Jorge Osvaldo Gorodner Médico y Doctor en Medicina (UBA), Profesor Honorario de Medicina (UBA), Académico de la Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires, Director Investigador del Instituto de Medicina Regional-UNNE, Prosecretario de la Asociación Médica Argentina (AMA).
La triquinosis es una zoonosis (enfermedades e adecuada inspección veterinaria de los faenamien-
infecciones que afectan a los animales y al hombre) tos en mataderos y frigoríficos la zoonosis logró dis- que ocasiona situaciones sanitarias y económicas minuirse y, en numerosos casos, controlarse. No obs- significativas para las comunidades. La Argentina tante, se mantiene el peligro en la faena domicilia- es uno de los países comprometidos por esta patolo- ria y el control de la infestación silvestre es práctica- gía regional e históricamente las áreas prevalentes mente imposible. eran el Sur de la Pcia de Buenos Aires, Cuyo y la Pa- Consideramos a esta zoonosis, como a algunas tagonia. otras, un indicador del desarrollo de los pueblos. Si Es conocido que el ciclo parasitario se mantiene consideramos que un pueblo educado y culto es un entre animales carniceros y omnívoros, las ratas son pueblo desarrollado, incluyendo el cumplimiento de las huéspedes del ciclo en la naturaleza, y el hom- normas sanitarias, en esas condiciones sería raro te- bre. La relación rata-cerdo-hombre es la base funda- ner casos de triquinosis. mental de la triquinosis. Datos parciales de las provincias de Entre Ríos, La primera pregunta que uno podría formularse Santa Fe, Mendoza, San Luis, La Pampa, Buenos es ¿por qué los cerdos comen ratas? Y la respuesta es: Aires y Córdoba en Argentina, nos permiten esti- los cerdos comen ratas cuando se crían comiendo mar unos 200 casos humanos de triquinosis, lo desperdicios en basureros en competencia con ratas cual es una cifra elocuente de la magnitud de la si- y no son controlados por el hombre en su alimenta- tuación, tanto por su extensión geográfica como de ción y habitat, según normas sanitarias. La pregun- morbilidad. ta siguiente es, ¿cuál es el papel que tiene el hom- En tal sentido cabe preguntarse lo siguiente: ¿se- bre? En ese sentido la respuesta es concluyente, el rá que los siglos han pasado en vano y no hemos hombre es responsable de la crianza del cerdo y del aprendido nada? ¿Será que debido a razones genéti- control sanitario de los productos que obtiene fae- cas la Trichinella spiralis presenta nuevas característi- nando para consumo personal y venta. cas? ¿Será que la influencia de los cambios climáti- Desde principios del siglo pasado se han impar- cos repercute en la biología del parásito? Las pre- tido normas sobre la cría de cerdos y su manufactu- guntas formuladas inducen a su investigación. ra. Es inadmisible verlos en basurales o doméstica- No obstante ello, recordando a JL Minoprio, sos- mente sin control alimenticio y sanitario. Así tam- tenemos que la profilaxis de la enfermedad huma- bién la falta de responsabilidad en manufacturar su na se realiza no comiendo carne de cerdo cruda o in- carne sin control bromatológico. suficientemente cocinada y sin inspección veterina- El resultado de la inobservancia sanitaria y bro- ria. Se deben desterrar los basurales como fuente de matológica es penosa desde todo punto de vista. La alimentación de cerdos y prohibir su alimentación triquinosis es una enfermedad muy antigua y su co- con desperdicios, además de alejar a los roedores de nocimiento se pierde en los tiempos prebíblicos. Is- las porquerizas. En muchos países que estuvieron se- raelitas y musulmanes han considerado a la carne riamente afectados esto se logró. de cerdo impura desde entonces, destacando desde Si no se observan las adecuadas medidas de pre- principios religiosos premisas sanitarias. El resto del vención y control en triquinosis y otras patologías mundo no ha quedado soslayado de la grave morta- infecciosas y parasitarias, frente al desafío que im- lidad ocasionada por la triquinosis y oportunamen- plican las enfermedades emergentes, reemergentes y te se tomaron medidas adecuadas para su preven- nuevas, estaremos desandando el camino de la lu- ción y eventual control. Transcurrieron centurias y cha exitosa que oportunamente se logró frente a es- particularmente en Argentina y otros países con tas enfermedades del subdesarrollo.
Correspondencia: Jorge Osvaldo Gorodner e
E-mail: gorodner@hotmail.com
32 / Revista de la Asociación Médica Argentina, Vol. 124, Número 1 de 2011.