Está en la página 1de 17

Educación

ISSN: 0379-7082
revedu@gmail.com
Universidad de Costa Rica
Costa Rica

Villarreal Montoya, Cecilia


La orientación familiar: una experiencia de intervención
Educación, vol. 31, núm. 2, 2007, pp. 79-94
Universidad de Costa Rica
San Pedro, Montes de Oca, Costa Rica

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=44031206

Cómo citar el artículo


Número completo
Sistema de Información Científica
Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal
Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

LA ORIENTACIÓN FAMILIAR:
UNA EXPERIENCIA DE INTERVENCIÓN

Cecilia Villarreal Montoya


Directora del Posgrado en Orientación en la Facultad de Educación y
docente de la Escuela de Orientación y Educación Especial.
Universidad de Costa Rica
San José, Costa Rica

Recibido 8-X-2007 • Aceptado 13-XI-2007 • Corregido 12-III-2008

I. Introducción

La comunidad de profesionales en
Orientación reconoce el impacto que tiene
Resumen: El artículo resume la experiencia de la familia en el crecimiento y desarrollo de
intervención con una familia de la escuela de Villa
Esperanza de Pavas. Se trata de un matrimonio con
las personas. Sin embargo, en el ejercicio
dificultades para disciplinar a sus tres hijos varones profesional la tendencia ha sido planear y
de ocho, seis, y cuatro años. realizar programas y proyectos de orienta-
En primer lugar, se exponen los principios teóricos y ción personal, educativa y vocacional-pro-
metodológicos, para luego mostrar la aplicación de fesional sin tomar en cuenta a las familias
ellos en el proceso vivido por la familia. Se aplica el
modelo de intervención estructural, que busca que la
de la población infantil y adolescente de las
misma familia logre realizar, paso a paso, los cam- instituciones educativas del país.
bios requeridos en la dinámica y estructura familiar. Tanto la familia como el centro edu-
En la situación específica de esta familia, se observa cativo comparten la gran responsabilidad
el fortalecimiento de la pareja como tal y como madre de la educación, la formación y el desa-
y padre en la medida que van logrando asumir la
autoridad en forma compartida para disciplinar a
rrollo humano de la población del país. El
los hijos. debate se ha centrado en cómo lograr la
Al compartir esta experiencia, la autora pretende coordinación entre ambas instancias y la
estimular a profesionales en Orientación a asumir el pregunta eje sigue siendo: ¿de qué manera
reto de considerar a las familias de la comunidad estu- pueden familia y escuela colaborar entre
diantil, de las instituciones educativas donde laboran,
como parte importante en el quehacer orientador.
sí en la ardua tarea de educar? plantea
Jaramillo (2002). El trabajo conjunto entre
Palabras claves: Orientación familiar, terapia de ambas instituciones sociales requiere ser
familia, educación parental. planificada, no debe dejarse a la esponta-
neidad u ocurrencia de ambas partes. Hay
que partir de que la relación siempre se
va a dar, no es posible obviar el hecho de
80 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

que lo que se realice en el centro educativo


formará parte de la convivencia familiar y
viceversa, porque ambos sistemas se influ-
yen mutuamente.
Al no establecerse formas y mecanis-
mos de coordinación se puede caer en una
interacción no propicia para la comunidad
estudiantil, como el interjuego de culpabi-
lización mutua, “cultivar esta actitud trae
consigo el inconveniente de que cuando
surge una dificultad se asume una posición
defensiva, se fija la atención en las fallas
del otro y se cierra el camino a la autocrí-
tica” apunta Jaramillo (2002, p. XV), afec-
tándose la eficacia del trabajo colaborativo.
Abstract.: This article summarizes the experience of Para coordinar la acción educativa
the intervention with a student’s family at the Villa entre familia y centro educativo, se requie-
Esperanza de Pavas school. It involves a marriage
with difficulty disciplining their three boys, who were
re de la definición de políticas claras en la
eight, six, and four years old respectively. institución educativa; además de la aplica-
First, we present the theoretical and methodological ción de éstas en actividades concretas de
principles, then how they were applied in the process intervención con las familias. Con un posi-
with this family. The approach applied was the cionamiento así, la atención a las familias
structural intervention, seeking to help the family
attain, step by step, the changes required by family
se convierte en un pilar de trabajo de los
dynamics and structure. In this family’s specific departamentos de Orientación. La labor con
situation, the process strengthened the couple, both as las familias no se puede evadir, especial-
a couple and as father and mother, as they gradually mente cuando la acción orientadora, dirigida
undertook a shared authority to discipline their a infantes, adolescentes, personas adultas, y
children.
By sharing this experience, the author seeks
mayores se enmarca dentro de la perspecti-
to urge Counselors to undertake the challenge of va del desarrollo humano integrado.
considering the families of their student community, Este artículo tiene como propósito com-
at the educational institutions where they work, as an partir una experiencia de intervención direc-
important part of the counseling process. ta con una familia, como una de las tantas
Key words: Family counseling, family therapy,
formas de realizar el trabajo con familias en
parent education. los centros educativos. Además, el interés es
aportar un nuevo insumo al debate nacional,
sobre la labor social del sistema educativo
para con las familias en general y sobre la
misión y posicionamiento de la Orientación y
el de sus profesionales respecto al quehacer
orientador con las familias de la comunidad
estudiantil, en particular.
Lo peculiar de la experiencia que pre-
sento, es el hecho de que la situación pudo
haberse atendido en el centro educativo, ya
que se originó allí: al observarse la conduc-
ta agresiva de un estudiante de kindergar-
ten, la maestra envió al niño a un centro de
salud apelando a la necesidad de que fuera
medicado, bajo la hipótesis de que éste pre-
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 81

sentaba déficit de atención. El proceder de car, comprender y transformar las interac-


la docente muestra una tendencia, primero, ciones individuales y colectivas.
al deficiente trabajo en equipo en la institu- El posicionamiento sistémico-estruc-
ción y de ésta con la familia, para favorecer tural, como parte de ese cuerpo del cono-
el desarrollo integrado de sus estudiantes, cimiento, concibe a la familia como “un
y en segundo lugar, a estigmatizar las sistema social en transformación” Minuchin
conductas del niño, en este caso, evitando (1985, p. 27) integrado por “un grupo de per-
explorar la situación concreta de éste. Para sonas, unidas emocionalmente y o por lazos
comprender la realidad del estudiante, se de sangre, que han vivido juntos el tiempo
requiere necesariamente un acercamiento suficiente como para haber desarrollado
con la familia de éste. patrones de interacción e historias que justi-
fican y explican tales patrones” (Minuchin,
Lee, y Simon, 1998, p. 47). Además, “los pro-
Ii. Posicionamiento teórico blemas y las conductas sintomáticas de las
personas son concebidas como el resultado
Según Nugent (1990), en los Estados de las interacciones inadecuadas al interior
Unidos el término orientación familiar se de la familia, en donde cada quien es parte,
utiliza exclusivamente en los centros edu- y no como un conflicto individual intrasíqui-
cativos públicos, para denominar el trabajo co” plantea Sturges, citado por Ronch, Van,
que realizan profesionales en Orientación y Stilwell (2006, p. 359).
con familias que experimentan lo que Los sistemas complejos se componen
él llama problemas normales. Para este de subsistemas, cada persona es un sub-
mismo autor, no existe diferencia entre sistema en sí mismo y participa en subsis-
terapia de familia y Orientación familiar. temas dentro del sistema familiar. Según
Plantea que ambas utilizan la misma base el tipo de familia así será la formación de
teórica, las técnicas y los procedimientos, y los subsistemas, si se trata de una familia
además cumplen los mismos objetivos. nuclear heterosexual y con descendencia se
En los centros educativos, la identifican los siguientes: conyugal (espo-
Orientación familiar se puede implemen- sa-esposo/compañero-compañera); parental
tar a diversos niveles: desde realizar una (madre y padre con la prole); fraternal o
gran diversidad y modalidad de programas filial (hermanos y hermanas); extendido
dirigidos a la formación y al desarrollo de (abuelos, abuelas, otros parientes); el sub-
habilidades básicas para el alcance de las sistema de mujeres (las que integran la
tareas en la convivencia familiar y para el familia); y el subsistema de los hombres.
cumplimiento de los roles conyugal, mater- Otro criterio clave dentro de la pers-
nal, paternal y filial de hombres y mujeres pectiva sistémica relacional es el hecho de
de diferentes edades; hasta intervenir direc- que “los subsistemas dentro de un sistema
tamente a las familias que lo requieran. más amplio, están perfectamente delimi-
Para ofrecer la Orientación familiar tados, y las interacciones entre comparti-
es necesario moverse de un posicionamiento mientos están gobernados por conductas
teórico y metodológico centrado en la per- y reglas implícitas” (Musitu, Román y
sona en sí misma para verla como un ser Gutiérrez, 1996, p. 35). Las relaciones entre
en interacción. Esta perspectiva se viene las personas se enmarcan por los límites o
desarrollando desde mediados del siglo XX las fronteras, éstas se definen tanto por
y ha ido conformando una base teórica y “las expectativas acerca de cómo deben con-
epistemológica sobre la convivencia relacio- ducirse las personas en diversos tipos de
nal, se parte del principio que las personas ambientes y circunstancias” (Richardson
se influyen entre sí, construyéndose de esta 1993, p. 28), como por las reglas de con-
forma redes humanas que permiten expli- vivencia, las costumbres, los valores y los
82 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

intercambios afectivos constantes. Barylko imposible no comunicarse, y el comporta-


(2005), lo resume como el afecto, la seguridad miento de una persona tiene valor de men-
y el compromiso en la expresión del cuidado, saje para las demás, plantea Watzlawick y
la atención de las necesidades y las relacio- otros (1983). Para este mismo autor, se le
nes de confianza entre los subsistemas. En debe dar igual importancia a los mensajes
sus propias palabras, Barylko (2005, p. 60), verbales como a los no verbales, al tipo de
afirma, “Si hablo de límites hablo de amor, relación y a los contenidos que se intercam-
de relación, de ser con otros”. bian, a la forma en que se puntúa en las
Lo adecuado es que los límites y las secuencias de interacciones, y a las relacio-
reglas vayan cambiando y flexibilizándo- nes basadas en la igualdad o diferencia, o
se en la medida en que la familia vaya sea, la interacción simétrica o complementa-
avanzando en su ciclo vital. Los sistemas ria entre las personas.
familiares viven en constante cambio debi-
do al propio desarrollo de los subsistemas
y del sistema mismo, y aunque tengan la Valoración del sistema familiar
capacidad de auto-organizarse, y autorregu-
larse no pueden concebirse en términos del Para identificar y comprender la
equilibrio completo, de la predeterminación, estructura de un sistema familiar es nece-
del control jerárquico, de la permanencia sario observarlo estando éste en plena
o de la predictibilidad estructural. Según acción. Al evaluar una familia, tanto
Hernández (1998) hay que tomar muy en Minuchin (1985) como Whitaker y otros
cuenta la condición humana de las familias (1991), coinciden en que la atención debe
y por eso mismo es que hay que reconocer la centrarse en los siguientes indicadores:
imperfección, la inestabilidad, la incertidum-
bre, la diferenciación y la ecodependencia Las fronteras o límites: Se refiere a
entre los subsistemas como condiciones de la separación o cercanía virtual, emocional
los procesos y de las estructuras familiares. y conductual entre los subsistemas que per-
Los sistemas familiares se constru- mite o prohíbe las interacciones entre uno
yen y reconstruyen constantemente; lo y otro, plantea Suares (2002). Además, la
anterior se da por la capacidad que tienen frontera, agrega Umbarger (1999, p. 25), “se
para evaluar la propia dinámica y replan- puede experimentar como las interacciones
tearla basada en los efectos de sus propias gobernadas por reglas, que de manera regu-
interacciones (Suares, 2002). Una mayor lar se producen entre las personas durante
disposición al cambio permite el creci- períodos largos”. Según este mismo autor, los
miento y desarrollo del sistema familiar, problemas se presentan cuando esos límites
mientras que la oposición o resistencia a o fronteras son rígidos o difusos. Son rígidos
éste, pone al sistema en riesgo. Cuando el cuando no se permite el ingreso de un sub-
sistema se encuentra en esta última posi- sistema a otro, provocando distanciamiento
ción enfrenta problemas o dificultades en el y desprendimiento entre los subsistemas. La
desarrollo de cada uno de los subsistemas, demarcación demasiado rígida, conlleva al
esto por cuanto la familia es una totalidad desapego y al aislamiento en la medida que
y los diferentes subsistemas se influyen se ignora el compromiso recíproco relacional.
mutuamente. Estas son las condiciones que Cuando la independencia entre los subsiste-
generalmente lanzan a las familias a la mas es grande, los movimientos o el estrés
búsqueda de ayuda profesional. se atienden en forma menos inmediata que
La comunicación cumple un papel si los mismos fueran muy dependientes o
esencial en los procesos de relación y cam- estuvieran muy ligados.
bios en los sistemas familiares, por el hecho Los límites o fronteras son difusas
de que toda conducta es comunicación, es cuando no permiten la indiferenciación entre
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 83

los subsistemas, favoreciendo las relacio- Ciclo vital: La familia en la medida


nes aglutinadas. La demarcación demasiado que evoluciona debe ir cambiando, pasa por
débil de los límites conlleva a un apego exce- diferentes etapas: del ser pareja a tener
sivo y aglutinado entre los miembros, preva- bebés, infantes, adolescentes hasta la convi-
leciendo entonces la unidad de pensamientos vencia con la descendencia adulta y adulta
y sentimientos por sobre la intimidad e indi- mayor. En cada uno de esos estadios la fami-
viduación física, emocional y mental. lia debe cumplir con tareas específicas y
La jerarquía o separación clara debe pasar necesariamente por esos cambios
entre las generaciones: Cada subsistema o crisis de desarrollo. Para distintas fami-
tiene un rol específico y una posición al inte- lias unas transiciones son más dificultosas
rior del sistema. Resulta claro que madre y que otras, y ponen a prueba la capacidad de
padre (o bien las personas adultas) tienen reorganización del sistema familiar, la capa-
responsabilidades diferentes en relación con cidad de apertura, y la forma de enfrentar
el subsistema filial (o personas menores), en los conflictos intra y extra sistema.
cuanto a la autoridad y la responsabilidad. La atención del conflicto: El con-
El subsistema parental conforma la columna flicto según como se maneje, puede ser visto
vertebral de la familia, y debe brindar segu- y utilizado como el fertilizante de la vida,
ridad y protección al sistema familiar en que aunque no es agradable, es decisivo para
general, y al filial en particular. El problema lograr el crecimiento óptimo. El manejo que
se presenta cuando se construyen coalicio- se haga de las crisis y del conflicto puede
nes intergeneracionales y se confunde el rol permitir cambios significativos para el sis-
jerárquico. Cuando no hay claridad jerár- tema familiar. Con una visión limitada y
quica se presentan las coaliciones, que son cerrada al cambio y con un manejo inadecua-
los agrupamientos intergeneracionales en do de las dificultades conflictivas, el sistema
contra de una de las figuras progenitoras. familiar se puede atascar y se convierte en
Triangulación: en la organización un ambiente inadecuado para el crecimiento
de la familia subsisten los triángulos cam- y desarrollo de la familia en general y de las
biantes y coaliciones fluctuantes sin generar personas que la conforman en particular.
celos ni inseguridad entre los miembros. La distribución del poder: el
Ello permite que quienes conforman el sis- manejo del poder en forma adecuada hace
tema se enriquezcan por la libertad de expe- que el sistema no se mueva en el caos. Las
rimentar todas las combinaciones y permu- personas adultas deben llevar el liderazgo
taciones posibles de relaciones triangulares. en forma consensuada por la responsabi-
La libertad de unirse libremente de acuerdo lidad de cuido, protección y formación que
a intereses comunes, es una elección y no debe cumplir con la prole.
responde en ningún momento a una impo- En el ejercicio del poder y para influir
sición. Cuando la triangulación se vuelve en el desarrollo de la prole, el subsistema
rígida impidiendo así la rotación esperada, parental, según Musitu, Román y Gutiérrez
el sistema familiar entra en crisis. (1996), debe hacerse uso del afecto (estimu-
La pertenencia y la separación: lar la cooperación, ofrecer ayuda, recono-
La estructura de la familia brinda a cada ciendo y elogiando las capacidades) y del
integrante la experiencia de formar parte control (capacidad de disciplinar) al mismo
de un todo, seguro y protector, al mismo tiempo. El uso del poder legítimo implica
tiempo que estimula la independencia y la respeto y autoridad de las figuras proge-
manifestación del sí mismo o la individua- nitoras en el acto de disciplinar (influir en
lidad. Cada quien cuenta con la libertad de la prole). El subsistema parental haciendo
salir e ingresar al sistema familiar cuando uso del poder, no abuso de éste, guía con
lo considere necesario, nunca se deja de respeto y ofrece libertad al subsistema
pertenecer. filial, para que éste desarrolle sus propias
84 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

capacidades en un marco de seguridad. El familia presenta dificultades. No obstante,


buen uso del poder por parte del subsiste- la acción actúa sobre la estructura, o sea
ma parental brinda, según Austin (1992), en “el conjunto invisible de demandas fun-
seguridad, creatividad y control, además de cionales que organizan los modos en que
herramientas para ejercitar el permanente interactúan los miembros de esa familia”
desarrollo de la inteligencia de la prole. (Minuchin, 1985, p. 86). Para lograr los
La comunicación: Ésta, según cambios estructurales se requiere de la
Satir (2002, p. 65) “abarca la diversidad de modificación de la familia como un todo, se
formas como la gente transmite informa- enfatiza en las maneras de organización y
ción: ¿qué da y qué recibe, cómo la utiliza y del funcionamiento del sistema familiar.
cómo le da significado”. Según esta misma La intervención estructural no sólo
autora (2002), es posible re-aprender patro- permite a las familias la exploración de
nes adecuados de comunicación al interior sus áreas fuertes, sino que también las
de las familias. El reto es que las personas estimula a trazar fronteras claras entre las
puedan expresar lo que piensan, sienten generaciones, a distribuir jerárquicamente
y desean, pues las relaciones humanas se las competencias y a acomodar esa estruc-
enmarcan en el intercambio constante de tura interna a los propios ciclos evolutivos y
pensamientos, sentimientos y reacciones a las demandas del entorno. Para tal efecto,
corporales, y según esta misma autora, las se pone especial atención en el proceso inte-
buenas relaciones dependen, en gran parte, ractivo que muestra el sistema familiar,
de que las personas sepan interpretar las en otras palabras, “la secuencia discreta
interacciones del uno para con el otro. y limitada en el tiempo, de conductas que
La búsqueda de la homeostasis constituyen una transacción” (Umbarger,
y del cambio: Tal y como se mencionó 1999, p. 31). Las pautas de interacción,
anteriormente, lo esperado es que el sistema en el sistema familiar, según Minuchin
familiar se mueva en un constante equili- (1985), se van construyendo en forma evolu-
brio-desequilibrio, en un proceso de perma- tiva y conjugan necesariamente las reglas
nente movimiento ya que la falta del mismo de participación (¿quién participa y cómo
llevaría al sistema a un estado de caos. participa?), el nivel cognitivo y perceptivo
(¿cómo debe entenderse la conducta o una
clase de conducta), además de la comunica-
Iii. Principios metodológicos ción entre los subsistemas.
orientadores de la Otro principio de intervención impor-
intervención tante en esta perspectiva se refiere a que
el aprendizaje se adquiere en la acción, por
En este apartado se presenta en eso es que, en las sesiones estructurales
forma resumida los principios teóricos y se practica el rompimiento de patrones
metodológicos que sustentan la interven- inadecuados de interacción y la búsqueda
ción realizada. de nuevas conductas que los reemplacen.
Lo anterior se logra, primero, identificando
la secuencia de conductas que forman la
Intervención con perspectiva interacción para luego ensayar con la fami-
estructural sistémica lia nuevas secuencias que sustituyan a las
anteriores enfatizan Minuchin y Fishman
Las familias buscan ayuda cuando (1985). El cambio se logra en la sesión y si
entran en crisis, generalmente personi- se captó, en ese mismo momento, el sistema
fican el problema en un subsistema, que familiar lo introduce y lo mantiene en su
con frecuencia es la persona que según la dinámica cotidiana.
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 85

Rol profesional Cuestionamiento de la realidad


familiar: se parte de que las pautas de
Quien facilita, se desempeña como interacción familiar obedecen a la realidad
un ente transformador, y facilitador de tal como es vivenciada por quienes integran
cambios, debe actuar sobre el drama fami- la familia. Para modificar la visión de la rea-
liar e introducir desequilibrio en busca de lidad por la que se rigen los miembros de la
modificar el sistema y desarrollar un nivel familia se requiere un cambio en la estruc-
diferente de homeóstasis en el mismo. tura. Asimismo, el cambio en la estructura
Para lograr los cambios, el proceso va a influir en un cambio en la visión del
terapéutico demanda, en quien facilita, el mundo o de la realidad de la familia.
establecimiento de una relación que va desde
la cercanía hasta la distancia con el sistema
familiar, con el cual conforma el sistema Iv. Proceso de intervención
terapéutico. La posición cercana permite
la confirmación y la expresión de afecto La familia que llamaremos Sánchez
y la actitud empática, mientras que en la Madrigal, fue referida a la terapia de familia
intermedia se asume el papel de observador por la pediatra del niño. Ella en la valo-
o espectador (papel oyente activo, neutral, ración que realizó del menor identificó
hace preguntas de secuencia y circulares, la dificultad de las figuras progenitoras
rastrea información), y en la posición distan- para disciplinar a los tres hijos. Además
te se espera un rol más directivo que permite desconfirmó el diagnóstico de déficit aten-
la asignación de tareas a la familia en busca cional que sugería la maestra. Se me
de la reestructuración del sistema familiar. asignó la familia y trabajé con ella en mi
propio proceso de formación como terapeu-
ta familiar bajo la supervisión del profesor
Estrategias de intervención Gerardo Casas.
Realicé ocho sesiones con una dura-
A continuación mencionaré las tres ción aproximada de hora y semana en un
estrategias que Minuchin y Fishman período de cuatro meses. Para efectos de
(1985), sugieren para el logro de la rees- este artículo resumo el proceso vivido por
tructuración del sistema familiar: el sistema familiar, destacando los cambios
estructurales que cronológicamente se fue-
Cuestionamiento del síntoma: Se ron realizando.
reencuadra el hecho de que el problema no
reside en el paciente individualizado, sino
en algunas de las pautas de interacción del Evaluación inicial
sistema familiar. Para ello se induce a la del sistema familiar
familia a la búsqueda de nuevos comporta-
mientos afectivos, cognitivos y de conducta La valoración inicial del sistema
para atender las demandas y necesidades familiar la realicé en la primera sesión
de todos. cuyo propósito, para quien recibe a la
Cuestionamiento de la estructu- familia, es leer la danza de la familia en
ra familiar: Se identifica y se intervie- función de una queja específica que gene-
ne en las coaliciones, alianzas, conflictos ralmente se acompaña del pedido de la
explícitos e implícitos, así como las formas familia. Además, la evaluación permite el
en que los miembros de la familia se agru- planteamiento de las metas e hipótesis de
pan en la resolución de conflictos ya que trabajo con el sistema familiar. En cada
tiene que ver con la manera en que se rela- una de las siguientes sesiones retomé los
cionan subsistemas en el sistema familiar. cambios del sistema familiar respecto a la
86 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

sesión inicial, para tener siempre presentes ja tiene un hijo de ambos, Sergio de 8 años
las necesidades de la familia e ir ajustando de edad. También viven aquí los dos herma-
las metas de intervención. nos de madre de Karen; ellos son: Ronald de
Esta es una familia de bajos recur- 33 años y Jairo de 22 años. Tanto Ronald
sos económicos que vive en una situación como Jairo tienen problemas de drogadic-
muy precaria. Residen en Rincón Grande ción, muestran conductas violentas entre
de Pavas, donde alquilan un cuarto en la ellos y con el resto de la familia.
casa de la familia de origen de Karen. Ella El sistema familiar presenta un esti-
y Antonio, como pareja muestran deseos de lo transaccional aglutinado, con límites
salir de esa situación y de proteger a los muy débiles entre los miembros y maltrato
tres hijos del ambiente de drogadicción y permanente. Se observan coaliciones entre
de violencia que les rodea. En este sentido, el padre y el hijo mayor y por otro lado, la
el hecho que los niños estén escolarizados madre con el hijo menor. En esta situación,
representa para la pareja una esperanza. Jorge pareciera estar fuera, tratando de
El sistema familiar está conformado desequilibrar esas coaliciones con su com-
por los siguientes subsistemas: portamiento. Estas coaliciones definen la
forma en que se organizan para dormir. El
Conyugal: Padre, Antonio de 37 años, padre y el hijo mayor duermen en una cama
con primaria completa. Se desempeña como individual y la madre duerme con el menor
misceláneo en una fábrica en Pavas y Karen y con Jorge en una cama doble.
de 23 años, con primaria incompleta. Ella El liderazgo se ejerce con poca claridad,
atiende los oficios domésticos de su familia y situación que favorece la manutención de las
además ayuda a su madre en los quehaceres dificultades de este sistema familiar, cuales
de la casa. Como pareja están enfrentando son: la disciplina poco eficaz, la dificultad
alejamiento emocional por la dificultad de para desarrollar hábitos, la confusión en la
privacidad en que viven y por el rechazo a línea jerárquica y la necesidad de aprender a
Antonio de parte de la familia de Karen. negociar para enfrentar el conflicto.
Subsistema parental: además de El estilo de comunicación es bastante
las limitaciones económicas para llenar agresivo, centrado en amenazas, gritos y se
las necesidades básicas, se les estaba difi- utiliza el castigo físico para que los hijos
cultando compartir el liderazgo para disci- acaten las órdenes. Ante esta situación la
plinar a sus hijos. Además, hay confusión reestructuración en este sistema familiar
en la línea de autoridad, los niños reciben debe ser dirigida a:
órdenes y agresión de parte de los abuelos,
los padres, y de los tíos maternos. - el ordenamiento de la jerarquía entre
El subsistema filial: conformado los subsistemas;
por Mauricio de ocho años cursa el pri- - el delineamiento de límites o fronte-
mer grado, Jorge de seis años y está en ras entre los subsistemas;
Kindergarten y Mario de cuatro años quien - la definición de roles y funciones
permanece con su madre. Según la pareja entre los subsistemas y
los niños pelean entre ellos, se agraden y - a favorecer la comunicación directa
además no les obedecen. Sin embargo, pre- entre los subsistemas.
sentan a Jorge como el problemático debido
a las dificultades en el rendimiento escolar
y al mal comportamiento en el kinder. El pedido de la familia
Subsistema extendido: está inte-
grado por Israel de 70 años padrastro de La familia presenta a Jorge como el
Karen, quien desde 1993 convive en unión problema porque la maestra quiere suspen-
libre con Zaira, madre de Karen. Esta pare- derlo del kinder por presentar conductas
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 87

agresivas, además de dificultades para tenemos que estar con los hijos y no meter-
permanecer sentado y poniendo atención en nos en pleitos.
el aula. Sin embargo, al explorar más sobre Karen: Es que yo quiero que sea una
el pedido, éste se amplía. casa cerca para no cambiar a los güilas de la
T.: ¿En qué les puede ayudar esta escuela, que les quede cerca. Yo quiero estar
terapia de familia? con los güilas para que no los maltraten, mi
Karen: A cambiar a Antonio, él agre- padrastro los maltrató estando yo ahí, ahora
de a los niños y a mí con palabras. A sacar- si no estoy? Llevamos dos meses de no pagar.
nos adelante como papás también. Antonio: Juntemos la plata y nos
Antonio: A cambiar la forma de tra- vamos. Yo no puedo hablar con su papá
tarnos y entre nosotros como papás. por mi enfermedad (problema pulmonar),
entonces él le reclama a usted, usted a mí
y entre los dos agredimos a los niños.
La clarificación de las fronteras
entre los subsistemas Karen: Bueno está bien, vámonos y
yo no me meto en los problemas de ellos.
Para atender la diferenciación entre
los subsistemas, se inició con el subsistema Les reforcé la capacidad de tomar
conyugal decisiones como una fortaleza entre ellos. La
T.: ¿Qué les mantiene juntos? pareja llegó a un acuerdo sin muchas dificul-
Antonio: los güilas. tades, además se acercaron emocionalmente
Karen: No es solo los güilas. y definieron una meta en común (luego se les
T.: Me gustaría que se pusieran de asignó la tarea de realizar actividades como
frente, se tomen de las manos y conversa- grupo familiar). Al fortalecerse la alianza
ran sobre eso. conyugal, el padre y la madre logran un
(El niño menor corrió y se sentó en avance en compartir el liderazgo. Antonio se
el regazo del padre. El lo acogió, yo le dije ubica ahora en el subsistema conyugal y no
al padre si era posible que lo sentara en la en el fraternal. La madre logra un avance
silla en que el niño estaba; él le dio la orden en el desvinculamiento con el subsistema
al niño, pero éste no la acató). ampliado, se acerca más a sus hijos, y define
límites para el trato de sus hermanos con
T.: ¿Qué está haciendo el niño, según sus hijos. En la siguiente sesión:
ustedes?
Karen: Está protegiendo al papá. T.: ¿Cómo han estado ?
T.: De qué o de quién lo protege? Padre: Hemos pasado muy bien,
Karen: Ellos quieren mucho al papá,
estamos más unidos.
y ven que en mi casa no lo quieren.
Madre: hemos estado bien entre
T.: Pueden captar la gran tensión que
nosotros, conversamos más, yo estoy con-
existe en este niño.
SILENCIO tenta con él (esposo).
T.: Continuemos. T.: ¿Qué cosas han hecho diferente?
Karen: Antonio, yo estoy con usted Madre: Ahora pasamos más tiempo
porque lo amo, además usted es muy impor- juntos, en las tardes yo me encierro con los
tante para mis hijos, ellos lo adoran a usted. güilas en el cuarto. La idea es mantenernos
Antonio: ¿Entonces por qué no quie- un poco más aparte de mi familia.
re que nos cambiemos de casa? T.: ¿De quién fue la idea de hacer ese
Karen: Es que usted quiere que nos cambio?
vayamos y que las cosas de mi familia son Padre: Yo tuve la idea y conversé con
de ellos y que yo no me meta con ellos. Karen y los dos estuvimos de acuerdo.
Antonio: Nosotros somos aparte, T.: Qué bueno que conversaran y
las cosas de ellos son de ellos, nosotros hayan tomado esta decisión en conjunto.
88 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

¿Qué efectos ha tenido esta decisión en mejor portado y mucho más tranquilo. La
ustedes como familia? maestra me manda recados de Mauricio,
Madre: Muy bueno porque yo los que él camina por toda la clase, desconcen-
pongo a hacer tarea, después juegan ahí, tra a los demás. En los exámenes que ha
de lo más bien juegan entre ellos, pelean hecho ha salido muy mal.
menos entre ellos y evitamos problemas con
mi familia. Con este comentario de la madre, se
Antonio: Cuando yo llego a la casa nota un nuevo acomodo-desacomodo en la
compartimos más entre nosotros. familia. Como el padre rompe la coalición
T.: Karen ¿cómo se siente usted? con Mauricio éste debe ubicarse en el sub-
Madre: Muy bien, yo estoy más con sistema fratrenal, situación que no com-
prende aún y le provoca desconcierto que lo
ellos y en la noche se une Antonio y está la
muestra en su comportamiento de desobe-
familia junta.
diencia tanto en la casa como en la escuela,
y Jorge que estaba fuera de las coaliciones,
Karen al sentirse apoyada por su al tener más espacio y acceso a las figuras
esposo al mismo tiempo que se concentró en progenitoras mejora su comportamiento.
su familia de procreación, inició la clarifi-
cación de fronteras con su familia de origen T.: ¿Cómo se está portando Mauricio
(subsistema extendido). en la casa?
Madre: Conmigo bien, lo pongo a
T.: ¿Qué otra cosa han hecho estos hacer las tareas y las hace, si están malas
días para sentirse mejor entre ustedes? las vuelve a hacer.
Madre: Yo me les paré en raya a T.: ¿Y en otros momentos?
mis hermanos en la casa. Ellos maltratan Madre: A él le gusta oír lo que uno
a mis hijos; yo les dije: Si tienen algo que habla. La maestra me manda a llamar, yo
decirles a mis hijos, me lo dicen a mí, yo le digo, no venga y él llega.
soy su mamá y a mí me toca corregirlos. T.: Entonces el niño no siempre hace
Les pueden hablar por bien pero no los van caso. En el ejemplo que usted puso ante-
a maltratar. Aquí estoy yo. riormente, evidentemente Mauricio no hizo
T.: ¿Cómo se sintió usted al hacer eso? caso, ¿tuvo después alguna consecuencia?
Madre: Muy bien, además mi mamá Madre: No, yo le digo vaya a la casa
me dijo que estaba bien hecho, que era hora y él no se va.
de que yo hiciera eso. Ya ve, casi no los han T.: En esa situación ¿quién mandó?
vuelto a maltratar. Madre: Él.
T.:¿Cómo ven ustedes eso?
T.: Antonio, ¿qué opina usted al res-
Madre: Mal.
pecto?
Padre: Eso no está bien.
A.: Me parece muy bien, los dos
T.: ¿Cómo podrían ustedes dos mane-
hablamos de eso y estamos de acuerdo. jar diferente esta situación?
T.: Me parece que el hecho de que Madre: Aquí hay un problema, le
ustedes estén más unidos tomando acuer- voy a decir la verdad, el papá lo alca-
dos en conjunto les coloca en una posición huetea mucho, con él hace lo que le da la
más fuerte para defender tiempo y espacio gana, esos dos son muy pegados. Desde
para ustedes cinco como familia. que nació parece que tiene sólo un hijo, yo
Madre: Estamos más unidos, y más le digo que tiene tres hijos, que los tiene
contentos. que atender igual.
Padre: Sí, estamos más contentos. Padre: A mí sí me hace caso.
K.: El problema que tenemos ahora es Madre: El problema es que cuando
con Mauricio. Está saliendo mal en la escue- yo no lo dejo ir a jugar afuera usted sí se lo
la, no le hace caso a la maestra. Jorge está permite, entonces él se envalentona y piensa
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 89

que a mí no me tiene que hacer caso. Yo Antonio: Mario déme esas monedas.
siento que él me desautoriza a mí. Madre: Antonio, no, porque se va a
T.: ¿Cómo afecta eso a Mauricio? poner a llorar.
SILENCIO T.: Hagamos un alto acá y hablemos
T.: Me hubiera gustado que Mauricio sobre lo que acaba de pasar aquí.
hubiera estado acá (lo dejaron acompañan- Madre: Ay, perdón, acabo de desau-
do a la abuela materna); como no está, yo torizar a Antonio.
quiero que tomen esta silla, y cada uno Padre: Cierto, qué fácil que nos sale.
la jale para su lado, si esta silla fuera Ella decía que no lo hacía, pero ya veo que
Mauricio ¿Cómo se sentiría él? somos los dos.
Padre: Ay, no, eso está mal, se siente T.: Lo importante es que los dos
jalado, como mareado. están de acuerdo en apoyarse y así pueden
Madre: Seguro no sabe qué es lo que ir cambiando juntos. Me parece necesario
debe hacer. que durante los próximos días observen los
T.: ¿Qué podrían hacer ustedes dife- momentos en que ambos se desautorizan.
rente para que Mauricio sepa con claridad
lo que él debe hacer? En la siguiente sesión, se le dio segui-
Padre: Si ella da una orden, yo la miento al patrón de desautorización.
debo apoyar. T.: ¿Cómo les fue en la semana?
Madre: Sí, así él no me desautoriza Madre: Nos fue bien, nos apoyamos y
a mí, y yo tampoco a él. Cuando yo no lo no nos desautorizamos.
dejo salir y usted sí lo deja, ahí me está Padre: Ya aprendimos que si nos
desautorizando. apoyamos nos va mejor con ellos.
T.: Recuerdan ahorita algún momen-
Con la escenificación la pareja reve- to o situación específica en que actuaron
la una secuencia de comportamiento que juntos?
debe ser cambiada: la desautorización Madre: Sí, Mauricio quería salir, yo
entre madre y padre permite que se diluya le dije que no y Antonio me apoyó, también
la autoridad parental y la capacidad para dijo que no.
disciplinar.
Hasta este momento los niños no
habían cesado de gritar y de subirse enci-
Clarificación de la jerarquía ma de las sillas. Tanto la madre como el
y los roles entre los subsistemas padre les pedían que hicieran silencio, que
se sentaran, y los niños no atendían al
T.: ¿Qué cosas diferentes pueden pedido de los padres. Se observa acá otro
hacer el día domingo? patrón importante, en esta familia No, no
Madre: Hay una cosa, yo quiero que significa no.
el domingo Antonio me ayude con los güi-
las, que haga tarea con ellos, o que los lleve T.: ¿Se sienten incómodos por el com-
a jugar. Yo paso toda la semana con ellos, portamiento de los niños?
los hicimos entre los dos, los tenemos que Padre y madre respondieron afirma-
cuidar entre los dos. tivamente.
Padre: Bueno, yo el domingo me puedo T.: ¿Cómo les gustaría que se compor-
encargar de ellos. Pero yo le digo a ella que taran los niños ahora?
no tiene que trabajar tanto en la casa. Madre: Yo quiero que estén sentados
con nosotros aquí.
En este momento a Mario, el hijo T.: Antonio, ¿qué quiere que hagan
menor se le cayeron unas monedas. los niños ahora?
90 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

Padre: Lo mismo que Karen, que T.: ¿A qué se debe esa amenaza al
estén sentados aquí con nosotros. niño, si ya había hecho caso.
T.: Si eso es lo que quieren llamen a Madre: Es que lo que yo quería que
los niños y les dan esa orden. él estuviera del aquel lado, donde yo puse la
Madre: Nosotros queremos que uste- silla él no ha hecho caso todavía.
des se sienten queditos y estén con nosotros. T.: ¿Entonces usted no está conforme
Los niños en coro: No, no quere- todavía?
mos y empezaron a alegar, luego se salie- Madre: Jorge no hace caso.
ron del salón. T.: Haga algo para que él le haga caso.
T.: ¿Qué tan efectiva fue la orden que Madre: Jorge ponga la silla ahí, en
dieron? esa mancha negra del piso.
Madre: No nos hicieron caso, así es Jorge: No, aquí es donde yo la quiero.
en la casa, ésa es la lucha eterna.
Padre: Sí, ellos no nos hacen caso. Esta escena duró varios minutos.
T.: Llamen a los niños y entre los dos Jorge continuaba retando y desafiando la
le dan la misma orden y manténganlos sen- autoridad de la madre.
tados por unos cinco minutos en las sillas.
T.: Papá, ¿cómo puede usted apoyar
Madre y padre salieron del salón en a Mamá para que Jorge cumpla con lo que
busca de los niños. Por sugerencia mía ubica- se le pide?
ron las dos sillas de ellos en frente de las tres Antonio: Lo levanta del suelo y lo
sillas de los niños. Les dieron la orden y los lleva a la silla y le dice “no se levanta más
niños empezaron a resistirse y padre y madre de aquí”.
les rogaban y les amenazaban, se paraba uno, Jorge suelta el llanto y todo “moquien-
luego el otro, y no cumplían con la orden. to”, se levanta de nuevo y dice: ¨Yo no quie-
ro esa silla”, y se fue a sentar a otro lugar.
T.: Hagan algo diferente para que los
niños hagan caso.
Se presenta otra serie de puntuacio-
Seguían rogando, ahora se acercaban
nes entre madre hijo y padre, sin lograr
a los niños y los llevaban al asiento, éstos se
que el niño hiciera lo que ambos querían.
levantaban apenas se les sentaba. Seguían
El padre busca cambiar la orden que había
desafiando la autoridad de los padres. El
dado la madre.
padre mostró enojo y les dijo con un tono
firme: se sientan ya porque yo lo digo. (Los
niños se sentaron pero se volvieron a levan- Madre: (a Jorge): Ahí no es.
tar de las sillas). Jorge: Aquí es donde yo quiero, y
se quedó sentado por segundos y luego se
Madre: Siéntense ya porque si no volvió a levantar de la silla y se sentó en
les vamos a castigar. (A ella se le puso roja el suelo.
la cara). Padre: Bueno Jorge, siéntese en esa
Los niños se sentaron, Mauricio y otra silla.
Mario callados y Jorge llorando. T.: Mantengan la orden inicial.
Todavía no logran que el niño se siente
T.: ¿Qué fue lo que hicieron diferente dónde ustedes quieren (el padre desautori-
para que los niños hicieran caso? zó a la madre).
Madre: Les dejamos de rogar. Madre: Yo me pongo a rogarle ahori-
Padre: Además mi voz fue más fuer- ta que se quite de ahí, él no lo hace.
te, y no les pegamos. T.: No le ruegue, acabamos de darnos
Madre (a Jorge): vea que si no se cuenta que no sirve rogar, haga usted algo
queda allí no lo llevo a ver las palomas… diferente
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 91

Padre: Sin rogar. Ambos: Sí.


T.: Haga algo diferente, algo que se T.: ¿Qué fue lo que hicieron diferente
le ocurra en este momento para que el niño para controlar a los niños?
le haga caso. Padre: No les rogamos, y entre los
Madre: (a Mario) Córrase para acá, dos nos apoyamos.
Mauricio para acá y usted se queda allí Madre: Yo en la casa nunca les doy
(reacomodó a los niños que sí hicieron caso las órdenes claras ni qué es lo que quiero
con anterioridad). Jorge también se cam- que hagan.
bió de silla, pero no permaneció donde la T.: ¿Cómo se sienten?
madre quería. Madre: Me siento bien.
T.: Parece que deben hacer algo dife- T.: Y usted ¿cómo se siente?
rente. ¿Qué otra cosa podrían hacer para Padre: Bien, juntos lo hicimos.
que Jorge cumpla con la orden? T.: Yo estoy muy de acuerdo con uste-
Madre: Así pasa en la casa, hasta des; juntos es como han logrado controlar a
que no le peguemos no vamos a terminar los niños. Veo que tienen mucha paciencia
con esto. y fortalezas para educar a sus hijos. Otra
T.: ¿Es eso lo que quieren hacer? cosa es que, para ambos es muy importante
Padre: No. la educación de los hijos y tienen disposi-
T.: ¿Qué otra cosa podrían hacer ción para hacerlo.
entonces? ¿Antonio, cómo puede usted ayu-
dar a mamá para que Jorge cumpla la El padre y la madre confirmaron su
orden que se le pide? autoridad ante los hijos en la medida que
El padre se levanta de su silla y aga- se identificó el patrón de desobediencia;
rra a Jorge y lo sienta de nuevo. para el niño “no” significa tal vez, que
si presiona con el llanto lo transforma
En este momento, Mauricio, el herma- en sí. Quedó muy claro para los padres
no mayor quiso levantarse de su silla y pedir- que el niño utiliza el llanto como una
le a Jorge que se sentara. El padre le dijo: estrategia; por lo tanto el dejarlo llorar
Mauricio siéntese, no se meta, es puede ser la forma de desarmar al niño y
entre su mamá y yo. hacerle obedecer. Además, el subsistema
(Esta transacción confirma que la conyugal está unido para actuar, y eso el
coalición padre-hijo mayor se debilitó, niño lo sabe.
mientras que la alianza del sistema conyu-
gal está fortalecida). En la siguiente sesión:
Jorge, que estaba sentado en su silla,
Padre: Él tiene que hacer caso. Jorge, se levantó y le dijo a la madre que necesita-
siéntese en esa silla. (Jorge se levantó y ba ir al baño. La madre primero le dijo que
salió corriendo). “no”, el niño lloró, el padre volvió a ver a la
T.: Mamá y papá vayan entre los dos, madre y ella lo dejó salir. En ese momento,
traen a Jorge y entre los dos lo sientan en la madre afirmó: a él (el padre), no le gusta
la silla y se queda uno a cada lado para que ellos aguanten…
que no se levante. Lo hicieron, el niño lloró
desconsolado, y se abrazó a la madre, quien T.: ¿Qué sucedió acá?
estaba en la silla de a la par. El padre tam- Madre: Yo le dije que no, pero siem-
bién lo abrazó. pre fue.
T.: ¿A mamá y papá les parece que los T.: ¿Qué la movió para dejarlo salir
niños pueden dibujar ahora? (Recordemos después de decirle como cuatro veces que no?
que fue un pedido que los niños hicieron al Madre: Me cuesta verlo llorar y no es
llegar) bueno que aguanten.
92 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

T.: ¿Su esposo le dijo con los ojos que origen de Karen, situación que favoreció el
lo dejara salir? ambiente familiar.
Madre: Sí, a él no le gusta que
aguanten… T.: Recuerdan ustedes que la terapia
T.: ¿Ni que llore? Esa es una forma de la iniciamos debido a la petición que hicie-
descalificar, aunque no fue con palabras, el ron por el comportamiento de Jorge que
efecto es el mismo. mostraba conductas agresivas, de hiperac-
Padre: Es cierto (sonríe). tividad e impulsividad. ¿Cómo ven ustedes
T.: ¿Con el llanto el niño logra lo que esa situación actualmente?
quiere? Madre: Jorge, Ahora como ya yo lo
Madre: Sí, él me manipula con eso. manejo a la manera mía, él cumple órde-
T.: ¿Cuándo eso sucede quién tiene la nes, pide permiso, ayuda en el oficio, acepta
autoridad? la autoridad de la maestra y la de nosotros,
Padre: Jorge, hizo lo que él quería. ya él cambió.
T.: (a Jorge) ¿Qué debió haber hecho Padre: Jorge además de eso, ha
mamá y papá para que no salieras? mejorado en el lenguaje, es un niño cola-
Jorge: No dejarme salir. borador.
Mario: Si no le dejan él no va afuera. Madre: La maestra dice que Jorge
T.: ¿Se dieron cuenta de la claridad ahora participa en la clase, él era muy
que tienen los hijos del manejo que ustedes apartado. Ahora participa, hasta canta,
hacen con ellos? juega con plasticina y participa en el círcu-
Padre: Es un jueguito que tenemos. lo. En la casa busca papeles para pintar, y
de él nace decir “voy a ayudarle a mamá”.
En ese momento, Mario quiso salir Ya no tengo que pegarle, se le castiga con
para ir al baño y Jorge se paró y quiso salir no dejarlo jugar por un rato.
de nuevo con el motivo que necesitaba ori- T.: Qué increíble el cambio que ha
nar. La madre cerró la puerta y no les dejó tenido esta familia ¿Qué cosas consideran
salir. Jorge se enojó mucho, se tiró al suelo, ustedes que deben continuar haciendo para
se puso a llorar y hasta pateó la puerta. no volver a la situación inicial?
En el llanto decía yo quiero ir, la madre le Madre: No volver a la agresión,
respondió “no es no” y allí se mantuvo en que nosotros sigamos como los estamos
ese pulso por unos minutos. educando. Si perdemos el control ellos se
desubican y entonces vuelven a la mala-
Madre: Eso pasa en la escuela, le crianza. Otra cosa es poder mantener-
dicen que no y hace lo que él quiere. nos en la casa apartados de mi familia.
T.: ¿Pasa eso en la casa también? También dialogar más en la casa para el
Madre: Pero ya no más, “no es no”. crecimiento de ellos.
Que llore lo que quiera, pero no sale. El
problema en la casa es que mis herma- T.: ¿Qué otras cosas deben hacer para
nos no aguantan oír llorar y me regañan mantener el cambio en ustedes?
a mí. Padre: Mantenernos en casa apar-
Padre: El llanto es un arma que te de la familia de Karen, eso es lo más
Jorge tiene, ya me doy cuenta de eso. importante; el manejo de los güilas entre
los dos, nosotros juntos les podemos a ellos.
Tenemos que dialogar en la casa, compar-
La familia habla sobre tir con ellos, salir a pasear, apoyarnos en
los cambios logrados las órdenes que damos, no descalificarnos,
apoyarnos entre nosotros. Ahora yo siento
Para la octava sesión la familia logró que sí tengo una esposa, antes no.
la meta de independizarse de la familia de T.: ¿Qué otra cosa podrían hacer?
Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007 93

Madre: Como yo tengo trauma de no (bajo el lema: “el palito para que crezca rec-
tener papá yo quiero que Antonio sea más tito hay que enderezarlo desde chiquito”),
papá. y a pesar de las dificultades económicas,
T.: Colóquense de frente y dialogan movió a este sistema familiar a lograr las
entre ustedes sobre eso, ¿qué significa ser siguientes reestructuraciones:
más papá?
1. Con respecto al subsistema con-
De frente Karen prosigue: Que usted yugal: acercamiento emocional,
cuando llegue los busque, habla con ellos mejoramiento de la comunicación,
sobre la escuela, lo que han hecho. Además lograron separarse físicamente de
que revise los cuadernos y me ayude con lo la familia de origen de ella, y resta-
de la escuela. blecer otras formas de relación con
Padre: Sí, yo puedo tener más comu- esa familia.
nicación con los hijos. Lo de la escuela si 2. En cuanto al subsistema parental: for-
usted no me dice yo no sé, pero si usted me talecieron la función parental en cuan-
dice yo participo. De ahora en adelante les to lograron acuerdos sobre la forma de
voy a revisar cuadernos y ayudar a hacer disciplinar a los niños. Aprendieron a
las tareas. no descalificarse, a poner orden jun-
Madre: Yo le voy a seguir comuni- tos, a cumplir la norma “no es no” y a
cando. buscar diálogo con los hijos.
T.: Otra de las cosas que ustedes 3. El subsistema filial: ninguno de los
pedían fueron: mejorar la relación entre hijos forma parte ahora de coaliciones
ustedes, y ser mejores padres. ¿Qué pien- estables; están más unidos, comparten
san de eso ahora? más entre ellos, también han mejora-
Padre: Ya eso está cumplido. do el comportamiento en la escuela.
Madre: Ya hemos logrado lo que que-
ríamos. Sería bueno que nos reuniéramos Esta familia desde el inicio del pro-
una vez después de que pasen las vacacio- ceso intuía las situaciones que se les esta-
nes para ver si yo puedo manejar sola a ban dificultando, y con poca guía Karen
los güilas cuando no están en la escuela. y Antonio fueron encontrando las salidas
Me da un poco de susto, antes Mami me y tuvieron la perseverancia para reencon-
ayudaba. trarse y asumir la formación de los hijos.
T.: ¿Qué piensa Antonio de eso? No todas las familias de los centros
Padre: Me parece bien que suspen- educativos requieren del tipo de interven-
damos un mes y después venimos a ver ción que recibió esta familia. Sin embargo,
cómo nos va. no se puede desconocer la necesidad que
tienen las familias de mejorar la comuni-
Es la misma familia la que define la cación, la dificultad de las figuras proge-
finalización del proceso terapéutico, según nitoras respecto a la educación de la prole,
la pareja se cumplió con el pedido que plan- el manejo adecuado del poder inter e intra-
tearon al inicio. generacional al interior de las familias,
la responsabilidad de las familias en la
transmisión de valores de vida, la violencia
V. Consideraciones finales de género, entre otros. Estas necesidades
de las familias costarricenses aparecen
Durante el proceso esta familia logró en los informes del Proyecto del Estado
cambios muy significativos y en un período de la Nación. Ante esta realidad vale la
corto de tiempo. El deseo de estar mejor, pena preguntarse: ¿qué aporte puede ofre-
y sobre todo, el de educar bien a sus hijos cer el sistema educativo en general y los
94 Revista Educación 31(2), 79-94, ISSN: 0379-7082, 2007

departamentos de Orientación en particu- Minuchin, S., Lee, W. y Simon, G. (1998). El


lar para mejorar la calidad de vida de las arte de la terapia familiar. Barcelona:
familias? Vale la pena asumir el reto con Paidós.
una posición proactiva. Considero necesa-
rio que las universidades como formadoras Musitu, G., Román J. y Gutiérrez, M.
de profesionales en orientación, refuercen (1996). Educación familiar y socia-
el currículo con teoría y metodología para lización de los hijos. Barcelona: Idea
educar, orientar y asesorar a familias. Por Books, S.A.
otro lado, es urgente que el Ministerio de
Educación pública, por su misión como ente Nugent, F. (1990). An Introduction to the
rector del sistema educativo (le corresponde Profession of Counseling. USA: Merril
la formación de la infancia y la adolescencia Publishing Company.
escolarizada del país), defina e implemente
políticas y acciones a nivel nacional, que Richardson, R. (1993). Vivir feliz en fami-
favorezcan la asesoría a las familias desde lia. Barcelona: Editorial Paidós.
los centros educativos.
Ronch, J., Van, W. y Stilwell, N. (2006).
The Counseling Sourcebook: a practi-
Vi. Referencias bibliograficas cal reference on contemporary issues.
New Cork: Crossroad.
Austin, G. (1992). Amor y poder entre
padres e hijos. México: PROMEXA. Satir, V. (2002). Nuevas relaciones huma-
nas en el núcleo familiar. México:
Barylko, J. (2005). Familia el arte de Editorial PAX.
la convivencia. Argentina: Editorial
Suramericana. S.A. Suares, M. (2002). Mediando en sistemas
familiares. Argentina: Paidós.
Hernández, A. (1998). Familia, ciclo
vital y psicoterapia sistémica breve. Umbarger, C. (1999). Terpia Familiar
Colombia: Editorial El Búho. Estructural. Argentina: Amorrortu
editores.
Jaramillo, J. (2002). Familia y colegio.
Colombia: Grupo editorial Norma. Watzlawick, P. y otros. (1983). Teoría de
la comunicación humana. Barcelona:
Minuchin, S. (1985). Familias y Terapia Editorial Herder.
familiar. México: Gedisa.
Whitaker, C., y Bumberry, W. (1991).
Minuchin, S. y Fishman, H. (1985). Técnicas Danzando con la familia. España:
de terapia familiar. España: Paidós. Ediciones Paidós.

También podría gustarte