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Una cuenca hidrográfica, es el espacio geográfico donde todas las aguas caídas por
precipitación se unen para formar un curso de agua o un río, es decir, es el área de
drenaje donde se origina la escorrentía superficial cuando se presenta una lluvia
para luego formar un curso de agua. La cuenca es una unidad natural hidrológica y
geofísica, con límites definidos que facilitan la planificación y el aprovechamiento
de sus recursos. La cuenca puede subdividirse de varias formas, siendo común el
uso del término subcuenca para denominar a las unidades de menor jerarquía,
drenadas por un tributario del rio principal. El término microcuenca se emplea
para definir las unidades hidrográficas más pequeñas dentro de una cuenca
principal. Esta subdivisión de las cuencas permite una mejor priorización de las
unidades de intervención o tratamiento. Otra forma conocida de dividir las
cuencas hidrográficas, de clara aplicaci6n en las cuencas andinas y basada en la
elevación relativa de sus partes, da lugar a 1os tipos de cuenca alta media y baja.
El Perú está totalmente enclavado en la zona tropical cuyo límite Sur es el trópico
de Capricornio (23º 28’ Sur) y su clima debería ser cálido, húmedo y lluvioso, con
variaciones de intensidad de precipitación y temperatura impuestas más que por la
distancia al Ecuador Terrestre, por la altura sobre el nivel del mar. Nuestra costa
en especial, de acuerdo con la referida situación continental, debería estar llena de
vegetación exuberante gracias a un régimen de lluvias abundante. Igual debería
ocurrir en las laderas de la cordillera que miran al Pacífico.
La Cordillera de los Andes actúa como una inmensa pantalla fija que obliga a las
masas de aire caliente y llenas de humedad que vienen desde la extensa cuenca
amazónica a convertirse en lluvias orográficas al ascender a grandes alturas.
Como se sabe, la Tierra, es el único planeta en nuestro sistema solar en el que está
presente de manera continuada el agua líquida, la cual cubre aproximadamente las
dos terceras partes de la superficie terrestre, la Tierra es un universo aislado, de allí
se concluye que el agua que hay en el planeta Tierra, es una masa constante, sin
aumento ni disminución a lo largo del tiempo, cuyo volumen total ha sido
estimado en 1 360 millones de km3, equivalente a 1 billón 360 mil millones de
m3 de agua.
Desde el punto de vista académico, se estima que el ciclo hidrológico empieza con
la evaporación desde los océanos, los ríos, lagos, lagunas, bofedales, suelos
húmedos, etc. luego el vapor de agua pasa a la atmósfera para formar las nubes,
las cuales ascienden a grandes alturas, donde las temperaturas son muy bajas y se
produce la condensación, formándose de esta manera las gotas de lluvia para
luego caer en forma de precipitación.
Teniendo en cuenta que los océanos se constituyen dentro del ciclo hidrológico en
la fuente más importante de la evaporación del agua y la formación de las
precipitaciones, las lluvias en Arequipa deberían tener su origen en el
desplazamiento de las masas de aire saturado desde el Océano Pacífico; sin
embargo, debido a la interacción de la Cordillera de los Andes y de la Corriente
Marina Fría de Humboldt, las lluvias en Arequipa no provienen de la evaporación
desde el Océano Pacífico, las lluvias intensas en Arequipa tiene su origen en el
desplazamiento de la denominada ALTA DE BOLIVIA hacia los andes peruanos
de donde las masas de aire saturado y caliente se desplazan desde el frente
boliviano hacia Arequipa, en la dirección del SO al NO de la ciudad, es decir, de
Characato hacia Cerro Colorado.
6. LA CORRIENTE DEL NIÑO (su incidencia)
La corriente del Niño, es una corriente marina fría que se desplaza de Norte a Sur,
es decir, contraria a la de Humboldt, es un brazo terminal de la de California,
originada a su vez por la corriente denominada Kuroshivo del Japón y, que se va
perdiendo al entremezclar sus aguas con las aguas frías de Humboldt. Cuando
estos encuentros ocurren frente al Ecuador Hemisférico, las condiciones
climáticas de la costa peruana son NORMALES, es decir, se producen las lluvias
orográficas, hay aridez en la costa y las descargas de los ríos ocurren dentro de los
límites usuales.
Desde que las corrientes marinas son elementos dinámicos, no existe un área
específica, donde persistentemente se efectúe ese encuentro, sino que puede
ocurrir en cualquier punto de una amplia extensión del mar. Esas diferentes
ubicaciones sucesivas ocasionan FLUCTUACIONES CLIMÁTICAS a lo largo de
los años en la costa del Pacífico.
Se le llama así por que presenta condiciones contrarias al fenómeno del Niño, pero
también es conocido como "El Viejo" o "El Anti-niño" .Suele ir acompañado del
descenso de las temperaturas y provoca fuertes sequías en las zonas costeras del Pacífico.
"La Niña" comenzó en 1903, y siguió en 1906, 1909, 1916, 1924, 1928, 1938, 1950,
1954, 1964, 1970, 1973, 1975, 1988, y en 1995. Siendo el más intenso el de 1988/1989.
Este fenómeno de se desarrolla cuando la fase positiva de la Oscilación del Sur, alcanza
niveles significativos y se prolonga por varios meses como por ejemplo en 1973, 1988,
1998, y se caracteriza entre otras por las siguientes condiciones, las cuales son opuestas a
las de los episodios El Niño:
- Los vientos alisos se intensifican, provocando que las aguas profundas relativamente
más frías a lo largo del Pacífico ecuatorial, queden en la superficie.
- Los vientos alisios anormalmente intensos, ejercen un mayor efecto de arrastre sobre
la superficie del océano, aumentando la diferencia de nivel del mar entre ambos
extremos del Pacífico ecuatorial. Con ello el nivel del mar disminuye en las costas de
Colombia, Ecuador, Perú y norte de Chile y aumenta en Oceanía.
Este fenómeno que aparece por primera vez en la literatura científica a finales de 1989, se
divide en cuatro fases:
Es el final del evento de La Niña, y ocurre después de que la intensidad de los vientos
alisios ha regresado a su estado normal.
Por lo general comienza desde mediados de año, alcanza su intensidad máxima a finales y
se disipa a mediados del año siguiente.
Este fenómeno se presenta con menos frecuencia que el niño y se dice que ocurre por
periodo de 3 a 7 años.
En los trópicos, las variaciones son radicalmente opuestas a las ocasionadas por El Niño.
En América del Sur, predominan condiciones más secas y más frescas que lo normal
sobre El Ecuador y Perú; así como condiciones más húmedas que lo normal en el Noreste
de Brasil.
En México, provoca lluvias excesivas en el centro y sur del país, sequías y lluvias en el
norte de México, e inviernos con marcada ausencia de lluvias.
Tanto este Fenómeno de La Niña como El Niño, son variaciones normales en las
temperaturas de la superficie del mar, que han existido desde hace millares de años
que continuarán existiendo, sin que el hombre puede interferir.