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Bilingüismo y Cerebro
Bilingüismo y Cerebro
Resumen. Se revisan someramente las políticas europeas y locales para entender lo que se
pretende alcanzar con el bilingüismo en el campo educativo; se mencionan algunos concep-
tos que se refieren al aprendizaje de una segunda lengua como método didáctico, para, final-
mente, revisar los procesos neuropsicológicos que intervienen en el bilingüismo.
Implicaciones para la enseñanza de una segunda lengua.
Palabras clave: enseñanza segunda lengua, aprendizaje y adquisición bilingüe, neurocien-
cias de la educación, neuroplasticidad, cerebro bilingüe.
Abstract. In this paper, local and European education policies concerning bilingualism are
reviewed. A number of concepts are used regarding the learning of a second language as
educational method. Then, neuro-psychological processes underlying bilingualism are
reviewed. Finally, their implications for learning a second language are addressed.
Key words: second-language training, bilingual learning and acquisition, educational neuro-
sciences, neuro-plasticity, bilingual brain.
como en otros países, un replanteamiento de los sis- Tampoco tienen claras las reglas de combinación,
temas educativos de enseñanza de las lenguas sino que despliegan un “sentido o intuición” de lo
extranjeras. correcto. Otras formas de llamarlo serían aprendiza-
En este sentido, desde el Ministerio de Educación je implícito, aprendizaje informal o natural.
(MEC) y, posteriormente, desde las distintas La otra forma de alcanzar la competencia bilingüe
Comunidades Autónomas se han ido elaborando es aprendiendo la lengua. En este proceso el alum-
proyectos para la optimización del aprendizaje de no está consciente de las reglas de construcción y
lenguas extranjeras. La iniciación en la Educación uso y puede hablar de ellas (reglas gramaticales).
Infantil y la incorporación de una segunda lengua en Sería un tipo de aprendizaje explícito y formal.
Educación Primaria son algunas de estas propuestas, Algunos teóricos han asumido que los niños adquie-
que incluye un importante cambio metodológico ren y los adultos aprenden, pero esta hipótesis sos-
con la adopción del sistema bilingüe de enseñanza tiene, además, que la habilidad para adquirir una
en los centros educativos públicos. Esta última ini- segunda lengua no desaparece con la pubertad. Lo
ciativa implica que el personal docente acredite el cual no significa que los adultos podrán acceder
adecuado conocimiento del idioma que va a impar- como lo hacen los niños; por ejemplo, corregir una
tir, donde normalmente debe realizar una prueba de frase errónea se asume como la vía para que el alum-
práctica oral que certifique su aptitud, pero que en no repita el enunciado correctamente, pero las inves-
ningún caso incluye un acabado conocimiento de la tigaciones en la adquisición infantil de la lengua
didáctica ni de los procesos neuropsicológicos que materna muestran que los padres corrigen una por-
subyacen. La escasez de este tipo de profesorado ción muy pequeña de ese lenguaje (problemas de
han convertido la aplicación de esta metodología en articulación ocasionales, tiempos verbales…y pala-
una carga adicional de formación docente que inclu- brotas). Los padres atienden mucho más al conteni-
ye cursos, seminarios e incluso, estancias en centros do de verdad en la expresión verbal que a la forma,
educativos europeos y un importante problema de en un intento constructivo de invitar –sobretodo– a
formación para las autoridades educativas. la comunicación.
Continuando con la idea inicial de considerar las De modo que, los dos aspectos mencionados
aportaciones de la neurociencias en este campo, intervienen de maneras específicas: la adquisición
conviene resumir algunos conceptos que se refieren “inicia” nuestras emisiones en la segunda lengua y
a la propia didáctica de una segunda lengua. es responsable de la fluidez; el aprendizaje sólo
tiene una función: es el editor que corrige antes o
después de que sea “producido” por el sistema
Adquirir o aprender una segunda lengua adquirido.
Krashen da gran importancia, además, a la hipó-
Stephen D. Krashen, teórico de la didáctica bilin- tesis del input, por su aplicabilidad e impacto en la
güe, cree que la hipótesis adquisición-aprendizaje es enseñanza. La pregunta es, naturalmente, ¿entonces,
fundamental para entender los fenómenos básicos cómo adquirimos una segunda lengua? Continuando
que se dan en la práctica docente. Establece que los con el argumento anterior, la adquisición sería cen-
adultos pueden acceder a dos formas distintas e inde- tral y el aprendizaje sólo periférico, de modo que la
pendientes en el desarrollo de la competencia bilin- pedagogía de una segunda lengua debería estimular
güe. La primera es la adquisición, proceso similar, precisamente la adquisición. Si es así, para avanzar
sino idéntico, a la forma en que los niños desarrollan de un nivel ya adquirido a otro superior, es decir, del
la habilidad de su lengua materna: no son conscien- actual competencia a la siguiente, una condición
tes de que están adquiriendo una lengua sino de que necesaria (pero no suficiente) sería que el alumno
están utilizando el lenguaje para comunicarse. comprendiera el input que contiene, en parte, len-
guaje ya dominado y otra porción del nivel lingüís- llo –de fácil acceso para los profesionales no espe-
tico siguiente. Aquí comprender significa que el cializados– con el objetivo de “estimular la colabo-
alumno se centra en el significado y no en la forma ración de las ciencias del aprendizaje y del cerebro,
del mensaje, haciendo un esfuerzo por integrar lo por una parte, y de investigadores y políticos, por la
adquirido con la entrada de la nueva información. otra”.
Aunque Krashen y Vygotsky pueden ser categori- Se trata de considerar aquellos avances neuro-
zados en posiciones muy distintas –uno es un teóri- científicos en funciones tales como la percepción,
co de la didáctica de una segunda lengua, el segun- cognición y emoción relevantes para el desafío de
do psicólogo–, incluso en lo concerniente a sus posi- aprender, no como una solución definitiva sino para
ciones epistemológicas, las aplicaciones de sus teo- contribuir con nuevas perspectivas desconfirmando,
rías a la práctica de la enseñanza comparten simili- a su vez, antiguas creencias.
tudes. De acuerdo con Vygotsky, la interacción En el presente número de esta revista se incluye el
social es indispensable en el proceso de aprendizaje trabajo del Prof. Rodríguez Santos (“Neurociencia y
y propuso así la zona de desarrollo próximo, como Educación”), donde se hace un análisis detallado de
elemento donde los aprendices construyen el len- los procesos y funciones cerebrales que permiten el
guaje –y todo aprendizaje– mediado por la interac- aprendizaje. Aquí nos remitimos a su exposición y,
ción social. De forma similar a la que propone al mismo tiempo, subrayamos algunos conceptos
Krashen. Según éste, su hipótesis predice que el aula relevantes para la comprensión del bilingüismo.
puede ser el entorno por excelencia para la adquisi- El cerebro cambia continuamente a lo largo del
ción de una segunda lengua, por lo menos hasta un ciclo vital, guiado por la propia biología y la expe-
nivel intermedio. Para los principiantes el aula riencia. Las tendencias genéticas interactúan con
puede ser más apropiada que el mundo real, ya que esa experiencia para determinar la estructura y fun-
ésta les proporciona inputs poco comprensibles y, ción del cerebro en un momento dado, por ello cada
por tanto, desmotivantes. De este modo, en el aula cerebro es único y de allí la importancia de conside-
sería posible establecer una hora diaria de inputs rar las diferencias individuales en la enseñanza.
accesibles (zona de desarrollo próxima), que proba- Además, dispone de unas características precisas
blemente sea más adecuada que lo que el aprendiz relacionadas con la edad –cambios madurativos que
puede encontrar en su entorno cotidiano. guían el desarrollo– y que pueden tener importantes
Otro aspecto que subraya con especial interés es consecuencias para el diseño didáctico más apropia-
el filtro afectivo, que relaciona con el proceso de do y eficaz.
adquisición de una segunda lengua. Hay una serie de El cerebro aprende, porque es flexible y dispone
variables afectivas determinantes en el logro de la de una potente capacidad para responder a las
adquisición de una segunda lengua, que para el psi- demandas del entorno. Lo hace creando y consoli-
cólogo educativo ya son cuestiones sabidas: la moti- dando conexiones neurales relevantes mientras eli-
vación, como proceso integrado con la cognición y mina las inútiles (“poda”). Este aspecto es familiar a
la confianza en sí mismo o autorregulación, rela- los enseñantes, quienes han comprobado prácticas
cionada también con el control de la ansiedad (ya como la de aprender haciendo. Este idea responde
sea ésta individual o colectiva). a la implicación activa (funcionalidad) de los apren-
dices en la interacción con su entorno social y mate-
rial, basado en la idea de que esta forma de aprendi-
Bilingüismo y funcionamiento cerebral zaje conduce a una integración más profunda de la
información que la mera percepción. Más adelante
En 2007, la Organización para la Cooperación y veremos la importancia de esta idea en el aprendiza-
el Desarrollo (OECD) publicó un extenso cuaderni- je bilingüe, sobretodo a edades tempranas.
en primer lugar para disponerse al aprendizaje de entre las edades de 2-9 años logran los fundamentos
una nueva (“hold-back approach”). Algunos de ellos sintácticos y morfológicos de la nueva lengua en el
son los siguientes y se distinguen por pertenecer a lo primer año, siempre y cuando sean expuestos de
que se ha dado en llamar “ la paradoja del bilingüis- forma extensiva y sistemática en contextos diversos
mo” y que revisamos en el apartado si-guiente. y múltiples. (3) Los niños expuestos a dos lenguas
– A mayor desarrollo de una nueva lengua hay desde el nacimiento adquieren los hitos de desarro-
pérdida de la ya adquirida. llo lingüístico en cada una de ellas al mismo tiempo
– Dos lenguas ocupan áreas separadas en el y de forma similar a los monolingües. (4) La intro-
cerebro, por lo que el conocimiento no puede ducción de una nueva lengua no daña ni contamina
ser transferido. a la lengua materna.
– El aprendizaje simultáneo de dos lenguas en la En la misma revisión se analiza el procesamiento
infancia retrasa el desarrollo del niño. fonológico del niño con una media de edad de 3
– Se debe alcanzar el dominio de la lengua meses. En tareas que implican percepción visual,
materna antes de comenzar el aprendizaje de reconocimiento del habla y percepción fonética en
una segunda. nativos y no nativos, a través de una técnica no inva-
– Los niños bilingües disponen de una mayor siva: Espectrografía de Infrarrojos Cercano (NIRS) .
capacidad intelectual (CI). Se encuentran resultados consistentes en la activa-
ción de las áreas de lenguaje ya conocidas, tanto en
bebés mono y bilingües.
Hallazgos de las neurociencias en el cerebro En los estudios de adultos se investigó el impac-
bilingue to de la edad en adultos bilingües a través de la tec-
nología de imagen (fMRI, imagen por resonancia
En una cuidadosa revisión llevada a cabo por L. magnética funcional). Los adultos bilingües que
Pettito y K. Dunbar, los investigadores en esta área adquirieron dos lenguas antes de los 5 años, proce-
han examinado el impacto en el niño al adquirir una san ambas en áreas del lenguaje que se solapan en
segunda lengua. Dos clases de hipótesis han domi- el hemisferio izquierdo y que coinciden con las
nado este campo de investigación: el sistema unita- áreas del lenguaje activadas en monolingües. Los
rio del lenguaje donde se cree que los niños expues- expuestos más tardíamente muestran más activación
tos a dos lenguas desde el inicio disponen de una bilateral, que ocupa tejido frontal más extensamente
representación linguítica “fusionada” (no saben que distribuído (memoria de trabajo e inhibición) y fre-
están adquiriendo dos lenguas) y comienzan a dife- cuentemente surge más esfuerzo cognitivo, medido
renciarlas alrededor de los 3 años, lo que implica un por el número de errores.
retraso en el desarrollo lingüístico. A diferencia del Para comprobar la existencia de períodos sensi-
sistema diferenciado del lenguaje que permitiría a bles se comprobó la eficacia del dominio bilingüe en
los niños bilingües diferenciar los inputs linguísticos función de la edad de inicio. Este dominio dismi-
correspondientes a las dos lenguas desde el inicio de nuía significativamente si el aprendizaje de una
su exposición a una segunda lengua. segunda lengua se iniciaba en la pubertad, o aún
Para entender a qué edad comienza esa diferen- antes. Este es un hallazgo que corrobora una aporta-
ciación se investigó en diversos grupos cuya prime- ción clásica de la psicolinguística.
ra exposición se realizó en el momento del naci- Para comprobar si los niños bilingües muestran
miento y a las edades de 3, 5, 7 y 9. Se encontró que: mejor capacidad intelectual, se investigó en los pro-
(1) antes de los 5 años la exposición linguística es cesos cognitivos de niños bilingües entre 4 y 6 años
óptima para el desarrollo bilingüe y su dominio. (2) comparados con monolingües de la misma edad. Se
Los niños monolingües de nacimiento y bilingües encontró que los niños expuestos a un entorno bilin-
güe desde el nacimiento desplegaban una “ventaja materna, así como en el procesamiento neural del
cognitiva” relacionada con el control atencional, cerebro. Asimismo, los niños que llegan más tarde
inhibición y flexibilidad cognitiva (switching tasks). al contexto bilingüe también consiguen el dominio
De modo que ser bilingüe facilita la ejecución de en la nueva lengua, siempre y cuando se vean
multitareas. expuestos a entornos linguísticos sistemáticos y
Como síntesis, tanto en estudios comportamenta- múltiples, que implican el hogar y la comunicación
les como de imagen cerebral, la exposición a un social, de modo que no es posible alcanzar un aca-
entorno bilingüe muestra un impacto significativo bado bilingüismo exclusivamente en el aula.
en el dominio simultáneo de dos lenguas. Se subra-
ya el resultado positivo en distintos aspectos del des-
arrollo del niño: lingüístico, cognitivo y en tareas de Referencias
lectoescritura (que aquí no se incluyen).
Los niños que experimentan una exposición tem- Bialystok, E. (1999). Cognitive complexity and
prana, sistemática y extensiva a dos lenguas, rápi- attentional control in the bilingual mind. Child
damente logran el dominio de sus aspectos básicos Development, 70, 636-644.
de un modo idéntico a aprendices monolingües. Boletín de la Unión Europea. Suplemento 5 (1995).
Como adultos , además, procesan las dos lenguas de El libro blanco sobre educación y formación.
una manera similar a los adultos monolingües. Enseñar a aprender: hacia la sociedad del cono-
cimiento. CERI.
Dulay, H. y Burt, M. (1977). Viewpoints on English
Implicaciones para la enseñanza as a second language. NY: Regents.
y la investigación Houwer, Annick de, (1996). Bilingual language
acquisition en Fletcher, P. Y Mc. Whinney, B.:
Aunque en el mundo real el bilingüismo en el The Handbook of Child Language. Blackwell.
niño no es habitualmente simultáneo y equilibrado, Vygotsky, L. (1979). El desarrollo de los procesos
restan algunas conclusiones inequívocas. psicológicos superiores. Ed. Grijalbo, Bar-celona.
El estudio de los niños bilingües puede contribuir OECD. (2007). Understanding the brain: the birth
en importante proporción a las teorías de la adquisi- of a Learning Science. CERI.
ción, ya que la adquisición bilingüe esclarece los lími- Pettito, L., Dunbar, K. (2004). New findings fron edu-
tes en la adquisición del lenguaje y, al mismo tiem- cational neuroscience on Bilingual Brains, Scientific
po, nos muestra el potencial de aprendizaje lingüísti- Brains and the Educated Mind. En K. Fischer & T.
co en edades tempranas (Houwer, Annick de, 1996). Katzir (Eds.), Building Usable Knowledge in Mind,
La edad de exposición al bilingüismo es un factor Brain and Education. CUP, 2004.
que impacta de forma directa y clara en el logro de Stephen D. Krashen (1995). Principles and practice
la fluidez lingüística y la lectura en la lengua no in second language acquisition. OUP, 1995.
Manuscrito recibido: 09/10/2009
Revisión recibida: 17/11/2009
Manuscrito aceptado: 27/11/2009