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TEMA: CUANDO DIOS SE HIZO PEQUEÑO

TEXTO: LUCAS 2:9-16

INTRODUCCION

Hemos llegado al tan esperado día de navidad y en este tiempo al observar la


sociedad y el mundo parecería que todo está relacionado con lo grande, con lo
majestuoso: grandes árboles navideños, en la ciudad vemos grandes arreglos de
navidad, en los almacenes se lee “gran noche de compras”, las familias preparan
una “gran cena navideña”, en los centros comerciales hay “gran cantidad de
personas comprando”, etc.

Pero la Biblia nos muestra que la navidad tiene que ver directamente con lo
pequeño, con un pequeño bebé envuelto en pañales acostado en un humilde
pesebre, pero ese pequeño niño es Dios, es Dios convertido en niño que ha
venido para habitar entre nosotros, ese pequeño niño acostado en el pesebre
literalmente representa que el Reino se ha acercado y está entre nosotros.

Hay una preciosa frase que nos dice que “Dios es tan grande que puede hacerse
pequeño” esto nos recuerda lo que nos dice el salmista en el Salmo 113:4-6, ese
Dios grande y excelso que se humilla a mirar en los cielos y en la tierra es el niño
Jesús que nació en Belén.

Pero quizás algunos se preguntaran ¿Porque Dios se hizo pequeño? ¿Porque


Dios tenia que venir a este mundo como un niño? ¿porque la imagen de la
navidad es un pequeño bebé envuelto en pañales y acostado en un pesebre?
Veamos la respuesta en la palabra de Dios:

I) PRIMERA RAZÓN: PARA PODER SALVARNOS DIOS VINO A ESTE


MUNDO COMO UN NIÑO, Y PARA PARA PODER SER SALVOS NOSOTROS
TAMBIÉN COMO EL TENEMOS QUE VOLVERNOS COMO NIÑOS (MATEO
18:1-3)

¿Habías reflexionado alguna vez sobre esto? Esto es algo verdaderamente


maravilloso, el símbolo más grande de la navidad; el niño del pesebre, es
verdaderamente el símbolo para nuestra salvación.

Para poder salvarnos nuestro Dios majestuoso y glorioso se volvió como un niño,
y por eso la única forma de poder recibir la salvación es que nosotros nos
volvamos también como niños, que dejemos nuestra soberbia, que dejemos
nuestra humana sabiduría, que dejemos nuestra autosuficiencia y podamos tener
la humildad y la fe sencilla de un niño, así como lo dijo nuestro Señor
Jesús (Mateo 11:25-26)
II) SEGUNDA RAZÓN: SE HIZO PEQUEÑO PARA MOSTRARNOS QUE
AHORA PODEMOS ACERCARNOS A ÉL CONFIADAMENTE (LUCAS 2:9-12 Y
15)

Podemos notar las primeras palabra de los ángeles para los pastores de Belén:
No temáis, y luego los enviaron a ver al niño que había nacido, verdaderamente
los enviaron para que fueran a contemplar a Dios.

Esto es verdaderamente maravilloso, pues antes del nacimiento de nuestro Señor


Jesús no era posible acercarse a Dios, su majestad, su gloria y su poder producía
temor y espanto cómo lo podemos leer en su palabra:

La carta a los Hebreos nos dice que Moisés cuando se presentó delante de la
majestad de Dios estaba espantado y temblando (Hebreos 12:21)

El libro de Éxodo nos dice que el pueblo de Israel no le era permitido ni siquiera
acercarse al monte donde descendió la gloria de Jehová y el que lo hacia tenia
que morir (Éxodo 19:10-12)

 Es por eso que es maravilloso leer lo que significa el mensaje que los ángeles
le dieron a los pastores: No tengan temor, vayan a ver a Dios que ha
descendido, acérquense con confianza, vean a ese niño envuelto en pañales
que es Dios hecho hombre.

A partir de Belen ya no nos acercamos al Señor con miedo, sino con amor, con
confianza, Dios se ha hecho cercano para nosotros, y aunque él ya no está más
en un pesebre sino que está sentado nuevamente en su trono aun podemos
acercarnos con toda la confianza delante de él como aquellos humildes pastores
de Belén (Hebreos 4:16)

 Dios se hizo pequeño y vino a este mundo y todos debemos venir a él, desde
los más humildes y pobres como los pastores de Belén hasta los más sabios y
ricos como los magos del oriente que venían para adorarlo.
TEMA: ¿DE QUE NOS HABLA LA NAVIDAD?

TEXTO: LUCAS 2:25-33

INTRODUCCION

Verdaderamente la navidad es algo sobre lo cual se habla mucho, sobre lo cual se


dicen muchas cosas.

No podemos negar que muchas personas hablan mal de la navidad llamándola


una celebración pagana, una fiesta mundana, etc.

Y verdaderamente al ver la forma como el mundo celebra la navidad, enfocados


en lo material, en los regalos, en la comida, en estrenar ropa, etc parecería que lo
que dicen las personas sobre la navidad tienen razón.

Pero en el texto que hemos leido vemos las palabras maravillosas que un anciano
llamado Simeón habló sobre ese niño que había nacido en Belén, esas palabras
que declaran que Jesús vino a nacer en este mundo con dos propósitos: Para ser
luz a los gentiles y gloria de Israel.

El texto nos dice que Maria y Jose se maravillaron de todo lo que se decía de
Jesús, y seguramente hoy en día también se maravillarian de todo lo que se dice
sobre el nacimiento de su hijo, es por eso que este día no vamos a enfocarnos
sobre lo que se dice de la navidad sino al contrario, vamos a reflexionar sobre lo
que la navidad nos dice a nosotros, vamos a responder por medio de la palabra de
Dios ¿De que nos habla la navidad?

I) LA NAVIDAD NOS HABLA DEL AMOR DEL PADRE CELESTIAL (JUAN


3:16)

Como lo hemos dicho en otros mensajes y es una realidad: La navidad es una


historia de amor. Una historia del amor incondicional de Dios para nosotros los
pecadores, un amor tan grande que fue capaz de enviar a este mundo lleno de
pecado y de maldad a su único hijo para salvarnos de la condenación.

Lastimosamente muchas personas no comprenden esto y en esta época se


sentirán tristes y deprimidos pensando que nadie los ama pues no recibirán un
regalo o porque nadie los visitara, o porque otros pueden comprar juguetes y ropa
nueva para sus hijos y ellos no. Pues no comprenden que la máxima muestra del
amor de Dios para ellos no es la cena, no es el estreno, no es el dinero, sino
JESÚS.
II) LA NAVIDAD NOS HABLA DEL AMOR DE JESÚS (2 CORINTIOS 8:9)

La navidad no solamente nos habla del amor del Padre Celestial para nosotros,
sino también del gran amor del hijo, de nuestro Señor Jesucristo, para cada uno
de nosotros.

Generalmente en esta época siempre se habla del pesebre en el cual fue puesto
Jesús cuando nació, ese pesebre que es símbolo de pobreza y de humildad, pero
se nos olvida hablar del trono de gloria y majestad que el hijo de Dios tuvo que
dejar para cumplir el propósito redentor.

Jesús siendo rico se hizo pobre para enriquecernos a nosotros haciéndonos hijos
de Dios por medio de la salvación que él vino a darnos.

Es por eso que toda persona no importa cual sea su condición social, económica,
académica, que quiera ser parte del Reino de los Cielos tiene que volverse pobre
de espíritu para reconocer su condición y poder recibir la salvación (Mateo 5:3)

Para cada uno de nosotros este también es un llamado a reflexionar en todo lo


que nuestro Señor Jesucristo dejó por amor a nosotros y preguntarnos ¿qué estoy
dispuesto yo a dejar por amor al Señor?

III) LA NAVIDAD NOS HABLA DEL EJEMPLO DE HUMILDAD, OBEDIENCIA Y


SOMETIMIENTO DE JOSÉ Y MARÍA (MATEO 1:19-24 / LUCAS 1:34-38)

José y María eran dos jóvenes que tenían planes para su vida, tenían planes para
su próxima boda, tenían planes para su vida juntos y seguramente ya habían
hablado de los hijos que querían tener, lo que ellos no sabían era que Dios tenía
otros planes para ellos: convertirse en los padres terrenales del hijo de Dios.

A pesar de que la voluntad de Dios para ellos cambiaba por completo sus planes
y proyectos, ellos no se enojaron contra Dios, ellos no se resintieron, ellos no
murmuraron, sino que ellos obedecieron la voluntad de Dios, ellos se sometieron
con humildad y obediencia a los planes del Señor.

María reconoció que ella era una sierva que debía obedecer al Señor, y José
reconoció que aunque muchas veces no comprendamos los planes de nuestro
Dios nosotros siempre debemos someternos a ellos para que sus propósitos se
puedan cumplir en nuestra vida. Al igual que en la vida de José y María, nosotros
también tenemos que comprender que Dios puede cambiar nuestros planes, pues
nuestra vida le pertenece a él y porque él siempre tiene planes mejores para
nosotros (Salmo 139:17)

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