Está en la página 1de 4

¿Cómo el cerebro hace posible el leguaje?

El lenguaje es el medio que utilizamos para expresarnos, para comunicar nuestros


pensamientos y también para recibir, analizar, criticar, y compartir los pensamientos de otros;
por lo cual es absolutamente necesario que ocurra el proceso de socialización.
El lenguaje humano es una sistema complicado de símbolos que nos traen a la mente
imágenes mentales de los objetos que representan, y por ello, tener un leguaje rico permite
tener un pensamiento mucho más amplio al lograr interpretar todos los símbolos que nos
llegan a través de las expresiones de otros (oral o escrito) y expresar nuestras propias ideas
de modo entendible y coherente.
El lenguaje está representado en múltiples áreas del cerebro haciendo posible que se procese
la información de manera adecuada para entender tanto lo que se está recibiendo como lo que
se está emitiendo, interviniendo áreas características del cerebro definidas por:
 Áreas de Brodmann: Es la subdivisión cerebral realizada por investigador Korbinian
Brodmann (1868-1918) y representada en un mapa el cual está clasificado en más de 40
zonas como se muestra a continuación:
De acuerdo a la anterior división, se pueden distinguir las siguientes zonas:
 Corteza Somatosensitiva primaria (1, 2, 3)
 Área Psicosomestésica (Área Sensitiva Secundaria) (5 , 7)
 Área Premotora y Área Motora Suplementaria (6)
 Área Prefrontal (Asociación Terciaria) (9, 10, 11, 12)
 Área Visual Primaria (17)
 Área Psicovisual o Área Visual Secundaria (18, 19)
 Corteza del Lóbulo Temporal (20 y 21)
 Área Psicoauditiva (22)
 Área Límbica (23, 24, 29, 30, 35, 28)
 Corteza Olfatoria (28, 34)
 Área de Wernicke (39, 40)
 Área del Esquema Corporal (39 , 40)
 Corteza Auditiva Primaria (41, 42)
 Área Gustativa (43)
 Área de Broca del lenguaje expresivo (44, 45)
Siendo las más importantes para el desarrollo del lenguaje desde el punto de vita cerebral,
las áreas de Wernicke (AB 39,40) y de Broca (AB 44,45)
 Área de Wernicke: llamada así en honor a Karl Wernicke (1848-1905), neurólogo y
psiquiatra alemán conocido por sus estudios sobre la afasia (alteraciones de la expresión
y/o la comprensión causadas por trastornos neuronales) es una zona de la corteza cerebral
que está localizada en la parte posterior de la circunvolución temporal superior del lóbulo
temporal, en el hemisferio cerebral izquierdo (en el 90% de las personas). El área de
Wernicke es una de las dos áreas del cerebro humano que participa del funcionamiento
del lenguaje humano y desempeña un papel clave en la comprensión del lenguaje hablado
y escrito y en conjunto con el área de Broca participan de la producción motora-sintáctica
y comprensión del lenguaje humano están unidas y sincronizadas por un haz de fibras
axónicas conocido como fascículo arcuato. (Neuroaprendizaje, 2017)
 Área de Broca: Se llama así en honor al médico francés Paul Pierre Broca (1825-1880),
quien la describió en 1864, después de varios estudios post-mortem de pacientes afásicos
que presentaban un grave daño en esa región. El área de Broca es área del cerebro
humano involucrada en la producción del habla, el procesamiento del lenguaje y la
comprensión. Aunque tradicionalmente se la ha asociado con la producción del habla,
hoy parece que no es esa su función concreta. No hay que olvidar que, pese a la
importancia de esta área en el habla, no se puede hablar en términos absolutos. (Homo,
2015)

Lateralización del lenguaje

Los dos hemisferios del cerebro están especializados en distintas funciones, por lo cual
se habla de lateralidad cuando estas funciones están centradas en uno de ellos y en este
caso el lenguaje está controlado por el hemisferio izquierdo en la mayoría de la población,
con pequeñas diferencias entre personas diestras y zurdas, Aproximadamente, el 95%
de los diestros tiene localizado el lenguaje en el hemisferio izquierdo y sólo un 5%
en el hemisferio derecho. En cambio los zurdos, el 70% lo tiene representado en el
hemisferio izquierdo, un 15% en el hemisferio derecho y un 15% en forma bilateral.
(González & Hornauer-Hughes, 2014)
El sexo influye en la representación cerebral del lenguaje. Las mujeres lo tienden
a tener en forma bilateral. En cambio, en los hombres está más lateralizado a izquierda.
Esta distribución repercute en la incidencia de la afasia. Este trastorno es más
frecuente en hombres que en mujeres en una relación de 2 a 1. (González & Hornauer-
Hughes, 2014)
La escolaridad es otra variable que determina la lateralización del lenguaje en las
personas. Los sujetos diestros con mayor escolaridad tienen el lenguaje más
lateralizado a izquierda. Por el contrario, los sujetos con baja escolaridad tienden a
tener una representación bilateral del lenguaje; por lo tanto, la incidencia de afasia
cruzada es mayor en estos sujetos. (González & Hornauer-Hughes, 2014)
La edad es otro aspecto que influye en la organización del lenguaje en el cerebro (2,5).
Se ha planteado que al momento de nacer el lenguaje estaría representado en forma
bilateral. Lo primero que se lateraliza a izquierda es la porción anterior, la que está
relacionada con la expresión, y en etapas más tardías lo hace la región posterior,
relacionada con la comprensión. Esto explicaría la razón por la cual, en las personas más
jóvenes la afasia más frecuente es la de Broca y en los sujetos más añosos, la de
Wernicke. Existe una diferencia aproximadamente de 10 años entre ambos tipos de
afasia. (González & Hornauer-Hughes, 2014)

Referencias

González, R., & Hornauer-Hughes, A. (Abril de 2014). Cerebro y lenguaje. Chile.


Recuperado el Julio de 2017, de
https://www.redclinica.cl/Portals/0/Users/014/14/14/Cerebro_%20y_lenguaje.pdf
Homo, P. d. (09 de Agosto de 2015). Area de Broca: filogenia y ontogenia. Recuperado el
Julio de 2017, de http://psicobiologiadelgenerohomo.blogspot.com.co/2015/08/area-
de-broca-filogenia-y-ontogenia.html
Neuroaprendizaje. (2017). Estrategias de desarrollo de las areas cerebrales en la
educacion. Recuperado el Julio de 2017, de https://neuropedagogiau-
4.jimdo.com/ocho-estrategias-para-el-funcionamiento-del-cerebro/historia-del-area-
de-wernicke/

También podría gustarte