1) EL FALLECIMIENTO
Este estado dura desde unas pocas horas (rara vez menos), días,
semanas, meses y a veces hasta varios años. Todo esto de
acuerdo a la entidad, a su nivel mental al momento de morir, al
carácter de su muerte, etc. Esa remembranza [recuerdo consciente
de la vida que tuvo en la Tierra] regresará lenta y gradualmente
hacia el final del estado de gestación … al momento de su entrada
en Devachan [el mundo divino]. »
(Carta Mahatma 24B, p.186-187)
¡Al contrario!
En cambio, una persona muy mala que tiene pocos meritos tendrá
un Devachan corto, ya que no hubo mucho de su ser que llevar al
Cielo. Y una persona muy materialista estará la mayor parte del
tiempo inconsciente en Devachan, ya que no desarrolló nada de
espiritualidad.
Aún así la Naturaleza es muy generosa al recompensarnos por
nuestros esfuerzos y sacrificos al descender en la materia, ya que si
nuestro promedio de vida en el plano físico es de 70 años (a nivel
mundial), los Maestros precisan que nuestra estancia en Devachan
es en promedio de 1’500 años. (¡Veinte veces más!)
EXCEPCIONES A LA REGLA
Pero como toda regla, tiene sus excepciones, hay casos en donde
el fallecido prematuro permanece en un estado de consciencia o de
semi-consciencia durante ese plazo. Son lo que los espiritistas
franceses llaman “les Esprits Souffrants” (los espíritus sufrientes),
las almas en pena que permanecen en la Tierra.
Desafortunadamente los Maestros no detallaron todas las
excepciones. De las que mencionaron está el caso de las personas
muy malvadas, de “los accidentados que mueren llenos de alguna
pasión terrestre absorbente” y de algunos suicidas.
[Es por eso que se debe evitar la pena de muerte (que es una
especie de suicidio impuesto) porque luego el criminal
desencarnado hace mucho daño, incitando a gente con poca moral
a que cometa los mismos crímenes. Lo detallo en este link]
Si sólo supieran esto los médiums y los espiritistas, que con cada
nuevo “espíritu” al que le dan la bienvenida con arrobamiento, ellos
están tentando a este último a que caiga en una Upādāna [deseo de
recuperar su vida física] que será productora de una serie de males
inenarrables para el nuevo Ego que nacerá bajo su nefasta sombra,
y que con cada sesión (especialmente las de materialización) ellos
multiplican las causas de miseria.
Otros peligros
[Pero como vimos eso sólo se aplica para aquellos que pudieron
todavía guardar algo de recuerdos que les permitió ir al Devachan,
para los otros no hay alternativa. Y también hay un porcentaje que
es arrastrado en el remolino del espiritismo, y la mayoría de los
médiums son buenas personas, pero no saben el daño que
ocasionan a sus invitados astrales, haciendo que muchos de ellos
se transformen en “fantasmas desalmados” y los más malos en
“humanos desencarnados endemoniados” (que son muchos de los
demonios de la tradición popular: Pisāchas, Íncubos, Súcubos, etc.)]
Hay que tratar de cumplir con todo deber que tengamos en la Tierra
y esforzarnos por evolucionar. El enseñar suicidio es un pecado,
porque incita a algunos a cometerlo. El prohibirlo sin razón es inútil,
ya que nuestras mentes deben de tener razones para hacer algo o
no. Y si interpretamossimplistamente y de manera literal la Biblia,
entonces encontramos allí dicho que el único lugar del suicida es el
infierno. Lo que satisface a muy pocos en esta época de
investigación critica y de análisis. Pero denle a los seres humanos
la llave de sus propias naturalezas, muéstrenles cómo hay leyes
que gobiernan tanto aquí como en el Más allá, y su buen sentido
hará el resto. »
(The Writings de William Judge, Vol. III, p221-224, extractos)
¡Castigo!
En el desarrollo esotérico, hay una regla que dice que todo tiene
que ser puesto a prueba y la Sociedad Teosófica no podía ser la
excepción. Desafortunadamente sus dirigentes en Adyar fracasaron
cuando la prueba surgió, y los Maestros no tuvieron más remedio
que separarse de ella, lo que permitió que la enseñanza original
fuera alterada. (ver la vida después de la muerte según Leadbeater
y Besant)
CONCLUSIÓN
Es a ti de decidir:
- Si te quieres quedar atrapado en el astral como un fantasma errante
durante décadas y décadas, sufriendo más intensamente ese dolor
hasta que te haya hecho perder todo recuerdo de la persona que
fuiste.
o
- Si prefieres paso a paso irte liberando de ese tormento y así
progresivamente ir recuperando el control de tu vida y ya no tener
que lidiar más con ese karma en la siguiente reencarnación.
- “¿Por qué no? Total, me caerá bien tener una buena emoción
antes de partir. Hace tanto que no he tenido ninguna.”
OBSERVACIÓN