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Subgéneros narrativos

Clasificación Tradicional : mito, fábula, epopeya,


leyenda, cuento y novela.
El mito
Los mitos son textos narrativos que relatan acontecimientos fabulosos
protagonizados por dioses, semidioses y héroes pertenecientes a diversas
culturas. También suelen explicar mágicamente los fenómenos de la naturaleza
o los sucesos cósmicos relacionados con la creación del mundo. Los más
conocidos entre nosotros son los que provienen de la mitología grecolatina,
filtrados, entre otros autores, por el poeta latino del siglo V Ovidio en su famosa
obra las Metamorfosis, donde los más diversos seres sufren transformaciones
milagrosas, bien para ser compensados de sus desgracias, bien para obtener
beneficios diversos. Casi todos los mitos adquieren valor de alegoría o símbolo.
Los trabajos de Hércules, las transformaciones de Zeus para lograr los
beneficios amorosos de jóvenes mortales, la de Dafne, la historia amorosa de
Orfeo y Eurídice y de tantas parejas de enamorados que nos han legado las
literaturas de Occidente, el viaje de los Argonautas en busca del Vellocino de
Oro, etc, son unos cuantos ejemplos.

La Fabula.

Las fábulas son una serie de relatos o composiciones literarias, las


principales características de la fábula es que en estos cuentos se
humanizan a los personajes y los personajes son generalmente animales u
objetos.

Se les atribuye artíficamente la capacidad de hablar, caminar e incluso vestirse


como los hombres y su objetivo es que sean identificados los personajes tanto
en sus cualidades de animales como en su cualidad de hombres (búho sabio),
así los niños podrán con más facilidad entender la idea explicada.

Se puede decir que es un género exclusivo, aunque forma parte de los relatos
y de las ficciones y su escritura puede realizarse tanto en prosa como en verso
y se puede alterar lo necesario para poder expresar la moraleja que desea
explicar el autor.

Hay cuatro autores muy reconocidos en este género:

o Gayo Julio Fedro.


o Samaniego.
o Juan de la Fontaine.
o Esopo.
Usos y Características de la Fabula

Las fábulas son utilizadas para darles ejemplos de moral, principalmente a los
niños, en donde los animales y objetos asumen actividades y formalismos
propios del ser humano y así acercar a la mente infantil, conceptos que de otra
forma se mantendrían muy alejados; explotando para ello la imaginación infantil

Las fábulas
siempre son cortas y cuando no es relatado sino escrito puede ser en verso o
en prosa, y lleva conversaciones lógicas, como sucede en los diálogos escritos,
que dejan clara toda la idea a transmitir, culminando con la ya mencionada
moraleja Así, volviendo al concepto inicial, el animal o el objeto elegido por
el escritor, guardará alguna similitud con el personaje que se desea comunicar.
Ejemplo:

Zorro = astucia

Búho = Inteligencia

La Epopeya.

Éste, el género narrativo más antiguo, tiene su origen en las grandes


narraciones épicas y heroicas de la Antigüedad: fundamentalmente, en la Ilíada
y en

la Odisea. La epopeya está escrita en verso, y su destino es el canto o la


recitación. El tema central de la misma lo constituyen los intereses e ideales de

la sociedad en la que surge, y los personajes, más que personas reales, se


convierten en tipos literarios que encarnan distintas cualidades humanas

inmutables. Así destacan el soberano, el consejero, en vasallo fiel, el amigo, la


bella mujer, la esposa amante, y un largo etcétera. El héroe épico es un

personaje noble, cuyos rasgos fundamentales son la valentía y la capacidad de


lucha. El narrador épico más trascendente es Homero, cuya maestría

narrativa resulta natural e imitable por autores que también alcanzaron la fama.
La Ilíada cuenta los últimos días de la guerra de Troya. La Odisea, el
regreso de Ulises a su hogar después de la guerra.

La Leyenda

Una leyenda es una narración proveniente de la tradición oral, que se ocupa de


contar hechos naturales o sobrenaturales, dentro de un tiempo y lugar
definidos, formando parte de la cosmovisión de una cultura. Por lo tanto, la
leyenda es un relato folclórico.
Como el mito, la leyenda busca dar explicación y/o fundamento a un hecho.
Pero mientras el mito busca explicar el origen del mundo, la leyenda se basa
en lo cotidiano y concreto, explicándose, por ejemplo, el origen del nombre de
un lugar o la formación de un lago, etc. En este sentido también se distancia
del cuento, pues siempre está ubicado en un lugar y tiempo reales, pues
tiene bases históricas.
Otro rasgo distintivo de la leyenda es que su eje central es el hombre (a
diferencia del mito que se centra en dioses y seres sobrenaturales). A
diferencia del cuento, la leyenda no narra sobre un hombre singular, sino mas
bien arquetípico, es decir, los personajes de la leyenda son el anciano sabio, el
joven temerario, el héroe, etc.

El cuento
Género narrativo de extensión breve, en prosa, de asunto ficticio, que posee
una trama sencilla (reducida generalmente a una sola acción), pocos
personajes y escasas descripciones. El cuento nació siendo popular y
transmitido oralmente para pasar a ser culto y literario a partir del siglo XIV y
adquirir su mayor auge en el XIX. El cuento popular fue anónimo. Existen
varias clases de cuentos populares: de hadas, de héroes, de animales...;
aunque también se pueden clasificar de otras maneras: infantiles, fantásticos,
realistas... Los cuentos populares fueron imitados enseguida por autores de
nombre conocido (Don Juan Manuel, entre otros), para más tarde ser
compuestos originalmente (Timoneda, Cervantes, Espronceda, Pedro Antonio
de Alarcón, "Clarín"...), y así llegar a la época contemporánea (Martín Gaite,
Cela, Delibes...). Todos estos cuentos reciben el nombre de literarios, que entre
otros caracteres, han ido perdiendo su afán moralizador, a cambio de ganar en
belleza de estilo y elaboración artística.

La novela
Debido a su complejidad, la novela es el género narrativo más importante.
Como decía Galdós, la novela es "la imagen de la vida y el arte de componerla
estriba en reproducir los caracteres humanos, las pasiones, las debilidades, lo
grande y lo pequeño, las almas y las fisonomías, todo lo espiritual y lo fisico
que nos constituye y nos rodea."
La novela puede clasificarse en varios tipos según su contenido: picaresca, si
sigue el modelo abierto por el Lazarillo de Tormes en 1554, es decir,
autobiográfica, protagonizada por un personaje antihéroe, a veces perverso y
delincuente, que sirve a varios amos y lucha por no morir de hambre, medrar
socialmente en un mundo degradado y corrupto y adquirir honra aunque sea
aparente. Ejemplos: Guzmán de Alfarache (1599), Vida del escudero Marcos
de Obregón (1618), El Buscón don Pablos (1626), etc. Caballeresca, si procede
de las narraciones referidas a la Corte del rey Arturo y de los ciclos bretón y
carolingio y cuaja en el Amadís de Gaula, refundido por Garci- Rodríguez de
Montalvo en el siglo XVI. Obra maestra del género es el Tirant lo Blanc, escrito
por Joanot Martorell y Martí Joan de Galba en el siglo XV. En ellas un narrador
omnisciente (en 3ª persona) relata aventuras heroicas y extraordinarias
llevadas a cabo por un caballero andante. Pastoril, si se inspira en Teócrito o
Virgilio (Églogas) y la Arcadia, de Sannazaro, entre otros; en medio de un
hermoso paisaje tienen lugar conversaciones amorosas entre pastores (suelen
ocultar personajes nobles) en una lengua elevada. Muestras de novela pastoril
son los Siete libros de Diana (1559), Diana enamorada (1564), La Galatea
(1585), etc. También existen otras clases de novela: gótica, novela
prerromántica, poblada de terrores y misterios (hombres-lobo, brujas,
fantasmas), que desembocó en otros tipos de novela, como la fantástica de
Dickens; histórica, que se inició en el Romanticismo y ambientaba su acción en
épocas pasadas como la Edad Media (El señor de Bembibre) y luego siguió
cultivándose (Episodios Nacionales), hasta llegar a nuestra época (El hereje);
intelectual, de acción casi inexistente y cuyos personajes sirven para exponer
ideologías y modos de concebir la existencia (Berlarmino y Apolonio); social,
que cuenta problemas que tienen que ver con el desequilibrio de la riqueza, las
condiciones sociales en que viven obreros y hombres del campo en contraste
con las gentes pudientes y acaudaladas, la injusticia, la política...; entre
nosotros, se da a partir de la Guerra Civil (La piqueta), y un largo etcétera.

…………..

El cuento. El cuento es una narración breve de hechos ficticios protagonizada


por un número reducido de personajes y con un argumento sencillo. Existen
dos tipos de cuentos: los populares o folclóricos (relatos anónimos que han ido
transmitiendo por tradición oral a lo largo de generaciones) y los literarios
(aquellos que han sido inventados por autores concretos y se han transmitido
única y exclusivamente por vía escrita).

El relato. El relato es una narración corta, regularmente resultado de


una inspiración inmediata y que no requiere la estructura formal de un cuento.
Es una estructura discursiva, caracterizada por la heterogeneidad narrativa, y
en el cuerpo de un mismo relato, pueden aparecer diferentes tipos de discurso.
Es por tanto un conocimiento que se transmite, por lo general en detalle,
respecto a un cierto hecho.

La novela. La novela es una narración extensa en prosa de sucesos


imaginarios con un argumento complejo y una caracterización exhaustiva de
los personajes. Con frecuencia se incluyen fragmentos descriptivos y
dialogados, los cuales contribuyen a dar viveza al relato. Existen varios
subgéneros dentro de la novela. Los más característicos son:

1. Novela fantástica - historia desarrollada en espacios imaginarios y con


seres irreales.
2. Novela realista - refleja la realidad con toda su dureza.
3. Novela histórica - se ambienta en un momento y un lugar del pasado
relevante en la
historia.
4. Novela de aventuras - nos cuentan peripecias, viajes, guerras... de los
personajes.
5. Novela de humor - pretende hacernos reír.
6. Novela de ciencia ficción - narra historias que suceden en el futuro.
7. Novela negra y de terror - encierra en su interior enigmas, crímenes y
misterios. A esta le
pertenece la novela gótica.
8. Novela rosa - su tema principal es el amor.
9. Novelas policíacas - se centran en una indagación que conduce al
esclarecimiento de un
crimen.
10. Novelas de aprendizaje - están protagonizadas por un niño o por un
adolescente que va
adquiriendo experiencia en la vida y va forjando su personalidad a lo
largo del relato.
11. Novelas de caballerías - se centran en las aventuras de caballeros
andantes.
12. Novela picaresca - se refiere a la vida pintoresca de los truhanes,
hampones, tahúres,
vagabundos, en una palabra: pícaros que se involucran en todo tipo
de situaciones y de las
que suelen salir airosos.
13. Novela psicológica - describe sobre todo los conflictos espirituales y/o
psicológicos de los
personajes, que son analizados minuciosamente, bien siguiendo el
hilo de sus pensamientos
(monólogos), o bien transcribiendo aquellos textos –diarios íntimos,
cartas (novela
epistolar), etc. – que se suponen escritos por dichos personajes.
14. Novela costumbrista - en estas se presentan conductas humanas de
personajes y tipos
analizados en su contexto histórico y entorno social, como
representantes significativos de
un grupo humano y de su esquema de valores en el marco de una
sociedad concebida como
totalidad.
15. Novela biográfica - toma los grandes hombres o héroes como seres
corrientes y los lleva
desde la cuna hasta la cima de la gloria y luego hasta la tumba.
16. Novela de tesis - es la que presenta conflictos o problemas de orden:
religiosos, políticos,
sociales, etc., predominando la idea sobre la acción y generalmente
hay un propósito
docente y hasta polémico: el autor combate por sus ideas y mueve
de capricho sus
personajes para llegar a resultados preconcebidos.

La leyenda. Es un relato de difusión oral que narran hechos


sobrenaturales pero
presentados como si realmente hubieran ocurrido. Con ello se pretende dar un
explicación fantástica a hechos que no pueden ser explicados racionalmente.
No obstante, existen también leyendas literarias, las cuales fueron inventadas y
escritas por un autor determinado en un momento concreto.

El mito. Es una narración de hechos imaginarios protagonizada


generalmente por dioses o héroes y que ha sido originariamente divulgada de
forma oral. El conjunto de mitos característicos de una determinada cultura
recibe el nombre de mitología y, de entre todos los mitos existentes, podríamos
destacar los que se desarrollaron en las antiguas civilizaciones griega y romana
debido a la fuerte influencia que han ejercido en nuestra cultura occidental.
Existen diversos tipos de mitos, a saber:

1.Cosmológicos - intentan explicar el origen del universo.


2.Cosmogónicos - intentan explicar la creación del mundo.
3.Teogónicos - narran el origen de los dioses.
4.Antropogénicos - intentan explicar el origen del ser humano.
5. Etiológicos - narran el origen de seres, las cosas, las técnicas y las
instituciones.
6. Morales - explican la existencia del bien y el mal.
7. Fundacionales - cuentan cómo se fundaron las ciudades por los dioses.
8. Escatológicos - anuncian el fin último de las cosas, el fin del mundo.

La saga. Se referirse a una narración parecida a una epopeya familiar


que se extiende a varias generaciones, dividida en episodios, actos o
volúmenes; o simplemente de forma imprecisa a cualquier historia en varias
entregas.

La fábula. Son relatos en prosa o verso protagonizados por animales


que asumen características humanas y que terminan con una enseñanza moral
o moraleja.

El poema épico. Narración extensa en verso que relata las hazañas de


un personaje histórico importante para una colectividad. En muchas ocasiones,
el relato histórico se mezcla con la imaginación popular para hacer sobresalir al
personaje con hazañas increíbles y actos heroicos.

El microrrelato. Es una construcción literaria narrativa distinta de la


novela o el cuento. Es la denominación más usada para un conjunto de obras
diversas cuya principal característica es la brevedad de su contenido, su
diversidad temática y su caracterización como género híbrido. El microrrelato
también es llamado microcuento, minificción, microficción, cuento brevísimo,
minicuento.

…….

Cuento: La palabra cuento proviene del término latino compŭtus, que significa “cuenta”.
El concepto hace referencia a una narración breve de hechos imaginarios. Su especificidad no
puede ser fijada con exactitud, por lo que la diferencia entre un cuento extenso y una novela
corta es difícil de determinar.
Un cuento presenta un grupo reducido de personajes y un argumento no demasiado complejo,
ya que entre sus características aparece la economía de recursos narrativos.

Ejemplo:

El Gigante Egoísta

El Gigante Egoísta
(Oscar Wilde)
Todas las tardes, a la salida de la escuela, los niños se habían acostumbrado a ir a jugar
al jardín del gigante. Era un jardín grande y hermoso, cubierto de verde y suave césped.
Dispersas sobre la hierba brillaban bellas flores como estrellas, y había una docena de
melocotones que, en primavera, se cubrían de delicados capullos rosados, y en otoño
daban sabroso fruto.

Los pájaros se posaban en los árboles y cantaban tan deliciosamente que los niños
interrumpían sus juegos para escucharlos.

-¡Qué felices somos aquí!- se gritaban unos a otros.

Un día el gigante regresó. Había ido a visitar a su amigo, el ogro de Cornualles, y


permaneció con él durante siete años. Transcurridos los siete años, había dicho todo lo
que tenía que decir, pues su conversación era limitada, y decidió volver a su castillo. Al
llegar vio a los niños jugando en el jardín.

-¿Qué estáis haciendo aquí?- les gritó con voz agria. Y los niños salieron corriendo.

-Mi jardín es mi jardín- dijo el gigante. -Ya es hora de que lo entendáis, y no voy a
permitir que nadie mas que yo juegue en él.

Entonces construyó un alto muro alrededor y puso este cartel:


Prohibida la entrada.
Los transgresores serán
procesados judicialmente.

Era un gigante muy egoísta.

Los pobres niños no tenían ahora donde jugar.

Trataron de hacerlo en la carretera, pero la carretera estaba llena de polvo y agudas


piedras, y no les gustó.

Se acostumbraron a vagar, una vez terminadas sus lecciones, alrededor del alto muro,
para hablar del hermoso jardín que había al otro lado.

-¡Que felices éramos allí!- se decían unos a otros.

Entonces llegó la primavera y todo el país se llenó de capullos y pajaritos. Solo en el


jardín del gigante egoísta continuaba el invierno.

Los pájaros no se preocupaban de cantar en él desde que no había niños, y los árboles se
olvidaban de florecer. Solo una bonita flor levantó su cabeza entre el césped, pero
cuando vio el cartel se entristeció tanto, pensando en los niños, que se dejó caer otra vez
en tierra y se echó a dormir.

Los únicos complacidos eran la Nieve y el Hielo.

-La primavera se ha olvidado de este jardín- gritaban. -Podremos vivir aquí durante todo
el año

La Nieve cubrió todo el césped con su manto blanco y el Hielo pintó de plata todos los
árboles. Entonces invitaron al viento del Norte a pasar una temporada con ellos, y el
Viento aceptó.

Llegó envuelto en pieles y aullaba todo el día por el jardín, derribando los capuchones
de la chimeneas.

-Este es un sitio delicioso- decía. -Tendremos que invitar al Granizo a visitarnos.

Y llegó el Granizo. Cada día durante tres horas tocaba el tambor sobre el tejado del
castillo, hasta que rompió la mayoría de las pizarras, y entonces se puso a dar vueltas
alrededor del jardín corriendo lo más veloz que pudo. Vestía de gris y su aliento era
como el hielo.

-No puedo comprender como la primavera tarda tanto en llegar- decía el gigante egoísta,
al asomarse a la ventana y ver su jardín blanco y frío. -¡Espero que este tiempo
cambiará!

Pero la primavera no llegó, y el verano tampoco. El otoño dio dorados frutos a todos los
jardines, pero al jardín del gigante no le dio ninguno.

-Es demasiado egoísta- se dijo.

Así pues, siempre era invierno en casa del gigante, y el Viento del Norte, el Hielo, el
Granizo y la Nieve danzaban entre los árboles.

Una mañana el gigante yacía despierto en su cama, cuando oyó una música deliciosa.
Sonaba tan dulcemente en sus oídos que creyó sería el rey de los músicos que pasaba
por allí. En realidad solo era un jilguerillo que cantaba ante su ventana, pero hacía tanto
tiempo que no oía cantar un pájaro en su jardín, que le pareció la música más bella del
mundo. Entonces el Granizo dejó de bailar sobre su cabeza, el Viento del Norte dejó de
rugir, y un delicado perfume llegó hasta él, a través de la ventana abierta.

-Creo que, por fin, ha llegado la primavera- dijo el gigante; y saltando de la cama miró
el exterior. ¿Qué es lo que vio?

Vio un espectáculo maravilloso. Por una brecha abierta en el muro los niños habían
penetrado en el jardín, habían subido a los árboles y estaban sentados en sus ramas. En
todos los árboles que estaban al alcance de su vista, había un niño. Y los árboles se
sentían tan dichosos de volver a tener consigo a los niños, que se habían cubierto de
capullos y agitaban suavemente sus brazos sobre las cabezas de los pequeños.

Los pájaros revoloteaban y parloteaban con deleite, y las flores reían irguiendo sus
cabezas sobre el césped. Era una escena encantadora. Sólo en un rincón continuaba
siendo invierno. Era el rincón más apartado del jardín, y allí se encontraba un niño muy
pequeño. Tan pequeño era, no podía alcanzar las ramas del árbol, y daba vueltas a su
alrededor llorando amargamente. El pobre árbol seguía aún cubierto de hielo y nieve, y
el Viento del Norte soplaba y rugía en torno a él.

-¡Sube, pequeño!- decía el árbol, y le tendía sus ramas tan bajo como podía; pero el niño
era demasiado pequeño. El corazón del gigante se enterneció al contemplar ese
espectáculo.

-¡Qué egoísta he sido- se dijo. -Ahora comprendo por qué la primavera no ha venido
hasta aquí. Voy a colocar al pobre pequeño sobre la copa del árbol, derribaré el muro y
mi jardín será el parque de recreo de los niños para siempre.

Estaba verdaderamente apenado por lo que había hecho.


Se precipitó escaleras abajo, abrió la puerta principal con toda suavidad y salió al
jardín.

Pero los niños quedaron tan asustados cuando lo vieron, que huyeron corriendo, y en el
jardín volvió a ser invierno.

Sólo el niño pequeño no corrió, pues sus ojos estaban tan llenos de lágrimas, que no vio
acercarse al gigante. Y el gigante se deslizó por su espalda, lo cogió cariñosamente en
su mano y lo colocó sobre el árbol. El árbol floreció inmediatamente, los pájaros fueron
a cantar en él, y el niño extendió sus bracitos, rodeó con ellos el cuello del gigante y le
besó.

Cuando los otros niños vieron que el gigante ya no era malo, volvieron corriendo y la
primavera volvió con ellos.

-Desde ahora, este es vuestro jardín, queridos niños- dijo el gigante, y cogiendo una
gran hacha derribó el muro. Y cuando al mediodía pasó la gente, yendo al mercado,
encontraron al gigante jugando con los niños en el más hermoso de los jardines que
jamás habían visto.

Durante todo el día estuvieron jugando y al atardecer fueron a despedirse del gigante.

-Pero, ¿dónde está vuestro pequeño compañero, el niño que subí al árbol?- preguntó.

El gigante era a este al que más quería, porque lo había besado.

-No sabemos contestaron los niños- se ha marchado.

-Debéis decirle que venga mañana sin falta- dijo el gigante.

Pero los niños dijeron que no sabían donde vivía y nunca antes lo habían visto. El
gigante se quedó muy triste.

Todas las tardes, cuando terminaba la escuela, los niños iban y jugaban con el gigante.
Pero al niño pequeño, que tanto quería el gigante, no se le volvió a ver. El gigante era
muy bondadoso con todos los niños pero echaba de menos a su primer amiguito y a
menudo hablaba de él.
-¡Cuánto me gustaría verlo!- solía decir.

Los años transcurrieron y el gigante envejeció mucho y cada vez estaba más débil. Ya
no podía tomar parte en los juegos; sentado en un gran sillón veía jugar a los niños y
admiraba su jardín.

-Tengo muchas flores hermosas- decía, pero los niños son las flores más bellas.

Una mañana invernal miró por la ventana, mientras se estaba vistiendo. Ya no detestaba
el invierno, pues sabía que no es sino la primavera adormecida y el reposo de las flores.

De pronto se frotó los ojos atónito y miró y remiró. Verdaderamente era una visión
maravillosa. En el más alejado rincón del jardín había un árbol completamente cubierto
de hermosos capullos blancos. Sus ramas eran doradas, frutos de plata colgaban de ellas
y debajo, de pie, estaba el pequeño al que tanto quiso.

El gigante corrió escaleras abajo con gran alegría y salió al jardín. Corrió
precipitadamente por el césped y llegó cerca del niño. Cuando estuvo junto a él, su cara
enrojeció de cólera y exclamó:

- ¿Quién se atrevió a herirte?- Pues en las palmas de sus manos se veían las señales de
dos clavos, y las mismas señales se veían en los piececitos.

-¿Quién se ha atrevido a herirte?- gritó el gigante. -Dímelo para que pueda coger mi
espada y matarle.

-No- replicó el niño, pues estas son las heridas del amor.

-¿Quién eres?- dijo el gigante; y un extraño temor lo invadió, haciéndole caer de rodillas
ante el pequeño.

Y el niño sonrió al gigante y le dijo:

-Una vez me dejaste jugar en tu jardín, hoy vendrás conmigo a mi jardín, que es el
Paraíso.

Y cuando llegaron los niños aquella tarde, encontraron al gigante tendido, muerto, bajo
el árbol, todo cubierto de capullos blancos.

Novela: La novela (del italiano novella, noticia) es, según la RAE, una obra literaria en
prosa en la que se narra una acción fingida en todo o en parte, y cuyo fin es causar placer
estético a los lectores con la descripción o pintura de sucesos o en lances interesantes, de
caracteres, de pasiones y de costumbres.

Ejemplo:

100 años de Soledad ( Fragmento )


( Gabriel García Marquéz )
" Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar
aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. Macondo era entonces una aldea de
veinte casas de barro y cañabrava construida a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por
un lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era tan reciente, que
muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había que señalarlas con el dedo.
(...)

José Arcadio Buendía, que era el hombre más emprendedor que se vería jamás en la aldea, había
dispuesto de tal modo la posición de las casas, que desde todas podía llegarse al río y abastecerse de agua
con igual esfuerzo, y trazó las calles con tan buen sentido que ninguna casa recibía más sol que otra a la
hora del calor. En pocos años, Macondo fue una aldea más ordenada y laboriosa que cualquiera de las
conocidas hasta entonces por sus trescientos habitantes. Era en verdad una aldea feliz, donde nadie era
mayor de treinta años y donde nadie había muerto.
(...)
Vio una mujer vestida de oro en el cogote de un elefante. Vio un dromedario triste. Vio un oso vestido de
holandesa que marcaba el compás de la música con un cucharón y una cacerola. Vio a los payasos
haciendo maromas en la cola del desfile, y le vio otra vez la cara a su soledad miserable cuando todo
acabó de pasar, y no quedó sino el luminoso espacio en la calle, y el aire lleno de hormigas voladoras, y
unos cuantos curiosos asomados al precipicio de la incertidumbre. Entonces fue el castaño, pensando en
el circo, y mientras orinaba trató de seguir pensando en el circo, pero ya no encontró el recuerdo. Metió la
cabeza entre los hombros, como un pollito, y se quedó inmóvil con la frente apoyada en el tronco del
castaño.
(...)
En aquél Macondo olvidado hasta por los pájaros, dónde el polvo y el calor se habían hecho tan tenaces
que costaba trabajo respirar, recluidos por la soledad y el amor y por la soledad del amor en una casa
dónde era casi imposible dormir por el estruendo de las hormigas coloradas, Aureliano y Amaranta
Ursula eran los únicos seres felices, y los más felices sobre la tierra. "

Entre los Subgéneros narrativos menores se encuentran:

Fábula: La fábula es un relato breve escrito en prosa o verso, donde los protagonistas
son animales que hablan. Las fábulas se hacen con la finalidad de educar, lo cual es la moraleja,
esta normalmente aparece al final, al principio o no aparece porque se encuentra en el mismo
contenido del escrito. Algunos famosos escritores de fábulas son : Esopo, La Fontaine y
Samaniego.

El Pastor Mentiroso y el Lobo


( Esópo )

Una vez, un Pastorcillo queriendo divertirse a costa de los demás, se puso a gritar con todas sus fuerzas:

"¡El lobo! ¡Viene el lobo!"


Entonces, los Campesinos vecinos al oírle, corrieron en su auxilio, pero al llegar donde este, encontraron
al Pastorcillo acostado tranquilamente a la sombra de un árbol. Al día siguiente, y con más ganas de
bromear, volvió a la misma jugada este Pastorcillo, y gritando dijo:

"¡Socorro, socorro! ¡viene el lobo!"

Los demás campesinos escuchando el auxilio, acudieron inmediatamente armados con hachas y palos. Sin
embargo, su sorpresa fue muy molestaya que no encontraron Lobo alguno, mas solo
al Pastorcillo carcajeándose de la risa por su gran mentira. Los pastores indignados, regresaron
disgustados a sus campos.

Al poco rato, un Lobo se apareció en la granja del Pastorcillo mentiroso, y aunque este mentirosillo,
gritaba con todas sus fuerzas auxilio, nadie acudió a salvarlo. El Lobo, no teniendo contrincante alguno,
se hizo dueño de las ovejas y para terminar con broche de oro su fechoría, se comió también, al
Pastorcillo mentiroso.

Mito:Los mitos son relatos creados por los pueblos para explicar el origen del universo, de
la humanidad y fenómenos de la naturaleza. Presentan una estructura similar a la de los cuentos
de ficción, pero son de carácter sagrado y manifiestan creencias comunes de una cultura o
religión .

Ejemplo:
Medusa y Perseo
En el tiempo de los dioses y los héroes, hace mucho, vivían en la región del monte Atlas unas hermanas
espantosas, conocidas con el nombre de Gorgonas. Las más terribles de ellas se llamaban Medusa. De la
cabeza de Medusa, en lugar de cabellos, salían culebras vivas. Y cuando Medusa veía cara a cara a un
hombre, a un perro, a un ser vivo, el hombre y el perro y el ser vivo quedaban convertidos
instantáneamente en estatuas de piedra.

A lo largo de los años, muchos héroes valientes y bien armados habían venido a la región del monte Atlas
para matar a Medusa. Ninguno había podido matarlo. Por todas partes se veían guerreros y más guerreros,
en actitudes diversas, pero inmóviles y tiesos porque eran ya estatuas.
Entonces vino Perseo, hijo del dios Júpiter. Perseo sabía qué peligrosos eran los ojos de Medusa, pero
venía muy bien. Preparado. Tenía una espada encorvada, filosísima, regalo del dios Mercurio, Tenía un
escudo muy fuerte, hecho de bronce, liso como un espejo. Y tenía también unas alas que volaban solas
cada vez que él se las acomodaba en los talones.
Llegó, pues, volando. Pero en vez de lanzarse contra Medusa, se quedó

algo lejos, sin preocuparse más que de una cosa: no mirarla nunca cara a cara, no verla a los ojos por
ningún motivo. Y como era necesario espiarla todo el tiempo, usó el escudo de bronce como espejo, y en
él observaba lo que ella hacía.
Medusa iba de un lado para otro, esforzándose en asustar a Perseo, Gritaba cosas espantosas, y las
culebras de su cabeza se movían y silbaban con furia. Pero nunca consiguió que Perseo la viera
directamente. Cansada al fin, Medusa se fue quedando dormida. Sus ojos terribles se cerraron, y poco a
poco se durmieron también sus culebras. Entonces se acercó Perseo sin ruido, empuñó la espada y de un
solo tajo le cortó la cabeza. Durante toda su vida conservó Perseo la cabeza de Medusa, que varias veces
le sirvió para convertir en piedra a sus enemigos.

Leyenda:Una leyenda es una narración de un suceso con un parte de realidad y con


otra fantasiosa, las leyendas se transmiten generalmente de generación en generación. Forma
parte de la cultura y las creencias de cada pueblo, ciudad o país, cuando las leyendas se pasan de
generación en generación sufren algunos cambios en su contexto, varia un poco la leyenda
contada a la narración pero el objetivo es el mismo.

Ejemplo:

La Llorona

Cuenta la leyenda que en un lejano pueblo vivía una mujer junto con sus tres hijitos. Todo iba muy bien
en la familia, los niños eran muy felices y su madre los quería muchísimo. Pero una noche lluviosa de
invierno ocurrió algo terrible.
Aquella noche, llegó a casa el padre, quien los había abandonado tiempo atrás. Sin él la familia había sido
más feliz y esa noche sus gritos y borracheras se volverían a notar en la casa, por no hablar de las brutales
palizas que tanto los niños como la madre sufrirían. La mujer siempre había rezado para que no regresara
nunca más, pero el destino quiso otra cosa.

El hombre era un monstruo y tiró de un puñetazo la puerta y entró gritando que todos fueran a recibirlo,
los niños, espantados, se escondieron y la madre, por amor a sus hijos, se enfrentó cara a cara con su
marido. La mujer sufrió un golpe que la dejó sin sentido durante varias horas. Cuando la madre despertó,
buscó a sus hijos por todos los rincones de la casa. Pero ni los niños ni su marido se hallaban por ninguna
parte, desesperada, corrió bajo la tormenta llorando y gritando sus nombres, pasaron días, meses, años,
muchos años buscando...

Hasta que finalmente una noche murió de tristeza, nadie supo nada de los niños, nadie los vio nunca más,
no aparecieron sus cuerpos o alguna señal del hombre que se los llevó.

Desde entonces se dice que su espíritu no descansa en paz y todas las noches se le oye llorar y lamentar
con tristeza por los alrededores. Las mujeres corren tras sus hijos para esconderlos, ya que cuentan que
se los puede llevar la llorona, para volver a ser feliz.

Epopeya:La epopeya es un subgénero épico, es decir, narrativo, escrito la mayor parte


de las veces en verso largo (hexámetro), o prosa que consiste en la narración extensa de acciones
trascendentales o dignas de memoria para un pueblo en torno a la figura de un héroe que
representa sus virtudes de más estima. Casi siempre estas acciones son guerras o viajes y suelen
ser muy extensas. En ella intervienen muchas veces los dioses y existen elementos fantásticos,
cada vez más escasos en los cantares de gesta o epopeyas medievales y, ya en el siglo XIX,
absolutamente eliminados en la novela realista o epopeya del héroe vulgar o de la clase media
que por entonces conquistó el poder político y el prestigio social y reveló en ella los valores de la
burguesía: el individualismo y el materialismo.

Ejemplo:
La Odisea ( fragmento )
Homero
" Entretanto la sólida nave en su curso ligero
se enfrentó a las Sirenas: un soplo feliz la impelía
mas de pronto cesó aquella brisa, una calma profunda
se sintió alrededor: algún dios alisaba las olas.
Levantáronse entonces mis hombres, plegaron la vela,
la dejaron caer al fondo del barco y, sentándose al remo,
blanqueaban de espumas el mar con las palas pulidas.
Yo entretanto cogí el bronce agudo, corté un pan de cera
y, partiéndolo en trozos pequeños, los fui pellizcando
con mi mano robusta: ablandáronse pronto, que eran
poderosos mis dedos y el fuego del sol de lo alto.
Uno a uno a mis hombres con ellos tapé los oídos
y, a su vez, me ataron de piernas y manos
en el mástil, derecho, con fuertes maromas y, luego,
a azotar con los remos volvieron al mar espumante.
Ya distaba la costa no más que el alcance de un grito
y la nave crucera volaba, mas bien percibieron
las Sirenas su paso y alzaron su canto sonoro:
"Llega acá, de los dánaos honor, gloriosísimo Ulises,
de tu marcha refrena el ardor para oír nuestro canto,
porque nadie en su negro bajel pasa aquí sin que atienda
a esta voz que en dulzores de miel de los labios nos fluye.
Quien la escucha contento se va conociendo mil cosas:
los trabajos sabemos que allá por la Tróade y sus campos
de los dioses impuso el poder a troyanos y argivos
y aún aquello que ocurre doquier en la tierra fecunda".
Tal decían exhalando dulcísima voz y en mi pecho
yo anhelaba escucharlas. Frunciendo mis cejas mandaba
a mis hombres soltar mi atadura; bogaban doblados
contra el remo y en pie Perimedes y Euríloco, echando
sobre mí nuevas cuerdas, forzaban cruelmente sus nudos.
Cuando al fin las dejamos atrás y no más se escuchaba
voz alguna o canción de Sirenas, mis fieles amigos
se sacaron la cera que yo en sus oídos había
colocado al venir y libráronme a mí de mis lazos. "

CONCLUSION.
Los géneros literarios no surgieron espontáneamente, estos alcanzaron su auge según la
situación que se vivía en su época o el estado de animo del autor, esto nos quiere decir que la
literatura se puede transformar de un momento a otro, o que varia de persona a otra porque
humanos, los autores tienen variaciones en sus sentimientos; es por esto que tenemos a nuestra
disposición una gran variedad de obras de arte, ya sea de texto como teatro, poemas, canciones,
etc.

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