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CUARTO ACTO

Primera Escena

Personages
Anunciador
Alfonso
Voz de Jesus

Anunciador: El Señor Jesús se para enfrente de nosotros y nos enseña el amor, después
de eso vemos el mundo tal cual es: injusticias, corrupción,
insensibilidad, egoísmo, envidias y pérdida de valores y
después, sigue y sigue revelándose poco a poco. Y al final nuestro
refugio es El, el señor Jesús.

Entra una persona con el letrero “Hospital de los Incurables”, sale el anunciador y queda
el letrero, entran algunos enfermos, y después entra Alfonso al ver a los enfermos
escucha la voz de Jesús-

Jesús: “Lascia il mondo e datti a me”, “abandona al mundo y entrégate a mi”

-Alfonso se lleva las manos a los ojos y empieza a llorar. Corre a los pies de la virgen-

Alfonso: Padre redentor del mundo has de mi lo que quieras –sed dirige a la virgen
de la La Merced- Madre te entrego mi pasado –deposita la espada a
los pies de la virgen- madre te encomiendo mi futuro y te ofrezco mi
vocación sacerdotal.

-sale el anunciador y alguien sosteniendo un letrero “Montana de Scala”-

Anunciador: El Señor Todopoderosos toma el barro y nos moldea, y algunas veces se


necesita romper el vaso para volver ha formarlo, es un proceso en
el que el Señor Misericordiosos nos toma en sus manos y con un amor
eterno nos hace vasos nuevos.

Alfonso: Gracias padre por darnos a Jesucristo, tu voluntad encarnada,


manifestación admirable del amor salvador de dios.

-salen personas con letreros: encarnación”, “pesebre”, “cruz”, “muerte”, “resurrección”


“eucaristía”-

Alfonso: les presento “El misterio de el Altar”


Segunda escena
Personajes
Anunciador
Alfonso
Sacerdote1
Sacerdote2
sacerdote3
Pobres

Anunciador: «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino


de los Cielos. Bienaventurados los mansos, porque ellos
poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran,
porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen
hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos
alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos
verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque
ellos serán llamados hijos de Dios.
Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de
ellos es el Reino de los Cielos. Mateo 5

-entran algunos pobres-

Alfonso: Dios los creo a ustedes pobres, para que por la gracia de las enseñanzas de
Jesús, nosotros nos convirtiéramos en ricos en espíritu. Jesús vino
por nosotros alegrémonos y regocijémonos en el Señor.

-entran personas con albas y un letrero “”Congregación del Santísimo Redentor”

Alfonso: Llevar el evangelio a los pobres abandonados. Sacien el hambre de los


pobres, ayúdenlos en sus necesidades, pero sobre todo enseñen el
evangelio a ellos por quien Nuestro Dios omnipotente se
hizo carne en el Señor Jesús. “seguir el ejemplo de Jesucristo
salvador, en la predicación de la divina palabra a los pobres”

Sacerdote1: LA encarnación, el verbo se hizo carne.

Sacerdote2: La Pasión de Jesús, por la redención de nuestros pecados.

sacerdote3: La confianza en la mediación de Maria Santísima.

Alfonso: Lleven esto es sus corazones y recuerden su misión: La conversión de los


pecadores motivados por el amor y no por el terror al castigo del
infierno.

-se acaba la escena salen todos-


Tercera escena
Personajes
Alfonso
Anunciador
Voz
Persona 1
Persona 2
Persona 3

-entra el anunciador-

Anunciador: Cuando el Señor da, El da a manos llenas, nos da talentos por medio de su
espíritu, esos dones de los que nos hablo San Pablo, todos tenemos dones, usen sus dones
para alabar a nuestro creador. Alaben al señor con sus bocas, con sus manos, con sus pies,
alabenlo con todo su ser porque el hace maravillas en nuestras vidas.

-entra alguien con una mesa y una silla, entra San Alfonso -

Alfonso: Señor, ayúdame a dar tu mensaje, usadme para llegar a todos aquellos mas
necesitados.

-se sienta y empieza a escribir se escucha una voz que dice-

Voz: El gran medio de la oración.

-entra alguien sosteniendo un gran libro con este titulo.

Persona 1: Hay Señor mío, ilumínanos y haznos comprender lo mucho que valen ante
nuestro eterno padre las plegarias que le dirigimos en tu nombre y por tus
meritos.

Voz: Las glorias de Maria.

-entra alguien con un gran libro con este titulo-

Persona 2: Quede para otros autores el cuidado de pregonar las grandezas de Maria,
que yo en este libro me propongo especialmente tratar de su gran
piedad y de su poderosa intercesión.

Voz: Teología Moral.

-entra alguien sosteniendo un gran libro con este titulo-


persona3: “Todos estamos obligados al precepto del amor, y la verdadera santidad
consiste en el amor de Jesucristo, nuestro Dios, nuestro soberano
bien, nuestro salvador. Creer que la santidad consiste en vivir con
rigidez, en las largas oraciones, o en las limosnas abundantes, es un error. Dios es
bondadoso”

Anunciador: El don de Dios es Jesucristo, Dios esta siempre a tu lado, A Maria la


comparo al olivo, LA cruz como trono de Gracia, El Calvario
monte de los amantes, El lleva la cruz contigo, La Gracia Abundo mas que el
pecado, estas sin algunas de las Obras de San Alfonso, hay mas de
111, 20 ediciones, 70 lenguas. Para San Alfonso la santidad
es una feliz posibilidad para todo el pueblo creyente y no
privilegio de unos pocos perfectos. Su legado es para todos nosotros.

-salen todos queda solo san Alfonso-

Cuarta escena
Personajes
Alfonso
sacerdote1
Anunciador

Anunciador: Recuerdan a los doce, aquellos doce que escucharon la voz del maestro
que les dijo: “venid en pos de mi que los haré pescadores de
hombres”, el señor nos llama a ser obedientes a su llamado, como lo hizo
con ellos, aunque algunas veces para nosotros es tan difícil dejar
nuestras vidas pasadas y convertirnos a El, El señor misericordioso tiene
un plan para cada uno de nosotros, escuchen ese llamado.

-se escucha que toca la puerta-

Alfonso: Adelante, que pasa por que el alboroto?

Sacerdote1: soy yo, el servidor de vuestra señoría ilustrísima. El papa acaba de


nombrarlo obispo de Santa Agueda de Los Godos.

Alfonso: que dices?

-le da la carta a San Alfonso-

Sacerdote1: lea esta carta.

Alfonso: No puedo aceptar, voy a escribirle al santísimo padre, ve y llevadla, a y


no me vuelvas a llamar su ilustrísima, no querrás que me muera de
repente. No cambiare todos los reinos del mundo por la
congregación del santísimo redentor. Señor, perdóname por tener
estos pensamientos ante todo nos enseñaste obediencia, aquí estoy
señor hágase en mi tu voluntad.
-entra sacerdote 1 y 2 y le ponen su envestidura de Obispo-

Quinta escena
Personajes
Anunciador
Alfonso
Maligno

Anunciador: Has tenido una noche oscura, una noche oscura en la vida es cuando te
sientes abandonado por los que te rodean, tus fuerza te han dejado,
vives en una oscuridad física y espiritual, te sientes abandonado por
Dios, el purgatorio en la tierra. Te has sentido así – dirige su mano a
la entrada de la sacristía y entra San Alfonso caminando lentamente.

Alfonso: “Me dirijo a Dios, pero al punto me parece ver una mano que me rechaza,
si digo Jesús mío te amo, una voz implacable me responde no es
verdad” Santa Madre socorredme en estos momentos.

Maligno: En verdad tienes fe? crees que El esta ahí.

Alfonso: Padre todopoderosos auxiliadme, yo creo señor, yo creo señor, quiero


vivir y morir hijo de la iglesia.

Maligno: Alfonso, te acuerdas de tus triunfos como abogado, tu puedes ser famoso?

Alfonso: Señor Jesús nos hiciste humildes de corazón, nos enseñaste a servir y no a
ser servidos, dar mas que recibir. Señor Jesús sacramentado ante ti
pongo este corazón arrepentido.

Maligno: tú crees en la concepción, en la redención de los pecados por la sangre


derramada por Jesús?, esperas la intercesión de Maria?

Alfonso: Oh Jesús muera yo antes que ofenderte, oh Maria sino vienes en mi auxilio
será mas criminal que judas.

-Alfonso se acerca al sagrario y se postra ante el, el maligno sale de escena-

Alfonso: Jesús, mi salvador, que diste la vida por salvarme, graba tu dulce nombre
en mi memoria, imprímelo tu en mi corazón, y que no se me caiga
nunca de la boca, si me enfrió en tu amor, que tu nombre me anime, que
me sostenga firme cuando la tentación me asalte, que cuando este
afligido tu nombre me conforte, que el sea mi refugio, mi escudo, mi
esperanza y mi consuelo. Y que acabe mis días invocado tu
nombre.
- empieza a tocar alabanza, de la parte de atrás de la Iglesia entra todos cargando la
imagen de san Alfonso en procesión.

FIN DE LA OBRA

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