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Jean Sigmann

1848
Las revoluciones
románticas y
democráticas
de Europa

HISTORIA DE
LOS MOVIMIENTOS
SOCIALES
tor/a de los Niovimtentos SociaUs

1848
Las revoluciones románticas
y democráticas de Europa

por
EL AUTOR
JEAN, SIGMANN
Jean Sigmann nació en Nancy (Francia) en 1912. Profesor de
historia, especialista en problemas germánicos, ejerce la enseñanza
desde 1936. Investigador del Centro Nacional de Investigaciones
Científicas, catedrático en el Instituto de Estudios Políticos, en el
Centro de Estudios Germánicos y en el Centro de Altos Estudios
Europeos de Estrasburgo, Jean Sigmann formó parte en 1951 de la
comisión franco-alemana encargada de redactar las recomenda-
ciones para los autores de manuales de historia. E n 1956, participó
en el coloquio de Viena consagrado a la historia de la resistencia
europea.
Colaborador de Annales y de la Revue d'Histoire de la Deu-
xième guerre mondiale, ha publicado anteriormente Qu'est-ce qu'un
nazi? y La Revolution de 1848 en Bade.

TRADUCTOR

Víctor Testa

D I S E Ñ O DE LA CUBIERTA

Santiago Monforte
INDICE

W l
sijí^lo veintiuno editores, sa
CERRO DEL AGUA, 248. MÉXICO 20, D- E

siglo ivintiimo de espafìa editores, sa


CALLE PLAZA, 5, MADRID 33, ESPAÑA

sigh wintiuno argentina editores, sa


Av, PERÙ, 952, BUENOS AIRES, ARGENTINA ALGUNOS PROBLEMAS

PRIMERA PARTE

LA EUROPA DE LOS AÑOS CUARENTA

I. EL REINO UNIDO: CAPITALISMO, PROLETARLMX), LIBERA-


LISMO, NACIONALISMO IRLANDÉS 17
El crecimiento demográfico y la prodigiosa urbanización, 17;
El poderío económico de la aristocracia terrateniente amenazado:
el capitalismo industrial y comercial contra el proteccionismo, 19;
Los fundamentos del poderío del capitalismo industrial, 21; Las
consecuencias sociales del gigantismo industrial: proletariado y
patronato, 23; La fuerza política de la aristocracia terrateniente
tambalea por la alianza del proletariado y las clases medias: la
reforma electoral de 1832, 26; El movimiento obrero del sindi-
calismo revolucionario al sindicalismo reformista por la etapa
cartista de la lucha por el sufragio universal, 30; El gobierno
de los {»seedores y la paz social por la filantropía, 33; La Irlanda
romántica contra la Inglaterra pragmática, 34.

IL LOS CONTRASTES DE LA FRANCIA RURAL! UNA BURGUESÍA


DOMINANTE, UNA CAPITAL REVOLUCIONARIA 38
I. La lentitud del crecimiento demográfico y la insignificancia de
la urbanización. El caso lyonés, 38; II. París, capital de la
Primera edición en español, marzo 1977 revolución en Francia, 41; III. París, capital de la revolución
© SIGLO XXI DE ESPAÑA EDITORES, S. A.
en Europa, 49; IV. Economía, sociedad, política, 60.
Calle Plaza, 5. Madrid-33
III. EL RÉGIMEN CONSTITUCIONAL ENTRE LOS VECINOS DE
Primera edición en francés, © Calmann-Lévy, 1970 FRANCIA 71
Título original; 1S48. Les révolutions romantiques et démocratiques I. La península ibérica: guerras civiles y pronunciamientos, 71;
de l'Europe II. Suiza: la unión de las nacionalidades y las agitaciones polí-
DERECHOS RESERVADOS CONFORME A LA LEY ticas, 74; III. Bélgica: unidad nacional y monarquía parlamen-
taria "democrática". Apariencias y realidades, 79.
Impreso y hecho en España
Printed and made in Spain IV. LA EUROPA DEL NORTE ARISTOCRÁTICA Y ABSOLUTISTA 86
I. Los Países Bajos, estado nacional del antiguo régimen, 86;
ISBN: 84-323-0255-4 II. Una pareja mal avenida: Suecia autocràtica y Noruega demo-
Depósito legal: M. 5.259- 1977 crática, 88; III. Dinamarca frente al nacionalismo germánico, 90.
Impreso en Closas-Orcoyen, S. L., Martinez Paje, 5. Madrid-29
V. LA EUROPA CENTRAL GERMÁNICA 94 revoluci^ón vienesa, 242; III. La unidad alemana: desilusiones
I. Los problemas políticos alemanes: Austria y Prusia contra la nacionalistas y decepciones democráticas, 249; IV El triunfo
unidad y la libertad, 95; II. El Zollverein y sus leyendas: proble- í® '.oJff'^S''^" mayo-comienzos de diciembre
mas económicos, sociales y políticos, 103; III. La idea nacional de 1848), 254.
y el liberalismo en los años cuarenta, 111.
V. EL DERRUMBE (DICIEMBRE DE I848-AGOSTO DE 1849)
259
VL LA EUROPA CENTRAL DE LAS NACIONALIDADES 118 I. Italia: La derrota sarda y el aplastamiento de los regímenes
L Los pueblos de Austria y la germanización de las élites, 118; democráticos, 259; II. La victoria del centralismo vienés y la
II. El ascenso del movimiento magiar: liberalismo aristocrático, opresión de las nacionalidades, 263; III. El fin de la revolución
opresión social y nacionalitaria, 120; III. Los renacimientos alemana: el fracaso de la solución parlamentaria y la gran
eslavos, 126; IV. La Transilvania, cuna del renacimiento rumano insurrección republicana del sudoeste, 267.
en los principados otomanos, 134.

VII. ITALIA: DE LA EXPRESIÓN GEOGRÁFICA AL NACIMIENTO ALGUNAS REFLEXIONES


285
DE LA CONCIENCIA NACIONAL 139
I. La Restauración y sus consecuencias, 139; II. Del liberalismo REFERENCUS CRONOLÓGICAS
291
de la carbonería a la democracia unitaria de la joven Italia.
La mística del complot, 144; IIL El Risorgimento: los escritores
al servicio de la idea nacional. ¿Albertismo o neogüelfismo?, 147. BIBLIOGRAFÍA SUMARIA
299

SEGUNDA PARTE
LAS REVOLUCIONES EUROPEAS

I. CRISIS ECONÓMICAS, SOCIALES, POLÍTICAS Y NACIONALES


(1846-ENERO DE 1 8 4 8 ) 155
I. Las dificultades económicas y sociales de Europa, 155; II. Los
problemas de Schlesvig-Holstein, de Cracovia y Suiza: aspectos
internacionales y resonancias interiores, 164; III. En la escuela
del radicalismo suizo: Alemania meridional, centro del movi-
miento democrático y unitario, 168; IV. La Italia de las refor- '
mas liberales con "revoluciones" (junio 1846-enero 1848), 172.

II. LA REVOLUCIÓN PARISIENSE 177


I. El nacimiento de una revolución: de "Viva la Reforma" a
"Viva la República", 177; II. "La revolución de siete semanas",
184; III. La derrota de la revolución popular en París y en las
provincias (16-23 de abril), 195; IV. Los últimos sobresaltos
parisienses contra el veredicto popular: las jornadas de junio,
197; V. La revolución francesa y Europa, 198.

III. EL AVANCE DE LA MAREA (MARZO-JULIO DE 1 8 4 8 ) 208


I. Austria a la defensiva en el im^^rio, 208; II. Las "revoluciones
italianas", 214; IIL Las "revoluciones alemanas" y la revolución
alemana, 217.

IV. EL R E F L U J O (JULIO-DICIEMBRE DE 1 8 4 8 ) 237


I. Italia: del fracaso nacional a las revoluciones democráticas,
237; 11. La ruptura austro-húngara y el aplastamiento de la
ALGUNOS PROBLEMAS

El francés de hoy posee o cree poseer algunas ideas sobre la " G r a n


Revolución". De los viejos manuales, conserva el recuerdo de
acontecimientos grandiosos —el juramento del Jeu de Paume* la
toma de la Bastilla, la noche del 4 de agosto: ( o de personajes
trágicos: Mirabeau, Danton, Robespierre, Saint-Just). A u n animado
del pacifismo más puro, experimenta una secreta atracción por los.
ejércitos revolucionarios lanzados a la conquista de E u r o p a al grito
de: "¡Guerra a los castillos! ¡Paz a los pobres!" Las preocupaciones
cotidianas lo alejan de la epopeya; los tribunos políticos lo remiten
a ella durante la temporada electoral, cuando, a falta de programas
adaptados a los problemas de nuestro tiempo, invocan los "principios
inmortales" y movilizan los "grandes ancestros".
Los hombres de 1848, abandonados a los historiadores profe-
sionales y a los autores de obras escolares, no conocen "ni este
exceso de honor ni esta indignidad". Y sin embargo, ellos fueron
los hijos carnales de aquellos que habían conocido o habían hecho
la "Gran Revolución", y se consideraron, segiín su temperamento, los
herederos de los constituyentes, de los girondinos o de los monta-
ñeses. El olvido en el que cayeron es resultado del descrédito total
que sufrieron al día siguiente del fracaso. Por una extraña coinci-
dencia, de la que la historia ofrece pocos ejemplos, los "del 4 8 "
— l a expresión misma refleja un ahivo desprecio o una simpatía
condescendiente— sufrieron los ultrajes de los partidarios del orden
establecido y de la tradición tanto como las críticas de los demó-
cratas. Formados en la atmósfera del romanticismo, estaban
condenados en nombre del realismo, del positivismo, del cientifi-
cismo. Se los acusó con pasión por su retórica vacía, su idealismo
místico —¡cuántos juicios sumarios a Lamartine, el "ministro-
poeta"!—, sus ilusiones generosas. El "año loco" (das tolle Jahr),
tal será por mucho tiempo, más allá del Rhin, el inevitable epíteto

* Juego de pelota. Hace referencia al juramento que prestaron los dipu-


tados de la Asamblea Nacional del 20 de junio de 1789, e n la sala del "Jeu
de Paume" de Versailles. [N. del E.j
12 Algunos problemas Algunos problemas 9

de este año 1848 que al comienzo había recibido la poética deno- curada de la enfermedad nacionalista? ¿El contagio racista no se
propaga en los nuevos estados de Asia o de Africa aun cuando los
minación de "primavera de los pueblos".
dirigentes se proclamen socialistas?
De marzo a junio de 1848, los himnos a la libertad y a la
Los "del 48", estos idealistas impenitentes, no podrían escapar
fraternidad resonaron desde París a Poznan y Bucarest, de Holstein al reproche de haberse desinteresado de la suerte de las clases
a Sicilia. Solamente dos grandes estados escaparon al contagio: la populares. La mayoría de ellos creyeron que la democracia social
Inglaterra industrial, capitalista y liberal y la Rusia agrícola, feudal sería la consecuencia ineluctable de la democracia política. Los
y autocràtica. E u r o p a continental descubría su unidad en la idea otros, los socialistas y los comunistas —las palabras "socialismo" y
de revolución pero también su diversidad en el desarrollo de las "comunismo" se extienden más o menos al mismo tiempo que
revoluciones. Porque los problemas esenciales que los hombres de "nacionalidad"— apelan al estado, siguiendo distintas modalidades,
1848 intentaron resolver se planteaban en los estados, o mejor, en para mejorar la condición de las "clases obreras". Espiritualistas,
las regiones — l a existencia de los estados remodelados en 1815 era a veces cristianos —el "catolicismo social" será una de las novedades
cuestionada casi en todas partes— que matizaba una^ original de 1848— rechazan la violencia. ¿Quién pensaría, en efecto, en
combinación de las estructuras políticas, étnicas, económicas y un clima de fraternidad, en combatir las transformaciones cuya
sociales. propaganda habrá demostrado la necesidad moral? La "organiza-
El problema político recibirá su solución radical en Francia con ción del trabajo", el "derecho al trabajo", estas fórmulas francesas
la proclamación de la república y la instauración del sufragio uni- serán en 1848 dos grandes consignas de los partidos avanzados de
Europa.
versal. En la mayoría de los estados italianos, a fortiori en los países
eslavos, la clase media era demasiado débil y la clase campesma Liberar a los trabajadores de la servidumbre económica, a los
demasiado atrasada como para que los liberales pensaran en exigir, al individuos de la sujeción f)olítica, a los pueblos de la dominación
menos al comienzo, algo más que una constitución y la extensión extranjera, tales fueron algunas de las más altas ambiciones — ¡ t a m -
del derecho al voto. Mientras tanto, han aprendido de una historia bién las hubo mediocres!— de 1848. Su realización suponía
reciente, la de la década de 1930, que las promesas más solemnes se hombres excepcionales surgidos simultáneamente de los cuatro
olvidan cuando la amenaza que las provoca desaparece. Sólo un rincones de Europa — ¿ h u b o jamás un caso así?— y poderosas
estado nuevo y fuerte que reúna a los miembros dispersos de la fuerzas materiales para destruir el retorno ofensivo a los viejos
nación, será capaz de garantizar al individuo sus derechos contra poderes que retrocedieron sin haber librado batalla. L a reacción
miedosa tiene en sus manos el aparato de estado y los resortes
los príncipes llamados a someterse o a dimitir. Polonia restaurada,
de la economía. ¡Qué importa! El pueblo, esclarecido sobre sus
Italia y Alemania unificadas, formarán con Francia una comunidad
sagrados derechos, será consultado. ¿Cómo no va a pronunciarse
fraterna en una E u r o p a libre y pacífica.
contra sus opresores de ayer? El espectáculo único en la historia
Dotado de virtudes mágicas en la lengua mesiánica de un Michelet, del mundo de la sucesión precipitada de "revoluciones-sorpresa"
de un Lamennais o de un Mickiewicz, el principio de las "nacionali- con rasgos aparentemente idénticos, mantenía este sueño exaltado.
dades" — l a palabra es de uso corriente desde 1 8 3 0 — iba a dejar
La "complejidad de 1848" (Ch.-H. Pouthas) no sólo ha des-
por primera vez el dominio del sueño y de la especulación. En concertado a los contemporáneos, sino que también ha confundido
algunos meses, la ambigüedad de la expresión aparecerá en toda sii a espíritus sistemáticos, apareciendo ante ellos como revoluciones
crudeza. ¿Se trata del derecho de los pueblos a disponer de sí cortas, poco sangrientas y que no provocaron ningún conflicto
mismos segiin la tradición revolucionaria francesa? ¿O del derecho armado entre las grandes potencias.
de reunir, aunque sea por la fuerza, a los individuos supuestos de
la misma raza porque hablan la misma lengua, según la concepción
de un Herder o de un Arndt? La impotencia o la complacencia ante
Este libro quisiera subrayar, si no la actualidad, al menos el carácter
el ascenso de los nacionalismos agresivos sería imputable — ¡ s e ha
moderno de los problemas planteados por 1848. El lector n o encon-
escrito mil veces!— a la falta de realismo de una época ya lejana.
trará aquí un resumen de las revoluciones: existen excelentes obras
Después de dos guerras mundiales ¿Europa contemporánea está
10 Algunos problemas
Algunos problemas 11
al respecto. Sin embargo, y a despecho del talento de sus autores,
muchas de ellas resultan poco inteligibles a la mayoría de sus L a bella fachada de un país próspero gobernado sabiamente por
lectores. Con un ritmo acelerado se suceden jornadas con héroes una burguesía francesa o afrancesada ¿no disimulaba los sufrimientos
enigmáticos y consignas contradictorias, ministros de tendencias de un proletariado privado del derecho de huelga, como en Francia,
opuestas, elecciones más o menos libres, constituciones que nacen las cóleras de la pequeña burguesía excluida, como en Francia, del
muertas y son proclamadas eternas. Esta historia de acontecimientos derecho de voto, los resentimientos del pueblo flamenco tratado
toma forzosamente el aspecto de una cronología que hace agradable como paria? ¿Los demócratas belgas no esperaban la señal de París
para instaurar una república belga con el consentimiento de todos
el estilo del narrador. Esto resulta de una opción cuyas razones,
los réprobos? ¿Los demócratas franceses no soñaban con anexar
aunque buenas, escapan a los no especialistas. En efecto, estos
simplemente la joven monarquía, creación sacrilega de los reyes?
resúmenes a menudo son precedidos de capítulos con fórmulas
E n la península ibérica, tierra elegida de revoluciones y pronun-
tranquilizantes: "¡Causas y orígenes!". . . Así, el lector es llevado
ciamientos, ¿una república francesa no estaría tentada a intervenir
a admitir la fatalidad de las revoluciones que estallan inesperada-
con más o menos discreción, si no para sostener a los grupúsculos
mente y a ignorar el peso que tienen sobre la conducta de los
republicanos, al menos para facilitar el derrocamiento de las dic-
hombres las revoluciones previsibles que abortan.
taduras locales?
El fracaso de la manifestación londinense del 10 de abril incita
a los partidarios del orden en París, Austria y Hungría a resistir Los reinos del norte (Países Bajos, Suecia, D i n a m a r c a ) , estados
a las presiones populares porque la agitación cartista, que nosotros del Antiguo Régimen, ¿estaban protegidos, como se asegura, por
juzgamos irrisoria, había parecido capaz de sacudir la sociedad su alejamiento de las ¡deas subversivas de Occidente? ¿No existían
inglesa. Para los contemporáneos, el Reino Unido no era el modelo hasta 1848 regímenes tan arcaicos en Alemania del norte, espe-
de la unión de clases. ¿En qué país las h u e l p s fueron tan nume- cialmente en la Prusia del "liberal" Federico Guillermo IV? Some-
rosas y llevadas a cabo con tanta determinación? ¿En qué país las tida a la hegemonía política de Suecia, a la hegemonía lingüística
luchas por la conquista del sufragio universal fueron tan precoces de Dinamarca, ¿Noruega no ofrecía la imagen única de una
y sangrientas? ¿Acaso Engels' no tenía razones para creer a los democracia campesina cuya independencia parecía próxima? Aho-
obreros ingleses capaces de derrocar el estado capitalista, que por gado en los Países Bajos, en Suecia y Dinamarca, ¿el liberalismo no
otra parte minaban los irreconciliables irlandeses? En la Europa de podría encontrar al fin su oportunidad contando con el debilita-
las nacionalidades ¿no era en la miserable Irlanda donde se con- miento de Rusia y Austria, guardianas vigilantes del absolutismo?
fundían los odios religiosos, sociales y políticos aptos para provocar Pero la presencia en Francfort de los delegados de los reyes de
explosiones revolucionarias, en esta Irlanda que vio nacer el primer los Países Bajos y de Dinamarca ¿no justificaba los apetitos de los
partido católico de masas? alemanes liberados de la opresión por una revolución parisiense?
L a suerte de los estados secundarios, en particular aquellos que "Capital de la revolución en Francia", París es también, a los
limitan con Francia, ha sido también despreciada. ¿Acaso no ojos del extranjero, la "capital de la revolución en Europa". ¿Cómo
se enseña desde hace un siglo que Suiza y Bélgica, dotados de una explicar de otro modo que la acción de algunos miles de activistas
sagacidad política ejemplar, debían mantenerse necesariamente de barricadas haya derrocado a un régimen considerado fuerte,
apartados de los grandes movimientos? Queda por definir por qué obligado a aceptar a Francia la república, e invitado en todas
razones países industrializados formados uno de tres, otro de dos partes a las oposiciones más timoratas a presentar en conjunto
pueblos, en estrechas relaciones con Francia y Alemania, no han las reivindicaciones más audaces y obligado a la mayoría de los
conocido ni los conflictos de clases ni las querellas lingüísticas que gobiernos a ceder o desaparecer? La presión de la calle parisiense
jalonan el año 1848. Refugio de completados, ¿no fue Suiza el empuja la liberación de los trabajadores y los pueblos como lo
teatro de una guerra civil de donde habrían salido, según algunos, demostrará la jornada del 15 de mayo de 1848, llamarada pasajera
las revoluciones de 1848? El estado belga, surgido de los movi- de locura colectiva para quien ignorara el 5 de junio de 1832.
mientos de 1830 con sus fronteras recientes ( 1 8 3 9 ) impuestas por Pero, por primera vez en la historia del gobierno francés, con la
las grandes potencias ¿estaba seguro de resistir una nueva tormenta? instauración del sufragio universal, debe toTnar en cuenta la opinión
de los franceses, campesinos en su mayoría. Ahora bien, ¿qué repro-
Algunos problemas Algunos problemas
1 2 13
Para la aplastante mayoría de las poblaciones del imperio com-
chan a la monarquía estos campesinos analfabetos? ¿Qué saben ellos puesta de campesinos abrumados por los censos señoriales ¿el
de la república, del socialismo, de la guerra por la liberación de los problema esencial no es social? Imaginar pueblos resueltos a reivin-
pueblos sometidos? ¿Van a rechazar a los "notables" del régimen dicar el derecho de voto y a constituirse en naciones independientes
censitario y votar por los candidatos de los clubes parisienses? La ¿no es ceder al anacronismo?
interpretación de los resultados de las elecciones de abril no podría
¿La revolución liberal y antialemana no estallará ante todo en
dejar de lado las estructuras y mentalidades de la sociedad francesa esa Italia donde hasta 1846 los Habsburgo ejercieron un poder
a la caída de la monarquía de Julio. de hecho del que no gozaron jamás en la Confederación germánica?
Los movimientos revolucionarios del imperio austriaco, de Italia Algunos embates de la caballería austriaca alcanzaban para destruir
y los de Alemania son también incomprensibles sin un conoci- los movimientos inspirados por el odio del absolutismo y de los
miento exacto de la monarquía del Danubio. A pesar de los ma- tedeschi. Las valientes pero locas tentativas de fundar en 1849
gistrales trabajos de J. Droz y de R. Minder, Austria es una repúblicas en Roma, Florencia y Venecia son incomprensibles para
víctima de los mitos que oscurecen la historia alemana e impiden quien ignora sus vinculaciones con el provincialismo y el "campa-
captar, más allá de lo accidental, el sentido profundo del " a ñ o loco . nilismo" por un lado, y las empresas de los carbonarios (1820-21;
La imagen de una Prusia preparando la unidad política de Alemania, 1831) y las insurrecciones incoherentes de los años 1833-45 de la
debido a la prosperidad de 25 estados sobre 38, debe ser confrontada joven Italia por otro.
con la opinión de las clases mayoritarias y la de los políticos que
fueron los primeros en reclamar la libertad política y la unidad El Risorgimento, movimiento complejo de escritores comprome-
nacional. ¿Existe correlación o coincidencia entre el advenimiento tidos formados en la atmósfera romántica, ¿no ha preparado también
de Federico Guillermo IV ( 1 8 4 0 ) y el innegable progreso de la por falta de realismo los grandes desacuerdos de 1848'' El a/èer-
idea liberal y de la idea nacional en el curso de los anos cuarenta? tomo detrás de un déspota esclarecido que en 1821 había trai-
¿Por qué la verdadera .revolución, la que desconocía la existencia cionado sucesivamente a reaccionarios y liberales, ¿resistiría al
de la Dieta, surge de los pequeños estados del sur? ¿Por qué el par- prestigio de una monarquía pontificia reconciliada con la libertad?
lamento de Francfort, su emanación, está dominado por una No son solamente los movimientos italianos de enero de 1848
burguesía de intelectuales? ¿Por qué, en fin, el rey de Prusia no os que incitan a revisar el punto de vista tradicional según el cual
aprovecha en abril de 1849 las graves dificultades de Viena en las revoluciones europeas habrían comenzado en febrero de 1848 A
Hungría para convertirse en el emperador de una Alemania de la partir de 1846, la Europa de los sometidos se unifica en el sufri-
que Austria se excluye? miento y la esperanza, la E u r o p a de los príncipes en el terror Una
p a v é crisis alimentaria seguida de una depresión económica particu-
De todos los movimientos nacionales que agitarán Austria en
larmente aguda castiga desde las islas británicas a Europa central-
1848-49, el más poderoso es con mucho el movimiento magiar.
el cartismo parece renacer. ¿Pero por qué los trabajadores alemanes,
¿Satisfacer las reivindicaciones de la "nación húngara" significa
los proletarios parisienses parecen insensibles en una coyuntura
otra cosa que acordar a una aristocracia la libertad de oprimir a los
que si se produjera, justificaría una gran acción obrera? En
siervos de todos los orígenes y de incomodar a los extranjeros?
cambio, los conflictos políticos cuyo estudio pertenece sobre todo
¿En qué medida los "renacimientos eslavos" — e n primer lugar
a la historia de las relaciones internacionales, oponen ya el nacio-
un brillante "renacimiento checo"—, indiscutibles acontecimientos
nalismo agresivo y el ideal de fraternidad de los pueblos. Miles de
literarios, prepararon los movimientos de 1848? ¿El "despertar
alemanes —¡la izquierda no es la menos ardiente!— se disponen
de las naciones eslavas es, como lo pretende Engels, producto de
a combatir con la pequeña Dinamarca que se burla en Schlesvig-
una minoría de intelectuales románticos, nutridos de cultura ale-
Holstein de los "derechos" de un gran pueblo. Al contrario, todos
mana, dóciles instrumentos del "paneslavismo" (se exceptúa por
los elementos avanzados consideran un acontecimiento menor la
supuesto a los polacos, patriotas por instinto y enemigos de los
anexión de Cracovia (noviembre de 1 8 4 6 ) , como una nueva victoria
r u s o s ) ' ' ¿Cómo nació la idea de reunir a las poblaciones rumanas
de la reacción sobre las nacionalidades y saludan la derrota de los
de un lado y otro de los Cárpatos, en una de las provincias mas
catohcos suizos (noviembre de 1847) como el primer éxito obtenido
atrasadas de los Habsburgo?
14 Algunos problemas PRIMERA PARTE

por la "Santa Alianza de los pueblos" sobre la "Santa Alianza de


LA EUROPA DE LOS AÑOS CUARENTA
los reyes". ¿Por qué, en fin, en la época en que los notables franceses
hacen bellos discursos contra un régimen cuya fuerza inquieta a
Londres, las manifestaciones de carácter revolucionario hacen tem-
blar a los príncipes de Alemania meridional? La imprevisible
revolución parisiense estallará sobre un terreno minado.
Integrar los años 1846-1847 en los movimientos de 1848-1849,
intentar responder a las numerosas cuestiones planteadas, tratar de
justificar afirmaciones aparentemente tajantes es, para nosotros,
esclarecer un dossier complejo, sin sorprender la buena fe del lector
que desconfía siempre un poco de las certidumbres que exige.
I. EL REINO UNIDO: CAPITALISMO, PROLETARIADO,
LIBERALISMO, NACIONALISMO IRLANDÉS

Entre 1815 y los años cuarenta, el mapa de E u r o p a sufrió sólo dos


modificaciones notables: Bélgica y Grecia arrancaron su inde-
pendencia al reino de los Países Bajos y al imperio. otomano. Esta
estabilidad territorial contrasta con un auge demográfico hasta
entonces desconocido, los comienzos de la industrialización, la apa-
rición del proletariado de fábricas en algunos centros urbanos, el
ascenso de la burguesía. La burguesía — a d o p t e m o s provisional-
mente el singular, que oculta las diferenciaciones sociales que recubre
este vocablo— reivindica un lugar en el estado a la medida de su
peso en la economía. A la E u r o p a del este, agrícola, aristocrática,
aparentemente fijada en su absolutismo del pasado, se opone en
adelante en el oeste una E u r o p a nueva, burguesa, constitucional,
inclusive parlamentaria, cuyos rasgos más notables representa
Inglaterra.

EL CRECIMIENTO DEMOGRÁFICO Y LA PRODIGIOSA URBANIZACIÓN

E n el curso de la primera mitad del siglo xix, la expansión demo-


gráfica del Reino Unido (71 % ) alcanza un ritmo no igualado en
E u r o p a ( 5 0 % ) . De 1800 a 1850, el número de habitantes se eleva
de 16,2 a 27,7 millones. Gran Bretaña sola crece un 92 % (21,1
contra 11 millones). Irlanda un 27 % (6,6 contra 5 , 2 ) . Este auge
es sin embargo obstaculizado por la emigración transoceánica: cerca
de 300.000 irlandeses parten sin esperanza de retorno entre 1841
y 1845. El crecimiento británico se debe a la disminución consi-
derable de la mortalidad y al mantenimiento de un alto nivel de
natalidad.
La tasa media anual de mortalidad por cada 1.000 habitantes
de Inglaterra y del país de Gales, de 27,7 ( 1 7 8 1 - 1 8 0 0 ) y de 22,5
( 1 8 0 1 - 1 8 3 0 ) bajará a 21,4 entre 1841 y 1845. Esta reducción
fue precedida por el año 1798, que vió la publicación de la obra
donde Jenner reveló su descubrimiento de la vacuna antivariólica
y los comienzos de la campaña de Malthus.
El Reino Unido 19
18 La Europa de los años cuarenta
EL PODERÍO ECONÓMICO DE LA ARISTOCRACIA TERRATENIENTE
Conservador, Malthus recomendaba la limitación voluntaria de AMENAZADO: EL CAPITALISMO INDUSTRIAL Y COMERCIAL
los nacimientos en las familias pobres. La propaganda de sus CONTRA EL PROTECCIONISMO
partidarios no modificó en nada el comportamiento británico. La
tasa media anual de natalidad por cada 1.000 habitantes en Ingla- La Inglaterra de los grandes dominios no se parece a esa Europa
terra y en el país de Gales se estabiliza entre 1841-45 en 32,4. occidental de pequeños propietarios independientes ni a la Europa
Luego retoma su marcha ascendente para sobrepasar, entre 1871 central y oriental de campesinos todavía sometidos a las fuerzas
y 1875, con 35,5 — e l máximo del siglo—.su cifra de 1790. Su señoriales. Los landlords han obtenido de las Cámaras que dominan
alto nivel parece ligado a la urbanización y a la industrialización el derecho de anexar y de cercar los bienes comunales (terrenos
de Inglaterra: la promiscuidad de sexos en las fábricas y los tugurios en barbecho, tierras de pastoreo). Los dominios cercados son
de las aldeas bruscamente transformados en centros industriales, han divididos en vastas explotaciones agrícolas confiadas a farmers que
disminuido la edad para el matrimonio y favorecido la unión libre. disponen de un importante capital de explotación. El crecimiento
La Europa de 1800 contaba solamente con 22 ciudades de más de las ciudades asegura mercados fáciles para la carne. Las super-
de 100.000 habitantes. Francia tenía tres: París, Marsella y Lyon; ficies reservadas directa o indirectamente a la ganadería constituyen
las islas Británicas una sola: Londres. La capital política y financiera quizá las ¥4 partes de las tierras explotadas. En espacios reducidos,
del Reino Unido y de un inmenso imperio tenía, es cierto, cerca de los cultivos alcanzan rendimientos desconocidos en el continente.
un millón de habitantes ( 9 6 0 . 0 0 0 ) . Era ya la ciudad más grande
Este innegable triunfo de la técnica provocó profundos cambios
del mundo. También en ese entonces, desde la segunda mitad del
en la sociedad. La confiscación de los terrenos comunales por el
siglo xviii la revolución industrial modificaba la distribución de la
capitalismo terrateniente priva al pequeño propietario de los
población entre el campo y la ciudad. 4 8 ciudades de más de 10.000
ingresos que le reporta su escaso ganado, el auge del capitalismo
habitantes (con excepción de Londres) reunían el 1 1 , 9 % de la
industrial de su salario complementario como tejedor a domicilio;
población inglesa y galesa en 1801 y el 1 5 , 2 % en 1831. En la
corre el riesgo de convertirse en un aparcero o en un jornalero
Francia de 1836, todas las ciudades de más de 10.000 habitantes
sometido a una desocupación endémica, pues la extensión de la
(con exclusión de París) reunían sólo el 8,7 % de la población
ganadería tiende a reducir al mínimo la mano de obra asalariada.
total. El avance de Inglaterra y del país de Gales no cesará de
crecer. En 1851, en el Reino Unido se cuentan diez ciudades de y a para esta época, una parte del proletariado rural, inmenso
más de 100.000 habitantes — L o n d r e s tenía 2 . 3 6 3 . 0 0 0 — y en Fran- "ejército de reserva" del capitalismo industrial, se ha puesto en
cia cinco; 18 ciudades británicas contra 10 francesas tienen de marcha. De 1801 a 1831, la parte del sector agrícola en la población
50.000 a 100.000 habitantes; las aglomeraciones de más de 50.000 activa británica había disminuido de 35,9 % a 24,6 % y la del
habitantes representan el 20 % de la población de G r a n Bretaña sector industrial y minero había aumentado de 29,7 % a 40,8 % .
y el 6,5 % de la de Francia. Hacia 1850 el Reino Unido es el El éxodo de la Inglaterra del sur agrícola hacia la Inglaterra del
primer estado del mundo moderno que conoce una distribución norte industrial debía ser acelerado por la reforma de la legislación
igual entre ciudad y campo. U n a nueva Inglaterra urbana, hija social. L a ley de 1834 "sobre los pobres en Inglaterra y en el país
de la gran industria, se levanta frente a la vieja Inglaterra agrícola. de Gales" impone a los desocupados su internación en la workhouse.
La lucha por el poder, que en la mayoría de los estados europeos El hombre es separado de su familia. La "Bastilla de los pobres"
opone la aristocracia terrateniente a la aristocracia financiera, toma será vanamente denunciada por Dickens en Oliver Twist ( 1 8 3 8 ) y
aquí la forma original de una rivalidad, plena de transacciones, el joven Disraeli en Sybil ( 1 8 4 5 ) . Entre ella y la indigencia, la
entre el capitalismo industrial y el capitalismo terrateniente. mayoría de los proletarios elige la indigencia, primera etapa hacia
la fábrica. El impuesto de pobres cargado a los propietarios, cae de
ocho millones de libras en 1818 a cuatro millones en 1837.
Los representantes del capitalismo industrial y comercial intro-
ducidos en la Cámara de los Comunes, en virtud de la reforma
electoral de 1832, habían aceptado votar una ley reclamada por el
20 La Europa de los años cuarenta El Reino Unido 19

capitalismo terrateniente pero favorable a todas las formas de con carácter provisional, el impuesto sobre la renta (income tax) de
riqueza. En cambio, consideraban con creciente hostilidad el pro- Pitt; sin embargo, no se atreve a abolir de un golpe la legislación
teccionismo agrícola que una minoría había dictado a la nación. sobre granos: se mantiene la escala móvil pero sus tasas disminuyen.
Dueña de las Cámaras, la aristocracia terrateniente hizo votar en Por otra parte, desde 1843, baja el precio del trigo, los negocios
1815 las corn laws* Por abajo del precio de 80 chelines el mejoran, se estabilizan o aumentan ligeramente los salarios, el
quarter,** la importación estaba prohibida. Este proteccionismo movimiento cartista está en plena descomposición. La propaganda
riguroso es impotente para frenar una b a j a de carácter internacional de la Liga se refuerza y se extiende a E u r o p a para hacerle aceptar
que sólo interrumpe la penuria, generadora de trastornos sociales. una doctrina admirablemente adaptada a los intereses británicos.
L a legislación de 1828 abre una brecha en el sistema: el alza
del 50 % de 1822-25 ha provocado demasiados tumultos como
para que el gobierno no tome en cuenta los intereses de los consu- LOS FUNDAMENTOS DEL PODERÍO DEL CAPITALISMO INDUSTRIAL
midores. La introducción de la escala móvil sucede a las primeras
medidas sobre disminución de los derechos de ingreso de los E u r o p a constata con horror el poderío del "gigante británico"
productos fabricados ( 1 8 2 2 - 2 5 ) . Por primera vez desde 1815 el (Meyissen, 1 8 4 5 ) . El gigantismo es sin d u d a el rasgo más carac-
poder escapa, tímidamente por cierto, a la influencia del "grupo terístico de la industria británica y de todos los elementos que
de presión" dominante. favorecen su auge y a los que ella asegura, a su vez, su prodigioso
Durante una década, la evolución de los precios distrae un poco desarrollo.
la atención del público de la legislación de granos. E n 1835 los Los capitales creados en el transcurso del siglo xviii por el gran
precios del trigo bajan bruscamente, pero una mala cosecha invierte comercio colonial no permanecieron inactivos. Ninguna crisis
la tendencia y el alza continúa hasta septiembre de 1838. B a j o empaña el prestigio del viejo Banco de Inglaterra ( 1 6 9 5 ) : sus
la dirección de Richard Cobden, los industriales de Manchester' billetes son aceptados en E u r o p a como el oro. Algunos poderosos
encuentran la ocasión para desatar una gran campaña librecambista: bancos por acciones — q u e Francia ignorará hasta el segundo
en el punto más alto de la crisis f u n d a n la Liga contra la ley de imperio— colectan los fondos británicos: "El mayor crédito del
granos (Anti-Corn Law League). Apartada del terreno político, la m u n d o está al servicio de la economía más grande del mundo."
(E. L a b r o u s s e ) .
Liga invoca contra la escala móvil argumentos económicos — l a
industria inglesa acrecentará sus mercados en los países exportadores El "gigantismo del crédito" da origen al "gigantismo del tras-
de cereales— y sociales — t o d o s los consumidores se beneficiarán porte": rutas, canales y luego ferrocarriles librados a la iniciativa
con la desaparición del impuesto indirecto más injusto, el que privada. A comienzos del siglo xix, sólo las personas y el correo
más duramente golpea a los más pobres, el impuesto clandestino (el sello postal nace en Inglaterra) utilizan la red caminera. Los
sobre el p a n — . Así, la Liga se esfuerza por oponer al capitalismo canales, cuya era se abre con el de Bridgewater ( 1 7 5 9 - 1 7 6 1 ) han
agrario el frente unido de la alta burguesía y las clases medias monopolizado el trasporte de mercancías. E n cincuenta años las
por un lado, y por otro el proletariado obrero y agrícola. Su sociedades construyeron cerca de 5.000 km de canales en las
propaganda sigue los métodos típicamente británicos: petitorios, r e g i o n ^ mineras e industriales. Los ferrocarriles también aseguraron
campañas de prensa y en especial mitines. Los éxitos que la Liga primitivamente la circulación de la hulla. Su desarrollo continuó
obtiene especialmente en los centros urbanos incitan a la refle- durante una veintena de años a un ritmo más rápido que en otras
xión del primer ministro Robert Peel, preocupado ya por la partes, con excepción de Estados Unidos. Con la línea Manchester-
agitación obrera cartista. En 1842, el gobierno tory obliga a su Liverpool, que a partir del 15 de septiembre de 1830 trasporta
mayoría proteccionista a votar medidas librecambistas. Valiente- mercancías y pasajeros, comienza la era del riel en Europa. En
mente, para compensar las pérdidas del Tesoro, Peel restablece. Gran Bretaña primero es la "fiebre", y luego a partir de 1845, la
"locura" de los ferrocarriles. Las compañías encuentran en el
• Leyes de granos. [N. del E.]
mercado financiero capitales cada vez más abundantes a los que
Medida equivalente a 12.70 kg. [N. del E.] también recurren los constructores franceses y belgas. La longitud
El Reino Unido 19
2 2 La Europa de los años cuarenta

de vías pasa de 91 km en 1831 a 1.349 en 1841, 6.400 en 1848 masa. Hacia 1830, la concentración está muy avanzada en el hilado
( p a r a Francia, las cifras correspondientes son 88, 435, 1.930). A y sólo se bosqueja en el tejido, que a partir de 1822, como conse-
comienzos de 1848, Londres ya está en relación con los centros cuencia de mejoras técnicas decisivas, se transforma por fin en una
mineros y manufactureros así como con los principales puertós. operación mecánica. De la misma manera que el hilandero de la
Gran Bretaña, la primera nación marítima, se adaptó admira- empresa artesanal, el tejedor a domicilio es, a su vez, sometido a la
blemente a la revolución que provocó el vapor en la economía; en presión de la gran industria capitalista. La proporción de obreros
1840, Cunard inaugura con el Britannia una línea transatlántica de manufacturas en el tejido de algodón se eleva del 4 % en 1820
de barcos a vapor. "El período Victoriano, apogeo de prosperidad, al 70 % en 1845. La resistencia del artesanado a la proletarización
y poderío, evoluciona b a j o el signo del carbón . . ." recuerda es más vigorosa en las industrias textiles tradicionales. El West
A. Siegfried al comienzo de su estudio sobre La crisis británica en Riding tiende a ser para la lana lo que el Lancashire para el algodón.
el siglo XX ( 1 9 3 1 ) . El empleo corriente desde 1820 de máquinas El cardado y el peinado al agua y al vapor se expanden recién
alrededor de 1830. La oposición de los tejedores a la mecanización
a vapor en las minas, la metalurgia, la industria textil, estimula la
es eficaz porque se apoya en viejos reglamentos corporativos.
producción. El ferrocarril, gran consumidor, determina una dismi-
Gracias al algodón, sobre todo, la industria británica domina los
nución de los precios. De 10 millones de toneladas en 1800, la
mercados europeos. En 1830 la producción de algodón del Lan-
producción de las minas de carbón británicas se eleva a 56 en
cashire representa V., partes de las exportaciones del Reino Unido.
1850, o sea las Vr, partes de la producción mundial. Desde 1840,
Este enorme poderío industrial es inseparable de transformaciones
el consumo de carbón por habitante es de 1,11 toneladas en el
sociales a una escala tal que la historia jamás había ofrecido
Reino Unido contra 0,13 en Francia.
ejemplos.
El auge de la metalurgia se explica aquí más que en otras partes
por la abundancia de carbón. El desarrollo de Birmingham, capital
de la Black Country y metrópoli de las máquinas de vapor —^Watt
funda allí en 1776 su m a n u f a c t u r a — es prodigioso: 15.000 habi- LAS CONSECUENCIAS SOCIALES DEL GIGANTISMO INDUSTRIAL:
tantes en 1700, 73.000 en 1801 y 225.000 en 1850. La aparición PROLETARIADO V PATRONATO
de los altos hornos lleva a Glasgow a un crecimiento más rápido
todavía: la población pasa de 77.000 en 1801 a 345.000 en 1851. El aumento de la población obrera precipita el crecimiento de todos
Para ese entonces, el Reino Unido produce la mitad del hierro los centros textiles. Manchester ( 2 0 . 0 0 0 almas en 1760, 250.000
del mundo. El creciente papel de la metalurgia pone fin al predo- en 1830, 401.000 en 1851) y el Lancashire —desde fines del
minio exclusivo de los bienes de consumo en la economía. siglo xvin hasta alrededor de 1820, el número de obreros del
La rama textil sigue no obstante siendo, como en el siglo xviii, algodón aumenta grosso modo de 30.000 a 360.000 en este condado
la actividad esencial del Reino Unido. En realidad, la expresión donde se acumulan las manufacturas— constituyen el modelo más
"revolución industrial" empleada a veces de manera inadecuada, acabado de una nueva sociedad dividida entre el feudalismo in-
se aplica á las transformaciones que introdujeron en ella el telar dustrial y el proletariado de las fábricas, cuyo irreductible anta-
mecánico y la máquina a vapor. La joven industria algodonera gonismo describirán muy pronto Marx y Engels.
aceptó las innovaciones técnicas en la primera mitad del siglo xix La historia es a veces irónica: por voluntad de su padre, rico
mucho más que la vieja industria de la lana. Desde 1770 Lan- hilandero de Barmen y copropietario de una manufactura en
cashire es el dominio del algodón. La mecanización del hilado Manchester, el joven Engels, en 1842, va a hacer su aprendizaje
resulta de la aplicación del waterjrame de Arkwright ( 1 7 7 1 ) que de futuro "explotador" en este observatorio privilegiado. Sus pri-
reemplaza por todas partes a comienzos del siglo xix al hilado a meras impresiones forman la trama de los artículos aparecidos en
mano. El hilado a domicilio desaparece a favor de la pequeña
la Rheinische Zeitung* de Colonia dirigida por Marx, artículos
empresa artesanal. Hacia 1820, se generaliza la sustitución del
motor hidráulico por el motor a vapor. La baja de precios, fenómeno
europeo ya señalado, empuja a los fabricantes a producir en * Gaceta Renana. [N. del E.]
La Europa de los años cuarenta El Reino Unido
24 25

reunidos en 1845 en Die Lage der arbeitenden Classen in England es muy sensible a las variaciones del precio del pan que con la
(La situación de la clase obrera en Inglaterra) que tuvo enorme papa, forma la parte esencial de su alimentación. Alimentación
repercusión en los medios cultos de lengua alemana. L a revista desequilibrada — t o d o s los observadores comprueban los progresos
Gegenwart de Leipzig, poco sospechosa de simpatizar con el socia- del raquitismo—, a menudo de mala calidad, y la mujer del
lismo y el comunismo, considera a esta obra como el acta a e obrero, obrera también, sólo puede ser una mediocre ama de casa.
acusación más rigurosa dirigida contra "la sociedad industrial y ¿Los manufactureros fueron testigos egoistamente indiferentes
sus consecuencias". , ., de esta miseria? El feudalismo industrial de los años cuarenta no
era de ningún m o d o un grupo homogéneo o una casta cerrada. En
El crecimiento de la población lleva al alza de los alquileres
un país donde la aristocracia no limita sus actividades a la explota-
y a la proliferación de los tugurios: en Manchester y en Liverpool
ción de sus tierras, algunos representantes de la gentry poseen
se instalan albergues en los sótanos. L a fábrica donde se p n t a n
siempre empresas industriales. Richard Cobden, gran fabricante
máquinas y obreros es un foco de infecciones; hacia 184U, el
de Manchester, y Robert Owen, convertido en uno de los más
30 % de los habitantes de Derby muere de enfermedades pul-
grandes algodoneros gracias a sus fábricas de New Lanark cerca
monares. Con la difusión del farol a gas, la jornada de trabajo
de Glasgow, saheron de capas sociales puestas cruelmente a prueba
se prolonga hasta alcanzar dieciséis a diecisiete horas. Asi se por el p r o c e s o técnico. El padre de Cobden era un pobre farmer
explica el desarrollo del alcoholismo — a u n q u e algunos autores del sur de Inglaterra. Owen es hijo de un galés fabricante de sillas
nieguen su importancia— en un mundo de desarraigados. Los a e montar. En el mundo de los manufactureros de orígenes
salarios, generalmente bajos, son a menudo reducidos por el diversos, con empresas de variadas dimensiones, los sufrimientos
truck system — u n a parte de lo ganado se da al obrero en productos obreros —defensa de salarios, reglamentación de las condiciones
alimenticios a un p r e d o fijado arbitrariamente por el empleador—, de trabajo y empleo (los despidos son a discreción del p a t r o n a t o ) —
que se aplica a pesar de la prohibición legal. Los asalariados están no provocan reacciones unánimes.
sometidos sobre todo a una doble presión: al aflujo de los prole-
tarios rurales y los artesanos empobrecidos se agrega la competencia El espíritu puritano, considerando que la riqueza es "un don de
de la mano de obra barata que proporcionan los irlandeses, las Dios , conduce, según los individuos, a actitudes opuestas. Algunos
mujeres y los niños. piensan testimoniar su reconocimiento al Creador mejorando el
Importantes movimientos hacia Inglaterra preceden a las grandes bienestar de sus obreros: son los "buenos patrones". Las generosas
migraciones transoceánicas de los años cuarenta: más de un millón innovaciones de Robert Owen, el fundador del movimiento coope-
de irlandeses famélicos — l a papa es su principal alimento a razón rativo, el padre del socialismo inglés" son conocidas: se evoca
de 10 a 12 libras por persona , y por día— forman una parte con agrado la fábrica modelo de New Lanark con su ciudad obrera
considerable de la población flotante de los centros mdustriales. El de viviendas higiénicas, su escuela para los niños sustraídos a la
irlandés acepta cualquier salario y las peores condiciones de vida; maquma. El Robert Owen de esta época era aun conservador y su
esto es lo que Engels descubrió visitando los barrios miserables de acción ¡prolongaba la de su suegro, el rico manufacturero David
Manchester con la joven obrera irlandesa Mary Burns. Sus obser- Dale. El padre de Robert Peel era también un patrón "social"
vaciones directas están en la base del pasaje del Manifiesto Comu- Los anatemas de Engels, los testimonios de los contemporáneos de
nista que liga la introducción masiva de las mujeres y los^ ninos las mas diversas tendencias —filántropos evangélicos o radicales
en las fábricas con el auge del maquinismo: " N o hay mas que anticristianos— coinciden en denunciar la implacable tiranía de la
instrumentos de trabajo cuyo costo varía según la edad y el sexo. mayor parte de los manufactureros. La vieja legislación Señor y
El salario de la mujer, siempre inferior al del hombre, es un aporte siervo que también conocía el continente — a n t e los tribunales
indispensable para la familia angustiada por el espectro de la salvo pruebas en contra, el primero siempre tiene razón— es uii
desocupación. Si se produce una crisis — y fueron numerosas en arma temible. La contradicción entre un egoísmo feroz y los senti-
la primera mitad del siglo x i x — , miles de trabajadores deben mientos cristianos que se manifestaban con ostentación es rara-
aceptar la reducción de salarios y el aumento de los días de desocu- mente percibida. A menudo ése es el caso de los fundadores de
pación; otros miles son arrojados a la calle. La poblacion obrera tabncas con recursos inicialmente modestos; los capitales, que se
26 La Europa de los años cuarenta El Reino Unido 27
ofrecen a las grandes empresas de crédito asegurado, resisten a las Los regímenes electorales (¡cJ singular es una simplificación
solicitudes de los nuevos manufactureros. Así se explicarían "el abusiva de nuestro espíritu cartesiano!) elaborados al azar de Jas
enceguecimiento casi total contra todo lo que no produzca dinero circunstancias, se fundan sobre criterios económicos y sociales peri-
[y] una dureza [ . . . ] respecto a la m a n o de obra obrera" ( E . J. midos que sólo una lengua deliciosamente arcaica preserva del
Hobsbawm). olvido: colonos libres (freeholders), propietarios o poseedores de
La cólera contra la opresión y su símbolo, la máquina, condujo a un bien de por vida que Ies reportaba al menos 4 0 chelines, o sea
los obreros, desde fines del siglo xvni, a destruir telares, a quemar el equivalente a 50 francos (en Francia el censo,* de 300 francos
la fábrica y la casa del patrón. A pesar de una legislación terrorífica, en 1815, será, de 200 francos en la víspera de 1 8 4 8 ) ; pot-boilers
algunas huelgas apoyaron las reivindicaciones salariales. Los traba- (los que tenían algo que hervir en su c a c e r o l a ) . . . L a supremacía
jadores no vacilarán jamás, en una coyuntura favorable, en utilizar política de la aristocracia terrateniente anglicana resulta menos
tal arma. Su comportamiento aparecería también conforme a un de reglamentos perímidos — a u n q u e los n o conformistas hasta 1828
prejuicio sobre el temperamento británico (la primacía de los y los católicos hasta 1829 no puedan ser elegidos— que de prác-
intereses materiales sobre las seducciones de la ideología), si los ticas detestables pero eficaces.
obreros no hubieran oscilado, hasta los años cuarenta, entre la E n los condados, los electores son obligados a expresar su pre-
acción política y la acción sindical. ferencia en un registro en presencia de un delegado de la gran
propiedad. E n los burgos podridos la elección no cuestionada
(uncontested election) es la regla. Además, el pequeño número de
LA FUERZA POLITICA DE LA ARISTOCRACIA TERRATENIENTE electores favorece las formas más vulgares de la corrupción. La
TAMBALEA POR LA ALIANZA DEL PROLETARIADO Y LAS CLASES Inglaterra pervertida, grosera y brutal de Hogarth se perfila detrás
MEDIAS: LA REFORMA ELECTORAL DE 1 8 3 2 de la Inglaterra virtuosa y respetable.
Reclutada así la Cámara de los Comunes, que supuestamente
La crisis de 1815-19, caracterizada entre otras cosas por el enca- representa a la nación, se parece extrañamente a la de los lores,
recimiento del pan —las corn laws fueron votadas en 1 8 1 5 — emanación de los señores. Los intereses de la aristocracia terra-
provoca un descontento general contra el capitalismo agrario y su teniente son tan bien defendidos por el ministerio tory como lo
mandatario, el ministerio tory. Un cambio en la orientación política, serían por un ministerio wh/g. A comienzos del siglo xix, las
concebible en principio —el Reino Unido es el único estado del facciones sobrevivían a las querellas del siglo xvii. Se nacía tory o
mundo que practica el régimen parlamentario—, es de hecho whig como se nace republicano o demócrata en ios Estados Unidos
imposible mientras subsista el sistema construido " p a r a la como- de hoy. Fuera del parlamento y del whigismo se desarrolla en los
didad de una aristocracia" ( A . Maurois), Cada condado envía medios burgueses el movimiento radical al que adherirá una frac-
a la Cámara de los Comunes dos diputados, cualquiera sea su ción creciente del proletariado británico.
población. Esta única concesión a la lógica otorga una creciente La participación de las masas populares insufla a una corriente
ventaja a la Inglaterra del sudeste rural que declina sobre la ideológica ya vieja un impulso revolucionario de un vigor inigualado
Inglaterra del noroeste industrial y en expansión. Disposiciones en el continente hasta las jornadas parisienses de 1830. Con Ja
aparentemente favorables a las ciudades refuerzan aun la represen- guerra, la aristocracia gobernante había sabido derivar las pasiones
tación de la vieja Inglaterra: los condados designan 80 diputados, populares contra la Francia enemiga e "irreligiosa", sobre los
las ciudades 405. Las ciudades, esto es, los burgos (boroughs y no jacobinos ingleses que habían recibido con mucho entusiasmo la
towns) cuya fidelidad las hacía recomendables antaño a la elección Revolución (James Mili, el padre de Stuart, Thomas Paine, al que
de tal o cual soberano; los burgos podridos poblados por algunos la Convención recibió en sus bancas, los jóvenes poetas de la
habitantes, casi desiertos, están representados en los Comunes "primera generación romántica" Wordsworth y Coleridge). Des-
mientras que centros comerciales e industriales como Liverpool,
Manchester y Leeds no tenían diputación propia. • Cens, en francés: cuota d e imposición necesaria p a r a ser elector o
elegible. [N. del E . ]
28 La Europa de los años cuarenta El Reino Unido 29

pués de 1815 el partido radical reunía, además de los sobrevivientes para tratar, en condiciones sin embargo desfavorables —la depre-
del jacobinismo burgués de fines del siglo xviii, algunos elementos sión de los años 1825-32—, de reagrupar en vastas federaciones
de origen popular. Con William Cobbett, hijo de un pequeño al conjunto de los trabajadores británicos. En 1830, la Asociación
granjero creador de la prensa barata, y Francis Place, viejo obrero nacional para la protección del trabajo, bajo la conducción del
sastre, el partido radical se extiende a los proletarios del campo obrero irlandés John Doherty, se propone federar todas las unions
y las ciudades. Slogans temidos —sufragio universal, abrogación de los textiles, metalurgia y minas. El año en que esta Asociación
de las corn laws—- atraen a grandes muchedumbres: en 1816 en desaparece ( 1 8 3 1 ) nace otra: la Unión nacional de las clases obre-
Spafield, cerca de Londres, miles de obreros aclaman un gorro ras, que bajo la dirección del ebanista londinense Lovett, pretende
frigio y una bandera verde, blanca y roja, símbolo de la soñada agrupar a todos los oficios.
República de Gran Bretaña. La agitación persiste hasta el 16 de La aparición de este sindicalismo de tipo moderno no podría ser
agosto de 1819, día en que 50.000 trabajadores se reúnen en St. disociada del clima revolucionario que las jornadas parisienses
Peter's Fields, cerca de Manchester. La tropa carga: once muertos de 1830 mantuvieron t n la propia Inglaterra. Ante todo, clima de
y centenas de heridos, tal es el precio pagado por los obreros • revolución política: todos los excluidos del derecho de voto reclaman
ingleses que, por primera vez eri Europa, han osado reclamar abier- la reforma electoral, la burguesía industrial para ella misma, los
tamente el sufragio universal. La "batalla de Manchester" -^Peterloo, radicales para la mayoría. Mientras las viejas unions vacilan, como
dirán los adversarios del gobierno evocando Waterloo con amarga antes, a comprometerse en la acción política, la Unión nacional de
ironía— es seguida del voto de una legislación de excepción (las las clases obreras concentra su propaganda —Lovett colabora estre-
Six Acts)-, el radicalismo inglés no sólo aterrorizó a los gobernantes chamente con las campañas de Place y Cobbett, que han vuelto a
de Londres sino que suscitó el terror del otro lado del canal de la entrar en escena— sobre la reivindicación de una Cámara anual
Mancha. Comentando el reciente asesinato del duque de Berry, la elegida mediante voto secreto y sufragio universal. La obstinación
Gazette de France escribe ( 2 7 - 2 - 1 8 2 0 ) : "El hacha de los radicales de la Cámara d e los lores desencadena. las pasiones populares:
ingleses es la misma que la de los jacobinos franceses". Pero muy 10.000 obreros sitian el palacio de Saint-James; en Bristol se
pronto la Inglaterra obrera se aleja de una ideología extranjera incendia la residencia episcopal. Los lores capitulan. La ley de
para volcarse durante una decena de años a una forma de acción 1832 suprime los abusos más manifiestos; 143 bancas les son
específicamente británica, la acción profesional. retiradas a los burgos podridos y a burgos poco poblados y son
Las asociaciones obreras {unions) existen en Inglaterra desde el adjudicadas a condados y ciudades con poca o ninguna represen-
siglo xvni. En principio son sociedades de socorros mutuos pero de tación; por primera vez, 21 ciudades, especialmente Manchester,
hecho son también sindicatos. En el primer caso, la legislación Leeds, Birmingham, enviarán diputados a Westminster. Los privi-
favorece su actividad; en el segundo la prohibe. Pero la policía legios de la vieja Inglaterra del sudeste son restringidos, pero la
inglesa no tiene la eficacia de la que creara Napoleón. El movi- Inglaterra del noroeste sufre siempre un tratamiento injusto. En los
miento sindical, que se mantuvo alejado de la agitación política, burgos, todo ocupante de un inmueble de diez libras de alquiler
sale fortalecido del fracaso del partido radical. La recuperación se convierte en elector. En total, el cuerpo electoral pasará de un
económica de 1820-25 facilita su acción. Las huelgas se muldplican. poco menos de 500.000 a 800.000. La burguesía industrial y
Queda por acordar el derecho al hecho. Desde 1822, el ministerio comerciante es la gran ganadora. Los obreros se consideran traicio-
tory había recibido hombres nuevos como Peel y Huskisson, menos nados. El sindicalismo político de la Unión nacional de las clases
inclinados que sus colegas a sostener a cualquier precio la Ingla- obreras los ha decepcionado; sin abandonar el sindicalismo cor-
terra del pasado. En 1824, una ley acuerda a los obreros el derecho porativo de las viejas unions, se reagrupan, en un clima de revo-
de coalición en las cuestiones relativas a salarios y duración del lución social casi socialista, en la Unión general de los oficios que
trabajo. Aunque restringida en 1825, su alcance es considerable. Robert Owen f u n d a a fines de 1833.
Por primera vez en la historia, los trabajadores son autorizados a
defender su derecho a la vida cesando el trabajo. El tradeunionismo
se convierte en una fuerza suficientemente segura de sí misma como
El Reino Unido
30 La Europa de los años cuarenta 19
Este movimiento es político en sus principios (la reivindicación
EL MOVIMIENTO OBRERO DEL SINDICALISMO REVOLUCIONARIO
del sufragio universal), social en sus fines ("la cuchara y el plato")
AL SINDICALISMO REFORMISTA POR LA ETAPA CARTISTA DE LA LUCHA
y en su composición (el elemento obrero es ampliamente mayori-
POR EL SUFRAGIO UNIVERSAL
tario). N o es socialista (las reformas de estructura de la Unión
general caen en el olvido), ni sindicalista (las unions se mantienen
Robert Owen ( 1 7 7 1 - 1 8 5 8 ) goza del prestigio de un profeta a quien ante todo en reserva, como en las grandes épocas de agitación por
los acontecimientos parecen darle la razón: había condenado la la reforma radical). Británico en el pleno sentido del término —los
agitación por la reforma electoral, a la que consideraba una irlandeses ocupan un lugar importante en el heterogéneo estado
estafa. Los obreros no deben contar más que con ellos mismos. La mayor del movimiento— el cartismo, reviviendo la tradición del
Unión general de los oficios se propone, como las dos centra es jacobinismo y del radicalismo inglés de fines del siglo xviii y de los
precedentes —Lovett, el inspirador de la Unión nacional de las años veinte, se abre ampliamente a la ideología revolucionaría
clases obreras, alejándose momentáneamente de los radicales, se francesa.
había unido a O w e n — , reagrupar todas las unions del Remo Unido. La Asociación de trabajadores londinenses ( 1 8 3 6 ) , sociedad de
Esta confederación general de oficios —nosotros diríamos hoy educación popular con 150 filiales en 1838, se da un programa de
confederación general del t r a b a j o — se apoya en un organismo seis puntos elaborado por Lovett y Place: sufragio universal, voto
original imaginado por Owen (¡el espíritu de organización de Owen secreto, dieta parlamentaria, abolición del censo electoral, igualdad
contrasta con el romanticismo de Fourier que cree en el papel de las circunscripciones electorales, parlamento anual. El abogado
bienhechor de las pasiones!): la cooperativa obrera de producción. irlandés James Bronterre O'Brien ( 1 8 0 5 - 6 4 ) intenta conciliar la
El sindicalismo tradicional, por la etapa de la cooperativa obrera ensenanza de Owen y las tradiciones de la Montaña y de Babeuf.
conducirá al socialismo. El vocablo apareció hacia 1825 en el En 1837 traduce la obra publicada nueve años antes en Bruselas
círculo íntimo de Owen. En 1841, el célebre folleto de Owen por Buonarotti {Histoire de la conspiration pour l'égalité dite de
{What is socialism?) le dará derecho de ciudadanía en la lengua Babeuf) y en 1838 escribe una Vie de Robespierre. Feargus O'Con-
inglesa. La palabra mágica, ligada a la idea de un cambio inmi- nor ( 1 7 9 4 - 1 8 5 5 ) , también irlandés y abogado, orador realista y
nente, desencadena el entusiasmo del proletariado. L a Union periodista de talento, abunda en ideas confusas y contradictorias.
general reúne bien pronto 500.000 adherentes a quienes se les A pesar de sus divergencias, todos los jefes cartistas así como los
enseña que la huelga general es capaz de asegurar el triunfo de la cuadros del movimiento, obreros calificados y artesanos instruidos,
revolución socialista. A las huelgas que desencadenan en toda están convencidos que la democracia política es la condición para la
Inglaterra, los pátrones responden con el lock out. Éstos encuentran democracia económica. Los dos embates cartistas coinciden con el
en los poderes públicos aterrorizados por la agitación social un alza de precios de 1838 —el trigo alcanza un precio record— y la
apoyo incondicional (el ministerio whig no es más favorable a los depresión de 1842: aumenta la desocupación y bajan los salarios.
obreros que los gobiernos tories de antes). El fracaso de las huelgas La agitación cartista entra en competencia con la agitación de la
y la represión explican el desmembramiento de la Unión general, Liga de Cobden. Los cartistas afirman que la disminución del costo
primer ejemplo de un sindicalismo revolucionario apolítico, en el de la vida traerá apareada la disminución de los salarios; agregan
trascurso del verano de 1834. En agosto, el voto de la inhumana a la reivindicación política una vehemente campaña por la abo-
ley de pobres por casi unanimidad de las Cámaras, inclina los icion de la ley de pobres. Arrastran a una parte del proletariado de
ánimos a poner en duda los métodos preconizados por Owen. las fabricas textiles y mineras, pero sobre todo reclutan en el
Progresa la idea de que la suerte de los trabajadores seguirá siendo proletariado a domicilio, que se inclina a aceptar los métodos (el
precaria mientras la Cámara de los Comunes represente sólo los recurso a la "fuerza física") y el objetivo a decir verdad reac-
intereses de los poseedores. Bruscamente en 1836, con la aparición cionario de O ' C o n n o r : ¡recrear una Inglaterra del pasado destru-
de grandes dificultades económicas, dicha idea inflama a una yendo las máquinas y reconstituyendo la pequeña propiedad
gran parte del proletariado e inspira el cartismo, uno de "los más campesma! El Northern Star tira 42.000 ejemplares, más que ningún
grandes movimientos populares de los tiempos modernos" (E. diario francés. Más de 100.000 manifestantes en Glasgow, Birming-
Labrousse).
33
La Europa de los años cuarenta El Reino Unido 19

ham y Leeds, más de 30.000 en Manchester y en Liverpool aclaman abre una nueva etapa hacia el sindicalismo unitario y reformista.
el programa del movimiento: los Six Points esencialmente políticos Esta confederación reclama la jornada de diez horas y salarios más
de Lovett y Place se convierten en la Carta del pueblo. Un petitorio elevados. Cree posible obtener, mediante la negociación, la insti-
a la Cámara de los Comunes reúne firmas y se designan delegados tución de procedimientos de arbitraje. Estos puntos de vista "a ras
a una Convención obrera, el parlamento del pueblo. El entusiasmo de tierra (E. Halévy), muy alejados de los sueños generosos de
de sus adherentes incita a ciertas unions a participar en bloque en un pasado reciente, están por cierto de acuerdo con el estado de
los mítines. Reunido en Londres en 1839, el parlamento del pueblo ammo de la mayoría de los trabajadores británicos. Los agitadores
comprueba que la Gran Petición sólo ha recogido 600.000 firmas. mas turbulentos tienden a adaptarse al nuevo clima. El diario de
En mayo, los partidarios de la "fuerza física" obtienen el acuerdo O Connor se convierte, hecho significativo, en el Northern Star and
de los adeptos a la "fuerza moral" (Lovett) para imponer, mediante National Trades Journal, pero lejos de ganar nuevos lectores los
la huelga general, la introducción en el Reino Unido del sufragio pierde. El descenso, que comenzó después de la gran fiebre de
universal. En julio, la Cámara de los Comunes rechaza la petición 1839, continúa. El tiraje promedio pasa de 12.000 ejemplares en
cartista. La Convención, replegada en Birmingham, lanza en agosto 1842 a 7.500 en 1844 y 6.000 en 1846. Todo aqueUo que recuerda
la orden del huelga. Las unions, siempre hostiles a una agitación al romanticismo cartista parece tan pasado de moda como el
política arriesgada, no participan. El fracaso es total. La represión romanticismo literario.
cae sobre los cuadros del cartismo. T o d o parece terminado en el
verano de 1839. • j i
Todo recomienza a principios de 1842. El renacimiento del EL GOBIERNO DE LOS POSEEDORES Y LA PAZ SOCIAL
movimiento resulta de los indecibles sufrimientos del invierno de POR LA FILANTROPÍA
1841-42. Sube el precio del pan; las fábricas cierran sus puertas. La
petición de 1842 contiene reivindicaciones sociales, incluso socia- Los poetas románticos de la "segunda generación", liberales, incluso
listas; entre otras, la supresión de la apropiación privada "de las ^volucionarios como los de la primera, los Byron, los Shelley, los
máquinas y de la tierra". Su éxito no tiene precedentes: ¡3.300.000 Keats, desaparecieron antes de 1830. Ningún país de Europa parece
firmas! La Cámara de los Comunes no por ello deja de negarse mijs alejado de las efusiones sentimentales que Inglaterra. El
a tomarla en consideración. Espontáneamente, una parte de la clase debilitamiento del proteccionismo y la reforma electoral marcan el
obrera reacciona. A pesar de la abstención de las unions y de los ascenso de una clase de comerciantes, industriales, gente calcula-
consejos de moderación de los jefes carlistas — O ' C o n n o r mismo dora y fría" (A. M a u r o i s ) . Muy pronto y pacíficamente, según la
denunciará los excesos de sus discípulos de la "fuerza física" , voluntad de Dios, el poder pasará a las manos de los más
estallan huelgas en un clima insurreccional. En agosto, durante tres meritorios: los manufactureros y los hombres de negocios. Pero
semanas, la huelga es general en Lancashire, Yorkshire, Staford- permanece siempre en manos de los grandes señores. Sin duda,
shire. Después, con el auge de 1843, se apaga el fuego como en despues de 1832, la ampliación del cuerpo electoral y la redis-
1820, 1832 y 1839. tribución de las bancas reforzaron la posición de los whigs. Los dos
Las desilusiones provocadas por la acción política no han afectado partidos" se equilibran. Los whigs gobiernan de 1830 a 1834 y
la autoridad de las unions, que se mantuvieron prudentemente de 1835 a 1841; los tories de 1834 a 1835 y de 1841 a 1846.
alejadas del cartismo. El sindicalismo de los años 1843-45 rompe Ministros y candidatos a ministro pertenecen a las mismas grandes
con el sindicalismo socialista y revolucionario de Owen y con el familias de esta aristocracia que sabe entreabrirse a la riqueza y
sindicalismo tradicional y regional. Estrictamente profesional, se al talento (el tory Peel, hijo de un manufacturero, es un ilustre
esfuerza, como lo había intentado John Doherty en 1830, por agru- ejemplo de este prudente liberalismo). También la ideología
par las unions en poderosas centrales. En 1842 aparece la Aso- desempeña un mediocre papel en las batallas políticas. El parla-
ciación de mineros de Gran Bretaña e Irlanda, que reúne mas de mento legisla en interés de los más dignos, poseedores, y de los
100.000 miembros. Con la Asociación nacional de oficios unidos mas debiles, los niños y las mujeres. La ley de pobres de 1834
para la protección del trabajo, fundada en Londres en 1845, se es el caso más célebre de intervencionismo egoísta. El intervencio-
19
El Reino Unido
34 La Europa de los años cuarenta
fundado en la pertenencia a una religión, Lamennais y sus amigos
nismo filantrópico que inspira el espíritu evangélico aparece en una
franceses lo admirarán, los católicos belgas y alemanes lo imitarán.
serie de medidas, las primeras de las cuales se remontan a los
La extensión del derecho de sufragio asegurará sólidas bases a los
tiempos de la hegemonía tory. Inoperantes por falta de órganos de
partidos católicos. Los poderes públicos tenían por cierto ese pre-
control, son seguidas, después de 1830, por prescripciones legis-
sentimiento en el momento en que la agitación irlandesa los obligó
lativas a las que Marx rendirá homenaje. En 1833, a proposición
a ceder. La emancipación de los católicos del Reino Unido ( 1 8 2 9 )
de un tory evangélico, lord Ashley, la mayoría whig vota una ley
permite a los electores irlandeses enviar diputados católicos a
válida para toda la industria textil; se prohibe el trabajo nocturno
para los niños; el máximo de la jornada de trabajo es de 8 horas Westminster. ¡Pero el fair play tiene sus límites! Antes de 1829,
para los menores de 13 años y de 12 horas para los jóvenes entre la "franquicia electoral" era poco elevada en Irlanda; en 1829 se
13 y 18 años. Innovación capital: ¡se crean 4 cargos de inspector quintuplicó. El número de electores cae de 200.000 a 26.000.
de trabajo! En 1844, lord Ashley obtiene del gobierno tory la O'Connell no tiene nada de revolucionario: no quiere ni a los
confianza y el voto de un texto llamado a hacer época: de 8 a H - obreros de las trade unions ni a los colonos que sueñan con la
años, la jornada de trabajo no puede sobrepasar 6 horas y media; expropiación. Al servicio de la . Iglesia católica, obtiene primero
de 13 a 18 años, 11 horas; los menores de 10 años no pueden ser la supresión de 10 obispados anglicanos y finalmente la reducción
empleados en hilanderías ni en minas; en estas últimas, el trabajo del diezmo pesado y vejatorio (que enriquece a la Iglesia aborrecida)
de las mujeres está también prohibido. Por primera vez en la y su trasformación en un impuesto percibido por el estado ( 1 8 3 8 ) .
historia social de Europa, el estado se preocupa por la suerte de los Estos éxitos se deben a la fuerza del grupo parlamentario irlandés
trabajadores adultos. Si bien es sensible a los aspectos más inhu- — 4 1 diputados en 1 8 3 2 — y a la táctica de O'Connell. El objetivo
manos de la explotación capitalista, el espíritu filantrópico per- proclamado — l a independencia mediante la abrogación {repeal)
manece cerrado, salvo casos excepcionales, a las reivindicaciones del Acta de Unión de 1 8 0 1 — no es más que un medio de presión
de la Irlanda nacionalista, romántica y revolucionaria. sobre los whigs, que gobiernan (salvo el intermedio tory de 1834-35)
hasta 1841 con los votos irlandeses. O'Connell, dispuesto a una
"reconciliación total y eterna", espera convertirse en ministro
encargado de los asuntos de Irlanda. Los elementos más avanzados
LA IRLANDA ROMÁNTICA CONTRA LA INGLATERRA PRAGMÁTICA
del movimiento denuncian las ambiciones y comprorriisos del ídolo.
En las elecciones de 1841 O'Connell pierde su banca. El espíritu
La opinión pública inglesa permanece profundamente hostil a los
de revuelta sopla otra vez en Irlanda.
irlandeses, esos papistas siempre dispuestos a traicionar a sus
conquistadores. Los obreros protestantes se quejan de la compe- El grupo de la Joven Irlanda, animado por el poeta protestante
tencia de hombres rústicos que, acompañados por sus sacerdotes, Thomas Davis y organizado por el periodista Cavan Duffy, se
acuden hacia las ciudades manufactureras. Los ricos se indignan convierte, a partir de la fundación en Dublin ( 1 8 4 2 ) de un
al descubrir tantos irlandeses entre los agentes más ardientes de la semanario con el título evocador de The Nation, en el punto de
subversión social. Los miembros de la "clase política", acostum- convergencia de los irreductibles. Sus miembros son jóvenes —en
brados a los tiernos discursos de estos clubes exclusivos que son 1842 Davis tiene 28 años, Duffy 26 y Smith O'Brien, el más
las Cámaras, se impresionan por las violentas arengas que un viejo, 3 9 — e intelectuales. Para recrear la nación, hay que devolver
Feargus O'Connor pronuncia ante enormes multitudes. ante todo su alma al pueblo sometido. El patriotismo de la Joven
En el país de los tribunos, el abogado Daniel O'Connell (1775- Irlanda es original. No es ni racista ni religioso, apenas lingüístico:
1847) había desatado, desde 1823, un combate verbal contra las de cultura inglesa, los jefes de la Joven Irlanda se preocupan muy
desigualdades más manifiestas. Su Asociación católica había logrado poco del gaèlico, lengua todavía hablada hacia 1840 al oeste de
movilizar al clero ignorante y por muchos años apático. Desde hacía una línea Londonderry-Waterford. La exaltación de los grandes
tiempo, el sentimiento nacional y el fervor católico estaban hombres, un San Columbano o un Duns Escoto, y la publicación
indisolublemente unidos en el alma polaca, pero gracias a O'Connell, en inglés de cantos y baladas populares en el Spirit of the Nation,
Irlanda ofrece a Europa el primer ejemplo de un partido de masas
36 La Europa de los años cuarenta El Reino Unido 19

deben forjar una comunidad de sentimiento entre los descendientes a la agitación es capaz, como lo afirma Engels en 1845, de salir de
de los celtas y de los sajones, entre los católicos y los protestantes. su sopor para abatir el capitalismo? Si el proletariado está defi-
Estas ideas generosas se oponen a las concepciones de O'ConnelI, nitivamente calmo, como lo esperan los gobernantes pragmáticos,
defensor de los celtas y de los católicos exclusivamente, ideas a ¡qué paradoja ofrecería a la sagacidad de los historiadores el país
las que el nacimiento en 1922 de una Irlanda irlandesa y una donde nacieron la industria moderna con sus grandezas y sus
Irlanda inglesa relegará al reino de Utopía. Hacia 1840, la opinión miserias y el régimen parlamentario con sus juegos sutiles reservados
comienza a admitir que sólo una asamblea legislativa con sede en a las clases poseedoras!
Dublin sería capaz de resolver, por fin, el problema agrario: los
campesinos, colonos precarios de explotaciones minúsculas — e n
1843, más de la mitad de ellos tienen menos de 3 hectáreas—
aspiran a debatir libremente el monto de su arriendo y a garantizarse
contra una evicción arbitraria y sin indemnización. O'ConnelI, para
restablecer una situación comprometida, hace suyas las consignas
de sus críticos. Mientras el cartismo se apaga en Gran Bretaña, un
movimiento revolucionario agita Irlanda. Enormes multitudes acla-
man al "liberador" y lo llevan a predecir, en el ardor de la impro-
visación, la inminente independencia. O'ConnelI convoca a todos
los irlandeses a la colina de Tara, donde el 15 de agosto de 1843
más de 200.000 personas responden a su llamado. Desbordado por
la Joven Irlanda y prisionero de sus excesos oratorios, pretende
mantener el 8 de octubre una nueva reunión popular en Clontarf,
cerca de la capital, que el gobierno prohibe. El destino de Irlanda
está en sus manos. Una parte de sus más íntimos seguidores lo
empuja a la resistencia para obligar a los ingleses a una elección
difícil: la pasividad engrosaría las filas de los partidarios de la
autonomía e incluso de la independencia; la represión desencadenaría
la insurrección nacional. ¡Una cosa es jugar a la revolución, otra
cosa es hacerla! O'ConnelI no se resigna —los ¿cfes más jóvenes
tendrán el mismo comportamiento en 1848— a cargar con la
responsabilidad de un enfrentamiento sangriento aun cuando fuera
liberador. El mitin es anulado. La represión golpea tanto al
oportunista O'ConnelI como al revolucionario Duffy. Condenado
a prisión y multa, O'ConnelI apela a la Cámara de los lores, que
anula la sentencia. Liberación que termina de desacreditarlo. Jefe
sin tropas, irá a morir en Italia ( 1 8 4 7 ) . La Joven Irlanda tiene vía
libre. Deja de ser un estado de ánimo para convertirse en un
movimiento revolucionario bajo la dirección de Duffy —Davis
muere a los 31 años, en 1845.
El espectro de un levantamiento irlandés cuya eclosión favo-
recería una gran trasformación, quiebra en adelante la quietud de
Gran Bretaña. ¿El proletariado, numeroso y antaño tan dispuesto
II. LOS CON I RAS I liS DP. LA F R A N C I A R U R A L ; Los contrastes de la Francia rural 39
UNA B U R G U E S I A D O M I N A N T E , U N A C A P I T A L
REVOLUCIONARIA ante la vida actitudes análogas; el deseo de ascenso social y la
voluntad de reducir al mínimo los efectos de los repartos sucesorios
las incitan a la restricción de los nacimientos. La tasa media anual
de natalidad pasó de 38,6 a 31,2 entre 1771-75 y 1811-15. A
partir de 1829 desciende para siempre por d e b a j o de 30, a 28
en 1837 y a 27 en 1844. El retroceso es tan impresionante en la
Lot-en-Garonne agrícola como en la capital, donde la fuerte pro-
porción de adultos debida a la inmigración produce una natalidad
elevada. Con su natalidad Francia está, en adelante, " a la cabeza"
( A . Sauvy).
Los aspectos de Francia bajo Luis Felipe no son menos paradojales.
Su mortalidad, en cambio, n o la distingue de la mayoría de los
La industrialización está en sus comienzos; sin embargo, desde
estados europeos. L a tasa media de los años 1841-45, que preceden
1830, la burguesía ejerce el poder a la sombra del "rey-ciudadano".
a la crisis económica y política, es casi tan buena ( 2 2 , 7 ) como la
El proletariado, desorganizado profesionalmente, es p o c o numeroso
de Inglaterra y el país de Gales ( 2 1 , 4 ) y mejor que las de Alemania
y está disperso; sin embargo, Francia es el país elegido d e las
( 2 6 , 1 ) , los Países Bajos ( 2 3 , 9 ) y Bélgica ( 2 3 , 5 ) . L a diferencia
doctrinas socialistas. Éstas, ignoradas por la mayoría de los tra-
entre la mortalidad en las ciudades y la del c a m p o es hacia 1840
bajadores de las fábricas, penetran poco a poco la élite de los
una realidad. E n las ciudades malsanas, la mortalidad es elevada.
obreros de taller de París y de algunas grandes ciudades. Complots,
L a tasa en París será hasta 1885 siempre superior a la de t o d o el
golpes de mano, insurrecciones con miras no a intimidar a sus
país. Sin embargo, el París miserable y violento d e las investigaciones
gobernantes a la manera de los movimientos de masas inglés o
sociales y de las novelas posee una vitalidad muy superior a la de
irlandés sino a derrocarlos, son las formas originales de la corriente
los centros u r b a n o s modestos diseminados e n regiones con rasgos
democrática, socializante y romántica. La propensión a la acción
contrastantes: entre 1831 y 1851, la mortalidad supera a la nata-
revolucionaria, por imitación de los "grandes precursores" es el
lidad en R o u e n , Caen, Rennes, Orléans, Toulouse, Montpellier,
producto de hombres jóvenes y ardientes sumergidos en una
Toulon, Metz y Estrasburgo.
población p r u d e n t e y con crecimiento lento.
El mediocre crecimiento francés tiene orígenes campesinos. Según
Ch.-H. Pouthas, que considera c o m o rural la población que vive
en comunas de menos de 3 . 0 0 0 almas, entre 1836 y 1851 la
I. LA L E N T I T U D DEL C R E C I M I E N T O DEMOGRAFICO
proporción de habitantes del c a m p o pasa de 7 4 , 8 % a 71,9 % . E n
Y LA INSIGNIFICANCIA DE LA URBANIZACIÓN. EL CASO LYONÉS
1851 se c o m p r u e b a un descenso relativo de la población rural en
todos los d e p a r t a m e n t o s salvo cuatro ( D o r d o g n e , Deux-Sèvres,
En una época en que la fuerza de los ejércitos d e p e n d e ante Cantal y Basses-Alpes). Las variaciones más fuertes se observan
t o d o de los efectivos movilizables, Francia continúa por cierto en regiones esencialmente agrícolas: Pyrénées Orientales, 2 1 , 5 % ;
imponiéndose. En 1851, con 3 5 . 7 0 0 . 0 0 0 habitantes, mantiene el Haute-Loire, 33,8 % . A la inversa, las regiones más industriales
primer lugar {exceptuada R u s i a ) ; sin embargo, su a u m e n t o del han sufrido cambios insignificantes: R h ô n e ( 6 , 4 % ) , Nord ( 5 , 2 % ) ,
3 0 % en cincuenta a ñ o s a p a r e c e m o d e s t o c o m p a r a d o con el de Loire ( 3 , 9 % ) y Seine ( 1 , 9 % ) . "El desarrollo industrial n o ha,
E u r o p a ( 5 0 % ) e irrisorio si se lo coteja con el del R e i n o U n i d o pues, vaciado el c a m p o ni ha traído la revolución demográfica."
( 7 1 % ) , país de emigración transoceánica. (Ch.-H. Pouthas).
El Reino U n i d o no h a seguido a Malthus, F r a n c i a lo ha precedido. Sólo a partir de 1831 las ciudades comienzan a ocupar un lugar
La baja de la natalidad es un f e n ó m e n o viejo y regular que n o más importante en la población global por efecto del éxodo rural.
tiene n a d a que ver con la acción d e los medios académicos con- De 1836 a 1851 a u m e n t a r o n en u n 13,8 % (el crecimiento del
movidos por el temor de convulsiones sociales. Desde fines del país f u e de 9 , 9 % ) , especialmente las aldeas de 4 . 0 0 0 a 5 . 0 0 0
siglo xvni, la minoría burguesa y la masa campesina han a d o p t a d o aimas ( 3 6 % ) , crecimiento que explica el espectacular retroceso
22 Los contrastes de la Francia rural 67
La Europa de los años cuareiila

de la población rural en un departamento agrícola como el Haute- insurrección de abril no es más que un episodio en la historia
Loire. El carácter arcaico de Francia en la primera mitad del revolucionaria de París. La segunda insurrección lyonesa de la
siglo XIX se refleja también en la evolución de las grandes ciudades. monarquía de julio presenta, como la primera, pero por otras
En 1851, 15 ciudades — c o n t r a 8 en 1 8 0 1 — tienen más de 50.000 razones, rasgos excepcionales: es ante todo la consecuencia de un
vínculo en la acción jamás concretado en Francia entre el ideal
habitantes. Su peso en la población global (6,5 % ) es proporcio-
republicano y las aspiraciones obreras. Ofrece además el modelo
nalmente tres veces más débil que el de las ciudades británicas del
único de un movimiento armado provincial y autónomo cuyo
mismo tipo. ( E n Inglaterra es evidente la ligazón entre un prodigioso
ejemplo se impone a la capital.
avance urbano y un incomparable desarrollo industrial.) Entre
1801 y 1851, las ciudades obreras experimentaron un crecimiento Después de 1834, el espíritu revolucionario declinará con la
igual (Amiens, 3 0 % ) o inferior (Rouen, 1 6 % ) al promedio aparición de un proletariado fabril. A comienzos del reinado de
francés; únicamente Saint-Étienne aumentó mucho ( 1 9 3 , 7 % ) , Luis Felipe, la industria de la seda empleaba telares manuales
menos no obstante que el puerto militar de Toulon (245 % ) . Las dispersos en una decena de miles de pequeños talleres; sus jefes,
ciudades de más de 50.000 habitantes evolucionan según su propia propietarios de algunos telares, ayudados por uno o dos compa-
historia. En 1848, como siempre, reaccionarán bajo el impulso ñeros, asalariados como ellos, trabajaban para 300 a 500 "fabri-
de París. cantes" que les entregaban la materia prima. Más instruidos que los
Lyon, tercera ciudad de Francia ( 1 7 7 . 0 0 0 habitantes en 1 8 5 1 ) , compañeros, en 1831 y en 1834 se habían mostrado capaces de
constituye en los años treinta el único centro revolucionario pro- adoctrinarlos y llevarlos al combate. C u a n d o a partir de los años
vincial. En noviembre de 1831, unos veinte mil obreros toman las cuarenta se instalan las empresas modernas en los suburbios (La
armas agitando la bandera negra (que los excavadores de Reims Guillotière), los viejos compañeros, separados de los jefes de
habían hecho flamear por primera vez unas semanas antes sobre taller, y los campesinos rústicos y dóciles f o r m a r á n allí un prole-
una muchedumbre obrera) con la divisa "Vivir libres trabajando o tariado nuevo que la miseria y la ignorancia alejarán de la reflexión.
morir combatiendo". Es "la primera insurrección puramente obrera
en el mundo moderno" ( G . L e f e b v r e ) . Reacción espontáitea de
II. PARÍS, CAPITAL DE LA REVOLUCIÓN EN FRANCIA '
trabajadores que defienden sus salarios, no se inspira en ninguna
ideología. Contrariamente a los obreros ingleses, los de Lyon no
Las paradojas parisienses
reinvindican todavía el derecho de voto.
Pero el año 1834 ve producirse un acontecimiento sensacional:
Es sólo de París que Francia, y también Europa, esperan o temen
una insurrección obrera de orígenes políticos innegables. Con su
el estallido de la chispa revolucionaria.
Sociedad de los derechos del hombre y del ciudadano, que cuenta
Con I.053.0()0 habitantes en 1846 y en 1851 (la crisis económica
2.000 miembros, Lyon se convierte a comienzos de 1834 en "la
y la tensión política son causa de un estancamiento de cinco a ñ o s ) ,
primera ciudad republicana de Francia". Cuando a fines de febrero
la capital sigue siendo, como a comienzos del siglo, la única ciudad
el gobierno decide modificar el artículo 291 del Código Penal, que
de más d e 200.000 almas. Representa en 1851 cerca del 3 % de la
la Sociedad de los derechos del hombre había tornado irrisono
población total. Pero Londres tiene dos veces más habitantes
(como las reuniones de más de 20 personas estaban prohibidas, la
( 2 . 3 6 3 . 0 0 0 ) y un peso proporcionalmente más elevado (más del
Sociedad se fraccionaba en secciones de 10 a 20 m i e m b r o s ) , se
8 % de los habitantes del Reino Unido y el 10 % de G r a n Bre-
plantean los medios de hacer retroceder al Poder. Los jefes pari-
t a ñ a ) . La "singularidad demográfica" de París no debe exagerarse.
sienses, divididos, discuten. En Lyon, el 9 de abril se realiza
una gran manifestación contra el proyecto gubernamental. Suena E n cambio, su singularidad en la vida política nacional e
un tiro. Los obreros se arman. La tropa dispara. Los combates d u r a n internacional es evidente. De los grandes movimientos populares
cuatro días (9-12 de abril). El 13, París conoce el levantamiento (radicalismo, cartismo, librecambismo), Londres n o percibe más
lyonés y se levantan barricadas en el Marais. El 14, la masacre que los ecos, ya que toda agitación culmina con la presentación
de la calle Transnonain sella la derrota de los sublevados. La solemne de una petición a la Cámara de los comunes. En Francia,
23
La Europa de los años cuareiila 67
Los contrastes de la Francia rural

salvo las insurrecciones lyonesas de 1831 y 1834, todo comienza en tadores de niños, prostitutas y vagabundos. Ella recibe y contamina
París en medio de la violencia y todo termina allí. Las barricadas, a los inmigrantes.
desaparecidas de la escena desde el 25 y 26 de agosto de 1648, L a inmigración es una constante de la historia de París. La
renacen el 19 de noviembre de 1827 para "saludar la caída de coyuntura económica no ejerce ninguna influencia sobre ella, al
Villèle" (G. Duveau). El 27, 28 y 29 de julio de 1830, cumplen menos hasta el censo de 1846. De buen o mal grado, los inmigrantes
un papel decisivo en el advenimiento de Luis Felipe. Después de viven como " n ó m a d e s " (L. Chevalier) porque en esta ciudad de
los sangrientos e infructuosos intentos del 5 y 6 de junio de 1832, artesanado y de pequeños comerciantes (el aguatero auvernés forma
del 13 de abril de 1834 y del 12 de mayo de 1839, pusieron en parte del paisaje), con la mano de obra superabundante, las
fuga al "rey de las barricadas" y suscitaron "revoluciones en ca- ofertas de empleo son importantes sólo en la construcción. Miles de
dena". La inclinación a la insurrección de la población de París hombres llegan en primavera y retornan para pasar el invierno "en
y la extraordinaria repercusión que las jornadas de febrero tuvieron su tierra natal", como esos albañiles de Creuse fielmente pintados
en Europa, confieren a la capital francesa su excepcional origina- por el más célebre de ellos, Martin N a d a u d {Mémoires de Léonard,
lidad. Ésta resulta de causas múltiples, geográficas, demográficas, ouvrier garçon, maçon, 1 8 9 5 ) . A partir de 1840, la construcción
especialmente espirituales, cuyo análisis suprime las interrelaciones. de vías férreas, estaciones ferroviarias y fortificaciones contribuye
al retroceso del nomadismo. Los hábitos adquiridos van ligando
los barrios céntricos a los nuevos sedentarios, que se alojan masi-
El París obrero frente al París burgués vamente en lugares minúsculos y sórdidos (la mano de obra ajena a
las grandes ciudades toma esa apariencia gregaria tan característica
París en los años cuarenta se parece todavía al París de fines del de los desarraigados famélicos). Los propietarios hacen buenos
siglo xvni. Está todavía circunscripto a sus antiguos límites. Entre negocios recargando el alquiler de casas centenarias: una habitación
ellos y las fortificaciones terminadas en 1844 se extiende el "pequeño sin amueblar se alquila a 12 francos por mes; amueblada misera-
suburbio" que comienza a industrializarse en algunos puntos: blemente encuentra inquilino a 20 francos por quincena entre los
Belleville, La Villette, La Chapelle. Las concentraciones obreras fuera de la ley, con recursos inconfesables. Así, poco a poco, el
en esos lugares son demasiado esporádicas como para desconges- m u n d o del trabajo y el de la delincuencia se encuentran en los
tionar un París superpoblado: la densidad media de 1846 ( 3 0 . 6 5 5 ) mismos inmuebles y se suceden en los mismos tugurios. Pero un
es sensiblemente igual a la de 1970, habiéndose duplicado la doble movimiento comienza a alejar una parte de los trabajadores
superficie de la ciudad después de 1860. Jamás los contrastes demo- y la casi totalidad de las familias burguesas de los barrios super-
poblados y de mala fama.
gráficos fueron tan acusados: sobre 48 barrios (4 por cada uno
de los 12 distritos administrativos), 2 tienen una densidad menor Los obreros se dirigen hacia los barrios de "la cruz de París": el
a 10.000 (Invalides y Champs-Élysées) y 8 más de 100.000 (Les VIII9 (Marais, Popincourt, faubourg Saint-Antoine, Quinze-Vingts)
Arcis, Les Marchés, Bonne-Nouvelle, Lombards, Montorgueil, Ban- en la margen derecha, y el X I I ? (Saint-Jacques, Saint-Marcel,
que, Saint-Avoye, porte Saint-Denis). Éstos forman el núcleo de Conservatoire, Jardin de Plantes) en la margen izquierda. Estos
una zona de superpoblación, que limitan de norte a sur el Louvre barrios, cuyos nombres surgen en cada gran momento de la historia
y la porte Saint-Denis, y de oeste a este Les Halles y el Hôtel de revolucionaria, están habitados por un artesanado (carpinteros y
Ville. Es el París de las callejuelas tortuosas y estrechas que se diría ebanistas del faubourg Saint-Antoine, curtidores de las orillas de
dibujadas para y por los constructores de barricadas. Es el París Bièvre) profundamente arraigado en un medio abierto a las propa-
de los trabajadores, de los mendigos y de los delincuentes, que gandas subversivas. Aquí, en contacto con otros trabajadores, pero "
describen con indiferencia profesional las Mémoires de los policías de un nivel ideológico más alto, el provinciano tendrá por fin la
Vidocq ( 1 8 2 8 ) y Canler ( 1 8 6 2 ) y con una simpatía emotiva Los sensación de fundirse en una población autóctona que, no obstante,
Misterios de París de Eugène Sue ( 1 8 4 2 - 4 3 ) . La isla de la Cité cambiará su universo mental.
aparece como una "corte de los milagros" donde conviven estafa- La penosa sensación de convertirse en extranjero en el corazón
dores, ladrones, mercenarios, presos liberados o evadidos, explo- del viejo París invadido, lleva a los hombres de levita a emigrar. La
24 Los contrastes de la Francia rural 67
La Europa de los años cuareiila

segregación culminará bajo el Segundo Imperio. Sin embargo, renacen los recuerdos del 10 de agosto de 1792 y con ellos el sueño
comienzan a dibujarse los contornos de un París pobre al este y de una nueva república conquistada por París para toda Francia. L a
de un París rico al oeste. En junio de 1848, la zona de barricadas historia revolucionaria pesa sobre París y no sobre Londres. Nosotros
tiene por límite una línea que sigue los jaubourgs Poissonnière, lo sabemos hoy, pero los contemporáneos mejor informados lo igno-
Saint-Denis, Saint-Martin y Saint-Antoine, la isla de la Cité y la raban; en particular, la corte y la burguesía de Londres, aterrori-
rué Saint-Jacques. Es "la frontera entre el París burgués y el zadas en abril de 1848 por el espectro del jacobinismo y los
París obrero" (G. D u v e a u ) . disturbios del siglo xvii: ciento cuarenta y cuatro años antes de
Luis X V I , Carlos I fue decapitado y ciento cuarenta y dos años
El París burgués tiene miedo al París de los "nómades" y de los
antes de Carlos X, Jacobo II perdió su corona. L a dictadura de la
"salvajes". Los misterios de París, publicados en folletín en el muy
Moritaña, indiferente u hostil al cristianismo, igualitaria y expan-
orleanista Journal des Débats, revelan a un vasto público la degra-
sionista, había contribuido a debilitar la idea de revolución en
dación de una fracción creciente de la población, gente del pueblo
Inglaterra. El culto a Robespierre y a Babeuf introducido en
y las clases altas seguían con pasión las aventuras de Flor de María
Londres en 1837-38 por James Bronterre O'Brien, reunía sólo u n
y del gran duque Rodolfo. La tesis central de esta novela de
p u ñ a d o de fieles. Gozaba de un creciente fervor entre los republi-
peripecias múltiples — l a pobreza extrema engendra el crimen—
canos y los trabajadores parisienses cuando Guizot invoca el
entra en el dominio de los prejuicios. Los espíritus generosos re-
precedente inglés de 1688 para detener en 1830 el curso de
claman la lucha contra la miseria, los ricos de corazón d u r o el fin
la historia revolucionaria francesa, cuya prestigiosa primera etapa
de la invasión de la "vil multitud" que Thiers denunciará en
f u e el período 1789-1815.
1850. El gran estudio de L. Chevalier (Classes laboríeuses et classes
dangereuses à Paris pendant la première moitié du XIX' Siede, Antes del 2 de diciembre de 1851, los franceses de todas las
1958), confirma la impresión sentida por los contemporáneos de condiciones sociales confundían en su nostalgia admirativa Imperio
una irreductible oposición social, moral y mental entre dos pueblos. y Revolución. Escritores comprometidos que se dirigen a un círculo
Hace más comprensibles las tormentas de París pero más miste- restringido adornan con colores legendarios acontecimientos todavía
riosas las calmas londinenses. cercanos pero mal conocidos. Al final de la Restauración, Thiers
( 1 8 2 3 - 2 7 ) y luego Mignet ( 1 8 2 4 ) publican una Histoire de la Ré-
volution française. En 1845, el primero aborda la Histoire du
Consulat-, en 1847, Michelet y Louis Blanc comienzan la entrega
El poder de los mitos: jacobinismo y bonapartismo
de importantes obras consagradas a la Histoire de la Révolution
Porque con la misma paleta se puede pintar a Londres y a París: y Lamartine hace aparecer los siete volúmenes de la Histoire des
"Sedentarios y errantes [. . .], viejos [ciudadanos] e inmigrantes Girondins, monumento a la gloria de la Revolución. Estas obras
recién llegados se encuentran [. . . ] Fuente de terror social, el n o están en el origen de las barricadas de febrero de 1848 ni
desequilibrio entre las masas populares y la pequeña minoría de mucho menos del culto imperial que se ha. reprochado a Thiers
ricos pesa constantemente sobre los espíritus". (F. Bédarida). Las haber extendido "muy imprudentemente". (C. Jullian). Entre las
mismas tensiones internas en las dos aglomeraciones son incapaces clases populares, estas obras sólo llegaron a los escasos lectores de
de provocar movimientos comparables cuando crece la miseria en la prensa democrática, porque las ventajas de la ley Guizot sobre
las orillas del Támesis y del Sena. La depresión de 1825-32 golpea enseñanza primaria no serán visibles antes del Segundo Imperio.
más duramente al Reino Unido que a Francia. Sin embargo es París (Por otra parte, cincuenta años después de la legislación escolar de
que se levanta y derroca un rey en 1830. El ebanista londinense Jules Ferry, ¿acaso una estación ferroviaria de París no ofrecerá
Lovett no piensa, como sus congéneres del faubourg Saint-An- todavía el sorprendente espectáculo de un atareado escribiente
toine, en levantar barricadas para obtener el sufragio universal. púbhco?) Al final de los años cuarenta y al precio de grandes
Revolucionaria por principio, ya que rechaza los fundamentos y emocionantes esfuerzos, una ínfima fracción de la clase obrera
mismos del régimen, la oposición republicana y obrera de París ha adquirido la capacidad de leer y también de escribir. L'Atelier,
acepta en un clima pasional los riesgos de la acción revolucionaria: organe des intérêts moraux et matériels des ouvriers, f u n d a d o en
46 La Europa de los años cuarentg Los contrastes de la Francia rural 47
1840 por el Dr. Buchez, cuenta entre sus redactores a tipógrafos La insurrección obrera de junio de 1832:
como Corbon, obreros de joyería y sastres. Pero sus raros lectores por la república y por Polonia
—el tiraje mensual cae de 1.000 ejemplares en 1840 a 500 en
1846— son miembros de las clases superiores curiosos por conocer L a causa polaca es popular en todas partes: Viena, Bruselas y
las reivindicaciones de los trabajadores. La élite obrera de los Londres recibirán como amigos a los vencidos en la insurrección
años cuarenta lee Le national ( 3 . 0 0 0 abonados) y sobre todo d e 1830, pero ¿qué decir del recibimiento delirante d e los fran-
La Reforme ( 2 . 0 0 0 ) más audaz desde el punto de vista social. ceses? C o m o antes los griegos, los polacos cuentan en 1830 con
Exaltando cotidianamente la Francia anterior a 1815, esta prensa partidarios en todos los sectores sociales. [Madame Adelaida, her-
concuerda con (os sentimientos profundos de ios hombres incultos mana y confidente del rey, desea la victoria de los insurrectos! Los
que sueñan con el retorno de la dictadura de la Montaña y de la legitimistas reaccionan como católicos y denuncian la opresión que
era napoleónica. L a paradójica relación entre el amor a la bandera ejerce un soberano "legítimo" pero ortodoxo. Los católicos liberales
tricolor y el culto al "petit caporal" * termina con los sorprendentes agrupados alrededor de Lamennais reclaman una intervención
resultados de la elección presidencial del 10 de diciembre de 1848. armada. Belicoso también, Le Globe se convierte desde el 21 de
Es un fenómeno precoz y espontáneo. El "vuelo del Águila" había diciembre de 1830 en Diario de la doctrina de Saint-Simon. La
provocado durante algunas semanas una resurrección del espíritu del audiencia de los católicos liberales y d e los saint-simonianos es
93. Agricol Perdiguier ha evocado en Mémoires d'un compagnon por cierto limitada: UAvenir y Le Globe vivieron dos años; el
la emotiva adhesión de su padre, un pacífico carpintero ex capitán primero contaba con 1.200 suscriptores, las % partes eclesiásticos,
de las guerras revolucionarias, al emperador. Bajo la Restauración, el segundo 500, todos miembros de las "clases esclarecidas" (S.
la propaganda contra el " u s u r p a d o r " no prende en los medios Charléty). Insignificantes minorías {La Tribune de Marast, en ese
populares; los "grognards"** son numerosos entre los obreros entonces el único diario republicano que n o tenía más de 1.500
parisienses. A diferencia de Londres —los ingleses suministraron abonados y Le National, órgantt del Movimiento, son, por supuesto,
pocos contingentes a los ejércitos de las coaliciones antifrancesas francamente pro-polacos) ¿hubiesen sido capaces de movilizar el
e ignoraron las grandes expediciones coloniales— París seguirá 5 de junio de 1832 a los barrios populares, si el mito de la libera-
siendo una ciudad de ex combatientes. A partir de 1830 la conquista ción de Polonia ligado a los exaltantes recuerdos de la Revolución
de Argelia agrega a los veteranos de las campañas de la Revolución y del Imperio — l a historia gloriosa de las legiones polacas incor-
y del Imperio, cuyas filas raleaban, el refuerzo de ex soldados todavía poradas al ejército francés nutría las imaginaciones— no hubiera
jóvenes. Así se trasmiten técnicas que los habitantes de los barrios ejercido su atractivo?
populares utilizarán por última vez en la C o m u n a d e 1871 — e n Sin duda, las circunstancias eran favorables para una explosión
junio de 1848, Tocqueville descubrirá con admirado estupor la
popular. Las dificultades económicas producidas en 1828 se agra-
ciencia d ^ los constructores de barricadas.
van b a j o el efecto de los disturbios políticos de 1830, que en
Los recuerdos de los "grognards", también ellos viejos jacobinos parte habían provocado. El alza de los productos alimenticios
—los hombres de la generación d e Michelet, nacido en 1798, ,y la desocupación engendran una agitación permanente. Como
recibieron en su juventud confidencias de los contemporáneos de se ha visto, es en Lyon y no en París que la crisis social desencadena
Marat, Danton o Robespierre—, difunden una ideología ambigua una insurrección. E n la primavera de 1832 se desata una epidemia
hecha de un nacionalismo agresivo y un mesianismo emancipador: de cólera en Ja capital. Si bien no perdona a los ricos (Casimir
Ja derrota de la pérfida Albion, de la Rusia bárbara y de la Austria Périer fue una ilustre víctima), golpea con predilección a la po-
de Metternich daría la orilla izquierda del Rhin a Francia, conver- blación subalimentada, concentrada en la "cruz de París". En un
tida nuevamente en la "gran nación", y liberaría de la opresión clima social deteriorado, el flagelo crea la tensión psicológica que
extranjera y reaccionaria a los italianos y sobre todo a los polacos. precede a veces a los levantamientos. Los funerales de Evariste
Galois (hoy una céJula comunista lleva su n o m b r e ) , dotado de la
* Napoleón I. IN. del E.] seducción de la juventud (tenía 21 a ñ o s ) y aureolado del doble
* * Soldados de la vieja guardia, bajo Napoleón I. [N. del E.] prestigio de sabio y revolucionario, se desarrollan pacíficamente.
49 67
La Europa de los años cuareiila Los contrastes de la Francia rural

Algunos días después, los funerales de un viejo general estuvieron Considerada en sus causas y su desarrollo, la insurrección de
en el origen de la primera gran batalla republicana librada en París junio de 1832 constituye, a diferencia de los motines de abril de
desde 1795 (E. Labrousse). Voluntario en la Revolución, general 1834 y de mayo de 1839, el verdadero prefacio de las jornadas
y conde del imperio, Lamarque se convierte durante la campaña de 1848. Su "raíz moral" es ya la que provocará el golpe de
de los Cien Días en un hombre "del 9 3 " para aplastar la insurrección mano del 15 de mayo de 1848 contra la Asamblea Nacional: la
de la Vendée contra Napoleón, trasfigurado en jacobino. Su popu- causa polaca. Por su carácter proletario, la explosión de junio de
laridad data de su ingreso a la Cámara de diputados, donde 1832 prefigura la gran insurrección obrera de junio de 1848; como
denuncia la paz instituida por los tratados de 1815, como "un dieciséis años más tarde, los notables republicanos defeccionan
alto en el pantano". Irreconciliable enemigo de Inglaterra, amigo mientras los activistas de barricadas son combatidos brutalmente
ardiente de Polonia, poco antes de su desaparición había estigma- por las guardias nacionales unidas en la defensa del orden.
tizado la pasividad del gobierno ante la represión rusa. La mayor "Politécnicos" y estudiantes forman parte del paisaje revolucio-
parte de los organizadores de la ceremonia —los orleanistas O. nario parisiense. La Ècole polytechnique es una institución especí-
Barrot y Laffitte y el republicano A r a g o — es conocida por sus ficamente francesa. Las Facultades de letras y de ciencias vegetan.
simpatías hacia Polonia. La presencia del marqués de La Fayette La vida estudiantil sólo existe en los alrededores de las Facultades
da un tono ambiguo, eso es cierto, a los funerales del general de derecho y medicina, que preparan para las profesiones liberales.
republicano. A pesar de la desagradable propaganda que le hace Pero en este aspecto la supremacía de la capital es aplastante. Su
una nota biográfica del Dictionnaire des girouettes, este aris- Facultad de medicina cuenta con más de 8.000 estudiantes en
tócrata versátil y timorato ha entrado vivo en la leyenda. U n 1835, la de Montpellier, la segunda de Francia, menos de 600 en
respeto casi religioso rodea al anciano de ochenta y cinco años 1837. "Politécnicos" y estudiantes están concentrados en el Quartier
latín, desde donde perciben los rumores del viejo París. Acuden ante
asociado a dos revoluciones: la estadounidense, creadora de esa
la señal de disturbios porque las doctrinas subversivas seducen a
república que la particular inclinación hacia Estados Unidos de los
los hijos de la burguesía (la École polytechnique provee detrás del
medios europeos avanzados considera una nueva Arcadia, y la
"padre" Enfantin muchos adeptos a la "iglesia" saint-simoniana;
francesa, cuya misión emancipadora simboliza éste, su "héroe de
Considérant, el representante más eminente del fourierismo, es "poli-
Dos Mundos". La vista del patriarca que lleva uno de los cordones técnico"). Jóvenes sometidos a la jerarquía militar y estudiantes
del carro fúnebre, el espectáculo de las banderas de las naciones turbulentos admiran el "triunvirato democrático" del Colegio de
subyugadas, no sólo la polaca sino también las de la futura Alemania Francia —Michelet, Quinet, Mickiewicz—. Románticos que se abu-
y de la futura Italia, despiertan la cólera contra un régimen infiel rren en una Francia donde no pasa nada, desprecian la monarquía
a la vocación de Francia. En fin, la aparición por primera vez en de Julio prosaica y pacífica. Su aspiración al cambio se nutría de
un cortejo popular de la bandera roja que lleva un misterioso recuerdos y de sueños.
caballero se agrega a la emoción. Algunos gritos de "¡Viva la
república!", instigados sin duda por los miembros de las sociedades
secretas, desatan un motín que rápidamente se convierte en insu-
in. PARÍS, CAPITAL DE LA REVOLUCIÓN EN EUROPA
rrección. Los barrios populares (Marais, Arcis, Halles, faubourgs
Saint-Denis, Saint-Martin, Saint-Antoine) se cubren de barricadas. La amenaza proferida por Luis Felipe en 1840 de "sacarle el bozal
Al primer tiro, La Fayette vuelve a su casa; Arago, como Laffitte al tigre" no era seria pero se apoyaba en una realidad psicológica:
y Barrot, después de hablar desapareció. La unión de los poseedores una parte de la prensa de París reclamaba la orilla izquierda del
contra el desorden es total. La guardia nacional rivaliza en ardor Rhin y Quinet publicaba un folleto de sugestivo título, 1815-1840.
con la tropa. Los insurrectos tienen como únicos aliados a algunos Si los alemanes se indignaron, los polacos y los italianos esperaron
estudiantes y alumnos del Polyiechnique. Su resistencia desesperada de una guerra general la liberación y la unificación de sus patrias.
termina el 6. El recuerdo de los heroicos combatientes de Saint-
Merri tendrá un valor ejemplar para los sublevados de 1848.
50 La Europa de los años cuarenta Los contrastes de la Francia rural La Europa ar

El mesianismo de los "peregrinos" polacos


Farís cosnwpolita
La colonia polaca no es la más numerosa pero comprende la mayor
Los liberales y luego los demócratas que la reacción instaurada
proporción de refugiados políticos. En su gran mayoría, la gran
en su país después de los fracasos de 1830-31 trasforma en errantes,
emigración de 1831 elige a Francia, donde encontraron asilo después
buscan ocasión de llegar a París o de volver cuando han sido
de 1815 tantos fieles servidores de Polonia y de Napoleón. La
expulsados por una policía fastidiosa; la "capital del liberalismo
emigración no cesa de reforzarse con el aporte proveniente de los
europeo" (Ch.-H. Pouthas) de los años treinta se convertirá en la
territorios prusiano y austriaco cuando el rey y el emperador,
"capital de la revolución" (F. F e j t o ) de los años cuarenta.
siguiendo el ejemplo del zar, inician una política de represión. Para
Para la élite de la emigración, París no es sólo la "nueva Jeru-
los exiliados, Francia no es solamente una segunda patria, es la
salén" como imaginaba incluso antes de conocerla el joven Heine.
única patria real; con su nombre, Polonia perdió su territorio, pero
Es también la ciudad encantadora por su vida de sociedad bri-
su alma fue salvada por la formación de una Polonia ideal gracias a
llante y cosmopolita. Los salones de madame de Girardin, autora
la acción de escritores refugiados.
de éxitos b a j o el nombre de Delphine Gay, de madame d'Agoult
(Daniel Stern en literatura), de pluma fecunda, de George Sand, Esta Polonia tiene a París por capital y por portavoz a A d a m
encarnación del feminismo y que recibe vestida de hombre, se abren Mickiewicz ( 1 7 9 8 - 1 8 5 5 ) . Desde 1834, él es "el jefe espiritual de la
a los artistas (Liszt, Meyerbeer y Chopin se convierten en pari- emigración y por extensión de la nación polaca" (C. Wilczkowski),
sienses) y a los poetas extranjeros. Herwegh y Mickiewicz aparecen a pesar de la presencia en París de los otros dos miembros de la
como discípulos de Lamartine, Hugo o Michelet. Los "salones "gran tríada romántica", Krasinski y Slowacki, y del historiador
extranjeros" — o t r o rasgo del carácter internacional de París— son Lelewel, que fuera maestro de Mickiewicz en Vilna. E n sus Libros
a la vez centros de propaganda y lugares de encuentro para los de la nación y del peregrinaje polaco ( 1 8 3 2 ) , Mickiewicz formuló
inmigrantes-, alemanes, italianos y polacos frecuentan el salón de la doctrina de una nación crucificada llamada a dar a E u r o p a el
madame de Circourt, una rusa casada con un diplomático francés; ejemplo del sacrificio: " [ . . .] E n todos los lugares de E u r o p a donde
el de la bella princesa Belgiojoso ( 1 8 0 8 - 7 1 ) (a comienzos de mayo hay opresión de la libertad y combate por la libertad [. . .] todos
de 1848 su llegada a Milán encabezando un cuerpo de voluntarios los polacos deben librar ese combate [. . .]" Predicando con el
equipados por ella hará sensación) sirve de enlace a los emisarios de ejemplo, formará una legión polaca y en mayo de 1848 la pondrá
Mazzini; el príncipe Czartoryski usa su crédito internacional para a disposición de los patriotas lombardos. Pero Polonia sigue siendo
preparar la liberación de los polacos. la aliada privilegiada de una Francia que, renunciando poco a poco
en el clima romántico a su nacionalismo expansionista, está más
La acción de los personajes más importantes de la emigración
deseosa que nunca por conducir guerras liberadoras. Entre pueblos
en favor de las "nacionalidades" (este vocablo es desde entoiices
liberados se instaurará forzosamente, bajo el magisterio de Francia,
empleado por los autores de todos los países) no debe hacer olvidar
el reino de la fraternidad. La presencia simultánea en el Colegio
la presencia en París y en el interior de gran número de extratijeros
de Francia de Michelet, Quinet y Mickiewicz es el símbolo de un
ignorados. Los proscriptos son una minoría que la policía considera,
acuerdo p r o f u n d o entre el mesianismo francés y el mesianismo
según su espía de L a Hodde, un "virus que Francia se ha inoculado".
polaco.
En los talleres de viejos telares, miles de trabajadores manuales se
impregnan de ideología revolucionaria. Refugiados políticos de todo El primero, a la espera de cambios ineluctables, puede adorme-
tipo y obreros inmigrantes conservan su cohesión nacional. Sobre cerse con sus sueños. El segundo está obligado, como lo indica
todo los polacos y los alemanes. Mickiewicz, a la acción. Pero en la acción, la mística de los
"peregrinos" se degrada; las disensiones de antes renacen y se
amplían. Los blancos tienen como jefe al príncipe Czartoryski.
Quieren reformar, con el apoyo diplomático de Francia y del Reino
Unido, una Polonia monárquica aristocrática, dicen sus adver-
sarios. Las simpatías del grueso de la emigración se dirigen hacia
91
52 La Europa de los años cuarenta La Europa aristocráticayabsolutista

los rojos, partidarios de una Polonia dcmocríitica pero también del general Ramorino, uno de los jefes de la insurrección de 1830,
social, porque han aprendido en 1831 que la adhesión de la clase contra Saboya, entonces sarda ( 1 8 3 0 ) . En cambio, no cesan de
más numerosa al movimiento de liberación nacional supone que reforzarse los lazos entre rojos y demócratas alemanes, lazos anu-
previamente se solucione el problema esencial del mundo eslavo, el dados tras la fraternal acogida reservada a los vencidos de 1831.
problema agrario. Brillantes y categóricos oradores, los rojos des- Los polacos asisten en 1832 a la manifestación unitaria de Ham-
pliegan sus divisiones. Lelewel logra durante un tiempo reunir las bach; otros conducen en 1833 a los revolucionarios que intentan
facciones pero debe refugiarse en Bruselas. Los elementos más derrocar la Dieta germánica de Francfort. El mismo amor a la
avanzados se agrupan en marzo de 1832 en la Sociedad democrática libertad, el mismo odio al zarismo crean un clima de concordia
polaca, que combate duramente a los blancos y afirma la primacía difícil de concebir en el último tercio del siglo xx. Herwegh, en sus
del pueblo polaco entre los eslavos; contra los opresores, la Sociedad Poesías de un ser viviente ( 1 8 4 0 - 1 8 4 1 ) , había preconizado una
democrática organiza sociedades secretas que prefiguran los "movi- coalición de Occidente contra Rusia "para vengar a Polonia y
mientos de resistencia" de la Segunda Guerra Mundial. De 1833 a suprimir la tiranía asiática de la superficie de E u r o p a " (V. Fleury).
1850, la policía rusa descubrirá 13 grupos subversivos y detendrá En París elucubrará, en la primavera de 1848, un aventurero
a más de 500 patriotas. En 1838 los autriacos destruyen en Galitzia proyecto de cooperación armada entre refugiados alemanes y
la red del mayor Konarski, a quien los rusos fusilan en 1839. Desde polacos con la ayuda esperada de Francia republicana.
Francia, la Sociedad democrática prepara una revuelta general en
Poznam contra prusianos, rusos y austríacos: a comienzos de 1846,
Mieroslawski será detenido en Poznam antes que estalle la revo-'
La educación revolucionaria del proletariado alemán
lución. De padre polaco y madre francesa, nacido en Francia y
estudiante en Polonia, Louis Mieroslawski ( 1 8 1 2 - 7 8 ) personifica
La proximidad con Alemania y la comunidad lingüística atrajeron a
el mesianismo nacionalista polaco y el mesianismo emancipador
muchos refugiados a Estrasburgo, capital provincial de la emi-
francés. Durante más de treinta años, su vida fue la de un paladín
gración política alemana. La población ha sido ganada por las ideas
siempre vencido, jamás descorazonado. La revolución berlinesa del
liberales; el partido republicano ve a los demócratas alemanes como
18 de marzo de 1848 lo liberará de los calabozos prusianos; él
"hermanos". Algunos folletos publicados en imprentas estrasbur-
acudirá una vez más a Poznam para dirigir a un grupo de insurrectos
guesas mantienen la agitación entre los pueblos y la inquietud de
que depondrá las armas en mayo. Quince años más tarde, surgirá
los soberanos. E n 1834, el prefecto del Bajo Rhin observa que los
en Polonia rusa y luego retornará a Francia vencido y desacreditado.
gobiernos del sur "se preocupan más de lo que pasa en Estrasburgo
La gloria conquistada en 1849 por el general Bem, un blanco, a la
cabeza de los ejércitos magiares, hará olvidar la extraordinaria que de lo que pasa en París". Originario de Darmstadt, Georg
popularidad de Mieroslawski en la E u r o p a de 1848. Sin embargo es Büchner ( 1 8 1 3 - 3 7 ) elige estudiar ciencias naturales en Estrasburgo.
bajo sus órdenes que los rebeldes sicilianos libran en 1849 sus De regreso a Hesse, funda una Sociedad de los derechos del hombre
últimos combates. Un mes más tarde, emisarios del gobierno e impulsa a los campesinos a la insurrección. El comienzo de su
insurreccional de Carlsruhe llegan a París a pedirle que tome el célebre panfleto ("¡Paz a los pobres! ¡Guerra a los castillos!"),
comando de los amotinados de Badén, que pretenden oponerse a la como su drama La muerte de Danton representado en 1968 en
penetración de las tropas prusianas en el sur con un grupo de París, demuestran las influencias sufridas en Alsacia. Amenazado
voluntarios alemanes, entre ellos, Friedrich Engels. de arresto en 1835, busca refugio en Estrasburgo. Sin embargo su
caso es aislado: para los alemanes notoriamente conocidos, Estras-
La presencia en la Sociedad democrática de un Mieroslawski
burgo no es más que una etapa hacia París.
explica el poco éxito entre los rojos de París de la propaganda de
la Joven Polonia, filial de la Joven Europa. La exaltación soberbia Los 50.000 a 70.000 alemanes de París forman a fines de los
de la misión de Italia despertaba las susceptibilidades de celosos años cuarenta la colonia extranjera más importante. La prepon-
patriotas. Los polacos participaron solamente en una de las nume- derancia de obreros es aplastante. De las ciudades y del campo
rosas insurrecciones fomentadas por Mazzini: la desdichada aventura alemán se expande una ola continua de aprendices en busca de
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54 La Europa de los años cuarenta La Europa aristocráticayabsolutista

empleo o de compañeros que desean completar en la capital del con el socialismo y el comunismo,' "productos franceses" ( E . Ha-
gusto sus conocimientos técnicos. Algunos se arraigan en París lévy), y observar a la clase a quien confiaba la misión de realizar
como esos ebanistas del faubourg Saint-Antoine, admiradores de la revolución, habiendo probado lo pusilámine de la burguesía
los Napoleones. alemana. ¡No importa si el proletariado alemán a quien Marx quiso
París es también la capital de la Alemania del liberalismo, de la despertar la conciencia de clase y el proletariado parisiense tan
democracia y del socialismo. Boeme y Heine terminan allí su vida espontáneamente revolucionario no tienen nada en común con el
en 1837 y 1856. Ruge traslada desde Dresde el órgano de la proletariado de la gran industria imaginado, según el ejemplo
izquierda hegeliana los Deutsche Jahrbücher {Anales alemanes) británico, en el Manifiesto comunista] El hecho importante que
que se convierten en los Deutsch-Französische Jahrbücher {Anales M a r x comprueba entre 1844 y 1845 es la adopción por parte
franco-alemanes). La revista, de la cual apareció un solo número de los artesanos alemanes de ideas republicanas socialistas y
(febrero 1 8 4 4 ) , debe su celebridad pòstuma a los artículos de comunistas y de métodos de combate propios al medio parisiense.
Karl Marx, que también colabora en Vorwärts de su amigo Börns- Los alemanes, conviene no olvidarlo cuando se evoca el avance
tein. Fastidiosa sería la lista de alemanes que se prepararon en ideológico francés, tienen u n grado de instrucción superior al de
París para tener un papel siquiera modesto en los movimientos de sus compañeros de taller. E n 1848, la asistencia escolar se habría
1848-49. Una élite rica en personalidades fuertes con opiniones elevado a un 93 % en Prusia y a u n 80 % en Baviera. Los
categóricas, y problemas teóricos de una extraordinaria complejidad, proletarios alemanes están pues en condiciones de convertirse en
privan a la emigración alemana de la unidad ideológica tan carac- buenos alumnos de la élite obrera de París. L a historia de la
terística de la emigración polaca. A pesar de sus disensiones, los Liga de los justos {Bund der Gereichen) constituye un testimonio
polacos están casi de acuerdo sobre lo esencial: la reconquista irrefutable de ello. L a Liga de los proscriptos {Bund der Geächteten)
de la patria perdida. Los alemanes están de acuerdo para mejorar reunía en 1834 a intelectuales y varias centenas de compañeros.
la suerte de los trabajadores así como rechazar las instituciones C o m o la Sociedad de los derechos del hombre, es una asociación
erigidas en 1815. ¡Pero cuántas diferencias cuando se trata de secreta jerarquizada donde se dibujan dos tendencias, animadas
abordar reformas prácticas! Respecto de los franceses, los intelec- una por Venedey ( 1 8 0 5 - 7 1 ) , republicano renano antiprusiano
tuales tienen sentimientos mezclados: los desdeñan en el plano del que pone la cuestión política en primer plano (unidad en la
pensamiento y los admiran en el de la acción. Los antiguos estu- libertad), y la otra por Schuster, joven profesor revolucionario
diantes de universidades prestigiosas diseminadas en la Confede- de la universidad de Göttingen, adepto a Saint-Simon y admirador
ración, nutridos con las enseñanzas de Kant, Herder, Fichte y de Lamennais, que insiste sobre la cuestión social. Sensibles a la
Hegel, miran despreciativamente a estas modestas universidades prédica de Schuster, los trabajadores fundan grupos clandesünos
en Maguncia, Francfort, Munich, Hanover, Bremen, Leipzig y
provinciales y al eclecticismo, frágil construcción de un Victor
Berlín, que reconocen la autoridad de la central de París.
Cousin promovido al rango de filósofo nacional. Se sabe con qué
altura el " d o c t o r " Marx tratará a Proudhon, el autodidacto. Son El retorno a Alemania de elementos proletarios, por orden de la
muchos los refugiados a quienes puede aplicarse el juicio de Dieta, permite a la tendencia puramente política obtener la primacía.
Franz Mehring sobre Karl Grün, autor de Die sociale Bewegung in En 1836, los disidentes forman la Liga de los justos. Sus jefes
Frankreich und Belgien, Darmstadt, 1845 {Movimiento social en pertenecen a esos oficios que, exigiendo la reflexión o dejando un
Francia y Bélgica) : "Tenía el orgullo del escritor y del filósofo
alemán". Sin embargo, se sienten atraídos por París. Se trata no
del peregrinaje de un Bcerne o de un Heine, sino de un viaje de ' Los nombres mismos lanzados en Francia, el primero por el saint-
simoníano Pierre Leroux en 1833, en la época en que nacía en Inglaterra, y
estudios. Lorenz von Stein, en Der Socialismus und Comunismus el segundo por dirigentes de sociedades secretas parisienses hacia 1840, están
des heutigen Frankreichs, Leipzig, 1842, {Socialismo y comunismo aún no completamente germanizados; Lorenz von Stein escribe Socialismus
en la Francia actual) hizo conocer en Alemania las doctrinas "que y Comunismus, no Sozialismus y Kommunismus: a pesar del Manifiesto
comunista estos dos vocablos conservarán hasta los años cincuenta su sello
estaba encargado de vigilar". Marx también quiso tomar contacto francés.
56 La Europa de los años cuarenta Los contrastes de la Francia rural 57

lugar para la imaginación, darán tantos militantes al movimiento programa, y sobre todo el método, sedujeron a las sociedades
obrero en sus comienzos: Karl Schapper ( 1 8 1 3 - 7 0 ) , ex estudiante, secretas republicanas que en su mayoría reclutaban obreros. A la
mazziniano, pronto fiel compañero de Marx y Engels, se hizo Sociedad de las familias sucede en 1837 la Sociedad de las estaciones
cajista; Bauer, también futuro colaborador de los autores del que dirigen el tipógrafo Martin Bernard y dos burgueses, Barbès
Manifiesto, es zapatero; Weitling, sastre. y Blanqui. ¡Nada de discusiones doctrinales! ¡Ante todo, el golpe
De todos los reformadores sociales ( G r ü n , Marx, Engels, Moses de fuerza que liberará a los pobres! E s t e c o m u n i s m o específicamente
Hess, etc.) el tínico n o filósofo es Weitling ( 1 8 0 8 - 7 1 ) . El primer francés f u e a d o p t a d o por Weitling y la Liga de los justos, filial
teórico del comunismo alemán es u n o de esos artesanos autodi- alemana de las estaciones. Sus miembros participan en la insurrección
dactos que se encuentran en las callejuelas del viejo París. Su obra del 12 de mayo de 1839. Schapper y Bauer así c o m o Barbes y
es inseparable del pensamiento socialista francés y de la corriente Blanqui son detenidos. Expulsados, parten para Londres. E n 1847
babouvista y blanquista. Su primer folleto. Die Menschheii wie sie el grupo londinense t o m a r á el n o m b r e de Liga de los comunistas
ist und wie sie sein solite {La humanidad tal como es y como y recibirá la adhesión d e M a r x y Engels. A fines de 1845, el culto
debería ser), es un manifiesto redactado en 1838 en nombre de la a Babeuf se extenderá al N u e v o M u n d o . T o m a n d o p r e s t a d o su
título al Tribun du peuple, aparecerá en N u e v a Y o r k a comienzos
Liga de los justos. Weitling imita cuidadosamente Le livre du
de 1846 Der Volks-Tribun r e d a c t a d o por los inmigrantes reunidos
peuple, que Lamennais publicara el año anterior. Incapaz d e admitir
en una nueva Liga de los justos. R o d e a d o d e algunos discípulos,
la sociedad jerarquizada, c o m o lo hace la escuela saint-simoniana,
entre los cuales se hallaba el médico E w e r b e c k ( 1 8 1 6 - 6 0 ) , p r o n t o
se siente próximo a Fourier, el pequeño empleado d e comercio
convertido al sistema d e C a b e t ( a c a b a d e traducir Le voyage en
desaparecido en el aislamiento en 1837. L o conoce a través de los
¡carie) hostil a la mítica de las barricadas, Weitling deja París e n
innumerables folletos de La petite bibliothèque phalanstérienne,
1841. E n Suiza f u n d a otra Liga de los justos cuya acción en A l e -
que anima Considérant. De estas enseñanzas h a retenido el pos-
mania se a p o y a r á en el breviario revolucionario c o n c e b i d o en la
tulado romántico de la excelencia d e las pasiones, pero no comparte
atmósfera de las sociedades secretas parisienses, i m p r e s o secreta-
algunos aspectos de la doctrina: la denuncia de la " q u i m e r a igua- mente con u n tiraje de 2 . 0 0 0 ejemplares que cierto publicista decla-
litaria" y el repudio a la violencia. rará sin embargo en 1852 haber p a s a d o desapercibido.
D e s d e 1838 Weitling es el profeta de una sociedad comunista Atribuyendo una importancia d e s m e s u r a d a a u n a h o j a d e p o c a
surgida de la revuelta de una clase obrera con base artesanal. Los audiencia pero d i f u n d i d a públicamente, los gobiernos p r u s i a n o y
comunistas parisienses preparan el porvenir a p a r t i i d e u n a recons- francés cometieron u n e r r o r inverso d e apreciación: el p r i m e r o
trucción legendaria dei p a s a d o revolucionario. Al lado del "mito reclamó y o b t u v o del segundo la expulsión d e los r e d a c t o r e s d e
bonapartista", más discreto pero siempre viviente, el " m i t o jaco- Vorwärts. L a influencia d e Börnstein, R u g e y M a r x , débil en
bino" se vio revigorizado b a j o la acción de Philippe Bubnarotti Alemania, era nula en F r a n c i a ; los revolucionarios parisienses
( 1 7 6 1 - 1 8 3 7 ) , el viejo revolucionario t o s c a n o q u e f u e quizás el ignoraban el a l e m á n y la filosofía; los h o m b r e s d e la oposición
principal jefe de la Carbotiería. Su Histoire de la conspiraron pour estaban desconcertados por el a t e í s m o d e los neohegelianos; L a m a r -
l'égalité dite de Babeuf ( 1 8 2 8 ) , ejerció una e n o r m e influencia sobre tine, Lamennais, L o u i s Blanc, Pierre L e r o u x , p r o p u e s t o s p a r a
los elementos ya politizados de la clase obrera f r a n c e s a ; en las colaborar en los Anales franco-alemanes se habían n e g a d o .
prisiones, los trabajadores detenidos p o r su participación en las
insurrecciones de junio d e 1832 y d e abril de 1834, f u e r o n adoc-
trinados p o r discípulos de Buonarotti. L o s artesanos de los jaubourgs Los intelectuales de Italia
Saint-Antoine o Saint-Denis tendrán en adelante dos "semidioses
fraternales", p o r q u e Buonarotti, al final d e su vida, reconcilió a Circunstancias fortuitas crearon, a c o m i e n z o s de los a ñ o s treinta,
Robespierre y Babeuf: la propiedad en c o m ú n de todos los medios el mito de un comité revolucionario en acción p a r a u r d i r c o m p l o t s
de producción preconizada por Babeuf será realizada según los en Alemania e Italia. D e t e n i d o en 1830, Mazzini se exilió en
métodos dictatoriales del "sublime C o m i t é d e salud pública". El Marsella en 1831, d o n d e f u n d ó la Joven Italia. M i e m b r o , según
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su expresión, de la "nación de los proscriptos", llega también a la francesa sus formas de organización política y sus aspiraciones
"capital de la revolución". Sin embargo, en 1834 elige Berna para sociales, los elementos políticos italianos constituyen una élite. La
crear su Joven Europa y en 1836 traslada a Londres el centro del atmósfera parisiense sólo ha embellecido sueños que ellos ya traían
movimiento italiano e internacional. C o m o Victor Alfieri, el poeta consigo.
reaccionario de fines del siglo x v m , como su rival Vincenzo Gioberti,
sacerdote liberal y patriota, el republicano anticlerical Giuseppe
Mazzini pertenece a la corriente antifrancesa del pensamiento ita- Los intelectuales de Europa oriental
liano, nutrido de grandiosos recuerdos de la R o m a de los Césares y
de los papas. Su pasado prestigioso responde por el porvenir de Los medios cultivados de la E u r o p a del este y del sudeste, dominio
Italia. Sólo el pueblo italiano es el pueblo-mesias. L a partida de de sociedades rurales sometidas a la servidumbre y al absolutismo,
Mazzini hacia Londres tiene el sentido de una condena retrospectiva son aun más estrechos. Una parte de la nobleza y de la burguesía
a los perseguidos italianos que acudieron a París. Pero París se entusiasma con los románticos franceses, desea admirar en su
conserva su seducción. Silvio Pellico ha pasado ocho años en los círculo prestigioso a los escritores que predican la libertad de
calabozos austríacos (su obra Mis prisiones debía tener una pro- los hombres y la fraternidad de los pueblos. "¿Quién no ha soña-
digiosa acción moral en Italia y E u r o p a ) ; cuando es liberado en do con París en su juventud?", pregunta en 1839 el magiar
1830, París le ofrece una acogida triunfal. Comprometido en las Eötvös. El valaco Bratiano renueva en 1846 la fórmula del joven
agitaciones de la Joven Italia, Gioberti se refugia en París antes de Heine y encuentra los acentos de Mickiéwicz: "Los peregrinos no
instalarse en Bruselas, donde en 1843 aparecerá el libro que lo se van más unos a La Meca, otros a Jerusalén [ . . fl vienen todos
inmortalizará. L a tesis central, la unidad b a j o la f o r m a de una a Francia [ . . . ] la tierra santa de todos". La colonia magiar cuenta
confederación dirigida por el papado, había sido sostenida siete con artesanos que combatirán en las barricadas de febrero. Los
años antes en un panfleto de poco tiraje publicado en París; su estudiantes d e Moldavia y Valaquia escuchan en el Colegio de
autor era Niccolo T o m m a s e o ; novelista y filólogo, el "Littré de la Francia las profecías de Quinet y Michelet sobre la emancipación
península" compartirá en marzo de 1848 con Manin, también de los pueblos; a comienzos de los años cuarenta, el Quartier latín
refugiado en Francia, la dirección del movimiento revolucionario alberga jóvenes llamados a la celebridad: Kogalniceanu, historiador
veneciano. En 1844, desde París, es Balbo quien replica vigoro- de lengua y de literatura y emancipador de campesinos, el historia-
samente a Gioberti. En 1841, el jurista y filósofo Mamiani había dor Balcesco, que participará en las luchas de febrero, los hermanos
lanzado desde París un llamado a la liberación de Italia. Partidario Bratiano, fundadores de una dinastía de políticos; después de la
de la supremacía del rey de Cerdeña y de laicizar la administración victoria de la revolución en París, querrán llevarla a su país;
de los estados pontificios, se convertirá paradójicamente en 1848 en socialmente moderados en su mayoría, reivindican con un cierto
el primer ministro de Pío IX. Su sucesor. Pellegrino Rossi, que será esnobismo un rótulo de moda en París, el de los rojos. El ascen-
asesinado en noviembre de 1848, había debido huir de Bolonia. diente de Francia se ejerce también sobre el principado servio,
Comienza una sorprendente carrera de ciudadano francés y de apenas salido de la ignorancia, y que para una administración
patriota italiano que lo conduce, por la Cámara de los Pares y la todavía embrionaria espera de París cuadros activos; a su regreso,
e m b a j a d a ante la Santa Sede, del Colegio de Francia y de la los ex estudiantes llevarán por mucho tiempo el sobrenombre
Facultad de Derecho a las funciones de jefe del gobierno romano. laudatorio de "parisienses"; el poeta servio Nenadovitch participará
El lombardo Ferrari, llegado a París en 1836, representa la tendencia en el golpe de Febrero. De la inmensa Rusia replegada sobre sí
minoritaria de los italianos adeptos al mesianismo francés. Nume- misma, vinieron los dos personajes más representativos de las
rosos amigos de Mazzini esperan en Francia que París dé la señal clases esclarecidas hostiles a la aristocracia zarista: Bakunin y
a los italianos de liberarse a sí mismos. Frente a u n a , masa de Herzen conocieron al pueblo parisiense casi sólo a través de
inmigrantes a quienes el analfabetismo y las costumbres de pasivi- Proudhon, su amigo. Bakunin, futuro teórico de la anarquía, era
dad impiden, a diferencia de los alemanes, tomar de la clase obrera entonces un ferviente admirador de Marx. Colaborador de Vorwärts,
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La Europa aristocráticayabsolutista 91
La Europa de los años cuarenta

fue obligado a abandonar París en 1847. Ese año, el liberal Herzen hubiera podido, sin renegar de sus principios, como en Bélgica o en
obtenía la autorización para ir a París. Prusia, aceptar que el estado tomara a cargo los ferrocarriles. No
El mito de una Francia inflamando E u r o p a al llamado de su creía en el porvenir de un medio de trasporte revolucionario (en
capital es común a la mayoría de los demócratas, "comunistas" y este sentido, el sabio republicano Arago no reaccionaba de manera
patriotas refugiados. ¿Una revolución parisiense puede abatir las distinta al orleanista Thiers) y estimaba que era imposible para
instituciones del estado centralizado como en 1830 o en 1792? En el estado reunir los enormes capitales que exigía la realización de
ese caso, ¿la sociedad francesa se prestaría a aventuras guerreras programas concebidos por entusiastas "politécnicos" saint-simo-
para convertir el mito en realidad? nianos. Del fracaso de compañías privadas nació en 1842 un
compromiso: siete grandes líneas concedidas por noventa y nueve
años a sociedades, tomando el estado a su cargo la adquisición de
terrenos, la edificación de la obra de fábrica y las estaciones.
IV. ECONOMÍA, SOCIEDAD, POLÍTICA
Siguiendo el ejemplo de la finanza británica, la "Alta Banca" co-
mienza a interesarse por los ferrocarriles franceses: en 1845, James
El progreso de la economía y sus límites de Rothschild constituye con el banquero inglés Blount la Compagnie
du Nord. El conjunto de líneas en explotación alcanza a 1.930 km
La crisis económica de 1846-47 relegó al olvido el período de en 1848. Esta cifra, modesta si se la compara con las del Reino
expansión que sucedió después de 1834 a la depresión de 1828-32. Unido, de Alemania, de Bélgica o con los brillantes resultados del
Con la elevación del número de electores censitarios y del rendi- Segundo Imperio, refleja la mentalidad de una sociedad no aficionada,
miento de los impuestos, los contemporáneos comprueban que al riesgo.
Francia se enriquece; pero los que observan las dificijltades cani-
pesinas y la miseria obrera están convencidos que la única benefi- El riguroso proteccionismo es otra expresión de este estado de
ciaria del progreso económico es la burguesía, cuya omnipotencia animo. La última Cámara del régimen, como la última de la
y egoísmo estigmatizara Tocqueville. L a monarquía de Julio ha Restauración, cuenta tres veces más grandes terratenientes que
sufrido inevitables comparaciones: una economía todavía arcaica industriales, comerciantes o banqueros y tanto éstos como aquéllos
entra tímidamente en la vía de la modernización que el Segundo consideran la adquisición de la tierra como la inversión más segura
y el signo más visible del éxito. El acuerdo entre los notables es,
Imperio seguirá resueltamente. Francia es, no obstante, en 1848
en este sentido, el hecho más destacado de la historia parlamentaria
el primer gran estado industrial del continente: antes que los
de Francia entre 1815 y 1848. L a ley de 1819 rompe con la
alemanes, los franceses, con su temperamento, han seguido la
política del pan barato del Antiguo Régimen mantenida por la
escuela de los ingleses.
Revolución y el Imperio. El régimen protector es reforzado aun
La red caminera, que a fines del siglo xviii había suscitado la
más en 1821. Los ministros más decididos b a j o Luis Felipe sólo
admiración de Arthur Young, se prolonga. Se terminan canales que
pueden atenuario. Los historiadores denuncian con razón el egoísmo
habían comenzado a construirse mucho antes de 1830 — e l canal
de los representantes de la gran propiedad. Sin embargo, los "cen-
del R ó d a n o al Rhin, suspendido desde 1795— y otros se inician sitarios" son también, como lo subrayan los diputados de izquierda,
(canal del M a r n e al R h i n ) . El estado y las colectividades locales los portavoces de millones de pequeños propietarios alejados de las
financian esos trabajos (en 1831 nace el ministerio de obras pu- urnas. El retorno al proteccionismo agrícola ( 1 8 9 2 ) después del
blicas) recurriendo al crédito según los procedimientos del viejo intermedio librecambista del Segundo Imperio, responderá a los
régimen. La costumbre es dirigirse a las grandes casas (sobre 900 deseos de los campesinos convertidos en electores y su instigador
millones de empréstitos de estado, el barón James de Rothschild Méline será presentado durante mucho tiempo como el "salvador
tomó 8 0 0 ) . Es la "Alta Banca". Esta "Francia de judíos de la de la agricultura francesa".
Bolsa" (K. M a r x ) domina al Banco de Francia con 15 sucursales.
La timidez de los capitales y la rutina son los mayores obstáculos El proteccionismo industrial que interrumpirá momentáneamente
para el auge de los ferrocarriles. L a burguesía francesa, que no la voluntad innovadora de Napoleón III, se remontaba al Antiguo
reivindicó jamás para sí misma la explotación de las rutas y canales. Régimen y servía de caución al proteccionismo agrícola. La com-
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petcncia inglesa justificaba medidas de protección. El período en que de la mitad de la producción. La insignificancia del impulso urbano
los grandes terratenientes dominaban en el Palacio Borbón fue uria está en correlación con la dispersión de fábricas con modestos
efectivos: en 1845, solamente 3.200 empresas emplean más de 50
edad de oro para los industriales. La lucha contra la industria
personas, de las cuales 135 ocupan al menos 500 obreros. El
textil inglesa llevaba a una prohibición ciega. La monarquía burguesa
carácter familiar de las empresas del norte y del alto Rhin, que se
intenta suavemente aflojar el cerco proteccionista; los publicistas
mantendrá hasta nuestros días, es un obstáculo para la formación
y profesores que en 1841 fundaron el Journal des Economistes,
del "capitalismo monopólico" que Ledru-Rollin denuncia en 1847.
sólo encontraron al comienzo una condescendiente indiferencia. Pero
En realidad, este fenómeno no afecta más que a la industria del
cuando Bastiat osó crear, a imitación de la organización manches-
carbón y a los ferrocarriles. Ello se debe en gran medida a la
teriana, una Liga por el librecambio, resonaron en la C a m a r a
obra de la banca (la explotación de las minas de Anzin es una
indignados discursos. Los adversarios del librecambio disponían de de las bases de la familia Périer) y de la "Alta Banca". Marx no
un argumento aparentemente irrefutable: la economía francesa se había equivocado al señalar en Las luchas de clases en Francia,
se desarrollaba a un ritmo jamás alcanzado; entre 1825 y 1847, el 1848-1850 la preeminencia económica de la "aristocracia finan-
ingreso agrícola había aumentado en un 38 % y el industrial en ciera" sobre la "burguesía industrial" y la debilidad numérica del
un 66 % . proletariado de fábrica. A pesar de las trasformaciones sufridas
Este auge es en realidad una consecuencia del fracaso del pro- bajo la monarquía de Julio, la Francia de 1848 sigue siendo una
teccionismo. Como las barreras aduaneras no lograron frenar la nación de campesinos y artesanos.
inexorable tendencia a la caída de los precios, la propia agricultura,
tan lenta para trasformarse, trata en ciertas regiones de adaptarse
para sobrevivir. Aumentan las superficies cultivadas; las tierras en
barbecho retroceden, se arrienda una parte creciente de las tierras Una sociedad de campesinos y artesanos
comunales; la superficie destinada al trigo y sobre todo a la papa
se extiende. Los progresos de la ganadería son considerables: entre LAS CLASES POPULARES. Los campesinos forman el grueso de las
1812 y 1852, el número de ovinos aumentó en un quinto; entre "clases inferiores" excluidas de la vida política hasta 1848. ¿Cuál
1830 y 1850 el de bovinos en un tercio. El mantenimiento del es su proporción en el conjunto de la nación? En Le Peuple,
precio de la carne, como consecuencia de la protección y también Michelet la evalúa en un 68 % en 1846. Esta estimación da
de su consumo más frecuente en las clases populares, contribuyó cuenta de las realidades sociales mejor que la estadística de 1851
al "despegue de los cultivos". (el 56 % de los adultos de sexo masculino habrían ejercido una
Al "desafío" británico, la industria francesa intenta responder actividad agrícola y el 27 % una actividad industrial o comercial)
inspirándose en el ejemplo británico: la concentración de obreros que Ignora la existencia de campesinos, obreros ocasionales.
en grandes fábricas utilizando máquinas de vapor. Contra la revo- Lejos de extenderse como en Inglaterra, la gran propiedad
lución industrial actúan un sistema bancario inadaptado a una retrocede: entre 1815 y 1850 el número de propietarios habría
economía moderna, el espíritu de rutina propio de una sociedad pasado de 6 millones y medio a 7 millones y medio. Sin embargo, la
rural, la debilidad de la industria pesada. Francia es pobre en superpoblación explica la existencia de un importante proletariado.
carbón (el rico yacimiento de Pas-de-Calais descubierto en 1841 En Cóte-d'Or, departamento esencialmente agrícola, sobre 100
será explotado recién en 1847) y en hierro (las minas de la región campesinos hay 45 obreros manuales y domésticos, 5 arrendatarios
de Lorena están todavía poco exploradas). Los impuestos sobre el o aparceros sin propiedad y 5 que son mitad campesinos, mitad
carbón y el hierro británicos frenan la modernización de la meta- jornaleros. El alza del ingreso agrícola ha beneficiado a una
lurgia y el desarrollo de la máquina de vapor. Como en el Reino minoría. Pequeños propietarios y arrendatarios disponen a menudo
Unido, la industria textil es la primera en mecanizarse. La mecánica de menos de 5 hectáreas. Con buenas cosechas, la venta de los
triunfa en las hilanderías de Mulhouse, Lille y Rouen, pero en la excedentes los incita a arrendar o adquirir pequeñas y codiciadas
región de Elbeuf la lana todavía se peina a mano. En Alsacia y en parcelas de tierra. A falta de instituciones de crédito, contraen
Normandia, el hilado mecánico del algodón no representa aun más préstamos hipotecarios a tasas de interés usurarias. El campesino
64 La Europa de los años cuarenta Los contrastes de ¡a Francia rural 65
francés "interesado, ávido de negocios", pintado con simpatía por viejos soldados han cincelado desde 1815, con ruda ternura, la
Michelet, está, vísperas de 1848, agobiado por las deudas. Tiene imagen del ""petit caporal" amigo de los campesinos. Votando
ya la sensación de ser víctima del progreso. masivamente por su sobrino en diciembre de 1848, los electores del
La administración quisiera suprimir de un golpe la vaine pâture* campo harán una estrepitosa entrada en la historia.
y el uso de los terrenos comunales. En Côte-d'Or, logra progresiva-
mente entregar 1.600 ha al cultivo entre 1843 y 1847. Justificada Las "clases obreras". En Francia y en Alemania se emplea indis-
económicamente, esta política favorece en realidad a los intereses de tintamente "clases obreras", "clases laboriosas" o "trabajadores". La
la gran propiedad y perjudica a los de amplias capas campesinas. famosa Comisión de Luxemburgo se llamará oficialmente "Comisión
La mecanización de la industria textil acentúa la amargura gubernamental para los trabajadores". El uso constante del plural
de los pequeños propietarios y jornaleros, mal pagados y subem- testimonia la heterogeneidad del m u n d o obrero.
pleados. E n muchas provincias, el trabajo a domicilio constituía en En vísperas del maquinismo, el proletario industrial sigue siendo
invierno la principal actividad del campo. Hacia 1845, el hilado a minoría: hacia 1848, los obreros de fábrica no suman más que un
mano representa para el lino las ®/,,, partes de la producción, pero millón doscientos cincuenta mil mientras que el número de trabaja-
está en vías de desaparición en el algodón. El tejido rural disminuye. dores a domicilio se eleva a 4 millones. Describir la formación
El campesino, que teme perder su segundo oficio, comprueba que de la nueva clase, evocar sus condiciones de vida y de trabajo sería
gana menos que el obrero de fábrica: en 1847, en la región de incurrir en repeticiones. Porque Francia, como todos los países
Rouen, el ingreso global de los tejedores a domicilio es inferior al continentales que entrarán detrás de ella en la vía de la industriali-
total de los salarios de los obreros de fábrica que son tres veces zación, sigue el "modelo" inglés, aunque a un nivel menos elevado.
inferiores en número. Entre 1834 y 1840, las encuestas de los católicos sociales revelan
la terrible situación de los obreros de la industria textil. En Lille, los
Después de febrero, los campesinos-artesanos normandos rom-
sótanos del barrio Saint-Sauveur han sido trasformados en viviendas.
perán las máquinas. E n Alsacia, los trabajadores rurales se desqui-
El escándalo obliga a las Cámaras a reglamentar el trabajo de los
tarán con los bienes y con la persona de judíos acusados de usura.
niños. Inspirada en la legislación inglesa de 1833, la ley de 1841
Los bosques serán devastados casi por todas partes y se restable-
no prevé los medios de asegurar su cumplimiento. Esta ley no tenía
cerán los derechos de uso. Y en fin, destruyendo los registros fiscales
punto de comparación con la ley Ashiey de 1844 a favor de la
se creerá destruir con ellos los impuestos indirectos. La generali-
mano de obra femenina. La esperanza de un aumento de salario
zación de esos movimientos desordenados impide suponer la acción
o de una disminución de la jornada de trabajo (la reivindicación de
de cabecillas. Los efectos de la propaganda republicana en el medio
la jornada de 10 horas aparece, como en Inglaterra, hacia 1840)
rural a menudo han sido sobrestimados. Los albañiles de Creuse y
pudo impulsar a los obreros de la gran empresa a movimientos
sobre todo Martin Nadaud, ya citado, constituyen casos de excep-
improvisados; es el caso de la gran huelga de Jas minas de carbón
ción. Analfabetos, los campesinos no se apasionan por las teorías
del Loire, en 1844, con las violencias de Rive-de-Gier, duramente
extrañas a su universo: en 1848, los comisarios del gobierno des-
reprimidas por la tropa, como en Lyon en 1831 y en 1834. La
cubrirán con estupor rurales que no comprenden la "diferencia entre
conciencia de clase es un sentimiento intermitente. La idea de
una república y una monarquía"; es sabido, por lo demás, cómo
derrocar el orden social está ausente.
los nombres de dos ministros del nuevo régimen se convertirán
en los de mujeres de mala vida, la Marie y la Martine. En cambio. Los miembros del artesanado forman los cuadros del movimiento
Napoleón es un personaje familiar. En un mundo replegado sobre Dbrero bajo Ja monarquía de Julio. El compagnonnage, práctica
sí mismo, dispone del único medio de penetración eficaz: la tradición iecular del "oficio" * en Francia y en los países germánicos, se
oral. Desgranados en las veladas, los embellecidos recuerdos de los
• En el original, du "bâtiment", que tiene a la vez el sentido de cons-
rucción / / conjunto de industrias y oficios que intervienen en la construcción
* Derecho que permite a los habitantes de una aldea hacer pastar su le edificios, y (fig. y fam.) también interviene en expresiones c o m o "ser del
ganado en las tierras no aradas, una vez levantadas las cosechas. [N. del E l )ficio", "ser uno de los nuestros". [N. del E.]
Los contrastes de la Francia rural
La Europa de los años cuareiila 67
66
autores a c o s t u m b r a d o s al aspecto p a r a d o j a l de su ascenso, sobres-
perpetúa b a j o sus aspectos anacrónicos. Los miembros de oñcios timan su importancia numérica y su cohesión.
"nobles" (canteros, mueblistas y c e r r a j e r o s ) se dividen en facciones Los doscientos mil privilegiados admitidos p a r a designar los
rivales (los Deberes) y se c o m p o r t a n con aires de aristócratas. Basta diputados f o r m a n la "burguesía censitaria". Esta expresión unívoca
con citar la opinión de Agricol Perdiguier, mueblista del faubourg se aplica en realidad a grupos sociales diversificados, cuyos ingresos
Saint-Antoine, cuyo Livre du compagnonnage inspiro a George Sand no tienen ni el mismo origen ni el m i s m o volumen. Una minoría
Le Compagnon du Tour de Franee ( 1 8 4 1 ) : " Y o aprecio tanto a de algunos cientos de familias c o m p r e n d e a los financistas de la
un honesto p a n a d e r o y a un honesto zapatero c o m o a un mueblista Alta B a n c a " parisiense, los a r m a d o r e s de Bordeaux, Nantes y
y a un cantero c u a n d o son honestos también". Las disensiones que Marsella, grandes negociantes que están también a la cabeza de
mantienen entre los migrantes del artesanado y su apohticismo pro- pequeñas e m p r e s a s dispersas ( " f a b r i c a n t e s " lyoneses) y por fin
f u n d o garantizan a organizaciones en principio ilegales la tolerancia manufactureros.
de las autoridades. Sin embargo, el compagnonnage declina. A la L a "burguesía m e d i a " reúne otros negociantes y m a n u f a c t u r e r o s
sombra de las sociedades de socorros mutuos autorizadas, que agru- notarios, p r o c u r a d o r e s judiciales, abogados, altos funcionarios, ren-
pan en el plano local a obreros de una misma profesion, nacen tistas propietarios de inmuebles de alquiler, de valores mobiliarios
las sociedades de resistencia. Su objetivo real es cubrir el riesgo y de tierras arrendadas. D a d o que la base del censo era la patente
de la desocupación por huelga. Siendo un delito la coalicion con y el impuesto a la tierra, en u n a é p o c a q u e ignora la tasación
miras a obtener un a u m e n t o de salario, se fraccionan — c o m o las de los ingresos, los terratenientes constituyen el grueso del cuerpo
asociaciones r e p u b l i c a n a s — en grupos de menos de veinte rniem- , electoral. E n sus filas se encuentran enemigos declarados de la
bros. L a Sociedad de mutualistas de L y o n con la Sociedad de los m o n a r q u í a burguesa. Algunos miembros de la vieja aristocracia
derechos del hombre organiza la insurrección de abril de 1834. L a s acusan con el m i s m o odio al m o n a r c a u s u r p a d o r y a sus aliados
sociedades de resistencia desempeñan un papel capital en las huelgas No le temen a las r e f o r m a s que afectarían los intereses de los
parisienses de 1840, 1843 y 1847. F u e r a de los mecánicos y de los industriales ( a u n q u e los católicos sociales han surgido d e la nobleza
tipógrafos, sólo encuentran adeptos en el seno de los viejos oficios. egitimista). Algunos son bastante perspicaces c o m o p a r a apreciar
E n t r e ellas y las unions británicas la afinidad de origen es notable. las ventajas d e un sufragio m e n o s restringido. C u a n d o participan
El auge precoz del sindicalismo en el R e i n o U n i d o resulta de la en el f u n c i o n a m i e n t o del execrado régimen lo h a c e n con la intención
antigüedad y de la importancia numérica de las unions, y también de destruirlo.
de la actitud conciliadora del estado: el derecho de coalición acor- E n cambio, los excluidos del sistema quisieran entrar en él L a
d a d o a los obreros británicos desde 1824 será negado a los traba- vaga expresión " p e q u e ñ a burguesía" designa ante t o d o a la gente
jadores franceses hasta N a p o l e ó n 111 ( 1 8 6 4 ) . Obligadas a la acción que tiene conciencia de no pertenecer o de n o pertenecer más a las
clandestina, poco numerosas, las sociedades de resistencia perte- clases p o p u l a r e s : miembros de profesiones liberales y funcionarios
necen a la prehistoria del sindicalismo, cuya historia comienza b a j o Los p e q u e ñ o s potentados, tenderos y patrones que trabajan con
la 111 República. C o n c e n t r a d a s en gran medida en L y o n y espe- algunos asalariados, f o r m a n una categoría marginal. Su sentimiento
cialmente en París, ven a sus miembros más conocidos obrar de clase es c a m b i a n t e : tal es el caso del tendero del faubourg
activamente en el seno de las organizaciones revolucionarias por el Saint-Denis que en junio de 1832 disparó contra los insurrectos en
advenimiento de una república social, incluso socialista o comunista. Obrero de 1848 contra la tropa y en junio de 1848 c o n t r a ' l o s
U n a élite política y no sindical será la que encuadre a los insurrectos insurrectos. ¿ P o r q u é en F e b r e r o la " p e q u e ñ a burguesía" f u e revo-
de F e b r e r o que d e r r o c a r á n a la m o n a r q u í a burguesa. lucionaria?

LAS BURGUESÍAS. Vista desde París, la revolución de 1848 aparece


c o m o la victoria de las "clases o b r e r a s " sobre la burguesía. Esta
clase llegó a su apogeo en una Francia con preponderancia rural y
artesanal, desprovista de instituciones bancarias y apenas afectada
por la industrialización. Desde Tocqueville, la mayoría de los
36
La Europa de los años cuarenta La Europa aristocráticayabsolutista 91

El régimen parlamentario al servicio del rey república. El sistema parlamentario es introducido en Francia según
y de la burguesía de negocios el modelo británico admirado por los líderes (Guizot, Broglie,
Thiers). Pero es alterado. Los pares, nombrados a título vitalicio
Había perdido la esperanza de participar, aunque fuera indirecta- en recompensa por los servicios prestados al soberano, no gozan
mente, en el manejo de los negocios. Sin embargo, los primeros del crédito de los lores. En la Cámara baja, el espíritu individua-
meses del reinado le habían parecido ricos en promesas. lista, rebelde a la disciplina partidaria se manifestaba desde 1830.
Reformada en 1831, la guardia nacional es una institución envi- Francia había hecho el aprendizaje de la inestabilidad ministerial:
diada por la E u r o p a liberal. En 1848 servirá de modelo a todos los 15 gabinetes en diez años. El juego cesa en 1840, cuando Luis
movimientos revolucionarios. En principio, forman parte de ella Felipe logra utilizar a los políticos que pretendían confinarlo a un
todos los franceses de 20 a 60 años; en realidad, están inscritos papel decorativo. Hasta 1848 gobierna en asociación con Guizot.
sólo los contribuyentes al impuesto personal. Esta "milicia burguesa" Pero las apariencias del régimen parlamentario están a salvo. Como
tiene una base tan amplia como el cuerpo electoral legislativo. Ella los jefes de los estados totalitarios de hoy, Guizot es sostenido por
engloba a la inmensa masa de pequeños propietarios. Los "espe- hombres que él mismo elige. Introducida en las costumbres políticas
cieros jenízaros", objeto de tantas burlas, sostuvieron valientemente inglesas en el siglo xviii y practicada en Francia desde la Restau-
el régimen de Julio hasta el momento en que comprendieron que ración, la corrupción electoral se erige en sistema. Circunscripciones
nunca elegirían su diputado. Al devolver a los franceses el derecho de algunas centenas de electores la facilitan. La fidelidad de los
que les había sacado Napoleón de elegir los administradores locales, diputados electos por la corrupción está asegurada por la corrupción
Luis Felipe parecía sin embargo haberse comprometido en este misma; el otorgamiento de sinecuras generosamente remuneradas o
sentido. Sin duda, la ley municipal de 1831 acuerda el derecho de de promociones precede a los escrutinios importantes. La Cámara
sufragio a los que pagan más impuestos; pero como la proporción elegida en 1846 comprende: 142 propietarios y rentistas, 16 hom-
de los electores está fijada en un décimo de la población, en las bres de letras, 52 abogados y notarios, 7 médicos, 34 banqueros e
comunas de menos de 1.000 habitantes, su aplicación es muy liberal i n d u s t r i a l e s . . . ¡y 185 funcionarios! El partido de Guizot no es
en esa época. La ley sobre el reclutamiento de la Cámara, que tanto un partido de clase: es una clientela de funcionarios necesitados de
debía contribuir a la caída del régimen, había sido bien recibida en progreso. Pero la estabilidad ministerial, nacida del llamado a
1831. El censo había disminuido de 300 a 200 francos y aún a 100 intereses egoístas, encubre las especulaciones de la burguesía de
francos para algunas "capacidades" (miembros del instituto y negocios y el tráfico de la alta administración. El gobierno toma "el
algunos bficiales retirados). El número de electores casi se dupli- giro de una compañía industrial donde todas las operaciones se
caba: 168.000 contra 94.000. Montalembert, en la tradición del hacen con miras al beneficio que los socios puedan obtener de
legitimismo realista, solicitó reducir el censo a 50 francos pero ellas" (Tocqueville). Reducidos legitimistas y radicales a algunas
su proposición fue juzgada como demagógica. Diez años más tarde, individualidades (desde 1835 la "calificación de republicanos" está
los excluidos que se pavonean en las revistas de la guardia nacional prohibida), la oposición parlamentaria se compone esencialmente
y participan en las elecciones municipales se impacientan: el derecho de unos sesenta diputados de la izquierda dinástica. Estos orlea-
electoral legislativo es menos un privilegio político que una consa- nistas, surgidos de las capas elevadas de la burguesía media, son
gración social. A quien se ha esforzado vanamente en seguir el políticamente moderados que reprochan al ministerio su gestión
famoso consejo de Guizot; "¡Enriquecéos!", el crecimiento de! sin brillo y . . . su longevidad. Los enemigos de Guizot proponen
número de censitarios ( 2 4 7 . 0 0 0 en 1846) vuelve más intolerable destruir los mecanismos que lo hacen invulnerable. Reclaman incan-
aún el inmovilismo del régimen. Un sentimiento de frustración sablemente pero en vano de una Cámara dominada por funcionarios
lleva a los pequeños propietarios a prestar oídos complacientes a los el voto de una ley que prohibiera a los funcionarios formar parte
ataques de la oposición parlamentaria. de ella. Justificada moralmente, la reforma parlamentaria no
La cuestión de la reforma electoral y la de la reforma parla- conmueve a la opinión pública ya que sólo concierne a los privile-
mentaria están ligadas. Una y otra contribuirán a mantener la fer- giados que pagan 500 francos de impuestos directos. La reforma
mentación de donde surgirá, con gran horror de los antagonistas, la electoral reivindicada en 1840 y luego en 1847, tiene una signifi-
70 La Europa de los años cuarenta III. E L R É G I M E N C O N S T I T U C I O N A L E N T R E
LOS VECINOS DE FRANCIA
cación clara para la minoría que la oposición cuenta movilizar. El
proyecto de Duvergier do Hauranne nada tiene de democrático:
previendo la disminución del censo a 100 francos y el aumento del
número de "capacidades"', se presenta como la adaptación a la
época de los principios planteados en 1831. Con un cuerpo electoral
rinniirado por la incorporación de 200.000 nuevos miembros, los
' t i . . , IPI r^n

En una Europa donde generalmente se confunden las aspiraciones


el sutragio universal! ), sus enemigos, que son también los de la libernles v nnrinnr'!"" ' • rn fr-- - ri ' son
deir • • ••'•v- ^
clig' .u. ,, pesar de una breve exis-
prever q . lüMcaciDü . . ia
..^ia, estado belga, al qae hoy perturban las querellas entre
a olías que, poí eiapiis, ,'rv;ir'an al sufragio universal? l a l eia bui
flamcncns y ' iones, gv-a de notable estabilidad en un cliraa de
duda la opinión de los parlaniemaüüs ' i o s de ir u-
libertad. U ' ga historia común asegura una innegable cohesión
irecciones siempre derrotadas, que se compi iMnetieron en el partido
nacional a la c oafederación suiza, al menos hasta 1845, a pesar de
de la reforma.
sus divisiones lingüísticas y a España y Portugal, a pesar de las
La mayoría de los trabajadores del campo y de las ciudades guerras dinásticas y los pronunciamientos.
ignoran o no comprenden un conflicto que los supera. L a élite
artesanal de las sociedades secretas parisienses mejor informada no
cree, a diferencia de la clase obrera inglesa, en las virtudes de las
I. LA PENÍNSULA IBÉRICA: GUERRAS CIVILES Y PRONUNCIAMIENTOS
instituciones representativas. Privada de la libertad de reunión, del
derecho de coalición, asocia el régimen parlamentario a la política
España y Portugal parecen, en todos los aspectos, encaminarse por
de reacción en el interior y de traición en el exterior, Pero para el
vías paralelas. Al mismo tiempo, pierden sus imperios en América
lector de La Réforme, la palabra " r e f o r m a " lanzada por los adver-
central y meridional ( 1 8 2 4 - 2 5 ) ; pasan, casi sin transición, de la
sarios de Guizot despierta los sueños de un régimen democrático y monarquía absoluta a la monarquía constitucional; entran en una
social. Para sorpresa de los aprendices de b r u j o de la Cámara de era de guerras civiles y de pronunciamientos y logran, en vísperas
diputados, algunos miles de parisienses erigirán barricadas y derro- de 1848, una estabilidad política precaria: se instalan dictaduras
carán a Guizot, al rey, a la monarquía y al sistema parlamentario. bajo la cubierta de un liberalismo aparente.
La liberalización de las instituciones no es, como en el Reino
Unido o en Francia, una consecuencia del ascenso de las clases
medias. Economías arcaicas (en España las primeras vías férreas
serán inauguradas recién en 1851 ) mantienen a duras penas en un
nivel muy mediocre las condiciones de vida de millones de campe-
sinos con horizontes limitados. El crecimiento demográfico en la
primera mitad del siglo xix es inferior al promedio europeo ( 5 0 % ) :
en 1850, la población d e España ( 1 5 millones) y la de Portugal
(3 millones y medio) aumentaron sólo un 4 3 % y un 25 % ,
respectivamente. La nobleza y el clero, poseedores de inmensos
dominios, representan la autoridad social. En países ardientemente
católicos, el absolutismo puede ejercerse plenamente sólo de acuerdo
con la Iglesia, que siempre dispone de la Inquisición. Sus adversarios
72 La Europa de los años cuarenta Régimen entre los vecinos de Francia 73

tradicionales se reclutan en la burguesía comerciante y en las clases poco comprensible sino la persona real. En 1826 y 1833, las niñas
populares de algunos centros urbanos: Lisboa y Opoilo c " Portugal, Maríá ( 7 años) en Portugal, e Isabel ( 3 años) en España acceden
La Coruna, Barcelona, Valencia y Cádiz en España. Sin duda al trono. Miguel y Carlos pretenden eliminar a sus respectivas
habrían permanecido por mucho tiempo impotentes de no mediar sobrinas. E n los dos países los liberales sostenían a la reina, los
la aparición de elementos revolucionarios en el seno del ejército. absolutistas al tío. Proclamándose rev e " 1829,
"' nftrrnles n"<' inpresaron en los carbonarios en Italia y a la guerra civil, que .se r ' ' nasta
' ^nrn-- • '.<

... .. w.-. diiaiugia lu uuauos, como lo áou sus aüv el sanos; reciben subsidios de If«;
partirlpación de jóvenes oficiales en los movimientos revolucionarios potencias conservadoras mipntrnc
' del ' •—- í w - '. M-iría Cr!-.!"'-' P'aJ. c «le isabel, a quien
entre c ':f>f j ' i ' i ü o bijre.i.ies y , 'J-l j ' ' I:Í CAIIC Fr PL>I - , y en España, septembristas y
icaliza en circunstancias análogas, ei vbiá fFemando VU / r-.t'i'r i/ . " / ue ios favores de Londres, cañistas ) | ..rtidarios
de España está preso en Francia, Juan VI de Portugal ha huido al del estatuto de 1834 de los favores de Taiis. El prestigio de los
Brasil) y las operaciones militares impiden el funcionamiento de las dos gobiernos está en cuestión pero también lo están los intereses
instituciones. E n España, la constitución de 1812, inspiiada en la de sus ciudadanos; tradicionalmente dueños del mercado portugués,
constitución francesa de 1791, suprime los derechos señoriales y los británicos obtienen de Madrid la atenuación del proteccionismo
proclama que "la soberanía reside esencialmente en la nación"; aduanero. Los manufactureros del Reino Unido y en menor medida
abolida en 1814, es restablecida por un golpe de estado militar en los de Francia, compiten peligrosamente con la joven industria
1820. En Portugal, Juan VI es obligado a aceptar la constitución textil catalana.
de 1822, réplica de la de 1812, objeto de veneración del liberalismo Cataluña, que en 1640 y 1714 había manifestado vivamente su
mediterráneo: ¿las conspiraciones militares de 1820-21 no se pro- particularismo contra Madrid, n o reaccionó a pesar de la aparición
ponen acaso introducirla en los reinos de las Dos Sicilias y Cerdeña? de una burguesía instruida y de un proletariado turbulento. El
Los problemas constitucionales están en el origen de la formación catalán sigue siendo la lengua del pueblo, el castellano se convierte
de partidos. Los absolutistas, apoyados por el clero, desean abolir las en la de las clases altas y los escritores. El sentimiento nacional
constituciones que los exaltados y los progresistas españoles, los adormecido despertará solamente a fines del siglo. Sus primicias
septembristas portugueses quieren mantener o restablecer. Los par- serán, como siempre, literarias y de inspiración romática. E n este
tidarios de un compromiso propician soluciones (la Carta portuguesa sentido la Oda a la patria de Carlos Aribaud ( 1 7 9 8 - 1 8 6 2 ) es una
de 1826, el Estatuto español de 1834) que aumentan las querellas. anticipación precoz pero tímida, que su editor en 1833 declara
Las mismas lenguas sonoras se prestan aquí, como en América publicar "con patriótico orgullo". L a violencia de los vascos contrasta
latina, a solemnes afirmaciones doctrinarias. Invocar el derecho no con la pasividad de los catalanes. Estos rtísticos campesinos, acos-
impide el recurso a la violencia o a la ilegalidad: se destruye alegre- tumbrados a administrar democráticamente sus aldeas montañesas,
mente la constitución del adversario, se viola deliberadamente la sospechan de las intenciones centralistas de los liberales. Sosteniendo
propia. Para los diputados a la espera de una cartera, los oficiales y a Carlos, ellos defienden sus privilegios (fueros) y deponen las
funcionarios ambiciosos, los soldados mal pagos y los civiles poco armas a cambio de la promesa de escapar a las ingerencias de los
ocupados, la conquista y la conservación del poder tienen carácter funcionarios madrileños. Portugal permanece, en medio de los
de programa. Muy pronto los gobiernos descubren el arte de ganar conflictos internos, al abrigo de las tentaciones "regionalistas".
las elecciones o de burlar el control de las C á m a r a s , los partidos de En los dos estados, el fin de la guerra civil marca el comienzo de
la Oposición el medio de derrocarlos: el pronunciamiento se la era de las dictaduras. El pronunciamiento es inspirado por una
convierte en el arma favorita de los profesionales de la política. camarilla de políticos, pero su principal ejecutor, a m e n u d o un
Sin embargo, los pueblos comienzan a interesarse en las luchas oficial de alta graduación, es el beneficiado. Su resistencia a la
coalición de los partidos depende de la fidelidad del ejército y del
de los partidos c u a n d o lo q u e está én juego no es más un documento
74 La Europa de los años cuarenta La Europa aristocrática y absolutista 91

apoyo de París o de Londres. El general E s p a r t e r o ( 1 7 9 ? - 1 8 7 9 ) y bernés sobre el levantamiento napolitano del 15 d e m a y o de 1848.
el genera! Narváez ( 1 8 0 0 - 6 8 ) f u n d a n en E s p a ñ a un sistema que La Dieta suiza, c o m o la germánica, está f o r m a d a por e m b a j a d o r e s
se arraigará en las antiguas posesiones de América. El p n m e r o de los gobiernos. Sin sede fija, se reunía alternativamente cada dos
goza de la amistad inglesa. D u r a n t e tres años, este pretendido anos en los cantones directores de Zurich, Berna y Lucerna. El
progresista trata a la constitución de 1837, reedición atenuada de la gobierno de estos tres cantones hace las vcc;-s
• i R n con el más p r o f u n d o desprecio. El ejército lo a b a n d o n a r ^ b i c i n n f , - I , ; ; . ! ; „ o r . >: . i g e n t p c '
•• tniuu V • ' • e x t r . n o . e<- H • pie un oír- •<

nales subsisten. ' ^ "


en lo interno, los m o d e r a d o s son e n g a ñ a d o s c o m o antes los pro- Con excepHón n ... , „
gresistas. N a n nohif-'V) i d ' • '' • •
'i' 'í^P' - ' uno posee su
'la alegremente ' 'k M:;- . pcsp lies V montañeses (Schwyz,
K idres, P o r t u p - ' -voluciou iamb^.^ . '. i : ^.la dictaiu.ia. Un un . r.-i ; ¡; .. alianza de 1291 está en el origen de
civil, Costa O Oial 0 ^ 0 3 - 8 9 ) y un militar, el iiKin- i u u a , conservai instituciones democráticas medievales- u n a
( 1 7 9 1 - 1 8 7 6 ) se alternan en el poder. El primero es un m o d e r a d o vez por ano, la asamblea del pueblo elige a los jefes del gobierno
al estilo de Narváez, el segundo, ex c - ^ p a ñ e r o del pretendiente 1 e". f , l^s constituciones establecidas o restablecidas en
reaccionario, un a v a n z a d o del tipo d ' irtero. 1814-15 se inspiran en el espíritu de reacción que sopla entonces
A comienzos de marzo de 1848, t ;o E u r o p a entra en la era en el continente. En los nuevos cantones (Saint-Gall, Argovie, V a u d ,
de las revoluciones, un periodista parisiense cree n o comprometerse l e s s i n ) , el regmieii censitario a la francesa asegura a los ricos
prediciendo "acontecimientos que no pueden dejar de agitar ince- la conducción de los asuntos públicos. En los viejos cantones, en
santemente a E s p a ñ a y Portugal". Considera que las dictaduras Berna, Lucerna, Friburgo, Soleure, Neuchátel y Ginebra, la "bur-
serán barridas pero que la m o n a r q u í a constitucional, símbolo de la guesía había r e t o m a d o el p o d e r . L a p a l a b r a conserva en Suiza
unidad nacional, no tiene nada que temer de ínfimas minorías su sentido pohtico medieval, a u n q u e comienza a adquirir su actual
republicanas. significación. El burgués es todavía el m i e m b r o de una familia que
detenta el 'derecho de burguesía", que le confiere el privilegio de
votar y de ser elegible; es ya el p e r s o n a j e eminente cuyos antecesores
II. SUIZA: LA UNIÓN DE LAS NACIONALIDADES se enriquecieron por la explotación de la tierra, la actividad comer-
Y LAS AGITACIONES POLÍTICAS cial e industrial. Los oligarcas de las ciudades cabecera han extendido
su dominacion al c a m p o mediante cínicas disposiciones. E n todas
Suiza vivió hasta 1848 b a j o el régimen del Pacto federal de 1 ^ 5 , partes r e m a n la opresión política (la prensa está sometida a la
que pretendió considerar c o m o un accidente desgraciado el periodo censura, las asociaciones políticas no están autorizadas) y la into-
revolucionario e imperial. Sin embargo no se osa restablecer los lerancia religiosa: el culto protestante está prohibido en Valais el
diezmos y los derechos señoriales. L a Restauración f u e solamente culto catolico en la región de V a u d . El despertar de 1830, que
política. El mantenimiento de la neutralidad ofrecía a las cinco prepara los movimientos de los años cuarenta, hubiera sido imposible
potencias garantes de la inviolabilidad territorial de Suiza, pretextos si un país dividido en repúblicas egoístas, s e p a r a d o p o r barreras
para intervenir en sus asuntos internos. El Pacto federal era menos lingüisticas y religiosas, no hubiera sufrido p r o f u n d a s trasformaciones
una constitución que un tratado de alianza entre cantones soberanos económicas y e x p e r i m e n t a d o un notable desarrollo del sentimiento
con el o b j e t o de velar por su seguridad interna y externa. También nacional.
podían concluir entre ellos, acuerdos "con la condición de que no El retorno a la paz favorece la reanudación de la actividad L a
sean perjudiciales al pacto" y firmar con el extranjero ' capitula-
rigurosa gestión financiera de burgueses prudentes suministra los
ciones" militares c o m o en los buenos tiempos: E u r o p a democratica
medios de emprender grandes trabajos, como la bella ruta de
se enterará con doloroso estupor de la victoria de un regimiento
iaint-Gothard. E n cambio, el espíritu localista impide a Suiza
La Europa de los años cuarenta La Europa aristocrática y absolutista 91
76

entrar en la "era del riel": en 1848, la red ferroviaria sólo llega a hochdeutsch. Philippe Sirile Bridel, nacido en V a u d y muerto en
25 km. Siguiendo una evolución comenzada en el siglo xviii, la 1845, que recoge las tradiciones de la Suiza francesa, trabaja
ganadería predomina sobre los cultivos. El éxodo rural hacia el mfatigablemente para acercar a romandos y alemanes. Jeremías
Nuevo M u n d o disminuye lentamente: la población (2,4 millones en Gothelf (m. 1 8 5 4 ) , tierno pintor de las costumbres bernesas,
1850) crece solamente un tercio en medio siglo. L a industria Gottfried Keller ( 1 8 1 9 - 9 0 ) y Conrad Ferdinand Meyer (1825-98>
moderna aporta progresivamente la verdadera solución a las difi- sobre todo, poetas y novelistas, o r n r l u ) hu-
11 ff-rtil Sf^ H'^Tlta ía literatura alem^nr« ' ' ' r . Ppr
1 ", •-"'f t-«. .

^.^LW JUlí-Ü ¡^b) . u m m o de iaigos periodos en í>uiza romanda, Francia e Italia la


síntesis más acabada del "espíritu suizo". Los progresos del senti-
se ubicará en el segundo puesto en E u r o p a después del Reino
miento nacional, en las condiciones más desfavorables para su
Unido (7,3 k g ) . La hilandería mecánica utiliza la fuerza de los ecloswn. constituyen el hecho más importante de la historia de la
cursos de agua y se concentra más particularmente en el cantón de Europa de las nacionalidades. Ellos desmienten la profecía tan a
Zurich, El auge de la industria textil provoca el nacimiento de la menudo cumplida de Henri Martin, que anunciaba en 1847 los
industria mecánica, llamada a convertirse en una de las bases de efectos devastadores del principio de las nacionalidades ("Los
la prosperidad suiza. L a industrialización precoz de un país afectado estados que no puedan, por su razón de ser, mantenerse dentro de
por la ausencia de carbón es exclusivamente obra de capitalistas ese principi/ sei. i trasformados o disociados"), e ¡lustran la
de los grandes negocios de la banca. "El espíritu conquistador de definición que el < - m p l o francés sugirió a Renan en 1882: " U n a
estos burgueses protestantes de cultura germánica llevara a algunos nación es un air: un principio e s p i r i t u a l . . . "
de ellos, en la época del Zollverein, a extender sus negocios mas
allá del Rhin, especialmente a B a d é n . Se difunde la idea de que los Desde la época de la Restauración, el alma de Suiza se expresa
intereses materiales de los suizos sólo serían defendidos ante los en asociaciones sin fines políticos aparentes pero que desbordan
extranjeros por un estado federal fuerte, que sustituyera a una las fronteras cantonales: Sociedad de historia suiza ( 1 8 1 1 ) , Sociedad
de estudiante.<f--de Zofingen ( 1 8 1 9 ) , que reúne; a la juventud b a j o
Confederación anticuada e inerte.
la bandera federal. Sociedad suiza de carabineròì, q u e organiza a
Estos puntos de vista no podían triunfar sin que la nación estu-
partir de 1824 los. célebres tiros federales, etcétera. Hombres de
viera ya viva en los corazones. La ausencia de sentimiento nacional
todas las clases, de religiones y de idiom'as diferentes; apriiebaii
en los suizos de 1848 no desconcertaría por cierto a los historia-
a los intelectuales e industriales que propone« crear un estado
dores; sin hablar de oposiciones sociales en los cantones industria-
tuerte, capaz de sacudir la tutela de las grandes potencias y de abolir i
lizados, dispondrían de un variado repertorio de explicaciones: las aduanas interiores. C o m o - l a reforma del Pacto federal exige
división política, antagonismo religioso y sobre todo diferencia de el acuerdo de la mayoría de los cantones, la Regeneración federal
idiomas. Con excepción de los romanches (2 % ) los suizos hablan pasa por la regeneración cantonal. Así nace hacia 1829 e\ partido
y escriben (en el país de Pestalozzi la enseñanza primaria fue liberal, que reclama en cada cantón una revisión constitucional
organizada en la mayoría de los cantones después de 1830; desde basada en la extensión del derecho de voto, la igualdad civil, la
1832 es obligatoria en Zurich) idiomas "nobles": alemán ( 7 0 % ) , libertad de prensa, de pensamiento y una estricta limitación dé la
francés ( 2 0 % ) e italiano (7 % ). C o m o en toda E u r o p a romántica, influencia de las iglesias sobre los asuntos públicos. El partido con-
se honra a la historia y a la lingüística, cuyo papel es conocido en servador quiere conservar a los privilegiados sü monopolio político,
el despertar de la conciencia nacional; las viejas leyendas son a las Iglesias su dominación, a los cantones su soberanía. L a luclia "'
coleccionadas con devoción. Pero lejos de llevar a la disgregación del partido liberal por la conquista del pérfer está pues precedida'
de un estado débil, el uso del alemán y del francés contribuye a necesariamente de una prueba de fuerza.
reforzarlo. El amor a la pequeña patria {Heimat) se asocia en
La Suiza de hoy, "democracia-testigo" (A. Siegfried), modelo de
los autores de lengua alemana a l culto de la grande (Vaíerland). bl
estabihdad constitucional y de sabiduría política, conoció entre 1830
Idiotikon de Stalder,. primer diccionario de locuciones dialectales
y 1847 un período de disturbios y guerras civiles. El contragolpe
germánicas, testimonia el cuidado de precisar las distancias con el
Régimen entre los vecinos de Francia 79
La Europa de los años cuarenta

de la revolución de Julio f u e allí más sensible y d u r a d e r o que en cristiano^l . , gj inexpiable carácter de guerras de religión
Alemania e Italia. De 1830 a 1831 Suiza realizó. el plano O r a c u s a la libertad de prensa, toda querella en el interior de un
SM -Revolución de 1848-. Imponentes asambleas populares preti- cantón sacude -ú conjunto del país: el partido radical y el partido
guran las grandes reuniones de marzo-abril de 1848 a favor de la '•onservador o católico se convierten en partidos nacionales. E n
liberalización ' 'as instituciones en los estados alemanes. Aterro- 1841, el gobierno de Argovia suprime los ocho conventos del cantón
rizados, la mayoría de los gobiernos oligárquicos acuerdan constnu- a pesar del Pacto federal que garantizaba su existencia. L a Suiza
s F n los cantones m á s poblados pertenecientes a t r ^ zonas católica obtiene de la Dieta el restablecimiento de cuatro convenl ^
; v.K ' •• .•ich, Berna, Lucerna, etc.; Friburgo y V a u d ; T e s s m ) , Esta semi victoria no satisface sino que exaspera a la Suiza radical!
las nuevas constituciones suprimen los privilegios de n ^ i m i e n t ^ de ( on la instalación de los jesuítas en L u c e r n a en 1844, u n o de los
fortuna, de suelo, proclaman la soberanía del cantones directores, termina el período de disturbios cantonales
Consejo electo n o m b r a al gobierno) y conceden las i ™ e s LfrilL / guerra c v ü generalizada. E n dos oportunidades
f u n d a m e n t a l e s '. L a resistencia de los viejos poderes Provoca la
nn7r?.r w f ^^^^^ " ^ i c a l se subleva
insurrección de Neuchátel ( 1 8 3 1 ) y la S en contra el gobierno de Lucerna. Con la connivencia de las autori-
( 1 í ; 3 2 - 3 3 ) . L a situación particular del canton de Neuchátel esta en dades, recibe el apoyo de voluntarios d n -.^a, Argovin ' -ure
' .rigen de conflictos d estilo de 1848- el partido re^niblicano local Sr; M / ;' ' ^ - " e e r n í Uri, Schwyz,'
se propone n o solamente derrocar la dominación burguesa sino frán^ ' alemana, F r i b u r e o y Valais de leneu-.
francesa) c o n c l u v . . ^^ diciembre d^ I . „ u„a union ,
también sustraer el cantón a b autoridad del rev
p:.,.. e v i - '-arion- ^ i ~ - ' e s ayudr- ^ >hierno nderbund^ • -^rese-- '• • • , „ 1 •\ •, J
• . , rese, .. i y la mtegnHid
conservauu. . . .uüii - '-vu-.í^mv. • lepuJica- e^ '. . f ' 1. eonli, ^ cristaliza en una
vención en el cantón de B. .lica es miputente par e Parfn / r S^^nderbund es contrario al
statu quo. Aquí las rivalidades políticas encub. t Ktfv/nií- ' desean los cantones católicos.
sociales. Al no obtener de los burgueses de Basile i fealdad . . Esta viol^acon es denunciar: (os radicales, que sueñan con dotar
los derechos, los campesinos f o r m a n u n gobierno disidente^ La ¡.^Hi constitución. U n a grave crisis interna amenaza
guerra civil termina con la escisión del canton en dos semi-cantones. E , . "" preservado, a pesar de la
Basilea-ciudad y Basilea-campo. lengua dominante, de las ambiciones germánicas. Anles que ios
El ala izquierda del partido liberal imputa el fracaso de Neuchátel proletarios parisienses ¿darán los agitados suizos la señal de vastos
así c o m o la infructuosa tentativa de u n a tímida revision del Pacto rvoT"'"' ¿Y la guerra civil no crea el r i e s g T de
provocar conflictos internacionales? ^
lederai ( 1 8 3 3 ) a la pusilanimidad de sus jefes. Ella f u n d a en la
mayoría de los cantones un partido nuevo que reivindica como un
desafío el epíteto de radical. E n el R e m o U m d o , la p a l a d a ha
adquirido desde los años veinte u n a innegable respetabihdad. Im- BÉLC • u - Xü NACIONAL Y MONARQUÍA PARLAMENTARIA
portada al continente, la reacción la utiliza para d e s i g n a r un DEMl ' . APARIENCIAS Y REALIDADES
misterioso complot q u e intentaría destruir el orden s o c i a l Patr otas
ardientes, los radicales insisten más que los liberales sobre el ca- o"¡taliano? ' ^'''^dos alemanes
rácter unitario de la f u t u r a constitución federal; demócratas apas o- o Italianos están de acuerdo en ver en el reino de Bélgica la
TOquia constitucional ejemplar. Los refugiados alemanfs, ita-
nados de fraternidad, tratan de resistir mas o b s ü n a d a m e n t e as
pretensiones de los gobiernos que exigen la expulsion de los retu- lanos y polacos aprecian la tolerancia del nuevo estado y la
glados alemanes, polacos o italianos; protestantes o rac.nnahstas
denuncian la influencia de u n a Iglesia ultramontana, l u e p critican Bruselas el Manifiesto comunista; de Bruselas partirán los panfletos
de los proscritos contra el Segundo Imperio
a las instituciones religiosas: los conventos, los jesuítas. Las lucha
políticas que dividen a las categorías sociales (si los campesinos
ac agosto de 1830 en u n a sala d e teatro. L a representación de
de B a s i l e a - c a m p o son radicales, los de L u c e r n a son democrata-
80 La Europa de los años cuarenta Régimen entre los vecinos de Francia 81
La Muettc de Poríici, de Aubcr en 1828, en la Ópera de París, no absolutistas, Pero no afectaba con ello la paz general: confiando en
había sacudido el trono de Carlos X ; en Bruselas hizo estallar los la prudencia de Luis Felipe, el gobierno de Londres toleraba las
rencores acumulados contra el despotismo ilustrado de Guiflcrmo 1. operaciones de los ejércitos franceses.
En el gran coro patriótico que suscitaran en E u r o p a la dominación Porque Bélgica es en gran medida una "coproducción franco-
francesa y luego la derrota de Napoleón, la voz de los belgas había inglesa". El acuerdo entre Londres y París — L o n d r e s llevaba el
sido singularmente débil. Todavía a fines de agosto de 1830 n o se juego— impuso a Europa el reconocimiento de la independencia
expresa la idea nacional. Católicos y liberales unidos reclaman belga, al nuevo reino su soberano, a los adversarios recalcitrantes
garantías contra un régimen autoritario' sometido a la influencia el trazado de las fronteras. El Congreso nacional, que había elegido
calvinista. La intransigencia del rey, la extensión de la agitación rey al duque de Nemours, segundo hijo de Luis Felipe, debió elegir
fuera de Brabante, la trasformación b a j o la acción de las clases un príncipe alemán. El tío de Victoria, Leopoldo de Sajonia-
populares de u n movimiento municipal y provincial en un movi- Coburgo, se esforzó por aplacar los resentimientos franceses: desposó
miento nacional, la ofensiva de las tropas holandesas y su derrota a Luisa, una de las hijas de Luis Felipe. Sin embargo, le era preciso
ante los voluntarios civiles (a fines de octubre n o tienen más que la zigzaguear entre las exigencias verbales de sus parlamentarios y las
cindadela de Amberes, Maastricht y L u x e m b u r g o ) , cambian el decisiones de la E u r o p a reunida en Londres. L a perpetua neutralidad
sentido del conflicto. En pocas semanas se pasa de la exigencia garantizada a un estado no completamente realizado, colocaba a
de reformas a la reivindicación de la autonomía, y por fin a la Bélgica en una situación más incómoda que la de Suiza en 1815,
declaración de independencia ( 4 de o c t u b r e ) . producto de una larga historia, Francia, y sobre todo el Reino Unido,
La designación de un rey, el establecimiento de fronteras, la se negaban a exasperar a los holandeses y a provocar el descontento
supervivencia misma del nuevo estado dependían al fin de cuentas de los alemanes. L a nacionalidad belga, tal como se expresaba en
de las potencias signatarias de los tratados de 1815, que la revo- ios discursos de los políticos de lengua y cultura francesa, se
lución belga violaba manifiestamente. Nicolás I soñaba con resta- basaba en el derecho de los pueblos a disponer de sí mismos. Esta
blecer el viejo orden en el Senne, pero la insurrección polaca lo tesis revolucionaria francesa legitimaba, en nombre d e la vieja teoría
retenía en la Vístula; Federico Guillermo I I I se inclinaba también de los "derechos históricos", las reivindicaciones sobre Flandes
por la intervención armada. Unido personalmente a Guillermo I, el zelandés, Limburgo y Luxemburgo. El tratado de los xxiv artículos
gran ducado de Luxemburgo había ingresado en 1815 a la Confe- (noviembre de 1 8 3 1 ) entrega Limburgo a H o l a n d a y divide Luxem-
deración germánica: la fortaleza federal de Luxemburgo abrigaba burgo, cuya parte occidental recibe Bélgica. C o m o Guillermo I se
u n a guarnición prusiana. L o s diputados luxemburgueses, sin em- niega a suscribir el tratado hasta 1839, los belgas continúan ocu-
bargo, deliberaban con naturalidad en el Congreso nacional. Los pando los territorios perdidos d e derecho. E n 1839 la Cámara, al
deseos de castigar a los belgas cedieron ante la amenaza de una término de u n debate que algunos han c o m p a r a d o al de la Asamblea
contraintervención francesa. Luis Felipe no podía hacer menos a nacioiial de Bordeaux sobre la cesión de Alsacia y Lorena, se
pocas semanas de su tumultuoso advenimiento para aplacar una resigna a lo inevitable. L a Dieta de Francfort, considerada muy
opinión ardientemente belicosa. L a causa belga, c o m o la de los iébil, obtiene en compensación por la amputación de L u x e m b u r g o
polacos, unía a los católicos de VAvenir (Félix de M é r o d e , suegro la entrada de Limburgo en la Confederación. ^
de Montalembert, era miembro del Gobierno provisional) y a los El peligro holandés había preservado la alianza establecida en
hombres de la izquierda; D u p o n t de l'Eure y Louis Blanc soñaban 1828 entre el partido católico y el partido liberal. Los clericales,
con reanudar su contacto con la tradición revolucionaria. L a invasión ;nemigos del jacobinismo, y los anticlericales, admiradores de la
holandesa de agosto d e 1831 y la obstinación d e Guillermo I por devolución, se habían acercado b a j o la influencia d e u n a corriente
conservar en 1832 la cindadela de Amberes, permitieron exteriorizar reñida d e Francia. G a n a d o p o c o a poco por las ideas d e Lamennais,
e! sentimiento nacional. D e t r á s de la bandera tricolor, los soldados partido católico belga, única organización política confesional
d e Luis Felipe tuvieron la impresión, compartida por el público, de :uropea junto al partido irlandés, se convierte en el gran partido
cumplir un acto simbólico y reparador. Por primera vez desde 1815, eformador que el f u n d a d o r d e L'Avenir soñaba p a r a su país. P o r
la Francia liberadora atacaba el estatuto decretado por las potencias la lado, se admite la libertad de cultos, por o t r o la de la enseñanza.
La Europa de los años cuarenta La Europa a r i s t o c r á t i c a y absolutista 91
82

La constitución del 7 de febrero de 1831 registra, por primera de la casa de Austria, proseguido en los tiempos de la Revolución
vez en Europa, un compromiso voluntariamente consentido entre y del Imperio, no había sido detenido por el régimen holandés.
el catolicismo político y el liberalismo de Voltaire: el casamiento Después de 1830, la "clase política" belga se pone de acuerdo para
civil previo al religioso, separación de la Iglesia del estado, que no asegurar en todo el país el triunfo del francés: no es ya sólo el
obstante continúa subsidiando al clero. Votada antes de la elección idioma de una élite social en Flandes, sino el de la administración,
de Leopoldo, la constitución levanta sólidas barreras contra el re- los tribunales, el ejército. Muchos burgueses flamencos consideran
torno a lo arbitrario. El individuo goza de las libertades en uso en el a los dialectos holandeses como idiomas de rústicos. Poco instruido
Reino Unido. "Todos los poderes emanan de la nación": el soberano (en 1846 el 5 0 % de los milicianos belgas son analfabetos), ex-
es, a la manera del "rey de los franceses", "rey de los belgas". Los cluido de la vida política, el pueblo parece incapaz de formular
reivindicaciones. La toma de conciencia de la nacionalidad es,
ministros son responsables ante el parlamento, compuesto por una
como en E u r o p a central y oriental, la obra de intelectuales pací-
Cámara y un Senado reclutados por los mismos electores. C o m o
ficos cuyos discípulos serán nacionalistas agresivos. Pero en Flandes
todas las monarquías del continente que presumen de modernismo,
la tarea es al comienzo más cómoda: no se trata de forjar una
el nuevo estado considera el derecho de voto como una función
lengua literaria sino de ponerla al servicio de la recuperación
social ligada a un cierto ingreso, pero el censo no es uniforme;
nacional. El romanticismo, con su gusto por el pasado, incitó a los
varía según el nivel económico presuntivo de las provincias entre
historiadores y a los filólogos flamencos a redescubrir el patrimonio
un máximo de 100 florines ( 2 1 1 , 6 0 f r a n c o s ) , ligeramente superior
literario y a exaltar las grandezas nacionales. Los más notables de
al impuesto francés, y un mínimo de 20 florines. El abate De Foere estos pioneros del "movimiento flamingante" son nostálgicos del
había luchado por la extensión inmediata a todo el país de la cifra regimen holandés, admiradores de la erudición alemana que muy
de 20 florines; su proposición conoció la misma suerte que la de pronto manifestó su interés por los Países Bajos de lengua germá-
Montalembert en la misma época; los notables, en Bélgica como en nica. El archivista Jan Frans Willems (m. 1846) y el abate Jan
Francia, ponían sus intereses por encima de los principios. Sin B. David fundan en 1836 en Gante una Sociedad flamenca con una
embargo, la existencia de un mínimo constitucional ofrece el medio audiencia aparentemente restringida. Con sus novelas históricas,
de ceder a las presiones populares sin cuestionar las bases del Henri Conscience ( 1 8 1 2 - 8 3 ) , hijo de un marino francés, alcanza
régimen. Mientras tanto, el cuerpo electoral es, siguiendo al del directamente a una fracción de las clases populares. Su Lion de
Reino Unido tras la reforma de 1832 (1 elector por cada Fiandre ( 1 8 3 8 ) es una romántica evocación de la victoria de
26 habitantes), el más amplio de E u r o p a (1 elector por cada 90 Conrtrai ( 1 3 0 2 ) obtenida por los "oficios" flamencos sobre la
belgas, por cada 170 franceses). Esto contribuye, con el goce caballería francesa. Se ha minimizado la resonancia de los "desper-
pacífico de libertades cuestionadas en otras partes y la sucesión de tadores" del sentimiento nacional. Sin embargo, cuando Willems
gobiernos " d e unión nacional" que cooperan con el rey, a conferir organiza un "petitorio" con el fin de dar al flamenco un lugar
a la Bélgica de Leopoldo una reputación de estado afrancesado Igual al del francés en las provincias de dialectos holandeses,
pero nacional, más liberal y más activo que la Francia de Luis recoge, en una población analfabeta en su mayoría, 100.000 firmas.
Felipe. La Bélgica afrancesada, ¿resistiría a la introducción del sufragio
De acuerdo con el empadronamiento de 1846, los flamencos repre- universal?
sentan el 57 % de la población belga. Sin embargo, parecen ausentes
de la vida pública. Sólo un artículo de la constitución que proclama ¿Una Bélgica flamenca no pondría en cuestión una prosperidad
la igualdad de las lenguas supone su existencia. Las regiones fla- económica aparentemente fundada en la miseria de una comunidad
mencas habían estado en un principio equitativamente representadas despreciada? Es conocida la audacia del capitalismo financiero belga,
en el Congreso nacional ( 1 0 5 diputados sobre 2 0 0 ) . En realidad el especialmente de la Société genérale, que siguiendo el ejemplo de
juego combinado del censo electoral y del censo de elegibilidad los banqueros británicos y en relación con ellos favorece la prodi-
concurre a la designación de notables francófonos en las circuns- giosa expansión de la red ferroviaria; el nombre de John Cockerill
cripciones flamencas. El afrancesamiento de la burguesía, comenzado (1790-1840), ese hijo de un emigrante inglés, fundador de las
bastante curiosamente en el siglo xviii b a j o la acción centralizadora fábricas de Seraing — d e donde salió en 1835 la primera locomotora
91
8 4 La Europa de los años cuarenta La Europa a r i s t o c r á t i c a y absolutista

construida en el continente—, alcanzó muy pronto celebridad mun- cimiento del folleto que Louis Blanc acababa de publicar en la
dial. Los recientes cálculos de P. Bairoch confirman el sorprendente Revue du progrès ( 1 8 3 9 ) . Los demócratas, hosdles al régimen
auge económico de Bélgica. En 1840 ocupa, teniendo en cuenta su censitario y a un orden social tiránico, están en relación con
población, el segundo lugar en Europa después del Reino Unido en revolucionarios románticos como Lelewel o con M a r x y Engels,
lo que concierne al consumo de carbón, la potencia instalada y la llegados a Bruselas a principios de 1845. A través de los numerosos
extensión de las vías férreas, y el tercer lugar en el consumo de artesanos alemanes en la capital, las doctrinas subversivas, preco-
algodón bruto y la producción de hierro fundido (Suiza y Succia nizadas en Suiza y sobre todo en París, comienzan a penetrar en una
tienen respectivamente el segundo lugar). El país valón, con su clase obrera atrasada.
carbón y sus actividades metaMrgicas, acrecienta su potencia. La L a extrema izquierda demócrata y socializante es demasiado
burguesía de negocios y los manufactureros aumentan su domi- débil para intentar algo en contra de las instituciones políticas y
nación. La miseria de los trabajadores parece llegar a su paroxismo sociales. Un sacudimiento europeo, sobre todo si provenía de
en Flandes, antes tan próspero. L a tierra donde nació la idea de Francia, ¿no sería, como en 1830, una tentación? Si se hubiera
hacer productivas las tierras en barbecho es siempre de altos formulado esta hipótesis en 1846, los observadores perspicaces
rendimientos. Pero el parcelamiento, consecuencia de una elevada hubieran hesitado en aceptar la supervivencia del joven estado,
natalidad, lleva al alza regular de los arrendamientos y del precio puesto que el resurgimiento de las viejas querellas entre las dos
de las tierras; por su lado, la mecanización de la industria del lino grandes formaciones gubernamentales amenazaba la estabilidad
arruina al trabajo a domicilio, ligado, más estrechamente que en política, mientras que una crisis alimentaria trasformaba la parte
Francia, a la actividad del campo. E n 1843, más de 200.000 fla- flamenca en otra Irlanda, cargada de miseria y odio.
mencos a medias campesinos, a medias obreros, ven amenazada su
existencia por el desarrollo de las fábricas (Gante, cuya población
se duplica en medio siglo — 1 0 3 . 0 0 0 habitantes en 1846 contra
55.000 en 1801—, se convierte en el gran centro textil) y también
por la entrada de los tejidos de algodón ingleses. Para resistir esta
competencia, los manufactureros de Gante imponen trece a catorce
horas de trabajo diario remunerado con bajos salarios. Los obreros
de las regiones en expansión (las provincias de Hainaut y Lieja
cuentan en 1846 con el 41 % de los obreros del reino, las dos
Flandes con el 3 1 % ) conocen una suerte menos trágica. No
representada en el parlamento, sin medios de lucha (la constitución
ignora el derecho de coalición), la clase obrera belga encuentra sus
defensores gracias a la libertad de prensa.
J. Kats funda a partir de 1835 diarios y revistas que describen
en holandés la desgracia moral y económica de un pueblo privado
del derecho a la cultura y a la vida. Adolf Bartels, calvinista
convertido al catolicismo, es el animador de una prensa en francés
con tendencias democráticas y socializantes. En esta Bélgica,
refugio de proscritos, Buonarotti habita durante el período de la
dominación holandesa; sus teorías igualitarias seducen a un pequeño
grupo de intelectuales. A partir de 1838, Víctor Considérant va allí
frecuentemente para ganar al fourierismo a la burguesía progresista.
Bartels acomoda a su gusto la doctrina saint-simoniana en su
Essai sur l'organisation du travail ( 1 8 4 2 ) cuyo título revela cono-
La Europa aristocrática y absolutista 87
IV. LA H U R O P A DBL N O R T E A R I S I O C R A ! ICA
Y ABSOLUTISTA Después de la pérdida de Bélgica, Guillermo I se esfuerza por
sacudir el sopor de sus súbditos. Con el concurso de ganteses
deseosos de conservar el mercado de Java, favorece la instalación
de manufacturas de algodón. Los resultados son mediocres. La
construcción de vías férreas, más tardía que en Bélgica (Bruselas
queda unida a Malinas en 1835, Amsterdam a Haarlem en 1839) se
prosigue a un ritmo más lento: en 1847 sólo está abierta la línea
Rotterdam-La Haya. El pabellón holandés retrocede regularmente
en los puertos de los Países Bajos ( 4 2 % en 1831, 28 % en
Todavía a fines de los años cuarenta, soberanos autoritarios go- 1850) en beneficio de los ingleses. Con excepción de un pequeño
biernan los Países Bajos, Suecia y Dinamarca con el apoyo de la grupo de cínicos audaces que quieren enriquecerse en Java ham-
Iglesia (calvinista en los Países Bajos, luterana en Suecia, Noruega breando a los indígenas mediante la sustitución de cultivos alimen-
y Dinamarca) y de los grandes terratenientes. El modelo británico ticios por cultivos industriales, los holandeses parecen formar un
de una monarquía protestante y liberal, el ejemplo de los movi- pueblo de tenderos timoratos y resignados.
mientos revolucionarios de 1830, parecen incapaces de sacudir Esta resignación se manifiesta en la actitud con respecto a un
las instituciones del antiguo régimen: las asambleas legislativas déspota y frente a instituciones de otra era impuestos en el clima
— c u a n d o existen— representan no la nación sino las "ordenes de unanimidad nacional de 1813. Las instituciones republicanas
que se apoyan en distinciones perimidas. Unicamente Noruega, que antes habían permitido gobernar a la burguesía fueron reaco-
dependiente de Suecia, ofrece el sorprendente espectáculo de una modadas en beneficio del absolutismo real y de la aristocracia. La
sociedad de pequeños propietarios que ha impuesto a un rey extran- ley fundamental de 1814 prevé, al lado de una C á m a r a alta nom-
jero las instituciones políticas en armonía con las estructuras so- brada por el soberano, una C á m a r a baja designada por los estados
ciales trasformadas. provinciales y compuesta por diputados de la nobleza de las ciudades
Las fuerzas conservadoras están sostenidas por la acción personal y del campo. El parlamento, que vota el presupuesto cada diez
del zar Nicolás I, e instigadas por una reaccionaria Austria, inspi- años, no tiene influencia sobre los ministros. Bajo este régimen, los
radora de la Dieta de Francfort, donde deliberan los d e l e p d o s Países Bajos ignoran las libertades que en el siglo xviii hicieron de
de los soberanos de los Países Bajos y Dinamarca. La cuestión de las Provincias Unidas una tierra de asilo para los espíritus inde-
Holstein y de Schlesvig, que opone al nacionalismo alemán el nacio- pendientes; la prensa es estrechamente vigilada y recién en 1828
se f u n d a el primer gran diario de Amsterdam, el Handelsblad.
nalismo danés, tendrá por efecto reforzar en Copenhague la co-
El debilitamiento del absolutismo resulta menos de la oposición
rriente liberal y patriota y aumentar en los países nordicos la
política que de las discordias religiosas. En una "nación impregnada
audiencia de escritores cuya obra evoca el pasado común de
de teología y nutrida por la Biblia durante dos siglos" ( E . van
pueblos separados.
Gelder), la incorporación de Limburgo — d e lengua holandesa
pero de religión católica— despierta los furores de antaño. La
mayoría de los holandeses comprueba con decepción que el estado
I. LOS PAÍSES BAJOS, ESTADO NACIONAL DEL ANTIGUO RÉGIMEN
nacido de una revuelta del calvinismo contra el catolicismo español
En 1839 los Países Bajos alcanzaron sus fronteras actuales. Un ha perdido el elemento esencial de su grandeza: su unidad moral.
poco más'extensos que Bélgica ( 3 2 . 6 0 0 km^ contra 2 9 . 5 0 0 ) están Frente a los católicos que representan desde ese momento un
entonces menos poblados (en 1850 3,1 millones de habitantes tercio de la población y exigen gozar de los derechos reconocidos
a los protestantes, éstos se crispan en una actitud de rechazo total.
contra 4 , 3 ) . - • j
Guillermo I no se atreve a acordar a sus súbditos católicos el
La declinación iniciada en el siglo xviii continúa. El espíritu de restablecimiento de los obispados abolidos desde la introducción
empresa de los burgueses de! siglo x v n ha desaparecido en sus de la Reforma. Si su falta de acción lo priva del apoyo de los
descendientes, que se repliegan en el culto de la "edad de oro .
8 8 .a Europa de los años cuarenta L a Europa aristocrática y absolutista 89
católicos, su intervención e n / i d a de la Iglesia rcforinada le pera: Suecia es exportadora de granos y lo seguirá siendo hasta
enajena los aliados tradicionade la casa de Orange: él exige cerca de 1870. La madera de los inmensos bosques y el mineral de
la reunión de todas las tendes; los "ortodoxos", hostiles a la hierro de riqueza proverbial constituyen las bases de su comercio
interpretación liberal de los dos, deciden la secesión y provocan exterior. A pesar de la sustitución de la madera por el coque en la
en la plebe una viva agitacicontra la Iglesia reformada y el metalurgia, sigue siendo en 1840, proporcionalmente a su población,
rey. Descorazonado, éste abdia 1840. el segundo productor europeo de hierro fundido. Los progresos
Con el advenimiento de sio Guillermo II, reputado refor- económicos tuvieron como consecuencia el aumento de la impor-
mador, un pequeño partido lit muy moderado reclama, bajo la tancia numérica de la burguesía.
dirección de Jan Rudolf Tbcke ( 1 7 9 6 - 1 8 7 2 ) , profesor en A comienzos- del siglo, la masa de la población se compone de
la universidad de Leyden, la tad de prensa y la elección de la campesinos pobres, pescadores y mineros. La nobleza, poseedora de
Cámara baja sobre una base caria rompiendo así con la repre- grandes dominios, conserva su poder y la Iglesia luterana su mo-
sentación por "órdenes". Lalización de un 89 holandés se nopolio. Ambas dominan el Riksdag dividido en cuatro curias
enfrenta con la resistencia deiobleza, el fanatismo de los pas- (nobles, clérigos, burgueses, campesinos) y dotado de poderes
tores, y las reticencias del nueey, a quien su cuñado Nicolás I irrisorios. Con el ejército, mimado por el viejo mariscal, y la
exhorta al inmovilismo. Así fsa la tentativa de revisión cons- burocracia, forman los pilares de un sistema de opresión. Sin
titucional en 1844. embargo, Estocolmo percibe un débil eco de la revolución de Julio.
Pero, como en Bélgica esperas de 1830, se dibuja una Era la época en que el romanticismo sueco, hostil a las influencias
alianza entre liberales y cató. El temor de ser superado por francesas, admirador de la literatura alemana, alcanzaba su apogeo
una ola revolucionaria exóg podría incitar al rey a hacer y comenzaba a abandonar el campo del conservadorismo. El ejemplo
concesiones. ¿La liberalizacirél régimen no sería, después de de esta evolución está dado por el poeta Erik Gustav Geijer (1783-
todo, el mejor medio de resisjs apetitos de una Alemania que 1847). El Aftonbladed de Estocolmo, órgano de burgueses e inte-
fundaba su unidad en el pare:o lingüístico y los recuerdos del lectuales audaces, hace una campaña por la libertad de prensa y la •
abrogación de las leyes contra los no luteranos. Después de 1840,
Sacro Imperio?
el rey acuerda al liberalismo algunas satisfacciones formales. En
1844, el advenimiento de su hijo, reputado como liberal, despierta
II. UNA P A R E J A MAL AVENIDAECIA AUTOCRATICA
las esperanzas de los partidarios de la modernización de las
instituciones. Empero, aliada de Rusia desde la caída del Imperio,
Y NORUEGA DEMOCRÁTICA
Suecia — c o m o los Países Bajos— no puede rechazar las adver-
tencias de Nicolás I. La propaganda liberal no conmueve a un
Las luchas seculares de Suef Dinamarca por el dominio de
pueblo profundamente devoto de la joven dinastía.
Escandinavia culminan en 18bn ventaja para Suecia. Fiel aliada
de Napoleón, Dinamarca dcbder Noruega a Suecia, que ingresa En Noruega, el pueblo se apoya en una constitución impuesta
en la gran coalición impulsaór Bernadotte, presunto heredero al rey. Sobre su inmenso territorio (320.000 km^'), Noruega cuenta
de! trono. De 1818 a 1844, C XIV reinó en Suecia y Noruega, en 1800 con menos de un millón de pescadores, marinos comer-
pero mientras gobernaba deicamente a Suecia aristocrática, ciantes y especialmente campesinos (en 1850, 1,3 millones). La
debió consentir que en Non se instaurase una democracia nobleza,, poco numerosa, está a la defensiva: de 1814 a 1835 se
rural, ejemplo único en Eurononárquica. duplica la clase de los pequeños propietarios. Desde que se precisó
Succia (450.000 km-) que éOO contaba con menos habitantes la amenaza de anexión a una Suecia absolutista y aristocrática,
(2,3 millones) que Holanda 1850 tenía más que ella (3,5 Noruega campesina redactó la constitución más avanzada de Eu-
millones). Este crecimiento íf ) resulta de una baja tasa de ropa ( 1 8 1 4 ) : el Storthing, elegido por los terratenientes y los
mortalidad (20,2 entre 1841 4 5 ) propia de los países nórdicos poseedores de un ingreso de 750 a 1.000 francos no puede ser
v de una tasa de natalidad ap inferior a la de Inglaterra y el disuelto. En materia legislativa, el rey sólo dispone de un veto
país de Gales (31,1 para el pdo 1841-50). La economía pros- suspensivo. La asamblea puede de esa manera abolir los títulos de
La Europa aristocrática y absolutista 91
90 La Europa de los años cuarenta
(1808-39) que gobernaba sus estados según las tradiciones abso-
nobleza contra la voluntad del ex jacobino. Carlos XIV rio consigue
lutistas. Las estructuras sociales, la demografía de Dinamarca y
conquistar ni el veto absoluto ni el derecho de disolución. Por el los ducados son los de Alemania del norte. La aristocracia terrate-
contrario, a partir de los años treinta está expuesto a nuevas reivin- niente ejerce poderes considerables sobre el campesinado; la
dicaciones. burguesía, poco numerosa, está concentrada en Copenhague. Siete
Los progresos del espíritu democrático se ligan con un renaci- veces menos extensa que Noruega ( 4 3 . 0 0 0 km^), Dinamarca cuenta
miento del sentimiento nacional. A la desconfianza instintiva respecto con el mismo número de habitantes que aquélla (0,9 millones) en
a Suecia se agrega la toma de conciencia de la nacionalidad. Entre 1800 y más en 1850 (1,5 millones); además, 900.000 almas pueblan
la burguesía de negociantes instruidos y el campesinado subsiste, en ese entonces los ducados. El crecimiento de Dinamarca ( 6 6 % )
como en Flandes, una barrera lingüística con significación social: supera al de Suecia a pesar de una economía exclusivamente
la primera habla el danés, lengua del estado durante cinco siglos; el agrícola estimulada por el debilitamiento del proteccionismo britá-
segundo, despreciados dialectos. El romanticismo noruego, el más nico. Principal beneficiaria de esta expansión, la nobleza danesa
nacionalista de los romanticismos escandinavos, libra un doble reclama, a favor de las agitaciones liberales de 1830, instituciones
combate: político contra Suecia y cultural contra Dinamarca. representativas.
Henrik Wergeland (m. 1845), poeta y periodista liberal, es hacia Esta reivindicación es desde quince años atrás en ios ducados
1830 "el típico representante del norueguismo" (C.-G. Bjurstrom). una de las exigencias de la nobleza, de la burguesía y de la mayoría
Él recluta entre los estudiantes de Cristiania los primeros adversarios de los profesores de la universidad de Kiel y tiene sobre todo una
burgueses de los "danófilos". Con el idioma nacional, el romanti- significación nacional. El alemán es a la vez el idioma de la mayoría
cismo exalta al reino de Noruega desaparecido en 1397 y al de la población y el de las clases ilustradas. El danés, en retroceso
campesinado, símbolo de la nación. constante, es hablado por un tercio de los habitantes de Schlesvig,
Este último es todavía poco accesible a una literatura de elevado en realidad sólo por los campesinos del norte. El historiador
nivel (los Cuentos campesinos de Bjornson, discípulo de Wergeland, Dahlmann ( 1 7 8 5 - 1 8 6 0 ) , entonces profesor en Kiel, combina astu-
aparecerán recién en 1 8 5 7 ) ; pero dueño del Storthing, busca tamente argumentos jurídicos e históricos: se apoya en el acta
obstinadamente desanudar los lazos que el rey pretende reforzar. federal germánica, aplicable sólo a Holstein, para pedir la institución
Residiendo en Estocolmo, Carlos X I V quiso imponer en 1836 la de estados provinciales en el conjunto de los ducados con el pretexto
presencia de un virrey sueco en Cristiania. El Storthing lo obligó a de su "indisoluble unión".
designar a un noruego y a prometer, al final de su vida, una La reforma puesta en vigor en 1834 trata de la misma manera al
revisión del Acta de unión de 1815. Bajo Oscar 1, Noruega obtiene remo y a los ducados: se crean cuatro asambleas puramente
el reconocimiento de su bandera y la supresión del virreinato, consultivas en Jutlandia, las islas, Schlesvig y Holstein. En la capital,
últimas etapas hacia una secesión aparentemente inminente. ya fuertemente desproporcionada en relación a la exigüidad del
estado (Copenhague reúne más de '/i» de la población danesa),
los burgueses y los universitarios manifiestan su decepción. Se
111. DINAMARCA F R E N T E AL NACIONALISMO GERMÁNICO forma un partido liberal que reclama una constitución, una Cámara
reclutada según los principios modernos y dotada de poderes efec-
Rechazada de la península escandinava, desde 1815 Dinamarca se tivos. Sin audiencia en las masas rurales, combatido por la nobleza,
vincula más estrechamente con la Europa alemana. Soberana es incapaz de torcer la obstinación de Federico VI. B a j o Cristián
heredera de los ducados de Schlesvig y de Holstein desde el siglo xv, VIH ( 1 8 3 9 - 4 8 ) , la agitación en los ducados se acercará poco a
la corona ha adquirido el pequeño Lauenburg, miembro como poco al liberalismo patriota, casi nacionalista, del estado absolutista
Holstein de la Confederación germánica. Las iniciativas de Copen- amenazado de secesión.
hague en los ducados corren el riesgo de provocar la intervención En los estados de Schlesvig, la presencia de diputados daneses
de la Dieta, vale decir, de Austria y Prusia. eleva el tono de los debates. Para satisfacerlos, Copenhague había
En la época de la Restauración, las dos grandes potencias no introducido en 1840 la lengua danesa en la administración de
tuvieron, es cierto, ningún motivo para inquietar a Federico VI
92 La Europa de los años, cuarenta La Europa aristocràtica y absolutista 93

Schlcsvig del norte. Esta ida provocò ardientes protestas de alemán por la causa de "Schlesvig-Holstein" (¡sólo los daneses y
los alemanes. El Schlcsvi] hizo ingobernable. Una solución ios diplomáticos hablan todavía de Schlesvig y de Holstein!).
razonable hubiera consisticn una división sobre una base lin- Compuesto en 1844, el lied Schleswig-Holstein meerumschlungen
güística. En efecto, era acele las lenguas habladas en Schlesvig (rodeado por el m a r ) resonaba en asambleas populares cuya
que versaba la disputa de lignos filólogos de Copenhague y de espontaneidad y amplitud sorprenden e inquietan a los soberanos
Jena, movilizados en una ga de libelos. En realidad, cada uno que creían reinar sobre súbditos inertes. Pocos serán los alemanes
de los antagonistas acaricida esperanza de apropiarse de todo que escaparán al vértigo — a la "manía" escribirá el irreverente
Schlesvig. En ella se apelda Historia, más dócil aún que la filósofo Bruno B a u e r — de Schlesvig-Holstein. El conservador pru-
filología a las sugestionesi nacionalismo expansionista. Los siano Radowitz publica desde 1846 un estudio contra la herencia
liberales de Copenhague pimaban que la historia había fijado femenina en Schlesvig. Engels no se preocupará por consideraciones
las fronteras de Dinamarci el Eider, es decir, en el límite jurídicas: "Estos países evidentemente alemanes por la nacionalidad,
meridional de Schlesvig. /lació el "partido del Eider". Para la lengua, la mentalidad eran [. . . ] necesarios para Alemania."
los universitarios de Kiel, iretensiones danesas estaban en fla- (1852).
grante contradicción con tDrincipios: los ducados son estados Pero Dinamarca podía contar con el apoyo de Rusia y del Reino
independientes, inseparabh hereditarios por línea masculina. Unido igualmente interesados en el mantenimiento del statu quo
Adoptadas en 1844 por laados del Holstein, estas tesis cons- en Kiel y en los estrechos. En Escandinavia, Dinamarca ya no
tituyeron en adelante la "]forma" del movimiento separatista. parecía sola. El sentimiento de pertenecer a una misma comunidad
La úhima, debido a las mstancias, hacía pesar una amenaza comenzaba a acercar a pueblos de lenguas y civilizaciones vecinas
sobre la soberanía danesa.no tener hijos el príncipe Federico, separados por los recuerdos de querellas seculares. El escandina-
hijo de Cristián VIII, su su(n recaía en su pariente más cercano, vismo es ante todo un movimiento literario, estrechamente ligado
Cristián de Glücksburg, bto por su madre de Federico V al romanticismo. Daneses, suecos y noruegos extraen del fondo
(m. 1 7 6 6 ) . Su advenimientsataría una secesión preparada desde común de las poesías populares y de la mitología escandinava
mucho antes en los ducadRepudiando a un heredero por vía una inspiración que desborda el cuadro nacional. Oehlenschlager
femenina, los estados de isvig y de Holstein se alian a otro ( 1 7 7 9 - 1 8 5 0 ) , el jefe de la escuela romántica danesa, es también el
miembro de la familia real,uque Cristián Augusto de Augusten- trovador de las aspiraciones de los pueblos escandinavos; su rival
burg, que había sabido irse las simpatías del movimiento Grundtvig ( 1 7 8 3 - 1 8 7 2 ) es el adaptador de las viejas leyendas. Sin
antidanés. Cristián VIII, enarta abierta de julio de 1846, declara dura el norueganismo es un obstáculo para el escandinavismo
a Schlesvig regido por las ms reglas de sucesión que Dinamarca, que reviste la forma de la "danofilia". Pero el poeta Welhaven
pero reserva para un estuciterior la decisión a tomar respecto ( 1 8 0 7 - 7 2 ) , adversario de Wergeland, lo combate. En Suecia, el
a Holstein. La universidad Liei, dirigida por Dahlmann, protesta romanticismo se pone al servicio del escandinavismo: en Lund,
contra el agravio a los echos" de los Augustenburg y la Oehlenschlager es proclamado rey de los poetas nórdicos.
afirmada intención de sep¡ Schlesvig de Holstein. Los estados Frente a Prusia, mandataria del germanismo, ¿será capaz un
de Schlesvig y de Holstein icgan a deliberar. Enfrentadas a los movimiento de intelectuales de movilizar a los pueblos de Suecia
reclamos de los subditos an príncipe "alemán", la Dieta de y Noruega? Este será el problema planteado al escandinavismo
Francfort, contrariamente a costumbres — p e r o bajo la presión en 1848.
de una opinión pública sokcitada— falla a su favor: la suerte
y los derechos de los due no podían ser modificados por la
carta abierta. El historiadobel no se equivocaba al recordar en
1892 que el sentimiento nnal se había cristalizado en los du-
cados a partir de 1846. Latud bélica del parlamento de Franc-
fort en ocasión del armisticrusiano-danés de agosto de 1 848 es
incomprensible cuando se ig el prodigioso entusiasmo del pueblo
V . l a ì;uk(>i'a C H N I K A L . C I H R M A N I C A La Europa germanica 95
I. LOS P R O B L E M A S POLÍTICOS A L E M A N E S : AUSTRIA Y PRUSIA
CONTRA LA UNIDAD Y LA LIBERTAD

El pueblo alemán y Alemania resumen los rasgos complejos de


Europa central. Es evidente que los alemanes forman el grupo lin-
güístico más numeroso. También lo es que resulta imposible delimitar
de una vez por todas un país cuya extensión y sistema político
Durante la crisis renana de 1840, el desencadenamiento de las varían según los resultados obtenidos en los campos de batalla. La
pasiones populares prueba indiscutiblemente que la "nación ale- Alemania de 1848, nacida en 1815, vivió hasta 1866, o sea más
mana" ideal a la que Fichte se dirigía en 1807-1808 (Reden an die que la Alemania bismarckiana (47 a ñ o s ) , weimariana ( 1 5 ) o
deutsche Nation) no pertenecía al reino del sueño. Ella apoya sus hitleriana ( 1 2 ) . A fines de los años cuarenta, los 38 estados de la
"derechos" en el idioma y en los grandiosos recuerdos del Sacro Confederación germánica (Deutscher Bund) representaban, en
Imperio. El recurso a argumentos lingüísticos e históricos, que relaci ón a los 360 territorios soberanos de 1789, una notable
chocará en 1848 a los demócratas franceses acostumbrados desde simphficación: eran las cuatro venerables ciudades libres de Bre-
1789 a ver en la nación el resultado de un contrato consentido por men, Hamburgo, Lübeck y Francfort y 34 monarquías (una parte
los individuos libres, será, a imitación de los alemanes, practicado del imperio austríaco, los reinos de Prusia, Baviera, Sajonia, Ha-
por los pueblos admiradores de la Revolución francesa ("pueblos" y nover, Wurtemberg, los grandes ducados, ducados y principados).
"naciones" se empleaban entonces en forma indistinta). Es el reflejo Algunas provincias del estado prusiano, símbolo a nuestros ojos
ideológico de situaciones si no idénticas al menos análogas: hombres del germanismo lanzado a la conquista del mundo eslavo, eran
que se han hecho conscientes de su originalidad nacional, sienten rechazadas de la organización alemana: Posnania, poblada en su
con más o menos amargura la ausencia total o parcial de una mayoría de polacos y también Prusia occidental y Prusia oriental,
existencia estatal, garantía de sus aspiraciones. dominio de los valientes caballeros teutónicos. Königsberg, presti-
Entre la Francia "burguesa" y parlamentaria y la Rusia rural y giosa fortaleza todavía llena de los recuerdos del coronamiento
autocràtica se extienden, desde el mar del Norte y del Báltico al real de un elector de Brandeburgo ( 1 7 0 1 ) , no figura en la lista
Adriático por un lado, y por otro del Rhin al Vístula, países que de las ciudades jurídicamente alemanas que comprende Praga,
sólo los geógrafos llegan a distinguir. La expresión vaga de Miítel- Laibach ( L j u b l j a n a ) , Trento y Trieste. Las posesiones habsbur-
europa conviene a esta Europa de transición. Economías esencial- guesas integradas al Bund se componen, en efecto, de Austria
mente agrícolas basadas en la servidumbre de los campesinos anun- alemana y de la mayoría de los territorios no dependientes de la
cian a Europa oriental; la presencia de pequeños propietarios, la de corona de San Esteban. Por último dos reyes extranjeros (hasta el
intelectuales escuchados, de burgueses enriquecidos por el comercio advenimiento de Victoria en 1837, éste fue también el caso del
y la explotación de fábricas modernas recuerdan a Europa occi- soberano inglés para Hanover) son miembros del Bund por una
dental. Coexisten todas las formas de régimen político: el absolu- fracción de sus territorios: los reyes de los Países Bajos y de
tismo más retrógrado retrocede ante el ascenso de las monarquías Dinamarca.
constitucionales, algunas de las cuales comienzan a evolucionar La extraña configuración del Bund debía orientar los esfuerzos
hacia un efectivo parlamentarismo b a j o la presión de resueltos unitarios del parlamento de Francfort hacia un nacionalismo agre-
opositores. Las religiones del oeste y del norte (catolicismo, calvi- sivo; el asunto de Schlesvig-Holstein ofrece, en vísperas de 1848,
nismo, luteranismo) se enfrentan mientras combaten a la de oriente, un buen anticipo. Hubiera podido contradecir todavía más el
la ortodoxa. El fanatismo de las guerras de religión se mezcla con principio francés de la nacionalidad si los diplomáticos reunidos en
los conflictos políticos y nacionales. En los primeros, la influencia Viena hubiesen escuchado a los patriotas alemanes. En un clima
de los clérigos se ejerce en beneficio de las fuerzas conservadoras; romántico de fervor medieval, la aspiración a un estado fuerte
en los segundos, la influencia juega a favor de la ideología revolu- capaz de imponerse en el exterior se apoya en una vieja e impre-
cionaria de las nacionalidades. cisa noción: se impone a la élite la idea de restaurar el Reich,
LÜÜ
La Europa de los años cuare/iia La Europa germánica
97
desaparecido en 1806 después de 844 años. La palabra Imperio e egido que aspirara a la dominación de Europa central. Con Fichte
de la famosa fórnuila El Sacro Imperio romano germánico (Das ( 1 7 6 2 - 1 8 1 4 ) , cuya influencia considerable sobre los medios uni-
heilige rörische Reich deutscher Nation) es la insípida traducción versitarios es posterior a 1815, las ideas de Herder terminan en la
de un vocablo que comúnmente significa reino (animal, vegetal) y reivindicación de un estado que reúna a los miembros dispersos del
jamás imperio (Kaiserreich designa tanto el imperio austríaco como Urvolk (pueblo primitivo) no contaminado. Desde antes de 1815
el de los Napoleones), excepto cuando se trata de creaciones son popularizadas por dos hombres de mediocre talento que vivirán
puramente germánicas; el Reich se materializará sucesivamente en lo suficiente como para tener un papel de patriarcas en el parla-
las grandes empresas de 1871 (el Segundo Reich) y de 1933 (el n ^ n t o de Francfort: en la canción fVas ist des Teutschen Vaterland?,
Tercer Reich). El Reich imaginado en 1814-15 sobrepasa los limites ¿Cual es la patria del alemán? Arndt responde que está "allí donde
del que Napoleón acaba de destruir y que englobaba a los Países resuenen el idioma alemán y los cantos de Dios en el cielo [. . .]";
Bajos austríacos. Mientras que los exaltados exigen una Alemania Jahn ( 1 7 7 8 - 1 8 5 2 ) es el representante por antonomasia del roman-
que se extienda de Suiza a Schlesvig, de Alsacia a Livonia, os ticismo pangermanista; el Turnvater* (él es inventor del sustantivo
"moderados" reclaman el retorno a la situación anterior a los Jumen, gimnasia) era apasionado por las expresiones auténtica-
tratados de Westfalia ( 1 6 4 8 ) en nombre de los "derechos histo- mente germanas; sustituyó Nationalität, demasiado ostensiblemente
ríeos" El pomeranio Arndt ( 1 7 6 9 - 1 8 6 0 ) reivindica a Flandes inspirada en el francés nation (nationalité apareció en los dicciona-
"germánica", Alsacia y Lorena. Stein ( 1 7 5 7 - 1 8 3 1 ) , nacido en rios franceses recién en 1823), por Volkstum** (sobre el que Arndt
Nassau, lo aprueba. En su Mercurio renano publicado en Coblenza, formara el adjetivo volkstümlich***), sin equivalente en ningún
Corres ( 1 7 7 6 - 1 8 4 8 ) limita sus ambiciones a Alsacia y Lorena, inse- otro idioma. El Volkstum es el conjunto de manifestaciones del
parables del Reich. ¡Estrasburgo, Worms, Espira, Trévens, Ma- Volksgeist. Es también una comunidad moral y étnica superior a
la voluntad de los individuos. El carácter explosivo de este término
guncia Colonia, otras tantas ciudades santas que dominan a
vago aparecera en el uso que de él hará el Tercer Reich.
antigua "Meca", Aix-la-Chapelle, ciudad de Carlomagno, y la
moderna "Meca", Francfort, en cuyo Römer fue elegido el ernpe- A r m a d o desde 1815 con su ideología ambigua y su vocabulario
rador y coronado a partir de 1562! De expresivo titulo, el olleto equivoco, el nacionalismo alemán está demasiado avanzado para
de Arndt Der Rhein. Deutschlands Strom, aber nicht Deutschlands su tiempo como para no enfrentar a gobernantes apasionados de
Grenze (Et Rhin, río aleman y no frontera de Alemania) no es solo independencia, orden y paz. Su campaña con miras a reconstituir un
una amonestación a los alemanes. Es sobre todo una exhortación Reich umdo alrededor de un emperador encuentra la oposición de
a los "hermanos" de Alsacia. Como Arndt, pastor luterano, el principes hostiles a un poder central fuerte que alienaría una parte
católico Corres comprueba que "la población aisaciana, que todavía de su soberanía. Al fin de cuentas, todo dependía de la actitud de
en tiempos de los estudios de Goethe se sentía alemana, ha sido Austria. Los historiadores tienen razón sin duda al afirmar que ya
ganada para Francia por el nuevo orden político y social establecido en 1815 Prusia era e! estado alemán más poderoso. Los contem-
por el Imperio". Puesto que la historia puede corregir la historia, poráneos no lo juzgaban así. Como en el siglo xviii, la opinión
se recordará a los pueblos olvidados del pasado su pertenencia al francesa se inclina hacia Prusia débil pero esclarecida y teme a
Deutschtum (sustantivo lanzado por G ö r r e s ) , es decir al germa- Austria fuerte y reaccionaria. Ninguna de las numerosas combina-
nismo Algunos años después de la muerte de Herder (1744-18UJ;, ciones elaboradas en 1815 para volver a dar un gobername a
el - p a d r e del romanticismo" alemán y de los romanticismos eslavos, Alemania, deja de plantear la exclusión de Austria y el acceso a
sus discípulos hacen de su pensamiento un arma temible Herder la dignidad imperial del rey de Prusia.
consideraba a la nación como un ser vivo animado por el Volksgeisl Stein, ministro reformador del estado prusiano, ¡admite en
(literalmente, espíritu del pueblo), "espíritu colectivo inconsciente 1813 "hacer a Austria señora de Alemania"! Detentando casi
( R Minder) que se manifiesta espontáneamente en los cuentos y
cantos populares, las costumbres y sobre todo en el idioma. Doc-
* A p r o x i m a d a m e n t e , "padre de la gimnasia". ¡N. del E ]
trina estrictamente estética. Amigo de los eslavos, partidario de a ** Suele traducirse al castellano por "nacionalidad". [N del E ]
emancipación de los judíos, le era ajena la concepción de un pueblo La versión en castellano suele ser "popular". [N del E]
La Europaaristocráticayabsolutista 91
9 8 La Europa de los años cuarenta
más allá del nivel de cuerpo de ejército. Sin embargo, la construc-
sin interrupción durante casi cuatro siglos una corona elegible, los ción de fortalezas federales en el oeste, acelerada por la crisis
Habsburgo adquirieron una autoridad inigualada. La dinastía es renana de 1840, recuerda a los soldados profesionales, que se
la personificación de los sentimientos antifranceses y el símbolo ignoraban, la necesidad de prepararse para resistir juntos una
del Reich. Pero el renano Metternich estima que la corona imperial invasión francesa y confirma claramente el carácter germánico del
germana debilitaría la acción del emperador de Austria en la imperio de los Habsburgo: en 1848, los austríacos mantienen tropas
monarquía del Danubio. Para mantener en la obediencia a un en Maguncia, Ulm y Rastatt.
mosaico de pueblos, el estado debe ser suficientemente vigoroso Los ataques al particularismo no se limitan en principio a las
para reprimir las aspiraciones liberales y reducir a un papel figu- exigencias de la defensa nacional. El artículo 13 del acta federal
rativo a las asambleas provinciales. Sería temible la creación implica la obligación de acordar algunas libertades a los individuos:
—según el punto de vista de los patriotas— de una representación " E n todos los estados confederados habrá una organización de
del pueblo alemán. Ésta pondría fin, en las regiones incorporadas asambleas de estados.'' Mezclando la noción moderna de asambleas
al Reich, a la omnipotencia de la burocracia vienesa; incitaría a las legislativas elegidas garantizadas por una constitución (Verfassung)
otras provincias del imperio a reclamar asambleas electas que se y la noción medieval de estados (Landstande) sin grandes poderes
convertirían en la liza de los partidos y luego de las nacionalidades. compuestos por "órdenes" tradicionales, este ambiguo artículo
Metternich combatirá siempre a las instituciones representativas, que permite actuar a los príncipes según su gusto. Los del norte y de
juzga mortales para la monarquía de los Habsburgo. Alemania central siguen con rapidez el ejemplo de las dos grandes
El acta federal (Bundesakt) del 8 de junio de 1815 es la solución potencias reaccionarias. En las provincias incorporadas al Bund
austriaca al problema alemán. La organización unitaria concierne (9.700.000 habitantes sobre 29.400.000 en 1822) como en el
a los príncipes y no a los pueblos. En la ciudad libre de Francfort, resto del imperio austriaco se prosigue la política centralizadora
obsesionada por los recuerdos del Reich, sesiona la Dieta. Como de José II. El gobierno es su agente, la nobleza alemana y el
la ONU, es una conferencia permanente de delegados de los gobier- clero católico son sus instrumentos.
nos, sometida a la regla de unanimidad para las cuestiones esen- Aunque el absolutismo alcanza sus formas más retrógradas en
ciales, sin ejecutivo, sin recursos financieros propios y con el aporte el estado que los historiadores alemanes adornarán más tarde con
de los estados, cuyas cotizaciones se efectúan con mayor o menor los colores seductores del liberalismo. Durante más de treinta
regularidad. Bajo la presidencia — p o r derecho— de Austria, debe anos, será tarea esencial de los Hohenzollern unificar el reino y
velar por el "mantenimiento de la seguridad interna y externa y la no Alemania. La Prusia protestante, agrícola y feudal, había adqui-
independencia e integridad de los estados particulares". Oficialmente rido en 1815, con la provincia renana, Westfalia y Sarre, países
no tiene política exterior (contrariamente a la Dieta helvética no católicos, en parte industrializados, con estructuras sociales y men-
tiene representantes); en realidad, la diplomacia alemana se con- talidades modificadas bajo la acción de la Francia revolucionaria
funde con la diplomacia austríaca. Sin embargo, con majestuosa e imperial. Federico Guillermo III ( 1 7 9 7 - 1 8 4 0 ) creía como Met-
lentitud, la Dieta ha realizado en defensa del Bund una obra a ternich que el absolutismo centralizador era el procedimiento más
menudo subestimada pero lo bastante considerable como para eficaz para fundir en un solo cuerpo a grupos humanos dispersos. El
provocar las críticas de los liberales, admiradores de la "milicia ciu- ejército y la burocracia se confían a la enérgica nobleza prusiana.
d a d a n a " francesa. En vísperas de 1848, cada estado mantiene una Recién en 1823 Federico Guillermo III consintió en crear, siguiendo
fuerza correspondiente a un centesimo de su población. Los contin- el ejemplo de Austria, estados provinciales. Dominados por la no-
gentes federales forman diez cuerpos de ejército bajo la autoridad de bleza, puramente consultivos, convocados a discreción del soberano,
representantes del emperador de Austria y de los reyes. Además no corrían el riesgo de imitar a los del sur que, para indignación
de Federico Guillermo III y de Metternich, propagaban doctrinas
de los eslavos de las tropas austríacas hay en el 9? y 10<? cuerpo
subversivas.
luxemburgueses, limburgueses, soldados de Holstein y de Lauen-
burg que podrían ser legalmente conducidos a combatir a su sobe- En la Alemania de la Santa Alianza, el sur forma desde el
rano. La imposibilidad creada de elegir entre Austria y Prusia comienzo de los años veinte un bastión liberal. El gran duque de
impidió nombrar un comandante en jefe y organizar maniobras
LÜÜ La Europa de los años cuare/iia La Europa germánica 101

Nassau ( 181 6 ), el rey de Baviera y el gran duque de Badén ( 1 8 1 8 ) , asegurarse una libertad de voto casi total. En esta época, la doci-
el rey de Wurtemberg ( 1 8 1 9 ) y el gran duque de Hessc-Darmstadt lidad de una Cámara no se mide, como en Francia, por la impor-
( 1 8 2 0 ) "otorgaron" constituciones a sus pueblos. Estos príncipes tancia numérica de los funcionarios. Deliberando en pequeñas
se habían beneficiado con largueza, bajo el régimen francés, con la ciudades (en 1850 Stuttgart cuenta 50.000 habitantes, Carlsruhe
supresión de una multitud de principados y ciudades libres y la 26.000) donde los rumores se propagan rápidamente, los diputados
secularización de numerosos obispados. Concibieron la idea de que hablan con altivez "en nombre del pueblo". Una suerte de vértigo
instituciones políticas comunes al conjunto de sus estados contri- se apodera de hombres cultivados, asiduos lectores de la prensa
buirían a su cohesión. El cálculo se cumple, no obstante que las liberal francesa e inglesa. Desde humildes tribunas de asambleas
Cámaras bajas —elegidas sobre una base infinitamente más amplia sin grandes poderes, lanzan a la Alemania oprimida un mensaje
que en el Reino Unido o en Bélgica (con su millón de habitantes. de libertad. A la cabeza, los más respetados e independientes de los
Badén cuenta en 1830 con mayor número de electores que Fran- funcionarios: los profesores (únicamente los maestros de enseñanza
c i a ) — , se enardecen. Muy pronto reclaman la disminución de los superior llevan el título prestigioso de Professor) que aceptan en-
poderes de la policía, la institución del jury,* la libertad total de señar historia y derecho a sus colegas, inclusive a los ministros.
prensa, la introducción del régimen parlamentario. Teniendo en Exasperado por las diatribas de los diputados-profesores contra
cuenta el cuerpo electoral, este liberalismo de intelectuales es el absolutismo, Metternich se indigna al comprobar que la libertad
aparentemente paradojal; los electores son en su mayoría pequeiíos
de expresión mantiene a los estudiantes en un estado de agitación
propietarios liberados de la servidumbre, que gozan de los beneficios
contra las instituciones federales. La idea nacional se ha refugiado
del Código Civil pero que a veces están sometidos a las obliga-
después de 1815 en las universidades. Desmovilizados, los jóvenes
ciones feudales que la Dieta se empeña en mantener: en 1825, el
han retomado sus estudios con una mentalidad de ex combatientes
85 % de los bienes rurales en Baviera están gravados con censos
traicionados. En la época en que un viento de reacción sopla de
a favor de los príncipes mediatizados** {Standesherren) y de los
Berlín y de Viena, la universidad de Jena se convierte en el centro
señores {Grundherren)-, en 1830 los privilegiados reinan en Badén
del patriotismo germánico. El gran duque de Sajonia-Weimar, el
sobre el 34 % del territorio y el 29 % de la población. A u n allí
donde la legislación ha previsto una representación de los nobles, los amigo de Goethe, ha hecho de su minúsculo estado (257.000
funcionarios forman el grupo más numeroso (en 1830, 54 bancas habitantes en 1846) un oasis liberal. Desde el verano de 1815 se
sobre 124 en Baviera). En el gran ducado de Badén a veces forma allí la Burschenschajt. De Jena, el movimiento estudiantil se
rozan la mayoría absoluta (31 a 32 bancas sobre 6 3 ) . Un elevado extiende a 14 universidades. Su inspiración es a la vez nacional,
censo de elegibilidad descarta o reduce considerablemente las religiosa y revolucionaria. Como los estudiantes parisienses, pero
candidaturas de los elementos verdaderamente representativos de la por muy diferentes motivos, la Burschenschajt condena la obra
sociedad: campesinos, artesanos, comerciantes; en cambio, no es de 1815: el parcelamiento, condición de la hegemonía política rusa,
exigido a numerosos poseedores de empleos públicos. De su todopo- fundamento de la prosperidad económica británica, se ha institu-
derosa situación de la época de la Aujklarung,*** los funcionarios cionalizado en el Bund. Los tres colores negro-rojo-oro que
(todavía se los llama "servidores del estado") conservan ante ellos enarbolaba el cuerpo-franco de Lützow durante las "guerras de li-
mismos y ante las poblaciones, un prestigio que en Alemania se beración", simbolizan la unidad. La acción revolucionaria pretende
perpetuó hasta el siglo xx. En 1818-19, los funcionarios bávaros y inspirarse en Lutero. La lucha contra Roma aparece como un
badenses, que habían obtenido la inmovilidad y la posibilidad de combate contra el Antiguo Régimen espiritual. El año 1517 se
retiros anticipados acompañados de confortables pensiones, logran convierte para los intelectuales protestantes en el equivalente de
1789. Realizada en Wartburg, refugio venerado de Lutero, el 18 de
octubre de 1817 — p a r a conmemorar a la vez el tercer centenario de
la Reforma y el cuarto aniversario de la victoria de Leipzig—, la
* J u r a d o , tribuna! no profesional de origen inglés. [N. del E.]
* * En sentido estricto: príncipes colocados bajo la soberanía del Emperador, famosa manifestación de la Burschenschajt exalta peligrosamente a
pero q u e no pierden la soberanía nominal (bajo el Sacro Imperio). [N. del E.] los jóvenes espíritus: en 1819, el asesinato por el estudiante Karl
* * * Acepción alemana de "ilustración". [N. del E.] Sand de August von Kotzebue, escritor ligado al zar, da a Metternich
¡02 La Ltiropa DE las UÌÌOS cuarenia La Europa germánica
103

la ocasión de desatar una ofensiva general contra las fuerzas hos- había propuesto en 1831 sustituir la representación de los príncipes
tiles al particularismo y al absolutismo —prensa, universidades, con un parlamento elegido por los pueblos de la Confederación)
asambleas de los estados constitucionales. La mayoría de las leyes liberales adoptadas desde 1830 son abolidas.
En las ciudades de la Confederación pero dependientes de la En 1833 se crea en Francfort una nueva institución unitaria represiva
soberanía del emperador (Teplitz, Münchengrätz, Karlsbad, Viena), encargada de vigilar a los liberales alemanes y a los emigrados en
los proyectos de Metternich reciben el beneplácito de Prusia y Suiza y Francia. En 1834, la conferencia de Viena redacta reglas
Rusia (el acta federal y su interpretación están bajo la garantía de comunes sobre la censura de prensa y decide prohibir a los ex
las grandes potencias) y luego son aclarados con los estados ale- Burschenschaftler las profesiones de médico y abogado. El profesor
manes que Austria ha tenido a bien convocar. La Dieta sale Silvestre Jordan, principal redactor de la constitución de Hesse-
definitivamente de su sopor. Desde 1819-20 los diarios son censu- Cassel, es encarcelado. En Hanover, se suspende la aplicación de la
rados; las universidades son vigiladas por curadores; no solamente constitución ( 1 8 3 7 ) ; siete profesores de Göttingen (los hermanos
es disuelta la Burschenschaft sino que a sus antiguos miembros se Grimm, Gervinus, Dahlmann . . .) que protestan son expulsados. En
les prohibe el acceso a las funciones públicas. La Dieta prestara el sur, fortaleza del liberalismo, los gobiernos conservadores niegan
asistencia a los soberanos en dificultades con sus diputados. La hipócritamente a los diputados-funcionarios de la oposición su
comisión federal de Maguncia, encargada de investigar los movi- licencia para participar en los trabajos de las Cámaras. Aquí, como
mientos revolucionarios, corona esta primera etapa de la unificación en Alemania del norte, la reacción trasforma a la burocracia en su
con la represión. Jahn es puesto en prisión, Arndt expulsado de instrumento.
Bonn, Corres obligado a refugiarse en Estrasburgo ¡a la que antes Con las Cámaras abolidas o domesticadas, los profesores y sus
soñaba con anexar! Los opositores saben ahora que el triunfo de estudiantes reducidos al silencio, Metternich parece triunfar total-
la libertad es la condición de la unidad germánica. mente a fin de los años treinta. Pero él ha destrozado la autoridad
La revolución de Julio, la insurrección polaca (es conocida la de la Dieta, convertida en una institución despreciada o ignorada.
admiración de los liberales alemanes por un pueblo valiente, ene- Como Metternich, la Dieta no encontrará defensores en 1848.
migo de la odiosa Rusia), y en fin los movimientos italianos pro- Antaño a la cabeza de la resistencia antifrancesa, la Prusia de
vocan una agitación que prefigura, en menor escala, la de 1848: Federico Guillermo III ha traicionado la idea liberal y la idea
algunas manifestaciones conducidas por universitarios, estudiantes nacional por su alianza contra los Junkers y con Metternich.
y miembros de profesiones liberales bastan para derrocar al abso-
lutismo; los reyes de Hanover y de Sajonia, el duque de Brunswick el
elector de Hesse-Cassel acuerdan constituciones. En el sur, las II. EL Zollverein Y sus LEYENDAS: PROBLEMAS ECONÓMICOS,
Cámaras de Munich, Stuttgart y Carlsruhe realizan en algunos SOCIALES Y P O L Í T I C O S
meses reformas políticas (libertad de prensa) y sociales (abolicion
parcial de los censos señoriales) que violan deliberadamente la
Políticamente muy ligada a Austria, Prusia creó de 1818 a 1836 y
legislación federal. Abandonada momentáneamente por Metternich,
sin seria oposición por parte de Metternich un vasto "mercado
ocupado en mantener la preponderancia austríaca en Üaha, la
común" de 25 estados que totalizaba 26 millones de habitantes. Obra
Dieta no reacciona. Una minoría de intelectuales demócratas aliados
de burócratas marxistas avant Marx, el Zollverein, según una tenaz
a los "hermanos extranjeros", sobre todo polacos, elige el momento
leyenda, habría nacido de la voluntad de preparar, para satisfacción
mismo en que la voluntad pacífica de Luis Felipe otorga libertad
de los intereses materiales, las vías para la unidad política bajo la
de acción a Metternich para organizar una ruidosa manifestación
hegemonía prusiana. Aun si rechazan esta tesis, la mayoría de
unitaria (Hambach, mayo de 1832) e intentar un putsch contra la
los autores estima que el Zollverein engendró un estado de ánimo
Dieta (abril de 1833). Cada una de esas desatinadas empresas es
favorable para la fundación del Segundo Reich. ¿Pero cuáles eran,
seguida de medidas que agravan a las de 1819-20. Las seis actas
para los alemanes de los años cuarenta, las consecuencias financieras,
votadas por la Dieta en junio de 1832 prohiben a las asambleas
económicas, sociales y políticas del Zollverein'!
electas inmiscuirse en los asuntos alemanes (en Carlsruhe, Welcker
104 La Europa de los años cuarenta La Europa germánica 1 0 5

Los gobiernos menos dispuestos debieron reconocer que el príncipes que querían tener en su capital una cabecera de línea.
Zollverein era financieramente un buen negocio. Los gastos de Parece difícil discernir en el florecimiento ferroviario de 1848 un
percepción de las tasas aduaneras caen del 44 % al 9 % de la particularismo que "traiciona una disciplina". La obra de la buro-
recaudación para el conjunto de los estados, debido a que disminuye cracia berlinesa tiende a ligar las viejas provincias del centro y del
la extensión de la frontera a vigilar. L a s recaudaciones, repartidas este con las recientes adquisiciones del oeste; en 1849 están en
al prorrateo de la población de los estados, aumentan de 1834 a servicio 1.600 km de líneas; trece veces menos poblado, el país de
1843 en un 71 % . Los adversarios del Zollverein reconocen que Badén tiene 350 km. Al margen del Zollverein, Austria participa
ésa es una de las causas de la disminución de los impuestos directos. en el movimiento general. Viena está en comunicación con Praga,
Sus efectos sobre la economía, en vísperas de 1848, son menos la Silesia prusiana y Presburgo. Los intereses de un imperio que
evidentes. Muchos autores consideran los años cuarenta a través se quiere germánico y mediterráneo se afirman en el sur: en 1850 el
de los años sesenta. Se destacan las ventajas de la libertad de ferrocarril llega a Trieste, que en adelante desviará de Marsella el
transacciones como si la abolición de las aduanas interiores hubiera correo de las Indias. Los apoyos casi unánimes de los soberanos no
conllevado la suspensión de las tasas percibidas por las mercancías eran platónicos: los estados fueron llevados a financiar parcial
que recorren el Elba, el Wesser y el Rhin. Es cierto que algunas (Prusia) o totalmente (Sajonia, Baviera, B a d é n ) , las líneas pro-
industrias comenzaron a progresar al abrigo de la tarifa protec- yectadas.
tora. También las viejas empresas algodoneras del sur de Badén Porque los capitales eran escasos. En razón de la extrema diver-
le deben su renovación: la perspectiva de ser expulsados del sidad de monedas, la principal actividad de los modestos bancos
mercado alemán incitó a dinámicos capitalistas de la Suiza ger- era el cambio, como en la Edad Media. Renania ofrecía el espec-
mánica a invertir más allá del Rhin. Sin embargo, la industriali- táculo insólito de banqueros (Camphausen y Mevissen en Colonia,
zación no afecta realmente más que la Sajonia textil y a la región Hansemann en Aix) q u e acuerdan su sostén a la industria. Los
reno-westfaliana textil y metalúrgica que utilizan los ^(t de las bancos más importantes perpetuaban la tradición alemana de los
máquinas de vapor del Zollverein. En total, los resultados alcanzados "judíos de corte" del siglo xviii. Las necesidades urgentes de estados
hacia 1848 son modestos. Los recientes trabajos de P. Bairoch que intervenían más en la vida económica, obligaban a recurrir ya
miden el abismo que separa todavía en 1840 a la industria alemana no a un público lejano sino a financistas amigos, en primer lugar a
de la industria francesa. Francia domina en todos los sectores los Rothschild de Francfort y de Viena, Amschel y Salomon.
característicos: consume más algodón bruto por habitante (1,5 kg Un aparato bancario dominado por algunos financistas (única-
contra 0,9 kg) y carbón ( 1 3 0 kg contra l l O k g ) ; produce más mente la casa Bethmann rivaliza en Francfort con la banca Roths-
hierro ( 1 2 kg contra 5 k g ) ; por cada mil habitantes dispone de child), una industria en sus comienzos librada a sí misma, consti-
1 C.V.* y Alemania de 0,6 C.V. Veinte años más tarde la situación tuyen seguramente obstáculos para la formación de una vigorosa
se mantendrá excepto en lo que respecta al consumo de carbón burguesía. Banqueros e industriales renanos, grandes negociantes
( 3 9 0 kg contra 4 4 0 k g ) . de los centros de redistribución (Francfort, Bremen, Hamburgo,
Lubeck. . .) representan a esta clase exigua. Sin embargo, la bur-
Sin embargo, en un aspecto esencial para la trasfoTmación de la guesía alemana no ha dejado de ser acusada desde Marx. Los
vida material y la aceleración de los intercambios de ideas, la relatos de los acontecimientos de 1848 constituyen ocasión para
superioridad germánica es aplastante: desde 1841, las líneas férreas denunciar su egoísmo de clase, su incapacidad. E n realidad, la
alemanas (1.138 k m ) son más extensas que las francesas (435 k m ) ; burguesía que por menos de un año ocupará el centro de la
al de enero de 1849 conservan su ventaja (5.500 km contra escena no tiene nada en común con la burguesía capitalista. Marx
2.000 k m ) . L o s ferrocarriles contribuirán más tarde a atenuar el tuvo necesidad de introducir en el idioma alemán los sustantivos
particularismo y terminarán, según Treitschke, "lo que el Zollverein franceses bourgeois y bourgeoisie porque sus equivalentes BUrger,
sólo había comenzado". Ahora bien, nada le deben numerosos Biirgertum y Bürgerstand son de una rara imprecisión. E n 1845,
Biittersdorff, un aristócrata, co.mienza a asimilar el Biirgertum a la
clase poseedora. El mismo año, un diario de Constance ve en el
* Caballo de vapor. [N. del E.]
U ) 6
La Europa de los años cuarema La Europa germánica ¡07

HUrgcrsland a la pequeña burguesía eoinereiante y artesanal euyos estuvieron siempre a la vanguardia del movimiento obrero. En
estudios no pasan de la eseuela primaria. Hsta definición pone el 1840, la Dieta completa su obra de reacción unificadora coordinando
acento en la originalidad de la burguesía alemana. El Burger lue las medidas de represión social: en adelante, todo compañero
primero el que tenía el derecho de ciudadanía comunal y acceso- condenado en otro estado que el suyo por participación en una
riamente el personaje de fortuna. Hacia 1848 es el notable, muy asociacion ihcita o en la preparación de una huelga, será enviado
diferente del burgués necio de Daumier; su prestigio se basa meiios a su país y obligado a residir allí. Gracias a sus espías y a los
en la riqueza que en la cultura: pertenece a la clase de los Akade- de la Comisión federal de Francfort, Metternich sigue de cerca la
miker (gente que ha frecuentado la universidad), una elite pedante penetración de las doctrinas "anarquistas". Hace llegar con regula-
que reverencia un pueblo respetuoso de todas las f o r m a s del saber ridad a príncipes listas cuidadosamente puestas al día de los miem-
(en el trascurso de los años treinta, la enseñanza primaria alcanza bros de la Liga de los proscritos y de la Liga de los justos. A su
en la mayoría de los estados alemanes un desarrollo desconocido vez, estos son colocados b a j o la vigilancia de la policía. El peligro
en E u r o p a ) . Con la extensión del régimen constitucional, la auto- que teme Metternich no es imaginario. M a r x y Engels, n o obstante
ridad política se agrega a la autoridad moral. El rico manufacturero ser p o c o afectos hacia el "socialismo utópico" reconocerán en sus
que ha comenzado desde a b a j o vacila en suceder en la tribuna a un artículos del New York Daily Tribune ( 1 8 5 1 - 5 2 ) su influencia
Akademiker charlatán, que a b r u m a a sus adversarios con una ola sobre el artesanado alemán. L a s novelas de Eugène Sue, entre otras
de citas de Kant, Herder, Fichte y Hegel. El liberalismo b u r g u p , Los místenos de París y El judío errante, encuentran, a diferencia
más que en el Reino Unido e incluso que en Francia, es en A e- de las sabias obras de Stein y Grün, lectores en todas las capas
mania un liberalismo de intelectuales. El aparente desprecio por las sociales. A partir de 1838 se reeditan constantemente v se publican
consecuencias sociales del maqiiinismo en sus comienzos resulta a en las m a s humildes hojas; ellas crean un clima propicio para la
la vez de una formación separada de la técnica y de la msigmti- difusión de las ideologías parisienses por parte de esos otros errantes
cancia del proletariado industrial. . que son los compañeros. L a rigidez del sistema corporativo alemán
Por falta de estadísticas federales, el número siquiera aproximado favorece, aparentemente, las oposiciones de clases en el mismo lugar
de los o b r e r o s de fábrica del Bund es desconocido. Las estadísticas de trabajo. Engels ha pintado con humor a los " m a e s t r o s " (sastres,
del Zollverein, especialmente las de 1842, suman los asalariados de zapateros, ebanistas) de residencias principescas deseosos de ser
las fábricas y los obreros-campesinos. Las estimaciones de J. Kuc- bien acogidos por su clientela de aristócratas, oficiales y altos f u n -
zynski ( 6 0 0 . 0 0 0 obreros de fábrica y 100.000 mineros) para el cionarios, adhiriendo a opiniones ultraconservadoras. E n realidad,
territorio de la Alemania de 1914, visiblemente poblada como la las dificultades del conjunto de las profesiones artesanales acercan
Francia de 1848 ( 3 5 millones), parecen razonables: la ventaja de a patrones y obreros. E n 1830, los efectivos eran considerados
Francia estaría en la relación 3 a 2. En la Confederación existe una excesivamente abundantes. Según los cálculos de Fr. Lütge el
sola fábrica textil que o c u p a más de 8.000 personas . . . ¡en Reich- artesanado u r b a n o y rural habría contado con 59 habitantes sobre
enberg ( L i b e r e c ) en Bohemia! Con sus 1.200 obreros, la fabrica l.UUO en 1861 contra 30,8 en 1816. Los compañeros, orgullosos
berlinesa de Borsig que construyó la primera locomotora alemana y de su calificación d u r a m e n t e adquirida, son reducidos a la condi-
la hilandería de Ettlingen ( B a d é n ) constituyen casos excepcionales^ ción de jornaleros; los " m a e s t r o s " se sienten rechazados del Bürger-
La firma Krupp, de Essen, hacia 1841 no reúne mas que stand. Estos desclasados se ponen de acuerdo para imputar la
trabajadores. A u n si se agregan los tejedores a domicilio, nume- responsabilidad de su decadencia a la libre empresa. E n 1845 el
rosos en Silesia y en Badén, la clase heterogénea de los trabajadores republicano hádense Fickier lleva una ardiente campaña c o n t r a ' l o s
industriales sigue estando relegada a segundo plano por el artesa- ricos autorizados para instalar cervecerías, imprentas y panaderías a
n a d o tradicional. En resumen, el régimen opresivo y malthusiano pesar de no seguir los trámites corporativos. Por su parte los
de las corporaciones {Ziinjte) subsiste en las ciudades; no asi en el companeros envidian a los obreros de las fábricas cuyas condiciones
c a m p o y en las nuevas empresas, es decir las fábricas. Raras (mu) de trabajo son en todos los aspectos comparables a las del Reino
probablemente menos de una centena de 1791 a 1 8 4 8 ) , las huelgas Umdo y Francia (la legislación prusiana de 1839 que reglamenta
son realizadas por esos s a s t r e s , encuadernadores o tipógrafos que el trabajo de los niños no es más respetada que la ley francesa
La Europaaristocráticayabsolutista 91
1 0 8 La Europa de los años cuarenta
pietarios que practican una agricultura atrasada. Más aún que en
de 1841). Pero comprueban que los salarios reales de los obreros
Francia, la ausencia de instituciones de crédito pone a los campe-
de las industrias mecanizadas han resistido mejor que los suyos
sinos en manos de los usureros, en su mayoría judíos. El temor
al movimiento de baja del período 1820-50. Entre los "maestros"
a la proletarización se expresa públicamente en reivindicaciones a
favorables al mantenimiento de Jas dinastías y los compañeros
la vez progresistas y reaccionarias. Utilizando la extraordinaria
partidarios de la república unitaria y social predicada en los talleres contradicción 4ue resulta de la coexistencia de instituciones políticas
del faubourg Saint-Antoine sólo existen matices en el plano econó- modernas y de instituciones sociales medievales, los campesinos
mico. El reforzamiento del sistema corporativo es la panacea ima- badenses protestan con su voto contra el precio fijado para el
ginada para quebrar la tímida ofensiva del capitalismo; es cierto rescate de los derechos abolidos y reclaman la supresión sin indem-
que los compañeros esperan con él la supresión de la astuta regla- nización de otros, en particular del derecho de caza. Al mismo
mentación que trasforma poco a poco la maestría en un monopolio tiempo niegan la igualdad política a los judíos. Los diputados
familiar. liberales de Carlsruhe adoptan hasta 1846 las consignas de sus
A la irrealidad de las aspiraciones del artesanado, mayoritario electores: por la emancipación campesina y contra la emancipación
en las ciudades, se oponen las temibles reivindicaciones de una judía.
fracción importante del campesinado, mayoritario en la nación. La
La persistencia del antisemitismo medieval y la complaciente
Alemania del Zollverein forma una vasta zona rural con estructuras
admiración por el régimen corporativo de antaño, traducen el pro-
apenas modificadas por la acción de los ocupantes franceses o los fundo desconcierto de categorías sociales muy numerosas como para
reformadores alemanes. En Prusia, donde el este agrícola y el amenazar el orden establecido. Su miseria (Armut, Not, Elend)*
oeste industrial se equilibran, el porcentaje de la población rural se convierte en tema literario. Entre 1822 y 1847 inspira cerca
habría pasado de 72,73 a 72,45 entre 1834 y 1843. Causas demo- de 200 libros: a partir de 1834 comienza el interés por los obreros
gráficas agravan las dificultades del campesinado de un país de las fábricas. Términos nuevos tomados del inglés o del francés
"subdesarrollado": alta natalidad (36,1 contra 27,4 en Francia (Pauperismus, Classe o Klasse, Proleíarier, Mittelstand)** pintan
en los años 1841-50) y mortalidad elevada (26,1 contra 22,7 en una sociedad de tipo antiguo: por un lado, el bienestar y la
Francia entre 1841 y 1 8 4 5 ) . Cada año, jóvenes proletarios se cultura, por otro la miseria y la ignorancia. Se busca instruir a las
suman a la multitud de ex productores que la reorganización del "clases inferiores" y sobre todo educarlas: así, bajo el impulso de
régimen feudal ha trasformado en jornaleros famélicos. Al este del burgueses, nacen en lo": años cuarenta asociaciones para "fomento
Elba, las reformas del "jacobino" Stein, paradójicamente han lle- del bien de las clases laboriosas". Perspicaces observadores que han
vado a la proletarización de una parte de la clase campesina. En descubierto la causa profunda del malestar social, la discordancia
treinta años el número de obreros agrícolas casi se ha duplica- entre el aumento de la población y el desarrollo económico, denun-
do. Así, sobre los aproximadamente 12.000 grandes dominios de cian las ilusiones de la filantropía.
junkers se ha desarrollado una agricultura de tipo moderno a
A partir de 1830 se multiplican los libros consagrados a la super-
imitación de la de los landlords. En cambio. Silesia no ha conocido
población del campo. El remedio propuesto es la emigración. Los
siquiera un simulacro de reforma campesina: los tejedores, cuyo
gobiernos antes "poblacionistas" lo aceptan con alivio. La gran ola
levantamiento espontáneo en 1844 despierta profundos ecos en
migratoria de los años cincuenta hacia Estados Unidos fue pre-
Alemania, sufren como siervos la explotación señorial y como tra-
parada psicológicamente desde 1820: el número de emigrantes
bajadores la explotación capitalista; igual que los proletarios del
alemanes habría pasado de 52.000 ( 1 8 2 1 - 3 5 ) a 329.000 (1846-
campo prusiano, no desempeñarán ningún papel en los grandes
50). En vísperas de 1848, la emigración es considerada como una
acontecimientos de 1848-49. En cambio, los campesinos del sur
"tarea nacional". Friedrich List ( 1 7 8 9 - 1 8 4 6 ) , precursor de la idea
tomarán su destino en sus manos en marzo de 1848. Mientras que
de una Mitteleuropa, recomienda en vano a los candidatos a
la Revolución y el Imperio abolieron en Renania el Antiguo
Régimen social, el régimen señorial continúa estragando los estados
meridionales. El rescate de impuestos y censos constituye, a pesar * Pobreza, miseria, necesidad, estrechez, etc. [N. del E.]
Pauperismo, clase, proletario, clase media. [N. del E.]
del concurso del estado, una pesada carga para los pequeños pro-
110 La Europa de los años cuarenta La Europia germánica 111
partir, trasladarse hacia los países danubianos de los Habsburgo. 1846 son considerados como una traición. Prusia aparecía como el
En realidad, él considera que la industrialización puede resolver "caballo de Troya" del Reino Unido en Alemania. El Zollverein
el problema de superpoblación; pero una sociedad dominada por no contribuyó en nada a la obra de unificación de Prusia. En 1866,
los Akademiker no lo comprende: la literatura de la época es en vísperas de la guerra austro-prusiana, la casi totalidad de los
hostil a la fábrica, fuente de beneficios inmerecidos para patroiies estados alemanes se pronunciará a favor de Austria.
poco cultivados, lugar de perdición para trabajadores sin formación.
Los libros consagrados al socialismo y al comunismo se apoyan
en los ejemplos francés o inglés. E n cuanto a la "organización del m . LA IDEA NACIONAL Y EL LIBERALISMO EN LOS AÑOS CUARENTA
trabajo" tan cara de Louis Blanc, es demasiado vaga como para
integrarse a la concepción alemana del proletario. Se reclama para En Alemania, la fuerza creciente del sentimiento nacional y el
él aumentos de salarios, la reducción de la jornada de trabajo y el despertar de las ideas liberales caracterizarán el período que
estrechamiento de los lazos corporativos (Rodbertus constituye en comienza en 1840. Ese año, Federico Guillermo IV se convierte
este aspecto una ilustre excepción). Por último, muchos autores en rey de Prusia y Thiers desata desatinadamente una crisis inter-
imputan los sufrimientos de las "clases laboriosas" al Zollverein nacional. El primer acontecimiento no debe ser sobrestimado: los
y a Prusia, inspiradora de su política aduanera. comienzos del nuevo rey, que entusiasmaron a los intelectuales ya
Se admite que el Zollverein, en muchos estados, fue impuesto a adheridos a la causa prusiana, engañaron —con excepción de los
una opinión reticente; pero a fines de los años cuarenta sus res- renanos— a pocos liberales. Los efectos de las pretensiones fran-
tallantes méritos habrían sido reconocidos para mayor gloria de cesas de reconquistar las fronteras naturales fueron en cambio
Prusia. Se trata de una leyenda desmentida por la creciente irritación profundos y durables.
contra el gobierno de Berlín. Los partidarios de la adhesión al
Zollverein habían prometido una firme protección contra la compe-
tencia británica, pero el cuidado de no molestar a los ingleses y La crisis renana de 1840 y sus efectos
el deseo de seducir a las ciudades hanseáticas, fortalezas del libre-
cambio, exigían el mantenimiento de tarifas moderadas. Se acusaba En la Alemania del silencio renace el espíritu de 1813. Soberanos
a la burocracia prusiana de sacrificar los intereses alemanes al replegados en su particularismo, periodistas prudentes, profesores y
"gigante británico". Lejos de preparar la unión, el Zollverein estudiantes pacíficos reaccionan con sorprendente vigor. L a co-
aparecía como un fermento de división. Los hiladores del sur habían rriente antifrancesa alcanza su máximo de intensidad en el oeste
recibido el apoyo del apóstol de la "revolución industrial": en su y en el sur, regiones liberales pero expuestas a una eventual
Sistema nacional de economía política ( 1 8 4 1 ) , Friedrich List libra invasión. Su fuerza es tal que los demócratas, amigos de Francia
una ardiente campaña en favor de un proteccionismo riguroso. El revolucionaria, se comprometen —con matices, pero se compro-
badense Nebenius, que fue junto con List uno de los primeros meten— en una literatura combativa cuyo precursor fue Arndt. Se
defensores de la idea de una asociación aduanera alemana, reclama conoce el gran éxito del Rheinlied del renano Nikolaus Becker y la
en 1842 elevados derechos sobre el hierro británico. En 1845, espiritual respuesta de Müsset. De la misma vena que el Rheinlied,
Mevissen, un resuelto partidario del Zollverein y de la unidad la Wacht am Rheim {La Guardia en el Rhin) del wurtemburgués
alemana bajo la dirección prusiana, exige en nombre de las Cámaras Schneckenburger, sera el himno patriótico más popular de 1870 a
de comercio de Renania una modificación de la política aduanera. 1914. Otro renano, Moses Hess ( 1 8 1 2 - 7 5 ) , futuro líder con Karl
En ocasión de las conferencias secretas del Zollverein la tensión Grün (1817-87) del socialismo verdadero, es simultáneamente el
aumenta. A pesar de la censura, la prensa mantiene al público en autor de una apología de Francia y de una melodía para el Rhein-
suspenso. Se ha difundido la opinión de que la competencia bri- 'ied francófobo. "El Rhin debe seguir siendo alemán", repite un
tánica no solamente es nefasta para la mayoría de las fábricas •efrán del wurtemburgués Herwegh, el más francófilo de los repu-
(excepto el tejido) sino también mortal para el artesanado y la Micanos alemanes de los años cuarenta. En París, Venedey, miem-
industria rural a domicilio. Los mínimos aumentos de las tarifas de Dro de la Liga de los proscritos y autor de una requisitoria contra
Ì I 2 La Europa de los años cuarenta La Europa germánica 113

la Prusia de Federico Guillermo III, denuncia las quimeras de las Cámaras de los estados constitucionales, en un "parlamento
francesas. Sus amigos Quinet, Michelet, Arago y Lamennais se de profesores" y de ex Burschenschajtler.
emocionan. Venedey publica entonces sucesivamente en París En una Alemania particularista donde se distiende la atmósfera
La France, l'Allemagne et la Sainte-Alliance des peuples y Der sofocante de los años treinta, algunos profesores —revocables según
Rhein: ¡que los demócratas franceses renuncien al Rhin y los demó- el humor de los gobernantes— preparan las vías para la limitación
cratas alemanes renunciarán a Alsacia! Solamente el pequeño grupo de las soberanías principescas. Esta comprobación, banal para los
de la izquierda hegeliana animada por Ruge ( 1 8 0 2 - 8 0 ) mantiene la alemanes, resulta de la psicología de las autoridades, de la situación
cabeza fría. Teme que la exaltación nacional sea para los regímenes y de la mentalidad de los profesores. Cuidadoso de cultivar su popu-
opresivos una feliz evasión. Los Hallische Jahrbücher* (tras- laridad alimentando la vanidad de sus súbditos, cada príncipe se
esfuerza por atraer a su o sus universidades a maestros eminentes.
feridos a Dresde y luego a París, se convertirán en los Deutsch-
(Los "Siete" de Góttingen, revocados por el rey de Hanover, reci-
Französische Jahrbücher**) publican, en respuesta al Rheinlied
bieron numerosas proposiciones con acuerdo de soberanos reaccio-
otro Rhein, uno de los escasos poemas renanos no conformistas. La
narios.) Los profesores se hacen valer antes de aceptar. Eligen la
corriente antifrancesa que arrastra a una parte de la extrema
universidad que les ofrece, junto a las mejores condiciones de
izquierda de las Cámaras del sur, no obstante ser tradicionalmente
trabajo, el más alto tratamiento. El renombre de una universidad
admiradora de los principios de 1789, conduce hacia 1845 a los
no se mide por la importancia de la aglomeración en donde está
espíritus moderados a aceptar como verosímil el absurdo rumor
situada, sino que depende de la reputación de sus profesores. La
de una alianza entre Francia y la Rusia aborrecida. A las imágenes universidad de Berlín declina después de la desaparición de Hegel
de una Rusia bárbara y belicosa lista para arrojar sus hordas sobre (1831). Las pequeñas ciudades de Bonn, Jena, Heidelberg y Kiel
una nación culta y pacífica y de una Inglaterra que explota con la tuvieron grandes universidades. En Austria, la universidad alemana
complicidad de Prusia a un pueblo abandonado, se agrega ahora la de Praga eclipsa muy pronto a la de Viena. Pasando de una univer-
de una Francia sedienta de conquistas. Contra los franceses, los sidad a la otra de acuerdo a las circunstancias, a sus preocupaciones
ingleses y los rusos, los patriotas apelan a la fraternidad de los (la presencia simultánea en Kiel de un Dahlmann, de un Droysen
alemanes y no a la fraternidad de los pueblos, diabólica invención [1808-84] está en relación directa con el asunto Schlesvig-Holstein),
francesa. El Deutschland über alles ( 1 8 4 1 ) predica "la unión a sus intereses, los profesores no se sienten consagrados a prín-
fraternal [ . . .] del Mosela al Niemen, del Adigio al Belt [. . .]" cipes de quienes son súbditos provisionales; conscientes en cambio
Su autor, el sajón H o f f m a n von Fallersleben es sin embargo, desde de constituir la élite de la clase de los Akademiker, se reúnen a
el punto de vista nacional, un moderado y en el plano interno un partir de 1822 en congresos nacionales de especialistas; el Congreso
demócrata. Profesor en Breslau, es expulsado en 1842 de la llamado de los germanistas —comprendía juristas, lingüistas e histo-
universidad a causa de sus simpatías hacia los polacos y sus riadores— se realiza en Francfort en 1846; se expone y se aprueba
críticas contra el gobierno prusiano. No había hecho más que la tesis alemana sobre los ducados.
popularizar temas familiares al m u n d o universitario.
La "ciencia alemana" proviene en efecto de las "ciencias del
hombre". En el campo de las ciencias experimentales como en el
de la técnica, el retraso de Alemania respecto a Francia sigue siendo
La acción de los universitarios
considerable hacia 1850. El naturalista Alexander von Humboldt
Dueños de un prestigio que desborda el mundo germánico, los uni- (1769-1859) publica su libro en francés. Antes de desempeñarse
en la universidad de Giessen, Justus von Liebig ( 1 8 0 3 - 7 3 ) había
versitarios encarnan cada vez más, aunque no participen en la vida
llegado a París para frecuentar los cursos de Gay-Lussac. El
política activa, las aspiraciones unitarias de la nación alemana:
espíritu alemán, afecto a la abstracción, alcanza su punto más
naturalmente, el parlamento de Francfort se convertirá, a la manera
alto con Hegel ( 1 7 7 0 - 1 8 3 1 ) . Que de su sistema haya salido una
corriente revolucionaria, la de la izquierda hegeliana, no es indife-
* Anales de Halle. [N. del E,] rente a la historia de las ideas. En cambio la historia política está
* * Anales Franco-alemanes. [N. del E.]
La Europaaristocráticayabsolutista 91
14 La Europa de los años cuarenta
alegremente al Volkstum alemán de los Países Bajos. Algunos
más inclinada hacia la corriente conservadora, cuyo poder crecerá
perciben en el norueganismo antidanés una manifestación de un
con el ascenso de Prusia. El estado fuerte que glorifica la filosofía
escandinavismo germánico. El problema de los ducados es la
hegeliana, está en condiciones de reivindicar, en nombre de la
ilustración ejemplar de la movilización de los universitarios al
razón que encarna, la soberanía absoluta sobre los individuos. El
servicio de la causa nacional.
tínico estado alemán digno de ese nombre es para el filósofo pro-
testante la Prusia protestante. Pero la extraordinaria e inmediata
influencia de Hegel es sobre todo casi exclusivamente filosófica.
El libro del wurtemburgués Paul Pfizer (Correspondencia de dos Las veleidades liberales de Prusia y la opinión alemana
alemanes) que desde 1831 preconizaba una Alemania amputada de
Austria y puesta bajo la hegemonía prusiana, era en esta época la El "rechazo" de Federico Guillermo IV a la corona de "emperador
anticipación de un solitario. de los alemanes" en 1849, sorprendió a sus más fervientes parti-
La misión alemana había sido predicada antes que la misión darios. Sin embargo, entraba dentro de la lógica de un pensamiento
prusiana por los filólogos, los juristas y especialmente esos historia- nutrido de los recuerdos del pasado de Prusia y Alemania. Durante
dores ante quienes la Europa cultivada se inclinó durante mucho la crisis internacional de 1840, el hijo del vencido de Jena no había
tiempo con respeto. Esta admiración se basa en la ambigüedad disimulado sus sentimientos francófobos: Nikolaus Becker f u e
misma de la "ciencia alemana". Guizot, Mignet y Michelet se gratificado con una pensión por su Rheinlied. Como muchos ale-
comprometen abiertamente en la lucha de partidos; su campo es manes, percibió el peligro que en caso de guerra representaría la
el período contemporáneo más explosivo; un estilo brillante disimula ausencia de un comando unificado e intentó obtener una reorgani-
una documentación a veces superficial. ¡Qué contraste con los zación del sistema defensivo del Bund. Sin duda pensaba asumir
trabajos de un Niebuhr reuniendo las "fuentes" de la historia ro- las responsabilidades militares supremas, pero la ambición del
mana, con los prodigiosos esfuerzos del equipo de Göttingen que Hohenzollern excluía todo pensamiento antihabsburgués. El rey se
publica a partir de 1826 los Monumenta Germaniae histórica, funda- inclina ante el veto de Austria. Cuidadoso de reforzar las insti-
mento de la reputación de la erudición germánica! Pero ésta es tuciones federales, según el deseo casi unánime de la opinión
el soporte de una concepción partidaria del derecho, de la filología alertada por las habladurías francesas, propone confiar al Bund la
y de la historia. Sin duda, los universitarios alemanes hubieran dirección de la política comercial de los estados alemanes. ¡Idea
rechazado esta acusación. Creían servir a la verdad, ¡pero una extraña a una concepción maquiavélica del Zollverein que había
verdad de acuerdo con las tesis de Herder sistematizadas por Görres, germinado en un espíritu lleno de sueños del Sacro Imperio!
Arndt y Jahn! El jurista Savigny ( 1 7 7 9 - 1 8 6 1 ) rechaza en nombre
Romántico a la manera de la mayoría de los románticos alemanes
del Deutschtum el Código Civil de importación extranjera. Jakob
de los años 1815-40, Federico Guillermo IV admira la Edad Media
Grimm ( 1785-1863) liga el sentimiento nacional a la lengua
y venera sus instituciones. La influencia del bernés C. L. von Haller
hablada. En cuanto a la propaganda por medio de la historia, se
afirma ingenuamente después de 1840. La cohesión nacional de (1768-1854), apóstol de una monarquía patriarcal (un dios, un
Suiza y también el cuidado de no obstaculizar los esfuerzos de los rey, un p a d r e ) , acentúa sus disposiciones conservadoras y su repul-
cantones en lucha contra el Sonderhund católico atemperan los sión por la herencia del pensamiento racionalista. Siempre prefirió
ardores anexionistas de profesores en su mayoría protestantes^ (en a las Cámaras electas, los estados representativos de las "órdenes";
1846, sobre las 22 universidades de la Confederación germánica jamás admitió francamente que las relaciones del soberano y sus
solamente seis, de las cuales tres están en Austria, son católicas). súbditos pudieran estar reglamentadas por una "hoja de papel". Sin
Respecto a Bélgica y los Países Bajos, los apetitos se expresan sin embargo es de este soñador, respetuoso de la preminencia histórica
moderación: el católico conservador Buss y el protestante liberal de Austria y orgulloso defensor del absolutismo medieval, que inte-
Welcker se ponen de acuerdo para descubrir en las primeras lectuales y burgueses esperan una acción coherente con miras a
reivindicaciones "flamingantes" un "movimiento nacional germá- preparar la unidad alemana bajo la conducción de una Prusia
nico". Del Volkstum alemán de las provincias flamencas, se pasa liberal.
116 La Europa de los años cuarenta La Europa germánica 1 1 7

Federico Guillermo IV goza en sus comienzos de la reputación peticiones, según el capricho del rey. En su discurso de apertura
de liberal que la opinión acuerda al sucesor de un personaje autori- de abril de 1847, el rey confirma su oposición a cambios políticos
tario. Vagas promesas y algunos gestos espectaculares confirman reales. Sin embargo, los liberales renanos no desesperaron de modi-
las primeras impresiones. La amnistía a los condenados políticos ficar las concepciones de un soberano considerado como influi-
permite el retorno del popular Arndt. Se suaviza la censura. Se ble. E n el sur, donde desde la insolente expulsión de los diputados
publican los debates de los estados. L a vida política se anima: se badenses Hecker e Itzstein por parte de la policía berlinesa se
critica ante todo a la omnipotente burocracia, luego se reclama una proclama que "sólo la circulación de ganado es libre en el Zollve-
constitución, primera etapa de un reino b a j o el signo de la libertad rein", se desata el odio contra Prusia. Una hoja aislada. Die
germánica. Deutsche Zeitung del profesor Gervinus ( 1 8 0 5 - 7 1 ) de Heidelberg,
Esta interpretación optimista de las intenciones de Federico Gui- intenta resistir a la corriente prusófoba. Se difunde la opinión de que
llermo IV encuentra partidarios particularmente entusiastas en una Berlín constituye, con Francfort, el principal obstáculo a la tmidad
región antes plena de prevenciones ante Berlín. Profundamente en la libertad.
alemanes pero apegados a las conquistas de la Revolución, los
renanos católicos no se sentían cómodos después de 1815 en un
estado absolutista que se apoyaba en una sociedad aristocrática y
protestante. La defensa del "derecho renano", es decir del derecho
francés, expresaba no la voluntad de secesión que imaginaban los
liberales parisienses sino el rechazo al retorno del Antiguo Régimen.
La burguesía industrial y comerciante de las provincias prusianas
más activas no apreciaba nada a los estados instituidos por Federico
Guillermo III en beneficio de la nobleza, pero medía las ventajas
que podía extraer del Zollverein, aun cuando juzgaba exageradas las
concesiones otorgadas a los productos británicos. M u y pronto ad-
mitió que la unión económica preparaba las vías para la unión
política. Estaba dispuesta a trabajar por la unidad moral del reino
y por la hegemonía de Prusia en Alemania, pero con la condición
de participar en la conducción de los asuntos en el seno de
asambleas reclutadas sobre la base de un censo elevado. Tales eran
las condiciones que Hansemann ofrecía vanamente desde 1830 a
Federico Guillermo III. Bajo Federico Guillermo IV, que pone
término al conflicto con la Iglesia católica respecto a los matrimonios
mixtos (asunto de Colonia), el particularismo renano pertenece al
pasado. Se anudan lazos entre los burgueses moderados de Colonia
y los intelectuales avanzados de Königsberg, como Jacoby. En el
oeste y en el este se reclama la libertad total de prensa y un
ministerio responsable ante una asamblea nacional prusiana. La
Patente del 3 de febrero de 1847 publicada después de muchas
vacilaciones es una concesión irrisoria. El Landtag unido, nueva
asamblea que perpetúa las tradiciones feudales, reúne en Berlín a
los miembros de los 8 estados provinciales. La preponderancia de los
nobles es allí aplastante. Esta caricatura de parlamento sin periodi-
cidad es llamada para votar nuevos impuestos y para presentar
VI. LA EUROPA CENTRAL UE LAS NACIONALÌDADES La Europa de las nacionalidades 119

Ya se esboza la división que el Compromiso de 1867 institucio-


nalizará. Por un lado, los "países alemanes" incorporados a la
Confederación germánica; por otro, la Corona de San Esteban. Los
primeros comprenden los "estados hereditarios" poblados por ale-
manes al norte de los Alpes, al sur por eslovenos, croatas, italianos
y los países de la Corona de San Wenceslao o Corona de Bohemia
(Bohemia, Moravia, Silesia) de mayoría checa ( 6 0 % ) con una
fuerte minoría alemana ( 3 7 % ) . Dependen también directamente
I. LOS PUEBLOS DE AUSTRIA Y LA GERMANIZACIÓN DE LAS ÉLITES de Viena el reino de Galitzia, resto austríaco de la vieja Polonia, y
Bucovina, con predominio rumano, arrancada a los turcos. La
(^orona de San Esteban no es, como la Corona de Bohemia, una
En el curso de los años, Austria había detenido y luego hecho simple reminiscencia histórica. Ella simboliza el rechazo a aceptar
retroceder a los turcos lanzados al asalto de Occidente. Su victoria la absorción en la Austria alemana y la voluntad de colonizar a los
aseguró la preminencia del germanismo vienés sobre los magiares eslovacos separados de los checos, los rumanos separados de sus
y los eslavos, del catolicismo sobre la ortodoxia y el protestantismo, hermanos del imperio otomano, los croatas y los servios establecidos
de la nobleza sobre el campesinado. Protegida por la muralla entre el Drave y el Save.
levantada contra el imperio otomano, la "Babel de los pueblos" se Sin embargo, las reivindicaciones nacionales de los mismos ma-
habría convertido así en la "prisión de los pueblos", pero los opri- giares, que desde la conquista ( 1 5 2 6 ) hasta el siglo xviii habían
midos habían preparado con mucha anticipación la dislocación del resistido victoriosamente a las tentativas de asimilación, fueron
estado opresor. Esta tesis parece reflejar con exceso las opiniones presentadas sin prisa a un gobierno debilitado por sus divisiones
de los gobernantes de los estados sucesores. Sin embargo, no hay (maestro de la diplomacia, Metternich no lo es en la conducción de
duda de que el desmembramiento de 1918 se inscribe en una evo- los asuntos internos) y paralizado por la lentitud del aparato
lución comenzada con estrépito en 1848. Cada nacionalidad parti- administrativo. La tardanza de los pueblos sojuzgados para expresar
cipó en la "primavera de los pueblos" según el grado de su torna sus aspiraciones nacionales tiene como causa esencial la actitud
de conciencia y la naturaleza de sus relaciones con los otros grupos, de las clases dominantes. E n economías atrasadas, varias centenas
pardcularmente con los alemanes y los magiares imbuidos de sus de miles de nobles viven de la explotación de millones de campe-
derechos históricos y seguros de su cohesión nacional. sinos. A la cabeza del ejército, de la burocracia y de las pequeñas
asambleas provinciales, se inclinan por el orden. El analfabetismo
El idioma y la religión acercan o alejan psicológicamente a los
de los rurales garantiza el mantenimiento de la servidumbre. Hablar
individuos que viven juntos. El imperio cuenta aproximadamente
su idioma es desclasarse; la nobleza rutena se había polonizado, la
una mitad de eslavos repartidos en varias ramas (checos y eslovacos,
aristocracia eslovaca magiarizado. Fuera de la nobleza magiar y
rutenos o ucranianos, polacos, croatas y servios, eslovenos) V4 de polaca, las clases altas adoptaron, como la burguesía, el alemán,
alemanes, '/,; de magiares, ' d e rumanos y menos del 2 % de lengua de la civilización vienesa. Por lo demás, las clases medias
italianos. Además de los católicos (V.O, se cuentan uniates o —cuyo papel fue primordial en los movimientos liberales y nacio-
católicos griegos ( V s ) , ortodoxos ( V r - ) , calvinistas y luteranos nales europeos— ocupan un lugar insignificante en el imperio. La
C / g ) , israelitas (V2:,). La religión reúne a los alemanes, católicos industrialización de la metalurgia y los textiles sólo alcanzó a Viena,
en su mayoría, pero aumenta las tensiones dentro del mundo eslavo: la parte oriental de los Alpes, Bohemia del norte y especialmente
vecinos por el idioma, los servios son ortodoxos, los croatas y los Moravia. Los fabricantes, satisfechos con un sistema aduanero que
eslovenos, católicos. Las fronteras administrativas que reunían en los protegía contra la competencia del Zollverein, se preocupan
Galitzia a los nobles polacos católicos y a los campesinos rutenos poco por la política. El liberalismo burgués es un fenómeno alemán
uniates separan de los eslovenos a la mayoría de los croatas. y vienés. C o m o en el resto de la Confederación, se reduce a una
Creación de la historia, ignoran las afinidades lingüísticas. minoría de intelectuales y parlamentarios. En la Dieta de la Baja
i 24 La Europa de los años cuarenta La Europa de las nacionalidades 121

Austria que delibera en Viena, algunos audaces relacionados con palacios vicnescs. Muchos ejercen altas funciones. Nada los predis-
los medios universitarios reclaman la libertad de prensa. Los salones pone para cuestionar las instituciones políticas, las estructuras so-
de la capital se entregan a una guerra de epigramas contra Metter- ciales: el conde Itsvan Széchenyi ( 1 7 9 2 - 1 8 6 0 ) y el barón Josef
nich, pero un liberalismo nacionalista se ha afirmado con fuerza en Eötvös ( 1 8 1 3 - 7 1 ) son brillantes excepciones. La pequeña nobleza
el seno de la sociedad más aristocrática del imperio. constituye las Ya partes de la aristocracia. Arraigada en el campo,
cerrada en general a las ideas de Occidente, se revelará reaccionaria
en lo interno y revolucionaria en lo externo. Pobre, se aferra tenaz-
II. EL ASCENSO DEL M O V I M I E N T O MAGIAR: LIBERALISMO mente a sus privilegios señoriales, fiscales (exención del impuesto) y
ARISTOCRÁTICO, OPRESIÓN SOCIAL Y nacionaUtaría* políticos. El derecho de voto es por otra parte la última prerroga-
tiva que conservan los 30.000 nobles empadronados en 1834 en
El estado de la sociedad explica los rasgos del moviniiento magiar tierras serviles e inscritos de oficio en la lista de contribuyentes. Las
y sus vacilaciones para abordar el problema esencial, el de la asambleas de los 55 comitats (condados) son el campo de maniobra
emancipación campesina. El peso del proletariado industrial y de la
de esta "nobleza de sandalias" que desprecia a los siervos, envidia
burguesía es despreciable: para una población de 12 millones de
a los magnates y combate al absolutismo germano. Por temor a
habitantes (Hungría y Transilvania) en vísperas del 48, se cuentan
esta clase indócil, el gobierno no reunía más la Dieta húngara desde
sólo 23.000 obreros de fábrica y 35.000 mineros; en los grandes
1811, pero la agitación de los comitats obligó al emperador-rey a
burgos agrícolas residen un millón de artesanos y pequeños comer-
ciantes privados de derechos políticos, a menudo alemanes o convocarla en 1825.
aparentemente germanizados como muchos judíos. El año 1825 marca el comienzo de la resurrección de la nación
magiar. Mientras Viena reconocía una vez más la existencia de la
Compuesto por varios millones de individuos, el campesinado
"constitución húngara", los magiares emprenden la rehabilitación
f o r m a una clase de parias. Los siervos sometidos a censos y corveas
de su idioma: Istvan Széchenyi funda la Academia húngara; el poeta
señoriales no son los más desgraciados, ya que la proporción de
Miguel Vörösmarty ( 1 8 0 0 - 5 5 ) consagra una epopeya a la gloria
siervos sin tierra crece a causa de la presión demográfica y de las
de Arpad, el héroe legendario; el romanticismo magiar, de inspi-
medidas más o menos legales de la nobleza. En 1848, sólo en
ración esencialmente nacional y patriótica, ha nacido. E n 1837,
Hungría 539.000 siervos disponen de un terrazgo o de una fracción
Vörösmarty publica su Llamado a la nación húngara y se abre el
de terrazgo;** 826.000 (de los cuales 98.000 no poseen siquiera
Teatro nacional-, muy pronto, los dramas históricos de Eduard
una c h o z a ) , reducidos a la condición de jornaleros, sólo trabajaban,
Szigligeti ( 1 8 1 4 - 7 8 ) , inspirados en Alexandre Dumas y Victor Hugo,
según Kossuth, unos cincuenta días por año. Fuera de los eslovacos
remplazan a las traducciones de piezas alemanas. El barón Nicolas
(dos millones) y los rutenos ( 4 0 0 . 0 0 0 ) , los campesinos del reino
Josika ( 1 7 9 4 - 1 8 6 5 ) , primero discípulo de Walter Scott y luego de
hablan el idioma de sus opresores; los del principado de Transil-
Eugène Sue, crea la novela histórica popular. Muy pronto, el
vania y de Banato son en su mayoría rumanos y servios. En 1848,
romanticismo magiar rompe con el romanticismo alemán para vol-
la nobleza intentará crear la "unión sagrada" de los señores y de los
verse hacia Occidente, especialmente hacia Francia. Muchos son los
siervos del reino contra los levantamientos de los alógenos. El éxito
magnates que hablan el francés a la perfección; sensible a los sorti-
no será completo, ya que la aristocracia se niega generalmente a
legios parisienses y a la obra emancipadora de la Revolución,
acordar a la gran mayoría un lugar en la sociedad y el estado.
Eötvös escribe novelas de tesis contra el dominio de los feudales. De
Los 680.000 nobles representan el 5 % de la nación. Esta enorme origen popular servio, Sandor Petöfi ( 1 8 2 3 - 4 9 ) , ídolo de algunos
clase está muy diferenciada. Los magnates, apenas 1.500, son demócratas de Pest, será el cantor de la clase servil y de la patria
grandes 'propietarios que viven una buena parte del año en sus húngara antes de morir por ellas en un campo de batalla transilvano.
El ejemplo de Petöfi el plebeyo, de Széchenyi y de Eötvös,
magnates y personajes políticos considerables, testimonia la origi-
* E n el original, el a u t o r e m p l e a el n e o l o g i s m o nationalitaire. [N. del E.]
nalidad de la situación húngara. Si en la Europa de las nacionalidades
* » E n el original, tenure. [N. del E.]
sometidas, los "despertadores" de la nación son a menudo intelec-
i 24 La Europa de los años cuarenta La Europa de las nacionalidades 123

tuales aislados, en Hungría, ciertos hombres de acción se ponen de En cambio estima, como en los bellos días de la Santa Alianza,
acuerdo para realizar los ideales nacionales de los escritores que la existencia del imperio está ligada al mantenimiento del
comprometidos. Desde el restablecimiento de la Dieta, se reclutan absolutismo. Frente a caracteres indomables, debe maniobrar. Desde
esencialmente en las capas superiores de la nobleza: la Mesa de los 1825, la Dieta había obtenido el respeto de su periodicidad. Una
magnates es naturalmente la asamblea de los grandes señores; la vida parlamentaria de tipo occidental y burgués se aclimata poco a
Mesa de los estados comprende, además de la representación sim- poco en las fronteras de Oriente en una sociedad aristocrática.
bólica de las ciudades (dos diputados) y una delegación de la Animado por Eotvos y luego por Frantisele Deak ( 1 8 0 3 - 7 6 ) , que
Dieta de Croacia, 110 diputados elegidos a razón de dos por cada será uno de los autores del Compromiso de 1867, el partido liberal
uno de los 55 comitats. Por la fuerza de las cosas, se convierte en es el artesano de esta evolución. Desde 1834, reclama la libertad de
la asamblea de la nobleza media, ya que la pequeña nobleza prensa, la trasformación de la Dieta en un verdadero parlamento con
—predominante en los comitats— era generalmente demasiado po- un gobierno responsable. G a n a d o por las ideas de Széchenyi, audaz
bre como para postular a funciones gratuitas en Presburgo (Bratis- economista pero político moderado, quiere terminar con la explo-
lava). Su ausencia facilita la penetración de las ideas reformistas tación que sufre un país obligado a vender sus materias primas
en la Mesa de los estados pero no debilita el rigor de las reivindi- a precios fijados por Viena sin poder trabajarlas (¡Hungría compra
caciones nacionales: la nobleza forma un bloque cuando se trata a Austria tejidos fabricados con su propia lana!). Ese gran proyecto
de luchar por la lengua magiar y la autonomía húngara. supone la participación de las fuerzas productivas en la necesaria
trasformación de una economía colonial. Algunos nobles conscientes
De acuerdo a la proposición de Széchenyi regularmente reno-
de ello, agrupados alrededot de Deak, proponen la abolición de
vada desde 1825, el magiar, de 1833 a 1844, remplaza al latín en sus privilegios: derecho de voto (que sería extendido a las profe-
las deliberaciones de la Dieta, la administración, incluida la de los siones Uberales y económicas), inmunidad fiscal y derechos seño-
comitats, y la enseñanza. Pero los aristócratas croatas, que disponen riales. Producto de un "tercer estado" poco numeroso reclutado
de un esbozo de organización estatal, resisten a los aristócratas en la fracción esclarecida de la nobleza media, esté programa inno-
magiares así como estos últimos resisten a la burocracia austriaca. vador se enfrenta con los prejuicios e intereses austríacos, con el
E n la Dieta de Agram ( Z a g r e b ) , se delibera siempre en latín y en conservadorismo prudente de los magnates pero también y especial-
latín continúan expresándose los diputados croatas en la Dieta de mente con el egoísmo ciego de la pequeña nobleza. Durante la
Presburgo. Esta oposición nacional que refuerza el movimiento sesión de 1839-40, el partido liberal logra imponer en la C á m a r a
"ilirio" suscita las cóleras de la nobleza magiar. En 1842, la pequeña alta algunas medidas favorables para los campesinos (prohibición
nobleza de los comitats la denuncia a Fernando I — u n débil mental de castigos corporales, posibilidad de un rescate definitivo para los
convertido rey en 1835— como una traición. En 1843, los croatas siervos). Eotvos y Deak comprenden que la condición previa para
son recibidos con invectivas en la Mesa de los estados por rechazar profundas reformas es el control de la pequeña nobleza. Su "centra-
el empleo del magiar. Széchenyi es casi el único en protestar contra lismo" preconiza un gobierno magiar fuerte apoyado en una asam-
la magiarización forzada. El gobierno austríaco, que manifiesta sus blea representativa de la nación, y gana terreno en el partido
simpatías a un pueblo católico, autoriza provisionalmente, además liberal — c u y a influencia comienza a desbordar el estrecho marco
del magiar, el empleo del latín en la Dieta y deja a Croacia en de la Cámara baja.
libertad de conservar el uso del latín en su administración. Así La vida política, desde el comienzo de los años cuarenta, ha
estimulados, los sentimientos antimagiares se exasperan: procla- dejado de ser asunto de algunos iniciados. Por haber divulgado y
mando en 1845 al croata como lengua de sus deliberaciones, la comentado en una hoja litografiada los debates de la Dieta, Lajos
Dieta de Agram lanza un desafío a la Dieta de Presburgo. Ese Kossuth ( 1 8 0 2 - 9 4 ) , había sido encarcelado ( 1 8 3 7 - 4 0 ) . En adelante,
dualismo, que Austria sabrá utiUzar en 1848-49 contra Hungría, no la administración autoriza la publicación de los discursos de la
la preocupa. Porque la burocracia vienesa — y su acdtud respecto a Dieta . . . ¡siempre que no se revelen los nombres de los oradores!
las propias reivindicaciones lingüísticas magiares lo demuestra— no Porque en el futuro ella debe tomar en cuenta una opinión reducida,
sospecha el potencial revolucionario de los movimientos nacionales. cierto es, a los medios intelectuales urbanos, pero peligrosa por su
i 24 La Europa de los años cuarenta La Europa de las nacionalidades 1 2 5

adhesión entusiasta a un hombre apasionado y audaz. Aureolado de Su popularidad incita a los liberales de la Cámara baja a atacar
la gloria del mártir, Kossuth f u n d a en 1841 el Pesti Hirlap (Diario a la administración austríaca. Metternich concibe el audaz proyecto
de Pest) que muy pronto contará con 7.000 abonados, dos veces de poner término a la agitación parlamentaria . . . ¡acomodando a
más que el francés Le National. Este éxito prodigioso es ante todo el su manera el programa liberal! Como Eötvös y Deak, ve crecer en
de un periodista de gran estilo, también dotado de dones de oratoria la Mesa de los estados la representación de la pequeña burguesía
excepcionales. Polemista intransigente, el "Demóstenes húngaro" pero a expensas de la nobleza media nacionalista; también como
ellos, pretende reducir la influencia de la pequeña nobleza; sin
gusta de oponerse al pacífico Széchenyi. Sin embargo, los puntos
embargo, ubicando funcionarios a la cabeza de las asambleas de
de vista del abogado salido de la pequeña nobleza son singular-
comitats, piensa menos en regenerarlas que en obtener "buenas
mente menos amplios que los del gran señor. Portavoz del partido
elecciones". Esta reforma administrativa, que recibe el apoyo de
liberal, Kossuth sostiene esencialmente su programa de autonomía
Széchenyi y de otro magnate —el conde György Apponyi ( 1 8 0 8 - 9 9 ) ,
política. Al comienzo se preocupa poco por la suerte del campesi-
para quien será creada la función de canciller para Hungría
nado; contrariamente a Eötvös y a Deak acaricia la quimera de
( 1 8 4 7 ) — , aparece, a causa de las circunstancias, como una empresa
fundar, sobre la agitación tumultuosa de las asambleas de comitats,
del germanismo centralizador y absoludsta. Por una de esas ironías
una vida democrática al estilo de la pequeña nobleza, cuyas preven-
de las que la historia es pródiga, una institución arcaica simboliza
ciones antieslavas comparte. Cuando Széchenyi aconseja tratar con el progreso y una clase reaccionaria la libertad. En las elecciones
precaución a los croatas, el Pesti Hirlap lo acusa directamente de de 1846 Deak y Kossuth, reconciliados contra Viena, defienden los
traidor. Casi hasta el final de la insurrección de 1849, Kossuth se bastiones de la pequeña nobleza con más ardor que los conserva-
opondrá a un acuerdo con las otras nacionaüdades. Sin embargo es dores, tradicionales sostenedores de asambleas cerradas a la idea
capaz de aprender las lecciones de la experiencia — c u a n d o la supre- misma de reforma. En la apertura de la Dieta de 1847, la coalición
macía magiar no está en juego—. La audiencia del Pesti Hirlap y la liberal y democrática es mayoritaria en la Mesa de los estados.
penetración de los escritos de Saint-Just, Etienne Cabet y Louis Concebido contra los proyectos de Metternich, el programa de la
Blanc en los cenáculos literarios de Pest no lo engañan sobre la oposición refleja casi exclusivamente las aspiraciones nacionales de
fuerza real del partido liberal. L a alianza con el campesinado asegu- la nobleza magiar; con fuerza reivindica para la aristocracia el
raría a la oposición política oportunidades razonables de arrancar derecho de administrar y gobernar Hungría en el marco del imperio
concesiones a un gobierno hábil para explotar los odios sociales (nadie piensa entonces en una secesión); a pesar de los tumultos
contra una nobleza nacionalista. En este sentido, las jacqueries* de Galitzia, relega para más adelante la solución del problema
rutenas (los "fieles galitzianos" del emperador) contra los señores agrario; a pesar de la resistencia croata, manifiesta un soberano
polacos ( 1 8 4 6 ) son una advertencia. Kossuth está ahora conven- desprecio con respecto a los pueblos eslavos y a los rumanos. En la
cido de la urgencia de la supresión de la servidumbre y de la medida en que inspirará la acción del gobierno magiar formado
abolición de las corveas; pero sabe también que la pequeña nobleza después de la caída de Metternich, hipotecará el destino de la
no sacrificará jamás de buen grado sus privilegios a los intereses revolución de 1848-49.
de la nación, y cree discernir en la actitud prudente de los parla-
mentarios liberales una tendencia a transigir con los derechos de Mientras que los eslavos y los rumanos le harán pagar cara su
Hungría. Este romántico, enemigo de las medidas provisionales, que arrogante incomprensión, el nacionalismo magiar recibirá el apoyo
rompe con su clase y sus amigos políticos, funda el partido radical, moral de los republicanos italianos y se beneficiará con el concurso
partido de la emancipación política del pueblo magiar y de la eman- de muchos patriotas polacos. Desde antes de 1848, ha testimoniado
cipación social del campesinado. en efecto su simpatía por los burgueses de Lombardo-Véneto y
por los nobles de Galitzia. Orgullosa de su cohesión nacional, la
nobleza magiar se siente cerca de los pueblos que extraen de la
* El n o m b r e proviene de la sublevación campesina en F r a n c i a (1358) y grandeza de su pasado y la riqueza de su civilización la voluntad
tiene origen en la calificación despectiva Jacques Bonhomme. Véase, entre de resistir, como ella, a las tentativas de germanización. En cambio.
otros, la obra de Mollat y Wolff en esta misma colección. [N. del E.]
i 24 La Europa de los años cuarenta La Europa de las nacionalidades 127

considera a los eslovacos, servios y a los croatas mismos como una Pero la frecuentación a universidades germanas no solamente
turba de esclavos — " u n eslavo no es un hombre"— sometidos a inspiró obras; ella actuó profundamente sobre el comportamiento
los aristócratas favorecidos en Viena. Los esfuerzos para dotar de de los "despertadores" de pueblos. Josef Dobrovsky ( 1 7 5 3 - 1 8 2 9 ) ,
lenguas nacionales a pueblos desconocidos en Occidente —Víctor sacerdote católico educado en la atmósfera del Aufklärung (era
Cousin no creía en 1840 que el servio se hablaba en B o h e m i a - francmasón), escribía en latín y en alemán aunque fue autor de una
aparecen como ridiculas maquinaciones del germanismo antimagiar. Gramática científica del checo. La generación romántica merece en
parte los sarcasmos de Engels. Chafarik ( 1 7 9 5 - 1 8 6 1 ) , que adopta
el checo a partir de 1837, ha publicado antes en alemán su Historia
n i . LOS R E N A C I M I E N T O S ESLAVOS de la lengua y de la literatura eslavas en todos los dialectos. Palacky
( 1 7 9 8 - 1 8 7 6 ) reprocha a Dobrovsky no haber empleado el checo;
Los demócratas alemanes enemigos del "paneslavismo" no son pero es en alemán que comienza a hacer aparecer a partir de 1836
menos despreciativos. Nadie ha afirmado con más hiriente ironía su gran Historia de Bohemia cuya primera edición checa es poste-
que Friedrich Engels el carácter artificial de los "renacimientos nor a 1848. El esloveno Bartolomé Kopitar ( 1 7 8 0 - 1 8 4 4 ) , que
eslavos". Después de la revolución, evocará las "elucubraciones redacta en alemán una Gramática de la lengua eslava en Carniola,
de algunos diletantes eslavos de la ciencia histórica" obligados a Corintia y Estiria, personifica a estos eruditos eslavos que, estimu-
hablar el alemán en el Congreso de Praga de junio de 1848, y lados por las autoridades, prepararon tranquilamente, sin quererlo, la
presentará al gran Frantisele Palacky, defensor de la "nacionalidad dislocación del imperio. El patriota croata Lajos G a j ( 1 8 0 9 - 7 2 ) y
checa moribunda", como un "sabio alemán incapaz de hablar aun Dobrovsky gozan de los favores de Francisco I. Metternich, su
en la hora actual ( 1 8 5 2 ) , correctamente el checo y sin acento colega y rival Kollowrat, el archiduque Juan, subvencionan socie-
extranjero". dades y escuelas checas. Esta tolerancia no deja de tener sus
segundas mtenciones: cultivando su pequeño jardín, las élites eslavas
harán renacer antiguas querellas y escaparán a las temidas seduc-
En ¡a escuela de Herder y de la "ciencia alemana" ciones de la gran potencia eslava del este.
Este cálculo subestima las consecuencias morales de una for-
Este juicio apasionado contiene una innegable parte de verdad: el mación intelectual común. Los estudiantes de Austria se encuentran
"despertar" de las naciones eslavas es el producto de una minoría en Leipzig, en Göttingen, donde el filósofo Johann Ludwig
de intelectuales nutridos en la cultura alemana. De Alemania Schlözer ha creado un seminario de estudios eslavos. La universidad
sufrieron el contagio romántico (el "romanticismo eslavo tránsfuga de Jena, caracterizada por la ciencia y el liberalismo de sus profe-
de Alemania", J. Ancel) que engendra el culto de las naciones sores, el espíritu místico y patriótico de la Burschenschaft fundada
desaparecidas y aprendido los medios de preparar su resurrección, por el historiador Heinrich Luden, han marcado especialmente a
Quieren acelerar el cumplimiento de la predicción de Herder, amigo ios protestantes Chafarik, Palacky y Jan Kollar ( 1 7 9 4 - 1 8 5 2 ) . Se
de los eslavos "¡Naciones caídas, naciones antes libres [ . . .] sabe, por el discurso entusiasta que redacta en checo dirigido a sus
saldréis de vuestro largo sueño!". Siguiendo el ejemplo del filósofo compatriotas, que Kollar participó en la manifestación de la
prusiano, buscan en los cuentos y en las canciones populares el Wartburg. En La hija de Slava ( 1 8 2 4 ) , que describe las vicisitudes
' Volksgeist de la nación, en el idioma y en la historia los fundamentos de los eslavos bajo la ocupación germánica, este discípulo de
de su renacimiento. Pero, contrariamente a los polacos, los otros Arndt traspone las aspiraciones nacionales del romanticismo alemán.
pueblos eslavos no poseen lengua literaria; algunos, como los En las universidades del imperio donde la política está ausente,
eslovacos, jamás formaron un estado. El idioma está por crearse, jóvenes separados por barreras administrativas, idiomas y prejuicios
la historia por escribirse. De ahí el lugar eminente de un puñado religiosos, descubren afinidades entre ellos al mismo tiempo que
de filólogos e historiadores, discípulos de Herder y de maestros se apasionan por el estudio de los orígenes de su nación bajo la
alemanes, en movimientos que pertenecen más a la literatura que dirección de eruditos alemanes o eslavos. A pesar de un Kollar o de
a la política. un Kopitar, la universidad de Viena sufre la proximidad del aparato
La Europa de los años cuarenta La Europa de las nacionalidades 29
i 24

policial central; la de Praga en cambio goza de un prestigio incom- Realizaciones croatas y tentativas "ilirias"
parable. Dos hombres han creado su reputación: el checo Dobrovsky
y el alemán Meinert ( 1 7 7 3 - 1 8 4 4 ) , filólogo y poeta, entusiasta La aristocracia croata, que ve en la cultura alemana un obstáculo
alumno de Herder. En 1833 Chafarik esboza, a la manera de contra la magiarización, se opone desde luego a los esfuerzos de
Herder, la imagen de una nación eslava adornada con las virtudes G a j en favor del servio-croata. G a j obtiene del propio emperador,
idílicas que el romanticismo otorga a los pueblos primitivos. Predi- autorización para imprimir un periódico: en 1835 en Agram la
cado libremente en la más antigua universidad alemana ( 1 3 4 8 ) , el Gaceta croata convertida muy pronto en la Gaceta iliria, publica
"eslavismo" hará en 1848 de la capital de Bohemia " L a Meca las obras de poetas. El "ilirismo", precursor del "yugoslavismo",
de los eslavos del imperio" (R. Portal). subestima el estado atrasado de las poblaciones aisladas, los
prejuicios rehgiosos, las resistencias de los magiares, la desconfianza
A fines de los años treinta, existe primero un estado de animo:
de algunos medios vieneses, las susceptibilidades del príncipe de
intelectuales dispersos prosiguen estudios paralelos. En Praga,
Servia, Miloch Obrenovitch, y su clero ortodoxo (desde 1830 este
Dobrovsky ha ejercido sobre los filólogos eslavos un benevolo
ultimo es independiente de la metrópoli de Karlowitz [Karlovci],
magisterio; después de él, su discípulo Kopitar pone libremente a
centro, con Novi Sad, del renacimiento intelectual servio en la
disposición de los estudiosos las riquezas de la biblioteca imperial
Vaivodia h ú n g a r a ) , defensor del "eslavo eclesiástico" contra el
que él administra. Apoya las tentativas para crear una lengua
dialecto de Ragusa, la hostilidad de los turcos que dominaban a los
Uteraria eslovena; también protege al servio de Hungría Vuk
campesinos servios de Bosnia. En 1843, el emperador-rey prohibe
Karadjitch ( 1 7 8 7 - 1 8 6 4 ) a quien impulsa a publicar la primera hablar de la Iliria. En cambio, el "croatismo" progresa libremente-
gramática servia y la hace conocer a Leopold von R a n k e y los recluta adeptos fuera de los intelectuales y del clero católico aquí
hermanos Grimm, gracias a los cuales la obra del genial autodi- y alia favorable al nacionalismo. L a nobleza poco a poco deja de
dacto será conocida en Europa. En el imperio, dicha obra seduce considerarlo como una simple rehabilitación del folklore. El con-
a G a j que recomienda a los croatas adoptar el dialecto de Ragusa tlicto entre los aristócratas magiares y croatas ha acelerado cierta-
(Dubrovnik) que Karadjitch ya había propuesto a los servios. La mente la evolución de los espíritus: en 1845, el croata se convierte
lengua servio-croata con dos alfabetos, cirílico para los servios, latino en la lengua de la Dieta de Agram.
para los croatas, será reconocida en 1850 como lengua literaria
Así, por la fuerza de las circunstancias y bajo el impulso de un
común. La idea de una unión lingüística de los eslavos del sur se
nombre de acción, la idea nacional croata sale del m u n d o de los
inspira en la acción de los jefes del renacimiento checo para acercar
doctos para entrar en la arena política.
a los eslavos del norte. Esa unión fue preconizada por Chafarik, el
maestro de Gaj, y Kollar, su ídolo. ^ .
Los trabajos de estos discípulos de la Alemania romantica co-
Grandezas y debilidades del renacimiento checo
mienzan a ser conocidos por una pequeña élite. Los nobles
germanizados han f u n d a d o en Praga el Museo de Bohemia (1818),
biblioteca y centro de estudios checos que Palacky dirige a partir Por el contrario, en las regiones checas el despertar nacional conti-
de 1827. A imhación de la Matica ( R u c h e ) de Neusatz (Novi Sad nua expresándose en los trabajos de los eruditos y en los sueños de
en territorio húngaro), academia provincial y órgano de difusión los poetan hasta la entrada en escena del periodista Borovsky
de los cantos populares servios, creada por jóvenes discípulos de Havlitchek ( 1 8 2 1 - 5 6 ) . Y sin embargo ¡qué contraste entre este
Karadjitch ( 1 8 2 6 ) , nace en Praga bajo los auspicios de mecenas retardo y una aplastante superioridad en los aspectos que se con-
influyentes una Matica checa ( 1 8 3 1 ) ; círculo de lectura y editorial, sideran eminentemente favorables para la toma de conciencia de la
publica obras en checo a partir de 1840. nacionalidad! Por un lado, un mediocre discípulo de los grandes
despertadores" checos, una modesta provincia (poco más de un
millón de habitantes) sometida al yugo magiar desde la lejana
desaparición (siglo x i ) del efímero estado croata, una economía
rural, una sociedad de siervos y de señores; por otro, las guías
i 24 La Europa de las nacionalidades
La Europa de los años cuarenta 131

de los renacimientos eslavos, provincias densamente pobladas ( 6 Vi época. En la huelga de 1844, "primer gran manifestación de la
lucha de clases en Europa central", los obreros que realizan el
millones de habitantes en 1846) conquistadas al mismo tiempo que
estampado en telas de algodón alemanas toman la dirección de
los países húngaros ( 1 5 2 6 ) y que como ellos conservaron durante
un movimiento que, cuatro años más tarde, provocará en la bur-
tres siglos una apariencia de estado nacional (la Corona de San
guesía un "gran terror" retrospectivo. Algunos miembros de esta
Wenceslao evoca a la Corona San Esteban y la Dieta de Praga se
élite profesional se han impregnado del comunismo elemental de
parece más a la Dieta de Presburgo que a su subordinada de
las sociedades secretas en las fábricas de Mulhouse, los talleres
A g r a m ) , una industrialización desconocida en los países eslavos
de París o de Lyon. Frente al progreso técnico, todos reaccionan
—excepto R u s i a — acompañada de la formación de un poderoso
a la manera clásica del viejo artesanado: destruyen los telares
capitalismo y del nacimiento de un importante proletariado fabril. mecánicos y reclaman el control de los contratos de trabajo, es
Estas trasformaciones económicas y sociales no modifican en decir la supresión del flujo de campesinos. Esta intervención egoísta
absoluto el comportamiento de los checos, que son mayoría en la no es el reflejo de un sentimiento anticheco sino una simple medida
proporción de 3 a 2. Las consecuencias del desastre de la Montaña defensiva de obreros calificados que se sienten amenazados por la
Blanca ( 1 6 2 0 ) parecen irreversibles. Diezmada en el campo de competencia de una m a n o de obra sin formación y de una docilidad
batalla, exiliada, perseguida, la nobleza checa protestante sobrevivió ejemplar.
convirtiéndose en alemana y católica. La Dieta de Bohemia, guar-
El espíritu de sumisión de todas las clases de la sociedad checa
diana del recuerdo del estado absorbido en el imperio, no perte-
es la dominante de una trágica historia aun hoy inacabada. Con-
nece, como la Dieta de Hungría, a una aristocracia nacional. Son
trasta con la mística combativa de los "peregrinos" polacos. Sea
señores y grandes burgueses alemanes los propietarios de las
o no el resultado de una exacta apreciación de las reaüdades, aclara
minas y los altos hornos. Siendo la práctica del alemán la condición
la indiferencia, las casi simpatías de los alemanes de Austria
para el ascenso social, las clases medias se han desnacionalizado:
respecto al renacimiento intelectual checo y la actitud a primera
en la familia Palacky, el idioma usual es el alemán. En vísperas de
vista desconcertante de un Palacky a fines de los años cuarenta. El
1848, el burgués checo consciente de su nacionalidad constituye
comportamiento del historiador es inseparable de concepciones
un personaje de excepción. En el corazón de las regiones checas, las
nacionalistas ambiguas que provienen directamente de las univer-
ciudades y especialmente la capital son naturalmente centros de
sidades alemanas. Unas veces Palacky parte de consideraciones lin-
germanización. Se considera generalmente al baile checo de 1840,
güísticas para describir, no sin exageración, la lucha secular del
donde era de rigor danzar música checa y hablar el checo, como
pueblo alemán y del pueblo checo; otras, recurre a la historia para
una manifestación de mal gusto.
defender los derechos de una Bohemia si no independiente, al
El checo era casi siempre, salvo en los países alemanes que
menos autónoma dentro del imperio. E n el primer caso, exalta la
bordean Austria, Baviera, Sajonia y Prusia, el idioma de los
misión del pueblo checo; en el segundo, da armas a las clases
campesinos, pero desde la reconquista católica, ya no es más la
menos adheridas al ideal nacional. Al final de su larga vida, el
lengua de la herejía husita o luterana. La disociación de los dos
testigo de tantos levantamientos fomentados en nombre de un
elementos que fueron antes los fundamentos del sentimiento na-
principio —el derecho de los pueblos a disponer de sí mismos—
cional, explica la autoridad de los Habsburgo. Los campesinos
ignorado por los checos, referirá, en una orgullosa resignación, sus
cuentan con la dinastía para completar la obra emancipadora de
esperanzas de resurrección nacional: " C a d a vez que triunfamos, fue
José 11. Sus aspiraciones son esencialmente sociales. En cambio no
sobre todo por la supremacía del espíritu más que por la fuerza física
se podría decir lo mismo de los trabajadores industriales checos:
y cada vez que fuimos derrotados, fue por falta de actividad inte-
el desarrollo de las fábricas provoca un éxodo rural cuyo principal
lectual, de coraje y audacia morales." A la espera del despertar
efecto es aumentar en las ciudades la proporción de checos sin
moral de compatriotas considerados inconstantes, blandos, sin
conciencia nacional, de obreros sin conciencia de clase. En 1848,
espíritu de empresa, la alianza con la aristocracia no reviste el
la mayoría del proletariado de Praga será checa; sin embargo,
carácter escandaloso que se le ha adjudicado posteriormente. ¿Acaso
serán los alemanes quienes, como en Liberec, realizarán el combate
la nobleza no invoca contra el centralismo vienés los "derechos"
social y expresarán en su idioma las reivindicaciones obreras de la
La Europa de ¡as nacionalidades Jtalia: nacimien
1 3 2 La Europa de ¡os años cuarenta
Los comienzos del particularismo eslovaco
de esta nación histórica que Paiacicy definió en su Historia de
Bohemia! Frantisele Ladislas Rieger ( 1 8 1 8 - 1 9 0 3 ) , el yerno de
Eti Eslovaquia, la propaganda de Havlitchek se enfrenta con las
Palacky, considerado hombre de acción ¿no será él también, con los
primeras manifestaciones del particularismo lingüístico. Contraria-
Viejos checos, un campeón del "derecho de estado", es decir de la
mente a los campeones del "derecho histórico", Havlitchek desea,
reconstitución del reino de San Wenceslao? La Dicta, que desconocía
mucho antes que el presidente Tomas Garrigue Masaryk (1850-
la existencia de la plebe checa del campo y las ciudades, basa sus
1937), la anexión a Bohemia, Moravia y Silesia de una Eslovaquia
pretensiones en trasformarse en una verdadera asamblea legislativa
liberada del yugo magiar. Este viejo seminarista, que rechazó "la
en el "contrato fundamental" caro al "despertador de la conciencia
capucha negra que llevaban los asesinos romanos de Jean Huss",
nacional checa" (J. A n c e l ) . Tal es la significación de su petición
experimenta respecto a la lengua de los montañeses eslovacos en
de 1845. El mismo año, el conde de Thun reclama vanamente de
su mayoría católicos, el mismo desprecio que los grandes intelec-
la nobleza el respeto de la lengua y la cultura checas.
tuales a quienes reprocha falta de realismo. Los eslovacos Kollar y
El año 1845 marca también, con la fundación de la Gaceta de
Chafarik (el primero es pastor, el segundo es hijo de un pastor), el
Praga y de la Gaceta eslovaca, los comienzos del movimiento
moravio de los confines eslovacos Palacky, nutridos de prejuicios
democrático checo y de la autonomía lingüística eslovaca. L a acción
anticatólicos, identifican al pueblo eslovaco con la minoría luterana
de la Gaceta de Praga y su ardiente animador Havlitchek se inscribe
que escapó a las persecuciones. La preminencia de la lengua del
en un clima liberal y nacional de inspiración occidental que favo-
hussitismo sobre los dialectos eslovacos es para ellos una evidencia.
rece, desde el advenimiento de F e r n a n d o I, el aflojamiento del
Cuestionada ya por el abate filólogo Anton Bernolak ( 1 7 6 2 - 1 8 1 3 ) ,
control policial. Leipzig, centro universitario y metrópoli de la
es ardientemente combatida por el clero católico, que ve en el
edición y del comercio de libros, derrama en la vecina Bohemia,
checo la lengua de escritores herédeos germanizados. Contra la
a pesar de la censura, folletos y traducciones aptas para seducir
chequización, la influencia cultural de activos focos alemanes y sobre
a jóvenes espíritus hastiados de las frías demostraciones de la
todo contra la magiarización espontánea o forzada (en 1847, el
"ciencia histórica". Las Paroles d'un croyant, el Livre du peuple de
magiar reinplazará al latín como lengua administrativa), un protes-
Lamennais, Le peuple, de Michelet, no separan el sueño de la acción.
tante romántico f o r m a d o en las universidades alemanas, Ludovico
Admirador de Lamennais, Havlitchek denuncia el extraordinario
Stúr ( 1 8 1 5 - 5 6 ) , toma la dirección de un movimiento que aspira a
desfase entre las grandiosas visiones del paneslavismo intelectual
unir, más allá de las religiones, a todos los eslovacos. Patriota
checo, la exaltación nacionalista del suplicio de Huss y del desastre
susceptible, Stúr elige como lengua literaria el dialecto de Eslova-
de la M o n t a ñ a Blanca y una colaboración de hecho con la nobleza
quia central, el más alejado del checo, al que se considera muy
germánica católica. Porque vale más actuar por el pueblo que
contaminado por el alemán. Este programa se expresa en la Gaceta
"hablar de él", Havlitchek prepara el advenimiento de un estado
eslovaca y suscita la eclosión de una poesía inspirada en las tradi-
democrático emprendiendo la educación política y nacional de
ciones populares. La escisión lingüística nacida en una región que
un pueblo adormecido. Impedido por la censura de exponer
no formó jamás un estado, separa por ahora a las élites de dos
un programa necesariamente abstracto, el astuto periodista concede
pueblos estrechamente confundidos en la obra de los "desperta-
u n amplio espacio a las novedades de Irlanda: el coraje de una
dores" checos. Ella no impedirá a Stúr de acercarse a los checos
pequeña nación que resiste a la opresión de un estado poderoso
en 1848 ni preconizar en 1850 un estado "checoslovaco". Con el
adquiere, para los lectores de la Gaceta de Praga, el valor de un
desarrollo de la instrucción, ella acentuará entre pueblos seme-
ejemplo. Los estudiantes y algunos burgueses de Praga son con-
jantes y vecinos incomprensiones que sobrevivirán a la euforia de '
quistados. Ellos revelarán sus sentimientos democráticos y patrió-
1918.
ticos completamente nuevos en el trascurso del chispazo de la
primavera de 1848.
1 3 4 La Europa de los atìos cuarema La Europa de las naciomiidades 135

IV. LA TRANSILVANIA, CUNA DEL RENACIMIENTO RUMANO uniate" (J. Ancel). Una parte de los ortodoxos había roto en 1700
EN LOS PRINCIPADOS OTOMANOS con una Iglesia cuyo jefe residía cerca del sultán y adhería a la
religión del emperador. Aislada, la Iglesia ortodoxa dormita. En
El papel de los rumanos de Transilvania en la formación de Ru- , contacto con el catolicismo, el clero uniate se renueva intelectual-
mania es paralelo al de los servios de la Vaivodia, incluso de los mente y toma conciencia de su misión nacional. Los sacerdotes
croatas, en la creación de Yugoslavia: la base intelectual de la formados en R o m a descubren ahí la Antigüedad latina y sus prede-
nación se ha fijado en el imperio austriaco, la base material en cesores, los d a d o s . Blaj, sede episcopal desde 1738, se convierte
un estado que es la resultante de la desintegración del imperio con su seminario en el centro del romanismo y del rumanismo, la
otomano. La unión de Moldavia y Valaquia b a j o un príncipe cuna de la Escuela transilvana. Tres hombres salidos de este medio
heredero ( 1 8 5 9 ) es más tardía que la autonomía servia ( 1 8 2 9 ) . clerical personifican el renacimiento espiritual: S. Klein (1745-
Porque el zar, que se esfuerza por desnacionalizar a los rumanos 1806), autor de la primera gramática "dacio-rumana", G. Sincai
de la Besarabia anexada en 1812, trata de sustituir definitivamente (1754-1816) que escribió una Crónica de los rumanos. P. Maior
su protectorado a la soberanía declinante del sultán en Moldavia (1755-1821), autor de una Historia de los orígenes rumanos en
y Valaquia. Quebrando la oposición rusa. Napoleón III responde a Dada. El mito dacio será, con la exaltación de la lengua nacional
las expectativas de intelectuales que en 1848 impulsaron la admi- escrita en caracteres ya no cirílicos sino latinos, el elemento esencial
ración por Francia hasta querer imitar su ejemplo revolucio- del movimiento rumano. El clero uníate es el propagador de esos
nario, mientras que sus compatriotas de Transilvania se levantaban temas ante los campesinos de Transilvania.
contra el imperialismo magiar. Dependencias de Turquía puestas b a j o el protectorado ruso que
Transilvania será incorporada a Rumania recién en 1918. Fue reglamenta el tratado de Adrinópolis U 8 2 9 ) , los principados de
sin embargo en esta provincia, una de las más atrasadas del Moldavia y Valaquia (3.300.000 habitantes en 1 8 5 2 ) , están po-
imperio austriaco, que nació la idea de unir las poblaciones de blados por campesinos miserables y grandes propietarios del mismo
lengua latina que separa la imponente barrera de los Cárpatos. origen, los boiars que viven en un lujo estridente y a menudo han
Conquistada por los Habsburgo en 1699, pertenece a la cotona adoptado el griego. El clero ortodoxo, los gobernadores (hospodars)
de San Esteban. Los rumanos (alrededor de dos millones) son y su entorno fueron los agentes de la helenización de las clases altas.
siervos. Poseedores de terrazgos insignificantes (promedio tres hec- Los prelados y los superiores de los monasterios "dedicados a los
táreas), su sujeción no es solamente social sino económica: consti- Santos Lugares" son griegos de Constandnopla. Lo mismo ocurrió
tuyen para los grandes propietarios nobles magiares (menos de hasta 1822 con los hospodars nombrados por el sultán. En 1821,
10.000) una mano de obra explotable a discreción. En su país, son Ypsilanti, hijo de un hospodar y ayudante de campo del zar, ¡creyó
considerados extranjeros. Cuando la Dieta, a la que no se convo- poder preparar la insurrección de Grecia levantando a los boiars
caba más desde 1809, se reúne nuevamente en 1834 en Kolozsvar helenizados de Valaquia! Contra este movimiento, un boiar, Vladi-
( C l u j ) , se compone de tres "naciones": magiares, sajones (colonos mirescu, hizo un vano llamamiento a los campesinos a quienes el
de origen germano) y szeklers (campesinos libres de origen magiar clero predicaba la resignación y no el amor a la patria. Sus procla-
o magiarizados). Los debates oponen a dos aristocracias minori- mas ( " ¿ Q u é pueden tener en común los d a d o s y los helenos?")
tarias en el país: los alemanes desearían la anexión de Transilvania testimonian la penetración de las ideas venidas de más allá de los
a Viena; los magiares, más numerosos, su incorporación al reino Cárpatos. E n el trascurso de los años veinte, la nobleza de los
de Hungría. principados comenzó en realidad a reconciliarse con su pasado: a
Y a en esta época, el movimiento nacional rumano es una reali- invitación de los boiars, un profesor de Hermannstadt (Sibiu),
dad. Los "despertadores" de la nación son, como en Bohemia, Gheorghe Lazar ( 1 7 7 9 - 1 8 2 3 ) , fundó en 1816 una escuela rumana
gramáticos e historiadores. Estos intelectuales no están separados en Bucarest. Recurrir a profesores transilvanos fue desde entonces
de los campesinos analfabetos y creyentes. El espíritu rumano se una moda que consagró la ruptura de los boiars con la cultura
desarrolló "a la sombra de las iglesias y sobre todo de la iglesia helénica.
i 24 La Europa de los años cuarenta La Europa de las nacionalidades 137

Buscando aumentar su influencia, Turquía y Rusia toman me- patriota. En Moldavia y en Valaquia, la propaganda en favor de la
didas que refuerzan el sentimiento nacional de las clases cultivadas. unión de los principados es un tema familiar. Profesor de historia
Desde la revuelta de Ypsilanti, los griegos habían perdido la en lassy, Kogalniceanu ( 1 8 1 7 - 9 1 ) , hijo de un boiar, plantea,
confianza de Constantinopla; el sultán eligió desde entonces a los reclamando la reunión de todos los rumanos, la cuestión de la "gran
hospodars en la nobleza autóctona. Después de la guerra ruso- Rumania" ( 1 8 4 3 ) . El cónsul de Rusia hizo suspender su curso.
turca, el general Kisselef, comandante de las tropas rusas de
ocupación, dota a Moldavia y Valaquia de constituciones idénticas
( 1 8 3 1 - 3 2 ) . Dos asambleas legislativas {divans) formadas por El mito del paneslavismo
boiars, prelados y algunos representantes de las ciudades (nadie
piensa en incluir a los delegados del campesinado), eligen príncipes Puesto que los principados son sólo una carta de triunfo en un
vitalicios. Así, las consideraciones de política exterior conducen a juego cuyo premio es el acceso al "mar libre". Nicolás I, enemigo
la Rusia autocràtica a crear en su frontera dos embriones de estados de las agitaciones revolucionarias, no podría además sostener a un
constitucionales, aristocráticos por cierto pero rumanos. Contraria- pueblo latino permeable a las doctrinas subversivas de Occidente.
mente a las esperanzas de San Petersburgo, los principados tratarán Muchos contemporáneos, especialmente alemanes, sospechan en
de unirse y, lo que es más, se inspirarán en ideologías que el zarismo cambio que quiere incorporar a su imperio a todos los pueblos
execra. eslavos. El eslavismo sentimental y vago de un Kollar o de un
Chafarik deja indiferente al zar; más bien él une su voz al coro que
El espíritu nacional ya no es más, a comienzos de los años
impulsa al emperador a prohibir la propaganda "iliria". El panes-
treinta, una importación transilvana. Un alumno de G. Lazar, el
lavismo político dejará de ser un fantasma b a j o el reino de su
valaco Juan Radulescu Eliade llamado Radulesco ( 1 8 0 2 - 7 0 ) ,
hijo Alejandro II ( 1 8 5 5 - 8 1 ) .
gramático y periodista, funda la primera hoja rumana, el Correo
rumano. El moldavo Gheorghe Asachi ( 1 7 8 8 - 1 8 6 9 ) publica en
lassy la Abeja rumana. Esta prensa difunde las obras de escritores
que miran hacia Occidente. E n Transilvania la latinidad se expresa, Conclusión: la lealtad de las nacionalidades
b a j o el impulso de la iglesia uniate, en el fervor romano y católico.
En Moldavia y Valaquia toma la forma de una admiracióii deli- El despertar de las nacionalidades eslava y rumana no por ello
rante por las letras francesas: con igual pasión se traducen e imitan deja de permanecer como la realidad más importante de fines de
Boileau, Voltaire, Bernardin de Saint Pierre, Lamartine, Hugo . . . los años cuarenta. Visto de lejos, cuestiona la obra de varios siglos:
Producción mediocre, que testimonia una voluntad febril por darse se han anudado lazos entre las provincias austríacas y los países
de la Corona de San Esteban, entre el imperio de los Habsburgo
lo más pronto posible una literatura nacional, impulsa a jóvenes
y el imperio otomano. En realidad, muchos movimientos nacio-
nobles, a hijos de burgueses o campesinos enriquecidos a proseguir
nales no son más que movimientos de intelectuales, pero la acción
sus estudios en la nueva Atenas: en París, los moldo-valacos
mediadora de los cleros (en Croapia, en Transilvania) ante las
aprenden que nacionalidad y democracia son inseparables.
masas rurales no puede negarse. Sin duda, las aspiraciones de los
A fines de los años cuarenta, el sentimiento de una comunidad siervos son ante todo y en todas partes sociales, pero no pueden
rumana progresa en Austria y en los países del Danubio. E n Tran- dejar de colorearse de pasiones nacionales frente a señores de otro
silvania, la idea nacional se nutre de la resistencia a la magiarización gmpo lingüístico.
que pesa sobre los rumanos tanto como sobre los eslavos. Simeón
Barnut ( 1 8 0 8 - 6 4 ) , hijo de un siervo, ex seminarista de Blaj, no se La armonía que reina entre los teóricos de las nacionalidades
contenta con celebrar a T r a j a n o : defiende los derechos de la lengua (el cisma lingüístico eslovaco está en sus comienzos) se refuerza
rumana y exige el reconocimiento de la "cuarta nación". La misma con un odio casi general contra los magiares (con excepción de la
Iglesia ortodoxa sale de su sopor. Con la elevación de Saguna al nobleza polaca de Galitzia, cuyo sentimiento antigermánico la im-
pulsa a una entente con los aristócratas de H u n g r í a ) . El deseo de
episcopado ( 1 8 4 7 ) está dirigida, como su rival uniate, por un
138 La Europa de los años cuarenia
Vii. M A L I A : DE LA E X P R E S I O N ( Ì E O G R A F I C A
AL NACIMIENTO DE LA CONCIENCIA NACIONAL
escapar a su opresión no alimentó nunca el pensamiento de dejar el
imperio.
Aunque los magiares, los más ardientes en reivindicar atribu-
ciones ampliadas por su capacidad para pulverizar las minorías
lingüísticas, pretenden ser también fieles súbditos del Habsburgo
"rey de Hungría", el gobierno imperial es sensible al tono de los
debates de la Dieta, a la violencia verbal de un Kossuth. En
1846, Metternich afirma que Hungría está "en la antecámara de la
revolución".
La revolución liberal, nacional y antialemana estallará fuera del Por su presencia en la península y su influencia sobre los asuntos
imperio, en ese dominio reservado de Austria que es Italia desde germanos, Austria estableció lazos entre la historia de Italia y la
que el Habsburgo agregó a sus coronas la de rey de Lombardo- de Alemania. Los movimientos revolucionarios de 1831, que
Véneto. concentran su ejército y su diplomacia en Italia, favorecen, como
se ha visto, las agitaciones liberales alemanas; su fracaso provoca
el retorno de la reacción en los estados de la Confederación. Las
revoluciones italianas y la guerra con Cerdeña contribuyen hasta el
verano de 1848 a paralizar la restauración en el imperio y la acción
contra el movimiento unitario alemán. La derrota de Austria en
Sadowa ( 1 8 6 6 ) conlleva su expulsión de Alemania y de Italia.
Oteos acercamientos son clásicos: una alta civilización, aspiraciones
liberales y nacionales, un estado portador de la idea unitaria
(Prusia, C e r d e ñ a ) , un soberano romántico (Federico Guillermo IV,
Carlos Alberto) con sucesor realista (Guillermo l, Víctor Manuel
11) bien servido por un estadista maquiavélico (Bismarck, Ca-
vour) . . . Pero más allá de esas apariencias ¡cuántos contrates
políticos, morales, económicos y sociales!

I. LA RESTAURACIÓN Y SUS CONSECUENCIAS

Italia, como Alemania, había sufrido profundas trasformaciones


sociales y políticas bajo la presión francesa. Las primeras fueron
durables, las segundas efímeras. El clero perdió definitivamente sus
diezmos y la nobleza sus censos. Al reconstituir los poderes desti-
tuidos, las potencias reunidas en Viena parecían actuar de acuerdo
con una opinión pública antifrancesa.
140 La Europa de ¡os años cuarenta Jtalia: nacimiento de la conciencia nacional 141

CI triunfo del absolutismo y de¡ particularismo El norte de la península está repartido entre dos potencias lla-
bajo la protección de Austria madas a enfrentarse en 1848-49 en un combate desigual. El Lom-
bardo-Véneto (cuatro millones y un cuarto de habitantes) resulta
El término Restauración adquiere en Italia su pleno significado. de la anexión a los ducados austríacos de Milán y Mantua, de la
parte continental de Venecia. En calidad de virrey, un archiduque
Mientras que en Alemania subsiste la obra napoleónica de con-
se dedica a explotar estas ricas provincias en beneficio del tesoro
centración territorial, se restablecen todos los viejos estados italianos,
imperial. Gracias a los procedimientos administrativos y policiales
excepto Génova y Venecia.
expeditivos, hace callar a los descontentos. Si el campesinado está
A ambos lados del estrecho de Messina, el reino de las Dos inerte, la burguesía comerciante e industrial siente, especialmente en
Sicilias, el estado más vasto y más poblado (siete millones y medio las épocas de dificultades económicas, el peso de las exacciones
de habitantes) ofrece un mismo telón de fondo; gran propiedad fiscales; la numerosa nobleza reprocha a Austria el no haber resta-
noble y eclesiástica, campesinado miserable, bandolerismo, corrup- blecido los derechos señoriales y reservar los altos empleos a los
ción de funcionarios, arbitrariedad de un Borbón despótico (Fer- tedeschi. La presencia austríaca será cada vez más considerada
nando II, 1 8 3 0 - 5 9 ) ; sin embargo, la turbulenta Sicilia sueña con una como una ocupación alemana.
autonomía que garantizara el retorno de la constitución parla-
mentaria de 1812, regalo británico mal adaptado al clima medi- Frente al Lombardo-Véneto adosado (por Trentino, Trieste,
terráneo. Istria y Dalmacia en parte itahanos) a un poderoso imperio, el
reino de Cerdeña con sus cuatro millones y medio de habitantes
Los estados de la Santa Sede (dos millones y medio de habi-
ofrece una pálida figura. No es una Prusia, apenas una Baviera.
tantes) forman en cambio un conglomerado heterogéneo; Roma es
Además de los viejos territorios —Cerdeña, Piamonte; Saboya y
una dependencia económica de la corte pontificia; los campesinos del
Niza retomadas a F r a n c i a — ha adquirido la ex república de Gé-
Lacio y de la Umbría cultivan indolentemente los vastos dominios
nova. Unicamente la activa e inquieta burguesía del gran puerto
de algunos potentados; en las Marcas ( A n c o n a ) y sobre todo en las
causa algunas preocupaciones a la monarquía, paternalista b a j o
Legaciones (Bolonia y su universidad liberal. Ferrara, Ravena)
Carlos Félix ( 1 8 2 1 - 3 1 ) , largo tiempo absolutista b a j o Carlos
pequeños burgueses liberales y artesanos descontentos aborrecen a
Alberto ( 1 8 3 1 - 4 9 ) . El rey se apoya en la sumisión del campesinado,
los dignatarios de la Iglesia (las legaciones están administradas por la docilidad del clero y la fidelidad de la nobleza y del ejército.
cardenales-legados, de ahí su nombre, las otras provincias por
obispos) que, en nombre del papa, ejercen una autoridad discre- Así, en la Italia abandonada a la influencia de Austria, ínfimos
cional apoyada en una vigilante policía. En la primera oportunidad, matices separan a los regímenes políticos. Las libertades indivi-
se enciende la chispa revolucionaria y abrasa a los pequeños estados duales dependen del capricho de príncipes al margen de todo control:
de Italia central confiados, como consecuencia de las combinaciones ninguna asamblea electa; a diferencia del liberalismo alemán del
vienesas, a príncipes emparentados con los Habsburgo. El gran sur, el liberalismo italiano está privado de la tribuna parlamentaria,
ducado de Toscana (un millón y medio de habitantes) acrecentado medio de formación y propaganda. Obligado a permanecer en la
en 1829 con el principado de Massa y Carrara, pasa por ser, clandestinidad, no sale sino para seguir los caminos de la violencia.
bajo el gobierno paternalista de Leopoldo II ( 1 8 2 4 - 5 9 ) un oasis A causa de largos siglos de dominación extranjera y de fragmen-
liberal donde los profesores de la universidad de Pisa, los escritores tación política, la visión de los intereses generales se ha oscurecido
de Florencia, no están sometidos a ningún molesto control. El en hombres conscientes de pertenecer a la misma civilización, de
ducado de Parma, Plasencia y Guastalla ha sido concedido en forma hablar el mismo idioma, de profesar la misma religión. La partici-
vitalicia a la ex emperatriz María Luisa. El general austríaco pación en las "guerras de liberación" ha sido mediocre; las tímidas
Adán Adalberto Niepperg, su favorito y luego su esposo, se esfuerza reivindicaciones no serán llevadas más allá del plano provincial o
por gobernar como déspota ilustrado poblaciones esencialmente municipal. La caricatura de instituciones unitarias, que la Ale-
rurales. El ducado de Módena, también agrícola, obedece la férula mania nacional y liberal rechazó con indignación, hubiera sido para
de Francisco IV de Este ( 1 8 1 4 - 4 6 ) . Italia un inmenso progreso. ¡La oposición del papado y la monarquía
142 La Europa de los anos cuarenta Italia: nacimiento de la conciencia nacional 143

sarda, más larde símbolos de la idea unitaria, impidió a Mettcrnich, nobleza y a la burguesía urbana, es aceptable, en el estado ponti-
que quiso crear una confederación italiana, ser considerado por la ficio y en las Dos Sicilias reina una miseria increíble. En ésas
historia como el predecesor inmediato de Cavour! Así Italia ha regiones sin caminos, un proletariado super abundante e ignorante
vuelto a ser, según la expresión famosa del canciller, "un grupo de cultiva mal los latifundia de los grandes señores. A falta de activi-
estados independientes ligados solamente por una misma expresión dades más honorables, el contrabando y el bandolerismo representan
en Italia meridional los recursos complementarios: el bandido cala-
geográfica".
brés no es un personaje de ficción.
El artesanado es incapaz de absorber la saturación del campo.
Economías atrasadas y separadas El número de obreros a domicilio y de pequeños talleres parece
elevarse a un cuarto de la población campesina. Algunos artesanos
L a incoherencia y la falta de coordinación de los movimientos trabajan un tiempo en Francia y en Inglaterra pero son menos
políticos italianos están todavía reforzados por economías atrasadas aptos que los alemanes para impregnarse de ideologías extranjeras,
y compartimentadas, por sociedades diversificadas y separadas. La como lo comprueba Mazzini con amargura. El despegue industrial
vida económica, que a partir de los años treinta sufrirá lentas tras- en el norte, en Toscana, hasta en Nápoles entre 1830 y 1840 no
formaciones, se resume en lo esencial a una agricultura pobre. debe crear ilusiones (las primeras líneas férreas abiertas en 1839
Ciertos argumentos fiscales tienen por consecuencia superponer a y 1840 de Nápoles a Portici, de Milán a Monza están al servicio
las fronteras barreras aduaneras. En el Lombardo-Véneto el protec- de las cortes; la red piamontesa de interés económico entrará a
cionismo toma la forma de una explotación colonial que tiende, como
funcionar hacia 1845; en 1859, Italia explotará menos de 2.000
en Hungría, a compensar la pérdida de los mercados del Zollverein.
kilómetros). La fábrica sigue siendo la excepción en el algodón
Las Dos Sicilias y el estado pontificio son los bastiones de la reac-
(Novara, Monza, Florencia, Nápoles) y la metalurgia (Turín, Li-
ción y del proteccionismo. El ciego proteccionismo piamontés
vorno, Nápoles). En total, resultados mediocres: Italia consume
durará hasta fines de los años cuarenta. Solamente la Toscana
tres veces menos algodón por habitante (0,1 kg) y produce dos
forma una pequeña zona franca en el corazón de Italia.
veces menos hierro fundido (2 kg) que España. La nueva bur-
guesía y el nuevo proletariado no cuentan para nada.
El poder social del clero y de la nobleza. Fiel a los papas que se apoyan en Austria para oprimir a sus
La insigniíicancia de las clases medias súbditos y a los príncipes que le dejan la dirección de la enseñanza
y la responsabilidad de la censura, el clero omnipresente (alrededor
La gran mayoría de la población continúa viviendo en su universo de 150.000 sacerdotes) se esfuerza por preservar a las masas de
restringido. La clase campesina que constituye su mayor parte influencias liberales y nacionales. De ahí la indiferencia religiosa
sufre un estado de "subdesarrollo" de tipo ibérico. A pesar de y el anticlericalismo de la mayoría de los primeros campeones de
una alta natalidad y una emigración insignificante (las saUdas la libertad y la unidad; de ahí también la larga serie de sus fracasos.
hacia el Nuevo M u n d o comienzan después de 1 8 7 0 ) , Italia habría Ninguna empresa puede triunfar sin el concurso del clero.
contado, en sus límites de 1914, 25 millones de habitantes en 1850
También de la nobleza. La clase feudal y guerrera, rústica y
contra 18 millones y medio en 1800, o sea un aumento del 35
grosera, que vive en sus tierras a la manera de los junkers y de la
uno de los más mediocres de Europa incluidos los de Portugal
pequeña nobleza magiar, sólo se encuentra en el Piamonte. Los
( 2 5 % ) y España (43 % ) . Las innovaciones de comienzos de los
años treinta se limitan a la planicie del P o ( P i a m o n t e , Lombardia) grandes propietarios del estado pontificio, de Calabria y Sicilia
y a algunas zonas del centro; la mayoría de los propietarios, ruti- residen en sus palacios próximos a la corte y sus sinecuras. Como
narios y pobres, no participa en la renovación. Mientras que bajo en términos generales los nobles llevan una vida urbana difícil
un cielo sereno la suerte de aquellos que, a fuerza de ahorro, agregan desde que la dominación francesa abolió los privilegios señoriales,
a la explotación de su magra parcela la de tierras arrendadas a la se dedican a conservar el monopolio de los altos grados y empleos
144 La Europa de ¡os años cuarenta Jtalia: nacimiento de la conciencia nacional 141

elevados. En Alemania, el burgués exitoso sueña con la partícula;* nobleza apoyada por el clero y el populacho reclama, con la puesta
en Italia, la conquista de un título es la condición para el ascenso en vigor de la constitución siciliana de 1812, la independencia.
social. Los soberanos respondieron generosamente a las solicitudes Mientras que los liberales de Nápoles y los insurrectos de Palermo
de la ambición y la vanidad: condes, marqueses, duques y príncipes discuten, Austria, mandataria de la Santa Alianza, envía un ejército
abundan. La nueva nobleza no es la menos ardiente en confinar que aplasta a Guillermo Pepe y ocupa Nápoles el 24 de marzo de
a las clases medias en el ejercicio de las profesiones liberales. 1821. Un mes más tarde, será restablecido el orden en el norte. El
En cambio, en las universidades, que ignoran las barreras socia- odio a los tedeschi no anima solamente al ejército piamontés, sino
les, se reúnen en torno de los mismos ideales los hijos de la nobleza también a la juventud culta. Ese odio conduce a los confabulados
y de la burguesía urbana. Ciertamente, las universidades italianas a preparar, junto con los carbonari del Milanesado y de los estados
no han tenido el papel exclusivo de las universidades aleinanas en de la Iglesia, un levantamiento nacional. Durante largos meses los
la formáción del sentimiento nacional, y la misión de Italia no ha conspiradores vacilan; deciden pasar a la acción cuando las tropas
sido predicada por profesores de reputación internacional. Sin austríacas se ponen en movimiento contra la revolución napolitana.
embargo, como en Alemania y por las mismas razones, las 24 Su jefe, el conde Santorre di Santarosa ( 1 7 8 3 - 1 8 2 5 ) , un romántico
universidades (¡enorme cantidad!) fueron, en la época del particu- campeón de las nacionalidades oprimidas — m o r i r á por la causa
larismo y de la reacción, los focos de la idea nacional y de un griega—, cree un poco superficialmente haber ganado a Carlos
pensamiento relativamente libre: Bolonia es el centro de la Alberto, príncipe de Carignan. La insurrección estalla el 10 de
insurrección de 1831; en 1848, profesores y estudiantes de Pavía, marzo en Alejandría; un gobierno provisional proclama al rey del
Génova y Pisa se levantan sin distinción de origen contra la domi- Piamonte rey de Italia, ¡y pretende imponerle a él también la
nación austríaca. constitución española de 1812! El muy reaccionario Víctor Manuel
I abdica en favor de su hermano Carlos Félix, entonces ausente.
Carlos Alberto no ha participado en el pronunciamiento pero, como
n. DEL LIBERALISMO DE LA CARBONERÍA A LA DEMOCRACIA regente revolucionario, otorga la constitución liberal, que a su vez
UNITARIA DE LA JOVEN ITALIA. LA MÍSTICA DEL COMPLOT rechaza Carlos Félix. Desde marzo de 1821 data esta reputación
de versatilidad y de hipocresía que tanto pesará, en el trascurso de
Romántica y de tradición mediterránea es la mística del golpe urdido los dramas de 1848-49, sobre la política del "Hamlet italiano". El
por una minoría de conspiradores. Entre los complots de los carbo- 8 de abril, los austríacos dispersan en Novara a las desalentadas
narios y muchos intentos italianos de 1848, la continuidad es tropas de Santarosa. Ni la idea nacional ni la idea liberal han
evidente: temperamentos proclives a la acción desatinada se sacudido la pasividad de las poblaciones del norte. En Sicilia, si las
desalientan cuando descubren la inercia de las masas, las resis- clases poptilares habían entrado en escena era solamente por odio
tencias regionales, el poder de Austria. En 1820-21, Italia del norte hacia el régimen napolitano, cualquiera fuera. M á s sumisa que
e Italia del sur aunque separadamente, tratan de seguir el compás nunca a la tutela de Austria, que durante varios años ocupa
de España: oficiales miembros de los carbonarios se levantan Nápoles, Ancona y Ferrara, Italia recae en su sopor. Los revolu-
siguiendo el ejemplo de sus colegas ibéricos. El general G. Pepe cionarios se refugian en Ginebra, Londres, París.
( 1 7 8 3 - 1 8 5 5 ) que defenderá a Venecia insurrecta en 1848-49, Después de Julio, París se convierte abiertamente en el centro
impone en julio de 1820 al rey de las Dos Sicilias la constitución de la agitación con un Comité de la emancipación italiana. La
española de 1812. Este movimiento, manifestación de un Uberalismo insurrección de la Polonia rusa, que retiene la atención de Austria
particularista, provoca en Sicilia una violenta agitación separatista: en Galitzia, estimula los ardores. Atrayendo hacia una celada a
los burgueses de la costa oriental reivindican la autonomía; la Cándidos jefes liberales (3 de febrero) el duque de Módena
provoca la explosión. La revolución lo derroca, expulsa a María
Luisa de Parma, triunfa en unos pocos días en la mayoría de las
» Transcribimos literalmente la expresión del original. Se refiere, por ciudades pontificias. N o desborda la Italia central donde, por otra
cierto, a la "partícula nobiliaria", a la que precede a un patronímico ( 'de ).
parte, los campesinos permanecen indiferentes u hostiles ante
[N. del E.]
Jtalia: nacimiento de la conciencia nacional 141
1 4 6 La Europa de ¡os años cuarenta
cerca de la de los demócratas franceses. C o m o ellos y contra la
movimientos conducidos por abogados, comerciantes y artesanos
mayoría de los patriotas italianos, Mazzini es el campeón de una
a menudo anticlericales. El acceso de la pequeña burguesía a la
república unitaria, democrática y social. Este programa grandioso
vida política es una novedad en relación con las revueltas de
supone la abolición de las soberanías principescas, del poder tem-
1820-21. Los revolucionarios de Módena, Parma y Bolonia se
poral del papa en cuya dependencia permanecen tantos católicos
ignoran. En Bolonia los amigos de Philippe Buonarotti, especial-
dentro y fuera de Italia, y la expulsión de Austria. Con la ayuda de
mente el barón Zucchi ( 1 7 7 6 - 1 8 6 4 ) , un ex general del Gran Dios — ¡ u n Dios extraño al cristianismo!— y de la humanidad, el
Ejército, forman un gobierno que proclama la disolución del poder pueblo cumplirá su misión nacional e internacional. Este mesianismo
pontificio y convoca a una Asamblea de diputados de las provincias hostil al mesianismo francés sueña con una revolución italiana
libres de Italia: el 23 de febrero se constituye el estado (¡virtual!) surgida de movimientos europeos fomentados simultáneamente por
de las Provincias Unidas de Italia central. Esta pomposa fraseología italianos. Si la fundación de la Joven Europa es la expresión de un
disimula un incurable particularismo. Los boloñeses han obstaculi- pensamiento original, los medios empleados recuerdan al pasado.
zado un golpe de mano contra R o m a ; más aún, con el pretexto Mazzini había condenado las improvisaciones de la carbonería] sin
de hacer respetar su neutralidad, desarman a los liberales de embargo, desde 1833 hasta 1845 renacen conspiraciones incesan-
P a r m a y Módena que huían ante los austríacos. Vencido Zucchi, es temente aventadas y estallan insurrecciones siempre mal preparadas.
condenado a veinte años de prisión (la revolución de 1848 lo La participación de polacos en la expedición contra Saboya da, por
liberará). Austria restaura el poder pontificio. una vez, una tonalidad europea a las locas empresas puramente
Sin embargo, en adelante ya no tiene el campo libre en Italia. italianas. E n 1844, dos nobles venecianos, oficiales de marina aus-
Para una parte de la izquierda parlamentaria francesa de los miem- tríacos, los hermanos Atilano y Emidio Bandiera, desertan-y desem-
bros de las sociedades secretas, de los bonapartistas (el futuro barcan en Calabria con un p u ñ a d o de conjurados: caen en una
Napoleón III y su hermano Carlos Napoleón participaron en la emboscada y son fusilados con siete compañeros. El sacrificio de
empresa contra R o m a ) , los asuntos italianos son, casi como los esos jóvenes de alto rango al patriotismo más puro tiene una
polacos, asuntos franceses. El pacífico Luis Felipe es obligado a repercusión moral enorme. Prácticamente, asesta un golpe fatal a
tomar en cuenta las tendencias intervencionistas de las clases popu- un movimiento cuyo jefe prepara desde Londres, sin tomar jamás la
lares parisienses. Casimir Périer exige que Austria evacue los dirección, operaciones sin esperanza.
estados pontificios. A comienzos de 1832, los austríacos vuelven a
ocupar Bolonia y Ravena, a instancias del acorralado papa; pero
los franceses se instalan por su cuenta en Ancona, que recién aban-
UI. EL R I S O R G I M E N T O : LOS ESCRITORES AL SERVICIO DE LA IDEA
donarán a la partida de los austríacos, en 1838. Bajo la presión de
NACIONAL. ¿ALBERTISMO O NEOGÜELFISMO?
la opinión francesa, la política internacional se apodera de la
cuestión italiana.
Los liberales que habían esperado el concurso de Francia, juzgan Anticarbonarista y antimazziniano, el Risorgimento (resurrección),
que debe su nombre al periódico de Camilo Benso, conde de
irrisoria su intervención en 1832. Renacen las desconfianzas ador-
Cavour, es también el heredero del romanticismo. Caso contrario
mecidas desde la caída de Napoleón. Los repetidos fracasos del
del romanticismo francés, el italiano fue constantemente liberal y
carbonarismo, incapaz — a pesar de recientes adhesiones populares—
nacional. Después de 1830, la literatura se identifica casi con la
de mover a las masas, lo desacreditan. Con su Joven Italia, Giuseppe
política. Los grandes poetas Alessandro Manzoni ( 1 7 8 5 - 1 8 7 3 ) ,
Mazzini ( 1 8 0 5 - 7 2 ) se esfuerza por captar la corriente anticarbo-
patriota prudente (¡su oda Marzo 1821 a la revolución piamontesa
narista y antifrancesa: la educación moral y espiritual del pueblo
recién será publicada en 1848!), y Giacomo Leopardi ( 1 7 9 8 - 1 8 3 7 ) ,
es la condición para una liberación que nada deberá a Francia. Su
crítico de los políticos liberales, se comprometen tímidamente.
ideal es la nación. Él no la imagina, a la manera alemana, como un Escritores de segundo orden exaltan con éxito a la patria y la
organismo vivo impulsado por una fuerza misteriosa. El idioma es libertad: Giovanni Niccolini (1782-1861 ), profesor en Florencia,
sólo uno de los elementos de un sentimiento consciente: " L a patria que compone tragedias de carácter evocativo (Arnaud de Brescia),
es ante todo la conciencia de la patria." Esta concepción está muy
148 La Europa de los años cuarenta Italia: nacimiento de la conciencia nacional 149

Francesco Gerrazz.i ( 1 8 0 4 - 7 3 ) , de Livorno, autor de novelas de demócratas enemigos del poder temporal, únicamente algunos
históricas {El sitio de Florencia de 1530) desprovistas de la calidad espíritus objetivos perciben las debilidades de un programa cuya
de Los novios ( 1 8 2 7 ) de Manzoni, pero que inflaman a la juventud realización se basa en tres apuestas: liberalización de un régimen
y harán de él un miembro del gobierno toscano en 1848. A imitación ultrarreaccionario, liquidación de los particularismos principescos
de Alemania (Barthold Georg Niebuhr representa a Prusia ante la y especialmente la pasividad de Austria. Al año siguiente, el conde
Santa Sede), la filologia y la historia se ponen al servicio de la Cesare Balbo ( 1 7 8 9 - 1 8 5 3 ) , piamontés refugiado durante mucho
patria. tiempo en Francia, publica en París la más grande refutación del
El sentimiento de una solidaridad económica parece haber sos- neogüelfismo. En sus Speranze d'Italia, título inspirado en las
tenido tibiamente la idea unitaria. Sin duda, una parte de la Speranze de Santarosa, que fue su jefe, Balbo denuncia la vanidad
burguesía, en formación en el Piamonte, Lombardia y Toscana, de las fanfarronadas antifrancesas (¡Gioberti, como Mazzini, anexa
deseaba la destrucción de las barreras aduaneras. Pero "un Zollve- Córcega!) y la pretensión de construir Italia ignorando Austria. L a
rein no es una patria" ( R e n a n ) . Sin duda los congresos, imhados irremediable debilidad de los italianos impone el recurso a una
de Alemania y que sesionaron cada año a partir de 1839 en una diplomacia paciente que podría alejar del Lombardo-Véneto a una
ciudad diferente, acostumbraron a algunas centenas de delegados a Austria extendida hasta los Balcanes. La casa de Saboya tomaría la
abordar los problemas económicos bajo el ángulo nacional. Pero dirección de la confederación imaginada por Gioberti. Desde 1845,
no concluyen en ningún programa político. este último parece haber sufrido la influencia de su crítico: en sus
El Risorgimento político es obra de escritores conscientes de la Prolegomeni del Primato, ataca vivamente a los jesuítas y omite
vanidad de las conspiraciones animadas por odio al catolicismo asignar un papel de dirección al papado.
y a su jefe. En la época en que Gregorio X V I ( 1 8 3 1 - 4 6 ) combate En ocasión de una última tentativa insurreccional de origen
a sus indóciles súbditos con la ayuda de mercenarios suizos y mazziniano en Rimini ( 1 8 4 5 ) , aparece en 1846 un violento pan-
voluntarios extranjeros, la idea de una Iglesia convertida en liberal fleto, Degli ultimi casi di Romagna (Sobre los últimos aconteci-
es audaz aunque común a una parte de los católicos: los de Irlanda, mientos en Romana), contra la administración interna de la Santa
Bélgica, el grupo de Lamennais: ¡Cuidémonos de imaginar influen- Sede y sus concesiones respecto a Austria. El pequeño folleto de
cias exteriores, puesto que la historiografía italiana afirma la Massimo d'Azeglio ( ( 1 7 9 8 - 1 8 6 6 ) , noble piamontés yerno de Man-
italianidad absoluta del Risorgimentol Sin embargo, es en Francia zoni y amigo de Balbo, contribuye —al menos tanto como la obra
donde desde 1836 Tommaseo ( 1 8 0 2 - 7 4 ) desea {Las nuevas espe- más elaborada de Balbo—, a acrecentar el número de aquellos
ranzas de Italia) un papa reformador que federe a los estados que, rechazando la mística de los complots, cuentan con el rey de
italianos. En 1843 se retoma esta tesis, con una fuerza incomparable, (Cerdeña para fundar la unidad. Se ha podido decir que creó un
en un libro de título deliberadamente provocativo {Del Primato verdadero partido, el partido albertista.
morale e civile degli Italiani) publicado en Bruselas por el abate Al menos hasta 1843, nada parece predestinar a Carlos Alberto a
Vincenzo Gioberti ( 1 8 0 1 - 5 2 ) . En el teólogo piamontés, que en un encarnar la idea nacional y liberal. Los patriotas recuerdan los
momento fue compañero de Mazzini, se reencuentran rasgos del bruscos cambios de opinión del príncipe de Carignan en 1821.
fundador de la Joven Italia, en particular la exaltación de un pueblo Carlos Alberto rechaza, como Federico Guillermo IV, el principio
que ha hecho todo lo que hay de grande en el mundo (¿Napoleón mismo de la constitución otorgada. Luego de los disturbios de
no es acaso un itahano?). La galofobia se alimenta del recuerdo de Italia central y de las amenazas de intervención de la monarquía de
los "perversos" que se apoderaron del papa y ocuparon Roma. Sin Julio, su política reaccionaria y sus sentimientos antifranceses lo han
embargo, el nacionalismo de Gioberti, menos exigente que el de acercado a Austria, con quien concluye secretamente una alianza.
Mazzini, apela no al espíritu de sacrificio sino a una agradable toma Y sin embargo, el equívoco regente de 1821 no ha olvidado
de conciencia de la grandeza de Italia. Se liga a las tradiciones jamás las intrigas de Metternich para separarlo del trono; durante
religiosas de la nación y las tendencias liberales que, b a j o la in- mucho tiempo, sus resentimientos pertenecieron al "secreto del
fluencia del abate filósofo Antonio Rosmini ( 1 7 9 7 - 1 8 5 5 ) , comienzan rey". Comienzan a traducirse en actos bajo el efecto de las cam-
a ganar a una parte del clero. Fuera de los jesuítas y de un puñado pañas que emprenden los piamonteses en favor de un monarca

i
142 Italia: nacimiento de la conciencia nacional
La Europa de los anos cuarenta 1 5 1

prctendiciamentc liberal. Se admite hoy que las reformas sardas son alcanzado a algunas sociedades secretas, la emancipación social se
más tímidas que las introducidas en la misma época en Toscana y confunde con la emancipación nacional.
también en las Dos Sicilias. Carlos Alberto actúa en la línea del Este punto de vista es también el de los demócratas, cuyas diver-
despotismo ilustrado: abolición de los últimos rasgos del régimen gencias versan sobre las instituciones. Mazzini había proclamado
señorial en la isla de Cerdeña, promulgación de códigos inspirados con claridad en 1840 que el mejoramiento de la suerte de los
en F r a n c i a . . . Algunos nobles cultos exaltan este riformismo trabajadores era la condición para la emancipación de Italia; sin
prudente y citan como ejemplo al rey que, a su pedido, impulsa la embargo, en vísperas de 1848, consagra lo mejor de sus fuerzas
agricultura, la industria, la construcción de vías férreas y atenúa el para defender con intransigencia su república unitaria. Más cons-
proteccionismo. En realidad, desde 1843 la defensa de los intereses ciente de la realidad, el historiador lombardo Cario Cattaneo
económicos piamonteses es, a la vez, origen de incesantes confhctos (1801-69) preconiza una federación de repúblicas italianas.
con Austria y oportunidad de manifestar el acercamiento de la casa La idea federal reúne a los partidarios del rey de Cerdeña; la
de Saboya a la causa de la independencia italiana. A los consejeros idea liberal los separa. Carlos Alberto no ha abandonado en
que temen las consecuencias de una guerra de tarifas, Carlos Alberto absoluto sus prevenciones contra el régimen constitucional. Su com-
replica orgullosamente: "¡Si el Piamonte perdiera Austria, ganaría portamiento acentúa la confusión que reina en los espíritus a
Italia!" comienzos de 1846. Una orgullosa concepción de la independencia
En un clima tenso, la nobleza piamontesa conservadora y particu- (Italia fara da se), que compartirán Mazzini y la mayoría de los
larista descubre en los libros de sus compatriotas los problemas Italianos hasta las derrotas de 1848-49, ligada a un carácter
vacilante relega a un lejano porvenir los sueños unitarios. Atentos
de la unidad nacional. Mientras el neogüelfismo la inquieta, con
a la formación de una opinión cada vez más hostil, los austríacos
sus abates democráticos que esperan la regeneración del estado de
comprueban los efectos perniciosos del "veneno de la propaganda
un papado amigo de Austria, el albertismo la seduce: el acceso
literaria". Pero Metternich no toma en serio las veleidades de Carlos
de su rey a la dirección de una confederación sería sin d u d a para
Alberto. L o imprevisible se produce en R o m a : la elección de Pío IX
ella, dueña ya de la administración sarda, una promesa de ascenso.
(17 de junio de 1846) trastorna las condiciones de la vida política
Y en fin, los jefes del movimiento son tranquilizantes. De origen
itahana y desencadena disturbios, de sur a norte de la península. La
aristocrático como Balbo, d'Azeglio o Cavour ( 1 8 1 0 - 6 1 ) , no tienen
carestía de los productos alimenticios y la desocupación les confieren
ninguna afinidad con los agitadores; piensan más en la liberación de un tono social.
Italia que en la libertad de los italianos. D'Azeglio es un esteta
fundamentalmente conservador; Balbo no piensa más que en la
unidad; Cavour, el más avanzado, es especialmente conocido por
su liberalismo económico de tipo manchesteriano. En su Risorgi-
mento fundado en Turín en diciembre de 1847, buscará ganar a las
clases medias reclamando un régimen constitucional con una asam-
blea reclutada sobre bases censitarias bastante amplias. La acción
del órgano albertista fue preparada por una afloración de escritos
que, abierta o clandestinamente, penetran en todos lados. La crítica
de la administración de la Santa Sede es un medio oblicuo de servir
a la causa de Carlos Alberto: Giovanni Durando ( 1 8 0 4 - 6 9 ) , un
oficial piamontés (que en 1848 dirigirá a las tropas pontificias), se
hace conocer proclamando la suspensión del poder temporal. El
odio a la dominación de los tedeschi es el factor esencial de la union
moral en torno a la dinastía sarda de una parte de las clases altas,
de la burguesía y del pueblo de las ciudades. En un país donde las
ideologías socialistas y comunistas llegadas de Francia sólo han
SEGUNDA FARTE

LAS REVOLUCIONES EUROPEAS


I. CRISIS ECONÓMICAS, SOCIALES, POLITICAS
Y NACIONALES

( 1 8 4 6 - E N E R O D E 1848)

Si la explosión parisiense de febrero asegura a los movimientos


revolucionarios europeos de la primavera de 1848 una amplitud
imprevisible, ella no los ha creado. Mientras Francia — q u e los
historiadores de hoy describen como dispuesta a derrocar a u n
régimen apolillado— parece tan fuerte que en febrero el descon-
fiado Henry Palmerston propone al Parlamento un aumento de los
créditos militares, Europa, a partir de 1846, no deja de sufrir
sacudidas que movilizan la sagacidad de los diplomáticos y despiertan
los temores de los dirigentes.

1. LAS DIFICULTADES ECONOMICAS Y SOCIALES DE EUROPA

Según M a r x {Las luchas de clases en Francia, 1848-1850), la crisis


económica de 1845-47 habría provocado una crisis social que a su
vez habría engendrado la crisis política de febrero. Este esquema,
apto para seducir a los espíritus lógicos explica, para retomar una
expresión del historiador inglés Cobban, "las revoluciones que han
tenido lugar", pero no siempre da cuenta de las "revoluciones que
no han tenido lugar".
La crisis de 1845-47 pertenece, como las precedentes — 1 8 1 6 - 1 8 ,
1825-32, 1836-39— a los trastornos decenales de la economía
europea. Ahora bien, "si hay crisis económicas decenales, no hay
revoluciones decenales" (E. Labrousse). Sin duda, el Reino Unido
ofrece evidentes correlaciones entre la depresión de la economía y
el ascenso de la temperatura política; sin embargo, los grandes
movimientos británicos de 1816-19, 1831-32 y 1838 abortaron.
Sin duda, la revolución de Julio y sus prolongaciones (insurreccio-
nes lyonesa de 1831 y parisiense de 1832) estallan durante una
depresión; no obstante, ni la crisis de 1816-18 ni la de 1836-39 —si
se exceptúa la tentativa blanquista del 12 de mayo de 1839, en la
156 Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales .157

que participan obreros alemanes— coinciden con períodos de Silesia. En la Corjfedcración germánica, J. Kuczynski comprueba
efervescencia política. Para apreciar la importancia política de las de 1844 a 1847 un alza de los precios mayoristas ( 1 3 5 % para
manifestaciones económicas y las consecuencias sociales observables la papa, 88 % para el centeno), muy inferior a la de los precios
de la crisis de 1845-47, habiendo sido éstas objeto de numerosos minoristas. En el mercado de Durlach, uno de los mejor aprovisio-
estudios, basta con evocarlas dentro de su marco geográfico. nados de Badén, el precio del trigo se cuadruplicó de enero de
1845 a mayo de 1847; el del "pan negro" de tres libras, gravado
como en casi todas partes, casi se duplicó entre agosto de 1845 y
La crisis alimentaria de 1845-46 y la crisis económica de 1847 marzo de 1847; en vísperas de la revolución descenderá, a causa
de la acción conjugada de la baja general y la voluntad del gobierno,
La crisis de 1845-47 tomó primero forma alimentaria. Ültima al nivel de enero de 1845.
crisis de este tipo, tuvo como primera causa una crisis agrícola no En el momento en que culmina la crisis agrícola, una crisis
de abundancia como en nuestros días sino de penuria. En 1845, la económica "anunciada ya en el curso del otoño de 1845 por la
phytophtora comienza a atacar la papa, las tormentas afectan la derrota masiva de los especuladores en acciones ferroviarias, con-
cosecha de cereales. La de 184ó se perderá. Es conocida, desde tenida durante el verano de 1846 por [ . . . ] la supresión inminente
luego, la importancia del pan y de la papa en la alimentación de los derechos de aduana sobre el trigo [. . .], fue finalmente desen-
popular. Gran Bretaña soporta bien los comienzos de la crisis cadenada en el otoño de 1847 por las bancarrotas de los grandes
prosiguiendo, sin cargo de conciencia, con el expediente de hacer comisionistas coloniales de Londres [ . . . ] Las repercusiones de la
venir los granos de la ya exangüe Irlanda; la persf)ectiva de la crisis no habían cesado en el continente cuando estallaba la revolu-
próxima abolición de las corn4aws impulsa a productores y nego- ción de febrero" (Karl Marx). Agreguemos que la especulación
ciantes a desprenderse de sus existencias. El quarter de trigo cae había hecho grandes anticipos sobre los beneficios de las compañías
de 64 chelines en octubre de 1845 a 47 en agosto de 1846. Como ferroviarias en Francia y también en Alemaniá; que la "fiebre
los gobiernos de los tradicionales proveedores del Reino Unido ferroviaria" había suscitado inversiones excesivas en la metalurgia,
prohiben la exportación de cereales, el precio sube a 65 chelines en que la exportación de numerario en contrapartida a las grandes
noviembre, a 78 en marzo de 1847, a 102 en mayo. A partir de importaciones de cereales había contribuido bastante a la penuria
julio la afluencia de trigo ruso y americano, y finalmente las de dinero líquido. La disminución del encaje-oro obliga al Banco
promesas de ricas cosechas contribuyen a invertir la tendencia: 49 de Inglaterra y al Banco de Francia a elevar la tasa de descuento.
chelines en septiembre. Después de las cosechas catastróficas de El alza de la tasa de interés es general. Las dificultades de los
1846, el precio de la papa se ha cuadruplicado en algunas regiones bancos alcanzan a las empresas que ellos sostienen. La banca
francesas y el precio nacional medio del hectolitro de trigo Rothschild de Francfort es muy simplemente considerada sospechosa
se ha duplicado en un año. Sin duda, el Mediodía se ha visto de compiotar la destrucción de la industria alemana, organizando la
favorecido por la proximidad de Marsella, adonde llega el trigo
bancarrota de los comanditarios.
de Odessa. En mayo de 1847, el kilo de pan cuesta 70 centavos
El marasmo de la industria y del comercio durante el año 1847 es
en París y 55 en Lille, o sea el doble del precio estimado como
en gran medida una consecuencia de la crisis agrícola. El alza de
soportable por las masas. En otoño comienza la baja que continuará
bajo la Segunda República: de 38 francos en mayo, el precio del precios de los artículos alimenticios lejos de beneficiar —^ya que
trigo cae a 22 en septiembre. En Bélgica, varias centenas de miles no tienen nada para vender— al inmenso ejército de asalariados
de flamencos en condiciones de vida habitualmente difíciles sufren agrícolas, a los pequeños productores tan numerosos en Irlanda,
una hambruna de tipo irlandés: se eleva la sobremortalidad en Flandes y Alemania del sur, restringió su poder adquisitivo y más
relación a las provincias valonas de Hainaut y Lieja. Debido a la aün el de los trabajadores de minas, de fábrica y de taller. Las
subalimentación, la "enfermedad de Flandes" o fiebre del hambre y existencias se acumulan, aumenta la desocupación, bajan los sala-
el tifus también contribuyen. El último se propaga asimismo entre rios. De agosto a octubre de 1847, Inglaterra experimentó una crisis
otros tejedores-cultivadores: en 1847 produce 16.000 víctimas en que E. Halévy juzga más grave que la de 1825. Desde enero, en
Manchester hay más de 3.0¡00 desocupados. En el segundo semestre
Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales 159
158
1847, los motines de Escocia, del sudoeste de Inglaterra, de Bru-
de 1847, el sector metalúrgico es alcanzado por primera vez en
selas, Berlín, Ulm, Viena, Génova, la Romania, la Lombardia, la
Francia —signo de su importancia creciente— por la recesión. La
Toscana . . . tuvieron también un origen estrictamente económico. Sin
industria textil es sin embargo la más vulnerable: los tejedores
duda, sociedades secretas teñidas de comunismo como en Toscana
rurales sobreviven solamente aceptando salarios de hambre. En
o agitadores republicanos como en Badén, se esfuerzan por explotar
Alemania, la desocupación afecta a Va de los tejedores a domicilio
los odios nacidos de la miseria; un volante anónimo distribuido en
de Chemnitz; se detienen las manufacturas del sur de Badén; la
Odenwald, donde la carestía hambrea a pequeños propietarios
crisis es la ocasión para una nueva campaña contra el Zollverein.
sometidos a la explotación de los Standesherren y de los Grundherren
Bélgica ofrece el sorprendente ejemplo de dificultades obreras
y agobiados por deudas usurarias, fija osadamente para el 12 de abril
a la vez en una economía en retroceso y en una economía en
de 1847 la revolución, cuyo objetivo final es la instauración de un
expansión. E n su mayoría, los campesinos flamencos, semicam-
estado libre (Freistaat) según el modelo de los Estados Unidos.
pesinos, semiobreros, no están en condiciones de comprar los ali-
Objetivos inmediatos: ¡destrucción de la nobleza, expulsión de los
mentos que producen habitualmente en sus campos exiguos; la
judíos, asesinato de los agentes del fisco y de los señores! Aunque
vieja industria del lino, desde hace tiempo en decadencia, muere.
las precauciones militares mantienen la calma, la parte social de
¡Qué contraste con el auge del país valón, basado en el carbón
este programa se realizará en marzo de 1848, cuando estallen las
y la metalurgia! " L o s habitantes de Hainaut y de Lieja se enterarán
jacqueries antinobiliarias y antisemitas favorecidas por los cambios
de la revolución de 1848 al término de una coyuntura industrial
políticos producidos en Carlsruhe.
ascendente" ( R . Demoulin). Esta brillante fachada disimula dos
años penosos: de 1845 a 1847, los salarios solamente progresan en
Las jacqueries de Galitzia. E n Galitzia, la crisis alimentaria desata
un 7 % en la industria del carbón no obstante que el centeno y la
una explosión no solamente social sino también religiosa, nacional e
papa duplican sus precios.
incluso política. Los siervos rutenos y uniates de Galitzia ignoraron
¿En qué medida las crisis, alimentaria de 1845-46 y económica de los esfuerzos de algunos sacerdotes de la universidad de Lemberg
1847 prepararon los grandes cambios de marzo de 1848? (Lwow) en favor de la lengua ucraniana; tenían suficientes motivos
para detestar a los grandes señores polacos quienes, con el clero
católico, son sus supuestos representantes en la Dieta. Las malas
Las consecuencias de la crisis alimentaria cosechas de 1845 los incitan a recoger el aspecto social de la
propaganda clandestina de los rojos de la Sociedad democrática
Los "disturbios de subsistencias". L a primera provocó la cólera de polaca de París, que prepara el levantamiento de las tres Polonias
las clases populares contra los gobiernos y dispuso los ánimos para bajo la dirección de Mieroslawski. A comienzos de 1846, masacran
la rebelión. En una época en que todavía mucha gente cocina su a cerca de 200 grandes propietarios polacos . . . invocando el pro-
pan, los granos circulan sin cesar hacia los mercados y los molinos. grama agrario de un gobierno insurreccional polaco instalado en
Los hambrientos, cediendo a la tentación de interceptarlos, hacen Cracovia. Esta jacquerie dará a Viena — l o menos que puede
ventas forzadas con tasaciones de oficio, casi puras expoliaciones. decirse es que inicialmente no la desalentó— la oportunidad de
Sus tumultuosas reuniones crean la inseguridad en el campo francés. anexar la república de Cracovia.
Las panaderías de las ciudades son tomadas por asalto. Estos
"disturbios de subsistencias" recuerdan los de 1789 y de 1830 pero
¿Los crímenes agrarios, preludios de la revolución en Irlanda? La
toman dimensiones que sin duda explica, y gracias a la prensa, la
calma relativa de Flandes contrasta con la guerra civil galitziana
difusión más rápida de las noticias. A pesar de una dura represión,
y los crímenes agrarios irlandeses. Ella no se explica ni por las
el orden no será restablecido por sus defensores profesionales sino
mejores condiciones materiales ni por un nivel cultural más bajo.
por el retorno de las buenas cosechas. El mapa de los disturbios
La unidad religiosa del estado belga afrancesado quizá privara es
que R. Gossez estableció a partir de los informes de la gendar-
una simple hipótesis— a los campesinos flamencos de la temible
mería, se superpone al de la penuria: el norte, oeste y centro políti-
arma de la pasión religiosa. A comienzos de 1847, Irlanda está.
camente calmos, fueron los más turbulentos. En la primavera de

i
i 60 Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales 161

después de una serie de consechas de papa desastrosa, ai horde depresión de agosto a octubre, los trabajadores recuerdan que los
de la "gran hambruna". La situación de una población en fuerte cartistas denunciaban la propaganda de la Liga como una maqui-
crecimiento que vive de la explotación de terrazgos cada vez más nación de los industriales. La desocupación en los distritos algodo-
pequeños (según una encuesta de 1835, más de dos millones de neros también parece dar la razón a las siniestras profecías de los
individuos están desocupados durante la mitad del año) parece lories proteccionistas que, tanto por filantropía o por odio a los
insoluble. El espírUu filantrópico inspira a Peel y a John Russell, su manufactureros, contribuyeron a dotar al Reino Unido de la
sucesor whig, la compra de maíz a los Estados Unidos y la costosa legislación obrera más avanzada de Europa. Mientras que los
apertura de talleres de caridad. El hambre irlandés sirvió de pretexto librecambistas condenan en nombre de la libertad el "sistema de
a la Liga de Richard Cobden para lanzar nuevamente su propaganda gobierno caritativo" (Stuart Mill), lord Ashley, promotor de las
y justificar la instauración del librecambio que, antes de arruinar leyes de 1833 y 1844, hace votar el Factory Act de 1847 que,
definitivamente a los pequeños arrendatarios, no aporta en lo inme- desde el 1? de mayo de 1848, limita la jornada de trabajo de
diato ninguna mejora. La acción de las masas, más espontánea mujeres y de "jóvenes personas" (13 a 18 años) a 10 horas en la
todavía que en Galitzia, provoca la admiración de Marx, que la gran industria. Esta ley beneficiará también a los hombres en razón
considera como una manifestación de la lucha de clases. Pero ésta de las exigencias del trabajo en equipo, y anticipa el efímero
se colorea, como siempre en Irlanda, de odios religiosos inexplicables decreto del gobierno provisional (marzo de 1 8 4 8 ) , saludado como
y de resentimientos nacionalistas más o menos conscientes. Incapaz la mayor conquista del proletariado revolucionario. También justifica
desde entonces de pagar regularmente su arriendo, el campesino la acción de la Asociación nacional de oficios unidos para la pro-
irlandés católico vive con la angustia de ser expulsado sin preaviso. tección del trabajo, adversaria de las violencias cartistas. Del pode-
Sin embargo, el propietario inglés protestante y el arrendatario que roso movimiento popular de 1842 subsistía un aparato en manos
remplaza a un expulsado saben que sus días están en peligro, porque de O'Connor. James Bronterre O'Brien, el revolucionario babou-
en el ciclo infernal de evicciones y crímenes agrarios, los culpables vista, se había separado de una organización dominada por su rival
se benefician con la complicidad activa de la población y, si son reformista; en 1843 el cartismo había adoptado el Land Scheme:
detenidos, con la indulgencia de jurados que deliberan bajo ame- el reparto de los grandes dominios en pequeños lotes individuales
naza. La modificación de una legislación penal inadaptada a los (por supuesto n a d a comparable a las colonias owenistas o fourie-
disturbios endémicos es retardada por las maniobras de Westminster: ristas) haría de los obreros desocupados opulentos cultivadores. La
rechazada a Peel es acordada a Russell en noviembre de 1847 crisis de 1847 relega este confuso proyecto al reino de Utopía. Las
mientras los miembros de la Joven Irlanda se dan cuenta de que es elecciones marcadas por el triunfo whig expresan la satisfacción de
preciso dar una dirección a un movimiento anárquico. En enero la burguesía de negocios librecambista y desconocen los sufrimientos
de 1847, Smith O'Brien ( 1 8 0 3 - 6 4 ) funda en Dublin la Confede- de los trabajadores: en la mayoría de las circunscripciones, la falta
ración irlandesa, organización clandestina que proclama la "fuerza de medios financieros redujo al mínimo las candidaturas cartistas.
física" para conquistar la independencia. Diez días antes de la También la elección de O'Connor en Nottingham aparece como
revolución de Febrero, J. Milchel ( 1 8 1 5 - 7 5 ) , el más impetuoso de una divina sorpresa; si algunos días antes de la reunión de las
sus miembros, lanza un llamado a la insurrección en su United Cámaras, el comité ejecutivo de los cartistas lanza un llamado a
Irishmen. favor de una "petición nacional" (20 de noviembre de 1 8 4 7 ) ,
recurriendo instintivamente al procedimiento típicamente británico
de presión popular sobre el Parlamento, se compromete también
Las consecuencias sociales de la crisis económica en la vía del "internacionalismo democrático socialista" b a j o la
influencia de su ala izquierda. Dos veces insular, O'Connor quiere
¿Un nuevo cartismo orientado hacia Europa? En la Europa de ignorar a E u r o p a y, aun cuando se refugian en Londres, a sus
1846-47, subalimentada, en vías de recesión, erizada de barreras revolucionarios. Pero debe resignarse a dejar que su ardiente
aduaneras, Gran Bretaña, a pesar del librecambio, sigue siendo una compañero George Julian Harney ( 1 8 1 7 - 9 7 ) , redactor jefe del
isla. E n la época de los precios récord de cereales y de la gran Northern Star, publique informaciones sobre los movimientos de
Crisis económicas y sociales .163
156 Las revoluciones europeas
Handwerkervereine (Asociaciones de compañeros), animadas por
oposición del continente. Harney encuentra a Engels en 1843 y se
antiguos adherentes a la d^iga de los justos, difunden el ideal comu-
interesa por las actividades de la Liga de los justos de Schapper y
nista y republicano de Weitling. La influencia de este último
Bauer que en el verano de 1847 se convierte en la Liga de los
sigue siendo preponderante n o obstante su ruptura con Marx, que
comunistas a la que pronto adhieren Engels y Marx, entonces en rechaza la concepción, tomada de Blanqui y de las sociedades
Bruselas. B a j o su dirección, los Fraternal Democrats, carlistas lon- secretas parisienses, de una revolución que surja de la acción de
dinenses de espíritu europeo, mantienen una correspondencia algunos jefes resueltos. En cuanto a Marx, y contrariamente a una
periódica con la Asociación democrática internacional de Bruselas, afirmación varias veces repetida, su nombre no es ignorado, ya que
compuesta por algunos radicales belgas, proscritos italianos, polacos en los estados donde la censura es relativamente débil, la prensa
(Lelewel) y alemanes, con M a r x como vicepresidente. N o es pues democrática contiene frecuentes sueltos sobre su actividad literaria
casualidad si pocos días después de los comienzos de la nueva en París y Bruselas. Muy favorable a Louis Blanc y a su "organi-
campaña cartista se realizan casi simultáneamente en Londres dos zación del trabajo", se muestra poco benevolente respecto a M a r x
reuniones llamadas, a causa de la participación de Marx, a marcar y P r o u d h o n a quienes pinta como filósofos nebulosos, orgullosos e
un hito en la historia del socialismo europeo. El congreso de la irascibles. C u a n d o en junio de 1847 M a r x publica Miseria de la
Liga de los comunistas que reúne a un p u ñ a d o de alemanes, prepara filosofía, respuesta a la Filosofía de la miseria de Proudhon, irónicos
la revolución social y encarga a M a r x y a Engels la redacción de comentarios saludan a la riña de esos dos personajes ávidos de
un programa de acción válido para todos los países:, será el publicidad. En vísperas de 1848, el único grupo "marxista" en
Manifiesto Comunista. El congreso pasa desapercibido; el Mani- Alemania —según un historiador reciente, Marx habría contado allí
fiesto publicado después que estallan las revoluciones no surtirá con menos de 100 adeptos— se encuentra en Colonia, donde Marx
efecto sobre movimientos de inspiración nacionalista. Harney lo había dirigido de 1842 a 1843 la Gaceta renana: en diciembre de
adoptará con la intención de regenerar el cartismo. Los Fraternal 1847, el médico Gottschalk ( 1 8 1 5 - 4 9 ) funda una sección de la
Democrats, conmemorando la insurrección polaca en presencia de Liga de los comunistas, pero este admirador de M a r x sigue siendo
M a r x (enemigo de los eslavos "degenerados", comparte las sim- aún permeable al comunismo sumario importado de Francia por
patías de los demócratas de su época hacia un pueblo irreductible- Weitling, el hereje.
mente hostil a los r u s o s ) , proclaman su incorporación a la causa
sagrada de la emancipación de los pueblos. Este esfuerzo, que se En Francia, los grupos icarianos de los grandes centros conti-
núan pacíficamente una obra de educación obrera; su maestro Cabet
enfrenta con la apatía de los viejos cuadros del cartismo indiferentes
no admite que "el problema social se arregle a tiros de fusil" ( G .
a todo lo que pasa más allá del canal de la Mancha, prueba la
Duveau). Los comunistas de las sociedades secretas parisienses,
voluntad de renovación de una minoría revolucionaria. E n enero
plagadas sin embargo de provocadores, no creían que la miseria
y febrero de 1848, los mítines tienden, como en los mejores tiempos
de las clases populares fuera a producir la ocasión —esperada
del cartismo, a movilizar a centenas de miles de desocupados a
desde quince años atrás— de imponer a Francia una república
causa de la crisis industrial, al servicio esta vez de un movimiento
social. C o m o en Alemania, la revolución estallará no por cierto
abierto sobre Europa.
en una economía próspera y un clima social sin nubes sino en el
momento en que, tras el fin de las dificultades alimentarias, la crisis
La debilidad del movimiento obrero en Alemania y en Francia. de 1847 parezca haber superado su punto culminante. Surgirá de
Nada comparable en el continente. Por todas partes el mismo crisis políticas que provisionalmente alinearán en el mismo campo
espectáculo: el número de indigentes, mendigos, ladrones y criininales a un p u ñ a d o de partidarios de profundas trasformaciones sociales
crece como crecen los ataques contra las máquinas. La organización y a una amplia fracción de clases medias decididamente conserva-
de las clases obreras sigue siendo embrionaria. Las Arbeiterbil- doras.
dungsvereine {asociaciones de formación de trabajadores) que se
multiplican en Alemania no hacen más que prolongar la obra de
las asociaciones para el " f o m e n t o del bien de las clases laboriosas".
Sólo persiguen objetivos filantrópicos. En Berlín y Hamburgo, las
156
Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales .164

II. L O.S PROBLEMAS DE SCHLESVIG-HOL STEIN, DE CRACOVIA Y SUIZA! protesta contra la incorporación de los ducados al reino, con el
ASPECTOS INTERNACIONALES Y RESONANCIAS INTERIORES apoyo unánime de Alemania d o n d e muy pronto se lanzarán sus-
cripciones para armar a los " h e r m a n o s separados". L a opinión
Algunos movimientos que, contrariamente a los de 1830, n a d a deben europea descubrirá con estupor la extraordinaria obstinación de los
a las agitaciones parisienses, no dejan de amenazar entre 1846 y alemanes en procurar la anexión de Schlesvig y también la tremenda
febrero de 1 8 4 8 al o r d e n establecido en 1815. El problema de complejidad de un problema que únicamente siguieron en sus
Schlesvig-Holstein, la desaparición de la república de Cracovia, la comienzos los gobiernos de L o n d r e s y Petersburgo, directamente
guerra civil en Suiza, obligan a las potencias a opciones sobre las interesados en la integridad del estado danés.
cuales la opinión pública toma partido: la i m p o p u l a r i d a d creciente
de Guizot, de Metternich y de la Dieta de F r a n c f o r t tiene como
causa esencial posiciones diplomáticas en contradicción con los La anexión de Cracovia, última derrota de los pueblos
deseos de los pueblos. E l asunto de los matrimonios franco-espa-
ñoles modifica, a partir del otoño de 1846, las condiciones de la En cambio, la incorporación a Galitzia de la república de Cracovia
vida internacional. L a r u p t u r a de la entente cordiale acerca a la es de esos acontecimientos menores que excitan las pasiones
m o n a r q u í a de Julio a Austria y Rusia, símbolos del absolutismo. El populares y agitan las cancillerías. Cracovia era desde 1815 la
papel que los liberales y los demócratas anglófobos soñaban para umca f r a n j a de tierra-siempre a m e n a z a d a de la Polonia indepen-
Francia, lo asume alegremente Palmerston, ese nuevo Pitt, impul- diente. Su anexión (noviembre de 1 8 4 6 ) , realizada con la compli-
sando la subversión en Suiza e Italia. A fines de 1847, estimuladas cidad de Rusia — P r u s i a se alineaba j u n t o a M e t t e r n i c h — aparece
por el radicalismo suizo, las aspiraciones liberales y nacionales como u n n u e v o desafío de la Santa Alianza de los reyes a la
se expresan con fuerza en Alemania del sur. E n enero de 1848, la "Santa Alianza de los pueblos". D e m ó c r a t a s y liberales m o d e r a d o s
insurrección particularista y liberal de Sicilia y el levantamiento multiplican las presiones p a r a que los gobiernos obliguen a Austria
antiaustriaco de Milán hacen que Italia ingrese en la era de las a dejar su presa. Las reacciones británicas son las m á s débiles:
revoluciones. solamente el ala izquierda del cartismo es polonófila. E n Alemania,
el a m o r p o r Polonia se confunde con el odio al zarismo. Detenido
algunos días antes de la insurrección que p r e p a r a b a en Posnania,
La vigilia de armas en Schlesvig-Holstein Mieroslawski es c o n d e n a d o a muerte con 10 de sus compañeros;
la opinión prusiana obtiene su perdón. L a consulta de Jas actas
Desde la carta abierta de Cristián V I I I (julio de 1 8 4 6 ) , el nacio- secretas de Ja Dieta revela que en junio de 1847 Baviera y Badén,
nalismo germánico y el danés se enfrentan vigorosamente a causa que sesionaban b a j o la presidencia de Austria, no temieron condenar
de Schlesvig-Holstein. E n el congreso de germanistas, filólogos e el rapto de Cracovia. E n Francia, d o n d e la causa de Polonia f u e el
historiadores en 1847 en L u b e c k , en los confines de Holstein, origen de la "gran batalla republicana" de junio de 1832, los
D a h l m a n n y los G r i m m recuerdan una vez m á s q u e la ciencia acontecimientos de Posnania y Cracovia suscitan una agitación
alemana está al servicio del Volkstum germánico. H a s t a su muerte considerable. P a r a la capital de la emigración polaca, Mieroslawski
( 2 0 de enero de 1 8 4 8 ) , Cristián V I I I reprime d u r a m e n t e los actos es un héroe francés. Desde febrero de 1846, la ocupación de Cracovia
de insubordinación. D e s d e su advenimiento, F e d e r i c o V I I intenta por las tropas austríacas, rusas y prusianas provocó, más allá de los
reforzar el espíritu de resistencia a las pretensiones alemanas clivajes políticos tradicionales, vivas inquietudes. A n t e la noticia
a c o r d a n d o una constitución común a todos sus estados, en virtud del de Ja anexión, el gubernamental Journal des Débats se indigna.
rescripto real del 2 8 de enero. Burgueses y universitarios de Copen- El distanciamiento con L o n d r e s impide toda acción común. L a
hague critican el carácter p o c o liberal de las nuevas instituciones excusa inglesa, que la diplomacia de Francia invocará más tarde
y no soportan que los alemanes tengan en la Dieta una representación hasta la saciedad p a r a justificar retiradas de mayor importancia, no
sensiblemente igual a la de los daneses. L a oposición alemana puede satisfacer a una opinión sobrexcitada y anglòfoba, en cuya
166 Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales 167

consideración Guizot dirige a Viena una nota de protesta. ¡En destina a los católicos suizos proclamando oficialmente, por miedo
vano! La impresión que la monarquía de Julio ha roto definitiva- a ser llevado a un conflicto abierto, primero la no intervención y
mente con sus orígenes se refuerza más aún cuando Francia parece luego una mediación colectiva en la que interviene Metternich y que
tomar partido por la Santa Alianza en los asuntos suizos. combate clandestinamente Palmerston, amigo de los radicales. La
violenta ofensiva del general Wilhelm Dufour, que en ventiséis días
ocupó los cantones católicos (30 de noviembre), desacredita un
El triunfo del radicalismo suizo, primera victoria de los pueblos poco a Guizot, resignado socio de Metternich, e impulsa en Suiza
y en Europa al partido de la revolución.
La crisis del Sonderbund, ese dramático episodio de la historia Ebrios de victoria, los radicales suizos preocupan a sus más
helvética, adquirió una dimensión internacional por la agitación seguros amigos: habiendo adoptado el gobierno conservador de
en los países limítrofes y las relaciones europeas del radicalismo Neuchátel, con acuerdo de su príncipe, el rey de Prusia, una actitud
suizo. Los gobernantes del sur de la Confederación germánica y neutra en el conflicto de Sonderbund, la Dieta prepara la ocupación
sus adversarios están igualmente convencidos de que la victoria militar del cantón. Palmerston la llama severamente al orden. En
de los adversarios del Sonderbund sería contagiosa. Preocupado por todas partes, los radicales tratan con poca suavidad a los vencidos.
la calma de Alemania e Italia, Metternich desea aprovechar la Mientras en los banquetes reformistas mansos burgueses brindan
oportunidad esperada desde 1830 de destruir un foco de turbulencia por ios vencedores del SonderbimL, éstos reciben de Michelet y
permanente, deteniendo a los refugiados políticos (en Suiza, Maz- Ooñief nn pMético llamado a b moJeiación: ""El Terror nos parece
zini ha fundado la Joven Europa y Weitling iatroduio la Liga de los como una escalera rápida donde no se desciende un primer escalón
jacr^c^), i tes ¿ J E S E S Í S de ZiEÍcá daaáe s i Láo»»- sin descenderlos todos . . . En nombre de la Fraternidad no descen-
rischen Komor {mostrador literario) de Jnlins Frobd eáta a dáis el primero!" La preocupación de tranquilizar a Londres, que
H e r w e ^ Ruee. Mane. etc. Gtnzot recbara cumpcometerse en esti se (s&ierza en purvruir lag: eaccsos T tandÑén de nr irritar « \ l e n a .
vía. El problema que trastorna su tranquilidad es d de la liberta«!
de enseñanza secundaria, que sostienen abiertamente los legitimistw
y subrepticiamente los jesuitas. Dispuesto a acomodamientos coi
la Iglesia francesa, no podría impulsar en el extranjero un movi- Ocurrida en 1947, es grande la tentación de considerar a la
miento que goza de las simpatías de los extremistas de derecha fia molución nacional de 1848 como un episodio al margen de los
provocar las protestas de los extremistas de izquierda. Porque loi ftndes trastornos europeos. Este punto de vista no concuerda con
defensores de la Universidad son los aliados de los radicales suiim ¿íoilimiento de algunos contemporáneos que Marx expresa el 30 de
Coautores del panfleto Les Jésuítes ( 1 8 4 3 ) , Michelet y Quinet ifinembre de 1847 en la Deutsche Brüsseler Zeitung, al exaltar
vituperan al Sonderbund, instrumento de la reacción clerical inter- ima victoria que "beneficia al partido popular de todos los países
nacional, y las maquinaciones de la Compañía maldita. En li Jt Europa". El triunfo después de tantos reveses, de los principios
Cámara, Odilon Barrot proclama tranquilamente que la ùnici è soberanía de los pueblos y de independencia de las naciones
intervención digna de un gobierno fiel a la vocación de Franrii (arierra una enseñanza: abandonada a sí misma, la poderosa
sería ayudar al radicalismo suizo a destruir el Sonderbund sometide iKtría retrocedió ante im puñado de adversarios resueltos.
a Austria. Los republicanos aplauden, igual que los orleanist»
(Thiers), a quienes el deseo de desplazar a Guizot trasforma c»
defensores de ideas que ellos rechazarán fervorosamente en IWÍ.
Pero el carácter eminentemente religioso de las querellas suizas ta
debilitado el campo de partidarios de las nacionalidades: dispueao
a denunciar, al lado de los demócratas anticlericales, la opresión át
los polacos, Montalembert toma calurosamente partido por «il
Sonderbund. El protestante Guizot entrega armas en forma cJi»-
1 0 8 Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales 169

Ili. EN LA ESCUELA DEL RADICALISMO SUIZO". AI.EMANIA perspectiva de sustituir a un lejano papa italiano por un cercano
MERIDIONAL, CENTRO DEL MOVIMIENTO DEMOCRÁTICO papa alemán. El profesor Franz Joseph Buss ( 1 8 0 3 - 7 8 ) , que de
Y UNITARIO 1846 a 1850 será el católico más f a m o s o de Alemania, intenta
movilizar a los campesinos de la Selva Negra contra los enemigos
Cuando E. Halévy afirmaba que las revoluciones de 1848 no sur- de la religión: siguiendo el ejemplo de O'Connell, lanza petitorios y
gieron de las barricadas parisienses sino de la guerra civil suiza, funda asociaciones católicas. El "Veniilot * alemán" hace del
sin d u d a pensaba en las revoluciones alemanas. E n Prusia no se Siiddeutsche Zeitung de Friburgo un órgano ultramontano. L o s
percibe ningún síntoma premonitorio. Abierto en abril, el Landtag historiadores señalan con razón la novedad de u n a acción que abre
unido termina en junio con un vano e interminable palabrerío, el camino para la formación de un partido católico, pero desprecian
mostrando que la idea de una Prusia liberal que lleve a la unidad el hecho de que, en las circunscripciones llamadas a convertirse en
de Alemania es un sueño. Los liberales renanos pronunciaron las fortalezas del Zentrum, todos los candidatos católicos, con
ardientes discursos sobre las ventajas que el régimen constitucional, excepción de Buss, son derrotados en las elecciones de abril de
luchando contra los abusos de la burocracia, aportaría a la monar- 1846. Siendo el derecho de voto muy amplio, este fracaso es
quía. Atento a los consejos de los junkers — u n o de los más imputable a la indiferencia de las masas católicas badenses. E n 1848,
elocuentes fue un joven diputado llamado Otto von Bismarck— el Buss renunciará b a j o la presión popular y deberá aspirar a u n a
rey nada acordó ni n a d a prometió. ¿Por qué habría de inquietarse banca en el parlamento de F r a n c f o r t . E n Wurtemberg, el obispo
por las reclamaciones de liberales enemigos de las aventuras, o de Keller lleva una campaña paralela a la de Buss y se enfrenta con
los ataques de ciertos demócratas cuyos extravíos son duramente las mismas incomprensiones.
sancionados? La naturaleza del apoyo a acordar a los radicales berneses
E n cambio, en los estados meridionales reina u n a agitación que acentúa las divergencias entre los partidos en formación. L o s
alcanzará su paroxismo con la victoria de los radicales suizos, cuya liberales, que no dejan de progresar (en Badén acaban de ganar
causa es casi tan popular como la de los alemanes de Schlesvig- las elecciones), ya n o practican u n a oposición sistemática contra
Holstein. L a s simpatías, que faciUta la afinidad Ungüística, se ministros dispuestos a concesiones. Sostienen que u n trámite
inspiran en el sentimiento de una estrecha solidaridad ideológica. diplomático bastará para desviar a Austria y sus aliados de u n a
La situación religiosa favorece el acuerdo con los enemigos de intervención en favor del Sonderbund. Algunos parlamentarios
los jesuitas. Dentro del protestantismo, la secta de los Lichtfreunde rechazan todo compromiso con el particularismo monárquico y
("amigos de las l u c e s " ) , así como la mayoría conservadora, man- reclaman apoyo para los radicales suizos cuya denominación, por
tienen la lucha contra los amigos de la Santa Sede por la expresión otra parte, comienzan a tomar. Se recolectan fondos y se enrolan
de la fidelidad al espíritu nacional. Sometidos a un clero mediocre voluntarios en Badén y en Wurtemberg. L o s gobiernos instan a
de funcionarios que se apoyan gustosamente en el estado protestante Francfort el envío de contingentes federales para establecer un
para sacudir la tutela de los obispos y que ignoran al papa, nada cordón sanitario frente al foco de infección suizo. A fines de 1847,
incita a los católicos del sur a romper lanzas a favor de los jesuitas. la propia palabra revolución estalla b a j o la pluma de ministros
Los esfuerzos de algunos prelados que, con el apoyo del papado, caracterizados por su sangre fría. E n el origen de esta psicosis están
tratan de elevar el nivel moral de los sacerdotes y combatir su asociaciones típicamente alemanas, apolíticas en principio y por lo
tendencia a la insubordinación, recién darán sus frutos en la segunda tanto autorizadas, que reúnen en Wurtemberg y en Badén a jóvenes
mitad del siglo xix. El doble fracaso del Deutsch-Katholiiismus de todas las clases; corales, asociaciones de gimnastas, caros al
("catolicismo a l e m á n " ) , y de la respuesta ultramontana en Haden, Turnvater Jahn, y por supuesto, sociedades de tiro participaron con
es una p r u e b a irrefutable. En 1845, Ronge predica sin éxito la entusiasmo en la propaganda en favor de los republicanos suizos.
nueva religión de Heidelberg en Constanza; en una región donde Invadidas por militantes de la extrema izquierda, se convierten en
desde decenios una importante fracción del clero reclama la abo-
lición del celibato eclesiástico y la instauración de u n parlamen- * Refiérese a Louis Veniilot, publicista católico francés (n. 1813), fun-
tarismo sinodal, Ronge nada aporta como no sea la fastidiosa dador de L'Univers. [N. del E . j
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Las revoluciones europeas .170
Crisis económicas y sociales

centros de difusión de las doctrinas revolucionarias. Prosiguiendo Reformas sociales susceptibles de horrorizar a los poseedores y
un movimiento comenzado desde hacía poco, en oportunidad de exaltar a los pobres en razón de su imprecisión misma (disminución
las fiestas anuales, tienden a federarse en vastos conjuntos regio- de la desproporción existente entre el capital y el trabajo, bienestar,
nales. Los gobiernos se atemorizan sobre todo con el pensamiento educación y enseñanza para todos) reflejan las nuevas preocupa-
de que podría constituirse esta asociación de todos los gimnastas ciones. L a cuestión alemana es abordada indirectamente (es preciso
alemanes con la que sueña la juventud más ardiente, porque sin obligar a la Dieta a abolir la legislación represiva de 1819-20 y
duda habrían tenido mucho que temer de la formación de un gran bre de 1847 es, a escala de Alemania y también de Europa, una
partido inspirado por el radicalismo badense. representación del pueblo alemán ante el Bund". Cierto es que el
El radicalismo badense progresó en la opinión a medida que se monárquico liberal Theodor Welcker había lanzado en 1831 en la
agravaban las tensiones dentro de la Confederación helvética. Su tribuna de la Cámara la idea de un parlamento electo. Pero en
programa es una síntesis de las reivindicaciones del liberalismo de Offenburgo son hombres sin mandato los que se comprometen a
los años veinte y treinta concebidas en el marco de un pequeño trabajar para la instauración de una república alemana basada en
estado y de exigencias sociales y políticas que suponen la trasfor- la soberanía popular. La asamblea de Offenburgo del 12 de septiem-
mación de la sociedad y la destrucción de la Confederación ger- bre de 1847 es, a escala de Alemania y también de Europa, una
mánica. Dos hombres personifican estas tendencias y hacen de manifestación de carácter revolucionario ante la cual los banquetes
Mannheim el gran centro de la oposición: brillante abogado y parla- reformistas franceses parecen anodinos. Cumple asimismo el papel
mentario popular, Hecker ( 1 8 1 1 - 8 1 ) es un romántico sin doctrina de congreso constitutivo de una formación de un nuevo tipo. El
hasta su encuentro con Gustav von Struve ( 1 8 0 5 - 6 9 ) ; aristócrata partido radical pretende ser un partido de masas; sus cuadros son
desclasado —recién en 1848 renunciará a la partícula nobiliaria— jóvenes y en contacto con la población; no cuenta con ninguno de
Struve conoció una larga serie de fracasos; magistrado y luego esos profesores, adornos obligados de los partidos de base parla-
abogado, no logró imponerse; los electores se negaron a enviarlo mentaria; pero sí, junto a médicos y abogados ex Burschenschaftler,
a la C á m a r a ; en el periodismo encuentra por fin su camino a partir con mesoneros e instructores mezclados en la vida de las sociedades
de 1845. Sus altercados con la censura terminan por trasformar a coralp y gimnásticas, distribuidores de panfletos, de periódicos
este hombre irritable y agresivo en un teórico de la revolución. sediciosos y de consignas. Apoyada en una red clandestina, la pro-
Admirador de los hombres del 93, lector de Saint-Simon, Fourier paganda radical denuncia el perjuicio de instituciones consideradas
y Louis Blanc, sueña con una Alemania democrática y social esta- por mucho tiempo como las más progresistas de Alemania y pinta
blecida por la fuerza. Sensible al mito americano, como tantos de con lirismo la felicidad que aportaría la república. Artesanos y
sus correligionarios políticos alemanes y suizos, rechaza el mito del proletarios en vías de proletarización ünputan poco a poco sus
jacobinismo centralizador: una república federal remplazará a j a dificultades a un sistema basado en el particularismo interno y la
confederación de las dinastías. Estos puntos de vista, que un ano impotencia en el exterior. Una Alemania democrática y fuerte
más tarde espantarán a la mayoría del Vorparlament, son expuestos defendería contra Petersburgo y Londres los "derechos" de los
el 12 de septiembre de 1847 en la pequeña ciudad de Offenburgo alemanes de Schlesvig-Holstein y los intereses materiales de la
ante 200 miembros d e una Asociación de amigos de la constitución. nación. Aspiraciones nacionales, políticas y sociales tienden a
El texto votado y hecho público aborda reformas de una s i n g l a r fundirse en el espíritu de gentes humildes b a j o la influencia
audacia. Algunas exigencias políticas provienen del liberalismo del radicalismo. El liberalismo parlamentario que dominan los
clásico (libertad de prensa, de asociación); otras, inspiradas por el Akademiker se preocupa poco por la emancipación política y social
odio a los ejércitos profesionales y a la burocracia, anuncian (crea- de las clases populares, pero desea apasionadamente una Alemania
ción de una milicia análoga a nuestra guardia nacional * ) o s u p e r a unificada bajo su dirección efectiva. La repercusión producida por
(elección de funcionarios) las reivmdicaciones habituales de 1848. la asamblea de Offenburgo la lleva a tomar partido públicamente.
David J. Hansemann, el hessense Heinrich von Gagern, el wurtem-
Miembros eminentes de las Cámaras del oeste o del sur — e l renano
La guardia nacional de Francia. IN. del E.] burgués Römer, los badenses Friedrich Bassermann, Mathy y
Crisis económicas y sociales .173
156 Las revoluciones europeas
no ha sufrido ni aun difusamente la influencia del Risorgimento.
T h e o d o r W c l c k e r — se encuentran el 10 de octubre en Heppenheim, Pero jamás, una fracción tan grande de la población, tan diversifi-.
en Hesse-Darmstadt, en el corazón de la Alemania liberal. Impresio- cada, condenó con tanta pasión la tiranía de los gobiernos, la
nados por la calidad de los participantes y por la resolución división de Italia, la dominación de los tedeschi. La carestía de los
votada, los historiadores sobrestimarán la importancia de este víveres y la desocupación aumentan la fuerza de los elementos
coloquio. L a experiencia decepcionante del Landtag unido n o ha avanzados e incitan a los m o d e r a d o s a reclamar reformas p a r a
disipado las tenaces ilusiones de los liberales renanos acerca de la cerrar el paso a los aventureros.
voluntad unitaria de Federico Guillermo IV. Ludolf van Camphausen
Desde junio de 1846, R o m a , blanco tradicional de los enemigos
obtiene que la reunión se pronuncie por la creación de un Zollve-
de los regímenes reaccionarios, se convirtió en la capital de las
reinsparlament, es decir, un parlamento que representa a los estados
esperanzas liberales y nacionales. La resurrección del neogiielfismo
del Zollverein. De la unión aduanera surgiría una Alemania política
moribundo está ligada al advenimiento del papa cuyo n o m b r e p e r m a -
d o m i n a d a por Prusia pero a m p u t a d a por las ciudades hanseáticas, de
necerá asociado al Syllabus, al dogma de la infalibilidad pontificia,
Mecklemburgo, de Oldenburgo, de H a n o v e r y de Austria germánica.
al rechazo obstinado a aceptar la incorporación de los estados de
¡Este programa es demasiado prusiano para un rey de Prusia la Santa Sede al reino de Italia. D u r a n t e dos años, nadie d u d a de la
respetuoso de la superioridad histórica de Austria! Un mes después voluntad de Pío I X por reconciliar en todos los aspectos a la Iglesia
de H e p p e n h e i m , trata de sacudir el sopor de F r a n c f o r t : su plan de con el m u n d o moderno. E s conocida la amarga frase de Metternich:
r e f o r m a del acta jederal retoma viejos proyectos, especialmente el de "¡Un p a p a liberal, he aquí algo nuevo!" Alexandre Dumas, eco del
introducir a Austria en un Zollverein dirigido en adelante por la entusiasmo delirante de vastos sectores de la opinión italiana,
Dieta. Felizmente p a r a Prusia, Metternich sigue siendo u n partidario escribirá en marzo de 1848: "Italia ha encontrado la estirpe de un
obstinado del síatu quo en Alemania. L a actitud de Federico Gui- nuevo Gregorio V I I . . . Así, cada dia se grita b a j o sus ventanas:
llermo constituye en todo caso un golpe fatal a la idea de Cam- «Santo Padre, ¡cuidado con el chocolate!»" ( e n v e n e n a d o ) . Segura-
phausen. L o s liberales del sur olvidan muy rápidamente el sueño de mente el ex cardenal Mastai será, hasta sus decepciones de 1848, un
H e p p e n h e i m . E n su célebre moción en la C á m a r a badense ( 1 2 de patriota y un liberal, pero no consentirá jamás renunciar al p e r s o n a j e
f e b r e r o ) , Bassermann propone, siguiendo el ejemplo de los hombres de papa y de soberano. Desde su advenimiento, Pío I X c o m p r u e b a
de O f f e m b u r g o , una asamblea representativa del pueblo y no de los que a pesar de un régimen despótico, Gregorio X V I deja a los
príncipes; se contenta con un parlamento designado por las Cámaras estados pontificios en la situación revolucionaria en que los había
locales, y obtiene la adhesión de Hecker y Struve. Vuelto hacia los encontrado en 1831. P a r a romper el círculo de insurrecciones y
príncipes que resisten a la corriente nacional, el veterano Welcker represalias, promulga un decreto de amnistía política (julio de
toma otra vez el acento de los Convencionales p a r a esgrimir la 1846) que, después de un largo período de ciega compresión, toma
amenaza de la revolución: " H o y estamos todavía a tiempo de el vuelo de una medida revolucionaria. Prisionero de su prodigiosa
advertirles. ¡Mañana será demasiado tarde!" Antes de un mes, la popularidad, de la cual el Himno a Pío IX es una emocionante
profecía se cumplirá. Importación francesa, la revolución estallará manifestación, el p a p a va m u c h o más allá de sus iniciales intenciones
primero en el sur, de estructuras sociales todavía arcaicas pero de reformar u n a administración esclerosada; una ley de m a r z o de
con tendencias políticas avanzadas. 1847, que confía la censura a una comisión f o r m a d a en su mayoría
por laicos, es una etapa hacia la libertad de prensa; cuatro meses
más tarde, con la institución de una guardia cívica, son satisfechas
IV. LA ITALIA DE LAS REFORMAS LIBERALES CON "REVOLUCIONES" dos de las principales reivindicaciones de los liberales europeos
(JUNIO 1 8 4 6 - E N E R O 1848) en u n o de los bastiones de la reacción.
Leopoldo n , a quien inquieta la agitación de la universidad de
Desde 1847, Italia es el teatro de agitaciones de una amplitud Pisa, introduce estas reformas en mayo y septiembre en Toscana;
desconocida desde 1831. L e j o s de seguir como antes los impulsos también el propio Carlos Alberto suaviza el régimen de la censura'
parisienses, es ella la que da la señal de la conmoción europea de promete consejos municipales electos, aleja en octubre a ministros
1848. Sin duda, una parte considerable de las masas campesinas
174 Las revoluciones europeas Crisis económicas y sociales 175
ulfrarreaccionarios. Pero nada cambia en las Dos Sicilias, donde blanco de los ataques furiosos de una oposición que lo acusa de
Fernando II cuenta con la fidelidad del ejército y sus mercenarios complicidad con Metternich. No obstante su prudente firmeza, se
suizos, ni en los ducados del Centro. En Parma, el sucesor de suma a las estruendosas declaraciones de Palmerston, e incita a
María Luisa, Carlos II de Borbón (1847-49) — a quien el levanta- Austria a abandonar Ferrara, el 18 de diciembre. La presencia de
miento obligó a abandonar Lucca a Leopoldo II—, y en Modena los tedeschi en Ferrara había hecho progresar en cuatro meses la
Francisco V D'Este (1846-59), resisten al contagio liberal pensando idea unitaria. Lejos de solicitar, como su predecesor, la intervención
que Austria intervendrá a tiempo para evitarles los infortunios armada de Viena, Pío IX la había condenado solemnemente. Ello
de María Luisa y de Francisco IV, en 1831. aumentó aun más su popularidad. Desde Londres, Mazzini, el
Estas esperanzas no serán defraudadas. En el momento en que anticlerical, ¡aconsejaba a sus partidarios sostener al papa'. Roma,
Metternich, a raíz de la querella del Sonderbund, produce una crisis Florencia y Turín discutían un proyecto de vmión aduanera.
internacional, ésta desata otra infinitamente más grave. En Suiza, el La retirada de Metternich en Italia, así como su fracaso diplo-
viejo canciller ejerce una acción puramente diplomática; en Italia mático en Suiza, aumenta las agitaciones. En el trascurso del
recurre a una acción militar como en 1821 y 1831: las fuerzas verano, el reino de las Dos Sicilias fue teatro de motines fomen-
austríacas se instalan en Ferrara, en el estado pontificio, el 13 de tados al grito de: "¡Viva Pío IX!" El 12 de enero de 1848 estalla
agosto de 1847. Las preocupaciones de Metternich no son estric- una insurrección en Palermo, en la que como en 1820 participan
tamente ideológicas: si la propaganda liberal está minando los todas las clases. El 27 de enero, únicamente la cindadela de
regímenes conservadores amigos, las maquinaciones de los demó- Messina permanece en manos del ejército napolitano. Un comité
cratas de Milán y Venecia, especialmente las de un clero ganado al presidido por el viejo almirante Rogerio Settimo (1778-1863)
neogüeliismo ¿no preparan acaso la secesión de opulentas provincias convoca para el 23 de marzo a un parlamento encargado de modi-
de donde el tesoro imperial extrae abundantes recursos? Temor ficar la constitución de 1812, siempre invocada en Sicilia y jamás
determinante en una decisión que Metternich, sostenido únicamente aceptada en Náj)oles. Por el momento no reclama ni el derrocamiento
por Rusia, se muestra incapaz de hacer aceptar por Londres y por de los Botbones oi la independencia, si bien los historiadores
París. impugnan, en contra de la opinión de los contemporáneos, el carácter
En efecto, la política de los hechos consumados en Italia, más particularista del movimiento. Sea como fuere, la causa esencial de la
aún que las tortuosas maniobras en Suiza, se enfrenta con la primera revolución del año 1848 es de orden pasional: el odio a
oposición de Palmerston y con la reprobación de Guizot. Los dos ja dominación napolitana une momentáneamente a los diversos
disgustados ministros siguen políticas semejantes, el primero con elementos de una sociedad jerarquizada.
ostentación, el segundo con la reserva que se impone a un amigo no El triunfo de la revolución en Sicilia aumenta en la península la
confesado de Metternich: llevar la paz a los ánimos impulsando a los audacia de los liberales y debilita la voluntad de resistencia de las
gobiernos italianos a hacer oportunas concesiones. Lord Minto, fuerzas reaccionarias. La época de las reformas fragmentarias ha
miembro del gabinete británico, va a Turín, Florencia, Roma y pasado. Contra el retorno a los abusos, los opositores exigen, quince
Nápoles. Prodiga a los soberanos consejos de prudencia, y a los años después que los liberales alemanes, garantías escritas; como
liberales estímulos, rogando discretamente al .papa actuar sobre antes en la Confederación germánica, soberanos preocupados las
la jerarqtlía para frenar el ardor revolucionario de los campesinos conceden. En Nápoles Fernando II, tras formar un nuevo gobierno
irlandeses. Su misión prefigura la de otros nobles mediadores que cuyo ministro del interior es un ex carbonario, publica el 10 de
contribuirán a desatar en el continente catástrofes que pretenderán febrero una constitución. En Toscana, Leopoldo II decide seguir su
prevenir. El apoyo moral de Londres es, para las muchedumbres ejemplo a pesar de la cercanía de las fuerzas austríacas (17 de
delirantes que aclaman a Lord Minto, el preludio de una asistencia febrero). Las noticias de Sicilia y Nápoles provocan en Génova y
militar muy alejada de las intenciones de Palmerston y de la opinión Turín una efervescencia que los albertisías saben explotar. Preocu-
inglesa. Abogado en Italia —son conocidas las relaciones confi- pados por la imprevisible popularidad del papado, Cavour y ahora
denciales del embajador de Francia, Rossi, con Pío IX— de un también Balbo y D'Azeglio demuestran incansablemente que el
reforraismo moderado, Guizot, así como antes Casimir Périer, es el destino nacional de la casa de Saboya depende dé la trasformación
Las revoluciones europeas II. LA REVOLUCIÓN PARISIENSE
1 7 6

del régimen. Al fin convencido, Carlos Alberto promete el 8 de


febrero un estatuto constitucional. Mientras el rey de Cerdeña gana
los favores de una parte de la opinión italiana, el impulso reformista
del iniciador de la explosión liberal parece quebrado: Pío I X se
contenta con un consejo de ministros que preside el cardenal-
secretario de estado y con una consulta formada por miembros
designados por el papa. Bajo la presión de sus decepcionados
súbditos, anuncia el 14 de febrero la institución de una comisión Las jornadas parisienses de febrero sacuden a Francia y a Europa,
de reformas. sobre todo a la Europa de los pueblos en búsqueda de su unidad
Sólo P a r m a y Módena, ligadas a Austria por tratados secretos de nacional. Al este del Rhin y en el sur de los Alpes, los soberanos
protectorado (diciembre de 1 8 4 7 ) aparentemente no son alcanzadas son presa de un pánico alimentado por los recuerdos de 1792-93:
una Francia republicana según la moda de París no podría ser sino
por la ola liberal que la revolución de Viena trasformará en una
belicosa. ¿Cómo entonces no ceder a las exigencias de súbditos a
tormenta nacional.
quienes muy pronto habrá que rogar resistan armas en mano a los
Desde enero, Austria percibe sus primeros síntomas en el Lom-
nuevos misioneros con cascos? El gobierno provisional se esforzará
bardo-Véneto. Los patriotas desatan el boicot contra el aumento del
por disipar esas alarmas, sin lograrlo plenamente. Sometido a las
tabaco, monopolio del estado; agreden a los militares austríacos
presiones de grupúsculos de entusiastas revolucionarios, hábiles para
que, como desafío, f u m a n en público. El "motín de los cigarros' (2
demostrar a los proletarios parisienses que la emancipación de los
al 4 de enero) de Milán es duramente reprimido. C o m o la agitación
trabajadores franceses y la liberación de los pueblos oprimidos son
persiste, el mariscal Radetzky proclama el estado de sitio en
obligaciones complementarias para su mandatarios del Hôtel de
Lombardia el 11 de febrero. E n Venecia, el abogado Daniello
Ville, el gobierno vive en el temor de ser derrocado. C o n la derrota
Manin ( 1 8 0 4 - 5 7 ) y el escritor Tommaseo, que urden un levanta-
de la revolución parisiense (16-23 de abril), que confirman las
miento antiaustriaco y republicano, son puestos en prisión.
jornadas de junio, la mayoría de los franceses y los poderes esta-
Seguro de haber mantenido el orden en el norte Joseph Radetzky
blecidos en Europa, experimentan por fin el sentimiento de que la
sostiene en Viena que solamente el recurso a la fuerza es capaz de
hora de las grandes conmociones políticas y sociales ha pasado.
restaurar los viejos poderes en el sur. Se decide una intervención
armada análoga a la de 1821. Esta expedición, que habría llevado
al colmo la impopularidad del régimen de Julio, f u e impedida por
la caída de Guizot y de Luis Felipe. I. EL NACIMIENTO DE UNA REVOLUCIÓN: DE "¡VIVA LA R E F O R M A ! "
A "¡VIVA LA REPÚBLICA!"

Las diferentes fases de lo que L. Girard ' ha llamado el "escenario


de una revolución" son bien conocidas. Una campaña de banquetes
—se trata de escapar a la legislación restrictiva del derecho de
reunión y de manifestación— organizada por parlamentarios de la
oposición (dinásticos, radicales que ven en la república un ideal
lejano) preocupados por establecer, sin necesidad de presiones
callejeras, anodinas reformas en una Cámara servil, desemboca en
una revolución democrática y social. Del 9 de julio en París hasta
el 25 de diciembre en Rouen, 70 banquetes reúnen a un total de

1 La IV République, Calmann-Lévy, París, 1968.


i 84 Las revoluciones europeas La revolución parisiense 179
17.000 convidados que, mediante un derecho de adhesión elevado, p a r l ^ e n t a r i o s y adherentes desde la plaza de la Madeleine a
aceptan escuchar "ante un pavo frío" (Flaubert) a Odilon Barrot, Chaillot; además de los estudiantes y el pueblo, son invitados
Lamartine, Ledru-Rollin y tutli quanti hacer brindis "por la reforma —audacia insigne— los guardias nacionales "en uniforme". A este
electoral y parlamentaria", "la revolución de Julio". Si se observa desafío, el ministerio replica prohibiendo banquete y cortejo. Los
que al lado de los censitarios (son 246.000 en 1 8 4 6 ) , participaron diputados republicanos son abandonados por todos sus aliados
en los ágapes reformistas pequeños burgueses privados del derecho reformistas, excepto Lamartine y una media docena de fieles. El 21
de voto, se debe convenir en que la campaña resulta un fracaso. Más por la noche se suspende el banquete no obstante que obreros no
aún, fue ocasión para que la oposición evidenciara sus divisiones: prevenidos continúan levantando carpas y tablados. E l cortejo está
si en el calor de los banquetes, los radicales atacaron la persona comprometido.
del rey y pregonaron el sufragio universal, los dinásticos de Odilon E n las Tullerías reina el buen h u m o r : 20.000 hombres de tropa
Barrot parecen recuperables al precio de modestas concesiones. y 3.000 guardias municipales ¿no bastan para contener al día
Pero, seguro de su trono, Luis Felipe los confunde a todos con siguiente a algunos alborotadores? Desde 1840 es sabido que la
una misma reprobación pública que estigmatiza las "pasiones ene- guardia nacional no es unánime en aprobar el rechazo de las
migas o ciegas". reformas políticas y la paz a cualquier precio; también se podrá
Por un encadenamiento de falsas maniobras y reacciones impre- distmguir entonces a los malos elementos que responderán a la
vistas, la prohibición del 71? banquete será el origen de aconte- invitación de los agitadores.
cimientos extraordinarios, que ninguno de los promotores de la E n la mañana del 22, los lectores de Le National se enteran, con
campaña reformista hubiera previsto una semana antes. E n diciem- variadas reacciones, de los llamados a la calma de Marrast. L a
bre^ en uno de los distritos más revolucionarios, el ya citado XII?, mayoría de los enemigos del gobierno y los curiosos que se
oficiales de la guardia nacional elegidos por hombres a quienes apretujan en la plaza de la Madeleine a la espera de los organiza-
concierne personalmente el éxito de la reforma electoral, se dores del banquete, ignoran que éstos no vendrán y se sorprenden
proponen realizar un último banquete antes de la apertura de la de ver solamente soldados. Pasa un cortejo de estudiantes particu-
sesión parlamentaria; solicitan el patrocinio de los diputados repu- larmente excitados que impulsa a la muchedumbre hacia el Palais-
blicanos (la denominación de radicales va a desaparecer con la Bourbon. Guardias municipales despejan la plaza de la Concorde.
m o n a r q u í a ) y dinásticos. Los primeros aceptan; los segundos no. Agentes de las sociedades secretas provocan refriegas aquí y allá.
El 14 de enero se prohibe el banquete. Los republicanos deciden Los dragones intervienen rudamente. Por la noche, si bien el orden
realizar otro. Cuidadosos de evitar cualquier enfrentamiento con el no está restablecido, al menos el régimen no parece en peligro. En
Poder, toman precauciones: el lugar (Chaillot, lejos del viejo esos desordenados movimientos de estudiantes y gente del pueblo
P a r í s ) , la fecha elegida ( 2 2 de febrero, un martes), el autnento del solamente se han escuchado consignas mil veces repetidas desde
precio de participación, se inspiran en el deseo de alejar a los 1847: " ¡ A b a j o Guizot! ¡Viva la reforma!" Thiers cree poder
elementos menos ponderados, estudiantes y trabajadores. Hábiles predecir que su rival saldrá fortalecido de la prueba.
orleanistas imaginan, de acuerdo con Guizot, un proceso destinado a El 23 es el prólogo del drama. Frente a acontecimientos que los
salvar primero la cara de la oposición y también del gobierno desconciertan, los hombres buscan su inspiración en los recuerdos
(¿por qué solamente el 719 banquete sería ilegal?): se iría al ban- de la Revolución — e n el círculo íntimo real se evoca el 20 de junio
quete; a la entrada, un comisario de policía haría un acta y todo y el 10 de agosto— y de las jornadas del 830. E n una ciudad agitada
terminaría ante un tribunal correccional. Descubierta la transacción, donde la primera barricada es una "barricada burguesa" (Duveau)
suscita la indignación de los republicanos. Armand Marrast, el levantada en la calle de Rivoli, el llamado a tropas de línea y el
oráculo de Le National, un impetuoso discípulo del general Lamar- recurso a la guardia nacional crean una situación anárquica. Sobre
que, toma entonces una iniciativa que ahora sabemos cambió el 12 legiones de la guardia (una por distrito), únicamente la primera
curso de los acontecimientos: redactó un programa detallado de la (Champs Elysées, place Vendôme) manifiesta respecto al gobierno
manifestación, que apareció el 21. El banquete está casi olvidado; una lealtad inquebrantable. Lejos de cooperar con la tropa como
se pone el acento en la procesión que debe acompañar a los en junio de 1832, los guardias nacionales en armas se limitan a
180
i 84 La revolución parisiense
Las revoluciones europeas
asegurar la protección de un edificio que la larga presencia de
gritar: "¡Viva la reforma! ¡Abajo el ministerio!"; además, cada vez Guizot ha hecho odioso. Estalla una detonación aislada. La tropa
más numerosos, se interponen entre los soldados y los manifestantes. dispara. Una veintena de muertos, entre ellos dos mujeres, y una
Ante todo desconcertada la tropa teme que se le dispare por la cincuentena de heridos, yacen sobre los adoquines. La responsa-
espalda. Al rey no le asoma la idea de englobar en una misma bilidad, como en todas las matanzas que fueron causa o pretexto de
represión a la canalla y a la guardia nacional, traidora a su juramento grandes movimientos populares, es un "enigma de la historia".
pero emanación de esas capas sociales por tanto tiempo fieles al ¿Acto provocador de Charles Lagrange, un veterano de la insu-
régimen. " ¡ H e visto bastante sangre!" repite Luis Felipe. Quiere ser rrección lyonesa de 1834? ¿Gesto irreflexivo del sargento Giacomini,
más perspicaz que Carlos X, de quien se dice que se perdió por que creía a su jefe amenazado? Manifestantes a salvo o espectadores
conservar a Polignac hasta el final. Puesto que los "especieros aterrorizados apilan 17 cadáveres en un volquete. ¿Reacción
jenízaros" están impulsados por odio a Guizot, se lo sacrificará; espontánea? ¿Macabra puesta en escena? Convertida en cortejo
así se abrirá una brecha entre los guardias nacionales y los fúnebre, la columna avanza a la luz de esas antorchas encendidas
amotinados. Por la tarde, el rey releva despreocupadamente a su algunos instantes antes como signo de alegría; se detiene ante las
ministro y lo remplaza por el conde Molé; con la prudente lentitud oficinas de L e National gritando: " ¡ A las armas! ¡Se nos asesina!";
de un experto en crisis parlamentarias, éste prepara la formación ello le valió una homilía emocionante pero prudente de Louis
de un nuevo gobierno. Consultado, Thiers se entrega en manos de Antoine Garnier-Pagès. E n las oscuras calles de los faubourgs
la alegría de volver a ocupar una cartera y reconoce que el viejo Saint-Denis y Saint-Martín, sembrando el odio y llamando a la
monarca ha sabido una vez más franquear un escollo peligroso. Al venganza, surgen a su paso nuevas barricadas.
final de la tarde, el espectáculo de la calle inclina al optimismo. El Mientras la manifestación sigue su marcha, Luis Felipe se entera
anuncio de la partida de Guizot produce una distensión que todos del tiroteo. No se le habría escapado la agravación de los aconte-
los testimonios confirman. Mientras que los guardias nacionales cimientos. Si bien sigue a favor de la solución de compromiso, no
piensan en retornar a sus. casas con los laureles del g u e n e r o por eso deja de considerar, en caso de fracaso de la primera, una
victorioso, una enorme muchedumbre afluye en los bulevares. Los soliición de fuerza. Su elección de hombres y sus reacciones hasta
desconocidos se abrazan. Miles de luces titilan en las ventanas. Se el final de la mañana del 24 revelan un pensamiento crecientemente
encienden candelas en los cañones de los fusiles. U n o a otro, dos retardado en relación con el ritmo acelerado de los hechos. Con un
cantos se responden. La Marsellesa y el Chant des Girondins Molé decididamente anacrónico, que se da cuenta de ello, Luis
(Morir por la p a t r i a . . .) que triunfa cada noche en la pieza de Felipe cree innovar presentando a Adolphe Thiers, que se dice
Alexandre Dumas Le chevalier de Maison-Rouge. seguro de una prodigiosa popularidad. A duras penas avala a "la
Los oscuros cabecillas que dirigen las barricadas erigidas en el culebra" Barrot, cuyo prestigio —adquirido en el curso de la cam-
centro no comparten ciertamente esta euforia. Lejos de aplacarlos, paña de banquetes— debería hacer maravillas. Hostilizado por los
la retirada bajo presión de la calle del "viejo bribón" que en mismos insurrectos que trata de calmar, Barrot pronto retornará a
1830 robó al pueblo la repúbhca, exalta su coraje. ¿Hubiesen sido su casa, "para tranquilizar a su esposa".
capaces en todo caso de derrocar la monarquía? Los historiadores Si se impone la idea de sustituir a dos incapaces por un único
lo discuten. Pero los contemporáneos están de acuerdo en ver en comandante en jefe de la tropa de línea y de la guardia nacional,
el tiroteo del bulevar de los Capuchinos el incidente trágico que, de la designación para tal cargo del mariscal Bugeaud, un hombre
un motín, hizo una revolución. ligado estrechamente a la masacre de la calle Transnonain, es
Un poco después de las 9 de la noche, 200 hombres resueltos desgraciada. Para romper la resistencia de miles de amotinados en
venidos del faubourg Saint-Antoine se dirigen hacia la plaza de la estado de alerta tras 1.500 barricadas y muy resueltos a derrocar
Madeleine. A su cabeza, vestido de pantalón y camisa a pesar del a Luis Felipe, Guizot, Thiers, Barrot y consortes, Thomas Bugeaud
frío invernal, uno de ellos sostiene una bandera roja, tal como ese dispone de 10.000 hombres exhautos y desmoralizados. Durante la
otro desconocido en los funerales de Lamarque. En el bulevar de los noche había fanfarroneado; se da cuenta que despejar los alrede-
Capuchinos, a la altura del ministerio de Relaciones Exteriores, el dores de Hôtel de Ville provocaría hecatombes cuya responsabi-
cortejo se enfrenta con un destacamento de línea encargado de
Las revoluciones europeas La revolución parisiense 183
i 84
nicamente con su renuncia. Después de un galante homenaje a la
lidad nadie seguramente le disputaría. Ya el ejército, a quien
duquesa, L a m a r t i n e propone la constitución de un gobierno provi-
la pasividad del rey, de los príncipes y del ministerio en formacion,
sional llamado a consultar al país. Al final de su discurso lo apuntan
por cierto no estimula, parece a b a n d o n a d o a sí mismo. Los generales
nuevos intrusos que se preguntan si los parlamentarios se preparan,
parlamentan en una inextricable confusión. L o s guardias nacionales,
como en 1830, para engañar a los vencedores de las barricadas. El
al menos aquellos que no han vuelto a sus casas, muestran c o m o en
presidente levanta la sesión y los diputados desaparecen, excepto el
la víspera u n a neutralidad hostil o pasan simplemente al c a m p o
pequeño g r u p o que conoce por anticipado las grandes líneas del
enemigo. Por último, los soldados se dejan desarmar. A las 9
desenlace. E n el hemiciclo de la representación nacional trasformada
horas, Bugeaud o r d e n a el repliegue sobre las Tullerías, que se
en club popular — L a m a r t i n e está sentado entre el diputado legiti-
convierten en el objetivo de una m u c h e d u m b r e abigarrada compuesta
mista L a Rochejaquelein y un desconocido de larga barba, sombrero
por guardias nacionales, civiles a r m a d o s y curiosos. El c o r a j e de
torcido y chaquetilla desaliñada— se aclaman los nombres de los
dos compañías atrincheradas en el Palais-Royal retarda el asalto
nuevos gobernantes: Dupont de l'Eure, Lamartine, Arago, L e d r u -
decisivo hasta el mediodía. P a r a Luis Felipe, ese 24 de febrero
Rollin, Garnier-Pagès, Marie y Crémieux, ¡todos republicanos de la
es su 10 de agosto. Dócil — c o m o los insurrectos— a las lecciones
víspera o del mismo día! Esta lista f u e presurosamente redactada al
de la Revolución q u e vivió, el hijo de Felipe-Igualdad n o imagma
final de la m a ñ a n a , cuando los respetables burgueses de Le National
poder apelar al veredicto d e París, aun con las tropas leales acan-
se convencieron por fin de que el poder corría peligro de caer en
tonadas en las provincias. Antes de huir (morirá en Inglaterra en
manos impuras. Se trataba ante todo de cerrar el camino a sus
1 8 5 0 ) , sin q u e nadie intente impedírselo, abdica a favor de su
adversarios de La Réforme, y a través de ellos, a esos oscuros
nieto el conde de París. j r u cabecillas de las sociedades secretas que en la noche del 23 al 2 4
L a abdicación cierra el primer acto del d r a m a del 2 4 de lebrero; habían lanzado a los insurrectos al asalto de la monarquía. L a
el segundo se desarrollará por la tarde en el Palais-Bourbon. A una operación f u e ejecutada con eficacia; propendía a una combinación
C á m a r a desacreditada - ^ u e el propio Thiers algunas horas antes estrictamente parlamentaria con mayoría m o d e r a d a , con L e d r u -
proponía vanamente disolver—, y que sesiona en medio de la Rollin, único rehén de La Réforme, Crémieux, esa misma m a ñ a n a
insurrección triunfante, se va a solicitar la proclamación del adve- todavía partidario caluroso del conde de París, y Lamartine, total-
nimiento de un niño de diez anos y que se confíe dentro de la mente adherido a la república algunos minutos antes de la apertura
legalidad — u n a legalidad por otra parte menoscabada, (¿quien se de la sesión de la Cámara.
acuerda de la C á m a r a de los pares, coautora de la ley que garantiza
Tercer acto. P a r a obtener la consagración de la calle, única
los derechos del príncipe de N e m o u r s ? ) — la regencia a sti madre,
autoridad real, y para no ser postergados — ¿ q u i é n puede saberlo
la duquesa de Orléans, p o c o antes tan valorada por los diputados
nunca?—, tan pronto como lo permite el obstáculo de las barricadas,
de izquierda y Lamartine. P a r a apoyar el 2 4 u n a solución que
los siete notables ganan el Hôtel de Ville, esas "Tullerías del pueblo",
hubiera devuelto t o d o a como estaba el 22, era preciso m u c h o
rodeado por una m u c h e d u m b r e tumultuosa y que ocupan mocetones
coraje, m u c h a fidelidad . . . o m u c h a s ilusiones. U n p u ñ a d o de
armados y resueltos. Encuentran p o r fin una oficina y comienzan a
orleanistas lo testimonia, y ante t o d o Barrot, consciente sin duda
repartirse carteras ministeriales, en medio de un indescriptible
de su papel de aprendiz de b r u j o . Ministro, quizá presidente de
tumulto salpicado con alegres disparos. ¡Tarea c ó m o d a entre com-
Consejo proyectado, hace colocar a la entrada del ministerio del
pinches! Pero hacia las ocho de la noche aparecen con naturalidad
Interior u n a proclama en favor de la duquesa y su hijo. Tras
cuatro hombres que se dicen ministros elegidos después de una
comprobar que "el orden está confiado al coraje y a la prudencia
discusión con las sociedades secretas en los locales de La Réforme:
del pueblo de París y de su heroica guardia nacional" (JÍC), se
tres periodistas, A r m a n d Marrast, Ferdinand Flocon, Louis Blanc y
precipita a la C á m a r a . Y a ha sido lanzada la idea de un gobierno
un desconocido Albert. ¡Molestos, los otros deben apretarse un
provisional, en u n a atmósfera que evoca irresistiblemente el 9 3 :
poco! Luego los once pasan a la sala del consejo municipal colmada
rechazando a los ujieres, los guardias nacionales fuerzan las puertas
por completo p a r a recibir de manera relativamente oficial la
de la asamblea; tras ellos ingresan rápidamente h o m b r e s armados
investidura popular. Son aclamados. Los nuevos jefes, cuya lista
cada vez más bulliciosos e impacientes. Barrot amenaza anacro-
i 84 Las revoluciones europeas La revolución parisiense 185
se proclama a gritos, "se ofrecen en el alféizar de las ventanas poeta que los fascina y domina a la m u c h e d u m b r e , girondinos más
a la admiración de la m u c h e d u m b r e " ( D u v e a u ) y escuchan subir que montañeses, odian el Terror.
hacia sus oídos los gritos de "¡Viva la república!" U n a certeza: las Pero ¿quiénes son estos graves personajes entronizados por rudos
barricadas abolieron el régimen censitario e impusieron la expe- trabajadores? Dupont de l'Eure ( 1 7 6 7 - 1 8 5 5 ) , el presidente nominal,
riencia quizá p r e m a t u r a del sufragio universal. es un símbolo: la imaginación popular se complace en ligar al
¿Pero Francia es revolucionaria? ¿Se tiene el derecho, es correcto decano de la oposición parlamentaria durante dos monarquías a la
acaso, c u a n d o se ha sido designado por un procedimiento revolu- Revolución, asimilando exageradamente la asamblea de los Quinien-
cionario, correr el riesgo de una desautorización? D e allí, tras una tos, d o n d e participó, con la Convención. L a m a r t i n e ( 1 7 9 0 - 1 8 6 9 )
laboriosa discusión, esta pequeña obra maestra: "Si bien el gobierno goza ^ t e las masas incultas del prestigio que confiere un don
misterioso; los artesanos instruidos admiran su obra de historiador
provisional [. . .] prefiere la f o r m a republicana, ni el pueblo de
de la Revolución; durante esas pocas semanas donde el arte de
París ni el gobierno provisional pretenden sustituir con su opinion
gobernar se confundirá con el arte de la oratoria, la acción con la
la opinión de los ciudadanos que serán consultados acerca de la
poesía, n o tendrá rival; ministro de Relaciones Exteriores, resistirá
f o r m a definitiva del gobierno [. . .]" ¿Quién se atreverá a leer esta a las seducciones del sueño y demostrará un sorprendente realismo.
proclama a gentes cada vez más impacientes, a quienes los recuerdos La presencia de François A r a g o ( 1 7 8 6 - 1 8 5 3 ) se impone: la
de Julio predisponen a olfatear la traición en todas partes? Resuel- república ha tenido siempre debilidad por los sabios repubücanos; el
tamente, L a m a r t i n e lanza entonces desde el balcón la fórmula celebre astrónomo es considerado desde lustros atrás como un
mágica: " ¡ L a república ha sido proclamada!" modelo de rigor e integridad política; se revelará particularmente
Así culmina en el Hôtel de Ville un d r a m a iniciado por la hostil a las reivindicaciones obreras, pero muy atento a los intereses
m a ñ a n a en las Tullerías y continuado en el Palais-Bourbon. Su de su familia: es ministro de Marina, su h e r m a n o É d e n n e se
rapidez y desenlace han desafiado todos los cálculos. Le National apodera de la dirección de Correos, su hijo E m m a n u e l será sucesi-
del 25 escribe: " N u n c a una revolución f u e tan rápida, tan impre- vamente comisario de gobierno en Lyon y luego diplomático en
vista." Y Barrot al final de su vida: "Nosotros estábamos [. ..] Berlm. C o m o Arago, Garnier-Pagès ( 1 8 0 3 - 7 3 ) pertenece, por su
muy lejos de sospechar con qué facilidad sería derrocado este medio h e r m a n o desaparecido en 1841, a la aristocracia radical;
gobierno que se decía tan fuerte." Desde la monarquía a la repúbhca este honesto intermediario comercial, convertido en alcalde de
pasando por la regencia, todo cedió a la presión de la muchedumbre. París el 24 de febrero, se instala el 6 de m a r z o en un ministerio
H a s t a las elecciones del 23 de abril — e l 16 es ya una advertencia— de Finanzas que abandona con m a n s e d u m b r e el b a n q u e r o israelita
los revolucionarios parisienses sostenidos por las clases populares Goudchaux, un amigo de James de Rothschild; sobre su memoria
pretenderán regir Francia por mediación de gobernantes conside- pesa el impuesto de 45 centavos. Al insistir sobre lo mediocre del
rados como agentes ejecutores de la "voluntad del pueblo". personaje y referir la frase de un granujilla q u e exclamara ante la
proclamación de su nombre en la hsta del gobierno provisional
¡Ese no es el bueno!", los historiadores no explican su ingreso
11. " L A REVOLUCIÓN DE SIETE S E M A N A S "
—no obstante los anatemas lanzados contra los "vejestorios" del
48— en el gobierno de Defensa Nacional de 1870. Isaac Crémieux
( 1 7 9 6 - 1 8 8 0 ) , llamado también a ligar la Tercera R e p ú b h c a con
Un gobierno desgarrado y desarmado
la Segunda (su decreto a favor de sus correligionarios de Argelia
es f a m o s o ) , T h o m a s Marie ( 1 7 9 5 - 1 8 7 0 ) , diputado repubHcano
El espíritu de partido no ha sido benévolo para con los gobernantes
bajo el Segundo Imperio, Alexandre Ledru-RoUin ( 1 8 0 7 - 7 4 ) , todos
del Hôtel de Ville que n o pensaron jamás en el recurso a la
abogados, dirigen respectivamente Justicia, Obras Públicas' y el
violencia: traidores o incapaces, así fueron juzgados en general.
mmisteno de Interior. Los dos primeros son hábiles moderados;
Representan, sea como fuere, una corriente mayoritaria entre los
el tercero es el líder vociferante de una democracia social p u r a m e n t e
del 4 8 de Francia y E u r o p a : creen en la Fraternidad. ¡Hombres del verbal; los conservadores le reprocharán la hgereza de sus costum-
92, algunos del 89, raramente del 93! Siguiendo el ejemplo del
i 84 186
La revolución parisiense
Las revoluciones europeas
junio. Talleres y comercios que la insurrección ha cerrado reabren,
bres y especialmente sus cínicas intervenciones en la campaña
pero faltan los pedidos porque los capitales se esconden. Así se
electoral; han de olvidar, una vez pasado su miedo, los eminentes
nutre el marasmo de los negocios, nacido de la agitación. París se
servicios prestados a la causa del orden por un ministro de Interior
ha convertido en una ciudad de ociosos y desocupados en armas
revolucionario.
que se puede imaginar fácilmente con ayuda de los recuerdos
Los retrasados de la noche del 24 sólo a partir del 28 serán
de 1944. Pero en 1848, ninguna fuerza regular garantiza la seguridad
miembros plenos del gobierno provisional, organismo colegiado que
de las personas y los bienes: el ejército vencido ha desaparecido; la
representaba al estado, aunque no recibirán carteras (mientras que
policía se ha esfumado; en la prefectura de policía, el gigante Marc
los ministros no formarán parte del gobierno). Marrast ( 1 8 0 1 - 5 2 ) ,
Caussidière ( 1 8 0 8 - 6 1 ) , " u n casco, dos pistolas en la cintura, un
personaje considerable a causa de sus funciones de redactor jefe
enorme tahalí sosteniendo el sable", se ha apropiado de un f e u d o al
de Le National, jugó una buena pasada a sus amigos al reunirlos
margen de la autoridad de la alcaldía de París, y es considerado no
bajo el pabellón de La Réforme-, pronto sucesor de Garnier-Pagès
obstante como un miembro del gobierno. Sus montañeses, reclutados
en la alcaldía de París, se comportará como enemigo jurado de la
entre ex detenidos políticos, inquietan a lös poseedores y no
extrema izquierda que personifican sus tres compañeros de la hora
tranquilizan en absoluto a los hombres que sesionan en el Hôtel
undécima. Flocon ( 1 8 0 0 - 6 6 ) , redactor jefe de La Réforme, tuvo
de Ville bajo la impotente protección de alumnos de Saint-Cyr y
probablemente un papel importante durante la insurrección. Louis
"politécnicos". En cuanto a los guardias nacionales, nadie puede
Blanc ( 1 8 1 2 - 8 2 ) , colaborador de La Réforme es, como se sabe, un
distinguir luego de la insurrección, entre ellos, a los defensores del
historiador de talento y el teórico de reputación europea de la
orden de los provocadores del desorden. De m o d o que la ausencia
Organización del trabajo-, arde por vengarse del destino que obligó
de venganzas y el número extremadamente reducido de actos de
a una vida difícil al niño de buena burguesía y dotó a un gran
pillaje son aun más notables: nadie pensó en acosar a los "colabo-
hombre de una minúscula estatura. A su lado, quiso que un
radores" del régimen difunto; sin duda a veces se aprovecha la
proletario simbolizara su misión. Alexandre Martin ( 1 8 1 5 - 9 5 ) ,
ocasión para destruir máquinas y emprenderlas en los arrabales con
llamado Albert, el humilde mecánico, fue impuesto por Blanc a
las vías férreas (éstos son solamente, como hemos señalado, gestos
los burgueses. Éstos, recuperados de su sorpresa, se acostumbran
que cumplen en toda Europa, la conciencia adormecida, las víctimas
al m u d o joven que, por su presencia, les da buena conciencia.
del progreso).
Tras la desaparición del gobierno, el ex militante de las estaciones
El lado positivo de la explosión de 1848 es inseparable del clima
recuperará al fin su ambiente, el de las sociedades secretas; conocerá
romántico. El pueblo de París está poseído de la "ilusión lírica":
la suerte de los vencidos del 15 de mayo, y luego terminará su
"Por fin se va a constituir una sociedad justa cuyos miembros
larga vida en un oscuro empleo de la compañía de gas.
serán todos libres e iguales [. . .] Después ¿quién sabe si con la
La cohesión de un gobierno compartido entre todos los matices ayuda del contagio muy pronto toda E u r o p a no va a trasformarse
de la ideología republicana y dividido por conflictos personales, en una federación de pueblos libres? Después de todo, solamente es
sigue siendo el hecho principal de la primavera de 1848. Los lazos necesaria la rectitud y la energía de parte del gobierno provisional
masónicos (Dupont de l'Eure, Crémieux, Ledru-Rollin, Gariiier- [ . . . ] " ( E l subrayado es nuestro). Tirar al aire, alborotar, ha sido
Pagès, Marie, L. Blanc pertenecen a la francmasonería), contribu- ante todo para los insurrectos la expresión ingenua del triunfo sobre
yeron sin duda a ello, como gustaba señalarlo G. Duveau. Pero el el pasado. Deambular fusil en mano, pistola al cinto, es probarse
verdadero cimiento del gobierno de febrero fue la convicción de a sí mismo y a los otros que se pertenece a la vanguardia del
que la unión alrededor de Lamartine era para cada uno el único partido republicano. Los "ex combatientes" se vuelven más nume-
recurso, en medio de tormentas amenazantes, de alcanzar el mar rosos a medida que se aleja el 24 de febrero, más indinados que los
de la tranquilidad, es decir las elecciones, sin ir demasiado a la auténticos insurrectos a servir de escolta a los cabecillas que van
deriva. a pavonearse ante los gobernantes.
La situación de París la noche del 24 de febrero es muy Jamás el pueblo de París tuvo tantos guías solícitos por asegurar
poco tranquilizante; mejorará con lentitud; el orden en la calle será su felicidad. La supresión de la caución y el estampillado provoca
restablecido verdaderamente recién después de las jornadas de
i 84 Las revoluciones europeas La revolución parisiense 189
un extraordinario florecimiento de la prensa. De febrero a junio, romántica, hace su entrada en la plaza pública. Los discípulos de
nacerán más de 300 periódicos de bajo precio —el diario a George Sand tratan de educar a las francesas y de vencer los
1 centavo hace su aparición— a menudo efímeros, pregonados en prejuicios de los franceses. L a opinión recibirá al Club de la
la vía pública, e incluso pegados como carteles. Sus fundadores emancipación de las mujeres de Eugénie Niboyet con una irónica
no se comportan como hombres de negocios sino como apóstoles. simpatía. Los clubes de refugiados extranjeros, sobre los cuales
Escrita para el pueblo, como lo atestiguan los títulos atractivos volveremos, procuran junto a los clubes avanzados modificar
(La voix du peuple, L'Esprit du peuple. Le Peuple constituant, de la política de Francia — e s t o al precio de disturbios internos—. L a
Lamennais, Le réprésentant du peuple, de P r o u d h o n ) , esta prensa mayor parte de unos 150 clubes políticos goza, erróneamente,
se propone menos informar que educar, es decir orientar. La condena de una espantosa reputación: tal es el caso de la Sociedad fraternal
en la enfática lengua de la época de los "abusos y privilegios central del suave Etienne Cabet ( 1 7 8 8 - 1 8 5 6 ) . Verdaderamente
sociales" es el tema principal. No la acompaña ningún plan práctico. temibles son aquéllos surgidos de las sociedades secretas, que han
L a asociación, basada en la fraternidad de los trabajadores y la conservado en un régimen de libertad las costumbres de la
comprensión de los poseedores, raramente puesta en duda, es el clandestinidad. La Sociedad de los derechos del hombre se preocupó
remedio-milagro. El catolicismo — q u e según algunos autores desde su fundación por reclutar hombres de confianza dispuestos a
habría marcado junto a la masonería el curso de la revolución responder sin discutir al primer llamado a la insurrección. El club
francesa de 1 8 4 8 — contribuye, por mediación de un puñado de de Blanqui y el de Barbés concentraron, en razón de la personaUdad
intelectuales, a extender el sentimiento de que la solución de los de sus animadores, la atención de un vasto público. Encarcelado
problemas sociales es asunto de buena voluntad: en L'Ere nouvelle, desde 1839 — p a s a r á más de treinta y tres años en prisión—
Jean-Baptiste Lacordaire, el abate Henri Maret y Anton Ozanam, Auguste Blanqui ( 1 8 0 5 - 8 1 ) es liberado el 24 de febrero; ¡el 25
son, para las clases medias, los abogados de los pobres. Existe funda la Sociedad republicana centrali Al comienzo, celebridades
también una prensa violenta cuya audiencia se ampliará a medida (Baudelaire, Sainte-Beuve) y damas de la buena sociedad vienen
que los sueños se enfrenten con la realidad. Extrae su fuerza de a escuchar con trémula curiosidad a este pequeño hombre bien
la tradición del 9 3 ( 1 8 4 8 tiene su Père Duchesne o su Vieux vestido que expone con cortesía una especie de teoría de la
Cordelier). B a j o el patrocinio de los "grandes antepasados", ataca a "revolución permanente". C u a n d o se descubre que no se trata de
los "burgueses", los "girondinos de hoy", denuncia como una frases al viento, el bello mundo desertará de un club que cada vez
estratagema reaccionaria la pretendida fraternidad. Por sus exagera- frecuentarán mas los artesanos revolucionarios de los faubourgs.
ciones, creó en las provincias y en E u r o p a la impresión de que la Liberado también por las jornadas de febrero pero frío con Blanqui
capital estaba en manos de nuevos terroristas. desde el fracaso de 1839, A r m a n d Barbés ( 1 8 0 9 - 7 0 ) inaugura el
En París, la acción de la prensa es eclipsada por la de los 21 de marzo el Club de la revolución. El título fue elegido sin duda
clubes, cuyo solo nombre, evocador del período jacobino, des- para distraer adherentes al club adverso. Contrariamente a Blanqui,
pertará la desconfianza de los rurales. Su auge prodigioso es la áspero y duro, Barbés no apela a la tradición de 1793. Es un hombre
expresión de un sentimiento de alivio o de liberación. Puros idea- del 48, seductor y sentimental. Al comienzo sueña, como otros
listas pero también aficionados a los golpes de mano, desclasados cabecillas populares, con hacer de su club un comité electoral
obligados durante mucho tiempo a esconderse o callarse se central que impulse, de acuerdo con clubes provinciales, la consti-
apoderan de tribunas erigidas con apremio y desde allí exponen tución de comités electorales departamentales. La rivalidad con la
vastos programas de reconstrucción social y política. En esos Sociedad republicana central "izquierdizará" las posiciones iniciales
desacostumbrados espectáculos se agolpa la muchedumbre de del Club de la revolución. Las promesas ilusorias, fruto de la
curiosos, armados o no. El buen pueblo ignorante pero que arde desunión, marcarán todas las empresas de los voceros del pueblo
en la emotiva pasión de instruirse manifiesta, él que todavía no parísiense. El gobierno aprenderá poco a poco a servirse de ellas,
era nada el' 21 de febrero, la alegría delirante de participar en pero en varias oportunidades cuestionará su existencia.
primera fila en la fundación de un mundo nuevo. E n pocas semanas
surgen cerca de 400 clubes. El feminismo, producto de la literatura
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Las revoluciones europeas La revolución parisiense

Un gobierno prisionero: la revolución social de 7 días Lo que hace la elocuencia de un poeta, la elocuencia de un
tribuno podrá deshacerlo. Por la noche, el intratable Blanqui reunió
(25 de febrero - 2 de marzo)
a sus partidarios: ¡nueva manifestación el 26 a favor de la bandera
roja! Un ingenioso compromiso que Louis Blanc acepta, prevé que
Desde el 25 de febrero hasta el 2 de marzo, el gobierno vive
"las autoridades llevarán la insignia roja, la que será también puesta
en el constante temor de ser desbordado tanto por la muchedumbre
en el asta de la bandera". El 27, un domingo, los nuevos gober-
agolpada ante el Hôtel de Ville, que segtín los rumores lo aclama
nantes abandonan por algunas horas la pesada atmósfera del
o lo hostiliza, como por las delegaciones que lo asedian y exigen
Hôtel de Ville. L a solemne proclamación de la república al pie de la
ser escuchadas inmediatamente. Las importantes decisiones tomadas,
columna de Julio tiene un doble objeto: alimentar el gusto de los
particularmente en el plano social, no constituyen elementos de
parisienses por ceremonias que recuerdan las grandes fiestas
una política concertada, como lo hacen creer los imperativos
cívicas de la Revolución y recoger, para imponerla a los revoltosos,
pedagógicos. Son promesas que jalonan el calendario de ostentosas
la adhesión de la gente pacífica. Detrás de los cuerpos constituidos,
demostraciones. los "Saint-cyrianos", los "politécnicos", los elementos de la guardia
El 25 hacia el mediodía, un pequeño grupo se separa de una nacional con los que se mezclan "otros ciudadanos cuyas armas
muchedumbre armada sobre la que flamean banderas rojas; a su y vestimenta son el signo viviente de la revolución cumplida", los
cabeza el obrero Marche tiene en sus manos un petitorio elaborado miembros del gobierno "con la banda tricolor y la insignia r o j a "
en las oficinas de La Démocratie pacifique de Considérant (1808- toman un baño de masas que los consuela de los clamores discor-
9 3 ) , que Louis Blanc hubiera podido rubricar. Enfrentando ruido- dantes de los días precedentes.
samente a las autoridades, Marche comenta lacónicamente: "¡La Al día siguiente, 28, divididos en cuerpos de oficios (construcción
organización del trabajo, el derecho al trabajo inmediatamente] Tal e imprenta, especialmente), 2.000 obreros vienen a reclamar la
es la voluntad del pueblo. ¡Él espera!" ¿Qué hacer sino ceder? Y creación de un "ministerio del Progreso", es decir del Trabajo.
Louis Blanc redacta con la alegría que es de imaginar el famoso Concertada o no con Louis Blanc, esta reivindicación está dentro
decreto: "El gobierno de la república francesa se compromete de la lógica del decreto del 25, cuya primera aplicación práctica
a garantizar la existencia del obrero por el trabajo [. . .] a garantizar parece ser, el mismo 28, bajo la denominación de Talleres nacionales
el trabajo para todos los ciudadanos. Reconoce que los obreros (en realidad, se trata de talleres de caridad), una institución
deben asociarse entre ellos para gozar del beneficio de su trabajo." revolucionaria. Satisfacerla equivaldría a confiar a un teórico de
¡En pocas horas, la república se ha convertido, en los papeles, en "la organización del trabajo" la misión oficial de instaurar el
socialista! socialismo. Una vez más la mayoría es superada. Por una transacción
¡A régimen nuevo símbolo nuevo! Hacia las tres de la tarde, que calma las susceptibilidades de la extrema izquierda, se decide
gentes excitadas por rumores de una próxima regencia, repiten ante la formación inmediata de una "Comisión del gobierno para los
el Hôtel de Ville: "¡La bandera roja!" Lamartine se adelanta y trabajadores". Sesionando en el Luxemburgo en el lugar de la
afronta los gritos de los belicosos. La sorprendente sangre fría que Cámara de los pares, bajo la presidencia de Blanc asistido por
ya había demostrado el 24 es estimulada por el temor, expresado Albert, compuesta por delegados obreros y patronales a los que
a media voz, de que la adopción de la bandera roja restará todo se agregarán escritores socialistas y economistas, tiene "como misión
crédito a su política pacífica de ministro de Relaciones Exteriores. expresa y especial ocuparse" de la suerte de los obreros. Reunida
¡De su vuelo lírico admirablemente adaptado a la sensibilidad el 19 de marzo, propone la abolición del marchandage* (espe-
popular, la historia retuvo el esplendor de una alocución . . . falsa! cialmente en la construcción, los jefes de equipo, verdaderos
" L a bandera roja [. . .] sólo ha recorrido el Champ-de-Mars teñida
con la sangre del pueblo l. . .] la bandera tricolor h a recorrido el
* Literalmente, "regateo". Alude a un contrato mediante el cual un
mundo con el nombre, la gloria y la libertad de la patria". Un subcontratista se compromete a efectuar cierto trabajo a precio fijo, y
testigo comprueba: "Ese pueblo, que subía como una marea, que para el cual aporta fuerz-a de trabajo reclutada y remunerada por su exclusiva
cuenta. [N. del E.]
resonaba como un trueno, se detuvo y calló".
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Las revoluciones europeas La revolución parisiense 193

subcontratistas, explotan sin vergüenza a los compañeros que principio debía comprender 24 batallones de 1.000 voluntarios de
contratan) y la reducción de la jornada de trabajo. El gobierno 16 a 30 años cada uno, que recibían 1,50 francos por día. Jóvenes
ratificará lo actuado el 2 de marzo; el decreto que fija en 10 horas trabajadores que habían hecho su bautismo de fuego en las barri-
para París y 11 para las provincias la duración del trabajo jornali- cadas se tentaron (el servicio en la guardia nacional seguía siendo
zado, concierne, contrariamente a la legislación inglesa, a los gratuito) y se convirtieron en preteríanos de la legalidad. La
trabajadores de todas las edades de ambos sexos y de todas las actitud de la guardia móvil en junio probará que, a ejemplo de
empresas. Pero después de este buen punto de partida, la comisión Caussidière, los once de Hôtel de Ville habían sabido "hacer el
entrará en controversias sin fin entre doctrinarios intransigentes. orden con el desorden".
Así se termina una revolución social de 7 días. Prácticamente El 5 de marzo, habían anunciado para el 9 de abril las elecciones
ahogado, el gobierno hizo promesas cuya realización se considera para la asamblea. Los numerosos disturbios comprobados en los
segura: a comienzos de marzo, ¿por qué dudar, entonces, de la departamentos ya citados (delitos forestales, exacciones contra el
eficacia social de los Talleres y de la Comisión del Luxemburgo fisco, agitación antisemita en el este, rotura de máquinas, huelgas)
que dirige Louis Blanc? El compromiso de reformar la tributación están vinculados a las dificultades de 1845-47; adquirieron un
indirecta (impuestos a la sal, las bebidas, etc.), y los decretos del carácter explosivo a causa de la desorganización de las adminis-
2 de marzo ¿no representan en fin la prueba de una activa simpatía traciones, pero no tenían como destinatario al gobierno. Es sabido
hacia las "clases obreras"? que a partir del 25 de febrero, el inmenso ejército de "republicanos
del día siguiente" sumerge en el interior a la pequeña cohorte de
los "republicanos de la víspera". Así en Chavignólles, el 26 "la
Un gobierno bajo el régimen de libertal condicional proclamación de la república fue anunciada en la alcaldía. Este
(4 de marzo - 16 de abril) gran acontecimiento dejó estupefactos a los burgueses. Pero cuando
se supo que la Corte de casación, la Corte de apelación, la Corte de
El 4 de marzo, los funerales de "los ciudadanos muertos por la cuenta, el Tribunal de comercio, la Cámara de notarios, la Orden
república en las jornadas del 23 y 24 de febrero" soii ocasión de los abogados, el Consejo de estado, la Universidad, los generales
para una nueva y conmovedora ceremonia cívica. Después que un y el mismo señor de La Rochejaquelein daban su adhesión al
inmenso cortejo en el que figuraban el clero de la Madeleitie, gobierno provisional, recobraron el aliento [. . .]" (Bouvard y
guardias nacionales, y delegaciones de obreros condujo los despojos Pécuchet).
de los mártires hasta la columna de Julio, Marie expresa la La adhesión de los grandes cuerpos del estado y del ejército a
esperanza de que "la calma, la grandeza de [la] reunión de hoy todos los regímenes era regla desde 1815; el clero no aprobaba
será una nueva prenda de esos principios de orden que son el en absoluto la atmósfera voltairiana de la monarquía de Julio, a la
fundamento sólido y durable de la nueva república". que reprochaba no haber sostenido con firmeza la causa de la
En realidad, después del 4 de marzo, el gobierno provisional pasa libertad de enseñanza secundaria; el voto campesino abre a su
del régimen de detención al de libertad condicional. Aguijoneada influencia amplias perspectivas. La nobleza legitimista ve en la
por la prensa, encuadrada por los clubes, una fracción de las caída de Luis Felipe el juicio de Dios, y es sabido que calcula desde
clases populares se entrega apasionadamente a la política: la mucho tiempo atrás las ventajas de un derecho de sufragio ampliado.
preparación de las elecciones en la guardia nacional y en la asamblea Los notables del lugar no estaban preparados para hacer de don
es el gran tema. El gobierno aprovecha este respiro para prevenir Quijote. El miedo a la extensión de los disturbios a las provincias, y
el retorno de las amenazas callejeras y apresurar el momento de la particularmente el espectro del "comunismo" parisiense los llevan a
trasmisión de su frágil autoridad a los representantes de la nación. unirse a una república que rechaza la herencia del 93 con sus
El 25 se había decidido abrir la guardia nacional a todos los símbolos: la guillotina y el assignat.* El 26 de febrero el gobierno ha
franceses de 21 a 55 años. Esta medida eminentemente democrática,
aumentará los efectivos de 56.000 hombres en febrero a 190.000 * Literalmente, "asignado": papel moneda emitido bajo la Revolución,
en marzo. Ese mismo 25 se instituye la guardia móvil, que en que estaba en principio garantizado con "los bienes nacionales". IN. del E.j
La revolución parisiense 195
1 9 4 Las revoluciones europeas
A último momento, por temor a Blanqui, que dirige la manifes-
tomado la iniciativa de abolir la pena de muerte en materia política; tación, la extrema izquierda se une a la mayoría que posterga las
frente a la crisis financiera y monetaria, Garnicr-Pagès utiliza medios elecciones en la guardia nacional para el 5 de abril y las de la
clásicos para ganar la confianza de los poseedores y aumenta en un asamblea para el 23. Una vez más, el gobierno se decide, como los
45% todos los impuestos directos, lo que provocaría "en el débiles, por un compromiso. Para sus adversarios la tentación
campo un descontento fatal para la república" (Ch.-H. Pouthas). de abusar de la fuerza contra la impotencia es grande.
A plazo, por supuesto. Por el momento el campesino, incluso
pobre, cree amenazada su fracción de tierra por los escritores
socialistas y hace responsables del crecimiento de sü contribución ni. LA DERROTA DE LA REVOLUCIÓN POPULAR EN PARÍS V EN LAS
territorial (recaudada recién después de las elecciones) a los pere- PROVINCIAS ( 1 6 - 2 3 DE ABRIL)
zosos que haraganean en los Talleres nacionales. Con su cédula
de voto, contribuirá a formar una república "honesta" y barata. Este El 16 de abril los extremistas pierden el control de las calles de
estado de ánimo es conocido por el ministro de Interior, Ledru- París.' El 23, el voto de los franceses los condena sin apelación.
Rollin, y pequeños grupos de "republicanos de la víspera". Éstos El 16 de abril se lee en los muros de París un extracto no firmado
intentan modelar a su imagen a los conciudadanos más atrasados, del Bulleíin de la république del 14: "Si las elecciones no hacen
creando a la manera parisiense clubes y periódicos. Aquél, partidario triunfar la verdad social [. . .] entonces no habrá más que una
de una "concepción intervencionista y radical [. . .] en las elec- sola vía de salvación para el pueblo: [. . .] será [. . .] la de suspender
ciones" (J. Kayser), sustituye a los prefectos por "misioneros de las decisiones de una falsa representación nacional." Para evitar el
ideas nuevas", los comisarios del gobierno. Si los historiadores se recurso a la solución extrema que George Sand, la Egeria de la
esfuerzan por juzgarlos con equidad, los "republicanos del día república, expone ingenuamente en un órgano oficial. Le club des
siguiente" los describen como Convencionales en misión; señalan clubs, federación de unos sesenta clubes, resuelve exigir la poster-
con malicia su falta de desprendimiento, ¡esos señores que se gación indefinida de estas malditas elecciones. La ocasión será la
preparan un porvenir de parlamentarios! Las circulares cada vez reunión en el Champ-de-Mars el domingo 16 de abril de miles de
más incisivas de Ledru-Rollin y la actitud de los "clubistas" pari- obreros invitados a elegir a los oficiales del estado mayor de la
sienses encomiando una postergación de las elecciones, demuestran guardia nacional; el pretexto, una manifestación para la aplicación
que los avanzados no creen para nada en la eficacia de la de los grandes principios: abolición de la explotación del hombre
propaganda oficial. por el hombre, organización del trabajo. Prevenida de diferentes
La certeza de su próxima victoria incita a los hombres del lados, especialmente por Louis Blanc y Albert, ligados con los
orden a descender a la calle: el 14 de marzo el gobierno, en un jefes del complot, la mayoría decide por primera vez resistir; hace
gesto de democratización, suprime las compañías de élite (grana- un llamado a la guardia móvil pero también a la guardia nacional
deros y tiradores) de la guardia nacional. El 16 de marzo, 30.000 que Ledru-Rollin convoca, tras un conflicto de conciencia. Los
guardias nacionales convergen hacia el Hôtel de Ville para salvar obreros sin armas desfilan ante las risas socarronas de "gorros de
su "gorro de plumas". En sus filas figuran habitantes del faubourg plumas" que gritan: "¡Viva la república! ¡Abajo los comunistas!".
Saint-Germain, pero también pequeños burgueses que tres semanas Un abismo separa el 16 de abril de los días 16 y 17 de marzo. El
antes fueron combatientes de la libertad. La escisión entre los aislamiento de los revolucionarios se ha acentuado. En marzo, la
insurrectos de febrero tiene como oportunidad una herida en el defección odiosa de los pequeños burgueses republicanos había
amor propio y como causa el problema social. Los manifestantes, sido compensada de inmediato por la calurosa alianza del pueblo.
que gritan: " ¡ A b a j o Ledru-Rollin! ¡Abajo los comunistas!" son Un mes más tarde, muchos trabajadores, al m o d o del coronel
muy bien recibidos por el gobierno. Barbes (desde la publicación de los documentos Taschereau, el 31
So pretexto de apoyar a este último contra la escalada reaccio- de marzo, su rival Blanqui parece perdido), se han incorporado a su
naria, los clubes, de acuerdo con Louis Blanc, reúnen al día legión para sostener al gobierno. En vísperas de desaparecer, este
siguiente más de 100.000 personas, cantidad nunca antes vista. El último, gracias al coraje y a la habilidad de Lamartine, conquista
objetivo real es imponer la postergación de las diversas elecciones.
i 84
Las revoluciones europeas La revolución parisiense 197

por fin su libertad — a pesar de la gritería de los clubes, hace IV. LOS ÚLTIMOS SOBRESALTOS PARISIENSES CONTRA EL
entrar las primeras tropas en la capital— y, a expensas de la extrema VEREDICTO POPULAR: LAS JORNADAS DE J U N I O
izquierda, ha reforzado su cohesión: la actitud ejemplar de Ledru-
Rollin aisla a Blanc y Albert. Con la Fiesta de la fraternidad Entre las lamentables empresas políticas del 15 de mayo de 1848
del 20 de abril una era agitada termina en una apoteosis: centenas y del 13 de junio de 1849 contra la representación nacional, la
de miles de parisienses, actores emocionados o espectadores entu- insurrección obrera de junio de 1848 es la última manifestación
siastas, participan en la entrega de banderas a la guardia nacional, de las ilusiones perdidas y la desesperación.
a la guardia m ó v i l . . . y ¡al ejército! La composición de la Comisión del poder ejecutivo para la cual
Los resultados de las elecciones del 23 de abril, destacadas son designados por orden decreciente Arago, Garnier-Pagès, Marie,
por una participación del 84 % , superan los más sombríos pronós- Lamartine y Ledru-Rollin, muestra que los electos de la nación
ticos de los revolucionarios parisienses. ¡Francia, con París, los juzgan excesivas las concesiones arrancadas al gobierno. El 15 de
rechaza! Hartas de agitaciones que no comprenden, las provincias se mayo, los clubistas toman al pie de la letra las amenazas de
han irritado con las manifestaciones del 17 de marzo y 16 de abril George Sand. Para clausurar la asamblea y proclamar un irrisorio
destinadas a amordazarlas; su voto es un reflejo de miedo y de gobierno insurreccional, no logran movilizar por última vez a las
indignación. Sobre 900 bancas, los candidatos de La Réforme y del masas sino invocando la liberación de Polonia. Albert, Barbès y
socialismo obtienen menos de 100; los monárquicos convertidos en Blanqui son arrestados, Caussidière y Blanc eliminados de la vida
republicanos conquistan 300: a una mayoría de legitimistas se poh'tica.
agregan algunos ex dinásticos ( B a r r o t ) . El clero tiene más peso
Las jornadas de junio (23 al 2 6 ) , son el producto exclusivo de
que los instructores movilizados por su ministro Hippolite Carnot.
un proletariado que desprecia a los políticos de la asamblea y a los
El innegable éxho de los 500 republicanos llamados de Le National
organizadores de vanos golpes de mano. Los obreros, y no sola-
se debe al prestigio de Lamartine y un régimen electoral propio
mente los beneficiarios de la institución, ven en los Talleres un
para facilitar la acción de los agentes del gobierno: el escrutinio de
recuerdo — l a victoria popular de febrero— y un símbolo: el
lista departamental a una vuelta termina por favorecer, a causa
de la multiplicidad de listas, a las que confeccionaron b a j o el derecho al trabajo. Para la asamblea, intérprete del país, la existencia
patrocinio oficial los comisarios del gobierno: 77 de éstos serán de los Talleres es un escándalo financiero (150.000 francos por
efímeros representantes del pueblo. día), moral (más de 100.000 inscritos pagados para no hacer
nada) y político: Marie había favorecido la creación de un Club
Extrañas comprobaciones aumentan la amargura de los revolu- de Talleres nacionales y el ingreso de los obreros que él creía
cionarios: la mayoría de los diputados son, como b a j o la monarquía, controlar en la guardia nacional; la penetración de la propaganda
ricos propietarios, mientras crece la proporción de abogados; los "demagógica" en un medio destinado a combatirla fue una de las
26 obreros elegidos son en general moderados. En París, la derrota lecciones del 15 de mayo. Las medidas que anunciaban la disolución
de los escritores socialistas Considérant y Cabet es aplastante y provocan una serie de motines espontáneos que degeneran en una
Louis Blanc, último elegido de los miembros del gobierno, recoge guerra estrictamente social: contra los insurrectos del hambre, la
dos veces menos votos que Lamartine (120.000 contra 2 6 0 . 0 0 0 ) . guardia móvil y la guardia nacional combaten con mayor ardor
La "revolución de siete semanas" (E. Labrousse) culmina con la
que el ejército; varios miles de muertos del lado de los insurrectos,
melancólica conclusión de que la fundación de una nueva sociedad
1.000 en las filas adversarias. El miedo no es solamente, según se ha
y su mantenimiento son incompatibles con el libre juego de la
dicho, un "miedo burgués", si bien como se ha recordado, la zona
democracia política: en las elecciones cantonales y después en las
de las barricadas sea la del París obrero frente al París burgués.
legislativas de mayo de 1849, el sufragio universal dispensará sus
Ledru-Rollin pidió a los prefectos el envío de contingentes
favores a los electos del régimen censitario.
de la guardia nacional y las unidades de esta milicia popular se
desplazan desde el norte, el este y Normandia. Las provincias arden
por combatir, armas en manos, a los perpetuos revoltosos que se
niegan a inclinarse ante el sufragio universal. ¿Cómo sorprenderse
i 84 Las revoluciones europeas La revolución parisiense 199

si después de una atroz represión (más de 1.500 fusilados, de Esta política enfrenta a la extrema izquierda, donde los "paci-
10.000 condenados a prisión o a ser deportados) seguida de la fistas" Considérant y Leroux son figuras originales; en el gobierno,
anulación de las conquistas sociales de la revolución (una ley de Ledru-Rollin y Louis Blanc son fervientes partidarios de la "cruzada
septiembre lleva la limitación de la jornada de trabajo a 12 horas y de los pueblos". Lamartine, uno de los escasos escritores que no
solamente en las manufacturas, fábricas y talleres de por lo menos ha cedido a los arrebatos de 1840 (su Marsellesa de ¡a paz no daba
la razón ni a Becker ni a Musset), logra hacer compartir sus
20 obreros; en noviembre, el derecho al trabajo no es introducido
convicciones por la mayoría de sus colegas, porque la Francia
en la constitución), los proletarios redescubren, más allá de los
republicana, a veces se lo olvida, está amenazada hasta mediados
sueños de febrero, el mito bonapartista?
de marzo por una "cruzada de los reyes". Nicolás I acaricia la
La impresionante victoria de Luis Napoleón del 10 de diciembre esperanza de realizar con Austria y Prusia el sueño que la insu-
de 1848 se debe, como hemos dicho, ante todo al campesinado. rrección polaca, las agitaciones alemanas y los disturbios italianos
Los obreros participaron ampliamente en ella: con sus 5 millones habían disipado después de julio de 1830. Hecho más grave: los
y medio de votos, el sobrino del petit caporal derrotó al candidato liberales alemanes aprueban la movilización prusiana en el Rhin
de la burguesía, el general republicano Louis-Eugène Cavaignac temiendo que los franceses invadan una vez más la pacífica
(un millón y m e d i o ) , jefe del poder ejecutivo y "príncipe de Germania.
sangre" desde su triunfo de junio, y aplastó a los de la izquierda
El manifiesto del 4 de marzo, aparecido antes de la caída de
parlamentaría Ledru-Rollin ( 3 7 0 . 0 0 0 ) , del socialismo, François Metternich y las jornadas berlinesas que disiparon todo temor a
Raspali ( 3 7 . 0 0 0 ) y Lamartine ( 1 7 . 0 0 0 ) , símbolo de una esperanza una coalición como la de 1815, no es solamente una obra circuns-
muerta. tancial; es también en un estilo noble la exposición de una política
El sufragio universal había puesto fin a la revolución en abril. a largo plazo. Se repudia el mesianismo revolucionario: "El mundo
¿Va a sustituir ahora a la república con el imperio o con la y nosotros, queremos caminar hacia la fraternidad y la paz." Obli-
monarquía? A esta alternativa, la jornada del 13 de junio de 1849 gado a calmar las aprensiones de las cancillerías sin irritar a los
es una respuesta cuyo anacronismo percibe confusamente el pueblo. revolucionarios parisienses, Lamartine reconoce de hecho los tra-
El "asesinato de la república r o m a n a " impulsa a Ledru-Rollin a tados de 1815 que condena formalmente de derecho. Su revisionismo
intentar contra la Legislatura con mayoría conservadora electa un de principio sólo considera el recurso a la diplomacia. Profunda-
mes antes, un nuevo 15 de mayo que se hunde en el ridículo o la mente apasionada de la paz, Francia se declara no obstante dispuesta
indiferencia. El jefe de la M o n t a ñ a escapa a la represión refugián- a combatir si está "obligada o amenazada" o si Austria pretende
dose en Londres . . . aplastar en sus fronteras a los movimientos liberales y nacionales
de Italia y Suiza. Deseando solamente el "proselitismo de la estima
y la simpatía", el manifiesto logra su objetivo esencial: obtener la
V. LA REVOLUCION FRANCESA Y EUROPA gracia de Londres. Palmerston, a quien Lamartine acaba de
hacer saber que Francia no tiene ninguna ambición sobre Bélgica,
La repiiblica francesa repudia el mesianismo revolucionario aprecia los esfuerzos del gobierno francés por desasirse del roman-
ticismo de las barricadas. El entendimiento estrecho con el Reino
Mientras que en lo interno el gobierno, b a j o el imperio del terror Unido es para Lamartine y sus sucesores la condición para el
mantenimiento de la paz.
tomaba medidas improvisadas, fijaba con coraje los principios
de una política exterior que se esforzó por aplicar a pesar de las Esta política, que se liga con la de la monarquía de Julio después
más vivas oposiciones, y que sus sucesores, incluido el príncipe- de 1830, no es nada estimulante para una izquierda intervencionista
presidente, adoptarán hasta la expedición de R o m a . A comienzos y anglòfoba cuya acción se conjuga con la de muchos clubes
de la "revolución de siete semanas", Lamartine hace rechazar la extranjeros: Club de la emigración polaca, resurrección de la
tentación de la guerra para devolver a los pueblos oprimidos su Sociedad democrática polaca, tres clubes alemanes (especialmente el
libertad y a Francia sus "fronteras naturales". Club de los obreros alemanes surgido de la Liga de los justos) muy
i 84 La revolución parisiense 201
Las revoluciones europeas
a través de la pluma de Herwegh: "Combatir por la libertad del
pronto fusionados en la Sociedad democrática alemana que presidirá
Herwegh, Club de los emigrados italianos, Club democrático ibérico, pueblo alemán [. . .], acudir en ayuda de la Polonia resucitada [. . .],
Sociedad patriótica belga, etc. Estas asociaciones, a las que se combatir a Rusia [. . .], iniciar la lucha por los derechos alemanes
agregan las delegaciones que acuden a París, se comportan como en Schlesvig-Holstein." Los príncipes alemanes aterrorizados, desde
mandatarias de sus compatriotas. So pretexto de expresar a los varias semanas atrás ruegan al gobierno provisional mantener sus
nuevos gobernantes una simpatía admirativa, los apremian en busca compromisos, mientras la prensa anuncia una inminente invasión de
de ayuda para exportar la revolución. Del 4 de marzo al 2 de obreros franceses; en la noche del 23 al 24 de marzo, a raíz
abril desfilan polacos, alemanes, suizos, griegos, magiares, rumanos, de la noticia de que los franceses habrían cruzado el Rhin, un
portugueses, españoles y también diputaciones que cuestionan la "gran miedo" (Franzosenlarm) se apodera de los campos badenses
política amistosa con Cerdeña —saboyenses— y de acuerdo con y wurtemburgueses: ¡un profesor de Tübingen aconseja gravemente
el Reino Unido —cartistas e irlandeses—. El rito es inmutable: a las jóvenes del bello sexo llevar vestimentas mascuHnas . . . para
Garnier-Pagès, Crémieux, Lamartine se prodigan en fórmulas gene- preservar su virtud! Hecker y Struve, que han lanzado un llamado
ralmente vagas que, sin embargo, los gobiernos juzgan inconve- a la insurrección, preocupados por no comprometerse con los
nientes porque "encierran una apreciación sobre los asuntos de agentes del extranjero, rechazan la ayuda de la Pariser Legión, tra-
otros países" (lord N o r m a n b y ) . ducción tendenciosa de la Legión alemana. H a b i e n d o franqueado el
Más que las frases imprudentes, la existencia de bandas armadas río el 23 de abril, ésta es deshecha el 27 en Dossenbach. Recién el
que organizan abiertamente, con la complicidad de las más altas 26 había aparecido en Le Moniteur u n decreto del 19 (la manifes-
autoridades administrativas, cuerpos francos para revolucionar Bél- tación del 16 reforzó, como se sabe, la autoridad de los moderados)
gica, Saboya y Alemania, arroja sospechas sobre la buena fe de un resolviendo la disolución de las agrupaciones alemanas.
Lamartine sin medios de acción en lo interno. El 29 de marzo, De la misma manera que el golpe de mano en Saboya indignó
1.500 hombres llevados al lugar con el apoyo del comisario del a los italianos, tampoco la empresa de Herwegh facilita la inter-
gobierno en el norte y el acuerdo de Ledru-Rollin son dispersados vención diplomática en favor de Polonia. Lamartine había imagi-
cerca de Mouscron ( e n Risquons-Tout). L a expedición de Saboya nado sacar provecho de la popularidad de la causa polaca en
reviste una dimensión distinta porque aparece, por otra parte erró- Alemania para impulsar al rey de Prusia a trasformar el gran ducado
neamente, como consecuencia de una política dehberada. El 2 0 de de Poznan en una Polonia autónoma. Después de algunas semanas
marzo, Lamartine había evocado la posibilidad de que Saboya de idilio, polacos y alemanes se enfrentan en Posnania; en Alemania,
pudiera estar un día "reunida con Francia". El 3 de abril, obreros a fines de abril, baja el fervor polaco; la opinión se pregunta sobre
saboyenses sostenidos por los republicanos de Lyon, los Voraces, el papel de esos polacos que sólo juran por Francia; ¿no serían
y que desfilaron el 3() de marzo ante el comisario de gobierno instrumentos de la ambición francesa, como parece sugerirlo su
Emmanuel Arago, se apoderan de Chambéry. Son expulsados el 4 participación en la Pariser Legioni El 26 de abril, Federico Gui-
por campesinos que reaccionaron a la manera de los guardias llermo I V incorpora los círculos alemanes del gran ducado de
nacionales de las provincias frente a los insurrectos de junio. jCeirlos Poznan a Prusia.
Alberto propone a Suiza una alianza defensiva! Por su lado, la loca El nacionalismo, que se afirma sombrío en Alemania e Italia,
aventura de Herwegh crea entre Francia republicana y los alemanes disipó poco a poco las ilusiones de la mayoría del gobierno provi-
de todos los matices un clima de profunda desconfianza. La So- sional sobre la fraternidad de los pueblos e incitó a Lamartine a
ciedad democrática alemana prepara ostensiblemente la invasión de mantenerse en la política definida el 4 de marzo. Este inmovilismo
Alemania. El 18 de marzo, 6.000 alemanes se reúnen en los que condenan los revolucionarios parisienses, según se ha obser-
Champs-Elysées. Entre el 2 4 de marzo y el 3 de abril, parten
vado, es el origen de manifestaciones tumultuosas. Pero las provin-
cinco batallones rumbo a Estrasburgo. Durante todo el recorrido se
cias, hostiles a las aventuras, lo aprobaban. En las elecciones de
festeja a estos campeones de la democracia germánica a los que
abril, los campesinos votaron contra quienes consideraban como
se han unido polacos y franceses. Constituida definitivamente en
enemigos, a la vez, de la propiedad y de la paz.
Estrasburgo el 14 de abril, la Legión alemana anuncia sus objetivos
202 Las revoluciones europeas
La revolución parisiense 203
Las revoluciones abortadas jornadas de Julio. El espectro del 93, que agitan los nobles y los
conservadores protestantes fanáticos para impedir la revisión de la
A pesar de la abstención de la Francia oficial, la marea revolucio- ley fundamental y la emancipación de los católicos, incita en cambio
naria avanza sobre los estados constitucionales vecinos de Francia. a Guillermo II a comprometerse en el camino de las reformas.
En todas partes fue quebrada, ya sea por oportunas concesiones, Destituye al ministerio reaccionario. El nuevo se apoya en los
ya sea por la fuerza o la amenaza de su utilización. liberales de Johan Thorbecke, protestantes tolerantes en su mayoría,
L a influencia de las jornadas de febrero sobre Bélgica no se y sobre los católicos admiradores de Lamennais y lectores de L'ere
limita al desgraciado asunto de Risquons-Tout. U n a situación nouvelle, fortalecidos con la resistencia de sus correligionarios de
económica y social explosiva —recuérdese la dura condición Limburgo a los apetitos germánicos. El producto de esta unión
obrera y la miseria de Flandes— hubiera producido sin duda en "católico-liberal" recuerda la emprendida en 1830-31 en el es-
1848 profundos sobresaltos si Bélgica no hubiera realizado en tado belga por una coalición del mismo estilo. La constitución
1847 lo que J. d ' H o n d t llamó "su revolución". El autoritario de octubre de 1848 garantiza, con la libertad de prensa y el
Leopoldo I se había acostumbrado a gobiernos católicos cada vez derecho de reunión, el libre ejercicio del culto. Se promete el
más conservadores, y los liberales habían sido rechazados poco a restablecimiento de la jerarquía católica (que será efectivo en 1 8 5 3 ) .
poco en la oposición. E n 1846 las organizaciones liberales se Los estados provinciales designan los miembros de la Cámara alta;
agrupan en un verdadero partido, teniendo como programa la la Cámara baja, ante la cual son responsables los ministros, n o
rebaja progresiva del censo y reformas a favor de las "clases representa más a las "órdenes" sino a los electores censitarios.
obreras e indigentes". L a nueva formación gana las elecciones de Así, en pocas semanas, un estado del antiguo régimen, por temor
1847; su jefe. Charles Rogier ( 1 8 0 0 - 8 5 ) constituye un gobierno al contagio de las doctrinas subversivas francesas, ¡cumple a la vez
homogéneo que todavía el 14 de febrero de 1848 vacila en aumentar su revolución de 1789 y su revolución de 1830! Guillermo II dota
en más de un millar el número de electores. Con la noticia de la también de una constitución censitaria al gran ducado de Luxem-
caída de Luis Felipe, el pánico se apodera de las clases dirigentes; burgo.
desaparece el numerario, la industria se detiene por falta de Los estados escandinavos percibieron los efectos de febrero sólo
crédito. El gobierno convoca a los reservistas, y el 29 de febrero a través del desencadenamiento nacionalista de la "revolución ale-
presenta un proyecto que, votado el 12 de marzo, lleva uniforme- mana". El gran problema para los daneses, que apoya la opinión
mente el censo al mínimo constitucional: de un golpe, el cuerpo en Suecia y Noruega, es la supervivencia de un estado por el cual
electoral pasa de 55.000 a 79.000. La clase obrera se agita; en responde la absolutista Rusia; en Copenhague como en Estocolmo,
Gante, el 1? de abril, la tropa abate a dos manifestantes. Se se considera a los alemanes como los más belicosos discípulos de los
autorizan algunos adelantos a los industriales para reanudar la insurrectos de febrero. El no reconocimiento de derecho de los
actividad; se distribuye ayuda a 400.000 desocupados (Vio de la tratados de 1815 ha terminado de desacreditar a las ideas democrá-
población), en su mayoría flamencos; se abren talleres de candad. ticas; al precio de algunas concesiones (libertad de prensa), la
P a r a solventar estos grandes gastos, "las clases poseedoras cumplen burguesía nacionalista se une a la monarquía absolutista para luchar
con su deber hacia sí mismas" (J. d ' H o n d t ) ; con acuerdo de la contra el peligro exterior: de una leal colaboración surgirá la cons-
oposición católica, el ministerio hace votar dos empréstitos forzosos. titución de 1849, que suprime la representación de las "órdenes".
Se comprende que estas medidas políticas y sociales, junto a la En Suecia, las veleidades liberales de Oscar I duran poco; el
acción del ejército y la policía, hayan quitado toda eficacia a una regimen censitario será introducido recién en 1865; las amenazas
propaganda republicana y socializante demasiado visiblemente del germanismo contra el Jutlandia relegan a segundo término las
inspirada en los medios anexionistas parisienses. reivindicaciones nacionales de Noruega, que no obtendrá su inde-
En los Países Bajos, la proclamación de la república francesa, las pendencia hasta 1905.
manifestaciones parisienses y la tentativa de Risquons-Tout horro- En ninguna parte la proclamación de la república suscita tanto
rizaron a los dirigentes, que no habían olvidado ni la dominación entusiasmo como en Suiza. La prensa es unánime en celebrar los
francesa de la época revolucionaria ni las consecuencias de las méritos de los insurrectos, que encuentran imitadores en Neuchátel:
La revolución parisiense 2 0 5
2 0 4 Las revoluciones europeas
donde el 13 de mayo se levanta una parte de la guarnición en
el 1? de marzo, el gobierno aristocrático es derrocado (recién en medio de la indiferencia popular. En España como en Portugal, la
1857 el rey de Prusia reconocerá el hecho consumado). Pero la revolución de 1848 no modificó el curso de una evolución que
denuncia de los tratados de Viena crea muy pronto malestar. Lamar- obedecía a sus propias leyes.
tine tiene cuidado de subrayar que, lejos de disimular una intención El nacionalismo irlandés y el cartismo inglés son profundamente
de violar la neutralidad suiza, su manifiesto afirma la voluntad afectados por las jornadas de febrero. Delegaciones irlandesas y
de imponer su respeto. Las dificultades de Austria y Prusia, las cartistas se precipitan a París para solicitar ayuda o consejos. La
agitaciones alemanas y la guerra de Italia liberan durante un alianza celebrada en la primavera de 1848 bajo los auspicios de
año de amenazas y recriminaciones de las potencias conservadoras O'Connor parece amenazar, durante algunas semanas, la unidad
a los vencedores del Sonderbund. Los republicanos alemanes pre- del Reino Unido y los privilegios políticos de los poseedores. Tras
paran, con la connivencia más o menos tácita de las autoridades un caluroso homenaje a la causa irlandesa que irrita a Londres,
de los cantones renanos, los movimientos de abril y de septiembre Lamartine, que el 3 de abril recibe a Smith O'Brien, declara que
de 1848 y el de mayo de 1849. Por último, y sobre todo, un Francia desea "permanecer en buenas relaciones [. . .] con Gran
programa concebido en un clima de guerra intestina se realiza Bretaña entera". El abandono de Paris, seguido muy pronto por el
dentro de la independencia y la paz civil: la constitución del 12 de fracaso cartista, y el despliegue de las querellas intestinas frente
septiembre de 1848 trasforma a la Confederación, cuya aiiacrónica al monolitismo orangista, desmovilizan a una gran parte de los
denominación se ha perpetuado, en un estado federal a imitación opositores. John O'Connell ( 1 8 1 0 - 5 8 ) , continuador con respecto
de los Estados Unidos; dos cámaras que representan, una al pueblo al gobierno de la "agitación pacífica" de su padre, recomienda el
y la otra a los cantones, designan al ejecutivo: el consejo federal. empleo de la violencia contra sus rivales irlandeses: el 30 de
Signada por las recientes luchas (los jesuitas son excluidos del abril, sus partidarios atacan en Limerick a los miembros de la
territorio federal) y todavía impregnada de prejuicios medievales Confederación irlandesa. Ésta se deshace entre Smith O'Brien y
(los judíos no son enteramente ciudadanos), la constitución de 1848 J. Mitchel, favorable a la insurrección general que fracasa misera-
es el origen de la Suiza moderna, cuya prudencia preservará desde blemente (agosto) mientras que su instigador es condenado dos
entonces de disturbios internos y de conflictos externos. meses después a catorce años de deportación. El arresto o la fuga
Acostumbradas a vivir peligrosamente, las dictaduras ibéricas son de los jefes y la gran sangría de la emigración (de 1846 a 1850
las más aptas para resistir el contagio revolucionario. La prensa más de un millón de iriandeses parten para los Estados Unidos)
gubernamental pinta con los colores más sombríos las jornadas de contribuirán a mantener la paz durante quince años.
febrero y despierta en pueblos celosos de su independencia el L a caída de Luis Felipe, producida después de la revuelta de
recuerdo de las invasiones francesas. Puesto en estado de alerta, el Palermo, revigoriza al cartismo. O'Connor comparte el entusiasmo
ejército emprende una acción preventiva. En Portugal nada ocurre, de los internacionalistas del movimiento. El 26 de febrero, el
puesto que los opositores renuncian a intentar un golpe de fuerza Northern Star celebra con lirismo a los "hombres de París". Los
que el gobierno francés se niega a apoyar. En España, desde los mítines a favor de la Carta del pueblo se multiplican como en
primeros días de marzo, Narváez suspende inclusive la apariencia 1838 y 1842; siguiendo el ejemplo de Newcastle (2 de m a r z o ) , se
de garantías constitucionales; los ultrarreaccionarios "cariistas" no votan emocionantes mensajes a los insurrectos parisienses. La
logran movilizar a los campesinos vascos; en Madrid estallan graves agravación de la desocupación consecutiva a la reducción de la
disturbios fomentados por los liberales y republicanos el 26 de demanda de los estados víctimas de disturbios, provoca desórdenes
marzo; levantado el estado de sitio, el 7 de abril se produce en la espontáneos de una amplitud desconocida en el continente. En
capital una manifestación de civiles y soldados conducidos, lo cual Glasgow, el 5 y 6 de marzo, el ejército dispara sobre una decena
es nuevo, por suboficiales a los gritos de: "¡Viva la república! ¡Viva de miles de amotinados que se dedican al pillaje de comercios.
el pueblo soberano!"; 7 soldados y 5 civiles son pasados por las Manchester, Birmingham y Nottingham son teatro de tumultos. Por
armas. Las dos jornadas madrileñas se saldan con el envío a primera vez, la capital se pone al unísono. El Reino Unido, antes
prisión de 1.500 individuos y la detención o deportación de otros profundamente sacudido por las barricadas de julio ¿va a pasar
800. Las provincias permanecen calmas con excepción de Sevilla,
206 Las revoluciones europeas La revolución parisiense
207
a la revolución bajo el impulso de los motines de febrero? Se decide por la presión popular — c o m o en 1832—, el espíritu insurreccional,
recurrir a los procedimientos legales, no obstante haber conducido tras la fiebre de 1818-20, no ha dejado de retroceder. La ideología
por dos veces al fracaso: la Carta del pueblo, apoyada en un jacobina, que no se integra a los sueños de los trabajadores, sigue
petitorio que se espera rubriquen seis millones de firmas, será siendo ajena a la mayoría de los cuadros cartistas, que O'Connor
remitida al Parlamento por una delegación seguida de varias cen- representa bien. De ahí la repetición mecánica de empresas condu-
tenas de miles de manifestantes. ¿Qué se hará después del seguro cidas sin imaginación.
rechazo del programa cartista? Sólo una ínfima minoría considera L a resistencia a la ola revolucionaria del Reino Unido debe ser
imitar el ejemplo parisiense. El agregado á los Six Points tradicio- comparada con la de otros estados (Bélgica, Países Bajos, España,
nales de un séptimo punto que prevé, de acuerdo a la proposición Portugal) con estructuras económicas, sociales, e instituciones
de O'Connor, la abolición del Acta de Unión, se enfrenta con los pohticas vanadas. Exportada, la revolución popular parisiense
prejuicios antiirlandeses de la opinión y más particularmente de los solo adquirió formas explosivas (estados alemanes e italianos
trabajadores. Vista en perspectiva, la jornada del 10 de abril imperio de Austria) entre pueblos en busca de su unidad nacional'
aparece como una farsa grotesca: O'Connor lleva en un coche de
plaza el petitorio con menos de dos millones de firmas, mientras
la tropa y una policía de 170.000 voluntarios ordenan a algunas
decenas de miles de personas permanecer juiciosamente detrás del
Támesis. Sin embargo, el anuncio de la manifestación cartista ha
puesto en fuga a la familia real y a los ricos londinenses. El fracaso
del 10 de abril incita — b a s t a con evocar el 16 de abril en París—
a las fuerzas reaccionarias a iniciar un proceso de rectificación que
acelerarán las jornadas de junio.
M u c h o se ha discutido sobre las razones del derrumbe cartista.
¿La "revolución de 1846"? Los trabajadores sólo podrán apreciar
los beneficios del librecambio recién en la segunda mitad del siglo.
¿La influencia de las Iglesias? Muchos testigos señalan la dismi-
nución de la práctica religiosa en los medios populares; en todo
caso, no sería posible sostener seriamente que el protestantismo
inglés haya sido más conservador que el protestantismo alemán, el
catolicismo francés o italiano. ¿La importancia de las clases medias?
Es cierto que ellas habían logrado dos victorias muy importantes
con la reforma electoral y el triunfo de la Liga de Cobden. E.
Halévy, que insistió sobre su "inmensidad", no olvidaba sin embargo
la existencia de dos clases antagónicas: "la extrema riqueza de unos,
la extrema pobreza de otros". Los fracasos precedentes aclaran
quizá la débâcle de 1848. El arma poderosa que sólo el proletariado
británico posee en Europa ha desdeñado el combate político, aiin
en la época de las aspiraciones revolucionarias de Owen. Reticente
en 1838, el sindicalismo se mantuvo apartado del cartismo en
1842. El voto del Factory Act de 1847 probablemente contribuyó
a acentuar la indiferencia política: el sindicalismo fue enemigo del
cartismo en 1848. En el país donde se podían realizar mítines,
redactar petitorios, acariciar la esperanza de obtener concesiones
111. ÜL A V A N C E DE L A MAREA El avance de la marea 209

(MARZO-JULIO DE 1848) de la Dieta de Baja Austria, reclama una constitución para el imperio
y la destitución de Metternich. Algunos manifestantes son abatidos.
Se erigen barricadas y los arrabales se insurreccionan. Abandonado
por la mayoría de los archiduques — e n primer lugar el archiduque
J u a n — que desaprueban continuar con la represión armada, el
viejo canciller decide como Luis Felipe fugarse. F e r n a n d o I provoca
un gran entusiasmo acordando, junto con la libertad de prensa, una
guardia nacional y prometiendo una constitución (15 de m a r z o ) .
P a r a los nobles liberales y la gran burguesía vienesa, la revolución
ha terminado. Los elementos radicales (estudiantes y profesores de la
Con la noticia de la proclamación de la repiiblica en Francia, Italia Legión académica, pequeños burgueses de clubes avanzados, arte-
acentúa sus agitaciones; Alemania meridional, conforme a su vo- sanos proletarizados) consideran las concesiones del 15 de marzo
cación, toma la dirección del movimiento liberal, democrático, social como un punto de partida. A la manera de los clubistas parisienses
y unitario en la Confederación; en Austria, los aristócratas magiares y por mucho más tiempo que ellos, van a ejercer una irresistible
aumentan sus exigencias, los demócratas checos levantan la voz, y presión sobre débiles gobiernos enfrentados a dificultades insu-
es derribado Metternich. El levantamiento vienés ( 1 3 de marzo) perables. La publicación de una constitución aplicable a los "estados.
provoca la insurrección berlinesa ( 1 8 de marzo) y refuerza hereditarios" con una Cámara reclutada sobre una base censitaria
el movimiento liberal y unitario en la Confederación e Italia y las estrecha, engendra una serie de disturbios producidos b a j o la
reivindicaciones nacionales en el imperio y E u r o p a oriental. consigna de una asamblea única elegida por sufragio universal. Tras
la jornada del 15 de mayo, el gobierno capitula: una Constitu-
yente redactará una nueva constitución. Como en Francia, la acción
I. AUSTRIA A LA DEFENSIVA EN EL IMPERIO de los revolucionarios iba a ser sometida al juicio del campesinado.
Ya a comienzos de junio los observadores señalaban la creciente
Mientras que las "revoluciones" italianas amenazan con expulsarlo popularidad del emperador, que después del 15 de mayo se había
del Lombardo-Véneto y la revolución alemana con dislocarlo, el creído obligado a refugiarse con su corte en Innsbruck; mientras
estado austriaco está interiormente paralizado. El 3 de marzo la tanto, el simpático archiduque Juan representaba a la autoridad
Dieta húngara reclama, a instigación de Kossuth, la plena autonomía imperial en Viena.
de la Corona de San Esteban y un ministerio responsable. El I I , en
Presburgo, una asamblea popular elabora para los checos u n plan
de reformas inspirado por la minoría de demócratas b u r ^ e s e s La revolución magiar
agrupados alrededor de Havlitchek, plan que incluye una Cámara
común a los países de la Corona de San Wenceslao. Exigencias El "dualismo" de 1848, que prefigura el de 1867-1918, es aplicado
incompatibles con el mantenimiento del absolutismo que personifica primero en Hungría. El emperador encarga al conde Batthyany
Metternich. ( 1 8 0 9 - 4 9 ) , un liberal, la formación de un ministerio responsable
ante la Dieta. Este primer gobierno es un gobierno nacional magiar
La revolución vienesa (13 de marzo) en Deak, Eötvös, y Kossuth. B a j o la presión de Kossuth y de los
demócratas de Pest, la Dieta toma medidas liberales (libertad de
Éste va a desaparecer muy pronto, víctima de una impopularidad prensa,/«ry, guardia nacional) y sociales (igualdad ante el impuesto,
llevada a su punto culminante por las diatribas de Kossuth. El 13 abolición de la servidumbre y supresión de censos señoriales contra
indemnización). En la práctica, la emancipación campesina es una
de marzo, en Viena, una multitud de burgueses, estudiantes y
farsa: las tierras son quitadas a los siervos con el pretexto de que
obreros — e s lunes, día que los trabajadores consideraban gustosa-
antes habían estado arrendadas; se mantienen los censos sobre los
mente como una prolongación del domingo—, reunida ante la sede

A
211 217
Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

viñedos; la miseria de la mayoría de los rurales les impide obtener nica, en la medida en que éstos no aprecian en absoluto las promesas
su libertad. Las leyes constitucionales sancionadas el 11 de abril imperiales del 8 de abril relativas a la igualdad de los idiomas. La
refuerzan la hegemonía de los magiares. Hungría se convierte en un compañía de checos y "alemanes de los Sudetes" plantea, a partir
estado unitario por la absorción de Croacia, Transilvania y el del año de la "fraternidad de los pueblos", un problema insoluble
Banato. En adelante la Dieta, trasladada a Pest, comprende una que pesará profundamente sobre el destino de la primera república
C á m a r a baja protegida contra la intromisión de los alógenos: el checoslovaca. Patriotas alemanes, los demócratas vieneses ven a los
complicado régimen censitario es producto de una astuta geometría checos, organizadores de un congreso eslavo, como pehgrosos reac-
electoral y de la obligación impuesta a los elegibles de hablar cionarios. Aplauden cuando Windischgrátz ( 1 7 8 7 - 1 8 6 2 ) reprime
magiar. Preocupado por conseguir un arreglo sobre los problemas de con sangre el levantamiento de Praga del 12 de junio. Proclamado
interés común, el gobierno imperial, en una situación muy compro- el estado de sitio, disuelto el Comité Nacional, Viena olvida sus
metida, habrá de permanecer sordo hasta fines de junio a los promesas del 8 de abril: la "revolución checa", obra de radicales
reclamos de pueblos para los cuales 1848 no significa todavía más tímidos en materia social y de intelectuales llevados a la negociación,
que el refuerzo de una opresión secular. ha terminado. De la Asamblea constituyente que sesiona en
Viena, esperan Palacky y Rieger la autonomía de los países de la
Corona de San Wenceslao.
El movimiento checo y los eslavos de Austria E n Galitzia continúa la fructífera política de 1846; se aisla
a la nobleza polaca favoreciendo los intereses y las pasiones del
E n cambio, da satisfacción a las demandas de sus fieles súbditos campesinado ruteno (la mitad de los 4,6 millones de habitantes
eslavos, directamente incorporados a su autoridad. L a Carta de empadronados en 1 8 5 0 ) : la servidumbre es abolida y se instituye
Bohemia del 8 de abril sanciona la más sensible de las reivindica- un Consejo ruteno que reclama la división de las provincias en dos
ciones de la asamblea del 11 de marzo (igualdad de los idiomas partes, rutena y polaca. Las demandas eslovenas en favor de la
checo y alemán en la enseñanza y la administración). Sin embargo, lengua nacional son el producto de una minoría, indiferente a las
la solución de los problemas fundamentales, políticos (organización reivindicaciones de los campesinos analfabetos y que multiplica las
del futuro estado autónomo) y sociales (liberación de los campe- declaraciones de lealtad.
sinos) es postergada. El Comité Nacional, que cumple el papel de
un consejo consultivo ante el nuevo gobernador, el liberal conde
de Thun, está dominado por moderados del estilo de Palacky- Austria sacrifica a los magiares los fieles eslavos del sur
Rieger. R o m p e su solidaridad con los revolucionarios de Viena y
envía a Innsbruck un mensaje de lealtad al emperador. La invitación El espíritu de revuelta se manifiesta en los eslavos y los rumanos,
que se efectúa a Palacky para participar en los trabajos de la comi- que se levantan contra la dictadura magiar. El movimiento eslo-
sión de los Cincuenta ofrece a los checos la oportunidad de definirse vaco, cuyos recientes esfuerzos para resistir a la checoslovaquización
con relación a la nueva Alemania y a Austria. E n su célebre cultural son conocidos, es arrojado hacia Praga a causa de la
respuesta ( 1 1 de abril), ampliamente difundida, el historiador negativa a acordar la autonomía a los comitats de lengua eslovaca:
rechaza la pretensión de los alemanes de Francfort de absorber Stúr y Havlitchek se reconcilian. Los eslavos del sur, que pueden
a los checos. Sin embargo, no concibe el porvenir de su pueblo en contar con sacerdotes y oficiales patriotas, toman su destino en
otro marco que el de una federación austríaca separada de Alemania: sus propias manos. B a j o la conducción de Rajacitch, metropolitano
"Si el estado austríaco no existiera desde hace mucho tiempo, sería de Karlowitz, más favorable que sus predecesores al idioma servio-
preciso apresurar su creación en interés de Europa y de la croata, y del coronel Suplikac, la Vaivodia restaurada se declara
humanidad." Los radicales adoptan el "austroeslavismo", y exhortan provincia autónoma en el marco del imperio y Suplikac es procla-
a los checos a abstenerse en las elecciones para el Parlamento de mado vaivoda ( 1 3 de m a y o ) ; una legión servia se prepara para la
Francfort. Ello suscita reacciones tanto más vivas por parte de los lucha; puede contar con la ayuda croata. Fortalecidos por poderosos
alemanes de Bohemia, entusiastas partidarios de la unidad germá- apoyos en la corte, los croatas han obtenido, sin consentimiento de
212 Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea 217

Pest, la nominación como ban (gobernador) del coronel •—muy lavismo es prudente. Descarta la Federación paneslava propuesta
pronto general— Jellatchitch ( 1 8 0 1 - 5 9 ) . Una delegación croata se por Bakunin ( 1 8 1 4 - 7 6 ) , único participante ruso, y el recurso a la
traslada ante Alexandre Karageorgevitch, que sustituyó a los Obre- fuerza. Según el "Manifiesto a las naciones europeas" redactado por
novitch — m á s dispuestos a extender su principado que a alimentar Palacky, los eslavos esperan de un congreso de todos los estados
amplios pensamientos— por un golpe de estado, en 1842. Si bien europeos el reconocimiento del derecho de disponer de sí mismos.
el sueño de un reino yugoslavo que agruparía — b a j o la dirección Tales quimeras llevan el sello de la "primavera de los pueblos". Sin
del príncipe de Servia— a Bosnia, Bulgaria, Croacia, Dalmacia y embargo, la importancia histórica del Congreso de Praga no podría
Hungría meridional está en contradicción ' con las resoluciones ser exagerada. Frente a la amenaza alemana y magiar, los eslavos
votadas en junio por la Dieta croata, en favor de un reino autónomo del imperio testimoniaron por primera vez una solidaridad que
que englobe a todos los eslavos del sur del imperio, se inicia una supera las afinidades lingüísticas y literarias.
cooperación entre Belgrado y la coalición servio-croata: Alejandro
dejará que sus súbditos se enrolen contra los magiares.
Éstos reciben el apoyo del gobierno imperial, que el 10 de El movimiento nacional rumano en Transilvania
junio confirma la integridad del reino de Hungría y destituye a y en los principados
Jellatchitch. La promesa del envío de contingentes húngaros a
Italia explica sólo en parle este brusco cambio. En Viena se había Los campesinos de Transilvania, sometidos como siervos a la
admitido repartir la autoridad entre alemanes y magiares, pero no explotación económica de los grandes propietarios magiares y
se estaba en absoluto preparado para aceptar, en beneficio de un alemanes, constituyen, bajo la dirección del clero patriota, una de
reino yugoslavo, la solución "trialista" que en vísperas de 1914 las clases más agitadas del imperio. E n una asamblea realizada en
contará con algunos partidarios; se temían sobre todo los avances el " C a m p o de la libertad" cerca de Blaj, metrópoli de la Iglesia
del "paneslavismo" que unía a pueblos del imperio y del extranjero. uniate y cuna del rumanismo, 40.000 de ellos bajo la presidencia
La intervención de Windischgratz en Praga procuraba no solamente de dos obispos, uno uniate y otro ortodoxo, aclaman a Barnut, el
la destrucción del movimiento nacional checo sino también la apóstol de la igualdad política y social ( 1 5 de m a y o ) . Se protesta
clausura del Congreso eslavo. contra la unión de Transilvania a Hungría; se exige el reconocimiento
de la "nación rumana", là creación de escuelas rumanas y la
liberación de los campesinos. La lealtad respecto de Fernando I se
El final del movimiento checo y la dispersión del Congreso de Praga traduce por vivas al "gran duque de Transilvania". Librados tam-
bién ellos, por decisión imperial del 10 de junio, a la vindicta de
Inaugurado el 2 de junio, interrumpido el 12 por el motín, dispersado los magiares, los rumanos aliados de los eslavos del sur —los
el 28 por Windischgratz — a quien la muerte de su esposa, de la servios reconocieron los derechos de la minoría r u m a n a de la
familia Schwarzenberg, segada por una bala perdida, no inclina Vaivodia— se niegan a plegarse.
por cierto a la mansedumbre—, el Congreso eslavo, reunido inten- E n los principados, los movimientos de 1848 son el producto
cionalmente en el momento en que comenzaban los trabajos del de intelectuales aislados de masas campesinas abandonadas a un
parlamento de Francfort, fue presentado en Alemania desde 1848 clero privado de conciencia nacional. Sobre ellos planea la sombra
(recuérdense las invectivas de Engels) como instrumento de un peli- del sultán, el soberano, y el zar, el protector. En lassy, con la
gro entonces imaginario, el paneslavismo zarista. Si bien el Congreso noticia de la revolución de febrero, Kogalniceanu reclama la unión
reúne a los polacos, rutenos y eslavos del sur (Gaj, Karadjitch), de los principados; el 27 de marzo aborta un complot liberal
está f o r m a d o en % por checos (Chafarik, Palacky, Rieger, Havlit- porque el hospodar Stourdza hace intervenir a los rusos; el 23 de
chek) y eslovacos (Stúr). Denuncia vigorosamente los proyectos junio, en Bucarest, su colega Bibesco abdica sin combatir: un
de una "Gran Alemania" y las pretensiones hegemónicas de los gobierno provisional es alentado por los hermanos D. y J. Bratiano
magiares. Pero un voto en favor de la reconstitución de Polonia y Balcesco, un avanzado, llegados presurosamente desde París.
levanta a los medios dirigentes vieneses. Sin embargo, este panes- Como este último no obtiene nada en favor de los siervos, los
215 217
Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

rurales permanecen inertes. Los turcos, a quienes los rusos rempla- proclama republicano e incluye, siguiendo el ejemplo de París, a
zarán en noviembre, penetran sin resistencia en Valaquia y ocupan un representante obrero! Del 18 al 22 {Los cinco días), las calles
Bucarest en septiembre. El tratado ruso-turco de Balta-Liman de Milán se cubren de barricadas; los 20.000 hombres de Radetzky
( m a y o de 1849) es una regresión para los principados. El "consti- ( 1 7 6 6 - 1 8 5 8 ) son obligados a replegarse sobre el Cuadrilátero. Los
tucionalismo" realizado por Kisselef es abolido: los hospodars moderados han tomado el poder: el gobierno provisional del conde
antes vitalicios son nombrados por siete años y los divans dejan Casati está compuesto por aristócratas y grandes propietarios
de ser electos. Si bien las revoluciones de 1848 no aceleraron la terratenientes partidarios de la casa de Saboya; pero el Comité de
hora del nacimiento de la "Gran Rumania", enseñaron a los revolu- guerra, de reclutamiento popular y animado por el republicano
cionarios valacos exihados en Occidente que la unión de los princi- Cattaneo, lo vigila. La derrota de Radetzky provoca el hundimiento
pados era imposible sin el concurso de Francia. de los frágiles protegidos del emperador: los duques de Módena
y P a r m a huyen.

II. LAS "REVOLUCIONES ITALIANAS"


De la cruzada patriótica a la guerra piamontesa
Los orgullosos italianos que habían comenzado a agitarse antes que
los franceses, se creyeron lo suficientemente fuertes como para ¡En la expulsión de los tedeschi —^juzgada inminente—, los italianos
rechazar con altivez el ofrecimiento de ayuda de la Repiiblica quieren participar! Los "cruzados" —así se denominan— se lanzan
francesa. Porque la revolución vienesa trasformò, durante varias a los caminos de Milán. Cavour, el frío realista de los años
semanas, los movimientos liberales localizados dentro de los estados cincuenta, se abandona a la ilusión. El 2 3 de marzo, en su
en un gran movimiento patriótico con objetivos imprecisos y que Risorgimento, insta al rey a entrar inmediatamente en guerra. Cosa
contraría el particularismo de los príncipes. que se produce al día siguiente. En su proclama " a los pueblos de
Lombardia y Venecia", Carlos Alberto anuncia que cuenta con la
ayuda d e . . . "Dios [ . . . ] que pone a Italia en condiciones d e actuar
La aceleración del movimiento reformista por sí misma (in grado di farà da se)". ¡Dios no podría, como los
y la revolución nacional antialemana franceses, favorecer el desarrollo de las ideas republicanas ni exigir
una compensación en Saboya! Turín vive en un m u n d o irreal: la
Las jornadas de febrero aceleran prodigiosamente la realización de incorporación de 60.000 hombres —el "ejército de los A l p e s " —
las promesas del rey de Cerdeña y del papa. El 5 de marzo, Carlos dispuestos a sostener a los " h e r m a n o s " italianos, suscita una protesta
Alberto promulga el estatuto constitucional, futura constitución de sarda. El ministro de Relaciones Exteriores declara públicamente:
la Itaha unificada: la Cámara de diputados es elegida por los "El ejército francés no entrará a menos que lo llamemos, y como
censitarios (el censo de 4 0 francos recién será disminuido en no lo llamaremos, no entrará." En realidad, con excepción de un
1 8 8 2 ) . El 8, Balbo se convierte en el jefe del gobierno. Los estados puñado de republicanos que no obedecen a Mazzini, la mayoría
pontificios reciben el 14 de marzo una constitución que crea un de los patriotas adopta el fara da se piamontés, símbolo de un
Consejo legislativo con reclutamiento censitario. La caída de Luis càndido nacionalismo.
Felipe trae así como consecuencia la promulgación en dos estados, Carlos Alberto sólo se preocupa por el crecimiento de su reino;
después de Dos Sicilias y Toscana, de constituciones imitadas de arde por extenderlo a Italia del norte, que Palmerston por su parte
la Carta de 1830. imagina ya b a j o el protectorado británico. L a proclama del 24
La huida de Metternich incita, en el Lombardo-Véneto, insurrec- de marzo ha desatado no obstante una corriente que los príncipes
ciones cuyo rápido triunfo alimentará peligrosas ilusiones. En no podrían combatir. El gran duque de Toscana deja partir a los
Venecia, la muchedumbre ha liberado a Manin y T o m m a s e o el 17 voluntarios; el general D u r a n d o marcha hacia Venecia a la cabeza
de marzo; el 22, Manin se apodera del arsenal mientras los austríacos de las tropas pontificias y de voluntarios; F e r n a n d o II confía a
se retiran sin combatir; su gobierno causa una enorme sorpresa: ¡se Pepe, el jefe de la revolución de 1820, un cuerpo de 15.000
216 Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea 217

hombres que en el norte fraternizará con un contingente siciliano. nomía que reclamaba. En abril, el parlamento de Palermo dicta la
La aparición de estos "cruzados" mantiene el entusiasmo. Pero destitución de Fernando II y su dinastía, y discute un proyecto de
son a lo sumo 40.000. Las bases de su reclutamiento son esencial- constitución (los electores deberán saber leer y escribir, lo que
mente urbanas (pequeños burgueses, artesanos) y universitarias: es excluiría a medio m u n d o ) , mientras se busca un rey. Muy hostil a
conocida la contribución de profesores y estudiantes de Pisa y Carlos Alberto, el sucesor de Lamartine, Bastide, un amigo de los
Florencia. A fines de junio, en Bolonia, Gioberti exhorta a "los republicanos italianos, estimula la candidatura del hijo mayor del
curas a poner en movimiento a [. . .] los habitantes del campo". En gran duque de Toscana. Triunfa empero la tradicional influencia del
realidad, el ejército sardo dispone de una innegable superioridad liberalismo británico, que data de 1812, apoyada por la amistosa
numérica pero está mal dirigido. El pequeño éxito de Goito ( 1 0 de presencia de la marina de Su Graciosa Majestad: un hijo de Carlos
abril) no fue explotado. El tiempo perdido permitirá a Austria Alberto, el duque de Génova, es electo el 10 de julio.
reunir sus fuerzas contra un movimiento debilitado por la defección El egoísmo de Carlos Alberto y las defecciones de Pío I X y
de los príncipes. Fernando II han hecho de la ¡dea unitaria un mito. E n cambio un
En la alocución del 29 de abril, que siguió a la desaprobación "gran reino de Cerdeña" se poncreta a comienzos de julio según la
de la iniciativa de Durando, Pío I X habla como papa y no ya constitución, a pesar de que los austríacos se aproximan al Cuadri-
como príncipe patriota; condenando formalmente la guerra, pierde látero y progresan en Venecia. ¡Había pasado el tiempo en el que
su popularidad y debilita la resistencia nacional. Las tropas de el gobierno imperial pensaba abandonar Lombardia a invitación de
Durando se desbandan; muy pronto también las de Pepe, puesto que Palmerston! Seguro de la actitud de los magiares, que consienten
la actitud de Pío IX impulsa a Fernando II a sacarse la máscara: en no llamar a sus tropas de Italia e incluso prometen refuerzos, y
el 15 de mayo, algunos elementos avanzados habían fomentado una después de la represión de Praga, puede ahora reforzar a Radetzky.
revuelta en Nápoles; con la ayuda de sus fieles mercenarios de la Lo que un general cumplió contra el movimiento checo, un mariscal
Suiza democrática, el rey la reprime duramente, expulsa al gobierno lo cumplirá contra el anémico movimiento italiano. Mientras tanto
liberal del historiador Troya ( 1 7 8 4 - 1 8 5 8 ) , disuelve la Cámara, en Alemania, el 29 de junio, la elección del archiduque Juan a la
convoca a su contingente; al alcanzar el Po, Pepe conservará no presidencia provisional del Reich demuestra el prestigio imperece-
más de 2.000 hombres. La contradicción entre los objetivos de dero de los Habsburgo.
guerra estrictamente sardos y una pretendida guerra nacional
aparecen de allí en más.
La inacción militar contrasta con el ardor de la propaganda III. LAS " R E V O L U C I O N E S A L E M A N A S " Y LA REVOLUCIÓN ALEMANA
albertista. Módena y Parma se consagran con ímpetu. En Milán, el
"fusionista" Casati recibe el apoyo de Mazzini, doctrinario del Las jornadas vienesas y berlinesas no hacen más que acrecentar
unitarismo, contra Cattaneo que aceptaría el mantenimiento del el vigor del incendio que, iniciado en el sur con el anuncio de las
Lombardo-Véneto en una Austria federal y democrática. ¡A fines jornadas de febrero, se ha propagado en todas direcciones. L a
de mayo, la Lombardia se une a Cerdeña por 561.000 votos contra agitación culmina en concesiones que, según el carácter del príncipe
681! En Venecia, la partida es más difícil. La nueva república de y la fuerza o la tenacidad de la oposición, van de la liberalización
San Marcos pretende hacer de Venecia un estado autónomo en una a la democratización del régimen. Tales son esos movimientos
Italia libre. Pero las poblaciones de tierra firme ven en el gobierno locales de carácter estrictamente político llamados tradicionalmente
de Manin la resurrección del despotismo de los dogos. El 4 de "revoluciones alemanas" cuya frondosa historia ha sido esbozada
junio se consuma la escisión: las cuatro provincias continentales en los importantes libros de V. Valentín y J. Droz. La verdadera,
todavía libres proclaman su fidelidad a Carlos Alberto. La asamblea la única revolución alemana es una revolución nacional. E n los
elegida por la provincia de Venecia las imita el 3 de julio. estados más avanzados, con Metternich todavía en funciones, la
En la particularista Sicilia, el rey de Cerdeña logra al mismo presión de la opinión basta para anular la acción de la Dieta y
tiempo un gran éxito de prestigio. En marzo, el gobierno provisional preparar por medios ilegales que ninguna autoridad se atreve a
no había obtenido del ministerio liberal napolitano la amplia auto- impugnar, la reunión de una Constituyente. La revolución alemana
219 217
Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

alcanza su apogeo cuando se forma un gobierno del Reich respon- Baviera, durante tanto tiempo en calma bajo Luis I, amigo de las
sable ante el parlamento de Francfort, bajo la dirección del archi- artes y de los insurrectos griegos, suspicaz defensor de la indepen-
duque Juan. dencia del reino y entusiasta patriota alemán. En las viejas provincias
conservadoras así como en el lejano Palatinado de temperamento
político casi tan ardiente como el de Badén, la pasión del rey por
Los movimientos de marzo y los motines agrarios la bailarina Lola Montes, una aventurera que se entrometía con
cínica desenvoltura en los asuntos de estado, había provocado una
Los contemporáneos no tenían una conciencia tan clara como los creciente indignación; el 8 de febrero, los estudiantes de Munich
historiadores de la distinción entre aspiraciones liberales y espe- se insurreccionan; el 11, Luis debió consentir el alejamiento de su
ranzas unitarias. E n este sentido, las cuatro Forderungen ("reivindi- favorita; acosado por las reivindicaciones, antes que ceder abdica el
caciones") votadas el 27 de febrero por la asamblea popular de 19 de marzo; bajo su hijo Maximiliano II, Baviera cumple a su vez,
Mannheim son significativas: " A r m a m e n t o del pueblo con elección pacíficamente, su "revolución".
de los oficiales, libertad de prensa ilimitada, establecimiento del En Alemania central, febrero produje conversiones más rápidas
jury segtin el modelo inglés, parlamento alemán." C o m o la cuarta, aún que julio. Únicamente Federico Guillermo I de Hesse-Cassel,
la segunda cuestiona la existencia de la Dieta, siendo que como que jamás aplicó lealmente la constitución de 1831, intenta hacer
sabemos, una resolución federal instauró la censura en todos los frente a la nueva ola venida del oeste, pero los famosos Turner
estados. ¡Al ceder a estos imperativos, el gobierno granducal entra (gimnastas) de H a n a u que, como los de Badén, forman el grupo
en el camino de la ilegalidad! Después de la caída de Luis Fehpe, de choque de la democracia unitaria, lo impulsan a someterse; el
parecía imposible oponerse a una corriente popular que la efímera 11, Hesse-Cassel tiene su "ministerio de marzo". Ernesto Augusto
unión de los liberales y los radicales tornaba irresistible. Muy a de Hanover gozaba de una detestable reputación desde que en
menudo considerada como una peripecia local, la primera mani- 1837 había suspendido la constitución y revocado a las celebri-
festación popular de carácter revolucionario reveló cuatro consignas dades de la universidad de Gottingen; adaptándose con facilidad,
aceptadas tanto por los moderados como por los extremistas de a mediados de marzo llama a Stüwe ( 1 7 9 8 - 1 8 7 2 ) , un reformador
izquierda y que, de mitin en mitin, iban muy pronto a recorrer moderado; los privilegios de la nobleza se reducen y se pone a
toda la Confederación. estudio una constitución. Federico Augusto II había gobernado
En Baden, unos arreglos de escasa envergadura bastaron para Sajonia hasta 1848 con mesura; en marzo Dresde, siguiendo el
colocar al gobierno al ritmo de los acontecimientos. En los otros ejemplo de las ciudades que viven de la corte, continúa dando
estados constitucionales del sur, los príncipes organizan con más pruebas de lealtad; Leipzig, ciudad industrial, metrópoli de la
o menos buena voluntad los "ministerios de marzo". En Hesse- actividad editorial alemana y sede de una brillante universidad, es
Darmstadt, el insignificante Luis II asocia al poder a su hijo Luis, de el centro de una ardiente oposición dividida, como en Badén, en
reputación liberal; H. von Gagern ( 1 7 9 9 - 1 8 6 0 ) , que participó en dos tendencias: los liberales tienen como líder al profesor K.
1847 en la reunión de Heppenheim y acaba de reclamar al Landtag Biedermann ( 1 8 1 2 - 1 9 0 1 ) y los radicales al periodista R. Blum
de Hesse, a instancias de Bassermann ( 1 8 1 1 - 5 5 ) , pero luego de (1807-48), jefe de la comunidad "católica alemana" cuya trágica
las barricadas parisienses, la creación de un parlamento alemán, muerte lo trasformará en héroe nacional; un " L l a m a d o al pueblo
toma la dirección del nuevo gobierno. La amenaza de una jacquerie sajón" lanzado en Leipzig el 12 de marzo impulsa la inmediata
acelera la capitulación de Adolfo I de Nassau, último soberano de formación de un gobierno liberal. El gran duque de Mecklemburgo-
un estado que Prusia anexará después de Saboya. En Wurtemberg, Schwerin promete el 11 modificar por fin las instituciones me-
Guillermo 1 confía la dirección de los asuntos públicos a Römer dievales. En las ciudades hanseáticas y en Francfort, donde un
( 1 7 9 4 - 1 8 6 4 ) , el jefe de la oposición, también participante de levantamiento obliga al Senado a capitular, los regímenes oligár-
Heppenheim; P. Pfizer ( 1 8 0 1 - 6 7 ) , que en 1831 había concebido quicos realizan su cambio.
el sorprendente proyecto de una Alemania prusificada, es ministro La primera quincena de marzo no sólo es un período de exal-
de Cultos. Desde 1847 la situación se había tornado explosiva en tación donde clases medias, artesanos, obreros de fábricas e
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Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

inclusive campesinos hacen jubilosamente el aprendizaje de la nacional convocando inmediatamente en Francfort a los delegados
libertad. (¡Cuántas manifestaciones, reuniones públicas, clubes, de todas las Cámaras alemanas, pero el rey persistió en su eterno
periódicos!) Es también época de disturbios agrarios de una proyecto de extender el Zollverein a Austria. De ahí, con el acuerdo
gravedad excepcional en Europa. Badén es el corazón de los de Metternich, esta conferencia de los príncipes alemanes que se
mismos. El 4 de marzo, campesinos de Kraichgau que quieren realizaría en Dresde . . . ¡el 25 de marzo! Completamente partidario
apoderarse de los reconocimientos de deudas que poseen los usu- de la causa prusiana pero convencido de que la corriente unitaria
reros, atacan bienes y personas de los judíos; a partir del 6, el furor corre el riesgo de arrastrar los tronos, von Gagern pasa a la
de las masas rurales se vuelve contra los Grudherren y los Standes- acción; instigado por él, su hermano Max ( 1 8 1 0 - 8 9 ) , consejero
fierren-, la búsqueda de actas que estipulan las cargas señoriales del duque de Nassau, trata de persuadir a los soberanos sobre la
todavía en vigor se acompaña con escenas de pillaje e incluso de urgencia de formar un gobierno provisional del Reich b a j o el
incendios. El 10, el territorio comprendido entre el Main y el patrocinio de Federico Guillermo IV; la acogida, en general tibia,
Neckar está en manos de una muchedumbre delirante. Del Oden- es entusiasta en Berlín, donde la insurrección acaba de trasformar
wald badense, el contagio se extiende al Odenwald de Hesse, a al rey en campeón de la idea unitaria. Pero, desde la "revolución
Wurtemberg, al principado de Hohenzollern-Sigmaringen. En nin- de Heidelberg" y la acción de la Comisión de los siete, el proyecto
gún lado el poder del soberano es cuestionado; en ningún lado se de von Gagern pertenece al pasado.
detectan movimientos subversivos. Inspirados por motivos estricta-
mente económicos, estos desórdenes no habrían debido sorprender
a la izquierda ni a la extrema izquierda, que siempre habían La "revolución de Heidelberg" (5 de marzo de 1848). Aquello que
sostenido las reivindicaciones de los campesinos y alentado su habían intentado en vano los putchistas de 1833 es realizado pací-
antisemitismo. Mientras que la capitulación del estado ofrecía la ficamente en Baden el 5 de marzo. A iniciativa de Römer e
ocasión de abolir por la fuerza los últimos vestigios de feudalismo, Itzstein ( 1 7 7 5 - 1 8 5 5 ) , entonces próximo a los radicales, 51 perso-
la proclamación el 1? y 2 de marzo de la igualdad civil y política najes en su mayoría miembros de las Cámaras bajas del sur, se
de los judíos enfrentaba a los rurales. Pero suprimiendo los censos encuentran en Heidelberg para decidir sobre los mejores medios
de realizar la unidad alemana. La asamblea cuenta solamente con
señoriales, las Cámaras badenses, que imitan las de los estados
cuatro renanos, entre los cuales está Hansemann y un austríaco.
agitados, contribuyen a llevar la paz al campo; mucho antes de la
Liberales y radicales (Hecker, Struve) coinciden en la necesidad
reunión del parlamento de Francfort, la revolución estaba terminada
de elegir rápidamente una "representación nacional". Así son
en el Odenwald y la parte septentrional de la Selva Negra.
violados los derechos constitucionales de la Dieta y considerados
nulos los poderes soberanos de todos los príncipes. Hombres sin
mandato desatan sencillamente la revolución nacional: una comisión
La revolución alemana: de la "revolución de Heidelberg" permanente de siete miembros, incluyendo a H. von Gagern,
al Vorparlament: ¿república o monarquía? Welcker ( 1 7 9 0 - 1 8 6 9 ) , Itzstein y Römer, reunirá un "preparla-
mcnto" {Vorparlament) encargado de preparar las elecciones para
Antes de las explosiones de Viena y Berlín, liberales y radicales del el primer parlamento alemán. Estupefacta, una Dieta por la cual
sur, en estrecha unión, iniciaron un proceso revolucionario de nadie excepto los diplomáticos se interesan ya, contraataca con
unidad alemana, donde la voluntad de los pueblos sustituyó a la debilidad: el 10 pide a los gobiernos la incorporación de diecisiete
de los príncipes. personas "que gocen de la confianza pública" para ayudarle a
La iniciación —¿la "carencia"?— de Federico Guillermo IV reformar las instituciones federales. Imperturbables, los siete deci-
sorprenderá siempre a las víctimas del mito francés del "complot den que el Vorparlament estará compuesto por ex o actuales dipu-
prusiano" denunciado de manera risible por R. Minder o del mito tados de las Cámaras o por notables de todos los"países" (y no
alemán de la "misión prusiana". Su representante ante la Dieta "estados") alemanes, y por lo tanto de las provincias prusianas que
insistió en aconsejarle que tomara la dirección del movimiento estén fuera de la Confederación (Prusia oriental y occidental.
El avance de la marea 223
222 Las revoluciones europeas

Posnania) y también por el Schlesvig. Este expansionismo todavía La revolución nació de múltiples errores reales. La miseria y
teórico ¿descubre esas intenciones proprusianas que según algunos la desocupación provocaron un descontento que se cristalizó primero
habrían inspirado la decisión histórica del 5 de marzo? ¿Pero por en reivindicación política. A comienzos de marzo, los berlineses se
qué atribuir a los hberales de Badén, Wurtemberg y Baviera las sorprenden con intensa inquietud de no gozar, como los otros
concepciones propias de Gervinus y de su Deutsche Zeitung, de von alemanes, de libertades elementales que una constitución garanti-
Gagern y de algunos renanos? E n todo caso, en vísperas de la zaría. Irritado, el rey refuerza la guarnición; el 6 cree marchar con
reunión del Vorparlament prevista para el 31 de marzo, ¿quién su época decretando la periodicidad del Landtag unido, ya clara-
osaría actuar a favor del rey de Prusia? Tras las sangrientas mente anacrónico en 1847. El 13, la caballería dispersa Unter den
jornadas berlinesas de los días 16 a 18 de marzo, jamás el pueblo Linden a manifestantes desarmados. El conflicto entre civiles y
alemán odió tanto a Prusia ni detestó tanto a su rey. militares —entre hombres libres e instrumentos del despotismo en
la óptica del 4 8 — se exaspera para terminar el 16, con el anuncio
de la revolución vienesa, en una colisión violenta. El 17 los
La revolución berlinesa (18 de marzo) y el descrédito prusiano.
demócratas se animan a organizar para el día siguiente una gran
Para Federico Guillermo aferrado a su absolutismo de derecho
concentración a fin de exigir el alejamiento del ejército y la creación
divino así como para su hermano Guillermo, futuro rey y empe-
de una guardia cívica. Por la noche, el rey piensa anticiparse a esta
rador, ceder a los reclamos de súbditos indóciles, al m o d o de tantos
humillante confrontación proclamando la abolición de la censura,
príncipes, era indigno de un Hohenzollern. L a noticia llegada
la formación inmediata de un nuevo ministerio y la elaboración de
de Berlín el 16 sobre la caída de Metternich y la capitulación de
una constitución sometida, eso es cierto, al antidemocrático Landtag
un Habsburgo, estimula en la población berlinesa el espíritu de
unido. En la mañana del 18, Prusia parece a su vez haber cumplido
protesta y lleva a l / e y a una "dolorosa revisión".
su "revolución de marzo", y sin mayores daños.
E n un estado acostumbrado a la obediencia por una larga
represión, la acción reivindicativa de comienzos de marzo se limita, Por la tarde, el odio de la población contra el ejército por un
en las provincias, a depositar petitorios en algunos centros urbanos lado, y por otro el espíritu de revancha de la corte y del alto
del este (en Breslau, el ejército dispersa a los manifestantes) y del comando, trasforman una manifestación de lealtad monárquica en
oeste. En Colonia, el 3 de marzo, varios miles de trabajadores una insurrección. Informada de las concesiones del rey, una enorme
agregan a las exigencias políticas habituales, reivindicaciones sociales muchedumbre que ha venido a aclamarlo descubre en el patio del
(protección del trabajo, enseñanza gratuita) que el radicalismo castillo a esos soldados cuya presencia se le ha hecho odiosa. La
badense había formulado, como es sabido, en septiembre de muchedumbre reclama a grandes gritos su partida. Pero es a ella a
1847. Insólita en Renania, esta demostración atemorizó a los quien intima el general von Prittwitz, de acuerdo con el príncipe
liberales y retuvo la atención de los historiadores a causa de la Guillermo, ordenándole evacuar el lugar. C o m o en el bulevar de
personalidad de su principal instigador, Gottschalk, activo presi- los Capuchinos el 23 de febrero, los soldados enardecidos disparan y
dente de una importante Arbeiterverein (asociación de trabajadores) los civiles creen que se trata de una emboscada; surgen centenares de
y fundador, como se ha visto, de una sección de la Liga de los barricadas defendidas con ardor (más de 200 insurrectos muertos).
comunistas. Como el furor popular apuntaba ahora principalmente contra la
casta militar y la camarilla, el rey de Prusia puede ceder terreno, a
Con sus 400.000 habitantes, Berlín ofrecía un campo de maniobra
diferencia del "rey de los franceses", sin arriesgar su corona: el
ideal para un partido revolucionario. Los radicales de la Zeitungs-
19 ordena el repliegue de las tropas, se pone b a j o la protección de
halle, de escasa audiencia, podrán redactar cuantos petitorios y
una guardia cívica y aleja a su hermano a Inglaterra. El 21 promete
panfletos deseen. Nada los predispone a conducir una acción
la libertad de prensa, de asociación, de reunión, la igualdad de las
armada. Si en la capital, profundamente partidaria de su dinastía,
religiones en favor de los "católicos alemanes" y de los judíos y una
no existen formaciones clandestinas de tipo parisiense, una vez
constitución de tipo parlamentario. Reunido por última vez el 2
desatada la insurrección bastará con que algunos compañeros
de abril, el Landtag unido ratificará estas concesiones y decidirá
recuerden las lecciones aprendidas en París en los talleres o en
que una Asamblea nacional elegida por sufragio universal, de
las barricadas.
225 217
Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

acuerdo con el rey, prepare el estatuto de una Prusia comprometida de las Iglesias del estado. Para vencer las resistencias internas, en
en el camino de la democracia. A un cambio de actitud poco cada comuna un club se encargará de la "formación política y social"
glorioso acompañado de escenas humillantes — e n presencia de miles y del armamento de los ciudadanos, subordinado a un club de
de manifestantes el rey debe saludar la larga procesión de vícti- distrito dependiente a su vez de un club de círculo que recibirá las
m a s — sucede la conversión que deseaban los liberales renanos desde directivas de un Comité central con sede en Mannheim, verdadero
mucho tiempo atrás. En su pomposa proclama del 21 de marzo "contragobierno" presidido por Hecker. Así institucionalizado, el
" A mi pueblo y a la nación alemana", el vencido del 19 anuncia partido radical está listo para instaurar una república badense,
su intención de conducir a Alemania hacia la unidad y la libertad. miembro de la República Federal Alemana. Sin embargo, en
En las principales ciudades de Prusia, especialmente en Berlín, Offenburgo, Hecker y Struve se negaron a proclamar allí mismo
este llamado grandilocuente llega demasiado tarde. Fuera del la república: antes de declarar la guerra a todos los príncipes, los
reino, la sangre derramada reanima los odios antiprusianos: la fiel republicanos debían organizarse en todos lados de acuerdo al
Deutsche Zeitung aconseja abdicar a Federico Guillermo. E n Carls- modelo badense; con este fin, desde Offenburgo se lanzó un llamado
ruhe, Munich y Stuttgart se queman su retratos públicamente. Desde a "todas las provincias de Alemania". Por lo demás, nada probaba
Cassel, un anónimo vilipendia a este "segundo N e r ó n " : "Habéis que el Vorparlament no se pronunciaría después de algunos días por
hecho asesinar traidoramente a tu pueblo a sangre fría [• • •] y ahora la república.
[. . .] que tu acólito Metternich es juzgado, que tú perteneces al Sin embargo, los liberales moderados admiten también esta
verdugo, ¿queréis dirigirnos? Si tu pueblo está suficientemente eventualidad. Ante los desórdenes sociales y los progresos de la
desnaturalizado como para no expulsarte, sabed que nosotros, no propaganda democrática en Renania, Camphausen ( 1 8 0 3 - 9 0 ) y
os soportaremos." También los munichenses condenan a " u n rey Hansemann ( 1 7 9 0 - 1 8 6 4 ) se lamentan de haber ayudado a la
que hasta el 21 de marzo ha querido ser el jefe de una gran operación del 5 de marzo. Por miedo a la "anarquía" y a la
potencia sin Alemania [. . .]" y aconsejan: "Dejemos a nuestro par- república, ofrecen su apoyo a Federico Guillermo. El 29 de marzo
lamento nacional el cuidado de decidir la forma y extensión del el primero se convierte en presidente del Consejo, y el segundo en
poder central llamado a asegurar al pueblo alemán el rango que le ministro de Finanzas de un gobierno que considera el sufragio
pertenece desde hace tanto tiempo." universal como una enojosa consecuencia de la insurrección ber-
linesa. En Badén, la administración no se atreve a disolver las
El impulso republicano en el sudoeste. En Badén, el comportamiento fuerzas paramilitares radicales; es incapaz de sancionar a los alcaldes
de la "veleta" de Berlín viene a ilustrar justamente uno de los que, con la complicidad de los interesados, incitan a los soldados
temas favoritos de la propaganda radical: esos príncipes que a volver a sus casas y a los reclutas a permanecer en ellas. Contra
cuestan tan caro son imbéciles o criminales. Desde fines de los agentes de la subversión, los liberales estrechan filas alrededor del
febrero, el partido ha salido de su semiclandestinidad. Sus clubes, trono gran ducal amenazado y se acercan al vacilante poder
sus Turner armados, su prensa ardiente, sus numerosos mitines lo federal, tanto tiempo detestado: el gobierno de Carlsruhe hace ingre-
convierten en una organización democrática sin equivalente en sar a Bassermann en la Comisión de los 17; Welcker es a la vez el
Alemania. La asamblea de Offenburgo del 19 de marzo testimonia muy oficial delegado badense ante la Dieta y el muy activo miembro
los extraordinarios progresos realizados desde el 12 de septiembre de la ilegal Comisión de los siete.
de 1847: ya no son más algunas centenas de militantes sino al
menos 10.000 trabajadores de la llanura y la Selva Negra los que
acuden al llamado de Hecker y Struve; en lugar de votos anodinos, El Vorparlament (31 de marzo - 3 de abril)
se someten a la aclamación popular, después de la ritual invocación
a un "parlamento alemán", medidas precisas cuya aplicación se Eran muy imprudentes esos radicales que esperaban y esos liberales
exige en forma "inmediata": depuración del gobierno y de la que temían el espíritu repubhcano de una asamblea reunida por
C á m a r a baja, supresión de la C á m a r a alta, fusión de la guardia diligencia de una mayoría moderada. El Vorparlament que sesiona
cívica y el ejército, impuesto progresivo sobre el ingreso, separación del 31 de marzo al 3 de abril en Francfort, en el histórico Römer
226 LMS revoluciones europeas is/ avance de la marea 227

y luego en la iglesia protestante de San P a b l o , es como la Comisión mento, las divergencias se borran cuando se trata de proveerse a
de los siete, una reunión de parlamentarios del sur y del oeste, manos llenas en un arsenal de argumentaciones contradictorias
vale decir de Akademiker, ligados a una institución familiar, la extraídas de nociones ambiguas — V o l k s t u m , Reich— cuya historia
monarquía constitucional. Sobre 574 delegados, 304 son origi- ya ha sido evocada. Struve, a quien los historiadores conservadores
narios de Baden, Baviera, Wurtemberg, Nassau, Hesse-Darmstadt, declararán "undeutsch" (indigno de un alemán) — ¡ e s un celador
Hesse-Cassel. Subrepresentado, ( 1 4 1 ) , el grupo prusiano cuenta del 9 3 ! — hace entrar en su Alemania a las 23 repúblicas, Viena,
con muchos renanos. C o m o en Heidelberg, la participación aus- Praga, Trieste y los ducados daneses. En teoría, el Vorparlament
triaca ( 2 ) es simbólica. La del "Schlesvig-Holstein" ( 7 ) traduce la procede por unanimidad a la anexión del Schlesvig. Posnania,
voluntad de hombres sin poderes por arreglar unilateralmente un poblada en su mayoría por polacos, crea un conflicto de conciencia
problema internacional complejo en beneficio de un estado que que Struve expone con cierto cinismo: por un lado, esta provincia
no existe. prusiana debe ser incorporada a la nueva Alemania; por otro, ¿se
En acuerdo con su presidente, el ilustre jurista de Heidelberg pueden despreciar los derechos de los polacos adversarios de la
Mittermaier ( 1 7 8 7 - 1 8 6 7 ) , la mayoría liberal se dispone a votar, bárbara Rusia? Es preciso mantener la promesa mil veces hecha de
después de discusiones académicas, el proyecto elaborado por los restablecer Polonia — y el Vorparlament emite un voto en este
siete que prevé una Alemania federal, imperial y parlamentaria. La sentido— pero "sin cometer injusticia respecto a los alemanes". L a
extrema izquierda, a pesar de ser minoritaria (Vs a lo s u m o ) , intenta, remisión del asunto al parlamento por parte de una asamblea que
a la manera de los revolucionarios parisienses, forzar la elección cuenta en su mayoría con amigos de Polonia, constituye u n mal
del pueblo alemán imponiéndole la república. Ante una asamblea presagio para la causa polaca.
que comprende opositores de renombre europeo —el profesor S. El parlamento debía reunirse en mayo, pero el Vorparlament es
Jordan ( 1792-1861 ), el perseguido de Hesse-Cassel, Ronge (1813- incapaz de concebir una ley electoral uniforme. Deja a los gobiernos
8 7 ) , el " p a p a " del "catolicismo alemán" (y de los demócratas el cuidado no solamente de fijar la fecha, sino también las moda-
resueltos) el sajón Eisenstück ( 1805-71 ), J. Jacoby de Königsberg lidades de las elecciones. Se contenta con estipular que habrá un
( 1 8 0 5 - 7 7 ) , pionero de un liberalismo avanzado en Prusia del diputado por cada 50.000 habitantes y acuerda el derecho de voto
este, el colonense von Ester ( 1 8 1 1 - 5 9 ) , un fiel devoto de Engels— y elegibilidad a todo alemán mayor de edad e independiente (selbs-
el radicalismo badense se afirma durante algunos días como guía tändig), lo que puede desembocar, según el sentido dado a este
del radicalismo alemán. El plan de democratización de la vida adjetivo, en el sufragio universal o en su caricatura: en estados
social y política del gran ducado establecido en Offenburgo el 19 de sin tradición política, por ejemplo, se logrará marginar a los asa-
marzo, se encuentra a veces literalmente en el programa expuesto lariados.
por Struve. Las innovaciones constitucionales que supone su apli- Contra Struve, que propone la "permanencia" hasta la reunión
cación en Alemania son de tal naturaleza como para provocar el del parlamento de una asamblea donde sin embargo es minoritario,
espanto de aquellos que quieren reformar sin trastocar. Según el el Vorparlament elige en su seno una comisión de 50 miembros
modelo norteamericano, Alemania tendría un presidente electo; —el ala izquierda del radicalismo está excluida— encargada de
23 repúblicas remplazarían a los 38 estados. Remitiendo al parla- tomar en sus manos los intereses de Alemania.
mento la responsabilidad de decidir si la nueva Alemania será
republicana o monárquica, liberales prusófilos o prusófobos se
alian de hecho — s o pretexto de respetar la soberanía popular—, al La Alemania de dos cabezas: los "50" y la Dieta
proyecto de los siete sostenido por von Gagern, pero evitan la ruptura (4 de abril - 18 de mayo)
con los radicales, que demuestran un patriotismo ejemplar.
Por primera vez desde 1815, los alemanes se hallan enfrentados Con mayoría moderada pero comprendiendo también a Itzstein,
concretamente —¡al menos así lo imaginan ellos!— a un problema Blum y Jacoby, los 50 dan, gracias a una hábil dosificación, una
muy grave para Alemania y para Europa, el de las fronteras del imagen más exacta de la Alemania real que el Vorparlament o la
nuevo estado. En el Vorparlament, como más tarde en el paría- asamblea de Heidelberg; allí los seis estados del sur y del oeste.
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Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

fortalezas del liberalismo y del radicalismo ya no tienen la mayoría La epopeya comenzada el 12 de abril parece hoy una ridicula y
( 2 0 ) . Durante las siete semanas de su breve existencia, se vieron descabellada empresa de una decena de días. Se olvidan los efectos
enfrentados a tareas arrolladoras. Mientras que la insurrección producidos por un levantamiento que proclamaba el "derecho al
republicana badense refuerza las separaciones políticas, el problema trabajo": la confusión de los soberanos, los temores de los "minis-
de Posnania y especialmente la cuestión de Schlesvig-Holstein tien- terios de marzo", la cólera de los políticos liberales. La burguesía
den a borrarlas: el desencadenamiento de las pasiones nacionalistas de los Akademiker que se prepara para gobernar Alemania no
ofrece al rey de Prusia la ocasión de rehabilitarse ante los ojos quiere permitir que se remplace la dominación de la nobleza, de las
de la opinión, mientras que Austria está ausente de la conducción camarillas y de la burocracia por la de las clases populares. Tras
de los asuntos alemanes librada a la "biarquía" de los 50 y de la una vana tentativa por llevar a Hecker y a Struve a renunciar a su
Dieta. intento, los 50 avalan la represión que la Dieta organiza en el
La coexistencia de un organismo revolucionario y de una insti- marco de las instituciones federales. El frente antirrepublicano
tución despreciada no deja de sorprender a los historiadores, que invoca la defensa de la patria alemana. Los recuerdos del Franzosen-
denuncian la debilidad y el espíritu legalista de los liberales. larm (23-24 de marzo) todavía cercano son hábilmente explotados.
Cierto es, hubiera sido sencillo dispersar a los dignos plenipoten- Denunciando una imaginaria colusión entre la Pariser Legión y los
ciarios de gobiernos que, en la euforia de comienzos de marzo, no jefes radicales, los liberales justifican el llamado del gran duque
se había ni siquiera pensado en derrocar. ¿Qué ventaja hubiera a las fuerzas de Hesse-Darmstadt, Nassau, Wurtemberg y Baviera.
obtenido la "revolución alemana"? Al decidir el Vorparlament, según La victoria lograda en Kandern (20 de abril) por las tropas
la proposición del badense Soiron ( 1 8 0 6 - 5 5 ) (pronto llamado a badenses b a j o el comando de un general de Hesse, Friedrich von
presidir los 50), que el parlamento fijara einzig und allein ("exclu- Gagern (hermano mayor de Henri y Max, caerá antes de finalizar
sivamente él") la constitución de Alemania, condenaba la Dieta. el combate), puede ser presentada como el triunfo de la idea
Aparentemente regenerada por la incorporación de los 17, la Dieta unitaria sobre el movimiento de anarquistas separatistas.
no cesa de testimoniar una notable docilidad, así como sus mandan- Esta propaganda parece haber sido llevada especialmente sobre
tes siempre paralizados de miedo: después de haber "recomendado" los diplomáticos franceses. Muchos partidarios de Hecker y Struve
a los estados el 3 de marzo abolir la censura legalizando de tal no se sienten afectados por el fracaso de una insurrección a la
manera la violación de sus disposiciones, ¿no acaba de confirmar cual, con la excepción de jóvenes compañeros desocupados y de
las "resoluciones" del Vorparlament al haber fijado el 30 de marzo los cuadros del radicalismo, negaron su apoyo; ellos consideraban
en uno por cada 70.000 habitantes el número de diputados en el insensato combatir por una causa cuyo rápido y pacífico triunfo
parlamento? Mientras se aguarda la reunión del parlamento, la parecía seguro ¡tan inmensas eran las esperanzas puestas en el
Dieta ofrece un medio, en realidad el único, de actuar sobre las primer parlamento alemán! Algunas semanas después de Kandern,
administraciones principescas. los candidatos republicanos obtendrán en Badén los Vio de las
bancas; Hecker, que se halla prófugo, será triunfalmente electo. De
La unión contra los republicanos badenses. De esta colaboración las decepciones de un año surgirá la gran insurrección republicana
entre la autoridad moral y el símbolo del poder material, los badense de mayo y junio de 1849. Si el frustrado putsch de abril no
republicanos badenses, en primer lugar, soportan las consecuencias. debilitó en absoluto la idea republicana en el sudoeste, está en cam-
Badense por sus promotores y su escenario, la insurrección de bio en el origen de la ruptura definitiva entre republicanos y mo-
abril no debe ser considerada como un episodio de historia regional. nárquicos constitucionales.
Tiene ramificaciones en la colonia alemana de Suiza, en Hesse-
Cassel, en Hesse-Darmstadt; está directamente ligada a la negativa La unión en la defensa del germanismo: Posnania y ducados. De
del Vorparlament de pronunciarse en favor de una república federal acuerdo con la Dieta para combatir lo que Soiron llama la
y social. Desde una asamblea de notables, Hecker y Struve llaman "anarquía", los 50 no logran superarla en la defensa del germa-
a las masas. Para estos entusiastas "del 48", bastará con proclamar nismo. Conforme a su mandato, pidieron a los países austríacos de
la república en el gran ducado para que toda Alemania los siga . . . la Confederación que eligiesen diputados y, en este sentido, rogaron
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Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea

a Palacky que colaborase en sus trabajos. Es conocida la rotunda revolucionario de Kiel que preside Augustenburgo y proclama, des-
negativa del historiador checo. En la cuestión de Posnania, se pués del Vorparlament, la admisión de Schlesvig en la Confederación;
esfuerzan por seguir, detrás de la Dieta, la evolución de una opinión mientras tanto los 50 lanzan un llamado a la formación de cuerpos
cada vez menos favorable a los polacos; cuando Federico Guillermo francos y envían al liberal badense Mathy ( 1 8 0 7 - 6 8 ) a Berlín.
funda un irrisorio ducado en Gnesen ( 3 0 0 . 0 0 0 habitantes), que Comandante en jefe de las fuerzas federales, el general prusiano
provocará la breve insurrección de Mieroslawski, e incorpora a la Wrangel ( 1 7 8 4 - 1 8 7 7 ) penetra en Schlesvig, derrota a los daneses
mayor parte (un millón de habitantes) del gran ducado de Poznan el 24 de abril y franquea los límites de Jutlandia.
a su reino, la Dieta decreta la unión de esos territorios a la Confede- Estos éxitos sobre u n adversario débil suscitan el delirio en
ración; si bien no piensan más en emitir un voto piadoso en favor Alemania; la prensa celebra con énfasis la intrepidez de los cuerpos
de la restauración de una nación cuyos indignos portavoces se
francos, la solidez de los prusianos, el genio estratégico de Wrangel.
atreven a reivindicar Dantzig y se niegan a participar en las elec-
Los extranjeros comprueban estupefactos el brusco viraje en favor
ciones del parlamento, los 50 — c o m o el Vorparlament— dejan a
de Federico Guillermo, que comienza a interrogarse sobre las
la asamblea elegida el problema de resolver la espinosa cuestión
graves consecuencias de un problema asumido dentro de un clima
polaca.
pasional. Prusia continental descubre su impotencia en el m a r :
El paso de la vela de armas en los ducados a la guerra franca y después de haber apresado a los barcos enemigos en sus puertos,
jubilosa contra Dinamarca, trasforma al " N e r ó n " de Berlín en Dinamarca decreta el bloqueo de las costas prusianas y mecklem-
mandatario de la Dieta y en defensor de los derechos del pueblo burguesas. Con el apoyo de su vecino del norte, está en condiciones i
alemán representado por los 50. Las agitaciones en Alemania meri- no solamente de perturbar los intercambios de Prusia sino también
dional han tenido inmediata repercusión en las riberas del Báhico, de impulsar a la desesperación, asfixiándolas, a las repúblicas
donde la ola liberal decrece lentamente mientras aumenta la tem- hanseáticas. El estado de ánimo en Suecia y Noruega hace cada vez
pestad nacionalista. Schlesvig es la apuesta de dos partidos resueltos más probable esta eventualidad; desde comienzos de abril, el
a no considerar, por las razones ya expuestas, el rescripto real escandinavismo no se limita más al m u n d o de los escritores; ahora
del 28 de enero y a anexar, en contra de su voluntad, a las pobla- es, según un diplomático, el "movimiento de las razas escandinavas
ciones despreciadas: en Copenhague, el 11 y 12 de marzo, el contra la agresión de la raza germánica"; en Cristiania, como en
"partido del Eider" reclama una constitución común a Dinamarca Upsala y en Lund, los estudiantes se comprometen; los militares
y Schlesvig; en Rendsburgo, en Holstein, la oposición alemana solicitan — e n v a n o — la autorización para combatir a los alemanes.
exige el 18 que los ducados se erijan como un estado autónomo, y El pacífico Oscar I es arrastrado por una corriente irresistible: a
que a su vez el Schlesvig ingrese en la Confederación. Ante esta comienzos de mayo, pone a disposición de Federico VII 15.000
imposición, 'el reaccionario Federico V I I replica el 22 formando suecos y 3.000 noruegos así como también una escuadra, no por
un gabinete de unión con los liberales que refleja "la nacionalidad cierto para recuperar Schlesvig sino para preservar la integridad
danesa frente a los ducados". El 24, un gobierno provisional de Jutlandia.
compuesto de alemanes de todas las tendencias se constituye en A esta amenaza de intervención militar limitada inspirada por
Kiel. El 3 de abril, los estados de los dos ducados se reúnen en el escandinavismo se agrega una presión diplomática creciente de
Rendsburgo. Cuerpos francos entrenados en las sociedades de gim- parte de dos potencias interesadas en el mantenimiento del statu
nasia atacan a los daneses, que los aplastan el 9 de abril. quo en la entrada al Báltico. Las amenazas de Nicolás I llevan
Preocupados por restaurar ante los ojos de la opinión alemana a Federico Guillermo a aceptar la mediación de Londres, que
una autoridad muy comprometida, el círculo íntimo de Federico prevé la división de Schlesvig según la frontera lingüística. Wrangel
Guillermo incita a la intervención. A fines de marzo el rey, en una evacua Jutiandia; su instalación en Schlesvig meridional, de po-
carta pública al duque de Augustenburgo, el pretendiente a la suce- blación germánica, facilitaría la trasformación de la tregua en un
sión danesa, había declarado que defendería los "intereses alemanes" armisticio acordado sobre las bases establecidas por Palmerston, si
en los ducados. El 8 de abril las tropas prusianas entran en acaso la fiebre nacionalista fuese menos elevada: unos quieren
Holstein, territorio federal. El 12 la Dieta reconoce al gobierno conservar todo, otros conquistar todo. L a cuestión de los ducados.
Las revoluciones europeas El avance de la marea 233
232
amplio según las regiones, un reflejo atenuado de las Cámaras
que complicará las relaciones internacionales hasta Sadowa, perturba
bajas de los estados constitucionales: si los Akademiker y los
desde su nacimiento a la buscada Alemania. La razón de estado
profesores (los Dahlmann, Gervinus, Welcker, Soiron, Mohl,
prusiano no en vano ha desconocido las aspiraciones de la nación,
etc.) se revelaron finalmente inferiores a las expectativas de sus
ni despreciado las decisiones de la Dieta y de los 50; cuando se
contemporáneos y de los historiadores, no se podría incriminar a
reúne el parlamento, el prestigio de Federico Guillermo es tan una insuficiente experiencia política; los problemas provenían sólo
b a j o como después del 18 de marzo. de la imaginación creadora. Asimilados los Akademiker de Franc-
fort a una alta burguesía reaccionaria con la cual la clase de los
intelectuales alemanes, como creemos haberlo probado, no tiene
El apogeo de la revolución alemana: el primer parlamento alemán
nada en común, queda por recordar las razones del retroceso de la
y la fundación de un Reich provisional (18 de mayo-fulio de 1848)
representación de las tendencias avanzadas de la asamblea de
Heidelberg al Vorparlament, y del Vorparlament al parlamento.
Desde su entrada a la iglesia San Pablo ( 1 8 de m a y o ) hasta la
Invocar, como se lo ha hecho a veces, el temor a la "anarquía", es
formación del primer gobierno del Reich, el parlamento de
una explicación controvertida por los resultados de las elecciones
Francfort se comporta como soberano. L a autoridad moral que
en los países más agitados. El sólido liberalismo y el radicalismo
se asocia a la misión de llevar la felicidad a los alemanes y la
republicano del sudoeste fueron progresivamente reducidos a su
grandeza a Alemania, es una fuerza invencible. ¿Quién pues se
peso real: en conjunto, Prusia ( 2 0 0 ) y Austria ( 1 2 1 ) totalizan más
atrevería a oponerse a la revolución nacida en Heidelberg el 5 de de la mitad del efectivo parlamentario; cada una contará apenas
marzo? Hasta junio, ni Prusia, por la impopularidad de su rey y mas diputados de izquierda y de extrema izquierda ( 1 9 ) que
sus discusiones con la Asamblea nacional prusiana,^ ni Austria, Badén y Hesse-Darmstadt ( 1 7 ) .
cuyo gobierno refugiado en Innsbruck lucha con los demócratas
vieneses, el movimiento nacional checo (el Congreso de Praga E n realidad, la noción de partido se introduce poco a poco
se inaugura el 2 de junio), las exigencias magiares y los movi- y no sin hallar una obstinada resistencia de parte de hombres
mientos sardos, están en condiciones de influir en los debates a preocupados por cumplir con toda independencia su alta misión.
que se consagran extasiados los efímeros dueños de los destinos Graciualmente la vida parlamentaria incitará a los diputados a
germánicos. reunirse según sus afinidades. Así aparecerán clubes o, si se pre-
fiere, grupos parlamentarios; el bávaro Eisenmann ( 1 7 9 5 - 1 8 6 7 )
¿Quiénes son pues esos casi 600 retóricos a los cuales desde
contará nueve desde el café Milani (derecha) hasta el hotel Don-
hace un siglo se reprocha no haber anticipado, por la sola
nersberg (extrema izquierda). Centro de la vida política hacia el
persuasión, la obra bismarckiana realizada "a hierro y fuego !
que convergen esperanzas y reclamos (¡jamás asamblea alguna
U n a estadística de noviembre de 1848 sobre 573 diputados muestra
recibió tantos petitorios!), el parlamento vivió demasiado poco
una débil representación de la gran propiedad terrateniente (38,
como para modificar el particularismo de formaciones nacidas
incluidos 25 nobles), de la gran burguesía industrial ( 7 ) y comer-
en el marco de los estados y siempre atentas a los debates de sus
ciante ( 1 3 ) , la insignificancia del pequeño comercio ( 1 3 ) , del Camaras, que continuaron sesionando, como lo hizo también la
artesanado ( 4 ) — ¡ n i un solo obrero de fábrica!-— y del campe- Asamblea nacional prusiana. Las primeras tentativas para dotar a
sino ( 3 ) . En cambio, la preponderancia de los Akademiker (alre- Alemania de partidos nacionales emanarán de parlamentarios
dedor de 400, incluyendo 49 profesores) no debería sorprender. demócratas de Francfort: una red de clubes tratará de movilizar a
En un escrutinio a dos niveles, menos favorable a las clases^ altas las clases populares en defensa de la consdtución votada en marzo
de lo que imaginan los doctrinarios del sufragio directo, los "gran- de 1849. El violento retorno de la reacción tornará ilusoria esta
des electores" optaron naturalmente por candidatos experimentados. tardía empresa.
El parlamento de Francfort es, a pesar de un sufragio más o menos
Las decisiones iniciales del pariamento expresan n o ya las
tendencias de partidos inexistentes o embrionarios, sino los senti-
' Remitimos el estudio de la vida política del estado prusiano a partir de mientos profundos de la mayoría de los alemanes. Las elecciones
la reunión de la Asamblea Nacional (22 de mayo) al capítulo siguiente.
234 Las revoluciones europeas fe'/ avance de la marea 217

están demasiado próximas, la iglesia de San Pablo está situada en de la Alemania del sur) de Friburgo, saludando al "retoño de la
el corazón de una región de opinión demasiado unitaria y dema- antigua casa imperial", lo siente la mayoría de los alemanes. La
siado democrática como para que los monárquicos constitucionales misión de presidir la fundación de un nuevo Reich, ¿en quién
mayoritarios olviden los clamores de los mitines de marzo y abril. recae si no en el más popular de los Habsburgo? Décimo tercer
La actitud del prusófilo H. von Gagern, brillantemente llevado a la hijo de Leopoldo II (m. 1 7 9 2 ) , hermano de Francisco II
presidencia de la Asamblea, está de acuerdo con el estado de ánimo (m. 1 8 3 5 ) , tío de Fernando l, el archiduque Juan ( 1 7 8 2 - 1 8 5 9 )
y las tradiciones germánicas. Pide al parlamento, el único que no es el personaje grotesco cuya mediocridad y neutralidad habrían
detenta la soberanía nacional, que elabore la constitución del Reich, llamado la atención de los diputados, como se afirma a veces.
¡sin consultar a los príncipes, que son empero los únicos deposi- Ambicioso, paciente, supo conquistar la simpatía de los medios
tarios del poder material! Toca al parlamento decidir, a la manera cultivados —protector de los eruditos eslavos en particular—, de
de la Dieta de los años treinta, pero con un espíritu opuesto, la los liberales —adversario de Metternich, es sabido que precipitó
caducidad de las disposiciones constitucionales locales que fueran su caída— y del pueblo: su casamiento con la hija de un jefe
contrarias a la constitución federal. C o m o al acuerdo de principio de correos y una simplicidad que parece natural dan a este gran
sobre la instalación de un ejecutivo provisional hasta que se crearan señor el porte de un demócrata. Por largo tiempo mantenido al
las nuevas instituciones siguiera un número increíble de proyectos margen de la conducción de los asuntos públicos, asume, en el
rechazados, von Gagern propone el 24 de junio la elección de un momento de su elección y en condiciones dramáticas, las res-
Reichsverweser ("vicario del Reich"), y adelanta el nombre del ponsabilidades supremas. E n una capital víctima de agitaciones
archiduque Juan. El 28 se vota la ley sobre el provisorische Zeníral- callejeras, es preciso no sólo hacer frente a las pretensiones con-
gewalí ("poder central provisional"): el Reichsverweser será asis- tradictorias de las nacionalidades, sino en particular cumplir dos
tido por un ministerio responsable ante el parlamento; su puesta tareas esenciales por la tranquilidad y la integridad del imperio:
en funciones dará fin a la existencia de la Dieta. El 29, Juan es preparar la reunión del parlamento constituyendo los "estados
designado por 436 votos contra 52 de von Gagern, que n o es hereditarios" y salvar, si no la Lombardia, al menos la Venecia.
candidato, y 32 de Itzstein. Un voto precedente acerca de una Recibido en Francfort el 11 de julio como un emperador germánico,
moción republicana, rechazada por 355 votos contra 171, muestra el 15 regresa a Viena. E n medio del regocijo general, el 12
que la mitad de la izquierda votó por el archiduque. redacta solemnemente el acta de defunción, que se podría pensar
Esta elección, que no suscita ninguna protesta de parte de los definitiva, de la institución más detestada, la Dieta. Su retorno a
príncipes, excepción hecha del rey de Hanover, despierta un gran comienzos de agosto será triunfal; aquel que muy pronto hablará
entusiasmo popular. Antes incluso que en cada estado se ordene un de "su ex soberano el emperador de Austria", personifica las
desfile militar, los gobiernos juzgan prudente dejar que los ciuda- aspiraciones liberales y los apetitos del germanismo. Se inaugura
danos exterioricen su alegría: el 30 de junio en Carlsruhe, Friburgo, el 22 de julio, en nombre de Fernando L un parlamento elegido
Rastatt y Baden-Baden se desfila al compás de la música en las por sufragio universal, proclama la obligación de una estrecha
calles adornadas mientras la artillería dispara salvas. La prensa de colaboración del imperio y de la nueva Alemania. L a gloria de
todos los matices testimonia una excepcional unanimidad: ninguna Custozza recae sobre él; la victoria austríaca es saludada como
crítica a la elección de un príncipe austríaco ni a la persona del una victoria alemana por muchos diputados, que ven en el Lom-
Reichsverweser-, los periódicos radicales se pronuncian incluso bardo-Véneto el bastión de un Reich que englobe Trieste, Trento y
contra la irresponsabilidad del jefe de estado provisional. Para el Tirol.
los diarios liberales en poder de protestantes o de católicos tibios, Después de haber entronizado en Viena el primer ministerio
la pertenencia del elegido a la más venerable familia reinante marca liberal de la antigua monarquía, el Reichsverweser, según los prin-
a la vez la continuidad — e l fracaso del partido republicano— y el cipios del régimen parlamentario, forma en Francfort el primer
cambio — l a victoria de la idea unitaria—. Nadie condena el ostra- gobierno de Alemania. Monárquicos ligados a las instituciones
cismo que ha afectado a los Hohenzollern. Lo que expresa ruido- representativas, todos los ministros excepto uno pertenecen al
samente la clerical y reaccionaria Süddeutsche Zeitung (Gacela parlamento. Su jefe, el príncipe Karl von Leiningen ( 1 8 0 4 - 5 6 ) ,
23() Las revoluciones europeas IV. ÜL REFLUJO

uno de los más ricos Standesherren del sudoeste, a quien su libe- (JULIO-DICIEMBRE DE 1848)
ralismo no preservó en marzo de disturbios rurales, está conven-
cido de la urgencia de crear un poder central fuerte. El aparente
equilibrio entre el norte y el sur es en realidad una desventaja
para Prusia: sobre seis carteras ministeriales sin contar a Leiningen
hay dos prusianos, uno de ellos renano, dos son burgueses de
Bremen y Hamburgo, ciudades refractarias al Zollverein, y dos
partidarios declarados de una Alemania unificada bajo la dirección
habsburguesa, R. Mohl (1799-1875) y Schmerling (1805-93). El
primero, un wurtemburgués ex Burschenschaftler, enseña con Todo ocurre como si la derrota obrera parisiense de junio hubiera
pasión derecho público en Heidelberg; en un vibrante artículo disipado las "ilusiones líricas" de la "primavera" e impulsado a
publicado después de las jornadas berlinesas, rompe con la línea Austria y Prusia a emplear las armas contra las ideas. Los parla-
proprusiana de la Deutsche Zeitung. El segundo, un magistrado a mentarios comienzan a ceder el paso a los militares. Austria
quien su oposición a Metternich le había valido representar a restablece su situación en Italia en julio y destruye el movimiento
Austria ante la Dieta después del 13 de marzo, comienza una democrático vienés en octubre; como la abolición del régimen
extraordinaria carrera: ministro de Interior del Reich en julio y señorial en septiembre clausuró la revolución en los campos de
sucesor de Leiningen en septiembre, luego ministro de Interior de los "estados hereditarios", gracias a sus fieles súbditos eslavos y
Schwarzenberg (1849-51) y jefe del goWerno del imperio (1860- rumanos puede intentar la liquidación de las arrogancias magiares.
65). Más allá de las adaptaciones políticas, se descubre en este En la lucha por las fronteras, el parlamento de Francfort ha
adversario de las nacionalidades del imperio la inquebrantable registrado en Schlesvig-Holstein un doloroso fracaso que estuvo al
voluntad de fortificar la influencia de Viena en los asuntos alema- borde de arrastrarlo en septiembre; únicamente lo salvó la inter-
nes. En general, este ministerio, cuya sola existencia constituye, vención de tropas austríacas y prusianas. A ejemplo del emperador
después de la reunión del parlamento, un nuevo milagro de pero en condiciones más cómodas, el rey de Prusia borró en su
"primavera", es bien recibido por una opinión impaciente por ver capital, en noviembre, las consecuencias de marzo. Tras el aplas-
actos que sigan a las proclamaciones. tamiento de la revolución vienesa y el triunfo de la contrarrevo-
La fuerza del parlamento reside en el consenso popular y en lución en Berlín, ¿cuál es el porvenir de la revolución alemana?
las dificultades de las potencias reaccionarias. De julio a noviembre,
Francfort percibirá los efectos del receso de la ola revolucionaria
en Viena y Berlín y los signos inequívocos de las decepciones
I. ITALIA: DEL FRACASO NACIONAL A LAS
de la opinión.
REVOLUCIONES DEMOCRÁTICAS

Custozza (25 de julio) marca los comienzos del restablecimiento


de la autoridad imperial allí donde precisamente soportó los pri-
meros asaltos de la revolución. Carlos Alberto fugó de Milán bajo
los gritos hostiles de una población que, creyendo siempre en la
invencibilidad italiana, repudia la traición. Salvo en Venecia,
inflamada por Manin, todo se quiebra, todo se abandona. La
quimera del fara da se se disipa, pero con gran lentitud. ¿Acaso el
4 de julio Mazzini no exhortaba todavía a los franceses a preocu-
parse más bien por la suerte . . . de los polacos? Puesto que Pal-
merston no parecía dispuesto a una riesgosa intervención militar,
2 3 8 Las revoluciones europeas LI rejlujo 239

en remplazo de un apoyo diplomático que la jactancia piamontesa En diciembre, la llegada al poder de Gioberti tranquiliza a los
de ninguna manera facilitaba, resultó forzoso para Carlos Alberto monárquicos, preocupados por librar al reino, mediante la guerra,
seguir el ejemplo del gobierno provisional de Milán y solicitar del destino que parece reservado a Toscana y a los estados
la ayuda de Francia, cuya asamblea constituyente había votado a pontificios.
fines de mayo una declaración en favor de la independencia italiana. Después del armisticio, la concentración de los demócratas más
El solicitante pone sus condiciones: Francia enviaría 40.000 hom- exaltados en Florencia y R o m a agrava las situaciones explosivas.
bres a Lombardia y 10.000 a Venecia para combatir b a j o el m a n d o E n esta Italia donde los historiadores de todas las tendencias
de Carlos Alberto; Francia se comprometería a no reclamar ninguna comprueban la ausencia casi completa de conciencia de clase en
compensación territorial y a prohibir toda propaganda republicana. los trabajadores, la Toscana, patria de Buonarotti, constituye una
Cavaignac y Bastide, quien, como se ha visto, se había empeñado excepción. Algunas sociedades secretas republicanas comunizantes
recientemente en contrariar las ambiciones de la casa de Saboya como se h a visto, se manifestaron en ocasión de los "disturbios de
en Sicilia, no deseaban ni trabajar para el rey en Cerdeña ni subsistencias" de 1847; en Florencia aparecía en 1848 una revista
ayudar a restaurar la influencia austríaca en Italia. A pedido de que propaga el comunismo " f u n d a d o por Jesucristo"; Livorno
Carlos Alberto, Bastide, burlón, respondía el 7 de agosto: "Hemos especialmente, entre septiembre de 1847 y septiembre de 1848,
lamentado que una noble susceptibilidad nacional no os haya es escenario de huelgas que inspiran reivindicaciones a la vez
permitido llamarnos antes." E s de agregar que París y Londres sociales y políticas. La derrota es sentida tanto más dolorosamente
acababan de ofrecer su mediación. La política de acuerdo, cuyas en el ducado por cuanto el esfuerzo de guerra fue allí relativamente
bases había sentado Lamartine en marzo, salvará a Carlos Alberto. importante. El retorno de los vencidos, la agitación republicana y
Sin embargo, el armisticio impuesto al general Salasco (9 de agosto) el recrudecimiento de la desocupación mantienen un clima anárquico.
anulaba las ambiciones sardas sobre la misma Lombardia que El 23 de agosto, Livorno se levanta y amenaza convertirse en una
Austria pensaba abandonar un mes antes: las tropas de Carlos república independiente b a j o la duección de Guerrazzi. A fines
Alberto deben replegarse hacia el Tessin y evacuar P a r m a y de octubre, Leopoldo II consiente en formar un ministerio Gue-
Modena. Fuerte en Italia pero débil en el interior, el gobierno rrazzi. L a Toscana sólo conserva de monarquía su nombre.
imperial no apresura las negociaciones con dos potencias que sabía El divorcio entre Pío I X y la opinión liberal y nacional italiana
han resuelto no combatir. se remonta, como es sabido, a la vibrante declaración del 29 de
Las decepciones unitarias irritaron a los elementos politizados, abril condenando la guerra y la revolución. El papa, para apaciguar
inclinados a endilgar a los príncipes y a los ministerios liberales la los espíritus, había convocado a Mamiani ( 1 7 9 9 - 1 8 8 5 ) , un unitario
responsabilidad de los fracasos. Mientras las masas ven agravada hostil a la administración de los cardenales y animado por la
su situación por los desórdenes y las actividades militares y se voluntad de aliviar los sufrimientos de los humildes. Ante la noticia
refugian en su habitual pasividad (desde fines de mayo el recluta- de Custozza los prelados reaccionarios obtienen el alejamiento de
miento de "cruzados" había cesado y en varios estados la indife- Mamiani, y con sus preparativos de un retorno del Antiguo Régimen
rencia popular obligaba a las autoridades a postergar la fecha de desatan un proceso revolucionario. En septiembre. Pío I X designa
las elecciones), un puñado de demócratas sostenidos por una a Rossi, ex embajador de Guizot convertido nuevamente en ita-
liano después de que Lamartine lo despidiera. Este moderado es
clientela de artesanos intenta hacerse con el poder para desatar
mal visto por los cardenales y repudiado por los demócratas porque
la guerra de los pueblos.
no piensa ni abolir la constitución del 14 de marzo ni renunciar
E n el Píamente, la popular monarquía parece vacilar. Frente en lo externo a la línea prudente fijada por el papa; el 15 de
al campesinado enamorado de la paz, los demócratas reclaman a noviembre, viejos carbonari lo apuñalan en el momento en que
grandes gritos la denuncia del armisticio; poco numerosos, excepto se apresta a entrar en el Consejo Legislativo. Este asesinato es la
en Génova, logran imponerse sobre la clase política que había señal de la insurrección. C o m o en febrero en París, la guardia
impulsado al rey a la aventura: la cuestión de la guerra o la paz nacional participa. El 16 se lanza un ultimátum al papa, combinado
se convierte en la de mantenimiento o desaparición de la monarquía. con la amenaza de asalto al Quirinal: formación inmediata de un
248 -240
Las revoluciones europeas El reflujo

gobierno demócrata, convocatoria de una Constituyente, declaración monarquía bajo la protección del Reino Unido, interponen las
de guerra a Austria. Pio I X elude estas dos últimas exigencias, escuadras de los almirantes Baudin y Parker; al armisticio im-
observando que ellas son de competencia de los diputados; pero puesto a F e r n a n d o sucederán infructuosas negociaciones : en Nápoles
inmediatamente hace un llamado a los liberales que él mismo había se aceptaría una autonomía aparente, en Palermo se exige una
alejado bajo la presión de sus familiares: Mamiani, el abate filósofo independencia real. El tiempo trabaja para Fernando. Los aconte-
Rosmini . . . Esta combinación quizá hubiera salvado todo algunas cimientos de septiembre ¿no han demostrado que el porvenir de
semanas antes; ahora estaba superada. un movimiento particularista separado de las grandes llamaradas
La propaganda de los mazzinianos, reunidos al fin en enero democráticas y unitarias peninsulares reposa, al fin de cuentas, en
por su jefe siempre desventuradamente ausente en las acciones la presencia seguramente temporaria de las flotas extranjeras?
decisivas, halla una profunda repercusión. Exasperadas "por la E n el corazón de las provincias en las que Radetzky ejerce un
crisis de subsistencias, la crisis del crédito, el estancamiento del despotismo aun más opresivo que el del rey de Dos Sicilias, sólo
turismo, la caída en el comercio de objetos de arte" ( G . Bourgin), Venecia no deja de estar en pie de guerra desde marzo de 1848 a
las clases populares aspiran a cambios que mejoren su condición: el agosto de 1849. Ávida de autonomía, la vieja república de los dogos
aspecto social explica las violencias repentinas del 16 de noviembre simboliza para los demócratas europeos lá idea nacional y la idea
y confiere a la revolución romana un lugar aparte en los movi- republicana que personifica Manin. L a epopeya y su héroe han
mientos italianos de 1848. Rechazando el papel de un títere some- nacido de Custozza. Incorporada en principio a Cerdeña desde el
tido a los imperativos de la muchedumbre. Pío I X toma una decisión 3 de julio, Venecia pierde su independencia solamente durante
que consideraba secretamente desde fines de abril: "Si quieren cinco días: el 7 de agosto, funcionarios sardos toman posesión de
continuar exigiendo de mí cosas que la conciencia rechaza, me la ciudad en nombre del rey; el armisticio del 9 los hace huir el 12.
retiraré [ . . .] a un convento para llorar por las desgracias de Roma La asamblea anula su voto del 3 de julio, entrega el poder a Manin
víctima de [. . .] esta anarquía cuya señal será mi retiro." En la y se prepara para la resistencia. Separada de tierra firme, amenazada
noche del 24 al 25, Pío I X se va a poner bajo la protección' de de asfixia por la flota austríaca, sometida a un armisticio cuya
F e r n a n d o II en Gaeta desde donde, el 4 de diciembre, ruega a las validez cuestiona Viena, Venecia continúa desgarrada por las
potencias restablecer su poder temporal. Mientras tanto R o m a se facciones. El triunvirato — e s t a curiosa institución encubre en 1848
convierte en una república de hecho, esperando la elección de una como ai final de la república romana, regímenes personales— debe
asamblea constituyente (¡los republicanos romanos son más lega- enfrentar a los moderados, albertistas arrepentidos ahora resignados
listas que los republicanos parisienses!). El gobierno provisional a la restauración de la dominación austríaca y especialmente a los
establece contactos con el gobierno de Guerrazzi. clubistas mazzinianos reforzados por el arribo de voluntarios. Manin
E n el continente, el insobornable protector de Pío I X había expulsa, a comienzos de octubre, a los agitadores que declaman
logrado en el verano borrar la "primavera". Este príncipe, que no contra el clero y elogian los méritos de una república unitaria. E n
sin humor comparaba ante republicanos franceses su acción del 15 lo externo, se beneficia hasta el 2 0 de diciembre, fecha de la
de mayo con la ejecutada ese mismo día por la comisión ejecutiva, restructuración ministerial consecutiva a la elección de Luis Napo-
no aplica la constitución que se jacta de haber otorgado antes león, con el apoyo de Bastide. ¿Se trata para el sucesor de Lamartine
que nadie en Italia: puesto que la Cámara elegida después de la de reparar las injusticias cometidas por Bonaparte en Campo-
disolución de mayo es tan poco dócil como la precedente, no la Formio? A u n si en el curso de las negociaciones con Viena aceptó
reúne. Carlos Alberto había declinado la corona de Sicilia ofrecida
la idea del retorno a Austria de una Venecia que gozaría, es cierto,
a su hijo después de Custozza; F e r n a n d o II cree entonces llegado
de la autonomía acordada a los magiares, sus favores iban dirigidos
el momento de lanzar el grueso de sus fuerzas contra los rebeldes:
a una república lombardo-véneta. Este republicano católico, hostil
en septiembre, 20.000 hombres apoyados por una poderosa flota
al crecimiento de la monarquía sarda, manifiesta, a pesar de las
atacan Messina con tal furor que le valdrá al rey el sobrenombre
exigencias del acuerdo con Londres, una activa simpatía por la
de Re bomba. Bastide, que vería con placer el nacimiento de una
república veneciana y su jefe, el más francófilo de los demócratas
nueva república, y Palmerston, que desea la fundación de una

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1
248 Las revoluciones europeas El reflujo -243

italianos. Desde su acceso al ministerio de Relaciones Exteriores, su autoridad en los "estados hereditarios". En el Reichstag elegido
suministró 20.000 fusiles. Si bien no procede al reconocimiento por sufragio universal, los eslavos son mayoría: 190 (55 son
de jure de la nueva república, no es menos cierto que recibe a sus checos) contra 160 alemanes. El presidente, un abogado vienés, es
emisarios. Cuando Palmerston rechaza una ocupación franco- asistido por dos vicepresidentes, uno checo y el otro polaco. M u y
inglesa de Venecia, Bastide envía dos barcos de guerra para patru- ampliamente representadas ( 5 0 % ) , las profesiones liberales se
llar ante la ciudad. Así, el bloqueo decretado por Viena se torna hallan dispersas entre los diferentes grupos nacionales; la relativa
irrisorio. insignificancia de la clase hasta entonces dominante ( 1 2 % de
nobles), la enorme proporción de parias ( 2 5 % de campesmos)
L a reacción —realizados ya sensibles progresos en Nápoles y
— d e allí que cerca del 10 % de los diputados ignoraran el alemán
en el Lombardo-Véneto—, pudo en diciembre considerar una
e incluso fueran analfabetos— confieren al Reichstag vienés sus
rápida acción para librarse de los regímenes republicanos instalados
rasgos originales. De una asamblea con preponderancia eslava, con
o en vías de instalación en Sicilia, Roma, Florencia y Venecia.
fuerte representación campesina que solicita a Fernando I que le
N o m b r a d o el 21 de noviembre, el enérgico Schwarzenberg está
haga el honor de volver a Viena ( 1 2 de agosto), el gobierno
resuelto a imponer en el Piamonte la paz de los vencidos y a
no tiene nada que temer. Contra la izquierda alemana dispone
restablecer en todas partes las autoridades legítimas. De los monár-
de una confortable mayoría: los intelectuales checos (Palacky,
quicos (Barrot es jefe del gobierno y Drouyn de Lhuys ministro
Rieger) son tan conservadores como los monárquicos alemanes. El
de Relaciones Exteriores) que presiden los destinos de la Francia
campesinado eslavo se preocupa poco por la reorganización de las
republicana, no es de temer ninguna represalia. En cuanto a
instituciones pohticas y nadie ha pensado en enseñarle las virtudes
Palmerston, enemigo de la demagogia republicana, será menester
del federalismo. Sorprendido, casi indignado por la revolución y
soportar con filosofía sus habituales demostraciones verbales en
sus excesos vieneses, el campesinado cree hacer " s u " revolución.
favor de Carlos Alberto.
Con una extraordinaria perspicacia, sabrá aprovechar la única
ocasión que se le ofrece para obtener, en la legalidad nacida de la
revolución, la supresión de las cargas señoriales. El problema de la
11. LA RUPTURA AUSTRO-HIJNGARA Y EL APLASTAMIENTO indemnización enfrenta a la nobleza, apoyada por los diputados
DE LA REVOLUCIÓN VIENESA checos, con los campesinos sostenidos por la izquierda, que descubre
las aspiraciones de la clase más numerosa. Promulgada el 7 de
De julio a noviembre, el gobierno imperial resiste victoriosamente septiembre, la ley votada el 31 de agosto satisface plenamente al
a los demócratas vieneses y a los aristócratas magiares. El fracaso canipesinado (la servidumbre, las corveas y los censos son abolidos;
de la revolución vienesa es la señal de una contraofensiva general según su naturaleza, estos últimos son suprimidos sin contrapartida
apoyada en las nacionalidades no magiares contra el régimen de o rescatados, sea por el estado, sea por los ex sometidos), que no
Pest y de u n a política más activa en los asuntos alemanes. Los pensó nunca en la división de los grandes dominios. Superados por
demócratas de Francfort siguieron con pasión la lucha sin espe- debates puramente políticos, los diputados rurales comienzan a
ranza de sus "hermanos" austriacos y formularon ardientes votos desertar del Reichstag. L a popularidad del "buen emperador" está
por el éxito de los magiares. Porque ellos percibían claramente en su apogeo en las provincias, mientras que la oposición de la
una verdad que hoy disimulan las explicaciones centradas tanto en capital (demócratas burgueses, obreros, intelectuales) parece en
Berlín como en Francfort: la suerte de la revolución alemana vías de desintegración. El 23 de agosto, las clases medias reunidas
dependía en última instancia del mantenimiento o la destrucción en la guardia nacional reprimieron duramente, como en junio en
del dualismo austro-húngaro surgido de la jornada del 13 de París, una insurrección obrera provocada por la amenaza de drástica
marzo de 1848, reducción de los salarios. Como signo más alentador todavía, la
La reunión de la Reichstag (Asamblea constituyente), el 22 de turbulenta Legión académica permaneció neutral. Por primera vez
julio, es, para el gobierno imperial en vías de restaurar su desde marzo, el gobierno parece estar en condiciones de concentrar
prestigio en Italia, un medio de emprender el restablecimiento de sus fuerzas contra un solo enemigo, el magiar.
248 Las revoluciones europeas El reflujo -245

Por imperio de la necesidad, Austria, como se ha visto, había y nombra con plenos poderes civiles y militares un nuevo comi-
abandonado sus aliados naturales, eslavos del sur y rumanos, a los sario real, Jellatchitch. La Dieta se niega a someterse. Un Comité
magiares. A pesar de las promesas de Batthyany, presidente del de defensa dirigido por Kossuth se convierte en el órgano revolu-
Consejo, la Dieta rechaza enviar refuerzos a Radetzky. El ministro cionario del movimiento de independencia húngaro, es decir magiar.
de Finanzas, Kossuth, formula votos ptiblicamente por la inde- Los éxitos del joven ejército, que para sorpresa general rechaza a
pendencia italiana y proclama que el ejército hvíngaro no participará las fuerzas de Jellatchitch más allá de las fronteras, aumentan la
en una guerra "alemana". En resumen, la nueva Hungría, que determinación de los extremistas magiares y hacen estallar la
pretende defender su unidad llamando a la obediencia a sus revolución en Viena.
súbditos, desconoce la autoridad moral del imperio. Del 6 al 31 de octubre, la alianza entre los demócratas vieneses
Las graves decisiones tomadas en julio y agosto conducen a una y la nobleza magiar pone en cuestión la reorganización de la
secesión de hecho. La Dieta elegida según las prescripciones cen- autoridad imperial en Austria, Italia y especialmente en Alemania.
sitarias se parece a las precedentes; falta de burguesía, está en Desde que la agitación de Kossuth ha conmocionado al absolutismo
manos de la nobleza media nacionalista. Kossuth la domina por austríaco, la extrema izquierda alemana en su conjunto, se trate de
su elocuencia, y gracias al apoyo de los intelectuales de Pest. El 11 Struve o Marx, se apasiona por los magiares. L a opresión de las
de julio hace votar la creación de un ejército de 200.000 hombres "nacionalidades moribundas" (Engels), "desechos de pueblos"
y un crédito de 42 millones de florines para su mantenimiento. ( M a r x ) indignos de la libertad, la deja indiferente. U n a iniciativa
C o m o las arcas están vacías, obtiene el 24 de agosto el poder de magiar trasforma la amistad en alianza: el 15 de septiembre, una
emitir papel moneda. El emperador rechaza la sanción de estas delegación de ese origen solicita en vano exponer en el Reichstag,
leyes de espíritu separatista y por instigación de Windischgrátz, los reclamos de Pest. La mayoría antimagiar está formada por
muy influyente desde los acontecimientos de Praga, replica con la eslavos y alemanes moderados, los "negro-amarillo", partidarios
declaración del 31 de agosto. Obligado a negociar la realización de un imperio austriaco unitario; la minoría por demócratas, los
de servicios de interés común, el gobierno húngaro recluta volun- "negro-rojo-oro", campeones de la resurrección del Reich. Pero
tarios, pone a funcionar la máquina de emitir billetes y envía los emisarios de Kossuth han negociado con la oposición revolu-
delegados a Francfort y a París. cionaria, revigorizada por el poderoso impulso de fiebre antieslava
Para terminar con esas insolencias, el gobierno imperial convoca que ha suscitado la vuelta de Jellatchitch; para debilitar la presión
a la guerra de las nacionalidades. Tal es el sentido del restableci- del ban en Hungría, se prepara una insurrección en Viena. La
miento de Jellatchitch en sus funciones de ban. El 10 de septiembre prensa avanzada concentra sistemáticamente sus ataques, verda-
Jellatchitch franquea el Drave, mientras que en el sur de Hungría deras condenas de muerte, sobre el ministro de Guerra, el general
se levantan los servios sostenidos por el coronel Mayerhofer, cónsul de Latour, un aristócrata del antiguo régimen (nacido en 1780)
de Austria en Belgrado. Considerado como muy próximo a los amigo de Jellatchitch. El anuncio de las decisiones imperiales del
magiares, el archiduque Esteban, palatinés (representante personal 3 de octubre confirma la impresión de que la reacción, delibera-
del soberano) de Hungría, resigna sus funciones. Un aristócrata damente, intenta primero aplastar la libertad en Pest antes de
magiar, el general conde Lamberg, recibe con el título de comisario destruirla en Viena; ante la noticia de que un batallón debe partir
real la doble misión de cesar las hostilidades y lograr de los magiares para reforzar a Jellatchitch, obreros y estudiantes levantan barri-
el respeto a la legalidad; Lamberg cuenta con aislar a Kossuth y los cadas en la mañana del 6; una parte de la guardia nacional los
extremistas negociando con Batthyany, Eotvos y Deak, miembros apoya; otra, los "negro-amarillo", los combate; la tropa de línea
de un gobierno que creyó que su deber era retirarse después de la se fuga o pasa a la insurrección; Latour es asesinado y su cuerpo
n o ratificación de las leyes sobre el ejército y la moneda; la Dieta colgado de un farol. La multitud se procura 30.000 fusiles en el
declara a Lamberg traidor a la patria y prohibe al ejército obede- arsenal. El emperador y la corte se ponen bajo la protección de
cerle. Lamberg llega a Pest el 28 de septiembre y el mismo día una Windischgrátz en Olmütz ( O l o m o u c ) , en la fiel Moravia.
muchedumbre enardecida lo apuñala. El 3 de octubre el gobierno Por primera vez desde marzo, los alemanes, siguiendo el ejemplo
imperial disuelve la Dieta, proclama el estado de sitio en Hungría de los obreros parisienses, derrocaron el poder. Carentes de una

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248 Las revoluciones europeas El reflujo -247

tradición revolucionaria y de objetivos políticos claros •—¡nadie se ción en Alemania está ligada al destino de la insurrección vienesa;
atreve a proponer la abolición de la monarquía!— los demócratas exhorta a los demócratas alemanes y a las fuerzas de Kossuth a
se muestran incapaces de forjar, al calor de la acción, organismos concurrir en ayuda de Viena; el apoyo a una revolución ya vencida
adaptados a una situación que ellos han creado. El Reichstag, que estará en el origen de la última gran manifestación berlinesa.
desde la partida de los eslavos se ha convertido en un parlamento- Dos misiones, una oficial y la otra oficiosa, habían salido de
rabadilla,* da lugar al nacimiento de un comité permanente de 25 Francfort hacia Austria a mediados de octubre. Si la primera tuvo
miembros; este singular "comité de salud pública" no se resignará un fin cómico, la segunda termina en un drama. El Reichsver-
jamás, preocupado por la legalidad, a reclamar el auxilio de los weser había encomendado a dos diputados, entre ellos Welcker,
magiares. C o m o su conducta, la defensa de la revolución está impedir el enfrentamiento sangriento que amenazaba desatarse; los
marcada por el signo de la imprevisión y la superficialidad. Como comisarios del Reich van a Olmütz; las autoridades civiles y militares
consecuencia de la abstención de los moderados de la guardia les notifican que los asuntos internos del imperio no incumben al
nacional y de la Legión académica, el ejército revolucionario cuenta "poder central provisional" y les ruegan partir.
solamente con unos treinta mil hombres de los cuales los más El fracaso de sus tentativas por obtener un voto en favor de
combativos pertenecen a la guardia móvil, un cuerpo de voluntarios los revolucionarios vieneses condujo a la izquierda a enviar dos de
pagados, reclutados entre los desertores y los desocupados. El sus miembros para expresarles su activa simpatía: R . Blum, J.
comandante en jefe Messenhauser, hombre sin energía, tiene al Frobel ( 1 8 0 5 - 9 3 ) , el animador del Mostrador literario de Zurich
menos el mérito de confiar las funciones de jefe del estado mayor de los años cuarenta. Blum, en nombre de la democracia alemana,
al general polaco Bem ( 1 7 9 5 - 1 8 5 0 ) , el futuro héroe de la revueha lanza ardientes llamados a la lucha a ultranza y se incorpora con
magiar. Bem, como se ha visto, no tiene nada de demócrata; pone Frobel a! ejército revolucionario, porque el tiempo de los discursos
su bravura y su ciencia al servicio de todos los movimientos de ha pasado.
donde él espera ver surgir un día la resurrección de su patria. En sus manifiestos del 16 y el 19 de octubre, el emperador había
Por su revolución, Viena se ha aislado física y moralmente de confiado a Windischgratz, elevado a la jerarquía de mariscal, la
las provincias. En un estado donde persisten las estructuras y las tarea de restablecer el orden, y había también trasladado el
mentalidades del Antiguo Régimen, nada recuerda al eminente Reichstag a la región checa, en Kremsier (Kromerice), cerca de
papel de París. ¡Quien tiene Viena no tiene Austria! El poder y la Olmütz. Concluido el cercamiento de la ciudad el día 23, Windisch-
autoridad están allí donde reside el emperador. La ideología demo- gratz, que dispone de una aplastante mayoría en hombres y
crática es incomprensible para las masas rurales y una parte de las cañones, pasa al ataque. Hasta el 31 se desarrollan combates
clases medias. L a sustitución de la bandera imperial por el emblema callejeros, interrumpidos por la tregua del 29, que es violada el
negro-rojo-oro en nada favorece en los "estados hereditarios" a la 30 con la noticia de la llegada de los magiares. Pero éstos n o
causa de la revolución vienesa. insisten y vuelven a pasar el Leitha más rápidamente que cuando
En el resto de la Confederación, ¿quién podría permanecer lo habían franqueado. El 1<? de noviembre, Viena es totalmente
indiferente hacia lo que pasa en una metrópoli que, sin duda, forma ocupada y se iza la bandera imperial.
parte de la nueva Alemania? Los monárquicos constitucionales, Varios rasgos aproximan la insurrección vienesa a las jornadas
como el archiduque Juan y von Schmerling, reciente jefe del de junio en Francia. Las pérdidas de los adversarios son tan nume-
gobierno del Reich, no desean la represión de una agitación que rosas a orillas del Danubio como del Sena: 2.000 a 5.000 insu-
condenan. La extrema izquierda y una parte de la izquierda toman rrectos, sesenta oficiales y alrededor de 1.100 soldados. En Viena,
franca y decididamente partido a favor de los insurrectos. Marx como en París, la proporción de los vencidos masacrados después
muestra en la Neue Rheinische Zeitung que la suerte de la revolu- de la rendición es anormalmente elevada. Si la aspereza de los
combates y la crueldad de los vencedores son comparables, no
sucede lo mismo en cuanto a sus causas. Obrera en su composición
* Parlement-croupion, como se conoció al convocado por Carlos I de
Inglaterra en 1640, disuelto luego por Cromwell en 1653. También conocido
y social en sus fines desesperados, la revuelta parisiense desencadena
como parlamento corto. [N. del E.) pasiones propias de las guerras civiles. Con amplia participación
248 Las revoluciones europeas El reflujo
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obrera —la guardia móvil proletaria es la punta de lanza—, la La represión de octubre le ofrece la ocasión. Bem había huido,
revolución vienesa refleja esencialmente, a pesar de algunas dia- demasiado listo como para ahmentar ilusiones sobre la mansedumbre
tribas contra los ricos que han huido, las aspiraciones políticas y de Windischgrátz. Ingenuamente, Blum y Frobel se creían invulne-
nacionales de ¡as masas populares. Esos obreros, cuyo atraso rables: ¿acaso la tregua del 29 no los protegía a ellos, que no
observa M a r x a fines de agosto, ceden a un espejismo extremada- habían vuelto a tomar las armas? La inviolabilidad parlamentaria
mente egoísta: en una Alemania unida y Ubre los eslavos serán votada en Francfort el 30 de septiembre, ¿no garantizaba su li-
mantenidos a raya y los trabajadores vieneses se librarán de su bertad? Detenidos el 2 de noviembre, son condenados a muerte.
competencia. La presencia de muchos eslavos en las tropas de Frobel es indultado: este Donnersberg (miembro de la extrema
Windischgrátz, la de los croatas y la de su aborrecido jefe, izquierda) se había mostrado bien inspirado al publicar en sep-
exasperaron el espíritu de resistencia de los insurrectos. Jellatchhch tiembre un folleto reprobando todo sistema que tendiera a la
y sus hombres, todavía bajo el golpe de su dolorosa derrota en dislocación del imperio de los Habsburgo. Blum es fusilado el 9.
Hungría, volcaron su odio sobre los alemanes, aliados de los ma- Francfort protesta y recibe una respuesta teñida de humor negro:
giares. De una parte y de otra, el conflicto adquirió el carácter jamás promulgada en Austria, la ley del 3 0 de septiembre no es
inexpiable de una guerra de "razas". aplicable.
Las jornadas de octubre tienen, más aún que las de junio, un La ejecución de Blum provocó una indignación general en Ale-
considerable alcance, tanto dentro como fuera. Si junio h a borrado inania. Demócratas y monárquicos constitucionales llenan de petito-
en parte febrero, octubre anula totalmente marzo. El estado de rios las Cámaras locales y el parlamento, de mensajes a los
sitio, que cesa en París en octubre, pesará en Viena con inexorable gobiernos y ministros del Reich. De las orillas del Rhin a Sajonia, se
rigor hasta mayo de 1849. La derrota de los obreros parisienses multiplican espontáneamente "ceremonias fúnebres" en las que
fue, como se sabe, la derrota de una cierta concepción de la participan pastores y, a pesar de las prohibiciones de la jerarquía
revolución; ella no significaba sin embargo el retorno a la monarquía católica —Bluin es un discípulo de R o n g e — también curas. E n
censitaria. El aplastamiento de los proletarios y de los demócratas Badén, la opinión radical olvida las controversias que opusieron
vieneses, separados de los pueblos del imperio, desencadena esfuer- en el Vorparlament a Blum con Hecker y con Struve. E n todas
zos paralelos por el restablecimiento tanto del absolutismo como partes, la prensa lanza con éxito suscripciones a beneficio de la
viuda y los hijos del mártir. L a fabricación de sus bustos en yeso
del prestigio de la dinastía en E u r o p a . El 21 de noviembre, el
se convierte en una industria lucrativa. Este culto ingenuo y
príncipe Schwarzenberg ( 1 8 0 0 - 5 2 ) , cuñado de Windischgrátz, se
emotivo traduce el desconcierto de las clases populares. Frente al
convierte en presidente del Consejo y ministro de Relaciones Exte-
espectáculo de un parlamento impotente para hacer respetar los
riores; el 2 de diciembre, Fernando I, a quien desde marzo las
derechos de la nación, la vida y el honor de sus miembros, se
circunstancias habían arrancado muchas promesas, y firmas ahora
plantea la angustiante pregunta: ¿Ha pasado la hora de la revo-
molestas (especialmente la ratificación de las leyes constitucionales
lución alemana?
húngaras),, consiente en abdicar a favor de su sobrino Francisco
José. Seguro del apoyo incondicional del joven emperador, Schwar-
zenberg busca sólo un apoyo: el del fiel ejército que, después de
Praga y Custozza, acaba de alcanzar un nuevo éxito. Los días del in. LA UNIDAD ALEMANA: DESILUSIONES NACIONALISTAS
régimen de tipo parlamentario están contados; pero la dispersión Y DECEPCIONES DEMOCRÁTICAS
de los charlatanes que bajo la segura protección del gobierno
imperial, preparan en Kremsier una constitución que no se aplicara Reunido el 18 de mayo, el parlamento de Francfort aborda a fines
jamás, no es urgente. En efecto, ¿por qué, si no se ha reducido a la de octubre de 1848 la discusión de la constitución. L a crisis de
obediencia a los magiares, atrepellar a los Cándidos diputados septiembre lo ha obligado, para resisth- a las violentas arremetidas
eslavos? En vísperas de la ofensiva general en Hungría, la vieja republicanas, a apoyarse en los gobiernos; pronto Austria y Prusia
monarquía alemana se siente lo suficientemente fuerte como para estarán en condiciones de influir en sus debates, cuando ni siquiera
lanzar un desafío sangriento a la joven democracia alemana. habrían podido atreverse a hacerlo en el verano. ¿Es f u n d a d o el
248 -250
Las revoluciones europeas El reflujo

reproche con que incesantemente los historiadores, desde hace un partidarios del slatu quo territorial. Entre el extranjero y Francfort
siglo, abruman a este parlamento de Francfort? el desacuerdo era fatal, porque estaba basado en la ignorancia de
Se ha criticado el tiempo perdido en legislar con cualquier objeto las realidades germánicas.
y especialmente los largos párrafos consagrados a los Grundrechte Problemas que consideramos todavía hoy como provenientes de
(derechos fundamentales). Sin embargo, éstos no revisten, cuando la política exterior de una minoría de doctrinarios y retóricos, eran
se los lee atentamente, ese carácter abstracto tan a menudo con- considerados por amplios sectores de la opinión como problemas
denado. En un país donde la libertad individual (basta con de política interna y producía irritación el empecinamiento de las
recordar la brusca e insolente expulsión de Itzstein y Hecker del potencias por entrometerse en ellos. Esto era lo más importante
estado prusiano) y la igualdad civil y política (piénsese en los y lo más complicado de resolver, sobre lo cual habían tropezado en
proletarios y en los judíos) eran en general desconocidas, donde los parte el Vorparlament y los 50, el problema de la extensión del
vestigios de feudalismo eran siempre pertinaces, la Gründlichkeií estado en formación. Una minoría de nostálgicos del Reich medieval
germánica tendía a prevenir el retorno de abusos tantas veces consagraban imprudentes discursos —¿se ilusionaban sobre las
denunciados en vano. Por cierto, la ley que prohibe las casas de posibilidades de realizar sus sueños?— a Alsacia, Suiza y los Países
juego hubiera podido esperar. En todo caso, testimonia preocupa- Bajos. L a inmensa mayoría «de los diputados, especialmente de
ciones altamente morales. Y es la opinión pública, traumatizada izquierda (basta con recordar los proyectos de Struve), juzgaba
por la aplastante superioridad danesa en el Báltico, la que impuso imposible excluir del nuevo Reich la menor parcela del Bund: ¿por
la decisión, tan frecuentemente criticada, de crear una flota de qué la unidad de Alemania tendría que ser acompañada de su
guerra. "desmembramiento"? Se evocaba la suerte de Limburgo y del
La debilidad de Francfort residía en la ausencia de medios. El gran ducado de Luxemburgo. El rey de los Países Bajos, sostenido
gobierno del Reich disponía de una única arma, ¡un diario oficial por San Petersburgo, Londres y París, protestó. Francfort renunció
cada vez más voluminoso! El ministerio de Relaciones Exteriores a suscitar una segunda guerra de ducados. En cambio, el parla-
no tenía representación diplomática (las potencias seguían recono- mento trabajaba con vehemente obstinación para preservar la
ciendo sólo a las múltiples misiones acreditadas por los estados), el unidad de los países austriacos. ¡Para las aspiraciones italianas y
ministerio de Guerra no tenía tropas, el ministerio de Interior no checas no había solución! Los diputados italianos del Tirol no
tenía funcionarios (se ha visto cuánta atención dispensaba
cuestionaban la soberanía de los Habsburgo, pero pedían la
Austria a los comisarios del Reich, "representantes en misión" do-
formación de dos zonas según criterios lingüísticos: el norte debía
tados de plenos poderes teóricos), el ministerio de Finanzas no
ser incorporado a la Confederación, la región de Trento debía ser
tenía ingresos, con excepción de las cotizaciones antes pagadas a
separada. La mayoría, que había aplaudido Custozza, rechaza esas
la Dieta. T o d o dependía al fin de cuentas de la buena voluntad
moderadas reivindicaciones invocando la gloriosa historia del
de soberanos excluidos de toda participación en la trasformación
Reich . . . y los intereses de Austria; el prusiano Radowitz (1797-
de las instituciones federales. " D e j a n d o el aparato del estado en
1 8 5 3 ) , amigo y confidente de Federico Guillermo, declaró que la
manos de los gobiernos", los hombres de Francfort "se habían
frontera de Alemania debía "estar en el Mincio". La Carta de
condenado a la impotencia" (J. D r o z ) . Pero nadie ha explicado
claramente por qué caminos y con qué apoyos, siendo como fueron Bohemia, que puso provisionalmente fin a los privilegios de los
las "revoluciones alemanas", la "revolución alemana" hubiera po- alemanes, pasa por una pehgrosa debilidad de Austria; reclamando
dido arrancar en el verano lo que solamente una minoría de radicales la unión de la Corona de San Wenceslao con los países "donde
del sur había exigido en la exaltación de la "primavera". resuena el idioma alemán", el viejo Arndt provocó un delirante
entusiasmo. Los acontecimientos de junio en Praga fueron seguidos
La lógica, al menos la de los historiadores, hubiera querido
con pasión; cuando anunció el 20 que el ministerio del Reich
que ese poder, sin apoyo material en lo interno, se empleara para
acababa de rogar a Prusia, Sajonia y Baviera que intervinieran en
asegurarlo en lo externo. Ambiciones que prefiguraban las de
Bohemia al primer llamado de Viena, Schmerling disgustó a la
Guillermo II y de Hitler, inquietaron sin ninguna duda tanto a
izquierda, que exigía , . . ¡una acción inmediata!
los sostenedores del "principio de las nacionalidades" como a los
248 Las revoluciones europeas El reflujo -253

Los debates del 24 al 27 de julio relativos al estatuto del gran chaba a Prusia haberlos modificado en Poznan sin el consentimiento
ducado de Poznan confirman que en la izquierda el "cosmopoli- de los signatarios de las actas de Viena. Su intervención no fue más
tismo" — e s decir la concepción francesa de la nacionalidad— y el allá de este trámite diplomático porque el ex carbonaro comprobaba "
"polaquismo" estaban decididamente en retirada. A fines de día a día que el nacionalismo belicista germánico tenía como base
marzo, Herwegh no separaba la causa alemana de la causa polaca; no a la vieja monarquía particularista sino a la joven democracia
a comienzos de abril, el Vorparlament había dado una declaración unitaria.
de principios pro polaca. Los 50 habían remitido la cuestión al Cuando b a j o presión de Londres, San Petersburgo y París
parlamento; de la idea de no renunciar à ningún territorio se (Bastide engloba en una misma reprobación los proyectos sobre -
pasa, para retomar los términos de un francés lúcido, a la de que Schlesvig y Posnania) Prusia consciente en concluir con Dinamarca
"todo país extranjero sometido a una potencia alemana debe [. . . ] el armisticio de Malmce ( 2 6 de agosto), desencadena las cóleras
tarde o temprano pertenecer a Alemania" (Saint-René Taillan- del gobierno provisional de los ducados (todas sus decisiones
dier). El 27 el parlamento, por 342 votos contra 31, y después revolucionarias son anuladas), las protestas del ministerio del
la Dieta, ratifica la decisión prusiana de anexar la mayor parte Reich no consultado, la indignación de una opinión a la que
del gran ducado de Poznan (el ducado "polaco" de Gnesen seguía afiebraban los solos nombres de Schlesvig y Holstein. Al llamado
reduciéndose como consecuencia del continuo desplazamiento de de Dahlmann, el doctrinario de la causa alemana en los ducados,
la línea de demarcación trazada por los militares prusianos). Cerca el parlamento rechaza el 5 de septiembre la ratificación por 2 3 8
de 200 diputados de izquierda o ex amigos de Polonia se refugiaron votos contra 221; la izquierda se ha pronunciado en bloque por la
en una prudente abstención. ¡Los universitarios no habían predicado reiniciación de la guerra; en sus bancas, estallaron gritos de odio
en vano durante décadas la misión atribuida a la nación más contra Prusia, Rusia, Inglaterra y Francia. Leiningen renuncia y
cultivada de Europa! Entre una muldtud de declaraciones, desta- Dahlmann es encargado de formar el nuevo gobierno. El brillante
quemos los sorprendentes conceptos de R. Blum sobre " u n pueblo profesor descubre entonces su imposibilidad, sin ejército, de vengar
predestinado a dictar su ley" a la E u r o p a libre. "el honor" de Alemania. Por instigación suya, la Asamblea vuelve
El voto del 27 de julio comenzó a alertar a los franceses sobre el 16 sobre su voto del 4 y Schmerling se convierte en primer
los peligros de una Alemania con fronteras móviles. A pesar de ministro.
las medidas anexionistas de Federico Guillermo, la Asamblea De la "crisis de Malmoe" Prusia, el parlamento y el ejecutivo de
constituyente había propuesto el 24 de mayo, dirigiéndose al Francfort salen desacreditados. L a prensa de todas las tendencias
parlamento de Francfort, "pacto fraternal con Alemania, recons- comprueba la p r o f u n d a confusión de una opinión que n o ha sepa-
titución de la Polonia independiente y libre, emancipación de r a d o jamás en sus aspiraciones el mejoramiento de la condición de
Italia". Los diplomáticos franceses contribuían a mantener absurdas los alemanes de la grandeza de Alemania. Los proletarios del
ilusiones, inclinados como estaban a descubrir en los alemanes artesanado constituyen para los demócratas, los más unitarios y los
sentimientos ' análogos a los que ellos sentían. Desde Francfort, más prusófobos de los alemanes (F. Meinecke ha puesto en evi-
el encargado de negocios francés había escrito el 30 de mayo que dencia que el hombre de izquierda se definía por el odio al par-
"los diputados de los más opuestos sectores" estimaban que el ticularismo y la intransigencia nacionalista), la tropa de choque que
parlamento recogería muy pronto por su cuenta el texto votado debe expulsar a los figurones indignos. E n la Neue Rheinische
en París. Bastide, partidario como la mayoría de los "del 4 8 " de Zeitung, Marx había sostenido una fogosa campaña contra los
"una estrecha alianza entre Francia y Alemania", pero más ligado opresores daneses y Rusia, su amiga; lejos de temerla, deseaba
todavía hacia la suerte de los polacos —participó en la insurrección la intervención armada del zarismo, que según sus cálculos provo-
parisiense de junio de 1 8 3 2 — había denunciado a comienzos de caría — a beneficio de la democracia social— una gran guerra
junio las verdaderas aspiraciones de Alemania; el 9 revelaba "un patriótica. M a r x estigmatiza ahora la doble traición del rey de
cuarto desmembramiento de Polonia". Convencido desde entonces Prusia y del régimen de Francfort: Colonia es escenario de
que "nacionalidad" es intraducibie al alemán, el ministro de un agitadas manifestaciones. También en Francfort, los republicanos
gobierno que rechazaba de derecho los tratados de 1815, repro- apoyados en el Arbeiterverein local proyectan depurar la Asamblea
2 5 4 Las revoluciones europeas El rejlujo - . 2 5 5

a la manera de los clubistas parisienses del 15 de mayo; el 18 de Austria no va más lejos. Después del 18 de marzo, Berlín fue
surgen las barricadas; dos diputados reaccionarios son asesinados; escenario de motines; jamás de una gran insurrección. En la capital
los 3.000 insurrectos hubieran penetrado en la iglesia San Pablo prusiana falta esa ardiente pasión de la unidad germánica que
si Schmerling no llamaba —símbolo de los cambios producidos inflama a la capital austríaca. L o que a veces se denomina el
desde m a y o — a las fuerzas austríacas y prusianas de la guarnición aplastamiento de la revolución en Prusia, no es más que la brutal
federal de Maguncia. Ante la noticia de que la revolución triunfaría comprobación, admitida por una gran parte de la opinión pública,
en Francfort, Struve, refugiado en Basilea (desilusionado, Hecker del fracaso del movimiento reformista nacido en las barricadas del
acaba de abandonar Suiza hacia los Estados Unidos, donde se le 18 de marzo.
unirán muy pronto muchos republicanos), atraviesa el Rhin con Una Cámara resueUa a limitar para siempre los poderes de la
una treintena de partidarios, a los que se unen voluntarios armados monarquía y sus apoyos, la gran propiedad nobiliaria, la burocracia
que acuden desde Suiza y la Selva Negra. El 21 se proclama la y la casta militar, ha hostigado, bajo la presión de un proletariado
república en Lörrach, pero Struve es aplastado por las tropas sin madurez política, a ministros de buena voluntad mientras se
badenses y cae prisionero el 24 en Staufen. organizaba el frente unido de las fuerzas reaccionarias más pode-
La represión de movimientos de origen extraparlamentario justi- rosas de Alemania. Aunque elegidos el mismo día según el mismo
fica las empresas de la reacción a los ojos de la inmensa mayoría régimen electoral (sufragio universal en dos grados), los diputados
de diputados, todavía no repuestos del gran miedo del 18: el estado de Berlín son de origen más modesto, de tendencias más avan-
de sitio en Francfort y la ocupación militar del país de Baden zadas, de menor notoriedad que sus colegas de Francfort; los
aparecen como medidas de salvación pública contra la "anarquía". personajes más notorios se interesaron especialmente en las elec-
Aborrecido por los elementos avanzados, despreciado por las masas ciones para el primer parlamento alemán; también las clases popu-
patriotas, el ministerio del Reich obtiene al fin el reconocimiento lares (especialmente los campesinos) fueron más libres en la
de una autoridad cuestionada, gracias a su participación en la caza elección de los miembros de la Asamblea nacional prusiana. Sobre
de revolucionarios. ¡Con qué rapidez las administraciones locales 402 diputados, 68 eran campesinos y 28 artesanos contra respec-
por tanto tiempo sordamente hostiles responden a los pedidos del tivamente un solo campesino y siete artesanos en Francfort, donde
ministro de Justicia sobre la actividad de las asociaciones (Vereine) la representación prusiana suma 200 miembros. Los grandes
democráticas! terratenientes son poco numerosos. Los Akademiker apenas repre-
Las falsas apariencias no disimulan la realidad: el parlamento sentan la mitad de la Cámara; frente a la derecha muy débil (el
ha sido salvado por las dos potencias germánicas que había preten- príncipe Guillermo vuelto de Inglaterra y el joven Bismarck con
dido ignorar desde su nacimiento. Cuando se abre la discusión sus ornamentos), hostil a los "principios de marzo", constituyen
constitucional, le es preciso tener en cuenta el peso de Austria, ya los elementos más ardientes de la izquierda mayoritaria. B a j o la
segura de su fuerza como para rechazar un régimen particular en conducción de los demócratas Jacoby y von Ester, ésta reivindica
sus provincias "alemanas", y de Prusia, cuyo gobierno se prepara para la asamblea el derecho de redactar soberanamente la consti-
para liquidar el movimiento democrático berlinés y expulsar a la tución; los ministros apoyados por el centro recuerdan que la ley
turbulenta Asamblea nacional. votada en el Landtag unido exige el acuerdo del rey y de los
diputados. Esta controversia disimula un problema de fondo: ¿el
18 de marzo fue un accidente o una revolución?
IV. EL TRIUNFO DE LA REACCIÓN EN PRUSIA Por sus clubes y sus diarios, los demócratas berlineses pretenden
( F I N E S DE MAYO-COMIENZOS DE DICIEMBRE DE 1848) estimular el celo de la izquierda. La Zeitungshalle es su principal
órgano: su más ilustre colaborador es el joven tipógrafo Born
El 5 de diciembre de 1848, Federico Guillermo disuelve la ( 1 8 2 4 - 9 8 ) , antes amigo de Marx y Engels que, como tantos com-
Asamblea nacional y otorga una constitución. Sin ninguna duda, la pañeros vivió en Suiza, Lyon, París y Bruselas. Este pionero de
derrota de la revolución en Viena lo ha impulsado a tomar estas una organización obrera extendida a Alemania, funda en Berlín
graves decisiones. El paralelismo entre la evolución de Prusia y la un Zentralkomitee (Comité central) y un diario. Das Volk. Oscuros

17
2 5 6 Las revoluciones europeas El reflujo

agitadores a quienes falta la inteligencia política de un Born, el 21 los obreros berlineses levantan algunas barricadas. Acusado
excitan con facilidad a un rudo proletariado, presa de la desocu- por la camarilla de favorecer el desorden y de hacerse cómplice de
pación, herido en su dignidad porque se lo separa de la guardia una Asamblea poco preocupada por facilitar su tarea, el ministerio
cívica (se advierten los límites de la "revolución prusiana"). Auerswaid se retira el 10 de septiembre. Es el fin de la era del
Manifestaciones agitadas (la bandera roja aparece por primera pseudo liberalismo de Camphausen y del sincero liberalismo de
vez en Berlín el 4 de junio) y actos de violencia impulsan a la Hansemann.
Asamblea a la acción, pero aterrorizan a la clase media de las Del 21 de septiembre al 5 de diciembre la reacción, que puede
ciudades y al pequeño campesinado. El 15 de junio obreros y contar con la aprobación o la apatía de las provincias — l a oposi-
estudiantes asaltan el arsenal y la Asamblea toma el poder consti- ción de los demócratas de Breslau o de la Neue Rheinische Zeitung
tuyente, confiando a una comisión la tarea de reorganizar el no podría impresionarla— prepara metódicamente el cerco de sus
proyecto gubernamental. Vilipendiado por la calle, desconocido por enemigos berlineses: la Asamblea y los obreros. Apronta sus armas
los diputados, Camphausen entrega la dirección de los asuntos bajo el ministerio ( 2 1 de septiembre - 1? de noviembre) Pfül
públicos a Auerswaid ( 1 7 9 5 - 1 8 6 6 ) ; Hansemann, que ha perma- ( 1 7 7 9 - 1 8 6 6 ) . La elección de este general es hábil: su dureza res-
necido en Finanzas, considera medidas que satisfagan a los pecto a los polacos de Posnania no oscurece su popularidad; la
rurales, cuya suerte no preocupa para nada a los agitadores berli- camarilla no lo ha asociado en marzo a la política de fuerza que
neses; los proyectos de ley deben liberar la propiedad de la tierra terminó en un desastre. En realidad, la reacción considera a Pfül
y someter la nobleza al impuesto territorial. como un "expediente transitorio"; ella revela sus verdaderas
Amenazada en sus intereses, la temible aristocracia del este se intenciones después del retorno de las tropas que el armisticio de
reagrupa en la Asociación para la defensa de los derechos de la Malmoe deja disponibles. Wrangel, el hombre del rey, el vencedor
propiedad. Con el apoyo financiero de Federico Guillermo — q u e de los daneses, es nombrado comandante de la guarnición de Berlín.
recluido en Potsdam espera la ruptura entre la izquierda y los La Asamblea comenzó por fin a elaborar el 12 de octubre una
obreros de la capital para dispersar la Asamblea— y el concurso de constitución de tipo democrático y de carácter particularista: el
L. von Gerlach ( 1 7 9 0 - 1 8 6 1 ) , el alma de la camarilla, f u n d a el 1*? monarca dejaría de ser "rey por la gracia de Dios" y la nobleza
de julio la Kreuzzeitung (Gaceta de la Cruz). Se aprovecha del sería abolida; pero la legislación federal recién sería aplicable sólo
miedo a los disturbios berlineses y también del temor a la absorción después de la aprobación de los diputados prusianos. La idea
del reino en esa Alemania que quieren construir en Francfort, bajo nacional germánica no inflama a la Cámara más avanzada de
la dirección de un archiduque católico, los políticos del sur y del Alemania. Esta indiferencia aumenta la tensión entre la Asamblea
oeste; apela entonces a las virtudes que hicieron en el pasado la y la calle, entre las clases medias liberales y los elementos populares;
grandeza del estado: la lealtad monárquica y la fidelidad a la el 16 de octubre, la guardia cívica dispara sobre algunos obreros
Iglesia luterana. Las viejas provincias se horrorizaban ahora de las impulsados a acciones irreflexivas por su situación de cesantes. El
consecuencias de su extravío electoral de mayo. Junkers, altos Congreso de los demócratas alemanes, expulsado de Francfort
funcionarios y oficiales ya no están aislados. por el estado de sitio, se ha trasladado a Berlín del 26 al 30 de
La hostilidad contra el ejército, presente en el origen de la octubre; piensa movilizar a las masas el 31 a fin de exigir de la
insurrección del 18 de marzo, sigue siendo el único lazo que une asamblea apoyo financiero y militar para los insurrectos vieneses.
todavía a los agitadores berlineses y a los parlamentarios que se Protegida por la guardia cívica, la Asamblea se limita a solicitar
irritan por los disturbios anarquistas. El choque sangriento de al ministerio que cumpla en Francfort un irrisorio trámite en favor
Schweidnitz (31 de julio), en Silesia, entre la guardia cívica y la de la libertad amenazada en Austria.
tropa, impulsa a la indignada Asamblea a declarar a la casta Sin embargo, esto es demasiado para la reacción. El ministerio
militar una guerra en la que ella misma perecerá: el 9 de agosto, una Brandenburgo-Manteuffel, formado el 8 de noviembre y estimulado
orden del día invita a los oficiales reaccionarios a renunciar. Del por la victoria de Windischgrátz en Viena, no vacilará en actuar
16 al 19, los grandes propietarios del este se reúnen como un abiertamente. Primer momento: con el pretexto de evitar un nuevo
desafío en Berlín; en respuesta a la reunión de este Junkerparlament, 31 de octubre a una Cámara hostil, el 9 de noviembre el gobierno
V. EL D E R R U M B E
258 Las revoluciones europeas
(DICIEMBRE D E 1848 - AGOSTO D E 1849)
le ordena reunirse el 27 en la pequeña ciudad de Brandenburgo,
cerca de Potsdam. Algunos diputados, jugando a las escondidas con
las autoridades, continúan deliberando en locales improvisados.
Segundo momento: se proclama el estado de sitio; el 15, Wrangel
expulsa a los recalcitrantes. La capital permanece inerte. De las
provincias sólo emanan mensajes de respetuosa admiración. La
campaña de la Neue Rheinische Zeitung en favor del rechazo al
impuesto no tiene éxito. El golpe de estado prusiano produce la
agitación más intensa en Francfort; adversarios y amigos de Berlín
se dedican vanamente a defender los derechos del pueblo prusiano; Salvado por las tropas prusianas y austríacas, el parlamento de
en este sentido el fracaso de H . von Gagern, prusófilo presidente Francfort aborda con resignación la tarea para la cual había sido
del parlamento, es significativo; como éste deja entender que la entusiastamente elegido. ¿A quién confiar la dirección del Reich
si no a la Austria de Schwarzenberg o a la Prusia de Brandenburgo-
formación de un ministerio liberal facilitaría el acceso de la casa de
Manteuffel? Pero Austria señala su pretensión de hacer ingresar la
Hohenzollern a la dignidad imperial, el rey lo regaña ásperamente:
totalidad del imperio en un Reich que solamente sería germánico
"Espero no tener jamás necesidad de vuestra amistad.'" Tercer
de nombre. Con ello aumenta las posibilidades de la monarquía
momento: el 27, la izquierda logra un último triunfo, porque menos
alemana más detestada. ¿Aceptará el Hohenzollern, de elegidos por
de la mitad de los diputados ( 1 5 4 ) se reúnen en Brandenburgo.
sufragio universal, la corona imperial?
El 5 de diciembre se disuelve la Asamblea y se otorga una consti-
tución. Gracias a los soldados de Wrangel, el rey ha b o r r a d o el
recuerdo humillante de marzo, pero lo que concede por su propia
voluntad se inspira, para gran decepción de los conservadores, en I. ITALIA: LA DERROTA SARDA Y EL APLASTAMIENTO
las exigencias de la "primavera": al lado de una Cámara alta en DE LOS REGÍMENES DEMOCRÁTICOS
parte nombrada, una Cámara b a j a es elegida por sufragio universal;
el principio de la responsabilidad ministerial compensa el veto del Cuando a comienzos de 1849 Austria crea poder hablar, como
soberano. En general, las reacciones del país son favorables. antes de 1848, altiva y categóricamente en Alemania, Schwarzenberg
Algunos liberales también hubieran deseado la exclusión de los no habrá puesto término a los sueños sardos y abierto la vía para la
poseedores de la vida poh'tica. La izquierda espera, del voto próxima destrucción de los regímenes republicanos en Italia.
popular, una revancha. Hasta marzo de 1849 el ejército de Radetzky había permanecido
alerta en el Lombardo-Véneto, ya que las operaciones de Hungría
requerían el grueso de las fuerzas del imperio. Así también, la
Después de muchas peripecias, Prusia completó en diciembre su subversión ha continuado su progreso. En Roma, una Constituyente
"revolución de marzo". El particularismo del círculo íntimo del rey legaliza la revolución de noviembre, proclama la república (9 de
y los conservadores, la tibieza de los parlamentarios liberales y febrero) que instaurará la "democracia p u r a " y un "estado
los demócratas respecto a Francfort y Viena, muestran que Prusia de perfección social". Un triunvirato dirigido por Mazzini ( 2 2 de
no se preocupaba absolutamente por la "revolución alemana". La febrero) se esfuerza por dar la "tierra a los campesinos" y
idea de una misión alemana de Prusia no se había convertido, a organizar con el armamento del pueblo la defensa del nuevo
fines de 1848, en una idea prusiana. régimen. Porque la revolución romana tiene enemigos temibles.
Los representantes de las cuatro potencias católicas (Austria,
España, Francia y Dos Sicilias) a las que Pío I X había pedido
el 4 de diciembre la ocupación colectiva de sus estados, se reúnen
en Gaeta el 30 de marzo. Bastide, antes que el conservador
Las revoluciones europeas El derrumbe 261
2 6 0

Drouyn de Lhuys, se había declarado favorable al restablecimiento la cesión de Lombardia, París y Londres hacen entender claramente
de la soberanía pontificia. Austria, que por propia iniciativa, como a Turín su reprobación anticipada por un acto de locura. Carlos
en los buenos tiempos, había ocupado Ferrara, acaba de derrotar el Alberto comete este acto el 20 de marzo. El 23, veintiocho años
23 al ejército de Carlos Alberto. después del pequeño grupo de Santarosa, su ejército es aniquilado
Desde la víspera, sesiona una Constituyente en Florencia. Al en la planicie de Novara. El rey, que ha buscado en vano en el
partir Leopoldo para Gaeta, la Toscana se ha convertido en una campo de batalla un final de héroe romántico, sabe que desde ahora
república ( 8 de febrero) que parece reconocer la vocación unitaria es un interlocutor imposible para Austria. Abdica y va a morir a
de la república romana. ¿Acaso el 5 de marzo, Guerrazzi no hace Portugal. Su hijo Víctor Manuel II obtiene el 26 un armisticio y el
efectuar elecciones simultáneas a la Constituyente toscana y a la 6 de agosto condiciones de paz muy benignas: b a j o la presión de
Constituyente romana, embrión de una Constituyente italiana de Palmerston y particularmente de Bonaparte, Viena ha debido
estilo mazziniano? La apatía y la sorda hostilidad de la población renunciar a anexar Alejandría. De acuerdo con su política tradi-
( 8 0 % de abstenciones) imprimen a la república un carácter dicta- cional —¡está lejos la "primavera de los pueblos"!—; Francia y
torial: Guerrazzi es dotado de plenos poderes. el Reino Unido son en Italia los defensores del statu quo.
En la extremidad de la península, los regímenes republicanos Reditando su paseo militar de 1831 los austríacos, a quienes
particularistas están directamente amenazados por sus ex opresores. siguen Leopoldo II, Francisco V d'Este y Carlos III (Carlos II
En Venecia, las elecciones de enero reafirman la autoridad del dimitió en favor de este otro Borbón, que en 1854 será asesinado
insobornable Manin. Hacia fines de febrero, Fernando II ha como su suegro, el duque de Berry), ocupan la Toscana, Módena
intimado a los sicilianos a someterse. Como el armisticio impuesto y Parma. Abandonados por la marina británica y francesa a la
por Baudin y Parker expira el 29 de marzo, el gobierno de Palermo vindicta de Fernando II, los sicilianos resisten durante dos meses
se prepara para la lucha a uhranza y convoca a Mieroslawski. a los aborrecidos napolitanos. El absolutismo del rey Bomba, ya
Al denunciar el armisticio de agosto de 1848, Carlos Alberto restaurado en el continente, es implantado en la isla el 11 de
atrae sobre Cerdeña un desastre que precipitará la caída de los mayo. La victoria de los tedeschi provoca en Brescia y en Venecia
movimientos nacidos, con excepción del siciliano, de la decepción de un sobresalto patriótico cuyo recuerdo cultivarán los italianos. El
Custozza. La idea romántica de que sería preferible una nueva 23 de marzo un grupo de montañeses encierra en la cindadela a la
catástrofe a la inacción no había dejado de progresar en Turín pequeña guarnición austriaca de Brescia y levanta la ciudad;
durante el invierno. La ínfima clase política (de Cavour a los tomada entre el fuego de artillería de sus prisioneros y el de los
radicales), la corte y el rey se entregan a una morosa delectación. refuerzos enviados en su ayuda, la población lucha desesperada-
Desbordado, Gioberti renuncia el 20 de febrero. Un gobierno donde mente hasta el 2 de abril. Acerada por los " 1 0 días de Brescia",
entran intelectuales como el radical Rattazzi ( 1 8 0 8 - 7 3 ) se dirige la Asamblea veneciana proclama la resistencia a cualquier precio. El
rápidamente al suicidio. El ejército sigue siendo lo que era ocho sitio comienza en mayo; a pesar de los obuses, el hambre y el
meses antes. Se cree remediar la temida impericia de los cuadros cólera que el ejército austríaco ha traído, los venecianos, nucleados
aceptando sin discernimiento la ayuda de los "peregrinos". R a m o - por fin alrededor de Manin, demuestran una fuerza moral ejemplar.
rino, el triste héroe de la descabellada aventura mazziniana de 1864 El odio a los tedeschi y también la certeza de que los valerosos
contra Saboya, es nombrado jefe de cuerpo. Señalado responsable aliados magiares lograrán una victoria próxima y decisiva sobre
de la derrota, pronto será fusilado. No menos incapaz es el el adversario común, exaltan temperamentos que oscilan entre
general Chrzanowski, a quien el rey entrega el comando supremo. la postración y el entusiasmo. El 22 de agosto, ante la noticia de la
Tanto en lo interno como en lo externo, el aislamiento de Carlos derrota magiar del 13, Manin se resigna a capitular; exiliado con
Alberto es total; sus ruidosas tentativas de alianza con F e r n a n d o 11 una cuarentena de revolucionarios, terminará sus días en esa
y los sicilianos han fracasado; la era de los "cruzados" ha terminado; Francia que, de acuerdo con el Reino Unido, le había aconsejado
la idea unitaria que pretenden encarnar los gobiernos más revolu- en abril renunciar a las "ilusiones de un generoso patriotismo".
cionarios no va más allá de inflamados discursos. Ya descontentos A comienzos de julio, la república romana había sucumbido
por el reiterado reproche de no haber obtenido de Schwarzenberg bajo los golpes de tropas francesas. Apoyada en Ferrara, Austria
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Las revoluciones europeas El derrumbe

parecía no obstante, después de Novara, la mejor ubicada de las prestó juramento al estatuto constitucional, en una Italia donde los
cuatro potencias de Gaeta para reponer en su capital a ese papa príncipes son los protegidos de los Habsburgo, es una dinastía
cuya elección, tres años antes, había desatado una formidable ola nacional la que se ha levantado con coraje contra Austria. En los
liberal y nacional. Decidida por una asamblea con mayoría repu- otros estados, la reacción abolió no solamente las conquistas de la
blicana, una intervención de carácter antiaustriaco se convirtió, para "primavera" sino también las concesiones anteriores. Jamás la
gran júbilo de una asamblea con mayoría conservadora, en una dominación extranjera ha sido tan aplastante; el único cambio
expedición contra la república romana. Movida por el mismo reflejo introducido por los movimientos revolucionarios es la ocupación
que había conducido a la monarquía de Julio a Ancona en 1832, francesa de R o m a .
la Constituyente vota, ante la noticia de Novara, una resolución Ésta contribuye a alejar más que nunca a los patriotas italianos
que aprueba por adelantado "la ocupación parcial y temporaria de Francia. E n 1848, rechazaron con altivez un apoyo que se
de un punto cualquiera de Italia" (31 de m a r z o ) . Esta toma de ofrecía; en 1849, ellos reprocharon a la Francia de Barrot y de
posición salvaguarda la integridad de la monarquía sarda pero Bonaparte el no haber agregado a un poderoso apoyo diplomático
justifica también el envío de un cuerpo expedicionario a R o m a : se una ayuda militar. Mazzini se atreve a denunciar la "traición
trata, según la declaración gubernamental del 16 de abril, de francesa". En realidad, la convicción de que Italia era incapaz de
restablecer a Pío I X sin recurrir a la fuerza. Los conservadores "hacerse a sí misma" como lo habían demostrado Custozza y
están encantados, los republicanos tranquilos. Una proclama ponti- Novara, germinará lentamente. El recuerdo de los fracasos y de
ficia que promete una amplia amnistía y profundas reformas las dolorosas derrotas comenzará a borrarse. Después de los her-
avalaría una política ambigua, imposible sin embargo de ser manos Bandiera, los héroes de las "5 Jornadas de Milán", las
suscripta por 30.000 combatientes de todo origen, y en primer legiones de voluntarios, de los " 1 0 días de Brescia", del sitio de
lugar, el millar de hombres de la Legión italiana del nicense Venecia, entrarán en la epopeya. Rompiendo con su "mentalidad
Garibaldi ( 1 8 0 7 - 8 2 ) cuya figura de héroe legendario comenzó a juvenil" (S. Jacini) "del 48", Cavour será uno de los primeros
dibujarse en los encuentros de la primavera de 1848. Los 5.000 en comprender que "las ideas cuentan menos que los hechos".
soldados de Oudinot son obUgados a retirarse ( 3 0 de abril). En
París, la Constituyente en vísperas de finalizar desaprueba su com-
portamiento; a la espera de las elecciones legislativas, las nego- II. LA VICTORIA DEL CENTRALISMO VIENÉS
ciaciones con el triunvirato distraen la atención. C o m o los austríacos Y LA OPRESIÓN DE LAS NACIONALIDADES
toman Ancona y los españoles y napolitanos penetran en el sur
de los estados pontificios, el príncipe-presidente decide satisfacer Marzo de 1849 es para la monarquía habsburguesa el mes de los
los deseos de la mayoría conservadora victoriosa el 13 de mayo: triunfos y de los dramas: es el mes de Novara y del golpe de estado
el 3 de junio comienza el sitio que desata en París el motín del que pretende anular definitivamente en el imperio las consecuencias
13, fatal para los jefes de la extrema izquierda; al cabo de un políticas y nacionales del levantamiento vienés del 13 de marzo de
mes de encarnizada resistencia, R o m a capitula el 19 de julio. Pío IX 1848; es también el mes de la elección de Federico Guillermo IV
se ha convertido en otro Gregorio XVI. A pesar de la presión de como "emperador de los alemanes" y sobre todo de la sorprendente
Bonaparte, se niega a toda reforma, mientras que la presencia de contraofensiva magiar. El coloso convalesciente vacila, tínicamente
las tropas de Oudinot en R o m a abre un largo período de compli- la intervención de las tropas del zar le evitará desintegrarse y ser
caciones diplomáticas. Con Austria y Dos Sicilias, "la República expulsado de Alemania.
francesa había cumplido su papel en la contrarrevolución" (L. A fines del invierno, el proyecto de castigar a los magiares
Girard) italiana. parecía pronto a realizarse. La promesa de acordar la igualdad
Mientras la actitud de Pío I X condena definitivamente al neo- a todas las nacionalidades había revigorizado el ardor de los
güelfismo, el reino de Cerdeña conserva, a pesar de los errores y alógenos. La guerra de los pueblos se convertía en aliada de la
la ligereza de sus dirigentes, el prestigio de un estado liberal e vieja monarquía. Desde que Windischgrátz atravesó la frontera, los
independiente: cuando su dramático advenimiento, Víctor Manuel II rumanos de Jancu, los servios de Stratimirovitch y los croatas de
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Las revoluciones europeas El derrumbe

Jellatchitch se arrojaron sobre los magiares. Las tropas imperiales bardo-Véneto, considerado hasta entonces como una colonia im-
ayudadas por los rumanos y los "sajones" se apoderan de Tran- perial'. instituye la unidad política y económica de una Austria
silvania a pesar de la obstinada resistencia de los Szeklers. Windisch- centralizada gracias a un cuerpo de funcionarios dependientes
gratz ocupa Pest el 5 de enero mientras Kossuth y su comité de directamente de Viena; la supresión de las aduanas con Hungría
defensa se refugian en Debrcczin. Un nuevo éxito austriaco en y el Lombardo-Véneto quita a la burguesía industrial y comer-
Kapolna ( 2 6 de febrero) obliga al enemigo a retirarse detrás del ciante todo motivo de descontento; el 14 de marzo, a fin de tran-
Tisza. El aplastamiento de la revolución nacional magiar parece quilizar plenamente al campesinado, se confirma la abolición de
inminente. los censos y se mejoran las condiciones para su rescate. Por último,
Schwarzenberg cree poder frenar las maniobras de Kremsier. la organización unitaria del imperio es un doble desafío para los
Como el ministerio Brandenburgo-Manteuffel a comienzos de no- revolucionarios de Debreczin y los parlamentarios de Francfort:
viembre de 1848, él se encuentra a fines de febrero de 1849 frente Hungría es reducida al rango de provincia; la idea de introducir
a una Constituyente próxima a terminar su obra. Sin los demócratas en el Reich sólo a los territorios del Bund está muerta; el nuevo
alemanes, los únicos elementos favorables a la unidad germánica, el imperio deberá entrar en bloque en el nuevo Reich.
Reichstag, reabierto el 22 de noviembre, está más preocupado que L a inesperada contraofensiva magiar cuestiona durante algunas
nunca por mantener la integridad del imperio pero renovándolo. semanas los espectaculares éxitos obtenidos desde noviembre por
Los compromisos entre la mayoría eslava que conducen los hábiles las armas de Windischgrätz y la fría determinación de Schwarzen-
"austrófilos" Palacky y Rieger y la minoría alemana de tendencia berg. Reorganizada después de las improvisaciones del invierno,
"negro-amarilla", concillan la vocación centralizadora del estado reforzada por 10.000 hombres de la Legión polaca — t o d o s los
con las aspiraciones autonomistas de las nacionalidades. Animado "peregrinos" se precipitan en ayuda de los adversarios de la potencia
por un liberalismo heredero de la tradición de Julio — u n a repre- que anexó Cracovia y mantiene a los polacos de Galitzia bajo el
sentación de las poblaciones sería elegida no por sufragio universal yugo—, la Honved ha hallado dos jefes valiosos: el polaco Bem y
sino sobre una base censitaria— el Reichstag adopta algunas inno- el magiar Görgey ( 1 8 1 8 - 1 9 1 6 ) . En marzo, el primero ha vuelto
vaciones, aceptables en el desconcierto de marzo de 1848 pero a ocupar casi la totalidad de Transilvania; a comienzos de abril, el
intolerables un año más tarde. El emperador solamente dispondría segundo obliga a Windischgrätz a retirarse. Los extremistas ven
de un veto suspensivo; sus aliados, la nobleza y el clero, perderían la victoria al alcance de su mano. B a j o su presión, Kossuth impulsa
sus últimas prerrogativas y sus privilegios (el catolicismo ya no a la reticente Dieta a proclamar el 14 de abril en la catedral calvi-
sería la religión del estado). Establecido definitivamente el 2 de nista de Debreczin la caída de los Habsburgo y la independencia de
marzo, el proyecto constitucional recibiría la consagración parla- los países de la Corona de San Esteban. Sin que sea pronunciada
mentaria el 7, en el trascurso de una sesión puramente formal. la palabra, se instaura de hecho la repiiblica.
Pero en Olmütz, como antes en (Berlín, los servicios ministeriales Estas decisiones debilitan la cohesión del campo magiar y exas-
han redactado su constitución. Siguiendo el ejemplo de sus colegas peran a los alógenos. Ya Deak, Eötvös y Batthyany se habían ne-
prusianos, Schwarzenberg utiliza procedimientos expeditivos: el 7, gado a reagruparse en Debreczin. Los magnates, muchos miembros
la tropa ocupa la sala de sesiones del Reichstag y los diputados de la nobleza media que señorea en la Dieta y oficiales, entre ellos
se dispersan sin resistir. El mismo día, se "otorga" una constitución Görgey, ligados al emperador por un juramento de fidelidad, vieron
fechada el 4. Jamás puesta en vigor en razón de las disposiciones en la revuelta el medio de imponer a los ministros traidores el res-
liberales (régimen parlamentario) destinadas a hacer aceptar más peto por la autonomía magiar. Ellos n o aceptan una secesión de
fácilmente el golpe de estado, la constitución expone con toda carácter republicano. Un conflicto latente opone a militares y
claridad los principios fundamentales de la nueva política austríaca. gobernantes, dando prueba ambos, por otra parte, de un mismo
La constitución nacida-muerta de Kremsier pretendía reglar los enceguecimiento nacionalista. L a incesante invitación de voluntarios
problemas internos de los "estados hereditarios". La del 4 de polacos a una gran reconciliación con los croatas, servios, eslovacos
marzo se aplica no solamente a la totalidad del imperio, o sea a los y rumanos los supera; el ejército hace fracasar las negociaciones
países de la Corona de San Esteban, sino también al reino Lom- emprendidas con algunos revolucionarios valacos refugiados. Kos-
266 Las revoluciones europeas
El derrumbe 267
suth desautoriza a su enviado en París, L. Teleki ( 1 8 1 1 - 6 1 ) , quien
en oportunidad de una reunión de la emigración internacional, ha condiciones de la recuperación austríaca. Si bien la abrogación
prometido una amplia autonomía a los pueblos de Hungría. de la servidumbre y de las obligaciones señoriales no destruyó el
La ausencia de un realismo generoso se une en Kossuth a extra- poder económico de la aristocracia, que conserva sus inmensos
ordinarias ilusiones diplomáticas. La simpatía de los revolucionarios dominios, ella constituye la primera gran etapa hacia la emanci-
es una cosa, la actitud de los gobiernos otra. Luis Napoleón y pación campesina de los eslavos y los rumanos. Por otro lado, el
Palmerston son hostiles a la secesión húngara: la integridad de mito del poderío austríaco ha resistido al lamentable espectáculo
Austria debe contener la presión rusa en el este y los Balcanes; de los ejércitos imperiales incapaces de vencer a rebeldes rodeados
también únicamente ella es capaz de impedir la formación de un de enemigos. Tal es la lección de la última fase de la revolución
bloque germánico cuyas temibles aspiraciones han dejado entrever alemana. ^
los debates de Francfort. La Hungría de Kossuth no tiene más
que una sola aliada, y puramente formal, que es la Venecia de
Manin. UI. EL FIN DE LA REVOLUCIÓN ALEMANA: EL FRACASO
Austria obtiene en cambio, y sin contrapartida, el apoyo ruso. DE LA SOLUCIÓN PARLAMENTARIA Y LA GRAN INSURRECCIÓN
Motivos ideológicos originan la intervención de Nicolás I: el zar REPUBLICANA DEL SUDOESTE
arde desde hace veinte años por ejercer el papel de guía de la
contrarrevolución europea. L a presencia de polacos en el ejército Desde octubre de 1848 a marzo de 1849, la asamblea de Francfort
húngaro y las reticencias de Viena en la cuestión alemana —los logró por fin redactar la constitución unitaria tan esperada por la
unitarios alemanes son, como se ha visto, ferozmente antirrusos— opinión, a pesar de las reticencias de Prusia, la hostilidad de
refuerzan su determinación. A partir del 13 de mayo, Paskievitch Austria, Baviera, Wurtemberg, Sajonia y Hanover. La negativa de
( 1 7 8 2 - 1 8 5 6 ) — l a elección del verdugo de la Polonia de 1831 es Federico Guillermo a aceptar la corona imperial torna irrisorio el
simbólica— penetra en Hungría a la cabeza de 200.000 hombres. trabajo de los parlamentarios, pero provoca en el sudoeste una gran
E n julio, b a j o la doble presión de los rusos y los austríacos apoyados insurrección republicana, que no obstante los sarcasmos de Engels
por los croatas, los magiares, que habían vuelto a ocupar Pest, se y Marx, los molestos silencios de los demócratas arrepentidos y del
baten en retirada en todos los frentes. Reunida en Szegedin, la desprecio de los historiadores bismarckianos, salva el honor de
Dieta acuerda — ¡ p o r fin!— la autonomía administrativa y la los hombres "del 48".
libertad lingüística a los otros pueblos. El 10 de agosto, Kossuth Las sesiones de una Asamblea sin poderes, con su autoridad
renuncia y se fuga a Turquía. El 13, Gorgey capitula en Villages. deteriorada desde septiembre, detestada por fuerzas reaccionarias
Una dura represión se abate sobre Hungría: 13 generales son en plena recuperación, se caracterizan por una melancólica majes-
fusilados, lo mismo que Batthyany, no obstante ser éste extraño a las tuosidad. Este carácter no aparece en absoluto en las exposiciones
actividades subversivas de Debreczin. Según los principios plan- que describen las peripecias de una lucha implacable iniciada en
teados por la Constitución del 4 de marzo, Hungría pierde incluso octubre entre grandes alemanes partidarios de un Reich descentra-
el derecho de invocar el respeto a su antigua "constitución", como lizado englobando a una parte si no a la totalidad de Austria, y
en tiempos de Metternich. C o m o Croacia, Transilvania y Vaivodia, pequeños alemanes que sostienen una Alemania centralizada sin
no es más que una unidad administrativa. Austria, por lo tanto bajo Prusia. E n realidad, recién a comienzos
Bajo el "neoabsolutismo" centralizador y policial que sustituye de 1849 el parlamento se divide en dos fracciones sensiblemente
al absolutismo patriarcal de antes, Austria da a los eslavos y a los iguales a raíz del problema austríaco. El voto de los artículos II
rumanos "en recompensa" lo que reservaba a los magiares "como ("Ninguna parte del Reich puede ser reunida en un solo estado
castigo" (J. A n c e l ) . La germanización encarnizada triunfa en los con los países no alemanes") y III ("Si un país alemán llegara a
países de la Corona de San Esteban así como en los "estados here- tener un mismo soberano con países no alemanes, las relaciones
ditarios". El fracaso total de las reivindicaciones nacionales ha entre esos países no pueden ser regladas sino por una unión
relegado a segundo plano la importancia social de 1848 y las personal") de la constitución, no debe ser considerada como la
victoria de un partido pequeño alemán aún inexistente. Los debates
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Las revoluciones europeas El derrumbe

y su resultado —los dos artículos fueron votados por la abrumadora gobiernos —¡se está lejos de "einzig und allein" del Vorparlament
mayoría de 340 votos contra 76 y 316 contra 9 0 — confirman que y de las perentorias declaraciones de von Gagern sobre la plena e
el parlamento sigue siendo fiel a su programa mínimo del verano, íntegra soberanía del parlamento!— y también al juicio de la
el de hombres tan diferentes como Struve, von Gagern y Radowitz: opinión pública. El divorcio entre los súbditos, impacientes por ver
la unión de todos los territorios del Bund. El 27 de octubre, o sea al fin realizadas las aspiraciones unitarias de la "primavera", y los
antes de la ola de indignación que siguió a la represión de la príncipes, poco deseosos de perder una parte de sus prerrogativas
insurrección vienesa y la ejecución de Blum, la existencia de un (dirección del ejército, administración de las finanzas y las adua-
Reichstag competente sólo para "estados hereditarios" ¿no abre n a s ) , aparece nítidamente. La prensa, en su mayoría, y todas las
el camino para la incorporación de una parte del imperio en el Cámaras se pronuncian por una inmediata aprobación. Por temor a
Reich? levantamientos populares, con fecha 23 de febrero, 26 estados
Es la política de Schwarzenberg la que conferirá progresivamente — t o d o s los pequeños— hacen conocer su aceptación. A la irreduc-
una tonalidad antiaustriaca a los artículos 11 y 111. Desde fines de tible oposición de Schwarzenberg se agregan las maniobras de
octubre, no encontrándose todavía oficialmente al frente de los Munich que, para aniquilar la influencia de Berlín, agita proyectos
asuntos públicos Schwarzenberg está resuelto a introducir en una de directorio, las reticencias de Wurtenberg, de Hanover y . . . la
confederación germánica de poder central débil una Austria uni- indiferencia de Prusia: la denuncia de Dinamarca del armisticio de
taria y fuerte. Este plan, fundado en la anulación del Reichstag Malmoe el 26 y la reafirmación de su autoridad en el reino son las
de Kremsier y la sumisión del parlamento de Francfort, supone el mayores preocupaciones de un monarca que en noviembre acaba
previo aplastamiento de los magiares. A la espera de ello, es de fijar, por su desenvoltura respecto a von Gagern, el poco
preciso espaciar los debates constitucionales —el archiduque Juan aprecio que le merece el trabajo de los parlamentarios. E n Franc-
y Schmerling se dedicarán a eso— y atraer a los grandes estados fort, entre tanto, la corriente a favor del proyecto constitucional ha
particularistas. En realidad, las iniciativas de Schwarzenberg desa- impresionado a los partidarios del mantenimiento de Austria
creditan en Francfort la causa de Austria y aumentan el número alemana en el Reich. Alrededor de 120 moderados, en su mayoría
de partidarios resignados a una Alemania librada a Prusia. El 27 austriacos y católicos, forman el 15 de febrero el grupo de los
de noviembre, Schwarzenberg proclama su voluntad de "mantener grandes alemanes; su programa es el mismo del gobierno bávaro.
a Austria en su unidad estática", precipitando así la caída de El 17, 200 diputados reaccionan constituyendo el partido de los
Schmerling y su remplazo por von Gagern. Este último ve levantarse pequeños alemanes con los profesores Dahlmann y Droysen, fogosos
contra él no solamente a los austriacos y los católicos (la confe- adversarios de la Iglesia romana y de los Habsburgo. ¿No resulta
rencia episcopal de Würzburgo estaba conmovida ante la idea de normal el acercamiento de los grandes alemanes y la izquierda, que
un Reich bajo dirección protestante), sino también a moderados del no se consuela aún por la pérdida de Viena? Inclinados, como la
sur como el protestante Welcker o demócratas enemigos de la mayoría de sus antagonistas, a privar del derecho de voto a las
Prusia reaccionaria. Si bien se declara a favor de un tratado parti- clases populares, los primeros consienten en la designación de la
cular entre Austria y un Reich implícitamente sometido a la hege- Cámara baja por sufragio universal y secreto; la segunda se prepara
monía de Berlín, el 13 de enero de 1849 no obtiene más que para "sabotear" los debates constitucionales en el trascurso de la
una estrecha e incierta mayoría (261 votos contra 2 2 4 ) . Las segunda lectura.
dilaciones, hasta mitad de marzo, de una Asamblea, sin embargo, Con su constitución unitaria del 4 de marzo, seguida el 9 por el
adherida al proyecto de los siete — q u e von Gagern hace suyo—, extravagante proyecto de una confederación de Europa central
de una Alemania federal, imperial y parlamentaria, demuestran una colocada, como el Bund, b a j o su presidencia, Austria asesta un
escasa diligencia por aceptar la solución prusiana; muchos diputados golpe fatal a las combinaciones tácticas de sus amigos. Varios
esperan siempre una adhesión austriaca de último momento. El grandes alemanes estiman, como Welcker, que la elección no es
proyecto constitucional votado en primera lectura el 28, crea un ya entre Austria y Prusia sino entre un emperador prusiano y la
emperador al que se le niega carácter hereditario y a quien no se anarquía republicana. De ahí el sensacional giro del profesor
designa. Enseguida von Gagern lo somete a la opinión de los badense, que el 12 de marzo propone ofrecer la corona imperial
El derrumbe 2 7 1
2 7 0 Las revoluciones europeas
A comienzos de mayo, Francfort sobrevive en el ridiculo. El 4
a Federico Guillermo. Una parte de la izquierda teme también el parlamento fija para el 15 de julio las elecciones legislativas,
movimientos populares incontrolables en caso de un fracaso parla- que evidentemente ni Prusia ni Baviera autorizarán, y para el 16
mentario. Ella negocia ahora con los probables vencedores; a de agosto la convocatoria del Reichstag. Von Gagern habla, es
cambio de la confirmación del sufragio universal y la trasformación cierto, de forzar — ¿ p o r qué medio?— a los estados recalcitrantes
del veto absoluto en un veto suspensivo, se declara por un a respetar la constitución. El archiduque Juan lo obliga a renunciar
emperador hereditario y por el rey de Prusia. El 28 de marzo, 290 ( 1 0 de mayo) y forma un gobierno extraparlamentario someddo a
votos eligen a Federico Guillermo "emperador de los alemanes". los asaltos cada vez más violentos de una izquierda cuyo poder
La corriente unitaria es tan fuerte que 28 estados, pequeños y crece a medida que disminuyen los efectivos. Siguiendo el ejemplo
medianos, se adhieren. En Prusia la Cámara, designada en febrero de Schwarzenberg, que ha llamado el 5 de abril a los diputados
y de tendencias menos avanzadas que la tumultuosa Asamblea austriacos, Federico Guillermo anula el 14 de mayo los mandatos
nacional, reconoce la constitución del Reich. El 26 de abril el rey prusianos. A fines de mayo, el quorum es llevado a 100. Los
la disuelve y el 28 rechaza la corona. También anuncia la ruptura disturbios y las insurrecciones no suscitan entre los extremados
con la "revolución prusiana" (en mayo, el sistema de las tres luchadores del verbo ninguna medida práctica. Unicamente el
clases tranquilizará a los junkers; aplicado en Badén desde 1831 miedo a los prusianos que se preparan para precipitarse hacia el sur
en las elecciones municipales, hace variar el peso del voto en los saca de su indeterminación: el 30 deciden trasladar el parla-
función de la cifra del impuesto; en Prusia, "arreglará" provisional- mento a Stuttgart, capital de ese Wurtemberg considerado todavía
mente . . . hasta 1918 el sufragio universal) y asesta un golpe fatal hoy por ciertos historiadores como el más democrático de los
a la revolución parlamentaria alemana. estados alemanes porque el 27 de mayo, 30.000 ciudadanos acla-
El rechazo de una "corona deshonrada en demasía por el olor maron en Reutlingen la constitución del Reich, aceptado por el rey
putrefacto que le da la revolución en 1 8 4 8 " sorprende, curiosamente, él 25 de abril, y luego volvieron sabiamente a casa. Hasta entonces,
a hombres como Dahlmann, Camphausen y von Gagern, así como lo que quedaba del parlamento había enviado a las regiones insu-
a la casi totalidad de los diputados. No obstante, está de acuerdo rrectas comisarios del Reich para servir de mediadores entre la
con principios permanentes reforzados por las humillaciones sufridas revolución y la contrarrevolución. Instalados desde ese momento
desde marzo de 1848. Quitar al emperador de Austria una dignidad en el corazón de un país considerado amigo, los diputados hacen
consagrada por la historia supondría al menos el consentimiento el papel de convencionales. El 7 de junio sustituyen el ministerio
de los otros mandatarios de Dios (la circular del 23 de enero por una especie de comité de salud pública de cinco miembros, la
precisaba que Prusia aceptaría un papel preponderante en caso Reichsregentschaft (regencia del Reich), destituyen el Reichsver-
que le fuera atribuido por los príncipes). Pero los reyes de Baviera, weser (el archiduque resignará oficialmente sus funciones seis
Sajonia y Hanover condenaron el voto de Francfort. Y, finalmente, meses más tarde) y decretan el reclutamiento de una Volkswehr
¿acaso el realismo no aconseja no desafiar a una Austria, debilitada (milicia popular) garantía de la aplicación de la constitución. ¿Van
es cierto, pero a la que Nicolás 1 no dejaría de sostener en Alemania a identificar su causa con la de los republicanos badenses? El
como lo hizo en Hungría? Esas especulaciones no son vanas: "ministerio de marzo" ubicado siempre en Stuttgart bajo la dirección
seguro del apoyo del zar, Schwarzenberg esgrimirá en noviembre de de Römer no desea atraer sobre las prudentes poblaciones suabias
1850, contra la modesta tentativa de una "unión restringida" presi- los rayos prusianos. El 2 de junio encarcela al emisario de Carls-
dida por Federico Guillermo, la amenaza que conducirá, como la ruhe, que pretendía revolucionar el reino; el 17 ordena a los
"retirada de Olmütz", a la resurrección de la Dieta de 1815. diputados no originarios de Wurtemberg abandonar Stuttgart; al
día siguiente, hace dispersar a los recalcitrantes por sus soldados;
En la noche del 28 de abril, del trabajo de Francfort no queda
b a j o la conducción del digno profesor-poeta L. Uhland (1787-
más que un texto constitucional y una ley electoral consignados 1 8 6 2 ) , los últimos miembros del parlamento recibido trece meses
en el diario oficial del Reich nacido-muerto. El parlamento no antes en Francfort con vítores populares, desfilan tristemente por
sabrá ni desaparecer dignamente ni tomar la dirección de los movi- las calles de Stuttgart antes de fijar . . . para el 24 de junio en
mientos populares.
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Las revoluciones europeas El derrumbe

Carlsruhe su próxima sesión. A causa de la amenaza de las tropas septiembre son, no lo olvidemos, excepciones. De espíritu a veces
prusianas sobre la capital del gran ducado, el primer parlamento paternalista, casi siempre particularista, los Arbeitervereine consti-
alemán desaparece el 18, abatido por la reacción particularista; tuyen ante todo minúsculas "universidades populares" aisladas en
queda para la historia como su más ilustre víctima. el seno de las "clases laboriosas". También los esfuerzos de Born
La lucha por la unidad germánica, cuyo cómodo símbolo es la por federarlos han llamado con razón la atención de los historiadores.
constitución monárquica del Reich —símbolo detrás del cual se C o m o se ha visto, en Berlín comienza, con su comité central y su
perfila la república "federativa" y social—, moviliza en mayo de diario Das Volk, la acción de Born. La derrota real del 18 de marzo
1849, más aún que en septiembre de 1848, a muchos proletarios. permite entonces a los inventores de soluciones mágicas para demo-
¿El estudio del "movimiento obrero" explica esta amplia partici- cratizar el estado y reformar la sociedad decir y escribir, sobre todo.
pación? La crisis de 1847, prolongada por la reducción del crédito Pero no ha trasformado de golpe la mentalidad de un proletariado"
debida a las agitaciones políticas, agravó la condición de los atrasado. Aunque pertenezca a la élite obrera (imitados únicamente
trabajadores. Las reivindicaciones del mundo artesanal se expresan por los cigarreros, los tipógrafos fundaron en 1848 el primer
de un modo abierto en el nuevo clima de libertad; pero su inspi- sindicato alemán), el obrero-imprentero está demasiado cerca del
ración sigue siendo profundamente conservadora, casi reaccionaria, m u n d o artesanal como para correr el riesgo de desorientarlo reve-
ya se trate de maestros o de compañeros. El congreso llamado de lando de entrada doctrinas que lo superarían. Aun si ha aprendido
los artesanos {Handwerker und Gewerbekongress) realizado en de Marx "la necesidad ineluctable de la lucha de clases" (J. D r o z ) ,
Francfort (15 de julio-18 de agosto de 1 8 4 8 ) , reunió solamente Born cree que es preciso primero despertar la conciencia de clase
a maestros; este efímero grupo de presión trata de imponer al de los trabajadores y emprender su educación política. La convo-
parlamento una legislación que refuerce el sistema corporativo. Al catoria a todos los Arbeitervereine de Alemania (en realidad, sola-
mismo tiempo (20 de julio-20 de septiembre), los compañeros mente una treintena de asociaciones del norte respondió a este
realizan también en la capital de la nueva Alemania su propio llamado), está inspirada en esta doble preocupación. El Arbeiter-
congreso (Gesellkongress)\ excepto la exigencia de romper el mo- kongress (Congreso de los trabajadores), realizado en Berlín del
nopolio familiar del acceso a la maestría, el "contra-congreso" de 23 de agosto al 3 de septiembre, se propone, contrariamente al
los compañeros está de acuerdo con el congreso de los maestros Gesellenkongress que se realiza en Francfort, hacer salir a los com-
en lo esencial, a saber la lucha contra la libre empresa. El parla- pañeros de su aislamiento espiritual. C o m o consecuencia suya, se
mento, para quien el liberalismo es un dogma en todos los ámbitos constituye la Arbeiterverbrüderung (Fraternidad de los trabajado-
(se cree obligado no obstante a apoyar a la clase más numerosa res). Trasladada muy pronto a Leipzig, intenta con su órgano
confirmando la abolición de los censos señoriales decidida por las Die Verbrüderung, que aparece desde el 3 de octubre, el reagrupa-
Cámaras locales), se niega tanto a restringir la emigración, remedio miento esbozado en Berlín. A largo plazo, se piensa en la creación
para la extensión de la pauperización, a proclamar el "derecho de asociaciones obreras de producción (¡Born es también un admi-
al trabajo", causa de las jornadas de junio, como a generalizar las rador de Louis Blanc!). En lo inmediato, se dedica a recolectar
reglamentaciones medievales. Este abstencionismo económico sin fondos para facilitar a los compañeros la "Gira por Alemania",
ninguna duda le restó muchas simpatías a los elegidos de la nación; fundar cajas de enfermedad, y con ese pretexto, cajas de huelga. A
sería en todo caso excesivo descubrir en eso el origen de una toma esta acción social que no tiene nada de subversiva (un simple
de conciencia revolucionaria: los maestros se sienten y quieren cambio de dirección permitirá al diario sobrevivir hasta 1850, en
obstinadamente pertenecer al BUrgerstand; los compañeros sueñan pleno período de reacción), se agrega una acción política a favor
con entrar en él. de la legalidad de Francfort. Born saluda a los Grundrechte como
Los Arbeitervereine que agrupan a trabajadores de todos los una gran conquista revolucionaria. Contrariamente a Marx, él no
oficios y se multiplican a partir de marzo de 1848, ¿prepararon el ridiculizó la constitución del Reich-, la admiró. Cuando intenta atraer
camino para la acción política violenta? el de Colonia, que organizó al sudoeste reticente respecto de un movimiento nacido en el
la poderosa manifestación popular del 3 de marzo, y el de Franc- norte reaccionario, pide al diputado Frobel que presida el Congreso
fort, que participó en el motín antiparlamentario del 18 de de los Arbeitervereine de Heidelberg ( 2 8 de enero de 1 8 4 9 ) .
266 Las revoluciones europeas
El derrumbe 275
¿Cuál fue la repercusión de este reformismo unitario? El Verbrii-
derung, "el más célebre de los diarios obreros" ( R . Balser), no seguir su camino en la Westfalia industrial, en la región de Cassel
superó jamás los 1.000 abonados; teniendo en cuenta las costumbres y en Wiesbaden. Interesante esfuerzo que permite descubrir los
de la época, eso representa quizás una decena de miles de lectores. primeros lectores del Manifiesto (conocido en Alemania en marzo-
¿El número de Arbeitervereine afiliados a la Fraternidad'} A lo abril, fue traducido al francés en vísperas de junio y al inglés en
sumo doscientos en los centros urbanos de Prusia, Sajonia, Fran- 1850) y los admiradores aislados de la Neue Rheinische Zeitung.
conia y Wurtemberg donde el artesanado no manifestará, llegado el Pero sería excesivo sostener que M a r x y su diario ejercieron un
momento decisivo, una gran predisposición revolucionaria. Sin duda notable ascendiente sobre las asociaciones democráticas, cuya
faltó tiempo para modificar los espíritus formados por siglos de multiplicidad es uno de los aspectos más originales de la historia
servidumbre. En todo caso, Born sabrá ajustar su comportamiento alemana de 1848-49.
a su prédica: participará en el levantamiento de Dresde, mientras que Se ha querido ver en la espectacular realización de congresos
su censor M a r x se eclipsará. a los que el renombre de algunos participantes confirieron un brillo
La Neue Rheinische Zeitung, Organ der Demokratie (19 de junio fugaz, una de las causas de las reacciones populares de mayo. La
de 1848-19 de mayo de " 1 8 4 9 ) , admirablemente restituida en idea de crear un gran partido de la democracia unitaria se expresó,
1928 (ed. J.H.W. Dietz, Berlín), es de distinta naturaleza que el como se ha visto, en Offenburgo el 19 de marzo de 1848. Algunos
Verbrüderung. E n varias oportunidades la hemos citado porque diputados de la extrema izquierda de la Iglesia San Pablo la
revela a u n o "del 4 8 " demasiado ignorado, compartiendo las retomaron en el verano. Ellos esperaban utilizar contra la mayoría
pasiones, los prejuicios y las ilusiones de la izquierda alemana. Este del parlamento el peso de una organización popular devota. Así
Marx es más matizado de lo que imaginan comúnmente sus nació el primer Congreso de los demócratas, que sesionó en Franc-
hagiógrafos: frente a sus amigos, más marxistas que él en la fort del 14 al 17 de junio b a j o la presidencia de Frobel. Esto
ocasión, se levanta — p a r a no dispersar los votos de los adversarios inquietó a los monárquicos constitucionales y espantó a los gobier-
del ministerio Brandenburgo-Manteuffel—, contra las candidaturas nos — t a n t o el prusiano como el badense— a causa de l a p r e s e n c i a
puramente obreras en las elecciones de febrero de 1849; no es de pardcipantes considerados como peligrosos energúifienos: los
infalible: ¿acaso no profetiza el 19 de enero de 1849 que el nuevo badenses Damm, un ex sacerdote convertido en furioso republi-
año será "el del levantamiento de la clase obrera francesa y de cano, y Kapp, un sostenedor de la "revolución permanente" que
la guerra europea"? Que haya pretendido el papel de guía de un renunciará enseguida a un parlamento considerado como muy
movimiento f u n d a d o en la alianza de las clases medias y las moderado, el diputado Zitz ( 1 8 0 3 - 7 7 ) , jefe del partido radical de
"clases laboriosas", parece cierto; ¿al proceder a la disolución de Maguncia, Ronge, el anticristo, Gottschalk y otros dos comunistas
la Liga de los comunistas, no quiso dejar de solidarizarse con de Colonia, fieles compañeros de Marx, Schapper, ex militante de
elementos que, t o m a n d o a la manera blanquista el golpe de fuerza la Liga de los justos y el relojero J. Moll ( 1 8 1 2 - 4 9 ) mezclado
como medio normal de conquistar el poder, debilitaban el frente también en todos los movimientos secretos en Francia, Bélgica,
de la oposición progresista? La realidad parece haber estado muy Alemania . . . En realidad, el congreso reunió sólo a un poco más
alejada del sueño y también de los relatos del fiel Engels, escritos de 200 delegados, enviados por menos de 100 asociaciones. Los
a posteriori. El Marx seguro de sí que a fines de mayo de 1849 debates opusieron los "políticos" a los "sociales". Los radicales
se dirige a Francfort y a Carlsruhe, regaña ásperamente a los parla- badenses estimaron inconveniente la instalación en la capital pru-
mentarios demócratas y a los republicanos badenses, y luego, siana de un comité central, incluso fantasma, y la designación
disgustado por la endeblez de unos y el particularismo de otros, se como órganos del movimiento, al lado de la Mannheimer Abend-
va a Londres a preparar en "el estiércol de lá emigración" la zeitung, el único periódico radical de Alemania antes de 1848, de
revolución proletaria; no se encuentra ningún rastro en los docu- la Zeitungshalle y de la Neue Rheinische Zeitung. Su abstención
mentos de la época. Indudable en Colonia, la influencia de Marx contribuyó a hacer de un minucioso organigrama un cuadro vacío.
no es en absoluto perceptible en mayo en el comportamiento Las circunstancias quisieron que el segundo Congreso de los
de las masas populares renanas. Recientemente se ha tratado de demócratas reunido en Berlín se preocupara especialmente por la
suerte de . . . la revolución vienesa. L o esencial de su actividad
260 Las revoluciones europeas El derrumbe 277

consistió, como es sabido, en suministrar a la reacción prusiana la 1850) de la Zentralmärzverein siguió siendo verbal. Marx no se
tan esperada ocasión de hacerse abiertamente con el poder. Esta equivocará al fustigar a los oradores del congreso realizado en
asamblea compuesta por gente del norte y de Renania, se reveló Francfort a comienzos de mayo, y que no se atreven a expresar su
menos capaz todavía que su predecesora para sentar las bases de opinión ni sobre el levantamiento de Dresde ni sobre la insurrección
un verdadero partido. Se encontraban allí además de los tímidos del Palatinado.
que abandonaban la sala para no escuchar la palabra "república", Lógicamente, el combate unitario debería haber adquirido su
comunistas de diversas procedencias dispuestos a criticarse mutua- plena significación en los estados cuyos príncipes habían conside-
merite (Weitling y su ex discípulo el Dr. Ewerbeck expulsado de
rado nulo el voto del parlamento del 28 de marzo.
París, los amigos de Marx, Born y Ruge, siempre perentorio pero
A fines de abril, la oposición prusiana dispondría de temibles
cada vez más alejado del "radicalismo filosófico" de la época de los
argumentos: no solamente el rey ha abatido en Francfort el frágil-
Anales franco-alemanes). Separado del sur, el Congreso no logró
, edificio del que era piedra angular sino que también ha disuelto
sentar las bases de un acuerdo entre un partido político del norte
una Cámara moderada. Los parlamentarios liberales, los demócratas
en sus comienzos, y la Fraternidad de Born en vías de federar el
que hicieron su perorata en la capital en octubre y los Arbeiter-
mundo obrero de Prusia y Sajonia por intermedio de los Arbeiter-
vereine. vereine ligados a la Fraternidad, no se mueven. El pueblo no cues-
tiona Brandenburgo-Manteuffel. El 30 de mayo, la promulgación
Los lamentables fracasos de junio y octubre son seguidos de un del edicto de las tres clases no suscita más que algunas protestas. E n
éxito aparentemente extraordinario. La crisis de septiembre y el las elecciones de junio, los demócratas se manifestarán por la pro-
ascenso de la reacción en Berlín y en Viena, favorecen la empresa paganda en favor de la abstención, arma de los débiles. E n Renania,
del infatigable Frobel: crear un partido de masas que pudiera obligar el motín que estalla el 9 de mayo en Elberfeld, gran ciudad indus-
al parlamento a votar una constitución unitaria y a los soberanos trial, permite medir la influencia del grupo marxista: sus inspira-
a aplicarla. F u n d a d a en diciembre en Francfort y dirigida por un dores demócratas expulsan a Engels, llegado como vecino — e s
comité f o r m a d o exclusivamente por parlamentarios, la Zentral- originario de B a r m e n — a prodigarles consejos de táctica revolu-
mdrzverein {Asociación central de marzo), habría agrupado a cionaria. La ocasión es sin embargo aprovechada por el gobierno
fines de marzo de 1849 cerca de medio millón de adherentes, repar- para suprimir el Neue Rheinische Zeitung. E n su último número
tidos en un millar de asociaciones afiliadas. La referencia a las fechado el 19 de mayo, impreso en caracteres rojos, el periódico,
esperanzas de marzo y un programa limitado desde fines de enero que no ha dejado de informar con simpatía los acontecimientos de
al reconocimiento por todos los gobiernos de la constitución del Sajonia, del Palatinado y de Baden, aconseja calma a los obreros
Reich, explican esos grandes progresos: muchos tibios que no se de Colonia. La pasividad de las provincias prusianas permite a
encontrarían jamás detrás de las barricadas aspiraban a salir por fin Federico Guillermo acudir en ayuda de los soberanos amenazados
de un estado provisional que se eternizaba. En realidad la Zentral-. por la "anarquía" y de sellar con los reyes de Hanover y Sajonia
marzverein no penetró, en razón de su misma moderación, en las (26 de mayo) esa "unión restringida" que Schwarzenberg destruirá
regiones donde el radicalismo había tejido desde hacía más de un el año siguiente.
año una red de clubes sólidamente jerarquizados, extendido el odio Alentado por los ejemplos del rey de Hanover, que disolvió su
a Prusia y Austria, condenado las palinodias de los parlamentarios Cámara veinticuatro horas antes que Federico Guillermo, y del
en el asunto de Schlesvig-Holstein y su pasividad durante la repre- rey de Prusia, el rey de Sajonia desgarra su máscara unitaria y
sión de septiembre; denunciada en Badén como una empresa liberal. Disuelve la Cámara que acaba de recomendar el reconoci-
reaccionaria, fue en cambio bien recibida en Wurtemberg y Fran- miento de la constitución del Reich y expulsa al ministerio favorable
conia, donde las asociaciones ya existentes adhieren en bloque. a la creación francfortense. Provoca así un profundo descontento.
Pero un cambio de denominación era incapaz de trasformar el Los monárquicos constitucionales de las Deutsche Vereine {Asocia-
estado de ánimo de poblaciones más inclinadas a la palabra que a ciones alemanas), como los demócratas fieles a la memoria de
la acción. La campaña por la constitución del Reich (tal es por Blum y reunidos en las Vaterlandsvereine {Asociaciones patrióticas
otra parte el título de una célebre obra publicada por Engels en — ¡ e n la mayoría de los estados, esta denominación designa moví-
260 278
Las revoluciones europeas El derrumbe

mientes conservadores!—), redactan petitorios y despachan dele- viñateros. En el otro, donde los artesanos que trabajan por cuenta
gaciones ante el soberano. Con la noticia de que Federico Augusto, de un poderoso capitalismo comercial están concentrados en Nu-
pretextando la participación de las fuerzas sajonas en las opera- remberg, Bamberg y Schweinfurt, se percibirían los primeros
ciones contra Dinamarca, ha solicitado la ayuda militar de Prusia, se síntomas de una lucha de clases; en todo caso es cierto que la
elevan barricadas el 3 de mayo en la capital. La iniciativa del Fraternidad se implantó allí y que el movimiento democrático
levantamiento no pertenece ni a la Zeniralmürzverein, inexistente, manifestó su vigor en las elecciones en el parlamento y en la
ni a los numerosos Arbeitervereine sino más bien al abogado Cámara de Munich ; ¿es preciso recordar el éxito de la Zentralmdrz-
Tzschhner ( 1 8 1 4 - 7 0 ) , un republicano de Francfort que se destacó vereinl ¿Qué resultó de esta "inmensa propaganda"? Sin duda, la
en la Cámara sajona por sus ataques contra una constitución dureza de la represión en la vecina Sajonia incitó a la reflexión a
imperial y hereditaria. Para él, como para los proletarios del mediocres tribunos surgidos al azar de los mítines. E n el Paladnado,
artesanado, la defensa de la constitución del Reich no es más que un el radicalismo era menos un partido organizado rápidamente que
pretexto. Su objetivo es la "república social". Con la participación un estado de ánimo. El recuerdo de la Revolución y del Imperio
de Bakunin y de agitadores polacos venidos de París y el despliegue había dejado en esta posesión excéntrica de Baviera la nostalgia
de la bandera roja al lado de la negro-rojo-oro, el motín adquiere de un gran estado unificado; no es fortuito que la primera manifes-
la estatura de una insurrección proletaria internacional. De allí la
tación unitaria germánica se haya realizado en 1832 en Hambach,
pasividad hostil o indiferente de la mayoría de las organizaciones
en presencia de franceses y polacos. Lá proximidad de Francia y la
unitarias y la calma observada en todo el reino. Abandonada, Dresde
atracción de la "capital de la revolución" mantienen la llama de
se convierte en una nueva Viena. Animados por el odio a Prusia
la democracia. Simbolizando el particularismo palatinés detestado
y a los soldados profesionales, los trabajadores dirigidos por Born
por los historiadores prusianos, Savoye ( 1 8 0 2 - 6 9 ) , abogado en
resisten hasta el 9 con un encarnizamiento que los prusianos les
Zweibrücken (Dos-Puentes), es simultáneamente un patriota alemán
harán pagar caro: de un bando 250 muertos, del otro 31, 23 sajones
y un patriota francés. Refugiado en París desde 1832, de abril a
y 8 prusianos. El representante francés, muy desfavorable a un
septiembre de 1848 es el encargado de negocios de la República en
movimiento cuyo "éxito hubiera llevado no solamente a Sajonia sino
también a Alemania y quizás a E u r o p a entera a la destrucción de Francfort; diputado del Alto Rhin en 1849, no separa la causa
todas las condiciones esenciales de buen orden y de la vida social", de los amigos de Ledru-Rollin de la de los republicanos alemanes
observa: " L o s efectos del furor de las tropas han sido terribles y del sudoeste. También se comprende mejor la reacción del Palati-
los relatos que circulan entre los habitantes de Dresde equilibran n a d o ante la actitud negativa del rey de Baviera ( 2 3 de abril).
en ellos la impresión producida por la satisfacción de haber sido El 2 de mayo, una asamblea reunida en Neustadt a iniciativa de
hberados de la tiranía del señor Tzschirner." asociaciones populares, elige un comité que se propone obligar al
También en el sudoeste, .los prusianos iban a dar muy pronto rey a someterse. El 11, la guarnición de Espira pasa a la insu-
pruebas de su savoir-jaire. La insurrección del Palatinado y la rrección. El 17 se forma en Kaiserslautern un gobierno provisional
revolución badense, iniciadas, respectivamente el 2 y el 12 de mayo, cuya autoridad se extiende en principio a todos los países excepto
atestiguan más aún que el movimiento sajón, la "ambigüedad" de la las fortalezas de Landau y Gemersheim. Movimiento espontáneo,
"campaña por la constitución del Reich" y demuestran el peso de la desorganizó totalmente la administración y la preparación de la
historia sobre el comportamiento de los hombres. En este sentido, defensa. El reconocimiento del hecho consumado por el comisario
es interesante comparar las reacciones de Franconia y del Palatinado del Reich Eisenstück hubiera conferido, a ojos de los indecisos, una
ante el anuncio de que el gobierno bávaro se niega a aceptar la legitimidad unitaria a la revolución si el parlamento-rabadilla,
constitución del Reich. En esas dos provincias tardíamente incor- siempre apasionado por la legalidad, no hubiera desautorizado a su
poradas, la lealtad dinástica es tibia, e intensa la hostilidad pro- emisario. El coloniense von Ester intenta vanamente insuflar el
testante a la vieja Baviera conservadora y católica. Más allá de estas espíritu del 93 a los bravos demócratas que cuentan ante todo
similitudes, ¡cuántos contrastes capaces de explicar un Palatinado con los amigos de Ledru-Rollin y con los magiares para salir de la
pasivo y una Franconia revolucionaria! Uno es un país de alegres situación en que los ha puesto u n generoso temperamento.
260 280
Las revoluciones europeas El derrumbe

La idea de que una alianza de todos los revolucionarios haría un fervor ejemplar. La influencia de las Iglesias hostiles al radica-
de una primavera, que fue la del derrumbe, la verdadera "prima- lismo no fue perceptible en absoluto. Los católicos ( % ) se habían
vera de los pueblos" no es un atributo de republicanos alemanes alejado de las organizaciones creadas después del primer Congreso
imaginativos. Kossuth, como se ha visto, la comparte. El ingreso de los católicos realizado en Maguncia en octubre b a j o la presidencia
de los magiares a Pest, el 4 de junio, reforzó el ardor de los de Buss, a quien la "primavera" había hecho huir de Badén. El
insurrectos alemanes y exaltó peligrosamente a la extrema izquierda culto de Blum, el "católico alemán", había acercado a católicos y
francesa. Ella está, tanto como la expedición romana, en el origen protestantes y suscitado en unos y otros el mismo deseo de venganza.
del 13 de junio. El fracaso de esta jornadá desmoralizó a los Curas y pastores se lanzarán junto a sus parroquianos a la revo-
magiares, abatió a los alemanes y disipó las-alarmas de los gobiernos lución. En cuanto a los judíos, si la gente de edad temía que el
europeos, en particular del gobierno francés. Desde mediados de derrocamiento del estado preludiara progromos, la juventud no tuvo
mayo a fines de junio, los informes policiales describían una vasta parecidas reticencias.
conspiración franco-germano-húngara cuyos hilos habían sido tejidos Bajo uno de los ministerios más liberales de Alemania, que
en París: el comité húngaro animado por Teleki, el delegado de reconoció la constitución del Reich, un poderoso partido busca,
Kossuth, complotaba con el comité alemán del doctor Ewerbeck, apoyándose en las masas que ha educado políticamente desde 1847,
que recibía a los emisarios palatineses y badenses; Savoye era el fundar en el sur la república que debería extenderse progresivamente
agente de enlace de sus compatriotas y de la Montaña; "los dos a todos los países alemanes por efectos del ejemplo. Esta idea,
comités veían diariamente a Considérant y Leroux; Ledru-Rollin prematura durante todo el lapso en que Francfort parecía estar en
recibe con bastante frecuencia a Teleki". E n una carta a la "demo- condiciones de responder a las aspiraciones unitarias y democrá-
cracia alemana", ¿la Montaña acaso no había dado crédito (el 9 ticas, progresó con el impu^^o reaccionario del otoño y el fracaso
de junio) a los rumores de una próxima insurrección parisiense que del parlamento. En virtud del estado de sitio, Struve y muchos
liberaría a la vez a Francia y a Alemania? "¡Hermanos! [. . .] Un militantes radicales habían sido encarcelados y los clubes que
poder infiel a su origen, traidor a sus deberes, ¿trabará por mucho habían surgido en marzo fueron cerrados. Pero éstos se reconstitu-
tiempo el auge generoso de Francia? ¡No! Francia no puede fallar yen secretamente primero y luego abiertamente cuando los Grun-
a sus nobles instintos y, por la causa común, está lista para verter drechte, que el gobierno badense no se atreve a ignorar, reconocen
la sangre que jamás ahorró en favor de las naciones oprimidas [ . . . ] " . a todos los alemanes el derecho de reunión y asociación. Más fuerte
En realidad, contra las tropas bávaras y prusianas (el 4 de que nunca en razón de su antigua implantación y de la simpatía de
junio, Maximiliano imploró, después del rey de Sajonia, la ayuda que gozan sus cuadros perseguidos, el partido radical no es más,
de Federico Guillermo), la insurrección palatinesa sólo puede contar como en tiempos del popular Hecker, el partido de un hombre. Su
con los badenses, con quienes ha firmado el 18 de mayo una nuevo presidente, el abogado Brentano, miembro del parlamento
convención militar en buena y debida forma. En el territorio y de la Cámara badense, se contentaría con convertirse en ministro.
badense, igual a la mitad de Bélgica, dando prueba frente a Los jefes de los clubes —abogados, médicos, farmacéuticos, instruc-
peligros aparentemente insuperables de una extraordinaria voluntad tores, hoteleros—• le imponen sus puntos de vista. Ellos saben
de vencer,' todas las clases, con la evidente excepción de la nobleza que el pueblo ha perdido todo respeto por el gran duque "Leopoldo
y los altos funcionarios, en una proporción desconocida en otros Badén", que odia cada vez más a la Prusia antiliberal y vilipendia
lados, abrazaron la revolución: Akademiker, boticarios, el pequeño a los cinco diputados badenses (sobre 19) que, el 28 de marzo,
pueblo de los talleres, las fábricas y también el campo. Los ele- votaron por Federico Guillermo. En fin, lograron crear en el
mentos menos ardientes fueron los autores de las jacqueries de ejército clubes abiertos a los soldados y suboficiales. Así fue fácil
marzo de 1848; después de la abolición de los censos señoriales, se incitar a la tropa contra sus oficiales nobles. El radicalismo de los
convirtieron nuevamente en súbditos leales preocupados sobre todo militares es el reflejo del radicalismo de los civiles, y los permisio-
por la subsistencia de familias pictóricas en tierras exiguas y poco narios fueron sus propagandistas más o menos conscientes.
fértiles; en cambio, los campesinos del sur de la Selva Negra y de Es en definitiva la participación masiva del ejército la que
la región de Constanza, en su gran mayoría católicos, testimoniaron confiere a la revolución badense su profunda originalidad. Si en las
El derrumbe 283
266 Las revoluciones europeas
futuro secretario de estado americano, W. Liebknecht (23 años),
revoluciones europeas soldados aislados o en grupo a veces defec-
el líder de la social-democracia de fines de siglo, Engels y su
cionaron, en Baden, todas las guarniciones sin excepción pasan a la
amigo J. Molí muerto en combate, el abogado sajón Trützschler,
ilegalidad. Más todavía, es la más poderosa, la de la fortaleza
diputado en Francfort, comisario civil (Badén tomó esta institución
federal de Rastatt, a pesar de la presencia de dos compañías aus-
del gobierno provisional francés) en Mannheim que será fusilado
tríacas, la que da la señal de la revolución. En una Alemania donde
en agosto, el profesor Kinkel ( 1 8 1 5 - 8 2 ) , el maestro de Schurz,
sus tensas relaciones son origen de sangrientos choques, como
ex oficiales prusianos demócratas tales como Anneke ( 1 8 1 7 - 6 6 ) ,
hemos visto, civiles y militares badenses trabajan con un sincronismo
un discípulo de Marx, y Corvin ( 1 8 1 2 - 8 6 ) , los paladines de la
perfecto. En Offenburgo, donde se había constituido, en marzo
revolución como el relojero de Wiesbaden G. Bohning ( 5 1 a ñ o s ) ,
de 1848, el partido debe realizar su congreso el 13 de mayo. En
ex combatiente de la independencia griega que será pronto ejecutado.
Rastatt, distante a unos cincuenta kilómetros, la guarnición, que
Pero también cuántos intelectuales fracasados, revolucionarios de
a despecho de los esfuerzos del ministro de Guerra se amotina en
café que, en búsqueda de lucrativas sinecuras se abaten sobre el
la víspera, es pronto imitada por las de Friburgo, Lörrach, Carls-
desgraciado país. En voz alta, exigen una implacable depuración y
ruhe, Bruchsal y Mannheim. Aun antes de la apertura del congreso,
sabios movimientos estratégicos en el corazón de Alemania. Estos
llegados de Rastatt por tren (el ferrocarril paralelo al Rhin de
bravucones que denunciarán más tarde el "particularismo", el
Mannheim a la frontera suiza jugó un papel importante en la
"espíritu burgués" de los revolucionarios de Carlsruhe (Engels se
revolución), los soldados desfilan alegremente con la bandera
asociará a esta campaña de denigración con un talento que todavía
negro-rojo-oro a la cabeza. En presencia de Savoye, excitados
se impone hoy), debilitan el frente interno haciéndose cargo
delegados agregan a las reivindicaciones políticas previstas (renun-
de las querellas badenses: en general, apoyan las maniobras de
cia del gobierno. Asamblea constituyente) un programa socializante
Struve contra Brentano.
(seguro de vejez, etc.). La sedición de la guarnición de Carlsruhe
Después de la rápida derrota del Palatinado (11-8 de junio),
tanto como las exigencias de Offenburgo provocan la huida del
40.000 hombres resistieron durante un mes a los 100.000 prusianos
gran duque. El comité director del partido radical se convierte de
y bávaros dñigidos por el príncipe Guillermo. Además del ejército
facto en el gobierno de una república. La revolución badense ha
regular que se pasó a la revolución, las fuerzas republicanas com-
terminado.
prenden la Volkswehr (milicia) badense, la legión germano-polaca
Comienza entonces el más poderoso de los movimientos revolu-
—¡siempre los "peregrinos"!— el batallón de los refugiados, bajo
cionarios de toda la historia alemana. Leopoldo, como Maximiliano,
el mando de G. Bohning, una legión de extranjeros. Puestos bajo
apela a Federico Guillermo, cuyos soldados pasarán al ataque el
el comando de Mieroslawski, que comunica sus órdenes en francés,
11 de junio. La alianza de Carlsruhe y Kaiserslautern se impone.
se cubren de gloria el 15 y 16 de junio en la región de Mannheim.
Se intenta, a pesar de lo que dijo Engels, revolucionar Wurtemberg
Rodeados por el príncipe Guillermo, que franquea el Rhin en
y Hesse-Darmstadt. La actitud de los demócratas es decepcionante.
Germersheim, abandonan la posición del Neckar. El 25 de junio,
Desde Francfort sólo llegan, por intermedio de los comisarios del
después de furiosos combates cerca de Wagháusel, Mieroslawski
Reich, consejos de reconciliación con el gran duque. El parlamento-
debe evacuar la capital y replegarse a lo largo del Murg, con su
rabón, como se ha visto, no se unirá a la revolución sino en la
centro de apoyo en la fortaleza de Rastatt. El 29 y 30, es rota la
víspera de su expulsión a Stuttgart. A pesar de su aislamiento, los
última línea de defensa, el 11 de julio el gran ducado es ocupado,
badenses no se sienten abandonados. Con un extraordinario entu-
excepción hecha de Rastatt. L a ciudadela de donde había partido
siasmo que mantienen las "buenas noticias" de Hungría y París
la revolución el 12 de mayo, capitulará el 23 de julio con los
que prodiga la prensa, se asiste a un reclutamiento espontáneo de
víveres y municiones agotados.
voluntarios muy pronto reforzados por la movilización de una parte
El orden reinaba ahora de Mannheim a Constanza. Leopoldo
de la guardia cívica. Desde Francia, y sobre todo desde Suiza
entra en su caphal el 18 de agosto. La represión batía a pleno.
acuden los emigrados. Desde todos los estados alemanes se apre-
Mientras que en el Palatinado las autoridades bávaras la conducían
suran los vencidos ávidos de revancha; entre ellos, idealistas ardien-
con moderación, en Badén los prusianos instalaron cortes marciales
tes y generosos: el estudiante de Bonn K. Schurz ( 2 0 años), un
284 Las revoluciones europeas A L G U N A S REFLEXIONES
que funcionaron hasta octubre. H u b o 14 ejecuciones. La adminis-
tración badense la sucedió: miles de personas fueron controladas.
Un documento oficial donde se enumeran 804 responsables prin-
cipales, da una idea de la amplitud del movimiento.
Si el odio a Prusia permanece vivo entre los humildes, la repre-
sión decapitó por mucho tiempo al partido democrático, lo cual
facilitará la influencia hasta ahora insignificante del catolicismo
político en este país católico. Pero, por su victoriosa intervención
en la lucha contra la "anarquía", Berlín obtuvo el reconocimiento De la primavera de 1848 al verano de 1849, cuántas esperanzas,
de las clases altas, de los profesores y de los temerosos. Miichos cuántos fracasos. 1848. Abril: derrumbe cartista en Londres, de-
radicales convertidos, por unitarios, en nacionales-liberales admi- rrota de la revolución popular de febrero en París y en las pro-
radores de la Prusia bismarckiana, se dedicarán a hacer olvidar que vincias; junio: destrucción del movimiento checo y dispersión del
la revolución alemana de 1848, nacida en Badén, murió en Badén. Congreso eslavo de Praga, aplastamiento de la insurrección pari-
Tenderán un velo sobre su participación en un movimiento tratado siense; julio: fin de la revolución nacional italiana; octubre: caída
duramente por el futuro "emperador alemán". En cuanto a los de la revolución vienesa; diciembre: golpe de estado prusiano y
socialistas, retomarán por su cuenta las críticas de Engels contra disolución de la Asamblea nacional. 1849. Marzo: golpe de estado
una revolución que no se desarrolló según el esquema marxista. En austriaco y disolución del Reichstag de los "estados hereditarios",
1850, Engels, que esperaba una nueva revolución, reconocía su restauración del Antiguo Régimen en Parma, M ó d e n a y Florencia;
desconcierto: después de haber observado, lo que era cierto, que junio: derrota sin gloria en París, de la extrema izquierda y en
" n o existía casi oposición de clases antes de la insurrección en
Stuttgart fin lamentable del parlamento de Francfort; julio: la
Badén", y afirmado que "ninguna experiencia insurreccional puede
República francesa vence a la república romana y el rey de Prusia
suplir el desarrollo de las clases, que sólo pueden esperar de largos
a la democracia unitaria; agosto: capitulación de Hungría indepen-
años de práctica de la industria", agregaba: " N o es menos cierto
diente y de la república de Venecia.
que Badén, por su última insurrección y sus consecuencias, se ha
ubicado entre los países alemanes que tendrán u n lugar muy impor- ¿El balance? Napoleón III avanza tras el presidente conservador,
tante en la inminente revolución". y después de un breve período republicano, 18 años de Segundó
Imperio van a suceder a 18 años de la monarquía de Julio. Para
los patriotas italianos, el mantenimiento del estatuto constitucional
sardo es una magra compensación a la presencia de una nueva
potencia extranjera en la península. E n Austria, el autoritarismo
negligente y la tolerancia un tanto desdeñosa respecto a los "des-
pertadores" de los pueblos, no están ya permitidos: el "centralismo"
absolutista y germánico se prepara para reprimir implacablemente
las aspiraciones liberales y nacionales de todos los súbditos del
imperio. En Alemania, el triunfo de la contrarrevolución resulta
de una especie de división del trabajo, por otra parte no concertada,
entre Federico Guillermo y Schwarzenberg: las armas del primero
destruyeron, en la persona de sus jóvenes- representantes, el ideal
republicano, las audaces presiones del segundo dieron nueva vida
a un cadáver detestado, la Dieta. Tremendo desastre, es cierto,
para todos aquellos que encendieron las luces del escenario:
obreros parisienses, proletarios vieneses, pequeña gente del sud de
286 Algunas reflexiones
Algunas reflexiones 287
Alemania, líderes democráticos y clubistas de todas partes, dipu-
tados de la Asamblea nacional prusiana, del Reichstag austriaco, Los republicanos avanzados veían ingenuamente a Europa a ima-
del parlamento alemán. gen de Francia. Pero, en todas partes el peso de los rurales era más
pesado; casi en todas partes, los artesanos constituían un proleta-
Pero también gran victoria social para millones de campesinos
del imperio y de muchos estados alemanes. El miedo de que se riado más atrasado, con excepción de algunos solitarios formados
renovaran las jacqueries de marzo, la preocupación por ganar a bajo la influencia parisiense; en todas partes, los intelectuales dise-
una masa electoral compacta, hicieron de parias ignorados o des- minados en los estados particularistas ardían por unir los trozos
preciados, y generalmente cerrados a las doctrinas subversivas, los de la patria que ellos habían forjado. Aspiraciones sociales y polí-
niños mimados de la revolución, a quienes demócratas, monárquicos ticas se confundían con una pasión unitaria poco inclinada a colo-
constitucionales, ministros conservadores y soberanos reaccionarios carse b a j o la bandera francesa de la democracia europea.
. muhiplicaron a porfía promesas y compromisos formales. La aboli- Este aspecto no apareció, para los descendientes de una vieja
ción de la servidumbre y los censos señoriales fue una revolución nación, sino recién al final de la primavera. E n una Europa donde
silenciosa 1 que escapa a los historiadores enternecidos con las las corrientes ideológicas de los años cuarenta habían llevado a los
callejuelas del viejo París. radicales suizos y badenses y a los liberales italianos, en una
atmósfera de dificultades económicas, a m o v e r s e . d e s d e 1847 sin
Por supuesto, los actores de la pieza representada en 1830
esperar la señal de París, el escenario de 1830 se repite con una
conocían admirablemente su papel; los proletarios levantan barri-
fuerza diez veces mayor. Gobiernos considerados débiles por los
cadas y derrocan al régimen en tres jornadas; el rey, sobre quien
historiadores pero que, gracias a su policía y a su ejército, disponen
pesa una historia vivida, la del 92, no piensa recurrir a las pro-
de una aplastadora superioridad sobre endebles adversarios, ceden
vincias, a la manera de Enrique IV. Revolución —sin comillasi—
casi espontáneamente. El pánico se apodera de aquellos que habían
política primero, como siempre, pero también social. El "comu-
resistido el miedo de 1830.
nismo" de las sociedades secretas, los hacedores de sistemas y de ,
Desde Viena, se comprueba el extraordinario efecto de las
una élite obrera parece, en las brumas de febrero, capaz de impedir
barricadas de febrero en ItaHa, Alemania, y también las trasfor-
el retorno de los sufrimientos nacidos de una larga crisis alimen-
maciones sufridas por una revolución importada. En ninguna parte
taria y económica: sin transición, la república "roja" sucede a la
se piensa en proclamar la república. Si el rey de Baviera desapare-
monarquía. ¿Marcha rápida para las provincias? ¡Qué importa!
ciese sería en favor de su hijo. "Revoluciones" italianas y alemanas
Quien tiene París tiene a Francia centralizada, a condición de no
son en general, pacíficas. Las primeras terminan de introducir en la
pedir a la mayoría de los franceses aprobar las empresas de una
primavera de 1848 la "revolución de 1830" en la península. Las
minoría. Entre los notables y los campeones de la democracia y del
segundas conducen a una real democratización de estados y a
socialismo apoyados por algunas decenas de miles de artesanos
"liberalizados".
parisienses, el campesinado no vacila. Su manera de manifestar su
indiferencia será pronunciarse por un mito, Bonaparte. Los m á s La revolución nacional en Italia es, a pesar de la aparición
sutiles escritores comprometidos que se oponen sin cesar a las de los "cruzados", un producto sardo. Sin embargo, tiene sufi-
segundas intenciones de tal o cual miembro del gobierno provisional, ciente impulso como para traer consecuencias que las reivindica-
subestiman un hecho esencial: el sufragio universal llevaba en ciones liberales no hubieran implicado en absoluto: huida de los
sí mismo la condena de la democracia social que predicaba la príncipes de Módena y Parma, luego, después de Custozza, naci-
fraternidad de los pueblos bajo la dhección de Francia. miento de regímenes democráticos sin porvenir, es cierto, en un
país compartimentado, de clases medias débiles, pero símbolos
de un romanticismo desenfrenado cuyo fara da se y la negativa a
1 La abolición de la esclavitud en las colonias, realizada por el gobierno aceptar la ayuda militar francesa constituyen notables manifesta-
provisional el 4 de marzo, es una medida espectacular ya bien esbozada por ciones. Italia es uno de los países donde se celebró con más fasto
la monarquía de Julio. La emancipación judía, decidida por el parlamento el centenario de la "revolución de 1848", a pesar del "complejo
de Francfort, sólo se realizó más tarde y progresivamente en el marco de Cavour". De este complejo es sin duda testimonio el juicio de
los estados.
Crispí: al diplomatiseur Cavour, que sabrá usar armas francesas

19
288 Algunas reflexiones Algunas reflexiones 289

y prusianas, el hombre de estado prefería a Mazzini y Garibaldi, que fracaso que, como buen junker, había deseado. Convencido que
habían combatido sin esperanza, como Carlos Alberto en Novara. el poder de los Habsburgo es un mito, los expulsará de Alemania
En Alemania, la gran revolución nacional que comienza el y cumplirá así el sueño de los "pequeños alemanes". Su éxito le
5 de marzo en la Heidelberg de tranquilos notables y que termina en . valdrá los favores de hombres "del 4 8 " arrepentidos; renombrados
julio de 1849 ya sea ante pelotones de ejecución prusianos, o en historiadores culminarán su obra borrando de la historia germánica
las prisiones badenses o en la emigración hacia los Estados Unidos una página en términos generales honorable. Así serán disociadas
(muchos cuadros políticos se perderán definitivamente para Ale- en Alemania la idea democrática y la idea nacional.
m a n i a ) , fue desacreditada y superficialmente clasificada como el Esta disociación aparece en el curso mismo de las revoluciones
"año loco". Decidir la convocatoria a un parlamento, elegirlo, de E u r o p a central. El odio a la unidad germánica y a la dominación
hacerlo trabajar, y esto a pesar de los príncipes, el emperador y el magiar arrojó a checos, croatas y rumanos en brazos de la Austria
rey de Prusia, era dar muestras de una audacia singular. Las reaccionaria que combatían los demócratas vieneses y los aristó-
"fallas" del parlamento, tantas veces denunciadas, son imputables, cratas magiares. Por espíritu de partido los demócratas alemanes
no ya a una alta burguesía poco numerosa y en todo caso débil- y por ceguera algunos demócratas franceses que ignoraban los
mente representada en Francfort, sino al conjunto de la nación. Las imperativos del Volkstum pero proclamaban bien alto el derecho
reivindicaciones "pangermánicas", por ejemplo en Schlesvig, que ,, de todo el pueblo a regirse por su libre voluntad, ambos resérvaron
inquietaron a la Rusia autocràtica, al Reino Unido hberal y a la a los opresores magiares un lugar privilegiado en el panteón
Francia republicana, se inspiran en una ideología ya muy extendida democrático internacional y trataron como servidores del oscu-
durante los años cuarenta. El "tiempo perdido" para abordar la rantismo a los intelectuales checos así como a los campesinos
discusión de la constitución se explica, cosa que se persiste en eslavos.
silenciar, por una voluntad desesperada de no decepcionar a E n sus intentos de aplicación, el principio de las nacionalidades
un pueblo que no estaba preparado en absoluto para la separación exacerbó las querellas entre los alemanes por un lado y los
de los "hermanos alemanes" de Austria. E n cuanto al reproche de daneses y polacos por otro, y creó entre checos y alemanes de
haber hablado sin actuar, se basa en un desconocimiento de las Bohemia odios perdurables. Desembocó en querellas lingüísticas
reahdades: preocupados y alarmados por las barricadas de febrero, cuya violencia no parece agotada. La pasión nacionalista es el
los soberanos dejan hacer pero conservan su poder material. Afirmar elemento esencial de las revoluciones, excepto Francia. Su mode-
que p u d o ser posible apoderarse del aparato de los estados, es hacer ración en los estados unificados y sin embargo tan diferentes,
creer que todos los proletarios de Berlín, Renania, Baviera y explica quizá la calma del Reino Unido, Bélgica, los Países Bajos,
Sajonia tenían el espíritu revolucionario de los "pequeños bur- España y Portugal. 1848 reveló el poder explosivo del nacionalismo
y su aptitud para arrastrar a las mismas desviaciones a hombres
gueses", de los artesanos y de una parte del campesinado del
opuestos por pasiones políticas, religiosas (el caso de Pío I X ,
sudoeste formados políticamente antes de 1848. ¿El sufragio uni-
excluido como soberano temporal, en tanto las Iglesias se entregaron
versal no hubiera condenado al fin de cuentas a los autores de
a la corriente en la primavera) y por intereses de clase (en los
golpes de fuerza? Piénsese en los residtados de las elecciones del
países socialistas se denuncia episódicamente a los "nacionaUsmos
parlamento anteriores a la "traición" de los Akademiker, espantados
burgueses"); en el trascurso de luchas implacables, los rasgos
por los movimientos democrádcos de septiembre de 1848 y mayo
de los pueblos se acentuaron: eljsspíritu de contradicción germánico,
de 1849. Por supuesto, el fin del parlamento, ineluctable después
la inercia checa, la brutalidad magiar, la resolución croata, el
del 28 de abril, carece de vuelo. No es menos cierto que la unidad,
misticismo polaco.
b a j o la f o r m a de una monarquía imperial y democrática, se enfrentó
L a época de la fraternidad no sólo desconoció las generosas
con la resistencia insuperable de Austria, con el miedo que ésta
utopías (Ruge y Cattaneo lanzaron en vano la idea de un congreso
inspiraba, con el pardcularismo del rey de Prusia y de su pueblo.
o de una federación de pueblos libres), ella enseñó sobre todo que
Bismarck, que a diferencia de la mayoría de sus contemporáneos la sangre tiene otro peso que las palabras. Cuando, después de
n o era un romántico, sacará provecho de las lecciones de un Sadowa, el gobierno imperial reconstituirá un estado profundamente
290 Algunas reflexiones REFERENCIAS CRONOLÓGICAS >

quebrantado, se entenderá con el adversario más duro y los


magiares lo imitarán. El compromiso de 1867 institucionalizará,
b a j o el patrocinio de un ex "del 48", Deak, el dualismo de la
primavera de 1848. En 1868, el gobierno húngaro, por un com-
promiso de tipo austro-húngaro, exceptuará de una magiarización
cada vez más rigurosa sólo a los compatriotas de Jellatchitch. Los
polacos, a través de la actividad desordenada pero emocionante de
los "peregrinos", dieron prueba de la voluntad de vivir de un
pueblo privado de su territorio. Al servicio de Carlos Alberto, de 1801 Anexión de Irlanda.
la insurrección vienesa, de la revuelta magiar, del motín de Dresde, 1812 Constitución española - constitución siciliana.
de la revolución badense, todos llevaron en todas partes el mismo 1814 Ley fundamental en los Países Bajos - constitución
combate: ¡por la resurrección de Polonia! democrática noruega.
Para los polacos, los moldo-valacos y los servios, muy pronto 1815 Creación del Bund - pacto federal suizo - voto de
para los italianos así como más tarde para los checos, el recuerdo las corn-laws.
de la Francia de febrero subsiste. Mucho después de Luis Felipe, 1816-1819 Agitación radical y represión en el Reino Unido.
Metternich o el príncipe Guillermo, Londres puede recibir a 1816-1820 Constituciones de Nassau, Baviera, Badén, Wurtem-
la Internacional de los vencidos, cuyo comité democrático europeo berg, Hesse-Darmstadt.
de Mazzini, Ledru-Rollin, Ruge y Kossuth lanza grandilocuentes 1817 18 de octubre Manifestación unitaria de Wartburg.
llamados a la insurrección. París sigue siendo sin embargo, tanto 1819 Instauración del proteccionismo agrícola en Francia.
bajo el Segundo Imperio como b a j o la III República, "la capital 1819-1820 Medidas reaccionarias federales en Alemania.
de la revolución en E u r o p a " . Con la participación de Francia, los 1820 España: golpe de estado militar y restablecimiento
principados rumanos e Italia antes de 1871, Polonia, Checoslovaquia de la constitución de 1812.
y Yugoslavia después de 1918, realizarán los sueños de 1848. 1820-1821 Revoluciones de Nápoles, Sicilia y Piamonte.
Ni Francia ni Europa conocerán otros 48. Conocedores, por 1821 8 de abril Victoria austríaca sobre los revolucionarios pia-
experiencia, de su verdadera fuerza decuplicada por los progresos monteses en Novara.
técnicos, los gobiernos no cederán más a las amenazas internas 1822 Portugal: constitución imitada de la constitución
mientras declinará la mística de las barricadas en las filas de la española de 1812.
oposición. Revoluciones de otra duración y de otra envergadura 1823 Comienzos de la agitación irlandesa (O'Connell) -
marcarán el siglo xx. No tendrán sin embargo ni la espontaneidad creación de estados provinciales en Prusia.
ni el candor del 48. Surgidas de desastres militares o del apoyo de 1824-1825 Reino Unido: derecho de coalición.
ejércitos amigos —¿cuáles hubieran sido las consecuencias para 1825 Hungría: fundación de la Academia; - resurrección
Austria de una abstención rusa en Hungría, para Italia las de una de la Dieta.
intervención francesa?— ellas se cuidarán muy bien de jugar con 1826 Neusatz (Hungría): fundación de la Matica servia.
la diabólica invención de románticos imprevisores: ¡el sufragio 1827 19 de noviembre Primeras barricadas parisienses del siglo xix.
universal! 1828 Buonarotti: Histoire de la conspiration pour l'égalité,
dite de Babeuf.
1829 Emancipación de los católicos del Reino Unido.
1829-1835 Guerra civil portuguesa.
1830 27-29 de julio Las Tres Gloriosas Jornadas.
1830 25 de agosto Revolución en Bruselas.

1 Estas fechas han sido tomadas de las mencionadas en el contenido del libro.
Referencias cronológicas 293
2 9 2 Referencias cronológicas
1843 Irlanda: Clontarf, fracaso de O'Connell; impulso de
1830 4 de octubre Declaración de la independencia belga. la Joven Irlanda - en Bruselas: Gioberti: Del PrI'
1830-1831 Insurrección polaca contra los rusos - revoluciones mato...
cantonales suizas - constituciones de Hanover, Sa- 1844 Párís: Anales franco-alemanes de Ruge-Marx; Balbo:
jonia, Brunswick, Hesse-Cassel. Speranze d'Italia.
1831 Mazzini funda la Joven Italia en Marsella - fun-
1845 El croata se convierte en el idioma de la Dieta de
dación de la Malica checa - advenimiento de Carlos
Agram - la Dieta de Bohemia quiere convertirse
Alberto en Cerdeña - disturbios en Módena, Parma,
en asamblea legislativa - fundación de la Gaceta
estados pontificios y represión austriaca.
de Praga - fundación de la Gacela eslovaca - Engels:
1831 noviembre Lyon: primera insurrección puramente obrera - La situación de la clase obrera en Inglaterra.
Bélgica: tratado de los 24 artículos.
Diciembre Fundación del Sonderbund.
1831- 1832 Los rusos otorgan a Moldavia y Valaquia consti-
tuciones idénticas. 1846 Crisis alimentaria - disturbios de subsistencia -
jacqueries rutenas de Galitzia - crímenes agrarios
1832 Hambach (Palatinado): manifestación unitaria - irlandeses - abolición de las corn-laws: "revolución
nuevas medidas reaccionarias federales en Alemania de 1846" - casamientos franco-españoles.
- reforma electoral en el Reino Unido.
Febrero Fracaso de Mieroslawski en Posnania - ocupación
1832 5-6 de junio Insurrección obrera parisiense (bandera roja) por la
de Cracovia por los austro-pruso-rusos.
república y por Polonia.
1833 Francfort: intento de putsch contra la Dieta - Oda Mayo D'Azeglio: Degli ultimi casi di Romagna.
a la patria del catalán Carlos Aribaud. Junio Elección de Pio IX.
1833-•1834 Reino Unido: leyes sociales. Julio Carta abierta de Cristián VIII sobre los ducados -
1833-1845 Complots mazzinianos. Pío IX decreta la amnistía política..
1834 Mazzini funda la Joven Europa en Berna - Dina- Noviembre Anexión a Austria de la república de Cracovia.
marca: estados provinciales en el reino y los
1847 Crisis económica - Michelet: Historia de la Revo-
ducados - Reino Unido: ley de pobres - París:
lución; Louis Blanc: Historia de la Revolución-,
creación de la Liga de los proscriptos.
Lamartine: Historia de los Girondinos - Bélgica:
1834 9-12 de abril Lyon: insurrección republicana. victoria liberal y gabinete Rogier - Factory Act
1834 14 de abril París: masacre de la calle Transnonain. (ley de 10 horas) - la Dicta húngara dominada por
la oposición.
1834- 1839 España: guerra carlista.
Enero Fundación de la Confederación irlandesa.
1835 Agram (Zagreb): fundación de la Gaceta croata.
Abril-junio Landtag unido prusiano.
1836 Gante: fundación de la Sociedad flamenca - París:
fundación de la Liga de los justos - Palacky co- Julio Pío IX crea una guardia cívica.
mienza la publicación de la Historia de Bohemia. 9 de julio- Campaña de los banquetes (para las reformas
1837 Suspensión de la constitución de Hanover: los 7 25 de diciembre electoral y parlamentaria).
de Göttingen. Agosto-diciembre Austria ocupa Ferrara en los estados pontificios.
1838 Reino Unido: fundación de la Liga contra las
12 de septiembre Asamblea de Offenburgo (Badén), primera manifes-
corn-laws.
tación revolucionaria (democrática, social y unitaria)
1839 Prusia: ley sobre el trabajo de los niños - Louis alemana.
Blanc: Organización del trabajo - primer fracaso
cartista. 10 de octubre Coloquio liberal de Heppenheim (Hesse-Darmstadt).
1839 12 de mayo París: insurrección de las E.staciones. Noviembre Renovación de la campaña cartista - Marx y Engels
preparan el Manifiesto Comunista - el radicalismo
1840 Crisis renana - advenimiento de Federico Gui- suizo vencedor del Sonderbund.
llermo IV.
1841 Francia: ley sobre el trabajo de los niños. Diciembre Gottschalk funda en Colonia una sección de la
Liga de los comunistas
1842 Reino Unido: segundo fracaso cartista; fundación
de La Nation en Dublin. 1848 Enero-febrero Mítines cartistas.
294 Referencias cronológicas Referencias cronológicas 295

2-4 de enero Disturbios de los cigarros en Milán. 22 de marzo Revolución en Venecia.


i 2 de enero Insurrección en Palermo. 23-24 de marzo Franzoicnicirm.
28 de enero Rescripto de Federico V i l (incorporación de los 24 de marzo Carlos Alberto declara la guerra a Austria.
ducados a Dinamarca).
26 de marzo Motín en Madrid.
10 de febrero Constitución de Nápoles.
27 de marzo Jassy: fracaso de un intento revolucionario.
11 de febrero Estado de sitio en Lombardia.
31 de marzo-
12 de febrero Moción Bassermann en la Cámara badense (pro- 3 de abril Vorparlament en Francfort - guerra de los ducados.
posición de un parlamento alemán) - John Mitchel
8 de abril Carta de Bohemia.
lanza un llamado a la insurrección irlandesa.
14 de febrero 10 de abril Londres: fracaso cartista.
Pío IX crea una comisión de reformas.
11 de abril Sanción de leyes constitucionales húngaras (dua-
17 de febrero Constitución de Florencia.
lismo), "abolición" del régimen señorial.
22-24 de febrero Revolución en París; proclamación de la República;
12-20 de abril Insurrección republicana badense.
gobierno provisional.
25 de febrero París: derecho al trabajo. 16 de abril París: fracaso de una nueva manifestación popular
por la postergación de las elecciones.
27 de febrero Mannheim (Badén): asamblea popular (las cuatro
reivindicaciones). 11 de abril Francia; fracaso de la extrema izquierda en las
elecciones de la Constituyente.
28 de febrero París: los Talleres nacionales, la Comisión de
Luxemburgo. 26 de abril Federico Guillermo IV incorpora los "círculos
alemanes" del gran ducado de Poznau.
Marzo, primera Los "ministerios de Marzo" en los estados alemanes
quincena y los motines agrarios en el sudoeste de Alemania 27 de abril Dossenbach (Badén): derrota de la Pariser Legión.
(abolición de las últimas cargas señoriales). 29 de abril Pío IX condena la guerra italiana.
19 de marzo Revolución en Neuchátel (Suiza). 7 de mayo Motín en Madrid.
2 de marzo París: decreto sobre la reducción de la jornada de 9 de mayo Francia: institución de la Comisión del poder
trabajo. ejecutivo.
3 de marzo Reivindicaciones de la Dieta húngara. 13 de mayo Autonomía de la Vaivodia servia.
4 de marzo Manifiesto de Lamartine a Europa. 15 de mayo París: motín antiparlamentario (Polonia) - Nápoles:
5 de marzo motín y comienzo de la reacción - motín vienés -
Carlos Alberto promulga el estatuto constitucional -
Heidelberg (Badén): comienzos de la revolución manifestación de los rumanos de Transilvania en
nacional alemana. Blaj.
5-6 de marzo Disturbios en Glasgow. 18 de mayo Comienzos del parlamento de Francfort.
11 de marzo Asamblea popular de Praga. 22 de mayo Comienzos de la Asamblea nacional prusiana.
12 de marzo Reducción del censo en Bélgica. 2 de junio Apertura del Congreso de Praga.
13 de marzo Revolución vienesa; huida de Metternich. 10 de junio Viena confirma la integridad del reino de Hungría
y destituye a Jellatchitch.
14 de marzo Roma: constitución.
12 de junio Motín de Praga, fin del movimiento checo.
16 de marzo París: manifestación de los "gorros de plumas".
14-17 de junio Francfort: primer Congreso de los demócratas.
17 de marzo París: manifestación popular por la postergación
de las elecciones. 15 de junio Berlín: motín obrero.
18 de marzo Revolución berlinesa. 23-26 de junio Insurrección obrera parisiense.
18-22 de marzo Milán: los 5 días. 24 de junio Cavaignac, jefe del poder ejecutivo.
19 de marzo Abdicación de Luis I de Baviera - Offenburgo: 28 de junio Disolución del Congreso de Praga.
asamblea popular, impulso republicano.
29 de junio Francfort: el archiduque Juan es electo Reichsver-
21 de marzo Capitulación de Federico Guillermo IV. weser.
2 9 6 Referencias cronológicas Referencias cronológicas 297

Junio-septiembre Revolución en Bucarest y su fracaso - medidas a 31 de octubre Berlín: manifestación popular a favor de la revo-
favor de los campesinos prusianos. lución vienesa - Windischgratz vencedor de la
3 de julio Venecia se entrega a Carlos Alberto. revolución vienesa.
12 de julio Abolición de la Dieta germánica. Fines de octubre Florencia: ministerio demócrata Guerrazzi.
15 de julio- 8 de noviembre Berlín: ministerio Brandenburg-Manteuffel.
18 de agosto Francfort: Congreso de artesanos (maestros). 9 de noviembre Viena: ejecución de Robert Blum.
20 de julio- 15-16 de novbre. Revolución romana.
20 de septiembre Francfort: Congreso de compañeros. 21 de noviembre Schwarzenberg, primer ministro y ministro de
22 de julio Viena: apertura del Reicitstag constituyente ("estados Relaciones Exteriores.
hereditarios"). 22 de noviembre El Reichstag austriaco reabre en Kremsier.
24-27 de julio Francfort: el parlamento incorpora la mayor parte 25 de noviembre Huida de Pío IX a Gaeta.
de Posnania al Reich.
27 de noviembre Declaración austriaca sobre "la unidad estatal del
25 de julio Custozza: derrota de Carlos Alberto. imperio" - H. von Gagern sucede a Schmerling -
Julio-agosto Fracaso de la insurrección irlandesa. Francfort: Francfort: fundación de la Asociación central de
ministerio Leiningen, primer gobierno alemán. Marzo.
9 de agosto Armisticio austro-sardo. 2 de diciembre Abdicación de Fernando I, Francisco José empe-
rador de Austria.
12 de agosto Venecia: Manin retoma el poder.
5 de diciembre Disolución de la Asamblea nacional prusiana y
16-19 de agosto Berlín: el Junkerparlament.
constitución otorgada.
23 de agosto Viena: insurrección obrera.
10 de diciembre Luis Napoleón, presidente de la república francesa.
23 de agosto- Berlín: Congreso de asociaciones obreras (Born) y
3 de septiembre fundación de la Fraternidad. 5 de enero Windischgratz ocupa Pest.
23 de enero Circular de Berlín a los gobiernos: Prusia está dis-
26 de agosto Armisticio de Malmoe.
puesta a desempeñar un papel dirigente con el
Fines de agosto Ruptura austro-húngara. acuerdo de los soberanos.
Septiembre Expedición de Fernando II contra Sicilia. 26 de enero Derrota de los magiares en Kapolna.
7 de septiembre Abolición del régimen señorial en los "estados 28 de enero Francfort: el proyecto constitucional sometido a la
hereditarios" de Austria. opinión de los gobiernos.
10 de septiembre Jellatchitch restablecido c o m o ban ataca a Hungría. 8 de febrero Proclamación de la república toscana.
12 de septiembre Constitución helvética. 9 de febrero Proclamación de la república romana.
16 de septiembre Francfort: el parlamento ratifica el armisticio de 15 de febrero Francfort: formación del grupo de los "grandes
Malmoe; Schmerling primer ministro. alemanes".
18 de septiembre Francfort: motín republicano, estado de sitio. 17 de febrero Francfort: formación del grupo de los "pequeños
alemanes".
21-24 de septbre. República badense de Struve.
26 de febrero Dinamarca denuncia el armisticio de M a l m a .
28 de septiembre Pest: asesinato de Lamberg.
Febrero-abril Victoriosa contraofensiva magiar.
Comienzos de
octubre Victoria magiar. 7 de marzo Disolución del Reichstag de Kremsier y otorga-
miento de una constitución centralista en el imperio
6 de octubre Comienzos de la revolución vienesa, asesinato de (fechada el 4).
Latour.
9 de marzo Austria propone la formación de una Confederación
26-30 de octubre Berlín: 2"? Congreso de los demócratas. de Europa central.
27 de octubre Francfort: voto de los primeros artículos constitu- 14 de marzo Austria: confirmación de la abolición de los censos
cionales. señoriales.
298 Referencias cronológicas BIBLIOGRAFIA SUMARIA

20-23 de marzo • Carlos Albataca Austria y es derrotado en No-


vara; Víctonuel 11 rey de Cerdeña; restauración
de los ans poderes en Parma, Módena y
Florencia.
28 de marzo Federico Crmo es electo "emperador de los
alemanes".
5 de abril El gobiern« Viena llama a los diputados aus-
triacos de :fort.
14 de abril Debreczin: lamación de la independencia hún-
gara. Las siguientes indicaciones bibliográficas tienen c o m o único objeto remitir
al lector a los libros fundamentales y a los artículos fácilmente accesibles.
25 de abril El rey de temberg acepta la constitución del
Se tendrá un panorama general de la historia de los pueblos antes y
Reich - el de Hanover disuelve su Cámara.
durante las revoluciones de 1848 consultando algunas grandes historias gene-
26 de abril Disolución Cámara prusiana elegida en febrero. rales, clasificadas de acuerdo con la fecha de la primera edición.
28 de abril Federico O m o rechaza la corona imperial.
I? de mayo Tratado rurco de Balta-Liman: la reacción en Ponteil, F.:/'l'Eveil des nacionalités et le mouvement libéral (1815-1848)",
los principE en Peuples et civilisations, t. xv, 1960.
Pouthas, Ch.-H.: "Démocraties et capitalisme (1848-1860)", en Peuples et
2 de mayo Palatinado: nblea popular de Neustadt y co- civilisations, t. xvi, 1961, 3? edición.
mienzos deisurrección. Droz, J. y otros: "Restaurations et révolutions", en Clio, t. ix, i, 1953.
3-9 de mayo Dresde: levniento republicano. Schnerb, R.: "Le XIX" siècle", en Histoire générale des civilisations, t. vi, 1961.
9 de mayo Motín de feld. Duroselle, J,-B.: "l'Europe de 1815 á nos jours. Vie politique et relations
10 de mayo Francfort: t de H. von Gagern. internationales", en Nouvelle Clio, n? 38, 1967, 2? edición.
Se podrá agregar el estudio antiguo pero siempre útil de:
11 de mayo Fin de la ución siciliana. Seignobos, Ch.: Histoire politique de l'Europe contemporaine (1814-1914),
12 de mayo Badén: sed de la guarnición de Rastatt y 2 vol., 1929-31, 7? edición,
comienzos ( revolución. y en un libro reciente de:
13 de mayo Francia: éxie los conservadores en la legisla- Pirenne, J.: Les grands courants de l'histoire universelle, t. v, 1953.
tiva - Offe;o: Congreso revolucionario de las
asociacionesiocráticas badenses. Sobre el socialismo en general y sobre Marx y Engels antes de 1848,
remitirse a
14 de mayo Federico G m o anula los mandatos de los di- Cornu, A.: Karl Marx et Friedrich Engels, 1955-1962, 3 vol. •
putados pros de Francfort. Halévy, E.: Histoire du socialisme européen, Paris, 1948.
18 de mayo Tratado de iza entre la insurrección palatina y
la revoluciádense. Sobre el movimiento literario:
19 de mayo tJltimo núnde la Neue Rheinische Zeitung. Encyclopédie de la Pléiade, t. ll. Littératures occidentales, 1956.
30 de mayo El parlamenja Francfort - Berlín: promulgación
Sobre el aspecto internacional de los movimientos de 1848:
del edicto d 3 clases.
Renouvin, P.: Le XIX' siècle: de ISÌ5 à 1871, La Europa de las nacionali-
4 de junio El gobiernoCossuth vuelve a Pest. dades y el despertar de nuevos mundos, 1954 (t. v de la Historia de las
13 de junio París: motínparlamentario (expedición romana). relaciones internacionales).
18 de junio Stuttgart: ekierno de Wurtemberg expulsa al Sobre la cuestión de las nacionalidades, uno de los aspectos esenciales de las
parlamento. revoluciones de 1848, se consultará:
26 de junio Los prusianc Carlsruhe. Henry, P.: Le problème des nationalités, 1937.
Roma capiti Pouthas, Ch.-H.: Le mouvement des nationalités en Europe dans la première
19 de julio
moitié du XIX' siècle (curso en la Sorbona), 1947.
23 de julio Capitulaciónlastatt. Weill, G.: L'Europe du XIX' siècle et l'idée de nationalité, 1938.
6 de agosto Tratado de austro-sardo.
Sobre las revoluciones:
13 de agosto Capitulacióngara ante los rusos en Villagos. El libro fundamental sigue siendo el de:
22 de agosto Capitulación Venecia. Ponyeil, F.: 1848, 4» edición, 1966.
3 Ü Ü Bibliografía sumaria
Bibliografía sumaria 301
El centenario de la revolución de 1848 dio lugar a numerosas publicaciones
en Francia y en el extranjero. N o s contentaremos con señalar las cuatro Desde la aparición de estos estudios, fueron publicados los documentos
siguientes obras con las abreviaturas que permitirán situar los artículos oficiales en:
citados: Documents diplomatiques du gouvernement provisoire et de la commission
Actas del Congreso histórico del Centenario de la revolución de 1848, 1948 du pouvoir exécutif, t. i, febrero-abril de 1848; ii, mayo-junio de 1848,
(Actas). 1954-55. •
Estudios de historia moderna y contemporánea II, 1949 (Estudios).
El libro del Centenario (bajo la dirección de Ch. Moulin), 1948 (Centenario).
1848 en el mundo. La primavera de los pueblos (obra colectiva dirigida por
F. Fejto), 2 vols., 1948 (Primavera). REINO UNIDO
Conviene indicar además los artículos aparecidos en la Revista de las
revoluciones contemporáneas, o en las publicaciones de la:
Bederida, P.: Londres au milieu du XIX' siècle: une analyse des structures
Biblioteca de la revolución de 1848 y especialmente:
Godechot, J. y otros: La presse ouvrière 1819-1850. Inglaterra, Estados Uni- sociales (Annales ESC, 1968).
dos, Francia, Bélgica, Italia, Alemania, Checoslovaquia, Hungría; 1966. Cahen, L.: L'Angleterre au XIX' siècle, 1924.
Dolleans, E.: Le chartisme (1831-1848), 1949, 2? edición.
Cualquier interpretación de la revolución francesa y las revoluciones Halevy, E.: Histoire du peuple anglais au XIX' siècle, t. I-III, 1912-23 y
europeas no puede ignorar los puntos de vista expuestos por: IV, 1947.
Labrouse, E.: 1848, 1830, 1789. C ó m o nacen las revoluciones (Actas). Hobsbawm, E.: En Angleterre: révolution industrielle et vie matérielle des
classes populaires. Annales ESC, 1962.
Labrousse, E.: Aspects de l'évolution économique . . . (op. cit.)
Rivollan, A.: L'Irlande, 1925.
FRANCIA
Vaucher, P.: 1848 en Angleterre (Actas).
Woodward, E.-L.: The Age of Reform (1815-1870), t. xiii, Oxford History
Se remitirá a la bibliografía que acompaña el reciente libro de:
of England, 2? edición, 1960.
Girard, L.: La II' République, 1968, publicado por el mismo editor.
Se podrá consultar también:
Chevalier, L.: Classes laborieuses el classes dangereuses á Paris pendant la
première moitié du XIX' siècle, 1958. ESPAÑA
Duroselle, J.-B.: Les débuts de catholicisme social en France (1820-1870),
1951. Altamira, R.: Histoire d'Espagne, n. edic., 1956.
Fejtô, F.: Paris des années 40, capitale de la Révolution (Actas).
Bruguera, F.-G.: Histoire contemporaine d'Espagne (1789-1950), 1953.
Labrousse, E.: Le mouvement ouvrier et les idées sociales en France de 1815
Descola, J.: Histoire d'Espagne, 1956.
à la fin du XIX' siècle (curso en la Sorbona), 1948.
Lhomme, J.: La grande bourgeoisie au pouvoir (1830-1880), 1960.
Pouthas, Ch.-H.: La France de 1815 à 1870, historia de Francia para todos
los franceses, t. ii, pp. 179-346, 1951. PORTUGAL
Pouthas, Ch.-H.: La population française pendant la première moitié du
XIX' siècle, 1956.
Rémond, R.: La droite en France de la Première Restauration à la Nowell, Ch.-E.: Histoire du Portugal, 1953.
V République, 1963.
Tudesq, A.-J.: Les grands notables en France (1840-49), t. ii, 1964.
Weill, G.: Histoire du parti républicain en France (1814-1870), 1928.
SUIZA
El gobiertio de la República Francesa, formado por c a m i s o n e s del principio
de las nacionalidades, adoptó finalmente, frente a los movimientos nacionales, Bessler, H.: La France et la Suisse de 1848 à 1952, s. d.
una actitud prudente juzgada de manera muy diversa. Una interpretación Dierauer, J.: Histoire de la confédération suisse, 1919.
moderada de la política republicana fue dada por: Helperin, J.: La transformation de la Suisse, prélude aux révolutions (Prima-
Henry, P.: "La France et les nationalités en 1848, d'après les correspondances
vera I).
diplomatiques". Revue historique, t. 186-188, 1939-1940.
Pouthas, Ch.-H.: La politique étrangère de la France sous la seconde Répu- Náf, F.: Der schweizerische Sonderbund als Vorspiel der Revolution von
blique el le second Empire (curso de la Sorbona), 1949. 1848, 1919.
Rappard, W.: 1848-1948. La constitución federal de Suiza, 1948.
3ÜÜ 302
Bibliografía sumaria Bibliografía sumaria

BÉLGICA AUSTRIA

Bartier, J.: 1848 en Belgique (avéra I). Por las razones ya expresadas, algunos libros citados en el rubro a l e m a n u
Dechesne, L.: Histoire économict sociale de la Belgique, 1932. aclaran los problemas estrictamente austríacos; también los estudios consa-
Dessal, M.: Les incidents francqcs en 1848 (Actas). grados a a u s t i u a tratan forzosamente las cuestiones alemanas.
Dhondt, J.: La Belgique en 184&as).
Austria propiamente dicha:
Jacquemyns, G.: Histoire de la économique des Flandres (1845-1850), Endres, R.: 184S en Autriche (Primavera II).
Hantsch, H.: Die Geschichte Oesterreichs, t. u, 1950.
Pirenne, H.: De la révolution û30 à la guerre de ¡914, t. vu, de la KiszHng, R.: Die Revolution im Kaisertum Oesterreichs 1848-1849, 1948.
Histoire de la Belgique, 1932,
Sobre Metternich, dos grandes biografías:
Van Kalken, F.: La Belgique caporaine (1789-1930), 2? edición, 1950. Srbik, H. von: Metternich, der Staatsmann und der Mensch, 2 vols., 1925,
(que se considera equitativo).
Eibl, V.: Metternich, der Dämon Oesterreichs, 193ff (¡muy hostil!).
PAISES BAJOS Sobre las nacionalidades del imperio:

Van Gelder, E.: Histoire des Pms du XVt siècle à nos jours, 1936.
Van der Linden, J.-P.: L'emancin catholique aux Pays-Bas, R. R. C.. HUNGRÍA
1949.

Andics, E.: La France, l'Angleterre et la révolution hongroise de 1848 (Actas).


Benda, C.: La question paysanne et la révolution hongroise (Estudios).
PAÍSES ESCANDINAVOS Eckhart, F.: La révolution de 1848 en Hongrie et la cour de Vienne (Actas).
Eisenmann, L.: La Hongrie contemporaine, 1921.
Hôljer, O.: Le scandinavisme da> passé et dans le présent, 1919. Fejto, F.: La guerre d'indépendance hongroise (Primavera II).
Krabbe, L.: Histoire du Danemats origines jusqu'à nos jours, 1950. Kosary, D.: L'aspect social de la révolution de 1848 en Hongrie (Actas).
Svanstrom, R. y Palmerstierna, : Histoire de Suède, 1944. Makkai, L.: La révolution hongroise de 1848 et sa place dans l'évolution
européenne (R. R. G., 1948).
Spohr, L,: Die geistigen Grundlagen des Nationalismus in Ungarn, 1936.
Stremookhoff, D.: La question allemande et l'intervention russe en Hongrie
ALEMANIA (Actas).
Benaerts, P.: Les origines de la de industrie allemande, 1933.
Benaerts, P.: L'unité allemande, lición, 1965.
Droz, J.: Le libéralisme rhénan, Jición, 1965. . ESLAVOS
Kuczynski, J.: Die Geschichte dere der Orbeier unter dem Kapitalismus,
t. I, 1961.
En general, para los eslavos el lector se remitirá a:
Lütge, F.: Deutsche Sozial ~ urdrtschaftsgeschichte, 2? edición. 1960. Ancel, J.: Slaves et Germains, 1947 (pequeño libro siempre útil), y sobre
Mehring, F.: Geschichte der deun Sozialdemokratie, 6? edición, 1919, todo al gran libro de
(punto de vista socialista). Portal, R.: Les Slaves, peuples et nations (VIII'-XX' siècle), colección Destin
Minder, R.: Allemagnes et Allen, 1948 (el libro maestro de un gran du Monde. 1965.
germanista).
Renouvin, P.: L'Allemagne, l'Ani et l'Italie (1830-1852) (curso en la Checos:
Sorbona), 1939. Denis, E.: La Bohême despuis la Montagne Blanche, 2? edición, 1936.
Schnabel, F.: Deutsche Geschichttl9. Jahrhundert, 4 volúmenes, nueva Husova, M.: L'an 1848 et la évolution sociale de la nation tchèque (Actas).
edición, 1954 (punto de vistaólico y antiprusiano). Klima, A.: La révolution de 1848 en Bohême (Primavera).
Treitschke, H.-. Deutsche Geschick 19. Jahrhundert, t. lU-v, 1885-1894, Krofta, K.: Histoire de la Tchécoslovaquie, 1934.
(punto de vista conservador y rusiano). Léger, L.: La renaissance tchèque au XIX' siècle, 1911.
Vermeil, E.: L'Allemagne, essai äcation, 1946. Macurek, J.: L'année 1848 et la Moravie (Actas).
Sobre los movimientos revolucios, dos libros fundamentales de un Tibal, A.: La Tchécoslovaquie, 1935.
historiador alemán y de un histor francés:
Valentin, V.: Geschichte der deuli Revolution, 2 volúmenes, 1930-31, Eslovacos:
Droz, J.: Les révolutions allemand- 1848, 1957. E>enìs, E.: Les Slovaques, 1917.
3ÜÜ Bibliografía sumaria Bibliografía sumaria 305

h'.síuvo.i dit sur (del Imperio más el principado de Servia): OBRAS G U A D A S EN LA BIBLIOGRAFIA
Haumant, E.: La formaíion de la Yougoslavie, 1930. Q U E TIENEN TRADUCCIÓN EN ESPAÑOL
Markovitch, M.: La révolution serbe de 1848 et les Français (Actas).
Wendel, H.: Der Kampf der Südslaven um Freiheit und Einheit, 1925. Cornu, A.: Carlos Marx. Federico Engels. Del idealismo al materialismo
histórico, Buenos Aires, Platina-Stilcograf, 1965, 703 pp.
Droz, J.: Europa: Restauración y revolución. 1815-1848, en Historia de
POLACOS Europa Siglo XXI, Madrid. Siglo XXI, 1974, 320 pp.
(Las 3 Polonias) Gramsci, A.: El "Risorgimento", Buenos Aires, Granica, 1974, 151 pp.
Historia de lai relaciones internacionales. Publicada bajo la dirección de
Gasiorowska, N.: Le problème social en Pologne en 1846-48 (Actas). Fierre Renouvin, Madrid, Aguilar. T. I, v. 1, 1960; t. II, v. 1, 1964;
Gorieli, B.; La Pologne en 1848 (Primavera II). t. n , v. 2, 1964.
Grappin, H.: Histoire de Pologne des origines à nos'jours, 1934. Schnerb, R.: El siglo XIX, en Historia general de las civilizaciones, t. VI,
Handelsman, M.: 1848 et la question polonaise (R. R. C., 1948). Barcelona, Destino, s.f.
Kienewiez, S.: La question agraire en Pologne en 1848 (Actas).
Sobieski: Histoire de la Pologne des origines à nos jours, 1934.

RUMANOS
(Transilvania y provincias danubianas)

Emerit, M.: Les paysans roumains despuis le traité d'Andrinople jusqu'à la


libération des terres (1829-1864), 1937.
Makkai, L.: Histoire de Transylvanie, 1946.
Roller, M.: Les Roumains en 1848 (Primavera II).
Seton-Watson, R.-W.: Histoire des Roumains, de l'epoque romaine jusqu'à
la achèvement de l'unité, 1937.

ITALIA

Bolton-King, H.: Histoire de l'unité italienne, 2 vols. 1901.


Bourgin, G.: La formation de l'unité italienne, 1929.
Bourgin, G.: L'œuvre sociale de la république romaine de 1849 (Actas).
Boyer, F.: La Marine de la seconde République et la révolution sicilienne
de février à juillet 1848 (Actas).
Boyer, F.: La seconde République et Charles-Olbert en 1848, 1967.
Cantimori, D.: 1848 en Italie (Primavera I).
Croce, B.: L'Italie comtemporaine, 1929.
Ferrari, A.: L'Italia durante la Restaurazione (1815-1849), 1935.
Ghisalberti, A.-M.: L'archive de la légation des Pays-Bas auprès du Saint-
Siège el son importance pour l'étude des événements de 1848 (Actas).
Gramsci, A.: Il Risorgimento, 1955.
Jacini, S.: Liberté, indépendance, unité dans l'Italie de 1848 (Actas).
Morelli, E.: Mazzini et la révolution de 1848 en France (Actas).
Salvo, M.: 1848^ et l'Italie (R. R. C. 1848).
Valsecchi, F.: L'intervention française et la solidarité révolutionnaire inter-
nationale dans la pensée des démocrates lombards en 1848 (Actas).
Vidal, C.: La France et la question italienne en 1848 (Estudios).

C o m o conclusion, se leerá el artículo de:


Renouvin, P.: L'idée d'Etats-Unis d'Europe pendant la crise de 1848 (Actas).

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