Está en la página 1de 73

INTRODUCCIÓN

El artículo 37 de la carta de derechos del niño propuesta por la UNICEF, dice que
ningún niño será privado de libertad; esta ha sido aceptada y revisada por la
legislación boliviana, sin embargo en la cárcel de San pedro de la Ciudad de La
Paz ya se habla de niños-presos.

En este recinto penitenciario se encuentran niños, niñas y hasta adolecentes


viviendo, creciendo y desarrollándose en una de las cárceles más peligrosas de
Latinoamérica al lado de sus padres, donde conviven con asesinos peligrosos,
violadores reincidentes, narcotraficantes violentos, deben desarrollarse en
ambientes donde la violencia física y sexual está a la orden del día, al igual que
las extorsiones, las actividades ilícitas y el tráfico y consumo de drogas, pero lo es
también la pobreza, el hacinamiento, las enfermedades crónicas, la falta de
seguridad e higiene.

Estos menores, lejos de haber cometido algún crimen, se ven obligados a pasar
gran parte de su infancia, si no toda, en estos contextos tan poco aptos para su
desarrollo, confinados, aislados de la sociedad, y expuestos a modelos sociales
violentos.

Según organismos internacionales como la ONU y UNICEF, estas circunstancias


son “únicas en el mundo” y se están agravando aún más, ya que hasta hace
algunos años los niños reclusos eran pocos y fácilmente identificables, pero en los
últimos años la cantidad de niños que viven en la cárcel de San Pedro ha ido en
franco aumento a tal grado de no tener un número exacto.

El hacinamiento en este penal, se ve agravado si consideramos, que existen


cientos de niños que comparten estos espacios con sus padres que se encuentran
privados de su libertad.

La particularidad de la situación de los niños en el penal de San Pedro, radica en


que estos conviven entre los reos, compartiendo los mismos espacios, ya que
estos no se encuentran en celdas, funcionan como un régimen abierto, sin celdas

1
propiamente dichas, sino con viviendas que muchas veces son construidas por los
mismos reos y alquiladas o vendidas a otros presos.

La permanencia de estos niños en la cárcel, está sujeto al tiempo de condena de


sus padres, quienes en su mayoría no tiene sentencia y permanecen por muchos
años en esas condiciones, lo que genera que los niños permanezcan dentro de
estos espacios durante años, niños que incluso han nacido dentro de la prisión y
no conocen otra realidad.

En este sentido, es importante determinar cómo estas vivencias influyen en las


percepciones de los niños, considerando especialmente que, como seres sociales
nos vemos influidos por el medio en que nos criamos y desarrollamos, desde que
nacemos, donde los diferentes agentes de socialización determinarán nuestras
conductas, actitudes, personalidad y la forma de percibirnos en el mundo y de
percibir al mismo en tanto a valores, criterios morales, etc.

El presente trabajo de investigación da cuenta justamente de esos hallazgos. Sin


embargo, para una mejor organización se ha estructurado en seis capítulos de
trabajo, partiendo por el capítulo de contextualización donde se hace una revisión
crítica del problema y del contexto donde surge, que da origen a esta
problemática, tanto de los reclusos en la cárcel de San Pedro, como de la
necesidad de convivencia de los mismos con sus hijos dentro del penal, así mismo
se analiza en esta apartado el contexto carcelario y las condiciones de
habitabilidad en las cárceles bolivianas, la vida cotidiana de los niños dentro de
estos recintos, las dinámicas familiares que emergen en estas circunstancias y las
redes sociales y familiares de apoyo con las que cuentan, tanto los reclusos como
los niños en estos contextos tan particulares.

El segundo capítulo de esta monografía se alude a la metodología de


investigación seguida meticulosamente, para estructurar la misma como un
estudio cuantitativo, que intenta explicar las causas y consecuencias del fenómeno
bajo estudio, trabajando de esta manera alrededor de la verificación de los datos.
Da a conocer la incidencia sobre la seguridad ciudadana, de la génesis de la

2
criminalidad como una actividad descriptiva y relacionar dicha opinión con
conceptos como edad y socialización, diferente de señalar por qué la criminalidad
se presenta por causas múltiples. Además de los instrumentos utilizados para su
compilación, contando con el criterio de expertos jefes policiales relacionados con
la investigación de delitos.

El tercer capítulo de este estudio investigativo hace referencia al marco teórico,


conceptual y jurídico, donde se revisan los sistemas penitenciarios enfocándonos
en el sistema progresivo (supuestamente implementado en el penal de San
Pedro), se han revisado investigaciones y postulados que puedan darnos algún
atisbo de interpretación respecto a la criminología, las causas del crimen y los
conceptos de criminogénesis, de esta manera, entender cómo se produciría el
fenómeno en los niños de la cárcel. En el marco jurídico analizaremos la norma
vigente que rige la ejecución de penas en nuestro país.

El cuarto capítulo hace referencia a los resultados obtenidos de la investigación


factores que extraemos de las herramientas de investigación que se utilizaron para
el esquema que construimos, por lo que partimos de una revisión de la población
de mujeres que viven en el penal de San Pedro segmentando a esta población,
para obtener una muestra significativa y aplicar los instrumentos de medición. Así
mismo, en este apartado se hace un diagnóstico de comparación cruzada con el
centro penitenciario de Calahuma, para entender como incide el proceso de
criminogénesis en la seguridad ciudadana.

El capítulo quinto de este documento expone el diseño de la propuesta, producto


de la interpretación y análisis de los datos. Basado en las características
generales de la población, la estructura familiar, las dinámicas y las prácticas
familiares y sociales de los niños, los roles y funciones familiares, las normas,
valores y limites que tejen los padres en las prácticas de crianza, dando primordial
importancia a los valores y contravalores que se transmiten
intergeneracionalmente.

3
Para terminar, en el capítulo sexto se presentan los resultados descriptivos
conclusiones y recomendaciones que se han encontrado a lo largo de la
investigación en la revisión de los datos, los mismos que responden a los objetivos
de la investigación, haciendo una interpretación enfocada en las cusas y el efecto
del proceso de criminogénesis al interior del penal de San Pedro sobre los niños
que viven en el penal más ahora que el Estado ha perdido el control interno de
este.

Finalmente se analizan las consecuencias sobre la seguridad ciudadana, respecto


de las posibilidades de desarrollo futuro, prospectivo de los niños que actualmente
viven en el penal de San Pedro (niños-reclusos sin culpa).

4
CAPÍTULO I
EL PROBLEMA

1.1. ANTECEDENTES

El populoso barrio de San Pedro de la ciudad de La Paz, donde se encuentra el


Panóptico (penal de San Pedro en la actualidad), formó parte de un sistema de
asentamientos indígenas regional; fue un centro de ayllus (unidades territoriales
precolombinas).

En el periodo republicano, a fines del siglo XIX se construyó en ese barrio


indígena (aun periférico del centro urbano de la joven ciudad), un centro de
reclusión de acuerdo a las últimas tendencias carcelarias.

Hace un poco más de cien años La Paz se convierte en sede de gobierno y su


adecuación a este nuevo rol constitucional se realiza aceleradamente, entre las
obras que se realizaban por esos años (1895) está la edificación de una cárcel
modelo que como en otras capitales del mundo, se la realiza basándose en lo
propuesto por Jeremías Bentham.

Dentro de un contexto urbano mayor, San Pedro y el Panóptico han ido


constituyéndose en el centro urbano alternativo y popular mayor al de la Plaza
Murillo, que ha devenido en un centro de poderes aislado y prohibido dentro de la
dinámica social popular del conjunto urbano, bares y cantinas donde asisten
parroquianos del lumpen paceño y por otro lado la más peligrosa de las cárceles
de Latino América, catalogada así por documentales de canales como la (BBC de
Londres) y el (Discovery Channel).

Donde prima la ley del más fuerte, debido a la falta de aplicabilidad práctica, real y
tangible de un sistema penitenciario, el Estado no tiene el control al interior del
penal de San Pedro, la convivencia en un solo ambiente, de privados de libertad
con sus familias, esposas y lo más preocupante niños, la falta de una separación

5
selectiva de reos por peligrosidad o por tipo de delito, hace que todos estén en
una sola bolsa (asesinos, narcotraficantes violadores estafadores y otros).

Haciendo vulnerables a los niños, de vejámenes sexuales, su uso para el ingreso


de objetos prohibidos al penal, y lo peor haciéndolos susceptibles y presas fáciles
del contagio criminal y el proceso de criminogénesis.

1.2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

1.2.1. DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA

Unos 1.600 niños y adolescentes viven en las cárceles bolivianas de los cuales
aproximadamente 700 viven en el Penal de San Pedro de la ciudad de La paz. Su
presencia resulta más problemática en los penales de varones porque en los de
mujeres hay un sitio especial para acogerlos y educarlos.

La ley permite la presencia infantil en las prisiones hasta los 6 años, pero exige
que el progenitor tenga la tutela otorgada por un juez.

De esta manera, en las prisiones bolivianas pueden encontrarse desde bebés a


jóvenes de 18 años que residen con sus padres, los niños están en la cárcel
porque no tienen con quién quedarse. Algunos son huérfanos y lo más frecuente
es que también la madre esté presa.

Los menores conviven con ladrones, asesinos, violadores, pandilleros y


narcotraficantes. Son testigos del consumo de alcohol y drogas y también de la
violencia.

Alarmados por los peligros que los rodean, algunos padres no los dejan salir de
sus celdas, causándoles un doble encierro.

Los niños interiorizan los códigos de relación humana imperantes al interior de las
cárceles. Crecen en un sistema violento y agresivo donde rige la ley del más
fuerte, donde todo tiene precio y construyen sus relaciones reproduciendo esos
principios.

6
Por las tardes, los mayores de 6 años asisten a una escuela pública próxima
donde cursan estudios básicos. Otros salen a buscar su sustento en las calles.

Aparentemente la seguridad de los infantes está preservada al interior del penal,


pero nadie sabe con certeza qué ocurre con ellos en los oscuros vericuetos
carcelarios. Aparecen golpeados y hasta serían objeto de agresiones sexuales.

En castigo, el agresor puede ser aislado por un tiempo, pero el menor no tiene
escapatoria, vuelve a convivir con quien le hizo daño.

La permanencia de los niños en la cárcel es un tema sensible que hay que tratarlo
con pinzas, hay implicaciones de seguridad ciudadana, porque si no, ese niño que
está en la cárcel, te va a matar después.

La falta de seguridad ciudadana y que los que ahora guardan detención


anteriormente vivieron en la cárcel junto a sus padres, es porque algo está
fallando.

El país no tiene una política en contra de la criminalidad, esto sería una de las
causas principales para que los niños vivan en las cárceles.

1.2.2. FORMULACION DEL PROBLEMA

¿Cómo incide en la inseguridad ciudadana, el proceso de criminogénesis al


interior del penal de san pedro?

1.3. JUSTIFICACIÓN

1.3.1. INSTITUCIONAL

Para la Policía Boliviana es una prioridad permanente explorar estrategias acordes


con la evolución de los fenómenos, la emergencia de expresiones de criminalidad,
la conflictividad social y las formas de organización e interacción social presentes
en el país. Dicha práctica obliga a repensar, redefinir y profundizar nuevas
perspectivas y modelos de gestión policial que le permitan interpretar las más

7
apremiantes necesidades ciudadanas de seguridad y, en esta medida, responder
con mayor eficacia y oportunidad.

Retomando el tema, reconozcamos que la importancia de la criminalidad se ha


vuelto suprema. Por esa razón continuaremos “descifrando” términos como
criminogénesis, contagio criminal y criminodinámica, que serán concluyentes en
su análisis y posterior tratamiento; no porque se trate de una tarea
encomendada, sino; porque ya muchos, hemos vivido su impacto y porque en
definitiva nadie esta eximido de ser víctima de un percance delincuencial.

1.3.2. SOCIAL

En la práctica los delincuentes están al acecho y es difícil reconocerlos o


anticiparnos a sus predisposiciones, pero de alguna manera, manejar el asunto,
nos puede llevar a constituirnos en “Auto-proporcionadores” de nuestra propia
seguridad personal.

Además no podemos dejar fuera lo que conocemos como criminogénesis y


contagio criminal. La primera está referida al origen, al nacimiento de la conducta
criminal. Se trata del capítulo de la Criminología que se ocupa del estudio
desde el punto de vista biológico, psicológico y social de la conducta criminal.
La Criminodinámica se ocupa del mecanismo o la forma como se dan las
motivaciones para que se produzcan los diferentes fenómenos criminales.
Ambos son de suma influencia en la criminalidad, por su característica
vivencial del día a día en el contexto social.

1.3.3. LEGAL

Es preciso que, tanto la intervención penal como las normas penitenciarias,


ofrezcan unos métodos y pretensiones más adecuadas para un mayor
reconocimiento de los derechos fundamentales de los familiares de los presos que
sin condena viven con sus progenitores al interior de centros penitenciarios, como
personas que siguen perteneciendo a la sociedad. Por tanto, la idea de
reeducación y reinserción social no debe ser rechazada, pues esa idea fue un

8
gran paso en reconocer, por parte de la sociedad, derechos a todas las personas
sin tener en cuenta el estatus de que se encontraban privadas de libertad.

Entender también que no podemos acceder a datos de menores de edad tomando


en cuenta la estigmatización criminal de la que podrían ser objeto.

1.3.4. TÉCNICA

Lo que algunos consideran importante y debe ser investigado puede no serlo


para otros: respecto a ello, suele diferir la opinión de las personas.

Sin embargo se puede establecer una serie de criterios para evaluar la utilidad de
un estudio propuesto, criterios que evidentemente son flexibles y de ninguna
manera son exhaustivos.

La justificación del tema de investigación responde a la necesidad de entender


conceptos como criminogénesis, contagio criminal y la consecuencia de estos
sobre la seguridad de la sociedad, como parte del fenómeno causa y efecto, sus
consecuencias y los aspectos técnicos.

1.4. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN

1.4.1. OBJETIVO GENERAL

Demostrar cómo el proceso de criminogénesis al interior del penal de San Pedro


incide en la inseguridad ciudadana.

1.4.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

1. Analizar el sistema penitenciario vigente y su aplicación.

2. Describir las causas de la criminalidad desde la óptica de la criminología.

3. Abordar la incidencia del proceso de criminogénesis en el penal de san


pedro sobre la inseguridad ciudadana.

9
4. Identificar nuevas formas de criminalidad producto del contagio criminal
desde el interior del penal de san pedro.

1.5. DELIMITACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN

1.5.1. DELIMITACIÓN TEMÁTICA

Esta investigación tiende a formular los conceptos de criminogénesis, contagio


criminal y el proceso de afectación a la seguridad ciudadana, buscando
primordialmente resultados de valor práctico específico e inmediato para su
aplicación, por tratarse de un tema de vital importancia en el ámbito del orden y
seguridad.

1.5.2. DELIMITACIÓN ESPACIAL

El espacio geográfico de la presente investigación, se circunscribe al Penal de


San Pedro de la Ciudad de La Paz.

1.5.3. DELIMITACIÓN TEMPORAL

Comprende la presente gestión, de acuerdo con el cronograma de la Unidad


Académica diseñada para el Diplomado, en referencia al tiempo se trata de una
investigación sincrónica.

10
CAPÍTULO II
MARCOS DE LA INVESTIGACION

2.1. MARCO TEORICO

2.1.1. EL RÉGIMEN PENITENCIARIO

La pena privativa de la libertad, y como corolario la cárcel son instituciones


modernas a pesar de estar petrificadas en nuestra conciencia como ancestrales.

Si bien se reconoce la existencia de antecedentes de la institución carcelaria


desde el año 248 antes de Jesucristo, la cárcel (en sentido moderno) surge a
mediados del siglo XVI y comienzos del siglo XVII con el auge de las "casas de
corrección", que fungieron por un buen tiempo como cárceles.

No obstante el consenso respecto a la pena privativa de la libertad como "la pena


por excelencia" y la cárcel como su sustento necesario, la modalidad de
cumplimiento o ejecución de la pena privativa de la libertad ha sido objeto de
mutaciones a lo largo de la historia, fundamentalmente basadas en un discurso
humanizador, resocializador, reeducador del delincuente, para que pueda volver a
vivir en sociedad, garantizando la eficacia del sistema propuesto por los
legisladores.

El régimen penitenciario, pude ser definido como "el conjunto de normas dictadas
por el Poder Legislativo o las autoridades administrativas con el objeto de
organizar el cumplimiento de las penas privativas o restrictivas de la libertad y la
ejecución de las medidas de seguridad, se sostiene además que la finalidad del
régimen penitenciario es procurar la enmienda del condenado" (Henri Capitant
2008, pag 137).

El diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales (M. Ossorio 2002) define


al régimen penitenciario como "el conjuntos de normas legislativas o
administrativas encaminadas a determinar los diferentes sistemas adoptados para

11
que los penados cumplan sus penas. Este encamina a obtener la mayor eficacia
en la custodia o en la readaptación social de los delincuentes..." (pag. 375)

2.1.2. SISTEMAS PENITENCIARIOS

A. Sistema Celular o Philadelfiano

En 1777 John Howard publicó su estudio sobre el estado de las prisiones en


Inglaterra y Gales (state of prisons in England and Wales), creando una conciencia
que contribuyó a la mejora de las condiciones carcelarias.

En Estados Unidos la "Sociedad penitenciaria de Filadelfia" reunida en 1787


consiguió introducir , con la ayuda de los cuáqueros, en la prisión de Walnut
Street, ciudad de Filadelfia, estado de Pensilvania, un sistema celular de completo
aislamiento durante el día y la noche con exclusión del trabajo.

La principal característica era el confinamiento o sistema celular absoluto, que


consistía en la separación celular del recluso durante todo el día y la noche con el
objetivo de que dicho aislamiento pudiera lograr que los pecadores retornaran a
Dios. El sistema era inhumano, en él se tenía la concepción de que mediante la
separación del delincuente de la sociedad, y su absoluta incomunicación se
lograba su corrección moral y readaptación social.

En su libro "Pena y estructura social", (Rusche & Kirchheimer), mencionan que "el
confinamiento de los prisioneros era tan extremo, que no se les permitía ni
siquiera trabajar por temor a que esto los pudiera apartar de la meditación"... y
recién en 1829, las cárceles del estado de Pensilvania introdujeron el trabajo
carcelario, el cual se revelo de inmediato como un fracaso económico debido a
que el mismo podía consistir solo en aquellas tareas que fueren susceptibles de
ejecutarse en la propia celda.

El sistema celular o filadélfiano fue objeto de muchas críticas, entre ellas:

1. Producía la propensión al suicidio y a la locura

12
2. El aislamiento prolongado produce la imbecibilidad y la perturbación moral y
física hasta perder los hábitos sociales, embruteciendo el entendimiento,
produciendo seres sin cultura, e incapaces.

3. Es muy costoso, pues la celda cuando el penado ha de permanecer en ella día


y noche, precisa ser más espaciosa y cómoda.

Los resultados de este sistema fueron en verdadero desastre, muchas casos de


tuberculosis irreversibles, otros muchos de enfermedades del sistema nervioso
incurable.

B. SISTEMA AUBURNIANO

El Sistema Filadélfiano por su fracaso fue reemplazado por el Sistema Auburn,


este sistema se originó en la ciudad de Auburn, New York, es conocido como el
"Silent System", ya que si bien se basaba en trabajo colectivo durante el día y
aislamiento continúo durante la noche, el trabajo colectivo se realizaba en
completo silencio.

El silencio obligatorio, garantizaba la imposibilidad de fugas, motines y evitaba los


"contactos diferenciales".

La crítica que se le hacía a este sistema era que producía un gran deterioro de la
personalidad y una des-socialización.

El Sistema de aislamiento celular tuvo amplia repercusión en Europa donde fue


adoptado por numerosos países, mientras que el Sistema Auburniano se expandía
en Norteamérica.

Sistema Progresivo:

El sistema progresivo contempla distintas etapas en los métodos de ejecución


hasta el completo reintegro del individuo en sociedad, teniendo como base la
conducta y el trabajo del condenado.

13
Se discute la paternidad del sistema, se atribuye al capitán de la Marina Real
Inglesa, Alejandro Maconochie, o a Sir Walter Crofton, en Irlanda. Pero la prioridad
cronológica corresponde al coronel Manuel Montesinos director de la Prisión de
Valencia.

Si bien el discurso del "progresivismo" o "gradualismo" consiste en permitir que el


recluso atraviese a lo largo de su vida en prisión, por una sucesión de periodos
con el fin de capacitarlo para su vida en libertad, su finalidad real es el
mantenimiento de la disciplina. El gradualismo se refleja en el principio de que la
disciplina debía ser mantenida a través de estímulos positivos antes que por
medio de medidas meramente represivas, alentar al recluso para que mantenga
una línea de conducta antes que amenazarlo con castigos corporales in terroem.

El sistema cuantifica la pena en función del trabajo y la conducta del condenado,


obteniendo vales o marcas, en caso de buena conducta, o multas, en caso de
mala y el detenido recuperará la libertad cuando obtenga determinada cantidad de
vales o marcas, que se encuentran previamente establecidas.

El modelo clásico del sistema progresivo contempla tres períodos:

1. Primer periodo o de prueba: el condenado está sometido a un aislamiento


absoluto (Sistema Filadélfiano) y su duración varía según el comportamiento del
penado. Este aislamiento permite que se lo observe, estudie y se lo prepare para
el siguiente grado o período. No obstante su aislamiento se le permite ciertas
visitas, como la del Director del establecimiento, del médico, maestro, del párroco.

2. Segundo periodo: este se caracteriza por el trabajo en común durante el día y el


aislamiento nocturno (Sistema Auburniano).

3. Tercer período o de libertad condicional: el penado si ha cumplido con los


requisitos de los períodos anteriores, obteniendo la cantidad de vales necesarios
puede obtener su libertad condicional. El recluso es sometido a un entrenamiento
riguroso de disciplina, trabajo y educación con el fin de prepararlo moral e
intelectual para la libertad.

14
Este sistema ha sido adoptado en Italia, Noruega, Rumania y otros países, siendo
utilizado principalmente en las instituciones reformatorias.

C. SISTEMA DE ELMIRA

El Sistema Elmira tuvo su origen en los Estados Unidos de Norteamérica y se


aplica por vez primera en el año 1876 en la Prisión de Elvira (Nueva York). El
sistema ha tenido gran auge; produciendo muy buenos resultados. Generalmente,
se aplica o se impone a los jóvenes infractores condenados a penas de prisión por
tiempo indeterminado, se trata de reformar al penado, obligándolo a prepararse
para una vida moral y de trabajo, sometiéndolo a la práctica de todo tipo de
deporte.

El recluso por su buena conducta, puede obtener tickts o boleto que le van
abriendo poco a poco la puerta de la prisión, disminuyendo el tiempo que debía
estar en ella y cuando ha llegado a un estado de suficiente confianza se le
concede la libertad condicional si cumple las condiciones de esa libertad y observa
una buena conducta, no tiene que volver más al presidio.

D. SISTEMA DE WITZWILL O RÉGIMEN ABIERTO

Este sistema Suizo, fue practicado por primera vez en Witzwill a fines del siglo
pasado y se lo ha generalizado como "establecimiento abierto" o "régimen
abierto". En el sistema Witzwill se sustituyen los obstáculos materiales que
impiden la evasión de los reclusos por una serie de reglas de disciplinas y
conductas que los inhibe de usar las posibilidades de fuga que se encuentren a su
alcance.

La principal característica de este sistema se encuentra en la vigilancia ejercida


respecto a los penados, elevando en cambio su sentido de personalidad y
haciéndose comprender la necesidad que tiene de someterse a la disciplina del
establecimiento.

2.1.3. EL SISTEMA PROGRESIVO

15
En que consiste la progresividad, el sistema progresivo es una modalidad de
ejecución de la pena en el cual se prevé la atenuación progresiva de las
condiciones del encierro de tal manera que la persona privada de la libertad, a
medida que transcurre la ejecución, va recuperando "progresivamente" los
derechos restringidos por la medida de encierro hasta alcanzar el pleno goce de
los mismos.

Hemos visto el origen y las distintas modalidades de este sistema, pero ¿Cuál es
su finalidad, cuál es su objetivo?

Parecería ser que su finalidad es mitigar los efectos del encierro preparando al
condenado para su vida en libertad. Pero si esta es su finalidad ¿en qué se
diferencia con la resocialización exclamada en las normas de ejecución penal?

Estas interrogantes se agudizan si a ellas sumamos la indeterminación del


concepto de resocialización mencionado. M. Salt nos dice que "sin perjuicio de la
insistencia de los textos normativos de nuestro entorno cultural en establecer la
resocialización, la reeducación o la reinserción social como fin primordial de la
ejecución de las penas de encierro, lo cierto es que nunca existió claridad ni
acuerdo acerca del significado concreto de los términos utilizados para expresar
este principio resocializador y mucho menos, sobre las consecuencias dogmáticas
que debiera tener en el régimen penitenciario".

Como nítidamente se advierte, se encadenan, uno sobre otros, una serie de


conceptos poco precisos que culminan basándose en la indeterminada
"resocialización".

2.1.4. LA CONDUCTA DELICTIVA

En este apartado se realiza un recorrido suficientemente exhaustivo sobre las


distintas explicaciones que se ha dado a la conducta delictiva, comenzando por las
explicaciones psicobiológicas, pasando por las psicológicas y del control social,
para terminar con el análisis de las teorías integrativas. Se pone el acento
principalmente en el desarrollo que estas últimas teorías han tenido a partir de los

16
años noventa por su importancia en la comprensión del delito desde una
perspectiva multicausal y evolutiva que es muy esclarecedora de la interrelación
entre los factores individuales y sociales que van construyendo, en una espiral
evolutiva, una personalidad proclive a cometer delitos. Algunas de estas teorías
constituyen la base teórica que sostuvo esta investigación, como la de Gottfredson
y Hischi.

2.1.5. PSICOLOGÍA DE LA CONDUCTA CRIMINAL

Desde los inicios de la sociedad organizada fue una preocupación constante el


encontrar una explicación a aquellas conductas que perturbaban el orden social
establecido. Así se avanzó en la explicación y comprensión de estas conductas
desde las concepciones morales en las que se concebía al individuo que cometía
un delito como un sujeto incapaz de aceptar las reglas de buena convivencia por
falencias en su constitución moral.

En una segunda etapa, y con el desarrollo de las ciencias de la conducta,


fundamentalmente la psiquiatría, comenzó a desarrollarse una serie de hipótesis
explicativas del delito, que lo concebían como producto de una patología.

Con el reconocimiento de la influencia de las condiciones sociales en la


producción de este tipo de conductas disfuncionales, comenzó a desarrollarse la
sociología criminal, que atribuía a las condiciones sociales una influencia
determinante en la producción y mantenimiento de las condiciones delictivas.

Estas posiciones teóricas que oscilaban entre los extremos de una individualidad
caracterizada por la patología, a una sociedad con características particulares que
producía delincuencia, y ante la evidencia de que estas explicaciones no
brindaban una verdadera comprensión del fenómeno, comenzó a considerarse las
características de la interacción del individuo con su medio ambiente, analizando
tanto la participación de las características personales como las sociales en la
producción de este tipo de conductas.

17
Así se vuelve a remarcar, obviamente en otro contexto, la importancia de los
factores individuales, devaluados ante el fracaso de las propuestas de la
antropología criminal y de la psicopatología. En este último caso ante la evidencia
de que la mayoría de los delitos eran cometidos por personas que eran
plenamente conscientes de los actos que cometían, de su implicancia social y
legal, y no obstante decidían llevar a cabo la conducta delictiva. Es decir que se
trataba de individuos normales, como cualquier otro ciudadano. Sólo lo
diferenciaba este tipo de conductas sancionadas por el colectivo social.

A finales de los año 80 y comienzos de los 90, los desarrollos científicos de la


psicología criminal y de la victimología aportan importantes conocimientos sobre el
comportamiento criminal, dejando en claro al menos dos conceptos
fundamentales: que la mayoría de los delitos era cometido por sujetos que eran
considerados normales desde el punto de vista psicopatológico, y que todo
comportamiento criminal debe ser analizado en función de la motivación del sujeto
y su interacción con la víctima.

Comienza así el desarrollo de una serie sumamente importante de teorías


psicológicas explicativas del crimen. Estas teorías pueden clasificarse en cinco
grandes grupos teóricos (Blackburn 1994), (Soria Miguel Angel 1998):
“Psicobiológicas, Psicológicas estrictas, Conductistas, Control social, Humanistas-
existencialistas y Motivacionales”.

A. Teorías Psicobiológicas

Están orientadas a tres líneas de investigación:

1. Las basadas en la trasmisión genética, corriente iniciada por Lombroso y que


considera el crimen como producto de una constitución genética particular

2. las teorías bioquímicas neurológicas, que están dirigidas a demostrar el rol de


las vitaminas y los minerales en la conducta criminal, o bien un anormal
funcionamiento neurofisiológico y

18
3. las teorías constitucionales, (Sheldon 1942). Esta última teoría tuvo una gran
aceptación, porque permitía establecer estereotipos con mucha facilidad. Esta
teoría dividía a las personas en tres tipos fundamentales según su constitución
física: endomorfos, exomorfos y mesomorfos. A este último tipo pertenecían
mayoritariamente los delincuentes.

De las teorías Psicobiológicas más desarrolladas y de una importancia significativa


en la actualidad se destaca la de (Eysenck 1967); (Eysenck & Eysenck 1976).

Esta teoría relaciona tres grandes súper factores, extraversión, neuroticismo y


psicoticismo con la criminalidad. De acuerdo con (Eysenck 1967) los delincuentes
debían puntuar alto en extraversión, ya que la baja estimulación corticorreticular
de los extravertidos dificulta el condicionamiento, y por lo tanto el aprendizaje de
las normas.

Del mismo modo los delincuentes deberían puntuar alto en neuroticismo porque
este podría interferir en el aprendizaje y amplificar los hábitos conductuales
adquiridos. Los extravertidos neuróticos serían los sujetos con mayor tendencia a
desarrollar y mantener conductas antisociales. El psicoticismo, también debiera
estar presente en los sujetos con comportamientos antisociales. Caracterizan a
esta dimensión la crueldad, la hostilidad y la insensibilidad.

Esta última dimensión que se incorpora el modelo eysenckiano (1952) apunta a la


existencia de un continuo entre la normalidad y la psicosis al estilo de la dimensión
N así como la similitud entre dos tipos de psicosis como la esquizofrenia y la
psicosis maniaco depresiva. La dimensión P (psicoticismo) es concebida como
una dimensión de la personalidad normal, que en puntuaciones extremas,
predispone tanto a los trastornos psicóticos como el trastorno bipolar o la
esquizofrenia, como a la conducta antisocial y la psicopatía, (Eysenck 1992). Uno
de los rasgos que componen esta dimensión de la personalidad, es la
impulsividad. (EPQ-R Eysenck & Eysenck 2001).

19
Otras corrientes modernas en esta línea de trabajo han puesto el énfasis en
estudios de gemelos y de adopción, encontrando correlaciones positivas entre la
conducta criminal y la heredabilidad biológica. Como no ha podido determinarse
genes que codifiquen directamente la conducta delictiva, este tipo de
investigaciones ha apuntado a determinar cuáles son los mediadores entre la
influencia genética y la conducta. En este sentido muchas líneas se han
desarrollado sobre las características neuroendocrinas, bioquímicas y
psicofisiológicas asociadas a la criminalidad. Otras corrientes han asociado la
conducta antisocial con factores biológicos, de origen ambiental tales como
accidentes y lesiones cerebrales, complicaciones perinatales, hipoglucemia,
anomalías físicas menores, intoxicación por plomo, etc, (Sierra, Jimenez & Buela
Casal 2006).

B. Teorías Psicológicas

Tienen tres vertientes: la psicopatológica, la del aprendizaje social y la visión


cognitiva.

1. La psicopatológica basada en la psicopatología mental, destacó la influencia de


la deficiencia mental en el origen de las conductas criminales. Un gran aporte a
estas corrientes de pensamiento la realizó el psicoanálisis que defiende una
causación del delito en el desarrollo psicosexual infantil y un súper ego deficitario.
Un desarrollo infantil traumático y la ausencia de control emocional de las normas
interiorizadas generarían la personalidad criminal (Soria 1998).

2. La del aprendizaje social pone su acento en la asociación diferencial que parte


del supuesto que la conducta criminal se refuerza al relacionarse el individuo con
personas con tendencias a mantener conductas criminales. Como mecanismo
fundamental de esta asociación plantea los principios del aprendizaje operante,
(Skinner 1978), Según esta corriente el crimen se aprende por refuerzo.

Esta corriente de pensamiento permitió comprender como determinados


comportamientos criminales se aprenden por la observación de modelos sociales

20
mediante la televisión, diarios, radios, amigos, familiares, etc. Según este
encuadre teórico existen dos modos en el individuo de ejercer un control sobre sus
conductas que son denominados locus de control interno y locus de control
externo. Las personas que cometen delitos utilizan generalmente un locus de
control externo

3. Las teorías cognitivas se basan en los estudios de (Yochelson & Samenov


1976). Estos autores sostienen que “la impulsividad es una falta de auto - control
que lleva al sujeto a cometer conductas sin evaluar, o haciéndolo, pero restándole
significado a las consecuencias de su accionar”. Analizándolo desde el de vista de
indicadores clínicos o de patologías definidas son sujetos considerados normales.
Los estudios realizados destacaron el importante papel que cumple la impulsividad
en el comportamiento criminal, convirtiéndose en el factor más importante.

Los patrones de pensamiento más característicos de los delincuentes peligrosos


que señalan estos autores, y que comienzan a manifestarse a edades muy
tempranas conjuntamente con la irresponsabilidad son: manipulación, mentira
compulsiva, impulsividad, cólera, desconfianza, pensamiento concreto y simplista,
búsqueda de excitación, hiperactividad, búsqueda de poder, orgullo,
sentimentalismo y pensamiento en “cortocircuito”.

La teoría de (Yochelson & Samenov 1976) posee una importancia significativa


para este estudio en la medida en que establece como uno de los factores
decisivos en el desencadenamiento de la conducta criminal a la impulsividad, y en
que se ha establecido como uno de los beneficios de esta investigación el poder
comprender los mecanismos psicológicos que intervienen en el agravamiento de
las conductas delictivas, con el objeto de hacer posible la implementación de
tratamientos que reduzcan el riesgo de aparición de las mismas.

Basado en el pensamiento diferente del delincuente y sus dificultades en el control


de sus impulsos, los autores proponen una técnica específica de tratamiento. Esta
consiste en enfrentar al delincuente con su propio modo de pensamiento
corrigiendo el carácter egocéntrico del mismo, introduciendo pensamientos pro

21
sociales, entrenándolos en el control de la cólera, enseñándoles a anticipar las
consecuencias de sus acciones y a ponerse en el lugar del otro, reflexionar sobre
su propia vida, desarrollar sentimientos de miedo y culpa, aceptar la
responsabilidad de que sus actos lesionan a otros.

C. Teorías del Control Social

Se diferencian en distintas corrientes con diferencias muy marcadas:

1. El interaccionismo simbólico que propone la existencia de una socio cultura


previa que induce a una interpretación personal del propio comportamiento y de
los demás y que regula la conducta criminal.

2. El etiquetado social que destaca el estigma social que se produce por la


aplicación de la ley a las personas pertenecientes a las clases sociales más
desposeídas y que transgreden las normas sociales, cargándolas con una etiqueta
negativa que las estigmatiza.

3. El marxismo ofrece una visión distinta. Para esta corriente el crimen es una
consecuencia de la sociedad capitalista y, la necesidad del control social por
medio de la clase dominante, (Soria 1998).

4. Corrientes que apuntan al deficiente desarrollo moral como origen de las


conductas delincuenciales. Las teorías que parten de una perspectiva humanista
existencial se centran en general en un deficiente desarrollo del crecimiento
personal interior, lo que provoca la conducta anormal criminal. Las teorías
provenientes de esta concepción teórica han tenido muy poca influencia y
desarrollo.

5. La teoría motivacional. Esta teoría desarrollada por un grupo especial del FBI
(Unidad de Análisis del comportamiento Criminal), afirma que el delito es una
consecuencia del desarrollo personal, el ambiente y el contexto en que se
encuentra el sujeto.

22
Actualmente se ha desarrollado una serie de teorías integradoras que pretenden
explicar la delincuencia de un modo más amplio, poniendo el foco de atención en
la interacción entre el individuo, la criminalidad y el control social. Según (Siegel
1998) podría clasificarse las teorías integradoras en tres grupos:

D. Teorías Integradoras

1. Teorías multifactoriales. Incluyen diversas perspectivas que consideran la


influencia sobre la conducta delictiva de diferentes factores sociales, personales o
económicos, procedentes de las teorías de la desorganización y tensión social, del
control del aprendizaje, del conflicto, de la elección racional y de los rasgos.
(Garrido, Stangeland & Redondo 1999).

2. Teorías de los rasgos latentes, cuya hipótesis básica es que algunas personas
poseen características individuales (como una menor inteligencia o una
personalidad impulsiva) que las sitúan frente a un mayor riesgo de
comportamientos delictivos.

3. Teoría de las etapas vitales. Según estas teorías no existe una propensión
individual estable para la conducta delictiva, sino que el comportamiento
evoluciona a lo largo del proceso de desarrollo de los sujetos. La tesis principal es
que del mismo modo que las personas cambian y maduran, también cambian los
factores que influyen sobre su comportamiento.

De las teorías integradoras, las multifactoriales y la de los rasgos latentes,


consideran como elementos importantes a tener en cuenta en la interacción de
factores entre el individuo, la criminalidad y el control social; el autocontrol y la
impulsividad, que harán de modeladores de la conducta antisocial.

E. Algunas Teorías integradoras actuales:

1. Teoría del autocontrol o Teoría General de la Delincuencia

Es de interés especial para este trabajo la Teoría del autocontrol o Teoría General
de la Delincuencia de (Gottfredson & Hirschi 1976), ya que explica las conductas

23
delictivas desde las diferencias existentes en el auto- control entre delincuentes y
quienes no lo son. Además porque considera al autocontrol como un rasgo
persistente y por lo tanto un constructo válido para la comprensión de las
conductas delictivas.

Esta teoría vincula conceptos de las teorías biopsicosociales, psicológicas, de las


actividades rutinarias y de la elección racional, otorgando al auto-control un rol
decisivo en el desencadenamiento de la conducta delictiva. (Gottfredson & Hirschi
1990) han destacado las grandes diferencias que caracterizan el comportamiento
de los delincuentes de los que no lo son. Señalan que en general el
comportamiento delictivo produce una gratificación inmediata de los propios
deseos que se obtiene sin demasiados esfuerzos. Este comportamiento implica
además actividades arriesgadas y excitantes con muy poca habilidad y
planificación, y aunque puede implicar algo de dolor físico o consecuencias
desagradables a través de una posible detención, estas aparecen como de muy
lejana probabilidad.

Las personas con un elevado nivel de autocontrol poseen características


exactamente contrarias a las descriptas con anterioridad: saben diferir las
gratificaciones, suelen ser esforzadas, tienden a ser prudentes en sus conductas,
desean beneficios a largo plazo (como los derivados del trabajo, de la estabilidad
afectiva, de la familia o de los amigos), suelen planificar sus acciones, no son
ajenas al sufrimiento de las otras personas y sopesan los riesgos de su
comportamiento. Todas estas características individuales no se adaptan
convenientemente a la vida delictiva. (Garrido, Stangeland & Redondo 1999).

Los individuos con bajo auto-control tienden a apetecer recompensas inmediatas


de fácil obtención, gustan de la aventura, son inestables en sus relaciones
humanas, carecen a menudo de las habilidades académicas y cognitivas
necesarias para la planificación de su conducta, son egocéntricos e insensibles
frente al sufrimientos tanto ajeno como propio, y no suelen considerar las
consecuencias de su comportamiento. Todas estas características individuales se

24
adaptan más fácilmente al modo de vida delictivo (Garrido, Stangeland & Redondo
1990)

Estos autores sintetizan su concepto del auto-control, integrado a los elementos


anteriormente expuesto de la siguiente manera: En síntesis, las personas que
carecen de auto-control tenderán a ser impulsivas, insensibles, físicas (en
oposición a mentales), asumidoras de riesgo, imprevisoras, y no verbales y
tenderán por lo tanto a implicarse en actividades delictivas y similares. Como
quiera que estos rasgos pueden identificarse con antelación a la edad de
responsabilidad delictiva, debido a que existe una considerable tendencia a que
estos rasgos aparezcan juntos en una misma persona, y debido a que los rasgos
tienden a persistir a lo largo de la vida, parece razonable considerarlos como un
constructo comprensivo y estable de utilidad para la explicación de la delincuencia.

Una particularidad interesante del enfoque de (Godfredson & Hirschi 1976) es que
consideran que el auto-control, o su inexistencia, no son producto del aprendizaje
o de la socialización, ya que se muestra antes de cualquier proceso de crianza y
entrenamiento social en los niños.

Sin embargo sí atribuyen a los procesos de socialización un rol fundamental en el


manejo y corrección de las características individuales relacionadas con el
autocontrol. Los autores expresan: Obviamente no sugerimos que las personas
son delincuentes natos, que heredan un gen criminal o algo parecido por el
contrario rechazamos tales planteamientos. Lo que nosotros sugerimos es que las
diferencias individuales pueden tener un impacto sobre los planteamientos
necesarios para lograr una socialización efectiva (o control adecuado). La
socialización efectiva es, pese a todo siempre posible con independencia de los
rasgos individuales. (Garrido, Stangeland & Redondo S. 1999).

Otro aporte sumamente importante de esta teoría para la comprensión y


explicación del fenómeno delictivo es el señalamiento de la necesidad de
diferenciar claramente entre acciones delictivas (delito como acción), e individuos
con tendencias delictivas (o criminalidad como tendencia). Para los autores

25
muchos de los problemas para encarar las soluciones al problema del delito,
surgen como consecuencia de incluir en el término delincuencia tanto a las
acciones delictivas, como a la criminalidad como tendencia. Esta asimilación de
conceptos y de características atentan contra la correcta comprensión de la
conducta criminal y su tratamiento.

La teoría de estos autores se retomará posteriormente en el análisis de la


importancia de diferenciar las conductas antisociales de los trastornos de
conducta, y las implicancias criminológicas y sociales que posee la correcta
diferenciación.

Dentro de este enfoque de las teorías integradoras, pero con características


particulares, ya que en realidad asume una perspectiva transaccional, es
sumamente interesante el modelo de Moffitt.

2. Teoría Transaccional.

Modelo de Moffitt, uno de los aspectos no resueltos del modelo de Gottfredson y


Hirschi es la incapacidad para dar cuenta de la relación entre edad y delincuencia,
precisamente esta relación es uno de los puntos de partida de la teoría de Moffit.
Este autor avanza sobre las diferencias que aparecen en los índices delictivos
cuando se tiene en cuenta la edad.

La delincuencia es un fenómeno que parece tener mucha estabilidad entre los


individuos, así es que muchos adolescentes delincuentes fueron niños con
problemas de conducta, y serán adultos delincuentes. También es un dato
indiscutible proporcionado por la investigación científica que es que, durante la
adolescencia se disparan las cifras delictivas y que luego comienzan a decrecer.

Para dar cuenta de la persistencia y del cambio Moffitt introduce una distinción
entre los delincuentes en los que aparecen características antisociales desde las
primeras fases de su desarrollo y que mantienen elevados niveles de delincuencia
a lo largo de su vida, y aquellos en que el delito aparece sorpresivamente y es de
corta duración.

26
El modelo asume que existen dos tipos de delincuentes, que presentan
trayectorias diferentes y que responden a etiologías y pronósticos también
distintos: los delincuentes persistentes (life-course-persistent) y los delincuentes
temporales (adolescence - limited). (Sierra, Jimenez & Buela Casal 2006).

La delincuencia persistente es la consecuencia de la intersección entre un niño


con temperamento difícil (impulsividad, déficit de auto-control, des inhibición,
irritabilidad etc.) y un ambiente familiar adverso. De este modo se van
entrelazando en forma acumulativa los factores personales y sociales.

El temperamento difícil estaría configurado por una serie de pequeñas


alteraciones neurológicas, que pueden resultar de complicaciones prenatales o
perinatales, o bien de factores genéticos.

La actitud de los padres es decisiva en el desarrollo adecuado de estos niños,


porque requiere una gran dosis de paciencia y de consistencia conductual.
Cuando por diversas razones (conflicto familiar, estrés psicosocial, desventajas
socio-educativas, etc) no se ponen en práctica las técnicas educativas adecuadas,
se crea un escenario de relaciones de interacciones recíprocas entre un niño
vulnerable y un ambiente adverso que irán constituyendo una espiral transaccional
de efectos acumulativos. Las conductas del niño provocan ira y malestar en los
padres, aparecerán prácticas disciplinarias inadecuadas y se exacerbará el
comportamiento inapropiado del niño. En estos primeros años es dónde se
produce el primer fracaso en el aprendizaje de las normas. Luego se produce una
cascada de interacciones que van precipitando y cronificando las conductas
disruptivas. El niño comienza su interacción escolar con dificultades para asumir
normas lo que lo lleva al fracaso escolar agudizándose su conducta antisocial.
Esto producirá el rechazo de sus iguales convencionales y la implicación en
grupos de amigos desviados, lo que contribuye a agravar el problema. En la
adolescencia la conducta entrará en conflicto con las normas legales lo que puede
llevar a la institucionalización. Todo este panorama influirá decisivamente en el
ingreso al campo laboral, y posiblemente ya haya incursionado con drogas. Así se
van reduciendo cada vez más sus posibilidades para una inserción adecuada al
27
medio social y laboral. La conducta antisocial se hace cada vez más persistente y
difícil de tratar.

En los delincuentes temporales la conducta antisocial aparece en la adolescencia,


en individuos sin disfunciones cognitivas, personales o sociales previas. La etapa
de la adolescencia se destaca porque el individuo posee una madurez biológica
pero no puede gozar de los roles adultos, entonces comienza a experimentar el
mundo estableciendo exigencias para conocer sus límites y potencialidades.
Busca constantemente vías para expresar su autonomía. Los delincuentes
persistentes pueden ofrecer un modelo atractivo a imitar ya que ellos han logrado
la “autonomía” respecto a la familia y en sus roles sexuales.

Los adolescentes pueden sentirse motivados a imitar a estos modelos cometiendo


conductas antisociales o delincuenciales. Pero esta actividad es transitoria y
desaparece ante la asunción de roles adultos, no presentando secuelas en el
desarrollo del individuo por estar este equipado con recursos personales y
vínculos sociales convencionales que le permiten implicarse con un estilo de vida
saludable e integrado.

De este grupo de teorías una que considera el aspecto interaccional entre las
variables familiares, escolares grupales y la delincuencia, es la de Thornberry.

3. Teoría Interaccional de T.P. Thornberry

Este autor señala que el comportamiento antisocial no responde a una causación


simple y unidireccional, sino que la delincuencia se va forjando a través de
complejos procesos bidireccionales a lo largo del desarrollo del individuo.

El individuo no se limita a “recibir las influencias criminogénicas de su medio


(familiar, escolar, grupal, etc.) como habitualmente proponen las teorías de la
delincuencia, sino que el propio comportamiento del sujeto influye sobre esos
agentes “causales”.

28
Para Thornberry la erosión al apego de la familia o a la escuela es uno de los
factores más importantes en la génesis de la delincuencia. No obstante a
diferencia de las teorías del control social, la teoría interaccional plantea que, para
que aparezcan conductas antisociales, es necesario además un contexto de
aprendizaje. Una vez desligado del mundo convencional el individuo aún ha de
aprender a delinquir en un contexto desviado (habitualmente el grupo de amigos).
Este contexto le reforzará las conductas antisociales y le facilitará la interiorización
de actitudes delictivas.

Aclara el autor que las diferencias delineadas no son unidireccionales sino


recíprocas es decir que los distintos elementos de la teoría se influyen
mutuamente. El desapego a los lazos familiares o escolares influye en la
delincuencia, pero a su vez esta influye debilitando aún más los vínculos con esos
espacios. La implicación con amigos desviados aumenta la probabilidad de
delincuencia en el individuo; pero, a su vez la actividad antisocial del sujeto le
llevará a implicarse, cada vez con mayor intensidad, con iguales delincuentes. Si
esto es así la interpretación que se hace de muchos resultados criminológicos (por
ejemplo las correlaciones que se hacen entre delincuencia y las variables
escolares, familiares o grupales) estaría sesgada. Cuando se obtienen
correlaciones significativas, por ejemplo entre tensión familiar y conducta
antisocial, esas covariaciones se interpretan como índices de la influencia del
conflicto familiar sobre la delincuencia. Sin embargo, de acuerdo con la teoría
interaccional, esta forma de proceder estaría ignorando la otra posible
interpretación: que la delincuencia afecta también a ese tipo de variables
psicosociales. (Romero 1998).

Thornberry intenta explicar la continuidad y el cambio en la carrera delictiva, al


igual que Moffitt, prestando la mayor atención a la edad de comienzo de la
conducta antisocial.

Sin embargo a diferencia de la división tipológica de Moffitt que establece una


dicotomía entre delincuentes con inicio temprano y delincuentes con inicio tardío.
Cree conveniente hablar de un continuo en la edad de inicio. Ciertos adolescentes
29
comienzan su conducta antisocial ya en los años preescolares, otros comienzan
en la adolescencia; pero muchos comienzan en el rango de edades intermedias.

Cuando la conducta antisocial aparece en edades muy tempranas el análisis que


realiza Thornberry coincide en gran medida con el hecho por Moffitt. Factores
temperamentales y familiares (prácticas educativas inadecuadas) y estructurales
(adversidad socio económica) se entrecruzan e interactúan dando lugar a
conductas desadaptativas ya en los primeros años.

Las relaciones recíprocas que se van produciendo entre la conducta desviada y


otros factores, mantendrán estas conductas desadaptativas. La conducta
antisocial debilita la relación con la familia y con la escuela, fortalece la asociación
con iguales desviados e impide una transición equilibrada a los roles adultos:
debido a ello, la actividad delictiva se perpetúa.

Las condiciones socio económicas tendrán un papel casi decisivo en la


delincuencia de inicio intermedio (en los años de la escuela primaria). El estrés
familiar impide o dificulta la creación de vínculos convencionales a la vez que el
éxito en la escuela se ve dificultado y aumenta la probabilidad de implicación con
delincuentes.

Este tipo de delincuencia también tiene una alta probabilidad de mantenerse a lo


largo del ciclo vital; de hecho, cuanto más temprano sea su comienzo más
probable es que los déficits que experimenta el sujeto sean severos, y por tanto
más probable será la continuidad de la conducta antisocial. No obstante existe
también una cierta probabilidad de abandono de la carrera delictiva. Por una parte
las condiciones de las que parten estos delincuentes son menos extremas que las
de los de inicio más temprano (preescolar) y, por ello existen mayores
probabilidades de cambio (en las circunstancias socioeconómicas o en el lugar de
residencia, por ejemplo). Además en estos sujetos pueden existir áreas vitales que
“compensan” los déficits en otros campos. Son los llamados factores de
protección: una alta inteligencia por ejemplo puede compensar las influencias

30
negativas de un ambiente familiar tenso. De este modo se puede detener el ciclo
acumulativo que fortalece la conducta antisocial.

Cuanto más tarde comience la carrera delictiva más posibilidades habrá de


cambio hacia un estilo de vida convencional.

Cuando las conductas antisociales aparecen en la adolescencia su persistencia es


muy poco común, abandonando este tipo de conducta en pocos años. La base de
estas conductas delictivas no tiene que ver con la falta de recursos sociales o
individuales. Responde a fenómenos madurativos que tienen que ver con la
búsqueda de autonomía de la adolescencia. La necesidad de asentar la propia
autonomía creará tensión y hostilidad hacia los padres y hará que el adolescente
“gravite” hacia el núcleo de amigos (un grupo de amigos que está viviendo la
misma tensión). Como consecuencia se implicará en conductas antisociales. Estas
conductas se caracterizan por ser poco severas y por estar relacionadas con la
independencia personal del joven. Con el logro de autonomía y con la asunción de
roles adultos estas conductas van desapareciendo.

4. Teoría de David Farrington

(Garrido, Redondo & Stangelan P 1999) consideran a la teoría de Farrington como


paradigma de las teorías de las etapas vitales.

(Farrington 1996) realiza un análisis comprensivo del desencadenamiento de las


conductas delictivas a partir del desarrollo evolutivo de tendencias antisociales y la
concreta comisión de la conducta desadaptada. En este análisis son
fundamentales de considerar: el grado de la tendencia antisocial, la decisión de
cometer un delito y el inicio, persistencia y desistimiento de la delincuencia:

a) Grado de la tendencia antisocial

Considera tres tipos de factores y procesos que determinarán el desarrollo de


conductas antisociales en los niños y jóvenes:

31
Los procesos energizantes o motivación, la direccionalidad antisocial del
comportamiento y los procesos inhibitorios.

Los procesos energizantes o motivadores estarían determinados por:

• El nivel de deseo de bienes materiales y sociales (prestigio). Estos deseos serán


más intensos en familias con escaso poder adquisitivo en la medida en que los
fines están más lejos de ser alcanzados, y

• Por el nivel de frustración, asociada al desarrollo de la ira, al estrés y al consumo


de alcohol

Los procesos que imprimirán al comportamiento una direccionalidad antisocial


dependerán de si el individuo posee habilidades suficientes para lograr los
objetivos de los procesos energizantes o motivadores por medios lícitos. En caso
de no poseerlos los jóvenes pueden adoptar la utilización de métodos ilícitos que
se convierten en hábitos.

La tendencia antisocial se verá condicionada en mayor o menor medida por la


intensidad de sus procesos inhibitorios y sus creencias y actitudes contrarias al
delito, la supervisión adecuada por parte de los padres, y la empatía y ausencia de
impulsividad y/o baja inteligencia.

b) La decisión de cometer un delito

La ocurrencia o no del delito estará relacionada por la interacción del individuo con
una situación concreta. Si las tendencias antisociales se encuentran presentes y
coinciden con oportunidades para cometer el delito, y la valoración costes
beneficio anticipados (materiales, castigos penales, posibilidad de ser descubierto,
etc) resulta favorable, el delito se cometerá.

En cuanto a la valoración de los costes y beneficios es menos probable que un


individuo impulsivo, tome en consideración las consecuencias posibles de sus
actos, especialmente aquellas que tienen un cariz demorado (caso de las
sanciones penales).

32
c) Inicio, persistencia y desistimiento de la delincuencia:

En el inicio de la conducta delictiva Farrington considera prioritariamente la


influencia que ejercen los amigos sobre el joven. El proceso de maduración del
joven determina un aumento de la motivación para conseguir dinero, junto con la
necesidad de una mayor consideración por parte del grupo y de nuevas y mayores
estimulaciones.

Aumenta también la posibilidad que si el grupo de amigos utiliza medios ilegales


para la consecución de estos fines, el joven los imite. Los padres en este período
de la adolescencia pierden influencia sobre los adolescentes, y si se trata de
padres ausentes, se incrementará notablemente la influencia del grupo de amigos,
haciéndose más frecuentes las oportunidades para cometer delitos, a la vez que
aumenta con la edad la utilidad esperada de las conductas ilícitas.

La persistencia de la conducta delictiva estará supeditada a la estabilidad que


presente la tendencia antisocial, como resultado del prolongado proceso de
aprendizaje.

El desistimiento de la conducta o carrera delictiva sólo se producirá en la medida


que el joven mejore sus habilidades para la consecución de los fines deseados, y
en la medida que aumente sus relaciones y sus vínculos afectivos con grupos no
antisociales. Esto suele ocurrir al final de la adolescencia y el inicio de la vida
adulta. (Farrington 1996) sintetiza estas etapas de la siguiente manera:

La prevalencia de la conducta delictiva puede aumentar al máximo entre los


catorce los veinte años debido a que los jóvenes (especialmente los de clase baja
que fracasan en la escuela) tienen en esas edades una alta impulsividad, grandes
deseos de actividades estimulantes, de poseer determinadas cosas y de mayor
consideración social, pocas posibilidades de lograr sus deseos mediante medios
legales, y poco que perder (en la medida en que las sanciones legales son suaves
y sus amigos aprueban con frecuencia la conducta delictiva). Sin embargo,
después de los veinte años, sus deseos se tornan menos imperiosos o más

33
realistas, es más posible su logro legalmente, y los costes del delito son mayores
(ya que los castigos legales son más severos) y, además, las personas más
allegadas – esposas o novias desaprueban el delito. (Garrido, Redondo &
Stageland 1999). A continuación se presenta un cuadro descriptivo de las teorías
explicativas del delito.

A modo de síntesis, se puede señalar la evolución que han tenido las teorías de la
criminalidad, que parten de las consideraciones biológicas, pasando por las
psicológicas y sociales, para concluir en la actualidad con las explicaciones
multicausales e integradoras de los aspectos individuales, sociales y situacionales.

2.1.6. LA INSEGURIDAD

De acuerdo con (Manuel Osorio 2002) en su Diccionario Jurídico, dice del


concepto de inseguridad: "como una incertidumbre de peligro o daño".

2.1.7. CAUSAS DE LA INSEGURIDAD CIUDADANA

El fenómeno de la inseguridad es muy complejo. Hay muchas causas, y están


íntimamente relacionadas unas con otras. En general se agrupan en biológicas,
psicológicas, sociales y familiares. Tan sólo por citar algunos ejemplos dentro de
cada grupo, tenemos las siguientes causas de la inseguridad:

A. Biológicas

Se ha mencionado al síndrome de déficit de atención con hiperactividad como


causa de problemas de conducta, que sumados a la impulsividad característica del
síndrome, pueden producir un ciudadano violento, que se traduce en un posible
delincuente.

B. Psicológicas

La inseguridad se relaciona de manera consistente con un trastorno mental (en


realidad de personalidad) en la sociopatía, llamada antes psicopatía y, de acuerdo
al trastorno antisocial de la personalidad y su contraparte infantil, el trastorno de la

34
conducta, llamado ahora disocial, aunque hay que aclarar no todos los que
padecen este último evolucionan inexorablemente hacia el primero, y de ahí la
importancia de la distinción. El trastorno antisocial de la personalidad se establece
entre los 12 y los 15 años, aunque a veces antes, y consiste en comportamiento
desviado en el que se violan todos los códigos de conducta impuestos por la
familia, el grupo, la escuela, la iglesia, etc.

El trastorno es cinco a diez veces más frecuente en hombres que en mujeres.


Como estos sujetos están más representados en los estratos más pobres, hubo
alguna discusión sobre si la pobreza induce o potencia estas alteraciones. Esto se
ha descartado: los individuos con trastorno antisocial de la personalidad, por su
incapacidad de lograr metas y conservar empleos, tienden a asentarse
naturalmente en los estratos de menores ingresos.

C. Sociales

La desigualdad económica es causa de que el individuo desarrolle desesperanza.


No se trata de la simple pobreza: hay algunos países o comunidades muy pobres,
como el caso de los cinturones de pobreza, en los que virtualmente desconocen el
robo y la violencia de otro tipo. Sin embargo, la gran diferencia entre ricos y pobres
y sobre todo la imposibilidad de progresar socialmente sí causa inseguridad: la
frustración se suma a la evidencia de que no hay otra alternativa para cambiar el
destino personal.

Más importante como causa social es la llamada subcultura delincuente. Aunque


sus detractores dicen que esta hipótesis carece de evidencia experimental, hay
comunidades, barrios y colonias en donde niños y jóvenes saben que para
pertenecer al grupo y formar parte de su comunidad necesitan pasar algunos ritos
de iniciación, entre los que se encuentran robar, asaltar o quizá cometer una
violación. La falta de medición requiere de estudios, sí, mas no de desestimar lo
que obviamente es un factor de formación de conductas y conceptos sociales.

D. Entorno Familiar

35
En la familia, los dos factores que con más frecuencia se asocian al desarrollo de
inseguridad es tener familiares directos que también sean delincuentes y/o que
abusen de sustancias. Un entorno familiar disruptivo potencia las predisposiciones
congénitas que algunos individuos tienen para delinquir.

A estos factores le vamos a sumar, por si fuera poco el hecho de habitar en un


ambiente hostil lleno de peligros y con una escala de valores invertida, en medio
de atracadores, homicidas, narcotraficantes, violadores, drogadictos, alcohólicos y
otros de peor o igual peligrosidad.

Tendremos la suma de todos los factores que generan inseguridad ciudadana más
el plus de haberse contagiado criminalmente mientras vivía en el penal sin culpa
alguna en un verdadero proceso de criminogénesis.

2.1.8 EL INDIVIDUO DELINCUENTE

En los individuos delincuentes vemos la interacción de los trastornos descritos.


Por ejemplo, en los delincuentes crónicos se encuentran varios o todos los
siguientes rasgos.

 Socialización pobre como niños: pocos amigos, no los conservaban, sin


ligas afectivas profundas.

 Poco supervisados o maltratados por sus padres: los dejaban solos, a su


libre albedrío, y cuando estaban presentes, los maltrataban.

 Buscan sensaciones en forma continua: desde chicos son niños problema y


los mecanismos de control social no tienen gran influencia sobre ellos.

 Manejan prejuicios como base de su repertorio: "todos los


blancos/negros/mujeres/hombres son así"

 Abusan del alcohol.

 Carecen de remordimientos, o aprenden a elaborar la culpa y así evitarlos.

36
 No siguen una religión o profesan una fe constante o eventual.

 Evitan asumir la responsabilidad de sus actos: construyendo casi siempre


una pantalla o justificación que suele ser exitosa para librarlos (Ejem: es
que cuando era niño me vivía en la cárcel).

2.1.9. FUENTES DEL COMPORTAMIENTO DE CIUDADANOS QUE COMETEN


HECHOS PUNIBLES

Uno de los factores que se une en multitud de ocasiones a este proceso es la


presión social emanada de un medio o unas condiciones de vida atosigante, el
ambiente enrarecido del suburbio sin otras alternativas culturales o la progresiva
frustración a lo largo del desarrollo, que va generando unos niveles de respuesta
violenta imposibles de contener al llegar a la adolescencia.

Los modelos sociales, a veces presentados en la misma familia, constituyen así


mismo otra importante fuente del comportamiento de niños y adolescentes. No hay
que olvidar lo susceptible que es el muchacho a la imitación y a la influencia que
está puede ejercer como método de afirmación personal, capaz de superar al
propio modelo.

Por otro, lado las causas orgánicas se hallan inscritas en la anatomía del
delincuente desde su nacimiento. La herencia no siempre es decisiva, pero ejerce
constantemente una influencia más o menos favorable, confirmada por los muchos
ejemplos ofrecidos por la misma familia. También se le atribuye culpabilidad a las
alteraciones física ó perturbaciones afectivas o de personalidad.

Sin embargo, parece más oportuno tener en cuenta el conjunto de los diversos
factores que afectan a la conducta del individuo y poner de relieve la interrelación
de todas las fuerzas y condiciones, internas y externas, que intervienen en su
desarrollo, influencia determinada en gran medida por ese ambiente circundante
que influye y determina la conducta de los individuos de manera negativa o
positiva, de acuerdo a la actuación que tiene la comunidad para mejorar la
situación reinante.

37
2.2. MARCO CONCEPTUAL

Los conceptos operacionales de orden explicativo tienen una importancia


fundamental, porque son un punto de partida en la utilización del lenguaje
criminológico, sobre todo es importante poder distinguir tres de ellos: factor
criminógeno de causa criminógena de móvil criminógeno; citaremos también -
índice y condición y factor causal.

2.2.1. CRIMINOGÉNESIS Y CRIMINODINÁMICA

La criminogénesis es el estudio del origen o principio de la conducta criminal. Por


extensión, podemos considerar la criminogénesis como el conjunto de factores y
causas que dan por resultado la conducta antisocial, a largo plazo.

Y la criminodinámica es la explicación de los procesos seguidos para llegar a la


conducta antisocial.

La criminogénesis se considera como una premisa para resolver el problema de la


criminodinámica.

Para Di Tulio, “la diferencia entre ambas es la misma que existe entre etiología y
patogénesis, así, el maestro de Roma explica como:

La etiología es, en efecto, el estudio de las causas que determinan los fenómenos
morbosos; mientras la patogénesis es el estudio de mecanismos con el que tales
causas obran para producir determinados efectos morbosos” (pag. 267).

Criminogénesis y criminodinámica son dos elementos indispensables en la


explicación del crimen, y necesarios también para el análisis del criminal y de la
criminalidad.

Para poder realizar ese análisis, es necesario conocer los llamados conceptos
operacionales de orden explicativo, que habíamos ya mencionado en el primer
capítulo de esta obra.

38
Los conceptos operacionales de orden explicativo tienen importancia fundamental,
porque son un punto de partida en la utilización del lenguaje criminológico, sobre
todo es importante poder distinguir tres de ellos: factor criminógeno de causa
criminógena de móvil criminógeno; citaremos también -índice y condición y factor
causal.

2.2.2. CAUSA CRIMINÓGENA

Por causa criminógena se entiende, de acuerdo con la definición de Naciones


Unidas, "la condición necesaria sin la cual un cierto comportamiento no se habría
jamás manifestado". Se entiende por causas del delito solamente los antecedentes
o condiciones necesarias de la conducta delictiva.

Entonces se entiende por causa un agente que determina, por su incidencia, la


aparición de una nueva fuerza o de un nuevo objeto; una causa precede al efecto
y es invariablemente seguida por el efecto. La utilización del término causa en
Criminología, supone que se ha individualizado la relación entre el objeto y el
efecto de una manera cierta. La causa criminógena tiene forzosamente un efecto,
el efecto de la causa criminógena es la conducta antisocial, toda conducta
antisocial tiene una causa, si no existe esa causa no tendremos la conducta, lo
que interesa en Criminología es demostrar que determinada conducta criminal fue
causada directamente, específicamente por determinada causa; ejemplifico: un
sujeto comete homicidio estando drogado, ¿el estar drogado es la causa del
homicidio? sí, siempre y cuando se pruebe que, de no haber estado drogado no
hubiera realizado el homicidio, ahora aquí estamos en lo que verdaderamente es
criminología clínica, buscar cadenas causales, porque la causa de lo ilícito, la
causa de la conducta antisocial de éste sujeto, es que haya estado drogado, pero
hay que ver qué y por qué causa se droga este sujeto, porque a nosotros nos
interesa más atacar las primeras causas, las más remotas, que las inmediatas.

El esquema de que partiríamos sería el siguiente: CAUSA - EFECTO si se da la


causa se da el efecto, si quitamos la causa no se dará el efecto. Dado que la
causa de la causa es causa de lo causado, estamos en la búsqueda de las causas

39
mediatas para poder eliminarlas, pues de atacar y destruir la causa inmediata
aparecerá de nuevo, pues es a su vez causada por una causa mediata. En
Criminología Clínica este esquema tiene importancia, pues mientras más remotas
sean las causas que logremos eliminar, mayor éxito tendrá el tratamiento. Sin
embargo, el problema no es tan simple, pues el esquema se nos complica por el
hecho de que la conducta criminal es producto no de una, sino de múltiples
causas, relacionadas entre sí, dependientes unas de otras, en un juego complejo y
nada fácil de descifrar.

Se ha abusado tanto de los conceptos "causa" y "causalidad" que hasta cierto


punto han perdido su valor, por esto algunos autores prefieren utilizar el término
más moderno y más matemático de "función".

2.2.3. ÍNDICE CRIMINOLÓGICO

Índice es el indicio o señal de una cosa, en esta investigación es el indicador de


ciertos aspectos diferenciales. El índice criminológico es un signo o síntoma que
permite un diagnóstico criminológico. El índice tiene una importancia clínica, pero
no tiene necesariamente un valor etiológico. Por esta razón factor e índice son
frecuentemente confundidos, lo que debe evitarse.

En Última instancia, la conducta antisocial es un índice, un indicador de la


personalidad del sujeto estudiado, pero no representa la personalidad en sí, y, en
nuestra opinión, el crimen no es forzosamente demostrativo de la peligrosidad
criminal de un individuo.

2.2.4. CONDICIONES CRIMINOLÓGICAS

Las condiciones provocan solamente las ocasiones o estímulos suplementarios.


Ellas permiten por lo tanto sacar a la luz un elemento de oportunidad que tiene su
importancia en la Etiología Criminal. Las condiciones no deben confundirse con los
factores, pues ni toda condición (ocasión o estímulo) es factor criminógeno, ni todo
factor es una condición. La variabilidad en cada caso concreto es notable.

2.2.5. EL MÓVIL CRIMINÓGENO

40
Otro concepto es el del móvil; por móvil se entenderá aquello de naturaleza interna
que ha llevado al sujeto a cometer una conducta antisocial. En español, móvil es lo
que mueve material o moralmente una cosa; en Criminología se acepta
exclusivamente en su segunda forma, es decir, la moral. Para ejemplificar,
podríamos pensar en un homicidio pasional cuyo móvil fueron los celos, o en un
robo cuyo móvil lo fuera la ambición.

2.2.6. EL FACTOR CRIMINÓGENO

Por factor criminógeno entenderemos todo aquello que favorece a la comisión de


conductas antisociales. Ósea es "un estímulo endógeno, exógeno o mixto que
concurre a la formación del fenómeno criminal".

Etimológicamente "factor" significa el que hace algo por sí o en nombre de otro, y


que en sentido figurado, representa todo elemento que contribuye o concurre a
determinado resultado. Por ello se debe entender por Factor Criminógeno, todo
elemento objetivo que interviene en la producción del fenómeno criminal.

En las ciencias matemáticas, factor es cada una de las cantidades que se


multiplican para formar un producto y en Criminología puede aprovecharse el
símil, pues los factores criminógenos se unen, se combinan, y si se multiplican
conducirán al criminal hacia el crimen.

Así, el alcoholismo, la promiscuidad, la miseria, la impunidad, son factores


criminógenos, pues favorecen la aparición del crimen, aunque por sí solos sean
incapaces de producirlo, estos factores son los que se transmiten en el contagio
criminal.

2.3. MARCO JURÍDICO

2.3.1. LEY Nº 2298, LEY DE 20 DE DICIEMBRE DE 2001 LEY DE EJECUCIÓN


PENAL Y SUPERVISIÓN

41
Entre las normas y principios generales, este cuerpo normativo dispone que la
ejecución de penas se basa en el sistema progresivo descrito en el marco teórico
de esta investigación.

ARTICULO 10. (Progresividad). La ejecución de la pena se basa en el sistema


progresivo que promueve la preparación del interno para su reinserción social.
Este sistema limita a lo estrictamente necesario la permanencia del condenado en
régimen cerrado.

El avance en la progresividad dependerá del cumplimiento satisfactorio de los


programas de educación y trabajo así como de la observancia del régimen
disciplinario.

El legislador presupone que los niños menores puedan habitar con sus padres
privados de libertad en el penal, disponiendo de espacios para este cometido, sin
embargo no analiza la infraestructura carcelaria ni el hacinamiento menos
considera la seguridad y peligrosidad a la que estarán expuestos, mucho menos
hace un análisis criminológico de las consecuencias de esta determinación
fundamentando nuestro estudio respecto a la criminogénesis y sus consecuencias
funestas sobre la inseguridad ciudadana.

ARTICULO 26. (Padres y madres privados de libertad). Los hijos del interno
menores de 6 años, podrán permanecer en los establecimientos penitenciarios,
siempre que el progenitor privado de libertad sea el que tenga la tutela del menor.
Cuando la tutela del menor la tengan ambos progenitores, el niño permanecerá
con el progenitor que se halla en libertad salvo que el niño se encuentre en el
periodo de lactancia en cuyo caso permanecerá junto a su madre.

La permanencia de niños menores de seis años en establecimientos


penitenciarios se hará efectiva en guarderías expresamente destinadas para ellos.

De conformidad a lo establecido en el Código del Niño, Niña y Adolescente, en


ningún caso podrán permanecer en los establecimientos penitenciarios niños
mayores de esa edad, correspondiéndole al Estado, según el caso, ubicar al niño

42
o niña con la familia extendida, en entidades de acogimiento o en familias
sustitutas, mientras dure la privación de libertad.

La administración penitenciaria otorgará las facilidades necesarias para que los


hijos menores de los internos los visiten, compartan con ellos y estrechen su
vínculo paterno filial.

Más allá de la explicitud de los conceptos jurídicos, teóricos y conceptuales que


respaldan este estudio científico y lo dispuesto en la ley, es menester considerar
que su aplicación práctica está muy, muy alejada de la realidad.

ARTICULO 157. (Sistema Progresivo). Las penas privativas de libertad se


ejecutarán mediante el Sistema Progresivo, consistente en el avance gradual en
los distintos periodos de tratamiento, basados en la responsabilidad y aptitudes del
condenado en los regímenes de disciplina, trabajo y estudio.

El sistema progresivo comprende los siguientes períodos:

1) De observación y clasificación iniciales;

2) De readaptación social en un ambiente de confianza;

3) De prueba; y,

4) De libertad condicional.

Para el cumplimiento de los periodos del Sistema Progresivo, se limitará a lo


estrictamente necesario la permanencia del condenado en establecimientos de
régimen cerrado.

43
CAPÍTULO III
METODOLOGIA DE LA INVESTIGACION

3.1. ENFOQUE DE LA INVESTIGACIÓN

Este estudio cuantitativo, intenta explicar las causas y consecuencias del


fenómeno bajo estudio, trabajando de esta manera alrededor de la verificación de
datos y resultados.

3.2. TIPO DE INVESTIGACIÓN

Es un estudio explicativo, es decir que va más allá de la descripción de conceptos


o fenómenos o del establecimiento de relaciones entre conceptos; es decir, están
dirigidos a responder por las causas de los eventos y fenómenos físicos o
sociales. Como su nombre lo indica, su interés se centra en explicar por qué
ocurre un fenómeno y en qué condiciones se manifiesta, o por qué se relacionan
dos o más variables.

Da a conocer la incidencia sobre la seguridad ciudadana, de la génesis de la


criminalidad como una actividad descriptiva (indicar, según el análisis y
comprobación de datos y resultados los casos que se presentaron en la realidad,
constituyendo un estudio descriptivo) y relacionar dicha opinión con conceptos
como edad y género (estudio correlacional), es diferente de señalar por qué la
inseguridad se presenta de diferente manera (estudio explicativo).

3.3. MÉTODOS

Inductivo-Deductivo: Permitieron lograr los objetivos propuestos y ayudaron a


verificar las variables planteadas.

Inductivo: Porque analiza otros factores como por ejemplo la revisión casuística.

Deductivo: Porque detalla toda la estructura referente a la Criminogénesis y


Criminodinámica.

44
Analítico-Sintético: Porque con este método se hace posible la comprensión de
todo hecho, fenómeno, idea, caso etc.

Histórico–Lógico: Porque se analizó científicamente los hechos, ideas del pasado,


comparándolos con los actuales.

Método de Investigación de Campo y Bibliográfico: La bibliografía de autores


nacionales e internacionales referentes al tema.

Método Conceptual: Su objetivo es clasificar conceptos, para arribar a definiciones


precisas.

3.4. DISEÑO DE ESTUDIO

Es una investigación no experimental, o que se realiza sin manipular


deliberadamente las variables, sin construir ninguna situación, solo limitándose
a observar hechos ya existentes sin intervención del investigador.

3.5. INSTRUMENTOS Y TÉCNICAS DE INFORMACIÓN

3.5.1. INVESTIGACIÓN DOCUMENTAL

Para la realización del presente trabajo y con el objetivo de profundizar el


conocimiento, se realizó la revisión y análisis de la literatura y documentos que
contienen parte de la historia, estudios e investigaciones anteriores, normativa
relacionada con el tema, publicaciones, trípticos, etc.

La revisión de la literatura consiste en detectar, obtener y consultar la bibliografía


y otros materiales que pueden ser útiles para los propósitos del estudio, de donde
se debe extraer y recopilar la información relevante y necesaria que atañe a
nuestro problema de investigación.

3.5.2. OBSERVACIÓN

La permanencia y formación en la Policía Boliviana, sumado a la importancia e


interés que presenta el problema de investigación, han permitido aumentar el

45
conocimiento sobre el tema, a través de continua información y observación del
fenómeno.

La observación realizada, ha sido analizada desde la percepción personal y


conocimientos complementarios, para realizar el presente trabajo de
investigación.

3.5.3. CUESTIONARIO

Utilizamos solo públicos externos, el cuestionario propuesto, permite recolectar


datos que traducidos en datos estadísticos y complementado con gráficos
muestran de manera objetiva los resultados de la investigación de campo.

3.5.4 ENTREVISTA

Se han realizado entrevistas personales a Jefes de la Institución principalmente


relacionados con el área de investigación.

Estas entrevistas nos permiten obtener importantes conocimientos, que fueron


introducidos en diferentes puntos de este documento, dotándole de un valioso
carácter de recopilación e información de primera mano con los entes
relacionados directamente con el problema de investigación, por sus
conocimientos, experiencia.

3.6. FUENTES DE INFORMACIÓN

Las fuentes de información primaria son aquellas que el investigador recoge de


manera directa, analiza e interpreta en base al trabajo de campo, en este caso en
específico la observación como herramienta de acercamiento objetivo, entrevista y
el cuestionario.

En cuanto a las fuentes secundarias, son las que contienen información,


organizada, elaborada, producto de análisis, extracción o reorganización que
refiere a documentos primarios originales, su interpretación y adecuación a
nuestro trabajo investigativo.

46
3.7. POBLACIÓN Y MUESTRA

Para determinar el tamaño de la muestra, primero se determinó el tamaño del


universo, utilizando los datos de Régimen Penitenciario, determinando como
universo a las mujeres que viven al interior del penal de San Pedro sin estar con
detención preventiva o viven con los reclusos de San Pedro.

El cálculo del tamaño de la muestra se apoya en técnicas estadísticas que


garantizan un nivel de confiabilidad mínimo y un margen de error aceptable en los
resultados. Es importante tener en cuenta que en muestreos probabilísticos,
determinar el tamaño de la muestra es fundamental para poder asegurar la
generalización de los resultados.

Sin embargo, en muestreos no probabilísticos, como es el caso de esta


investigación, el número de integrantes de la muestra vendrá dado
(subjetivamente) por el llamado "punto de saturación", es decir, por la mínima
cantidad de personas para la cual cualquier contacto adicional deja de agregar
información nueva o relevante.

3.8. PROCEDIMIENTOS

La recolección de los datos se fundamenta en la medición y el análisis de datos y


resultados. Esta recolección se lleva a cabo al utilizar procedimientos
estandarizados y aceptados por una comunidad científica. Para que una
investigación sea creíble y aceptada por otros investigadores, debe demostrarse
que se siguieron tales procedimientos. Como en este enfoque se pretende medir,
los fenómenos estudiados deben poder observarse o referirse en el “mundo real”.

47
CAPÍTULO IV
ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS

4.1. DIAGNÓSTICO

¿A dónde va toda esta investigación? A llegado a su punto cúspide, el diagnóstico,


de una realidad que está aquejando a la seguridad ciudadana, cuyos actores más
allá de ser criminales ocasionales, han hecho del delito su modus vivendi, sus
sustento vital, porque para ellos la comisión de delitos es algo común, su proceso
de socialización fue precario viciado de los peores modelos conductuales en una
de las cárceles más peligrosas de Latinoamérica.

Esta monografía tiende a explicar las causas que tuvo un delincuente para
delinquir, el resultante del estudio de su historia vital, donde tiene importancia
capital el perfil de personalidad básica del actor (factor individual o
biopsicogénesis) y de las influencias ambientales (factor mesológico o
sociogénesis).

Para entender lo explicado en el marco teórico, donde se fundamenta la tendencia


multicausal del estudio del delito y del delincuente, del porque es proclive a
cometer delitos cuando se da la ocasión.

Los datos que a continuación detallamos, son el sustento de esta monografia,


vienen de una realidad que no se había visto antes, porque es parte de la
evolución del proceso de criminogénesis al interior del penal de San Pedro desde
hace años atrás, no es un fenómeno mediato, sino más bien se va ir prolongando
en el tiempo y aumentando a medida que la cárcel de San Pedro siga recibiendo
en su complejo interior niños, niñas y adolescentes.

¿Pero cómo podemos probar esta teoría? Para ello echamos un vistazo al centro
penitenciario de Calahuma que alberga en sus instalaciones, a 263 internos
depositados ahí por la comisión de delitos en su mayoría patrimoniales y sexuales.

48
De los 263 internos, 39 vivieron durante su niñez en el penal de San Pedro
mientras sus padres cumplían detención ejecutoriada o preventiva, representando
el 15% de su población.

Este número al parecer reducido, es el resultado de hace aproximadamente 10


años atrás (2007) cuando en la cárcel de San Pedro solo vivían 120 niños, niñas y
adolescentes, esto quiere decir que el 35% de los niños de ese entonces hoy son
pobladores del centro penitenciario de Calahuma, que consideramos por la edad
de sus pobladores entre 16 y 20 años.

Hoy en día, el Penal de San Pedro de la ciudad de La Paz alberga a 2130


internos, entre los que tienen sentencia y aquellos que solo guardan detención
preventiva, a esto hay que sumarle 423 mujeres y 730 niños aproximadamente,
(no se cuenta con un registro exacto), viviendo al interior del penal con sus padres
que guardan detención.

4.2. ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS OBTENIDOS DE LOS


INSTRUMENTOS DE INVESTIGACIÓN

En esta etapa es importante haber aplicado el instrumento adecuado para poder


así medir los datos y posteriormente analizarlos. En este estudio, se eligió como
medio de la recolección de datos la forma directa y estructurada. Esto mediante un
cuestionario que se aplicara a manera de muestreo, entre las mujeres que viven
en el penal de San Pedro, que consta de 10 preguntas; dichas preguntas son
cerradas, dicotómicas y categóricas.

El enfoque cuantitativo utiliza la recolección de datos, con base en la medición


numérica y el análisis estadístico, para establecer patrones de comportamiento y
probar teorías, este enfoque busca obtener información de sujetos, comunidades,
contextos, variables o situaciones en profundidad en las propias palabras,
definiciones o términos de los sujetos.

49
Una vez recolectado los datos cuantitativos de una investigación se revisaran, se
prepararan y organizaran para el análisis, además que se efectuara una reflexión
sobre su validez y confiabilidad.

4.2.1. ENCUESTAS

El cuestionario es el instrumento de investigación usado para el propósito de este


trabajo investigativo, en el cual el objetivo principal es obtener información acerca
de cómo viven niños menores de 9 años en el penal de San Pedro. Esta
información servirá para medirla y contrastarla con los menores transgresores que
viven en el penal de Calahuma, de esta manera medir y demostrar la incidencia
del proceso de criminogénesis en el penal de San Pedro.

El cuestionario propuesto, de acuerdo al cálculo de la muestra, se ha realizado a


95 mujeres que viven en el penal de San Pedro, permitiéndonos recolectar datos
que presentaremos en gráficos ilustrativos que van a probar metodológica mente
esta investigación, a través del análisis confirmatorio de datos.

Para ello se realizaron encuestas a 95 personas segmentadas del total de mujeres


que viven en el penal de San Pedro por los hijos con los que cuentan o porque
formaron una nueva familia mientras habitaban en San Pedro, fueron distribuidas
de la siguiente forma:

• Muestra: 95 personas

• Edades: Fluctúan de 19 a 55 años

• Mujeres: 95

4.2.2. ENTREVISTAS

Estas entrevistas nos permiten obtener importantes conocimientos, que fueron


introducidos en diferentes puntos de este documento, dotándole de un valioso
carácter de recopilación e información toda vez que se entrevistó a jefes policiales
relacionados directamente con el problema de investigación.

50
Entre sus criterios está el poco interés que el estado le presta al tema de
investigación y su incidencia en la inseguridad ciudadana.

La incapacidad del estado para ejercer control al interior del penal de San Pedro.

La inaplicabilidad de un verdadero sistema penitenciario progresivo, como lo pide


la ley de ejecución de penas en actual vigencia.

Los últimos sucesos criminales que están aquejando a la urbe paceña son un
claro reflejo del estudio que se ha realizado, toda vez que los actores principales
de estos hechos vivieron en su niñez al interior del penal de San Pedro.

4.2.3. DESCRIPCIÓN DE LAS TÉCNICAS DE ANÁLISIS DE DATOS


UTILIZADOS

El procedimiento de datos incluye las funciones de edición y codificación. La


edición comprende la revisión de los formatos de datos en cuanto a la legibilidad,
consistencia y totalidad de los datos. La codificación implica el establecimiento de
categorías para las respuestas o grupos de respuestas (Kinnear y Taylor,1993).
Una vez que se ha realizado la recopilación y registro de datos, estos deben
someterse a un proceso de análisis o examen crítico que permita precisar las
causas que llevaron a tomar la decisión de emprender el estudio y ponderar las
posibles alternativas de acción para su efectiva atención.
El propósito del análisis es establecer los fundamentos para desarrollar opciones
de solución al factor que se estudia, con el fin de introducir las medidas de
mejoramiento en las mejores condiciones posibles (Franklin, 1998).

4.2.4. ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS

Los resultados se presentan a través de los siguientes gráficos:

51
GRAFICO 1: CAUSAS POR LAS QUE VIVEN NIÑOS EN SAN PEDRO

Lo que podemos notar en esta pregunta es que el 88% de las encuestadas


que vive en el penal, están ahí junto a sus familiares que cumplen condena
por motivos familiares, indican que no tienen con quien vivir fuera del penal,
el 9% de las encuestadas, vive ahí porque no tiene dinero para conseguir
vivienda afuera del penal y el resto por que hizo de la cárcel su modus
vivendi.

PREGUNTA 1 CANTIDAD PORCENTAJE


MOTIVOS FAMILIARES 84 88,4
MOTIVOS
ECONÓMICOS 8 8,4
COSTUMBRE 3 3,2
TOTAL 95 100%

¿Por qué vive en el penal?


MOTIVOS FAMILIARES MOTIVOS ECONOMICOS COSTUMBRE

9% 3%

88%

FUENTE: Elaboración propia

52
GRAFICO 2: CANTIDAD DE NIÑOS QUE VIVEN EN SAN PEDRO

Esta pregunta saco a relucir la alarmante la cantidad de niños menores de


12 años que viven en el penal, a razón de 2,1 niños por persona
encuestada, aunque la norma vigente permite que niños menores de 6 años
puedan vivir con sus padres reclusos, en San Pedro se pueden inclusive
encontrar adolescentes de 14 a 16 años.

NIÑOS
MENORES
PREGUNTA 2 CANTIDAD DE 12 AÑOS PORCENTAJE
1 23 23 11,5
2 45 90 45
3 21 63 31,5
4 6 24 12
TOTAL 95 200 100%

¿Cuántos niños menores de 12 años viven


con Usted?
1 2 3 4

10%

40% 20%

30%

FUENTE: Elaboración propia

53
GRAFICO 3: RIESGOS DE LOS NIÑOS EN SAN PEDRO

Las respuestas obtenidas de esta pregunta, son algo contradictorias por que los
padres de los niños saben el riesgo que los niños corren en un ambiente plagado
de homicidas, atracadores, violadores, drogadictos y otros, aun así no asumen
medidas para sacarlos de este lugar, es más persisten en que ellos vivan en esta
situación.

PREGUNTA 3 CANTIDAD PORCENTAJE


SI 72 75,8
NO 23 24,2
TOTAL 95 100%

¿Sabe Ud. a que riesgos esta sometidos?


SI NO

24%

76%

FUENTE: Elaboración propia

54
GRAFICO 4: CONDICIÓN DE VIDA EN SAN PEDRO

Esta tal vez es una de las preguntas que más luces brinda respecto, al
proceso de contagio criminal, el hacinamiento y la promiscuidad, campean
al interior del penal de San Pedro, y en medio de estas nefastas
condiciones niños, 71% de estas familias vive en rusticas habitaciones
separadas por plásticos o cartones.

PREGUNTA 4 CANTIDAD PORCENTAJE


Un cuarto 6 6,3

Barraca común
22 23,2

Cuarto separado por plásticos o


cartones
67 70,5
TOTAL 95 100%

¿En que tipo de vivienda habita al interior del


Penal?
Un cuarto Barraca común Cuarto separado por plásticos o cartones

6%

23%

71%

FUENTE: Elaboración propia

55
GRAFICO 5: ENTORNO DE APRENDIZAJE DE LOS NIÑOS

Las respuestas a esta pregunta refuerzan, la problemática planteada en


este trabajo de investigación, el aprendizaje comportamental del niño se
basa en imitación de conductas, 96% de los niños que vive en el penal se
desenvuelve alrededor de todo tipo de criminales, el restante vive en una
pequeño cuarto del que no sale justamente por seguridad.

PREGUNTA 5 CANTIDAD PORCENTAJE


SI 91 95,8
NO 4 4,2
TOTAL 95 100%

¿Los niños menores de 12 años que viven con


Ud. tienen contacto constante con otros
internos?
SI NO
4%

96%

FUENTE: Elaboración propia

56
GRAFICO 6: LOS NIÑOS DE SAN PEDRO Y LA ESCOLARIDAD

Si bien los resultados de esta pregunta tienen particular importancia en la


reversión de los antivalores que los niños aprenden en la cárcel, 87%
asisten a la escuela, generando problemas de conducta en sus
establecimientos escolares, el resto aún no está en edad escolar.

Los establecimientos escolares están fuera del penal por lo que los niños
constantemente salen y entran al penal, situación aprovechada por sus
padres para el ingreso se sustancias prohibidas al penal, induciendo a sus
hijos a la cultura del engaño.

PREGUNTA 6 CANTIDAD PORCENTAJE


SI 83 87,4
NO 12 12,6
TOTAL 95 100%

¿Asisten sus hijos menores de 12 años a


la escuela?
SI NO
13%

87%

FUENTE: Elaboración propia

57
GRAFICO 7: ASISTENCIA PSICOLOGICA EN SAN PEDRO

Si tomamos en cuenta que al interior del penal existe un profesional


Psicólogo y un equipo de pasantes estudiantes de último año de psicología,
la atención a los problemas que se puedan suscitar con los niños no son
tomados en cuenta, por ello es que solo alguna vez el 4% de los menores
fue atendido y el 95% nunca fue atendido en el área de psicología.

PREGUNTA 7 CANTIDAD PORCENTAJE


SIEMPRE 0 0
ALGUNA VEZ 4 4,2
NUNCA 91 95,8
TOTAL 95 100%

¿Tienen sus hijos menores de 12 años asistencia


del Psicólogo del Penal?
SIEMPRE ALGUNA VEZ NUNCA

0% 4%

96%

FUENTE: Elaboración propia

58
GRAFICO 8: VIVIR EN SAN PEDRO ES UNA OPCION

Pese a todos los peligros 94% de las encuestadas, persiste en vivir en el


penal de San Pedro con sus niños menores de 12 años, al consultárseles
por que indicaron que no tendrían recursos para vivir afuera del penal, o
tienen ahí a sus niños porque no tiene a nadie que los cuide afuera, que sus
familias no las reciben por la condición jurídica de sus parejas.

PREGUNTA 8 CANTIDAD PORCENTAJE


SI 89 93,7
NO 6 6,3
TOTAL 95 100%

¿Cree necesario vivir en el Penal con sus


hijos menores de 12 años?
SI NO
6%

94%

FUENTE: Elaboración propia

59
GRAFICO 9: EXPECTATIVA DE VIVIENDA EN NIÑOS DE SAN PEDRO

Esta pregunta tiene un tinte particular 35% de las encuestadas no quiere


dejar el penal cuando les preguntamos el porqué, nos comentaron que
tenían sus negocios de comida, lavandería y otros (inclusive ilícitos) es
decir que hicieron del penal su modus vivendi, al interior del penal conviven
con otros reos, en algunos casos sus parejas ya no están en el penal.

PREGUNTA 9 CANTIDAD PORCENTAJE


SI 62 65,3
NO 33 34,7
TOTAL 95 100%

¿Le gustaría contar con una vivienda


fuera del penal?
SI NO

35%

65%

FUENTE: Elaboración propia

60
4.3. DESCRIPCIÓN DE LA PROPUESTA

Toda persona, grupo humano, sociedad corporativa o institución, para alcanzar


una gestión eficaz y eficiente por medio del desarrollo de proyectos, debe crear el
espacio para pensar y planear su propio futuro al definir planes, rutas y programas
que le permitan impactar el entorno o contexto social en que se desenvuelve.

En esa medida, lo que se haga para avanzar en el conocimiento de los posibles


escenarios del futuro, contribuye a reducir el nivel de incertidumbre, lo cual resulta
fundamental para mejorar la calidad de las decisiones estratégicas adoptadas.

Para garantizar la efectividad de la Policía Boliviana en su lucha contra el Crimen,


en el largo plazo, requiere definir las posibles alternativas, al emplear interrogantes
¿cómo podría ser?, ¿cómo se espera que fuera?, ¿qué debe hacerse a partir del
presente para lograr el porvenir deseado? Es comenzar a pensar que toda
decisión y acción actual impacta o repercute sobre el devenir institucional.

De acuerdo con lo anterior, el presente documento tiene como objetivos:

 Explicar cómo la prospectiva se constituye en un medio para mejorar


los procesos de toma de decisiones de la Policía Boliviana en su
lucha contra el crimen, gracias al análisis inteligente de la
información y teniendo una visión de futuro bien definida.
 Presentar la prospectiva como herramienta fundamental en la
formulación del direccionamiento estratégico criminal, generando
acciones de conjunto que le permitirán a la Institución garantizar el
cumplimiento efectivo de su misión de largo plazo.

Iniciar a las diferentes unidades investigativas en la reflexión prospectiva y


presentar la metodología que servirá de guía para la consolidación de la
prospectiva criminal.

4.4. DESARROLLO DE LA PROPUESTA

4.4.1. CONSTRUCCIÓN DE LA PROSPECTIVA CRIMINAL

61
Considerando los avances logrados por la Institución en materia prospectiva y
promoviendo en todas las unidades policiales una reflexión bajo este enfoque, se
espera que todas ellas continúen fortaleciendo su capacidad de análisis y
proyección hacia el futuro, con el propósito de contribuir a la alta dirección en la
toma de decisiones frente a las necesidades y adaptaciones que debe llevar a
cabo la Policía Nacional para garantizar su efectividad en el largo plazo. Con este
fin, la Oficina de Planeación se encargará de consolidar la prospectiva institucional
que aportará de forma decisiva en el direccionamiento estratégico de la Institución,
para lo cual serán fundamentales todas las investigaciones, estudios, análisis e
iniciativas de carácter prospectivo que presenten en su ámbito de acción cada una
de las unidades policiales.

De acuerdo con lo expuesto y la conceptualización presentada, la consolidación


de la prospectiva criminal a cargo de la Oficina de Planeación, comprenderá los
siguientes pasos:

4.4.2. ELABORACIÓN DEL DIAGNÓSTICO ANALÍTICO

Elaboración de un diagnóstico del presente para identificar causas y efectos de los


aciertos y problemas de la criminalidad. Este paso responde a la necesidad de
conocer el estado de cosas que prevalecen en la realidad.

Este diagnóstico permite comprender la dinámica retrospectiva de la criminalidad


producto de la criminogénesis al interior del penal, de su entorno, evolución, y
factores de cambio en relación a los principales actores de su entorno. El análisis
de estos campos y de los retos estratégicos permite descubrir cuestiones clave
para diseñar el futuro.

Su realización contará con los siguientes insumos:

 Análisis Entorno Social


 Plan Nacional de Desarrollo
 Diagnostico perceptivo institucional interno
 Lecciones Aprendidas /Análisis Operacional

62
 Estadística Disponible (recintos penitenciarios con niños)
 Estudios internos y externos
 Diagnóstico de seguridad ciudadana
 Mapa de Riesgos
 Análisis de percepción

4.4.3. IDENTIFICACIÓN DE VARIABLES CLAVES

Todo ejercicio de prospectiva que complementa un proceso de reflexión


estratégica ha de tener en cuenta las tendencias susceptibles de influir de manera
importante en los futuribles que se diseñan, y también, en la medida que sea
posible, las rupturas del sistema que se pueden vislumbrar.

Con fundamento en la información obtenida del diagnóstico analítico, y la


elaboración de un análisis estructural y morfologico se deben identificar las
variables incidentes de todo orden (político, social, económico, jurídico, cultural,
tecnológico e ideológico) y luego correlacionarlas con el propósito de determinar
un número de posibilidades que permitan la definición de los escenarios futuros y
su probabilidad de ocurrencia.

Para el cumplimiento de esta etapa, se requiere que identifiquen determinados


factores o ideas fuerza concebidos como tendencias y rupturas que puedan tener
en los próximos 10 años, estos últimos, distribuidos así: 2017 - 2022- 2027;
posteriormente, deben presentar estos factores como los posibles escenarios (x
cantidad de posibles delincuentes proyectados para cada periodo de la y cantidad
de niños que actualmente viven en el penal de San Pedro.

Todo en contraste con la matriz FODA de la Unidad interviniente, que jugarán el


papel principal en la construcción de dicho futuro.

4.4.4. FORMULACIÓN DE ESCENARIOS

De los escenarios planteados será posible determinar los riesgos, amenazas,


nuevas manifestaciones y oportunidades de la institución policial, en su tarea de
garantizar la seguridad ciudadana.

63
La formulación de los escenarios se efectuará a través del cumplimiento de las
siguientes etapas:

 Analizar el juego de actores con el fin de plantear las preguntas clave


para el futuro de la Institución. Para el cumplimiento de esta etapa son
fundamentales los resultados del diagnóstico analítico y la matriz
producto del tratamiento de las variables.
 Reducir la incertidumbre que pesa sobre las cuestiones clave de futuro.
Se utilizan eventualmente los métodos de encuesta a expertos, para
poner en evidencia las tendencias de peso, los riesgos de ruptura y
finalmente descubrir los escenarios de entorno más probables.
 Definición de fines (objetivos y metas) asociados a cada uno de los
escenarios. Los objetivos corresponden a la definición operativa de las
características de un escenario; esto implica que los objetivos deben
ser teóricamente alcanzables y que la aproximación de este alcance
tendrá que ser medible. Las metas son objetivos cuantificados en el
tiempo y en el espacio. Se pueden fijar metas a corto, mediano y largo
plazos.
 Una vez definidos los escenarios, serán socializados a todas las
unidades policiales y unidades investigativas.

El ejercicio prospectivo establecido para la Policía Boliviana, facilita Dirección en


su proceso decisional de largo plazo, gracias a que aclarara el camino, identifica
las rupturas:

 Exploraciones al sistema
 Contextos de futuros cercanos
 Reportes, presentaciones, seminarios
 Desarrollo de opciones estratégicas y planeamiento
estratégico
 Variables y tendencias
 Análisis de impacto cruzado

64
 Pensamiento sistémico
 Análisis
 Escenarios
 Métodos exploratorios y normativos
 Entradas
 Análisis
 Interpretación
 Prospección
 Salidas

Estrategias que pueden impactar de forma importante el servicio y las


capacidades de la organización, así como las estrategias que podrían ser
adoptadas, sus ventajas y sus inconvenientes respectivos. Lo anterior, significa la
presentación del mapa de riesgos y oportunidades para el futuro institucional.

En este sentido, la prospectiva criminal permitirá construir los escenarios


deseables y los probables en la lucha contra el crimen, así como identificar las
tendencias a modificar para producir la evolución requerida, logrando de esta
manera alcanzar el escenario propuesto, que permita a la Institución sortear los
factores cambiantes de futuro. Estos últimos, constituyen un desafío categórico
que condicionan la respuesta, limitaciones y capacidad exigida por la Institución
para atender las demandas de la sociedad en materia de seguridad y convivencia
ciudadana en el presente como en el largo plazo.

65
CAPÍTULO V
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

5.1. CONCLUSIONES

5.1.1. RESPECTO AL OBJETIVO GENERAL

“Demostrar cómo el proceso de criminogénesis al interior del penal de San


Pedro incide en la inseguridad ciudadana”

El presente trabajo de investigación demuestra fehacientemente cómo el proceso


de criminogénesis al interior del penal de San Pedro incide directamente en la
inseguridad ciudadana.

Haciendo un análisis prospectivo, si nos situamos en un escenario producto de las


condiciones actuales de aquí a 10 años, no podremos esperar sino el incremento
de la inseguridad ciudadana y un aumento exponencial de la delincuencia,
directamente proporcional al aumento de niños al interior del penal de San Pedro,
escenario de condiciones funestas para la percepción de seguridad de parte de la
ciudadanía.

Sin ese infundado temor al cambio existe la necesidad de trabajar en la


prospección criminal con el fin de generar escenarios futuros favorables para la
policía, dirigiendo los esfuerzos contra las causas que originan la criminogénesis
o asumirlas y generar estudios prospectivos toda vez que este fenómeno ira en
incremento.

De esta manera, los niños aprenden a encontrar su función, su identidad y su rol


dentro de las dinámicas del penal más peligroso de Latinoamérica (San Pedro),
pero sobre todo, aprenden a relacionar y fusionar el Ser con el Hacer, aunque ello
implique la constante transgresión de normas y leyes, aunque está claro, que para
ellos la ley no es otra que la ley de la supervivencia, donde todo es válido mientras
tengas una buena razón para hacerlo.

66
Si bien es parte del desarrollo que el niño se estructure a partir de sus
experiencias y actuaciones, debe haber para que ello pueda darse, un adulto que
se implique de forma directa y responsable sobre su educación, dando un
significado a su accionar, que permita al niño a través de su guía la internalización
de lo que es correcto o incorrecto, hecho que no sucede con los niños de la cárcel,
quienes si bien cuentan con modelos e instituciones externas a la prisión que
intentan asumir este rol y dar las significaciones correctas a sus actos, debido a la
dicotomía y contradicción de discursos y parámetros morales opuestos, los niños
optan por hacer aquello que les permite Ser, buscando al igual que sus madres,
lograr un reconocimiento de su entorno inmediato, donde como ya lo dijimos
anteriormente lo correcto es algo relativo.

De igual forma, se valora mucho el hecho de que otros niños puedan enseñarles a
sobrevivir y socializar en este mundo hostil que es la cárcel, por lo que muchos
niños ven como positivo el aprender a mentir, a robar, a “ganarse la vida” dentro
de las paredes de la cárcel, aunque no lo dicen abiertamente, al menos no los
niños más grandes, pero si refieren situaciones que dejan traslucir este tipo de
conductas como valiosas.

Que posteriormente se traducen hacia la sociedad cuando dejan los muros de San
Pedro incidiendo directamente sobre la seguridad ciudadana causando una
sensación de inseguridad constante sobre la población.

Este aspecto no fue tomado en cuenta con anterioridad por estudiosos del tema
de la criminalidad debido a la falta de registro de los menores que habitaban San
Pedro allá entre los años 2007-2009, esos niños que ahora están entre los 16 a 20
años de edad, hoy son los nuevos moradores del centro de rehabilitación de
Calahuma.

6.2. RECOMENDACIONES

Es necesario entender que las recomendaciones de carácter legal y político


escapan a nuestro control, sin embargo es bueno mencionarlas.

67
 Que el Estado retome el control interno y externo de las cárceles a
través de la aplicación estricta de la Ley de ejecución de penas.

 Retirar del penal de San Pedro a las madres e hijos que viven con
los internos a través de la implementación de albergues u otros
centros que los acojan.

 Buscar mecanismos que nos permitan realizar un seguimiento y


control, sin vulnerar derechos a los niños que viven en San Pedro,
una vez que dejan el Penal.

 Reforzar el estudio respecto a la propuesta, con la finalidad de


ampliar, difundir y generar teoría sobre la prospectiva criminal.

 Generar políticas que le permitan a la policía contar con una base de datos
de ADN de las personas que habitan las cárceles, para tener un patrón de
comparación en casos criminales.

68
BIBLIOGRAFÍA

BAENA Sergio Guillermina, MONTERO Olivares Sergio “Como elaborar una


Tesis”

BALBI, Raúl Eduardo. Presentación: “Bases conceptuales de la Prospectiva


Estratégica”. Buenos Aires: Escenarios y Estrategia. Red en América Latina. 2007.

CANON Bradford, La ruta de un investigador, Ed. Siglo Veinte, Buenos Aires, 1947

CAPITANT, Henri. La ley de 26 de marzo de 1891 sobre mitigación y agravación de


las condenas, Ed. Relnk Books, Francia.

FORCINITI, Luis y ELBAUM, Jorge. Planeación y Prospectiva. En: “La


Prospectiva, qué es y para qué sirve”. Secretaría para la Tecnología, la Ciencia y
la Innovación Productiva: Dirección Nacional de Planificación y Evaluación.
Diciembre 2001.

GOTTFREDSON, Michael Y HISCHI, Travis. Teoria general del delito, Ed.


Stanford University 1990.

HERNANDEZ Sampieri Roberto, FERNANDEZ Collado Carlos, BAPTISTA Lucio


Pilar “Metodología de la investigación”, Colombia 1999.

LEY Nº 2298, Ley de 20 de diciembre de 2001 Ley de Ejecución Penal y


Supervisión.

ESPINOSA, (2013). Criminogenesis: El Derecho con visión multidisciplinaria

EYSENCK, Hans, Las causas y curas de la criminalidad Ed Springer.

EYSENCK, Hans, EP (QR) Cuestionario de Personalidad Ed Springer.

GARCÍA Pablos de Molina, Antonio (2009) Tratado de Criminología 4ta edición


Tirant Lo Blanch: Valencia

GARRIDO, Vicente; STANGELAND, Per y REDONDO, Santiago Principios de


criminología Ed. Trovant Lo Blanch 2006.

69
LOPEZ. S (2012). Derecho Penal 1. 1era Edisión: México. Red Tercer Milenio S.C

LOPEZ BETANCOURT, Eduardo. Delitos en Particular. Tomo 1. México, Purrúa,


1997

MAXWELL, Joseph. (1937) El crimen y la sociedad, Librerìa Gutenberg de Josè


Ruiz, Madrid

MUÑOZ Francisco,(2008) Teoría General del delito, Segunda Edición. Ed Temis.


Bogotá Colombia

OSSORIO, Manuel, Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales Ed.


HELIASTA, 2002

SHELDON JR. Atlas del hombre, 1942.

SIERRA, Carlos; JIMENEZ Eva y BUELA Gualberto. Psicologia Forense: Manual


de técnicas y aplicaciones Ed. Belleto de Jueva

SIEGEL, Daniel. Viaje al centro de la mente Ed. PAIDOS 1997

SKINNER, Burrhs F. El comportamiento de los organismos: un análisis explicativo


Ed. Mc Graw Hill.

SORIA, Miguel Angel y SAIZ, Maria, Pisicologia Criminal Ed. Prentice-Hall 1998.

VARGAS Flores Arturo, “Guia Perfil de tesis”

YOCHELSON, Samuel y SAMENOW, Stanton. Personalidad Criminal: El


proceso de cambio Ed. Aronson Publisher 1997

70
ANEXOS

71
ÍNDICE GENERAL

INTRODUCCIÓN .............................................................................................................................. 1
CAPÍTULO I....................................................................................................................................... 5
1.1. ANTECEDENTES ................................................................................................................ 5
1.2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA ............................................................................... 6
1.3. JUSTIFICACIÓN................................................................................................................... 7
1.3.1. INSTITUCIONAL .......................................................................................................... 7
1.3.2. SOCIAL .......................................................................................................................... 8
1.3.3. LEGAL ............................................................................................................................ 8
1.3.4. TÉCNICA ....................................................................................................................... 9
1.4. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN ............................................................................. 9
1.4.1. OBJETIVO GENERAL ................................................................................................. 9
1.4.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS ...................................................................................... 9
1.5. DELIMITACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN ..................................................................... 10
1.5.1. DELIMITACIÓN TEMÁTICA ..................................................................................... 10
1.5.2. DELIMITACIÓN ESPACIAL ...................................................................................... 10
1.5.3. DELIMITACIÓN TEMPORAL ................................................................................... 10
CAPÍTULO II ................................................................................................................................... 11
2.1. MARCO TEORICO ............................................................................................................. 11
2.1.4. LA CONDUCTA DELICTIVA ....................................................................................................... 16
2.1.7. CAUSAS DE LA INSEGURIDAD CIUDADANA ............................................................................. 34
2.1.8 EL INDIVIDUO DELINCUENTE.................................................................................................... 36
2.1.9. FUENTES DEL COMPORTAMIENTO DE CIUDADANOS QUE COMETEN HECHOS PUNIBLES .... 37
2.2. MARCO CONCEPTUAL.................................................................................................... 38
2.3. MARCO JURÍDICO ............................................................................................................ 41
CAPÍTULO III .................................................................................................................................. 44
3.1. ENFOQUE DE LA INVESTIGACIÓN .......................................................................................... 44
3.2. TIPO DE INVESTIGACIÓN ....................................................................................................... 44
3.3. MÉTODOS .............................................................................................................................. 44
3.4. DISEÑO DE ESTUDIO .............................................................................................................. 45
3.5. INSTRUMENTOS Y TÉCNICAS DE INFORMACIÓN .................................................................. 45

72
3.5.1. INVESTIGACIÓN DOCUMENTAL.............................................................................................. 45
3.5.2. OBSERVACIÓN ......................................................................................................................... 45
3.5.3. CUESTIONARIO .................................................................................................................. 46
3.5.4 ENTREVISTA ....................................................................................................................... 46
3.6. FUENTES DE INFORMACIÓN .................................................................................................. 46
3.7. POBLACIÓN Y MUESTRA........................................................................................................ 47
3.8. PROCEDIMIENTOS ................................................................................................................. 47
CAPÍTULO IV .................................................................................................................................. 48
4.1. DIAGNÓSTICO ................................................................................................................... 48
4.2. ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS OBTENIDOS DE LOS INSTRUMENTOS DE INVESTIGACIÓN .. 49
4.2.1. ENCUESTAS .................................................................................................................... 50
4.2.2. ENTREVISTAS ................................................................................................................. 50
4.3. DESCRIPCIÓN DE LA PROPUESTA .......................................................................................... 61
4.4. DESARROLLO DE LA PROPUESTA ........................................................................................... 61
CAPÍTULO V ................................................................................................................................... 66
5.1. CONCLUSIONES ............................................................................................................... 66
5.1.1. RESPECTO AL OBJETIVO GENERAL .......................................................................................... 66
“Demostrar cómo el proceso de criminogénesis al interior del penal de San Pedro incide en la
inseguridad ciudadana” .................................................................................................................... 66
6.2. RECOMENDACIONES...................................................................................................... 67
BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................................................... 69
ANEXOS .......................................................................................................................................... 71

73

También podría gustarte