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Informe Psicologico 03
Informe Psicologico 03
I. DATOS GENERALES
El problema, según informa la cliente, comienza con la muerte del esposo, en accidente
automovilístico, hace dos años, y coincide con los cambios de vida sobrevenidos a la viudedad
(soledad, descenso de actividad social). A ello se une la concurrencia de esos acontecimientos
con la salida de los hijos del hogar y el consiguiente cese del rol materno en el que se hallaba
centrada. Por otra parte, se perciben una marcada tendencia a la soledad y falta de
comunicación que han ido empeorando la situación con el paso del tiempo.
No se informa que se lleve a cabo actividades ni trabajos que ocupen el lugar del papel de
esposa y madre.
Los objetivos de esta evaluación se centrarán en una primera valoración del problema que sirva
para precisar los elementos que interaccionan en su desajustada situación y ayuden a generar
un plan de acción terapéutica que permita a la paciente reanudar su vida con nuevas fuentes
de refuerzo y satisfacción.
III. ANTECEDENTES
Se trata de una mujer de 48, educada en un sistema de valores tradicional, muy adaptada a la
vida familiar de origen y con la gran devoción de sus padres y a su familia. Tiene un hermano
con el que había mantenido hace años una estrecha relación, pero actualmente él está casado
y esa relación es esporádica.
La clienta se casó a los 20 años con un hombre diez años mayor que ella, al que describe
como llevando las riendas familiares, protegiéndola, decidiendo por ella y haciendo de puente
entre el mundo doméstico y el social. Su vida, desde su matrimonio, ha estado centrada en su
esposo y en su vida familiar.
Ha tenido dos hijos a los tres y cinco años de casada. Informa que desde su nacimiento
constituyeron el centro de su proyecto vital. Actualmente tienen 25 y 23 años respectivamente y
viven en otra ciudad. El primero está casado y trabaja, y el segundo estudia todavía. Este
hecho parece haber agravado sus sentimientos de soledad, de inutilidad y su aislamiento
social. No tiene amigas íntimas, ni familia con la que mantenga una estrecha relación, ni
tampoco informa poseer ningún tipo de afición o entretenimientos.
IV. OBSERVACIÓN
El tono de voz, las actitudes y el comportamiento durante las pruebas (lentitud, lloros,
cansancio) sugieren el diagnóstico de depresión.
VI. RESULTADOS
Sistema de Clasificación: Se cumplen los criterios del DSM-IV del trastorno de depresión
mayor (Eje I): estado depresivo todo el día, disminución del interés, insomnio, falta de energía,
sentimientos de inferioridad, falta de concentración. Aislamiento excesivo por fallecimiento del
esposo y marcha del hogar de los hijos (Eje IV) y disminución patológica de las actividades
relacionadas con una adaptación normal (Eje V). N o existe patología en los Ejes II y III.
Autorregistro de sueño (dos semanas): Duerme como promedio cinco horas 15 minutos.
Patrón irregular con despertares nocturnos, tardanza en aparición del sueño y despertar
temprano. La medicación que ingiere no parece haber mejorado la situación inicial.
Autorregistro de interacción social (siete días): 2,7 contactos diarios con una media de
duración de 11 minutos en la escala de satisfacción.
Autorregistro de satisfacción de actividades (siete días): Las actividades que realiza Isabel
le reportan un grado de satisfacción promedio de 1,9 (en una escala de 1 a 5).
Escala de Eventos Placenteros (PES): Tan sólo realiza un 20 por 100 de eventos reforzantes
listados (PD = 19, máx. 198), y el nivel de placer que obtiene es muy bajo (PD = 19, máx.
198).
Escala de Autorrefuerzos (SRQ): Baja puntuación, PD = 7 (máx. 30), lo cual implica un déficit
en autorrefuerzos.
V. INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS
Como prueba específica de depresión, las puntuaciones alcanzadas en el BDI permiten apoyar
el diagnóstico y precisar los canales en los que se manifiesta la depresión son diversos (motor,
cognitivo y fisiológico). La puntuación obtenida en el BDI (28) permite también precisar la
gravedad de la depresión en un nivel moderado.
Integrando la información procedente de las distintas pruebas aplicadas, se podrían precisar los
siguientes componentes del diagnóstico.
Como se puede comprobar en el apartado de las técnicas empleadas, en todas las pruebas
que se han administrado para la determinación de los repertorios básicos de conducta y otras
condiciones que hipotética y funcionalmente están asociadas a la depresión (carencia de
habilidades sociales y comportamiento asertivo, ausencia de acontecimientos reforzantes y
autorrefuerzos), se confirma la hipótesis de partida que han aconsejado su uso.
Se perfila claramente que presenta déficit en sus habilidades sociales, lo que impide llevar a
cabo un buen ajuste social e inhibe su correspondiente fuente de refuerzos, y lo mismo ocurre
con su falta de asertividad, que le dificulta desarrollar una actitud vindicativa de sus
necesidades y deseos.
Por lo que respecta a los resultados alcanzados en las pruebas de autorrefuerzos, así como en
las de actividades reforzantes, en ambas se manifiesta una marcada carencia de fuentes de
satisfacción y de refuerzo, lo que naturalmente consolida su estado depresivo e inhibe sus
posibilidades de recuperación.
Por tanto, con alta probabilidad tres repertorios básicos de conducta parecen estar
funcionalmente asociados a su depresión (habilidad social, actividad reforzante y
autorrefuerzos), pudiendo ser considerados como variables relevantes explicativas del trastorno
presentado.
Respecto a su tasa de ingesta de alcohol, los registros llevados a cabo indican que no alcanza
el criterio de alcoholismo, puesto que no sobrepasa las 600 calorías y no se da ni un patrón de
conducta aditiva ni ningún síntoma de síndrome de abstinencia. Por otra parte, el perfil del
MMPI hallado no tiene ninguna similitud a los típicos de sujetos alcohólicos. Sin embargo,
ingerir alcohol es una conducta diaria y llevada a cabo con el propósito de mejorar su estado de
ánimo, lo que la sitúa en una fase de posible prealcoholismo que con mucha probabilidad
también está funcionalmente asociada a su aislamiento social.
Se trata de una depresión mayor que cursa con algunas otras conductas problema. El
problema se ha desencadenado a la muerte del esposo y aparece funcionalmente relacionado
con un déficit en habilidades sociales, déficit en refuerzos y en autorrefuerzos. A la vista de los
datos precedentes, es imprescindible que Isabel Rivera comience un tratamiento psicológico,
en el que se logre la manipulación de las condiciones que se encuentran funcionalmente
asociadas a la depresión. Asimismo, también se llevarán a cabo las acciones necesarias
encaminadas a suprimir todas aquellas conductas indeseables que empeoran su situación,
como la ingestión de alcohol, y el control de la medicación contra el insomnio.