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UNA OBRA DE LAS AUTORAS MARÍA S OLEDAD BUERO M ARTÍNEZ Y C ONCEPCIÓN FLORIDO NAVARRO
Por Luis-Gethsemaní Pérez-Aguilar
No podemos dejar pasar 2019 sin recordar una importante efeméride cultural local: se cumplen 20 años
de la publicación del libro Arqueología de Alcalá de Guadaíra (Sevilla). Prospección arqueológica
superficial del término municipal, de María Soledad Buero Martínez y Concepción Florido Navarro.
Esta obra, publicada por el Ayuntamiento de la ciudad, materializa y divulga los resultados del trabajo
de campo que hicieron sus autoras a modo de carta arqueológica.
Todavía recuerdo cuando cursé, hace unos diez años, el máster en arqueología de la Universidad de
Sevilla y uno de sus profesores nos puso esta publicación como ejemplo de lo que debe ser una carta
arqueológica. Evidentemente, como todo en esta vida, los criterios científico-técnicos y parte de las
interpretaciones que estas investigadoras desarrollaron no han podido vencer el inexorable paso del
tiempo, y a día de hoy la disciplina arqueológica maneja otros. Más aún cuando el trabajo de campo lo
hicieron realmente entre 1987 y 1988.
Pero dejando esto a un lado, se trata de una carta arqueológica formidable y muy bien estructurada que
recopila información elemental sobre 161 yacimientos arqueológicos de nuestro término municipal. En
el catálogo de yacimientos los sitios son caracterizados atendiéndose a sus coordenadas geográficas,
sus emplazamientos topográficos y los artefactos en ellos hallados. Tales datos sirven a las autoras de
base para valorar e interpretar qué tipo de hábitats fueron estos enclaves y en qué momentos estuvieron
ocupados o en uso. Valga decir que las arqueólogas centraron su atención en la documentación de los
yacimientos datados entre la Prehistoria y el periodo andalusí, por lo que su trabajo no aporta
información relevante para el conocimiento ocupacional del territorio posterior a la Plena Edad Media.
Tras el catálogo presentan un análisis histórico en el que se aborda la evolución del poblamiento
humano entre el Paleolítico y la época almohade. La obra queda rematada por un nutrido corpus de
ilustraciones que resulta de gran utilidad a la hora de poder revisar dataciones y hacer inferencias
históricas de otro tipo, por ejemplo de carácter funcional y comercial, entre otros.
La carta arqueológica de Buero y Florido supone un hito historiográfico clave para el estudio y la
gestión patrimonial del término municipal de Alcalá de Guadaíra. Sus autoras, quienes ya no se dedican
profesionalmente a la arqueología, nos brindaron una libro de obligada consulta para investigadores y
curiosos del pasado de nuestro pueblo. Y como alcalareños, debemos reconocer tan magna labor y estar
agradecidos por ello.