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PISAR LA LUNA

Escatología y política
José laguna

introducción .................................................................................................................... 3
1. la Escatología dE la política ............................................................................. 5
2. la política dE la Escatología ............................................................................. 9
3. cinco EnsEñanzas bíblico-políticas ................................................................. 11
4. lo quE la rEalidad da dE sí ................................................................................. 23
notas .................................................................................................................................... 31
cuEstionEs para la rEflExión ................................................................................... 32
Hoy, antes del alba, subí a las colinas,
miré los cielos apretados de luminarias y
le dije a mi espíritu: cuando conozcamos
todos estos mundos y el placer y la sabi-
duría de todas las cosas que contienen,
¿estaremos tranquilos y satisfechos?
Y mi espíritu dijo: No, ganaremos esas
alturas para seguir adelante.
Walt Whitman

José Laguna, teólogo y músico. Ha publicado en esta colección: ¿Y si Dios no fuera per-
fecto? Hacia una espiritualidad simpática (Cuaderno 102); ¿De la liberación a la inclusión?
(Cuaderno 127); Hacerse cargo, cargar y encargarse de la realidad (Cuaderno 172) y ¡Ay
de vosotros…! Distopías evangélicas (Cuaderno 181).

Edita Cristianisme i Justícia - Roger de Llúria, 13 - 08010 Barcelona


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Rubio Tugas - Septiembre de 2015

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INTRODUCCIÓN

La escatología es un saber que se ocupa de las cosas «del más allá».


La política, por su parte, se encarga de gestionar la cosa pública del
«más acá». Entre ambas, la religión se mueve en una frontera difusa
que intenta religar aquel más allá con este más acá. Política y escato-
logía se necesitan mutuamente. La primera, porque la organización del
presente sin el horizonte último de un proyecto de bien común dege-
nera en mera burocracia. La segunda, porque la invocación de un cielo
que no exija ninguna transformación histórica «así en la tierra» no es
más que espiritualismo evasivo.

detrás de la actual crisis financiera ¿quién lleva las riendas de un caballo


mundial se esconde una evidente crisis que a juicio de muchos parece correr
moral reflejada en los ingentes casos de desbocado?
corrupción política que afloran como un El grito de los movimientos alter-
cáncer por todos los rincones del plane- mundistas que resuena en calles y pla-
ta, pero también –y no menos impor- zas de todo el mundo: «otro mundo es
tante– una crisis escatológica. El de- posible», necesita esbozar los contornos
rrumbe posmoderno de los grandes políticos de su propuesta alternativa
relatos de sentido ha dejado una socie- si no quiere quedarse en la necesaria
dad desnortada sin horizonte hacia el –aunque insuficiente– expresión de una
que encaminar sus pasos. queja. cuando la indignación busca
nadie duda hoy de que nos encon- articularse políticamente necesita la
tramos inmersos en un cambio de época brújula de la escatología. El deseo utó-
y que la sociedad avanza a un ritmo ver- pico e indeterminado de «otro mundo
tiginoso, la pregunta es ¿hacia dónde?, posible» necesita la formulación eutó-
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pica (eu=bueno, topos=lugar) de «otro Juicio, infierno, gloria…
mundo mejor».
Hago un uso pretendidamente genérico
la posmodernidad ha puesto en del término escatología como discurso
cuestión las tres certezas ilustradas que (logos) sobre las cosas últimas (escha-
Kant logró sintetizar: la epistemológica ta) sin ignorar que la teología tradicio-
(¿qué puedo conocer?), la moral (¿qué nal lo utiliza para referirse al tratado co-
debo hacer?) y la escatológica (¿qué me nocido como De novissimis y que, entre
cabe esperar?). Hasta hace unas décadas otras cosas, se ocupa del estudio de «no-
conocíamos el funcionamiento del mun- vísimos» transmundanos como juicio,
do, sabíamos cómo comportarnos con purgatorio, infierno, cielo, gloria, etc.
nuestros semejantes y confiábamos en un saber rayano al esoterismo que en
un progreso que avanzaba hacia una sus excesos más extravagantes ha busca-
arcadia feliz. Evidencias que en este do determinar la temperatura del fuego
inicio de milenio han saltado hechas del infierno a partir de los datos aporta-
añicos. la ciencia actual prefiere hablar dos por la biblia o establecer cronoló-
de probabilidades más que de leyes, la gicamente si en el juicio final el incendio
ética diluye sus imperativos normativos del mundo precedería a la resurrección
universales en acuerdos pragmáticos de los muertos, o viceversa1. no son és-
coyunturales y la esperanza que viajaba tas las cuestiones escatológicas que pre-
en el barco de un progreso ascendente ocupan al cristiano comprometido en
parece encallar en un finisterre conver- causas sociales y militancias políticas.
tido en escombrera de gadgets tecnoló- lo que estos creyentes se preguntan es
gicos. si sus acciones políticas se vinculan al
una teología que quiera entrar en sueño de dios sobre la humanidad, si
diálogo fecundo con los tiempos que le «sostenibilidad», «igualdad» o «decre-
toca vivir debe estar dispuesta a transi- cimiento» son nuevas formas de nom-
tar por las arenas movedizas de este pre- brar los antiguos novísimos, o si el és-
sente frágil y fragmentado. tres son a chaton secular de «otro mundo posible»
mi juicio las principales aportaciones converge en el mismo horizonte que el
que la religión –en su tradición judeo- éschaton ¿religioso? del «reino de
cristiana– puede aportar a un mundo en dios».
crisis en busca de rumbo: la hermenéu- dividimos nuestra exposición en
tica de una lectura teologal de la reali- tres momentos: el primero lo dedicare-
dad desde la mirada de las víctimas de mos a mostrar el debilitamiento escato-
la historia, la compasión como impera- lógico de la política actual, en un se-
tivo ético y principio de relación huma- gundo momento nos acercaremos a la
na por encima de cualquier contrato so- escatología bíblica entresacando las en-
cial, y la escatología como promesa señanzas políticas contenidas en ella y,
divina de un mundo transformado en fa- para terminar, esbozaremos los dinamis-
vor de los que ahora lloran. a este últi- mos y requisitos de una praxis política
mo aspecto es al que prestaré especial que quiere ser constructora de futuro y
atención en el presente cuaderno. no mera gestora del presente.
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1. LA ESCATOLOGÍA DE LA POLÍTICA

El 12 de septiembre de 1962 el presidente John F. Kennedy lanzó un


desafío al pueblo americano: «Creo que esta nación debe comprome-
terse consigo misma a lograr la meta –antes de que termine esta déca-
da– de llevar un hombre a la Luna y retornarlo en forma segura a la
Tierra». Una idea descabellada a juicio de los científicos de la época que
no contaban con el desarrollo tecnológico necesario para afrontar ta-
maño despropósito. El 20 de julio de 1969, Neil Amstrong hacía historia
y se convertía en el primer hombre en pisar la superficie lunar. Entre
ambas fechas, siete años de asombrosos avances científicos e inver-
siones públicas para responder a dificultades nunca antes planteadas.

J. f. Kennedy tomó una decisión políti- votar a izquierdas o derechas porque


ca: marcó un horizonte y dinamizó los todas las opciones ejercerán las mismas
recursos para alcanzarlo. dos momen- políticas tecnocráticas al servicio de
tos: meta y gestión, inscritos en el adn intereses económicos. ninguna de ellas
de toda política que quiera ir más allá del ofrece una luna que pisar.
mero arbitraje de intereses particulares. la debilidad escatológica afecta
lo terrible de la política actual no es tanto a las políticas igualitarias que tra-
sólo el grado de corrupción de sus dicionalmente se agrupan bajo la deno-
representantes o el sometimiento a los minación de «izquierdas» como a las
dictados del mercado global, sino su individualistas que lo hacen bajo el pa-
ausencia total de sueños movilizadores. raguas de «derechas». las primeras han
En el ciudadano de a pie se ha instalado dejado de vehicular el éschaton de una
el convencimiento de que da lo mismo sociedad horizontal mientras que las
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políticas conservadoras se han plegado capitalismo de épocas pasadas buscaba
a los deseos de individuos codiciosos. regularse atendiendo a necesidades co-
y en medio de esa confusión afloran lectivas, el actual se ha puesto al servicio
realidades sociales desconocidas que de la satisfacción de deseos individua-
reclaman nuevas escatologías y nuevas les. y los deseos, por definición, nunca
políticas. pueden ser satisfechos.
para Massimo recalti, narcisismo y
bulimia son la expresión patológica que
1.1. Izquierdas. Una escatología define al capitalismo actual: «la buli-
anoréxica mia manifiesta el mito del puro consu-
El fracaso del «socialismo real» que mo. los bulímicos lo engullen todo, lo
tuvo su máxima expresión simbólica en mastican y lo trituran, pero los excesos
la caída del muro de berlín es amplifi- prueban la imposibilidad de colmar el
cado por los voceros neoliberales hasta agujero vacío que se halla en el núcleo
extrapolarlo en el fracaso escatológico de su existencia y revelan el engaño en
de la izquierda. según estos agoreros no que se basa el discurso capitalista»3.
vale la pena detenerse a analizar los evi-
dentes errores y desviaciones de los so-
cialismos estatistas, lo que se pone en 1.3. El mercado como única
cuestión es el éschaton final: «El socia- escatología
lismo ha fracasado como horizonte; no aunque un estudio pormenorizado des-
hay alternativa al capitalismo». velaría las falacias que se esconden tras
los novísimos que hasta ahora vehi- los «adelgazamientos escatológicos»
culaba la escatología de la izquierda de uno y otro signo, de lo que no cabe
tradicional: fin de la pobreza, igualdad duda es que la crisis actual ha dejado
entre seres humanos, estructuras econó- una sociedad desnortada, con un mer-
micas que aúnan libertad y justicia, y cado fundamentalista como único hori-
creación de un mundo solidario2 se han zonte escatológico posible. «derrotado
instalado en el purgatorio de las quime- el socialismo en su ingenuo pulso con
ras irrealizables a la espera de que un el capitalismo americano y debilitado el
progreso redentor les rescate de su des- modelo de economía social de merca-
tierro. do, los hombres actuales parecen
haberse quedado sin norte en la organi-
zación de sus actividades. solo parece
1.2. Derechas. Una escatología haber una estrella a la que mirar en el
bulímica
firmamento de la economía. Esta nueva
Mientras que la izquierda busca recupe- estrella, como la de los reyes magos de
rarse de su anorexia social, la derecha la antigüedad, se posa sobre el merca-
necesita curarse de su obesidad capita- do. al mercado se le ha revestido de
lista. la bulimia consumista marca la características mesiánicas: él trae la sal-
dieta neoliberal de las políticas conser- vación de los hombres. del mercado se
vadoras de este principio de siglo. si el puede y debe esperar la solución de los
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enormes problemas que se nos van acu- cuatro hilvanes de cultura. una maraña
mulando al final del siglo xx. al mer- de telas e hilos incapaces de dinamizar
cado se le atribuyen unos poderes enor- un progreso armónico.
mes. pero el mercado no es la realidad El mercado hipostasiado convertido
o instancia última de referencia en la en la única instancia de referencia polí-
sociedad. no puede ser el criterio su- tica y escatológica: «fuera del mercado
premo de racionalidad en la organiza- no hay salvación», condiciona una idea
ción de las cosas materiales. ni su fun- de progreso que pasa a ser entendido
cionamiento es la garantía de que la como mera acumulación de bienes de
sociedad use sus recursos de la mejor consumo. El progreso científico, social,
manera posible»4. democrático, cultural, etc., se valora en
El mercado neoliberal presenta función de indicadores económicos; si
como aval escatológico la «eficacia» de contribuye a aumentar el pib se define
su receta consumista: las sociedades que como progreso, si no genera beneficios
alimentan la codicia de sus miembros económicos no se considera tal. así se
generan más beneficios para la comuni- festeja y bendice como desarrollo la
dad que las que anteponen las necesida- incorporación al capitalismo consumis-
des colectivas a los deseos individuales. ta de nuevas economías emergentes
El mercado dejado al albur de sus pro- como china, india, brasil o corea del
pias leyes genera más riqueza social sur, sin cuestionar, por ejemplo, que la
que el capitalismo mixto regulado por anexión de esta última al tren del «pro-
el Estado. una «ley» que es presentada greso» occidental va pareja al incre-
con la autoridad de las evidencias cien- mento del número de suicidios entre su
tíficas. población (la mayor tasa del mundo).
para el politólogo estadounidense
francis fukuyama, el horizonte escato-
1.4. Progreso desestructurado lógico del fin de la historia en el que
Hasta la época ilustrada, progresar era nos encontramos se reduce a poseer
sinónimo de crecer en sabiduría. gene- grabadoras de video y equipos estéreos:
ración tras generación iban trasmitién- «[…] El estado de conciencia que per-
dose el poso de saberes acumulados y mite el desarrollo del liberalismo pare-
entrelazados. los avances científicos se ce estabilizarse de la manera en que se
entretejían con los culturales, sociales, esperaría el final de la historia si se ase-
éticos y estéticos, confeccionando un gura la abundancia de una moderna
ajuar integrado que pasaba de padres a economía de libre mercado. podríamos
hijos. resumir el contenido del Estado homo-
la posmodernidad ha fragmentado géneo universal como democracia libe-
discursos y saberes, deshilachado la ral en la esfera política unida a un acce-
herencia de un tapiz que ahora se trans- so fácil a las grabadoras de video y los
mite en forma de retales: enormes tro- equipos estéreos en la económica»5.
zos de tecnología, pequeños pedazos de al desvincular el progreso de la
ética, algunas hebras de solidaridad y búsqueda de la verdad, el bien, la belle-
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za, la justicia y la igualdad que caracte- todo esto es síntoma de un tiempo
rizaba el éschaton humanista e ilustrado, en el que a la política se le ha despoja-
nos encontramos con una escatología do del carácter de acción que podría
con «novísimos» desestructurados y con producir un cambio hacia algo mejor. y
una política incapaz de vehicular nin- esto ocurre mientras que el cambio cul-
gún progreso. como afirma el catedrá- tural, social o tecnológico es una cons-
tico de filosofía política y social daniel tante imparable. Ha desaparecido la
innerarity: «se nos ha desestructurado esperanza de un cambio de naturaleza
el lenguaje relativo al cambio, con lo política. la política es el ámbito social
que todo ello supone de concepción del que más impresión da de paralización;
tiempo histórico y de la intervención po- ha dejado de ser una instancia de confi-
lítica. En el lenguaje progresista la revo- guración del cambio para pasar a ser un
lución ha sido sustituida por la moder- lugar en el que se administra el estanca-
nización: las reformas son un término miento. Esta circunstancia es valorada
más bien de derechas; y en la izquierda de diferente manera según sea uno libe-
extrema hay gestos críticos, pero no ral que lamenta la lentitud de las refor-
una teoría crítica de la sociedad (mucho mas o un izquierdista que se queja de la
menos un programa de acción). buena ausencia de alternativas»6.
parte de lo que se dice y hace no son anorexia escatológica y diviniza-
más que ademanes de heroísmo frente ción del progreso económico resumen
al mercado o simple melancolía. el estado de la realpolitik actual.

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2. LA POLÍTICA DE LA ESCATOLOGÍA

No hay política sin escatología como tampoco hay escatología que no


tenga su necesaria dimensión política. Obviamente la política no cons-
tituye la totalidad de la existencia humana ni abarca toda la esperanza
humana. Afirmar la necesidad política en la escatología religiosa no sig-
nifica reducir la salvación que la escatología expresa a mero cambio de
estructuras sociales. Dicho esto, resulta innegable que, en la tradición
judeocristiana, la historia –incluyendo su dimensión política– es el lugar
privilegiado de la revelación de Dios.

la experiencia fundante de la religión que liberará al pueblo de su destierro


judía es la convicción de que dios ha in- babilónico permitiéndole volver a pa-
tervenido en la historia liberando a su lestina (Esd 1).
pueblo de la esclavitud egipcia. pero no la promesa veterotestamentaria de
sólo tuvo esa intervención puntual, dios una tierra que «mana leche y miel» o el
está continuamente interviniendo en la anuncio evangélico de un reino de dios
historia: el dios que liberó al pueblo a en el que los hambrientos serán sacia-
través de Moisés será el mismo que ayu- dos marcan horizontes escatológicos
dó a gedeón a vencer a los madianitas trascendentes, al tiempo que dinamizan
con sólo 300 hombres (Ju 7), y a david, prácticas políticas concretas: un pueblo
apenas niño, a vencer a goliat armado saldrá al desierto tras Moisés en bús-
con una honda y cinco piedras (1sam queda de esa tierra prometida, Jesús an-
17,32-54). con la instauración de la mo- ticipará la presencia del reino dando de
narquía, dios intervendrá a través de sus comer a más de cinco mil hombres (Mt
reyes: david, salomón, etc. incluso ac- 14,21). las escatologías judía y cristia-
tuará a través de monarcas extranjeros na se refieren tanto al «más allá» como
como ciro, fundador del imperio persa, al «más acá». la disyuntiva teológico-
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filosófica que intenta delimitar el ámbi- adaptando sus modelos políticos a los
to histórico o transmundano de la esca- usos de cada época sin sacralizar nin-
tología es ajena a la mentalidad bíblica. guno de ellos. los profetas veterotesta-
El reino de dios es una promesa futu- mentarios velarán por que ningún siste-
ra y, al mismo tiempo, una realidad ya ma político olvide las dos constantes
presente. la oración judeocristiana del que se mantienen a lo largo de toda la
padrenuestro es un ejemplo claro de la historia: la alianza de dios con su pue-
simultaneidad de los dos momentos: blo y el sufrimiento de los más débiles.
«hágase tu voluntad así en la tierra co- tampoco el nuevo testamento arro-
mo en el cielo». El «ya, pero todavía ja luz sobre los contornos políticos del
no» paulino es la expresión temporal «reino de dios» anunciado por Jesús.
que mejor define la «política escatoló- si preguntamos a los evangelios por
gica» bíblica. cuestiones prácticas participaremos de
si en algo son expertas las religiones la perplejidad de los hijos de zebedeo:
mesiánico-proféticas es en la «gestión ¿quiénes se sentarán a la derecha e iz-
de la esperanza». Judaísmo y cristianis- quierda del rey?; ¿habrá que seguir pa-
mo poseen un saber escatológico que gando impuestos al césar?; ¿el reino de
deben poner al servicio de una sociedad dios restaurará la monarquía davídica?
en busca de horizontes. no se trata de Jesús no responde con un modelo polí-
aportar el recetario infalible de una cris- tico definido, marca un horizonte: de-
tiandad presentada como tabla de salva- volver la libertad a los cautivos, la vista
ción para una sociedad a la deriva, lejos a los ciegos, la libertad a los oprimidos
de nosotros tales resabios totalitarios, lo y anunciar el año de gracia del señor
que queremos es destilar el poso de sa- (lc 4,18-19), indica un cómo: si yo el
biduría «política» que las religiones ate- Maestro y el señor os he lavado los pies,
soran en su interior y extraer enseñan- también vosotros debéis lavaros los pies
zas útiles para nuestro tiempo convulso. unos a otros (Jn 13,13-14), y lanza una
advertencia contra el uso del poder:
sabéis que los jefes de las naciones las
2.1. ¿Monarquía, República, tiranizan y que los grandes las oprimen.
Democracia, Anarquía…? no será así entre vosotros; al contrario,
antes de adentrarnos en las enseñanzas el que quiera subir, sea servidor vuestro
bíblico-políticas conviene advertir a y el que quiera ser primero, sea esclavo
modo de introducción que la biblia no vuestro (cf. Mt 20,25-27).
aporta ninguna orientación práctica so- la soberanía de dios que relativiza
bre qué sistema político es más acorde toda forma de poder y la preocupación
con el sueño divino. divina por la suerte de los más indefen-
patriarcas, reyes, príncipes, jueces, sos marcan la hoja de ruta de la «políti-
emperadores…, el pueblo de israel irá ca bíblica».

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3. CINCO ENSEÑANZAS BÍBLICO-POLÍTICAS

«El lobo habitará junto al cordero, la pantera se tumbará con el cabrito,


el ternero y el leoncillo pacerán juntos; un muchacho pequeño cuidará
de ellos. La vaca vivirá con el oso, sus crías se acostarán juntas; el león
comerá paja, como el buey, el niño jugará en el escondrijo de la ser-
piente. Nadie causará ningún daño en todo mi monte santo» (Is 11,6-9).
«Voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva; de lo pasado no haya
recuerdo ni venga pensamiento, más bien gozad y alegraos siempre
por lo que voy a crear; mirad, voy a transformar a Jerusalén en alegría
y a su población en gozo; me alegraré de Jerusalén y me gozaré de mi
pueblo, y ya no se oirán en ella gemidos ni llantos, ya no habrá allí
niños malogrados ni adultos que no colmen sus años pues será joven
el que muera a los cien años, y el que no los alcance se tendrá por mal-
dito. Construirán casas y las habitarán, plantarán viñas y comerán sus
frutos» (Is 65,17-21). «Dichosos los pobres porque el reinado de Dios
les pertenece. Dichosos los que ahora pasáis hambre, porque os sacia-
réis. Dichosos los que ahora lloráis porque reiréis» (Lc 6,20-12).

3.1. Expresar la esperanza bre, ni llanto, un día en el que todos y


la biblia está preñada de promesas y todas tendrán una casa en la que vivir
sueños. En su expresión utópica, la es- y viñas para alimentarse!, un convenci-
catología bíblica dibuja los contornos de miento que no parte del cálculo previ-
un mundo paradisiaco. lejos de consi- sor del presente sino de la promesa de
derarlas quimeras imposibles, los creyen- un futuro en el que dios ha empeñado
tes se acercan a estas promesas con la fe su palabra y a la que el creyente se afe-
en su cumplimiento: ¡sí, habrá un día en rra reclamando su cumplimiento.
el que desaparecerá la pobreza de la faz creyente o no, el ser humano es cons-
de la tierra, en el que no habrá más ham- titutivamente escatológico. «por el he-
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cho de ser como es, el hombre tiene que abre el camino», «dormíamos, desper-
esperar, no puede no esperar» dirá laín tamos. plaza tomada», «ya tenemos sol,
Entralgo7. Expresar la esperanza es la ahora queremos la luna», «no estamos
afirmación radical de nuestra humani- llamando a la puerta, la estamos tirando»,
dad al tiempo que constituye la negati- «nuestros sueños no caben en vuestras
va a aceptar el presente como palabra urnas»… los sueños del movimiento
definitiva sobre la realidad. 15-M que hace unos años empapelaron
individuos y sociedades necesitan la puerta del sol madrileña fueron la ex-
expresar utópicamente sus horizontes plosión de una indignación contenida
de futuro si no quieren quedar atrapados pero también la expresión escatológica
en un presente eterno. las utopías no de una sociedad que «decidió» que la
son un lujo superfluo de sociedades realidad era cambiable. frente a la retó-
ociosas, son una necesidad política pa- rica neoliberal de la inevitabilidad, los
ra pueblos en marcha. movimientos altermundistas proponen
«Esto dirás a los israelitas: El señor el discurso utópico de lo posible/desea-
dios de vuestros padres, dios de abra- ble. El primer peldaño de todo cambio
hán, dios de isaac, dios de Jacob me social pasa por recuperar el lenguaje
envía a vosotros. […] He decidido saca- arrebatado por el poder.
ros de la opresión egipcia y llevaros al la expresión utópica de la esperan-
país de los cananeos, hititas, amorreos, za es ridiculizada por la lógica faraóni-
fereceos, heveos y jebuseos, a una tierra ca que la reduce a ingeniosos brindis al
que mana leche y miel» (Éx 3,15-18). sol. Eslóganes tan estériles como el
para iniciar un camino y plantar cara al anuncio de «una tierra que mana leche
faraón, es necesario que alguien anun- y miel»; a no ser que un día una comu-
cie una meta; un líder que proclame la nidad disidente decida salir en su bús-
alternativa política a la esclavitud de queda y dejar de construir pirámides…
Egipto: «hay una tierra que mana leche la religión es muy consciente de la
y miel». importancia de expresar y mantener la re-
la lógica faraónica de toda época tórica escatológica frente a los discursos
busca neutralizar la expresión de la es- presentistas. aquello que no se anuncia
peranza. instalado en un presente abso- está condenado a la inexistencia. la cam-
luto el faraón teme cualquier discurso paña política que llevó a barack obama
que agriete los muros del status quo pre- a la presidencia de Estados unidos en
sente y deje entrever los caminos de li-
enero de 2009 comenzó un 28 de agos-
beración que se esconden tras pirámides
to de 1963 cuando Martin luther King
suntuosas, aeropuertos inútiles o burbu-
expresó su sueño (I have a dream).
jas inmobiliarias.
«si no nos dejáis soñar no os deja-
remos dormir», «otra economía es posi- 3.1.1. Reivindicando las ideologías
ble», «precarios del mundo no tenéis la abstracción e indeterminación de la
nada que perder excepto vuestras cade- expresión utópica corre el peligro de
nas», «la barricada cierra la calle pero uniformar escatologías. cuando eso
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ocurre, conviene recurrir a la ideología venciones reivindicamos el necesario
como traducción política de la utopía. rearme ideológico de la política como
todas las opciones políticas se pre- medio para discernir sus verdaderos
sentan como defensoras de principios propósitos. la ideología que inspira el
universales. proyectos políticos de sig- neoliberalismo es individualista, elitista
nos antagónicos pueden coincidir por y autoritaria, mientras que la que inspi-
ejemplo en la defensa abstracta de los ra a las socialdemocracias es sistémica,
derechos Humanos (por cierto, otra es- inclusiva y democrática. ¿Hacia qué ho-
catología afectada de anemia). derechas rizonte social se dirigirá una política
e izquierdas confesarán defender los que ha renunciado a la ideología?, ¿có-
mismos valores de libertad, justicia y mo decidir las prácticas sociales si no
solidaridad. solo bajando un escalón formulamos ideológicamente hacia
hacia su expresión ideológica podemos dónde ir?
descubrir los lobos que se esconden tras para el filósofo marxista Ernest
los disfraces de cordero. bloch, lo que queda de las ideologías
la ideología sirve para aterrizar en pasadas, de los modos de representación
el debate público una metafísica escato- del mundo de otras épocas, es justamen-
lógica necesariamente abstracta. como te aquello que en ellas había de utópico,
afirma el filósofo argentino Mario bun- lo que en ellas apuntaba hacia adelante.
ge la ideología es la parte de una cos- Más allá de cuestiones semánticas, la rei-
movisión más amplia que se ocupa de vindicación de las ideologías es la afir-
los asuntos sociales8. para hacer frente mación de las utopías de los discursos
al pensamiento único neoliberal, urge políticos.
recuperar y reformular las ideologías.
llama poderosamente la atención
que los partidos políticos utilicen el tér- 3.2. Mantener la esperanza:
mino ideología como arma arrojadiza. Liderazgo y gestión
«¡su propuesta es ideológica!» es un re- realidad y esperanza utilizan el mismo
proche frecuentemente utilizado en la libro de contabilidad. la primera anota
arena política para invalidar las razones implacablemente en el «haber» social la
del adversario; cuando es precisamente insatisfacción de una brecha cada vez
la expresión ideológica la única capaz más acusada entre ricos y pobres, la de
de sacar a la luz las cartas que se es- un hambre infantil que no acaba nunca
conden bajo la manga de cualquier pro- o la de niños soldados arrebatados a sus
puesta política. familias. la segunda insiste en el «de-
no conviene obviar el riesgo de que be» social de la igualdad de oportuni-
la ideología pierda su tensión escatoló- dades, el fin de la hambruna o el dere-
gica y degenere en ideologización; el cho a una educación gratuita y universal
peligro de que la ideología responda al para niños y niñas. un balance a todas
discurso manipulador de las clases diri- luces desequilibrado que exige la fe
gentes como alertaba Marx siempre es- –antropológica y/o religiosa– de esperar
tá presente. pero a pesar de esas pre- contra toda esperanza.
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ante las voraces termitas del pre- principal: la oración y el anuncio de la
sente que parecen devorar todo futuro buena noticia.
alternativo, política y religión necesitan una política hipergestionada y sin lí-
dotarse de estructuras de resistencia que deres mosaicos que mantengan viva la
alimenten la permanencia del liderazgo esperanza condena al pueblo a perma-
que marca la meta final de la tierra pro- necer en Egipto.
metida y la gestión que organiza las eta- En pleno apogeo de las «mareas
pas del camino por un desierto sofo- blancas», multitudinarias manifestacio-
cante. nes en defensa de la sanidad pública, el
El sociólogo y teólogo gerald a. ar- por entonces consejero de sanidad de
buckle9 resalta cómo la sabiduría bíbli- la comunidad de Madrid, Javier fernán-
ca se preocupa por crear las condiciones dez-lasquetty, retaba a los sanitarios
que permitan mantener gestión y utopía. madrileños a que elaboraran un plan de
analizando el relato del Éxodo, com- viabilidad que mejorara su propuesta de
prueba como Jetró, el suegro de Moisés, privatización de hospitales y servicios
pronto se dio cuenta de que aquel iba sanitarios. al exigirles actuar como ges-
asumiendo el rol de gestor más preocu- tores, le estaba pidiendo a Moisés que
pado por cuestiones organizativas que sustituyera el cayado que sirve para
por mantener viva la promesa anuncia- avanzar por el camino por la balanza es-
da: «os estáis matando, tú y el pueblo tática de pesar maná. absolutizando la
que te acompaña; la tarea es demasiado razón gestora como único pensamiento
gravosa y no puedes despacharla tú so- posible pretendía neutralizar el sueño
lo. tú representas al pueblo ante dios, –ya antes alcanzado– de una sanidad
y le presentas sus asuntos; inculcas al pública, universal y gratuita.
pueblo los mandatos y preceptos, le en-
señas el camino que debe seguir y las
acciones que debe realizar» (Éx 18,18- 3.3. Las raíces de los sueños
20). Jetró entonces aconseja a Moisés Hasta ahora hemos utilizado indistinta-
que permita al pueblo escoger a unos mente los términos sueño, utopía, pro-
hombres temerosos de dios para gestio- yecto o promesa, pero desde una pers-
nar los asuntos cotidianos «nombra entre pectiva bíblica hay enormes diferencias
ellos jefes de mil, de cien, de cincuenta entre promesa divina y sueños huma-
y de veinte. si haces lo que te digo, po- nos. la más evidente viene marcada por
drás resistir, y el pueblo se volverá a ca- el sujeto que la pronuncia: la promesa
sa en paz» (v. 21). una decisión similar siempre viene de dios, los sueños pue-
a la narrada siglos después en el libro de den provenir también de las personas.
Hechos de los apóstoles, cuando la pri- pero hay otra diferencia más sutil que
mera comunidad cristiana elige diáco- suele pasar desapercibida y es la rela-
nos para administrar el suministro dia- cionada con los «intereses» que nutren
rio a las viudas (cf. Hch 6,1-4). con esa sueños y promesas. detrás de toda es-
organización, los apóstoles podían se- catología política se esconden intencio-
guir atendiendo a la que era su tarea nalidades más o menos conscientes y, en
14
no pocos casos, más o menos perversas. noruega) y socio de zuckerberg, enseña
no todo sueño político está enraizado las cartas que su jefe esconde: «dar es-
en la búsqueda del bien común. ta conexión es cara, pero sin propuestas
despojado de su halo romántico, el como éstas, nos quedamos fuera de nue-
«sueño lunar» de Kennedy respondía a vos negocios futuros. la visión de futuro
intereses estratégicos del periodo de la es crear nuevos clientes que no saben lo
guerra fría relacionados con los equili- mucho que les puede aportar internet».
brios de poder entre Estados unidos y conviene mantenerse alerta cuando
rusia. según desvelaba la grabación de los congresos sobre los «retos educati-
las conversaciones entre el presidente vos del nuevo milenio», que recomien-
americano y el administrador de la na- dan la sobredotación tecnológica de las
sa, James Webb, a J.f. Kennedy no le aulas para afrontar las nuevas demandas
interesaba llegar a la luna sino hacerlo de los nativos digitales, vienen patroci-
ante que los rusos: «si llegamos segun- nados por empresas dedicadas precisa-
dos a la luna estará bien, pero seremos mente a la venta de aparatos digitales.
los segundos para siempre. […] yo no no menos sospechoso es el hecho de
estoy interesado en el espacio, sólo en que las evaluaciones pisa (Programme
la batalla contra los rusos». for International Student Assessment)
la escatología bíblica no es ingenua, que determinan las políticas educativas
no sale corriendo detrás de cualquier de no pocos países, sean elaboradas por
utopía. sabe de falsos profetas, embau- un organismo económico, la ocdE
cadores que cuentan visiones de su fan- (organización para la cooperación y
tasía y no de la boca del señor (Jr el desarrollo Económicos). cuando la
23,16), profetas de baal que dicen al rey economía dicta los currículos escolares,
lo que quiere oír (1re 22,13) o falsos es lícito preguntarse por las intenciones
mesías que extravían a la gente (Mt ocultas de políticas y escatologías.
24,24). no queremos caer en caricaturas lu-
situada en la escuela de la sospecha, ditas10 trasnochadas y arengar a la des-
la biblia nos alerta sobre las agendas en- trucción de la tecnología (en el siglo xix
cubiertas de profetas y mesías que apro- los luditas se rebelaron contra la indus-
vechando el río revuelto de un mundo trialización destruyendo telares y má-
en crisis, proponen escatologías ligadas quinas trilladoras), únicamente quere-
a sus cuentas corrientes. sin entrar en mos advertir de la falacia escatológica
juicios morales sobre personas, llama que se esconde tras el culto idolátrico
poderosamente la atención, por ejem- que nuestra generación rinde a la tecno-
plo, el mesianismo «altruista» de Mark logía. una fascinación digital que lee en
zuckerberg, el creador de facebook, en clave de progreso social todo avance
su cruzada por llevar acceso gratuito a tecnológico. basta con asomarse a cual-
internet a mil millones de personas en quier conflicto bélico actual con drones
los países más desfavorecidos. afortu- de última generación para concluir que
nadamente, Jon fredrik baksaas, con- no todo progreso técnico es necesaria-
sejero delegado de telenor (operadora mente progreso humanizador.
15
3.3.1. La suerte de huérfanos y viudas ses, pero no a todos, ni siquiera a los
frente a la heterogeneidad de intereses que convivían con ellos: campesinos
espurios que rigen los designios políti- ingleses o franceses, negros y escla-
cos, un solo interés divino recorre toda vos norteamericanos, aunque no se
la historia bíblica: «la preocupación por les negase el carácter de “seres hu-
la suerte de huérfanos y viudas». los manos”. En el centro estaba el ciu-
sueños divinos de Moisés y Jesús beben dadano. las cosas no han cambiado
de la misma raíz de un dios que libera del todo. ya antes de nacer los hom-
de la esclavitud, el hambre, la ceguera o bres son desiguales. y de ahí la ne-
la exclusión. cesidad de formular la tesis contra-
ria y la necesidad de la parcialidad:
la persistencia del interés divino por
“los derechos humanos son los de-
las condiciones de los más desfavoreci-
rechos de los pobres”. la conclusión
dos debería trasladarse al ámbito de la
es que la iglesia –la política, añadi-
política secular: ¿a qué sufrimiento res-
mos nosotros–, no sólo debe ayudar
ponde el sueño de la globalización?,
a los pobres, sino que debe ponerlos
¿qué males remedia el sueño político
de modo consciente en el centro de
europeo?, ¿beneficia a los más pobres el
la realidad, y no basta con recordar
sueño del Estado de bienestar? para-
las bondades del bien común»11.
fraseando a Epicuro para el que toda pa-
labra del filósofo que no remedia nin-
guna dolencia es vana, afirmamos que 3.3.2. Escatología «situada»
toda política que no responda al sufri- la escatología bíblica no es genérica, no
miento de los más débiles es igualmen- proclama un horizonte tan idealista co-
te vana. compartimos la indignación de mo difuso de una sociedad fraterna, jus-
Jon sobrino contra una democracia que ta e igualitaria. anuncia una tierra que
no pone al pobre en el centro ni de sus mana leche y miel a un pueblo concre-
políticas ni de sus utopías: to que sufre bajo la esclavitud del fa-
«[…] tampoco en la democracia raón. llama bienaventurados a los que
–aceptando sus valores y minimi- ahora sufren la pobreza, a los que aho-
zando sus limitaciones, hipocresías, ra tienen hambre y a los que ahora llo-
incluso crímenes (sobre todo los que ran (lc 6,20-21). las promesas de dios
cometen gobiernos democráticos siempre están referidas a la liberación
reales, sobre todo fuera de sus fron- del sufrimiento concreto.
teras en pueblos del tercer Mundo, la metáfora escatológica de un gran
y a veces dentro de ellas)– el pobre banquete universal al que toda la huma-
está en el centro de la realidad, ni si- nidad está llamada, se concreta en la in-
quiera en el de sus utopías. En su ori- vitación a la mesa de pobres, lisiados,
gen, hace dos siglos, los derechos ciegos y cojos (lc 14,21). cuando Jesús
humanos tenían a la vista a los free- proclama que publicanos y prostitutas
men ingleses, a los hombres blancos llevan la delantera en el camino hacia el
de Virginia, a los burgueses france- reino de dios (Mt 21,22) no hace sino
16
reafirmar un escenario escatológico que digno de dios y originador de disensio-
se formula dialécticamente: el cielo es nes contrarias al bien común13.
el lugar de los que en la sociedad se les cuando la teología se aleja de los lu-
niega su lugar. no se puede pensar la gares de sufrimiento acaba deontologi-
salvación cristiana de espaldas al sufri- zando la esperanza, convirtiendo en có-
miento concreto. digo de conducta faraónica lo que se
la escatología cristiana está «man- anunció como itinerario de liberación. y
chada» con el barro de los crucificados cuando la política se aleja de los con-
de la historia. El discurso escatológico textos de exclusión elabora escatologías
sobre «lo último» está dialécticamente elitistas preocupadas por mantener el
relacionado con la suerte de «los últi- estado del bienestar de las minorías.
mos». una dialéctica conflictiva que teo- se equivoca la posmodernidad
logías sistemáticas y políticas neutrales cuando busca resolver sus angustias
tienden a minimizar y ocultar. Jon so- existenciales en la religión cristiana. la
brino, nuevamente, reivindica el acer- preocupación cristiana no es la finitud,
camiento dialéctico a la realidad de los o el nihilismo, sino la injusticia y el su-
empobrecidos frente a discursos con- frimiento del inocente.
temporizadores: «Hoy se hace hincapié
en todo lo que sea diálogo, negociación,
tolerancia, y se rehúye tanto todo lo que 3.4. El escándalo «cósmico» de
sea confrontación, que pareciera que los unos pies descalzos
pobres hubieran caído del cielo (o, mi-
El quehacer político es más amplio que
rando los horrores de este mundo, me-
la preocupación por las condiciones de
jor sería decir que han surgido del in-
vida de los más pobres, hay que ocu-
fierno) y que los problemas quedarían
resueltos por alguna mano invisible que parse también de políticas militares, fi-
quebraría el egoísmo de los poderosos nancieras, educativas, internacionales,
y reblandecería la injusticia, la mentira y etc. Hasta el sistema capitalista más fe-
la violencia estructurales. Más bien se roz dispone de su ministerio de asuntos
tiende a evitarlo». sociales desde el que gestiona las ayu-
En esa situación hay que recordar la das para los más desfavorecidos.
verdad bíblica e histórica fundamental, la política secular puede convivir
que tanto se proclamó alrededor de Me- con el porcentaje «inevitable» de exclu-
dellín y de puebla: «Hay ricos porque sión social que todo sistema genera,
hay pobres, y hay pobres porque hay la bíblica no. En la «política bíblica», la
ricos»12. existencia de un solo pobre vendido a
los imperios, dirá Walter bruegge- cambio de un par de sandalias (cf. am
mann, prefieren a teólogos –y a políti- 2,6) pone patas arriba toda la estructura
cos, añadimos nosotros– sistemáticos imperial, es un escándalo de tal enverga-
que ven la realidad en su conjunto, que dura que amenaza la estabilidad mundial.
comprenden a una y otra parte y que El rabino abraham Heschel se pre-
consideran la polémica como algo in- gunta por la desproporción de tal indig-
17
nación profética: ¿qué importa si en al- llones de personas carecen de acceso a
gún lugar de la palestina antigua los ri- medicinas esenciales. Hace unas déca-
cos trataban bien a los pobres? En rea- das, Margaret thatcher se quejaba del
lidad, los «crímenes» que los profetas servicio nacional de salud de gran
bíblicos denuncian no van más allá de bretaña, que según su criterio convenía
lo que podamos considerar «normal» en privatizar para mejorarlo: «quiero ele-
cualquier lugar del mundo. ¿En qué so- gir al médico que yo quiera, cuando yo
ciedad no hay pobres, desahuciados, po- quiera»16. Es fácil caer en críticas de-
líticos corruptos o jueces injustos? ¿no magógicas, pero parece un dato innega-
es excesivo, incongruente y absurdo que ble que las políticas primermundistas
por algunos actos menores de injusticia han abandonado las causas de los más
que se hayan cometido contra el pobre vulnerables en favor de la defensa de
insignificante e impotente, la gloriosa privilegios de las élites.
ciudad de Jerusalén sea amenazada con
El surgimiento de plataformas ciu-
la destrucción y toda la nación vaya al
dadanas reivindicando la condonación
exilio?14
de las deudas hipotecarias, exigiendo a
la «política bíblica» toma partido la sanidad pública la subvención de tra-
por los últimos, no es imparcial, exige
tamientos médicos contra la hepatitis c,
estructurar la organización de la convi-
recaudando fondos para la investiga-
vencia social desde la atención priorita-
ción en «enfermedades raras», o denun-
ria a las necesidades y demandas de los
ciando el atropello de la «devolución en
más vulnerables. Este ha sido el gran
caliente» de los extranjeros que logran
«pecado de omisión» de las políticas de
izquierdas: orillar la pobreza como un cruzar las vallas fronterizas, son el claro
efecto colateral de un progreso social no diagnóstico de una sociedad civil que
cuestionado y ponerse al servicio de rei- tiene que organizarse políticamente por-
vindicaciones emancipatorias de ciuda- que sus «políticos profesionales» han
danos satisfechos. En esta línea parece dejado de ocuparse de las necesidades
apuntar gonzález faus cuando distin- de los «pies descalzos» que deambulan
gue entre una «izquierda económica» por sus calles.
comprometida en la defensa de los de-
rechos primarios del ser humano: ali- 3.4.1. El «siempre» de los pobres
mentación, vivienda, salud y educación probablemente una de las citas más
dignas, y una «izquierda cultural» pre- frustrantes del nuevo testamento es
ocupada por la satisfacción de deseos aquella en la que Jesús pronostica la per-
individuales propios15. manencia de los pobres a lo largo de la
las «sociedades desarrolladas» se historia: «a los pobres los tendréis
indignan porque tienen que hacer cola siempre con vosotros, mientras que a mí
en la sala de espera del médico de la no siempre me tendréis» (Mc 14,7). sin
seguridad social, olvidando que según entrar en análisis exegéticos que nos
la organización Mundial de la salud, distraería de nuestro propósito princi-
en los países en desarrollo dos mil mi- pal, podemos considerar esta profecía
18
desde un punto de vista descriptivo: a lo su omnipotencia. pero, además, el po-
largo de toda la historia de la humani- der divino que interviene y trastoca la
dad ha habido pobres y los seguirá ha- historia contiene un argumento político
biendo. El «siempre» de los pobres se no menos importante: la historia es
convierte así en un hecho cuestionador transformable, no está predeterminada.
que atraviesa toda la historia, un dina- El señorío divino abre la historia hacia
mismo de crucifixión que cambia de caminos insospechados. como afirma
formas pero con el que todas las socie- i. Ellacuría, si no captáramos a dios in-
dades se ven confrontadas. terviniendo en la historia «no lo capta-
la presencia histórica de la cruz es ríamos como el dios pleno, rico y libre,
el hecho mayor al que deben responder misterioso y cercano, escandaloso y
todas las políticas y todas las teologías. esperanzador; sería captado como el
¿El reino de dios será la culmina- motor de los ciclos naturales, como pa-
ción del progreso histórico o acontecerá radigma de lo siempre igual, que puede
como una ruptura alternativa al mismo? tener un después, pero no un futuro
¿basta con ir haciendo «pequeños ajus- abierto y en ese sentido como impulsa-
tes» asistenciales hasta el advenimiento dor de y tal vez fin o meta de una evo-
de unos cielos y una tierra nueva donde lución necesaria. pero Moisés acude a
ya no habrá muerte, llanto ni dolor (ap yahvé y a las acciones de yahvé no pa-
21,1-4) o hay que empeñarse en un cam- ra reiterar lo mismo, sino para romper
bio radical de estructuras? sin el agui- con el proceso, y es por esta ruptura del
jón de ningún sufrimiento son cuestio- proceso donde se hace presente en la
nes que admiten todas las respuestas historia algo que es más que la historia.
temporales posibles; ahora bien, desde […] la naturaleza puede ser escrutada
una teología y una política concernidas cada vez más tanto en la lejanía del pa-
por las causas de los excluidos la res- sado originario como en la profundidad
puesta no admite dilación: «otro mundo de sus elementos, pero esa naturaleza
es necesario ya, aquí y ahora». El cielo está ya dada e incluso su evolución es-
sólo puede esperar para aquellos que en tá fundamentalmente fijada, mientras
la tierra gozan del favor de una vida re- que la historia es el campo de la nove-
suelta. dad, de la creatividad, pero un campo
donde dios solo puede revelarse “más”
si se hace efectivamente “más” historia,
3.5. Dios, Señor de la historia…
esto es una historia mayor y mejor que
transformable
lo que ha sido hasta ese momento»17.
creador, señor de los ejércitos, libera- los milagros presentes a lo largo y
dor, Juez, dios encarnado. En la concep- ancho de toda la biblia vienen a refren-
ción bíblica, dios está actuando conti- dar la tesis de que la realidad es trans-
nuamente en la historia: dios es el señor formable. devolver la vista a los ciegos,
de la historia. el habla a los mudos, saciar a una mul-
la soberanía de dios suele utilizarse titud hambrienta, liberar de espíritus in-
como argumento teológico en favor de mundos o curar leprosos, son acciones
19
que rompen con la predestinación social cual emerge una nueva realidad que no
de quienes padecían esos males exclu- existía. la política bíblica no ignora los
yentes. son la muestra de que el maña- lentos procesos de la génesis histórica
na no tiene por qué ser la continuación pero se configura claramente desde el
irremediable del hoy. novum de un futuro anticipado18.

3.5.1. Escatopraxis 3.5.2. Más allá de la predestinación


la política bíblica se puede definir co- aunque en la idea de progreso como
mo escatopraxis, los milagros anticipan predestinación no es difícil encontrar un
en el aquí y ahora histórico una prome- fundamento cristiano (será san agustín
sa divina que será realidad plena al final quien fusione la idea griega de creci-
de los tiempos. son acciones que se miento o desarrollo con la idea judía de
sitúan en el horizonte escatológico del una historia sagrada), no es menos cier-
reino de dios, lo hacen presente antici- to que la escatología bíblica al presen-
pándolo y lo señalan como posibilidad tar a dios con poder para transformar la
plena. historia, rompe con una idea mecanicis-
la escatopraxis no busca construir ta de la misma. En la biblia encontra-
un futuro ya definido. no se trata de mos continuamente la novedad que po-
transponer «aquí en la tierra» un orden ne en tela de juicio la pretendidas «leyes
divino perfectamente delineado «allí en naturales» que rigen el progreso históri-
el cielo». tampoco se reduce a levantar co. la novedad de descendencias surgi-
acta del último estadio evolutivo de un das de parejas estériles, de un niño que
progreso natural, según la metáfora ve- vence a un gigante con la sola arma de
getal de una semilla que plantada en una honda, de vergeles que brotan en
buena tierra acabará dando los frutos medio de desiertos, de un Jesús resuci-
que tiene en potencia. la escatopraxis tado…
persigue crear las condiciones de posi- para el creyente la historia no está
bilidad que permitan el nacimiento de predeterminada, dios interviene en ella;
una realidad histórica nueva. Esta es una tiene la esperanza de que dios lleve a
de las grandes enseñanzas que la reli- buen puerto su creación. utilizo preten-
gión aporta a una política que busca re- didamente el término esperanza (hope,
forzarse escatológicamente: la política hoffnung) y no espera (wait, erwartung),
ha de planificar acciones que buscan porque frente a la pasividad de esta últi-
«anticipar el futuro». ma, la esperanza se concibe como espe-
dialogando con bloch, el teólogo ra activa. El amo llega sin avisar y es-
alemán Jürgen Moltmann distingue en- pera encontrar al criado fiel y prudente
tre futurum y adventus. El futurum se re- repartiendo a sus horas la comida de los
fiere a lo que será en un proceso natural empleados (Mt 24,45), el novio espera
de desarrollo histórico, se trata de un fu- ser recibido por unas muchachas vigi-
turo calculable y predecible. El adven- lantes con los candiles encendidos, el
tus supone una ruptura histórica por la señor volverá para pedir cuentas a sus
20
criados del uso que han hecho de sus ri- la certeza de que la historia no está
quezas (Mt 25,1-30). predeterminada y que se puede orientar
si la historia no está predeterminada hacia futuros por inaugurar es compar-
y puede tomar el rumbo que dios y los tida también por no pocas escatologías
seres humanos quieran darle, la política seculares. En El principio esperanza, el
se reviste de una responsabilidad esca- filósofo ateo Ernst bloch se pronuncia
tológica trascendente. El cristiano aspi- en el mismo sentido: «la vida es tan po-
ra a que su acción política contribuya al co conclusa como en el yo que labora en
advenimiento histórico del reino de este “afuera”. no habría posibilidad de
dios. Huimos conscientemente del di- reelaborar una cosa según el deseo si el
lema teológico fe-obras (para la teolo- mundo fuese cerrado, lleno de hechos
gía protestante la afirmación de que es fijos e, incluso, consumados. En lugar
posible «construir» el reino de dios es, de ello hay simplemente procesos […].
cuanto menos, aberrante, según lutero En su frente de proceso todo lo real se
«dios lo hará todo a pesar de nosotros»). transpone a lo posible»19.
también nos alejamos del debate entre
una «escatología realizada» según la 3.5.3. «Forzar» la historia
cual el reino de dios ya está presente y
nada sustancialmente distinto habría En la carta a los romanos, el apóstol pa-
que esperar del futuro, y la «escatología blo habla de que la creación entera esta
consecuente» que desplaza el futuro del gimiendo con dolores de parto en la es-
reino de dios fuera de la historia. peranza de participar plenamente en la
nuestra posición es más integradora y gloria de dios (rom 8,18-25). la imagen
se acerca a la dinámica del milagro de de un parto doloroso es una buena metá-
la multiplicación de los panes y los pe- fora para describir las enormes dificulta-
ces; los evangelios coinciden en señalar des que tienen que vencer las nuevas rea-
que para realizar el milagro de alimen- lidades históricas que quieren ver la luz.
tar a una multitud hambrienta, Jesús pi- El fin del apartheid, la conquista del
dió a sus discípulos que previamente voto femenino, el logro de jornadas la-
compartieran aquello que tenían (cinco borales de ocho horas son «milagros se-
panes y dos peces), la solidaridad hu- culares» que muestran la posibilidad del
mana quedaba así integrada en la acción novum histórico. una novedad que no
sobrenatural capaz de alimentar a más cae del cielo, los «milagros sociales»
de cinco mil hombres. del mismo modo son el resultado de una lucha denodada
que la acción «política» de Moisés se ins- por «forzar» la realidad hacia el lugar
cribía en la acción liberadora de dios. señalado por el sueño escatológico.
la mística horizontalista de inspiración la irrupción de la novedad histórica
ignaciana ha acuñado una expresión surge como fruto de la lucha contra las
afortunada para expresar la «colabora- inercias que pretenden mantener el sta-
ción» entre dios y hombre: «actúa como tus quo presente. la conquista –aún ina-
si todo dependiera de ti, sabiendo que, cabada– de los derechos Humanos son
en realidad, todo depende de dios». un claro ejemplo de cómo la declaración
21
«escatológica» del horizonte común de conocidos: grupos disidentes cuestionan
la dignidad humana ha de seguir com- un orden social y jurídico que no los re-
batiendo contra las fuerzas sociales que conoce como sujetos de derechos e ini-
se alían para impedir su existencia. cian una lucha para modificar esa rea-
para Javier Muguerza, la categoría lidad20. Habría que desconfiar de la
«disenso» es la que mejor define el pro- «calidad escatológica» de propuestas po-
ceso de incorporación de nuevas realida- líticas que no cuentan con ninguna resis-
des sociales al ámbito de los derechos re- tencia social.

22
4. LO QUE LA REALIDAD DA DE SÍ

Que Dios con su poder puede intervenir y transformar la historia es una


afirmación creyente que, como hemos visto, cuenta con infinitos avales
bíblicos. Pero más allá de las intervenciones divinas –y sin necesidad
de excluirlas– lo que nos interesa en este punto es discernir qué accio-
nes políticas seculares son susceptibles de anticipar un novum escato-
lógico no predeterminado. Expresado de forma más concreta: ¿cómo
podemos anticipar el «otro mundo posible» anhelado?

la trascendencia de la pregunta no ad- En la filosofía de la «realidad histó-


mite respuestas simples ni apresuradas rica» de ignacio Ellacuría encontramos
(es fácil caer en panfletos revoluciona- un marco explicativo con muchas posi-
rios y recetarios de guerrilla), a nuestro bilidades de formular un nuevo para-
juicio, la edificación de una realidad al- digma político que aúne praxis y tras-
ternativa pasa por la elaboración de un cendencia. para Ellacuría, la «realidad
nuevo paradigma político que (1) re- histórica» abarca todas las demás for-
construya «el mito del progreso» más mas de realidad (material, biológica,
allá del concepto de modernización, (2) personal y social) y es el ámbito donde
que asuma críticamente el éschaton de todas esas realidades «dan más de sí».
la globalización desde la atención a la En la realidad histórica se nos da no só-
multiculturalidad y que (3) fusione po- lo la forma más alta de la realidad sino
lis y domus en un horizonte que integre también el campo abierto de las máxi-
justicia y cuidado. mas posibilidades de lo real21.
23
sólo si la realidad puede «dar más Ellacuría propone una concepción de la
de sí» es posible plantearse políticas con misma en la que ésta se concibe no sólo
alma escatológica capaces de inaugurar como el factum de lo que existe –un he-
futuros no predichos. cho que nos viene dado de un modo fa-
tal–, sino como el faciendum que, desde
la praxis, alumbra una realidad nueva.
4.1. Más allá del progreso. la verdad de la realidad no es lo ya
El futuro como capacitación hecho; eso sólo es una parte de la reali-
la historia de la cultura occidental es dad. Hay que observar también lo que
la historia de la cultura del progreso. se está haciendo y tomar conciencia de
Homo habilis, homo ergaster, homo lo que está por hacer para así compren-
erectus, homo neanderthalensis, homo der la praxis histórica, necesariamente
sapiens, «homo digitalis»… Edad de compleja, en el proceso de transforma-
piedra, edad de bronce, edad de hierro, ción de la realidad. «la historia no hay
«edad del silicio»… sociedades triba- que entenderla como un progreso conti-
les, esclavistas, teocráticas, igualitarias, nuo cuya meta final fuese un topos ide-
democráticas, «globales»… la historia al, porque esto sería ver el sentido de la
se cuenta en clave de progreso, seres hu- historia fuera de la propia historia. la
manos y sociedades evolucionan de for- historia no se predice ni está determina-
ma ascendente hacia un futuro mejor da fatalísticamente hacia una determi-
para todos. nosotros vivimos mejor que nada dirección. la historia se produce,
nuestros padres y éstos lo hicieron me- se crea, mediante la actividad humana
jor que los suyos. de transformación. y por ello, Ellacuría,
una nueva concepción política del de la mano de zubiri, critica las con-
progreso pasa por renovar el discurso cepciones de la historia que la entienden
sobre el que se ha construido hasta el día como un proceso de maduración o des-
de hoy y que no es otro que el paradig- velación»23.
ma aristotélico del paso de la potencia lo real no es idéntico a lo actual, en
al acto. Esta es la manera en la que se- el futuro se pueden actualizar las posi-
gún zubiri, la modernidad había pensa- bilidades que aún no lo han hecho. lo
do la historia: el desenvolvimiento de real abarca tanto lo actual como lo po-
unas potencias que el género humano sible. la dinámica histórica es un pro-
posee desde el comienzo de los tiempos. ceso de posibilitación y capacitación en
En esta concepción determinista, la his- virtud del cual la realidad se va confor-
toria queda prisionera de aquello que la mando y transformando. la historia hu-
naturaleza, la materia o el espíritu –se- mana no es sino la creación sucesiva de
gún la filosofía utilizada– ya tenía en nuevas posibilidades junto con la obtu-
potencia al comienzo de los tiempos, y ración o marginación de otras: «Hay un
que simplemente se limitaría a pasar a doble juego entre lo que las cosas pue-
acto durante los procesos históricos22. den ofrecer desde ellas mismas al hom-
frente a esta evolución determinista bre y lo que el hombre puede hacer sal-
y acumulativa de la historia, ignacio tar de ellas como posibilidades. Este
24
juego es, en definitiva, el juego de la his- les que impiden o dificultan al máximo
toria: nunca se acaba de descubrir el la libertad sociopolítica y económica de
conjunto sistemático de posibilidades la mayor parte del pueblo»25.
que los hombres y las cosas son capaces
de alumbrar, según sean las situaciones 4.1.1. «Anomalías» sociales
en las cuales se relacionan cosas y hom-
bres; solamente cuando la historia con- si la novedad histórica no viene deter-
cluya, se habrán terminado las posibili- minada por la predestinación de una ley
dades reales y podrá saberse entonces lo natural, ¿dónde y cómo podremos vis-
que es de verdad la realidad humana. y lumbrar las posibilidades reales que aún
esto sólo de hecho, porque en el cami- no han sido actualizadas?
no de alumbramiento y realización de ya anticipábamos la respuesta más
posibilidades pudiera suceder que se hu- arriba al hablar de una creación con do-
bieran abandonado irremediablemente lores de parto en la que nuevas realida-
las mejores»24. des sociales luchaban por salir a la luz.
la historia –la realidad histórica– no El germen del novum histórico hay que
se predice sino que se produce, se crea buscarlo en las anomalías sociales que
a partir de la actividad humana sobre la rompen con la inercia de lo establecido.
base del sistema de posibilidades ofre- En su reflexión sobre el modelo de uni-
cido en cada situación y en cada mo- versidad que deseaba Ellacuría, Hugh
mento del proceso histórico. lacey animaba a los universitarios a in-
El nobel de economía amartya sen vestigar sobre las anomalías actuales
acude también a la categoría «capaci- que pueden constituirse en fuente de
dad» para referirse al progreso. según posibilidades sociales del futuro. En el
él, la política no debe juzgarse sólo en contexto latinoamericano, las comuni-
función del incremento de bienes mate- dades Eclesiales de base y las «organi-
riales sino que debe atender también a zaciones populares» eran propuestas co-
su capacidad para generar las condicio- mo ejemplos de prácticas alternativas
nes que permitan a toda persona con- anómalas con capacidad de engendrar
vertir sus derechos en libertades reales. futuro26.
Este progreso «capacitante» ha de cooperativas y grupos de consumo
estar referido siempre a las condiciones ecológico, alternativas de financiación
materiales de las mayorías desfavoreci- colectiva o micromecenazgo (crowd-
das si no quiere confundirse con la de- funding), plataformas de afectados por
manda de privilegios para las élites. la las hipotecas, bancos de tiempo, obje-
mera defensa de la expansión de las li- ción fiscal, movimiento slow, decreci-
bertades, sin que se logre una distribu- miento, distribución libre de software y
ción social de acceso a las condiciones obras culturales mediante licencias
reales para su ejercicio, sólo favorece de copyleft, plataformas de acogida a in-
hecho a los mejor situados. «la autén- migrantes, banca ética, etc., son solo al-
tica lucha por la libertad exige la trans- gunos ejemplos de las miles de peque-
formación de aquellas condiciones rea- ñas grietas que agujerean el muro del
25
fatalismo. Anomalías sociales que en zón de la víctima negada se puede dar
modo alguno son anecdóticas ni resi- paso a una vida nueva que tiene carac-
duales sino que constituyen el banco de teres de creación»27. Es en el reverso de
prueba de realidades que anticipan el fu- la historia, al lado de los excluidos de un
turo. progreso depredador donde se dan la es-
resulta vital reivindicar el valor peranza y la liberación. En la historia
trascendente de las pequeñas acciones «hegeliana» que avanza hacia un telos
colectivas y/o domésticas. cuando mi- de perfección siempre aparecen hechos
les de personas se unen en una coope- no encuadrables en el sistema, una es-
rativa sin ánimo de lucro para autoa- pecie de «desecho histórico» que hay
bastecerse de energía eléctrica verde, o que acabar ignorando o integrando co-
cuando una asociación de vecinos deci- mo excepción. un desecho que, como
de promover actividades en favor de los dice paul ricoeur «es justamente la his-
jóvenes de su barrio, están demostrando toria»28.
lo que la realidad «da de sí» por cami-
nos inhóspitos, más allá de los cauces
predeterminados por un progreso uní- 4.2. Más allá del «globalitarismo»
voco. no es del todo cierto que en la moder-
El novum histórico germina en y nidad líquida en la que en estos tiempos
desde las anomalías sociales, por más zozobramos haya una ausencia total de
insignificantes que éstas puedan pare- escatología. aunque en las primeras pá-
cer. no conviene olvidar que el reino ginas hablaba de sociedad desnortada y
de dios se parece a un grano de mosta- sin rumbo, existe un horizonte que, de
za, la más pequeña de todas las semillas, facto, se ha impuesto como telos social
que un hombre sembró en su campo (Mt incuestionable, me refiero al éschaton
13,31-32). de la «globalización». no sabemos qué
la anomalía social en la que se fun- nos deparará el futuro pero de lo que na-
den todas es la presencia histórica cons- die parece dudar es que ese futuro será
tante del «pueblo crucificado». El «global» o no será. la globalización
«siempre» de la exclusión al que ya nos aparece así como un dogma incontesta-
hemos referido, es una señal inequívo- ble y se persigue a los herejes que, cues-
ca de que el presente histórico aún no ha tionando sus bondades, piden reforzar
creado las estructuras «capacitantes» los Estados nacionales o exigen políti-
que permiten el acceso de todas las per- cas de proximidad.
sonas a una vida libremente elegida. la reflexión sobre escatología y po-
El hecho mayor de que en la reali- lítica que venimos realizando ha de con-
dad hay opresión no aparece sólo como frontarse necesariamente con el dogma
un desafío para su erradicación, como si globalizador, discerniendo sus virtuali-
la pobreza fuese únicamente un proble- dades capacitantes para las mayorías
ma a resolver, sino que el lugar de la empobrecidas. un discernimiento que
opresión es donde se descubre la verdad ha de empezar por distinguir entre «glo-
del proceso histórico y donde «por ra- balización» y «globalitarismo». la glo-
26
balización es un dato, el globalitarismo mito construido alrededor de intereses
una ideología. que vivimos en un mer- multinacionales y de espaldas a las ne-
cado global en el que las mercancías se cesidades de los más pobres. para ella,
mueven libremente de un extremo del «la globalización es una ideología pan-
planeta al otro es un hecho innegable, economicista y monocultural al servicio
que la mundialización sea el éschaton de un grupo particular, que pone en mar-
incuestionable al que toda la humanidad cha un nuevo proceso de dominación
aspira es una escatología interesada. hegemónica o de colonización a escala
El uso ideológico del término glo- planetaria cada vez más intenso. […]
balización se asocia a la idea de salva- los procesos actuales de globalización
ción universal según la cual, un mundo de la economía y de las finanzas son, en
globalizado es per se homogéneo, ar- realidad, una guerra de liberación a fa-
mónico, inclusivo e igualitario. «Vivi- vor del capital, que nos conduce inexo-
mos en un mundo en camino hacia la rablemente a una nueva dictadura del
perfección, lo que es sugerido explícita- mercado global, la cual atenta direc-
mente por el término globalización: la tamente contra las estructuras sociales,
belleza de la redondez, y la equidad den- culturales, solidarias e igualitarias de las
tro del todo, la equi-distancia entre to- democracias modernas»30.
dos los puntos de la superficie del glo- la deslocalización inherente al pro-
bo y su centro; ese mundo globalizado ceso globalizador lleva implícito el
es predicado como buena noticia esca- enorme peligro de desvincular las insti-
tológica, como lo esperado por todos, tuciones sociales de la vida real de los
desde hace mucho tiempo, y ahora con individuos y, peor aún, del sufrimiento
mejores argumentos –y con mayores po- concreto de los más desfavorecidos. un
sibilidades– que los de fukuyama con su desanclaje que ya se ha producido en el
«fin de la historia»»29. no es necesario ámbito económico, en las transacciones
demonizar el fenómeno globalizador pa- financieras globales circula un «dinero
ra ser consciente de sus ambigüedades, virtual» no ligado a espacios ni tiempos
la escatología globalizadora se articula ni, lo que es más grave, a personas. se
primariamente en torno a los novísimos compra y se vende deuda pública entre
de mercado, privatización, competitivi- países, las multinacionales cambian la
dad, concurrencia, desregulación y li-
localización de sus fábricas atendiendo
brecambio. los continuos llamamientos
exclusivamente a su rentabilidad eco-
papales a «globalizar la solidaridad»
nómica, las empresas registran sus se-
pretenden reconducir un desarrollo que
des en países con menos carga fiscal, se
dejado a su libre albedrío no conduce al
pueden incluso vender y comprar «de-
mejor de los mundos posibles.
rechos de contaminación» (a día de hoy
una tonelada de co2 se paga a 17€) y
4.2.1. La globalización aleja del países como arabia saudí, Japón,
sufrimiento concreto china, india o corea encabezan la lista
para María José fariñas, la globaliza- del nuevo fenómeno de agrocolonialis-
ción como único horizonte social es un mo que lleva compradas más de cin-
27
cuenta millones de hectáreas de tierras la historia que piensan la universalidad
cultivables del continente africano. como producto de la inscripción de to-
la economía financiera global fun- dos los pueblos y naciones en una hipo-
ciona por encima de las economías rea- tética línea temporal de mayor o menor
les de países, pueblos e individuos, es- desarrollo, cuya vanguardia son las na-
tableciéndose una ruptura ética que ciones occidentales, la «realidad histó-
desresponsabiliza a los mercados de las rica» ellacuriana apuesta por una visión
consecuencias sociales de sus acciones. sistémica en la que conviven diversos
la globalización que permite la libre modelos de desarrollo que configuran
circulación de mercancías y cierra fron- una verdadera corporeidad o sociedad
teras a seres humanos condenados a mo- universal o mundial31.
rir en pateras no parece apuntar hacia el no hay una ley universal que diga
mejor de los progresos. que hay un único modelo de desarrollo
la lucha por la desaparición de las y que todos deban pasar por él. El pro-
leyes de extranjería, la crítica al tratado greso no es unívoco ni necesariamente
transatlántico de comercio e inversio- globalizador. Hay que romper con la
nes (ttip) que promueve una globali- idea de «países en vías de desarrollo»
zación con más capitalismo y menos de- viajando en el furgón de cola de los
rechos, las alternativas de trueque que «países desarrollados», frente a esta
conectan la economía con el valor real concepción mecanicista-causal de pro-
de las cosas o el consumo de productos greso existe una visión sistémico-con-
de temporada provenientes de la activi- secutiva que permite hablar de desarro-
dad agrícola local, son anomalías alter- llos simultáneos no necesariamente
globalizadoras que buscan vincular los convergentes.
progresos a la vida real de las personas.

4.2.2. La globalización como progreso 4.3. Política del cuidado


homogeneizante En el mundo antiguo greco-romano ha-
terminaba el párrafo anterior utilizando bía dos grandes ámbitos de experiencia,
deliberadamente el término plural «pro- el doméstico (de oikos/domus, la casa)
gresos» para criticar el dogma homoge- y el político (de polis, la ciudad). Vida
neizador de un progreso único y exclu- privada y vida pública eran dos esferas
yente. tras el mito de la globalización antropológicas complementarias que la
se esconde la dinámica de un desarrollo edad moderna ha venido a contraponer
uniformador, que impone el modelo de de modo antagónico: en lo privado se
vida occidental como ideal para todas persiguen unas metas individuales y
las culturas. particulares que son totalmente inde-
frente a este etnocentrismo, reivin- pendientes de la esfera de lo general y
dicamos el multiculturalismo y la mul- de lo común, por tanto, independientes
tiplicidad de desarrollos locales. con- de valores y funciones de orden colec-
trariamente a las visiones ilustradas de tivo.
28
una nueva concepción de la política mamos no parte de la reivindicación
pasa por volver a fundir polis y domus. cursi de una «política con corazón», si-
cuando en estas páginas he hablado de no de la exigencia ética de una «políti-
las anomalías sociales como acciones ca con futuro», configurada desde las
posibilitantes de futuros alternativos he anomalías sociales de los más desfavo-
mezclado pretendidamente actuaciones recidos.
públicas (luchar contra la ley de extran- ¡sin cuidado no hay futuro!, es una
jería) y domésticas (consumir productos advertencia que los movimientos ecolo-
de temporada) porque considero que la gistas llevan gritando desde hace dé-
política ha de abarcar ambos campos. cadas en el desierto globalizador. un
no se debe relegar la política al ámbito grito que no se sustenta sólo en el argu-
exclusivo de las instituciones públicas y mento de la sostenibilidad –una exigen-
los políticos profesionales, nuestros cia que, en última instancia, no deja de
modos de consumir, de relacionarnos, ser un razonamiento utilitarista–, sino
de afrontar el mundo laboral, etc., tie- desde la afirmación de fines absolutos:
nen mayor relevancia política de la que vida, belleza, biodiversidad, que hay
solemos atribuirles. que preservar por encima de cualquier
Más allá de las repercusiones públi- otro interés.
cas de nuestras decisiones privadas, la
necesidad de unir polis y domus viene
4.3.1. Reino de Dios: polis y domus
determinada por la urgencia de conciliar
«contrato social» y «fraternidad» en el la propuesta política de Jesús tiene tan-
discurso y la práctica política. la ges- to de polis como de domus. los exege-
tión del bien común no puede desligar- tas coinciden en afirmar que el reino de
se de las necesidades «domésticas» de dios anunciado por Jesús se situaba en
comida, techo, educación y ternura. una el ámbito de la religión política (en el
política que se entiende exclusivamente sentido aristotélico de bien común), y
desde el ejercicio del poder no respon- que la paulatina institucionalización del
de ni a las demandas ni a las necesida- cristianismo fue derivando el reino del
des de una ciudadanía que se define contexto político al doméstico. «a me-
«políticamente» desde su pertenencia a dida que se va extendiendo por el im-
ámbitos colectivos y privados. perio y se va abriendo a los paganos, el
siguiendo a lucía ramón, creemos cristianismo –el movimiento cristiano–
vital la reconstrucción de una nueva po- va renunciando a su pretensión inme-
lítica que aúne justicia, cuidado y trans- diata pública y política y se va encar-
formación social.32 necesitamos encon- nando en las casas, que eran la estruc-
trar escatologías y políticas capaces de tura base de aquella sociedad»33. una
integrar la preocupación y el cuidado de evolución histórica que no debe pasar
los más débiles en el centro de sus inte- por alto que las metáforas y acciones de
reses. no se trata de una concesión al Jesús en su anuncio del reino mezcla-
sentimentalismo de una sociedad con ban horizontes políticos y domésticos.
mala conciencia; el cuidado que recla- así imágenes apocalípticas de la trans-
29
formación radical del mundo entre es- políticas y nuevas retóricas escatológi-
truendo de batallas y noticias de guerra cas.
(Mt 24,5) conviven con parábolas sobre como vio el historiador de la cien-
un padre que perdona a su hijo pródigo, cia thomas s. Khun, un cambio de pa-
un pastor que cuida de su rebaño, un radigma científico obliga a reconstruir
agricultor que planta una semilla o una el discurso epistemológico para explicar
mujer que encuentra una moneda perdi- las «anomalías» que el modelo anterior
da. una fusión de horizontes que marca ya no es capaz de justificar.
la novedad de su anuncio «político», el Estamos inmersos en un cambio de
reinado definitivo de dios sobre la his- época en el que un nuevo paradigma aún
toria tiene más que ver con las relacio- en construcción obliga a replantear po-
nes familiares de un padre-Madre preo- líticas y escatologías. las ideologías
cupado por la suerte de sus hijos más «derechas» e «izquierdas» ya no sirven
débiles que con un ejército de ángeles para dar respuestas satisfactorias a las
que cambia el rumbo del mundo a gol- nuevas «anomalías» sociales que van
pe de espada (Mt 26,53). «El oikos, la surgiendo.
existencia y garantía de un núcleo de vi- política y teología tienen que asumir
da mínima y de familia humana, es la el reto de repensarse desde el nuevo pa-
utopía de los pobres»34. radigma emergente si no quieren quedar
relegadas a discursos arqueológicos. no
se trata sólo de realizar el esfuerzo her-
4.4. Nuevas realidades, nuevas menéutico de intentar explicarnos lo
escatologías, nuevas políticas
que está aconteciendo, sino del reto es-
globalización, ecología, feminismo, te- catopráxico de construir lo que quere-
rapias genéticas, brecha digital, bioe- mos que acontezca. que la historia
nergías, pluralismo religioso, sociedad avanza es una evidencia. que progrese
de la información, son solo algunas de a favor de los últimos depende, entre
las nuevas realidades y sensibilidades otras cosas, de nuestras políticas y nues-
sociales que buscan nuevas prácticas tras escatologías.

30
NOTAS

1. gisbert grEsHaKE, Más fuertes que la muerte. 19. Ernst blocH, El principio esperanza (3 vols),
Lectura esperanzada de los «novísimos», Madrid, aguilar, 1977-1980, i, 188.
santander, sal terrae, 1981, p. 20. 20. Javier MuguErza, «la alternativa del disenso»,
2. José ignacio gonzálEz faus, El naufragio de la en J. MuguErza y otros, El fundamento de los
izquierda, barcelona, cristianisme i Justícia, derechos humanos, Madrid, debate, 1989, p. 44.
cuaderno 177, p. 5. 21. ignacio Ellacuría, «función liberadora de la
3. Massimo rEcalti, Elogio del fallimento, filosofía», p. 57.
gardolo, Erickson, 2011, pp. 28-29. 22. xavier zubiri, Naturaleza, Historia, Dios,
4. luis dE sEbastián, El rey desnudo. Cuatro verda- Madrid, 1987, pp. 362-382.
des sobre el mercado, Madrid, trotta, 1999, p. 19. 23. Héctor saMour, Voluntad de liberación. La
5. francis fuKuyaMa, «¿El fin de la historia?», filosofía de Ignacio Ellacuría, granada,
artículo publicado originalmente en la revista comares, 2003, p. 172.
The National Interest (verano 1989), p. 8. 24. ignacio Ellacuría, Filosofía de la realidad
6. daniel innEnarity, «El lenguaje del cambio», histórica, san salvador, uca Editores, 1990,
El País, 10 de septiembre de 2011. pp. 523-524.
7. pedro laín Entralgo, Antropología de la espe- 25. ignacio Ellacuría, «En torno al concepto y a
ranza, barcelona, guadarrama, 1978, p. 10. la idea de liberación», en Implicaciones socia-
8. Mario bungE, «qué piensan los filósofos de les y políticas de la teología de la liberación,
hoy» (entrevista) en Filosofía hoy, selección sevilla, Escuela de Estudios Hispanoamerica-
nº 5. Editorial globus, 2014. nos, 1989, p. 99.
9. gerald a. arbucKlE, Refundar la Iglesia. Disi- 26. Hugh lacEy, «los planteamientos de Ellacuría
dencia y liderazgo, santander, sal terrae, 1998, sobre la dialéctica de verdad y justicia» en
p. 158. http://www.uca.edu.sv/facultad/chn/c1170/lac
10. El ludismo fue un movimiento encabezado por ey.htm
artesanos ingleses en el siglo xix, que protestó 27. ignacio Ellacuría, «función liberadora de la
entre los años 1811 y 1817 contra las nuevas filosofía», Eca 435-436, 1985, p. 61.
máquinas que destruían empleo. 28. paul ricoEur, Histoire et vérité, du seuil, parís
11. Jon sobrino, Fuera de los pobres no hay sal- 1964, p. 69, citado en luis gonzálEz-
vación. Pequeños ensayos utópico-proféticos, carVaJal, El Reino de Dios y nuestra histo-
Madrid, trotta, 2007, pp. 54-55. ria, santander, sal terrae, 1986, p. 112.
12. Jon sobrino, ibid., p. 54. 29. Jon sobrino, op. cit., p. 70.
13. Walter bruEggEMann, La imaginación proféti- 30. María José fariñas, «las asimetrías de la glo-
ca, santander, sal terrae, 1986, p. 27. balización y los movimientos de resistencia
14. Cf. abraham HEscHEl, Los profetas. El hombre global» en aa. VV., El cristianismo ante los
y su vocación. paidós, buenos aires, pp. 33-36. grandes desafíos de nuestro tiempo, universi-
15. José ignacio gonzálEz faus, op. cit., pp. 3-4. dad de Valladolid, 2003, pp. 16-17.
16. zygmunt bauMan, 44 cartas desde el mundo 31. ignacio Ellacuría, Filosofía de la realidad
líquido, barcelona, paidós, 2011, p. 31. histórica, op. cit., pp. 447-448.
17. ignacio Ellacuría, «Historicidad de la salva- 32. lucía raMón, Mujeres de cuidado. Justicia,
ción cristiana» en i. Ellacuría y J. sobrino cuidado y transformación, barcelona, cristia-
(ed.), Conceptos fundamentales de la Teología nisme i Justícia, cuaderno 176.
de la Liberación, Mysterium Liberationis, 33. rafael aguirrE, Ensayo sobre los orígenes del
Madrid, trotta, 1994, pp. 333-334. cristianismo. De la religión política de Jesús a
18. Juan José taMayo-acosta, Para comprender la religión doméstica de Pablo, Estella, EVd,
la escatología cristiana, pamplona, Editorial 2001, pp. 39-40.
Verbo divino, 2000, pp. 302-303. 34. Jon sobrino, op. cit., p. 88.
31
CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN

1. ¿Cuáles crees que serían las nuevas escatologías y las nuevas políticas que
reclama el autor en este fragmento? ¿Qué características deberían tener?
La debilidad escatológica afecta tanto a las políticas igualitarias que tradicio-
nalmente se agrupan bajo la denominación de «izquierdas» como a las indivi-
dualistas que lo hacen bajo el paraguas de «derechas» […]. Y en medio de esa
confusión afloran realidades sociales desconocidas que reclaman nuevas esca-
tologías y nuevas políticas. (pp. 5-6)

2. ¿Identificas en esta descripción elementos que mueven nuestra conducta per-


sonal y comunitaria?
Para recuperarnos de la crisis económica actual hay políticas que siguen este
discurso de consumir más… «La bulimia manifiesta el mito del puro consumo.
Los bulímicos lo engullen todo, lo mastican y lo trituran, pero los excesos prue-
ban la imposibilidad de colmar el agujero vacío que se halla en el núcleo de su
existencia y revelan el engaño en que se basa el discurso capitalista». (p. 6)

3. ¿Para la neutralización de la esperanza qué alternativa personal y social crees


que se puede ofrecer?
La lógica faraónica de toda época busca neutralizar la expresión de la espe-
ranza. Instalado en un presente absoluto el faraón teme cualquier discurso que
agriete los muros del status quo presente y deje entrever los caminos de libe-
ración que se esconden tras pirámides suntuosas, aeropuertos inútiles o bur-
bujas inmobiliarias. (p. 12)

4. ¿Cómo reivindicar el valor trascendente de las pequeñas acciones colectivas


y/o domésticas… el Reino de Dios se parece a un grano de mostaza?
Compartimos la indignación de Jon Sobrino contra una democracia que no pone al
pobre en el centro ni de sus políticas ni de sus utopías. (p. 16)
La historia se produce, se crea, mediante la actividad humana de transformación.
(p. 24)

5. A la hora de decidir quien nos representa, ¿tienes en cuenta quien ofrece una
nueva política que aúne justicia, cuidado y transformación social?

6. ¿Cómo resumirías lo que te ha aportado este cuaderno?


32

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