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Resumen

Geomara Rojas

Los principios del Derecho enmarcan los principios o bases en que se basara la
interpretación del derecho, dentro de esta rama, pues tiene características propias
que ameritan una especial interpretación y una especial demarcación de
posibilidades a escoger.

Este principio contenido dentro de la constitución en su artículo establece que

Ninguna persona puede ser detenida o presa, sino por causa de delito o falta y en
virtud de orden librada con apego a la ley por autoridad judicial competente. Se
exceptúan los casos de flagrante delito o falta. Los detenidos deberán ser puestos
a disposición de la autoridad judicial competente en un plazo que no exceda de
seis horas, y no podrán quedar sujetos a ninguna otra autoridad. El funcionario, o
agente de la autoridad que infrinja lo dispuesto en este artículo será sancionado
conforme a la ley, y los tribunales, de oficio, iniciarán el proceso correspondiente.

Dentro de este contexto vemos que la constitución está tutelando lo que es

nuestra libertad, además nos establece que la detención ilegal puede llegar a
considerarse un delito, este principio más propio del derecho procesal penal, se
tiene que llevar un procedimiento correcto, y detener a una persona de la forma
legal, si no es por prevención policial, por presentación espontanea, o por orden
judicial, pero que todo esto esté fundamentado en ley y pueda probarse eso.

Este principio lo que nos establece dentro del artículo de la constitución es que a
la persona a la que se le es detenida como vimos en el principio anterior, que tiene
que estar fundamentada en ley, se le tiene que hacer saber a la persona el motivo
de la detención y además establece la obligación de comunicarle a otra persona
aparte del detenido la misma detención para que esta pueda velar por el debido
proceso y la debida defensa el mismo.

Dentro del proceso penal es importante que se cumplan rigurosamente con todos
los principios, y como tiene relación este principio con los dos anteriores, al ya ser
detenido, y notificado la causa del mismo, fundamentada en ley, es importante que
se le hagan saber sus derechos al detenido, y es muy importante como lo deja
claro que tiene que hacérselo saber de una manera clara y comprensible, y que
tiene derecho a proveerse de un defensor, y no puede ser obligado a declarar
sino ante autoridad judicial competente.

Todo esto salvaguardando a la persona y también presumiendo su inocencia, y

para que no sea tratado de alguna manera cruel e inhumana.

Según lo establecido en el presente principio y enmarcado dentro de la

constitución política en su artículo establece que solo hay una autoridad
competente para poder realizar las preguntas y obtener información y ese es el
órgano jurisdiccional, y si se llega a obtener un interrogatorio extrajudicial,
carecerá de valor probatorio, por lo que es importante que la información obtenida
sea de manera licita y de acuerdo a los procedimientos establecidos en la ley.

Es importante recalcar el plazo del mismo pues se tiene lo que son 24 horas para
que la persona sea presentada ante un órgano jurisdiccional competente para que
le tome su primera declaración.

Es importante que aparte de que se hayan velado con los principios anteriores se
cumpla en todo caso que la persona quede consignada porque haya un peligro de
fuga u obstaculización de la justicia en un centro de detención legal, avalado por el
sistema penitenciario y que no sea un centro de detención en donde se trate de
forma cruel e inhumana.

Y hace mención que se distinguen distintos centros de detención, por un lado, se

tiene según el centro de detención preventiva donde se encuentran las personas a
quienes no se les ha dictado un fallo concreto.

Y por el otro lado se tiene el centro de cumplimiento de condena correspondiente,

con el fin de separar a las personas culpables con las que aún se presumen
inocentes.

Este es uno de los principios más importantes del derecho penal y procesal penal,
pues establece que los derechos de las personas son inviolables, y nadie podrá
ser condenado, ni privado de sus derechos, sin haber sido citado oído y vencido
en proceso legal ante juez o tribunal, ni tampoco ser juzgados por tribunales
especiales.

Es de vital importancia saber esto pues nadie puede imponer su justicia por su
propia mano, ya que hay procedimientos legales a respetar y que se tomaran en
cuenta para determinar la culpabilidad o no de una persona.

Según el artículo de la constitución el cual nos señala el principio de debido

proceso, el cual básicamente establece que para aplicar una pena tiene que
haberse llevado un proceso legal.

Presencia de un funcionario en la consulta no viola la confidencialidad. Según un

informe emitido por la presencia de un funcionario en la consulta fue solicitada
expresamente por el facultativo que la atendía "dadas las características de los
internos destinados en dicho módulo donde en múltiples ocasiones se vienen
vertiendo presiones y coacciones de todo tipo hacia el personal sanitario" según
se establece en el mismo, respondiendo, pues a razones de seguridad la
demanda efectuada por el médico; y esta medida se encuentra amparada por lo
establecido del Reglamento Penitenciario cuando establece el derecho de los
internos a que se preserve su dignidad así como a su intimidad, sin perjuicio de las
medidas exigidas por la ordenada vida en prisión, entre las cuales indudablemente
están incluidas las tendentes a mantener la seguridad del centro y preservar
también la dignidad de los que trabajan en él. Además, la medida adoptada no
viola la confidencialidad de datos clínicos toda vez que el control se ejerce por el
funcionario desde la puerta y es en todo caso visual, por lo que no tiene que
enterarse del contenido de la consulta, y en el caso de que por algún motivo fuera
necesaria su aproximación física, señala el informe que la confidencialidad obliga
igualmente al personal no sanitario presente, conjugándose así los derechos del
médico y del interno, que no vería vulnerado su derecho a la intimidad, debiendo
por ello ser desestimada la queja. Deber de los funcionarios de colaborar en la
consecución de una convivencia ordenada. No puede tenerse la certeza de que el
cartel a que se refiere la queja estuviera colocado en el Centro Penitenciario,
como tampoco que sobre él hubiera sido. No obstante, como el Centro
Penitenciario no niega en su informe la existencia del cartel con esa frase, el
cumplimiento de esta resolución queda condicionado a que efectivamente el cartel
hubiera sido colocado y permaneciera aún. Cuestión distinta es que los
funcionarios expresen de esa forma sus sentimientos dentro del Centro
Penitenciario. El Juez de Vigilancia sostiene que no existe razón para prohibir a
los funcionarios de Instituciones Penitenciarias la colocación - en murales como
hacen autorizadamente los internos – de recortes de prensa, posters, etc. Y el
Centro Penitenciario informa que cualquier interno o funcionario puede recortar o
reproducir las noticias que publican los periódicos o revistas que tienen entrada en
el Centro. No se comparten tales razonamientos en esta instancia. La cuestión
planteada va más allá de la colocación de un cartel cualquiera en las paredes de
una celda o de una dependencia de los funcionarios. No es preciso argumentar en
este sentido. Y la diferencia del cartel de que se trata con cualquier otro impone
una aproximación distinta a la cuestión. El Reglamento penitenciario impone a los
internos el deber de colaborar activamente en la consecución de una convivencia
ordenada dentro del Centro. Los funcionarios no pueden ser ajenos a ese deber;
su cumplimiento ha de serles exigido incluso en mayor medida. La colocación del
cartel con la frase transcrita no contribuye al logro de esa finalidad, pues en vez de
disminuir la tensión que la convivencia en el Centro lleva consigo, puede
aumentarla. La convivencia ordenada es necesaria para que las Instituciones
Penitenciarias logren el fin primordial para el que son creadas: la reeducación y la
reinserción social de los sentenciados. De ahí que las acciones de los funcionarios
- y ello se dice desde un absoluto respeto a los sentimientos y emociones de cada
uno deban adecuarse escrupulosamente al logro de ese fin, lo que supone que
deben tender al logro de una vida interna ordenada, evitando aumentar la tensión
lógica. La colocación del cartel no contribuye a esa convivencia ni, por lo tanto, a
la consecución del fin establecido por la Ley Orgánica General Penitenciaria. Por
lo tanto, el recurso debe estimarse en el caso de que hubiera sido colocado y aún
permaneciera