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Con este proceso se puede soldar con o sin material de aporte. El metal de aporte es agregado
para cubrir biseles y orificios.
A medida que la llama se mueve a lo largo de la unión, el metal base y el metal de aporte se
solidifican para producir el cordón.
Al soldar cualquier metal se debe escoger el metal de aporte adecuado, que normalmente
posee elementos desoxidantes para producir soldaduras de buena calidad. En algunos casos
se requiere el uso de fundente para soldar ciertos tipos de metales.
Ventajas:
El equipo es portátil, económico y puede ser utilizado en toda posición.
El proceso oxigas es normalmente usado para soldar metales de hasta ¼” de espesor. Se
puede utilizar también para metales de mayor espesor, pero no es recomendable.
Su mayor aplicación en la industria se encuentra en el campo de mantención, reparación,
soldadura de cañerías de diámetro pequeño y manufacturas livianas. También puede ser
usado como fuente de energía calórica para doblar, calentar, forjar, endurecer, etc.
Tipos de llamas
De la boquilla sale una llama, la llamada llama oxiacetilénica, en la que se distinguen zonas
claramente diferenciadas. Dependiendo de la proporción gaseosa, existen tres tipos de llamas,
como vemos en la siguiente figura.
Llama neutra: es la más utilizada, ya que es la que se logra cuando se suministra suficiente
oxígeno para realizar la combustión de todo el acetileno presente. Es, además, la más
aconsejable para conservar las propiedades del material. Se usa para soldar hierro fundido,
acero maleable, acero suave, bronce, acero inoxidable y acero al cromo con 12%.
Llama oxidante: la proporción de oxígeno en la mezcla es mayor que la de acetileno. Se
reconoce por su cono interno y penacho más cortos, así como por su sonido más agudo. Se
usa para latón con grandes porcentajes de zinc y aleaciones de bronce.
Llama reductora: con exceso de acetileno, se reconoce por una zona intermedia reductora
(penacho de acetileno) que aparece entre el cono y el penacho azul. Se utiliza solamente en
casos particulares para soldar aceros al carbono, aceros fundidos y sus aleaciones, aluminio
fundido y aceros especiales.
Protocolos de seguridad
Equipos de protección personal
Es significativo el riesgo de quemaduras ; para prevenirlas, los soldadores deberán usar ropa
de protección, así como guantes de cuero gruesos y chaquetas protectoras de mangas
largas para evitar la exposición al calor y llamas extremos.
Asimismo el brillo del área de la soldadura conduce puede producir la inflamación de la
córnea y quemar la retina.
Los lentes protectores y el casco de soldadura con placa de protección protegerán
convenientemente de los rayos UV.
Quienes se encuentren cerca del área de soldadura, deberán ser protegidos mediante cortinas
translúcidas hechas de PVC, aunque no deben ser usadas para reemplazar el filtro de los
cascos.
Exposición a humos y gases
También es frecuente la exposición a gases peligrosos y a partículas finas suspendidas en el
aire. Los procesos de soldadura a veces producen humo, el cual contiene partículas de varios
tipos de óxidos, que en algunos casos pueden provocar patologías tales como la fiebre del
vapor metálico. Muchos procesos producen vapores y gases como el dióxido de carbono,
ozono y metales pesados, que pueden ser peligrosos sin la ventilación y el entrenamiento
apropiados.
Debido al uso de gases comprimidos y llamas, en varios procesos de soldadura está implícito
el riesgo de explosión y fuego. Algunas precauciones comunes incluyen la limitación de la
cantidad de oxígeno en el aire y mantener los materiales combustibles lejos del lugar de
trabajo.
Generalidades
Las ventajas de la soldadura autógena son la de reunir un equipo portátil y económico, de
poder emplearse en las cuatro posiciones de soldadura (plana, vertical, horizontal y sobre
cabeza) y de soldar todo tipo de metales de poco espesor, tanto ferrosos como no ferrosos.
Sus principales desventajas residen en que es antieconómica para soldar espesores gruesos y
posee baja productividad y difícil automatización. Además, la gran concentración de calor
produce deformaciones y el proceso en sí introduce un gran número de impurezas en el
charco de soldadura.
Por estas razones, la soldadura autógena está perdiendo terreno frente a la soldadura por arco.
Sin embargo, aún se emplea con frecuencia en el área de manutención, reparación, soldadura
de cañerías de diámetro pequeño y manufacturas livianas.