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Asignatura:

Historia Dominicana III


Tema:
Las Raíces Dominicana de la Doctrina de Monroe
Elaborado por:
Yicaury Álvarez Fernández
Matricula:
100352008
Sección:
10
Presentado A:
Silverio González
Fecha:
03-11-2018
Introducción

A continuación le vamos a estar hablando sobre los orígenes de la doctrina de


Monroe a los de la dependencia Dominicana, el autor pedro Mir se enfrenta en
un recorrido incalculablemente largo a través de la historia de dos países, los
Estado Unidos de América y la Republica Dominicana, tonto en su desarrollo
interno como en sus relaciones con el exterior.

Dos grandes líneas se advierten en el proceso simultáneo. Una línea


colonialista que se remonta a los primeros tiempos de la vida histórica de
ambas naciones y que concluye en Santo Domingo en 174, época en que
Estado Unidos abandono sus empresas de naturaleza colonial en Santo
Domingo.
Las raíces dominicana de la doctrina de Monroe

Para 1972 cuando el autor Pedro Mir concluye esta obra, la Republica
Dominicana era un país atrasado, pero allí se inventó el ingenio de azúcar y
con él se puso marcha, la primera industria del continente, la industria
azucarera, en decir, que era ya un país industrial capaz de erigir los más
hermosos palacios de España, cuando la nación más altamente industrializada
de este continente, en la actualidad, los Estados Unidos distaban mucho
todavía de llevar a cabo su primera operación comercial de importancia.

Los adelantos de la isla de Santo Domingo pusieron en marcha un argumento


de desarrollo que según el autor Pedro Mir expande la fama de un país tan
pequeño y con menos población que algunas ciudades del México.

Pedro Mir dice que la Republica Dominicana está desconocida en la


actualidad, que mucha correspondencia se desvía y llega a una Antillas más
pequeña de nombre parecido, dominicana cuya capital Roseau tenía 10 mil
habitantes en 1960.

Los comerciantes se quejaban inútilmente de los trastornos que le ocasiona el


desconocimiento de la una y de la otra Antillas, en muchas de las importantes
oficinas de correos del mundo.

Es necesario señalar que esta obra de Pedro Mir fue publicada en 1974, lo que
quiere decir que muchas apreciaciones sobre conocimientos y datos
institucionales, económicos, sociales y jurídicos han cambiado a nivel local y
en las publicaciones de la época. Pedro Mir percibe algunos aspectos sobre
esta pequeña Antillas. Para el, es probable que la aparente apatía de los
autores respecto a esta pequeña Antillas se debe a su pequeñez y a su atraso
económico, con las consecuencias que particularmente esto último con lleva.

En la lectura el autor Pedro Mir hace una explicación sobre la base del
argumento que se desprende del tipo de estudio, conocido y orientado al
problema de la dependencia.
El hecho de que la independencia oficialmente reconocida en la Republica
Dominicana, fue proclamada en 1844 y que la revitalización de la doctrina de
Monroe haya tenido lugar en 1845, revela que no estamos en presencia de una
coincidencia ni de un artificio. Es que ambas estaban sumergidas en un mismo
proceso histórico mundial y a cada una le correspondía un papel en ese
proceso que forzosamente tenía que establecer una relación de intimidad y de
secreto entre las dos.

Los argumentos y formas de aplicación de la doctrina de Monroe, suscita


cierta opinión al respecto, que se reconoce en la raíz misma de las relaciones y
procedimiento jurídicos, legales, institucionales y formales.

Según Pedro Mir, es posible que la raíz de estas relaciones haya que buscarlos
en el desarrollo de la industria como base del desarrollo social en un momento
dado. Por qué el fenómeno de la dependencia parte de un punto determinado
del desarrollo industrial. En su forma estrictamente etimológica todo país
depende de otro. Los países altamente industrializados dependen de las
materia prima de los no industrializados.

Por su parte, Santo Domingo que inaugura en este continente la producción


industrial, muy pronto cayo en el marasmo económico más dramático del
continente y en particular del caribe, lo que hizo a esta Antillas
particularmente sensible al despliegue de la acción de las potencias
industriales en el área.

Los planteamientos críticos que surgen de esta lectura obligan a conocer los
usos de la misma por países como España, Francia, Inglaterra y otras
metrópolis, siendo algunos de sus embajadores responsables de sus logros y
desaciertos.

En el tercer capítulo del libro en cuestión, titulado la primera acción oficial de


la doctrina de Monroe, el autor ofrece la siguiente explicación:

El esquema de las fuerzas que gravitaban sobre los hombres de la nacionalidad


dominicana desde los días de su independencia en 1844, se vio profundamente
alterado en 1861 con el desembarco de tropas Españolas. Las potencias
Europeas, mejor dicho Inglaterra y Francia, dan un extraño paso y le dejan el
campo abierto a un débil rival, España. Estados Unidos y Haití contemplan,
circunstancialmente maniatadas el acontecimiento.

El autor Pedro Mir le agrega a dicha explicación un complemento informativo


más, mostrando la correlación de fuerzas en el país, y en aquel momento:

Las fuerzas populares en el interior del país quedan momentáneamente


paralizadas por la sorpresa, la rapidez y la astucia con que fue preparada y
llevada a cabo la operación. El resultado de esta combinación de
circunstancias resulta en la aniquilación del proceso de independencia y la
subyugación del pueblo dominicano por una potencia Europea.

Pedro Mir no cree que dicha situación podía desafiar el mensaje de la doctrina
de Monroe, pues dicho documento respaldaba las acciones y formulas
llevadas a cabo en el citado caso.

En el capítulo V de las raíces dominicana, titulado “Cuando mueren las


doctrinas”, el autor refiere una serie de contextos históricos y críticos sobre la
llamada doctrina Monroe. El comportamiento de dicha doctrina asegura un
predominio imperial cuyo operante principal es el poder de algunas metrópolis
que en el siglo XIX, hacían las funciones de un imperio.

El autor pasa de un argumento puntual a un argumento complementario,


afirmando que:

De contradicción en contracción fue mudando de piel, hasta convertirlo en su


contrario. Y fue así como habiendo empezado por afirmarse en Santo
Domingo, empezó igualmente a negarse en santo Domingo.

La dialéctica histórica que le sirve de apoyo metodológico al autor Pedro Mir,


pone en claro todo este recorrido en el espacio crítico de lo social. Y así las
condiciones y contradicciones que funcionan como activadores ideológicos de
la doctrina Monroe crean también sus ramajes políticos.

Los dos grandes momentos en el sentido de que configuran y establecen el


curso histórico de esta doctrina son: uno, la propuesta del secretario de Estado
Seward, así como de los embajadores Preston y Perry en España, a propósito
de la anexión de Santo Domingo en 1861, y el otro, el Corolario Roosevelt, en
ocasión de la incautación de las aduanas de Santos Domingo en 1905.

Esto antecedente originó, la primera ocupación Norteamericana a Santo


Domingo y sus consecuencias económicas, políticas y sociales.
Conclusión

En mi opinión la doctrina Monroe ha sido para los Estados Unidos un


instrumento de dominación que se ha potenciado en los momentos en que
aquel país ha percibido posibilidades de expansión por parte de otras potencias
extra continentales.

En principio se usó para ponerle freno a la santa alianza o Inglaterra y para


favorecer las aspiraciones territoriales norteamericanas en nuestro hemisferio.

Finalmente, durante la guerra fría, fue instrumento idóneo para frenar la


posible influencia soviética en el ámbito latinoamericano.

Toda la discusión apoyada en lo referente a discusiones financiera, políticas y


jurídicas, ha revelado hasta hoy, los obstáculos que produjo la primera
ocupación norteamericana de 1916.

Así en virtud se escuchó como un resuello la evolución de la doctrina Monroe.


Durante algunos momentos se discutió si era posible invocar los términos de
la doctrina de Monroe para ponerlo a las supuestas intenciones de la unión
soviética u otra potencia extra continental que pudiera estar explicada en
aquella rebelión dominicana.

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