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INDICE DE CONTENIDO

TEMA PÁGINA

INTRODUCCION…………………………………… 3

DESARROLLO………………………………………. 4

CONCLUCION.……………………………………… 7

BIBLIOGRAFIA………………………………………8

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El tema que se tratara en la siguiente exposición es sobre las adicciones y el

consumo. Si bien esto siempre estuvo presente en todas las épocas, en el último

tiempo se encuentra exacerbado. En la clínica actual nos encontramos con

interrogantes y diferentes enfoques frente a esta temática. Creemos que es un tema

de fundamental interés y preocupación para el psicoanálisis que busca encontrar

formas de abordaje y orientación en la práctica.

La toxicomanía deja de pensarse como un síntoma aislado, como lo era en la

época de Freud, para posicionarse como un malestar generalizado propio de la

época. Podría llegar a pensarse como producto del discurso capitalista. Hay que

hacer referencia que ya no se trata solamente de sustancias, sino de modalidades

adictivas que van desde el juego, drogas, alcohol, compras compulsivas, objetos

tecnológicos, sexo, gimnasio y hasta podríamos agregar que la forma de

alimentarse también es adictiva en algunos casos. El fenómeno de las adicciones y

el consumo da cuenta de que ni la adicción es siempre a un químico, ni la ingesta

toxica implica necesariamente una adicción.

2
Para el psicoanálisis las adicciones no se explican por el objeto al que se fija la

satisfacción sino por la operación inconsciente que las determina. Hay cierta

particularidad en la constitución del sujeto adicto que permite que haya un

enganche con el objeto.

“Lo que falla en la constitución del adicto es precisamente la función

paterna, en tanto que no hay un corte en lo simbólico que separe al sujeto del

objeto o le haya permitido perderlo, renunciar a él, lo que le permite al sujeto

construir un Otro imaginario, sin falta, que responda a su demanda por poseer el

objeto. Al no haber corte o castración, no hay una emergencia del fantasma

propiamente dicho, más bien hay una pseudofantasía, un simulacro que no

contempla la castración y al objeto como perdido...A través del pseudofantasma el

sujeto esquiva la castración y se hace a un objeto necesario”1

La adicción es un estado de dependencia absoluta de un objeto, necesario para

la existencia del sujeto. El lugar del objeto dentro de la economía psíquica es

fundamental, ya que es el resorte mismo del deseo; el objeto señalado como

faltante impulsa en su búsqueda, por lo que la existencia misma se justifica por la

búsqueda continua de este objeto. El adicto construye un objeto que suple al objeto

perdido y en este sentido tapa la falta. Es un objeto que puede encontrar y

1
Palma, C. “La sociedad de los a-dictos”
Revista de psicoanálisis https://docplayer.es/51747957-La-sociedad-de-los-a-dictos.html#

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reencontrar cada vez que necesite tapar su falta de ser. Dicho objeto pasa a ocupar

un lugar en el deseo de otra cosa del sujeto.

El consumo es entonces una de las figuras de la subjetividad de la época, hay

predominio de ofertas de goce que taponan la división subjetiva, por la invasión de

productos del mercado.

A estos objetos, los quitapenas como los llamo Freud, se les debe placer

inmediato y una anhelada independencia del mundo exterior, del cual el sujeto

escapa, refugiándose en su propio mundo. Se trata de una satisfacción pulsional

que desborda al sujeto, se le impone y no admite postergación. Se podría decir que

funcionan a la manera de pseudofantasma, que promueve un goce autista, que se

reitera ineludiblemente. Luego de la caída del efecto del objeto de consumo, el

sujeto se ve enfrentado al horror de lo real, repitiendo así el encuentro fallido con el

objeto una y otra vez. Hacemos referencia a pseudofantasma, pasivo, ya que la

adicción es un acto compulsivo que pretende ir derecho al encuentro con el objeto

evitando toda ligadura, lo que falla es la soldadura entre el acto y la actividad

intermedia de la fantasma. La actividad del fantasma queda ligada a lo automático

con un mínimo de trabajo psíquico. Ante el fracaso de la fantasma es que el objeto

adictivo se ubica en su lugar proporcionando una satisfacción, no sustitutiva, sino

más bien paliativa, que se repetiría compulsivamente por su falta de ligadura.

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“El sujeto carece de los mecanismos de simbolización que puedan anudar el

goce pulsional con el significante, para producir un síntoma neurótico. Esta

dificultad abre camino a la cancelación toxica como via casi obligada para

interponer una barrera química a la angustia”2

El Otro representado por el mercado no da lugar para el sujeto fuera de la

relación alienante con el objeto, lo que empuja al sujeto a pasar al acto en un

intento desesperado por fundar este lugar en lo real.

La autora, Mabel Levato, da cuenta de este malestar haciendo referencia a las

maratones toxicas como eventos que reflejan la perdida de subjetividad y en donde

hay un desenganche del Otro , del Otro del lenguaje, del Otro social. Estos eventos

que nuclea a los sujetos nada tienen que ver con una causa social, es una operación

donde se prescinde del Otro. De esta manera el goce del adicto se vuelve

completamente auto erótico, desde que posee el objeto no necesita relacionarse con

ningún otro partenaire para obtener placer.

En consecuencia de lo expuesto hasta aquí podemos decir que el adicto goza

hasta más allá de los límites de su objeto de adicción, rechazando toda dimensión

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Lopez, H. “Las adicciones. Sus fundamentos clínicos” , Buenos Aires, Lazos, 2003, p. 151

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del otro partenaire y del Otro como instancia tercera reguladora que pueda

interrumpir su goce autista.

“La apuesta del psicoanálisis es por el deseo y la responsabilidad subjetiva.

Juega su apuesta por hacer existir el inconsciente, de inventarlo para el sujeto a

contracorriente de lo contemporáneo y del consumo que lo rechazan…llegar con

el decir al lugar donde impera el goce. La operación analítica fuerza el autismo

del goce cuando localiza ese nudo de goce y sentido y logra desanudarlo…”3

Es por ello que creemos que el tratamiento de este malestar no solo debe estar

orientado por el discurso médico, que solo boga por el signo corporal que debe ser

eliminado, y sus curas de abstinencia ,estas solo encontraran un rotundo fracaso

.Debe también instaurarse la pregunta que gire en torno al sufrimiento psíquico del

sujeto ,del por qué el sujeto que se encuentra en esa situación y cuáles fueron sus

desencadenantes. La dirección del tratamiento solo será posible a partir de un

trabajo interdisciplinario y sus diferentes enfoques.

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Levato, M. “Maratones tóxicas: la pulsión, el goce y el síntoma en las toxicomanías”.
Revista Borromeo Nº 1 www.revistaborromeo.kennedy.edu.ar

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BIBLIOGRAFIA

Levato, Mabel

- “Objetos de consumo”.

U. K. Aula Virtual .www.kennedy.edu.a

- “Maratones tóxicas: la pulsión, el goce y el síntoma en las toxicomanías”.

Revista Borromeo Nº 1 www.revistaborromeo.kennedy.edu.ar

Lopez , Hector

- “Las adicciones, sus fundamentos clínicos” Ediciones Lazos, Buenos Aires,

2003.

Palma, Cristian

- “La sociedad de los a-dictos”

Revista de psicoanálisis https://docplayer.es/51747957-La-sociedad-de-los-a-

dictos.html#

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