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El arte en el Perú

El arte peruano empezó con los pobladores precolombinos y hay expresiones muy fecundas del arte a lo
largo de la historia del Perú.

Arte prehispánico
El arte de las sociedades andinas prehispánicas, de lo que hoy conocemos como el Perú, es de un carácter
distinto al del resto del mundo occidental. Ambos siguieron derroteros distintos tanto en el medio en que se
desarrollaron, como en las causas y móviles que lo impulsaron, y por ende, en el tipo de muestras que
presentaron.
Cerámica
Huaco retrato Mochica, fino ejemplo de la cerámica prehispánica peruana. Museo Larco, Lima-PerúLa
cerámica es el material más frecuente en el registro arqueológico andino y fue el medio preferido de los
artesanos prehispánicos por su versatilidad, ya que mediante su confección se satisfacían tanto
necesidades domésticas como rituales.[1] Los estilos más reconocidos de cerámica prehispánica se asocian
a culturas andinas y entre ellas encontramos: Paracas, Nasca, Moche, Wari, Tiahuanaco, Chimú e Inca.
Litoescultura
La litoescultura (o escultura en piedra), tuvo presencia en las manifestaciones culturales y artísticas en las
Chavín de Huántar, ubicado en el Callejón de Conchucos (Huari, Ancash). Este templo fue el primer centro
de devoción a nivel panandino, sostenido por un Estado eminentemente teocrático. Por tal motivo, la
presencia de la imaginería religiosa fue vital en su organización. El templo tiene dos fases: Templo Nuevo y
Templo Viejo.
Textiles
Los textiles precolombinos fueron elaborados con técnicas muy creativas y sofisticadas, tanto por la finura
de sus hilos, sus colores, la trama y urdimbre de sus tejidos, y los motivos en ellos representados. En su
mayoría, estos textiles recrean el mundo natural prehispánico y sobre todo su universo mental, y nos
aproximan a sus riquezas naturales e ideológico-culturales, así como al uso que le dieron las sociedades
que lo crearon.

Arte virreinal
En el Perú se conoce como Arte Colonial al período comprendido entre los siglos XVI y XVIII, es decir luego
de producirse la ocupación española hasta la etapa de la independencia. los periodos históricos no tienen
una fecha definida de inicio ni de fin pues este va evolucionando con el paso del tiempo.
Durante la segunda mitad del siglo XVI e inicios del XVII, numerosos cronistas escribieron sobre la riqueza
mineral y la producción alimenticia del Perú. Lima se convirtió en la capital de los virreynatos españoles,
convirtiéndose en una ciudad cosmopolita de gran importancia. Lima y su Plaza Mayor, se convierte en el
centro de las grandes ceremonias cortesanas y eclesiásticas (venida de virrey, nacimientos de príncipes en
España, fiestas luctuosas, pomposas procesiones) en ellas participan los intelectuales y artistas más
renombrados de la época. Durante este periodo sobresale la labor administrativa del Virrey Toledo.
Pintura
La pintura virreinal o pintura colonial, tuvo tres grandes influencias: la italiana, muy intensa durante el siglo
XVI y principios del XVII, que después se diluyó para recuperar su hegemonía a fines del siglo XVIII con la
introducción del neoclasicismo; la influencia flamenca, que se dio desde el principio y su importancia fue
creciendo hasta ser muy fuerte en el siglo XVII, pero, sobre todo fue constante por medio de los grabados; y
la española que se manifestó con mayor fuerza durante el período Barroco de los siglos XVII y XVIII,
especialmente a través de la Escuela Sevillana. Más adelante y luego de que indígenas y mestizos al
quehacer artístico se inició el Barroco Americano, con la introducción y recuperación de nuevos factores en
el panorama artístico. La incorporación de lo indígena no derivó sólo en un estilo, sino que supuso un
concepto distinto del universo y de su expresión, con validez genuina, manifestándose en un arte distinto y
propio. Los artistas indígenas interpretaron los temas religiosos y estilos de los trabajos del arte occidental
dados por los curas católicos.

Etapa barroca

A finales del siglo XVI la pintura manierista cede el paso hacia un mayor naturalismo en las obras de arte
dando a un nuevo estilo conocido como Barroco. Según el Concilio de Trento, toda obra de arte debe tener
como objetivo principal tener una intencionalidad retórica y sensibilizar al espectador, es decir, la obra de
arte debe ser fácilmente entendida por todos.
En Italia el mayor exponente del barroco es la Escuela Bolognesa caracterizada por tener grandes luces,
utilizar temas mitológicos. Exponentes: Carracci, Tiepolo. Por otro lado, en España el Barroco esta más
ligado al estilo tenebrista y utilizó el Claroscuro para modelar la forma y respetando la escala. No embellece
la forma ni en lo formal ni en lo temático. Su mayor antecedente lo encontramos incluso antes de Zurbarán,
con El Greco (pre-barroco s. XVI)
Podemos distinguir dos etapas del Estilo Barroco, la primera llamada de la plenitud del realismo, tuvo entre
sus mayores exponentes en España a Velázquez, Zurbarán y José de Ribera llamado el españoleto.
La segunda etapa llamada del desarrollo pleno del Barroco, se ubica en el último tercio del siglo XVII en
España. Se caracteriza por ser una pintura de características mayormente italianas, innova en las
composiciones, dándole un mayor dinamismo con ayuda de las perspectivas arquitectónicas (abre puertas y
pasadizos). Entre sus mayores exponentes en españoles distinguimos a Valdés Leal y Murillo. Escuela de
Zurbarán en Lima Zurbarán es la figura más influyente en el Barroco Hispanoamericano y Lima es la ciudad
con mayor número de obras relacionadas con su taller.
Serie del Apostolado de San Francisco el Grande (1638-1640)
Esta serie fue inventariada en 1758 por el padre Marimón (1758) y esta directamente vinculada con
Zurbarán pues se considera que era él quien daba el toque final a los lienzos. En 1940, llega a Lima el
marques de Losoya, quien certifica la autenticidad de los cuadros y da fe de ello en su libro Arte en
Hispanoamérica. La serie compuesta por trece cuadros podemos observar a los doce apostoles quienes
llevan un atributo que los identifica, correspondiendo el último lienzo de la serie a Cristo Redentor.
Serie de Santos Fundadores de Órdenes
Esta serie sale de Cádiz en 1752 rumbo a Lima. Según el marques de Losoya, fue un obsequio de doña
Gertrudis de Vargas al padre Francisco Laguna, prior del Convento de la Buena Muerte. Originalmente
estaba compuesta por 30 lienzos de los cuales hoy tan solo podemos apreciar trece. Serie de Arcángeles
del Monasterio de La Concepción
Serie de los hijos de Jacob
Serie atribuida a la pintora limeña del siglo XVII Juana de Valera, pues en el inventario de su taller se
encontró una serie titulada las Doce tribus de Israel que presenta similitudes con la existente en Londres y
firmada por Zurbaran la cual está inspirada en grabados como los de Durero. Se encuentra en el refectorio
de la tercera orden franciscana de Lima. Finalmente, el historiador peruano Guillermo Lohman Villena
menciona, en su Inventario Colonial Peruano de 1999, otras series de Zurbarán como La vida de la Virgen
(10 lienzos), Vírgenes latinas (24 lienzos), Los Cesares a caballo (12 lienzos, sobre esta serie en particular
se han encontrado documentos que indican que en 1647 Zurbaran gestionó su cobro), todos estos cuadros
pertenecientes al Monasterio de la Encarnación.
Claroscurismo en el Cusco
Durante la primera mitad del siglo XVII la pintura cuzqueña recibe la influencia del mestro italiano Bernardo
Bitti quien dejo allí varios discípulos como Pedro de Vargas y Gregorio Gamarra. Éstos fueron continuadores
del estilo manierista. Sin embargo, la segunda mitad de este siglo presenta características totalmente
diferentes debido en parte a la influencia de los dibujos y grabados flamencos como los de Martín de Vos y
Halbeck respectivamente, así como de la pintura de Zurbarán.

Escuela Limeña (siglo XVII)


La pintura de caballete en Lima estaba fuertemente influenciada por la pintura flamenca, más cerca hacia lo
académico y con intencionalidad dinámica, motivo por el cual no tuvo mucha acogida el claroscurismo. De
esta etapa destacan cuatro pintores Francisco Escobar, Diego de Aguilera, Andrés de Liebana y Pedro
Fernández de Noriega. Estos artistas recibieron el encargo de realizar la denominada Serie de la vida de
San Francisco compuesta por 12 pinturas que se encuentran en el claustro mayor del convento limeño.
Pintura Limeña (siglo XVIII)
Fray Miguel Adame, Retrato de Benedicto XIII,Rey Felipe V.
Cristóbal de Aguilar, en el Museo de Arte de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos podemos
pareciar parte de la obra retratística de Aguilar. En ellos observamos la innegable calidad de este pintor no
solo para representar el aspecto físico sino y principalmete el carácter del modelo.
José Joaquín Bermejo, al Igual que Aguilar, la obra de Bermejo se caracteriza principalemte por los retratos.
Entre los más importantes tenemos el de Pedro José Bravo de Lagunas y Castillo y el del Conde de
Superunda. Sin embargo, su obra no se limitó a este género sino que recibió encargos de órdenes religiosa
como los mercedarios para realizar las series de la Vida de Pedro Nolasco y la de la Partida a la Guerra
Julian Jayo, uno de los trabajo más destacados de este artista es la serie compuesta de cuatro cuadros de
la Vida de San Pedro Nolasco. Los cuales se titulan: San Pedro Nolasco llevado al coro por ángeles,
Aparición de la Virgen, Nacimiento de San Pedro y
San Pedro frente a la trinidad en el cielo.
Pedro Díaz, la obra de Díaz abarca un periodo muy importante pues se encuentra a finales del siglo XVIII e
inicios del XIX. De este modo en sus pinturas observamos a los últimos representates de la corte española
en el Perú así como a personajes que forjaron la independencia americana. Entre su obra religiosa
encontramos en la Iglesia de la Merced de Lima al Rey David, Pedro Nolasco, San José con el niñoy a
Santa Cecilia. En la Iglesia Santa Teresa de Ayacucho a San José con el Niño. Enla Iglesia de Santo
Domingo de Arequipa el retrato del Arzobispo José Triego y Caro. Otras obras suyas son San Francisco
Solano, Santa Rosay los retratos de los virreyes Aviléz y O’Higgins.
Escultura Durante el siglo XVII trabajaron en Lima los siguientes escultores:
Pedro de Noguera (catalán), inicialmente activo en Sevilla. Llega a Lima en 1619. Su obra sevillana, de
gusto manierista, evoluciona hacia el barroco en obras como la sillería de la Catedral de Lima. Gana el
concurso para la creación de la Sillería del Coro de la Catedral, en sociedad con Luis de Vargas (escultor) y
Martínez A. (diseño-escultura), después para Santo Domingo. Es nombrado maestro mayor de la Catedral
de Lima. Entre sus obras figuran:
Cristo del Santo Entierro hermosa e inédita imagen articulable que procesionaba en la Semana Santa de
Lima de los años coloniales, se encuentra en la Iglesia de la Soledad, Lima.
• Sillería del Coro de la Iglesia de San Agustín, Lima 1620
• Diseño de la Pileta de la Plaza Mayor de Lima (Fundida y ejecutada por Antonio Rivas)
Gomes Hernández Galván (Valladolid) Documentado siglo XVI, Entre sus obras figuran:
• Tablas de la catedral. Antigua Sillería del Coro
• El Profeta(relieve). trabajó el canon manierista, manos grandes al estilo Berruguete, postura Bitti a la
inversa. Museo Histórico regional del Cusco:
Diego de Medina
• En la Iglesia de San Agustín de Lima, observamos su obra en la Cajonería de la sacristía y techo de la
antesacristía elaborado al estilo mudéjar. Trabajó supervisado por el padre Bejarano.
Juan Bautista Vásquez
Escultura de la Virgen conocida como La Rectora, actualmente se encuentra en el Instituto Riva Agüero
(PUCP)
Diego Rodrigues
Nuestra Señora de Copacabana de Lima venerada en el Santuario homónimo del distrito del Rimac; Es
considerada la mejor obra de las postrimerías del siglo XVI y de marcada filiación sevillana.
Alonso Gómez
La adoración de los pastores (relieve), en la Catedral de Lima.
Anónimo
Sagrada Familia de la Doble Trinidad Interesante conjunto escultórico de estilo manierista, que se encuentra
en el crucero de la Iglesia de la Soledad en Lima
Esculturas traídas a Lima durante el siglo XVII [editar]La escultura española durante este período tuvo tres
tendencias, las cuales por su importancia marcaron escuela no sólo es España sino también en
Iberoamérica. Estas fueron:
Escuela castellana, Valladolid
Escuela Andaluza, Sevilla
Escuela Andaluza, Granada
Escuela Castellana
1. Escuela castellana, Valladolid Tiene su antecedente en escultores como Alonso Berruguete, Juan de Juni
(s. XVI) y Francisco del Rincón (Representante máximo del Barroco temprano, destacando entre sus obras
su modelo de los Pasos Procesionales s. XVII).
Gregorio Fernández
En el Barroco a plenitud destacamos la figura de Gregorio Fernández, quien se muestra como un escultor
realista – naturalista. Muy dado a los cristo pasionarios.
Escenas de la pasión
Conjunto escultórico de la Familia de la Virgen (la Virgen niña esta representada parada sobre una media
luna, tiene la vestidura de oro, que destaca el uso de la técnica del estofado). esta obra la podemos
observar en uno de los retablos de la [[Iglesia de San Pedro de Lima.
2. Escuela Sevillana
Sus precedentes son Juan Bautista Vásquez “La Rectora” y Jerónimo Hernández y Martínez Montañés (s.
XVI) llamado el Dios de la Madera por la excelencia en su obra, fue el representante máximo de esta
escuela
Juan Martínez Montañés
Montañés, inicia el barroco, es atemperado en sus esculturas de estilo clásico. Igualmente, logra crear una
tipología de personajes como Cristos (sobresale dentro de su gran obra el Cristo Crucificado de la
Clemencia en la Catedral de Sevilla), Doctorcitos (niño Jesús con el mundo en las manos) y la Inmaculada
Obras en Lima
- Cristo del Auxilio en la Iglesia de la Merced de Lima. - Retablo del Bautista, donde destaca la figura del
crucificado, en la Catedral de Lima. - Santa Apolonia, en la capilla Aliaga de la Catedral de Lima - San
Francisco de Borja en uno de los retablos de la Iglesia de San Pedro. - San Francisco Javier en uno de los
retablos de la Iglesia de San Pedro. - La Virgen de la Espina en el Convento de la Buena Muerte o de San
Camilo
Juan de Mesa,
Fue discípulo de Montañés, sin mebargo en su obra se percibe un carácter más realista.
Iglesia de San Pedro: - Cristo de la Buena Muerte, en esta escultura se observa el tratamiento de los paños
de pureza es más ampulosos, los cuales se presentan sostenidos por sogas, que hace destacar la
musculatura apolínea del crucificado. Iglesia de San Pedro - Cristo acompañado por la Virgen y San Juan.
en la Capilla de la Virgen de la O también en la Iglesia de San Pedro
3. Escuela Granadina
Esta escuela lleva el realismo al extremo, pora lo cual usa artificios como ojos y lágrimas de cristal, vidrio en
el paladar, su objetivo es lograr el máximo realismo para conmover al espectador.
Alonso Cano
Influencia sevillana XVII. Realismo atemperado. Una de sus obras más importantes es la Fachada de la
Catedral de Granada.
- Retablo de la Virgen - Inmaculada del retablo de San Francisco. Sin embargo, por ser muy joven
solamente se le encargó el diseño, el trabajo lo realizaría Francisco de Ocampo - La Virgen del Monasterio
del Carmen en Trujillo
Pedro Mena
Máximo representante del realismo extremo, utiliza ojos y lagrimas de vidrio, dientes de marfil. Fue discípulo
de Alonso Cano. Una de sus obras más reconocidad es la escultura de Maria Magdalena en el Muso de
Valladolid.
En la Iglesia de San Pedro de Lima, en el retablo de San Luis Gonzaga podemos observar dos de sus obras
como son los bustos del Ecce Homo y la Dolorosa. Los cuales llegan a Lima entre 1670 y 1680.
Primer período de la Retablistica
1. Ascencio de Salas
Representante del barroco temprano, introduce las columnas melcochadas y estriadas, con el fuste
decorado por paños colgantes o cabezas femeninas. Produce un cambio en la estilística barroca e introduce
también el juego de columnas en la catedral de lima.
Obras:
- Retablo de la Inmaculada en la Catedral de Lima, el cual marcó un hito de la retablística limeña. - Portada
Retablo de la Iglesia del Copacabana - Fachada de la Iglesia de San Francisco, Lima - Retablo del Colegio
de San Inldelfonso, 1638. Actual Escuela de Bellas Artes de Lima - Retablo Mayor de la Iglesia del Carmen,
1654 - Retablo mayor de la Iglesia de la Trinidad, 1669 - "Retablo de la Purísima"(Virgen Inmaculada).
2. Cristóbal Caballero
Arquitecto y escultor, estuvo activo hasta finales del siglo XVII, continuó el trabajo de Ascencio de Salas. Su
trabajo se caracterizó por utilizar modillones y arabescos en lugar de los capiteles, éstos aparecen tanto en
su arquitectura efímera como en la local.
Trabajos:
- Terminó el Retablo de la Iglesia de la Trinidad de Lima, que había empezado Asencio de Salas - Diseño el
Túmulo de la reina Mariana de Austria - Diseño el Túmulo del rey Carlos II de España - Realizó la fachada
de la Iglesia de la Merced, después de 1687. - Escultura de San Antonio de Padua en la Iglesia de Santa
Clara en Trujillo - Escultura de San Nicolás de Tolentino en la Iglesia de San Agustín en Trujillo

3. Diego de Medina
Arquitecto, ensamblador y escultor. En 1643 realizó la Cajonería y el Techo de la Antesacristía de la Iglesia
de San Agustín, supervisado por el padre Bejarano
Escultura Montañesina
Crucificado escultura ubicada en la capilla del Cristo de la Conciliación en la Iglesia de las Nazarenas de
Lima. Este estilo se escapa de las características españolas, por la línea serpentinata, el sensualismo de las
formas y el paño de pureza. Se observa un mayor acercamiento con los Cristos de las pinturas de Rubens.
San Antonio de Padua con niño Jesús de túnica celeste, sentado sobre el libro. El santo tiene los cabellos al
estilo montañesino. Trujillo
En el Cusco la escultura toma características dramáticas, por su exopresionismo y realismo.
Sobresale la obra anónima de San Jerónimo, representado al santo penitente solo y de de rodillas. El manto
rojo del santo está representado caído sobre sus caderas, lo cual deja el torso al descubierto y permite
enfatizar los golpes de pecho que el santo se da con una piedra. La sangre, las venas bajo la piel, la boca
entreabierta, la escena del martirio refuerzan el sentido realista y dramático de la obra.
Esta escultura tiene como antecedente al San Jerónimo de Tordillano, quien dejo impresionado a Montañez
y quien hace de este un modelo iconográfico y por las características de esta pieza fue atribuida a él, sin
embargo nuevas investigaciones la atribuyen a un artista local.

Segunda etapa de la Retablística


1. Diego de Aguirre ( -1718)
Introdujo en Lima las columnas salomónicas - Baldaquino de la Catedral de Lima - Retablo de las Ánimas en
la Iglesia de San Marcelo de Lima, 1681. Columnas melcochadas y con espejos - Retablos de la Iglesia de
San Pedro de Lima, 1660/1685. Columnas salomónicas
2. Juan Tomás Tairu Tupac
Tercera etapa de la Retablística- Siglo XVIII
Durante la segunda mitad del siglo XVIII se impone la ornamentación en rocallas, debido a la influencia
francesa. El uso de la rocalla, consolidado hacia 1760 en obras como los túmulos de Maria Bárbara de
Portugal y Amalia de Sajonia, continuará hacia fines del siglo. Así, se hace presente en el Retablo Mayor de
San Lázaro, una de las obras iniciales de Matías Maestro, introductor del neoclacisismo en Lima.
1. José de Castilla
- Retablo del Señor de Burgos, en la iglesia de San Agustín de Lima (desaparecido. - Retablo Mayor de la
iglesia de Jesús María y José, Lima.
2. Atanasio Contreras del Cid
- Retablo Mayor de la Iglesia de San Sebastián, Lima (ca. 1770). Presenta columnas con elementos de
rocalla, carros alegóricos y letanías dela virgen.
3. Fernando Collado
- Retablo Mayor, iglesia de San Agustín, Trujillo - Retablo Mayor, iglesia del Carmen, Trujillo
Arquitectura
La ciudad de Lima fue construida teniendo como modelo la cuadrícula, modelo que ha sido preservado
hasta hoy y que se conoce como el "Damero de Pizarro". Las casas en la costa del Perú fueron hechas de
adobe y luego ladrillo mientras que en la sierra fueron de piedra y luego "quincha". Cabe mencionar que los
más grandes influyentes en cuanto al estilo arquitectónico fueron los terremotos de 1586, 1687 y 1746.
Durante el siglo XVII las murallas de Lima tuvieron un carácter defensivo más que delimitatorio. En 1610 se
construye el Puente de Piedra en el actual Jr. Trujillo, ubicado detrás de Palacio Gobierno, la Alameda de los
Descalzos (en extramuros pasando el río) que antiguamente tenía el nombre similar a la Alameda de
Hércules en Sevilla. En 1613 los límites de la ciudad de Lima eran de n–s el Barrio de San Lázaro en el
Rimac y de e-o el pueblo indígena del Cercado.
Arte Peruano del siglo XIX
El desarrollo de las academias en Latinoamérica empezó en México con la Real Academia de San Carlos
creada en 1785, la cual padeció los problemas políticos de la época que no permitieron su continuidad.
Después de la independencia mexicana se caracterizó por el control directo que ejercía sobre ella la
Academia de San Fernando de Madrid, en cuanto a los proyectos de pintura y arquitectura su objetivo era
establecer el “buen gusto neoclásico”, borrando todo vestigio del antiguo régimen. De la misma forma, en el
resto de Latinoamérica, se fueron formando paulatinamente las Academias instauradas por el gobierno
republicano, ya que la monarquía consideró un error la fundación de San Carlos en México.

EL ARTE POPULAR PERUANO


La artesanía peruana se encuentra entre las más variadas del mundo, como lo prueba la amplia red de
exportadores que cada año expone el ingenio de los peruanos en mercados europeos, asiáticos y
norteamericanos. Su diversidad, colorido, creatividad y múltiple funcionalidad hacen de ella una actividad
fundamental no sólo para la configuración de la identidad peruana sino también para la supervivencia de
miles de familias y aún de pueblos enteros, como los de Sarhua y Quinua, en Ayacucho.
Pequeñas y grandes piezas que causan la admiración de propios y extraños, contienen siglos de historia
cargados de formas y también símbolos prehispánicos que se funden y conviven con otros traídos por los
españoles. Esa identidad múltiple y compleja es, quizá y paradójicamente, una de las razones de la
marcada tendencia de la artesanía peruana al moderno "arte ingenuo" que impregna de ternura e inocente
sabiduría a sus piezas.

Pintura peruana del siglo XIX


Daniel Hernández
Teofilo Castillo
Francisco Laso
Arte peruano del siglo XX
El grabado peruano durante el siglo XX
El grabado es uno de los medios tecnológicos de comunicación más antiguos. Ya por los años 60 el
grabado ocupa un lugar importante dentro de las disciplinas artísticas, fue un medio accesible, comercial,
identificable y popular, permitiéndose elaborar una amplia gama de estilos.

Escultura
La escultura en el Perú republicano ha tenido sus principales exponentes durante el siglo XX. Durante las
décadas decimonónicas, la ausencia de una academia nacional impidió el surgimiento de escultores. Así,
las obras plásticas que engalanaban recintos públicos y privados en el Perú a lo largo del siglo XIX eran en
su gran mayoría producidas en talleres de Europa o por artistas del Viejo Mundo. Así, son de mencionar el
monumento ecuestre a Simón Bolívar, obra del escultor italiano Adamo Tadolini (1788-1868); y el
monumento a Cristóbal Colón, elaborado en Roma durante el gobierno de Ramón Castilla (1851). Con la
celebración del Centenario de la Independencia (1921) surge la primera generación nacional. Muchos de
ellos giraron en torno a la Escuela Nacional de Bellas Artes de Lima, fundada el 28 de setiembre de 1918;
inaugurada oficialmente el 15 de abril de 1919, cuyo primer director fue el pintor Daniel Hernández.

David Lozano Lobatón (1865-1936)


Chalaco. Autor de obras entre las que destacan el monumento ecuestre a Antonio José de Sucre y la
estatua de Leoncio Prado. Su obra cumbre es el monumento a Ramón Castilla, ubicado en la plazuela de La
Merced, en el Centro Histórico de Lima.
Artemio Ocaña Bejarano (1893-1980)
Ancashino. Su obra más conocida es el monumento a Francisco Bolognesi que reemplazó al realizado por
Agustín Querol durante el gobierno de Manuel Odría. Sin embargo, su obra cumbre fue el grupo escultórico
La Patria, calificado por la Academia Internazionale di Pontzen di Lettere, Sciense ed Arti de Nápoles como
el monumento más bello de la humanidad.
Miguel Baca Rossi (1917- )
Lambayecano. (Véase artículo sobre Miguel Baca Rossi)
Joaquín Roca Rey (1923- )
Limeño, fue Premio Nacional de Escultura en 1951. Entre sus muestras se cuentan 38 personales y 150
colectivas en numerosos países.
Raúl Franco Ochoa (1955- )
Limeño. Estudió en la Escuela Nacional de Bellas Artes, de la que después fue docente. Entre sus obras
destacan el Monumento a los Héroes del Cenepa y al campeón olímpico Edwin Vásquez Cam, ubicados en
Lima. Autor de bustos en los cuales denota apreciable habilidad para el retrato artístico, son de mencionar
los realizados en torno a las figuras de Fernando Belaúnde (2003), Horacio Zeballos (2001), Juan Landázuri
(1997), Alejandro Graña (1996) y Raúl Acha Rovira (1995), entre otros. Un hito destacable en su trayectoria
artística ha sido la figura del historiador Jorge Basadre, al cual ha encarnado en distintas ocasiones. En
1995 lo plasmó en un busto ubicado en la Biblioteca Nacional de Lima, cuya réplica da desde el 2003
nombre al Hall Basadre del Palacio de Gobierno del Perú. En el 2004, realizó una versión sedente del
personaje el cual se halla en la Casa Basadre de Tacna. Finalmente, el 2005 lo esculpió en mármol para el
mausoleo familiar del personaje.

Arte Mural del siglo XX


Máximo exponente de este género es el Dr.Teodoro Núñez Ureta, artista que no solo ejerció el oficio de las
bellas artes, era a su vez un filósofo y escritor notable de su época. Su vasta cultura en historias y su
perfecto domínio del dibujo le permitió recrear la historia y las viviencias de su pueblo. El sucesor de este
estilo histórico monumental es su hijo Teodoro Núñez Rebaza, quien hizo un importante aporte técnico en
sus vitrales de fibra de vidrio en la Corte Superior de Justicia de Arequipa.

Autor:
Luis Fernando Llauca Prada
fernando_ingenieros@hotmail.com

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