LA JOVEN CON EL ARETE DE PERLA

“La joven con el arete de perla”, es una película que gira en torno a la vida de
una joven llamada Griet, quien luego de que su padre quedara ciego después
de una explosión, tuvo que ponerse a trabajar para mantener a su familia. Griet
empezó a trabajar como criada en la casa de Johannes Vermeer, quien es uno
de los pintores neerlandeses más reconocidos del arte Barroco. Aunque son
totalmente diferentes en cuanto a educación y estatus social, hay algo que los
une: el arte. Vermeer descubre la intuición de Great para comprender la luz y el
color, y lentamente la va introduciendo en el misterioso mundo de la pintura, a
tal punto en que ella le ayuda a hacer los colores para sus pinturas, e incluso
Vermeer la hace partícipe, o mejor aún, protagonista de uno de sus cuadros.

El arte es una manera en la que el ser humano expresa su visión del mundo, es
ese pasaje por medio del cual el ser humano transmite ideas y emociones al
mundo. Entonces, ¿podríamos decir que el arte es exclusivo de la gente
estudiada o de la gente adinerada?

En la película se observaba que a pesar de que Great no tenía educación, ni

mucho menos cuantiosos recursos económicos, tenía un don muy especial que
era su sensibilidad artística. Great tenía la capacidad de ver más allá de lo que
comúnmente la gente vería, tenía una inmensa capacidad para percibir la luz y
los colores. Great aparte de tener esa sensibilidad, también tenía una belleza
indescriptible: labios rojos y gruesos, piel perfectamente blanca, ojos grandes,
claros y expresivos, cabello castaño y ondulado; básicamente Great nació para
generar y percibir arte.

En cuanto a la belleza, cabe agregar que no se trata solamente de “tener” sino

también de “transmitir”, y esa era la belleza que poseía Great, una belleza que
transmitía emociones y sentimientos, por tanto era algo así como perfecta para
ser plasmada en un cuadro. Estaría mal decir que era perfecta para ser
convertida en arte, pues de hecho, ella ya era arte; la labor de Vermeer era
más bien plasmar ese arte, inmortalizarlo.
Quizás Great fue una mujer muy afortunada al poseer esa conexión con el arte,
tanto física como espiritual. Tenía tan agudizados sus sentidos que podía ver
una gama de colores, en donde una persona normal sólo vería el color azul.
Tenía tan agudizados sus sentidos que podía comprender la función de la luz
en un cuadro, la intensidad de luz necesaria para que el cuadro quedara
equilibrado, las diferencias que puede hacer la luz sobre un cuadro, las
sombras que esta genera, etc.

Great no era una persona adinerada, pero de seguro tenía mucha más riqueza
que muchos, era rica en sentidos, era rica en percepción, era algo así como
una artista oculta, una artista lista para generar un “boom” en el arte.

Trayendo esto a un contexto más contemporáneo, se puede hacer referencia a

aquellos artistas urbanos, quienes a pesar de no tener maestrías en el campo
de las artes, a pesar de no tener ningún conocimiento teórico sobre el arte, ni
bastantes recursos económicos, hacen de las calles el mejor museo para
visitar. No usan las mejores pinturas, ni tienen un caballete y un cuadro para
pintar, pero con un aerosol, una pared y una mente llena de imaginación,
plasman ideas totalmente magníficas y llenas de contenido, llenas de
mensajes, de conciencia, de transformación, etc.

Concluyendo entonces, se puede decir que para ser y hacer arte no es

necesario tener innumerables cartones colgados en la pared, ni mucho menos
cuantiosas sumas de dinero, basta con aprender a ver las cosas más allá de lo
externo, más allá de lo común, y con tener el hermoso don de la imaginación.

“A cada tiempo su arte, a cada arte su libertad”

(Cita encontrada sobre la puerta de entrada
al Pabellón de la Secesión de Viena)
SECESIÓN DE VIENA
La Secesión vienesa (también llamada Secessionsstil, o Sezessionsstil en Austria)
formó parte del muy variado movimiento actualmente denominado modernismo. Fue
fundada en 1897 por un grupo de 19 artistas vieneses que había abandonado la
Asociación. Como proyecto de renovación artística, trataba de reinterpretar los estilos
del pasado ante los embates de la producción industrial que estaba desnudando
estructural y estéticamente la realidad del arte y la sociedad de la época. Su primer
presidente fue Gustav Klimt.

Historia
La Secesión fue fundada dentro de la Vereinigung Bildender Künstler Österreich que
es la Asociación de los artistas de las artes visuales en Austria.
En esta época, Austria sufre de problemas en todos los sectores: social, económico,
religioso, político, monárquico... que contrastan con un ambiente idealista. Es el
periodo más brillante para Austria, siendo su capital, Viena, la cuna delpsicoanálisis.
Los portavoces de este movimiento son: Gustav Klimt, Koloman Moser, Ferdinand
Andri y Joseph Maria Olbrich (arquitecto) entre otros.
Aunque la secesión es incluible en el modernismo, típico de fines del período histórico
y cultural conocido como la Belle Époque, corresponde señalar que presenta
importantes diferencias con el coetáneo Art Nouveau y con otros estilos semejantes al
Art Nouveau (el Liberty o floreale italiano o el modernismo español por ejemplos); en
la secesión, aunque se busca la elegancia, predomina la sobriedad formal, e incluso
cierta severidad, en los casos en que se transgrede la sobriedad sale a la luz
el expresionismo, en muchos aspectos por su rupturismo la secesión ya es incluible
dentro del vanguardismo.
Los carteles provienen del campo cultural, no comercial, como primaba hasta
entonces. Los trabajos son muy estructurados, dándoles mucha importancia al orden,
el equilibrio y la geometrización (el cuadrado y el cubo son repetidos continuamente).
Su objetivo estético final era la "obra de arte total" o Gesamtkunstwerk, término
acuñado por Richard Wagner para denominar a un arte que condensara las destrezas
de todas las demás.
Los artistas vieneses querían dar a su arte una expresión despojada de sus velos y
nada envuelta en accesorios. Un arte propio, sin servilismos extranjeros. No quieren
imitar al arte exterior, pero sí que les sirva de inspiración y análisis.
La decoración es modernista, ni orgánica, ni naturalista sino estilizada y abstracta.
La tipografía es un elemento determinante, le dan gran importancia a la letra, esta
tiene un valor formal, compositivo y comunicativo.
En 1903, se forma una nueva agrupación de artistas en torno a los llamados Wiener
Werkstätte o Talleres Vieneses, en los que colaborarían Gustav Klimt, Egon
Schiele, Oskar Kokoschka, y otros.
Sobre la puerta de entrada del "Repollo de Oro", como es conocido popularmente en
Viena, puede leerse A cada tiempo su arte, y a cada arte su libertad ("Der Zeit ihre
Kunst, der Kunst ihre Freiheit")