(Nota: El siguiente artículo es la transcripción de un discurso ofreci-
do por Richard Phillis Feynman, ganador de un Premio Nobel, el 26 de noviembre de 1959, durante la reunión anual de la "Sociedad Físi- ca Americana" en el "Instituto de Tecnología de California" y poste- riormente incluido en el libro "Miniaturization"). De hecho, es consi- derado, junto con el discurso de Norio Taniguchi titulado "On The Basic Concept of Nano-Technology" ("Sobre el Concepto Básico de Nano-Tecnología") realizado en 1974 y el libro "Engines of Creation" ("Máquinas de la Creación"), por Kim Eric Drexler y pu- blicado en 1986, como uno de los tres pilares de la "Nanotecnología". El nombre original del artículo es "There´s Plenty of Room at The Bottom" y también puede ser descargado por Internet).
(Traducción y adaptación: Pablo Martín Agüero)
YO imagino que los físicos experimentales deben mirar a menudo
con envidia a hombres como Kamerlingh Onnes, quien descubrió un campo como la baja temperatura, la cual parece ser insondable y en el cual uno puede ir abajo y abajo. Un hombre tal es entonces un lider y tiene algún monopolio temporal en una aventura científi- ca. Percy Bridgman, al diseñar una manera de obtener presiones mayores, abrió otro campo nuevo y fue capaz de moverse en él y guiarnos alrededor. El desarrollo de un vacío aún mayor fue un con- tínuo desarrollo de la misma especie. Quisiera describir un campo, en el cual poco ha sido hecho, pe- ro en el cual una enorme cantidad puede ser hecha en principio. Es- te campo no es bastante igual como los otros en que no nos dirá mucho de físicas fundamentales (en el sentido de, "¿Cuáles son las partículas extrañas?") sino que es más como físicas de estado sóli- do en el sentido que podría decirnos mucho de gran interés acerca de los extraños fenómenos que ocurren en situaciones complejas. Aún más, un punto que es más importante es que tendría un núme- ro enorme de aplicaciones técnicas. De lo que quiero hablar es el problema de manipular y contro- lar cosas en una escala pequeña. Tan pronto como menciono ésto, la gente me habla acerca de miniaturización, y cuánto ha progresado hoy. Me hablan acerca de motores eléctricos que son del tamaño de la uña de tu dedo meñi- que. Y hay un dispositivo en el mercado, me dicen, por el cual us- ted puede escribir el Padrenuestro sobre la cabeza de un alfiler. Pero eso no es nada: ese es el paso más primitivo y vacilante en la dirección que intento discutir. Es un mundo sorprendentemente pequeño que está debajo. En el año 2000, cuando miren hacia a- trás a este año, se preguntarán por qué no fue hasta el año 1960 que alguien comenzó seriamente a moverse en esta dirección. ¿Por qué no podemos escribir los 24 volúmenes enteros de la Enciclopedia Británica sobre la cabeza de un alfiler? Veamos lo que estaría involucrado. La cabeza de un alfiler es de una décima sexta parte de una pulgada transversalmente. Si usted lo amplía por 25.000 diámetros, el área de la cabeza del alfiler es entonces igual al área de todas las páginas de la Enci- clopedia Británica. De allí en más, todo lo que se necesita es re- ducir en tamaño toda la escritura en la Enciclopedia por 25.000 veces. ¿Es eso posible? El poder de resolución del ojo es aproxi- madamente el 1/120 de una pulgada-es casi el diámetro de uno de los pequeños puntos sobre las finas reproducciones de medio tono en la Enciclopedia. Así, cuando usted lo demagnifica por 25.000 veces, es aún de 80 angstroms en diámetro-32 átomos transversalmente, en un metal común. En otras palabras, uno de estos puntos aún contendría en su área 1.000 átomos. Entonces, cada punto puede fácilmente ser ajustado en tamaño según lo re- querido por la fotograbación, y no hay ninguna duda que hay sufi- ciente espacio sobre la cabeza de un alfiler para colocar toda la Enciclopedia Británica. De allí en más, puede ser leído si es así escrito. Imaginemos que está escrito en letras elevadas de metal: ésto es, donde se encuentra la parte negra en la Enciclopedia, hemos elevado le- tras de metal que son de hecho el 1/25.000 de su tamaño común. ¿Cómo lo leemos? Si tuviéramos algo escrito en tal manera, podríamos leerlo uti- lizando técnicas en uso común hoy. (Indudablemente encontra- rán una mejor manera cuando de hecho lo tengan escrito, pero para exponer mi punto de vista conservadoramente sólo se preci- sarían técnicas que conocemos hoy.) Presionaríamos el metal dentro de un material plástico y haríamos un molde de él, luego, quitaríamos el plástico muy cuidadosamente, evaporaríamos síli- ce dentro del plástico para conseguir una película muy delgada, luego ensombrecerlo evaporando oro en un ángulo contra el síli- ce para que todas las pequeñas letras aparezcan claramente, di- solveríamos el plástico de la película de sílice, y luego lo obser- varíamos ¡con un microscopio de electrón! No hay duda que si el objeto fuese reducido por 25.000 ve- ces en la forma de letras elevadas sobre el alfiler, sería más fá- cil para nosotros leerlo hoy. De allí en más, no hay duda que nos resultaría fácil hacer copias del master; sólo necesitaríamos presionar la misma placa de metal de nuevo dentro de plástico y tendríamos otra copia.
¿CÓMO ESCRIBIMOS PEQUEÑO?
La próxima pregunta es: ¿Cómo lo escribimos? No tenemos
una técnica standard para hacer ésto ahora. Pero permítanme discutir que no es dificil como al principio parece ser. Podemos revertir los lentes del microscopio de electrón con el fin de de- magnificar así como también ampliar. Una fuente de iones, en- viados a través de los lentes del microscopio en reversa, podrían estar enfocados a un punto muy pequeño. Podríamos escribir con ese punto como escribimos en un osciloscopio de rayo cató- dico de TV, yendo transversalmente en líneas, y teniendo un a- juste que determine la cantidad de material que va a ser deposi- tada mientras escaneamos en líneas. Este método podría ser muy lento debido a limitaciones de carga de espacio. Habrá métodos más rápidos. Podríamos pri- mero realizar, quizás mediante algún proceso fotográfico, una pantalla que tenga orificios en ella en la forma de las letras. Luego, formamos un arco detrás de los orificios y delineamos iones metálicos a través de los orificios; luego podríamos de nuevo emplear nuestro sistema de lentes y generar una imagen pequeña en la forma de iones, que depositaría el metal sobre el alfiler. Una manera más simple podría ser ésta (aunque no estoy seguro que funcionaría): Tomamos luz y, mediante un microsco- pio óptico corriendo hacia atrás, nos enfocamos dentro de una pantalla fotoeléctrica muy pequeña. Luego, los electrones salen de la pantalla donde la luz está brillando. Estos electrones están enfocados hacia abajo en tamaño por las lentes del microscopio de electrón para chocar directamente sobre la superficie del me- tal. ¿Grabará un haz semejante el metal si está suficientemente fundido? No sé. Si no funciona para la superficie del metal, debe ser posible encontrar alguna superficie con la cual cubrir el alfi- ler original, de ese modo, donde los electrones bombardean, un cambio es realizado, el cual podríamos reconocer más tarde. No hay un problema de intensidad en estos dispositivos-ni de lo que usted está acostumbrado en la ampliación, dónde us- ted tiene que tomar unos pocos electrones y esparcirlos sobre u- na pantalla más grande y más grande; es sólo lo opuesto. La luz que conseguimos de una página está concentrada dentro de un área muy pequeño, por lo tanto, es muy intensa. Los pocos elec- trones que provienen de la pantalla fotoeléctrica son demagnifi- cados hacia abajo a un área muy diminuta, por lo tanto, de nue- vo, son muy intensas. ¡No sé por qué ésto no ha sido hecho aún! Esa es la Enciclopedia Británica sobre la cabeza de un alfi- ler, pero consideremos a todos los libros en el mundo. La Biblio- teca del Congreso tiene aproximadamente 9 millones de volúme- nes; hay también 5 millones de volúmenes en la Biblioteca Nacio- nal en Francia. Indudablemente, hay duplicados, entonces, diga- mos que hay unos 24 millones de volúmenes de interés en el mun- do. ¿Que sucedería si imprimimos todo ésto en la escala que he- mos estado discutiendo? ¿Cuánto espacio precisaría? Precisaría, por supuesto, el área de casi un millón de cabezas de alfileres, porque, en vez de existir sólo los 24 volúmenes de la Enciclope- dia, hay 24 millones de volúmenes. Los millones de cabezas de alfiler pueden ser colocados en un cuadrado de mil alfileres en un lado, o un área de casi 3 yardas cuadradas. Es decir, la réplica de sílice con el refuerzo de plástico delgado como un papel, con el cual hemos hecho las copias, con toda esta información, está en un área de aproximadamente el tamaño de 35 páginas de la Enci- clopedia. Ésto es sólo un cuarto de tantas páginas como una co- pia del Saturday Evening Post. Toda la información que toda la humanidad ha registrado alguna vez en libros puede ser traslada- da en un panfleto en su mano-y no escrita en código, sino una sim- ple reproduccción de las imágenes originales, grabados, y todo lo demás en una escala pequeña sin pérdida de resolución. ¿Qué diría nuestra bibliotecaria en la Universidad Tecnológi- ca de California, mientras corre de un edificio a otro, si le digo que, dentro de diez años, toda la información que ella lucha por seguir con atención-120.000 volúmenes, apilados desde el suelo hasta el techo, cajones llenos de tarjetas, habitaciones de almace- namiento llenos de los libros más viejos-¡puede ser guardada en sólo una tarjeta de biblioteca! Cuando la Universidad de Brasil, por ejemplo, encuentre que su biblioteca está quemada, podemos enviarles una copia de cada libro grabando una copia de la placa maestra en pocas horas y enviarla por correo en un sobre ni tan grande ni tan pequeño como cualquier otra carta común de co- rreo aéreo. Ahora, el nombre de esta charla es "Hay Bastante Espacio en el Fondo"-no sólo "Hay Espacio en el Fondo." Lo que he de- mostrado es que hay espacio-que usted puede reducir el tamaño de las cosas en una manera práctica. Ahora quiero demostrar que hay bastante espacio. Ahora discutiré cómo vamos a hacer- lo, pero sólo lo que es posible en principio-en otras palabras, lo que es posible de acuerdo con las leyes de la Física. No estoy in- ventando la antigravedad, lo cual es posible algún día si las leyes no son lo que pensamos. Le estoy diciendo lo que podría ser he- cho si las leyes son lo que pensamos; no estamos haciéndolo sim- plemente porque no hemos llegando allí todavía.
INFORMACIÓN EN UNA ESCALA PEQUEÑA
Supongamos que, en vez de intentar reproducir las imágenes
y toda la información directamente en su forma presente, escribi- mos sólo el contenido de la información en un código de puntos y rayas, o algo similar, para representar las varias letras. Cada letra representa seis o siete "bits" de información; ésto es, usted necesi- ta sólo casi seis o siete puntos o rayas por cada letra. Ahora, en vez de escribir todo, como lo hice antes, sobre la superficie de la cabeza de un alfiler, voy a utilizar también el interior del material. Representemos un punto por un pequeño punto de un metal, la próxima raya por un punto adyacente de otro metal, y así su- cesivamente. Supongamos, para ser conservativos, que un bit de información vaa requerir un pequeño cubo de átomos de 5 x 5 x 5-es decir, 125 átomos. Quizás necesitamos cien y algunos áto- mos sueltos para asegurarnos que la información no esté perdi- da mediante la difusión, o a través de algún otro proceso. He estimado cuántas letras hay en la Enciclopedia, y he asu- mido que cada uno de mis 24 millones de libros es tan grande co- mo un volumen de la Enciclopedia, y he calculado, entonces, cuántos bits de información existen (1015). Para cada bit, asigno 100 átomos. Y resulta que toda la información que el hombre ha cuidadosamente acumulado en todos los libros en el mundo pue- de ser escrita en esta forma en un cubo del material una bicenté- sima parte de una pulgada de ancho-lo cual es la pieza de polvo más mínima que puede ser descubierta por el ojo humano. Enton- ces, ¡hay bastante espacio en el fondo! ¡No me hable acerca del microfilm! Este hecho-que enormes cantidades de información puede ser llevada en un espacio excedentemente pequeño-es, por su- puesto, bien conocida por los biólogos, y resuelve el misterio que existía antes que entendiéramos todo ésto claramente, de cómo podría ser que, en la célula más pequeña, toda la información pa- ra la organización de una criatura compleja tales como nosotros mismos pueda ser almacenada. Toda esta información-si tene- mos ojos marrones, o si pensamos en absoluto, or que en el em- brión la mandíbula debería primero desarrollarse con un peque- ño orificio en el costado para que más tarde un nervio pueda crecer a través de él-toda esta información es contenida en una fracción muy diminuta de la célula en la forma de moléculas de ADN de larga cadena en las cuales aproximadamente 50 áto- mos son empleados para un bit de información acerca de la cé- lula.
MEJORES MICROSCOPIOS DE ELECTRÓN
Si he escrito en un código, con 5 x 5 x 5 átomos a un bit, la
pregunta es: ¿Cómo puedo leerlo hoy? El microscopio de elec- trón no es lo suficientemente bueno; con el mayor cuidado y es- fuerzo, sólo puede resolver casi 10 angstroms. Quisiera intentar inculcarle, mientras estoy hablando de todas estas cosas en una escala pequeña, la importancia de mejorar el microscopio de e- lectrón por cien veces. No es imposible; no está en contra de las leyes de difracción del electrón. La duración de la onda del elec- trón en un microscopio semejante es sólo de 1/20 de un angstrom. Entonces, ¿debería ser posible ver los átomos individuales? ¿Qué bueno sería ver átomos individuales distintamente? Tenemos amigos en otros campos-en Biología, por ejemplo. Nosotros, los físicos, a menudo los observamos y decimos, "¿Sa- ben la razón por la que ustedes, compañeros, están haciendo tan poco progreso?" (De hecho, no conozco ningún campo donde es- tén haciendo un progreso más rápido que en Biología hoy.) "Uste- des deberían emplear más Matemática, como nosotros." Ellos po- drían respondernos-pero son amables, entonces, yo responderé por ellos: "Lo que ustedes deberían hacer para que nosotros ha- gamos un progreso más rápido es fabricar el microscopio de elec- trón 100 veces mejor." ¿Cuáles son los problemas más centrales y fundamentales de la Biología hoy? Son preguntas como: ¿Cuál es la secuencia de bases en el ADN? ¿Qué sucede cuando usted tiene una muta- ción? ¿Cuál es el orden de base en el ADN relacionado con el or- den de aminoácidos en la proteína? ¿Cuál es la estructura del ARN; es de una sola cadena o de doble cadena, y cómo está re- lacionada en su orden de bases al ADN? ¿Cuál es la organiza- ción de los microsomas?¿Cómo son sintetizadas las proteínas? ¿ Dónde va el ARN? ¿Cómo se asienta? ¿Dónde se asientan las proteínas? ¿Dónde se introducen los aminácidos? En fotosíntesis, ¿dónde está la clorofila; cómo está dispuesta; dónde están los ca- rotenoides involucrados en ésto? ¿Cuál es el sistema de la con- versión de luz dentro de la energía química? Es muy fácil de responder muchas de estas preguntas bioló- gicas fundamentales; ¡usted sólo mire al objeto! Usted verá el orden de bases en la cadena; usted verá la estructura del micro- soma. Desafortunadamente, el presente microscopio ve a una escala que es un poco demasiado cruda. Hagan al microscopio cien veces más potente, y muchos problemas de la Biología se harían mucho más faciles. Exagero, por supuesto, pero los biólo- gos seguramente estarían muy agradecidos a usted-y ellos pre- ferirían eso a la crítica de que ellos deberían emplear más Ma- temática. La teoría de los procesos químicos hoy está basada en la Física Teórica. En este sentido, la Física sustenta la fundamen- tación de la Química. Pero la Química también tiene análisis. Si usted tiene una sustancia extraña y quiere saber qué es, us- ted va a través de un proceso largo y complicado de análisis químico. Usted puede analizar cualquier cosa hoy, por lo tanto, estoy un poco atrasado con mi idea. Pero si los físicos lo desea- ran, podrían también ahondar en la Química en el problema del análisis químico. Sería muy fácil para realizar un análisis de cual- quier sustancia química complicada; todo lo que uno tendría que hacer es observarla y ver dónde están los átomos. El único pro- blema que el microscopio de electrón en cien veces demasiado pobre. (Más tarde, me gustaría formular la pregunta: ¿Pueden los físicos hacer algo acerca del tercer problema de la Química- es decir, la síntesis? ¿Hay una manera física de sintetizar cual- quier sustancia química? La razón por la que el microscopio de electrón es tan pobre es que el valor f de los lentes es sólo una parte de 1.000; usted no tiene una apertura numérica lo suficientemente grande. Y sé que hay teoremas que prueban que es imposible, con lentes de campo estacionario axialmente simétricas, para producir un va- lor f mayor que éste y aquél; y, por consiguiente, la potencia de resolución en el tiempo presente está en su punto máximo teóri- co. Pero en cada teorema hay suposiciones. ¿Por qué el campo debe ser axialmente simétrico? ¿Por qué el campo debe ser es- tacionario? ¿No podemos contar con haces pulsados de electrón en campos que se muevan junto con los electrones? ¿Debe el campo ser simétrico? Expreso ésto como un desafío: ¿No hay una manera de hacer al microscopio de electrón más potente?
EL MARAVILLOSO SISTEMA BIOLÓGICO
El ejemplo biológico de escribir información en una escala pequeña me ha inspirado a pensar en algo que debería ser po- sible. La biología no es simplemente escribir información: es hacer algo acerca de eso. Un sistema biológico puede ser ex- cedentemente pequeño. Muchas de las células son muy dimi- nutas, pero son muy activas; manufacturan varias sustancias; caminan en derredor, se contonean; y hacen todas clases de cosas maravillosas-todas en una escala muy pequeña. Tam- bién almacenan información. Considere la posibilidad que tam- bién podemos hacer una cosa muy pequeña, que hace lo que queremos-¡que podamos manufacturar un objeto que manio- bra a ese nivel! Puede incluso haber un punto económico a este negocio de hacer cosas muy pequeñas. Déjeme recordarle de algunos de los problemas de máquinas de computación. En computa- doras, tenemos que almacenar una enorme cantidad de infor- mación. La clase de escritura que estuve mencionando antes, en la cual contaba con todo como una distribución del metal, es permanente. Mucho más interesante para una computado- ra es una manera de escribir, borrar, y escribir algo más. (U- sualmente, ésto se realiza porque no queremos desperdiciar el material sobre el cual hemos recién escrito. Aún si podríamos escribirlo en un espacio muy pequeño, no habría ninguna dife- rencia; sólo podría ser descartado después de que fue leído. No cuesta demasiado para el material.)
MINIATURIZANDO LA COMPUTADORA
Yo no se cómo hacer ésto en una escala pequeña en una
manera práctica, pero sí se que las máquinas de computación son muy grandes; llenan habitaciones. Por qué no las hace- mos muy pequeñas, hacerlas de pequeños alambre, pequeños elementos-y por pequeños, quiero decir pequeños. Por ejem- plo, los alambres deberían ser de 10 o 100 átomos en diáme- tro, y los circuitos deberían ser de unos pocos miles de angs- troms transversalmente. Todos quienes han analizado la teo- ría lógica de las computadoras han llegado al la conclusión que las posibilidades de las computadoras son muy interesan- tes-si ellas pudieran ser hechas más complicadas mediante varios órdenes de magnitud. Si tuviesen millones de tiempos comos tantos elementos, podrían realizar juicios. Tendrían tiempo para calcular cuál es la mejor manera de realizar el cálculo que tienen que realizar. Podrían seleccionar el méto- do de análisis que, desde su experiencia, es mejor que el úni- co que le brindaríamos. Y, en muchas otras maneras, ten- drían nuevas características cualitativas. Si miro a su cara, inmediatamente reconozco que la he visto antes. (De hecho, mis amigos dirán que he elegido un ejemplo desafortunado aquí para el tema de esta ilustración. Al menos, reconocería que eso es un hombre y no una man- zana.) Sin embargo, no hay máquina que, con esa veloci- dad, pueda tomar una imagen de una cara y decir incluso que es un hombre; y mucho menos que es el mismo hombre que usted le mostró antes-al menos que sea exactamente la mis- ma imagen. Si la cara es cambiada; si estoy más lejos de la cara; si la luz cambia-la reconozco de todos modos. Ahora, esta pequeña computadora que llevo en mi cabeza es fácil- mente capaz de hacer eso. Las computadoras que construi- mos no son capaces de hacer eso. El número de elementos en esta caja de hueso mía son enormemente mayores que el número de elementos en nuestras "maravillosas" computado- ras. Pero nuestras computadoras mecánicas son demasiado grandes; los elementos en esta caja son microscópicos. Yo quiero hacer algunas que sean sub-microscópicas. Si queremos hacer una computadora que tenga todas ma- ravillosas habilidades extra cualitativas, tendríamos que ha- cerla, quizás, del tamaño del Pentágono. Ésto tiene varias desventajas. Primero, requiere demasiado material; es proba- ble que no exista suficiente germanio en el mundo para todos los transistores que tendrían que ser colocados dentro de es- te objeto enorme. Existe también el problema de la genera- ción de calor y la consumición de potencia; AVT sería nece- sario para hacer funcionar la computadora. Pero una dificul- tad aún más práctica es que la computadora estaría limitada a una cierta velocidad. Debido a su gran tamaño, hay un tiem- po finito requerido para obtener la información de un lugar a otro. La información no puede ir más rápida que la velocidad de la luz-por lo tanto, últimamente, cuando nuestras computa- doras se vuelvan más rápidas y más rápidas y más y más ela- boradas, tendremos que hacerlas más pequeñas y más peque- ñas. Pero hay bastante espacio para hacerlas más pequeñas. No hay nada que yo pueda ver en las leyes físicas que diga que los elementos de las computadoras no pueden ser enor- memente más pequeñas de lo que son ahora. De hecho, pue- de haber ciertas ventajas.
MINIATURIZACIÓN POR EVAPORACIÓN
¿Cómo podemos hacer un dispositivo tal? ¿Qué clase de
procesos de manufacturación utilizaríamos? Una posibilidad que podríamos considerar, desde que hemos hablado acerca de escribir colocando átomos por debajo en un cierto arreglo, sería evaporar el material, luego evaporar el aislador cercano a él. Luego, para la próxima capa, evaporar otra posición de un alambre, otro aislador, y así sucesivamente. Entonces, us- ted simplemente realiza la evaporación hasta que tiene un blo- que de material que posee los elementos-bobinas y condensa- dores, transistores y así sucesivamente-de dimensiones exce- dentemente finas. Pero quisiera discutir, sólo por diversión, que hay otras po- sibilidades. ¿Por qué no podemos manufacturar estas peque- ñas computadoras de algún modo como manufacturamos las grandes? ¿Por qué no taladramos orificios, cortamos cosas, soldamos cosas, estampamos cosas, moldeamos formas dife- rentes todas en un nivel infinito? ¿Cuáles son las limitaciones acerca de cómo una cosa tan pequeña tiene que ser antes que usted no la moldee más? Cuántas veces cuando usted es- tá trabajando en algo frustrantemente pequeño, como el reloj pulsera de su esposa, se ha dicho a usted mismo, "¡Si sólo pu- diera entrenar a una hormiga para hacer ésto!" Lo que me gustaría sugerir es la posibilidad de entrenar una hormiga pa- ra entrenar una garrapata para hacer ésto. ¿Cuáles son las posibilidades de máquinas pequeñas pero movibles? Pueden o no pueden ser útiles, pero seguramente sería divertido ha- cerlas. Considere cualquier máquina-por ejemplo, un automóvil-y pregunte acerca de los problemas de hacer una máquina infi- nita como esa. Supóngase, en el diseño particular del automó- vil, necesitamos una precisión segura de las partes; necesita- mos una exactitud, supongamos, de 4/10.000 de una pulgada. Si las cosas son más inexactas que aquellas en la forma del cilindro y así sucesivamente, no va a funcionar muy bien. Si fabrico el objeto demasiado pequeño, tengo que preocuparme acerca del tamaño de los átomos; no puedo hacer un círculo con "balones", como quien dice, si el círculo es demasiado pe- queño. Entonces, si cometo el error, correspondiente a 4/ 10.000 de una pulgada, corresponde a un error de 10 átomos, resulta ser que puedo reducir las dimensiones de un automóvil 4.000 veces, aproximadamente-de ese modo, es de un milíme- tro transversalmente. Obviamente, si usted rediseña el auto pa- ra que funcione con una mayor tolerancia, lo cual no es del to- do imposible, luego usted podría hacer un dispositivo mucho más pequeño. Es interesante considerar cuáles son los problemas en má- quinas tan pequeñas. Primero, con partes sobrecargadas al mismo grado, las fuerzas van mientras va reduciendo el área, por lo tanto, las cosas como peso e inercia son relativamente de ninguna importancia. La fuerza del material, en otras pala- bras, es mucho mayor en proporción. Las tensiones y la ex- pansión del volante desde la fuerza centrífuga, por ejemplo, serían de la misma proporción sólo si la velocidad rotativa es incrementada en la misma proporción con la cual reducimos el tamaño. Por otro lado, los metales que empleamos tienen una estructura de grano, y ésto sería muy frustrante en una escala pequeña porque el material no es homogéneo, y en- tonces tendríamos que hacer nuestras máquinas de tales materiales. Hay problemas asociados con la parte eléctrica del sis- tema-con los alambres de cobre y las partes magnéticas. Las propiedades magnéticas en una escala muy pequeña no son las mismas que en una escala grande; allí está involucra- do el problema de "dominio." Un gran imán hecho de millo- nes de dominios sólo puede ser hecho en una escala peque- ña con un dominio. El equipamiento eléctrico no será reduci- do progresivamente; tiene que ser rediseñado. Pero no pue- do ver ninguna razón por qué no puede ser rediseñado para trabajar de nuevo.
PROBLEMAS DE LUBRICACIÓN
La lubricación involucra algunos puntos interesantes. La
viscosidad efectiva del aceite sería mayor y mayor en propor- ción mientras efectuamos la reducción (y si incrementamos la velocidad tanto como podamos). Si no incrementamos tanto la velocidad, y cambiamos de aceite a kerosene o algún otro fluí- do, el problema no es tan malo. Pero, de hecho, ¡no tenemos que lubricar en absoluto! Tenemos un montón de fuerza extra. Dejemos que los soportes se sequen; ellos no se vuelven ca- lientes porque el calor se escapa de tal dispositivo muy, muy rápidamente. Esta rápida pérdida de calor evitaría que la gasolina explo- te, entonces, un motor de combustión interna es imposible. O- tras reacciones químicas, que liberan energía cuando están frí- as, pueden ser utilizadas. Probablemente un abastecimiento externo de potencia eléctrica sería más conveniente para má- quinas tan pequeñas. ¿Cuál sería la utilidad de tales máquinas? ¿Quién sabe? Por supuesto, un pequeño automóvil sólo sería útil para que las garrapatas manejan alrededor., y supongo que nuestros intere- ses cristianos no irán tan lejos. Sin embargo, no notemos la po- sibilidad de la manufactura de elementos pequeños para com- putadoras en fábricas completamente automáticas, conteniendo tornos y otras herramientas de maquinaria en un nivel muy pe- queño. El torno pequeño no tendría que ser exactamente como nuestro torno grande. Dejo para su imaginación la mejora del diseño para tomar una ventaja completa de las cosas en una escala pequeña, y en una manera tal que el aspecto completa- mente automático sea más fácil de manejar. Un amigo mío (Albert R. Hibbs) sugiere una posibilidad muy interesante para máquinas relativamente pequeñas. Él di- ce que, aunque es una idea salvaje, sería interesante en cirugía si usted pudiera digerir al cirujano. Usted coloca el cirujano me- cánico dentro de su vaso sanguíneo y éste va dentro de su co- razón y "mira" alrededor. (Por supuesto, la información tiene que ser suministrada.) Descubre que válvula es la dañada y toma un pequeño cuchillo y la rebana. Otras máquinas peque- ñas podrían ser incorporadas permanentemente en el cuerpo para asistir a algún órgano que funciona inadecuadamente. Ahora viene la pregunta interesante: ¿Cómo hacemos un mecanismo tan pequeño? Lo dejo para usted. Sin embargo, déjeme sugerir una posibilidad extraña. Usted sabe, en las plantas de energía atómica, ellos tienen materiales y máqui- nas que no pueden manejar directamente porque se han vuel- to radioactivos. Para destornillar tuercas y colocar tornillos y así sucesivamente, ellos tienen un set de manos amas y es- clavas, por lo tanto, mediante la operación de un set de palan- cas aquí, usted controla las "manos" allí, y puede girarlas de este modo y así usted puede manejar las cosas bastante agra- dablemente. Ahora, quiero construir demasiado el mismo dispositivo-un sistema amo-esclavo que opera eléctricamente. Pero quiero que los esclavos sean hechos especialmente y cuidadosamen- te por maquinistas modernos a gran escala, para que sean de un cuarto de la escala de las "manos" que usted comúnmente maniobra. Entonces, usted tiene un esquema por el cual pue- de hacer cosas a un cuarto de escala de cualquier manera-los pequeños servomotores con manos pequeñas juegan con pe- queñas tuercas y tornillos; taladran pequeños orificios; son cuatro veces más pequeños. ¡Aha! Entonces, manufacturo un torno de un cuarto de tamaño; manufacturo herramientas de un cuarto; y hago, a la escala de un cuarto, aún otro set de manos ¡de nuevo relativamente del tamaño de un cuarto! Ésto es el tamaño de un décimo sexto, desde mi punto de vista. Y después que termino de hacer ésto, conecto con a- lambres directamente desde mi sistema a gran escala, a tra- vés de transformadores quizás, a los servomotores del tama- ño de un décimo sexto. De este modo, puedo ahora manipu- lar las manos del tamaño de un décimo sexto. Bien, usted tiene el principio de ahí en adelante. Es un problema bastante dificil, pero es una posibilidad. Usted po- dría decir que uno puede ir mucho más rápido en un paso que de a uno por cuatro. Por supuesto, todo ésto tiene que ser di- señado muy cuidadosamente y no es necesario simplemente para hacerlo como manos. Si usted pensaba es eso muy cui- dadosamente, usted podría probablemente llegar a un sistema mucho mejor para hacer tales cosas. Si usted trabaja a través de un pantógrafo, aún hoy, usted puede obtener mucho más que un factor de cuatro aún en un paso. Pero usted no puede trabajar directamente a través de un pantógrafo que hace un pantógrafo más pequeño que lue- go hace un pantógrafo más pequeño-debido al aflojamiento de los orificios y las irregularidades de construcción. La parte final del pantógrafo se mueve rápidamente con una irregulari- dad relativamente mayor que la irregularidad con la cual us- ted mueve sus manos. Al reducir esta escala, encontraría la parte final del pantógrafo sacudiéndose tan mal que no esta- ría haciendo nada sensible en absoluto. A cada etapa, es necesario mejorar la precisión del apara- to. Si, por ejemplo, se ha hecho un pequeño torno con un pan- tógrafo, encontramos a su tornillo de plomo irregular-más irre- gular que la escala mayor-podríamos plegar el tornillo princi- pal contra tuercas rompibles que usted puede revertir en la manera usual de un lado a otro hasta que este tornillo de plo- mo original, a nuestra escala. Podemos hacer planchuelas frotando superficies no pla- nas triplicándolas juntas-en tres pares-y las planchuelas luego se vuelven más planas que el objeto con el cual usted ha em- pezado. De este modo, no es imposible mejorar la precisión en una escala pequeña mediante las operaciones correctas. Entonces, cuando construímos este material, es necesario a ca- da paso mejorar la exactitud del equipamiento trabajando por un rato allí debajo, haciendo tornillos de plomo precisos, bloques de Johansen, y todos los materiales que utilizamos en el traba- jo exacto de la maquinaria en un nivel mayor. Tenemos que detenernos en cada nivel y manufacturar todo el material para ir al próximo nivel-un programa muy largo y muy dificil. Quizás usted puede encontrar una manera mejor que esa para reducir a una escala pequeña más rápidamente. Aún, después de todo ésto, usted tiene sólo un pequeño tor- no bebé cuatro mil veces más pequeño que lo normal. Pero es- tábamos pensando en hacer una computadora enorme, la cual vamos a construir taladrando orificios en este torno para hacer pequeños depuradores para la computadora. ¿Cuántos depura- dores puede usted manufacturar en este único torno?
CIEN MANOS DIMINUTAS
Cuando haga mi primer set de "manos" esclavas en una es-
cala de un cuarto, voy a hacer diez sets. Hago diez sets de "ma- nos," y las conecto con alambre a mis niveles originales, enton- ces, cada una de ellas hace exactamente lo mismo al mismo tiempo en paralelo. Ahora, cuando estoy haciendo mis nuevos dispositivos de un cuarto de nuevo tan pequeños, dejo que cada uno manufacture diez copias, entonces, tendría cien "manos" en el tamaño de 1/16avo. ¿Dónde voy a colocar los millones de tornos que voy a te- ner? Porque, no hay nada que hacer con eso; el volumen es mucho menor que aquel del aún único torno a escala completa. Por ejemplo, si hiciera un billón de tornos pequeños, cada uno 1/ 4.000 de la escala de un torno regular, habría bastante materia- les y espacio disponibles porque en los pequeños billones hay menos que el 2 por ciento de los materiales en un gran torno. No cuesta nada para los materiales, usted ve. Entonces, yo quiero construir un billón de pequeñas fábricas, modelos de ca- da uno, los cuales están manufacturándose simultáneamente, taladrando orificios, estampando partes, y así sucesivamente. Mientras reducimos en tamaño, hay un número de proble- mas interesantes que surgen. Todas las cosas no simplemente se reducen en escala en proporción. Existe el problema que los materiales se pegan juntos mediante las atracciones molecula- res (Van der Waals). Sería de este modo: Después que usted hizo una parte y destornilló la tuerca de un tornillo, no va a caer- se porque la gravedad no es apreciable; sería aún dificil quitarlo de la tuerca. Sería como aquellas viejas películas de un hombre con sus manos llenas de melaza, tratando de quitarse un vaso de agua. Habrá varios problemas de esta naturaleza por los cuales tendremos que estar listos para dedicarnos a ellos.
REARREGLANDO LOS ÁTOMOS
Pero no tengo miedo de considerar la pregunta final en cuan-
to a si, finalmente-en el gran futuro-podemos ordenar los átomos de la manera que queremos; todos los átomos, ¡por completo! Qué sucedería si pudiéramos ordenar los átomos uno por uno de la manera que queremos (dentro de la razón, por supuesto; usted no puede colocarlos de tal manera que sean químicamente ines- tables, por ejemplo). Hasta ahora, hemos estado contentos por excavar en el sue- lo para encontrar minerales. Los calentamos y hacemos cosas en una gran escala con ellos, y esperamos conseguir una sustan- cia pura sólo con tanta impureza, y así sucesivamente. Pero siempre debemos aceptar algún arreglo atómico que la naturale- za nos brinda. No tenemos nada, digamos, con un arreglo de "ta- blero", con los átomos de impureza exactamente dispuestos 1.000 angstroms aparte, o en algún otro patrón particular. ¿Qué podríamos hacer con estructuras con capas con sola- mente las capas apropiadas? ¿Cuáles serían las propiedades de los materiales si pudiéramos disponer de los átomos de la mane- ra que queremos? Serían muy interesantes para investigar teóri- camente. No puedo ver exactamente que sucedería, pero puedo apenas dudar que cuando tengamos algún control de la disposi- ción de cosas en una escala pequeña, conseguiremos una serie enormemente mayor de propiedades posibles que sustancias po- damos tener, y de cosas diferentes que podamos hacer. Considere, por ejemplo, una pieza de material en la cual ha- cemos pequeñas bobinas y condensadores (o sus análogos en estado sólido) 1.000 o 10.000 angstroms en un circuito, uno jus- to al lado del otro, sobre un gran área, con pequeñas antenas so- bresaliendo al otro extremo-una serie completa de circuitos. ¿Es posible, por ejemplo, emitir luz desde un set completo de antenas, como emitimos ondas de radio desde un set organizado de antenas para emitir los programas de radio a Europa? Lo mis- mo sería emitir la luz hacia afuera en una dirección definida con muy alta intensidad. (Quizás un haz semejante no es muy útil téc- nicamente o económicamente.) He pensado acerca de algunos de los problemas de construir circuitos eléctricos en una escala pequeña, y el problema de la resistencia es serio. Si usted construye un circuito correspondien- te en una escala pequeña, su frecuencia natural se incrementaría, ya que la longitud de la onda se reduce junto con la escala; pero la profundidad de la cobertura sólo decrece con la raíz cuadrada del porcentaje de la escala, y por lo tanto los problemas resistivos son de una dificultad que incrementa. Posiblemente, podamos vencer la resistencia mediante el empleo de superconductividad si la frecuencia no es demasiado alta, o mediante otros trucos. ÁTOMOS EN UN MUNDO PEQUEÑO
Cuando llegamos al mundo muy, muy pequeño-digamos, cir-
cuitos de siete átomos-tenemos muchas cosas nuevas que suce- derían y que representarían oportunidades completamente nue- vas para el diseño. Los átomos en una escala pequeña se com- portan como nada en una gran escala, pues satisfacen las leyes de la Mecánica Cuántica. Por lo tanto, mientras descendemos y perdemos el tiempo con los átomos allí debajo, estamos trabajan- do con leyes diferentes, y podemos esperar a hacer cosas dife- rentes. Podemos manufacturar en maneras diferentes. Podemos utilizar, no sólo circuitos, sino algún sistema involucrando los nive- les de energía cuantificada o las interacciones de rotaciones cuan- tificadas, etc. Otra cosa que notaremos es que, si descendemos lo suficiente- mente lejos, todos nuestros dispositivos pueden se producidos en masa, de tal modo que son copias absolutamente perfectas la una de la otra. No podemos construir dos máquinas grandes, por lo tan- to, las dimensiones son exactamente las mismas. Pero si su máqui- na es sólo de 100 átomos de alto, usted sólo tiene que tenerla co- rrecta a la mitad de un por ciento para asegurarse que la otra má- quina es exactamente del mismo tamaño-es decir, ¡100 átomos de alto! Al mismo nivel, tenemos nuevas clases de fuerzas y nuevas clases de posibilidades, nuevas clases de efectos. Los problemas de manufactura y reproducción de materiales será bastante dife- rente. Estoy, como he dicho, inspirado por los fenómenos biológi- cos en los cuales las fuerzas químicas son empleadas en una mo- da repetitiva para producir todas clases de efectos extraños (uno de los cuales es el autor). Los principios de la Física, tan lejos como puedo ver, no hablan contra la posibilidad de maniobrar cosas átomo por átomo. No es un intento de violar ninguna ley; es algo, en prinicipio, que puede ser hecho; pero, en práctica, no ha sido hecho porque son dema- siado grandes. Finalmente, podemos hacer síntesis química. Un químico vie- ne a nosotros y dice, "Miren, quiero una molécula que tenga los átomos dispuestos de esta manera; háganme esa molécula." El químico hace una cosa misteriosa cuando quiere hacer una mo- lécula. Él ve que tiene ese anillo, entonces mezcla ésto y aquello, y él lo sacude, y pierde el tiempo. Y, al final de un proceso dificil, él usualmente sí tiene éxito en sintetizar lo que quiere. Para el tiempo que consigo que mis dispositivos trabajen, por lo tanto, po- damos hacerlo mediante la Física, él habrá descubierto cómo sin- tetizar absolutamente cualquier cosa, por lo tanto, ésto realmente sería inútil. Pero es interesante que sea, en principio, posible (creo) pa- ra un físico sintetizar cualquier sustancia química que el químico anote. Imparta las órdenes y el físico la sintetiza. ¿Cómo? Colo- que los átomos donde el químico dice, y entonces usted hace la sustancia. Los problemas de la química y la biología pueden ser mayormente evitados si nuestra habilidad de ver lo que estamos haciendo, y de hacer cosas en un nivel atómico, es finalmente desarrollada-un desarrollo que creo no puede ser evitado. Ahora, usted podría decir, "¿Quién debería hacer ésto y por qué deberían hacerlo?" Bien, señalé pocas de las aplicaciones económicas, pero sé que la razón que usted lo haría podría ser sólo por diversión. Pero ¡diviértase! Tengamos una competición entre laboratorios. Dejemos que un laboratorio haga un motor diminuto que lo envíe a otro laboratorio que lo envíe de nuevo con un objeto que encaje dentro del eje del primer motor.
COMPETICIÓN DE ESCUELA SECUNDARIA
Sólo por diversión, y para mantener a los niños interesados
en este campo, propondría que alguien que tenga algún contac- to con las escuelas secundarias piense en realizar alguna es- pecie de competición de escuela secundaria. Después de todo, no hemos aún comenzado en este campo, y aún los niños pue- den escribir más pequeño de lo que ha sido escrito antes. Ellos podrían tener una competición en escuelas secundarias. La escuela secundaria de Los Ángeles podría enviar una nota a la escuela secundaria de Venecia en la cual diga, "¿Cómo es ésto?" Ellos tendrán la nota de nuevo, y en el punto de la "i" dice, "No tan caliente." Quizás ésto no lo excite para realizarlo, y sólo la economía lo hará. Luego, quiero hacer algo; pero no puedo hacerlo en el momento presente, porque no he preparado el terreno. De aquí en más, ofrezco un premio de $ 1.000 para el primer mu- chacho que pueda tomar la información en la página de un li- bro y colocarla en un área 1/25.000 más pequeño en escala li- near de tal manera que pueda ser leída por un microscopio de electrón. Y quiero ofrecer otro premio-si puedo descubrir cómo fra- searlo de tal modo que no entre en un lío de discusiones acer- ca de definiciones-de otros $ 1.000 para el primer muchacho que haga un motor eléctrico operante-un motor eléctrico rota- tivo que pueda ser controlado desde el exterior y, sin contar los alambres de entrada, sea sólo de 1/64 de pulgada cúbica. No espero que tales premios tengan que esperar mucho tiempo para reclamantes.
(Nota al margen: Este artículo, "Hay Mucho Espacio en el
Fondo" ("There´s Plenty of Room at the Bottom"), fue origi- nalmente publicado en la edición de febrero de 1960 de la Revista de Ingeniería y Ciencia (Engineering and Science Magazine) de la Universidad Tecnológica de Ca- lifornia, y subsiguientemente publicado como un capítulo del libro de la "Corporación de Publicaciones de Reinhold" titula- do Miniaturización (Miniaturization), Horace D. Bilbert, Ed. El primer desafío de Feynman fue ganado por Tom Newman, un estudiante de R. Fabian W. Pease, oficial de ra- dar en la "Fuerza Aérea Real" (1955-1957); Licenciado en Artes; Master de Artes y Doctor en Filosofía de la Universi- dad de Cambridge (1960, 1962 y 1964). Desde 1978, ha sido profesor de Ingeniería Electrónica en la Universidad de Stan- ford. Tom Newman empleó un haz de electrón para escribir la primera página de "Una Historia de Dos Ciudades" ("A Tale of Two Cities"), por Charles Dickens, en una escala de reducción de 1/25.000. (Artículo Pequeña Historia Se Vuel- ve Grande, Tiny Tale Gets Grand, por J. Dietrich, Revista de Ingeniería y Ciencia, enero de 1986, página 24; Sistema de Patrón de Alta Resolución con un Lente de Objetivo de un Simple Diámetro Interior, High Resolution Pattern- ing System with a Single Bore Lens, por Tom H. Newman, K.E. Williams, y R. Fabian W. Pease, Periódico de Tecno- logía de Ciencia del Vacío, Journal of Vacuum Science Technology, Volumen B5, Número 1, páginas 88-91, enero/ febrero 1987). El segundo premio fue presentado por el Doc- tor Richard Phillips Feynman el 28 de noviembre de 1960 a William McLellan quien construyó un motor eléctrico de un 1/64avo de pulgada sobre un lado. Pesa 250 microgramos y genera una millonésima de un caballo de fuerza).
Fuentes Consultadas:
- Feynman, Richard P. There´s Plenty of Room at the
Bottom, Periódico de Sistemas Microelectromecánicos (Journal of Microelectromechanical Systems), marzo 1992, páginas 6-9. - "Pease Group - Stanford University." R. Fabian W. Peace William Ayer Professor of Electrical Engineering, Stan- ford University. Internet: chomsky.stanford.edu/~pease/ - Ramsden, Jeremy J. What Is Nanotechnology?, "Depar- tamento de Materiales Avanzados" ("Department of Ad- vanced Materials"), Cranfield University, Bedfordshire, Rei- no Unido, "Percepciones de Nanotecnología", "Nanotechno- logy Perceptions", 31 de marzo de 2005. - Regis, Ed. "Nano!", "Bantam Books", edición 1997. Richard Phillis Feynman (Far Rockaway, Queens, New York, U.S.A., 11 de mayo de 1918/15 de febrero de 1988). Foto to- mada de "ysfine.com".