Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Art PDF
Art PDF
SALIR
Menú i SALIR
EL ARTE PREHISTÓRICO
El período artístico más largo de la historia de la humanidad es el que abarca el arte de la
Prehistoria, es decir, las diversas creaciones artísticas que llevaron a cabo los seres
humanos desde su aparición sobre la Tierra hasta la invención de la escritura. Este
larguísimo período se extiende desde unos 400.000 años antes de nuestra era hasta
aproximadamente el 3000 a.C., pero de hecho sólo se conocen manifestaciones artísticas a
partir de unos 25.000 años antes de Cristo.
ETAPAS DEL ARTE PREHISTÓRICO
EL ARTE PALEOLÍTICO
El arte paleolítico fue la primera forma de expre- Por la importancia de sus pinturas rupestres, la
sión de los seres humanos. Apareció en el deno- cueva de Altamira (Cantabria) ha recibido el
minado Paleolítico Superior, que comenzó unos calificativo de «Capilla Sixtina» del arte paleolítico.
35.000 años antes de Cristo. Su manifestación
más importante son las pinturas rupestres, que das al culto, el hombre prehistórico reprodujo esen-
suelen englobarse bajo la denominación general cialmente animales y trazó también representacio-
de arte parietal. Pero el hombre paleolítico reali- nes humanas y signos. Los animales son con
zó también esculturas y decoró con relieves diver- mucho el tema predominante, siendo los más habi-
sos objetos de piedra, hueso y arcilla, todo lo cual tuales los caballos y los bisontes. De las representa-
se agrupa bajo la expresión arte mobiliar. ciones de seres humanos, las más corrientes son las
figuras femeninas, que aparecen siempre de perfil, y
Arte parietal también manos, que se reproducen tanto en positi-
El arte parietal, o decoración de las paredes de las cue- vo como en negativo. En cuanto a los signos, son
vas con diversos temas pictóricos, se desarrolló en muy variados y constituyen un gran enigma, ya que
todo el continente europeo y el norte de África, pero se ignora por completo su significado.
fue particularmente prolífico en la región denomina- Normalmente, las escenas de las cavernas están re-
da francocantábrica, que incluye Asturias, Cantabria y presentadas en color, pero a veces aparece tan solo la
el País Vasco, en España, y el sur de Francia. En ella se silueta dibujada en negro. Otras veces el contorno se
encuentran no sólo la mayoría de las cuevas con de- ha grabado con un punzón antes de colorearlo, y en
coración parietal que se conocen en la actualidad sino algún caso las figuras están talladas en relieve.
también algunas de las más importantes: Altamira, el
Castillo, Lascaux y Niaux, entre otras. Arte mobiliar
En las cuevas, no se sabe si en las que le servían En lo que respecta al arte mobiliar, la muestra más
de vivienda y refugio o en otras especiales dedica- interesante son las llamadas venus esteatopigias,
444
Menú i SALIR
ARTE
445
Menú i SALIR
EL ARTE MESOPOTÁMICO
Se entiende por arte mesopotámico el conjunto de todas las manifestaciones artísticas
surgidas en Mesopotamia, es decir, en el territorio asiático comprendido entre los ríos
Tigris y Éufrates, desde fines del IV milenio a.C. hasta el 560 a.C., cuando se produjo la
conquista de estas tierras por los persas, que crearon un estilo artístico propio.
446
Menú i SALIR
ARTE
babilonio (626-560 a.C.). La primera fue una eta- Las principales construcciones de la zona, don-
pa con una gran variedad de centros creativos más de resulta sorprendente la ausencia de monumen-
o menos independientes: las ciudades de Uruk, tos funerarios, fueron los templos y los palacios.
Ur, Lagash, Mari, etc. Las restantes, en cambio, Los primeros templos (templo de Caliza de Uruk,
fueron épocas de uniformización artística basada templo de Inana, en Uruk, y templo Blanco de
en los gustos de los grupos que detentaban el po- Uruk), anteriores al 2600 a.C., eran de planta rec-
der (civil y religioso). De todas ellas, las más fe- tangular y recinto único. Más tarde se generalizó
cundas desde el punto de vista de la historia del su construcción sobre terrazas escalonadas, y en-
arte fueron la sumeria, la babilonia y la neoasiria. tonces se multiplicaron las dependencias, que lle-
garon a ser muy numerosas. Entre los templos de
este tipo cabe citar los de Tell Harmal, el de Shu-
LA ARQUITECTURA MESOPOTÁMICA sin, en Tell Asmar, el de Inan, en Uruk, y sobre
todo los de Asur.
La arquitectura mesopotámica, que fue en general Pero el templo más representativo de esta civili-
monumental y maciza, estuvo condicionada por zación fue el zigurat, una gran torre escalonada
la inexistencia de piedra y de madera en el país. con el santuario del dios en lo alto. El primer zi-
Por este motivo, todas las construcciones de la gurat conocido, que apareció en torno al 2100
zona, tanto las ordinarias como las monumentales a.C., es el que edificó Urnamu en Ur en honor de
y las defensivas, eran de adobe al principio y des- Nannar, el dios luna. El zigurat, levantado a veces
pués de ladrillo. Este hecho aparentemente trivial como construcción independiente, se integra en
tuvo consecuencias muy importantes, ya que im- ocasiones dentro de un templo convencional
pidió la construcción de edificios arquitrabados, como un santuario más.
como en Egipto, y condujo a la invención del arco Los palacios mesopotámicos eran, en cambio,
y de la bóveda, que aparecieron aquí por primera edificios de construcción horizontal, con una
vez. También se explica por la misma causa la fal- planta articulada en torno a uno o varios patios
ta de columnas en los edificios mesopotámicos. centrales, desde los que se accedía a la Sala de las
Audiencias, al Salón del Trono y a
las restantes dependencias públicas
y privadas. Merecen destacarse el
palacio de Naramsin, rey de Ak-
kad, en Tell Brak; el de Zimrilin en
Mari; el de Yarimlin en Alalakh y el
palacio real de Dur-Kurigalzu.
Más grandes y suntuosos fueron los
palacios que construyeron los distin-
tos soberanos neoasirios en las diver-
sas capitales del imperio: Calah (la
actual Nimrud), Jorsabad y Nínive.
LA ESCULTURA
MESOPOTÁMICA
447
Menú i SALIR
448
Menú i SALIR
ARTE
Fragmento del Estandarte de Ur, realizado en de Ur, que representa escenas bélicas sobre una
concha, lapislázuli y caliza hacia el año 2750 a.C. base de concha, arenisca y lapislázuli, y el arpa de
(Museo Británico). Ur, un instrumento musical hermosamente traba-
jado. Estas dos piezas y algunas otras muy notables
se conservan en el Museo Británico de Londres.
na herida se cuentan entre las mejores obras sali-
das del cincel de los escultores asirios.
Los frisos neobabilónicos, muy distintos de los EL ARTE PERSA
asirios, se caracterizan por estar hechos con ladri-
llo esmaltado y policromado, y además porque no La región de Mesopotamia, en la que se había de-
representan escenas sino figuras aisladas, general- sarrollado el arte sumerio, acadio, asirio y babiló-
mente de animales. Los más valiosos artística- nico, fue ocupada el 560 a.C. por los persas, quie-
mente son los que decoraban la puerta de Ishtar y nes fundaron un gran imperio que abarcaba todo
la avenida procesional de Babilonia. el Próximo Oriente y Egipto. Bajo su dominio
Los asirios también debieron de cultivar habitual- surgió un arte peculiar, caracterizado por la cons-
mente el relieve en bronce, pero la única muestra que trucción de grandes palacios.
nos ha llegado son las magníficas puertas de Balawat, Los palacios persas, como los de Ciro II el
conservadas también en el Museo Británico. Grande en Pasargada y Susa, o el de Darío I en
Persépolis, eran inmensos recintos construidos a
diversos niveles. Tenían dos estancias principales,
LA PINTURA Y LAS ARTES MENORES la Sala de Audiencias o apadana y el Salón del
Trono o tatchara. Este último estaba sostenido ge-
De la pintura mesopotámica quedan abundantes neralmente por numerosas columnas, rematadas
testimonios documentales, pero los restos conser- por monumentales capiteles decorados con moti-
vados son escasísimos, por lo que apenas se tie- vos vegetales o con bustos de animales.
nen conocimientos sobre ella. Estos palacios estaban decorados con bajorre-
Muy distinto es lo que ocurre con las artes me- lieves y frisos de ladrillo esmaltado, en los que los
nores. De éstas la que más destacó en Mesopo- únicos temas representados eran los soldados de
tamia fue la glíptica, o decoración con relieves de la guardia y los largos cortejos de los pueblos ven-
los cilindros-sellos que se usaban para autentifi- cidos. Sobresale entre todos ellos el Friso de los
car los documentos oficiales. La glíptica, que se arqueros de Susa (h. 404-359 a.C.), que se con-
empezó a cultivar hacia el 3300 a.C., logró sus serva en el Museo del Louvre.
mejores muestras hacia mediados del tercer mile- Además de las ruinas de los palacios y los restos
nio, cuando la producción era extraordinaria- de capiteles y relieves, lo único que queda del arte
mente rica y variada. Después, una clara tenden- persa son dos monumentos funerarios: la tumba
cia hacia la uniformización hizo perder a este arte de Ciro II el Grande en Pasargada y el hipogeo de
una parte de su riqueza y originalidad. Darío I en Naqsh-i-Rustam. No existen edificios
Las artes menores produjeron asimismo algunas religiosos, puesto que los persas eran mazdeístas
piezas aisladas sobresalientes, como el Estandarte y practicaban su culto en altares al aire libre.
449
Menú i SALIR
EL ARTE EGIPCIO
La historia de Egipto está íntimamente ligada al Nilo, en cuyas márgenes se organizaron
los primeros asentamientos urbanos para el control de las crecidas del río y el regadío.
Su curso divide el país en dos regiones, el Alto Egipto (la zona sur) y el Bajo Egipto
(la zona norte).
450
Menú i SALIR
ARTE
451
Menú i SALIR
452
Menú i SALIR
ARTE
La pintura
Relieves y pinturas estaban al servicio de la
arquitectura funeraria para la decoración de
tumbas y templos. Con la popularización
del hipogeo durante el Imperio medio, la
pintura adquirió mayor protagonismo, con
una temática más variada y una mayor li-
bertad de representación. Las tumbas reales
mantenían todavía un carácter simbólico, y
sus pinturas seguían complejos itinerarios
iconográficos que debían garantizar un
agradable viaje hacia la eternidad: el ban-
quete funerario, escenas de pesca y caza, re-
presentaciones de los oficios, acompañados
a menudo de jeroglíficos.
Estas escenas no obedecían
a un afán de realismo his-
tórico sino que debían ga-
Representación del faraón Ramsés II en su carro rantizar un tránsito feliz al
sobre uno de los muros del templo de Karnak. más allá.
La representación se ba-
saba en una serie de con-
venciones compositivas
inalterables, como la dis-
Tañedora de arpa. Pintura mural del Imperio posición de la figura de
antiguo que decora una tumba del perfil, con el ojo y los
Valle de los Reyes.
hombros de frente y la
pelvis en tres cuartos, o
la figura sentada, a veces dispuestas en grupos, y la distribución de la com-
el escriba. Obras destacadas de la época son la es- posición en registros superpuestos. Durante el
cultura en diorita de Kefrén, la tríada de Micerino Imperio nuevo, los artistas empezaron a utilizar el
o el Escriba sentado (Louvre). color con criterios naturalistas, y los relieves em-
En las esculturas del Imperio medio se aprecia pezaron a plasmar acontecimientos reales ocurri-
una mayor humanización y realismo en las repre- dos en cada reinado. Destacan especialmente las
sentaciones de los faraones, como muestran los pinturas del Valle de los Reyes y las Reinas, así
retratos de Amenemhet III y Sesostris III. Con el como los espléndidos relieves de Tell el-Amarna.
Imperio nuevo nació la tipología de la imagen
oferente, con el faraón de rodillas en ofrenda a la
divinidad, y las figuras colosales que representan LAS ARTES MENORES
al faraón en piedra situadas a los lados de los pí-
lonos del templo, como los célebres Colosos de Las artes menores adquirieron una extraordinaria
Memnón. También durante el Imperio nuevo, ad- suntuosidad y gran perfección técnica, tanto la
quirió personalidad propia el arte naturalista de orfebrería como la cerámica y el vidrio, que pro-
Tell-el-Amarna, en la corte de Amenofis IV y su dujeron objetos de gran belleza y hermoso colori-
esposa Nefertiti, que promovieron una tendencia do para los ajuares reales, el culto y la vida coti-
artística caracterizada por el realismo, la expresi- diana.
vidad, la sensualidad y el gusto por las escenas ín- Durante los períodos de dominación extranjera,
timas y cotidianas. Obras características de este en todas las artes se mantuvieron las pautas de
período son el célebre busto de Nefertiti y los re- épocas anteriores, aunque se observa una progre-
lieves de los faraones con sus hijas. De la época de siva incorporación de los criterios estéticos del
Ramsés II destacan sus dos estatuas gigantescas arte griego, evidentes ya en los magníficos retra-
en Luxor y Abu Simbel. tos de al-Fayum.
453
Menú i SALIR
EL ARTE GRIEGO
La civilización griega, por su concepción del mundo, su organización social y su
contribución artística, constituye uno de los hitos de la historia universal. Esta
extraordinaria civilización se desarrolló entre los siglos VIII y II a.C., en el Ática y la
península del Peloponeso. Estaba organizada en ciudades-estado con sus propias leyes y
gobierno, y forjó una cultura centrada en el hombre, la razón, la belleza y la justicia,
marcada por la mitología y un profundo sentido religioso.
ETAPAS DEL ARTE GRIEGO gráfica en el centro de las rutas comerciales de la
época. Esta brillante civilización terminó siendo
La periodización del arte griego establece una eta- sometida por la cultura micénica, arraigada en el
pa de formación, el llamado período arcaico (si- Peloponeso, en la segunda mitad del II milenio.
glos VIII-VII a.C.), precedido por una época oscura Las culturas minoica y micénica, extraordinaria-
(XII-VII a.C.) o geométrica; el período clásico (V-IV mente interrelacionadas, alcanzaron su período
a.C.), que coincide con el momento de mayor es- de máximo apogeo hacia el 1600; no obstante,
plendor de la civilización y el arte griegos; y el pe- hacia el 1200 las guerras y los desastres naturales
ríodo helenístico (III-II a.C.), durante el que se marcaron el declive de su esplendor, paralelo al
produjo la expansión de los modelos griegos por inicio en Grecia de la «edad oscura».
las provincias anexionadas, y que terminó con la En el mundo minoico, el edificio más impor-
toma de Corinto en 146 a.C. por Roma, que tante de la ciudad era el templo, una edificación
adoptaría el pensamiento y las formas artísticas adovelada que tenía en la columna su elemento
de la Grecia antigua. El arte griego se inspiró a su de sustentación, y que se estructuraba en torno a
vez en las realizaciones de una civilización ante- un patio rectangular con gran número de depen-
rior, la civilización creto-micénica. dencias. Los muros de las estancias estaban deco-
rados con frescos de colores vivos y temáticas
naturalistas y rituales, como animales marinos,
EL ARTE CRETO-MICÉNICO procesiones y escenas de tauromaquia, del que
son magnífico ejemplo los palacios de Cnossos,
La isla de Creta fue el centro de la civilización mi- Festos y Hagia Tríada. Típicamente cretenses son
noica, que se desarrolló desde el III milenio hasta las figurillas femeninas con el torso descubierto y
fines del II milenio a.C., gracias a su posición geo- serpientes enrolladas en sus brazos y manos, pro-
bablemente representaciones de sa-
cerdotisas y diosas, así como la deli-
cada cerámica de Camares.
A partir del 1500 a.C. se inició la
etapa de mayor esplendor de la civi-
lización pre-clásica griega, organiza-
da en ciudades similares a las polis
griegas. De la arquitectura micénica
cabe destacar las murallas de blo-
ques ciclópeos que rodeaban las
ciudades de Micenas y Tirinto, en
las que se abrían puertas monumen-
tales, como la extraordinaria Puerta
454
Menú i SALIR
ARTE
LA ARQUITECTURA
455
Menú i SALIR
Cornisa
Triglifo Friso
Arquitrabe
Ábaco Voluta
Acanto
Equino Metopa Voluta
Collarino
Orden dórico Orden jónico Orden corintio
Toro
Escocia
zócalo que sostiene un templo jónico, y ya en el el modelo ideal de belleza masculina y femenina.
período helenístico, la construcción de ciudades Ligados a la tradición oriental, y en especial a la
ordenadas regularmente, con palestras, gimnasios egipcia, los kuroi, figuras de atletas desnudos, se
y estadios, así como el célebre Altar de Pérgamo. caracterizan por el modelado del cuerpo en for-
mas cúbicas y las aristas bien marcadas, el hiera-
tismo, el rostro impávido con los ojos almendra-
LA ESCULTURA dos y el cabello dispuesto geométricamente, y la
llamada sonrisa egineta o arcaica. Las korai, figu-
La estatuaria alcanzó con los artistas griegos una rillas de muchachas, presentan complicados pei-
belleza y una perfección pocas veces igualadas, nados y están ataviadas con mantos y pliegues
fruto de su interés por la plasmación del cuerpo geométricos. En el período protoclásico se aprecia
humano, desde las rígidas representaciones una menor rigidez en las figuras y un modelado
del período arcaico, al ideal de plenitud y equili- más suave, como puede observarse en los fronto-
brio del período clásico, y el dinamismo de las nes del templo de Afaia (Egina); también se em-
obras del período helenístico. piezan a realizar esculturas en bronce, como El
Tras las primitivas xóanas de madera, las obras Auriga de Delfos y los relieves del Trono Ludovisi.
más significativas del período arcaico fueron los A mediados del siglo V se inició el período clási-
kuroi y las korai, esculturas en piedra que plasman co de la escultura griega, marcado por tres gran-
456
Menú i SALIR
ARTE
LA PINTURA Y LA CERÁMICA
457
Menú i SALIR
en el tema decorativo preferido, con una factura ta la preocupación por una representación tridi-
más realista y mayor vivacidad en las escenas, que mensional mediante el escorzo y el recurso al cla-
pueden ser negras sobre fondo rojo o viceversa; y roscuro, y con escenas más complejas que consti-
la época clásica (siglos V-IV), en la que se manifies- tuyen auténticas composiciones pictóricas.
EL ARTE ROMANO
El arte romano asimiló los modelos etruscos, orientales y del arte griego, del que recogió el
lenguaje abstracto y racional adecuado a sus necesidades cotidianas e históricas. Es un
arte sobrio, más preocupado por los aspectos prácticos y técnicos que por la belleza y la
estética. Su desarrollo fue paralelo a la evolución del estado; desde la primitiva monarquía
hasta la instauración de la República, en el 509 a.C., que coincidió con el momento de
eclosión del arte romano, y desde el 27 a.C., con una reorganización del estado promovida
por Octavio que marcó el comienzo del Imperio, que perduraría hasta el 476 d.C., año de
la caída de Roma, con un arte aristocrático e imperial, en el que se dejaban sentir también
las influencias de las provincias conquistadas.
458
Menú i SALIR
ARTE
459
Menú i SALIR
LA ESCULTURA
El edificio típicamente romano es el anfiteatro en el
De todas las expresiones artísticas del pueblo ro- que se celebraban las luchas de gladiadores. Sin
mano, la escultura fue sin duda la más deudora lugar a dudas, el anfiteatro por antonomasia es el
Coliseo de Roma.
de la plástica griega. Desde el siglo II a.C., la fasci-
nación por el arte griego generó una inmensa pro-
ducción escultórica, mayoritariamente copia de les, como el Augusto de Prima Porta. El gusto ro-
esculturas griegas, que influyó decisivamente en mano por el realismo testimonial dio magníficos
su configuración estilística. No frutos en los relieves de temática histórica, una de
obstante, la estatuaria romana las aportaciones más originales de la cultura ro-
introdujo algunas tipologías mana. Estos relieves decoraban los monumentos
propias, como el retrato, el erigidos para conmemorar acontecimientos triun-
retrato ecuestre, el meda- fales, como arcos de triunfo, columnas o altares,
llón y el relieve descripti- con un estilo de gran realismo y expresividad, del
vo, que se realizaron en que son magnífica muestra el Ara Pacis, el Arco
todo tipo de materia- de Tito y la Columna de Marco Aurelio. También
les, piedra, metales o destaca el resurgimiento de los sarcófagos, deco-
madera. En la escultu- rados con temas de la vida cotidiana o mitológi-
ra romana se dan cita cos, como el Sarcófago Ludovisi.
una línea más popular
y realista, que embe-
llece los rostros sin ol- LA PINTURA Y EL MOSAICO
vidar sus peculiarida-
des, y otra de factura Pinturas y mosaicos ocuparon un lugar privilegia-
más clasicista e ideali- do en los austeros edificios romanos. Se conser-
zada, llegando incluso van extraordinarios ejemplos en las ruinas de
a la divinización en Pompeya y Herculano, que han permitido cono-
los retratos imperia- cer su evolución estilística. Por lo general, eran
pinturas al fresco, en las que los artistas mostra-
ban un absoluto dominio del espacio gracias a la
utilización de efectos de perspectiva y hábiles ve-
Patricio romano laduras y matices. De un primer estilo de influen-
sosteniendo los bustos cia helenística, en el que las paredes parecen estar
de sus antepasados,
siglo I a.C. (Palacio de revestidas con mármoles de colores (siglo II a.C.),
los Conservadores, la pintura evolucionó hasta crear la impresión de
Roma). un espacio naturalista que se prolonga hacia los
460
Menú i SALIR
ARTE
EL ARTE BIZANTINO
La fundación de Constantinopla sobre los vestigios de la antigua colonia griega de
Bizancio, y la división del Imperio romano, acosado por las invasiones germánicas, serían
fechas decisivas para la historia del arte occidental.
LAS TRES EDADES DE ORO dad se convirtió en el centro creador de unas for-
mas artísticas que tuvieron una extraordinaria
En Constantinopla surgió a partir del año 330 acogida en el arte medieval europeo, y que se
una cultura que continuaba la tradición paleo- concretaron en un arte imperial-religioso, de
cristiana, enriquecida por las aportaciones de tono solemne, marcado por una concepción teo-
Oriente, Egipto y la estética helenística. La ciu- crática del mundo y del arte mismo.
461
Menú i SALIR
El arte bizantino se desarrolló a partir del si- ten la iglesia en un reflejo del orden del cosmos: el
glo VI, en tres grandes períodos conocidos como espacio bizantino se forma con elementos que tras-
Edades de Oro: la Primera Edad de Oro corres- cienden el plano material y simbolizan el espíritu.
pondió al reinado del emperador Justiniano (527- El edificio más representativo de la arquitectura
565); la Segunda Edad de Oro fue el momento en bizantina es la basílica de Santa Sofía (532-537)
el que se definió la estética bizantina; y la Tercera de Constantinopla (hoy Estambul), obra de los
Edad de Oro, período especialmente brillante en arquitectos Antemio de Tralles e Isidoro de Mile-
las artes, se vio truncada por la toma de Constan- to, en la que destaca la grandiosa cúpula central,
tinopla por los turcos el año 1453. y que constituye el modelo de basílica con cúpula
para la arquitectura bizantina posterior. De este
período destacan además la iglesia de Sergio y
LA ARQUITECTURA Bacco, organizada según esquema de planta cua-
drada con octógono en el centro, la iglesia de los
El templo de planta central, a menudo en forma Santísimos Apóstoles (536-550) en Estambul y la
de cruz griega, cubierto con una gran cúpula so- iglesia de San Demetrio (siglos VI-VII) en Salónica.
bre pechinas, sería la tipología dominante en las Durante el siglo V, se erigieron en Ravena (Ita-
construcciones religiosas a partir del reinado de lia) espléndidos monumentos construidos en par-
Justiniano, adaptada a la liturgia cristiana. La dis- te por arquitectos de Constantinopla, como las
tribución interior del espacio litúrgico conserva el iglesias de San Vitale (525-547), San Apollinare
atrio, y el nártex paleocristiano se hace doble, in Classe y San Apollinare Nuovo.
mientras que el presbiterio queda separado de las De la Segunda Edad de Oro, cabe citar iglesias y
naves mediante un elemento característico del capillas de planta de cruz griega cubiertas con cúpu-
arte bizantino, el iconostasio, una especie de can- las de alto tambor, como la catedral de Atenas y la
cel con tres puertas. Al fondo quedaban el coro y, basílica de San Marcos de Venecia, de proporciones
a los lados, las dos cámaras, la prothesis y el dis- no excesivamente monumentales, pero dotadas de
conicon. Destacan la utilización del arco de me- magníficos revestimientos en mármol o mosaicos.
dio punto y los hermosos capiteles, formados por Durante la Tercera Edad de Oro, el arte bizanti-
dos cuerpos superpuestos en forma de pirámide no se extendió por Creta, Grecia y los países esla-
truncada invertida y decorados con relieves a vos, repitiendo modelos anteriores.
base de motivos vegetales y geométricos.
Los grandes monumentos LA ESCULTURA
del arte bizantino
Los interiores de estos templos crean un ambiente Fiel al gusto romano tardío, prevaleció en el arte bi-
suntuoso gracias a una ornamentación rica en es- zantino el relieve ornamental, esculpido con
maltes, telas y magníficos mosaicos, que convier- admirable factura y elegancia, sobre todo en la de-
coración de capiteles y otros motivos
arquitectónicos, que presentan nue-
vas formas decorativas, generalmente
vegetales y animales con simbolismos
cristianos. La escultura figurativa per-
vivió en sarcófagos, relieves, retratos
imperiales y algunas esculturas de
temática religiosa, incluso después
del período iconoclasta.
462
Menú i SALIR
ARTE
Justiniano y su corte,
mosaico del siglo VI
que decora el
presbiterio de la iglesia
de San Vital, en
Ravena.
Las manifestaciones escultóricas más abundan- grafía de los santos y las escenas que configuran el
tes son los llamados dípticos consulares, los tríp- ciclo de las fiestas del calendario litúrgico, y son
ticos de temática religiosa y las tablillas en marfil frecuentes las representaciones del emperador y
que celebran la toma de poder de cónsules y altos su séquito. Entre estos mosaicos destacan los ex-
cargos, así como piezas en piedra dura que repre- traordinarios ciclos musivarios de Ravena, en las
sentan escenas mitológicas y profanas. iglesia de San Vital y San Apollinare Nuovo, así
como los de San Marcos de Venecia, Monreale y la
capilla palatina de Palermo.
LAS ARTES FIGURATIVAS En el arte bizantino adquirió además gran
importancia la producción de iconos, en su mayo-
La mayoría de iglesias estaban pintadas, y sólo las ría del siglo XIV, generalmente representando la
más ricas utilizaban el mosaico, considerado el Virgen, Cristo, los santos y temas sagrados, realiza-
medio más idóneo para plasmar el simbolismo dos en mármol, marfil, pintura, mosaicos o esmal-
trascendente de las representaciones sacras. Estas tes. En este campo se destacaron especialmente los
obras, de extraordinaria belleza y suntuosidad, artistas rusos, como Andrea Rubliov, entre otros,
siguen rígidos esquemas compositivos y icono- así como las escuelas de Chipre, Salónica y Creta.
gráficos, como la adopción de la perspectiva je- Merecen también especial mención las ilustra-
rárquica, según la cual el tamaño de la figura esta- ciones miniadas, una de las creaciones más bellas
rá directamente relacionado con su importancia, del arte bizantino, principalmente de los siglos XI
los fondos dorados, la idealización de los rostros y XII, realizadas en los scriptorium imperiales o
y la distribución de los temas en función de la monásticos, como el Salterio de Klúdov, el Meno-
parte del edificio que les corresponde (el Panto- logio de Basilio II o las Crónicas históricas del Skilit-
crátor en la cúpula, la Virgen en el ábside, las es- zés, en las que conviven tendencias clasicistas con
cenas sagradas en el zócalo, etc.). representaciones más pintorescas y otras rígida-
La estética y la iconografía quedaron plenamen- mente abstractas.
te fijadas en la Segunda Edad de Oro, convirtién- La elaboración y minuciosidad del arte bizanti-
dose en representaciones habituales la figura del no encontró su mejor expresión, por último, en
Pantocrátor (adoptando el modelo sirio de mele- las artes suntuarias, tanto para usos litúrgicos
na larga y barba partida) y la Virgen con el Niño, como imperiales o privados: tejidos, orfebrería y
que suele representarse como la Virgen Kiriotissa esmalte, combinados con materiales preciosos
(mostrando al niño de frente), la Virgen Theo- y perlas. Una obra de estas características, excep-
tokos (ofreciéndole al niño una flor o una fruta) o cional por sus méritos artísticos, es el retablo co-
la Virgen Hodigitria (señalando al Niño como ca- nocido como la Pala d'Oro, del tesoro de la cate-
mino de la Salvación). Se fijó también la icono- dral de San Marcos en Venecia.
463
Menú i SALIR
EL ARTE PRERROMÁNICO
Bajo el nombre de arte prerrománico se engloban todas las manifestaciones artísticas que
se desarrollaron en Europa occidental desde la caída del Imperio romano de Occidente, el
año 476, hasta la expansión del arte románico, a partir del siglo XI. El arte prerrománico
es, pues, aunque no exclusivamente, el arte de los pueblos germanos que se asentaron en el
sur y el oeste de Europa a raíz de la desintegración del Imperio romano.
LOS PUEBLOS GERMANOS
464
Menú i SALIR
ARTE
EL ARTE ASTURIANO
La arquitectura La orfebrería
La manifestación más impor- La orfebrería asturiana, muy
tante del arte asturiano fue la rica, combinó las tendencias vi-
arquitectura, centrada en edifi- sigodas con influencias carolin-
cios de pequeño tamaño cons- gias. Las piezas más representa-
truidos con muros de sillajero, tivas son la Cruz de las Victorias,
reforzados por contrafuertes y la Cruz de los Ángeles, la Arqueta
con hileras de sillares bien talla- de las Ágatas y la Caja de las Re-
dos en las esquinas. Es una ar- liquias, que se conservan en su
quitectura heredera de la visigo- mayor parte en Oviedo.
da, que sustituyó el arco de he-
rradura por el arco de medio
punto peraltado, y la columna EL ARTE MOZÁRABE
por el pilar. Los edificios son
casi siempre de planta basilical, Se conoce con este nombre el
y a menudo presentan como or- arte que realizaron los mozára-
namentos franjas de relieve bes, es decir, aquellos poblado-
muy plano que suelen incluir res de la España musulmana
motivos a soga. que conservaron la religión
Del reinado de Alfonso II el católica y constituyeron comu-
Casto (791-842) datan la Cámara Santa de la ca- nidades independientes dentro del mundo islá-
tedral de Oviedo, que pertenecía a la antigua cate- mico. Muchos de ellos emigraron a mediados del
dral de San Salvador, y la iglesia de San Julián de siglo IX hacia la España cristiana, donde se han
los Prados o Santullano. Al reinado de Ramiro I conservado las principales muestras de su arqui-
(842-850), período de culminación del arte astu- tectura.
riano, corresponden Santa María del Naranco, El arte mozárabe tuvo dos manifestaciones
que fue palacete de recreo del rey, y San Miguel principales, la arquitectura y la iluminación de
de Lillo, ambas en las proximidades de Oviedo, manuscritos.
así como Santa Cristina de Lena. Por último, en el
reinado de Alfonso III el Magno (866-910), se La arquitectura
construyeron San Salvador de Valdediós y San Los mozárabes construyeron numerosas iglesias,
Adriano de Tuñón, y algo más tarde, San Salvador en general de mayor tamaño que las visigodas y
de Priesca. De época posterior no se conserva asturianas, y edificadas con una gran variedad de
ninguna otra construcción del arte asturiano, cu- materiales. Sus rasgos más representativos son el
yas últimas manifestaciones datan de la segunda uso del arco de herradura y del alfiz, y la presen-
mitad del siglo XI. cia como elemento sustentante de la columna de
465
Menú i SALIR
466
Menú i SALIR
ARTE
467
Menú i SALIR
EL ARTE ROMÁNICO
El término «románico», reservado en un primer momento a la arquitectura y después
extendido también a la escultura y la pintura, se usa para calificar las manifestaciones
artísticas que surgieron en el occidente europeo entre los siglos XI y XIII. Cronológicamente,
el románico se inscribe entre el arte prerrománico, que le sirvió de antecedente en algunos
aspectos, y el arte gótico, que lo superó en monumentalidad y extensión.
UN ARTE CRISTIANO Y EUROPEO punto. No obstante, y aunque tomó sus elemen-
tos estructurales de diversos estilos precedentes,
Con respecto al arte prerrománico, el románico el románico supo mezclarlos con una concepción
aporta la novedad de ser un arte europeo. Las nueva y les dio una personalidad propia muy bien
anteriores creaciones artísticas de los pueblos ger- definida. Así surgieron los edificios de gruesos
mánicos, limitadas territorialmente al ámbito muros reforzados por contrafuertes y provistos de
político de cada reino, dieron paso a un estilo muy pocas ventanas para no restarles capacidad
artístico que se difundió por toda Europa bajo el de soporte. Dentro de estos muros, en un interior
impulso de las autoridades religiosas, que habían más bien oscuro, gruesos pilares con columnas
pasado a desempeñar un papel fundamental en el adosadas, enlazados por arcos de medio punto,
terreno cultural, y que proporcionaron las bases sostienen grandes bóvedas de cañón divididas en
para dotar de unidad a un territorio muy frag- tramos por arcos fajones. Ésta es la estructura ele-
mentado políticamente. mental de todos los edificios románicos, grandes
En medio de esta fragmentación, el románico se y pequeños, que se repite con algunas variacio-
difundió como un estilo único porque era un arte nes, como los campanarios perforados por multi-
cristiano, orientado a la difusión de las verdades tud de ventanas característicos del románico lom-
de la religión católica. Para ello, se centró en la bardo. A veces, los arcos de medio punto salen
construcción de edificios destinados a la plegaria también al exterior del edificio y se convierten en
y a la peregrinación (iglesias y monasterios), y los un elemento decorativo en forma de galerías de
decoró con esculturas y pinturas que reproducían arcos o de arcuaciones.
los grandes pasajes del Antiguo y del Nuevo Tes- Esta estructura fundamental fue la que el romá-
tamento. Era una forma de adoctrinar gráfica- nico aplicó en los dos tipos de construcciones que
mente a unos fieles que en su mayoría no sabían más proliferaron: iglesias y monasterios.
leer ni escribir, y que encontraban en las iglesias y
templos, como acertadamente se ha dicho, verda- Iglesias y monasterios románicos
deras «biblias en piedra». La iglesia románica es un templo, grande o peque-
En el nacimiento y difusión del románico se ño, generalmente con planta de cruz latina, con el
pueden distinguir dos tendencias: el románico lom- brazo mayor dividido en tres o cinco naves y
bardo, llamado también primer románico, y el ro- el menor, denominado transepto, de una o tres
mánico pleno. El románico lombardo nació en Lom- naves. La nave central, normalmente de mayor ta-
bardía a fines del siglo X, y se difundió por el norte de maño que las laterales, termina en un ábside
Italia, el sur de Francia y el norte de la península Ibé- semicircular cubierto con cúpula de cuarto de es-
rica. El románico pleno nació algo después en Fran- fera, mientras que las naves laterales pueden
cia, por lo que también recibe el nombre de románi- terminar en sendos ábsides o en un corredor lla-
co francés, y se difundió por toda Europa. mado deambulatorio, que rodea la capilla mayor
y en el que se abren otras capillas radiales. Sobre
el crucero, el espacio donde se cruzan los dos bra-
LA ARQUITECTURA zos de la cruz, se alza el cimborrio, y a veces, so-
bre las naves laterales, discurre una galería que
La arquitectura románica debe su nombre al arte recibe el nombre de triforio.
romano, del que adoptó algunos de sus elemen- La portada de estas iglesias, que unas veces es
tos más característicos, como el arco de medio única y otras veces triple, está constituida general-
468
Menú i SALIR
ARTE
La proyección Cimborrio
axonométrica de la
catedral románica nos
Crucero
permite apreciar los
distintos volúmenes
arquitectónicos.
Ventanas Capilla
Torre
Fachada
Triforio
Deambulatorio
Bóveda en botarel
Archivoltas
Contrafuerte
Pilares Pilar
mente por una serie de columnas adosadas, las En los monasterios, la iglesia, de planta similar
jambas, que sostienen un conjunto de arcos aboci- a la que ya se ha descrito, tiene a su lado un claus-
nados llamados arquivoltas. Las arquivoltas delimi- tro formado por cuatro galerías cubiertas que co-
tan, junto con el dintel de la puerta, un espacio, el munican con un patio descubierto a través de un
tímpano, de cuya parte inferior surge a veces una conjunto de arcos de medio punto. Estos arcos
columna o pilar que divide en dos mitades la puer- descansan sobre columnas rematadas por capite-
ta: el parteluz. Todos estos elementos (jambas, ar- les, que son otro de los grandes centros focales de
quivoltas, tímpano y parteluz) suelen ser aprove- la escultura románica.
chados como soporte de una riquísima decoración Aparte de estos edificios, los arquitectos romá-
escultórica que convierte las portadas románicas en nicos construyeron algunos castillos, como el de
focos principales de la escultura del mismo estilo. Loarre, en Huesca, y también importantes fortifi-
469
Menú i SALIR
caciones, de las que queda como magnífico testi- Conques, Saint Sernin de Toulouse y la catedral
monio el conjunto de las murallas de Ávila. de Angulema.
En España los constructores siguieron básica-
Difusión de la arquitectura románica mente las pautas del románico francés, concreta-
La arquitectura románica se difundió por toda mente de las escuelas Borgoñona y del Languedoc,
Europa con una gran unidad en lo esencial, pero con algunas excepciones, como Cataluña, donde
con diversas variaciones geográficas y regionales se desarrolló el románico lombardo, y Zamora,
que la caracterizan en cada lugar concreto. que creó un estilo de características propias (ro-
En Francia el románico alcanzó tal difusión que mánico zamorano). El románico tuvo una enorme
dio origen a la aparición de numerosas escuelas, difusión en toda la parte cristiana de la península
cada una con sus propias peculiaridades. Las de Ibérica, y son numerosísimos los testimonios que
mayor proyección internacional fueron la Borgo- se conservan, tanto iglesias y catedrales como
ñona, que exportó el modelo de la tercera iglesia monasterios. Entre todos ellos, cabe mencionar
de la abadía de Cluny, y la de Normandía, de la las catedrales de Santiago de Compostela, Zamo-
que tomó sus rasgos principales el románico in- ra, la Seu d'Urgell (Lleida) y la catedral vieja de
glés. Pero las más originales fueron la de Proven- Salamanca; los monasterios de Santo Domingo
za, caracterizada por la disposición clásica de las de Silos, San Juan de la Peña, Sant Cugat del
fachadas, y la de Auvernia, que introdujo el uso Vallès y Leyre; y las iglesias de San Pedro el Viejo,
de piedras de distintos colores. A la escuela del en Huesca, San Martín de Frómista, en Palencia, y
Languedoc le cabe el mérito de haber creado el San Vicente, en Ávila.
tipo de iglesia de peregrinación, con tres o cinco
naves, triforio y girola, cuyo máximo exponente La catedral de Pisa, con su torre inclinada
se encuentra sin embargo en España, la catedral de bellas galerías columnadas.
de Santiago de Compostela. Entre
las muestras más representativas del
románico francés se hallan las igle-
sias de Saint Trofime d'Arles, Saint
Front de Périgueux, Sainte Foy de
470
Menú i SALIR
ARTE
471
Menú i SALIR
472
Menú i SALIR
ARTE
EL ARTE GÓTICO
Se denomina arte gótico al estilo artístico que se desarrolló en Europa occidental y central
entre los siglos XII y XIV, prolongándose en algunos lugares hasta el siglo XVI. El término,
derivado de «godo», fue acuñado por Giorgio Vasari en el siglo XVI para referirse a todas
las manifestaciones artísticas comprendidas entre la Antigüedad clásica y el Renacimiento.
Dotado en su origen de un acentuado carácter despectivo, como sinónimo de barbarie, con
la llegada del Romanticismo y la revalorización del arte medieval perdió sus connotaciones
peyorativas y adquirió un significado más bien elogioso y muy preciso, referido al estilo
que sucedió en Europa al románico. Pese a que esta denominación es a todas luces
impropia, ya que nada tiene que ver el arte gótico con los godos, ha obtenido la aceptación
general y en la actualidad ya nadie discute su uso y aplicación.
473
Menú i SALIR
474
Menú i SALIR
ARTE
475
Menú i SALIR
476
Menú i SALIR
ARTE
477
Menú i SALIR
los grandes personajes, donde aparece como no- Aloy; el mallorquín Guillem de Sagrera, autor de
vedad la representación de la efigie del difunto. la portada de Miramar de la catedral de Palma
También adquiere gran importancia durante el de Mallorca; Lorenzo Mercadante de Bretaña, que
período gótico la labor de talla en las sillerías de centró su labor en Sevilla, donde esculpió la
coro. fachada principal de la catedral; y en Castilla,
En lo que a portadas se refiere, los mejores con- Hannequín de Bruselas, Egas Cueman, Simón de
juntos de la escultura gótica se encuentran en Colonia, Gil de Siloé y Rodrigo Alemán, entre
Francia: puerta de la Virgen de Notre Dame de muchos otros.
París y fachadas de las catedrales de Chartres,
Amiens, Reims y Bourges; en Alemania: escultu-
ras de Naumburg, Freiberg, Bamberg y Estrasbur- LA PINTURA
go; y en España: puertas del Sarmental y de la Co-
ronería de la catedral de Burgos, puerta Preciosa La pintura gótica, en la que incluimos la miniatu-
de la catedral de Pamplona, fachada occidental de ra, muy importante durante este período, presenta
la catedral de León, con su hermosa Virgen Blan- una serie de etapas sucesivas que no se dieron por
ca, y fachada de la catedral de Tarragona. igual y simultáneamente en todos los países. La
Durante el período gótico, la escultura experi- primera fue el estilo franco-gótico, que abarca el
mentó en Italia una gran renovación, que apunta siglo XIII y principios del siglo XIV y se caracteriza
ya hacia el Renacimiento, gracias a la labor de im- por el colorido plano y la ausencia de volumen.
portantes figuras como Arnolfo di Cambio; An- A continuación se difundió el estilo italo-góti-
drea Pisano, autor de las puertas de bronce del co, derivado de la renovación pictórica llevada a
lado sur del baptisterio de Florencia; y, sobre cabo por los grandes artistas italianos del mo-
todo, Nicola Pisano y su hijo Giovanni, a quienes mento (Giotto, Duccio, Simone Martini, los Lo-
se deben los maravillosos relieves de los púlpitos renzetti). Sus rasgos peculiares son el empleo
de las catedrales de Pisa y Siena y de la iglesia de prioritario de colores claros, el uso de una pers-
San Andrés en Pistoia. pectiva incipiente y la propensión al naturalismo,
En Haarlem surgió una gran personalidad es- que va siendo cada vez más acentuada.
cultórica, Claus Sluter, que trabajó principalmen-
te en Francia, donde dejó dos obras magistrales El gótico internacional
en Dijon: la portada de la cartuja de Champmol y Hacia 1400 hizo su apari-
el calvario de su claustro, más conocido como el ción el llamado gótico
Pozo de Moisés. internacional, estilo
En España, además de las esculturas ligadas a elegante y cortesa-
las portadas de las iglesias, florecieron los retablos no, de gran refina-
y los sepulcros. Entre los primeros cabe mencio- miento técnico y
nar el de la catedral de Tarragona, la predela del riqueza colorística,
de la Seo de Zaragoza y el de la cartuja de Mira- que fundió las for-
flores, obra cumbre de Gil de Siloé y muy repre- mas italo-góticas
sentativa del estilo Isabel. con el gusto por el
Entre los sepulcros sobresalen las sepulturas realismo proce-
reales de los monasterios de Poblet y Santes dente de Europa
Creus, el de Carlos el Noble y su esposa en la ca- septentrional. Una
tedral de Pamplona, el de Elisenda de Montcada
en el monasterio de Pedralbes (Barcelona), el de
la condesa Ermesinda en la catedral de Girona, el
de los Velasco en Guadalupe, el del Doncel en Si-
güenza y los de Juan II e Isabel de Portugal en la
cartuja de Miraflores.
Entre los escultores góticos activos en España
San Francisco de
hay que destacar a Janin de Lomme, que trabajó Asís recibiendo los
en Navarra; los catalanes Pere Sanglada, Pere estigmas, fresco de
Oller, Pere Joan, Jaume Cascalls y el maestro Giotto di Bondone.
478
Menú i SALIR
ARTE
EL ARTE ISLÁMICO
Con el término arte islámico se designa, en líneas generales, la producción artística de los
países de religión musulmana. Sin embargo, los límites temporales y espaciales de esta
corriente artística no se corresponden exactamente con los de la religión musulmana, ya
que ésta le ha sobrevivido en el tiempo y ha arraigado en algunas zonas, como Indonesia,
el África negra y las repúblicas centroasiáticas de la CEI, donde las manifestaciones
artísticas no encajan en el concepto de arte islámico.
479
Menú i SALIR
LA ARQUITECTURA
480
Menú i SALIR
ARTE
481
Menú i SALIR
Izquierda, la Torre del Oro de Sevilla, singular ejemplo de una torre albarrana almohade. Derecha, la Alhambra
de Granada, modelo de palacio-fortaleza islámico.
También se deben a los almohades la sevillana To- do los llamados castillos del desierto, construidos
rre del Oro y las mezquitas de Hassan en Rabat y por los califas de Damasco en los confines del de-
de Kutubiya en Marrakesh, que figura entre las sierto de Siria. Los más conocidos son el de Mi-
obras maestras de la arquitectura islámica. De la satta (743), el de Qusayr Amra, famoso por sus
desintegración del Imperio almohade nació, en el fastuosos baños, y el de Qasr al-Hayr (728), uno
siglo XIII, el reino nazarí de Granada, que dio a la de los pocos edificios del mundo islámico decora-
luz una de las obras cumbres del arte islámico do con pinturas de carácter figurativo. Simultá-
universal: el palacio-fortaleza de La Alhambra, neamente, en el norte de África, por donde ya se
construido en etapas sucesivas, y en el que apare- había difundido la religión islámica, comenzaba
cen todos los recursos ornamentales de la plástica la construcción de la gran mezquita de Kairuán
musulmana. A los nazaríes se debe asimismo el (Tunicia), completada por los emires aglabíes en
palacio del Generalife y sus hermosos jardines. el siglo IX.
Otros reinos surgidos tras el hundimiento almo- Iraq. A mediados del siglo VIII, cuando los Aba-
hade y que también dejaron su huella en la his- síes sucedieron en el poder a los Omeyas, el cen-
toria del arte fueron el de los hafsíes en Túnez, a tro artístico del mundo musulmán se trasladó de
quienes se debe la mezquita de la Casbah Damasco a Bagdad. Esto facilitó la incorporación
(1223), y el de los abd al-wadíes en Tremecén, por parte del arte islámico de las influencias del
autores del bellísimo oratorio de Sidi bel Hasan arte persa sasánida. A este período, comprendido
(1296). entre los años 750 y 900, se remonta la aparición
Siria y Palestina. El arte islámico se inició en Si- de la mezquita con las naves perpendiculares a la
ria y Palestina durante la primera dinastía de los qibla y con una decoración interior a base de estu-
Omeyas (661-750). A esa época corresponden cos, en lugar de los mosaicos y revestimientos de
edificios extraordinariamente emblemáticos, mármol habituales hasta entonces. Los monu-
como la cúpula de la Roca (669-692), decorada mentos más significativos se conservan en Sama-
con mosaicos a la manera bizantina, y la mezqui- rra, ciudad situada a unos 100 km al norte de
ta de al-Aqsa (705), ambas en Jerusalén, así como Bagdad, que fue residencia de los califas de 838 a
la Gran Mezquita de Damasco (706-715), que 889. Cabe destacar dos mezquitas, la de Samarra
fue la primera mezquita monumental y ofreció un y la de Abu Dulaf, construidas ambas en adobe,
modelo muy imitado posteriormente, sobre todo con una gran muralla dotada de refuerzos semi-
en occidente. También se remontan a este perío- circulares y un alminar cilíndrico con una rampa
482
Menú i SALIR
ARTE
helicoidal de acceso. La arquitectura civil tiene su Los turcos selyúcidas. Los selyúcidas, que domi-
mejor exponente en el palacio de Yawsaq (836), naron Irán, Iraq y Siria entre los siglos XI y XIII, pro-
donde aparece por primera vez el iwan (sala cu- piciaron un período de máximo esplendor del arte
bierta con bóveda de cañón y abierta al exterior islámico. Los monarcas de esta dinastía dieron un
por medio de un pórtico), llamado a tener un fuerte impulso a las artes, que se concretó en nue-
gran desarrollo en la posterior evolución de la ar- vas formas arquitectónicas, como la torre funeraria
quitectura islámica. Durante el período abásida y el mausoleo, y en la aparición de cúpulas y cupu-
floreció también la artesanía del cobre y el bron- linos sobre las naves de las mezquitas, que ofrecen
ce, así como la producción de ricos tejidos y la ce- a partir de entonces una mayor elevación y un nue-
rámica, especializada en la loza de reflejo metáli- vo juego de volúmenes. De esta época datan cons-
co. Fuera de Iraq, la mejor construcción de este trucciones monumentales tan importantes en el
período fue la mezquita egipcia de Ibn Tulun arte islámico como la Gran mezquita de Isfahan, y
(879), inspirada en los monumentos de Samarra. las mezquitas de Al-Musil y Alepo.
Egipto. El arte musulmán se afirmó en Egipto Persia. A partir de la conquista del Turkestán,
durante la época fatimí (913-1171), logrando una Irán e Iraq por parte de los mongoles, el arte islá-
síntesis entre las influencias orientales y las proce- mico se vio impregnado de elementos estéticos
dentes del norte de África. En El Cairo, enriqueci- procedentes de la cultura china, sobre todo en lo
do por entonces con numerosos palacios que han que respecta a las artes menores. En arquitectura,
desaparecido, se conservan las mejores muestras la gran innovación de este período (1250-1500)
arquitectónicas del momento, las mezquitas de al- fue la aparición de un iwan en cada uno de los
Hakim (900-1003) y al-Azhar (970-972). Los fa- cuatro lados de los patios de las mezquitas. La
timíes destacaron también en la construcción de construcción de tumbas llegó con los mongoles a
fortificaciones, de las que constituye un buen
ejemplo la muralla cairota, que pervive en tres
puertas monumentales. Las artes menores experi-
mentaron igualmente un gran desarrollo, en parti-
cular la loza, el vidrio, el bronce, la talla en made-
ra y los tejidos, caracterizados por el denominado
punto de Tiraz. Saladino y los Ayubíes pusieron
fin en 1171 al dominio fatimí. Con ellos, que go- Alminar de la
bernaron en Egipto hasta 1250, apareció el proto- madrasa de
tipo arquitectónico de la madrasa, consistente en Isfahan, Irán.
un patio con cuatro iwanes. Los ma-
melucos, que gobernaron en Egipto
y Siria de 1250 a 1517, impusieron
un estilo arquitectónico refinado y
preciosista, caracterizado por una
elegante decoración policroma, al-
minares con balcones y arcos de he-
rradura apuntados. Esta corriente se
concretó en multitud de edificios,
entre los que cabe mencionar la mo-
numental mezquita-madrasa de Ha-
san (1356) y la mezquita cairota de
Qa'it bey (1472), que incluye la
tumba de los califas.
De la mezquita de Hassan de
El Cairo, destaca la ornamentación
interior, con mármoles de colores y
cerámicas.
483
Menú i SALIR
EL ARTE PRECOLOMBINO
El arte precolombino engloba las manifestaciones artísticas desarrolladas por los pueblos
americanos antes de la llegada de los españoles en 1492. El momento cultural y artístico
más importante de la América precolombina abarca desde el año 2000 a.C. hasta el 1500
d.C., y puede dividirse en tres grandes períodos: el preclásico, el clásico y el postclásico.
484
Menú i SALIR
ARTE
485
Menú i SALIR
EL PERÍODO CLÁSICO
486
Menú i SALIR
ARTE
El clasicismo maya
El pueblo maya es, junto con el azteca, el princi-
pal representante de las altas culturas en la zona
mesoamericana. Durante el período clásico, la ci-
vilización maya vivió el momento de mayor es-
plendor político y cultural, abarcando la penínsu-
la del Yucatán, Belice y Guatemala, con algunos
territorios de El Salvador y Honduras. La civiliza-
ción maya estaba organizada en ciudades-estado,
con centros ceremoniales y plazas
que constituían la zona monumen-
tal, con templos, palacios, altares y
juegos de pelota.
El edificio más importante es el
templo piramidal escalonado, coro-
nado con crestería o «peineta» en la
parte superior. Toda la decoración
estaba concentrada en el templo.
Una de las características más so-
bresalientes del clasicismo maya es
la adopción de una techumbre
construida con bóveda falsa o por
aproximación de hiladas. Los edifi-
cios más representativos de la arqui-
tectura maya clásica son el Templo
de las Inscripciones de Palenque, la
Acrópolis de Tikal y el «Cuadrángu-
Arriba, detalle de las pinturas que decoraban las lo de las Monjas» en Uxmal.
paredes de una tumba de Monte Albán (Museo En el campo escultórico, además de las magnífi-
Nacional de Antropología, México). Abajo, el campo cas decoraciones de los templos, destaca también
de juego de pelota de Palenque, en Chiapas (México).
el arte del relieve, en estelas, lápidas y dinteles,
decorados con jeroglíficos, figuras religiosas y
dor una serie de edificios sobre los que se iría edi- zoomorfas, como las estelas de Copán y Quiriguá.
ficando a través de los siglos, constituyendo un Sobresale asimismo el notable desarrollo de la
reducto inexpugnable en lo alto de la montaña. pintura, como se pone de manifiesto en el extra-
En un primer período, la cultura zapoteca estu- ordinario conjunto del Templo de las Pinturas de
vo dominada por la influencia teotihuacana, Bonampak, y hay que mencionar además la intro-
sobre todo en la cerámica, pero posteriormente ducción de la cerámica policromada.
desarrolló un arte propio. Entre los edificios
construidos por este pueblo sobresalen el Mon-
tículo de los Danzantes, cuyos muros presentan
lápidas de gran tamaño con grabados e inscrip-
ciones, y el Juego de Pelota, así como la necrópo-
lis, en la que se han hallado enterramientos con
espléndida decoración mural y valiosos ajuares,
destacando las urnas funerarias, verdaderas escul-
turas en barro cocido que parecen representar
divinidades o sacerdotes. El arte escultórico zapo-
teca ha dejado además espléndidas estelas con
relieves, como la Lápida Bazán, casi «barroca» en Vista de Tikal (Guatemala), uno de los conjuntos
su decoración, magníficas máscaras de jade, y monumentales más extensos del área maya, con la
códices de brillante colorido. Acrópolis sur, el templo I y la Acrópolis norte.
487
Menú i SALIR
488
Menú i SALIR
ARTE
EL PERÍODO POSTCLÁSICO
489
Menú i SALIR
490
Menú i SALIR
ARTE
la pintura mural y la escultura, que se limita a Si bien los artesanos incas se interesaron más
piezas de pequeñas dimensiones, realistas y de por el aspecto funcional de las piezas artísticas
magnífica factura. Destacan las intervenciones en que por la estética, lograron con el trabajo del
el Machu Picchu y algunos de los monumentos oro, la plata y el bronce magníficas piezas, y tam-
más importantes de Cuzco, como el Templo del bién en la cerámica, en la que cabe destacar el
Sol, la fortaleza de Sacsahuamán y el palacio de vaso tipo «kero», originario de la cultura tiahua-
Huayna Cápac. naca, profusamente decorado.
EL RENACIMIENTO
Entre los siglos XV y XVI triunfó en Europa un movimiento de renovación cultural y
artística, que se caracterizaría por la recuperación de la antigüedad grecorromana y por la
ruptura con la tradición estética medieval, a la que calificaba de «estilo de bárbaros».
EL HUMANISMO
491
Menú i SALIR
tura de su temática exclusivamente religiosa, y fa- que destaca el citado Alberti, cuya De re aedifica-
voreció la aparición de nuevos géneros, como el toria se convirtió en una referencia fundamental
retrato, el desnudo, la mitología y el paisaje, más para los arquitectos renacentistas.
acordes con los gustos de esta nueva clase social.
El hecho de que esta rinascita de la antigüedad El quattrocento
tuviera lugar en Italia no fue un hecho fortuito, El edificio renacentista es un espacio de dimen-
puesto que allí había pervivido la herencia clási- siones más humanas, a la medida del hombre, y
ca a lo largo de la Edad Media. Esta vuelta a la por esto la verticalidad del gótico dejó paso a una
antigüedad latina se inicia hacia 1420, con una arquitectura en la que predominan la horizontali-
primera fase temprana, el quattrocento, a la que dad y las líneas rectas. Esta recuperación del len-
sigue en 1500 el alto renacimiento o cinquecento. guaje clásico constructivo y decorativo supuso la
Mientras Italia desarrollaba el estilo renacentista, sustitución de la bóveda de crucería, el macizo pi-
en el resto de Europa floreció el gótico final, por lar gótico y el arco apuntado por los órdenes clási-
lo que en estos países el renacimiento surgió en cos, el arco de medio punto, columnas y pilastras,
contacto con el arte italiano, en torno a 1490- y un techo plano cubierto con casetones o bóve-
1500, cuando en Italia ya se habían realizado das de cañón, reservando la gran cúpula romana
prácticamente las obras más significativas del pe- semiesférica para los espacios centralizados. Las
ríodo. plantas buscan una simétrica y calculada perfec-
ción, con preferencia por la planta basilical y la
central, y un ambiente diáfano, opuesto a la colo-
LA ARQUITECTURA
Las formas racionales y geométricas inspiradas en el
A pesar de que no hubo una ruptura violenta con arte clásico dominan en la iglesia florentina de San
las formas arquitectónicas góticas, el renaci- Lorenzo.
miento supuso su sustitución por
un nuevo sistema constructivo, geo-
métrico y clásico, inspirado en la
antigüedad clásica: círculo, cuadra-
do, cubo y cilindro eran las formas
más adecuadas para la racionalidad
y regularidad de unos edificios que
buscaban la claridad de los motivos
y un espacio articulado armónica-
mente. Una arquitectura que se
basó en un sistema teórico racional,
en una belleza fundamentada en un
racionalismo matemático: «... en
una determinada concordancia sis-
temática de todas las partes entre sí
y con la totalidad, de manera que
no se puede añadir, quitar o alterar
nada en el contexto sin perjudicar-
la...», como escribía el teórico y ar-
quitecto Leon Battista Alberti.
El edificio renacentista se concibe, En sus inicios, Filippo
en efecto, como una repetición ar- Brunelleschi se enfrentó a un
moniosa y proporcionada de partes importante reto arquitectónico,
o de elementos que crean un espa- construir la cúpula de Santa
cio racional y simétrico. Esta visión Maria del Fiore de Florencia
que supo resolver de forma
renacentista de la arquitectura que- genial con un doble casco
da claramente establecida en la obra autoapoyado en un sistema de
de los tratadistas teóricos, entre los armadura interior.
492
Menú i SALIR
ARTE
493
Menú i SALIR
La arquitectura renacentista
en el resto de Europa
494
Menú i SALIR
ARTE
La última fase del renacimiento arquitectónico nes ideales, junto con un estudio científico de la
está representada en España por Juan de Herrera, anatomía.
quien hacia 1567 construyó el monasterio de El
Escorial por encargo de Felipe II. La sencillez for- La escultura renacentista
mal y la austeridad de El Escorial dieron origen al del quattrocento
llamado estilo herreriano, que fructificó también La aproximación al ideal artístico de la anti-
en la catedral de Valladolid, del propio Herrera, en güedad clásica fue también la meta de la escultu-
el Alcázar de Toledo, de Alonso de Covarrubias, y ra renacentista, que imitó a los artistas griegos y
en el proyecto y construcción de la ciudad de Ler- romanos no sólo en las formas monumentales
ma, debido a Francisco de Mora. y en la severidad y en la temática, sino también en
En Portugal la arquitectura renacentista siguió los materiales, mostrando una gran predilección
una evolución parecida a la de España, con una por el mármol y el bronce. La técnica de la fundi-
primera etapa dominada por el estilo manuelino, ción en bronce alcanzó en esta época una gran
que tiene muchos puntos de contacto con el pla- perfección, y las creaciones en mármol llegan a re-
teresco, y una segunda etapa en la que predominó presentar la paradigma del refinamiento. Se apre-
el purismo de las formas italianas. El estilo ma- ciaron los materiales nobles, pero también con
nuelino, del que existen en el país muchas más otros más pobres, como el barro cocido, pintado o
muestras que del renacimiento puro, tuvo su obra vidriado, obtuvieron los artistas renacentistas be-
culminante con el Monasterio de los Jerónimos, llos efectos. La máxima preocupación del escultor
del barrio lisboeta de Belem. renacentista fue la perfecta expresión de las pro-
A la América española, el renacimiento arqui- porciones y de la anatomía del cuerpo humano,
tectónico llegó en la segunda mitad del siglo XVI, estudiadas particularmente en los desnudos. Esta
cuando se inició la construcción de las grandes preocupación llevó al establecimiento de un ca-
catedrales: la de Santo Domingo, en estilo plate- non que situaba el cuerpo perfecto en una medida
resco, y las de Nuevo México, Puebla, Lima y de entre 9 y 10 cabezas. En consonancia con estos
Cuzco, en estilo purista. ideales, los escultores se decantaron por la escul-
tura de bulto redondo, aunque también cultivaron
el relieve en las figuras para sepulturas, en bustos
LAS ARTES FIGURATIVAS y medallones, y realizaron asimismo figuras ecues-
tres y sepulcros monumentales.
La escultura y la pintura renacentistas represen- Al igual que en la arquitectura, Florencia fue el
tan también una clara ruptura con la tradición del centro de la escultura del primer renacimiento. El
gótico final, todavía pletórica de fuerzas en el primer escultor plenamente renacentista fue Lo-
siglo XV, a través del gótico internacional. Mito- renzo Ghiberti, quien en 1402 ganó el concurso
logía, historia sagrada, temas astrológicos y esoté- para la realización de la segunda puerta del bap-
ricos e inspiración humanista configuran la temá- tisterio, obra todavía gótica, pero cuyas figuras
tica más apreciada por los pintores renacentistas. muestran una perfección anatómica que preludia
A su vez, la afirmación del hombre como centro ya el renacimiento. Al mismo autor se debe la ter-
del universo dio lugar a la cera puerta del baptisterio,
aparición de nuevos géne- llamada puerta del Paraíso,
ros artísticos, como el retra- realizada entre 1425 y
to, el monumento ecuestre 1452, que constituye una
y el sepulcro, así como al obra cumbre del nuevo es-
abandono de las convencio- tilo: en el interior de diez
nes en la representación del grandes rectángulos se de-
espacio sagrado. El estudio sarrollan otras tantas esce-
del hombre se concreta, por nas concebidas según las
tanto, en una gran preocu-
pación por una representa-
Detalle de la Puerta del
ción objetiva, fundamenta- Paraíso de Lorenzo Ghiberti,
da en las leyes de la con escenas de la vida de
perspectiva y las proporcio- José.
495
Menú i SALIR
496
Menú i SALIR
ARTE
en los monumentos sepulcrales, en los que se blo de San Benito (Museo Nacional de Escultura,
empleó el mármol, el alabastro o el bronce. En Valladolid), y Juan de Juni, a quien se deben el
España, las primeras esculturas plenamente rena- Santo Entierro del Museo de Valladolid, la Piedad
centistas fueron obra de artistas italianos, como de la catedral de Segovia y la Virgen de los Cuchi-
Domenico Fancelli, autor del sepulcro de los Re- llos de la iglesia de las Angustias de Valladolid. En
yes Católicos en la Capilla Real de Granada. Tam- Aragón y Cataluña, el principal escultor renacen-
bién desarrollaron la mayor parte de su carrera en tista fue Damián Forment, de cuyo cincel salie-
España Jacobo Florentino, Pietro Torrigiani, a ron los retablos del altar mayor de la basílica del
quien se debe una famosa estatua de San Jeróni- Pilar, de la catedral de Huesca, del monasterio de
mo, y los Leoni, que trabajaron en El Escorial, Poblet y de la catedral de Santo Domingo de la
particularmente en la realización de los cenotafios Calzada.
de Carlos V y Felipe II. Junto a éstos, hay que
mencionar al francés Felipe Vigarny, autor del La pintura renacentista
retablo de la Capilla Real del Granada y de parte La pintura cuatrocentista parte formalmente de la
de la sillería alta del coro de la catedral de Toledo, reacción contra el gótico internacional, propo-
además del retablo de la capilla del Condestable, niendo una evocación de la antigüedad, unida a
en la catedral de Burgos, realizado en colabora- la observación de la naturaleza y un dominio de
ción con el español Diego de Siloé. Otras figuras la perspectiva y la proporción que permite la re-
destacadas fueron Vasco de la Zarza, autor del se- presentación de la realidad.
pulcro de El Tostado, en la catedral de Ávila, y Dos fueron son los aspectos que más
Bartolomé Ordóñez, al que se deben los relieves contribuyeron a la gran revolución de la
del trascoro de la catedral de Barcelona y los se- plástica que tuvo lugar durante el quat-
pulcros de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, en trocento: el uso generalizado de la
la Capilla Real de Granada. Por el mayor drama- perspectiva lineal, desconocida
tismo de sus figuras y la importancia que conce-
den al movimiento, se puede considerar ya San Sebastián de Alonso
manierista la obra de dos grandes persona- de Berruguete (Museo
lidades artísticas de la época: Alonso de Nacional de Bellas Artes,
Valladolid).
Berruguete, autor, entre otras mu-
chas creaciones, del reta-
497
Menú i SALIR
hasta entonces, y un afán de veracidad que se tra- En la primera mitad del quattrocento fueron es-
dujo en la reproducción exacta de la realidad. De pecialmente apreciadas las formas monumentales,
la combinación de estos dos factores nació una la sobriedad expresiva y el empleo de la perspecti-
pintura radicalmente nueva, realizada principal- va, aunque algunos pintores presentan reminis-
mente al temple y sobre tabla, en la que empezó a cencias del gótico internacional en el cromatismo
aparecer habitualmente el paisaje como tema de vivo, incluyendo aún oro en sus pinturas, y en las
fondo, y que además no se limitaba ya a la temáti- líneas refinadas, mientras que en la segunda mitad
ca religiosa, sino que cultivó también el retrato, se prefirió el dinamismo a la monumentalidad,
buscando la individualidad del personaje, el gé- con introducción de elementos cotidianos. A par-
nero mitológico y la alegoría. En este sentido, hay tir del siglo XV, el dominio de las formas sería casi
que señalar la desaparición casi total de los reta- perfecto, y se alcanzaron niveles magistrales en los
blos, predominantes durante el gótico, y su susti- efectos de profundidad y la representación del
tución por el cuadro de caballete, sin olvidar la movimiento, logros todos ellos que se asocian con
pintura al fresco, que dio creaciones magistrales esta nueva etapa de la historia del arte.
en este período. El quattrocento fue el siglo en el que florecieron
dos artistas geniales de distinta significación: Fra
La pintura del quattrocento Angélico, con una obra personal que intenta con-
Durante el quattrocento, los pintores actuaron en ciliar elementos del lenguaje gótico, como la
efecto en un doble frente: la pintura al fresco y la idealizada temática religiosa, con la utilización de
pintura de caballete, primero ésta con la técnica formas decorativas y arquitectónicas clásicas, así
del temple y, a partir de la segunda mitad del si- como con un sobrio uso de la perspectiva (siendo
glo, al óleo. Durante la primera mitad del siglo, se esta transición entre la tradición del gótico inter-
sentaron las bases del nuevo sistema de represen- nacional y el nuevo lenguaje especialmente evi-
tación visual de la perspectiva, y a partir de la se- dente en las pinturas realizadas al fresco en las
gunda mitad, se avanzó en el desarrollo de la ana- celdas del convento de San Marcos, en Florencia);
tomía, en la plasmación del movimiento y en el y Masaccio, creador de un nuevo lenguaje que
establecimiento de cánones de proporción basado rompió con la tradición gótica, poderoso y monu-
en el cuerpo humano. La temática es sobre todo mental, en el que destacan el nuevo realismo de
religiosa, mitológica y profana, y en ocasiones se las figuras y la nueva manera de entender la re-
realizan grandes composiciones alegóricas y mito- presentación pictórica, patentes ya en los frescos
lógicas, con la introducción de arquitecturas y
paisajes, frecuentemente con elementos decorati-
vos clásicos, interesados los artistas renacentistas
en una representación realista y un minucioso es-
tudio psicológico de los personajes.
498
Menú i SALIR
ARTE
499
Menú i SALIR
500
Menú i SALIR
ARTE
gran popularidad, y Juan de Borgoña, que firma gura cumbre del renacimiento español: Doméni-
las hermosas pinturas murales de la sala capitular kos Theotokópulos, llamado El Greco, que pese a
de la catedral de Toledo. El retrato cortesano, in- su origen cretense desarrolló toda su carrera en
troducido en España por el holandés Antonio España. Pintor fecundo, fue en realidad un expo-
Moro, fue cultivado con gran acierto por Alonso nente del manierismo, tanto por el alargamiento
Sánchez Coello y Juan Pantoja de la Cruz. Por de las figuras y el uso de colores fríos, como por
encima de todos ellos, brilla con luz propia la fi- su intensa espiritualidad.
EL MANIERISMO
La crisis social, económica y religiosa suscitada por la Reforma y el saqueo de Roma
planteó paralelamente una crisis de valores en el arte italiano. El arte clásico se mostró
incapaz de expresar la nueva situación, y los artistas empiezan a cuestionar sus
posibilidades y a buscar nuevas formas de expresión artística basadas
en la libertad de creación.
501
Menú i SALIR
LA CONTRARREFORMA
502
Menú i SALIR
ARTE
EL BARROCO
La diversidad y la riqueza que caracterizan el arte barroco, movimiento que ocupó el
panorama artístico del siglo XVII y principios del XVIII, se explican por la confluencia entre
la evolución artística y la particular situación social y política de las naciones europeas.
503
Menú i SALIR
presencia de elementos clásicos dispuestos de for- lador, en el que los lugares principales eran seña-
ma poco ortodoxa, y la introducción de la colum- lados por medio de obeliscos y fuentes, en plazas
na salomónica. En el exterior, las fachadas buscan bellamente ornamentadas.
la integración con el conjunto urbano, y se articu-
lan en una fuerte plasticidad con sus curvas, ni- Italia
chos, entablamentos, frontones rotos, remates El barroco romano alcanzó su máximo apogeo
mixtilíneos, columnas y pilastras que producen entre 1630 y 1670, de la mano de tres grandes ar-
movimientos cóncavo-convexos de gran dina- quitectos, Gian Lorenzo Bernini, Pietro da Corto-
mismo. na y Francesco Borromini. Bernini, arquitecto,
El palacio noble es el edificio más representati- escultor y pintor, siguió utilizando los elementos
vo de la arquitectura civil barroca. En Italia, es un clásicos en toda su pureza, aunque con mayor
espacio cerrado organizado en torno al cortile, el fuerza y contraste, en obras como la columnata
patio, del que arranca la majestuosa escalera prin- de la plaza de San Pedro del Vaticano, la iglesia de
cipal y que concentra la atención en la planta Sant'Andrea al Quirinale o la fachada del Palacio
noble, donde se desarrolla la vida social. Las fa- Barberini. Por su parte, Pietro da Cortona se inte-
chadas, como en la arquitectura religiosa, son di- resó principalmente por la utilización de elemen-
námicas y resaltan los salones principales. En tos plásticos que modelasen el espacio, en extra-
Francia, adquirió importancia el palacete urbano ordinarias fachadas como la de la iglesia de Santa
(hôtel), y en la tipología del castillo se sustituyó el Maria della Pace. Borromini, en cambio, dotado
patio por una cour d'honneur abierta. Los jardines, de una fantasía desbordante, rompió con las re-
que sirven de marco al palacio y
como lugar de recreo, son la imagen
de una naturaleza racionalizada por
la mano del hombre, con paseos y
caminos que conducen hasta mag-
níficas fuentes monumentales y es-
tanques.
Las plazas son uno de los elemen-
tos más importantes del urbanismo
barroco, como reflejo del poder civil
o religioso. Punto de referencia para
el trazado de las calles, se articulan
en torno a un edificio principal, or-
namentadas con estatuas, monu-
mentos, obeliscos, arcos o fuentes.
Roma sería objeto de un plan regu-
Planta de la
basílica y
columnata de la
plaza de San
Pedro del
Vaticano.
504
Menú i SALIR
ARTE
505
Menú i SALIR
506
Menú i SALIR
ARTE
507
Menú i SALIR
508
Menú i SALIR
ARTE
por tanto al realismo, incluso a la crudeza del es- tura de vanitas, que advertía sobre la vanidad de
tudio anatómico, y este afán llevó a la utilización los bienes terrenales.
de lágrimas de cristal, cabellos auténticos y telas En la pintura barroca cobró también especial
verdaderas en las imágenes de vestir. La iconogra- importancia una temática burguesa con escenas
fía creó nuevos modelos, como la Inmaculada de género e interior, bodegones y floreros, ade-
Concepción, e incorporó nuevos santos, como más de paisajes, marinas y vistas urbanas y arqui-
santa Teresa, san Francisco de Borja o san Ignacio tectónicas, especialmente en el arte holandés. El
de Loyola, exaltándose también los temas relacio- retrato, individual, de familia, de grupo o autorre-
nados con los sacramentos, la Dolorosa o el Ecce trato, expresaba la autoafirmación de la burgue-
Homo. A comienzos del siglo XVII, se distinguían sía, y asimismo el poder, en el caso de la nobleza
dos escuelas escultóricas: el barroco castellano, y los monarcas.
con una imaginería espectacular, expresiva y rea-
lista, caracterizada por un patetismo expresado de La pintura barroca italiana
forma hiriente, cuya figura central sería Gregorio En Italia surgieron dos de las corrientes funda-
Fernández, y el barroco andaluz, más sosegado y mentales de la pintura barroca, el naturalismo y el
amable, con una belleza más formal, representado clasicismo, nacidas como rechazo a las formas ca-
por los escultores Juan Martínez Montañés, prichosas e intelectuales del manierismo, y repre-
Alonso Cano, Juan de Mesa y Pedro de Mena. sentadas por dos artistas geniales, Caravaggio y
Annibale Carracci.
El naturalismo. La Contrarreforma recomendó
LA PINTURA un arte sencillo, comprensible, con una interpre-
tación realista del hecho religioso que estimulara
La pintura adquirió durante el barroco un esplen- la piedad y la sensibilidad de los fieles. El arte de
dor sin precedentes, tanto en Italia, donde se ini- Caravaggio iba a representar una verdadera revo-
ció con el naturalismo romano y, en círculos más lución, al romper con el ideal de belleza renacen-
cultos, con el clasicismo, para culminar con las tista: los modelos de Caravaggio para los persona-
apoteosis decorativas típicamente barrocas, como jes bíblicos serían gente del pueblo, con toda su
en el resto de Europa, con humanidad, sus defectos,
escuelas nacionales e indi- su fealdad, representados
vidualidades de una calidad con un realismo brutal y
pocas veces igualada. descarnado que permitía a
La popularización de los los creyentes reconocerse
valores de la Contrarre- en el hecho religioso. Cara-
forma y la afirmación de los vaggio iba a utilizar un re-
dogmas cristianos determi- curso que haría fortuna y
naron la aparición de una que tendría un papel funda-
nueva iconografía que se mental en su producción, el
desarrolló en complejos tenebrismo, consistente en
programas iconográficos: la situar a los personajes y los
vida de Cristo y de los san- objetos sobre un fondo os-
tos, la temática mariana, la curo, pero iluminados por
caridad y los sacramentos una luz violenta para crear
de la Eucaristía, éxtasis y
visiones ocuparon reta-
El entierro de Cristo,
blos de gran tamaño, y a (Pinacoteca Vaticana, Roma)
partir de mediados del si- es un auténtico manifiesto
glo XVII, grandes apoteosis de la renovación pictórica
pintadas al fresco en bóve- propuesta por Caravaggio,
das y cúpulas. Como con- con sus modelos tomados
del pueblo, las figuras
trapunto a esta glorificación situadas en primer plano, y
de la fe y de la iglesia, apa- los rotundos efectos de
recieron temas como la pin- claroscuro.
509
Menú i SALIR
focos de atención. Es una luz artificial y dirigida, Reni, Domenichino, Guercino y, en Francia,
que se convierte en elemento definidor de la com- Poussin y Claudio Lorena.
posición. Otros recursos son los escorzos violen- El pleno barroco. Esta corriente decorativa y
tos y la adopción de un punto de vista muy bajo, elegante, llena de libertad, ocupó prácticamente
como si la escena fuese contemplada por una per- la segunda mitad del siglo. En el pleno barroco
sona tumbada en el suelo. Seguidores de Caravag- predomina el color sobre el dibujo, el cromatismo
gio fueron Orazio y Artemisia Gentileschi, Carrac- cálido, el efecto de conjunto sobre las partes, con
ciolo, Saraceni y el español José de Ribera. composiciones asimétricas e ilusionistas que se
El clasicismo barroco. En Bolonia surgió la co- plasman en arquitecturas fingidas, escorzos, for-
rriente del clasicismo barroco, que combinó la mas dinámicas y curvas. Las grandes decoracio-
fuerza clásica con la observación realista, el nes de Giovanni Lanfranco, llenas de luz, color y
monumentalismo del alto renacimiento con la ca- movimiento, anuncian ya el pleno barroco, prota-
lidez veneciana, en una suerte de naturalismo gonizado por Pietro da Cortona (frescos del Pala-
idealizado y sereno. En torno a los hermanos cio Barberini), el padre Andrea Pozzo (cúpula de
Agostino y Annibale Carracci y su primo Ludo- la iglesia de San Ignacio de Roma) y Luca Giorda-
vico, se forma un foco artístico que propugnaba no, que resume la pintura decorativa de todo el
un arte más idealizado y sereno, basado en com- siglo XVII en sus espectaculares composiciones
posiciones equilibradas, el predominio del dibujo para iglesias y palacios.
y una iluminación fría. Es realista
frente al manierismo, pero idealiza-
do en comparación con el naturalis-
mo caravaggesco. Fueron numero-
sos los discípulos de la academia de
los Carracci, entre ellos Guido
510
Menú i SALIR
ARTE
511
Menú i SALIR
y Jacob Jordaens. En la temática de género, pin- géneros como Jacob Ruisdael, Adriaen van Osta-
tores costumbristas como Cornelis de Vos, David de, Paulus Potter, Hobbema y Pieter Saenredam.
Teniers el Joven y Frans Snyders se especializaron
en temas como el bodegón, la fiesta aldeana, la ta-
berna o escenas campesinas. EL SIGLO DE ORO ESPAÑOL
El protestantismo y la sociedad burguesa mar-
caron profundamente la actividad artística de Ho- La pintura fue la manifestación más notable del
landa, dando lugar a la tendencia del realismo barroco español, con una importancia sin prece-
barroco, reflejo de una sociedad cuyos valores no dentes por el número de artistas y la categoría de
eran la religión sino la posición social conquista- los mismos. La temática es fundamentalmente de-
da a través del trabajo y el dinero. Al sentimiento vota, puesto que incluso los bodegones adquieren
grandilocuente y espectacular del mundo católi- connotaciones simbólicas de tipo religioso, y la
co, el barroco holandés contrapone un arte inti- pintura profana, mitológica y de género, se limita
mista, de temática realista, con cuadros de peque- al círculo cortesano. Aunque el punto de partida
ñas dimensiones aptos para la decoración de las fue el arte de Caravaggio, que pervivió en la asun-
casas: escenas de interiores domésticos, paisajes, ción de formas realistas a lo largo de todo el siglo,
bodegones, retratos, pinturas de
animales, etc. Los artistas holande-
ses se inspiraron en la realidad para
sus obras, reproduciéndola con la
mayor fidelidad y detalle, en magní-
ficos juegos de color y de luz. Cobró
especial importancia el retrato de
grupo, como retrato colectivo
de corporaciones médicas o de sín-
dicos, y también el retrato indivi-
dual, ambos extraordinariamente
vivos y realistas, alejados de los re-
tratos cortesanos o de aparato.
Rembrandt representa la culmina-
ción de la pintura barroca holande-
sa, con un especial tratamiento de la
luz que define el espacio y crea una
atmósfera que matiza las formas, y
el profundo estudio psicológico de
sus personajes. Destacan asimismo La Venus del espejo
el genial Vermeer, exponente de la (National Gallery,
pintura de ambiente intimista, y Londres) de Diego
Velázquez es uno de
Frans Hals, con sus cuadros de los pocos desnudos
ambientación popular y tabernas. femeninos del
También Holanda tuvo sus pintores barroco español.
menores especializados en distintos
512
Menú i SALIR
ARTE
la pintura barroca española presenta algunos ras- de los valores de la Contrarreforma, Murillo
gos estilísticos propios, como la sencillez en la y Valdés Leal, el primero con una producción
composición, el predominio de una cierta huma- sensible y algo almibarada, mientras que el se-
nidad, un equilibrado naturalismo y la ausencia gundo inclinado por una temática de acusado
de sensualidad. pesimismo.
La primera mitad del siglo estuvo dominada
por este naturalismo tenebrista, que adoptaron el
bodegonista Juan Sánchez Cotán, Francisco Ri- LA PINTURA BARROCA AMERICANA
balta, José de Ribera, Francisco Zurbarán, Alon-
so Cano y Diego Velázquez, uno de los genios de Durante el siglo XVI, se establecieron en América
la pintura universal, a caballo entre el realismo pintores procedentes de Europa que importaron
de esta primera mitad de siglo y el barroquismo modelos propios, aunque siempre con un marca-
posterior. El barroco de la segunda mitad del siglo do carácter popular, como Alonso Vázquez y
debe mucho al modelo pictórico flamenco, fundi- Alonso López de Herrera, en México, y Angelino
do con la influencia veneciana. Es un barroco Medoro, en Perú. A mediados del siglo XVII, la
decorativo y teatral, que se plasma en la extraor- pintura hispanoamericana acusaba la influencia
dinaria riqueza cromática y compositiva de las del tenebrismo sevillano, como puede observarse
decoraciones al fresco de los artistas de la escuela en la obra del mexicano José Juárez y el boliviano
madrileña Juan Carreño de Miranda, Claudio Melchor Pérez. Posteriormente, los artistas ameri-
Coello, Herrera el Mozo, fray Rizzi y Francisco canos evolucionarían hacia un barroco más blan-
Rizzi. En la escuela andaluza, la evolución hacia do y sentimental, influido por la obra de Murillo,
el pleno barroco estaría marcada por dos persona- patente en la obra del mexicano Juan Rodríguez
lidades contrapuestas, aunque ambas al servicio Juárez y el colombiano Gregorio Vázquez de Arce.
ROCOCÓ Y NEOCLASICISMO
El siglo XVIII fue un siglo de grandes cambios a todos los niveles. Un siglo que se inició con
las monarquías absolutas y finalizó con la Revolución francesa. La progresión de la
burguesía iba a producir un distanciamiento entre dos clases dominantes, burguesía y
nobleza, y paralelamente una clara contraposición en el gusto artístico. En el siglo XVIII
iban a convivir, por tanto, dos polos opuestos: el rococó, un arte aristocrático y cortesano,
lleno de fantasía y refinamiento, que se apegaba a un mundo ya caduco, y el neoclasicismo,
un lenguaje más acorde con la nueva sociedad burguesa, que plasmó sus ideales de orden,
claridad y razón.
513
Menú i SALIR
Los más brillantes representantes de la arqui- manes serían los mejores exponentes de esta co-
tectura rococó fueron el arquitecto Jacques Ga- rriente, con sus palacios, jardines con singulares
briel, artífice del bello palacete de Versalles co- juegos de agua, escaleras, balaustradas e interio-
nocido como Petit Trianon, deslumbrante de gra- res profusamente decorados con estucos y frescos
cia y delicadeza, y los decoradores Oppenord y que creaban una atmósfera vibrante de luz y co-
Meissonnier. lor. También los interiores de las iglesias serían
Las artes menores y decorativas cobraron con el objeto de una profusa decoración en estucos y
nuevo estilo una importancia singular, y también dorados, que contribuían a la disolución de los
la pintura de esta época encontró su espacio en muros en la luz y el color. En Baviera, François
estos ambientes preciosistas, con una temática ga- Cuvillies trabajó en la decoración del palacio de
lante y amorosa, adecuada a una sociedad frívola Nymphenburg y su parque (con el pabellón
y sensual. Los principales representantes de la de Amalienburg) y del Teatro de la Residenz de
pintura de las fêtes galantes fueron Antoine Wat- Munich, y en Prusia se distinguió G. W. von Kno-
teau, con escenas campestres y escenas musicales belsdorff, autor del palacio de Sans-Souci en
que se desarrollan en ambientes bucólicos e idíli- Potsdam, inspirado en el Trianon francés. Otros
cos, plasmados con pinceladas vaporosas y di- artistas destacados del momento fueron Baltasar
sueltas; François Boucher, con una pintura más Neumann, que creó algunas de las obras más be-
sensual, generalmente mujeres desnudas y esce- llas del estilo rococó alemán, como la residencia
nas sofisticadas y delicadas, y Jean-Honoré Fra- del Obispo Elector de Würzburgo, decorada con
gonard. Paralelamente, surgió una corriente de frescos de Tiepolo, y la iglesia de Vierzehnheiligen,
tono realista e íntimo protagonizada por pintores Dominikus Zimmermann, autor del santuario de
como Greuze, con una obra de tono sentimental Wies, los hermanos Asam y Johann Michael Fis-
y moralizante. Destacaron asimismo los retratistas cher, autor de santuarios bellísimos, como la igle-
de la aristocracia, principalmente Quentin de la sia de Ottobeuren.
Tour y Chardin. La pintura rococó italiana estuvo dominada por
la escuela napolitana, con Francesco Solimena y
El resto de Europa sus discípulos, Giaquinto y Jacopo Amignoni, y la
Fuera de Francia, el influjo del rococó se dejó escuela veneciana, con Tiepolo, genial represen-
sentir con desigual intensidad, pero terminó por tante de la tradición decorativa con frescos llenos
imponerse en las pequeñas cortes europeas, sobre de escorzos y vibrante cromatismo. En este perío-
todo en Europa Central. Baviera y los estados ale- do destaca asimismo la aparición de los grandes
514
Menú i SALIR
ARTE
515
Menú i SALIR
516
Menú i SALIR
ARTE
EL SIGLO XIX:
LA EVOLUCIÓN DE LAS
ARTES PLÁSTICAS HASTA
EL IMPRESIONISMO
Durante la primera mitad del siglo XIX, el arte, y en especial la pintura y la escultura, no
serían ajenos a los grandes acontecimientos históricos y las grandes transformaciones
industriales que estaban afectando profundamente a la sociedad europea.
517
Menú i SALIR
518
Menú i SALIR
ARTE
EL REALISMO
519
Menú i SALIR
520
Menú i SALIR
ARTE
EL IMPRESIONISMO
Y EL POSTIMPRESIONISMO
La industrialización, los avances científicos en el campo de la percepción visual, la
fotografía y los nuevos materiales iban a tener consecuencias decisivas en la concepción de
la realidad y de la naturaleza, y este cambio afectaría de manera definitiva al arte. Ante
este mundo cambiante, el arte tomaría dos caminos básicos: el simbolismo, final del ciclo
pictórico iniciado en el renacimiento, y el impresionismo, que daría origen a las conquistas
pictóricas del arte contemporáneo.
EL IMPRESIONISMO
521
Menú i SALIR
522
Menú i SALIR
ARTE
a la acuarela. Las gamas cromáticas son más sua- pero con una ejecución geométrica y construida
ves, luminosas, reservando para las sombras, que que nada tiene que ver con la inmediatez percep-
dejan de ser oscuras, los tonos complementarios, tiva de los impresionistas. En realidad, Seurat se
y con esto desaparecen los contrastes de claroscu- alejaba de los impresionistas en algo más que en
ro y la primacía del dibujo y la línea. el enfoque científico, ya que su obra adquirió una
gravedad más cercana a la tradición
clásica que a la inmediatez del im-
presionismo. Otros seguidores del
divisionismo o puntillismo fueron
Paul Signac, que sustituyó los pe-
queños puntos por pinceladas más
amplias, y Camille Pissarro.
EL POSTIMPRESIONISMO
523
Menú i SALIR
524
Menú i SALIR
ARTE
LA ARQUITECTURA
DEL SIGLO XIX
El siglo XIX fue, desde el punto de vista arquitectónico, un siglo contradictorio y ecléctico,
que no puede resumirse en términos de evolución formal a causa de las múltiples
tendencias coetáneas. Un siglo en el que se dieron cita las evocaciones historicistas, la
torre Eiffel y las primeras propuestas del urbanismo utópico y moderno. No obstante, se
observan dos grandes líneas, la arquitectura artística y la arquitectura de ingeniería que
intenta dar respuestas a las necesidades y problemas de la nueva sociedad industrial.
LA ARQUITECTURA
HISTORICISTA LA ARQUITECTURA
DEL HIERRO
La arquitectura historicista
iba a continuar la línea ini- Las nuevas necesidades de
ciada a fines del siglo XVIII la sociedad industrial
de recuperación de los ele- tendrían una influencia de-
mentos de la tradición na- cisiva en el sector de la
cional arquitectónica, de construcción y en la arqui-
acuerdo con ciertas necesi- tectura. El aumento de la
dades simbólicas o utilita- demanda en la edilicia, jun-
rias del edificio. De este to a los problemas de esca-
modo, la arquitectura neo- sez de suelo urbanizable y
rromántica o la arquitectu- el uso de nuevos materiales
ra neogótica, por sus com- y técnicas exigían respues-
ponentes de exaltación tas que encontrarían solu-
espiritual, serían más ade- ción en la combinación de
cuadas para la edificación la imaginación del arqui-
de nuevas iglesias, mientras tecto con la tecnología in-
dustrial y la ingeniería.
En las últimas décadas
Los avances técnicos del del siglo XVIII se erigieron
siglo XIX permitieron levantar las primeras grandes cons-
obras de increíble audacia y
originalidad, basadas en trucciones públicas e in-
estructuras de hierro colado dustriales en hierro colado,
como la torre Eiffel de París. como el célebre puente so-
525
Menú i SALIR
bre el río Severn, en Inglaterra (1777), o la escale- El incendio que en 1871 sufrió Chicago obligó
ra de acceso a la Gran Galería del museo del a reconstruir gran parte de la ciudad, y un gru-
Louvre, que Germain Soufflot cubrió con hierro po de arquitectos, integrantes de la llamada Es-
(1779-1781). No obstante, cuando se utilizaba cuela de Chicago, planteó soluciones alternativas
este material en el interior de los edificios, por que combinaban estética, técnica y arquitectura, y
ejemplo, en las columnas, se decoraba y recubría que tuvieron su precedente en la obra de Henry
exteriormente imitando las formas tradicionales. Hobson Richardson. El desafío de la ciudad
A mediados de siglo se llevaron a cabo aplicacio- moderna se resolvía de este modo con un plantea-
nes más técnicas, en obras que ya no ocultaban el miento arquitectónicamente más racional y uni-
empleo de los nuevos materiales; de este modo, forme, mediante construcciones levantadas gra-
se levantaron edificios construidos totalmente en cias a poderosas estructuras internas en hierro,
hierro, como la Biblioteca Nacional de París, obra que permitían sustituir los espesos muros exterio-
de Henri Labrouste. El impulso definitivo para la res por grandes ventanas y crear un espacio inte-
utilización sistemática de los nuevos materiales rior más luminoso y más amplio. Miembros de la
llegaría, sin embargo, con las grandes exposicio- Escuela de Chicago fueron los arquitectos William
nes universales. Obras representativas de estos Le Baron Jenney, autor del Home Insurance Buil-
certámenes son el Palacio de Cristal de Joseph ding de Chicago, Daniel H. Burnham y John
Paxton, construido para la Exposición de Londres Wellboern Root, entre otros, aunque fue Louis
de 1851, la Galería de las Máquinas, de Louis Du- Henry Sullivan quien profundizó y desarrolló el
tert y Contamin, y el paradigma de la arquitectu- nuevo estilo con edificios rigurosamente raciona-
ra en hierro, la célebre torre Eiffel, levantada con listas, como el Guaranty Building de Buffalo.
motivo de la Exposición de París del año 1889.
EL MODERNISMO
LA ESCUELA DE CHICAGO
Entre 1890 y 1910 surgió en Europa el llamado
En Estados Unidos, el espectacular crecimiento modernismo, estilo artístico que abogaba por una
de las ciudades, con núcleos de negocios centrali- integración decorativa de todas las artes. Fue un
zados, llevó a la necesidad de construir en altura movimiento complejo, que se manifestó en todos
para rentabilizar los terrenos y facilitar los servi- los ámbitos, desde las artes decorativas al mobi-
cios. El desarrollo de los ascensores y de las es- liario y la arquitectura, como reflejo de la burgue-
tructuras metálicas permitió superponer diversos sía moderna y refinada de fines de siglo, optimis-
pisos y contribuyó a la aparición del rascacielos: ta ante los avances industriales pero que exigía
nació así la nueva arquitectura utilitaria que ha- formas más elegantes y de mayor calidad.
bría de dominar el siglo XX.
La arquitectura y las artes aplicadas
A pesar de tener concreciones diversas según los
países, y denominaciones también diversas (art
nouveau, en Francia; jugendstil, en Alemania;
sezessionstil, en Austria; liberty, en Italia; moder-
nismo, en España; modern style, en Gran Breta-
ña), el modernismo presenta algunos rasgos
comunes, principalmente el hecho de intentar au-
nar lo útil y lo bello, la artesanía y la industria, así
como el extraordinario desarrollo de las artes me-
nores. En Francia, Bélgica y España, los edificios
modernistas están concebidos como seres vivos,
con plantas absolutamente libres y superficies on-
526
Menú i SALIR
ARTE
duladas y de líneas sinuosas, en las que se abren vidad de las formas abstractas y regulares. Está re-
miradores y balcones, y proliferan bellos motivos presentado básicamente por el arquitecto escocés
decorativos florales y curvos realizados con mate- Charles Rennie Mackintosh, quien proyectó la
riales diversos, como cerámicas, vidrios, hierros Escuela de Arte de Glasgow, y los austríacos Otto
forjados y maderas. Este modernismo encontró Wagner (Caja Postal de Viena), Joseph Maria Ol-
sus mejores representantes en Gaudí, artífice de la brich (edificio de la Secesión vienesa) y Josef
Pedrera o la Casa Batlló, en Barcelona, Domènech Hoffman (Palacio Stoclet, Bruselas), cuya arqui-
i Montaner (Palau de la Música Catalana, Barcelo- tectura depurada y sobria anunciaba la arquitectu-
na), Victor Horta, que proyectó en Bruselas la ra racionalista alemana de los años veinte.
Casa Tassel y la Casa Solvay, Henry van de Velde y Diseño, joyería, cartelismo, mobiliario y otras
Hector Guimard, autor este último de las estacio- actividades artísticas adquieren también con el
nes del metro de París. En Gran Bretaña y, sobre modernismo un desarrollo extraordinario. Des-
todo, en Austria, triunfó un modernismo más ri- tacan en este sentido los diseños de muebles y
guroso, basado en la perfección matemática, la lí- cristales de Emile Gallé, las joyas de René Lalique
nea recta, la ornamentación geométrica y la objeti- y Luis Masriera y los carteles de Alfons Mucha.
527
Menú i SALIR
tinto signo, e incluso en algunos momentos se postimpresionismo e incluso del simbolismo. Los
produjo una total identificación entre arte y revo- paisajes, retratos e interiores con naturalezas
lución. El arte pasó a ser, por tanto, instrumento muertas se caracterizan por una avanzada utiliza-
de representación, pero también campo de inves- ción del cromatismo. Así, el color, principalmente
tigación formal y manifestación de las ideas y sen- colores primarios y complementarios en fuertes
timientos del artista. contrastes, se independizó del objeto, con un uso
El término vanguardia se utilizará a partir de arbitrario respecto a la naturaleza: rostros verdes,
este momento para definir las diferentes tenden- ríos amarillos, árboles rojos, de formas simplifica-
cias artísticas que se irán sucediendo y que, en- das y con contornos perfilados mediante pincela-
frentadas a situaciones establecidas, provocarán das amplias. Los fauvistas no buscaban copiar la
rupturas. El panorama artístico de estas primeras realidad, sino dar una expresión más verdadera a
décadas del siglo se resume, de hecho, como un la obra a través del cromatismo.
complejo entramado de movimientos, en cons-
tante interrelación, que surgen de forma coetánea
en distintos lugares de Europa. EL EXPRESIONISMO
528
Menú i SALIR
ARTE
529
Menú i SALIR
530
Menú i SALIR
ARTE
EL DADAÍSMO
531
Menú i SALIR
532
Menú i SALIR
ARTE
tros aprisionados en una estructura de líneas ho- dinamismo, como las de El Lissitzky, Malévich y
rizontales y verticales. El grupo De Stijl dejó de Melkínov (autor del Pabellón Soviético, para la
trabajar hacia 1928, cuando Theo van Doesburg Exposición de Artes Decorativas de París de
empezó a introducir variantes, como la línea dia- 1925), y una configuración urbanística en la que
gonal, para crear mayor dinamismo en sus obras. las formas estéticas de edificios y barrios expresa-
Probablemente, fue en la arquitectura y el diseño ban el avance dinámico de la Revolución.
donde mejor se materializaron las ideas de De
Stijl, con un purismo tan acusado que se relacio-
na con el racionalismo posterior. J. J. P. Oud, EL SURREALISMO
G. Th. Rietveld y Jan Wils adoptaron para sus ca-
sas unifamiliares formas puras e intelectuales, En París, un grupo de intelectuales próximos al
acentuando la horizontalidad y la continuidad de dadaísmo y a la revista Littérature organizaban en-
los espacios interiores. La Casa Schröder de Riet- cuentros movidos por su interés por las experi-
veld, en Utrecht, es el prototipo de casa neoplas- mentaciones sobre el subconsciente: André Bre-
ticista, con sus formas simples y geométricas, y su ton, Louis Aragon, Paul Éluard y, posteriormente,
construcción a base de piezas prefabricadas, ele- Francis Picabia, Man Ray y Max Ernst. De estos
mentales en estructura y esenciales en la forma. encuentros surgió un nuevo movimiento, inspira-
do en las teorías psicoanalíticas, más constructivo
que el radicalismo dadá, que intentaría aplicar el
EL CONSTRUCTIVISMO RUSO psicoanálisis para expresar el funcionamiento real
del pensamiento y el interior del ser humano, y
Si el suprematismo proponía un arte subjetivo, que catalizaría en el Manifiesto del Surrealismo pu-
sin ataduras estéticas, para el constructivismo el blicado por Breton en 1924. Con la adhesión, en-
arte debía estar al servicio del Estado, ser útil para tre 1925 y 1929, de algunos miembros del grupo
la sociedad, como la arquitectura y la producción al partido comunista, se produjo una escisión del
industrial. Sus presupuestos figurativos eran si- movimiento en dos tendencias, un movimiento
milares a los de movimientos coetáneos como el de revolución política, encabezado por Louis Ara-
cubismo, el dadaísmo y, en especial, el futurismo: gon, y otro más interesado en la profundización
se rechazaba el arte clásico burgués y se propug- del subconsciente, encabezado por Salvador Dalí.
naba un nuevo lenguaje basado en la tecnología y Poco después, con el estallido de la Segunda Gue-
la industria. El constructivismo abría la posibili- rra Mundial y la marcha de muchos de sus miem-
dad de unir arte y pueblo, de construir un nuevo bros a Estados Unidos, se produjo prácticamente
arte para esta nueva sociedad, la desintegración del grupo su-
basado en la técnica, la funcio- rrealista.
nalidad y el diseño industrial.
A pesar de todo, el construc- El surrealismo
tivismo no presentó una pro- en las artes plásticas
ducción unitaria, sino pro- El movimiento surrealista exal-
puestas tan diversas como las taba la imaginación, el sueño,
pinturas de El Lissitzky y el erotismo, para liberar al ser
las esculturas de los hermanos humano de la moral burguesa
Naum Gabo y Antoine Pevsner y, en el campo artístico, de las
y de Vladimir Tatlin. En arqui- convenciones clásicas, buscan-
tectura, los artistas constructi- do nuevas relaciones a través
vistas planteaban soluciones del sueño, el inconsciente y el
formales audaces y llenas de automatismo psíquico puro,
como una especie de dictado
mágico nacido del inconscien-
te. Si bien inicialmente se trató
Proyecto del Monumento a la III de un movimiento fundamen-
Internacional, de Vladimir talmente literario, pronto dio
Tatlin. interesantes frutos en el terreno
533
Menú i SALIR
Izquierda, Mujer y pájaro a la luz de la Luna (Tate Gallery, Londres) de Joan Miró. Derecha, Dalí de espaldas
pintando a Gala (Fundación Gala, Figueres), de Salvador Dalí.
de las artes plásticas. Casi todos los grandes nom- con el apoyo de los intelectuales y los artistas.
bres de la plástica del siglo XX atravesaron una Terminada la revolución, los primeros gobiernos
fase surrealista, y en la primera exposición surrea- buscaron la colaboración de estos artistas para
lista participaron, además de Hans Arp, Giorgio formar al pueblo, recuperar la brillante civiliza-
de Chirico y Max Ernst, artistas como Picasso,
Paul Klee y Joan Miró. Posteriormente se adhirie-
José Clemente Orozco trasladó a pinturas de
ron al grupo Magritte, Masson y Duchamp. caballete, como Zapatistas, 1931 (Museum of
Se pueden distinguir dos tendencias básicas en Modern Art, Nueva York), el expresionismo y el
el surrealismo pictórico: un surrealismo abstrac- cromatismo violento de sus monumentales frescos.
to u orgánico abstracto, representa-
do por Joan Miró y André Masson,
en el que los artistas se decantan
por el automatismo puro y la plas-
mación de unos universos figurati-
vos propios, y un surrealismo natu-
ralista y figurativo, más interesado
por el mundo de los sueños, con
obras de gran realismo pero enga-
ñosamente figurativas, puesto que
sorprenden por las extrañas asocia-
ciones de objetos y el ambiente
irreal, como en las composiciones
de Magritte, Dalí o Yves Tanguy.
EL MURALISMO
534
Menú i SALIR
ARTE
535
Menú i SALIR
536
Menú i SALIR
ARTE
537
Menú i SALIR
sionismo y la abstracción, tendencias que presen- siglo presenta una pluralidad extraordinaria, en la
tan algunas características comunes, como el pre- que conviven propuestas tan distintas como el
dominio de los grandes formatos y el gusto por el eclecticismo de algunos artistas americanos, la
tratamiento libre del color por encima de otros escultura neo-geométrica, las barrocas concepcio-
elementos formales. El neoexpresionismo es una nes espaciales de Reinhard Mucha, la monumen-
tendencia netamente europea, dividida funda- talidad de Ulrich Rückriem y Richard Serra, y
mentalmente en dos corrientes: la transvanguar- trabajos más experimentales como instalaciones
dia italiana y Los Nuevos Expresionistas. y foto-esculturas.
Surgida a fines de los setenta, la transvanguardia, Gran Bretaña ha tenido durante el siglo XX una
integrada entre otros por Sandro Chia, Francesco importante tradición escultórica, con artistas sin-
Clemente, Enzo Cucchi, Nicola de Maria y Mimmo gulares como Henry Moore, Barbara Hepworth o
Palladino, en torno al crítico y teórico Achille Boni- Anthony Caro, y en los últimos años una notable
to Oliva, es una tendencia marcada por el eclecti- generación de artistas, conocida como la «Nueva
cismo, que participa del movimiento general de escultura británica», integrada por Richard Dea-
recuperación de la figuración y la tradición pictó- con, Shirazem Houshiari, Barry Flanagan, Tony
rica, con una reivindicación de los estilos históri- Cragg, Anish Kapoor, Richard Long y Gilbert &
cos italianos como nexo de unión entre presente y Georges.
pasado. El grupo de Los Nuevos Expresionistas
(conocidos también por «Los nuevos salvajes»),
formado por Baselitz, Anselm Kiefer, Per Kirkeby, LA BAUHAUS
Jörg Immendorff, Markus Lüpertz y Gerhard
Richter, y posteriormente por una nueva genera- En 1919 nació en Weimar (Alemania) la Bauhaus,
ción, con R. Fetting, H. Middendorff, B. Kober- fruto de la fusión entre la Escuela de Bellas Artes
ling y Adamski, recoge las aportaciones del expre- y la Escuela de Arquitectura, promovida por Wal-
sionismo de principios de siglo, principalmente ter Gropius. El objetivo de esta escuela sería la re-
de la nueva objetividad en cuanto a la recupera- novación de la arquitectura y el diseño, y para
ción de la sátira y la crítica social, y del expresio- ello Gropius reunió a un extraordinario equipo
nismo abstracto estadounidense en los grandes docente: Joseph Itten, Lionel Feininger, A. Meyer
formatos propios y la técnica, que marca la indivi- y, más tarde, Oskar Schlemmer, Kandinsky, Mo-
dualidad del artista a diferencia de los nuevos holy-Nagy, P. Klee, Josef Albers y Marcel Breuer,
realistas. es decir, algunas de las figuras más interesantes y
relevantes de la vanguardia alemana de entregue-
rras. En 1925 la escuela se trasladó a Dessau,
EL PLURALISMO ESCULTÓRICO siempre bajo la dirección de Gropius, donde de-
sarrolló un novedoso programa de estudios que
Resulta difícil precisar movimientos combinaba la teoría y la práctica: los
concretos en el campo de la escultura, y alumnos estudiaban los materiales, el
sólo cabe distinguir entre las obras figura- color, la composición y el espacio, y
tivas y las abstractas (realizadas en mate-
riales como plexiglás, plásticos, aleaciones
metálicas o nylon). Es interesante destacar
que, si en pintura el retorno a la figura-
ción es un hecho, en la escultura las ten-
dencias figurativas todavía no han recon-
quistado una posición de fuerza. El fin de
538
Menú i SALIR
ARTE
539
Menú i SALIR
540
Menú i SALIR
ARTE
541
Menú i SALIR
GLOSARIO
ábside Parte de la iglesia situada en la cabecera. estela En el arte precolombino, losa o pilar de
abstracción Las tendencias y obras artísticas no piedra de gran tamaño, situada por lo general al
representativas y no figurativas. pie de las pirámides-templo, y adornada con re-
acuarela Pintura realizada con colores transpa- lieves, inscripciones o ambas cosas.
rentes, muy diluidos en agua, y en la que se em- glifo Símbolo jeroglífico individual con valor
plea como blanco el del papel. fonográfico, cuando expresa el sonido de una pa-
aguafuerte Técnica de grabado que se obtiene labra, o ideográfico, cuando expresa el contenido
tratando las partes de la plancha de metal no pro- de un término. Es muy frecuente en las estelas
tegidas por un barniz previo con aguafuerte o áci- mayas, y también aparece en los códices y en al-
do nítrico. gunos recipientes de cerámica.
altar Roca de gran tamaño, tallada en forma de hieratismo Término aplicado a las obras en las
mesa y con relieves en los lados. Es característica que predomina la tendencia monumental, rígida
del arte maya y olmeca, que la usaban con fines y majestuosa.
rituales. juego de pelota Construcción muy corriente
arbotante Arco rampante que descarga el em- en las civilizaciones precolombinas de Meso-
puje de las bóvedas sobre un contrafuerte situado américa, que era un recinto en forma de doble T
en el exterior del edificio. unida por la base. En las paredes laterales había
arquitrabado o adintelado Se dice del sistema dos arcos de piedra por donde los jugadores de-
arquitectónico que utiliza elementos de cierre ho- bían introducir la pelota.
rizontales, al desconocer el arco y la bóveda. monolito Columna, puerta o monumento
capitel Elemento colocado sobre el fuste de la construidos con un solo bloque de piedra.
columna, que sostiene directamente el arquitrabe naos Cella. En el templo clásico, cámara central
o el arco. donde se encontaba la estatua de la divinidad.
cariátide Escultura femenina que ejerce el pa- nártex Parte del atrio de la basílica paleocristia-
pel de soporte en lugar de una columna o pilar. na, porticada.
cimborrio Construcción elevada sobre el cruce- perspectiva Sistema de representar una forma
ro que habitualmente tiene forma de torre de tridimensional en una superficie bidimensional.
planta cuadrada u octogonal rematada en chapitel. Según la perspectiva lineal, los objetos se repre-
collage Composición realizada con fragmentos sentan en un tamaño menor y las líneas paralelas
de otros dibujos, fotografías u otros, pegados so- convergen, al alejarse.
bre un soporte. ready-made Objeto encontrado y descontex-
deambulatorio Pasillo que rodea la parte trase- tualizado.
ra del presbiterio, como prolongación de las na- soporte Lienzo, cartón, papel o cualquier otra
ves laterales. También llamado girola. superficie sobre la que se aplica la pintura.
díptico Obra realizada en dos hojas que pue- taracea Decoración a base de entalles en la ma-
den cerrarse a modo de libro. dera que se rellenan posteriormente con fragmen-
escorzo Técnica para representar una figura tos de otros materiales, para crear efecto de poli-
que en la realidad estaría dispuesta perpendicular cromía.
u oblicuamente al plano en que ha sido represen- tendencias objetuales Movimientos artísticos
tada. que producen objetos físicos como cuadros, es-
esfumado Efecto suave y difumado creado me- culturas, etc., frente a las tendencias no objetua-
diante colores y tonos superpuestos y mezclados les, que elaboran propuestas o teorías.
que cambian imperceptiblemente de claro a os- voluta Figura con forma de espiral o de caracol
curo. usada como motivo ornamental.
542