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Ser como
San José
@locoinmaculadaa
@sercomomariaa
Pasos a seguir:
Coronilla o Rosario a San José.
Repetir 7 veces entre cada misterio (en honor a los 7 dolores y 7 gozos de San José):
V/ San José, custodio y protector de los Corazones
Unidos y traspasados de Jesús y de María.
R/ Inflamad mi corazón para que en él solo reine, mi
Dios, Jesús, como reinó en vuestro santo corazón.
En vez de gloria:
Jesús, José y María, os doy el corazón y el alma mía.
Al final de la coronilla, repetir 3 veces:
V/ San José, modelo y patrono de los amantes del
Sagrados Corazones de Jesús y María. R/ Rogad
por nosotros.
— San Maximiliano Kolbe @locoinmaculadaa
A excepción de nuestra amorosa Madre, San
José está por encima de todos los santos.
@sercomomariaa
.
Insigne descendiente de David.
V. San José,protector nuestro.
Luz de los Patriarcas.
R. Ruega por nosotros.
Esposo de la Madre de Dios.
Casto guardián de la Virgen. Oración a San José
Padre nutriciodel Hijo de Dios. ¡Oh!, San José: cuya protección es
Celoso defensor de Cristo. tan grande, tan poderosa y eficaz
Jefe de la Sagrada Familia. ante el Trono de Dios, en vuestras
José justísimo. manos entrego todos mis intereses y
José castísimo. mis deseos.
José prudentísimo. ¡Oh!, San José: asistidme con vuestra
José fortísimo. poderosa intercesión, conseguidme
José obedientísimo. de vuestro Divino Hijo Nuestro Señor
José fidelísimo. todas la bendiciones particulares
Espejo de paciencia. que necesito a fin de que habiendo
Amante de la pobreza. conseguido aquí en la tierra la
Modelo de obreros y artesanos. ayuda de vuestro poder celestial
Gloria de la vida doméstica. pueda ofrecer mi gratitud y
Custodio de las Vírgenes. homenaje al padre más amoroso.
Amparo de las familias. Amén.
— San Francisco de Sales @locoinmaculadaa
Nada le será negado (a San José), ni por Nuestra Señora ni por su glorioso Hijo.
@sercomomariaa 1.- Lirio perfumado
Lirio Perfumado de la Divina Volntad
San José Dice:
Hijos míos: os llamo a que volquéis vuestra mirada hacia mí, os llamo
a que escuchéis mi voz, voz que ha de retumbar en vuestro corazón;
voz que ha de deteneros, hoy día miércoles, día dedicado a mi culto
y veneración, día en que derramo muchísimas bendiciones a mis
devotos; almas que creen en el poder que Dios me ha otorgado,
almas que tienen la certeza plena de mi protección e intercesión;
almas que perciben mi fragancia, aroma suave de lirio fresco; lirio
que floreció en aquella vara seca, vara que fue entregada por los
sacerdotes en mis manos, vara que fue la señal del cielo para mi
desposorio con la Santísima Virgen María porque en ella nació el
más esbelto de los lirios perfumados. Lirios cultivados en el cielo para
este majestuoso momento; momento que me llevaba a descubrir un
plan de amor, plan que había sido trazado en mi vida desde mucho
antes de mi nacimiento, plan que hacía de mí el padre adoptivo del
Salvador; el custodio y protector
de los Corazones Unidos y
Traspasados de Jesús y de María. Plan que cambiaría el rumbo de
mi vida, vida que era transformada y renovada según los designios
de Dios. Vida que tomaría un nuevo curso, una dirección diferente;
vida que haría historia, vida que dejaría huella en mi generación y
en las generaciones futuras.
Hoy, hijo mío, que habéis abierto vuestro corazón para recibir mis
gracias, no dudéis en acudir a mí; siempre estaré presto en ayudaros;
os protegeré de igual forma como lo hice con el Niño Jesús y con mi
castísima esposa; os defenderé contra todo peligro, contra toda
asechanza del mal; basta que os acerquéis más a mí, que no me
tengáis tan distante de vuestra vida, que no me sintáis como a un
extraño. Sabes alma mía: vuestra indiferencia me hiere, me lastima.
Abrid vuestras manos y recibid el lirio perfumado de la Divina
Voluntad; oledlo y aspiradsu suave perfume,perfume que renovará
vuestro corazón, perfume que os mostrará vuestro camino, camino
guiado por una nueva luz, camino promisorio, esperanzador; camino
que os lleva a actuar movido por el Santo Querer de Dios; camino
que dará beneplácito a su Sacratísimo Corazón; Corazón
sumamente bueno, Corazón con muchísimos espacios porque muy
pocas almas hacen su Divina Voluntad; muy pocas almas renuncian
Así es pues, hijos míos, morid a vosotros mismos para que reine mi
Dios Jesús en vosotros como reinó en mi santo corazón.