CINCO ACCIONES Y/O ACTIVIDADES QUE HAGAN PARTE DE UN
PROGRAMA DE RESPONSABILIDAD SOCIA
La responsabilidad social empresarial no es una moda, sino un elemento esencial para aquellas compañías que desean ser competitivas y mantenerse en el tiempo. Cada día son más los consumidores que consideran el impacto en la sociedad y el medio ambiente de una empresa para convertirse en su cliente. 1. EMPIEZA POR TUS EMPLEADOS Una empresa generosa se preocupa porque sus empleados reciban todo lo necesario para desarrollarse como profesionales y seres humanos. Da sueldos justos y prestaciones (más allá de las de ley). Involucra a tu gente en los planes de la organización; recuerda que ellos son clave para lograr tu misión y visión. Otro punto importante que debes considerar es el espacio laboral. Tus oficinas deben estar limpias y ser seguras. Debes ofrecer flexibilidad de horarios y vacaciones. Ten siempre un trato respetuoso hacia tus colaboradores y evita cualquier tipo de insulto o de palabras que puedan ofenderlos. Nunca olvides que tus empleados son seres humanos con sentimientos y sueños, y que tu trabajo como gerente o director es impulsarlos a alcanzar sus metas. Sólo así tu empresa crecerá y trascenderá en el tiempo. 2. INFLUYE POSITIVAMENTE EN TU SOCIEDAD Los empresarios son los verdaderos impulsores de la sociedad; ellos son los que generan empleos y soluciones a los problemas. Por eso, en tu día a día como emprendedor o directivo procura contribuir a un bien mayor. Esto puedes hacerlo contratando empleados pertenecientes a grupos desfavorecidos como la tercera edad o que tengan una discapacidad. 3. APOYA UNA STARTUP CON MISIÓN SOCIAL O MEDIOAMBIENTAL Apoyar de manera activa al startups con enfoque social o medioambiental. Se destacan rubros: impulsando el reconocimiento de la empresa (47%), dando financiamiento (46%), entregando mentoría (45%) e introduciéndolos a nuevos mercados (23%). Así que si tu empresa cuenta con tiempo y experiencia en el mercado, pero es novata en la responsabilidad social, una buena opción es convertirte en inversionista, mentor o colaborador de una empresa naciente que tenga este enfoque. 4. SÚMATE A UNA FUNDACIÓN O CAUSA SOCIAL Si tu empresa no cuenta con los medios o la experiencia para desarrollar una causa social independiente, únete a una que ya exista. Existen decenas de fundaciones y organizaciones civiles, por lo que elegir la mejor para tu empresa no es tarea fácil. Por eso, te recomendamos primero revisar tu misión y visión, y a partir de ella elige una opción que vaya acorde (ya sea una enfocada en disminuir la pobreza, mejorar la educación, disminuir la contaminación, etc.). Después, investiga que se trate de una ONG real que cumpla con sus promesas.
Una vez que hayas elegido la fundación:
1) Define cuál será tu contribución (monetaria, en especie o voluntariado) 2) Involucra a tus empleados y haz que sean parte de ella. 3) Comunícala a tus clientes e invítalos a participar. 5. RECICLA Disminuye el impacto medioambiental de tu empresa. Puedes empezar con algo tan simple como reciclando el papel que utilices, así como otros materiales como el cartón y los plásticos. Instala basureros dedicados especialmente al reciclaje y otros donde separes la basura orgánica de la inorgánica. También es recomendable que invites a tu equipo a evitar las impresiones innecesarias y a utilizar siempre que sea posibles comprobantes digitales.