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OFERTA

Para Laura Fisher y Jorge Espejo, autores del libro "Mercadotecnia", la oferta se refiere a
"las cantidades de un producto que los productores están dispuestos a producir a los posibles
precios del mercado." Complementando ésta definición, ambos autores indican que la ley de
la oferta "son las cantidades de una mercancía que los productores están dispuestos a poner
en el mercado, las cuales, tienden a variar en relación directa con el movimiento del precio,
esto es, si el precio baja, la oferta baja, y ésta aumenta si el precio aumenta".

La cantidad de bienes y/o servicios que las distintas organizaciones, empresas o personas
tienen la capacidad y deseo de vender en el mercado, en un determinado lapso tiempo y
espacio, en un particular valor pecuniario, con el fin de satisfacer deseos y/o necesidades.

La ley de oferta

Es entendida como la variación de la disposición de bienes y servicios en un mercado, cuyos


cambios se encuentran estrechamente vinculados con el cambio de los precios. Si los precios
son altos la oferta aumenta, de manera contraria, si los precios bajan la oferta hará lo mismo.

(Fischer, 2004)

Curva de la oferta

El comportamiento cambiante de las determinantes de la oferta nos lleva a


suponer continuos desplazamientos en la oferta. Para que se produzcan
alteraciones en las determinantes lo suficientemente intensas como para
provocar cambios visibles, es necesario que transcurran períodos largos, como
la ampliación de la capacidad productiva, la introducción de nuevas técnicas de
producción.

1.- Cambios en las cantidades ofrecidas.- Estos cambios se refieren a los


movimientos que se dan dentro de la misma curva de oferta, como resultado
del cambio dado en el precio. Se reduce el precio y se reducen las cantidades
producidas, se incrementa el precio y se incrementan las cantidades; esto
sucede dentro de la misma curva de la oferta.
Los cambios en la curva de la oferta se representan gráficamente con una línea
recta ascendente que indica que a más elevado precio, mayor será la cantidad
del producto que los productores estarán dispuestos a ofrecer en el mercado.

2.- Desplazamientos de la curva de oferta.- Estos movimientos de la oferta se


dan cuando el precio o el monto de las cantidades aumenta o se reduce, llevando
a la curva de la oferta a realizar fluctuaciones a la izquierda o a la derecha.

Aumento en la oferta.- Este cambio significa que los productores están


dispuestos a vender una mayor cantidad del producto a los posibles precios del
mercado. El aumento en la oferta desplazará la curva de oferta a la derecha y
hacia abajo.

Aumento en la oferta. Un aumento en la oferta se ilustra mediante un cambio


en la curva de oferta. Aquí la curva de oferta O se movió a la posición indicada
en la curva O1 como consecuencia del aumento en la oferta.

Reducción en la oferta.- Una reducción en la oferta desplazará la curva hacia la


izquierda y para arriba. Este cambio significa que los productores han
modificado su política de venta. A precios posibles del mercado acudirán con
menores cantidades del producto.

Determinantes de la oferta

Variables que afectan la oferta

Al construir la curva de la oferta se supone que el precio es el que más influye en la cantidad
ofrecida de un producto cualquiera, sin embargo, existen otros factores muy importantes en
la oferta como:
 Número de empresas potencialmente aptas o número de vendedores que hay en el
mercado.
 Si lo demás es constante, cuanto mayor es el número de proveedores, mayor será
la oferta. Esto provocará un desplazamiento de la curva a la derecha, y al contrario,
cuando se cierran algunas industrias se disminuirá la oferta, desplazándose la
curva hacia la izquierda.
 El costo de los insumos y de los diferentes recursos utilizados en la producción
del bien y condiciones de la oferta.
 Los mayores precios de éstos elevan los costos de producción y a determinados
niveles de precios reducen los beneficios del productor, por lo que no se ofrecerán
las mismas cantidades de productos, igualmente un descenso en el precio de los
insumos aumenta la oferta, lo que desplaza la curva a la derecha.
 La tecnología
 Las mejoras en la tecnología hacen posible que las empresas produzcan la misma
cantidad de productos e incluso aumente su producción con menores recursos, lo
que permite reducir los costos de producción y aumentar la oferta. Estas mejoras
tecnológicas desplazan la curva hacia la derecha.
 El tiempo de duración de los bienes producidos, o el necesario para responder al
cambio de precios.
 Si un bien puede ser almacenado por un período largo de tiempo podrá ser
guardado por el productor en el caso de precios que no sean favorables, reduciendo
la oferta, de la misma manera podrá aumentar la oferta cuando su precio aumenta,
lo cual no ocurre con los bienes perecederos. De otra parte si el tiempo requerido
para producir el bien o poderlo traer de otro sitio es muy corto, podrá
incrementarse la oferta ante una variación repentina del precio, de lo contrario no
podrá reaccionarse en un corto período de tiempo.

 Los precios de los bienes relacionados complementarios, o sustitutos.


 Un aumento en los precios de la carne de pollo puede conducir a un aumento en
la oferta de la carne de res. También puede darse una situación contraria. Los
vendedores tanto de un producto como del otro ante unos menores precios
menores precios de la carne de cerdo reducirán la oferta de ésta y aumentarán la
oferta de carne de res.
 Expectativas sobre la evolución de la demanda y de los precios relativos futuros.
 Las expectativas de que el precio del bien que producen aumente en el futuro
entonces retendrán la venta de por lo menos parte de su producción hasta que
aumente el precio. De la misma manera ante la previsión de cambios que se puedan
dar en la demanda futura de bienes hará aumentar o disminuir la oferta. (Mankiw,
2012)

Demanda
Para la economía, la demanda es la suma de las compras de bienes y servicios que realiza un
cierto grupo social en un momento determinado. Puede hablarse de demanda individual
(cuando involucra a un consumidor) o demanda total (con la participación de todos los
consumidores de un mercado).

En este mercado la cantidad del producto que se demanda puede variar, dependiendo de
varios factores, fundamentalmente su precio, su disponibilidad y la riqueza y necesidad de
quien desea adquirirlo.

El precio es uno de los factores determinantes de un producto y es de tipo variable; esto


significa que el mismo puede modificarse a lo largo del tiempo, generalmente lo hace en
casos en los que sea necesario desde los ojos del oferente.

Si un producto tiene una gran salida en el mercado, la disminución de sus existencias hace
que se vuelva más preciado y, para conseguir una mejor ganancia, los productores aumentan
su precio; en cambio, si se trata de un producto que no ha tenido una gran repercusión, suele
bajarse su precio para conseguir ubicarlo satisfactoriamente en el mercado.

Esto último ocurre sobre todo en bienes alimentarios, con una fecha de caducidad, con tal de
no perder todo lo invertido en la fabricación o recolección del producto, los productores
prefieren venderlo antes de la fecha de vencimiento a un precio incluso más bajo que los
gastos que conllevó conseguirlo.

La curva de demanda permite conocer la relación existente entre la cantidad demandada de


un producto y su precio. Es decir, las cantidades que los consumidores desearían adquirir de
un producto en función de un precio y en un determinado tiempo. (KOTLER, 2012)
Producto
Por norma general, en las sociedades desarrolladas los deseos y necesidades se satisfacen a
través de productos. Normalmente el término producto nos sugiere un bien físico, tal como
un automóvil, un televisor o una cámara de fotos. Sin embargo, hoy en día son pocos los
productos que no vienen acompañados de ciertos elementos auxiliares como servicios
adicionales, información, experiencias, etc. Así, por ejemplo, cuando compramos un coche,
no solo adquirimos el bien físico que este supone, sino también aspectos asociados a él como
la garantía, unas condiciones de financiación determinadas, un servicio de taller y
reparación, etc. En este sentido, debemos concebir el producto como una propuesta de valor,
es decir, un conjunto de ventajas que contribuyen a satisfacer las necesidades. Esta propuesta
de valor se materializa en una oferta que supone una combinación de productos físicos,
servicios, información, experiencias, etc.

 Bajo esta definición, debemos entender el término producto desde un enfoque amplio
en el que, además de los propios bienes físicos y los servicios (educación, sanidad,
restaurantes, hoteles, limpieza, envío postal, etc.), tienen cabida otras posibilidades
como las siguientes: Los acontecimientos (espectáculos artísticos y deportivos como
el Fib, las olimpiadas o la Expo).
 Las experiencias (se empieza a comercializar el ir al espacio, el tomarse una copa en
un bar de hielo o adentrarse en mundos paralelos como los que ofrecen Euro Disney
o Port Aventura).
 Las personas (iconos como Madonna, los Rolling Stones, Michael Jordan o Michael
Jackson han sido utilizados comercialmente en muchos ámbitos de negocio).•Los
lugares (continuamente vemos en televisión anuncios tratando de pro-mocionar los
encantos de ciertas comunidades autónomas).
 Las empresas (hoy en día es difícil ver alguna campaña de promoción de las dos
marcas deportivas líderes, Nike y Adidas, centrada en algún producto en concreto.
Lo cierto es que sus campañas suelen estar centradas en promocionar su marca).

Dimensiones del producto


Esta conceptualización del producto desde una perspectiva amplia nos lleva a considerar
diferentes dimensiones que componen el «todo» del producto. Concreta-mente identificamos
tres dimensiones

 Producto básico: es el centro del producto total. Representa el servicio o beneficio


básico que el consumidor busca cuando compra el producto. Incluye los
componentes principales del producto como las características funciona-les, el valor
percibido, la imagen o la tecnología asociada (ej.: el producto básico al comprar un
perfume sería el aroma que se desprende del líquido del interior del frasco).
 Producto real: un producto básico se convierte en producto real cuando se le añaden
atributos como la marca, el etiquetado, el envase, el diseño, el estilo, calidad, etc.
(ej.: en el caso del perfume el producto real sería el producto tal cual se adquiere en
la tienda).
 Producto aumentado: consiste en todos los aspectos añadidos al producto real, como
son el servicio posventa, el mantenimiento, la garantía, instala-ción, entrega y
financiación (ej.: en el caso del perfume, podría ser el periodo de 30 días que se
ofrece para devolver el producto o un teléfono de atención al cliente).

Clasificaciones del producto

Una vez comprendido qué entendemos por producto, el siguiente paso será examinar las
diferentes formas de clasificarlos. Podemos hacerlo en base a diferentes criterios.

 Según la tangibilidad
Atendiendo a las posibilidades extremas encontramos:
 En el extremo de tangibilidad los bienes puros (como puede ser el caso de un
paquete de sal).
 En el extremo de intangibilidad los servicios puros (como puede ser la
enseñanza).Sin embargo, hoy en día es difícil estar en estos extremos; lo
normal es moverse en posiciones intermedias. De esta manera, encontramos
bienes que son ofrecidos al mercado añadiéndoles aspectos intangibles (la
compra de un coche incluye unas condiciones de financiación, de garantía,
servicio de taller, etc.) y, al mismo tiempo, vemos como se ofrecen servicios
que incluyen muchos aspectos tangibles (una agencia publicitaria presta
su servicio acompañándolo de varios soportes como material audiovisual,
folletos, informes de cuidado formato, etc.).
 Según la durabilidad

Centrándonos ya en el caso de los bienes, en función de la duración en el consumo o uso


del producto podemos hablar de:

 Bienes no duraderos: son aquellos que normalmente se consumen rápida-mente


y son utilizados en una o muy pocas ocasiones (como la cerveza, la fruta y otros
productos de la cesta de la compra).
 Bienes duraderos: son utilizados durante un periodo extenso de tiempo y
normalmente duran varios años (como los electrodomésticos, un coche,
mobiliario, etc.).

 Según el tipo de usuario

En base a esta clasificación, podemos dividir los productos en dos grandes grupos:

 Bienes industriales: son aquellos que son adquiridos para producir otros bienes.
Dentro de estos englobamos productos como: – Materias primas. – Materiales y
conjuntos incorporables. –Instalaciones. –Bienes de equipo.–Suministros.
 Bienes de consumo: son aquellos que son adquiridos para satisfacer las necesidades
personales y de las familias. Estos pueden dividirse en cuatro categorías:
 Bienes de conveniencia: suelen ser productos baratos, que se compran
frecuentemente, y cuya compra no supone un esfuerzo para el consumidor.
(productos de uso común como por ejemplo el pan, el periódico, etc.).
 Bienes comerciales: son aquellos que los consumidores adquieren tras un largo
periodo de búsqueda y comparación entre marcas, establecimientos, calidades,
etc. (suelen ser productos duraderos, tales como la ropa, los electrodomésticos,
los coches, etc.).
 Bienes de especialidad: son productos que a la vista de los clientes poseen una serie
de atributos que los hacen únicos y que se suelen comprar por lealtad a una
marca, de ahí que la comparación entre marcas sea escasa. Suponen un gran esfuerzo
económico (productos de joyería, de diseño, frutas exóticas, etc.).
Bienes no buscados: son aquellos productos que el cliente no ha pensado en comprar,
bien porque los desconoce o bien porque no los necesita (seguros, las enciclopedias,
etc.). Aquí son muy importantes las promociones con publicidad y la fuerza de ventas
agresiva. (Tirado, 2013)
Bibliografía
Fischer, L. (2004). Mercadotecnia (Cuarta ed.). (McGRAW-HILL/INTERAMERICANA, Ed.) Mexico.

KOTLER, P. Y. (2012). Dirección de Marketing (Decimocuarta ed.). (B. G. Hernández, Ed.) Mexico:
PEARSON.

Mankiw, N. (2012). Principios de economia (sexta ed.). Mexico.

Tirado, D. M. (2013). Fundamentos de marketing. PRIMERA.

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