense de Psicología
Sin embargo, más allá de este piso común, entre estas diversas fuentes normativas
pueden surgir conflictos y contradicciones de difícil resolución, que instan a reflexionar sobre
las relaciones que se establecen entre ellas2.
Justamente, el caso de los psicólogos en Guantánamo puso sobre el tapete esta
cuestión. Detengámonos a repasar esos sucesos3. En 2004 dos hechos que nos conciernen
tomaron público conocimiento: el uso sistemático de técnicas de interrogatorio basadas en la
coerción psicológica por parte de las fuerzas americanas en los centros de detención en
Afganistán, Irak y Guantánamo en el marco de la llamada “war on terror” –guerra contra el
terrorismo–, y la participación de profesionales de la salud mental en su diseño,
implementación, e incluso, su ejecución.
Por una parte, este asunto reedita, en particular, la reflexión sobre la participación de
psicólogos en situaciones de tortura, al tiempo que pone en cuestión algunos capítulos ético-
deontológicos de aplicación más general, tal como la relación que las pautas deontológicas
de la profesión entablan con los requerimientos institucionales y jurídicos.
La revelación, por parte del periódico New York Times4, de unos informes
confidenciales dirigidos al gobierno norteamericano hizo públicas las denuncias del Comité
Internacional de la Cruz Roja sobre graves violaciones a la ética médica en la cárcel de
Guantánamo y sobre la existencia de equipos profesionales constituidos por psicólogos,
psiquiatras y médicos que diseñaban planes de interrogatorios individualizados,
proporcionando información sobre las “debilidades y salud mental” de los detenidos para
ayudar a quebrarlos psicológicamente.
Se conoció así la existencia del Behavioral Science Consultation Team (BSCT,
familiarmente llamado Biscuit), Equipo de Asesoramiento en Ciencias del Comportamiento,
constituido por psicólogos y psiquiatras, encargados de elaborar estrategias de
interrogatorio en base a la evaluación de los detenidos y el análisis de sus historiales
médicos para detectar los puntos de mayor vulnerabilidad de cada persona y entonces
informar a los interrogadores.
De este modo, fue claro el papel preponderante de la tortura psicológica como eje
fundamental de los interrogatorios a los detenidos y el rol central y decisivo que jugaron los
psicólogos en los métodos de tortura.
Frente a esta situación que tomó estado público, en 2005 la presidencia de la
American Psychological Association creó un grupo de trabajo denominado Presidential Task
Force on Psychological Ethics and National Security (PENS), Grupo de trabajo sobre ética
profesional y seguridad nacional, para analizar si el código de ética de la Asociación
constituía una orientación ética adecuada referente a la participación de psicólogos en
“actividades de seguridad nacional”.
Finalmente, el informe del PENS declaraba compatible con los principios éticos de
los psicólogos el desempeño de roles relativos a la seguridad nacional, tales como la
2
Algunos avances respecto de estos temas pueden consultarse en los informes correspondientes a los
proyectos UBACyT consignados en la bibliografía.
3
Por cuestiones de espacio, presentamos aquí sólo los aspectos centrales de la situación. Para un análisis con
mayor detalle e información ver: Salomone, G. Z.: (2011) Los principios éticos y su articulación con las normas
jurídicas e institucionales: el debate sobre Guantánamo como analizador, en Salomone (comp.): Discursos
institucionales, Lecturas clínicas: Dilemas éticos de la psicología en el ámbito jurídico y otros contextos
institucionales. Dynamo, Buenos Aires.
4
The New York Times: “Red Cross Finds Detainee Abuse in Guantánamo”. Published: November 30, 2004.
http://www.nytimes.com/2004/11/30/politics/30gitmo.html
269
VI Congreso Marplatense de Psicología
5
Proyecto UBACyT “Dilemas éticos en la práctica psicológica: el diálogo con otros discursos disciplinares en
contextos institucionales diversos. Estudio exploratorio descriptivo en base a una investigación cuali-cuantitativa”.
(2012-2015. Dirección: Prof. Salomone).
270
VI Congreso Marplatense de Psicología
6
Código de la American Psychological Association APA, 2002:
1.02 Conflictos entre la Ética y las leyes, las regulaciones, u otra autoridad legal
Si existe un conflicto entre las responsabilidades éticas de los psicólogos y las leyes, las regulaciones, u otra
autoridad legal, los psicólogos manifiestan su compromiso con el Código de Ética y realizan los pasos necesarios
para resolverlo. Si el conflicto es irresoluble por estos medios, los psicólogos pueden adherir a los requerimientos
que exigen las leyes, las regulaciones u otra autoridad legal.
7
Código de la American Psychological Association APA, 2002:
1.03 Conflictos entre la Ética y las exigencias institucionales
Si existe un conflicto entre este Código de Ética y las exigencias de una organización a la que pertenecen o para
la cual trabajan los psicólogos, éstos determinan la naturaleza del conflicto, manifiestan su compromiso con el
presente Código y, en la medida de lo posible, resuelven el conflicto de manera tal que guarde consistencia con
este Código de Ética.
271
VI Congreso Marplatense de Psicología
últimas son resguardadas frente a las normas institucionales. Es decir, se establece que en
caso de conflicto el psicólogo puede adherir a los requerimientos de la autoridad en cuestión
(normativa 1.02), lo cual respaldaba la participación de los psicólogos en Guantánamo. En
esta formulación, entonces, la normativa podría usarse para justificar conductas no éticas
bajo el argumento de “obediencia a las órdenes”.
Luego de varios años de debates al interior de la APA y de fuertes pronunciamientos
de profesionales y asociaciones externos a ella, como Physicians for Human Rights y la
Fundación Ignacio Martín-Baró, el 1° de junio de 2010 entró en vigencia la nueva versión del
código de la APA que incluyó ciertas enmiendas con el objetivo de evitar cualquier
interpretación de las normativas tendiente a justificar o defender la violación de los derechos
humanos. Las modificaciones fueron realizadas en la Introducción y en las normativas 1.02 y
1.03, referidas a la responsabilidad de los psicólogos en situaciones de conflicto con la ley y
con los requerimientos institucionales, respectivamente.
Los cambios introducidos son los siguientes:
INTRO DUCCIÓN
(…) Si este Código de Ética establece una norma de conducta superior a la exigida
por ley, los psicólogos deben cumplir con la regla ética más elevada. Si las
responsabilidades éticas de los psicólogos entran en conflicto con las leyes, con las
regulaciones u otra autoridad legal, los psicólogos manifiestan su compromiso con el
presente Código de Ética y toman las medidas para resolver el conflicto de manera
responsable, en correspondencia con los principios básicos de los derechos humanos (el
destacado es nuestro).
Respecto de la Introducción, se incorporaron dos modificaciones: en la última
oración, la mención expresa a los derechos humanos como referencia superior a las leyes y,
más arriba, en alusión directa al conflicto entre los principios éticos de los psicólogos y la
ley, la enmienda determina la preponderancia del Código de Ética, a diferencia de la versión
2002.
La normativa 1.02 que, en la versión anterior del código establecía la posibilidad de
desplazar las obligaciones éticas en razón de exigencias legales, fue fuertemente
cuestionada luego de los acontecimientos relativos a la cárcel de Guantánamo y modificada
como sigue:
1.02 Conflictos entre la Ética y las leyes, las regulaciones, u otra autoridad legal
Si las responsabilidades éticas de los psicólogos entran en conflicto con las leyes, las
regulaciones, u otra autoridad legal, los psicólogos aclaran la naturaleza del conflicto,
manifiestan su compromiso con el Código de Ética y toman las medidas razonables para
resolver el conflicto de manera consistente con los Principios Generales y las Normas del
código de Ética. Bajo ninguna circunstancia esta norma es utilizada para justificar o defender
violaciones a los Derechos Humanos (el destacado es nuestro).
Al igual que en la Introducción, en la normativa 1.02 se hace explícito el compromiso
con los Derechos Humanos y se establece la indicación de resolver el conflicto abogando
por el Código de Ética. En la misma perspectiva se plantean las modificaciones a la
normativa 1.03:
272
VI Congreso Marplatense de Psicología
COMENTARIOS FINALES
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
273
VI Congreso Marplatense de Psicología
Lira, E.: (2008) Psicología, Ética y Seguridad Nacional: El Rol de los Psicólogos. Psykhe
[online] Vol. 17, Nº 2, 5-16, 2008.
Salomone, G. Z. (comp.): (2011) Discursos institucionales, Lecturas clínicas: Dilemas éticos
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Salomone, G. Z.: (2007) Responsabilidad profesional: las perspectivas deontológica, jurídica
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Asociación Americana de Psicólogos. New York: Autor. Extraído el 1 Febrero, 2007, de
http://www.martinbarofund.org/contact/petition-APAespanol.htm
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Nuestro objetivo fue entonces la detección de aquellos sujetos APTOS conforme el perfil
solicitado.
En este sentido y tras un concienzudo rastreo de las técnicas psicológicas que cuentan
con aval académico y profesional en la materia, y el antecedente de haber ya realizado en
el año 2004 el Colegio de Psicólogos de la Provincia de Buenos Aires la Selección
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VI Congreso Marplatense de Psicología
ADMINISTRACIÓN REALIZADA
- Colectiva a 1043 aspirantes, 623 (59,63%) mujeres y 420 (40,37%) varones
entre 18 y 35 años
- En grupos de no más de 40 aspirantes por aula
ROLES PROFESIONALES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
278
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
-BENDER, Lauretta. (2005), Test Guestáltico Visomotor (B.G) Usos y aplicaciones
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-RAVEN, J. C (1993) Test de Matrices Progresivas, Escala General. Buenos Aires. Ed.
Paidós.
279
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
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VI Congreso Marplatense de Psicología
el respeto hacia los pacientes, de sus diferentes ideas y valores en una sociedad
pluralista.
Muchos de los aportes de la Bioética en este sentido, se han visto plasmados
jurídicamente desde hace apenas unas décadas a través de diferentes normativas que
resaltan la importancia de la autonomía en diferentes campos de la salud y que tienen
como objetivo la consolidación de derechos que comienzan a reconocerse
socialmente. La mayoría de estas disposiciones se basan en la Ley 17132 (1967) del
Ejercicio de la profesión Médica que en su artículo 19 inc. 3 impone a los médicos:
“Respetar la voluntad del paciente en cuanto sea negativa a tratarse o internarse,
salvo los casos de inconsciencia, alienación mental, lesionados graves por causa de
accidentes, tentativas de suicidio o de delitos.”
Podemos destacar, a partir de esta ley, algunas normativas que refuerzan y
amplían esta disposición : la Ley 23.798 (1990), de lucha contra el SIDA, y su Decreto
reglamentario 1244/91;la Ley de Transplantes (1993) ;la ley 11.044 de la Provincia de
Buenos Aires, sobre protección a personas que intervienen en investigaciones
científica s; la ley 26 130 (2006) de contracepción quirúrgica; la ley 26 529, de
derechos de los pacientes; la ley 26742 (2012) de Muerte digna; la ley 26 743 de
identidad de género y la ley nacional 26.862 de Fertilización Asistida (2013) entre
otras
Creemos que la aparición de nuevas leyes, se relaciona con cambios sociales
que promueven una mayor equidad y un mayor respeto por el paciente, pero que a la
vez abren cuestiones éticas nuevas que demandan un profundo diálogo a fin de que
las decisiones se tomen con toda la información requerida según los casos. Se
reconocen nuevos derechos, como a decidir si seguir un tratamiento o no, a morir
dignamente, a procrear, a cambiar la identidad. La complejidad de los mismos encierra
la necesidad de promover una autonomía basada en la responsabilidad. A la vez,
abren la discusión sobre concepciones (maternidad, identidad, salud, muerte) que
fueron construidas fundamentalmente sobre la dimensión biológica y que ahora
incluyen nuevos aspectos sociales y psicológicos. A partir de esto, la concreción y
puesta en práctica de nuevos derechos, requiere cambios de perspectiva no sólo en
los pacientes sino en los profesionales de la salud, quienes deben orientar y
acompañar a otros en su formación, para que las decisiones sean tomadas
autónomamente
Dadas así las cosas, sería posible pensar que el nuevo corpus de leyes
bastaría para cambiar y o modificar la conducta de los profesionales en relación a
ellas.
Sin embargo en este punto se hace necesario distinguir entre la legalidad, que
resulta de actuar conforme a la ley positiva y la legitimidad que surge de actuar
conforme a la fundamentación que otorgaría la ética. Esto implica reconocer que no
todas las leyes positivas son éticas y que muchas veces lo legitimado por la ética no
consigue ser parte de ninguna ley positiva.
Al respecto se hace necesario elucidar acerca de las siguientes afirmaciones:
Las leyes jurídicas son necesarias pero insuficientes para
garantizar que una sociedad sea justa ya que no siempre consideran todas las
aristas de una problemática y son limitadas para dar cuenta de la complejidad
de los casos particulares
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CONCLUSIÓN
Las nuevas leyes sancionadas en la Argentina, sobre todo en los últimos años,
dimensionan e incorporan, desde el marco teórico asumido, el reconocimiento de la
otredad y de la diferencia sin renunciar al sostenimiento universal de los principios
bioéticos de beneficencia , autonomía y justicia distributiva, sumando también los de
solidaridad, precaución y liberación que se instancian en el paradigma de los derechos
humanos.(Declaración de Bioética y Derechos Humanos, 2005)
2
Dussel preferirá hablar de analéctica en atención al momento positivo de su dialéctica,
momento, éste, que no es otra cosa que la positiva afirmación del más allá del ser del sistema
(la afirmación de la dignidad de la víctima más allá del desconocimiento que sufre por parte del
sistema). El método de Dussel se llamará analéctico Santander Jesús Rodolfo: Enrique
Dussel y la ética de la liberación en Revista Estudio de filosofía práctica e historia de las
ideas, año 2 v. 2 2001
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
Es importante aclarar que esta ley también autoriza a determinadas personas a reali-
zar esa denuncia transversalizando las circunstancias personales y/o las situaciones
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VI Congreso Marplatense de Psicología
en las que se pueda encontrar esa mujer víctima a través de su artículo séptimo
cuando dispone que puede ser realizada por:
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VI Congreso Marplatense de Psicología
ber de denunciar por parte de estos terceros, existe. Ante lo hasta aquí expuesto, cabe
preguntarse ¿Qué sucede ante el incumplimiento de esta obligación legal impuesta a
los terceros? ¿Podrían los profesionales negarse a denunciar, amparándose en el se-
creto profesional establecido en el art. 156 del Código Penal? ¿Cómo juega la omisión
de sanción alguna en las leyes, ante el incumplimiento del deber de denunciar que
compete a las personas enumeradas?
a) el secreto profesional (Dispone el art. 156 del Código Penal que “será repri-
mido con una multa..... e inhabilitación especial, en su caso, por seis meses a tres
años, el que teniendo noticia, por razón de su estado, oficio, empleo, profesión o arte,
de un secreto cuya divulgación pueda causar un daño, lo revelare sin justa causa”);
b) lo dispuesto por art. 34 inc. 4° del Código Penal, que determina que no es
punible “el que obrare en cumplimiento de un deber o en el legítimo ejercicio de su
derecho, autoridad o cargo...”;
c) el principio sentado en el art. 1071 del Código Civil, que establece que “el
ejercicio regular de un derecho propio o el cumplimiento de una obligación legal no
puede constituir como ilícito ningún acto”.
Sin embargo, estos fundamentos no parecen posibles invocarse como una justificación
ante el incumplimiento del deber legal de denunciar. Cabe señalar que el secreto pro-
fesional representa para el paciente la garantía de poder confiar detalles relativos a su
vida íntima con relación a su salud, con la seguridad de saber que lo que exprese en el
marco de la relación médico paciente, no podrá ser divulgado, por este mandato tácito
que existe entre ambos. Asimismo, debe ponderarse la raigambre constitucional del
derecho a la privacidad, lo que se relaciona con el derecho humano básico al libre
desarrollo de la personalidad y la intangibilidad de la dignidad humana, que debe per-
manecer protegida respecto de intromisiones estatales, toda vez que el derecho del
paciente a tener una esfera privada en lo relativo a su condición psíquica y física pue-
de considerarse como un derecho personal y por lo tanto digno de protección como
bien en sí mismo. No obstante ello, como sucede en el ámbito de todo derecho fun-
damentado de la manera que fuera, pueden existir otros intereses que se superpongan
y disputen por la supremacía en la prelación de la aplicación de la regla y, frente a los
cuales, deba ceder. Lo descripto precedentemente puede graficarse en el caso de
encontrarse comprometida la integridad física o la salud en concreto de otra u otras
personas cuyo resguardo dependiera de la divulgación de informes médicos confiden-
ciales. La ley le impone a los profesionales de la salud la obligación de denunciar este
tipo de situaciones en tanto concibe a la denuncia como camino más idóneo que per-
mite visibilizar el problema que suele caracterizarse por presentarse en la esfera de
intimidad en la que los hechos se desarrollan y por la repetitividad hacia uno o varios
integrantes del grupo familiar y el modo en que el operan, en muchas ocasiones con
desenlaces fatales. No se trata de cualquier tipo de delito, sino uno de características
muy peculiares por las específicas circunstancias de la víctima y de su agresor y sobre
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VI Congreso Marplatense de Psicología
todo por la repetitividad de los hechos que la configuran en el tiempo. La revelación del
“secreto” cuando se trata de violencia familiar y de género siempre obedece a una
justa causa. Es justa causa proteger la integridad física y psíquica de un niño o un in-
capaz que se ve sometido a una situación de violencia doméstica, como así también
visibilizar la problemática cotidiana de de género, activando así con la denuncia los
mecanismos judiciales hacia la protección del entorno familiar. El tipo penal contem-
plado en el at. 156 del Código penal no queda configurada ante la revelación del se-
creto por cuanto las víctimas no pueden verse perjudicadas, al contrario, se deja de
lado con miras a garantizarle una adecuada protección. En cuanto a la inimputabilidad
determinada por el art. 34 inc. 4° del Código Penal, nunca puede funcionar como cau-
sal de exención del deber de informar, por las mismas razones expuestas preceden-
temente. Finalmente, y respecto del principio sentado en el art. 1071 del Código Civil,
no es posible olvidar la excepción que ese mismo artículo establece en su segunda
parte: “La ley no ampara el ejercicio abusivo de los derechos. Se considerará tal al que
contraríe los fines que aquélla tuvo en mira al reconocerlos o al que exceda los límites
impuestos por la buena fe, la moral y las buenas costumbres”. Pensamos que res-
guardarse de las consecuencias del incumplimiento del deber de denunciar invocando
los principios sentados constituye un ejercicio abusivo del derecho que se opone cla-
ramente a los fines que el legislador tuvo en cuenta al incorporarlos al ordenamiento
jurídico. Los nuevos paradigmas han incorporado la perspectiva de derechos humanos
en las leyes, como así también el hecho de que la violación a estos principios no solo
atañe al ámbito de lo privado sino que lo trasciende. Es por ello que esta circunstancia
se ve receptada en la nueva ley de salud mental 26.657 en su art. 29, el cual reza lo
siguiente: “A los efectos de garantizar los derechos humanos de las personas en su
relación con los servicios de salud mental, los integrantes, profesionales y no profesio-
nales del equipo de salud son responsables de informar al órgano de revisión creado
por la presente ley y al juez competente, sobre cualquier sospecha de irregularidad
que implicara un trato indigno o inhumano a personas bajo tratamiento o limitación
indebida a su autonomía. La sola comunicación a un superior jerárquico dentro de la
institución no relevará al equipo de salud de tal responsabilidad si la situación irregular
persistiera. Dicho procedimiento se podrá realizar bajo reserva de identidad y contará
con las garantías debidas del resguardo a su fuente laboral y no será considerado co-
mo violación al secreto profesional”. La falta de sanción en la leyes refleja la resisten-
cia que todavía existe en la sociedad, más específicamente entre los profesionales de
la salud y los funcionarios públicos, de hacer conocer los hechos de violencia a la jus-
ticia. A pesar de la omisión legal, es indudable que se aplican al caso las normas del
Derecho Penal, las normas de la Administración Pública, y las normas generales sobre
Responsabilidad Civil. El incumplimiento del deber de denunciar la violencia o abuso
puede configurar delito de abandono de personas, tipificado en los arts. 106 y ss. del
Código Penal, a saber:
-“el que pusiere en peligro la vida o la salud de otro, sea colocándolo en situación de
desamparo, sea abandonando a su suerte a una persona incapaz de valerse y a la
que deba mantener o cuidar o a la que el mismo autor haya incapacitado, será repri-
mido con prisión de seis meses a tres años...” (art. 106);
-“será reprimido con una multa ..... el que encontrando perdido o desamparado a un
menor de diez años o a una persona herida o inválida o amenazada de un peligro
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VI Congreso Marplatense de Psicología
cualquiera, omitiere prestarle el auxilio necesario, cuando pudiere hacerlo sin riesgo
personal o no diere aviso inmediatamente a la autoridad” (art. 108).
En particular, y en cuanto al incumplimiento de los deberes de funcionario público, el
art. 248 establece que “será reprimido con prisión de un mes a dos años e inhabilita-
ción especial por el doble tiempo, el funcionario público que dictare resoluciones u
órdenes contrarias a las constituciones o leyes nacionales o provinciales o ejecutare
las órdenes o resoluciones de esta clase existentes o no ejecutare las leyes cuyo
cumplimiento le incumbiere”. Asimismo, en este supuesto, y de encontrarse el funcio-
nario en ejercicio de sus funciones, serán de aplicación las sanciones administrativas
correspondientes: apercibimiento, multa, suspensión, cesantías, etc.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
- Famá, María Victoria; “Derechos Humanos y Violencia Familiar: el rol de los terceros
¿ajenos? al proceso”. Asociación Argentina de prevención del maltrato infantojuvenil,
http://www.asapmi.org.ar/publicaciones/articulos-juridicos
- González Magaña, Ignacio; “Los límites del secreto profesional frente a la obligación
de denunciar que la Ley N° 24.417 impone a los profesionales de la salud”,
http://www.ijeditores.com.ar/articulos.php
291
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
Con esto queremos advertir que no solo el agresor es el legitimado pasivo en las
acciones de responsabilidad por daños derivados de la violencia, sino que existen
múltiples obligados a responder en tanto su conducta haya agravado la lesión o
permitiendo la ocurrencia del daño.
En la relación entre la víctima y los prestadores del servicio de salud, hay un vínculo
obligacional, cualquiera que sea la fuente de éste, que esta integrado en una relación
en la cual hay un acreedor de prestaciones consistentes en conductas apropiadas a
las circunstancias.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Se debe recalcar que para que una conducta omisiva genere responsabilidad, la
misma debe estar ligada al resultado final dañoso, es decir que pueda ser considerada
lo suficientemente eficiente para la consumación del daño.
La Corte de San José sentó el criterio de que quien contrae la obligación de prestar un
servicio lo debe realizar en condiciones adecuadas para llenar el fin para el que ha
sido establecido, siendo responsable de los perjuicios que causare su incumplimiento
o su irregular ejecución. Esta idea se fundamente en el artículo 1112 del Código civil
que establece un régimen de responsabilidad por los hechos y las omisiones de los
funcionarios públicos en el ejercicio de sus funciones, por no cumplir sino de una
manera irregular las obligaciones legales que les están impuestas (…) ello pone en
juego la responsabilidad extracontractual del Estado en el ámbito público.
Aquí no se trata de una responsabilidad indirecta sino que debe entenderse como una
respuesta en modo principal y directa por las consecuencias dañosas de sus actos en
ejercicio de una función en el Estado.
Si bien es dable esperar que el Estado no pueda garantizar que nadie sufra daño y
esa responsabilidad por omisión de mandatos jurídicos indeterminados debe, por
tanto, ser interpretada en forma restrictiva.
El Estado debe responder sólo cuando preste en forma deficiente un servicio público
garantizado por el Estado y para lograr la reparación por parte de éste habrá que
demostrar que el accionar estadual no es el que las circunstancias aconsejan.
Y sobre esto hay que insistir, que esa responsabilidad se reclame en casos en que se
demuestre una deficiente prestación del servicio garantizado por el Estado.
Rosana y sus hijos menores JN y RN fueron asesinados por su padre luego de varios
hechos de violencia familiar hecho en que sobrevivió V quien también fue agredida por
el padre y recibió severas heridas en su estómago y extremidades pero a diferencia de
su madre y hermanos salvó su vida porque el progenitor la consideró muerta.
La sobreviviente inició una acción por responsabilidad por daños y perjuicios contra
Martinez, un miembro del personal policial de la provincia de Salta, fundada en la
omisión estatal de hacer respetar la Ley de Protección de violencia Domestica ya que
en el caso se había dictado solamente una orden judicial de extracción de fotocopias
que no fue oportunamente cumplida por personal judicial.
293
VI Congreso Marplatense de Psicología
Pasaron casi dos meses sin que se adoptara ninguna medida ni se diera intervención
al juez de familia. Recién el 4 de agosto de 2004 el juez resuelve “pudiendo los hechos
denunciados constituir actos de violencia familiar, proceda la preventora a extraer
fotocopias de las presentes actuaciones y remitirlas inmediatamente al defensor de
menores e incapaces a efectos de que inicie la presentación que correspondiere por el
Juzgado.
El 28 de agosto de 2004 sin que se hubieran sacado las fotocopias ni que el Estado
haya adoptado ninguna medida de protección, el señor Yapura mató a dos de sus
hijos y a su esposa.
El policía demandado estaba a cargo de la tramitación del sumario penal por lesiones
y amenazas iniciado por Rosana, al defenderse el policía señala que en la
subcomisaría de Campo Castañares, pcia de Salta, donde se tramitaba la causa, sólo
había un oficial por turno (tercios de ocho horas), no contaban con fotocopiadora en la
dependencia y el trámite para la extracción de copias consistía en llevar las
actuaciones a jefatura de Policía, en donde había una fotocopiadora para todo el
distrito por lo que lo anotaban en un cuaderno y le asignaban un turno para su
extracción y el personal policial no conocía la ley de Protección contra la violencia
familiar, ya que no había recibido instrucción alguna respecto a la menciona a ley, ni
por parte del jefe ni de la escuela de policía ni de la justicia.
294
VI Congreso Marplatense de Psicología
señalando que si bien a la época del evento dañoso la policía de Salta no estaba
especialmente formada en violencia doméstica, conocía la ley y sabía que debía darle
trato prioritario por ello modificó la sentencia recurrida y condenó a Martinez como
autor penalmente responsable del delito de incumplimiento de los deberes de
funcionario público, imponiendo una pena de 5 mil pesos e inhabilitación especial de
un año para desempeñarse en funciones.
CONSIDERACIONES FINALES
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
- González Magaña, Ignacio; “Los límites del secreto profesional frente a la obligación
de denunciar que la Ley N° 24.417 impone a los profesionales de la salud”,
http://www.ijeditores.com.ar/articulos.php
295
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
296
VI Congreso Marplatense de Psicología
Las memorias no sólo tienen género, sino que evidencia relatos que configuran
dos tipos de historias, una Historia (con mayúscula) relato oficial y muchas historias
que son las que constituyen las memorias del encierro. Relatos traumáticos que dejan
siempre un resto de lo indecible. Arfuch sostiene que “el yo como marca gramatical
que opera en la ilusoria unidad del sujeto, la forma del relato, que traza los contornos
de los decible dejando siempre el resto de lo inexpresable” (Arfuch, 2012: 75).
Hay una necesaria mirada de género en cuanto a la construcción de estas
tramas que permiten visibilizar los textos que desde el contrato social/sexual, han
quedado relegados al espacio privado – íntimo. Para poder visibilizar estas voces,
democratizar la palabra y dar voz a quienes no la tienen, es importante distinguir las
diferencias entre los testimonios de varones y mujeres: Las voces de las mujeres
cuentan historias diferentes a las de los hombres, y de esta manera se introduce una
pluralidad de puntos de vista. Esta perspectiva también implica el reconocimiento y
legitimación de “otras” experiencias además de las dominantes (en primer lugar
masculinas y desde lugares de poder). Entran en circulación narrativas diversas: las
centradas en la militancia política, en el sufrimiento de la represión, o las basadas en
sentimientos y en subjetividades. Son los “otros” lados de la historia y de la memoria,
lo no dicho que se empieza a contar.
RELATOS ENFRENTADOS
297
VI Congreso Marplatense de Psicología
Son relatos en primer lugar enfrentados "entre sí". Las voces contrapuestas
son múltiples. En principio y enunciado genéricamente, "las partes". Se agregan a
ellas y sus letrados, según los casos, innumerables "coreutas" no menos importantes y
definitorios al momento constituyente del gran relato. Peritos, testigos, mediadores,
querellantes, particulares damnificados, tutores, curadores, el estado y todo tipo de
instituciones representadas por los mas diversos funcionarios (Procuraduría General,
Instructores, Asesor de Menores e Incapaces, etc.). En segundo lugar, hablamos de
relatos enfrentados con los hechos y el derecho. Enfrentados con "lo ocurrido" y "lo
legislado". "Lo dado" y "lo construido",
Los relatos enfrentados, remiten también a otras voces que convergen en el
proceso judicial, voces que transmiten otras miradas, como la del trabajo de ONGs,
equipos de extensión, docentes que también expresan sus narrativas y relatos sobre la
situación de las mujeres y sus niños/as en el contexto carcelario.
Las memorias de las mujeres detenidas se dirigen a la trama familiar en primer
lugar, sus acciones colectivas también evidencia el reclamo por sus vínculos, por el
bienestar de sus niños/as. Pese a esto, el cuerpo de las mujeres/ madres detenidas es
un espacio de tensiones y relatos enfrentados.
Los funcionarios del Ministerio de Justicia entrevistados dan cuenta de la
experiencia que algunas mujeres detenidas reincidentes transmiten a las recién
llegadas: “quedar embarazada es un beneficio”. Esto cae al momento de constatar la
situación de vulneración previa al encierro, con respecto al ejercicio de maternidad,
entendiendo por esta una construcción con un fuerte sustrato patriarcal que se
sostiene desde la concepción misma del sujeto, a partir de la prolepsis, concepto que
remite a la anticipación de los padres con respecto a ese deseo de hija – madre.
La maternidad en el encierro marca una ruptura y una vivencia de
excepcionalidad que requiere de nuevas categorías y miradas para su complejo
análisis.
Una de las entrevistadas (docente en contexto de encierro) con una mirada
lúcida se refiere a un hecho que observa en las mujeres de la Unidad N°33 de Los
Hornos, al momento de narrar qué piensan las mujeres detenidas sobre sus delitos
observa que muchas veces los relatos tienen que ver con lo que viven, no como un
tormento sino como testigos de su historia “me cagaron, me re contra cagaron”. No
voy a ser ortiva, si digo como fueron las cosas. Hay algo contradictorio también la
mayoría de las chicas (sectores populares) están convencidas que los varones que
tienen que hacerse cargo de la causa aun cuando no sean responsables”.
Para poder analizar estas tramas es necesario despojarse de los prejuicios de
la clase media, de los prejuicios vinculados con el uso del espacio privado y espacio
público, dado que la frase denota en primer término una vivencia de socialización
propia de un sistema patriarcal que homologa el cuidado al ejercicio de la maternidad.
En entrevista a un grupo de extensionistas de la Facultad de Trabajo Social
(UNLP), comentan reflexionando sobre estas narrativas de las mujeres detenidas: “las
chicas con los nenes y los varones con la pena”, esto nos lleva a pensar otra
problemática, la del cuidado de los niños/as. Esto suscita prácticas de circulación que
vulnera a los infantes, y que no está acompañado de un sistema de promoción y
protección eficaz que garantice su cuidado.
298
VI Congreso Marplatense de Psicología
La Lic. Anatilde Senatore, presidenta del COFAM, refiere que en otros países
se han efectuado estudios en los que se registran más daños ejercidos en los niños/as
por parte de los cuidadores/as, que compartir el contexto carcelario con sus madres.
Este argumenta refuerza los desarrollos del Observatorio de Violencia de Género de la
Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, sustentando la importancia de
la morigeración de la pena y se medidas alternativas a la prisión preventiva en el caso
de las mujeres detenidas con niños/as.
Senatore sostiene, reforzando el planteo anterior que “la mayoría de las
mujeres entrevistadas inició el relato de la pérdida de la libertad aludiendo a
situaciones vinculares: siguiendo a sus parejas, siendo cómplices de padres y
hermanos, resolviendo violentamente una situación de maltrato familiar, víctimas o
victimarias, en relación con el varón, poniendo de manifiesto el desigual reparto de
poder; la calificación laboral es menor que la del hombre, de niñas han debido ser
madres de sus hermanos, siendo muchas de ellas madres en la adolescencia”.
REFLEXIONES FINALES
Para poder darle un cierre, no una conclusión, sino un intento de reflexión que
suponga una apertura, tomaremos una experiencia de la Unidad 33 de Los Hornos, en
la en la escuela las mujeres se organizaron y armaron un centro de estudiantes.
Para pintar el centro invitaron al artista plástico Luxor, quien realizó un mural de
unas pajaritas con la frase “educación para las pibas”. A los días el mural apareció con
la palabra pibas tachada, y luego pintado de marrón, tapado. Frente a esto se
movilizaron periodistas, activistas de varias facultades, sin lograr ningún cambio. En el
acto de fin de año, las alumnas que terminan la escuela dan un discurso sobre el logro
de haber concluido ese año y finalizan el mismo con la canción de Roberto Carlos que
corrigen en la parte que dice: “yo quiere tener un millón de amigos…..yo quiero un
coro de pajaritas…….” Cecilia Actis comenta en relación a esta experiencia que “el
discurso de ese año lo tengo guardado, sensibilizó mucho, fue un año muy jodido. Las
chicas cantando eso de sorpresa fue perfecto. Entendieron el código como hay que
decirlo”.
Se advierte entonces que a través de la identidad colectiva, el discurso de la
violencia institucional falla, es en ese intersticio en que se erigen las identidades que
resisten.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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DESARROLLO
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Artículo 3º: Derechos Protegidos. Esta ley garantiza todos los derechos reconocidos por la
Convención para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, la
Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la
Mujer, la Convención sobre los Derechos de los Niños y la Ley 26.061 de Protección
Integral de los derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes y, en especial, los referidos a:
302
VI Congreso Marplatense de Psicología
Ley 7032/2011 de la Provincia de Santiago del Estero, adhiere a la ley 26.485 y la Ley
6915/2008 es de Protección Integral de Niñas Niños y Adolescentes.
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
-EDGAR MORIN: La Via para el futuro de la Humanidad (Paidós Estado y derecho, junio
de 2011.).
304
VI Congreso Marplatense de Psicología
DE LA FUNCIÓN A LA PARENTALIDAD
En escritos anteriores1 hemos señalado el recorrido que va desde la concepción
estructuralista de la familia de Levy Strauss a la perspectiva lacaniana. Desde Levy
Strauss ubicamos una diferencia y complementariedad de las funciones paterna y
materna originada en la división de tareas con la finalidad de sostenerse en la
subsistencia. Mientras que Lacan arrancó la familia del campo del mito y la biología para
leerla desde la estructura. En esta perspectiva las funciones de padre y madre tenían un
lugar constituyente del sujeto. En la actualidad, algunos pensadores han acuñado el
término parentalidad para hablar de una ausencia de complementariedad de las
funciones. La parentalidad “implica una simetría y una igualdad entre el padre y la madre
en lo concerniente al orden familiar.” (Brousse, 2010) Esto supone una transición que
modifica las enseñanzas de Lacan y sin embargo, se origina en ellas.
Lacan observaba, por la década del 70 una “anomalía familiar” en la medida en que los
roles y las funciones parentales se encontraban subvertidas. Esta subversión en las
relaciones de parentesco nos obliga a re pensar las formas de constitución subjetiva que
están signadas por las transformaciones actuales. Según Godelier (2010) las cuestiones
que han impactado en la modificación de las relaciones de parentesco a nivel social, han
sido: la libre elección de pareja, la igualdad de los sexos como estandarte de los
movimientos feministas y la valorización del niño y la infancia como etapa evolutiva.
Estas modificaciones familiares deberán ser repensadas desde las formas de
reproducción que facilita la ciencia en estos momentos y en prospectiva se observan
maneras de engendrar que suponen un deslinde cada vez más pronunciado entre los
lazos de parentesco y la biología.
La ciencia ha tomado lo real de la reproducción que ha quedado escindido de lo simbólico
de la filiación. Esto supone efectos subjetivos y sociales que impactan en la dinámica de
1
Ormart, E. (2014) TRHA: impacto en las constelaciones familiares y la identidad de sus miembros. En
Aesthethika, Volumen 10 nº 1. Año 2014. (PP. 86-102)
305
VI Congreso Marplatense de Psicología
“El nombre del padre sobre el deseo de la madre, implica una tachadura, una limitación de
esa locura inicial que supone el deseo materno insensato al que el nombre del padre, por
su interpretación, intenta agregar un sentido, una significación que Lacan va a llamar
fálica.” (Schetjman, 2014)
La idea de pensar el nombre del padre como sustitución metafórica le permitió a Lacan
ubicar la función de la ley como no deducible de adaptaciones funcionales al medio, ni a
cuestiones genéticas, siendo evidente que está articulado a la especie humana en tanto
que habla. La metáfora paterna articula la función del padre con la castración.
Según Carlos Indart (2005, 27) “Lacan muestra que lo esencial de la operación del
significante del nombre del padre no es sustituir otro significante, operación creadora de
sentido, sino representar la suposición de la falta de un significante, efectuando la
suposición $, y articulándola a los demás significantes para que con ese límite se ordenen
como pertenecientes al campo del Otro.” Este momento en la enseñanza de Lacan
supone la concepción del nombre del padre como función. El funcionario es quien se
inscribe en la función. El funcionario se libera de una deuda contraída cumpliéndola. El
padre es el funcionario del nombre del padre. La deuda está ubicada en la hiancia que
existe entre el padre y la función, ya que ningún padre está a la altura de la función. El
306
VI Congreso Marplatense de Psicología
fracaso del nombre del padre por regular el goce es lo que produce un resto, propio de la
simbolización, al que Lacan denominó objeto a.
En 1974 Lacan profetiza la declinación de la función paterna. Cuando hablamos de la
decadencia del nombre del padre tenemos que ubicar que no se trata de la decadencia de
la función sino de los funcionarios. Junto con ella se produce la multiplicación de los
nombres del padre que dan lugar a nuevas formas de lazo social. “Hemos pasado de la
autoridad paternal a la autoridad parental, donde el padre no predomina más, dice Negri
(2010) La parentalidad implica que el padre sea sustituido por los pares. […] La predicción
de Lacan del ascenso de la segregación es correlativo a este borramiento de la diferencia:
los mismos con los mismos.” (Negri, 2010,192)
Este recorrido final de Lacan que ubica la declinación del nombre del padre nos sirve
como herramienta teórica para pensar los entramados familiares que observamos en la
actualidad como efecto de las TRHA.
307
VI Congreso Marplatense de Psicología
308
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Llegamos así a una primera distinción: si bien las TRHA introducen modificaciones
en las estructuras familiares, bajo sus diversas formas, hay algo en la constitución
subjetiva que permanece invariante. Lo invariante es el deseo. Para que un ser humano
devenga sujeto deberá ser alojado por un Otro significativo vía la libidinización del cuerpo
o a partir del baño de lenguaje, operación capaz de sustraerlo de la pura pulsión de
muerte. Ubicamos a esta operatoria como lo simbólico de la filiación dado que permite
establecer los distintos lugares y funciones. Sin embargo pareciera que la Ciencia –vía las
TRHA comienza a afectar algo del orden de lo real del cuerpo o de la biología, que en un
futuro podría devenir en una modificación simbólica o en un aplastamiento de la
subjetividad. Cuando el deseo de hijo se rige por la lógica mercantil del tener, cuando
resulta de la necesidad o deviene en cumplir una función determinada por ejemplo la de
“salvar” a un hermanito4 puede leerse más como síntoma, posibilitado por el desarrollo
2
Aída Kemelmajer de Carlucci, Eleonora Lamm y Marisa Herrera: Con el impulso de la ciencia, sin
fundamentalismos. En Perspectivas Bioéticas. Año N°17 – Número 32. 2012
3
En el art. 561 del proyecto de reforma del Código Civil y Comercial Argentino dice: “Los hijos nacidos de
una mujer por las técnicas de reproducción humana asistida son también hijos del hombre o de la mujer que
ha prestado su consentimiento previo, informado y libre en los términos del artículo anterior, debidamente
inscripto en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas, con independencia de quién haya
aportado los gametos.”
4
Véase artículo Reprogenética: avance técnico y avatares subjetivos en Aesthethika, Volumen 10 nº 2. Año
2014, donde se reseñan los distintos escenarios de la reprogenética: las fluctuaciones en las pirámides
309
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
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al (Comp.) Buenos Aires: Grama. (Pp. 59-70)
Ormart, E. (2014) TRHA: impacto en las constelaciones familiares y la identidad de sus
miembros. En Aesthethika, Volumen 10 nº 1. Año 2014. (PP. 86-102)
310
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
311
de quien aporte el gameto o el vientre. Incluye claro está, la falta de acción para
reclamar la filiación de estos niños, por parte de los dadores de gametos/vientre. A la
fecha solo se cuenta como veremos, con un capítulo incompleto en el flamante Código
Civil y Comercial 2012.
c) Por último, el mercado que se ha formado en torno a las TRA, en relación a
los centros de salud, los bancos de gametos, los profesionales involucrados, las
limitaciones éticas en la ejecución de estas técnicas, deben ser regulados fuertemente
por una ley especial que Argentina no tiene programada.
312
VI Congreso Marplatense de Psicología
Las TRA posibilitan acceder a ser padre o madre a quienes no pueden serlo,
ante dicho impedimento acuden a solicitarlas tanto parejas heterosexuales,
homosexuales y personas solas. Pero para cierto sector de opinión -Moran de Vicenzi
(2005)-, también se utilizan con la finalidad de disminuir o evitar el riesgo de
transmisión de enfermedades genéticas hereditarias, o bien para satisfacer el deseo de
paternidad o maternidad de aquellas personas que no comparten ni desean compartir
su vida con una pareja. Tradicionalmente, el deseo y la unión heterosexual eran los
componentes necesarios para una filiación, mientras que hoy las técnicas de
reproducción permiten el advenimiento de un hijo biológico sin necesidad de coito
heterosexual, lo cual disocia la procreación de la unión sexual entre el varón y la
mujer, ya no siendo necesaria tampoco la unión amorosa. Por otro lado, posibilita que la
procreación se realice sin la participación biológico-genética y/o sin el conocimiento del
otro miembro de la pareja, pues dicho proceso de manifestación de voluntad, no está
regulado específicamente en la ley. La fertilización asistida pensada originalmente para
dar solución a la infertilidad de una pareja heterosexual sobrepasó esta cuestión, dando
lugar a la posibilidad de nuevas fuentes filiatorias. Lo que nos conduce a revisar los
conceptos de maternidad, paternidad y filiación planteando novedosos interrogantes,
cuestiones éticas, legales, sociales y psicológicas.
Nos preguntamos entonces, ¿qué rol ocupa el psicólogo ante estos desarrollos vitales
familiares? Pensamos que las prácticas de reproducción asistida y especialmente la
gestación por sustitución son situaciones complejas que requieren de un abordaje
múltiple, ya que no se trata de una cuestión meramente médica o legal, por lo cual el
psicólogo debiera ser parte del equipo que lleva adelante dichos tratamientos. El
acompañamiento psicológico debería darse de manera paralela al tratamiento médico,
313
ya que este implica un proceso tanto físico como psicológico que suele ser estresante
para quien lo esta viviendo.
Independientemente de la singularidad de cada sujeto y del proceso único e irrepetible
por el que pasa una persona para recurrir a alguna practica de reproducción asistida, es
posible señalar algunas cuestiones que expondremos a continuación que deberían
trabajarse desde el punto de vista psicológico:
Duelo por la imposibilidad de ser padres de manera natural. Cuando una pareja
tiene un proyecto de vida de formar una familia con hijos, la noticia de la
infertilidad o esterilidad constituye una crisis sumamente dolorosa que puede
hacer tambalear el proyecto de vida juntos. La elaboración de esta situación
depende de muchos factores, que involucran aspectos de la historia personal,
de la pareja y también familiares, ya que muchas veces la presión social y/o
familiar para que una pareja tenga hijos, incrementa la angustia, la
incertidumbre y el padecimiento, dificultando la visualización de otras opciones.
Diversos estudios señalan la preponderancia de sentimientos de frustración,
impotencia y tristeza que surgen en las personas ante la certeza de la
esterilidad (Moreno y cols., 1999), Miranda, Larrazabal & Laban (1995), (Luckse
& Vacc, 1999).
Deseo de un hijo/a. Es necesario considerar que querer tener un hijo/a no
implica un deseo. El psicoanálisis nos brinda un sustento teórico para poder
pensar e intervenir en torno a este tema, ya que establece una diferencia entre
demanda y deseo. En un pedido, además de las razones y las intenciones
concientes que una persona pueda esgrimir, existen también dimensiones
inconscientes que es necesario dilucidar. El deseo de hijo supone un deseo de
dar vida a un ser diferente de uno mismo, esto es distinto de considerar al
hijo/a como una parte de si, como un objeto que vendría a cubrir alguna falta.
La parentalidad. Cada época y cultura elabora mitos, ritos y representaciones
que brindan un soporte simbólico e influyen en la manera en que se ejercen las
funciones materna y paterna. En la actualidad la parentalidad no requiere de
dos, ni para la concepción ni para la crianza, es producto de un trabajo de
elaboración y construcción complejo que implica una reorganización psíquica y
afectiva que dispone a un sujeto a libidinizar, brindar sostén y todas las
acciones necesarias para la crianza y desarrollo de un ser humano.
Debemos apreciar que las personas que desean formar una familia por esta vía,
están en soledad, sin respaldo legal, ante un mercado sin coto, que comercializa “vida”.
No hay respuesta legal, por ejemplo para el caso de la venta de ovocitos, espermas,
citoplasma con mitocondrias, la crioconservación de embriones, la cuestión de los
embriones supernumerarios, el destino último de los mismos, entre otros casos que
genera esta especialidad médica.
314
VI Congreso Marplatense de Psicología
Así, en Paraguay, que no tiene reglamentada la voluntad procreacional como Argentina. SD 190 del
28/5/2013. Juzgado de Primera Instancia de la Niñez y Adolescencia de Asunción, Quinto Turno, “B.V.N.I
y otra s/impugnación de paternidad”. En “Revista de Derecho de Familia. Revista Interdisciplinaria de
doctrina y jurisprudencia, 2014-I, Buenos Aires, Abeledo Perrot, págs.231/250.
2
Así, en el caso S.G.E.F.y.G.C.E, Juzgado de 1a Instancia de Distrito de Familia, San Lorenzo(JFlia),
02/07/2012.
315
inalienable, y que le corresponde a cada ser humano por tal condición. Abordaremos a
continuación algunos aspectos relevantes de tal debate.
En general, las discusiones se refieren a los límites que debería establecer el Estado en
relación a las edades máximas, la orientación sexual, la identidad de género, la
mediación económica, la explotación de las mujeres en situaciones de necesidad
extrema, el derecho de las personas a acceder a la paternidad, el derecho de las
mujeres a utilizar su cuerpo libremente y el derecho de los niños que nacerán a partir de
estos acuerdos.
Sintetizaremos los argumentos que desde el punto de vista moral objetan la práctica
de la gestación por sustitución:
-La maternidad es considerada proceso natural y cualquier intervención que
desnaturalice dicho proceso es moralmente inaceptable.
-El uso del cuerpo de la mujer como medio para obtener un hijo es inmoral, ya que se
considera que es una manera de control, apropiación y explotación de la mujer.
-El dinero en la maternidad subrogada, mercantiliza a los seres humanos y un hijo o hija
no puede ser un medio para obtener otra cosa.
-Procrear un hijo para darlo sabiendo el destino ya de antemano es objetable.
-Desprenderse de un hijo o hija y de la responsabilidad que implica es moralmente
cuestionable. -
Las personas nacidas bajo estas circunstancias sufrirán consecuencias psicológicas y
sociales.
-Es inmoral traer de esta forma un nuevo ser al mundo habiendo muchos niños que
pueden ser adoptados.
Por su parte, la jurisprudencia norteamericana, en igual sentido que lo programa el
Proyecto CCyC 2012, reconoce la categoría de derecho rightto reproduce, como
expresión de la libertad personal. La doctrina de este país considera que se trata de un
derecho que le puede corresponder a las parejas o personas ya sean estériles o no.
Este derecho los ampara en el sentido de procrear de manera natural y a acceder a
cualquiera de las técnicas de fecundación artificial. Este enfoque defiende la existencia
de una nueva forma de pensar acerca de los vínculos parentales basados
principalmente en el afecto y en el deseo de tener descendencia, lo cual permite
explicar la atribución de la paternidad o la maternidad a favor de quienes recurren a la
fecundación artificial, esto es de los padres intencionales.
6. CONCLUSIÓN
316
VI Congreso Marplatense de Psicología
7. REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
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318
VI Congreso Marplatense de Psicología
Así es como en estos años emergió un nuevo imaginario del cuerpo con la llegada de
la anticoncepción oral, que separó la sexualidad de la reproducción; veinte años más
tarde llegan las nuevas tecnologías reproductivas que separan, esta vez, la
reproducción de la sexualidad; cambios estos que implican modificaciones en las
costumbres y vínculos entre hombres y mujeres.
¿Qué podemos pensar en la gestación por sustitución? Una mujer que gesta un bebe
ajeno; o bien un embrión formado por material genético del padre pero no de la madre
que lo gesta. La fecundación extra-corpórea, que corresponde al período in Vitro
realizado en un laboratorio, introduce un elemento nuevo, los embriones se gestan allí
y el médico o laboratorista adquiere una función fecundante; con el agregado de una
experiencia inédita, los embriones se pueden ver, su imagen se puede amplificar,
fotografiar y esto difiere ampliamente de los modos en que concibieron sus padres y
otras generaciones y esto introduce, a decir de P. Aulagnier una “inquietante
extrañeza” ; “...hay una ruptura en el modo de concebir tradicional y eso exige un
proceso en el que abra que indagar que evoca en cada persona, ya que nos es ajeno
imaginar partes de cuerpo en otros cuerpos dando vida”.
De hecho, mas allá que intentemos tapar el sol con las manos, ha habido cambios en
la vida cotidiana y en los horizontes de los proyectos de vida de los sujetos actuales
que tienen impacto en la clínica y establecen nuevas demandas y conflictos.
Una de ellas se refiere a no dejar que el prejuicio, o las concepciones anteriores a los
problemas actuales, nos hagan ver como psicopatológicos perse a los cambios
señalados. Y la otra, es que tampoco resignemos poder identificar las formas que
pudiera ir adoptando la psicopatología en lo nuevo.
Poder deslindar estas dos caras de la problemática es un imperativo ético para poder
seguir sosteniendo, lo que a nuestro modo de ver es el compromiso básico del
319
VI Congreso Marplatense de Psicología
psicoanálisis con la sociedad: trabajar con las formas en las cuales se expresa el
malestar humano, poniéndole palabras al dolor.
Es muy importante tomar esto como tarea, para que no nos ocurra que por
abstenernos de repensar frente a los nuevos desafíos, nos quedemos siendo los
defensores de lo que en un momento fue novedoso, y hoy puede convertirse en
reliquia.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
investigación que aceptando la complejidad, respete y comulgue con otros campos del
conocimiento en un espacio distinto.
En el campo de la salud mental, el gran avance de las biociencias y el desarrollo
tecnológico aplicado al territorio de la Reproducción Asistida, nos presentan una realidad diferente
a aquella sobre la cual fueron elaborados los marcos teóricos y las herramientas de intervención.
Los nuevos modos de gestación y filiación presentan un complejo desafío, exigen pensar lo
inédito, principalmente en relación a lo identitario, en coexistencia de diversas legalidades que
convergen en la temática .Avances científicos que crean huellas en la subjetividad.
Desde el fundamento conceptual de nuestra práctica, pensamos la construcción de la
subjetividad originada desde una matriz vincular donde las dimensiones intersubjetiva y social se
vuelven co-productoras del campo de lo psíquico, en donde sujeto vínculo cultura forman un
entramado único. Centralizados entonces en los efectos sobre la subjetividad actual, son muchos
los interrogantes que surgen. Quizás algunos de ellos pueden ser agrupados en la caducidad de
las dicotomías previas: madre/padre, naturaleza/cultura, gestación/crianza y en los efectos que los
nuevos modos de gestación tienen en el proceso de construcción de la identidad del infante por
venir. A este respecto, resaltan el modo en que será elaborado y transmitido por las figuras
parentales, la fragmentación gestacional que las TRAs implican en la cadena e historia
generacional cuando participan dadores de gametos externos a la pareja, el lugar que ocupará el
proceso y sus consecuencias en la fantasmática parental y en por lo tanto, en el modo en que
puedan transmitir la verdad del origen a su descendencia. Se entrecruzan factores genéticos,
biológicos, psíquicos, socioculturales y jurídicos que generan diversos modos de engendramiento,
nacimiento y filiación, que tienen efectos en el proceso de constitución psíquica, y con llevan
transformaciones profundas en las relaciones de parentesco, nuevos modos de ser, nominar y de
construir una familia.
Coincidimos en este punto con Silvia Bleichmar quien sostiene que si bien la información
tiene en esta historia un lugar importante, lo tiene aún más el modo en que será transmitida. La
información estará siempre acompañada de una carga afectiva, y por lo tanto el informar implicará
que los padres (padre-madre, padre-padre, madre-madre, madre, etc.) hayan metabolizado esa
información para dar lugar a que el hijo elabore su verdad. “Los enigmas que se constituyen en la
infancia son el resultado de complejos entramados deseantes respecto a su engendramiento”1.
Para el campo Psi deberemos tener en cuenta que “Los elementos de la filiación no son
nominaciones de lo real sino instituyentes simbólicos”2.
Es evidente que la complejidad que ofrece la temática y los interrogantes que se abren en
relación a su aplicación, exige un abordaje desde diversas disciplinas que abarquen el campo
biológico, psicológico, jurídico y sociológico. ¿Pero es ello suficiente?
Las inquietudes en relación al abordaje de temáticas complejas en investigación surgieron
con fuerza desde agencias internacionales como la OCDE y la UNESCO, y a partir del trabajo de
cuatro académicos: Edgar Morin, Basarab Nicolescu, Erich Jantsch y Jean Piaget, quienes, en la
conferencia denominada La interdisciplinariedad, problemas de enseñanza y de investigación en
las universidades realizada en 1970 en Francia pusieron de relieve las nociones de inter, trans,
multi y pluridisciplinariedad que hoy conocemos. (Aposteletal.,1972).
La multidisciplina o plurisdisciplina se refiere a un objeto de estudio propio de una misma y
única disciplina, abordado por varios campos disciplinares al mismo tiempo. Es la simple suma de
diversos campos de conocimientos. Si bien aporta algo más a la disciplina base, siempre lo hará
1
BLEICHMAR,Silvia.Lasubjetividadenriesgo.EdTopia.2005.
2
ROTEMBERG,Eva,WAINERAGREST,Beatriz.Homoparentalidades.Nuevasfamilias.Edlugar.2010.
322
VI Congreso Marplatense de Psicología
3
GARRAFA, Volnei y OSORIO DE AZAMBUJA, Leticia, Epistemología de la bioética -enfoque latino-
americano-, en “REVISTA COLOMBIANA DE BIOÉTICA”, VOL. 4 Nº 1 - JUNIO 2009, ps.73-92Disponible en:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=189214300004 (2/7/14).
4
PIAGET,Jean(1972)The epistemology of interdisciplinary relationship, en Interdisciplinary: problems of
teaching and researchin universities, Centre for Education al Research and Innovation, OECD.
323
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Queda claro que la complejidad no puede ser investigada desde un solo saber ni desde un
grupo de puntos de vistas. Los instrumentos pueden ser la multidisciplina, la interdisciplina, y la
transdisciplina, las que bien pueden interactuar si se tiene presente la acción complementaria
entre ellas por las distintas finalidades que persiguen.
La bioética, por su posibilidad dialógica y reflexiva, se consolida como el método adecuado
para el estudio particular de las TRAs, tanto desde un enfoque académico como terapéutico, en la
conformación de los equipos de salud que las aplican y en la intervención profesional hacia los
consultantes. A la vez propone y facilita el debate necesario que asegure un enlace apropiado
entre la aplicación de las TRAs y la realidad social. Se inicia un proceso de aprendizaje interactivo
y construcción colectiva donde cada disciplina (y cada investigador) se vincula con el campo
conceptual, metodológico y axiológico fundamental de las otras. El grupo de investigación se
consolida en la medida en que se va vinculando más intensamente, creando un espacio nuevo,
fundado en un objetivo común que permite la cohesión al interior del grupo y el abordaje de la
problemática compleja a partir de esa creación. Los conceptos de inter y transdisciplina se van
enredando en nuestra experiencia bioética, de una forma espiralaza que permite aprendizajes,
análisis, reflexión y síntesis.
Para este grupo de investigación la transdisciplina es un objetivo a alcanzar, recordando
que para transgredir las fronteras, necesitamos libertad para emerger, sin temer a desaparecer por
lo que hacemos. Es poder ir más allá, proporcionando libertad de estar del otro lado sin ser
MALDONADOGOMEZ,Olga;Interdisciplinariedadenbioética,disponible:www.bdigital.unal.edu.co/783/14/26
3_-_13_Capi_12.pdf(8/8/14).
324
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
6
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Garrafa V, Kottow M, Saada A. Estatuto epistemológico de la bioética. México: UNAM / REDBIOÉTICA, 2005. p. 67-
85.
325
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
del sistema social/societal, que excede la memoria de los individuos que forman parte del
sistema – a través de los informantes claves y de la potencia de sus relatos de tradición
oral, como a través de la historia escrita - memorias, legajos, libros -, y su re-lectura re-
contextualizada desde el aquí y ahora. Sólo recuperando las historias sociales en las que
se inscriben los hechos actuales, el sistema societal– a través de sus actores – podrá
aprender de la experiencia colectiva, construyendo un futuro porque ha re-visitado el
pasado, y abriendo espacio para ciclos de expansión, de cambio, más allá de los
encapsulamientos institucionales Engeström, 1991). La elección de la metodología
etnográfica de investigación, responde a la posibilidad de articular el instrumento utilizado
con lo expuesto por Rockwell (2010) respecto de romper con la documentación oficial o
prescriptiva, para mirar desde lo cotidiano de las vivencias de los actores. El objetivo
central sigue siendo explorar las practicas docentes, pero con un elemento fundamental,
en que el propio protagonista construye teoría através de sus narrativas. Las vuelca en
relatos de experiencias escolares y profesionalizantes, no como una catarsis sino como
actor principal, a la vez que autor de su trayectoria y de la constitución de su rol docente.
La autora nos plantea que la llamada trasmisión “escolar” como cultura, guarda más de un
sentido, recuperando la riqueza y la diversidad de las experiencias educativas del pasado,
permitiendo apreciar esa diversidad en las escuelas que conocemos, pero también
imaginar, en base a ellas, caminos futuros posibles. Instrumentos y apertura de líneas de
indagación El instrumento utilizado resulta como producto de las investigaciones
cruzadas explicitadas en el inicio de este trabajo : Narrativa sobre la experiencia educativa
actual y prospectiva (NEEAP) Autores: Erausquin, Cristina; García Labandal, Livia y
Meschman, Clara. (2012)
328
VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
estudiando plástica, para introducir otros lenguajes en el aula. Desde entonces nunca dejé
de formarme en ese sentido (además del académico, ya que un año después hice el
profesorado). Ese año fue mi quiebre, comencé una revisión constante de mi práctica “
Cuando los profesores narran las prácticas escolares que los tuvieron como
protagonistas, cuentan sus propias biografías profesionales, confían sus perspectivas e
impresiones acerca de lo que consideran una buena práctica de enseñanza, el papel de la
escuela en la sociedad contemporánea, sus propios lugares en la enseñanza y en la
escuela, los criterios de intervención curricular y docente que utilizan, los supuestos que
subyacen a las formas con que evalúan los desempeños de los estudiantes y los suyos
propios. (Suárez, 2007) A modo de reflexión Resulta primordial convertir a las
Biografías Escolares en método, herramienta y objeto de investigación educativa, en los
procesos de construcción y reconstrucción de las prácticas docentes profesionales. El
registro, sistematización y comunicación de las autobiografías educativas constituye un
punto de fortalecimiento en la constitución de la profesionalización del rol e identidad
docente, en nuestro caso, del Profesor en Psicología. Las narraciones de profesores
descubren sentidos pedagógicos parcialmente ocultos o ignorados; convierten su
conciencia práctica en discursiva a través de la narración, la ponen en tensión, la
componen y recomponen, la objetivan, la fijan en escritura, la comunican, la critican. En el
movimiento que se produce al compartir sus relatos pedagógicos, entregan sus propias
lecturas acerca de lo que pasó en los ámbitos educativos y fundamentalmente lo que les
pasó. El conocimiento de las situaciones cotidianas del ejercicio profesional docente
y de las contradicciones de la práctica real proporciona un desafío que orienta a poder
pensar cambios posibles, que jerarquicen la profesión.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
(2003) La Fábrica de Historias- Derecho, literatura, vida. Buenos Aires: Fondo de Cultura
- Momberger, Ch. (2009) 1/ Biografia y educación. Figuras del
individuo-
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Montero García-Celay. Maestría en Psicología Cognitiva y Aprendizaje. Buenos Aires:
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bandal L., González D.,
330
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331
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
"El juego es aquella capacidad de abrirme al misterio y la belleza,
de tratar los objetos y las ideas de manera no convencional
y nos hace personas capaces de disfrutar de la vida
y de imaginar y transformar el mundo"
Imma Marín. Representante de IPA en España
(Asociación Internacional por el derecho de niños y niñas a jugar).
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Sin embargo, a pesar de reconocer el valor del juego diversas investigaciones corroboran
lo que observamos cotidianamente: nos atraviesa una pérdida de espacios y tiempos
lúdicos.
EL DISPOSITIVO DE FORMACIÓN
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Cada una de las propuestas1 fue recibida con gran entusiasmo, avidez por la
bibliografía y altísimo involucramiento -en las actividades presenciales y no presenciales-.
En otras palabras, los grupos se caracterizaron por ser altamente participativos y dieron
cuenta de una actitud comprometida frente a la propuesta de capacitación.
“Rescato la metodología de la capacitación: lo que planteaban teóricamente lo
desarrollaban en las clases”. “Jugar mientras aprendo y transformo mi practica personal
fue una experiencia muy interesante”. “Aprendí la responsabilidad y compromiso que
implica los espacios lúdicos, antes lo pensaba como una pavada”. “El juego no tiene
límites. Los límites los ponemos nosotros.”·Son algunas de las frases que podemos
rescatar de la memoria de cada encuentro.
En las evaluaciones pudieron señalar que había sido una experiencia vital del
año, que les había brindado alegría, nuevas inquietudes, reencuentro con su capacidad
lúdica, desarrollo creativo, ganas de seguir profundizando en el tema, y sobre todo
renovado entusiasmo para propiciar espacios lúdicos en cada uno de sus respectivos
lugares de trabajo.
CONCLUSIONES
1
Cada una de nosotras realiza capacitaciones sobre lo lúdico todos los años. Livia García Labandal
lo hace en Educación (desde el Equipo de Orientación Escolar del GCBA), mientras que Liliana
Zacañino lo hace en Salud (desde el Programa Juegotecas en Salud del Ministerio de Salud del
GCBA).
336
VI Congreso Marplatense de Psicología
mudo, ajeno. Puede encenderse en significaciones o quedar inerte, presa ciega del
tiempo..."
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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NUESTROS ESTUDIOS
340
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341
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
342
VI Congreso Marplatense de Psicología
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343
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Nos interrogamos entonces, sobre como estas tecnologías atraviesan los vínculos,
específicamente los adolescentes. En particular, consideraremos dos vertientes, por un lado,
en lo que hace a los vínculos entre los propios adolescentes, y por otro lado, lo concerniente a
los vínculos de los adolescentes entre generaciones
“En la vida anímica del individuación, el otro cuenta con total regularidad, como modelo, como
objeto, como auxiliar, como enemigo y por eso desde el comienzo mismo, psicología social” la
psicología individual es simultáneamente psicología social”. (Freud. 1921)
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Hablar de vínculos es hablar de ligazón, de unión con otros. Se han tornado frágiles,
superficiales, poco profundos, “líquidos” como los denomina Buaman, si bien esto, esta
relacionado con la modernidad “líquida”, no tiendo su correlato especifico con las NTICS.
“La pantalla, lo digital, lo virtual, suscita en los chicos desde antes de cumplir el primer
año, una violenta atracción, concierne al cuerpo, cuyos límites no se pliegan ya a lo anatómico
y a lo grupal, que se amplía en nuevos diseños” (Rodulfo,R. 2013)
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En cuanto a lo que hace a los modos de vincularidad de los adolescentes con otras
generaciones, nos remite a analizar el “entre” que se produce entre ellas, además de tener en
cuentas las características epocales de cada una.
Por otro lado, retomando lo mencionado respecto a la autonomía que los adolescentes
encuentran en este espacio, influye en su movimiento de desprendimiento familiar.. Las otras
generaciones, a su vez ocupan prioritariamente posiciones legitimadas que funcionan
predominantemente a favor de la tradición y del instituido., aún habiendo estos mismos,
también modificado sus hábitos para relacionarse y obtener información a través de los medios
digitales, pero de modo más lento y gradual.
Es así que nos encontramos con un desafío entre generaciones, entre los que están en
el lugar del saber instituido, y los más jóvenes que están construyendo su espacio en la
estructura social, entre la figura de autoridad y el representante de lo nuevo. Por eso podemos
pensar que el tema de la adolescencia frente a las nuevas tecnologías es una cuestión de
generaciones, a ser confrontada, desde un desafío que se plantea en una relación desigual. De
todos modos, seria iatrogénico adjudicarle solo a este grupo social, los nativos digitales,
transformaciones que van ocurriendo en el mundo contemporáneo, en distintas generaciones.
Lo que sin duda podemos considerar, es que los adolescentes, protagonistas de este mundo
tecnológico viven el poderío que les otorga ser “nativos digitales”, fluidez comparable con
aquellos que hablan otro idioma siendo su lengua materna. A su vez, el adulto “inmigrante
digital” reacciona defensiva o creativamente, según su capacidad de incluir lo diferente, en un
juego dialéctico que los moviliza en una realidad de constante transformación.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En las redes sociales se pone en juego la dimensión narcisista de la mirada: ser visto,
ser reconocido y ser aceptado.
Nos resulta interesante poder pensar que no todo tiempo pasado fue mejor, ni todo lo
nuevo es beneficioso, sino que todo depende de la capacidad de asir lo nuevo como recurso
sin quedar entrampados mirando lo nuevo con anteojos viejos.
Esto nos lleva entonces a pensar que se debe ser capaz de adaptarse creativamente,
con la plasticidad suficiente a nuevas realidades, realizando la travesía entre viejos y nuevos
paradigmas, que nos constituyen y atraviesan.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Bauman, Zygmunt. (2005) “Amor líquido. Acerca de la fragilidad de los vínculos humanos”. Ed
Fondo de Cultura Económica. Bs As
Blanco Cristina (2014) Las instituciones atravesadas por las NTICS Presentado en el
Congreso de AASM-
348
VI Congreso Marplatense de Psicología
Brea, Norma (2013) Nuevas tecnologías, nueva cultura? Presentado en Congreso Mundial
AASM 2013
Corbisier Matheus, Tiago (2013) Adolescencia y nuevas tecnologías digitales: desafíos entre
generaciones. Revista Actualidad Psicológica N° 419. BsAs
Najmanovich, Denise (2005) “El juego de los vínculos. Subjetividad y redes: figuras de
mutación”. Ed Biblios. Bs As
http://www.pagina12.com.ar/diario/psicologia/9-229309-2013-09-19.html
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
alcances que tiene una ley que pretende desde su carácter universal abordar la
especificidad de cada caso. Sin embargo, en el marco singular de cada sujeto o
conjunto de sujetos que se ven afectados por ella ocurren efectos contrarios al espíritu
de la misma.
A partir de estos cuestionamientos se ponen en juego dos dimensiones que se
entrecruzan en el campo de análisis. Por un lado, se rescata lo que Salomone (2006)
ha denominado como dimensión clínica, que no alude al campo de trabajo clínico en
específico, sino que hace referencia a la subjetividad de cada individuo como sujeto
singular. A fines prácticos de este trabajo esta dimensión será denominada como
dimensión subjetiva. Asimismo, ésta se ve atravesada, tal como se mencionó
anteriormente, por el marco normativo de las leyes que regulan el hacer de cada
sujeto, que es denominado como campo deontológico-jurídico (Salomone, 2006). Se
puede entender que este último, desde ahora dimensión jurídica, tiende por naturaleza
a restringir la dimensión subjetiva en tanto coerciona las posibilidades de satisfacción
individual para la adaptación del sujeto a la vida en sociedad. Sin embargo, la
dimensión jurídica colabora en la conformación de la subjetividad, en la medida que es
a partir de la prohibición fundamental en el niño durante el complejo de Edipo que se
constituye como sujeto singular. Se entiende entonces que ambas dimensiones se
entrecruzan de manera constante causando complejos y variados efectos en los
sujetos. Siendo así, se plantean entonces dos movimientos posibles que pueden
resultar de estos entrecruzamientos, que dan cuenta a su vez de los alcances y límites
de la regulación de una ley.
Un primer movimiento posible es la apertura de la subjetividad, que se produce
en el marco en que una ley permite la garantía de los derechos de cada sujeto que
encuadra. Si bien se rescatan una gran diversidad de derechos en el campo de la
legislación, se entiende aquí que son los derechos fundamentales, aquellos que hacen
a la condición humana, los que deben ser garantizados por la dimensión jurídica para
que sea favorecida la subjetividad de cada individuo. Las regulaciones son las que
tienen el poder de establecer la garantía de una vida digna rescatando los valores que
hacen al ser humano. Esto es lo que se halla en la enunciación de la universalidad de
las leyes, buscando enmarcar cada caso singular de los sujetos que se ven afectados
por ellas (Lourau, 1970). Al mismo tiempo el correcto ejercicio de la ley no se agota en
asegurar los derechos, sino que se presenta una segunda vertiente que se basa en el
castigo a quien la corrompe, favoreciendo así movimientos de apertura subjetivos,
pero esta vez en los afectados por el infractor.
Sin embargo, el hecho de que una ley establezca la garantía de un conjunto de
derechos no se correlaciona de manera necesaria con que los mismos se apliquen de
forma directa en la práctica cotidiana. Cuando la legislación está establecida, es
necesario que en un segundo momento sea puesto en práctica por los organismos
que regulan el hacer de los sujetos, para que sus derechos sean respetados de
manera óptima. Si esto no sucede, por más que esta ley exista no puede ser capaz de
ser garante de derecho para los sujetos. Es aquí cuando nos topamos con un segundo
movimiento posible, el de la supresión de la subjetividad que ocurre cuando la misma
no se ve favorecida por el ejercicio de la ley o bien cuando la proclamación de ésta es
insuficiente para ser garante efectiva de aquello que hace a la realización de cada uno
de los habitantes de la sociedad.
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CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
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INTRODUCCION
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Dilema 1
Arturo sabe que la Delegación Municipal tiene recursos en las partidas de Recreación y
Cultura, que no se pudieron ejecutar a tiempo, por lo que se van a tener que reintegrar a la
Tesorería Nacional. Con ese dinero se podría atajar la emergencia, al menos en el barrio
donde se detectó el brote. Pero también sabe que si autoriza la compra del antibiótico con
esos recursos, estaría incurriendo en el delito de malversación, por lo cual podría perder su
empleo y hasta ir preso. Naturalmente, Arturo no quiere que su incipiente carrera política
termine de ese modo, pero el Delegado Municipal está en el exterior, los organismos
competentes a nivel estatal y nacional no responden las llamadas, el tiempo corre y Arturo
tampoco quiere sentirse responsable por que sesenta o más personas se queden ciegas.
Dilema 2
Juan siempre quiso trabajar en la empresa XX por lo cual desde hace unos años
viene dejando currículos en ella de forma periódica. Para Juan sería un gran sueño poder
trabajar allí.
Un día, en el que está tomando mate con dos amigos, suena el teléfono. Atiende y es un
llamado de la empresa XX. Juan se siente realmente contento de –finalmente- combinar
una entrevista. Luego de una serie de reuniones y de hacer un chequeo médico entra a
trabajar allí… y ¡en su puesto más anhelado! Para ello deja el trabajo que tenía hacía unos
años, si bien el sueldo no es muy bueno siempre le permitió vivir sin aprietos. En el nuevo
trabajo, la relación con sus compañeros de trabajo en general es muy buena: hay algunos 357
con los que mucho no se lleva), pero la mayoría rápidamente lo integró en el grupo y hasta
VI Congreso Marplatense de Psicología
358
VI Congreso Marplatense de Psicología
¿Quién es nuestro “otro”, quién no lo es? Silvia Bleichmar cuenta que “los siervos de la
gleba no envidiaban al señor feudal, ni los campesinos a sus reyes porque tenían la
convicción de que habían nacidos en lugares diferentes, que el orden establecido los
había colocado en esa posición, y que no había razones para soñar siquiera con la
posibilidad de tener lo que el otro tenía. La envidia no transgrede más que en el borde
el principio de realidad, no se establece sino sobre la base de una cierta convicción de
simetría que conlleva la injusticia.” (Bleichmar, 2007) Entonces, si el argumento de
base de estos sujetos que se regularizarían ellos es que “quiero tener lo mismo que
tienen los otros” si estamos hablando aquí, aunque adquiera esta forma de la relación
con un semejante, si no la discusión pasaría a ser otra.
Por otro lado, solo un puñado de respuestas da cuenta de ese mismo
reconocimiento para con el dueño de la empresa (que podría ser concebido como un
representante de la autoridad o como un par) “yo no puedo decidir sobre el bolsillo del
empresario, eso es algo que no puedo hacer”.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Tal vez con sólo agregar una palabra connotaría en nuestros sentimientos de modo
diferente.
Si tan solo pudiésemos agregar”...hasta que la muerte del AMOR los separe”...
Todas las familias tienen un origen, una historia y todas las historias tienen un
principio. Según desde donde nos paremos el principio puede ubicarse en diferentes
momentos.
Sabemos que en este siglo tenemos que plantearnos diferentes interrogantes debido
a la multiplicidad de escenarios familiares en permanente proceso de evolución.
360
VI Congreso Marplatense de Psicología
Ser padres es una función que se construye con la experiencia y es sostenida por
sentimiento.
Tener claro porque una pareja pone fin a la relación es comenzar a trazar un nuevo
camino.
Ser padres separados es entonces una verdad y una categoría social a la que
necesitamos prestarle mucha atención estableciendo límites claros en la comunicación
como padres.
En una actitud adulta los padres son confiables, seguros y necesarios para los hijos.
Aprender a ser padres separados es tener muy claro los motivos que los llevaron a
poner fin al matrimonio y comenzar a elaborar un nuevo espacio en donde se elaboren
diferentes propuestas que faciliten acuerdos de crianza para los diferentes momentos
de la vida de un hijo.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Es muy común que parejas que no tienen elaboradas la ruptura, pongan en práctica
una batalla territorial individual que lleva a los hijos a generar incertidumbre y miedo.
Se puede discrepar pero el fin tiene que ser el mismo, lograr acuerdos y minimizar las
diferencias. Esto último conlleva a discernir y a descargar emocionalmente el discurso
ante los hijos.
Aprender a estar por encima de los conflictos personales que no fueron elaborados
mientras funcionabancomo familia es una ardua tarea que necesita de un
entrenamiento de “nuevas habilidades de comunicación”.
Aprender que esta nueva construcción lleva tiempo y esfuerzo, tiempo y buena
voluntad.
Todo los vínculos entre las personas se dan de modo diferente. Ser padres para
algunos individuos es lo que les da sentido a sus vidas, para otros es un sacrificio.
Para otros una fuente de prestigio y reconocimiento social. Otros padres privilegian su
desarrollo profesional por lo que sus hijos son de algún modo un “obstáculo” para su
realización. Para otros son un “regalo del cielo” Es decir para algunos es un deber y
para otros un derecho. La función de ser padres se construye, por lo tanto puede ser
una fuente de orgullo, un anhelo, una vocación, un proyecto, un accidente, una
casualidad, un frustrado deseo o una gran incógnita.
El ansia desmedida por querer saldar una “cuenta afectiva pendiente” con la ex pareja,
implica olvidar y dejar de mirar el territorio del niño. Este acto que simboliza” alguien
tiene que pagar por esto” “Me las vas a pagar”… En términos de operaciones
matemáticas creo que la suma de deudas no tiene que caer sobre los niños.
362
VI Congreso Marplatense de Psicología
Los seres humanos tenemos algunas “lentes de percepción” de la realidad que guían
nuestros pensamientos y procesamiento de la información, pero es importante
destacar que la velocidad con que se pretende elaborar daños emocionales no es
proporcional al proceso interno ni tampoco el “tiempo de la justicia” favorece y
fortalece saludables maneras de resolver cuestiones afectivas de la separación.
Combatir no es la cuestión.
Consideremos estas reflexiones para elaborar el territorio del niño y el territorio de los
padres:
El niño debe sentir que ninguno de los padres lo abandonará aunque estén
separados.
Fortalecer acciones tendientes a que el niño sienta que puede amarlos a los dos y que
no es juzgado por expresar palabras de afecto hacia uno de sus padres.
No ponerlos de testigos en situaciones generadas por los
adultos, peleas y conflictos.
-Evitar ponerlos como árbitros y mensajeros.
TENER EN CUENTA QUE TODO AQUELLO QUE SE HAGA ,PARA PERJUDICARSE
MUTUAMENTE COMO EX PAREJA, LASTIMA AL NIÑO.
Si la pareja se menosprecia, insulta e injuria delante del niño, lo perjudica y daña.
Los adultos tienen que entender que por sus cuestiones de pareja sin resolver, para el
niño son sus padres y los necesita a ambos.
Recordar y tener presente que estar con los hijos es un derecho, NO un privilegio de
alguno de los padres ya que los niños los necesitan a los dos.
363
VI Congreso Marplatense de Psicología
Evitar colocar al niño en situaciones en donde tenga que elegir entre uno y otro padre.
Reforzar la idea de que los hijos NO tienen la culpa de sus problemas.
Facilitar las expresiones de los niños ya que a veces cuando vuelven de la casa de
algunos de los padres manifiestan enojo, llanto. Eso no es que le “llenaron la cabeza”
sino la expresión de su tristeza.
No incumplir las visitas pactadas. Es prioridad cumplir el acuerdo pactado para ver a
los hijos.
Aceptar la nueva pareja de no de los padres es permitirle al hijo que pueda disfrutar
otros momentos.
Evitar utilizar a los hijos de espías para saber que hace uno u otro padre. Esta acción
conlleva en el niño la sensación de haberle fallado a uno u a otro padre.
Utilizar a los hijos como instrumento de venganza es contarle todo lo malo que ha
hecho. Lo único que se logra es llenar al hijo de resentimiento.
Asegurarle al niño que aunque la relación como pareja ya terminó, la relación con ellos
es siempre vigente. El niño necesita tener la imagen de cada uno de los padres
intacta.
Recordar que el niño que acepta que sus padres ya no se aman, solo quiere que se
respeten, ya que èl los quiere a los dos por igual.
Estos son solo algunos de los puntos a considerar en este aprendizaje de “ser
padres separados”, esta nueva categoría social que necesita de un cuidadoso
análisis, de cada situación de separación. Evitar generalizar los casos, ya que
la misma lleva a una especie de pereza mental que naturaliza ciertas prácticas
de maltrato muy dolorosas, cuyos receptores y herederos
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
La revolución de las madres, Laura Gutman, Edit. Del nuevo extremo, 2013
Cuando es preciso ser padres, Ricardo Levy, Lilian Banderas,Editorial Opción, 2007
Mujeres tratando a mujeres, Coord. Emilce Dio Bleichmar, Edit. Octaedro, 2011
364
VI Congreso Marplatense de Psicología
Ubicados desde la lógica del discurso jurídico, este aggiornamiento es solidario del
respeto por los derechos humanos, que se enlaza a la Ética del bien decir para cada
sujeto.
Las normas éticas básicas en la relación psicólogo paciente, suponen entre otras cosas el
respeto a la dignidad de las personas, el cuidado responsable en tanta preocupación por
el bienestar del otro, la integridad en las relaciones que supone integridad y mínimo
prejuicio
365
VI Congreso Marplatense de Psicología
El respeto a la dignidad del hombre, por el solo hecho de ser una persona, es el
fundamento de toda ética. Desde la mirada de Jonas podemos decir que el imperativo
contemporáneo, en tanto ética de la responsabilidad, plantea: “incluye en tu elección
presente, como objeto también de tu querer, la futura integridad del hombre” imperativo
sustentado en la experiencia de la vulnerabilidad de la vida
DESARROLLO
Este trabajo forma parte de un Proyecto más amplio denominado: “Valores, ética y
práctica científica”.
Es necesario distinguir entre la legalidad, que resulta de actuar conforme a la ley de
Identidad de género y la legitimidad que surge de actuar conforme a la fundamentación
que otorgaría la ética
El antropólogo francés Maurice Godelier lo ha expresado así: “No es la sexualidad lo que
obsesiona a la sociedad, sino la sociedad la que obsesiona la sexualidad del cuerpo. Las
diferencias relativas al sexo entre los cuerpos son evocadas continuamente como
testimonios de relaciones y fenómenos sociales que nada tienen que ver con la
sexualidad, y no sólo como testimonio de, sino también como testimonio para; en otras
palabras, como legitimación”
Transitamos un tiempo que confronta a cambios profundos, inéditos sobre los modos de
hacer una familia. Somos testigos de nuevas uniones.
En nuestro país, fue aprobada el 9 de mayo del año 2012 la ley de identidad de género,
que conlleva al respeto por el Otro, lo diverso, lo múltiple como el matrimonio igualitario
En la actualidad se sigue discutiendo desde un paradigma binario de género que vulnera
los derechos alcanzados desde la ley.
Es por eso que, a través de esta investigación nos proponemos indagar los factores que
alientan, dificultan o condicionan a los profesionales psicólogos de las instituciones de
salud, en la implementación de las nuevas prácticas relativas a la autonomía de los
pacientes, teniendo en cuenta los derechos vigentes. Dadas así las cosas sería posible
pensar que el nuevo corpus de leyes bastaría para cambiar y o modificar la conducta de
los profesionales en relación a ellas. Continuamente los grupos y colectivos Trans en
Argentina están exigiendo un acceso autónomo y responsable a los tratamientos
366
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Las leyes jurídicas son necesarias pero insuficientes para garantizar que una
sociedad sea justa ya que no siempre consideran todas las aristas de una
problemática y son limitadas para dar cuenta de la complejidad de los casos
particulares
No es bueno juridizar absolutamente la conflictividad bioética, pues daría cuenta
de una sociedad incapaz de ejercer la libre reflexión acerca de lo que es correcto
en diferentes casos y aceptar que es posible disentir respecto de algunas
cuestiones.
La reflexión ética que legitima las leyes jurídicas nos emancipa de las posibles
totalidades dogmáticas y permite revisar la normativa jurídica desde perspectivas
que tengan que ver con intereses que no pueden ser universalizables pero sí
atendibles
Es problemático que las leyes no surjan de debates en la comunidad y lo más
temible es que supongan que los problemas se resuelvan una vez sancionadas las
leyes. La bioética aborda verdaderos dilemas, lo que implica que los problemas
no desaparecen, sólo se minimizan. El derecho tiende a preservar la racionalidad
estratégica en lugar de la racionalidad comunicativa porque la ley suele cumplirse
estratégicamente: por miedo a la sanción y no por propia convicción.
Las éticas que aceptan el pluralismo moral proponen procedimientos de acción
que reconociendo las diferencias se obligan a obtener normas universalizables
en contexto
Como dice Delia Outomuro (2003) el mejor argumento es aquél que nadie
impone, pero que se impone a todos.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
Apel K.O.; (1990) “Una Ética de la Responsabilidad en la era de la ciencia” Buenos Aires,
1ª Jornadas de Ética, U.B.A.: Almagesto
Maurice Godelier,(1981) "The Origins or Male Domination", en New Left Review, 12,p 17.
367
VI Congreso Marplatense de Psicología
La Rocca, S.; Naveira, L. (Comp), (2012) “ Valores, Ética y Práctica Científica II. La
percepción social de las prácticas científicas desde la dimensión ética”; Buenos Aires,
Ediciones Suarez
Mauas Liliana. (2012) “Un desorden creciente de la sexuación”. Barcelona.
Outomuro, D (2004) _”Manual de fundamentos de la bioética”. Editorial Magister.
Outomuro, D. (2003) Algunas observaciones sobre el estado actual de la bioética en
argentina Acta Bioethica ; año IX, NO 2
368
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
¿FUNCIÓN O GÉNERO?
Uno de los aspectos que merece ser mencionado en relación a la lectura que
Rozitchner hace de la teoría lacaniana podría situarse en el siguiente párrafo, el cual
se encuentra enmarcado en una reflexión sobre la castración en la mencionada
conferencia: “(…) implorarla (la castración) para evitar que las mandíbulas de cocodrilo
del monstruo materno femenino se cierren y nos devoren, como Lacan la representa.
¡Si no fuera por el padre que le pone esa columna de granito, ese “rouleau” entre sus
dientes! Como si la amenaza del padre no fuera tanto o mucho más terrorífica que la
369
VI Congreso Marplatense de Psicología
que se le atribuye a la madre. Como si todas las madres, no las de estructura, fueran
tan terribles como la descripta por Lacan.” (Rozitchner, 2006).
Siguiendo a AnalíaCacciari y Horacio Martinez podemos notar otra perspectiva
que evita la superposición de las funciones parentales y el género de las personas que
las encarnan a lo largo del complejo de Edipo planteado por Lacan: “El síntoma del
niño habla de aquello que resulta sintomático, no en su familia, sino en ésta en tanto
soporte de la estructura familiar (entendiendo que, para Lacan, la estructura familiar es
la que vehiculiza dos funciones: “deseo de la madre” y “nombre del padre”)” (Cacciari y
Martinez, 2009: 2).
Estos autores concluyen en que “Familia conyugal” y “pareja parental” son dos
modos que tiene Lacan de articular dos niveles que no establecen entre sí relaciones
de complementariedad. Lo que Lacan busca es articular una diferencia entre las
funciones parentales (madre y padre) y el nivel de la pareja, es decir la relación
hombre-mujer.
Si ubicamos el foco específicamente en la subjetividad de la mujer, se erige
una gran diferencia entre la perspectiva freudiana (la cual cita Rozitchner) y la
lacaniana:
El filósofo argentino cuestiona: “(…), cuando veo que la mujer-madre en el campo de
su teoría -es una diferencia fundamental que tiene con el Freud judío-, la mujer en
tanto madre aparece tan negada como para situar en ella a la pulsión de muerte. Y me
sorprendo que tantas mujeres psicoanalistas lacanianas acepten complacidas una
concepción teórica que descalifica lo materno femenino (…)” (Rozitchner, 2006).
Es notable la supervivencia y constancia de esta crítica, de tal forma que el propio
Lacan en su seminario, exactamente cincuenta años antes de la conferencia de León
Rozitchner, contrarrestaba distinguiendo la superposición entre el registro imaginario
del simbólico: “Lo que cuenta en todo esto, ¿es sólo el grado de carencia paterna?
¿Tenemos que fiarnos de características supuestamente reales y concretas, que tan
difícil resulta averiguar en que quedan? Porque ¿qué significa exactamente eso de
que el padre real es más o menos carente? (…) y finalmente nos dicen, sin fijarse
siquiera, en nombre de no sé qué lógica que sería supuestamente la nuestra, que en
este punto las cosas son más contradictorias. Pues bien, por el contrario, para
nosotros todo se ordena en función de que para el niño determinadas imágenes tienen
un funcionamiento simbólico.” (Lacan, 1956-57: 261-262).
Consideramos que, Rozitchner incurre en una yuxtaposición de lo imaginario
con lo simbólico al decirnos que deslindar lo materno de lo femenino es una
descalificación para las mujeres, y que no comprende cómo puede ser que tantas
analistas lo "acepten complacidas". Siguiendo los parámetros lacanianos mostrados
por Cacciari y Martinez notamos que no sería acorde plantear una sinonimia entre el
proceso de sexuación de una mujer, y el encarnar la función de deseo materno a lo
largo del complejo de Edipo de su descendencia.
No obstante a esto, Rozitchnercontinúa:“Una teoría que acentúa hasta ese extremo la
castración y el matricidio debe venirle de perilla en el inconsciente a tanta mujer que
forma parte de los círculos psicoanalíticos; pero sería un triste consuelo.”(Rozitchner,
2006).
Para esclarecer un tanto más esta cuestión, Lacan nos enuncia: “Los analistas,
muy especialmente los analistas de sexo femenino, a menudo objetan que no ven
370
VI Congreso Marplatense de Psicología
porqué las mujeres han de estar más destinadas que los demás a desear
precisamente lo que no tienen, o a creer que les falta. Pues bien, por razones-
limitémonos a esto- relacionadas con la existencia del significante y su insistencia
característica. Si el falo se impone de forma predominante entre otras imágenes al
deseo de la madre, es porque tiene un valor simbólico en el sistema significante, y se
retransmite así a través de todos los textos del discurso interhumano” (Lacan, 1956-
57: 261).
Si nos basamos en la enseñanza lacaniana, también proveniente de su
Seminario, entendemos que la Privación se presenta como la operación del Padre
sobre la Madre, que no puede ser castrada en la medida en que no posee pene. Por
tanto se podría hablar de una operación de falta en lo Real, en tanto despeja la
fantasía infantil de la madre fálica, haciendo patente la carencia de pene. Pero como
en lo real, por definición, no falta nada, esta operación se realiza a partir de un
símbolo, el falo simbólico, que será a partir de allí lo que el padre hace faltar en la
madre respecto al niño.
Ahora bien, luego de esclarecer un tanto más esta “falta” femenina; que no se
trata de una cuestión genital sino simbólica, y no es que hablamos de disminución sino
de otro tipo de estructura, volvemos a Rozitchner que en un nuevo cuestionamiento al
Edipo lacaniano, nos dice que “queda aniquilada totalmente la función del padre”
(Rozitchner, 2006).
Lacan afirma: “Al fin y al cabo, nadie puede decir qué significa en verdad ser
padre, salvo que es algo que de entrada forma parte del juego. Sólo el juego jugado
con el padre, el juego de gana el que pierde, por así decirlo, le permite al niño
conquistar la vía por la que se registra en él la primera inscripción de la ley” (Lacan,
1956-57: 211).
Cacciari y Martinez nos explican la cita precedente: “El padre se presenta así
como un elemento de lo Simbólico, un significante, pero que requiere a la vez un
sostén real, en la figura de un jugador que realice su parte del juego: alguien que
garantiza un lugar de invulnerabilidad (‘siempre gana’), pero que a la vez transporta al
perdedor a otra dimensión (pues se trata de un exótico juego en el que ‘gana el que
pierde’). Perder, someterse a la ley del padre, le permite al niño “ganar” un lugar en el
universo normativizado.” (Cacciari y Martinez, 2011: 3).
La potestad de brindarle al niño su inscripción en el mundo de la legalidad y
normativizar su universo, a nuestro entender, no es del todo compatible con la idea de
Rozitchner del “empobrecimiento de la función paterna”. Más aun, si tenemos en
cuenta el valor central que el complejo de Edipo tiene en la producción subjetiva a lo
largo de los primeros años del niño.
Si agudizamos un tanto la perspectiva, consideramos válido recordar que al
principio de la clase 13, ubica al padre real como agente de la castración y al padre
imaginario como agente de la privación. Operaciones ellas (castración y privación),
nodales en el desarrollo del complejo de Edipo; y con una preponderancia fundamental
de la mencionada función paterna, que consta de ser el significante que viene a
sustituir al significante Deseo de la Madre para producir la significación fálica.
Asimismo, Jacques Lacan al enunciar la diferenciación del padre en su
vertiente imaginaria, de la simbólica y la real, nos dice sobre el primero: Padre
Imaginario: “es con él con quien siempre nos encontramos. A él se refiere muy a
371
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIÓN
De esta forma intentamos dar cuenta de lo insalvable que se torna analizar una
teoría de la subjetividad olvidando sus postulados centrales, (el registro de lo simbólico
en este caso), ya que entonces perdería coherencia en sus determinaciones tanto
prácticas como teóricas.
Asimismo, es válido recordar que es condición cine qua non reconocer y
otorgarle la justa importancia y validez contextual a los momentos de la teoría de un
autor (tanto lógicos como temporales), de modo de advertir sus inscripciones y
reinscripciones a lo largo de su teorización (o en este caso, de su enseñanza).
Delia Elmer nos explica el porqué de la acentuación de Lacan en lo simbólico:
“Así como en la primera etapa de su enseñanza aunque más tarde él lo niega, hay una
sobrevaloración de lo Simbólico en detrimento de lo Imaginario, esto en gran parte
estaba determinado por su discusión con los post-freudianos y era un intento de quitar
el bla, bla, bla imaginario propio de esa época. Él tiene un momento en “…Ou pire”,
por ejemplo donde dice, “yo nunca dije lo simbólico ahhh… lo imaginario puaj”. Pero,
no obstante, es recién ahora, me refiero al seminario R.S.I que da a lo imaginario su
justo lugar…. (Elmer, 2000: 11)
372
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Rozitchner, L. (2006). EdiposTopía, 48.
373
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
En la actualidad, la familia ha ido experimentando un pasaje de la familia
Conyugal a la familia monoparental, cada vez más generalizada observamos, nuevas
formas de lazos familiares Aparecen nuevas formas de uniones que conviven con las
anteriores, que cuestionan o sacuden las condiciones estándar de esa trasmisión
original: familias constituidas por parejas del mismo sexo, monoparentales, ampliadas,
reconstituidas.
En contrapartida, la exclusión del hombre en el ejercicio del rol paterno, era la forma
de monoparentalidad más frecuente hasta no hace muchos años. Mujeres solas, sin
figuras masculinas, que acompañan la crianza de sus hijos biológicos o adoptivos. En
374
VI Congreso Marplatense de Psicología
estos últimos años, se sumaron los hijos nacidos por inseminación con semen donante
y también la adopción de embriones.
Hasta aquí podríamos decir que estamos frente a nuevos formatos de familia; pero, si
nos trasladásemos por un instante a la Roma antigua, veríamos que existía como
práctica el alquiler de vientre, ya que según las costumbres un hombre cuya mujer era
fecunda, podía “prestar o alquilar” temporalmente a su esposa a quien no tenía hijos y
se lo pedía. Se trataba de un acuerdo entre hombres y las mujeres no tenían opinión,
escribe la antropóloga francesa Françoise Héritier (Heritier, 1992).
De modo que frente a los nuevos orígenes se hacen visibles nuevos interrogantes y
enigmas a resolver.
Nuevas formas de nacer. Nuevos enigmas. Son tantas y tan variadas las formas de
nacer hoy. Somos testigos de la naturalización que ha adquirido la implementación de
375
VI Congreso Marplatense de Psicología
Ya no podemos decir como entonces, “madre hay una sola”, nos encontramos de
golpe con una pluralidad de madres: madre gestante, madre genética, madre social.
Lo cual nos lleva a la pregunta ¿quién es la madre?: ¿la que aporta el útero, la que
dona el óvulo, o la que adopta?
También podríamos preguntarnos ¿quién es el padre?: ¿el que aporta el esperma, el
que cría? Este punto nos conduce al debate alrededor de las funciones parentales y
aquellos que las encarnan, como también a pensar en las diferencias entre genitor y
padre.
Estos son los nuevos escenarios en fertilidad asistida. En los casos de alquiler de
vientre resulta inédito que una mujer esté “frente” a su embarazo ya que siempre
estuvo “en” su embarazo; aquel que está siempre “frente” es el hombre.
Hay situaciones que no tienen referentes ni experiencias previas acerca de los efectos
de impacto psíquico frente a estas nuevas formas de acceder a una parentalidad.
Pueden funcionar como un retorno de los fantasmas infantiles sobre la realidad en la
que todo puede ser posible, alimentando la vieja omnipotencia infantil a la que tanto
costó renunciar en la infancia, promoviendo a su vez distintas versiones de la novela
familiar. Hoy en día la fantasía no sería ser una hija o hijo de otros padres, sino haber
nacido de genes de padres desconocidos por ovodonación o espermodonación, o bien
ser un embrión perdido y nunca reclamado de un laboratorio.
Ya nada garantiza los lazos biológicos en la parentalidad. Se diluyen los límites entre
la realidad y la fantasía, surgiendo interrogantes en distintas direcciones.
A nivel de los vínculos, ¿cómo abordar la sexualidad de las parejas en el seno de las
técnicas reproductivas? ¿Cómo han transformado los lazos de sangre, la filiación
biológica y la filiación social o afectiva? Por otra parte, la cuestión del anonimato en la
filiación deja una estela de incertidumbre sobre los orígenes de muchos niños cuya
herencia anónima, a su vez seguirá silenciada en las generaciones sucesivas.
376
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
377
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
Las mujeres y niñas se van consolidando como sujetos dentro de estos postulados
culturales. Sabiéndose, algunas, excluidasde la historia universal, de su historia y otras
ni sospechándolo.
Lagunas, C. (2000)sostiene y enseña que “Estudiar la problemática del género es hoy
una realidad científica posible” y afirma que la historia tradicional positiva y liberal no
dio cabida a las mujeres, suponiendo que su exclusión se debió a su falta de acción
protagónica en los grandes acontecimientos de la historia, especialmente los políticos.
Así como la estructura social está dada o impuesta por las clases más fuertes que
proponen sus leyes como únicas y objetivas, así también la cultura y sus instrumentos
se transforman en principios de verdad, cuando en realidad no son más que
proyecciones de un entramado de interpretaciones de la realidad que se posee y
proyecta fuera de sí misma esa parte de la sociedad que ya sabe de su poder
dominante.
Esta cultura patriarcal pone en marcha varios mecanismos para su perpetuación. Uno
de esos mecanismos es la violencia contra las mujeres y su silenciamiento.
Cuando hablamos de violencia contra las mujeres lo abordamos desde la ley, que
define violencia contra las mujeres como toda conducta, acción u omisión, que de
manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en
una relación desigual de poder, afecte la vida, libertad, dignidad, integridad física,
378
VI Congreso Marplatense de Psicología
1
LEY Nº 26.485 de protección integral para prevenir,sancionar y erradicar la violencia contra
las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales y Decreto
Reglamentario 1011/2010. Se considera violencia indirecta, a los efectos de la presente ley,
toda conducta, acción u omisión, disposición, criterio o práctica discriminatoria que ponga a la
mujer en desventaja con respecto al varón.
2
Existe otra forma de conocer que no es por medio de pensamiento claro y consciente; esta
otra forma tiene que ver con saber-deseo, saber a través del deseo, un saber que resulta de la
calidad de sujeto deseante del ser humano. Estaría relacionado con creencias e ilusiones que
permiten ilusionar la realización de este deseo. Ver Eva Giberti, La mujer y la violencia invisible.
3
Realidad psíquica: designa lo que en el psiquismo del sujeto, presenta una coherencia y una
resistencia comparables a las de la realidad material; se trata fundamentarme del deseo
inconsciente y de las fantasías de con él relacionadas, ver Laplanche, Pontalis Diccionario de
psicoanálisis, pág. 353.
379
VI Congreso Marplatense de Psicología
DATOS Y ESCENARIOS
A nivel internacional India es el cuarto país más peligroso para las mujeres del
mundo. En la India, cerca del 37 % de las mujeres que han estado casadas alguna vez
ha sufrido violencia por parte de su esposo.
En Argentina, los femicidios han crecido un 16% en el 2013 relación al año
anterior: esto significa que casi 300 mujeres fueron asesinada en el país durante ese
año. Un femicidio cada 30hs. “Es el númeromás alto de los últimos seis años” destacó
Ada Beatriz Rico4.
Según su ONG, el 63 % fueron perpetrados por esposos, parejas, novios o
amantes. El 16 % de las víctimas había hecho la denuncia contra quien luego la
asesina, o había obtenido en la Justicia una medida de prohibición de acercamiento o
de exclusión de hogar para el agresor.
El lugar más peligroso sigue resultando el propio hogar más que la vía pública
para las víctimas de violencia de género: el 52 % de las víctimas fue asesinada en la
vivienda que compartía con el agresor o en la de ella.
Cuatro víctimas pertenecían a pueblos originarios, y en sus casos hubo abuso
sexual seguido de muerte. En relación a la provincia de Buenos Aires, por su densidad
de población, reúne la mayor cantidad de femicidios: 89; le siguen Córdoba, 31; Santa
Fe, 28, Salta y Chaco, con 16.
Es por esto que considero necesario visibilizar la problemática de la violencia
de género, ya que la misma se encuentra naturalizada, aceptada, sin posibilidad de
revisión crítica.
La desigualdad entre los géneros lleva a que, en numerosos contextos, las
mujeres sean consideradas inferiores a los varones. El tratamiento inferior se expresa
en diversas formas de comportamiento, el más temible de los cuales es que los
varones sancionan a las mujeres valiéndose de sus podes, el paradigma de esta
4
Directora del Observatorio de Femicidios lleva el nombre de Adriana Marisel Zambrano, La
Casa del Encuentro, en Argentina. El observatorio lleva el nombre de una mujer, asesinada a
golpes en 2008 cuando tenía 28 años en la localidad jujeña de Palpalá por su pareja, Juan
Manuel Alejandro Zerda, quien fue condenado por el hecho “por homicidio preterintencional” a
sólo cinco años de cárcel. Es decir, la Justicia consideró que no tuvo intención de matarla,
aunque la molió a palos. Zerda ya recuperó la libertad. Y la hija que tuvo con Zambrano, y que
tenía apenas nueve meses de vida cuando la joven fue muerta, está siendo obligada por la
Justicia a ver al asesino de su madre dos veces por semana, contó Tuñez. Este es un caso
testigo que presentó ayer La Casa del Encuentro al fundamentar un proyecto de ley para quitar
la patria potestad a los femicidas. “No es un proyecto cerrado. Queremos que diputadas y
diputados lo tomen para discutir el tema”, apuntó Tuñez. No fue el único reclamo de la entidad.
Junto con las estadísticas presentó un petitorio con un abanico de medidas que apuntan a
mejorar el abordaje del problema de la violencia hacia las mujeres.
380
VI Congreso Marplatense de Psicología
sanción es la violencia de género dirigida hacia las mujeres que ejercen la prostitución
por ejemplo.
Los escenarios violentos crean un tejido de estados donde las víctimas quedan
atrapada sin dar cuenta de su posición y, de esta manera, sin posibilidad de pedir
ayuda, sin posibilidad de darse cuenta que la víctima es ella y los niños y niñas que la
acompañan.
Los/las licenciados/as en psicología son unos de los principales promotores de
salud y son quienes, dentro de un sistema de salud integral y equipos
interdisciplinares, deberían poder detectar estas situaciones aún antes de que
comiencen a manifestarse. Pero, a su vez, las/los psicólogas/os tienen internalizados
sus propios estereotipos de lo que es ser mujer en esta sociedad y lo que es ser varón
en la misma y, por ende, se relaciona con que es ser una mujer sana y un varón sano5.
Un estudio realizado por Broverman, Inge K.; Broverman, Donald M.; Clarkson,
Susan R6. permitió observar la relación entre los estereotipos de género de médicos y
terapeutas y sus juicios clínicos en salud mental. Trabajaron con la hipótesis de que
los juicios clínicos sobre las características de los individuos sanos serían diferentes
en función del sexo de la persona juzgada, y que estas diferencias podrían ser
paralelas al estereotipo de los diferentes sexos. Una hipótesis segunda predijo que los
comportamientos y características juzgados saludable para un adulto, el sexo no
especificado, que se supone que reflejan un nivel ideal de salud, se asemejan a los
comportamientos juzgados saludables para los varones, pero no para las mujeres.
Ambas hipótesis fueron confirmadas.
Estos profesionales poseen internalizado todo ello porque respiran en esta cultura
patriarcal que los moldea de la mejor forma a sus intereses y servicios.
Pero los licenciados/as en psicología tiene como una de sus deberes, según el
artículo 2 de la nueva ley de salud mental, “la aplicación y/o indicación de teorías,
métodos, recursos, procedimientos y/o técnicas específicas en tratamiento y
prevención de la salud mental de las personas”.
Un punto inicial para eliminar las violencias contra las mujeres es el de poder
debatir seriamente la problemática de género y la vulnerabilidad y opresión en la que
se encuentran las mujeres y niñas. Redes de mujeres y redes feministas en los últimos
años han contribuido al debate público, con la generación de propuestas y los avances
en el conocimiento sobre la violencia de género con el fin de centrarse en las políticas
5
Los parámetros de sanidad son medidos tomando como protagonista al género masculino.
6
Sex-role stereotypes and clinical judgments of mental health. Broverman, Inge K.; Broverman,
Donald M.; Clarkson, Frank E.; Rosenkrantz, Paul S.; Vogel, Susan R. Journal of Consulting
and Clinical Psychology, Vol 34(1), Feb 1970, 1-7. doi. (Registro de bases de
datosPsycINFO(c) 2010APA, todos los derechos reservados).
381
VI Congreso Marplatense de Psicología
públicas, que en muchos casos demostró deficiencias y carencias que habría que
superar.
Como primera medida las investigaciones que se realicen en salud tendrán que tomar
género como categoría analítica. Si no tenemos disponibles investigaciones con esta
variable caemos en un vacío de información que no dejará planificar estrategias
correctas para cada género, teniendo en cuenta sus particularidades y fragilidades. Y
si esto sucede, indicaría que seguimos silenciando a las mujeres y niñas como ocurrió
con las enfermedades cardiovasculares en el último siglo7.
Siguiendo a Débora Tajer, Mariana Gaba8las autoras plantean que en las prácticas de
salud mental existen diversos modelos de atención. Comenzando desde el
asistencialista hasta las prácticas que incluyen diferentes grados de integralidad. “Esta
diversidad implica entender que coexisten, dentro de las prácticas y discursos
referidos a las mujeres, multiplicidades de paradigmas subyacentes a la atención en la
salud.”
Siguiendo a esta autora tomaremos de ella la escala que propone para medir el grado
de integralidad y equidad de género en los servicios de salud. Esta escala proporciona
información precisa como guía para poder aplicar una atención en salud con
perspectiva de género.
Propone cuatro modelos de atención que ponen en marcha los y las profesionales
dentro del sistema de salud que, a su vez, se evalúan teniendo en cuenta cuatro ejes
de análisis considerados relevantes a la hora de atender personas desde esta
perspectiva. Modelos de atención: integral, semiintegral, transicional y asistencialista.
Y los cuatro ejes son: integralidad, ciudadanía, autonomía y equidad.
7
Se difundían síntomas de ataques cardicaco universalizando los masculinos. Se sabe
actualmente que los síntomas cardiacos que padecen las mujeres son destinos y por ende han
muerto, y siguen muriendo mujeres porque no saben los síntomas que como género padecen
al tener un ataque al corazón.
8
Tajer Débora, Genero y salud las políticas en acción, Lugar Editorial, 2012, pág. 49.
382
VI Congreso Marplatense de Psicología
PROGRAMAS Y SERVICIOS
383
VI Congreso Marplatense de Psicología
El abordaje de las víctimas de violencia tiene que llevarse adelante con asistencia
interdisciplinaria y trasdisciplinaria con el objetivo de proteger a las víctimas y
fortalecerlas para que puedan armar proyectos libres de violencia. Y fomentar la libre
violencia en los ámbitos de trabajo de los y las profesionales, ya que, como trabajamos
en páginas anteriores respiranestán inmersos en esta cultura patriarcal y violenta.
CONCLUSIÓN
10
Según estudios realizados por la Fundación Fair Wear, la violencia contra las mujeres está
muy extendida en las fábricas de ropa de la India. La violencia va desde el abuso verbal y físico
con el acoso sexual y la volación. Ver ONU Mujeres, In India’s garment factories, stitching
clothes and a culture of non-violence, 2014.
384
VI Congreso Marplatense de Psicología
Esto nos permite aventurar una primera recomendación que es que se hable del tema,
en todos los niveles donde el/la psicólogo/a se desempeñe, de manera tal de ponerlo/a
en conocimiento de la desigualdad que existe entre varones y mujeres, en la sociedad
en la que vivimos.
Creemos que tanto las investigaciones como la atención en salud desde un análisis de
componentes desde una perspectiva del campo de la subjetividad y del género, puede
contribuir al logro de una mejor calidad de vida de mujeres y niñas y por ende de toda
la sociedad.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
11
Muchas veces nos encontramos con profesionales que quieren denunciar hechos que han vivenciado
sus pacientes pero las instituciones en la cual trabajan no las respaldan o las dejan solas; aunque sea
obligación denunciar si la víctima es menor de edad.
385
VI Congreso Marplatense de Psicología
386
VI Congreso Marplatense de Psicología
Gómez, Mariana
Degiorgi, Gabriela
González, David
INTRODUCCIÓN
1
Proyecto: Construcciones discursivas y dilemas actuales sobre el cuerpo y la identidad. Análisis de los
nuevos derechos civiles en la argentina y su vinculación con el campo de la bioética y la biopolítica
(2014-2015). CIECS (CONICET y UNC).
387
VI Congreso Marplatense de Psicología
2
Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans.
3
Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina.
388
VI Congreso Marplatense de Psicología
LGTBI4 de todo el país e independientes. Este frente tenía como objetivo crear un
proyecto de ley que garantice los medios necesarios para que las personas trans
puedan acceder a la plena ciudadanía.
El proyecto es presentado el 11 de noviembre de 2010 en la Cámara de Diputados
y aprobado por 167 votos a favor, 17 en contra y 7 abstenciones. Luego, el 9 de mayo
del 2012 es aprobado en el Senado de la nación por 55 votos a favor y una
abstención, convirtiéndose así en ley.
La misma va a definir por identidad de género a la vivencia interna e individual del
género tal como cada persona la siente, la cual puede corresponder o no con el sexo
asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo.
Al mismo tiempo, va a registrar en texto de ley el derecho humano fundamental de
toda persona al reconocimiento de su identidad de género, a ser tratada de acuerdo a
ella y al libre desarrollo de su persona conforme dicha identidad, pautándose de
manera particular, a ser identificada de ese modo en los instrumentos que acreditan su
identidad. Es así que bajo el amparo de la presente ley, la persona podrá solicitar la
rectificación registral del sexo, y el cambio de nombre de pila e imagen, cuando no
coincidan con su identidad de género autopercibida. La rectificación registral no
alterará la titularidad de los derechos y obligaciones jurídicas que pudieran
corresponder a la persona con anterioridad a la inscripción del cambio registral, ni las
provenientes de las relaciones propias del derecho de familia en todos sus órdenes y
grados, las que se mantendrán inmodificables, incluida la adopción.
En síntesis, la ley pondera el trato digno y el respeto por la identidad de género
adoptada por las personas, sosteniendo que ninguna norma, reglamentación o
procedimiento podrá limitar, restringir, excluir o suprimir el ejercicio de este derecho,
debiendo interpretarse y aplicarse las normas siempre a favor del acceso al mismo.
Se trata de la primera ley nacional que recepta este concepto, lo cual vuelve a
colocar a nuestro país a la vanguardia mundial en materia de reconocimiento de
derechos, en este caso, de identidad de género.
La norma que analizamos viene a instalar legal y discursivamente una postura
claramente despatologizadora, no solo oponiéndose a cualquier abordaje de este tipo,
sino también configurándose en un motivo válido de revisión de todas aquellas
clasificaciones diagnósticas.
4
Siglas que designan colectivamente a lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersex. Este conjunto es
abierto y en continuo cambio.
5
Desde esta perspectiva, si bien el concepto de identidad como el de género no pertenecen al campo
epistémico del psicoanálisis, podemos pensar desde el concepto de “nominalismo” (Laurent, 2004) los
nuevos nombres que involucran lo trans, lo bi, lo homo. Cuestión que no será desarrollada en esta
oportunidad.
389
VI Congreso Marplatense de Psicología
La cuestión del género, a nivel discursivo, empieza a cristalizar en los años 50’-60’.
Por un lado, como cuestión clínica en el campo de la psiquiatría y de la psicología del
yo, cuando la técnica médica y quirúrgica está preparada para el cambio de sexo y por
el otro, por parte del feminismo de la llamada “segunda ola” al que se unirán los
movimientos gay y lésbicos. Se comienza a elaborar la concepción del género como
categoría política y cultural. Así, las ideas de jerarquía de género, el falocentrismo, el
binarismo hombre/mujer, serán los campos de batalla de estos campos (Álvarez, M. et
al, 2002).
Eric Laurent (2010) ubica el cambio que se produce desde el “orgullo homosexual”
rebelde de los años sesenta a la búsqueda de lo igual. A partir del cual el gay quiere
ser considerado un igual. Quiere ser esposo, padre, trabajador, incluso soldado, igual
que el resto de la sociedad. Ya no un contestatario, sino alguien que busca el
reconocimiento por parte del Estado.
Para Eric Laurent, el acontecimiento que produce la ruptura entre estos dos
paradigmas es la epidemia de HIV que marca una detención en el carácter
expansionista y triunfante de la felicidad homosexual a la que Foucault se refería
(Fajnwaks, 2013). Surgen así, asociaciones representativas que permiten la
participación ciudadana de estas comunidades.
A su vez, el discurso político busca romper la lógica binaria hombre-mujer (aunque
paradójicamente introduce el “todos y todas”), ampliando las posibilidades de elección
identitaria a lo que se conoce como GLTTBI (gay, lesbiana, transgénero, transexual,
bisexual, intersexo), buscando pulverizar las formas de identificación. Se busca la
desidentificación para hacer aparecer una identidad como sujeto político (Musachi,
2010). Es decir, no hay diferencia sexual, sino una multiplicidad de diferencias. Así,
según Musachi, GLTTBI bien podría ser el nombre de una comunidad de goce en la
que cada uno busca darse su propio nombre, más allá de todo nombre universal6.
Ahora bien, ¿de qué modo el psicoanálisis puede permitirnos esclarecer estos
nuevos paradigmas y discursos sociales, sobre todo teniendo en cuenta algunos
malentendidos respecto de la teoría de Lacan en el seno de los Gender Studies
(Alvarez et al., 2002)?
Si bien el sintagma freudiano de la anatomía es el destino (Freud, 1996 [1923-25])
parece haber caído, no podemos olvidar la lectura de su texto Pulsiones y destinos de
pulsión, donde Freud (1996 [1914-16]) introduce a la pulsión como indefinida y, por lo
tanto, como señala Richard Klein (2002), inasequible para el pensamiento
psicologizante. Esto en función de un fuerte contraste con lo que Freud llama
sexualidad genital que implica lo definible y no ambiguo.
Pero Lacan nos indica otra orientación epistémica. La cuestión ya no pasa por el
destino fijado en lo real del cuerpo, sino por el fantasma, lugar donde se plantean los
modos de elección sexual y de goce.
El género es un sistema que excluye la pulsión ya que no es posible incluir algo
tan indefinido en un sistema tan definido como el género. Por el contrario, la pulsión
está incluida en la sexuación.
6
Recientemente (abril de 2014), la red social Facebook anunció que ofrecerá a sus usuarios 50 opciones
de identificación de género. En la categoría Información Básica, el desplegable ahora incluirá opciones
personalizadas y no binarias, tales como intersexo, neutro, andrógino, sin género, género dudoso, género
fluido, variante de género, queer o ninguno.
390
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VI Congreso Marplatense de Psicología
propio cuerpo y nombre. Por el otro, la instauración legal del Matrimonio Civil
establece una nueva construcción discursiva que va incidiendo y se va instalando de
manera progresiva en las subjetividades sociales, lo que hace que la incorporación de
esta nueva ley refuerce discursivamente y se acomode dentro de un proceso previo
iniciado con la ley anterior.
PALABRAS FINALES
392
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCION
DESARROLLO
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Descripción de la propuesta:
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La Psicología Como Promotora de Derechos
“Hacia la interdisciplinariedad de las practicas en los escenarios actuales “
DESAMPARO Y SUBJETIVACIÓN
Acuña,Juana
Buzzella,Paola
Quirós, Margarita
Revaneira,Paola
Ruiz, Mariana
INTRODUCCION
“El hecho de que los seres humanos sean crías destinadas a humanizarse en la
cultura marca un punto insoslayable de su constitución: la presencia del semejante es
inherente a su organización misma. En el otro se alimentan no sólo nuestras bocas sino
nuestras mentes; de él, recibimos junto con la leche, el odio y el amor, nuestras
preferencias morales y nuestras valoraciones ideológicas. El otro está inscripto en
nosotros, y esto es inevitable”. 1
400
fragilidad en el sujeto (indefensión); caída de la función estructurante del Otro que no
puede ser leída exclusivamente en clave de los déficit parentales. Son múltiples factores
los que pueden arrojar a los sujetos a la declinación de la posición de Amparador. Desde
lo histórico-social, los severos procesos de desconstrucción de las subjetividades, efecto
de la desocupación, marginalidad y el deterioro de la calidad de vida, llevados por la
depredación económica del modelo neoliberal, han dejado como prima, fragilización de
los lazos sociales y vinculares, desamparo, falta de apuntalamientos de “red”. “ (… )
junto con una creciente fragmentación de vínculos, y la pérdida de sentido en tanto sujeto
social perteneciente a una comunidad “ (Fernández, 2006)
El individuo es reconocido, nombrado, está en el habla del otro, antes de advenir a una
conciencia de sí. Lo cual hace que su experiencia de individuación solo pueda sostenerse
en esta función de reconocimiento y decir del otro sobre sí. Su filiación e identidad
provienen del decir de otro y requieren del reconocimiento para su asunción individual
(Galende,E. 1998.)
Desde nuestra perspectiva, nos interrogamos qué sucede cuando estos sostenes, redes,
o apuntalamientos se encuentran ausentes, son precarios o discontinuos. En qué lugar
queda el sujeto, merced a qué respaldo, o sujeto a qué configuraciones. Una de las
instituciones en la que realizamos nuestro trabajo, es un Hogar en el que viven
transitoriamente adolescentes que sus familias por diversas vulnerabilidades no pueden
hacerse cargo de ellos. En las discusiones del Equipo de Intervención surgen
innumerables interrogaciones en relación a los adolescentes, el funcionamiento
institucional, como de las vivencias de desamparo que atravesamos en algunos de los
encuentros. ¿Qué implicaciones tienen para las/los adolescentes cuando a la
vulnerabilidad propia de ese momento vital se le suma la proveniente de las fragilidades
de los vínculos familiares y sociales? ¿Qué significaciones sostienen ciertos avatares del
funcionamiento institucional que producen nuevamente la reproducción del desamparo?
401
Tiempo de incertidumbres que les imponen necesarias desorganizaciones que reavivan
las experiencias del desamparo e indefensión; arduo trabajo psíquico que los
adolescentes deben transitar para que puedan construir una nueva posición subjetiva. En
la experiencia que hoy trasmitimos, observamos en los directivos de la institución
dificultades para sostener el cumplimiento de las normas y de la asimetría entre
adolescentes y adultos. Dificultades en los adultos que exponen a los adolescentes a
situaciones de intensa incertidumbre y perplejidad, reproduciendo, como efecto
impensado, la ausencia o déficit de un marco contenedor.
Entonces hay que reconsiderar la función del no, del límite, porque el “no” también es uno
de los nombres que fundan lugares. El “no” es posibilitador porque al nombrar lo que “no”,
se abre el campo de lo posible. (Brignoni,J; Esebbag, G, y Martín,J. 2011)
Así, todo sujeto necesita de un lugar donde alojarse, no aludimos con esta expresión sólo
a un espacio material sino a las posibilidades de contención y sostéN ley, la mirada, la
palabra, la escucha pueden proveer y desde los cuales puedan construir su proyecto de
vida.
BIBLIOGRAFÍA
Acuña J.; Amilkar M; Lakonich J.; Possetto,G (2006) Dispositivos grupales y producción
de subjetividad. Adolescentes en condiciones de vulnerabilidad psicosocial. En:
https://sites.google.com/site/psicologiadelosgruposmdp/
402
Acuña, J; Buzzella, P. (2014) Proyecto de Extensión 2014.Fac. de Psicología. UNMDP.
Compartiendo Realidades. En:
http://www.mdp.edu.ar/psicologia/index.php/secretarias/extension/proyectos- y-eventos
Fernández, A.M. (2006) Política y Subjetividad. Editorial Tinta Limón. Buenos Aires.
403
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Caro, Agustina
Rodríguez,Florencia.
INTRODUCCION
El currículo ya no es algo que se pueda definir simplemente por lo que está escrito en un
papel, sino que tiene que ver con lo que varios investigadores han denominado el
“currículo en acción” oculto o vivido, el cual es llevado efectivamente a la práctica
(Camillioni, 2001). Sin embargo, el “currículo establecido” no siempre es igual al currículo
realmente enseñado y suele haber diferencias entre ellos. En este sentido, el currículo se
transforma en un intento de comunicar los principios esenciales de una propuesta
educativa de tal forma que quede abierta al escrutinio crítico y pueda ser traducida
efectivamente a la práctica (Stenhouse, 1975). En correspondencia con estos autores,
este trabajo pondrá el énfasis en el currículo como un tipo de “puente” entre los principios
y la práctica educativa, y en las actividades para relacionar conscientemente ambos, así
como revisar los vínculos entre ellos en un sentido de escrutinio crítico que incluye la
prueba de las propuestas curriculares y de las teorías educativas en la práctica.
Stenhouse afirma que el problema central del estudio del currículum es el vacío existente
entre las ideas y aspiraciones de los docentes y/ o de las instituciones, y los intentos por
hacerlos operativas. El aporte de este autor resulta interesante aquí en tanto que coloca
al mismo, ya no como un conjunto de principios establecidos teóricamente que no se
enfrentan con la realidad total de la clase en una perspectiva educativa completa. Desde
esta premisa se parte para realizar una mirada crítica y conciliadora, en tanto permite
encontrar los quiebres para modificar aquello que debe ser cambiado con la finalidad
optimizar las prácticas institucionales. En consecuencia se proponen como objetivos: 1.
Explicitar las diferencias que existen entre el lugar que se le asigna al G.R.A.P en el
currículo prescripto 2010, las modificaciones introducidas para la presentación a la
CONEAU en Octubre 2013 y la significación que se le da al requisito en la práctica
concreta. 2. Mencionar los aportes del orden de lo diferente que hace el G.R.A.P al
cumplimiento de los objetivos del currículo de la carrera para la formación profesional. 3.
Explicitar la relación del G.R.A.P con el resto de las asignaturas y requisitos curriculares.
Dicha relación se concretiza en la evaluación que se le solicita al alumno en cada uno de
404
VI Congreso Marplatense de Psicología
los niveles: un trabajo final con articulación teórica con los contenidos que le aportan las
asignaturas de cada nivel y la bibliografía específica del requisito.
405
VI Congreso Marplatense de Psicología
Por otra parte, G.R.A.P está definido como requisito curricular, y no como asignatura. Si
se observa la definición que Camilloni (2012) hace de la misma, se plantea que: “una
asignatura es la secuencia organizada de contenidos seleccionados de una o más de una
disciplina para ser enseñada en un ciclo lectivo cuya duración está establecida en el
diseño curricular. Las asignaturas se definen por su programa en relación a: Propósitos u
objetivos; Contenidos; Formas de evaluación; Formas de promoción; Régimen de
asistencia o cursada; Relación clases teórico-práctica”. Por lo antedicho, cabría pensar
que los Grupos de Reflexión se corresponden con esta definición. En la Planificación 2010
G.R.A.P forma parte del área curricular socio- antropológica, sin embargo, resulta
significativo que (Fj.18) en el ítem “CARGA HORARIA POR ÁREAS”, en el área Socio
antropológica no se encuentre inscripto el requisito curricular. Es de advertir que en las
otras áreas de conocimiento sí se encuentran incluidos los requisitos restantes acordes a
cada área en cuestión. Tampoco sus 200 horas contribuyen a las 500 que tiene el área
socio-antropológica. Para refrendar la distribución propuesta de los GRAP en relación a
las Áreas Curriculares y a sus contenidos mínimos se confeccionaron programas
separados por nivel en lugar de un programa único. Dichos programas debieron incluir
contenidos teóricos, evaluación y bibliografía para la implementación en el año en curso.
A partir de las incongruencias encontradas entre los distintos currículos y la práctica es
que resulta trascendental el análisis crítico y constructivo para unificar criterios y prácticas,
ya que se considera que G.R.A.P funciona como un nexo articulador entre las distintas
materias de la carrera.
406
VI Congreso Marplatense de Psicología
407
VI Congreso Marplatense de Psicología
Para mostrar la relación del GRAP con el resto de las asignaturas y con el recorrido que el
alumno realiza año a año, se presenta el siguiente cuadro (Rodríguez, F. 2014). Allí se
visualizan algunos emergentes, tanto de lo que le produce al alumno el recorrido con la
institución y con el contenido de lo aprendido en las asignaturas, como con la articulación
teórica con la bibliografía que dichas materias proveen.
NIVEL Recorrido por la Institución Recorrido por los Asignaturas Emergentes en los
G.R.A.P
En las materias que cursan este primer año se ven contenidos de las Ciencias básicas de
la Psicología, tratando de hacer un recorrido por las diferentes disciplinas que estudian al
Hombre desde distintas perspectivas. Son contenidos que producen una importante
movilización en el alumno.
Las temáticas oscilan entre contenidos teóricos y la propia condición subjetiva. Un idea y
vuelta entre el sujeto social y el individuo, el individuo y la institución, entre los orígenes y
la historia. Qué y para qué los GRAP Importancia y reconocimiento del Encuadre
Exposición de ideas con claridad Posibilidad de escuchar al otro Por qué de la elección de
la carrera Diferentes procedencias. Arraigos y desarraigos. Duelo por lo perdido.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Recorrido por la Institución Recorrido por las materias Emergentes en los G.R.A.P
Ven el qué y el cómo del aprendizaje. Cursan materias más específicas que los llevan a
un replanteo muy serio de su capacidad para ser psicólogos. Cursan Ps. Social y Ps. de
los Grupos otorgan la teoría para empezar a comprender y conceptualizar situaciones
jugadas en los GRAP. Comprensión de qué es un G.R.A.P Discriminación entre G.R.A.P y
Grupo Terapéutico Comprensión de la necesidad de la mirada introspectiva como parte
de la formación. Mayor capacidad de análisis y síntesis Aparece un pensamiento más
crítico y reflexivo Reflexión acerca de la ética como estudiante y la ética como futuro
profesional. Hay un intento de conceptualizar la vivencia. Reflexión acerca de las
diferencias y lo que esto implica.
CONCLUSIONES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
BIBLIOGRAFÍA
PLAN CURRI
Presentación a concurso de oposición y antecedentes. Facultad de Psicología
Universidad Nacional Mar del Plata
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
En el marco del Congreso de Psicología que lleva como título “La Psicología
como promotora de derecho hacia la interdisciplina de las prácticas en los escenarios
actuales”, nos interesa compartir nuestro trabajo acerca de la Especificidad del
Dispositivo G.R.A.P (Grupos de Reflexión para el Aprendizaje de la Psicología).
Consideramos necesario plantear cómo entendemos y desde dónde nos posicionamos
al hablar de Lo Grupal, de Dispositivo (social y de intervención) articulando y
contextualizando el GRAP con la formación del futuro profesional psicólogo egresado
de la Facultad de psicología UNMP.
Siguiendo los aportes de Ana María Fernández, que trabaja y teoriza acerca
del pensamiento de lo grupal, tomamos la noción de campo grupal pensado desde su
multidimensionalidad y complejidad con sus múltiples atravesamientos (políticos,
sociales, económicos, ideológicos) así como desde sus dimensiones, especificidades y
legalidades.
La propuesta es pensar el campo grupal desde un abordaje transdisciplinario
en el camino hacia las ciencias complejas que permite abrirse a las dimensiones
filosóficas, antropológicas, sociales, históricas, psicológica. El punto de partida es el de
un paradigma que rompa con la disociación entre los biológico por un lado y lo
psíquico y cultural por el otro.
La noción deleuziana de multiplicidad (Deleuze, Guattari, 1980) trata de aquello
que escapa a dualismos y binarismos generalmente reductivos, que insita a pensar
desde lógicas disyuntivas desde el “Y “ y el “entre”, más que desde dialécticas de lo
Uno, lo idéntico. No se trata de “pensar una multiplicidad como lo que tiene muchas
partes, como mera adiciones de partes sino como lo que está plegado de muchas
maneras” (Deleuze G 1988)
Desde esta perspectiva, los grupos pueden ser pensados como dispositivos
sociales de producción subjetiva que al ser generadores de transformación, producen
subjetividad y provocan su despliegue.
411
"El sujeto "no es" sino que "adviene "y "deviene" en y por los intercambios
sociales en los que participa y en cuyo ambiente esta embebido".1
Así, propone Najmanovich, D. (2001) que pensar en términos de dinámica
vincular, nos posibilita el darnos cuenta que devenimos sujetos entramados en
múltiples configuraciones.
Foucault al introducir la idea de dispositivo alude al complejo entramado de
fuerzas y discursos con el fin de ejercer el poder para producir determinadas acciones,
es una configuración estratégica que crea condiciones para conducir ciertas formas de
subjetivación. Dispositivo como un conjunto multilineal, inscripto siempre en un juego
de poder ligado a los bornes del saber, que nacen de él y así mismo lo condicionan.
(Foucault - Saber y verdad, 1991),
Desde éste pensamiento, se destacan líneas que hacen ver ciertos aspectos,
permaneciendo otros invisibles, líneas de enunciación, lo dicho y lo silenciado, de
fuerzas que regulan los tipos de relaciones, de objetivación y subjetivación en
referencia a la producción de subjetividad. Deleuze habla de líneas de fuga,
refiriéndose a lo que escapa de los esfuerzos de captura, líneas de fractura que se
entrecruzan y se mezclan mientras unas suscitan otras a través de mutaciones de
disposición. Cada época organiza lo que puede ser visible y lo que debe quedar
invisibilizado.
En tiempos actuales podemos visualizar crisis en los valores, presión de la
inmediatez, incremento de la tendencia a la acción, con agotamiento de políticas y
teorías y la consecuente evaporación de certezas. Se vuelven necesarios espacios de
reflexión que permitan instalar preguntas en relación a las nuevas formas de percibir,
sentir, pensar, explorando los modos de producción, preguntas que permitan la
creación de nuevas categorías de pensamiento que posibiliten enfrentar y resolver las
problemáticas que se presentan. Se trata de generar herramientas para transformar lo
dado, las significaciones, las tramas institucionales y las subjetividades que se ponen
en juego.
412
"Indagar las situaciones que los dispositivos en acción disparan es dilucidar las
configuraciones que allí se componen, pero que no responden a un plan previamente
estipulado. Es en tal sentido que se ha planteado que el dispositivo dispone, ni predice
ni previene (Fernandez,A.M., Borakevich, S.; Ojam, E; Imaz, X., 2003)"
413
apropiación del saber. Para lograrlo, debe instalarse en una actitud interrogativa,
quebrando el mundo de las certezas, al desarticular argumentos que parecen
inquebrantables.
En cada encuentro, independientemente de cuál sea la temática manifiesta de
la reunión, el coordinador tendrá como objetivos que se privilegian: incentivar el trabajo
grupal, promover el espíritu de grupalidad, tratar de evitar efectos de masificación y
evitar caer en la serialidad en una Institución que tiende a la dispersión. Habilitar a los
sujetos del agrupamiento a sentirse miembros, lo que se posibilitaría cuando se
vuelven pertinentes en las prácticas el juicio reflexivo, la imaginación y el pensamiento
crítico.
414
grupal. El encuentro con las asignaturas, con el saber, con los conceptos específicos,
con las dudas y preguntas que surgen en el encuentro, suelen ser tema de reflexión, lo
que nos introduce a la pertinencia de este dispositivo en la formación y construcción
del rol del psicólogo.
La existencia de éstos espacios con sus particularidades, posibilitan la
interrupción a la lógica acrítica e instituida de transitar, por intensificación de otra
lógica, que requiere instaurar una desaceleración del tiempo, un pliegue,
transformándose quizás, en ésto a lo que se refería Ignacio Lewkowicz, cuando
proponía “remansos” en la aceleración propia de la fluidez contemporánea remansos
que inviten al estudiante a rescatar y reconocerse en el movimiento de aprender.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
415
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416
VI Congreso Marplatense de Psicología
LA SUBJETIVIDAD-ES? … RIZOMA
Berlaffa, Miriam
Ghiglione, Melina
Mosquera, Jazmín
INTRODUCCIÓN
SUBJETIVIDAD-ES. UNO-RIZOMA
417
Podríamos entonces arribar a la noción de que la historia del sujeto, nunca existió por
fuera de los márgenes de quienes la contaron, y que como tal, no se aprendió a contemplar la
diversidad de interpretaciones que ese mismo suceso pudo haber tenido. Es en este mismo
margen de maniobra, en donde un doble régimen complementario nos converge e invita a
accionar desde la transmutación que asumimos inexorable, la necesidad de corromper la
representación autofundada del yo-nosotros, e intentar pensarnos desde lo extraño, lo
exótico, desmarcándonos en inacabable proceso dentro de un legado constituido por un
entramado histórico, político, económico y cultural. En otras palabras, señalamos que
esbozar o aspirar a explicar lo que es la subjetivación, en este sentido, demandaría cierta
aglomeración puesto que nos mantendría dentro, pero a su vez demandaría forzosamente del
afuera, de la otredad, para alcanzar su condición, es decir, reclamaría cierta flexibilidad, ya
que sería un tránsito vertiginoso que deberíamos comenzar a recorrer, en donde las líneas de
subjetivación comenzarían, especialmente, a trazarse como líneas de creación, en la medida
que escapan de las dimensiones del saber y del poder. Esto nos incursa en un nuevo
concepto, el de “Nomadología,” que nos llevará hacia aquella dimensión fantaseada,
anteriormente expuesta, y permitirá finalmente resbalarnos en el túnel de lo descolonizado, y
transitarlo en el desafío constante de resignificar las propias matrices culturales, las que,
estancadas en la norma de la identidad esencialista, suelen restringir el devenir ser-otro.
En ese sentido es que referiremos a la palabra nomadología, para sustentar algunas
reflexiones sobre la construcción de la subjetividad desde la otredad en la transmutación,
para poder de esta manera comenzar a desnudar los sistemas de significación endógenos, a
modo de desplazamiento hacia los márgenes, al cruce con la otredad. En este sentido la
nomadología seria una apuesta para repensarnos, cruzar esa delgada línea en la que todo se
pierde funestamente para nuestra significación, puesto que es allí donde pretendemos
explicarnos. ¿Como lo haríamos, como interpretarnos desde la transmutación? Deberíamos
someternos al vertiginoso juego de transitar la presurosa cornisa que separa dos mundos que
se aglutinan, línea en donde no nos resignaríamos a abandonar por completo nuestros signos
de lectura, como tampoco a resbalarnos de lleno en esos trazos descolonizados de la
subjetividad, reconociendo que justamente lo que nos arrima a la subjetividad es aquello que
en signos nos separa.
Se evidencian así dos miradas que conviven, por lo menos en los ámbitos
académicos, por un lado se encuentra la idea de sujeto, que remite a un lugar, un estado al
cual hay que llegar, a adonde arribaría la subjetividad o el fin de los procesos de
subjetivación, habría un punto de partida y uno de llegada. Y por otro lado las perspectivas
que nos ofrecen otros “atrevidos” en donde queda interrumpida la secuencia lineal, donde es
difícil y casi imposible identificar un comienzo y un fin o adquisiciones que devienen como
resultado de una deuda. Donde la figura del rizoma1 pareciera la forma que mejor representa
ese mundo entramado, en donde lo social, lo cultural, lo histórico, etc., se enlazan, casi al
punto imposible de alguna separación, acompañando ese proceso que llamamos
subjetivación.
Desapegarnos de la reliquia epistémica moderna para profundizar niveles de
comprensión que contemplen multiplicidad de nociones y abonen lo rizomático. Un ejemplo
de esto es la constante necesidad de algunos autores en utilizar términos que pueden
resultar engañosos, porque intentan aludir a alguna otra cosa, pero no, porque a la vuelta nos
encontramos con lo mismo. Esto, en el proceso de análisis, puede conducirlos a conjeturar
1
Concepto filosófico desarrollado por Deleuze y Guattari, basado en el rizoma botánico que no es raíz, son
bulbos, tubérculos y que aprehende las multiplicidades. Rompe con la estructura vertical de la raíz, son formas
contrarias a la linealidad de la razón común.
418
que parten de cierta unidad principal diferencial, pero que en realidad no culminan de
despojarse de matrices y puntos de apoyo genealógicos y reflexivos para sustentar sus
nuevas argumentaciones, por lo que existe cierto punto de comando o monitoreo que en sus
procesos de escritura los lleva hacia una raíz de juicios permanentes, y esto, lejos de ser
diferente puede ser peligroso, porque tiene pretensiones de otra cosa y no llega a serlo, sino
que legitima lo que viene siendo.
Abrimos el juego en la pretensión de acercarnos a una antigenealogía. Que aloje en
nuestro trabajo cierta advertencia reflexiva y teórica que permita insertarnos en un principio
de multiplicidad, que contenga matices y gradaciones, en infinita diversidad y en constante
rizomatización con el mundo.
En este mismo trazo podemos argumentar, quizá en un sentido más metodológico,
que la subjetividad escapa a cualquier posibilidad de conceptualización, a cualquier intento de
captura, justamente porque siempre existirá en paralelo, al margen de nuestras
interpretaciones, en un plano inaprensible, paradójicamente, porque mientras mas intentemos
aproximarnos a ella, en el afán de explicarla y entenderla, mas lejos estaremos de su
naturaleza. Porque esta condición sujeto radica en un territorio que nos expropia, el lugar de
lo despojado, donde precisamente a nada podemos sujetarnos para comprenderlo, ni siquiera
a lo corpóreo, si pensamos al individuo como un lugar evanescente, que puede o no estar
más allá de los procesos que lo subjetivan, de allí el carácter sesgado de cualquier
conceptualización, precisamente por tratarse de un proceso, inacabado, infinito, que no deja
de funcionar y si hay un devenir sujeto de este proceso, es un sujeto inconcluso, a tal punto
que para algunos autores podríamos prescindir de la categoría sujeto ya que podríamos
pensar la subjetivación sin sujeto. Si bien se aspira a alcanzar ese estado de definición o
completud, dicha ambición posee una falla primordial que imposibilita su alcance, tal falla
viene dada por la creencia de que tal estado podría alcanzarse, por supuesto, esto apoyado
en la idea de sujeto pleno planteado por la ciencia moderna, al hombre de conciencia
transparente, con certeza de sí, poseedor de la razón y por lo tanto de un completo
autodominio. De este modo, lo que produce la subjetivación como proceso no es un
encuentro consigo mismo, sino una expropiación de sí, una salida fuera de sí mismo o mejor
dicho una desidentificación, un reverso de lo que se entiende por identificación, concepto
caro a las ciencias sociales, ya que ha sido sobrevaluado por la mayoría de las disciplinas
que componen dicho campo. Opera así, también, un proceso inverso que es asociar el
proceso de subjetivación con aquello que no se es, con un no ser en el sentido cartesiano del
concepto.
Por lo tanto si retomamos lo recientemente expuesto podríamos, en binariedad, estar
acercándonos a una nueva visión que antagónica y coexistente con la anterior concepción
estructural, se definiría engendrándose básicamente en lo acéfalo, en lo impreciso, puesto
que abonaría una nueva y singular percepción que es la de “rizoma”, que solo estaría hecha
de líneas, líneas de segmentariedad, de estratificación y también líneas de fuga siguiéndola,
la multiplicidad entra en metamorfosis multiplicándose a si misma, es decir nos
encontraríamos con un enjambre de líneas sin destino. Y justamente esta idea nos conduce
en efecto a aquella primera concepción de sujeto planteada, en la que visionamos la
subjetividad como un proceso, inacabado, infinito, que no deja de funcionar, proceso que
básicamente podríamos estar ilustrando retomando la etimología biológica de la palabra
rizoma a través de la imagen del tubérculo.
419
Podemos vislumbrar de esta manera, encontrando cierto anclaje icónico en esta
imagen2, que la subjetivación como proceso, desde esta percepción, no seria solo un
encuentro consigo mismo, sino también con lo que bordea el sí mismo. Por tanto podríamos
arribar a una concepción que nutre líneas de fuga y procesos de creación subjetiva en la
medida que escapa a estructuras de poder y significación, puesto que lo fundamental aquí es
producir otros enunciados, otros deseos al modelo del rizoma.
Si bien la filosofía contemporánea, especialmente de los últimos 20 o 30 años, ha
producido abundantes reflexiones y producciones teóricas respecto de estas exterioridades,
de estos no lugares, no sujetos, desinstalando, esta vertiente esencialista moderna, no
podemos ignorar que desde la psicología se produjo el efecto contrario, que es enfatizar esta
lógica del razonamiento psicológico que tiene que ver con el lugar sujeto como lugar de las
certezas, el lugar en donde es posible y conveniente habitar nuestra propia existencia, sujeto
como el lugar donde convergen y se encuentran en un plena coincidencia el sí mismo, el yo,
la identidad, la conciencia autotransparente, etc., sujeto que designa más un lugar donde
llegar, el fin de un camino, un estado indicador de la esencia del ser. Aquí el lugar sujeto, es
un lugar previsto, una perspectiva alcanzable, por tanto la esencia del ser, siguiendo las ideas
de Deleuze y Guattarí, se podría calificar ingenuamente desde esta perspectiva a partir de las
siguientes preguntas ¿quién sos? ¿a dónde vas? porque al parecer existiría aquí una especie
de eje genético a partir del cual se organizarían estadios sucesivos hacia un horizonte
preconfigurado, hacia un estado terminal.
¿Será posible permear nuestros sistemas académicos-científicos, nuestros bagajes
socio-históricos-culturales abriendo un nuevo camino en los cuales puedan converger nuevas
rutas, nuevos escenarios, nuevos horizontes que nos permitan expresar la subjetividad, como
relativa, suelta, incompleta, mutante, sin que en función de ello no podamos ni siquiera
aspirar a convenir básicamente nada para explicarnos este suceso a nivel social o en gran
escala, o simplemente limitarnos a vivirlo, como una especie de suceso babélico, en donde el
constante nebuloso, disidente y heterodoxo es lo único que nos subjetiva?
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
2
Imagen extraída de power point del Curso de Posgrado Subjetividad (es) dictado por la Dra. Andrea Bonvillani.
Organizado por la Secretaría de Posgrado. Facultad de Psicología. Universidad Nacional de Córdoba.
420
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FOUCAULT, M. (1988) El sujeto y el poder. Revista Mexicana de Sociología, 3, 3-20.
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Bogotá.
421
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Características del contexto actual y gestión local
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Entendemos que los cambios del contexto global y local han modificado la
intervención en lo social y la inserción de los profesionales en la institución municipal,
escenario que nos planteó la necesidad de revisar la nueva cuestión social y los
modos de abordaje que generen nuevas formas de comprenderla e interpretarla.
Como expresamos con anterioridad, hoy las problemáticas sociales son complejas,
alcanzan a sectores heterogéneos, atraviesan las instituciones, las prácticas
profesionales y a los sujetos de la intervención y muestran los efectos de las tensiones
entre necesidades y derechos y dan cuenta de cómo la pérdida de derechos sociales,
conlleva a un rápido quebranto de la subjetividad (CARBALLEDA, 2009).En esta trama
histórico-social, surgen políticas sociales donde se evidencia una tensión permanente,
que incide en la intervención profesional que resulta relevante para compatibilizar la
cuestión social emergente y el ejercicio de derechos ciudadanos.
La cuestión actual pasa por renovar nuestra comprensión sobre la política como
definición estratégica del desarrollo y como estructuradora de ciudadanía y de
derechos sociales, la configuración de un sistema de protección social que tenga un
efecto de redistribución, con políticas públicas que consideren las necesidades como
derechos.
Por tanto, se desprende la necesidad de cambiar el discurso y dirigirlo hacia una
agenda más equitativa, que tenga relación directa entre el crecimiento económico y el
desarrollo social y que la política social sea respuesta a la deuda social originada por
la política económica, creemos necesario anudar el diseño de los Programas a
estrategias superadoras para el reconocimiento y garantía de los derechos integrales
de los sujetos en la búsqueda del ciudadano.
Creemos en la importancia de proponer la intervención del equipo profesional con la
dimensión política de la práctica cotidiana y que los funcionarios políticos puedan
componer una administración comprometida con la efectivización de los derechos de
ciudadanía, para instalar en la agenda pública la diversidad de la demanda que
plantean los ciudadanos. El conocimiento de las actuales transformaciones de lo social
resulta clave para una intervención social efectiva, para reflexionar sobre las
posibilidades y límites de las intervenciones.
Por lo antedicho, anclamos en entender que el factor humano, en este caso del equipo
profesional son una clave estratégica en las condiciones de calidad de la gestión
social, que: “[…] permitiría repensar en la distribución, la asignación de tiempos en las
intervenciones y enfatizar en la calidad indispensable para renovar la gestión
profesional” (MATUS SEPÚLVEDA, op. cit.: 26).
REFLEXIONES FINALES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Pero como decía al inicio, hablar de cárcel es hablar también de opinión pública.
Nos encontramos con el recelo de la “gente de bien” a que los “delincuentes” sean
“mantenidos” por la sociedad (que parece ser pensada por fuera de misma cárcel) y que
reciban casi como premio a su maldad comida, educación, salud y beneficios por el estilo.
Se oyen repetidas veces frases como “los derechos humanos son para los delincuentes y
no para nosotros”. Seria irrelevante traer estos dichos populares si no fuera porque se
encuentran encarnados muchas veces en los mismos agentes del sistema penal
incluyendo a los profesionales.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
De todos modos, pocos son los interesados en que estas personas reciban los
derechos que tal vez, jamás fueron cumplidos. Más bien parece escucharse el deseo de
que estas personas sufran lo más posible en la cárcel., y de ser posible, por supuesto,
que no salgan.
1
Código de Ética de la Provincia de Buenos Aires. Pag.1 .1987
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Ahora bien, el abordaje interdisciplinario, aporta siempre sea cual sea la temática
de estudio mayor rigurosidad y conocimiento sobre la misma. Interdisciplina digo, a
diferencia de transdiciplina (entendida como la transposición de conceptos de una
disciplina para ser aplicada a otra) o multidisciplina (entendida como la sumatoria de
visiones parcializadas respecto al mismo objeto de estudio).
Ahora bien: ¿Por qué trabajar interdisciplinariamente con los internos de un penal?
¿Por qué esta interdisciplina debe apoyarse en el paradigma de los derechos humanos?
En el caso del ingreso al penal, podemos ver otro ejemplo. La posibilidad de evaluar
interdisciplinariamente al sujeto que ingresa a un penal, permite establecer así, y ofrecer
las coordenadas necesarias para reducir la vulnerabilidad.Esto significa, intentar que la
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VI Congreso Marplatense de Psicología
cárcel no sea esa tumba a la que se va a sufrir y morir subjetivamente durante la perdida
de la libertad, sino, la oportunidad del estado de ofrecer y/o restituir derechos. Si la
carencia de derechos facilitó el accionar delictivo, restituir los derechos es esencial en el
intento de incluir esta persona en la convivencia social.
El interno accede a la asistencia en salud mental y es atendido por una psicóloga del
Servicio. Quien trabaja arduamente en el tratamiento de la adicción. Sin embargo, el
acceso a la educación en la Institución se ve imposibilitado por la movilidad que ello
implica. Esto significa que el sujeto volverá a su casa en el mismo estado de casi
analfabetismo. La trabajadora social que se encarga de la conexión con la familia no
arroja mejores perspectivas en cuanto a la situación familiar. La esposa no consigue
trabajo y continúan en situación precaria.
Otro ejemplo: internos que a partir del trabajo terapéutico comienzan a pensar la
posibilidad de habilitarse en nuevas capacidades, que no son otra cosa que derechos. Por
ejemplo a estudiar. Tristemente vuelven desanimados al encontrarse con la inconsistencia
de la enseñanza por parte de algunos maestros. “Se que eso que nos dan no es lo que
enseñan en la escuela afuera. No sabemos nada. Esto no nos va a servir afuera”.
Nuevamente falla la interdisciplina sosteniendo la vulnerabilidad y la corresponsabilidad
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VI Congreso Marplatense de Psicología
social inherente. Por un lado se potencia el desarrollo académico, y por otro se desalienta.
y este desaliento no necesariamente implica subestimación por parte del docente. Muchas
veces el docente decide no exigir suponiendo que de ese modo beneficia al interno.
Considero que interdiciplina y autogestión son los conceptos que deben ir de la mano en
la restitución de derechos al interior de un penal. Porque no se trata de desresponsabilizar
al sujeto de su delito, por eso hablamos de corresponsabilidad social y no de
irresponsabilidad. Pero sí se trata de restituir derechos para generar herramientas reales
que permitan la autogestión lejos de la vulnerabilidad socio penal.
Otro ejemplo: es algo muy habitual que un interno se cosa la boca para pedir algo. A
veces con hilo, a veces con alambre. ¿Qué piden? Muchas veces información acerca de
sus causas, otras comunicación con la familia, ajustes en algunos informes que no son
fidedignos (por ejemplo cuando se mantiene una nota sobre su conducta que ha sido
calificada posteriormente mejorándola) En este caso, también falla la interdisciplina. (No
hace falta mencionar el acceso a derechos). Digo que la interdisciplina no funciona aquí
porque cuando esto sucede, muchas veces se trata de internos que están alojados en “el
fondo” del penal y por ello con difícil acceso al área de salud, al jefe del penal y a las
oficinas donde trabajan los profesionales. Quienes podrían escuchar estos pedidos son
los oficiales encargados de pabellón, que no pueden resolverlo. Entonces, nuevamente la
distancia entre el oficial, el procurador, la psicóloga y todos los agentes que podrían
responder es abismal. Para quienes trabajamos con la palabra, es verdaderamente
significativo que alguien se cosa la boca para pedir algo, a escasos metros de distancia.
432
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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dogmática jurídico-penal). Capítulo 4: Necesidad y posibilidad de una respuesta
marginal. Editorial Temis.
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INTRODUCCION
Me detengo aquí a plantear que allí comienza la intervención, ya que siendo el mirar, no
solo el ver , es donde comienza la intervención no naturalizando imágenes, no
llevándolas a una cristalización, sino por el contrario, irrumpir, realizar un corte, una
transformación en el momento de mirar.
Hasta aquí desarrollo la escena en sus comienzos, volviendo al punto anterior, el verbo
mirar, y no sólo el ver, se pone en escena. Lugar del adulto que mira a los niños y niñas, y
que luego debe acontecer la responsabilidad de lo que se hace, de cómo se interviene,
luego de ése primer momento de mirar, lo naturalizado, cristalizado, como lo habitual.
Trayendo la mitología griega como manera de ilustrar de otra manera ésta intervención
vivida, se asemeja al laberinto del Minotauro donde podemos pensarlo como las salidas,
no a modo de puertas yventanas , sino otras salidas, no pensadas aún.Siendo para ello
necesario encontrar el hilo de Ariadna. Aquí podríamos situarnos, dentro del laberinto , sin
saber aún donde está la salida, ni donde está el hilo. Pero si sabiendo que las salidas no
son las puertas y las ventanas.
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Volviendo a la escena relatada, dentro del ámbito escolar, luego de una sesión propia,
donde entre otros relatos, que no voy a detallar , comento la escena mirada en la escuela.
AL finalizar la sesión, la terapeuta, en un gesto, que se hace acto, me entrega un
costurero. Sin palabra alguna.
No detallo aquí todo lo sentido y pensado ya que el mito me permitirá ilustrar de algún
modo los afectos y pensamientos que acontecieron en mí, siendo parte de la intervención
poder discriminar lo propio , lo singular de uno, de lo que se está construyendo con otros
en la intervención.
Entrega de costurero.
Siguiendo con éste momento, ingreso a la institución, y les digoa lasdocentes que : - en
el espacio del equipo de orientación hay un costurero y que si algún niñ@ tiene el
guardapolvo descosido o en el transcurso del día alguien se lo descose , pueden venir al
espacio del equipo.
Docente: - ¿A…lo que nos falta…que le cosamos la ropa a los chicos; éso le corresponde
a las familias?!!
Psi: - Vamos viendo, depende de cada niñ@, por ahí alguno de ellos ya sabe coser.
Aquí podemos pensarlo como momento fundante en la intervención, donde hay una
incertidumbre en lo que pueda acontecer, pero se pone en movimiento dentro de la
escena, ya no sólo el mirar, sino el poner en acto , acompañado de palabras, ésa imagen
cristalizada de descuido, a modo de intemperie, no solo corporal, en el sentido de no
sostenimiento, sino intemperie intelectual ya que no había acto, ni palabra hasta el
momento. Volviendo al laberinto, comienza el movimiento de búsquedas de salidas, que
son desconocidas, ya que no son las puertas y las ventanas, pero que con el hilo de
Ariadna, se podrá recorrer, y quizás encontrar la salida.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Un tercer momento podemos caracterizarlo donde ante la pregunta: - ¿quién coserá? Otro
momento de tensión , aquí se expresa ,en la propuesta positivista, conservadora, donde
propongo que quien lo haya descosido lo tendrá que coser.
Pensamiento binario, lineal, positivista ya que a partir de escuchar los relatos de los niños
y niñas, se enunciaban situaciones que eran originadas desde el barrio, desde las
familias, es decir por fuera del ámbito escolar, y en éstas situaciones ocurridas dentro del
ámbito escolar, no eran vínculos de dos , sino de varios.
Aquí podemos vincularlo con una frase que ilustra y promueve al proceso de
investigación, siendo el análisis de la implicación subjetiva, una necesidad ética.
Es mucho lo que ignoramos y muy poco lo que sabemos de nuestra propia ignorancia.(
Fidel Castro)
Otro aspecto dentro de éste mismo momento fue la propuesta de ir hilando singularmente,
deteniéndonos los adultos en cada caso, de cada niño o niñas y ante la pregunta - ¿ cómo
fue que se te descosió el guardapolvo? Las respuestas y los abordajes fueron diversos,
en algunos casos hubo que cambiar el guardapolvo por completo porque no había costura
que pudiera repararlo, en otras con el niño, en otras situaciones la docente y en otras las
familias. Es decir, que los hilados y las costuras diversas, como las subjetividades
diversas que habitan los laberintos institucionales, que muchas veces nos convocan, nos
interpelan a que hilemos, cosamos, ligemos, los desbordes de las costuras, y así
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VI Congreso Marplatense de Psicología
podamos encontrar salidas que no son necesariamente son las puertas y las ventanas ,
pero que son salidas a crear, con el hilo de Ariada dentro de los laberintos institucionales.
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INTRODUCCIÓN
CONTEXTO HISTÓRICO POLÍTICO
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443
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
En este primer avance nos proponemos analizar la categoría clínica de la Locura Maniaco -
Depresiva descripta por Emil Kraepelin, en particular las novedades que introduce en su
octava edición, considerando además las divergencias con su edición clásica en su octava
edición, considerando además las divergencias con su edición clásica. Abordaremos los
criterios que el autor propone para su clasificación, y los fundamentos que el mismo da para
llegar a concluir que los diferentes estados que toma en consideración formarían parte de la
misma entidad nosológica. Es nuestra intención, en primer lugar, dar cuenta de que el
trastorno del humor es el rasgo privilegiado que utiliza Kraepelin para el diagnóstico de la
PMD.
En segundo lugar, el desarrollo efectuado nos permitirá esclarecer que el trastorno del
humor es uno de los aspectos que le da unidad a esta patología. No obstante nos
preguntamos si la laxitud que implica este criterio podría ser pensada como uno de los
motivos por los cuales esta entidad muestra dificultades en cuanto a la delimitación de su
especificidad.
1
Investigación inscripta en el Programa Promocional de Investigación en Psicología (PPIP) Código 19 Fac. de
Psicología UNLP. Director: Mgter. Luis Volta
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Ha sido nombrado como un investigador nato, siempre permeable a las críticas, a tal
punto que en función de ellas y de sus propias observaciones, revisó, corrigió, reformuló y
reescribió sus obras tantas veces como fuera necesario.
En la 6º edición (1899) de su obra ubica a la PMD dentro del grupo de las Psicosis de
causas endógenas, cuyo origen debía buscarse en la organización interna predisponente de
la personalidad. Ésta es considerada como la edición clásica y las concepciones generales
que el autor propone darán vuelta al mundo y se impondrán en todas partes. Es aquí donde
opone las enfermedades mentales adquiridas, de origen exógeno, a las enfermedades
mentales congénitas de origen endógeno. Caracteriza a la PMD planteando la existencia
de estados maníacos y depresivos alrededor de los cuales incluye “todos los estados
agudos (“psiconeurosis”) no confusionales que no constituyen estados sindrómicos de la
Demencia Precoz” (Bercherie 1986, p.112). Diferentes psiquiatras alemanes, entre ellos
Meyer y Kraft-Ebing ya habían estudiado la locura circular de los franceses pero ha sido
Kraepelin quien por su descripción y análisis de los estados mixtos fundó esta variedad de
psicosis endógena.
Hasta aquí hemos caracterizado brevemente su edición clásica. Pero como fuese
enunciado, nuestro propósito consiste en analizar la categoría clínica de la Locura Maniaco
- Depresiva descripta en la octava edición del Tratado de Psiquiatría de Kraepelin, la cual
constituye para muchos autores una verdadera y franca reestructuración de su sistema. Es
una clara tentativa por parte de Kraepelin de integrar el conjunto de las críticas y los aportes
de la psiquiatría de su época, modificando de esta manera la clasificación nosológica. Nos
resulta de interés interrogarnos acerca de si esta reestructuración clínica implica un cambio
en los criterios utilizados en la sexta edición.
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Con respecto a la PMD, objeto de nuestro interés, en esta nueva edición a la hora
de definir su campo toma las entidades clínicas descriptas por representantes de la Escuela
francesa, en particular Falret y Baillarger que habían descripto la locura periódica y la locura
circular. Incluyó además “…la manía simple, la mayor parte de los estados patológicos que
se designan con el nombre de melancolía y también una cantidad considerable de casos de
amentia.” (Kraepelin, 1909, p.9). También ubica ciertas disposiciones del humor que
considera como el primer grado de trastornos más graves, y que se confunden sin límites
claros con el conjunto de las disposiciones naturales de los individuos.
Hemos podido constatar a partir del recorrido bibliográfico efectuado, que más allá de
las diferencias aparentes entre los distintos cuadros que componen la entidad, Kraepelin
afirma que éstos forman parte de una misma unidad nosológica. Más aún, nos advierte que
hay un hecho más significativo que los síntomas fundamentales de la PMD para dar cuenta
de que la amplia variedad de cuadros por él reunidos y descriptos minuciosamente no
corresponderían a diferentes entidades sino que por el contrario, se aúnan en una sola. Al
respecto dirá que “…todas las formas que vemos aquí en la unidad clínica no sólo presentan
entre ellas una serie de transiciones sin que se pueda marcar el límite donde una comienza
y la otra termina, sino que a veces también, en un único y mismo caso pueden superponerse
o sucederse” (Kraepelin, 1909, p.10). Menciona además que por lo general se encuentra
una coloración especial y uniforme del humor que forma la base sobre la que aparecen los
accesos, siempre bipolares, propiamente dichos de la PMD.
Por otro lado, y fiel al criterio clínico evolutivo, nos dice que la separación de las
formas clínicas prácticamente no tiene sentido, siendo el carácter idéntico de su pronóstico
aquello que favorece la unificación. Estos accesos nunca llevan a un debilitamiento
intelectual profundo, aun cuando se desarrollan sin interrupción durante toda la vida.
Además de los citados, otro de los argumentos que observamos que Kraepelin
postula en pos de ratificar la unidad clínica de los distintos cuadros de la PMD es aquel que
pondrá en consideración al aspecto hereditario. En tal sentido refiere que “…las diferentes
formas que abarca pueden reemplazarse unas a otras hereditariamente”. (Kraepelin, 1909,
p.11). De esta manera, para el autor, algunos subgrupos que conforman la entidad, yendo
desde locuras circulares hasta leves oscilaciones del humor, pueden transmitirse en la
cadena generacional. Con esta argumentación, Kraepelin no sólo apunta a destacar la
homogeneidad de los cuadros aparentemente disímiles, sino que además reafirma la base
orgánica de esta patología, más allá de estructurarla a partir de una descripción de
fenómenos psicológicos.
En cuanto a las distintas formas que puede adoptar esta patología, el autor nos
propone que por regla general el cuadro evoluciona en accesos que se distinguen de
manera más o menos diferente pero que a menudo presentan entre sí una oposición
completa. Por un lado nos presenta los Estados Maníacos. Estos consisten en la presencia
de fuga de ideas, verificándose trastornos en el curso del pensamiento muy marcados, con
dificultades para jerarquizarlos y darles una determinada dirección. Por otra parte se
presenta un humor alegre, exuberante y una necesidad imperiosa de actividad. Por el otro,
Estados Melancólicos o Depresiones, caracterizados por la exteriorización de sentimientos
de tristeza y angustia, acompañados de dificultad del pensar y actuar. Estas dos formas
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opuestas son presentadas por Kraepelin como el fundamento del núcleo de la enfermedad y
agrega una tercera forma de presentación: los Estados Mixtos, en donde las
manifestaciones maníacas y melancólicas se asocian entre sí, de manera que se obtiene un
tipo clínico en el que pueden encontrarse juntos los síntomas de los estados anteriores.
Stagnaro (2006) coincide con estos planteos al postular que Kraepelin afirma
categóricamente la unidad clínica de la locura maníaco-depresiva fundamentándolo a partir
de cuatro razones: la ubicuidad de los síntomas fundamentales en los distintos cuadros, las
transiciones y reemplazos entre las formas clínicas, el pronóstico idéntico para todos los
casos (ya que no conlleva un debilitamiento intelectual), y el carácter hereditario que puede
comprobarse a partir de la realización de estudios familiares.
Hasta aquí podemos aducir que estos planteos reafirman lo ya descripto por el autor
en 1899. No obstante es en la octava edición de su Tratado, en donde nos brinda una
novedad que, según nuestra opinión, es el motivo esencial por el cual esta entidad se diluye,
perdiendo precisiones en sus límites. Desde la perspectiva Krepeliniana la PMD se ve
enriquecida por un cuarto tipo de estados, los Estados Fundamentales. El autor llamaba así
a las “modificaciones poco sensibles, pero reales que hallamos en el intervalo de los
accesos propiamente dichos y por las que se expresa el estado psicopatológico fundamental
de la locura maníaco-depresiva.” (Kraepelin, 1996, p. 59). Paul Bercherie (1986) comenta
que en el contexto de la octava edición, constituían un aporte valioso para Kraepelin ya que
confirmaban la naturaleza constitucional de la entidad, al igual que aquellos casos en los
que los accesos se repiten con cierta regularidad e independencia de toda influencia
exterior. Se incluyó en esta categoría a la depresión y la excitación constitucionales, el
temperamento ciclotímico y la irritabilidad constitucional, un humor variable entre la alegría,
la tristeza o la ansiedad. Sobre esta base trabajaría luego Kretschmer, para quien la
ciclotimia es aquella modalidad de temperamento fluctuante entre la alegría y la tristeza.
CONCLUSIONES
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el autor propone para su clasificación, y los fundamentos que brinda para llegar a concluir
que los diferentes estados que toma en consideración formarían parte de la misma entidad
nosológica. De este modo, nos interrogamos por si mantenía los mismos razonamientos que
en su clásica edición para el establecimiento de la entidad clínica por él acuñada
pudiéndose poner en evidencia que los mismos siguen vigentes en su octava edición. Del
recorrido realizado, revelamos una novedad en esta publicación: la inclusión de los estados
fundamentales, la cual, desde una perspectiva psicoanalítica utilizaremos para arribar a
algunas conclusiones que discrepan con la concepción del autor alemán.
Concluimos entonces que el trastorno del humor es el rasgo privilegiado que utiliza
Kraepelin para el diagnóstico de la PMD. Este razonamiento se desprende de que si bien
este criterio está junto con el de las alteraciones en el pensamiento y la actividad que
describe el autor en las formas más floridas de la enfermedad, encontramos asimismo,
como ya fue expuesto, condiciones particulares del humor (los llamados estados
fundamentales), que aun no cursando con accesos maníacos o depresivos tienen un valor
patognomónico que reclama su inclusión legítima en la PMD. Este, a nuestro entender, es el
problema primordial que comporta esta entidad, debido a que Kraepelin mismo aclara que
estos se confunden con lo que podríamos denominar disposiciones normales de los
individuos. Es decir, lo que según esta clasificación se considera patognomónico se
confunde sin más con los aspectos que en los individuos que se encuadran dentro de la
normalidad. Es nuestra opinión que el carácter de “poco sensibles” que Kraepelin atribuye a
los síntomas fundamentales, sin una clara especificación de qué constituiría lo que le daría
especificidad a éstos, es lo que ha propiciado que esta entidad se funde en un continuum
con la llamada normalidad.
2
Las particularidades de los planteos freudianos en relación a esta temática y las concepciones aportadas por
Jacques Lacan serán abordadas en una próxima etapa de la presente investigación.
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En definitiva, entendemos que si bien el trastorno del humor por un lado es uno de
los aspectos que le da unidad a esta patología, este criterio comporta una excesiva laxitud
que podría ser pensada como uno de los motivos por los cuales esta entidad muestra desde
sus inicios dificultades en cuanto a la delimitación de su especificidad.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
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psicológico. Este elemento es plausible de concebirse como aquel que encarna el dogma
de la escuela. A diferencia del uso científico de las ideas (contextualizadas, no absolutas y
en proceso de transformación), el uso dogmático (escolástico), se caracterizaría por
transformar las ideas en Máximas, únicas, sin posibilidad de convivir con otras (Vainer,
1997).
Cada sistema teórico psicológico instaura una retórica de la verdad, definida por
ser exclusivista, absolutista, y de legitimación ideológica (Ibáñez, 2007). Por ende, las
diferentes escuelas se presentan más como espacios dogmáticos de reproducción
mimética y acrítica, que como nuevos momentos de producción de conocimiento. Y
quienes participan de los credos irrefutables que conforman los sistemas teóricos
psicológicos admiten una modalidad de “investigación” basada en la interpretación de
verdades reveladas. Un tipo de investigación dogmática que consiste en interpretar
acríticamente aquel conjunto de creencias desarrolladas por una autoridad máxima. La
consecuencia directa es el distanciamiento de una de las características básicas del
conocimiento científico: la auto-corrección o revisación crítica de las creencias producidas.
Según Rokeach (1960; en Etchezahar & Jaume, 2012) una de las principales
características del concepto de dogmatismo es la de no limitarse a las esferas política y
religiosa, dado que puede observarse también en ámbitos científicos. En psicología es
posible observar expresiones del freudismo dogmático, como así también de un
dogmático anti freudismo; los dogmáticos piagetianos y los dogmáticos anti piagetianos,
etc. El dogmatismo no pierde sus componentes preponderantes al pesquisarse en el
ámbito de la psicología como ciencia y profesión. Por el contrario, sus componentes se
visualizan acabadamente: la defensa de la cohesión del propio grupo, la infravaloración
de otras escuelas, el autoritarismo, el aislamiento, la creencia en una sola verdad, y el
auto-engrandecimiento (Rokeach 1960; en Etchezahar & Jaume, 2012). Es relevante
remarcar que el dogmatismo como elemento principal del escolasticismo en psicología, no
remite únicamente a la dimensión psico-individual destacada en la idea de actitud
dogmática. Como elemento constitutivo del escolasticismo, el dogmatismo desborda
tumultuosamente el nivel individual y adopta formas institucionalizadas y persistentes
(Vilanova, 2003). En esta misma línea de análisis, Deconchy estudia los aspectos socio-
estructurales responsables del desarrollo de la ortodoxia en los individuos. Los sistemas
ortodoxos -léase dogmáticos- crean ortodoxia en individuos, por el hecho de que el
sistema mismo impulsa la creencia en dogmas básicos que trascienden los criterios de la
demostración racional o empírica (Deconchy, 1980; en Fraisse, 1985). La lograda difusión
de una ortodoxia depende simultáneamente de su origen en sistemas de creencias, del
poder ejercido por los grupos situados en el centro del sistema y de la capacidad del
sistema para encontrar nuevos prosélitos (Deconchy, 1980; en Fraisse, 1985). La
formación del psicólogo latinoamericano se forja en instituciones universitarias que
tienden a promulgar el individualismo, opacando la relación entre estructuras socio-
institucionales y económicas, y el individuo.
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CONCLUSIÓN
En este sintético trabajo se han abordado tópicos acuciantes respecto del terreno
problemático que presenta la psicología. Estos se han referido principalmente al
escolasticismo, la fragmentación, y el dogmatismo, enunciando a su vez la propuesta de
unificación y la propuesta pluralista. Hoy el carácter escolástico-fragmentado
representaría uno de los problemas de esta ciencia y profesión. Como se ha expuesto,
con la misión de superar esta condición se han desarrollado propuestas alternativas que
buscan englobar la dispersión en una totalidad coherente y organizada, y por otro lado, se
ha recurrido a la propuesta del pluralismo. Este último fomentaría la participación de un
mayor número de sistemas teóricos psicológicos, en un juego de argumentos y contra-
argumentos que tiendan a sociabilizar el conocimiento psicológico, y a lograr el avance
científico-profesional por medio de una práctica comunicativa, colectiva y dialógica.
Sostenemos que deben ser los tópicos abordados aquellos que guíen el debate de la
psicología actual, direccionándonos hacia un pluralismo científico y democrático
fundamentado en la práctica comunicativa del dialogo.
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En segundo lugar, escuela puede tomar un sentido más literal y referir a una institución
universitaria, centro educativo u organización profesional concreta, para remitir
indirectamente y en un segundo momento a un conjunto humano y a sus producciones
intelectuales(Sahakian, 1975/1982). Ejemplo de este sentido más literal es la referencia a la
escuela de Würzburg, en torno a Oswald Külpe.
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Hasta tan tarde como 1948, en el prefacio de la segunda edición de su libro, reconocía
que “Las más grandes escuelas de Psicología, tal como existían en 1931 cuando la primera
edición de este relevamiento fue publicada, son aún escuelas contemporáneas”(Woodworth,
1938/1961, pág. v). Y aunque admitía que estas escuelas se habían complejizado y
diversificado, aún sostenía que eran identificables como grupos coherentes y delimitados.
Por el contrario, Heidbreder, en su Seven Psychologies –editado en español como
‘Psicologías del Siglo XX’- sostenía que
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Respecto a Edwin Boring, y como afirma Klappenbach (2000), es claro que su Historia de
la Psicología Experimental de 1929(Boring, 1950/1978)–una de las primeras
reconstrucciones propiamente históricas de la psicología- no presenta una ciencia
fragmentada. Sin embargo, la Psicología retratada por Boring, aunque no fragmentada,
tampoco se muestra unificada ni predominantemente unitaria. De hecho, su Historia alterna
entre la descripción de obras científicas unipersonales y la descripción de escuelas y
sistemas en términos de psicologías (como la Gestalt, el Conductismo, la escuela de
Würzburg y la de Brentano) conceptualizadas como emergentes del zeitgeist. En este
sentido sostiene Klappenbach (2013)que Boring, en 1930,“no ocultaba un fuerte
cuestionamiento al conductismo y, más ampliamente, a todos aquellos que adherían
dogmáticamente a escuelas basadas en puntos de vista, a los cuales consideraba
escolásticos” (pág. 87).Aunque con el fin de legitimar la psicología experimental, la obra de
Boring no desechó el concepto de escuela como unidad central del análisis histórico de la
ciencia –aunque su exposición no se organiza en escuelas-, ni eludió las implicaciones del
concepto acerca de la unidad y uniformidad al interior de dichas escuelas.
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En contra de este enfoque deductivo, los autores proponen “examinar el corpus completo de
trabajo publicado en una era para ver –empíricamente en vez de conceptualmente- qué
‘géneros’ emergen naturalmente”(Green, Feinerer, & Burman, 2013, pág. 169). Llevando a
cabo el análisis descrito, los autores arriban a conclusiones semejantes a las obtenidas en
los estudios de la tradición valenciana. Aunque es innegable la existencia de grupos de
autores relativamente estables, estos grupos no cuadran y exceden las escuelas tal como
las caracterizan las reconstrucciones históricas clásica. En segunda instancia, las escuelas
o grupos ya no son la unidad principal de análisis histórico, en tanto que este análisis
constata la existencia de linajes o géneros de investigación (es decir, unidades que
representan áreas o programas de investigación desarrollados por los psicólogos),
emergentes sólo a partir de un análisis diacrónico y temático sobre los intereses y las
comunicaciones de los psicólogos históricos. Los autores manifiestamente asimilan estos
géneros a los colegios invisibles previamente aludidos, inicialmente propuestos por la
sociología de la ciencia (Crane, 1969).
CONCLUSIÓN
Lo que vienen a criticar las revisiones descritas es, en primer lugar, la referencia unívoca
al concepto escuela: la noción misma de escuela es polisémica, y la confusión de sus
niveles de referencia no colabora con clarificar las reconstrucciones históricas. En segundo
lugar, vienen a sostener que aunque operativas, existen alternativas conceptuales que
refieren igual o mejor al campo de la psicología que la noción de escuelas, en tanto que
estas, clásicamente concebidas como grupos estables en el tiempo, claramente delimitadas
espacio-temporalmente, con una estructura interna homogénea inmutable y con un grupo de
ejemplares adscritos usualmente descritos en calidad de líderes, no reflejan con veracidad
la historia de la psicología. Existen alternativas que dan lugar a relatos históricos más
veraces, como aquél que se configura al concebir colegios invisibles o géneros en historia
de la psicología. Estos géneros comprenden estructuras predominantemente temáticas,
alrededor de múltiples programas de investigación delimitados que han sido desarrollados a
lo largo del tiempo y a través de cambios y alteraciones. Los miembros de estos colegios no
pueden identificarse de una vez y para siempre en calidad de líderes y subalternos. Y dado
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464
VI Congreso Marplatense de Psicología
465
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
466
VI Congreso Marplatense de Psicología
MÉTODO/PARTICIPANTES
INSTRUMENTOS
467
VI Congreso Marplatense de Psicología
ANÁLISIS DE DATOS
RESULTADOS
468
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469
VI Congreso Marplatense de Psicología
IMPORTANCIA ATRIBUIDA
470
VI Congreso Marplatense de Psicología
Con el fin de organizar los eventos en función del sentimiento que evocan y la
importancia atribuida, se confeccionó la Tabla 2. La misma, construida en la forma de
una tabla de contingencia, presenta 9 cuadrantes en los que un evento se ubica en
base a la evaluación en la dimensión positivo-negativo y a la importancia que se le
otorga. De esta manera, la evaluación en la dimensión positivo-negativo presenta tres
columnas: (a) negativo, con puntuaciones entre 1 y 2,99; (b) intermedio, puntuaciones
entre 3 y 4,99; y (c) positivo, puntuaciones entre 5 y 7; y la importancia atribuida
exhibe tres filas: (a) bastante importancia, puntuaciones entre 3 y 4,99; (c) mucha
importancia, puntuaciones entre 5 y 5,99; y (d) importancia extrema, puntuaciones
entre 6 y 7.
Al analizar la distribución de frecuencias se verifica que existe una asociación
positiva entre el tipo de sentimiento evocado y el grado de importancia atribuido. Así, a
los eventos considerados más negativos tiende a atribuírseles menor importancia, al
tiempo que a los eventos más positivos se les asigna mucha importancia, como por
ejemplo la Revolución Industrial, la era digital, la invención de la imprenta y de la
abolición esclavitud. Esta asociación es estadísticamente significativa (x2(4)=15,83;
p<,003. Calculada mediante el Statistics Calculator 4.0 en base a la distribución de
frecuencias aquí presentada).
471
VI Congreso Marplatense de Psicología
descub.
médicos/científicos
Total 10 7 11 28
Nota. Los números indican cantidad de eventos.
DISCUSIÓN
472
VI Congreso Marplatense de Psicología
en base a una primera lectura descriptiva de los datos respecto a la evaluación de los
mismos, se puede inferir que los eventos se ordenan bajo una lógica de calamidades
versus progreso histórico-lucha contra la opresión.
En un segundo momento de análisis (clúster jerárquico), aquella lógica se
ratifica, hallándose un conglomerado -el más negativo- relativo a las calamidades
históricas, otro -el más positivo- relacionado con el progreso histórico y la lucha contra
la opresión y un tercer agrupamiento donde, si bien se incluyen eventos relacionados
con el progreso histórico y la lucha contra la opresión, éstos se relacionan más con
luchas sociales y aparecen cuestiones relativas a conquistas y exploraciones.
En lo que hace a la importancia atribuida, los 28 eventos presentados exhiben
medias superiores a 4,6, confirmando la importancia de los estímulos presentados en
línea con lo hallado tanto por estudios previos transculturales (Liu & Hilton, 2005; Liu,
et al., 2005; Liu, et al., 2012; Hanke, et al., 2014).
Los eventos considerados más importantes se relacionan con avances en los
derechos del hombre y la libertad, el conocimiento y cambios en la vida social.
Mediante la construcción de un cuadro de contingencia y el cálculo del Chi
Cuadrado, se verifica una asociación entre la evaluación de los eventos de la historia
universal presentados y la importancia atribuida a los mismos. La evaluación positiva
se relaciona con una mayor atribución de importancia y, a la inversa, los eventos
evaluados de forma más negativa son a los que se les atribuye una relativa menor
importancia. Los estímulos relacionados con la temática de avance son los evaluados
de forma más positiva y a los cuales se les atribuye mayor importancia. Por el
contrario, los fenómenos totalitarios son los evaluados de forma más negativa y con
una importancia relativa más baja. Los hallazgos corroboran el argumento de que la
memoria colectiva se relaciona con el bienestar del grupo social, donde los eventos y
personajes recordados tienden a ser positivos para mantener una buena imagen del
grupo1 y, que cuando éstos son negativos, se les tiende a atribuir menor importancia a
fin de lograr, a nivel de la memoria colectiva, una balanza positiva, afirmando que es
cierto que existieron fenómenos negativos pero éstos tienen una importancia relativa
menor a la de los eventos positivos.
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1
Al hablar de eventos de la historia universal, el grupo de referencia sería la humanidad.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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474
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
475
VI Congreso Marplatense de Psicología
orden preestablecido sino con la frecuencia que cada una de ellas tiene en la escritura
de la lengua.
Según Ferreiro (1979) la escritura, sistema de signos socialmente constituidos,
tiene un modo de existencia entre los objetos del mundo. En tanto objeto del mundo
externo tiene propiedades visibles, en tanto objeto de intercambios sociales participa
de una compleja red de interrelaciones potencialmente observables. Y los niños no
esperan tener seis años e ingresar a la escuela para comenzar a pensar y reflexionar
acerca de la escritura, este proceso tiene su inicio en etapas anteriores, en las cuales
empiezan a organizar sus ideas al tratar de comprenderla.
Teniendo en cuenta lo antes mencionado y conociendo los complejos procesos
cognitivos que se ponen en funcionamiento en el desarrollo normal de la escritura.
Esta investigación propone ampliar la perspectiva, para comprender y entender qué le
sucede a las persona con Dislexia. Cuáles son los mecanismos que se activan en el
cerebro disléxico y qué estrategias son las más adecuadas para alcanzar este
conocimiento. Teniendo también en cuenta todas las potencialidades que se
desarrollan a partir de una estructura neurológica diferente pero con muchas ventajas,
evitando así reducir dicha problemática únicamente a los niños y al ambiente escolar.
No debemos olvidar que hay muchos adolescentes y adultos que son disléxicos y
sufren las consecuencias de este trastorno. Muchos de ellos diagnosticados tarde o no
diagnosticados.
En 1970 la Federación Mundial de Neurología define dislexia como “Trastorno
manifestado por dificultad en el aprendizaje de la lectura pese a la instrucción
convencional, una inteligencia adecuada y buenas oportunidades socioculturales”.
En 1992 en el CIE-10 se define dislexia como “Un déficit específico que no se
explica por el nivel intelectual, por problemas de agudeza visual o auditiva o por una
escolarización inadecuada”.
Según la International Dyslexia Association (2002), la dislexia es una dificultad
específica de aprendizaje cuyo origen es neurobiológico. Se manifiesta en el
aprendizaje de la lecto-escritura, presentando dificultades en el proceso lector, como
también en la escritura y en la ortografía y, en general, con todo lo que tenga que ver
con la decodificación de los símbolos que nosotros mismos hemos creado para
nuestra comunicación (las letras y los números).
Según Defior Citoler (2000), la decodificación es entendida como la capacidad
de reconocimiento de palabras. Su dominio implica aprender a discriminar e identificar
las letras aisladamente, identificar cada palabra como una forma ortográfica con
significado y también atribuirle una pronunciación. Para poder decodificar con éxito, el
niño tiene que entender cómo se relacionan los símbolos gráficos con los sonidos y
adquirir los procedimientos de lectura de palabras.
El reconocimiento de palabras tiene que convertirse en un proceso automático,
que no requiera demasiada atención, de modo que cuantos menos recursos
atencionales se dedique a las operaciones de bajo nivel, mayor será la capacidad de
ejecución de los procesos de nivel superior, cuya meta es la comprensión. Esta es una
dificultad particular que presentan los niños y niñas disléxicos.
Pero la dislexia es mucho más que tener dificultades en la lectura y en la
escritura, ya que existen problemas de compresión, de memoria a corto plazo, de
476
VI Congreso Marplatense de Psicología
477
VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
479
VI Congreso Marplatense de Psicología
UNIVERSITARIOS HOY
Ehuletche, Ana María
Banno, Beatriz
De Stefano, Adriana
INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
1
Prensky, M (2001) Digital Natives, Digital Immigrants From On the Horizon (MCB University Press, Vol. 9 No. 5,
October 2001)
480
VI Congreso Marplatense de Psicología
2
Pedró, F (2006) Aprender en el nuevo milenio. Un desafío a nuestra visión de la tecnología y la educación
OECD-CERI.
3
Piscitelli, A. (2009) Nativos digitales Dieta cognitiva, inteligencia colectiva y arquitecturas de la participación
Aula XXI. Santillana .2009
4
Palfrey J. & Gasser, U (2008). Born Digital: Understanding the First Generation of Digital Natives. New York,
NY: Basic books
5
Vilches, L. (2001) La migración digital
6
Brooks-Young, S. (2006) Critical technology issues for school leaders. Corwin Press; EEUU, 2006. ISBN 1412927307,
9781412927307
481
VI Congreso Marplatense de Psicología
Si bien existe la mencionada brecha digital entre los nativos y los inmigrantes, en países en
desarrollo en los cuales, el acceso a las tecnologías no se halla distribuido en forma pareja
en todos los sectores sociales esto no es lo único. Otras dos problemáticas asociadas
emergen en el panorama educacional: el analfabetismo digital, que se refiere a las
habilidades técnicas que una persona no logra desarrollar sin acceso a la tecnología y la
brecha alfabetogeneracional profundizando diferencias culturales entre nativos e
inmigrantes.
A la luz de la aparición de generaciones con capacidades, intereses, manejo de la
tecnología y valoración de la formación y de la información totalmente ortogonal respecto de
las preexistentes, las propuestas educativas tendrán que ser deconstruidas y vueltas a
diseñar. En este caso la singularidad es precisamente la digitalización de la cultura
(especialmente juvenil) en las dos últimas dos décadas.
La adecuación de los procesos de enseñanza aprendizaje a estos fenómenos emergentes
lleva a autores entre ellos Coll, C y Monereo, C.7 a repensar los modelos y las prácticas
educativas a la luz de estos fenómenos.
RESULTADOS
7
Coll, C. Monereo, C. (2008) Psicología de la educación virtual. Ediciones Morata, Madrid.
8
Kolb, D. (1976) Psicología de las organizaciones: Problemas contemporáneos. Edit. Prentice-Hall
Hispanoamericano. México
9
Kolb, D (1999). IEA: Inventario de estilos de aprendizaje versión 3. España.
482
VI Congreso Marplatense de Psicología
medida que avanzan en su proceso de aprendizaje los estudiantes van descubriendo cuál
es su mejor forma de aprender, dependiendo de condiciones tales como las circunstancias,
contextos o tiempos de aprendizaje. Los alumnos aprenden con más efectividad cuando se
les enseña con sus estilos de aprendizaje predominante.
Pero en realidad en el avance de la investigación decidimos evaluar los supuestos de los
docentes sobre estas preferencias de sus estudiantes para percibir y procesar la información
en el proceso de aprendizaje. Se elaboró a partir del IEA una escala para medir los
supuestos de los docentes sobre el aprendizaje de sus alumnos.
Para el objetivo que señala describir las características del estilo de aprendizaje de
cada segmento de la ampliación de la muestra y describir los supuestos de los
docentes con respecto a las capacidades de uso de las TICs de los estudiantes los
docentes suponen que el estudiante ingresante a la universidad tiene un estilo de
aprendizaje divergente y acomodador, que supone que prefieren experiencias que
activen sentimientos o emociones y la observación cuidadosa y desde distintos
puntos de vista de situaciones e informaciones. Que son estudiantes motivados para
hacer descubrimientos, saber el porqué de las situaciones, de las cosas y de los
fenómenos. Sujetos creativos que poseen amplios intereses culturales y que
prefieren la información presentada de forma detallada, sistemática y con posibilidad
de discutir sobre ella. Cuyo punto fuerte está en la imaginación y que conceden gran
sentido a las relaciones personales. Un sujeto que procura buscar el significado a las
experiencias de aprendizaje, disfrutando en llevar a cabo planes que impliquen
nuevas experiencias. Que resuelven los problemas de forma intuitiva, más por
tentativa y error que por capacidad analítica. Sin embargo estos supuestos del
docente marcan una diferencia con la caracterización hecha a partir del estudio de
los ingresantes que lo muestran como predominantemente convergentes y
asimiladores. Esto significa que se encuentra enfatizado el uso del pensamiento
sobre la experiencia concreta y la experiencia práctica sobre la observación reflexiva.
Los estudiantes prefieren encontrar el uso práctico de las teorías y de las ideas para
solucionar los problemas. Prefieren trabajar con objetos y problemas técnicos en vez
de trabajar situaciones sociales e interpersonales. En cuanto al estilo de
procesamiento de la información son más formalmente abstractos, prefieren una
información bien organizada, no les gusta explorar algo fortuitamente. Les gusta
organizar los datos de forma lógica y concisa, aprenden teorías, leyes,
generalizaciones aunque se preocupan poco de la aplicación de las mismas.
Prefieren más las relaciones con las ideas que con las personas. De todos modos,
483
VI Congreso Marplatense de Psicología
las tendencias halladas en este proyecto sobre el uso frecuente de las TIC ya sea en
actividades individuales y grupales están presentes en ambas muestras y siguen las
tendencias mundiales que señalan un incremento en la realización de actividades
interactivas o de colaboración en la web, aunque con diferentes grados de inmersión
mostrándose esta apropiación más lenta en los docentes.
CONCLUSIONES
Lo hallazgos que fuimos obteniendo al seguir esta línea de investigación nos llevó a
definir el tema al presentar el nuevo proyecto de investigación. Así decidimos retomamos el
constructo teórico competencias10 para focalizar la mirada en las competencias TIC de los
docentes universitarios en sus prácticas áulicas. Las preguntas de investigación ¿está
preparado el docente para incorporar a la práctica de enseñanza el uso de TIC en carreras
de grado en la Educación Superior? y ¿el docente tiene actitud para incorporar a la práctica
de enseñanza el uso de TIC en carreras de grado en la educación superior? aportan dos
variables “preparación” y “actitud” consideradas como estructurantes del constructo
competencias vinculadas al uso pedagógico de las TIC y al perfil innovador del docente. Se
tomarán como casos de estudio las Facultades de Psicología, de Exactas y Ciencias
Naturales y de Ciencias Económicas y Sociales de la UNMdP y Universidad CAECE. El
instrumento de recolección de datos escala tipo Likert será diseñado ad hoc y administrado
mediante un servidor de encuestas online. Se aplicarán técnicas estadísticas descriptivas y
exploratorias.
Con esta nueva investigación seguimos produciendo insumos que puedan ser usados para
el fortalecimiento de la carrera docente.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
10
Lo habíamos trabajado en 2008 2009 en el proyecto: Diseño curricular por competencias y criterios de
evaluación de tutores de e-learning.
484
VI Congreso Marplatense de Psicología
Palfrey J. & Gasser, U (2008). Born Digital: Understanding the First Generation of Digital
Natives. New York, NY: Basic books
Palfrey J. & Gasser, U (2008). Born Digital: Understanding the First Generation of Digital
Natives. New York, NY: Basic books
Pedró, F (2006) Aprender en el nuevo milenio. Un desafío a nuestra visión de la tecnología y
la educación OECD-CERI.
Piscitelli, A. (2009) Nativos digitales Dieta cognitiva, inteligencia colectiva y arquitecturas de
la participación Aula XXI. Santillana .2009
Prensky, M (2001) Digital Natives, Digital Immigrants From On the Horizon (MCB University
Press, Vol. 9 No. 5, October 2001)
485
VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVO
INTRODUCCIÓN: EL PROBLEMA.
familiares diversas: ahora son las familias, y sus características culturales quienes explicarían el
fracaso.
En ambas perspectivas, tal como ha señalado Terigi (2009) se confunden aspectos que
favorecen el aprendizaje escolar con condiciones “necesarias” sin las cuales este aprendizaje no
sería posible.
Estos posicionamientos tienen sus efectos en las escuelas, donde se suele pensar que si un
niño tiene dificultades para aprender el problema está en la naturaleza del niño o en su familia, la
escuela no resulta interpelada, y como consecuencia se desestima lo que la propuesta escolar
pueda hacer para transformar las situaciones de fracaso. Como resultado el maestro queda a la
espera de un remedio que vendrá de otro lugar –el psicólogo, el neurólogo, el asistente social, la
familia.
Para dar cuenta de lo que sucede en las escuelas con las dificultades de aprendizaje de
algunos niños, desde la política educativa de la provincia de Buenos Aires, se plantea como eje la
centralidad de las condiciones de enseñanza:
La recuperación de la centralidad de la enseñanza es el único camino para garantizar el derecho de
los niños/as a la educación.” “…los caminos que en este sentido pueden empezar a transitarse,
pasan por la reorganización de la institución escolar y una propuesta que actualice los contenidos
curriculares y vuelva a instalarlos en el centro de la vida escolar.(Diseño Curricular de la Provincia de
Buenos Aires, p 13).
Sin desconocer que algunos alumnos atraviesan dificultades singulares o trastornos que
complican sus posibilidades de aprender en la escuela, se trata de abordar el problema pedagógico,
desde las propiedades de la situación áulica y escolar, pensando ayudas más ajustadas a sus
necesidades y posibilidades.¿Qué alternativas diferenciadas se pueden implementar en y desde la
propuesta escolar para que estos niños de 2º año que no leen ni escriben convencionalmente
avancen en sus conocimientos del lenguaje escrito? ¿Cómo se sostienen dichas alternativas en el
tiempo, atento a las características propias de la dinámica escolar? ¿Qué situaciones didácticas son
más valiosas para que avancen en la construcción del lenguaje escrito?
El Diseño Curricular de la Provincia de Buenos Aires establece la alfabetización inicial como
un continuo que no se resuelve en un año de escolaridad. Así, en el aula de 2ª año conviven
diferentes modalidades de escritura: niños que han comprendido la fonetización del lenguaje escrito -
en un nivel alfabético, en transición o silábico-, y niños que aún no han fonetizado la escritura. En
todos los casos son alumnos que han hecho grandes progresos en su proceso constructivo del
lenguaje escrito.
Los niños que fracasan en la escuela están recorriendo el mismo camino de apropiación del
objeto de conocimiento que aquellos que tienen éxito, pero con otros tiempos. Cuando la propuesta
escolar los ignora, la misma pierde la posibilidad de intervenir y de plantear problemas significativos
que consideren los puntos de partida de estos niños.
En el presente trabajo se realizó el seguimiento de un grupo de alumnos con dificultades en
su alfabetización inicial de 2ª año A y B de la Escuela Primaria Privada Galileo Galilei de Mar del
Plata. Sus docentes Natalia Basualdo y Vanesa Somers y la directora Sra. Raquel Stebani, les
ofrecieron alternativas escolares no habituales en la práctica, previstas en el Diseño Curricular de la
Provincia de Buenos Aires: Aula Flexible y trabajo en Parejas Pedagógicas. Ambas modalidades
consisten en la flexibilización de modalidades de agrupamiento y del uso del tiempo, así como
favorecen el trabajo en equipos docentes. Se seleccionaron ciertas situaciones didácticas, se evaluó
su impacto en los aprendizajes y se realizó un trabajo de análisis y seguimiento del proceso de
alfabetización.
.
Investigaciones psicogenéticas han puesto de manifiesto que los niños elaboran diferentes
ideas sobre el lenguaje escrito. Estas ideas guían sus producciones y definen un camino que se
inicia fuera de la escuela pero que se continúa en ella como lugar privilegiado de apropiación de los
bienes culturales (Ferreiro, 1991ª y 2001;Teberosky, 1991; Tolchinsky, 1993). Se hará a continuación
una breve mención de los aspectos fundamentales de la evolución de dicho proceso de apropiación
desde la perspectiva constructivista:
La alfabetización inicial se piensa en términos del sujeto que aprende y de la naturaleza del
objeto de conocimiento: el sistema de representación alfabética. Como tal, implica un proceso de
relaciones y diferenciación de sus elementos, así como una selección de aquello que será retenido
en la representación.
Siguiendo a Ana María Kaufman (Kaufman, 2007) se concibe al aprendizaje de la lengua
escrita como la comprensión del modo de construcción de un sistema de representación, su
aprendizaje se convierte en la apropiación de un nuevo objeto de conocimiento, una
conceptualización. Alfabetizarse implica, desde esta concepción, apropiarse reflexivamente de los
modos de representación del lenguaje que corresponde a un sistema alfabético de escritura. Para
poder apropiarse de las prácticas de lectura y escritura el alumno necesita descubrir las
características alfabéticas del sistema. En un primer momento – generalmente antes de entrar a la
escuela- diferencian trazados que hacen cuando quieren dibujar y cuando quieren escribir, luego se
plantean ciertas condiciones que debe cumplir la escritura “para que diga algo”. Se imponen
entonces exigencias cuantitativas y cualitativas: tener una cantidad mínima de letras y no presentar
la misma letra repetida. El trabajo de diferenciación continúa: para que se puedan “leer” cosas
diferentes, es necesario escribir textos diferentes, o sea variar la grafía (Ctrl+ clic para seguir el
vínculo) .
Hasta aquí el niño no ha establecido ninguna relación entre la sonoridad y las letras o marcas
gráficas que ve escritas o que él mismo escribe. Finalmente llega a fonetizar la escritura, pero no es
aún una relación alfabética sino silábica: cada sílaba de la palabra dicha se corresponde con una
letra escrita. Se pone en correspondencia partes de la escritura (sus letras) con partes de la emisión
oral (sus sílabas). Por ejemplo, Máximo. (Ctrl+ clic para seguir el vínculo) en Ciencias Naturales,
para arbusto escribe de derecha a izquierda “ar…una A” “bu…bu, ¡como burro la B!” y completa con
la O, quedando satisfecho con su escritura: OBA. Luego lee utilizando el recorte silábico para
justificar. Emilia Ferreiro (Ferreiro, 2009) plantea que las escrituras silábicas pueden centrarse en las
vocales o en las consonantes: se trata de centraciones cognitivas sobre dos aspectos de la unidad
sílaba, la sílaba oral es considerada desde dos anclajes diferentes. Para capa un niño escribe AP y
lee “ca…pa”, revisa la escritura y ve las dos rayitas que sobraban, insatisfecho escribe AP y lee
señalando una letra por cada sílaba: “ca…pa, ca…pa”: A P A P . Este es un ejemplo de lo que Emilia
Ferreiro (2003) llama “escrituras silábicas yuxtapuestas”.
El proceso constructivo continúa, pues las contradicciones que le plantea la escritura propia y
las escrituras convencionales producidas por los adultos, perturban sus esquemas. El niño descubre
que la sílaba es reanalizable e inicia un proceso de transición donde algunas sílabas se escriben con
una única letra, mientras que otras se escriben con más de una letra. A este período se lo llama de
transición o silábico alfabético. El niño en estos momentos se autodicta, y haciendo un análisis de la
sílaba comienza a intercalar letras pertinentes pero sin considerar el orden dentro de la sílaba.
Finalmente logra escribir una letra por cada fonema, y deberá continuar su proceso sumando
los aspectos ortográficos del sistema de escritura.
DESARROLLO DE LA EXPERIENCIA
488
VI Congreso Marplatense de Psicología
El Colegio Galileo Galilei de Mar del Plata es una institución de educación pública de gestión
privada que cumple una importante función social en la comunidad del barrio Regional. Atiende una
matrícula de 456 alumnos, está subvencionada por el Estado Provincial, y a la fecha no cuenta con
Equipo de Orientación Escolar.
En el mes de marzo 2014, los docentes de 2ª año A y B realizaron una Evaluación Inicial de
escritura de palabras. Los resultados obtenidos permitieron identificar en ambas secciones un grupo
de 15 alumnos -sobre un total de 78-, con dificultades para escribir alfabéticamente. Se realizó el
análisis de sus producciones a fin de entender dónde estaban ubicados respecto del proceso
alfabetizador y qué conceptualizaciones habían logrado construir sobre el lenguaje escrito.
El equipo docente, directivo y la inspectora del nivel, elaboraron una propuesta para generar
nuevas condiciones de trabajo institucional: ajustaron las cajas horarias -distribución semanal de
horas curriculares-, realizaron en equipo planificaciones de secuencias de actividades conjuntas,
propiciaron acciones de seguimiento y monitoreo, discutieron posibles agrupamientos flexibles de
alumnos. Se acordó una propuesta diferenciada, para que estos niños con dificultades tuvieran otras
oportunidades de aprendizaje del lenguaje escrito, mientras avanzaban en su 2ª año.
Dicha propuesta planteó sostener una ayuda específica de carácter momentáneo (de mayo
a agosto) y sistemático: trabajo en parejas pedagógicas con cada grupo de 2ª A y B, garantizando
dos encuentros semanales en horario escolar. Se utilizaron horas especiales de educación física y
artística en las que el maestro no estaba frente al grado. De esta manera el docente de 2ªA trabajó
con el subgrupo de 2ªB y lo mismo para el caso de su colega de la sección B. La directora resultó
otro actor fundamental, no sólo garantizando las condiciones institucionales para ajustar los horarios
y agrupamientos, sino que también tomó a su cargo a los grupos o a alumnos en particular, cuando
algún imponderable en la dinámica escolar impedía que se trabajara de acuerdo a lo planificado.
Las parejas pedagógicas maestro- maestro también trabajaron dentro del aula con el grupo
total: mientras una docente organizaba la clase y daba las consignas de la actividad, su colega de la
otra sección intervenía con el subgrupo más reducido, al que ayudaba a seguir la actividad general
del grado o presentaba una propuesta alternativa previamente planificada. Se comunicó a las familias
de los 15 niños la modalidad de trabajo de apoyo adoptada, se las orientó sobre manera de
acompañar a sus hijos desde el hogar, y en algunos casos en los que se presumía una dificultad de
otro orden, se sugirió una consulta con un profesional de la salud
Se realizó una nueva evaluación de escritura de palabras al momento de iniciar la experiencia
–el 23 de mayo 2014-. Como resultado de la misma se pudieron analizar las siguientes situaciones:
- dos niños aún no habían establecido una relación entre la pauta sonora y la escritura. Sin embargo,
habían elaborado criterios de variedad cuali y cuantitativos a fin de que su escritura fuera
“interpretable” –escrituras diferenciadas-.
- El resto de los alumnos ya habían logrado fonetizar su escritura, dos con escrituras silábicas –
donde a cada unidad sonora le corresponde una unidad gráfica- y el resto –once niños- con
escrituras de transición silábico-alfabéticas, donde algunas letras eran tratadas con valor sonoro
fonético, mientras que otras mantenían una sonoridad silábica.
RESULTADOS DE LA EXPERIENCIA
donde la letra que representa la sílaba puede o no tener valor sonoro convencional. Es el caso de
Carlos, quien descompone la palabra dicha en “pedacitos” y a cada uno le hace corresponder una
letra, el resultado es OEA para oveja, AUO para canguro, EIO para cerdito. Cuando entra en
contradicción con la cantidad mínima de letras “para que diga” Carlos opta por agregar una letra más,
como en el caso de pez, quedando ESI
- Cinco niños han comenzado el trabajoso proceso de reanalizar la sílaba, autodictándose y
produciendo escrituras de transición o silábico-alfabéticas. Joaquín continúa lentamente avanzando
en su conocimiento sobre el lenguaje escrito: ha comenzado a reanalizar la sílaba. Aún intercala sin
ordenar y es la lectura quien lo guía. Por ejemplo, para escribir paragua Joaquín realiza el siguiente
recorte: “par, par…a, la pe y la rr (PRR) , ra, ra, la a (A) gu, gu, la gu (GU)” El resultado ES
PRRUAGU
- El resto –ocho alumnos- han logrado comprender los principios de base del sistema alfabético,
produciendo escrituras convencionales, deberán iniciar ahora el aprendizaje de los aspectos
ortográficos del sistema.
- Por su parte, los docentes pudieron sostener en el tiempo el proyecto descrito, trabajando en
equipo, donde las intervenciones implementadas fueron seguidas de momentos de reflexión, toma de
decisiones y evaluación colaborativa.
CONCLUSIONES
Considerar al alumno como sujeto cognitivo que intenta conocer el lenguaje escrito como
objeto cultural, hizo visible el trabajoso camino que el niño recorre en una construcción que está muy
lejos de ser lineal y uniforme. Así, las escrituras infantiles no convencionales con sus dificultades,
lejos de remitir mecánicamente a déficit del alumno, fueron “mojones” donde el maestro pudo mirar el
recorrido singular que sus alumnos estaban realizando.
Al asumir el cambio de posicionamiento docente –del alumno portador de un déficit a la
situación áulica y escolar- se recortó le centralidad de la enseñanza como espacio potente de
intervención en situación de fracaso escolar. Esto les permitió a los maestros resignificar su práctica
profesional asumiendo el protagonismo en la implementación de alternativas desde la enseñanza, a
través de un trabajo en equipo, generando espacios de reflexión y asumiendo la autoría en la
implementación de propuestas.
De esta manera, sin desconocer que algunos alumnos atravesaban dificultades singulares,
se trató de abordar el problema pedagógico desde las propiedades de la situación áulica y escolar,
pensando ayudas más ajustadas a sus necesidades y posibilidades.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Es indiscutible afirmar, tal cual lo hacen Credé y Phillips (2011) que los
alumnos requieren participar en sus aprendizajes autorregulando y monitoreando su
propio progreso, estableciendo metas, siendo cada vez más capaces de reflexionar
sobre la eficacia de sus modos de aprender, aspirando a altos niveles de
metacognición; en este sentido, deberían considerar las tareas de aprendizaje como
intrínsecamente interesantes y apostando a altos niveles de auto-eficacia. Las
preguntas que surgen entonces son: ¿Cómo podemos desde nuestro rol docente
colaborar en que esto se produzca? ¿Puede variar el cómo en función del qué?
El caso de las asignaturas llamadas por los alumnos neuro, parece ser un claro
ejemplo en la formación de Psicopedagogos y Educadores Especiales. El diminutivo
en sí, ya provoca en la mayoría de los estudiantes determinados gestos de fastidio y
temor, apelando a: no sabemos estudiarla… no nos gusta… ¿para qué nos sirve saber
tantos nombres de memoria? Si se los evalúa con parciales de opción múltiple
manifiestan: no soy bueno para rendir así…pero si queremos evaluar de manera oral o
492
VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVOS
Nuestra finalidad era conocer los patrones de aprendizaje y su relación con los
desempeños de los estudiantes de Educación Especial y Psicopedagogía en el
instrumento ILS (Inventory Learning Style, Vermunt, 1995) y observar si estos varían
sobre todo en relación con el rendimiento académico en las materias vinculadas a las
Neurociencias de sus carreras.
PARTICIPANTES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INSTRUMENTO
El ILS consiste en una lista de 120 afirmaciones acerca de actividades,
estrategias y motivos para estudiar que se distribuyen en cuatro dominios. Se
responde, siguiendo una escala tipo Likert de (1) “lo hago rara vez o nunca” a (5) “lo
hago siempre”, para los ítems sobre estrategias; y de (1) “totalmente en desacuerdo” a
(5) “completamente de acuerdo” para los ítems referidos a los motivos para estudiar.
El primer dominio se refiere a estrategias de procesamiento de la información,
el segundo a estrategias de regulación, el tercero a qué orienta o motiva los
aprendizajes y el último dominio, a los modelos mentales de aprendizaje, esto es a
cómo se concibe e conocimiento.
ANÁLISIS Y RESULTADOS
En primer lugar observamos los desempeños del grupo total en cada uno de
los dominios, escalas y subescalas, y luego consideramos si se hallaron diferencias
sobre todo en relación con el rendimiento académico.
Podemos decir que, respecto del primer dominio, Estrategias de
Procesamiento, en general el grupo total evidencia tendencias de uso un tanto
satisfactorio en las estrategias de procesamiento paso a paso que se relacionan con
procesamiento concreto y un uso poco satisfactorio en las de memorización y
repetición y analizar. En tanto también muestran un uso poco satisfactorio para las de
procesamiento profundo en relación con el pensamiento crítico, y ninguna tendencia
en relación con las estrategias de relacionar y estructurar.
Por rendimiento académico, se observan algunas diferencias significativas en
el segundo parcial de Neurofisiología entre el grupo con promedio superior a la media
y promedio inferior en la estrategia de memorización y repetición (t= 2,30 α: .025) a
favor de los segundos. También en el segundo parcial de Estructuración y Patología
del Lenguaje entre el grupo por encima y el por debajo de la media en la estrategia de
relacionar y estructurar (t= 2,03 α: .047) a favor de los segundos.
En relación al segundo dominio, Estrategias de Regulación, podemos decir que
en general el grupo total evidencia sólo tendencias de uso satisfactorio de las
estrategias de autorregulación de procesos y resultados, y de uso poco satisfactorio de
estrategias de regulación externa de procesos de aprendizaje y de resultados de
aprendizaje, como así también, cierta tendencia a realizar algún tipo de regulación.
Por rendimiento académico se observan diferencias significativas en el
segundo parcial de Neurofisiología entre el grupo que se encuentra por debajo y el que
se encuentra por encima del promedio en carencia de regulación (t= 2,78 α: .007) a
favor de los que están por encima de la media, lo cual indica que hay indicios de
regulación. Lo mismo sucede en el primer parcial de Estructuración y Patología del
494
VI Congreso Marplatense de Psicología
lenguaje, para la misma escala (t= 2,17 α: .034) y a favor también de los alumnos que
obtienen notas por encima de la media.
Respecto del tercer dominio, Orientaciones de Aprendizaje, en general el grupo
total evidencia tendencias satisfactorias para cada escala del dominio y se condice por
lo tanto con una baja puntuación en la escala ambivalente, que es lo deseable.
Por rendimiento académico, aparecen diferencias de medias significativas en el
segundo parcial de Neurofisiología entre los que califican por encima y por debajo del
promedio para motivación para obtener un título (t= 2,47 α: .016) a favor de los que
obtienen notas por debajo del promedio.
Finalmente, en el cuarto y último dominio, Modelos de Aprendizaje, se observa
que el grupo total muestra tendencias favorables a concebir al conocimiento en
términos de consumo, al educador como un estímulo y valora la cooperación, mientras
que no se evidencian tendencias en este grupo en relación a concebir al conocimiento
en términos de construcción.
CONSIDERACIONES FINALES
En síntesis, podemos decir entonces que las mayores diferencias aparecen en
el segundo parcial de Neurofisiología. Se evidencia que son los alumnos de promedios
más bajos los que manifiestan mayor uso de estrategias de memorización y repetición,
los más motivados a obtener un título, los que ven el conocimiento en términos de
consumo. En este parcial los que muestran mejores promedios son los que evidencian
algunos indicadores de regulación del aprendizaje y lo manifiestan también en el
primer parcial de Estructuración y Patología del lenguaje. Finalmente, llama la atención
que sean los alumnos de promedios más bajos, los que presentan mayor evidencia en
usar estrategias referidas a relacionar y estructurar en el segundo parcial de
Estructuración y Patología del lenguaje.
Como podemos observar, los patrones no son puros, surgen combinaciones
que quizás no aventurábamos, lo cual indica que debemos seguir indagando y
comparando qué sucede con materias que impliquen contenidos conceptuales
diferentes.
Coleoni y Buteler (2008) en sus investigaciones sostienen que un alto grado de
desarrollo de las habilidades metacognitivas es una característica de sujetos con
mayor grado de experticia. En nuestro caso, recién comienzan en un segundo año a
enfrentarse con los contenidos de las Neurociencias, quizás con la experiencia se
logren mejores resultados.
Al respecto, Martínez Fernández (2007) retoma las afirmaciones de Vermunt y
Vermetten (2004) para destacar que tanto las estrategias metacognitivas como una
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Coleoni, E. y L. Buteler (2008). Recursos metacognitivos durante la resolución de un
problema de Física. Investigações em Ensino de Ciências, 13 (3), 371-383.
Vermunt, J. (2005). Relations between student learning patterns and personal and
contextual factors and academic performance. Higher Education, 49, 205-234.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
497
VI Congreso Marplatense de Psicología
Según Brush, debe partirse de una definición ampliada de historia de la ciencia, definida
como el conjunto de relatos coherentes sobre descubrimientos y propuestas teóricas,
incluyendo las interrelaciones entre la ciencia y las otras formas de actividades humanas.
Brush reconocía, tal como lo hacía simultáneamente Walter Weimer (Weimer, 1974) acerca
de la historiografía de la psicología que “la historia no es meramente un registro estático de
hechos, sino también las interpretaciones propuestas por cada nueva generación de
historiadores” (Brush, 1974, pág. 1166).
La noción de que la historia de la ciencia se reconstruye con cada generación de
historiadores fue parte de la perspectiva historiográfica de variados y disímiles autores en el
campo de la psicología. Por mencionar algunos, el historiador Robert Watson, al explayarse
sobre el rol y uso de la historia de la psicología en la formación de los psicólogos había
reconocido que dicha historia, al responder a intereses concretos, y al pertenecer estos
intereses a generaciones específicas, debía ser reescrita constantemente (Watson, 1966).
Allan Buss (Buss, 1975) incorporaría la idea del carácter dinámico y generacional del
conocimiento y de la cultura a partir de la teoría generacional del sociólogo del conocimiento
Karl Mannheim (Mannheim, 1952), sosteniendo la dependencia generacional ya no sólo de
las reconstrucciones históricas, sino del conocimiento psicológico general. A su vez, la
necesidad de mantener una actitud crítica y revisionista y de fundamentarse adecuadamente
en fuentes primarias sostenida por Kurt Danziger (Danziger, 1979) respondió en parte a la
tendencia de historiadores y sociólogos de aceptar acríticamente los relatos históricos
heredados generacionalmente, y de usarlos como base de interpretaciones y ulteriores
producciones historiográficas.
Brush identifica que ciertos historiadores de la ciencia –entre ellos el prolífico y pionero
George Sarton-, aunque reconocen como legítimo el estudio de la historia y de la totalidad
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VI Congreso Marplatense de Psicología
de los conocimientos pasados, llaman a no perder de vista que lo que ha sido dejado atrás
por los científicos debe ser considerado necesariamente como perteneciente a los errores o
fallos históricos. La historia clásica de la física, por ejemplo, enfatiza el rigor metodológico de
autores como Galileo y Newton, en desmedro de otras variantes explicativas historiográficas
y de otras teorías originalmente competidoras a los modelos teóricos propuestos por dichos
autores.
Brush nota que esta actitud es diametralmente opuesta a lo que propone la nueva historia
de la ciencia. Esta coloca en un segundo plano la importancia de la verificación experimental
para el avance de la ciencia para reconocer la importancia de otros tipos de argumentos y
estructuras (filosóficas, metafísicas o sociológicas) para el avance de la ciencia. Haciendo
eco de la clásica sociología del conocimiento, y augurando el desarrollo de la sociología del
conocimiento científico (Bloor, 1978/1998), Brush sostiene que el historiador, lejos de ser un
documentador de la objetividad de los problemas en ciencia, “debe estar preparado para
analizar los aspectos filosóficos, psicológicos y sociológicos del trabajo científico” (Brush,
1974, pág. 1166) a la hora de analizar desde una perspectiva histórica y epistemológica la
prevalencia, aceptación, difusión o fracaso de teorías y enfoques científicos.
Esta caracterización ampliada de la historia, especialmente en sus vertiente sociológica,
reaviva hoy necesariamente los debates en torno a las problemáticas relaciones entre la
sociología y la historia (Burke, 1994). La propuesta de Brush de una historia con sensibilidad
sociológica puede verse consumada en la historiografía de la psicología en el enfoque de la
historia social de corte crítico-marxista (Wolf, 1978), en la historia sociológica de corte
mannheimiano (Buss, 1975; Danziger, 1979) o en la historia social de corte profesionalista o
institucional (Sokal, 1984; Vilanova, 1997), entre otros. No se registra, sin embargo, una
proliferación tal de enfoques en lo que respecta a la articulación sociología-historia en el
marco de perspectivas de enseñanza de la historia de la psicología. Podemos citar algunos
pronunciamientos de autores internacionales a favor de una enseñanza de la historia que
presente a la ciencia como social y culturalmente contextuada (Robinson, 1979; Benjamin,
2009; Chamberlin, 2010). A nivel local hallamos las argumentaciones del historiador Alberto
Vilanova (Vilanova, 2000) en torno a la enseñanza de una historia de corte social o
sociológico.
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CONCLUSIÓN
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
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Esto significa que es imposible que se pueda entablar una discusión entre quienes sostienen
puntos de vista distintos, dado que la adhesión teórica promueve lenguajes que no pueden
ser homologados, lo que convierte a la comunicación intergrupal en algo prácticamente
inalcanzable. Esta tesis, que se encuentra en la base de los argumentos de quienes
sostienen un posicionamiento escolástico, se traduce en una negativa al diálogo
interparadigmático. Como es notorio, esta negación ha llevado a la promoción del
relativismo conceptual a través de la incomunicación que existe entre los miembros de las
diferentes escuelas de psicología (Calo, et al., 2010).
Sin embargo, como dice Klappenbach (2013), la crisis de la psicología, no responde
al modelo de crisis científicas analizadas por Kuhn (1962). Para que se trate de una crisis
paradigmática, según el modelo kuhniano, la crisis deberá ser un fenómeno poco frecuente
en el paradigma, es decir, un momento que irrumpe desestructurando un período de ciencia
normal. Además, también según el modelo de las revoluciones científicas, los miembros de
la comunidad no tendrían consciencia de la situación sino hasta el momento precedente a la
revolución paradigmática. Notemos que esto no puede aplicarse al caso de la psicología,
debido a que, según lo dicho anteriormente, la situación de crisis en su disciplina constituye
un fenómeno ampliamente conocido por los psicólogos, que está presente casi desde su
inicio y que parece estructural a la psicología (Sturm & Mülberger, 2012).
Por otra parte, desde una perspectiva filosófica, Popper (1994) ha desestimado la
tesis inconmensurabilista, afirmando que es un mito que necesitemos disponer de un marco
común -entiéndase “unificador”- para poder entablar una discusión y que exista posibilidad
de comprensión mutua. Señala que no sólo no es necesario tal marco común, sino que es
incluso más fructífero no contar con él ya que “el aumento del conocimiento depende por
entero de la existencia del desacuerdo” (Popper, 1994, p. 46), lo cual sólo es posible lograr
si intercambiamos argumentos con un disentor.
A partir de lo desarrollado, consideramos que el problema del escolasticismo aún
existe, ya que la diversidad de enfoques, cuando está ausente el diálogo con los adherentes
a otros marcos conceptuales, pone a la disciplina en estado de fragmentación interna.
Debido a que las propuestas unificacionistas y relativistas han sido hasta ahora ineficaces
para resolver este problema, creemos necesario cambiar el enfoque hacia una mirada que
enfatiza la dimensión psicosocial de la situación de división escolástica. Creemos que existe
allí un aspecto psicológico que se conoce como disposición al dialogo (Maliandi, 2000) que
puede resultar explicativo del fenómeno del escolasticismo en su aspecto social. Por otra
parte, como expondremos a continuación, enfatizar el componente dialógico promueve un
giro de la concepción de la racionalidad científica que se transforma en el elemento central
de nuestro enfoque del problema.
Consideramos que un cambio de enfoque del problema podría aportar luz a sus
intentos de resolución. Tal vez si reconsideramos la noción de racionalidad supuesta, tanto
en la formulación del problema como en las anteriores propuestas de solución, sea factible
redefinir el problema desde un punto de vista que resulte más fructífero. De no ser completa
la solución, creemos que este intento al menos servirá, por un lado, para desalentar las
propuestas disgregacionistas que sostienen que la psicología no tiene futuro como disciplina
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VI Congreso Marplatense de Psicología
unificada, y por otro, para resolver el problema planteado por la unificación, es decir, la
anulación de algunos desarrollos teóricos que quedarían excluidos de esta nueva y única
ciencia normal.
Proponemos retomar la tensión existente entre la diversidad y la unicidad de la
Psicología, reconociendo la necesidad de un cambio en la concepción de la racionalidad
científica implícita en el abordaje del problema. Para ello, será necesario cambiar nuestra
mirada desde una concepción semántica a una concepción pragmática de la racionalidad.
Es que el acento puesto en la multiplicidad de objetos y de métodos que le son solidarios
parece conducir a un atolladero conceptual donde el problema es conducido
irremediablemente a la cuestión de la compatibilidad paradigmática. Este planteo del
problema parece reducir la posibilidad de ejercicio de la racionalidad a la comunicación intra-
paradigmática, pues es dentro del mismo paradigma donde se comparte el sentido, y por lo
tanto, donde puede existir comunicación y comprensión mutua. De allí que lo denominemos
enfoque o concepción semántica del problema del escolasticismo.
Sin embargo, existe un enfoque de la racionalidad que, a diferencia de la concepción
semántica, acentúa la relación existente entre los usuarios del lenguaje, es decir, la
pragmática. Este enfoque recibe el nombre de racionalidad dialógica (Habermas, 1987) y
entiende a la racionalidad como una dimensión social característica de la actividad humana
(Maliandi, 2000). Definiremos esta concepción en pocas palabras: razón es sinónimo de
comunicación intersubjetiva; es decir que cuando se habla de racionalidad dialógica se está
haciendo referencia a una concepción de la razón que la homologa al diálogo.
La visión dialógica de la racionalidad nos permite poner el acento en los procesos
sociales que ocurren en la producción, validación y transmisión del conocimiento en
psicología. De esta manera, la disposición a cooperar para resolver problemas se conforma
en un indicador de la dimensión racional en la actividad científica; y parece que esta
dimensión es la que está afectada en la comunidad de psicólogos. La cooperación y la
búsqueda de soluciones a los problemas propios de la psicología rara vez se da entre
psicólogos o grupos de psicólogos pertenecientes a diferentes escuelas.
Esta situación pone de relieve un aspecto interesante de indagar en este problema,
que es el referido a la constitución de las identidades profesionales. Es decir, de la identidad
que surge de la pertenencia a subgrupos que trabajando en torno a un problema, están
abocados a una teoría o grupo de teorías en particular. Es aquí donde surge y se mantiene
la actitud escolástica, como una disposición a limitar o privilegiar un corpus de conocimiento
sobre otros que existen en la psicología. Esto ocurre porque la pertenencia grupal permite
establecer lazos de unión y fraternidad ente los miembros del grupo, pero esta identidad
común incluye también algunas creencias sobre la superioridad del propio grupo y algunos
estereotipos comúnmente descalificadores hacia los demás. Este fenómeno social ha sido
conocido con el nombre de prejuicio intergrupal (Brown, 2006) y consiste en una actitud
positiva o negativa hacia los miembros de un grupo, que crea y mantiene relaciones
jerárquicas entre grupos dentro de la sociedad (Dovidio, Hewstone, Glick & Esses, 2010).
CONCLUSIÓN Y DISCUSIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
perspectiva social. La idea central en esta ponencia es proponer un cambio de mirada sobre
el problema, que corra el eje de la discusión sobre la división escolástica en psicología
desde la tradicional óptica de los objetos y los métodos hacia las cuestiones de entidad
social, como por ejemplo la comunicación y el prejuicio intergrupal. Tal vez, este cambio de
enfoque pueda aportar nuevos caminos para entender las razones de la persistencia que el
problema de la tensión existente entre la diversidad y la unicidad de la psicología ha tenido
en la literatura de la historia y epistemología de la psicología.
Al plantear esta perspectiva, y siendo consecuentes con la concepción dialógica de
la racionalidad, debemos advertir que no creemos que sea posible eliminar completamente
los conflictos que puedan surgir de estos agrupamientos. Debido a que, si bien la actividad
racional del psicólogo estaría, desde esta concepción, dirigida intencionalmente a la
minimización de la conflictividad, también desde ella se propone el reconocimiento de la
inevitabilidad de las relaciones conflictivas. Por lo tanto, “…nunca puede llegar, ni es
racionalmente lícito pretender llegar, a una eliminación total de la conflictividad” (Maliandi,
2006, p.130).
Por último, pretendemos promover una idea que más que una concepción
epistemológica tal vez represente una declaración de principios. Es que en función de
nuestra actividad docente proponemos un cambio de actitud en la mirada profesional.
Creemos que sería deseable la búsqueda de la cooperación en la resolución de problemas
de la disciplina para superar las dificultades comunicativas generadas por la existencia de
intereses sub-grupales. Realizar esta tarea conlleva la aceptación de una actitud ética
denominada principio de convergencia (Maliandi, 2006). Dicho principio dice que, si bien es
improbable que todos los conflictos alcancen o puedan alcanzar la convergencia total, es
racional procurar en cada caso la mayor convergencia posible. El punto central es que esta
convergencia lleva implícita necesariamente la disposición a aceptar la propia falibilidad, en
palabras de Gadamer (1977), aceptar que el otro puede tener razón.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Las carreras de Psicología surgen, tal como ha sido señalado por varios
historiadores de la disciplina, a mediados de la década del cincuenta cuando, caído el
gobierno constitucional peronista, comenzaba en el país un largo período en el que se
sucederán gobiernos elegidos en forma democrática, golpes de estado y gobiernos
militares. Consecuentemente, las universidades nacionales permanecerán
intervenidas la mayor parte del tiempo. No escapa a la lectura que, estas medidas no
sólo se dirigen al control de los movimientos políticos al interior de las mismas sino
que, además, posibilitan la elección directa de los docentes y, de este modo, una
regulación de los contenidos de la formación de grado. Podemos afirmar que, de este
modo indirecto, se controla la producción del pensamiento y la producción de
subjetividad. La llamada Noche de los Bastones Largos es uno de los sucesos en el
ámbito universitario que da cuenta de estas afirmaciones: el ingreso de fuerzas
policiales en la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, en el marco de la caída del
gobierno de Illia y la irrupción por la fuerza en la vida académica.
Esta primera etapa estuvo marcada por los últimos años de un Estado
Benefactor que se debilitaba y cedía su lugar a las ideas desarrollistas en las que, tal
como señalan Carpintero y Vainer, “la ciencia era vista como el camino para que la
Argentina se incorporara al mundo…los psicólogos como agentes de cambio
posibilitarían el pasaje de una sociedad subdesarrollada a los problemas propios de
los grandes centros industriales” (2004,p. 82).
512
VI Congreso Marplatense de Psicología
En la UNLP un nuevo plan de estudios surgirá en los años 1970 y 1971 que
incluirá estas líneas de pensamiento y tenderá a un cambio en la formación: una
Metodología de la Investigación sustituirá a una Psicología Experimental, una segunda
Psicología Social abordará los grupos y las instituciones y una Psicología Preventiva
reemplazará a Higiene Mental, sólo para dar algunos ejemplos.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En los primeros años de este siglo, luego de las crisis institucionales comienza
un ciclo de gobiernos que plantean la reconstrucción del Estado de Bienestar y
elaboran propuestas y programas en esa dirección. Las políticas sociales alcanzan
una dimensión central y prioritaria en este período pero, además, se producen
cambios profundos que implican un cambio de paradigma en leyes que, en muchos
casos, restituyen derechos a minorías que habían permanecido postergadas.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Vezzetti Hugo: Estudio Preliminar en Terán Oscar; Nuestros Años Sesentas, Siglo XXI
Editores. Buenos Aires.2013
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Ignacio Martín Baró, nace en Valladolid, España en 1942 y muere ejecutado por un
escuadrón elite del ejército salvadoreño en 1989. Hombre de fe y de ciencia supo complementar
sus intereses intelectuales con sus creencias religiosas volcándolas en una praxis comprometida
con su pueblo, su disciplina y su iglesia. Reflexionó sobre los presupuestos psico sociales del
carácter, mostró como un régimen político a través de la ideología puede forjar el carácter de los
individuos, aquel aspecto de la personalidad que es claramente social a diferencia del
temperamento. La personalidad se desarrolla en un contexto histórico, cultural y político y la
ideología va interpenetrar dialécticamente el carácter.
El compromiso personal del científico social para cooperar en hacer verdad la liberación de
los sectores vulnerados en sus derechos implica un proceso de humanización que libera también
a los opresores (Freire, 1964-1970). En el diálogo por la humanización de los desposeídos,
concientización, desideologización del sentido común, de la cotideaneidad naturalizada, se hace
también posible la decolonialidad. (Martín Baró, 1986, 1991, 1998)
518
VI Congreso Marplatense de Psicología
Pensar el giro decolonial en la obra de Ignacio Martín Baró nos sumerge en un trabajo
complejo, en donde el camino que los conceptos tejen despliegan una lógica que hay que
explicitar, interpretar allí donde el nombre del concepto está ausente. Martín Baró no utiliza
términos como eurocentrismo, colonialidad del saber, o giro decolonial, sin embargo, la lógica de
la praxis libertaria implica un proceso de decolonialidad. Proporciona una metodología, una
epistemología que convergen en muchos aspectos con el grupo decolonial. Observaremos puntos
en común, sin pretender minimizar las diferencias, puesto que la interrogación decolonial involucra
la complejidad (Castro Gómez y Walsh, 2007) demanda por un pensamiento heterárquico
(Kontopoulos, 1993. En Castro Gómez, 2007) que cree nuevos conceptos para pensar el
capitalismo como una “red global de poder, integrada por procesos económicos, políticos y
culturales, cuya suma mantiene todo el sistema” (Castro Gómez y Grosfoguel, 2007, pg. 17).
Para ambos enfoques es importante mantener visibles tanto los factores subjetivos como
los objetivos que obstaculizan el fortalecimiento de Latinoamérica. Admitir la presencia de
aspectos estructurales ya sea la lógica del sistema-mundo (Wallerstein, 1997) ya sea el singular
posicionamiento de Centroamérica en los ochenta en la política exterior norteamericana.
Martín Baró insiste en la presencia de variables objetivas macroeconómicas que
distribuyen el poder de forma desigual y que al interior de las sociedades latinoamericanas esa
distribución injusta se reproduce. En relación a los factores subjetivos, el autor enfatiza el carácter
ideológico de la realidad social.
La ideología se inscribe en los cuerpos, en el carácter, el síndrome fatalista
latinoamericano es la expresión de ese sometimiento. Siguiendo a Fanón observa como el
latinoamericano indolente ha introyectado la figura del colonizador, como lo carcomen los
sentimientos de culpa y lo agita una violencia que las más de las veces lo motoriza hacia una
estéril lucha entre hermanos. Una rebeldía que difícilmente desemboque en una revolución
auténtica. Pero como Fanon, reconoce que la dialéctica de la dominación, admite la puerta al
cambio, la dominación no es absoluta, la posibilidad libertaria es una afirmación esperanzadora
dada a luz, no por la clásica partera de la historia (la violencia en Fanon) sino por el diálogo, la
concientización y la construcción de una nueva identidad latinoamericana.
Praxis de liberación creada por sabios latinoamericanos como Fals Borda (1985) y Paulo
Freire (1964), proporcionan una potente metodología. Cabe mencionar para no distorsionar un
asunto complejo que encierra muchos colores y matices que Fanon resalta la autocrítica grupal
como una institución africana que ha servido para resolver los conflictos entre las tribus, creación
africana por excelencia y práctica dialógica que se asemeja a la construcción dialógica
latinoamericana.
Son explícitas en Martín Baró las críticas al desarrollismo, aquellas políticas y economías
que buscan justificar el atraso económico latinoamericano en un análisis psicologista del carácter,
la ideología capitalista forja este espejismo para argumentar el camino único de la inversión
extranjera y la mano de obra mal paga. La DESAL (Centro para el desarrollo económico y social
de América latina) planteaba en este sentido del desarrollismo una dualidad, formulaba la
deficiencia psicosocial de los sectores marginados por la interposición de la cultura hispana y la
indígena en relación al mundo moderno de las sociedades latinoamericanas e intentaba integrar
como posible solución la población marginada al sistema social cambiando sus valores y actitudes
519
VI Congreso Marplatense de Psicología
fundamentales (una subcultura dentro del subdesarrollo). Otras explicaciones en esta línea
atribuyen el fatalismo al carácter o a la personalidad de los individuos, se encuentra en quienes lo
vinculan con una baja motivación de logro dada la escasa ambición de progreso de los lugareños
a diferencia claramente de los norteamericanos.
CONCLUSIÓN
De alguna forma, los autores del giro decolonial mantienen en común con el pensamiento
de Martín Baró: la posibilidad de expresión de los sectores oprimidos latinoamericanos, de
convertirse en sujetos de la historia, de hacer historia su verdad. De manera convergente, con el
espíritu de la época la psicología de la liberación y el grupo modernidad colonialidad han realizado
una crítica feroz al desarrollismo, a las posiciones cientificistas y tecnocráticas, promoviendo el
compromiso político en las ciencias sociales y fortaleciendo el empoderamiento de los sectores
oprimidos.
Descolonización, decolonialidad y liberación son categorías que se piensan actualmente en
el territorio de la psicología crítica latinoamericana. Su impacto es visible en muchas áreas, tanto
teóricas como prácticas, y en la formación de psicólogos. Episteme de la relación, en Maritza
Montero; analéctica en Dussel. Desideologización y liberación de Martín Baró, implican un nuevo
520
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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521
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
522
VI Congreso Marplatense de Psicología
Variables internas tales como la necesidad de mano de obra para el trabajo agrario y
determinantes internacionales como la gran depresión económica de los países europeos
durante los años 1880 y 1890 dieron lugar a la gran oleada inmigratoria proveniente
mayoritariamente de Italia y España (Lattes, 2007; Panettieri, 1967, entre otros).
Consciente de la necesidad de resolver por la vía legislativa los graves problemas que
aquejaban a los trabajadores, Joaquín V. González, en ese entonces Ministro del Interior,
propuso el Código Nacional del Trabajo1 en 1904 y el diputado por Córdoba Julio A. Roca
presentaba en 1907 la creación del Departamento Nacional del Trabajo2.
1
El Código Nacional del Trabajo constituido por 14 títulos que abarcaban 466 artículos que
constituye un primer ensayo de unificación de las leyes obrera y un intento de legislar conforme al
momento laboral de la época. Rechazado por la Federación Obrera Argentina (Panettieri, 1967), el
proyecto en cambio encontró buena aceptación por parte de los Socialistas quienes lo encontraron
solidario a sus ideas.
2
El Departamento Nacional del Trabajo
523
VI Congreso Marplatense de Psicología
José Nicolás Matienzo fue su primer director. En 1943 el Departamento es sustituido por la
Secretaría de Trabajo y Previsión.
3
Entre ellos podemos citar el libro de Angelo Mosso sobre La Fatiga y los estudios de Alfred Binet
y Víctor Henri publicados en el libro La fatigue intellectualle en 1898.
4
Hugo Klappenbach (2006) ha estudiado la importancia de la recepción de las ideas
experimentalistas francesas en la Argentina en general y en el laboratorio de Horacio Piñero. En su
desarrollo, sostiene que la enseñanza impartida por Piñero en el curso de Psicología que tenía
sede en la Facultad de Filosofía y Letras remitía a la tradición francesa del experimentalismo y si
se hacía referencia a la psicología alemana de Wundt era a través de dicho matiz. En efecto, a
mediados del siglo XIX la psicología en Francia tenía características diferentes a la alemana. En
Francia se adoptaba fundamentalmente el método experimental que Claude Bernard (1813-1878)
propuso para la medicina. Desde esta perspectiva se consideraba al ser humano desde el punto de
vista de la biología y se establecía una homología funcional entre el estado normal y el patológico
lo cual “inclinó a la incipiente disciplina hacia temas aplicados en el campo de la psicología clínica y
la psicoterapia, y muy pronto hacia lo social y la educación” (Sos; Esteban & Civera; 1998, p. 154).
524
VI Congreso Marplatense de Psicología
En sus concepciones sobre la Psicología Horacio Piñero afirmaba que “Hoy, la psicología
científica se acerca más a la biología que a la filosofía” (Piñero, 1916b, p. 231) y así lo
transmitía en sus primeros cursos de Psicología en la Universidad de Buenos Aires. Sus
programas abordaban el lugar de la psicología en relación con la metafísica y la biología
haciendo hincapié en el “carácter científico de la psicología contemporánea” (Piñero,
1916a, p. 250), considerando luego las características de los fenómenos psicológicos
desde un punto de vista de la fisiología: “el proceso cerebral de la ideación” (Piñero,
1916a, p. 252). En sus Programas, dedicaba toda una unidad temática al “Trabajo
intelectual y a la fatiga mental”, cuyo desagregado analítico evidencia su apoyatura
fisiológica, el paralelismo psicofisiológico que subyace a sus consideraciones y las
posibilidades aplicativas de su estudio: “El ejercicio físico, el reposo y el trabajo intelectual
en el niño y en el adulto. Importancia grande de estos estudios para la pedagogía
científica” (Piñero, 1905, s/d).
Con respecto a los estudios sobre el trabajo físico, ya en una Conferencia pronunciada en
1902, Piñero alertaba sobre “el ejercicio del cuerpo mal comprendido y peor aplicado que
va trazando rumbos a la práctica del perfeccionamiento del hombre físico radicalmente
equivocados” (Piñero, 1916b, p.229). Lejos de ello,
525
VI Congreso Marplatense de Psicología
El curso de Piñero contaba con un Laboratorio que en general asumía el propósito de ser
un complemento de las clases dictadas y donde los estudiantes realizaban sus “diarios de
trabajos prácticos” eligiendo tres series de ejercicios. Dos, de las diez Series propuestas
para 1905, correspondían a estudios sobre la relación entre el ejercicio muscular, la fatiga
y el trabajo mental, a saber:
Serie VIII. Estudio gráfico y experimental de la fatiga muscular en función del trabajo
mental. Ergografía y sus aplicaciones. Influencia de algunas sustancias sobre la
fuerza muscular: ídem de la clase de trabajo mental, etc. Curvas gráficas en la mujer
y en el hombre.
526
VI Congreso Marplatense de Psicología
2°. Que el trabajo muscular fatiga la inteligencia, puesto que la fatiga intelectual se
agregó, como cantidad igual, a la fatiga muscular, precipitándola. De aquí que sea
erróneo el combinar, en los horarios escolares, los ejercicios físicos como medio de
descanso cerebral. (Camaña, Aita y Acevedo, 1916, p.458).
La cita evidencia que las relaciones entre el cuerpo y la mente son complejas y que sus
mutuas relaciones responden a procesos físicos y químicos cuya sumatoria no siempre
resulta beneficiosa. Ya lo había planteado Angelo Mosso en su libro Mens sana in corpore
sano (1903) que se inscribe en una larga tradición de estudios que abordan estos
dualismos.
CONCLUSIONES
527
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Camaña, R., Aita, D., Acevedo, M. (1916). Estudio gráfico y experimental de la fatiga
muscular en función de trabajo mental. Ergografía y sus aplicaciones. En Laboratorio de
Psicología, Trabajos de Psicología Normal y Patológica (pp. 453-465). Tomo I. Buenos
Aires: Compañía Sud-Americana de Billetes de Banco.
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Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires.
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Piñero, H. (1916b). Nuevos rumbos educacionales. Antropometría, psicometría y
educación física. En Laboratorio de Psicología, Trabajos de Psicología Normal y
528
VI Congreso Marplatense de Psicología
529
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Este trabajo forma parte del relevamiento bibliográfico hecho en el marco de la beca de
Maestría correspondiente al Proyecto UBACyT “Psicogénesis de Competencias Jurídicas”, dirigido
por la Dra. Roxana Ynoub.
LOS INICIOS DEL PARADIGMA. UNA NUEVA DEFINICIÓN DEL OBJETO DE ESTUDIO.
1
Este aspecto se fundamenta en su interés de fundar una Psicología General con bases materialistas,
consonante con las teorizaciones de Marx y Engels que explicaban el proceso de humanización como una
transformación que se operó en los ancestros del hombre a consecuencia de las categoría trabajo y
herramientas (véase por ejemplo Cole & Scribner (2009: 24 y ss.), Baquero (2012:65))
530
VI Congreso Marplatense de Psicología
Esto hizo que Vigotsky se interesara por los aportes de autores como Köhler o Piaget,
puesto que cada uno a su manera buscaba estudiar cómo procesos “intrínsecamente humanos” tal
como el pensamiento, podían rastrearse en otros dominios; en el caso del primero, por
comparación, haciendo experiencias con monos antropomorfos; en el del segundo, en un sentido
genético, rastreando las condiciones de posibilidad del conocimiento en la línea que se inicia con
ciertas funciones biológicas ligadas a la adaptación.
Para dar cuenta de la transición, propondrá una diferenciación entre los procesos
psicológicos elementales y los procesos psicológicos superiores; los primeros estarían
encuadrados en la línea natural de desarrollo- es decir, regulados por factores biológicos-, mientras
que los segundos se constituirían en la línea cultural del desarrollo (Baquero 2012:65). Los
procesos psicológicos elementales referirían a funciones hasta cierto punto compartidas con otras
especies (memoria, atención, etc.), mientras que los superiores serían aquellos propios de los
humanos2; pero estos últimos requieren de los elementales para su constitución, aunque no como
condición suficiente (Baquero 1996:33).
Así como la primera utilización de las herramientas rechaza la noción de que el desarrollo
representa el simple despliegue del sistema de actividad orgánicamente predeterminado del niño,
la primera utilización los signos demuestra que no puede haber un único sistema de actividad
interno orgánicamente predeterminado para cada función psicológica. El uso de medios artificiales,
la transición a la actividad mediata, cambia fundamentalmente todas las funciones psicológicas, al
tiempo que el uso de herramientas ensancha de modo ilimitado la serie de actividades dentro de
las que operan las nuevas funciones psicológicas. En ese contexto, podemos emplear el término
de función psicológica superior, o conducta superior, al referirnos a la combinación de herramienta
y signo en la actividad psicológica. (Vigotsky, 1988, p.91)
2
Los procesos psicológicos superiores se distinguirán por constituirse en la vida social, siendo específicos de
los humanos; regular la acción en forma voluntaria; estar regulados conscientemente; valerse de instrumentos
de mediación para organizarse (Baquero 1996:33)
3
Vigotsky esbozó una sub diferenciación de los procesos psicológicos superiores: los rudimentarios y los
avanzados. Autores posteriores retomaron y caracterizaron más nítidamente estos procesos; uno de ellos fue
Rivière, a través del planteo de procesos tipo 3 y tipo 4.
531
VI Congreso Marplatense de Psicología
Baquero (2001b:27) distinguirá los factores activantes, que facilitan el desarrollo de ciertas
funciones “sin definir la forma o dirección de ese desarrollo”, de los factores formantes que definen
la forma de aquello que se desarrolla. La mediación social puede así ser entendida como un factor
formante, puesto que no puede decirse que “despierte” alguna capacidad biológica sino que
inaugura una dimensión psicológica a la vez que le marca una dirección. Dicho en otras palabras,
la mediación social es inherente a las funciones psicológicas superiores en tanto que no sólo las
produce sino que las estructura.
Tanto las herramientas como los signos, a los que refería la cita de Vigotsky son entendidos
como mediaciones instrumentales4; resaltando su papel de portadores de la cultura, se ampliará la
categoría de mediación instrumental de manera de incluir en ella a la actividad semiótica; así, “lo
que explica la constitución subjetiva humana es la actividad instrumental entendida no sólo como
aquella que implica el uso de herramientas físicas, sino, crucialmente, como la que implica el uso
de herramientas psicológicas, es decir, signos” (Baquero 2001b:35).
Pero esa producción no debe ser entendida en el sentido “de afuera a adentro”, como una
influencia externa que imprime en el cachorro humano su sello; se requiere de un papel activo del
sujeto, en un proceso al que Vigotsky llama interiorización5. Ésta consiste en la “reconstrucción
interna de una operación externa” (Vigotsky 1988: 92), en la que se da una serie de
transformaciones: la operación externa se reconstruye, pasando a suceder internamente; el
proceso, en principio interpersonal (puesto que requería de la relación con otro ser humano), se
vuelve intrapersonal; y esta transformación es el resultado de una serie de procesos evolutivos
(op.cit. p.94). Postula así la llamada ley de la doble formación de los procesos psicológicos
superiores: todo proceso de este tipo tuvo una génesis interpersonal, requirió de la interacción con
otros (partícipes de un contexto socializado), a partir de la cual se transformó, interiorizándose.
4
La diferencia fundamental entre los dos tipos de instrumentos mediadores radica en la orientación de la
actividad, externa en un caso e interna en otro: “La función de la herramienta no es otra que la de servir de
conductor de la influencia humana en el objeto de la actividad; se halla externamente orientada y debe
acarrear cambios en los objetos (...) Por otro lado, el signo no cambia absolutamente nada en el objeto de una
operación psicológica. (...) se trata de un medio de actividad interna que aspira a dominarse a sí mismo”
(Vigotsky, citado por Rivière 1984:43)
5
otros autores, como Rogoff (1997) abogarán por el empleo del término “apropiación”.
532
VI Congreso Marplatense de Psicología
Otro factor que podría citarse como predeterminando las lecturas reduccionistas es el que
Benasayag (2013:16) menciona como el mito del individuo autónomo: el individuo de la
posmodernidad se percibe a sí mismo como descontextualizado, como independiente de los
contextos sociales que integra:
El individuo pasa a ser una ficción, resultado de un proceso histórico que, en palabras del
autor, “ha destruido eso que justamente funda los fenómenos humanos” (ibídem). Frente a esta
situación se impone un análisis crítico que parta de lo evidente de la realidad humana: los seres
humanos necesitamos de las relaciones sociales para constituirnos. Así, dice el autor
parafraseando a Marx “la cuestión no es cómo liberar al individuo del poder sino más bien cómo
liberarnos del poder del individuo”, entendiendo individuo como esa categoría pregnante desde la
cual parte, o a la que llega, todo estudio sobre el fenómeno humano.
6
Bleger (1964), muchos años ha, se refería a esta situación con el nombre de la antinomia individuo-sociedad
533
VI Congreso Marplatense de Psicología
existencia si no es en el contexto del organismo total7. Esta manera de pensar los contextos es
llamada por Cole (1999) contexto como lo que entrelaza, aludiendo a
...una relación cualitativa entre un mínimo de dos entidades analíticas que son dos momentos en
un único proceso. Los límites entre la tarea y su contexto no son claros y estáticos sino ambiguos y
dinámicos. Por regla general, lo que se toma como objeto y lo que se toma como aquello que rodea
al objeto se constituyen por el acto mismo de nombrarlos. Cole (1999: 137)
Por su parte, Rogoff (1997) propone al acontecimiento o actividad como unidad de análisis,
como recorte que hace posible el análisis en tres niveles que se plantean como inseparables y
mutuamente constituyentes:
el del aprendizaje que alude a formatos culturalmente organizados –puesto que supone la
especialización de roles- en los que participan sujetos con distintos grados de experiencia en la
7
esta analogía, común en Epistemología para la caracterización de este tipo de modelos, es retomada por
Rogoff (1997:112) para ilustrar la lógica de su modelo de aprendizaje, participación guiada y apropiación
participativa
8
detallado en Vigotsky (1988:93)
534
VI Congreso Marplatense de Psicología
tarea a realizar, de manera tal que los menos experimentados aprenden activamente de los que lo
están más. Este plano alude a lo institucional/cultural (Baquero y Limón 2012:169)
el de la participación guiada, en el que el foco está puesto en las relaciones interpersonales,
en las interacciones (ya sea “cara a cara”, “codo a codo”, o a distancia) que suponen, en tanto que
participantes de la actividad, sistemas de implicación mutua y de comunicación
el de la apropiación participativa: en donde el punto de mira se ubica en las
transformaciones del sujeto que se dan como consecuencia de su participación e implicación en la
actividad, a la vez que se plantean como anticipatorias de actividades futuras. Aquí se está
considerando el plano individual del análisis sociocultural.
A MANERA DE SÍNTESIS
Vigotsky explicitó que las unidades de análisis deben poder expresar “las relaciones
sistémicas y específicas que se dan entre los componentes constituyentes del proceso” (Vigotsky,
citado en Baquero 2012:67). Al analizar considerar las propuestas de los distintos autores, hay en
todas ellas una estructura común.
Rodrigo hará una caracterización general de las dimensiones que de una u otra manera los
autores de los enfoques socioculturales han tenido en cuenta para la definición de sus unidades de
análisis:
Un escenario físico que integra actores ligados por diferentes tipos de vínculo, que de forma
conjunta realizan actividades enmarcadas en tareas con sentido para la cultura y que durante la
realización de las mismas se comunican, verbalmente o no, para tratar de negociar sus intenciones
y metas, con el fin de construir un significado conjunto de sus actividades y de la tarea. (Rodrigo,
citado por Baquero 2012:167)
535
VI Congreso Marplatense de Psicología
Aunque por cuestiones de extensión sólo hemos presentado las propuestas de dos de los
autores (e incluso ambas de manera bastante reducida), pensamos que al comparar las distintas
unidades de análisis de las distintas líneas de investigación se produce un efecto hasta cierto punto
parecido al anterior: cada unidad es recortada desde el sistema de categorías teóricas propuesto
por el enfoque, pero dada su complejidad no queda limitada al ámbito de la propia teoría. Así, sería
posible pensar modelos que articulen los distintos recortes, las distintas unidades de análisis,
también a la manera de focos posibles de abordar la complejidad de los fenómenos.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
536
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INTRODUCCIÓN
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(AUAPSI, 1998, 1999; Di Doménico & Vilanova, 1999; Klappenbach, 2003; Vilanova,
1997, 2001; Vilanova & Di Doménico, 1999).
ANTECEDENTES
MATERIALES Y MÉTODO
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Tabla 1
Rango de análisis de las revistas estudiadas.
Para el análisis de la estructura temática del corpus documental fueron utilizadas las
palabras claves expresadas en los artículos. En este caso se ha decidido no adoptar
una estructura temática preconfigurada para el análisis y representación del campo
abordado evitando así una interpretación forzada y arbitraria. La elección de las
palabras clave asignadas por los autores de los artículos genera, a nuestro entender,
una representación más ajustada a la percepción que ellos mismos tienen del campo
semántico.
El conjunto quedó conformado por 2892 expresiones, arrojando una media de tres
palabras clave por artículo. Para evitar ambigüedades y reducir la dispersión
semántica del listado original se procedió a una lematización de aquellos conceptos
con variantes morfológicas, con variantes de género y número y, en los casos más
evidentes, los semánticamente equivalentes. El número final de entradas quedó
conformado por 1844 palabras clave.
Luego de este recuento primario se procedió al análisis de este universo en base al
cálculo de la co-ocurrencia (co-word analysis) de las mismas (Miguel, Moya-Anegón,
540
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RESULTADOS Y DISCUSIÓN
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Tabla 2.
Centralidad de grado (normalizada) de los principales nodos que componen las
revistas
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Identidad 0,2
Figura 1
Figura 2
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Figura 3
Figura 4
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La figura es la del historiador y profesor Alberto Vilanova (1942- 2003). Las líneas de
influencia, que se desprenden de su heterogénea y abundante obra, y que alcanzan el
presente de la disciplina, son tematizadas en tres apartados que responden a delimitaciones
(algo artificiales) de áreas que el autor definió como esencialmente vinculadas: la historia, la
enseñanza y formación, y la profesionalización de la Psicología.
La obra de Alberto Vilanova es, cuanto menos, heterogénea. Su tesis de maestría, por
ejemplo, es un análisis crítico (basado en un contundente acervo de fuentes primarias)
sobre autores argentinos de comienzos de siglo XX que tematizaron en torno a la identidad
nacional, y que se nutre y abreva de la metateoría historiográfica en Psicología (Vilanova, El
Carácter Argentino. Los primeros diagnósticos, 2001). Otras obras, como su revisión de los
orígenes del funcionalismo norteamericano (Vilanova, 1994b) y su análisis sobre la axiología
de la cuestión del mentalismo en ciencias (Vilanova, 1994c) representan indagaciones
propiamente históricas.
La obra histórica de Vilanova demuestra, especialmente, cuatro cuestiones que son de
plena vigencia en los trabajos contemporáneos en historia, tanto nacional como
internacional. En primer lugar, que la historia, lejos de ser un ‘literateo’, constituye una
disciplina empírica, donde la ausencia de experimentalismo no es sinónimo de ausencia de
rigor o de remisión a la realidad (en forma de hechos históricos). En efecto, Vilanova
defendió un claro realismo crítico en historia de la Psicología (Vilanova, 2000), según el cual
la reconstrucción histórica provenía de una dinámica (aunque limitada) aleación o maridaje
entre la firmeza ontológica de los hechos y el mundo interno (valoraciones, decisiones e
implícitos) del historiador.
En segundo lugar, Vilanova polemizó con historiadores y filósofos de la ciencia (tales
como Canguilhem o Deleule) (Vilanova, 1997b) que, completamente externos a la
Psicología, teorizaban de forma abstracta sobre su historia y cuyas obras, sin un sustento
empírico razonable, “se enarbolan con intenciones denostativas y para atraer a los alumnos
hacia formas académicas marginales” (pág. 280). Fue un férreo defensor de historias que,
alejadas de las ‘modas’, fueran realizadas por miembros de la propia comunidad disciplinar.
Como veremos, Vilanova no veía contradicción entre esta idea y la posibilidad de una
historia crítica.
552
VI Congreso Marplatense de Psicología
Finalmente, Vilanova defendió la idea de la historia localmente situada, que desde las
particularidades regionales se proyectara (hacia y desde) la psicología internacional. El
problema de la identidad tanto nacional como profesional es nuclear en algunas de sus
principales obras (Vilanova, 2001).
Cabe agregar, finalmente, que tamaña empresa intelectual bien podría llevarse a cabo,
en la práctica, de forma discursivamente extraña, compleja o retorcida, siguiendo la tradición
formativa de los Psicólogos argentinos. Vilanova, opuesto decididamente a los textos que
requiriesen de traductores ‘iluminados’, se caracteriza por haber legado un generoso y
peculiar estilo narrativo caracterizado por la belleza, la erudición y, a la vez, por el hecho de
que en su conjunto este estilo no rechaza sino invita al lector a profundizar. Si el lector se
identifica con el alumno, la lectura invita a la construcción de futuro; en nuestro caso, de
futuro científico.
Vilanova, además de poseer una vasta formación en historia, se caracterizó por haber
tematizado de forma pionera en la región acerca de la cuestión de la enseñanza de la
psicología, sin confundirla con la profesionalización de la disciplina ni con la cuestión más
amplia de la formación del psicólogo. Se preocupó por el diseño curricular (Vilanova, 1996),
que consideró desde una perspectiva histórica desde Boulder hasta Bogotá, especialmente
a la luz de las parcialidades formativas del psicólogo de nuestra región (clinicismo,
asistencialismo, practicismo, dogmatismo, entre otros).
La obra de Vilanova refleja a la vez consideración por un mejoramiento en la enseñanza
(diseño y mejoramiento curricular), como un conjunto de consideraciones concretas en torno
al problema de dicha enseñanza. A la vez que propulsó el debate y el mejoramiento de las
curriculas, resaltando en esta empresa el lugar de la Asociación de Unidades Académicas
de Psicología (Vilanova, 1994; 1995), remarcó el lugar de la historia de la psicología en la
formación integral del psicólogo. En un artículo que coincidió temporalmente con debates
internacionales de semejante contenido y tenor, Vilanova, en discusión con Brozek y con
Danziger, abogaba por una enseñanza de la historia de la psicología que, a la vez que
impulsara el pensamiento crítico del alumno, fortaleciera su identidad profesional y le
permitiera articular el ciclo básico y el ciclo profesional de su ciencia, hija de un modelo de
científico-practicante que sin explicación histórica se reduciría a un mero ejercicio de
553
VI Congreso Marplatense de Psicología
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local- derramaban en deudas concretas que la Psicología del cono sur había adquirido:
respecto de sus alumnos y estudiantes, respecto de otras ciencias, y respecto de demandas
y necesidades societales mayores (Vilanova, 1997b). El psicólogo Argentino, según
Vilanova, se caracterizaba por confundir la investigación con el ejercicio clínico del
psicoanálisis; por relegar de forma dogmática la explicación de todo el campo humano a un
puñado de conceptos especulativos provenientes de un marco psicodinámico específico;
por no hallarse vinculada con las demandas sociales del contexto y por constituir, en
definitiva, un practicismo que, sin fundamento teórico, epistemológico ni empírico alguno, se
mantenía sólo a costas de la anulación mágica de grandes parcelas de la realidad.
Es interesante notar en este marco que las preocupaciones de Vilanova no son sólo
formativas o teóricas sino también epistemológicas. En su análisis sobre el desembarco del
construccionismo en las aguas de la Psicología, Vilanova destaca cómo en el marco
profesionalista-lacaniano imperante en Argentina (y en el Cono Sur), “el grito de guerra
posmoderno resuena en el vacío que nunca ocupó el contradictor objetivista” (Vilanova,
2003, pág. 156). El construccionismo y sus propuestas teóricas y epistemológicas (la
narración como forma constitutiva de crear la realidad, la importancia de las cofradías
profesionales, la cronotopía como signo de lo humano) no hallaron un suelo fértil donde
proliferar precisamente por el contexto formativo y profesionalista propio del Río de la Plata.
En Argentina resultaría absurda una reacción posmoderna, anti empirista, ya que en
nuestras latitudes en empirismo nunca existió en su tradición académica.
Relevamientos empíricos respecto de las tendencias que más preocupaban a Vilanova
muestran la actualidad de sus preocupaciones y la necesidad de revitalizar su llamado a
debate. El rasgo distintivo de la formación nacional, el clinicismo (es decir, la reducción de la
psicología a su vertiente aplicada, práctica, asistencialista, y que en Argentina se confundió
y confunde con Psicoanálisis) no demuestra una reversión significativa del estado de
situación criticado por el autor, específicamente a nivel local. Estudios bibliométricos sobre
la formación en teorías básicas (fundamento de una formación plural) muestran la amplia
preminencia del Psicoanálisis por sobre otras áreas igualmente legítimas de la Psicología
(Moya & Di Doménico, 2012). Estudios cuantitativos sobre áreas de aplicación demuestran
la prevalencia de formación en clínica en desmedro de otras áreas (Alonso & Klinar, 2013).
En línea con lo anterior, estudios sobre autopercepción de competencias en estudiantes de
Psicología muestran tanto la prevalencia de la clínica como la amplia superioridad de la
formación en Psicoanálisis (Manzo & Di Doménico, 2010; Fierro, 2014).
El mismo carácter limitado de la regresión de las tendencias criticadas por Vilanova
puede observarse en torno a la investigación, que el autor denunciaba como relegada: a la
555
VI Congreso Marplatense de Psicología
vez que los alumnos de grado no se muestran competentes en gran medida respecto de la
búsqueda de información –vital para todo estudio científico- (Visca, 2011), las publicaciones
científicas, consideradas como indicadores del intercambio y producción en el ámbito de la
ciencia, muestran en argentina una alta prevalencia del psicoanálisis en desmedro de otras
áreas (Visca, 2012).
Desde una perspectiva nacional y longitudinal (evaluando la última década), es cierto que
el perfil del egresado de las carreras de psicología comienza a virar hacia la valoración de la
labor académica como espacio de producción y legitimación del conocimiento (Di Doménico
& Piacente, 2003; 2011). Sin embargo, la actualidad refleja en gran medida el estado de
cosas que llevó a Vilanova a discutir por la psicología en un primer momento; de aquí que
se concluya que se necesita profundizar la discusión y, específicamente, derivar en medidas
de mejoramiento concretas.
CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Alonso, M., & Klinar, D. (2013). Los psicólogos en Argentina. Relevamiento cuantitativo
2012. Memorias del V congreso internacional de investigación y práctica profesional
en psicología, XX jornadas de investigación y noveno encuentro de investigadores
en psicología del MERCOSUR. Buenos Aires: Universidad de Buenos Aires.
Asociación de Unidades Académicas de Psicología. (1998). Informe Diagnóstico de la
Situación Actual del Programa de Formación de Especialistas en Innovación
Curricular en Psicología. Buenos Aires: Mimeo.
Asociación de Unidades Académicas de Psicología. (1999). Informe de la segunda etapa del
programa "Mejoramiento de la formación de grado en las carreras de Psicología de
seis Universidades Nacionales de la República Argentina". AUAPsi.
556
VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Pese a la diversidad de trabajos realizados entre los siglo XVIII y XIX (Manuel Dendo y
Ávila:1756, López Huerta:1789, Joaquin de Mora:1855), llegando a mediados del Siglo XX,
Bernard Levy (1942) marcaba que "La historia de la sinonimia española es, en gran parte, un
terreno relativamente poco explorado". Pérez, en el artículo ya citado, explicita que la sinonimia,
dentro de la semántica, ha sido dejada de lado bajo premisas axiomáticas que se quedan en la
idea de que nunca se podrá lograr la igualdad total de significados. Gonzalez Martinez (1989)
señala que dentro de la poca atención que ha recibido el tema, cada una de las posturas que se
han ido presentado, si bien resultan impecables en sí mismas, no llegan nunca a resultar viables si
se busca su aplicación al análisis de situaciones comunicativas reales.
Asimismo, diversos autores (Hernández García, 1995) señalan que, contando excepciones, el
panorama no ha variado demasiado. Entre estas excepciones, se destacan los trabajos de
Salvador, G. (1985) y Lyons, J. (1979) que plantean posiciones definidas en torno al tema y las
defienden a partir del análisis de grandes diccionarios o corpus particulares. Otra gran variedad de
estudios que no se tienen en cuenta para este trabajo, hacen énfasis en aspectos históricos sobre
el tema o se limitan a proponer grandes corpus de sinónimos. Martínez López, J. (1997) explica
que la divergencia en las posturas está dada por puntos de partida diferentes (no se considera la
misma definición de sinonimia, algunos analizan la lengua, otros analizan el habla, etc.) y en su
propio análisis toma en cuenta que al actualizarse la lengua en el habla, se pierde cualquier
neutralidad pretendida en los diccionarios. No hay que dejar nunca de lado que el diccionario en sí
es una forma de definir fuera del uso el significado, que si bien está elaborada a partir de estudios
sobre el uso, nunca podrá ser totalmente fiel al mismo, puesto que en cada acto de habla, la
lengua cambia lentamente. Porqué un diccionario y una gramática son una abstracción; ilusión de
que hay un sistema único y homogéneo.
Por otra parte, el concepto de distancia semántica fue acuñado por Smith, Shobben y Rips (1976),
y ha recibido diferentes definiciones, que repasaremos brevemente a continuación. Distintas
definiciones darán como resultado distintos modelos de comprensión de la distancia entre dos o
más palabras.
En una red semántica clásica (Collins y Loftus, 1975) dos conceptos se hallan semánticamente
relacionados si se encuentran juntos próximos en la red. Podemos medir la “proximidad” como la
distancia literal entre ambos, esto es la longitud del camino que ambos comparten. El modelo se
presenta adecuado para abordar el problema planteado.
En el modelo de Clave Compuesta de Ratcliff y McKoon (1988), la distancia semántica se explica
por la probabilidad con que dos palabras coexistan relacionadas más frecuentemente que
palabras no relacionadas. Esta circunstancia explica la existencia del efecto de priming
significativo para relaciones asociativas no necesariamente semánticas. Este proceso es, sin
embargo, transparente cuando se solicita a las personas que estimen la proximidad semántica
entre dos términos relacionados semánticamente por relaciones de distinta naturaleza y con
diferente peso en su asociación.
559
VI Congreso Marplatense de Psicología
Los modelos Conexionistas Distribuidos (Plaut, 1997; McRae y Boisvert, 1988) proponen que los
conceptos relacionados presentan un patrón de activación similar. Si bien el método de
comparación de distancias aquí propuesto, no se muestra, en principio, incompatible con este
modelo, sugerimos que la mensura de la distancia semántica dentro de esta perspectiva
probablemente encuentre un instrumento adecuado y coherente para su ejecución, por medio de
la utilización de los algoritmos Self-Organizing Map (SOM), introducidos por T. Kohonen (1988,
1997).
Los modelos basados en la co-ocurrencia de ítems lexicales (Lund, Burgess y Atchley, 1995;
Burgess y Lund, 2000), se basan en la coexistencia de términos lexicales en un corpus de texto.
La distancia semántica, en este caso, se calcula de acuerdo a la similitud entre los vectores
semánticos calculados para cada término.
Ahora bien, cuando una persona estima la similitud semántica entre dos o más ideas puede
establecer entre ellas diferentes tipos de relaciones semánticas. Su proximidad puede estar dada
porque ambos conceptos presentan una relación inferencial entre sí, de modo que evocar un
concepto supone la propagación de la activación hacia otro concepto con el que se halla vinculado
lógicamente. Pero también ambos conceptos pueden compartir numerosos atributos por medio de
los cuales se establezcan relaciones no necesariamente lógicas. Las semejanzas en los atributos
compartidos entre dos conceptos pueden promover el establecimiento de relaciones analógicas -
identificaciones por el predicado - que se hallan facilitadas por la presencia de activación en las
etiquetas respectivas.
Del mismo modo y tal como lo han señalado algunos estudios sobre relaciones semánticas (Bejar,
Chaffin y Embretson, 1991; Mayor y López, 1995) distintos procesos cognitivos permiten elicitar
relaciones parte-todo, contraste, causa-propósito, etc.
Así planteado el problema la sinonimia no puede definirse de manera clara y concisa dada la
diversidad de definiciones y perspectivas en lingüística. El estudio de la distancia semántica
presenta varias metodologías de análisis que podrían contribuir a su elucidación. Entonces, en
este estudio exploratorio a partir de estas divergencias, proponemos entender que la sinonimia
puede ser interpretada y calculada como una forma particular de distancia semántica cuando la
proximidad es del orden de .9.
PROCEDIMIENTO
TRATAMIENTOS NUMÉRICOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
561
VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La Tabla 2 exhibe la matriz de modo uno que muestra en sus celdas el valor de la distancia
semántica para cada par de conceptos. Se puede observar que se presentan los valores
superiores en la relación entre palabras que evocan a conceptos que pertenecen a la misma
categoría.
ALEG FELICI ENO VAC CABAL CHANC MES ESCRITO SILL
RIA DAD JO A LO HO A RIO A
ALEGRIA 1.000 0.986 0.916 0.00 0.000 0.000 0.00 0.000 0.00
0 0 0
FELICID 0.986 1.000 0.905 0.00 0.000 0.000 0.00 0.000 0.00
AD 0 0 0
ENOJO 0.916 0.905 1.000 0.00 0.000 0.000 0.00 0.000 0.00
0 0 0
VACA 0.000 0.000 0.000 1.00 0.815 0.834 0.00 0.000 0.00
0 0 0
CABALL 0.000 0.000 0.000 0.81 1.000 0.828 0.00 0.000 0.00
O 5 0 0
CHANCH 0.000 0.000 0.000 0.83 0.828 1.000 0.00 0.000 0.00
O 4 0 0
MESA 0.000 0.000 0.000 0.00 0.000 0.000 1.00 0.889 0.64
0 0 7
ESCRITO 0.000 0.000 0.000 0.00 0.000 0.000 0.88 1.000 0.68
RIO 0 9 3
SILLA 0.000 0.000 0.000 0.00 0.000 0.000 0.64 0.683 1.00
0 7 0
Se puede observar a simple vista en la Tabla 2 que los resultados agrupan los conceptos a
partir de tres grupos que corresponden a las tres categorías anteriormente enunciadas. No
obstante, las distancias entre los conceptos de cada uno de estos grupos varían de manera
sustancial. El caso de las emociones, por ejemplo, exhibe un grado de proximidad mayor a .9 en
cada cruce. En animales, los valores quedan comprendidos entre .8 y .9, con menor proximidad
entre los conceptos. Mientras que en muebles, ningún valor supera 8.9 y se hallan valores incluso
por debajo del .7.
La inclusión de esta matriz en un programa de Análisis de Redes Sociales permite hacer un
análisis de cluster y graficar sus resultados tal como se puede observar en el Gráfico 1.
563
VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
A partir de lo observado en la Tabla 1, se puede plantear como lo que diversos autores han
polemizado bajo el nombre de sinonimia (con todos sus matices, desde las posturas que plantean
la inexistencia teórica de la sinonimia hasta los que afirman sin lugar a dudas que existe) puede
comprenderse desde una perspectiva más amplia y esclarecedora si se plantea la sinonimia como
un caso particular de la distancia semántica.
La Tabla 2 provee sustento a esta idea y genera evidencia por medio de la cual los datos
muestran la escala que determina el límite entre palabras parecidas o que pertenecen a una
misma categoría y los sinónimos. La propuesta de utilizar una distancia superior a .9 es aún
provisoria y requiere del tratamiento de mayor volumen de datos y la contraprueba experimental,
es decir, confirmar si dos listas conducen a las mismas palabras en tareas de nombramiento por
atributo (tarea donde el sujeto debe reconocer la palabra de que se trata a partir de la
presentación sucesiva de la lista de atributos). Cosa que se desarrollará cuando se encuentren
procesadas las listas de atributos para cuatrocientas palabras que conforman las Normas.
Hay muchos pares de palabras que pese a ser considerados sinónimos por el diccionario,
alcanzan una puntuación promedio entre 0.8 y 0.9 cuando se calcula su distancia semántica. En
este trabajo sostenemos que las puntuaciones más elevadas son las que con menor margen de
error son las que corresponden a relaciones entre palabras que pueden ser reemplazadas en
diversos contextos de uso sin que se pierdan su significado. Las puntuaciones entre 0.8 y 0.9
564
VI Congreso Marplatense de Psicología
parecen estar asociadas por lo que se ha propuesto denominar categorías base (Rosch, Mervis,
Gray, Johnson, & Boyes-Braem, 1976). Estas categorías de nivel base han ido propuestas como
aquellas en las que se concentra la mayor cantidad de atributos asociados, facilitando la
formación de una imagen visual. En este sentido, los objetos relacionados taxonómicamente en el
nivel base (e.g., perros) tienen en común muchas dimensiones en las que se los puede comparar
(e.g., nombre, tamaño, forma, partes), de modo que dentro de la jerarquía taxonómica, las
categorías de nivel base, como comparten muchas características distintivas, se conforman
predominantemente a partir de un proceso de comparación de ítems. Cuando se pregunta a
alguien ¿dónde duermes? , la mayoría de las personas prefieren decir cama en lugar de un
subordinado como cama de dos plazas o en lugar de un concepto de orden superior, tal como
mueble. Las categorías base son relativamente homogéneas en términos de valoración
sensoriomotriz y casi no hay rasgos significativos de otras categorías que se puedan agregar a los
del nivel base. Rosch y colaboradores (op cit) lo definen como el nivel que tiene el más alto grado
de validez de localización.
Por último, el Gráfico 1 de formación de Cluster muestra como las palabras de acuerdo a
su distancia se agrupan a partir de categorías: emociones, muebles y animales. Y dentro de esas
categorías, solo las palabras con poca distancia semántica entre sí adquieren el valor para ser
considerados sinónimos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
LA TEORÍA DE LA AUTO-DETERMINACIÓN
567
VI Congreso Marplatense de Psicología
BIENESTAR
En las últimas décadas, dos corrientes de pensamiento predominaron en el
campo de la Psicología dedicado al estudio del bienestar y la felicidad. Por un lado,
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIÓN
A lo largo del trabajo se desarrollaron los aportes de la Teoría de la Auto-
Determinación que explican los procesos subyacentes al bienestar, en base a un
conjunto de necesidades psicológicas básicas. Se definieron las nociones más
importantes de esta perspectiva y del campo psicológico que estudia a la felicidad. Por
último, se articularon las necesidades psicológicas básicas con algunos beneficios de
su satisfacción. Estas se vinculan con factores que promueven el bienestar psicológico
y a la vez protegen del malestar.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Baumeister, R. F., & Leary, M. R. (1995). The need to belong: Desire for
interpersonal attachments as a fundamental human motivation. Psychological Bulletin,
117, 497–529. doi:10.1037/0033-2909.117.3.497
Chirkov, V., Ryan, R. M., Kim, Y., & Kaplan, U. (2003). Differentiating autonomy from
individualism and independence: A self-determination theory perspective on
internalization of cultural orientations and well-being. Journal of Personality and Social
Psychology, 84, 97–110
Deci, E. L.,&Ryan, R. M. (2000). The “what” and “why” of goal pursuits: Human needs
and the self-determination of behavior. Psychological Inquiry, 11, 227–268.
doi:10.1207/S15327965PLI1104_01
Deci, E. L., & Vansteenkiste, M. (2004). Self-determination theory and basic need
satisfaction: Understanding human development in positive psychology. Ricerche di
Psicologia, 27, 23–40.
570
VI Congreso Marplatense de Psicología
571
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
572
VI Congreso Marplatense de Psicología
De esta modo, la hipótesis general planteada para este estudio es que las
personas que presentan una alta exposición a eventos traumáticos (que no
necesariamente configuran un trastorno), presentarán dificultades en inhibir procesos
automáticos asociados a estímulos emocionales.
MÉTODO
Participantes
Diseño
Materiales
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VI Congreso Marplatense de Psicología
prueba piloto para la elección del material emocional, y se eligió el contenido que
presentaba menos errores y tiempo de respuesta. En primer lugar, para las palabras
distractoras se adoptaron cuatro de valencia negativa (pesadilla, disputa, prisión,
horror) y cuatro positivas (fortaleza, solidaridad, libertad y cercanía). En segundo
término, para las imágenes, se adoptaron cuatro negativas (2800, 3180, 6821, 9254) y
cuatro positivas (2091, 2224, 2360, 4626).
RESULTADOS
TIPO DE ENSAYO
GRUPO TR Congruente TR Incongruente
Adultos Jóvenes 635.1 ms 614.2 ms
Refugiados 780.4 ms 814.3 ms
Los datos confirman que los adultos jóvenes fueron más rápidos en ensayos
incongruentes y que, por el contrario, los refugiados lo fueron en ensayos congruentes.
574
VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Aupperle, R.L., Melrose, A.J., Stein, M.B., & Paulus, M.P. (2012). Executive
function and PTSD: Disengaging from trauma. Neuropharmacology, 62, 686-694.
Bomyea, J., Risbrough, V., & Lang, A.J. (2012). A consideration of select pre-
trauma factors as key vulnerabilities in PTSD. Clinical Psychological Review, 32, 630-
641.
Elwood, L.S., Hahn, K.S., Olatunji, B.O., & Williams, N.L. (2009). Cognitive
575
VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Pese a la diversidad de trabajos realizados entre los siglo XVIII y XIX (Manuel Dendo y
Ávila:1756, López Huerta:1789, Joaquin de Mora:1855), llegando a mediados del Siglo XX,
Bernard Levy (1942) marcaba que "La historia de la sinonimia española es, en gran parte, un
terreno relativamente poco explorado". Pérez, en el artículo ya citado, explicita que la sinonimia,
dentro de la semántica, ha sido dejada de lado bajo premisas axiomáticas que se quedan en la
idea de que nunca se podrá lograr la igualdad total de significados. Gonzalez Martinez (1989)
señala que dentro de la poca atención que ha recibido el tema, cada una de las posturas que se
han ido presentado, si bien resultan impecables en sí mismas, no llegan nunca a resultar viables si
se busca su aplicación al análisis de situaciones comunicativas reales.
Asimismo, diversos autores (Hernández García, 1995) señalan que, contando excepciones, el
panorama no ha variado demasiado. Entre estas excepciones, se destacan los trabajos de
Salvador, G. (1985) y Lyons, J. (1979) que plantean posiciones definidas en torno al tema y las
defienden a partir del análisis de grandes diccionarios o corpus particulares. Otra gran variedad de
estudios que no se tienen en cuenta para este trabajo, hacen énfasis en aspectos históricos sobre
el tema o se limitan a proponer grandes corpus de sinónimos. Martínez López, J. (1997) explica
que la divergencia en las posturas está dada por puntos de partida diferentes (no se considera la
misma definición de sinonimia, algunos analizan la lengua, otros analizan el habla, etc.) y en su
propio análisis toma en cuenta que al actualizarse la lengua en el habla, se pierde cualquier
neutralidad pretendida en los diccionarios. No hay que dejar nunca de lado que el diccionario en sí
es una forma de definir fuera del uso el significado, que si bien está elaborada a partir de estudios
sobre el uso, nunca podrá ser totalmente fiel al mismo, puesto que en cada acto de habla, la
lengua cambia lentamente. Porqué un diccionario y una gramática son una abstracción; ilusión de
que hay un sistema único y homogéneo.
Por otra parte, el concepto de distancia semántica fue acuñado por Smith, Shobben y Rips (1976),
y ha recibido diferentes definiciones, que repasaremos brevemente a continuación. Distintas
definiciones darán como resultado distintos modelos de comprensión de la distancia entre dos o
más palabras.
En una red semántica clásica (Collins y Loftus, 1975) dos conceptos se hallan semánticamente
relacionados si se encuentran juntos próximos en la red. Podemos medir la “proximidad” como la
distancia literal entre ambos, esto es la longitud del camino que ambos comparten. El modelo se
presenta adecuado para abordar el problema planteado.
En el modelo de Clave Compuesta de Ratcliff y McKoon (1988), la distancia semántica se explica
por la probabilidad con que dos palabras coexistan relacionadas más frecuentemente que
palabras no relacionadas. Esta circunstancia explica la existencia del efecto de priming
significativo para relaciones asociativas no necesariamente semánticas. Este proceso es, sin
embargo, transparente cuando se solicita a las personas que estimen la proximidad semántica
entre dos términos relacionados semánticamente por relaciones de distinta naturaleza y con
diferente peso en su asociación.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Los modelos Conexionistas Distribuidos (Plaut, 1997; McRae y Boisvert, 1988) proponen que los
conceptos relacionados presentan un patrón de activación similar. Si bien el método de
comparación de distancias aquí propuesto, no se muestra, en principio, incompatible con este
modelo, sugerimos que la mensura de la distancia semántica dentro de esta perspectiva
probablemente encuentre un instrumento adecuado y coherente para su ejecución, por medio de
la utilización de los algoritmos Self-Organizing Map (SOM), introducidos por T. Kohonen (1988,
1997).
Los modelos basados en la co-ocurrencia de ítems lexicales (Lund, Burgess y Atchley, 1995;
Burgess y Lund, 2000), se basan en la coexistencia de términos lexicales en un corpus de texto.
La distancia semántica, en este caso, se calcula de acuerdo a la similitud entre los vectores
semánticos calculados para cada término.
Ahora bien, cuando una persona estima la similitud semántica entre dos o más ideas puede
establecer entre ellas diferentes tipos de relaciones semánticas. Su proximidad puede estar dada
porque ambos conceptos presentan una relación inferencial entre sí, de modo que evocar un
concepto supone la propagación de la activación hacia otro concepto con el que se halla vinculado
lógicamente. Pero también ambos conceptos pueden compartir numerosos atributos por medio de
los cuales se establezcan relaciones no necesariamente lógicas. Las semejanzas en los atributos
compartidos entre dos conceptos pueden promover el establecimiento de relaciones analógicas -
identificaciones por el predicado - que se hallan facilitadas por la presencia de activación en las
etiquetas respectivas.
Del mismo modo y tal como lo han señalado algunos estudios sobre relaciones semánticas (Bejar,
Chaffin y Embretson, 1991; Mayor y López, 1995) distintos procesos cognitivos permiten elicitar
relaciones parte-todo, contraste, causa-propósito, etc.
Así planteado el problema la sinonimia no puede definirse de manera clara y concisa dada la
diversidad de definiciones y perspectivas en lingüística. El estudio de la distancia semántica
presenta varias metodologías de análisis que podrían contribuir a su elucidación. Entonces, en
este estudio exploratorio a partir de estas divergencias, proponemos entender que la sinonimia
puede ser interpretada y calculada como una forma particular de distancia semántica cuando la
proximidad es del orden de .9.
PROCEDIMIENTO
TRATAMIENTOS NUMÉRICOS
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RESULTADOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La Tabla 2 exhibe la matriz de modo uno que muestra en sus celdas el valor de la distancia
semántica para cada par de conceptos. Se puede observar que se presentan los valores
superiores en la relación entre palabras que evocan a conceptos que pertenecen a la misma
categoría.
ALEG FELICI ENO VAC CABAL CHANC MES ESCRITO SILL
RIA DAD JO A LO HO A RIO A
ALEGRIA 1.000 0.986 0.916 0.00 0.000 0.000 0.00 0.000 0.00
0 0 0
FELICID 0.986 1.000 0.905 0.00 0.000 0.000 0.00 0.000 0.00
AD 0 0 0
ENOJO 0.916 0.905 1.000 0.00 0.000 0.000 0.00 0.000 0.00
0 0 0
VACA 0.000 0.000 0.000 1.00 0.815 0.834 0.00 0.000 0.00
0 0 0
CABALL 0.000 0.000 0.000 0.81 1.000 0.828 0.00 0.000 0.00
O 5 0 0
CHANCH 0.000 0.000 0.000 0.83 0.828 1.000 0.00 0.000 0.00
O 4 0 0
MESA 0.000 0.000 0.000 0.00 0.000 0.000 1.00 0.889 0.64
0 0 7
ESCRITO 0.000 0.000 0.000 0.00 0.000 0.000 0.88 1.000 0.68
RIO 0 9 3
SILLA 0.000 0.000 0.000 0.00 0.000 0.000 0.64 0.683 1.00
0 7 0
Se puede observar a simple vista en la Tabla 2 que los resultados agrupan los conceptos a
partir de tres grupos que corresponden a las tres categorías anteriormente enunciadas. No
obstante, las distancias entre los conceptos de cada uno de estos grupos varían de manera
sustancial. El caso de las emociones, por ejemplo, exhibe un grado de proximidad mayor a .9 en
cada cruce. En animales, los valores quedan comprendidos entre .8 y .9, con menor proximidad
entre los conceptos. Mientras que en muebles, ningún valor supera 8.9 y se hallan valores incluso
por debajo del .7.
La inclusión de esta matriz en un programa de Análisis de Redes Sociales permite hacer un
análisis de cluster y graficar sus resultados tal como se puede observar en el Gráfico 1.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
A partir de lo observado en la Tabla 1, se puede plantear como lo que diversos autores han
polemizado bajo el nombre de sinonimia (con todos sus matices, desde las posturas que plantean
la inexistencia teórica de la sinonimia hasta los que afirman sin lugar a dudas que existe) puede
comprenderse desde una perspectiva más amplia y esclarecedora si se plantea la sinonimia como
un caso particular de la distancia semántica.
La Tabla 2 provee sustento a esta idea y genera evidencia por medio de la cual los datos
muestran la escala que determina el límite entre palabras parecidas o que pertenecen a una
misma categoría y los sinónimos. La propuesta de utilizar una distancia superior a .9 es aún
provisoria y requiere del tratamiento de mayor volumen de datos y la contraprueba experimental,
es decir, confirmar si dos listas conducen a las mismas palabras en tareas de nombramiento por
atributo (tarea donde el sujeto debe reconocer la palabra de que se trata a partir de la
presentación sucesiva de la lista de atributos). Cosa que se desarrollará cuando se encuentren
procesadas las listas de atributos para cuatrocientas palabras que conforman las Normas.
Hay muchos pares de palabras que pese a ser considerados sinónimos por el diccionario,
alcanzan una puntuación promedio entre 0.8 y 0.9 cuando se calcula su distancia semántica. En
este trabajo sostenemos que las puntuaciones más elevadas son las que con menor margen de
error son las que corresponden a relaciones entre palabras que pueden ser reemplazadas en
diversos contextos de uso sin que se pierdan su significado. Las puntuaciones entre 0.8 y 0.9
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VI Congreso Marplatense de Psicología
parecen estar asociadas por lo que se ha propuesto denominar categorías base (Rosch, Mervis,
Gray, Johnson, & Boyes-Braem, 1976). Estas categorías de nivel base han ido propuestas como
aquellas en las que se concentra la mayor cantidad de atributos asociados, facilitando la
formación de una imagen visual. En este sentido, los objetos relacionados taxonómicamente en el
nivel base (e.g., perros) tienen en común muchas dimensiones en las que se los puede comparar
(e.g., nombre, tamaño, forma, partes), de modo que dentro de la jerarquía taxonómica, las
categorías de nivel base, como comparten muchas características distintivas, se conforman
predominantemente a partir de un proceso de comparación de ítems. Cuando se pregunta a
alguien ¿dónde duermes? , la mayoría de las personas prefieren decir cama en lugar de un
subordinado como cama de dos plazas o en lugar de un concepto de orden superior, tal como
mueble. Las categorías base son relativamente homogéneas en términos de valoración
sensoriomotriz y casi no hay rasgos significativos de otras categorías que se puedan agregar a los
del nivel base. Rosch y colaboradores (op cit) lo definen como el nivel que tiene el más alto grado
de validez de localización.
Por último, el Gráfico 1 de formación de Cluster muestra como las palabras de acuerdo a
su distancia se agrupan a partir de categorías: emociones, muebles y animales. Y dentro de esas
categorías, solo las palabras con poca distancia semántica entre sí adquieren el valor para ser
considerados sinónimos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
584
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
LA TEORÍA DE LA AUTO-DETERMINACIÓN
585
VI Congreso Marplatense de Psicología
BIENESTAR
En las últimas décadas, dos corrientes de pensamiento predominaron en el
campo de la Psicología dedicado al estudio del bienestar y la felicidad. Por un lado,
586
VI Congreso Marplatense de Psicología
587
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIÓN
A lo largo del trabajo se desarrollaron los aportes de la Teoría de la Auto-
Determinación que explican los procesos subyacentes al bienestar, en base a un
conjunto de necesidades psicológicas básicas. Se definieron las nociones más
importantes de esta perspectiva y del campo psicológico que estudia a la felicidad. Por
último, se articularon las necesidades psicológicas básicas con algunos beneficios de
su satisfacción. Estas se vinculan con factores que promueven el bienestar psicológico
y a la vez protegen del malestar.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Baumeister, R. F., & Leary, M. R. (1995). The need to belong: Desire for
interpersonal attachments as a fundamental human motivation. Psychological Bulletin,
117, 497–529. doi:10.1037/0033-2909.117.3.497
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Psychology, 84, 97–110
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doi:10.1207/S15327965PLI1104_01
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Psicologia, 27, 23–40.
588
VI Congreso Marplatense de Psicología
589
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
590
VI Congreso Marplatense de Psicología
De esta modo, la hipótesis general planteada para este estudio es que las
personas que presentan una alta exposición a eventos traumáticos (que no
necesariamente configuran un trastorno), presentarán dificultades en inhibir procesos
automáticos asociados a estímulos emocionales.
MÉTODO
Participantes
Diseño
Materiales
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VI Congreso Marplatense de Psicología
prueba piloto para la elección del material emocional, y se eligió el contenido que
presentaba menos errores y tiempo de respuesta. En primer lugar, para las palabras
distractoras se adoptaron cuatro de valencia negativa (pesadilla, disputa, prisión,
horror) y cuatro positivas (fortaleza, solidaridad, libertad y cercanía). En segundo
término, para las imágenes, se adoptaron cuatro negativas (2800, 3180, 6821, 9254) y
cuatro positivas (2091, 2224, 2360, 4626).
RESULTADOS
TIPO DE ENSAYO
GRUPO TR Congruente TR Incongruente
Adultos Jóvenes 635.1 ms 614.2 ms
Refugiados 780.4 ms 814.3 ms
Los datos confirman que los adultos jóvenes fueron más rápidos en ensayos
incongruentes y que, por el contrario, los refugiados lo fueron en ensayos congruentes.
592
VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Aupperle, R.L., Melrose, A.J., Stein, M.B., & Paulus, M.P. (2012). Executive
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Elwood, L.S., Hahn, K.S., Olatunji, B.O., & Williams, N.L. (2009). Cognitive
593
VI Congreso Marplatense de Psicología
594
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
595
VI Congreso Marplatense de Psicología
competidor, el cual podría ser un hermanito, siendo el propio sujeto el que detenta
todo el amor de su padre. Dado el carácter incestuoso de este deseo, este sucumbe a
la represión, generando culpa y, por regresión a la fase anal, el castigo queda
erogenizado.
En la tercera etapa, el sujeto que pega queda indeterminado, y el propio sujeto no
aparece en la fantasía, salvo como espectador. Puede decirse que esta etapa es el
retorno de lo reprimido.
En la lectura que hace Lacan de esta fantasía, en primer lugar, aclara que conviene
hablar del Nombre del padre, para distinguirlo del padre real. Luego, dice que “el
carácter fundamental del fantasma masoquista tal como existe efectivamente en el
sujeto es la existencia del látigo… el látigo, que permanece como un signo hasta el
final, hasta el punto de convertirse en el eje, y casi diría el modelo, de la relación con
el deseo del Otro” (Lacan, 1958, p. 251).
Con “el látigo” hace referencia a la ley impuesta por eso que existe más allá, el Padre,
y es lo que permite al sujeto entrar en el mundo del deseo.
Luego dice que este fantasma, el cual llama “fantasma terminal” (Lacan 1958, p. 251),
manifiesta una relación esencial del sujeto con el significante.
Este látigo, esta ley impuesta por un más allá, más allá del Otro, implica que el
Otro está castrado, que hay un deseo del Otro que inaugura el Che vuoi? La pregunta
por el deseo del Otro, ¿qué me quiere?
596
VI Congreso Marplatense de Psicología
falta. Es una falta estructural, si bien lo que falta es un objeto simbólico, el agente es
imaginario” (Iunger, 2000 p. 17).
El Padre, entonces, padre imaginario, priva a la madre del falo. Por lo tanto, el niño no
es el falo de la madre. En esta línea, encontramos que Lacan, en “Las formaciones del
Inconciente” dice: “Cómo deberá situarse el sujeto y cómo encontrará su identificación
de sujeto es siempre en tanto que es y no es el falo. En resumen, el sujeto en cuanto
tal es, a su vez, un sujeto marcado por la barra”.
Encontramos al Padre como agente de la privación, lo que instauraría al mismo como
“causante” de la falta en la estructura. Sin embargo, surge una contradicción, puesto
que, si la falta es estructural, si es inherente a lo real de la estructura, instaurar un
agente de tal operación implica un “más allá del Otro” y por lo tanto, un “Otro del Otro”.
Eidelsztein (2008) afirma “Que el Padre sea causa es un fantasma neurótico”. Este
Padre, “más allá del Otro”, es puesto en ese lugar, podría decirse, por medio del mito,
Padre que no existe pero que la neurosis supone. El neurótico intenta convertirlo en
causa de la incompletud, haciendo de ella algo contingente (Eidelsztein, 2008).
Lacan lo expresa en Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconciente
freudiano (1960) “…no hay Otro del Otro. Es como impostor como se presenta para
suplirlo el Legislador (el que pretende erigir la Ley)” (Lacan 1960, p. 793).
En tanto la falta en lo real, instaura el más allá del Otro, el sujeto a su vez es
anulado (aufhebung), “elevado a la dignidad del significante”, sujeto barrado.
Esto se produce en la medida que interviene el Nombre del Padre, en cuanto
constituyente de la ley del significante.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONSIDERACIONES FINALES
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
Jean Allouch (1992) afirma que el acto homicida de Louis Althusser no puede
ser explicado a través del concepto analítico de pasaje al acto. Afirma que se trata de
un acto sintomático sádico. La ubicación del asesinato dentro de una categoría tal es
confirmada, afirma el autor, por un rasgo clínico, a saber, el corto tiempo de ausencia
por parte del “autor” del crimen al momento de su realización. Este lapso de ausencia
corresponde, según afirma, a un punto de angustia y no se encuentra en otros pasajes
al acto psicóticos. Además, sostiene Allouch, se confirma la lectura de un acto
sintomático ya que ésta plantea como tal la cuestión de la recidiva, de la reiteración del
acto, cuestión que se excluiría definitivamente en lo que refiere al pasaje al acto: “(…)
no hay otra manera de explicar el hecho de que tras este asesinato Louis Althusser
haya podido afirmar, y de lo más tranquilo, que volvía a tener las riendas en la mano
(lo que, pensándolo bien, es una frase espantosa en estas circunstancias), sino
tomando nosotros mismos nota de que este asesinato no fue ni más ni menos que un
acto sintomático sádico. Tras un pasaje al acto, la idea misma de volver a tomar las
riendas no tiene sentido, y nadie piensa en ello dado que lo hecho… hecho está.
Circunstancias expecionales de orden transferencial llevaron ese día el síntoma un
paso más lejos, un paso de más”.1 Acto sintomático que, en cuanto tal, sostiene el
autor, “se realizó ‘sin él’”.2 Nos proponemos el objetivo de desarrollar este planteo de
Allouch, desenvolviendo esta sugerente afirmación de un acto sintomático producido
por la psicosis.
En primer lugar, cabe destacar que la argumentación del propio Allouch resalta
la dimensión de la recidiva. Un pasaje al acto, en cuanto tal no se reiteraría: marcaría
una ruptura a partir de la cual sería imposible un retorno de lo anterior. En efecto, el
testimonio de Althusser (1991) plantea esta cuestión: “Recuerdo incluso un día en que
hice la terrible pregunta a mi médico, pensando muy concretamente en una amiga
cuyo cuello había contemplado con pavor un día preguntándome angustiado: ¿y si lo
volviera a hacer (a estrangular a una mujer)? Mi médico me había tranquilizado: ¡no!,
sin darme ninguna razón. Pero supe después que las enfermeras tenían miedo,
cuando llegaba la noche, de entrar solas en mi habitación, miedo a que les saltara
encima y las estrangulara... como si hubieran captado mi pavoroso deseo arropado de
angustia”.3 Se observa aquí la posibilidad de reiteración del acto homicida en una vía
progrediente.
1
Allouch, J. (1992): En estos tiempos, Ed. Psicoanalítica de la Letra, México D.F., 1993, pág. 51.
2
Ibíd., pág. 64.
3
Althusser, L. (1991): El Porvenir es Largo y Los Hechos, Editora Nacional, Madrid, 2002, pág. 359
600
VI Congreso Marplatense de Psicología
4
Althusser, L. (1947-1980): Lettres À Hélène, Ed. Grasset/IMEC, Saint-Amand-Montrond, 2011, pág. 25.
La cursiva es nuestra.
5
Althusser, L. (1991): El Porvenir es Largo y Los Hechos, Editora Nacional, Madrid, 2002, pág. 187.
6
Allouch, J. (1990): Marguerite, Lacan la llamaba Aimée, México, Epele, 1995. Por citar algunos
ejemplos: pp. 46 y 53.
7
Ibíd., pág. 381.
601
VI Congreso Marplatense de Psicología
8
Aún una hora antes del “atentado”, Marguerite dudaba en si no iría como de costumbre a visitar a su
hijo.
9
La cursiva es nuestra. Es interesante señalar en esta cita la referencia a la repetición, aquella que toma
para refutar la categoría de pasaje al acto en Althusser. ¿Significaría esto, según Allouch, que el pasaje al
acto implica un quiebre, no sólo a la duda como irresolución, sino también a la repetición?
10
Ibíd., pág. 381.
11
Ibíd., pp. 381-382.
12
Ibíd., pág. 382.
602
VI Congreso Marplatense de Psicología
tiene sino función significante,13 y es este acto lo que parecería constituir una “vía por
la que el sujeto se declara hombre o mujer”.14
Resulta necesario explicitar una hipótesis central de Jean Allouch en cuanto al
pasaje al acto, a saber, que éste es reabsorbido por el concepto de acto, tal y como es
delimitado por Lacan a partir de El Seminario XV. Más allá de la construcción propia
del pasaje al acto en Marguerite, lo que consideramos oportuno subrayar lo que
consideramos como la estructura del mismo según la propuesta del autor: acto como
resolución de la tensión producto de las tramas determinantes que constituyen el
delirio como sobredeterminado.
“El acto implica compromiso”, afirma Allouch.15 No se refiere según nuestra lectura a
una dimensión ética o moral del mismo, sino a la formación de compromiso, y
sostenemos que esto se aplica a toda la “gama del acto” 16: acto psicoanalítico, pasaje
al acto, acting out, acto “a secas”. Por supuesto, también al acto fallido y al acto
sintomático. Acaso la diferencia entre acto y acto sintomático desde la perspectiva de
Allouch pueda ser establecida a partir del carácter resolutorio o no de un acto: en el
primero, la tensión se “resuelve”; en el segundo, la sobredeterminación que instala un
conflicto, por formularlo así, se cristalizaría.
Postulamos entonces que Allouch, al referirse al acto homicida de Althusser
como acto sintomático, hace hincapié en que dicho crimen no resuelve la
sobredeterminación sintomática. El acto sintomático como formación de compromiso
implica entonces la tensión entre tramas determinantes contradictorias. Sería una
figuración de tal conflicto. Allouch no explicita cuáles son tales determinaciones en
cuanto al filósofo argelino pero acaso puedan reestablecerse a partir del testimonio del
propio Althusser (1991), así como de las cartas ya citadas (1947-1980).
Del primer encuentro con quien sería su esposa, Althusser (1991) dirá: “(…)
advertí en ella un dolor y una soledad insondables (….). A partir de aquel momento
experimenté un deseo y una oblación exaltantes: salvarla, ayudarla a vivir. Nunca en
toda nuestra historia y hasta el final de ésta, abandoné aquella misión suprema que no
cesó de ser mi razón de ser hasta el último momento”.17 Posición oblativa que
Althusser conociera en relación a su madre y que repetiría con Hélene, su esposa.
Althusser recurre a las palabras de un supuesto médico amigo, quien, al
repasar todas las hipótesis posibles que dieran cuenta del acto homicida, habría dicho:
“Sé que siempre habrá gente, incluso amigos, que dirán: «Hélene era su enfermedad,
ha matado su enfermedad. La ha matado porque le hacía la vida imposible. La ha
matado porque la odiaba, etc.» O, más elaborado, «la ha matado porque él vivía en el
fantasma de su propia autodestrucción, y esa autodestrucción pasaba «lógicamente»
por la destrucción de su obra, de su notoriedad, de su analista, y finalmente de Hélene
que resumía toda su vida»”.18 De este modo, la figura de este médico amigo pone en
boca del círculo de amistades del filósofo una hipótesis causal del crimen en base a la
13
Lacan, J. (1967-1968): El Seminario XV: El acto Psicoanalítico. Inédito.
14
Allouch, J. (1990): Marguerite, Lacan la llamaba Aimée, México, Epele, 1995, pág. 389.
15
Ibíd., pág. 395.
16
“Gama del acto”: término propuesto por Lacan en El Seminario XV.
17
Althusser, L. (1991): El Porvenir es Largo y Los Hechos, Editora Nacional, Madrid, 2002, pág. 133. La
cursiva es nuestra.
18
Ibíd., p. 317.
603
VI Congreso Marplatense de Psicología
realización de una moción de odio. Es decir, que, según esta posición, el asesinato
habría estado determinado por el odio de Althusser hacia su mujer.
Sin embargo, las palabras del médico contraponen el siguiente argumento:
“ahora bien, lo que resulta muy molesto en este tipo de razonamiento (muy extendido
porque es muy tranquilizador, se tiene en efecto una «causa» indudable) es el
«porque» que introduce una necesidad sin apelación, sin tener en cuenta la
acumulación de elementos aleatorios objetivos. Ahora bien, todos tenemos, todos
nosotros, fantasmas inconscientes agresivos, incluso homicidas, de asesinato. Si
todos los que alimentan estos fantasmas pasaran a la acción, todos deberíamos
convertirnos, comprendes, en asesinos. Ahora bien, la inmensa mayoría de la gente
puede vivir perfectamente con sus fantasmas incluso homicidas, sin jamás pasar a la
acción para llevarlos a cabo. Quienes dicen: «la ha matado porque ya no podía
soportarla, porque, incluso inconscientemente, deseaba liberarse de ella», no
comprenden nada del asunto, o no se dan cuenta de lo que dicen. Si se aplicaran a
ellos mismos esta lógica, ellos que alimentan también en sí mismos esta lógica de
fantasmas de agresión y de asesinato (¿quién no los alimenta?) que a fin de cuentas
es la de la premeditación del inconsciente, todos estarían no en un hospital
psiquiátrico, sino en la cárcel desde hace mucho tiempo”.19
A dicha hipótesis causal, la figura del médico objeta (y esta voz difícilmente no
sea la del propio Althusser): “¿Cómo pretender entonces poder hablar solamente de la
determinación «causal» de un fantasma, sin invocar al mismo tiempo la otra
determinación «causal», la de la ambivalencia, la que se da en el fantasma mismo
como el deseo radicalmente opuesto al deseo homicida del fantasma, el deseo de
vida, de amor y de salvación?”.20 Según esta argumentación, el odio no podría ser
determinante del asesinato, ya que a dicha corriente se le contrapondría una moción
tierna, aquella que en términos de Althusser es definida en los siguientes términos:
“deseo de vida” y de “salvación”.
La argumentación del médico prosigue: “En el fondo, ¿tenía Hélène un deseo
de acabar con la vida (desde hacía un mes no dejaba de hablar de matarse pero tú la
considerabas incapaz de hacerlo) por lo que ha aceptado pasivamente de tus manos 21
la muerte que te había suplicado que le dieras? Tampoco esto se puede excluir. ¿O
bien tenías, como durante toda tu vida, un deseo tal de ir a socorrerla, de ayudarla en
su deseo más intenso, el más desarmado, que habrías, inconscientemente, llevado a
cabo su deseo de acabar con la vida? ¿Un caso que se denomina "suicidio por
persona interpuesta" o el "suicidio altruista", que se observa con frecuencia en los
casos de melancolía aguda como la tuya? Tampoco esto se puede excluir”. 22
De esta manera, el acto homicida de Louis Althusser no podría jamás explicarse a
través de una hipótesis causal que aluda a un determinismo inconciente desde el
momento mismo en que a la moción hostil se contrapondría una moción tierna. Cabe
preguntarse, sin embargo, si el acto homicida no vendría a resolver en su figuración
19
Ibíd., pp. 317-318.
20
Ibíd., p. 319.
21
La escena del crimen no habría registrado otro signo de violencia por fuera del estrangulamiento, lo que
llevó a que se considerara la hipótesis de que no hubo resistencia alguna por parte de la víctima.
22
Althusser, L. (1991): El Porvenir es Largo y Los Hechos, Editora Nacional, Madrid, 2002, pág. 315. La
cursiva es nuestra.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
606
VI Congreso Marplatense de Psicología
Además de no saber lo que tiene, este sujeto llega con sus fijaciones particulares,
muestra con que goza y es en transferencia que todo esto queda desplegado. El sujeto
despliega su posición fantasmática, demandando amor y en posición de amado.
En el Seminario 8, Lacan dice respecto de quien demanda: “El que viene a vernos,
por el principio de suposición de que no sabe lo que tiene – ahí se encuentra ya toda la
implicación del Inconciente, del él no sabe fundamental.” (Lacan, 1960, p. 49).
Es un sujeto en posición de amado, amado que pide que lo amen, amado que no
sabe lo que tiene; postura más bien pasiva y opuesta a la posición de falta, por ende
opuesta a la posición deseante. Esta demanda de amor al analista, está marcada por la
identificación con significantes provenientes de una antigua demanda, antigua demanda
que me ayuda a explicar lo estructural del fenómeno de la transferencia.
607
VI Congreso Marplatense de Psicología
Ahora bien, ¿qué papel ocupará Sócrates ante tal pedido? ¿Por qué podemos
comparar el lugar de Sócrates con la posición del analista? ¿Qué posibilita que la
demanda sea puesta entre paréntesis en un análisis?
Dicha esencia es también la del analista, que será más bien un lugar, antes que
una persona. Quien ocupa dicho lugar, conocido como la posición del analista, habilita a
que aparezca este Otro primordial, fundamental en la conformación fantasmática de quien
demanda. Por esto también decimos que quien está en dicha posición tiene deseo…de
analizar.
Ocupando dicha posición, el analista deja abierta la hiancia del deseo del Otro,
hiancia entre s1 y s2. Retomando el texto La Dirección de la cura y los principios de su
poder (1958), Lacan dice: “El deseo es lo que se manifiesta en el intervalo que cava la
demanda más acá de ella misma.” (p. 597).
608
VI Congreso Marplatense de Psicología
En la medida en que lo que Sócrates desea, él no lo sabe, y que se trata del deseo del
Otro, en esta medida Alcibíades es poseído, ¿poseído por qué?- por un amor del cual
puede decirse que el único mérito de Sócrates es designarlo como amor de transferencia
y remitirlo a su verdadero deseo. (Lacan, 1960-1961, p. 207)
Sócrates, aguarda a que Alcibíades termine su discurso para decir que en verdad,
lo que este bello ateniense acaba de decir está dirigido a otro y no hacia su persona; está
dirigido a Agatón. Lacan explica- también en el Seminario 8- que Sócrates posibilita que
otros hablen por él, hablen ¿de qué?, de su verdadero deseo, algo que también es propio
de la posición del analista. Diana Rabinovich en un libro titulado Modos lógicos del amor
de transferencia (1992) dice:
(…) no se trata de mostrar cuán deseable es Sócrates, sino cómo puede desear
Alcibíades, cómo el objeto a lo pone fuera de sí, causa su frenesí. Tras los elogios
al objeto del deseo, se desnuda la presencia de Agatón como causa del deseo,
que divide a Alcibíades, y esto es lo que Sócrates subraya. El al menos tres del
amor, según Lacan, queda al descubierto. (Rabinovich, 1992, p. 110)
609
VI Congreso Marplatense de Psicología
Lo que aprenderá el sujeto que llega demandando amor será justamente a saber
que le falta, que de hecho, le seguirá faltando toda la vida, pero esto no habla de un
Apocalipsis ni mucho menos, sino lo contrario. Si el sujeto puede moverse un poco de esa
fijación inicial que se evidencia en transferencia, o al menos si puede estar más advertido
de aquello con lo que Goza, se habrá conseguido bastante. Habrá conseguido, ni más ni
menos, que conocer una nueva forma de Amar.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
Rabinovich, D. (1992). Modos lógicos del amor de transferencia. Buenos Aires: Manantial.
610
VI Congreso Marplatense de Psicología
FUNDAMENTACIÓN
Las expectativas culturales acerca del envejecimiento influyen sobre las metas y la
motivación de los adultos mayores, determinando, en cierto modo, las trayectorias vitales
de estas personas. Dentro de estas expectativas se espera que los mayores controlen,
más que en otras edades, sus deseos y su capacidad de disfrute, construyendo una
representación social de las personas mayores como seres asexuados o imposibilitados
para el sexo.
El amor y la sexualidad son temáticas que han generado interés en diversos
campos disciplinares. El amor, menciona Hendrick (1995), constituye el elemento más
poderoso e importante de las relaciones en pareja, implica un sentimiento hacia otro, es
un compromiso incondicional y protector entre dos partes que contribuyen mutuamente a
su bienestar y desarrollo (Sternberg, 1996). Los sujetos en su mayoría, pasan gran parte
de su vida adulta en pareja, y se supone que es el amor, el constructo que posibilita su
aparición y permanencia a lo largo del ciclo vital.
Específicamente en lo referido a las personas mayores, la relación de pareja ha
sido identificada como uno de los vínculos centrales y entre aquellos que les proporcionan
los mayores niveles de satisfacción. (e.g. Arias, 2004, 2005; Bishop, Martin & Poon, 2006;
Phillips, Sui, Yeh & Cheng, 2008; Prince-Paul, 2008; Vanderhorst & McLaren, 2005;
Warren, Stein & Grella, 2007; Zinbarg, Lee & Yoon, 2007; Polizzi, 2011; Arias & Polizzi,
2011).
Entre las teorías que han abordado la relación amorosa, una de las que más se ha
destacado es la teoría triangular del amor, de Sternberg (1986, 2000). La misma
considera que el curso de la relación de pareja depende de la fluctuación de los tres
componentes que integran el amor: intimidad, pasión y compromiso, a lo largo de su ciclo.
Estos componentes juntos, pueden graficarse como los vértices de un triángulo. En cada
uno se manifiesta un aspecto diferente del amor: 1) la intimidad (vértice superior del
triángulo), se refiere a los sentimientos de cercanía, apoyo, incondicionalidad,
comunicación, vínculos y acercamiento mutuo en la relación de pareja, representada por
la acción de compartir, 2) la pasión (vértice izquierdo del triángulo), está vinculada al
romance, la atracción física, la consumación sexual; a las necesidades de entrega,
autoestima, pertenencia, sumisión, deseo y satisfacción sexual, y su expresión puede, en
algunas ocasiones, verse motivada por aspectos fisiológicos y psicológicos que dan
611
VI Congreso Marplatense de Psicología
612
VI Congreso Marplatense de Psicología
Desde una perspectiva que se orienta a resaltar más las posibilidades que los
déficits, Iacub (2006) centró el análisis en el erotismo, que además de incluir el deseo y el
amor, implica una infinita variedad de formas posibles de lograr placer. Esta consideración
de la sexualidad en un sentido amplio no presenta obstáculos ni limitaciones para su
práctica y desmistifica la posibilidad de una vejez que impida su ejercicio.
Es de relevancia y debemos tener en cuenta que con el paso de los años se
producen una serie de cambios en el organismo que pueden influir en la vida sexual de
las personas mayores, así como la aparición de distintas disfunciones en el ámbito sexual.
Pero además, la sexualidad puede verse disminuida durante la vejez debido al gran
desconocimiento y la desinformación que existe sobre el envejecimiento en general y la
sexualidad en particular (Sánchez y cols., 2005).
Por ello, es importante que las personas mayores y que la sociedad en general,
reciban la información adecuada que permitan deconstruir prejuicios sobre la temática. En
este sentido, el taller “Nunca es tarde para amar”, dirigido a personas mayores intenta
contribuir a la educación de la población adulta con el objetivo de mejorar su calidad de
vida.
El trabajar con falsas expectativas y erróneas creencias contribuirán a variados
beneficios. En esta dirección Yela (1997) plantea algunos: 1) cuestionar falsas creencias
acerca de las relaciones amorosas contribuirá a un aumento en la satisfacción en las
mismas; 2) reconocer los diferentes componentes en la relación amorosa y que en función
de diferentes variables estos se van modificando, quizás generen mejores condiciones
para mejorar esos cambios; 3) aprender y reconocer la reducción de la pasión como algo
natural ayuda a que no se produzcan expectativas incumplidas.
Considerando que esta temática es poco abordada, desde una perspectiva
positiva, orientada a la promoción de la salud, se presenta una propuesta, que consiste en
un taller para adultos mayores denominado “Nunca es tarde para amar…”. El mismo, es
coordinado y ejecutado por un equipo de Licenciadas en Psicología, especialistas en
vejez, en la Facultad de Psicología y forma parte del programa UPAMI. Sus objetivos
son:
Generar un espacio de encuentro en el que los adultos mayores logren:
Debatir acerca de las diferentes concepciones acerca del amor.
Debatir sobre los cambios en la concepción del amor en la historia.
Explorar la experiencia amorosa a lo largo de ciclo vital de la persona
Problematizar mitos, supuestos y estereotipos negativos acerca del amor en la
vejez
Explorar supuestos y experiencias personales en relación al amor, la pareja y la
sexualidad en la vejez.
Generar nuevos vínculos con pares.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Clase 1 y 2: Se expusieron desarrolles teóricos acerca del amor con sustento empírico
sobre las investigaciones actuales, con el objetivo de psicoeducar y deconstruir falsas
creencias sobre este constructo.
Clase 3: Se trabajó con el concepto del amor; amor romántico en la historia. Se analizo su
evolución en el tiempo a través de historias de amor clásicas; y las maneras de
representar el amor a través de los libros y el cine.
Clase 4 y 5: Análisis fílmicos a través de la reflexión y preguntas disparadoras. Las
películas con las que se trabajó: Hope Springn y la Vida empieza hoy.
Clase 6 y 7: Erótica y Vejez: La femeneidad y la masculinidad en la vejez. Se trabajó con
cortos del programa Aqua Mayor.
Clase 8: Se trabajo con testimonios de adultos mayores acerca de las relaciones de
pareja en la vejez, con relaciones de larga duración e incipientes
Clase 9: ¿Cómo será nuestra relación de pareja en el futuro? Mediante un ejercicio
prospectivo se convocaba a pensar e imaginar cómo sería la relación amorosa tanto de
aquellos que estaban en pareja como los que no la tenían.
Clase 10: Se realizo el cierre del taller y relatando las vivencias y significaciones que este
taller tuvo en cada uno de los participantes
Las personas mayores tuvieron una participación muy activa en las distintas
actividades que fueron propuestas. Manifestaron la importancia de reflexionar sobre estos
temas y consideraron que existen aspectos naturalizados que pueden ser modificados y
problematizados a partir de estos encuentros permitiendo construir nuevos significados
compartidos. Los talleres se desarrollaron en un clima de trabajo agradable, con respeto,
escucha del otro y teniendo en cuenta la experiencia pasada, presente y las proyecciones
a futuro de cada integrante.
Se trabajó con recortes literarios, periodísticos, videos, publicaciones científicas,
el análisis de películas y relatos de vida. Los materiales fueron tanto aportados por el
equipo docente como también por los propios participantes. Se generó un espacio
dinámico, participativo, dialógico y reflexivo en el que los adultos mayores pudieron
problematizar ciertos mitos y prejuicios sobre el amor, la pareja y la sexualidad, como
también compartir vivencias y emociones del transitar en esta etapa de la vida.
CONCLUSIONES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Los talleres proporcionan muchos beneficios para las personas mayores, por
ejemplo el aumento del bienestar general, entusiasmo, incremento de la capacidad
intelectual, estado de ánimo y autovaloración y aumento en la participación social, entre
otros (Dottori, 2013 & Arias). A su vez, permite la posibilidad de pensar, decir y discutir
sobre temáticas muy habladas en nuestra sociedad pero poco problematizadas. El amor y
la pareja son temas recurrentes en la literatura, el cine y los medios de comunicación, sin
embargo poco se habla de la sexualidad y mucho menos de lo que pasa con ella en las
personas mayores.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
616
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
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VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
“En ciertas cosas uno se siente más confiado para decidir, porque le dedico más
tiempo o porque investigó mas” (hombre, 80 años sin discapacidad)
Sin embargo, hubo casos en los que las respuestas coincidían respecto a una temática
en particular dentro de un mismo grupo. Frente a la pregunta referida a la presencia o no de
618
VI Congreso Marplatense de Psicología
decisiones que consideraran más dificultosas para llevar a cabo, aparecieron en el grupo de
personas con discapacidad, respuestas referidas a temores en la elección o la posibilidad de
conformación de nuevas parejas. En algunos casos ese temor fue atribuido a la presencia de
la dificultad física.
“en noviazgo si.. o en tener una compañera si… me cuesta… porque tengo ese temor…
capaz que yo me enamore de una persona, pero me miro yo y digo no… tengo todo pero
esta dificultad, a esa persona le puede dar vergüenza…” (Hombre 66 años , discapacidad
motriz)
“Si, tal vez en relación de pareja si. Quede viuda y podría haber tenido la oportunidad de
tener pareja y en ese caso si, no quería saber nada de eso. Tal vez en algún momento
me arrepiento, pero ahí me cuesta. Me parecía que ya no era momento, que era
dificultoso” (mujer 79 años, discapacidad visual)
“ahora tomo decisiones simples, de todos los días, las complejas como comprar un
departamento, casarme o tener hijos ya no corren más” (Hombre 80 años, sin
discapacidad)
Las respuestas que surgieron con mayor frecuencia entre las personas con
discapacidad fueron aquellas que consideraban que concretamente no era el proceso de toma
de decisiones lo que se había modificado con la aparición de la discapacidad, sino que lo que
se modificaba eran las actividades sobre las cuales ahora podían decidir. Al encontrarse frente
a la realidad de que su condición física actual no les permite desempeñarse en ciertos ámbitos
como lo hacían habitualmente, las decisiones se restringen al campo sobre el cual ahora
pueden circular y desplazarse sin riesgo.
“no puedo ser libre como tendría que ser, pero si tener mi opinión o decisión” (Hombre,
79 años, discapacidad visual)
“me siento más limitada para tomar decisiones, porque si bien yo puedo tomarlas no
las puedo actuar y siempre estoy dependiendo de los demás” (mujer 67 años,
discapacidad respiratoria)
Ahora entendí -que hay cosas que ya no puede hacer, como subirse a un banco- y
tomo mis decisiones porque yo no consulto nada, mande a hacer un mueble para la
cocina a mi medida” (mujer 73 años, discapacidad visual)
619
VI Congreso Marplatense de Psicología
Otro de los puntos en los cuales se hallaron convergencias en las respuestas de los
mayores con diversas discapacidades, es el foco en la perdida de independencia. Actividades
que previo a la discapacidad realizaban solos, actualmente deben desempeñarlas con ayuda y
soporte de alguna otra persona, ya sea familiar o no.
Esta realidad parece generar el mayor de los impactos en los adultos mayores ya que
sienten limitado su accionar al tener que depender de un otro, de los tiempos ajenos y en gran
cantidad de respuestas puede evidenciarse la presencia del temor a ser percibido como una
carga.
“Yo no quiero ser carga, con el asunto de la vista, veo poco, camino poco, quiero sacarle
compromisos a mi señora y ella anda pendiente atrás mío” (Hombre 76 años,
discapacidad renal)
“me siento un poco bloqueado, como que no tengo la misma capacidad que tenía
antes…” (Hombre 72 años, discapacidad motriz)
“Mi hija vive lejos, en un lugar donde no hay vereda, entonces me caí y ahora le tengo
miedo al colectivo o tengo que tomar remís y me sale muy caro, entonces opto por no ir”
(Mujer 72 años, discapacidad motriz)
“era muy difícil escribir braile, así que me idee mi propio sistema, en lugar de poner las
letras seguidas voy dejando espacios y asi voy tocando letra por letra así no jorobo a nadie
en mi casa preguntando todo, entonces así rotulo las cosas” (Hombre 70 años,
discapacidad visual)
620
VI Congreso Marplatense de Psicología
“aprendí mis limitaciones y como manejarme porque yo tengo que andar con la mochila de
oxigeno en el colectivo y es muy pesada” (mujer 67 años, discapacidad respiratoria)
CONSIDERACIONES FINALES
621
VI Congreso Marplatense de Psicología
parte, esta dificultad es lo que los lleva a depender de otras personas, impactando en su
calidad de vida, dado que si localmente contáramos con diseños universales para el ingreso a
lugares públicos o transporte seria sencilla la tarea de acceder y poder participar como
ciudadanos gozando plenamente de sus derechos.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
623
VI Congreso Marplatense de Psicología
MÉTODOS Y TÉCNICAS
RESULTADOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La primera frase incompleta aludía al vínculo de la red que se asocie más con
alegría. De 51 personas que respondieron a la frase, la mayoría mencionó a los amigos
principalmente. Le siguieron en orden decreciente los hijos, la pareja y los nietos. (Ver
tabla 1)
Tabla N°1:
Vínculos de la red de apoyo social que se asocian más frecuentemente con la emoción de
alegría para las personas mayores entrevistadas. Mar del Plata
Vínculos que se asocian con alegría
Amigos Hijos Pareja Nieto Otros* Total
N° % N° % N° % N° % N° % N° %
Total 23 45,0 11 21,5 6 11,7 6 11,7 5 9,8 51 100,0
Nota: *Entre los “otros” se incluyeron: 1 hermano, 1 sobrino, 1 vecino, 1 cuñado y 1 primo.
La comparación por género muestra que los amigos y nietos son mencionados de manera
similar por ambos sexos. Sin embargo los hijos y las parejas son mencionados
mayoritariamente por los hombres, y los otros familiares (hermanos, vecino, cuñado y
primo), por las mujeres.
Tabla N°2:
Vínculos de la red de apoyo social que se asocian más frecuentemente con la emoción de
alegría según género. Mar del Plata
Vínculos que se asocian con alegría
Amigos Hijos Pareja Nieto Otros* Total
N° % N° % N° % N° % N° % N° %
Femenino 11 50,0 4 18,1 0 0,0 3 13,6 4 18,1 22 100,0
Masculino 12 41,3 7 24,1 6 20,6 3 10,3 1 3,4 29 100,0
A la frase incompleta que identificaba el vínculo de la red de apoyo social que se asociaba
más frecuentemente con la emoción de enojo sólo respondieron 23 (38,8%) personas
mayores de las 60 entrevistadas dentro de los mencionados. Los hijos fueron los más
elegidos como aquellos vínculos que se asocian con el enojo.
Tabla N° 3
Vínculos de la red de apoyo social que se asocian más frecuentemente con la emoción de
enojo para las personas mayores entrevistadas. Mar del Plata
Vínculos que se asocian con enojo
Hijos Amigos Pareja Vecino Nieto Nuera/yerno Total
N° % N° % N° % N° % N° % N° % N° %
Total 8 34,7 5 21,7 3 13,0 3 13,0 2 8,6 2 8,6 23 100,0
625
VI Congreso Marplatense de Psicología
La comparación por género muestra que los hombres pudieron responder con mayor
frecuencia a la frase incompleta (n: 15) en comparación con las mujeres (n: 8). A su vez,
ellos mencionan mayormente a los amigos, vecinos y nuera/yerno más que las mujeres.
(Ver tabla 4)
Tabla N° 4
Vínculos de la red de apoyo social que se asocian más frecuentemente con la emoción de
ira según género. Mar del Plata
Vínculos que se asocian con enojo
Hijos Amigos Pareja Vecino Nieto Nuera/yerno Total
N° % N° % N° % N° % N° % N° % N° %
Femenino 4 50,0 1 12,5 2 25,0 0 0,0 1 25,0 0 0,0 8 100,0
Masculino 4 26,6 4 26,6 1 6,6 3 20,0 1 6,6 2 13,3 15 100,0
Tabla N° 5
Vínculos de la red de apoyo social que se asocian más frecuentemente con la emoción de
tristeza para las personas mayores entrevistadas. Mar del Plata
Vínculos que se asocian con tristeza
Amigos Hijos Vecino Hermano Nieto Otros* Total
N° % N° % N° % N° % N° % N° % N° %
Total 14 37,8 13 35,1 4 10,8 2 5,4 2 5,4 2 5,4 37 100,0
Nota: *Entre los “otros” se incluyeron: 1 pareja y 1 cuñado.
La comparación por género muestra frecuencias similares. Las mujeres mencionan más a
los amigos y otros vínculos como aquellos que les generan tristeza. Mientras que los
hombres mencionan en mayor medida a los hijos y vecinos. Los hermanos y nietos fueron
mencionados en igual medida por ambos sexos. (Ver tabla 6)
Tabla N° 6
Vínculos de la red de apoyo social que se asocian más frecuentemente con la emoción de
tristeza según género. Mar del Plata
Vínculos que se asocian con tristeza
Amigos Hijos Vecino Hermano Nieto Otros* Total
N° % N° % N° % N° % N° % N° % N° %
Femenino 8 42,1 6 31,5 1 5,2 1 5,2 1 5,2 2 10,4 19 100,0
Masculino 6 33,3 7 38,8 3 16,6 1 5,5 1 5,5 0 0,0 18 100,0
Nota: *Entre los “otros” se incluyeron: 1 pareja y 1 cuñado.
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CONCLUSIONES
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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PRESENTACIÓN
La información acerca del uso de los servicios de salud por parte de los adultos
mayores, es muy escasa. No obstante, los datos disponibles permiten afirmar que las
personas mayores que cuentan con cobertura asegurada en salud no hacen siempre un
630
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uso continuado y eficaz de los servicios de salud, y destaca la baja presencia de prácticas
preventivas.
.
LA PSICOLOGÍA: SU ESPECIFICIDAD EN EL CAMPO GERONTOLÓGICO
631
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Así es que, los mayores con sus prácticas construyeron un nuevo paradigma del
envejecimiento y se han convertido en sujetos activos de su propio devenir. Entendiendo
por paradigma la idea de modelo, patrón, ejemplo a seguir. Son las directrices de un
grupo que establecen límites y que determinan cómo una persona debe actuar dentro de
los límites. En tal sentido, los mismos mayores construyeron sus modelos y emblemas
sobre los que se configuran los ideales futuros.
632
VI Congreso Marplatense de Psicología
Los mayores actuales han hallado cómo representar un presente y un futuro a seguir.
Las propuestas educativas han contribuido en forma directa a la construcción de la
identidad psicológica en el envejecimiento. Como efecto, las personas mayores han
producido una nueva identidad, proponiendo modelos innovadores y creativos de ser
sujetos adultos mayores.
En estas transformaciones cabe la idea de pensar los nuevos modos del envejecer, como
una invención, en el sentido más estricto del término como creación, diseño o producción
de alguna cosa nueva que antes no existía.
LA EXPERIENCIA UPAMI
633
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFLEXIONES FINALES
REFERENCIAS BIBLIOGRAFIICAS
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Salvarezza, L;(comp) Envejecimiento, psiquis, poder y tiempo.(Cap. 3), Bs. As., Eudeba
635
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
636
VI Congreso Marplatense de Psicología
637
VI Congreso Marplatense de Psicología
En este sentido el presente trabajo intenta puntualizar algunos ejes que resultan relevantes
en función de los factores del desarrollo descriptos por Baltes (1983): 1. Factores normativos
vinculados a la edad; 2. Factores normativos vinculados a la historia; y 3. Factores no normativos.
Los primeros implican factores biológicos o sociales que se relacionan con la edad y con el género,
por ejemplo los cambios esperables en la pubertad en relación a la vida social, los cambios
corporales, la relación con los padre y adultos en general, etc. Los segundos implican sucesos que
tienen lugar en un momento histórico y afectan en diferentes niveles (social, económico, cultural) la
vida de una o varias generaciones, un ejemplo clásico en este sentido es el de las mujeres y la
educación. A principios del siglo XX y por supuesto antes, las mujeres en general tenían vedado el
acceso a la educación media y superior en función de su rol como esposa y madre, por eso no era
esperable que accediera a títulos universitario y si que tuviera varios hijos. En la actualidad en
occidente es mucho menos esperable que una mujer tenga más de tres hijos a que obtenga un
título universitario.
El tercer factor hace referencia a eventos particulares, idiosincráticos que afectan a
personas o a pequeños grupos y no constituyen una norma. Entran aquí enfermedades, mudanzas,
divorcios, etc.
La suma de los factores mencionados configura el desarrollo a lo largo del curso de la vida.
En el mismo sentido el concepto trayectorias define claramente una construcción biográfica
no lineal sino como producto de continuidades y discontinuidades, de cambios y transformaciones
propios de la biografía de un sujeto.
Esta condición aparece mucho más claramente en la biografía de los adultos mayores para
quienes la sucesión de crisis y cambios ha ido determinando rumbos diversos en lo que podemos
denominar como el axioma del envejecimiento diferencial: conforme vamos envejeciendo son más
notables las diferencias de unos respecto de otros. Stanley Hall, autor del primer libro sobre
psicología de la vejez (Senscente, The last half of life, 1922) ya sostenía que en la vejez las
diferencias individuales eran mayores que en la juventud.
Los perfiles biográficos la manera que unos y otros factores actúan nos permiten generar
mapas de trayectorias que siguen los sujetos, tomando como base recorridos normativos o
esperables en función de un grupo social o una cultura determinada y sus variaciones o
alteraciones respecto de esa norma.
La historia de vida como herramienta, se muestra como una fuente de información relevante
y que ofrece una perspectiva centrada en la construcción narrativa que la propia persona hace del
relato de su propia existencia. En cada uno de los eventos que el entrevistado va mencionando se
puede ir contemplando aquellos significados que otorgan a cada vivencia, y nos ofrecen un
panorama acerca del producto del interjuego de los factores mencionados.
A nivel teórico, la razón de la conducta humana en esas situaciones han sido generalmente
explicadas desde modelos deterministas ya sea a nivel interno o externo. Fue Albert Bandura
(1978) quien propuso el modelo del determinismo recíproco donde el ambiente, la persona y la
conducta se ven influidas recíprocamente. El autor sostiene que son los procesos de auto
regulación del yo los que, mediante evaluaciones y recapitulaciones, otorgan sentido a las
diferentes vivencias del sujeto.
La historia de vida, al ser una narrativa generada por el propio sujeto, nos permite observar
cómo esta influencia recíproca va tomando lugar en cada uno de los eventos vitales al mismo
tiempo que nos presenta un trayecto de la experiencia vital recapitulando factores normativos y no
normativos en el desarrollo personal.
638
VI Congreso Marplatense de Psicología
Se presentan aquí 3 recortes de historias de vidas realizadas en la ciudad de Mar del Plata
por alumnos avanzados de la facultad de psicología en un proyecto de prácticas profesionales. En
todos los casos hemos modificado algunos hechos de manera de preservar la identidad. También
vale la pena aclarar que estas prácticas fueron permanentemente supervisadas por docentes. Los
alumnos recibieron formación teorico - práctica antes de realizar la entrevista.
En cuanto a las historias en sí se destacan en ellas diferentes eventos significativos donde
se puede observar cómo la técnica de historia de vida permite pesquisar la influencia recíproca
entre ambiente, persona y conducta en eventos normativos y no normativos.
Historia a
F es un hombre que tiene ahora 78 años. Nació en el campo, cerca de Mar del Plata. Su padre era
peón de campo y se criaron en una casa de escasos recursos. Hizo sólo la primaria en una escuela
rural y luego para hacer la secundaria tenía que viajar hasta Mar del Plata en bicicleta todo los días.
De esa época F recuerda que la materia que más le gustaba era Matemática, además de los bailes
de carnaval. A los 13 años comenzó a trabajar en el campo, ayudando a su papá arriando vacas a
caballo y tenía ya su propio sueldo. 5 años más tarde empezó con el trabajo de escritorio en la
administración “… que era otra cosa. Ya era más grande, ya manejaba, usaba los autos, hacía las
compras de la estancia en Mar del Plata, era ayudante de los contadores, todo eso. (…) yo era el
encargado, el que decidía todo”. A los 19 años se mudó de su casa al centro de la estancia donde
estaba la administración. Esta mudanza la hizo al dividirse la estancia donde trabajaba. Uno de los
hermanos se quedó con el “me veían inteligente y que sabía defenderme bien, que tenía labia”.
Este punto se muestra como un corte con su familia de origen, no sólo por distanciarse de ellos
sino por decidir su propio camino, con el que sus padres no estaban de acuerdo. El trabajo en
relación con la administración ha sido su ocupación a lo largo de toda su vida. En la vejez, cuando
se indaga acerca del uso del tiempo libre, encontramos que continúa realizando tareas
relacionadas con ello “Hago las compras, las cosas del banco, me gusta mucho todo lo que es
papeles. Llevo todas las cuentas, como siempre hice todo en administración, llevo todo detallado
en la agenda”. Este interés y gusto por todo lo administrativo lo ha llevado en estos últimos años a
iniciarse en un taller educativo para adultos mayores donde aprende a usar la computadora.
Historia b
L es una mujer de 74 años. Nació en una localidad del interior bonaerense. Es hija única. Se crio
en una familia de clase media. Su padre era empleado de banco y su madre era ama de casa,
aunque algunas veces ella la ayudaba en su ocupación temporaria de costurera. Se casó joven y
sus 3 hijas nacieron en los primeros años de matrimonio. Su marido era viajante y pasaba una
buena cantidad de días a la semana fuera de su casa. Por lo que su ocupación durante la crianza
de sus hijas fue ser ama de casa. Sin embargo, aprovechando lo que había aprendido con su
madre, hacia vestidos de para fiestas de la gente de su barrio. Al año de que su hija más chica, al
igual que las otras, se fueran de la ciudad a estudiar se entera que su marido tenía otra familia.
"Fue muy difícil, estaba sola, mis padres habían fallecido y no me quedaba familia propia". La
infidelidad de su marido la hace enfrentarse a la decisión de quedarse en su ciudad o irse. Decide
mudarse a Mar del Plata donde estudiaban 2 de sus hijas. “No tenía trabajo, no conocía a nadie.
Pero de a poco me fui acomodando”. Los recuerdos de esta época remiten a las complicaciones de
cambiar de ciudad y de poder solventarse económicamente. Para hacerlo siguió desarrollando su
actividad en la confección de ropas y de a poco comenzó su emprendimiento propio en la ciudad.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Si bien reconoce que no fue un emprendimiento grande le ayudó a poder sostenerse y crecer de a
poco económicamente. En la actualidad, ya jubilada sigue trabajando de su oficio enseñándoles a
personas más jóvenes.
S es una mujer de 58 años, nació en Bahía Blanca. Era la segunda hija de una familia con 3 hijos.
Su padre trabajó de diferentes oficios durante todo el tiempo de su crianza por lo que se ha
mudado repetidas veces de ciudad en su infancia y hasta inicios de su adolescencia terminando su
secundario en La Plata. Cuando iba a iniciar su estudio de medicina, su padre tuvo contratiempos
económicos y debe mudarse de ciudad. En ese momento estaba comprometida con quien ahora es
su esposo y adelantaron su casamiento para poder quedarse y estudiar. Las dificultades
económicas de la época que habían afectado a su padre no tardaron en afectar a su esposo;
asimismo, al poco tiempo de casada tienen su primer hijo. Esta situación hizo que se le haga
imposible continuar con su estudio. El recuerdo de este tiempo le genera nostalgia. “Tuve que
decidir entre mi familia o mi estudio. Y esa decisión no se puede dudar mucho”. Durante varios
años estuvo trabajando ayudando a su marido y cuidando de sus hijos y la casa. Cuando su hija
menor terminó el secundario les comentó a sus padres de su interés por estudiar enfermería.
“Cuando nos dijo que quería estudiar eso, se me vino encima todo lo que había pasado con la
carrera de medicina. Me alegraba por ella, pero me hizo mal darme cuenta de lo que no había
podido hacer. Yo no dije nada, sin embargo mi esposo no tardó en darse cuenta qué era lo que me
pasaba. Estábamos bien económicamente y me apoyó mucho en mi decisión de estudiar
enfermería con mi hija ya de adulta. No pude hacer la licenciatura, pero hoy soy enfermera y puedo
trabajar de eso”.
RESULTADOS Y CONCLUSIONES
De las historias hemos querido destacar con el subrayado aquellos nodos a partir de los
cuales el desarrollo se orienta hacia una u otra dirección. Son momentos determinantes,
generadores de novedades y cambios.
Situaciones que implican un cambio drástico en las condiciones de vida generan tomas de
decisiones que abren un espectro de nuevas orientaciones y potencialidades y posibilidades. Este
tipo de hechos entendemos no pueden explicarse aisladamente por fuera ya sea del contexto más
amplio de lo social, pero encuentran un sentido profundo en el trayecto de vida de los sujetos. No
coincidimos con modelos que apuntan a una sobredeterminación desde momentos tempranos en el
desarrollo. Sino que más bien encuentran una lógica a lo largo del trayecto de vida, como un todo.
Muchas veces el azar no es ajeno a estos cambios. Para nuestra disciplina queda configurado un
nuevo objeto de estudio que son las trayectorias de vida. Quedan por explicar cuestiones tales
como la mayor o menor presencia que tienen en unas biografías más que en otras los factores no
normativos. También resultan de interés las diferencias culturales presentes en los factores
normativos vinculados a la historia, como en los criterios en la toma de decisiones entre otros
fenómenos.
Se abre entendemos todo amplio campo de estudio para la psicología acerca de las
trayectorias de vida a través de las historias de vida, su lógica, sus modalidades narrativas.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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bulletin 64, 92-107.
641
VI Congreso Marplatense de Psicología
1
El equipo de cátedra está conformado por docentes del área de las Ciencias de la Educación, de la Psicopedagogía y de la
Psicología, quienes se abocan, a través del dispositivo de supervisión, al análisis interdisciplinario de diversas situaciones de
intervención psicopedagógica en contextos educativos formales y no formales.
2
Proyecto aprobado por Secyt (2012-2015). “La intervención psicopedagógica como posibilitadora de variaciones de lo escolar: su
estudio a partir de prácticas situadas en contextos diversos”. Directora: Mgter. Liliana Moyetta. Investigadores: Lic. Daniela Barbero,
Dra. Mariana Bottini, Lic. María Filippi y Lic. Daniela Rainero.
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3
Desarrollada por dos alumnas practicantes de la cátedra de Práctica Profesional Psicopedagógica en Educación en el año 2012,
Belén Laciar-Carolina Probst y con el asesoramiento colaborativo de los miembros de la mencionada cátedra.
4
Para ello se elaboró una huerta de plantas aromáticas y medicinales y se efectuaron diversos talleres para trabajar con las
diferentes propiedades de las hierbas y plantas (envasado y etiquetado de hierbas aromáticas, de elaboración de comidas, de
teñido de lanas, de elaboración de jabones y cremas, entre otros).
643
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645
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relacionarse entre ellos y con los demás, respetuoso de la situación de hogarización y de las
singularidades propias de cada historia de vida de los residentes.
Se pudieron fortalecer los vínculos de los residentes del Hogar entre sí al otorgarles
espacios para compartir y crear colectivamente y con la comunidad, a partir de los dos
encuentros inter-generacionales (residentes del Hogar- niños/ jóvenes de los talleres de la
biblioteca) posibilitados por la intersección de las organizaciones implicadas. De esta manera,
se revalorizó la posición del adulto mayor como sujeto que aprende del encuentro con los otros
y que por su trayectoria o experiencia de vida tiene mucho por aportar a las demás
generaciones. Proponer experiencias psicoeducativas que potencien esas posibilidades, se
configuró en un desafío para los profesionales implicados en este tipo de propuestas.
En la jornada de cierre de las actividades del proyecto uno de los residentes del Hogar
expresó: “Esto sí que es algo para recordar”. Dicha expresión nos merece alguna reflexión, la
principal creemos se orienta hacia el paradigma sobre el cual se erigen actualmente ciertas
propuestas educativas para los adultos mayores. Una rápida recorrida por los ámbitos donde
éstos se insertan, permite advertir que se extienden con marcado énfasis, prácticas lineales,
funcionalistas, que conciben a lo educativo como correctivas de déficits y compensadoras de
carencias.
Sáez Carreras (2002) considera que tomar como punto de partida los déficits de las
personas no sólo incide en la naturaleza de las propuestas (talleres de memoria, de atención,
etc.) sino que también inhibe todo intento de convocarlos hacia la participación social y
educativa impidiendo su incorporación a vínculos sociales.
646
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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“Psicopedagogía, Contextos y Aprendizaje”- Rosario Sta. Fé.
Sáez Carreras, J. (2002) La educación die las personas mayores o el combate por restablecer
el pacto intergeneracional En Nuñez, V. (coord.) La educación en tiempos de
incertidumbre: la apuesta de la Pedagogía Social. Barcelona, España: Gedisa Editorial.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Juan, entro por primera vez a mi consultorio muy tímidamente, le costó elegir el
sillón en el que sentarse, Juan es un hombre alto, bastante delgado con poco cabello .y
enormes ojos negros. Los primeros momentos fueron tensos –
_ No sé si podrá,
-Hace dos años comencé a estudiar computación, es un lindo grupo ,con el tiempo fui
teniendo afinidad con algunos, primero tomamos un café en el intervalo, luego alguien
llevo mate y comenzamos lentamente a hacer amistades . María también estaba en el
grupo, vivíamos para el mismo lado así que cuando salíamos caminábamos algunas
cuadras juntas. María vivía sola, y no tenía apuro en volver a su casa. Una tarde nos
agarró la lluvia y entramos a tomar un café por Independencia. Charlamos de tantas
cosas ¡de la vida de la familia de nosotros. Y se nos fue haciendo costumbre. Y así dos
veces por semana luego de la clase teníamos “nuestro cafecito”.
Y ¿por qué vengo acá?, un amigo me dijo que Vd. Me puede ayudar
.En ¿qué?
No voy más a computación pero todas las tardes paso por la casa de María y tomamos un
café, un mate LA NECESITO
Estoy hace años casado con Inés, nunca le hable de María, bueno en realidad no
hablamos ella grita y yo callo. Antes por aburrimiento ahora por miedo.
Hay una familia detrás, el tiempo juntos, la vida, pero María es imprescindible para mí,
hay temas, hay risas, y también alguna vez lloramos juntos. Consulte con mi médico,
tomo una vez cada tanto una pastilla celeste. Me da energía.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La culpa por no poder hablar de algo que le estaba pasando y que era bueno para Juan...
Fue tomando fuerzas, y una tarde hablo con la familia. Nadie comprendió fue “EL VIEJO
VERDE” “EL DESGRACIADO” “LA PORQUERIA QUE ENGAÑA A MAMA”
Hoy María y Juan viven juntos, y muy lentamente va reconstruyendo los lazos con su
familia. Inés falleció hace 1 año rodeada de la familia.
Los personajes
JUAN 76 AÑOS
MARIA 75 AÑOS
INES 70 AÑOS
Desde el análisis de esta viñeta, nos encontramos frente a un nuevo envejecimiento, algo
no pensado hasta estos momentos, La concepción de la vejez la vamos cambiando con el
paso del tiempo y comenzamos con la elaboración de un nuevo abordaje del “ser
sufriente” considerando al viejo como una PERSONA en donde se ponen en juego, el
narcisismo como compensador del cambio de la imagen corporal, y sobre todo la
concepción que el psicólogo clínico tiene del paciente frente al que está.
Hay cambios en la vida cotidiana, las viejas parábolas son eso VIEJAS PARABOLAS
donde debemos re-elaborar constantemente conceptualización que se vayan adecuando
a las nuevas pautas fundantes del análisis. En primera instancia debemos
preguntarnos frente a que persona nos encontramos cual es su historia de vida y hasta
donde existe la capacidad de análisis y comprensión de los cambios fundamentales por
los que todos vamos pasando.
Hoy es igual alguien de 65 o 75 a otro de 85- 90 o más .Han vivido las mismas
experiencia ¿Cómo ha sido su relación con el mundo.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Será de la misma manera que trabajare si el paciente es traído? Por la familia de donde
generalmente proviene la queja, Del médico que da la orden o “sugerencia” o si la
demanda es del mismo paciente.
Muchas veces me he preguntado hasta donde tiene valor el acompañamiento del que es
traído, del que no se pregunta si no me pregunta y para este, ¿tengo la respuesta?
Olvidemos que estamos en el 2014 no hace tanto tiempo atrás en la literatura podemos
encontrar ejemplo de las diferencias jóvenes -viejos
La intuición literaria de Bioy Casares, en los fines de la década del 60, relata en su
novela” Diario de la guerra del cerdo” un enfrentamiento insólito, casi absurdo, de un
grupo de jóvenes contra los viejos de la comunidad en que conviven.
Por la misma época aparece una obra de teatro de carácter siniestro “ La Nona” de
Roberto Cossa, pieza teatral en la que se describe la singular historia de una vieja
monstruosa que engulle todo lo que encuentra a su alcance angustiando con su voracidad
a todos los seres que la rodean.
Y en Esperando la Carroza de Jacobo Langsner como típico grotesco argentino aparece
la figura de la vieja como conflicto entre los que ansían su muerte y el pertinaz deseo de
ella por vivir.
Las tres obras tuvieron su versión cinematográfica y buena repercusión del público señal
de que algo del orden de la catarsis colectiva estuvo funcionando en ellas.
Una necesidad de proyectar en la ancianidad como entidad casi del orden de lo intangible,
las angustias que provocan la idea de la finitud y muerte tanto real como simbólica.
Hoy, no tanto tiempo después no es esta la visión que el mundo tiene de los viejos pero lo
mas importante esa NO es la perspectiva que los viejos tienen de los viejos
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VI Congreso Marplatense de Psicología
múltiples marcas descoloridas que indicaban que algunos cuadros o muebles habían sido
mudados de lugar con el correr de los años.
Con todo y enfrentando la insistencia de todos, mi abuelo se rehusó a dar su aprobación
al proyecto, con un argumento imbatible: para él, esas marcas no
eran manchas, sino recuerdos; él podía identificar qué era lo que había estado en cuál
lugar, evocar diálogos con su compañera (mi abuela muerta diez años atrás) que habían
llevado a esas decisiones, e inclusive evocar acontecimientos relacionados con las
manchas de humedad y rajaduras. Para él, repintar la casa tendría el efecto de robarle
todos esos recuerdos. Ya podrían pintar la casa a gusto cuando él muriera, pero no antes,
arguyó. Sus deseos fueron respetados,
Y cuando murió a los 99 años, lo hizo rodeado no sólo del cariño de su familia, sino de los
recuerdos anclados en las manchas de la pared.
Volvamos al consultorio, volvamos a la clínica, ¿cuál será nuestro rol? volvamos al caso
clínico
No. Una persona vieja mantiene derecho a elegir su modo de vida, el derecho de
encontrar el disfrute donde lo halle y sobre todo donde pueda ser y mantiene su derecho a
elegir su modo de vida, el derecho de ubicar el disfrute donde lo encuentre y sobre todo
donde pueda ser EL-- .PERSONA SUJETO DE DESEO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
El paradigma del curso vital (Baltes, 1983; Baltes, Linderberger & Staudinger,
1998; Schlossberg, 1981) aborda el desarrollo humano a lo largo del curso de vida
completo y nos permite considerar al envejecimiento como un proceso dinámico y
complejo del desarrollo de una persona en relación con su contexto a medida que
construye su curso de vida (Lombardo & Krzemien, 2008). Dentro de esta perspectiva
el envejecimiento puede definirse como un proceso progresivo, natural y lento de
transformación, que afecta a los seres vivos desde su nacimiento hasta su muerte.
Este enfoque resalta que el itinerario o camino personal de vida, en parte debido a
circunstancias externas y en parte elegido por la persona, contribuyen a determinar la
vejez de cada cual (Buendía, 1994). Es una perspectiva u orientación de abordaje del
desarrollo humano a lo largo del curso de vida completo: desde la concepción hasta la
muerte.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
virtudes de las personas y desarrolla herramientas para potenciarlas con el fin de lograr
un funcionamiento psíquico óptimo. Seligman, Parks y Steen (2004) afirman que las
investigaciones centradas en la patología brindan un conocimiento que es transferible sólo
al 30% de la población, mientras que los hallazgos desde el enfoque salugénico
benefician a toda la sociedad.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El rol del coordinador de los talleres puede ser pensado como como un facilitador
en la producción conjunta de conocimientos, y no como un docente emisor de un saber
pre-establecido. De acuerdo con Yuni y Urbano (2005), la clave de su accionar es la de
ser un operador de la trasposición didáctica, mediar el saber académico para convertirlo
en saber enseñado y recuperarlo resignificado desde la vivencia y experiencia de los
participantes, fomentando la reflexividad a través de diversos medios, recursos, y
elementos conceptuales que lo faciliten. La metodología debe ser flexible y diversa, y
sobre todo ser significativa, es decir, que esté conectada con las experiencias, intereses y
aprendizajes previos de las personas mayores (Rojas, 2012). Por último, otro elemento
fundamental es la formación profesional y especializada de quienes tiene a cargo las
tareas formativas con adultos mayores, atendiendo a las particularidades que presenta
este grupo etario y a la variabilidad de personalidades, experiencias, capacidades y
habilidades existentes entre los adultos mayores (Yuni & Urbano, 2008).
Una investigación reciente y desarrollada a nivel local (Dottori, 2013) analizó el impacto de
dichos dispositivos en los adultos mayores obteniendo resultados favorables en gran
variedad de áreas. Los hallazgos más relevantes indican que la mayoría de las personas
que han participado de la investigación referencian múltiples y variados cambios positivos
en el área social y psicológica. Asimismo, no se han encontrado diferencias según género
ya que tanto hombres como mujeres han percibido efectos positivos, y dos tercios de los
entrevistados encuentran que aumentó su bienestar general, entusiasmo, y conocimiento
sobre la vejez. Más de la mitad percibe que mejora su capacidad intelectual, estado de
ánimo y autovaloración. Finalmente, dentro del área social, se destacan: la cantidad de
actividades que realiza, interés, voluntad y eficacia. Perciben, a su vez, un aumento en su
participación social, sobre todo en relación al número de encuentros con amistades.
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generativa, por ejemplo a través de programas de formación, así como también favorece
la percepción del propio envejecimiento como satisfactorio (Villar, 2012).
Así, los adultos mayores dejan de ser usuarios de un dispositivo para ser
protagonistas y gestores de los mismos. El impacto social de esta situación deviene en la
creación de espacios como clubes o asociaciones de jubilados. Se lo considera una de las
formas principales de participación social, debido a que se trata de un tipo de movimiento
que permite la unión de personas en torno a múltiples fines, en función de los intereses
grupales (IMSERSO, 2008). El desafío profesional es pasar de un rol docente a participar
como facilitador de prácticas autogestivas, con el objetivo de promover mayor autonomía
en el desarrollo de conductas generativas y la creación de espacios para su despliegue.
PRESENTACIÓN DE TALLERES
Los talleres se desarrollaron dentro del marco del convenio UPAMI. La duración de
los mismos fue de cuatro meses, con encuentros semanales de 2 horas de duración. Los
grupos tienen entre 10 y 20 participantes con dos docentes al frente del grupo. Se cuenta
con recursos como cañón proyector, parlantes y fotocopias de materiales teóricos y
prácticos.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONSIDERACIONES FINALES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
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lecturas del envejecimiento desde la identidad narrativa (Iacub, 2011), entre otros,
muestran claros ejemplos de nuevas conceptualizaciones que piensan al proceso de
envejecimiento y a la vejez de un modo diferente, considerando las pérdidas, pero
también las ganancias de cada etapa de la vida, las amplias variabilidades existentes en
la vejez y las potencialidades presentes en los adultos mayores. Asimismo, el cambio
producido acerca de la concepción del desarrollo ha tenido importantes efectos tanto en lo
referido a la visión de la vejez y el envejecimiento como en las posibilidad de desarrollar
nuevos dispositivos que promuevan el aprendizaje, el crecimiento, el fortalecimiento de
diversos potenciales de los que disponen los adultos mayores aún en etapas muy
avanzadas de sus vidas
Este nuevo enfoque teórico y los hallazgos de investigación como los
anteriormente referidos, dan cuenta de los múltiples recursos y potencialidades de las
personas mayores y amplían las posibilidades de diseñar estrategias de intervención,
orientadas tanto al tratamiento y asistencia como a la prevención y promoción de la salud.
Más allá de los objetivos concretos de cada una de ellas, contribuirán de uno u otro modo
a un envejecimiento positivo y competente así como a mejorar la calidad de vida de las
personas mayores.
La tarea de diseñar estrategias y técnicas de intervención que se orienten a
potenciar las capacidades, recursos y potencialidades de las personas, grupos y
comunidades es uno de los desafíos del futuro de la Psicología (Vera Poseck, 2006).
Según Vecina Jimenez (2006) la exploración de las posibilidades de estrategias desde lo
positivo constituye algo sugerente para la investigación y muy probablemente resulte útil
para mejorar la eficacia de los tratamientos.
El trabajo orientado a prevenir y fomentar el desarrollo o fortalecimiento de
competencias, la implementación de estrategias que promuevan capacidades, optimicen
y liberen potencialidades (Fernandez Ballesteros, 2009) así como la propuesta de
actividades interesantes y significativas que motiven el aprendizaje son algunas líneas a
desarrollar en el corto plazo en el trabajo con personas mayores. En este sentido y desde
una perspectiva orientada a promover el desarrollo del potencial humano a lo largo de
toda la vida, a continuación se presentan algunos talleres que han sido especialmente
diseñados para el trabajo de aspectos positivos en la vejez.
Siguiendo esta línea se han desarrollado diversos dispositivos que desde la
perspectiva positiva se han orientado a promover el bienestar en las personas. Estos
dispositivos incluyen desde prácticas en ámbitos clínicos, que en lugar de apuntar a
disminuir el daño, la patología o el sufrimiento se han enfocado específicamente en
potenciar lo positivo, hasta múltiples propuestas (talleres, cursos, actividades, etc) que
desde esta misma perspectiva apuntan a optimizar, potenciar los recursos y promover el
desarrollo y el empoderamiento.
CONCLUSIONES
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCION
PRESENTACION
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Gabriela A. le brinda cuidados a sus dos progenitores, así como se ocupa de las
tareas propias de la administración de su hogar en consenso con su madre. Esta casada y
no convive con sus padres.
De una relación histórica con ellos estimada como saludable, fluida y presente, el
incremento en su necesidad de cuidados ha generado una comunicación presencial y
telefónica diaria que, en ocasiones, le cuesta sostener por lo que percibe como una perdida
en el manejo de su vida.
Con un carácter sólido y una fortaleza yoica acorde presenta, en relación a la actualidad de
sus padres, oscilaciones en su estado de ánimo esperables complejizadas con una falta de
registro del propio cansancio y el propio cuidado. No obstante refuerza y reafirma su
voluntad de cuidarlos sin dificultad, más ante el temor de que su madre “se agote y quiera
internar a papá”.
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Al ingreso de José al Centro de Día, la dinámica familiar atravesaba una crisis ante el
agotamiento de Susana por los cuidados que requería su esposo. Agotamiento que era
acompañado por un estado anímico negativo reactivo a las dificultades de adaptación a su
situación.
Transcurridos unos meses, donde la participación de José A. no registraba ningúna
situación significativa, se realizó entrevista a demanda de la familia provocada por un
episodio (caída de José) que planteaba la dificultad de sostenerlo en el hogar y la
consecuente creencia de la necesidad de su internación.
En la misma se describió la realidad cognitiva de José A, se barajaron alternativas de
su prospectiva. Al mismo tiempo, se intentó despejar las propias sensaciones de Susana y
Gabriela respecto de lo que le sucedía a José, de la situación de José, sugiriendo,
finalmente, la necesidad de brindarse cuidados y sostén para poder desarrollar la tarea de
cuidarlo.
Como resultado de la misma, se planificó un abordaje familiar sobre la situación,
cuyo objetivo principal es el sostén y supervisión del Sistema de Cuidados de José, el cuál
pretende la continuidad en su domicilio y evitar/retrasar su institucionalización. Y, como
objetivo subsidiario, incluir la necesidad de Cuidado de sus Cuidadores.
Estando tanto José como Susana con prestación médica adecuada, se estimó
necesaria la inclusión de Cuidadores Domiciliarios. En primera instancia uno por la mañana,
que le brinda acompañamiento y asesoramiento en todas las actividades de la vida diaria
Susana. En segunda instancia, uno por la tarde/noche, que asiste en la higiene y provee
acciones preventivas de accidentes.
En los espacios familiares, se trabajó psicoterapéuticamente en la elaboración
subjetiva de la situación actual, así como los significados sobre la propia vejez y el
reconocimiento de las emociones y sensaciones generadas en el cuidado a José. A su vez
se abordó psicoeducativamente la descripción de las características y limitaciones de su
deterioro cognitivo, y su prospectiva de cuidados.
Actualmente dos años después, la pareja continúa conviviendo en su hogar. José A.
participa del Centro de Día y está estable en su Deterioro Cognitivo. Susana F. afirma la
voluntad de cuidar a su marido en su casa. Y Gabriela A. asiste y acompaña a sus padres a
diario de buen grado.
PRESTACIONES PSICOLOGICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSION
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Bonifacio, A. y Jaskilevich. (2011) Módulo sobre Deterioro Cognitivo Ficha Inédita Buenos
Aires.
Iacub, R.; Sabatini, B. (2012). Psicología de la mediana edad y vejez (3ra. ed). Mar del
Plata, UNMdP/Ministerio de Desarrollo Social. 100 p. [ISBN: 978-987-544-222-1]
Roqué, M.; Fassio, A. (2012). Gerontología comunitaria e institucional (3da ed.). Mar del
Plata, UNMdP/Ministerio de Desarrollo Social. 145 p. [ISBN: 978-987-544-224-5]
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PROBLEMA
Que el término libertad no alcanza a constituirse como un concepto propio del psicoanálisis, es
una aseveración que se suele compartir. Que el psicoanálisis ofrezca una concepción unificada de la
libertad, es muy difícilmente consensuable. En efecto, un rápido paneo por los autores más
destacados al respecto ofrece un panorama desalentador: no sólo no hay consenso respecto de qué
es la libertad en psicoanálisis, sino que más bien se constata que se han ocupado poco, muy poco,
del mismo. Escasas referencias que, las más de las veces, eluden responder a la pregunta sobre qué
puede significar el término libertad en psicoanálisis. Ausencia que quizás debamos considerar
síntoma. No obstante, se lo emplea, siempre más o menos ambiguamente ubicado en el sitial de un
ideal a alcanzar en la cura y adornado con alguna mención a la ética del psicoanálisis, la cual -casi
como palabra mágica u oracular- garantiza que creamos “comprender” qué nos decimos cuando la
mencionamos. Son esos momentos en que la transmisión del psicoanálisis muestra su faceta
resistencial.
No obstante, el término insiste pues está presente en las obras de Freud, de Winnicott, de
Lacan, entre otros. ¿Por qué? A mi modo de ver, su insistencia se debe a que cuestiones del orden de
la práctica y la experiencia del psicoanálisis lo plantean, muy pocas veces explícitamente, muchas
otras lo rozan o aluden a él. El tema es extenso y listar los inconvenientes que involucra sería aquí
excesivo.
Tal insistencia, entonces, a pesar del acuerdo indicado, nos plantea la dificultad de aceptar
que en psicoanálisis nunca podremos ofrecer una concepción unificada de qué entendemos por
libertad, aunque no podremos extirparla de nuestro vocabulario ni soslayarla en nuestras reflexiones,
sobre todo cada vez que la ética, la decisión y la responsabilidad se plantean. Quizás tengamos que
aceptar que nos hemos propuesto una tarea imposible: dar un “concepto psicoanalítico de libertad”.
Oximorón, pues pretender apresar la libertad con conceptos es desnaturalizar su inherente oscuridad.
Aceptemos entonces que no habrá concepto de libertad, por una razón fundamental: porque todo
concepto cae -y no podría ser de otro modo- en las redes del pensamiento positivo. Pero aceptemos
también que, irremediablemente, por esto, aquello o lo otro, seremos llevados hasta ella, con sus
paradojas, sus encierros, sus impasses. De una u otra manera, la libertad nos interpela.
Su insistencia, decíamos, y la imposibilidad de su definición unívoca nos lleva a considerar
mas bien su multiplicidad: un conjunto de variadas referencias que, sin llegar a constituir un sistema,
pueden distinguirse de posiciones que se han tomado desde otros discursos, como la ciencia -en sus
diversas versiones-, la filosofía -en sus casi infinitas escuelas-, la religión -con todas sus variantes-, la
magia -desde el chamanismo en adelante-.
En efecto, tanto en la obra de S. Freud como en la de J. Lacan, la libertad no es un tema de
elaboración sistemático ni permanente. Esta ausencia se convierte en un obstáculo en el punto en
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que no es factible aseverar -como indicamos- la existencia de una concepción psicoanalítica sobre la
libertad en las obras de los autores referidos. Pero es justamente semejante escollo el que se
convierte en objeto y, partiendo de esas múltiples y dispersas referencias aisladas, se trata de
reunirlas, con la exigencia de identificar con precisión sus variaciones, sus matices, y sus
consecuencias.
El problema mencionado no ha impedido ciertos avances en la empresa de cercar una libertad para el
psicoanálisis. Intentos vacilantes, que no han hecho más que apresarla didácticamente a partir de
truismos, poniéndola del lado de una autodeterminación insólita que termina por confundirla con el
capricho y la arbitrariedad más absoluta. Mencionaremos entonces algunas de las dificultades que
hemos encontrado en las discusiones tradicionales, y que ya han sido objeto de otras publicaciones.i
a) La oposición libertad-determinismo.
El determinismo sería así lo que limita la libertad, entendida como la posibilidad absoluta. Sin
embargo, la libertad podría definirse también, en sentido inverso, como una desviación del
determinismo -siendo este lo absoluto y la libertad aquello que transcurre en su margen-. El dilema: o
libertad absoluta y determinismo relativo, o predeterminación absoluta y dentro de ella una relativa
libertad, como tal es indecidible, debido a que la afirmación de uno u otro de los términos como
absoluto o relativo es ante todo un acto de creencia anterior y previo a todo conocimiento, e incluso
que constituye la condición del conocimiento mismo.
Discusión engorrosa que pone a la libertad como la posibilidad electiva de escapar a la
determinación. A mi modo de ver, la libertad siempre es contra algo pero implica a la vez ligarse a
nuevas condiciones. En cuanto nos liberamos de algo tenemos que ligarnos necesariamente a otro
algo. No es entonces un movimiento único de liberación, la paradoja de la libertad reside en que
anudamiento y desanudamiento son dos operaciones inseparables, cuya lógica no puede desligarse
en psicoanálisis de la noción freudiana de trauma, tomando en consideración su escansión en dos
tiempos ordenados según la lógica del après-coup.
b) Ideales de la libertad.
El uso, y abuso, de la expresión de Lacan “poco de libertad” y “margen de libertad” suele conducir a
una posición romántica en el sentido de plantear la libertad como un ideal al cual acceder. El riego de
situar el ideal como un emblema es el de definir un objetivo prefijado para el recorrido del análisis.
Cuando Lacan redacta su escrito Variantes de la cura-tipo justamente comienza por señalar que
semejante título “constituye un pleonasmo” (Lacan 1955, 311), es decir una redundancia. Y agrega:
“señalándose con una contradicción, no por ello es menos cojo” (ibid.). En efecto, hablar de una cura-
tipo resulta contradictorio con la idea de las variantes. El pleonasmo, por lo tanto, nos lleva a
cuestionar la idea de cura-tipo en psicoanálisis y nos presenta entonces, paradojalmente, la cura-tipo
como variante, dicho de otro modo: no hay sino variantes de la cura. O bien: el tipo de la cura en
psicoanálisis es la variación que impide cerrar una cura-tipo, pues “la rúbrica de las variantes no
quiere decir ni la adaptación de la cura, sobre la base de criterios empíricos ni, digámoslo, clínicos, a
la variedad de los casos, ni la referencia a las variables en que se diferencia el campo del
psicoanálisis, sino una preocupación, puntillosa llegado el caso, de pureza en los medios y los fines,
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VI Congreso Marplatense de Psicología
que deja presagiar un estatuto de mejor ley que la etiqueta aquí presentada” (ibid. 312).
Se aprecia el cariz ético que tiene para Lacan el no propiciar curas-tipo, ni quiera en lo atinente a sus
fines. El problema de la neutralidad analítica se incrusta aquí hastas la médula. Problema sobre el
que Lacan volvió en numerosas oportunidades, ubicándola en una perspectiva ética. Posición de
raigambre freudiana, pues Freud se había mostrado prudente en cuanto a la posible obtención por el
paciente de una satisfacción ulterior, fruto de su renuncia a un placer inmediato. Lacan lo extrema,
llegando a cuestionar el fantasma de un "bien soberano" cuya realización marcaría el fin del análisis.
La libertad no puede tampoco, por tanto, venir a ese lugar. Si así lo hicere, se convertiría en un punto
de llegada, al modo de lo que Michel Foucault define como una ascecis. El análisis entonces sería un
medio para llegar a ser libre. Pero justamente “llegar a ser” es lo que el psicoanálisis tiene para
discutir, en la medida en que el sujeto es el correlato de la pérdida de ser.
Para concluir este punto: ¿Qué es lo que el psicoanálisis tiene para aportar a ambas
discusiones? Incomodidad: el psicoanálisis debe subvertir esas polaridades y transformarlas en otra
cosa porque nos sumerge en los problemas de delimitar un “margen de libertad”. Pues se desliza así
la pendiente que nos lleva hacia una versión de la libertad como el margen posible que ha escapado
a la determinación que gracias a Dios no ha sido implacable, dejándonos -para nuestro consuelo- ese
bordecillo. Versión “consuelo” de la libertad que no conviene al psicoanálisis.
Es preciso entonces aclarar que los términos de la alternativa libertad-determinismo
pertenecen a campos diversos cuya coalescencia conduce a ciertos errores. El determinismo es una
categoría que se aplica a los objetos del mundo, es decir que pertenece al plano del conocimiento de
los objetos; mientras que la libertad no es un objeto del mundo sino que pertenece al campo de la
ética, por lo cual se enrarece el planteo de cuánto hay de libertad y de determinismo pues el mismo
supondría un mismo terreno. En este sentido, la alternativa trata como objeto de conocimiento un
término ético, con su degradación concomitante.
Vale decir que desde la perspectiva del psicoanálisis debemos quebrar la solidez de la díada
determinación-libertad, recurriendo al concepto de sujeto y el problema de la responsabilidad pues,
como hemos ya señaladoii, el sujeto no es ni se hace responsable, sino que la responsabilidad le
viene del Otro, le es imputada, impuesta por la ley. En ese sentido, si incrustamos la responsabilidad
en la libertad resolvemos el problema del margen que resta, pues entonces el sujeto no es libre, ni
deviene libre, ni le prometemos libertad, la libertad le es impuesta por el Otro. Paradoja de la libertad:
una libertad impuesta. La “elección forzada” que plantea Lacan es eso mismo: forzado a elegir. La
libertad, entonces, para el psicoanálisis no podrá ser causa final. La libertad se efectúa en acto
cuando una palabra toma valor de tal.
2. Clínica de la libertad
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- Locuras
Desde los comienzos de la clínica, la pregunta por la libertad del ser humano y los límites o no que la
enfermedad le imponen, ha sido planteada. En su escrito Acerca de la causalidad psíquica Lacan
discute con Henri Ey y le oponer un orden de realidad psíquica que implique la dimensión del sentido,
al orden de realidad física inherente al organicismo. Desde esta perspectiva, la clínica psiquiátrica no
se organiza a partir de la búsqueda de un déficit sino de las significaciones que aporta el paciente.
Así, la causalidad psíquica que sostiene Lacan introduce la dimensión de la subjetividad que la causa
orgánica rechaza. La suposición de un sujeto allí donde el enfermo aporta su significación se hace
entonces posible con este nuevo orden de realidad psíquica. Y junto con la dimensión subjetiva se
plantea el problema de la responsabilidad y la libertad.
En lo tocante a la concepción de la locura, este escrito puede concebirse, en consecuencia,
como su respuesta al empleo que Ey hace del término locura al afirmar que "Las enfermedades son
insultos y trabas a la libertad" (Lacan 1946, 148). Lacan desmantela críticamente esta afirmación
oponiéndole una concepción de la locura ligada a su doctrina de la causalidad psíquica vinculada a su
teoría de la imago del yo, a partir de lo cual relativiza de un modo tan lógico como irónico aquello que
se llama libertad.
En este escrito Lacan relaciona la locura con el ser del hombre y no con una psicopatología: “No
creáis que me extravío, que me aparto de un propósito que debe llevarnos nada menos que al
corazón mismo de la dialéctica del ser: en punto tal sitúase, en efecto, el desconocimiento esencial de
la locura” (ibídem, 162). Y agrega: “Este desconocimiento se revela en la sublevación merced a la
cual el loco quiere imponer la ley de su corazón a lo que se le presenta como el desorden del mundo,
empresa ‘insensata’ [...] por el hecho de que el sujeto no reconoce en el desorden del mundo la
manifestación misma de su ser actual, y porque lo que experimenta como ley de su corazón no es
más que la imagen invertida, tanto como virtual, de ese mismo ser” (ibídem). El mecanismo que
define a la locura es especificado así: “El momento de virar lo da aquí la mediación o la inmediatez de
la identificación y, para decirlo de una vez, la infatuación del sujeto” (ibídem, 161). Es decir que la
locura dependerá de un rasgo de la identificación: de la mediación o inmediatez de las
identificaciones ideales.
Esta fórmula general de la locura es presentada por Lacan como una “estasis del ser” (ibídem,
162), por oposición al “desarrollo dialéctico del ser humano”, estasis de una identificación ideal,
fijación, detención de la dialéctica del ser, en una identificación sin mediación, identificación plena a
partir de la cual el sujeto se cree ser lo que es. Pero esa identificación “cuyo carácter sin mediación e
‘infatuado’ he deseado ahora mismo hacer sentir, se demuestra como la relación del ser con lo mejor
que este tiene, ya que el ideal representa en él su libertad” (ibídem). Es decir que la realización plena
de la identificación del sujeto con el ideal sin la mediación del Otro, le da al ser la ilusión de la libertad:
ser lo que es sin el Otro. Identificación al Ideal sin referencia al Otro, libre de las ataduras del Otro
que, dialécticamente, hacen del sujeto un sujeto dividido. Pero para Lacan la libertad del loco es un
engaño pues no es un punto de libertad sino de esclavitud: “Lo que ocurre es que el juego de mi títere
dirá mejor a cada cual el riesgo que lo tienta cada vez que se trata de la libertad” (ibídem, 166). Se
advierte lo sarcástico de recurrir a una figura de títere para representar al hombre libre, figura satírica,
bufonezca, en tanto depende de quien mueva los hilos que lo agitan, aunque lo desconozca.
Locura y libertad se articulan entonces de un modo muy preciso: “Lejos de ser ‘un insulto’ para
la libertad, es su más fiel compañera; sigue como una sombra su movimiento. Y al ser del hombre no
sólo no se lo puede comprender sin la locura, sino que ni aun sería el ser del hombre si no llevara en
673
VI Congreso Marplatense de Psicología
sí la locura como límite de su libertad” (ibídem). Así Lacan establece una relación indisoluble aunque
paradójica entre locura y libertad. Lejos de ser un insulto -posición de Ey-, la locura es inherente a la
libertad, dicho de otro modo: sólo es posible considerarse libre siendo loco, es decir títere del Ideal.
La locura es creerse libre, vale decir: sin relación al Otro, cuando en verdad se está amarrado al
Ideal, que es -como el matema lacaniano destaca- un elemento del Otro: I(A).
Que la locura es la más fiel compañera de la libertad no es entonces solo la inversión de la
fórmula de Ey, sino que implica una posición ética insoslayable para el psicoanálisis: la locura no
puede concebirse sin una insondable decisión del ser, a la vez que se refiere a la necesariedad del
“inasible consentimiento de la libertad”. La locura como límite de la libertad debe entenderse no como
el límite que la locura le impone a la libertad que sin la primera sería ilimitada, sino que, por el
contrario, es la locura misma la que lleva la posibilidad de la libertad a su punto límite.
- Psicosis
Locura, libertad y psicosis hallan un sugestivo punto de encuentro en ocasión del discurso que Lacan
ofrece a los psiquiatras, denominado “pequeño”, donde dice: "El loco es el hombre libre" (Lacan 1967,
inédito). En esta oportunidad locura y libertad vuelven a anudarse. Pero debemos leer allí que locura
es sinónimo de psicosis. En efecto, en esta conferencia Lacan recurre a distinguir neurosis y psicosis
a partir de sus posiciones contrapuestas respecto de la relación del sujeto con el objeto a. Les enseña
a los psiquiatras que el psicótico está libre de la demanda del Otro a la que "el normal", el neurótico -
en este caso-, se ve compelido. Es el principio de la transferencia: como el neurótico ha perdido el
objeto, tiende a suponer que lo hallará en el campo del Otro y por ello va a demandárselo. Como en
la psicosis se trata de otra relación del sujeto con el a, pues el loco tiene el objeto “en su bolsillo”
(ibídem), él es libre, libre de la demanda, libre del Otro, a quien no tiene nada que pedirle. El psicótico
está loco en este punto: no pasa por el Otro -locura definida en nuestra relectura del escrito de 1946-
en su relación con el objeto. Si lo que la tesis de la forclusión del significante del Nombre-del-Padre
dice -entre varias otras- es que el psicótico no ha hecho lugar a cierta dimensión del padre que
impone un límite al goce, y eso implica un rechazo del inconsciente y, en ese sentido, un fuera de
discurso, eso ubica al sujeto de la psicosis fuera del lazo social (que todo discurso constituye). Es de
estas ataduras que el loco se libera, se encuentra libre de estos lazos por “liberarse” a su vez de la
función de punto de almohadillado del significante paterno. Lo paradojal de la libertad aquí se
presenta en la medida en que el psicótico se encuentra libre de la demanda pero eso es lo que lo
“ata” a una relación al significante, el significante impuesto, del que le resulta imposible escapar, así
como la relación a un Otro intratable, que lo goza ilimitadamente. La paradójica “dependencia” del
Otro al que se le dirige en su demanda el neurótico, es lo que le permite liberarse del padecimiento de
la falta de objeto del deseo que por ese medio intentó remediar, ligándose al Otro como condición de
posibilidad para una relación diversa al deseo como deseo del Otro.
- Manía
Lacan se refiere en El Seminario 10 a la excitación maníaca. El término excitación expresa con
enorme justeza que hay algo del registro vital del cuerpo y del hablanteser en cuanto ser vivo en ese
síntoma pero sin regulación. Ello implica que una energía sin regulador es siempre excitación
desenfrenada. Esa es una figura de cómo podemos leer la libertad en la excitación maníaca.
Dice Lacan que se trata de “la no-función de a” (Lacan 1962-63, 363) y ya no simplemente de su
desconocimiento bajo la cobertura imaginaria de i(a). Siguiendo la comparación que hace con la
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VI Congreso Marplatense de Psicología
melancolía podríamos decirlo así: en la manía se trata del triunfo pero ya no del objeto sino sobre el
objeto. Lo cual arroja al sujeto “a la metonimia infinita y lúdica, pura, de la cadena significante” (ibid.).
Es decir, el sujeto liberado al juego loco de la cadena significante. El a no opera y se ve entonces
privilegiada la consistencia del i(a).
¿Qué implica para Lacan que el a no funcione? “algo que confiere a la referencia al a su carácter de
básica, radical, más arraigante para el sujeto que cualquier otra relación, pero también de
fundamentalmente desconocida, alienada, en la relación narcisista” (ibid.). La función arraigante del
sujeto por parte del objeto, el punto de anclaje que el a introduce para el sujeto en la deriva de la
cadena significante, cuando no opera como tal, lo lanza a la infinidad metonímica del significante que
remite sin cesar a otro significante y tras él a otro y otro, ausencia de detención metafórica que en la
manía se traduce en un hacer ilimitado pues “el sujeto ya no es lastrado por ningún a” (ibid.) [el
destacado es mío]. El término francés empleado es “lesté”, participio pasado del infinitivo “lester”,
“lastrar”. La Real Academia da tres acepciones: 1- “poner lastre a la embarcación”; 2- “afirmar una
cosa cargándola de peso”; y 3- “comer, por lo común vorazmente. Los adolescentes no comen,
lastran”.
Podemos entender esta afirmación de Lacan, según las dos primeras acepciones, en el
sentido de que cuando el a no funciona, no opera en tanto lastre (piedra u otro objeto de peso que se
pone en el fondo de la embarcación, a fin de que esta entre en el agua hasta donde convenga), no fija
al sujeto que queda entonces “metonimizado” en la cadena significante sin anclaje, sin punto de
afirmación. Es un sujeto desamarrado de la cadena, disperso en la fuga de sus ideas. Es lo que la
psiquiatría tan bien describe en estos casos: el enfermo invadido por una sucesión incesante de
ideas, pasando de una a otra rápidamente sin poder detenerse en ninguna. Pero también la tercera
acepción nos permite reconocer en esa cita algo que nos evoca la afirmación de Freud cuando en
Duelo y melancolía nos dice que el yo vencedor “parte, voraz, a la búsqueda de nuevas investiduras
de objeto” (Freud 1917, 252). Cuando el sujeto -elemento simbólico que como tal se desplaza
permanentemente- no está detenido por el peso del a, se ve arrojado a lastrar, a “comer vorazmente”
en una metonimia irrefrenable: de allí que se presente como un estado de exaltación, una liberación
enloquecida, que aparentemente lleva al enfermo a interesarse por todo lo que hay a su alrededor,
aunque sin poder detenerse en nada en particular. Por eso Lacan recurre en esa misma clase a la
estructura del fantasma -($ ◊ a)- para articularlo. La no-función de a debe entenderse entonces no
como su no operación, sino como el entorpecimiento de su función real.
Lo paradojal de su posición es que esa libertad que se presenta como absoluta entraña en
verdad como consecuencia el peor de los efectos: un hacer ilimitado sin ninguna orientación. La
ausencia de regulación que conlleva la no-función de a, ausencia de lastre que fije, que limite, se
traduce en la no operatoria del deseo como regulador, que es el vector por excelencia del
pensamiento y la acción. Esa aparente absoluta libertad es en verdad la imposibilidad más absoluta
de decidir cualquier acción en libertad. Dicho de otro modo, el lastre o función de límite que implica la
operatoria del a es “liberadora”.
- Pasaje al acto
El concepto de pasaje al acto que Lacan inventa en su enseñanza tiene coordenadas muy precisas:
lo inscribe en la matriz de la angustia en el Seminario 10 y lo vincula con la estructura del fantasma,
entendido como respuesta al deseo enigmático del Otro. De este modo, subvierte su concepción
original en dos sentidos. Primero, porque lo articula con la noción de sujeto en psicoanálisis.
675
VI Congreso Marplatense de Psicología
Segundo, porque lo extrae de la referencia psiquiátrica más clásica que solía restringirlo al campo de
las psicosis y de la delincuencia. En efecto, se trata de un término empleado por la psiquiatría
francesa y que vía esta operación de despsiquiatrización Lacan eleva a la categoría de concepto en
psicoanálisis despegándolo de sus connotaciones delincuenciales y criminológicas.
La consecuencia clínica más notable de esta operación es que el pasaje al acto deviene un concepto
clínico que se puede aplicar a una enormidad de acciones humanas que sería imposible reunir y
ordenar en una clasificación, de modo que pueden considerarse tales muchos fenómenos comunes y
corrientes, incluso cotidianos, que en el marco de la criminología quedaban fuera. A pesar de su
inabordable variedad, entonces, una estructura común los enlaza: el rasgo distintivo que los
caracteriza aún en su variedad es el de la ruptura, el quiebre, el corte de una escena: la del fantasma.
En el mismo seminario Lacan aplica esta concepción a dos casos freudianos, Dora y la joven
homosexual: “En el caso de homosexualidad femenina, mientras que la tentativa de suicidio es un
pasaje al acto, toda la aventura con la dama de dudosa reputación […] es un acting out. Mientras que
la bofetada de Dora es un pasaje al acto, todo su comportamiento paradójico con la pareja de los K.
[…] es un acting out” (Ibid., 136). Es decir que el pasaje al acto se especifica por ser una salida, el
quiebre de la escena consagrada al Otro. En este sentido el pasaje al acto es un portazo al Otro,
mientras que el acting out lo convoca, el pasaje al acto es un NO! proferido al Otro bajo la forma de la
caída de la escena. De allí que Lacan lo deduzca del término freudiano niederkommen, dejar caer,
donde se verifica la ruptura de un equilibrio, y el intento de solucionar una coyuntura imposible de
tolerar para el sujeto.
En este sentido, el problema clínico que el pasaje al acto comporta es el de la libertad, la
liberación del Otro. Pero es una libertad distinta a la de la psicosis, que prescinde de la demanda. La
libertad del pasaje al acto es un rechazo del Otro que comporta caída del Otro en los dos sentidos
que admite el genitivo: el sujeto caído del Otro, liberado de los lazos con el Otro, y a la vez el Otro
destituido, caído de su función. Sin embargo, es una libertad que lo apresa en tanto lo deja en la
posición de resto caído del deseo del Otro, del que la maniobra transferencial deberá rescatarlo para
volver a ligarlo al deseo como deseo del Otro, como única relación a partir de la cual será posible
pasar al... acto -entendiendo por tal: un corte, un antes y un después, que tiene lugar y surge a partir
de un decir, corte ligado con la temporalidad del instante en el que ocurre la transformación del sujeto,
acto que implica una inscripción, lo que quiere decir que no es sin Otro, aunque vaya más allá de él
(cf. el ejemplo de César cruzando el Rubicón)-. El Otro ineludiblemente liga pero a la vez acompaña
la dimensión del acto ya que si no está ese límite trazado, no se le puede replantear y si esto no se
da, tampoco el acto.
- Acting out
En El seminario 10 Lacan plantea que “Todo lo que es acting out debe oponerse al pasaje al acto”
(Ibid. 135). Si el pasaje al acto es la caída del sujeto, la extrema barradura del sujeto en el fantasma y
ruptura de la escena, el acting out implica un sostenimiento de la escena, que Lacan ubica en un
contexto de palabra, es decir que implica a un Otro al que se da a ver, y en tal sentido le exige
respuesta, es decir le demanda.
Es en estos términos que Lacan señala el poder correctivo del acting out en el sentido de que
la intervención analítica se extravió al ubicar en el plano de la realidad, del registro imaginario, de las
significaciones, lo que habría que haberse escuchado, leído desde el registro simbólico. Reclama al
Otro, por este abordaje en el seno de la realidad, por la no operatividad simbólica que dejaría como
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VI Congreso Marplatense de Psicología
resto al objeto a, que en tanto caído, causa el deseo. Este “deseo desconocido” en su causa, el
objeto a, es lo que se recubre imaginariamente y se da a ver.
Dice Lacan: “El acting out es esencialmente la demostración, la mostración, sin duda velada,
pero no velada en sí. Sólo está velada para nosotros, como sujetos del acting out, en la medida en
que eso habla, en la medida en que eso podría hacer verdad. Si no, por el contrario, es visible al
máximo, y por ese mismo motivo, en un determinado registro es invisible, al mostrar su causa. Lo
esencial de lo que es mostrado es aquel resto, su caída, lo que cae en el asunto” (Ibid. 139). Y es ello
lo que se libera, lo que cae. El sujeto del acting out está liberado del a. Liberación que
paradójicamente lo saca de la escena analítica y lo obliga a la compulsión de un hacer del que no
puede dar cuenta, en una escena que no lo representa, sino que le presentifica el desconocimiento
del lugar de objeto a como causa del deseo. Transferencia salvaje, transferencia sin análisis, dirá
Lacan, transferencia liberada de análisis, en tanto se le demanda una interpretación, que desde ese
lugar transferencial, no es posible.
- Síntoma neurótico
“El síntoma, en su naturaleza, es goce” (Ibid.), dice Lacan en El Seminario 10, y agrega: “no los
necesita a ustedes, como el acting out” (Ibid.) que llama a la interpretación. El síntoma está libre del
Otro, no requiere del Otro para constituirse, se basta a sí mismo, es decir que prescinde del Otro en
cuanto a su satisfacción, y por esa razón no es interpretable. Devendrá interpretable a condición de
que se instale la transferencia pero eso ya no es “su naturaleza” como dice Lacan sino que algo
antinatural se introduce para que ese satisfacción libre del Otro, requiera de él. Para luego,
paradójicamente, demandarle que lo libere de él. Tal como sucede con el Hombre de las ratas que
tras la negativa de Freud de extenderle el certificado por medio del que realizaría el delirante pase de
manos de las 3,80 coronas adeudadas, “sólo pidió ser liberado de sus representacines obsesivas”.
Podríamos decir que lo que hace que un síntoma se convierta en analítico es el reconocimiento, por
parte de quien lo padece, de la pérdida de libertad, paradójicamente la pérdida de la libertad del Otro
que es lo que es el síntoma en su naturaleza.
Este pequeño recorrido nos permite concluir que plantear la problemática de la libertad en
psicoanálisis no es del orden de una abstracción -aunque la merezca para no banalizarse cayendo en
definiciones truistas-, que no es una temática meramente filosófica -aunque sea un excelente recurso
argumentativo para plantear sus paradojas y dificultades-, sino que toca la práctica y la experiencia
del análisis. La libertad afectada en todos y cada uno de aquellos que se nos dirigen, de uno u otro
modo, ya sea por exceso o por defecto, por sus estrictos límites o por su infinitud, ya sea como queja
o como demanda, o como ruidoso silencio, siempre atañe de uno u otro modo a nuestro “asunto”, ese
“sujeto” que le da sentido a nuestra práctica.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
FREUD, S. (1917): “Duelo y melancolía”. En Obras Completas, Bs. As., Amorrortu Editores, Tomo XIV,
pp. 235-255.
- (1921): “Psicología de las masas y análisis del yo”. En O. C., op. cit., Tomo XVIII, pp. 63-136.
- (1923): “El yo y el ello”. En O. C., op. cit., Tomo XIX, pp. 1-66.
- (1924a): “Neurosis y psicosis”. En O. C., op. cit., Tomo XIX, pp. 151-159.
677
VI Congreso Marplatense de Psicología
- (1924b): “La pérdida de realidad en la neurosis y la psicosis”. En O. C., op. cit., Tomo XIX, pp. 189-
197.
- (1927): “El humor”. En O. C., op. cit., Tomo XXI, pp. 153-162.
LACAN, J. (1946/2002): “Acerca de la causalidad psíquica”. En Escritos 1, México, Siglo XXI, 2008
(Ed. revisada), pp. 151-190.
- (1955-56/1984): El seminario. Libro 3: “Las psicosis”, Bs. As., Paidós, 1995.
- (1957-58/1999): El seminario. Libro 5: “Las formaciones del inconsciente”, Barcelona, Paidós.
- (1962-63/2006): El seminario. Libro 10: “La angustia”, Bs. As., Paidós.
- (1964/1973): El seminario. Libro 11: “Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis”, Bs. As.,
Paidós, 1995.
- (1967): “Breve Discurso a los psiquiatras”, inédito.
MUÑOZ, P.: “El concepto de locura en la obra de Jacques Lacan”. En Anuario de Investigaciones, Nº
XV, Buenos Aires, Universidad de Buenos Aires, Facultad de Psicología, Secretaría de
Investigaciones, pp. 87-98.
- (2008): “De locuras, encadenamientos y desencadenamientos”. En Revista ANCLA. Psicoanálisis y
Psicopatología (Revista de la Cátedra II de Psicopatología de la Facultad de Psicología de la
Universidad de Buenos Aires), Nº 2, Buenos Aires, Ancla Ediciones, pp. 97-123.
- (2009): La invención lacaniana del pasaje al acto. De la psiquiatría al psicoanálisis, Bs. As.
Manantial.
Cf. 1) Muñoz, P. (2014): "Problemáticas de la causa en psicoanálisis y su incidencia en la concepción del sujeto
como libre o determinado". En Bertorello, A.; Lutereau, L.; Muñoz, P. (Comp.): Conciencia y Objeto / Causa y Sujeto,
Buenos Aires, Letra Viva, en prensa. 2) Muñoz, P. (2013): “Lacan con y contra Sartre. La libertad del deseo / El deseo de
libertad”. En Bertorello, A.; Lutereau, L.; Muñoz, P. (Comp.): Deseo y libertad. Sartre y el psicoanálisis, Buenos Aires,
Letra Viva, pp. 37-52. 3) Muñoz, P. (2012): “Paradojas del sujeto y la libertad en psicoanálisis”. En Anuario de
Investigaciones, Nº XX, Buenos Aires, Ediciones de la Facultad de Psicología, Universidad de Buenos Aires, pp. 131-143.
ii
Muñoz, P. (2011): Las locuras según Lacan. Consecuencias clínicas, éticas y psicopatológicas, Buenos Aires,
Letra Viva, cap. II: “Sujeto y responsabilidad”.
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DESARROLLO
1
Programación UBACyT. Categoría Maestría. Cohorte 2013. Directora: Prof. Gabriela Z. Salomone, enmarcado
en el proyecto de investigación UBACyT (2012 – 2015) Dilemas éticos en la práctica psicológica: el diálogo con
otros discursos disciplinares en contextos institucionales diversos. Estudio exploratorio descriptivo en base a una
investigación cuali-cuantitativa. Directora: Prof. Gabriela Z. Salomone).
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VI Congreso Marplatense de Psicología
LEYES Y DERECHOS
Retomaremos ahora la ley 26.529 sobre los Derechos del Paciente en su Relación
con los Profesionales e Instituciones de la Salud sancionada en 2009. Su espíritu, tal como
sugiere su título, apunta a resguardar los derechos del paciente, quien históricamente había
quedado indefenso frente a quienes portaban el saber científico (ya fueran médicos,
psicólogos, etc.). Es decir, se toma al paciente en tanto sujeto de derecho a quien le
corresponden los derechos de autonomía y autodeterminación, confidencialidad, intimidad,
entre muchos otros. Además, destaca el deber de los profesionales respecto de sus
intervenciones para proteger y garantizar estos derechos, evaluando previamente si el
sujeto está en condiciones subjetivas de ejercerlos4. En consonancia con esta ley, hacia
2
Ley 26.529. Ley de Derechos del Paciente en su Relación con los Profesionales e Instituciones de la Salud.
Sancionada: Octubre 21 de 2009 y Promulgada de Hecho: Noviembre 19 de 2009. Modificada por la ley 26742
promulgada de hecho el 24 de mayo de 2012. Su reglamentación se realizó a través del Decreto N° 1089/2012,
promulgado el 5 de julio de 2012.
3
Al respecto, sugerimos revisar la compilación de códigos deontológicos de los países de nuestra región y otros,
disponible en: www.proyectoetica.org
4
Para ampliar el abordaje conceptual de esta cuestión en relación con el consentimiento informado, sugerimos:
Domínguez, M. E. (2011). Alex: una e-lección posible. En Cuestiones ético-clínicas en series televisivas. Dr.
House, In treatment, Los Soprano, Grey’s Anatomy (pp. 27-43). Buenos Aires: Editorial Dynamo.
680
VI Congreso Marplatense de Psicología
fines de 2010 se sancionó la Ley Nacional de Salud Mental5, ley que acentúa el enfoque de
Derechos para todos los sujetos con padecimiento mental, reintroduciendo así la dignidad
perdida durante años a través de políticas tutelares.
Ya en otros lugares (López, 2012; 2011) hemos situado que a partir del análisis de
ambas leyes, enmarcadas en los estándares internacionales del enfoque de derechos
humanos y de la bioética, sostenemos la hipótesis de que para el ámbito de la salud mental
la historia clínica se torna dilemática en sí misma. Intentaremos desplegar la argumentación
a nuestra hipótesis.
En primer lugar, la norma determina que en este registro escrito se debe asentar
“todo acto médico realizado o indicado”, incluyendo prescripción de medicamentos, estudios,
prácticas, diagnóstico, pronóstico, evolución, etc. Sabiendo que el titular de la historia clínica
es el paciente (quien puede exigir una copia que los profesionales deben entregar dentro de
un plazo de 48 horas) y que incluso -si así lo dispusiera- podría designar a su abogado o un
familiar para acceder a sus historias clínicas6, nos preguntamos: ¿tendrá el mismo peso
simbólico el diagnóstico emitido por un médico cardiólogo que el del médico psiquiatra o el
psicólogo tratante? Suponemos que no. Por una parte, porque los padecimientos mentales
cuentan con una larga tradición de estigmatización en el discurso social y podría resultar
estigmatizante para el paciente, tanto como condicionar la mirada de su entorno hacia él.
Por otra, por las propias fantasías que en los pacientes podría suscitar una categoría
psicopatológica de la que poco saben y que podría impactar negativamente en su
concepción de sí, así como tener consecuencias respecto del vínculo transferencial en virtud
de lo que sus terapeutas han hecho letra escrita.
En el anexo del decreto reglamentario de la ley de Derechos del Paciente se hace
una distinción bien interesante entre lo confidencial y lo íntimo. El respeto de la intimidad de
los pacientes y de la autonomía de su voluntad queda entendida como un deber de los
profesionales en toda actividad “… tendiente a obtener, clasificar, utilizar, administrar,
custodiar y transmitir información y documentación clínica del paciente y en especial
respecto de sus datos sensibles”. Mientras que, acerca de la confidencialidad, legisla que “El
paciente tiene derecho a que todo aquello que llegare a conocimiento de los profesionales
(…), y de quienes manipulen su documentación clínica, no se dé a conocer sin su expresa
autorización, salvo los casos que la ley que se reglamenta u otras leyes así lo determinen, o
que medie disposición judicial en contrario o cuando se trate de evitar un mal mayor con
motivo de salud pública. (…) El deber de confidencialidad es extensivo a toda persona que
acceda a la documentación clínica”.
Para citar un ejemplo, recordamos algunas propuestas de historia clínica que
parecen desconocer este aspecto cuando proponen desglosar ítem por ítem7 aspectos de la
5
Ley 26.657. Ley Nacional de Salud Mental. Sancionada: Noviembre 25 de 2010. Promulgada: Diciembre 2 de
2010.
6
Ley 26657, Capítulo IV, artículo 7°, el apartado g).
7
En el material “Salud y Bienestar de Adolescentes y Jóvenes: una mirada integral” disponible en:
http://publicaciones.ops.org.ar/publicaciones/publicaciones%20virtuales/libroVirtualAdolescentes/pdf/SaludBienes
tarAdolescente.pdf se anexa un modelo de historia clínica para adolescentes propuesta por la OPS / OMS
donde se consignan datos sobre su sexualidad tales como abuso sexual, tipo de abuso, información sobre el
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VI Congreso Marplatense de Psicología
vida íntima de los pacientes, por ejemplo, los referidos a las conductas sexuales. Con la
buena intención de producir una historia clínica que supuestamente facilitaría arribar a los
diagnósticos más ajustados a partir del trabajo interdisciplinario, dejan asentado por escrito
cuestiones que pertenecen a la esfera más íntima de las personas.
Más aún, sabemos que si mediara una causa judicial la historia clínica podría ser
solicitada por un juzgado y anexada a un expediente al que acceden no solo el paciente sino
los abogados y demás personas del aparato judicial, poniendo en riesgo el derecho a la
intimidad, con todas las implicancias subjetivas que esto podría producir. En el código de
ética de la Federación de Psicólogos de la República Argentina se advierte una indicación
bien interesante: si bien los registros están al amparo del secreto profesional, el propio
código deja en manos del “estricto criterio profesional”8 el consignar determinados
elementos –suspendiendo así el deber de secreto profesional- cuando estos sean
“ineludibles” para configurar el informe, a la vez que se insta a adoptar las precauciones
necesarias cuando estos registros puedan trascender a organismos donde no sea posible
asegurar la privacidad. Este criterio profesional, en el sentido de una lectura clínica singular
sostenido en una posición ética es el que permitiría una decisión al momento de la escritura.
IMPLICANCIAS SUBJETIVAS
Si la historia clínica estará en manos del paciente, todo lo que allí se consigne debe
ser evaluado minuciosamente en función de los posibles efectos subjetivos que lo escrito
pudiera ejercer sobre el paciente. Los psicólogos no podemos desconocer las implicancias
subjetivas que los diagnósticos, pronósticos y cualquier otra referencia al ser o al padecer
del paciente potencialmente conllevan. Ubicamos este problema a nivel de lo que, en
investigaciones anteriores, acordamos en llamar “conflicto entre el campo normativo y la
dimensión clínica.” La ley nos exige consignar “todo”, sin embargo, no podemos soslayar las
posibles consecuencias de hacer letra lo que en un tratamiento se desarrolla. ¿Cómo
inscribirá el paciente los rótulos (según las nomenclaturas universales que exige la ley) que
su terapeuta ha sentenciado? ¿Está un paciente en condiciones de interpretar
correctamente lo que allí se consigna? El leer determinados diagnósticos, ¿favorecen u
obturan una posible conmoción de la posición subjetiva? Ineludible será para el
psicoanalista la pregunta por la transferencia en relación con la lectura de este material. Una
vez más, reconocemos aquí que el sujeto al que se refiere la ley, sujeto titular de su historia
clínica, paciente con derechos, no coincide con el sujeto destinatario de la práctica del
psicólogo, sujeto del padecimiento psíquico.
CONFLICTO DE INTERESES
agresor, denuncia, tipo de experiencia sexual, frecuencia coital, nivel de actividad sexual, actividad
masturbatoria, entre muchos otros.
8
Código de Ética Nacional de FePRA, artículo 2.2.
682
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Son múltiples las situaciones de la práctica clínica que nos deberían llevar a
interrogarnos acerca de la decisión y la responsabilidad que conlleva la confección y
evolución de las historias clínicas de nuestros pacientes. Por ejemplo, en las instituciones
son harto frecuentes los pedidos de copia de historia clínica. Una situación que nos fuera
revelada en las entrevistas realizadas involucraba a un paciente con un diagnóstico de
enfermedad mental grave que debido a un ACV quedó severamente invalidado. Su familia
comenzó a tramitar un subsidio de discapacidad para solventar los gastos de sus cuidados,
para lo cual les era requerida una copia de su historia clínica. Quien llevaba adelante el
trámite, en pos del bienestar del paciente, era el hermano del mismo. El dilema para los
profesionales de la institución se suscitaba en virtud de que en la historia clínica estaban
consignados muchos relatos del paciente con relación a este hermano en virtud de lo
trabajado en su terapia, cuestiones muy íntimas que evidentemente el paciente nunca tuvo
la intención de comunicar a su familiar, que necesariamente iban a generar sentimientos en
el familiar que el paciente siempre quiso ahorrar. Otro fue el caso de una mujer que era
paciente de un servicio público de salud mental a quien su hijo inicia un juicio de insania y
solicita la tutela de sus bienes. Luego de un tiempo de entrevistas, llega el pedido de copia
de historia clínica por parte de un juzgado. En la misma se había consignado un diagnóstico
psicopatológico de psicosis. Sin embargo, esta mujer podía valerse por sí misma, cuidar de
sí, no entrañaba ningún tipo de daño para sí ni para terceros y, lo más importante,
9
El destacado es nuestro.
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autovalerse tenía un valor fundamental para ella. En este caso, el psicólogo tratante se vió
compelido a ampliar su informe y aclarar todas estas variantes al juez, para que pudiera
considerarlas. Es decir, por una parte, conceptos psicopatológicos que son con frecuencia
empleados al interior de las disciplinas de la salud mental para orientar el tratamiento
pueden ser leídos desde otros discursos como invalidantes per se, o bien resultar
estigmatizantes para los pacientes.
Por todo lo dicho, concluimos que el criterio profesional debe regir la posición ética
del psicólogo frente a los dilemas que aquellas que surgen a partir de la confección de las
historias clínicas, criterio que se sostendrá tanto en el campo deontológico como en
la dimensión clínica de la ética profesional (Salomone, 2006), siendo este último un
concepto que nos resulta clave para pensar tal posición, es decir, aquella dimensión que
hace lugar a la singularidad del sujeto.
La responsabilidad profesional se pone en juego en la escritura misma de las
historias clínicas que implicará siempre un recorte en que el psicólogo se ve convocado a
asumir una decisión. Para ello, es necesario poner en cuestión su confección como una
mera tarea administrativa y como reaseguro de la buena praxis del profesional. Al respecto,
advertimos que -tanto el manejo de historias clínicas como su confección- generalmente
configuran una práctica naturalizada, que queda ubicada más a modo de requisito a cumplir,
sin atender a las múltiples variables involucradas que surgen del entrecruzamiento de los
discursos médico, jurídico y psicológico.
En otro lugar (López & Salomone, 2014) hemos situado que la lectura clínica supone
anudar, en el acto de lectura, la universalidad de la Ley constitutiva de lo humano, lo
particular de las normas y lo singular del sujeto, es decir, supone introducir la dimensión
singular en el campo de las instituciones. Tal acto de lectura implica hacer lugar al vacío que
habita esa operación, en el sentido de la hiancia, de la falta de garantías, pero que de
ningún modo implica un salto al vacío, sino más bien la asunción de la decisión y la lógica
del no-todo. Esta decisión se verá plasmada en la redacción de la historia clínica.
PARA CONCLUIR
Hemos intentado sostener por qué la historia clínica en el campo de la salud mental
requiere un tratamiento especial, a la luz de la especificidad del padecimiento subjetivo.
Siendo un elemento que ha sido extrapolado de un campo heterogéneo al de nuestra
disciplina y que a la vez posee el estatuto de documento legal que apunta al resguardo de
los derechos del paciente, protegiendo especialmente su autodeterminación y autonomía, y
siendo de su propiedad, cuestiones tales como intimidad, confidencialidad, estigma social y
transferencia deben ser ponderados a partir del juicio clínico en cada caso, cada vez.
En este entramado complejo se sitúa la historia clínica, y por lo tanto su confección,
manejo y almacenamiento convoca a la responsabilidad profesional y a un posicionamiento
ético por parte de los psicólogos. Hacer lugar a la tensión permanente entre el enfoque de
derechos y el sujeto de la clínica es un desafío al que no podemos renunciar, y el que se
dirime en la decisión profesional del acto de escritura, con cada caso, vez por vez.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
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EL MAL EN PSICOANÁLISIS
Álvarez, Hugo Martínez
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el bien moral es un real que insiste, homólogo al imperio del mal den Sade. La ética
kantiana que permite con el campo de conciencia moral introducir la libertad en la
humanidad y por lo tanto permite que luego el psicoanálisis niegue esta posibilidad
conduce al mal del sujeto.
El hombre es unheimlich en cuanto sujeto del deseo inconsciente, en cuanto
impugnador y transgresor de los órdenes de los órdenes. Sin que se derive en esto
una nueva orden, la orden de ir contra las órdenes. Pués el psicoanálisis sólo puede
seguir siendo tal en la medida en que se prive de emitir confirmas conformistas o
petardistas.
Como es que siendo el hombre el ser que traspasa todos los límites, puede
existir la cultura que es la organización histórica de tales límites, estructuración de
barreras y dique de contención y derivación del deseo. Hay algo del mal que refiere a
todos los existentes.
La indagación de las dimensiones del superyo freudiano, concebido como
imperativo de goce es otro de los puntos fundamentales que tenemos en cuenta en
este trabajo.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍCAS
Braunstein, N A medio siglo del Malestar en la Cultura de Sigmund Freud, Bs. As.:
Siglo XXI editores.
Freud, S. Más allá del principio de placer, Obras completas, Bs. As.: Ed. Amorrotu
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“NEUTRALIDAD Y ABSTINENCIA EN LA
CLÍNICA DE HOY”
Villi, Graciela
Cada vez y con más frecuencia, las personas que nos consultan
muestran cuadros diferentes a los neuróticos, pero de menor gravedad
que los psicóticos. Son los denominados “”pacientes de hoy”: trastornos
de la personalidad y de la conducta, patologías del control de los
impulsos, ansiedad social, estrés postraumáticos, depresiones...
La clínica actual a menudo nos plantea situaciones dilemáticas,
situaciones en las que debemos saber cuándo y cómo realizar las
modificaciones técnicas necesarias para sostener nuestra práctica bajo
un marco de acción guiado por la ética.
Me referiré aquí a dos conceptos fundamentales de la práctica analítica:
la neutralidad y la regla de abstinencia.
Partiendo de la amplia descripción que implica el concepto de
neutralidad del analista, de inmediato nos sentimos ante algo no
solamente difícil, sino más bien, casi imposible de cumplir. No obstante,
no renunciamos a lograrlo, como requisito básico para lograr el mejor
análisis posible.
Etimológicamente, “neutralidad” deriva del latín “neuter” y se aplica
a las cosas que tienen un carácter indefinido y a las palabras o
expresiones desprovistas de matiz afectivo.
Según el Diccionario de la Lengua Española, “neutral” significa lo que no
es ni de uno ni de otro; que entre dos partes que contienden permanece
sin inclinarse hacia ninguna de ellas. Se dice de personas y cosas que no
se inclinan a un lado ni a otro.
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práctica. Poder respetar esa posición implica que siga paso a paso el
discurso forjado por un deseo que no es el suyo, que sea capaz de callar
su narcisismo y sus creencias, para pasar a la escucha de un discurso
que no tiene derecho a interpretar si no es respetando su contorno, su
estilo, su singularidad.”
M. Baranguer sostiene que se trata de una posición ética y la
compara con la ética del estoico: “…es el borramiento deliberado de los
deseos personales, es dejar al otro la posibilidad de organizar el campo
según sus propios deseos de expresión y eventualmente modificarlo…”.
Neutralidad implica, además, tolerar todos los cambios que el
paciente durante el tratamiento. Aceptando que el analizando ha
encontrado, gracias al vínculo, una manera más realista y/o creativa o
imaginativa o libre para vivir, o una manera, como diría Freud, con un
sufrimiento más llevadero, más aceptable.
Cuando el yo del paciente apela al yo del analista, éste debe
eclipsarse haciendo desaparecer su “yo”. Lo contrario de esta actitud
sería el ejercicio del poder que la transferencia otorga, es decir, el poder
de la sugestión. Comprender que del saber que le supone el analizante,
él no sabe nada, forma una parte importante de la posición de neutralidad
que el analista debe sostener, evitando de esta manera imprimir en el
analizante significaciones que le son propias.
En el desarrollo de cada proceso analítico encontramos variaciones
en nuestra distancia y neutralidad frente al paciente y en las posibilidades
de implicancia con él. La significación de momentos en los cuales, por
distintas razones estamos más implicados sólo puede investigarse
retrospectivamente, desde una “segunda mirada” que permita volver
sobre lo ocurrido y reflexionar sobre ello.
La neutralidad resguarda el principio de autonomía, pues al
mantener una actitud neutral en nuestra función como terapeutas
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
MÉTODO
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y 58 años de edad (Media= 26 años, DS= 7 años) en su mayoría de género femenino (72%).
En la tabla 1 se presentan la frecuencia de variables demográficas.
Sexo
Varones 30%
Mujeres 70%
Sedes
Mar de Ajo 27%
Dolores 33%
Mar del Plata 40%
Consumo en los últimos 12 meses
Si 94%
Cantidad habitual
1o2 38 %
304 32%
5 o mas 22%
Frecuencia habitual
Diario* 27%
Semanal** 46%
Ocasional*** 19%
Tipo de bebida
Tragos preparados 33%
Cerveza 29%
Vino 10%
CEEA****
Si 38%
* Consumo Diario: todos los días, casi todos los días 3 o 4por semana.
** Consumo semanal: 1 o 2 veces por semana, 2 o 3 veces al mes.
*** Consumo ocasional: cerca de una vez al mes, 6 o 11 veces al año y 1 o 5 veces al año.
**** Consumo de 5 o más UE por ocasión en varones, 4 o más EU por ocasión en mujeres.
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Se compone de 45 ítems que miden expectativas positivas y negativas hacia el alcohol a través
de 6 subescalas: sociabilidad, relajación, incremento de la sexualidad, deterioro cognitivo y
conductual, riesgo y agresividad y estados negativos.
Cuestionario sobre variables demográficas: se diseñaron preguntas que evaluaron edad,
género, sede.
RESULTADOS
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DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Brown S., Christiansen B., & Goldman M. (1987). The Alcohol Expectancy Questionnaire: An
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universitarios del interior del país. Recuperado el 15 de febrero de 2014 de la página:
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INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
Javier es oriundo de una provincia vecina, tiene 28 años, está cursando las últimas
materias de quinto año de la carrera de licenciatura en bioquímica. Es económicamente
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A MODO DE CIERRE
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCION
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OBJETIVO
CONSIDERACIONES METODOLOGICAS
ALGUNOS RESULTADOS
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CONCLUSIONES
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Laurent, E. (2000) Psicoanálisis y Salud Mental. Buenos Aires. Tres Haches.
Miller, J.-A. (1997) Introducción al método psicoanalítico, Buenos Aires. Paidós
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OMS (1978). Atención primaria de la salud. Informe de la Conferencia Internacional
sobre Atención Primaria de la Salud. Alma-ata, URSS; 1978. OMS. Ginebra. Documento
recuperado de www.who.int
Sotelo, I (2012) Perspectivas de la clínica de la urgencia. Buenos Aires, Gramma
Ediciones, 2012.
Stevens, A (2001) Nuevos síntomas en la adolescencia. Revista Lazos Nº 4, EOL
Sección Rosario. Rosario. Editorial Fundación Ross.
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INTRODUCCIÓN
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Incluso, hay estudios que han examinado este fenómeno hasta en 37 naciones,
demostrando que el bullyinges algo común en numerosos países del mundo y que no es
un problema de una región o cultura particular (Akiba, LeTendre, Baker y Goesling,
2002). Nansel y otros (2004) mediante un estudio en 25 naciones (113.200 alumnos de
escuelas medias) brindan valiosa información sobre la incidencia del bullying a nivel
mundial: Suecia tenía los niveles más bajos (9%) y Lituania, los más altos (54%).
Una vasta literatura científica señala que tanto las víctimas como los victimarios
tienen perfiles emocionales y conductuales distintos. Un extenso cuerpo de
investigación científica ha señalado la fuerte asociación entre la victimización a manos
del grupo de pares y los problemas internalizantes o emocionales (Olweus, 1993;
Hawker y Boulton, 2000). En general las victimas del acoso escolar son más ansiosas,
inseguras, sumisas, con baja autoestima, con una imagen negativa de sí, no tienen
amigos y/o tienen dificultad para hacer nuevas amistades (Juvonen, Graham, y
Shuster, 2003; Olweus, 1993). Hawker y Boulton (2000) en una revisión meta-análitica
sobre el ser acosado y el ajuste psicosocial (depresión, soledad, ansiedad y autoestima)
hallaron que el correlato más fuerte del bullying era la depresión.
En lo referente a las diferencias de género, es más común que las mujeres
denuncien el acoso, pero es más probable que los muchachos sean víctimas del mismo;
a su vez, ellos son los que perpetran la agresión en mayor medida que las muchachas
(Solberg, Olweus, y Endresen, 2007).
La Argentina tampoco ha sido ajena a la preocupación que la violencia entre
pares ha despertado. Sin embargo, la mayoría de los estudios que se han llevado a
cabo en nuestro país son de naturaleza teórica y casi no existen datos científico-
empíricos al respecto. De este modo, la importancia y fortaleza del presente trabajo
radica en contribuir a estudiar un fenómeno de gran actualidad y notable relevancia
psicológica, social, educativa y política, aportando datos empíricos sobre el acoso
escolar y su asociación con el ajuste psicosocial. Esto es vital para saber qué tan
extendido y grave es el problema en comparación con los resultados aportados por las
investigaciones realizadas en los países del mundo; en los cuales se lleva a cabo la
mayor parte de la investigación empírica en psicología.
OBJETIVOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
METODOLOGÍA
Muestreo:
Se constituyó una muestra intencional de502 alumnos (media de edad =14,4 S = 1,7
años; 55% mujeres) que asistían al nivel escolar medio en la provincia de Entre Ríos.
Los datos se recogieron en las siguientes localidades de Entre Ríos:Paraná (26%),
Crespo (18%), San Benito (28%) yFederación (28%).
Instrumentos:
-Cuestionario estructurado para recabar datos sociodemográficos.
-Cuestionario Revisado de Victimas y Perpetradoresde Olweus (1996). El mismo
consiste de 40 preguntas para medir los problemas con relación a agredir/ser agredido:
una para determinar si se fue agredido (Desde que empezaron las clases ¿cuántas
veces fuiste agredido en la escuela?) y otra para observar si el alumno agrede (Desde
que empezaron las clases ¿cuántas veces agrediste en la escuela?); tipos y formas de
violencia (física, verbal, indirecta, sexual); entre otras.
A partir de las distintas preguntas sobre los tipos de violencia que sufre el
alumno se puede sacar un índice de victimización sumando las respuestas.
El Cuestionario de Olweus para medir si el sujeto fue víctima del acoso escolar
emplea las siguientes alternativas de respuesta: -“Nunca”-“Una o dos veces” -“Dos o
tres veces al mes”-“Más o menos una vez por semana” y - “Varias veces por semana”.
Las virtudes psicométricas del mismo han sido sólidamente comprobadas en
muestras de más de 5.000 sujetos, demostrando su confiabilidad, validez de constructo
y confiabilidad (Solberg y Olweus, 2003).El mismo ya ha sido adaptado a nuestro país
en estudios preliminares con alfas de Cronbach similares a los informados por Olweus
(Resett, 2011). En el presente estudio el alfa de Cronbach fue de 0,87 para la escala de
ser agredido.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
Se halló que un 21% de los alumnos habían sido víctimas del acoso escolar, como se
ve en la tabla 1. No se detectaron diferencias significativas según género.
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CONCLUSIONES
El propósito del presente trabajo era evaluar los niveles de acoso escolar y los
correlatos internalizantes en adolescentes de escuelas medias. Con respecto al primer
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VI Congreso Marplatense de Psicología
objetivo relacionado a evaluar la incidencia del bullying, se detectó que un 21% de los
alumnos habían sido agredidos. Varones y mujeres no diferían en los niveles de
agresión experimentada. Estas cifras son bastante más elevadas a las informadas por
los estudios nórdicos de Olweus (1993), los cuales encontraron un 9% de victimización.
En cambio los porcentajes son similares a los hallados en países europeos como
Alemania y Lituania (Nansel y otros, 2004). Esto sugeriría que también a nivel local y en
nuestro país el bullying es un grave problema que afecta a un porcentaje no menor de
alumnos.
No se hallaron diferencias significativas según el género con respecto a la
victimización. Este último hallazgo no concuerda con lo señalado empíricamente por la
literatura científica donde los varones son más victimizados (Olweus, 1993; Solberg y
Olweus, 2003). Sin embargo, en otros estudios a nivel local tampoco se han encontrado
diferencias a este respecto (Resett, 2011).
En lo referente al segundo objetivo de examinar los correlatos de problemas
internalizantes de ser agredido, se encontró que el pertenecer al grupo que era víctima
se asociaba con mayores niveles de depresión y ansiedad. Numerosos estudios
llevados a cabo en Norteamérica y Europa del norte han detectado que los principales
correlatos de experimentar el bullying son los problemas emocionales (Juvonen y otros,
2003; Nansel y otros, 2004). Asimismo, la literatura científica
señala a este respecto que uno de los principales correlatos de esta problemática es la
depresión (Hawker y Boulton, 2000). Las víctimas del acoso escolar tienden a ser
inseguras, ansiosas, con una imagen negativa de sí mismo, solitarias, etc. Estos sujetos
serían un blanco fácil de los agresores, pero, a su vez, el ser acosado frecuentemente
conduciría a que estos sujetos experimenten mayores niveles de problemas
emocionales. Incluso se sabe que el acoso escolar crónico puede llevar a cometer
suicidio (Olweus, 1993).
El presente trabajo tiene limitaciones, como una muestra de conveniencia y
basada solamente en el autoinforme. No obstante, esta investigación arroja datos
sugerentes sobre el bullying y sus correlatos de problemas emocionales; Futuras
investigaciones deberían replicar estos hallazgos en muestras más grandes, aleatorias y
de otras partes del país.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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El título de este trabajo se inspira en el clásico material freudiano El problema económico del
masoquismo (1924). Sin embargo, el término “económico” no se tomará en el sentido en que Freud lo
propone, sino que se lo resituará a partir de algunos desarrollos de Lacan, en el Seminario 7, La ética
del Psicoanálisis (1959-1960) en particular los abordados en la clase del 18 de mayo de 1960, de la
que se extrae la siguiente cita, que servirá de punto de inicio y de despliegue de este escrito:
A partir de esta referencia, podemos advertir al menos dos líneas de ideas en la articulación
masoquismo-dialéctica de los bienes. Propongo que en los márgenes del extracto textual
encontraremos un sentido de esta articulación, en tanto en el centro, en el párrafo que hace mención a
la literatura de Masoch, otro.
Ambos sentidos tienen en común no sólo la puesta en juego de los términos masoquismo,
dialéctica de los bienes, sino también de algunos significantes, que refieren directamente a esta
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VI Congreso Marplatense de Psicología
dialéctica, tal es el caso de la palabra compartir. Ahora bien, en un sentido amplio, puede decirse que
la diferencia quedará colocada del lado de qué es aquello que aparece como susceptible de ser
compartido. No es lo mismo decir compartir el dolor, que decir compartir un sujeto reducido a un bien.
“(…) ese esclavo que se transmite y se comparte.” Ello desde una perspectiva estructural implica
considerar dos sentidos del masoquismo; en el primer caso se trata de cómo participa la cuestión de
“compartir el dolor”, como elemento de la estructura, mientras que en el segundo nos encontramos con
el masoquismo como estructura perversa.
→ Compartir el dolor: “La economía del dolor masoquista termina por parecerse a la de los bienes.”
(…) Y una vez que el sentir dolores se ha convertido en una meta masoquista, puede surgir
retrogresivamente la meta sádica de infligir dolores; produciéndolos en otro uno mismo los goza de
manera masoquista en la identificación con el sujeto que sufre. (Freud, 1915, p. 124)
En las palabras de Freud se condensan - de alguna manera - elementos de los dos sentidos
que hemos referido encontrar en la cita de Lacan, en lo tocante a la puesta en relación del
masoquismo con la economía de los bienes; en la medida en que hace alusión tanto al dolor como
susceptible de ser compartido, como a los sujetos perversos. En este punto, sirve de bisagra para
pasar a ese otro sentido que se vislumbra en el texto lacaniano.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Esclavo mío,
Las condiciones bajo las cuales os tomo como esclavo, y os permito estar a mi lado son las siguientes:
Renuncia completa e incondicional a vuestro yo.
No tendréis otra voluntad que la mía.
Seréis en mis manos un instrumento ciego, que cumplirá sin resistiere todas mis órdenes. (…)
No tendréis nada fuera de mí, yo seré para vos todo, vuestra vida, vuestro futuro, vuestra felicidad,
vuestra infelicidad, vuestro tormento y vuestro placer. (…)
Si algún día no podéis seguir soportando mi dominio y se os vuelven demasiado pesadas mis
cadenas, entonces habréis de mataros. Jamás os devolveré la libertad. (…) (Sacher – Masoch, 1870,
p. 186-187).
724
VI Congreso Marplatense de Psicología
Retomando el título de este trabajo, es posible plantear - ahora como afirmación - que el
masoquismo acarrea un problema económico, o más precisamente que existen varias formas
problemáticas que puede adquirir lo económico en relación al masoquismo.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
Freud, S. (1905/1976). Tres ensayos para una teoría sexual. En Obras completas. Tomo 7. Buenos
Aires: Amorrortu.
(1915/1976). Pulsiones y destinos de pulsión. En Obras completas. Tomo 14. Buenos Aires: Amorrortu.
(1924/1976). El problema económico del masoquismo. En Obras completas. Tomo 19. Buenos Aires:
Amorrortu.
Lacan, J. (1958-1959/s/f). Seminario 6. El deseo y su interpretación. [CD-Room]. Versión no
autorizada.
(1959-1960/2011). Seminario 7. La ética del Psicoanálisis. Buenos Aires: Paidós.
Sacher – Masoch, L. (1870/1993). La Venus de las pieles. Tusquets
725
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
El sistema público de salud del Partido de General Pueyrredón (Mar del Plata, Chapadmalal,
Camet y Batán), como parte integrante de la Región Sanitaria VIII, se encuentra conformado por
diversas instituciones: a nivel nacional, dos institutos (INAREPS e INE); a nivel provincial, dos
Hospitales Interzonales, un Hospital Local y un Centro Regional; y a nivel municipal, dos Centros de
Salud, cinco Subcentros de Salud y veinticinco Unidades Sanitarias, además de hogares, casas del
niño, divisiones y programas de salud, y el recientemente inaugurado Centro de Especialidades
Médicas Ambulatorias (Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, 2010).
La realización de nuestro Trabajo de Investigación de Pregrado consistió en un relevamiento
institucional -a través de entrevistas y encuestas a profesionales y autoridades de diferentes servicios
de Salud Mental de la ciudad de Mar del Plata- acerca de la identificación de factores que influyen en
la forma y calidad de atención en Salud Mental. Asimismo, buscamos conocer los criterios de
asignación y distribución de recursos en Salud y, específicamente, en Salud Mental, tanto en la región
como en las diferentes instituciones y en diversos períodos, a nivel provincial y municipal, a través del
análisis presupuestario; y vinculado a esto, indagamos acerca de las políticas públicas en Salud y,
específicamente en Salud Mental, en la ciudad de Mar del Plata.
La configuración del sistema sanitario en su totalidad se ha visto gravemente modificada por el
efecto de cambios contextuales, sociopolíticos y económicos implementados en la Argentina
principalmente entre las décadas de los ´70 a los ´90; cambios que han dejado sus secuelas y
continúan en vigencia en la realidad actual. Los procesos de privatización, descentralización y
fragmentación del sistema, a partir de la caída del Estado como garante de lo público y de una
redefinición de las funciones adoptadas por éste, condujo a una nueva concepción de la salud -y de la
posibilidad de acceso a ésta- en términos de un valor de mercado; reduciendo y dirigiendo la
participación del sector público hacia aquellos ciudadanos que no pueden abonar por un servicio de
salud a nivel privado. De este traslado de la “ganancia” en salud a una “ganancia” económica
(Galende, 1997), nos habla la intromisión de organismos internacionales y corporaciones económicas
como el Banco Mundial en la confección de políticas sanitarias de corte neoliberal, que refuerzan
dichos lineamientos (Banco Mundial, 1993). Pese a la supuesta falta de recursos del Estado para
desarrollar su actuación en salud, las investigaciones afirman que los mayores obstáculos no serían
económicos, sino referidos a las prioridades e intereses de los líderes locales que controlan dichos
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VI Congreso Marplatense de Psicología
recursos; es decir, a la implementación de políticas que deciden el sentido de la utilización del gasto
(Galende, 1997).
En este contexto, cabría preguntarse si podemos hablar aún de la existencia misma de un
“sistema de salud” a nivel público, dada la fragmentación del mismo, la desproporción en la distribución
de recursos del sector, y la falta de coordinación e integración entre los distintos subsectores -
nacional, provincial y municipal- (Ugalde y Jackson, 1998).
Dentro del sistema sanitario, el campo de la Salud Mental en particular ha sido uno de los más
relegados, en cuanto a la implementación de políticas sanitarias, consideraciones económicas y
asignación de presupuesto; cuestiones reflejadas a partir de datos estadísticos desde la década de los
‘90 en adelante. Asimismo, actualmente Salud Mental ocupa un escaso lugar dentro del listado de
programas sanitarios, áreas y proyectos, tanto a nivel nacional y provincial, como dentro del itinerario
municipal. Además de una escasa asignación de recursos a las políticas en Salud Mental a nivel
provincial, en el actual contexto se las coloca en primer término cuando se trata de elegir recortes
presupuestarios (Stolkiner, 1991).
Por lo tanto, resulta imprescindible enmarcar las políticas de salud mental tanto dentro del
escenario del desarrollo político social y económico del país y de las diversas jurisdicciones, como
dentro de la fragmentación y falta de coordinación respecto de esquemas de asistencia, atención y
prevención en el campo de la salud en general (Fiasché, 1994). Esto se ve reflejado en lo que perciben
en su cotidianeidad los trabajadores de los servicios de Salud Mental: crecientes dificultades, riesgos,
cierto abandono e insuficiencia de políticas claras, salarios por debajo de la tarea que realizan y falta
de apoyo institucional; una multitud de carencias como forma primera en que se manifiesta la política,
o la no-política respecto a la salud mental (Pacenza & Romanín, 2005).
Como contrapartida, la sanción y reciente reglamentación de la Ley Nacional de Salud Mental,
podría implicar -además de una resignificación de los padecimientos mentales y las prácticas en torno
a la atención, tratamiento y prevención de la salud mental- una apertura hacia el campo de la salud
mental dentro de la agenda política del Estado, particularmente en términos de asignación de recurso
económico. En efecto, dicha ley determina que en forma progresiva y en un plazo no mayor a tres
años, el Poder Ejecutivo debe incluir en los proyectos de presupuesto un incremento en las partidas
destinadas a salud mental hasta alcanzar un mínimo del 10% del presupuesto total de salud;
promoviendo que las provincias adopten el mismo criterio.
Una problemática propia del campo de la Salud Mental dentro del sistema público de salud a
nivel municipal -al menos en el Municipio de General Pueyrredón-, tiene que ver con la falta de
asignación de un presupuesto específico para el Departamento de Salud Mental. Dicho Departamento
forma parte, desde lo administrativo, del presupuesto general de la Secretaría de Salud. Es decir, que
la asignación de presupuesto y por lo tanto el nivel de gasto en Salud Mental a nivel municipal
(constituido por los Centros de Atención Primaria de todo el partido), dependen de la decisión político-
administrativa de la autoridad de la Secretaría de Salud, y en consecuencia de los pedidos y reclamos
de los trabajadores de la Salud Mental, que solicitan ante la Jefatura del Departamento la ampliación
de recursos.
727
VI Congreso Marplatense de Psicología
728
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Si consideramos que un sistema de salud debe asignar recursos de manera eficiente, brindar
servicios de calidad y garantizar el acceso equitativo al cuidado de la salud; podemos decir que se
evidencia en la realidad la dificultad de la concreción simultánea de estos objetivos. Dificultad que se
vincula con un aspecto que hace a las características históricas de la Salud Mental en el país: la
ausencia de un presupuesto específico para Salud Mental que obstaculiza, aunque no excusa, la
gestión y toma de decisiones que afecta en última instancia a los usuarios.
Teniendo en cuenta que la complejidad de este campo se entrama en la convergencia de
diferentes lógicas e intereses (corporativas, tecnoburocráticas, participativas y de oferta y demanda),
diferentes actores sociales (comunidad, profesionales, autoridades y políticos) y diferentes poderes
(técnico, administrativo y político); la articulación de los procesos de gestión pública, intersectorialidad
y de toma de decisiones resultan de suma importancia a la hora de planificar, diseñar, desarrollar y
evaluar las políticas públicas, que pretendemos, saludables. Las percepciones y opiniones de
numerosos profesionales de la Salud Mental, así como los datos presupuestarios obtenidos parecen
demostrar que, a pesar de las intenciones e ideales discursivos, existe una importante desarticulación
entre las decisiones de quienes gestionan y las demandas de la propia comunidad.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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San Andrés, Centros de Estudios para el Desarrollo Institucional.
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730
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
731
RESULTADOS DESCRIPTIVOS
En lo que refiere a las fortalezas del carácter, los participantes obtienen puntajes de
medios a altos. Estos resultados son esperados, ya que, en un estudio transcultural se describe
que los sujetos de población argentina, suelen dar una imagen positiva de sí mismos (Sánchez-
López, Casullo & Aparicio, 1999). Asimismo, estos resultados, podrían responder a que esta
población se encuentra dentro de un dispositivo terapéutico, y que como señalan Peterson,
Park y Seligman (2006) las intervenciones que ayudan a remitir los síntomas, se asociarían a
un aumento de las fortalezas del carácter.
Las fortalezas que obtienen mayores puntajes, refieren a predicar aquello que es
correcto y ser honestos (integridad, M=4,31), a no ostentar los logros personales (humildad,
M=4,16), a ser cordiales y bondadosos (amabilidad, M=4,11) y, a ser justos con los otros
(imparcialidad, M=4,04). Por el contrario, las puntuaciones más bajas se observan en las
fortalezas que refieren al control de los impulsos (autorregulación, M=3,00), a una mirada
positiva sobre la vida (humor, M=3,02) y sobre el futuro (esperanza, M=3,16). Por último, las
fortalezas restantes, reciben puntuaciones intermedias.
Estos hallazgos, van en línea con los de Park et al. (2006), quienes en un estudio
transcultural, en población general, mencionan que la amabilidad, imparcialidad e integridad
serían tres de las fortalezas más elevadas. Asimismo, mencionan que la gratitud y apertura
mental serían fortalezas que aparecen en diversas naciones, pero debido a las características
de los participantes, es esperable en esta población no aparezcan en niveles elevados por las
características de la muestra. Los participantes de este estudio, son pacientes psiquiátricos de
un hospital público. Como explican diversos autores (Dobson & Dozois, 2011; Seligman Steen,
Park, & Peterson, 2005), una de las fortalezas más afectada por los trastornos mentales es la
gratitud. De igual modo, las fortalezas de humor y esperanza, menos presentes en la muestra
analizada, coinciden con lo que reportan estudios previos (Martin Puhlik-Doris, Larsen, Gray &
Weir, 2003; Park & Peterson, 2009). Asimismo, las bajas puntuación halladas de
autorregulación, van en línea con lo que señalan Park et al. (2006), en cuanto que sería una de
las fortalezas, que de manera transcultural, aparece menos elevada, en muestras de población
general de diversos países.
Los datos obtenidos respecto de la sintomatología clínica, señalan la existencia de
niveles más críticos, es decir mayor presencia, de los síntomas ansiedad (sumando las
dimensiones ansiedad M=1,39 y ansiedad fóbica M =,97) y depresión (M=1,62). Mientras que,
los síntomas de hostilidad (M=,94) y psicoticismo (M=,94), son los menos presentes.
Los síntomas más prevalentes, coinciden con los hallados por Scheinsohn y Casullo
(2007), quienes señalan que en el contexto argentino, estos síntomas son los de mayor
prevalencia en pacientes psiquiátricos ambulatorios son la depresión y la ansiedad. Así como
también son los síntomas que más puntúan los sujetos de población general (Casullo, 2004;
Vicente et al., 2002).
732
Al observar los resultados correlaciónales de la Tabla 1, las variables con significancia
estadística, muestran niveles de intensidad de moderados a bajos. En este sentido, se
observan asociaciones estadísticamente significativas en sentido negativo, entre la mayoría de
las fortalezas, con todos los síntomas y los índices adicionales y globales. Sin embargo, sólo
cinco de las fortalezas no correlacionan con ninguna de las variables de sintomatología, siendo
estas: la amabilidad, la perspectiva, el anhelo de saber, la apreciación de la belleza y la
excelencia y la espiritualidad.
Asimismo, el liderazgo, en primer lugar, seguido por el humor y la vitalidad, son las
fortalezas que se asocian con mayor significancia al índice total de síntomas positivos. Esto
indicaría que las personas con mayor presencia de síntomas psicopatológicos, muestran mayor
déficit de dichas cualidades positivas. En un nivel más bajo de intensidad, las fortalezas amor y
creatividad, también aparecen disminuidas, ya que se asocian a este índice, de forma
significativa y en sentido negativo. Por otra parte, el síntoma de sensibilidad interpersonal es el
indicador psicopatológico, que presenta mayor cantidad de asociaciones significativas y
negativas con las fortalezas del buen carácter. Este resultado, indicaría que aquellos sujetos
que muestran sentimientos de inferioridad e inadecuación presentan también un mayor déficit
con las fortalezas curiosidad, vitalidad e inteligencia social.
Algunos autores, señalan que existe una mayor prevalencia de síntomas de ansiedad y
depresión, tanto en población psiquiátrica como general (Casullo, 2004; Scheinsohn & Casullo,
2005; Vicente et al., 2002) y que dicha prevalencia se asociaría a niveles negativos de las
cualidades positivas del carácter. Asimismo, los resultados, muestran que los síntomas de
depresión y ansiedad, los que serían los de mayor incidencia en este estudio, se asocian
negativamente de forma significativa con la vitalidad, la curiosidad, el humor, la esperanza, la
autorregulación, el liderazgo y la inteligencia social. En la misma línea, diversos autores han
encontrado relaciones similares (Dobson & Dozois, 2011; Martin et al., 2003; Park & Peterson,
2009; Seligman, 1998). Por otro lado, diferentes estudios han mostrado que la dimensión moral
de la gratitud estaría asociada al bienestar, en el mismo sentido, indican que la depresión se
asociaría negativamente con la gratitud (Dobson & Dozois, 2011; Seligman et al., 2005), ya que
esta promueve no solo el bienestar, sino el afecto positivo y se relaciona con la salud física y
mental. Por ello, resulta esperado hallar esta asociación en los datos analizados.
En cuanto a los síntomas de obsesiones y compulsiones, los resultados muestran
relaciones negativas y estadísticamente significativas, con un gran número de fortalezas. En
donde, la vitalidad, la inteligencia social, el liderazgo y la curiosidad son las cualidades del
carácter que más se ven afectadas por este tipo de sintomatología. Por el contrario, el
indicador somatización
733
Tabla 11. Análisis Correlacional de Fortalezas y Virtudes (IVyFabre) con la Sintomatología (SCL-90)
Sintomatología
S O S D A H F P P I I I T
OM BS I EP NS OS OB AR SIC A GS PM SP
Fortalezas del
Carácter
, - - - - - - - - - - - -
** *
1. Persistencia 01 ,38 ,32 ,19 ,17 ,24 ,18 ,22 ,18 ,23 ,25 ,28 ,17
- - - - - - - , - - - - ,0
* *
2. Valentía ,15 ,35 ,26 ,22 ,22 ,01 ,29 03 ,20 ,21 ,25 ,33 0
- - - - - - - - - - - - -
3. Integridad ,07 ,18 ,39** ,28 ,13 ,14 ,12 ,31* ,29 ,22 ,26 ,30* ,09
- - - - - - - - - - - - -
** ** ** ** ** ** * ** ** ** *
4. Vitalidad ,43 ,54 ,47 ,63 ,60 ,28 ,58 ,28 ,34 ,46 ,60 ,54 ,36
- - - - - - - - - - - - -
* ** * ** ** * *
5. Amor ,21 ,30 ,41 ,26 ,32 ,22 ,43 ,10 ,39 ,14 ,36 ,25 ,32
6. Inteligencia - - - - - - - - - - - - -
Social ,21 ,45** ,46** ,33* ,33* ,44** ,52** ,17 ,31* ,24 ,43** ,42** ,22
, , - - , - - - , - - - ,0
7. Amabilidad 03 13 ,05 ,02 02 ,03 ,05 ,22 01 ,07 ,02 ,03 0
- - - - - - - - - - - - -
* ** * ** **
8. Imparcialidad ,21 ,30 ,41 ,26 ,32 ,22 ,43 ,10 ,39 ,06 ,12 ,07 ,20
- - - - - - - - - - - - -
** ** * * ** ** * ** ** ** **
9. Liderazgo ,21 ,45 ,46 ,33 ,33 ,44 ,52 ,17 ,31 ,42 ,52 ,47 ,40
, , - - , - - - , - - - -
10. Ciudadanía 03 13 ,05 ,02 02 ,03 ,05 ,22 01 ,13 ,32* ,33* ,20
11. Creatividad , , , , , , , , , , , , ,3
734
24 23 10 13 15 30* 15 27 18 20 23 16 2*
12. Apertura - - - - - , - - - - - - -
*
Mental ,21 ,25 ,22 ,20 ,18 04 ,19 ,03 ,19 ,32 ,23 ,22 ,05
- - - - - - - - - - - - -
* ** ** ** ** ** * ** ** ** **
13. Curiosidad ,32 ,44 ,52 ,48 ,46 ,29 ,42 ,30 ,42 ,43 ,52 ,57 ,13
, , - - - - - - , , - - -
14. Perspectiva 10 05 ,19 ,04 ,04 ,02 ,03 ,18 08 11 ,01 ,05 ,05
15. Anhelo de - , - - - , - - - - - - -
saber ,24 02 ,17 ,27 ,14 18 ,04 ,09 ,07 ,09 ,15 ,14 ,10
16. - - - - - - - - - - - - -
** * * * * * **
Autorregulación ,18 ,40 ,35 ,31 ,35 ,18 ,23 ,18 ,25 ,35 ,35 ,40 ,07
, - - - , - , - - , - - ,0
17. Clemencia 18 ,02 ,24 ,11 11 ,29 16 ,20 ,03 06 ,03 ,12 8
- - - - - - - - - - - - -
18. Prudencia ,27 ,18 ,39** ,21 ,31* ,18 ,27 ,14 ,29 ,32* ,32* ,26 ,27
- , - - - , - - - - - - -
*
19. Humildad ,11 01 ,30 ,15 ,21 02 ,07 ,23 ,08 ,02 ,15 ,18 ,06
20. Apreciación - - - - - - - , - - - - -
de belleza ,02 ,04 ,20 ,04 ,06 ,10 ,24 08 ,15 ,10 ,11 ,04 ,10
- - - - - - - - - - - - -
21. Gratitud ,02 ,28 ,39** ,32* ,23 ,29 ,19 ,24 ,23 ,20 ,29* ,28 ,23
, , - - , , , , , , , , ,1
22. Espiritualidad 25 15 ,15 ,08 12 13 11 07 11 12 10 06 5
- - - - - - - - - - - - -
** ** * ** * * **
23. Esperanza ,26 ,40 ,38 ,33 ,43 ,17 ,35 ,03 ,23 ,27 ,37 ,42 ,12
- - - - - - - - - - - - -
** ** ** * ** ** ** ** ** *
24. Humor ,28 ,29 ,45 ,50 ,39 ,36 ,44 ,47 ,23 ,39 ,47 ,39 ,35
Nota: Somatizaciones (SOM), Obsesiones y Compulsiones (OBS), Sensibilidad Interpersonal (SI), Depresión (DEP),
Ansiedad (ANS), Hostilidad (HOS), Ansiedad Fóbica (FOB), Ideación Paranoide (PAR), Psicoticismo (PSIC), Índices
Adicionales (IA), Índice Global de Severidad (IGS), Índice Positivo de Malestar (IPM), Total de Síntomas Positivos (TSP).*.
La correlación es significante al nivel 0,05 (bilateral). **. La correlación es significativa al nivel 0,01 (bilateral).
735
736
VI Congreso Marplatense de Psicología
sería el menos asociado a las fortalezas del carácter, presentando solamente dos relaciones
significativas, con la vitalidad y la curiosidad, también en sentido negativo.
Los síntomas paranoides, por otro lado, presentan asociaciones negativas relevantes con el
humor, la integridad y la curiosidad. Por último, los síntomas de psicoticismo, en línea con lo que
señalan McCrae y Costa (1987), presentan la asociación más intensa en sentido inverso, con la
curiosidad, pero también, con un niveles más bajos, se asocia a las fortalezas imparcialidad, amor,
vitalidad, inteligencia social y liderazgo.
CONCLUSIONES
A la luz de los resultados descriptivos de la muestra en general, para las fortalezas del carácter,
se encuentra que en su totalidad, obtuvieron puntuaciones de medias a altas, siendo las más salientes
las de: integridad, humildad, amabilidad e imparcialidad. Estos datos, son similares a los que reporta
un estudio de población general transcultural realizado en 54 naciones por Park et al. (2006). El hecho
que, la muestra analizada adquiera puntuaciones similares a la población no-clínica, podría explicarse
tal como señalan algunos autores, a partir de la imagen positiva que suele tener la población argentina
(Sánchez-López et al., 1999). Sin embargo, como afirman Ready y Clark (2002), también podría
guardar relación con el deterioro en la capacidad de insight, generalmente encontrada en pacientes
clínicos. Esto último, se vincularía con las puntuaciones más bajas que se encuentran en este estudio,
para las fortalezas autorregulación, humor y esperanza; si se tiene en cuenta que estos atributos del
carácter, se asocian de manera negativa con el malestar y la sintomatología que caracterizan a las
enfermedades mentales (Dobson & Dozois, 2011; Martin et al., 2003; Park & Peterson, 2009; Seligman
et al., 2005).
Los datos descriptivos hallados en cuanto a la sintomatología psiquiátrica muestran que, los
síntomas de mayor prevalencia son la ansiedad y la depresión. Lo cual va en línea con los resultados
que encuentran algunos estudios de población clínica (Scheinsohn & Casullo, 2007), al igual que, en
estudios epidemiológicos en población general (Casullo, 2004; Vicente et al., 2002). Por su parte, los
síntomas hostilidad y psicoticismo, fueron los indicadores que presentaron niveles más bajos.
Al analizar las relaciones entre las fortalezas del carácter, con los índices de sintomatología.
Los resultados muestran que aquellos participantes con mayor prevalencia de, sentimientos de
inferioridad e inadecuación social (sensibilidad interpersonal), así como la mayor presencia de
síntomas de ansiedad y depresión, son quienes muestran un mayor déficit en las fortalezas del
carácter. Por otra parte, se pudo observar que el liderazgo, el humor y la vitalidad, son las cualidades
positivas más críticas, ante mayor presencia de indicadores psicopatológicos. De este modo, los
resultados, coinciden con numerosas investigaciones previas, que señalan que la presencia de
sintomatología se asociaría significativamente y en sentido negativo, con las fortalezas del carácter y
las virtudes (Dobson & Dozois, 2011; Martin et al., 2003; Park & Peterson, 2009; Peterson et al., 2006;
Seligman, 1998; Seligman et al., 2005).
737
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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739
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
740
VI Congreso Marplatense de Psicología
este sistema diagnóstico, se hace referencia explícitamente a los ataques no epilépticos psicógenos,
dando cuenta de que se trata de episodios que implican “sacudidas y movimientos bruscos de las
extremidades y pérdida y/o alteración de la conciencia que se asemejan a las crisis epilépticas”
(American Psychiatric Association, 2013: 319).
Por su parte, el DSM-IVR define a los Trastornos Disociativos a partir de la “alteración de las
funciones integradoras de la conciencia, la identidad, la memoria y la percepción del entorno”
(American Psychiatric Association, 2000: 489), incluyendo entre ellos a la “Amnesia disociativa”, la
“Fuga disociativa”, el “Trastorno de identidad disociativo”, el “Trastorno de despersonalización” y el
“Trastorno disociativo no especificado”. En el DSM-5 (American Psychiatric Association, 2013) se
mantiene la misma categoría de Trastornos Disociativos, entre los que incluyen al “Trastorno de
identidad disociativo”, el “Trastorno de despersonalización/desrealización”, la “Amnesia disociativa”, el
“Trastorno disociativo no especificado”, y se introduce la categoría de “Otros Trastornos Disociativos
Especificados”. Específicamente en la última versión del manual, se especifica que el Trastorno de
Identidad Disociativo (300.14 [F44.81]) se presenta frecuentemente en casos de CNEP (American
Psychiatric Association, 2013: 293, 295). Sin embargo, se aclara que las amnesias circunscriptas en
los trastornos conversivos suelen ser más limitadas y circunscriptas (American Psychiatric Association,
2013: 297).
En cuanto a su prevalencia, no se han hallado investigaciones que informen, de manera
fehaciente, la prevalencia de CNEP en la población general. Dado que la mayoría de los pacientes que
reciben diagnóstico de CNEP, fueron anteriormente diagnosticados con epilepsia refractaria -ER, en la
que se presenta una frecuencia de crisis de al menos una crisis al mes en los últimos 2 años a pesar
de recibir el tratamiento adecuado (Oddo y cols., 2003; Lesser, 1996; Howell, Owen y Chadwick,
1989)- en general, la frecuencia de aparición de CNEP se calcula en relación a los casos de epilepsia.
La incidencia de CNEP en pacientes inicialmente diagnosticados como epilépticos en centros de
atención médica general es de un 5 a un 10%, cifra que asciende a un 20% cuando se trata de centros
especializados en epilepsia y hasta un 40% en pacientes internados por epilepsia (Alper, 1994; D’
Alessio y cols., 2006; Scevola y cols., 2013). Asimismo, un tercio de los pacientes diagnosticados con
CNEP han recibido un prolongado tratamiento para epilepsia (Reuber, Pukrop, Mitchell, Bauer y Elger,
2003).
El diagnóstico de CNEP actualmente se basa en la exclusión de otras enfermedades y se realiza a
través del Video-Electro-Encefalograma (VEEG). El VEEG es indicado en aquellos pacientes en los
que existe una posibilidad de cirugía para su epilepsia, y resulta imprescindible para realizar un
diagnóstico diferencial entre epilepsia y CNEP.
Si bien las causas de las CNEP son multifactoriales y resultan de la combinación de factores
biológicos, psicológicos, ambientales y sociales, los pacientes con CNEP reportan altas tasas de
trauma general y las situaciones traumáticas parecen ser una de las causas más importantes en el
desarrollo de las CNEP (Goldstein y Mellers, 2012; Reuber, 2008). Asimismo, distintos estudios han
destacado la frecuente presencia de trastornos psiquiátricos comórbidos, entre los que se incluyen
trastornos afectivos, trastornos de ansiedad, trastornos disociativos, otros trastornos somatomorfos y
trastornos de personalidad (Bowman y Markand, 1996; D'Alessio y cols., 2006).
741
VI Congreso Marplatense de Psicología
METODOLOGÍA
Este trabajo consiste en una revisión de los tratamientos cognitivo-conductuales disponibles para
las CNEP. Para la recolección de información hemos llevado a cabo una búsqueda bibliográfica en las
siguientes bases de datos: Medline, Latindex, Redalyc, Cochrane Collaboration EBSCO y Lilacs.
Como resultado de esta revisión, hemos encontrado dos tratamientos cognitivo-conductuales (los
cuales cuentan con estudios randomizados y controlados).
1. Modelo de Goldstein
El tratamiento desarrollado por Goldstein (Goldstein y cols., 2004,2010a) se encuentra basado en
un modelo de miedo, de escape o evitación que considera a las CNEP como respuestas disociativas a
distintas señales (cognitivas, emocionales, fisiológicas o ambientales); dichas respuestas se
742
VI Congreso Marplatense de Psicología
2. Modelo de LaFrance
Por su parte, el modelo desarrollado por LaFrance se basa en un abordaje inicialmente
desarrollado para fortalecer el autocontrol de las crisis epilépticas (Reiter, Andrews y Janis, 1987)
modificado a partir del modelo Beckeano de terapia cognitiva (Beck, Rush, Shaw y Emery, 1983). La
intervención se basa en el supuesto de que los pacientes con CNEP han tenido experiencias
traumáticas que los llevan a desarrollar creencias centrales desadaptativas (esquemas negativos) y
que, a partir de ellos, los pacientes presentan distorsiones cognitivas y síntomas somáticos. El
tratamiento de 12 sesiones tiene por objetivo promover cambios conductuales, generar mayor
autocontrol y autoeficacia. Ha sido diseñado especialmente para pacientes con CNEP, tanto para el
tratamiento de las crisis como de las comorbilidades que habitualmente se desarrollan en este
trastorno.
En uno de los trabajos que se realizaron para comprobar la eficacia de esta intervención,
encontraron que, de los 21 participantes, 16 habían logrado reducir las crisis a un 50% y que 11 de las
17 personas que completaron el tratamiento se encontraban libres de crisis al finalizar el mismo
(LaFrance y cols., 2009). En un estudio posterior (LaFrance, Reuber y Goldstein, 2013) se realizó un
ensayo controlado y randomizado con 35 pacientes que fueron evaluados con VEEG confirmando el
diagnóstico de CNEP. Estos pacientes fueron asignados a cuatro tratamientos: Medicación
(Sertralina); TCC; TCC y Medicación; y tratamiento médico estándar. La intervención TCC mostró una
reducción significativa en las crisis, y una mejora en el funcionamiento general y respecto de los
síntomas en las distintas escalas administradas. La combinación de TCC y Medicación mostró
mejoras, pero menores que la sola aplicación de TCC. La Medicación mostró trazos de mejoras,
mientras que el tratamiento médico estándar no mostró disminución de las CNEP, dando cuenta de
que la terapia de soporte no funciona para las CNEP.
CONCLUSIONES
Dadas sus características semiológicas, las CNEP han sido un tema de interés desde los inicios
de la psiquiatría -en particular por su asociación con los trastornos conversivos y disociativos-, pero
743
VI Congreso Marplatense de Psicología
recién en los últimos veinte años se han desarrollado intervenciones específicas con apoyo empírico,
como lo demuestran los estudios cognitivo-conductuales. No obstante, la investigación en esta
dolencia es aún reciente, por lo que no hay estudios realizados por grupos de investigadores
independientes, motivo por el cual hay que ser cautos a la hora de generalizar estos resultados.
Sin embargo es posible señalar algunos aspectos centrales que son tenidos en cuenta por los
tratamientos cognitivos-conductuales. En primer lugar, estos tratamientos destacan la importancia y
dificultad de cambiar el sistema atributivo en pacientes que, durante un promedio de ocho años
aproximadamente, han pensado que tenían una enfermedad neurológica. Éste es un aspecto
fundamental, tanto en lo que refiere a los objetivos mismos de los tratamientos, como de los factores
que pueden afectar la adherencia a éstos por parte de los pacientes.
En segundo lugar, dada la alta comorbilidad de CNEP con otros trastornos psiquiátricos, los
modelos de tratamiento psicológicos con buenos resultados incluyen estrategias en función de estas
patologías coexistentes (abuso, trauma, depresión, etc.).
Los resultados parecen alentadores y es probable que en los próximos años tengamos más
investigaciones de tratamientos cognitivo-conductuales y expliquen las causas por las que se produce
la mejoría.
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745
VI Congreso Marplatense de Psicología
APROXIMACIÓN INICIAL
En el presente trabajo nos proponemos abordar, a partir del recorte de un material clínico, el
estatuto de la afección psicosomática y las particularidades que presenta respecto al dispositivo
analítico.
Conviene, entonces, partir de precisar que, en consonancia a lo ya expuesto por varios autores
(Miller, 1994, entre otros), lo psicosomático se sitúa en oposición y diferenciado del síntoma neurótico.
Este último, de acuerdo con la lectura que Lacan ha propiciado de la obra de Freud, configura una
formación del inconsciente cuya estructura de lenguaje opera una metaforización del deseo
inconsciente y como tal es susceptible a una modificación debida a la emergencia de los efectos de
verdad que se producen en el trabajo del análisis.
En el campo del psicoanálisis cuando hacemos referencia al síntoma en la neurosis,
inmediatamente está implicado el supuesto freudiano del retorno de lo reprimido, la lógica de la
temporalidad inconsciente y la articulación de la falta por la vía de la castración, cuestiones que no
están involucradas en lo psicosomático. Es por ello que J. A. Miller ha propiciado la designación de
“efecto”, incluso de “fenómeno” con respecto a lo psicosomático: fenómeno psicosomático (FPS), tal
denominación apunta a evidenciar su diferencia estructural para el psicoanálisis respecto del
“síntoma”. Tenemos así una oposición FPS / síntoma, que deja al fenómeno psicosomático por fuera
de los mecanismos de producción del síntoma neurótico.
Tal designación implica también algo que aquí sólo rozaremos lateralmente y que merece una
mayor atención: el fenómeno psicosomático tiene un carácter trans-estructural. Ello significa que
puede presentarse en cualquiera de las estructuras clínicas, lo que redobla nuestro interés por
interrogar cuál es entonces su lugar en la economía subjetiva.
Primeros encuentros
Florencia, de 25 años, consulta en un hospital público de la Ciudad de Buenos Aires donde había
realizado tratamiento previamente, el cual había sido abandonado de manera repentina.
Sobre el motivo por el cual pide tratamiento nuevamente, Florencia refiere que empezó a
“encerrarse” y a “no salir” debido a que los hombres “la acosan” (siendo ésta la misma razón por la
cual había pedido tratamiento anteriormente). También, ubica como motivo de malestar la relación
conflictiva con su padre.
La analista indaga sobre el “acoso” de los hombres y la paciente relata varias situaciones: en una
oportunidad un hombre la siguió hasta el hospital; en otro momento, un hombre la apoyó en el
746
VI Congreso Marplatense de Psicología
colectivo (“me dio un pijazo en la cara”). Agrega que alguien la llama por celular y que hay un
vagabundo cerca de su casa que una vez “se hizo la paja” delante de ella. La lista de circunstancias
prosigue, pero una de las cuestiones que se destaca es el poco pudor y vergüenza al relatar estas
escenas, sumado a que por momentos suena provocativa y desafiante al describirlas.
Comenta que “desde siempre” la acosan los hombres, pero esto no siempre fue algo problemático
para ella sino que comenzó a serlo a partir de una fecha precisa. Fecha que pareciera marcar un
quiebre en su vida: “el 25 de noviembre de 2011”, día en que le diagnosticaron fibromialgia y en el que
un hombre intentó abusar sexualmente de ella en la calle. La analista pregunta por este último hecho,
ante lo cual Florencia dice que al salir del médico reumatólogo (que le había diagnosticado
fibromialgia), un hombre se le acercó, la manoseó y la golpeó: “Me dejó el cuerpo marcado”. A partir de
allí, comenzó a tener “fobia” y a no querer salir a la calle. Esta situación motivó que dos meses más
tarde se acercara al hospital a pedir tratamiento (primera consulta).
Un cuerpo marcado
Sobre la fibromialgia, Florencia comenta que “desde siempre” ha tenido “dolores” en el cuerpo.
Estos dolores han generado que durante muchos años fuera a diferentes médicos, quienes le
realizaron diversos estudios hasta que, finalmente, un reumatólogo le dio el diagnóstico. Relata que, a
raíz de sus reiteradas quejas somáticas, en su adolescencia recibió el diagnóstico de “hipocondría” por
parte de un médico clínico quien, a su vez, le indicó que viera a un psiquiatra.
Describe a los dolores como “pinchazos y puñaladas en el pecho”, “dolor en los huesos de las
piernas”, “dolor en las articulaciones” y “falta de fuerza en los músculos”, lo que le dificulta realizar
distintas actividades. A lo largo de las entrevistas, agrega otras cuestiones: migraña, erupciones en la
piel, “acné” y dice tener las manos frías: “¿ves estos puntitos azules? Eso es porque tengo el síndrome
de Raynaud”. A ello también se suma el diagnóstico de intestino irritable.
Es muy detallista al hablar de sus dolores, dando explicaciones que cierran sentido sobre lo que le
sucede y hablando despectivamente de los tratamientos previos que no le han dado resultado.
747
VI Congreso Marplatense de Psicología
Ante esta descripción tan precisa y detallada, la analista le pregunta qué siente cuando tiene
dolores. La paciente dice que siente una “tortura”. A la entrevista siguiente dice que se quedó
pensando en esa pregunta y que a raíz de ello escribió una poesía que lee en la sesión; la última
estrofa dice así: “El dolor es constante, el dolor es hiriente, el dolor es bastante, el dolor está en mi
mente”.
La analista indaga por esto último (“el dolor está en mi mente”) y Florencia cuenta que los dolores
se incrementan cuando ella está mal anímicamente. Manifiesta querer “ser normal”, es decir, hacer las
cosas que cotidianamente hacen las personas: estudiar, trabajar, hacer tareas hogareñas. Desde el
momento en que le diagnosticaron fibromialgia, abandonó sus estudios universitarios y no volvió ni a
trabajar ni a tener novio. “En el fondo, creo que no puedo ser normal”, expresa con angustia.
En una entrevista posterior se retoma este tema. Dice que primero negó su enfermedad: “no
quería tener eso, intenté hacer una vida normal... luego lo acepté desde la negatividad, es una
enfermedad crónica e incurable que se puede mejorar”. Dice que ha encontrado una forma de
sobrellevar los dolores “fraccionando sus esfuerzos” durante el día, haciendo “con calma, por partes,
variando la posición”. “Doy lo mejor para ese día”, “La gente que no me conoce, me manda a hacer
cosas que no puedo”. La analista señala la importancia que tiene esto, ante lo cual Florencia dice: “me
alegro que sea importante para alguien”.
El sujeto y la holofrase
Florencia consulta porque empezó a “encerrarse” y a “no salir” debido a que los hombres “la
acosan”, a lo que se agrega la preocupación por una conflictiva relación que mantiene con su padre.
La oferta de un espacio de escucha analítica en el cual poner a decir su padecimiento intenta generar
un primer movimiento, en función de clarificar el pedido de tratamiento.
La analista indaga acerca del “acoso”, ante lo cual la paciente dice que los hombres la han
acosado “desde siempre” pero que esto no ha sido problemático para ella hasta una fecha precisa: el
día en que su reumatólogo diagnostica sus múltiples “dolores” y quejas corporales bajo el rótulo de
fibromialgia y en el que un hombre intenta abusar sexualmente de ella, lo que produce un quiebre en
su vida y deja su “cuerpo marcado”.
En dicha escena se entrecruzan, por un lado, la confluencia de un Otro absoluto -el del campo
médico- que designa su cuerpo con un nuevo nombre: fibromialgia y, por otro lado, el encuentro
contingente con la alteridad radical, el Otro sexo, bajo la figura del acosador. Podemos situar allí, en
este trance en el que su vida adquiere un nuevo sentido, la irrupción del deseo del Otro de un modo
imprevisto e inasimilable para el sujeto. Florencia une en esta escena dos acontecimientos, el
veredicto del médico sobre su padecer corporal y el episodio de acoso. Junta ambos en una misma
escena, en su discurso y en su cuerpo. Estos acontecimientos, de los que ella hace Uno, marcan su
cuerpo, y la inmovilizan.
El carácter de fijeza de su padecimiento corporal, de intrusión sobre los órganos del cuerpo y la
inconmovible inmutabilidad de un sentido congelado otorgado por la paciente a dichos fenómenos
748
VI Congreso Marplatense de Psicología
corporales, permiten establecer su diferencia con el síntoma neurótico y nos acerca a la concepción
del fenómeno psicosomático.
Hemos remarcado en nuestra aproximación inicial la oposición entre el síntoma y el fenómeno
psicosomático (FPS). Una de las razones reside en que el FPS no implica una metaforización del
deseo ya que no pone en juego el intervalo entre el par significante; allí Lacan refiere al holofraseo, al
pegoteo del par significante S1//S2.
Podría decirse que lo psicosomático esquiva la estructura de lenguaje (Miller, 1994) en tanto
detiene la remisión significante, la congela en un S1 que adquiere valor absoluto. Este hecho altera la
lógica temporal del inconsciente, por la cual el síntoma como formación del inconsciente reconduce al
sujeto, históricamente, a los significantes de su biografía. En el FPS, por el contrario, el fenómeno del
trauma, en cierta forma, estaría inscripto de manera directa en el cuerpo. Pero, ¿qué cuerpo?
El cuerpo y el afecto
Efectivamente, el psicoanálisis ha puesto de manifiesto que el cuerpo no es un dato natural sino
que es algo que se construye. Lacan (1964 y 1966) retoma la cuestión freudiana del cuerpo libidinal a
partir del mito de la laminilla, para decir que es a partir de una sustracción que la libido existe.
Efectivamente, la condición de lo que Freud denominó la “libido” es una cierta pérdida, y las
operaciones de alienación y separación que Lacan describe dan cuenta del movimiento por el cual el
significante separa el goce del cuerpo en una metaforización que hace a la constitución subjetiva. Se
trata de la pérdida del viviente y de la libido como un órgano “incorporal”, fuera del cuerpo, que
instaura el espacio libidinal en el que tendrá lugar el síntoma histérico y de la producción de todas las
formas enumerables del objeto a. Colette Soler señala, en tal sentido, que “la libido es lo que hace
buscar una parte de sí mismo fuera de uno mismo, lo que de alguna manera nos asegura una
extensión fuera de nosotros… esta extensión sólo es posible a partir de una sustracción previa” (Soler,
1993, p. 110).
El holofraseo del par significante en el FPS implica un rechazo a la función del intervalo, de la
falta, por lo cual tenemos el goce a nivel de la cadena, relacionando algunos significantes (S1) con
órganos del cuerpo. En otros términos, el cuerpo yace como superficie de inscripción de un goce sin
metaforizar.
El padecimiento corporal de Florencia da testimonio del efecto mortífero de la implantación directa
del significante en el cuerpo, cuando el ser de goce se instala en el organismo haciendo de los
órganos objetos. Allí el órgano “afectado” va al lugar de restituir la fallida operación simbólica por
medio de una lesión corporal.
Esta afectación del órgano implicado en el FPS es correlativa de una “desafectivización” por parte
del sujeto, ya que la abolición de la dimensión de la falta no pone en juego la angustia. Lo que aparece
en el lugar de la angustia es el fenómeno psicosomático. Aunque el FPS no es un afecto, se lo puede
situar fuera del afecto.
El “fuera del afecto” es una cuestión que se presenta en el discurso de Florencia, quien relata
diferentes situaciones sobre el “acoso” en las que no aparece algo del orden de los diques psíquicos. A
su vez, los sucesos que involucran a su padre son contados con tono desafectivizado e indiferencia.
Sin embargo, se nota cierta actitud provocativa y desafiante ante quien se dirige. Ello constituye una
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VI Congreso Marplatense de Psicología
arista interesante para pensar el lugar del oyente, en este caso, el lugar del analista. ¿Desde qué lugar
se lo convoca al analista a escuchar?, y en consecuencia: ¿cómo operar desde ese lugar con el FPS?
REFLEXIONES FINALES
Sigmund Freud ya estaba advertido de todo un conjunto de casos en los que un goce corporal
estaba involucrado de manera particular, siendo refractarios a la transferencia (Freud, 1916-17).
Justamente, en el FPS, por efecto de la solidificación del par significante en la holofrase, se presenta
750
VI Congreso Marplatense de Psicología
este obstáculo estructural respecto del dispositivo analítico en tanto no se produce la remisión del S1
al S2.
En el caso presentado, la analista sorprende al sujeto con su intervención, rompe el
encriptamiento del goce corporal que permanecía mudo al interrogar por el “sentir” del cuerpo. Moviliza
al sujeto y lo relanza en la cadena significante. Sentir el cuerpo es lo que hace hablar a Florencia al
producir una poesía hacia la búsqueda de un nuevo sentido.
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751
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
METODOLOGÍA
752
VI Congreso Marplatense de Psicología
En este trabajo, realizaremos una revisión bibliográfica -a través de las bases de datos EBSCO,
Medline y PsychInfo- de distintos modelos de tratamiento psicológico que se han propuesto para su
abordaje terapéutico, entre los cuales se destacan las intervenciones cognitivo-conductuales,
conductuales, mindfulness y EMDR. Describiremos las características principales de estas propuestas
de abordaje, a la vez que daremos cuenta de las investigaciones que le brindan apoyo empírico.
Tratamientos conductuales
Tratamiento operante
El tratamiento conductual operante es uno de los tratamientos pioneros para el manejo del
dolor crónico, en especial a partir de los desarrollos de W.E. Fordyce (Fordyce et al., 1968; Fordyce,
1984). Este tipo de abordaje supone, en términos generales, que todo comportamiento es afectado por
753
VI Congreso Marplatense de Psicología
las contingencias ambientales que se generan por el mismo comportamiento. Entonces, aquellas
conductas que sean reforzadas mantendrán o incrementarán su frecuencia, mientras que aquellas
conductas ignoradas o castigadas, tenderán a disminuirla. En el caso del dolor crónico, Fordyce
identificó que aquellas conductas que las personas realizan para comunicar su dolor -como, por
ejemplo, los gestos o las expresiones manifiestas de sufrimiento-, denominados “comportamientos de
dolor” (“pain behaviors”), funcionan de la misma manera que otros comportamientos en cuanto a su
sensibilidad a las contingencias ambientales. Así, los comportamientos de dolor que son reforzados,
como la demostración de afecto o posibilidad de liberarse de responsabilidades sociales, aumentarán
la frecuencia. Sin embargo, si los comportamientos de dolor fueran sistemáticamente ignorados, y
otros -los “buenos comportamientos”, entre los que se incluye la actividad física y el mantenimiento de
un estilo de vida activo- se reforzaran positivamente, se esperará que estos “buenos comportamientos”
aumenten su frecuencia, y que disminuyan los comportamientos de dolor.
En pacientes con FM este tipo de abordaje obtuvo buenos resultados. Por ejemplo, Thieme et
al (2003) encontraron que un tratamiento conductual operante obtuvo mejoras significativas en
medidas de dolor, sueño, depresión y funcionalidad general, comparándolo con un programa médico
estandarizado, con énfasis en la terapia física.
Otro de los modelos que surge de las corrientes comportamentales es la Terapia de Aceptación
y Compromiso -ACT, por sus siglas en inglés-. Este tipo de abordaje tiene una serie de ideas rectoras
que podrían resumirse en que la fuente de los problemas psicológicos se encuentra en el lenguaje,
asumiendo que el sufrimiento psicológico está causado por la “evitación experiencial”. El objetivo del
tratamiento es disminuir las estrategias tanto de lucha como de control de los pensamientos y las
emociones. La salud estaría centrada en la aceptación de las propias reacciones naturales,
automáticas e inherentes a la condición humana y la toma de contacto con el momento presente, lo
que permitiría elegir más libremente una dirección valiosa, con sentido personal y comprometerse con
la acción y los cambios acordes con esa dirección.
Esta terapia fue aplicada en casos de dolor crónico (McCracken et al, 2005; Wicksell et al.,
2009), y fue incluida por la División 12 de la Asociación Psicológica Norteamericana como un
tratamiento empíricamente validado para Dolor crónico persistente (División 12, 2010, citado en
Wicksell et al, 2013). En el caso particular de pacientes con FM, Wicksell et al. (2013) evaluaron los
resultados de un tratamiento de 12 sesiones en formato grupal de ACT, encontrando resultados
positivos en cuanto al funcionamiento relacionado con el dolor, la calidad de vida, impacto de FM,
autoeficacia, depresión, ansiedad e rigidez cognitiva.
754
VI Congreso Marplatense de Psicología
EMDR
CONCLUSIONES
En esta ocasión hemos realizado una breve síntesis de algunas de las estrategias terapéuticas
no farmacológicas propuestas para el tratamiento de la FM. En la mayoría de los casos, los modelos
de abordaje se orientan al manejo del dolor crónico en general -que incluye otros síndromes y
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VI Congreso Marplatense de Psicología
patologías, como la artritis, lumbalgias, migrañas-, pero en su gran mayoría cuentan con
investigaciones y estudios clínicos pacientes con FM.
De los cuatro tipos de intervenciones que expusimos en este trabajo -Terapia cognitivo-
conductual, abordajes conductuales, Mindfulness y EMDR-, los estudios indican que son las dos
primeras las que han demostrado mejores resultados en distintos aspectos de la FM -entre las que se
incluyen percepción del dolor, funcionalidad general, calidad del sueño y trastornos asociados-. Sin
embargo, dadas las características de la FM, las guías clínicas recomiendan que los tratamientos
deben realizarse de manera integrada y multidisciplinar, por lo cual éstos deberían formar parte de un
plan de tratamiento interdisciplinar, y no ser aplicados de manera aislada. De todas maneras, la buena
respuesta por parte de los pacientes respecto de este tipo de abordajes refuerza el importante papel
que juegan las variables psicológicas en la percepción del dolor en este tipo de pacientes.
Dado ello, se vuelve imprescindible que los profesionales orientados al abordaje de la FM
reciban formación y actualización sobre los factores psicológicos involucrados en la experiencia del
dolor, para conseguir así un trabajo interdisciplinario efectivo en el camino a la mejoría de calidad de
vida de pacientes que sufren FM.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Como equipo de investigación en las denominadas nuevas patologías en el campo del trabajo,
hace algunos años nos propusimos abordar la problemática del síndrome de Burnout de uno de los
grupos de riesgo más signado por la literatura en el tema, los trabajadores de la salud.
Su surgimiento a mediados de los años ´70 fue conceptualizado como una forma del denominado
estrés laboral y así la problemática del síndrome de Burnout propuesta por Freudenberger (1974) y
retomada inmediatamente por Maslach y Jackson (1976) que lo definen como...un stress laboral
crónico producido por el contacto con los clientes que lleva a la extenuación y al distanciamiento
emocional con los clientes en su trabajo, inicia un largo camino que lleva ya más de 40 años.
(Schaufeli, Leiter y Maslach; 2008).
El personal sanitario fue estudiado como uno de los grupos más vulnerables a la problemática,
Maslach y Jackson (1981) en un trabajo comparativo entre enfermeros y médicos detectan un
importantes índices de Burnout en sendos subgrupos, en sus conclusiones hacen notar que la
profesión de enfermería presenta altos niveles de Cansancio Emocional y Falta de Realización
Personal en contraste con los médicos que muestran altos niveles de Cansancio Emocional y
Despersonalización, y un año más tarde, señalan el tiempo que los profesionales de la salud pasan
junto a los pacientes, como una de las causas principales que desencadena el síndrome de Burnout
(Maslach y Jackson; 1982).
Fue a raíz de este estudio que Maslach y Jackson (1981) publican la primera edición del
Maslach Burnout Inventory, un inventario para medir el Burnout de los trabajadores de la salud, citado
en la literatura como el MBI- H.S.S. (Maslach Burnout Inventory-Human Services Survay), que es la
versión clásica del inventario.
A partir de ese momento podemos decir que los estudios sobre el Burnout en trabajadores de
enfermería a crecido sin cesar, solo por citar algunos ejemplo, el trabajo de Yasko (1983) en
profesionales de enfermería, identifica el servicio de Oncología como el que más es afectado por el
síndrome.
Los trabajos de Etzioni (1984) y Cronnin, Stubbs y Drophy (1985) destacan la variable Apoyo
Social como la más importante, que se asocia negativamente con el síndrome, el estudio de Brito Ortiz
y Nava Gomez (2008) asociando el trabajo de enfermería con factores psicosociales, el estrés y el
síndrome de Burnout y muestra claramente como el factor Apoyo Social está asociado a la variable
Control Laboral y correlaciona negativamente con las dimensiones del Burnout.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El absentismo laboral también fue considerado como indicador de Burnout en los estudios de
enfermería, los trabajos de Firth, H. y Britton, P. (1989) lo relacionan con el turnover, y los de Cohen,
Mansfierld y Rosenthal (1989) lo relacionan con los diferentes turnos de trabajo y la rotación que sufre
el personal de enfermería.
Ya en este siglo encontramos como los estudios fueron profundizándose y siendo asociado con
un buen numero de variables predictoras o concomitantes, citemos a modo de ilustración el trabajos de
Ortega Herrera, Ortiz Viveros y Coronel (2007), quienes realizaron un estudio comparativo entre 119
profesionales de la salud (61 médicos y 58 enfermeras), dicha muestra fue administrada en distintos
centro y servicios de salud de México, dando un alto porcentaje de los trabajadores (más del 30%)
vulnerables a contraer Burnout, este mismo estudio se relaciono con Personalidad Resistente,
correlacionando esta negativamente con los casos detectados de Burnout.
En un trabajo publicado en el 2011 (Rios Risquez, et al) se hace una comparación de los
niveles de Burnout asociados con la Personalidad Resistente en un sub grupo de enfermeras
encargadas de los cuidados intensivos obteniendo también, correlación negativa entre Burnout y
Personalidad Resistente.
Rodriguez Garcia el. al, (2009) realizaron un estudio comparativo sobre 122 enfermeras de dos
hospitales públicos de México, encontrándose niveles importantes de Burnout (más del 22 %) y
comprobándose valores crecientes en algunos sectores (como Cuidados Intensivos) en las
dimensiones de Cansancio Emocional y Despersonalización.
Para finalizar esta presentación queremos citar también el trabajo de Gil-Monte (2002) quien
destaca la influencia del género en los estudios de enfermería, donde los hombres puntúan más alto
que las mujeres en Despersonalización.
Son innumerables los trabajos que pueden citarse como antecedentes de investigaciones de
Burnout en enfermería en particular y en personal sanitario en general, a continuación vamos a
presentar algunas de las variables asociadas en los estudios de Burnout, dichas variables sugieren
una relación con las dimensiones del síndrome.
Entre las variables que se destacan asociadas al síndrome podemos citar, el trabajo próximo al
dolor, el sufrimiento y la muerte, las relaciones que se establecen con los pacientes y su familiares
directo, así también como con los colegas y supervisores, las satisfacción laboral, la gestión y
estructura de la organización hospitalaria (básicamente la falta de participación en el proceso de toma
de decisiones), las consideradas variables socio-demográficas como sexo, edad, estado civil, número
de hijos y también las especificas que hacen (entre otras) a la carga laboral, como el turno, la cantidad
de horas diarias y semanales que trabaja, la rotación, la antigüedad laboral y la antigüedad en el
mismo puesto de trabajo, entre otras.
A medida que el síndrome cobro forma en la investigación al menos dos enfoques
complementarios fueron dando lugar a la aparición de variables intervinientes para profundizar su
estudio, estas pueden ser clasificada en variables de tipo organizacional, envolviendo aquellas que se
produce en el ambiente de trabajo, dentro de ella la sobrecarga laboral (medida como frecuencia e
intensidad) es la más citada y por otro lado encontramos las variables de tipo personal (individual), que
recoge aspectos de la personalidad y de los mecanismos de defensa (afrontamiento) junto a Locus de
Control utilizados para combatir los estresores laborales, son las más frecuentemente en la literatura.
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no son más que variables independientes encontradas, asociadas en un número menor de casos e
insuficientes para hacer conclusiones.
Por esta razón desde un inicio nos propusimos considerar el síndrome de Burnout como un
síndrome puramente psicológico y que nada tiene que ver con los estudios sobre el estrés.
En el año 2011 Kaschka et. Al., publican un artículo titulado Burnout: A Fashionable Diagnostic
donde hacen un análisis crítico de los estudios encontrados sobre la problemática.
Independientemente de lo abarcativo del estudio y del punto desde donde se hacen las
consideraciones, puede decirse que el mismo es exhaustivo en cuanto al material estudiado (852
publicaciones), donde entre otras cosas se señala que el síndrome de Burnout a nivel médico no es lo
suficientemente sólido, que no se tiene base científica para ser considerado una patología y que falta
un largo camino a recorrer para que el constructo Burnout quede establecido con base sustentable,
tanto en su clasificación diagnostica y el modo en que debería ser tratado, así también como en su
diagnóstico diferencial.
La segunda consideración la encontramos que la relación entre Proyecto de Vida y Proyecto
Laboral (o Proyecto de Vida Laboral) prácticamente no es tratada en los estudios sobre síndrome de
Burnout y observamos esto como una falta de aportes de la psicología social al estudio de la
problemática.
No es este último un punto que abordaremos aquí, aunque sobre el final del articulo vamos a
hacer algunas reflexiones que nos lleven a este tema poco tratado en los estudios de Burnout,
básicamente cuando reflexionemos sobre la idea de Value (Valores) considerada en los estudios de
Maslach y Leiter (1997; 1999) sobre finales del siglo XX.
A continuación vamos a hacer una síntesis del trabajo de investigación realizado entre los años
2008 y 2011 en enfermeras de hospitales públicos de la ciudad de Rosario.
A lo largo de estos 4 periodos se realizó un estudio con un abordaje metodológico cuali-cuantitativo,
considerando apropiada la estrategia de triangulación e interpretación de datos para comprender la
problemática de forma sustancial. (Vasilachis de Giardino; 1992).
MATERIAL Y MÉTODO.
Entre los años 2008 y 2011 fueron estudiadas cohortes de trabajadores de enfermería de
hospitales públicos de la ciudad de Rosario, el estudio puede ser definido como un estudio de tipo
transversal (cross-sectional study), no obstante, como el periodo de tiempo es extenso puede ser
considerado parcialmente un estudio de tipo longitudinal. Las muestras fueron obtenidas a través de
un método aleatorio simple, todos los participantes se integraron al estudio de forma voluntaria,
gratuita y anónima.
El relevamiento cuantitativo se realizo con el M.B.I. H.S.S., se hizo en un total de 12 grupos de
diferentes efectores de salud (2 en el año 2008, 3 en el año 2009, 4 en el año 2010 y 3 en el año 2011)
y se complemento con la instrumentación de un total de 15 entrevistas en profundidad (3 en el año
2008, 4 en el año 2009, 4 en el año 2010 y 4 en el año 2011), las entrevistas se realizaron en los
mismos establecimientos donde se instrumento el inventario. (Taylor y Bodgan; 1986).
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Paralelamente se hicieron observaciones de los diferentes centros estudiados, así también como
contactos informales con los directivos y jefes de áreas, muchos de los datos recogidos en estas
instancias cobraron relevancia en el momento del análisis.
El Maslach Burnout Inventory (MBI) es el cuestionario más utilizado en los estudios
epidemiológicos sobre el síndrome de Burnout, algunos autores sugieren que más del 90% de los
estudios se hicieron con el mismo.
Fue elaborado por Maslach y Jackson en 1981 y plantea que el Síndrome de Quemarse por el
Trabajo posee una estructura compuesta por 3 síntomas: Agotamiento Emocional (cuando las
personas sienten que ya no pueden dar más a nivel afectivo), Despersonalización (actitudes y
sentimientos negativos hacia personas a las cuales brinda su trabajo y con las que comparte en
ambiente laboral, llegando a conductas Cínicas) y Baja Realización Personal en el trabajo (cuando el
profesional se ven insatisfecho con sus logros laborales). Cabe agregar que el desarrollo de este
instrumento tuvo una gran influencia sobre el SQT (Síndrome de Quemarse por el Trabajo, en una de
sus traducciones al castellano más conocidas), ya que la definición que se adoptó para delimitarlo
corresponde a las disposiciones del M.B.I.
En el año 1981 Maslach y Jackson especificando la definición dada en el año 1976 definen el
Síndrome de Burnout como un síndrome de cansancio emocional, despersonalización y reducción de
la realización personal (Maslach y Jackson, 1981). Esta coincidencia entre la definición y la
instrumentación fue muchas veces observada de forma negativa por diferentes autores, ya que la
definición del síndrome se ve opacada por la instrumentación del mismo, no permitiendo nuevos
aportes conceptuales.
El M.B.I. (Maslach Burnout Inventory) plantea al sujeto una serie de enunciados sobre los
sentimientos y pensamientos en relación a su interacción con el trabajo. Está conformado por 22 ítems
que se valoran con una escala tipo Likert. El sujeto valora, mediante un rango de 6 adjetivos que van
de nunca a diariamente, con qué frecuencia el trabajador experimenta cada una de las situaciones
descritas en los ítems.
Estos 22 factores corresponden a las tres dimensiones a partir de las cuales se mide el
Burnout. La dimensión de Agotamiento Emocional (Emotional Exhaustion) (EE) está formada por 9
ítems que refieren la disminución o pérdida de recursos emocionales y describen sentimientos de estar
saturado y cansado emocionalmente por el trabajo; la dimensión Despersonalización
(Despersonalization) (D) está formada por 5 ítems que describen una actitud de respuesta fría,
impersonal, con falta de sentimientos e insensibilidad hacia los sujetos objeto de atención (que muchas
veces se extiende a los compañeros de trabajos y jefes); y la dimensión Realización Personal
(Personal Accomplishment) (PA) está compuesta por 8 ítems que describen sentimientos de falta de
competencia y de eficacia en el trabajo, así también como evaluar el propio trabajo de forma negativa y
vivencias de insuficiencia profesional y personal.
Altas puntuaciones en las subescalas de Agotamiento Emocional y Despersonalización y bajas
en la subescala de Realización Personal se corresponden a elevado riesgo de vulnerabilidad al
síndrome de Burnout. Un llamado de atención muchas veces encontrado en la literatura es que se
deben mantener separadas las puntuaciones de cada subescala y no combinarlas en una puntuación
única, ya que no está claro si las tres pesan de igual modo para una puntuación única o que peso
específico tienen cada una en relación al total.
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El instrumento M.B.I.-H. H. S., original fue modificado para la realización de nuestro trabajo de
investigación, incluyendo sobre el final del mismo un apartado optativo de observaciones, del mismo
se recolectaron sugerencias hechas por los actores participantes, material que utilizamos luego para
hacer más exacta la interpretación y darle consistencia semántica a las conclusiones.
En este trabajo nos propusimos algunos objetivos que sirvieron de guía a lo largo de todo el
proyecto, ellos son:
Medir y evaluar a través del M.B.I.-H.H.S., la prevalencia del Síndrome de Burnout en
enfermeros de hospitales públicos de la ciudad de Rosario.
Identificar relaciones significativas entre las cohortes en los periodos de tiempo estudiados.
Reconocer las posibles relaciones existentes y preexistentes a nivel social y organizacional que
posibilitan el síndrome de Burnout.
Sensibilizar a las direcciones generales tanto administrativas como ejecutivas sobre la
problemática del Síndrome de Burnout en los distintos niveles y ámbitos.
Potenciar la descripción de los trabajadores de enfermería con respecto a su salud en el ámbito
donde se desenvuelven.
Potenciar los estudios del Síndrome de Burnout a partir de nuevas y más precisas
investigaciones en el área.
Potenciar a partir de los resultados obtenidos la planificación de programas de prevención e
intervención a nivel de los colectivos de trabajo estudiados.
A lo largo de los 4 periodos estudiados se hizo un relevamiento de trabajadores de enfermería
de los 7 centros de salud más importantes de la ciudad de Rosario. En los mismos se administraron a
las diferentes muestras un total de 512 inventarios con una tasa de respuesta del 73% con un total (N)
de 370 cuestionarios validos.
Para determinar la estructura interna del M.B.I. se procedió a realizar un análisis factorial
exploratorio, método de ejes principales con rotación Varimax y criterio Kaiser, para la selección de
actores con valores propios superiores a 1 (criterio de inclusión: saturación de los ítems en los factores
superior a 0,30). Para medir la fiabilidad o la consistencia interna se usó el coeficiente alfa de
Cronbach para cada una de sus dimensiones.
Finalmente, se estudiaron los descriptivos básicos de cada ítem y de las dimensiones que
conforman el síndrome. Se utilizó el paquete estadístico SPSS y se realizó un análisis factorial
confirmatorio para el que se empleó el método de estimación de máxima verosimilitud en el análisis de
la matriz de correlaciones. Las varianzas de las variables latentes se fijaron en 1 y las varianzas de los
términos de error fueron especificadas como parámetros libres. Además, se consideró la posibilidad de
que hubiera un factor de segundo orden que explicara de forma global las dimensiones del constructo.
RESULTADOS
Los valores de las medias generales en los trabajadores de enfermería son: Cansancio Emocional
25,95%, Despersonalización 21,17% y Baja Realización 37,65%.
En la tabla siguiente se presentan los resultados por cohorte:
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Latinoamérica (Argentina, Guatemala, México, Perú y Colombia, entre otros) y en España. La media
general de la investigación para Cansancio Emocional fue de 24,5.
La nota a resaltar en esta investigación es que los valores más alto en las dimensiones fueron los
obtenidos en Argentina y España, en Argentina el Cansancio Emocional obtuvo una puntuación de 27
(la más alta) seguida de España con 26,1, en ambos casos más alta que la media obtenida en nuestra
investigación. Respecto a la dimensión Despersonalización la media general de dicha investigación es
de 7,6, aquí el país con valor más alto es España con 8,5 seguido de Argentina con 8,3, ambos valores
muy por debajo de los obtenidos por nosotros. Respecto a la Realización Personal la media general
obtenida por Grau es de 37,7, y donde encontramos a España con la puntación más baja (menos
realizados) con 35,7 seguido de Argentina con 36,6 (también en primero y segundo lugar) con
puntuaciones muy similares a las encontrada en nuestro trabajo (37,65).
También incluimos en la tabla comparativa los trabajos de Del Campo Romero et al s/f con 71
enfermeras de diálisis de Cadiz, que incluye un cuadro comparativo de profesionales de enfermería y
médicos de diferentes investigación en España, entre ellos el citado de Gil-Monte, también el trabajo
de Albaladejo et al (2004) en un hospital de Madrid que incluye 622 sujetos repartidos entre
enfermeros y auxiliares de enfermería, el trabajo de Ortega Herrera et. al. (2007) realizada en
realizado con 119 profesionales de la salud del cual 61 son personal de enfermería de un centro
cancerológico de la ciudad de Veracruz (México), también el trabajo de Puialto Duran et. Al (2006) en
el Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (5 hospitales) con un total de 175 enfermeros que
incluye una tabla (pag. 9) con las diferentes puntuaciones en cada uno de los hospitales.
Finalmente incluimos un estudio realizado en Tubarao, en el estado de Santa Catarina al sur de
Brasil, realizado por Souza Moreira et, al, en el año 2009, donde se aplico el M.B.I para personal de
salud, sobre una muestra de 151 enfermero de distintos sectores de un hospital, con resultado medios
de 17 puntos para Cansancio Emocional, 7,79 puntos para la dimensión de Despersonalización y 36,6
puntos para la dimensión de Baja Realización, cabe señalar que los autores señalan que la puntuación
obtenida para las dimensiones de Cansancio Emociona y Despersonalización son consideradas bajas,
e incluyen en el articulo una tabla con los cortes según niveles bajo, medios y altos (Pag. 1563). (Un
punto que aquí no vamos a tratar son los valores utilizados por los distintos autores para considerar
caso de Burnout, los puntos de cortes utilizados o criterios y hasta que punto puede ser considerado el
M.B.I., como instrumento de valor diagnostico clínico).
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Como puede observarse la fluctuación de la variable de Cansancio Emocional está por encima de
los 17 puntos, en las investigaciones presentadas varia de algo más de 10 puntos a más de 27.
La variable Despersonalización fluctúa en un rango de más de 18 puntos, desde algo más de 3
puntos (en la investigación de Ortega Herrera) a más de 21 en la nuestra.
Por su parte la Baja Realización fluctúa en más de 20 puntos, desde un 20,8 en la investigación de
Albaladejo a 40,14 en la de Ortega Herrera.
Concluimos que tomando en cuenta los valores presentados en la tabla el personal de enfermería
estaría en una media de Cansancio Emocional de 20,21, de Despersonalización de 9,38 y de Baja
Realización de 35,33 puntos.
No podemos dejar de mencionar aquí como referencia el trabajo de Fernandez Sanchez et al
(2011) sobre el estado del arte en trabajadores de enfermería, en el se pasa revista a 15
investigaciones y comparan las medias de las dimensiones de Burnout, tomando trabajos no solo de
países latinoamericanos e Hispanoparlantes sino también de EEUU e Iran, donde se concluye que
cada investigador toma criterios propios y eso dificulta el trabajo de establecer comparaciones.
Complementario al análisis cuantitativo se realizo un abordaje cualitativo de análisis de las
entrevistas realizadas, el mismo se realizo de tres modos diferentes para poder profundizar lo dicho el
personal entrevistado.
El primer análisis se presenta como un análisis de contenido, donde básicamente se pone en
juego las ideas principales que los sujetos tiene respecto a su vida y su trabajo, así también como con
respecto a su salud, ya que los mismos son considerados (y se consideran) personal responsable de
la salud. Junto a esto se logro un análisis secundario sobre algunos temas importantes como la
formación recibida, opinión sobre el lugar de trabajo, la estructura de la organización y la función que
cumplen como parte de la misma, también sobre problemas sensibles en su vida laboral, como el
compañerismo, la relación con los jefes y con el público en general.
Un segundo análisis se apoyo parcialmente los lineamientos de Maslach y Leiter (1997; 1999),
mediante el cual se intento obtener indicadores respecto de las 6 áreas de la vida laboral (Worklife) en
las organizaciones.
Las 6 áreas implicadas son: Workload (o work overload) haciendo referencia a los límites de la
carga laboral (sobrecarga), el Control (lack of control) pone el acento en el desempeño del rol, los
conflictos que se suceden en el desempeño del mismo y la ambigüedad a la que es sometido en
trabajador en su tarea, Recompensa (reward insuficient) refiere no solo a la recompensa material sino
también simbólica, falta de reconocimiento social (o estatus) y organizacional, Comunidad
(breackdown in community) observa la construcción de los lazos sociales, la calidad de las
interacciones, la posibilidad del trabajo en equipo y el apoyo (soporte) mutuo de los individuos en la
organización y la sociedad, Justicia (absence of fariness) son las percepciones de injusticia o
inequidad dentro del ámbito de trabajo, y finalmente los Valores (conflicting values) que mapea las
ideas (motivaciones y expectativas) puestas en juego por parte de las personas en relación a la
organización, básicamente afectando la atención en el trabajo que tiene que realizar, los desajustes
producidos entre la atención a sí mismo y al trabajo y el compromiso requerido por la organización.
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Este último punto fue tomado con más detalle ya que a nuestro entender es el más importante, porque
articula el llamado Proyecto de Vida con el Proyecto Laboral en práctica cotidiana.
Cabe destacar que el Areas of Worklife Scale (AWS) y los 29 ítems que la componen fue tomada
como valores de referencia y no fue utilizada con fines estadísticos.
Un tercer análisis incorporo los comentarios incluidos en los cuestionarios, tomados de un
apartado optativo que fue creado por nosotros a tal fin (como ya señalamos), las observaciones
hechas en el momento de hacer entrevistas y administrar el inventario y también utilizamos la escala
Likert como diferencial semántico (básicamente en el análisis del reactivo 20 (Me siento acabado).
Dos observaciones generales surgen del análisis global de las entrevistas, una es el papel que
juega la estructura de la organización y el funcionamiento en general de la misma, esto apareció de
diversos modos dentro de las entrevistas realizadas, en general se hace referencia a la percepción del
desempeño del rol dentro de la organización de parte del trabajador y en este punto se acepta a
regañadientes que la organización no aprecia el trabajo realizado, aunque muy pocos señalan como
responsable directo a la institución, o la estructura y funcionamiento de la misma, ven más a la
institución como otra víctima de la situación social (frases como -esta todo igual, o -alla afuera esta
cada vez peor, van en esta línea).
Por otro lado no se observo en el análisis de las entrevistas en su conjunto que los trabajadores
den una importancia fundamental al proceso de trabajo o la tarea que realizan como condiciones para
el desarrollo del síndrome de Burnout, en este sentido, en algunas entrevistas la idea de estrés laboral
estuvo puesta en juego, relacionada con diferentes síntomas y actitudes, principalmente trastornos del
sueño, problemas gastro intestinales y automedicación (también en menor medida consumo de café,
mate y cigarrillos), interpretamos esto como un mecanismo de defensa colectivo (o ideología
defensiva, en el sentido que Dejours le atribuye al termino) y a la falta de información sobre el
síndrome de Burnout. Se noto en muchas entrevistas que el personal maneja las formas y el camino
de ingreso a las denominadas carpetas medicas, el cual no les seduce y en un sentido general y muy
vago, lo ven como una debilidad del propio sujeto que poco tiene que ver con el trabajo que realiza.
Tres ejes fundamentales surgieron a lo largo de todas las entrevistas, estos denominadores
comunes intentan sintetizar el trabajo de análisis cualitativo:
El primer eje destaca que el trabajo se ha incrementado en los últimos años, no solo en cantidad
sino en complejidad y en un buen numero de entrevistas (de modos diferente) este comentario estuvo
seguido de una queja (y/o malestar) por la falta de posibilidades para acompañar esa complejidad, asi
también como por la falta de propuestas de formación específica y (en algunos casos) desinterés de
parte de colegas y superiores, en el caso del personal con más años de trabajo, a ese malestar lo
acompaño un gestos de fastidio por esa situación.
El segundo eje común esta centralizado en la falta de interés, prevención y cuidado de la salud de
los trabajadores en general por parte de la institución, de los responsables (autoridades competentes)
y de los usuarios de los servicios. En este punto se destacan los episodios de violencia de todo tipo y
la aceptación general y casi naturalizada de los mismos, muchas entrevistas ponen de manifiesto esta
situación (falta de cuidado y protección de los trabajadores en el lugar de trabajo) básicamente por
parte de las autoridades y responsables de la institución y una conducta de resignación y aceptación
de diferentes acontecimientos violentos ocurridos dentro del propio lugar de trabajo, así también como
una intensión de dejarlos en el olvido.
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El tercer eje hace referencia a la deficiente formación recibida para manejar situaciones en
relación a lo afectivo que necesariamente se pone en juego en el trabajo con personas, este punto
está directamente relacionado con la dimensión Agotamiento Emocional y debe ser donde más se
ponga el acento en el momento de diseñar planes de estudio y planificación de prevención de la salud
de los trabajadores de la salud, muchos entrevistados relacionan esto con la poca practica recibida en
la carrera que los prepara para el ejercicio profesional, así también como una clara falta de control
interno de la calidad de la formación y de información o lineamientos (al menos generales) sobre salud
mental.
A lo dicho podemos agregar mucho mas, en esta línea van nuestros comentarios finales a modo
de conclusión.
CONSIDERACIONES FINALES
Si se considera el núcleo central de síndrome con su estructura trifactorial según (al menos
aparentemente) la amplia mayoría de los investigadores, diremos que la problemática quedaría
reformulada del siguiente modo.
La variable cansancio emocional (agotamiento) puede ser considerada la variable principal, la
misma es una sensación de no poder dar más (o mucho mas) de sí mismo, sensación que en el
trabajo (y en la vida) uno lo dio todo y no encuentra sentido a lo que está haciendo. Una sensación de
extrañamiento de sí mismo, donde algo se perdió y es imposible saber que es para poder recuperarlo.
Poco y nada tiene que ver con el agotamiento físico, de hecho, esos trabajadores no paran nunca de
trabajar, dicen que no pueden hacerlo (textual) y que el trabajo los sostiene.
En esto claramente se diferencia de la depresión (aunque puede ser confundida con alguna de
sus fases). Un estado confusional a nivel afectivo parece haberse apoderado del sujeto, donde los
estímulos que recibe del exterior (en el trabajo y en la vida) no pueden ser vivenciados como positivos
ni negativos y donde el sujeto, en muchos casos, percibe esa no conexión con el mundo afectivamente
hablando. Este es el punto inicial para diferenciarse del estrés, ya que para reencontrarse
afectivamente (sinónimo de encontrarse a sí mismo) y a su proyecto de vida se necesita mucho
tiempo, las licencias por estrés cuando en verdad se trata de Burnout solo agrava la situación del
trabajador.
La llamada variable Despersonalización puede ser entendida como un reacción (por
agotamiento) conductual, evidenciada por actitudes de ironía, mal trato, burla, trato distante y
displaciente. El Cinismo es muchas veces disimulado en el trabajo, sobre todo ante sus superiores y
para no ser sancionados o señalados por estos, pero entre los trabajadores del mismo grupo o
cercanos se percibe, incluso el Cinismo muchas veces es aceptado dentro del propio grupo de
trabajadores y se hace una cultura de esto (muchas veces se tilda a estos trabajadores como
caraculicos, malaonda, siempre enojados, mala leche, etc.). Mucha de esta simulación está dada
también por una actitud compulsiva por el trabajo (probablemente por esto el síndrome de Burnout fue
confundido con conductas obsesivas). En este punto el entrenamiento con técnicas de relajación,
sensibilización y de juegos de roles, pueden ser un puente para encuadrar sus conductas y actitudes
en el trabajo y en la vida cotidiana).
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771
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Este trabajo surge en el contexto de una labor mayor, que toma por eje la cuestión del
masoquismo en la obra de Lacan. En varias ocasiones se ha encontrado cierta propuesta lacaniana
consistente en destacar la necesariedad de establecer una fórmula más homogénea, más unitaria, que
la clásica tripartición freudiana de la década del ´20. Recordemos que, en el texto El problema
económico del masoquismo (1924), Freud diferencia, masoquismo femenino, masoquismo moral,
masoquismo erógeno. Lacan critica esto (digamos, estas “tres formas del masoquismo”), sobre la base
de no encontrar allí un principio claro que justifique la clasificación, es por ello que dice: “(…) aquí
tienen un vaso, la fe cristiana y la baja de Wall Street” (1963, p.119) y señala la conveniencia de
encontrar para el término masoquismo una fórmula más unitaria. Hasta lo que he indagado esta
formulación no se ha plasmado; contrariamente aparecen referencias que apuntan a la pluralidad de
sentido que puede englobar el masoquismo. Así, por ejemplo, en el Seminario X (1962-1963), en la
clase llamada La mujer, más verdadera y más real, y luego de trabajar, en la sesión anterior, el
masoquismo perverso; se lee: “(…) verán ustedes que el masoquismo femenino adquiere un sentido
muy diverso, bastante irónico y otro alcance.” (Lacan, 1963, p. 207) Diré que este alcance se relaciona
con los otros conceptos con los que está en red.
Propongo entonces seguir los caminos reticulados que abre el masoquismo femenino, a partir de
Lacan, no para agotar el tema, cosa imposible, sino para resaltar las asociaciones que abre.
En el Seminario V (1957-1958), se hace referencia al masoquismo femenino indicando que es una
nomenclatura que ha invitado a “errores de perspectiva” (Lacan, 1958, p. 256); consistentes en
considerar que en el vínculo con el hombre, la posición de la mujer tiene que ver con cierto
masoquismo. Semejante conclusión, según el pensamiento lacaniano, muestra más bien el interés del
sujeto masculino, por la posición femenina, pero nada dice en verdad de esa posición. En todo caso, el
masoquismo femenino, es un fantasma masculino.
¿Qué otra cuestión aparece ligada al masoquismo femenino? Pues bien, la referencia de Lacan a
un artículo de Joan Rivière, La femineidad como mascarada (1929).
Estos dos ejes (fantasma masculino y femineidad como máscara) insisten, por lo general, cada
vez que Lacan habla del masoquismo femenino (por ejemplo en el Seminario X y también en el XI).
Debemos suponer alguna justificación en esta insistencia asociativa.
¿Cómo se articulan estos ejes? ¿qué comparten los temas del masoquismo femenino como
fantasma masculino y la mascarada? Una forma de comenzar a dar respuesta a estos interrogantes y
de situar un suelo común a ambos, puede abreviarse también bajo la forma de una pregunta: ¿qué
busca una mujer?
772
VI Congreso Marplatense de Psicología
El fantasma, calificado como masculino, nos muestra su función (o mejor dicho una de sus
funciones ), responder a la pregunta, anteponer una afirmación a la incógnita. El masoquismo aquí, no
es per se la modalidad femenina de vínculo con el Otro, sino una forma fantasmática, esencialmente
masculina, de encontrarle un objeto al enigmático deseo femenino. Solución elegante, pero que se
asienta en un masoquismo imaginado en la mujer. Más allá de este recurso masculino, la pregunta
sigue intacta: ¿qué busca una mujer?
Para decirlo todo, lo que a la mujer le interesa es el deseo del Otro, se interesa en tentarlo,
podemos decir, pescarlo en su deseo, y por tanto, mostrarlo como deseante. “Se tienta tentando”, dice
Lacan (1963, p. 207) y nos recuerda a Adán, a Eva y a la manzana. La máscara “que puede emplear”
para capturar el deseo del Otro, no es un disfraz malicioso, maquiavélico que esconde aún otra cosa,
su “verdadera” femineidad. Desde mi perspectiva, lo que todo el trabajo de Rivière, labor
fundamentalmente clínica, se esfuerza en mostrar es que no se trata de niveles diferentes, del
ocultamiento de un núcleo real por una fachada cosmética, sino que, la femineidad es la máscara. Lo
dirá con todas las letras: “El lector podrá tal vez preguntarse ahora cómo defino la femineidad o dónde
trazo la línea que separa la genuina femineidad de la “máscara”. Sin embargo, mi opinión es que no
existe tal distinción; (…) son una misma cosa.” (Rivière, 1929, en traducción de Velásquez y Ponce de
León, 2007, p. 221)
A continuación haré un breve relato de un caso, que Lacan resume en el Seminario V; sin
embargo, me centraré en el material original, que es el de Rivière.
Se trata de una mujer norteamericana de gran éxito profesional, cosa que en la época (fines del
’20) no era del todo habitual, pero tampoco ya una rareza. Este éxito parecía extenderse a otras áreas
de su vida, era esposa, madre, ama de casa, tenía una rica vida social y cultural. El vínculo con su
marido era excelente y era muy correcta con todas las personas con las que se relacionaba.
Sin embargo esta perfección sin fisuras, pronto demostró ser aparente. Por su trabajo
(propagandístico) tenía que hablar frente a un auditorio, a ello se anudaba cierto grado de angustia, en
ocasiones severo. Destaquemos esto, la angustia sobrevenía luego del acto público. Mostraba, al
tiempo, una importante “necesidad de afirmación” (Rivière, 1929, en traducción de Velásquez y Ponce
de León, 2007, p. 220), que la llevaba a buscar el elogio de los hombres, a posteriori de su
performance. Estos hombres representaban, para la paciente, figuras paternas. Rivière destaca, en
relación a la necesidad de afirmación, dos modalidades, una directa destinada a obtener cumplidos
respecto de su actuación y, otra, indirecta destinada a obtener insinuaciones sexuales de los hombres
en cuestión, a partir de un coqueteo relativamente evidente. Este modo de conducirse de la paciente
no se le presentaba a ella como algo consciente.
Con el desarrollo del análisis es posible reconducir la problemática, a la situación edípica de
rivalidad con la madre, inicialmente, y también con el padre; hombre de letras que luego se dedicó a la
política. Los coqueteos de la paciente respondían a un intento de evitar la angustia, asociada a la
represalia que presuponía por parte de las figuras paternas. Se ofrecía sexualmente al vengador. A su
comportamiento se anudaban sueños y fantasías análogas. En algunos de sus sueños aparecían
773
VI Congreso Marplatense de Psicología
personas con máscaras en sus rostros, lo que les permitía evitar o impedir alguna catástrofe. En otro
sueño se subrayaba el hecho de que la paciente no representaba un peligro para los hombres, que a
la vez la encontraban atractiva como objeto de amor.
Antes de introducir otra referencia clínica, que es susceptible de poner en relación con la
anterior y nos permitirá extraer algunas consideraciones, mencionaré que el camino por el que Lacan
continúa en el Seminario V, en relación con este caso, aborda la vía del deseo, en tanto deseo de
reconocimiento.
El otro caso. Se trata de una paciente de Colette Soler, es un material clínico que la analista
francesa presentó en las Jornadas de EEP, en Málaga en el ´93 y que salió publicado en el libro
Sexualidad femenina (1994).
Esta paciente de Soler vivía lo que ella llamaba “el infierno del descubierto”, “descubierto” lo
usaba en el sentido bancario del término. Su marido ocupaba el rol de proveedor, que restablecía la
cuenta bancaria. El azar desorganizó la vida de esta pareja, cuando ella cobra una pequeña herencia.
Comenta Soler que la paciente refirió: “Yo sabía que él no debía saber sobre mi dinero.”(1994, p. 19)
Esto no se liga únicamente a la herencia, ya que esta mujer contaba en verdad, desde hace años, con
dos cuentas bancarias, pero sólo una de ellas era conocida por su marido y antes que él, por el padre
de la paciente. Siempre había disimulado lo que ganaba, frente a los otros se hacia la pobre, mientras
le fascinaba guardar el secreto de tener. “Esta mascarada (…) utilizaba la ficción de la falta de dinero
como una metonimia de la falta fálica en su valor seductor.” (Soler, 1994, p. 19)
En estas dos breves apelaciones clínicas se muestra como elemento común el tema de la
seducción, el lugar que inconscientemente ocupaban ambas mujer en su relación con los hombres.
A MODO DE CIERRE
En su artículo, Soler menciona que un masoquista y una mujer tienen algo en común: “hacer de
objeto” (1994, p.17). Agregaremos que, es menester considerar cómo entender esto, en un caso y en
otro. Antes de avanzar hay que introducir una aclaración, no estamos diciendo que el deseo
masoquista y el deseo femenino sean lo mismo; ciertamente ambos constituyen un problema, pero son
problemas distintos. ¿Qué anotaremos entonces del lado de las semejanzas?
Decir “hacer de objeto”, y no simplemente decir “ser el objeto”, le permite a la autora subrayar en
el caso de la mujer, la mascarada y en el caso del masoquista, cierta puesta en acto, en tanto que
escena. Esta consideración vale para el “hacer de”, veamos ahora lo que vale respecto del “objeto.”
Interesa ver de qué aspecto del a se trata. Mientras el masoquista, hace de desecho, de piltrafa, lo
echado a los perros (suele decir Lacan), la mujer encarna lo “amable”, en el sentido de susceptible de
ser amado, el brillo fálico, como pudimos ver en los ejemplos recortados; esto es lo que tiene que ver
con lo que se llama objeto agalmático.
(…) el objeto agalmático que sujeta el deseo no obtiene su poder más que de la falta que él
incluye. Este hecho de estructura está en el fundamento de lo que podemos llamar una “mascarada
masoquista”. (…) la mascarada tiene varias facetas. Más a menudo disimula la falta, actuando lo bello
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VI Congreso Marplatense de Psicología
o el tener para recubrirla. Pero hay una mascarada masoquista que, a la inversa, hace ostentación de
la falta, o del dolor, o del dolor de la falta. (Soler, 1994, p. 18)
Vemos, a partir de esta referencia, la extrema conexión entre mascarada y falta; sea por el lado
del recubrimiento, sea por el lado de la ostentación. El caso de la “potente y exitosa” paciente de
Rivière, el caso de la “pobre y endeudada” paciente de Soler. Ambas facetas recalcan lo atrapante del
brillo fálico, en tanto lo que a la mujer le interesa, tal como hemos indicado antes, es el deseo del Otro.
Por otro lado, como contraparte de la pregunta que formulamos hace un momento entorno a las
semejanzas entre masoquismo y femineidad, surge el interrogante por las diferencias… será motor
para otro trabajo.
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Sexualidad femenina. Buenos Aires: EOL.
775
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Estos términos suelen ser utilizados de manera indistinta. Sin embargo, no designan lo mismo,
por ello resulta necesario comenzar este trabajo con una breve definición que permita diferenciarlos.
Comenzamos por destacar que el envejecimiento normal no implica deterioro cognitivo ni
alteraciones neuropatológicas degenerativas. Por lo tanto, se reserva el término declive para definir los
cambios cognitivos que pueden ser esperables con el envejecimiento. Estos cambios no son
patológicos, no comprometen la autonomía de la persona y no interfieren en su vida diaria. El declive
se traduce en una menor eficiencia al realizar tareas intelectuales, estas pueden insumir más tiempo y
más esfuerzo cognitivo pero se alcanza el resultado correcto. Esta declinación tiene como mecanismos
responsables la disminución en la velocidad con que se procesa la información, el declive de la función
inhibitoria y la memoria de trabajo así como la alteración de las funciones sensoriales involucradas en
estos procesos, como pueden ser la vista y la audición (Park, 2002). Sin embrago, se hace necesario
un análisis más complejo de estos cambios que integre en su comprensión aquellos procesos que
facilitan, con la edad, el procesamiento de las tareas cognitivas (Dixon, 2002).
El deterioro cognitivo consiste en la alteración o cambio de distinto grado en las funciones
psicológicas tales como la memoria, orientación, lenguaje, reconocimiento, regulación conductual y/o
funciones ejecutivas. Según el grado en que se presenta este deterioro y fundamentalmente según el
impacto funcional va a encuadrarse como deterioro cognitivo leve (DCL) o síndrome demencial.
776
VI Congreso Marplatense de Psicología
El DCL es una condición patológica, no es un proceso normal asociado a la edad, que describe
un déficit cognitivo pero de severidad insuficiente para cumplir con criterios de síndrome demencial,
principalmente, al no verse afectada la capacidad de la persona para continuar de manera
independiente sus actividades cotidianas.
En cambio, el término demencias o síndrome demencial se reserva para definir al deterioro
adquirido de las funciones cognitivas y/o conductuales cuando el mismo es de tal magnitud que
interfiere en las actividades de la vida diaria.
Tanto en el DCL como en las demencias se pueden encontrar diferentes explicaciones
etiológicas. Por ello en su evaluación se tendrá en cuenta la detección del síndrome junto con la
identificación de los factores que lo explican (Arizaga, 2011).
777
VI Congreso Marplatense de Psicología
teóricos que se refieren al trabajo con adultos mayores y menor aún los contenidos que hacen
referencia al rol del psicólogo tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de estas alteraciones
cognitivas.
En este contexto de escases -al menos en nuestro medio- de formación gerontológica en las
carreras de grado, de escasa producción teórica y de investigación con respecto al trabajo con adultos
mayores y del subsiguiente desconocimiento y poco interés de los egresados con respecto al trabajo
con esta franja etaria y menos aun del trabajo con estas patologías, se desdibuja o desvanece el rol
del psicólogo en estos casos.
Al mismo tiempo, la formación clínica que prevalece no brinda herramientas para el abordaje
concreto de pacientes que presentan estas características, dejando esta área como un espacio de
vacancia a la que el psicólogo deberá acceder luego en formaciones de posgrado.
Si bien actualmente se observa una tendencia hacia revertir esa condición, continúan prevaleciendo
una serie de oscuridades con respecto a este área de trabajo o aspectos de intervención poco
visibilizados.
Si sumamos a ello la prevalencia aun vigente de ciertos estereotipos negativos con respecto a
la vejez, lo que transforma al trabajo con adultos mayores en un área “poco interesante” o con “pocas
posibilidades de intervención”, nos encontramos indefectiblemente con un espacio en el que los
psicólogos no hallarán su campo de inserción profesional y no generarán sus aportes.
778
VI Congreso Marplatense de Psicología
neuropsicológica es mucho más que la simple administración de pruebas (Grillo y Mangone, 2006).
Durante la entrevista el psicólogo puede desempeñar diferentes funciones, en algunos casos las
personas concurren a causa del “temor” por cambios cognitivos que, durante la evaluación, se
detectan como cambios acordes a la edad o motivados por causas psicológicas como pueden ser el
estrés, la ansiedad, la depresión u otros factores que alteran el funcionamiento normal de las
habilidades cognitivas. En esas situaciones el psicólogo podrá cumplir un rol psicoeducativo,
informando sobre el funcionamiento de la cognición y favoreciendo la reformulación del motivo de
consulta, lo que llevará eventualmente al inicio de un tratamiento psicológico o a la implementación de
otras estrategias que permitan implementar cambios.
En cualquier caso, la persona que atraviesa una evaluación cognitiva concurre con un grado de
expectativa que puede generarle ansiedad o inquietud. Será importante generar un clima propicio para
que, tanto la persona como el familiar que lo acompaña se sientan escuchados y contenidos. Esto
permitirá que la entrevista pueda realizarse de manera fluida, pudiendo evaluar y realizar algunas
intervenciones sobre lo observado guiando el relato de las personas que consultan para obtener
información relevante acerca de los distintos aspectos que requieren ser considerados.
779
VI Congreso Marplatense de Psicología
El tratamiento, como se indicó, deberá planificarse para cada paciente en función del
diagnóstico y teniendo en cuenta variables personales, familiares, económicas y sociales. En lo que
respecta al diagnóstico, el tratamiento no será el mismo para un paciente cuyos cambios cognitivos
puedan deberse a un trastorno de base como puede ser la depresión o la ansiedad, o para un paciente
en que el deterioro cognitivo es la base para la aparición de síntomas psicológicos. Tampoco será
igual el tratamiento en el caso de las demencias, este tendrá variantes en función de los diferentes
tipos de demencia y en función del estadio en que se encuentra la misma.
En el caso de pacientes en los cuales el diagnóstico permite pensar en la presencia de
deterioro cognitivo debido a otras alteraciones psicológicas (trastorno depresivo o de ansiedad) el
tratamiento estará orientado al trabajo sobre estas patologías, lo que permitirá la remisión parcial o
total de los cambios cognitivos por los cuales se había iniciado la consulta. Un estudio realizado por
Derouesnè (1989) permitió establecer que de las personas mayores que manifestaron problemas de
memoria el 20% presentó resultados alterados a causa de ansiedad o depresión asociada a cambio de
roles y status o a pérdidas sociales más que a un verdadero déficit.
Cuando a partir del diagnóstico se considera que la causa de los cambios a nivel cognitivo no
se deben a un trastorno afectivo, la intervención recaerá sobre otros aspectos. En este caso podemos
encontrar que la persona comienza a experimentar síntomas de ansiedad o depresión luego de
experimentar los primeros cambios a nivel cognitivo, allí será importante el tratamiento psicológico
para que la persona pueda elaborar dichos cambios.
En la demencia las intervenciones también tendrán sus variantes, principalmente teniendo en
cuenta el estadio de la enfermedad. En los estadios iniciales el trabajo terapéutico podrá realizarse con
el paciente quien muchas veces necesita elaborar lo que le pasa y desea pensar estrategias a seguir
en el plano familiar, social y laboral. A medida que la enfermedad avanza el trabajo con la familia o su
entorno se transforma en un pilar fundamental. Este abordaje familiar no deja por fuera a la
intervención con el paciente, pero en este caso serán las personas encargadas de acompañarlo
quienes podrán realizar cambios en su vida cotidiana que mejoren la calidad de vida de todo el grupo y
por ello el trabajo terapéutico se realiza en función del paciente incluyendo a las personas de su
entorno. El tratamiento terapéutico que incluye al paciente y a las personas de su entorno puede
desarrollarse de manera individual y/o grupal, existen numerosas experiencias de trabajo grupales que
merecerían una consideración aparte dado el poder de esta dinámica y el desarrollo que ha merecido
la misma en el contexto latinoamericano (Berriel, 2003).
Ambos tipos de intervención se encuentran dirigidos a: brindar herramientas para mitigar los
cambios o fortalecer al núcleo familiar ante ellos, promover modos de interacción saludables ya que en
general se observa una interacción inapropiada ocasionada por el desbalance entre los recursos del
sujeto y las demandas del ambiente (se le pide más de lo que puede o menos de lo que es capaz),
asesorar sobre modos de comunicación más funcionales, permitir la elaboración de duelos que
comienzan a partir de la percepción de ciertos cambios, favorecer la resolución de conflictos familiares
que pueden surgir en torno al cuidado, promover el cuidado del cuidador evitando la sobrecarga,
colaborar en la planificación de rutinas diarias, facilitar la toma de decisiones, informar sobre recursos
de apoyo formal disponibles en la localidad, trabajar sobre estrategias de resolución en situaciones
concretas que generen dificultad, permitir la elaboración de emociones que pueden formar parte del
proceso, como ansiedad, miedo, agotamiento, culpa, negación, enojo, frustración, entre otras.
780
VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
La finalidad de este trabajo fue alcanzar al estudiante de psicología una descripción del aporte
que se puede realizar desde el rol en el diagnóstico y el tratamiento de personas con deterioro
cognitivo leve y demencia y alertar sobre la importancia de tener en cuenta esta labor de cara al futuro.
En muchos casos, somos los terapeutas quienes comenzamos a escuchar dudas o quejas con
respecto al funcionamiento de la memoria y será necesario conocer el canal de derivación necesario
para que esa persona pueda realizar una correcta evaluación cognitiva. En otros casos, el terapeuta
podrá formar parte de equipos interdisciplinarios donde él también tendrá parte en esta evaluación y
posterior tratamiento. Este trabajo habrá cumplido su objetivo si despertó la curiosidad o el interés
sobre este posible campo de aplicación sobre el que aún la psicología deberá seguir dando sus
aportes.
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781
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Toda persona que intente desempeñarse como terapeuta tendrá a su favor ciertas condiciones
naturales (como su disposición empática o sus capacidades de atención y comprensión) y podrá, a su
vez, incorporar un conjunto de habilidades como resultado de un aprendizaje sistemático (Hill &
O’Brien, 1999; Hill et. al. 2007).
El proceso de la psicoterapia surge como resultado de una interacción. El beneficio que puede
obtenerse con su administración depende, por ende, de lo que hagan ambos participantes, el paciente
y el terapeuta. No debe esperarse que el entrenamiento del terapeuta asegure el resultado del
tratamiento, aunque es lógico suponer que la calidad de la formación facilita que, ante favorables
condiciones del paciente, se alcancen mayores logros.
La formación de terapeutas está orientada a adquirir herramientas básicas y comunes a
cualquier psicoterapia como paso previo a incorporar el manejo de los procedimientos reclamados por
las aplicaciones específicas.
Los componentes fundamentales a considerar en la formación y entrenamiento de los
terapeutas incluyen:
• Aprender teoría de la psicoterapia
• Entrenarse en la práctica clínica
• Trabajar sobre sí mismo
El objetivo final del programa de entrenamiento es garantizar que la acción del terapeuta
facilite que se alcancen los mejores logros como producto del proceso terapéutico, y que dicho
proceso se realice dentro de los límites de máxima seguridad para el paciente y de la adecuada
protección para la persona del terapeuta.
Es necesario que el terapeuta aprenda sobre sí mismo y encuentre caminos apropiados para la
auto reflexión, no solo para potenciar su trabajo sino para asegurar su cuidado personal. Por tratarse
de un trabajo emocionalmente tóxico, en que el profesional está expuesto a situaciones de sufrimiento,
ira, crueldad, etc., es alto el riesgo de burnout. El desgaste psíquico suele ser muy insidioso, ya que el
estímulo estresante no es visible y sus efectos impactan en la calidad del trabajo clínico generando
distintos grados de malestar.
782
VI Congreso Marplatense de Psicología
Hill y Lent (2006) notaron que la investigación temprana en los componentes del entrenamiento
se enfocaba en la instrucción, modelado, práctica y retroalimentación. La instrucción (ej: un buen libro
y lecturas estimulantes en habilidades de ayuda) ofrece una sólida base de conocimiento para
comprender las habilidades. El modelado brinda ejemplos para que los alumnos puedan adquirir
competencias a través de demostraciones de psicoterapeutas expertos. Además, favorecer la
observación de sus pares en acción también es un modelado valioso para el desarrollo de habilidades
terapéuticas.
La Facultad de Psicología en convenio con la Fundación Aiglé ofrece desde el año 2006 y de
manera ininterrumpida una Carrera de Especialización en Psicoterapia Cognitiva. Distintas versiones
de este programa de formación y entrenamiento diseñado por la Fundación Aiglé se dictan
actualmente en 8 ciudades del país y en Asunción del Paraguay. Además, a través de un sistema por
internet, cursan el posgrado alumnos de todo el país.
Específicamente, el programa de formación y entrenamiento se orienta al desarrollo de
competencias terapéuticas y está estructurado jerárquicamente por niveles de complejidad creciente.
Por un lado desarrolla cuatro aspectos formativos, que constituyen los fundamentos teóricos: a) Teoría
de la psicoterapia, b) Teoría general de los procesos disfuncionales, c) Niveles de los procesos
disfuncionales, y d) Evaluación de la psicoterapia.
Asimismo desarrolla cuatro competencias que constituyen el eje de las operaciones de toda
psicoterapia: entrevista, diseño de tratamiento, intervenciones y evaluación. El dominio de la
entrevista, contempla una serie de acciones dirigidas a las siguientes finalidades: el establecimiento de
la relación terapéutica, el ajuste de mecanismos atencionales, la regulación de los aspectos
emocionales y la identificación de los objetivos.
El diseño de tratamiento supone concentrar el aprendizaje en dos acciones complementarias: el
juicio clínico y la selección de intervenciones.
Las intervenciones hacen referencia a los criterios de elección dentro del menú de opciones y
de técnicas posibles (orientadas al insight, a la expresión, a los cambios de conducta o
interaccionales).
Aprender a evaluar la marcha de un proceso de psicoterapia es la habilidad que completa el
entrenamiento, ya que supone la revisión de todo el proceso terapéutico -tanto de la calidad de la
relación terapéutica, como del ajuste de las aplicaciones-.
Cada año el programa se actualiza en función de los desarrollos de la disciplina basados en la
investigación, de los requerimientos cambiantes del contexto en cuanto a los servicios que pueden
brindarse, y de la evaluación de los alumnos sobre su experiencia personal durante la cursada.
En 2013 se puso en marcha un proyecto de investigación dirigido a evaluar el nivel de
satisfacción de los graduados con respecto al programa, específicamente en relación a su utilidad para
la práctica profesional. La finalidad fue obtener feedback acerca de los beneficios y limitaciones del
posgrado con el fin de realizar los ajustes necesarios para optimizar su rendimiento.
METODOLOGÍA
783
VI Congreso Marplatense de Psicología
Se llevó a cabo un estudio cuanti-cualitativo. El primer paso fue desarrollar un cuestionario para
evaluar el beneficio que los estudiantes del posgrado estimaron haber obtenido del programa de
entrenamiento.
PARTICIPANTES
La muestra total procedente de diferentes ciudades del país fue de N= 404. El 82,2% de la
muestra fueron mujeres y un 17,8% hombres, con una media poblacional de 37,02 años. El 95,8% con
título de grado en psicología, un 3,5% en medicina y un 1,7% en otras disciplinas (fundamentalmente
psicopedagogía). Los terapeutas presentaron una amplia variabilidad en sus años de experiencia
(rango 1-40 años; Modo = 4 años). También se registró gran variabilidad en cuanto a la cantidad de
pacientes asistidos (rango 3-60). El 63% informó haber realizado entrenamientos previos.
PROCEDIMIENTO
1) Para la construcción de los ítems del cuestionario se realizó una entrevista en profundidad a
5 graduados del posgrado que exploró lo siguiente:
Aspectos del posgrado más útiles para la práctica clínica
Cambios observados en la propia práctica a partir del entrenamiento
Recursos que también le hubiera resultado útil recibir
A partir de estos datos se diseñó la versión final del cuestionario que incluyó 10 preguntas
sobre datos sociodemográficos y 21 preguntas de evaluación.
2) El cuestionario fue enviado electrónicamente a 1004 graduados desde 1999 a 2013, que
completaron el proceso de entrenamiento con la siguiente consigna:
Nos ponemos en contacto con usted en el marco de la construcción de una Red Nacional de
Psicoterapeutas entrenados con nuestro modelo teórico-clínico. Actualmente estamos llevando a cabo
una investigación sobre la influencia que ha tenido la carrera de postgrado en la práctica clínica. Por
este motivo solicitamos su colaboración respondiendo un breve cuestionario disponible on-line.
RESULTADOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Otra metodología de mucha utilidad fue la inclusión de entrevistas videograbadas que alcanzó un
66,8% de respuestas altamente satisfactorias y para el 29% de bastante utilidad.
En segundo lugar resultaron las viñetas clínicas una de las dos metodologías valoradas entre
útiles y muy útiles por los terapeutas en un 91,8% de los casos (Figura 2).
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Finalmente, el 88,6% de los terapeutas consideraron que las discusiones de casos resultaron
útiles o muy útiles como recurso para el aprendizaje (Figura 4).
b) Sistema de evaluación
Este ítem resultó bastante útil en un 48,3% y muy útil para un 20,3%.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
c) Diagnósticos clínicos
Un 62,4% los consideró de bastante utilidad la capacidad de realizar diagnósticos de un modo
más preciso y un 29% de mucha utilidad.
e) En cuanto al cuidado de sí mismo la categoría más destacada fue la de bastante utilidad con el
48% y solo en un 24,3% mucha utilidad.
CONCLUSIONES
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Desclée de Brouwer.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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special section. Psychotherapy Research, 16, 261-267.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Actualmente se sabe que las teorías que han adquirido mayor influencia en la promoción del
proceso de construcción de conocimientos y saberes significativos son aquellas que están asociadas a
los principios de educación experiencial y del aprendizaje colaborativo. Estas modalidades formativas
se encuadran en un enfoque centrado en el pensamiento y afectividad del estudiante. Están orientadas
a suscitar el logro de una autonomía creciente en la adopción de la toma de decisiones, proponiendo
con este objetivo, experiencias de aprendizajes basadas en la reflexión del alumno. En esta línea de
formación se busca la articulación entre la teoría y la práctica, los individuos, la institución y los
contextos, que son clave para la construcción del conocimiento profesional.
Este proceso formativo se vincula con constructos teóricos referidos a la metacognición,
motivacion (Ugarterxea, 2001), la evaluación formativa (Camilloni, 2004) la comprensión crítica
(Cassany, 2005), el cambio conceptual (Pozo, 1999), los sistemas de creencias e ideologías.
La formación profesional implica la consecución de un trayecto (Anijovich, R. y Mora, S., 2012),
concepto muy utilizado en la bibliografía pedagógica francófona- que hace referencia no solamente a
un proceso vivencial que se continúa en el tiempo, sino también que ese recorrido compromete a la
totalidad de la persona y por tanto, posee un carácter diferenciado o individualizado. Entonces tanto la
secuencia como la continuidad son atributos del trayecto, ya que ambos otorgan al proceso formativo,
puntos de partida y puntos de llegada, de pasaje de una etapa a otra, un tránsito que se realiza y
alcanza un grado efectivo de profundidad en la transformación del sujeto que aprende.
El dispositivo pedagógico utilizado para llevar a cabo este trayecto está referido al constructo
construido por Michel Foucault (Foucault, 1991), definiendo la función metodológica de este concepto
por su capacidad para relacionar elementos heterogéneos y analizar de qué manera los resultados de
su interrelación producen estructuras de poder, conocimiento y subjetividad en una formación histórica
determinada. En la pedagogía francesa, su uso se ha extendido, entendiendo al mismo como un
conjunto de actividades pedagógicas que se integran formando un conjunto coherente, que se
combinan intencionadamente para facilitar un aprendizaje. Se entiende entonces al dispositivo tanto en
su aspecto organizativo de los medios pedagógicos, como en su dimensión afectiva de promoción de
una actitud, tendencia o disposición en los sujetos durante el proceso de formación. En este proceso el
desafío es diseñar propuestas que potencien la capacidad de los estudiantes, futuros profesionales de
la psicología, para la reflexión en y sobre la acción.
En este encuadre teórico se considera al sujeto de la formación de un modo integral, es decir,
con su mundo interno, sus emociones, sus afectos, sus experiencias, sus implicaciones, su sistema de
creencias, sus ideologías. Concomitantemente se entiende a la formación como un proceso complejo,
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VI Congreso Marplatense de Psicología
cuyo entramado se conforma por las interacciones entre el o los formadores, el y los estudiantes, su
objeto de estudio y su ámbito de trabajo en un contexto socio histórico determinado.
El origen etimológico del término formación, proviene del latín formatio, -onis, cuyo significado
es “acción o efecto de formar o formarse”, y la base de la expresión es forma, entendida como “la
configuración externa o modo de proceder en algo”. Entonces formar es algo que tiene que ver con la
forma, por lo tanto, formarse, se relaciona con adquirir una forma. En este caso la forma se vincula con
la construcción del rol del profesional psicólogo, en torno a la adquisición de un conjunto de saberes,
actitudes, competencias, procedimientos para poder cumplir con las tareas requeridas para ejercer la
profesión.
M. Souto (2006) hace referencia a la necesidad de comprender a la formación como un campo
de problemáticas desde la complejidad. La formación es entonces un trayecto, un espacio flexible y de
construcción.
El dispositivo de formación es un modo particular de organizar la experiencia formativa con el
objetivo de crear situaciones para que los estudiantes que participan en ellas se modifiquen a través
de las interacciones consigo mismos y con los otros, pudiendo efectuar una lectura activa de las
situaciones cambiantes, apropiándose de nuevos saberes, interiorizando un sistema de actitudes y
construyendo competencias pertinentes para efectuar intervenciones que le demandara el rol
profesional.
El compromiso de nuestra tarea como docentes es construir dispositivos que promuevan la
emergencia de la reflexión, ya que es solamente a través de la misma que el estudiante por medio de
una actividad consciente se compromete a explorar sus experiencias. La reflexión es tanto una forma
de pensamiento como una disposición, e implica una actitud comprometida y no impulsiva o rutinaria,
que orienta a las decisiones y acciones a la luz de conocimientos específicos. El objeto de reflexión en
las prácticas profesionales está orientado tanto a los aspectos cognitivos, como los emocionales y los
componentes de acción. “Reflexionar sobre la propia práctica también significa reflexionar sobre la
propia historia, los habitus, la familia, la cultura, los gustos y aversiones, la relación con los demás, las
angustias y las obsesiones” (Perrenoud, 2004).
Las prácticas extensionistas, ejercidas por medio de los proyectos de extensión brindan a los
estudiantes dispositivos legítimos a través de los cuales logran articular la práctica con la teoría,
promoviendo además el acercamiento real a las problemáticas actuales que atraviesa nuestro campo
disciplinar.
Se entiende a la función de la extensión universitaria como aquella comunicación del quehacer
universitario en diálogo permanente con la sociedad. La función de la “comunicación” aparece así
como esencial para la universidad y de igual jerarquía que su quehacer académico: docencia e
investigación. Tal comunicación implica un proceso de interacción dialéctica: universidad – cuerpo
social.
En las Jornadas de Extensión del Mercosur (UNICEN, 2014) se concluye que la extensión no
trata de leer las necesidades desde la universidad sino que las necesidades deben surgir del diálogo.
Aprendiendo docentes, estudiantes y comunidad en contexto, poniendo en diálogo el saber popular y
el saber científico. Se destaca la importancia de integrar las tres funciones de investigación, docencia y
extensión desde el inicio de la formación universitaria, siendo indispensable avanzar en un proyecto
nuevo de universidad respetando la diversidad, desde el punto de vista teórico, práctico e institucional.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
También se postula que todo estudiante debería transitar por la práctica de extensión como
forma de compromiso para lograr mayor sensibilización y compromiso con las problemáticas sociales
que lo rodean y en las cuales está inmerso.
Desde esta perspectiva se ubica al estudiante que atraviesa la experiencia de extensión no solo
como un sujeto epistémico sino como un sujeto social. Se reconoce que el conocimiento empondera y
quien posee ese poder debe asumir un compromiso social (Cecchi et al, 2009) que esté a la altura de
los valores y prácticas que caracterizan el ejercicio profesional, en particular, y el comportamiento
como ciudadano, en general.
La enseñanza superior no puede ni debe disociarse de la investigación y/o la extensión, ya que
la transmisión disociada de la producción de conocimiento aliena a los sujetos con respecto al campo
de la producción de conocimiento (Castro, J. O. y Espinoza, J., 2006). Además cuando la misma no
trasciende sus propios límites, supone no hacerse cargo de las exigencias propias que comprometen a
la universidad, en el sentido de comunicar el conocimiento, entendido como patrimonio cultural
colectivo.
CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Foucault, M. (1991): Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión, Buenos Aires, Siglo XXI.
Lakonich, J. J. (2006): “Consideraciones acerca de la acreditación curricular de las actividades de
extensión de los estudiantes universitarios”, en actas del II Congreso nacional de extensión
universitaria, Ediciones Suarez.
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representacional. Enseñanza de las Ciencias. UAM, Madrid.
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Novedades Educativas.
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Investigación y EValuación Educativa. 7 (2). Recuperado desde:
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UNICEN (2014). III Jornadas de Extensión del Mercosr. Recuperado desde:
http://www.extension.unicen.edu.ar/web/jem
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“(la ley del patronato) era muy poco clara… o sea, el pibe venía porque estaba acusado de un hecho
penal y había que trabajar la famosa responsabilidad. ¿Responsabilidad de qué? Si ni siquiera
sabíamos si era culpable o inocente (…)
“(el pibe) viene suponiendo que vos sos el que le vas a conseguir el permiso, o una salida más rápida.
Porque además ¿qué es lo pasa cuando trabajas en una institución? Vos tenés un Director, que
generalmente en esa época eran tipos pesados, que lo que quieren es la funcionalidad del lugar. Con
la cual, si vos tenés alguien quilombero, sácalo, expulsalo. Tu eficiencia como psicólogo- en esa
lógica- se radica ahí, en que vos despejes rápido lo que hace problema. Eso es lo que te pide la
institución. Eso es Freud. Cuando la institución te convoca, pregúntate para qué te convoca. No es
para que los chicos estén contentos, es para que no rompan las bolas, para que no te quemen todo”.
“fui primero al (refiriéndose al nombre de la institución donde trabajó) macro de los macros si se puede
mencionar, con edades de niños desde dos años que estaban perdidos por los sótanos, porque era tan
grande ese lugar… bellísimo lugar como edificio, pero no para que funcionara nada para un niño,
menos internado”.
“ahí en el (institución donde trabajó) era el más pibe que había entrado, con lo cual me
enchufaron los 15 pibes más hijos de puta que había y no era joda, te encerraban del lado de afuera y
vos te quedabas encerrado adentro en el aula, y los pibes… había mucha violencia, mucha agresión.
Eran chicos con causas penales. Y ese lugar como se había desmadrado varias veces, lo había
tomado el Servicio Penitenciario. Era siniestro”.
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Ahora bien, así pensadas las condiciones jurídicas e institucionales en y con las cuales se
inscribían sus prácticas profesionales, nos preguntamos acerca de los dispositivos que
implementaban. De las cuatro entrevistas realizadas a psicólogas y psicólogos , tres de ellos/s relatan
prácticas profesionales que, en su diseño e implementación, integraban las dimensiones del juego de
poder-institucionales-jurídicas-materiales, para intervenir en y con las mismas, interrumpir prácticas
tutelares existentes y crear otros modos de intervención con los niños, niñas y adolescentes
institucionalizados:
“ahí trabajé intentando volver a los niños a sus comunidades. Trabajábamos mucho con ese tema, y
cuando egresábamos tres, entraban cuatro; porque era imposible (…) trabajábamos con un Poder
Judicial, que seguían internando y un Poder Político que todavía no estaba fuerte como para poder
decir cambiamos la ley”.
“se pudo hacer de una gran macro, ya no más caótica, (…) dentro de todo lo que igual seguía siendo
teníamos como una pequeña posibilidad, básicamente el dispositivo tenía que ver con que la
masificación había que cortarla por algún lado. Entonces la cuestión era que había en esa institución
lugares que podían pertenecerles. Primero su grupo, que era propio, de ella, y no de aquella, sino de
ella, y por otro, cuestiones que pudieran, de a poco, sentir como de pertenencia. Si querían una taza,
un vaso o algo, ese vaso y esa tasa eran de ellas. Era algo que costaba que las mismas preceptoras
entendieran pero después les empezó a gustar. Y era de “fulana” y no había que tocarlo porque era de
“fulana”.
“Las salidas, si bien para cualquier Organismo Internacional eso era privación de libertad, que yo
estaba de acuerdo pero que no podía decir mucho, entonces ¿qué era lo que más podía hacer?, que
todas salieran. Salían con una cierta organización porque era una institución, pero había una salida.
(…) Todo fue un cambio, o sea, el que les perteneciera y el que era un ámbito en el cual también
podían hacer uso de su libertad, bueno entre comillas. Esas fueron las cuestiones donde yo más me
paraba”.
“Empecé a trabajar mucho lo grupal, y como yo tenía esta formación que a mí me interesaba,
que era Psicodrama, armamos dispositivos teatrales que eran paralelos a la cuestión más de trabajo
terapéutico que se hacían. Después empezamos a tener serios conflictos con la dirección y la cosa se
fue deteriorando (…) Ese trabajo a mí me parecía mucho más terapéutico que lo individual, digamos,
lo que vos veías es que, las chicas en ese caso, laburaban mucho más lo personal, se animaban
mucho más cuando se encontraban con otras, que transitaban en este espacio, lo mismo que
transitaban ellas. Y este era un encuentro que era increíble cómo salían cosas que en las entrevistas
individuales no (…)”
“Se hacían dispositivos individuales pero se trabajaba lo grupal con los pibes y también con las
familias. Empezábamos a hacer trabajo grupal con las familias, y ahí lo pudimos sostener con mucha
resistencia, con mucho boicot a veces (…) se trabajaban cuestiones también de la violencia
institucional, cuestiones de la vida sexual de los pibes, que eran muy resistidas dentro de la institución”
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“(…) hablando esto de Pichón, primero no sabía qué hacer, y además me angustiaba el tema
de la agresividad (…) y se me ocurrió armar un equipo de fútbol del grado. Lo cual me implicaba ir los
sábados, llevar equipos de fútbol para jugar con lo que era mi equipo. Pero fue logrando una unión ese
grupo, una interdependencia, se empezaron a cuidar porque teníamos que jugar partidos. La verdad
que no nos ganaba nadie… y así se fue trabajando en grupo y logrando un poco la paz. Tenía chicos
que eran analfabetos, les tenías que enseñar a leer y escribir… pero yo todo el tiempo pensaba como
psicólogo”.
“yo empecé a utilizar, en vez de citar a los pibes, que eso era lo que tenía que hacer por
formalidad, caminar en el patio y meterme en las charlas y charlar”.
“La asamblea era algo muy difícil de sostener, es muy esforzado sostener ese espacio hasta
que empieza a funcionar. Y lo que pasa es que cuando se pone densa la asamblea, viene una
asistente y te dice: ‘¿no ve lo que se dijo?, ¿para qué hacemos eso?’, entonces vos lo tenes que
convencer con el tiempo, que eso no se engendró porque se dijo ahí, que eso es un malestar que
viene y hay que darle un ámbito para que se pueda plantear en palabras. Ahora sabemos el quilombo,
ahora podemos hacer algo. En la asamblea se resolvía todo lo inherente a la institución, desde la
comida hasta la ropa que iban a usar (…)”.
Nos detuvimos en situar partes de las entrevistas realizadas, en la voz de los entrevistados/as,
porque consideramos que los relatos de los y las psicólogas aportan mayores grados de visibilidad
respecto a las múltiples inscripciones que anudaban, materializando, unos modos institucionales de
hacer con los niños, niñas y adolescentes institucionalizados, y las prácticas profesionales que ellos y
ellas efectuaban en y con las mismas; a la vez que arrojan luz sobre la dimensión de las prácticas
profesionales en el ámbito público, en el contexto histórico-jurídico e institucional en el cual efectuaron
las mismas.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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MARCO TEÓRICO
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perspectiva del Ciclo Vital como marco de referencia considera la totalidad de la vida como una
continuidad con cambios y representa un intento de superar la dicotomía crecimiento–declinación
(Dulcey-Ruiz & Uribe Valdivieso, 2002). Quienes comparten la perspectiva del ciclo vital (Baltes, 1985;
Baltes, Lindenberger & Staudinger, 2006; Baltes, Staudinger, & Lindenberger, 1999; Labouvie-Vief &
Diehl, 1999; Labouvie-Vief & Diehl, 2000) en una u otra forma consideran como rasgo característico
del curso de la vida la multidimensionalidad, la multidireccionalidad, la plasticidad y la discontinuidad
del desarrollo. Las diferencias interindividuales se acrecientan típicamente con la acumulación de
experiencia, arrojando el resultado de que el avance de la edad comporta un efecto progresivo de
mayor heterogeneidad entre las personas (Baltes, 1985). Como resultado de las adaptaciones
acumuladas a los acontecimientos tanto biológicos como culturales, la base del individuo está en
constante transformación. Las personas cambian sea para bien o para mal, como resultado de la
acumulación de experiencia.
METODOLOGÍA
PARTICIPANTES
Se trabajó sobre una muestra intencional compuesta por 20 adultos mayores de entre 51 y 79
años (M = 63.70, DS = 6.76) residentes de la ciudad de Balcarce de los cuales 15 eran mujeres y 5
varones. El criterio de selección que sirvió para determinar el grupo de participantes fue que los
adultos mayores hubieran desempeñado alguna actividad laboral de forma independiente o en relación
de dependencia, con un máximo de 5 años posteriores a la jubilación efectiva. Se excluyeron sujetos
institucionalizados, con deterioro cognitivo y/o inmovilidad física, y que hubieran recibido jubilación
anticipada.
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estudio y cumplían con los requisitos necesarios, se encontraban transitando por períodos de duelos o
padeciendo enfermedades que constituían situaciones de crisis vital de mayor intensidad que la de la
jubilación Se explicó a cada persona, en forma oral, el contexto de la investigación y las características
de la misma, para luego leer el consentimiento informado, aclarar dudas y señalar expresamente que
la colaboración era voluntaria y confidencial, solicitar la firma del mismo y proceder a la realización de
la recolección de datos. Las entrevistas fueron llevadas a cabo por la primera autora de manera
individualizada con cada participante. La recolección de los datos se realizó desde el mes de octubre
de 2010 hasta el mes de agosto de 2011. Durante el desarrollo del trabajo se respetaron los principios
éticos de la investigación con personas, procurando las condiciones necesarias para proteger la
confidencialidad.
INSTRUMENTO
RESULTADOS
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madre, la asistencia o facilitación del transporte a los hijos por la ciudad para hacer mandados y
trabajar, las reuniones y las visitas a miembros que viven en otra ciudad. Otras actividades que fueron
mencionadas ampliamente, pero en menor proporción fueron las que involucran las tareas del hogar,
la limpieza, el orden, el cuidado de la casa y los mandados. En relación a este aspecto el cocinar
también fue señalado frecuentemente, pero en un contexto de vinculación con la familia o con amigos,
por ejemplo cocinar para los nietos o para las amigas de la peña no como una actividad más del hogar
sino ya como una ocupación con connotaciones individuales y afectivas. En orden de frecuencia se
registran los viajes, aquí la mayoría de los participantes lo hacen a la ciudad de Mar del Plata, con dos
tendencias, lo describen como un corte en la rutina de sus ocupaciones en Balcarce con la posibilidad
de ver espectáculos artísticos, vidrieras y pasear o también como una visita a los hijos, muchos de
ellos radicadas en esta ciudad. La realización de manualidades, diferentes tipos de tejido, pintura,
bordado, realización de flores, trabajos en madera, presenta una incidencia medianamente alta entre la
población, coincidiendo la implicación vocacional en este tipo de actividades, pudiendo ser realizadas
con mayor asiduidad después de la jubilación por contar con más tiempo libre. Con la misma
frecuencia se mencionan las actividades de autocuidado como ir al gimnasio, pileta o salir a caminar.
La participación en instituciones de bien público son elegidas en pocos casos (Amigos del Riel,
LIBALCEC, Abuelas cuenta cuentos, Hogar de Ancianos). Es de destacar que un bajo porcentaje de
la muestra continua trabajando, ya sea porque tenía dos trabajos y se ha jubilado de uno o porque
comienza con un nuevo trabajo una vez jubilado. Aquí se registran casos que continúan con la misma
modalidad de ocupación, por ejemplo una docente que hace apoyo escolar o casos que cambian de
tipo de ocupación, por ejemplo una docente que pasa a ser secretaria de un consultorio médico. Solo
dos personas realizan actividades de estudio y en la misma cantidad se registró la incorporación de la
informática como ocupación actual.
Actividades que lo hacen sentir bien y los motivos
En relación a este aspecto hubo una tendencia en contestar que “todo lo que hago me hace
sentir bien” mencionando como motivo fundamental la posibilidad de la libre elección del tipo de
ocupación, de compañeros de actividad, frecuencia y uso del tiempo, así como la posibilidad de evitar
las actividades que no son placenteras en esta etapa de la vida. Como ocupación concreta se
mencionó con frecuencia media la realización de tareas del hogar, y en unos pocos casos la
jardinería pero no se presentó una tendencia definida hacia alguna actividad. Solo cuatro casos
mencionaron la ocupación laboral que desempeñaban hasta el momento de jubilarse o actividades con
la misma modalidad diciendo que es parte de su vida, lo que siempre han hecho. El resto de los
participantes presentaron tipos y modalidades diversas de ocupaciones que los hacen sentir bien:
jugar a las cartas, adiestrar perros, salir de shopping, comer con la familia y contar cuentos entre otros.
En relación a la motivación también se mencionaron cuestiones diversas y personales como el
entretenimiento, el sentirse útil, vincularse con otras personas, distraerse, obtener placer por el placer
mismo, estar tranquilo, mejorar el lugar de residencia, expresarse, obtener el reconocimiento de otros.
Solo un caso mencionó el recordar su pasado feliz. Casi todos los participantes mencionaron
un solo tipo de motivación.
Actividades de mayor importancia
Se observa una tendencia a establecer las ocupaciones realizadas con la familia como las de
mayor importancia, estableciéndolas como las de prioritarias, y estableciendo, en algunos casos,
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VI Congreso Marplatense de Psicología
como posibilidad el hecho de dejar de hacer cualquier otra actividad por la familia si esto así lo
requiere. La familia es establecida en primer lugar en relación a otros aspectos de la vida y la
reelección de este tipo de actividades es constante. Las tareas del hogar ocupan el segundo lugar,
pero la elección se define con mayor carácter obligatorio -hay que comer, hay que tener la ropa limpia-.
En contraposición las actividades que ocuparon el último lugar al definirlas como importantes fueron
algunas de cuidado de la salud, como realizar actividad física, o estudiar. Si bien solo fueron pocos
casos que mencionaron en este punto la participación en entidades de bien público, se evidencia en
quienes lo realizan un fuerte sentido de pertenencia describiéndolas como ocupaciones que proveen
de alto grado de satisfacción y ocupan gran parte de su día.
Con quién realiza las actividades.
Más de la mitad de los participantes contestaron que realizan sus ocupaciones en familia y
solos, según la actividad y en menor proporción con compañeros de tarea. En relación a esta última
manera se describen grupos organizados en relación a la actividad, por ejemplo grupo de: gimnasia,
pilates, pileta, de coro compuestos por hombres y mujeres, de menor, igual o mayor edad que los
participantes. Pocas personas mencionaron a los amigos, incluso en un caso la persona entrevistada
hizo el señalamiento que a partir de la jubilación empezó a darse cuenta de la diferencia entre amigos
y compañeros de trabajo, también manifestó como algo positivo que la jubilación le había permitido
ampliar y enriquecer sus vínculos, que en su etapa laboral eran predominantemente con gente de su
misma profesión.
Frecuencia de realización de actividades
La mayoría de los participantes efectúan sus actividades diariamente y con una frecuencia
semanal en días y horarios fijos y estipulados. Aun así, un gran porcentaje señaló que la realización de
sus ocupaciones está determinadas por necesidades propias, las ganas o el deseo que tengan de
realizarlas, las circunstancias del momento o las actividades de las instituciones de las cuales forman
parte. Una minoría contestó que las efectúa sin ningún tipo de estructuración en relación al tiempo.
Todos coincidieron en tener todo el día ocupado, algunos con connotación positiva y otros más
negativa en relación a este aspecto.
Lugar de realización de actividades
El propio hogar fue el lugar que con mayor frecuencia fue mencionado para la realización de las
ocupaciones, seguido por los espacios donde se realizan las actividades, por ejemplo pileta, gimnasio,
casas de profesoras de manualidades o lugares de trabajo como consultorio médico, quiosco y taller
de mecánica independientemente de la edad o la condición laboral de quienes realizan la actividad.
Con mediana frecuencia se mencionó la calle o el barrio u otras ciudades.
Modificaciones de actividades a partir de la jubilación
Menos de la mitad de los entrevistados mencionó incorporar nuevas ocupaciones a partir de la
jubilación. Con excepción de dos participantes, el resto continuó con las actividades que realizaba con
anterioridad a la misma, describiendo que habrían cambiado a partir de la jubilación en cuanto a
cantidad, aumentando la frecuencia y también en cuanto a calidad, relatando este hecho como algo
positivo. La mayoría dijo tener más tiempo para dedicarse a sus ocupaciones preferidas, a la
consecución de deseos, mayor flexibilidad en horarios, mayor posibilidad de proyectar actividades a
mediano plazo y disfrutar, haber ampliado y variado sus grupo de pertenencia lo que implicaría
crecimiento personal, e incluso mejorar actividades de autocuidado como la alimentación. En dos
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casos se connotó negativamente el cambio en calidad ya que estaría relacionada con una menor
independencia y menor resistencia física en la ejecución, pero no estaría implicado con la jubilación
sino con la presencia de alguna enfermedad orgánica como osteoporosis o afección cardíaca. Solo
dos personas relataron continuar con las actividades, pero no haber registrado ningún cambio en su
modalidad de ejecución.
CONCLUSIONES
Este estudio exploratorio buscó comprender las ocupaciones significativas de adultos mayores en
la etapa post-jubilatoria. Se evidenció que las actividades que se realizan en mayor proporción y a las
que se les otorga mayor importancia son las que involucran a la familia, ya sea con modalidad de
asistencia, de forma complementaria o de encuentro, seguidas por las actividades del hogar. Viajes,
manualidades y de autocuidado también son realizadas frecuentemente. Se observó una continuidad
en el ciclo vital de cada persona en relación a la elección de ocupaciones significativas, modificándose
cualitativamente su ejecución a partir de la jubilación. Todas las actividades son llevadas a cabo con
grupos y en espacios organizados socialmente en relación a la actividad y no en relación a la franja
etaria o a la condición de jubilado. Si bien la obtención del placer y los motivos del mismo constituyen
un aspecto altamente personal e individual aparece como aspecto en común el hecho de lograr, a
partir de la jubilación, la libre elección de las ocupaciones guiada por el placer o necesidades propias,
y de compañeros de actividad, el sentido de satisfacción, la flexibilidad en la frecuencia de realización
y en el uso del tiempo, el acrecentamiento de grupos de pertenencia, el enriquecimiento de vínculos y
la posibilidad de disfrutar lo que implicaría el desarrollo de habilidades, la oportunidad de crecimiento
personal, la posibilidad de expresar valores personales y la propia creatividad.
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or separate domains of adult development? Psychological Aging, 15(3), 490- 504.
804
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Los objetivos fueron: 1) Analizar las principales dificultades enfrentadas por los adultos mayores
en el proceso de integración al contexto de una residencia geriátrica, y el modo en que influyen en la
asunción del rol de residente; 2) Describir el posible impacto, en la vida social de adulto mayor,
producido por las normativas, ritmos y legalidad institucionales; 3) Identificar, a partir de la participación
en el taller propuesto, qué factores relacionales facilitadores se encuentran involucrados en esta
población, respecto a los procesos de socialización y adaptación al marco de una residencia geriátrica.
Se realizó un estudio descriptivo y se trabajó sobre material de tipo cualitativo acopiado a partir de
entrevistas semi dirigidas, observaciones participantes, tanscripciones de relatos orales y relatos
escritos. El espacio recreativo de taller literario se programó y planificó conforme los objetivos del
estudio, llevándose a cabo con un grupo de aproximadamente 10 residentes, previamente escogidos y
entrevistados de acuerdo a una lista sugerida por la institución elaborada conforme su interés respecto
a la participación en el dispositivo.
805
VI Congreso Marplatense de Psicología
Si bien la institucionalización del adulto mayor se presenta como un recurso posible a las
necesidades y demandas que surgen en la cotidianeidad del sujeto a partir de su entrada en la
senectud y de los cambios biopsicosociales que esta etapa de la vida trae consigo, podría pensarse
tanto como un fenómeno configurado a partir de una serie de cambios en la dinámica de las
sociedades como en función al valor social dado a la figura del adulto y a un imperativo de mercado
que dictaría la necesidad de envejecer puertas adentro, lejos de la mirada de los otros (Salvarezza,
1998).
Esta lógica del alejamiento de la mirada de los otros respondería, en cierto modo, a la presencia
de una serie de prejuicios instalados en torno a la figura del adulto mayor que fueron reforzados por la
errónea asociación deterioro-vejez sustentada por la psicología clásica de corte positivista (Moody,
1993; Acrich, 2012).
La valoración tenida hacia las personas mayores ha oscilado a lo largo de los años, producto de
acontecimientos relacionados con cambios socio-económicos. Entre estos acontecimientos pueden
citarse: la aparición de la imprenta, innovación capaz de reproducir innumerables veces la cultura, la
tradición e historia de una sociedad, la revolución industrial, que a su avance exigió el desplazamiento
de familias enteras hacia los centros urbanos, imprimiendo con ello la presión de ser móvil, y la
aparición de nuevas formas de trabajo que exigieron un mayor grado de adaptabilidad (Branco &
Williamson, 1982; Nelson, 2005).
En este sentido, puede reafirmarse el planteo de pensar al propio cuerpo como elemento
susceptible de ser cercado, marcado por las metamorfosis sociales (Foucault, 1975), idea que permite
reforzar la concepción del proceso de institucionalización del adulto mayor como elemento funcional a
una lógica impuesta por los imperativos sociales y de una lógica de mercado que cada vez exige más
de aquellos que quedan atravesados y por dentro de su discurso. De ese modo, podrían pensarse que
tales exigencias de adapatabilidad y movilidad han impreso a lo largo del tiempo una modificación
radical en el modelo familiar y en la valoración social del adulto mayor, produciéndose un movimiento
que, de cierto modo, reduce a las personas de edad a una suerte de estatus de responsabilidad
sopesada.
806
VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
dialógico. En este segmento emergen co-construcciones colectivas en las que se ponen de manifiesto
las diferentes vivencias y recuerdos respecto a lo dialogado, es un momento de rehilado del discurso
propio y ajeno en un tejido homogéneo y compartido. En ocasiones es un momento en el que se ponen
de manifiesto tensiones de diversa índole, estas situaciones no deberían evitarse ya que la
emergencia de estas diferencias y la posibilidad de expresión de las mismas sirven para disminuir la
eventual tensión del grupo, lo que favorecería la convivencia y tolerancia por fuera del espacio
recreativo. Finalmente, en un tercer momento, se procede al cierre y puesta en común para recibir
nuevas sugerencias de temáticas. La dinámica sugerida abarca un espacio de 1 hora y media de
duración.
A partir de esta propuesta posible de abordaje a la institucionalización del adulto mayor y del
análisis realizado, se espera poder contribuir a la construcción de conocimientos que contemplen la
dimensión subjetiva de los protagonistas a los fines de enriquecer aún más el área de estudio de esta
franja etaria.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Acrich, L. (2012). La psicogerontología social y la evaluación de las redes sociales de apoyo. Estudos
Contemporâneos da Subjetividade, 2 (1). Recuperado el 17/8/2014 en:
http://www.uff.br/periodicoshumanas/index.php/ecos/article/view/842/654
Aizen, R. (2003). Los hogares de ancianos y el desafío de la construcción de ciudadanía. En: Rosa
Aizen (Coord.), Temas de Gerontología Social. (p. 52-63). Buenos Aires: Gobierno de la Ciudad de Bs.
As. Dirección de la Tercera Edad.
Bolívar, A., Domingo, J. (2006). Biographical and Narrative Research in Iberoamerica: Areas of
Development and Current Situation. Forum Qualitative Sozialforschung / Forum: Qualitative Social
Research. Recuperado El 22/12/2013 en: <http://www.qualitative-
research.net/index.php/fqs/article/view/161/355
Foucault, M. (1975). Vigilar y Castigar. Buenos Aires: Siglo XXI editores.
Goffman, E. (1961). Internados, ensayo sobre la situación social de los enfermos mentales. Buenos
Aires: Amorrortu Editores.
Nelson, T. (2005). Ageism: Prejudice Against Our Feared Future Self. Journal of Social Issues, 61
(2), 207-221. Recuperado en 21/12/2012 en: http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/j.1540-
4560.2005.00402.x/abstract;jsessionid=5D17E5FE77436DBB6FE54B458F3700EA.d02t03?deniedAcc
essCustomisedMessage=&userIsAuthenticated=false. DOI: 10.1111/j.1540-4560.2005.00402.x
Onofre, D. (2003). Construcción Narrativa en la historia Oral. Dialnet, (18), 94-102. ISSN-e 0121-7550.
Recuperado en 23/12/2012. En:http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3991962
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Vázquez Sixto, F. y Muñoz justicia (2003). La memoria como construcción colectiva. Compartiendo y
engendrando significados y acciones. En F. Vázquez (ed.), Psicología del comportamiento
colectivo (189-258). Barcelona:UOC.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
ARTICULACIÓN INSTITUCIONAL
FUNDAMENTACIÓN
La Sexología es una disciplina científica que tiene por objeto el estudio de la sexualidad
humana. Constituye un campo inter y transdisciplinario, abarcando los fenómenos estudiados desde
una perspectiva epistemológica que no se limita a la descripción e interpretación de los mismos, sino
que procura posibles espacios de articulación entre las diferentes ciencias que los abordan, para
integrarlas en un sistema único.
La sexualidad es constituyente del ser humano desde el momento del nacimiento y hasta el fin
de la vida, viéndose influenciada por el atravesamiento de las diferentes etapas evolutivas del recorrido
vital de las personas, en sus dimensiones física u orgánica, psicológica y social.
Basada en el sexo, incluye al género, las identidades de sexo y género, la orientación sexual, el
erotismo, la vinculación afectiva y el amor, y la reproducción. Se experimenta o se expresa en forma
de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, actividades, prácticas, roles y
relaciones. […] es el resultado de la interacción de factores biológicos, psicológicos, socioeconómicos,
culturales, éticos y religiosos o espirituales. Si bien la sexualidad puede abarcar todos estos aspectos,
no es necesario que se experimenten ni se expresen todos. Sin embargo, la sexualidad se experiencia
y se expresa en todo lo que somos, sentimos, pensamos y hacemos. (OPS & OMS, 2000, p.8)
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Como señala Iacub (2006, p. 17) “El tema de la sexualidad en la vejez ha sido poco planteado en
nuestra cultura. El erotismo en la vejez ha sido una temática poco abordada desde el punto de vista
cultural, histórico y político”. El silencio toma las formas de la negación y la descalificación social de la
vida erótica de los adultos mayores, generando desconocimiento de sus potencialidades y de las
soluciones a las que podrían acceder para enriquecer su vida sexual en esta vital.
En tercera edad se producen cambios biológicos que afectan la función sexual de las personas,
incrementándose la posibilidad de incidencia de disfunciones sexuales que tienen un efecto negativo
en la salud y repercuten en la vida psíquica y vincular. Esto se debe a que el curso y prevalencia de
algunas disfunciones sexuales está asociado directamente a factores como la edad y el estado de
salud. Es importante señalar que actualmente se dispone de terapéuticas efectivas y eficaces para
todas las disfunciones sexuales, lo cual permite que tanto la mujer como el varón puedan seguir
disfrutando de una saludable vida sexual.
A su vez, el contexto sociocultural habitualmente influye de tal manera, que las personas que han
enviudado o se ha divorciado en la vejez encuentran a veces resistencias personales y familiares a la
hora de plantearse la posibilidad de buscar una nueva pareja. Aquí se ponen en juego cuestiones
educativas, mitos y representaciones que circulan en los imaginarios sociales, como por ejemplo: que
la actividad sexual en la vejez es mala para la salud; que la misma es indecente; que con la
menopausia termina la vida sexual; la representación social de la “ternura asexuada” de los mayores,
entre otros.
811
VI Congreso Marplatense de Psicología
Durante el año 2011 se realizó, previamente a la implementación del Programa, una evaluación
ex ante con el objetivo de determinar su pertinencia, consistencia y viabilidad. Se realizaron diversas
actividades (charlas abiertas y talleres participativos) destinadas a la detección de demandas y
necesidades sentidas por parte de los potenciales beneficiarios directos del Programa. Se elaboraron
instrumentos destinados a indagar creencias y conocimientos previos respecto a las temáticas; así
como las preferencias respecto a las modalidades de abordaje en los futuros espacios de trabajo a
implementar durante el Programa. Los resultados de esta etapa permitieron al equipo gestor orientar
las acciones respecto al diseño y los contenidos adecuados a incluir en el Programa.
Durante 2012 se realizaron en la Sede de PAMI UGL XI las siguientes actividades:
Talleres Informativos: espacios donde se brinda información científica y actualizada por parte de
profesionales especializados en los temas a tratar.
Talleres participativos y vivenciales: espacios de co-construcción del conocimiento que permite
procesar, elaborar y compartir los aspectos implicados en las temáticas propuestas.
Talleres realizados:
- Sexualidad femenina y masculina en la tercera edad: aspectos generales.
- Mitos y mandatos acerca de la sexualidad de los adultos mayores.
- La Función Sexual en la tercera edad: aspectos orgánicos.
- Sexualidad Femenina.
- Sexualidad Masculina.
- Enriquecimiento sexual.
- Empoderamiento: vida sexual y afectiva.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Es común que los diferentes profesionales en su trabajo con personas adultas mayores tiendan
a omitir temas relacionados a la sexualidad, ya sea por falta de tiempo u “olvidos involuntarios”. Estas
situaciones, como también la propia resistencia por parte de las personas envejecientes, producen un
abandono del estudio de la sexualidad en la vejez e impiden conjuntamente la construcción de
políticas clarificadoras y de desmitificación (Salvarezza, 1999).
Como plantea (Murgieri, 2011), dentro del ámbito geriátrico, algunos de los impedimentos para
el ejercicio sexual son el deterioro físico –más específicamente, la percepción que tiene el viejo de su
propio deterioro físico–, los prejuicios, la falta de oportunidad para encontrar pareja y algo fundamental
que es la falta de intimidad dentro de las mismas. Normalmente el personal de las residencias
geriátricas puede aceptar demostraciones de afecto como abrazos o besos, pero les cuesta concebir la
masturbación, la genitalidad o el erotismo entre los residentes.
Algunas instituciones cuentan con espacios matrimoniales donde los residentes tienen la
posibilidad de tener intimidad durante su estadía en la misma. Algunos de ellos han convivido o
conviven con su pareja dentro de la institución. Los viejos en sí están más cercanos a aceptarse como
son que lo que el personal más joven puede llegar a hacerlo. A los profesionales se les dificulta en
mayor medida el considerar el cuerpo de un viejo como algo erótico. Iacub (2008) sostiene que los
juicios acerca del cuerpo en la vejez son peores en la mujer que en el hombre, a quien se le incita a
ejercer su sexualidad abiertamente.
En función de lo dicho, la presente investigación tuvo por fin la indagación de aspectos
vinculados a la sexualidad en adultos mayores institucionalizados en un hogar geriátrico de la CABA.
Sumado a ello, se buscó describir el comportamiento sexual de dicho grupo etario, al tiempo que
constatar las modificaciones eventuales en su sexualidad. Los objetivos del presente estudio fueron:
OBJETIVO GENERAL
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VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
PARTICIPANTES
INSTRUMENTOS
PROCEDIMIENTO
Durante la circulación por la institución se llevó a cabo una observación detallada tanto de los
residentes como del personal profesional en busca de la aparición del tema de la sexualidad. Se
procuró tener charlas abiertas con los diferentes agentes, profesionales y residentes y se llevó a cabo
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VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
Fue posible concluir que los espacios más propensos para la aparición de los comentarios y
demás expresiones vinculadas a la sexualidad, surgían durante el tiempo libre y de manera
espontánea. Rara vez los residentes comentaban o actuaban abiertamente su postura sexual durante
los tiempos de actividad o en compañía de los profesionales a cargo.
Se pusieron de manifiesto los juicios íntimos que desde la perspectiva del propio anciano
influyen en el momento de tener una apertura sexual. Si bien el deseo inicial no se encuentra
suprimido, es decir, los adultos mayores sí experimentan deseo e interés sexual al igual que cualquier
individuo no institucionalizado, la diferencia radica en la manera como se encauza ese deseo, ese
interés y las modalidades de resolución.
Desde el polo de la supresión, para algunos sirve de limitante el tiempo, la vejez propiamente
dicha, el aspecto físico que tiene el cuerpo y los cambios en su funcionamiento. Fue posible confirmar
una predominancia de este tipo de percepciones en la mujer más que en el varón, a través de
comentarios en donde se planteaba la sensación de estar siendo juzgadas como insanas dentro de la
lógica homogeneizadora del personal, y terminando en la propia autopercepción de estar enfermas o
no aptas para este tipo de vivencias. El fantasma de la enfermedad y la insanía se convierte en un
estigma que no les permite concebir su propia sexualidad. Un factor supresor que también aplica para
la población en general es la falta de intimidad y la ausencia de espacios destinados para ello dentro
de la institución. Como argumenta (Ferrero, 1998), la tendencia a la desexualización de los viejos
produce una alteración de la imagen que tienen de sí mismos y de la etapa de la vida que se
encuentran viviendo. Los más jóvenes consideran que el sexo y la intimidad son prescindibles –a
veces, motivo de burla o descalificación–, logrando así generar ansiedad y temor al viejo al contradecir
dichas creencias .
Por otro lado, desde el polo de la exteriorización, se identifican dos tipos de manifestaciones
sexuales: las resultantes de patologías graves (ej. Conductas desinhibidas debido a una Demencia
avanzada, perfiles sociópatas, etc.) y los que gozan de una sexualidad normal –entiéndase el término
normal como la contracara de la enfermedad–. Esta última categoría es minoría dentro de la
institución, aún así cuenta con individuos que plantean sus necesidades biológicas de manera firme,
hablan de su sexualidad abiertamente y la conciben como algo que merece ser tratado con el mayor
nivel de seriedad posible.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
aumento del erotismo entre otras manifestaciones sexuales posibles. Algunos exponen sus críticas al
ambiente ya que consideran que la situación de aislamiento en su condición de institucionalizados
afecta su deseo y su atracción sexual. Otra porción cae dentro de la negación absoluta de su
sexualidad, ya sea por la autopercepción que tienen de su propio deterioro físico, por prejuicios, falsas
creencias o también a causa de la depresión.
COMENTARIOS
Por lo que se pudo observar dentro de esta esfera en la tercera edad, una vez que se logra
sobrepasar las barreras iniciales del tabú se revela una dimensión sumamente rica en su simbología.
Si bien la genitalidad no es la protagonista en muchos casos, el erotismo se despierta de manera
intensa y se puede lograr un goce más profundo a otros niveles, en donde se mezcla el bagaje de
significados de toda una vida y se producen demostraciones más sutiles pero que abarcan mucho más
de lo que aparentemente se manifiesta. Además, se pone a prueba la autopercepción del cuerpo y de
sus atractivos como finalidad en una relación sexual, así como también la genitalidad como la única vía
de alcanzar la satisfacción plena.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
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PRESENTACIÓN DE DATOS
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Tabla donde se detallan las características de la muestra y los datos que se han obtenido una vez
que se han aplicado: Mini Mental Test junto con Pruebas de conservación de acuerdo a Piaget
Inhelder
De los 30 pacientes presentados por iniciativa personal en el año 2013, se han dejado dos de lado
que no culminaron el proceso diagnóstico
La forma en que son estudiados los aspectos de lateralidad son explicados al final
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VI Congreso Marplatense de Psicología
del artículo
ANÁLISIS DE DATOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
sobre temas que le importan “ y que no tienen en donde hablar de esos temas “ toma la iniciativa y
consulta
Se entiende por Empoderamiento:
“Proceso mediante el cual las personas fortalecen sus capacidades, confianza, visión y
protagonismo en cuanto que forman parte de un grupo social, para impulsar cambios positivos en las
situaciones en las que viven”.
“Las personas y/o grupos organizados cobran autonomía en la toma de decisiones y logran ejercer
control sobre sus vidas basados en el libre acceso a la información, la participación inclusiva, la
responsabilidad y el desarrollo de capacidades”
http://brizas.wordpress.com/2010/10/05/definicion-de-conceptos-empoderamiento-i/
Consultado 10/12/2013.
El anciano pasa a ser protagonista mediante la acción una vez que sabe dónde dirigirla
“Yo ni sabía que existía esta clínica” •
“ De no haber sido por el artículo de la revista ni sabía que podía venir a consultar”
han sido comentarios comunes de aquellos ancianos que por iniciativa personal han decidido
acercarse en la policlínica.
De acuerdo a los datos que se han presentado, ancianos que poseen aspectos de no
conservación de sus capacidades cognitivas también han tomado la iniciativa de consultar.
Finalmente no podría dejar de señalar que mientras instituciones estatales o privadas no pueden
dar cuenta de las necesidades de la población anciana, mientras las políticas oficiales y oficiosas se
alejan de instrumentar espacios que puedan satisfacer éstas necesidades podríamos pensar que
puede estar en nuestras manos el desarrollar opciones que, junto a nuestros ancianos transformen la
realidad acorde a lo necesario.
Dejar de esperar de políticos, de administradores de la salud, de catedráticos y formalizar una
realidad material para que, desde la misma junto con ancianos siendo parte desde su
empoderamiento, sea más difícil o casi imposible negar lo existente.
O como cantaba Zitarrosa, “ hacerla crecer desde el pie"
Otros aspectos a considerar....
Queda claro que el anciano fuera del contexto Geriatrico-Gerontológico, siente que no tiene un
espacio donde verbalizar lo que le preocupa, lo que le angustia (tampoco que siente que tiene
problemas de memoria) - especialmente cuando las policlínicas médicas incluyen 20 pacientes a ser
atendidos en dos horas-
Por otro lado, sería importante considerar " la medicalización de la salud mental", donde, a pesar
que los psicólogos somos profesionales universitarios, el status médico intenta imponer su modelo de
atención a la clínica psicológica logrando inutilizarla en muchos casos.
El hecho que la Policlínica de Psicogerontología del HCFFAA atiende un paciente por hora da
cuenta que hubo un proceso que dio lugar a ello.
A pesar de éste no faltan médicos que sostienen que un proceso de psicodiagnóstico psicométrico
de la conservación de las capacidades cognitivas de 6 sesiones es muy largo ( no tomando en cuenta
que de ésta manera no solo se asegura que el cansancio del paciente no altera los resultados - se
aplica un MMT y otra 5 técnicas- sino que además se desconoce " sub instancias" que se presenta en
cada una de las sesiones que permiten redondear una diagnóstico psicogerontológico que habilita a
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VI Congreso Marplatense de Psicología
plantear derivaciones a Psicogeriatría, Servicios Sociales, etc, crear una instancia de reunión con
familiares, amén que a cada paciente se lo educa sobre la necesidad de consultar en adelante en la
Policlínica Geriatría).
También debemos de señalar que han surgido demandas por el sector médico que los informes
finales deberían hacerse de acuerdo a una taxonomía médica ( demencia, multiinfarto, frontotemporal,
alzheimer, etc) olvidando que a éstos diagnósticos MÉDICOS se arriba una vez que un PROCESO
DIAGNÓSTICO ha sido completado y que ( por ejemplo) una seudo demencia ha sido descartada.
El psicólogo informa de acuerdo a SU taxonoimia! (además se entiende que un proceso
psicométrico, por más completo que sea no habilita plantear un diagnóstico de Alzheimer)
A nivel poblacional un MMT puede detectar los primeros síntomas de no conservación de las
capacidades cognitivas del anciano que puede justificar la profundización con una batería más
completa que en nuestro caso puede señalar aspectos tales como lateralidad, en que lóbulos se
encuentran los descensos encontrados, si ya está presente algún grado de estereotipia del
pensamiento, si una depresión puede justificar los descensos encontrados, etc y realizar las
derivaciones correspondientes a los efectos que la Medicina incorpore los datos clínicos que se han
constatado en un proceso diagnóstico, acorde a lo que la clínica señale.
Notas al Pie
(1) Se presentan como son evaluados los aspectos de lateralidad de acuerdo a un Test de “Praxia
constructiva” ( derivado del trabajo " Distribución de las copias de los dibujos: estudio sobre la
integración en el niño y la desintegración de las lesiones focales de los hemisferios derecho e
izquierdo en el adulto" Acta Neurologica Latinoamericana, 1971, 17: 97-108; Medilaharsu, Sélika
Acevedo et al)
Se le presenta al paciente 4 dibujos que se le pide que copie. En función de la copia se pueden
plantear las siguientes hipótesis diagnosticas
Lesion “Izquierda”
• Micrografía
• Desviación del triángulo a la izquierda
• Rectificación del ángulo posterior de la casa
Lesión “Derecha”
• Macrografía
• Repasado del dibujo ( que el anciano ha copiado)
• Desestructuración
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Una cosa es olvidarse donde deje las llaves de la casa un día que estaba muy preocupado
porque la nena estaba con fiebre y otra cosa es que CASI TODOS LOS DIAS sienta que me olvido de
cosas muy distintas, tales como, dónde dejo las cosas, los nombres de las personas, el fuego
prendido de la cocina, el vencimiento de una cuenta, etc.
Aparecen olvidos EN MUCHAS Y DISTINTAS COSAS QUE HACEMOS DIARIAMENTE.
Y esto da para asustarse?
No necesariamente, pero si para motivar una consulta para saber que es lo que lo provoca.
Y los olvidos significan lo mismo que una demencia?
No, pero una demencia tiene muchos olvidos
Entonces….
Entonces les proponemos a todos los adultos mayores de 65 años que en algún momento se den
una vuelta por el HCFFAA y anótense en la Policlínica de PSICOGERONTOLOGIA ( no es necesario
un pase o una derivación) y soliciten un estudio de la memoria.
¿En que consiste éste estudio?
Tiene principalmente dos partes, una primera en que se conversa con el paciente y otra en que se
le pide que copie unos dibujos, ordene una fichas de plástico, etc, nada invasivo, nada que duela; y
todo eso en una hora de tiempo.
Mientras se van realizando las distintas tareas, los datos obtenidos son introducidos en un
programa de computadora, y al final de esa hora, tenemos un informe escrito que va a quedar en su
historia clínica.
Este informe, nos va a dar una pista no solo sobre su memoria, sino que también, nos permitirá
conocer otros aspectos que pueden estar afectando o no a la memoria y que de ser reconocidos
podrán ser tratados debidamente y cuanto antes mejor.
Por eso que reiteramos nuestra propuesta: todo usuario de la DNSSFFAA mayor de 65años que
este interesado en hacer algo preventivo por su memoria, solicite ser atendido por la policlínica de
PSICOGERONTOLOGIA.
Y que mas se puede hacer en ésta policlínica por el usuario mayor de 65 años?
Esta policlínica esta dirigida a aspectos psicológicos personales y familiares de los adultos
mayores .
Por eso pueden consultar en ella:
• Los propios usuarios mayores de 65 años
• Los familiares de éstos usuarios
• Cuidadores y acompañantes
Los usuarios mayores de 65 podrán dirigirse a ésta policlínica por cualquier motivo que los ponga
nerviosos, los angustie o si se sienten “ bajoneados“ o deprimidos, si algo los inquieta, etc, y también
problemas de tipo familiar que involucren a hijos , nietos o cualquier otra persona de su núcleo cercano
¿Familiares y cuidadores que no son usuarios de la DNSFFAA pueden consultar también con
respecto a un usuario mayor de 65 años?
Si, lo pueden hacer, anotando a la policlínica de PSICOGERONTOLOGIA al usuario y
concurriendo con él o no.
826
VI Congreso Marplatense de Psicología
En nuestra policlínica podrán plantear los motivos de sus inquietudes, o simplemente sus dudas y
traeremos de orientar la situación de forma tal que sea beneficioso tanto al adulto mayor como al
núcleo familiar que lo rodea.
Por lo tanto….
Si usted es un usuario mayor de 65 años de la DNSFFAA o es pariente o cuidador de alguien con
éstas características dése una vuelta por la policlínica de PSICOGERONTOLOGIA.
Téngalo presente
POLICLÍNICA DE PSICOGERONTOLOGÍA
Departamento de Salud Mental
Servicio de Psicología
Al Lado de la Sala 2 planta alta
HCFFAA Entrando por 8 de octubre
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VI Congreso Marplatense de Psicología
“Cada día nos levantamos para la misma tarea: comprender lo incomprensible; vamos adelante, por
ese tiempo terriblemente lacerante, como a través de un zarzal.”
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VI Congreso Marplatense de Psicología
psicóloga. En un momento me dice: “Sé que te caigo como el orto, vos te vas a llevar muy bien con el
padre de Marquitos”.
En el sillón se movía sin poderse controlar.
Siguiendo a Bellomo, L., en su artículo sobre las modalidades de comunicación en la entrevista
psiquiátrica, afirma que ciertos sujetos que consultan, se ven impulsados a actuar por la demanda
interna que siendo la misma impostergable, utilizan para ello al entrevistador como prolongación de su
propio self.
“Establecen una relación narcisista de objeto, en la cual el sujeto entrevistado, está centrado en
el placer de la expulsión.” Predomina la actuación por sobre la reflexión. Esta entrevista tuvo
exactamente, estas características.
Dice que con el padre del niño se lleva mal y que hizo cualquier cosa por retenerlo, pero que él
la abandonó. Seguidamente pregunta si puede contar algo.
Por algún motivo, le digo que sí, que la escucho y narra la siguiente escena: “Con el padre de
los chicos, teníamos una fantasía que no pudimos cumplirla pero como lo amaba tanto, y todavía lo
amo, la cumplí en parte. Nosotros queríamos incluir a un tercero, a una chica y tener relaciones los
tres, justo nos separamos… Contraté a una prostituta que me cobró mucho, tuvimos relaciones, filmé
todo y se lo mandé a mi ex…” Frente al relato, no me inmuté.
Mientras hablaba, no podía dejar de pensar cómo sería Marcos, con qué niño me encontraría,
con que defensas contaría, como habría sobrevivido a esta madre que a esta altura no tenía dudas de
estar frente a alguien con rasgos psicopáticos.
Encauzo la conversación hacia Marcos y le pregunto acerca de los primeros años de vida, qué
me podía decir. Si podía describirlo, contarme cómo era, quien lo cuidaba.
Y para mi asombro me dice que JAMAS LO BAÑÓ, NI LO CAMBIÓ, que de todo eso se
ocupaba el padre, que ella tenía miedo a excitarlo sexualmente si lo tocaba, aun cuando era un bebé.
Pensé entonces en los cuidados primarios, en el concepto de dimensión mental, que hace referencia a
la estructuración del psiquismo y que solo puede pensarse en el marco del despliegue de una historia,
en la que lo hereditario, el contexto social e histórico están presentes así como la manera en la que el
Otro, imprima su marca humanizante.
¿Cómo habría sido el pasaje de lo biológico a la constitución subjetiva? ¿Y las zonas erógenas?
¿Tendrán las marcas del placer o del dolor?...
Con esta mirada de la madre a su hijo recién nacido y con la imposibilidad de atender a las
necesidades básicas. ¿Cómo habría sido el embarazo, con qué habría fantaseado? ¿Era o no su falo
imaginario? ¿Colmó su falta fálica? ¿Tuvo valor de signo? ¿Fue un objeto valorado? Si partimos de la
premisa de que no hay hijo no deseado, cabe preguntarse, deseado para qué.
Cada palabra de Mariana me asustaba más.
Cierro la entrevista con algún comentario intrascendente y le doy un turno para Marcos. Le digo
que voy a ver si puedo trabajar con él, que voy a citar al padre y que en un tiempo la llamo.
Seguidamente, realizo un recorte clínico de algunos momentos significativos de las sesiones.
Cuando ingresa el niño al consultorio, tuve la sensación de la desprotección absoluta.
Como alguien que se encuentra en una casa que acaba de estallar, sin paredes, sin sostén
alguno. Estaba con el uniforme de la escuela, raído, se lo veía descuidado. Tenía los brazos escritos
con fibras, con dibujos de calaveras y los nombres de las compañeras. Todo junto.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Me mira fijo y me dice que ya sabe lo que hacen los psicólogos y que él tiene que jugar, que
siempre le piden lo mismo. Luego de presentarme, le digo que puede jugar si quiere, que puede
hablar, que puede dibujar. Me dice que primero vamos a jugar, a manera de imposición. Quiere jugar a
Las Damas. Cuando no gana, no tolera la frustración, y reacciona, insultando y pateando cada cosa
que encuentra a su paso.
Los juegos reglados, propios del período del desarrollo en el cual se encuentra el niño y que
nos dan indicios de cómo se vinculan con el semejante, si tolera o no los turnos, si puede superar algo
del carácter de la frustración, es vivido como un ataque del que carece de recursos para reponerse.
Se acerca al cajón de los juguetes y saca cuatro muñecas articuladas a las que les pone
nombres de personajes famosos. A una rubia la llama Anna Kournikova y a otra morocha, Angelina
Jolie. Comienza a pegarles y a decirles putas de mierda, perras. Yo observo la escena y al rato le
pregunto por qué está tan enojado. Me dice que las mujeres son todas unas putas y que quiere
matarlas, que tiene armas en la casa porque el abuelo es policía.
Todo su discurso es hipersexualizado. Intenta que me siente en el piso para jugar con las
muñecas pero no accedo. Es decir, todo el tiempo intenta llevarme a su terreno, incomodarme, lo
mismo que intentó hacer su madre en la primera consulta. Pero a diferencia de aquella, Marcos no me
produce rechazo, al contrario, me ofrezco a ayudarlo. Su mirada es fría y tiene una actitud pedante, ya
que dice que todos los juegos del consultorio los conoce. Se queja de los juegos de mesa a los que le
falta alguna ficha, a los que ve incompletos, y me exhorta a que consiga lo que falta, a que lo
solucione. Estas son sus afirmaciones, las que menciona con un tono de voz firme.
Un rasgo que comienza a manifestarse a partir de la tercera sesión, es la necesidad de
exhibición. Se recuesta en el amplio sillón y se levanta la remera. Presenta eccema, hongos y
lastimaduras de rascarse. Indago acerca del tiempo de estas marcas y me dice que no son nuevas
porque siempre, desde pequeño, va al dermatólogo.
Si bien esta exhibición forma parte de querer generar impacto, pude leerla como un pedido de
ayuda. De un niño con un profundo sufrimiento psíquico que estaba empezando a manifestarse.
Estas afecciones psicosomáticas las pensé como defensas frente a un posible ataque sexual
por parte de la madre. Esta piel ajada y poco deseable, ahuyentaba la posibilidad del abuso sexual.
Recordé la entrevista con la madre en la cual temía excitarlo si lo acariciaba, cuando seguramente era
ella quien se excitaría.
Luego me cuenta que siempre lleva gotas para la conjuntivitis, que es crónica, que nunca ve
bien. También esta frase me remitió a pensar qué cosas veía Marcos, de qué se estaba protegiendo al
ver borroso.
En esta sesión cuenta que ve pornografía desde los nueve años, con amigos más grandes, en
Internet y en revistas. Ambos padres lo saben.
Para pensar los avatares de la sexualidad infantil, parto de la postulaciones de Freud, S. en Tres
Ensayos de Teoría Sexual, donde introduce el concepto de disposición perversa polimorfa, al asegurar
que bajo la seducción el niño practica toda clase de transgresiones, que opone escasas resistencias
ya que aun los diques anímicos no se constituyeron, estos frenan los excesos sexuales: la vergüenza,
el asco y la moral.
Es taxativo al afirmar la importancia de que instale la amnesia infantil y la represión de la
sexualidad infantil, ya que como sabemos, los objetos en este momento del desarrollo, son de carácter
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Esta es la única vez que se angustia. Relata una escena en la cual la madre se acerca “con
cara de mala” a bajarle el pantalón frente a todos, a la nueva pareja de ella, estando presente también
la hermana, para avergonzarlo.
El golpe a un niño siempre es incestuoso, porque implica el poder sobre alguien cuyo cuerpo es
objeto de goce y que no tiene tercero de apelación, quedando sometido a un capricho.
No lo toca para acariciarlo pero sí para pagarle, haciendo uso de la autoridad de la cual el niño
no tiene como escapar. La encerrona trágica.
Continúa diciendo que la madre le dice que no sea maricón y que se banque los golpes porque
hay padres que les pegan con cables o cinturones a los hijos. Mostrando su falta de empatía y
generando cada vez más sufrimiento en Marcos.
En otra consulta, le pido que “dibuje una familia haciendo algo”, (TFK). Me pregunta si la
familia puede ser de animales. Le digo que sí, que la dibuje como él quiera. Seguidamente me dice
que hay familias de animales, humanas y familias de palabras…
Finalmente dibuja primero a la madre en el centro de la hoja, luego al padre, mucho más
pequeño, después se dibuja él, del mismo tamaño que el padre, cercano a la madre. “Todos están
bailando, como borrachos”, según describe Marcos.
Los rasgos que dibuja en la madre también me inquietan, ya que le hace pantalón y una pollera
superpuesta, es decir, portando atributos de ambos sexos.
Cuando le pido asociaciones del dibujo, me dice que se llama “Nazarena” pero que en realidad
es “Nazareno” haciendo alusión a un personaje televisivo. Dice que es una escena de “Sin Codificar”
en donde bailan y hacen chistes en doble sentido. Pensé que este nombre remite a la falta de códigos,
a que todo se muestra sin disfraz en una familia en donde la represión, el velamiento, no se inscribe,
donde falta lenguaje, símbolos y sobra cuerpo… Por algo Marcos, frente a la consigna del test,
pregunta si puede dibujar una familia de animales…
Podría hallarse obturada la castración de la madre. Aún es prematuro realizar inferencias, pero
este niño podrá estar identificado con el falo, dimensión que nos acercaría al concepto de fetiche.
Entendido como el sustituto simbólico del falo faltante en la madre. Solo la continuidad del
tratamiento y pensar el caso a la luz de la teoría y su profundización, podrá confirmarse o rechazarse
esta hipótesis.
A la altura del Seminario 4, La relación de objeto, Lacan establece formas de relación entre la
madre, el niño y el falo como tercer elemento.
En tanto el niño puede estar identificado con la madre, dimensión que nos acercaría a la
identificación con ella, terreno de la homosexualidad; identificado con el falo, dimensión del fetichismo;
identificado con la madre portadora del falo, campo del travestismo o presentarse como portador del
falo. Esta versión es la que daría cuenta de la salida del Complejo de Edipo, identificado con el padre.
Las entrevistas con el padre, Julio de 35 años, me aportan poco, ya que se muestra como un
doble de su hijo. Habla como si ambos tuvieran la misma edad, se visten con la misma ropa, ambos se
tiñen el cabello. Marcos le devuelve al padre la detención del paso del tiempo, en donde él no
envejece, el eterno mito de Narciso.
Oscar Wilde retoma el mito de Narciso. El muere fascinado por su propia imagen que
observaba en las aguas de un río que era el Dios Padre de los Ríos. Queda espejado en las aguas del
propio padre. Cuando las sociedades vieron morir a Narciso, pensaron en el Dios Padre estaría muy
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apenado y preguntaron: ¿Estás triste? a lo que el Dios Río responde: “Sí, estoy acongojado, dolorido
pero no porque haya muerto Narciso sino porque cuando él me miraba, yo en sus ojos veía reflejada
mi propia belleza”.
Recordé este pasaje cuando tuve una nueva entrevista con Julio. En la misma, dice que siente
celos de su hijo porque su novia actual, de 23 años, lo mira a Marcos con deseo de acostarse con él.
Puede observarse las fallas graves en ambas funciones parentales. Con lo cual la asimetría
psíquica que lo ubicaría como un niño al que hay que proteger, no aparece, y su propio hijo es vivido
como un competidor sexual con 11 años. Asimismo, vuelve a aparecer la renegación como defensa
predominante, propia de la estructura perversa, que alcanza a todos los miembros de la familia. El
padre comenta que tuvo problemas con las drogas y que siempre le costó “controlarse”.
Lo que rescato de estas entrevistas es que el padre relata que cuando Mariana no tolera más a
Marcos, lo expulsa de la casa, colocando en una bolsa grande sus pertenencias y subiéndolo de mala
gana a un taxi para que vaya a otra casa… Es decir, que tanto la escuela, como la madre y a veces el
padre, lo expulsan y dejan a su decisión dónde pasar la noche. A veces en lo de los abuelos, o en lo
de algún amigo. “Nunca se sabe dónde voy a terminar”, dice Marcos en una sesión. Todo el tiempo
pienso en el grado de desprotección, de desinterés de quienes lo rodean, de la ausencia de empatía,
nadie logra verlo como a un niño, recién ahora, en vías de convertirse en púber.
Esta falta de control que manifiesta el padre es análoga a la imposibilidad de prestar atención,
de estar concentrado en una tarea, de quedarse quieto cuando la situación lo amerita, de moverse sin
metas, que presenta Marcos. Podría pensar en la hiperactividad como una defensa maníaca contra la
depresión, como un modo de desmentir la tristeza y la apatía.
Recuerdo una de las últimas consultas en donde Marcos estuvo caído, sin ganas de hablar. Ve
en el escritorio unas golosinas y pregunta si puede llevarse una. Le digo que sí, que elija la que quiera
porque las dejó otro chico para compartir y exclama: “Yo también voy a traer algo para todos”. La
sesión siguiente trae galletitas infantiles. Fue un pequeño signo de que él aún es un niño y espera que
alguien le devuelva la mirada de lo que es, creo que actualmente no se halla en posición de niño.
Traté de reubicarlo y devolverle una mirada tierna, que lo ayude a entrar en otro circuito. Que
comience a armar otras escenas, a jugar otros roles, proponerle otros modelos vinculares que llamaría
diferenciadores, a través de juegos, de contar nuevas historias alejadas de lo siniestro, de lo oscuro.
Que aparezca algo del orden de la diferencia.
Cuando hacía un mes que Marcos asistía a las sesiones, Mariana consideró que ya no
necesitaba tratamiento, quería que deje la terapia, pero intercede la escuela poniendo como condición
sine qua non realizar tratamiento para conservar la vacante. Nuevamente, quien acota el goce de la
madre es un tercero que no es el padre del niño, ni otro adulto, sino una institución.
Esto me llevó a pensar en cuál es nuestro lugar frente al maltrato infantil. Si el darle la palabra
al niño, escuchar lo que dice y lo que calla, brindar este espacio en donde logre historizar el
sufrimiento, conectarse con los aspectos muertos, cediendo lugar a investiduras libidinales nuevas, es
suficiente. Pero algo no alcanza y decido citar a la madre.
Le comento que si ella persiste en los golpes, la escuela y yo íbamos a hacer una denuncia por
maltrato. Se tomaron medidas de protección como sugerir que el niño viva con el padre, aunque sea
transitoriamente. Los problemas alérgicos y de la piel van cediendo a medida que puede hablar, que
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puede simbolizar, entrar en la cadena significante para que pueda aparecer como sujeto deseante, si
es que esto fuera posible en esta instancia.
El juego “Sobrepalabras” es actualmente, su favorito.
Continúa relatando sueños donde hay personajes vestidos de negro, asesinos que lo persiguen
y lo quieren lastimar. Cuando los relata, se rasca intensamente los brazos, las piernas y la cabeza.
La madre no pudo sostener nunca un tratamiento psicológico, con lo cual asistiría solo bajo
orden judicial. Pero las medidas fueron efectivas, al menos hasta este momento.
Actualmente, Mariana desarrolló una enfermedad psicosomática, la fibromialgia que afectó sus
manos. Con lo cual de alguna manera, lo que no puede hacer por la imposibilidad de controlar los
impulsos, las fallas en la represión, de formularse alguna pregunta atinente a la relación con su hijo, a
la imposibilidad de demandar ayuda, de reflexionar, algo pone tope al maltrato hacia Marcos, ya que
no puede tocarlo…
Continúo viendo a Marcos una vez por semana. Me propongo presentarlo en la próxima
supervisión institucional como así también desarrollar exhaustivamente la teoría, ya que las
particularidades del caso, lo justifican absolutamente.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Cuando escuché esta noticia me dio una bronca.... ¿cómo puede ser? ¿Qué falta para bastardear más
la educación? si antes no querían estudiar o estaban desmotivados estas medidas van a hacer que lo
estén menos!!!
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Si tenemos en cuenta que más adelante, en el capítulo VI, en sus folios 20 y 21 -en donde da
cuenta del Periodo Extendido de Enseñanza-, artículo 18; se explicita cómo será la promoción o no al
año lectivo siguiente de aquellos estudiantes que no alcancen los progresos necesarios en relación a
los créditos requeridos, caen los argumentos que se refieren a la imposibilidad de la repitencia o
testimonios como los antes mencionados. Entonces, resulta al menos llamativo que una significativa
cantidad de los comentarios que se pueden encontrar al pie de las notas periodísticas sobre la
normativa en cuestión no dan cuentan de una lectura de la reglamentación, lo que produce que, en
ocasiones, las justificaciones de las posiciones tomadas resulten equivocadas e innecesariamente
beligerantes al partir de premisas falsas. Cabe preguntarse si los comentarios se realizan en relación a
la lectura de la reglamentación o se trata de comentarios vertidos desde posturas de rivalidad,
envidia… de aquellas que podemos pensar a un nivel más imaginario.
Incluso, resulta interesante poder plantear la percepción solapada en la cual se pierde de vista
que una nota periodística no necesariamente da cuenta fielmente del texto de la propuesta (en este
caso); también cabría reflexionar acerca de sí los medios de comunicación tienen o deberían tener una
función educadora, o si debemos hacer un trabajo más arduo en términos de reconocer y tener más
presente que todo discurso tiene un enunciador y un lugar de enunciación.
Una de las líneas que podemos encontrar en los comentarios se refiere a la pérdida del
incentivo “se pierde el entusiasmo por aprender”; “Esto genera que los alumnos no se preocupen por
estudiar y no adquieran conocimientos”; “Para una mejor inclusión, también podríamos obligar a los
pocos chicos que estudian, a que dejen de hacerlo”; “con esta normativa estamos premiando la
desaplicación y la holgazanería estudiantil y desalentando al estudioso”. Esto nos hace preguntarnos
por la fuente del interés en los niños, ya que desde estas posturas parecería sostenerse la
necesariedad de que a otros les vaya mal como fuente del propio incentivo. ¿Dónde quedaría el deseo
epistémico por el aprendizaje, el deseo por buscar soluciones, por autosuperarse? Marco Aurelio se
preocupaba porque el actuar en relación al deber no debía quedar supeditado a lo decoroso… “Haz lo
que es correcto no porque sea lo decoroso sino porque de ese modo te das a ti mismo placer” y
parece que hoy en día lo estamos supeditando a que haya una diferencia con el otro y
fundamentalmente a que esta diferencia quede señalada, que haya una sanción simbólica acerca de
ellos. ¿Qué pasaría entonces en un grupo en el que todos los niños son estudiosos? ¿Tendríamos un
grupo de chicos poco incentivados? Consideramos más bien que se trata de la defensa de la
dimensión de la rivalidad y la competencia como ideales o valores a preservar.
La escuela es un espacio en el cual el niño o adolescente pasa una cuota importante de su
tiempo y se constituye como un lugar de socialización fundamental para el sujeto. Lugar en el cual
adquiere normas y pautas, donde se tiende a que alcance el respeto por el otro, la solidaridad, y la
responsabilidad. Es una institución destinada a dar al estudiante formación, información, contención,
en la que entra en relación con otros haciendo que la familia deje de ser el único lugar de aprendizaje.
Como dice Raquel Gioffredo (2008), tanto la familia como la educación, es decir la escuela, son
instituciones fundamentales para la construcción del sujeto por los efectos y las improntas o marcas
que dejan en cada uno.
Hablamos de la escuela en términos de institución, lo que implica que se trata de un producto,
una creación, un dispositivo social destinado a su vez a producir cierto efecto y a re-producirse en
tanto artificio de la cultura. No podemos pensar, entonces, la institución educativa como un producto
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natural. Es una creación humana, creación particular ya que el colectivo social descansa sobre ella
depositando allí gran parte de la responsabilidad de la transmisión de la cultura, es decir de la
modelación de los sujetos sociales. Es en este sentido que cobra fuerza preguntarnos si la
competencia y la rivalidad son los ideales que queremos seguir sosteniendo en nuestros modos de
subjetivación.
En estrecha relación con la anterior línea argumental, ubicamos una considerable cantidad de
comentarios que ponen el acento sobre el eje del esfuerzo. Parecería ser que el hecho de que un
compañero no tenga un aplazo sino un desaprobado por un lado produciría una baja de interés y por
otro no premiaría el esfuerzo de quien sí aprueba. Un análisis rápido del asunto nos llevaría a pensar
en principio que el hecho de que un chico obtenga un ocho y otro un tres nada nos dice sobre el
empeño que cada uno de ellos se vio obligado a poner para alcanzar tan calificación. Recordemos a
Mozart y Salieri. Nos sirven aquí las palabras de Ferrater Mora citado por E. Guizán (1988)
(…) supongamos que para alcanzar algo estimado valioso no es necesario ningún esfuerzo o que, en
todo caso, el esfuerzo realizado no cueste ninguna “pena”. No por ello ha de ser menos valioso […]
Algunas doctrinas morales, muy dadas al rigorismo, no parecen creerlo así. Para empezar, asocian lo
que es valioso con algún deber, y hasta hacen del deber algo valioso. Luego asocian el deber con el
esfuerzo en cuanto que se juzga valioso sólo lo que se consigue esforzadamente.
En esta línea de análisis pueden encontrarse los siguientes comentarios: “una sociedad debe
construirse sobre la base del esfuerzo, de la disciplina, en nuestro país el estado genera ignorantes”.
Es posible poder pensar que si bien puede valorarse el esfuerzo o no, luego se evalúa en función de
resultados o de contenidos. Aquí entra en cuestión otro punto del debate que tiene que ver con el
hecho de que la mínima calificación en el primer ciclo de primaria será “regular”, no pudiendo utilizarse
el “aun no satisfactorio”, como nota conceptual y en el segundo ciclo será cuatro, no usando el uno,
dos y tres, como calificación numérica (Capítulo IV).
Ahora bien, ¿es el esfuerzo un fin en sí mismo? ¿O ha de ser considerado un medio para
obtener un resultado determinado?
En este punto son numerosos los comentarios que se leen al respecto: “si aislamos a los chicos
de las situaciones frustrantes, les estamos robando la posibilidad de aprender para la vida”, “sacar los
castigos y las evaluaciones suena bien para los mediocres”. En relación a esto, podemos
preguntarnos, ¿será lo mismo obtener una calificación baja a ser castigado? ¿Quién obtiene la
calificación y quién castiga? ¿Sacarse una baja calificación necesariamente implica una frustración?
Como podemos ver, en el presente trabajo nos propusimos introducir algunas preguntas y
reflexiones a partir de ciertos comentarios que se observaban recurrentes y consideraban significativos
en referencia a las líneas de investigaciones que el grupo de investigación persigue. Sin embargo,
son muchas las líneas de análisis que pueden llevarse a cabo a la luz de la lectura de una normativa
en general o de este documento en particular. Cada una de las líneas nos permite formular un sinfín de
interrogantes que se vinculan con diversos posicionamientos subjetivos que adopta tanto quien lee la
normativa como quien la comunica de diversos modos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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En nuestro quehacer diario como docentes de Nivel Inicial nos encontramos insertos en una
Institución Hospitalaria, por lo cual en innumerables ocasiones el equipo de salud nos solicita la
intervención con un paciente buscando otra mirada; otro modo de abordar a un niño que presenta
dificultades y que impactan sobre sí mismo agravando su enfermedad.
En la medida de nuestras posibilidades el desafío que intentamos abordar es descontextualizar
al niño enfermo de la realidad que trae aparejada una internación hospitalaria trabajando desde el
lugar de educación, salud y bienestar otorgándole un lugar de sujeto que juega y aprende dentro de
sus posibilidades. Amparados en primer lugar en el derecho que garantiza la Ley Nº 26.206 de
Educación Nacional que en su artículo primero “...regula el ejercicio del derecho a enseñar y aprender
consagrado por el artículo 14 de la Constitución Nacional y los tratados internacionales incorporados a
ella...” “La educación y el conocimiento son un bien público y un derecho personal y social,
garantizados por el Estado”, revistiendo carácter de prioridad nacional.
Asegurando dentro de sus fines y objetivos una educación de calidad con igualdad de
oportunidades y posibilidades; garantizando la inclusión educativa a través de políticas universales,
estrategias pedagógicas y asignación de recursos que prioricen los sectores más desfavorecidos de la
sociedad; asegurando igualdad y respeto a las diferencias entre las personas sin admitir discriminación
de género u otras; el sistema Educativo Nacional se estructura en cuatro (4) niveles- Educación inicial,
Educación Primaria, Educación Secundaria y Educación Superior-, y ocho (8) modalidades
La Educación Domiciliaria y Hospitalaria se constituye como “... la modalidad del sistema
educativo, en los niveles de Educación Inicial, Primaria y Secundaria, destinada a garantizar el
derecho a la educación de los/as alumnos/as que, por razones de salud, se ven imposibilitados/as de
asistir con regularidad a una institución educativa en los niveles de la educación obligatoria”.
El objetivo de esta modalidad es garantizar la igualdad de oportunidades a los/as alumnos/as,
permitiendo la continuidad de sus estudios y su reinserción en el sistema común cuando ello sea
posible dentro de los derechos del niño hospitalizado (UNICEF)
Entonces garantizamos además la “Educación para todos” (derechos declarados en
Salamanca) independientemente de la enfermedad, sino que el paciente se transforma en un sujeto
alumno potenciando así la salud.
En el Contexto Hospitalario la enseñanza escolar crea una comunidad de niños y normaliza sus
vidas: (IV Congreso en Barcelona, Derecho a la Atención Educativa de los Niños y Adolescentes
Enfermos. mayo 2000).
• Se organiza de manera grupal o individual, tanto en el aula como en las habitaciones.
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b) los contenidos que son acordes a su etapa evolutiva, evitando deserción escolar y atrasos en la
escolaridad.
Para esto trabajamos con dos ejes centrales:
• El juego. En la infancia el medio para la afirmación del yo, la más clara autonomía del sujeto
sobre el medio, y en este sentido, factor de salud. Permite afianzar nuevas conquistas, facilita la
comunicación con los otros y la posibilidad de escoger (los jugadores transforman una acción real en
algo lúdico)
Es la más clara manifestación de autonomía del sujeto sobre el medio y es en este sentido es
factor de salud, es liberador de endorfinas que ayuda a elevar el sistema inmune. También facilita la
comunicación con el adulto.
..”.el niño extenuado y aterrorizado reduce su juego”…
• Los cuentos por constituir la puerta de entrada y el camino hacia el mundo de la imaginación,
de la fantasía, de la creación estética.
Permite que el niño pueda valerse de la lengua como herramienta para lograr expresar la
subjetividad, por todo lo que permiten: fantasear, reparar, crear, ser protagonista, historizar, sentir y
expresar emociones... “escaparse” de la realidad hospitalaria.
La inclusión de la escuela en el ámbito domiciliario y/o hospitalario, se legitima en su
irrenunciable posibilidad de hacer el giro desde el paciente-objeto de intervención médica, hacia el
alumno-sujeto de aprendizaje de la educación.
Estamos convencidas acerca de la necesidad de construir espacios de enseñanza-aprendizaje
allí donde se encuentre el niño.
Esto es, acercar la escuela hasta su cama, su sillón de tratamiento, la sala de espera, su casa
... primero encontrarse con ese niño para después convocar su deseo de aprender más allá (y en
medio) de la circunstancia que le toca vivir. Desarrollar sus potencialidades como sujeto, incluyendo la
situación de enfermedad.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Gobierno de la Ciudad Autónoma de buenos Aires/ Secretaría de Educación. Diseño curricular para la
educación inicial.
Leif, L y Brunelle, L. “La verdadera naturaleza del juego”.Editorial Kapelusz
Winnicott, J. “Realidad y juego”.
Smith, M. (2003) Cuando digo no, me siento culpable. Nuevas ediciones de bolsillo.
Castanyer,O. La asertividad: la expresión de una sana autoestima.
Asociación HOPE (organización de pedagogos de hospitales de Europa). (2000, mayo). Carta Europea
sobre el Derecho a la Atención Educativa de los Niños y Adolescentes Enfermos.
Derechos del Niño Hospitalizado (base de datos).
Disponible en: www.unicef.cl/.../Derechos Niño Hospitalizado.ppt
(1994). Constitución de la Nación Argentina (base de datos)
Disponible en: www.constitution.org/cons/argen
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INTRODUCCIÓN
El Museo Social Argentino se funda el 23 de mayo de 1911 con el objetivo de estudiar las
problemáticas sociales que afectaban a la Argentina de principios de siglo y proponer políticas que
pudieran resolverlas. Su primer presidente es Emilio Frers, un abogado proveniente de la Facultad de
Derecho de la Universidad de Buenos Aires que entre 1908 y 1910 había sido presidente de la
Sociedad Rural Argentina. Esto marca una tendencia de tinte conservador en los actores que
participarán de los congresos y publicaciones de la institución.
Entre las participaciones más destacables del Museo Social Argentino se cuenta que en 1916
organiza el Primer Congreso Americano del Niño; en 1918, el Primer Congreso de la Mutualidad, con
el fin de fundar las bases para una Ley de la Mutualidad, asentar los cimientos para la organización de
una Federación Nacional de Sociedades de Socorros Mutuos e implementar un Seguro Social; en
1919, lleva a cabo el Primer Congreso Argentino de la Cooperación.
Cinco meses después de celebrado el Primer Congreso de la Mutualidad, el 9 de septiembre de
1918, el Dr. Alberto Meyer Arana brinda una conferencia titulada “Protección a la Infancia”.
De acuerdo con la distinción propuesta por la Prof. Dra. Lucía Rossi (Rossi, 2005) en relación
con las categorías trabajadas por Gino Germani (Germani, 1961), podría establecerse una
periodización temporal para la primera mitad del siglo XX, a saber: 1900-1916 (El Estado Conservador:
Participación Política Restringida), 1916-1930 (La revolución de las urnas: Participación Política
Ampliada), 1930-1945 (La Década Infame: Participación Política Restringida) y 1946-1955 (El
Peronismo: Participación Política Masiva o Total).
Esta clasificación adopta como criterio el acceso al sufragio de los ciudadanos. En base a ello,
la conferencia mencionada se ubicaría dentro del Período de Democracia de Participación Ampliada;
sin embargo, se observa que contiene ideas características del período anterior. Esto demuestra que
los tiempos institucionales y los tiempos sociopolíticos no son los mismos sino que las instituciones en
algunos momentos se mantienen conservadoras y en otros pueden resultar vanguardistas al resistirse
o anticiparse a los cambios en el contexto, respectivamente.
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En la conferencia “Protección a la infancia”, el Dr. Alberto Meyer Arana plantea que la cuna de
toda legislación protectora de la infancia se mece, originariamente, en la escuela. A fin de poner en
práctica esa legislación se han ideado cursos destinados tanto a cuestiones de Higiene Social,
Maternología y Puericultura como así también al estudio de los problemas sociales referentes a la
Beneficencia, Asistencia Pública, Patronatos para menores delincuentes, reformatorios y colonias de
relevamiento (Meyer Arana, 1918)
Meyer Arana toma el modelo de experiencias europeas de asistencia a la infancia desvalida,
principalmente el francés (Meyer Arana, 1906). Durante su trabajo en el Patronato de la Infancia,
donde se desempeña como vocal y secretario de la Comisión Directiva, se dedica a instrumentar las
herramientas necesarias para ayudar al niño abandonado a partir de la creación de escuelas, la
donación de alimentos y vestimenta y la puesta en marcha de un consultorio jurídico de carácter
gratuito.
La caridad y la asistencia social, temas esenciales en la obra de Meyer Arana, se plasman en
esta conferencia: “El niño extraviado y el huérfano, el delincuente, el mutilado y el vencido, todos los
insuficientes tienen sitio reservado en el consultorio de la protección que se llama asistencia social,
cuyo patrimonio lo constituye la caridad” (Meyer Arana, 1918; pp. 704).
Se observa que, de acuerdo a estos criterios de clasificación, el niño delincuente es considerado un
insuficiente al igual que huérfanos y minusválidos, de lo que se desprende que requiere de cuidados
especiales que deberán estar asegurados, en última instancia, por el Estado a través de la asistencia
social. De allí que el eje central de la conferencia se basa en argumentar los fundamentos que
sostienen la necesidad de proteger socialmente al niño pobre, muchas veces huérfano, y al que
comúnmente se denomina “vago” o “haragán”.
Se refleja en estas concepciones el espíritu de la Ley de Patronato Nº10.903, conocida como
“Ley Agote”, que se promulgará un año más tarde y que tendrá por finalidad corregir y
fundamentalmente evitar la desgraciada y dolorosa situación en que se encuentra el niño de la ciudad.
Para ello, suspenderá en algunos casos la Patria Potestad de los padres y ampliará el rol tutelar del
Estado para con aquellos niños (nominados como menores) considerados material o moralmente
abandonados (Juárez, 2013).
Se trata de un niño que es hijo de la miseria, portador de una existencia desgraciada que queda
explicada por la descripción del hogar en que vive: el conventillo. Su madre no puede dispensarle el
alimento que necesita, el juego que lo distraiga y las condiciones de hacinamiento de las viviendas
desbordan su umbral de tolerancia. Un niño que tampoco puede gozar de la presencia de su padre a
quien su extensa jornada laboral no le permite pasar tiempo con él. Esta desgraciada situación se ve
aún agravada cuando el niño pasa todo su tiempo en la calle, especialmente en el caso de los
huérfanos. De todos modos, el niño pobre soportaría vivir en ese cuarto diminuto que configura su
hogar en el conventillo de no ser porque la calle le completa ese espacio tan precario.
Ante esto, el Dr. Meyer Arana advierte que no debe olvidarse que se está ante un niño que
“ante todo necesita besos, abrazos y bondades” (Meyer Arana, 1918; pp. 706). Es así que afirma la
necesidad de que los niños pobres y huérfanos acudan a escuelas de preservación desde la mañana
hasta la noche. De este modo, el asilo, que siempre debe ser un refugio del pobre, debe significar para
el niño una escuela que lo prepare para la vida y que le permita homogeneizar las condiciones de
crianza respecto de los otros niños que no están presos de esa dolorosa situación.
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Asimismo propone que el alimento y la vestimenta que sus padres no puedan proporcionarle -
ya sea por las condiciones más anteriormente descriptas o por su orfandad- le sean otorgados por la
caridad. Estas afirmaciones corroboran el rol que se asigna al Estado, respecto de la función de los
asilos, y a las Sociedades de Beneficencia que ya venían funcionando desde fines del siglo XIX
respecto de la caridad.
Estas lecturas demuestran que el niño es concebido como un sujeto desvalido que requiere de
una estructura que no puede sostenerse en ambientes de pobreza que, lejos de cumplir su función de
contención, lo priva de las necesidades básicas de alimento y vestimenta y, finalmente, lo expulsa a la
calle. Esta configuración social articula la insuficiencia con la delincuencia, en tanto el niño pobre se
vuelve un niño peligroso.
Por ello propone que la educación es un recurso preventivo contra la miseria y el delito, porque
importa lograr el mejoramiento de un desviado antes que la pena de un delincuente. Como se observa,
Meyer Arana denuncia implícitamente un elemento que preocupa en esos años: la peligrosidad del
niño.
Frente a la potencialidad del peligro que el niño comporta se torna necesario que el Estado
ejerza su tutela como corrección de la existencia desgraciada que los padres pobres y el conventillo
conllevan. Es de este modo que el Estado debe distribuir sus acciones entre los Patronatos para
menores delincuentes, los reformatorios, las colonias de relevamiento y las Sociedades de
Beneficencia, entre otros.
Bajo la presidencia del Dr. Augusto Manuel Montes de Oca y con la necesidad de diagnosticar y
evaluar el impacto que las políticas sociales tienen sobre los trabajadores, el Museo Social Argentino
organiza en 1924 el Primer Congreso Internacional de Economía Social.
La sede elegida es el Colegio Nacional Buenos Aires y su sesión inaugural cuenta con la
presencia del Presidente de la República Argentina, Dr. Marcelo Torcuato de Alvear, hecho que señala
la importancia y trascendencia que este congreso implica para el Estado argentino.
La problemática de la infancia se instala entre los ejes principales del Congreso pero su abordaje
permite visibilizar cambios sustanciales en la concepción de niño con respecto al período anterior.
Las resoluciones adoptadas a partir de las propuestas de los conferencistas intervinientes se
publican un mes después bajo la forma de un proyecto de ley. Al respecto, se sostiene que todas las
estadísticas referentes al niño son de particular importancia y que aquellas que refieren especialmente
a su bienestar deben ser interpretadas para el público en forma popular, en boletines, folletos, artículos
en diarios y revistas, diagramas, cuadros gráficos, cintas cinematográficas y de una manera amplia por
todos los medios adecuados para el público no especializado (Boletín del Museo Social Argentino,
1924; pp. 487).
Estas estadísticas tienen por objetivo sustentar la acción social, que si bien continúa constituyendo
una de las principales preocupaciones a nivel social y político, la perspectiva que adopta está
enmarcada dentro de un Período de Democracia de Participación Ampliada (Rossi, 2005). Así, la
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concepción de niño que adopta este período puede verse expresada en el siguiente artículo de la
resolución:
“Todo niño tiene derecho a nacer sano y con honor […] Todo niño tiene derecho a una educación
que lo prepare para una vida completa, es decir, para desempeñar bien el papel que le corresponde
como miembro de la familia, de la ciudad, del Estado, de su país y de la humanidad en general. Esta
enseñanza esencial debe ser obligatoria y gratuita para todos” (Boletín del Museo Social Argentino,
1924; pp. 488).
A la noción de niño como sujeto desvalido y peligroso tutelado por el Estado mediante patronatos
y asilos surge como respuesta una noción de niño como sujeto de derecho a formarse para
desempeñarse en la familia y como ciudadano.
De hecho, en las resoluciones se postula que el niño abandonado debe ser atendido, de ser
posible, en hogares y no en instituciones y se afirma taxativamente que todo niño tiene derecho a ser
considerado inocente y que “el llamado niño delincuente debe ser tratado en forma especial como el
niño enfermo o retardado” (Boletín del Museo Social Argentino, 1924; pp. 489). Aquí se establece otra
importante diferencia: la atención especial que suple deficiencias se reserva sólo para los niños
enfermos o retardados. Es decir, el niño delincuente ya no es un niño insuficiente.
Se destaca entonces la idea de un niño con facultades creadoras y con derecho a expresarlas,
para lo cual se le debe garantizar que goce de recreos sanos que le permitan conservar y mejorar su
salud física. A este niño se lo debe estimular a que asista a espectáculos que le produzcan un placer
espiritual y le permitan desarrollar su inteligencia, a la vez que le ayuden a formar su carácter.
La concepción de niño cambia y va de suyo que el lugar desde el cual el Estado lo contemple,
también. Para esto, el Estado ya no debe asegurarse de ejercer la patria potestad como lo proponía la
Ley Agote sino que su rol será el de garantizar que todos estos derechos que deben poseer los niños
se brinden. Es decir, se trata de un Estado que garantiza derechos antes que asumir obligaciones.
Con respecto a la salud, se establece que se deben instrumentar leyes tendientes a prevenir la
creación de generaciones de enfermos y degenerados. Para ello los servicios públicos –a través de
médicos y enfermeras¬– deben cumplir un papel destacado asistiendo al niño y a su madre desde el
momento del nacimiento brindándole la atención necesaria.
Este Estado debe preocuparse por evitar que surjan niños enfermos y degenerados; debe evitar el
daño que la falta de cuidados básicos desde el nacimiento conlleva; debe garantizar al niño y a su
madre acceso al sistema de salud. Así, se diferencia del modelo de Estado que persigue como
principal finalidad corregir los problemas que la escasez de recursos económicos genera en los niños
que viven en conventillos y carecen de correcta alimentación y vestimenta, niños que finalmente se
convierten en vagos que pasan el día en la calle y por ende, se tornan peligrosos.
En 1924 y pocos meses después de que se lleva a cabo el Primer Congreso Internacional de
Economía Social, la Sociedad de Naciones adopta la Declaración de Ginebra, un texto histórico que
marca un precedente a nivel mundial donde se establecen por primera vez los Derechos del Niño y las
obligaciones de los adultos para con ellos.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En esta oportunidad nos proponemos reflexionar sobre el valor del jugar en la niñez, y su
consideración en tanto derecho inherente a esta etapa.
Para tal fin, en un primer momento repasemos algunas cuestiones teóricas sobre la concepción de
juego. Luego daremos lugar a las reflexiones arribadas en torno a la temática propuesta como así
también a los interrogantes surgidos del presente recorrido.
Más allá del Principio de Placer (1920) es sin duda uno de los escritos bisagra en la Teoría
Psicoanalítica. Allí Freud introduce su concepción de la pulsión de muerte y uno de los referentes
desarrollados que dan sustento a este cambio en la teoría es el juego infantil.
A través de la observación del juego de su nieto, Freud concibe al Fort-Da como nodal en la
constitución del psiquismo. Lo ubica en ese particular y difícil momento de separación y diferenciación
con respecto a la unión-fusión inicial con la madre “…de ser, uno distinto a la madre…” (Freud, 1920).
Momento de transición y elaboración, que requiere una tramitación por parte del pequeño y que
este juego de ausencia y presencia viene a dramatizar, a poner en escena, para poder elaborar ese
real que llama a la simbolización.
Freud ensaya algunas interpretaciones del famoso juego. Lo concibe como un gran logro
cultural del pequeño en tanto renuncia pulsional, como la posibilidad de adueñarse de la situación
mediante el pasaje de la pasividad a la actividad al tiempo que destaca la compulsión a repetir y su
“…ganancia de placer, pero de otra índole”. También hace referencia al deseo de los niños de ser
grandes y “obrar como mayores”.
De esta manera, el juego le permite a los niños y niñas poner en escena y tramitar aquello que
les resulta traumático, aquello que conmueve su vida y por lo tanto requiere de su inscripción, de su
simbolización para poder elaborar dicha situación. La separación/diferenciación de la madre es sin
dudas un momento crucial, pero no el único en donde el juego tiene un valor indiscutible en la
economía psíquica.
Para entender el lugar que le da Jean Piaget al juego es necesario comprender que era lo que
estaba investigando. Éste autor era un epistemólogo que incursionó en la psicología para dar
respuesta a su pregunta de investigación, la cual era ¿cómo se construye el conocimiento? A partir de
su trabajo, Piaget planteó que el juego es el reflejo de la experimentación del niño con el mundo, que
se da a través de los procesos de asimilación y acomodación.
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A través de su desarrollo el niño va atravesando por distintas etapas del juego, diferenciándolas en
tres. A la primera la denominó juego de ejercicio, el cual se da durante el período sensoriomotor, que a
medida que va creciendo se va complejizando. El niño investiga el mundo a través de sus sentidos.
Este tipo de juego se da previo a la adquisión de la función simbólica. Una vez que esa función
es adquirida se empieza a observar el juego simbólico, es característico del período preoperatorio. Es
a través del símbolo que el niño va a poder traer aquél objeto que no se encuentra presente en dicho
momento. Por último se encuentra el juego de reglas, este tipo de juego requiere una inserción total
del niño dentro de la sociedad. Ya que ése debe reconocer el hecho que se encuentra inmerso dentro
de reglas. A su vez debe tener adquiridas las funciones de seriación y clasificación. El niño debe poder
enfrentarse a las frustraciones y tolerancias propias de este tipo de juego.
Winnicott era un médico psicoanalista inglés que a partir de su trabajo como pediatra, fue
estudiando cómo es la constitución psíquica en los niños. Dicho autor entiende que el juego como una
función estructurante para la constitución psíquica. En relación a la construcción de objetos planteo
tres tipos. El primero de ellos es el objeto subjetivo, que se da en un primer momento, de
indiferenciación yo-no yo, en la cual el niño es parte de la madre, cuya función justamente es la de
complacer todo los deseos del niño, incrementando aquél sentimiento de omnipotencia. En esta
primera etapa el juego se da a partir de la función con este otro. Posteriormente dicha madre, debe
permitir que el niño experimente el proceso de ilusión-desilusión, por el cual el niño va dejando de lado
aquel sentimiento de omnipotencia. Más tarde este mismo objeto que en un principio se encontraba
fusionado al propio niño (objeto subjetivo) es repudiado y rechazado por éste, luego reaceptado y
entendido objetivamente. Esto va a permitir instaurar la confianza, que luego va a posibilitar que el niño
pueda jugar bajo el supuesto de que la persona que le es de confianza, aquella a la cual ama, se
encuentra cerca, y que sea posible de ser traída a través de la imaginación. Esto es posible a partir de
la construcción del objeto denominado transicional. Éstos permiten al niño ir construyendo las
categorías de presencia y ausencia, yo-no yo. Este objeto brindado al niño desde el exterior, vendría a
representar a esta figura materna. El juego se da en el espacio potencial que en un principio se
construye entre la madre y el niño, en la superposición de estas dos zonas. Ésta no es interna, pero
tampoco externa. En dicha zona se utilizan objetos externos que estarán al servicio del mundo interior
del niño.
Winnicott entiende que esta zona no es propia de la infancia, si no que perdura a lo largo de
toda la vida. Permite ubicar al sujeto en un espacio y tiempo distinto a la realidad. Esto se puede dar a
través del arte, la religión, la ciencia, etc. Le permite al sujeto romper con las tensiones entre el mundo
interno y el mundo externo.
De esta manera, pensar en el valor y el derecho a jugar de todo niño/a nos lleva a reflexionar
sobre ese Otro-otro que da condiciones de posibilidad para ello. Nos peguntamos ¿cómo y desde
dónde se habilita este espacio?
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Beatriz Janin (2005) nos acerca las siguientes palabras: “Como en la canción infantil, para que
un niño juegue alguien tiene que abrir puertas y alejar el terror… Es decir, alguien tiene que haber
posibilitado el armado de deseos e instaurar la esperanza de un encuentro-reencuentro”.
Por su parte, Alba Flesler (2005) enfatiza la importancia del jugar en el niño en tanto permite
marcar una distancia, una diferencia con respecto al Otro, por ello a pesar de ser individual no deja de
ser con el Otro. El niño solo podrá introducir esta “marca diferencial”, si el Otro primordial “ofrece
también su falta, dona su castración”.
En tanto a través del juego el niño/a se expresa, escenifica sus conflictos y vivencias, aprende,
conoce su mundo y se conoce él mismo, construye su subjetividad, entendemos que tiene un lugar de
inigualable valor en diversos ámbitos de distintas disciplinas.
Desde la Psicologia, recalcamos el valor diagnóstico del juego en el campo jurídico, educacional y
clínico. Especialmente en el terreno de la clínica y entendiendo al diagnostico desde una perspectiva
procesual, pensamos que los efectos, dadas las condiciones que habiliten ese espacio, pueden ser no
solo catárticos y terapéuticos, sino también analíticos.
Minnicelli, Maiale, Marassi y Marino (2012) en una publicación titulada “¿Es posible jugar por ley?”
se preguntan por las posibilidades, implicancias y efectos del juego, en tanto regulado por una ley
jurídica, la LEN, Ley de Educación Nacional Argentina. En el artículo, las autoras plantean las
diferencias existentes entre juego como contenido curricular y el valor intrínseco del jugar, entre
material didáctico y juguete, entre acto educativo y acto de jugar. Advierten sobre la paradoja que crea
el considerar el juego como un derecho, como un contenido pedagógico a enseñar en tanto pasa a ser
una obligación que requiere planificación y anticipación por parte del docente de Educación Inicial que
inscribe su desempeño en el marco de la LEN.
El análisis desarrollado advierte sobre la importancia de clarificar cual es la noción de juego de los
docentes y a partir de ahí, cual es su papel y su función. En este sentido es que nos hacemos eco de
las reflexiones de las autoras en cuanto a ambas cuestiones:
Sobre su concepción de juego nos dicen: “El niño que juega va incorporando el entorno a su
psiquismo a la vez que el mismo va insertándose en dicho entorno (…) Es su modo, por excelencia, de
“ser” en el mundo”. El juego no puede ni debe ser gobernado, para ser tal, en el sentido que lo
entendemos y exponemos, debe dar lugar a la creatividad e intencionalidad de los mismos sujetos
Acerca del posicionamiento de los docentes, profesionales y demás trabajadores del campo de la
niñez y adolescencia, tomamos las palabras de la Dr. Minnicelli (1994) quien expresa: “El juego
presenta como condición necesaria pero no suficiente tiempo y espacio para desplegarse.” La
posibilidad de tener la posibilidad”: esta es la condición del juego, que haya Otro que ofrezca la
posibilidad de tener la posibilidad de jugar”.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
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proyecto está dirigido a jóvenes que atraviesan un periodo de crisis, de ruptura, una situación crítica en
la cual deben tomar decisiones, por lo cual se considera como población en riesgo.
En Orientación Vocacional se introduce una cuestión ÉTICA; hay que tener en cuenta como
orientador que la capacidad de ELEGIR es propia del alumno y NO del orientador.
Entonces la tarea del equipo es brindar recursos para que el sujeto pueda desarrollar destrezas
y así pueda ELEGIR de la manera más autónoma; cumpliendo así el orientador la tarea de facilitador,
no dando respuestas sino estimulando. Desde la especificidad de su rol debe reflexionar sobre su
propio deseo y expectativas y lograr cuestionarse a sí mismo mediante una DISOCIACIÓN
INSTRUMENTAL.
Se utiliza como instrumento de trabajo además del abordaje individual mediante entrevistas, el
dispositivo grupo operativo. Se llevaron a cabo actividades grupales y muestras educativas para que
conozcan la oferta académica de la ciudad.
Hay que tener presente que la población con la que se trabaja son alumnos de una escuela
municipal de bajos recursos, que cursan el último año escolar, y deben tomar la decisión de: seguir
una carrera que este entre sus posibilidades, salir a trabajar, o realizar las dos cosas. Lo cual no es
tarea sencilla. Por eso la Orientación Vocacional es considerada como un espacio de aprendizaje; en
el cual el objetivo principal será que el alumno pueda desarrollar habilidades (destrezas) para poder
elegir y a su vez sostenerlo en el tiempo.
Considerando que ELEGIR es un PROCESO, lleva tiempo. Es una búsqueda que comienza o
ya comenzó en cada uno y sigue en la relación que se establece con los demás, cuando se habla con
ellos y se sigue pensando. Hay que tener en cuenta que estos alumnos ya vienen eligiendo, por lo que
la tarea del orientador será reveer si están eligiendo de un modo autónomo.
Es importante como orientadores tener presente el triángulo de la elección: (hay interacción)
considerando:
LO QUE QUIERO (gustos, intereses);
LO QUE PUEDO (si lo que quiero puede ser llevado adelante y sostenerse como proyecto; plantea
limitación o posibilidad) y
LO QUE DEBO (tiene en cuenta las respuestas del otro; aquello que hace que me acerque de aquello
que quiero o puedo).
Estos son tres elementos que intervienen en la elección, los tres están interrelacionados y no
hay jerarquía entre ellos. Hay que tener en cuenta que la elección siempre implica ganar pero perder
algo también (por eso no es fácil elegir).
Una de las actividades muy interesante que realizamos, fue “PAPELES EN BLANCO”, en la
que cada alumno pega en su espalda una hoja en blanco, y el resto de los alumnos con un lápiz de
diferente color anota la profesión o actividad que creen que debería seguir/elegir esa persona. Cada
alumno en la hoja que tienen en su espalda debería tener anotadas tantas profesiones o actividades
como alumnos presentes haya en el aula.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Luego los alumnos se sientan en ronda, y cada uno va diciendo que creen que sus compañeros
pueden haber escrito.
Después toman la hoja de su espalda y ven si concuerda la elección que sus compañeros
realizaron con las que el alumno en cuestión suponía que le habían escrito.
El objetivo fue identificar qué actividad o profesión a futuro ven los alumnos en cada uno de sus
compañeros. Y luego si ello guarda relación, es decir, si concuerda con la elección que haría cada uno.
Se analiza entonces, desde la mirada del otro ¿qué me ven haciendo mis compañeros ?... Y a
su vez, ¿Qué creo que me ven haciendo/eligiendo mis compañeros? Y ¿Qué elección me veo
realizando?... ¿hay relación entre la elección que me veo haciendo y la que mis compañeros creen que
haría en un rol laboral-profesional?, ¿mis compañeros creen que puedo dar más de lo que realmente
yo creo que puedo dar de mí?...frente a ello hubo alumnos que se asombraron al ver como sus
compañeros esperaban más de lo que realmente ellos creían dar por si mismo. Una alumna creía que
no le habían anotado nada o tan solo se quedaba en el rol de madre, y la mirada de sus compañeros
la ayudaron a poder ver más allá de ese rol. Demostrándole que tiene capacidades para mucho más,
lo cual favorece a su autoestima, imagen de si.
Puede decirse, el autoconocimiento permite ir tomando conciencia de la experiencia personal y
de las propias potencialidades, de una forma más realista, motivando al adolescente a mejorar sus
aptitudes y capacidades en la zona de interés.
En esta actividad “papeles en blanco”, los alumnos expresaron “LO QUE QUIEREN”.
En el siguiente encuentro se realizó una MUESTRA EDUCATIVA, con el objetivo de brindar
ofertas académicas que brinda la Ciudad de Mar del Plata. Los alumnos pudieron evaluar el QUIERO,
PUEDO y DEBO contrastando entre duración de la carrera, ámbito público y privado, la posibilidad de
trabajar en simultáneo con el estudio.
Otro aspecto que el orientador debe tener en cuenta son aquellos condicionantes que afectan
la elección del adolescente, tales como el deseo de sus padres, la falta o escasa información sobre
actividades, prejuicios o valoración sobre determinadas carreras, la posibilidad de insertarse en el
mundo del trabajo.
CONCLUSIÓN
Entonces puede decirse que los objetivos específicos de la orientación vocacional son:
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1) favorecer la autoestima para que la decisión personal sea objetiva y llevada a cabo con
responsabilidad,
2) facilitar la detección de intereses y habilidades individuales, motivando y propiciando el
desarrollo de ello dentro del ámbito académico, artístico y de relaciones interpersonales y sobre todo,
3) proporcionar herramientas de autoconocimiento, tales como entrevistas de Orientación
Vocacional, pruebas de intereses, pruebas de habilidades, pruebas de personalidad, información y
acercamiento a planteles e instituciones ya que todo ello coadyuva a una decisión personal integral.
Podría pensarse a modo de procedimientos de ajuste en relación con nuestra práctica, incorporar
a otros actores educativos como agentes de salud entendiendo que este concepto no sólo se refiere a
profesionales de la salud mental sino a toda “una red de personas significativas para la población en
riesgo” (Gullco, 1992) con el objetivo de trabajar desde la prevención fortaleciendo la
corresponsabilidad.
De esta manera, se promueve el trabajo en conjunto con los docentes, generando espacios de
reflexión, brindándoles desde nuestro rol herramientas y recursos para que puedan construir otra
mirada del alumno actual.
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INTRODUCCIÓN
MÉTODO
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Se realizó una búsqueda bibliográfica en las bases de datos Pubmed y Ebsco utilizando
diferentes combinaciones de los términos en español y en inglés memoria de trabajo (working
memory), inteligencia (intelligence), desempeño (archievement), aprendizaje (learning) y matemática
(math). Para su inclusión en esta revisión los trabajos debían cumplir los siguientes criterios: constituir
trabajos empíricos, ser realizados con muestras de niños, considerar el estudio conjunto de las
relaciones entre la MT, la If y el desempeño y/o aprendizaje de la matemática.
Conforme a tales criterios fueron seleccionados un total de 15 investigaciones. A continuación
se describen los principales resultados de las mismas.
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Por último, gran parte de los estudios se realizaron con alumnos del primer ciclo de la
educación primaria, siendo escasos los trabajos con niños que cursan el segundo ciclo de dicho nivel
educativo (4, 5ª y 6ª año). El análisis de las relaciones entre dichos constructos en tal etapa reviste
una particular importancia teórica, dado que en la misma los niños adquieren habilidades
procedimentales (e.g., operaciones aritméticas que implican relaciones complejas entre números
naturales y operaciones aritméticas con números fraccionarios y expresiones decimales) y
conocimientos conceptuales (e.g., fracciones, expresiones decimales) (Ministerio de Educación,
2011a) que constituyen los pilares para una adecuada transición académica en el área de la
matemática entre el nivel educativo primario y el secundario (Ministerio de Educación, 2011b; National
Mathematics Advisory Panel, 2008; Siegler et al., 2012).
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862
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Son de amplio conocimiento en la actualidad los efectos nocivos que el stress produce. Uno de
los planteamientos clásicos del stress es el Síndrome de Adaptación General de Selye (1956) como
patrón no específico de respuesta, que implica un esfuerzo del organismo por adaptarse y sobrevivir;
se lo define en tres fases: alarma, resistencia y agotamiento. Una persona expuesta a tensión
excesiva responde con una hiperactividad de la corteza adrenal, alteraciones neuroendócrinas,
(frecuencia cardíaca, presión arterial, etc), y también disfunción inmunológica: respuestas de la
reacción de alarma. Si la tensión continúa, la reacción de alarma desaparece ingresando en la etapa
de resistencia. Así el cuerpo se somete a una adaptación en apariencia adecuada a la situación
estresora. Si esto se sostiene, el organismo colapsa y se da la fase de agotamiento de energía
adaptativa. Tal disfunción puede inducir a actitudes compensatorias que estimulan conductas insanas
como adicciones, desórdenes alimentarios, insomnio, entre otros. Todo lo cual provoca el
debilitamiento inmunológico y la aparición de enfermedades graves.
Por ser la adolescencia una etapa en la que se está sometido a las propias presiones que
tienen que ver con aspectos evolutivos individuales, los estresores externos pueden vulnerar al sujeto
influyendo notoriamente en desajustes conductuales, psicológicos y sociales.
El pasaje hacia la adolescencia resulta muchas veces una etapa de excesiva convulsión
interna. Se experimentan veloces transformaciones en el crecimiento físico, en la psicología, en las
emociones y también el en área social. En el transcurso de esta agitación interna el adolescente debe
tramitar, de manera obligada, una mudanza desde la dependencia hacia una manera más emancipada
de conducirse. Estos cambios, bastante traumáticos, llegan a mejor puerto cuando durante la niñez se
motivó a ese sujeto desde la confianza en sí mismo hacia la posibilidad de autonomía propia.
Las presiones externas y las que emergen desde el mundo interno de quien está dejando la
niñez son susceptibles de ocasionar stress que desencadena en disfunciones de toda índole. Tanto la
fuerza que coacciona desde el entorno en el que se vive, como la tensión que desde lo interno puja,
afectan al adolescente en su totalidad psicofísica ya que dichas presiones no se diferencian al
momento de provocar stress. Puede decirse entonces que las condiciones estresantes a las que se
enfrentan chicos y chicas durante la adolescencia son de lo más diversas.
El ubicar al sujeto adolescente en un contexto social particular, favorece a la mejor
comprensión de como inciden los diferentes estímulos estresores en su integridad.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Aunque las nuevas tecnologías han brindado reconocidos beneficios, el impedimento para
controlar su uso puede ser muy nocivo para el adolescente. El uso y abuso de las mismas se relaciona
a variables psicosociales, tales como la vulnerabilidad psicológica, estrés y sostén familiar y social.
Si bien el adolescente puede evadirse en las redes sociales para neutralizar tensiones,
paradójicamente, este escape puede estresarlo aún en mayor medida por la ininterrumpida
hiperestimulación que se le presenta: masividad de datos a los que debe atender, velocidad de
circulación de la información que maneja, cantidad y diversidad de sitios virtuales en los que interactúa
a la vez, etc.
En el caso de los procesos de enseñanza aprendizaje, los cambios propiciados por las nuevas
tecnologías, según los psicólogos cognitivos, tiene que ver con que la apropiación cultural e ideológica
de una tecnología, no sólo repercute en cómo se codifica y transmite la información, sino también en
los procesos cognitivos que se movilizan (Cabero, 2001). Se hace referencia a cierta reciprocidad
entre la tecnología que el sujeto manipula y, al mismo tiempo, la influencia que dicha tecnología ejerce
en el funcionamiento de los procesos cognitivos.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En talleres realizados en el año 2013 en el quinto año de una escuela de gestión pública del
Partido General Pueyrredón, estudiantes manifestaron cierto registro de sí que se relacionaba a una
inquietante inseguridad interna. Entre varias cuestiones, reconocen que desempeñan ciertas
actividades o adoptan determinadas conductas por imposiciones y fuertes condicionamientos que
reciben del contexto; y no, precisamente porque sea de su agrado. Así se encuentran compelidos a
hacer, hacer y hacer sin contemplar el cómo, resignando lo que son sus auténticos gustos y
tendencias.
En una sociedad en la que circulan sentidos de ser expeditivo, eficaz y ejecutivo; en donde hay
que hacer cosas que sean “importantes”, muchos adolescentes manifestaron que en su entorno se
sobreestiman determinadas actividades en detrimento de otras. En algunos casos, el círculo familiar no
apoya actividades que tienen que ver con el arte, la creatividad, la actividad plástica; que por otro lado,
son las ocupaciones que terapéuticamente contrarrestan el estrés y que también facilitan a que el
sujeto este más en contacto con si mismo y menos alienado.
La temática de la ansiedad, el nerviosismo y la enajenación en la que se vive, fue
adecuadamente abordada y puesta en común por los mismos chicos, expresando su inquietud que
desde ahí pueden aparecer conductas insanas como: adicciones, insomnio, riesgos de exposición a
todo tipo de peligros y enfermedades diversas.
Si bien estos talleres obraron para hacer una catarsis de quejas que pueden ser algo
exageradas, se evidenció marcadamente la tensión que registran estos adolescentes. Tanto presiones
por sobresaturación de actividades a cumplimentar y de manera brillante, como así también de una
muy sentida autoexigencia que proviene de ellos mismos.
Después de intercambiar acerca de sus vivencias, se dedujo que no se valoriza el aquí y ahora,
la maravilla de estar en el presente focalizando la atención en lo que se está llevando a cabo. Esta
actitud ante la vida favorece a que estemos más enajenados, más fuera de nosotros con menos
posibilidades de habitarnos.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Una sugerencia que puede resultar de suma utilidad es el rememorar esta etapa tan conflictiva
que como padres nos tocó atravesar. Tal vez haya que hacer algún esfuerzo en recordar los
sentimientos que mayormente nos habitaban en la adolescencia si están muy reprimidos. Lo cierto es
que en mayor ó en menor medida, nos encontraremos con que la lógica del adolescente está
principalmente regida por una gran inseguridad.
Entre las demandas académicas de las materias en la escuela, en medio de los primeros
enamoramientos tan intensos, del competidor o competidora que se llevó al chico o chica deseada,
entre la presión de ser aceptado o no por el grupo de pares, en esa explosión hormonal que acarrea
todo tipo de movilización: externa e interna, en el tan incómodo cambio del esquema corporal, están
también las voces de: …….“Estudiá! Es lo único que se te pide que hagas bien! Cómo vas a llevarte
una materia!”………..
El ser capaces de recordar la vulnerabilidad, y los sentimientos de desconfianza de la
adolescencia, permitirá un posicionamiento desde la empatía para dialogar mejor y para comprender
ese mundo, a veces, tan frágil habitado por la desorientación. Desde esta vereda se tendrá mejor
disposición para comprender a ese adolescente inseguro y será posible callar más a tiempo; como así
también, será más sencillo el poner sanos y firmes límites de una manera más cariñosa por medio de
lo cual el adolescente, aunque se enoje, se sentirá cuidado y a resguardo.
CONCLUSIONES
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se hace, aunque bastante eficientemente, es desde una mecanicidad muy ciega. Esto va
repercutiendo en detrimento de la integridad. Si desde el propio registro hay una seria mirada al cómo
se vive, el automatismo que muchas veces habita en las personas quedará más expuesto y, por ende,
contrarrestado. El recuperar la posibilidad de vivir con mayor conciencia, lo que significa estar con más
energía en el aquí y ahora, es un valiosísimo aprendizaje que pueden recibir los hijos desde la práctica
misma de los padres.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Almenara, J. C. (2012) Educación 2.0. ¿Marca, moda o nueva visión de la educación? Web 2.0: El uso
de la Web en la sociedad del conocimiento, 13.
Cabero, J. (2001) Tecnología educativa. Diseño y utilización de medios en la enseñanza.
Selye, H. (1956) The stress of life.
Tettamanti, A. (2007) Madre e hijo. Secretos de un vínculo. Buenos Aires: Deldragón.
Vasarhelyi, M. (2011) Terapia Psicológica. Revista Marplatense Dedicada a la Salud.
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En primer lugar cuando se concibe a la escuela como ámbito de lo público se alude a una
institución creada por el Estado que, de manera gratuita, promueve el acceso a la cultura y a la
educación. Se trata de una institución construida históricamente, en paralelo con la emergencia de
los modernos Estados nacionales, que persigue como uno de sus objetivos fundamentales la
socialización de las jóvenes generaciones a través de la transmisión de un sentido de pertenencia
compartido, de valores y de saberes. Es decir, una institución garantizada y promovida por el
Estado, quien define un modo determinado de organizar el sistema escolar. Es un modo de
transmisión de la cultura a la vez que se genera y sostiene ciudadanía.
Desde el momento en que los Estados nacionales, a fines del siglo XIX, asumen la tarea de formar
a sus ciudadanos bajo una serie de valores y creencias comunes con el objeto de constituir un
sentido de pertenencia nacional, la escuela moderna se conforma como una organización que tiene
objetivos específicos. Esta finalidad vinculada a lo pedagógico, es decir, a los procesos de
enseñanza y aprendizaje, es lo que distingue a la escuela de otro tipo de organizaciones.
Pero, además, cuando pensamos la escuela como espacio de lo público nos referimos a un ámbito
donde se producen, circulan y se transmiten saberes socialmente significativos. Esto es, no
cualquier tipo de conocimientos o contenidos, sino aquellos validados por su carácter público. Para
el filósofo Cullen (1997) tres son los criterios a partir de los cuales se legitiman los saberes
socialmente significativos. En primer lugar, se relacionan con lo que el autor denomina como la
universalidad de su exposición. Es decir, un saber es público cuando está destinado a todos,
cuando cualquier individuo (independientemente de su condición social, racial o sexual) lo puede
aprender y no existen restricciones de ningún tipo para su transmisión. Esto significa pensar la
educación como un derecho para el conjunto de los ciudadanos. En segundo lugar, el carácter
público de los saberes, refiere a su condición de estar expuestos a la contrastación y al
cuestionamiento de todos. Es decir, el estar sujetos a la crítica y a la revisión permanente. Este
carácter abierto de los saberes supone entender lo público como espacio de diálogo, de diferencias
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una escuela con bajo grado de dinámica que, ante una dificultad o conflicto genera mecanismos
defensivos que intentan negar o expulsar el problema, termina aferrándose a un status quo como
única posibilidad.
A partir de las interacciones entre los sujetos se construye una estructura grupal integrada por
alumnos y docentes. En ésta circulan, además de conocimientos, toda clase de afectos. Incluso,
hasta el objeto de conocimiento mismo puede ser depositario de una carga afectiva por parte de los
sujetos, tal como señala el psicoanálisis. Ese movimiento de afectos que se despliega entre
docentes y alumnos tiene, según Abad (2005), diversas significaciones para cada uno de ellos,
pues allí se juegan intercambios cognitivos y emocionales que actualizan historias relacionadas,
entre otras cosas, con la autoridad parental.
Desde esta perspectiva, se hace necesario analizar el papel de la escuela en la constitución
subjetiva de los estudiantes. Para ello, debe partirse del hecho de que el ser humano se constituye
como sujeto en el vínculo con otros a través de su tránsito por distintos ámbitos de socialización.
¿De qué modo la escuela interviene en la constitución del sujeto? Tal como lo explica Rosbaco
(2000), la escuela participa de la constitución del psiquismo.
Cabe aclarar que escuela y familia, así como el tipo de tramas vinculares que en ellas se
entretejen, no pueden ser pensadas como instituciones dadas e inmutables. Por el contrario, han
sufrido modificaciones significativas a lo largo de su historia, en consonancia con transformaciones
sociales más amplias.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Los alumnos de hoy integran familias que se encuentran en transición, alejándose del modelo
tradicional y transitando hacia nuevas formas aún no completamente claras. Esas transformaciones
también alcanzan a la escuela, tanto en lo que respecta en las significaciones que le son
socialmente asignadas, como en lo que concierne a los roles tradicionales ejercidos por adultos y
jóvenes en sus papeles de docentes y alumnos. Así, encontramos docentes que eluden la
confrontación con los alumnos, ya sea desde una visión unidireccional de las normas escolares y
una resolución autoritaria de los conflictos, o desde el situarse como “pares” de los alumnos,
desestimando las normas, sin ofrecer otro punto de vista para dialogar. Pero también están
aquellos que, desde una posición de adultos, pueden disentir, confrontar o acordar con los
alumnos, estableciendo con ellos "nuevos significados" de las normas y pautas de convivencia,
propiciando acuerdos factibles entre los diferentes actores de la institución y favoreciendo la
asunción de las responsabilidades por parte de cada uno de ellos. La escuela como espacio para
las tramas vinculares debe ser pensada en este nuevo contexto, que instala nuevas situaciones
problemáticas con respecto a la tolerancia, la inclusión y la convivencia.
Llegados a este punto, podemos afirmar que la convivencia escolar puede posibilitar o dificultar la
distribución equitativa de los saberes que la sociedad considera valiosos, la construcción de una
organización democrática con finalidad pedagógica y la conformación de tramas vinculares que
reconozcan las diferencias entre los sujetos.
Las condiciones sociales y económicas cada vez más empobrecidas de la población escolar han
ido adquiriendo una fuerte presencia en la cotidianeidad del aula, haciendo que las mismas
atraviesen la dinámica institucional habitual. Muchas veces, inclusive, pareciera que algunas
problemáticas sociales actuales se opusieran a la finalidad pedagógica, es decir a la finalidad
formativa-educativa de la escuela, demandando un desplazamiento de la atención desde las
cuestiones asociadas al aprendizaje hacia otras de diversa índole, que se plantean como graves y
urgentes (por ejemplo, ante casos de violencia). Así, la apropiación de los conocimientos y la
consecución de los objetivos de aprendizaje se mostraría obstaculizada por situaciones
emergentes. Esto se da porque actualmente, la escuela es también un centro de demandas, pero
a la vez un lugar privilegiado para la detección de situaciones. En este sentido, lo no escolar, está
cada vez más presente dentro de la escuela. Consideramos que, principalmente, en la educación
de adultos, estas demandas también son demandas de afecto. El rol del alumno adulto es diferente
al del alumno adolescente. El adulto va y viene demandando cuestiones propias de un alumno pero
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Uno de los desafíos que atraviesa la escuela de nuestros días implica que, aún ante estas nuevas
demandas a las que debe responder o nuevas funciones que debe desempeñar, pueda hacerlo sin
perder de vista su finalidad pedagógica. Es decir, aún cuando la escuela desempeñe un rol
asistencial o de contención de sus alumnos, pueda llevarlo a cabo sin que se desdibuje su finalidad
pedagógica, centrada en la producción y transmisión de saberes socialmente significativos.
El cumplimiento de la finalidad pedagógica de la institución escolar no sólo se ve alterado por la
presencia de cuestiones de carácter social (violencia o falta de contención familiar, adicciones, falta
de recursos económicos, etc.), sino también por otras propias de su carácter de organización
burocrática (requerimientos y rutinas administrativos que insumen una importante cantidad de
tiempo). Debido a esta combinación de cuestiones, los actores institucionales pueden perder de
vista el sentido de las tareas desempeñadas.
Si desde la concepción de salud amplia, sostenemos que la salud no sólo tiene que ver con lo
biológico, sino con lo histórico-social-cultural y con el mayor o menor acceso a derechos, y
consideramos que a mayor grado de libertad, mayor salud; entonces no podemos dejar de lado
aquellas inquietudes de lo no escolar que traen nuestros estudiantes, ya que del aprendizaje que
se pueda generar a partir de esas situaciones, se generará la posibilidad de un cambio que permita
al sujeto alcanzar mayor grado de conocimiento y autonomía, y, por ende, de salud. Si pensamos
también en que terminar los estudios secundarios abre la puerta a mejorar las condiciones actuales
de trabajo, ser promovidos o conseguir un trabajo en el caso de no tenerlo, no podemos dejar de
pensar en eso como la restitución de derechos –el derecho a la educación, el derecho a un trabajo
digno- y por ende, a mayores condiciones de autonomía, libertad y salud. También el
posicionamiento subjetivo será distinto.
En esto surge también, la necesidad de atender a la particularidad de cada uno de los sujetos. La
educación de adultos presenta esta cualidad de que quienes estudian tienen todo un cúmulo de
conocimientos propio que pueden tener que ver o no con su recorrido educativo previo, pero que
tiene mucho de vivencial y experiencial y que no se puede soslayar. Académico o no, es un saber
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válido, que puede y debe capitalizarse haciéndole un lugar en el proceso de transmisión de los
contenidos.
Si como docentes podemos atender a los trayectos educativos particulares que históricamente han
tenido y en el trayecto particular que están haciendo dentro de nuestra escuela, podemos darnos
cuenta de que casi nunca se cumple la premisa de que se pueden lograr aprendizajes equivalentes
mediante enseñanzas similares. El desafío se encuentra en lograr trayectorias escolares continuas,
que estos estudiantes puedan lograr la terminalidad de la educación secundaria obligatoria,
atendiendo a los recorridos particulares de cada uno.
Nuestra mayor herramienta en el trabajo con alumnos adultos, será el diálogo. Es el diálogo el que
mantiene y transforma la realidad subjetiva de las personas, el intercambio con el otro modifica la
subjetividad, y en esto también debemos ser cuidadosos, porque cada una de nuestras
intervenciones, tendrá su impacto en la subjetividad de los estudiantes, impacto que no es posible
ser anticipado o medido. Este diálogo, no deberá ser un diálogo entre pares, sino un diálogo que
permita adecuar los contenidos y las estrategias de enseñanza a mejorar la situación de ese sujeto.
Esto quiere decir que particularizar nos ayuda a tener en cuenta las distintas cronologías de
aprendizaje. En ese punto, así como cada sujeto es único, para conseguir un aprendizaje
equivalente, hay que tener en cuenta que son necesarios mecanismos diferentes.
Es en este presente, en este aquí y ahora en que estos sujetos están transitando su educación
secundaria, es donde podemos ayudar a generar un cambio subjetivo que vaya en beneficio de su
persona y de su salud, produciéndose una modificación en la identidad. Es la posibilidad de
resignificar las vivencias singulares en el presente y de este modo, promover un cambio subjetivo
que les permita proyectarse de un modo diferente y más beneficioso para su futuro.
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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
- Abad, Susana (2001) Acerca de las conductas violentas en la escuela: cuando la asimetría lleva a
la humillación. Buenos Aires: Ediciones Novedades Educativas
- Abad, Susana (2005) Entrevista con Susana Abad: 'repensando la escuela como espacio
privilegiado para prevenir la violencia'. Buenos Aires : Aique
- Berger y Luckman (2008) La construcción social de la realidad. Amorrortu editores. Buenos Aires.
- Cullen, Carlos (1997): Crítica de las razones de educar, Buenos Aires. Paidós.
- Duschatzky, Sztulwark (2011) Imágenes de lo no escolar. Editorial Paidós. Tramas sociales.
Buenos Aires
- Montesinos, Sinisi, Schoo. (2009) Sentidos en torno a la “obligatoriedad” de la educación
secundaria. Dirección Nacional de Información y Evaluación Educativa. Ministerio de Educación de
la Nación. Argentina.
- Rosbaco, Inés Cristina (2000): El desnutrido escolar: dificultades de aprendizaje en los niños de
contextos de pobreza urbana. Rosario. Homo Sapiens.
- Teriggi, F. (2010) “Las cronologías de aprendizaje: un concepto par pensar las trayectorias
escolares”. Conferencia. Cine Don Bosco. Santa Rosa. La Pampa.
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INTRODUCCIÓN
El presente escrito tiene como finalidad exponer los primeros resultados del estudio: “La
presencia del docente en el encuentro intersubjetivo. Un estudio a partir de las voces de alumnos y
docentes de dos escuelas de nivel medio de la ciudad de Neuquén”. La propuesta pretende contribuir
al estudio de las relaciones intersubjetivas indagando en las características y los efectos que producen
los docentes reconocidos como significativos por los alumnos. Este estudio procura recuperar las
voces de docentes (en tanto docentes y ex-alumnos) y de alumnos de 5º año de escuela seleccionada,
indagando en torno a sus experiencias escolares. Con este fin se realizan entrevistas en profundidad a
alumnos y a docentes indagando acerca de sus experiencias escolares con docentes que hayan
resultado significativos en su trayectoria tanto escolar como vital. En el caso de los docentes, también
se indaga en torno a su actual posición como docentes. De este modo, se obtienen voces de alumnos
de 5º año que relatan experiencias con docentes por ellos reconocidos como significativos, y voces de
estos docentes que hablan de sus propias experiencias con docentes significativos para su formación
o para su desarrollo personal, y sobre su tarea en la escuela estudiada.
La pregunta que guía esta indagación es: ¿Cómo se hace presente el docente en la escena
educativa y cómo lo perciben los alumnos? El objetivo general es: comprender las condiciones de la
intersubjetividad pedagógica a partir del reconocimiento de docentes significativos en el vínculo
pedagógico, desde las voces de docentes y alumnos. De allí, se desprenden los siguientes objetivos
específicos: 1) identificar cuáles son los docentes reconocidos como significativos por sus alumnos; 2)
identificar características que presentan los docentes reconocidos como significativos en el vínculo
pedagógico, tanto para alumnos como para docentes; y 3) reconocer posibles efectos que producen
estos docentes en las trayectorias escolares, profesionales y vitales de los sujetos entrevistados.
MARCO TEÓRICO
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teórica el aprendizaje tiene lugar a partir de un encuentro intersubjetivo, donde el docente y el/los
alumnos comparten la definición de la situación que los convoca. Siguiendo a Wertsch (1988: 170) “la
intersubjetividad se da cuando los interlocutores comparten algún aspecto de sus definiciones de una
situación”. De este modo, la intersubjetividad se construye en un marco de interacción e interlocución
entre personas, en el que inciden tanto aspectos cognitivos como afectivos. En el marco de nuestra
investigación fue necesario redefinir el concepto de intersubjetividad a fin de lograr una mayor
comprensión del objeto de estudio en el contexto de la institución estudiada. Se pretendió construir un
concepto teórico ajustado y potente que permita dar cuenta de lo que creemos es una condición
indispensable de la tarea educativa, a fin de prevenir situaciones de riesgo educativo. Se elabora el
concepto de Intersubjetividad Pedagógica, definido como “el encuentro entre sujetos involucrados en
un proceso de construcción conjunta de la subjetividad, situados en un espacio y tiempo escolar
determinado” (Castilla, 2013: 80). Resulta un encuentro vital para los intercambios y donaciones de
herramientas culturales que posibilita a los sujetos constituirse como sujetos de la cultura y en la
cultura. Se distinguen como componentes del concepto las siguientes dimensiones: la relación
asimétrica, la autoridad responsable, la confluencia de aspectos afectivos y socio-cognitivos, y la
tracción del deseo de aprender.
Por otro lado, para atender a las particularidades del docente involucrado en una relación
intersubjetiva, se tienen en cuenta diversos estudios que, desde diferentes campos del conocimiento,
arriban a caracterizaciones de los docentes reconocidos positivamente por los alumnos. Por un lado,
Laura Duschatzky (2008) toma las voces (emergidas de entrevistas en profundidad) de jóvenes
estudiantes, docentes y profesionales que hablan de sus maestros, o figuras de maestros. En las
distintas entrevistas se evocan experiencias que han implicado algún tipo de encuentro entre el
maestro y el aprendiz/discípulo, encuentros que han dejado huellas, que han conmovido. Para la
autora, hablar de encuentro implica “la paradoja de lo intenso y lo fugaz, pero a la vez la posibilidad de
dejar una traza, de algo que pueda activarse en el vacío de una situación anterior y marcar un
después” (Duschatzky, 2008: 55). En su investigación, la autora distingue dos modos de encuentro con
las figuras de maestros: maestro-aprendiz y maestro-discípulo; a su vez, cada una de estas formas
presenta distintas tonalidades que las caracterizan. La diferenciación entre aprendiz y discípulo se
sienta en que, el primero, sigue las enseñanzas de un otro, en cambio, el segundo, es partidario y
busca imitar a ese otro. En la relación maestro-discípulo, la autora identifica la admiración, el
pensamiento (ligado al experimentar y al planteamiento de problemas), la igualdad (como punto de
partida) y el respeto mutuo, como tonalidades que pueden adoptar este encuentro. En la relación
maestro-discípulo, en cambio, predomina la centralidad de la figura del maestro, el discípulo como “el
elegido”, y la idealización. Por otro lado, en un estudio anclado en la didáctica (Álvarez, Porta y
Sarasa, 2010), se adopta el término memorables para referirse a docentes generadores de buena
enseñanza. En este marco la buena enseñanza de los profesores memorables implica atender tanto a
la calidad y el éxito de la misma, como a su carácter moral. Interesa, de este estudio, resaltar la
dimensión temporal que implica el recuerdo de estas personalidades. Apelar a la memoria es otra
forma de recuperar las huellas impresas de estos profesores. Por último, el trabajo de Ewa Domagala-
Zyk (2005) nos orienta al estudiar a profesores como personas significativas. El adjetivo “significativo”
nos permite reconocer en estos docentes cierta influencia en la trayectoria escolar de los alumnos,
pero también y sobre todo, en la trayectoria vital. Sullivan (1953) acuñó el término persona significativa
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VI Congreso Marplatense de Psicología
para referirse a aquella persona “importante para el niño que tiene influencia en su desarrollo” (En
Domagala-Zyk, 2005: 270). Esto cuenta tanto para los padres y demás miembros de la familia, como
para personas por fuera del vínculo familiar. Según una investigación de Moshe Tatar (1998, en
Domagala-Zyk, 2005), los jóvenes valoran más a los profesores, como personas significativas, que a
sus padres. Los jóvenes reconocen como significativos a los profesores que son justos, competentes y
que prestan ayuda, profesores que se dirigen a ellos como coetáneos y que se interesan pos sus
problemas y asuntos personales, profesores con conocimientos y aptitudes didácticas que estimulan el
esfuerzo, profesores que brindan apoyo emocional y ayudan a resolver problemas. Siguiendo el
trabajo de Tatar (1998), Marian Nowak (1999, en Domagala-Zyk, 2005) aporta otros rasgos de estos
profesores: son personas comprometidas emocionalmente con su trabajo, lo que se manifiesta en la
satisfacción de estar con los alumnos; son personas compasivas, que saben tratar temas, experiencias
y emociones de los alumnos; son personas que se interesan por escuchar a los alumnos; son
personas justas, respetuosas y de carácter agradable; y son personas capaces y con gran
conocimiento.
En este trabajo, el término docente significativo, es propuesto como una puerta de entrada al
análisis del docente involucrado en una relación intersubjetiva, y se prevé que en el propio proceso de
investigación esta concepción pueda irse modificando, dando lugar a una re-conceptualización de este
tipo de docentes que dejan algo más que contenidos en sus alumno. De este modo, el adjetivo
“significativo”, oficia como herramienta tanto teórica como metodológica para un primer acercamiento
al objeto de estudio. Por un lado, designa “que tiene importancia por representar o significar algo”,
según la segunda acepción de la Real Academia Española, lo que permite dar lugar a las voces de los
alumnos en el sentido de qué consideran que es importante y en qué aspecto de su vida. Por otro lado,
éste término permite establecer la comunicación con los alumnos, ya que no es una palabra ajena en
sus vocablos. Para indagar en los alumnos cómo se produce el encuentro intersubjetivo es preciso
evocar una palabra que puedan significar y que les abra posibilidades de pensar múltiples
experiencias. De esta manera, lo significativo de los docentes será lo que interpreten los alumnos (y
los docentes en tanto alumnos) a partir de sus propias experiencias escolares.
METODOLOGÍA
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Para cumplimentar los objetivos de esta propuesta, se realizó un rastreo de aquellos docentes
considerados significativos por los alumnos de 5º año, mediante un cuestionario semiestructurado
inicial. En una etapa posterior, se prevé una segunda salida al campo para realizar entrevistas en
profundidad a cuatro (4) de estos docentes y a ocho (8) alumnos de 5º año, para profundizar en sus
experiencias y percepciones. El cuestionario semiestructurado resultó una importante herramienta para
realizar una primer entrada al campo de estudio y un primer acercamiento exploratorio en torno a
quiénes son los docentes significativos y en qué sentido lo son. El mismo, constó de cuatro ítems para
completar con datos del/la alumno/a (Escuela, Curso, Nombre y Edad), y tres consignas: 1) ¿Qué
docentes de esta escuela reconoces como significativos para tu trayectoria escolar y/o vital?
Mencionar el nombre de uno o dos docentes y la materia que tienen a cargo. 2) ¿Por qué? Explicar en
qué sentido estos docentes son o han sido significativos para vos. 3) Narrar una situación particular
que hayas vivido con uno de estos docentes. Incluir en el relato datos de tiempo (cuándo) y espacio
(dónde), así como también cómo te sentiste en esa situación.
RESULTADOS
Los datos arrojados por este cuestionario permitieron identificar a los docentes que más veces
fueron mencionados como significativos por el total de la población de alumnos, así como también
ciertas características de los docentes significativos en general, y de los más mencionados en
particular. Fueron los docentes de las materias de Cívica y Ciencias Sociales los que resultaron más
nombrados en el cuestionario: de un total de 57 alumnos, 14 consideraron a estos dos docentes como
significativos para sus trayectorias escolares y/o vitales. Las docentes de Contabilidad y de Inglés,
siguieron en el orden, según la cantidad de veces mencionadas, con una diferencia significativa:
ambas fueron elegidas por 9 alumnos. El resto de los docentes elegidos han sido nombrados por 6 o
menos alumnos. Estas distancias generadas por la cantidad de veces en que los docentes han sido
mencionados en el cuestionario, permite realizar un análisis a partir de la recurrencia, identificando así
a cuatro docentes como los más representativos de los docentes reconocidos como significativos por
los alumnos de 5º año de la escuela estudiada. Estos docentes se distinguen, se destacan, en el
colectivo de docentes que integran la escuela según la perspectiva de los alumnos. En ellos se centró
el análisis de los datos.
Ante la consigna: “Explicar en qué sentido estos docentes son o han sido significativos para
vos”, los alumnos de 5º año distinguen y destacan ciertas características que le atribuyen a los
docentes elegidos; características o rasgos que, a los fines de su análisis, se pueden agrupar en dos
grandes dimensiones: una predominantemente cognitiva o escolar, y otra predominantemente afectiva
o inter-personal. La primera, se vincula con la modalidad de enseñanza de los docentes y sus efectos
en los alumnos; la segunda, compromete la relación que establecen los docentes, en tanto adultos,
con los alumnos, en tanto adolescentes. Estas dimensiones son claramente diferenciados por los
alumnos a la hora de argumentar sus elecciones: por una lado, algunos alumnos enfatizan las
características del docente elegido en tanto docente, es decir que se vincula con los jóvenes desde
una posición institucional socio-históricamente construida y cuya función es la enseñanza de una
materia curricular; y por otro lado, distinguen características de los docentes en tanto persona, que se
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vincula con ellos desde una posición subjetiva singular ontológicamente constituida. Avanzando un
poco más, la dimensión cognitiva tiene que ver con la enseñanza y el aprendizaje escolares, y la
dimensión afectiva, se vincula con los modos de trato entre docentes y alumnos, lo que incluye
acciones, actitudes y gestos que los alumnos perciben en los docentes y que favorecen a la relación
entre ambos. Algunas expresiones que evidencian esta diferenciación son: “[son significativos por] la
forma de enseñar, como persona y la forma de comprender”, “no sólo la veía como una profesora, sino
como una persona a la que le tengo mucho afecto”, “tengo un aprecio a ella como persona y como
docente”, “te ayuda en todo (su materia y lo personal)”, “son los únicos profesores con los que se
puede tener una buena relación más allá de lo académico (bromas, charlas, consejos, etc)”.
A) La dimensión cognitiva que distinguen los alumnos de los docentes considerados
significativos, se expresa, al menos, en dos sentidos: 1) Ligada a una modalidad de enseñanza que
promueve el aprendizaje de los contenidos de la materia: “nos sabía explicar cosas difíciles de la
historia Argentina de una forma más fácil”, “me enseñaron mucho, con ellos aprendí más que con otros
profesores”, “tenían una forma de explicar muy buena”, “me gusta su método de enseñar, y además
sus clases siempre son divertidas”. 2) Vinculada con la generación de condiciones para la producción
del pensamiento y la novedad en los alumnos: “Ha sido significativo en el sentido del pensamiento”, “te
hacían pensar y ver las realidades”, “me enseñó a tener la cabeza más abierta”, “me hizo pensar y
cambiar un poco”, “te hace abrir la mente”.
B) La dimensión afectiva aparece recurrentemente en los escritos de los alumnos. Los
docentes significativos, a través de palabras, gestos o acciones, promueven una relación pedagógica
medida por los afectos. Los alumnos aluden a esta mediación de forma más o menos directa. Algunos,
expresan: “Había mucho cariño por parte de ella y de nosotros, el curso”, “una persona a la que le
tengo mucho afecto”. Otros, aluden a ciertos gestos o actitudes de los docentes que favorecen a una
buena relación adulto-adolescente: “(…) su forma de tratarnos, la cual era muy agradable”,
“comprensión y apoyo, “nos trataba como amigos, nos teníamos confianza entre alumno y profesor,
obvio nunca pasando los límites”, “siempre te escuchaba, enseñaba y aconsejaba”, “te ayudaban en lo
que podían”. La escucha, los consejos, la ayuda y la confianza, fueron las actitudes o gestos de los
docentes que aparecieron con más recurrencia en los escritos de los alumnos a la hora de argumentar
sus elecciones. Actitudes y gestos de los docentes, que configuran modos singulares de hacerse
presentes en la escena educativa, y que resultan significativos para los alumnos.
DISCUSIÓN
Los docentes no son significativos por el sólo hecho de ser docentes, o por ocupar dicho rol
institucional, sino que lo son en la medida en que son reconocidos como tales por los alumnos. Algo
debe producirse en la relación para que el docente resulte significativo, pues “no es el mero estar allí lo
que opera como condición de posibilidad, sino las formas en que se despliega esa presencia y los
significados que adquiere” (Kantor, 2008: 71). A partir de los datos recabados por el cuestionario
semiestructurado, se pudo establecer que los docentes son significativos para las trayectorias
escolares y vitales de los alumnos, en tanto sus modos de hacerse presentes en el escenario
educativo posibilitan la configuración de relaciones intersubjetivas mediadas por componentes
879
VI Congreso Marplatense de Psicología
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880
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Del universo de los conflictos en el escenario social urbano, en el presente trabajo se recupera
una situación de conflicto emergente a partir de la toma de viviendas por parte de un grupo de vecinos
y vecinas, en el Partido de Necochea y Tandil. En cuanto a la descripción, se podría ubicar dentro de
los llamados Conflictos Públicos, en tanto resultan de interés público por el número de actores y
actoras y de intereses involucrados, o por la repercusión que tienen en el conjunto social o en una
comunidad en particular, dado que una minoría activa produce un impacto visible (Nató, Querejazu y
Carbajal, 2006).
La recuperación y análisis de los mencionados conflictos posibilita comenzar a comprender las
complejas y diversas formas de producción, utilización y apropiación del espacio urbano por parte de
diferentes actores y actoras sociales. Asimismo, posibilita reafirmar la importancia del espacio en tanto
producción social históricamente construida, con sus complejidades y contradicciones, en permanente
formación y devenir (Gravano, 2005; 2013). Sumado a lo anterior, resulta interesante entender a los
conflictos no sólo como expresiones disímiles por la manera de representación y materialización del
espacio (antagonismos, confrontaciones y divergencias de intereses, objetivos y racionalidades entre
diversos actores y actoras sociales), sino también como luchas por el reconocimiento y la defensa de
derechos (Cardoso de Oliveira, 2004).
Se busca visibilizar cómo el conflicto es reconstruido por los diversos actores y actoras
sociales, quienes a través de sus discursos y prácticas ponen en tensión los discursos clasificatorios y
moralizantes que se reprodujeron al interior del barrio, en organismos estatales y en la sociedad en
general. Tales discursos debaten la legitimidad del reclamo y de los actores y actoras sociales.
Aparecen aquí imaginarios sociales instituidos (Castoriadis, 2005; Fernández, 2007), en tanto operan
como organización de los sentidos, y como criterios demarcadores de lo lícito y lo ilícito.
Finalmente, y en relación a lo mencionado, el conflicto habitacional presente en las mencionadas
ciudades habilita reflexionar respecto a las particulares sensibilidades legales (Geertz, 1994) que se
construyen alrededor del derecho a la vivienda, y cómo en la lucha de los actores y de las actoras
movilizadas por acceder a este derecho, la dimensión del reconocimiento adquiere particular
protagonismo. Los procesos organizativos y participativos que se generan a raíz de la lucha por el
reconocimiento, generan espacios de apropiación del espacio urbano a través de transformaciones
simbólicas y materiales. Tal como lo menciona Wiesenfeld (1998), aquellos procesos pueden generar
resistencia al desalojo, en tanto los vecinos y las vecinas que protagonizan la toma desarrollen lazos
de cooperación durante la mejora de hábitat.
881
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
Los diversos conflictos que se originan en la ciudad en vinculación al valor de uso de la misma,
en tanto dispositivo institucional-espacial para la reproducción social (Gravano, 2013), posibilitan
adentrarse en los diferentes y heterogéneos modos de apropiación, circulación y utilización del espacio
urbano. En este sentido, la recuperación sociocultural de los discursos y prácticas de los actores y las
actoras sociales permite desnaturalizar y debatir visiones hegemónicas respecto a procesos sociales,
así como también permite entender a la ciudad tanto en su espacialidad física como en su dimensión
significacional. Los significados que se construyen complejizan la situación de conflicto, que conjuga
derivaciones de usos y actividades más o menos incompatibles en el espacio público por parte de
diferentes grupos de personas, y derivaciones de la desigualdad social, dos formas de entender el
conflicto en el espacio público propuestas por Di Masso (2007). Sumado a ello, estos significados
plasmados en discursos se interrelacionan con imaginarios locales y relaciones de poder que se
construyen en el territorio históricamente, y que al mismo tiempo que posibilitan consolidar lo
establecido, organizar sentidos y demarcan “lo permitido y lo prohibido”, también instituyen
transformaciones en el espacio urbano.
En vinculación a lo mencionado, nos preguntamos qué aspectos socioculturales subyacen al
reclamo por una vivienda digna, puesto que el discurso y las prácticas de los actores y de las actoras
movilizadas no se agotan en la materialización de una casa. Si bien el conflicto se origina a raíz de la
no satisfacción del derecho al acceso a una vivienda, derecho presente en la Constitución Nacional
Argentina y en tratados internacionales, se incorporan otros reclamos (como por ejemplo el acceso a
los servicios colectivos urbanos, la vigencia del trabajo informal, la falta de planes habitacionales, etc.;
reclamos “cargados” de sentimientos, deseos, imaginarios) que dan cuenta de las complejas
relaciones que se tejen en vinculación a vivir en y la ciudad.
En este sentido, el concepto de sensibilidad legal de Geertz (1994) resulta relevante para el
análisis de las maneras en que los actores sociales elaboran particulares sentidos de legitimidad,
legalidad y justicia en relación a sus reclamos y a su presencia en el espacio urbano a partir de la
recuperación del derecho a la vivienda. Como bien menciona Geertz “el aspecto «jurídico» de las
cosas no es un conjunto limitado de normas, reglas, principios, valores o cualquier otra cosa a partir
del que puedan plantearse respuestas legales a una serie de acontecimientos destilados, sino parte de
una manera determinada de imaginar lo real” (1994: 202). De este modo, se entiende que los sentidos
de justicia e injusticia, legitimidad e ilegitimidad no provienen de normas, reglas o principios fijos sino
de una particular manera de imaginar relaciones en contextos culturales específicos.
Tanto en la ciudad de Tandil como en el partido de Necochea diversos actores y actoras
sociales construyeron nuevos universos de sentido vinculados a la apropiación del espacio urbano,
particularmente respecto al derecho a una vivienda digna y el rol del Estado, cuestión que posibilitó la
demarcación de otros criterios de legalidad y legitimidad. En este marco, los actores y las actoras
sociales movilizadas se conciben en tanto legítimxs vecinxs/ciudadanxs que intentan, a través de
prácticas ilegales pero que consideran justas, ser parte de los diversos proyectos de ciudad
propuestos por los gobiernos municipales, proyectos que detentan opciones habitacionales
restringidas y que oscilan entre acciones de indiferencia (como por ejemplo falta de políticas
habitacionales y de asistencia) y acciones de hostigamiento y control punitivo (desalojos, presencia de
882
VI Congreso Marplatense de Psicología
policías en los barrios tomados, amenazas). Los funcionarios y las funcionarias del Estado, oscilan
entre el discurso punitivo y el indiferente, alternados con enunciados vinculados a la empatía con la
situación de los vecinos y las vecinas que protagonizan la toma (Wiesenfeld, 1998), que no terminan
de manifestar si solapadamente hay discursos punitivos disfrazados de frases “políticamente
correctas”, o si realmente constituye una preocupación para aquellos funcionarios o aquellas
funcionarias.
Cardoso de Oliveira (2004; 2009), a partir de la recuperación de la conceptualización
mausseana del don, propone atender, en el tratamiento institucional de disputas, no solo el problema
del interés y el derecho, sino también el reconocimiento en tanto una tercera dimensión fundamental
para la comprensión de los conflictos sociales. La categoría de reconocimiento la vincula con el insulto
moral, en tanto esta última implica una agresión objetiva contra los derechos que no puede ser
adecuadamente traducida en evidencias materiales, y siempre implica desvalorización o negación de
la identidad de las otras personas.
Asimismo, el autor menciona que muchas veces las actitudes de distanciamiento, cuando son
percibidas por los actores como constitutivas de un acto de desconsideración, generan los
sentimientos de resentimiento e indignación, aspectos característicos de la percepción del insulto
moral; “El insulto aparece, entonces, como una agresión a la dignidad de la víctima, o como negación
de una obligación moral que, por lo menos en ciertos casos, significa una falta de respeto a derechos
que requieren respaldo institucional.” (2009:17).
Como puede observarse en la situación descripta, los vecinos y las vecinas exigen el
reconocimiento de legitimidad a su condición de ciudadanos y ciudadanas, en relación a las
posibilidades materiales y simbólicas de apropiación del espacio urbano. Esto implica la demanda de
respeto y consideración, a través de la visibilización pública de sus padecimientos, y de la
responsabilidad estatal al respecto.
“Soy padre de dos hijos, hace ocho años me inscribí en el plan federal (…) Ayer mi esposa
tomó la decisión de tomar una casa porque nunca vamos a recibir nada”; “Te da mucha bronca que
dejaron destruir un barrio, como en Quequén, y que nunca nosotros podríamos tener nada, porque el
trabajo te da para comer, pero no para comprar ni siquiera un ladrillo”; “En la calle no nos vamos a
quedar, y menos con una nena de un mes. No queremos tener problemas con nadie y menos con la
gente que estaba anotada aquí, pero nosotros estamos dispuestos a pagar una cuota”; “Estamos
construyendo un barrio donde antes había solo ladrillos, tratando de sobrevivir en casas que deberían
haberse terminado hace mucho tiempo pero el Estado miro para otro lado y dejó que se vengan abajo.
Hoy por hoy estamos haciéndoles arreglos con los escasos recursos con los que contamos sin apoyo
de los responsables. Sabemos que es difícil pero es nuestro sueño estar mejor con nuestros/as
hijos/as”; “Hay muchos problemas pero sobran las ganas de solucionarlos, falta de instalaciones
adecuadas de agua corriente, instalación de luz muy precaria con el riesgo que conlleva para
nosotras/os y nuestras/os chicas/os, recolección de residuos deficiente. Esto también hace a tener un
barrio habitable, le estamos pidiendo a las autoridades que den alguna respuesta también sobre estos
temas. Nosotros y nosotras le ponemos hombro para vivir mejor porque ese es nuestro objetivo”.
En los discursos aparecen alusiones a las condiciones materiales que imposibilitan el acceso a
una vivienda digna, la presencia de hijos e hijas que “merecen” un “lugar habitable”, y la
883
VI Congreso Marplatense de Psicología
“desconsideración” del Estado. Se manifiestan como actores y actoras sociales que trabajan por
mejorar su situación de habitabilidad, a pesar de que el Estado no reconozca su padecimiento.
Aparecen diversas alusiones a percepciones que están ligadas a emociones suscitadas por la
situación percibida, que ponen de relieve al reconocimiento en su carácter dialógico, que no puede
reducirse al plano exclusivamente formal, sino que demanda intercambios sustantivos de palabras o
gestos (Cardoso de Oliveira, 2004). En reiteradas oportunidades se menciona los desencuentros, las
dilaciones, la falta de reuniones para debatir la situación, todas cuestiones ligadas a la percepción de
las personas acerca del rol que está jugando el Estado a partir de la toma de viviendas. Incluso se
mencionan personas concretas, particularmente, el Secretario de Desarrollo Social.
En relación a los casos recuperados en la presente ponencia, y como se mencionó con
anterioridad, se podría decir que los actores y las actoras movilizadas no sólo están demandando el
cumplimiento de un derecho particular, sino también están exigiendo ser reconocidxs en tanto
legítimxs ciudadanxs/vecinxs de la ciudad, con el objetivo de comenzar a derribar fronteras simbólicas
y materiales que condicionan las posibilidades de acceso al espacio urbano. Frases como: “No
queremos que nadie nos regale nada, pero tenemos criaturas, y necesitamos una solución (…) Pagar
un alquiler hoy en día es imposible, tengo un nene de 3 años y otro en camino, (…) queremos un techo
para nuestras familias”; “ninguno de nosotros tiene un recibo de sueldo, que es lo que exigen para
acceder a una vivienda (…) Lo que podemos hacer es pagar una cuota de 600 u 800 pesos.”; “No
queremos tener problemas con nadie y menos con la gente que estaba anotada, pero nosotros
estamos dispuestos a pagar una cuota”; “no queremos una pelea de trabajadores contra trabajadores
(…) de gente pobre contra pobres”; “Soy padre de dos hijos, hace ocho años me inscribí en el plan
federal (…) Ayer mi esposa tomó la decisión de tomar una casa porque nunca vamos a recibir nada”;
“nos cansamos de tantas promesas incumplidas y recurrimos a la lucha y a la organización como
camino para lograr el derecho que nos corresponde”, posibilitan advertir que las personas
protagonistas de la toma buscan ser tratadas con respeto y consideración, y que se contemple el
cumplimiento de sus derechos, intereses y preocupaciones. Por tales motivos, intentan que sus
padecimientos sean visibilizados como problemas sociales que requieren de la intervención estatal.
Y para ello, se presentan como trabajadores y trabajadoras, en ocasiones informales, que
sobre la base de sus condiciones materiales intentan adquirir una vivienda digna para sus familias. En
este punto la presencia de menores de edad resulta un argumento central en sus reclamos ya que
delimita las obligaciones del Estado y legitima las ocupaciones sobre la base de argumentos que se
conciben en tanto moralmente correctos, como lo es el cuidado y protección de los/as niños/as.
Sumado a ello, las mencionadas personas intentan redimir su situación de ilegalidad ocasionada por la
acción y omisión del Estado, quien no sólo los invisibiliza sino que también legitima desigualdades
sociales al interior de la ciudad y, particularmente de los barrios, puesto que la experiencia cotidiana
del espacio permite vislumbrar la relación entre el territorio y criterios de justicia en cuanto a la
distribución efectiva de recursos/servicios socialmente valorados (Soldano, 2014);
“Por acá cerca hay gente que ocupó terrenos y se construyó sus casa, precaria, pero casa, y
los dejaron tener luz y todo, nosotros también queremos una solución”; “el Plan Federal no permite el
alquiler de las casas, y sin embargo vemos que muchas viviendas están alquiladas o están sin uso”.
Las personas que protagonizaron la toma en Tandil acordaron con el Ejecutivo Municipal, al
igual que las vecinas y los vecinos que se habían asentado en un barrio en Necochea, que estaba
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VI Congreso Marplatense de Psicología
construyendo una mutual privada, tenía adjudicatarios asignados, y presentaban el mayor desarrollo
en cuanto a estructura, cerramientos y servicios urbanos. Se resalta esta cuestión para enfatizar que
en ambos casos se actuó en tiempos cortos, ya sea desde el Ejecutivo Municipal como es el caso de
Tandil, o desde el Poder Judicial a través del Juzgado de Garantías en el caso de ese barrio de
Necochea, en el cual se estipuló fecha para el desalojo, y se logró previo a esa fecha, un acuerdo con
la Secretaría de Desarrollo Social. En ambos casos, las personas desconocían las situaciones de los
otros y las otras que estaban en el mismo lugar, y no habían realizado ninguna reunión para compartir
los modos de abordar la situación.
En el barrio tomado en Quequén (Partido de Necochea), lograron generar procesos de
participación y organización, visibilizados en las reuniones que realizaban para compartir sus
situaciones y formas de abordaje de las mismas, efectuar petitorios a autoridades municipales, y en las
formas de reparar las condiciones de infraestructura de las viviendas. Incluso nombraron al barrio
como “Unión y Esperanza”. Estos procesos obedecen a aspectos vinculados a una construcción de
una unidad social (el barrio), y se manifiestan inseparables de la construcción física del barrio a la vez
que ponen de manifiesto conceptos tales como la identidad y el sentido de comunidad (García, Giuliani
& Wiesenfeld, 1994). Estas cuestiones mencionadas cursan en paralelo con la construcción de la
resistencia al desalojo, o al menos, con la construcción de estrategias para lidiar con la amenaza de
desalojo por parte de organismos estatales o judiciales (Wiesenfeld, 1998; 2000)
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desalojo”. En: Urbana, 27, pp. 13-25.
886
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
El prejuicio intergrupal es uno de los problemas más serios que enfrenta nuestras sociedades.
Diferentes estrategias se han desarrollado para la reducción del prejuicio intergrupal (Stephan &
Stephan, 2000). Sin lugar a dudas una de las estrategias más estudiada es el contacto intercultural
(Allport, 1954). La teoría de contacto intergrupal ha sido motivo de numerosas investigaciones. En
general se ha encontrado que bajo ciertas condiciones el prejuicio es reducido a través del contacto
con miembros del exogrupo (Pettigrew & Tropp, 2008). En este trabajo se discutirán los mecanismos
psicológicos que explican la reducción del prejuicio. Más específicamente se tratará el rol de los
procesos de categorización, haciendo hincapié en las categorizaciones cruzadas (Marcus-Newhall,
Miller, Holtz, & Brewer,1993), la complejidad de identidad social (Roccas & Brewer, 1991), y las
categorizaciones sociales múltiples (Crisp, Hewstone, & Rubin, 2001).
Nuestra capacidad de entendernos los unos a otros dentro del entorno social depende de cómo
nuestra mente percibe, procesa, y recuerda los estímulos sociales. Por lo tanto una piedra angular al
tratar temas sobre prejuicio intergrupal es la cognición social, la cual puede ser definida como “el
estudio de cómo las personas hacen sentido de otras personas y ellos mismos” (Fiske & Taylor, 2013,
p. 1). Para darle sentido a nuestro mundo social, aprendemos desde temprano a categorizar a las
personas en base a características asociadas con grupos sociales particulares. Un supuesto de
cualquier análisis sobre el prejuicio intergrupal es precisamente el poder percibirnos los unos a los
otros como miembros de grupos sociales. Está se ha designado como una condición sine qua non, o
esencial, a la hora de entender el prejuicio (Fiske, 2004). A grandes rasgos, podemos organizar
nuestra forma de percibir los estímulos sociales en base a características individuales o a las
características asociadas a sus afiliaciones grupales. Macrae y Boddenhausen (2000) han identificado
dos rutas por las cuales las personas procesan el estímulo social (ver también McClelland, Naughton,
& O’Reilly, 1995). La ruta automática es el modo de operación estándar. Mediante esta ruta
procesamos el estímulo social en base a información que ya existentes en nuestros esquemas
mentales. Estos esquemas se fundamentan en grandes categorías en las cuales organizamos la
información sobre un tema o grupo social. Un ejemplo de esto lo son los estereotipos. Los estereotipos
no son otra cosa que información general que tenemos en nuestra mente que está basada en la
categoría particular a la cual se refiere el mismo. Cuando nos encontramos en una situación social y
887
VI Congreso Marplatense de Psicología
categorizamos a un individuo dentro de un grupo social particular (e.g. basado en el género), nos
vienen a la mente la información dentro de nuestro esquema mental que responde a esa categoría
social (Kunda & Spencer, 2003). Si esa persona es una mujer, ese encuentro va a disparar
automáticamente los estereotipos sociales relacionados a la categoría “mujer”. Esa información
estereotípica no solo incluye características generales sobre esa persona sino también nos sugieren
qué debemos esperar de esta persona. O sea, que el estereotipo nos adelanta una serie de
expectativas conductuales relacionada a la persona en base a su afiliación grupal. Debo esperar que
esta persona (por ser mujer) actúe de esta o aquella forma. Es mucho más fácil el interactuar con las
personas en base a la información que proviene de estos estereotipos por que no implica mucha carga
cognitiva. Fiske y Taylor (2013) han identificado le metáfora de “avaro cognitivo” para representar esta
tendencia de los seres humanos a tomar atajos mentales reduciendo así el esfuerzo cognitivo que se
utiliza en una tarea particular.
Ya que nuestra capacidad cognitiva es limitada, trataremos de utilizar nuestros recursos
mentales lo menos posible, a menos de que estemos motivados a hacer una evaluación más
minuciosa de la situación social. Ya motivados a procesar más detalladamente la situación social,
utilizamos otra ruta de procesamiento cognitivo. Esta segunda ruta de procesamiento cumple la
función de identificar y darle sentido a los estímulos sociales nuevos o diferentes (en comparación con
aquellos en nuestros esquemas) (Macrae & Bodennhausen), y por lo tanto se enfoca en las
características individuales de las personas, en lugar de las grupales. Sin embargo, para que este
estímulo sea identificado como novel, se debe de comparar con la información existente en el
esquema mental (asociado a la categoría social). Interesantemente, la percepción social requiere gran
complejidad en el sentido de que las personas con las cuales nos encontramos no poseen solo una
dimensión social en base a la cual podamos clasificarlas. Una persona puede ser percibida en base a
múltiples dimensiones sociales tales como la edad, el género, la etnia, ocupación, afiliación religiosa,
etc.. Esto nos lleva a preguntarnos sobre si se activa la información correspondiente a todas estas
categorías, o si se activan varias y no otras, si solo una, etc. Como veremos más adelante, la
complejidad cognitiva mediante la cual procesamos los estímulos sociales resulta relevante a la hora
de considerar estrategias para la reducción del prejuicio intergrupal.
La Teoría de Contacto es sin lugar a dudas en enfoque más estudiado para la reducción del
prejuicio intergrupal. Gordon Allport (1954) es usualmente mencionado como el propulsor de esta
teoría, la cual sostiene que el prejuicio intergrupal pueden ser reducido a través del contacto
intergrupal siempre y cuando se cumplan una serie de condiciones: estatus igualitario entre los
miembros de los grupos, metas en común, la naturaleza no competitiva de la situación, y el endoso de
las autoridades pertinentes. A través de los años muchos estudios empíricos han evaluado y
confirmado el supuesto principal de las Teoría de Contacto: que el prejuicio intergrupal es reducido a
mediante del contacto (Pettigrew & Tropp, 2006; 2011). ¿Pero qué exactamente explica la reducción
del prejuicio en las situaciones de contacto? ¿Cuáles son los procesos socio-psicológicos que nos
ayudan a entender esta disminución en las actitudes negativas hacia miembros de exogrupos? Varias
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VI Congreso Marplatense de Psicología
hipótesis se han propuesto para tratar de contestar estas interrogantes. Una explicación es que el tipo
de condiciones presentes en las situaciones de contacto disminuyen los límites grupales. O sea, que
las condiciones presentes en la situación de contacto reduce la prominencia de las demarcaciones que
dividen el endogrupo del exogrupo. Esto facilita la evaluación de la persona no en base a sus
afiliaciones grupales sino a sus características individuales o a la intersección de dos o más
dimensiones sociales. A este enfoque se le conoce como “decategorización” (Brewer & Miller, 1984).
Enfoques relacionados incluyen el de “recategorización” (Gartner et al, 1994) donde los límites son
debilitados por la presentación de un identidad supra-ordinal común, y la diferenciación mutua (Brown,
2010) donde las distinciones endogrupo-exogrupo son mantenidas mientras que se enfatiza su
interdependencia.
Aún cuando los enfoques identificados en el apartado anterior nos ayudan a entender como
nuestras representaciones de los límites endogrupo-exogrupo influencian nuestras actitudes hacia
miembros del exogrupo, ninguna trata directamente el tema de la intersección de identidades sociales.
Como hemos identificado en el apartado sobre cognición social y categorización, hay múltiples
dimensiones sobre las cuales podemos clasificar los estímulos sociales y por lo tanto resulta relevante
el saber cuales de estas (dimensiones) se activaran y como estos procesos influenciaran nuestra
evaluación de esa persona. El paradigma de las categorizaciones cruzadas ha tratado de atender ese
problema al presentar situaciones en las cuales se cuenta simultáneamente con dos dimensiones
sociales. Mientras otros enfoques se centran en resaltar características individuales o la afiliación a
una identidad grupal supraordinario, el paradigma de las categorizaciones cruzadas presenta
oportunidades de contacto donde dos dimensiones sociales son “cruzadas” o “intersectadas”. La
relevancia de este enfoque ha sido argumentada por Brewer:
“Las categorizaciones cruzadas (y las asociadas identidades múltiples) pueden suavizar o
prevenir las consecuencias más odiosas de la diferenciación endogrupo-exogrupo y la comparación
intergrupal. Este entendimiento, que patrones cruzados de de diferenciación social aumentan la
estabilidad social y la tolerancia, ha sido independientemente generado por los antropólogos, los
sociólogos, y politólogos.” (Brewer, 2000, p. 169)
Las investigaciones sobre las categorizaciones cruzadas han encontrado que las condiciones
de contacto son establecidas para resaltar dos, a diferencia de una dimensión de identidad social
reduce sesgos intergrupales (Marcus-Newhall, Miller, Holtz, & Brewer, 1993). Sin embargo, una
limitación de este enfoque es precisamente el limitar el número de dimensiones a dos.
Tomando como base las investigaciones de las categorizaciones cruzadas, Roccas y Brewer
(2002) han resaltado la importancia del constructo de Complejidad de Identidad Social. Basado en un
enfoque fenomenológico, el énfasis ha sido sobre como los individuos evalúan el significado de sus
múltiples identidades sociales. La complejidad de identidad social ha sido definida por estos autores
como la “naturaleza de la representación subjetiva de las identidades múltiples endogrupales” (p. 91-
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VI Congreso Marplatense de Psicología
92). Las investigaciones sobre la complejidad en identidad social han encontrado al contructo
relacionado con la tolerancia hacia miembros exogrupales (Roccas & Brewer; Brewer & Pierce, 2005).
Mientras que la Complejidad de Identidad Social presenta un enfoque fenomenológico
enfatizando nuestra percepción de las propias identidades sociales, otra línea de investigación se
enfoca en la complejidad con la cual percibimos a otros. Este enfoque es conocido como
Categorizacion Social Múltiple (Crisp & Hewstone, 2006). Crisp, Hewstone, y Rubin (2001), por
ejemplo, encontraron que participantes exhibieron menos sesgo intergrupal cuando estos utilizaron dos
y cinco dimensiones de identidad (en comparación con una dimensión) al evaluar a miembros del
exogrupo. Hallazgos similares fueron encontrados por Hall y Crisp (2005). Participantes los cuales
generaron agrupaciones sociales alternativas a la presentada inicialmente como dicotómica exhibieron
menos sesgo intergrupal.
CONCLUSIÓN
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891
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUÇÃO
O presente trabalho foi desenvolvido de acordo com as discussões feitas em sala de aula na
disciplina de Estágio Básico II sobre as ideias apresentadas nos capítulos do livro de Vincent de
Gaulejac, 2007, “Gestão como doença social” e de mais outros dois textos correspondentes à temática
do mundo do trabalho. Dessa maneira, a partir dos debates acerca dos conteúdos teóricos abordados
em sala de aula, foram realizadas atividades práticas que consistiam em entrevistar sujeitos que
estivessem empregados ou não, nos mais diversos contextos e áreas do mundo do trabalho, a fim de
relacionar os dados obtidos das falas dos entrevistados com os conceitos e ideias explicitadas nos
textos discutidos.
A importância do trabalho justifica-se pelo tema estar relacionado a conceitos amplamente
difundidos no mundo do trabalho e na sociedade em geral, como os de Sucesso e Reconhecimento,
que caracterizariam uma pessoa que pode ser considerada bem sucedida, conforme a lógica
gerencialista que permeia as culturas organizacionais das grandes empresas. O presente trabalho
pretendeu colocar em questionamento esses conceitos que nas relações trabalhistas são associados à
qualidade, satisfação e bem-estar no trabalho, levantando a hipótese de que a definição do que é
sucesso para uma pessoa pode ser diferente para outra e assim sucessivamente, ou seja, pretende-se
verificar se os trabalhadores entrevistados definem Sucesso e Reconhecimento no trabalho da mesma
forma como esses conceitos são explicitados no livro “Gestão como doença Social - Ideologia, Poder
Gerencialista e Fragmentação Social”, de Vincent de Gaulejac, 2007. As empresas tentam impor aos
seus funcionários de que forma eles devem moldar seus valores, suas crenças e comportamentos,
sendo muito relevante que o psicólogo investigue e compreenda esses aspectos circunscritos no
mundo do trabalho.
REFERENCIAL TEÓRICO
Leão (2012) apresenta em seu texto a reflexão de que a partir da Revolução Industrial, o
capitalismo propaga uma forte ideologia constituída por uma noção de trabalho baseada nas relações
de venda das forças de trabalho dos indivíduos e que consequentemente, são sustentadas pela
desigualdade social, que possibilita que alguns vendam sua força de trabalho por necessidade,
enquanto outros exploram os seus empregados. Com a emergência da sociedade capitalista, o
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sistema se torna mercadoria - apresentando valor de troca e venda, como a força de trabalho do
trabalhador. Além disso, apontam a alienação, a repetitividade, a submissão, a humilhação e a
condição dos sujeitos componentes de uma chamada classe operária ou proletária, que é explorada.
Ademais, o marxismo impulsionou as lutas que reivindicavam por um trabalho no qual fosse possível
produzir a própria condição humana.
Assim, compreende-se que o Movimento dos Sem-Terra (MST), sob a perspectiva da teoria
marxista, possa ser considerado como um movimento de resistência, visto que os trabalhadores do
campo lutam pela reforma Agrária, a fim de que as terras concentradas sob o domínio de grandes
latifundiários sejam repartidas ou redistribuídas, de maneira a proporcionar um pequeno pedaço de
terra para famílias de pequenos produtores que desejam viver e trabalhar no campo.
Dessa forma, o objetivo da prática do Estágio Básico II foi delineado conforme as principais ideias
abordadas por ambos os textos citados, a fim de investigar as concepções pessoais do trabalhador em
relação ao seu trabalho, como o reconhecimento ou falta deste, assim como valores que permeiam os
seus afazeres, como a definição do que é uma pessoa com sucesso e bem sucedida. A hipótese
elaborada antes das entrevistas era a de que os trabalhadores iriam apresentar definições distintas a
respeito dos conceitos de sucesso e reconhecimento, em comparação com a definição apresentada
por Gaulejac (2007), em que o sucesso é relacionado como sendo algo de difícil alcance, pelo fato de
que o sujeito nunca deve sentir-se plenamente satisfeito com o que faz, pois pode sempre melhorar,
enquanto que o reconhecimento é definido com base no grau em que os colegas de trabalho e as
demais pessoas respeitam e valorizam as atividades laborais executadas pelo sujeito, influenciando
seu bem-estar e sua satisfação com o trabalho que possui.
Além disso, a ideia apresentada no texto, que o conceito de sucesso abarca, é o de que, para
que o sujeito seja bem-sucedido, precisa consumir certos produtos, obter determinados resultados no
trabalho, ser ambicioso, ser competitivo, ser individualista e adquirir um padrão ou estilo de vida que o
sistema capitalista difunde como sendo a única maneira através da qual, o sujeito consegue obter
dignidade, reconhecimento e felicidade.
METODOLOGIA
Gaulejac (2007) mostra que a definição dos conceitos de reconhecimento e de sucesso estão
atrelados a outros, também mencionados no texto, conforme a lógica gerencialista. Por meio de
entrevistas, baseadas em um roteiro (em anexo), feitas com trabalhadores que fazem parte do
Movimento dos Sem-Terra (MST), tentou-se investigar o que significava para essas pessoas ter
sucesso, ser um trabalhador bem-sucedido, além de questioná-los se eles consideravam que seus
respectivos trabalhos eram reconhecidos por outras pessoas e pela sociedade em geral.
AMOSTRA
O trabalho prático foi realizado com dois trabalhadores que serão chamados de trabalhador 1 e
trabalhador 2. Os dois estão assentados, ou seja, conquistaram um pedaço de terra no Assentamento
Emiliano Zapata que fica aproximadamente a uns 17 km da cidade de Uberlândia. A escolha desta
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APLICAÇÃO
Antes do início das entrevistas foi esclarecido aos entrevistados que a entrevista visava atender à
proposta de trabalho de uma disciplina de estágio do curso de Psicologia da Universidade Federal de
Uberlândia (UFU), tendo como objetivo investigar as opiniões dos trabalhadores a respeito de alguns
conceitos e noções referentes ao mundo do trabalho.
CATEGORIAS
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pelos colegas de trabalho e chefia. As empresas difundem aos funcionários um discurso imerso na
lógica gerencialista que propõem que todos devem almejar alcançar suas metas e superar os
resultados obtidos pelos seus colegas de trabalho, além da ideia de que o sucesso deve ser buscado e
o sujeito nunca pode sentir-se plenamente satisfeito e feliz com o trabalho realizado, pois sempre
haverá algo a ser aprimorado, melhorado, inovado.
Nesse sentido, para que o sujeito alcance o sucesso e obtenha reconhecimento por parte dos
outros indivíduos, deve ser competitivo, empenhar-se em liderar os grupos, em conseguir promoções,
em atingir uma maior quantidade de metas em menor tempo possível. Assim, o sucesso torna-se uma
obrigação para o indivíduo que deseja ser reconhecido e valorizado pela função que desempenha,
pois sempre está vigente o discurso de que “o mundo é dos espertos” e de que é “um contra todos e
todos contra um”, sendo que a definição de um conceito está atrelada à definição de outros conceitos
referentes à qualidade do trabalho, como também à satisfação e bem-estar do indivíduo no trabalho.
DISCUSSÃO E RESULTADOS
Categoria – sucesso:
O conceito de sucesso é definido com relação ao desempenho do sujeito na organização da
qual faz parte, sendo que é preciso sempre fazer mais, sempre melhorar algo, de maneira a tentar
sobrepor-se sobre os demais, demonstrando eficiência, qualidade do seu trabalho, internalização da
cultura organizacional e comprometimento com os objetivos estipulados pela organização.
O primeiro entrevistado disse que considerava ter obtido sucesso na vida, pois após tantas
lutas, reivindicações e ocupações de terras, havia conquistado seu “cantinho abençoado de terra”. O
trabalhador diz que concorda com a frase “só não trabalha quem não quer”, relatando alguns fatos de
sua vida, enfatizando que ele começou “do zero” antes de poder considerar-se como um trabalhador
assentado (que conquistou seu pedaço de terra). Ele conta: “de pouco em pouco fui crescendo
devagar, melhorando de vida”. A prefeitura doou mudas para que iniciasse seu trabalho no campo,
assim como os vizinhos também o ajudaram muito nesse sentido, segundo o que me relata. Segundo
ele “a vida é dura pra quem é mole”.
Ainda na conversa com o trabalhador 1, ele comunica que possui 4 filhos, sendo que um deles
é nomeado por ele como “deficiente”, que mora com ele e sua esposa. Seus outros filhos já são
casados e assim como ele, trabalham no campo. O entrevistado também diz que não possui carteira
de trabalho assinada, sendo que ele comprovará sua aposentadoria a partir da época em que mora e
trabalha no campo.
Na conversa que tive com o trabalhador 2 sobre o que era sucesso em sua opinião e se ele
considerava que era bem-sucedido, ele disse que ele e a esposa vivem para suas duas filhas,
contribuindo da melhor forma possível para que elas sejam felizes. Para eles isso é sucesso. Além
disso, acrescenta que o fato deles permanecerem no campo, lutando pela reforma agrária, a fim de
mostrar que é possível e que “dá certo”; isso é considerado por eles como sendo um sucesso, uma
grande conquista em suas vidas, algo que foi bem-sucedido.
Categoria – Reconhecimento:
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Borges e Yamamoto (2004) pontuam que o trabalho e a forma de se pensar sobre ele
relacionam-se com as condições histórico-culturais em que cada sujeito vive e convive com os demais.
Nesse sentido, a percepção de reconhecimento do próprio trabalho ou a falta deste está envolvida com
as condições em que o indivíduo desempenha seu trabalho, com a posição que ocupa na estrutura
social, dos exemplos e convivência com trabalhadores de seu meio, entre outros aspectos.
Por meio de uma sistematização do modo como o trabalhado é pensado e executado, Borges e
Yamamoto (2004) descrevem algumas dimensões didáticas, que agrupam fatores importantes para o
desenvolvimento de uma investigação referente ao mundo do trabalho, sendo que dentre esses
agrupamentos destaca-se a dimensão socioeconômica, que abrange a interação entre o trabalho e as
estruturas sociais, econômicas e políticas da sociedade, incluindo o ritmo de crescimento econômico
de um país em questão e o nível da oferta de emprego. Outra relevante dimensão é a denominada de
dimensão simbólica, que engloba os aspectos condizentes com a produção subjetiva provinda da
interação entre o indivíduo e o seu trabalho executado. OBS.: parte acrescentada.
A respeito do Governo atual, o trabalhador 1 comenta que “falar sobre o Governo não é bom,
você sabe disso, né? Tem pessoas que falam mal porque não tá bom pra elas. O Governo tá
razoável”. Ele também menciona que é preciso que os políticos invistam mais em Saúde e Educação
no país. Ainda referente ao assunto, ele diz que os políticos não aplicam as leis da maneira como
deveria ser; ou seja, eles não aplicam as leis “nos seus iguais, nos próprios filhos”. Dessa forma, em
sua opinião, isso contribuiu para que a bandidagem seja sustentada e revigore no país. E nesse
sentido, ele volta a falar sobre o modo como o MST é reconhecido pelas demais pessoas, dizendo que
ás vezes o movimento é fortemente criticado e tido como sinônimo de “bandidagem”, mas para ele, a
corrupção está por todas as partes, principalmente na “política do país”.
Questionado sobre se, em sua opinião o Governo atual havia contribuído para melhorar e
aumentar as ofertas do trabalho no país, o trabalhador 2 me conta que no passado, as pessoas
queriam se locomover para o campo por questões de necessidade, pois a vida na cidade se tornara
insustentável, com os elevados impostos, precárias condições de subsistência, com extensas jornadas
de trabalho; fenômeno que se intensificou após a Revolução Industrial. Para ele, o Governo Lula, de
certa forma, limitou as reivindicações pelas terras, enfraquecendo consideravelmente o MST e as lutas
baseadas na reforma agrária, pois foram oferecidos mais empregos na cidade; provocando um
acentuado movimento das pessoas do campo para as cidades.
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trabalhar sempre mais, sob o ditado de que “tempo é dinheiro”, além de tentar sempre melhorar seu
desempenho e a qualidade de seu trabalho. Consequentemente, na medida em que o sujeito nunca
alimenta uma plena satisfação pelo seu trabalho executado, ele receberá o reconhecimento por parte
dos outros, sendo visto como alguém indispensável e importante para a organização ou para a
comunidade em que está inserido e trabalha. Relacionando as ideias dos autores mencionados com o
objetivo delineado para este presente trabalho, foi direcionada uma pergunta ao trabalhador 2, a
respeito de como ele se sentia vivendo e trabalhando no campo.
O trabalhador 2 disse que diferentemente do que ocorre com as famílias das cidades, as
famílias do campo realizam um trabalho familiar em que cada integrante da família auxilia de alguma
forma no plantio e colheita de alimentos, garantindo seu próprio sustento e distribuindo na cidade uma
parte excedente do que foi produzido. Nesse sentido, o entrevistado me diz que no campo há uma
exigência maior sobre a família, sendo que na cidade, muitas das vezes ocorre que em uma família,
apenas o pai e a mãe trabalham, ou ainda apenas um destes trabalha, enquanto que os seus filhos
apenas estudam, grande parte, até chegarem à faculdade.
Compreendi que, conforme ele contou, muitas pessoas se deslocavam da cidade para o
campo, pois a grande maioria, que morava na periferia da cidade, possuía alguma relação com o
campo, talvez devido a uma origem camponesa dos pais ou avós. Perguntei-lhe sobre como era a sua
vida no campo, e ele me disse que, no campo, tinha a sensação de possuir maior liberdade,
coordenando sua própria mão de obra, controlando sua jornada de trabalho, que em média é de 10 a
12 horas por dia, conforme a tarefa que ele e sua esposa realizam, além da disposição física que
dispõe no dia.
Por outro lado, quando ele vai para a cidade, de 2 a 3 dias por semana, ele me comunica que
se sente “asfixiado” com o ritmo da cidade, devido ao fato de que todas as atividades possuem horário
fixo, como por exemplo, ir ao Banco para pagar uma conta. Segundo ele, sua vivência de estresse
está associada á sua ida para a cidade, além de me relatar que, conforme sua percepção pessoal, na
cidade todos os espaços são delimitados, “tudo é distante, tudo é fechado”; diferentemente do que
ocorre no campo, pois as pessoas possuem maior liberdade para caminhar por suas terras e pelas
terras dos vizinhos, que ele diz que são relativamente grandes, “até onde seus olhos não conseguem
alcançar”.
Sobre a ideologia do Movimento do MST:
Em seu texto “O mundo do trabalho”, Borges e Yamamoto (2004) falam a respeito de uma
chamada dimensão ideológica que estaria relacionada com o discurso formulado acerca do trabalho,
tanto pelo sujeito quanto pela sociedade, derivando diretamente das formas de pensamento vigente e
justificando as relações de poder promovidas pela sociedade, assim como a desigualdade social
sustentada pelo sistema capitalista e que por sua vez, também o afirma e o perpetua.
Segundo Leão (2012), após a Revolução Industrial e simultaneamente às várias
transformações ocorridas na época, o capitalismo difunde uma forte ideologia pautada na noção de um
trabalho constituído nas relações de venda das forças de trabalho dos sujeitos, sendo que somente
por meio desse seria possível que o sujeito obtivesse sua dignidade e alcançasse a felicidade,
conforme a maior quantidade de bens acumulados.
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CONCLUSÃO
Pode-se verificar que são distintas as formas como cada trabalhador irá compreender e definir os
conceitos de Sucesso e Reconhecimento, a partir do contexto histórico-social em que está inserido,
juntamente com as condições e relações trabalhistas com as quais lida cotidianamente.
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Dessa forma foi possível averiguar que, no caso dos dois trabalhadores entrevistados, que
fazem parte do Movimento dos Sem-Terra (MST), as definições do que é ser uma pessoa bem-
sucedida e ter seu trabalho reconhecido implicam questões elaboradas singularmente por cada
indivíduo, apresentando diferenças perceptíveis no que se refere às definições explicitadas por
Gaulejac (2007). Talvez tais diferenças possam estar relacionadas com o fato de que os trabalhadores
entrevistados vivem e trabalham preponderantemente no campo, e não na cidade, apesar de se
locomoverem até ela de 2 a 3 vezes por semana para distribuírem os alimentos que plantam.
Nesse sentido, a hipótese elaborada antes das entrevistas, a de que os trabalhadores iriam
apresentar definições distintas a respeito dos conceitos de sucesso e reconhecimento, em
comparação com a definição apresentada por Gaulejac (2007), foi confirmada. No entanto, pela
amostra ser composta de somente dois trabalhadores, é importante ressaltar que os dados obtidos
não podem ser generalizados, nem levar a uma noção de esgotamento da temática ou serem vistos
como resultados inquestionáveis, considerando que estes nunca foram os intuitos da proposta de
realização do presente trabalho. Além disso, considera-se que a temática acerca das condições
laborais dos trabalhadores pertencentes ao MST, configura-se como um campo de ampla e
inesgotável investigação, tanto para a Psicologia do Trabalho quanto para a Psicologia mais voltada
para a Saúde do Trabalhador.
Pontuo que considerei extremamente positivo e enriquecedor a livre escolha que cada
integrante da turma de Estágio Básico II possuiu para realizar entrevistas com os trabalhadores que
desejasse, respeitando, de certa maneira, os interesses e preferências pessoais de cada um.
Considero que as dificuldades enfrentadas para o desenvolvimento do respectivo trabalho estejam
relacionadas com conteúdos teóricos com os quais não estávamos devidamente familiarizados, além
do fato da disciplina envolver uma parte prática, com a qual também nos deparamos relativamente
pouco durante toda a nossa formação acadêmica, pela maioria das disciplinas curriculares enfatizarem
mais leituras, críticas e discussões dentro das salas de aula, ao invés de proporem um processo de
aprendizagem que implica na conciliação entre o estudo de teorias e o desenvolvimento de atividades
práticas feitas fora das salas de aula.
Outra dificuldade que pude perceber como algo gritante na minha turma de Estágio Básico II foi
a proposta de cada um escolher as categorias que gostaria de investigar, com quais trabalhadores
realizaria as entrevistas e a elaboração de um roteiro de entrevistas, assim como o delineamento de
um ou mais objetivos pretendidos para a parte prática da disciplina. Em minha opinião, as citadas
dificuldades estão relacionadas com a maneira com a qual nos habituamos, até o presente momento,
em realizar trabalhos, pois em praticamente todas as outras disciplinas, todos os alunos sempre
devem desenvolver as mesmas atividades, do mesmo modo, com um roteiro e objetivo pré-
estabelecidos pelo professor.
Dentre as dificuldades enfrentadas particularmente por mim, durante a realização do presente
trabalho, posso pontuar o fato de que como encerrei, ao menos presencialmente, meu semestre com
uma antecedência de aproximadamente um mês, pela Mobilidade Internacional, tive que antecipar
muitas atividades acadêmicas, cuja algumas já finalizei, enquanto outras estou no processo de
finalização, à distância.
Por esse motivo, desenvolvi sozinha o trabalho prático e senti em alguns momentos um pouco de
dificuldade para me lembrar de todas as informações obtidas em cada entrevista, além do desânimo
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que às vezes surgia, pelo motivo de que realizei as atividades práticas em dois sábados consecutivos,
da parte da manhã até o início da tarde, fora da cidade de Uberlândia, na companhia de outros
estudantes, que desempenhavam atividades muito distintas em relação à minha; dessa forma, devido
ao tempo de viagem e à presença dos outros estudantes, as entrevistas não podiam ser muito
prolongadas e às vezes eram interrompidas. Ademais, devido ao fato de que minhas aulas na
Universidad Nacional de La Plata tiveram início no dia 11 de agosto, e de que antes disso precisei
procurar um lugar para morar, também foi igualmente difícil elaborar sozinha a parte escrita do
trabalho.
Apesar de todas as dificuldades mencionadas, considero que me empenhei muito na realização
do respectivo trabalho, pela temática ter me despertado muito interesse e curiosidades. A ideia de
entrevistar trabalhadores integrantes do MST surgiu de conversas que tive com veteranas do curso,
que fazem parte de um Projeto de Extensão com as famílias de alguns assentamentos, assim como da
vontade de afastar-me da minha zona de conforto, de conhecer relações trabalhistas com as quais
estava menos familiarizada, além de iniciar uma aproximação entre a Psicologia do Trabalho e outros
campos possíveis de se conhecer e intervir.
Uma sugestão que tenho para as próximas atividades práticas da turma de Estágio Básico 2 é a
de que, em caso de que todos da turma entrassem em acordo, poderia ser escolhida pelo grupo uma
Instituição sobre a qual poderia ser feita uma breve análise institucional, com base em entrevistas
feitas com trabalhos pertencentes à mesma, a fim de coletar uma maior quantidade de dados
referentes à Instituição eleita.
No entanto, no caso de nem todos concordarem em desempenhar suas atividades práticas na
mesma Instituição, acredito que isso seria igualmente interessante e proveitoso para esses alunos e
para a turma em geral, pois os resultados não seriam repetitivos e além do mais, penso que o objetivo
dos Estágios Básicos é proporcionar aos alunos vivências diferenciadas nos mais diversos contextos
de atuação e intervenção do psicólogo. Sendo assim, se um aluno deseja realizar sua parte prática em
uma organização do trabalho onde nunca antes foi desenvolvido um trabalho de entrevistas
semelhante ao proposto na disciplina, considero que isso deve ser valorizado e encorajado, pois está
relacionado com ampliação dos campos de estudo e intervenção psicológica.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
El presente trabajo parte de una investigación cuyo objetivo es estudiar y analizar las
subjetividades de personas que han atravesado situaciones de vulnerabilidad social extrema, como la
situación de calle. Se utilizó como metodología la administración de entrevistas con la modalidad relato
de vida, incluyendo también observaciones naturalísticas de la interacción espontánea de los sujetos
en diferentes actividades dentro de la institución. La muestra estuvo compuesta por sujetos de ambos
sexos de edad entre (35) y (65) años, que residen en un hogar de transitorio de la ciudad de Mar del
Plata.
DISCUSIÓN
Durante nuestro trabajo, observamos como factor común que los sujetos entrevistados pusieron
de manifiesto en su discurso, diferentes fallas o déficit en las funciones de la familia como institución
primera, que atraviesa y constituye a todo sujeto. Estas fallas revisten como característica principal el
desapuntalamiento y el desamparo en la primera infancia a partir de la violencia, muchas veces
alternada con la falta de cuidado e indiferencia por parte de las figuras de autoridad. La violencia
sufrida durante la infancia, supone fundamentalmente la anulación del otro como sujeto, del otro en su
otredad. Supone la destrucción de los vínculos. “Un estímulo no tuve de chico, siempre me molían a
palos por cualquier cosa”. El interjuego entre la violencia, las carencias de afecto y la indiferencia por
parte de la red de vínculos que configura la familia, nos invita a pensar en una situación de fragilidad y
vulnerabilidad tanto a nivel psíquico, como social, ya desde los primeros años de la vida de los sujetos.
“Pensar como viene la moto el tema de mi viejo, todo, era un hombre violento, digamos (…)
salía con sus amigos por ahí, se iban a los prostíbulos y venía borracho y se armaban cada quilombo.
No podíamos ni estar en la casa. Era violento”.
Otra característica a destacar en relación a las fallas en la familia como institución
subjetivadora, son las dificultades de acompañar y sostener a los sujetos en el tránsito por otras
instituciones sociales, no cumpliendo su función de intermediaria; en algunos casos siendo expulsados
abruptamente a la sociedad sin acompañamiento alguno, en otros dificultando la capacidad de llevar
adelante sus vidas más allá del ambiente familiar. “Mi infancia fue jodida. Y por eso fui creciendo a los
portazos, a los tumbos, a las trompadas. Y acá estoy”; “Todo un proceso, claro… cambio de vivir con
mi mamá toda la vida así y ahora vivir con veinticinco personas (sujeto de 54 años)”. Creemos
oportuno señalar que cada una de las instituciones que conforman la sociedad, operan sobre las
marcas subjetivas previamente forjadas. La familia, como institución, adquiere un lugar fundamental en
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el orden de la producción de subjetividad, mediante la presentación y el sostén de una ley, que debe
reconocer un más allá de quien la sustenta, siendo fruto del consenso social. Según Kaës (1998) la
cuestión del sujeto se define cada vez más necesariamente en el espacio inter-subjetivo y más
precisamente en el espacio de lo intergeneracional, de lo familiar y de lo grupal, allí precisamente a
donde “el yo puede advenir” (Aulagnier; 1976), o fracasa al constituirse. Por ello las fallas en las
funciones familiares revisten gran importancia, ya que, no solo estarían dificultando el sentido y la
continuidad en la vida institucional de los sujetos, sino que estarían dificultando la transmisión y
asimilación de aquellos pactos y alianzas sobre los cuales se van a tejer los vínculos futuros.
Asimismo, en relación a lo anteriormente descripto, debemos reconocer ciertas
descomposiciones en la red de vínculos y en los modos de vincularse que presentan los sujetos
entrevistados. El otro no aparece como un semejante-auxiliar con el cual establecer un vínculo basado
en la confianza y la seguridad: “No les importa nada, te apuñalan, te matan, te asesinan ahora”. En
principio, podemos sostener que la modalidad de vincularse de los sujetos, se basaría en el contacto
momentáneo y efímero de lo situacional, predominando el encuentro con el otro desde las
interacciones. A pesar de sus propias dificultades, no podemos desconocer que en la realidad social
de estos tiempos, el encuentro con el otro con el cual establecer un vínculo sólido y duradero, ha
pasado a un segundo plano, en detrimento de los contactos fugaces que llevan la impronta de la
aceleración e incertidumbre los tiempos actuales. Sin embargo, más allá de las transformaciones
socio-históricas contemporáneas y las características de las nuevas subjetividades, podríamos
reconocer a estas dificultades de generar y sostener los vínculos, como características propias de los
sujetos entrevistados, padeciendo una progresiva desafiliación de los soportes relacionales que los
ubican en situación de vulnerabilidad. El otro no cuenta como una fuente posible de apuntalamiento,
sino que hace las veces de enemigo, mereciendo al menos la desconfianza, lo cual dificultaría la
apertura del sujeto a la creación de nuevos vínculos. “Eso es lo que piensa la gente, entendés. A ver
cómo te pueden joder”. Esta fragilidad vincular y la progresiva pérdida de las redes de contención,
toman importancia sobre todo ante situaciones de crisis acentuadas como lo es el trabajo de duelo. El
factor “pérdida” cumple un papel importante como punto de inflexión, el cual situaría a los sujetos
frente a una situación de desamparo que reactualiza otras vivencias de desamparo fundantes y que
posteriormente y en la mayoría de los casos, derivaría en la situación de calle. “Cuando ella fallece yo
me veo en una situación para mi extrema porque yo siempre trabaje con cama adentro, y me quede en
la calle”. Nos preguntamos si esta crisis vital, pondría de manifiesto la necesidad y fundamentalmente
la ausencia de una red vincular que contenga y apuntale al sujeto en estos momentos. “Fíjate que me
paso lo que me paso y no tenía a quien pedirle que me diera una mano que no fuera Bienestar Social.
Si yo hubiera tenido un montón de amigos o un grupo más social, hubiera estado más
relacionada, no hubiera terminado en Calidad de Vida”.
En base a lo expuesto anteriormente, podríamos hipotetizar que las fallas en la familia como
institución subjetivadora (que como sostuvimos anteriormente, en ocasiones obstaculiza las
condiciones de habitabilidad de otras instituciones), así como la desvinculación del sujeto con el orden
institucional en general, como parte de los procesos de desafiliación de las matrices vinculares,
generarían en los sujetos entrevistados cierta fragilidad a nivel psíquico, social y vincular, que
antecede y condiciona (no determina) a situaciones de extrema vulnerabilidad, como la situación de
calle.
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A la luz de la hipótesis anterior, resulta importante mencionar la relación que los sujetos
mantienen con el trabajo como institución. Los vínculos con respecto al trabajo como institución se
presentan con características de inestabilidad y con cierta fragilidad. Observamos que el trabajo no
constituye para los sujetos una fuente de realización personal, ni un espacio potencial de integración y
de fortalecimiento de los lazos sociales y vinculares ; ha dejado de ser una institución que apuntala,
sostiene, que sienta las bases de la identidad subjetiva y colectiva y que marca el camino hacia un
proyecto futuro, convirtiéndose solo en un medio que permite satisfacer las necesidades básicas del
día a día. En este sentido, nos preguntamos si el trabajo, como institución dadora de sentido, sería en
estas situaciones una institución que reproduce la desafiliación, la vulnerabilidad social y que empuja
hacia la exclusión social. “Me siento a veces indignado embroncado, que no me veo mucho futuro, no
porque yo no quiera sino que… el sistema, la sociedad medio que te impone te va descartando te
descarta en la edad. Ciertas cosas que vos querés hacer, principalmente me refiero al trabajo (…)”.
Siguiendo con el mismo sentido argumentativo, situamos a las instituciones de disciplinamiento
social. Las cárceles y los hospitales psiquiátricos significarían para los sujetos entrevistados
instituciones fuente de sufrimiento, que en base a la privación de la libertad y el encierro, los dejan
muchas veces frente a situaciones de desamparo, inseguridad y vulneración constante de todos sus
derechos: “Me ignoraban, el doctor “x” me ignoraba, me pasaba por al lado, “ahora no puedo”, siempre
estaba en reuniones, siempre en charlas. Lo único que me veía cuando me venía a ver, “¿cómo
estás?” y yo estaba decaído, mal, porque el encierro, el entorno. Se produce de esta forma, una suerte
de “Encerrona trágica” (Ulloa; 1995) en el sentido de que los sujetos para poder sobrevivir, apelan
muchas veces, a instituciones incapaces de amparar y dar alguna solución, reproduciendo el maltrato
y la exclusión, sin tener en cuenta vulnerabilidad de los entrevistados. En este punto, nuevamente las
instituciones, excluyen a los sujetos de la dinámica social, generando una desafiliación constante con
el resto de las instituciones sociales y sobre todo de las matrices vinculares, produciendo condiciones
de vulnerabilidad.
Entendemos a la producción de subjetividad como un proceso inacabado, abierto a los efectos
que lo social, los otros, los vínculos puedan producir. De esta forma lo singular, lo vincular y lo social,
se enhebran de modos peculiares en una trama que entreteje lo uno y lo múltiple de modo irrepetible
para cada sujeto (Sternbach, 2003). Es así que las condiciones inaugurales del psiquismo, no excluyen
la producción de nuevas marcas a partir de los múltiples cruces que la vida posibilita, de esta forma el
aparato psíquico se recrea y complejiza de modo diferencial en cada una de sus situaciones
vinculares. En tal sentido, podríamos pensar que la vivencia de condiciones de extrema vulnerabilidad,
como lo es la situación de calle, conducirían a modificaciones en las subjetividades de los
entrevistados, las más de las veces produciendo efectos des-subjetivantes.
Asimismo, resulta importante reflexionar sobre la manera en que los sujetos van armando sus
subjetividades a partir del universo de significados, valoraciones, y las propias experiencias de vida
que proveyó el atravesar situaciones de vulnerabilidad extrema, como la situación de calle. Los sujetos
entrevistados perciben al otro que comparte su condición de vulnerabilidad, como un otro distinto; otro
con el cual transitan situaciones y vivencias, pero que sin embargo es necesario diferenciarse para
recuperar algo del orden de la singularidad, frente a la generalización que el imaginario social realiza
sobre la figura del excluido. “Un negrito que tenga tanta cultura, me dijo un día una vecina. Claro, yo
tengo, tengo cultura porque leo, leo mucho y escucho las cosas, veo, me informo le digo. Leo los
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diarios, hablo con personas, pero no, no con otro como yo, ¿de qué vamos a hablar? Ya sabemos todo
lo nuestro”. En este punto podemos sostener que el imaginario social construido en torno a la figura de
sujetos en situación de vulnerabilidad y exclusión social, se arraiga de tal forma que genera modos de
pensar, sentir, decir y representar incluso en quienes padecen la realidad de estas circunstancias.
En el marco de la sociedad actual, con el debilitamiento de los enmarcamientos colectivo y el
privilegio de la individualidad, la palabra sobrevivir, adquiere un significado importante en los sujetos
entrevistados. Esta, se relaciona con el esfuerzo diario para mantenerse con vida físicamente y
psíquicamente, es decir, que pone en juego no solo la capacidad de conseguir comida, agua y un lugar
donde dormir. La inseguridad vivida en la situación de calle, se va inscribiendo en el psiquismo,
produciendo subjetividad y estableciendo modalidades vinculares y afectivas y una determinada
representación del mundo presente y futuro; en este sentido, podríamos destacar como un rasgo
característico de los sujetos entrevistados, a la incapacidad de pensar, cuestionarse o preguntarse
acerca de las condiciones de su existencia, tomando protagonismo la falta de cualquier proyección o
imagen a futuro y con el ella el descuido: “Y me vine de vuelta (…) estaba viviendo en la calle con un
nylon, todo mugriento al no bañarme, mugre y la barba parecía Papá Noel, una mugre, una grasa por
acostarte en cualquier lado. No te importa, te da lo mismo.”
La situación de calle, presentada en palabras de los entrevistados, tiene ciertas características
particulares, entre ellas se destaca la ausencia de una terceridad que ampare y regule los vínculos
intersubjetivos. Podríamos pensar que justamente si hay una Ley en la calle, es la Ley del más fuerte,
constituida por la violencia y la inseguridad, como pilares básicos. Justamente en la violencia radica la
posibilidad de sobrevivir de los sujetos, víctimas del hambre, el frío y el desprecio de la sociedad, todos
ellos están atravesados por una violencia que termina organizando casi inevitablemente; pasan de
víctimas a victimarios, evidenciando una ruptura de los pactos intersubjetivos: “Lo veo acá, pibes
tomando alcohol, drogándose, haciendo barullo a las 2, 3 de la mañana, cantando. Yo con mi físico ya
no puedo correr, no puedo hacer nada, me cagan de un tiro ahí, me dejan tirado. Es el miedo mío acá
que un día vengan, me pongan ahí sin poder defenderme”. Son sujetos jugados a la violencia por la
violencia misma. (Ulloa; 1995). Por otro lado es interesante reflexionar, acerca de lo que Agamben
(2004) propone como el Estado de excepción. Haciendo esta referencia, podríamos pensar justamente
que la situación de violencia, fragilidad e inseguridad que vivieron los sujetos entrevistados, no es una
excepción, es decir, algo irrepetible y pasajero que ante determinadas circunstancias adquiere
vigencia; para ellos estas situaciones configuran el día a día, la cotidianidad.
Otra de las significaciones sociales registradas en el discurso de los entrevistados, establece
que quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad y exclusión, son los responsables de su
propia desgracia, los culpables de lo que les sucede y les toca vivir, no reconociéndose como producto
que la misma sociedad genera. “Algunos te sacan volando, te dicen “voy a llamar a la policía”, “manga
de vagos”, “búsquense trabajo”, cosas así. Normales. Bueno, vos no le podes decir nada, el que
molesta es uno. Ellos son los damnificados, digamos”. Por otro lado y más allá de la perspectiva de los
entrevistados, la sociedad contemporánea privilegia y realza como valores principales, al éxito y a la
capacidad de autogestión individual de potencialidades, ubicando a los sujetos como agentes de su
propio destino. Si cada “individuo” es agente promotor de su vida, en cuanto a sus capacidades y
potencialidades, también el fracaso, la vulnerabilidad y la exclusión pasarían a ser responsabilidad de
los mismos sujetos. La sociedad se considera la víctima, y como tal se protege de la amenaza que
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONSIDERACIONES FINALES
Es importante tener en cuenta que los padecimientos actuales se acentúan en los sujetos en
situaciones de vulnerabilidad social y se ven reforzados por la inexistencia de instituciones capaces de
hacer algo con esta situación. Es así que las instituciones contemporáneas, a partir de la metamorfosis
estatal y el predominio del mercado, ya no son espacios de sostén y apuntalamiento, así como
tampoco regulan los encuentros entre los sujetos; asisten a un proceso de vaciamiento de sentido,
desligadas y fragmentadas, terminan por reproducir las condiciones de expulsión social (Grupo doce;
2001). Si bien los sujetos entrevistados consideran al hogar como una institución de tránsito, la
mayoría se preguntan por su salida del lugar, su futuro y con ello adviene la incertidumbre. En este
sentido, nos cuestionamos acerca del hogar como institución de amparo en su capacidad para dejar
las marcas subjetivas que señalen el camino de la continuidad y la transferencia hacia otras
instituciones sociales. De esta forma se redobla la apuesta para una sociedad que tenga como
premisa la inclusión y el bienestar de todos sus ciudadanos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
sufre ese daño;4) una persona o grupo con mayor poder hace daño a otro con menor
poder; 5) no existe la provocación; 6) la conducta se suele repetir; y 7) el agresor disfruta
de hacer daño a la persona más débil.
A partir del interés creciente y del avance en las investigaciones surgen estudios
más específicos sobre el bullying, entre los que se encuentran los estudios centrados en
el rol de los espectadores. Rigby es pionero en esta línea de investigación. Plantea que el
bullying típicamente tiene lugar en presencia de estudiantes espectadores, entendiendo a
los mismos como los testigos u observadores de la intimidación que efectúa el acosador.
Por otra parte sostiene que frente a dichas situaciones de intimidación o acoso, los
espectadores adoptan diferentes conductas entre las que se encuentran las reseñadas a
continuación:
Espectadores que brindan una ayuda directa al acosado: dentro de este grupo
encontramos a aquellos estudiantes que desde un punto de vista moral,
argumentan que lo correcto es brindar ayuda a quien está siendo acosado. Otros
estudiantes fundamentan su ayuda a partir de una fuerte identificación con el
acosado. En otros casos, la ayuda está condicionada por la relación con el chico
acosado, o sea que lo ayudarían si pertenece a su grupo de amigos, en caso
contrario ignorarían la situación.
Espectadores que brindan una ayuda indirecta al acosado: se trata de aquellos
estudiantes que consideran que es mejor contarle al docente, que intervenir
directamente.
Espectadores que ignoran el bullying: aquí encontramos a aquellos espectadores
que deciden ignorar la situación por el temor a las consecuencias, que se refiere
generalmente al miedo a pasar a ocupar el lugar del acosado. En otros casos,
algunos espectadores consideran que la intervención sería contraproducente o en
vano, y por ello deciden ignorarlo. Otros estudiantes, se muestran indiferentes ya
que consideran que la responsabilidad es del acosado.
Espectadores que actúan en sentido negativo: se refiere a aquellos espectadores
que actúan apoyando al acosador, ya sea por considerar que es la opción más
segura, por admiración hacia el acosador o también por encontrar atractiva esta
modalidad de acoso.
En esta misma dirección, a partir de una investigación llevada a cabo con una pequeña
muestra de estudiantes pertenecientes a las ciudades de Mar del Plata y Coronel Vidal,
encontramos en coincidencia y sumándonos a los aportes arrojados por las
investigaciones de Rigby, que las modalidades propiciadoras de bullying ocurren en
presencia de espectadores y que los mismos adoptan diferentes conductas, entre las
cuales también encontramos: la intervención directa, la intervención indirecta, la no
intervención y la intervención en sentido negativo, es decir el apoyo al acosador.
Por otro lado, sus investigaciones señalan que el factor más importante para que
los espectadores apoyen al chico acosado es la expectativa que tiene el grupo de pares
en relación a cómo ellos deberían comportarse frente a una situación de acoso. Las
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VI Congreso Marplatense de Psicología
expectativas de los padres, parecerían ser en gran parte irrelevantes. Mientras que las de
los docentes parecerían no tener en absoluto influencia directa sobre sus conductas.
A su vez ha sido informado que la intervención para apoyar al sujeto acosado
decrece con la edad. Esto es especialmente verdadero en las escuelas secundarias
(Rigby, 2006).
Por su parte Astill, Feather & Keeves (en Rigby, 2006), afirman que la importancia
del grupo de pares en el contexto del comportamiento escolar, indica que las expectativas
de los amigos, a diferencia de la de los docentes puede tener una mayor influencia.
De lo anteriormente citado se desprende la importancia que tiene la posición que
adoptan los espectadores frente a esta problemática. En este sentido Rigby pone el
acento en estos actores considerando que su intervención puede ayudar a combatir el
bullying. Menciona que el objetivo de los programas de intervención debería orientarse a
motivar a los estudiantes espectadores para intervenir y asistir a los acosados. Deduce a
su vez que el trabajo de los docentes con los estudiantes en esta área necesita ser
indirecto, esto es, ayudar a los estudiantes a formular y expresar sus propias opiniones
sobre cómo los espectadores deben comportarse y ayudarlos a adquirir las habilidades
necesarias para ser verdaderamente útiles.
Uno de los métodos empleados por Rigby, se denomina “preocupación
compartida” (Rigby, 2005), es un método que asume la participación de todo el grupo en
el fenómeno de bullying, es decir que comprende la dinámica grupal de esta problemática.
De esta manera, la responsabilidad es difundida. El método se propone que los miembros
del grupo en forma individual tomen conciencia de la situación en que participan, a través
de charlas individuales. Este autor sostiene que si bien puede haber un líder, este dirige o
lidera si hay miembros de un grupo que puedan ser dirigidos. Dentro de los motivos por
los cuales estos estudiantes pueden estar involucrados enumera los siguientes: algunos
pueden sentirse enojados por el comportamiento del acosado; otros pueden sentir que lo
que están haciendo es divertido; mientras que otros pueden integrarse en el grupo de los
acosadores porque tienen miedo de pasar a ser ellos mismos los acosados.
El método de “preocupación compartida” consiste en una serie de etapas en las
cuales se emprenden entrevistas con estudiantes, que se cree que estuvieron
involucrados en un episodio de bullying. En primer lugar se entrevista a los acosadores, el
entrevistador comienza a compartir su preocupación por una persona que ha sido
acosada, enfatizando en que esa situación para esa persona es injusta o no es buena.
Después del reconocimiento por parte del estudiante, se lo interroga por lo que puede
hacer para mejorar las cosas. Luego se hacen reuniones con el acosado, y el
entrevistador revela que ha hablado con los acosadores y que con su cooperación están
ayudando a mejorar la situación. Posteriormente, se hacen otras reuniones con todo el
grupo para confirmar que existe un progreso real hacia mejorar la situación. Finalmente,
se hace una última reunión para corroborar que el bullying ha terminado y que se han
establecido relaciones aceptables entre todos los estudiantes.
Por otra parte y teniendo en cuenta que esta problemática ocurre en presencia de
dichos espectadores, creemos necesario poder visibilizar las consecuencias que produce
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el bullying en estos actores. En este sentido Rigby (2004) menciona que en el momento
en que el acoso tiene lugar algunos espectadores se sienten tristes y preocupados por
pasar a ocupar el lugar del acosado; otros se sienten enojados; otros se sienten
avergonzados o culpables por no hacer nada; mientras que a otros simplemente no les
importa. Con respecto a las consecuencias a largo plazo, sostiene que los espectadores
también pueden verse afectados, así como los demás actores, de una manera que no es
posible predecir.
En relación a este tema consideramos que frente a situaciones de acoso
sostenidas en el ámbito educativo, una de las consecuencias que se podría producir en
este grupo de actores es la naturalización temprana de situaciones de acoso, la falta de
implicación y puesta en palabras necesaria para que se pueda producir el inicio de algún
cambio.
CONCLUSIONES
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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INTRODUCCIÓN
Teniendo en cuenta los diversos tipos de violencias que tienen lugar dentro de la escuela, el
maltrato entre pares ha sido una de las problemáticas más investigadas en las últimas cuatro
décadas, constituyendo aun hoy una alarmante preocupación debido a su prevalencia y al impacto
negativo que esta forma de maltrato ocasiona en los sujetos implicados. El conocimiento de las
repercusiones nocivas en la salud física, psicológica y emocional ha hecho que algunos
profesionales de la salud hayan orientado su interés al estudio de esta problemática, a fin de
contribuir principalmente en la detección de situaciones de vulnerabilidad y factores de riesgo, así
como en su prevención y asistencia (Rigby, 2003).
La escuela es por excelencia uno de los primeros espacios de socialización secundaria
donde los niños, niñas y adolescentes profundizan los vínculos con sus pares. El grupo de iguales
adquiere una gran relevancia y significación, y dentro de la dinámica grupal surgen muchas veces
formas de maltrato y hostigamiento. Muy a menudo, estas situaciones se tornan sistemáticas y
derivan en un proceso de victimización que ocasiona en los escolares implicados sentimientos de
indefensión, temor y amedrentamiento (Smith y Brain, 2000). Asimismo, esta problemática
repercute negativamente afectando al clima escolar, así como al despliegue y mantenimiento de
una convivencia respetuosa.
El maltrato entre pares dentro de las aulas escolares ha sido nombrado internacionalmente
con el vocablo inglés bullying siendo su traducción más aceptada la de maltrato o acoso escolar
(Palacios de Torre, 2009). Existe un amplio consenso en la utilización de la definición propuesta por
Olweus (1998) a partir de la cual se considera que hay presencia de bullying cuando tiene lugar
una dinámica grupal en la que un escolar está siendo acosado, siendo ella o él expuesto,
repetidamente y de forma prolongada en el tiempo, a acciones negativas por parte de uno o más
escolares, que intencionalmente causa, o trata de causar, daño o molestias a otro. Esta dinámica,
en la que pueden distinguirse diversos roles –víctimas, agresores, agresores-victimizados,
ayudantes, reforzadores y testigos– se caracteriza por la intencionalidad de agredir, la repetición en
el tiempo y el desequilibrio de poder. Pero además de las formas presenciales de maltrato escolar,
en la última década ha ido surgiendo y aumentando una nueva modalidad de bullying. La creciente
disponibilidad de dispositivos de conectividad y de herramientas tecnológicas de interacción, como
los teléfonos celulares y recursos de Internet, proporciona nuevas vías que algunos adolescentes
utilizan para provocar daño y causar angustia en sus iguales (Keith y Martin, 2005). Se trata del
fenómeno conocido con el nombre de cyberbullying, en amplio crecimiento dentro de la población
infanto-juvenil, donde la intimidación, la humillación y el hostigamiento, que surgen
mayoritariamente entre púberes y adolescentes dentro de la escuela, cruzan la frontera física y se
viralizan en el espacio virtual de la web 2.0.
En este trabajo se intentarán abordar y describir las principales características del fenómeno
de cyberbullying a fin de ampliar su conocimiento y de contribuir con la reflexión sobre esta
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masividad ya que, como muchas otras actividades que los adolescentes mantienen en la web, el
maltrato a través de estos medios digitales pareciera mantenerse en el secreto de una cultura
juvenil que escapa al control de los mayores, lo que acrecentaría la desprotección de quien es
agredido y de aquel que agrede. Siguiendo esta línea, podría inferirse que en muchas ocasiones
los adultos no se encuentran al tanto de las relaciones que mantienen los niños, niñas y
adolescentes a través de la web ni de la significación que le atribuyen a las mismas. De este modo,
el maltrato recibido y ocasionado a través de las TIC podría no ser percibido por los adultos, ya sea
por docentes o padres, o ser minimizado como una broma de mal gusto, situación que contribuiría
al hecho de que se torne más difícil evitar este tipo de hostigamiento. En relación con esto último,
un estudio llevado a cabo por Eurobarómetro (2007) encontró que, si bien los adolescentes
conocían cuáles eran los riesgos potenciales online y las precauciones que debían tomar, la
mayoría manifestaba que prefería intentar resolver el problema por sí mismo o con la ayuda de
amigos, y que solo recurriría a los padres en los casos más graves. En un estudio local (Lanzillotti y
Korman, 2014), obtuvimos resultados similares encontrando que solo el 6.2% de los adolescentes
involucrados en situaciones de cyberbullying manifestaron haber dialogado con sus padres acerca
de la existencia del acoso. Sin dudas, lo anterior constituye un dato relevante a tener en cuenta a la
hora de reflexionar sobre la presencia de los adultos al momento de intervenir, preventiva o
asistencialmente, en las situaciones de cyberbullying.
También se torna necesario mencionar que si bien el maltrato entre pares dentro de las
aulas escolares no constituye un fenómeno nuevo, la incorporación de las tecnologías interactivas-
digitales en la vida cotidiana, y así la posibilidad de que el ciberespacio se instituya como un nuevo
escenario de intimidación y acoso, hacen visible una violencia que ya existía entre los
adolescentes, dado que muchas veces las agresiones verbales y sociales que permiten estos
dispositivos serían la continuación de agresiones que se desarrollan dentro del colegio. En este
sentido, resulta relevante destacar que estas formas de maltrato no se presentan aisladas sino
dentro de un contexto social más amplio que incluye, en diversos ámbitos y de diversos modos,
conductas sociales violentas. Así, se sugiere que, en principio, el enfoque de las violencias
escolares requiera hacer referencia a los múltiples y complejos determinantes de la misma, como
son los factores socio-históricos, comunitarios, institucionales, familiares e individuales. En este
sentido, la investigación internacional se interesa cada vez más en los efectos del contexto ligado
al establecimiento escolar: cómo su organización y gestión favorece o previene la violencia, el rol
de las familias, los problemas de salud mental asociados, el impacto de los ámbitos sociales,
políticos y culturales, en un intento de abordar la multicontextualidad de las diversas formas que
asumen las violencias escolares (Castro Santander y Reta Bravo, 2014).
En especial referencia al fenómeno de cyberbullying, se sostiene la necesidad de
incrementar los estudios regionales haciendo hincapié en las características que este fenómeno
adquiere en cada contexto. Un punto importante al respecto pareciera ser el conocer y reconocer la
importancia de la escuela como agente protector o de riesgo frente al maltrato escolar cibernético:
por ejemplo, la creencia institucional acerca de que las agresiones entre los alumnos ocurren en un
espacio físico y temporal diferente al de la escuela, constituiría un factor de riesgo ya que derivaría
en el desentendimiento de la institución. Como se mencionó anteriormente, diversos estudios han
demostrado que más de la mitad de los casos de cyberbullying tienen un historia previa de bullying,
por lo que, en la mayoría de los casos, este fenómeno resultaría de la continuación por medios
digitales de las agresiones que tienen lugar dentro de la escuela. Así es que se enfatiza la
importancia de que la comunidad educativa asuma este tipo de maltrato como algo propio e
incremente su prevención mediante normas de convivencia respetuosa, priorizando el rechazo de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
cualquier situación de abuso, maltrato y/o humillación, tanto si éstas se producen dentro de las
aulas como en cualquier otro espacio real o virtual donde interactúen los estudiantes (Castro
Santander y Reta Bravo, 2014).
Asimismo, merecen ser mencionadas algunas consideraciones relacionadas con el abordaje
de este fenómeno en el campo de la investigación. Cabra Torres y Marciales Vivas (2012)
sostienen que resulta indispensable conocer con mayor profundidad las atribuciones causales de
comportamientos e interacciones asociados al cyberbullying, tanto desde el punto de vista de los
mismos actores que sufren estos maltratos como desde el de los actores sociales que observan
dichos fenómenos con pasividad y sin ninguna intención de intervenir o mediar en dichas
situaciones. Al respecto, Smith y cols. (2002) señalan que los estudiantes no emplean los mismos
términos o conceptos que los investigadores para expresar o describir lo que a ellos les ocurre en
relación con este tipo de agresiones. En relación con esto último, en el trabajo anteriormente
mencionado (Lanzillotti y Korman, 2014), también indagamos las creencias que los adolescentes
poseían acerca de los motivos del cyberbullying encontrando que la mayoría de ellos percibía que
la motivación de sus pares era molestar; y, en menor medida, que sus compañeros agredían por
diversión o por envidia. Una indagación más profunda al respecto permitió concluir que los
adolescentes consideraban que la motivación principal estaba relacionada probablemente con
diferencias individuales («porque no les gusta como soy», «porque me ven diferente a ellos»). De
acuerdo a lo observado en el campo local, los adolescentes tienden a manifestar que esta
problemática estaría relacionada con actitudes y comportamientos de sus pares asociados a la
atribución negativa de las diferencias individuales. De esta manera, pareciera tornase
imprescindible que el trabajo de prevención y asistencia incluya en su consideración no solo a los
implicados directos -víctimas, agresores, agresores-victimizados- sino también a todo el grupo de
iguales, promoviendo el respeto por las diferencias y las diversidades. Considerando el rol de
espectador como mayoritario en las dinámicas de bullying, se infiere que estos participantes
indirectos, tanto de las situaciones que se producen dentro del establecimiento escolar como de
aquellas que se producen en la web, cumplen un rol muy importante en la inhibición y detención de
las conductas de maltrato, modificando su rol de observadores pasivos para constituirse como
agentes activos.
CONSIDERACIONES FINALES
Podría considerarse que las respuestas que pueden ser ensayadas ante esta problemática
deberían surgir desde la concientización y reflexión de todo el conjunto social, incluyendo
principalmente a los púberes y adolescentes. Considerando las características de este fenómeno y,
debido a que las aplicaciones de teléfonos celulares y los entornos en línea están cambiando
constantemente, se sugiere que, en lugar de centrarse en la prohibición de un sitio específico o en
medidas punitivas, padres y educadores trabajen con sus hijos y alumnos en la promoción de
conductas prosociales y de convivencia respetuosa, para que sean los adolescentes mismos los
que decidan no utilizar estos recursos interactivos en forma perjudicial. En relación con esto último,
Cabra Torres y Marciales Vivas (2012) sostienen que uno de los mitos del cyberbullying se
relaciona con la creencia ingenua según la cual controlando la tecnología y a los jóvenes se
obtendrá como resultado el control de las expresiones de acoso y maltrato. Lo que debe priorizarse
al momento de reflexionar sobre esta temática, entonces, es que el cyberbullying constituye un
problema social y no un problema de las tecnologías. En este sentido, expertos en la temática
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCION
DESARROLLO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
darse entre un grupo y un solo alumno, o entre dos grupos; raramente entre dos
alumnos. Otro rasgo es la presencia de los espectadores o testigos que sostienen el
desarrollo del fenómeno, desde la arenga hasta la indiferencia, pasando por el miedo
a tomar el lugar de acosado. Asimismo, sabemos que lo que caracteriza al bullying es
la falta de palabra o la existencia de la palabra descalificadora, hiriente o injuriante
hacia el otro semejante que suele acompañar a los actos agresivos y dañinos
sistemática y repetitivamente en un plano de asimetría de fuerza y/o poder. Quisiera
destacar que la sujeción al lenguaje, entre otras cosas, nos posibilita la comprensión
de reconocer que estamos inmersos en un entorno con otros a quienes respetar,
aceptar en su diferencia y compartir espacios, tiempos y actividades que hacen a la
construcción del lazo social. Todo ello va por el camino opuesto a una problemática
como el bullying. En cuanto a la planificación y aplicación de modos de intervención,
los pioneros en la temática-Olweus y Rigby-, resaltan el trabajo conjunto a través del
involucramiento de toda la comunidad educativa. Sin embargo, en esta oportunidad,
me interesa focalizar la función del adulto responsable que está en relación directa
con los niños y adolescentes, y cómo esa relación entre ambos se establece. Si antes
los alumnos obedecían más, creo que deberíamos preguntarnos qué hacemos o qué
eludimos para que ello ocurra. Porque si ser responsable y deseante es inherente al
sujeto adulto, nuestra responsabilidad y nuestro deseo están implicados, y entonces,
quizás, debamos revisar nuestros modos de vinculación con estos sujetos en
constitución.
En otro escrito (Pirillo, 2012), señalé la importancia de la relación entre padres
e hijos cuando de la confrontación generacional se trata; como señalara Kancyper,
(2010) cuando las diferencias son desmentidas el hijo queda en un lugar de
indiscriminación que promueve una pasividad, o lo aloja en una interminable
provocación tanática. Ese mismo sujeto en constitución, cuando está en la escuela
probablemente continúa desplegando su accionar de modo similar, pero si se
confronta con un adulto que ejerce su función de autoridad, el alumno será, aunque
sea parcialmente, limitado en su accionar. Ese límite es fundamental. Ahora, ¿qué
entiendo por el concepto de autoridad? Según Kòjeve (2005) es: “la posibilidad que
tiene un agente de actuar sobre los demás (o sobre otro), sin que esos otros
reaccionen en su contra, siendo totalmente capaces de hacerlo”. Es decir,
implementar la fuerza y/o el poder queda totalmente excluido de esta definición. Sin
embargo, suele suceder que se confunda la noción de autoridad con la de
autoritarismo. Si la autoridad implica: potestad, facultad, legitimidad, prestigio y crédito
que se reconoce a una persona o institución por su calidad y competencia en alguna
materia, según la Real Academia Española, entonces implica la confianza necesaria
en ese otro que propone, que enseña, y que transmite. Barcia (2010), miembro de la
Real Academia de Letras, diferencia ambos vocablos y expresa:
“Autoritarismo es un vicio de la democracia, es el pisar la cabeza del de abajo.
Pero la palabra autoridad viene del latín y significa hacer crecer y promover.
Es decir, el que tiene autoridad no es el que pisa la cabeza, sino el que
promueve y lleva a un proceso de crecimiento, de elevación. La autoridad
genera confianza, permite y alienta la conciencia crítica, no quiere que se
desarrolle como él sino mejor. Me animo a afirmar que en términos generales,
los temores en materia educativa generan pusilánimes, y la autoridad deja de
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CONCLUSION
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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el 11 de Julio, 2014 de www.diarioelargentino.com.ar/noticias/82767/entrevista-al-
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Kòjeve, A. (2005). La noción de autoridad. Buenos Aires: Nueva Visión
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INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
Siguiendo a Olweus (s.f.), tanto el bullying como el comportamiento violento son sub-
categorías del comportamiento agresivo. Según él, la violencia existe cuando el acoso
escolar se lleva a cabo a través de medios físicos o con contacto. Por otra parte, menciona
que hay mucho acoso sin violencia física, como también violencia que no se puede
catalogar de acoso escolar, por ejemplo una pelea en el patio. De todos modos, enfatiza en
dos ejes fundamentales para estudiar el bullying: la sistematicidad y la repetición en el
tiempo. Por lo tanto, esta aclaración marca una línea divisoria entre la violencia en el amplio
sentido de la palabra, y el fenómeno bullying.
927
El acoso se puede llevar a cabo por medios físicos o psicológicos. El comportamiento
negativo puede ser evidente como golpes o insultos, o tomar formas más sutiles y menos
notorias como difamaciones, hacer gestos insultantes, manipulación y/o exclusión social
intencionada.
Resumiendo lo anteriormente expuesto, se podría decir que cada vez que se hace
referencia al fenómeno bullying, se está significando aquel comportamiento que alguien
inflige, intencionadamente, o intenta infligir a otra persona para causarle malestar; que
puede o no implicar contacto físico; se produce de forma repetida y sistemática, con un
desequilibrio de poder entre el acosador y el acosado y que ocurre sin mediar provocación
por parte de este último.
Hablar de violencia implica hablar de una instancia compleja, que admite múltiples
miradas, y diversos discursos se han construido en torno a la misma según las disciplinas
928
que la han estudiado y la continúan analizando. Di Leo (en Kornblit, 2008), expresa esta
idea del siguiente modo:
5. Se dice del genio arrebatado e impetuoso y que se deja llevar fácilmente de la ira.
Al observar estos significados, se puede inferir que el término violencia posee una
connotación tanto negativa como positiva. Corrao (en Vernieri, 2010) lo expone del siguiente
modo: “Cierto grado de energía o de énfasis es necesario por parte del sujeto para hacerse
un lugar en el mundo y avanzar en la vida. Esta vehemencia o violencia es negativa en su
uso irracional e irrefrenable. (p. 106)
Lolas Stepke (1991) plantea una definición operativa de violencia diciendo que “es la
manifestación o el ejercicio inadecuado de la fuerza (o del poder). Manifestación o ejercicio
inadecuado significan extemporáneo (fuera de lugar y de contexto) o desmesurado o
excesivo (inapropiado en intensidad).” (p. 13)
En este sentido, Bleichmar (2008) expresa: “Mi mayor preocupación con respecto a
la violencia no está en la violencia en sí misma, porque es parte de la vida y parte de la
historia. El problema es qué tipo de violencia”. (p. 60) Y luego agrega que la cuestión es:
“(…) qué sentido tiene el ejercicio de la violencia. El ejercicio de la violencia individual, y
como explosión, es puramente destructivo. La posibilidad de un sujeto de resistir a la
violencia del otro puede ser muy constructiva”. (p. 60)
929
En cuanto al sentido positivo de la violencia, como fuerza que impulsa a avanzar, se
podría realizar un amplio recorrido investigativo, pero siguiendo los objetivos de este trabajo
se pondrá la mirada en el aspecto negativo de la misma; como así también, se acotará la
observación a aquella violencia que ocurre en el ámbito escolar.
Según Di Leo (en Kornblit, 2008), las investigaciones acerca de las violencias en la
escuela se han ido multiplicando durante la última década,
Lo que la violencia como acto trae de diferente es que se sitúa fuera del lenguaje,
diferenciándose así de los actos de transgresión a lo instituido donde la pretensión
es disputar ideas e imaginarios. […] De este modo, lo que caracteriza la violencia
actual en la escuela es la ausencia de nuevos modos de pensar y hacer frente a la
“violencia”, obturados por el discurso higiénico psicodidáctico tradicionalmente
utilizado para dar cuenta del orden escolar. En este sentido, lo que el contexto
reclama es escuchar no sólo “al otro” –como proponen las perspectivas más
ligadas a la resolución de conflictos- sino “otra cosa”. (Filmus, 2003: 25). (p. 23)
930
Por otra parte, Olweus especifica, entre las características que definen al bullying, el
desequilibrio de poder existente entre el/los acosadores y el acosado, característica que no
necesariamente debe existir en situaciones de violencia en sentido amplio.
CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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Recuperado el 2 de Julio, 2012 de http://www.educacionenvalores.org/spip.php?article79
932
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUÇÃO
Para Oliveira (1997), a maneira para que o equilíbrio fosse alcançado, era por
meio de oferendas, como demonstrações de agradecimento e retribuição por tudo o
que a natureza ofereceu aos homens. Além disso, o povo africano valoriza muito o
conhecimento transmitido dos ancestrais aos seus descendentes, de forma que esse
processo constitui-se pela conservação de valores, rituais, comportamentos, crenças
espirituais e construção das identidades de cada civilização.
Durante os rituais, há muita música, danças, cantos, que evocam energias dos
ancestrais, por meio da repetição de movimentos que produzem um efeito de transe.
Existem danças específicas de cada divindade (orixá), sendo que ocorre a prática de
dançar com os pés descalços, para que os adeptos entrem em contato com a terra do
ambiente ritualístico e absorvam as energias que este emana. No Brasil, estes
ambientes são denominados de terreiros.
933
VI Congreso Marplatense de Psicología
cultura de seu povo. Entretanto, vieram integrantes de várias tribos, sendo que cada
uma possuía suas próprias tradições, práticas religiosas e língua nativa. Por esse
motivo, os colonizadores separaram os africanos pertencentes de um mesmo grupo,
etnia ou nação, a fim de dificultarem a sua intercomunicação, sendo também
obrigados a conviver com integrantes de nações inimigas.
JUSTIFICATIVA
934
VI Congreso Marplatense de Psicología
aos nativos do continente africano, porém, não são transmitidos os valores, tradições,
costumes e crenças cultivadas por esses indivíduos que foram submetidos á condição
de escravos.
OBJETIVO GERAL
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
Também se pretende, por meio desta pesquisa de campo, verificar quais tipos
de reações, o estigma que a sociedade atribui à religião, são vivenciadas pelos
adeptos, a fim de compreender a forma como essas pessoas lidam e interpretam os
preconceitos e res-significam ou não, a sua vivência religiosa.
935
VI Congreso Marplatense de Psicología
METODOLOGIA
. Mulheres;
RESULTADOS ESPERADOS
936
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERÊNCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Lody, Raul. Candomblé: religião e resistência cultural. São Paulo: Ática, 1987. 85 p.
937
VI Congreso Marplatense de Psicología
938
VI Congreso Marplatense de Psicología
939
VI Congreso Marplatense de Psicología
M. García (2012) por otra parte sostiene que en los años ‘90, con el estímulo de un tipo de
cambio fuertemente sobrevaluado, se observa una nueva y pujante corriente migratoria boliviana
que encuentra un espacio de inserción en el mercado de trabajo hortícola de los cordones de las
grandes ciudades. La misma muestra gran influencia en la conformación de redes, como en la
consolidación de las preexistentes; siendo La Plata una zona del Área Hortícola Bonaerense
(AHB), más específicamente la zona sur del AHB, en donde la misma de destaca.
Proseguiremos por definir a qué nos referimos cuándo hablamos de bajo rendimiento
escolar.
940
VI Congreso Marplatense de Psicología
La definición de bajo rendimiento escolar varía según diferentes autores, ya que el mismo
está comprendido en algunas ocasiones en la definición de fracaso escolar.
El fracaso escolar puede desarrollarse desde dos aspectos, hay autores que se refieren al
mismo como al abandono de la vida escolar y otros como al bajo rendimiento escolar; tomaremos
la segunda línea ya que este trabajo de investigación se basará en niños con bajo rendimiento
escolar y no como deserción en la misma.
Por ello utilizaremos a definición de F. Terigi (2009): Cuando se habla de fracaso escolar,
se habla de desgranamiento, de repitencia, de bajo rendimiento, de dificultades de aprendizaje, de
sobreedad. Se habla también de logros diferenciales según género, según sector social, según
etnia, etcétera.
La misma hace referencia a la diversidad cultural y social del alumno.
941
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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_El_horticultor_boliviano_en_La_Plata.pdf?sequence=14 .
943
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944
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TRAUMATISMO
945
VI Congreso Marplatense de Psicología
intervenir en los tiempos de constitución de la psique a partir del encuentro con los efectos
de lo traumático.
946
VI Congreso Marplatense de Psicología
un problema que uno podría silenciar o resolver por medio del silencio.” (Aulagnier, 1992:
168)
La importancia de la atención de niños y adolescentes en el campo de la urgencia
reside en que la intervención se realizará en los tiempos de lo infantil. Se entiende por
infancia “el tiempo de instalación de la sexualidad humana”, de constitución psíquica, en
donde cada momento en la organización (en función de los movimientos lógicos
estructurantes) generará diferentes caminos de intervención. “Operar en el aparato
psíquico infantil en constitución es tener en cuenta que el inconciente no es algo que flota
en el espacio, sino que es algo que se ubica en el interior de un sujeto psíquico con
relaciones de conflicto intrapsíquico, donde las instancias con las cuales entra en relación
van a definir qué calibre va a tener ese conflicto y de qué manera se va a resolver a partir
de las defensas con las que pueda estructurarse.” (Bleichmar, 2010: 20)
LA CLÍNICA
947
VI Congreso Marplatense de Psicología
dice lo mismo, que todo va a estar bien. No puede contestar siempre igual.” Figura 1 y
Figura 2
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
948
VI Congreso Marplatense de Psicología
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Editores.
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Winnicott, D. (1971) Realidad y Juego, España: Gedisa Editorial.
Anexo
949
VI Congreso Marplatense de Psicología
Figura 1
Figura 2
950
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
951
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
Con UP nos encontramos con este tipo peculiar de historias que lejos de
alejarse de la realidad, la expresan en los extremos de las más alocada fantasía. Los
personajes son humanos. No hay héroes1. Si, actitudes heroicas. Irracionales. Locas.
1
Respecto de este punto, nos interesa destacar unas líneas que se encuentra en
el capítulo titulado Cuento de hadas frente al mito, del libro Psicoanálisis de los
cuentos de Hadas, de Bruno Bettelheim: “El cuento de hadas deja bien sentado que
habla de todo el mundo, de gente como nosotros (…)”; “los héroes reales de nuestras
historias, siendo, con todo, personas como todas las demás, impresionan al niño
cuando compara con ellos su propia pequeñez (…)” ; “los mitos proyectan una
realidad ideal que actúa de acuerdo a las demandas del superyo, mientras que los
cuentos de hadas representan una integración del yo que permite una satisfacción
adecuada de los deseos del ello. Esta diferencia explica el contraste entre el pesimismo
952
VI Congreso Marplatense de Psicología
Cabe pensar que tanto en distintas escenas puntuales del film, como en su
sentido general como obra artística, la filiación del niño por parte del viejo encuentra
2
No nos parece casual que muchas de las películas digitales de mayor impacto
de la industria cinematográfica hagan de la figura del ahijamiento el núcleo temático
de sus historias. Pensemos en ejemplos tales como: La Era de Hielo; El Gato con
botas; Kun fu Panda; Mi villano favorito, etc. La lista no resulta en absoluto
exhaustiva; pero si reveladora de como se hace que una misma situación (el
ahijamiento) despliegue la trama de todas estas historias, matizadas por la
singularidad de cada uno de sus personajes y las situaciones que los enlazan.
953
VI Congreso Marplatense de Psicología
como uno de los medios de su concreción la narración oral de una historia fantástica3.
Ya desde el inicio de la película encontramos al niño que en su tiempo fue el
viejo Carl, leyendo en su habitación las historias fantásticas de un libro de aventuras.
Sorprende esa mirada fascinada que mantiene el niño Carl con su texto, acostado en
su cama, en la oscuridad de su habitación, iluminando las hojas con una linterna de
mano. Acontece así la aparición de la niña que luego sería su compañera, Ellie, quien
3
En el mismo sentido, encontramos en dos clásicos de las películas animadas,
escenas similares en donde por medio de la función de mediador que ejerce el adulto,
promueve la filiación del niño y su ingreso a la cultura escrita: En “Mi villano favorito”,
el supervillano Gru comienza, primero de modo forzado, y luego, hacia el final, por
propia elección, a leerles un cuento infantil a sus tres hijas adoptivas Margo, Edith y
Agnes. Primero un cuento que ellas han traído del horfanato en donde vivían, y luego,
en el final del film, uno que escribió el propio Gru, en donde metaforiza su paternidad.
Ambas escenas son cruciales en la historización de los vínculos que enlazan a los
personajes. Por otra parte, en “La Era de hielo”, en una de las escenas mas emotivas
del film, observamos una maravillosa exposición del baño del lenguaje que hace un
personaje adulto sobre un niño, en sus primeros años de vida. Es por medio de la
lectura compartida que tanto Manny como el pequeño bebé humano hacen de las
imágenes jeroglíficas que descubren en una cueva (en donde se narra la historia de la
caza que los humanos hacen de los mamuts), que se promueve la apropiación
subjetiva, vía resignificación de las imágenes leídas, en la decisión de Manny de
devolver al cachorro humano a su manada, filiando al bebe como su propio cachorro,
en total contrariedad de todo imperativo, natural o simbólico, impuesto. Encontramos
una línea de análisis que promovió estas reflexiones en un texto de C. Corea y I.
Lewkowicz titulado, La Era de Hielo. Cito un párrafo: “ La manada que se arma por
decisión subjetiva se sostiene por la decisión de los mutuos cuidados y no por las leyes
que dicta la naturaleza -o la institución-. Se diría que los cuidados son las operaciones
en las que se sostiene la decisión de integrar la manada. Esos mutuos cuidados, sin
embargo, no son recíprocos ni suponen algo así como una semejanza entre los
miembros de la manada. Qué cuidar, a quién cuidar, cómo cuidar y quién cuida son
operaciones que se implementan bajo la presión de las circunstancias y que dependen,
ellas también, de decisiones situacionales precisas y no de mandatos o saberes –así
sean instintivos” (2001 – Texto no editado, disponible en internet; Ver Bibliografía).
954
VI Congreso Marplatense de Psicología
4
Vale destacar el juego temporal que hace el film, en donde en una sucesión de
escenas de aproximadamente 4 minutos, carentes de toda palabra, estando solo
acompañadas por una suave melodía que varía según el sentido, cómico o dramático,
que presenta cada situación, se nos trasmiten aproximadamente 70 años de la vida de
los personajes.
955
VI Congreso Marplatense de Psicología
Me interesa una relación. Aquella que se establece entre los encuentros inter
generacionales y la transmisión de historias, ya sea de modo narrado, escrito, o
fílmico.
CONSIDERACIONES FINALES
[...]Si el mediador no ejerce sobre los lectores la violencia simbólica que implica
la imposición de un sentido al texto que se lee, si cree firmemente en la
posibilidad de múltiples lecturas, si habilita las diversas interpretaciones que
surgen de la experiencia de leer, es posible que cada lector pueda encontrar en
el texto “noticias de si mismo” (2008, pag. 103)
956
VI Congreso Marplatense de Psicología
La experiencia aquí descripta como socio educativa, que convocó a niños y sus
familias signadas por condiciones socio-económicas desfavorables, como micro-
acción política que promueva condiciones de posibilidad para el fortalecimiento
comunitario, pudo encontrar en la proyección de un film, una arista sobre la cual
intervenir, afín de transmitir una obra que devenga capital simbólico, factible de ser re-
significada, re-transmitida, recordada, o quizás, simplemente vista, disfrutada y
olvidada por aquellos que participaron del evento. Después de todo, como lo dijera la
profesora E. Stapich respecto del derecho a la lectura, también es parte constitutiva del
mismo el derecho a construir sentidos nuevos y personales a partir de los textos
leídos. Mutatis Mutandis sobre la lectura de las imágenes en movimiento y con sonido
que constituyen las obras cinematográficas.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
5
Aquí diferenciamos, siguiendo a de Lajonquiere, la educación del discurrir
pedagógico. Según palabras del propio autor: “[...] una cosa es el discurrir pedagógico
y otra el quehacer educativo. El quehacer educativo, o simplemente la educación, es lo
que se pasa entre los grandes y los chicos, entre los viejos y los chicos, es la vida de
todos los días. Que obviamente no se reduce a los dispositivos pedagógicos” (2011,
pag. 199)
957
VI Congreso Marplatense de Psicología
STAPICH, Elena. Lecturas de infancia: ¿se acabaron los niños buenos? Conferencia.
IV Simposio Infancia e Instituciones. Mar del Plata. 2013
UP. Una aventura de altura (2009). Película. Dirección: P. Docter & B. Peterson.
Estados Unidos. Walt Disney Pictures - Pixar Animation Studios
958
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
959
VI Congreso Marplatense de Psicología
luchas entre diferentes versiones que, además, se proyectan hacia el futuro de los grupos
sociales constituyendo vectores a seguir (Carretero, Rosa y González, 2006).
Rosa (2004) distingue diferentes registros de la historia: escolar, cotidiano y
académico. Entre esas diferentes representaciones existen tensiones y acuerdos variables,
incluso pueden coexistir versiones muy diferentes en su contenido sobre un mismo proceso
histórico. La historia escolar se expresa en los libros de texto y los planes de estudio,
mientras que la historia en la vida cotidiana se refiere al modo en el que la memoria
colectiva se inscribe y actualiza en la mente de los individuos. Por último, el registro
académico corresponde a la versión del pasado elaborada por los historiadores y científicos
sociales, de acuerdo con la lógica disciplinaria del conocimiento establecida en esos ámbitos
y en instituciones específicas.
Específicamente, este trabajo se ubica en el registro cotidiano o de sentido común de
la historia con el objetivo de explorar cómo las personas sin formación académica en esta
disciplina –más allá de la escuela obligatoria- piensan la historia y si es posible identificar
posicionamientos diferenciales dependiendo de su auto-posicionamiento ideológico, la
relevancia que le otorgan a la religión en su la vida y su nivel de nacionalismo.
MÉTODO
Participantes
Se utilizó una muestra intencional compuesta por 375 adultos argentinos (edad: M =
34. 05, SD = 13. 00), residentes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El 70% (n = 264)
eran mujeres. Asimismo, el 57% (n = 214) eran estudiantes universitarios de carreras de
ciencias sociales y el 43% (n = 72) población general.
Instrumentos y procedimientos
Se utilizó un instrumento auto-administrado destinado a evaluar:
a) Concepciones de la historia: compuesta por 44 afirmaciones que describen
diferentes concepciones de la historia construidas a partir de la información obtenida
por estudios previos, en un continuo de respuestas de 7 puntos (1 = Totalmente en
desacuerdo, 7 = totalmente de acuerdo) (Bobowik, et al., 2010).
b) Nacionalismo: esta variable fue evaluada mediante un ítem “Cuando la gente habla
sobre política generalmente usa el término “nacionalismo” ¿Dónde te posicionarías
en la siguiente escala?” Con un continuo de respuesta desde 1 =no nacionalista a 10
= muy nacionalista.
960
VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Los resultados presentados en este trabajo con respecto a las concepciones legas o
de sentido común de la historia, muestran una tendencia general a considerarla como el
resultado de la lucha entre clases, con una fuerte dependencia de las condiciones socio-
culturales (concepción marxista). No obstante, se puso de manifiesto un compromiso con la
Verdad, al entender a la historia como “el descubrimiento de lo que verdaderamente
sucedió”, orientada probablemente, por un lado, a destacar la objetividad de la historia y, por
el otro, a enfatizar la concepción de la historia como la capacidad para tener certezas sobre
962
VI Congreso Marplatense de Psicología
los eventos del pasado. Estas concepciones se encuentran alejadas de pensar a la historia
como el producto de Leyes objetivas o de un Plan Divino, que, en general, fueron
rechazadas por los participantes.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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963
VI Congreso Marplatense de Psicología
964
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Larrañaga, Valencia y Vergès (2007) señalan que la teoría del núcleo central
distingue en la estructura de una RS dos tipos de elementos: el núcleo central y el
sistema periférico. El núcleo central es el elemento que da sentido y organiza la
representación. Su determinación es esencialmente de carácter social, y reúne tanto
condiciones históricas y sociológicas como ideológicas. De esta manera, el núcleo
es el elemento unificador y estabilizador de la representación y constituye el elemento
más estable, siendo en la representación el elemento que más resistirá al cambio. Por
otro lado, el sistema periférico permite el anclaje en la realidad del momento, dando
lugar a modulaciones individuales e interviniendo en el proceso de defensa y de
transformación de las representaciones sociales.
DESARROLLO
965
VI Congreso Marplatense de Psicología
MÉTODO
966
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RESULTADOS
967
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CONCLUSIONES
Los datos presentados muestran que los personajes más relevantes evocados
por los estudiantes de psicología para narrar la historia universal son en su mayoría
líderes asociados a la guerra o a la política, y este hallazgo es congruente con los
obtenidos en estudios previos (Sosa, Bombelli, Cejas & Fernández, 2013). La mayoría
de los personajes están vinculados a situaciones bélicas, como Colón, Napoleón,
Hitler, Mussolini, Che Guevara, Fidel Castro, Bush y Bin Laden, todos estos presentes
en el núcleo central de la representación. Asociados a la política se evocan las figuras
de Kennedy, Perón, Eva Perón y Obama. Estos resultados concuerdan con estudios
recientes (Liu et al., 2009) que sostienen que el relato de eventos asociados a guerras
es considerado crucial para las RS de la historia universal. Esto evidencia el fenómeno
denominado sesgo bélico. Perón y Eva Perón representan a su vez, un sesgo socio-
céntrico. Sobresalen también personajes cuyos liderazgos se sostienen en la
promoción de la paz, la no violencia y la ayuda al prójimo como son la Madre Teresa,
Luther King, Nelson Mandela, Juan Pablo II y Mahatma Gandhi. A diferencia de un
estudio local previo realizado con población de estudiantes militares argentinos
(Barreiro, Fernández, Sosa, Bombelli & Zubieta, 2012), se destacan aquí personajes
asociados a descubrimientos científicos tecnológicos, o religiosos como es el caso de
Einstein, Darwin, Marx, Freud, Piaget, y el cardiocirujano Favaloro. Estudios
transculturales también hallaron evocaciones relacionadas con el progreso científico,
económico, cultural o tecnológico a la hora de representar el pasado (Liu et al., 2005),
sin embargo, destacan su menor frecuencia en comparación con las figuras de orden
político, de guerras y de batallas. En las evocaciones de los estudiantes surgen
también Maradona, los Beatles y John Lennon, personajes relacionados con el deporte
969
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
972
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
El golpe de Estado que mantuvo a los militares en el poder de 1976-1983 fue el culmen de
una larga lista de golpes de Estado en Argentina que, por otra parte, estaba en sintonía con un
fenómeno de época latinoamericano. Robben (2005) afirma que debido a la violencia política, la
impunidad con la que se actuó desde el Estado Nacional tomado por los militares, y la extensiva
utilización de la represión como modo sistemático de regulación social, se puede considerar al último
período de gobierno militar como un trauma social para la Argentina. A propósito, Martín Baró (2003)
entiende que dichos traumas provocan efectos psicosociales globales, más allá de las heridas físicas
o emocionales que puedan acarrear individuos concretos. Una de las consecuencias psicosociales
de la violencia sociopolítica radica en una determinada percepción del clima emocional, entendiendo
por éste a lo que de Rivera (1992) define como la predominancia y saliencia relativa de un conjunto
de escenarios emocionales. Retomando las ideas de Martín Baró (2003), luego del terror
sociopolítico, las personas afectadas quedan con estrechez y rigidez en su vida social, se socavan
sus relaciones interpersonales, y se deteriora la convivencia social. Esto sucede, según lo entienden
Lira y Castillo (1991), porque cuando miles de personas son amenazados por un régimen político, la
sensación de vulnerabilidad y de miedo incide sobre la conducta y la conciencia del grupo humano
afectado.
Entonces: ¿Qué se puede hacer para restablecer ciertas condiciones de convivencia social
que restauren un orden de cosas dinamitado por el terror sociopolítico? ¿Es acaso esto posible? En
respuesta a la primera pregunta, es necesario considerar la aplicación de un conjunto de medidas
que se establecen en el marco de la Justicia Transicional, es decir, aquel modelo de justicia que se
administra luego de violaciones severas a los derechos humanos por parte de agentes estatales y/o
fuerzas armadas de oposición. Dentro de ese conjunto de medidas se pueden identificar la creación y
el desempeño de las Comisiones de Verdad(Teitel, 2003). La investigación en las violaciones a los
derechos humanos realizadas en un país (Hayner, 1994)colabora aportando información que luego
puede o no ser utilizada por las instituciones responsables de implementar la Justicia (Avruch, 2010).
Además, existen otras medidas de justicia retributiva (juicios a los responsables), o
restaurativa (rituales de recuerdo y conmemoraciones, pedidos de disculpas públicos, resarcimientos
económicos a las víctimas, etc.) (Andrieu, 2010) que buscan la consolidación de normas y el refuerzo
de la cohesión social en pos de evitar el resurgimiento de la violencia, recuperar la confianza
interpersonal e institucional vulnerada en el período de violencia y, así, garantizar la paz y la
convivencia armónica (Teitel, 2003).
En relación a lo anterior, diversos estudios señalan los beneficios salutogénicos del compartir
social de las experiencias emocionales sobre todo cuando éstas son intensas (Frattaroli, 2006;
973
VI Congreso Marplatense de Psicología
Weinman, Ebrecht, Scott, Walburn&Dyson, 2008), ó el impacto negativo sobre el bienestar subjetivo
de la inhibición de la expresión emocional (Finkenauer& Rimé, 1998). Estudios previos muestran que
las víctimas directas y las generaciones más jóvenes son quienes más necesidad sintieron de hablar
sobre lo sucedido en el pasado (Arnoso, Cárdenas y Páez, 2012), aunque en un estudio con
población argentina se encontró que tanto quienes vivieron la dictadura como quienes nacieron en
democracia mostraron una alta necesidad de hablar sobre el pasado violento (Arnoso, Cárdenas,
Muratori, Zubieta, Páez y Bombelli, 2014). Asimismo, en un trabajo transcultural realizado en seis
países se detectó que el mayor recuerdo de eventos traumáticos se asoció a un mayor clima
emocional negativo percibido y tendencialmente un menor clima emocional positivo, y que mientras
más se hablaba sobre aquellos, menor era el clima positivo percibido y mayor el clima negativo
(Páez, Ruiz, Gailly, Kornblit, Wiesenfeld y Vidal, 1996).
Sobre la base de lo hasta aquí expuesto, se realizó un estudio empírico con el objetivo de
explorar la percepción del clima social tanto positivo como negativo en una muestra de personas con
diferentes niveles de afectación por la violencia política durante la última dictadura militar argentina.
También se evaluó en qué medida el compartir social media las diferencias en la percepción
de clima social entre los participantes.
MÉTODO
RESULTADOS
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participantes de un clima emocional negativo (efecto total: B = -.17, DT = .08, t = -2.28, p =.02, 95%
CI [-.3252, -.0243]; efecto directo: B = -.11, DT = .07, t = -1.55, p =.12, 95% CI [-.2624, .0310]).
Finalmente, el grado de victimización predice de manera significativa el compartir social, siendo que
las personas más afectadas por la violencia son quienes sintieron mayor necesidad de hablar sobre
lo que les sucedió (B = .36, DT = .05, t = 7.75, p = .00, 95% CI [.2706, .4543]). El compartir social
también es un predictor significativo de la percepción de un clima emocional positivo (B = .22, DT =
.06, t = 3.61, p = .00, 95% CI [.0995, .3373]). El compartir social exhibe un rol mediador en la
evaluación del clima emocional positivo (efecto total: B = .22, DT = .06, t = 3.66, p =.00, 95% CI
[.1037, .3436]; efecto directo: B = .14, DT = .06, t = 2.25, p =.02, 95% CI [.0185, .2705]; efecto
indirecto (B =.08, BootDT = .03, 95% CI [.0346, .1357]).
A su vez, quienes más compartieron sobre lo sucedido durante la dictadura fueron quienes
evaluaban menos negativamente el clima emocional negativo (B = -.21, DT = .07, t = -2.94, p = .00,
95% CI [-.3522, -.0697]), evidenciando los efectos positivos del compartir social de las emociones. Se
comprueba que el compartir social no explica la capacidad predictiva de la victimización en la
percepción del clima emocional negativo (efecto total: B = -.18, DT = .07, t = -2.58, p =.01, 95% CI [-
.3252, -.0441]; efecto directo: B = -.11, DT = .07, t = -1.46, p =.15, 95% CI [-.2580, .0381]).
DISCUSIÓN
la situación actual percibida en la sociedad, para las víctimas –sean directas o indirectas- la temática
de su experiencia durante la dictadura puede ofrecerse como un punto de referencia a partir del cual
establecer evaluaciones sobre dicha situación colectiva. Toda vez que esto sea así, los índices más
elevados de clima emocional positivo, tanto como los menores niveles de clima emocional negativo,
pueden deberse al efecto restaurativo de las medidas implementadas, considerándolas herramientas
efectivas en la reivindicación de derechos y un importante progreso democrático.
En relación a lo anterior, el análisis el análisis de mediación permite verificar el poder
explicativo de las variables analizadas en la percepción del clima emocional. Así, se corrobora que el
nivel de victimización predice el clima emocional positivo, y más aún cuando se introducen el
compartir social, la aprobación de la CONADEP y de los Juicios (con leve efecto), y la sinceridad
atribuida a las disculpas. Otro hallazgo interesante es el del compartir social y la atribución de
sinceridad de las disculpas públicas en la explicación de la relación inversa entre la victimización y la
percepción de clima emocional negativo.
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979
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INTRODUCCIÓN
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MÉTODO
RESULTADOS
Bienestar social
Como puede observarse en la Tabla 1, los sujetos presentan niveles
relativamente altos en bienestar social, siendo que la puntuación más alta se
encuentra en la dimensión contribución y la más baja en la de aceptación. Por un lado,
esto indica que el aspecto más óptimo respecto a la valoración que se hace de la
relación con el entorno tiene que ver con el sentimiento de utilidad por parte de los
participantes, que sienten que son miembros vitales de la sociedad, que son eficaces y
aportan al bien común. Por otra parte, el aspecto más deficitario pasa por la baja
confianza que se vivencia respecto de los otros, de las actitudes positivas entre las
personas y de la atribución de honestidad, bondad y amabilidad, y de capacidad.
Tabla 1
Puntuaciones medias en bienestar social
Dimensiones Media SD
Integración social 4.03 .69
Aceptación social 3.05 .86
Contribución social 4.22 .83
Actualización social 3.72 .88
Coherencia social 3.82 .77
Total Bienestar social 3.73 .52
Nota. Continuo de respuesta de la escala de bienestar social (1=totalmente en
desacuerdo a 5=totalmente de acuerdo).
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Tabla 2
Puntuaciones de Clima Social Emocional
Media SD
Clima Social Emocional
Clima social emocional negativo 5.08 1.07
Clima social emocional positivo 2.87 .94
Nota. Continuo de respuesta de la escala de clima social emocional (1=no a 7=
completamente).
Tabla 3
Descriptivos de victimización y miedo al delito
Víctima Miedo al delito
Si No M SD
Robo o atraco en la calle 25.6% 71.7% 3.40 1.29
Robo de/en vehículo o daños en el mismo 23.1% 74.2% 2.73 1.45
Acoso, amenazas u hostigamiento verbal 30.2% 66.5% 2.56 1.34
Robo o fraude con tarjetas de crédito 1.4% 96.1% 2.47 1.30
Agresión física 17.7% 79.5% 2.80 1.29
Secuestro o ser retenido contra su voluntad 5.6% 91.7% 2.41 1.33
Agresión sexual 3.9% 93.4% 2.25 1.36
Atentado terrorista 1.4% 95.7% 1.58 1.05
Robo en su casa, estando dentro alguno de los 10.9% 86.0% 2.64 1.29
residentes
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Tabla 4
Diferencias en bienestar, clima socio-emocional según los niveles de miedo al delito
Bajo Alto T Gl P
Aceptación social 3.10 2.94 2.56 475 .01
Integración social 3.85 3.82 .52 477 .60
Contribución social 4.19 4.28 -1.41 473 .16
Actualización social 3.39 3.27 1.93 481 .05
Coherencia social 3.68 3.71 -.52 474 .60
Clima negativo 3.34 3.72 -4.85 473.582 .00
Clima positivo 2.67 2.43 3.97 474.610 .00
Tabla 5
Diferencias clima socio-emocional según la victimización
No víctima Víctima t gl p
Clima negativo 3.36 3.68 -4.11 482 .00
Clima positivo 2.66 2.47 3.10 419.352 .00
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DISCUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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Cierta respuesta fue dada cuando nos constituimos como grupo de trabajo, conformado por:
psicóloga social, pediatra, fonoaudióloga, nutricionista, psicopedagoga, constructor de viviendas,
terapistas ocupacionales, diseñadoras industriales, con diferentes saberes y experiencias, desarrollando
las actividades bajo la premisa de “la salud como proceso”, acompañando y escuchando a la comunidad,
articulando técnicas, movilizando recursos institucionales, comunitarios, públicos y privados, fomentando
el fortalecimiento, el control y el poder de las personas de la comunidad, ejemplos de esto han sido, la
gestión que les permitió obtener de Obras Sanitarias la colocación de más tanques de agua potable,
igualmente, continúan tramitando la instalación de una red de agua en el barrio. También, un taller,
emprendimiento textil con mujeres de la comunidad.
En el campo de las ciencias humanas y sociales el profesional, la actividad interdisciplinar es una
figura complicada, se ponen al descubierto diferentes saberes, entonces, tanto la figura del profesional,
como cada uno de nosotros, es uno entre tantos. Para ir paliando ciertos momentos hemos instalado
momentos de intercambio de ideas, para nosotros es una necesidad porque la situación está ahí, nos
atraviesa y tenemos que ponerle palabras para pensar como intervenir y hasta tolerar el impacto del
desvalimiento y desazón de esas realidades.
Desde dónde miramos, pensamos y accionamos, en el transcurso de la exposición trataremos de ir
contestando algunos interrogantes. Lo que teníamos claro era que esas situaciones, requería de la
intervención comunitaria, grupos inmersos en la pobreza, como decíamos anteriormente, éstos
requieren alternativas saludables para mejorar las condiciones de salubridad, transformar lo social,
superar la pobreza, la dependencia en las relaciones de poder. Son emergentes de que ya lo viven en
carne viva y también son emergentes de las redes que ya se vienen discutiendo. Esto provoca y
promueve el ingreso de nuevos interrogantes en cuanto a las concepciones y prácticas en salud y, en
especial, en cuanto a la salud comunitaria.
El conocimiento sobre lo preguntado es condición necesaria para el que consulta, el inquirir correcto
exige disponer de cierto conocimiento, saber lo que se interroga, a quién o a qué se le pregunta, cómo
debe formularse y el contexto del saber desde el que se realiza la pregunta. De la misma manera, hay
que pensar por el motivo por el cual se averigua, el cómo tiene sentido hacer la pregunta y el cómo vale
la pena responderla. Nuestra praxis acrecentó nuestro interés por lo comunitario, y fuimos descubriendo
cada uno de nosotros que era imposible operar desde un campo de saber y, menos aún, con una sola
disciplina.
En este escenario continuamos trabajando y surgieron varias teorías, consideramos relevante el
paradigma ecológico (Saforcada, E. y Castellá Sarriera 2008). La palabra “ecológico” (del griego oikos:
hábitat, casa), representa una metáfora que, significa el cuidado del entorno, la naturaleza, las personas,
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las comunidades, para conquistar o preservar una calidad de vida. Boff L., mencionado por Castellá-
Sarriera (2008). Y así fuimos trabajando y repensando, entonces, la naturaleza de las concepciones y
de las prácticas en el escenario comunitario, dice E. Saforcada: En el campo profesional, o sea el de la
ciencia aplicada, el paradigma puede cambiar en una misma persona, no es fácil, es muy difícil, pero sin
lugar a duda cambian y fundamentalmente no por la reflexión teórica conceptual, sino por la práctica del
terreno concreto con la realidad. La realidad es un motor profundamente poderoso para el cambio en el
modo de pensar de la gente. Adherimos a estas palabras. La experiencia de ir a una comunidad
semanalmente, a 14 km. de la ciudad de Mar del Plata, y ver una población de doscientas personas,
que siguen yendo al predio final de residuos a buscar su sustento diario, y dependen de un aguatero
para el agua potable, con calles anegadas que los aíslan de la ciudad y de los centros asistenciales,
evidentemente, en ese lugar detectamos que no hay una sola respuesta. Desde este punto iremos
dando cuenta de la implicancia que tienen estos escenarios y de la apoyatura científica que requiere el
abordaje comunitario.
El aporte científico tanto en su contenido, como en la estructura socio-profesional que la sostiene va
transitando este paradigma los aspectos de índole política y económica han dejado huellas diríamos casi
imborrables, como el subdesarrollo, la dependencia y el impacto psicosocial de regímenes dictatoriales
militares, que exigían una praxis consistente con los problemas específicos de nuestros países (Krause
1991; Maurer y Sawaia 1991; Montero 1984; Serrano-García, López y Rivera-Medina 1987; Wiesenfeld y
Sánchez 199l).
Por todo esto mencionado, se han ido desarrollando conceptos, casi imprescindibles, que
acompañan a nuestro quehacer. En la tarea comunitaria nos encontramos con circunstancias tan
adversas que vive gran parte de la población; según la postura ante como son respetados en sus
derechos, se gesta la manera de intervenir y favorecer la posibilidad de construir acciones desde esas
realidades para mejorar la calidad de vida de la comunidad. Consideramos que, gracias a la apertura
democrática y el apoyo estatal, se ha permitido la creación de programas académicos, el desarrollo de
organizaciones no gubernamentales, centros de investigación, y diferentes organismos provinciales
pensando en intervenciones comunitarias (Chinkes, La Palma y Nicemboim 2004).
En la “gramática de la igualdad” (Montero 2007) se considera como nudo de la complejidad de la
comunidad que la persona tiene que ser respetada, tener los mismos derechos, afirmarse en sus
convicciones, apoyarse en una ética con concepciones profundas que orienten a las personas en la
sociedad. Estar con la comunidad es propiciar el lugar a la palabra, la reflexión y descubrirse en sus
posibilidades, fomentar en ellos la “persona sana”.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Como dicen estos autores, poner el acento en la “psicología de la salud”, y actuar con respecto a él
e integrar los diferentes saberes. Para ello tenemos en cuenta la comunidad, aquí mencionamos
algunos conceptos, aportados por autores latinoamericanos.
La definición de “comunidad” desde la psicología comunitaria caracteriza a un grupo de individuos
en constante transformación y evolución que, en su interrelación, generan pertenencia, identidad social y
conciencia de sí como comunidad; lo cual los fortalece como unidad y potencialidad social. Este grupo
social y dinámico comparte problemas, intereses en un tiempo y espacio determinado, haciendo realidad
y vida cotidiana. Lo que caracteriza la comunidad es la cohesión, la solidaridad, el conocimiento, el trato
entre sus integrantes y las formas de organización específicas que éstos adoptan. Y el sentido de apego
a la comunidad llamado “sentido de comunidad” se construye históricamente (Montero 2003).
Otro aporte el de Pedrinho Guareschi (2008), quien enuncia dos ejes que pueden ayudarnos a
advertir las diferencias de sentido de la palabra “comunidad”. Uno remite a la dimensión de lo individual y
el otro, a la dimensión de lo social. Muchas veces se presentan como opuestos, pero en verdad se
complementan…. Están interconectados…. Lleva o debería llevar la superación de la dicotomía… solo
separados a fines didácticos.
En nuestra tarea uno observa en la comunidad esta definición siendo lo relacional y los sentimientos
lo preponderante, lo define Habermas J. (1999) la dimensión organizacional y burocrática, la presencia
de sentimientos y afectos, lo que responde a la necesidad de los seres humanos de amar y ser amados,
hay un predominio de relaciones primarias. Otro punto: la comunidad mantiene una estrecha relación
con la familia y lo femenino (Lichtblau, 1990); otra característica es que sus producciones y
reproducciones de sentido se dan a partir de un sustrato, lábil, poroso y fragmentario, permeado de
“saberes prácticos”, imposible de ser totalizado; éstos son denominados Mundo de la vida (J. Habermas
1999). Siguiendo a este autor, describe el mundo de la vida como un horizonte de sentido por fuera del
cual no es concebible —al menos hasta ahora— una sociedad humana y del cual emanan esquemas de
interpretación, legitimidad e identidades.
990
VI Congreso Marplatense de Psicología
Estas premisas nos ayudarán con algunas respuestas sobre la comunidad, sobre sus maneras de
relacionarse, el lazo social y sus maneras de integración y pensar nuestra tarea con el mismo
compromiso y del mismo modo que la salud individual de cada célula contribuye a la salud de todo el
organismo, cada uno de nosotros contribuye al estado de la condición humana, E. Saforcada (2012).
Así, respetando esta premisa, el grupo de profesionales a través de la ong. propicia espacios de
participación de niñas, niños, adolescentes, jóvenes y sus familias; en los siguientes barrios, Antártida
Argentina, Sta.Rosa del Mar , Monte Terrabusi, y Nuevo Golf. favoreciendo la inclusión y la integración
en diferentes actividades, huerta escolar, taller de costura para capacitación y emprendimiento, apoyo
escolar, juegoteca, apoyo para el desarrollo del lenguaje, alfabetización sanitaria y promoción de hábitos
alimentarios saludables, asesoramiento en construcciones y mejora de viviendas, talleres de electricidad
y de reciclado. Se aprovecha el espacio grupal, se trabaja en el cambio de actitud y en las mejoras
hacia el autocuidado y la relación en los grupos. La propuesta de la asociación constituye una
herramienta de cambio, que se fundamenta en la historia previa de las personas y en los hechos a
construir un futuro deseable a través de las actividades, que la salud sea pensada “como proceso”,
actuar con respecto a esta premisa, vivir permitiéndose estar en un continuo aprendizaje, en una
constante formación de subjetividad e identidad humana, recuperando derechos y espacios
comunitarios. Cuando hablamos de intervención comunitaria, nos centramos en la prevención de
problemas sociales y la promoción del bienestar de las personas, de organizaciones en la comunidad.
Lo hacemos “con la comunidad”, nuestros objetivos son promover fortalezas, prevención,
capacitación y cambio comunitario, considerando a las personas como partícipes en la búsqueda de
soluciones, dando apoyo hoy, con la aspiración que en el futuro las proyecciones de las intervenciones
realizadas sigan existiendo, que el cambio sea sustentable aún sin la presencia de instituciones ajenas a
la comunidad. Lo hacemos en una triangulación que se ha logrado a través del tiempo por el respeto
entre los diferentes actores, son la Comunidad, el Estado y la Asociación. Hablar de respeto no es una
palabra menor, es una actitud que nace con el reconocimiento del valor de una persona, como propio o
también relacionado con una destreza o conducta. Kant es uno de los filósofos que mayor influencia ha
ejercido sobre el concepto de respeto en el mundo de la academia. En su filosofía moral este pensador
sostiene que los seres humanos deben ser respetados porque son un fin en sí mismos, el respeto es
vital para la vida en sociedad, para nosotros mismos y para los demás. Estamos en una comunidad,
factores y procesos determinan directa o indirectamente la pobreza y la exclusión social, en una
sociedad latinoamericana tan desigual e injusta queda opacada como dice Montero M. la “gramática de
la igualdad”. La intervención entonces tiene por objetivo la transformación de la realidad, un cambio
social, es un entramado de lo Ético y lo Político. En cuanto al aspecto político, dice Rappaport (1997)
991
VI Congreso Marplatense de Psicología
que implementar un programa requiere acción política, particularmente si ese programa desafía las
relaciones de poder existentes en la comunidad, si se está interesado en el cambio social debe
“abiertamente entrar en el mercado político a fin de someter a prueba sus ideas” pag.144, en Montero
M., (2003). . No hay una única receta intervencionista; en cambio, las condiciones que no pueden estar
ausentes son, los valores morales, sentimientos, respeto, libertad, empatía, por el otro. Tenemos que
estar dispuestos a ser sorprendidos, a reconocer que el saber de la comunidad es lo que va a permitir
ser sus verdaderos gestores del cambio social, fomentar la participación social, debemos contribuir a
fortalecer los mecanismos institucionales que permitan la participación de los ciudadanos, reconociendo
la índole pública de los problemas y de las soluciones de la política social (De Leonardis, 2001) y nuestro
rol es y será “acompañar” con nuestros aportes, para una sociedad más justa, igualitaria y digna.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El presente trabajo pretende dar cuenta de la tarea realizada a partir del año 2011 en el proyecto
Compartiendo Realidades.
Los diagnósticos producidos en las últimas décadas desde diversos campos de saberes acerca de
la hegemonía neoliberal y las inmensas transformaciones económicas, políticas y sociales que trae
aparejadas, son las bases de este proyecto. La reorganización del sistema capitalista que surge en
este período produjo importantes transformaciones que en lo social se presentifican en el crecimiento
de las desigualdades sociales, incremento de la vulnerabilidad social, y resquebrajamiento de los lazos
sociales. Situación que R, Castel (1977) denominó nueva cuestión social.
Desde una perspectiva crítica pensadores como F. Guattari (2001), C. Castoriadis (1997), M.
Lazzarato (2008), analizan cómo la producción de subjetividad en el neoliberalismo acota a los actores
sociales a individuos produciendo una ruptura en los procesos identificatorios colectivos, generando a
la vez complejas fragilidades sociales y subjetivas.
Las problemáticas de la vulnerabilización social, que afectan a numerosas personas y
colectivos son el resultado de un complejo entramado de situaciones histórico-sociales y trayectorias
singulares. Proceso que no se circunscribe a condiciones de pobreza y falta de trabajo sino que está
asociado con la pérdida o fragilización de los vínculos de pertenencia y referencia, como de las
capacidades y recursos psíquicos y sociales.
El deterioro provocado implicó que muchos ciudadanos no pudieran satisfacer sus necesidades
más básicas ingresando en lo que R. Castel (1992) teorizó como “zona de vulnerabilidad social”. Esta
noción, referida a situaciones intermedias entre la inclusión y la exclusión está asociada no sólo a la
potencial exclusión económica, sino también a la pérdida o desafiliación de los lazos laborales,
institucionales y afectivos que unen a los sujetos en el entramado social. Las múltiples carencias a las
que estos ciudadanos quedan expuestos configuran una “situación social de riesgo”, y una
nueva desigualdad: la desigualdad ante la precariedad.
Las dificultades o imposibilidades que atraviesan estos colectivos en tanto correlatos de la
aplicación de dichas políticas, permite significar las condiciones de precariedad y fragilidad como
“procesos de vulnerabilización” (Fernández, A M., López, M., 2005).
Consideramos que los procesos vulnerabilizantes no se circunscriben a condiciones de pobreza y
falta de trabajo; la pérdida o fragilización de los vínculos familiares y de referencia, de las
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VI Congreso Marplatense de Psicología
capacidades y recursos psíquicos y sociales son las afectaciones que más perduran en el tiempo y las
que resultan más invisibilizadas1.
Los procesos de vulnerabilización instalan complejas afectaciones en la dimensión subjetiva,
difíciles de desarticular, quizá como interiorización en los afectados de significaciones desvalorizantes
provenientes de cierto discurso social. En esta dimensión, los sentimientos de inseguridad, desestima,
empobrecimiento de la imaginación, desesperanza, dificultad para imaginar un futuro, son indicadores
de “lo vulnerado”; quiebres que afectan los derechos humanos y a la salud en sus sentidos más
amplios.
En tanto las manifestaciones pueden presentarse de múltiples formas, para poder trabajar
operativamente con esta noción debemos pensar entonces en “vulnerabilidades”, en plural.
En los procesos que describimos gran parte de la población de nuestro país se vio implicada,
paulatinamente y ante la implementación de diversas políticas públicas algunos de estos ciudadanos
han ido recomponiendo su situación; en otros las afectaciones persisten de modo transitorio o con
mayor permanencia. Sabemos que cuando tienden a instalarse en el tiempo pueden generar estados
alienantes, de desafiliación o exclusión.
El presente Proyecto propone el abordaje de algunas de estas problemáticas en dos
agrupamientos de nuestra comunidad; las personas que residen en estas instituciones se encuentran
atravesadas por diversas afectaciones de vulnerabilización psicosocial.
En el trabajo con las/os adolescentes es de suma importancia las personas que cumplen, aunque
sea temporariamente algunas de las funciones parentales: brindar cuidados, protección, afectos, la
mirada que reciben sobre ellos. El modo y particularidades en que estas funciones son ejercidas
pueden constituir un aporte fundamental en la elaboración y transitar de sus vivencias o
constituir un obstáculo o fuente de sufrimientos.
Las personas que viven o han estado en situación de calle forman parte de uno de los colectivos
en mayor riesgo. Las experiencias vividas, expuestos a traumatismos recurrentes son destituyentes de
subjetividad, de las tramas sociales y vinculares. Los lazos familiares se encuentran gravemente
deteriorados cuando no perdidos, las personas tienden gradualmente a aislarse de la vida comunitaria
por las experiencias de rechazo o repudio, reforzando un lugar de exclusión; encerrados en un circuito
difícil de quebrar. Ante el desamparo, la falta de sostén, de apuntalamiento, de “red” de lo social, se
produce una creciente pérdida del sentido de sujetos sociales. Como señala Ana María Fernández:
“Los sectores vulnerabilizados han desarrollado estrategias de supervivencia que se sostienen en
la lógica del instante: la subsistencia obliga a atender lo que salva en el momento. Se producen así
inserciones efímeras y pasividad colectiva ante la ausencia de perspectivas económicas, sociales y
políticas y se despliegan una serie de reacciones que van desde la reserva o la franca indiferencia
hasta la tolerancia colectiva hacia la inacción y la resignación frente a la injusticia y al padecimiento de
otros.”
Han perdido su visibilidad en la vida pública en tanto nada se espera de ellos, han entrado en el
universo de la indiferencia (Duschatzky; 2002).
1
Ana María Fernández define lo invisible como aquello que está inscripto en la superficie social subjetiva, sin que sea
posible percibir toda su significación
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llevada a cabo en un mismo encuentro, es decir que se iniciaba y se terminaba la tarea en la misma
jornada.
Dicho modalidad de trabajo se continúo una vez que el proyecto se radico como Proyecto de
extensión en la Facultad de Psicología de la UNMdP, durante el 2013. Tratando distintas técnicas
como por ejemplo dibujo, pintura, manualidades, cocina y distintos juegos. En el medio de este
proceso desde el grupo de trabajo vimos la necesidad de generar una continuidad entre encuentro y
encuentro, posibilitando de este modo en los talleristas la posibilidad de proyectarse y salir de la
estructura puramente del presente.
De este modo fue como iniciamos el armado de una obra de títeres. Este proceso inició con la
confección artesanal de los títeres, luego una vez que cada participante tenía su títere debía armarle
una historia previa y ciertas características personales. Fue así como finalmente a partir de una frase
disparadora, se llevó adelante las distintas obras de teatro.
Al ver los resultados obtenidos en dicha actividad, decidimos continuar el proyecto bajo esta
modalidad de trabajo. En el transcurso de momentos de intercambio entre todos los participantes de
los talleres, surgió la idea de llevar adelante una obra de teatro con el fin de poder presentarla ante la
comunidad. Desde el grupo de trabajo les acercamos una obra de teatro infantil.
La totalidad del armado de la obra nos llevó cuatro meses, en los cuales repartimos los personajes,
los diálogos, ensayamos las distintas escenas y confeccionamos entre todos los vestuarios y
escenografías.En este proceso se pusieron a disposición los medios de trabajo diversos
implementados con anterioridad, pero esta vez al servicio de un objetivo a mediano plazo, poniendo en
juego la categoría tiempo y la continuidad y sostenimiento de una misma tarea.
Finalmente a fines de noviembre presentamos la obra en el Jardín de Infantes que se encuentra
dentro del predio del Hospital Interzonal General de Agudos Dr. Alende. El mismo queda a tan sólo
cinco cuadras del Hogar. La mayor parte de las personas que viven en El Campito, han habitado ese
lugar desde la patología, por lo que se encontraban en esa oportunidad con la invitación a ocupar un
otro lugar respecto de las posiciones habituales que habitan.
Previo a la presentación de la obra surgieron distintos miedos, como “si me saldrá”, “yo no soy
actor”, “no me acuerdo que tenía que hacer”. Sin embargo una vez que estábamos todos vestidos e
inició la música no hubo olvidos ni ningún miedo que impida que se realice la obra. Todos sabíamos el
momento exacto en el que intervenir, cuándo entrar y cuándo salir. La obra salió a la perfección, a
diferencia de los caóticos ensayos. Una vez que terminó la obra, la alegría se veía reflejada en las
caras tanto de los que habíamos hecho la obra como de los chicos que la habían visto. Los chicos
corrían a abrazar y saludar a los personajes de esa obra que los había ido a visitar a su jardín.
Cuando volvimos al Hogar la alegría continuaba, y el agradecimiento era infinito. Por un momento
habían logrado sacarles una sonrisa a esos chicos y ellos habían pasado a ser protagonistas de ese
dar.
En el último encuentro antes del receso estival, nos despedimos con la promesa de continuar con
este trabajo que habíamos iniciado entre todos. Y como dijo uno de los integrantes del Campito y
participante de los talleres “Hasta el Colón no paramos”.
Durante el 2014 decidimos ampliar la población destinataria del proyecto. Es así como
comenzamos a trabajar en APAND (Asociación Empleados de Casino Pro Ayuda a la Niñez
Desamparada) de la ciudad de Mar del Plata, éste es un hogar en cual actualmente se albergan 9
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varones y 7 mujeres entre 12 a 18 años. Los jóvenes provienen por derivación de los Tribunales de
Menores por “causas sociales” o por egreso del Hogar Scarpati (dependiente de la Municipalidad de
Gral Pueyrredón), todos ellos de familias con grandes dificultades económicas o que por diversas
vulnerabilidades no pueden hacerse cargo de sus hijos. Si bien en principio la estadía de los niños y
adolescentes es transitoria, en muchos casos la permanencia lleva varios años.
El trabajo incipiente en esta institución lo planificamos en distintos ejes a saber:
La planificación de talleres con los y las chicas de APAND, según temáticas que ellos propongan,
sosteniendo que la tarea permita un trabajo de apuntalamiento, fortalecimiento de lazos y posibilidad
de proyectarse en un futuro mediato, donde ya la institución no los albergará.
La planificación de encuentro con las cuidadoras, llamadas Tías, a modo de grupo de reflexión,
para pensar su trabajo, su implicación, sus dificultades y construir nuevas formas de encontrarse en
esta tarea tan particular.
Ambos ejes parten de la base de las reuniones periódicas con el director de la institución y los
miembros del equipo técnico.
Este es el nuevo desafío que hemos emprendido y comenzamos a recorrer. Despacio, con
cuidado, advertidos de nuestras implicancias, nuestro atravesamiento histórico-político y cultural y
nuestras propias historias. Porque compartimos con Bonano que la destitución de las subjetividades,
para lograr procesos de resubjetivación, no son sólo con aquellas personas con las que trabajamos (en
los diversos dispositivos) si no también del/os coordinador/es.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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ANTECEDENTES
En el municipio existen antecedentes legislativos de trabajo en el tema que intentan resolver la
situación de las personas sin hogar, tales como:
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VI Congreso Marplatense de Psicología
diagnostica, a partir del contacto ONGs y grupos de voluntarios que abordan la problemática. Desde
esa intervención se brinda asistencia a personas que reciben alguna prestación por parte de dichas
organizaciones.
En el mes de Julio del mismo año a consecuencia de la epidemia de Gripe A, se realiza la apertura
de un lugar para que parte de esta población que presentaba características sanitarias de riesgo
(asmáticos, VIH+, etc.) contara con un lugar de reposo de 24 horas, dado que los servicios existentes
solo brindaban atención durante la noche.
Posteriormente se produce una ola de frío polar que hace que se reciban más de 60 personas. Con
el transcurrir de los días se va detectando la necesidad de algunas de las personas acogidas, de
contar con un abordaje integral de su problemática, en tanto otras prefieren continuar recibiendo una
asistencia puntual.
Se crea formalmente el Programa, mediante Resolución Nº 1734 de la Secretaría de Desarrollo
Social
OBJETIVOS
General
Brindar asistencia a las personas adultas sin hogar, de ambos sexos, en el territorio del Partido
de General Pueyrredón.
Específicos
Brindar asistencia social, médica y jurídica a las personas incluidas en el presente programa
Favorecer el trabajo con redes sociales que desarrollen acciones vinculadas con la
problemática
METODOLOGÍA DE TRABAJO
El abordaje en cuestión se realiza de forma interdisciplinaria.
Se efectúan periódicamente reuniones de equipo. Este espacio esta destinado a la reflexión,
análisis y evaluación de los siguientes aspectos:
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CARACTERÍSTICAS DE FUNCIONAMIENTO
Entre las acciones que se desarrollan en la actualidad en forma sistemática, las que se suman a la
alimentación, higiene, controles médicos periódicos con diversas especialidades médicas, gestiones
judiciales en los casos que se requieran, apoyo psicológico, gestiones sociales, documentación,
vacunación, se pueden citar:
Talleres de Arte:
Desde mediados de 2012 con un grupo de estudiantes de las Facultades de Psicología y de
Ciencias de la Salud y Servicio Social realizan talleres de arte con los acogidos, desde el nuevo
paradigma de desmanicomialización de las prácticas salud mental.
Taller de Huerta
Entre las actividades del Hogar existe una Huerta Orgánica, y compos actualmente la
capacitación de los acogidos que tienen a su cargo el trabajo en la misma es realizado por un
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VI Congreso Marplatense de Psicología
voluntario (se prevé para el año en curso la presentación de este proyecto en el Programa Promover
Igualdad de Oportunidades para el Empleo)
Prácticas de Yoga
Semanalmente se realizan prácticas de Yoga en la sede del Hogar El Campito. Las mismas son
coordinadas en forma voluntaria y ad honorem por el Instructor Eduardo Hooft, de las mismas
participa un gran número de acogidos, los que valoran positivamente ese espacio.
Asambleas
Desde el mes de febrero del corriente año se están realizando asambleas entre todos los
acogidos y trabajadores del Hogar. La finalidad es generar espacios de democratización de las
resoluciones comunes y asunción de responsabilidades por parte de los acogidos.
Natación en el EMDER
A partir del corriente mes de marzo los acogidos concurren en forma semanal a clases de natación
en el EMDER. Divididos en dos grupos especiales (Martes para aquellos que requieren de un abordaje
más personalizado, y sábados para el resto de los participantes).
Salidas recreativas
Hemos realizado algunas salidas grupales a espectáculos (circo, teatro. museos, etc.) con los
acogidos. Estas propuestas son valoradas positivamente por los acogidos y tienen un efecto saludable
en ellos.
Espacio de psicoterapia
Desde el año 2012 contamos con el apoyo del Licenciado en Psicología Juan Pablo Peralta que
concurre una vez a la semana en forma voluntaria, brindando a los acogidos un espacio de
psicoterapia. Se ha solicitado su designación con un modulo de 18 h./semanales, sin respuesta hasta
la fecha.
Asesoramiento nutricional
Desde fines del año pasado contamos con el asesoramiento nutricional ad honorem de la Lic.
Verónica Aispun, quien elaboró un menú quincenal balanceado y realiza los controles de peso de
los acogidos. El menú es sometido a la aprobación de los acogidos La profesional nos visita y
realiza en forma quincenal
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Así mismo dos veces a la semana funciona en un espacio cedido por el Programa un grupo de
la comunidad de Alcohólicos Anónimos. En coordinación con dicho grupo se han realizado
reuniones abiertas a la comunidad en las que se aborda la problemática de los enfermos
y sus familiares, con el acompañamiento de especialistas de salud.
LOGROS
Desde la creación del Programa a la fecha se han brindado una ó más prestaciones a
820 personas.
De las personas que han sido acogidas en el Hogar 81 han podido reinsertarse
socialmente.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El trabajo presentado a continuación forma parte de una de las coordenadas del proyecto de
investigación “Instituciones y Procesos de Subjetivación contemporáneos desde la Perspectiva de la
Psicología Institucional. Los desafíos del poshumanismo”, aprobado para la programación 2014-2016
por parte de la Facultad de Psicología de la UBA, a través del PROINPsi. Dicho proyecto incluye como
parte de sus vectores de análisis la exploración crítica de una constelación de nociones y narrativas
que han legitimado las condiciones de posibilidad histórica de la Modernidad. Una multiplicidad de
abordajes desde perspectivas diversas y polifacéticas coincide en señalar la emergencia de una serie
de transformaciones y mutaciones histórico-sociales que resultan inmanentes a una progresiva
difuminación de los paradigmas modernos. Para la Psicología Institucional resulta insoslayable la
exploración de dichas condiciones, teniendo en cuenta que sus objetos de abordaje no pueden ser
pensados sino como producciones socio-histórico-culturales, que cumplen una función decisiva en el
campo de las producciones de subjetividad. Pero sobre todo, que los conceptos de la Psicología
Institucional son productos típicamente modernos, y que su puesta en entredicho genera
problemáticas impensadas para su campo de análisis y de intervención.
En este escrito nos ocuparemos de dos nociones clave para esta especialidad de la Psicología,
como lo son el concepto de institución y el de población. El primero pierde sentido sin el segundo,
teniendo presente además que la noción de población repercute igualmente sobre las prácticas de la
Psicología en el campo social y comunitario. Cabe señalar igualmente la relación que con dichas
nociones mantiene el concepto de identidad, pues una de las funciones sociales de la institución
consiste en el apuntalamiento identitario, así como una población se define por una serie de atributos
que le confieren una especificidad propia, sustentada en rasgos que conforman su identidad.
La Psicología Institucional puede ser considerada como un producto argentino, pues adquiere una
autonomía en dicho territorio a fines de la década del sesenta. Sus precursores locales han abrevado
en los desarrollos psicoanalíticos europeos, superando sus paradigmas grupalistas para señalar la
determinación de variables sociales cuya materialización en las instituciones resultaba ineludible para
comprender la multiplicidad de procesos de subjetivación individuales, grupales o comunales.
Uno de los desafíos contemporáneos para la Psicología Institucional consiste a nuestro entender
en la revisión y eventual superación de las conceptualizaciones freudianas en sus mal llamados
escritos sociológicos. Los mismos continúan determinando las prácticas psicológicas en los diversos
espacios colectivos de intervención, generando así un falso problema que consistiría en lo siguiente: si
las formaciones colectivas contemporáneas resultan inmunes a intervenciones o análisis fundados en
los principios de los “escritos sociológicos”, ello se debe a una progresiva fragmentación de las
sociedades cuyo corolario es la recaída en un individualismo narcisista y gozoso, que no persigue más
1006
VI Congreso Marplatense de Psicología
que la propia satisfacción autoerótica, ignorando las necesidades y deseos de los otros1. Las
sociedades fragmentadas resultan solidarias con la ruptura del lazo social, y con ello, del fin de lo
social como sustrato común. En este punto coincidimos con la crítica de Dipaola respecto de la tesis
de la fragmentación social. La misma haría una lectura correcta del resquebrajamiento de las
estructuras orgánicas, totalizantes que vertebraban el campo social, pero lo dicho “no determina la
disolución del lazo social o un modelo fragmentario del mismo, pues si así fuera, retornaríamos a tesis
tendientes a reproducir un atomismo que colige en individuos que sólo esporádicamente y según
intereses meramente individuales se congregarían”. (2013:74) La crítica de Dipaola coincide con la de
Castoriadis, pues a pesar de asumir el agotamiento del proyecto de la Modernidad, ello no implica que
el mundo “se caiga a pedazos” (1993:14) El problema no consiste pues en la imposibilidad de acceso a
un modelo fragmentario, no social o a-social, sino en la imposibilidad de acceso a una multiplicidad de
nuevas formas de sociabilidad a través de las coordenadas sociológicas clásicas de la Modernidad.
De aquí se desprende el agotamiento y ocaso de las tesis freudianas para la comprensión de una
serie de vínculos sociales anorgánicos, cuya consistencia y modalidades de composición están ligadas
a una lógica de la contingencia, la incertidumbre y la multiplicidad.
En otros términos, el problema no reside en las formas de socialidad contemporáneas,
poscomunales, sino en los discursos modernos que no acceden a ellas más que a través de la
negatividad, a partir de lo que dichas colectividades ya no son, antes que en función de lo que estas
formas de socialidad producen como novedad o anomalía.
Más allá de que planteará desde el inicio la inseparabilidad de la psicología individual y la psicología
social, el interés de Freud radica – sobre todo en la Massenpsychologie und Ich Analyse – en
establecer las condiciones de posibilidad de conformación del Yo, composición subjetiva inescindible
del campo social. Sin perder de vista este vector de análisis, los escritos “sociológicos” de Freud
conforman un discurso que produce grosso modo dos modalidades de sociabilidad, analizadas a la luz
del oxímoron que Freud definió como “psicología colectiva”.
La primera es un proceso de subjetivación comunal definida como masa espontánea o efímera. En
la misma predominan los estratos irracionales y agresivos por sobre los reflexivos y autocríticos. Freud
sigue los lineamientos que Le Bon desarrolla en su Psicología de las multitudes, para quien las masas
constituyen poco menos que una amenaza para la civilización. Cabe recordar que Le Bon está
considerado, junto con Spencer y Comte, como uno de los fundadores de la sociología moderna. En
este sentido, una mirada institucional del discurso de la sociología no debe sortear que su fundación y
legitimación científica es producto de una serie de movilizaciones colectivas en las ciudades
superpobladas luego de la revolución industrial. El poder instituido necesitaba comprender la dinámica
interna de una incipiente clase obrera, indispensable y a la vez peligrosa para la supervivencia un
modo de producción económica todavía sin inmunizadores.
1
Cabe recordar que esta visión desencantada, melancolizada por los buenos viejos tiempos perdidos, no es
patrimonio exclusivo de la mirada institucional psicoanalítica. Más bien, sería más acertado decir que esta mirada
se encuentra infectada por un espíritu de época que detiene las potencias analíticas y las mantiene coaguladas
en la nostalgia por las bondades de la Modernidad en retirada. Su exponente más citado es Zygmunt Bauman, el
más nostálgico de las sociedades “sólidas”.
1007
VI Congreso Marplatense de Psicología
Pero la subjetividad individual es para Freud el mayor peligro que enfrenta la cultura, a punto tal
que “(…) no hay vida humana en común sino predomina el poder de la comunidad por sobre el del
individuo”. (1930, 3036) El problema político que plantea lo cultural es planteado descarnadamente en
el Porvenir de una Ilusión: “(…) cada individuo es virtualmente un enemigo de la civilización, a pesar
de tener que reconocer su general interés humano”. (1927, 2962) Freud intenta resolver su propio
laberinto – entre el sujeto individuado que persigue su propia satisfacción, y las masas incultas y
explotadas – fugando hacia arriba.
Compone así su segunda producción de subjetividad colectiva que definirá como masa organizada,
tomando como referencia el texto de Mac Dougall, The group mind . En ellas las intensidades
libidinales encuentran una configuración que admite ciertos márgenes de diferenciación de roles o
funciones, a diferencia de las masas efímeras donde la homogeneización masiva de las subjetividades
parecía ser excluyente para la inclusión. La importancia de Mac Dougall consiste para Freud en la
reincorporación en la masa de características de la subjetividad individual, básicamente la
intelectualidad. Esto posibilita que los miembros del agrupamiento conozcan la naturaleza, la función,
la actividad y las aspiraciones de la masa. Asimismo, la masa se sustenta en tradiciones, usos e
instituciones específicas que regulan los vínculos interpersonales. De este modo, las masas
organizadas pueden ser pensadas como un producto de la cultura. Protegen al individuo del
desamparo y el malestar por la insatisfacción pulsional, de las fuerzas de la naturaleza y de los
impulsos de sus semejantes. Esta función cultural de la masa es la que posibilita una actitud afectiva
más o menos estable y permanente respecto de la misma. Las masas organizadas acceden a niveles
mínimos de estabilidad, continuidad y previsibilidad. Estas modalidades de agrupamiento constituyen
los procesos de subjetivación privilegiados de abordaje de la Psicología Institucional – usualmente en
los territorios de las organizaciones – sin perjuicio de la observación frecuente de fenómenos y
dinámicas de masa espontánea en dichos agrupamientos a primera vista más “organizados”.
Sin embargo, las categorizaciones freudianas de las formaciones sociales colectivas revelan su
inconsistencia y sus límites cuando son sometidas a una genealogía crítica. De la misma surge una
coordenada de análisis sociopolítico, por lo menos desatendida en los “escritos sociológicos”. Pues la
tesis freudiana de las masas es el producto de una operación epistémica que sostiene la existencia
previa de un conjunto de fenómenos sociales, susceptibles de ser explorados o analizados por el
psicoanálisis. Planteamos aquí la operación inversa, siguiendo los desarrollos de Foucault: los
discursos no acceden a sus objetos como realidades “naturales” o dadas de antemano. Por el
contrario, los discursos producen sus objetos, en función de una multiplicidad de necesidades y
urgencias sociales y políticas que requieren de una legitimación científica de sus dispositivos. Freud
desestima que la emergencia de la sociología es parte de un conjunto de procedimientos, tecnologías,
prácticas y discursos que responden al diseño de nuevas formas de gubernamentalidad. En este
sentido, la sociología no se ocupará de estudiar las poblaciones y las nuevas clases sociales
precapitalistas, sino que producirá, junto con el discurso jurídico y el modelo médico-psiquiátrico, una
nueva noción de las colectividades humanas bajo el estatuto teórico denominado como población,
entre los siglos XVII y XVIII.
La población constituye para la genealogía foucaultiana una noción clave para comprender las
formas modernas del higienismo. Hasta bien entrado el siglo XVII, los colectivos y las comunidades no
requerían más que una consideración basada en la obediencia al soberano. Esa sola variable dividía a
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Todas estas consideraciones y calificaciones son extractos de los textos freudianos, especialmente de El
Porvenir de una Ilusión.
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Todo lo señalado no supone de ningún modo que las instituciones contemporáneas están vacías.
Por el contrario, el vaciamiento de los sentidos de pertenencia y permanencia institucionales nos
convoca, desde la Psicología Institucional, a dar cuenta de la insuficiencia de los modelos de abordaje
heredados. Pues las escenas institucionales contemporáneas nos revelan que sus territorios están
llenos de cuerpos subjetivados como masas errantes, en un estado de sufrimiento y fatalismo
coagulado en un presente perpetuo. Uno de los desafíos para la Psicología Institucional – insistimos, y
para cualquier especialidad vinculada con subjetividades de grupo o comunales – no puede dejar por
fuera la instauración de otras formas posibles de habitar las instituciones. Sin descartar por cierto la
opción de la fuga o la deserción, cuando la permanencia sea no más que perdurar. En cualquier caso,
se trataría de apostar a un posicionamiento ético vinculado a una perspectiva estética, abierta a
encontrarse con procesos de subjetivación que intentan habitar, desertar o circular por las instituciones
generando formas de vida vivibles. Estas “comunidades por venir” no constituyen una negatividad que
debe ser normalizada, sino una provocación a las herramientas, las metodologías y las
conceptualizaciones instituidas de una práctica cuyo devenir, si continúa ignorando y minimizando
despectivamente las interpelaciones del afuera, no podrá ser otro que la fosilización.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
3
Un desarrollo más profundo de estas teorizaciones se encuentran en la producción de Ignacio Lewcowicz,
particularmente en Pensar sin Estado. La subjetividad en la era de la fluidez. (2003) Paidós. Colección Espacios
de Saber.
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Freud, S. (1981) Obras completas. Ballesteros. Psicología de las masas y análisis del Yo
El malestar en la cultura.
El porvenir de una ilusión.
Lewcowicz, I. (2003) Pensar sin Estado. Paidós.
Lourau, R. (1970) El Análisis Institucional. Amorrortu.
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RESUMEN EN ESPAÑOL
El presente trabajo fue realizado con el objetivo de investigar como se constituyen las famílias
indígenas y como se desarrolla en este contexto la mirada y actuación del psicólogo. La família puede
ser comprendida como siendo la primer intancia receptora de los sujetos, responsable por la
transmición de las reglas sociales. Para este trabajo de investigación, se elegió estudiar el caso de los
índios Krahô, que se encuentran situados en las províncias del Maranhão, Piauí e Tocantins, en Brasil.
A partir de los estudios, se verificó lo cuanto los pueblos indígenas latinoamericanos sufren estigmas,
prejuicios y exclusión social, encuanto luchan por la preservación de sus tierras y cultura. Es posible
observar que muchos de los problemas enfrentados por esas comunidades hoy, son de órden
psicosocial, comprometendo la qualidad de vida y la salud mental de esos sujetos. En este sentido, se
percibe que la Psicología puede contribuir para destruir los estigmas acometidos contra esos pueblos,
como también para que esas personas puedan tener sus derechos respectados, así como el
reconocimiento de su história y identidad, a través de la construcción de espacios de escucha, de
diálogos recíprocos, de intervenciones multiprofesionales que consideren la diversidad y
especificidades de esos pueblos.
INTRODUÇÃO
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como: famílias que passam dias dentro de hospitais, famílias que possuem um membro como portador
de algum tipo de doença, etc. Porém nos deixamos atrair pelo assunto mais desafiador.
Tinhamos como objetivo familiarizar um pouco desse público, até então, estranho à nossa
formação. Conhecer a trajetória por eles percorrida, as dificuldades, os costumes, os relacionamentos,
as famílias, suas reivindicações, angústias e, por fim, aonde nós psicólogos entramos em todo esse
contexto.
DESENVOLVIMENTO
Para isso utilizamos o texto: “O sistema de parentesco dos índios Krahó” de Melatti (1973) que
faz referência a tribo específica dos índios Krahó, relatando como funciona a família e suas relações
dentro desse sistema cultural. Além disso o texto cita curiosidades sobre o mecanismo e
funcionamento do dia a dia dessa população, retratando, de forma geral, a vida de comunidades
indígenas. E para abarcar a nossa curiosidade diante do papel do psicólogo frente a essa realidade
fizemos uso do artigo: “Psicologia e povos indígenas: reflexões, desafios e possiblidades”.
Iniciamos o nosso grupo de discussão contextualizando o assunto a ser apresentado, utilizando
informações do site da Fundação Nacional dos Índios - FUNAI.
Trouxemos o questionamento do que é ser índio, uma vez que o “povo” ao qual denominamos
“índígena” não se reconhecem como proprietários de tal classificação, eles se auto-denominam Tupy,
que significa “TU” (som) e “PY” (pé), ou seja, o som-de-pé, de modo que o índio é uma qualidade de
espírito posta em uma harmonia de forma. Porém, utilizaremos aqui a designação índio para nos
referirmos ao nosso objeto de estudo.
O antropólogo brasileiro Darcy Ribeiro baseou-se na definição elaborada pelos participantes do
II Congresso Indigenista Interamericano, no Peru, em 1949, para assim definir o indígena como: todo
indivíduo reconhecido como membro por uma comunidade pré-colombiana que se identifica
etnicamente diversa da nacional e é considerada indígena pela população brasileira com quem está
em contato. Mesmo sendo, este, o critério mais utilizado, ele tem sido colocado em discussão, já que
muitas vezes são interesses de ordem política que levam a adoção de tal definição.
Atualmente no Brasil, vivem mais de 800 mil índios, menos de 1% da população. Não
encontram-se nessa mensuração alguns povos indígenas que desde a época do descobrimento
mantiveram-se afastados mantendo suas tradições culturais, sobrevivendo da caça, pesca, coleta e
agricultura, isolados do convívio com a sociedade nacional e com outros grupos indígenas. Eles
procuram defender bravamente seus territórios e quando vistos em ameaça pelo “desconhecido”
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recuam para regiões mais distantes, na esperança de esconderem-se dos perigos que os cercam.
Pouca ou nenhuma informação se tem sobre eles, sabe-se que ainda hoje, muitos falam unicamente
sua própria língua, desconhecendo o português.
As populações indígenas são vistas pela sociedade brasileira ora de forma preconceituosa, ora
de forma idealizada. O preconceito parte, muito mais, daqueles que convivem diretamente com os
índios: as populações rurais, as quais necessitam disputar em sua região com membros de
sociedades indígenas e por isso utilizam estereótipos que denigrem a imagem do índio para fortalecer
a sua. Já a população urbana tende a ter uma visão mais favorável.
E finalizando a contextualização colocamos em pauta a recente conscientização por parte da
sociedade brasileira de que os índios são seus contemporâneos. Eles participam da elaboração das
leis, elegem candidatos e compartilham problemas semelhantes aos nossos, afinal, quem são eles?
Foi esse o convite que fizemos a sala e, então, prosseguimos com a nossa discussão.
O fato é que a população indígena hoje carrega em sua identidade os esteriótipos daqueles
que atribuíram essa identidade a eles. A identidade indígena está em um processo de construção, e,
ao contrário das concepções históricas presentes em nosso imaginário – bom selvagem, ameaça
selvagem, paladinos da natureza, donos da Amazônia – a prática realizada pelo grupo mostrou que os
sujeitos indígenas lutam pelos seus direitos à terra, à afirmação de sua cultura, à educação, à saúde,
etc.
Outra questão importante para se pensar é que os índios não estão isolados e sem contato
com a cultura ocidental. Os índios aldeados são a maioria mas há uma parte considerável que vive nos
meios urbanos “alguns vêm até a cidade para vender seu artesanato, para procurar algum tipo de
assitência ou outro motivo que os faça permanecer durante um período na cidade, algumas vezes
configurando uma sazonalidade.” (CALEFFI, 2003).
Os índios desaldeados não são reconhecidos pela FUNAI. Ela reconhece apenas os indígenas
que habitam terras demarcadas por ela – o que mostra que a identidade indígena está muito
relacionada à questão das terras e a luta por elas é uma maneira de afirmar essa identidade. As
aldeias indígenas podem ser consideradas como confinamentos históricos que na época colonial
tinham o objetivo de civilizar esse povo, e, a negação da identidade aos que decidem na atualidade
sair deste espaço imposto demonstra que as práticas e políticas coloniais ainda são reproduzidas na
contemporaneidade.
O paradigma do índio consicente de sua classe e engajado pelos seus direitos ainda é muito
desconhecido pelo senso comum do brasileiro que pensa que as culturas nativas para serem
reconhecidas enquanto tal devem configurar-se da mesma forma que se encontrava quando os
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europeus chegaram. É preciso tratar a cultura de maneira processual e não cristalizada no tempo para
poder entender e reconhecer os indígenas de uma forma que condiz com a realidade.
Com base na nossa prática, foi possível perceber o quanto esses sujeitos vivem à
margem da sociedade, enfrentando dificuldades sem ter a quem recorrer, sendo que não recebem
auxílio da Fundação Nacional do Índio - FUNAI. Durante a realização do trabalho, tentamos entrar em
contato através de e-mail com um antropólogo, do Instituto de Ciências Sociais, localizado no campus
Santa Mônica, da Universidade Federal de Uberlândia (UFU). Entretanto, não conseguimos obter um
relato de experiência do professor - que inclusive já desenvolveu trabalhos sobre os índios Krahô –
pelo fato de que o mesmo estava envolvido em muitos outros compromissos e consequentemente, não
possuía horários compatíveis com a disponibilidade dos integrantes do grupo.
Além disso, algumas pessoas se disponibilizaram para ir ao Museu do Índio, a fim de obter
informações que fossem relevantes para o trabalho em questão e ao mesmo tempo, com o intuito de
agregar conhecimentos referentes ao tema escolhido. No entanto, no dia e horário escolhidos para
visitar o Museu, não foi possível encontrar a diretora do mesmo; diante disso, tivemos que entrar em
contato com ela através de e-mail e telefone, para que dessa forma, obtivéssemos algumas
informações desejadas. O Museu do Índio da cidade de Uberlândia foi aberto á público em outubro de
1987, com a proposta de difundir, colecionar e preservar a cultura indígena brasileira, por meio de seu
acervo, composto por fotografias, livros, videoteca e instrumentos etnográficos.
De acordo com a lei 11.645 sancionada em março de 2008, torna-se obrigatório o conteúdo,
acerca da cultura indígena, ser transmitido nas salas de aula das escolas. Nesse sentido, lançam-se
duas questões norteadoras do trabalho: “o que significa ser índio hoje?’’ e “como ele é reconhecido e
retratado na sociedade em que vivemos?”. Após a visita ao Museu do Índio e através das discussões
feitas em grupo, percebe-se que a figura do índio na cidade de Uberlândia tem sofrido um considerável
descaso e esquecimento por parte dos políticos, das instituições de ensino, como também por parte da
população em geral, fato este que pode ser interpretado como sendo o reflexo de uma tendência à
nível nacional. Conforme iniciamos a nossa busca por índios que vivessem na cidade ou nas
redondezas, notou-se que as fontes para a obtenção das informações eram de certa forma “limitadas”
e ao mesmo tempo, de difícil acesso; entretanto, por meio de um contato com uma estudante do curso
de Jornalismo da UFU, juntamente com uma notícia do Jornal Correio encontrada, conseguimos saber
sobre a existência e a localização de uma cacique e de um pajé no assentamento da cidade; com
quem tivemos o prazer de desfrutar das companhias e conversas.
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Ademais, pode-se observar que quanto maior é o contato de um povo indígena com a
sociedade nacional envolvente, maior o risco de exposição ao alcoolismo e à violência acometida
contra o índio. Dessa maneira, a prática que tivemos nos proporcionou ouvir um pouco da sabedoria
mística desses sujeitos, que possuem forte ligação com a natureza; de onde extraem as plantas
medicinais para a elaboração de remédios, de onde obtém seus alimentos, de onde conseguem
matéria-prima para a criação de seus instrumentos artesanais. Os dois índios entrevistados foram
respectivamente: uma cacique chamada Kaun Poti, da etnia dos Guarani, e um pajé chamado
Henrique Gamarra, etnia dos Terena.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Conforme a cacique Kaun Poti nos disse: “A cidade não vê a gente como ser humano,
selvagem é como nos chamaram, mas selvagem é quem invade as nossas terras” ; de modo que, em
seu relato podemos destacar uma das frases mais marcantes e que, de certa forma, nos impulsionou a
seguir em frente com os questionamentos e leituras sobre o assunto: “será que a academia ensina
vocês a serem mais humanos?”.
Após estudar e analisar na prática os costumes indígenas relacionados em como lidam com
sua linhagem, compreendemos que existem diversificadas formas de se falar sobre família. Diante a
curiosidade de conhecer este sistema de parentesco indígena, escolhemos um artigo base à
construção de nosso grupo de discussão, que tratava de forma bem específica o tema, “O sistema de
parentesco dos Índios Krahó” de Julio Cesar Melatti se inclui no departamento de Antropologia do
Instituto de Ciências Sociais da Universidade de Brasília e foi publicado originalmente em 1973.
Os índios Krahó vivem em uma área no norte do estado de Goiás e incluem-se entre os timbira
(grupo de diferentes povos indígenas). Falam a língua da família Jê e habitam uma reserva na qual
tiveram uso garantido por um decreto-lei de 1944, com uma área de aproximadamente 3200
quilômetros quadrados.
Compreender o sistema de parentesco dos índios Krahó, não basta relacioná-lo a organização
familial, como o tipo de residência ou as escolhas matrimoniais, porque nele se manifestam relações
de natureza ritual, principalmente o dualismo que permeia grande parte das instituições Krahó. Esse
dualismo se expressa através de diversos pares de metades com critérios de afiliação bastante
variáveis e sem a função de regulamentar o matrimônio. Até mesmo a forma da disposição
(organização da área) das aldeias Krahó permite a expressão desse dualismo. Compara-se ao formato
de um sol onde o centro, o pátio da aldeia, representa a vida política, sendo o local onde se fazem as
reuniões e rituais e a periferia da aldeia o local onde se expressa à vida doméstica.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Um dos principais pares de metades que forma este dualismo são as metades Wakmeye e
Ketamye. Ao Wakmeye estão ligados os símbolos do dia, a estação seca, o oriente, o pátio da aldeia,
palhas pra enfeito de cor clara e listras verticais na pintura do corpo e ao Ketamye os símbolos são
expressos pela noite, a estação chuvosa, o ocidente, a periferia da aldeia, palhas pra enfeite de cor
escura e listras horizontais de pintura do corpo. Cada uma destas metades fornece dois orientadores
das atividades da aldeia que governam de acordo com a estação correspondente a sua metade. O
indivíduo pertence a uma ou outra metade, conforme o nome pessoal que porta, independente de seu
sexo.
Esta organização dualista expressa outras oposições, como a oposição entre homens e
mulheres. Aos primeiros compete a caça, a coleta de mel a derrubada de matas para o plantio. As
mulheres, que pertencem à metade de seu pai enquanto solteiras e a metade do marido quando se
casam, são encarregadas da coleta de frutos, dos serviços culinários e do cuidado com as crianças.
Há ainda, outros pares divididos de acordo com classes de idade, os classificados por um homem
experiente da aldeia ou por própria escolha individual, entre outros.
A vida doméstica dos índios Krahó é representada por uma organização familial arquitetada em
grupos. A família elementar é composta por pai, mãe e filhos (biológicos ou adotados). Ela partilha a
casa com outras famílias e atua como uma unidade, onde as atividades econômicas de pai e mãe são
complementares e objetivam a manutenção dos filhos. É autossuficiente, pois cultiva para si uma
porção de terra específica. Uma característica típica da família elementar e a forma como se organiza
para realizar as refeições, formando um grupo separado dos demais. Não há a princípio nenhuma
autoridade bem delimitada neste grupo, o homem é um mediador que liga a vida pública quanto à
política, mas não tem uma autoridade demarcada.
O grupo doméstico é composto por mais de uma família elementar e é caracterizado por uma
colaboração entre sogros e genros, na qual o sogro orienta as atividades econômicas e caso este se
torne decrépito ou morra, o genro assume a liderança. Seus membros costumam fazer suas roças
justapostas. Num mesmo grupo doméstico, quando uma mulher prepara uma refeição, todos os
membros de seu grupo partilham dela, embora as famílias elementares se separem para realizar a
refeição. A autoridade no grupo doméstico se refere apenas a relações econômicas, o homem que
entrou há mais tempo na casa através do matrimônio realiza a orientação e diferenciação de tarefas.
Os segmentos residenciais são distinguidos principalmente pela forma como delimitam o local
de suas residências. Quando mudam de aldeia, mantem no novo local a mesma referência (pontos
cardiais) que ocupavam no local anterior. Desta forma, um único segmento residencial pode estar
representado em mais de uma aldeia.
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os deuses lançarão punições por praticarem essas atitudes, como por exemplo, nascer filhos com
problemas físicos ou mentais. Na tribo Krahó particularmente o incesto pode ser uma situação
adaptável depois de ocorrida, alguém que era antes “parenta” se torna “esposa (o)”, bastando agir
como tal, desta forma deixam de ser parentes, mas isso não acontece de forma tão simples quanto
parece, uma atitude incestuosa pode afetar a nomeação de uma família inteira. Aquele que comete o
incesto recebe um rótulo que se aplica à vergonha dentro da tribo vista aos olhos dos outros. O marido
deve fazer um pagamento além do normal à esposa, para amenizar o processo tormentoso que ela e
toda a família passam. Nesse sentido diz-se que quando o pagamento é grande a vergonha pode
deixar de existir.
Outro assunto sobre o sistema de atitudes dos índios é o infanticídio indígena. Em diversas
tribos quando nascia uma criança deficiente, filhos de mães solteiras ou gêmeas, era solicitado a
prática do extermínio. Após a realização de pesquisas bibliográficas, documentários e entrevista
pessoal, descobrimos que essa temática ainda se faz presente. É importante ressaltar que se o
número de mortes que acontecem dentro dessas tribos continuarem grande uma das definições de
família perderá o sentido: a proliferação da espécie, podendo acabar com toda uma cultura. Na
entrevista com uma cacique entendemos melhor porque acontecem esses sacrifícios. Quando nasce
uma criança que a tribo não consegue cuidar com necessidades especiais, é visto como dádiva a
devolução dessas crianças aos deuses. Compreendemos que atitudes como esta são embasadas nas
crenças, o medo e a manutenção das tradições. Atualmente existem abrigos para essas crianças,
alguns são nomeados como a aldeia dos sobreviventes. Assistentes sociais, antropólogos e outros
voluntários fazem os resgates nas tribos e as encaminham para uma nova jornada. Feita uma
estabilização as crianças podem ser adotadas por uma nova família.
CONCLUSIÓN
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sócio-histórico, que surgiram muitos dos problemas enfrentados por essas comunidades hoje, de
ordem psicossocial, comprometendo a qualidade de vida e a saúde mental desses indivíduos.
A discussão permeou pelas seguintes questões: “O psicólogo tem espaço nesse contexto?”,
“Quais as dificuldades enfrentadas por esses profissionais na atuação com os povos indígenas?”. E foi
a partir delas que surgiram muitas dúvidas, sobre qual a melhor forma de entrar em contato com as
comunidades, como se daria a inserção dos profissionais psi nas aldeias, ou estando fora delas, como
os povos indígenas chegariam ao psicólogo.
Dentre as possibilidades, identifica-se que é cada vez mais comum, os próprios pajés e
lideranças indígenas solicitarem junto aos órgãos públicos atenção em saúde mental por psicólogos.
Como exemplo, tem-se as palavras do pajé de uma aldeia ianomâmi, município de São Gabriel da
Cachoeira, Amazonas: “Quem abriu as portas do inferno foram os brancos. Então essas doenças é o
branco que tem que curar”. (RAÍZES TRIBAIS, 2008). Os problemas de saúde mais frequentes nas
aldeias de todo o Brasil são o alcoolismo, depressão e suicídio e estes são problemas que afetam a
comunidade como um todo. Assim, não basta um olhar para o índio individualmente, há que se pensar
em toda a família e na comunidade em si. Cabe aqui então a discussão do papel da Dinâmica da
Família na atuação dos psicólogos com os povos indígenas.
Uma outra possibilidade citada durante a discussão em sala e que se confirma nas palavras do
médico Marcos Noronha, citado no artigo Raízes Tribais – Um universo de possibilidades, é a
associação com o xamanismo. “As técnicas da Psicologia sistêmica e do Psicodrama se identificam,
em alguns aspectos, com os recursos de que os terapeutas tradicionais – pajé, xamãs – se utilizam”.
Ressalta-se, dessa forma, que a atuação conjunta dos profissionais de saúde com pajés e outros
líderes espirituais é considerado de grande importância.
O nosso papel enquanto profissionais, nesse contexto, é descontruir conceitos, se propor a
construir um saber híbrido, com especificidades de cada etnia. A psicologia pode contribuir na
construção de um espaço de escuta, de diálogo recíproco, fortalecer os laços familiares e
comunitários, intermediar conflitos e promover vínculos integradores da comunidade. Para que o
tabalho seja efetivo, deve-se contar com uma rede interdisciplinar, com participação efetiva de todos
os atores envolvidos, inclusive dos líderes das populações indígenas, na formulação das políticas
públicas e em todas as questões que envolvem a saúde dos povos indígenas. (Comissão dos Direitos
Humanos do CRPRS, 2009).
Após apresentadas essas questões, verifica-se que muitas ações do profissional psicólgo
cabem no contexto dos povos indígenas, aliás, este é um dos diversos campos de atuação da
Psicologia. Neste sentido, a Psicologia e os psicólogos são convocados a encontrar seu lugar neste
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campo, e para tal, precisam se preparar, buscar capacitação, ampliar o conhecimento sobre as
especificidades culturais desses povos e de cada etinia que compõe o país.
No intuito de promover conhecimento e disseminar informações, o CRPSP mantém o Grupo
de Trabalho – Psicologia e Povos Indígenas, cujo objetivo é propiciar diálogos entre profissionais de
diversas áreas, seus saberes e práticas, compreendendo que a atuação nessa área deve se pautar
pela interdisciplinaridade. Nos diálogos desse grupo, estão sempre presentes lideranças indígenas, de
forma a legitimar a construção coletiva de referências, de forma a expressar o compromisso social e o
apoio da Psicologia brasileira à autodeterminação dos povos, sem constituir-se em uma nova forma de
dominação cultural. (CRPSP, 2010).
Enfim, verifica-se que devido as relações históricas de dominação cultural, as visões e
representações que temos atualmente sobre a população indígena são distorcidas e preconceituosas,
contribuindo na perpetuação de relações marcadas por negligência e desrespeito para com os
mesmos. Esse campo de atuação é, portanto, novo, importante e desafiador para os profissionais da
Psicologia, que precisam desenvolver estudos e estratégias de trabalho que atendam às demandas
dessa parcela da população, considerando suas visões de mundo, singularidades e especificidades.
REFERÊNCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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século XXI. Revista Diálogos Latinoamericanos, nº 007, p. 20-42. Disponível em:
http://www.plataformademocratica.org/Publicacoes/23103_Cached.pdf
Conselho Regional de Psicologia da 6ª Região (org). Psicologia e Povos Indígenas. Conselho regional
de Psicologia da 6ª Região – São Paulo: CRPSP, 2010. 250f.; 23cm. Disponível em:
http://www.crpsp.org.br/povos/povos/livro.pdf
Freitas, E. B. (2001). Ser ou não ser Mehin: A etno-história Krahô. Revista Proj. História, p. 263-283.
São Paulo. Disponível em:
http://revistas.pucsp.br/index.php/revph/article/view/10721
Fundação Nacional do Índio. Direitos Sociais. Brasília/Distrito Federal, Brasil. Disponível em:
http://www.funai.gov.br/index.php/nossas-acoes/direitos-sociais
Guimarães, L. A. M., Grubits, S. (2007). Alcoolismo e violência em etnias indígenas: uma visão crítica
da situação brasileira. Revista Psicologia & Sociedade, 19 (1): p. 45-51; jan/abr. Disponível em:
http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0102-71822007000100007
1023
VI Congreso Marplatense de Psicología
Meletti, J. C. (1973). O sistema de parentesco dos índios Krahó. Série Antropologia. Departamento de
Antropologia do Instituto de Ciências Sociais, Universidade de Brasília, Brasília, Brasil. Disponível
em: http://www.juliomelatti.pro.br/artigos/a-parentescocrao.pdf
Psicologia e povos indígenas: reflexões, desafios e possibilidades. (2009). Comissão de Direitos
Humanos do Conselho Regional de Psicologia no Rio Grande do Sul, Brasil. Disponível:
http://www.crprs.org.br/tema.php?AreaTematicaID=7&ArtigoID=7#artigos
Raízes Tribais – Um Universo de Possibilidades. Reportagem da Revista Psique: Ciência e Vida, sobre
a inserção de psicólogos em aldeias indígenas, com entrevistas às principais profissionais que
hoje debatem e pesquisam a questão. Edição nº 24, janeiro de 2008. Disponível em:
http://www.portalcienciaevida.com.br/ESPS/Edicoes/24/sumario.asp
Souza, M. C. (2004). Parentes de sangue: incesto, substância e relação no pensamento Timbira*
Mana vol.10, nº.1, p. 25-60. Rio de Janeiro Apr. Disponível em:
http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0104-93132004000100002
**Observación: Si posible, me gustaria de tener disponible el proyector para mostrar algunas fotos
que sacamos con los indígenas entrevistados, así como uma corta presentación del powerpoint.
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Nos encontramos en este nuevo Congreso intentando reflexionar acerca de lo que significa el título
del mismo en nuestras prácticas cotidianas, tomando como referencia nuestro rol como futuros
profesionales de la salud y actuales estudiantes de una Universidad Pública, rol que necesariamente
implica el reconocimiento y la promoción de los Derechos Humanos.
La naturaleza de algunas de las experiencias a las que se hará mención será de carácter
preventivo ante una posible vulneración de derechos, y en otros casos, será basada en un intento de
reparación cuando los mismos ya han sido corrompidos.
Para hablar de instituciones, se tomarán en cuenta los aportes de René Kaës, quién la define como
“el orden por el cual se funda un colectivo con el objetivo de realizar una tarea útil, necesaria para el
funcionamiento social: reproducción de la vida, educación, salud, trabajo, defensa colectiva, sistemas
religioso y cultural, basados en representaciones compartidas. La institución es un colectivo instituido,
organizado y legislado en el campo de las relaciones sociales. Somos cuidadores, administradores,
docentes, en ese orden”.
Es a través de las mismas que el Estado debe garantizar el cumplimiento de los derechos de todos
sus habitantes, derechos que hacen a la integridad y dignidad los mismos. Sin embargo, el
funcionamiento de éstas se ha visto afectado, producto de las transformaciones que ha sufrido el
Estado en las últimas décadas. Transformaciones que no sólo se ligan a lo económico, sino también a
lo histórico, social, político y cultural.
¿Por qué son necesarias las intervenciones institucionales como parte de una comunidad
universitaria y como parte de futuros profesionales de la salud? Entendemos que cuando hablamos de
los múltiples atravesamientos institucionales, hacemos referencia a las significaciones que un
determinado colectivo arma y que tienen que ver con lo político, lo fantasmático, lo deseante, y lo
económico. Entonces como estudiantes debemos trabajar con esta producción de significaciones que
habitan los diferentes escenarios. Es la reconstrucción de las mismas nuestra principal herramienta y
nuestro principal fin al que aspiramos.
Ahora bien, en las prácticas concretas a las que haremos mención, nos encontramos con ciertas
dificultades que, a pesar de las particularidades en cuanto a objetivos, encuadre y funciones de cada
institución, prevalecieron de manera casi estable. Estas serían, la falta de recursos provenientes del
Estado (tanto nacional, provincial o municipal) destinados al funcionamiento de las mismas; la
dificultad para poder acotar las problemáticas específicas. Esto se debe a que la mayoría de los casos,
debido a su complejidad, requieren de intervenciones interinstitucionales que apunten a las diferentes
esferas que hacen a la integridad física, psíquica y social; falta de comunicación intra-institucional y
falta de articulación fluida interinstitucional.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Específicamente, las instituciones a las que se hará referencia, y sus correspondientes espacios
desde los cuales se realizaron las prácticas son:
Escuela N 1 (Piloto). En el marco de la Secretaría de DDHH del Centro de Estudiantes.
Posteriormente como integrantes del Proyecto de Voluntariado Universitario Volunta-red.
Escuela Secundaria Básica Nº 44. En el marco del Proyecto de Extensión “Diálogos
Compartidos”.
Escuela Secundaria Básica Nº 15. en el marco del proyecto de Extensión
“Fortalecimiento comunitario para el abordaje de problemáticas psicosociales en adolescentes
y jóvenes del sud-oeste marplatense”.
Servicio Local de Promoción y Protección de los Derechos del Niño, sede Miramar. En
el marco de la Residencia de Pregrado en el ámbito de Psicología Jurídica.
Programa de Inclusión Social ENVION, sede Nº 1 (Puerto Mar del Plata).
Unidad Penitenciaria de Batán, programa provincial “Casas por cárceles”. En el marco
del Proyecto de Extensión “Casas por cárceles: construyendo puentes”.
Cada proyecto es planificado en función de objetivos y plazos estipulados antes del inicio del
mismo. Se espera en cada uno cumplir con lo preestablecido. Sin embargo, en la cotidianeidad de las
prácticas, muchos son los inesperados que se presentan y dificultan e inclusive en algunos casos,
hasta impiden la continuidad del proyecto.
Se entiende que algunas de las dificultades mencionadas pueden ser verdaderos obstáculos, sin
embargo otras pueden transformarse en oportunidades de trabajo en conjunto con la población
destinataria. Esto implicaría, un abordaje flexible que permita trabajar no exclusivamente en función de
lo establecido en los objetivos preestablecidos, sino trabajar en y para la institución en la que
intervenimos. Cada nuevo avatar hace revisar y repensar una y otra vez los propósitos de las acciones
que se llevan adelante, como así también las funciones propias de las instituciones.
Al momento de analizar los aparentes obstáculos mencionados, se debe tener en cuenta el hecho
de que las instituciones albergan el malestar y expresan las formas a través de las cuáles se intenta
resolverlo. Si se piensa dicho malestar como algo estructural, implica tener en cuenta que las
instituciones se asientan sobre un vacío constituido por la falta de respuesta preestablecida, de allí
podría decirse que proviene su carácter inventivo. En este sentido, se produce la relación entre
instituyente e instituido, siendo en esta dinámica donde muchas veces lo instituido acaba reduciendo
la fuerza de lo instituyente. Este fenómeno podría pensarse con diferentes nombres: burocratización,
repetición, sufrimiento institucional, etc.
Por ejemplo en el caso de la Escuela Nº 1 (Piloto), como integrantes del Proyecto de Voluntariado
Universitario Volunta-red en el año 2013, sucedieron diversos acontecimientos que no estaban
contemplados en la planificación inicial del proyecto, entre ellos el proceso de toma de escuelas
secundarias dependientes del municipio, durante casi un mes. En el caso de la escuela mencionada
los estudiantes reclamaban por mejoras en las condiciones edilicias, allí fue donde decidimos
acompañar a los alumnos, y ayudándolos a filmar y difundir su mensaje al resto de la comunidad. Este
escenario nos permitió acercarnos más a la población y conocer mejor la dinámica institucional, así
como también pensar y trabajar sobre el proceso de toma de escuelas secundarias en la ciudad.
Consideramos que esta flexibilidad y capacidad para atender a lo emergente es imprescindible en el
trabajo institucional y comunitario.
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Otro ejemplo podría ser el ocurrido en la Unidad Penitenciaria de Batán, en el cuál a partir de la
falta de talleristas que concurran a las diferentes actividades propuestas, se agregó al dispositivo del
proyecto dos asambleas anuales para poder articular dichas actividades con las particularidades de la
población en cada momento, ya que en dicha institución cambia continuamente.
Por su parte, al pensar las prácticas y los atravesamientos por el Servicio Local de Promoción y
Protección de los Derechos del Niño, también se encuentran presentes los límites difusos del accionar
y de las funciones para los cuales fue creado el Servicio. En el caso a caso se logran ver las
problemáticas que se deben afrontar, para las cuales la institución no cuenta con los recursos (tanto
personales como económicos). Es ahí donde se debe ir más allá de los propios límites, y encontrar en
la articulación, el seguimiento y el trabajo en conjunto, la posibilidad de dar respuesta a una realidad
que se presenta como inabarcable.
Es aquí donde las preguntas sobre las intervenciones se hacen presentes, y sobretodo necesarias.
Para buscar alternativas, para producir transformaciones, es propicio que las mismas sean trabajadas
en espacios conjuntos de intercambio, donde se reflexione y se discuta entre pares sobre la realidad
presentada en el transcurrir institucional, para que las sensaciones propias del quehacer diario se
tornen motores para las futuras intervenciones. Para dar cuenta de esto, se tomarán los aportes de
Fernando Ulloa, quien dice:
“Así fue que con los años cobró un gracioso valor clásico, entre quienes trabajábamos juntos,
hablar de la socialización de los carajos, a partir de escuchar con frecuencia cómo alguien expresaba
su dolor enojado diciendo “¡no se qué carajo hacer!”. Expresión que suele traducir el sentir de las
personas dispuestas, más que aquejarse, a levantar su protesta enojada y dolorida, que ese es el
sentido frecuente y auspicioso de la expresión.”
Es en función del recorrido de las prácticas a las que se hizo mención, que se piensa en el
compromiso de cada uno para con la institución, y a través de ésta, el compromiso para con la
sociedad, como así también para con la entidad a la que representa (sea la Universidad o la
comunidad profesional a la que se pertenece).
Se trata entonces de una interacción social y académica mediante la cual la Universidad haría un
aporte, y su vez, se enriquecería, cuestionaría y replantearía toda su actividad. Se necesita quizás,
una formación continua, tanto de los estudiantes como de los profesionales, habilitando el trabajo en
comunidad en todas sus formas, contribuyendo además a la no cristalización de los saberes. La
Universidad en este sentido, considerando su rol social, debe tener en cuenta la formación de
profesionales comprometidos, su reposicionamiento como ciudadanos, y su implicación en las
problemáticas que a la sociedad aquejan.
Como mencionamos anteriormente, nuestro rol de futuros profesionales de la salud estará
atravesado principalmente por una necesidad de la sociedad de promover los Derechos Humanos, con
los deberes y las obligaciones que éstos implican. Es por esto que sostenemos la importancia del
trabajo en las instituciones, ya que a través de ellas se podrá lograr el cumplimiento de los mismos,
tanto a través de su prevención como de su proceso de reparación cuando se han visto vulnerados.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
Teniendo en cuenta algunas de las metas de la Ley 26.657 de Salud Mental de la Nación Argentina
como son: transformar el sistema manicomial; propiciando abordajes intersectoriales,
interdisciplinarios, abiertos, comunitarios y promotores de los derechos humanos, es que
consideramos prioritario abordar esta temática, para formar profesionales que puedan dar respuestas
a las nuevas demandas y desafíos que se plantean en la sociedad vinculados al campo de la salud
mental.
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En este contexto, se realizo una “práctica externa”, la cual se refiere al conjunto de actuaciones
que un estudiante realiza en un contexto natural relacionado con el ejercicio de una profesión. Si bien
como menciona García Jiménez (2006) el contacto con la profesión puede desarrollarse de diversas
formas, las prácticas externas están diseñadas no tanto para una práctica profesional en sentido
estricto, sino como una oportunidad de aprendizaje. Esta práctica formativa significa en los docentes
trabajar para que los estudiantes puedan poner en práctica los conocimientos teóricos adquiridos a
través de una intervención destinada a problematizar sus saberes y haceres en el área de la salud
mental. Todo profesional y en especial el psicólogo, necesita enfrentarse a la realidad social en la que
se encuentra inmerso, reflexionar sobre el cuidado, apoyo social, respeto, y participación familiar
necesarios para la formación del sujeto, el sostenimiento de su salud y su recuperación cuando se
enferma. De esta manera con el propósito de evaluar los imaginarios acerca de la salud mental en la
comunidad marplatense, se desarrolló una práctica formativa que consistió en una Consulta en donde
se administró en 1155 hogares, un cuestionario cualitativo con tres ejes de indagación en 56 barrios de
la ciudad. Los mismos fueron: ¿Qué significa para Ud. la salud mental?; ¿Qué tipo de problemas de
salud mental le parece a Ud. que padece la gente en la actualidad? y ¿Cómo considera Ud. que se
debería cuidar a la gente con problemas de salud mental?
Esta consulta fue realizada por los estudiantes, acompañados por sus docentes, los días sábados
y domingos durante los meses de mayo y junio del presente año. Los resultados fueron analizados
cualitativamente y se construyeron categorías acerca de los ejes de indagación. La formación de los
estudiantes para un abordaje comunitario implica dotarlos de compromiso ético, flexibilidad para
adaptarse a distintas situaciones, capacidad de análisis y síntesis, crítica y autocrítica y
fundamentalmente trabajo en equipo. La participación en este tipo de actividades, genera conciencia
social y favorece la reflexión acerca de la posibilidad de cambio. Se trabaja la propia implicación, como
también la consideración y respeto por las posiciones o puntos de vista que sustentan otros,
constituyendo un principio de responsabilidad y ética fundamental en la profesión de psicólogo
comunitario. Finalmente los resultados se divulgaron en posters, que contenían las categorías
construidas para cada eje, y testimonios que ejemplificaban las opiniones de los diferentes barrios
consultados.
El tercer eje de la consulta pretendía indagar las propuestas de la comunidad para el cuidado de
las personas con problemas de salud mental. La significación de cuidar en el diccionario de la Real
Academia Española es poner diligencia, atención y solicitud en la ejecución de algo; asistir, guardar,
conservar. Teniendo en cuenta estas significaciones, cuidar hace referencia a la preocupación por algo
o alguien. Leonardo Boff, (2009) sostiene, que cuidar es más que un acto, una actitud. En este sentido,
Malvárez (2007) destaca que el cuidado surge cuando la existencia de otro adquiere importancia para
uno entonces se desplaza la preocupación hacia uno y el otro toma prevalencia. Menciona que el
cuidado incluye dos significados íntimamente ligados: el primero, la actitud de desvelo, de atención
hacia el otro; y el segundo, la preocupación, la inquietud, la involucración, porque supone una
implicación afectiva con el otro cuya condición moviliza la acción. Finalmente es interesante incluir la
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concepción que Leininger (Golpe & Yuni, 2012) sostiene sobre el concepto de Cuidados Culturales al
cual define como: los valores, las creencias y los modos de vida que se han aprendido subjetiva u
objetivamente y que asisten, sostienen, facilitan o habilitan a otros individuos o grupos a conservar el
bienestar y la salud con el fin de avanzar en su condición humana y en el modo de vida, o de afrontar
la enfermedad, o las incapacidades, o la muerte.
Teniendo en cuenta el rol del psicólogo comunitario, trabajar sobre las concepciones del cuidar, es
fundamental y estratégico, es una forma de introducir a los alumnos en el campo de la implicación
afectiva con el otro y de la involucración requerida para trabajar con la comunidad ejerciendo la
función de facilitador promoviendo el empoderamiento.
A continuación se presentan las categorías que se construyeron a partir de los testimonios que
respondían a como se debería cuidar a las personas con problemas en la salud mental.
1. CON APOYO PROFESIONAL de Psicólogos, Médicos, Psiquiatras, y acompañamiento
terapéutico. Esta categoría alude a todas aquellas respuestas que mencionaban que las personas con
problemas en su salud mental deberían ser tratadas por alguno de estos profesionales.
2. CON APOYO AFECTIVO DE LAS REDES SOCIOFAMILIARES. En este caso los sujetos
manifestaban que el cuidado debería ser desde la familia, fortaleciendo los vínculos, y fomentando la
escucha, comunicación y contención.
3. CON APOYO DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS. Incluye aquellos testimonios que
consideran a la educación como la principal herramienta de cuidado. Esta recomendación se relaciona
con la necesidad de incrementar el conocimiento de la población sobre los trastornos mentales, sus
variadas formas de tratamiento y los lugares para consultar. La educación es un instrumento
estratégico para generar una cultura amigable hacia la problemática de la salud mental. (Levav, 2003)
4. CON APOYO RELIGIOSO. Son aquellas respuestas en donde la gente menciona a la religión y
a Dios como medios para el cuidado de los sujetos con problemas de salud mental.
5. CON APOYO DE LA COMUNIDAD. Generando inclusión social, concientización, buen trato,
esparcimiento, recreación
6. CON APOYO DE LAS OBRAS SOCIALES. En estas respuestas se destaca el mal
funcionamiento de las obras sociales, por lo que una forma de cuidar seria un funcionamiento eficiente,
de manera que se puedan cubrir las necesidades de atención de los sujetos que lo requieran
7. CON APOYO DE LAS ORGANIZACIONES NO GUBERNAMENTALES. Incluye aquellos
testimonios que mencionan dispositivos terapéuticos, como centros de día, dispositivos de
rehabilitación y contención, entre otros.
8. CON APOYO DE LAS POLITICAS PÚBLICAS PARA LA INCLUSIÓN Y EL TRATAMIENTO.
Fundamentalmente se destaca la necesidad de Políticas públicas de promoción y prevención de la
salud y Servicios de atención gratuitos en toda la ciudad.
9. CON APOYO DE LAS INSTITUCIONES DE SALUD MENTAL. Esta categoría alude a aquellas
respuestas en donde se menciona a la Internación como forma de alejar de la sociedad a los sujetos
que padecen problemas de salud mental.
Estas categorías reflejan las estrategias de afrontamiento que surgen de la comunidad
marplatense. La metodología cualitativa con la que trabaja la cátedra permite el conocimiento de la
multiplicidad de opiniones que componen el tejido social y su ordenamiento posterior para que todas
1031
VI Congreso Marplatense de Psicología
las propuestas tengan un lugar de enunciación y de esta manera pueda representarse el imaginario
social acerca del cuidar en la ciudad de mar del Plata.
REFLEXIONES FINALES
Se considera a la Salud Mental como un proceso multidimensional que implica la capacidad del
sujeto de disponer y/o generar recursos subjetivos para afrontar las situaciones conflictivas que lo
atraviesan. Cuando ésta capacidad se encuentra dañada u obstaculizada, el sujeto se encuentra en
situación de desamparo psíquico, dificultando la capacidad de hacer lazo con otro/s.
El empobrecimiento y la fragilidad de los vínculos impacta entonces en la posibilidad de
sostenimiento y cuidado de otros significativos, tanto en relación al afrontamiento de aquellas
incapacidades que afectan a su bienestar y salud como a la conservación de aquellas capacidades
que no han sido afectadas. Por otra parte, el desmembramiento y/o ruptura de vínculos y lazos
sociales provoca un fuerte desapuntalamiento de la subjetividad, al verse empobrecida la red de
sostén tanto en el ámbito familiar como social- comunitario.
Tomando las respuestas sobre el cuidado de la salud mental, es dable advertir como en su
mayoría refieren la noción de un cuidado pensado desde “lo vincular”: Familia, grupos, organizaciones,
instituciones, la comunidad son incluidas como distintos niveles dentro de las estrategias de
afrontamiento para el cuidado de la salud mental, niveles fundamentales para una integración optima
del sujeto en relación al apuntalamiento subjetivo que los vínculos promueven, y escenarios donde
debe desempeñarse el psicólogo comunitario. En tal sentido, encontramos en la reciente Ley de salud
mental una serie de derechos que el Estado reconoce a las personas con padecimiento mental, entre
ellos el “Derecho a recibir tratamiento y a ser tratado con la alternativa terapéutica más conveniente,
que menos restrinja sus derechos y libertades, promoviendo la integración familiar, laboral y
comunitaria”
En consecuencia, y basándonos tanto en los testimonios como en el espíritu de la ley, resaltamos
la importancia de la integración del sujeto en distintos niveles que van de lo familiar - institucional –
comunitario- y social. Es por ello que proponemos como estrategia, la promoción de vínculos y redes
que potencien los lazos entre sujetos, formando entramados dinámicos y colectivos. Se propone
entonces la construcción de un rol profesional en lo social, trabajando en redes. Se piensa a la red
como forma de organización que, en base a un intercambio entre sus miembros, se dirige a la
resolución de problemas de una comunidad, apuntando hacia fortalecimiento de la comunidad y al
desarrollo de la ciudadanía. El carácter transformador de la red en tanto promotora de cambios en el
orden socio comunitario y subjetivo ha sido resaltado en consideraciones como las de Fernández,
(1999) “la red se convierte en una alternativa de desarrollo comunitario cuando en cada uno de los
actores implicados se producen cambios en los niveles de las condiciones materiales de existencia y
de la construcción subjetiva de la realidad” Consideramos entonces que la creación de dispositivos en
el cuidado de la salud mental debe realizarse desde un enfoque en red, donde el usuario no sea
tomado como ente aislado desde un enfoque clínico patologizante, sino como sujeto de vinculo,
entramado en una red familiar, social y comunitaria que le otorga identidad, pertenencia y sostén
subjetivante. Pensar en Red implica no solo la idea de una estrategia de abordaje en el campo de la
1032
VI Congreso Marplatense de Psicología
Salud Mental Comunitaria sino también la creación de dispositivos acordes a dicho enfoque. Una
perspectiva en Redes deberá comenzar desde la formación de los profesionales, a través de la cual
pueda concebirse el rol del agente de salud mental como dentro de un entramado formado con
distintos actores sociales implicados. Este propósito es el que intentamos cumplir desde nuestro
desempeño docente en esta cátedra.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Boff, L. (2009) Saber Cuidar: El nuevo paradigma ético de la nueva civilización. Elementos
conceptuales para una conversación. Disponible en
http://www.fundacionparalareconciliacion.org/documentos/upload/02052012_430pm_4fa1a7870c3
e7.pdf
Garcia Jimenez, E. (2006) Practicas externas. En Metodología de enseñanza y aprendizaje para el
desarrollo de competencias. Madrid. Alianza Editorial
Golpe,L & Yuni, J. (2012) Cuidado de personas mayores. Dones, responsabilidad y compromiso.
Catamarca. Argentina Encuentro Grupo Editor.
Fernández, S. (1999) “La red como alternativa al desarrollo comunitario”. en Dabas, E. y Najmanovich
D. (comp.) Redes, el lenguaje de los vínculos. Hacia la reconstrucción y el fortalecimiento de la
sociedad civil Buenos Aires. Paidos
Itzhak Levav (2003) Salud mental: una prioridad de la salud pública Revista de la Maestría en Salud
Pública ISSN: 1667-3700 · Año1 Nº 2 ·
Malvárez, S. (2007) El reto de cuidar en un mundo globalizado. Texto & Contexto Enfermagem, vol. 16,
núm. 3, julho-setembro, pp. 520-530,
Zabalza, M. (2006) Competencias docente del profesorado universitario. Calidad y desarrollo
profesional. Madrid. Narcea Ediciones.
1033
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Las representaciones sociales (RS) refieren a las imágenes y modelos explicativos que un
determinado grupo social tiene acerca de algún fenómeno de la realidad. Krause (1999) plantea “aún
cuando algunos se han referido a las Representaciones Sociales como un trozo de cultura, resulta
necesario diferenciarlas del concepto de cultura, entendiendo esta última como el macro-concepto que
las engloba, siendo más abarcativo que el de Representaciones Sociales, en tanto incluye no
solamente el “pensamiento social”, sino también las prácticas sociales, instituciones y objetos” (p. 42).
En los últimos años se ha dado especial interés en el área de la memoria colectiva (MC) al estudio
de la historia desde la perspectiva de las RS. Como señalan Liu y Hilton (2005), la historia se invoca
como una reserva simbólica que ofrece situaciones y personas concretas que poseen una relevancia
emocional, en gran medida compartida, y cuya importancia para el presente es fundamental para
construir una identidad personal y grupal.
Según Páez y Liu (2009) las RS de la historia (RSH) son útiles en varios sentidos. Específicamente
en cuatro: mantienen una imagen positiva del grupo al que consideran pertenecer; guardan un sentido
de continuidad de dicho grupo que se mantiene según pasa el tiempo; brindan un marco de referencia
respecto de los valores y las normas mediante la prescripción de determinadas conductas y de aquello
que se espera de los miembros del grupo, o lo que debería caracterizarlos; y por último, actúan como
reservorios simbólicos a los cuales puede acudirse para justificar posturas y acciones del presente o
del futuro. La MC incluye el estudio sobre cómo los grupos rememoran, olvidan y reconstruyen el
conocimiento del pasado histórico (Valencia & Páez, 1999).
DESARROLLO
Zubieta (2001) señala que es imposible encontrar una definición única del concepto de
Representaciones Sociales. Su creador reconoce que una de las características de la teoría de las
Representaciones Sociales es la ambigüedad que este concepto presenta y la controversia que esto
ha provocado; es así como Moscovici (1979) postula: " (...) la Representación Social aparece como un
constructo cuya realidad es fácil de entender pero cuyo significado es difícil de captar (...)” (p.89).
Abric (2001) plantea que una RS está constituida por un conjunto de informaciones, de creencias,
opiniones y actitudes respecto a un objeto dado, y que este conjunto de elementos es organizado y
estructurado. Siguiendo estos lineamientos teóricos es que surge una hipótesis respecto de la
organización interna de las RS, la denominada hipótesis del núcleo central. Al respecto sostiene: “la
1034
VI Congreso Marplatense de Psicología
organización de una representación presenta una modalidad particular, especifica: no únicamente los
elementos de la representación son jerarquizados sino además toda representación esta organizada
alrededor de un núcleo central, constituido por uno o varios elementos que dan su significación a la
representación” (p.18) y agrega: “el núcleo es simple, concreto, grafico y coherente, corresponde
igualmente al sistema de valores al cual se refiere el individuo, es decir que lleva la marca de la cultura
y de las normas del entorno social” (p.20).
Para Abric (2001), el núcleo central de una RS avala dos funciones esenciales; una función
generadora, que es el elemento mediante el cual se crea, se transforma la significación de los otros
elementos constitutivos de la representación y es por su conducto que esos elementos toman un
sentido, un valor. Por oro lado, una función organizadora, donde es el núcleo central quien determina
la naturaleza de los lazos que unen entre ellos los elementos de la RS determinando así su estructura.
Mientras que el sistema periférico tendrá la función de concreción, que depende del contexto y resulta
del anclaje de la representación en la realidad; una función de regulación donde los elementos
periféricos tendrán un desempeño fundamental en la adaptación de la RS a las evoluciones del
contexto y por ultimo, una función de defensa de la representación ya que un cambio en el núcleo
central ocasionaría una RS distinta. De esta manera, el núcleo es el elemento unificador y estabilizador
de la RS y constituye el elemento más estable, siendo en la representación el elemento que más
resistirá al cambio. Larrañaga, Valencia y Vergès (2007) señalan que el núcleo central es el elemento
que da sentido y organiza la RS. Su determinación es esencialmente de carácter social, y reúne tanto
condiciones históricas y sociológicas como ideológicas. Por otro lado, se encuentra el sistema
periférico, el cual permite el anclaje en la realidad del momento, dando lugar a modulaciones
individuales e interviniendo en el proceso de defensa y de transformación de las representaciones
sociales.
Siguiendo la línea de estudios transculturales previos sobre la historia universal que incluyen
muestras argentinas (Bobowik, Páez, Liu, Espinosa, Techio, Zubieta & Cabecinhas, 2010; Bombelli,
Fernández & Zubieta, 2012; Bombelli, Sosa, Fernández, Cejas & Torres, 2013; Fernández, Bombelli &
Zubieta, 2012; Fernández, Cejas, & Sosa, 2013; Zubieta, Barreiro & Delfino, 2010) así como de
estudios locales realizados con estudiantes universitarios, se realizó un estudio empírico con el
objetivo de indagar en las RS de la historia universal, puntualmente en los eventos que un grupo de
estudiantes universitarios de la carrera de Psicología consideran importantes al narrarla. Como
objetivos específicos se propuso identificar los eventos que integran el núcleo central y la periferia de
las RS de la historia universal y la presencia de sesgos tales como: consenso transcultural, bélico, de
recencia, violento, nostálgico y sociocéntrico.
MÉTODO
1035
VI Congreso Marplatense de Psicología
Instrumento y procedimiento: Para la recolección de datos se utilizó una versión modificada del
cuestionario autoadministrable construido por Liu et al. (2005). A diferencia del instrumento original no
se utilizó un listado predeterminado de eventos de la historia, sino que se presentó la siguiente
consigna “Te pedimos que escribas por lo menos 8 (ocho) eventos de la historia universal que
consideres relevantes”. Se utilizó, para el análisis de los datos, el enfoque estructural de la teoría del
núcleo central de las RS (Abric, 2005, 2001).
El tratamiento de los datos se realizó con el software “Evoc” (Vergés, 1994) organizando las
evocaciones en base a jerarquías entendidas como frecuencia y orden de la evocación, generando la
construcción de un cuadro de cuatro divisiones. Este programa posibilita realizar un análisis
lexicográfico mediante la obtención de un cuadrante con el núcleo central, la primera periferia, el grupo
contraste y la denominada segunda periferia de la representación. El producto de las evocaciones fue
organizado previamente manteniendo el orden surgido en las respuestas de los participantes. Los
términos inductores para las mismas fueron “personajes” de la historia universal que debían asociar
con un máximo de ocho respuestas.
RESULTADOS
Tabla 1. Estructura de la representación social de los Eventos más relevantes en la historia universal
en estudiantes de psicología.
1036
VI Congreso Marplatense de Psicología
F r F R
Revolución 43 4,047
Francesa
Revolución
60 3,650
Industrial
Segunda Guerra
107 3,299
Mundial
Guerra Fría
frecuencia mínima = 6; frecuencia intermedia= 23; y rango medio = 4,4. Sobre estos criterios se
construyen los cuadrantes en función de “rango x frecuencia”.
En la Tabla 1 se puede observar como en el primer cuadrante aparecen los eventos que obtuvieron
un rango medio por debajo de los 4,4 y una frecuencia intermedia mayor o igual a 23. Estas
evocaciones surgidas con mayor frecuencia y rapidez constituyen el núcleo central de la
representación, el cual quedó conformado por los siguientes eventos: la caída del muro de Berlín, el
descubrimiento de América, el Nazismo, la Primera Guerra Mundial, la Revolución Francesa, la
revolución Industrial y la Segunda Guerra Mundial. En este sentido, se observa que lo que otorga
significado a la representación son hechos relacionados a guerras, conflictos y revoluciones, asociados
a la historia europea y acontecimientos dominantes de la cultura occidental.
Siguiendo el enfoque estructural de las representaciones sociales (Abric, 2005) los elementos del
núcleo tienden a ser estables y resistentes al cambio.
En el cuadrante inferior izquierdo de la Tabla 1, denominado “primera periferia” se localizan los
eventos con alta frecuencia de evocación pero que registran un rango medio en el orden de aparición,
por lo que no logran integrar el núcleo central. Allí se evocan: el atentando producido a las Torres
Gemelas por miembros de la red Al Qaeda el 11 de septiembre de 2001 y el bombardeo atómico a
Hiroshima ocurrido en agosto de 1945. Los elementos que conforman la primera periferia si bien son
ampliamente compartidos, son menos relevantes que los elementos que conforman el núcleo central
(Abric, 2001). La caída de la Torres Gemelas es un evento más actual en el tiempo que los
mencionados en el núcleo y el bombardeo a Hiroshima marcó el final a la Segunda Guerra Mundial,
evento que aparece en el núcleo central.
En el cuadrante superior derecho se sitúan los sucesos mencionados con menor frecuencia pero
que fueron evocados más rápidamente. Siendo que las frecuencias se encuentran debajo del valor
intermedio, estas evocaciones no pueden ubicarse dentro del núcleo central ni tampoco en la primera
periferia por lo que se la denomina zona de contraste. Dentro de los elementos que la integran se
encuentra por un lado, un acontecimiento ocurrido muy lejano en el tiempo, la Caída del Imperio
Romano que tuvo lugar en el siglo III y por otro dos eventos relacionados con hechos bélicos ocurridos
en el siglo XX, es decir más actuales en el tiempo: la Guerra de Vietnam y la Revolución Cubana.
Estos elementos si bien están dispersos pueden llegar a formar parte del núcleo central en un futuro.
Finalmente, los eventos ubicados en el cuadrante inferior derecho son los que tuvieron menor
frecuencia y que fueron evocados con ulterioridad, componiendo el segundo límite o periferia de la
representación. Allí se evocan eventos relacionados con a) hechos bélicos ocurridos en el siglo XX y
XXI: la guerra de Irak, la guerra Fría, y la guerra de Malvinas; b) diferentes eventos relacionados con la
evolución humana y avances científicos: la llegada del hombre a la luna, la abolición de la esclavitud,
el avance tecnológico, la creación de Internet, y la globalización y, por último; c) la crisis de los años
treinta ocasionada por la caída más desastrosa de los mercados de valores en la Bolsa de Estados
Unidos.
Conclusiones
Los hallazgos de la presente investigación están en línea con los resultados obtenidos en los
estudios previos sobre memoria colectiva y RS de la historia. En primer lugar se verifica la presencia
del sesgo bélico y de violencia como partera de la historia, coincidentes con los estudios
transculturales que muestran que la referencia a guerras y conflictos bélicos como sucesos centrales
1038
VI Congreso Marplatense de Psicología
en la historia son concebidos como dinamizadores de cambios y progresos. Las personas tienden a
recordar espontáneamente y de manera más frecuente hechos asociados a guerras o conflictos
armados en general (Liu et al., 2005). La preeminencia de los eventos vinculados a las guerras puede
deberse a que este tipo de eventos bélicos poseen un gran impacto en la percepción y en la cognición
de las personas. Moscovici (1983 en Bobowik, et al., 2010) plantea que las personas sostienen la
creencia implícita de que la historia es el resultado de la violencia y de la acción de grandes hombres.
A su vez, se destaca la presencia de Consenso transcultural. El mismo sugiere la existencia de una
MC dominante en la que se comparten creencias hegemónicas sobre la historia mundial. Liu et al.
(2005) dan cuenta de la presencia de un sesgo eurocéntrico en las naciones, ya que los eventos
citados están en relación con la historia europea y acontecimientos dominantes de la cultura
occidental. En estudios preliminares realizados por el equipo de investigación a nivel local con
muestras de estudiantes universitarios y de población general de la ciudad de Buenos Aires también
se ratifica la tendencia tanto de sesgo bélico como del eurocéntrico (Bombelli, Fernández, Sosa, 2013;
Sosa, Barreiro & Zubieta, 2011; Sosa, Bombelli, Cejas & Fernández, 2013; Zubieta, Barreiro & Sosa,
2011). Asimismo, la presencia del descubrimiento de América y de la guerra de Malvinas da cuenta del
sesgo socio-céntrico. Por último, se destaca también, pero recién en la segunda periferia, la ocurrencia
de eventos asociados al progreso científico y a avances tecnológicos. Estos sucesos tienen un
carácter más transitorio, y su pertenencia a la RS está sujeta a los cambios que se produzcan en el
contexto social.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Actualmente es evidente el creciente interés por temáticas relativas al mundo de la política, el cual
puede explicarse a partir de una situación de crisis más o menos explícita que los sistemas y modelos
políticos están atravesando a nivel mundial. Los ejemplos de esta situación están representados por
aspectos como: la lamentable distancia entre la población y la clase perteneciente a este ámbito, la
decreciente participación en el mismo y la denuncia –en la mayoría de los casos expresa- de la relativa
insuficiencia de ciertas instituciones pertenecientes a este espectro. Esta situación de transición e
incertidumbre de acuerdo a Quadrio, Catellani y Sala (1988), resulta particularmente estimulante para
el estudio de las RS de la política. Las RS refieren “al producto y proceso de la actividad de
apropiación de una realidad exterior al pensamiento y de una elaboración psicológica y social de esa
realidad” (Jodelet, 1989: 37), de modo que estas se conciben como una textura psicológica autónoma
y a la vez propia de de nuestra cultura, en otras palabras, una forma de conocimiento particular de
nuestra sociedad (Moscovici, 1961). Al decir de Moscovici (1981) "por representaciones sociales
nosotros entendemos un conjunto de conceptos, enunciados y explicaciones originados en la vida
diaria, en el curso de las comunicaciones interindividuales. En nuestra sociedad se corresponden con
los mitos y los sistemas de creencias de las sociedades tradicionales; incluso se podría decir que son
la versión contemporánea del sentido común” (p. 181)
Según Lagos (1997), para comprender la manera en que la democracia es percibida y entendida
por los ciudadanos de un país conviene considerar, por un lado las bases formales e institucionales de
la política, y por otro lado, las actitudes centrales generales que subyacen a los comportamientos y
creencias políticas. En este sentido, Villarroel (2001) rescata el papel de las RS, comprendiéndolas
como el resultado de actividades de simbolización por parte de los actores sociales, es decir como una
consecuencia de actividades constructivas y reconstructivas concernientes a una serie de dimensiones
que incluyen valores, creencias e imágenes sobre distintos aspectos del orden político. Es decir que,
éstas aluden a un modo de relacionarse con la política, característico de unos seres humanos, de una
sociedad y de un tiempo determinado.
Dentro de la Psicología social, la teoría de las RS ha dado lugar a un número importante de
desarrollos teóricos y proposiciones metodológicas. Fundada en Francia a mediados de la década del
70´, la Escuela de Aix en Provence constituye una de las líneas de investigación más sobresalientes
en el área desde la cual se erige un “enfoque estructural” que privilegia el estudio de los mecanismos
cognitivos que posibilitan la organización interna o estructuración de las RS. La más importante
aportación hasta este momento dentro de esta perspectiva es la “teoría del núcleo central” (Abric,
1976), a partir de la cual se concibe un universo representacional configurado alrededor de dos
1041
VI Congreso Marplatense de Psicología
1042
VI Congreso Marplatense de Psicología
Frente a la generalización de una visión negativa de la política tradicional y los representantes, con
el consecuente rechazo y desconfianza que este fenómeno produce en la ciudadanía,-particularmente
en los jóvenes-. (Bruno y Barreiro, 2014, Kriger, 2010; Mayer, 2009), resulta fundamental la
investigación sistemática del pensamiento colectivo que se elabora al respecto, tomando en
consideración tanto sus aspectos consensuales como divergentes. De esta forma, sin dudas la teoría
de las RS- como rama de estudio del conocimiento social-, proporciona un marco útil para el análisis
de la política en toda su riqueza y vivacidad, constituyendo una temática aún más relevante en tiempos
de crisis, donde la brecha entre la gente común y la clase política se amplía notablemente. (Catellani y
Quadrio, 1991). En base a lo detallado, se pretendió en esta pesquisa, advertir y especificar el
contenido, la estructura, las dimensiones latentes y los conglomerados de las RS en torno a la
Dirigencia política, mediante una muestra de estudiantes de la Universidad Nacional de Tucumán
(UNT) Se examinaron igualmente sus posibles diferencias de acuerdo a variables socio-demográficas
y psicosociales.
MÉTODO
Rango
Frecuencia X ≤ 2.5 X > 2.5
1
“L’Induction pour Scenário Ambigü”. Iniciado por Moliner (1992, 1993, 1994) este método permite verificar o controlar el
núcleo de RS.
1043
VI Congreso Marplatense de Psicología
2
“El Señor X es una persona muy particular en tanto es portador de un determinado tipo de cualidades individuales, así como
de una amplia gama de funciones, deberes, ideas e intereses específicos, llevando a cabo acciones orientadas a múltiples
fines y con resultados diversos en el ámbito social. Este Señor, es un DIRIGENTE POLITICO….”(grupo 1)….no es un
DIRIGENTE POLÍTICO….” (grupo 2)
1044
VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
REPRESENTACIONES
SOCIALES Si Probablemente No Probablemente No
“DIRIGENTE POLÍTICO” Si No contesta
Términos descriptores
Política 65.4 19.5 2.7 3.8 8.6
Poder 59.5 27.6 3.2 1.6 8.1
Campaña 58.4 23.2 3.2 1.6 13.5
Ambición 50.8 35.7 1.6 3.8 8.1
Dinero 50.3 34.1 2.7 3.8 9.2
Representación 47.0 28.6 8.6 8.1 7.6
Ideología 44.3 24.9 8.1 11.4 11.4
Gobierno 41.1 34.1 7.6 2.7 14.6
Puntero 37.3 36.2 8.1 7.6 10.8
Liderazgo 37.3 40.0 9.7 5.9 7.0
Manipulación 35.1 40.0 7.0 8.6 9.2
Movilización 34.1 42.7 6.5 5.4 11.4
Ideales 33.0 41.1 7.6 10.3 8.1
Sociedad 30.3 25.9 11.9 12.4 19.5
Oportunismo 29.7 41.1 7.0 10.8 11.4
Capacitación 26.5 38.4 7.0 18.9 9.2
Mentira 25.9 45.4 5.9 11.9 10.8
Descreimiento 24.9 33.0 11.4 18.4 12.4
Guía 22.2 30.3 16.2 18.4 13.0
Lucha 19.5 35.7 16.2 15.1 13.5
Presidente 19.5 35.7 20.0 11.9 13.0
Compromiso 17.8 43.8 8.6 20.0 9.7
Desprestigio 16.8 29.7 14.1 23.2 16.2
3
Se consideró porcentajes cercanos o superiores al 50% de las respuestas concentradas en la modalidad “Si” como valor
confirmatorio de la centralidad de los elementos inherentes a la RS examinada.
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Factor 1 Factor 2
REPRESENTACIONES SOCIALES Características/Aspectos Características/Aspectos
“DIRIGENTE POLÍTICO” Políticos Positivos Políticos Negativos
Compromiso .767
Cambio .732
Lucha .730
Guia .726
Sociedad .652
Ideología .651
Ideales .645
Capacitación .573
Representación .566
Honestidad .523
Movilización .483
1046
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Protesta .473
Liderazgo .430
Corrupción .743
Mentira .720
Manipulación .718
Oportunismo .692
Ambición .619
Incompetencia .596
Descreimiento .592
Falta de compromiso .586
Poder .528
Puntero .523
Campaña .513
Desprestigio .477
Dinero .430
Alpha .869 .853
Varianza Total 41.53 %
Varianza Factor 29.40% 12.13%
KMO .878
Bartlett = 1901.124 325 gl. Sig.=.000
Corrupción 1 -+---+
Mentira 5 -+ +-+
Manipulación 10 -----+ +-----+
Oportunismo 19 -------+ +-----+
Descreimiento 22 -------------+ +-----+
Desprestigio 25 -------------------+ +---------+
Falta Compromiso 9 ---------------+---------+ |
1047
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Características/Aspectos Políticos Negativos (Factor 2) 27.35 26.43 26.09 .543 184 .291
CONCLUSIONES
Los resultados alcanzados en esta investigación demuestran una configuración simbólica sobre la
dirigencia compuesta por categorías nucleares contrapuestas tales como: Política, Poder, Campaña,
Ambición, Dinero versus Representación, revelando de este modo el carácter esencialmente
polisémico de la matriz figurativa de las RS. Considerando la estructura representacional se advirtieron
dos dimensiones latentes contradictorias representadas por los factores Características/Aspectos
Políticos Positivos versus Características/Aspectos Políticos Negativos, alrededor de los cuales se
distribuyeron las categorías utilizadas. Igualmente en relación a los conglomerados, se identificaron
dos agrupamientos categoriales diferenciados y alejados entre sí, -el primero refiriéndose a una faceta
negativa y el segundo a una faceta positiva-, próximos a los factores subyacentes detectados por
intermedio del procedimiento factorial, correspondiendo a una suerte de confrontación entre un polo
ideal/ abstracto (“deber ser”), -asociado a valores e ideales democráticos como la representación, la
justicia, la honestidad, el compromiso y el sentimiento moral- y un polo real/concreto (“el ser”), -
1049
VI Congreso Marplatense de Psicología
relacionado con valoraciones y juicios negativos a partir de prácticas signadas por la corrupción, el
egoísmo, la inmoralidad, la ilegalidad y el clientelismo-, ambos indisociables en la caracterización del
campo de la política, así como de los actores que en él se desenvuelven.
En cuanto a las dimensiones de las RS del estrato dirigencial político no se encontraron diferencias
en función del sexo, la edad, la facultad, la disciplina de formación, el año de cursado, la ocupación de
cargos políticos de representación estudiantil universitaria, la participación en elecciones de
representantes estudiantiles universitarios, la posesión de antecedentes de participación política en el
mismo ámbito institucional y el conocimiento sobre detalles de la vida política que se desarrolla dentro
de la Universidad. Respecto al factor Características/Aspectos políticos Negativos, se encontró una
diferencia a favor de los estudiantes militantes en agrupaciones políticas estudiantiles, la cual permite
pensar que éstos jóvenes muy probablemente sostienen la decisión de revertir los desordenes, vicios,
disfunciones del orden político dominante y de la clase dirigente, a través del ejercicio sistemático y
comprometido de prácticas de carácter proselitista. Este dato, -vinculado a formas particulares de
objetivar elementos inherentes a la esfera pública-, devela la existencia no solo aspectos consensuales
sino también diferenciales en el universo representacional, indicando una multiplicidad de significados
posibles respecto al objeto social aquí analizado. A pesar del contraste detectado, los resultados
sugieren no obstante la existencia de una RS preeminentemente dominante y hegemónica ya que solo
pocas características socio-demográficas y psicosociales propiciaron diferencias, lo que permite
suponer configuraciones representacionales diferentes pero comparables entre si y en cierto aspecto
convergentes en una RS más global y general.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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de Provence.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
1051
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Es difícil imaginar un profesional capacitado en una adecuada articulación teórico práctica, que no
tenga competencias que le permitan articular estos dos aspectos: planteándose interrogantes por lo
que ocurre en la realidad, analizando investigaciones sobre el tema, pudiendo interpretar
observaciones o resultados antes de intervenir sobre las cambiantes demandas de la comunidad, se
dedique o no formalmente a ser un investigador.
Tal como señala Nuñez Roca (2007), “el desarrollo de habilidades para la investigación constituye
una demanda urgente en el proceso formativo del estudiante, especialmente de educación superior. La
sociedad del conocimiento exige nuevos perfiles tanto en los profesores como en los educandos con la
finalidad de que contribuyan al desarrollo de sus países a través del aporte de su investigación”.
Las autoras del presente proyecto, en consonancia con las políticas educativas, nacionales e
internacionales, sobre los estándares de formación del psicólogo en el siglo XXI han venido realizando
en etapas anteriores, estudios sobre las competencias requeridas para investigar y han diseñado un
instrumento para evaluar si los estudiantes de psicología, poseen dichas competencia, Prueba para
Evaluar Competencias en Investigación (PECI).
Para la construcción del instrumento se adoptó el modelo de Goleman y Boyatzis (en Bolivar
2004) el cual abarca aspectos que contemplan tres dimensiones: Personales, Cognitivas y Gestión de
Relaciones, con algunas modificaciones, realizadas por las autoras, incorporando la información
obtenida mediante entrevistas a expertos investigadores del medio y análisis de programas de
asignaturas relacionadas a la investigación. (Tornimbeni, S., González, C., Corigliani, S., Salvetti, M.,
2007). En la etapa 2010-2012, se realizó el estudio de las propiedades psicométricas del PECI,
(validez de contenido, de constructo y confiabilidad). El objetivo general de esa etapa 2012-2013, fue
“conocer si los estudiantes de psicología poseen competencias para investigar y observar su posible
relación con la formación de grado recibida”. Para ello se propuso como uno de los objetivos
específicos conocer si existen diferencias entre las competencias para investigar evaluadas por el
PECI, entre los estudiantes de primero y quinto año de la carrera.
En esta presentación se comparte los resultados obtenidos de las aplicaciones de la prueba de
evaluación de competencias para investigar (PECI) a alumnos de 1º y de 5º año de psicología de la
Universidad Nacional de Córdoba y de la Universidad Católica de Santa Fe, dado que las dos
unidades académicas comparten los contenidos curriculares establecidos por la resolución 343/091 del
Ministerio de Educación de la Nación. Se estima que la información obtenida es de utilidad para
determinar si los contenidos curriculares desarrollados durante el trascurso de la carrera logran la
formación del alumno en estas competencias.
METODOLOGÍA
PARTICIPANTES
1 Resolución 343/09 sobre estándares para la acreditación de carreras de Psicología del Ministerio de Educación de
la Nación Argentina
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INSTRUMENTO
PROCEDIMIENTO
RESULTADOS
Los resultados obtenidos muestran diferencias estadísticamente significativas entre los alumnos de
1º y 5º año de ambas universidades en el dominio cognitivo (significativo .000) y en el dominio
Personal (significativo .05). Los resultados de las diferencias en del Domino Gestión de Relaciones no
son estadísticamente significativos. (Tabla I).
Tabla de prueba T diferencia de medias entre alumnos de primero y quinto año de Psicología
Dominio Dominio Dominio
cognitivo personal gestión de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
relaciones
1er año 19,50 (sig. 117,30 (sig. 82,25 (sig.
0,000) 0,000) 0,77)
5to año 23,58 (sig. 120,46 (sig. 81,98 (sig.
0,000) 0,000) 0,77)
CONCLUSIONES
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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FUNDAMENTACIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
unidad de un “pensamiento coherente”, nos interesa en tal sentido trabajar sobre los discursos, la
modalidad de enunciación, los conceptos y las selecciones temáticas ya que conforman las reglas de
nuestros decires y haceres a partir de aplicar técnicas y tecnologías de la subjetividad.. Este modo de
abordar el trabajo de obrador en la tutoría, con esta caja de herramientas que implica las tecnologías
del yo aplicadas a las biografías nos permitirá comprender los pasados no dichos y no repensados que
transitan por nuestro presente histórico universitario, a partir de un redescubrimiento meticuloso, de
todas las implicaciones institucionales y comunitarias que nos recorren en la memoria social.
Finalmente, el método genealógico, nos permite enfatizar el sentido critico de las torsiones simbólicas
que atraviesan nuestras formaciones discursivas “esa materia inerte a través de la cual la historia trata
de reconstruir lo que los seres humanos han hecho dicho y de lo cual solo resta el surco, se trata de
definir en el propio tejido documental: unidades, conjuntos, series, relaciones.”(Foucault, 2005). El
objetivo de la tutoría será que los estudiantes podrán descubrir en estas formaciones discursivas, las
huellas, aquellas manifestaciones explicitas de la enunciación con marcas subjetivas anudadas al
tiempo, y sus marcas de espacio que les darán matices significativos a cada enunciación realizada; se
generará de esta manera una polifonía dialogica sobre los distintos géneros discursivos que les
permitirá profundizar sus maneras de interpretación y ampliar sus maneras de conocer las
vinculaciones entre ‘nosotros’ y los ‘otros’.
Las significaciones imaginarias de los estudiantes de ser graduado adquieren distintos matices.
1) Un grupo de estudiantes consideran que ser graduado significa contar con un nuevo campo de
acción y de saber, posibilitándolos a poner en práctica lo aprendido en la carrera, y habilitándolos a
trabajar en la profesión.
Postulan la importancia de haber cumplimentado con todas las exigencias propias disciplinar, de
ello deriva haber adquirido las destrezas, aptitudes y conocimientos necesarios para poder
desenvolverse como psicólogos.
Consideran que administrativamente ya tienen los conocimientos suficientes para desarrollar el
ejercicio de la profesión, habilitados por el título, que los acredita al desempeño en el campo de la
salud mental, en diferentes ámbitos. Enfatizan la importancia de sentir la confianza de la sociedad
para desarrollar tareas y funciones propias de su incumbencia y la posibilidad de inserción en ámbitos
de interés personal para desplegar el deseo de ejercer la psicología.
2) Significaciones imaginarias del ser graduado vinculadas a la satisfacción personal por los
objetivos cumplidos.
Otro grupo de estudiantes ponen el acento en la satisfacción personal y los objetivos cumplidos
configurados por la culminación de una etapa y el comienzo de otra nueva. Satisfacción personal, ya
que verían cumplidas las metas y objetivos pre-fijados, lo que implica haber atravesado una época
muy importante en sus vidas, un camino que les demandó muchos sacrificios, tiempos dedicados al
estudio, relegando diferentes actividades, sacrificio con responsabilidad que valen la pena.
Asimismo lo visualizan como algo muy importante y de orgullo, tanto para ellos como para sus
familias, proporcionándoles prestigio y respaldo económico y social.
1058
VI Congreso Marplatense de Psicología
Coinciden en la satisfacción y alegría que les producirá a sus seres queridos que los acompañaron
desde el comienzo en esa etapa, y pusieron sus expectativas en el logro de este objetivo.
2) Significaciones imaginarias sobre el ser graduado vinculadas a los miedos y la preocupación
por la salida laboral
Para otro grupo de estudiantes al ser graduado lo significan con los miedos, relacionándolos al
después, al como continuar una vez recibidos. Temor al no saber, al que se esfumen los
conocimientos adquiridos, y a como incorporarse al mercado laboral.
Reflexionan sobre la necesidad de contar con algún profesional de confianza que los ayude, los
guía, los oriente sobre cómo resolver determinadas situaciones. Son conscientes de que no les van a
resolver los problemas que puedan presentarse en el ejercicio de la profesión, pero consideran que
pueden ayudarlos a través de su experiencia, la cual muchas veces es más significativa para ellos que
el conocimiento que pueden acceder por medio de libros.
Enfatizan la importancia de poder contar con supervisión en la tarea.
3) Las significaciones de ser graduado con las cuestiones vinculadas a la responsabilidad y el
compromiso social:
Otra línea que emerge en el discurso de este grupo de estudiantes se vincula con las formas de
actuar responsables y comprometidas, tanto, en forma política, social y personal.
Algunos estudiantes lo consideran como la culminación de un ciclo, una recompensa al esfuerzo,
haber cumplido con sus expectativas teniendo en cuenta que esto a la vez les proporciona un lugar
diferente en la sociedad.
Manifiestan que es una satisfacción a nivel personal pues les implica un crecimiento tanto como
estudiantes y como individuos. Además esto conlleva una gran responsabilidad que es la dedicación
durante toda la vida a su profesión teniendo un compromiso con uno mismo y con la sociedad. Este
compromiso implicaría un buen desempeño en la tarea que realicen, actuando en base a la
deontología profesional, ser conscientes del título que se les ha otorgado, y cumplir de manera
responsable con sus actividades.
En este grupo algunos imaginan que el titulo los habilita a medias ya que requieren de estudios
superiores, que les permita adquirir destrezas y actitudes, para poder ocupar un espacio que les rinda
económicamente. El recibirse y obtener un titulo, trae consigo una lista de innumerables
responsabilidades, entre las que destacan la de seguir formándose, para poder ser una herramienta
de la sociedad, un agente de cambio dentro del ámbito que elijan ocupar, y poder investigar sobre los
temas que les incumban.
Coinciden en la responsabilidad y el compromiso que conlleva posicionarse en el rol, esto implica
poder dar respuestas a las demandas sociales a través de cada intervención, concreta y particular,
con una mirada global. Una mirada que sea psicológica pero también política y social. Enfatizan el
hecho de formar parte de una nueva comunidad, con nuevos derechos y obligaciones, con nuevas
reglas para cumplir y un nuevo rumbo a seguir. Un espacio de pertenencia del cual pueden apropiarse
de diferentes maneras, ya sea desdela investigación realizando los aportes necesarios, desde los
grupos de extensión, desde la docencia etc.
4) Las significaciones de ser graduado vinculada a la movilidad social y laboral e identidad
profesional
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Reflexionan sobre el cambio que esto les producirá en sus vidas, un hito en la historia personal de
cada uno, el paso de ser estudiantes, con todo un “mundo” que les pertenece, a ser un profesional con
un nuevo universo de significados diferentes y por conocer, que implica dar un paso importante en el
mundo laboral.
Para otros estudiantes es la posibilidad de trabajar en lo que les gusta, su vocación, los define
como profesionales. Coinciden en que ser graduados universitarios significa alcanzar movilidad social
y un progreso a nivel laboral
En esta misma línea de pensamiento algunos plantean que la inserción laboral para un graduado,
adquiere más posibilidades; aducen que en el mundo mercantilista en el que están insertos , donde las
posibilidades de conseguir un empleo son cada vez más escasas y la competencia cada vez mayor, el
ser graduados les proporcionaría los beneficios competir con otras personas y poder lograr un trabajo
mejor, logrando acceder a una mejor vida, entienden que el mundo capitalista que les toca vivir, exige
de títulos o de logros académicos , es decir que a la hora de elegir empleados siempre gana por sobre
el resto el que tiene un título mayor que el que solo termino la secundaria .Es por eso que también el
ser graduado genera cierto plus a la hora de conseguir trabajo o de poder hacer lo que uno le guste
para vivir.
1060
VI Congreso Marplatense de Psicología
Otros plantean no saber como incorporarse al mercado laboral imaginan un camino difícil por la
falta de experiencia, o por no tener un contacto en alguna Institución que les abra las puertas para
ejercer. Hay quienes consideran tener que “pagar derecho de piso” y trabajar sin remuneración.
Para otros el temor es que no les permita mantenerse económicamente y tengan que trabajar de
otra cosa después de tanto esfuerzo para obtener el titulo.
Algunos es la incertidumbre de no saber en qué especializarse y para varios como llevar a la
práctica toda la teoría adquirida en tantos años. Pensarse ejerciendo les genera mucha ansiedad,
temor a que su desempeño pueda afectar a otros por la falta de práctica.
Un estudiante lo llama crisis post estudio a los miedos, al hecho de sentirse perdido, de no hallarse
como persona, de no saber lo que va a ser de ellos luego de una etapa tan larga como maravillosa.
3) Imaginan su vida a partir de que obtenga el título universitario: devolviendo a la sociedad lo que
ella les dio
Un grupo de estudiantes consideran que haber tenido la posibilidad de estudiar en una universidad
públicales genera “un compromiso social” Ejercer para devolver a la sociedad a través de la practica y
de la investigación, insertarse dentro de la sociedad y no ser un participe aislado.
Otros consideran valioso que la formación académica vaya de la mano de la ética y del interés
para devolver a la sociedad lo que ella les dio, la oportunidad de poder estudiar y graduarse, Por ello,
es que consideran fundamental la vocación de servicio el comprometerse con el país, con nuestra
sociedad ayudando a las personas a resolver el padecer y sufrimiento humano.
4) Imaginan su vida a partir de que obtenga el título universitario: ejerciendo
Algunos estudiantes se imaginan en el ámbito clínico y privado, la clínica como un espacio
enriquecedor para observar de manera clara el funcionamiento, el sentir y el pensar de cada individuo
particular, como concibe cada sujeto los diferentes vínculos que va estableciendo, a lo largo de su
vida, con otras personas.
Otros ligado al trabajo en comunidad para responder a las necesidades de la misma,la practica
social y comunitaria para entender como se forman, de que manera se establecen las relaciones de las
personas en grupos, en distintas comunidades, que hace que el grupo se mantenga o se disuelva.
Siempre teniendo en cuenta al individuo como sujeto que pertenece a un grupo, como transformador
de la realidad y construcción de sentidos.
Otros un desarrollo profesional orientado hacía las instituciones (escuelas, psiquiátricos, etc), para
otros al ámbito de la investigación debido a que les permite crecer y perfeccionarse en la profesión.
Algunos interesados en la docencia en el ámbito de la psicología.
Otros enfocándose en una especialización con niños con capacidades diferentes y sus familias, en
problemas de aprendizaje, en adicciones o en la psicología deportiva.
Otros tienen proyectos de irse a Tierra del Fuego o al Sur a trabajar o trabajar y estudiar en otros
países y conocer centros de psicología en EEUU y en Europa
Un estudiante plantea la necesidad de participar en la institución colegiada que nuclea a los
matriculados aportando a las políticas no solo de regulación de la actividad sino de generación de
legalidad y apertura de espacios y ámbitos de desarrollo para la disciplina psicológica.
4) Imaginan su vida a partir de que obtenga el título universitario comprometido con su elección,
responsable, cuestión ética
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Algunos estudiantes plantean hacer las cosas con responsabilidad a partir de revisar las teorías y
los trabajos nuevos para ver cuál es la mejor opción o respuesta a la problemática presentada. El
adquirir el titulo conlleva una responsabilidad en formarse y capacitarse tanto a nivel profesional como
personal ya que el trabajo que van a realizar es muy delicado dado que consiste en trabajar con la
mente humana y sus padecimientos. En especial en el campo de la salud mental, porque tratan con
gente que sufre y que necesita de su ayuda, no es la licenciatura, la maestría o el doctorado solamente
lo que hace que una persona sea profesional si no el compromiso personal, con la constancia de
actualizarse en su campo, de brindar la mejor ayuda, la ayuda necesaria, de capacitarse, de ser
comprometido con la tarea.
Otros destacan el trabajo en equipo como fundamental considerando que el ser humano en su
totalidad es de una complejidad imposible de abordar desde una única y absoluta perspectiva y que
por lo tanto hay que admitir las limitaciones tanto personales como de la propia disciplina para
abarcarlo todo. La ética profesional es un factor a destacar para el trabajo como psicólogo tratar con
personas, con cuestiones dilemáticas, con situaciones delicadas que van a requerir decisiones de su
parte, que muchas veces resultan determinantes.
Un alumno manifiesta que poseer el título universitario conlleva un alto grado de responsabilidad,
ya que éste trabajo involucra a personas y por consiguiente se requiere un accionar ético, basándose
en el respeto de los derechos humanos, sin descuidar la integridad bio-psico-social de la persona. Los
códigos de ética pueden guiar sus acciones creen que depende exclusivamente de cada uno de ellos,
como profesionales, para poder tener un desempeño adecuado.
Otro grupo plantea establecer un nexo entre la facultad, la sociedad y la comunidad ejerciendo la
profesión de una manera idónea y comprometida investigando lo que se hace y como se hace
constantemente, dado que el objeto de estudio constituye el ser humano y el instrumento con el que
cuentan son ellos mismos considerando por lo tanto la importancia de la terapia y la supervisión.
Para otro estudiantes al elegir esta disciplina deben respetar los principios éticos ya que
consideran de gran importancia respetar a la persona que sufre evitando todo tipo de discriminación y
teniendo un cuidado especial hacia ellos donde se dé un respeto, seguridad, privacidad y de esta
manera protegiendo la información del paciente y fomentando el secreto profesional.
CONSIDERACIONES FINALES
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teórico, y a la preocupación por la inserción laboral, como así también las ventajas en cuanto a la
competencia en el mercado laboral con respecto a aquellos que no tienen un título universitario.
Al ejercicio del rol lo conciben como un actuar responsable y comprometido tanto en lo político,
como social y personal con nuevas reglas y obligaciones, actuando en base a la deontología
profesional. Destacando la necesidad de una formación continua a partir de la obtención del título con
el fin de mejorar sus prácticas en los diferentes ámbitos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
RESUMEN
A los fines de entender al currículum, hay que situarlo históricamente dimensionando que se trata
de una cuestión significativamente compleja. Así se hallan comprometidos diversos determinantes, a
saber: modalidades de enseñanza, de evaluación, ambientes institucionales, políticas internas,
externas, etc. Desde esta multideterminación de variables se alude a un currículum explícito, en
referencia a lo que está escrito; y, a un currículum oculto, que es lo que finalmente se lleva a la
práctica. La idea de pensar al currículum como proyecto político es porque se encuentra articulado a
los proyectos político-sociales, amplios, sostenidos por diversos grupos que impulsan y determinan un
currículum de cada época. En esta complejidad de factores que intervienen en la configuración del
currículum Universitario, se discute acerca de posibles cambios.
INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
EL TÉRMINO CURRÍCULO
La palabra currículo1 implica una transformación respecto al concepto que venía utilizándose
previamente: “plan de estudios”. El vocablo currículo se introduce en Argentina a comienzos de la
década del ’70. Simboliza una modificación de criterio respecto a cómo se deben definir, cómo se
deben conceptualizar y cómo se deben diseñar los programas de formación en todos los niveles de la
educación (Camilloni, 2001).
Al momento de poner en tela de juicio lo que se venía haciendo en las Instituciones en educación
respecto a lo que debería realmente hacerse, se empieza a usar el concepto currículo. La teoría del
currículo puso en duda lo que venía llevándose a cabo en escuelas y Universidades hasta principios
del Siglo XX. Dicho desarrollo se concretó junto con una revisión crítica acerca del papel social de las
Instituciones educativas. (Camilloni, 2001).
Ya no se cree que un plan de estudios es sencillamente una organización secuencial de
asignaturas. La construcción de un concepto más complejo: currículo, implica que se hallan
comprometidos aspectos diversos. Entre los que se encuentran las modalidades de enseñanza,
modalidades de evaluación, ambientes institucionales en los que esto se lleva a cabo, políticas
internas, entre otros. De esto se desprende que el currículo no se define únicamente por lo que está
escrito, sino que también tiene que ver con lo que finalmente se manifiesta en la práctica: currículo en
acción.
Desde una mirada de oferta-demanda, para algunos, el currículo en la Universidad podría
representar la oferta, propuesta para que la tome aquél que le resulte de su agrado. Esto no deja de
ser un reduccionismo que impide ver las complejas interacciones que acontecen en la configuración de
un currículum Universitario. Por esto también es que se lo define desde un aspecto explícito, que es lo
que está registrado, documentado; y, desde un aspecto oculto, que es lo que realmente se enseña.
1
El vocablo curriculum (sing). proviene del latín. En castellano: currículo. En este trabajo se utilizan indistintamente ambos
términos para referir al concepto en singular.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
va más allá de la Universidad; y, también como acción política en la que se juega la conciliación de
diferentes dimensiones, actores, intereses (Hawes, 2003).
La construcción de cualquier currículum conlleva un carácter sesgado ya que no se trata de un
conglomerado indiferente de contenidos. Ciertas directrices, que muchas veces no son concientizadas
se constituyen en importantes criterios para tomar decisiones. Al ser producto de los sujetos, el
currículum se encuentra cargado de juicios valorativos, que se expresan en un particular lenguaje de
práctica (Hawes, 2003).
Los contenidos seleccionados denotan una manera específica de percibir el mundo, el saber y la
profesión.
En relación a cuáles asuntos han de ser incluidos y cuáles no, una de las consideraciones a tener
en cuenta es la obsolescencia de los saberes a una velocidad que día a día se incrementa. Queda en
un pretérito más lejano el hecho de consolidar verdades inamovibles que el profesional debe saber
dominar. Por esto, la revisión de los contenidos debe formar parte de la dinámica curricular como
proceso permanente.
Dentro de lo que se discute respecto a contenidos curriculares, se encuentra la elección entre
extensión o profundidad. Este complejo inconveniente influye sobre los contenidos a ser incluidos y
también en las estrategias de enseñanza. La extensión hace a un gran volumen de información cuyos
riesgos son los de caer en la superficialidad. El diseño de currículum de modalidad extensiva abarca
importante cantidad de datos que conlleva los riesgos de caer en la superficialidad. Sin embargo hay
quienes argumentan convincentemente a favor de la extensión, sosteniendo que el estudiante debe
conocer acerca de la existencia de todos los campos; de lo contrario, estaría ignorando parte de la
realidad contenida en la ciencia. Por otro lado, quienes están a favor de la variable profundidad,
sostienen que si no se abordan los campos científicos con la rigurosidad que ameritan, dichos
conocimientos se van a olvidar de inmediato; y que, aunque se incluyan áreas de conocimiento más
limitadas, asegura mayor seriedad. Estas cuestiones no dejan de persistir al momento de tratar los
diseños curriculares. Podría suponerse que es posible resolverlas eligiendo algunos temas para
trabajar en profundidad y presentando el campo completo de conocimiento junto con su metodología
aunque no se las pueda luego tratar con la amplitud suficiente (Camilloni, 2001)
Es una disyuntiva sumamente delicada el discernir qué criterios se usan para la selección de los
temas que se eligen y cuáles de ellos se toman de manera más o menos parcial. Uno de los aspectos
que aquí se juega es la variable del tiempo. Se conoce que los docentes resolverían gran parte de sus
dificultades disponiendo de mayor cantidad de tiempo. Aunque el tiempo que los estudiantes utilizan es
prolongado, sigue siendo insuficiente en la media que los conocimientos a aprender se van agregando
con los años (Camilloni, 2001)
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Una idea interesante es pensar al currículum como proyecto político ya que, entre otras cosas,
favorece a cuestionar las maneras naturalizadas de percibir la realidad. Tiene también que ver con
ponerse más verdaderamente al servicio de un bien común al de todos, pensando en qué sujetos se
están formando y qué es lo que la sociedad necesita. El currículum como proyecto político propone
desempeñarse de manera más integrada y coherente desde muchos aspectos: como persona,
ciudadano, educador, contribuyendo a una mayor responsabilidad respecto a los propios actos. Tiene
que ver también con un hacerse cargo de las resistencias a los cambios, resistencias a abandonar
formas obsoletas de proceder, a estar más conscientes si es que hay complicidad en reproducir el
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VI Congreso Marplatense de Psicología
instituyente hegemónico. Desde esta idea, se pregona una mirada crítica hacia la visión ahistórica
integrando al presente los orígenes y causas previas.
El currículum como proyecto político incluye cuestiones de la vida práctica y de la cotidianeidad
integradas a los conocimientos impartidos. Se espera así, establecer mejores vinculaciones con el
contexto social, cultural y con la cultura experiencial con el objetivo final de optimizar calidad. Esta
posibilidad permite articular con los proyectos políticos sociales amplios, sostenidos por diferentes
grupos que determinan un currículum específico para cada época. De esta forma, debería tenerse en
cuenta que los déficits de ciertos individuos o grupos son efecto de una particular organización
curricular. Su estructuración hace a una selección del conocimiento; que, al reflejar los intereses de
ciertos grupos sociales, reproduce eficazmente las desigualdades al interior de la sociedad.
CONCLUSIONES
Respecto a lo que serían procedimientos de innovación curricular, habría que pensar en cambios
coherentes del currículo según los requerimientos de un contexto en el que se revisen los resultados
de las políticas de enseñanza implementados. Esto sería de utilidad para superar dificultades y
obsolescencias, en tanto y en cuanto se tome como base datos objetivos y planificación educativa
coherente. Al poner en cuestión ciertos presupuestos teóricos, categorías, principios y postulados que
sirven de directriz en el proceso de sostén de lo instituido, éstos deberían de tratarse con la máxima
seriedad y minuciosidad a los fines de quedar visiblemente clarificados. Así se estaría previniendo de
un mero cambio superficial nominal para que, en definitiva, todo quede intacto.
William Pinar, uno de los autores que trabajó sobre la teoría del currículum, sostiene que además
de ser implementado y evaluado, el currículum debe ser comprendido. Se trata de un espacio de
deliberación, interdisciplinario en el que interactúan diversas opiniones; y, en el que se recogen los
aportes de distintas teorías.
Desde una mirada comprometida con la sociedad en la que se vive; y, desde un pensar seriamente
a los procesos formativos y a la educación, puede percibirse al currículum como un proyecto integral
de la Institución Universitaria, colaborativo que representa un proyecto político en relación a la
formación, conocimiento y educación, capaz de generar responsabilidades compartidas para
transformarlas en una práctica pedagógica autónoma.
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INTRODUCCIÓN
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a la exclusión. Freire (2) habla ampliamente de estas cuestiones cuando se refiere a la educación
bancaria contraponiéndola a la pedagogía de la libertad. En el otro polo tenemos las prácticas
educativas propuestas desde la perspectiva de autonomía y aprendizaje activo. Estas se apoyan en el
supuesto de igualdad, desde una visión horizontal y dialéctica, como un ida y vuelta de saberes y no
desde la verticalidad del modelo escolarizante. El docente, como facilitador del proceso, reconoce en
el estudiante a un otro que sabe, y que realizará su propio camino en el proceso de aprendizaje. La
práctica activa propone que el estudiante se visualice a sí mismo como autónomo, en el sentido de que
él es responsable de su formación. Dándole la posibilidad de alcanzar sus potencialidades, pudiendo
aprovechar mejor las propuestas que le ofrece la institución en que se encuentra. La subjetividad de
este sujeto se forma en contacto con el docente que lejos de posicionarse por sobre él, lo reconoce y
respeta. De esta forma el alumno, el sin luz, se convierte en un estudiante y en un profesional en
formación. Esto produce un efecto motivacional y acrecienta el sentido de responsabilidad en relación
al propio proceso formativo, dando lugar a un futuro profesional crítico, activo y comprometido, sin
temor a cuestionar lo dado y a hacer propuestas.
“El vínculo educativo puede jugar, si juega bien, como una plataforma de lanzamiento a lo nuevo,
a lo por-venir” (Nuñez, 2003, p.39).
Debemos reconocer la presencia de escalas de grises en la dinámica educacional. Más allá de las
prácticas pedagógicas dicotómicas mencionadas anteriormente, también entre el discurso y las
prácticas educativas concretas podemos encontrar contradicciones propias de la lucha que se da entre
estos dos modelos o modos de hacer. En este sentido debemos evidenciar un fenómeno intermedio
que he llamado “la fantasía en la práctica educativa” y que debe visualizarse como un obstáculo en la
formación crítica. El término fantasía no debe en ningún caso ser entendido en el sentido positivo,
creativo, ni de cumplimiento de deseo como refiere Freud(3), sino todo lo contrario. En este análisis el
término fantasía debe ser entendido como algo negativo, estático y ocultador, ya que además de no
generar nada nuevo, inmoviliza y oculta la realidad. Es la ocultación la que produce la inmovilidad
desde una falsa sensación de seguridad. La contradicción que se da entre los contenidos que
propician la creencia de una práctica activa y horizontal pero que en concreto sólo limita o restringe, al
punto de tan sólo mantener la idea o fantasía de relación horizontal entre sujetos. En este caso, el
discurso ocultaría la realidad de una práctica escolarizante, verticalista e incluso en algún caso
autoritaria, tras una máscara de relación horizontal. Además culparía del fracaso a los llamados
estudiantes, en realidad posicionados como alumnos (4), desde la idea de responsabilidad que
deberían tener ellos mismos con su formación. Cuando en realidad, desde las prácticas concretas se
los aliena subjetivamente y empíricamente de su propio proceso formativo. Esta alineación se produce
a través de distintas prácticas discursivas, que se desarrollan como un sub-discurso circulante. Se
sostienen por prácticas concretas, que en conjunto contradicen el discurso de horizontalidad. En
concreto desmotivan, censuran cualquier pensamiento distinto al propuesto por el docente o la
cátedra. Callan o ignoran las preguntas o demandas. Descalifican y no dejan espacio para ningún tipo
de decisión en relación a su proceso de aprendizaje. Esta descalificación de su bagaje personal,
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relegaría al estudiante, a una actitud de pasividad, oculta tras la creencia de participación. Dada por la
mera repetición del discurso docente, que no sería más que la legitimación de la dominación, ya sea
por desconocimiento consciente de su posición y/o por un proceso de internalización del sub-discurso
circulante. Esto en relación con la fantasía explícita o implícita de que en algún momento esa relación
de asimetría se verá invertida a su favor, dando lugar a un circuito de reproducción activo o latente. Lo
peligroso de este tipo de subjetivación de la asimetría, será la ocultación de la misma. En el sistema
educativo universitario alimentaría una cadena de reproducción continua, es decir, profesionales que
forman a profesionales bajo un sistema de prácticas que tienden a reproducir la desigualdad. Oculto en
la fantasía de igualdad educativa y de horizontalidad del proceso de enseñanza-aprendizaje, que
resulta ser una fachada que impide visibilizar la desigualdad y la dominación del pensamiento.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
investigador. Esto le posibilitará manifestar sus intereses de forma responsable, poner sus valores en
juego y actuar críticamente en el campo psicológico. A tal fin, resulta necesario recuperar dentro de la
formación la concepción de eticidad (8) como proceso básico propio del ser humano. Capaz de
dictarse reglas y cumplirlas, como parte del vivir en sociedad. Entendiendo que las creencias éticas se
fundamentan desde el grupo social al que se pertenece, que las acciones se justifican desde los
modos de hacer de dicho grupo y en este sentido, de ningún modo puede dejarse librado a la buena
voluntar del estudiante el profundizar en estas cuestiones. Tampoco puede quedar en
reglamentaciones sin una praxis profunda y certera, ya que la clave para alcanzar los objetivos que la
Universidad se propone es una formación continua en las cuestiones planteadas.
CONCLUSIÓN
Poder analizar estas cuestiones sin perder de vista las necesidades sociales actuales. Nos
conduce inevitablemente a considerar de suma importancia la necesidad de incluir en la formación del
psicólogo, de manera explícita y obligatoria, contenidos de Derechos Humanos y Ética profesional,
desde los primeros años de formación y a lo largo de toda la carrera, sobre todo en el área de
investigación. Ya que son contenidos que ningún profesional, científico o investigador debería
desconocer. Sobre todo cuando se trata de profesionales que pueden en su ejercicio, poner en riesgo
la salud mental, física y/o afectar los derechos de las personas. Por esta razón, carreras con la nuestra
son reguladas por el artículo 43 de la Ley de Educación Superior y como lo cita la Resolución N° 343
del Ministerio de Educación. La necesidad de replantear la forma de aprender, priorizando el proceso
de aprendizaje, nos insta a desnaturalizar las prácticas actuales en educación universitaria. Para poder
superar la mera transmisión de conocimientos y dirigirnos hacia una educación que permita la
formación de psicólogos que puedan funcionar no sólo como simples reproductores, sino como
productores y hacedores, capaces de responder a las demandas sociales actuales. Hacer uso de la
palabra y particularmente de la pregunta, nos permite reflexionar, develar lo oculto y da lugar a
organizar propuestas en pos de acciones concretas que permitan mejorar lo dado, planteando nuevas
preguntas y construyendo nuevas prácticas. Exponer y compartir nuestras opiniones de forma abierta y
sin perjuicio de nuestra seguridad personal, tan sólo es posibilitado por condiciones sociales que ha
sido producto de una lucha histórica. Estamos en un momento que es distinto a otros que se han
vivenciado en nuestro país, con los golpes militares, las desapariciones y otros actos bochornosos que
fueron en detrimento de los intereses de la Nación Argentina. Con la pérdida de capitales económicos,
sociales, intelectuales y humanos. Por esta razón, es indispensable valorar los derechos ganados y
mantener en la memoria las luchas que lo hicieron posible. Educar en el respeto de los Derechos
Humanos y en la construcción de Valores, no sólo impide el olvido, sino que posibilita la formación de
un profesional reflexivo, crítico y comprometido, que pueda participar del proceso de promoción de una
sociedad más justa.
REFERENCIAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
(1) Perfil profesional del egresado de la carrera de Psicología. Anexo I de la Ordenanza del
Consejo superior N° 553/09
(2) Referido a las tres obras consultadas de Freire.
(3) No debe confundirse con la conceptualización que Freud hace del término fantasía en sus
obras.
(4) Nótese que el uso del término estudiante se refiere al sujeto relacionado con las prácticas
activas y el término alumno con las pasivas.
(5) Freire. (2013). trata sobre el aprendizaje significativo y la pregunta.
(6) PPEP Prácticas preparatorias electivas para las prácticas profesionales.
(7) Los resultados no intencionales son tratados por Olive. (2000)
(8) El concepto de eticidad es tratado por Samaja. (1993).
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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INTRODUCCIÓN
PRIMEROS INTERROGANTES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Consideramos importante comenzar por explicitar cuáles han sido y son nuestros interrogantes a la
hora de adentrarnos en el presente trabajo de indagación. Quizá la pregunta que insiste y oficia de
brújula en tal intento, apunta a establecer el peso de la historia en la construcción de la formación
académica y las prácticas profesionales de los psicólogos en la actualidad. Teniendo en cuenta que
hoy día evidenciamos encuentros y desencuentros entre la formación, las prácticas y las políticas
públicas en las que estas se enmarcan, nos preguntamos: ¿es posible que encontremos rastros o
marcas en los relatos de los primeros egresados, que nos permitan echar luz sobre las problemáticas
que hoy recortamos? ¿Cómo se articulaban antaño las tres dimensiones que nos interesa indagar?
¿Qué problemas se delimitaban como centrales a la hora del ejercicio profesional? ¿Qué imaginarios
animaban las prácticas? ¿Qué significaciones permanecen de aquellas, cuáles se han transformado?
Interrogantes que, lejos de buscar respuestas últimas, solo pretenden ser motor de búsqueda y
reflexión.
“…Se crea el Servicio de Psiquiatría en el Hospital Policlínico. Entonces, ahí me puse a dar
materias y entro a trabajar. Me acuerdo que eran 4 horas diarias, en el Hospital Policlínico como
auxiliar ad honorem de Psiquiatría.¿Qué hacía? Tomaba baterías de tests. Me acuerdo que en ese
momento estaba cursando Psicodiagnóstico y estaba ya aplicando los tests a la vez que cursaba.”
(RG)
En lo narrado se pueden leer las marcas de una formación con mirada integral en lo que respecta
al proceso salud-enfermedad, ligada siempre a una perspectiva de prevención primaria.
“…los recuerdos más fuertes que tengo de lo que fue la carrera de grado fue la diversidad a la que
tuve acceso y ciertas materias que me marcaron que, curiosamente, no serían las que hoy podríamos
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VI Congreso Marplatense de Psicología
pensar como troncales, porque tampoco había troncales. Sí había materias que por ahí vos podías
pensar, por las correlatividades, que eran complementarias de otras (…) Teníamos una formación que
para mí fue fundamental. Neurología o algo así, fue una materia fantástica porque nos permitió
desarrollar como un ojo clínico” (…) “Nosotros éramos promociones relativamente jóvenes en La Plata,
como psicólogos. Incluso la misma carrera, en ese momento, tenía un perfil diferente del actual. Los
docentes eran mayoritariamente médicos o psiquiatras. Era diferente. Tenía una diversidad que
agradezco haber tenido, y una conexión entre lo que es la Salud Mental y las patologías de lo que los
psicólogos llamamos orgánicas, que creo que dejaron una marca importante en lo que fue mi
formación” (E)
También la presencia de trayectos formativos no académicos que dan cuenta de una subjetividad
interesada en la formación profesional como motor y herramienta para la transformación efectiva de la
realidad en la que se inscribían sus prácticas.
“Shueder tenía una perspectiva completamente diferente del trabajo en salud mental,
trabajábamos de hecho psicólogo y psiquiatra juntos, segundo que teníamos el compromiso y la
obligación de recorrer todas las áreas de asistencia, es decir, que no era que hacías niños, o hacías
adultos, hacías todo; y tercero que ese hospital había nacido como hospital piloto en la época de
Allende y tenía una perspectiva de impronta interdisciplinaria desde su nacimiento. Que quiere decir
esto, que no era que vos ibas a pedir una interconsulta, no, era en interconsulta y ahí partíamos
psicólogo y psiquiatra”. (M)
Todo lo anterior da cuenta de un trabajo que, como refiere una de las entrevistadas“…se iba
armando así…” sin demasiados protocolos ni recetas. Aquellos psicólogos/as consideraban y
efectivamente vivían al hospital como un espacio privilegiado para desarrollar sus primeros pasos
como profesionales.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
No puede soslayarse en la lectura de los diversos relatos la dimensión afectiva puesta en juego por
estas psicólogas. Se oye en ellas la potencia del entusiasmo, el deseo y una intención clara de
arriesgarse a la creación de nuevos e inéditos dispositivos, herramientas, discursos atentos a las
problemáticas con las que se enfrentaban en los hospitales. El tanteo, la intuición, la búsqueda fueron
los puntos de orientación que llevaron a nuevas lecturas, a revisar posiciones y técnicas, todo esto en
simultáneo con las prácticas que se llevaban adelante.
Un psicólogo/a formado de manera integral, habitando una institución que históricamente
pertenece a la hegemonía médica, pero disputando allí un lugar, un territorio para el ejercicio
profesional, son los sentidos que pueden recogerse de las diferentes entrevistas.
Ana María Fernández, en su texto La mujer de la Ilusión. Pacto y contrato entre hombres y
mujeres, señala que a partir de 1950 se dan tres acontecimientos que dan visibilidad a las mujeres
como actores sociales. En primer lugar, la consolidación de prácticas transformadoras en la vida
cotidiana, que implicaron una entrada masiva de la mujer en el mercado laboral, acceso a la
educación secundaria y terciaria, cambios en los contratos conyugales y los regímenes de fidelidad,
nuevas formas de erotismo, problematización de la vida doméstica y la adquisición de códigos
públicos. En segundo lugar, la aparición de una práctica política de los movimientos feministas, que
implicó una lucha legal y laboral, una denuncia sistemática de la discriminación de género y la
institución de grupos de autoayuda. Finalmente, la problematización de una dimensión ausente en el
mundo académico: la perspectiva de género, lo cual dio lugar a la denuncia de los sesgos sexistas en
las disciplinas científicas y la reelaboración teórica y metodológica. Estos tres movimientos fueron
permitiendo, paulatinamente, la desnaturalización de las ideas de género establecidas y sus roles o
estereotipos asociados.
Sobre estas urgencias históricas, se comienzan a desarrollar prácticas profesionales, experiencias
en el ámbito hospitalario, enmarcadas en lo que luego se dio en llamar “perspectiva de género”
“…comenzó la represión nos fuimos. Entonces se empezaron a prohibir los grupos dentro de los
hospitales, después con los militares y demás. El único grupo que no estaba prohibido era el de
Maternidad porque supuestamente era un tema digno de ser visto y no se corría riesgo, entonces ahí
teníamos la oportunidad de revisar los estereotipos, las cuestiones que de alguna manera provocaban
malestar a las parejas y a las mujeres. A los hombres también”.(J)
“Nosotros lo teníamos como análisis, tal vez sin darle al principio un nombre, sino que nosotros
veíamos cómo ciertas cuestiones como el deber ser, como el sometimiento, la moral y todo lo demás,
incidía en la patologización de las mujeres madres o la culpa por dejar los hijos para ir a trabajar.
Todos esos temas que circulaban dentro de los medios profesionales”. (J)
“en el ‘69 me encuentro con quien había sido mi partera, María Crivaro, pionera en prevención en
la Maternidad de La Plata, y me invita a formar parte del equipo de prevención de Maternidad, para lo
cual teníamos que presentar un proyecto al Dr. Lagrutta que era el director de Maternidad. Entonces
ahí invito a Ana Pich, Matilde Otero, Ana Chusvarín, Estela Fernández… y realizamos un proyecto de
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cómo trabajar en el curso que ellos le llamaban Psicoprofilaxis-obstétrica, que era ahí interdisciplinario,
y cómo trabajar en las distintas salas de embarazo, puerperio, sala de espera, cómo hacer grupos de
padres que era algo que no existía en ese momento y empezar a reunirnos con los profesionales para
ir escuchando cuál es, con qué paradigmas, cuál era su discurso y empezar a descubrir tanto en la
relación con las pacientes, como con las mujeres embarazadas o las puérperas y sus parejas, cómo
había una violencia sutil y un discurso hegemónico realmente terrible. Fue una tarea muy ardua pero
teníamos muchas utopías, así que desafiamos y con ilusiones, con deseos, con deseos de cambio
fuimos transitando los años ahí en Maternidad.” (J)
Estos inicios, que surcan la dimensión del azar, son en gran parte constitutivos de todo un
andamiaje en políticas públicas, que va a encontrar su expresión más visible recién en la vuelta a la
democracia en el año 1984. Período en el cual se comienza a establecer al interior de los ministerios
de desarrollo social, ciertas problemáticas acalladas durante la dictadura: “la violencia hacia la mujer”,
“la violencia intrafamiliar”, entre otras. Estas expresiones, fueron paulatinamente incorporándose a la
letra de programas, líneas de acción y normativas, señaladas en la actualidad como políticas públicas
en perspectivas de género.
A MODO DE CONCLUSIÓN
La riqueza, amplitud e infinidad de senderos que surcan lo expresado en las entrevistas, hace
complejo un punto de cierre. Podemos decir que el mismo es solo a los fines de concluir parcialmente
lo hasta aquí tratado.
El análisis de estas narrativas, como de otras realizadas a profesionales egresados en ese
momento histórico, demuestra la complejidad de una profesión que se va poniendo en marcha y
organizando a medida que se despliegan sus prácticas. Un denominador común, o aspectos que
insisten en los diversos relatos, es no haber quedado entrampados en los instituidos o en aquellos
sentidos establecidos como absolutos. La innovación al momento de responder a lo que allí se les
pedía, ha constituido un gran desafío para aquellos profesionales que se lanzaban a creación de
nuevos campos. Dejarse interpelar e interpelar a la institución en un hacer distinto, fue la consigna, y
quizá hoy una invitación.
En relación al proceso de indagación que vamos realizando en este trayecto de investigación,
sabemos que la exploración es compleja, contextualizada, parcial, de múltiples planos. Construida de
historias personales, que no tienen pretensión de totalizarse. Son relatos moleculares, de acciones en
micro poder, que se expresaban en acciones, ilusiones, resistencias, que algunas veces devenía
proyecto, y en ocasiones institución.
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DESARROLLO
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Analizaremos a partir de 4 ejes las posibilidades y limitaciones de las TIC en el ámbito académico.
1.- Las funciones psicológicas superiores y su relación con las TIC.
Desde los primeros estadios de la humanidad, la apoyatura del hombre en elementos externos
muestran que siempre existió una apoyatura de la funciones psicológicas superiores y es desde la
cultura que éstas, sean en sus formas rudimentarias como ayuda memorias con nudos en los dedos o
hasta los ordenadores, se han amplificado y reformulado ampliando sus límites. De esta manera
acordamos que: “en lo esencial, cuando se considera que la mediación a través de artefactos
constituye la característica fundamental distintiva de los seres humanos, se está declarando que se
adopta la idea de que la cognición humana está distribuida” (Cole & Engeström, 2001, p. 69).
Si pensamos en la posibilidad de un reservorio de datos, como es la Web, y una interacción
permanente con las tecnologías por parte de los jóvenes, podremos observar cambios en las funciones
superiores alterándose fundamentalmente la memoria y la atención. Estos observables muestran otras
competencias instrumentales en los alumnos, que requieren ser tomadas por el ámbito educativo y
potenciadas para la producción de conocimientos. La cognición así se abre paso a modelos
distribuidos. Teniendo en cuenta los aportes de Vigotsky y de autores contemporáneos que trabajan
desde la perspectiva de la cognición distribuida, como Cole y Engeström (2001), encontramos que se
cuestionan a sí mismos preguntándose si tal modelo significa un avance respecto de la teoría
sociocultural rusa, y se responden afirmando que en todo caso es un avance “leve”. De alguna manera
dichos desarrollos no hacen mucho más que enfatizar la “distribución extra somática de la cognición”
(Cole y Engeström, 2001, p. 36). Gardner acuerda con este enfoque al sostener que “lejos de quedar
limitadas al cráneo del individuo, la cognición y la inteligencia están distribuidas por el paisaje”
(Gardner, 2008, p. 118). En el mismo sentido investigaciones sobre los buscadores como google son
pensados como la memoria externa del sujeto y así encontramos: “Los resultados de cuatro estudios
sugieren que cuando se enfrentan a preguntas difíciles, las personas están preparadas para pensar
acerca de las computadoras y que cuando las personas esperan tener acceso en el futuro a la
información, que tienen menores tasas de recuperación de la información en sí misma y la
recuperación mejorada en lugar de dónde se puede acceder ella. El Internet se ha convertido en una
forma primaria de memoria externa o transactivo, donde la información se almacena en conjunto fuera
de nosotros mismos...” (Sparrow, Liu y Wegner, 2011). La importancia de investigaciones de este tipo
está dada por el impacto que se produce en el alumno, cuyo sistema educativo está organizado en
función del recordar; mientras que en la esfera del mercado, el sujeto desplaza las funciones de la
memoria al dispositivo que funciona como prótesis mental. Se recuerdan menos datos y se recuperan
éstos desde los soportes externos, teléfonos y computadoras. Esta situación nos ubica en una de las
tensiones entre modelo educativo y la cognición en la actualidad.
2.- El problema del tiempo y la distribución en las clases magistrales
En tiempos fluidos, tiempos “baumianos” de atención dividida, la organización de las clases
teóricas o magistrales sufren una crisis silenciosa. Sostenidas en el prestigio del orador, titular o
adjunto de una cátedra se organizaron históricamente como el espacio de reflexión teórica donde se
“iluminaba” a la concurrencia sobre los avatares del campo disciplinar exponiéndose líneas teóricas y
contradicciones. Con una duración entre dos a cuatro horas, heredan del púlpito, la transmisión del
mundo del saber y la verdad revelada. Jorge Luis Borges en Ruinas Circulares nos acerca a una
metáfora de este mundo:
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VI Congreso Marplatense de Psicología
"... El forastero se soñaba en el centro de un anfiteatro circular que era de algún modo el templo
incendiado: nubes de alumnos taciturnos fatigaban las gradas; las caras de los últimos pendían a
muchos siglos de distancia y a una altura estelar, pero eran del todo precisas. El hombre les dictaba
lecciones de anatomía, de cosmografía, de magia: los rostros escuchaban con ansiedad y procuraban
responder con entendimiento, como si adivinaran la importancia de aquel examen, que redimiría a uno
de ellos de su condición de vana apariencia y lo interpolaría en el mundo real. El hombre, en el sueño
y en la vigilia, consideraba las respuestas de sus fantasmas, no se dejaba embaucar por los
impostores, adivinaba en ciertas perplejidades una inteligencia creciente. Buscaba un alma que
mereciera participar en el universo...”
Sin embargo las “almas a ser elegidas”, van encontrando otros caminos para su aprendizaje y este
tipo de clase podríamos pensarlas afectadas por el concepto de “economía de la atención”. Como
señaló Herbert Simon (1971) en tiempos previos a la abundancia de datos en Internet, se refiere a
cómo la riqueza de información produce una pobreza de atención. Esta tensión entre los datos y la
capacidad de atender, en el escenario de una renovación permanente de la presentación de los
mismos, debe dar lugar a un primer paso donde el aparato psíquico convierta los datos en
información, relacionando lo nuevo con lo aprendido para luego llegar al paso siguiente, la producción
de conocimiento. En tiempos de crisis de la atención, se aggiorna el modelo con algunas variantes
como las presentaciones en ppt, Prezi o las pizarras electrónicas. Como señala Restrepo (2005): “Pero
aún más relevante para los propósitos de la educación, es la concepción sobre la naturaleza de los
contenidos que subyace a la clase magistral, la de verdades concluidas. Las verdades son hechos
establecidos, dentro de la perspectiva de que pertenecen a un mundo real de objetos incuestionables
que tienen existencia propia e independiente, no solamente del estudiante, sino del profesor (von
Glasersfeld citado en Phillips, 1995). Son transmitidas en forma vertical hacia unos alumnos cuyo
papel es el de receptores pasivos, aislados y distantes. La concepción de aprendizaje en esta práctica
está basada en la memoria (Carretero, 1993, p. 27). La misma disposición de los ambientes de clase
alineados en filas y columnas que tienen como su centro de atención al profesor refleja estas
concepciones (Koop, Stanford, Rohlfing y Kendall, 2004)”
En relación a la modernización por el uso de las TIC, Area Moreira (2000), pone el foco en las
problemáticas a cambiar: El reto de futuro está en que las universidades innoven no sólo su
tecnología, sino también sus concepciones y prácticas pedagógicas, lo que significa modificar el
modelo de enseñanza universitario en su globalidad. Abordar este proceso significará reformular el
papel y práctica pedagógica del docente, planificar y desarrollar modelos de aprendizaje del alumnado
radicalmente distintos a los tradicionales, cambiar las formas organizativas del tiempo y el espacio de
las clases, cambiar las modalidades y estrategias de tutorización..."
3.- Las Narrativas transmediales.
Las narrativas transmedia son un modo de apropiación cultural en la que muchos jóvenes están
interactuando a nivel de las producciones del mercado. El término narrativa transmedia se define
como: “ La narración transmediática se refiere a una nueva estética que ha surgido en respuesta a la
convergencia de los medios, que plantea nuevas exigencias a los consumidores y depende de la
participación activa de las comunidades de conocimientos. La narración transmediática es el arte de
crear mundos. Para experimentar plenamente cualquier mundo de ficción, los consumidores deben
asumir el papel de cazadores y recolectores, persiguiendo fragmentos de la historia a través de
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canales mediáticos, intercambiando impresiones con los demás mediante grupos de discusión virtual,
y colaborando para garantizar que todo aquel que invierta tiempo y esfuerzo logre una experiencia de
entretenimiento más rica....” (Jenkins, 2008).
La lógica de las narrativas transmediales puede pensarse en educación como situaciones de
inmersión del alumno en el conocimiento, narrando en diferentes soportes que le son tanto o más
familiares que la oralidad lineal de las exposiciones o la lectoescritura tradicional. Como bien ha
observado Carlos Scolari (2012): “Para evitar una intoxicación semántica lo mejor es pensar al
transmedia como un tipo muy específico de producción cultural o discurso donde el relato: a) se
expande a través de varios medios y plataformas, y b) los “usuarios” participan en esa expansión...”.
Podemos pensar en el campo educativo una situación donde se conjugue la producción y apropiación
de conocimiento en un ambiente transmedial y colaborativo de cogniciones distribuidas.
4.- El concepto de clase invertida
En el año 2007, Jonathan Bergman y Aarom Sams del instituto Woodland Park trabajan sobre un
software que combina presentaciones en power point con videos. Muchos recursos se han agregado al
concepto de clase tecnológica, pero todos bajo la misma lógica, los aprendizajes fuera del espacio
áulico y el retorno a este para avanzar sobre lo aprendido desde otro lugar, más allá de la denominada
clase magistral.
CONCLUSIONES
Al articular los 4 ejes de esta exposición queda claro que las cogniciones en la actualidad
funcionan de manera distribuida y facilitada por la flexibilidad que aporta la tecnología en diversos
soportes y formatos. Queda repensar y trabajar sobre el núcleo duro de la educación que resiste a esta
nueva configuración del espacio y del tiempo para pasar a una propuesta que enmarque los nuevos
desarrollos del conocimiento con formas y herramientas acordes a los tiempos y la subjetividad de
nuestros alumnos. Para ello nos interesa la posibilidad de producir objetos de aprendizaje que
permitan “descargar” la carga cognitiva de la memoria y la atención. Si la transmisión de datos se da
en un entorno extra áulico, el tiempo áulico puede ser repensado para la discusión y profundización
con mediaciones fuertes que permitan la inclusión y el desarrollo de conocimiento. La utilización de
muros compartidos, twitter y otros recursos en la clase teórica, convertirán ésta no sólo en una
exposición o profundización de los objetos de conocimiento trabajados fuera del aula, sino en una
verdadera red social de distribución y producción de los mismos. Esta producción en la clase teórica se
convierte también en un objeto de aprendizaje, descargable por códigos qr o desde el sitio o aula
virtual de la cátedra. Es decir, serán objetos reutilizabes, pasibles de ser intercambiados por la
comunidad de aprendizaje y accesibles a todos aquellos que lo requieran. La actividad de los sujetos
en la red deberá ser orientada por los educadores para que las tensiones entre la proliferación de
datos y las limitaciones de la atención no naufraguen en el sinsentido y se canalicen a través de las
intervenciones pedagógicas hacia la producción de conocimientos.
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En diferentes culturas y sociedades, el trabajo ha sido visto como obligación, como derecho, como
oportunidad de fruición incluso como vicio, como en el caso de la adicción al trabajo.
“El trabajo es una actividad humana, individual y colectiva, de transformación de la realidad para
proporcionar bienes y servicios a la sociedad” 1
Esta actividad requiere de las personas una serie de contribuciones: esfuerzo, tiempo, habilidades,
destrezas, etc. Que éstas aportan buscando a cambio compensaciones, no sólo económicas y
materiales, sino también psicológicas y sociales que contribuyan a cubrir y satisfacer sus propias
necesidades humanas.
Las personas en su trabajo, pretenden la satisfacción de necesidades biológicas, de seguridad, de
relación social, de autoestima y de realización”. 2
Lo que José María Peiró nos quiere decir con esto, es que más allá de lo individual, existe una
dimensión social del trabajo que tiene que ver con la realización personal dentro de un marco social y
que algunos trabajos no ofrecen a las personas dicha posibilidad de desarrollo, es decir, sus
condiciones no garantizan o no satisfacen adecuadamente las necesidades sociales de la persona.
“La manera de entender el trabajo, individual y socialmente, influye en la forma en que se vive esa
experiencia y en los comportamientos que genera”.3
Si logramos realizar un inventario de las variables más frecuentemente evaluadas, (autonomía,
control de impulsos, creatividad, etc.), haciendo una abstracción del puesto de trabajo y de la empresa
empleadora, seguramente será más sencillo disponer de un listado de técnicas de evaluación
psicolaboral no solo porque las técnicas se desprenden de las variables evaluadas, sino
fundamentalmente porque la cantidad de técnicas es bastante menor que la de variables, y porque
cada una de las técnicas puede estar abarcando más de una habilidad laboral.
En el listado de técnicas no debemos pasar por alto la primera y la más importante de todas, que
es la entrevista. Habitualmente en el área laboral se utiliza la entrevista semi dirigida, focalizada en el
contexto laboral del evaluado.
Esta herramienta es considerada por la mayoría de los profesionales como la más completa de
todas, y constituye la fuente de información primordial en la elaboración de los informes. No obstante
hay otras que son más o menos utilizadas en función de las variables que se desee evaluar, algunas
de estas son:
Test proyectivos gráficos: Son los habitualmente utilizados para el área clínica y su bibliografía es
extensa. Los indicadores más utilizados son los descritos por Hammer en su clásico test proyectivos
gráficos (1982). Podemos mencionar los clásicos HTP, persona bajo la lluvia, entre otros.
Test de láminas: En el ámbito laboral, ha ganado popularidad en la Argentina, por su mayor
simplicidad, el Z test (zulliger, 1970)
Test de habilidades cognitivas: Para la evaluación de la inteligencia general, los más utilizados
siguen siendo los clásicos como el Test de matrices progresivas (Raven, 1958), aunque como
consecuencia de su gran difusión en ámbitos no profesionales (lo que dio lugar al estudio de las
respuestas por parte de los evaluados) algunos psicólogos optan por utilizar alternativas disponibles
aunque no siempre validadas. El DAT 5 (Bennett y otros, 2000), también es una opción completa para
la evaluación de varias habilidades cognitivas (razonamiento abstracto, razonamiento mecánico,
calculo, velocidad y precisión, etc.). La versión del WAIS-IV (wechsler, 2002), es muy poca utilizada en
el ámbito laboral, quizás a veces por medio de la administración de algunos sub test.
1089
VI Congreso Marplatense de Psicología
Test Gestáltico viso motor de Bender: Lo describiré en una categoría separada, ya que, si bien son
sumamente utilizado en el ámbito laboral, no podría incluirse en ninguna categoría anterior sin forzar al
menos la similitud. Quizás el test gestáltico viso motor (Lauretta Bender, 1968) admite una lectura
como una técnica proyectiva gráfica, pero es claro que es algo más que eso.
No todas las técnicas mencionadas son utilizadas con la misma frecuencia en el área laboral y,
estas no son otra cosa que herramientas de trabajo, que utilizaremos en caso de ser necesarias según
cada situación.
También es cierto que hay profesionales que se sienten más a gusto realizando evaluaciones con
algún tipo de técnicas que con otras, para obtener el resultado deseado.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
En este trabajo presentaremos algunas consideraciones sobre los resultados de una investigación
centrada en “Indicadores de autopercepción de mobbing”, en trabajadores y trabajadoras bancarias de
Mar del Plata, República Argentina.
Autopercepción es un concepto que tomamos de la psicología gestáltica, (Aguirre Pavón, M.:2007)
para quienes el sujeto percibe totalidades organizadas como configuraciones que aparecen en la
experiencia directa del individuo, intenta entender el sentido del sujeto desde su propia perspectiva.
Tanto desde la búsqueda en los marcos teóricos como en los hallazgos de investigación pudimos
comprender la preeminencia de ciertos factores condicionantes del fenómeno, y entendimos que su
oportuna visualización pueden ser facilitadores de los mecanismos que propicien la formación de las
condiciones para una futura erradicación del mismo en las organizaciones donde se ha detectado.
(Martín, Alfonso, 2011).
Así hemos visto que son los principales, tanto la cultura organizacional como ámbito donde se
manifiesta, como las condiciones estructurales del mercado de trabajo, la escasa legislación o la
confusión profesional en el campo del derecho, además de la falta de información como fenómeno.
Partimos de la base que el trabajo es una actividad humana que si bien se la considera como
productora de riqueza, también dentro de sus fines debe tender a la autorrealización de hombres y
mujeres. El concepto “trabajo decente” acuñado por primera vez por la O.I.T. en 1999, como respuesta
a la globalización económica, declara respecto de los principios y derechos fundamentales en el
trabajo “la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación” todo ello encuadrado
dentro de los derechos humanos y el trabajo. Asimismo con la incorporación, en 2004, del Trabajo
Decente (TD) como uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), la República Argentina
(Salinas, 2004) es uno de los primeros países que connota ”al trabajo como una dimensión estructural
de su desarrollo”, tan trascendente como la lucha contra la pobreza y el hambre y tan prioritario como
la sostenibilidad ambiental.
MOBBING
Rastreando la literatura científica sobre mobbing, se observa que aún no hay acuerdo sobre una
definición (Leyman, H., 1996), (Fornés Vives, J. 2002 & 2008), (OMS, ISPEL, ICP, IST, 2004), (Anahí
Ramos, 2004). Según Fornés, (2008): “el término ha recibido diversas denominaciones: acoso en el
trabajo (Brodsky, 1976), abuso a los empleados (Bassman, 1992), acoso moral (Hirigoyen, 2001),
psicoterror laboral (Piñuel, 2001) y en la literatura anglosajona, mobbing (Leyman, 1992) y/o bullying
1091
VI Congreso Marplatense de Psicología
(Rayner y Cooper, 1997). Todos estos conceptos aluden a comportamientos irrespetuosos en una
situación laboral que atentan contra la integridad física, psicológica….” haciendo énfasis, cada uno de
ellos en algún aspecto particular del mismo.
Asimismo existen diversas perspectivas teóricas donde en algunos casos se enfatizan las
características individuales de los agentes involucrados y otras donde se prioriza la organización del
trabajo y el contexto sociopolítico donde ellas se encuentran.
Adoptaremos la definición aportada por Heinz Leyman, (1996:1-5), considerado a nivel
internacional el experto pionero en esta materia:
Mobbing significa el proceso de atormentar, hostigar o aterrorizar psicológicamente a otros en el
trabajo.
Según sostiene este autor,
Aunque el mobbing es un fenómeno ancestral, no fue descrito ni investigado sistemáticamente
hasta principios de los 80.
Entiende que tal fenómeno es muy antiguo e inclusive ha sido documentado en todas las culturas,
pero hasta sus estudios de 1982 y publicados por el Comité Nacional Sueco de Seguridad y Salud
Ocupacional de Estocolmo (Leyman & Gustavsson, 1984) no había sido descripto sistemáticamente.
Acotamos este estudio exploratorio a dicho gremio, teniendo en cuenta los recursos del grupo
de investigación. También es oportuno decir que la factibilidad en la realización del mismo se vio
facilitada por la buena predisposición de las autoridades gremiales locales. En este caso la estrategia
consistió en detectar el comportamiento de algunas variables ya testeadas en estudios pioneros de H.
Leyman y algunas que consideramos relevantes en nuestro contexto.
Informe sobre los resultados obtenidos en el trabajo de campo
Método: Se realizaron 45 encuestas a trabajadores del gremio bancario, la muestra ha sido tomada
en entidades públicas, tanto como privadas, y en el primer caso en una sucursal regional y otra local.
Instrumento: El instrumento que denominamos Síntesis Leymann prueba piloto (SLPP) fue
concebido para recoger los datos necesarios para cumplimentar los objetivos de nuestra investigación.
El instrumento tuvo como base el desarrollado por Heinz Leymann (Leymann Inventory of
Psychological Terrorization, LIPT), el que fue adaptado a los objetivos de nuestro estudio, y que
constó de las siguientes preguntas:
1A) ¿Critican permanentemente la forma en que hace su trabajo?
(Basada en Leymann, título A) Actividades de acoso para reducir las posibilidades de la persona
trabajadora (acosada) de comunicarse adecuadamente con otros, incluido la persona acosadora,
pregunta 5)
2A) ¿Le restringen la posibilidad de hablar en el lugar de trabajo?
(Basada en Leymann, título A) Actividades de acoso para reducir las posibilidades de la persona
trabajadora (acosada) de comunicarse adecuadamente con otros, incluido la persona acosadora,
pregunta 1)
3B) ¿La gente que realiza su misma tarea lo aísla de sus colegas?
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VI Congreso Marplatense de Psicología
(Basada en Leymann, título B) Actividades de acoso para evitar que la persona trabajadora
(acosada) tenga la posibilidad de mantener contactos sociales, síntesis preguntas
12,13,14,15.)
4AB) Se ignora su presencia, por ejemplo dirigiéndose exclusivamente a terceros (como
si no le vieran o no existiera, no responden a sus preguntas).
(Basada en Leymann, título A) Actividades de acoso para reducir las posibilidades de la persona
trabajadora (acosada) de comunicarse adecuadamente con otros, incluido la persona acosadora,
pregunta 11 y B) Actividades de acoso para evitar que la persona trabajadora (acosada) tenga la
posibilidad de mantener contactos sociales, pregunta 16)
5D) ¿No se le asignan nuevas tareas, no tiene nada que hacer?
(Basada en Leymann título D) Actividades de acoso dirigidas a reducir la ocupación de la
persona trabajadora (acosada) y su empleabilidad mediante la desacreditación profesional, pregunta
32).
6N) ¿Lo obligan a enfrentarse con el público otorgándole permanentemente tareas
conflictivas?
73B) ¿Ignoran sus opiniones todo el tiempo?
(Basada Leymann, título A) Actividades de acoso para reducir las posibilidades de la persona
trabajadora (acosada) de comunicarse adecuadamente con otros, incluido la persona acosadora,
pregunta 11, título B) Actividades de acoso para evitar que la persona trabajadora (acosada) tenga la
posibilidad de mantener contactos sociales, pregunta 16
8A) ¿Le dan indicaciones mediante gritos e insultos?
(Basada en Leymann título A) Actividades de acoso para reducir las posibilidades de la persona
trabajadora (acosada) de comunicarse adecuadamente con otros, incluido la persona acosadora,
pregunta 4)
9B) ¿Atacan sus creencias morales, políticas o religiosas?
(Basada en Leymann, título C) Actividades de acoso realizadas por jefes(as) o
compañeros(as) dirigidas a desacreditar o impedir a la persona trabajadora (acosada) mantener su
reputación personal o laboral, pregunta 24.)
10C) ¿Hablan a sus espaldas?
(Basada en Leymann, título C) Actividades de acoso realizadas por jefes(as) o compañeros(as)
dirigidas a desacreditar o impedir a la persona trabajadora (acosada) mantener su reputación personal
o laboral, pregunta 17.)
11C) ¿Difunden rumores y comentarios injuriosos sobre usted?
(Basada en Leymann, título C) Actividades de acoso realizadas por jefes(as) o compañeros(as)
dirigidas a desacreditar o impedir a la persona trabajadora (acosada) mantener su reputación personal
o laboral, pregunta 18.)
12N) ¿Sufre de dolores estomacales, cefaleas, náuseas o se siente deprimido a causa
de su trabajo?
13 N) ¿Planteó alguna vez su problema a alguna persona dentro del mundo laboral?
14N ¿A quién?
Compañero o compañeros.
Jefes o superiores jerárquicos.
1093
VI Congreso Marplatense de Psicología
Delegados sindicales.
Al gremio.
Profesionales.
15 N) ¿Cuánto tiempo hace que trabaja o estuvo trabajando en ese banco?
1 0a1
2 2a5
3 6 a 10
4 11 a 15
5 Más de 15
La validez resulta de la teoría desarrollada hasta el presente y la aplicación del instrumento general
que ha sido puesto a prueba en diversos contextos con resultados satisfactorios, sus modificaciones
son adaptaciones al lenguaje local. Asimismo la confiabilidad ha sido testeada en el sentido que ha
producido resultados consistentes y coherentes.
Procedimiento: El cuestionario fue autoadministrado en presencia del Delegado gremial
correspondiente en cada sucursal, siendo su respuesta voluntaria y anónima. De este modo se
pretendió la objetividad mediante la estandarización en la aplicación del instrumento (mismas
instrucciones y condiciones para todos los participantes) y en la evaluación de los resultados
(Sampieri, et. all 2006:287)
Si bien el universo observado (218) y la muestra (45) no son extensas, y tampoco sin la pretensión
de realizar generalizaciones, nos presentan algunas realidades que nos permitirán profundizar
posteriormente en los aspectos que resultan notables en nuestros resultados.
RESULTADOS
Sabemos que lo que debiera ser deseable, el trabajo decente, se aleja en varios casos ante la
presencia de los estresores detectados, que nos dan idea que en el universo observado su incidencia
tiene una frecuencia notable.
En nuestra muestra aparecen 18 casos en los que al menos han informado uno o alguno de ellos, y
en su conjunto en 7 se presentan asociados a trastornos físicos. No podemos afirmar con rotundidad
que aquellos sean la causa de estos, lo que en un futuro se tratará de investigar a fin de eliminar
correlaciones espurias. Pero tampoco debemos descartar que se encuentren en las etapas iniciales de
mobbing donde el trastorno psicológico aún no se manifiesta en síntomas físicos, tal como se funda en
los marcos teóricos revisados, que entienden que el mobbing se trata de un proceso.
En la mayoría de los 18 casos con estresores denunciados, se han observado que aparecen
simultáneamente con 3 de ellos, siguiéndolos los de 2 y 1 en frecuencias similares; habiendo un caso
en el que denuncian 6 estresores y asociados a los trastornos físicos indagados.
El estresor más frecuente ha sido en el que perciben que hablan a sus espaldas (11 casos),
siguiéndolo en orden el que ignoran sus opiniones permanentemente (6 casos). En su mayoría ambos
se presentan en las mismas personas. El siguiente es el ataque a las creencias morales, políticas o
religiosas (5) y la difusión de rumores y comentarios injuriosos (4). Entre los mencionados solamente
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VI Congreso Marplatense de Psicología
en casos aislados aparecen como único indicador. En general se encuentran asociados entre dos a
cinco stresores. Del resto de los consultados solamente uno no tuvo registro.
Del total, solamente 3 empleados no recurrieron a plantear su problema a alguien del ámbito
laboral, y la mayoría que sí lo hicieron siempre fueron a dos personas o más, siendo el registro muy
parejo entre compañero/a o compañeros/as, jefes o superiores jerárquicos, delegados sindicales y al
gremio. Ello nos indica que en la mayoría de los casos las personas consultaron con alguien. Y una
minoría de casos no consultaron. Quedaría por averiguar en estas mayorías de casos que consultaron
cuáles son las respuestas que han logrado.
Si bien la muestra fue muy pareja entre empleados de bancos públicos (22) como de privados (23)
esta variable no aparece como significativa para nuestro estudio. Respecto de la antigüedad en el
empleo se mantuvieron las proporciones en los rangos entre 1 a 5 años hasta más de 15 años.
Conclusiones
Habiendo realizado una pequeña muestra dentro de algunas organizaciones del gremio bancario
de la ciudad de Mar del Plata, se han observado algunos indicadores que pueden alertarnos sobre la
aparición de casos de mobbing. La denuncia de ellos nos estaría informando acerca de
comportamientos seguramente anclados en una cultura organizacional donde puden haber sido
naturalizados.
Es preciso visualizarlos y de este modo alertar, no sólo a quienes los pueden estar padeciendo,
sino también a la administración, quien debería intervenir, para garantizar los derechos humanos de
los acosados y también los intereses de la organización, que siempre es perjudicada cuando ello
acontece.
Hasta el presente, tanto la bibliografía como nuestra experiencia, nos indican que cuando se pone
en evidencia el acoso, éste tiende a desaparecer.
Seguramente este trabajo nos alienta a continuar con estudios más profundos, apelando a
metodologías y métodos múltiples para su mayor comprensión.
Tratándose de una problemática muy antigua en el mundo del trabajo, los estudios recientes no
hacen más que ponerla en evidencia. Como sabemos la resolución de un problema comienza con su
correcta visualización. Es así que no solamente debe ser realizado desde el ámbito académico sino
que debe difundirse para que sea en incluida en normativas del trabajo y fundamentalmente
concientizada por todo tipo de organizaciones.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN Y ANTECEDENTES
El tema elegido como campo de investigación para la elaboración de una tesis doctoral es el
fenómeno definido como ‘acoso laboral’ (mobbing), que se integra al conjunto de temas abarcados por
el Proyecto UBACYT:“Hacia un modelo comprensivo de las condiciones de emergencia y de las
consecuencias psicosociales del acoso y la violencia en el trabajo. Insumos para intervenciones
preventivas y resolutivas orientadas a la salud del trabajador”; ambas investigaciones bajo la dirección
de la Dra. Liliana E. Ferrari.
El trabajo puede tener una influencia positiva sobre la salud de un individuo -satisfacer
necesidades de supervivencia, contribuir al desarrollo de capacidades intelectuales, dar identidad al
sujeto, posibilitar la autorrealización, entre muchos otros-, pero también puede influir de modo negativo
-accidentes laborales, enfermedades profesionales, sentimientos de deshumanización y alienación-: es
evidente que, sin salud, el trabajo puede llegar a ser muy difícil e incluso imposible (Pérez Bilbao,
2004).
Son fundamentales los aportes de investigaciones que ya existen sobre el acoso: a) los que
explican su genealogía (Lorenz,1960); b) los que exponen diferencias dadas por las causas que lo
originan (Leyman,1996); c) o sobre las tipologías del fenómeno (Hirigoyen, 2001); d) las
investigaciones que explican sus consecuencias a nivel individual, en las víctimas; e) las que estudian
sobre tipología del acosador (Piñuel, & Zabala, 2003); f) o sobre las causas de su emergencia en
organizaciones (Filippi, 2005; Ferrari, 2009, 2011).
Cada organización genera diferentes tipos de riesgos y tiene una cultura organizacional propia que
la distingue e identifica, reflejada en las actitudes de los empleados, sus creencias acerca de la
organización, sus valores comunes y conductas dominantes sobre lo que está aceptado o no a nivel
organizacional. La violencia en el lugar de trabajo ya no es un fenómeno episódico, sino un problema
enraizado en factores más amplios, de orden social, organizativo y cultural; a causa de ello se
obstaculizan las condiciones para el trabajo. La OIT designa al mobbing como la nueva plaga laboral
del siglo XXI, por ello promueve la incorporación de legislación al respecto en todo el mundo. El
impacto del fenómeno no sólo termina con la salud del personal, sino que aniquila las relaciones
interpersonales en los lugares de trabajo (Organización Mundial del Trabajo, 2004).
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El objetivo de esta comunicación es presentar algunos resultados del abordaje cualitativo a partir
del análisis e interpretación de dos grupos focales. Este trabajo está inscripto en una investigación
mayor que se propone: identificar, describir y comprender factores y procesos intervinientes en la
emergencia del fenómeno de acoso laboral y violencia psicológica en el lugar de trabajo. Para tal fin se
diseñó un abordaje metodológico de tipo cuanti-cualitativo, que utiliza focus-group, y entrevistas a
informantes clave que aportan datos para la creación de escalas construidas ad-hoc para relevar
aspectos ligados al poder y la comunicación organizacional y su vinculación con las situaciones de
violencia laboral, además de otras escalas que miden clima, condiciones y medio ambiente de trabajo,
situaciones de acoso laboral y sintomatología con escalas del VAL-MOB que evalúa riesgos de
mobbing en contextos organizacionales (Deitinger, et al. 2007) y su versión revisada y adaptada
(Ferrari, 2007).
Para tal fin, se han realizado cuatro grupos focales que reúnen a las personas según sean
profesionales o no profesionales, de organizaciones públicas o privadas, desconocidos entre sí. Para
esta presentación, se exponen resultados del análisis discursivo de dos de los mencionados focus-
group, cuyo elemento de agrupación es “ser empleados públicos no profesionales” y “ser empleados
públicos profesionales”. Esta técnica permite trabajar con tópicos seleccionados y prefijados con
antelación según los objetivos de la investigación. Aporta la posibilidad del tratamiento y análisis de lo
producido por el grupo como un discurso único y singular en cuanto a su configuración de sentido. De
los posibles análisis (Ibáñez, 1979) informacional, estructural y social-hermenéutico, en este caso se
presentan algunas categorías emergentes del análisis social-hermenéutico.
-Caracterización del grupo focal “ser empleados públicos no profesionales”: El grupo está formado
por nueve personas empleadas en organizaciones públicas de servicios con edades que oscilan entre
los 28 y los 54 años, de ambos sexos: tres mujeres y seis varones. Están representados en el grupo
organizaciones de salud, de la administración pública local y nacional, de loterías y casinos, y
educativas de nivel medio y universitario.
-Caracterización del grupo focal “ser empleados públicos profesionales”: En este caso el grupo está
compuesto por ocho profesionales que, si bien expresan tener relaciones laborales con privados en
algunos casos, todos reconocen que su trabajo principal es vinculado a su puesto estatal. Sus edades
oscilan entre los 28 y los 45 años, pertenecen a ambos sexos: cuatro son mujeres y cuatro son
varones. Están representadas en el grupo organizaciones judiciales, de educación media,
universitarias, municipales, hospitalarias, y organismos de fiscalización nacionales, empresas de
transporte y logística, alimentarias, administración de negocios.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
A partir de las producciones discursivas de los grupos resultan interesantes para su comparación dos
categorías emergentes: los Factores que facilitan el acoso laboral o situaciones de violencia y su
Autopercepción laboral como empleado público, como se puede observar en la tabla 1.
Se observaría que, para los empleados públicos profesionales, su emergencia estaría ligada a lo
relacional y al medio ambiente laboral; así como para los empleados públicos no profesionales estaría
vinculado a las faltas de controles a las jefaturas, sobre las que denuncian abusos de poder, a
organizaciones indiferentes, y a programas de selección de personal deficitarios.
Es interesante puntualizar que los dos grupos reconocen la existencia de variables
organizacionales e individuales ligadas al fenómeno del acoso laboral. Identifican algunas de carácter
organizacional, en las cuales prevalecen, según las frecuencias en sus respuestas, las condiciones
laborales para los empleados públicos profesionales, así como los empleados públicos no
profesionales caracterizan a las organizaciones de indiferentes y con prácticas de selección de
personal deficientes. Por otra parte, las variables individuales que enuncian los empleados públicos
profesionales estarían centradas en lo relacional, y para los empleados públicos no profesionales, la
emergencia del maltrato laboral se relacionaría más con el abuso de poder, ya sea por el cargo o las
características personales de sus jefes. Y con respecto a las variables organizacionales, para los
empleados públicos profesionales las pérdidas económico-productivas y la calidad de lo producido.
Un participante del grupo de empleados públicos profesionales expresa:
Podemos, soportar y vos vas a tener que soportar, y yo también tengo que soportar, porque
tenemos que vivir, lamentablemente. Por más que tengamos profesiones. El hecho de soportar,
también genera violencia, me parece.
1099
VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN FINAL
En síntesis, una reflexión que se desprende del análisis del discurso de ambos grupos es que los
participantes pueden identificar con claridad elementos decisivos como factores que facilitan la
emergencia del acoso laboral y violencia en los lugares de trabajo.
A diferencia de las primeras perspectivas analíticas sobre el fenómeno y lo que algunos
investigadores de la temática resaltan (Piñuel y Zabala, 2005), estos grupos se distancian de la
comprensión del acoso laboral como proceso que dependa solamente de los rasgos de personalidad –
característicos o atribuidos – de los actores partícipes en la díada acosador-acosado/a.
1100
VI Congreso Marplatense de Psicología
Así, los hallazgos aquí expuestos parecieran abonar a la perspectiva de aquellos expertos que
introducen la denominada ‘variable ambiente’ (Zapf, Knorz & Kulla, 1996) al debate acerca de la
violencia en los espacios de trabajo y promueven que en su configuración intervienen otros actores y
otras dimensiones –como las socio-organizacionales procesuales y estructurales –, por lo que se
trataría de un proceso colectivo o comunal (Ferrari et al., 2013) que ha de ser abordado en su
especificidad, es decir, en las dinámicas y relaciones laborales mismas.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Deitinger, P. et al (2007) Val Mob. Documentos de trabajo, Escala y Factores. Dipartimento di Medicina
del Lavoro, Laboratorio di Psicología e Sociologia del Lavoro. Roma, Italia.
Ferrari, L. (2007). Versión revisada y adaptada del Val-Mob. Grupo de Investigación, Facultad de
Psicología, UBA.
Ferrari, L.; Filippi, G.; Cebey, M. C.; Córdoba, E. & Trotta, M. F. (2013). Hacia una comprensión
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Investigaciones, Facultad de Psicología, UBA. ISSN 0329-5885 (impresa). ISSN 1851-1686 (en
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Ferrari, L.; Filippi, G. & Trotta, M. F. (2011). ¿Moderadores o condicionantes estructurales del campo
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Investigaciones. Instituto de Investigaciones, Facultad de Psicología, Universidad de Buenos
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subjetivos e intersubjetivos de la precarización laboral”. Instituto de Investigaciones. Memorias
Facultad de Psicología UBA. 2009
Filippi, G. (2005) “Los protagonistas del mobbing: Características psicológicas del acosado y del
acosador”, ponencia en el Seminario organizado por la Comisión Tripartita Comisión Tripartita de
igualdad de trato y oportunidades entre varones y mujeres en el mundo laboral y la OIT. Buenos
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Hirigoyen, M. F. (2001). El acoso moral en el trabajo. Barcelona, Editorial Paidós.
Ibañez, J. (1979). Más allá de la Sociología. El grupo de discusión: técnicas y crítica. Madrid. Editorial
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del trabajo (OIT). “Serie protección de la salud de los trabajadores”. Nº 3. La organización del
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NIVEL DE Cantidad de %
ENGAGEMENT sujetos
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ALTO 37 4
6%
MEDIO 42 5
3%
BAJO 1 1
%
80 1
00%
Femenino
NIVEL DE Cantidad de %
ENGAGEMENT sujetos
ALTO 27 55%
MODERADO 21 44%
BAJO 1 1%
49 100%
Masculino
NIVEL DE Cantidad de %
ENGAGEMENT sujetos
ALTO 10 32%
MODERADO 21 68%
BAJO 0 53%
31 100%
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ALTO 3 60%
MODERADO 2 40%
BAJO 0 0%
5 100%
más de 50
ALTO 3 75%
MODERADO 1 25%
BAJO 0 0%
4 100%
n “planeamiento del futuro”, no se encuentra ningún sujeto con valores inferiores y se encuentran
gran cantidad de sujetos ubicados en el extremo superior (el 38% de la muestra). Es decir que en la
mayoría de esta muestra los sujetos cuentan con grandes posibilidades de alcanzar metas y distintos
objetivos personales.
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SUPERIOR 30 38%
80 100%
En consideración con los Recursos Sociales, en general se obtuvieron valores medios y altos,
siendo solo el 8 % de la muestra la que obtuvo valores inferiores al término medio.
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En el grafico se puede visualizar claramente que la mayoría de los sujetos se ubican en niveles
superiores al término medio.
Mar del Plata es una ciudad turística por excelencia desde su creación y tiene aún hoy día, la
consideración de todos los habitantes argentinos de ser la principal ciudad de veraneo del país. En los
últimos años, además, se han implementado diversas estrategias en coordinación con el poder político
provincial y nacional bajo el lema “ mar del lata”, para fomentar la actividad turística durante los 12
meses del año.
En relación a ello, las empresas de servicios de la ciudad, y más específicamente el sector
hotelero, se vieron ampliamente beneficiadas por contar con la afluencia masiva de personas
distribuidas de forma más homogénea durante todo el año. Estos cambios generaron mejoras en el
nivel de ocupación incluso en periodos del año que otrora resultaban críticos.
De la mano de un incremento en la demanda, se abrió un nuevo abanico de posibilidades de
negocios para los hoteles que comenzaron a recibir mayor público, sumado a los cambios en el mundo
de la mano de la globalización que amplió la posibilidad de mercados antes inalcanzables.
Esto, puso de relieve la importancia de lograr diferenciarse del resto de los competidores,
nacionales e internacionales, a través de la calidad de servicio prestado como valor añadido a las
comodidades propias de cada segmento (jerarquizado por estrellas) como principal herramienta
competitiva en el sector.
En relación a lo antes dicho y pensando su relevancia en esta temática, si bien este es un estudio
exploratorio utilizado para observar el comportamiento de las variables elegidas (resiliencia y
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engagement) en los dos hoteles seleccionados (Hotel 4* y 5* de la misma firma de la ciudad de Mar
del Plata), el mismo puede tener cierta implicancia tanto para las organizaciones estudiadas como para
los empleados de las mismas.
Atendiendo a los resultados de la muestra total, los niveles de engagement muestran una
tendencia elevada, perteneciendo el 46% de la muestra al nivel “alto” de dicha variable y el 53 % a
valores moderados. Similares valores, misma tendencia, se presenta al dividir la muestra por hotel.
En relación a la resiliencia, resulta interesante observar que la misma tendencia se presenta en
esta variable, encontrando para todos sus factores valores medios o superiores al término medio en la
muestra total.
Si se analizan estas conclusiones y se piensan dentro del contexto laboral actual, retomando el hilo
conductor del presente trabajo, se sostiene que es necesario que las distintas empresas promuevan en
los trabajadores el desarrollo de la capacidad de resiliencia y una vinculación engaged con su labor.
De ese modo, podría pensarse que se conseguirían mejores niveles de desempeño y mayor
satisfacción laboral tanto para el trabajador como para las organizaciones en general.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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DESARROLLO
Según datos arrojados estadísticamente cada vez es mayor la cantidad de alumnos que poseen
dificultades en la promoción de las materias curriculares que requieren de la lectura y comprensión de
textos. Debido a que uno de los medios utilizado con mayor frecuencia en las instituciones escolares
es el texto escrito, el estudiante debe desarrollar habilidades y destrezas que le permitan procesar
adecuadamente la información contenida en ellos, con el fin de lograr su comprensión y su
aprendizaje. (Poggioli, 1997).
Si el alumno lograse un adecuado uso de los métodos, los hábitos y las técnicas de estudio
desempeñaría una buen rendimiento académico y alcanzaría una buena calidad de aprendizaje el cual
solo se logrará mediante la comprensión de los conocimientos (Simon, 2003).
Frente a lo expuesto, esta investigación tiene como finalidad identificar y explicitar los métodos, los
hábitos y las técnicas de estudio utilizadas actualmente por los alumnos de primer año del nivel
secundario de un colegio de la ciudad de La Plata.
Realizando un breve recorrido histórico, se pueden mencionar diferentes investigaciones referidas
al tema que nos concierne.
En una de ellas que tuvo como finalidad describir los métodos de estudio más efectivos para el
logro del éxito académico, Barrios (1980) demostró que los hábitos de estudio eficientes hacen el
aprendizaje más placentero y esto influye positivamente en el éxito académico del alumno.
Rondón (1991) demostró que los hábitos y técnicas de estudio tienen una importancia significativa
en el mejoramiento del rendimiento estudiantil ya que garantiza un entrenamiento en técnicas e
instrumentos necesarios para la adquisición de nuevos aprendizajes, un mayor bagaje de
conocimientos y adaptación a la cambiante vida moderna.
Lara y Barradas (1997) señalan que los estudiantes con métodos, hábitos y técnicas de estudio
obtienen un mayor rendimiento académico en comparación con los que no lo tienen.
Las investigaciones efectuadas por Reyes Sánchez (1998) sostienen que el concepto de hábitos
de estudio está íntimamente relacionado con el manejo de técnicas adecuadas para leer y tomar
apuntes, con la apropiada distribución del tiempo, la concentración en el estudio, el lugar para estudiar,
entre otras. Es decir, es muy importante lograr organizar y desarrollar su propio proceso de
aprendizaje.
Diversos estudios como los de Lamer, Onwuegbuzie y Stale (2001) han reportado que los
métodos, los hábitos y las técnicas de estudio de los alumnos son aspectos que influyen
significativamente en sus rendimientos académicos.
En otro trabajo de investigación realizado por Albarello, Rimoli, Spinello (2005), consideran las
estrategias de aprendizajes como su posible incidencia en el logro de las metas académicas previstas,
1110
VI Congreso Marplatense de Psicología
como así también el nivel de autonomía del alumno para gestionar críticamente sus aprendizajes,
ponderando fortalezas y debilidades en este proceso.
Ruiz Sosa (2005) en su investigación afirma que a nivel educativo, los hábitos de estudio facilitan el
proceso de aprendizaje ya que provocan en el estudiante actos repetitivos que lo llevan a la
culminación del proceso de aprendizaje. De este modo, los hábitos facilitan el aprendizaje significativo,
y dentro de ellos, la lectura y la escritura son relevantes ya que proporcionan una clave para adquirir
conocimiento en todos los otros dominios del aprendizaje.
Luque (2006), demostró en una investigación realizada que en los hábitos de estudio se deben
reforzar todas las dimensiones o categorías como el espacio y ambiente de estudio, el tiempo y la
planificación de estudio y los métodos de estudio puesto que considera significativa su influencia en el
rendimiento académico de los alumnos.
A partir de la revisión presentada, la mayoría de las investigaciones realizadas concluyen que los
métodos, los hábitos y las técnicas de estudio de los que se vale el alumno son indispensables para
lograr un estudio estratégico y eficaz (Tresca, 2012).
Este marco referencial se realiza con la finalidad de definir en profundidad los conceptos de:
estudio, métodos de estudio, hábitos de estudio y técnicas de estudio.
En primer lugar, abordaremos el concepto el estudio.
Si tomamos la definición del diccionario de la Real Academia Española, el estudio proviene del latin
studium que significa el esfuerzo que pone el entendimiento aplicándose a conocer algo, es un trabajo
empleado en aprender y cultivar una ciencia o arte.
Según Thomas y Rohwer (1986), el análisis y la reflexión sobre el proceso de estudio ha permitido
determinar algunas de sus características, las cuales se presentan a continuación. En primer lugar,
estudiar es un proceso deliberado, que realizan los estudiantes y que demanda tiempo y esfuerzo. En
segundo lugar, mientras que aprender es una actividad que tiene lugar en un contexto social donde
otros planifican, dirigen, guían y evalúan, estudiar es una actividad individual que requiere que el
estudiante mantenga la atención y se comprometa en alguna actividad de práctica, de elaboración, de
organización o de transformación de la información. En tercer lugar, estudiar involucra contenido, es
decir, implica la adquisición de conceptos, hechos, principios, relaciones, procedimientos, etc. En
cuarto lugar, estudiar depende del contexto, lo cual quiere decir que la incidencia o la efectividad de
una estrategia o de un proceso difieren en la medida que existan variaciones en las condiciones de las
tareas de aprendizaje. Finalmente, estudiar es un proceso orientado a metas, lo cual quiere decir que
cuando estudiamos, lo hacemos en función de unos objetivos o metras pre-establecidos que
pretendemos alcanzar en un determinado lapso.
Vigo Quiñones (2008) señala que el estudio es el proceso realizado por un estudiante mediante el
cual trata de incorporar nuevos conocimientos a su intelecto, en otras palabras es el proceso que
realiza el estudiante para aprender nuevas cosas.
Haciendo referencia a la licenciada en psicopedagogía Tresca (2012), el estudio es un proceso
deliberado por el cual una persona implementa estrategias para aprender y almacenar en su memoria
información específica.
En segundo lugar, para abordar el concepto de método de estudio, se describirán diferentes
métodos propuestos por diversos autores.
1111
VI Congreso Marplatense de Psicología
Poggioli (1997) propone métodos de estudio diseñados por diversos investigadores. Entre ellos,
describe los siguientes:
*El método SQ3R de Robinson (1961), a pesar de haber sido diseñado a principios de la década
del sesenta, es un método bastante utilizado en los medios educacionales y una referencia obligada de
los artículos relativos al estudio. Este método recibe su denominación por sus siglas (en inglés) que
representan los cincos pasos a seguir:
1) Survey (S): Revisar o inspeccionar, de manera general, el contenido del material
de estudio incluyendo sus títulos y subtítulos, sus ayudas tipográficas, sus esquemas o
resúmenes. Es como dar un vistazo general inicial para saber de qué se trata lo que se
desea estudiar.
2) Question (Q): Hacer preguntas a partir de los títulos y subtítulos del material.
3) Read (R): Leer el material de estudio y buscar respuestas a las preguntas
elaboradas en el paso anterior.
4) Recite (R): Repetir o recitar con las propias palabras las ideas contenidas en el
material de estudio.
5) Review (R): Revisar o repasar el contenido del material en su totalidad,
comprobando las respuestas a las preguntas realizadas y tratando de recordar la
información.
En el año 1979, Thomas y Robinson revisaron este método e introdujeron dos pasos más, creando
así el SQ5R. Estos últimos pasos son:
1) Record (R): Registrar las ideas más importantes contenidas en el material de
estudio.
2) Reflect (R): Reflexionar sobre el material y emitir juicios críticos y valorativos.
*El método de Request de Pearson y Johnson (1978) se basa en la elaboración de preguntas,
después de haber leído un texto en forma silenciosa. El texto se utiliza para generar preguntas, pero
no para responderlas y las preguntas que se hacen deben estar referidas a diferentes aspectos, no
solamente a su contenido, sino también a aspectos de carácter inferencial, de vocabulario, de
relaciones, etc. A partir de esta metodología, Pearson y Johnson (1978) desarrollaron una taxonomía
de preguntas que, según estos autores, influye de manera diferencial en la codificación de la
información contenida en el material de estudio.
Por su parte, Tresca (2012) afirma que el método de estudio abarca una serie de pasos a seguir a
la hora de estudiar para favorecer una mejor organización del tiempo y del trabajo. Haciendo referencia
a dichos pasos, ella propone los siguientes cinco:
1) Revisar los temas que se deben estudiar y organizar el material de estudio
2) Leer y subrayar o destacar de alguna manera las ideas que consideramos importantes
tomando como referencia lo visto en clase o la carpeta.
3) Aplicar la técnica de estudio que consideramos más adecuada.
4) Memorizar
5) Autoevaluarse.
Tresca agrega: “Para optimizar aun más el método, es bueno aconsejar a los chicos que midan
aproximadamente cuánto tiempo les lleva cada uno de estos pasos, para poder organizarse mejor.”
(2012, p. 88).
1112
VI Congreso Marplatense de Psicología
En tercer lugar, se realiza una descripción sobre el concepto de hábito de estudio según diversos
autores.
Rodón (1991) define a los hábitos de estudio como conductas que manifiesta el estudiante en
forma regular ante el acto de estudiar y que repite constantemente.
Cartagena Beteta (2008) postula que los hábitos de estudio son el resultado de una ordenación
previa de la actividad o planificación y un cumplimiento continuo del plan propuesto. Expresa que es
necesario señalar que los hábitos se crean por repetición y acumulación de actos, pues mientras más
estudiemos, y lo hagamos de manera más regular en el mismo lugar y a la misma hora, se podrá
arraigar el hábito de estudiar. Al utilizar el término de hábitos de estudio se está expresando la manera
que acostumbra a emplear el estudiante para asimilar unidades de aprendizaje, su aptitud para evitar
distracciones, su atención al material especifico que está siendo estudiado y los esfuerzos que realiza
a lo largo de todo el proceso por medio de la práctica en la realización de las tareas escolares.
En cuarto y último lugar, se desarrolla el concepto de técnicas de estudio según Tresca (2012)
quien confirma que es necesaria una enseñanza explicita de las diversas técnicas de estudio para que
los alumnos las adquieran y aprendan a manejarlas adecuadamente. Al hablar de técnicas de estudio,
Tresca hace referencia a una serie de herramientas específicas (resumen, esquema, cuadro
comparativo, etc.) que favorecen el aprendizaje cuando uno debe recordar información para un
examen.
Además de leer y comprender lo que leen, los estudiantes necesitan recordar la información
aportada por los textos. Es aquí donde juegan un papel primordial las mencionadas técnicas de
estudio, que no son otra cosa que modos de organizar la información para favorecer una mejor forma
de recordarla y acceder a ella cuando sea necesario. Su aplicación implica un procesamiento de la
información que varía en cada caso, pero que siempre supone un papel activo del sujeto en relación
con el contenido a estudiar. Es por esto que se las denomina también técnicas de organización de la
información.
En su libro, Tresca (2012) menciona las siguientes técnicas de estudio:
- El subrayado: implica localizar subrayando aquellas palabras o frases que contienen las
ideas clave para comprender el texto con el objetivo de destacar de alguna manera las ideas
centrales diferenciándolas de los detalles.
- Los esquemas: permiten expresar gráficamente las ideas fundamentales de un texto,
ordenadas según sus relaciones lógicas, especialmente en función de la inclusión de las partes
de un todo (categorías). Su función principal es la de permitir la percepción clara y rápida de la
estructura de un texto.
- El cuadro comparativo: su objetivo es poder establecer similitudes y diferencias entre los
mismos aspectos de distintos fenómenos, lugares, personajes históricos, etc. Exige identificar
en el texto las categorías de comparación de las variables y reorganizar la información para
ubicarla en las celdas.
- El mapa conceptual: se utiliza como un medio para visualizar conceptos y relaciones
entre conceptos. El objetivo es representar visualmente las relaciones más importantes entre
las ideas de un texto uniendo dos o más conceptos con palabras enlace.
1113
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Vigo Quiñones, A. (2008). Influencia de los hábitos de estudio en el rendimiento académico de los
estudiantes del 1º año del Instituto Superior Tecnológico Huando–Huaraz, Tesis de Maestría no
publicada, Universidad Cesar Vallejo de Lima, Perú.
Virgilio Simon, (2003), Universidad Mayor de San Marcos, Influencia de los hábitos de estudio y
autoestima en el rendimiento académico de los estudiantes de la escuela Profesional de Agronomía de
la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann, Lima, Perú.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
MOTIVOS Y ANTECEDENTES
Tal como expone Fernández Liporace (2001), los organismos internacionales plantean la
necesidad de adecuar los sistemas educacionales a sus usuarios y hacen necesario preguntarse
acerca de las características de los alumnos universitarios. Curiosamente, éstas no han sido
estudiadas de forma sistemática. Ampliando el conocimiento de las características individuales de los
estudiantes universitarios, la universidad puede generar oportunidades que favorezcan la formación de
sus alumnos.
En este trabajo partimos de la concepción de personalidad desde el Modelo de Eysenck (1965), el
cual establece que la personalidad es una organización más o menos estable y duradera del carácter,
temperamento e intelecto y físico de una persona, que determina su adaptación única al ambiente.
Este autor fue ampliando sus teorizaciones hasta postular un modelo de tres factores: Psicoticismo,
Extraversión y Neuroticismo.
El concepto de personalidad adquirió muchas acepciones y teorizaciones durante su desarrollo
histórico; una de los modelos más conocidas y utilizados en la actualidad es el de McCrae y Costa
(1990) quienes postulan que las diferencias individuales se basan en su mayoría en las diferencias de
“Cinco Grandes” dimensiones: Neuroticismo, Extraversión, Apertura a la Experiencia, Amabilidad y
Responsabilidad. Este modelo de los Cinco Grandes o Big Five es el que sirvió de base teórica a esta
investigación.
En cuanto al rendimiento académico es una variable sumamente compleja en la cual influyen
diversos factores. Pizarro y Clark (1998) definen el rendimiento académico como una medida de la
capacidad de respuesta del individuo, que expresa, en forma estimativa, lo que una persona ha
aprendido como resultado de un proceso de instrucción o formación.
La literatura científica registra antecedentes de estudios, que han tratado de asociar la
personalidad con el aprendizaje y el desempeño académico (Eysenck, 1965; Furneaux, 1957; Lynn,
1959; Steiner, Ericson, Hernández & Pavelski, 2002; Sternberg, Lautrey & Lubart, 2003). Algunos de
los trabajos más representativos, que exploran relaciones entre rasgos de personalidad, procesos
cognitivos y desempeño académico se caracterizan por diferir y variar significativamente en sus
resultados. Por ejemplo, Eysenck y Cookson (1969) encontraron que el rasgo de extraversión,
asociado a la estabilidad emocional, favorece el rendimiento en pruebas de razonamiento verbal
A estos trabajos, se han sumado nuevas evidencias que confirman este tipo de relaciones entre los
rasgos de personalidad y el desempeño académico. Rosander et al. (2011) sostienen que la
Responsabilidad, la Extraversión y el Neuroticismo se relacionan significativamente con el rendimiento
1116
VI Congreso Marplatense de Psicología
METODOLOGÍA
Para obtener datos sobre la personalidad se aplicó el Listado de Adjetivos para Evaluar la
Personalidad [AEP] (Ledesma, Sánchez y Díaz, 2011). Se trata de una escala de autoinforme de 67
adjetivos que describen la personalidad, basado en el modelo de los cinco grandes factores [MCF]
(John y Srivastava, 1999; McCrae y Costa, 1990). Para obtener datos sobre el rendimiento académico
de los estudiantes se utilizó la información de los sistemas informáticos de la División Alumnos
RESULTADOS
Tabla 1
Estadísticos descriptivos desempeño académico
Mínimo Máximo Media Desv. típ.
Promedio con aplazos 2,00 9,88 7,3222 1,50573
Promedio sin aplazos 4,00 10,00 7,7708 1,08465
Nº Cursadas aprobadas x año 1,00 8,00 4,5081 1,46730
Nº Finales anuales (con y sin aplazos) 0,00 5,67 2,2151 1,23085
Nº Finales aprobados x año 0,00 5,67 2,0709 1,23966
N° Aplazos x año 0,00 1,25 0,1442 0,26103
Tabla 2
Estadísticos de grupo para personalidad discriminado por género
Media Desviación típ. Error típ. de la media
1117
VI Congreso Marplatense de Psicología
Tras realizar una prueba T de muestras independientes, observamos que las variables con
diferencias estadísticamente significativas eran Neuroticismo y Apertura a la Experiencia.
Ahora bien, la Tabla 3 sintetiza las correlaciones de Pearson entre los rasgos de personalidad y el
desempeño académico diferenciadas por sexo.
Tabla 3
Correlaciones entre personalidad y rendimiento académico
Extraversión/ Amabilidad/ Responsabilidad/ Neuroticismo/ Apertura a la
Introversión Antagonismo Irresponsabilidad Estabilidad experiencia/
emocional conservador
Femen
Femenino Masculino Femenino Masculino Femenino Masculino Masculino Femenino Masculino
ino
Promedio c/ -0,178(**) -0,328(*) -0,185(**) -0,232 0,089 0,048 0,064 0,061 0,045 -0,083
aplazos
Promedio s/ -0,164(*) -0,205 -0,209(**) -0,323(*) 0,084 0,016 0,111 0,325(*) 0,004 -0,010
aplazos
Nº Cursadas 0,012 -0,004 -0,040 -0,123 0,040 0,245 0,013 -0,044 0,067 -0,008
aprobadas x año
Nº Finales -0,111 -0,087 -0,104 -0,164 0,193(*) 0,146 0,032 0,066 -0,123(*) 0,155
rendidos x año
(c/ y s/ aplazos)
Nº Finales - 0,127(*) -0,155 -0,118 -0,179 0,182(**) 0,154 0,031 0,052 -0,126(*) 0,111
aprobados x año
N° Aplazos x 0,079 0,357(*) 0,070 0,078 0,042 -0,037 0,003 0,077 0,021 0,235
año
Nota: * La correlación es significativa al nivel 0,05 (unilateral). ** La correlación es significante al nivel 0,01 (unilateral).
En cuanto a las mujeres, la escala Extraversión se asoció negativamente con el promedio –con y
sin aplazos- y con el número de exámenes finales aprobados anualmente. Por su parte, el rasgo
Amabilidad en las mujeres también afecta negativamente al promedio –con y sin aplazos-. Por último,
observamos una asociación positiva entre Responsabilidad y el número de finales que rinden por año -
incluido los aplazados- y con el número de finales que aprueban al año, pero negativa entre estos dos
últimos indicadores de rendimiento académica y la variable Apertura a la Experiencia. El Neuroticismo,
en las mujeres, no evidenció asociación con el rendimiento académico.
En los estudiantes varones, se encontró una asociación estadística negativa entre Extraversión y el
promedio con aplazos y, congruentemente, positiva con el número de aplazos anuales. En cuanto al
rasgo Amabilidad, se observa una asociación negativa con el promedio sin aplazos. Finalmente, el
rasgo Neuroticismo afecta positivamente al promedio –sin aplazos-. Los rasgos responsabilidad y
apertura a la experiencia, en los varones, no evidencian asociaciones significativas con los indicadores
de rendimiento académico.
1118
VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN
En cuanto a las características de personalidad de la muestra, podemos decir que los estudiantes
de ambos géneros exhibieron similares niveles de Amabilidad, Responsabilidad y Extraversión. Las
diferencias de género fueron significativas para las dimensiones de Apertura a la Experiencia (mayor
en hombres) y para Neuroticismo (mayor en mujeres). Esta última diferencia se puede pensar desde
los patrones culturales, sociales, en donde las mujeres suelen ser más sensibles, inestables, y
emocionales –rasgos propios del Neuroticismo-, y los varones suelen representar esa constante
búsqueda hacia lo nuevo, ser menos conservadores y menos rígidos.
En cuanto al rendimiento académico, no se observaron diferencias significativas en función del
género, a diferencia de lo arribado por numerosas investigaciones las cuales reportan que las mujeres
presentan mejores calificaciones (Capella & Weinstein, 2001; Di Gresia et al., 2002; Yip, 2007).
Respecto a las relaciones entre las características de la personalidad y el rendimiento académico
se puede decir que existe una asociación entre las variables. Se observó que, de formas diferentes
según la dimensión, el indicador del rendimiento y el género, los cinco rasgos de personalidad
exhibieron correlaciones significativas sobre el rendimiento académico.
El rasgo Extraversión correlacionó negativamente con el rendimiento académico en ambos sexos.
Esto es similar con otras investigaciones (Rosander et al., 2011; Castro Solano y Casullo, 2002), que
establecen que la Extraversión se correlaciona con los peores desempeños académicos que exhiben
los estudiantes, sobretodo en cuanto al promedio. Una posible explicación supone que los
extravertidos al ser más sociables, activos, habladores, divertidos, se concentren más en tener
vínculos interpersonales intensos y variados, y le dediquen menos tiempo al estudio. Por el contrario,
los introvertidos al ser reservados, distantes, fríos e independientes, dedican más tiempo a los estudios
universitarios.
El rasgo Amabilidad también correlacionó negativamente con el rendimiento académico
(específicamente con el promedio) en ambos sexos. Esto quiere decir que se observa una tendencia a
que las personas con puntuaciones más altas en el rasgo Amabilidad tienden a presentar bajos
promedios. En investigaciones realizadas a estudiantes universitarios también se ha encontrado que la
Amabilidad demuestra ser predictor del desempeño académico (Niño de Guzmán et al., 2000;
O’Connor & Paunonen, 2007; Caprara, 2010; Asghar Hazrati-Viaria, 2011; Rosander Pia et al., 2011).
Esto se puede deber a que, en el polo opuesto de este rasgo, personas con un perfil Antagónico, al ser
competitivos, egoístas, críticos, puede ser propensos a cuidar su propio desempeño académico dentro
del sistema universitario y registrar mejores promedios que los demás estudiantes.
En cuanto a la Responsabilidad, los resultados muestran correlaciones estadísticamente
significativas y positivas en las mujeres en relación al número de finales rendidos por año, ya sean que
se hayan aprobado o desaprobado. Es decir, que las mujeres con altos niveles de Responsabilidad
rinden mayor número de finales por año y, a su vez, aprueban más finales que las mujeres que
puntúan bajo en Responsabilidad. Las investigaciones que se han rastreado también refieren que la
Responsabilidad correlaciona positivamente con el rendimiento académico (Niño de Guzmán et al.,
2000; Bitran et al., 2002; Judge & Ilies, 2002; O’Connor & Paunonen, 2007; Caprara, 2010; Asghar
Hazrati-Viaria, 2011; Rosander Pia et al, 2011). Cabe destacar que a diferencia de investigaciones
1119
VI Congreso Marplatense de Psicología
anteriores Responsabilidad no ha sido el rasgo de personalidad con los niveles de correlaciones más
altos en relación al rendimiento académico, y que, como mencionamos, sólo se ha evidenciado
significación en las mujeres. A nivel comportamental, los estudiantes responsables tienen más
probabilidades de poseer buenas habilidades para organizar su trabajo, proponerse metas, ser
persistentes, y monitorear sus progresos. Se destaca la autodisciplina, y la organización que es lo que
posiblemente permita que los estudiantes estén más predispuestos a preparar finales, organizarse con
el tiempo requerido y el material de estudio y rendir exámenes.
Por su parte, Neuroticismo se asoció en varones al promedio sin aplazos, cabe aclarar que esta
correlación es baja. Este resultado no es similar al resto de las investigaciones donde se observaron
correlaciones altas y negativas entre el rasgo Neuroticismo y rendimiento académico, (Little, Lecci y
Watkinson, 1992; Entiwisle y Cunninghan, 1968; Judge & Ilies, 2002; O’Connor y Paunonen, 2007).
Por otro lado, Kappe y Van der Flier, 2010) exploraron la contribución predictiva de los rasgos de
personalidad en relación al rendimiento académico, destacando que el factor Neuroticismo se
relaciona de manera positiva con el rendimiento académico cuando las condiciones de evaluación son
menos estresantes. Esto lo podríamos atribuir potencialmente al hecho de que al momento de rendir
un examen final, si el clima es poco estresante, sujetos que tienen rasgos más inclinados por la
inestabilidad, sensibilidad, inseguridad, tensión, se puedan desempeñar mejor al sentirse más seguros
y contenidos, alcanzando mejores notas.
También con correlaciones bajas, se observó en las mujeres que Apertura a la Experiencia
presenta una asociación negativa con los finales rendidos por año y los aprobados por año. Es decir
que cuanto más curiosas, creativas, originales, y liberales son las estudiantes universitarias, menor es
el número de finales que rinden por año, ya sea que se aprueben o desaprueben. Esto puede deberse
a que al tener el interés en vivir nuevas experiencias, aventuras, suelen dedicarle menos tiempo a la
preparación y exposición de exámenes finales. En su polo opuesto podemos decir que las mujeres
más Conservadoras, rinden mayor número de finales por año, posiblemente debido a que rasgos como
ser conservadoras, rígidas, prácticas, les permita armar y valerse de un cronograma de estudio para
avanzar en la carrera universitaria.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Asghar Hazrati-Viaria, Ali T. R. & Sayed, S. T. (2011). The effect of personality traits on academic
performance: The mediating role of academic motivation. Journal Social and Behavioral Sciences 32,
367 – 371.
Bitran, M., Zúñiga, D., Lafuente, M., Viviani, P., y Mena B. (2004).Tipos psicológicos y estilos de
aprendizaje de los estudiantes que ingresan a medicina en la Pontificia Universidad Católica de
Chile. Rev Méd Chile 2004; 131: 1067-78.
Capella, E. & Weinstein, R. S. (2001). Turning around reading achievement: Predictors of high school
student´s academic resilience. Jorunal of Educational Psychology, 93(4), 758-771.
Caprara, G. V., Barbaranelli, C., Pastorelli, C. & Cervone, D. (2010). The contribu- tion of self-efficacy
beliefs to psychosocial outcomes in adolescence: predicting beyond global dispositional tendencies.
Personality and Individual Differences, 37, 751-763.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Rosander, P., Bäckström, M. & Stenberg, G. (2011). Los rasgos de personalidad y la inteligencia
general como predictores del rendimiento académico: Un enfoque estructural de modelos de
ecuaciones. Aprendizaje y Diferencias Individuales, 21, 590-596.
Steiner, H., Erickson, S. J., Hernández, N. L. & Pavelski, R. (2002). Journal of Adolescent Health,
30(5): 326–335.
Sternberg, R., Lautrey, J. & Lubart, T. (2003). Where are we in the field of intelligence, how did we get
here and where are we going? En: R. Sternberg, J Lautrey & T. Lubart (Eds.). Models of
intelligence, (pp 3-25). Washington D.C.: American Psychological Association.
Yip, M. C. W. (2007). Differences in learning and study strategies between high and low achieving
university students: A Hong Kong study. Educational Psychology, 27(5), 597-606.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
“Anita es TGD, Santi es ADD, Pedro es DOWN”. Vamos a apelar a la experiencia y memoria
reciente de todos nosotros. ¿Quién no ha escuchado nombrar a una persona con el nombre de una
patología? Con frecuencia se escucha casi a cualquiera y con total liviandad efectuar o mencionar este
tipo de diagnósticos que aparentan ser condenatorios, eternos y determinantes. Esta situación no es
una novedad y tampoco es privativa de la época actual. Un gran psicoanalista argentino1 decía, allá
por la década del ’70, que algunos diagnósticos más que diagnósticos eran epitafios. Nos preguntamos
por qué habiendo evolucionado en tantas áreas, esto parece resistirse al cambio… Es una pregunta
tramposa porque algo podemos decir al respecto: parecería obedecer a la dificultad de vérselas con la
angustia propia y el sufrimiento ajeno. La angustia no es tanta cuando el otro está desubjetivado y el
1
Eduardo Wilde.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
sufrimiento queda reducido a su mínima expresión, tan mínima que de él queda sólo una sigla (TGD,
TOD, TEA). Esto es válido para los sujetos adultos, como decía Eduardo Wilde pero en los niños y
jóvenes, que están construyendo su persona, tiene mayor peso.
Muchas veces, los niños nos llegan con diagnósticos ya instalados desde algún referente real
(maestros, profesionales, padres) y/o virtual (“lo busqué en internet”). No se recibe la pregunta por ese
niño sino que se recibe a un diagnóstico, un rótulo, un nomenclador. Se los deriva entonces a
tratamientos que se suponen efectivos con el fin de modificar su conducta y en muchos casos se
solicita además medicación. ¿Quiénes son estos niños? Los que no se acomodan a lo esperable, los
que no prestan atención, los que no acatan las directivas, los que se mueven constantemente, los que
no aprenden al ritmo deseado. Este tipo de abordaje intenta acomodar al niño a lo que se espera de él.
Cuando estamos ante esta circunstancia creemos, siguiendo a Beatriz Janin, que es necesario
“desarmar“ tales diagnósticos para poder entender lo que sucede pensando conflictivas dominantes
que están en juego y entre qué actores se juegan.
Consideramos que la consulta a un profesional por una dificultad infantil (que suele ser un síntoma
con el que el niño “dice” su desesperación) termina en algunos casos siendo un espacio en el que el
pequeño queda anudado a un decir sobre él que lo excluye como sujeto. El niño es catalogado por los
síntomas que presenta perdiendo así su identidad. Como plantea también B. Janin: “Se suelen poner
rótulos, reduciendo la complejidad de la vida psíquica infantil a un paradigma simplificador y
biologizante. En lugar de un psiquismo en estructuración, en crecimiento continuo en el que el conflicto
es fundante y en el que todo efecto es complejo, se supone un “déficit” neurológico.”2
Este tipo de expectativas determinan una exigencia por la resolución del problema sin considerar la
posibilidad de plantearlo como tal, con la complejidad que implica. Impera el “aquí y ahora” como si
sólo existiera el presente. Por otra parte, se suele observar que se ejerce presión para que todos los
logros se cumplan en el niño sin el compromiso y la disponibilidad de los adultos.
Tomando las palabras de Gisela Untoiglich “Así como los niños comienzan trazando sus primeras
letras con lápiz, los profesionales que nos ocupamos de la salud mental de los más pequeños también
tendríamos que utilizar un lápiz para escribir esas primeras hipótesis diagnósticas, que por un lado son
absolutamente necesarias y forman parte del proceso de cura, pero que no deberían constituirse
nunca en una marca indeleble en la vida de un sujeto”.3
Es importante también determinar quién solicita un diagnóstico y por qué lo solicita, para qué se
realiza, quién lo realiza y desde qué marco teórico. La enunciación de un diagnóstico es un ACTO
profesional y seríamos muy ingenuos si no nos detenemos a considerar las consecuencias del mismo.
Consideramos que, antes de formular tal pronunciamiento, se debería observar al niño durante un
lapso sustancial, en escenarios múltiples y seguros, en el contexto transferencial adecuado, y sin
basarse en observaciones o apreciaciones incidentales.
2
Janin. B.: Niños desatentos e hiperactivos, reflexiones críticas acerca del trastorno por déficit de atención con o
sin hiperactividad. Ed. Noveduc. Bs. As. 2010. Pág. 13.
3
Untoiglich G.: En la infancia los diagnósticos se escriben con lápiz. La patologización de las diferencias en la
clínica y la educación. Ed. Noveduc. Bs. As. 2013. Pág. 61.
1124
VI Congreso Marplatense de Psicología
Todo lo dicho hasta ahora nos obliga a sostener que un diagnóstico en la infancia -y ya que
estamos un tratamiento también- debiera realizarse con la delicadeza necesaria, con suma prudencia y
sobre todo respetando lo único que tienen todos los niños en común: sus psiquismos están en VÍAS
DE CONSTITUCIÓN y en permanente CAMBIO. Estas dos características debieran ser puestas en
primer plano a la hora de elegir qué decir acerca de un niño.
Cada palabra, intervención o vivencia puede dejar marca e incidir en el devenir de esas incipientes
estructuras psíquicas, tanto para bien como para mal, tanto para contribuir a recuperarse como para
infringir daño. Esto nos ubica a todos los que estamos en contacto con niños y jóvenes en un lugar de
responsabilidad indelegable.
Diagnósticos del estilo “etiquetas”, fijos e incuestionables, enunciados en contextos susceptibles
(padres angustiados, escuelas desbordadas) y realizados por expertos profesionales (investidos del
poder de la ciencia) podrían adquirir la forma de “sentencias” ya que influyen en determinar y pueden
CONDICIONAR EL FUTURO de un niño. Siguiendo a Wilde, a Janin y a Untoiglich, esa es la variable
que quisiéramos resaltar: existe el peligro de que esa subjetividad en vías de constitución, cual
enredadera o Santa Rita, acabe armándose en torno a ese síntoma o síndrome, cubriendo y opacando
el resto de su persona. No seamos incautos, todos conocemos el poder de la profecía autocumplida.
Cualquier diagnóstico, por mejor o peor que sea, adecuado o no, hace referencia a un “aquí y
ahora”, sería como una foto. En contraparte, un niño en su devenir constante, en su movimiento
incesante, se asemeja más a una película (comedia, tragedia, documental o ciencia ficción, todas
sucesivamente o al mismo tiempo). Por lo tanto pareciera existir un contrasentido conceptual entre la
noción de “diagnóstico” y la de “psiquismo infantil”. Llegados a este punto diagnosticar en la infancia
sería casi una paradoja o una utopía… sin embargo se lo hace todo el tiempo. ¿Cómo se podría hacer
para sondear esta paradoja conceptual sin caer en la fijeza del reduccionismo? Ni más ni menos que
teniendo a la vista el carácter PROVISORIO, TEMPORAL, MOMENTÁNEO y sobre todo
CIRCUNSTANCIAL de todo lo que podemos decir acerca del psiquismo de un niño, y por lo tanto de
un diagnóstico de un niño, también. Al referirnos a niños pequeños lo que resulta prudente y útil es
encontrar el modo de identificar las dificultades del niño dejando abiertas las cuestiones de etiología,
evolución y pronóstico, considerando que el niño se encuentra en desarrollo y el mismo es
absolutamente flexible.
El trabajo psicoanalítico con niños y al diagnóstico lo pensamos como parte de este trabajo, es un
recorrido en permanente cambio porque el psiquismo infantil ES permanente cambio. Los niños nos
proponen un camino de encuentros y desencuentros. En este contexto nos gusta pensar a los
diagnósticos como “postales” del viaje que acompañan ese devenir que va variando debido al proceso
de maduración propio del crecimiento, al trabajo que realiza el profesional con el niño, la familia y la
escuela. Todos estos factores van modificando las circunstancias y posibilitando nuevos movimientos
subjetivos. Vemos a los posibles diagnósticos como instantáneas que nos permiten ubicarnos en
sucesivos “aquí y ahora”, no para quedarnos fijados allí, sino para tenerlos en cuenta a la hora de
seguir adelante y acompañar a nuestros pacientes en la aventura de crecer, aventura en la que
permanentemente “pasan cosas” ya que la mente infantil está abierta a todo tipo de influencias, incluso
la nuestra…
Un poco influidos por la incorporación precoz en contextos educativos, los niños son comparados
unos con otros y con una “media” en edades tempranas. Se supone que los logros en su desarrollo
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VI Congreso Marplatense de Psicología
deben ser simultáneos y uniformes y se les exige aprendizajes formales desde muy corta edad. La
infancia ha dejado de ser el tiempo de cuentos y juegos, para convertirse en una preparación para el
éxito. El juego simbólico no es valorado en tanto no supone ningún aprendizaje.
Es frecuente que algunas cuestiones como alteraciones en la mirada, el juego, el lenguaje, la
interacción, etc., que deberían ser vistos como signos de alerta, pasen rápidamente a conformar una
patología o un trastorno en sí mismos. Esto responde a la necesidad de obturar rápidamente con
respuestas cuando aún no se ha formulado ninguna pregunta acerca de lo que le pasa a ese niño.
Aquí cobra importancia fundamental el entorno, porque todo niño se encuentra inmerso en un medio
determinado, que lo atraviesa, lo determina y lo constituye como sujeto. En general la derivación se
centra en el niño, en la búsqueda de un diagnóstico, de una enfermedad, suponiéndola la causa de los
problemas de aprendizaje y/o comportamiento del niño. No se tienen en cuenta las posibles causas
ubicadas en los problemas de la pedagogía utilizada, en las condiciones de trabajo, en los
determinantes familiares, en la formación docente, etc.
En la época actual no se da tiempo para la espera o la evolución. No pareciera haber lugar para lo
transitorio tampoco. Esta postura eclipsa una realidad de la infancia que tiene que ver con que existen
múltiples regresiones al servicio del yo, del desarrollo. Parece haber un mandato que exige que el
camino de la maduración sea homogéneo, recto, directo, continuo, sin interferencias y todo lo demás
queda del lado de la enfermedad. Con lo cual se evidencia una tendencia a ver como patológicos
sucesos que son propios de la infancia de estos tiempos. El desarrollo normal y saludable está
salpicado de momentos en los que se debe detener la evolución o incluso desandar algo del camino
recorrido para poder realizarlo nuevamente con mayor firmeza o seguridad. Estos estados regresivos
son muchos, son transitorios y son esperables. Es necesario visualizar a los niños desde sus
posibilidades, y no desde sus déficits, con tiempo para que desarrollen sus potencialidades.
La infancia aparece significativamente “inquieta”, “dispersa”, “molesta”. Maestros y padres se
sienten desbordados por niños “incontrolables”, “indominables”. En este sentido, quienes estamos en
contacto con niños debemos reflexionar sobre lo que esperamos de ellos. Se deslinda como una labor
importante recuperar la categoría de NIÑO y cuestionar e interrogar los abordajes terapéuticos
llevados adelante.
Los motivos de consulta frecuentemente presentados tienen más relación con la presentación de
trastornos en la estructuración psíquica que con síntomas neuróticos. Es decir predomina la aparición
de fallas en la estabilización de la represión primaria, y déficits en la constitución narcisista y en la
tramitación pulsional por sobre los conflictos entre la represión y el retorno de lo reprimido.
Sumado a esto, como mencionábamos anteriormente, la noción del tiempo ha adquirido una
velocidad y una exigencia de urgencia, que atraviesa a los niños, a los padres y a nosotros, los
profesionales. Una temprana medicalización aparece como solución prometedora de cambios rápidos
y ajustados a la sociedad actual.
En este contexto el DSM se eleva a la categoría de verdad única e incuestionable, en donde el
sujeto queda cosificado, fragmentado, desubjetivado. Su mensaje reduccionista transforma la
subjetividad en espectador/consumidor. Pasamos a ser consumidores cuya subjetividad quedará
marcada por las leyes del mercado, por la aceleración del flujo de la información, por las importantes
dificultades para pensar. Si el niño queda rotulado como un objeto “clasificable”, la cosificación se
concretiza.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Decimos con María Cristina Rojas: ”Pensar de este modo no implica dejar de lado la medicación u
otra clase de asistencia, bienvenidas a la hora de las patologías que las requieran. Se trata en cambio,
de poner de manifiesto el riesgo de abuso innecesario de las mismas, así como el aumento constante
de infundados trastornos”.4
¿Pastilla que calma? ¿Pastilla que calla? ¿Qué calma? ¿Qué calla?
El proceso de medicalización se ha elevado notoriamente en la infancia, con un consecuente
aumento de consumo de psicofármacos en niños. Parecería que la psique queda reducida a un solo
órgano: el cerebro, y lo que llamamos sujeto a aquellas conductas observables consideradas
inapropiadas para las exigencias del medio. Y será, en este sentido, que la pastilla (reducción de la
vida a un sustrato biológico) acallará, taponará toda posibilidad de escucha de las diferentes
determinaciones del sufrimiento, desestimando las peculiaridades de cada historia y de las vicisitudes
particulares de la constitución subjetiva en la que se enlaza toda manifestación humana.
Muchas veces el rápido pedido de medicación queda al servicio de abortar la posibilidad de bucear
en los múltiples determinantes de las conductas no esperadas de cada niño, impidiendo pensar “sin
prisa pero sin pausa” a ese padecer en un contexto familiar, educativo, histórico y social en el que está
inmerso. La responsabilidad de los padres queda eclipsada frente a un “hijo enfermo”. El espíritu
epocal, que no tolera la presencia del sufrimiento, que lo trata de evitar y mantener a distancia, lo
convierte en patología, y ello conduce rápidamente a la búsqueda de su anulación, también por medio
de la medicalización.
Podríamos plantear algunas reflexiones posibles y una mirada más amplia, abarcativa e
interdisciplinaria respecto de problemáticas tan complejas como lo son la desatención, la
hiperactividad, las conductas oposicionistas, dificultades vinculares, problemas de aprendizaje. En un
entorno social caracterizado por padres desbordados o deprimidos, docentes que quedan superados
por las exigencias, un medio en el que la palabra ha ido perdiendo valor y normas que suelen ser poco
claras, parece ser que la única alternativa posible en este contexto fuera el rótulo o etiquetamiento de
manifestaciones clínicas.
”Ahora más que nunca, cuando la idea en muchos sectores es que todo es genético, que alguien
está determinado desde el vamos y por elementos biológicos, reflexionar sobre la complejidad de la
vida psíquica, pensar en términos de determinaciones intra e intersubjetivas, y operar en
consecuencia, implica considerar al ser humano como sujeto en devenir, contradictorio y
sobredeterminado, producto de muchas historias… por ende implica abrir la puerta para que todo niño
pueda jugar y soñar”5.
La escuela ha cambiado poco y el entorno demasiado. Los niños y adolescentes de hoy son
diferentes a los de tiempos pasados, por ende es necesario escucharlos, mirarlos, darles la
oportunidad de abrir puertas en ese recorrido de constitución subjetiva. Los nuevos padecimientos o
nuevos sufrimientos deben ser pensados en el contexto actual. No se liga el aprendizaje al placer y las
exigencias muchas veces suelen ser exageradas y a veces desde edades muy tempranas. Se
4
Rojas, M.C.: El Mercado de la Felicidad. Artículo en “Problemas e intervenciones en la clínica”. Bs. As. 2013
5
Janin, B.: ”Intervenciones en la clínica psicoanalítica con niños”. Ed. Noveduc. Bs. As. 2013. Pág. 14.
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requieren recursos creativos sobre todo para trabajar con niños con tiempos diferentes. “El ser humano
es en relación con otros. Imposible de ser pensado en forma aislada, todo sujeto se va haciendo a sí
mismo en un entorno y en un tiempo, armando una historia. La familia, fundamentalmente, pero
también la escuela, son instituciones que inciden en esa constitución. Instituciones marcadas a su vez
por la sociedad a la que pertenecen…”6
La escuela es un eslabón fundamental a la hora de detectar dificultades, pero también a veces
también diagnostica estigmatizando así al niño o al joven. No se da la oportunidad para que despliegue
sus potencialidades, la única alternativa posible es la “Exclusión”.
Algunas expresiones de docentes:
- ”No estoy capacitada para estos CASOS, no me formé para esto”
- “¿Por qué tenemos que pasar o soportar un año terrible con Felipe?”
- ”Juana no puede permanecer las 4hs. en el jardín porque se mueve todo el tiempo, no
se queda quieta, hace berrinches, es para integración…” (Juana es menor de 4 años)
Por último, creemos en la necesidad de equipos interdisciplinarios que desde sus distintos saberes
realicen diagnósticos diferenciales evitando las omisiones y sobrediagnósticos, permitiendo un enfoque
terapéutico global para superar las dificultades pero respetando las INDIVIDUALIDADES E
IDENTIDADES. Confiamos que de esta manera podremos lograr entender a los niños, que puedan ser
escuchados, mirados, mimados, que logren convivir con los otros respetando sus diferencias…
Quisiéramos cerrar con una parábola literaria tomada prestada del gran Eduardo Galeano:
El Mundo. “Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo. A la
vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar
de fueguitos. El mundo es eso -reveló- Un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla
con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos
y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de
fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero
otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se
enciende” 7.
6
Janin, B.: “Niños desatentos e hiperactivos”. Ed. Noveduc. Bs. As. 2010. Pág. 12.
7
Galeano, E.: “El libro de los abrazos”. http://www.portalalba.org/biblioteca/ Pág. 5.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
y de terapéuticas que retrotraen a una era biologicista las posibilidades de la cura, poniendo sellos a
las dificultades infantiles. Catalogando “cuadros”.
Algunas de las actividades del FORUM INFANCIAS MAR DEL PLATA:
- Conferencia: “EL APRENDIZAJE ESCOLAR Y SUS VICISITUDES. EL PAPEL DE LA
ESCUELA EN LA PATOLOGIZACION DE NIÑOS Y ADOLESCENTES”. Disertante: Lic.
Beatriz Janin. 5 de octubre de 2013.
- Idem anterior el 5 de Julio de 2014. Con notas radiales y televisivas a la Lic. Beatriz,
Janin.
- Publicaciones en distintos medios.
- Revista “Contexto psicológico”: FORUM INFANCIAS MAR DEL PLATA. Marzo/Abril de
2014.
- Nota en revista “Pido Gancho”. Año 8 N°43. Diciembre/Enero/Febrero, 2013-2014.
Sección ‘sana sana’: “PALABRAS VERSUS PASTILLAS”.
- Nota en revista” Magacine”.
- Conferencia: “EN LA INFANCIA LOS DIAGNOSTICOS SE ESCRIBEN CON LAPIZ”.
Disertante Lic. Gisela, Untoiglich.16 de Agosto de 2014.
- Reuniones mensuales.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Dueñas, G.; Kahansky, E.; Silver R. (comp): La Patologización de la infancia (II). Problemas e
intervenciones en la clínica. Noveduc. Bs. As. 2013.
Galeano, E.: El libro de los abrazos. http://www.portalalba.org/biblioteca/
Grassi, A.; Córdova, N.: Entre niños, adolescentes y funciones parentales. Edit.Entreideas. 2010.
Janin, B.: Intervenciones en la clínica psicoanalítica con niños. Noveduc. Bs. As. 2013.
Janin, B.: Niños desatentos e hiperactivos reflexiones críticas acerca del trastorno por déficit de
atención con o sin hiperactividad. Ed. Noveduc. Bs. As. 2010.
Leibovich de Duarte, A.:La construcción de la identidad profesional de los primeros psicólogos clínicos:
la experiencia Lanús. Ponencia en Panel de Apertura de Jornadas “50 Años de Políticas en Salud
Mental. Homenaje al Dr. Mauricio Goldenberg”. Bs. As. Agosto de 2007
Rojas, M.C.: El Mercado de la Felicidad. Artículo en “Problemas e intervenciones en la clínica”. 2013.
P Untoiglich, G.:. En la infancia los diagnósticos se escriben con lápiz. La patologización de las
diferencias en la clínica y la educación. Ed. Noveduc. Bs. As. 2013.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
El presente trabajo pretende mostrar la doble cara del diagnóstico psicopedagógico, por un lado,
ser entendido como horizonte de posibilidades y eje central del futuro tratamiento en la clínica
psicopedagógica; y por otra parte, debatir su concepción negativa como rótulo y etiqueta
desubjetivante en la vida del niño.
En primer lugar se van a exponer las raíces etimológicas del término diagnóstico, nacido de la
Medicina, para luego adentrarse en el diagnóstico psicopedagógico como eje central, exhibiendo sus
beneficios y desventajas.
Se identificará la utilidad de los mismos, revelando los usos inadecuados y su actual perspectiva, al
evitar patologizar las diferencias en la infancia. Se hará una descripción de los sistemas clasificatorios
mayormente utilizados como el DSM V y el CIE 10.
Somos partícipes de una época que ofrece continuamente nuevas posibilidades y descubrimientos
fruto de sus avances en investigación. Se explorará con ojos críticos el proceso de medicalización que
está teniendo lugar actualmente, convirtiendo a la enfermedad en un producto de las industrias
farmacéuticas. Conductas y descripciones aisladas de los sujetos comprenden los diagnósticos más
comunes como TGD y ADD, asociados a medicamentos/soluciones para hacer desaparecer sus
síntomas mágica e inmediatamente.
El DSM y sus nominaciones producen etiquetas que marcan la subjetividad de un niño en pleno
proceso de estructuración psíquica. De esta forma, se lo coloca en un lugar de enfermo, con su ulterior
rótulo interfiriendo en su naciente identidad e influyendo en el contexto familiar y social donde está
inserto.
Se ofrece la visión beneficiosa del diagnóstico psicopedagógico que habla del sufrimiento del niño
y de la búsqueda de causas, estrategias, abordajes, posibilidades de crecimiento y despliegue de sus
potencialidades y posibilidades individuales en su tratamiento; en contraposición al encasillamiento y la
ubicación en trastornos y síndromes estáticos.
Los interrogantes que surgen a partir de esta cuestión son: ¿Cómo perciben los Psicopedagogos el
diagnóstico? y ¿Cómo construyen los mismos?. De esta forma, se recopilarán sus experiencias y
testimonios.
Se incluirá en el desarrollo teórico, la reflexión ética que orienta el quehacer psicopedagógico
acompañado de las aproximaciones a un código ético del profesional. El diagnóstico como actividad de
profundas repercusiones humanas, debe englobar en todas sus manifestaciones un claro compromiso
de estas virtudes y condiciones personales, ya que su carácter certero constituye la mejor obediencia
al tratamiento.
1130
VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVO GENERAL
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
MARCO TEÓRICO
DIAGNÓSTICO SEGÚN LA MEDICINA
Para ahondar en los orígenes del diagnóstico médico, Richard Koch afirmó que existió una primera
etapa en la cual los sanadores no practicaban al mismo como es entendido en la actualidad. Existió un
período en el cual quien atendía al enfermo, el sanador, actuaba de forma instintiva y terapéutica. Esto
se debía a que los hombres primitivos, próximos a la animalidad, eran dominados puramente por el
instinto, por sobre la razón. Desde esta etapa de la vida humana, se habría pasado a una práctica del
diagnóstico orientada en dos miradas o líneas diferentes: la natural, que actuaba ante las afecciones
visual y patentemente percibidas; y la teorética, cuando la realidad interna de la dolencia se ocultaba
al deseo de saber del sanador y éste tenía que resolver su problema mediante una interpretación de
carácter mágico. La medicina de estos pueblos primitivos, denominados de esta manera sin responder
1131
VI Congreso Marplatense de Psicología
a juicios de valor, sino a la comprobación de hechos sociales, económicos y culturales; presenta como
característica central la asociación entre creencias mágico-religiosas y práctica a ciegas.
Laín Entralgo (1982) afirmó que arribar a un verdadero diagnóstico tienen que cumplirse tres
condiciones. La primera consiste en que la denominación de la enfermedad debe proceder de una
actitud mental que haya excluido toda apelación al pensamiento mágico. En segundo lugar, que el
médico aplique un método racional para establecer un diagnóstico. De esta forma, el proceso mental
por el cual el sanador llega a su conclusión y al término con la que la nombra, está caracterizado por
una conciencia metódica, expresión más fehaciente de la racionalidad de la mente. Por último, las
enfermedades a las que se llega por el diagnóstico deben poseer apelaciones específicas. Estas
condiciones sólo se identifican en la medicina griega de Hipócrates, a partir del siglo V. El médico
griego se impone a la medicina mítica-religiosa de la época, introduciendo la medicina técnica.
Resumiendo bajo este nombre los hallazgos de toda una escuela y período histórico, describe con
precisión signos de enfermedades y los explica mediante los cambios de los cuatro humores del
organismo. Concluye en sus trabajos, que el orgullo médico no es únicamente el curar las
enfermedades, sino que se cumpla aquello que se pronostica y, de esta forma, no hay pronóstico
correcto sin un buen diagnóstico. Éste último es el núcleo central del saber médico, fundado en el
conocimiento justificado por la experiencia y no en la simple intuición. La enfermedad era descripta
como una manifestación de la vida del organismo y un desequilibrio, bajo la influencia del medio
ambiente.
A lo largo de los siglos, el médico ha pasado de ser mago y adivino (Edad Antigua, 3500 a.C. hasta
el 476 d.C.), a pronosticador (Renacimiento en el siglo XV y XVI), esto es, un observador de los
síntomas que de la enfermedad, aplica remedios eficaces; para luego convertirse en diagnosticador
(Ilustración a fines del siglo XVII), cuando relaciona científicamente la lesión con la enfermedad,
pasando a ser, con la Revolución industrial del siglo XIX, un técnico en el diagnóstico cada vez más
especializado.
El diagnóstico médico da cuenta mediante fundamentos epistémicos que es producto de un
conocimiento aplicado que busca comprender de qué se trata un sistema determinado y qué teorías y
leyes científicas permiten conocerlo a fondo, en general con fines pragmáticos. Llevado a un ejemplo
práctico, se podría decir que al igual que el cauce de un río, ningún paciente presenta los signos y
síntomas de la neumonía, tal como lo señalan los textos: la tos difiere de paciente en paciente.
Se puede decir que es un azar que los médicos hipocráticos convirtieran en verdadero término
técnico en una palabra ya usada en los tiempos homéricos con un sentido más amplio, el verbo
diagigndskein, y lo adopten como suyo, dándole estricta significación médica. Este verbo proveniente
del griego hace referencia al sentido de discernir y distinguir, comprendiendo el conocer con amplitud.
En la mente de los hipocráticos haría referencia a saber discernir las enfermedades con precisión entre
todas las restantes y penetrar en lo que de ella no se ve a través de lo que ella es aparentemente. La
raíz etimológica de la palabra trae acepciones como: distinguir, ser diferenciado, conocer, percibir,
creer, juzgar.
Los diagnósticos médicos, en correspondencia con los diagnósticos desde la Psiquiatría y la
Psicología, se construyen a partir de signos y síntomas que las personas manifiestan. Los últimos son
las descripciones subjetivas que el paciente realiza y que no pueden ser observadas directamente por
el profesional. En cambio, los signos son observables clínicos, objetivos y percibidos fácil y
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VI Congreso Marplatense de Psicología
directamente por el clínico. La agrupación de signos y síntomas da lugar a síndromes que no poseen
un carácter tan definido como los trastornos y las enfermedades.
Como hemos expuesto anteriormente, luego de la introducción histórica y epistemológica sobre los
orígenes médicos del diagnóstico, se procederá a distinguir el diagnóstico psicopedagógico en
particular. En él están implicados la escuela, el psicopedagogo, la familia, el alumno y el docente, ya
que la realidad del sujeto/paciente está atravesada y es resultante de un juego de interrelaciones entre
los mismos. Filidoro (2008) define al diagnóstico psicopedagógico como un proceso de investigación
clínica, que construye conocimientos novedosos acerca de lo singular.
Untoiglich plasma como título de su libro la frase: “En la infancia los diagnósticos se escriben con
lápiz” para dar cuenta de la importancia del uso de ese instrumento en las primeras hipótesis
diagnósticas con el fin de no convertirse en una marca indeleble, aun reconociendo su característica
ineludible en el tratamiento. (…)”tendrían que funcionar como brújulas orientadoras para los
profesionales, siempre tomando en cuenta que se construyen en un devenir que va
modificándose(…)”afirmó la autora.
Los diagnósticos se edifican sobre cimientos, que en controversia con la idea de sostén y firmeza,
se caracterizan por ser dinámicos, atravesados por la subjetividad del niño en interacción con Otros e
insertos conjuntamente en procesos históricos, sociales y culturales. Constituyéndose y co-
construyéndose en un ambiente trasferencial entre el psicopedagogo y el paciente, reciben
transformaciones constantes. Sujetos particulares atendidos por otro sujeto forman una relación
intersubjetiva, donde cada cual transfiere, actualiza deseos inconscientes, vislumbrando ser la
herramienta inicial y el punto de partida para el abordaje. Lo que sostiene y dirige la mirada sobre el
niño, es el marco conceptual del profesional. La mirada es el instrumento de indagación por
excelencia, se hacen visibles determinadas producciones del niño, asignándoles determinados
sentidos y no otros. Este instrumento no es neutro, sino que es una lectura protagónica en la clínica
psicopedagógica: hace visible, recorta y privilegia aspectos del observable. “No hay lectura pura de la
experiencia” (García, 2000). La pregunta como técnica de indagación construye y crea condiciones
para la respuesta.
Hay tres momentos de reflexión en el diagnóstico psicopedagógico que no se ordenan en una
secuencia temporal sino que se encuentran ensamblados como un modelo para el interior de la clínica.
El primero de estos tiempos lógicos es el tiempo de la materia prima. Está compuesta por las
modalidades peculiares de apropiación de los objetos de conocimiento (por ejemplo, lectura y
escritura). También denominado a) tiempo de los observables, se incluyen todas las producciones del
niño, de los padres y la escuela. En cada proceso diagnóstico, recortamos los observables con los que
vamos a elaborarlo. ”En la clínica no nos manejamos con certezas sino desde posiciones que nunca
son definitivas” (Filidoro, 2008). El papel de la conceptualización en la experiencia del psicopedagogo
vuelve a la cuestión, ya que incide en su forma de mirar, observar y ver. Los observables no son datos,
un niño es un ser indiferente y remotamente lejano a ser tan sólo un individuo. Al considerarlo un niño,
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VI Congreso Marplatense de Psicología
nos hallamos conceptualizando e interpretándolo, haciendo una lectura de lo que significa la niñez y
adjudicándole ciertas características.
Puede afirmarse que el diagnóstico se funda en observables y no en datos objetivos, donde el
profesional de la Psicopedagogía participa activamente en su construcción.
A partir del establecimiento de relaciones entre los observables que conforman el material tangible
y empírico, comienzan a realizarse inferencias constituyendo el segundo momento lógico del
diagnóstico, b) de las inferencias. Cabe destacar que estos dos primeros momentos de reflexión
mantienen relaciones dialécticas, no hay primero observables y luego inferencias. Las inferencias nos
permiten construir nuevos observables, habilitando una mirada que anteriormente dejaba cuestiones
imperceptibles, comprendiendo el tercer nivel o momento, denominado “de las configuraciones”. Es
válido aclarar que este camino responde a un marco conceptual, a los conocimientos y referencias
clínicas y teóricas de cada psicopedagogo. Se trae aquí un ejemplo ilustrativo: Edilson, presenta
dificultades en la escritura, evidenciando omisiones y sustituciones en sus producciones (observable).
Por otra parte, no se poseen datos profundos y detallados de su historia vital, ya que vive con su tía (
hasta el momento desconocida), luego del fallecimiento de su madre (observable). Además, sus
relatos verbales son acotados y acompañados de retraimiento. Se puede inferir, que sus problemas en
la escritura derivan de problemas tempranos en el desarrollo de su lenguaje. Lo que está quedando
exento de este recorte es que el niño es de Paraguay, y que vino a la Argentina a los once años,
donde paso de hablar fluidamente guaraní al español, acompañado de un cambio en su dinámica de
vida y en su cultura. De esta forma, el sistema de inferencias cambiaría de dirección.
Los hilos que se seleccionan para realizar ese tejido y los problemas que se recorten, nacen de la
trama que sepamos tejer. Dicho de otra manera, las relaciones e inferencias parten de un marco
conceptual y metodológico; por esta razón, no hay instrumentos neutros que intervengan donde el
psicopedagogo no se encuentre implicado en su posición.
El tercer nivel, c) de las configuraciones, se nutre de lo que el profesional recorta y abstrae, y las
inferencias/relaciones que establece entre ellos. De esta forma, ese conjunto de relaciones establece
una configuración que da cuenta de los observables. Esta configuración es un punto de llegada, como
cierre del proceso diagnóstico, pero también un punto de partida para las intervenciones clínicas
(tratamiento). El cierre del proceso nunca implica el cierre del diagnóstico ya que éste tiene un carácter
provisorio y de apertura constante, no obstante, permite necesariamente conformar una respuesta
para el niño, sus padres y la escuela.
El profesional realiza un corte transversal sincrónico de su paciente, integrado por sus observables,
inferencias y relaciones. De ese corte producto del proceso diagnóstico, resulta una configuración. De
esta manera, el diagnóstico psicopedagógico es la construcción de una configuración en la que están
presentes estos elementos subyacentes.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Cuando se profundiza en el ¿Para qué del diagnóstico?, se dispara una disyuntiva entre la utilidad
y la necesidad del mismo. Entre los conocidos fines positivos del diagnóstico se encuentran:
o Establecer un abordaje terapéutico particular en función del sujeto/paciente.
o Evaluar la funcionalidad y efectividad del abordaje de acuerdo a su evolución y
pronóstico.
o Poseer un lenguaje común entre los profesionales permitiendo compartir trabajos,
investigaciones e información científica.
o Permitir la toma de decisiones específicas y fundamentales en sistemas como la
escuela, la justicia, etc.
ETIQUETA Y ÉTICA
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como impredecible e inestable. Desde el punto de vista antropológico, todo esto determina y los límites
del conocimiento del Otro desaparecen.
El objetivo es salir de la lógica y la estructura que forma al psicopedagogo para ser consciente que
diagnosticar es un saber, y está ligado tanto a lo científico como a lo subjetivo, en una relación
dialéctica.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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adolescentes. La habilitación de la oportunidad (pp 58-63). Buenos Aires: Noveduc.
Affonso Moysés ,M.A, Collares,C , Untoiglich,G (2013). La maquinaria medicalizadora y patologizadora
en la infancia. Untoiglich, G, En la infancia los diagnósticos se escriben con lápiz. La patologización de
las diferencias en la clínica y la educación (pp.25-42). Buenos Aires: Noveduc
Chambers, I (1994). Migración, cultura, identidad. Londres: Amorrortu.
Laín Entralgo,P. (1982). Los orígenes del diagnóstico médico. Historia y teoría.
Lorenzano, C (2006).El diagnóstico médico. Subjetividad y procesos cognitivos, 8,149-172.
Manonni, M (1976). El psiquiatra, su “loco” y el psicoanálisis. Buenos Aires: Siglo Veintiuno.
Filidoro,N (2008).Tiempos lógicos del proceso diagnóstico. En Diagnóstico psicopedagógico: los
contenidos escolares (pp.17-45). Buenos Aires: Ed. Biblos.
Janin, Beatriz (2004) Niños desatentos e hiperactivos. Reflexiones críticas
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Janin,B. (2012). Los niños y la medicalización de la infancia. Topia. Recuperado de
http://www.topia.com.ar/articulos/ni%C3%B1os-y-medicalizaci%C3%B3n-infancia
Schlemenson, S (2001). El diagnóstico psicopedagógico. En Niños que no aprenden. Actualizaciones
en el diagnóstico psicopedagógico (pp.15-23). Bs.As.:Ed. Paidós
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El trabajo que sigue tiene como punto de partida los interrogantes que me genera mi práctica
como adscripta dentro del proyecto de extensión de la Facultad de Psicología “Equipos de Apoyo al
Sistema de Protección de los Derechos del Niño”, bajo la dirección del Lic. Enrique Roberto Stazzone
desde inicios del año 2013 y mi reciente incorporación como becaria desde agosto del corriente en el
Programa de Centros de Extensión Universitaria (CEU), dependiente de la Secretaría de Extensión de
la Universidad.
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“La extensión concebida como un proceso dialógico y crítico debe contribuir a orientar la
investigación y la enseñanza. Esta concepción implica la consolidación de las prácticas integrales y la
natural articulación de la investigación, la enseñanza, el aprendizaje y la extensión en la intimidad del
acto educativo” (Tommasino & Rodríguez, pág. 39)
Cabe también citar la Resolución nº 692 del 17 de mayo de 2012 en la cual el Ministerio de
Educación expone que:
“(…) la comunidad académica considera que la extensión no refiere al sólo acto de transferir los
resultados de la producción científica a la sociedad, sino “producir” en función de las problemáticas y
demandas que surgen en la vinculación de la Universidad con la sociedad, por lo que debe realizarse
en el marco de un proceso dialéctico en el que sociedad y universidad se enriquezcan mutuamente
nutriéndose con nuevos conocimientos y nuevos problemas a investigar por parte de la universidad”.
(pág. 1-2)
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De todo esto se deriva que la integralidad entonces no sólo debe ser entendida como la integración
y articulación de las tres funciones de la Universidad, sino también como la articulación entre actores
sociales y universitarios.
El programa Centros de Extensión Universitaria (CEU) es una iniciativa que surge en el año 2013
de la mano del Rector de nuestra Universidad Nacional de Mar del Plata, Francisco Morea, siendo
ejecutado desde la Secretaria de Extensión Universitaria, cuyo Secretario es el Dr. Orlando Calo y la
Subsecretaria, la Lic. María Eugenia Libera.
El objetivo principal de este programa es que los CEU se constituyan en un espacio de encuentro y
articulación entre nuestra Universidad y distintos barrios de Mar del Plata. Se propone generar
acciones en pos de garantizar igualdad de oportunidades en el acceso a la educación a todos los
estudiantes de nuestra ciudad -contribuyendo así a disminuir las asimetrías existentes-, en conexión
con la elaboración de un proyecto de vida.
Este programa además, pretende crear un espacio en el cual se desarrolle un trabajo
interdisciplinario y de mutua cooperación entre los distintos actores sociales involucrados y la
Universidad. Se entiende así que los CEU son espacios de co-gestion entre la Universidad y la
comunidad para intentar dar respuestas a las problemáticas y necesidades presentes en cada barrio,
las cuales hayan sido identificadas por los propios vecinos.
Para llevar adelante este proyecto se realizó una convocatoria a distintas organizaciones de la
sociedad civil, habiéndose presentado 15 de la ciudad de Mar del Plata y Balcarce. Se conformó una
comisión asesora para su selección, habiendo sido escogidas la Sociedad de Fomento General San
Martin, Casa D`Italia-PROTER y Sociedad de Fomento Parque Camet, todas ellas situadas en barrios
alejados del Complejo Universitario y distantes entre sí.
Una vez seleccionadas las instituciones que habrían de ser sedes de los CEU, durante el primer
cuatrimestre del ciclo académico del año 2014 se convocó a Becarios Universitarios a fin de actuar
como colaboradores y articuladores de las actividades y proyectos que allí se desarrollan. Tal es la
función que desempeño en la sede San Martin de Centros de Extensión Universitaria, además de
brindar asesoramiento a todo aquel que lo demande en cuestiones relacionadas a oferta académica,
requisitos de ingreso, modalidad de inscripción, servicio de becas, etc.
Para fomentar la participación universitaria en las sedes se realizó una convocatoria específica de
Proyectos de Extensión a radicarse en las sedes, instaurando las siguientes líneas de trabajo:
Capacitación y formación para el trabajo, Salud colectiva y promoción de la Salud y Hábitat, Vivienda y
calidad ambiental.
Específicamente en el CEU del cual participo como becaria se han implementado hasta el
momento actividades fundadas en el primer y tercer eje de trabajos propuesto. Entre estas actividades
se pueden citar la articulación con el Proyecto “Diseño Social: re-diseño de objetos del deshecho”,
Proyecto de fotografía “Fuera de foco: un sinfín de historias en mi barrio” y Proyecto Vinculación socio-
productiva VISOPRO, este último para articular específicamente con la cooperativa que funciona en
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VI Congreso Marplatense de Psicología
esta Sociedad de Fomento. Se destaca que estos proyectos fueron seleccionados teniendo en cuenta
las necesidades y problemáticas que habían sido identificadas previamente por los propios habitantes
de este barrio.
El desafío que caracteriza a los Centros de Extensión Universitaria es la sostenibilidad en el
tiempo, a diferencia de los plazos cortos que suele caracterizar a la implementación de los proyectos
de extensión. A esto se suma la flexibilidad que se requiere de las actividades que se implementen en
las sedes, susceptibles de cambios frente a situaciones imprevistas y demandas que se generen
desde los actores involucrados.
Asimismo, cabe destacar la posición propicia en la que se encuentran los CEU en pos de la
democratización social del conocimiento favoreciendo el acceso de todos los sectores de la sociedad a
la educación superior y a la capacitación en conocimientos o herramientas que resulten necesarios
para la inserción, permanencia y progreso en el mundo laboral.
Se concluye que la extensión universitaria constituye un ámbito privilegiado en la construcción de
una Universidad socialmente comprometida en aras de un país más justo, equitativo y socialmente
cohesionado. Se destaca entonces la importancia de la participación de toda la comunidad educativa
en experiencias de extensión, propiciando dicha práctica en los estudiantes desde los primeros años
de su formación académica como parte esencial de una formación profesional integral.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
El presente trabajo pretende compartir la tarea realizada como psicólogos en diferentes ámbitos a
lo largo de años en la interfase trabajo-salud-educación. Intenta profundizar algunos aspectos del
trabajo con otros sea en equipos, en comunidades de práctica o en redes. A lo largo de la historia de la
humanidad es posible identificar diferentes paradigmas que dan cuenta de la conformación de grupos
y su transformación en verdaderos equipos. El ser humano nació para vivir en sociedad, su sentido de
vida es social y su desarrollo humano espiritual y profesional lo alcanza en plenitud cuando es en
interacción con otros. La relevancia del tema está en intima relación con la potencialidad de cambio
inherente al trabajo conjunto.
El trabajo en equipo es una modalidad de articular las actividades laborales de un grupo humano
en torno a fines, metas y resultados a alcanzar. Implica una interdependencia activa entre los
integrantes de un grupo que comparten y asumen una visión. Valora la interacción, la colaboración y la
solidaridad entre los miembros, así como la negociación para llegar a acuerdos y hacer frente a los
posibles conflictos; otros modelos de trabajo sólo dan prioridad al logro de manera individual y, por lo
tanto, la competencia, la jerarquía y la división del trabajo en tareas tan minúsculas que pierden
muchas veces el sentido, desmotivan a las personas y no siempre han resultado efectivos. El trabajo
en equipo se caracteriza por la comunicación fluida entre las personas, basada en relaciones de
confianza y de apoyo mutuo.
En la actualidad el aporte de la psicología en la tutorización posibilita la construcción de equipos de
trabajo, donde resulta nodal desarrollar el trabajo colaborativo y cooperativo, en tanto cada miembro es
responsable de su aprendizaje pero al mismo tiempo de los demás integrantes de su equipo sus
elementos básicos la interdependencia positiva, la interacción, la contribución individual y las
habilidades personales y de grupo. Desde distintos campos de investigación y práctica se ha planteado
la relevancia del tema, como ajuste mutuo (Mintzberg, 1989) como comunidad de práctica (Wenger,
2001), como instancia de cooperación (Dejours, 2013).
Es interesante que con la misma frecuencia que se establecen las ventajas del trabajo
colaborativo, uno constate las dificultades inherentes a este tipo de trabajo.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Respecto de las ventajas, se logra una interdependencia óptima entre propósitos, sistemas y
equipos disponibles, propicia un ambiente para la comunicación y discusión productiva. Se optimiza la
utilización del conocimiento y experiencia de los miembros, según su área de especialización y las
diferentes miradas en tanto propicia una visión completa del estudio a realizar mejorando la calidad de
las decisiones y de los productos obtenidos. Genera la posibilidad de realizar procesos en paralelo en
función de la división del equipo en comisiones o subgrupos, que permiten aligerar la presentación de
la solución, producto u opinión según la situación para la cual trabajan. El logro de resultados por
consenso grupal asegura la calidad, confiabilidad y exactitud en las ideas y soluciones planteadas al
extraer el máximo provecho de las capacidades individuales para beneficio del grupo. Respecto de las
desventajas el trabajo en grupo puede generar retraso en la presentación de soluciones debido a la
falta de orientación, de propósitos claros y poca o inadecuada definición de los lineamientos a seguir.
Esto puede traer como consecuencia el enfrentamiento y discusiones no relacionadas con los objetivos
planteados.. El comportamiento de los miembros del grupo puede afectar la productividad del equipo:
arrogancia, juicios automáticos, percepción negativa sobre la tarea desarrollada, inhabilidad para
manejar errores, apatía, impaciencia o poca tolerancia, entre otros.
Estos aspectos clave a considerar están vinculados por lo menos con tres dimensiones: La
dimensión del contexto, la interpersonal y la subjetiva.
Al abordar la dimensión del contexto, el eje esta puesto en la importancia vinculada a la imbricación
de los diversos entornos (Schlemenson, 2007). Es imposible pensar la lógica grupal
descontextualizada.
Al mencionar la importancia del contexto institucional del grupo, esa dimensión permite abordar y
analizar procesos abarcativos que condicionan el funcionamiento grupal.
Los contextos organizacionales, sus lógicas, sus prescripciones y proscripciones, las racionalidad
dominante, o sea las razones que inciden en las decisiones organizacionales (Schvarstein, 1992)
fijarán ciertas condiciones para el funcionamiento grupal que deberán ser consideradas. Sin embargo,
este contexto organizacional también debe pensarse inmerso en una lógica de época, de espacio, de
circunstancias sociales más amplias.
Diet (1998) plantea por ejemplo como emergencia de personas como los tanatóforos, personajes
capaces de dañar la red vincular existente de un colectivo humano, generando desconfianza y
minando la comunicación abierta se puede relacionar con momentos, con contextos donde
determinadas lógicas sociales funcionarían como marcos favorecedores para su emergencia. Esta
sería una de las dimensiones a considerar.
Otras de las dimensiones es la interpersonal. Esta dimensión, como es comprensible, requiere
profundizar sobre la noción de vínculo.
El vínculo es aquella relación que se establece con otros, teñida de las primeras experiencias
vitales. “El estado del vínculo o vínculo originario o protovínculo describe la condición permanente y
previa a toda posibilidad de vínculo. Sobre este zócalo relativamente inmutable cobran fuerza y forma
las formaciones diferenciadas del vínculo, y especialmente las alianzas, pactos y contratos” (Kaes,
1998 pp. 24)
Muchas veces el otro es vivido como amenazante y el desafío está puesto en alcanzar el
desarrollo de un espacio de confianza psíquica (Ulloa, 1973) como marco de un intercambio genuino.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Rafael Echeverría (2007) siguiendo a Luhmann, plantea la de la confianza en el mundo del trabajo
y considera la misma como una construcción que requiere necesariamente de una historia compartida
y además de honestidad, competencia y cumplimiento.
También estos vínculos se configuran siguiendo ciertas modalidades o lógicas de época. La forma
de relación con el otro, también está marcada por la dimensión anterior, las lógicas temporales, formas
pensar y pensarse en relación con otros.
Bauman (2006) identifica como consecuencia de la modernidad una lógica de producción de
progreso económico que trae asociado como efecto secundario seres humanos “residuales”. La
construcción de este orden pareciera necesariamente introducir la necesidad de excedentes
superfluos. Lógica de descarte transferible a una modalidad de vínculo social donde la exclusión
predomina en término de descarte no reutilizable.
Frente a esta modalidad presente en el campo organizacional, donde la producción se pondera y
se descarta lo innecesario.
En este sentido, siguiendo a Wittke (2005) podrían pensarse otras formas posibles de subjetivación
en el mundo del trabajo.
Estas modalidades subjetivas intervienen en el funcionamiento grupal e introducen nuevos modos
de posicionamiento frente al mundo del trabajo.
La vida “wired” centrado en proyectos que se ejecutan en función de talentos y la vida
emprendedora que se orienta a generar valor en la comunidad en la que se vive. (Flores y Gray,
citados por Wittke 2005). Son considerados por el autor nuevos posicionamientos subjetivos que
entrañan nuevas modalidades vinculares, siempre con el marco de un determinado contexto histórico
social.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
dispositivos relevantes para la construcción de nuevas prácticas más ajustadas a las circunstancias
concretas en las que se trabaja, permitiendo identificar tensiones y trabajar sobre ellas para ir
posibilitando la revisión de antiguas ideas y la construcción de nuevas representaciones acerca de la
realidad en la que se opera” (Funes Molineri y otros, 2009 pp. 236)
En términos de gestión de conocimiento es un momento central en el proceso de socializar
prácticas efectivas, traducirlas a procesos, algoritmos o flujos, y compararlas con otras para luego
incorporarlas al circuito institucional recuperando la memoria institucional ligada a esa práctica.
Al mismo tiempo la lógica productivista privilegiada en algunos casos en estos espacios, en tanto
privilegia la producción o número de pacientes atendidos por sobre la calidad y la necesaria reflexión
sobre los procesos (comunicación, toma de decisión, formulación de problemas, gerenciamiento de
conflictos) desactivan estos espacios clave para el cambio organizacional.
Al trabajar con otros sectores del estado por ejemplo entre Ministerios o Secretarias, Universidades
y a veces Organizaciones de la Sociedad Civil, un aspecto clave tiene que ver con la construcción de
un lenguaje compartido, el diseño de una estructura organizativa operativa y la flexibilidad necesaria
para amortiguar los desfasajes propios del encuentro entre diferentes culturas organizacionales.
El trabajo orientado hacia la generación de comunidades de práctica con las tres dimensiones que
las caracterizan: un repertorio compartido, o sea productos alcanzados a lo largo de la historia que
fortalecen al conjunto como tal, la existencia de un compromiso mutuo orientado no solo a los
resultados sino al proceso mismo y por último la idea de empresa conjunta, los flujos de intercambios a
lo largo del tiempo (Wenger, 2001), refuerzan la relevancia de estos aspectos antes mencionados.
Si este trabajo articulado, es pensado desde la perspectiva de Red, requiere necesariamente y en
primer lugar del reconocimiento de la existencia de otros. Este reconocimiento, que pareciera ser
sencillo es aceptar la importancia de que hay otros con los que se necesita interactuar. Otros que,
merecen ser reconocidos como base para la posibilidad de avanzar en la consolidación de una red y el
logro de los resultados. Más adelante, el conocer al otro, la interiorización sobre sus características
permitirá avanzar y lograr el cimiento requerido para alcanzar los niveles más altos de conformación de
una red: colaboración, la cooperación sistemática y la asociación. (Rovere, 2006)
EN EL CONTEXTO EDUCACIONAL
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VI Congreso Marplatense de Psicología
(no directivamente) el proceso de construcción y transformación del conocimiento, así como las
interacciones de los miembros de los distintos grupos. Es un mediatizador en la generación del
conocimiento y del desarrollo de las habilidades sociales de los alumnos. (Eggen y Kauchak, 1999)
Son cinco los elementos que caracterizan el aprendizaje colaborativo: la responsabilidad individual:
todos los miembros son responsables de su desempeño individual dentro del grupo; la
interdependencia positiva: los miembros del grupo deben depender los unos de los otros para lograr la
meta común; las habilidades de colaboración: las habilidades necesarias para que el grupo funcione
en forma efectiva, como el trabajo en equipo, liderazgo y solución de conflictos; la interacción
promotora: los miembros del grupo interactúan para desarrollar relaciones interpersonales y establecer
estrategias efectivas de aprendizaje y el proceso de grupo: el grupo reflexiona en forma periódica y
evalúa su funcionamiento, efectuando los cambios necesarios para incrementar su efectividad. (Eggen
y Kauchak, 1999)
La premisa básica del aprendizaje colaborativo es la construcción del consenso, a través de la
cooperación de los miembros del grupo. Se comparte la autoridad y entre todos se acepta la
responsabilidad de las acciones del grupo; mientras que en la cooperación la interacción está diseñada
para facilitar el logro de una meta o producto final específico por un grupo de personas que trabajan
juntas.
Un dispositivo de trabajo, en el contexto educativo, al interior de los equipos es el de la comunidad
de aprendizaje, entendiendo por tal un proyecto de aprendizaje colaborativo. Esta concepción, que
incorpora el espacio intersubjetivo como el lugar por excelencia donde transcurre el proceso de
aprendizaje, lleva a plantear que la adjudicación de sentido a la experiencia no reside en forma
exclusiva en procesos cognitivos individuales, sino en los universos simbólicos compartidos. (García
Labandal, 2014). Las comunidades dan cuenta de grupos de personas con diferentes niveles de
experiencias, conocimiento y pericia que aprenden mediante su implicación y participación en
actividades auténticas y culturalmente relevantes, gracias a la colaboración que tienen entre si, a la
construcción de conocimiento colectivo y a los diversos tipos de ayuda que se prestan mutuamente
(Rogoff y otros, 2001; Smolka, 1996)
Esta modalidad posibilita interpretar "lo que ocurre" desde el punto de vista de quienes actúan e
interactúan en la situación problema y tomar decisiones más ajustadas y adecuadas a partir de su
participación en la experiencia práctica y la reflexión crítica que desarrollan en sus interacciones.
Implica generar condiciones para que los actores involucrados, puedan vivenciar, al decir de Larrosa
(2003), su experiencia de aprendizaje.
Esta intervención sobre el escenario de formación de equipos enfatiza la importancia de desarrollar
y construir “sentido” entre todos los actores, siendo un espacio de diálogo reflexivo entre pares y con el
tutor. El aprendizaje, entendido como participación social, implica algo más que involucrarse en
actividades de las comunidades de conocimientos y prácticas a las que se pertenece. Implica la
construcción de subjetividades e identidades con respecto a estas comunidades. Estas identidades
se construyen a partir de significados compartidos.
CONCLUSIONES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La potencialidad que tiene el trabajo en equipo es que produce una potente red de relaciones e
interacciones que termina consolidando un liderazgo colectivo con responsabilidad y compromiso. Es
tarea de los profesionales “psi” propiciar en los equipos de trabajo el desarrollo de la sinergia para
desplegar una elevada competencia y capacidad que posibilite resolver problemas con decisiones
consensuadas y casi siempre más eficientes y menos costosas. Los equipos de trabajo de alto
desempeño son capaces de asumir los conflictos y resolverlos de forma constructiva convirtiéndolos
en una herramienta de su propio crecimiento.
Otras modalidades de trabajo conjunto como las comunidades de práctica y las redes, instalan
también espacios sustantivos a la hora del abordaje de la complejidad.
Son todas estas formas de trabajo espacios centrales para reflexionar sobre la práctica e interpelar
la realidad, incorporando sus desafíos, pero al mismo tiempo construyendo reglas potentes
compartidas que permitan afrontar las nuevas experiencias que nos esperan.
Julio Cortázar nos dice…“Tenemos que obligar a la realidad a que responda a nuestros sueños,
hay que seguir soñando hasta abolir la falsa frontera entre lo ilusorio y lo tangible, hasta realizarnos y
descubrir que el paraíso perdido está ahí, a la vuelta de la esquina…”
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Enfoques Socioculturales y su aporte a la Psicología Educacional: Categorías de análisis e
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Educacional de cara al siglo XXI: teoría, investigación e intervención. Tucumán, 25, 26 y 27 de
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Kaes y otros (1998) Sufrimiento y psicopatología de los vínculos institucionales. Elementos de la
práctica psicoanalítica en institución. Buenos Aires: Paidós
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El plazo máximo que una persona puede permanecer alojada en una Alcaidía Departamental es el
de 180 días, promoviendo mayor celeridad de la justicia al momento de dictaminar sobre la prisión
preventiva o el procesamiento de un sujeto o de decidir la liberación según corresponda.
A través de una metodología de relevamiento de datos hemos formalizado una serie de espacios
formales y estrategias no formales de intervención que tienen lugar en las Alcaidías mencionadas. Se
han podido deslindar las siguientes estrategias intervención:
1151
VI Congreso Marplatense de Psicología
La información que se pudo recabar respecto al trabajo del psicólogo en las Alcaidías podemos
mencionar que en las mismas se desempeña un grupo de profesionales de la salud mental
encargados de diferentes tareas.
En la admisión, la tarea que se realiza consiste en entrevistar a los detenidos realizando preguntas
básicas pre establecidas o estructuradas de antemano. Utilizan una “planilla de salud” que es un
documento que se incorpora en el legajo personal del sujeto por si el juzgado lo solicita. Es una
planilla, desde el punto de vista de los profesionales y observadores, de estilo conductista, que tiene
preguntas fijas que se responden por sí o no. Por ejemplo: “¿consume? si – no, ¿cuantas veces al día,
a la semana, al mes?”.
Las entrevistas tienen como fin recabar información para el armado de un legajo estándar, todos
los legajos de arman de la misma manera y contienen la misma información, y por ello no difieren unos
de otros.
En este espacio se realiza una evaluación individual que pretende un primer conocimiento y
acercamiento al sujeto y permite la toma de decisiones en torno a su lugar de alojamiento dentro de la
Alcaidía.
Se trata de una instancia donde se encuentran elevados montos de ansiedad y angustia. Las
intervenciones profesionales tienden a enmarcar la situación de encierro, explicando a los detenidos
las características del dispositivo y el punto del proceso en que se encuentran (detención), así como el
ofrecimiento de recursos para tramitar la angustia. El objetivo de dichas intervenciones apunta a paliar
los efectos del encierro.
Las entrevistas de seguimiento consisten en realizar asistencia y no tratamiento, en la asistencia se
trabaja en el “aquí y ahora”, no realizando un análisis que intente rastrear en su historia o en su
infancia los motivos por los que el sujeto se encuentra detenido. El trabajo de quienes realizan esta
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tarea es fundamentalmente de contención individual para intentar paliar los efectos que produce el
encierro en el sujeto. En palabras de una de las profesionales entrevistadas: “La asistencia es el aquí y
ahora, uno tiene que trabajar la angustia y el miedo que tienen de entrar a una Unidad Penitenciaria.
La mayoría son chicos que apenas tienen 18 años. Algunos dejan de ver a sus hijos, porque cuando
están detenidos pierden la patria potestad, solo los puede traer la madre. En la asistencia no indago
por qué están acá, a veces me lo cuentan solos. Trato de estar “limpia” de prejuicios, si no el trabajo se
dificulta”. Comenta que su tarea consiste en tratar de “adaptarlos a cómo funciona el sistema” ya que
los detenidos, sobre todo los que son nuevos o no han tenido contactos anteriores con el sistema
penal, llegan con ciertos prejuicios, miedos y ansiedades, entonces lo que procura es brindarles la
información pertinente, despejar esas ideas para bajar la ansiedad”.
En apariencia la institución propicia el trabajo interdisciplinario. Cuentan con un trabajador social,
psicólogos, un profesor de educación física, pero en la realidad de la práctica lo que se observaría a
partir de las visitas realizadas, es una dificultad para el trabajo interdisciplinario –en la definición de
interdisciplina que sostiene que ésta se basa en el trabajo conjunto entre todas las disciplinas-,
tampoco pudo observase la existencia de una comunicación fluida entre la alcaidía y las unidades
penitenciarias.
ALGUNAS CONCLUSIONES
Consideramos que al ser las Alcaidías un dispositivo novedoso y sin precedentes en América
Latina, se presenta como un espacio de múltiples desafíos para los profesionales que se desempeñan
en ese terreno.
Desde el marco de los Derechos Humanos, resulta auspiciosa la existencia de este tipo de
instituciones y sostenemos que es de vital importancia la realización de capacitaciones y cursos de
formación específicos en la materia. Poder abordar al sujeto integral es lo que permite comprender que
sólo la interdisciplina es la que lo permite y comenzar a trabajar en conjunto con otras disciplinas.
Sin dudas los psicólogos vamos encontrando nuevos y distintos espacios de trabajo, lo que
generando marcas en la identidad profesional. La inserción en las Alcaidías es sólo un ejemplo de ello.
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Psicología Forense. UNLP.
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Zaffaroni, Raúl Eugenio (1998) “En busca de las penas perdidas (Deslegitimación y dogmática jurídico-
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Temis.
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INTRODUCCIÓN
MARCO CONCEPTUAL
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VI Congreso Marplatense de Psicología
A fines de los años 90,Labourdette y Gavilán(2000) han realizado una investigación sobre los
programas sanitarios existentes en la Provincia de Buenos Aires. En la misma podemos observar que
se encontraban en ese momento en funcionamiento 29 Programas Sanitarios, de los cuales un 52 %
respondía a una estrategia de prevención primaria y un 14 % eran destinados a la salud mental.
Es en este marco es que nos proponemos comparar los programas dependientes del Ministerio de
Salud de la Provincia de Buenos Aires (MSPBA) implementados a principios de la década del '90 y
aquellos programas que se encuentran en funcionamiento en la actualidad con el fin de constatar si se
han implementado o no las estrategias propuestas por los distintos organismos internacionales de los
cuales la Argentina forma parte.
RESULTADOS
GRÁFICO 1
Programas clasificados según el nivel de prevención al que están destinados.
1999 2014
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VI Congreso Marplatense de Psicología
GRÁFICO 2
Programas clasificados según sus objetivos.
1999 2014
DISCUSIÓN
Los resultados ponen al descubierto que no ha habido un cambio sustancial en las políticas de
programas sanitarios para implementar la estrategia de la APS cono nodo central del sistema sanitario
en la provincia de Buenos Aires. Esto puede deducirse no solo porque el porcentaje de programas
destinados a la prevención primaria ha disminuido levemente sino por el hecho de que en la actualidad
se cuenta con la misma cantidad de programas sanitarios que en el año 1999. Tampoco ha aumentado
la cantidad de programas que abordan una prevención operando a varios niveles, los cuales incluirían
la prevención primaria dentro de su accionar.
Por otra parte, consideramos que la marcada disminución de los programas destinados a la
capacitación de personal se debe a que en la actualidad no se presenta la necesidad de formar
recursos humanos que existía a fines de los años 90 para poder poner en marcha la reforma del
sistema de salud (cuyos ejes eran la descentralización de la salud y la creación del hospital público de
autogestión)siguiendo los lineamientos de la reforma constitucional del año 1994.
1158
VI Congreso Marplatense de Psicología
Si bien los programas sanitarios son una parte del sistema de salud, consideramos a estos datos
estadísticamente significativos, al poseer tamaña similitud en estos dos periodos.
Respecto a la salud mental, vemos como el avance en el tratamiento de la misma desde una
estrategia preventiva es nulo. Las estrategias sugeridas por los organismos internacionales siguen
siendo ignoradas.
El aumento en los programas destinados a la prevención secundaria (tratando al paciente una vez
que contrajo la enfermedad –tuberculosis, diversos tipos de cáncer, VIH, asma, etc-), muestran como
el modelo médico hospitalocéntrico sigue siendo el reinante en las políticas sanitarias.
Finalmente creemos que la salud de la poblaciónno debería depender pura y exclusivamente de las
acciones que determine y decida el sector estataldesde sus ministerios y secretarías. Las
problemáticas relacionadas a la salud de la población y a la prevención de daños y patologías
carecieron de protagonismo en la agenda pública, la cual es definida por Martin De Lellis como los
"temas que son colocados en la arena pública a partir de la actividad desplegada por los medios de
comunicación y la agenda institucional" (De Lellis, 2010: 23) a lo que nosotros agregamos el accionar
político de los ciudadanos organizados, de la forma que fuese, quienes también son capaces (aunque
con menos poder) de macar agenda pública. Por esta razón consideramos que sería reduccionista
culpar al Estado por la falta de acciones tendientes a una implementación de la estrategia de APS.
Creemos que poner sobre la agenda esta carencia es una tarea central para la aplicación de estas
viejas estrategias que aún debemos implementar.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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la perspectiva del factor humano. Buenos aires: Paidós.
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVOS
1) Examinar diferencias en las necesidades psicológicas básicas según nivel educativo. 2) Analizar la
asociación entre las necesidades psicológicas básicas y los tipos de motivación académica en
estudiantes medios y universitarios. 3) Examinar diferencias en las necesidades psicológicas básicas
según rendimiento académico en estudiantes medios y universitarios
MÉTODO
PARTICIPANTES
La muestra de nivel medio se conformó con 376 alumnos (34.9% varones; 65.1% mujeres;
Medad=15.23; DEedad=1.61) que cursaban sus estudios en diversos cursos de instituciones públicas y
privadas de la Ciudad de Buenos Aires (1er año 31.4%, 2° año 18.1%, 3er año 16.5%, 4° año 25% y 5°
año 9%). El grupo de estudiantes universitarios se compuso por 330 educandos de la Ciudad de
Buenos Aires (31.9% varones, 68.1% mujeres; Medad=22.94; DEedad=3.67). Los sujetos cursaban en
cinco facultades públicas y privadas (5.5% Ciencias Exactas y Naturales; 11.2 % Ingeniería, 23.3%
Ciencias Veterinarias, 25.2% Medicina, 44.8% Psicología).
INSTRUMENTOS
ANÁLISIS DE DATOS
1161
VI Congreso Marplatense de Psicología
Para responder al objetivo 1 se calcularon pruebas t para muestras independientes. En el caso del
objetivo 2 se efectuaron correlaciones r de Pearson. Finalmente, para el objetivo 3 se llevaron a cabo
análisis de la varianza de un factor (ANOVA).
RESULTADOS
Tabla 1.
Necesidades psicológicas básicas y motivación. Asociación.
Vinculación Autonomía Competencia
Tipos de motivación
M U M U M U
Experiencias
.16** .13* .38** .12* .25** ,22**
Motivación Estimulantes
intrínseca Logro .12* .14** .36** .11* .32** Ns
Conocimiento Ns Ns .49** .18** .27* Ns
Identificada .18** .33** .32** .14** Ns Ns
Motivación
Introyectada .14** Ns .14** -.15** .10* Ns
Extrínseca
Externa .13** .19** Ns Ns Ns Ns
Amotivación Ns -.18** -.59** -.38** -.29** -.25**
Nota. M=Medios; U= Universitarios, **=<.010; *=<.050
Como paso previo al objetivo 3 se conformaron grupos de rendimiento académico bajo, medio y
alto para cada nivel educativo. En los estudiantes de nivel medio se efectuó la siguiente clasificación:
1) Bajo. Alumnos repetidores, estudiantes de 2º a 5º año que se ubicasen por encima del percentil
75 en la cantidad de asignaturas adeudadas a diciembre y marzo, y, para el caso de los alumnos de 1º
año que no han llegado a la instancia de adeudar asignaturas, se consideró como bajo rendimiento a
aquellos que se encontrasen por debajo del percentil 25 en el promedio del trimestre; 2) Medio. Todos
los estudiantes no repetidores que se hallasen entre los percentiles 25 y 74 en el promedio de
calificaciones/asignaturas adeudadas; 3) Alto. Educandos no repetidores que superasen el percentil
1162
VI Congreso Marplatense de Psicología
75 en sus calificaciones para 1º año –mejores calificaciones-, y los ubicados debajo del percentil 25
de materias adeudadas para 2do a 5º año –menor cantidad de asignaturas adeudadas-. En el caso
de los alumnos universitarios, los grupos de rendimiento se conformaron del siguiente modo: 1) Bajo.
Aquellos alumnos que alguna vez perdieron la regularidad, los ubicados en el percentil 75 en la
proporción de aplazos sobre el total de materias cursadas -tasa de fracaso–, así como los sujetos que
se hallasen entre los percentiles 25 y 74 en dicha tasa, pero en el 75 en el retraso en la carrera,
entendido como la proporción de materias aprobadas sobre las cursadas -considerando que han
tenido un cantidad media de aplazos y aprobación, pero que para ello tardaron más tiempo que la
mayoría de sus pares-; 2) Medio. Los ubicados entre los percentiles 25 y 74 en la tasa de fracaso y
demora –esto incluye a los que tuvieran una cantidad promedio de aplazos y retraso-, también a los
alumnos que puntuaran debajo del percentil 25 en fracaso, pero sobre el 75 en demora -evaluándose
que realizaron un adecuado rendimiento, pero en un tiempo excesivo-; 3) Alto. Aquellos educandos
por debajo del percentil 25 en fracaso y demora –dado que exhiben menor cantidad de aplazos y de
retraso-.
Conformados los grupos, se examinaron posibles diferencias en las necesidades psicológicas
básicas según rendimiento académico. En el grupo de nivel medio no se detectaron diferencias
estadísticamente significativas en vinculación [F(367, 2)= 2.12, p =.121] y autonomía [F(367, 2)=0.49,
p=.610] pero si en competencia [F(367, 2)= 19.87, p=.000], con tamaño del efecto entre moderado y
alto (ƞ2=0.09). Los alumnos con rendimiento bajo presentaron medias inferiores que los restantes
(MB=8.12), aquellos con desempeño medio (MM=8.83) exhibieron valores menores que los de
rendimiento alto, quienes reportaron las medias más altas (MA=9.68). Al analizar el grupo de
estudiantes universitarios, nuevamente no se detectaron diferencias en estadísticamente significativas
en vinculación [F(319, 2)=2.05, p=.129] y autonomía [F(319, 2)=1.30, p=.272], mientras que si se
hallaron en competencia [F(319, 2)=17.23, p=.000] con tamaño del efecto entre moderado y alto
(ƞ2=0.09) De similar modo, los estudiantes rendimiento bajo presentaron las medias inferiores
(MB=9.01), mientras que aquellos de desempeño medio (MM=9.91) obtuvieron puntajes menores que
los de rendimiento alto (MA=10.47).
CONCLUSIÓN
1163
VI Congreso Marplatense de Psicología
alumnos. Los resultados de los objetivos 2 y 3 se ubican en la línea de los postulados de la teoría de la
autodeterminación, en los que se afirma que la satisfacción de las necesidades psicológicas básicas
se asocia con un perfil motivacional de regulación autónoma y a un mejor desempeño (e.g., Black &
Deci, 2000; Otis et al., 2005; Ratelle et al., 2007), aunque en esta oportunidad solo se ha verificado
para la competencia.
Considerando las limitaciones del trabajo, cabe mencionar que el muestreo realizado fue
intencional simple. A su vez, la muestra obtenida en el grupo de nivel universitario carece de
participantes de varias Facultades, como por ejemplo, Ciencias Sociales y Abogacía. Finalmente, la
utilización de instrumentos de autoreporte tiene como consecuencia posibles sesgos en las respuestas
de los participantes. A pesar de las falencias, se considera se ha efectuado doble aporte. En primer
lugar, se generó conocimiento en relación a los postulados de la teoría de la autodeterminación. En
segundo término, se aporta información sobre características motivacionales del estudiantado de la
Ciudad de Buenos Aires y su vínculo con el rendimiento académico. Esto resulta una información de
utilidad para los profesionales que se desempeñan con los educandos para lograr una mejor
comprensión del trabajo en el aula, y diseñar estrategias que fomenten aquellas características
relacionadas con un mejor desempeño académico.
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1165
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Tomando la perspectiva de la teoría de las Representaciones Sociales (en adelante RS), surge una
línea de investigaciones que pone a la historia como objeto representacional, indagando cómo las
personas y los grupos sociales se representan a sí mismos su pasado individual y social. En este
marco, se hace relevante el concepto de memoria colectiva (en adelante MC), la cual es entendida
como el proceso social de reconstrucción del pasado experimentado por los miembros de un grupo,
una comunidad o una sociedad (Halbwachs, 2004). Para llegar a dichas RS, los estudios en la
temática se centran en analizar cómo los grupos rememoran, olvidan y reconstruyen el conocimiento
del pasado histórico (Valencia & Páez, 1999). Se parte del supuesto que el proceso de recordar si bien
es individual, está influido por el hecho de estar inserto en un contexto social que condiciona la manera
en que se percibe y se interpreta la realidad, reforzando la idea constructivista respecto de que todo
pensamiento individual está atravesado por la relación entre lo subjetivo y el contexto sociocultural
(Moñivas, 1994). Según Moscovici (1988), las RS pueden ser ampliamente compartidas
(hegemónicas), diferentes pero sin problemas de interacción entre las diferentes poblaciones
(emancipado-as), o contradictorias en las distintas poblaciones (polémicas). El estudio de las
Representaciones Sociales de la Historia (en adelante RSH) se vuelve relevante toda vez que se
entienda que, en tanto construcciones sociales de conocimiento de sentido común, son útiles para
orientar al individuo en el aquí y ahora de su contexto inmediato, y para estar adaptado en su mundo
físico e integrado en las interacciones sociales que le implica su pertenencia a distintos grupos (Farr,
1983; Páez & Liu, 2010). Las investigaciones previas refieren, en relación a los personajes de la
historia universal, que a través de la tradición y su embellecimiento (Hobsbawm & Ranger, 1983) los
héroes históricos y villanos se convierten en personificaciones de las culturas políticas nacionales, las
cuales van cambiando en las diferentes sociedades. En este sentido, Liu y Hilton (2005) afirman que si
bien los eventos históricos imparten lecciones, no encarnan valores sino que son las figuras históricas
las encargadas de transmitirlos. Es en el consenso en cuanto a los héroes y villanos de la historia del
mundo que se simbolizan los valores y logros a los que la humanidad aspira, y los que se rechaza.
De esta manera, el estudio de las RS en general, y en particular también el de las RSH, incluyen
en su interior un sistema valores, de conocimientos y de prácticas cuya función es doble: ordenar el
mundo de modo que sea más accesible guiar los propios actos en el entorno físico y social en el que
una persona se desarrolla; y en segundo lugar, propone un código compartido de significaciones que
1166
VI Congreso Marplatense de Psicología
ayuda a comunicarse, a nominar y clasificar sin ambigüedad los múltiples aspectos de su mundo y su
historia (Farr, 1986). Desde una perspectiva psicosocial, es necesaria la incorporación de creencias y
valores para poder comprender de manera más específica las RSH que surgen en un determinado
grupo social.
De acuerdo con Schwartz (2001), los individuos y los grupos, con el fin de adaptarse a la realidad
en un determinado contexto social, trasforman las necesidades intrínsecas a la existencia y las
expresan en un lenguaje especifico de valores. Éstos emergen como metas deseables que responden
a necesidades individuales en tanto organismos biológicos, así como a requerimientos para la
interacción social ordenada y el buen funcionamiento de los grupos. Son motivos sociales que se
adquieren en la socialización por lo que se vinculan a metas y fines deseables del grupo cultural de
pertenencia del individuo. Los valores promueven, orientan e intensifican la acción erigiéndose así en
tendencias de acción relativamente estables que se constituyen en normas de evaluación y
justificación de la acción. Schwartz (2001) encuentra diez tipos motivacionales de valores que, a su
vez, se organizan en dos dimensiones bipolares: Apertura al cambio versus Conservación, y
Autopromoción versus Auto-trascendencia. Los valores de Autopromoción hacen énfasis en el
individuo mientras que los de Auto-trascendencia en lo social.
El objetivo general del presente trabajo es identificar los posicionamientos diferenciales sobre los
sentimientos que despiertan 24 personajes de la historia universal mediante un análisis de
conglomerados. Como objetivo específico se planteó verificar si existen asociaciones entre los valores
y la importancia atribuida y los sentimientos que despiertan los personajes de la historia universal
considerados más importantes por los participantes.
Método
Tipo de estudio y Diseño. Se trata de un estudio correlacional de diferencias entre grupos, de
diseño no experimental transversal, con población general como unidad de análisis.
Procedimiento. La aplicación del cuestionario se realizó de manera online, invitando a los
participantes a completar el cuestionario voluntariamente y de forma anónima. La aplicación del
cuestionario se realizó en un periodo de 30 días aproximadamente.
Participantes. La muestra no probabilística intencional estuvo compuesta por 379 sujetos
residentes en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense. Del total de los encuestados, un
44,3% (n= 168) eran hombres. La media de edad fue de 36,20 (SD=11,16), siendo el rango de edad
18-69 y la mediana igual a 34 años.
Instrumentos. El cuestionario utilizado fue de formato autoadministrado y estuvo integrado por las
siguientes secciones: -Personajes de la Historia Universal: se solicitó a los participantes que indiquen
(sobre una escala del 1 al 7, donde 1=extremadamente negativo, 4=neutral y 7=extremadamente
positivo) qué sentimiento les despertaban 24 personales de la historia universal seleccionados en base
a estudios previos (Liu et. al, 2005). -Auto Posicionamiento Ideológico: se les solicitó a los participantes
que indiquen sobre una escala de 1 a 7 (donde 1 =izquierda y 7=derecha) que indiquen en términos de
política cuál era su posicionamiento. -Nivel de Nacionalismo: se les solicitó a los participantes que
indiquen sobre una escala de 1 a 10 (donde 1 =nada nacionalista y 10=muy nacionalista) que indiquen
en su nivel de nacionalismo. -Importancia de la religión: se les solicitó a los participantes que indiquen
sobre una escala de 1 a 7 (donde 1 =nada importante y 7=muy importante) que indiquen cuán
importante es la religión en sus vidas. -Escala de Valores (Schwartz, et al., 2001) versión reducida de
1167
VI Congreso Marplatense de Psicología
21 ítems. Recoge enunciados sobre valores o medios y fines deseables en la vida, que orientan la
conducta social. El participante tiene que contestar entre varias opciones de respuestas que van desde
0 (no se parece nada a mí) a 5 (se parece mucho a mí) la medida en que se ve reconocido en cada
frase.
Análisis de datos. En primer lugar, se realizó un análisis de conglomerados no jerárquico donde se
clasificó a los participantes en función del nivel de nacionalismo, posicionamiento ideológico y nivel de
religiosidad. En segundo lugar se describieron los conglomerados en términos de variables
psicosociales religiosidad, nacionalismo y posicionamiento ideológico. Por último, se realizó un análisis
de correlación entre los valores y la importancia atribuida y los sentimientos que despiertan los
personajes de la historia universal considerados más importantes por los participantes.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
1168
VI Congreso Marplatense de Psicología
un lado se agruparon los personajes valorados con sentimientos positivos, a este conglomerado se lo
denominó “Héroes” y por el otro se formó un conglomerado que reúne a los personajes con baja
valoración o valoración negativa el cual fue definido como “Villanos”.
Einstein Mussolini
Freud Stalin
Gandhi Thatcher
Luther King
Mandela
Alej. Magno Alej. Magno Alej. Magno Alej. Magno
Churchill Churchill Churchill Churchill
Colón Colón Colón Colón
Kennedy Kennedy Kennedy Kennedy
Napoleón Napoleón Napoleón Napoleón
Varían
1169
VI Congreso Marplatense de Psicología
de manera positiva por los grupos de izquierda nacionalista y derecha conservadora. Por su parte, los
grupos de moderados y de izquierda liberal categorizaron a estos personajes con sentimientos
negativos.
El personaje del Che Guevara es valorado por todos los grupos como un héroe de la histona
universal ya que su puntuación es positiva, a excepción de la valoración negativa otorgada por el
grupo denominado moderado. De manera similar, el personaje de Fidel Castro es valorado
positivamente por el grupo de izquierda liberal y de izquierda nacionalista. Pero en este caso el grupo
de derecha conservadora junto con el grupo de moderados le adjudicó sentimientos negativos. Ambos
fueron líderes políticos y referentes de la Revolución Cubana. Los personajes de Lutero, Jesucristo y
Juan Pablo II son evaluados con sentimientos positivos por el grupo de izquierda nacionalista, derecha
conservadora y moderados. El grupo de izquierda exhiben sentimientos negativos hacia su figura.
Dicha agrupación es esperable por la baja importancia otorgada a la religión por este último grupo.
En este sentido, se evidencian diferencias a partir de las variables de agrupación en lo que cada
grupo considera como héroes (otorgando valoración positiva) o villanos (los personajes con valoración
negativa). Los diferentes posicionamientos diferenciales dejan ver disenso en el consenso, sobre todo
en las variables de religiosidad y el auto-posicionamiento ideológico Se repite, al igual que en un
estudio previo de Liu (2009), el mayor consenso en la valoración de figuras humanitarias dedicadas a
la defensa de los derechos humanos y a las actividades científicas. Se observa mayor consenso en
héroes que en villanos (10 héroes y 6 villanos). Los estudios previos explican que las personas tienden
a justificar los hechos negativos de los personajes universales bajo el argumento o justificación de que
éstos se encontraban luchando por motivos nobles relacionados por ejemplo, a la construcción de
una nación, independencia o conquistas nacionales, entre otras (Hanke et al, 2013).
Por último, se realizó un análisis de correlación entre las dimensiones subyacentes de los valores,
la importancia atribuida y los sentimientos que despiertan los 10 personajes de la historia universal
considerados más importantes por los participantes (ver Tabla 2).
Tabla 2. Asociaciones entre las dimensiones subyacentes de valores e importancia y sentimientos de los 10
personajes de la historia universal considerados más importantes por los participantes
1170
VI Congreso Marplatense de Psicología
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1172
VI Congreso Marplatense de Psicología
La cita del Silvina Ocampo nos invita a pensar los recuerdos de la niñez como "tarjeta postal" en
tanto señala que carecen de "continuidad" porque "están llenos de desmayos,/ de pérdidas de
conocimiento". Es a partir de esta línea de pensamiento que se presenta una viñeta clínica, que da
cuenta de la construcción de estas tarjetas postales, cuando la intervención del Estado indica que este
niño no pueden convivir con sus progenitores y por lo tanto se busca un ámbito familiar alternativo para
el. Así se imprimirán en dichas postales nuevas puntualizaciones y segmentaciones que se
manifestaran en construcciones y nuevas ficciones que podrán producirse en el curso del análisis de
un niño.
Señala Freud en Un recuerdo infantil de Goethe en “Poesía y verdad” un fragmento de las páginas
de la biografía del famoso poeta y novelista:
“Cuando queremos recordar lo que nos sucedió en la época más temprana de la niñez, hartas
veces damos en confundir lo que hemos escuchado decir a otros con lo que efectivamente poseemos
por experiencia propia, habiéndolo contemplado nosotros mismos” (1917, pp 141)
Si bien Freud estaba interesado en estos pasajes a los fines de dar cuenta de los recuerdos
infantiles encubridores, es decir, aquellos que habiendo quedado conservados en la memoria,
sorteando los efectos de la amnesia infantil, habían adquirido una suma importancia mayor de la de
aquel estadio de la vida, bien porque ya en su tiempo entrañaban tal importancia, bien porque la hayan
adquirido después, bajo la influencia de sucesos posteriores, es posible seguir sus huellas para la
presentación del niño.
Kevin de 5 años, llega a la consulta por derivación del Jardín al que asiste, desde dicha institución
le señalan a los tíos del niño, que sería conveniente que comience tratamiento psicológico
derivándolos a un dispositivo de atención gratuita dependiente de un proyecto de formación de
graduados de la Facultad de Psicología. Es así como Liliana tía del niño, en tanto esposa del hermano
de la mamá de Kevin, solicita un turno. Respecto de los progenitores del niño, en la actualidad se
desconoce quién es el padre biológico, mientras que su madre se dedica a la prostitución y se
encuentra en situación de calle. Llevará una gran cantidad de entrevistas entender los entramados
familiares por los cuales ante la observación de que Kevin se encontraba en riesgo Liliana le pide a su
cuñada que le deje al niño así junto a Hernán (tío biológico del niño) pueden ofrecerle otro espacio de
1173
VI Congreso Marplatense de Psicología
crianza. La mamá de Kevin acepta en primera instancia y desde los 11 meses el niño comienza a vivir
con Liliana y Hernán, en ese momento no tenían hijos biológicos aunque si estaban en sus planes a
futuro.
A lo largo del tiempo la mamá de Kevin cambiará de opinión y en dos oportunidades intenta
llevarse al niño, reintegrándolo horas o días después a la casa de Liliana y Hernán. Para evitar este
tipo de situaciones los tíos del niño deciden presentarse ante el CPDeN a los fines de comenzar los
trámites necesarios para obtener la guarda de Kevin, obteniendo en primera instancia una medida de
abrigo.
Pocos días antes de la solicitud del turno, Liliana y Hernán habían recibido la noticia de la
efectivización de dicho proceso. Aunque no podían establecer un vínculo entre dicha situación y lo que
le ocurría a Kevin.
La derivación del Jardín implicaba la presunción de un cierto diagnóstico basado en las
particularidades de la mamá de Kevin, así solicitaban mi intervención a los fines de que logre un
mejoramiento del comportamiento del niño que no podía quedarse la totalidad de las horas en el jardín,
se mostraba agresivo hacia sus docentes y compañeritos, en ocasiones volviéndose inmanejable para
su maestra de sala por lo que el niño asistía en horario reducido quedándose Liliana en la Institución
por si algo ocurría. Esta situación provocaba mucho malestar en los tíos, sobre todo porque habían
tenido un bebé por lo que la permanencia de Liliana en el jardín implicaba también quedarse allí con
este niñito.
Las tarjetas postales de Kevin daban cuenta de una familia materna que se ocupaba de su crianza
y cuidado, pero tendría que unirse con otras, una con otra para dar cuerpo al relato,
fragmentariamente unidas desde la manualidad infantil de pegar retratos recortados por los intersticios
del recuerdo. El texto se caracterizaba, por la presencia de la acumulación no solo desde lo textual con
sus relaciones intra e intertextuales, sino también desde el lenguaje. Kevin tardó más tiempo de lo
esperable en aprender a hablar y lo hizo a partir de las canciones que sus tíos le ofrecían en diversos
juegos y antes de irse a dormir. Recurso que a lo largo de las sesiones iré implementando y dará lugar
a nuevas construcciones.
Las sesiones con Kevin me permitían encontrarme a un niño muy diferente del que las voces del
jardín hablaban. En incontables oportunidades dicha situación me sorprendía llegando a pensar que
hablábamos de niños diferentes. Luego de un tiempo pude advertir que lo diferente no estaba en Kevin
solamente, sino en los adultos que lo recibían y en sus diferentes maneras de alojarlo o no. Había algo
del orden del deseo que me acompañaba en mi trabajo con Kevin, que me permitía orientar la cura y
me posicionaba de una manera diferente que a las docentes del jardín.
Será a partir de las diferentes canciones que acompañen las sesiones que Kevin que comenzará a
manifestarme algunas cuestiones que no llegaba a comprender. Jugábamos con el ritmo, la
entonación, el volumen de las voces, y en una oportunidad el niño comienza a introducir variaciones en
el contenido. Así la clásica canción que señala la llegaba de la mamá pato, luego la del papá pato y a
continuación los patitos, adquirió nuevas versiones, Kevin me preguntaba si podía llegar primero el
papá pato y luego si podía irse. Lejos de plantear una lectura lineal del suceso, algo de la presencia y
ausencia comenzaba a instalarse, e interrogaba no sólo lo simbólico sino también a la realidad. Al
momento de referirse a sus tíos Kevin le dice papá a Hernán, y recién tiempo más tarde podrá
comenzar a referirse con el significante mamá para nombrar a Liliana, temporalidad que Kevin definirá
1174
VI Congreso Marplatense de Psicología
de acuerdo a la posición de los adultos, Liliana ante el “mama” le señala al niño una y otra vez, que
ella no es su madre, que el tiene una mamá y que ella pueda ser su mamá del corazón. Estas
dificultades de Liliana se expresaran en el juego de la canción al preguntarme Kevin si primero puede
venir el papá. Y por otro lado la pregunta de la posibilidad de que el padre pueda irse quizás aluda a la
falta en la realidad de su padre biológico, al que nadie conoce, como también a si Hernán en algún
momento también se va a ir.
Las canciones y los juegos comenzarán a darme la pauta de que Kevin más se desorganiza
(sobre todo en el jardín) cuando algunas cuestiones respecto de su filiación lo inquietan. Si el papá es
Hernán y tal como lo señala Liliana la mamá es Estefanía (hermana de Hernán), Kevin es hijo de dos
hermanos, posición incestuosa si la hay. Estas situaciones se podrán de manifiesto cuando su abuela
conversando con Kevin le pregunta si extraña a su mamá, si quiere verla, y le pide que les insista a
Hernán y Liliana para poder verla. A partir de las entrevistas con los tíos es posible despejar que esta
abuela convencía a Kevin porque era la única manera que encontraba para que su hija vuelva a su
casa. Sin embargo lejos de producir el efecto deseado confundía a Kevin y al producirse los
encuentros con su madre este se desestabilizaba. Vale aclarar que la mamá del niño, se acercaba
esporádicamente a visitarlo, siendo imposible estabilizar de alguna manera estos encuentros, luego de
los cuales Kevin producía manifestaciones sintomáticas como enuresis o encopresis.
En el marco del denominado Sistema de Protección Integral de los Derechos del niños, niñas y
adolescentes se entiende a las “medidas de abrigo” como aquellas de carácter excepcional y
provisional que implican la permanencia temporal de un niño fuera del ámbito familiar. El objeto de la
medida es brindar un ámbito alternativo al grupo de convivencia, cuando en éste se encuentren
amenazados o vulnerados sus derechos o garantías y hasta tanto se evalúe la implementación de
otras medidas administrativas y/o judiciales tendientes a preservarlos o restituirlos.
La medida de abrigo tomada respecto de Kevin dará legalidad jurídica aquel pedido de Liliana a la
mamá del niño. Ahora bien, que implica dicha medida en la estructuración subjetiva de Kevin? ¿La
letra de ley propone modos alternativos de filiación? ¿ o de crianza? Un intento de respuesta puede
encontrarse en lo que puede definirse como la perspectiva de la filiación. Desde el psicoanálisis
freudiano la filiación puede entenderse desde la entrada en la cultura por una escena sancionada por
el cuerpo social (Freud, 1913), lo que permite definirla como efecto de un montaje normativo-
institucional que asigna a un individuo un lugar respecto de las generaciones y de la sexualidad,
dándole el estatuto de “hijo”. (Freud, 1913, 1921, 1927,1938; Lacan, 1955; 1957)
El caso de Kevin nos invita a pensar en que el lugar de los niños/as no es ajeno a las formas de
inscripción social-ceremonial, es decir formas filiatorias en la cultura a la cual llegan y son recibidos.
Ante el desamparo originario aparecen como respuesta diferentes modos de tratamiento: interdicción,
mistificación, legislación. De ahí la importancia del otorgamiento de la guarda como hecho filiatorio, de
inscripción desde lo jurídico a un grupo de pertenencia. Es importante destacar que la filiación no deja
de ser una procesamiento singular que un sujeto hace de su pertenencia a un linaje, un grupo, una
genealogía (Freud, 1921). La Infancia podría definirse como ese tiempo privilegiado para que estas
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VI Congreso Marplatense de Psicología
operaciones se constituyan. Es en estas operaciones donde aparecen las dificultades que Kevin
manifiesta en su comportamiento en el jardín. De ahí que mis principales intervenciones como analista
incluyeran de manera específica entrevistas con los tíos del niño a los fines de trabajar estar
cuestiones. Aquello que parecía un simple papel u oficio, podía convertirse en un punto de inscripción
para vida de Kevin y la de ellos mismos. Una apuesta a la filiación y no sólo a la crianza.
Es por esto que respecto de la escuela consideraba que mi trabajo en articulación implicaba que
pudiera hacerse lugar al síntoma subjetivo, leer la demanda, habilitar un vacío allí donde todo es
certeza, agudizar los oídos a la modalidad de hacer singular y de sostenerse en el mundo que el niño
ha encontrado. En este sentido, entendiendo que la preponderancia de problemas de conducta y los
enunciados recurrentes como por ejemplo “con este chico no se puede”, pueden estar funcionando
como síntoma social segregando los retoños de la sofocación de tendencias desructivas señaladas por
Freud en El Malestar en la Cultura (1930).
El trabajo clínico con niños que se encuentran bajo la figura “medida de abrigo” dan cuenta de los
efectos de la intervención del Estado cuando esta, desde el paradigma de la protección y promoción,
sólo apunta a la crianza y deja librada al azar la línea de la filiación, la interrumpe sin producir vías
alternativas de identificación y transmisión.
Será a través de la vía de reconstruir las historias familiares, las postales de cada sujeto, de
ordenarlas para desordenarlas, y volver a ordenarlas después, de armar agrupaciones diferentes, de
habilitar la construir postales nuevas, que podremos abordar estas situaciones de maneras diferentes.
Donde la apuesta sea promover las condiciones para que la filiación y la subjetividad puedan
acontecer y no queden veladas ante la discrecionalidad profesional de quienes intervienen en nombre
del Estado.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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1176
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
1177
VI Congreso Marplatense de Psicología
PLURALISMO Y SINCRETISMO
El sincretismo ha sido definido (Real Academia Española) como el intento de conciliar doctrinas
diferentes. Bastamente desarrollado en lo que respecta a la religión, ha sido escasamente abordado
desde la psicología desde un enfoque epistemológico. El psicólogo belga Marc Richelle (1985)
propone el sincretismo como una solución posible frente a la situación actual del campo teórico de la
psicología, en el que, al igual que en el resto de las ciencias, existe, inevitablemente un complejo de
teorías, paradigmas, sistemas o modelos. Es importante subrayar que la presentación y análisis de
múltiples sistemas psicológicos trata de poner de relieve el carácter problemático del territorio
psicológico, en el que coexisten distintas concepciones para similares o iguales fenómenos, lo que
señala agudamente el carácter siempre inacabado, polémico y provisorio del conocimiento científico
(Vilanova, 2003). La idea central de Richelle consiste en ocuparse de los temas abiertos, de los
grandes dilemas de la disciplina. Propone un alejamiento de cualquier esfuerzo por consensuar teorías
totalizadoras, conformando una alternativa a los intentos de unificación, al dogmatismo y al
eclectisismo.
Vilanova (2003) plantea que, si bien la actitud sincretista parece facilitar las cosas del investigador
básico, no hace lo mismo con las del praxiólogo, generalmente guiado por un sistema de constructos
que inteligibiliza su tarea y la dota de operatividad. Sin embargo, ubica un nexo insoslayable desde
una perspectiva de la historia de la disciplina y que se enraiza en los planes de formación de grado en
nuestras universidades: nos recuerda que “el psicólogo es, primero que todo, un científico, y sólo más
tarde un especialista en cierto método o técnica. La psicología es antes que nada psicología, y luego
se torna servicio clínico, pedagógico, forense, comunitario.” Un problema frecuente es el que se
produce cuando la psicología aplicada se desarrolla al margen de la psicología básica, lo que trae
como consecuencia la imposibilidad de evaluar su carácter científico o su eficacia y viceversa (Arana,
Meilán y Pérez, 2006). De esta manera, el psicólogo práctico debiera estar atento a los avances del
sector científico de su disciplina, adhiriendo a las teorías teniendo en cuenta el carácter perentorio que
las constituye, tanto como el investigador debiera permanecer atento a las problemáticas sociales que
irrumpen y a las vicisitudes que cotidianamente vivencia el psicólogo práctico.
Una posible vía para el sincretismo la aporta el pluralismo, el cual podría definirse como una actitud
de apertura crítica y no selectiva a la totalidad de la producción teórica que se cobije bajo el vocablo
psicología, siendo concientes de la diversa raíz social de cada pareja objeto-método. Así, se reconoce
la utilidad de cada teoría, dada por su congruencia con el aspecto de la realidad que se desea conocer
o en la que se quiera intervenir, es decir, por su contribución específica al aspecto del fenómeno en
cuestión (Vilanova, op. cit). De acuerdo con la posición pluralista, la pluralidad en la ciencia
contemporánea provee evidencia de que hay clases de situaciones producidas por la interacción de
factores, cada uno de los cuales puede ser representable en un modelo o teoría pero no todos ellos lo
son en el mismo modelo o teoría. Cada factor es necesario para que el fenómeno tenga los caracteres
variados que tiene, pero una explicación completa no es posible en el mismo lenguaje representacional
y no provendrá de ningún abordaje investigativo único. Una representación más completa de algunos
fenómenos requiere de múltiples explicaciones que no pueden ser integradas unas con otras sin
pérdida de contenido porque cualquier abordaje teórico pone luz sobre ciertos aspectos a la vez que
invisibiliza otros (Kellert, Longino y Waters 2006).
1178
VI Congreso Marplatense de Psicología
Esta actitud de apertura, constituiría los cimientos de la postura sincretista. Entre sincretismo y
pluralismo existe el nexo de la apertura, el diálogo y la racionalidad crítica hacia los conocimientos
psicológicos. Pero la diferencia está en la conciliación, síntesis que el pluralismo no busca. ¿Cómo
pueden coexistir la causalidad y el libre albedrío o la predisposición genética y el ambientalismo? Se
han realizado muchos intentos de unificación disciplinaria, todos ellos partiendo desde uno o varios
sistemas que, combinados de cierta manera eluden la inconmensurabilidad intersistémica. Todas ellas
han partido desde la teoría y van hacia el objeto de estudio, “pero las verdaderas entidades para un
científico no son las teorías sino los problemas, y ellos son generados, a la vez, por muchas teorías.
En la medida en que los problemas van siendo resueltos y surgen nuevos interrogantes, capítulos
enteros de varias teorías psicológicas se reformulan y otros se abandonan, puesto que la verdad
científica en psicología se halla dispersa en el seno de múltiples teorizaciones” (Vilanova, op. cit.).
La actitud sincrética parte desde el problema, y es allí desde donde podría realizarse la
conciliación, tomando por norte una concepción del psiquismo más abarcativa. En efecto, algunos
fenómenos pueden ser tan complejos o imprecisos que nunca podrá haber una representación única y
comprehensiva de todo lo que merezca conocerse o incluso de todo lo causal o fundamental acerca
del fenómeno. No se supone que la pluralidad de explicaciones deba ser carente de contradicciones,
que todas las verdades de una explicación aceptada deban ser traducibles en verdades de otras
explicaciones aceptadas. Quizá los abordajes y explicaciones dentro de la pluralidad no puedan ser
combinados y quizá incluso estén en desacuerdo entre ellos en algunos puntos. La pluralidad de
representaciones y abordajes en ciencia está sostenida por la complejidad de la naturaleza, el empleo
de modelos representacionales sumamente abstractos y la diversidad de objetivos investigativos,
descriptivos y tecnológicos (Kellert, Longino y Waters, op.cit.).
INTERDISCIPLINA Y SINCRETISMO
Lo mismo que ocurre en el campo psicológico, puede ser analizado con un enfoque más
abarcador, desde el nivel disciplinario, en el que coexisten, además de la pluralidad de cada disciplina,
la pluralidad de enfoques respecto de diversos ángulos o perspectivas de abordaje a un mismo
fenómeno, tal como se intenta llevar a cabo en el abordaje interdisciplinario. La interdisciplina es un
esfuerzo indagatorio, convergente, entre varias disciplinas que persigue el objetivo de obtener
diversidad de perspectivas o “cuotas de saber” acerca de un objeto de estudio nuevo, diferente a los
objetos de estudio que pudieran estar previamente delimitados disciplinaria o incluso
multidisciplinariamente (Sotolongo y Delgado Díaz, 2006).
La apreciación de la necesidad de abordajes interdisciplinarios en los estudios científicos se alinea
con el pluralismo al nivel metafilosófico. Debido a que la empresa científica, tal como se ha planteado,
es en sí misma un fenómeno complejo, ningún abordaje disciplinar único puede proveer una
explicación completamente adecuada de sus aspectos conceptuales, técnicos, sociales, históricos y
normativos (Kellert, Longino y Waters, op.cit.). La interpretación pluralista debe ser llevada un paso
más allá: ningún abordaje disciplinar único puede proveer una explicación completa ya que otra forma
de aferrarse al dogma y a la autoinmunización podría ser, más allá del dogmatismo teórico, la de
encerrarse en una disciplina concreta y no querer establecer puentes o vínculos con otros
1179
VI Congreso Marplatense de Psicología
DISCUSIÓN
El racionalismo crítico es una vía de superación del dogmatismo, en tanto establece una senda
hacia la pluralidad. Toda sociedad que descanse en ese camino y en ese tipo de actitud plural, creará
instituciones de carácter dialógico y por ende inclusivas. Es decir, se ha de configurar
democráticamente, siendo que únicamente en el seno de una sociedad con estas características es
posible el ejercicio del racionalismo crítico. La racionalidad crítica promueve tanto en la esfera del
conocimiento como en el de la decisión, es decir, en el de la praxis humana, la necesidad de escuchar
todas las voces, y las diversas alternativas, tener en cuenta las diferentes perspectivas desde las que
puede abordarse cualquier decisión. El racionalismo verdaderamente crítico determina la validez de
todo interlocutor, comprendiendo que en la pragmática comunicativa del diálogo la diversidad de
perspectivas y argumentos han de ser tomados genuinamente en consideración. Este mismo
racionalismo es aquel que derrumba la falacia del principio de autoridad, las actitudes
autoinmunizadoras, el compromiso ciego de todo totalitarismo y del fundamentalismo, sea este
religioso, político o científico. Como se ha dicho, su vía es el diálogo, pilar a partir del cual pensamos
que el otro quiere argumentar con nosotros tan seriamente como nosotros deseamos hacerlo con él
(Coderch, 2004).
.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Vilanova, A. (2003). Discusión por la Psicología. Mar del Plata: UNMdP.
1181
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
Desde hace un tiempo se ha incrementado el interés por investigar cómo aprenden quienes, en un
futuro, van a enseñar. Aventurando que si se dispone de un cúmulo de estrategias o procedimientos
recomendables con seguridad podrán ocuparse de utilizar algunos mecanismos fundamentales en pos
de una enseñanza de calidad.
Esta temática ha sido cuestionada y discutida desde inicios de la década de los 90. Así, diversos
autores (Martínez-Fernández, 1999; Pérez Pérez, 1999; Tynjälä, 1999) llegan a la conclusión que el
profesorado universitario (al que agregaríamos el nivel terciario o superior) suele centrar sus
estrategias de enseñanza en la transmisión; mientras que los estudiantes fundamentan su aprendizaje
en unas estrategias reproductivas y una actitud pasiva-receptiva ante el conocimiento. Cuesta pensar
que hoy, algo más de la primera década del nuevo milenio aún persistan dificultades de este tipo.
Sabemos que en la actualidad se plantea la necesidad de un modelo de enseñanza y aprendizaje
universitario basado en el enfoque constructivista y la didáctica mediadora y específica a cada
disciplina que posibilite al estudiante dirigir su propio aprendizaje desde una concepción centrada en
los procesos más que en los resultados. Desde esta posición, los estudiantes deben desarrollar un
modelo de aprendizaje basado en estrategias de procesamiento profundo, crítico y capaz de
autorregularse mostrando un interés personal por la construcción del conocimiento. Lo cierto es que
esto no ocurre de manera general en los ámbitos de enseñanza superior. La pregunta entonces es:
¿con qué patrones de aprendizaje se manejan los futuros profesores al momento de estudiar?
Patrones de aprendizaje
Vermunt (1998; 2005) define cuatro componentes que van a estar dando la forma a uno u otro
patrón: 1) concepciones de aprendizaje, que hace al desarrollo de un sistema coherente de creencias
acerca de cómo se concibe el conocimiento; 2) estrategias de procesamiento, que se refieren a
diferentes actividades de estudio para procesar los contenidos de aprendizaje; por ejemplo, relacionar
conceptos, seleccionar información, utilizar ejemplos y aplicarlos en la práctica; 3) estrategias de
regulación, relacionadas a las actividades de aprendizaje, que implican cierta dinámica de toma de
conciencia y control, o no, por parte de la persona que aprende; y 4) orientaciones de aprendizaje
centradas en un dominio completo de metas, intenciones, actitudes, preocupaciones y dudas de los
estudiantes en relación con sus estudios. A partir de combinaciones específicas, desde un punto de
vista teórico (Vermunt, 1998), se identifica una estructura de cuatro patrones de aprendizaje, a saber:
dirigido al significado, dirigido a la aplicación, dirigido a la reproducción y no dirigido. El patrón de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
aprendizaje dirigido al significado (MD por sus siglas en inglés) hace referencia a los estudiantes que
autorregulan su aprendizaje y utilizan estrategias de elaboración, con el fin de construir un aprendizaje
crítico y profundo. El patrón dirigido a la aplicación (AD) define a los estudiantes que hacen un uso
práctico de los contenidos y un procesamiento concreto con vocación, con el fin de emplear los
aprendizajes adquiridos. Los dirigidos a la reproducción (RD) estudian a través de la memorización, el
repaso y cierto nivel de análisis; pero suelen necesitar instrucciones externas que siguen
sistemáticamente, con el fin de 'absorber' el conocimiento para aprobar los exámenes. El patrón de
aprendizaje no dirigido (UD) caracteriza a estudiantes con ausencia de regulación, una orientación
ambivalente, se apoyan en el grupo de compañeros o los docentes, y muestran un bajo nivel de
procesamiento sin un claro objetivo asociado a sus procesos de aprendizaje.
EL ESTUDIO
PARTICIPANTES
Respondieron 187 alumnos, 121 mujeres y 66 varones. En cuanto a los profesorados, 109 estudian
el de Educación Física, 41 el de Educación Inicial, 26 estudian el de Educación Primaria, 10 el de
Psicología y 2 de Historia.
El ILS consiste en una lista de 120 afirmaciones acerca de actividades, estrategias y motivos para
estudiar que se distribuyen en cuatro dominios. Se responde, siguiendo una escala tipo Likert de (1) “lo
hago rara vez o nunca” a (5) “lo hago siempre”, para los ítems sobre estrategias; y de (1) “totalmente
en desacuerdo” a (5) “completamente de acuerdo” para los ítems referidos a los motivos para estudiar.
El primer dominio hace a estrategias de procesamiento de la información, el segundo a estrategias de
regulación, el tercero a qué orienta o motiva los aprendizajes y el último dominio, hace a los modelos
mentales de aprendizaje, esto es a cómo se concibe el conocimiento.
ANÁLISIS Y RESULTADOS
En primer lugar observamos los desempeños del grupo total en cada uno de los dominios, escalas
y subescalas, y luego consideramos si se hallaron diferencias por carreras y finalmente realizamos una
síntesis de los perfiles que predominan en cada carrera.
DOMINIOS
Respecto del primer dominio, podemos decir que en general el grupo total evidencia tendencias de
uso satisfactorio de las estrategias de procesamiento profundo que hacen a relacionar y estructurar y
1183
VI Congreso Marplatense de Psicología
las que hacen a un procesamiento concreto, en tanto que muestra tendencia de un uso poco
satisfactorio de las estrategias referidas a pensamiento crítico, memorización y repetición y análisis.
Por carreras, aparecieron diferencias significativas entre Prof. de Educ. Prim. y el Prof. de Educ.
Fis. en las estrategias procesamiento profundo relacionar y estructurar (t= 3,00 α: .003), en las
estrategias de procesamiento profundo paso a paso analizar (t= 2,24 α: .026) y en las estrategias de
procesamiento concreto (t= 1,99 α: .048) en todos los casos a favor del Prof. de Educ. Prim. También
entre el Prof. de Hist. y el Prof. de Educ. Fis. en las estrategias de procesamiento profundo paso a
paso analizar (t= 1,99 α: .048) a favor del primero. Además, entre el Prof. de Hist. y el Prof. de Psicol.
en pensamiento crítico (t= 1,99 α: .048) a favor de del primero. Entre Prof. de Educ. Inic. y el Prof. de
Educ. Fis. en procesamiento profundo paso a paso analizar (t= 3,37 α: .001) a favor del primero. Entre
Prof. de Educ. Inic. y el Prof. de Psic. en la estrategia procesamiento paso a paso memorización y
repetición (t= 1,99 α: .048) a favor del Prof. de Educ. Inic. Finalmente, entre Prof. de Educ. Fis. y el
Prof. de Psic en la estrategia procesamiento paso a paso memorización y repetición (t= 1,99 α: .048) a
favor de Prof. de Educ. Fis.
En el segundo dominio, decimos que en general el grupo total evidencia tendencias de uso
satisfactorio de las estrategias de regulación externa de procesos de aprendizaje y de resultados de
aprendizaje, una tendencia que indica un uso poco satisfactorio de las estrategias de autorregulación
de contenidos de aprendizaje y, finalmente no se evidenciaron tendencias en las estrategias de
autorregulación de procesos y resultados de aprendizaje, ni en carencia de regulación.
Por carreras, las diferencias significativas aparecieron entre Prof. de Educ. Prim. y Prof. de Educ.
Inic. en las estrategias de autorregulación del contenido de aprendizaje (t= 3,17 α: .002) a favor de
Prof. de Educ. Prim. y en las estrategias de carencia de regulación (t= -2,55 α: .013) a favor de Prof. de
Educ. Inic. También entre el Prof. de Educ. Prim. y el Prof. de Educ. Fís. en las estrategias de
autorregulación de procesos y resultados de aprendizaje (t= 2,00 α: .047) y en las estrategias de
autorregulación del contenido de aprendizaje (t= 3,71 α: .000) en ambos casos a favor de Prof. de
Educ. Prim. También entre Prof. de Educ. Inic. y el Prof. de Educ. Fís. en las estrategias de regulación
externa de resultados de aprendizaje (t= 2,16 α: .032) y en carencia de regulación (t= 2,87 α: .005) a
favor en ambos casos de Prof. de Educ. Inic. Entre Prof. de Educ. Inic. y Prof. de Psicol. en carencia
de regulación (t= 2,32 α: .024) a favor de Prof. de Educ. Inic.
En el tercer dominio, en general el grupo total evidencia tendencias de nivel satisfactorio en la
escala de interés personal, motivación para obtener un título, dirigida a la autoevaluación, dirigida a la
vocación. Mientras que para la escala ambivalente la tendencia es poco satisfactoria.
Por carreras, las diferencias significativas de medias aparecen entre Prof. de Educ. Prim. y Prof. de
Educ. Inic. en la escala de motivación para obtener certificado o título (t= -2,44 α: .017) a favor del
segundo; entre Prof. de Educ. Prim. y Prof. de Educ. Fís. en la escala de motivación para obtener
certificado o título (t= -2,38 α: .019) y en la dirigida a la autoevaluación (t= -2,24 α: .026) a favor en
ambos casos del Prof. de Educ. Fís. También se dieron diferencias entre Prof. de Educ. Inic. y Prof. de
Psicol. en la escala de motivación para obtener certificado o título (t= 2,22 α: .031) a favor de Prof. de
Educ. Inic. y entre Prof. de Educ. Fís. y Prof. de Psicol. (t= 2,15 α: .033) a favor de Prof. de Educ. Fís.
Por último, en el cuarto dominio, en general el grupo total evidencia tendencias de nivel
satisfactorio en todas las escalas, menos en la de concebir al conocimiento como consumo, donde no
se evidenciaría una tendencia marcada hacia ningún extremo.
1184
VI Congreso Marplatense de Psicología
Por carreras, las diferencias aparecen entre Prof. de Educ. Prim. y Prof. de Educ. Inic. en la escala
de consumo del conocimiento (t= -3,01 α: .004), en la de conocimiento visto en su utilidad (t= -3,43 α:
.001) y en la escala de concebir al educador como un estímulo (t= -2,69 α: .009) a favor del Prof. de
Educ. Inic. en todos los casos. Entre Prof. de Educ. Prim. y Prof. de Educ. Fís. en la escala de
consumo del conocimiento (t= -4,41 α: .000) y en la de concebir al educador como un estímulo (t= -
2,18 α: .031) en ambos casos a favor de los segundos. Entre Prof. de Educ. Inic. y Prof. de Educ. Fís.
en la escala de conocimiento visto en su utilidad (t= 2,71 α: .007) a favor del primero.
PERFILES
Respecto del primer dominio, estrategias de procesamiento, fueron los alumnos que estudian el
Prof. de Educ. Prim. y los de Prof. de Historia los que han mostrado hacer mayor uso de las
estrategias de procesamiento profundo, referidas a analizar la información o los contenidos. Los
alumnos que estudian Prof. de Educ. Inic. y los de Prof. de Educ. Fis. fueron los que utilizan
estrategias de procesamiento paso a paso, específicamente las de memorizar y repetir. Los alumnos
que cursan el Prof. de Educ. Prim. Evidenciaron usar en mayor medida estrategias de procesamiento
profundo, de relacionar y estructurar. Los alumnos que estudian el Prof. de Historia y los que estudian
Prof. de Educ. Prim., mostraron una tendencia a un procesamiento profundo, en relación al
pensamiento crítico. Finalmente, fueron los alumnos que estudian Prof. de Educ Prim., los que
evidenciaron un mayor uso de estrategias en relación con un procesamiento concreto.
En cuanto al segundo dominio, estrategias de regulación, fueron los alumnos que estudian Prof.
de Educ. Prim. los que se autorregulan en relación con el contenido de los aprendizajes y en relación
con los proceso y resultados de los aprendizajes. Serían los alumnos de Prof. de Educ. Inic. los que
evidenciarían en mayor medida estrategias de regulación externa de resultados de aprendizaje y
fueron los que manifiestan en mayor medida cierta carencia de regulación.
Respecto del tercer dominio, orientaciones académicas o de aprendizaje, fueron los alumnos de
Prof. de Educ. Inic. y los del Prof. en Educ. Fís., los que evidencian en mayor medida una motivación
en sus aprendizajes para obtener el título. Mientras que estos últimos alumnos en mayor medida se
interesan por la autoevaluación.
Finalmente, en relación a los modelos mentales de aprendizaje, fueron los alumnos que estudian el
Prof. de Educ. Inic. y los del Prof. de Educ. Fís. los que conciben el conocimiento en términos de
consumo. Las alumnas del Prof. de Educ. Inic., mayormente conciben al conocimiento en términos de
utilidad. Finalmente, fueron las alumnas del Prof. de Educ. Inic., y los del Prof. de Educ. Fís. los que
también mayormente conciben al docente, al educador como un estímulo.
Lo cierto es que estos 187 alumnos presentarían más de una característica que se corresponde a
cada patrón. En definitiva, no debemos dejar de reconocer que quizá los contenidos propios de cada
especialidad contribuyan a tener una u otra tendencia al momento de definir estos patrones, aspectos
que deberían seguir profundizándose.
CONSIDERACIONES FINALES
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VI Congreso Marplatense de Psicología
A manera de cierre, puede decirse que no se manifestó claramente un patrón definido para cada
carrera. Lo cierto es que la gran diversidad de estrategias empleadas nos lleva a suponer que es una
cuestión que no sólo tiene que ver con aspectos internos de unos u otros alumnos, sino con el valor y
la variedad de los contenidos en cada carrera.
En algunos casos prima la memorización y repetición literal de lo que aprenden, contando como
principal motivación en sus estudios la obtención del título. En otros, hay evidencia de estar
interesados en probarse a sí mismos su capacidad para realizar estudios superiores, más aun si
pueden recibir instrucciones precisas respecto de cómo manejarse al resolver una tarea o al realizar
un ejercicio. Lo cierto es que en varios casos sigue destacándose el valor del docente como un
estímulo genuino y motivador al momento de llevar a cabo sus aprendizajes.
Lo que sí habría que favorecer, desde los primeros años de estudio y fuertemente durante todo el
proceso es el rol protagónico que han de tener los alumnos. Habilidades tales como la autonomía y la
metacognición han de convertirse en el pilar que sostiene este trayecto. Esto va en concordancia con
lo que postulan Coleoni y Buteler (2008) cuyas investigaciones sostienen que un alto grado de
desarrollo de las habilidades metacognitivas es una característica de sujetos con mayor grado de
experticia. Al respecto, Martínez Martínez Fernández (2007) retoma las afirmaciones de Vermunt y
Vermetten (2004) para destacar que tanto las estrategias metacognitivas como una concepción o
enfoque profundo de aprendizaje son factores de importancia en el nivel de estudios superiores ya que
cada uno de ellos constituye una base importante del pensamiento crítico y del aprendizaje reflexivo y
autorregulado.
Entendemos que los resultados preliminares encontrados en la presente investigaciones permitirán
orientar prácticas en el aula que tiendan a favorecer aprendizajes más constructivos y al desarrollo de
estrategias que permitan autorregular el proceso de aprendizaje, a modo de formar pensando en los
futuros estilos docentes que educarán las promociones venideras, apostando siempre a una mejor
calidad educativa.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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RESUMEN
INTRODUCCIÓN
Este trabajo libre es un avance del proyecto de investigación-acción presentado este año en la
convocatoria del “Programa de Educación en Cooperativismo y Economía Social en la Universidad” de
la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) del Ministerio de Educación de la Nación, con el objetivo
de apoyar desde el ámbito de la educación universitaria la integración de las políticas públicas
dirigidas al fortalecimiento de la Economía Social.
Las autoras del presente trabajo, ambas investigadoras de la Facultad de Psicología de la UNMdP,
consideran relevante que se discuta y analice desde la institución las problemáticas del contexto y su
efecto en la subjetividad. En este caso, la crisis del mundo del trabajo y el surgimiento de
organizaciones autogestionadas por los trabajadores, dan cuenta de la conformación de un nuevo
sujeto laboral.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONTEXTO NACIONAL
Desde fines de la década pasada, y con particular intensidad a partir de 2001, cientos de
asalariados en todo el país se han hecho cargo de empresas en procesos de quiebra, cierre y/o por
importantes incumplimientos del contrato salarial con sus trabajadores. Así se han ido conformado
nuevas organizaciones autogestionadas por trabajadores nacidas por la necesidad de defender la
fuente de trabajo. Estas nuevas empresas organizadas en cooperativas de trabajadores conforman un
subsistema dentro del sistema capitalista en las cuales el capital es propiedad social o propiedad
conjunta, tercer derecho de propiedad, luego de propiedad privada y pública, que implica también la
constitución de una economía alternativa y de un nuevo sujeto trabajador/asociado. Desde esta
perspectiva se hace necesario reflexionar acerca del movimiento cooperativo y específicamente de las
cooperativas de trabajo.
Se ha detectado recientemente, a través de entrevistas a informantes clave del sector cooperativo
regional y nacional, que muchos de los cursos/talleres de capacitación destinados al sector no
responden a un diagnóstico de necesidades reales, más bien se trata de cursos “enlatados” que se
ofrecen de forma sistemática y general exceptuando un diagnóstico que los vuelva pertinentes. Los
mismos se centran en la óptica del mercado no respondiendo a la especificidad de las organizaciones
en las que enfocamos nuestro análisis en el presente trabajo. En estos casos tampoco se implementan
sistemas de monitoreo y evaluación que consideren (más allá de los niveles de satisfacción de los
participantes) los niveles de aprendizaje, transferencia e impacto a mediano y largo plazo en la
organización.
Rebón (2005) y Salvia y Chávez Molina (2007) enfatizan la contradicción que se presenta entre
ese sujeto “trabajador en relación de dependencia” socializado en el mercado de trabajo como
empleado/ trabajador de una empresa privada y el “trabajador/asociado” situado en el campo de la
Economía Social. El trabajo en calidad de asociado le demanda al trabajador una integración vincular-
afectiva de nuevo carácter, identificada con los propósitos de la cooperativa de trabajo. En tanto
trabajador de empresa privada, el trabajador se sitúa en el marco del conflicto capital-trabajo,
desentendiéndose de la gestión y gerenciamiento. En la cooperativa, por el contrario, el trabajador se
enfrenta a la resolución de complejidades ligados a procesos referidos a la recuperación de su
dignidad social, lo que requiere de una nueva identificación con el rol y la organización.
Este nuevo sujeto laboral es un agente de gestión cooperativa, que requiere de formación y
capacitación en prácticas de cooperación, solidaridad y conciencia social. De allí la importancia de la
capacitación en el marco de la Economía Social para poder afrontar la nueva realidad y superar la
contradicción planteada.
Este escenario nos permite pensar en la posibilidad de conformar un dispositivo de trabajo bajo la
modalidad de “Observatorio” al que denominamos “CooperaRed” con miras a facilitar la ejecución de
un diagnóstico de las reales necesidades de estas organizaciones identificando experiencias/prácticas
que han resultado favorables y desfavorables en las organizaciones auto-gestionadas. Este dispositivo
es un primer paso hacia la formalización de un espacio de diagnóstico, monitoreo, evaluación y
sistematización en organizaciones auto-gestionadas de la ciudad de Mar del Plata.
1189
VI Congreso Marplatense de Psicología
NUESTRO DISPOSITIVO
ANTECEDENTES
Los antecedentes revisados en la literatura científica de los últimos años dan cuenta de
investigaciones fragmentadas y dispersas que definen aquellos factores clave en el éxito en una
cooperativa y, específicamente, en una Empresa Recuperada/Cooperativa de Trabajo (Vuotto,
Verbeke & Acosta, 2012). Entendemos las buenas prácticas como un conjunto de buenos desempeños
en la organización siguiendo a Malacara Castillo, Sandoval Ballesteros y Becerra Bizarrón (2013) con
impactos en la calidad, productividad, sustentabilidad y competitividad.
1190
VI Congreso Marplatense de Psicología
La literatura nos muestra que son clave del éxito: la dinámica organizacional, la participación, la
gobernanza, la eficacia y eficiencia, la competitividad y sustentabilidad financiera, el conflicto y la
negociación, entre otros factores (Álvarez Rodríguez, 2010), la comunicación, la formación, el
liderazgo, la responsabilidad social (Lafleaur, Dion & López, 2004), la competitividad, el sentido de
pertenencia, la remuneración de sus asociados (Ome & Pardo, 2006; Bastidas, 2007), la identidad
organizacional cooperativa (DANSOCIAL, 2009; Cely & Pérez, 2008).
Para Stryjan (1994) hay que interrogarse sobre cómo estas organizaciones promueven afiliación,
estabilidad y conducción y es en esta línea que proyectamos esta investigación, interrogándonos
específicamente sobre prácticas de compromiso (engagement), empoderamiento y liderazgo
transformacional en trabajadores que integran las cooperativas de trabajo de la ciudad de Mar del
Plata, competencias que consideramos de alta relevancia en el marco del trabajo en organizaciones
auto-gestionadas.
1191
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
1192
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
1193
VI Congreso Marplatense de Psicología
En este marco, dos –y hasta tres – elementos centrales para la configuración de cultura
organizacional se ven trastocados en su funcionamiento y efectos de antaño: la percepción y los
hábitos. Ambos procesos intervienen en el bienestar de los miembros al tiempo que en el éxito
organizacional. La percepción opera como base para la creación, mantenimiento y hasta destrucción
de la cultura organizacional, aportando un marco desde el cual ciertas prácticas organizacionales
devienen hábitos y dotando a estos últimos de sentido positivo o negativo en términos de desempeños
cuanto de calidad de vida laboral de los miembros (Cebey, Trotta & Howie, 2013). Agrupando a ambos
–tercer elemento central – se encuentran la comunicación y su derivado necesario, los procesos de
toma de decisiones (Cebey, Trotta & Howie, 2013; Echeverría, 2001; Krynski, 2006).
La alteración de estos procesos en las organizaciones llamadas ‘emergentes’ (Echeverría, 2006)
es indisociable de la reconfiguración de los sistemas socio-productivos (De Giorgi, 2002) y comunales
(Rose, 2007), ahora sujetos a lógicas de producción y consumo mucho más informacionales, cognitivo-
inmateriales y simbólicas.
Dado este encuadre, lo que –con cierta sensación de tranquilidad – llamábamos ‘cultura’ al apelar
a aquello que ocurre dentro de una organización y cómo se vive allí, tiene la imperiosa necesidad de
repensarse desde las bases, y reconstruirse conceptualmente como necesariamente fragmentario.
Esto es así –en parte pero no únicamente – a partir de la aparición y popularización de Internet, y su
impacto en la cotidianeidad de las organizaciones y sus integrantes.
1194
VI Congreso Marplatense de Psicología
multifrontalidad debe de anclarse en que, de antemano, será imposible para la organización sesgar o
acotar los posibles roles comunicacionales que puede ocupar (o ha ocupado) un trabajador particular –
o un proveedor, o un cliente, o un stakeholder, etc.
Desde la anterior perspectiva, los límites organizacionales no se encuentran ya férreamente
definidos (Aguer Hortal, 2005; Filippi, 2010a; Schlemenson, 2002). Por el contrario, son más bien
probabilísticos, según los intereses y estilos de vida del trabajador (De Giorgi, 2002; Rose, 2007). Ello
quiere decir que un trabajador suma, resta, divide o multiplica a la organización desde el tamiz de los
intereses personales, desde cómo encastran o divergen éstos y su posibilidad de vehiculización en la
vida organizacional. Esta convergencia o divergencia será lo que sostiene intrínsecamente su interés
por y su compromiso con ‘lo organizacional’.
Al respecto, cabe aclarar que los intereses y estilos de vida son anteriores al momento de la
organización; y serán posteriores a éste. Además, son en gran medida los que motivan al lazo social y,
con ello, a la comunicación entendida como una enunciación multidimensional que contiene algo de lo
valioso y loable para el enunciante.
Lo anterior se refleja en críticas, reseñas, defensas frente a críticas en las redes, blog posts, selfies
aburridas o divertidas, videoblogs, podcasts, tweets y retweets, canciones de alabanza o protesta
subidas a YouTube, perfiles de LinkedIn orgullosamente completos o sospechosamente vacíos, etc.
Son reflejos que se plasman en terrenos y formatos generalmente públicos, que quedan registrados en
esa memoria perenne, y están dirigidos a una audiencia potencialmente infinita: una experiencia de
vida laboral que ‘siempre’ quedará marcada por un momento en una determinada organización y que
permitirá resignificar a actuales, potenciales y antiguos clientes –o proveedores, o trabajadores, o
stakeholders, etc. –, dándoles su propia relación a una marca u organización.
Puesto que los intereses y estilos de vida son algo que, como política organizacional, se pueden
fomentar o reprimir, son puentes que permiten la convivencia con lo diverso y lo común o puentes que
se queman en pos del ejercicio de la discriminación y persecución en una organización.
1195
VI Congreso Marplatense de Psicología
Sin embargo, esta modulación no refiere estrictamente a los objetivos organizacionales –ni a la
búsqueda de mejorar las aptitudes, actitudes y habilidades de los individuos y grupos de trabajo – sino,
más bien, a que la plétora de estilos de vida puedan tener algún sitio: el estilo de vida pasa a ser el
nuevo in situ laboral, un sitio sin fronteras temporo-espaciales delimitadas de antemano y con límites
probabilísticos basados en estados afectivos y relaciones. Esto en sí mismo supone el trabajo
constante por el reconocimiento de posiciones subjetivas disímiles, lo cual produce integración y
refuerzo de los vínculos en y con el trabajo.
El esfuerzo organizacional para producir engagement deberá de estar en que algo de lo ‘no-laboral’
esté siempre en juego (i.e. gamification) y sirva de plataforma para la vehiculización de los estilos de
vida como aquello que es un ‘universal’ (que comparten todos los trabajadores), pero que no es
colectivo sino microcomunitario.
En términos teórico-prácticos, el engagement surge como opuesto teórico del burn-out y procura
prevenir las ‘quemaduras’ que la propia actividad genera (Cebey et al., 2013; Schaufeli, Salanova,
Gonzélez-Romá & Bakker, 2002). El knowledge management y la gestión de las emociones se
transforman, así, en actos estratégicos (Gelaf, 2010) para mantener medianamente constantes los
niveles de compromiso y regularlos. Subyace a ambos la aspiración de ‘aculturación’, el
disciplinamiento y el control de lo que el trabajador compromete de sí para sostener el marco valorativo
organizacional vivo, nutrir su motivación intrínseca, incrementar su productividad –e iniciar una vez
más este ciclo cada vez que el compromiso disminuye.
Las organizaciones ‘emergentes’, en cambio, no interpelan al trabajador desde la díada
compromiso-cultura, sino –en una suerte de tergiversación o forzamiento del concepto – desde el flow
imaginado como una experiencia que puede ser permanente –y no, como la noción es definida, el
momento puntual o ‘pico’ en el que se percibe equilibrio entre las capacidades de que se dispone y las
oportunidades de acción que se encuentran (Leibovich de Figueroa, 2009).
Es aquí donde la gamification (Rimon, 2014) se presenta como estrategia y se transforma en un
vehículo para apelar a este modo de utilización del flow, en tanto toma al trabajador como user, viewer
y player (y no como mera audiencia) al que hay que mantener involucrado y participando pasiva u
activamente en una comunidad de interés durante el tiempo que ‘le guste’ –al mejor estilo Facebook –
la organización. Este ‘compromiso’ entretenido será el equivalente a lo que persista su interés y estará
modulado por lo que las elecciones de su estilo de vida habiliten, además de la lógica y límites del
terreno de juego en cuestión.
Si se siguen las coordenadas aquí trazadas, lo que no será es duradero, ni se sedimentará como
para dejar una huella lo suficientemente profunda como para devenir ‘programación mental colectiva’;
es decir, ‘cultura’.
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1198
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
METODOLOGÍA
1199
VI Congreso Marplatense de Psicología
RESULTADOS
Los artículos seleccionados se clasificaron según el tipo de publicación (Tabla 1). Las revisiones
no sistemáticas fueron las más frecuentes (42%) y en segundo lugar los estudios empíricos no
controlados (22%). Asimismo no se hallaron estudios controlados aleatorizados ni capítulos de libros
indexados en bases de datos.
Tabla 1
1200
VI Congreso Marplatense de Psicología
Paciente
La actividad realizada por los psicólogos que se desempeñan dentro de la psicooncología pediátrica,
a la cual aludieron la mayor parte de los artículos (56%) fue la evaluación (Figura 1), principalmente a
través de técnicas psicométricas. Si bien no todos los autores acuerdan en incluir a la evaluación como
una intervención psicológica, en el marco de este trabajo se la comprenderá como tal. Toda evaluación
es una sucesión de pasos destinados a recabar, valorar, categorizar, comparar, analizar y contrastar
información cualitativa y/o cuantitativa mediante diversas técnicas que permitan tomar decisiones
racionales con respecto a un sujeto o grupo (Casullo, 1996, 1999), proceso que de algún modo implica
intervenir en aspectos psicosociales del paciente.
Otros dos tipos de intervenciones muy utilizadas en el ámbito estudiado fueron las propuestas
lúdicas (42%) y las técnicas cognitivo-conductuales (42%). Asimismo la psicoeducación (36%), la
aplicación de programas protocolizados para abordar situaciones específicas relacionadas con la
enfermedad y/o el tratamiento (29%), y el acompañamiento y el apoyo (22%) fueron otras
intervenciones que los artículos señalaron como generalmente implementadas por los psicólogos en su
trabajo con niños con cáncer. En la Figura 1 se presentan todas las intervenciones halladas en la
literatura científica y el porcentaje de artículos que aludieron a ellas.
Familia y cuidadores
En la Figura 2 se presentan las intervenciones psicológicas identificadas y el porcentaje de artículos
que las abordaron. Al igual que sucedió con los pacientes, dos de las intervenciones destacadas por
gran parte de los artículos fue la evaluación (40%) y la psicoeducación (44%). Algo similar aconteció
con el apoyo y el acompañamiento (13%). En contraposición, la aplicación de técnicas lúdicas (2%) y
cognitivo-conductuales (9%) con la familia no fueron tan usuales como con los pacientes.
Equipo de salud
En la literatura científica son escasas las publicaciones que describen intervenciones del psicólogo
con los equipos de profesionales que asisten al niño o adolescente con cáncer. De hecho solo se
identificaron tres tipos de intervenciones, y abordadas por pocos artículos: arteterapia (2%),
psicoeducación (4%), y evaluación (2%).
Evaluación
Programas para…
Intervenciones…
Entrenamiento en…
Trabajar con el…
Atención de…
Gestión de…
Interpretación
Promoción de la…
0 20 40 60 80 100
1201
VI Congreso Marplatense de Psicología
Figura 1. Porcentaje de artículos que señalaron cada una de las intervenciones psicológicas
en el área de psicooncología infanto-juvenil destinadas a pacientes.
Figura 2. Porcentaje de artículos que señalaron cada una de las intervenciones psicológicas
en el área de psicooncología infanto-juvenil destinadas a la familia y cuidadores.
Escuela
En similar dirección al equipo de salud, la escuela fue un destinatario al cual pocos artículos hicieron
referencia. No obstante es relevante destacar dos intervenciones compartidas con los destinatarios
paciente y familia: la psicoeducación (9%) y la evaluación (2%) (Figura 3). Cabe destacar que se
hallaron intervenciones psicológicas tanto dirigidas a los docentes, los colegas del paciente como a la
institución en general.
Figura 13. Rangos medios Afrontamiento Conductual por grupos y momentos de evaluación.
1202
VI Congreso Marplatense de Psicología
Evaluación.
Psicoeducación.
Intervenciones con…
Actividades de refuerzo…
0 20 40 60 80 100
Figura 3. Porcentaje de artículos que señalaron cada una de las intervenciones psicológicas
en el área de psicooncología infanto-juvenil destinadas a la escuela.
El 51% de los artículos no informó la orientación teórico-técnica. El porcentaje restante presentó una
alta variabilidad en este sentido aunque con un alto predominio de orientaciones cognitivo-conductuales
(Figura 4). En relación a los dispositivos asistenciales en los que trabajan los psicólogos en el área de la
oncología infanto-juvenil, se observó que un 40% de los artículos señaló que las intervenciones
psicológicas eran implementadas por un profesional psicólogo, un 7% por psicólogo/s que se
desempeñaban en equipos interdisciplinarios, un 2% por psicólogos que trabajaban en conjunto con
psiquiatras, y en un 31% de los artículos se describieron intervenciones psicológicas que eran
implementadas por todo el equipo interdisciplinario sin distinción de la profesión de base de sus
miembros (Figura 5).
1203
VI Congreso Marplatense de Psicología
Psicólogo
Equipo interdisciplinario
No especifica
0 20 40 60 80 100
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
Las intervenciones dirigidas a los pacientes y sus familias fueron más numerosas comparadas
con las del los otros destinatarios, lo que señala nuevos desafíos para la práctica profesional del
psicólogo dentro de esta área. El cáncer infanto-juvenil impacta en todos los contextos del niño y aún
queda un campo inexplorado de diseño e implementación de nuevas estrategias de intervención
psicológica que se ajusten a las necesidades de los implicados.
En otro orden de cosas, es relevante destacar que evaluar y psicoeducar fueron dos
intervenciones que estuvieron presentes en todos los destinatarios, lo que estaría indicando la
importancia de implementarlas en toda intervención psicológica con los pacientes, su familia, la escuela
y/o el personal sanitario. Evaluar nos permite conocer el estatus de salud mental, los recursos y los
déficits neuropsicológicos, psicológicos y socio-vinculares del paciente o sus allegados para poder
responder a las necesidades o prevenir futuras complicaciones. Por su parte psicoeducar implica el
derecho del paciente y su entorno de tener conocimientos sobre la enfermedad, su tratamiento, las
1204
VI Congreso Marplatense de Psicología
secuelas y principalmente sobre los modos de mejorar su afrontamiento y por ende la calidad de vida y
el bienestar.
Este trabajo pretendió ser un aporte de conocimientos sobre las prácticas psicológicas dentro del
área de oncología pediátrica y una invitación a la reflexión sobre ellas, con el objetivo de que
constituyan un estímulo para futuros estudios que permitan un abordaje cada vez más integral y
responsable de esta población clínica.
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1205
VI Congreso Marplatense de Psicología
1206
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
1207
VI Congreso Marplatense de Psicología
una historia y estructuración de los procesos de poder fuertemente establecida, con gran distancia
entre las posiciones, apoyada en la expertise y la función social y económica que brinda al entorno
social y a los consumidores. Contra lo que se piensa habitualmente, los sistemas formales de
procedimiento existen, pero el efecto que provocan dista mucho de ser percibido como legítimo. Por
otra parte, los intereses y las perspectivas de ciertos grupos o personas han encontrado a lo largo del
tiempo un espacio discrecional y a la vez casi anónimo para instalar modalidades de efectividad
restringida y con frecuente producción de sufrimiento entre los trabajadores. Estas organizaciones no
son homogéneas y por lo tanto buena parte de la estructura no comparte algunos códigos y prácticas.
No obstante, en muchos casos se las deja hacer como si formaran parte del proceso de
disciplinamiento que hace a la inclusión y pertenencia de los miembros en la organización. Una vez
que se plantea la demanda, se está admitiendo la existencia de violencia y, en la mayoría de los
casos, ésta será planteada como si fuera una producción diferente, efecto de la corrupción de los
códigos, los procesos o la personalidad de los actores –y no de la estructura y funcionamiento del
sistema real. En efecto, tal vez un margen de situaciones de violencia remiten a una distorsión de los
procesos formales, pero la mayoría son resultado de los modos organizativos vigentes, que producen
éxito o fracaso, satisfacción o padecimiento, es decir, todo un sistema de regulación psicosocial que
llamamos ‘trama informal’ pero que no es obstaculizadora de la formal sino su más genuino
complemento en muchos casos. El aspecto más delicado en el trabajo con esta clase de demanda
consiste en el grado de poder con el que se cuenta para reexaminar y transformar estos
procedimientos que son efecto de los sistemas establecidos y, por lo tanto, formales. En segundo lugar
será igualmente importante la oportunidad que se tendrá de restituir a los grupos y personas afectadas
su posición y agencialidad, así como el reconocimiento y la superación de los daños recibidos.
Los modos defensivos más utilizados en la demanda institucional son: la neutralización de los
antecedentes y causas, y de las consecuencias mediatas e inmediatas. Decimos que son modos
frecuentes pero no exclusivos, ya que estos mecanismos pueden aparecer en distintos sistemas
conversacionales y actividades del grupo de intervención. Las defensas mencionadas son
resistenciales, aparecen durante el proceso de intervención y a nuestro entender no hacen menos
genuina la necesidad e intención original de la demanda. No obstante, ponen en evidencia la
ambivalencia entre la consideración particular y el análisis que podría dar cuenta de eventos
generalizables.
Como definición operacional llamamos ‘neutralización de antecedentes y causas’ a la negación de
un vínculo histórico de los casos con ciertas transformaciones organizacionales o, aún más,
continuidades y discontinuidades instaladas por políticas de gestión que no han tenido un profundo
seguimiento y adecuación a las condiciones de la organización y de su entorno. La neutralización evita
el vínculo con la historia; a su vez, silencia la oportunidad de construir memoria, es decir, recuerdo
significado de grupos relativo a las transformaciones, continuidades y discontinuidades.
La neutralización de las consecuencias mediatas e inmediatas es un proceso defensivo que opera
sobre el presente tratando de controlar en términos imaginarios el futuro. Las consecuencias en
materia de violencia laboral siempre son capaces de convocar a los procesos de identificación y,
consecuentemente, la empatía. Sin embargo, identificarnos con alguien que sufre y tendrá que
desplegar acciones para restablecerse implica, reflexivamente, al menos dos cuestiones: que las
consecuencias inmediatas y mediatas requieren una atención especial para la víctima; y que lo
1208
VI Congreso Marplatense de Psicología
En este apartado hacemos referencia a nuestro intercambio con grupos institucionales de salud
laboral, de higiene y seguridad del trabajo, de servicio social, entre otros. Aunque su función es
específica, se encuentra frecuentemente atravesada por la problemática de la violencia laboral.
Una de las condiciones que hacen más fructífero el trabajo de intervención en materia de riesgos
psicosociales (Ferrari et al., 2009) consiste en conformar sistemas interdisciplinarios. La
multiperspectiva mejora con mucho el tratamiento de los casos; sobre todo, aumenta las chances de
realización de las transformaciones requeridas por la organización para garantizar una reinserción
satisfactoria y una adecuada percepción de la justicia organizacional para estos casos.
Los tres grupos profesionales mencionados son relevantes al momento de tratar los procesos de
violencia. En efecto, las consecuencias físicas reflejadas como enfermedad-accidente, así como
también las menos visibles, como desmoralización, dificultades para concentrarse o insomnio y su
relación con el ambiente de trabajo, son una evidencia que debe ser cotidianamente profundizada en
cada sistema laboral –ya que, como dijimos, se tiende a la neutralización de consecuencias. Por otra
parte, los expertos en higiene y seguridad del trabajo en su análisis de las condiciones y medio
ambiente pueden aportar la perspectiva concreta en términos de la seguridad de los procedimientos, la
preparación en las normas de trabajo eficiente y el ritmo y volumen en el cual se realiza, entre otros
aspectos. Muchos de ellos forman parte de lo que hemos explorado como ‘variable ambiente’ y tiene
relevancia a la hora de pensar en el incremento de niveles de estrés que predispongan distintos tipos
de presiones sobre los trabajadores. Finalmente, los profesionales del ámbito de la asistencia social
poseen la experiencia con los efectos familiares y personales relativos a comportamientos evitativos,
tales como las adicciones.
No es frecuente que todas las organizaciones tengan en su organigrama los servicios descriptos.
Aun cuando los mismos existieran, realizan sus funciones específicas, por lo que cuando se plantea
una intervención organizacional en violencia laboral lo más efectivo es que tal equipo se conforme con
algunos de estos profesionales en una acción transversal que no se estratifique en la estructura. En
nuestra práctica este diseño ha sido el más efectivo y el más enriquecedor.
La práctica, sin embargo, nos ha mostrado la emergencia de dos estilos de defensa ligados
principalmente a esta forma de intervención aunque no de manera exclusiva. Se trata de la mímesis y
1209
VI Congreso Marplatense de Psicología
la cancelación imaginaria. En cuanto a la mímesis (Martín-Baró, 1986), se trata del peligro de actuar en
función de lo que la disciplina sabe, alejándonos de los problemas concretos que los trabajadores
tienen. Operacionalizar esta definición implicaría el uso de un conjunto de estrategias, técnicas y
procedimientos que distraen o demoran el examen de las opciones posibles para la problemática
presentada. La cancelación imaginaria es un mecanismo que aparece dada la naturaleza dolorosa y
de impacto que tiene la temática de la violencia. Se usan múltiples recursos para neutralizar el dolor
que causa en nosotros lo que las personas padecen, por lo que se despliegan distintas prácticas para
que ese dolor no se exprese o se mantenga injustificado. A nuestro entender, el sufrimiento es una
expresión viva de la forma en que el maltrato trabaja sobre la identidad y las propias potencialidades
del trabajador, por lo que la cancelación no puede ser entendida como resolución de la condición que
origina y mantiene el sufrimiento. El trabajo con otras áreas de placer y de cooperación o cuidado de sí
y de otros es relevante para el establecimiento de una red que mejore el equilibrio afectivo, pero no
erradica la vivencia de menoscabo que afecta a las personas y que permite rápidas interpretaciones
sobre la organización y sus necesidades.
DISCUSIÓN
Hemos pasado revista a algunos de los procesos defensivos que se generan en la actividad de
intervención de los equipos de profesionales que, como el nuestro, trabajan con violencia laboral. El
advertirlo forma parte del proceso de concienciación, ya que los obstáculos no son en sí mismos
internos ni externos sino parte del proceso social. Éste tiende a transformar a la violencia emergente
en una condición accidental, un fallo del sistema organizacional, una dificultad personal, una
orientación anti-hedónica, una insuficiencia de aplicación de técnicas correctas.
La fuente de estas distintas apreciaciones nace como forma de morigerar el movilizador impacto
que causa descubrir las consecuencias que los trabajadores viven en ciertos contextos, cuya trama de
producción hemos sido convocados a esclarecer y en razón de lo cual nuestra propia práctica ha de
resultar también elucidada. En este sentido, la intervención no puede estar al margen de momentos en
donde se reflexiona sobre los procesos personales y grupales que la actividad produce en los
miembros del equipo. Es probable que este proceso reflexivo pueda ser llevado a cabo a través de
distintos procedimientos, tales como la devolución de los grupos y personas que hayan pasado por el
programa de intervención y asistencia, el análisis conversacional de las reuniones en las que se
planifican estrategias y analizan casos, el examen periódico de las distintas presiones contextuales y
situacionales en las que se desarrolla la actividad.
En suma, describimos algunas de las acciones que consideramos importantes para transparentar
bloqueos y obstáculos que vuelven riesgosa la efectividad de nuestros grupos así como la capacidad
de comprometer nuestras emociones en el trabajo con víctimas de violencia laboral.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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1211
VI Congreso Marplatense de Psicología
En el presente trabajo me propongo abrir una serie de reflexiones e interrogantes con respecto a la
integración entre D-I-E en la formación universitaria. La vida y obra de Ignacio Martin-Baró será el
referente que nos guiará en esta empresa.
Ignacio Martin-Baró, psicólogo y sacerdote nacido en España, autor de numerosos artículos y
libros, docente de la UCA y de otras universidades latinoamericanas, fundador y director de la IUDOP,
participo activamente como estudiante y luego graduado en diversos cargos de la universidad, son
algunos de los títulos y reseñas que pretenden representarlo. La vida y obra de este psicólogo
salvadoreño por elección es intensa y extensa, a pesar de que encontró su muerte tempranamente a
los 47 años. A lo largo de ella, ha denunciado el papel que la “psicología tradicional” ha desempeñado
en el interior del ordenamiento social y ha expuesto su concepción de la psicología, una psicología en
pos de la liberación. Para ello ha delineado el papel del psicólogo social tal cual él lo concebía y tal
cual él lo representaba. Su vida y obra conjuga sus variados y extensos conocimientos teóricos, una
solida formación investigativa en la Universidad de Chicago, el conocimiento profundo de la realidad
social y política vivida en El Salvador con su comprometida labor docente y profesional.
En “Hacia una Psicología de la liberación” (1986) nuestro autor expresa que la Psicología deberá
replantearse su bagaje teórico y práctico, si pretende realizar algún aporte significativo. Propone tres
elementos claves para la construcción de una Psicología de la Liberación, a saber: un nuevo horizonte,
una nueva epistemología y una nueva praxis. Este nuevo horizonte propuesto esta dado por los
problemas reales de los pueblos latinoamericanos, su condición de miseria, dependencia y existencia
inhumana. En el camino hacia su realización, se vuelve indispensable concebir una nueva forma de
buscar el conocimiento, al respecto dirá: “No se trata de que nosotros pensemos por ellos, de que les
transmitamos nuestros esquemas o que les resolvamos sus problemas; se trata de que pensemos y
teoricemos con ellos y desde ellos” (Martin-Baró, 1986). Esto no implica descartar todos nuestros
conocimientos y experiencias pero si someterlos a una revisión que sea crítica. Pero aún así, no basta
con ubicarnos desde la perspectiva del pueblo, este nuevo conocimiento psicológico propuesto solo se
producirá en la confluencia de acción y participación, solo actuando sobre la realidad podrá construirse
ese conocimiento que al mismo tiempo que transforma la realidad, nos transforma a nosotros mismos.
Dentro de la lista de tareas urgentes destaca: la recuperación de la memoria histórica, desideologizar
la experiencia cotidiana y potenciar las virtudes de nuestros pueblos.
Uno de sus escritos publicados póstumamente y titulado “El Método en Psicologia Política” nos
permite continuar acercándonos y comprendiendo el rol del psicólogo propuesto por nuestro
protagonista de hoy. El mismo destaca los problemas metodológicos que debe enfrentar la Psicología
al estar enmarcada en la “perspectiva neopositivista” y propone una serie de principios metodológicos
que configuran, al decir del autor, un nuevo paradigma. Para el objetivo que hoy nos convoca, me
gustaría resaltar algunas de dichas directrices metodológicas:
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VI Congreso Marplatense de Psicología
La elección de la vida y obra de este psicólogo para problematizar sobre la temática se debe a que
considero que es una brújula para pensar que tipo de psicología queremos y estamos construyendo y
que rol del psicólogo concebimos, lo que nos conduce a volver la mirada a la formación académica y a
nuestra universidad. Es justamente su obra inseparable de su vida, su labor investigativa y docente, su
praxis en pos de ese horizonte que mencionamos, ese legado que considero nos permitirá pensar en
la articulación entre estas misiones o funciones de la universidad.
Así como Martín- Baró expresaba que referirnos a problemas prácticos incluía, necesariamente
la consideración por los teóricos y metodológicos, así como Montero considera que las dimensiones
ontológica, epistemológica, metodológica, ética y política son parte indisociable de todo paradigma, la
investigación, extensión y docencia no pueden concebirse ni desarrollarse por separado, ya que son
parte de un todo que es la universidad.
Esta tesis no tiene nada de novedosa ni de original y seguramente todos estarán de acuerdo en
ella. La pregunta es si en la práctica, si en el día a día se hace efectiva dicha concepción.
¿Significa esto que todos los profesionales que conforman la facultad deben tener desarrollos en
las tres áreas o secretarias? Esto sin dudas sería muy favorable, tanto para el desarrollo de la
disciplina como para la formación académica. Sin embargo, no es hacia ese lugar a donde pretendo
dirigirme.
Considerar la extensión, investigación y docencia como trama dialéctica, implica hacer reales,
consistentes estos principios ya mencionados de reflexibilidad, crítica, praxis y compromiso social.
Pienso que de otro modo nuestra ciencia y disciplina no podrá ser una “Psicología promotora de
derechos” que ponga su mirada, su trabajo reflexivo y su accionar con y para la comunidad de la que
somos parte.
Los estudios de género, la violencia en todas sus formas, social, familiar, escolar, las nuevas
formas de ser familia, las nuevas formas de vincularse con no ya la introducción sino la masificación de
las nuevas tecnologías, el descontrol en la medicalización y los diagnósticos, los debates en torno a la
nueva ley de salud mental, son algunas de las complejas temáticas y problemáticas que hoy nos
convocan como sociedad y nos desafían como profesionales y estudiantes.
Nuestro accionar no puede ser sino una praxis, una práctica reflexionada constantemente que
genere interrogantes en torno a las problemáticas actuales y nuestro consiguiente papel como
profesionales, una praxis que visualice aquellas zonas de necesaria investigación. Ya Vilanova
advertía sobre los peligros entre la brecha creciente entre psicólogo investigador y aplicado (Vilanova,
1992). Y Fals Borda, por su parte, hace de la investigación-acción –participativa uno de los conceptos
más importantes de su obra.
Por eso este concepto de praxis es constantemente remarcado en estas páginas, y esto es
justamente lo que se pone a disposición para seguir debatiendo y construyendo en el interior de las
cátedras. Sin praxis, los objetivos de articulación entre teoría y práctica, la lectura crítica y reflexiva y la
actitud ética y comprometida, que son mencionados como objetivos en prácticamente todos, sino
todos, los programas de las asignaturas de nuestra carrera, se vuelven, inverosímiles.
El trabajo de Martín-Baró, y sus continuadores, en el Instituto Universitario de Opinión Pública de la
UCA es un buen ejemplo de como se pueden conjugar exitosamente las tres misiones. Los sondeos
realizados por el instituto ofrecen información sobre las condiciones de vida y opiniones de los
miembros de la sociedad, a la vez que este conocimiento devuelto al pueblo le da posibilidades de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
transformación por la toma de conciencia sobre su realidad y del conocimiento público de la misma.
Los estudiantes participan activamente en los distintos momentos del proceso, contribuyendo en su
realización al tiempo que aprenden y enriquecen su propia formación.
Silvia Bleichmar (2007) marca una diferencia entre la facultad, en tanto “me faculta para el
ejercicio profesional, me torna licito prácticamente”, y “universitas”, universidad que refiere a “la
responsabilidad como sujeto social, como miembro de una comunidad”. Pienso que ambos aspectos
son igual de importantes.
A partir del recorrido llevado a cabo en esta oportunidad, se desprende la necesidad de abrir más
canales de vinculación y comunicación dentro de cada secretaria y entre ellas. Más programas
constituidos por proyectos, más líneas de investigación que aúnan grupos, más viñetas clínicas y
relatos de experiencias que surjan de nuestra misma facultad. Habilitar más espacios donde compartir
las experiencias y puntos de vista de los diversos actores de nuestra universidad no puede quedar
supeditado a otras cuestiones. Es difícil creer que dentro de una misma área muchas veces se
desconozca las investigaciones o proyectos llevados a cabo por colegas de la misma unidad
académica.
Me pregunto si esto tiene posibilidades de realización mas allá de y más acá de estas páginas y
cuales serian los caminos que hemos de delinear y construir todos como universidad para hacerlo
posible. Pienso que en la construcción de ese camino la forma de concebir la psicología y el papel del
psicólogo propuesto por Martin-Baro constituye un buen faro que puede guiarnos para no perder
nuestro norte.
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Buenos Aires: Médica Panamericana.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Actualmente se sabe que las teorías que han adquirido mayor influencia en la promoción del
proceso de construcción de conocimientos y saberes significativos son aquellas que están asociadas a
los principios de educación experiencial y del aprendizaje colaborativo. Estas modalidades formativas
se encuadran en un enfoque centrado en el pensamiento y afectividad del estudiante. Están orientadas
a suscitar el logro de una autonomía creciente en la adopción de la toma de decisiones, proponiendo
con este objetivo, experiencias de aprendizajes basadas en la reflexión del alumno. En esta línea de
formación se busca la articulación entre la teoría y la práctica, los individuos, la institución y los
contextos, que son clave para la construcción del conocimiento profesional.
Este proceso formativo se vincula con constructos teóricos referidos a la metacognición, motivacion
(Ugarterxea, 2001), la evaluación formativa (Camilloni, 2004) la comprensión crítica (Cassany, 2005),
el cambio conceptual (Pozo, 1999), los sistemas de creencias e ideologías.
La formación profesional implica la consecución de un trayecto (Anijovich, R. y Mora, S., 2012),
concepto muy utilizado en la bibliografía pedagógica francófona- que hace referencia no solamente a
un proceso vivencial que se continúa en el tiempo, sino también que ese recorrido compromete a la
totalidad de la persona y por tanto, posee un carácter diferenciado o individualizado. Entonces tanto la
secuencia como la continuidad son atributos del trayecto, ya que ambos otorgan al proceso formativo,
puntos de partida y puntos de llegada, de pasaje de una etapa a otra, un tránsito que se realiza y
alcanza un grado efectivo de profundidad en la transformación del sujeto que aprende.
El dispositivo pedagógico utilizado para llevar a cabo este trayecto está referido al constructo
construido por Michel Foucault (Foucault, 1991), definiendo la función metodológica de este concepto
por su capacidad para relacionar elementos heterogéneos y analizar de qué manera los resultados de
su interrelación producen estructuras de poder, conocimiento y subjetividad en una formación histórica
determinada. En la pedagogía francesa, su uso se ha extendido, entendiendo al mismo como un
conjunto de actividades pedagógicas que se integran formando un conjunto coherente, que se
combinan intencionadamente para facilitar un aprendizaje. Se entiende entonces al dispositivo tanto en
su aspecto organizativo de los medios pedagógicos, como en su dimensión afectiva de promoción de
una actitud, tendencia o disposición en los sujetos durante el proceso de formación. En este proceso el
desafío es diseñar propuestas que potencien la capacidad de los estudiantes, futuros profesionales de
la psicología, para la reflexión en y sobre la acción.
En este encuadre teórico se considera al sujeto de la formación de un modo integral, es decir, con
su mundo interno, sus emociones, sus afectos, sus experiencias, sus implicaciones, su sistema de
creencias, sus ideologías. Concomitantemente se entiende a la formación como un proceso complejo,
cuyo entramado se conforma por las interacciones entre el o los formadores, el y los estudiantes, su
objeto de estudio y su ámbito de trabajo en un contexto socio histórico determinado.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El origen etimológico del término formación, proviene del latín formatio, -onis, cuyo significado es
“acción o efecto de formar o formarse”, y la base de la expresión es forma, entendida como “la
configuración externa o modo de proceder en algo”. Entonces formar es algo que tiene que ver con la
forma, por lo tanto, formarse, se relaciona con adquirir una forma. En este caso la forma se vincula con
la construcción del rol del profesional psicólogo, en torno a la adquisición de un conjunto de saberes,
actitudes, competencias, procedimientos para poder cumplir con las tareas requeridas para ejercer la
profesión.
M. Souto (2006) hace referencia a la necesidad de comprender a la formación como un campo de
problemáticas desde la complejidad. La formación es entonces un trayecto, un espacio flexible y de
construcción.
El dispositivo de formación es un modo particular de organizar la experiencia formativa con el
objetivo de crear situaciones para que los estudiantes que participan en ellas se modifiquen a través
de las interacciones consigo mismos y con los otros, pudiendo efectuar una lectura activa de las
situaciones cambiantes, apropiándose de nuevos saberes, interiorizando un sistema de actitudes y
construyendo competencias pertinentes para efectuar intervenciones que le demandara el rol
profesional.
El compromiso de nuestra tarea como docentes es construir dispositivos que promuevan la
emergencia de la reflexión, ya que es solamente a través de la misma que el estudiante por medio de
una actividad consciente se compromete a explorar sus experiencias. La reflexión es tanto una forma
de pensamiento como una disposición, e implica una actitud comprometida y no impulsiva o rutinaria,
que orienta a las decisiones y acciones a la luz de conocimientos específicos. El objeto de reflexión en
las prácticas profesionales está orientado tanto a los aspectos cognitivos, como los emocionales y los
componentes de acción. “Reflexionar sobre la propia práctica también significa reflexionar sobre la
propia historia, los habitus, la familia, la cultura, los gustos y aversiones, la relación con los demás, las
angustias y las obsesiones” (Perrenoud, 2004).
Las prácticas extensionistas, ejercidas por medio de los proyectos de extensión brindan a los
estudiantes dispositivos legítimos a través de los cuales logran articular la práctica con la teoría,
promoviendo además el acercamiento real a las problemáticas actuales que atraviesa nuestro campo
disciplinar.
Se entiende a la función de la extensión universitaria como aquella comunicación del quehacer
universitario en diálogo permanente con la sociedad. La función de la “comunicación” aparece así
como esencial para la universidad y de igual jerarquía que su quehacer académico: docencia e
investigación. Tal comunicación implica un proceso de interacción dialéctica: universidad – cuerpo
social.
En las Jornadas de Extensión del Mercosur (UNICEN, 2014) se concluye que la extensión no trata
de leer las necesidades desde la universidad sino que las necesidades deben surgir del diálogo.
Aprendiendo docentes, estudiantes y comunidad en contexto, poniendo en diálogo el saber popular y
el saber científico. Se destaca la importancia de integrar las tres funciones de investigación, docencia y
extensión desde el inicio de la formación universitaria, siendo indispensable avanzar en un proyecto
nuevo de universidad respetando la diversidad, desde el punto de vista teórico, práctico e institucional.
También se postula que todo estudiante debería transitar por la práctica de extensión como forma de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
compromiso para lograr mayor sensibilización y compromiso con las problemáticas sociales que lo
rodean y en las cuales está inmerso.
Desde esta perspectiva se ubica al estudiante que atraviesa la experiencia de extensión no solo
como un sujeto epistémico sino como un sujeto social. Se reconoce que el conocimiento empondera y
quien posee ese poder debe asumir un compromiso social (Cecchi et al, 2009) que esté a la altura de
los valores y prácticas que caracterizan el ejercicio profesional, en particular, y el comportamiento
como ciudadano, en general.
La enseñanza superior no puede ni debe disociarse de la investigación y/o la extensión, ya que la
transmisión disociada de la producción de conocimiento aliena a los sujetos con respecto al campo de
la producción de conocimiento (Castro, J. O. y Espinoza, J., 2006). Además cuando la misma no
trasciende sus propios límites, supone no hacerse cargo de las exigencias propias que comprometen a
la universidad, en el sentido de comunicar el conocimiento, entendido como patrimonio cultural
colectivo.
CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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INTRODUCCIÓN
Los sectores dominantes han encontrado en el espacio disciplinar una alternativa viable para
generar desarrollos teóricos varios con la pretensión de mantener el sistema que funda la relación
dominante/dominado. Es de esta forma que se consolidan las lógicas de dependencia y se configuran
los vínculos intersubjetivos que mantienen con vida a dichos ideales. Los mismos promueven la
reproducción de tales posturas desde una asimilación acrítica, que no propician el desarrollo de un
pensamiento genuino, que dé lugar al surgimiento de un nuevo modelo de hombre que pueda
encontrar sus propias raíces y se asuma como libre, pleno de autonomía y con una identidad propia,
fiel a las necesidades, conflictos y valores propios de su tierra. (Castro Gómez, S.; Grosfoguel, R.;
2007).
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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Patrón de poder que emergió como resultado del colonialismo moderno, pero que en vez de estar limitado a una relación
formal de poder entre dos pueblos o naciones, más bien se refiere a la forma en cómo el trabajo, el conocimiento, la
autoridad y las relaciones intersubjetivas se relacionan entre sí a través del mercado capitalista mundial y de la idea de raza.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
pronuncie, es decir, ser críticos sólo con aquellas teorías que se alejan de nuestro posicionamiento
original. Claramente, se trata de fomentar aquella primera.
En relación a lo anterior, consideramos que la universidad nacional debería acercarse a los
problemas de la sociedad, y dar respuesta a estos, éste acercarse, involucra conocer nuestra sociedad
en principio, y luego no trabajar para ellos, se trata de un trabajar entre todos, en conjunto y en post de
apelar a nuestro perfil más creativo, para dejar de reproducir respuestas que nos son ajenas
culturalmente hablando y comenzar a producir, crear, respuestas a nuestros problemas, a los
problemas de nuestra cultura. Para esto es más que necesario que el papel de la extensión en la
universidad cobre un interés inconmensurable, claro está, articulado con los demás departamentos.
Ligado a esto, deben considerarse posibles prácticas que abarquen desde los primeros años de
nuestra carrera, y no solo prácticas de salón o academicistas.
El prestigio de los científicos en general, debería comenzar a ser juzgado como bien planteaba
Fals Borda, por la originalidad de sus propuestas y lo autóctono de éstas, y no tanto porque han sido
publicadas en revistas que se acusan de ser prestigiosas por pertenecer a culturas europeas-
norteamericanas.
Desde la mirada de éste autor hablamos de un “Robo internacional de cerebros”, esto implica que
los científicos nacidos en nuestros horizontes con el cuerpo en nuestras tierras, piensan y escriben con
una pluma extranjera, la cual da paso a un servilismo e imitación, que está más bien al servicio de
acumular el conocimiento para naciones dominantes, en vez de dar respuestas orientadas a las
problemáticas estructurales, ideológicas y materiales de nuestro día a día. A mayor creatividad en la
investigación local, menor dependencia y menor impacto del posible robo de cerebros. (Herrera Farfán,
N.A.; López Guzmán, L. (comp) (2013)
A MODO DE CONCLUSIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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INTRODUCCIÓN
LAS HERRAMIENTAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
intentan pensar lo que hacen y saber lo piensan (Castoriadis, 1993). Mas precisamente, no constituye
un descubrimiento de sentido existente o latente, sino que es producción de sentido propiamente
dicha, es creación.
De lo anterior se desprende el carácter necesario del análisis de aquello que Castoriadis denomina
Significaciones Imaginarias Sociales, las cuales pueden entenderse como aquellos sentidos
inventados o creados por un colectivo anónimo. Según el autor, estas significaciones tienen un triple
papel: estructuran las representaciones del mundo, sin las cuales no podría haber ser humano;
designan las finalidades de la acción determinando de alguna manera el hacer; y, en tercer término,
establecen los tipos de afecto que van a caracterizar a una sociedad. En este sentido es que toda
sociedad produce su propio mundo de sentido, y a su vez es animada por estas significaciones
instituidas que permiten y sostienen su existencia.
Ahora bien, son los sujetos que forman parte de esa sociedad quienes, como fragmentos
ambulantes de la misma, portan los sentidos de la sociedad como un todo y son la materia prima que
produce y reproduce los instituidos necesarios para su validez efectiva. De esta manera, se entiende
que las personas con quienes se implementan los talleres aludidos, son portadores de todas aquellas
significaciones instituidas socialmente, sea esto advertido por ellos o no.
Por su parte, el dispositivo taller posibilita la construcción de un espacio participativo de
pensamiento y reflexión, en este caso, respecto al lugar y función de los y las psicólogas a partir de la
producción colectiva sirviéndonos, como herramienta, de la multiplicación dramática. La elección de
esta herramienta resulta estratégica debido a que apunta al despliegue de las significaciones
imaginarias institucionales.
Ahora bien, la Multiplicación Dramática consiste en un dispositivo psicodramático ideado por
Pavlosky, Kesselman y Friedlevsky (1989), quienes han hecho explícito uno de sus criterios fundantes:
multiplicar en vez de reducir. Se trata de un modo y procedimiento de trabajo con grupos que busca
producir enunciaciones de líneas de sentidos colectivos siempre múltiples.
LOS TALLERES
A continuación presentaremos los dos talleres realizados durante el año 2013, destinados a
estudiantes y graduados participantes del Congreso. Se pretende resumir el modo en que han sido
dispuestos y dar cuenta de algunas de las conclusiones que pudieron desprenderse a partir de lo
trabajado en el taller y con posterioridad al mismo, en torno a la Elucidación de las Significaciones
Imaginarias Sociales.
El primer taller ha sido titulado “Significaciones Imaginarias Sociales que animan los modos de
pensar el lugar y función de los y las psicólogas”; y el segundo “Significaciones Imaginarias Sociales
que animan los modos de pensar lo público como ámbito de ejercicio profesional”.
Ambos respetaron una disposición común en torno a cuatro momentos:
-Primer momento: Presentación de la investigación en curso y de los participantes a partir de la
consigna: “Me llamo..., soy Psicólogo y trabajo en o trabajo con...”
-Segundo Momento: constitución de grupos y trabajo con consignas diferenciadas según el taller:
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-Consigna primer taller, tuvo dos momentos: Primero: “Cada uno debe pensar una situación de un
psicólogo trabajando, a modo de escena con un principio y un final”. Segundo momento: “Ahora deben
agruparse de a cuatro y van a compartir la escena que imaginaron y a partir de lo compartido, deben
elegir una de las escenas y pasar a representarla. O pueden construir una escena nueva
grupalmente”.
-Consigna segundo taller: “En cada grupo se va a construir una escena que se desarrolle con
principio, desarrollo y final. Y para esa escena van a tener que pensar en el psicólogo trabajando en
los ámbitos profesionales de infancia, salud, seguridad y genero”.
- Tercer momento: Multiplicación dramática propiamente dicha. Luego de haber escenificado lo
decidido grupalmente, bajo la consigna: “Ahora, aquel que quiera y se le ocurra alguna escena pasa y
la hace”; se propone una segunda consigna: “¿Quisieran comentar las escenas que hayan pensado y
que no representaron?”, se presentan las Escenas Silenciadas.
-Cuarto momento: Elucidación colectiva de las significaciones imaginarias inmanentes a las
escenas multiplicadas a partir de las consignas diferenciadas según el taller:
Consigna primer taller: “Ahora correspondería un momento de tomar distancia para
situar algunas de las producciones de sentido que se pusieron en juego en relación al lugar y
función de los psicólogos”.
Consigna segundo taller: “Ahora la idea es que veamos las Producciones de sentido en
torno al ejercicio profesional anudadas a lo que nos fue pasando”
ALGUNOS SENTIDOS DESPLEGADOS EN ESCENA
A continuación presentamos algunas insistencias detectadas en los talleres realizados, que aluden
al rol del psicólogo y la manera en que es pensada la práctica profesional por los estudiantes.
1. El psicólogo como trabajador
Se presentan con frecuencia escenas en los que se encuentran psicólogos trabajando en
instituciones públicas. Lo que se muestra es “la cocina de la institución”: un grupo de profesionales
(psicólogos o no) que conversan sobre aspectos formales del trabajo: llegadas tardes, inasistencias,
pagos atrasados. Se alude explícitamente a cuestiones laborales sin atender a la dimensión clínica.
- “yo estoy cansada de estos espacios”
- “y si venís dos veces en dos meses”
- “vos también faltas”
- “yo llego tarde, que no es lo mismo”
a. El dinero: Observamos que el dinero se hace presente en las escenas, tomando visibilidad. El
psicólogo se enuncia como alguien a quien le tienen que pagar pero que está mal pago. “Con el sueldo
que me pagan, ¿Qué niñera voy a pagar?”; “Chicas, acá tienen su sueldo, son $500 para todo el mes.
Gracias”.
Llama la atención que esta dimensión aparece cuando se piensa al psicólogo trabajando en
ámbitos institucionales y no en consultorio privado.
b. La autoridad: Se señala la presencia de una “subordinación”, el jefe, la directora de escuela o un
médico, le dicen al psicólogo lo que debe hacer y tienen el poder de dejarlo o no sin trabajo. Como
respuesta a estas situaciones una operación que intentan hacer los psicólogos para lograr hacer su
trabajo es que el director se vaya. Es necesario que la autoridad ceda su espacio “se retire” para que
los psicólogos puedan hacer lo que saben, de otra manera hacen lo que les dicen.
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La presencia del jefe o el director, es decir, la subordinación del psicólogo a un cargo jerárquico
superior nos hace pensar que lo público no permite definir el rol profesional, ya que se juega con que
para poder “ser psicólogo” y poder laburar tenes que echar al director.
c. El cansancio y el aburrimiento: En la cocina los psicólogos comparten lo tedioso de su trabajo, lo
difícil de lidiar con otros: los familiares de los pacientes, los padres de los niños, los demás
profesionales, los directivos de las escuelas, los jefes que no pagan, el psicólogo que llega tarde. El
aspecto clínico aparece ausente. Las conversaciones entre los personajes giran en torno a la queja y
las molestias. El clima es denso, aburrido.
Aparece una propuesta lúdica: jugar. Los que se muestran distendidos son los estudiantes que a
su vez se encuentran podridos por otros estudiantes más avanzados que “se hacen los psicólogos”.
d. La soledad del consultorio: En lo público, los equipos son un sostén para compartir el
padecimiento. Por un lado, se observa mucha desconexión interdisciplinaria. Los equipos aparecen
discutiendo sobre que deben hacer, cada uno da una visión parcializada de cada situación o caso, que
implica un saber especializado, fragmentado de otros saberes. No hay dialogo. Aún así el equipo
permite el espacio para compartir el malestar, la queja y el aburrimiento, parece que este estado no es
personal, sino que es propio del espacio público. Por otra parte, analizando una de las escenas
silenciadas “El Piquete”, escena que a diferencia de las otras sucede en la un espacio abierto y
público, la plaza; se plantea un piquete individual contra el Ministerio, donde se reclama por el egreso
de un paciente de un Hospital monovalente. En esta escena una psicóloga protesta sola en la plaza,
pidiendo la externación de un paciente. Observamos que el equipo no aparece acompañando estos
criterios, ni siquiera son debatidos en su interior, ante la figura del “Ministerio” aparece la soledad del
consultorio. La externación no se plantea como una decisión del equipo, sino como una decisión que
depende de una instancia externa, nuevamente de mayor jerarquía.
e. Los grupos: “Volvamos a los grupos”. ¿Cómo son pensados los grupos terapéuticos, las
intervenciones grupales? En íntima relación con el punto anterior, los grupos vuelven a aparecer como
un punto de rescate, pero nuevamente de una forma que no hace política. Los pacientes son muchos,
el dinero poco, volver a los grupos implica poder atender más personas en menos tiempo “¡Tengo
muchos pacientes! Chicas, volvamos a los grupos, yo así no puedo. La otra vez me cachó dormida, se
dio vuelta en el diván y yo me había dormido si me aburría”. Los grupos también aburren, dan pocas
ganas de ir, pero al menos los mantienen imaginariamente mas descansados.
f. El no saber: Encuadre/ demanda: No hacemos muchas cosas por no desdibujar el encuadre. “Si
vos no querés venir va a ser muy difícil que podamos trabajar. Dejemos acá por hoy”; “el problema es
el encuadre. Porque no hacemos muchas cosas por no desdibujar el encuadre”.
Lo llamativo de este caso es que el psicólogo se pone a sí mismo el encuadre que lo limita.
Pareciera que las herramientas conocidas para intervenir se imaginan como difíciles de implementar
en el ámbito institucional. Lo que no existe en los posibles del ejercicio profesional, no está en el cerco
de significaciones posibles. Por ejemplo, una de las participantes enuncia ante determinada escena:
“Nunca se me hubiera ocurrido que esa era una situación para llamar a un acompañante terapéutico, y
yo soy acompañante”. Se puede pensar que la pregunta sobre qué hacer o que es posible plantear
como intervención no surgió como idea, porque tampoco surgió la necesidad de preguntarse “que
tengo que hacer”. Las escenas se centraron de tal manera en la trama laboral, en lo que sucede entre
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VI Congreso Marplatense de Psicología
los equipos, entre los técnicos, los profesionales, que la dimensión de la clínica y de la intervención y
el psicólogo como especialista quedó desdibujada.
g. El psicólogo y el psicodiagnóstico: El psicólogo aparece administrando test en ámbitos laborales.
“Hola, yo soy la psicóloga, acá te vamos a hacer unas pruebitas. Dibújame una persona bajo la lluvia”.
“Yo, desde mi profesión, entiendo el asistencialismo del trabajador social. No estoy de acuerdo
porque para mí hay que hacer test” (pareciera ser el psicólogo).
A MODO DE CIERRE
Nos interesa puntuar que la producción de este escrito se inscribí en un segundo tiempo del taller
de multiplicación dramática, al decir de H. Kesselman y E. Pavlovsky: “Tal como en el mundo onírico,
la multiplicación escénica y lo literario, permiten una coexistencia de distintos tiempos: a) el tiempo en
que se hizo la dramatización b) el tiempo en que se la recuerda para escribirla…” (1993: 90). Segundo
movimiento de escritura que se fundó en la decisión de desplegar-compartir lo producido en el taller,
en tanto el mismo funcionó al modo de “una singular máquina para hacer ver, en el marco de un
proceso de reflexión” (Salazar Villava: 2004:292) y elucidación de las significaciones imaginarias que
animan los modos de pensar las prácticas profesionales de los y las psicólogas.
NOTAS
(1) Los psicólogos en el ámbito público: Ayer y Hoy. Salud- Desarrollo Social- Seguridad y
Justicia. (SO26) Director: Pérez, Edith Alba. Entidad que acredita: Secretaria de Ciencia y
técnica UNLP.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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MARCO EPISTÉMICO
Los modelos mentales de profesionales en formación (Schön, 1998), - en nuestro caso, profesores
de Psicología en formación - acerca de las situaciones problemas de intervención profesional en
contexto, constituyen una unidad de análisis compleja y multidimensional, en la perspectiva sistémica,
dialéctica y genética inspirada en el pensamiento de Lev Vigotsky (Vigotsky, 1934, Castorina y
Baquero, 2005). Sus componentes son recíprocamente constitutivos e inseparables, con interacciones
y relaciones recíprocas, funcionamiento distribuido y conflictos y tensiones que promueven giros de
significados y sentidos (Erausquin y otros, 2004), a través de procesos de internalización y
externalización (Engeström, 2001). En ese marco, los profesores de Psicología en formación realizan
un proceso de dominio y apropiación participativa de instrumentos de mediación (Wertsch, 1999) para
el análisis y la resolución de los problemas de intervención, en el seno de una comunidad de práctica y
aprendizaje (Lave y Wenger, 1991). Ello implica procesos de participación guiada y dispositivos
específicos de aprendizaje en contexto de prácticas culturales (Rogoff, 1997). La perspectiva de la
cognición en la práctica, inspirada en Vygotsky, supone un giro contextualista (Pintrich, 1999, Baquero
2002) en la concepción del aprendizaje, que se constituye como una actividad compleja, en la trama
inescindible de procesos corporales y mentales, emocionales y cognoscitivos, que se sitúan
fundamentalmente en el seno de un funcionamiento intersubjetivo. El aprendizaje, según esta
conceptualización, es un cambio abierto y relativamente impredecible en las formas de participación y
comprensión de los sujetos en las situaciones sociales. Si se entiende el cambio cognitivo como una
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ESTRATEGIAS METODOLÓGICAS
CARACTERIZACIÓN DE LA MUESTRA
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Del total de la muestra de egresados hallamos que en cuanto a su inserción laboral, el 63,6% (7 de
11) poseían experiencia docente antes de ingresar al profesorado (en diferentes niveles). El 54,5% (6
de 11) trabajan actualmente como docentes. El 36,3 % (4 de 11) trabajan como psicólogos y como
docentes a la vez y solo el 18,1% (2 de 11) trabajan únicamente como docentes. Estos pertenecen al
grupo de los que trabajaban como docentes antes de ingresar al profesorado. Por otro lado, el 45, 4 %
(5 de 11) trabajan sólo como psicólogos. Luego de completar el profesorado, el 36% logra una mayor
inserción en la docencia: el 27 % suma al trabajo docente pre-existente la inserción en un nuevo nivel
educativo y el 9% pasa de no trabajar en docencia a insertarse en este ámbito. Por otra parte, un
27,2% (3 de 11) no se insertaron en el ámbito docente. En cuanto a estudios de posgrado, si bien sólo
el 27,2 % (3 de 11) está haciendo curso de posgrado en educación, la mayoría, es decir el 81,8 % (9
de 11) manifiesta el interés específico en desarrollar en algún momento estudios de posgrado para
profundizar su formación como profesor de psicología.
ANÁLISIS DE DATOS
Este trabajo surge del interés por poner en interrelación dos de las cuatro dimensiones de la
Unidad de Análisis Modelos Mentales acerca de la Intervención sobre Problemas Situados en la
Práctica Docente. Nos planteamos descubrir la relación existente entre la experiencia laboral actual y
los estudios de posgrado de los egresados del profesorado que han sido entrevistados con su
rendimiento en relación a la complejidad de las situaciones problema que recortan, así como también
en relación a la unicidad o multiplicidad de las herramientas utilizadas en sus intervenciones.
Considerando el eje denominado “De lo Simple a lo Complejo” correspondiente a la Dimensión
“Situación Problema”, se puede observar que el 54,54% (6/11) del total de la muestra mantienen o
mejoran su rendimiento en el cuestionario de egresados en comparación con sus puntuaciones al
momento de finalizar sus estudios. Del total de egresados que mantienen o mejoran su puntuación, el
50% (3/6) logra recortar una situación problema compleja y multidimensional mientras que al finalizar
sus estudios de profesorado recortaban una situación simple y unidireccional. Por ejemplo, una de las
egresadas, aún como alumna, recorta una situación en la que “la docente comienza con la clase y los
alumnos no prestan atención sino que se encuentran leyendo o escribiendo sobre otra materia”, pero
en su cuestionario como egresada, la situación recortada se complejiza. Ella afirmaba que “la situación
problema sería la disconformidad hacia el modo de evaluar el parcial que tiene la cátedra. Utiliza un
instrumento de evaluación que es poco común dentro de las modalidades de evaluación de la carrera
en general”. Por otro lado, el 33,33% (2/6) plantearon una situación problema compleja y
multidimensional pero además ésta presentaba interrelación entre factores o dimensiones. Una
egresada responde: “una alumna cuando la fui a saludar me pidió que no le toque el brazo porque le
dolía ya que en su casa le pegaban siempre. Cuando intervine hablando con el colegio nadie le creyó
a la alumna y afirmaron que estaban de acuerdo con los padres ya que (...) no estudiaba y tomaba
alcohol”. Solo el 16,66% (1/6) recortan una situación problema simple y unidireccional. De éstos
egresados, los que mantienen el nivel o ascienden en sus puntuaciones, el 66,66% (4/6) se
encuentran trabajando actualmente como docentes tanto en el nivel secundario como universitario. El
50% de ellos (2/4) no tenían experiencia docente como alumnos y sí han podido adquirirla luego de
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recibirse como profesores. El 33,33% (2/6) no desarrollan su función docente en la actualidad. Por otro
lado, sólo el 16,66% (1/6) continúa sus estudios actualmente con un posgrado en el área docente.
El 45,45% (5/11) del total de la muestra, desciende en sus puntuaciones como egresados a
diferencia de las obtenidas al finalizar su práctica como estudiante. El 40% (2/5) de ellos plantean una
situación problema simple y unidimensional mientras que en su cuestionario como alumnos habían
podido recortar una situación compleja y multidimensional con interrelación entre factores o
dimensiones. Por ejemplo una de las entrevistadas, al finalizar el profesorado afirmaba: “durante un
parcial el profesor se va del aula, los alumnos comienzan a copiarse. Los resultados fueron de diez
para los que se copiaron y una compañera que no se había copiado no promociona. El profesor
respondió que éramos adultos y que el copiarse es una cuestión ética”. Mientras que en el cuestionario
de docente afirma: “luego de haberles leído un cuento una niña quería hablar, le decimos que esperara
su turno, se angustió mucho y cuenta que en su casa le dicen fea. Tuvimos que calmarla”. También el
40% (2/5) recortan una situación problema compleja y multidimensional mientras que previamente
habían podido incluir en la situación tramas relacionales intersubjetivas y psicosociales entre actores,
factores y dimensiones. Solo el 20% (1/5) da cuenta de la complejidad de la situación presentando
interrelación en sus dimensiones, mientras que previamente habían podido incluir, además, tramas
relacionales en dichas dimensiones. De los egresados que descienden en su rendimiento en dicho eje,
podemos observar que el 60% (3/5) no se encuentra actualmente trabajando como docente, de los
cuales el 66.66% (2/3) antes sí lo hacía y actualmente no y solo el 33,33% (1/3) no tenía experiencia
previa y aún hoy no la ha adquirido. El 40% (2/5) de los que bajan su rendimiento, está trabajando
actualmente como docente en el nivel secundario. Solamente el 20% (1/5), actualmente se encuentra
cursando un estudio de posgrado en educación.
Por otro lado, teniendo en cuenta la dimensión "Herramientas" se observa respecto al eje
denominado "Unicidad o Multiplicidad de las Herramientas" que el 63,63% (7/11) de los entrevistados
ascienden o se mantienen igual en su rendimiento al responder el cuestionario como egresados en
comparación con su rendimiento al hacerlo como profesores en formación. De estos egresados que
mejoran sus puntuaciones o se mantienen igual, el 42,85% (3/7) mencionan varias herramientas
vinculadas a una sola dimensión de la situación o bien, mencionan una sola herramienta pero pueden
vincularla a diferentes dimensiones de la situación. Mientras que en sus respuestas anteriores
alcanzaban a mencionar una herramienta pero vinculada a una sola dimensión de la situación
problema. Por ejemplo, una de las encuestadas, en su cuestionario post práctica, responde respecto a
las herramientas utilizadas en su intervención: “propuso el diálogo, no resultó con los alumnos” pero en
su respuesta como egresada puede dar cuenta de un giro al responder: “en primer lugar el diálogo,
intentar contener, acompañar. Tratar de persuadir a la madre para que actúe de manera positiva con
su hijo. La derivación al centro correspondiente para que se evalúe lo sucedido.” El 28,56% (2/7)
menciona una única herramienta vinculada a una sola dimensión en ambos cuestionarios,
manteniendo la misma puntuación y rendimiento. Una docente en formación respondía: “la herramienta
fue el diálogo para poder llegar a un acuerdo entre los docentes y alumnos” y en su cuestionario como
docente decía que la herramienta había sido “un contacto que tengo en el Ministerio del Trabajo.” El
restante 28,56% (2/7) logra mencionar varias herramientas y pueden vincularlas a diferentes
dimensiones de la situación problema, mientras que antes solo podían dar varias herramientas pero
sin vincularlas a más de una dimensión. Una docente en formación menciona respecto a las
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VI Congreso Marplatense de Psicología
herramientas: “las actividades utilizaron como recursos afiches con las consignas en el pizarrón (...)
también la actitud del docente hacia los alumnos, de guiarlos en la tarea” y al responder luego como
egresada se ve el giro cuando dice: “además del cambio en la disposición de los bancos y sillas,
también se trabajó con música, canciones y diarios, entre otros recursos para abordar el contenido.”
Del total de egresados que han ascendido en sus puntuaciones o las han mantenido igual podemos
observar que el 57,14% (4/7) se encuentra trabajando actualmente como docente, predominantemente
en el nivel secundario y universitario. De esos egresados, sólo el 25% (1/4) no tenía experiencia
docente al momento de contestar el primer cuestionario y sí ha podido desempeñarse en el rol luego
de haberse recibido de la carrera. Mientras que el 42,85% (3/7) no se encuentra ejerciendo un rol
docente al momento de responder el segundo cuestionario. Por otro lado el 28,57% (2/7) está
cursando actualmente un estudio de posgrado en el área docente.
El 57,14% (4/11) desciende en su rendimiento respecto a sus puntuaciones anteriores. El 75% de
ellos (3/4) pasan de mencionar una herramienta vinculada a una sola dimensión de la situación a no
mencionar ninguna herramienta. Una entrevistada pasa de afirmar “simplemente el diálogo” a decir:
“intenté trabajar con la docente para que esté atenta a la niña pero a la vez estaba posicionada como
psicóloga al charlar con la nena y su familia” mencionando las acciones realizadas pero no las
herramientas con las que contaba al hacerlo. Y el 25% restante (1/4) pasa de mencionar varias
herramientas a sólo mencionar una. Esta docente afirmaba en el primer cuestionario que sus
herramientas habían sido “material didáctico, láminas, casos, fragmentos de conceptos, carteles con
nombres, plastilinas, disfraces, etc.” y desciende su rendimiento en el segundo cuestionario al afirmar
que la herramienta fue “la disuasión para generar intereses.” De los egresados que han descendido en
sus puntuaciones respecto del cuestionario post práctica (4/11), el 50% (2/4) no desempeñan un rol
docente actualmente, mientras que sí lo hacían al concluir sus estudios y el otro 50% (2/4) sí se
encuentra ejerciendo como profesores. Además, se observa que ninguno de los que ha descendido en
su rendimiento posee estudios de posgrado en el área docente.
CONCLUSIONES
El proceso de construcción del rol profesional se entiende como un proceso dinámico, rico en
reestructuraciones, que admite progresos, retrocesos y giros. El rol docente no se construye de una
vez y para siempre, sino que presenta ciertos movimientos que lo llevan a intervenir desde diferentes
posiciones. Al indagar acerca de los giros que se producen desde el momento en que los profesores
de psicología en formación terminan sus prácticas, hasta que se enfrentan a la práctica profesional ya
como docentes egresados, se encuentra la compleja imbricación entre los conocimientos ligados a
contenidos teóricos, apropiados de maneras diversas durante las mencionadas prácticas, y los
saberes prácticos que se desarrollan en el quehacer docente.
En la muestra se ve que una cantidad importante de los egresados mantiene el nivel de sus
puntuaciones o asciende en comparación con sus cuestionarios post práctica y una minoría desciende,
tanto en el eje correspondiente a la complejidad de la situación problema como en el de la multiplicidad
de la herramientas. Respecto al primer eje mencionado, se observa con mayor relevancia, que los
docentes han podido recortar situaciones complejas y multidimensionales mientras que antes solo
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alcanzaban a recortar situaciones simples y unidireccionales. Dado que la mayoría de los docentes
que asciende o mantiene sus puntuaciones actualmente se encuentra trabajando en docencia, y solo
una minoría muy significativa también lo hace, podríamos aproximarnos a concluir que el hecho de
estar en contacto con el contexto educativo haciendo uso del rol posibilita la percepción y el posterior
recorte de situaciones más complejas. Con respecto a los estudios de posgrado observamos que la
cantidad de egresados que ha realizado algún tipo de estudio en el área docente, es muy baja y poco
significativa respecto a la mejora en su rendimiento, por lo que podríamos aproximarnos a la idea de
que, al menos en esta muestra, los estudios de perfeccionamiento en el área no tienen influencia a la
hora de mejorar en el desempeño del rol. De los docentes que han bajado en sus puntuaciones
respecto al eje complejidad de la situación problema, podemos observar que la mayoría se divide entre
los que han podido recortar situaciones simples y los que llegan a recortar situaciones complejas pero
sin interrelacionar factores. De ellos, la mayoría no se encuentra trabajando como docente al momento
de recortar la situación, mientras que sí lo hacía cuando contestó el cuestionario como alumno de la
práctica. Esto nos permite corroborar la importancia del desempeño del rol a la hora de recortar
situaciones complejas. Solo una muy pequeña minoría tiene algún estudio de posgrado, por lo que
este dato no es suficiente en la muestra para afirmar que el no tener estudios complementarios tiene
correlatividad con el hecho de puntuar más bajo.
Con respecto al eje de las herramientas, y respecto a los docentes que han ascendido en su
rendimiento, la mayoría ha podido mencionar varias herramientas vinculadas a una sola dimensión de
la situación, o bien una sola herramienta vinculada a diferentes dimensiones, mientras que antes solo
daban una herramienta y la vinculaban a una sola dimensión. También se observa que la mayoría se
desempeña actualmente en un rol docente permitiéndonos suponer, nuevamente, la correlación
afirmativa entre el trabajo docente y el rendimiento. La cantidad de egresados con estudios de
posgrado en este eje tampoco es significativa como para afirmar que existe correlación entre ambas
variables. Respecto a los docentes que han bajado su rendimiento en relación a las herramientas
mencionadas, la mayoría no recorta ninguna herramienta mientras que antes sí podía hacerlo. En este
caso, es equitativo el número de docentes que trabaja actualmente y los que no, por lo que no
creemos que este dato sea suficiente para afirmar, entre los que han bajado su rendimiento en este
eje, que dicho resultado tenga que ver con el no desempeño del rol. Si bien hemos visto que ninguno
de ellos tiene estudios de posgrado, al poner este dato en relación con los antes mencionados, no
consideramos que sea un dato suficiente para afirmar que el no tener estudios complementarios sea
consistente con bajar en el rendimiento respecto al momento de terminar el profesorado.
LÍNEAS FUTURAS
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la práctica diaria. En este sentido, la propuesta de trabajo en Red, permitiría la apertura a múltiples
perspectivas respecto al abordaje de diversas situaciones problemáticas, propiciando la circulación de
diversas herramientas con el consiguiente enriquecimiento grupal, a la vez que favorecería la co-
construcción de nuevas y variadas herramientas, promoviendo un aprendizaje colaborativo.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
Entendiendo a la “práctica docente” como aquella que tiene como objetivo la habilitación
profesional, en el sentido de “formación”, para posibilitar la posterior inserción laboral de los futuros
graduados. Se intentará dar cuenta del valor que posee la “micro-clase” como “estrategia-
metodológica” para acercar al practicante a la escena áulica, recreando las condiciones que la
caracterizan, controlando las variables intervinientes, es decir, el grupo de alumnos, el tiempo
estimado de duración de la misma, el contenido, el estilo docente y la configuración de la clase.
Dichas prácticas, con sus características singulares -de alta complejidad imprevisibilidad,
inestabilidad, indeterminación e incertidumbre- dan cuenta del trabajo que el docente realiza con sus
alumnos, por medio de la transmisión de conocimientos, métodos, normas y valores, teniendo en
cuenta la posición subjetiva del mismo, las concepciones con las cuales éste convive, las intenciones
que posee, la toma de decisiones a la cual debe enfrentarse y todo ello, en relación con la
construcción y la producción tanto del conocimiento, de la ética como de la moral. Es en este sentido,
que se está postulando a un docente consciente de sus acciones, a sabiendas de que su actividad
tiene una intensión, una meta a la cual llegar.
Desde nuestro lugar de formadores entendemos la “formación” como un proceso por el cual un
sujeto en posición de alumno, deviene profesor. Pero esa formación para constituirse en una instancia
reflexiva, deberá sustentarse en tres ejes, el epistemológico en tanto la transformación de las
creencias del docente en conocimientos fundados en sus acciones, el psicológico que hace referencia
a la posibilidad de pensar sobre su propio pensamiento, la meta-cognición, para poder evaluar y
modificar las premisas de su razonamiento práctico, y el socio- cultural que apela al reconocimiento de
las fuerzas socio-culturales e institucionales que influyen en la conformación del pensamiento docente
y la posibilidad de reflexionar sobre sus propias acciones. Sólo contemplando dichos ejes, la formación
se constituye en una instancia de reflexión que apuntará a la toma de conciencia respecto de las
implicaciones que se juegan en la asunción del estatus y el rol profesional.
En este sentido, la ética y el sistema de valores serán parte importante de este acto reflexivo, que
culmina en la autonomía y en la autodeterminación del profesional docente.
Siguiendo a Marta Souto (1999) puede rescatarse una de las dimensiones de la formación como
“desarrollo” de la persona, centrado en la autoformación donde los dispositivos actúan como
mediadores de la formación y provocadores de cambio.
En este contexto, las prácticas docentes constituyen dispositivos de formación en los cuales se
establece una relación intersubjetiva entre formador y formado que posibilita la interrogación acerca de
la singularidad en que se inscriben los procesos de aprendizaje.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
1238
VI Congreso Marplatense de Psicología
*Por otro lado, la consideración de las habilidades técnicas como objetivos de la microenseñanza:
así, el establecimiento de “un repertorio de capacidades de la enseñanza como conferencias,
interrogatorios, dirección de discusiones y dominio de las estrategias de enseñanza” (Peleberg; 1970)
pretenderán ser analizados desde el acercamiento que la “micro-clase” posibilita.
En este sentido, la microenseñanza, definida como un proceso sistemático para el adiestramiento
de maestros, con base en la adquisición de técnicas y habilidades de enseñanza que se
complementan con una práctica bien organizada, evidencia una impronta positivista en tanto se
enfatizan habilidades propias de una concepción técnica de la enseñanza. Sin embargo, puede ser
repensada a la luz de conceptualizaciones vinculadas a la “enseñanza reflexiva”.
Partiendo de considerar a la enseñanza como una práctica compleja “que se desarrolla en
escenarios singulares, claramente determinada por el contexto, con resultados siempre en gran parte
imprevisibles y cargados de conflictos de valor que requieren opciones éticas y políticas” (Pérez
Gómez, 1993), destacamos el carácter emergente y situacional del conocimiento que se pone en
juego, elaborado en el propio escenario, que invita al sujeto a objetivar su práctica para transformarla
en el material de su reflexión.
En este sentido, uno de los objetivos de la implementación de la “micro-clase” es la reflexión de las
instancias preactivas, activas y pos activas. Será el profesor quien en su práctica, deberá preocuparse
por las consecuencias de sus actos. Y se puede ir un poco más lejos aún, al hacer referencia a que la
reflexión sobre la acción del docente en solitario, si bien es necesaria, no es suficiente. Hay que
plantear a la reflexión como la presenta Lucarelli (2004). La autora menciona, que a raíz de que la
construcción del conocimiento es social y que el significado también es creado en relación con los
demás, la reflexión y la creación del sentido, también son un proceso social. Pensando con otros se
puede llegar más lejos, se encuentran diversos sentidos a un mismo hecho y se presentan diversas
perspectivas ante una misma situación.
En el discurrir de la práctica docente se pone en juego un conocimiento proposicional constituido
por marcos racionales y por términos teóricos-conceptuales, pero también un tipo de conocimiento que
no puede ser comunicado en proposiciones discretas: éste último refiere a los esquemas prácticos o
esquemas de acción (Gimeno Sacristán, 1993), que definen y regulan la acción de los profesores.
Tales sistemas, se constituyen como un fundamento para la toma de decisiones en los contextos de
inmediatez que plantea la enseñanza, poseen un carácter tácito y operan como suposiciones que
enmarcan la acción, aun cuando no tienen un carácter de racionalidad explícita. (Diker, Terigi. 1997).
Siguiendo esta lógica, la micro-clase contribuirá en la formación de docentes, a la construcción de
un quehacer reflexivo, con posibilidades permanentes de revisión/resignificación a partir del ejercicio
posactivo de la autoevaluación y de la consideración de un espacio de intercambio con los
compañeros que oficiaron de alumnos ficcionales, a fin de tomar conocimiento del desempeño y
capitalizar los logros tanto como modificar errores.
La micro-clase en la formación de docentes en psicología:
Durante el desarrollo del espacio de trabajos prácticos de la asignatura “Planificación Didáctica y
Prácticas de la Enseñanza en Psicología”, y en tiempos que preceden a la inserción de los
practicantes a la institución educativa, se promueve el trabajo con el conocimiento a partir del aporte
bibliográfico.
Es en este momento, cuando los futuros profesores son invitados a configurar una micro-clase
como estrategia para la formación, dando a conocer sus fundamentos y propósitos.
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La propuesta se ciñe a la planificación y puesta en acto de una clase, con un tiempo de duración
de aproximadamente 30 minutos, sobre temáticas de la estructura programática de la asignatura. En
ella, los estudiantes deberán seleccionar, organizar y jerarquizar los contenidos a trabajar y construir
estrategias metodológicas para tal fin.
A posteriori de la puesta en acto de la planificación, se plantea un espacio de reflexión donde todo
el grupo aporta al análisis de lo acontecido y quienes han coordinado la micro-clase, socializan los
procesos puestos en juego en la fase preactiva, activa y posactiva de la misma.
A fin de evaluar el valor que los practicantes le otorgan a la estrategia metodológica de la micro-
clase, se implementó una metodología cuantitativa de investigación basada en la presentación de diez
afirmaciones (ver anexo), solicitando el ordenamiento prioritario de las mismas según su singular
valoración.
De una muestra de 90 alumnos, la afirmación que resultó ser más valorada por los mismos, fue
la siguiente:
“La micro-clase es posibilitadora de un primer acercamiento a la práctica docente”.
En valoración, las afirmaciones que ocuparon el segundo puesto en mayoría de jerarquizaciones
fueron:
“La micro-clase es efectiva a los fines de la construcción de la identidad docente”
“La micro-clase es potenciadora de la reflexión acerca de lo pre-activo (planificación), lo activo
(microclase propiamente dicha) y post-activo (comentario postclase)”
De la primera valoración se desprende que los alumnos-practicantes llegan a esta instancia del
trayecto formativo con gran expectativa por tomar contacto con la experiencia áulica, y la posibilidad de
instaurar una estrategia-metodológica como la microclase, les brinda ese primer acercamiento
minimizando los riesgos, al controlar las variables e incluir el error como motor de cambios y no como
penalización, con el aporte del docente y de los compañeros, enriqueciendo su desempeño y
brindando los ajustes necesarios.
La segunda jerarquización hace referencia a la identidad docente, construcción que se realiza
teniendo en cuenta la historia singular de cada practicante, su autobiografía escolar y su hábitus (como
la serie de disposiciones que se constituyen en un operador implícito de racionalidad práctica); además
de la experiencia como profesor, ausente aún en los alumnos. Por consiguiente, la consideración de la
estrategia “micro-clase” los sitúa en la posición de iniciar la configuración de dicha identidad que irá
alimentándose conforme transiten la profesión educativa.
En relación a la tercera valoración, resulta importante destacar que el acto educativo resulta ser un
acto solitario desde la perspectiva docente, siendo el proceso de formación como profesores, un
proceso compartido, dicha estrategia brinda la posibilidad de instaurar el valor de la reflexión en todas
las fases de la acción de “dar clase”, potenciando una revisión crítica y reflexiva respecto del propio
desempeño a fin de establecer los ajustes necesarios.
Las restantes afirmaciones que fueron valoradas sin resultar en una convergencia posible, no
apelan a ser menos relevantes a la hora de pensar en la significación que posee la estrategia “micro-
clase” para los practicantes, sino que inferimos, se corresponden con las singularidades de cada futuro
profesor, y serán cuestiones a tener en cuenta a la hora de pensar la complejidad de la práctica
docente, donde no hay dogmatismo posible, sino que se apuesta a instancias de reflexión continuas.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIÓN
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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docente. Akal.1ª ed., 1ª imp.(04/1999). Cap. XVI.
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1241
VI Congreso Marplatense de Psicología
1242
VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Durante el desarrollo del proyecto de investigación, el grupo realizó un análisis bibliométrico de los
documentos sobre CSU obtenidos en las bases (Red de revistas Científicas de América Latina y el
Caribe), Scielo (Scientific Electronic Library Online) y a través de la Biblioteca Electrónica de Ciencia y
Tecnología del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Argentina. Se hallaron
gran cantidad de producciones a través del portal Dialnet (Difusión de Alertas en la Red) -que es uno
de los mayores portales bibliográficos de acceso libre, cuyo principal cometido es dar mayor visibilidad
a la literatura científica hispana.
Se realizó una investigación de tipo descriptiva, con el objetivo de conocer datos acerca de las
características de la producción científica.
La producción científica hallada sobre (CSU), muestra que es un campo de estudio de reciente
investigación, que “… ha tenido un primer pico de productividad en el año 2007, disminuyendo
considerablemente la frecuencia de publicaciones al siguiente año y apareciendo una nueva tendencia
creciente en el año 2009, alcanzando un nuevo pico en el año 2011”. (Mazzetti; Rodriguez Sessarego,
2013, p.13)
Se advierte en la producción encontrada sobre CSU, que pocos artículos presentan como eje
central la temática de la proyección social de la Universidad. En general, los diversos contenidos de las
publicaciones aluden a programas y/o proyectos específicos de las cátedras de diferentes Facultades
de Hispanoamérica. Se observan investigaciones con planteos de objetivos específicos, pero que no
forman parte de una estructura superior.
La visión sobre la Formación Integral del Universitario es planteada en los contextos de proyectos
educativos de orientación católica, en los cuales se enfatiza la misión de la Universidad de formar
integralmente a los estudiantes, dando respuesta a la necesidad de contar con personas que se
planteen el ejercicio de su profesión desde el compromiso con los otros y con su entorno. Estas
instituciones educativas con orientación católica plantean asignaturas universitarias de obligado
cumplimiento, en la que se trabaja para formar futuros profesionales comprometidos con la sociedad
en la que viven a través del servicio a los demás, sobre todo a los más necesitados.
A diferencia de lo hallado sobre la producción científica respecto de (RSU) por Pacenza y Silva
Peralta, (2013, p.301), quienes expresan que “los contenidos temáticos de la universidad de carácter
religioso no son explícitamente de contenido religioso”, se halló respecto de la producción científica
sobre (CSU), artículos cuyos contenidos temáticos están vinculados al proyecto educativo de
orientación religiosa.
En algunos artículos, se observan recorridos históricos sobre el planteo de propuestas de
instituciones de educación superior, repasando las más importantes iniciativas surgidas en las mismas.
En general se observaron propuestas sobre compromiso social universitario, abordadas a través de
proyectos de cátedras o de grupos de investigación, pero que no se articulan dentro de un proyecto
mayor y a la vez no están implicadas en una política institucional.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
gestión y de hacer negocios, la cual integra el respeto por las personas, los valores éticos, la
comunidad y el medioambiente con la gestión misma de la empresa.
Cajiga Calderón, (2008, p.16) expresa que la Responsabilidad Social Empresarial alude al
“compromiso consciente de cumplir integralmente con la finalidad de la empresa en sus dimensiones:
social, ambiental y económica, considerando las expectativas de sus grupos de interés, buscando la
generación sustentable de valor, respetando los valores, la gente, la comunidad y el medio ambiente.”
La (RSE), alude entonces al compromiso que tiene la empresa de contribuir al desarrollo del bienestar
y al mejoramiento de la calidad de vida de los empleados, sus familias y la comunidad en general, es
decir, la empresa se preocupa por el desarrollo sostenible de la comunidad donde se encuentra, de
sus trabajadores y del medio ambiente.
En el ámbito universitario el concepto de RSU es relativamente novedoso. Algunos autores hacen
referencia a que las organizaciones están desarrollando la idea de “responsabilidad social” como la de
una dimensión ética que toda organización o institución debería tener presente en su actividad diaria.
(Vallaeys 2006; de la Cruz Ayuso 2011; de la Calle Maldonado, Gimenez Armentia 2011; Meléndez
Alicea, Torres Rivera & Pacheco Sepúlveda 2012)
La RSU es definida por Vallaeys (2006, p.5)
…”como una política de calidad del desempeño de la comunidad universitaria (estudiantes,
docentes y personal administrativo) a través de la gestión responsable de los impactos educativos,
cognitivos, laborales y ambientales que la Universidad genera, en un diálogo participativo con la
sociedad para promover el Desarrollo Humano Sostenible”.
El mismo autor, hace referencia a que la Responsabilidad Social Universitaria es una política de
gestión de la calidad ética de la Universidad que busca alinear sus cuatro procesos (gestión, docencia,
investigación, extensión) con la misión universitaria, sus valores y compromiso social, mediante el
logro de la congruencia institucional, la transparencia y la participación dialógica de toda la comunidad
universitaria (autoridades, estudiantes, docentes, administrativos) con los múltiples actores sociales
interesados en el buen desempeño universitario y necesitados de él, para la transformación efectiva de
la sociedad hacia la solución de sus problemas de exclusión, inequidad, y sostenibilidad.
Otro de los objetivos del proyecto fue conocer la producción científica sobre RSU. El grupo realizó
un análisis bibliométrico de 94 documentos obtenidos a través de diferentes bases de datos. Se
consideraron tres criterios para la elección de las mismas: (a) la accesibilidad material, (b) la
accesibilidad económica y (c) el hecho de que se tratara de una aproximación latinoamericana al
fenómeno de estudio.
Los resultados mostraron que RSU es un campo de estudio reciente que comienza a tener
visibilidad a partir del año 2007, así mismo se observa la presencia de varios autores con un único
documento publicado, dando cuenta de la incipiente productividad y la escasa continuidad en el tema
de estudio. (Pacenza, Silva Peralta, 2013, p.294)
Se advierte en el análisis de los contenidos de las publicaciones, la necesidad de debatir y
repensar de forma autónoma y crítica la misión de las universidades. Se enfatiza su misión social y la
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
En los últimos años se ha incrementado la toma de conciencia por parte de las Universidades,
respecto a la misión social de la Universidad. Esta tiene la posibilidad, a través de la ejecución de
programas y proyectos, de contribuir, por un lado, a la formación de jóvenes con compromiso social y
por otro, de incidir en el desarrollo de las comunidades.
Pero para pensar en una verdadera transformación social, estos proyectos y programas no deben
ser esporádicos, sino que deben formar parte de un análisis amplio, que le permita a la universidad,
identificar claramente los problemas y demandas reales, y coordinar dentro de la comunidad, las
acciones pertinentes.
A la vez, la universidad tendrá que evaluar los resultados de las intervenciones y el impacto en
la formación de profesionales con compromiso social.
Los conceptos de RSU y CSU -involucrados como ejes de análisis respecto de la misión social de
la universidad- , se hallan muy interrelacionados. No obstante, se pueden observar algunos matices
diferenciadores que permiten entender a la responsabilidad social universitaria desde una visión más
integradora, correspondiéndole ser el eje transversal que guía el accionar de las personas, buscando
vehiculizarse por medio del compromiso social universitario, a través de la comunicación permanente
y sostenida con la sociedad, integrando las expectativas y necesidades de la misma y promoviendo el
intercambio continuo entre ambas.
Se está tendiendo en la actualidad, en las instituciones de educación superior, a una mirada
diferente, que involucra como protagonista al “proceso de interacción” entre universidad y sociedad.
En esta interacción con la comunidad, es donde la universidad se torna socialmente significativa.
1246
VI Congreso Marplatense de Psicología
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Vallaeys, F. (2006). La Responsabilidad Social Universitaria. Lima: Pontificia Universidad Católica del
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1247
VI Congreso Marplatense de Psicología
En base a los datos de investigaciones precedentes se podría decir que las diferencias existentes
entre los rasgos de personalidad entre quienes se dedican a bailar ballet y quienes no, probablemente
son resultado de un proceso de autoselección, entendiendo por esto que el ballet atrae a personas que
poseen ciertas características de personalidad (Bakker, 1987). Esta hipótesis implicaría que el perfil de
personalidad estereotipado surgido como resultado de dichos trabajos, sería conveniente para los
bailarines. Es probable que aquellos bailarines que más se parecen a ese perfil continúen sus
estudios, mientras que los que menos se asemejan sean más propensos a abandonarlos. A su vez, se
podría sostener que resultan necesarias determinadas características de personalidad para dedicarse
a esta disciplina, o que al menos éstas serían un factor predisponente para la práctica de la actividad.
Además, se debe tener en cuenta que los requisitos de la danza clásica generan el mismo tipo de
factores estresantes en diferentes culturas (Hamilton & Hamilton, 1994). Los bailarines de ballet clásico
están expuestos a niveles elevados de estrés y ansiedad en su vida profesional. Teniendo en cuenta lo
anterior, no es extraño que los bailarines consideren el control sobre sí mismos como una de las
características esenciales del bailarín profesional (Wulff, 2001).
Aunque un grupo de ballet puede ser caracterizado como un equipo, el ballet es generalmente
considerado como una actividad individual. Esto llevaría a la predicción de que los bailarines de ballet
serían, en promedio, más introvertidos que los grupos de control de los no bailarines de un rango de
edad similar (Bakker, 1991). El elevado nivel de neuroticismo, que refleja el potencial de excitación
emocional (McCrae& Costa, 1990), podría ser ventajosos para los bailarines ya que les posibilitaría
aprender a hacer frente adecuadamente a los estímulos que provocan ansiedad, enojo, etc. mientras
que podría ser perjudicial para aquellos que no lo han hecho. Hay una tendencia a que los bailarines
sean más ansiosos que los no bailarines. La ansiedad alta podría debilitar el desempeño en una tarea
compleja y novedosa, pero podría facilitar una tarea bien aprendida o por aprender (Bakker, 1991).
Con respecto a la alta emotividad se dan explicaciones tales como que los bailarines deben ser
sensibles al significado emocional de la música y la coreografía y a su vez ser capaces de transmitir
esto a otras personas. El ser sensibles y emocionales podría ser un rasgo favorable para quienes se
dedican a la danza, tales características son comprendidas dentro del factor Apertura a la experiencia.
Por otro lado, un estudio reciente sugirió que la presencia de ciertas características tales como
bienestar, emotividad e inteligencia emocional, se asocian positivamente con la capacidad de bailar
ballet. Motivación, expresividad, adaptabilidad y felicidad fueron las correlaciones positivas más fuertes
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VI Congreso Marplatense de Psicología
OBJETIVO GENERAL
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
MUESTRA
Se trabajará con una muestra de entre 60 y 80 estudiantes de danza clásica de entre 18 y 30 años
de sexo femeninode la Escuela Municipal de danza clásica Norma Fontenla, y con tres profesores y
dos bailarines profesionales.
INSTRUMENTOS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
DISEÑO DE INVESTIGACIÓN
HIPÓTESIS
- Las bailarinas de danza clásica suelen presentan un perfil de personalidad caracterizado por altos
niveles de Responsabilidad, Introversión, Neuroticismo, Amabilidad y Apertura a la experiencia.
- Existen diferencias en los perfiles de personalidad entre las bailarinas de ballet y la población general
del mismo grupo etáreo.
APORTES DE LA INVESTIGACIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
intérprete durante el curso de su carrera. Este trabajo aportará información relevante para el mayor
entendimiento de esta población en nuestro contexto.
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Wulff, Helena (1998, reprinted 2001). Ballet across Borders: Career and Culture in the World of
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1251
VI Congreso Marplatense de Psicología
DESARROLLO
En el siguiente trabajo presentaré los aspectos más relevantes de una entrevista realizada a una
paciente internada en una Clínica Psicopatológica, con el objetivo de dar cuenta de mi experiencia en
el ámbito clínico.
En el mes de septiembre del año pasado concurrí, a la clínica citada donde fui recibida por el
Psicólogo coordinador de la práctica, quien luego de una descripción de su trabajo dentro de la
institución y los motivos por los cuales los pacientes son derivados al lugar, pasamos a la sala con la
intención de presenciar una entrevista que realizaría con una paciente que había ingresado a la
institución hacía un mes, quien había sido derivada de un neuropsiquiátrico del Gran Buenos Aires, por
orden judicial. Mi participación, en esta ocasión, sería sólo en calidad de observadora.
Antes de pasar al sector de internación, el coordinador anticipa algunos datos sobre la paciente, a
la cual llamaremos “Juana”. Comenta que es una chica de 35 años, que padece de esquizofrenia
paranoide, la cual fue derivada de otra institución donde estuvo internada durante los últimos 6 años.
En el año 2006 hizo un pasaje al acto, intentando matar a sus hijos y luego suicidarse, intención que
logra sólo con el mayor y dañando al bebé. Acto que realiza, según sus declaraciones, para
protegerlos de las amenazas que le enviaban los psiquiatras a través de los programas de televisión.
Es declarada inimputable ya que ese acto fue en respuesta al delirio descripto.
Con estos datos de la paciente, pasamos al sector internación para la observación de la entrevista.
Luego de unos minutos, entra Juana, una chica de aspecto juvenil, ojos muy grandes y celestes,
con el pelo atado, muy prolija y su vestimenta es acorde a la temperatura del lugar, llevaba un bolso
que lo puso sobre sus piernas al tomar asiento, el cual lo tiene bien sujetado. El psicólogo me presenta
y ella saluda tímidamente.
En respuesta a las preguntas formuladas por el coordinador, el relato es el siguiente:
Juana cuenta que sus problemas comenzaron a los 17 años, cuando consulta por primera vez a un
psiquiatra porque no podía comer nada que estuviera elaborado fuera de su casa ya que consideraba
que, al no saber cómo lo habían hecho, podría estar contaminado; otro motivo de esa consulta fue que
cuando viajaba en colectivo de línea, al volver a su casa se lavaba las manos con lavandina reiteradas
veces hasta el extremo de que le llegaron a salir ampollas en las palmas de las manos, siendo los
motivos de tal accionar los gérmenes o la suciedad que se encuentra en los pasamanos. Considera
que eso le pasaba por algo que le ocurrió antes pero de lo cual no va a hablar. Se la sigue
interrogando de forma sutil y por otras vías para poder llegar a aquello que le ocurrió hace tiempo, pero
la paciente mirándonos, y a mí por primera vez ya que hasta ese momento no me había dirigido la
mirada, responde con énfasis “que ya le dijo que de eso no va a hablar”. Reconociendo la reticencia
que despierta el tema y para evitar que los delirios de persecución recaigan sobre la figura del
psicólogo, no se sigue indagando.
1252
VI Congreso Marplatense de Psicología
Acerca de la institución cuenta que el lugar, por un lado le gusta porque está cerca de su casa,
pero por otro lado no, porque es mixto y “los hombres a la noche le pueden hacer algo”.
Con respecto al personal de la clínica hace referencia que las enfermeras le tienen bronca porque
el día que ingresó, como ella tiene un tono de voz muy elevado, pensaron que les gritó o les contestó
mal y por eso ahora no la quieren, pero en realidad ella habla así, muy fuerte.
También contó que la semana anterior la fue a visitar su hijo, de 6 años de edad, el cual fue llevado
por el padre de la paciente. El encuentro fue en la recepción de la clínica, situación que no le gustó
mucho ya que consideraba que para su hijo no era un lugar seguro, resultaba peligroso porque había
gente que le podría hacer daño. Temor fundado en un paciente que había llegado hasta su papá y le
había dicho “buenos días señor”, que así como lo había saludado también le podría haber hecho daño
a su hijo que estaba sentado al lado de su padre. Más tarde esto fue aclarado por el psicólogo, quien
explicó que los pacientes pueden ir a la recepción a utilizar el teléfono, siempre acompañados por
personal de la clínica, situación que ocurrió en el momento que estaba Juana con la visita de su hijo y
de su padre y un paciente salió a hablar por teléfono acompañado del enfermero.
Una vez finalizada la entrevista, la cual fue breve, salimos del sector de internación volviendo a la
oficina del coordinador. Con respecto al relato escuchado me quedaron algunos interrogantes como
por ejemplo, si se sabía sobre el hecho ocurrido antes de los 17 años y del cual Juana no quiere
hablar, la respuesta es que la paciente hace poco tiempo que llegó a la institución y su historia se irá
reconstruyendo muy de a poco por los delirios de persecución que podrían hacer que recaigan sobre la
figura del psicólogo, recién cuando esté establecido el espacio de confianza necesario para que la
paciente desarrolle sus decires, se podrá indagar más profundamente a la paciente.
Nos encontraríamos frente a un caso de esquizofrenia paranoide desencadenada tempranamente,
en la adolescencia.
En cuanto al desencadenamiento de la misma, se produce cuando "…la falta de un significante
lleva necesariamente al sujeto a poner en tela de juicio el conjunto del significante". Todo el orden
simbólico es puesto en cuestión, y será necesaria una tarea de reconstrucción. Antes de ella, este
período muestra los efectos de la devastación: "disociación, fragmentación, movilización del
significante en tanto palabra, palabra jaculatoria, insignificante o demasiado significante, plena de
insignificancia, descomposición del discurso interior…". (Martínez, Horacio. “La psicosis en la obra de
Lacan”). Frente a la falta del significante primordial Nombre del Padre, el cual tiene la vocación de
engendrar significación en relación con otros significantes, fracasa en su función, por lo que al operar
por separado no habrá encadenamiento con otros significantes, con lo cual se repiten a sí mismos.
Este es el lugar desde donde se arma el delirio, que en la paciente referida, es de contenido
persecutorio ya que cree que los psiquiatras le van a “hacer algo a ella y a sus hijos” y también hay
presencia de alucinaciones auditivas, evidenciado esto en los mensajes que verbalmente le envían los
médicos a través de la televisión.
Este momento de desencadenamiento Lacan también lo llama “momento fecundo”. “…Ese
momento (…) siempre es sensible al inicio de una paranoia.” (Lacan, J. “El Seminario de Jackes
Lacan. Libro 3. Las psicosis. Cap II). Cuando se busca el origen de las causas que desencadenan la
psicosis, Lacan considera que puede ser un elemento emocional en la vida del sujeto, una crisis vital.
Hace referencia a situaciones vitales, una cuestión biográfica. Algunas de ellas son contingentes y
otras que son típicas como por ejemplo el casamiento, sexualidad, nacimiento, muerte, etc. Se trata de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
situaciones que exigen simbolización, llevan al máximo lo simbólico, aquello que debe enfrentar el
sujeto en la vida cotidiana, es un enfrentamiento con lo real y está dirigido a tener que ser simbolizado.
En el caso de nuestra paciente se podría relacionar el momento fecundo, con aquel enfrentamiento
que se ve obligado todo sujeto que llega a la adolescencia, que es el enfrentarse con su sexualidad, y
en Juana podríamos inferir que es cuando acude por primera vez al psiquiatra registrando que algo no
está bien.
El relato de la paciente se encontraría caracterizado por la autorreferencia, “…cuanto más inasible
es la significación, cuanto más asemántico es el significante, tanto mayor es la certeza del sujeto de
que le concierne íntimamente, que su ser depende enteramente de esa significación absoluta y
desconocida.” (Lombardi, G. ““La clínica del psicoanálisis 3 Las psicosis”). Esto se vería reflejado en
las certezas de Juana cuando relata que los psiquiatras le hablan, que las enfermeras le tienen bronca
o que los internos le pueden hacer daño de noche.
A su vez esto daría cuenta del elemento crucial para el diagnóstico de la psicosis como es “la
inercia dialéctica en que se encuentra el sujeto cuando el significante de su síntoma está en lo real,
como un significante que no se liga a nada. (…)En ese punto de inercia dialéctica inconmovible, el
síntoma se articula en la estructura con una nitidez incomparable”. (Lombardi,G. “La clínica del
psicoanálisis 3 Las psicosis”).
En cuanto a la dialéctica, cabe aclarar que la misma es constitutiva, implica un movimiento
inevitable y permanente de pasaje por el otro, como así también implica negación, afirmación, permite
la duda, el cambio de opinión, cosa que en el psicótico esto se detiene, la inercia hace referencia a lo
inconmovible. En Juana lo inconmovible podría ser el temor de que a sus hijos le pase algo, temor que
persiste en el tiempo.
Frente a la certeza de su delirio, aquel que refería que los psiquiatras le iban a hacer daño a sus
hijos, certeza que es radical, que le concierne y que es inquebrantable, es un fenómeno elemental que
no es posible de simbolizar, es una significación que remite a sí misma y permanece irreductible.
Habría plenitud de significación, que le habría generado tal angustia que realiza el pasaje al acto, el
cual lo explica diciendo que lo hizo para proteger a sus hijos. El pasaje al acto conceptualmente refiere
a una caída de la escena, una evasión al Otro, no hay dirección al Otro, no se busca llamar la atención
para que acudan al auxilio, es un acto que busca terminar con el sufrimiento, “…es lo que no quiere
decir. Lo que se rechaza decir, pasa al acto. (…) Es rechazo de saber y puesta de lado –fuera de
juego radical- del Otro (…) El sujeto, en el pasaje al acto, es pasión de la ignorancia. Es también
rechazo de la interpretación. En todos los casos el acto deniega el saber.” (Soler, C. “Finales de
analisis. El acting-out en al cura”).
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Esta práctica me permitió conocer el rol del psicólogo en una institución, el cual es muy diferente al
tratamiento que se lleva adelante en un consultorio particular. Despertó en mí un gran interés en seguir
capacitándome sobre el área, reconociendo que es un largo camino pero con la satisfacción final de
poder ayudar a un Otro.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
En un intento por recuperar la importancia que supieron tener las variedades y variaciones del
humor en el estudio psicopatológico de las psicosis, es que nos proponemos rastrear la concepción de
melancolía propuesta por Jules Séglas. Este autor es quien logra una conceptualización
psicopatológica de la misma y ubica en el centro de sus desarrollos la locución “dolor moral”. A los
fines de este trabajo analizaremos las “Lecciones clínicas sobre las enfermedades mentales y
nerviosas” (Séglas 1895 [1998]).
En este rastreo utilizaremos como claves de lectura psicoanalítica las siguientes preguntas: ¿cómo
pensar la causa de la enfermedad?, ¿qué lugar ocupan los factores ocasionales al momento del
desencadenamiento?, ¿cuál es el valor acordado al dolor moral?, ¿cuál es la relación entre el dolor
moral y la imagen del estadio del espejo propuesta por Lacan? Para intentar responder a estos
interrogantes e ilustrar los desarrollos conceptuales, se tomarán dos casos descritos por Séglas.
Las variaciones del humor en la Escuela Francesa.
Lanteri-Laura realiza un rastreo histórico pormenorizado del dolor moral, indagando no solo en qué
acepciones y en qué contexto dicha “locución” hizo su entrada en el vocabulario de la psiquiatría
moderna, sino también cómo se ha modificado su uso desde allí a la psiquiatría contemporánea.
Resulta interesante el rastreo que presentaremos a continuación por poner en relación al dolor
moral con la importancia que se le otorgó a los fenómenos del humor en las distintas escuelas. Y por
prevenirnos de realizar una lectura ingenua del dolor moral, recurriendo a la expresión prudente de
“locución”: justamente por no poder garantizar que cada vez que dichas palabras aparecen juntas,
estas refieran a lo mismo. (Lanteri Laura. 1996 [1998], p.59)
Tal locución hace su aparición en el paradigma de la alienación mental (1793-1854). La Escuela
Francesa de Pinel y Esquirol “Minimizará la importancia de los trastornos del humor, en provecho de la
oposición entre delirio general que caracteriza a la manía, y el delirio exclusivo, propio de la
melancolía, mientras que (para Guislain entre otros...) en varias cátedras en Alemania (...) las
alteraciones del humor y en particular las alteraciones del humor doloroso, y de los sentimientos de
tedio, sin una delimitación atribuible, constituyen un dato primero en calidad de fundamento de todo el
resto, pero también en la medida que todo comienza por su experiencia subjetiva.” (Lanteri Laura.
1996 [1998] p. 61)
En el paradigma de las enfermedades mentales, Falret (1794-1870) importa esos puntos de vista
germánicos a la psiquiatría francesa, y destaca el rol originario de todas las alteraciones dolorosas del
humor, al mismo tiempo que describe a la locura circular. “En la generación posterior, Séglas (1856-
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VI Congreso Marplatense de Psicología
1939) pondrá a punto una semiología precisa de la melancolía, separando de ella un aspecto
fundamental, en relación con la experiencia subjetiva de este dolor moral, y un aspecto secundario,
hecho de diversas representaciones que intentan dar cuenta de aquél de manera delirante” (Lanteri
Laura. 1996 [1998], p. 61).
En la época de las grandes estructuras si bien la locución perdura, y aparece la referencia exacta a
Séglas, “la misma tiende a perder precisión, perdiendo mucha de su significación psicopatológica”
(Lanteri Laura. 1996 [1998]p. 80-81)
Jules Séglas (1856-1939)
Su esfuerzo por describir pormenorizadamente el desarrollo de la enfermedad y la diacronía de los
síntomas, junto a su quehacer esencialmente descriptivo y semiológico, han hecho de Séglas una
referencia ineludible. Tales características han permitido que las siguientes generaciones de
psiquiatras sigan viendo “en sus descripciones la clínica de la observación en su estado más puro”
(Álvarez y Peña Esbrí. 2006, p. 319). Si bien la categoría de melancolía ya existía en la tradición
psiquiátrica, alcanzó con Séglas una caracterización fenomenológica totalmente novedosa por su
detalle y precisión.
Melancolía y Dolor Moral.
Séglas define a la melancolía de la siguiente manera: "La melancolía es una psiconeurosis que,
además de síntomas físicos de gran importancia, desde el punto de vista psíquico se caracteriza por:
1º la producción de un estado cenestésico penoso; 2º modificaciones en el ejercicio de las operaciones
intelectuales; 3º un trastorno mórbido de la sensibilidad moral que se expresa en un estado de
depresión dolorosa. A esos síntomas fundamentales pueden agregarse trastornos delirantes que
resultan directamente de ellos y les son secundarios” (Séglas 1895 [1998], p.8). Y subraya que “los
fenómenos fundamentales son: el estado emocional de dolor moral, insuficientemente motivado o
incluso totalmente inmotivado, y los trastornos del ejercicio intelectual, llamado también detención
psíquica" (Séglas 1895 [1998], p.8).
Moral en esta época no tiene una connotación ética sino que es un término que se utiliza como
opuesto a “físico”, por lo tanto un equivalente más actual de “dolor moral” podría ser “dolor psíquico”.
Séglas sostiene que cuando se busca comprender la génesis del dolor moral del melancólico, es
indispensable considerar no solo el sistema nervioso sino todas las funciones del organismo. En
patología mental no se puede considerar ni al cerebro ni al sistema nervioso en forma aislada. “En la
melancolía todo el organismo está afectado, las diferentes funciones no tienen la regularidad habitual,
la nutrición general languidece. Esos serían los primeros síntomas de la enfermedad.” (Séglas 1895
[1998], p. 9)
Se trata de una experiencia inmediata, en la medida que si el sujeto puede reflexionar sobre ella,
es siempre de manera secundaria y tras haberla experimentado directamente y sin mediación. Es una
conciencia centrada en el dolor, pero en un dolor que no es físico, cuando el dolor físico parece ser el
prototipo de todo dolor. En su origen, esta experiencia directa es la experiencia de una alteración de la
cenestesia, que se relaciona con la imagen del cuerpo. (Lanteri Laura. 1996 [1998], p.88)
Según Séglas, la melancolía generalmente estalla luego de un periodo de incubación a veces
largo, por ello considera indispensable estudiar el periodo prodrómico para entender la génesis y las
relaciones respectivas entre los diferentes síntomas. De esta observación concluirá que los trastornos
intelectuales más elementales, están precedidos por síntomas físicos acentuados que expresan en su
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Séglas piensa la cenestesia como un sentimiento o como una representación psíquica del
funcionamiento orgánico. Desde una lectura lacaniana se puede decir que entre el funcionamiento
orgánico y la experiencia corporal del sujeto no hay una relación directa. Entre una cosa y la otra, está
la imagen. Es la imagen del estadio del espejo, la que unifica un cuerpo originariamente fragmentado,
sin la cual no se tiene un cuerpo. (Lacan, 1949 [2012])
Siguiendo esta idea, y aprovechando la fineza de la descripción clínica de Séglas, se puede decir
que lo que está perturbado en el comienzo de la melancolía es esa imagen corporal. Y esa imagen no
depende del funcionamiento orgánico. No es el mal funcionamiento orgánico el que trastorna la
imagen. El dolor moral aparece como consecuencia del estallido del sí-mismo, se rompe la imagen que
unifica y condiciona la experiencia del cuerpo, sostenida en una identificación.
Por otro lado, Séglas sitúa una clara discontinuidad en la vida psíquica de los melancólicos,
discontinuidad a la que ellos mismos hacen referencia. Esta ruptura parece ubicarla en la traducción
subjetiva de los fenómenos corporales. Sin embargo, pensando desde otro paradigma, es posible
introducir la pregunta por el ¿qué pasó antes?, ¿qué propició u originó esos fenómenos corporales?
Una respuesta posible, nos hará necesario revisar cuestiones referidas a la causa ocasional del
“desencadenamiento” de las primeras manifestaciones, hecho no destacado por el autor ya que el
mismo ubica en ese “antes” un desorden puramente orgánico.
EJEMPLOS
Caso 1: “Dama de 37 años de edad, (...) En agosto de 1893 contrajo una fiebre tifoidea grave, en el
curso de la cual deliró mucho. (....) Ese delirio desapareció con la convalecencia. La enferma estuvo
entonces durante un mes, tanto en lo físico como en lo moral, tan bien como podría desearse para una
convaleciente de una enfermedad grave.
Al cabo de ese tiempo, fue víctima de un abatimiento general con dolores en las piernas y en la
cabeza a nivel del vertex, y de un insomnio persistente. Tales son los primeros síntomas que señaló;
es muy precisa sobre ese punto. Muy poco después, se dio cuenta de que su mente se volvía lenta, de
que no podía prestar atención a nada, de que su memoria fallaba. Es entonces cuando fue tomada,
dice, por una pena profunda, por la inquietud de verse en ese estado.
La aparición del dolor moral está entonces relacionada con lo que yo les decía hace un momento.
“Esto vino muy lentamente, nos dice la enferma, al principio, solo tenía el abatimiento, el insomnio,
luego, las ideas ociosas y la preocupación por verme así; mis rumiaciones solo llegaron más tarde.
Toda mi enfermedad, agrega, es el pesar y la inquietud”. Estas palabras nos muestran bien el carácter
invasor del dolor moral, síntoma fundamental, característico de toda melancolía.
Así instalada, la enfermedad comienza a agravarse; es entonces que ustedes van a ver la acción
recíproca ejercida por el dolor moral y ese círculo vicioso alrededor del cual, como se los decía, gira el
melancólico.” (Séglas 1895 [1998] p. 16, 17, 18)
Caso 2: “M.S de veintiocho años de edad, es contador en una gran administración de provincia. Su
padre, que lo acompaña, nos afirma que no hay en la familia ninguna tara neuro-psicopática y que,
hasta este último tiempo, el enfermo habría manifestado siempre un equilibrio intelectual perfecto. (…)
1259
VI Congreso Marplatense de Psicología
Fue designado para reemplazar temporariamente a uno de sus jefes que partía de vacaciones.
Manifestó por ello una gran satisfacción, porque veía en ese hecho un medio de adquirir méritos para
su progreso. Se ocupó de sus nuevas funciones, sin descuidar las antiguas, trabajando en forma
continua toda la jornada y frecuentemente una parte de las noches, preocupado sin cesar por las
responsabilidades que le incumbían. Terminó por perder totalmente el sueño, su apetito disminuyó,
sus digestiones se tornaron difíciles y no tardó en presentar todos los síntomas de un estado
neurasténico muy acentuado. No quiso cuidarse, rechazó descansar un poco y persistió trabajando sin
tregua. Pronto se dio cuenta de que ya no tenía la misma capacidad intelectual: no podía estar
ocupado durante mucho tiempo, fijar su atención; se perdía en medio de los detalles de sus tareas, su
memoria se volvía infiel. Estos síntomas lo inquietaban mucho y hablaba de ello con su familia sin
cesar.
Como veía que a pesar de todos sus esfuerzos no podía trabajar como antes, comenzó a
inquietarse mucho, a desanimarse. Veía todo negro; no podría llevar a cabo los asuntos que le habrían
encargado, se juzgaba incapaz, había presumido demasiado con respecto a sus fuerzas, no debería
haber aceptado tal responsabilidad, etc. (…)
Este estado duró de esta forma hasta el mes de noviembre. En esa época, aparecieron ideas
verdaderamente delirantes. El enfermo sostenía que “era deshonrado, que había cometido errores de
cuentas en sus cajas, que iba a pasar por un ladrón. Pronto su deshonor seria público, todos los
diarios iban a hablar de ello. Su familia estaba arruinada, perdida por su falta. Lo iban a meter en
prisión, a fusilarlo…”. (…) (Séglas 1895 [1998] p.32, 33, 34)
COMENTARIOS FINALES.
En la obra de Séglas la teoría quedó en un segundo plano frente a las descripciones y análisis
clínicos de los síntomas, sin embargo, sus descripciones y caracterizaciones han dejado un legado
sumamente valioso, y algunas brechas que posibilitan nuevas intervenciones sobre sus planteos.
Podemos ubicar claramente que Séglas sitúa una ruptura a nivel de la experiencia en el dolor
moral, el melancólico manifiesta sentirse totalmente distinto que antes, tal como se evidencia en la
dama de 37 años (1er ejemplo).
Desde una lectura psicoanalítica, intentamos dar un paso más allá, e introducir la pregunta por el
momento de desencadenamiento, por la dimensión de lo ocasional en el inicio de estas
presentaciones. Si bien Séglas no se detiene en ello, su descripción pormenorizada nos lo permita
leer. Así sucede en el segundo caso, donde al no poder responder frente a la exigencia de su trabajo,
aparecen en el enfermo todos los fenómenos corporales descriptos por Séglas, llegando incluso a
describir síntomas con una clara agitación que otros autores ubicarían dentro de la manía, aunque este
autor ni siquiera menciona esta categoría.
Como sostiene Colette Soler, en la melancolía el desencadenamiento se produce, no tanto por el
encuentro con Un-Padre, sino por el encuentro con una pérdida que lleva al sujeto a fenómenos de
mortificación bien reales. (Soler, 1989 [1991] p. 35) El ideal rígido, ya no cumple su función reguladora,
generando el estallido de la imagen yoica, y aquellos fenómenos “corporales” que Séglas consideraba
de naturaleza orgánica. Si bien es lícito considerar el pasaje por la identificación para la constitución de
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un sí-mismo, podría decirse que lo que causa el dolor moral entonces, es la conmoción de tal
identificación.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
Álvarez, J. M y de la Peña Esbrí, J. J. (2006). Sombras y luces de la Melancolía. Rev. Asoc. Esp.
Neuropsiq., Vol XXVI, n° 98, pp. 319-324.
Lacan (1949). El estadío del espejo como formador de la función del yo (je) tal como se nos revela en
la experiencia analítica. Escritos 1 (pp.99-105). Editorial Siglo XXI, 2012.
Lanteri-Laura, G. (1996). De la melancolía a las depresiones. En Melancolía y Dolor Moral (pp.41-46).
Editorial de la UNLP, 1998.
Lanteri-Laura, G. (1996). Introducción y crítica a la noción de dolor moral en psiquiatría. En Melancolía
y Dolor Moral (pp.57-91). Editorial de la UNLP, 1998.
Séglas, J. Leçons cliniques sur les maladies mentales et nerveuses: (Salpêtrière, 1887-1894), Asselin
et Houzeau, Paris, 1895. (Lección 10: De la melancolía sin delirio; Lección 11 El delirio en la
melancolía [hay traducción al español en “Melancolía y Dolor Moral, Editorial de la UNLP, 1998],
Lección 12: Las alucinaciones en la melancolía; Lección 13: El delirio de autoacusación; Lección 15: El
delirio de negaciones en la melancolía)
Soler, C. (1989). Pérdida y culpa en la melancolía. Estudios sobre las psicosis (pp. 33-43). Manantial,
1991.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
La mayoría de las revisiones bibliográficas que intentan situar los antecedentes conceptuales del
llamado “trastorno bipolar” o del más reciente “espectro bipolar” comienzan mencionando el carácter
inaugural que tuvieron los trabajos de Jules Baillarger y de Jean-Pierre Falret para el establecimiento
de un nueva entidad clínica en la escuela francesa de psiquiatría. Sin embargo, un doble deslizamiento
en el que se confunden ideas y disputas personales suele producirse en estas reseñas históricas.
En primer lugar, es frecuente encontrar una reducción del debate que tuvo lugar entre ambos
autores a una mera querella personal respecto de la prioridad en cuanto a la descripción de la nueva
forma psicopatológica.
De modo correlativo, se produce cierto efecto de borramiento respecto de la originalidad de las
ideas defendidas por cada uno de ellos. A lo sumo suele señalarse que después de este debate, la
mayor parte de los psiquiatras franceses de la época consideraron que las crisis de manía y de
melancolía se sucedían en una misma evolución de trastornos, constituyendo por su combinación una
enfermedad diferente.
Sin embargo, un examen más detallado de ambos deslizamientos, podría resultar interesante para
recuperar el fundamento clínico en torno a un debate cuya fineza resulta ejemplar en contraposición a
la chatura y vaguedad de las descripciones clínicas contemporáneas. Los acuerdos y diferencias entre
ambas perspectivas, podrían ser el punto de partida para elaboraciones teóricas novedosas relativas al
modo de entender los “intervalos lúcidos”, y las “intermitencias” en el estudio de las variedades y
variaciones del humor en las psicosis.
En la secuencia temporal, fue JP Falret quien en la décima de sus lecciones clínicas realizadas en
La Salpêtrière (1850-1851) describió una “locura circular” (Falret, pp. 249) como forma particular de
enfermedad mental. Tres años más tarde, en 1854, Baillarger leyó en la Academia de Medicina una
tesina sobre la “locura de doble forma”, basándose en siete observaciones. Algunos días después de
la lectura de la tesina de Baillarger, Falret publicó una separata de su curso en la Salpêtrière
reivindicando la prioridad del descubrimiento, y leyó en la Academia de Medicina una nueva tesina
sobre la “locura circular”, no sin dejar de aprovechar la ocasión para modificar bastante su propio texto
1262
VI Congreso Marplatense de Psicología
original. Estas peripecias, al decir de Paul Bercherie, “arrojan una luz poco gloriosa sobre la
honestidad intelectual de Falret”. (Bercherie, 1980, p. 61) Sin embargo, no es este deslizamiento hacia
las personas por sobre las ideas el que nos interesa destacar. Es en este último plano donde una serie
de equiparaciones suelen pasar desapercibidas en el debate psicopatológico.
Tomemos por ejemplo lo señalado por Jules Falret, el hijo de Jean Pierre Falret, en su trabajo
fechado en diciembre 1878 - enero 1879. “Queremos hablar del descubrimiento de la locura circular o
locura de doble forma, enfermedad descripta inicialmente por mi padre y por J. Baillarger en 1854. Es
esta especie de enfermedad mental que nos proponemos estudiar actualmente” (Falret, J. pp. 585).
Como se puede apreciar, ambas expresiones son tratadas como sinónimos de una misma “especie” de
enfermedad por este autor.
Algo similar ocurre con el trabajo de Antoine Ritti de 1880, con el que gana el premio Falret de la
Academia de medicina, en un concurso cuyo tema propuesto era “De la locura designada bajo las
denominaciones de locura circular, locura de doble forma, locura en formas alternas”. En el punto
inicial de la definición afirma: “Por locura a doble forma o locura circular, comprendemos una especie
particular de alienación mental cuyos accesos están caracterizados por la sucesión regular de dos
períodos, uno de depresión y otro de excitación, o recíprocamente” (Ritti, 1880, pp. 4) Avanzando un
poco más en la equiparación, escribe en el apartado “sinonimia”: “A pesar de su creación reciente, esta
especie mórbida ya ha recibido denominaciones diversas; creemos útil hacer conocer todas aquellas
que llegaron a nuestro conocimiento, con los nombres de sus autores:
Constatamos así, la equivalencia propuesta por los comentadores, entre ambas descripciones para
la constitución de una misma especie mórbida. Pero el debate entre ambos ¿fue solo una cuestión de
prioridad? Con el fin de esclarecer esta pregunta, realizaremos una presentación comparativa de los
puntos centrales de la polémica.
En su décima lección de 1851 J-P- Falret se ocupa de caracterizar en un sentido amplio la marcha
de las enfermedades mentales, señalando que la locura rara vez es uniforme en su curso, sino que
ofrece remisiones, paroxismos, intermitencias, transformaciones y complicaciones. Señala por ejemplo
que mientras que la melancolía simple es una forma que presenta pocas remisiones, la manía por su
parte ofrece variaciones intermitentes en cuanto a su intensidad a lo largo de su evolución. Invita a
diferenciar entonces ciertas formas de manía remitentes crónicas, en las cuales los accesos -violentos
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VI Congreso Marplatense de Psicología
y cortos- alternan de modo regular con notables remisiones que no llegan sin embargo a ser
verdaderas intermitencias ya que en ellas el delirio aunque atenuado, persiste. Por su parte, los
paroxismos, exacerbaciones o accesos, constituyen simples aumentos de intensidad de la
enfermedad, sin verdaderos cambios de naturaleza.
En cuanto a la existencia de verdaderos “intervalos lúcidos”, - caracterizados por su brevedad y
ausencia de periodicidad - señala su extrema rareza en contraposición con las “verdaderas
intermitencias”. En estas últimas, se trata de la suspensión completa o más o menos periódica del
delirio, que puede durar días, meses o años. Cuando la periodicidad es regular resulta más sencillo
adjudicarla a la marcha misma de la enfermedad, pero cuando la reproducción se produce tras largos
intervalos la pregunta sobre la intervención de nuevas causas queda planteada.
Dentro de las posibles intermitencias destacadas por Falret destacamos la que se observa entre un
período de debilitamiento y un período de excitación en una “forma circular” de enfermedad mental, en
el que se produce una transformación de melancolía en manía y recíprocamente. Se trata de una
“categoría de alienados en los cuales la sucesión de la manía y de la melancolía se manifiesta con
continuidad y de una manera casi regular” (…) Esto sirve de base a una forma particular de
enfermedad mental que llamaremos locura circular, porque la existencia de este género de alienados
rueda en un mismo círculo de estados enfermizos que se reproducen si cesar, como fatalmente, y no
están separados más que por un intervalo de razón de bastante corta duración”. Destaca que (…) “los
dos estados cuya sucesión continua constituye la locura circular no son, en general, la manía ni la
melancolía propiamente dichas, con sus características habituales”, sino “el fondo de estas dos
especies sin su relieve”. (Falret, 1851, pp 249-250) Por un lado, no hay incoherencia de ideas como en
la manía, sino simple exaltación de las facultades con necesidad incesante de actividad y movimientos
desordenados en los actos; por el otro lado, sólo hay una depresión física y moral sin predominio de un
delirio bien determinado.
Desde el punto de vista de la evolución, Falret señala que estas dos variedades de la manía y de la
melancolía, que tomadas aisladamente son más curables que las otras, conllevan una mayor gravedad
cuando se encuentran reunidas para constituir la forma circular. Sólo ha constatado meras remisiones,
más o menos notables en el curso de esta afección, pero jamás una curación completa, ni mejoría
duradera.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En consecuencia, en los casos presentados por Baillarger no se pondrá tanto de relieve las
características propias de cada acceso, - que incluso pueden variar en cuanto a su intensidad y
duración - ni la intermitencia también variable que separa el período de excitación del período de
depresión. La regularidad perseguida, atañe más bien al ritmo propio a cada caso.
Así pues, la locura de doble forma puede presentarse según los casos tanto en “accesos aislados”,
de modo “intermitente”, así como en accesos que se suceden sin interrupción. La intensidad de ambos
tipos de acceso, en un mismo paciente, suele ser proporcional. La duración de los mismos es de gran
variabilidad según los casos; “de dos días a un año” (Baillarger, 1854, pp. 679). Sin embargo, resulta
constante en el interior de un mismo caso. Así, Baillarger constata que cuando los accesos son cortos,
el pasaje del primer al segundo período se produce de modo brusco, y generalmente durante el sueño.
En contraposición, cuando se trata de accesos prolongados, la transición se lleva a cabo muy lenta y
gradualmente. En estos casos, el autor advierte que los enfermos parecen entrar en convalecencia al
finalizar el primer período. Sin embargo, un examen longitudinal de los enfermos permite constatar que
estas pretendidas intermitencias son en realidad siempre incompletas, y que el clínico desatento puede
incurrir en errores: “Así, una de las enfermas que he dejado salir de la Salpêtrière por creerla curada,
conservaba aún una tendencia ligera al aislamiento y a la taciturnidad que, como he podido saber
después, no le era para nada natural, lo que no le impedía mantener unos modales excelentes, ser
muy trabajadora y parecer razonable en todo” (Baillarger, 1854, pp. 677). Asegura entonces: “que esas
cortas intermitencias son por el contrario incompletas”.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En principio, la descripción del período o estado maníaco, supone gradaciones. El punto de partida
está la simple exaltación de la inteligencia y de los sentimientos. En un aparente estado de felicidad la
mente trabaja activamente, el enfermo concibe planes y los ejecuta instantáneamente.
Progresivamente, algunas alteraciones de los sentimientos conduce a que los actos se vuelvan
extraños y desordenados. Más tarde, la exuberancia de las ideas se vuelve prodigiosa, y los
sentimientos del paciente se exaltan. La picardía, las bromas pesadas, y la entrega a los excesos se
vuelven patente. Junto a estos, se destaca la falta de sueño sin sentimiento de fatiga, así como el
aumento de todas las funciones orgánicas, como el apetito. Si bien no se presenta un desorden
extremo de ideas y sentimientos como en la “manía común”, puede haber accesos de manía con
alucinaciones intensas y prolongadas, con delirio excepcional y temporario. Se trata en general de
exaltación y sobreexcitación de todas las facultades.
Una vez cursado el acceso, prosigue un estado que no constituye un intervalo lúcido pero que
muestra una declinación de los síntomas del período de excitación y el comienzo del estado de
depresión.
En este segundo período, el enfermo comienza a estar apartado y silencioso. Se muestra
humillado y comienza una postración progresiva que puede conducir hasta el debilitamiento del instinto
de conservación. La ideación se lentifica, y los sentimientos están debilitados. No siente antipatía ni
simpatía, se deja llevar. Pierde la espontaneidad en la acción, denota palidez y sentidos adormecidos,
acompañado de un sentimiento de malestar general, sueño no regular ni prolongado, y falta de apetito.
Falret propone nuevamente que estos fenómenos constituyen el “fondo del estado melancólico sin
su relieve” es decir sin ideas delirantes bien determinadas. Sin embargo hay algunos enfermos que
presentan ideas predominantes entre las cuales están las de humillación, ruina, envenenamiento y
culpabilidad.
A continuación, el estado depresivo declina poco a poco hasta llegar al controvertido intervalo
lúcido. El enfermo sale lentamente de la torpeza física y moral, habla más gustosamente y vuelve a
sus hábitos de trabajo, vuelve a ser “casi” el que era en su estado de salud, aunque con cierta
disminución del nivel intelectual en la generalidad de los casos. Falret parece coincidir con Baillarger
en que un observador inexperto podría ver allí una engañosa vuelta a la razón. Sin embargo, esto no le
impide postular que más allá de la pericia que pueden brindar la sagacidad y la experiencia clínica
para la detección de signos menores aún presentes, “dicho intervalo lúcido existe”. En él se produce
finalmente un “retorno completo al estado normal” (Falret, 1854, pp. 106). En este punto es donde se
produce la mayor distancia en la caracterización del curso clínico para ambos autores, y respecto del
propio planteo de 1851.
Este intervalo lúcido cuya existencia ahora sí defiende, es más corto que los períodos de
excitación/depresión, y su duración es variable. En función de esto distinguirá una locura circular de
períodos cortos de otra de períodos largos. En este último caso, el intervalo lúcido puede tener una
larga duración.
Para la declinación del intervalo lúcido, se aplican las mismas gradaciones que para su inicio.
Hacia la finalización de ese intervalo comienzan a despuntar nuevamente los síntomas de la
excitación.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
CONCLUSIONES
Del recorrido realizado, pueden señalarse que no es correcto hacer del debate Falret - Baillarger en
torno a la locura circular y la locura de doble forma una mera polémica centrada en la cuestión de la
prioridad intelectual. Creemos, por el contrario que es conveniente reordenar la polémica entre los
autores, en torno al problema de las intermitencias y del “intervalo” lúcido.
Mientras que Falret en 1851 no reconocía la existencia de un verdadero intervalo lúcido en esta
entidad mórbida, sí aceptaba la presencia de una breve intermitencia entre cada fase maníaca y
melancólica del círculo enfermizo. Sin embargo, dicha remisión no constituía jamás una curación
completa, ni una mejoría duradera.
Baillarger, por su parte en 1854, al lado de los casos en que sin solución de continuidad constaba
que la transición de un polo a otro se producía de modo brusco (modalidad no contemplada por Falret),
aisló casos en que la progresión entre ambos accesos estaba mediada por intermitencias graduales, y
siempre incompletas.
Cuando en 1854 Falret revisó su posición respecto de la “locura circular”, destacó que no se
trataba sólo de dos períodos – como lo parecía indicar la denominación de la “doble” forma- , sino que
el cuadro suponía siempre la reunión de “tres” elementos. En discontinuidad con las transiciones
graduales descriptas entre el período maníaco y del melancólico, aisló entonces la función de un
legítimo “intervalo lúcido”.
En consecuencia, Falret y Baillarger describieron formas cercanas pero que no se confunden.
Mientras que el primero sentó las bases de la descripción de una forma de locura “periódica”, el
segundo describió una forma de locura continua, o “cíclica”. Esto es demostrable en función de la
presencia acordada por el primero y negada por el segundo al intervalo lúcido y a su caracterización
clínica. Es probable que el equívoco respecto del término “circular” haya contribuido al malentendido
en el debate.
Por el contrario, creemos provechoso trascender la polémica personal y avanzar en la recuperación
de las diferenciaciones clínicas como paso esencial en el establecimiento de una clínica diferencial de
las variedades y variaciones del humor en las psicosis. Resta interrogar el hecho de si la casuística
presentada por cada autor, en sus diferencias, ofrece elementos orientadores para conceptualización
de los “intervalos lúcidos” desde una perspectiva que incluya la invención del sujeto.
NOTAS
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Baillarger, M « Folie à double forme » en Recherches sur les maladies mentales, Masson, Paris, 1890,
pp.143- 157. Traducido en « Locura de doble forma » (1854), Vertex : Revista Argentina de Psiquiatría,
Vol 12 Nº 43, Buenos Aires, 2001, pp. 64-69
Baillarger, M « Folie à double forme. Historique et question de priorité » en Recherches sur les
maladies mentales, Masson, Paris, 1890, pp. 675-686.
Bercherie, Los fundamentos de la clínica (1980), Manantial, Buenos Aires, 1986.
Falret, Jean Pierre, « Dixième Leçon » en Leçons cliniques de maladie mentales faites à l’hospice de la
Salpêtrière (1850-1851), JB Baillère, Paris, 1854. pp. 245- 263
Falret, Jean Pierre, “Acerca de la locura circular o forma de enfermedad mental caracterizada por la
alternancia regular de la manía y de la melancolía”, (1854) en Vertex Vol. VII, N° 25, 1996
Falret, Jules, «La folie circulaire ou folie à formes alternes » (1878-1879) en Études cliniques sur les
maladies mentales et nerveuses, JB Baillière, Paris, 1890, pp. 584-620.
Ritti, Antoine, Traité clinique de la folie à double forme, O. Doin, Paris, 1883.
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INTRODUCCIÓN
Los modelos distribuidos de memoria semántica proponen que la representación de los conceptos
constituye la suma de la activación de áreas de procesamiento sensorial primarias, áreas motoras,
áreas de procesamiento de conocimiento abstracto y áreas de asociación intermedias (Cree & McRae,
2003). En base a esta postura numerosos trabajos se han abocado a estudiar el peso diferencial de la
información sensorial y funcional en la representación de entidades vivas y no vivas (Farah &
McClelland, 1991; Martin & Chao, 2001; McRae & Cree, 2002).
En base a la información obtenida mediante las Normas de Producción de Atributos
Semánticos es posible contribuir al análisis de los tipos de atributos que conforman la representación
de los conceptos pertenecientes a ambos dominios semánticos (vivos y no vivos) y, más
específicamente, a las distintas categorías semánticas. Dado que la dicotomía sensorio-funcional ha
sido criticada por su insuficiente capacidad de reflejar la extensa variedad de rasgos que conforman la
representación semántica (Cree & McRae, 2003; Peraita, 2006), en este trabajo tomamos como
referencia una taxonomía de rasgos mucho más compleja. El esquema de codificación que hemos
seleccionado para las Normas es el propuesto por Wu y Barsalou (2009). Este esquema es el mismo
que ha sido utilizado para la clasificación de atributos en las Normas elaboradas por McRae, Cree,
Seidenberg y McNorgan (2005).
Este esquema de codificación fue elaborado en base al modelo de Conceptualización Situada
propuesto por Barsalou (2005). Los factores tomados en cuenta para elaborar el esquema de
codificación fueron los siguientes: a) cubrir la extensa producción de los sujetos en tareas de
producción de atributos; b) capturar la variedad de información de las entidades ontológicas (animales,
artefactos, etc.); c) considerar la correspondencia con las regiones cerebrales de modalidad específica;
d) reflejar los canales establecidos de información sensorial; e) reflejar experiencia introspectiva así
como sensorio-motora (Cree & McRae, 2003).
La taxonomía cuenta con 5 grandes categorías: Categoría Taxonómica, Propiedad de
Situación, Propiedad de la Entidad, Propiedades Introspectivas y Misceláneas (el esquema completo
se presenta en el Anexo 1). En la primera se incluyen aquellos atributos vinculados con la categoría
semántica de pertenencia del concepto en cuestión e incluye relaciones tanto verticales (vg.
supraordinada) como horizontales (vg. coordinada). La segunda abarca todos los elementos que
forman parte del contexto situacional en el cual se suele presentar el concepto (vg. cosas con las que
suele aparecer o lugares o situaciones en que se suele encontrar). La tercera se refiere a propiedades
intrínsecas del concepto como su apariencia física, sus componente, etc. La cuarta hace referencia a
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Se pude ver que hay una mayor frecuencia de atributos referidos a las propiedades de la
entidad en todas las categorías y una menor frecuencia en las Propiedades Introspectivas. A su vez,
es de notar que las categorías del dominio de seres vivos (animales y vegetales) presentan una mayor
frecuencia de atributos de Propiedades de la Entidad y una menor frecuencia de Propiedades de la
Situación que las categorías del dominio de no vivos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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editores.
Wu, L. & Barsalou, W. (2009) Perceptual simulation in conceptual combination: Evidence from property
generation. Acta Psychologica, 132, 173-189.
ANEXO
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Superordinada manzana-FRUTA
Coordinada roble-OLMO
Subordinada silla-MECEDORA
Individual auto-MI AUTO
Propiedades Persona juguete-NIÑOS
de Situación Cosa viviente sofá-GATO
Objeto sandía-en un PLATO
Organización picnic-FAMILIA
social
Artefacto granja-un libro (sobre)
social
Edificio/Constr libro-BIBLIOTECA
ucción
Lugar/Ubicaci compra/r-EN PARÍS
ón
Relación sandía-las hormigas
espacial anduvieron A TRAVÉS DE la
mesa de picnic.
Tiempo trineo-DURANTE EL
INVIERNO
Acción manzana-COMER
Evento sandía-PICNIC
Modo sandía-comiendo
DESCUIDADAMENTE
Función ropa-PROTECCIÓN
Estado físico montañas-HÚMEDAS
Estado social familia-COOPERATIVA
Cantidad auto-un LARGO paseo
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representacio
nal
Operación auto-APRENDÍ a manejar
cognitiva
Contingencia vacaciones-LIBRES DE
trabajo
Negación manzana-NO (es) una
naranja
Cantidad magia-me quedé BASTANTE
perplejo por el/frente al mago
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VI Congreso Marplatense de Psicología
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VI Congreso Marplatense de Psicología
dividido por la probabilidad que ese atributo aparezca en todos los conceptos. Así, un atributo
verdaderamente distintivo, como _mugir_ es para vaca, posee una puntuación de clave de validez = 1.
Dado que existe interés por conocer la distribución de los atributos en el espacio semántico para
mostrar las regularidades estadísticas entre atributos y conceptos, se calcularán tres variables sobre la
base de la estructura correlacional entre los atributos.
Primero se construyó una matriz de representación de conceptos y sobre ella se aplicaron una
serie de procedimientos cuyos resultados se vuelcan en la Matriz original. Esta nueva matriz tendrá
400 filas, una para cada concepto y miles de columnas, una para cada atributo. Cada elemento de la
matriz corresponde a la frecuencia de producción de un atributo en un concepto. Siguiendo a McRae et
al (2005), para evitar correlaciones espurias en el cálculo, sólo se considerarán los atributos que
aparezcan en 3 o más conceptos. Así, para calcular las correlaciones entre atributos se utilizó Pearson
para cada vector resultante de esta depuración y se aceptó un valor de significancia de 6,5 % de la
covarianza. Desde estos datos se calculó tres variables que indican el grado en el que los atributos se
hallan inter correlacionados: a) La densidad Intercorrelacional, (Cree, McRae & McNorgan, 1999) que
es la suma del porcentaje de covarianza de todos los pares de atributos significativamente
correlacionados, b) el número de correlaciones significativas entre pares de atributos de un concepto y
c) el porcentaje de correlaciones significativas entre pares de atributos de un concepto.
Las columnas finales proporcionan información vinculada a la cuantificación de las taxonomías
propuestas por Wu & Barsalou (2009/2010). Los atributos se clasificaron en 5 categorías con entre 4 y
16 subcategorías cada una.
Finalmente, hemos incluido un índice del comportamiento dinámico de los pesos relativos de
los atributos respecto a un concepto al que hemos denominado Valor Total de la Valorización (VTV de
Vivas & Azzolini en Vivas, J., 2010). Este índice resulta de dos pasos sucesivos: 1) ajustar el modelo
exponencial a la curva que describe el comportamiento de las valorizaciones de los atributos y 2)
integrar la función anterior en el intervalo comprendido entre el primer y último atributo producido por el
colectivo social bajo estudio. El área así establecida resume la valorización total que dicho colectivo
otorga al concepto estudiado y puede ser definida como el campo semántico de dicho concepto para
tal colectivo.
NÓMINA DE VARIABLES
Variable Explicación
Concepto Nombre del concepto
Atributo Nombre del Atributo
Nivel_WB Códigos generales y específicos para los atributos generados según la
taxonomía del Wu & Barsalou (2009, 2010).
Frec_Prod Frecuencia de producción: número de sujetos entre los n posibles que
enumeraron ese atributo para ese concepto.
1276
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1277
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
INTRODUCCIÓN
En este trabajo nos proponemos hacer una articulación entre la clínica de Dolto,
específicamente las intervenciones de la analista en el trabajo con un joven de 14 años llamado
Dominique, y el tema con el que venimos trabajando en el grupo de investigación al que
pertenecemos. “Se trata de una línea de investigación que propone una lectura de los relatos clínicos
organizada en función de dos ejes: 1- lo que hemos formalizado bajo el nombre de “modelos de
dirección de la cura”, y 2- lo que hemos dado en llamar “momentos fecundos”, ligados al punto ciego
en el saber del psicoanalista, y a la decisión ética que comanda su accionar en esas circunstancias”.
La teorización acerca de los mencionados momentos fecundos quedará en manos del Mag.
Horacio Martínez, quien preside el presente panel.
Dolto presenta por primera vez “El caso Dominique” en 1967, durante unas jornadas
organizadas por Maud Mannoni en París centradas en el estudio de las psicosis infantiles. El escrito
completo expone las doce sesiones mantenidas con Dominique, a quien se remite para un diagnóstico
y un consejo respecto de su ubicación escolar.
Nos preguntamos por qué Dolto eligió escribir sobre este caso. La misma nos responde en el
inicio: “He preferido publicar un caso visto en ‘coloquio entre dos’ en la consulta de un centro médico-
pedagógico,” -se refiere aquí al Centro Etienne Marcel-. Y continúa: “A menudo nos hemos visto
reducidos a redactar relatos reelaborados y muy resumidos, tanto por elección deliberada como por
razones narcisistas que unas veces nos permiten y otras nos impiden admitir nuestra
contratransferencia. Y siempre queda el problema de trasmitir con veracidad nuestras experiencias de
trabajo. Es para contribuir a la investigación psicoanalítica por lo que he juzgado interesante redactar
un caso en su totalidad. Si este trabajo puede traer consigo reflexiones críticas y constructivas, no
habré trabajado inútilmente”.
¿Cómo llega el joven a la consulta? Cuando recibe a Dominique Bel y a su madre, Dolto cuenta
con el informe que ha hecho la escuela especializada a la que asiste hace dos años, donde se
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VI Congreso Marplatense de Psicología
comunica que siempre ha llevado una escolaridad aberrante, que no ha habido progresos y que su
comportamiento, aunque estereotipado, parece deteriorarse. Asimismo, el médico que lo atiende lo
considera como un débil simple, pero teme una evolución hacia la esquizofrenia después de su
pubertad. Esto se condice con la primera impresión de Dolto al conocerlo; percibe a un muchachito
que no es capaz de pararse derecho -lo hace más bien como un primate- porta una sonrisa
estereotipada y parece totalmente desorientado en tiempo y espacio, siguiendo a su madre “con los
brazos encogidos y las manos caídas, como lo hacen con sus patas delanteras los perros a quienes se
ha adiestrado a caminar sobre sus patas traseras.”
HISTORIA SINTOMÁTICA.
A los seis años, Dominique era un niño extremadamente inestable y sin contacto con los otros.
Sus padres realizaron una consulta con neuropsiquiatría infantil, donde a pesar de obtener un EEG
normal, se decidió suministrarle una medicación que empeoró su conducta por sobreexcitación.
Se resolvió entonces emprender una psicoterapia, que duró seis meses y que dio sentido a lo que
se vio como la problemática del niño: los celos en torno al nacimiento de su hermana. A partir de dicho
acontecimiento Dominique, que contaba con dos años y medio, comenzó con un cuadro de
desórdenes de conducta, encopresis, enuresis, agresividad, mutismo e insomnio. Cabe aclarar que,
hasta ese momento, la madre adjudicaba los problemas del niño a los “cambios de aire” debidos a la
estancia en casa de los abuelos paternos por dos meses (donde lo llevaron previamente al nacimiento
de su hermana), y al crecimiento.
La psicoterapeuta decidió dar fin al tratamiento, argumentando que las cosas cambiarían poco a
poco si los padres le aseguraban tanto afecto como a su hermanita, si se trataba a ambos de igual
manera, y si se enviaba al niño nuevamente a la escuela. También aconsejó enviarlo al campo por su
interés en los animales. Es decir, si bien la terapia permitió dar sentido a lo que aparece como
sintomático en el niño, las intervenciones finales con los padres se basaron en consejos en torno a la
crianza y recomendaciones de orden sugestivo.
Ante esta presentación, la demanda de la madre hacia Dolto se centra en obtener una mera
indicación sobre la ubicación escolar de su hijo en un internado especializado, conjuntamente con una
total aversión del padre de Dominique a todo intento de psicoterapia, ya que la anterior no había dado
ningún fruto con el joven.
LA APUESTA DE DOLTO
Según leemos en el texto que nos ocupa, cuando Dolto se encuentra con Dominique después
de la entrevista que realizó a solas con la madre, se remite directamente a preguntarle si tiene algo
que decirle para explicarle “cómo se siente él mismo”.
Ante “el lugar” que le ofrece esta nueva doctora, el muchacho enuncia: “Bueno, yo no soy como
todo el mundo, a veces al despertar pienso que he experimentado una historia de veras.” Dolto
1282
VI Congreso Marplatense de Psicología
sanciona una posición del muchacho: “que te ha hecho que no seas de veras”. El joven prosigue: “
Eso!! Cómo es que ud. lo sabe!”. Y continua con algo que no sabríamos precisar si es un sueño o una
fantasía; “-pensaba que me encontraba otra vez en la sala (en francés salle), cuando era chico, tenía
miedo a los ladrones, pueden robar dinero, pueden robar la plata, ¿no piensa usted que se pueden
llevar muchas cosas?”. Y Dolto agrega: “Pienso para mí misma: ¿la sala (salle) no será la sucia (sale)?
Y digo, o quizá tu hermanita.”
Pensamos su intervención al modo de una interpretación que atrapa la atención del muchacho,
quien se siente comprendido y asombrado porque dan credibilidad a sus palabras. Dolto va más allá
de la imagen de niño loco o primate que tiene el joven, y sitúa un sujeto en otro lado, por fuera de esa
imagen que Dominique muestra. Por otro lado, es a partir de las palabras de Dominique, que la
analista puede leer una sustitución significante que interrogaría algo del deseo del joven (Sala por
Sucia por hermanita) La significación es ambigua, qué es esa hermanita para Dominique? La ladrona
que puede robarle a la madre, acaparar su mirada, o la que puede ser robada? En este sin sentido,
Dominique se haya cómodo, y prosigue. La analista lo sigue….
Vemos que el muchacho le atribuye un lugar de saber: -“Oh! Pero bueno, ¿cómo es que usted
se las sabe todas?”- lugar en el que Dolto se posiciona articulando ese saber del analista a su escucha
y su deseo. “Yo no sé nada de antemano, pero tú me dices cosas con tus palabras y yo escucho con
todas mis ganas; eres tú el que sabes lo que te ha sucedido, no yo. Pero juntos podremos quizás
comprender.” .
Dolto estaría proponiéndole una búsqueda conjunta sobre su padecer, ubicando el saber del
sujeto y el del analista.
Dominique: “Busco qué es lo que marcha mal en la vida. Me gustaría ser como todo el mundo. Por
ejemplo, cuando leo varias veces una lección, al día siguiente no me la sé. A veces siento que soy
más estúpido que los demás, y me digo: esto no marcha, ¡pero deliro!”
Dolto: “Bueno es verdad que tú deliras. Veo que te das cuenta. Quizá te las das de chiflado para que
no te regañen.
Él: ¡Ohh debe ser eso! Pero, ¿cómo lo sabe ud?”
Dolto: “No lo sé, pero veo que te has disfrazado de loco o de idiota y no lo eres, puesto que te das
cuenta y quieres cambiar”.
A su vez, le explica la cuestión del secreto profesional y la condición de la autorización del padre para
emprender el tratamiento. Dolto remarca la importancia de la presencia del padre diciéndole a
Dominique que “su venida es indispensable.”
En cuanto al diagnóstico, Dolto creía que no puede precisarse sino en el curso del tratamiento,
siendo el de partida tan sólo un diagnóstico sintomático . Sin embargo, en esta primera entrevista, la
intervención con la madre después de escuchar a Dominique, es decirle el diagnóstico frontal, directo y
definitivo: Dominique “es un niño psicótico inteligente” .
Dolto apuesta a un diagnóstico de entrada, corriéndose de lo habitual en su técnica. Apuesta a
modo de una intervención “jugada”, poco calculada, pero necesaria a la luz de lo que, a su entender,
es permitir la entrada en análisis conmoviendo la creencia parental que la obstaculizaba.
Así, señalaríamos estos dos momentos fecundos del tratamiento que darían cuenta de los
procesos que modificaron el rumbo que estaba previsto en el inicio a partir de las intervenciones del
1283
VI Congreso Marplatense de Psicología
analista. En primer lugar, remarcamos la interpretación que Dolto hace a Dominique - sustituir salle por
sale (es decir en castellano, sala por sucia, con lo cual supone que habla de la hermanita), y que por lo
tanto, en un dispositivo de palabra, como es el método psicoanalítico, se encontrarían los enigmas de
su padecimiento-, la cual conllevaría efectos en la instalación de la transferencia y del Sujeto Supuesto
Saber.
En segundo lugar, la intervención que realiza a la madre, donde Dolto hace una clara apuesta
por la psicoterapia, sostenida, creemos, por el deseo del analista: si el joven tiene alguna salida es a
partir de pensar el caso desde la psicosis y no desde la debilidad mental. Así, desvía el rumbo que
estaba preestablecido por el lado de la reeducación y lo lleva al espacio analítico y por ello, le dice a la
madre: “Habría que detener esta evolución hacia la locura por medio de la psicoterapia que todavía se
puede intentar.”
Pensamos que la carta que la Sra. Bel envió a Dolto pocos días después de la primera
entrevista corrobora el efecto de intervención que tuvo la manifestación del diagnóstico: “Confieso que
me sacudió profundamente cuando usted me declaró con toda tranquilidad que Dominique estaba loco
y que había que cuidarle como tal, cuando que desde hace doce años se contentan con decirnos: va
retrasado, pero se arreglará con paciencia y mucho afecto. Una vez pasado el primer choque, pienso
que prefiero su diagnóstico porque, en efecto, responde a muchas cosas que nos inquietaban.”
Asimismo, la madre comenta en dicha carta acerca de los cambios favorables y radicales que
observa en la conducta del muchacho después de la primera entrevista. Todos esos cambios se hallan
en torno a la adaptación al hogar y la vida en familia, sin embargo, son interpretados por Dolto como
claras resistencias al tratamiento: “El muchacho ha sentido que íbamos a tocar sus estructuras
profundas y ahora se defiende de otra manera.”
Resulta muy interesante esta mirada particular sobre las “rápidas mejorías” que se interpretan
como efectos de la sugestión y no productos del análisis. La enfermedad es una defensa y la mejoría
rápida del cuadro también se explica en esa línea. Pero, gracias a esa modificación rápida de los
comportamientos del muchacho por el encuentro con la analista, se perturba la negativa inicial del
padre al intento analítico. Tal es así, que en entrevista con el padre, éste parece mostrar una nueva
confianza en el análisis; da su consentimiento y dice: “que no se decepcionará si se le mantiene, ya,
como está desde hace quince días, es decir, como un muchacho que parece despertar” .
La entrada en análisis dependió, en este caso, de las maniobras de las que se valió el analista
para “hacer leer” algo que no se leía respecto a la implicación del joven en su padecimiento. Para ello,
fue necesario tener una influencia analítica sobre la pareja parental, tal como lo enunciara Freud en
1933, que posibilite la instalación de la transferencia y del análisis del joven.
Al decir de Alba Flesler, “reconocer la infancia como un tiempo en curso, y atendiendo al hecho
constatable de que la presencia de los padres no es banal o puramente fenomenológica, sino de
estructura, Freud señala la especificidad de la intervención del analista con los padres, otorgándole
estatuto de influjo analítico. Pero no explicita exactamente a qué se refiere. Ello dista, a mi entender,
de proceder a psicoanalizarlos.”
Creemos que, puntuando las intervenciones de Dolto, avanzamos en la constatación de ese
influjo que tan pocas veces queda explicitado, y cuyos efectos revisten una importancia radical en el
análisis con niños y púberes.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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espacio ritualizado, que se va instituyendo con sus marcas epocales en un palimpsesto de mitos
fundacionales y contemporáneos. La simbolización característica propia de todas las sociedades
humanas se orienta a hacer legible a todos aquellos que frecuentan el mismo espacio cierta cantidad
de esquemas organizadores, de puntos de referencia ideológicos y culturales que ordenan lo social. El
espacio, es un lugar de producción de lo social y de lo público como territorio de negociación de
intereses comunes. Esta ciudad deseada o ciudad soñada configura un ideario mítico sobre su estilo
de vida en el conjunto de los argentinos, quienes ritualizan su presencia sistemática de encuentro año
tras año. Jean-Pierre Vernant, sostiene que el mito “sólo permanece vivo si sigue siendo contando, de
generación en generación, en el transcurso de la existencia cotidiana […] Memoria, oralidad, tradición:
éstas son las condiciones de existencia y supervivencia del mito” (Vernant, 1999:4). En tal sentido,
Pintos señala que “los imaginarios sociales adquieren un grado máximo de relevancia para la teoría
sociológica cuando llegan a formular las estrategias de intervención en las condiciones materiales de
vida de los ciudadanos de una sociedad concreta. Este elemento del imaginario no sólo abarca el
campo de la moral y de la política, sino que penetra todo el mundo de la cotidiano en lo que tiene de
"saber de recetas" a través de las cuales se vuelven concretas las "palabras mayores" de los discursos
ideológicos” (Pintos, 1995:116).
La ciudad es un lugar del acontecimiento cultural y escenario de lo imaginario. Las ciudades
imaginadas son el conjunto de significaciones sociales acerca del espacio urbano, que se estructuran
en los distintos grupos humanos dentro de territorio compartido, a partir de la articulación entre la
historia objetivada (hecha cosa: ya sea materializadas en el paisaje natural y en obras arquitectónicas
o plasmadas en visualizaciones plásticas, literarias, comunicacionales o científico/técnicas, y
legitimadas subjetivada (hecha proyecto y hecha cuerpo: ya sean vividas, simbolizadas - cristalizadas
en mitos y creencias - o soñadas y plasmadas en rituales sociales) que generan formas identitarias
singulares de sentir, representar, decir y hacer que las distinguen por sus estilos de vida de otros
lugares y le dan sentido a la lucha entre lógicas actantes y lógicas de resistencia por la desigual
apropiación social del espacio local y su atravesamiento con el contexto global. Emmanuel Kadt, se
pregunta si el turismo es un pasaporte al desarrollo, en tal sentido señala que “vale la pena esforzarse
por analizar las consecuencias del turismo en función de los problemas del desarrollo y, al mismo
tiempo, de las lecciones que cabe sacar de otros proyectos o de otras sociedades en lo que a efectos
sociales y culturales se refiere.”(Kadt; 1979:9). Los múltiples imaginarios citadinos, su prospección en
ciudades, su visualización política y la creación de condiciones para hacerlos factibles y viables se
constituyen en componentes requeridos por la ciudad imaginada y deseada.
Entendemos que las ciudades imaginadas configuran una forma singularizada de apropiación
del espacio que adquieren forma y volumen de paisaje a partir de la realidad humana -de los
transeúntes ocasionales que la recorren y de los ciudadanos que la habitan- donde la historia, la
política y la estética se inscriben como hojaldres de textos urbanos cargados de significaciones que
van modelando las maneras de decir, de hacer y de sentir de los sujetos atravesados por su
territorialidad. Para algunos evoca el esplendor nostálgico de las élites del ocio, y para otros,
representa el sueño de gran parte de los argentinos de la época del turismo social de los sectores
populares. La primera época del peronismo, ha sido emblematizada como la mítica edad de oro, en el
imaginario social argentino, y la ciudad de Mar del Plata era parte de esa conjunción dionisíaca de
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Balneario Nacional y ciudad de encuentro de las clases populares que se agenciaban de su territorio.
Al respecto, Elisa Pastoriza sostiene que en la ciudad se puede vislumbrar la síntesis de las
“tendencias que recorrieron la historia social de la nación desde una ‘villa balnearia aristocrática’ hasta
la ‘ciudad de masas’ que perdurará hasta los 80. Mar del Plata se constituye así en un caso
emblemático, un símbolo, la ciudad deseada, a donde “hay que llegar”, a la que “hay que conocer” un
lugar anhelado: la ciudad que había que conocer, la experiencia de veraneo que había que tener. Un
espacio recorrido ‘con placer y orgullo, y regresaban a sus lugares de origen y narraban esa
satisfacción’. Lo cual hacía que más y más quisieran ir, en un círculo virtuoso que acompañó el
crecimiento de la Argentina”. Por tal razón, ‘la conquista de Mar del Plata y la obtención de las
reivindicaciones sociales recreacionales conformaron un proceso similar a muchos otros que han sido
visualizados como logros del peronismo. Mar del Plata es el lugar al que todos querían ir, un sueño de
los argentinos. Vistas retrospectivamente, las transformaciones de Mar del Plata condensan, quizá
mejor que ninguna, la eficacia de una de las principales fuerzas movilizadoras del país en el siglo XX:
la pasión por la igualdad social’. En ese sentido, es el gran balneario nacional, una de las ciudades
argentinas más visitadas, más fotografiadas, filmadas, descriptas y narradas; donde se remplazó el "el
modelo de ocio aristocrático" y "el modelo del ocio democrático". (Pastoriza, 2002, 2009, 2011)
Los espacios y lugares de la ciudad signan multiplicidad de referencias, que se re-escriben la
mayoría de las veces sobre las huellas de su propio devenir, las historias de su presente. “Entre un
pasado que insiste en desdibujarse y un presente que quiere resignar sus lugares, la ciudad como
materialización espacio-temporal de las lógicas estéticas que configuran el tejido de relaciones entre
los ahora, "hombres ciudadanos", persiste en ser el hábitat que construimos y erigimos, en el que
moramos en virtud de nuestra historia y que repetimos incesantemente como ejercicio de marcaje de
nuestra condición” (Silva, 2006:34). En tal sentido, el lugar de enunciación, es el discurso instituido es
decir, el discurso de la Institución desde donde se genera y no es precisamente el discurso del sujeto.
De tal suerte, las instituciones aparecen como espacios de poder, como lugares de enunciación
hegemónica, donde actúa un efecto ficcional acerca de la palabra dicha por ellas, tal como si las
instituciones nos hablaran con su retórica de poder. Los sujetos y los lugares se producen como tal a
través del lenguaje, ya que este, no es solo una herramienta comunicacional sino también una forma
de expresión del imaginario social del sujeto que habla.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
anfitrionidad local, se inscribe en un imaginario contemporáneo que nos interesa especialmente para el
estudio de nuestro proyecto, por la significancia que conlleva como conjunto identitario para ahondar
en cuestiones histórico sociales y psíquicas vinculadas a la tensión entre lo vernáculo y lo cosmopolita;
y para comprender la cristalización de sentido que trasunta esta nueva figura mítica citadina.
Según David Le Bretón el rostro posee la potencia de una llamada, es el objeto más pregnante
del deseo, es el lugar por excelencia de lo sagrado en la relación del hombre consigo mismo y con los
demás, se enlaza con “movilizar numerosas emociones, desprenderse de cierta tranquilidad de la vida
cotidiana para hacer frente a momentos que amplían la mirada sobre el mundo, es exponerse a
encuentros que dejan huella (…) El rostro es un lugar privilegiado para la aparición de “Lo Otro.”(Le
Bretón, 2009: 142).
La Cara de la Argentina frente al mar como espejo y espacio abierto hacia la mirada de los
otros, para recibirlos en calidad de anfitriones, nos coloca en un rol de exterioridad donde dejamos
traslucir nuestra identidad nacional, y nos damos a conocer desde la atractiva seducción de nuestra
belleza patrimonial, que ya no sólo se vincula con un lugar de encuentro urbano/paisajístico para
nuestros compatriotas, sino con mostrarnos como lugar acogedor para el mundo, desde lo político, lo
cultural, lo social, y lo económico. Es decir, que “el rostro acerca a una comunidad social y cultural por
la forma de las facciones y de la expresividad” la singulariza en el imaginario social nacional y
cosmopolita, debido a que “ser nombrado, significa beneficiarse del reconocimiento de los otros,
ofrecerles un rostro que tiene una cualidad particular, unas emociones y unos recuerdos en común.
Ser conocido por el otro implica mostrarle y hacerle comprensible un rostro lleno de sentido y de valor,
y hacer de su rostro en contrapartida, un lugar de igual significación e interés. De todas las zonas del
cuerpo humano, el rostro es donde se condensan los valores más importantes: matriz de identificación
donde se refleja el sentimiento de identidad, donde se fija la seducción y los matices innumerables de
la belleza o de la fealdad” (Le Bretón, 2009: 143).
La ciudad, emblematizada como rostro nacional, se encarna en un espacio/tiempo imaginado
desde lo apolíneo y lo dionisíaco; se convierte en el lugar que conjuga lo deseado, lo fantaseado, lo
planificado, lo realizado, lo vivenciado, y lo evocado, lo democratizado y lo privilegiado. Por ende,
instituye rituales que legitiman relaciones de poder simbólico vinculadas con el agenciamiento del
espacio por diferentes grupos sociales. Es a partir de la imaginación y el ritual de institución simbólica
del espacio que las ciudades, se transforman en lugares antropológicos. El lugar, (espacio triplemente
simbólico, cargado de identidad, relación e historia), y el no-lugar (espacio del anonimato), no son
dicotomías tajantes y excluyentes, sino muchas veces yuxtapuestas, conforman “verdaderos
palimpsestos donde se reinscribe, sin cesar, el juego intricando de la identidad y la relación”(Augé,
1993). Todas las ciudades imaginadas son escenarios de lenguajes, de evocaciones de sueños y de
símbolos; palimpsesto de mitos y ritos de institución de nuevas imágenes que se suceden
constantemente en la dinámica histórica, entre la tensión de la pregnancia por nuevo cuya
construcción colectiva emerge; con lo antiguo que se niega a diluirse, y cuyos resabios van quedando
como sustratos yuxtapuestos, en una mixtura de claroscuros. Como bien señala García Canclini: “Más
allá de las imágenes simplificadoras, - el “gran club” de las élites y luego el mayor balneario nacional
Mar del Plata aparece como síntesis de tendencias vertebrales de la Argentina moderna: crecimiento
1289
VI Congreso Marplatense de Psicología
económico basado en el trabajo agropecuario y auto-celebración de las élites del ocio, tensiones entre
el turismo aristocrático y el turismo masivo, entre lo local y lo internacional” (García Canclini, 1997:4).
En base a lo antedicho, entendemos que el relato mítico, es polisémico en sí mismo por sus
múltiples planos de significación; influye en la manera de pensar de un grupo y en sus costumbres; por
otra parte, permanece parcialmente abierto a la innovación y adquiere diferentes matices
narratológicos a través del tiempo. Mar del Plata, ciudad imaginada como anfitriona nacional y
cosmopolita por los argentinos, a partir de un magma de significaciones fragmentadas, encarnadas en
mitos contemporáneos, que le fueron atribuidos en base a rituales de institución de diferentes géneros
discursivos relacionados con el rostro de receptora de flujos turísticos en su entorno
urbano/paisajístico y con posibilidades de infraestructura arquitectónica de servicios para albergar
grandes grupos para eventos y convenciones. De tal manera, se transforma en una ciudad imaginada:
un lugar emblemático por su anfitrionidad, un espacio espectacular para la recepción de los
huéspedes, que configuran la contracara de los vernáculos. De este modo se la ha ido nombrando a
partir de una multireferencial anfitrionidad con diversas denominaciones, Ciudad de los Congresos,
Ciudad de las Estrellas, Ciudad de la Cumbre, Ciudad del Dakar, Ciudad de la Piel del Verano, Ciudad
del Festival de Cine; Ciudad de las Ferias, Ciudad de las Colectividades; Capital Nacional del Reggae,
y recientemente se le atribuye la apelación: Capital Nacional de la Infidelidad. Se la identifica a su vez,
por su producción textil -tejidos de punto- como la Capital Nacional del Pullover. Así también, por las
implicancias de los micro-grupos, que luego de transitarla y conocerla, deciden residir de modo
permanente en su territorio: a) la Ciudad del Jubileo (de allí su denominación como ‘La Florida
Argentina’ por la migración de personas de edad avanzada (Golpe, 2000, 2010), también nombrada
como ‘La Nanterre Argentina’, o ‘Ciudad de la Longevidad’, y peyorativamente ‘El Cementerio de
Elefantes’); b) la Ciudad de la Crianza (debido a la migración de familias con niños y adolescentes que
deciden migrar a la ciudad para disfrutar de un estilo de vida más tranquilo, pero que les permita
acceder a los sistemas de educación media y universitaria de su hijos); y c) la Ciudad de las
Divorciadas (por la migración de mujeres que luego de culminar sus vínculos conyugales, migran a la
ciudad para comenzar un nuevo proyecto en un espacio del anonimato (Augé, 1993). Una ciudad a
orillas de un mar oceánico, cuya rivera fue calificada como una Costa Galana, y actualmente
consagrada como la Capital Nacional del Surf. Con un puerto marítimo de ultramar, que concentra
gran parte de la actividad pesquera de todo el país, con industrias de conservas, congelado y fileteado,
y dos importantes astilleros navales. Finalmente, que tiene diversos rituales instituidos y personajes
sacralizados vinculados a su mar: a) una Reina Nacional del Mar, b) una Fiesta Nacional de los
Pescadores, c) un Premio Estrella de Mar, y últimamente, d) en su territorio se celebra la festividad
nacional de la Diosa Yemenjá. Estos rituales que se celebran para consolidar los mitos urbanos
contemporáneos, se entroncan con un lejano linaje: la bella Afrodita y el osado Poseidón.
EPÍLOGO
Ahondar la significación de esos mitos de anfitrionidad, con sus ritos de institución en el imaginario
argentino, así como sus correspondientes giros discursivos, nos permitió comprender: a) las diferentes
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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INTRODUCCIÓN
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Por otra parte, hablamos de “momento fecundo” del tratamiento, para situar, a través de ese
término, el accionar del analista que se corresponde con un “punto de fuga” respecto al modelo de
dirección de la cura que sostiene.
Se trata de una intervención del analista que merece el calificativo de “acto”, si por tal
entendemos: (a) una acción que no está determinada por un saber previo, sino que, al revés, viene a
contradecir ese saber, el que a partir del acto en cuestión queda puesto en suspenso; (b) una acción
que no se sostiene de un cálculo. Hay varios pasajes en los escritos y seminarios de Lacan en los que
hallamos la expresión “cálculo”, y aún “cálculo del sujeto”. En particular, la construcción de esquemas y
grafos son formas a través de las cuales Lacan busca plasmar lo que, en cada momento de su
enseñanza, califica como “estructura”, y es en el interior de la misma donde se propone delimitar la
posición del sujeto. Lacan menciona en varias oportunidades a la “moderna teoría de los juegos”, que
permite justamente construir un “cálculo del sujeto”. Pero en todos los casos aclara que ese cálculo no
“agota al sujeto”, pues éste se presenta siempre en términos de negatividad respecto a la estrategia de
cálculo.
Agreguemos a lo antedicho: (c) una acción que se sostiene de una ética, en la medida en que
entendamos que la ética es aquello que sostiene una acción cuando la misma no se desprende como
conclusión de una serie de razonamientos. Y por último, también se trata de (d) una acción que
modifica, de allí en más, la posición del paciente respecto de las significaciones que gravitan sobre su
historia, así como la posición del analista con relación al saber tal como hasta entonces lo venía
sosteniendo. Hay dos saberes que resultan afectados: se produce una suerte de agujero en el saber, y
el resultado acarrea consecuencias desalienantes, planteado esto con relación a los términos
“alenación” y “separación” que Lacan trabaja en el Seminario 11.
Los trabajos que se incluyen en este Panel se proponen una lectura de casos clínicos
publicados que busca resaltar en ellos esta dimensión del “momento fecundo”. Para ello se han
escogido un caso de Maud Mannoni y otro de Françoise Dolto.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
“Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano”, pp. 786 y 799.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
MATERIAL TRABAJADO
“Un caso de anorexia mental”, en: “El psiquiatra, su loco y el psicoanálisis” de Maud Mannoni.
Siglo Veintiuno Editores. (1976) 1990.
DIRECTRIZ TEÓRICA
El análisis del caso clínico está inscripto en los objetivos generales que presenta el actual
proyecto de investigación. Tal como lo explica su director, Mg Horacio Martinez, en el artículo “Acerca
de los momentos fecundos en la dirección de la cura”:
Se trata, por tanto, de una línea de investigación que propone una lectura de los relatos clínicos
organizada en función de dos ejes: 1) lo que hemos formalizado bajo el nombre de “modelos de
dirección de la cura”, y 2) lo que hemos dado en llamar “momentos fecundos”, ligados al “punto ciego”
en el saber del psicoanalista, y a la decisión ética que comanda su accionar en esas circunstancias.
(Psicoanálisis y el hospital. Finales de tratamiento. N° 42. Noviembre de 2012)
De este marco general nos interesó rastrear aquellas intervenciones que representaran estos
“momentos fecundos” a lo largo del tratamiento de esta paciente en particular. Entendiendo estos
momentos como aquellas intervenciones no calculadas del analista que producen, sin embargo,
efectos terapéuticos. A esta tarea nos avocamos en principio pesquisando la primera entrevista con
esta paciente y sus padres, llevada a cabo por Maud Mannoni, para luego continuar, desarrollando la
totalidad del caso en sus diferentes etapas, bajo las mismas premisas.
El caso clínico se presenta como “Un caso de anorexia mental” y esta subdividido en su desarrollo
en: a) El relato de 1) La primera entrevista, 2) La cura ambulatoria, 3) La hospitalización. Y finalmente
el punto b) Comentarios.
Acompañando el estilo del texto decidimos dividir la primera entrevista en cuatro momentos
marcados por las diferentes intervenciones del analista. Primer momento, trascurre al inicio de la
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por el tratamiento pactado, sino también por el brillo dado en tanto sujeto y no objeto portado por sus
padres y a la vez portador de infinitas etiquetas. Mannoni señalará para finalizar que Sidonie ha
encontrado en esa entrevista lo que fue a buscar: saber que los locos son los padres, no ella.
¿Es esta una conclusión? ¿Una tentativa hipótesis? La analista lo afirma. Nos preguntamos
cuáles son los elementos que argumentan tal afirmación, solo transcurrida una primera entrevista.
Intensa, pero primer entrevista al fin, primer contacto con la joven y con los padres ¿Cómo pudo ubicar
la locura? ¿Cómo pudo saber que era esa la respuesta que buscaba la paciente? En el transcurrir de
los siguientes momentos del caso clínico podremos develar si esta aseveración fue acertada o fue una
expresión de deseo. Quizás lo segundo determinara lo primero bajo la forma de “el deseo del analista”.
En este punto, esta última reflexión se presenta pasible de ser leída como aquello incalculable.
En las intervenciones de los tres tiempos anteriores de la entrevista, se puede seguir cierto hilo
intencional, hacia donde estaban dirigidas. En los siguientes momentos nos encontraremos con
intervenciones donde francamente se presenta lo incalculable y los posteriores efectos terapéuticos.
La cura ambulatoria tiene la misma duración que las vacaciones de sus padres. En este
período la paciente cumple con lo estipulado en la primera entrevista, asiste a sesión, habla de su
malestar, sus padres, y sus internaciones médicas. Se observa una franca mejoría que se degrada con
la aproximación del regreso de los padres.
Sidonie reclama una hospitalización, dada su desmejorada presentación, Mannoni dirá: “A esta
hospitalización me resigno”. No sin poner algunas condiciones. En principio la institución que recibirá a
la paciente no será aquella a la que estaba acostumbrada a asistir, en la que siempre tenía una cama
reservada. Será otra, también será otro médico quien la acompañe en este nuevo lugar. La indicación
de Mannoni hacia el cuerpo médico será la de no intervenir sobre el síntoma. La indicación a la
paciente será: “Tendrás que hacerte cargo de tu cuerpo”. La misma que comandó el inicio del
tratamiento ambulatorio. En este período en la nueva clínica Sidonie hace que se cumplan todas las
expectativas de su antiguo psiquiatra, su deterioro es franco. Así, dirá Mannoni que pone a prueba la
omnipotencia de la analista y la de ella misma. Sidonie confiesa que pende sobre ella una condena a
la muerte de su ser, su aspiración es la de morir en su cuerpo para que su ser escape de la muerte.
Parece construirse un nuevo par opositivo: vida – muerte, el anterior, anorexia – ingesta, queda
subsumido en este. Esto se retomará más adelante.
Mannoni comenta que con sus maniobras se corrió del lugar estrictamente de analista, puso su
deseo en juego. Lo formula así: “A este deseo lo había incluso formulado claramente; yo rechazaba el
sistema psiquiátrico clásico que en este caso no habría llevado a otra cosa que al fracaso. Sidonie
deseaba llegar hasta el umbral mismo de la muerte (del cuerpo), pues entonces que llegase a él”. La
analista reconoce que este deseo explícito puede ser obstáculo en la cura. La lectura del material
clínico muestra cómo se materializa este deseo en una intervención que llamaremos incalculada.
Intervención, por sus efectos fecundos; incalculada por la irrupción en la escena de las palabras de la
analista que en el texto no tienen fundamento previo, solo esta mención, a su propio deseo, en la
reconstrucción del caso.
La intervención ocurre al llegar la analista a la clínica y encontrar a la paciente extendida en el
suelo, casi inconciente. Mannoni le dice: “Te acepto tanto muerta como viva”. El efecto no espera, la
paciente salta a su cama y dice que no quiere morir. Esa noche sueña, sus padres se divorcian y ella
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VI Congreso Marplatense de Psicología
va a vivir con su padre. ¿Expresión del propio deseo o duplicación del deseo de estos padres que
desde la primera entrevista, tanto por una o por otra vía no pueden sostener el advenimiento de otra
mujer en la familia?
La analista dirá luego, al reconstruir el caso, que esa intervención privilegió la conservación del
deseo prohibido por el superyo materno, pero dejo intacto el juego de la paciente con la muerte y el
efecto de esta en los otros, para así medir el deseo de verla viva.
“No quiero ni engordar ni adelgazar, ni ser varón ni mujer, ni tener más menstruaciones ¿Qué
dirán mis padres si entro en un cuerpo de muchacha?”
Se pregunta Sidonie
Cuando dirige su interrogación al deseo del Otro, recibe en retribución una respuesta que la
aliena. El drama de Sidonie es el drama de su reencuentro con el deseo. Ella debe enfrentarse con el
deseo del padre (deseo de permanecer retardada y no entrar en el campo del deseo de otro hombre) y
con el deseo de la madre (que solo acepta perderla a cambio de recuperarla como objeto de
cuidados).
Esta es la dramática de la joven. Quien se afirma como deseante orquestando el rechazo, último
bastión de resistencia. Es desde el lugar de desear “nada” donde realiza su encuentro con la muerte.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
En cuanto al interés metodológico que la generación de normas de este tipo comporta, se debe
tener en cuenta que probablemente debido a su omnipresencia en la vida cotidiana y a su
disponibilidad directa para uso experimental, las “palabras” son estímulos ampliamente utilizados en
Psicología y disciplinas afines, y al ser tan sensibles a la cultura y a la educación, es de suma
importancia contar con normas locales a la hora de seleccionarlos.
Así, a partir de las normas se dispondrá de los reactivos necesarios para generar experimentos
orientados a la modelización teórica, y para favorecer aplicaciones y desarrollo tecnológico ajustado a
las necesidades locales, como ser la confección y la utilización de instrumentos validados para el
diagnóstico y la intervención neuropsicológica clínica en campos críticos del desarrollo vital, tanto en el
envejecimiento normal y en el déficit cognitivo mínimo como en diversos tipos de demencias.
En suma, atendiendo a las dos fuentes de interés mencionadas -teóricas y metodológicas-,
recolectar normas de producción de atributos semánticos permite construir modelos, testear hipótesis,
disponer de estímulos experimentales y generar tareas de evaluación en el ámbito clínico.
A raíz de lo anterior, nos planteamos el objetivo de proporcionar en forma libre y gratuita a la
comunidad científica un sistema de normas de atributos de 400 conceptos de nivel-base, referidos a
seres vivos y a objetos no vivos. Entre las categorías seleccionadas, pertenecientes a esos dos
dominios, se encuentran las de ANIMALES, APARATOS, COMIDAS, FRUTAS/VERDURAS,
HERRAMIENTAS, MUEBLES, PRENDAS DE VESTIR, UTENSILIOS y VEHÍCULOS.
El conjunto de conceptos seleccionado está conformado por los conceptos propuestos por
Cycowicz, Friedman, Rothstein y Snodgrass (1997). Cada concepto corresponde a un sustantivo en
castellano rioplatense. La selección de este set obedece a que: a) contiene muchos conceptos
frecuentemente utilizados en experimentos sobre memoria semántica con sujetos sanos y pacientes
neuropsicológicos, b) cuenta con la normalización del índice de familiaridad para población argentino-
parlante (Manoiloff, Artstein, Canavoso, Fernández, & Segui, 2010). La familiaridad es la apreciación
de la frecuencia personal con la cual una persona entra en contacto en su vida diaria con, o piensa en,
el objeto al cual alude el concepto. Así, la mayor familiaridad con un objeto implica un mayor contacto
con él. Algunos estudios sobre lenguaje español han mostrado que el grado de familiaridad es un
importante predictor de los tiempos de respuesta en el nombramiento de una imagen (Cuetos, Ellis, &
Álvarez, 1999).
Como estas normas, una vez publicadas, serán de fuente abierta, se caracterizarán por su
dinamismo y permeabilidad al trabajo colaborativo en la comunidad científica, ya que permitirán la
inclusión de otros análisis que resulten relevantes a partir de la base fuente. La muestra, hasta la
fecha, está conformada por 950 adultos jóvenes: el 70 % corresponde a estudiantes de Psicología, y el
resto a estudiantes de las carreras de Ingeniería, Ciencias Económicas y Ciencias Exactas; el 70 % es
de sexo femenino, y las edades de los participantes oscilan entre 20 y 40 años (moda = 22, promedio
= 24). Superamos así nuestra propuesta original de obtener respuestas de 800 participantes, y
también la de trabajos de normas previos como el de McRae et al. (2005), compuesta por 725
participantes, y el de Vinson y Vigliocco, conformada por 280 participantes.
El método comúnmente utilizado para recolectar información de este tipo es presentar a los
participantes un conjunto de palabras y solicitarles que mencionen los atributos que consideran
importantes para cada concepto. Las ambigüedades Sustantivo/Verbo fueron tratadas dando
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VI Congreso Marplatense de Psicología
instrucciones a los participantes de proporcionar los atributos para el significado del sustantivo de la
palabra (e.g., amo/amo) (ver McRae et al., 2005). También se identificaron las relaciones
Sustantivo/Sustantivo-Adverbio que pudieran generar ambigüedad (e.g., banco/banco). Para esos
casos, siguiendo las sugerencias de los mencionados autores, se proporcionó una clave para
desambiguar (en el ejemplo citado, “no institución”).
El procedimiento requirió que en forma contrabalanceada se otorgaran planillas con 400
conceptos, en grupos de 15 por planilla. Cada participante recibió una lista que no contenía conceptos
que intuitivamente consideramos similares, para evitar comparaciones explícitas. A continuación puede
verse la consigna, tal como se la presenta a los participantes.
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La carga de los atributos evocados por los participantes se puede hacer de manera manual o a
partir de la importación de un archivo desde el programa Excel, como se ve en las imágenes
siguientes, respectivamente.
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1303
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Los atributos evocados son luego codificados según ciertas convenciones, y para cada
concepto queda conformada una lista de atributos acompañada de un conjunto de medidas
adicionales, a la cual se denomina matriz final.
1304
VI Congreso Marplatense de Psicología
MEDIDAS ADICIONALES
En la imagen anterior se exhiben algunas de las medidas -en total son cerca de 50- que
también se calculan en los otros trabajos sobre normas mencionados. La primera columna
corresponde a la frecuencia de producción, que refiere al número de sujetos entre los n posibles que
nombraron ese atributo para ese concepto. La segunda muestra el ranking del atributo dentro del
concepto de acuerdo con la frecuencia de producción. La tercera corresponde a la suma de las
frecuencias de producción de un atributo teniendo en cuenta todos los conceptos en los cuales
aparece, exceptuando a los atributos taxonómicos. Esta excepción obedece a que, como plantean
McRae y colaboradores, referirse a la categoría superordinada a la que pertenece un concepto brinda
un tipo de información diferente a la que dan otros tipos de atributos, como ser partes, función, etc.
La cuarta columna de la figura 7 muestra el número de conceptos en los cuales ese atributo
aparece. La quinta indica si el atributo es o no distintivo, donde distintivo se define como apareciendo
solo en uno o dos conceptos. El grado de distintividad, que se observa en la quinta columna, se calcula
del siguiente modo: 1/(CFP), de modo que indica el número de conceptos en los cuales el atributo
aparece (o sea, la medida inversa de CFP). La última columna muestra la clave de validez del atributo
para ese concepto, y excluye a los atributos taxonómicos. Se calcula del siguiente modo: Frec_Prod/
Sum_FP_No_Tax. En casos extremos, si un atributo verdaderamente hace la diferencia para un
concepto, como “mugir” para “vaca”, entonces va a tener el puntaje máximo en Distintividad y CV_NT,
1305
VI Congreso Marplatense de Psicología
que es 1. En contraste, si un atributo es compartido por muchos conceptos, sus valores en esas
variables van a ser extremadamente bajos (e.g., “respirar”, “comer”).
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
Cuetos, F., Ellis, A., & Álvarez, B. (1999). Naming times for the Snodgrass and Vanderwart pictures in
Spanish. Behavior Research Methods, Instruments and Computers, 31, 650-658.
Cycowicz, Y., Friedman, D., & Rothstein M. (1997). Picture naming by young children: norms for name
agreement, familiarity, and visual complexity. Journal of experimental child psychology. 65, 171-
237.
Kremer, G. & Baroni, M. (2011). A set of semantic norms for German and Italian. Behavior research
methods, 43(1), 97-109.
Manoiloff, L., Artstein, M., Canavoso, M., Fernández, L., & Segui, J. (2010). Expanded norms for 400
experimental pictures in an Argentinean Spanish-speaking population. Behavior Research
Methods, 42(2), 452-460.
Martin, A. & Chao, L. (2001). Semantic memory and the brain: structure and processes. Current
Opinion in Neurobiology, 11, 194-201.
McRae, K., Cree, G., Seidenberg, M., & McNorgan, C. (2005). Semantic feature production norms for a
large set of living and nonliving things. Behavior Research Methods, 37, 547-559.
Murphy, G. (2002). The big book of concepts. Cambridge, MA: MIT Press.
Norman, D. & Rumelhart, D. (1975). Memory and knowledge. En D. Norman, D. Rumelhart, &
LNR Res. Group (Eds.), Explorations in cognition. SF: Freeman.
Smith, E., Shoben, E., & Rips, L. (1974). Structure and process in semantic memory: A featural
model for semantic decisions. Psychological Review, 81, 214-241.
Taylor, K., Moss, H., & Tyler, L. (2007). The conceptual structure account: a cognitive model of
semantic memory and its neural instantiatios. En J. Hart & M. Kraut (Eds.), Neural basis of
semantic memory. Cambridge University Press.
Vinson, D. & Vigliocco, G. (2008). Semantic feature production norms for a large set of objects and
events. Behavior Research Methods, 40(1), 183-190.
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INTRODUCCIÓN
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VI Congreso Marplatense de Psicología
El que los atributos sean correctamente unificados incide notoriamente en el cálculo de los valores
de muchas variables de atributos de gran significatividad en el marco de las normas. Para poner de
manifiesto la relevancia de esta cuestión, se ofrecerán dos ejemplos diferentes: el primero,
correspondiente a la variable frecuencia de producción, permite apreciar la relevancia de la unificación
al interior de cada concepto; el segundo, referido a la variable distintividad, posibilita advertir cuán
importante es la unificación entre los conceptos, es decir, considerando la totalidad de la base.
FRECUENCIA DE PRODUCCIÓN
Esta variable básica alude a la cantidad de veces que cierto atributo fue enunciado al interior
de determinado concepto. Permite estimar cuán relevante es un atributo para caracterizar a un
concepto (aunque para lograr una estimación correcta de este fenómeno es imprescindible considerar
otras variables más refinadas, tales como la distintividad, la relevancia o la significatividad). Ahora
bien: considérese lo que ocurre en el caso del concepto SILLA. Once participantes redactaron TIENE
PATAS; siete, POSEE PATAS; finalmente, otros seis escribieron sencillamente PATAS. Por separado,
estos valores de frecuencia no son muy elevados (considerando que el valor máximo es 30, dado que
cada concepto fue caracterizado por treinta participantes). Pero si se unifican estos atributos en una
única formulación (en este caso, siguiendo los criterios de unificación empleados el atributo resultante
es TIENE PATAS) la frecuencia de producción del mismo aumenta considerablemente, llegando a 24.
DISTINTIVIDAD
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VI Congreso Marplatense de Psicología
Por empezar, cabe destacar que los únicos criterios disponibles son los presentados en el ya
citado artículo de McRae et al. (2005). Existen también normas públicamente disponibles en italiano y
alemán, confeccionadas por Kremer y Baroni (2011); pero estos autores utilizaron los criterios
propuestos por McRae et al., de modo tal que no introdujeron ninguna novedad en este aspecto.
Al confeccionar las Normas locales, la gran mayoría de los criterios en cuestión fueron
respetados. No obstante, se advierten dos problemas: el más grave de ellos consiste en que la
heurística propuesta no se encuentra sólidamente fundamentada; el otro inconveniente radica en que
fue menester añadir muchos otros criterios, puesto que numerosos casos no eran abordables a partir
de los ya existentes.
A continuación, retomaremos algunos ejemplos de: a) criterios que fueron respetados al pie de
la letra; b) criterios que fueron considerados insatisfactorios o dudosos, y que por lo tanto no fueron
seguidos; c) criterios que no figuraban en la propuesta de McRae et al., y que por lo tanto fueron
agregados para lograr la homogeneización de muchos atributos que, caso contrario, no habrían sido
susceptibles de procesamiento.
a) Uno de los criterios propuestos consiste en añadir la frase FOUND IN toda vez que un
atributo alude al lugar donde típicamente se localiza el referente del concepto en cuestión. En las
normas en castellano rioplatense, se añadió consecuentemente SE ENCUENTRA EN en todos los
casos de este tipo. Otro de los criterios vigentes consiste en redactar DIFFERENT cada vez que un
atributo aluda al hecho de que la característica en cuestión es variable: así, atributos tales como ES
1309
VI Congreso Marplatense de Psicología
DE VARIOS COLORES, TIENE DIVERSOS TAMAÑOS, MUCHOS TALLES, etc. fueron comenzados
siempre con la palabra DIFERENTES (COLORES, TAMAÑOS, TALLES).
b) Uno de los criterios que no fue seguido reza lo siguiente: “Atributos conjuntivos (por ejemplo,
ES VERDE Y ROJO) deberían ser divididos (en ES VERDE y ES ROJO).”. Se consideró que era
pertinente mantener la conjunción en vez de dividir el atributo en dos, puesto que la conjunción permite
comprender que las características en cuestión corresponden a una misma entidad y no a, por
ejemplo, dos subtipos de la misma. A modo de ilustración, piénsese en los casos de MANZANA y
SANDÍA: para caracterizar el primer concepto, muchos participantes redactaron ES VERDE y ES
ROJA (o PUEDE SER VERDE y PUEDE SER ROJA), aludiendo nítidamente a dos variedades
diferentes de manzanas. Por el contrario, en el caso de SANDÍA, muchos señalaron que ES VERDE Y
ROJA: su cáscara es del primer color, mientras que su interior es del segundo. En el caso de
MANZANA, los atributos se mantuvieron por separado; en el caso de SANDÍA, por el contrario, la
conjunción fue mantenida dentro de un único atributo.
c) Un criterio básico que debió ser añadido debido a una diferencia lingüística entre el inglés y
el castellano atañe al género y al número de los adjetivos empleados como atributos. En castellano, el
género puede ser masculino o femenino, y el número puede ser singular o plural. Esto no ocurre en
inglés (por ejemplo: YELLOW FLOWER > FLOR AMARILLA; YELLOW SUN > SOL AMARILLO;
YELLOW LEAVES > HOJAS AMARILLAS; YELLOW BIRDS > PÁJAROS AMARILLOS). Por ello, se
agregó el criterio consistente en redactar todos los adjetivos, independientemente del género y número
del sustantivo-concepto, en género masculino y número singular. Así, por caso, el atributo SON RICAS
correspondiente a UVAS fue transformado en ES RICO.
El criterio recién mencionado responde a una peculiaridad del castellano que no se registra en
idioma inglés; por eso fue imprescindible añadirlo a los criterios de unificación aplicados a las normas
locales. Ahora bien: muchos otros criterios debieron ser añadidos no por esta razón sino por el hecho
de que las propuestas por McRae y sus colaboradores eran, como ya se remarcó, insuficientes para
cubrir la gran heterogeneidad propia de los cientos de atributos enunciados. En este apartado se
mencionarán sólo dos ejemplos, relativamente inocuos en lo que respecta al procesamiento ulterior de
estos datos. En cambio, en el próximo apartado se introducirá un ejemplo en el cual se pone de
manifiesto que algunas de las decisiones tomadas al diseñar criterios de unificación ejercen un
impacto considerable en el proceso de clasificación de atributos; en este caso, se tornará patente que
dichas decisiones no son triviales ni teórica ni empíricamente.
a) “Cuando un atributo consista en una acción predicable del concepto, pero su expresión sea
un verbo sin conjugar, deberá ser sustituido por la forma conjugada en indicativo presente. Por
ejemplo: en el caso de LEÓN figura RUGIR, que deberá remplazarse por RUGE.”.
b) “Agregar TIENE en caso de que un atributo consista en lo que de acuerdo a Barsalou se
clasificaría como E-Incomp o E-Excomp (componente interno o externo de una entidad,
respectivamente). Por ejemplo: si en el caso de LEÓN aparece MELENA, completar dicho atributo
añadiendo TIENE, de lo cual resultaría TIENE MELENA. Si aparecen espontáneamente expresiones
equivalentes a TIENE, tales como CON o POSEE, reemplazarlas por TIENE. Por ejemplo: CON
MELENA deberá ser sustituido por TIENE MELENA.”.
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VI Congreso Marplatense de Psicología
dadas en el marco de una tarea tal como la producción de atributos semánticos y los fenómenos
cognitivos subyacentes que engendran dichas respuestas. Éste es un clásico inconveniente de la
Psicología, que deberá seguir siendo abordado al reflexionarse sobre la confección de las Normas de
Producción de Atributos Semánticos.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
- Barsalou, L. (1999) Perceptual symbol systems. Behavioral and Brain Sciences, 22, 577-660.
- Kremer, G., & Baroni, M. (2011). A set of semantic norms for German and Italian. Behavior research
methods, 43(1), 97-109.
- McRae, K., Cree, G. S., Seidenberg, M. S., & McNorgan, C. (2005). Semantic feature production
norms for a large set of living and nonliving things. Behavior research methods, 37(4), 547-559.
- Santos, A., Chaigneau, S. E., Simmons, W. K., & Barsalou, L. W. (2011). Property generation reflects
word association and situated simulation.Language and Cognition, 3(1), 83-119.
- Wu, L., & Barsalou, L. W. (2009) Perceptual simulation in conceptual combination: evidence from
property generation. Acta Psychologica, 132 (2), 173 - 189.
1312
CONSULTA COMUNITARIA SOBRE
SALUD MENTAL BARRIO PINOS DE
ANCHORENA
Lourdes Fernández, Wertmüller Brian
“Psicoterapia”
“medicación, hay que tener plata, manicomios”
“tratamiento psicológico. Actividades para canalizar”
“Educación, es lo principal”
“desde la educación, desde la casa. Desde la educación de quienes de quienes están cerca de ellos”
IV. RECOMENDACIONES
- Promover la implementación de dispositivos que propicien el desarrollo de mayores canales de información sobre la significación de salud mental,
permitiendo una formación en el tema de parte de los habitantes del barrio.
- Promover dispositivos de participación comunitaria con los integrantes del barrio, con el objetivo de informar, concientizar, divulgar y esclarecer sobre las
problemáticas en salud mental.
- Generar un taller que permita la difusión y discusión sobre los lugares, y medios para los cuidados de las personas con problemas de salud mental.
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Proyecto específico de Promoción de Derechos y prevención de la
violencia de género y prevención de la violencia en niños, niñas y
adolescentes.
EJES
COMUNIDAD EDUCATIVA
NIÑOS
Buzzella, Paola
Monin, Jorgelina Vanesa
Rodrigo, Maria Julia
Zarza, Sabrina
Facultad de Psicología UNMDP
1314
1315
Facultad de Psicología
Universidad Nacional de Mar del Plata
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación
Argentina
Introducción
Las normas de producción de atributos semánticos proveen valiosa información acerca del funcionamiento y la estructura de la memoria semántica.
Actualmente existen normas para varios idiomas. El presente trabajo se desarrolla a partir de la pregunta acerca del grado de solapamiento existente entre los
atributos enunciados frente a un mismo concepto por hablantes de idiomas diversos; dicha pregunta se enmarca en el problema acerca de la vinculación entre las
representaciones léxicas y el conocimiento conceptual (para una revisión, véase Vigliocco y Vinson, 2007). Cabe señalar que Kremer y Baroni (2011) han
abordado interrogantes similares valiéndose también de normas de producción de atributos semánticos (en alemán, inglés e italiano, es su caso); pero estos
investigadores efectuaron la comparación de los tipos de atributos enunciados, y no el contenido semántico de los mismos. En el marco del presente trabajo, se
establecerá una comparación entre un subconjunto de los conceptos que componen las normas confeccionadas localmente en castellano rioplatense (Vivas,
Comesaña, García Coni, Vivas y Yerro, 2011) y las elaboradas en inglés (McRae, Cree, Seidenberg y McNorgan, 2005). Específicamente, se comparará el
contenido semántico de los atributos y su frecuencia de producción.
Metodología
Materiales: se extrajeron 30 conceptos junto con sus atributos de las normas de producción de atributos semánticos en castellano rioplatense, así como los
correspondientes 30 conceptos con sus atributos de las normas en idioma inglés. Procedimiento: se generó un vector para cada uno de los conceptos en ambos
idiomas. En cada vector, se plasmaron los atributos definidores de cada concepto, ordenados según su frecuencia de producción (siempre y cuando fuera igual o
mayor a 5). A continuación, se procedió a comparar los vectores obtenidos: para cada concepto, se cotejó cada vector en castellano con su correspondiente en
inglés. Para ello, se calculó la distancia semántica con la técnica geométrica de comparación de vectores en el espacio euclidiano n-dimensional usual a partir del
ángulo formado entre los mismos, representando el paralelismo de vectores el caso de mayor semejanza y la ortogonalidad el de mayor diferencia. El cálculo de
dicho ángulo se realizó mediante la fórmula estándar de cociente entre el producto interno (método usual, componente a componente) de los vectores y el
producto de sus normas. Cabe aclarar que la idea de medir la distancia semántica mediante este procedimiento fue propuesta originalmente por Kintsch (2001).
Hay que destacar que este método ya ha sido probado con alto grado de efectividad en investigaciones previas (Zapico y Vivas, 2014).
Resultados
Concepto en español Concepto en inglés Distancia semántica Concepto en español Concepto en inglés Distancia semántica Concepto en español Concepto en inglés Distancia semántica
Araña Spider 0,55 Banana Banana 0,66 Auto Car 0,6
Ballena Whale 0,58 Cebolla Onion 0,5 Avión Airpline 0,65
Caballo Horse 0,54 Manzana Apple 0,58 Bicicleta Bike 0,53
Cisne Swan 0,66 Frutilla Strawberry 0,54 Moto Motorcycle 0,65
Conejo Rabbit 0,51 Tomate Tomatoe 0,55 Tren Train 0,44
Gato Cat 0,57 Destornillador Screwdriver 0,57 Cama Bed 0,59
Lechuza Owl 0,52 Martillo Hammer 0,49 Mesa Table 0,55
Mariposa Butterfly 0,53 Hacha Axe 0,6 Silla Chair 0,61
Perro Dog 0,6 Pala Shovel 0,63 Escritorio Desk 0,62
Tigre Tiger 0,51 Rastrillo Rake 0,6 Armario Cabinet 0,45
Un valor de distancia semántica de 0,4 indica que dos vectores son similares; a partir de dicho valor, aumenta gradualmente la similitud. Así, los resultados
indican que existe un solapamiento considerable entre el contenido semántico y la frecuencia de los atributos empleados en ambos idiomas para definir los
conceptos en cuestión. No obstante, puede advertirse también que el solapamiento no es total (distancia semántica = 1) en ningún caso, y que no excede el
valor 0,66; por lo tanto, la similitud semántica es en la mayoría de los casos moderada/moderada-alta.
Discusión
Se observó una similitud moderada/moderada-alta entre los atributos de ambas normas. Estos resultados abonarían la hipótesis de acuerdo con la cual el sistema
lexical incide escasamente sobre la estructura conceptual de la memoria semántica. Esta conclusión converge en buena medida con aquella a la que arribaron
Kremer y Baroni (2011), según quienes “(…) no hay evidencia de efectos lingüísticos sobre la producción de descripciones de conceptos. Esto sugiere que la tarea
de descripción de conceptos principalmente accede a representaciones conceptuales independientes del lenguaje en la memoria semántica.”. De todos modos, es
necesario considerar las siguientes cuestiones a la hora de evaluar el grado de apoyo que los resultados hallados ofrecen a la mencionada hipótesis: a) la cantidad
de conceptos comparados es reducida; b) todos los conceptos en cuestión aluden a entidades concretas, siendo plausible encontrar divergencias notorias entre
hablantes de diversas lenguas en el caso de conceptos abstractos; c) los dos idiomas considerados tienen una misma raíz: la indoeuropea; podría estimarse que
surgirían disimilitudes más significativas si se cotejaran idiomas de raíces diferentes; d) las instrucciones mismas de la tarea de producción de atributos
semánticos inducen un sesgo que favorece la homogeneidad interlingüística de las respuestas. Estos interrogantes podrían orientar futuras investigaciones.
Referencias
Kintsch, W. (2001). Predication. Cognitive Science, 25, 173-202
Kremer, G., & Baroni, M. (2011). A set of semantic norms for German and Italian. Behavior Research Methods, 43 (1), 97-109.
McRae, K., Cree, G., Seidenberg, M., & McNorgan, C. (2005). Semantic feature production norms for a large set of living and nonliving things. Behavior Research Methods, 37, 547- 559.
Murphy, G. L. (2002). The Big Book of Concepts. Cambridge, Massachusetts. London: MIT Press.
Vigliocco, G., & Vinson, D.P. (2007). Semantic Representation. Handbook of Psycholinguistics. Oxford: Oxford University Press.
Vivas, J., Comesaña, A., García Coni. A. Vivas, L. y Yerro, M. (2011). Distribución de los atributos semánticos en función del tipo de categoría y descripción del campo semántico. En C. Minzi y V. Lemos
(Comps.) Psicología y Otras Ciencias del Comportamiento. BA: Ed. UAP-CIIPME-CONICET. Vol. 1, 311-334.
. Zapico, M. G. y Vivas, J. (2014) Synonymy as a particular case of semántic distance. Encontros Bibli: revista eletrônica de biblioteconomia e ciência da informação, 19 (40), 253-266. 1316
1317
El prejuicio hacia los indígenas y su relación con la
orientación a la dominancia social
Joaquín Ungaretti, Edgardo Etchezahar & Alicia Barreiro
(Universidad de Buenos Aires - CONICET)
jungaretti@psi.uba.ar
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
A fines del siglo XIX (1874-1885) el Estado argentino llevó a cabo una Se procedió a realizar un análisis factorial exploratorio (KMO=.773;
campaña militar denominada “Conquista del Desierto”, avanzando sobre Barttlet: p<.001) por componentes principales y rotación varimax, con los 20
territorio que hasta el momento se encontraba habitado por indígenas. Este ítems de la escala de Prejuicio Sutil y Manifiesto hacia indígenas (Tabla 1).
período de organización nacional y expansión territorial se basó en la
masacre y esclavización de los grupos indígenas. Aquellos que lograron
sobrevivir fueron forzados a negar su cultura, asimilándose a la de quienes
los dominaron, volviéndose “invisibles” como grupo social para los habitantes
de las ciudades “criollas” o “blancas”, fundadas durante la “conquista” (Del
Río, 2005).
Si bien desde ese entonces los distintos grupos indígenas en algunos
momentos se organizaron para reclamar sus derechos, su invisibilización
para el resto de la sociedad se ha mantenido a través de los años (Valko,
2012). En las últimas décadas las distintas comunidades cobraron mayor
visibilidad y lograron notorios avances, sobre todo en el reconocimiento de
sus derechos. Sin embargo, las comunidades indígenas permanecen
acosadas por la pobreza, el racismo y la exclusión social (Sarasola, 2010).
De esta manera, los pueblos fundados durante la conquista del
desierto hoy conviven con diferentes niveles de conflictividad entre
comunidades indígenas que reclaman la reparación de las injusticias sufridas
y descendientes de los militares que participaron en dicho proceso o de
inmigrantes europeos que llegaron para poblar las tierras ocupadas durante
dicho proceso histórico (Nagy, 2008).
En este marco, el principal objetivo de este estudio fue indagar las
formas manifiestas y sutiles del prejuicio hacia la población indígena
(Pettigrew & Meertens, 1995) en los habitantes de un pueblo fundado
Posteriormente se realizó un análisis factorial confirmatorio para el
durante la conquista. Debido a que, de acuerdo a estudios previos, mientras
modelo de dos dimensiones correlacionadas, cuyos resultados fueron
que el prejuicio manifiesto refiere a aquellas formas tradicionales, directas y
adecuados: S-B / X2(df) = 1,53; NNFI = .91; CFI = .94; Δ2 = .94; RMSEA =
cerradas de expresión de actitudes negativas hacia grupos minoritarios, el
.049.
prejuicio sutil se expresa de una manera fría, distante e indirecta.
Por último, se llevaron a cabo una serie de correlaciones entre el
Además, en el marco del estudio de as relaciones intergrupales, estas prejuicio sutil (PS), el prejuicio manifiesto (PM) y la orientación a la
formas de expresión del prejuicio podrían ser comprendidas a partir de la dominancia social (SDO) (Tabla 2).
orientación a la dominancia social (en adelante SDO), la cual explica el
deseo de ciertos individuos por mantener la desigualdad social a partir de la
valoración jerárquica de los diferentes grupos sociales que conforman una
sociedad (Sidanius & Pratto, 2009). Esto permite que los grupos dominantes
puedan minimizar o anular el conflicto y disfrutar de los privilegios y el poder
que les permite mantener su posición frente a los grupos subordinados.
OBJETIVOS
De acuerdo a lo expuesto, el objetivo principal de este estudio fue DISCUSIÓN
analizar las relaciones entre el prejuicio sutil y manifiesto hacia indígenas y la
orientación a la dominancia social en una muestra de ciudadanos del interior De acuerdo a los resultados obtenidos, se obtuvo una medida válida y
de la provincia de Buenos Aires donde habita una comunidad Mapuche en confiable para evaluar las dimensiones sutiles y manifiestas del prejuicio hacia
proceso de comunalización. población indígena. Además, se observó que solo el prejuicio manifiesto
presentó asociaciones significativas con la orientación a la dominancia social.
MÉTODO Este hallazgo es consistente con los estudios previos sobre el tema y expresa
una situación de conflicto intergrupal en la localidad donde fueron
Diseño y participantes recolectados los datos. En este sentido, la presencia de una comunidad
Se llevó a cabo un estudio ex post facto prospectivo de grupo único mapuche en proceso de comunalización, amenazaría el sostenimiento de la
(Montero & León, 2007). Participaron del estudio 249 sujetos de ambos desigualdad social histórica entre ambos grupos, dando como resultado
sexos (57,2% mujeres y 42,8% hombres), seleccionados por medio de un actitudes negativas manifiestas hacia este colectivo minoritario.
muestreo no probabilístico, incidental, con un rango etario de entre 18 y 41 Dado que no se han hallado relaciones entre la orientación a la
años (M = 22,42; DT = 4). dominancia social y el prejuicio sutil, se sugiere que futuros trabajos evalúen
dicho constructo analizando sus relaciones con otras variables que permitan
Medidas comprender estas formas de expresión mas sutiles y encubiertas.
- Prejuicio sutil y manifiesto hacia indígenas: se realizó una adaptación REFERENCIAS PRINCIPALES
de los 20 ítems que componen la escala original (Pettigrew & Meertens, Del Río, Walter (2005) Memorias de la expropiación. Sometimiento e incorporación indígena en la Patagonia (1872-1943). Ed. Universidad
1995), para evaluar el prejuicio sutil y manifiesto hacia población indígena. de Quilmes.
Etchezahar, E., Prado-Gascó, V., Jaume, L., & Brussino, S. (2014). Validación argentina de la escala de Orientación a la Dominancia
Cada una de las sub-escalas está compuesta por 10 ítems y un formato de Social (SDO). Revista Latinoamericana de Psicología, 46 (1), 35-43.
respuesta de cinco anclajes tipo Likert. Montero, I., & León, O. G. (2007). A guide for naming research studies in Psychology. International Journal of Clinical and Health
Psychology, 7, 847-862.
Nagy. M. (2008). ¿No tan distintas? La construcción de la identidad bonaerense a través de los relatos históricos y la celebración de actos
- Orientación a la dominancia social (SDO): se utilizó una versión de la fundacionales en Trenque Lauquen y Pigüé. Trabajo presentado en las II Jornadas de Historia Regional del Oeste Bonaerense.
Pettigrew, T. F., & Meertens, R. W. (1995). Subtle and blatant prejudice in western Europe. European Journal of Social Psychology, 25, 57-
escala original (Sidanius & Pratto, 1999) adaptada y validada al contexto 75.
Sarasola, C.M. (2010). De manera sagrada y en celebración: Identidad, cosmovisión y espiritualidad en los pueblos indígenas. Buenos
argentino (Etchezahar, Prado-Gascó, Jaume, & Brussino, 2014), compuesta Aires: Biblios.
Sidanius, J., & Pratto, F. (1999). Social Dominance: An intergroup theory of social hierarchy and oppression. Cambridge: University Press.
por 10 ítems con opciones de respuestas tipo Likert de cinco anclajes. Valko, M. (2012). Los indios invisibles del Malón de la Paz. De la apoteosis al confinamiento, secuestro y destierro. Buenos Aires:
Continente.
1318
1319
Búsqueda de Sensaciones y Experiencias
Óptimas: ¿dos vías antagónicas hacia el bienestar?1
Schmidt, V.2 ; Leibovich de Figueroa, N.2 y Molina, M. F.2
1. Proyecto UBACyT 052: “Ecoevaluacion psicológica de la interfaz adolescente-adulto. Contribución de las
experiencias óptimas (flow)”. Directora Nora B. Leibovich de Figueroa. Codirectora: Schmidt, Vanina I.
Universidad de Buenos Aires.
2. UBA-CONICET
Contacto: vaninaschmidt@gmail.com
1. Introducción 4. Resultados
La Búsqueda de Sensaciones se define como “la necesidad de Tabla 1. Correlaciones Rho de Spearman entre las variables de
experiencias variadas, novedosas, intensas y/o complejas, y una Experiencia óptima y las de Búsqueda de sensaciones
tendencia a involucrarse en situaciones de riesgo para lograr Experiencia
Balance
Deformación Experiencia
desafío- Autoconciencia Absorción Control Metas
tales experiencias” (Zuckerman, 1994). Otra vía para el disfrute autotélica
habilidad
del tiempo óptima Total
Mujeres (n = 122)
podría no implicar riesgo alguno sino un estado de Experiencia Búsqueda de emociones y .09 -.05 .17 .05 -.05 .28** -.01 .14
Óptima que las personas vivencian cuando están completamen- aventuras
Búsqueda de experiencia .17 .15 -.02 .07 -.04 .01 .00 .09
te involucradas en una actividad compleja, hasta el extremo de Desinhibición .16 .04 .05 .09 .12 .11 .10 .14
olvidarse del tiempo, el contexto y la fatiga. La experiencia Búsqueda de riesgo y novedad .29** .12 .24** .17 .11 .29** .10 .30**
Varones (n = 64)
desafía las propias habilidades (Csikszentmihalyi & Csikszentmi-
Búsqueda de emociones y .06 .02 -.05 -.10 -.07 .06 -.13 -.01
halyi, 1998). aventuras
Búsqueda de experiencia -.08 -.10 .14 -.14 .09 -.07 -.05 -.07
¿Puede haber relación entre ambos fenómenos o son vías inde- Desinhibición .03 .08 .07 .01 .05 -.02 -.14 .07
pendientes de disfrute y bienestar? Son escasos los estudios que Búsqueda de riesgo y novedad -.17 .06 -.07 -.20 .03 -.03 -.03 -.10
han relacionado ambas variables. Búsqueda de sensaciones total -.12 -.02 .03 -.21 .01 -.11 -.16 -.11
Muestra 0,4000
Sexo
Instrumentos -0,2000
- Csikszentmihalyi, M. & Csikszentmihalyi, I. (1988). Studies of Flow in Consciousness. (M. Csikszentmihalyi & I. Csikszentmihalyi, Eds.) (4th ed.). New York: Cambridge University Press.
6. Referencias - Jackson, S. & Eklund, H., (2002) Assessing Flow in physical activity: The Flow State Scale-2 and Dispositional Flow Scale-2.Journal of Sport & Exercise Psychology, 24(2), 133-150.
- Zuckerman, M. (1994). Behavioral expressions and biological bases of sensation seeking. N.Y.: Cambridge University Press. 1320
Facultad de Psicología
Universidad Nacional de Mar del Plata Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación
Argentina
INTRODUCCIÓN
Según la Teoría biosocial-evolutiva propuesta por Millon la personalidad es considerada como un patrón profundamente incorporado que se expresa en rasgos
cognitivos, afectivos y conductuales que persisten a lo largo del tiempo. Los estilos de personalidad son definidos como una tendencia en el individuo a actuar,
sentir o pensar de determinada manera (Millon & Davis, 2001). De esta forma las características de personalidad son parte importante en el desarrollo de
aptitudes y actitudes necesarias para el desempeño de un rol profesional e influyen en lo que se ha dado a conocer como estilo personal del profesional.
OBJETIVO
Analizar las características de personalidad predominantes en estudiantes de psicología a fin de conocer la posible
vinculación de las mismas con el rol profesional.
METODOLOGÍA
Diseño: ex post facto retrospectivo.
Muestra: 166 estudiantes de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata y 155 de la Universidad Federal de Rio Grande do Norte.
Instrumento: versión digital del Inventario Clínico Multiaxial de Millon II.
Análisis estadístico: se calcularon las puntuaciones medias en ambas poblaciones y se realizó una prueba t de student.
RESULTADOS
Tabla 1.
Medias de escalas básicas y patológicas de personalidad según país de residencia.
Argentina Brasil
CONCLUSIONES
Considerando las escalas más predominantes en ambas poblaciones es posible considerar que la escala esquizoide mantiene relación con la capacidad de
observación y de involucrarse instrumentalmente con los sentimientos del otro, posibilitando la distancia interpersonal con el paciente. La escala histriónica se
vincula con la capacidad de captar la atención brindando una apariencia de seguridad y autoconfianza, condiciones requeridas durante el vínculo terapéutico. La
escala paranoide remite a una actitud atenta y vigilante respecto del discurso, comportamiento y actitudes de los demás. Así, las características encontradas
podrían asociarse con actitudes fundamentales para el desempeño del rol del psicólogo y el sostenimiento proceso terapéutico.
REFERENCIAS
Millon, T. & Davis R. (2001). Trastornos de la personalidad en la vida moderna. Barcelona: Masson. 1321
PERFIL PSICOLÓGICO Y ACTITUDES IMPLÍCITAS DE ESTUDIANTES Y
RESIDENTES DE MEDICINA EN UN HOSPITAL UNIVERSITARIO
Rios 1
M. , Durante 2
E. , Eymann 3
A. , De Ortúzar G. 4 , & Argibay P. 1.
1 Laboratorio de Aprendizaje Biológico y Artificial (LBAL), Instituto de Ciencias Básicas y Medicina Experimental (ICBME), HIBA. 2 Servicio de
Medicina Familiar y Comunitaria ,HIBA . 3 Servicio de Clínica Pediátrica, HIBA. Hospital Italiano de Buenos Aires (HIBA). 4 Universidad Abierta Interamericana. Argentina.
marianab.rios@hospitalitaliano.org.ar
INTRODUCCIÓN
La personalidad es un patrón complejo de características psicológicas profundamente arraigadas, que son mayoritariamente inconscientes y difíciles de cambiar y que
se expresan automáticamente en casi todas las áreas del funcionamiento de los sujetos. Estos rasgos intrínsecos y generales surgen de una complicada matriz de
determinantes biológicos y aprendizajes y, en última instancia, comprenden el patrón idiosincrásico de cómo una persona siente, piensa, afronta los retos y se
comporta (Millon & Davis, 1998) (Millon, 1990). Las características psicológicas propias de cada sujeto y las actitudes implícitas, definidas como “las huellas de la
experiencia pasada introspectivamente, no identificada o erróneamente identificada que median un sentimiento favorable o desfavorable, el pensamiento o la acción
hacia un objeto social” (Banaji, 2001), determinarán la demanda emocional de quienes ejercen o estudian Medicina.
A partir de esta investigación, se buscó explorar la posible existencia de actitudes implícitas en una muestra de estudiantes y residentes de Medicina y sus estilos de
personalidad para a futuro poder predecir ciertos condicionamientos de aprendizaje a nivel emocional y relacional que ellos pudieran tener en el desarrollo de su
carrera.
OBJETIVOS
• Caracterizar a la muestra según determinadas variables sociodemográficas. • Identificar y describir los estilos de personalidad y las actitudes implícitas
• Comparar los estilos de personalidad de la muestra. relacionadas con la edad y el peso.
MATERIALES Y MÉTODOS
• N=110 sujetos de ambos sexos, que desarrollan su formación en el Hospital Italiano de Buenos Aires (HIBA).
• MIPS (Inventario Millon de Estilos de Personalidad). • IAT Peso y Edad (Test de Asociación implícita).
RESULTADOS
Variables sociodemográficas Actitudes explícitas (pre IAT) e implícitas (IAT) Perfil de personalidad
Edad
Medias de los puntajes de prevalencia del MIPS
Estudiantes Residentes Residentes Estudiantes Valor p
N 51 59 Apertura
Preservación
72,47
41,00
46,67
42,55
P<0.001
NS
Sexo Femenino 31 27 Modificación 84,85 53,04 P<0.001
Acomodación 25,59 60,53 P<0.001
Masculino 20 32 Individualismo 54,78 61,96 NS
Año en Primero 21 24 Protección
Extraversión
68,17
80,19
49,00
74,55
P<0.001
NS
curso Tercero 15 21 Introversión 41,85 40,08 NS
Sensación 71,17 45,41 P<0.001
Quinto 15 14 Intuición 44,69 52,06 NS
Tabla 1. Frecuencias de las variables sociodemográficas de los Grupos. Reflexión 65,78 37,33 P<0.001
Afectividad 48,71 62,73 P<0.01
Sistematización 91,58 47,96 P<0.001
Variables Estadísticos Estudiantes Residentes Innovación 44,08 88,53 P<0.001
Edad Mínimo 17 24 Retraimiento
Comunicatividad
36,95
54,39
49,76
82,20
P<0.01
P<0.001
Máximo 25 32 Vacilación 37,34 54,84 P<0.001
Firmeza 81,69 58,84 P<0.001
Media 20,27 28,07 Gráfico 2. Medias de las variables pre-IAT Edad. Gráfico 3. Medias de las variables IAT Edad. Discrepancia 36,64 53,69 P<0.001
Peso Mínimo 40 49 Conformismo 87,58 53,47 P<0.001
Máximo 100 115 • Se observó diferencias entre las actitudes explícitas (pre IAT edad) y las implícitas Sometimiento 30,29 56,59 P<0.001
Control 51,22 83,25 P<0.001
Media 61,63 70,88 (IAT edad) para ambos grupos. Insatisfacción 33,97 60,04 P<0.001
Concordancia 68,51 41,92 P<0.001
Altura Mínimo 1,53 1,56
Máximo 1,87 1,95 Peso Medias de los puntajes de las escalas de validez del MIPS
Residentes Estudiantes
Gráfico 4. Medias de las variables pre-IAT Peso. Gráfico 5. Medias de las variables IAT Peso.
• Se observó diferencias entre las actitudes explícitas (pre IAT peso) y las implícitas
(IAT peso) para ambos grupos.
Gráfico 1. Porcentajes de Residencias Médicas participantes.
CONCLUSIONES
• Los Estudiantes y Residentes de Medicina del Hospital Italiano de Buenos Aires presentan una preferencia automática de actitudes implícitas, según el peso y la
edad, relacionadas con el grupo al cual pertenecen (endogrupo).
• Presentan en su perfil promedio del MIPS los rasgos de personalidad:
Residentes de Medicina: apertura, modificación, sensación, sistematización, firmeza y sometimiento.
Estudiantes de Medicina: innovación, comunicatividad y control.
1322
TÍTULO: Problemas internalizantes y diferencias de género en adolescentes
AUTORES: lic Santiago Resett
E MAIL: santiago_resett@hotmail.com
PERTENENCIA INSTITUCIONAL: Universidad Argentina de la Empresa.
RESUMEN
Está bien establecido que en la adolescencia existen importantes diferencias en
los niveles de problemas internalizantes según el género (Facio y otros, 2006).
Muchos autores han explicado este hallazgo por los cambios puberales y la
hipótesis de la intensificación de género (Arnett, 2010). En la Argentina la actitud
machista ha decrecido en los últimos años y la brecha entre los sexos con
respecto al trabajo, la educación, la participación política y la libertad sexual ha
decrecido. La presente investigación tenía como propósito establecer si el nivel de
problemas internalizantes (autoestima global, depresión y ansiedad) variaban
según el género. Para ello se aplicaron medidas de problemas emocionales a una
muestra de 474 adolescentes de escuelas medias (edad media= 14,5; 47%
varones) de la provincia de Entre Ríos.
Al llevar a cabo un MANOVA con autoestima global, depresión y ansiedad como
variables dependientes y el género como factor entre sujetos, se hallaron
diferencias significativas (eta parcial al cuadrado = 6%) debido a que las mujeres
puntuaban más alto en depresión y ansiedad. Los resultados indicarían que, a
pesar de los cambios sociales, culturales y económicos ocurridos en nuestro país,
el ser mujer seguiría siendo un importante factor de riesgo para dichos problemas.
PALABRAS CLAVES
- Problemas internalizantes – Adolescentes – Género –Diferencias
1323
INTRODUCCIÓN:
-Ser mujer en adolescencia factor de riesgo para problemas emocionales
-La actitud machista ha decrecido en la Argentina
-Reducción de brecha en el trabajo, la educación, la participación política y la
libertad sexual.
OBJETIVO
-Comparar a mujeres y varones adolescentes en lo referente a la autoestima
global, depresión y ansiedad.
METODOLOGÍA
Muestra:
Muestra intencional de 474 adolescentes de escuelas medias (edad media= 14,5;
edades 12-18 años, 47% varones) de la provincia de Entre Ríos.
Instrumentos:
-Escala de autoestima global del Perfil de Autopercepción de Harter para
adolescentes. 5 preguntas con cuatro alternativas.
-Inventario de depresión para niños y adolescentes de Kovacs. 27 preguntas con 3
alternativas.
-Cuestionario de síntomas psicosomáticos de Rosenberg. Una medida de
ansiedad. 10 preguntas con 4 alternativas.
Procedimientos:
Los cuestionarios se aplicaron en horas libres. Se aseguró el anonimato y la
confidencialidad de los datos. Los datos se procesaron con el programa SPSS 18.
1324
RESULTADOS:
Tabla 1.
Medías y desvíos típicos en problemas emocionales según género
Género Desviación
Media típica N
Autoestima global varón 3,0416 0,61470 220
mujer 3,0752 0,69374 254
Total 3,0600 0,65876 474
Depresión varón 1,4455 0,27320 220
mujer 1,4912 0,27339 254
Total 1,4705 0,27398 474
Ansiedad varón 1,8035 0,64006 220
1325
CONCLUSIONES:
1326
Autores: Lic. Vuotto Andrés –Becaria Bogetti Celeste
La transmisión ético-deontológica en el área de investigación Grupo de investigación: “Psicología y Ética: Ciencia y Profesión”.
en psicología de la carrera de psicología de la Facultad de Facultad de Psicología – UNMDP
Directora: Hermosilla Ana María Co-director: Liberatore Gustavo
Psicología de la UNMDP: análisis complementario entre lo Proyecto en que se incluye: La formación en ética en la transversalidad de la
currícula de la carrera de Psicología
expresado en los PTDE y por docentes y estudiantes
Resumen
Se exponen resultados del estudio complementario entre:
Resultados
En el análisis del área se observa un
?
el cálculo de los factores TF-IDF de contenidos y bibliografía sobre temas ético-
?
deontológicos en los programas de las seis asignaturas del área de investigación. tratamiento medio de temas ético-
?la opinión de los docentes del área con respecto a la transmisión de contenidos ético- deontológicos en los PTED, estando dentro de
deontológicos en los programas y de forma actitudinal. un valor “aceptable”.
?la opinión de los estudiantes cohorte 2013-2014 con respecto a la recepción de los ? En cuanto al nivel de inclusión real en cada
contenidos que se transmiten en las asignaturas del área de investigación. cátedra más de la mitad de los auxiliares
expresaron tratar la temática en el dictado de la
Carac terísticas Metodológicas de La fo rmación ético-de ontológica en La fo rmación ético-deontológic a cátedra en la que participan. Se presenta una
los Proyectos de Investigación las asignaturas del área de de los estudiantes en las discrepancia entre lo indicado por profesores
inve stigación en la currícula de la asignaturas del áre a de
carrera de Psicología e n la UNMDP – inve stigación de la carrera de
(83%) y auxiliares (56%).
Financiada por CIN ( 2012-2013) psicología de la UNMDP – ? Los estudiantes coinciden:
Financiada por CIN (2013-2014)
- en la existencia de formación en la
Diseño Exploratorio-descriptivo Exploratorio-descriptivo temática ética en investigación [E-I] en niveles
“moderados” y “suficientes” (en 4 de las 5
Muestra Fase I: Programas 2012 de las No probabilístic a e intencional de
asignaturas de l área los estudiantes de las asignaturas asignaturas entre 80% y 100%)
del área de inve stigación cohorte - en que han recibido formación ético-
Fase II: Doce ntes de las asignaturas 2013-2014.
del áreaà no probabilística e deontológica [E-D] (entre un 66 y 100%)en las
intencional asignaturas que cursaron.
Instrumentos y té cnic as de Fase I: Cons trucción de un árbol de Combinación de escala aditiva de
? Profesores y auxiliares (100% en ambos)
recolecc ió n de datos pertenencias . Análisis de factores TF tipo Likert + pre guntas de opción consideran necesaria la inclusión de la
–IDF. múltiple. Validac ión por expertos.
formación ético-deontológica en la etapa de
Fase II: encuesta (autoadministrable formación de grado.
y cuantitativo)
? Los estudiantes en su mayoría indican que es
indispensable formación ético-deontológica en
la materia del área de investigación que
cursaron.
? Profesores y auxiliares (100% en ambos)
consideran que la formación ético-deontológica
debe ser transversal en la currícula de la carrera
de la psicología.
? Los estudiantes muestran discrepancias,
Términos 2 Términos 3
según la asignatura, en cuanto a si la formación
ético-deontológica y sobre ética en investigación
debe brindarse de manera transversal. Se
observa solo en dos asignaturas una mayoría de
respuestas que indican que la formación debería
brindarse en todas las asignaturas del área.
? En el análisis de los programas del área al
evaluar la transversalidad se confirma que la
misma no se cumple o sólo se observa en
niveles inferiores, ya que el grupo de términos
que mayor peso deberían de presentar expresa
una marcada disparidad en sus valores TF-IDF en
una comparación realizada entre las asignaturas
participantes.
1327
VI Congreso Marplatense de Psicología. La psicología como promotora de derechos. Hacia la interdisciplinariedad de las Prácticas en los escenarios actuales. 4-6, de diciembre de 2014.
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
El uso de sustancias psicoactivas varía en los distintos contextos, siendo el alcohol la más consumida a nivel La sustancia psicoactiva más consumida fue el alcohol, seguido del cannabis (Gráfico 1). Cuatro de cada diez
internacional (Smart & Ogborne, 2000). En nuestro país, el uso de sustancias psicoactivas es más frecuente en estudiantes consumieron múltiples sustancias en el último año. El uso exclusivo de una sustancia distinta del
los varones y en estudiantes universitarios con respecto a la población general (Observatorio Argentino de alcohol fue inferior al 1% (ver Gráfico 2).
Drogas, 2005; Observatorio Argentino de Drogas, 2010), con una tendencia de incremento especialmente en la El sexo y el consumo excesivo episódico de alcohol resultaron predictores del uso de múltiples sustancias (Tabla
juventud (Observatorio Argentino de Drogas, 2011). 2), Hosmer-Lemeshow, X2 = 4.088, p = .849, R2 de Nagelkerke = .10. Para los varones la probabilidad de uso
La relación entre el consumo de alcohol concurrente con otras sustancias no es clara (Smart & Ogborne, 2000) y de múltiples sustancias fue un 55% mayor que para las mujeres, mientras que el consumo excesivo episódico de
dependería del tipo de sustancia y el patrón de consumo (Midanik, Tam, & Weisner, 2007). Los jóvenes que alcohol aumentó casi tres veces la probabilidad de haber utilizado más de una sustancia psicoactiva en el último
consumen según patrones de riesgo, como el excesivo episódico, tienen más probabilidades de participar en el año.
uso de múltiples sustancias psicoactivas (Kuntsche, Rehm, & Gmel, 2004). El uso de múltiples sustancias
parece afectar a varones y mujeres por igual (Choquet, Morin, Hassler, & Ledoux, 2004; Venuti, Conroy, Landis,
& Chambliss, 2000). Esto representa un problema de importancia, ya que la mayoría de los usuarios de múltiples
sustancias psicoactivas las utilizan en la misma ocasión (Martin, Clifford, &Clapper, 1992), aún con los riesgos Gráfico 1. Prevalencia de consumo de sustancias psicoactivas. Estudiantes universitarios
que eso implica, que pueden derivar incluso en la muerte (Tanaka, 2002). En la población de estudiantes de Mar del Plata, 2014, N = 1240.
universitarios, el consumo de múltiples sustancias y el consumo excesivo episódico de alcohol se han visto
relacionados con episodios de amnesia anterógrada, que a su vez se relacionan a severas conductas 100,0
perjudiciales para la salud pública (Conde, Remaggi & Cremonte, 2014)
En resumen, estudiar la relación entre el alcohol y el uso de otras sustancias psicoactivas en los jóvenes y 90,0
especialmente los estudiantes universitarios es necesario por la alta prevalencia de consumo, y por el patrón
que caracteriza a esta población, a saber, el consumo excesivo episódico (Karam, Kypri, & Salamoun, 2007); 80,0
sumado a la falta de estudios de este tipo en nuestro contexto. Por ello, el objetivo de este trabajo es describir la
prevalencia de uso de múltiples sustancias psicoactivas y determinar en qué medida las siguientes 70,0
características resultan predictoras: el consumo excesivo episódico de alcohol, el sexo y la edad, en estudiantes
de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP). 60,0
50,0
METODOLOGÍA
40,0
Participantes. La muestra total (N = 1240) está compuesta por dos sub-muestras. En una primera etapa se
30,0
recolectaron datos de una muestra sistemática (n = 477) de estudiantes de primero a tercer año de la carrera de
Psicología de la UNMdP, durante los meses de noviembre de 2008, abril y junio de 2009. Luego se realizó un
20,0
muestreo aleatorio por conglomerados (n = 752) en asignaturas de los tres primeros años de las Facultades de
Ciencias de la Salud, Arquitectura, Ingeniería, Derecho, Ciencias Exactas y Naturales y Humanidades de la
10,0
UNMdP en los meses abril-junio de 2014. En este estudio descriptivo transversal los criterios de inclusión fueron:
estudiantes regulares, que estuvieran cursando alguna de las asignaturas seleccionadas que brindaran su ,0
consentimiento informado. Los datos descriptivos se encuentran en la Tabla 1.
Medidas. Se aplicó un cuestionario auto-administrado a fin de evaluar: Alcohol Cannabis Alucinógenos Sedantes (benzodiacepinas)
Consumo Excesivo Episódico de Alcohol (CEEA). Es un patrón de consumo que consiste en ingerir 5 o más Estimulantes tipo anfetamina Cocaína Opiaceos Otra (no recetada)
unidades estándar (cualquier bebida alcohólica con aproximadamente 11 gr de alcohol absoluto) de alcohol en
una misma ocasión. Se estableció mediante dos preguntas de frecuencia-graduada que luego se recodificaron
en una variable dicotómica (positivo/negativo), siendo positivo todo aquel que el al menos una vez al mes Gráfico 1. Prevalencia de uso de múltiple de sustancias psicoactivas vs. uso exclusivo.
consumiera según este patrón. Estudiantes universitarios de Mar del Plata, 2014, N = 1240.
Consumo de otras sustancias psicoactivas. Se estableció determinando si al menos una vez en los últimos 12
meses los participantes habían consumido alguna de las siguientes sustancias: alcohol, cannabis, alucinógenos, No Opioides Cannabis Sedantes
sedantes (benzodiacepinas), estimulantes de tipo anfetamínico, cocaína, opiáceos, y otras (excluyendo 7% 0% 0%
(benzodiacepinas)
0%
medicamentos recetados). El policonsumo (variable dicotómica, si/no) incluyó a todo aquel que al menos una
Otra (no recetada)
vez en los últimos 12 meses hubiera consumido dos o más de estas sustancias. 0%
Variables socio-demográficas. Se preguntó el sexo (variable dicotómica mujer/varón) y la edad de los
participantes en años (variable cuantitativa continua).
Procedimiento. La recolección de datos tuvo lugar en las aulas correspondiente a cada curso y una duración
aproximada de 20 min. Se requirió consentimiento informado y se garantizó el anonimato de la información
obtenida. Se les facilitó a los participantes información de contacto de los responsables del estudio información Uso múltiple
general del mismo. El estudio contó con el aval del Comité de ética del Instituto Nacional de Epidemiología en 41%
Mar del Plata.
Análisis de datos. Para establecer la prevalencia de uso de múltiples sustancias psicoactivas se realizaron
análisis descriptivos, diferenciando la prevalencia de consumo de cada sustancia, y la del uso de múltiples
sustancias, de exclusivamente una única sustancia o de ninguna. La predicción del uso de múltiples sustancias
con el consumo excesivo episódico de alcohol (valor de referencia = negativo), el sexo (valor de referencia =
mujeres) y la edad de los estudiantes se estableció mediante análisis multivariados (regresiones logísticas),
introduciendo todos los predictores juntos. Se utilizó el software SPSS 12.0 para todos los análisis.
Alcohol
Tabla 1. Características de la muestra. Estudiantes universitarios de Mar del Plata, 2014, N 52%
= 1240.
Variables % M(DE) IC 95%
Sexo
Mujer 68 66-71
Varón 32 29-34 Tabla 2. Predictores de uso de múltiples sustancias psicoactivas. Estudiantes
Estado civil = Soltero 89 87-90 Consumo excesivo episódico de alcohol .001 2.86 2.18-3.74
Consumo Excesivo Episódico de Alcohol 42 39-45 Sexo .002 1.55 1.17-2.06
Nota. IC = Intervalo de Confianza. Edad .576 1.01 .99-1.03
CONCLUSIONES
De acuerdo con lo observado en la literatura (Smart & Ogborne, 2000), el alcohol es la sustancia más consumida, aun cuando el cannabis está despenalizado para su uso. También se encontró una alta prevalencia de uso de múltiples
sustancias psicoactivas en esta población, que contrariamente a los resultados de otros estudios, no estuvo asociado a la edad pero sí al sexo (Choquet et al., 2004). Otros han indicado que no hay diferencias en el consumo pero sí en
los motivos (Venuti et al., 2000). Por razones culturales, los estudiantes de la UNMdP podrían ver traducidos estos motivos en diferencias de consumo, o que las mujeres tiendan a sub-reportar el uso de sustancias. Este trabajo tiene
implicancias prácticas. La planificación de programas de prevención de consumo de sustancias psicoactivas no suelen ser efectivas en usuarios de múltiples sustancias (Martin et al., 1992), por lo que en esta población las estrategias
de abordaje deben incluir herramientas específicas para este grupo. Por otro lado, permite pensar futuras líneas de investigación, como el uso combinado de sustancias, los motivos que lo impulsan, y patrones de consumo de
sustancias distintas al alcohol, entre otros.
Referencias
Choquet, M., Morin, D., Hassler, C., & Ledoux, S. (2004). Is alcohol, tobacco, and cannabis use as well as polydrug use increasing in France?Addictive Behaviors, 29(3), 607-614.
Conde, K., Remaggi, M. L. & Cremonte, M. (2014). Alcohol y Amnesia en Universitarios de Argentina y España: Prevalencia y Predicción. Health and Addictions Journal, 14(1), 37-46.
Karam, E., Kypri, K., & Salamoun, M. (2007). Alcohol use among college students: Aninternationalperspective.Current Opinion in Psychiatry, 20(3), 213-221. doi:10.1097/YCO.0b013e3280fa836). c
Kuntsche, E., Rehm, J., & Gmel, G. (2004). Characteristics of binge drinkers in Europe. Social Science & Medicine, 59(1), 113-127.
Martin, C. S., Clifford, P. R., & Clapper, R. L. (1992). Patterns and predictors of simultaneous and concurrent use of alcohol, tobacco, marijuana, and hallucinogens in first-year college students. Journal of Substance Abuse, 4(3), 319-326.
Midanik, L. T., Tam, T. W., & Weisner, C. (2007). Concurrent and simultaneous drug and alcohol use: Results of the 2000 national alcohol survey. Drug and Alcohol Dependence, 90(1), 72-80.
Observatorio Argentino de Drogas. (2005). Primer estudio acerca del consumo de sustancias psicoactivas en estudiantes universitarios del área metropolitana de buenos aires. Buenos Aires: La Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico.
Observatorio Argentino de Drogas. (2010). Estudio nacional en población de 12 a 65 años, sobre consumo de sustancias psicoactivas. Buenos Aires: Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico.
Observatorio Argentino de Drogas. (2011). Tendencia en el consumo de sustancias psicoactivas en argentina 2004-2010. Buenos Aires: Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico.
Smart, R. G., &Ogborne, A. C. (2000). Drug use and drinking among students in 36 countries. Addictive Behaviors, 25(3), 455-460.
Tanaka, E. (2002). Toxicological interactions between alcohol and benzodiazepines.Clinical Toxicology, 40(1), 69-75. Imagen de fondo: All You Can Feel: Images of Recreational Drugs Exposed to Film Negatives por
Sarah Schoenfeld, 2013. 1328
Venuti, J. P., Conroy, M., Landis, P., &Chambliss, C. (2000). Effects of substance use education programs: Gender differences in student substance use.
Posibles Sí Mismos: Estudio cualitativo en un grupo de
adolescentes de la Ciudad Autónma de Buenos Aires
Molina, M. F.; Raimundi, M. J.; Gimenez, M.
Institución: Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Facultad de Psicología,
Universidad de Buenos Aires (UBA). Proyecto UBACyT 052. Directora: Dra. Nora Leibovich de Figueroa.
Co-directora: Dra. Vanina Schmidt.
E-mail: fer_molina@hotmail.com
3. Método
1. Introducción
La adolescencia es una etapa de posibilidades. Es el momento 1. Participantes
en el que se crea el sí mismo en el que uno se podría convertir. Adolescentes (n = 72) de ambos sexos (70% mujeres) de una escuela privada
En la adolescencia temprana, los jóvenes empiezan a usar des- de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (M = 15.04; DE = 1.56).
cripciones más abstractas, pudiendo integrar diferentes pers-
pectivas del self: cómo son, cómo fueron, cómo quieren ser, y 2. Instrumentos
cómo se presentan al mundo (Oyserman, 2001). Es por esto que Cuestionario de los posibles sí mismos. Autores: Oyserman (2004). Adaptación:
el estudio de los Posibles Sí Mismos (PSs), es decir, el autocono- Molina, M. F. (2014). Es un cuestionario de preguntas abiertas en el que se
cimiento que hace referencia al propio potencial y futuro pide al adolescente que realice un listado de sus posibles sí mismos esperados
(Markus & Nurius, 1986) es de particular importancia en esta cuando termine el secundario.
etapa vital.
3. Análisis de datos
2. Objetivo Se realizó un análisis de contenido temático para categorizar el contenido de
Explorar y describir cómo se perciben a sí mismos cuando termi- los posibles sí mismos esperados enunciados por los adolescentes. Se realizó
nen el secundario un grupo de adolescentes de la Ciudad Autó- un conteo de frecuencias de cada categoría, de las las categorías globales y de
noma de Buenos Aires (CABA). la diversidad de áreas enunciadas por los adolescentes.
4. Resultados
Área Categoría n (%)
Ético/moral 9 (12,7) Frecuencia de respuesta en dominios generales
Descriptores personales
“una persona con una buena formación secundaria la cual trabaje” “voy a estar buscando 5 (7.0)
trabajo”
Estudios e intereses académicos
Números de dominios de PSs
25 (35.7)
“más estudioso” “estudiaría actuación o canto para llegar a ser una actriz y gran cantante”
Estilos de vida / bienes materiales 6 (8,5) 3%
“una persona que viaje mucho para conocer muchas culturas y estilos de vida” “tener mi auto”
Relación con los pares 7 (9.9)
Interpersonal
“una persona que mantiene sus amistades” “alguien con muchos amigos” 24% 1 dominio
Familia 11 (15.5)
“Parte de una familia” “voy a formar una familia con 4 hijos” 2 dominios
47%
Seres queridos 2 (2.8) 3 dominios
“muy unida a las personas que quiero” “importante y querida por algunas personas”
4 dominios
Felicidad 5 (7.0)
Satisfacción y
Metas personales
8 (11.3) 26%
“voy a ser una persona con objetivos claros” “cuando me proponga algo lo voy a cumplir”
Éxito general 7 (9.9)
“Exitosa” “Poder triunfar” “una personas feliz por sus logros”
5. Conclusión
Al igual que en otros contextos la mayoría de los adolescentes generan PSs en el dominio académico ocupa-
cional (Marshall, Young, Domene, & Zaidman-Zait, 2008; Oyserman & James, 2009). Un porcentaje importante de adolescentes desarro-
llan PSs en el dominio personal. Entre estos se destacan los que hacen referencia a la responsabilidad. Aproximadamene la mitad de los
adolescentes (53%) genera posibles sí mismos en más de dos áreas.
Markus, H., & Nurius, P. (1986). Possible Selves. American Psychologist, 41(9), 954–969. Marshall, S. K., Young, R. A., Domene, J. F., & Zaidman-Zait, A. (2008). Adolescent possible selves as jointly constructed in parent-adolescent career conversations and related activities. Identity: An
6. Referencias International Journal of Theory and Research, 8, Oyserman, D. (2001). Self-concept and identity. In A. Tesser & N. Schwarz (Eds.), Blackwell handbook of social psychology: Intraindividual processes (pp. 499–517). Massachusetts, CA: Blackwell. Oyserman, D., & James, L. (2009). Possi- 1329
ble selves: From content to process. In K. D. Markman, W. M. Klein, & J. A. Suhr (Eds.), Handbook of imagination and mental simulation (pp. 373–394). New York, NY: Taylor & Francis.
Factores motivacionales en la justificación del
sistema económico
Jaume, L. & Cervone, N.
UBA – Facultad de Psicología – Psicología Política II
lcjaume@psi.uba.ar/luiscarlosjaume@gmail.com
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
• La teoría de la justificación del sistema señala que los seres En primer lugar se procedió a analizar la escala de Necesidad de
humanos poseen una tendencia psicológica a racionalizar el Cierre Cognitivo. La confiabilidad de la escala resultó adecuada (α =
.76). En la Tabla 1 se presentan los descriptivos de los ítems.
status quo, percibiéndolo como justo, bueno, legítimo y
deseable (Jost & Hunyady, 2005). Ésa tendencia se expresa a
través de la aprobación de diferentes sistemas de creencias
tales como, la ética protestante del trabajo, la creencia en un
mundo justo y las políticas conservadoras (Jost, Blount, Pfeffer,
& Hunyadi, 2003).
• Adentrándose en la perspectiva psicológica, Jost y Hunyady
(2002) analizaron la estructura motivacional que predispone a
los individuos a justificar el status quo. Esta tendencia estaría
modulada por constructos motivacionales como la necesidad de
cierre cognitivo propuesta por Webster y Kruglanski (1994) para
referirse a la motivación de las personas por buscar y mantener
una respuesta definitiva ante un problema determinado, como
algo opuesto a la confusión, la ambigüedad y/o la
incertidumbre. Según Jost, en toda sociedad los individuos
necesitan tener ciertos conocimientos que guíen su
procesamiento de la información, les permitan tomar decisiones
y orientar sus conductas para adaptarse a la sociedad de la
mejor manera posible, es por ello que un mayor nivel de
necesidad de cierre cognitivo favorecería la justificación del
sistema económico ya que las personas con mayores niveles Los resultados principales indican asociaciones significativas y
de NCC son más propensas a seguir liderazgos autoritarios y positivas entre la necesidad de cierre cognitivo y la justificación del
conformarse con las normas sociales, así como a no aceptar la sistema económico (r = .40; p < .01).
diversidad cultural a partir de un fuerte sostenimiento de la DISCUSIÓN
desigualdad intergrupal, apoyando políticas conservadoras.
Estos aspectos favorecen a justificar la percepción de sistemas A partir de los resultados se propone que la necesidad de
sociales que favorecen la desigualdad. cierre cognitivo, es decir, las diferencias individuales en cuanto a
la aversión a la ambigüedad y la incertidumbre, así como una
• El objetivo de este trabajo fue analizar las relaciones entre la preferencia hacia las respuestas simples y contundentes, sería
justificación del sistema económico con la necesidad de cierre una de las bases cognitivas de la justificación del sistema
cognitivo. económico que favorece la desigualdad.
Se sugiere que trabajos futuros analicen la relación de la
MÉTODO
justicación del sistema económico con otros constructos
Diseño y muestra: se trabajó con un diseño no experimental motivacionales como la necesidad de cognición. Asimismo, sería
de tipo transversal. La muestra fue no probabilística, compuesta interesante realizar modelos de regresión entre estas variables
por 350 estudiantes universitarios (24,7% hombres y 75,3%
mujeres). El rango etario fue de 18 a 40 años (M = 22,02; DE = motivacionales con la tendencia hacia la justificación del
2,3). sistema.
Variables analizadas: se utilizó un instrumento REFERENCIAS PRINCIPALES
autoadministrable que evaluaba las siguientes variables:
•Hennes, E. P., Nam, H. H., Stern, C., & Jost, J. T. (2012). Not all ideologies are
created equal: Epistemic, existential, and relational needs predict system-justifying
- Necesidad de cierre cognitivo: se realizó una attitudes. Social Cognition, 30(6), 669-688.
retrotraducción inglés-español-inglés de la escala original de • Jost, J., Mahzarin R. Banaji, Brian A. Nosek(2004). A Decade of System Justification
Kruglanski & Webster (1996). Theory: Accumulated Evidence of Conscious and Unconscious Bolstering of the
Status Quo. Political Psychology Volume 25, Issue 6, 881–919.
•Kruglanski, A. W., & Webster, D. M. (1996). Motivated closing of the mind: Seizing
- Justificación del sistema económico: (ESJ; α = .77): se
and freezing. Psychological Review, 103, 263–283.
incluyó la adaptación a nuestro contexto realizada por Jaume,
Etchezahar y Cervone (2012) de la versión original de Jost y •Liviatan, I., & Jost, J.T. (2011). System justification theory: Motivated social cognition
in the service of the status quo. Social Cognition, 29 , 231-237.
Thompson (2000). La escala está compuesta por ocho ítems
con 5 anclajes de respuesta con formato Likert 1=Totalmente de •Thorisdottir, H., & Jost, J.T. (2011). Motivated closed-mindedness mediates the effect
acuerdo a 5=Totalmente en desacuerdo. of threat on political conservatism.Political Psychology, 32, 785-811.
• Webster, M.; Arie W. Kruglanski (1997). "Cognitive and Social Consequences of the
Need for Cognitive Closure". European Review of Social Psychology 18: 133–173.
- Datos socio-demográficos: edad y sexo de los participantes.
1330
JORNADAS DE INVESTIGACION-EXTENSION
PROYECTO de INVESTIGACIÓN
ANÁLISIS DE LA INFLUENCIA DE LAS OPORTUNIDADES EDUCATIVAS
EN EL DESARROLLO DE LA CAPACIDAD EMPÁTICA
Zabala María Lucía1, López Marcela2, Aguilar María José3, Richard´s María Marta4
1 Becaria Estudiante Avanzado UNMDP, 2 Directora del proyecto de investigación Aportes al estudio del funcionamiento social. Evaluación de variables
mediadoras en mujeres con diagnóstico de Síndrome de Turner, 3Becaria Formación Superior, 4Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y
Técnicas CONICET, 1, 2, 3, 4 Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación CIMEPB, Facultad de Psicología, Universidad
Nacional de Mar del Plata
Introducción
En la última década diversas investigaciones han realizado aportes al estudio de la vinculación entre el desarrollo cognitivo y las oportunidades educativas,
definidas por el nivel de recursos y la oferta que la institución escolar brinda a los estudiantes. Fundamentando dicha definición existen ciertos criterios que
permiten categorizar a tales instituciones según su nivel de oportunidades educativas, ellos son: 1-el nivel socio-económico predominante, 2-el porcentaje
de repetidores que tuviera el colegio, 3-la tasa de ausentismo, 4-el equipamiento del colegio (biblioteca, laboratorios, sala de computación, gimnasio), 5- el
tipo de jornada simple o completa y 6-las actividades extracurriculares. En este marco es de esperar que la calidad de la enseñanza que recibe cada niño
ejerza una fuerte influencia sobre la maduración de su sistema nervioso y por ende en su proceso de aprendizaje. Diversos estudios realizados con la
finalidad de indagar dichas influencias reportaron menor rendimiento en tareas que miden procesos cognitivo-sociales en niños sometidos a ambientes
desfavorables. Un proceso integrante de la cognición social es la capacidad empática definida como una respuesta emocional que procede de la
comprensión del estado o situación de otra persona y es similar a lo que esa otra persona está sintiendo, constituyendo un recurso emocional decisivo en el
funcionamiento social adecuado. Por lo expuesto, la presente investigación se plantea como objetivo general analizar las influencias que los distintos niveles
de oportunidades educativas ejercen en el desarrollo de la capacidad empática.
METODOLOGÍA
Tipo de estudio y diseño
Se realizará un estudio descriptivo correlacional con diseño observacional ex post facto retrospectivo simple (Montero y León, 2007).
Participantes
169 niños y adolescentes con edades entre 9 y 20 años, conformando dos grupos: pre-púberes de 9-12 años y púberes de 13-20 años. Dicha muestra se
obtuvo a partir de Convenios ya establecidos por el Grupo de Investigación Comportamiento humano, genética y ambiente, con Instituciones Educativas
(primarias y secundarias) públicas y privadas de la ciudad de Mar del Plata. Las mismas fueron categorizadas en Nivel 1, 2 y 3, según los criterios de
oportunidades educativas anteriormente mencionados. La participación fue voluntaria y sujeta al consentimiento de los padres y el asentimiento de los
estudiantes. Durante el desarrollo del trabajo se respetaron los principios éticos de la investigación con seres humanos, procurándose las condiciones
necesarias para proteger la confidencialidad y actuar en beneficio de los participantes.
Métodos e instrumento
Para evaluar la capacidad empática se administró el Interpersonal Reactivity Index (IRI) de Davis (1980), en su versión adaptada al español (Mestre, Frías
y Samper, 2004).
Resultados - Discusión
Prueba T de diferencia de medias del índice general de empatía y los En cuanto al nivel primario, las puntuaciones medias obtenidas en la mayoría
subíndices en función al nivel de oportunidades educativas de los niveles de las escalas son superiores en aquellos estudiantes con un nivel de
primario y secundario. oportunidades educativas tipo 1, respecto de aquellos pertenecientes a un nivel
3, sin embargo las pruebas inferenciales no evidenciaron diferencias
estadísticamente significativas. Respecto del nivel secundario, en el cual se
compararon estudiantes con niveles de oportunidades más próximos, tipos 2 y
3, se encontró que las puntuaciones fueron superiores en todas las escalas en
el caso del nivel 3. Las diferencias fueron estadísticamente significativas en el
caso del Índice General de Empatía y de la escala afectiva Preocupación
Empática.
Durante la niñez aún no se ha consolidado la capacidad empática y la
consideración del otro como ajeno, por lo cual es esperable que la influencia de
las oportunidades educativas sea menor o se encuentre solapada. Mientras
que en la adolescencia, los cambios propios de la etapa y las formas de
interacciones complejas permiten consolidar la capacidad empática,
evidenciando la permeabilidad a las influencias del ambiente educativo
recibidas a lo largo del desarrollo. Al mismo tiempo, en el caso del nivel
secundario, cabe destacar que las influencias del contexto educacional se han
evidenciado también en el ideario propuesto por cada institución. Mientras una
de ellas estimula y promueve el desarrollo creativo desde las habilidades
Nota. NOP = Nivel de oportunidades educativas; IGE = Índice general de empatía; TP =
Toma de perspectiva; F = Fantasía; PE = Preocupación empática; MP = Malestar musicales, la otra es una escuela de educación técnica, donde se privilegia la
personal. adquisición de habilidades más relacionadas con las ciencias duras.
* p < .05 ** p < .01
PROYECCIÓN
Los resultados del proyecto profundizarán en el conocimiento de los procesos cognitivo-emocionales que subyacen al desarrollo social de las personas,
promoviendo el uso de estrategias de intervención destinadas a estimular el desarrollo psicosocial de niños y adolescentes, a partir de experiencias
escolares positivas. Asimismo posibilita arbitrar medidas de política educativa dirigidas a disminuir el impacto de las desigualdades sociales.
Referencias
Davis, M.H. (1980). A multidimensional approach to individual differences in empathy. JSAS Catalog of Selected Documents in Psychology 10, 85. 1-17.
Ferreres, A., Abusamra, V., & Squillace, M. (2010). Comprensión de textos y oportunidades educativas. In Actas del Congreso Iberoamericano de Educación.
Mestre, V, Frias, M.D., & Samper, P. (2004). La medida de la empatía: Análisis del interpersonal reactivity index. Psicothema, 16(2), 255-260.
Montero, I., & León, O. (2007). A guide for naming research studies in Psychology. International Journal of Clinical and Health Psychology, 7(3), 847-862. 1331
Mujeres y jerarquías docentes. ¿Distribución desigual?.
Negri, Griselda. Strangi, Erica. Escobar Viré Maximiliano, Alcaraz, Guadalupe
Universidad Nacional de Luján
INTRODUCCIÓN
Nuestra investigación se aboca a una problemática de amplias y diversas manifestaciones sociales, como es la desigualdad de oportunidades entre
varones y mujeres en los distintos ámbitos institucionales. En esta oportunidad, la indagación se realiza sobre el espacio institucional de la universidad
pública en nuestro país, y el período analizado va desde la época de la crisis política y social del año 2001 hasta la actualidad. El caso abordado aquí es el
de la Universidad Nacional de Luján. Nuestra investigación se propone responder, desde la perspectiva de género, a ciertos interrogantes específicos
vinculados al acceso de las mujeres a cargos jerárquicos, en dicha universidad, y a la distribución de los géneros en tales cargos. Las preguntas precisas
que nos hemos planteado son: ¿ocupan las mujeres los mismos cargos que los varones en la jerarquía docente? ¿Se distribuyen de la misma manera
varones y mujeres en los Departamentos Académicos de esta Universidad?
RESULTADOS (cont.)
Departamento de Tecnología
En este Departamento, la Dirección ha quedado a cargo de una profesora
OBJETIVOS mujer desde 2006, como puede verse en el cuadro N° 9
1. Comparar la composición y estructura de la planta docente rentada de
los Departamentos de Educación y Tecnología en distintos momentos Profesores del Departamento de Tecnología por cargo y sexo (en
comprendidos entre 2001 y 2010. porcentaje)
Años
2. Analizar los resultados obtenidos desde una perspectiva de género. Cargo 2002 2006 2010
Titulares Asociados/as Adjuntos/as
Año M V M V M V
La selección de los Departamentos de Educación y de Tecnología se Muje 2002 21.4 78.6 37.5 62.5 38.1 61.9
justifica en virtud de que se consideran como los dos polos más Director/a Varón Mujer r 2005 27.3 72.7 50.0 50.0 36.2 63.8
Dirección
diferenciados, en relación a las carreras y las profesiones de los docentes. Varó 2006 20.0 80.0 50.0 50.0 41.5 58.5
Vicedirector/a 2009 11.1 88.9 50.0 50.0 41.9 58.1
Mujer Varón n
2010 12.5 87.5 40.0 60.0 42.9 57.1
MATERIALES Y MÉTODOS
Se revela un mayor acceso de profesoras mujeres a la Dirección de las
La unidad de análisis es cada uno de los/las docentes de los Secretarías y de las Divisiones del Departamento. En estas últimas, la
departamentos seleccionados. dirección era tradicionalmente ocupada por varones, primacía que disminuye
Las variables analizadas son: sexo, cargo, dedicación y participación en considerablemente en el período analizado.
órganos unipersonales de gobierno del Departamento. En cuanto a la dedicación a la docencia en este Departamento, el
Empleamos el indicador R (Relación), que definimos del siguiente modo: comportamiento de sus docentes varía con respecto a Educación; se
R = Relación = Nº de varones/ Nº de mujeres (similar al índice de observa mayor porcentaje de mujeres con dedicación exclusiva, mientras
masculinidad) que las dedicaciones semiexclusivas y las simples las detentan varones.
Interpretación del valor R: Esto se observa en forma aún más marcada en 2010 que en 2002.
Valor 0 indica que son todas mujeres, no hay ningún varón. Cuadro N° 13 - Profesores por dedicación y sexo. Año 2002 y 2010
Valor 1 indica que hay igual cantidad de mujeres que de varones es decir
paridad.
Totales por
Valor menor que 1 indica que hay más mujeres que varones. dedicación Relació
Valor mayor que 1 indica que hay más varones que mujeres. Dedicación
(%) n V/M
M V
A los fines de la interpretación, en los casos en que el valor sea menor o Exclusiva 52.9 47.1 0.89
Semiexcl
mayor que 1, se multiplica la cantidad obtenida por 10 y se relaciona a 10 2002
usiva 36.4 63.6 1.75
mujeres. Por ejemplo: si el valor es 0,75, al multiplicarlo por 10 es 7,5 y se Simple 35.8 64.2 1.79
interpreta que hay 7,5 varones cada 10 mujeres; si el valor es 4, al Exclusiva 59.5 40.5 0.68
Semiexcl
multiplicarlo por 10 es 40 y se interpreta que hay 40 hombres por cada 10 2010
usiva 21.6 78.4 3.63
mujeres. Simple 40.5 59.5 1.47
La reflexión que lleva este análisis, es pensar que los varones tienen a la
RESULTADOS universidad por una cuestión de prestigio, con poca dedicación,
La planta docente total de la UNLu se ha incrementado en un 30% entre manteniendo actividad en el sector privado que es más rentable. Las
2002 y 2010. Sin embargo, la composición por sexo de la misma se ha mujeres, en cambio lo mantienen como única actividad laboral y pública.
mantenido estable, como puede verse en el cuadro N° 1. Esta podría ser una de las razones que hacen que cada vez más mujeres
Asimismo, el cuadro N° 3 muestra que los cargos de profesores han sido ocupen cargos de dirección y decisión en este Departamento
siempre detentados mayoritariamente por varones, mientras que las
mujeres han tenido superioridad numérica en los cargos de auxiliares. CONCLUSIONES
1332
Mujeres y jerarquías docentes. ¿Distribución desigual?.
Negri, Griselda. Strangi, Erica. Escobar Viré Maximiliano, Alcaraz, Guadalupe
Universidad Nacional de Luján
INTRODUCCIÓN
Nuestra investigación se aboca a una problemática de amplias y diversas manifestaciones sociales, como es la desigualdad de oportunidades entre
varones y mujeres en los distintos ámbitos institucionales. En esta oportunidad, la indagación se realiza sobre el espacio institucional de la universidad
pública en nuestro país, y el período analizado va desde la época de la crisis política y social del año 2001 hasta la actualidad. El caso abordado aquí es el
de la Universidad Nacional de Luján. Nuestra investigación se propone responder, desde la perspectiva de género, a ciertos interrogantes específicos
vinculados al acceso de las mujeres a cargos jerárquicos, en dicha universidad, y a la distribución de los géneros en tales cargos. Las preguntas precisas
que nos hemos planteado son: ¿ocupan las mujeres los mismos cargos que los varones en la jerarquía docente? ¿Se distribuyen de la misma manera
varones y mujeres en los Departamentos Académicos de esta Universidad?
RESULTADOS (cont.)
Departamento de Tecnología
En este Departamento, la Dirección ha quedado a cargo de una profesora
OBJETIVOS mujer desde 2006, como puede verse en el cuadro N° 9
1. Comparar la composición y estructura de la planta docente rentada de
los Departamentos de Educación y Tecnología en distintos momentos Profesores del Departamento de Tecnología por cargo y sexo (en
comprendidos entre 2001 y 2010. porcentaje)
Años
2. Analizar los resultados obtenidos desde una perspectiva de género. Cargo 2002 2006 2010
Titulares Asociados/as Adjuntos/as
Año M V M V M V
La selección de los Departamentos de Educación y de Tecnología se Muje 2002 21.4 78.6 37.5 62.5 38.1 61.9
justifica en virtud de que se consideran como los dos polos más Director/a Varón Mujer r 2005 27.3 72.7 50.0 50.0 36.2 63.8
Dirección
diferenciados, en relación a las carreras y las profesiones de los docentes. Varó 2006 20.0 80.0 50.0 50.0 41.5 58.5
Vicedirector/a 2009 11.1 88.9 50.0 50.0 41.9 58.1
Mujer Varón n
2010 12.5 87.5 40.0 60.0 42.9 57.1
MATERIALES Y MÉTODOS
Se revela un mayor acceso de profesoras mujeres a la Dirección de las
La unidad de análisis es cada uno de los/las docentes de los Secretarías y de las Divisiones del Departamento. En estas últimas, la
departamentos seleccionados. dirección era tradicionalmente ocupada por varones, primacía que disminuye
Las variables analizadas son: sexo, cargo, dedicación y participación en considerablemente en el período analizado.
órganos unipersonales de gobierno del Departamento. En cuanto a la dedicación a la docencia en este Departamento, el
Empleamos el indicador R (Relación), que definimos del siguiente modo: comportamiento de sus docentes varía con respecto a Educación; se
R = Relación = Nº de varones/ Nº de mujeres (similar al índice de observa mayor porcentaje de mujeres con dedicación exclusiva, mientras
masculinidad) que las dedicaciones semiexclusivas y las simples las detentan varones.
Interpretación del valor R: Esto se observa en forma aún más marcada en 2010 que en 2002.
Valor 0 indica que son todas mujeres, no hay ningún varón. Cuadro N° 13 - Profesores por dedicación y sexo. Año 2002 y 2010
Valor 1 indica que hay igual cantidad de mujeres que de varones es decir
paridad.
Totales por
Valor menor que 1 indica que hay más mujeres que varones. dedicación Relació
Valor mayor que 1 indica que hay más varones que mujeres. Dedicación
(%) n V/M
M V
A los fines de la interpretación, en los casos en que el valor sea menor o Exclusiva 52.9 47.1 0.89
Semiexcl
mayor que 1, se multiplica la cantidad obtenida por 10 y se relaciona a 10 2002
usiva 36.4 63.6 1.75
mujeres. Por ejemplo: si el valor es 0,75, al multiplicarlo por 10 es 7,5 y se Simple 35.8 64.2 1.79
interpreta que hay 7,5 varones cada 10 mujeres; si el valor es 4, al Exclusiva 59.5 40.5 0.68
Semiexcl
multiplicarlo por 10 es 40 y se interpreta que hay 40 hombres por cada 10 2010
usiva 21.6 78.4 3.63
mujeres. Simple 40.5 59.5 1.47
La reflexión que lleva este análisis, es pensar que los varones tienen a la
RESULTADOS universidad por una cuestión de prestigio, con poca dedicación,
La planta docente total de la UNLu se ha incrementado en un 30% entre manteniendo actividad en el sector privado que es más rentable. Las
2002 y 2010. Sin embargo, la composición por sexo de la misma se ha mujeres, en cambio lo mantienen como única actividad laboral y pública.
mantenido estable, como puede verse en el cuadro N° 1. Esta podría ser una de las razones que hacen que cada vez más mujeres
Asimismo, el cuadro N° 3 muestra que los cargos de profesores han sido ocupen cargos de dirección y decisión en este Departamento
siempre detentados mayoritariamente por varones, mientras que las
mujeres han tenido superioridad numérica en los cargos de auxiliares. CONCLUSIONES
1333
Miedo al rechazo en la adolescencia. Su relación
con consumo social de alcohol 1
Schmidt, Vanina 2; Gimenez, Mariel 2; Molina, M. F. 2; Leibovich de Figueroa, N. 2.
1. Proyecto UBACyT 052: “Ecoevaluacion psicológica de la interfaz adolescente-adulto. Contribución de las
experiencias óptimas (flow)”. Directora Nora B. Leibovich de Figueroa. Codirectora: Schmidt, Vanina I.
Universidad de Buenos Aires.
2. Ubacyt - CONICET.
Contacto: vaninaschmidt@gmail.com
como el conjunto de prácticas de consumo que tienen 2. Para que un fin de semana sea divertido es necesario 48 %
lugar en escenarios de fiestas o salidas de fines de semana, tener bebidas alcohólicas
en un contexto de interacción social, asociado a la diversión
3. Suelo consumir grandes cantidades de alcohol 42 %
y al consumo excesivo de esta sustancia.
Pertenecer a un grupo, es una de las principales tareas y ne- 4. Cuando estoy con mis amigos el alcohol no puede 53 %
faltar
cesidades de los adolescentes. En nuestro contexto, se han
identificado dos componentes igualmente relevantes de la 5. Suelo ir a fiestas donde puede pasar de todo 56 %
necesidad de pertenencia: necesidad de pertenecer y
miedo al rechazo (Leibovich y Schmidt, 2014, enviado).
Objetivo general: explorar la relación entre consumo social Tabla 2. Correlaciones Rho de Spearman para explorar las
de alcohol y la necesidad de pertenencia. asociaciones entre CSA, Necesidad de Pertenecer y Miedo al
Rechazo.
2. Método
Necesidad de Necesidad Miedo al
Participantes Pertenencia de rechazo
Total pertenecer
283 adolescentes del AMBA, con una edad promedio de Consumo
14.7 años (DE =1.6) de los cuales el 60% fueron mujeres. social de -,02 ,03 -,14*
alcohol
Resultados
Preocupaciones laborales
La Figura 1 resumen las categorías que emergen como respuesta a la
pregunta abierta. En la Tabla 1 pueden observarse las principales fuentes
de preocupación laboral, ordenadas por importancia, de acuerdo con las
respuestas al cuestionario cerrado. En ambos casos, la inseguridad, el
tránsito, y las condiciones de trabajo se ubican entre las principales
preocupaciones.
Discusión
En general, las principales fuentes de preocupación laboral se
asociaron a el delito y la inseguridad, el estado del tránsito, las
condiciones laborales, los problemas de interacción social, los
efectos del trabajo sobre la salud y la vida personal, y la falta de
presencia del Estado en materia de regulación y control. Frente a esta
situación, se observa que las principales estrategias de afrontamiento que
utilizan los choferes son principalmente de carácter individual y paliativo,
orientadas ya sea a modificar la percepción de los problemas o a mitigar
sus efectos pero sin modificar sus determinantes. En general, se trata de
problemáticas difíciles de modificar si se adoptan perspectivas
individuales.
Resulta llamativo que los choferes no recurran a estrategias colectivas,
como la participación o el reclamo gremial, lo cual sería conveniente, no
solo para que la responsabilidad del mejoramiento de las condiciones
laborales non recaiga exclusivamente sobre el trabajador de manera
aislada sino también teniendo en cuenta que la orientación hacia el
colectivismo de los empleados actúa como una variable moderadora sobre
el estrés laboral (Omar, 2014).
Referencias
Ledesma, R.; Poó, F. & Peralta, M. (2008) Condiciones de trabajo y estado de salud en conductores de servicio de taxi. Revista del Instituto de Investigaciones de la Facultad de Psicología, 13, 83-103.
Berraho, M.; Nejjari, C.; Elrhazi, K.; El Fakir, S.; Tessier, J. F, Ouedraogo, N.; Mekouar, S. & Raiss, N. (2006). Measuring levels of professionally related stress in taxi drivers in Fes, Morocco. La Santé publique, 18, 375-87.
1335
Temmoev, D. CH. (1996). Occupational extreme stress factors determining psychological disorders in drivers. Meditsina Truda I Promyshlennaia Ekologia, 8, 12-4.
1336
1337
1338
1339
1340
1341
Prueba
** p<0,01 T
*** p<0,05
p<0,01
* p<0,05
OBJETIVO
INTRODUCCIÓN
Determinar la existencia de diferencias de género en la
En el presente trabajo se exploran las diferencias de género en la frecuencia de uso de Estrategias frecuencia de uso de Estrategias de Aprendizaje en estudiantes
de Aprendizaje de estudiantes universitarios de la carrera de Licenciatura en Psicología de la de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar
Universidad Nacional de Mar del Plata. Las estrategias de aprendizaje son conceptualizadas como el del Plata.
conjunto organizado, consciente e intencional de lo que hace el aprendiz para lograr con eficacia un
objetivo de aprendizaje en un contexto social dado. (Gargallo, Suárez-Rodriguez y Pérez-Perez,
2009)
La investigación sobre las diferencias de género en el uso de estrategias de aprendizaje no es
concluyente, por lo que resulta necesario profundizar en la forma en que estas variables podrían ser
relacionadas. El presente trabajo intenta explorar mediante la aplicación del cuestionario
CEVEAPEU si existen diferencias en la frecuencia de utilización estrategias de aprendizaje
diferenciadas por género. METODOLOGÍA
El instrumento evalúa dos grandes grupos de estrategias de aprendizaje:
• Estrategias Afectivas, de Apoyo y Control, que incluyen a las estrategias afectivas, motivacionales,
Se trabajó con una muestra de conveniencia de 206 alumnos
metacognitivas, control del contexto, interacción social y manejo de recursos;
regulares (166 mujeres y 40 hombres), de la Licenciatura en
• Estrategias relacionadas con el Procesamiento de la información, que contienen las estrategias de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata,
búsqueda y selección, de procesamiento y uso de la información Argentina. Se aplicó el Cuestionario de Evaluación de las
Estrategias de Aprendizaje de los Estudiantes Universitarios
(CEVEAPEU)
Resultados
Femenino Masculino
Escalas y subescalas de estrategias
N=166 n=40 T
de aprendizaje
Media D.S, Media D.S.
Afectivas, de Apoyo y Control 3,62 0,26 3,53 0,27 1,91*
Procesamiento de Información 3,47 0,32 3,42 0,35 0,74
Motivacionales 3,70 0,32 3,66 0,29 0,79
Componentes Afectivos 3,38 0,44 3,26 0,43 1,53
Metacognitivas 3,51 0,39 3,44 0,51 1,03
Control del contexto, interacción social y
3,78 0,45 3,54 0,57 2,80**
manejo de recursos
Búsqueda y Selección de información 3,26 0,50 3,41 0,44 -1,74
Procesamiento y Uso de la información 3,52 0,34 3,42 0,39 1,47
* p<0,05
** p<0,01
CONCLUSIONES
En el presente estudio se encontraron diferencias estadísticamente significativas según el género, para las estrategias de aprendizaje afectivas, de apoyo y control de contexto,
que son las responsables de la puesta en marcha y mantenimiento del proceso de aprendizaje, como así, del control del proceso.
De acuerdo a los datos encontrados, existe una tendencia de las mujeres a utilizar con mayor frecuencia, específicamente estrategias que implican control de contexto (búsqueda
activa de condiciones adecuadas, ambientales y temporales de estudio) e interacción social y manejo de recursos (búsqueda de interacción con pares a los fines de mejorar
condiciones de aprendizaje).
Lo expuesto implicaría, por contrapartida, que se observa una tendencia masculina a una tener menor organización activa del contexto de estudio, como así también, a utilizar
con menor frecuencia estrategias, que implican menor interacción social con pares.
A pesar de que las diferencias no resultan estadísticamente significativas, es interesante señalar que los estudiantes de sexo masculino tienden a utilizar con mayor frecuencia
que las mujeres, las estrategias de búsqueda y selección de información, que implican conocimiento de fuentes y búsqueda de información y selección de información.
El presente trabajo es de carácter exploratorio, por lo que sus resultados no terminan de ser concluyentes, debido al pequeño tamaño de la muestra, a desbalance entre el
número de sujetos de cada sexo y a las características idiosincráticas de los estudiantes de psicología. Resultan necesarios estudios adicionales, que permitan obtener
información adicional vinculada a la frecuencia de uso de determinadas estrategias y provean datos orientados a discriminar si estas diferencias se deben exclusivamente al
género o son producto de otro tipo de variables.
1342
CONSULTA COMUNITARIA
FACULTAD DE
SOBRE SALUD MENTAL
PSICOLOGÍA
Cátedra de Psicología Chamorro, Gina - Marzilli, Jennifer
Social y Comunitaria
IV. RECOMENDACIONES
1)Fortalecer el conocimiento acerca de la Salud Mental
2)Fomentar la participación colectiva acerca de los problemas de Salud Mental
3)Difusión de información acerca de las diferentes posibilidades de atención y asistencia en torno a las afecciones/afectaciones de salud mental
4)Concientizar acerca de los factores que causan problemas de Salud Mental
5)De construir los prejuicios acerca de la Salud Mental
6)Difundir conocimientos actuales sobre los padecimientos mentales, los tratamientos y los pronósticos
7)Promoción de la ley de Salud mental
1343
1344
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
Cátedra de Psicología
Institucional y Comunitaria
1345
El Cuidador Domiciliario del siglo XXI y sus Formas de organización social
Miori, Elsa
Larrubia, Andrea
Esp. Scolni Mirta
La realidad social demuestra que la población de adultos mayores dependientes y
personas con discapacidades van en aumento. De esa manera, las necesidades de
cuidado y atención personal son cada vez mayores. La sociedad está requiriendo
producir un gran número de cambios para poder reformar y potenciar servicios
sociales y sanitarios de modo que resulten adecuados, suficientes y de calidad para
dicha población. La necesidad de cuidado en las personas dependientes requiere de
la ayuda de otros, para realizar las actividades de la vida cotidiana. Esta situación
nos permite visualizar un nuevo paradigma de uno de los actores fundamentales
del sistema de cuidados: “el cuidador domiciliario del siglo xxi y sus formas de
organización social
NUESTROS OBJETIVOS
ACTIVIDADES REALIZADAS
a) Para los Adultos Mayores: Optimizar la tarea cursos de capacitación, convenios con diferentes
específica del cuidador, que consiste en brindar un instituciones, página web de la institución,
servicio de apoyo en la vida cotidiana de los Adultos monotributo social. Obtuvieron un préstamo
Mayores. - Elevar la calidad de vida de los Adultos para la adquisición de herramientas de trabajo
Mayores. - Mantener las personas cuidadas en su Participaron como expositores en diferentes
hábitat natural (su hogar, comunidad) logrando congresos nacionales e internacionales.
conservar sus roles familiares y sociales. Dieron charlas en cursos municipales
Organizaron el Primer Encuentro de
b) De los propios prestadores de servicios (Cuidadores Cuidadores Domiciliarios de la provincia
Domiciliarios): Brindar las prestaciones de servicio con de Buenos Aires, el 2 de noviembre de 2013 en
idoneidad en forma continua y planificada, respaldada la sede de ADUM, con la participación de 180
por un trabajo profesional e interdisciplinario. - cuidadores domiciliarios de la ciudad de Mar del
Trabajar, estudiar y capacitarse transitando el camino Plata, su zona de influencia y otras ciudades de la
de la formación permanente. - Mejorar las condiciones provincia de Buenos Aires.
generales de trabajo a través de un emprendimiento Participaron en jornadas de actualización .
solidario como es una Cooperativa de Trabajo. La Cooperativa cuenta con una bolsa de trabajo
que recibe solicitudes de atención domiciliaria
c) De las Organizaciones Sociales comprometidas con la derivadas de distintas organizaciones de salud:
tarea: Jerarquizar la labor del cuidador y su nivel de IOMA, IOSE, PAMI, Secretaría de Desarrollo
eficiencia. - Mejorar las condiciones generales del Social de la Municipalidad, Entidades del
trabajo: Nivel de honorarios, cobertura de salud, Movimiento Cooperativo, de médicos geriatras y
seguro laboral, monotributo social. - Gestionar con recomendaciones de familiares que ya han
idoneidad una organización (Cooperativa de Trabajo). utilizado sus servicios manifestado su
- Tenemos prevista la aplicación de un Sistema conformidad.
Integral de Asesoramiento y supervisión. - En las tres Los hogares asistidos en el primer año y
áreas señaladas: Adulto Mayor, Cuidadores medio fueron 140. En varios hogares
Domiciliarios y Cooperativa de Trabajo debemos cuentan con 4 y 5 cuidadoras por servicios
profundizar el nivel de Autonomía (poder de decisión). de 24 hs. Actualmente están trabajando
80 Cuidadores Asociados.
1346
Distracciones y Uso de Celular en Conductores de Motocicletas
Poó, F. M.1,2, Montes, S. A1,2, Langdon Sagasta, A.2, Churrupit, C.2, Carnotta Paciaroti, E.2,
1
Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Grupo Modelos y Métodos de Investigación en Psicología del Tránsito. Facultad de Psicología. Universidad
Nacional de Mar del Plata (Argentina). 2 Facultad de Psicología, Universidad Nacional de Mar del Plata. Contacto: poo.fernando@gmail.com
Introducción
Los errores como consecuencia de distracciones o inatención son uno de los principales factores de riesgo de siniestros viales (Dingus et al., 2006). Mientras la distracción implica dirigir la atención a un
estímulo secundario a la tarea de conducir, la inatención se produce sin la presencia de un estímulo externo (Regan & Hallet, 2011). Salvo algunas excepciones (Nucciarone, Poó, Tosi & Montes, 2012)
ambos procesos han sido poco estudiados entre los motociclistas. En este trabajo se informan los resultados de un estudio en el que se analizaron la modalidad y frecuencia de uso del celular en
conductores de motos, su relación con actitudes hacia el uso de celular durante la conducción, con fallas atencionales y con el historial de incidentes viales.
Método
Participantes N= 103 motociclistas de Mar del Plata que (a) poseían registro de conducir motos, (b) habían conducido moto al menos una vez por semana durante el último mes, y (c) poseían y utilizaban
teléfono celular. Edad: 19 a 60 años (M=30,04; D.E=7,55). Sexo: 71% varones. Nivel de educación: 88% posee secundario completo. No se incluyeron conductores que utilizaban la moto como parte del
trabajo.
Medidas
(1) Cuestionario de datos sociodemográficos e historial de tránsito: incluyó preguntas sobre edad, escolaridad, choques y casi choques.
(2) ARDES-M (Attention-related Driving Errors Scale-Motorcyclists; Nucciarone et al., 2012). Es una escala unidimensional compuesta por 22 ítems con formato de respuesta Likert (1= nunca, 5 = muchas
veces) que evalúa la frecuencia con que un conductor experimenta errores como resultado de fallas atencionales (e.g. Al llegar a una esquina, no darme cuenta de que un peatón está cruzando la calle").
Un análisis factorial exploratorio con la muestra actual (KMO = 0,87, Test de Bartlett = 1053,15 p < 0,001) (Método de extracción: Ejes Principales) reflejó la existencia de un único factor. La escala obtuvo
valores adecuados de fiabilidad (Alfa = 0,90).
(3) Cuestionario de uso del celular. Incluyó preguntas sobre el uso de celular durante la conducción de motos. Las respuestas no eran excluyentes entre sí. Ejemplos de preguntas: "Mientras manejas, ¿es
posible que hagas alguna de estas cosas? Usar el celular para llamar o atender, Leer o escribir mensajes de texto”.
(4) Escala de actitudes hacia el uso de celular durante la conducción (EACC). Se elaboró un instrumento con 17 ítems con una escala de respuesta tipo Likert (1=completamente en desacuerdo, 5 =
completamente de acuerdo) que evalúan la valoración del conductor del uso de celular durante la conducción. Ejemplo de ítem: "Aunque esté manejando creo importante atender el celular”.
Procedimiento
Los individuos participaron del estudio en forma voluntaria y anónima luego de brindar su consentimiento informado. Los instrumentos se completaron de forma auto-administrada.
Análisis de datos
(a) Análisis de frecuencia para conocer el número de conductores que informaron utilizar el celular mientras conducen y la frecuencia de uso de distintas funciones, (b) Análisis Factorial Exploratorio (AFE)
para evaluar la estructura dimensional de la EACC, análisis de ítems y de consistencia interna, (c) ANOVA univariado controlando género y edad para analizar si existían diferencias en los puntajes en la
EACC entre quienes informaron usar celular al conducir y quienes informaron no utilizarlo, (d) ANOVA univariado controlando género y edad para analizar si existían diferencias en los puntajes de la
escala ARDES-M entre quienes informaron usar celular al conducir y quienes informaron no utilizarlo, y (e) Análisis de prevalencia de incidentes de tránsito según uso o no uso de celular durante la
conducción.
Resultados
En los Gráficos 1 y 2 pueden verse las frecuencias de uso del celular durante la conducción y de las diferentes modalidades de uso.
Gráfico 1. Frecuencia de uso de celular durante la conducción. Gráfico 2. Modalidad de uso del celular entre conductores de motos.
Tabla 1. Cargas factoriales y estadísticos descriptivos de los ítems de la EACC. Tabla 2. Incidentes de tránsito de acuerdo con el uso de celular durante la conducción.
Carga Incidente Usa celular durante la conducción
Ítems EACC Media D.E Item-Test
factorial
Si No
1. Puedo prestar atención al tránsito aunque esté hablando por teléfono. 0,83 1,97 1,12 0,71
Maniobra brusca.1 67,6% (n=23) 44,9%(n=31)
2. Disminuye la capacidad de mantener una línea recta al conducir. -0,82 3,94 1,15 0,79 Perder el control.2 35,3% (n=12) 21,7% (n=15)
3. Reduce mucho la atención que presto al tránsito. -0,80 4,21 1,13 0,78 Daños materiales menores.3 47,1% (n=16) 37,7% (n=26)
4. Puedo usarlo sin riesgo porque soy un conductor hábil. 0,78 3,60 1,37 0,65 Daños materiales mayores.4 5,9% (n=2) 4,3% (n=3)
5. Provoca que el conductor realice maniobras -0,76 4,00 1,19 0,77 Chocar un objeto fijo o detenido.5 0% 2,9% (n=2)
inesperadas como frenar de golpe o cruzarse de carril
Ser chocado por otro vehículo.6 17,6% (n=6) 13% (n=9)
6. Si reduzco la velocidad puedo usarlo sin peligro 0,75 3,77 1,13 0,58
7. Puede ser tan negativo como manejar un poco alcoholizado -0,71 3,60 1,37 0,65 Chocar otro vehículo.7 5,9% (n=2) 0%
Personas heridas (leves, grave o fatales).8 14,7% (n=5) 7,2% (n=5)
8. Imposibilita mantener una velocidad estable. -0,71 3,87 1,15 0,73
9. Usar el celular aumenta el riesgo de chocar. -0,71 4,37 1,13 0,69 Nota: (1) Chi2 = 4,71, gl=1, p < 0,05; (2) Chi2 = 2,16, gl=1, p > 0,05; (3) Chi2 = 0,83 gl=1, p > 0,05; (4) Chi2
10. Aunque este manejando creo importante atender el celular. 0,71 2,19 1,16 0,63 = 0,12, gl=1, p > 0,05, (5) Chi2 = 1,00, gl=1, p>0,05 ; (6) Chi2 = 0,39 , gl=1, p>0,05; (7) Chi2= 4,14, df=1,
p<0,05; (8) Chi2= 1,45, gl=1, p>0,05.
11. El conductor que usa su celular lentifica la marcha y produce -0,70 3,83 1,22 0,72
dificultades en el tránsito.
12. Usar el celular me permite ganar tiempo mientras me traslado de un 0,67 2,34 1,36 0,58
lugar a otro.
13. Si soy pasajero y el conductor comienza a usar el celular le pido que -0,66 3,41 1,26 0,62
deje de hacerlo.
14. Debería existir un mayor control sobre su uso. -0,63 4,10 1,20 0,61
15. Su uso debería estar permitido. 0,56 3,94 1,23 0,79
16. Si uso un dispositivo de manos libres no hay riesgo. 0,56 3,46 1,24 0,51
17. A mis amigos o familiares no les preocupa si hablo por celular 0,34 1,97 1,12 0,26
mientras manejo la moto.
Discusión
La EACC posee buenas cualidades psicométricas y es un instrumento útil para evaluar las actitudes de los conductores de moto hacia el uso de celular. Por otra parte, los resultados sugieren que una
actitud positiva hacia el uso de celular está asociada con su uso efectivo. Estos hallazgos son coherentes con la literatura previa pero tienen un carácter relativamente novedoso por la población
estudiada. No se observaron diferencias entre quienes usaban y no usaban el celular en la comisión de fallas atencionales. La ausencia de diferencias puede deberse a que los errores por uso de celular
no sean del mismo tipo que los errores evaluados con la escala ARDES-M. En efecto, en un estudio reciente, se observó que el ARDES-M evaluaría una predisposición personal a cometer fallas
atencionales relativamente independiente de la realización de actividades secundarias (Nucciarone et al., 2012). Desde un punto de vista metodológico es posible que el tamaño de la muestra haya
afectado los valores obtenidos. En ese caso sería conveniente replicar el estudio con una muestra más amplia. Finalmente, quienes informaron utilizar el celular participaron más a menudo en distintos
tipos de siniestros viales. Este resultado es consistente con la gran cantidad de estudios que indican que utilizar el teléfono celular al momento de conducir incide perjudicialmente en el tránsito (Caird,
Willness, Steel, & Scialfa, 2008). Más aún, las investigaciones sugieren que este es un problema con una tendencia creciente y paralelo al desarrollo de nuevas tecnologías.
Referencias
1347
Caird, J. K., Willness, C. R., Steel, P., & Scialfa, C. (2008). A meta-analysis of the effects of cell phones on driver performance. Accident Analysis & Prevention, 40, 1282-1293.
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INVENTARIO DEL RIESGO DE LA CONDUCTA AUTODESTRUCTIVA I.R.C.A.
AUTORES
En el siglo XIX algunos autores concibieron el Suicidio como una Escuelas de formación policial a nivel país, de la cual se obtuvo
patología de carácter psiquiátrico que obedece a desórdenes baremos en puntuaciones directas y centiles de ambos sexos.
mentales clínicos; posteriormente en contraposición el autor Escolaridad: A partir de noveno grado de educación básica secundaria
Durkheim, E. (1995) manifestaba que más allá de lo individual y de 17 años en adelante. Asimismo se diseñó el Manual, cuadernillo,
patológico, el Suicidio es un acto social, que no solamente hoja de respuestas y aplicativo de calificación.
obedece a desórdenes mentales, puesto que en buena medida,
el acto suicida se cruza directamente con las dinámicas sociales Resultados
y más aún si lo asociamos con un ser humano que por su El análisis a partir de la muestra representativa infirió los
actividad policial se desenvuelve en contextos de violencia y siguientes resultados estadísticos y psicométricos, así:
presión psicosocial y que por su rol de garante y mediador de la Total Alpha de Crombach
N de Criterio Interpretación
Elementos Deseabilidad Social
seguridad y convivencia puede verse afectado, generando
PD Interpretación
conductas de riesgo. Total Prueba 0,90 68
< 17 Ausencia D.S
F. MICROSISTEMA 0,88 41
F. MESOSISTEMA 0,82 27 18 a 23 Baja D.S
Participantes: Muestra de 661 adolescentes, estudiantes de las Deseabilidad Social 0,61 12 24 a 29 Media D.S
> 30 Alta D.S
Bibliografía: Durkheim, E. (1995). Actualidad de Durkheim para la Sociología Latinoamericana. Editorial, Buenos Aires.
Springer, K. (2002). Examen de las raíces de la violencia. Un modelo ecológico, Washington D.C: World report on violence and health. P,13-15.
POLICÍA NACIONAL DE COLOMBIA – DIRECCIÓN DE INCORPORACIÓN dinco.jefat@policia.gov.co - dinco.arive@policia.gov.co
1348
TEST CONDUCTA PUNIBLE T.C.P.
AUTORES
La presente investigación tiene como objetivo evaluar la predisposición a generar conductas delictivas en los aspirantes a la Policía Nacional de
Colombia. Se encontró que la caracterización de la población a tener la predisposición a generar conductas delictivas, se determina por la
estimación de factores iniciales y predisponentes del actuar delictivo (Precriminal) y factor determinante de conductas punibles (Criminal).
Asimismo se identifica el riesgo mediante cinco medidas de estilo de respuesta (Riesgo bajo, medio, medio alto, alto y crítico).
Palabras Claves: Conducta Delictiva, Aspirantes Policías Colombianos.
Para determinar la influencia de factores biológicos de la conducta Participantes: Muestra de 540 adolescentes, estudiantes de las
criminal, en esta investigación se referencia el estudio reconocido por escuelas de formación policial a nivel país, de la cual se obtuvo
Eysenck H, quien con base en su planteamiento del modelo PEN baremos en puntuaciones directas y centiles de ambos sexos.
(Psicoticismo, Extraversión, Neuroticismo) estableció una teoría de la Escolaridad: A partir de noveno grado de educación básica
personalidad delincuente fundamentada en componentes biológicos. secundaria de 17 años en adelante. Asimismo se diseñó el Manual,
Asimismo, autores como Samudio, J. (1995) señala 4 factores de cuadernillo, hoja de respuestas y aplicativo de calificación.
incidencia en la constitución del sujeto criminal y de su
comportamiento, siendo estos Precriminógenos: Condiciones Resultados
sociohistóricas y Biológicas. Criminógenos 1: Determinantes de la El análisis a partir de la muestra representativa infirió los siguientes
formación de la personalidad infantil sociopatoide. Criminógenos 2: resultados estadísticos y psicométricos, así:
Condiciones de la formación criminal y Circunstanciales: Condiciones
en que aumenta la probabilidad de que se realice el comportamiento Total Alpha de Crombach
N de Criterio Interpretación
Elementos Deseabilidad Social
en cuanto lo facilitan y estimulan.
PD Interpretación
Total Prueba 0,81 46
< 15 Ausencia D.S
F. PRECRIMINAL 0,88 24
F. CRIMINAL 0,69 15 15 a 18 Baja D.S
Deseabilidad Social 0,70 7 19 a 25 Media D.S
> 25 Alta D.S
Bibliografía: Hysenck, H. (1997). Personality and the biosocial model of antisocial and criminal behavior.
Saudio Diaz, Jaime (2001). El comportamiento criminal en Colombia. Revista latinoamericana de psicología, año/vol. 33, N;1 FUKL. Bogotá, Colombia. Pp.59-71.
1349
INVENTARIO DE PERSONALIDAD POLICIAL I.P.E.P.
AUTORES
RESUMEN
La presente investigación tiene como objetivo identificar las características de personalidad requeridas en el quehacer policial en los aspirantes
a la Policía Nacional de Colombia. La prueba se basa en la medición de cuatro dimensiones, dos primarias (Rasgo organizacional policial–
Habilidades comportamentales policiales) y dos de apoyo o secundarias (Sociabilidad–Estilo Atribucional), las cuales se encuentran
relacionadas con habilidades mentales, intereses, actitudes, temperamento y otras diferencias individuales en pensamiento, sentimientos y
comportamientos. Asimismo se identifica los rasgos característicos mediante cinco medidas de estilo de respuesta (Baja presencia, media baja,
media alta, alta y muy alta). Palabras Claves: Características de Personalidad, Aspirantes Policías Colombianos.
Teniendo en cuenta que la Policía Nacional de Colombia es una Participantes: Muestra de 740 adolescentes, estudiantes de las
institución con un contexto social característico, en la cual prima diferentes escuelas de formación policial a nivel país, de la cual
la interacción con otros, en especial con la comunidad; se obtuvo baremos en puntuaciones directas y centiles de
basándose la presente investigación en la teoría del ambos sexos.
Conductismo Social y en especial en los postulados de Bandura, Escolaridad: A partir de noveno grado de educación básica
A. (1979) y Rotter, J. (1954, 1982 citado por Baron, R. 1997), el secundaria de 17 años en adelante. Asimismo se diseñó el Manual,
cual comenzó bajo los principios del aprendizaje, seguidamente cuadernillo, hoja de respuestas y aplicativo de calificación.
con el surgimiento de mediación cognoscitiva y terminó con el Resultados
conductismo social. Además de consideró que el modelo El análisis a partir de la muestra representativa infirió los siguientes
conductivo conductual, permite entender la personalidad no solo resultados estadísticos y psicométricos así:
como una manifestación sino también como el pensamiento que Total Alpha de Crombach
N de
Elementos
impulsa el comportamiento de un individuo en un contexto
social. Total Prueba 0,81 80
F. Rasgo Organ. Policial 0,93 52
F. Habilid. Comportam. 0,81 21
F. Sociabilidad 0,30 4
F. Estilo atribucional 0,65 3
Bibliografía: Baron, R. (1997) Fundamentos de Psicología. Tercera Edición. Mexico: Pearson Educación.
Bandura, A. (1979). Aprendizaje social y Desarrollo de la Personalidad. 4 Edición. Madrid: Alianza Universitaria.
1350
PRUEBA EVALUACIÓN DEL NIVEL DE DESARROLLO DEL JUICIO MORAL EK-6
AUTORES
La teoría en que se basa la presente investigación planteada por Escolaridad: A partir de noveno grado de educación básica
Kohlberg, L. (1974) citado por Barra, A. (1987), el cual se secundaria de 17 años en adelante. Asimismo se diseñó el Manual,
fundamenta en dos hipótesis; la primera enmarca los cambios cuadernillo, hoja de respuestas y aplicativo de calificación.
que a lo largo del ciclo vital presentan los individuos y los cuales
representan restructuraciones en cuanto al significado que este Resultados
tiene del contexto en el que interactúa. La segunda hipótesis El análisis a partir de la muestra representativa infirió los
señala que el producto de esas restructuraciones permite una siguientes resultados, así:
mayor adaptabilidad del sujeto en dicho contexto y es a partir de
Tabla. Interpretación de puntajes (Puntuaciones Directas)
estas premisas que se afirma que el individuo a medida que va
conociendo su mundo físico y social desarrolla y evoluciona en ESTADIO
NIVELES PUNTUACIÓN
su identidad moral, la cual le permite comportarse de manera
PSTCONVENCIONAL 25 a 28 E6: Principio Univ.
coherente con sus propias convicciones teniendo así un
20 a 24 E5: Contrato Social
crecimiento en su juicio moral.
CONVENCIONAL 15 a 19 E4: Sistema Social
10 a 14 E3: Expectat. Interp.
Participantes: Muestra de 790 adolescentes, estudiantes de las
escuelas de formación policial a nivel país, de la cual se obtuvo PRECONVENCIONAL 5a9 E2: Individualismo
E1: Heterónoma
baremos en puntuaciones directas y centiles de ambos sexos. 0a4
Bibliografía: Barra, A. E. (1987) El desarrollo Moral. Una introducción a la teoría de Kohlberg. Revista Latinoamericana de Psicología, Vol.19, FUKL, Colombia, pp. 7-18
1351
La Percepción Subjetiva del Bienestar en
Adultos Mayores Institucionalizados
Lic. Lidia R. Pietrantuono y Dra. Susana Verdinelli
www.postersession.com
1352
Facultad de Psicología
Universidad Nacional de Mar del
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación
Plata
Antecedentes Resultados
Se puede advertir un considerable esfuerzo en las investigaciones actuales de la Por medio de un Test de medias para muestras independientes se obtuvo una diferencia
Psicología Cognitiva por dar una adecuada respuesta al problema de la generación de estadísticamente significativa entre la fluidez del sujeto y la fluidez media, así como entre
la novedad (Glover, Ronning & Reynolds, 1989; Finke, Ward & Smith, 1992; Ward, la flexibilidad del sujeto y la flexibilidad media del grupo. Se halló una mayor flexibilidad y
Smith & Vaid, 1997). En el enfoque tradicional un nutrido grupo de estudios fluidez del sujeto que produce respuestas originales en comparación con la flexibilidad y
experimentales sobre la creatividad ha desplegado una amplia variedad de análisis la fluidez media del grupo.
cuantitativos para identificar los individuos creativos a través de sus productos, esto es, Los resultados ponen de manifiesto, de esta manera, que la Originalidad presenta un
de los logros obtenidos en el desempeño de ciertas tareas (Hyman, 1964: Torrance, muy alto nivel de asociación con la Fluidez y la Flexibilidad.
1966; Wallach & Kogan, 1970).
Para la mayoría de los psicólogos, la creatividad es considerada como un factor
multidimensional que implica la interacción o concatenación entre múltiples Estadísticas Descriptivas
dimensiones (Esquivias, 2004). En la literatura sobre el tema los autores coinciden en
destacar a la Originalidad, la Fluidez y la Flexibilidad como factores intervinientes en la Std. Error
producción de pensamiento creativo (Vivas, 2002). VAR00001 N Mean Std. Deviation Mean
Según Guilford (1967) la Originalidad es la aptitud o disposición para producir de forma FLUIDEZ 1.00 81 6.7037 2.58575 .28731
poco usual respuestas raras, remotas, ingeniosas o novedosas; la fluidez es la facilidad 2.00 81 5.3295 1.12645 .12516
para generar un elevado número de ideas; y la flexibilidad implicaría una FLEX 1.00 81 3.2716 1.62798 .18089
transformación, un replanteamiento, una reinterpretación o un cambio de categoría.
2.00 81 2.1641 .60821 .06758
En el contexto del estudio de la Originalidad debemos hacer referencia a la memoria
semántica, ya que es aquella que nos permite acceder a los recuerdos de los
Test de medias para muestras independientes
significados de los conceptos. Las teorías sobre esta memoria, tradicionalmente, se
han ocupado de especificar cómo los significados de las palabras se representan
mentalmente (Vivas, 2008). Uno de los modelos de memoria semántica que intenta dar Levene's Test for
Equality of Variances t-test for Equality of Means
una explicación sobre la organización de la memoria humana es la Teoría Extendida de
Propagación de la Activación (Collins y Loftus, 1975). El rasgo característico de dicha 95% Confidence Interval
teoría es la distinción entre el conocimiento de los significados de los conceptos y el of the Difference
conocimiento de sus nombres o, lo que es lo mismo, una red conceptual y una red Mean Std. Error
léxica. La red conceptual o semántica está organizada de acuerdo con similitudes F Sig. t df Sig. (2-tailed) Difference Difference Lower Upper
semánticas. En la medida en que dos nodos se hallan vinculados por tener más FLUIDEZ Equal
propiedades en común, mayor es su similitud y mayor es su proximidad en la red. Los variances 28.196 .000 4.385 160 .000 1.3742 .31338 .75529 1.99310
nombres de los conceptos son almacenados en una memoria lexical, también llamada assumed
Equal
diccionario lexical. Los vínculos en esta memoria derivan de propiedades fonológicas variances not 4.385 109.309 .000 1.3742 .31338 .75310 1.99530
de los fonemas incluidos en las diferentes posiciones dentro de la palabra. Cada assumed
entrada en la red lexical, a su vez, se encuentra conectada con uno o más nodos en la FLEX Equal
red semántica (Vivas, 2008). variances 24.218 .000 5.736 160 .000 1.1075 .19310 .72618 1.48888
Con respecto a la fluidez también es necesario clarificar el papel central que juega la assumed
Equal
memoria, ya que resulta necesario recurrir a ella para proporcionar una respuesta y, a
variances not 5.736 101.906 .000 1.1075 .19310 .72452 1.49054
su vez, es la que facilita las conexiones y asociaciones entre ideas y recuerdos. Varios assumed
autores distinguen diferentes tipos de fluidez. La Fluidez Lingüística consistiría en la
rapidez para emitir respuestas verbales en tareas definidas por condiciones fonéticas,
Estadísticas Descriptivas
Test de medias para muestras independientes
morfológicas y en general, gramaticales, como escribir palabras que empiecen por una
letra dada; la Fluidez Semántica en emitir respuestas verbales en torno a una
significación, como escribir sinónimos; la Fluidez Ideativa, en emitir respuestas
verbales que expresen distintas ideas sobre un tema propuesto, como enunciar los
usos distintos que se puede dar a un objeto (Granados, 2002). La Fluidez Asociativa,
Discusión
A partir de los resultados, es posible dar cuenta del nivel de asociación existente entre la
se basa en las relaciones semánticas, en el establecimiento de relaciones (Pérez,
Originalidad, la Fluidez y la Flexibilidad como mecanismos intervinientes en el complejo
1990).
proceso de creación de pensamiento novedoso. Puede decirse que los sujetos que dieron
Este trabajo participa del marco conceptual que promueve la exploración de la
respuestas originales, fueron los que brindaron mayor cantidad de atributos y, a su vez, los
multideterminación e interdependencia de los mecanismos cognitivos y también, del
que efectuaron mayores cambios de categoría. Asociación que podría interpretarse como
reconocimiento de la alternancia entre pequeños y grandes cambios conceptuales,
resultado de la colaboración de estas tres aptitudes cognitivas (Vivas, 2002). Y que nos
para la comprensión del proceso creativo (Vivas, 2002). En particular, se propone
remite a la concepción del hecho original como multideterminado, y a la interdependencia
estudiar la existencia de una asociación entre la Originalidad, la Fluidez y la Flexibilidad
de los mecanismos involucrados en él.
en la producción de atributos semánticos. Entendiendo que los sujetos que producen
En el decir de Dunbar: “Los nuevos conceptos y las ideas creativas surgen a través de una
atributos originales van a presentar mayor flexibilidad y fluidez en comparación con el
serie de pequeños cambios producidos por una variedad de mecanismos cognitivos
grupo.
diferentes”. En este sentido, resulta pertinente el papel central jugado por la memoria (la
Metodología red conceptual o semántica y la red lexical) y todos los procesos cognitivos que en ella
ocurren; los distintos tipos de Fluidez y el pensamiento flexible, para comprender la
Participantes
amplitud y el entrecruzamiento de los procesos que dan como resultado una idea original.
81 adultos jóvenes entre 20 y 40 años de edad que estudian en la Universidad Si bien, la presencia de los distintos tipos de Fluidez se consideran esenciales en una
Nacional de Mar del Plata. personalidad creativa; suele reconocerse a la Fluidez de tipo Ideativa y Asociativa como
Instrumentos primordiales. Así como también, se entiende que a mayor número de respuestas, mayor
Se administró una tarea de producción de atributos de diferentes categorías será la posibilidad de que se extiendan a un número también mayor de categorías (Pérez,
conceptuales, de los cuales a fines de este trabajo se seleccionaron 40 conceptos de 2002).
la categoría animales. Otro punto a considerar resulta ser las diferencias halladas en el orden de aparición de los
atributos originales, encontrados algunas veces en el inicio de la producción, otras luego
Análisis de datos
de proporcionados dos o tres atributos, y otras al final de la producción de atributos del
Se utilizó el software Definition Finder para identificar los atributos originales, y a sujeto. Cuestión que nuevamente nos invita a pensar en la existencia de múltiples
partir de estos resultados se realizó un análisis comparativo en función de: procesos y micro procesos cognitivos, afectivos, contextuales, etc. que contribuirían cada
-Fluidez del sujeto con respecto a la fluidez media del grupo. uno de ellos a comprender la complejidad de este fenómeno.
-Flexibilidad del sujeto con respecto a la flexibilidad media del grupo. Ya que el objetivo del presente trabajo ha sido tomar en cuenta sólo algunos de dichos
procesos, consideramos relevante estudiar la incidencia de otros factores vinculados con
Con los resultados obtenidos se establecieron diferencias de medias para muestras
la originalidad, propuestos por trabajos recientes, como por ejemplo, la exploración
independientes utilizando el software SPSS.
combinatoria y el pensamiento analógico, para lograr un análisis más abarcativo del
pensamiento novedoso.
Referencias bibliográficas
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1353
Bec. Lucía Nora Pérez lulis.87@gmail.com
Lic. María Florencia Giuliani mariaflorenciagiuliani@gmail.com
Est. Evangelina Gargiulo evangelinagm@hotmail.com Universidad Nacional de Mar del Plata
Argentina
La perspectiva del Curso vital entiende al desarrollo como un proceso que está presente durante toda la vida, implicando tanto pérdidas como ganancias (Ebner & Freund,
2007). Desde esta teoría, se concibe al envejecimiento satisfactorio como un proceso que implica la generación de recursos (comportamientos y creencias) para adaptarse
a los cambios, maximizando ganancias y minimizando pérdidas a lo largo de toda la vida (Zea Herrera, 2012). Las metas vitales permiten comprender estos procesos de
adaptación, en tanto refieren a los objetivos personales que organizan y motivan el comportamiento y el desarrollo vital (Ebner & Freund, 2007).
Las metas se modifican a lo largo de la vida en función de diversos factores, uno de los cuales es la perspectiva de tiempo futura (PTF), constructo desarrollado desde la
teoría de la selectividad socioemocional (Charles & Carstensen, 2007). Según esta teoría, los seres humanos tenemos la capacidad explícita o implícita de monitorear el
tiempo y la propia posición en el ciclo vital. Esto incide en las motivaciones, influenciando la adopción, búsqueda y realización de metas a lo largo de la adultez. Es la
expectativa de vida la que marca un límite al tiempo del que disponen los seres humanos. En diversos estudios se han registrado diferencias sistemáticas en la perspectiva
temporal futura entre adultos jóvenes y adultos mayores. Los más jóvenes presentan una perspectiva expansiva del tiempo. Mientras que los mayores preveen que su
futuro es limitado (Charles & Carstensen, 1999). Esto podría deberse a diversos factores individuales (biológicos como ser diagnosticado con alguna enfermedad; o
experienciales como la muerte de algún ser querido) y sociales (como el aumento de la expectativa de vida). Tener una perspectiva del tiempo como ilimitada favorece
que se se seleccionen metas centradas en la autonomía y desarrollo, mientras que cuando se percibe el tiempo como limitado se prioriza la obtención de bienestar
emocional en el presente, en particular, en el seno los vínculos interpersonales cercanos y duraderos (Charles, & Carstensen, 2010). De igual manera, mientras que cuando
se es joven el futuro es un dominio temporal en el que se puede progresar respecto al presente, los adultos mayores lo contemplan como un dominio en el que únicamente
se pueden mantener las condiciones positivas del presente (Villar Posada, 2005). En el presente estudio nos avocamos a la indagación de las dimensiones de la PTF en
mujeres adultas, basándonos en dos grupos etarios (de 20 a 35 años y de 60 a 80 años) y comparándolos entre sí.
Explorar y comparar las dimensiones de la Perspectiva Temporal Futura en mujeres adultas mayores y adultas jóvenes
residentes de la ciudad de Mar del Plata
Se trabajó con una muestra intencional de 50 sujetos de A partir del análisis de las medias de los grupos de Los resultados obtenidos en este estudio señalan que no
sexo femenino. 25 adultos mayores de 60 a 80 años – edad se puede observar que en las dimensiones existen diferencias significativas en la dimensión Tiempo
media de edad 68,4 DS 4,8- y 25 adultos jóvenes de 20 a Oportunidades y Limitaciones existe una mayor Infinito de la escala. Lo cual implica que no solo las
35 años –media de edad 27 DS 4,2- residentes de la ciudad diferencia entre los grupos que en la dimensión jóvenes tienden a percibir el futuro como algo ilimitado,
de Mar del Plata. Tiempo Infinito, donde los valores hallados son sino que también las mayores lo hacen. Este dato resulta
Respecto al nivel educativo de los adultos mayores, el 84% similares (ver Tabla 1). A partir de esta significativo ya que se opone a estudios que han registrado
de la muestra ha completado y superado la formación identificación, se procedió a aplicar una prueba t que los adultos mayores tienen una tendencia a ver su
secundaria, siendo equivalente el porcentaje en la de comparación de medias para muestras futuro como algo limitado (Charles & Carstensen, 1999).
muestra de jóvenes adultos. independientes. Este procedimiento permitió La diferencia podría deberse a los avances científicos y
En cuanto al grupo de convivencia, el 32% de la muestra establecer que las diferencias antes señaladas eran desarrollos médicos que han contribuido en un
de adultos mayores viven solas, el 44% viven con su de carácter significativo en las dimensiones mejoramiento en la calidad de vida. Esto ha favorecido las
pareja, el 8% con miembros de su familia, el 12% con hijos, Oportunidades y Limitaciones. Respecto de la nuevas concepciones que se han ido desarrollado en los
y el 4% con pareja e hijos. En cuanto a las jóvenes, el 16% primera, los jóvenes percibieron mayores últimos años en torno a la vejez, en donde ésta está
viven solas, 24% con pareja, posibilidades para desarrollar proyectos y metas dejando de ser considerada como una etapa final de la
32% con miembros de su familia, el 12% con hijos y 16% que los mayores. En el caso de las Limitaciones, los vida para ser pensado como un momento de desarrollo y
con pareja e hijos. adultos mayores informaron una visión más oportunidades. En las últimas décadas se viene
En el espacio de una entrevista fueron administrados los limitada del tiempo vital futuro que los adultos produciendo la denominada “revolución de la longevidad”,
siguientes instrumentos: jóvenes (Ver Tabla 1). con un aumento de casi 20 años en la expectativa de vida
1) Un Cuestionario de datos de base que exploró en tan solo medio siglo (Butler, 1999).
edad, sexo, grupo conviviente, nivel de Fue posible establecer diferencias significativas en el caso
instrucción y profesión. Tabla 1: Estadísticos descriptivos y valores t en dimensiones de RE por
de percibir el futuro como un espacio de Oportunidades (a
Se evaluará mediante la escala Perspectiva de Tiempo grupo de edad. favor de las mujeres jóvenes) y como Limitado (a favor de
Futura, de Carstensen y Lang (1996). La escala explora la las mujeres mayores).
percepción subjetiva del tiempo disponible de vida, en Perspectiva Oportunidades Tiempo Limitaciones Los mayores tienen una PTF mixta, en relación a los
tanto un espacio a) de oportunidades (explora la creencia temporal Infinito jóvenes, que presentan un perfil más uniforme. Se puede
en la posibilidad de generar metas y proyectos en el futura pensar que tal vez las mujeres mayores encuestadas se
futuro), b) limitado (la percepción de que el futuro es Media Desvío Media Desvío Media Desvío perciban en un lugar medio del curso vital, característico
finito y el tiempo disponible acotado) o c) de carácter de la mediana edad, donde se percibe limitaciones pero al
Adultos 14,47 1,50 9,29 1,82 4,95 1,70
infinito (percepción del tiempo subjetivo sin un fin mismo tiempo, existe una extensión temporal que
Jóvenes
explícito). Consta de 9 ítems, y presenta 4 opciones favorece la planificación y el desarrollo personal (Charles
estandarizadas de respuesta (1= extremadamente en Adultos 12,72 2,86 9,00 2,43 7,12 2,95 & Carstensen, 1999).
desacuerdo a 4= extremadamente de acuerdo). Se hará un Mayores El orden social también puede incidir en esta diferencia
estudio piloto para validar la escala en población local, entre las jóvenes y las mayores, ya que si bien la mirada
tomando la adaptación española de Zea Herrera (2012). Prueba t 0,010* ,643 ,004** en torno a la vejez está cambiando de manera positiva,
Se efectuó un análisis cuantitativo de los datos, falta mucho para que haya un cambio real a nivel de toda
obteniéndose los estadísticos descriptivos (media/ la sociedad en donde las oportunidades y recursos de los
desviación estándar) para las distintas medidas y se aplicó *p< ,05 ** p<,01 adultos mayores sean los mismos a los que accede el resto
la prueba t para muestras independientes. de la población (Huenchuan, 2009).
El estudio que hemos realizado presenta como
limitaciones el hecho de ser una muestra muy acotada y
de abordaje únicamente cuantitativo. Próximamente se
Butler, R. (1999). La revolución de la longevidad. El correo de la UNESCO, 18-20. incluirá una evaluación cuali-cuantitativa del contenido y
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Zea Herrera, M. (2012). Metas evolutivas y representaciones del futuro en personas mayores sanas y con enfermedades crónicas. Disertación doctoral. 1354
Universidad de Granada.
REGULACIÓN EMOCIONAL EN
Pereno, G, Moretti, L, Ortiz, A y
ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS: Medrano, L.
DESARROLLO DE UN PROGRAMA DE Universidad Empresarial Siglo 21.
ENTRENAMIENTO EN ESTRATEGIAS DE Córdoba, Argentina.
REGULACIÓN EMOCIONAL
RESUMEN El ejercicio profesional del psicólogo se ha visto gradualmente redefinido y enriquecido gracias a la
consideración de las emociones humanas. El ámbito educativo no se ha mantenido ajeno a este hecho.
La literatura especializada señala que las personas evalúan sus En efecto, diferentes investigaciones han demostrado el impacto de las mismas sobre el ajuste
emociones y recurren al uso de diferentes estrategias con el académico, las metas de logro, el interés, los recursos cognitivos y meta-cognitivo, motivación, el
INTRODUCCIÓN
propósito de disminuir, mantener o ejercer algún tipo de aprendizaje, el logro académico, y la permanencia en los estudios (González, Donolo, & Rinaudo, 2009;
dominio sobre las mismas. Surge así el concepto Regulación Pekrum, Goetz, Titz, & Perry, 2002; Turner & Schallert, 2001).
Emocional. Si bien la emoción más examinada en este contexto ha sido la ansiedad, estudios científicos recientes
Considerando la importancia que tiene la regulación emocional, advierten que los estudiantes experimentan una amplia variedad de emociones que influyen sobre el
el presente trabajo tiene como objetivo desarrollar un estudio comportamiento académico (González et al., 2009; Medrano & Vilte, 2010; Pekrum et al., 2002). Existen
de resultado (outcome research) con el objeto de evaluar la al menos nueve emociones que usualmente experimentan los estudiantes en clases, al estudiar o frente
eficacia de un programa para incrementar las capacidades de a un examen: disfrute/placer, esperanza, orgullo, alivio, ira/enojo, ansiedad, desesperanza, vergüenza y
regulación emocional de estudiantes universitarios. Así, se aburrimiento (Pekrum et al., 2002).
realizó un estudio experimental utilizando como medidas pre y La literatura especializada señala que las personas generalmente evalúan sus emociones y recurren al
postest el cuestionario de estrategias de regulación emocional uso de diferentes estrategias con el propósito de disminuir, mantener o ejercer algún tipo de dominio
(CRE) en su versión adaptada. Asimismo se evaluaron los sobre las mismas para alcanzar las metas planteadas. Surge así el concepto Regulación Emocional, (RE), la
niveles de emociones positivas y negativas mediante la escala cual puede definirse como toda estrategia dirigida a mantener, aumentar o suprimir un estado afectivo
PANAS y la frecuencia de interferencia emocional durante la en curso (Garnefski, Kraail, & Spinhoven, 2001).
realización de un examen utilizando el cuestionario de Considerando la importancia que tiene la regulación emocional en el funcionamiento humano, el
dificultades de regulación emocional (DERS). El programa se presente trabajo trata de responder si resulta efectivo un Programa de Entrenamiento en Regulación
dividió en tres módulos, un módulo psicoeducativo, un segundo Emocional para incrementar el uso adecuado de estrategias de regulación emocional en la población de
módulo centrado en técnicas cognitivas que involucraban estudiantes de la Universidad Empresarial Siglo 21. Así, el objetivo del presente apunta a desarrollar un
estrategias de reinterpretación emocional y disminución de estudio de resultado (outcome research) con el objeto de evaluar la eficacia del programa para
rumiaciones, y finalmente, un módulo conductual centrado en incrementar las capacidades de regulación emocional de estudiantes de la Universidad Empresarial Siglo
estrategias de relajación. Los resultados obtenidos son 21.
prometedores y sustentan la eficacia del programa para
incrementar el repertorio de estrategias de regulación
emocional en la población universitaria.
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Estudios preliminares de la Validación del Inventario de Ansiedad
Estado-Rasgo (STAI) en adultos mayores de la ciudad de Córdoba
Vaiman Marcelo & Pereno German Leandro
Facultad de Psicología, Universidad Nacional de Córdoba
Introducción
Investigaciones epidemiológicas y clínicas demuestran que los denominados trastornos de ansiedad representan el problema mental
más frecuente entre todos los trastornos psiquiátricos, tanto en población joven como de adultos mayores (Barlow, 2001; Cía, 2007;
Beaudreau & O’Hara, 2008), con tasas de prevalencia que oscilan entre el 15 y el 52% para los síntomas de ansiedad.
Entre los cuestionarios más utilizados en nuestro medio para la evaluación de los trastornos de la ansiedad en adolescentes y
adultos, se destaca el Inventario de Ansiedad de Beck (Beck, Epstein, Brown, & Steer, 1988), la Escala de Ansiedad Manifiesta de
Taylor (Taylor, 1953), y el State-Trait Anxiety Inventory (STAI) (Spielberger, Gorsuch, & Lushene, 1970)
El STAI, esta compuesto por dos escalas, la primera de ellas esta constituida por un factor de personalidad que comprendería las
diferencias individuales para responder ante situaciones percibidas como amenazantes con una suba en la ansiedad (ansiedad
rasgo), mientras que la segunda permite evaluar el periodo transitorio caracterizado por un por un sentimiento de tensión, aprensión
y un aumento de la actividad del sistema nervioso autónomo (ansiedad estado)
Cada una de las escalas del STAI está compuesta por 20 ítems; una parte de los mismos redactada de forma positiva y otra de
forma negativa. Los estudios psicométricos realizados sobre las escalas muestran adecuados índices de consistencia interna, que
oscilan entre 0,90 y 0,93 para la escala de estado, y entre 0,84 y 0,87 para la escala de rasgo. Respecto a su estructura interna, el
número de factores que subyacen en el STAI ha sido objeto de numerosos análisis, existiendo defensores del modelo bifactoral,
tetrafactorial y, en menor medida, un modelo pentafactorial , (Suzuki, Tsukamoto, & Abe, 2000).
El STAI se ha validado en adultos mayores (Bergua et al., 2012); y se han estudiado sus propiedades psicométricas en este grupo
de población (Bergua et al., 2012; Fernández-Blázqueza, Ávila-Villanuevaa, López-Pinac, Zea-Sevillaay, & Frades-Payo, 2014). En
Argentina existe una traducción de ambas versiones del STAI (Leibovich de Figueroa,1991) que ha sido ampliamente utilizada,
aunque a pesar de ello, no se han reportado estudios sobre sus propiedades psicométricas ni se han elaborado baremos para
distintos grupos etarios. El presente estudio tiene la intención de realizar el proceso de validación y elaboración de normas para el
STAI para población de adultos mayores de la ciudad de Córdoba, Argentina.
Metodología
Participantes
Mediante un muestreo no probabilístico de tipo accidental, se obtuvo una muestra constituida por 126 adultos mayores con edades
comprendidas entre los 60 y los 90 años, (M=70.07; DE=6.89) residentes en la ciudades de Córdoba y Río Cuarto. El 77% de la
muestra estuvo conformada por mujeres, mientras que el 23% restante fueron hombres. Ninguno de los participantes presentó
criterios diagnósticos de depresión, ni de deterioro cognitivo. Aquellos que presentaban antecedentes de depresión, se encontraban
bajo tratamiento psicofarmacológico.
Instrumentos
STAI Estado y STAI Rasgo: Se utilizó la adaptación argentina de la escala realizada por Leibovich de Figueroa (1991), realizando
una sola modificación en el ítem 6 de la escala Rasgo, sustituyéndose la expresión “ando a mis anchas” por “estoy descansado”.
Análisis de datos
Se realizó análisis factorial exploratorio y estudios de consistencia interna sobre ambas versiones de la prueba.
Estado Rasgo
M DS
Factor 1 Factor 2 Factor 1 Factor 2
Ítem13 ,844 -,190 Ítem8 ,761 -,099 STAI Estado 33,58 8,39
Ítem6 ,841 -,134 Ítem20 ,712 -,132
Ítem12 ,757 ,111 Ítem5 ,685 -,038 STAI Rasgo 40,06 10,25
Ítem18 ,721 -,016 Ítem15 ,654 -,031
Ítem9 ,711 -,103 Ítem12 ,639 ,160
Ítem4 ,620 -,098 Discusiones
Ítem17 ,673 ,104
Se realizó el primer estudio de validación de ambas versiones
Ítem14 ,620 ,138 Ítem18 ,616 -,019
del STAI en población de adultos mayores de la provincia de
Ítem7 ,607 ,052 Ítem9 ,547 ,075 Córdoba. Hallándose para la versión Estado, una estructura
Ítem4 ,603 -,025 Ítem2 ,441 ,250 bifactorial, la cual se encuentra conformada por un primer factor
Ítem3 ,554 ,234 Ítem11 ,439 ,150 compuesto por ítems que reflejan estados de bienestar en
Ítem16 ,002 ,756 Ítem6 ,327 ,300 relación al cuerpo y un segundo factor compuesto por ítems que
Ítem10 -,097 ,754 Ítem17 ,312 ,214 reflejan estados de ansiedad cognitiva y fisiológica. La misma
Ítem15 ,047 ,726 Ítem1 -,154 ,778 estructura se replica en la versión Rasgo, Hallándose un factor
que evalúa el estado de bienestar corporal y cognitivo, y un
Ítem20 ,063 ,719 Ítem10 -,048 ,735
segundo factor que denota estados de ansiedad. Ambas
Ítem1 ,127 ,631 Ítem19 -,070 ,689
soluciones presentan adecuados porcentajes de varianza
Ítem8 -,216 ,625 Ítem13 ,054 ,671 explicada de las puntuaciones dadas al test y excelentes índices
Ítem2 ,015 ,620 Ítem3 ,077 ,663 de consistencia interna, todos superiores a .80. No obstante, la
Ítem19 ,034 ,609 Ítem14 -,032 ,582 modificación realizada al ítem 6 de la escala de Rasgo, no
Ítem11 -,001 ,582 Ítem7 ,033 ,570 parece haber sido la adecuada pues no presento un buen
Ítem5 ,051 ,450 Ítem16 ,092 ,429 funcionamiento. Se pretende continuar con este estudio de
Alfa ,878 ,850 validación, ampliando la muestra y probando ítems alternativos
Alfa ,820 ,800
al construido para el presente estudio.
%Varianza 29,27 17,86 %Varianza 30,35 8,97
1356
FACULTAD DE
PSICOLOGÍA Autoras: Palomar, Carolina; Maidana, Melisa.
Cátedra de Psicología
Institucional y Comunitaria
Según la OMS, se define como “un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias
capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es
capaz de hacer una contribución a su comunidad”.
-Profesionales: Psicólogos: “Tratándose con buenos psicólogos”. “Algún profesional que los asista, primero el
clínico, después el psicólogo”.
Psiquiatras: “Algún tratamiento, según lo que le siente bien a la persona, un psiquiatra.”
-No gubernamentales: “Trabajo para una ONG, se podría crear algo específico, un grupo de ayuda entre vecinos”.
“Alguna sociedad de fomento, que haya más inclusión”.
-Religiosas: “La iglesia para que encuentren paz”. “Yo soy evangélica, habría que aconsejarlos por el camino
seguro”.
Participación ciudadana:
-Contención y apoyo: “Escuchándola, dándole cariño”. “Con apoyo de la familia, con contención”.
“ Enseñándoles, hablándoles” .“Juntarlos, hacer alguna reunión. Algún curso, algún proyecto para que no estén en la
calle”.
-Solidaridad : “Ayudarnos entre todos, estar más unidos”. “Hacer grupos o encuentros entre varias personas”. “El
que está sano tiene una deficiencia mental por no querer ayudar”.
IV. RECOMENDACIONES.
Problematizar el concepto de Salud Mental, en base a las modificaciones introducidas en la nueva Ley, con el propósito de promover los DDHH y
fomentar la participación activa de la comunidad, reconociéndose como sujetos poseedores de derechos y libertades.
Utilizar las Organizaciones existentes en el barrio (ONG, Sociedad de Fomento, Centros de Atención Primaria) para impulsar la prevención y enfatizar
los aspectos positivos de la Salud en general.
Creación de contextos para sensibilizar y orientar a la comunidad involucrada dentro de la problemática de las adicciones, mediante la planificación de
talleres que permitan deconstruir en conjunto los rumores y prejuicios que existan, realizando procesos lúdicos psicosociales con el fin de facilitar la
inclusión y el compromiso.
Desde el ámbito educativo, como facilitador, diseñar acciones deportivas, recreativas y extracurriculares para generar espacios alternativos de
socialización y contención.
1357
Desarrollar las potencialidades y las habilidades sociales dentro de la misma comunidad, con la intención de generar una red de contención intrabarrial,
en un primer momento, pudiendo extenderse luego a los barrios vecinos. Compartir y reflexionar sobre las necesidades en común.
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Facultad de Psicología
Metodología y Educación Universidad Nacional de Mar del Plata
Perspectivas Conductuales
Las emociones se entienden como respuestas condicionadas que se
OBJETIVO generan cuando un estímulo neutro se asocia con un estímulo incondicionado
que es capaz de elicitar una respuesta emocional intensa. La emoción surge
Describir y analizar los fundamentos teóricos de las principales como una forma en desajuste entre el estímulo y la respuesta. Para el
perspectivas que explican los estados emocionales en los seres conductismo la emociones se comportan de la misma manera que cualquier
humanos. comportamiento.
Referentes: Watson, D. ; Mowrer, O.H.; Solomon, A. ; Skinner, B.F.
Perspectivas Psicodinámicas
INTRODUCCIÓN La emoción surge de una evaluación inconsciente que realiza el sujeto. Se
compone de descargas de energía física y de sentimientos (percepciones de
Desde el advenimiento de la psicología científica ha habido las acciones motrices que se producen y sentimientos de placer o desagrado
numerosos esfuerzos por analizar y sistematizar la emoción en sus que dan a la emoción sus características esenciales). La unión de estos dos
componentes principales que permitieran tanto su clasificación, como aspectos surge de la repetición de una experiencia particular que debe
la distinción entre las mismas. Los inicios sobre estas colocarse en la prehistoria de la especie.
conceptualizaciones comenzaron con William Wundt (1986) que Referentes: Brenne, C. ; Bowlby, J.
estableció que las emociones son combinaciones específicas de tres
dimensiones: agrado-desagrado; tensión-relajación y excitación-calma. Perspectivas Cognitivas
Resulta dificultoso realizar una clasificación exhaustiva de todas las Teorías Periféricas
teorizaciones acerca de las emociones. Las grandes polémicas en el Estímulo Reacción motora Arousal visceral Percepción Emoción
estudio científico de la emoción periferalismo- centralismo, Referentes: James, W. ; Lange, C. G.
especificidad- dimensionalidad, evaluación consciente o inconsciente y Teorías Centralistas
origen fisiológico-cognitivo de las mismas han provocado un Estímulo Interpretación Cognitiva Arousal hipotalámico Emoción y cambios
incremento en las teorizaciones sobre su etiología y problemáticas corporales.
en su abordaje conceptual y metodológico. Referentes: Cannon,W.B. ; Lazarus, R. S. ; Averril, L. ; Weiner, B.
Teoría Intermedia
Estimulo Arousal Interpretación cognitiva Emoción
Referentes: Schachter, S. ; Singer, P.
Modelo bio-informacional
RESULTADOS Modelo bifásico y multidimensional de las emociones en la que éstas son
disposiciones para la acción que resultan de la activación de dos sistemas
Perspectivas Evolucionistas motivacionales, el apetitivo y el aversivo. Las mismas son respuestas a
Las emociones son reacciones adaptativas prototípicas e innatas, con estímulos significativos para un organismo que se producen en tres sistemas:
modos de expresión característicos permitiendo predecir el cognitivo, neurofisiológico y conductual. Según este modelo, se identifican
comportamiento asociado a las mismas. Se centran en el análisis de las principalmente dos dimensiones, la valencia afectiva y el arousal; la primera
funciones adaptativas de las emociones, estableciendo la existencia de un indicaría qué sistema motivacional se ha activado y la dimensión de activación
set de emociones básicas. reflejaría la intensidad de la misma.
Referentes: Tomkis, S.S.; Izard, C.E. ; Zanjonc, B.; Plutchik, R.; Ekman, P. Referentes: Lang, P. ; Moltó, J.
CONCLUSIONES
El análisis de la bibliografía da cuenta que la falta de consenso sobre qué son las emociones, como se originan y sus vínculos con otros procesos psicológicos
se ve reflejada en las diferentes teorías, dando cuenta de la complejidad de este fenómeno multivariado y pluridimensional. Podemos concluir que la reacción
emocional es algo omnipresente a todo proceso psicológico y como tal esta en constante cambio y ebullición, efectuándose a lo largo de los años numerosas
teorías que resignifican y reelaboran otras anteriores. La dimensión placer-displacer se encuentra en las mayoría de las perspectivas sobre los estados
emocionales de los seres humanos y sería la característica definitoria con respecto a cualquier otro proceso psicológico.
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1358
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
......................................
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación
mediadoras en mujeres con diagnóstico de Síndrome de Turner. Facultad de Psicología - UNMDP - CIMEPB.
RESUMEN
El reconocimiento de emociones básicas faciales, contribuye en la interpretación de mensajes y acciones de los demás, siendo central en la regulación de la conducta
social como componente de la interacción interpersonal; hecho que ha convertido su estudio en una de las líneas de investigación más fructíferas dentro de la neurociencia
cognitiva social. A mediados de los años ’60, Paul Ekman demostró la existencia de seis expresiones universales de emoción: ira, asco, miedo, alegría, tristeza y sorpresa. A
partir de las críticas relacionadas con la influencia cultural que recibió este modelo, actualmente se consideran tanto la universalidad como la relatividad cultural de los
patrones de reconocimiento emocional. A pesar de la exhaustiva investigación de los últimos años, sobre reconocimiento de emociones básicas y las evidencias acerca de
la influencia que ejerce la información genética – especialmente ligada al cromosomas X - sobre las aptitudes sociales; los estudios que relacionan el reconocimiento facial
de emociones básicas con las diferencias entre sexos, presentan poco profundización y algunas contradicciones, lo que lo convierte en un área de interés para la
investigación. En el presente trabajo se exponen estos lineamientos, con el objetivo de proyectar direcciones futuras en este campo, que aún continúa presentando
interrogantes.
CRÍTICA AL MODELO
De todas formas esta teoría ha sido fuertemente criticada por estudiosos como Russel (1994), quien
encontró diferencias en el reconocimiento de las expresiones dependiendo de la cultura de la que
provenían los examinados. Sin embargo, lo que parece determinar estas discrepancias en los grados
de reconocimiento emocional son las normas culturales que modulan las respuestas en contexto, y no
la universalidad de las expresiones y el reconocimiento de emociones básicas. Es por ello que
actualmente se considera tanto la universalidad como la relatividad cultural de los patrones de
reconocimiento emocional: universalidad representada por la capacidad de reconocer las seis
emociones básicas, y relatividad cultural constituida por las diferencias en los índices y velocidades de Fig. 1. Expresión facial de emociones básicas en ambos sexos (Ekman, 1976).
reconocimiento de los distintos tipos de emociones básicas.
FUTURO DE LA INVESTIGACIÓN
Actualmente nos encontramos ante un campo de investigación floreciente pero que no deja de plantear interrogantes, dada la casi nula unanimidad de resultados
empíricos. Muchos estudiosos direccionan las críticas a los instrumentos de evaluación utilizados: reconocimiento de emociones a través de imágenes estáticas. Hallazgos
recientes (Torro-Alvés, 2013) suponen que cualquier rendimiento inferior de los hombres para reconocer las emociones puede ser compensada por la adición de movimiento
a la cara, estímulo más compatible con las condiciones naturales de interacción social. En la evaluación de las caras dinámicas, los hombres y las mujeres tuvieron un
comportamiento similar. Desde el campo de la psicofisiología y la biología, por otro lado, las diferencias en el reconocimiento son justificadas por la acción combinada de
hormonas sexuales, características de cada sexo, que influyen sobre la arquitectura cerebral, y por lo tanto, en los modos de operación en el mundo (Berenbaum y Beltz,
2011). Estos estudios sugieren que niveles bajos de estrógeno y progesterona (hormonas sexuales femeninas) aumentarían los niveles de precisión en el reconocimiento de
emociones negativas, justificando el mejor desempeño en el reconocimiento de esta variedad de emociones en hombres y en mujeres en fase menstrual (niveles bajos de
estrógeno y progesterona). A pesar de todo ello, las argumentaciones aún son poco sólidas y los estudios que replicaron los expuestos, escasos. Como puede observarse,
la falta de precisión y consenso en la justificación de los hallazgos empíricos, justifica la continuidad de investigaciones en esta línea y la profundización en el conocimiento
del rol central que cumple el cromosoma X como posible factor protector de la cognición social.
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Necesidad de pertenencia y su relación
con edad y sexo
Leibovich de Figueroa Nora; Schmidt, Vanina; Gimenez, Mariel. 1
Proyecto Ubacyt P52: “Ecoevaluación psicológica de la interfaz evolutiva adolescente-adulto. Contribución
de las experiencias óptimas para su desarrollo positivo”. Directora Dra. Nora B. Leibovich, Co-directora Dra. Vanina
Schmidt.
1. Instituto de Investigaciones, Facultad de Psicología, UBA.
Contacto: nleibovich@fibertel.com.ar
1. Introducción 4. Resultados
Para Baumeister y Leary (1995) la necesidad de pertenencia es un PUNTAJE TOTAL
motivo humano fundamental y la proponen como punto de partida - NP según el sexo
para entender e integrar la conducta interpersonal postulando que En la Tabla 1 se muestran los estadísticos descriptivos del puntaje
los seres humanos tienen un impulso persuasivo para formar y mante- total de NP en función del sexo. Se compararon las medias de mujeres
ner al menos una cantidad mínima de relaciones interpersonales dura- (28.24) y los hombres (27.04) a través de la prueba T de Student para
deras, positivas y significativas. muestras independientes y se halló que las mujeres presentaron valo-
En 2013 Leary, Kelly, Cottreell y Schreindorfer aclaran que todos los in- res significativamente superiores, T(707) = 3.14, p < .003.
dividuos desean ser aceptados y pertenecer a un grupo social; las per-
Tabla 1. Estadísticos descriptivos del puntaje total de NP según sexo.
sonas difieren en el monto de su deseo de aceptación y pertenencia.
Mujeres Hombres
La aceptación interpersonal y la pertenencia son el corazón de la nece- Media 28.24 27.04
sidad de pertenencia. Mediana 28.00 27.00
Moda 27.00 25.00
2. Objetivo Varianza 23.95 24.46
Desvío Típico 4.89 4.94
Describir y analizar las diferencias halladas en nuestro medio socio- cul- Error Típico de la Media .23 .31
tural en relación al sexo y la edad en la necesidad de pertenencia. Asimetría -0.17 0.01
3. Metodología -Edad y NP
La muestra estuvo compuesta por 709 participantes de entre 12 y 20 Para detectar asociaciones entre la edad de los sujetos y el puntaje
años de edad (Media =14.97, DE =1.73). El 63.8% fueron mujeres. El 44% total de NP se realizó una correlación lineal de Pearson, la cual mostró
concurría a escuelas públicas y el 56% a una escuela privada. una asociación negativa leve entre ambas variables, r = -.09, p < .02. Al
realizar este mismo análisis segmentando a la muestra en función del
Cuestionario Sociodemográfico: fue diseñado específicamente para este sexo, se observó que en las mujeres tal relación no fue significativa, r
estudio. Evalúa las características sociodemográficas de los participan- = -.02, p > .58, mientras que en los hombres se obtuvo un r = -.24, p <
tes. .001. Es decir, en varones la NP tiende a decrecer en edades superio-
res; esto no sucede en la muestra de mujeres.
Escala de Necesidad de Pertenencia (NTBS, de Leary, Kelly, Cottrell, & Schre-
indorfer, 2013): Schreindorfer y Leary (1996) desarrollaron una medida FACTORES
de autoreporte del deseo de ser aceptado y pertenecer para ser usada -Diferencias por sexo en factores de NP
en investigación. En ambos factores las mujeres obtuvieron valores medios superiores
El proceso de adaptación lingüístico-conceptual a nuestro medio so- a los hombres, siendo estas diferencias significativas tanto en el
ciocultural (Leibovich, 2013) comprendió las instancias: entrevistas con Factor 1, T(692) = 2.66, p < .01, como en el Factor 2, T(699) = 3.81, p <
adolescentes, traducción y retrotraducción, prueba piloto y evaluación .001.
de la escala final. - Edad y Factores de NP
La escala de Necesidad de Pertenencia (NP) en su versión local está Los factores de NP se asocian de manera negativa con la edad del
compuesta por 10 ítems que evalúan los sentimientos de pertenencia adolescente (Factor 1, r = -.22, p < .001, y el Factor 2, r = -.19, p < .01),
(necesidad de pertenecer y ser aceptado) del joven en relación a su sólo en la submuestra de varones. En las mujeres las asociaciones no
grupo de pares. Las respuestas a los ítems deben ser marcadas de resultaron significativos (p < .21).
acuerdo a una escala Likert que va de 1 a 4 puntos (“no es así”,“casi
nunca es así”,“en general puede ser así”, “es exactamente así”), salvo en 5. Conclusiones
los ítems inversos (ítems 1, 3 y 7) que va de 4 a 1. La Escala NP en su versión local muestra adecuados indicadores de
confiabilidad, evidencias de validez de contenido, interna y de cons-
Validez de la escala tructo. En nuestra adaptación se extrajeron dos factores, ambos con
El Analisis Factorial Exploratorio en nuestro contexto, mostró dos fac- un moderado porcentaje de varianza explicada, siendo la varianza
tores que fueron reproducidos en el AFC. total del 38 %. Las correlaciones inter-factores dan cuenta de factores
FACTOR 1: Necesidad de pertenecer. Ítems ejemplo: “Tengo una fuerte independientes pero relacionados.
necesidad de pertenecer a un grupo de amigos”. “No me gusta estar Nuestras adolescentes muestran necesidad de vínculos estables y de
solo”. sentimientos de aceptación por parte de los otros significativos. Esto
FACTOR 2: Miedo al rechazo. Ítems ejemplo: “Mis sentimientos se hieren señala la importancia de considerar el género en fenómenos psicoló-
rápidamente cuando siento que otros no me aceptan”. “Me importa gicos influenciados fuertemente por el contexto socio-cultural.
cuando no me incluyen en los planes de otros”. Proponemos la versión aquí sugerida para su uso en investigación, en
Confiabilidad contextos de habla hispana. Proponemos que en toda evaluación de
El análisis de la confiabilidad arrojó un alfa de Cronbach de .647 para el adolescentes esta variable deberá ser tenida en cuenta dada la impor-
Factor 1, y de .468 para el Factor 2. El análisis de confiabilidad de la tancia de la mirada de sus otros significativos en la constitución de su
escala de NP total arrojó un alfa de Cronbach de .655. subjetividad.
-Baumeister, R.F., & Leary, M.R. (1995). The need to belong: desire for interpersonal attachments as a fundamental human motivation. Psychological Bulletin, 117(3), 497-529.
-Leary, M.R., Kelly, K., Cottreell, C., & Schreindorfer, L. (2013). Construct validity of the Need to belong Scale: mapping the nomological network. Journal of Personality Assessment, 95(6), 610-624.
6. Referencias -Leibovich de Figueroa, N.B. (2010). Ecoevaluación: Una perspectiva ecopsicológica en evaluación. En N.B. Leibovich de Figueroa & V.I. Schmidt, El contexto familiar y su evaluación desde una perspectiva ecopsicológica (pp. 13-25). ISBN 978-950-500-567-3. Bs.As.: Ed. Guadalupe.
-Rodríguez, E. (2002). Juventud, desarrollo social y políticas públicas en América Latina y el Caribe: oportunidades y desafíos. En Carlos Sojo (Editor) Desarrollo Social en América Latina: Temas y Desafíos para las Políticas Públicas. FLACSO-BANCO MUNDIAL (pp. 215-314).
-Leibovich, N. (2013) trabajo en prensa. 1360
Movilidad Sustentable: preferencias implícitas y explícitas por diferentes modos de transporte.
Jakovcevic A.; Ledesma R. D.; Tosi, J. D.
El uso masivo del automóvil provoca serios problemas tanto sociales como ambientales. Frente a Perjuicios del automóvil Beneficios de la bicicleta
estas dificultades, numerosas ciudades del mundo han implementado políticas dirigidas a
incrementar el uso de modos de transporte alternativos. Reduce la congestión
Congestión vehicular
En este contexto, la bicicleta es considerada como una de las mejores alternativas para la vehicular
movilidad urbana (Bacchieri, Barros, dos Santos & Gigante, 2010). Consumo de recursos no
Evita la emisión de CO2
Las políticas públicas destinadas a promocionar el uso de la bicicleta (e.g., construcción de renovables
ciclovías, puestos de alquiler de bicicletas públicas) han sido implementadas con éxito considerable
en numerosos centros urbanos alrededor del mundo (Pucher & Buehler, 2008). Incremento del sedentarismo Favorece la actividad física
En nuestro país se han implementado políticas similares. Sin embargo, si bien el desarrollo de
Inseguridad vial Evita la contaminación sonora
infraestructura es un factor necesario, no es suficiente para incrementar el uso de la bicicleta como
modo de transporte. Tanto factores individuales como contextuales intervienen en la elección del Emisiones de CO2, smog y
Más económica
medio de transporte. ruido
Determinantes en la elección del medio de transporte: preferencias explícitas e implícitas
-Las variables psicológicas resultan de suma importancia al momento de explicar la elección del medio de transporte, dado que éstas complementan el poder
explicativo de las contextuales (e.g., Hunecke, Haustein, Grischkat & Bohler, 2007).
-Se han postulado diferentes modelos psicológicos para explicar la elección del medio de transporte, por ejemplo: Teoría de la Acción Planeada (TAP).
Actitud
-Preferencias explícitas = racionales, controladas y
concientes.
Teorías de
doble Preferencias Explícitas
Procesamiento
-Valoraciones automáticas, espontáneas y menos concientes.
Implícitas -Métodos indirectos = IAT
Metodología y Técnicas
Participantes Procedimiento
Estudiantes y empleados de la UAI y de la UNMdP. Dos grupos: Muestreo por conveniencia. Previo consentimiento informado, completarán el IAT y el
Grupo 1: usan bicicleta; Grupo 2: usan auto. Criterio: observación. cuestionario de manera contrabalanceada. Análisis de datos con SPSS y ViSta.
Instrumentos
Encuesta = preferencias explícitas IAT = preferencias implícitas
-Mide la fuerza de la asociación entre
dos categorías: objeto de comparación (“usar
Consta de 4 partes:
la bicicleta” vs “usar el auto”), y atributos
1. Conducta de movilidad para ir a la universidad
evaluativos bipolares (“bueno” vs. “malo”).
2. Preferencia bici vs auto para ir a la universidad
-Tarea: clasificar estímulos
3. TAP : Intención, actitud, control conductual percibido y norma subjetiva
pertenecientes a las cuatro categorías usando
hacia el uso de la bicicleta para ir a la universidad
sólo dos opciones de respuesta.
4. Aspectos socio-demográficos.
-Fase crítica del IAT: otorgar una misma respuesta (presionar la letra E)
Evaluación de la actitud (explicita). Ejemplo: cuando se presenten estímulos de las categorías “usar bicicleta” o “bueno”, y
otra respuesta (presionar la letra I) a estímulos que representen “usar auto” o
Responda cada una de las siguientes preguntas marcando un número entre 1 y 7. Tenga en cuenta en qué
grado se corresponde su opinión con cada uno de los cuatro aspectos presentados a continuación. “malo”. En otra fase del experimento, el procedimiento sería inverso.
Para mí, ir en bicicleta/auto la mayoría de mis viajes a la universidad la próxima semana sería… -Lógica del IAT: la tarea debería ser más fácil (llevar menos tiempo)
a. Malo 1 2 3 4 5 6 7 Bueno cuando dos conceptos se encuentran implícitamente asociados.
b. Desagradable 1 2 3 4 5 6 7 Agradable
c. Perjudicial 1 2 3 4 5 6 7 Beneficioso
-La investigación previa aporta evidencia a favor de la validez del IAT.
d. Displacentero 1 2 3 4 5 6 7 Placentero -En Psicología del Tránsito ha tenido escasa aplicación.
Resultados esperados
a) El IAT será capaz de discriminar entre grupos según su modo de transporte (bicicleta/auto); b) Se observará una correlación positiva entre la medida implícita y
explicita de preferencia hacia la bicicleta/auto; c) La preferencia implícita tendrá un aporte singular a la explicación de la elección del medio de transporte,
independiente del poder explicativo de la preferencia explicita; d) Las preferencias explícitas e implícitas hacia el uso de la bicicleta/auto incrementarán el poder
explicativo de los factores contextuales sobre (1) la frecuencia de uso de cada medio y (2) la intención de utilizarlo en el futuro.
Referencias
1361
LAS TÉCNICAS DE REPRODUCCIÓN ASISTIDA: ANÁLISIS
INTERDISCIPLINARIO Y BIOÉTICO
Colacci R1, Jorge C2, Poli MN3, Iudica C1, San Martín V1, Zanier J13, Morgavi V1.
1Facultad de Psicología UNMdP, 2Facultad Derecho UNMdP, 3AGHu.
Resultados
Introducción
Mayor número de consultas de parejas con
El siguiente trabajo surge a partir de los diagnóstico de infertilidad/esterilidad.
desarrollos realizados por un grupo de Incremento consultas de parejas homoafectivas,
Investigación de la Facultad de Psicología principalmente mujeres y mujeres solas que buscan un
conformado interdisciplinariamente. Su inicio embarazo.
parte del estudio de la infertilidad masculina y Resistencia inicial a la aceptación de sugerencia de
sus efectos en la subjetividad, derivando en utilización de material donado, pero suele preferirse a la
nuevos ejes de investigación referidos a las idea de la adopción.
tecnologías de reproducción asistida y sus Surgimiento de distintas consultas acerca de la figura
efectos en la subjetividad actual. Actualmente del dador y condición legal de la situación, antes o ya
la investigación se centraliza en el impacto de aceptada la técnica.
las técnicas que exigen alta complejidad, y Todos subrayan la presencia de angustia en los
particularmente las que involucran dación de pacientes que consultan por infertilidad y consideran
gametos (heterólogas). deseable que estén contenidos psicológicamente.
Minoría no significativa de profesionales explicita la
importancia de indagar en mayor profundidad los
Metodología motivos de la demanda, previamente a la intervención
Entrevistas realizadas a informantes claves técnica.
(médicos especialistas y referentes jurídicos) Al menos el 50% de los especialistas consultados
introdujo la indicación de trabajar con gametas
femeninas dadas si la paciente supera los 35 años.
Conclusiones
• Si bien las TRAs son abordadas desde el eje salud-enfermedad, y generan una esperanza para muchos, son
conducidas también por grandes intereses políticos y económicos.
• Se interviene en algunas situaciones sin diagnóstico o causa justificada o en tiempos menores a los
estipulados.
• Se asocia a un nuevo mercado que es el congelamiento de óvulos (proyección futura de embarazo) y la
criopreservación de gametos y embriones.
• No siempre se informa acerca de posibles complicaciones y efectos secundarios no deseados.
• Existe un vacío legal ante la nueva fuente filiatoria y sus consecuencias.
Los nuevos modos de gestación y filiación presentan un complejo desafío, que sólo puede ser pensado
desde la interdiciplina, dado que atraviesan variables biológicas, políticas, jurídicas, sociales y
psicológicas. Exigen pensar lo inédito, principalmente lo identitario, en coexistencia de1362
diversas
legalidades que convergen en la temática. Obligan a la reflexión sobre dilemas bioéticos.
CONSULTA COMUNITARIA SOBRE SALUD MENTAL
AUTORES: Alejandra Giménez Castro, Gabriel Bursztyn,
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
Cátedra de Psicología Mariano Bellizzi, Juan Gabriel Primo
Institucional y Comunitaria
OMS : “La salud mental se define como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar
las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.”
GALENDE E. : “La Salud Mental forma parte de las condiciones generales del bienestar, se ocupa específicamente del bienestar psíquico y el
sufrimiento mental, por lo que está estrechamente unida a las condiciones sociales de la vida.” (1990)
a) “Son los problemas. Lo que le pasa a la gente. Las cosas a)“Las personas problemas no tienen. Hay más drogas y violencia, no están mal de la mente”.
malas que le pasan. La cuestión del estrés y todo eso”. a) “Llevar una vida normal” b)“Está relacionado con la droga y todo lo que tenga que ver con eso”.
b) “Son los problemas que a la gente le dan por la edad en c)“Las personas que se drogan”.
b) “Tener salud general”
general. No sé, pero muchas veces la edad influye mucho en
c) “No tener problemas psiquiátricos, poder relacionarse
la salud mental”.
con los demás, llevar una vida normal”
c) Es lo que estamos pasando todos ahora. Nos ataca a
todos.”
Esta categoría hace alusión a aquellos modos de trabajo con Aquí se hace referencia a la presencia de las diversas En esta categoría se hace mención a modos de ayuda a
las personas que padecen problemas de salud mental, que instituciones que pueden proveer ayuda a personas con sujetos con problemas de salud mental, vinculados a diversas
incluyen la presencia de profesionales de la salud problemas de salud mental. funciones tanto de la sociedad como del Estado.
a) “Yendo al psicólogo. No queda otra si no te podés a) “Tratamiento en algún centro especializado.” a) “Con apoyo de la familia principal, ambientes
recuperar”. b) “Yendo a centros de rehabilitación.” confortables.”
b) “Con los psiquiatras. Con controles a las personas mínimo c) “Tiene que ir a un centro donde le atiendan el problema” b) “lo primero sería buscar soluciones a problemas del país y
una vez por año”. luego mejorar los hospitales.”
c) “Yendo al médico y que se haga tratar” c) “Lo debería cuidar toda la sociedad, no con encierro”
IV. RECOMENDACIONES
Generar canales de información para que la población del barrio conozca más acerca del significado de Salud Mental.
Articular las distintas organizaciones barriales para observar proyectos en común relacionados con la salud mental, seguridad y atención primaria de salud.
Divulgar la nueva Ley de Salud Mental para dar a conocer a la población en general y a los profesionales del barrio en particular.
1363
CONSULTA COMUNITARIA BARRIO
SOBRE SALUD MENTAL DEL BARRIO VILLA LOURDES MAPA DEL
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
Cátedra de Psicología
Institucional y Comunitaria
BOLAJUZON, M. FLORENCIA
GIANNICOLA, GISELA BARRIO
Salud mental según la OMS es: La salud mental se define como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la
vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.
…“ Se reconoce a la salud mental como un proceso determinado por componentes históricos, socio-económicos, culturales, biológicos y psicológicos, cuya preservación y mejoramiento implica
una dinámica de construcción social vinculada a la concreción de los DD HH y sociales de toda persona… “ (Ley Nacional de salud mental 2010)
II.
I. SIGNIFICACIONES SOBRE SALUD MENTAL
IV. RECOMENDACIONES
Se recomienda para el barrio V. Lourdes:
* Realizar programas de intervención en prevención y promoción de la salud desde las salitas barriales, charlas sobre enfermedades de SM, ley
de SM, información y apertura de espacios terapéuticos.
* Apertura de clubes de barrio para la inclusión de jóvenes y adolescentes, para colaborar con la no violencia, alejarlos de las drogas y favorecer
su socialización.
1364
Facultad de Psicología
Universidad Nacional de Mar del Plata
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación
INTRODUCCIÓN
Dado que se han encontrado disociaciones en los resultados provenientes de diferentes tareas de inhibición cognitiva (Borella, Carretti, Cornoldi, & De Beni, 2007; Friedman &
Miyake, 2004), se ha formulado un modelo que sugiere la existencia de tres procesos inhibitorios diferenciados: acceso, borrado y restricción (Hasher, Tonev, Lustig, & Zacks,
2001). La función de acceso es la encargada de controlar el ingreso de información irrelevante al foco atencional. El borrado se ocupa de eliminar la información irrelevante del foco
atencional, que puede haber eludido el control de la función de acceso, o que puede haber sido relevante en una situación previa pero por un cambio en los objetivos, ya no lo es
más (Diamond, 2013). La función de restricción consiste en suprimir respuestas preponderantes pero inapropiadas, y se aplica al dominio del comportamiento. Por otra parte, la
flexibilidad cognitiva es la habilidad para activar y modificar ideas y comportamientos en respuesta a cambios en las demandas de las tareas o situaciones. La medida principal
de desempeño en tareas de flexibilidad cognitiva es el costo de cambio, que se caracteriza por una merma en el desempeño en los ensayos que implican un cambio en
comparación con los ensayos donde la tarea se repite (ver Rogers & Monsell, 1995). La mayoría de las propuestas teóricas que intentan explicar dicho fenómeno proponen a la
inhibición como el principal mecanismo explicativo (Philipp, Kalinich, Koch, & Schubotz, 2008), pero hasta el momento no se ha obtenido evidencia empírica concluyente (Koch,
Gade, Schuch, & Philipp, 2010). Por eso, este trabajo aborda la relación entre la flexibilidad cognitiva -costo de cambio- y la inhibición de acceso, de borrado y de restricción en
niños escolares.
RESULTADOS
METODOLOGÍA Se halló una correlación positiva y baja entre el índice de costo de cambio
referido a la diferencia en los tiempos de reacción (TR) entre los ensayos donde
Participantes: 73 sujetos de 9-10 y 11-12 años de edad (38 son mujeres), pertenecientes a 4º (n se registra un cambio de regla y los ensayos en los que no, y el índice de
= 36) y 6º (n = 37) año de una escuela primaria de gestión privada de la ciudad de Mar del Plata. inhibición de acceso también referido a la diferencia en los TR entre dos
Se tomó como criterios de inclusión que no hubiesen repetido ningún año escolar y no condiciones (en este caso, entre la condición de 16 distractores y la de 32), pero
presentaran antecedentes de trastornos del aprendizaje, del desarrollo o psicopatologías. no se presentó una correlación significativa con las otras medidas inhibitorias
Materiales: (Tabla 1).
Tabla 1.
1. Flexibilidad cognitiva. Se utilizó una adaptación de una tarea experimental de Davidson et al. Correlaciones entre Inhibición de acceso (1) -diferencia en precisión-, Inhibición de acceso (2) -
(2006). Se muestra un estímulo-objetivo (“dedos”) en el lado izquierdo o derecho de la pantalla. diferencia en TR-, Inhibición de restricción -tiempo de frenado-, Costo de cambio (1) -diferencia en
precisión-, Costo de cambio (2) -diferencia en TR-, Inhibición de borrado (1) -diferencia en TR-,
Los dedos pueden señalar hacia abajo o en diagonal (si aparece sobre el lado derecho de la
Inhibición de borrado (2) -diferencia en precisión-.
pantalla, señala hacia el izquierdo, y viceversa). En los ensayos congruentes se señala en línea
recta hacia abajo y el sujeto debe presionar la tecla que se ubica del mismo lado (respuesta Inhibición Inhibición Costo de Costo de Inhibición Inhibición
de acceso de cambio (1) cambio (2) de borrado de borrado
ipsilateral). En los ensayos incongruentes se señala en diagonal y el sujeto debe presionar la (2) restricción (1) (2)
tecla del lado opuesto al que está el estímulo (respuesta contralateral). En esta tarea se ve Inhibición de
0,01 0,02 0,01 0,18 0,09 -0,09
involucrado el efecto de incompatibilidad espacial o efecto Simon, que refleja la tendencia a acceso (1)
responder de manera ipsilateral. De modo que la tarea exige alternar entre dos reglas (responder Inhibición de
-0,01 0,06 0,31* 0,13 -0,16
acceso (2)
de manera ipsilateral o contralateral) e inhibir la tendencia a responder ipsilateralmente.
Inhibición de
0,01 0,01 -0,11 0,12
2. Inhibición de acceso. Se utilizó la tarea experimental de búsqueda conjunta (Treisman & restricción
Gelade, 1980), donde se solicita al niño que busque un cuadro azul (estimulo blanco) lo más Costo de
0,06 0,20 -0,04
cambio (1)
rápidamente que pueda frente a un conjunto de distractores (condición de interferencia) o sin
distractores (condición control). Así, en la condición de interferencia el estimulo blanco se Costo de
0,14 -0,20
cambio (2)
presenta mezclado con círculos azules o cuadrados rojos, y en la condición control se muestra
Inhibición de
aislado o junto a estímulos fácilmente distinguibles. borrado (1)
0,15
3. Inhibición de borrado. Se empleó una adaptación de una tarea de Oberauer (2005), que * p < 0,01
consta de tres presentaciones: aprendizaje, señal y reconocimiento. Aprendizaje: en esta etapa El análisis de regresión, que estimó la contribución del índice de inhibición de
se presentan simultáneamente dos listas de tres estímulos visuales (figuras abstractas) cada acceso al de costo de cambio, arrojó los siguientes resultados: Beta = 0,31, t =
una. Los estímulos de una de las listas se presentan en azul, y los de la otra lista se presentan 2,74, p < 0,01, r2 = 0,10.
en rojo. Señal: Luego de que se muestren las listas, se presenta una señal que informa cuál de DISCUSIÓN
las dos listas será relevante para una posterior tarea de reconocimiento. La señal puede ser un
Hemos hallado una contribución diferencial de los distintos procesos inhibitorios
rectángulo rojo, que señala que la lista roja deberá ser la recordada, o un rectángulo azul, que
a la flexibilidad cognitiva, en tanto los procesos inhibitorios de borrado y de
señala que la lista azul será la relevante. Reconocimiento: Al final aparece un estímulo negro
restricción no mostraron relación con el fenómeno de costo de cambio, y el de
(una de las figuras de las listas) dentro del rectángulo rojo o azul y los participantes deben indicar
acceso presentó una correlación baja. De modo que la disminución de los TR en
si estaba o no en la lista relevante, presionando una tecla para SÍ y otra para NO.
los ensayos con cambio se debe a la intervención de la función de acceso,
4. Inhibición de restricción. Se diseñó una tarea basada en el Paradigma de la Señal de Parar encargada de resistir la interferencia de información irrelevante para los
(PSP) (Verbruggen & Logan, 2009). En el primer bloque de práctica (tarea primaria) se presentan propósitos actuales. Este resultado coincide con los reportados por Friedman y
solo ensayos de ejecución. Aparece en el centro de la pantalla una flecha en color rojo Miyake (2004) en un estudio con población adulta. Por otra parte, resulta
señalando hacia la izquierda o hacia la derecha y el participante debe presionar lo más interesante destacar que el peso diferencial de los tres procesos sobre el costo
velozmente posible la tecla izquierda o derecha del teclado según la orientación de la flecha. A de cambio podría interpretarse como evidencia a favor de un enfoque no unitario
continuación se presenta el segundo bloque de práctica, donde el participante debe realizar la de la inhibición (ver Friedman & Miyake, 2004). Adicionalmente, dado que
misma tarea que en el anterior, pero en este caso se solicita que intente detener su respuesta nuestro análisis solo muestra asociación del costo de cambio con la inhibición de
cada vez que escuche una señal auditiva (señal de parar). Por lo tanto, durante la ejecución de acceso, y no con los otros procesos inhibitorios, podría considerarse que los
la tarea primaria, ocasionalmente y de manera imprevista, debe frenar su respuesta (tarea enfoques que atribuyen el costo de cambio de exclusivamente a la interferencia
secundaria) cada vez que escuche la señal de parar. El tercer bloque es el experimental, y es el proactiva generada en la tarea anterior resultan insuficientes. Por último, resulta
que permite obtener los distintos índices de desempeño para el cálculo del tiempo de frenado, necesario destacar que en la tarea de inhibición de borrado -que era esperable
que es la principal medida de desempeño de la tarea. se relacionara con el costo de cambio- se efectuaron modificaciones
importantes, ya que la tarea original tiene un formato verbal y la diseñada para
este estudio, un formato visual (se usaron figuras abstractas en vez de
palabras). Por ende, los hallazgos obtenidos deben considerarse como
preliminares.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Borella, E., Carretti, B., Cornoldi, C., & De Beni, R. (2007). Working memory, control of interference and everyday experience of thought interference: When age makes the difference. Aging, Clinical and Experimental Research, 19, 200-
206.
Diamond, A. (2013) Executive Functions. Annual Review of Psychology, 64, 135-168.
Friedman, N. & Miyake, A. (2004). The relations among inhibition and interference control functions: A latent-variable analysis. Journal of Experimental Psychology: General, 133(1), 101-135.
Koch, I., Gade, M., Schuch, S., & Philipp, A. (2010). The role of inhibition in task switching: A review. Psychonomic Bulletin & Review, 17(1), 1-14.
Oberauer, K. (2005a). Binding and inhibition in working memory - individual and age differences in short-term recognition. Journal of Experimental Psychology: General, 134, 368-387.
Philipp, A., Kalinich, C., Koch, I., & Schubotz, R. (2008). Mixing costs and switch costs when switching stimulus dimensions in serial predictions. Psychological Research, 72, 405-414.
Treisman, A. & Gelade, G. (1980). A feature integration theory of attention. Cognitive Psychology, 12, 97-136.
Rogers, R. & Monsell, S. (1995). The costs of a predictable switch between simple cognitive tasks. Journal of Experimental Psychology: General, 124, 207-231. 1365
Verbruggen, F. & Logan, G. (2009). Automaticity of cognitive control: Goal priming in response-inhibition paradigms. Journal of Experimental Psychology: Learning, Memory, and Cognition, 35(5), 1381-1388.
BIENESTAR PSICOLÓGICO: DIFERENCIAS DE GÉNERO EN
ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS
del Valle, M. ; Urquijo, S.; Heredia, L. ; Hormaechea, F.; Ané, A.
*Centro de Investigación de Procesos Básicos, Metodología y Educación (CIMEPB), Universidad Nacional de Mar del Plata
mdelvalle@mdp.edu - sebasurquijo@gmail.com
INTRODUCCIÓN
A fines de la década del 80, la Psicología amplía su foco de interés desde los aspectos patológicos, enfermos y desajustados, hacia un nuevo paradigma,
conocido como psicología positiva o salugénica, el cual incorpora aspectos positivos, tales como felicidad, calidad de vida y salud mental.
El término Bienestar Psicológico puede definirse como la autoevaluación que las personas realizan sobre sus vidas, y el equilibrio entre expectativas,
esperanzas, sueños, realidades conseguidas o posibles, que se expresan en términos de satisfacción y capacidad de afrontar los acontecimientos vitales, con
el fin de conseguir adaptación o ajuste (Molina Sena & Meléndez Moral, 2006).
Una de las investigadoras que ha realizado importantes aportes en el estudio del bienestar es Carol Ryff, quien critica los estudios clásicos sobre satisfacción
afirmando que en general se ha considerado el bienestar psicológico como la ausencia de malestar o de trastornos psicológicos, ignorando las teorías sobre
la autorrealización, el ciclo vital, el funcionamiento mental óptimo y el significado vital (Ryff, 1989). Señalando la multidimensionalidad del constructo, la autora
sostiene que el mismo estaría compuesto por seis dimensiones:
•Autoaceptación: capacidad para sentirse bien consigo mismo incluso siendo consciente de las propias limitaciones
•Relacionamiento positivo: autopercepción sobre la capacidad de mantener relaciones sociales estables, confiables y duraderas.
•Autonomía: autopercepción capacidad de mantener individualidad, asentarse en las propias decisiones y , mantener independencia y autoridad personal
•Dominio del entorno: autoevaluación sobre la habilidad personal para elegir o crear entornos favorables para satisfacer deseos y necesidades, y poseer
una mayor sensación de control sobre el contexto
•Propósito en la vida: autoevaluación de la habilidad para marcarse metas y definir objetivos que le permitan a la persona dotar a su vida de un cierto
sentido
•Crecimiento personal: autopercepción del desarrollo de las metas, capacidades y potencialidades propias y del crecimiento como persona.
METODOLOGÍA
OBJETIVO
Se trabajó con una muestra de conveniencia de 475 estudiantes (346 mujeres y 129 hombres) regulares de
Determinar la existencia de diferencias de género distintas unidades académicas de la Universidad Nacional de Mar del Plata, de ambos sexos, a quienes se
respecto del bienestar psicológico en estudiantes de la aplicó la Escala de Bienestar Psicológico de Ryff (Díaz et. al., 2006), que permite evaluar las seis
Universidad Nacional de Mar del Plata. dimensiones propuestas por Ryff en su modelo multidimensional del bienestar psicológico
RESULTADOS
Estadísticos de grupo diferencias por género Prueba t de muestras independientes
para Bienestar Psicológico
Media Desv. Típ. Error típ de la media Sig. Diferencia de Error típ. de la
t
(bilateral) medias diferencia
Fem Masc Fem Masc Fem Masc
AutoAceptación -0,004 0,997 0,000 0,083
AutoAceptación 4,59 4,59 0,76 0,90 0,04 0,08
Relacionamiento Positivo 2,236 0,026 0,179 0,080
Relacionamiento Positivo 5,16 4,98 0,74 0,86 0,04 0,08
Autonomía 4,18 4,44 0,77 0,72 0,04 0,06 Autonomía -3,400 0,001 -0,265 0,078
Dominio del Entorno 4,63 4,61 0,75 0,75 0,04 0,07 Dominio del Entorno 0,266 0,790 0,021 0,077
Crecimiento Personal 5,04 4,81 0,73 0,93 0,04 0,08 Crecimiento Personal 2,828 0,005 0,230 0,081
Satisfacción Vital 4,78 4,63 0,73 0,87 0,04 0,08 Satisfacción Vital 1,851 0,065 0,147 0,079
CONCLUSIONES
Se encontraron diferencias estadísticamente significativas según el género para las dimensiones Relacionamiento Positivo, Autonomía y Crecimiento Personal.
Existe una tendencia en los hombres a demostrar mayor autonomía (congruente con otras investigaciones, p.e., Zubieta, Fernández y Sosa, 2013), y en las
mujeres a exhibir mayores valores en relacionamiento positivo (al igual que lo encontrado por Arhens & Ryff, 2006; Valle et al., 2011 Barra Almagiá, Soto
Quevedo, Schmidt Díaz, 2013; y Zubieta, Fernández y Sosa, 2013) y en crecimiento personal (como postularon Andalete, 2013; Barra Almagiá, Soto Quevedo,
Schmidt Díaz, 2013; y Zubieta, Fernández y Sosa, 2013).
Es decir, se encontró en las mujeres una tendencia hacia valores más expresivos comunales y en los hombres hacia valores más instrumentales y agénticos. En
términos de bienestar, las mujeres muestran una mejor relación con el entorno que las rodea, ya que se perciben mejor en sus posibilidades de crecimiento y de
relaciones con los otros, mientras que los hombres enfatizan como fuente de su bienestar la autonomía. Estos resultados nos permiten brindar una explicación
que delinearía una clásica atribución social, donde las mujeres son más afables, sociales y emocionales, mientras que los hombres son instados culturalmente a
presentar patrones de independencia, responsabilidad,, individualidad, autoridad personal y/o, en síntesis, autonomía, como signo de masculinidad.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Zubieta, E., Fernández, O. y Sosa, F. (2012). Bienestar, Valores y Variables Asociadas. Boletín de Psicología, 106, 7-27.
1366
Estado de Salud en Conductores de Taxi
Cirese A.P; López S.S; Nucciarone M.I. ; Ungaro, J.
Metodología
Conclusiones
Resultados
Se identificaron diferentes aspectos relacionados con la salud
Hábitos y cuidado de la salud que resultan problemáticos en esta población, entre ellos: problemas
Se identificaron diferentes factores de riesgo vinculados a hábitos de sedentarismo, malos hábitos alimenticios, tabaquismo y uso
que se potencian por las características del trabajo. Por ejemplo: irregular de dispositivos de auto-protección (cinturón de seguridad).
A nivel de sintomatología, se destacan los problemas relacionados con la
(1) Problemas para mantener una alimentación saludable. Un fatiga y el agotamiento físico y emocional. Los problemas musculo-
dato relevante es que solo un 38% pueden volver a su casa para esqueléticos también son muy prevalentes en la población.
comer. En el horario de trabajo se ingieren principalmente
comidas rápidas, refrigerios y colaciones. En este contexto, resulta importante trabajar en la elaboración de
programas preventivos orientados a promover hábitos más
(2) Tabaquismo. Se trata de un hábito frecuente entre los saludables. Asimismo, es importante seguir incrementando el acceso
trabajadores del sector (aproximadamente el 40% refiere fumar a la cobertura médica, que en esta población es limitada.
(un 11% informa consumir más de un paquete diario).
Por último, se requiere profundizar las acciones orientadas a
(3) Alto grado de sedentarismo. Solo el 23 % realizan actividad física mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del sector (e.g.,
con cierta regularidad. reducción de la jornada laboral). El rol de las entidades
representativas en este sentido es fundamental.
(4) Uso irregular del cinturón de seguridad. Más del 40 % no usan o
solo usan “a veces”.
Referencias bibliográficas
Ledesma, R.; Poó, F. & Peralta, M. (2008) Condiciones de trabajo y estado de salud en conductores de servicio de taxi. Revista del Instituto de Investigaciones de la
1367
Psicología Económica y Teoría de Juegos Comportamental: Cómo los procesos psicológicos influyen en el pensamiento
estratégico.
Breccia, Fermín; Aguilar, María José; Zabaletta, Verónica; López, Marcela
Grupo de Investigación: Comportamiento, Genética y Ambiente –
CIMEPB. Facultad de Psicología. UNMDP
Introducción
Pensamiento Estratégico
Se describe a través de...
El pensamiento estratégico es el acto de calcular la estrategia que se utilizará para lograr un
resultado esperado.
Teoría de Juegos:
La Teoría de Juegos es el lenguaje matemático Las aplicaciones de la Teoría de Juegos permitieron esquematizar
Algunas potencialidades...
utilizado para describir las interacciones las interacciones humanas y crear una taxonomía de las mismas. A
estratégicas y los componentes principales de los su vez, permitió especificar lo que harían jugadores con distintos
juegos. Aquí, las decisiones de cada jugador niveles de racionalidad. El poder de la Teoría de Juegos es su
afectan las ganancias de los otros jugadores. Los generalidad y su precisión matemática
elementos de un juego son los jugadores, las
estrategias, la información y la estructura del Cuando estos juegos son replicados en experiencias concretas,
juego, los resultados de las decisiones de todos los comportamientos humanos muchas veces difieren
Algunas limitaciones... notablemente del comportamiento optimo estipulado por el
los jugadores y las preferencias que los jugadores
tienen por sobre estos resultados (por ejemplo, abordaje analítico de la Teoría de Juegos.
preferir ganar más dinero a ganar menos dinero).
(Camerer, 2014)
La Teoría de Juegos Comportamental utiliza evidencia
experimental para informar y expandir los modelos
matemáticos analíticos, tomando en cuenta aspectos como
los límites cognitivos, la emoción, las reglas de aprendizaje
y la utilidad social entre otros. Este abordaje es específico a
las interacciones estratégicas y arraiga más en profundidad
a la Teoría de Juegos en las ciencias cognitivas (Camerer,
2003a; Camerer 2003b)
Objetivo general
El objetivo del presente trabajo es presentar el estado del arte sobre los procesos psicológicos involucrados en el pensamiento estratégico con la
finalidad de sentar las bases para futuras líneas de investigación sobre la temática.
Resultados
Framing: La invariancia (cambios Teoría de la Mente: Mayores niveles de
minúsculos en la descripción de las Procesos activación en la corteza medial
consecuencias no afectarían a la toma de prefrontal se correlacionaron con
decisiones en el agente racional) es Psicológicos mejores tomas de decisiones en un
violada por efecto framing o encuadre, en juego estratégico (Coricelli y Nagel,
donde descripciones equivalentes en su 2009)
contenido (aunque distintas en su
formulación) llevan a que las personas Utilidad Social: En situaciones en donde
tomen decisiones diferentes. el jugador puede decidir si desea cooperar
(Kahneman,2003). o no con otro jugador para dividir una
ganancia, la teoría de juegos analítica
supone que el jugador intentará maximizar
Control Emocional: El control emocional cognitivo su propia ganancia aunque en los hechos
se utilizó con éxito para minimizar los este tomará en cuenta las ganancias del
comportamientos riesgosos, reducir la aversión a otro, su concepción de justicia y generará
las pérdidas y maximizar recompensas (Martin y teorías acerca de lo que el otro jugador
Delgado, 2011) consideraría justo. (Camerer, 1997).
Discusión y proyección
Los resultados de la revisión demuestran que el estudio de por qué las personas no siempre se comportan como estrategas óptimos o toman decisiones
que los separan del supuesto maximizador racional de ganancias es abordado desde distintas perspectivas en cuyos diseños los procesos psicológicos
juegan diversos papeles. En ciertos casos los estudios realizan descripciones y mediciones psicológicas precisas mientras que en otros se limitan a señalar
la discrepancia entre la respuesta prevista por la teoría clásica y la respuesta encontrada en las experiencias concretas, asociando esta discrepancia a uno
o varios procesos psicológicos, pero sin medir estos directamente. Adicionalmente, varias líneas de investigación miden el comportamiento concreto en
tomas de decisiones estratégicas o financieras realizando medidas de neuroimagen y asumiendo los procesos psicológicos involucrados en dicha toma de
decisión a través de una inferencia inversa, esto es, deduciendo los procesos involucrados a través de la activación cortical. Se postulan como futuras
líneas de investigación promisorias un relevamiento sistemático de la literatura acerca de procesos psicológicos involucrados en el pensamiento
económico/estratégico y la realización de diseños experimentales que midan de forma concreta el grado de influencia que dichos procesos psicológicos
tienen sobre el pensamiento económico/estratégico.
Referencias
Camerer, C. F. (1997). Progress in Behavioral Game Theory. Journal of Economic Coricelli, G., & Nagel, R. (2009). Neural Correlates Of Depth Of Strategic Reasoning In Medial
Perspectives, 11(4), 167-188. Prefrontal Cortex. Proceedings of the National Academy of Sciences, 106(23), 9163-9168.
Camerer, C. F. (2003a). Behavioural studies of strategic thinking in games. Trends in Cognitive Kahneman, D. (2003). Maps Of Bounded Rationality: Psychology For Behavioral Economics.
Sciences, 7(5), 225-231. American Economic Review, 93(5), 1449-1475.
Camerer, C. F. (2003b). Behavioral game theory: experiments in strategic interaction. New Martin, L. N., y Delgado, M. R. (2011). The Influence of Emotion Regulation on Decision-
York: Russell Sage Foundation . making under Risk. Journal of Cognitive Neuroscience, 23(9), 2569-2581.
Camerer, C. F. (2014). The Neural Basis of Strategic Choice. In P. W. Glimcher y E. Fehr 1369
(Eds.), Neuroeconomics: decision making and the brain (Second Edition ed., pp. 479-492).
London: Academic Press.
DIFERENCIAS EN EL PROCESAMIENTODE SERES VIVOS Y
OBJETOS INANIMADOS EN NIÑOS EN EDAD ESCOLAR
Fumagalli, J.1, 2, 4, 5 Borovinsky, G. 1, 2. Shalóm, D. 5, Manes, F. 1, 3 ,5 Martínez-Cuitiño, M. 1, 2, 3, 4
1 Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), 2 Laboratorio de Investigaciones en Lenguaje (LILEN) – Fundación INECO, 3 Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro, 4 Instituto de Lingüística, Facultad de
Filosofía y Letras, UBA - 5 CONICET, Buenos Aires, Argentina.
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
Durante las últimas décadas se detectó que los sujetos adultos procesan Este análisis inicial muestra que los niños de primer ciclo producen
diferencialmente seres vivos (SV) y objetos inanimados (OI). Estas diferencias significativamente menos palabras que los niños de segundo ciclo (p<,01).
también se han encontrado en pacientes con lesiones cerebrales adquiridas
(Warrington & Shallice, 1984). Los resultados encontrados en ambas poblaciones Se realizó una nueva prueba t de Student a fin de identificar diferencias entre
son aún contradictorios. En general se observa un peor desempeño ante SV, con dominios en función de la edad de los sujetos. El análisis arrojó diferencias
una relativa conservación de los OI (Capitani et al., 2003). significativas a favor de SV tanto en los niños del primer ciclo (t(33)= 12,301; p<0,001)
como en los alumnos de segundo ciclo (t(30)=10,743; p <0,001).
Una de las tareas más utilizadas es la de fluencia semántica. En esta tarea se
solicita que, en un tiempo limitado, el evaluado recupere la mayor cantidad de
ejemplares de determinada categoría semántica (por ejemplo, animales). Se ha
considerado que el desempeño en la fluencia semántica depende de la organización 70
de la memoria semántica (Riva, Nichelli & Devoti, 2000).
60
Esta tarea ha sido muy utilizada con fines clínicos en la evaluación de pacientes 50
adultos así como en ciertas poblaciones de niños (autismo, déficits de atención,
40 SV
dislexia, Síndrome de Down, etc.) (Braga, Souza, Najjar & Dellatolas, 2007). OI
30
Actualmente no hay suficientes datos del procesamiento semántico en niños
20
hispanohablantes de Argentina sin dificultades en el desarrollo (Sunila & Bellur,
2014). 10
0
El objetivo de este trabajo es identificar posibles diferencias en el procesamiento de
Primer ciclo Segundo ciclo
SV y OI en tareas de fluencia semántica en niños de Nivel Primario.
MÉTODO CONCLUSIONES
El objetivo de este trabajo era identificar posibles diferencias en el procesamiento de
Participantes SV y OI en tareas de fluencia semántica en niños de Nivel Primario.
Participaron de esta investigación 74 alumnos de nivel primario. Se comparó el Los resultados obtenidos muestran diferencias en niños de Nivel Primario en la
desempeño de 34 niños de primer ciclo (1er a 3er grado) y 30 de segundo ciclo (4to a activación de los dominios de SV y de OI. Los datos de primer y segundo ciclo dan
6to grado). Todos los niños fueron evaluados individualmente y la entrevista duraba cuenta de una ventaja en la activación de ejemplares pertenecientes al dominio de
aproximadamente 10 minutos. SV. Estos hallazgos muestran disociaciones en la activación de SV y OI desde
edades tempranas en el desarrollo.
Tarea Estos datos acuerdan con la Hipótesis de Dominio Específico (Caramazza &
Shelton, 1998) que sugiere una base evolutiva para las disociaciones encontradas
Se administró una tarea de fluencia semántica en forma oral. Se evaluaron 8 entre SV y OI. Su principal supuesto es que el conocimiento conceptual está
categorías semánticas, 4 pertenecientes al dominio de SV (animales, vegetales, organizado en relación a un pequeño número de categorías semánticas que han sido
profesiones y partes del cuerpo) y 4 al de OI (ropas, útiles escolares, deportes e salientes y necesarias para el desarrollo de nuestra especie. Estos dominios son
instrumentos musicales). producto de la selección natural, ya que fueron fundamentales para la supervivencia
como, por ejemplo, hallar comida y evitar el encuentro con otros animales peligrosos.
Dentro del dominio de SV se incluye tanto la comida (vegetales y animales), la
Análisis estadístico medicina (vegetales) como los posibles predadores (animales peligrosos para el
hombre). Los OI representan la ayuda necesaria para conseguir la comida
Se realizó un análisis de diferencias entre grupos con el estadístico t de Student para (herramientas).
muestras relacionadas a fin de comparar posibles diferencias entre los dominios de
SV y OI dentro de cada ciclo (primer y segundo ciclo). A fin de corroborar si efectivamente existe un procesamiento semántico diferencial
desde edades tempranas, se deberá evaluar niños de Nivel Inicial a fin de poder
certificar esta hipótesis.
REFERENCIAS
-Braga, L. W., Souza, L. N., Najjar, Y. J., & Dellatolas, G. (2007). Magnetic resonance imaging (MRI) findings and neuropsychological sequelae in children after severe traumatic brain injury: The role of cerebellar lesion. Journal of Child Neuropsychology, 22, 1084–1089.
- Capitani, E., et al. (2003). What are the facts of semantic category-specific deficits? A critical review of the clinical evidence. Cognitive Neuropsychology 20, 213-261.
- Caramazza, A. and J. R. Shelton (1998). Domain-specific knowledge systems in the brain: The animate-inanimate distinction. Journal of Cognitive Neuroscience 10, 1-34.
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- Riva, D., Nichelli, F., & Devoti, M. (2000). Developmental aspects of verbal fluency and confrontation naming in children. Brain and Language, 71, 267–284.
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- Warrington, E.K. & T. Shallice. (1984). Category specific semantic impairments. Brain 107(3), 829-854.
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
Los datos obtenidos y procesados brindan información acerca de la cantidad de
El procesamiento semántico es una de las áreas de investigación actual tanto en ejemplares activados para cada una de las categorías semánticas evaluadas. Se
niños como en adultos. Una de las técnicas más utilizadas para obtener datos obtuvo un corpus de 427 ejemplares. La categoría de profesiones alcanzó la mayor
acerca de las principales categorías semánticas es la tarea de la fluencia semántica. cantidad de ítems denominados (18,27%) y la de instrumentos musicales obtuvo el
En esta tarea se solicita a los evaluados que, en un tiempo pautado, recuperen la menor porcentaje (6,09%).
mayor cantidad de ejemplares de determinada categoría semántica (animales, por
ejemplo).
Esta técnica permite conocer la frecuencia en que los ejemplares son incluidos en
una categoría, el orden de presentación de los mismos, la posición en que son
mencionados y la extensión de una categoría (esto es, la cantidad de ejemplares
que la componen). Asimismo, permite hacer otros análisis como la selección de los
ejemplares de cada categoría en función de su tipicidad. Los miembros que se
recuperan para una categoría con mayor frecuencia serán los más típicos, en tanto
que aquellos que sólo aparezcan en ciertas ocasiones serán los atípicos.
MÉTODO
Participantes CONCLUSIONES
Participaron de esta investigación 74 alumnos de nivel primario (34 niños del primer Hasta la actualidad no se disponía de una base de datos obtenidos en tareas de
ciclo (1er a 3er grado) y 30 de segundo ciclo (4to a 6to grado)). Todos los alumnos fluencia semántica en niños en escolaridad primaria adecuada para nuestra región
eran hablantes nativos del español y no presentaban antecedentes neurológicos ni hispanoparlante.
de dificultades en la adquisición del lenguaje.
La información que se presenta en esta investigación constituye el primer corpus de
estímulos normatizados para niños hablantes del español rioplatense.
Tarea
Estos datos serán de fundamental importancia para la selección de material
Se administró una tarea de fluencia semántica en forma oral. Se evaluaron 8 adecuado para la investigación sobre la adquisición del lenguaje normal y también
categorías semánticas. Cuatro categorías pertenecientes al dominio de SV: para el diseño de herramientas adecuadas de evaluación y tratamiento de niños con
animales, comidas, profesiones y partes del cuerpo. Cuatro al dominio de OI: ropas, dificultades en el lenguaje.
útiles escolares, deportes e instrumentos musicales. Todos los niños fueron
evaluados individualmente y la entrevista duraba aproximadamente 10 minutos. Actualmente se trabaja en la ampliación de la muestra.
REFERENCIAS
- García, E.; Rodríguez, C.; Martín, R.; Jiménez, J. E.; Hernández, S. & Díaz, A. (2012). Test de Fluidez Verbal: datos normativos y desarrollo evolutivo en el alumnado de primaria. European Journal of Education and Psychology 5 (1), 53-64.
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INTRODUCCIÓN
El Bienestar Psicológico se asocia con el desarrollo del potencial humano, las capacidades y el crecimiento personal. Representa un juicio sobre cómo se
considera la propia vida en su totalidad; se trata de una medida cognitiva o evaluativa. Ryff sugirió un modelo multidimensional de bienestar psicológico
compuesto por seis dimensiones: autoaceptación, relaciones positivas con otras personas, autonomía, dominio del entorno, satisfacción vital y crecimiento
personal.
Las Estrategias de Aprendizaje son un constructo complejo que incluye elementos cognitivos, metacognitivos, motivacionales y conductuales. Se las
puede entender como el conjunto organizado, consciente e intencional de lo que hace el aprendiz para lograr con eficacia un objetivo de aprendizaje en
un contexto social dado. Ello implica la utilización de planes adaptados a las condiciones de las tareas que disponen de habilidades precisas para
alcanzar el objetivo.
Según diversos autores, las diferencias de género en el aprendizaje existen en la mayoría de los contextos a pesar de los intentos conscientes de igualar
oportunidades y resultados. Muchas son las investigaciones que encuentran diferencias de género en el uso de estrategias de aprendizaje, como así
también en las dimensiones de Bienestar Psicológico.
En el presente trabajo se exploraron y establecieron relaciones entre los niveles de Bienestar Psicológico y la frecuencia de uso de Estrategias de
Aprendizaje de estudiantes universitarios de la carrera de Licenciatura en Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Adicionalmente, se
evaluaron y constataron diferencias según el sexo.
OBJETIVO METODOLOGÍA
Establecer las relaciones entre los niveles de Bienestar Se trabajó con una muestra de conveniencia de 206 estudiantes (166 de sexo femenino y 40 de sexo
Psicológico y la frecuencia de uso de Estrategias de masculino) de la carrera de Psicología de la UNMDP. Para la evaluación del Bienestar Psicológico, se
Aprendizaje, discriminado por género, en estudiantes aplicó la Escala de Bienestar Psicológico de Ryff, que evalúa seis dimensiones del bienestar psicológico.
universitarios de la carrera de Licenciatura en Psicología de Para evaluar la frecuencia de uso de Estrategias de Aprendizaje se utilizó el Cuestionario de Evaluación de
la Universidad Nacional de Mar del Plata. las Estrategias de Aprendizaje de los Estudiantes Universitarios –CEVEAPEU-.
RESULTADOS
Correlaciones entre Bienestar Psicológico y Estrategias de Aprendizaje
AUTOACEPTA RELAPOSITIV AUTONOMIA DOMINENTORN CRECIPERSON SATIVITA
Femenino Masculino Femenino Masculino Femenino Masculino Femenino Masculino Femenino Masculino Femenino Masculino
EstrAAC 0,09 0,02 0,04 -0,03 -0,12 -0,20 0,05 0,03 0,32(**) -0,08 0,16(*) 0,01
EstrPPI 0,04 -0,09 0,03 -0,10 0,09 -0,28(*) 0,05 -0,12 0,18(**) -0,13 0,09 -0,09
EMotiv -0,01 0,06 0,01 -0,13 -0,19(**) 0,02 -0,05 0,12 0,21(**) -0,02 0,08 0,06
CompAfe
-0,00 0,24 -0,10 0,16 -0,27(**) 0,20 -0,10 0,27(*) -0,03 0,05 -0,07 0,26
EstMeta 0,22(**) -0,05 0,08 0,02 0,12 -0,26 0,23(**) -0,04 0,38(**) -0,08 0,25(**) -0,07
EstCtrl 0,08 -0,13 0,09 -0,01 0,03 -0,44(**) 0,04 -0,23 0,20(**) -0,14 0,12 -0,12
EstBuSeI 0,05 -0,15 -0,01 -0,11 -0,01 -0,11 0,14(*) -0,09 0,07 -0,11 0,06 -0,01
EstProUI 0,03 -0,06 0,04 -0,08 0,12 -0,28(*) 0,01 -0,11 0,19(**) -0,12 0,09 -0,10
* La correlación s significativa al nivel 0,05 (unilateral).
** La correlación es significante al nivel 0,01 (unilateral).
Salvar: *EstrAAC: Afectivas, de Apoyo y Control; EstrPPI: Procesamiento de Información; EMotiv: Motivacionales; CompAfe: Componentes Afectivos; EstMeta: Metacognitivas; EstCtrl: Control del contexto, interacción social y manejo de recursos; EstBuSeI: Búsqueda y Selección de información; EstProUI: Procesamiento y
Uso de la información. Dimensiones de Bienestar Psicológico: *AUTOACEPTA: autoaceptación; * RELAPOSITIV: Relacionamiento Positivo; * AUTONOMIA: DOMINENTORN: dominio del entorno; ; CRECIPERSON: crecimiento personal; *SATIVITA: satisfacción vital .
CONCLUSIONES
;
Los resultados muestran correlaciones en estudiantes universitarios de ambos sexos entre las dimensiones de Bienestar Psicológico y la frecuencia de uso de Estrategias de
Aprendizaje.
Se observaron mayor número de correlaciones en estudiantes de sexo femenino, a diferencia de los estudiantes masculinos, entre las diferentes dimensiones de Bienestar Psicológico
y la utilización de Estrategias de Aprendizaje. Esto significaría que aquellas mujeres que presentan un mayor nivel autopercibido de bienestar psicológico en general, tienden a utilizar
con mayor frecuencia distintas estrategias de aprendizaje en el ámbito educativo.
En mujeres, Crecimiento Personal ha mostrado correlaciones positivas con la mayoría de las Estrategias de Aprendizaje. Esto es atribuible a que una autopercepción de expansión
personal, apertura a nuevas experiencias, incremento de autoconocimiento, permitiría usar y probar diferentes Estrategias de Aprendizaje en pos de los objetivos académicos. A su
vez, Autonomía mostró correlaciones negativas con el uso de Estrategias Motivacionales y Afectivas, esto podría explicarse desde el hecho que personas con autopercepción de
autodeterminación e independencia, como así también de autoevaluación basada en estándares personales, tiende a utilizar en menor medida estrategias orientadas al control y el
sostenimiento del proceso aprendizaje
Por el contrario, en los hombres, la escala de bienestar psicológico que más se destaca es la de autonomía. La misma presenta correlaciones de tipo negativas –al igual que en las
mujeres-, es decir, a mayor nivel de autonomía percibida, menor es la frecuencia de uso de las estrategias de aprendizaje, las cuales incluyen el contacto con pares, el control del
contexto, el procesamiento de la información. Al parecer, podríamos decir que las personas que se autoperciben autónomas utilizan en menor medida estrategias para llevar a cabo un
aprendizaje eficiente.
1372
Facultad de Psicología
Centro de Investigación en Procesos Básicos,
Universidad Nacional de Mar del Plata
Metodología y Educación
INTRODUCCIÓN RESULTADOS
P300 Latencia
El Trastorno por déficit de atención con
FZ CZ
hiperactividad (TDAH) es uno de los trastornos del
neurodesarrollo más frecuentes en población Correlación de Pearson .88(*) .92(*)
TAS TR
infantil. Las manifestaciones clínicas se pueden Sig. (bilateral) .03 .09
agrupar en signos o síntomas de inatención,
hiperactividad e impulsividad que afectan el Se encontraron correlaciones positivas entre los
desempeño cognitivo y comportamental del niño. tiempos de reacción del TAS y las latencias del P300
Una de las técnicas de investigación neurofisiológica tanto en FZ como en CZ.
aplicada actualmente al estudio del TDAH es la que
registra la actividad eléctrica cerebral a través de los
potenciales cerebrales asociados a estímulos CONCLUSIONES
específicos, conocidos como potenciales evocados
cognitivos, provocados por la elaboración sensorial Los resultados preliminares del estudio indican que la
del individuo frente al estímulo. El objetivo del utilización de técnicas electrofisiológicas como los
presente trabajo fue analizar la velocidad de potenciales evocados cognitivos constituyen una
procesamiento en niños con diagnóstico de TDAH herramienta complementaria y válida en el estudio de
mediante la valoración de los tiempos de reacción las disfunciones cognitivas en niños con TDAH.
en la atención selectiva y los tiempo de latencia de
la onda P300 de los potenciales evocados cognitivos.
1373
Facultad de Psicología
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Metodología y Educación
Universidad Nacional de Mar del Plata
INTRODUCCIÓN. PROCEDIMIENTO.
La regulación emocional (RE) consiste en la capacidad de iniciar, Se diseñó un instrumento de evaluación de la RE para niños
mantener, modular o cambiar la ocurrencia, intensidad o duración de adaptado a nuestro medio, constituido por seis historias, las cuales
los estados afectivos internos con el objetivo de alcanzar una meta tres evocan una emoción de enojo y tres una emoción de tristeza.
(Thompson, 1990). Gross y Thompson (2007) identifican cinco Para su construcción se procedió en primer lugar a la redacción de
procesos cognitivos y conductuales que propician la aparición de las historias y a la codificación de los reactivos utilizando como
distintas estrategias de manejo emocional: selección de la situación, modelo el instrumento Emotion Regulation Interview (ERI) de
modificación de la situación, despliegue atencional, cambio cognitivo Zeman, Shipman, & Penza-Clyve (2001), que consta de seis viñetas
y modulación de la respuesta. Las cuatro primeras se consideran que evocan emociones y son precedidas por preguntas que
estrategias de aparición temprana focalizadas en los antecedentes, y indagan expresión y regulación emocional. Luego, se realizó una
la última es una estrategia de aparición más tardía focalizada en la prueba piloto, lo que permitió la adecuación lingüística, el aporte
respuesta. En los últimos años, ha cobrado relevancia la evaluación de de evidencias de validez aparente y la posibilidad de distinguir
la RE en la infancia por su probada influencia sobre diversas áreas del aquellas historias que evocaban altos niveles emocionales y la
desarrollo del individuo, especialmente de su funcionamiento social mayor cantidad de estrategias de regulación emocional.
(Lozano, González Salinas, & Carranza Carnicero, 2004). Si bien se han
diseñado instrumentos para evaluar la RE en niños, muchos fueron RESULTADOS.
realizados en lengua inglesa, y aquellos que fueron desarrollados en
español, pertenecen a otros modelos de RE. Por lo tanto, el objetivo A partir de los resultados obtenidos, las historias y los reactivos
del presente trabajo es diseñar y poner a prueba un instrumento de fueron sometidos a revisión realizándose modificaciones y
medida de las diferentes estrategias de RE planteadas por Gross y confeccionando la versión final del instrumento, la cual
Thompson (2007) en niños argentinos. posteriormente se administrará a una muestra mayor con el fin de
realizar los análisis estadísticos correspondientes. El instrumento
METODOLOGÍA. quedo constituido por dos historias que evocan enojo y tristeza
respectivamente, y por reactivos que evalúan intensidad de la
El tipo de estudio fue descriptivo psicométrico y la muestra para emoción, expresión o supresión de las emociones y estrategias de
realizar la prueba piloto se conformó de forma intencional de 58 niños regulación emocional.
escolarizados de la ciudad de Mar del Plata, Argentina (31 niñas y 27
niños), con edades comprendidas entre 8 y 14 (M:10,6). Se excluyeron DISCUSIÓN.
niños con antecedentes de enfermedades neurológicas o psiquiátricas,
trastornos del aprendizaje y trastorno de nivel intelectual. Su Contar con un instrumento de RE para niños desarrollado en el
participación fue voluntaria y sujeta a consentimiento informado y se contexto local es de gran importancia ya que los fenómenos
respetaron los principios éticos de la investigación con seres humanos, emocionales se encuentran profundamente modulados por
procurándose las condiciones necesarias para proteger el anonimato y factores situacionales y culturales (Medrano, Moretti, Ortiz &
la confidencialidad de los datos. Pereno, 2013).
BIBLIOGRAFÍA.
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1374
Universidad Nacional Centro de Investigación en
de Mar del Plata Procesos Básicos, Metodología
y Educación
Argentina
Introducción
La Reevaluación Cognitiva (RC) es una estrategia de regulación emocional que supone la construcción de nuevos significados con el objetivo de neutralizar el impacto emocional negativo o de amplificar el
resultado emocional positivo de un evento. Su uso frecuente se asocia a un impacto positivo en términos afectivos y de bienestar psicológico, tanto en adultos (Gross, 2014) como en niños y adolescentes
(Gullone & Taffe, 2011). La ejecución eficiente de esta estrategia requiere de varias funciones ejecutivas, entre ellas se cuentan la memoria de trabajo (MT) y la fluidez verbal (FV) (Schmeichel & Tang,
2013). La MT es un mecanismo de capacidad limitada que involucra procesos implicados en el control, regulación y mantenimiento activo de la información relevante para la ejecución de tareas complejas
(Unsworth, Redick, Heitz, Broadway & Engle, 2009). La FV es una capacidad de generación verbal relacionada con la producción de palabras en una categoría semántica determinada (Roseelli, Jurado &
Matute, 2008). Si bien estudios actuales comienzan a explorar la relación entre la MT, la FV y la RC éstos se han focalizado principalmente en adultos (McRae, Jacobs, Ray, John, & Gross, 2012) prestando
poca atención a la población infantil donde estas capacidades se encuentran en desarrollo (McRae, Gross, Weber, Robertson, Sokol-Hessner, et al., 2012).
Objetivo: El objetivo de este trabajo es analizar las relaciones entre la MT, la FV y la RC y las diferencias por edad en niños escolarizados de 9 a 12 años de edad.
Resultados Grafico 2
Los estadísticos descriptivos permiten observar que los niños de mayor edad poseen medias más Medias de RC en cada grupo de edad
altas en MT, FV y una tendencia similar se observa para el caso de la RC. La correlación bivariada
mostró una asociación estadísticamente significativa entre la MT y la RC (r=.31; p<.05) y entre la FV
y la RC (r=.30; p<.05). El análisis de diferencias de medias de RC mediante un ANOVA de un factor
12,5
en cada grupo de edad indica que éstas no son estadísticamente significativas (F=.71; p=.54). 12,36
Tabla 1
Estadísticos descriptivos para cada Grupo de Edad en MT y RC
Grupo de 11,73 11,71
Variable M DT Mínimo Máximo
Edad
MT 9 12,22 4,02 6 19
10 14,14 3,97 7,5 21
11 13,81 3,13 8,5 18,5
12 13,50 2,76 8,5 18,5
FV 9 8,82 1,662 7 13
10 9,59 3,001 5 15
11 9,36 1,804 6 12 1 2 3 4
12 10,17 2,455 6 14
RC 9 11,73 2,90 5 15
10 11,71 2,33 7 15
11 12,36 2,76 6 15 Nota: 1=Grupo de 9 años; 2=Grupo de 10 años; 3=Grupo de 11 años y
12 12,50 2,12 8 15 4=Grupo de 12 años de edad.
Discusión
El estudio propuso como objetivo principal, describir las relaciones entre la MT, la FV y la RC en un grupo de niños escolarizados de 9 a 12 años de edad y analizar la existencia de diferencias en las
puntuaciones de RC por edad. Los resultados se encuentran en concordancia con lo planteado en la literatura científica, en donde la MT y la FV serían componentes ejecutivos involucrados en la RC
(Schmeichel & Tang, 2013). La MT es importante para la RE ya que permite mantener el objetivo de regulación en el foco atencional a pesar de que las tendencias de respuestas automáticas generadas
por la emoción puedan debilitarlo (Kalisch, 2009). Para la implementación de la reevaluación cognitiva se requiere la capacidad de reemplazar las evaluaciones iniciales de un evento emocional con
evaluaciones secundarias, menos emocionales lo que implicaría la capacidad de actualización (updating) de la MT (Pe, Raes & Kuppens, 2013). La relación entre FV y regulación emocional ha permitido
sugerir a los investigadores que quizás la habilidad verbal general sea también importante la modulación de la propia emoción (Schmeichel & Tang, 2013).
Por otro lado el análisis de la RC en función de grupos de edad no mostró diferencias estadísticamente significativas. Una posible explicación podría considerar que la muestra es relativamente pequeña,
ya que si bien se observa que las medias de los grupos de niños de mayor edad son superiores estas diferencias no alcanzan la significación estadística. También, es posible que las edades consideradas (9 a
12 años de edad) estén muy próximas entre sí y fueran necesarios intervalos etáreos más discriminativos para el caso de la RC. Esperamos que estos resultados contribuyan a mejorar el diseño y
contenido de de programas de promoción de la salud mental infantil. Por ejemplo, Schweizer, Grahn, Hampshire, Mobbs y Dalgleish (2013) ya desarrollaron para posiblación adulta un entrenamiento en
MT que mostró que los participantes no solo incrementaron su MT sino que regularon mejor sus emociones en una tarea de RC.
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Universidad Nacional de Mar del
Centro de Investigación en Procesos Básicos, Plata
Metodología y Educación Argentina
Introducción Metodología:
Los factores de personalidad juegan un rol importante en la predisposición de Participantes: 321 niños de 4to (n=84; M= 9,47 años de edad), 5to (n=75;
los individuos hacia la depresión (e.g. Akiskal, Hirschfeld, & Yerevanian, 1983; M=10,60 años de edad) y 6to año (n=64; M=11,43 años de edad) de la
Widiger & Trull, 1992). El Neuroticismo se ha considerado uno de los rasgos Educación Primaria Básica y 1er año (n=98; M= 12,55 años de edad) de la
de personalidad más importantes para la psicopatología y para la Educación Secundaria de ambos géneros (169 mujeres y 152 varones).
psicopatología en niños, en particular ansiedad y depresión (e.g. Abe, 2005; Instrumentos:
John, Caspi, Robins, Moffitt, Stouthamer-Loeber, 1994; Vreeke & Muris, - Para evaluar el rasgo Neuroticismo se utilizó el Cuestionario Argentino de
2012). Personalidad Infantil CAPI de Lemos (2006).
Los mecanismos mediante los cuales esta vulnerabilidad a la depresión en los - Para evaluar rumiación se utilizó el Cuestionario de Estrategias Cognitivas de
niños con elevado Neuroticismo se ve incrementada son poco conocidos. La Regulación Emocional CERQ –por sus siglas en inglés- de Garnefski et al.
rumiación es una estrategia de regulación emocional que se refiere a focalizar (2007).
la propia atención en el ánimo negativo así como en las implicaciones y - Para evaluar depresión se utilizó la Escala de Autoinforme de Sintomatología
consecuencias de dicho ánimo (Nolen-Hoeksema, 1991) y se ha propuesto Depresiva para Niños y Adolescentes DDPCA –por sus siglas en inglés- de
como un posible mecanismo mediador en adultos como en adolescentes (e.g. Harter y Nowakowski (1987), validada y adaptada a población argentina por
Kuyken, Watkins, Holden & Cook, 2006). Existe evidencia respecto de la Richaud de Minzi, Sacchi y Moreno (2001).
relación entre la rumiación y los síntomas de depresión en niños (e.g. Procedimiento de recolección de los datos y consideraciones éticas: Una vez
Garnefski, Rieffe, Jellesma, Meerum Terwogt & Kraaij, 2007). El objetivo de que os directivos de las instituciones educativas dieron su permiso, se solicitó el
este trabajo es analizar el posible efecto mediador de la rumiación en la consentimiento informado de los padres de los niños. Luego, se informó a los
relación del Neuroticismo con la depresión en niños de 9 a 12 años de edad. niños del estudio y se evaluó a aquellos que además del consentimiento de sus
Las investigaciones realizadas para analizar el posible efecto mediador de la padres prestaron su asentimiento para participar. Se los entrevistó en horario
regulación emocional, se han concentrado principalmente en el efecto escolar, en pequeños grupos de hasta cinco niños, en un aula que la institución
mediador de la rumiación y la preocupación (worry) –pensamientos o educativa destinó para tal fin. La administración se realizó en un encuentro de 20
expectativas negativas sobre eventos futuros (Borkovec, Robinson, Pruzinsky, minutos minutos aproximadamente.
& DePree, 1983)- en la relación del rasgo Neuroticismo con síntomas de Plan de análisis de los datos: Para analizar si la rumiación mediaba la relación
ansiedad y depresión en participantes adultos (e.g. Muris, Roelofs, Rassin, entre el Neuroticismo y la depresión se siguieron las recomendaciones para
Franken & Mayer, 2005; Roelofs, Huibers, Peeters, Arntz & van Os, 2008; evaluar mediación de Baron y Kenny (1986). Para evaluar la significatividad del
Roelofs, Huibers, Peeters & Arntz, 2008) y adolescentes (Kuyken, et al., efecto indirecto se utilizó el test de Sobel (Sobel, 1982).
2006).
Si bien los estudios son relativamente escasos aportan evidencia sobre el rol Resultados
mediador de la regulación emocional en la relación de la personalidad con la El análisis de regresión del lineal para predecir depresión a partir del
ansiedad y depresión en población adulta. Si bien se reconoce que las Neuroticismo fue estadísticamente significativo (β =.383; p<.001). El análisis de
dificultades psicopatológicas en niños y adolescentes no siempre conllevan regresión lineal para predecir el mediador a partir de la variable Neuroticismo
dificultades en su adultez, sí se ha registrado que las problemáticas de los también fue significativo (β =.308; p<.001). El análisis para predecir la depresión
adultos casi siempre devienen de inconvenientes más tempranos (Garnefski, del Neuroticismo y la rumiación también fue significativo (β =.337; p<.001; (β=.150;
Legerstee, Kraaij, van den Kommer, & Teerds, 2002; Merikangas & Angst, p<.001 respectivamente).
1995; Smith, 1995) por lo que resulta valioso analizar estas relaciones en
Rumiación
población infantil.
Tabla 1 a=.30 b=.15
Regresiones lineales
Coeficientes
Coeficientes
Predictor/es VD No
Estandarizados
Estandarizados
Error Neuroticismo Depresión
Beta Beta t
típico
Step 1 Neuroticismo Depresión 4.18 .56 .38 7.40*** c´=.33
(c=.38)
Step 2 Neuroticismo Rumiación 2.80 .48 .30 5.78***
Neuroticismo Depresión 3.67 .58 .33 6.26***
Step 3 Sobel test= 2.50**
Rumiación .18 .065 .15 2.78**
Nota: ***p<.001; **p<.01
Discusión Fig. 1. Efecto mediador de la rumiación en la relación del Neuroticismo con la depresión; c=efecto total; c´=efecto directo; a*b=efecto indirecto
Como era esperado, se encontró una asociación estadísticamente significativa entre el Neuroticismo y los síntomas de depresión y entre el Neuroticismo y la
rumiación, y finalmente entre la rumiación y la depresión. La rumiación posee un efecto mediador en la relación del Neuroticismo con la depresión.
Como afirman Kuyken et al. (2006) en los adolescentes con puntuaciones elevadas en Neuroticismo, los estilos de respuesta rumiativos pueden incrementar la
vulnerabilidad hacia la depresión al exacerbar los estados afectivos negativos, lo que provee un mecanismo para escalar desde la disforia hacia la depresión.
Nuestros resultados muestran que estas asociaciones también se encuentran en niños de 9 a 12 años de edad sugiriendo que los niños que son emocionalmente
más lábiles y que tienden a rumiar más son más vulnerables a experimentar síntomas de depresión.
Considerando que los rasgos de personalidad son relativamente estables y difíciles de modificar, conocer que su influencia sobre los síntomas de depresión es a
través de mediadores que son modificables puede resultar de valor para el futuro diseño y contenido de programas de promoción de la salud mental infantil.
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