Está en la página 1de 3

IMPORTANCIA DE LOS INVERSORES

La necesidad de utilizar energía eléctrica en corriente alterna es indispensable


en cualquier lugar y a todo momento. En espacios donde no llega la red
pública, se hace necesario utilizar sistemas de energía alternativa, que
consisten en recoger y almacenar energía, en recipientes diseñados para este
fin, lo que comúnmente conocemos como baterías. El problema de estas, es
que solo entregan corriente directa (DC) y la mayoría de electrodomésticos
trabajan con corriente alterna (AC). Es en este momento que el inversor toma
importancia, para convertir esa corriente continua en corriente alterna.
Nikola Tesla científico e inventor serbio, nacido el 10 de julio de 1856,
en Smilyan, que hoy en día se conoce como Croacia, fue un gran físico,
ingeniero mecánico, ingeniero eléctrico, haciendo grandes aportes a la
ingeniería eléctrica y la ingeniería de radio.
Tesla dedico su vida al estudio del comportamiento de la energía eléctrica, sus
propiedades, el magnetismo, desarrollando las bases para la generación de
corriente alterna.
Todo indica que el concepto del inversor de voltaje fue una de las tantas
creaciones de
Tesla. No siempre un descubrimiento o un suceso, cuenta con todas las
fuentes y pruebas para indicar que tal suceso en concreto ocurrió. Incluso,
muchos descubrimientos, se los apropian ciertos personajes, que por difundirlo
en público o patentarlo primero, relegan al verdadero genio. Tesla quien
además de genio, fue una persona que trato de ayudar a la humanidad, no
busco gloria ni dinero. Característica que no cabe en un mundo ignorante,
seducido y manipulado por los monopolios, que vieron la forma de controlar y
vender la energía. Opacando e invisibilizando a Tesla, quien dio su vida por
dar energía gratis a la humanidad, conocido en su lema “energía gratis para
todos”
No hay que ser un genio ni un gran historiador, para entender, por la serie de
inventos de Tesla, sus deducciones y legado, que el fue el verdadero creador
del inversor de
Voltaje.
LA IMPORTANCIA DE LOS INVERSORES SOLARES
Anteriormente hemos explicado la manera en que funcionan los sistemas
fotovoltaicos, en esta ocasión toca el turno de uno de los componentes
fundamentales de estos sistemas, sin el cual el proceso de conversión de
energía solar en electricidad se vería trunco: los inversores solares.
Los sistemas fotovoltaicos son capaces de generar electricidad a partir de la
radiación solar, esto a través de la manera en que están configuradas las
celdas solares que los conforman. Las celdas solares fotovoltaicas se fabrican
de silicio cristalino o de arsenurio de galio y presentan dos capas, cada una de
ellas con un dopaje distinto, es decir, una positiva y la otra negativa, lo que crea
un campo eléctrico permanente. El dopaje de las celdas solares las convierte
en semiconductoras que al momento de captar la radiación del sol inician una
cadena de flujo de electrones, responsable de la creación de la diferencia de
potencial. Este flujo de electrones entre dos puntos con diferente dopaje genera
corriente eléctrica continua, que se caracteriza porque las cargas eléctricas
siguen siempre la misma dirección cuando circulan.
Es bien sabido que la mayoría de los aparatos eléctricos necesitan energía
alterna y por ello, para que un sistema fotovoltaico sea funcional necesita estar
equipado con un elemento que se encargue de transformar la corriente
eléctrica continua que producen las celdas solares en corriente alterna. Son los
inversores solares los que cumplen tan importante papel y éstos, dependiendo
de la potencia del sistema eléctrico, pueden llevar la corriente eléctrica
directamente a la red de baja tensión, o bien, conectarse con un transformador
que posteriormente inyecte la corriente a la red eléctrica de tensión media.
Un inversor solar se compone de un transistor que interrumpe la corriente
continua, de onda rectangular, para suavizarla y transformarla en una onda
senoidal, propia de la corriente eléctrica alterna. El transistor que interrumpe el
flujo de corriente se controla mediante un oscilador de onda en los inversores
más simples pero existen otros tipos de inversores que se clasifican según la
configuración del sistema, su número de fases y número de etapas. De esta
manera encontramos inversores monofásicos, utilizados por lo regular para
suministrar electricidad a motores de tamaño pequeño, para iluminación y para
sistemas de calefacción; la corriente alterna que producen y distribuyen es de
una fase y tienen un voltaje de entre 230 y 115 voltios. También existen
inversores trifásicos, mayormente utilizados en plantas de energía y en
diferentes tipos de industrias; producen y distribuyen energía conformada por
tres corrientes monofásicas constantes.
En este punto, la razón por la que los inversores solares son fundamentales en
los sistemas fotovoltaicos es obvia: la corriente alterna es la que se utiliza para
el consumo en hogares e industrias de todo tipo, ya sea en sistemas
monofásicos o trifásicos, dependiendo del voltaje requerido. El motivo por el
que la corriente eléctrica alterna es la empleada para el suministro eléctrico
tiene que ver con los costos de los procesos mediante los que se transporta la
energía: es mucho más económico transportar corriente alterna que corriente
continua. Debido a que lo más común es que los sistemas fotovoltaicos se
conecten a la red eléctrica y a que los aparatos eléctricos están diseñados para
funcionar con corriente alterna, es necesario utilizar inversores para garantizar
el buen funcionamiento de los sistemas, incluso de aquellos tipo isla.
La elección del inversor solar adecuado puede garantizar el buen
funcionamiento de un sistema fotovoltaico pues disminuye los riesgos de fallas
y defectos en el sistema que representen el corte de energía y pongan en
riesgo a los usuarios de las instalaciones o lleguen a dañar el equipo eléctrico.
Para elegir el inversor solar se deben considerar las características de la planta
ya que ello determinará si se necesita un inversor monofásico o trifásico y su
potencia de salida.
Ahora que hemos tocado el punto de las fallas y defectos en los sistemas
fotovoltaicos profundizaremos un poco más en el tema. Al igual que lo que
ocurre en las redes eléctricas abastecidas con energía de las compañías de
luz, la falla más común en un sistema fotovoltaico son los cortocircuitos. Las
sobrecargas, variaciones de corriente y sobretensiones también se pueden
llegar a presentar, por ello, además de un inversor solar, es necesario equipar
el sistema con elementos de protección, como fusibles, interruptores
automáticos y varistores. Los fusibles e interruptores automáticos, por su lado,
pueden contribuir a disminuir los riesgos de las variaciones de corriente y
sobrecargas, mientras que los varistores protegen al sistema de
sobretensiones.
A pesar de que las fallas más comunes, como ya mencionamos, se pueden
prevenir con ciertos elementos de protección, es importante mencionar que en
muchas ocasiones estas fallas se deben a elementos ajenos a la red, como
pueden ser descargas eléctricas generadas por rayos, la presencia de
animales y vegetación y los cambios atmosféricos, así como una mala
operación y errores en la instalación del sistema. Por esta razón es necesario
que la instalación del sistema se deje a cargo de un especialista, quien podrá
tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad y evitar fallas en el
sistema.
En Ingeniería Energética Sustentable nos especializamos en la
comercialización de los componentes necesarios para instalar sistemas
fotovoltaicos. Si deseas recibir información detallada acerca de los productos
que ponemos a tu alcance ¡contáctanos!, con gusto te atenderemos y te
brindaremos asesoría especializada en la elección de los sistemas que se
adapten mejor a tus necesidades.

También podría gustarte