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EL PRINCIPIO DEL INTERÉS SUPERIOR DEL NIÑO

El artículo IX del título preliminar del Código de los Niños y Adolescentes prescribe: «En toda
medida concerniente al niño y al adolescente que adopte el Estado a través de los Poderes
Ejecutivo, Legislativo y Judicial, del Ministerio Público, los Gobiernos Regionales, Gobiernos
Locales y sus demás instituciones, así como en la acción de la sociedad, se considerará el
Principio del Interés Superior del Niño y del Adolescente y el respeto a sus derechos».

En consecuencia, el Principio del Interés Superior del Niño, es un conjunto de acciones y


procesos enfocados en garantizar un desarrollo integral y vida digna, así como las condiciones
materiales y afectivas que permitan vivir plenamente y alcanzar el máximo de bienestar posible
a niños y niñas.

Restrepo citado por Amado (2018), la titularidad de derechos lleva inmerso tres implicancias: el
derecho a tener derechos, el carácter exigible de dichos derechos y el nuevo lugar y rol de los
niños, niñas y adolescentes en relaciones familiares, sociales y con el Estado (p.68).

Asimismo, Amado (2018) señala que el interés superior del niño tiene una triple connotación: es
un DERECHO, es un PRINCIPIO, y es una NORMA de PROCEDIMIENTO.
Es un DERECHO, debido a que el interés superior sea una consideración que permita sopesar
distintos intereses para decidir sobre una cuestión que le afecte. Es un PRINCIPIO, porque si una
disposición jurídica admite más de una interpretación, se elegirá la interpretación que proteja más al
interés superior del niño. Es una NORMA DE PROCEDIMIENTO, siempre que se deba tomar una
decisión que afecte el interés de niñas y niños, el proceso deberá incluir una estimación de las posibles
repercusiones de esa toma de decisiones en los intereses de los niños y niñas (p.98).

La Constitución Política del Perú en su artículo 4° prevé que «la comunidad y el Estado protegen
esencialmente al niño, al adolescente, a la madre y al anciano en situación de abandono.
También protegen a la familia y promueven el matrimonio. Reconocen a estos últimos como
institutos natrales y fundamentales de la sociedad».

El dispositivo constitucional no hace más que ratificar la obligación primera del Estado de
proteger al niño, entendiéndose como tal incluso al concebido, conforme lo estipulado por el
numeral 2) del artículo 2° de la carta fundamental y el artículo 1 del del título preliminar del
Código NN.AA, en atención a su condición de persona humana demandante de especial cuidado
y protección tanto para la satisfacción de sus necesidades vitales como para el logro de su
realización integral.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Amado, E. (2018). Derecho a la identidad, la identdad, la prueba de ADN en la filiación y la


impugnación de la paternidad. En GACETA CIVIL, Impugnacion de paternidad vs derecho
de identidad (págs. 87-102). Lima: Imprenta Editorial El Búho E.I.R.L.
Sokolich, M. (2018). El derecho fundamental a la identidad de los niños, niñas y adolescentes. A
propósito de la Casación N° 4430-2015 Huara. En GACETA CIVIL, Impugnación de
paternidad vs derecho de identidad (págs. 65-73). Lima: Imprenta Editorial El Búho E.I.R.L.

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