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Metzler fue el primero en investigar formalmente las consecuencias de los esfuerzos de los
empresarios para mantener sus niveles de existencias, a través de variaciones apropiadas en
la producción. Aquí vamos a exponer las características básicas de los modelos que
construyó con esta finalidad para después pasar a examinar uno de sus modelos de segundo
orden.
El producto total del periodo es la suma de los bienes de consumo y de inversión
producidos, siendo el volumen de estos últimos una constante exógena. El volumen total de
los bienes de consumo se compone de dos partes:
(1) La producción que normalmente debe venderse, de acuerdo con las expectativas de
ventas de los productores.
(2) La producción que se destina a mantener las existencias a su nivel deseado.
Este segundo componente puede, desde luego, ser negativo, lo cual vendría a significar que
los vendedores quieren producir menos de lo que esperan vender, cubriendo la diferencia
mediante la reducción deseada de existencias.
Desde luego, estas expectativas pueden no ser exactas, es decir, las ventas reales pueden
ser diferentes de las ventas esperadas, suponiendo esta diferencia una variación no deseada
de existencias. Obsérvese que las ventas reales coinciden con la demanda de consumo del
periodo que no debe ser confundida con la producción de bienes de consumo, ya que en el
modelo de Metzler la producción total (tal como arriba se define) y la demanda de bienes
de consumo, pueden ser diferentes.
A partir de estas características generales se puede obtener un gran número de modelos
distintos según los supuestos concretos que se formulen en torno a la formación de
expectativas y a cómo se determina el nivel deseado de existencias.
Vamos aquí a suponer que las expectativas son del tipo “ingenuo”, es decir, que las ventas
corrientes esperadas Ut son iguales a las ventas realizadas en el periodo precedente; en ese
caso
Ut = Ct - 1 (1.1)
donde Ut es por tanto el componente que arriba llamamos (1) y Ct-1 la demanda de consumo del
periodo anterior, aunque no se presume la existencia de ningún tipo de desfase en la función de
consumo, de modo que
Ct = bYt 0<b<1 (1.2)
y por lo tanto
Ut = bYt – 1 (1.3)
Para especificar el componente (2), suponemos que los productores desean mantener una
cierta relación constante entre sus existencias y sus ventas: llamemos a esta relación k (que
será el “acelerador de las existencias”). Puesto que las ventas reales sólo serán conocidas
Es decir, que el equilibrio estacionario viene dado como siempre por la aplicación del
multiplicador al gasto autónomo constante.
La ecuación homogénea correspondiente tiene por ecuación característica
λ2 – (2+k)bλ + (1+k)b = 0 (1.10)
Aplicando ahora las condiciones de estabilidad tenemos que, puesto la propensión al
consumo es menor que la unidad, la condición esencial es que
1
𝑏 < 1+𝑘 (1.11)
se cumple para cualquier k > 0, nos encontramos con los siguientes tipos de movimiento
(referidos a la situación de equilibrio estacionario):
1
0<𝑏< , oscilante y convergente;
1+𝑘
1
𝑏= , oscilante y de amplitud constante;
1+𝑘
1 4(1+𝑘)
<𝑏< , oscilante y divergente;
1+𝑘 (2+𝑘)2
4(1+𝑘)
𝑏≥ , monótono y divergente.
(2+𝑘)2
Ejemplo:
1. En el periodo inicial a la renta se encuentra en equilibrio en el valor 2.000; la
producción (y las ventas) de bienes de consumo es de 1.000; las existencias se
encuentran al nivel deseado y la inversión autónoma es de 1.000. En el periodo 1 la
inversión autónoma pasa a ser de 1.100 y se mantiene en este nivel en los periodos
sucesivos. Dado que la propensión al consumo es de 0,5 y que la relación deseada
existencias/ ventas es de 0,2, calcúlense los valores de Yt para un cierto número de
periodos, y averígüese matemáticamente el tipo de movimiento que presenta Yt.
Solución:
Los cálculos iterativos se presentan en el cuadro. Los encabezamientos de las columnas no
requieren ninguna aclaración. Los valores de las columnas señaladas con un asterisco se
suman para formar Yt; el resto de las columnas se presentan para que se puedan seguir los
cálculos.
Veamos ahora qué pasa con el movimiento; evidentemente es oscilante y atenuado en torno
al valor de equilibrio Yt = [1/ (1 – 0,5)] X 1.100 = 2.200. A modo de comprobación puede
verse con facilidad que las raíces de la ecuación característica
λ2 - 1,1λ + 0,6 = 0
Son complejas conjugadas, y su módulo, inferior a la unidad, (r = √0,6), lo cual nos
confirma la naturaleza del movimiento que ya habíamos afirmado.
Conclusión:
No puede existir un movimiento monótono estable; la estabilidad solo puede adoptar la
forma, de oscilaciones atenuadas. Obsérvese también que cuanto menos sea la relación que
los fabricantes desean mantener entre existencias y ventas, más probable es que tenga un
lugar movimiento estable.