1) La autora, Sofía Cecconi, identifica cuatro variantes del turismo contemporáneo: el
turismo clásico (sol y playa), el turismo de finalidad especifica (incluye el turismo cultural, de deportes y de negocios), turismo de encuentros (ferias y congresos) y al que denomina “turismo de fetichizacion y exotismo”. Esta variante de turismo tiene sus comienzos en la década de los 90s. Se trata de un turismo de lujo que es practicada por los sectores medios altos de los países centrales. Los destinos a los cuales esos se dirigen pueden ser destinos de playa, urbanos o los determinados dentro de la categoría de “turismo cultural”. Residen en alojamientos hoteleros del tipo boutique o de alta categoría, de cocina gourmet, o realizan recorridos en cruceros donde solamente visitan algunos puertos, visitas guiadas a lugares emblemáticos y asistencia a espectáculos donde tiene muy poco contacto con la población local. La industria turística tiende a convertir a la cultural (o lo más característico y vendible de la misma) en un espectáculo, que produce y comercializa símbolos. La diversidad cultural se convierte en un icono para impactar a turista visualmente. La fetichizacion en la industria turística consiste en la reducción de la diversidad cultural de un país a una marca, a un producto diferenciador del resto que tenga un impacto en la dimensión sensorial, pulsional y corporal del turista.