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Estos tres dispositivos eléctricos se encuentran en todos los ámbitos de la vida cotidiana moderna. En el hogar,
los motores eléctricos hacen funcionar a los refrigeradores, congeladores, aspiradoras, batidoras, equipos de
aire acondicionado, ventiladores y muchos otros aparatos similares. En los talleres los motores suministran la
fuerza motriz para casi todas las herramientas. En consecuencia, los generadores son necesarios para suministrar
la energía que utilizan todos estos motores.
Los campos magnéticos son el mecanismo fundamental para convertir la energía de una forma a otra en motores,
generadores y transformadores. Existen cuatro principios básicos que describen como se utilizan los campos
magnéticos en estos aparatos:
La ley básica que gobierna la producción de un campo magnético por medio de una corriente es la Ley de
Ampere:
∮ 𝐻 ∙ 𝑑𝑙 = 𝐼𝑛𝑒𝑡𝑎
Donde:
𝐻 es la intensidad del campo magnético en una trayectoria cerrada.
𝐼𝑛𝑒𝑡𝑎 es la corriente neta a través de la trayectoria cerrada (A).
𝑑𝑙 es el elemento diferencial a lo largo de la trayectoria de integración.
En la Fig. 1.1 se muestra un núcleo rectangular con un devanado de 𝑁 vueltas de alambre enrollado sobre una
de sus columnas. Si el núcleo es de hierro o de ciertos materiales similares (materiales ferromagnéticos) la
mayor parte del campo magnético producido por la corriente permanecerá dentro del núcleo, de modo que el
camino de integración es la longitud media del núcleo. La corriente que pasa por el camino de integración 𝐼𝑛𝑒𝑡𝑎
es igual a 𝑁 veces la corriente 𝑖 debido a que la bobina de alambre corta dicho camino 𝑁 veces.
𝑁𝑖
|𝐻|𝑙𝑛 = 𝑁𝑖 → |𝐻| =
𝑙𝑛
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Donde:
|𝐻| es la magnitud de la intensidad del campo magnético (A·espira/m).
𝑙𝑛 es la longitud media del núcleo (m).
𝑖 es la corriente a través del devanado (A).
𝑁 es el numero de vueltas del devanado (espira).
La relación entre la intensidad del campo magnético 𝐻 y la densidad del flujo magnético resultante 𝐵 producida
dentro del material está dada por:
𝐵 = 𝜇𝐻
Donde:
𝐵 es la densidad de flujo magnético (T).
𝜇 es la permeabilidad magnética del material (H/m).
La permeabilidad de cualquier material comparada con la del espacio libre se denomina permeabilidad relativa.
La permeabilidad relativa es una medida útil para comparar la capacidad de magnetización de los materiales y
está dada por:
𝜇
𝜇𝑟 =
𝜇0
Donde:
𝜇0 es la permeabilidad del espacio libre (vacío) y equivale a 4𝜋 × 10−7 H/m.
En un núcleo como el que se muestra en la Fig. 1.1, la magnitud de la densidad de flujo magnético está dada
por:
𝜇𝑁𝑖
|𝐵| = 𝜇|𝐻| =
𝑙𝑛
Ahora, el flujo magnético total en cierta área esta dado por 𝜙 = ∫𝐴 𝐵 ⋅ 𝑑𝐴. Si el vector de densidad de flujo
magnético es perpendicular a un plano de área A y si la densidad de flujo magnético es constante en toda el
área, la ecuación se reduce a:
𝜇𝑁𝑖𝐴
𝜙 = |𝐵|𝐴 =
𝑙𝑛
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Donde:
𝜙 es el flujo magnético (Wb).
𝐴 es el área de la sección transversal del núcleo (m2).
Es posible definir un circuito magnético cuyo comportamiento esta determinado por ecuaciones análogas a
aquellas establecidas para un circuito eléctrico. Con frecuencia, el modelo de circuito del comportamiento
magnético se utiliza en el diseño de máquinas y transformadores eléctricos para simplificar el proceso de diseño,
que de otro modo sería muy complejo.
En un circuito eléctrico sencillo como el de la Fig. 1.2, la fuente de voltaje 𝑉 genera una corriente 𝐼 a lo largo
de la resistencia 𝑅. La relación entre estas cantidades está dada por la Ley de Ohm:
𝑉 = 𝐼𝑅
En el circuito eléctrico, el voltaje o fuerza electromotriz (FEM) genera el flujo de corriente. Por analogía, la
cantidad correspondiente en el circuito magnético se denomina fuerza magnetomotriz (FMM). La fuerza
magnetomotriz de un circuito magnético es igual al flujo efectivo de corriente aplicado al núcleo, ó:
ℱ = 𝑁𝑖
Donde:
ℱ es la fuerza magnetomotriz (A·espira).
En el circuito magnético, al igual que la fuente de voltaje en el circuito eléctrico, la fuerza magnetomotriz tiene
una polaridad asociada a ella. La terminal positiva de la fuente de FMM es la terminal de donde sale el flujo
magnético. La polaridad de la FMM de una bobina de alambre puede determinarse mediante la utilización de
la regla de la mano derecha como se observa en la Fig. 1.3. En un circuito eléctrico, el voltaje aplicado ocasiona
un flujo de corriente I. En forma similar, en un circuito magnético, la fuerza magnetomotriz aplicada ocasiona
un flujo magnético 𝜙. En forma semejante a un circuito eléctrico, la relación entre la fuerza magnetomotriz y
el flujo magnético es:
ℱ = 𝜙ℛ
Donde:
ℛ es la reluctancia del circuito magnético (A·espira/Wb).
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Fig. 1.3. Regla de la mano derecha para determinar la polaridad de una fuente de FMM.
Utilizando las ecuaciones desarrolladas con anterioridad, se tiene que la reluctancia está dada por:
𝑙𝑛 𝑙𝑛
ℛ= =
𝜇𝐴 𝜇𝑟 𝜇0 𝐴
En un circuito magnético las reluctancias obedecen las mismas reglas que las resistencias en un circuito
eléctrico. La reluctancia equivalente de un numero de reluctancias en serie es la suma de las reluctancias
individuales:
ℛ𝑒𝑞 = ℛ1 + ℛ2 + ⋯ + ℛ𝑛 = ∑ ℛ𝑖
𝑖=1
1 1
ℛ𝑒𝑞 = =
1 1 1 1
+ +⋯+ ∑𝑛𝑖=1
ℛ1 ℛ2 ℛ𝑛 ℛ𝑖
Los cálculos de flujo magnético en el núcleo, que se obtienen utilizando los conceptos del circuito magnético,
siempre son aproximaciones y en el mejor de los casos su aproximación esta a ±5% del valor real. Aunque
existen muchas limitaciones inherentes al concepto de circuito magnético, este es aún la herramienta más útil
disponible para el calculo de los flujos magnéticos en el diseño practico de las maquinas.
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EJEMPLO 1.1
En la Fig. E1.1 se observa un núcleo ferromagnético. Tres lados de este núcleo tienen un ancho uniforme,
mientras que el cuarto es un poco mas delgado. La profundidad del núcleo es de 10 cm, mientras que las demás
dimensiones se muestran en la Fig. E1.1. Hay una bobina de 200 vueltas enrollada sobre el lado izquierdo del
núcleo. Si la permeabilidad relativa 𝜇𝑟 es de 2500, ¿Qué cantidad de flujo magnético producirá una corriente
de 1 A en la bobina?
Debido a que tres lados del núcleo tienen el mismo ancho y el cuarto es más delgado, tenemos dos áreas
diferentes:
10 10
𝐴1 = ( )( ) = 0.01 m2
100 100
15 10
𝐴2 = ( )( ) = 0.015 m2
100 100
15 15
+ 30 +
𝑙1 = 2 2 = 0.45 m
100
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10 15 15 15 15 10
+ 30 + + + 30 + + + 30 +
𝑙2 = 2 2 2 2 2 2 = 1.3 m
100
𝑙1 0.45
ℛ1 = = = 14323.94 A ⋅ espira/Wb
𝜇𝑟 𝜇0 𝐴1 (2500)(4𝜋 × 10−7 )(0.01)
𝑙2 1.3
ℛ2 = = = 27586.86 A ⋅ espira/Wb
𝜇𝑟 𝜇0 𝐴2 (2500)(4𝜋 × 10−7 )(0.015)
ℱ 200
𝜙= = = 0.0048 Wb
ℛ 41910.8
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1.1.3. Comportamiento magnético de los materiales ferromagnéticos
Al comienzo, un pequeño incremento de la fuerza magnetomotriz produce un gran aumento del flujo resultante.
Después de cierto punto, aunque se incremente mucho la fuerza magnetomotriz, los aumentos de flujo serán
cada vez más pequeños; para finalmente no producir cambios en el flujo. La región de la Fig. 1.5 en la cual la
curva se aplana se llama región de saturación, y se dice que el núcleo está saturado. La región en la cual el
núcleo cambia con rapidez se llama región no saturada de la curva, y el núcleo no está saturado. La región de
transición entre las regiones no saturada y saturada se denomina rodilla de la curva. Se puede observar que el
flujo producido en el núcleo varía linealmente con la fuerza magnetomotriz aplicada en la región no saturada.
En vez de aplicar una corriente directa a los devanados dispuestos sobre el núcleo, se aplica una corriente alterna
como se observa en la Fig. 1.6a. Suponiendo que el flujo inicial en el núcleo es cero; al incrementar la corriente
por primera vez, el flujo en el núcleo seguirá la trayectoria ab, dibujada en la Fig. 1.6b; sin embargo, cuando la
corriente decrece, el flujo representado en la curva sigue una trayectoria diferente de la seguida cuando la
corriente iba en aumento. Esta dependencia de la historia previa del flujo y el seguir una trayectoria diferente
en la curva se denomina histéresis.
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Fig. 1.6. Curva o lazo de histéresis trazado por el flujo en un núcleo cuando se le aplica la corriente 𝑖(𝑡).
Los átomos del hierro y los de los materiales similares (cobalto, níquel y algunas de sus aleaciones) tienden a
tener sus campos magnéticos fuertemente alineados entre sí. Dentro del metal hay unas pequeñas regiones
llamadas dominios, en las que todos los átomos se alinean con sus campos magnéticos apuntando en una misma
dirección, de modo que el dominio actúa dentro del material como un pequeño imán permanente. Una pieza de
hierro no manifiesta polaridad magnética definida porque los dominios se encuentran dispuestos al azar en la
estructura del material. La Fig. 1.7 representa un ejemplo de la estructura de los dominios en un trozo de hierro.
Para cambiar la posición de los dominios se requiere de energía, esto origina cierto tipo de pérdidas de energía
en todas las máquinas y transformadores. Las pérdidas por histéresis en el núcleo del hierro corresponden a la
energía que se necesita para reorientar los dominios durante cada ciclo de corriente alterna aplicada al núcleo.
La Ley de Faraday es la base del funcionamiento del transformador. La Ley de Faraday establece que, si un
flujo magnético atraviesa una espira de alambre conductor, se inducirá en esta un voltaje directamente
proporcional a la tasa de cambio del flujo magnético con respecto al tiempo. Lo anterior se expresa mediante la
ecuación:
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𝑑𝜙
𝑒𝑖𝑛𝑑 =
𝑑𝑡
Donde:
𝑒𝑖𝑛𝑑 es el voltaje inducido en la espira (V).
𝜙 es el flujo magnético que atraviesa la espira (Wb).
Si una bobina tiene 𝑁 vueltas y el mismo flujo magnético pasa a través de todas ellas, el voltaje inducido en
toda la bobina esta dado por:
𝑑𝜙
𝑒𝑖𝑛𝑑 = −𝑁
𝑑𝑡
Donde:
𝑁 es el numero de vueltas de alambre de la bobina (espira).
El signo menos en la ecuación es una expresión de la Ley de Lenz, la cual establece que la dirección del voltaje
inducido en la bobina es tal que si los extremos de esta estuvieran en corto circuito, se produciría en ella una
corriente que generaría un flujo magnético opuesto al flujo magnético inicial, tal y como se muestra en la Fig.
1.8. Puesto que el voltaje inducido se opone al cambio que lo produce u origina, se incluye un signo menos en
la ecuación.
Utilizar la ecuación de la Ley de Faraday presenta una gran dificultad en la práctica, puesto que establece que
hay exactamente la misma cantidad de flujo magnético en cada espira de la bobina. Desafortunadamente, esto
no es verdad debido al flujo magnético que se dispersa en los alrededores de la bobina. Si las espiras están
estrechamente ligadas, de modo que la mayor parte del flujo magnético que circula en una espira también circula
en las demás, la ecuación de la Ley de Faraday dará respuestas válidas. Pero si la dispersión es significativa o
si se requiere la máxima exactitud, se necesitará una expresión diferente que no suponga tal hecho. La magnitud
del voltaje en la i-ésima espira de la bobina esta siempre dada por:
𝑑𝜙𝑖
𝑒𝑖 =
𝑑𝑡
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𝑁 𝑁 𝑁
𝑑𝜙𝑖 𝑑 𝑑𝜆
𝑒𝑖𝑛𝑑 = ∑ 𝑒𝑖 = ∑ = ∑ 𝜙𝑖 =
𝑑𝑡 𝑑𝑡 𝑑𝑡
𝑖=1 𝑖=1 𝑖=1
Donde:
𝜆 es el flujo magnético concatenado de la bobina (Wb-espira).
La Ley de Faraday es la propiedad fundamental de los campos magnéticos que intervienen en la operación de
los transformadores. El efecto de la Ley de Lenz se emplea para predecir la polaridad de los voltajes inducidos
en los devanados del transformador. La Ley de Faraday también explica las perdidas debidas a las corrientes
parasitas. Un flujo magnético variable en el tiempo induce voltaje dentro de un núcleo ferromagnético, estos
voltajes causan flujos de corrientes que circulan en el núcleo y disipan energía en forma de calor puesto que
fluyen en un medio resistivo (el hierro del núcleo). Existen dos procedimientos posibles para reducir las perdidas
por corrientes parasitas en un transformador o en una maquina eléctrica:
1. Dividir el núcleo en muchas fajas o laminaciones disminuye su sección transversal y por lo tanto
aumenta su resistencia eléctrica. Lo anterior causa que el valor máximo de la corriente parasita se
reduzca y da como resultado menores perdidas. Los núcleos se construyen con muchas de estas
laminaciones en paralelo utilizando una resina aislante entre ellas. En la Fig. 1.9 se observan las
laminaciones de un núcleo ferromagnético.
2. Aumentar la resistividad del material del núcleo agregando algo de silicio al acero del núcleo. Si la
resistencia del núcleo es mayor, las corrientes parasitas serán menores para un flujo magnético dado.
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EJEMPLO 1.2
La Fig. E1.2 muestra una bobina enrollada alrededor de un núcleo de hierro. El flujo magnético en el núcleo
esta dado por la ecuación:
𝜙 = 0.05 sen(377𝑡) Wb
Si hay 100 espiras en el núcleo, ¿Cuánto voltaje se producirá en las terminales de la bobina? ¿Cuál será la
polaridad del voltaje durante el tiempo en el que el flujo magnético se incremente en la dirección que se muestra
en la Fig. E1.2? Suponer que todo el flujo magnético permanece dentro del núcleo.
𝑑𝜙 𝑑
𝑒𝑖𝑛𝑑 = 𝑁 = (100) [0.05 sen(377𝑡)] = 1885 cos(377𝑡) V
𝑑𝑡 𝑑𝑡
𝜋
𝑒𝑖𝑛𝑑 = 1885 sen (377𝑡 + ) = 1885 sen(377𝑡 + 90°) V
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1.3. Producción de fuerza inducida en un alambre
Un efecto importante que produce a su alrededor un campo magnético es que induce una fuerza sobre un
alambre conductor que porta corriente y se encuentra dentro del campo. El concepto básico involucrado se
muestra en la Fig. 1.10, que muestra un conductor dentro de un campo magnético uniforme de densidad de flujo
magnético 𝐵. El conductor mide 𝑙 metros y porta una corriente de 𝑖 amperes. La fuerza inducida sobre el
conductor está dada por:
𝐹 = 𝑖(𝑙 × 𝐵)
Donde:
𝐹 es la fuerza inducida en el conductor (N).
𝑖 es la magnitud de la corriente en el alambre (A).
𝑙 es la longitud del alambre (m), con la dirección de 𝑙 definida como la dirección del flujo de corriente.
𝐵 es el vector de densidad de flujo magnético (T).
La dirección de la fuerza está dada por la regla de la mano derecha: si el dedo índice de la mano derecha apunta
en la dirección del vector 𝑙 y el dedo medio apunta en la dirección del vector de densidad de flujo magnético 𝐵,
entonces el dedo pulgar apuntara en dirección de la fuerza resultante sobre el alambre. La magnitud de esta
fuerza está dada por la ecuación:
La inducción de una fuerza en un alambre conductor que porta corriente en presencia de un campo magnético
es la base de la acción motor. Casi todo tipo de motor se basa en este principio básico de las fuerzas y pares que
lo mueven.
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EJEMPLO 1.3
La Fig. E1.3 muestra un alambre que porta corriente en presencia de un campo magnético. La densidad de flujo
magnético del campo es de 0.25 T, dirigida hacia dentro de la página. Si el alambre tiene 1.0 m de longitud y
porta una corriente de 0.5 A en dirección de arriba hacia debajo de la página, ¿Cuál es la magnitud y dirección
de la fuerza inducida sobre el alambre?
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1.4. Voltaje inducido en un conductor que se mueve en un campo magnético
Una tercera forma importante de interacción entre un campo magnético y su alrededor. Si un alambre conductor
orientado de manera adecuada se desplaza a través de un campo magnético, se induce un voltaje en él. Esta idea
se ilustra en la Fig. 1.11. El voltaje inducido en el alambre esta dado por:
𝑒𝑖𝑛𝑑 = (v × 𝐵) ⋅ 𝑙
Donde:
𝑒𝑖𝑛𝑑 es el voltaje inducido en el alambre (V).
𝑣 es la velocidad del alambre (m/s).
𝐵 es la densidad de flujo magnético (T).
𝑙 es la longitud del conductor en el campo magnético (m).
El vector 𝑙 apunta hacia el extremo del alambre que forma el angulo mas pequeño con respecto al vector 𝑣 × 𝐵.
El voltaje en el alambre se inducirá de modo que su extremo positivo este en la dirección del vector 𝑣 × 𝐵. La
magnitud del voltaje inducido está dada por la ecuación:
La inducción de voltaje en un alambre conductor que se mueve dentro de un campo magnético es el fundamento
de la operación de todo tipo de generadores. Por esta razón, se le llama acción generador.
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EJEMPLO 1.4
La Fig. E1.4 muestra un conductor que se mueve en presencia de un campo magnético a una velocidad de 5.0
m/s hacia la derecha. La densidad de flujo magnético es de 0.5 T dirigida hacia la página, y el alambre tiene 1.0
m de longitud, el cual se orienta según se observa en la Fig. E1.4. ¿Cuáles son la magnitud y la polaridad del
voltaje inducido resultante?
La polaridad del voltaje inducido será positiva en la parte superior del alambre.
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