Primeramente, si hablamos desde un ámbito constitucional, nuestra carta magna en
diferentes artículos recoge los principios que reflejan el trabajo decente, como son los siguientes: 25 (derecho al trabajo), 55 (derecho a la negociación colectiva para regular las relaciones laborales), 39 (derecho a constituir sindicatos o asociaciones sin intervención del Estado), 43 (igualdad entre hombres y mujeres, protección especial a la maternidad), 45 (El adolescente tiene derecho a la protección y a la formación integral), 47 (derecho a la previsión, rehabilitación e integración social), 48 (derecho a la seguridad social), 56 (garantía del derecho de huelga), 53 (Obligatoriedad de expedir el Estatuto del Trabajo y otorga rango de norma de la legislación interna a los convenios internacionales del trabajo debidamente ratificados), 54 (la obligación del Estado y los empleadores de ofrecer formación y habilitación profesional), 38 (garantía del derecho de asociación), 93 (establece que los tratados y convenios internacionales ratificados por el Congreso, que reconocen los derechos humanos y que prohíben su limitación en los estados de excepción, prevalecen en el orden interno), 44 (Derechos fundamentales de los niños y niñas). También el Código Sustantivo del Trabajo (CST) expone los principios constitucionales en lo alusivo a la definición de trabajo, igualdad de los trabajadores (Art. 10), derecho al trabajo (Art. 9), derechos de asociación y huelga (Art 353), mínimos de derechos y garantías (Art 13), carácter de orden público de las normas laborales e irrenunciabilidad (Art 14), norma general de interpretación (Art 14), normas de aplicación supletoria (Art 19), conflicto de leyes y normas más favorables (Art. 21) y, los derechos individuales y colectivos. Con respecto a la seguridad y protección social podemos decir que la Ley 100 de 1993, estableció el sistema de seguridad social integral, en conexo con la Ley 797 de 2003 la cual modifico diversos preceptos del sistema general de pensiones dispuesto en la Ley 100 de 1993, también acogió disposiciones sobre los Regímenes Pensionales exceptuados y especial, con relación a la seguridad y salud en el trabajo, la Ley 1562 de 2012, modificó el sistema de riesgos laborales y consagró disposiciones en asuntos de salud ocupacional, en concordancia con el decreto 1072 de 2015, por medio del cual se expide el Decreto único reglamentario del sector trabajo. En materia de trabajo infantil y con el fin de garantizar el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en las normativas nacionales e internacionales, la Ley 1098 de 2006 - Código de la Infancia y la Adolescencia, establece diferentes normas para la protección integral de los niños, las niñas y los adolescentes. Así mismo se estableció que esta garantía y protección será obligación del estado, la sociedad y la familia. La resolución 3597 de 2003 es la que señala las actividades consideradas como peores formas de trabajo infantil y establece una clasificación de actividades altamente peligrosas para las personas menores de 18 años de edad. El gobierno nacional en la implementación del trabajo decente determina en el plan nacional de desarrollo 2006-2010 (ley 1151 de 2007), y en el plan nacional de desarrollo 2010-2014 ( ley 1450 de 2011), los sistemas de protección social, la competitividad y crecimiento económico, la innovación para la prosperidad, y las cinco locomotoras para el crecimiento y la generación de empleo, el nuevo plan de desarrollo 2014-2018 ( ley 1753 de 2015) “todos por un nuevo país”, cuenta con estrategias transversales y regionales, orientado al trabajo digno y decente y se identifican dos artículos: 74 sobre política nacional de trabajo decente y 75 fortalecimiento del diálogo social y la concertación. A nivel internacional podemos decir que en 1998 se acogió la “declaración de la OIT relativa a los principios y derechos fundamentales en el trabajo” que compromete y dalguna manera obliga a los estados miembros de la organización internacional del trabajo a respetar y promover la libertad de asociación y sindical, la abolición del trabajo forzoso, la erradicación del trabajo infantil y la eliminación de la discriminación en el trabajo. Esos principios se expresan en ocho convenios, declarados como convenios fundamentales en el trabajo, los cuales han sido ratificados por la mayoría de países. ratificar un convenio quiere decir que el estado se compromete a garantizar el respeto del mismo por medio de la adecuación de las leyes y las prácticas. La ratificación de un convenio es importante, pero es más importante aún que efectivamente se aplique. En relación con la promoción de los derechos de asociación y sindicalización Convenio (núm. 87) sobre la libertad sindical y protección al derecho de sindicación. Convenio (núm. 98) sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva. En relación con la eliminación del trabajo forzoso Convenio (núm. 29) sobre el trabajo forzoso u obligatorio. Convenio (núm. 105) sobre la abolición del trabajo forzoso. En relación con la eliminación del trabajo infantil Convenio (núm.138) sobre la edad mínima de admisión al empleo. Convenio (núm. 182) sobre la prohibición de las peores formas de trabajo infantil. En relación con la eliminación de la discriminación Convenio (núm. 100) sobre la igualdad de remuneración. Convenio (núm. 111) sobre la discriminación en materia de empleo y ocupación. CONCLUSION Podemos concluir que el gobierno en conjunto con organismos internacionales y a través de normas o preceptos jurídicos, se han encargado de regular las condiciones de trabajo de las personas, protegiendo sus derechos y garantizando igualdad de condiciones, con el fin de salvaguardar su dignidad humana y promover el trabajo decente.