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Instrumentos de Pago Internacionales

Pasamos a describir los principales medios de pago internacionales reflejados en el cuadro anterior.
No repetiremos la características comunes con los medios de pago nacionales que ya describimos en
la primera lectura, pero sí incidiremos y comentaremos las características que los diferencian.

3.1 El cheque

Ya explicamos sus primeras características. Es uno de los medios de pago más utilizados de forma
doméstica. Así, en países como EEUU y Francia son medios de pago tan frecuentes que se utilizan
para hacer pagos en restaurantes o supermercados. En otros países del norte de Europa como
Alemania, Holanda o los países escandinavos no son medios de pago habituales ni aceptados. En
España su utilización es más frecuente, pero en transacciones empresariales.

La utilización del cheque disminuye progresivamente. Los avances tecnológicos hacen que se vean
sustituidos por pagos electrónicos.

En transacciones internacionales se pueden utilizar cheques si las partes así lo acuerdan. No


obstante, el cliente pagador lo puede emitir en su moneda o, si así lo acuerda, en alguna divisa,
normalmente la del país del proveedor. Es decir, un exportador de EEUU puede acordar el pago con
su cliente en Alemania en euros o en dólares americanos.

A la hora de utilizar un cheque en divisas, hay que tener en cuenta que:

 El valor de una divisa con respecto a la otra varía de un día para otro dependiendo de
muchos factores.
 Las convenciones internacionales establecen dos días fecha valor para que las transacciones
se compensen. Es por ello que el float aumenta dos días como mínimo sobre un pago
nacional, a lo que hay que añadir el tiempo adicional que tarda el cheque en “cruzar
fronteras” por correo.
 Los bancos suelen cobrar comisiones adicionales por emitir talones a otros países y por
emitirlos en divisas.

Hasta finales de los años 90 existían la figura del Traveler´s cheque . Eran un tipo especial de cheques
bancarios emitidos en distintas divisas por entidades financieras y bancos sólidos que iban
preimpresos en unas cantidades fijas. Antes de salir de viaje, se acudía a la entidad financiera a
comprar cheques por el importe deseado. Estos cheques, una vez en el lugar de destino, eran
fácilmente canjeables en cualquier banco por efectivo. El hecho de ser emitidos por entidades de
solvencia internacional los convertía en instrumentos seguros. Además, su numeración específica y
control los hacían fácilmente anulables en caso de robo o extravío. Eran muy conocidos los Traveler
´s de American Express o los eurocheques. Al comprar los cheques en la entidad financiera emisora
se pagaban unas comisiones de emisión.

Los traveler’s están en desuso debido a la aparición de los medios electrónicos de pago,
especialmente las tarjetas de crédito y débito. Los eurocheques desaparecieron en 2002 con la
introducción del euro.

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