Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Carbon y Petroleo
Carbon y Petroleo
ORGÁNICO
Se incluyen aquí fundamentalmente el carbón y los hidrocarburos naturales (petróleo
y gas), que se forman no como consecuencia de la acumulación de los restos
inorgánicos de organismos (sedimentación bioquímica), sino de la acumulación,
degradación y evolución de los propios restos orgánicos de estos organismos. La
principal diferencia entre los tipos señalados es que el carbón se forma
fundamentalmente a partir de restos de vegetales superiores (hojas, tallos, troncos...),
mientras que petróleo y gas se forman a partir de microorganismos (plancton, algas,
bacterias...).
Hidrocarburos naturales
El petróleo y el gas natural, los hidrocarburos fósiles, están constituidos casi
exclusivamente por hidrocarburos, es decir, compuestos orgánicos, más o menos
complejos, de Carbono e Hidrógeno, mezclados en proporciones diversas entre sí, y con
otros compuestos químicos: su composición elemental se muestra en la Tabla 1.
Carbono 85-95 85
Hidrógeno 5-15 13
Gas Natural
Como comparación, una hulla presenta un poder calorífico entre 5.600 y 8.000 cal/gr,
con lo que, a efectos de poder calorífico:
Se incluyen aquí los hidrocarburos naturales de carácter sólido. Pueden ser de dos tipos
diferentes: hidratos de metano, y bitúmenes y asfaltos.
Los hidratos de metano son poco abundantes, aunque actualmente se han localizado
acumulaciones importantes en el límite plataforma continental – talud, cuya
importancia económica y posibilidades de explotación aún están por determinar.
Las Arenas asfálticas son rocas sedimentarias de tipo arenas gruesas, bien clasificadas,
porosas y permeables, consolidadas o no, que contienen productos petrolíferos pesados,
en las que el bitumen representa del orden del 18 al 20% en peso de la roca. Su
viscosidad es muy elevada, por lo que no pueden ser recuperados por medios
tradicionales. Desde el punto de vista geoquímico, están formadas fundamentalmente
por asfaltenos y productos complejos ricos en nitrógeno, azufre, oxígeno, frente a
productos saturados y ligeros.
El carbón
El carbón es una roca sedimentaria combustible con más del 50% en peso y más del
70% en volumen de materia carbonosa, formada por compactación y maduración de
restos vegetales superiores, como consecuencia de la evolución de esta materia orgánica
de origen vegetal que se acumula en determinadas cuencas sedimentarias.
Composición y propiedades
Dentro de la composición química del carbón se debe diferenciar entre los datos
correspondientes a la estructura química del carbón, y los correspondientes a su
composición elemental. Así mismo, es necesario diferenciar aquellos datos relacionados
con la medida de algunos parámetros de importancia tecnológica. Otros parámetros de
gran importancia en la actualidad son los referidos al contenido en elementos menores
que puedan liberarse durante el proceso de combustión, y que pueden tener efectos
nocivos para la salud humana o del medio ambiente.
Los parámetros tecnológicos que se utilizan para definir un carbón son: el contenido
en humedad, la proporción de volátiles, el contenido en cenizas, y el poder calorífico.
La proporción de volátiles viene dada por la pérdida de peso de una muestra seca por
calentamiento a temperaturas entre 875 y 1050ºC fuera del contacto con el aire.
Otra propiedad importante del carbón es su densidad, que se relaciona de forma directa
con su contenido en cenizas. Todos los procesos de lavado y concentración de carbones
se basan en el aprovechamiento de esta propiedad.
Origen:
El origen del carbón está en relación evidente con la acumulación de materia vegetal
superior (troncos, ramas, hojas) en cuencas marinas o continentales. Los parámetros que
definen la posibilidad de acumulación de la materia vegetal que va a dar origen al
carbón son similares a los que permiten la acumulación de microorganismos para dar
lugar al petróleo:
Otra cuestión importante en cuanto al origen del carbón es la edad de las series
sedimentarias en que aparece: las plantas vasculares aparecen en el Silúrico, y pueblan
la superficie de La Tierra en el Devónico. Ello implica que los yacimientos más
antiguos de carbón conocidos sean de edad Devónica. Posteriormente, se dan
yacimientos de carbón de todas las edades, pero hay períodos especialmente favorables:
Carbonización o Coalificación
Hace más de 100 años se enunciaba la llamada regla de Hill, según la cual a medida que
se profundiza en una explotación de carbón, el contenido en volátiles disminuye. Esta
idea simple es la base conceptual en la que se apoya la evolución de la materia orgánica
durante el enterramiento subsiguiente a la sedimentación. Es un proceso esencialmente
físico-químico, con participación biológica en las primeras etapas, que se conoce con el
nombre de carbonización o coalificación.
Los factores que influyen en este proceso son: temperatura, presión y tiempo. Los dos
primeros están relacionados con el enterramiento y con el gradiente geotérmico: en
condiciones normales un enterramiento produce un aumento de presión debido al peso
de los sedimentos suprayacentes, y un aumento de temperatura del orden de 33ºC/Km
(gradiente geotérmico medio), si bien en zonas concretas este gradiente puede ser
mucho más alto.