Originalmente llamada ‘Amores Perros’ es una película de drama y suspenso,
pues su musicalización el aspecto de los personajes, las historias permiten identificar rápidamente su género, con una duración de 2 horas y 33 minutos, realizada en el año 2000 en la ciudad de México, dirigida por Alejandro González Iñárritu y también como productor junto a Guillermo Arriaga. El reparto de este film se le atribuye a Goya Toledo, Álvaro Guerrero, Jorge Sanilas, Gael García Bernal, Vanessa Bauche, Rodrigo Murray y Marco Pérez. EL público destinatario sin duda alguna es para adultos y adultos mayores, puesto que contiene contenido agresivo y obsceno, sus escenas son contundentes y su vocabulario es bastante popular, por lo que todo lo que nos brinda Amores Perros no es apto para todas las personas. La película cuenta con tres historias donde se enmarca a Octavio y Susana, Daniel y Valeria, EL Chivo y Maru, las cuales cada una permitirá distinguir lo que es el amor, los problemas, la avaricia y el deseo e individualmente la traición. Es audiovisualmente al principio algunas calles parecen algún lugar de Estados Unidos, hay calles muy parecidas a otras películas que son originales de EEUU, pero solo es en algunas escenas, considero que las voces, el acento de los actores y actrices es bastante colaborativo, la película promueve a identificar varios temas, así que en cada fase se puede interpretar de la película variedad de cosas, pero principalmente como su título lo dice el amor hacia una persona, el deseo. El título de la película es sumamente coherente con las escenas, pues hace referencia a que el amor es difícil, da golpes y hace realizar cosas que jamos teníamos en mente que seriamos capaces de realizar, tiene una buena conjugación con el género drama y suspenso, principalmente cuando uno lee Amores Perros lo primero que piensa es en el drama que se someterá en todo el film acerca de las relaciones amorosas. El sonido de la película nos permite realizar una buena comprensión de la intencionalidad de la narrativa y el dialogo en cuanto a la musicalización y las voces, así como los momentos de silencio nos llevan a sentir tensión y tener expectativa de lo que sucederá en el momento, aunque dichos silencios pueden ser en su momento obvios y ya uno sabe que continuara después de ello, sin embargo las imágenes de este film son fuertes, detallistas y se puede decir bonitas de acuerdo al espacio y su mensaje, el contorno se adhiere a los personajes con una destreza y sutiliza impecable, gracias a la actuación de cada actor y actriz se llega al efecto de la preocupación, tristeza, angustia, rabia, pues cada personaje se logra diferenciar e identificar por su aspecto, postura, mirada y su manera de hablar y decir sus líneas. La película para mi gusto es mala, a pesar de ciertas aclaraciones por parte de Alejandro, director y productor, acerca de que los perros no sufrieron ningún daño en ninguna escena donde salen violentados y agrediéndose, para mí son escenas fuertes y realmente no soy partidaria de ello así sea en actuación, sin embargo es una película muy bien dirigida, tiene los principios de entretener, quizás educar y satisfacer al público, aunque muchas escenas son muy movidas en cuanto a la cámara, cansa ver el tratamiento de la cámara de esa manera, pero todo tiene un objetivo y creo que era hacerlo como más real, sin tanta producción en programas digitales. Alejandro González Iñárritu y Guillermo Arriaga supieron cómo llegar a su público especifico, lograron su cometido y supieron regalar unas buenas historias, juntando lo que es el amor perruno y el amor humano.