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SUMARIO

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Revisión

Inmunología de la infección por helmintos


M.a L. Caballero Soto
Servicio de Inmunología. Centro de Investigación Clínica. Instituto de Salud Carlos III. Madrid

La prevalencia global de infección por helmin- da intervenir para inhibir su penetración y asenta-
tos o gusanos parásitos, probablemente, excede a miento en el hombre, constituyen las perspectivas
cualquier otra infección. Se estima que un tercio actuales para el desarrollo de nuevos métodos de
de la población mundial alberga una infección con control mediante inmuno o quimioprofilaxis.
helmintos intestinales (Trichuris trichiura, Ascaris
lumbricoides, Strongyloides stercolaris, uncina-
rias) 1; entre 200 y 300 millones de personas se CARACTERÍSTICAS ANTIGÉNICAS
cree que están infectadas por alguna de las espe- DE LOS HELMINTOS
cies de esquistosomas (Schistosoma mansoni,
Schistosoma haematobium, Schistosoma japoni- Los parásitos helmintos son de mayor tamaño y
cum) 2, y más de 150 millones están infectados tienen estructuras y ciclos de vida más complejos
con alguno de los parásitos filariales patogénicos que los protozoos. Esto hace que presenten mayor
(Wuchereria bancrofti, Brugia malayi, Loa loa) 3 número de antígenos y que éstos tengan especifi-
(tabla I). cidad de estadio.
Estos grandes organismos extracelulares tienen Los helmintos muestran distinta morfología
complicados ciclos vitales. En el hombre pueden según se encuentren en su fase de vida libre o en
habitar en el intestino, en vasos sanguíneos, órga- sus distintos hospedadores, por ejemplo las cerca-
nos linfáticos u otras localizaciones. Con frecuen- rias de esquistosomas pierden la cola bifurcada
cia migran a través de tejidos hasta alcanzar el
órgano definitivo en el que se asientan. Pueden
sobrevivir durante años en el hospedador infecta- Tabla I. Prevalencia global de infección por helmintos humanos
do, al que no tienen como objetivo destruir, debi- Parásito Estimación Referencia
do a que han desarrollado estrategias de evasión bibliográfica
ante la respuesta inmunitaria del hospedador. Helmintos intestinales
Los helmintos inducen una expansión de los Trichuris trichuria
Ascaris lumbricoides 1/3 población
linfocitos Th2. No está claro si esta respuesta que Strongyloides stercolaris mundial 1
incluye aumento de la concentración de IgE total, uncinarias
eosinofilia y mastocitosis es importante en la res-
puesta inmunitaria protectora o si es la responsa- Esquistosomas
ble de la patología que se observa en algunas Schistosoma mansoni
Schistosoma haematobium 200-300 millones 2
parasitosis o si, tal vez, interviene en los dos Schistosoma japonicum
aspectos.
Un mejor entendimiento de la inmunología de Parásitos filariales
las infecciones por helmintos, así como la bús- Wuchereria bancrofti
queda de rutas bioquímicas y moléculas exclusi- Brugia malayi >150 millones 3
Loa loa
vas y vitales para el parásito sobre las que se pue-

Rev. Esp. Alergol Inmunol Clín, Diciembre 1998 Vol. 13, Núm. 6, pp. 297-313
300 M.a L. Caballero Soto Volumen 13

Hombre producen un abundante número de microfilarias


(Gusanos adultos) (Mf) o primer estadio larvario que circulan en la


sangre del hospedador infectado. Cuando las Mf
➚ Las hembras
producen huevos
son ingeridas por un mosquito hematófago sus-
ceptible, migran a los músculos torácicos y, tras
Penetran la piel del embrionados dos mudas, se desarrollan las L3 infectivas para el
hombre por picadura Microfilarias
Larvas infectivas hombre.
➚ Uno de los hechos más interesantes del ciclo de
vida de las filarias es el bloqueo del desarrollo

Circulan en sangre que sufre la Mf en el hospedador mamífero y el de


perifŽrica y son ingeridas la L3 en el vector artrópodo. Para ambas etapas
Las larvas
maduras
por insectos hemat—fagos del ciclo, el bloqueo marca el final de la fase de
migran en el hemocele
➚ desarrollo en el mamífero (Mf) o en el mosquito
hasta el labio (L3), lo que sugiere la posibilidad de que estos
Insecto vector nematodos utilicen señales derivadas del hospeda-
(Desarrollo larvario dor reguladoras del desarrollo 4.
en mœsculos tor‡cicos) Como en todos los nematodos, la transición de
una etapa del ciclo de vida a la siguiente está
caracterizada por una muda, en la cual, la nueva
Fig. 1. Representación esquemática del ciclo de vida de las
filarias humanas: Wuchereria, Loa, Onchocerca. cutícula es sintetizada y la antigua eliminada. La
glutation peroxidasa cuticular, gp29, se expresa en
todos los estadios del ciclo de vida examinados,
que necesitaban en el medio acuático al entrar en aunque la cantidad relativa y el grado de glicosi-
el hospedador. Los parásitos, en su penetración, al lación de la molécula varía entre las diferentes
pasar de un medio aerobio a uno anaerobio nece- etapas 5. Estudios mediante inmunofluorescencia
sitan una adaptación de su metabolismo. En las han establecido que epítopos estadio-específicos
migraciones a través de los tejidos hasta asentarse están presentes en la superficie más externa de la
en el definitivo, se ven sometidos a condiciones de L3, pero la naturaleza de estos epítopos es desco-
estrés debido a cambios de temperatura, pH, pro- nocida 6.
ductos de oxidación o radicales libres. En todos A pesar del hecho de que las diferentes etapas
estos medios el parásito debe adaptarse, y se pro- del ciclo puedan ser morfológica y antigénica-
duce una continua activación de genes que condu- mente distintas, la identificación y caracterización
ce a la expresión de moléculas que le ayuden a funcional de proteínas estadio-específicas no ha
esta adaptación. Una vez establecido, también sido sencilla 4. Se han generado bibliotecas de
desarrolla sus mecanismos de supervivencia cDNA preparadas de las diferentes etapas del
mediante una acción evasiva frente a la respuesta ciclo de vida de filarias mediante transcripción
inmunitaria del hospedador. En todos estos proce- inversa de RNA seguida de reacción en cadena de
sos existe una activa expresión génica que da la polimerasa (RT-PCR) a partir de RNA aislado
lugar a moléculas potencialmente antigénicas y de las distintas etapas del ciclo: L3 del mosquito,
que son específicas de la fase del ciclo en la que L3 postinfectiva, L4 y adulto. Los patrones de
el parásito se encuentre. expresión de cada mRNA varían a través de los
Las filarias proporcionan un buen sistema expe- diferentes estadios 4.
rimental para el estudio de antígenos estadio-espe- Se ha generado una biblioteca de la etapa L3
cíficos debido a la complejidad de su ciclo de vida postinfectiva (estadio crucial para la infección del
y al requerimiento de un vector (artrópodo hema- hombre y otros mamíferos), en la cual los genes
tófago) (fig. 1). La forma infectiva para el hospe- que se transcriben estarían implicados en los
dador mamífero es el tercer estadio larvario (L3) mecanismos de adaptación de la L3 a un ambien-
que es transmitido por picadura de mosquito. Las te completamente nuevo, donde toma las medidas
L3 son llevadas desde la piel a vasos linfáticos. En adecuadas para evitar la respuesta inmune del hos-
ellos alcanzan la madurez y las hembras adultas pedador y continúa su ciclo de desarrollo. No se

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Núm. 6 Inmunología de la infección por helmintos 301

conoce nada acerca de los mecanismos molecula- existencia de mecanismos superpuestos implica-
res o celulares implicados en estos procesos, pero dos en la defensa inmunitaria mediante citocinas
los genes transcritos responsables del inicio del individuales y las rutas efectoras que son induci-
desarrollo de la L3 hacia la etapa de Mf juegan das.
papeles clave en el ciclo de vida del parásito y, Las infecciones por helmintos han proporciona-
por tanto, podrían proporcionar posibles dianas do algunas de las más claras evidencias del para-
para intervención quimioterapéutica o inmunoló- digma Th1/Th2 aplicado al sistema inmunitario
gica 4. humano 10. Clones de células T específicos de
La Mf es una etapa interesante del ciclo porque nematodos aislados de individuos sanos generan
constituye un reservorio de infección. En este citocinas del patrón de respuesta Th2, mientras
estadio se ha identificado, mediante electrofore- que clones de células T contra antígenos bacteria-
sis, un complejo de proteínas que son altamente nos de los mismos individuos producen citocinas
expresadas en Mf cultivadas bajo condiciones de de respuesta Th1 11. Pacientes con esquistosomia-
hospedador mamífero e inmediatamente reprimi- sis o filariasis también muestran abundantes célu-
das cuando las Mf se transfieren a condiciones las T circulantes semejantes a una respuesta Th2
del vector (mosquito) 7. Estas proteínas, diferen- frente a los antígenos parasitarios 12-14.
cialmente expresadas, se comprobó que pertene- Consecuentemente con estas observaciones, el
cían a la familia de las proteínas de choque tér- aumento del número de mastocitos y eosinófilos,
mico (HSPs) de bajo peso molecular, cuyas así como las altas concentraciones de IgE e IgG4
funciones precisas permanecen desconocidas. Las son característicos de los individuos infectados
HSP se inducen en respuesta a una variedad de por helmintos 15, 16. Se desconoce si la respuesta
estímulos ambientales como la temperatura eleva- Th2 tras la infección por helmintos es beneficiosa
da o condiciones de estrés oxidativo. Se ha suge- para el hospedador o para el parásito 17, 18. Esta
rido que podrían estar relacionadas con el blo- cuestión merece un cuidado interés debido a que
queo del desarrollo de las Mf en el hospedador la IgG4 puede bloquear los mecanismos mediados
mamífero 4. por IgE 19, aunque ambos isotipos están promovi-
En general, se han definido genes que son dos por el mismo tipo de citocinas Th2.
expresados de forma estadio-específica, regulados Las demostraciones de que los eosinófilos y la
secuencialmente a lo largo del ciclo biológico del IgE pueden matar parásitos in vitro ha provocado
parásito, cuya importancia funcional es decisiva la extendida creencia de que estas respuestas Th2-
para asegurar su establecimiento y supervivencia dependientes son principalmente responsables de
en el hospedador. la destrucción de grandes parásitos extracelulares.
Sin embargo, in vivo tiene lugar una notoria con-
tradicción. En la mayoría de las infecciones por
MECANISMOS IMPLICADOS EN LA helmintos aparecen grandes cargas de parásito a
RESPUESTA INMUNE pesar de las abundantes respuestas Th2 y la evi-
dencia directa, in vivo, del papel de los eosinófi-
En 1986, Mosmann et al. 8 inician un concepto los, IgE o mastocitos para controlar la infección
revolucionario en Inmunología al dividir las célu- por helmintos es escasa 9.
las T cooperadoras (Th) en dos poblaciones según Existen dudas sobre si la interleucina 4 (IL-4)
los perfiles de citocinas implicadas. El papel de es crucial en el control de las infecciones por hel-
las células Th1 y Th2 ha llegado a constituir un mintos 20. Experimentos in vivo, con anticuerpos
dogma, con las afirmaciones categóricas que neutralizantes de IL-4, han mostrado que la expul-
actualmente aparecen en libros de Inmunología, sión del gusano es dependiente de la IL-4 durante
en las que las respuestas mediadas por células Th1 la infección con Trichuris muris. No se requiere
acaban con parásitos intracelulares y respuestas IL-4 para la expulsión en otras infecciones por
Th2 eliminan los extracelulares. Según Allen y helmintos intestinales, pero tiene un impacto
Maizels 9, sería importante no establecer afirma- importante sobre la intensidad de la infección y la
ciones tan categóricas dentro del tipo de respues- producción de huevos 21. A pesar del aparente
ta Th1 o Th2 y, en lugar de esto, considerar la papel de la IL-4 en estas infecciones intestinales,

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ha sido muy difícil demostrar que el clásico feno- ye a la prevención inmune al impedir el estableci-
tipo asociado con las respuestas Th2 sea respon- miento de parásitos 29. No se conoce la función
sable de los efectos perjudiciales sobre los parási- precisa de la mucosa intestinal pero, mediante
tos. Es posible que la IL-4 esté actuando sobre ensayos in vitro, se ha demostrado que el atrapa-
una población de células existente (para inducir miento de larvas de Trichinella spiralis en el
peristaltismo o producción de mucus, por ejem- mucus intestinal sólo ocurre en presencia de anti-
plo) y que la IL-4 derivada de la activación de lin- cuerpos específicos. Esto sugiere que dichos anti-
focitos Th2 sea un efecto colateral de la infección. cuerpos inducen la captura del parásito por dos
La IL-4 administrada directamente causa la expul- vías: por formación de una red cargada de anti-
sión del gusano Nippostrongylus en ratones SCID cuerpos que atrapa a la larva y por bloqueo de
infectados, lo que demuestra que la IL-4 puede alguna función requerida para su progreso a través
actuar independientemente de la respuesta inmune de la mucosa 30.
adquirida 21.
La complejidad del paradigma Th1/Th2 es
igualmente bien ilustrada en esquistosomiasis, ALERGENOS Y RESPUESTA IgE
donde estudios en humanos y ratón han originado
diferentes conclusiones concernientes a las res- Los helmintos tienen una fuerte asociación con
puestas Th2 en la inmunidad protectora. En huma- las reacciones de hipersensibilidad, atestiguada por
nos, correlaciones epidemiológicas sugieren que los altos valores de IgE encontrados en la mayoría
IgE y eosinofilia pueden ser la clave de la inmu- de las helmintiasis. Sin embargo, esta relación es,
nidad protectora 22. En el ratón, sin embargo, con frecuencia, paradójica: las reacciones alérgicas
varios estudios han indicado que la vacunación son raras en la gran infección y la mayoría son
efectiva requiere células efectoras que secreten graves en casos en los que el parásito no se
interferón gamma (IFN-g) para la destrucción del encuentra (como es el caso de la eosinofilia pul-
parásito 23. Estudios en ratones han sugerido, monar tropical) o en exposiciones exógenas (ejem-
incluso, que respuestas Th2 e IgE son beneficio- plo: trabajadores de laboratorio manipulando
sas para el parásito y, en realidad, aumentan la Ascaris) 10. Entre los nematodos, el grupo de antí-
infección 24-26. genos más importante es una familia denominada
poliproteínas alergénicas de nematodos (NPA) 31.
La familia NPA fue definida por la molécula pro-
CÉLULAS Y MOLÉCULAS EFECTORAS totipo en Ascaris, ABA-1, principal constituyente
del fluido corporal responsable de las respuestas
Gran cantidad de estudios han demostrado que alérgicas a este organismo 32. Curiosamente, la res-
la capacidad para expeler nematodos intestinales puesta de anticuerpos a estas moléculas parece
está mediada inmunológicamente y, particular- estar bajo estricto control genético 33, 34.
mente, que las células Th CD4+ son cruciales La ausencia de síntomas alérgicos en la infec-
para la expulsión de los gusanos. Las células Th ción por helmintos adquirida naturalmente, a
CD4+ regulan las respuestas inmunes por la pesar de la elevada concentración de IgE en suero
secreción de citocinas. Como anteriormente se ha y la aparición de eosinofilia, puede deberse a las
comentado, las células Th se han definido por los concentraciones extremadamente altas de IgG4
grupos de citocinas que secretan. Las células Th1 bloqueante que está también presente en estos
se han asociado, principalmente, con la secreción individuos 16, 35-38. Es interesante que el resultado
de IL-2 e IFN-g y las células Th2, se han relacio- clínico de las infecciones por helmintos puede,
nado con la secreción de IL-4, IL-5, IL-6, IL-9 e además, depender de la proporción de IgE e IgG4.
IL-10 27. Por ejemplo, en la filariasis, muchos individuos
Se ha demostrado que la expulsión del gusano no presentan síntomas aparentes pero sí valores
parásito está controlada por citocinas del grupo altos de Mf circulantes, mientras que otros han
Th2 que inducen una mastocitosis en la mucosa, eliminado sus Mf pero desarrollan síntomas clíni-
eosinofilia intestinal y concentraciones elevadas cos crónicos (elefantiasis). El primer grupo Mf+
de IgE en suero 28. La mucosa intestinal contribu- tiene concentraciones de IgG4 extremadamente

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Núm. 6 Inmunología de la infección por helmintos 303

altos con cifras bajas de IgE, mientras, en con- el daño se hace mayor al incrementarse el núme-
traste, esta relación de isotipos de anticuerpos está ro de huevos atrapados en el hígado, con forma-
invertida en pacientes con elefantiasis 36, 37. Aun- ción de lesiones granulomatosas que bloquean el
que la producción de ambos isotipos IgE e IgG4 flujo sanguíneo y causan hipertensión portal y
depende de la IL-4, la IgE es más susceptible de fibrosis hepáticas 10.
modulación por el IFN-g que la IgG4 39. En un La formación de granulomas inducidos por
modelo de filariasis en ratón, ambas formas, la huevos de Schistosoma mansoni ha servido como
larva infectiva (L3) y el parásito adulto inducen modelo útil in vivo para el estudio de la regula-
altas concentraciones de IL-4, mientras que la eta- ción de las células T cooperadoras y sus citocinas
pa Mf que circula en el torrente sanguíneo induce asociadas 44. Aunque está claro que citocinas Th1
IFN-g. Quizá en esta enfermedad, el IFN-g produ- y, en particular, la IL-2, juegan un importante
cido frente a las Mf modula la respuesta IgE que papel en la iniciación de la respuesta granuloma-
puede estar implicada en la eliminación del pará- tosa 45-47, estudios de depleción de citocinas han
sito y en la inmunopatología 40. En general, no hay sugerido que la formación del granuloma, particu-
evidencia de que los efectos bloqueantes sean más larmente en sus fases de crecimiento y manteni-
beneficiosos para el hospedador por prevenir el miento, se asocia con citocinas Th2 45, 48-50; el IFN-
daño de las respuestas de hipersensibilidad, o g modula este proceso 50, 51. La IL-12, citocina
beneficien al parásito por impedir la eliminación producida por células B y macrófagos 52, 53 , pare-
del gusano (dependiente de IgE). Esta relación ce tener un papel endógeno y exógeno en la regu-
podría ser beneficiosa para ambos, a la vista de la lación de la formación del granuloma por huevos
larga historia coevolutiva de los gusanos parásitos de esquistosoma 51. La neutralización de la IL-12
con el sistema inmunitario de los mamíferos 10. endógena aumenta la inflamación granulomatosa.
La resistencia a la infección con Schistosoma Cuando se administra IL-12 con huevos de esquis-
mansoni y S. haematobium en humanos se ha aso- tosoma actúa como un adjuvante reduciendo mar-
ciado con la producción de IgE, mientras que la cadamente la respuesta Th2 y la formación de gra-
susceptibilidad está asociada con la presencia de nuloma en una administración posterior de
isotipos no IgE, particularmente, IgG4 41, 42. Así, la huevos 51. Se ha pensado si los efectos de la IL-12
susceptibilidad o resistencia a la infección puede son directos o mediados por el IFN-g inducido. La
depender de un balance entre las respuestas pro- IL-12 tiene una capacidad intrínseca para desen-
tectoras IgE y los anticuerpos bloqueantes de antí- cadenar la producción de citocinas Th1 y de supri-
genos de las etapas infectivas. mir respuestas Th2 en hospedadores normales
como producto de la estimulación de la síntesis de
IFN-g. A pesar de sus mecanismos de acción, la
INMUNOPATOLOGÍA IL-12 tiene un enorme potencial como adjuvante
de la inducción preferencial de respuestas Th1.
La patología producida por infecciones por hel- Sin embargo, se sugiere que en individuos con
mintos es generalmente compleja, con componen- deficiencias en la producción de IFN-g, la IL-12
tes derivados de las lesiones directas y cambios administrada exógenamente puede, además de
ocasionados por el parásito, y de la respuesta promover la producción de citocinas Th1, también
inmune a la infección. exacerbar patologías dependientes de Th2 44.
Así, por ejemplo, la infección por esquistosoma
causa numerosos granulomas en el hígado como
resultado de la respuesta inflamatoria frente a los PAPEL DEL ÓXIDO NÍTRICO
huevos liberados por las hembras adultas. El gra-
nuloma depende de la producción de citocinas La inmunidad celular está clásicamente media-
inflamatorias, en particular, del factor de necrosis da por linfocitos T más células accesorias, princi-
tumoral a en respuesta a los antígenos proceden- palmente macrófagos que operan contra patóge-
tes de los huevos 43. Los macrófagos activados y nos dentro de los tejidos. Las células endoteliales,
eosinófilos son las principales células implicadas que tradicionalmente no se han considerado como
en la formación de estos granulomas. En clínica, parte del sistema inmunitario, pueden jugar un

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304 M.a L. Caballero Soto Volumen 13

papel importante en la inmunidad frente a helmin- Tabla II. Principales efectos del óxido nítrico sobre la esquisto-
sómula
tos como Schistosoma mansoni por medio de una
destrucción del parásito dependiente del óxido — Inactivación de enzimas críticos con centros Fe-S catalítica-
nítrico 54. mente activos
— Perturbación de las células del músculo subtegumental y de
Células endoteliales tratadas con citocinas mos- la mitocondria
traron un aumento en la expresión de mRNA de la — Desintegración progresiva y vacuolización de las estructuras
forma inducible de la óxido nítrico sintetasa y, internas del parásito
tanto la producción de óxido nítrico, como la des- — Inhibición del metabolismo de la larva como posible causa
trucción de las larvas de esquistosoma se anularon de la muerte del parásito
por el tratamiento con inhibidores competitivos de
la síntesis de óxido nítrico. La función efectora de
las células endoteliales tratadas con citocinas fue 48 horas de incubación los organismos se reduje-
similar a la de macrófagos de tejidos activados, ron a una “concha” tegumental intacta rodeada de
aunque esta activación parece estar diferentemen- tejidos internos intensamente vacuolados y desor-
te regulada en estos dos tipos de células 54. La ganizados 57. Este esquema es consistente con la
activación de macrófagos peritoneales por IFN-g y posibilidad de que la inhibición del metabolismo
otras citocinas o lipopolisacáridos (LPS) induce la de la larva esté implicada en la muerte del parási-
producción arginina dependiente de óxido nítrico, to mediada por macrófagos 56. Recientemente, se
el cual sirve como molécula efectora de la muerte ha encontrado que la inactivación del enzima aco-
del parásito 55. La observación de que las células nitasa o de la cadena de transporte de electrones
endoteliales son sensibles a señales de citocinas implicada en la respiración mitocondrial por
para la producción de óxido nítrico, sugirió que varios inhibidores químicos es tóxico para la
estas células puedan participar en la protección esquistosómula 58, lo cual verifica la naturaleza
contra parásitos que poseen una etapa intravascu- crítica de las rutas metabólicas afectadas por el
lar. Debido a que los esquistosomas permanecen óxido nítrico para la supervivencia de esta etapa
en ambiente intravascular la mayor parte de su infectiva del parásito.
ciclo de vida en el hospedador mamífero, consti-
tuyen un modelo ideal con el que estudiar estas
hipótesis. Estudios con líneas de células endote- MECANISMOS DE EVASIÓN DEL
liales murinas o humanas mostraron que estas PARÁSITO ANTE LA RESPUESTA INMUNE
células eran capaces de matar larvas de esquisto- DEL HOSPEDADOR
soma por un mecanismo que dependía de la argi-
nina. Un requisito común a todas las infecciones
La producción in vitro de óxido nítrico requería parasitarias que progresan consiste en que los
señales de citocinas, con combinaciones de IFN-g, parásitos puedan evadir los efectos totales de las
TNF-a e IL-1 56. El lipopolisacárido (LPS) era respuestas inmunes del hospedador y sobrevivir
también capaz de producir una señal adecuada 54. en éste durante largos períodos. Como ejemplos,
Los principales blancos del óxido nítrico en el entre las especies de nematodos que afectan al
esquistosoma parecen ser enzimas que contienen hombre, se encuentra el Necator americanus del
un grupo Fe-S catalíticamente activo (tabla II). que se sabe que vive entre 15-17 años tras la ino-
Estudios ultraestructurales de esquistosómulas de culación única de larvas infectivas 59; también
la piel cultivadas con macrófagos activados mos- Onchocerca volvulus tarda 18 años en desaparecer
traron que, a diferencia de una destrucción anti- de poblaciones humanas en regiones endémicas
cuerpo dependiente, la citotoxicidad mediada por cuando su transmisión ha sido suprimida a través
macrófagos no se dirige contra la superficie del de la eliminación de los insectos vectores 60, 61.
parásito. Dentro de la primera hora de incubación, Existe, por tanto, la necesidad de entender los
la perturbación de las células del músculo subte- mecanismos de supervivencia del parásito, parti-
gumental y de la mitocondria se hicieron notar. cularmente, debido a la implicación de las estrate-
Siguió una desintegración progresiva de las gias evasivas en la vacunación. Las vacunas con-
estructuras internas del parásito tal que a las vencionales (antiinfección) tienen el objetivo de

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Núm. 6 Inmunología de la infección por helmintos 305

explotar la resistencia del hospedador ante la Tabla III. Mecanismos empleados por nematodos para evadir
los efectos de la respuesta inmune del hospedador
infección por el parásito, mediante el reconoci-
miento inmunológico de antígenos relevantes que — Muda de componentes de la superficie de la cutícula
sean capaces de provocar una rápida respuesta — Enzimas antioxidantes
— Resituación en los tejidos
inmune adquirida, que limite la supervivencia del — Imitación molecular. Camuflaje con moléculas del hospeda-
parásito y la oportunidad para desarrollar la enfer- dor o similares
medad asociada. Sin embargo, este ideal puede no — Inmunomodulación
ser factible en el caso de nematodos. Hasta ahora,
la inmunidad adquirida de la cual dependen la
mayoría de las vacunas convencionales es débil y mente altas de estos enzimas en comparación con
es improbable alcanzar los altos niveles de efica- los presentes en tejidos del hospedador, lo que
cia que serían deseables 59. La cronicidad de las sugiere que pueden ser empleados adicionalmente
infecciones por nematodos no se cuestiona, pero para protegerse contra los radicales libres de oxí-
los mecanismos a través de los cuales se alcanza geno liberados durante la respuesta del hospeda-
esta cronicidad permanecen en la polémica y los dor 63. El enzima más ampliamente estudiado es la
avances en este área están siendo muy lentos 59. superóxido dismutasa, la cual se ha detectado en
Los mecanismos de evasión empleados por distintas familias de helmintos, algunas veces en
nematodos, hasta ahora conocidos, se describen a cantidades extraordinariamente altas 64-66.
continuación (tabla III). 3. Resituación en los tejidos. Allí donde la
1. Muda de componentes de la superficie de resistencia viene mediada localmente, como por
la cutícula. Mediante la aplicación de marcajes ejemplo en el sitio de fijación de un parásito, la
con isótopos radiactivos, el estudio de antígenos separación y resituación en un nuevo sitio puede
de superficie de nematodos ha demostrado que la ser una solución temporal para evitar la resisten-
cutícula no es enteramente inerte, como previa- cia del hospedador 59. El Ancylostoma caninum
mente se creía 62. Los componentes de superficie cambia su sitio de fijación a intervalos regulares,
son mudados y constituyen dianas para anticuer- quizá tan frecuentemente como cada 4-6 horas 67.
pos específicos a través de las cuales los mecanis- Observaciones con uncinarias en hamsters confir-
mos celulares citotóxicos pueden rodear y destruir man que hay considerablemente más lesiones que
parásitos. Su potencial papel en la supervivencia gusanos, lo que sugiere una relocalización regular
no es difícil de apreciar. Requiere continuas sínte- a sitios nuevos en busca de alimento. Al moverse
sis, transporte y expresión sobre la superficie. Si a nuevos sitios escapan a la respuesta celular
este ciclo fuera inhibido o meramente afectado, local 59.
los gusanos podrían llegar a ser susceptibles a los 4. Camuflaje con moléculas de origen del
efectores del hospedador. Los antígenos mudados hospedador o expresión de moléculas similares a
se encuentran frecuentemente en etapas infectivas las del hospedador sobre su superficie: imitación
que pronto mudan a L4, donde tienen lugar otros molecular. La evolución paralela de hospedador y
mecanismos 59. parásitos podría haber provocado una similitud
2. Enzimas antioxidantes. Los radicales de antigénica entre las dos especies. De este modo,
oxígeno se producen dentro de las células como se minimizaría la disparidad antigénica y la inmu-
parte normal del metabolismo oxidativo y la nogenicidad, lo que permitiría a los parásitos cau-
mayoría de los organismos aeróbicos poseen una sar infecciones crónicas 59. En esquistosomiasis se
serie de enzimas anuladoras del oxígeno que pro- han identificado dos mecanismos distintos: uno
tegen a los tejidos, órganos y células con la elimi- implica la adsorción de una variedad de moléculas
nación de los radicales potencialmente perjudicia- del hospedador sobre la superficie tegumental,
les de sitios donde podrían alterar la función de un entre las que se incluyen antígenos de los grupos
órgano 59. Estos enzimas constituyen un sistema sanguíneos y moléculas del complejo mayor de
de regulación natural, que capacita a los organis- histocompatibilidad 68; y el otro, la expresión
mos para emplear el metabolismo oxidativo y para sobre la superficie del parásito de productos géni-
protegerlos de los aspectos dañinos de sus pro- cos de esquistosoma con similitud a moléculas del
ductos. Los nematodos poseen cantidades relativa- hospedador 69.

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5. Inmunomodulación. Es la actividad de pedador, mediante las cuales modulan su inmuni-


cualquier factor de un parásito que reduce la efec- dad 59. Tras clonaje, se ha obtenido una molécula
tividad de la inmunidad del hospedador o, de de 11 kDa, normalmente secretada por L4 y adul-
alguna forma, modula los intentos del hospedador tos de Trichostrongylus colubriformis 74. Al
para expresar una respuesta potencialmente pro- secuenciarla, este factor mostró una llamativa
tectora 59. homología con una proteína humana inducida por
La literatura está repleta de información sobre el interferón gamma.
la inmunodepresión inespecífica, fácilmente
demostrable a lo largo de todas las clases del phy-
lum Nematoda 59. Por el contrario, la inmunode- PERSPECTIVAS PARA EL DESARROLLO
presión específica, como respuesta a los antígenos DE VACUNAS CONTRA INFECCIONES POR
del parásito infectante, sólo está bien documenta- HELMINTOS HUMANOS
da en el caso de especies filariásicas 70, 71, pero
incluso en éstas la cuestión no está completamen- Las infecciones por helmintos difieren en un
te clara, porque una proporción de individuos con importante número de mecanismos respecto a la
microfilaremia puede responder a antígenos fila- mayoría de las demás enfermedades infecciosas
riales 72. (tabla IV). Estas diferencias tienen un importante
Numerosos trabajos evidencian la existencia de impacto sobre las posibles estrategias para el con-
la inmunodepresión o de factores inmunomodula- trol de la enfermedad. Primero, con pocas excep-
dores derivados del parásito, pero en pocos casos ciones, los helmintos no se multiplican dentro del
se conoce qué moléculas son las responsables. El hospedador humano y requieren el paso a través
aislamiento y análisis de potenciales candidatos es del ambiente exterior y de un vector artrópodo u
extremadamente lento. Hay varias razones: los otros hospedadores invertebrados (como el cara-
factores inmunomoduladores parecen ser lábiles, col) para reproducirse y completar su ciclo vital.
con vidas medias cortas in vivo y su aislamiento Esto ofrece la posibilidad de control a nivel de
de los parásitos, bien extraídos directamente de vector u otras medidas ambientales. Segundo, la
los hospedadores o mantenidos in vitro, parece ser infección por helmintos puede persistir durante
problemático. años, una importante consideración cuando se
Se han realizado estudios con extractos de pará- contempla el control por quimioterapia o a nivel
sitos y sus productos de excreción/secreción (ES) de vector. Por ejemplo, es necesario mantener los
o fraccionamientos específicos de éstos, para programas de control de oncocerquiasis mediante
medir sus propiedades inmunodepresoras in vivo o ivermectina (la cual es inactiva contra el gusano
in vitro. No se conoce todavía bien el papel de las adulto) y el control del vector durante 10-15 años,
moléculas implicadas. El único punto en común lapso de la vida del gusano adulto 75. Tercero, los
de los estudios en los que estas fracciones de pro- efectos clínicos de la infección no están directa-
ductos de parásitos se han investigado es que, en mente relacionados con la presencia o ausencia de
general, las moléculas implicadas parecen ser
relativamente pequeñas (<50 kDa) 59. En microfi-
larias de Brugia malayi aparece la excepción, al Tabla IV. Diferencias entre las infecciones por helmintos y las
encontrarse sorprendente actividad en fracciones demás enfermedades infecciosas
excretora-secretora en rangos moleculares de 50- — Los helmintos no suelen multiplicarse en el hospedador
190 kDa 73; probablemente, ello se debe a que humano, pero requieren el paso a través de un vector u otro
varias moléculas de diferente tamaño están impli- hospedador
cadas o a que moléculas relativamente pequeñas — La infección por helmintos puede persistir durante años
— Los efectos clínicos de la infección no están relacionados
tienen capacidad para formar unidades multiméri- con la presencia o ausencia de infección
cas. Se piensa que son moléculas similares a cito- — La infección no está uniformemente distribuida en una
cinas. población: la intensidad y prevalencia varían en función de
Se especula con la idea de que los parásitos la edad
— La adquisición de inmunidad por efecto de la exposición a
nematodos hayan desarrollado moléculas simila- la infección es un fenómeno gradual y acumulativo
res, que recuerden funcionalmente a las del hos-

20
Núm. 6 Inmunología de la infección por helmintos 307

Tabla V. Estrategias para el control de las helmintiasis humanas y sus obstáculos


Estrategia Obstáculo
— Quimioterapia
— a individuos infectados o distribución de fármacos
— en masa — Problemas logísticos y económicos
— Rápida reemergencia una vez interrumpida

— Control del vector


— molusquicidas, insecticidas, mejor tratamiento
— residuos — Difícil implantación
— Toxicidad ambiental
— Resistencias
— Reemergencia

— Desarrollo de vacunas
— ninguna ha alcanzado todavía el ensayo clínico
— humano — Diferencias en los mecanismos inmunes efectores responsables
de protección en diferentes especies (humana respecto a
modelos animales)

infección, sino que dependen de una compleja zol) para geohelmintos. Aunque existen ejemplos
interación entre factores del hospedador y del de programas de control satisfactorios que utilizan
parásito, que incluyen la carga total de gusanos, la quimioterapia, problemas logísticos y económicos
duración de la infección y la respuesta inmune del han impedido la efectiva implantación de estrate-
hospedador 76. Cuarto, los datos de encuestas epi- gias de control basadas en ella. Además, la expe-
demiológicas en una variedad de infecciones por riencia sugiere que una vez que los programas se
helmintos indican que la infección no está unifor- relajan, hay una rápida reemergencia de la infec-
memente distribuida en una población, con una ción 77.
significante variación en la intensidad de la infec- Control del vector o alteración ambiental. Aun-
ción, particularmente, en los grupos de edades que existen las herramientas para el control de la
más jóvenes 76; tales variaciones necesitan ser con- transmisión de infecciones por helmintos (por
sideradas cuando se diseñan las estrategias de ejemplo, molusquicidas para el control de esquis-
control. Finalmente, la intensidad y prevalencia de tosomiasis, control del vector de oncocerquiasis y
la infección generalmente disminuye con el mejora del tratamiento de los residuos humanos
aumento de la edad, lo cual sugiere que la adqui- para geohelmintos y esquistosomiasis), las estrate-
sición de la inmunidad, por efecto de exposición a gias de control basadas en estos métodos han sido
la infección, es un fenómeno gradual y acumulati- difíciles de implantar. Entre los impedimentos
vo 75. está la toxicidad ambiental y el coste de la fabri-
cación y aplicación de insecticidas y molusquici-
das, así como la adquisición de resistencia a estos
ESTRATEGIAS PARA EL CONTROL DE LA agentes.
ENFERMEDAD (tabla V) Las condiciones económicas de muchas regio-
nes, los rápidos crecimientos de la población y,
Quimioterapia. El control de la infección por sobre todo, cambios climáticos, guerra o condi-
helmintos mediante quimioterapia, ya sea dirigido ciones ambientales alteradas, conducen a la emer-
a individuos identificados como infectados, o a gencia de nuevas áreas de endemicidad 75.
través de la distribución de fármacos en masa, Desarrollo de vacunas. Ha sido un componente
depende de un pequeño número de medicamentos: crucial para el satisfactorio control de muchas
praziquantel para esquistosomiasis y otros parási- enfermedades infecciosas, mientras que el control
tos cestodos, ivermectina y dietilcarbamacina es más difícil para las enfermedades contra las
(DEC) para filariasis y benzimidazoles (albenda- que no existen buenas vacunas (por ejemplo,

21
308 M.a L. Caballero Soto Volumen 13

tuberculosis, inmunodeficiencia humana o mala- que estos individuos desarrollan inmunidad con-
ria). Los criterios deseables para asegurar eficaz- comitante, y una vez curados de la infección con
mente el desarrollo de una vacuna son los siguien- gusanos adultos, son resistentes a nuevas infeccio-
tes 78: un entendimiento del mecanismo efector nes.
para eliminar la infección; un marcador reconoci- En la infección por filarias, un pequeño grupo
ble de inmunidad (respuesta con anticuerpos espe- de individuos parecen estar libres de infección a
cíficos); presencia de un buen modelo animal y pesar de largas etapas de residencia en áreas de
antígenos ya identificados para servir como fuen- alta endemicidad; a estos grupos se les llama
te de epítopos de células B y T (estos epítopos no inmune putativo o normal endémico 81-83. El enten-
deberían variar o ser objeto de cambio antigéni- dimiento del mecanismo de resistencia a la infec-
co). ción en tales individuos podría hacer posible el
Adicionalmente, para las infecciones por hel- desarrollo de vacunas u otras terapias que blo-
mintos, en las que el parásito adulto puede vivir queen la infección.
durante décadas en el hospedador humano y en las
que las poblaciones están continuamente expues-
tas a nueva infección, la demostración de inmuni- MECANISMOS INMUNES EFECTORES EN
dad espontáneamente adquirida en poblaciones INFECCIÓN POR HELMINTOS EN EL
humanas podría ser un aspecto a tener en cuenta HOMBRE QUE PUDIERAN RESULTAR DE
cuando se contemplan las estrategias para el desa- INTERÉS EN LA PRODUCCIÓN DE
rrollo de vacunas. VACUNAS
La carencia de vacunas disponibles en la actua-
lidad contra enfermedades ocasionadas por hel-
mintos refleja el hecho de que muchos de estos Los mecanismos responsables de la inmunidad
criterios no hayan sido satisfechos para la mayo- en el hombre infectado por helmintos no están
ría de estas infecciones. completamente entendidos. Mediante estudios en
diferentes parasitosis, se sugiere la existencia de
protección a través de varios mecanismos inmu-
INMUNIDAD ADQUIRIDA nes efectores (tabla VI) entre los que se incluye
ESPONTÁNEAMENTE eosinófilos, respuesta humoral a través de IgE o
respuesta celular polarizada hacia células T cola-
Estudios epidemiológicos han encontrado evi- boradoras Th1 o Th2 75.
dencia de inmunidad protectora adquirida espon- Inmunidad humoral. El balance de isotipos de
táneamente, hallazgo que apoya la idea de que anticuerpos antiparásito parece tener una impor-
puede ser posible el desarrollo de vacunas para el tante relación con el nivel de protección. Por
control de infecciones por helmintos. Principal- ejemplo, en esquistosomiasis, la concentración de
mente se ha observado en esquistosomiasis y fila-
riasis, en los que la carga de gusanos adultos
generalmente aumenta en la infancia y adolescen- Tabla VI. Mecanismos inmunes efectores que muestran protec-
cia, pero se estabiliza o cae en la etapa adulta 76. ción en infecciones por helmintos humanos
Esta observación se puede explicar por la adquisi- Infección Mecanismo inmune
ción de la llamada inmunidad concomitante 79, en efector implicado
la cual, un individuo desarrollaría resistencia a Esquistosomiasis IgE, eosinofilia, respuesta Th2
una nueva infección mientras alberga parásitos bajas cargas de parásito y
adultos. La inmunidad concomitante se ha obser- resistencia a reinfección
vado en modelos de infección por helmintos en
animales. Filariasis linfática Respuesta inmune Th1
Existe también evidencia de que personas con meseta en la carga de Inmunidad larva-específica
infección por helmintos, una vez tratadas, son parásitos y grupos libres
resistentes a la reinfección a pesar de siguientes de infección en áreas de alta
endemicidad
exposiciones al parásito 35, 41, 80. Se ha propuesto

22
Núm. 6 Inmunología de la infección por helmintos 309

IgE antiparásito y eosinofilia se asocian con bajas con los encontrados en estudios humanos. Por
cargas de parásito 80, 84 y con la resistencia a la ejemplo, frente a la asociación de IgE (cuya expre-
reinfección tras quimioterapia curativa 35, 85, mien- sión es dependiente de citocinas Th2) con la inmu-
tras que valores altos de IgG4 (frecuentemente nidad frente a esquistosomiasis humana, en un
identificado como anticuerpo bloqueante) se rela- modelo murino bien estudiado de esquistosomia-
cionan directamente con alta intensidad de infec- sis, la citocina Th1 interferón gamma se asoció
ción 75. De acuerdo con estos datos, los antígenos con la eliminación de la esquistosómula de los
empleados en las futuras vacunas deberían inducir pulmones de los ratones inmunizados 51. De igual
bajos niveles de anticuerpos IgG4 específicos. manera, la asociación de respuesta Th1 con pro-
Respuesta inmune celular. Estudios sobre las tección en filariasis humana no es apoyada por
respuestas inmunes celulares en filiariasis sugie- datos de modelos animales, que sugieren un
ren que una respuesta tipo Th1 hacia el antígeno importante papel de las respuestas Th2 en la inmu-
del parásito se asocia con protección 83, 86. La pro- nidad mediada por larvas infectivas muertas 90, 91.
liferación de linfocitos en respuesta al antígeno Las diferencias significativas observadas en los
del parásito, así como la producción de IL-2 83, 86, mecanismos inmunes efectores responsables de la
87
e interferón gamma 86, 87 están aumentadas en los protección en diferentes especies (humana respec-
grupos inmune putativo. Además, la naturaleza to a modelos animales), incluso entre cepas de la
estadio-específica de la inmunidad se demuestra misma especie (diferentes cepas de ratones) 92
por la respuesta proliferativa de células mononu- impiden la construcción de un marco teórico uni-
cleares sanguíneas periféricas frente a antígenos ficado para explicar el mecanismo de la inmuni-
del estadio larvario, hecho no observado con antí- dad frente a helmintos 75 que pudiera ser utilizado
genos de otras etapas del ciclo de vida del parási- en la elaboración de vacunas eficaces.
to 88. Por ello, las futuras vacunas deberían con- Así, mientras que un número de vacunas frente
vertir a los sujetos en altos respondedores en el a helmintos se han comercializado para uso vete-
compartimento Th1. rinario 93, 94, ninguna ha alcanzado todavía el ensa-
yo clínico humano. Los mayores progresos se han
visto en esquistosomiasis, en el que se han estu-
MODELOS ANIMALES DE INMUNIDAD diado varios antígenos recombinantes 95, 96 y se
FRENTE A HELMINTOS han identificado un número de vacunas candidatas
en filariasis humana 97.
Mientras que existe mucha información acerca
de la inmunidad en infecciones por helmintos de
importancia veterinaria 89 está muy limitada en CONCLUSIONES
cuanto a modelos animales para estudio de inmu-
nidad protectora frente a helmintos patogénicos El avance en la comprensión de la biología de
humanos. Aunque hay variaciones significativas la infección por helmintos y la naturaleza de la
en los modelos estudiados, generalmente, la relación hospedador-parásito aumentarán las posi-
mayor protección se ha encontrado con extractos bilidades de vencer los obstáculos potenciales
de parásitos vivos usados como vacunas. Las para la implementación de programas de vacuna-
estrategias de inmunización mejor caracterizadas ción satisfactorios, mediante la identificación de
se encuentran con parásitos atenuados por radia- antígenos y el posterior diseño de estrategias de
ción. Se han alcanzado niveles de protección del vacunación.
70-90 % en modelos animales de esquistosomia-
sis, filariasis, estrongiloidiasis y uncinarias. El
modelo llamado de infección por goteo, quizás, es REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Núm. 6 Inmunología de la infección por helmintos 313

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M.ª Luisa Caballero Soto


Servicio de Inmunología
Centro de Investigación Clínica
Instituto de Salud Carlos III
Sinesio Delgado, 10
Madrid

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