ELEMENTOS BÁSICOS PARA

EL USO EFICAZ DEL TIEMPO

Palabras clave:
Roles, prioridades, temperamentos, dones, habilidades y debilidades.

Objetivo:
Incentivar al estudiante a colocar delante de Dios sus fortalezas y debilidades a la luz
de la Palabra, mostrándole los diferentes temperamentos para que identifique el
propio y que se disponga de todo corazón a que el Espíritu Santo tome control de su
temperamento.

Resumen:
El ser humano ha recibido instrucción de parte de Dios de tener prioridades en su
vida, en cada rol que desempeña en este mundo, para eso se le ha otorgado dones,
talentos y habilidades. Debe también transformar sus debilidades para sacar el
máximo provecho de cada situación.

3. ELEMENTOS BÁSICOS PARA EL USO EFICAZ DEL

TIEMPO1

“Solo podemos saber que lo que estamos haciendo es absurdo después de haber
identificado las metas que procuramos alcanzar”.
Carlos Hughes

Es el momento de echar un vistazo a su trabajo. ¿Qué resultados espera lograr? Si

usted cuenta con una descripción de sus funciones en su trabajo, ¿está redactada en
términos de actividades o resultados? Si contiene una descripción de actividades, ¿se
puede hacer la conversión a resultados? Si no existe una descripción de su cargo,
trate de escribir un párrafo para describir todas sus responsabilidades.

1
Como aprovechar el tiempo capítulo 5, Ted Engstrom

1
El psicólogo cristiano Henry Brandt formula las siguientes preguntas:
- ¿Cuál es su meta en la vida?
- ¿Cómo piensa llegar a esa meta?
- ¿Contribuyen a esa meta los papeles que desempeña en la actualidad?
- De lo que hace ¿qué es lo realmente importante?
Dice además:
“Al determinar sus mejores funciones, debe mantener aquellas que lo
aproximan a su meta y hasta expandir una más si puede hacerlo, y eliminar
aquellas que son inútiles, un lastre, un estorbo. Su problema puede ser que
tiene demasiadas buenas metas. Y no le conviene procurar abarcar más de lo
que puede manejar bien".

¿QUÉ RESULTADOS PODRÍA OBTENER?

Después de completar una descripción de su cargo, el ejecutivo debe tener una idea
de los "resultados esperados". Luego vienen las preguntas sobre "resultados posibles."
¿Qué resultados, por encima de aquellos esperados, pueden ser alcanzados?

William Oncken, divide los deberes del ejecutivo en tres categorías:

- Los deberes impuestos por el cargo.
- Los deberes impuestos por la organización, y
- Los deberes que el ejecutivo se impone a sí mismo.

Él sugiere que lo que diferencia o distingue a los ejecutivos eficaces o exitosos es el

número, la importancia y la tasa de finalización de sus tareas auto-impuestas. Estas
son tareas no previstas en la descripción del cargo... no son requeridas por la
organización... pero fueron asumidas voluntariamente por el ejecutivo que vio una
necesidad y contó con los medios para cumplirlas personalmente.

Al considerar lo que podría lograr en su trabajo, piense en los resultados, no en las

actividades... en lograr los resultados, no en especificar los deberes. Si todas las
cosas saliesen bien... y los acontecimientos sucedieran en una secuencia favorable...

2
si los recursos se obtuviesen en el lugar y momento oportunos... ¿Cuánto sería
posible? Una organización cristiana internacional ha descubierto que la respuesta a
esta pregunta será de gran ayuda para orientar y dirigir todo su esfuerzo organizativo.

En un artículo de la revista Guideposts, la doctora Dorothy L. Brown escribió:

"Así como Dios da a cada uno de nosotros un talento especial, también nos
proporciona sueños para hacernos conscientes de nuestro talento."

LA ACEPTACIÓN DEL CAMBIO

Los ejecutivos de hoy han desarrollado un profundo apreció por el cambio... es decir,
en los asuntos fuera de sus propios puestos de trabajo. Conseguir la aceptación del
cambio en las políticas de la organización se ha convertido en un tema común que se
enseña en seminarios para ejecutivos y en publicaciones para administradores.

Nuevos conocimientos de ciencias del comportamiento han reforzado lo que hace

mucho tiempo sospechaban algunos estudiosos: Todo lo que se hace se hace por
medio de la gente; para hacer cosas mejores se necesita aplicar cambios; pero las
personas se resisten al cambio. De ahí el énfasis que se pone en la aceptación del
cambio.

El cambio en la propia función de trabajo de un gerente puede ser tan gradual, y

continua, que es apenas perceptible. Incluso cuando se procura reconocer ese
cambio, en la forma más exhaustiva y sistemática, tal cambio puede pasar
desapercibido. Esto hace doblemente importante la tarea descrita anteriormente, la
tarea de hacer un cuidadoso análisis de su propio trabajo.

Un beneficio adicional de este procedimiento es la oportunidad que nos da de

comparar sus propios requisitos de trabajo o cargo con los objetivos de la
organización. Si los objetivos generales están formulados por escrito, la tarea es
simple. Si no lo están, escríbalas, y luego compárelas. Si hay aspectos de su trabajo
que no coinciden con los objetivos organizacionales establecidos, tome un segundo

3
vistazo a ese aspecto particular de su trabajo.
- ¿Por qué hace lo que hace?
- ¿Por qué lo hizo su predecesor?
- ¿Por qué se ha hecho así siempre en la organización?
- ¿Algún miembro influyente de la Junta Directiva inicio el procedimiento... y él
es muy susceptible cuando se le hacen sugerencias de cambio?

Esperemos que este proceso resulte en la redefinición, quizá la modificación, y

especialmente en la eliminación de muchas de las actividades que hasta este
momento se realizaban sin ponerlas en tela juicio, y luego, cuando sus metas
personales y los requisitos de su cargo se hayan ajustado para coincidir exactamente
con los objetivos de la organización, concentre sus esfuerzos en los puntos
esenciales.

3.1. Los roles2

“La efectividad requiere equilibrar relaciones importantes, roles y actividades, la clave

no es dar prioridad a su programa, sino programar sus prioridades “
Stephen Covey

En sociología se llama rol social a los distintos papeles sociales que se pueden
desempeñar en una sociedad, por ejemplo, el rol de presidente, pero también, el rol
de maestro, de policía, de estudiante, de hijo, de madre, de niño o de anciano, de
casado o de soltero; cuanto más compleja es una sociedad, cuanta mayor sea la
división del trabajo, de funciones, de características específicas que marcan
diferencias de comportamiento, mayor será el conjunto de roles sociales.

De hecho, podemos contemplar la estructura social de una sociedad de varias

maneras, en función de sus clases sociales u otras formas de estratificación, por sus
instituciones, o como en el caso que nos ocupa en este artículo, un complejo
entramado de relaciones sociales entre actores que ocupan distintas posiciones y

2
Barajas, J.C. (2013). Roles Sociales.

4
desempeñan roles diferentes.

Y es que cada rol social implica una manera de comportarse y de actuar. Un

presidente, puede verse impelido a seguir unas pautas de comportamiento
específicas del rol que desempeña, tiene que ser especialmente serio y formal pues
es lo que se espera de él, por esa razón puede causarnos bastante sorpresa
encontrarlo en otro ambiente y descubrir que, en determinadas circunstancias, era
capaz de reír. Nadie hubiera entendido que cambiase sus formas de comportamiento
mientras desempeñaba su función. Imagínense a un presidente bromeando o
burlándose de las respuestas incorrectas de sus opositores. Si esto ocurriera se
produciría una gran desorientación entre sus asistentes y el público presente, nadie
sabría a qué atenerse, su comportamiento hubiere sido imprevisible y la
imprevisibilidad está muy mal vista cuando se vive en sociedad.

Luego podemos afirmar que todas las personas tienden a actuar en contextos
sociales determinados de acuerdo a las pautas concretas de comportamiento propias
del rol que desempeñan. Es decir, que todos representamos un papel como en las
obras de teatro. En este punto, en los libros de sociología se suele recordar que la
palabra “persona” deriva etimológicamente de la misma palabra latina que significa
máscara, aquellas máscaras que llevaban los actores en el teatro clásico
grecorromano.

De alguna manera cada mañana cuando nos despertamos, apagamos el despertador

y nos dirigimos al baño, ya nos vamos colocando las máscaras de los distintos roles
que vamos a desempeñar durante el día. Porque yo puedo contemplar a la sociedad
como un conjunto de roles pero también puedo contemplar la vida de cada persona
como un conjunto de roles, “set of roles”, como los denominó el sociólogo
norteamericano Robert Merton. Un mismo hombre puede ser marido, padre,
funcionario, informático, sociólogo, conductor, bloguero, y alguna que otra cosa más, y
cada uno de estos roles tiene sus propias pautas de comportamiento.

5
 3.1.1. Características de los roles

José Félix Tezanos, citando a Robert Nisbet, estima que los roles están caracterizados
básicamente por cinco rasgos:

1. Los roles implican comportamientos socialmente establecidos, el presidente debe

comportarse como su pueblo espera que lo haga.

2. Tienen su propia normativa que se expresa en el lenguaje usual como “ser un buen
padre” o “ser un buen profesor”.

3. Los roles constituyen un círculo o múltiples círculos sociales que suponen un

conjunto de relaciones concretas, por ejemplo, en el sistema educativo conviven el rol
del profesor, el del alumno, el del director del centro, el del personal no docente, el del
inspector de zona, entre otros; y todos los que participan, saben qué pueden o qué no
pueden hacer y qué pueden esperar de los demás.

4. Los roles sociales definen campos de acción que se consideran legítimos, un policía
puede en determinadas circunstancias hacer uso de la violencia “legal” pero un
vecino no puede tomarse la justicia por su mano.

5. Los roles forman parte del sistema de autoridad más amplio que implica el
cumplimiento de una serie de obligaciones para con uno mismo y para con los demás,
por ejemplo, el rol de alumno implica los deberes de acudir a clase, de estudiar, de
obedecer al profesor; el rol del soldado en un desfile implica que si lleva el paso
cambiado, su error no sólo le afecta a él sino a toda la compañía.

Robert Nisbet era de la opinión de que toda sociedad tiene una serie de roles
estándar o roles tipo, cada uno con sus características, pautas de comportamiento e
importancia social. Es más, opinaba que a lo largo de la historia había una serie de
roles básicos que se mantenían como el rol de profeta, el de guerrero y el de político
entre otros, Y tal y como están las cosas, el de político corrupto.

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 3.1.2. Conflictos entre los roles

Cuanto más activa sea la persona mayor será el número de roles que desempeña y
mayor también la posibilidad de encontrar conflictos entre los distintos roles.

Las causas específicas de conflictividad en estos casos son múltiples. Algunas están
relacionadas con la edad, por ejemplo, el rol de hijo, el rol de adulto, el rol de anciano.

También pueden surgir conflictos como consecuencia de encontrarse en contextos

sociales con sistemas de valores distintos, por ejemplo, el inmigrante que se ve
forzado a desempeñar roles culturalmente distintos a los de su país de origen, el uso
del chador por las mujeres musulmanas entraría en este capítulo. Pero el grupo de
causas más común se produce en el desempeño de roles que entran en colisión entre
sí, por ejemplo un inspector fiscal cuando desempeña el rol de contribuyente o el
profesor que da clases a su hijo, en el que el rol de padre y de profesor entran en
conflicto.

Estos conflictos pueden dar lugar a muchos tipos de trastornos psicológicos e incluso
de problemas de perturbación de la personalidad. Pero, en la mayoría de los casos no
llegan a ser patológicos gracias a que las personas demostramos suficiente
flexibilidad para adaptarnos las diferentes situaciones que provocan estos conflictos y
a que en muchos casos no pasan de ser cuestiones que provocan malestar ocasional.

Existe otro tipo de conflicto que sería “intrarrol”, se produce cuando una persona
decide abandonar o le hacen abandonar un rol que desempeñaba anteriormente y
que representaba una parte importante de su vida. Puede ser la transformación que
se sufre al llegar a la jubilación, pero es un síndrome que se le presenta a todos los
que de alguna manera son “ex”, por ejemplo: Ex cónyuges, ex alcohólicos, ex
sacerdotes.

Sobre todo al principio estas personas se siguen viendo a sí mismas con la imagen
que tenían cuando estaban desempeñando el rol que acaban de abandonar. Estas

7
inercias cognitivas pueden complicar mucho el proceso de transición a la nueva
situación.

¿Y qué decir cuando una persona pública, con un estatus importante, no cumple con
las expectativas sociales que derivan del rol que desempeña? Bueno, pues no es
necesario acudir a la teoría sociológica, basta con leer los periódicos, ver la televisión
o darse un paseo por Twitter.

Aunque parezca obvia, mencionemos que la relación entre rol y tiempo, se da

simplemente porque un rol (o las funciones del mismo), se desempeña de manera
temporal, el presidente no es presidente en su casa (o por lo menos no debe actuar
de esa manera allí), no somos conductores todo el tiempo (cuando nos bajamos del
auto pasamos a ser peatones), un profesor que se encuentra siendo instruido en
algún curso pasa a ser alumno en ese tiempo.

3.2. Prioridades

“ Las cosas que importan más, nunca deben estar a la merced de las cosas que
importan menos“
Goethe

En el Sermón del Monte, llamado por el pastor Darío Silva-Silva “La Constitución
Nacional de Reino de los Cielos”, Jesús dijo:
"Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas
cosas les serán añadidas." (Mateo 6:33).

El Reino de Dios es el gobierno perfecto de Dios que traerá paz y abundancia a esta
tierra cuando Jesucristo regrese. Debemos prepararnos para ese tiempo. Buscar la
justicia de Dios significa esforzarnos por vivir su Palabra de manera correcta, es decir
en obediencia a Él para obtener las bendiciones que vienen como resultado del amor
de Dios.

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Dice igualmente la Sagrada Escritura en Efesios 4:13:

“De este modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del

Hijo de Dios, a una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de
Cristo.”

Para llegar a estar más cercanos a la estatura de Cristo, tenemos que aprender a vivir
dando prelación a lo que para Dios es más importante. Y cuando actuemos con base
en el orden que el Señor ha establecido para cada una de nuestras actividades
lograremos producir un plan para mejorar nuestras vidas y alinearlas al plan de Dios.

Y tenemos que poner esos planes en acción, porque al ejecutarlos o utilizarlos, los
más beneficiados somos nosotros, y como consecuencia las personas que se
encuentran a nuestro alrededor.

Una prioridad, es la ventaja o preferencia que una persona o cosa tiene sobre otra.
Podemos tener en primer lugar a una persona, a una actividad o una cosa, igualmente
en segundo y en tercer lugar, y dependiendo de cómo tomemos a las personas y a las
cosas, asimismo estaremos actuando.

El final de Mateo 6:33 revela una cosa asombrosa sobre las prioridades de Dios. Si
ponemos lo que Dios dice que es importante en primer lugar, las otras cosas que
necesitamos y deseamos nos serán entregadas también.

Pero si, para nosotros es más importante el dinero, las cosas, alguna persona, e
incluso nuestros sentimientos; que el Reino de Dios, es decir, todas tienen igual o
mayor prioridad que Su Reino, a largo plazo no vamos a obtener ni lo uno ni lo otro.

No podemos hacernos cargo de nuestro tiempo, sin definir claramente nuestras

prioridades. Debemos programar lo que más importa en primer lugar, o será llevado a
cabo por los cientos de cosas “urgentes” y “persistentes” que vienen a nosotros cada
semana.

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La Administración del Tiempo debe establecer prioridades entre sus metas. Nunca hay
tiempo suficiente para hacerlo todo, pero siempre hay tiempo suficiente para hacer lo
que es importante.

Nuestras prioridades se vuelven más reales cuando les escribimos como metas y las
clasificamos en orden de importancia. Pero las metas pueden ser tantas cosas, que
muchas veces se queden solamente en anhelos, pero para que esto produzca fruto,
es necesario actuar y así podremos ver, con el solo hecho de actuar en el orden de
prioridades del Señor, resultados que van mucho más allá de nuestra comprensión en
un momento dado.

Lo importante del cristianismo no es sólo lo que hacemos en el templo. No somos

mejor que los demás, somos diferentes y es en el mundo donde se marca la
diferencia.

En Filipenses 3:20, podemos ver una clave para determinar los propósitos y las metas
para el diario vivir,
“En cambio, nosotros somos ciudadanos del cielo, de donde anhelamos recibir
al Salvador, el Señor Jesucristo“.

Todas las metas que como profesionales, o ejecutivos nos hacemos, tienen que ser
acordadas con esa prioridad para tener éxito, sin embargo, como la mayoría de las
veces, nuestras metas no están acordes con esa prioridad, vienen los inconvenientes
o ese sentimiento de “no me salen las cosas”

Nuestras metas están acorde con lo que el mundo nos ofrece, el éxito rápido, el
acumular riquezas, el poder de enseñoreamos de las demás personas, pero eso no le
agrada al Señor, a él sencillamente lo que le agrada es que sigamos sus
instrucciones, expresadas en su Palabra, y con sobre eso se base todo nuestro
comportamiento, así nuestra prioridad será: ¡La Vida eterna en presencia del Dios
Eterno!

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Toda meta que se trace en este lugar pasajero, tiene que estar acorde con esa
prioridad. Por ejemplo: yo tengo un propósito: Educar cristianamente a mi hijo. La
meta para ese propósito es que estudie en un colegio cristiano.

Igual que tu meta, mi meta, mi propósito, mi gran propósito, tu gran propósito es llegar
a la ciudadanía del cielo. Todas las metas terrenales tienen que estar encaminadas a
buscar la voluntad de Dios. No debemos fijarnos metas por fuera de la Palabra de
Dios porque no se van a obtener, porque la voluntad de Dios es buena, agradable y
perfecta, pero muchas veces nosotros hacemos nuestra propia voluntad y no la
voluntad de Dios.

3.2.1. Identificación de las prioridades

La Palabra de Dios en Mateo 12:47-50, muestra como el Señor Jesús nos da ejemplo
de las prioridades no son solo como “nombre”, sino también en las vivencias,
miremos el texto:
"Alguien le dijo:
—Tu madre y tus hermanos están afuera y quieren hablar contigo.
— ¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos? —replicó Jesús.
Señalando a sus discípulos, añadió:
—Aquí tienen a mi madre y a mis hermanos. Pues mi hermano, mi hermana y
mi madre son los que hacen la voluntad de mi Padre que está en el cielo.”

El gran maestro nos da ejemplo, cómo identificar y tener claras las prioridades, para Él
en ese momento la prioridad eran sus hermanos en Cristo quienes comparten la fe en
el Padre Eterno.

Tal vez sin darnos cuenta y con la ayuda de nuestros tres enemigos: el mundo,
Satanás y nuestra naturaleza pecaminosa, hemos invertido nuestras prioridades, en
nuestros cargos, en el ejercicio de nuestras profesiones, en nuestra familia y hasta en
el uso de nuestro tiempo libre.

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Finalmente, usar prioridades estratégicamente, es ordenar lo que es más importante
en nuestra vida, y ¿Con qué criterio debemos ordenar nuestras prioridades? Hay que
tener una perspectiva eterna para poder ordenarlas, como ya lo dijimos lo primero es
buscar el reino de Dios y su justicia, y lo segundo es discernir los tiempos, encontrar el
cuándo para cada cosa que hacemos.

Dios nos hace sabios, y en la medida que somos sabios aprendemos a identificar el
cuándo y aprendemos también a hacerlo de acuerdo a la manera de Dios.

Pero qué es a lo que debemos dar prelación o un mayor nivel de importancia en

nuestras vidas, o dicho de otro modo:
¿Cuál es el orden de las prioridades?,

Según lo escrito por Pablo en los versículos del 18 al 24 del capítulo 3 de su carta a
los Colosenses:
Esposas, sométanse a sus esposos, como conviene en el Señor.
Esposos, amen a sus esposas y no sean duros con ellas.
Hijos, obedezcan a sus padres en todo, porque esto agrada al Señor.
Padres, no exasperen a sus hijos, no sea que se desanimen.
Esclavos, obedezcan en todo a sus amos terrenales, no sólo cuando ellos los
estén mirando, como si ustedes quisieran ganarse el favor humano, sino con
integridad de corazón y por respeto al Señor. Hagan lo que hagan, trabajen de
buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo,
conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven
a Cristo el Señor.

Y continua en Colosenses 4:1-6,

Amos, proporcionen a sus esclavos lo que es justo y equitativo, conscientes de
que ustedes también tienen un Amo en el cielo.
Dedíquense a la oración: perseveren en ella con agradecimiento y, al mismo
tiempo, intercedan por nosotros a fin de que Dios nos abra las puertas para
proclamar la palabra, el misterio de Cristo por el cual estoy preso. Oren para

12
 que yo lo anuncie con claridad, como debo hacerlo. Compórtense sabiamente
con los que no creen en Cristo, aprovechando al máximo cada momento
oportuno. Que su conversación sea siempre amena y de buen gusto. Así sabrán
cómo responder a cada uno.

Bien, como podemos ver, la prioridades que nos muestra este pasaje, bien de la
siguiente manera:
- La relación son la esposa o con el esposo.
- La relación con el padre o con los (las) hijos (as).
- La relación con el empleador o con el empleado.
- La relación con la comunidad de los creyentes.
- La relación con los no creyentes.

Mirémoslas con más detenimiento,

3.2.1.1. Dios

Si queremos encontrar el reino de Dios y su justicia, es de sentido común que lo

primero que debemos contemplar en todas nuestras actividades es a Él.

En Marcos 12:30 dice:

"Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente
y con todas tus fuerzas.”. Este es el principal mandamiento.

Dios debe estar antes que cualquier persona o cosa, en el orden de nuestras
prioridades. La Palabra de Dios no dice amarás al Señor con tu corazón, o con tu
alma, o con tu mente, o con tus fuerzas. No, lo que dice claramente es: “y” con todo tu
ser, con toda tu mente, con todo tu cuerpo, con toda tu alma, con todas tus fuerzas,
debemos amar a Dios.

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 3.2.1.2. El Hogar

La relación de pareja, entre el esposo y la esposa, y la relación entre los padres y los
hijos, es decir el hogar, ocuparía el segundo lugar de importancia.

Cabe aclarar que dentro de ésta, lo primero es la relación con el (la) esposo (a), no con
los hijos. No cometer el error de poner a los hijos por encima de la pareja, eso no
quiere decir que debemos hacerlos a un lado, o no prestarles atención, simplemente,
que nuestro enfoque dentro del hogar debe contemplar primeramente a nuestra
pareja.

Podemos agregar que mientras los hijos conviven con sus padres, la prioridad de los
hijos, como no tienen esposo (a), deben ser sus padres.

En los versículos 4 y 5 del capítulo 3 de la primera carta de Pablo a Timoteo vemos:

"Debe gobernar bien su casa y hacer que sus hijos le obedezcan con el debido
respeto; porque el que no sabe gobernar su propia familia, ¿cómo podrá cuidar
de la iglesia de Dios?”.

El hogar es parte fundamental y dedicando más de nuestro tiempo por ejemplo a

nuestra profesión y a las tareas laborales diarias, lo descuidamos bastante, al punto
incluso de dejarlo abandonado (en muchos casos).

Tristemente, ésta es una de las prioridades que más descuidamos y casi siempre la
dejamos en un último lugar. Al hogar queremos llegar bien tarde, cuando todo las
personas de la familia estén durmiendo; y por la mañana nos esforzamos por salir
bien temprano, cuando nadie se haya levantado.

3.2.1.3. El trabajo

Ya hemos visto que el trabajo es un bendición y así debemos mirarlo, sin embargo a
veces nos cargamos con las personas, por ejemplo con nuestro jefe o supervisor, o

14
con quienes están bajo nuestra supervisión, tal vez por el esfuerzo que nos toman las
labores, pero generalmente, ni el trabajo, ni el empleador, ni los empleados, son los
culpables de la actitud que con base a nuestros sentimientos, tomemos ante las
diferentes circunstancias que se presentan en el normal desarrollo de nuestras
tareas.

Podemos ver cómo, la tercera prioridad es el trabajo, en 1 Tesalonicenses 4:11-12,

“a procurar vivir en paz con todos, a ocuparse de sus propias
responsabilidades y a trabajar con sus propias manos. Así les he mandado,
para que por su modo de vivir se ganen el respeto de los que no son creyentes,
y no tengan que depender de nadie.”

Si bien el trabajo es una prioridad, no debemos ser “labor-adictos”, es decir, no lo

debemos convertir en un dios, pues no está primero que nuestro hogar, pero tampoco
debemos hacerlo a un lado, quitándole la relevancia, sin hacer el espacio de tiempo
correspondiente en nuestra vida para obtener nuestra provisión; el extremo en este
sentido es convertirlo en una carga, despreciarlo.

Con nuestra manera de trabajar también estamos testificando de nuestra fe y, si

trabajamos en una comunidad secular, los no creyentes podrán observar que a
nosotros nunca nos faltará lo necesario.

3.2.1.4. La iglesia

El cuarto lugar en el orden de las prioridades es la Iglesia, Hebreos 10:25, lo expresa

así:
“No dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino
animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día
se acerca.”

En la iglesia nos vamos a exhortar unos a otros, nos vamos a animar, nos vamos a
edificar, vamos a crecer si vivimos en comunidad.

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Dice el pastor Arturo Rojas en su libro Razones para la fe, respecto de la comunidad
de los santos3:
“Vida en comunidad se llamó una de las obras del teólogo alemán Dietrich Bonhoeffer,
mártir del régimen nazi, quien paradójicamente, durante sus últimos años en los
campos de concentración antes de ser ejecutado, no pudo experimentar esa forma de
vida de la que escribió con tanta propiedad, razón por la cual tal vez aprendió a
valorarla más que nadie.

En efecto, la vida en comunidad es característica esencial e inseparable del

cristianismo. La comunión cristiana solo es posible dentro de la comunidad (1 Juan
1:3). La llamada “Iglesia Virtual” es inviable pues la posibilidad de que se termine
imponiendo sobre las formas congregacionales tradicionales en el cristianismo es
remota, ya que “nada hace presumir que las reuniones congregacionales tiendan a
desaparecer, porque la psicología de las masas, no ha cambiado, ya que el hombre –
animal social por excelencia- necesita comunión con sus semejantes. Somos rebaño
de ovejas, seres gregarios. Por lo tanto, el templo será insustituible hasta el final
(Silva-Silva).

3.2.1.5. La relación con la parentela

En este nivel de prioridad tenemos que contemplar dos tipos de personas, una son los
parientes: tíos, sobrinos, primos, pero en ella también irían los amigos más cercanos,
pues muchas veces ellos son más allegados que nuestros propios padres.

Observemos que estamos en la quinta prioridad, no es la primera, como en múltiples

ocasiones suele suceder. Sin embargo, no por eso vamos a dejar de relacionarnos con
ellos o a no prestarles atención, simplemente, lo que debemos hacer es dar más
importancia a las prioridades que ya hemos mencionado.

Respecto de la amistad, recordemos la historia del paralítico de Lucas 5:18-20:

“Entonces llegaron unos hombres que llevaban en una camilla a un paralítico.

3
Rojas, A. Razones para la fe página 199

16
 Procuraron entrar para ponerlo delante de Jesús, pero no pudieron a causa de
la multitud. Así que subieron a la azotea y, separando las tejas, lo bajaron en la
camilla hasta ponerlo en medio de la gente, frente a Jesús.
Al ver la fe de ellos, Jesús dijo:
—Amigo, tus pecados quedan perdonados.”

Los amigos del paralítico no desistieron en su intento de acercarlo a Jesús, a pesar de

las dificultades, como consecuencia el que se hallaba postrado, quedo
completamente sano.

A nuestros amigos nosotros los elegimos, pero a nuestros parientes no, eso no implica
necesariamente que los pongamos por encima de nuestra (o) esposa (o) o por encima
de nuestros padres, ni tampoco que los despreciemos y no les demos la debida
importancia.

De cualquier manera, sean amigos o parientes, debemos tener cuidado, porque estas
personas muchas veces, por considerar que nos conocen, no desaprovechan
momentos que a criterio de ellos son propicios para darnos consejos, criticarnos y
pedirnos favores. Situación que a cualquier ser humano causa molestia.

Es importante entonces, que no demos más tiempo del que merecen a este tipo de
relaciones, para tampoco entrar a juzgar, criticar o dar consejos fuera de lugar a
aquellos que por alguna razón están cerca de nosotros.

3.2.1.6. La relación con los no creyentes

Si bien no debemos caer en los excesos que el mundo promueve, no podemos

aislarnos de él, ya que de cualquier manera y en cualquier momento vamos a tener
que compartir algunas situaciones con el mundo.

El mismo Jesús al orar incluía la relación que nosotros como sus discípulos debemos
tener con el mundo,

17
 “Yo les he entregado tu palabra, y el mundo los ha odiado porque no son del
mundo, como tampoco yo soy del mundo. No te pido que los quites del mundo,
sino que los protejas del maligno. Ellos no son del mundo, como tampoco lo soy
yo. Santifícalos en la verdad; tu palabra es la verdad. Como tú me enviaste al
mundo, yo los envío también al mundo. Y por ellos me santifico a mí mismo,
para que también ellos sean santificados en la verdad. (Juan 17:14-18)

Nos referimos al mundo como aquellas personas que no creen en Jesús como Señor y
Salvador.

No podemos pensar que es un problema pasar algún tiempo con amigos

“inconversos”, o simplemente tenerlos, eso realmente no tiene por qué inquietarnos,
lo que verdaderamente importa es que tengamos clara cuál es nuestra identidad
como hijos de Dios, porque cuando presentamos falta de identidad en Cristo,
cualquier cosa, o cualquier relación, puede hacernos cambiar y generalmente, si es en
el mundo, esas influencias no serán propiamente para el bien de nuestro tiempo y de
nuestro ser.

Cuando llegamos al cristianismo, somos un poco legalistas y tendemos a romper

todas las relaciones que teníamos en el pasado, y a alejarnos de las personas, porque
pensamos que eso es lo que Dios quiere, pero ¿realmente es así? Consideramos que
lo mejor que podemos hacer es vivir apartados de todo y de todos.

Tendemos a escabullirnos a escondernos, para que nada nos pase, pero realmente
Dios quiere que seamos luz para los demás.

Esta perspectiva, nos vuelve arrogantes, ya que cavilamos que por tener la verdad de
Jesús, no es necesario dedicar tiempo para escuchar a otras personas, pero si
queremos que ellos nos escuchen a nosotros tenemos que escucharlos a ellos. No
obstante, tenemos como discípulos un propósito y un destino en Dios, expresado en
palabras de Jesús de la siguiente manera:
“—Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y

18
 hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre
y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he
mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin
del mundo,” Mateo 28:18-20

El Señor quiere que seamos luz para los demás. Jesús no vino a rechazar a las
personas, él aceptaba, amaba y servía aún a aquellos que no estaban interesados en
sus palabras, así debemos actuar nosotros, dando algo de nuestro tiempo en ese
sentido, pero después de haber atendido los intereses de Dios, de nuestro hogar, de
nuestro trabajo, de nuestra iglesia y de la parentela.

3.3. Los temperamentos4

El temperamento influencia todo lo que haces. Desde los hábitos de dormir a la

manera de comer y la forma en que tratas con otras personas. Humanamente
hablando, no 'hay en tu vida una influencia más poderosa que la de tu temperamento
o combinaci6n de temperamentos. Esta es la razón de que sea tan esencial que
conozcas tu temperamento y que puedas analizar el temperamento de otras
personas, no para condenarlas, sino para poder optimizar tu potencial y capacitarlos a
ellos a optimizar el suyo.

Por ejemplo, el sanguíneo habla acerca del tiempo, de los amigos, y de un centenar de
cosas antes de afrontar el verdadero problema. El colérico va directo al grano. El
(o ella) quiere que tú corrijas a su cónyuge a fin de poder tener una plácida vida
hogareña. La melancólica suspira profundamente al sentarse con su depresión,
autocompasión e infelicidad grabados en su rostro. La flemática pocas veces llega a
concertar una cita, y cuando lo hace necesita la mayor parte de su primera media hora
para cebar su bomba de conversación.

Estas personas no tienen el temperamento que tienen debido a que actúen así. Al
contrario, actúan de la forma en que lo hacen debido a sus temperamentos. Algunos

4
LaHaye T. (1984) Manual del temperamento

19
de nuestros actos son sutiles, como gustos o preferencias, en tanto que otros
involucran perspectivas y actitudes, e incluso maneras de pensar. Apenas si hay una
función en la vida que no esté influenciada por el temperamento. Así, será mejor que
determines tu temperamento y que lo dirijas coherentemente hacia el mejor estilo de
vida para ti y tu familia. De otra manera, tu temperamento te dirigirá a ti de una
manera subconsciente.

3.3.1. ¿Por qué actuamos de la manera en que lo hacemos?

Todos y cada uno estamos interesados en el comportamiento humano. Esta es la

razón de que más del 80 por ciento de los trece millones de estudiantes de
instituciones superiores de los Estados Unidos toman voluntariamente clases de
sicología; están fascinados por lo que hace actuar a la gente. Y, ante todo, están
interesados en por qué piensan, sienten, responden, estallan, y actúan de la manera
en que lo hacen.

Nada responde mejor a estas preguntas que la teoría de los cuatro temperamentos.
Explica las diferencias entre las personas, sus gustos, sus capacidades creativas, sus
fortalezas y debilidades. Explica por qué algunas personas entran en conflicto con
otras y por qué otras se sienten atraídas entre sí.

3.3.1.1. Hemos nacido con un temperamento

Hablando humanamente, nada tiene una mayor influencia sobre tu comportamiento

que tu temperamento heredado. La combinación de los genes y cromosomas de tus
padres en la concepción, que determinó tu temperamento básico nueve meses antes
de que respiraras por primera vez, es lo principalmente responsable de tus acciones,
reacciones, respuestas emocionales y, en un grado u otro, de casi todo lo que haces.

La mayor parte de la gente está totalmente inconsciente de esta poderosísima

influencia sobre su comportamiento. Como consecuencia, en lugar de cooperar con
ella y de usarla, entran en conflicto con este poder interno e intentan hacer de sí

20
mismos algo para lo que nunca fueron designados. Ello no sólo los limita
personalmente, sino que afecta a su familia inmediata y a menudo daña otras
relaciones interpersonales. Es una de las razones por las que tantas personas dicen:
"No me gusto" o "No me puedo comprender".

Cuando una persona descubre tu temperamento básico, puede por lo general

descubrir con facilidad cuáles son sus aptitudes vocacionales, cómo tener buenas
relaciones con otras personas, qué debilidades naturales se deben vigilar, con qué
tipo de esposa debería casarse, y cómo puede mejorar la eficacia de su vida.

3.3.1.2. ¿Qué es temperamento?

El temperamento es una combinación de características que heredamos de nuestros

padres. Nadie sabe dónde reside, pero creo que se halla en algún lugar de la mente o
del centro emocional (a menudo denominado "corazón"). De esta fuente se combina
con otras características humanas para producir nuestra estructura básica. La mayor
parte de nosotros estamos más conscientes de su expresión que de su función.

Es el temperamento de una persona lo que la hace abierta y extrovertida o tímida e

introvertida. Es indudable que conoces ambos tipos de personas nacidas de los
mismos padres. De una manera similar, es el temperamento lo que hace que unas
personas se entusiasmen por el arte y la música, en tanto que otras se centran en los
deportes o en la industria. De hecho, he conocido notables músicos cuyos hermanos
carecían totalmente de oído para la música.

El temperamento no es, naturalmente, la única influencia sobre nuestro

comportamiento. La temprana vida en el hogar, la instrucción, la educación y la
motivación constituyen también poderosas influencias sobre nuestras acciones a
través de la vida.

El temperamento, sin embargo, es la influencia número uno en la vida de la persona,

no sólo porque es lo primero que nos afecta, sino porque, como la estructura corporal,

21
el color de los ojos, y otras características físicas, nos acompaña a través de la vida.
Un extrovertido es un extrovertido. Puede que trate de ocultar la expresión de su
extroversión, pero siempre será un extrovertido. Similarmente, aunque un introvertido
pueda salir de su concha y actuar más agresivamente, nunca será transformado en un
extrovertido. El temperamento establece amplias líneas conductoras en las pautas de
comportamiento de cada uno, influenciando a la persona durante toda su vida.

De un lado tiene sus fortalezas, del otro, sus debilidades. La principal ventaja de
aprender acerca de los cuatro temperamentos básicos es descubrir tus fortalezas y
debilidades más pronunciadas a fin de que con la ayuda de Dios puedas vencer tus
debilidades y tomar la máxima ventaja de tus fortalezas. De esta manera podrás
cumplir hasta el máximo tu destino personal.

El temperamento se hereda genéticamente, e indudablemente quedó afectado por la

caída de Adán. Esta es la razón por la que todos nos identificamos con el deseo de
hacer lo bueno mientras que al mismo tiempo poseemos un deseo de hacer lo malo.
El Apóstol Pablo sentía indudablemente lo mismo cuando dice en Romanos 7:18-20:
“Yo sé que en mí, es decir, en mi naturaleza pecaminosa, nada bueno habita.
Aunque deseo hacer lo bueno, no soy capaz de hacerlo. De hecho, no hago el
bien que quiero, sino el mal que no quiero. Y si hago lo que no quiero, ya no soy
yo quien lo hace sino el pecado que habita en mí.”,

Pablo diferenció entre sí mismo y aquella fuerza incontrolable en el interior diciendo:

"Ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí". El "Yo" es la persona de Pablo, el
alma, la voluntad, y la mente del hombre. El "pecado" que moraba en él era la
naturaleza humana que él, como todos los seres humanos, había heredado de sus
padres.

Esta naturaleza básica que todos hemos heredado de nuestros padres recibe varios
nombres en la Biblia: "el hombre natural", "la carne", "el viejo hombre", y "simiente
corruptible", para mencionar unos pocos. Ella provee los impulsos básicos de nuestro
ser al buscar nosotros satisfacer nuestras necesidades. Para comprender

22
apropiadamente su control sobre nuestras acciones y reacciones, deberíamos
distinguir cuidadosamente entre temperamento, carácter y personalidad.

- El temperamento es la combinación de características con las que nacemos y que

afectan subconscientemente el comportamiento humano. Estas características están
dispuestas genéticamente sobre la base de nacionalidad, raza, sexo y otros factores
hereditarios, y son transmitidas genéticamente. Algunos psicólogos sugieren que
recibimos más genes de nuestros abuelos que de nuestros padres.

Ello podría dar la explicación de la mayor semejanza de algunos hijos a sus abuelos
que a sus padres. La manifestaci6n de las características del temperamento es tan
impredecible como el tamaño o el color de los ojos, y del cabello.

- El carácter denota el verdadero tú. La Bíblia se refiere a esto como "el hombre
escondido del corazón". Es el resultado de tu temperamento natural modificado por la
instrucción, educación, actitudes básicas, creencias, principios y motivaciones
recibidos en la infancia. En ocasiones se denomina como "el alma" del hombre,
constituida por la mente, emociones y voluntad.

- La personalidad es la expresión externa de la persona, que puede ser o no lo mismo

que el carácter, dependiendo de lo genuinos que seamos. Con frecuencia, la
personalidad es una agradable fachada que esconde un carácter desagradable o
débil. (Muchas personas pasan por la vida aparentando ser la persona que ellos creen
que deben ser, o la forma en que quieren mostrarse a los demás que son, en lugar de
actuar como realmente son). Esta es una fórmula para el caos mental y espiritual.
Tiene su origen en el seguimiento de la fórmula humana para una conducta
aceptable, que pone su énfasis en lo externo. La Biblia nos dice;
"La gente se fija en las apariencias,
pero yo me fijo en el corazón", 1 Samuel 16:7, y
"Por sobre todas las cosas cuida tu corazón,
porque de él mana la vida," Proverbios 4:23.

23
El lugar para cambiar el comportamiento del hombre es el interior del hombre, no el
exterior.

Resumiendo, el temperamento es la combinación de características con las que

nacemos; el "carácter" es nuestro temperamento "civilizado"; y la personalidad es "el
rostro" que mostramos a los otros. Debido a que los rasgos del temperamento los
recibimos genéticamente de nuestros padres y por ello son impredecibles, se debería
mantener en mente algunos de los factores que influencian el temperamento. La
nacionalidad y la raza son probablemente los factores que juegan la parte más
importante en la formación de nuestro temperamento heredado.

3.3.2. Los Cuatro Temperamentos

El corazón de la teoría de los temperamentos, tal como lo concibió primeramente

Hipócrates hace más de veinticuatro siglos, divide a las personas en cuatro categorías
básicas que él denomina sanguínea, colérica, melancólica y flemática. Cada
temperamento tiene fortalezas y debilidades que constituyen una parte distintiva de
su estructura durante la vida. Una vez que una persona ha diagnosticado su propio
temperamento básico, está mejor equipada para determinar qué oportunidades
vocacionales son las mejores para ella, y cuáles son las debilidades naturales de las
que tiene que ocuparse para evitar que le anulen su potencial y creatividad. La tabla
de temperamentos de la página 22 muestra estas fortalezas y debilidades, revelando
diez de ellas para cada temperamento.

3.3.2.1. El Sanguíneo

El sanguíneo es una persona cálida, vivaz y "que disfruta". Receptiva por naturaleza,
las impresiones extremas encuentran fácil entrada en su corazón, donde provocan un
alud de respuestas. Los sentimientos más que los pensamientos reflexivos le llevan a
tomar sus decisiones.

Es tan comunicativo que, por lo general, es considerado un súper-extrovertido. Por lo

general contagia a los demás su espíritu amante de la diversión. En el momento en
24
que entra en una estancia tiende levantar los espíritus de todos los presentes, gracias
a su exuberante conversación. Es un narrador extraordinario y su naturaleza cálida y
emocional casi te ayuda a revivir la experiencia al relatarla.

A quienes tienen este temperamento nunca les faltan los amigos. Pueden sentir de
una manera genuina los gozos y tristezas de cada persona que conocen y tienen la
capacidad de hacer que se sienta importante, como si se tratara de un amigo muy
especial; y lo es, en tanto que te está mirando. Después, fijará su mirada con la
misma intensidad sobre la siguiente persona que encuentre.

3.3.2.2. El Colérico

El colérico es caluroso, rápido, activo, práctico, voluntarioso, autosuficiente y muy

independiente. Tiende a ser decidido y de firmes opiniones, siéndole fácil tomar
decisiones, tanto para él mismo como para otras personas. Como el sanguíneo, el
colérico es extrovertido, (pero no hasta ese punto).

El colérico prospera en la actividad. No necesita ser estimulado por su ambiente, sino

que más bien lo estimula él con sus inacabables ideas, planes, metas, y ambiciones.
No se lanza a una actividad sin objetivo, porque tiene una mente práctica y aguda, no
vacila bajo la presión de lo que los demás piensan, sino que toma una postura
decidida sobre los temas en debate.

Al colérico no le asustan las adversidades; de hecho, tienden a alentarlo. Su terca

determinación le permite triunfar, por lo general, (allí donde otros han fracasado). Su
naturaleza emocional es la menos desarrollada de su temperamento. No simpatiza
fácilmente con los demás, ni muestra ni expresa naturalmente ninguna compasión.

3.3.2.3. El Melancólico

El melancólico es el más rico de todos los temperamentos. Es un tipo analítico,

abnegado, dotado y perfeccionista con una naturaleza emocional muy sensible. Nadie

25
consigue más disfrute de las artes que el melancólico. Por naturaleza, es propenso a
la introversión; pero, debido al predominio de sus sentimientos, es dado a una
variedad de talantes. Algunas veces estará en las alturas del éxtasis, lo que le hará
actuar de una manera más extrovertida. Sin embargo, en otras ocasiones se
encontrará sombrío y deprimido, y durante estos períodos se encierra en su concha.

El melancólico es un amigo muy fiel, pero a diferencia del sanguíneo no consigue

amigos fácilmente. Su reticencia a ponerse en primera línea es a menudo tomada
como indicación de que no le gusta la gente. Como a todos nosotros, no solo le gustan
las otras personas, sino que tiene un intenso deseo de ser amado por ellas. Sin
embargo, encuentra difícil expresar sus verdaderos sentimientos. Las experiencias
frustrantes le han hecho desconfiado a aceptar a la gente tal como se presentan; así,
es propenso a la sospecha cuando otros lo buscan o llenan de atenciones.

El melancólico halla por lo general su mayor significado en la vida a través del

sacrificio personal. Parece deseoso de ir al sufrimiento, y a menudo elige una vocación
difícil que requiere un gran sacrificio personal. Pero una vez la ha elegido, es propenso
a ser muy directo y persistente en su seguimiento de esta vocación y más que
probablemente logrará un gran bien si su tendencia natural a afligirse y quejarse
(debido al sacrificio) no lo lleva a tal depresión que lo abandone totalmente.

3.3.2.4. El Flemático

El flemático es un individuo tranquilo, que nunca se descompone, y que tiene un

punto de ebullición tan elevado que casi nunca se enfada. Es el tipo de persona más
fácil de tratar y es por esa naturaleza el más agradable de los temperamentos.

La vida es para él una experiencia feliz, placentera y sin estridencias en la que evita
involucrarse tanto como pueda. Es tan calmado y sereno que nunca parece agitado,
no importan cuales sean las circunstancias que lo rodean. (Es el único tipo de
temperamento que no varía).

26
Por lo general evita la violencia. El flemático no carece de amigos porque le gusta la
gente y tiene un sentido natural y seco del humor. Es el tipo de persona que puede
tener en vilo a una multitud de personas, y que sin embargo nunca esboza una
sonrisa, poseyendo la singular capacidad de ver algo humorístico en otros y en las
cosas que hacen, mantiene un enfoque positivo de la vida.

3.4. Habilidades y debilidades según el

temperamento

“He aprendido a lo largo de los años cómo organizar mi horario para acomodar mis
hábitos de trabajo... Para mí, conseguir el máximo de mis habilidades es directamente
proporcional a obtener el máximo provecho de mi tiempo. Tomo una actitud agresiva
hacia el tiempo, y procuro controlarlo en lugar de permitir que él me controle.”
- Marcos H. McCormack
3.4.1.1. Del Sanguíneo

AMBITO Habilidades Debilidades

Cálido y vivaz (alegre, eficaz). Tiene Llora con facilidad. Es emocionalmente

"carisma" (misericordia, ternura).
Comunicativo, nunca le falta de qué
hablar. Despreocupado, no le aflige el
VIDA futuro. Excelente narrador de cuentos.
EMOTIVA Vive en el presente. Su conversación
tiene una cualidad contagiosa. Tiene
chispa. Capacidad fuera de lo común
para disfrutar de todo. Cordial
(hospitalario).
imprevisible (circunstancial). Le cuesta
encontrar sosiego. Tiene arranques de
enojo. Exagera la verdad. Aparenta falta
de sinceridad. No tiene control sobre sí
mismo. Hace compras impulsivas. Se
pone demasiado en evidencia
(demostración).

27
 Hace amigos con facilidad. Es
acogedor, optimista, agradable. Se
muestra siempre sonriente, amable.
VIDA DE No le cuesta pedir disculpas. Es tierno,
RELACIONES comprensivo. Conversa con
autenticidad. Comparte las penas y
alegrías de otros.
Quiere dominar la conversación. No
tiene fuerza de voluntad. Depende de la
aprobación de los demás y busca hacer
méritos. Disfruta de la gente, luego la
olvida. Busca excusas para su
negligencia. Habla demasiado de sí
mismo. Se olvida de sus promesas y
compromisos.

Produce una buena impresión inicial. Es totalmente desorganizado. No se

Nunca se aburre porque vive en el
presente. Tiene don para cuidar
EN EL TRABAJO enfermos. Inspira entusiasmo.
puede confiar en él. Carece de
disciplina. Pierde el tiempo
conversando cuando debería trabajar.
Empieza proyectos y no los termina. Se
distrae con facilidad. No logra cumplir
sus meta

Su Mayor Necesidad. Necesita que el Espíritu Santo estabilice sus emociones, calmar
su espíritu intranquilo. Con la ayuda de Dios puede llegar a dominarse a sí mismo,
disciplinar su vida. Debe pedirle al Espíritu Santo que le ayude a reducir la atención
que se dedica a sí mismo. Su costumbre de dejar proyectos por la mitad, sus hábitos
desorganizados deberán convertirse en cosas del pasado a medida que adquiera
madurez en la vida cristiana. Con la ayuda del Espíritu Santo llegará a ser más
productivo, ser más responsable, digno de confianza, desarrollar una vida más
autodisciplinada, reemplazar su yo por una humildad genuina.

28
 3.4.1.2. Del Colérico

ÁMBITO Habilidades Debilidades

Seguro y firme en sus decisiones, Problemas con su carácter violento. Es

voluntarioso, tenaz (perseverante). Es porfiado (terco, testarudo) e insensible
auto determinado (aprende solo), a las necesidades ajenas. Es poco
optimista, audaz (arriesgado, atrevido), emocional, frío; no aprecia los detalles
y valiente. estéticos. Carece de simpatía; es
VIDA
cortante (brusco), es impetuoso
EMOTIVA
(arrebatado, imprudente), violento, le
disgustan las lágrimas, es vengativo
ante el que hace injusticia. Es
orgulloso, le cuesta pedir disculpas. Es
excesivamente autosuficiente.

No exige a los demás lo que él mismo Poco compasivo (don de misericordia),

no puede hacer. No pierde el ánimo con toma decisiones por otros. Cruel,
facilidad. Es un líder lleno de firmeza. cortante, sarcástico (burlón), tiende a
Sabe juzgar a la gente. Logra motivar a ser dominante en un grupo. Es
VIDA DE los demás. Sabe exhortar. No se achica arrogante (altanero, orgulloso,
RELACIONES ante las circunstancias. engreído), dictatorial (autoritario). Usa
a la gente para su beneficio, le cuesta
perdonar, es vengativo. Se inclina a ser
intolerante (terco); altivo, dominador en
su trabajo.

Es buen organizador, promotor; posee Demasiado seguro de sí mismo.

intuición para tomar decisiones
acertadas. Reacciona rápida y
decididamente ante emergencias, es
EN EL TRABAJO perspicaz (capaz, prudente) y agudo
(talentoso). Nunca vacila, es
sumamente práctico, sabe estimular a
los demás. Se propone metas y las
alcanza.
Inclinado a proceder con astucia
(hipócrita, mentiroso). Porfiado
(rebelde, terco) e impaciente por los
detalles. Poco analítico, fuerza a los
demás a que se acomoden a su plan.
Es fastidioso, difícil de complacer; sólo
tiene tiempo para sus planes y
proyectos.

Su Mayor Necesidad.- Poner al control del Espíritu Santo su carácter violento. El

Espíritu Santo puede ayudarlo a tener un corazón compasivo, perdonador; ser menos

29
sarcástico, dictatorial, más dispuesto a escuchar a los otros. Ser más tolerante
(comprensivo), menos ofuscado (rebelde, terco). Saber que los demás pueden tener
buenas ideas. Ser más sensible a las necesidades ajenas, confesar su carácter
violento y su crueldad. Desarrollar su belleza interior, mediante horas de oración y
meditación en la palabra.

3.4.1.3. Del Melancólico

AMBITO Habilidades Debilidades

Rico interiormente, analítico, tierno, Depresivo, le gusta dar una imagen de

VIDA reflexivo. Original, inmaterial. sufrido. Tiene preocupaciones
EMOTIVA injustificadas (preocupado, perturbado),
orgulloso; egocéntrico, introspectivo.

Amigo sacrificado, constante, Crítico severo; perfeccionista.

cauteloso; afectivo para elegir Preocupado por lo que piensan los
VIDA DE amistades. demás. Capaz de explotar con ira si lo
RELACIONES acosan. Rencoroso. Es apático con los
que piensan diferente, dificulta sus
relaciones.

Perfeccionista, preciso, analítico. Indeciso. Más teórico que práctico.

Termina lo que empieza. Apto para
trabajos creativos e intelectuales.
EN EL TRABAJO
Consciente, eficaz, es talentoso; tiene
rasgos de genialidad, conoce sus
limitaciones.
Anteproyectos novedosos, analiza las
cosas en exceso, deprimiéndose. Elige
tareas de máximo sacrificio. Se pone
irascible (irritable, furioso) cuando
realiza trabajos creativos.

Su Mayor Necesidad.- Caminar por fe, ver el futuro con optimismo. El Espíritu Santo
puede ayudarle a amar a los demás y ser menos exigente y así mejorar su capacidad
de relacionarse. Obedecer y confiar más en el Señor y no en sí mismo. Cambiar su
pesimismo por gratitud. Superar su espíritu crítico. Olvidarse de sí mismo y servir a los
demás. Entender que Dios quiere su disposición y no su perfección.

30
 3.4.1.4. Del Flemático

AMBITO Habilidades Debilidades

VIDA EMOTIVA Confiable, equilibrado; de buen No tiene confianza en sí mismo, es

carácter, fácil de congeniar; de ánimo
alegre, apacible aunque de pocas
palabras. Bondadoso, conciliador.
pesimista, temeroso; se aflige, se
preocupa con facilidad; rara vez
manifiesta sus emociones, es pasivo e
indiferente, se acomoda a las
circunstancias de forma farisaica y
egoísta.

VIDA DE Su compañía es agradable, tiene Huye de los compromisos, es egoísta,

RELACIONES amistades numerosas, tiene un sentido mezquino (avaro, miserable). Analiza las
de humor agudo. Es conciliador, tiene personas con indiferencia. Carece de
afecto sedante (tranquilizante) sobre entusiasmo, puede ser terco. Es
los demás, es constante, fiel, indiferente con los demás, le causa
diplomático (prudente, formal), molestias a quienes les disgustan. No se
pacificador, sabe escuchar; da un caracteriza por ser cordial. Afecta ser
consejo solo si se lo piden. superior de los demás.

EN EL TRABAJO Es eficiente si se lo exige. Es práctico, Actitud espectadora, calma y serena de

sencillo y conservador. Hábil, prolijo, la vida, no se compromete, perezoso.
planifica su trabajo antes de empezar. Acepta el liderazgo a desgano, carece
Influye apaciguando (pacificar, calmar) de motivaciones; es indeciso. Se auto
ánimos; es confiable en lo que protege de situaciones
emprende. comprometedoras. Resiste los cambios.

Su Mayor Necesidad.- Reemplazar su carácter apocado (turbado, desconcertado,

temeroso); ganar confianza en sí mismo, basado en una vida controlada por el Espíritu
Santo. Amar y comprometerse con los demás neutralizando su egoísmo e indiferencia.
Desarrollar motivación por su trabajo, percibiendo las necesidades de aquellos que lo
rodean. Dejando de lado su pereza y lentitud. Debe superar su pasividad, entregarse
a sí mismo, dejar de actuar como si fuera un creyente y serlo realmente, admitir sus
temores como pecado y tratarlos como tal. No aparentar ante los demás calma,
autosuficiencia. Cuando por dentro hay tormenta, no desperdiciar oportunidades de
servir a Cristo, a causa de su temor a las personas y su inseguridad, tanto en su

31
familia como en la iglesia. (2 Timoteo 1:7).

Recursos Adicionales:
Cuestionario Pastor Darío Silva Silva. El Fruto Eterno.

Bibliografía Básica:
(1999). Biblia Nueva Versión Internacional. Sociedad Bíblica Internacional. Miami.
Engstrom, T.W. y Mackenzie, R.A. (1974). Como aprovechar el tiempo. Miami: Vida
Zondervan.
Momento oportuno (inédito).

Bibliografía complementaria:
Barajas, J.C. (2013). Roles Sociales. Madrid, España. Sociología divertida. Recuperado
de: http://sociologiadivertida.blogspot.com.co/2013/09/los-roles-sociales.html
LaHaye, T. (1984). Manual del Temperamento. Miami. Unilit.
Warren. R. (2003). Una Vida con propósito. Miami. Editorial Vida.
Rojas. A. (2008). Razones para la Fe. Miami. Editorial Vida

Criterios de Evaluación:
Los estudiantes comprenden que al buscar la ayuda de Dios para organizar su tiempo,
serán guiados a realizar cada cosa de forma oportuna independientemente del
temperamento que cada uno tenga y que las circunstancias no las verán, como lo
hacían antes.

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