como lixiviación al proceso de extraer desde un mineral una especie de interés por medio de reactivos que la disuelven o transforman en sales solubles. En otras palabras, en la lixiviación se recuperan especies útiles desde una fase líquida, correspondiente a la sustancia o una sal de esta en disolución acuosa. Los minerales que usualmente son lixiviados son aquellos menos oxidados (óxidos, carbonatos, sulfatos, silicatos, etc.). La lixiviación es una técnica ampliamente utilizada en metalurgia extractiva que convierte los metales en sales solubles en medios acuosos. En comparación con las operaciones piro metalúrgicas, la lixiviación es más fácil de realizar y mucho menos dañina, ya que no se produce contaminación gaseosa. Sus principales inconvenientes son su alta acidez de trabajo y en algunos casos sus efluentes residuales tóxicos, y también su menor eficiencia causada por las bajas temperaturas de la operación, que afectan dramáticamente las tasas de reacción química. El mineral usado para el proceso de lixiviación puede ser o bien oxidado o bien sulfurado. Por ejemplo, para un mineral oxidado, una reacción de lixiviación ácida simple puede ser ilustrada mediante la reacción de lixiviación del óxido de zinc:
ZnO + H2SO4 → ZnSO4 + H2O
En esta reacción el ZnO sólido se disuelve, formando sulfato de zinc disuelto en
agua. En muchos casos pueden ser usados otros reactivos para lixiviar óxidos. Por ejemplo, en la metalurgia del aluminio, el óxido de aluminio reacciona son soluciones alcalinas:
Al2O3 + 3H2O + 2NaOH → 2NaAl(OH)4
La lixiviación de sulfuros es un proceso más complejo debido a la naturaleza
refractaria de minerales de sulfuro. Esto implica a menudo el uso de recipientes a presión, llamados autoclaves. Un buen ejemplo del proceso de autoclave de lixiviación se puede encontrar en la metalurgia del zinc. Se describe mejor por la siguiente reacción química:
2ZnS + O2 + 2H2SO4 → 2ZnSO4 + 2H2O + 2S
Esta reacción se produce a temperaturas superiores al punto de ebullición del agua,
creando así una presión de vapor dentro del recipiente. El oxígeno se inyecta a presión, haciendo que la presión total en la autoclave sea mayor a 0,6 Mapa. La lixiviación de los metales preciosos como el oro puede llevarse a cabo con cianuro o el ozono bajo condiciones suaves.
II. Métodos de lixiviación
1. Lixiviación in-situ o extracción por disolución
La lixiviación in-situ involucra dejar el mineral donde se encuentra en el subsuelo, y en lugar de tratar de acceder a él, se atrae el material hacia nosotros. Consiste simplemente en inyectar un material solvente al estrato en el que se encuentra el material a procesar y después bombear la solución impregnada a la superficie donde por procesos químicos los minerales se pueden recuperar. Aplicación de soluciones directamente sobre el mineral que está ubicado en el yacimiento, sin someterlo a labores de extracción minera.
2. Lixiviación en terrenos y pilas
Es un proceso que permite disolver el cobre de los minerales oxidados que lo contienen, aplicando una solución de ácido sulfúrico y agua. El mineral de cobre es apilado, en alturas que usualmente superan los 7 metros, con áreas superficiales. El lixiviante que contiene ácido sulfúrico (H2SO4) es aplicado en la superficie de la pila, desde donde percola a través del lecho mineral, disolviendo los minerales de cobre, para producir una solución enriquecida de cobre o PLS (Solución de Lixiviación Cargada), que es colectada en una superficie inclinada e impermeable que se encuentra debajo de la pila, para ser transportada por medio de tuberías hasta la poza de soluciones ricas, y posteriormente a los circuitos de extracción por solventes y electro-obtención. 3. Lixiviación por percolación Es usada para describir técnicas en la que la solución lixiviante se percola hacia arriba o hacia abajo a través del mineral que se ha triturado y se ha colocado en tanques. Los tanques se encuentran distribuidos de tal manera que un sistema de contracorriente es empleado, además estos equipos se encuentran provistos de un falso fondo cubierto con un medio filtrante. Los nuevos sólidos son agregados al último tanque y el agente lixiviante al primero bombeándose sucesivamente de un tanque a otro hasta alcanzar el ultimo tanque, el ciclo de lixiviación puede variar de 2-14 días y la extracción del metal puede ser tan alta como 80% para minerales oxidados de cobre. Este proceso es apropiado para minerales porosos y arenosos y es inaplicable a minerales que tienden a compactarse en masas impermeables. El método se usa también para lixiviar menas de oro, plata, uranio y vanadio. Para una buena percolación se exige una regularidad en el tamaño de las partículas, las más pequeñas se compactan en los huecos de las más grandes, de tal manera que obstruyen los canales. La lixiviación en bateas, “vat leaching”, consiste en circular una solución, a través de un lecho de mineral, previamente triturado
4. Lixiviación por agitación
En general, se selecciona este método para minerales de alta ley, o bien para concentrados, por necesidad de rapidez en el tratamiento, la agitación actúa sobre minerales de tamaño fino, en los que no es posible aplicar el método por percolación. La agitación posible que el tiempo de contacto sea reducido a horas, en lugar de días (5). La operación de lixiviación por agitación puede ser continua o intermitente, utiliza diversos tanques con agitación mecánica, para lixiviar, separar sólidos de líquidos y lavar los residuos sólidos estériles. La solución cargada se filtra, clarifica y envía a la precipitación; el licor agotado se reajusta y recicla al circuito de lixiviación. Los agitadores mecánicos son recipientes con impulsores colocados en el interior, mientras que, los neumáticos son a menudo recipientes equipados con un tubo central que funciona como tiro de aire, en ambos habrá que tener cuidado para evitar la corrosión ya que, por lo general, las soluciones para Cu y Zn son muy reactivas. Mineral finamente molido, aumentando el área expuesta. Preferentemente para minerales no porosos o que produzcan muchos finos y especies que requieren drásticas condiciones de operación. Se aplica a minerales de leyes altas, que justifican la molienda.