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Ciencia y Tecnologia Culinaria Fundamentos Cien PDF
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CIENCIA
Y
TECNOLOGÍA
CULINARIA
(Fundamentos científicos de los procesos culinarios
implicados en la Restauración Colectiva)
E-mail: ediciones@diazdesantos.es
Internet: //http: www.diazdesantos.es
ISBN: 978-84-7978-379-2
Depósito legal: M. 47.401-1998
PRESENTACIÓN.................................................................................... XIII
Parte primera: INTRODUCCIÓN A LA TECNOLOGÍA CULINARIA
IX
X ÍNDICE
XIII
XIV PRESENTACIÓN
J OSÉ B ELLO
Profesor Ordinario
de la Universidad de Navarra
PARTE PRIMERA
INTRODUCCIÓN A LA TECNOLOGÍA
CULINARIA
1
Concepto y objetivos de la
ciencia y tecnología culinaria
5
6 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
nen en el proceso culinario, lo armonizan con ese saber hacer, tan lleno
de inspiración personal, que permite obtener de los ingredientes ali-
menticios unos efectos sensoriales determinados.
De acuerdo con todas estas consideraciones, se le puede definir como
«aquella parte de la tecnología de los alimentos que se ocupa
de todas las operaciones y procesos, que son de aplicación
necesaria para que los ingredientes alimenticios puedan ser
transformados de modo adecuado en platos elaborados, aptos
para su consumo».
En definitiva, los ingredientes son transformados (paso 1) en pla-
tos cocinados, que una vez combinados (paso 2) dan lugar a los dife-
rentes menús, cuya variedad caracteriza los hábitos alimentarios de
una población y, además, determina su estado nutricional.
21
22 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
zanahorias, etc., así como del Extremo Oriente, arroz, melocotón, pi-
mienta, nuez moscada y clavo. De la India tomaron garbanzos, frutas
agrias, sidra, berenjenas, pepinos, albahaca y cardamomo. En cambio,
a través de Egipto conocieron productos africanos como melones y
sandías.
A lo largo del Neolítico no sólo evoluciona la alimentación, sino
también las técnicas culinarias, como se ha podido poner de manifies-
to en algunos bajorrelieves conservados en Mesopotamia, en los que
se pueden observar guisos de gallinas y patos, o bien procesos de
extracción de mantequilla. También en las tumbas egipcias abundan
representaciones de escenas de cocina: preparación de sopas, compo-
tas endulzadas con miel, etc.
Dentro de este periodo Neolítico se detectan en la cuenca medite-
rránea grandes movimientos de población, que debieron favorecer la
dispersión de muchos productos alimenticios, con un riquísimo inter-
cambio que ha tenido su reflejo importante en la dieta habitual de
muchos de sus pueblos. Desde esos tiempos remotos hasta el siglo IV
d.C. hubo en Europa dos modelos de alimentación, en función de la
producción y adquisición de los productos alimenticios:
legado histórico dejado por los pueblos que pasaron por ella: fenicios,
griegos, cartagineses, romanos, visigodos y árabes. Estos últimos hi-
cieron progresar la agricultura y de modo especial los cultivos de rega-
dío. Se supone que una serie de productos penetraron en los hábitos
alimentarios europeos a través de la influencia de la España musulma-
na: arroz, berenjena, alcachofa, limón, naranja, toronja, azafrán, nuez
moscada, etc.
La Europa medieval supuso una cierta uniformidad en los hábitos
alimenticios de sus diferentes pueblos, al existir una recíproca influen-
cia entre las zonas interiores y la cuenca mediterránea. Se alcanzan así
unas pautas de comportamiento alimentario más uniformes, al margen
de posiciones económicas y sociales: diferenciaba la cantidad, pero no
el tipo de alimentos, ni los métodos de preparación y cocción.
En los albores del siglo XVI cambia el panorama mediterráneo
como consecuencia de la presencia española en la cristianización de
América, recién descubierta. Se importaron alimentos, desconocidos
hasta entonces, modificándose en gran medida el espectro europeo de
productos alimenticios: maíz, tomates, pimientos dulces y picantes,
calabazas, calabacines, alubias, patatas y un único animal, el pavo. En
su momento ofrecieron tales ventajas que, en algunas zonas, sustitu-
yeron a los productos locales o fueron un paliativo para la escasez de
otros. Así el cultivo de patata y de maíz mitigaron las hambrunas pade-
cidas por Europa en los siglos XVII y XVIII. Muchos de estos productos
se han implantado de tal manera que, hoy día, parecen haber pertene-
cido siempre a esta cuenca geográfica: tal ocurre con el tomate, ya
considerado como un producto emblemático de la cocina mediterrá-
nea.
Una característica importante de esta cocina, que posiblemente la
distingue de cualquier otra, radica en su preferencia por los platos co-
cinados a base de alimentos de origen vegetal. Las verduras no son tra-
tadas como simple acompañamiento, o guarnición, de otros alimentos
de origen animal, sino que por sí mismas constituyen un plato básico.
El área mediterránea es la única zona del mundo occidental donde
puede consumirse simplemente pan acompañado de algún vegetal.
No obstante, parece conveniente señalar que, durante lustros, las
poblaciones —tanto rurales como urbanas— consumían, generalmen-
te con un mínimo de transformación, los productos agrícolas y gana-
deros producidos en su entorno. De este modo se explican las diferen-
cias observadas en los hábitos alimentarios, no sólo entre países, sino
también entre las comarcas dentro de un mismo país.
LA RESTAURACIÓN ACTUAL: FUENTES DE ALIMENTOS 27
— Productos frescos.
— Productos appertizados o conservas.
— Productos congelados.
— Productos envasados al vacío o en atmósferas modificadas.
— Productos tratados con calor y con vacío.
— Productos texturizados.
— Platos preparados.
Productos texturizados
Además de estas cinco gamas tecnológicas, existe otro grupo de
productos que, con una tecnología muy novedosa y especializada, van
adquiriendo posiciones en el mercado alimenticio: son los productos
texturizados.
La texturización representa un buen ejemplo de transferencia de
tecnología, trasladada desde la industria de plástico al mundo del ali-
LA RESTAURACIÓN ACTUAL: FUENTES DE ALIMENTOS 37
Platos preparados
Como se ha indicado anteriormente, los cambios producidos en los
hábitos de vida en esta segunda mitad del siglo XX han traído varias
consecuencias de interés para el ámbito alimentario: mayor número de
alimentos para consumir, más diversificación de las formas de consu-
mo, clara tendencia a consumir comidas preparadas fuera del hogar.
De aquí que entre los grupos de fuentes de productos alimenticios
para la restauración actual haya que incluir, como colofón de todos
ellos, los denominados «platos preparados» por la legislación alimen-
taria española. En concreto, el Código Alimentario Español los define
como «productos obtenidos por mezcla y condimentación de alimen-
tos animales y vegetales, con o sin adición de otras sustancias autori-
38 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Cocina valenciana, segunda mitad del siglo XVIII, Museo de Artes Deco-
rativas, Madrid.
DESARROLLO HISTÓRICO DE LA COCINA
COMO ESPACIO
41
42 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
— superficie disponible,
— volumen de materias a manejar,
— trabajo que se ha de ejecutar.
Amplitud
Materiales y paramentos
Deben corresponder a buenos criterios de calidad que garanticen la
seguridad y el confort. Los suelos deben ser construidos con materia-
les que no permitan el deslizamiento fácil (cemento, terrazo y mosai-
co sin pulir), además de ser no absorbentes, ni atacables por los ácidos
y álcalis usados en la limpieza. Serán fáciles de limpiar y se les dará la
suficiente inclinación hacia los sumideros para permitir la evacuación
de agua, o de cualquier otro líquido que se derrame. Estarán provistos
de desagües con unos dispositivos adecuados: sifones, rejillas, etc.,
que eviten tanto el acceso a los rodedores como el paso de malos olo-
res.
Los paramentos verticales serán de superficies lisas, de material no
absorbente, inalterables por el calor y de fácil limpieza, de color claro,
revestidos de material, o pintura que permita ser lavado sin deterioro.
Para cubiertas o techos se emplea el revestimiento de yeso, el encala-
do o la pintura plástica; deberán ser construidos de forma que no per-
mitan el acumulo de polvo ni de vapores de condensación; las uniones
de los paramentos verticales y horizontales han de ser redondeadas. En
todo su conjunto, reunirán tales condiciones que, además de ofrecer
una fácil limpieza, no puedan aportar alguna contaminación a los pro-
ductos alimenticios.
EL ESPACIO CULINARIO 47
Iluminación
Para un mejor desarrollo de los trabajos, las cocinas deben gozar
de una buena visibilidad. En la medida que sea posible, dispondrá de
buenos ventanales iluminados por la luz del día, que los colores claros
de paredes y techos deberán reflejar de modo perfecto. La luz natural
proporciona una vivencia más agradable y evita mejor el cansancio del
personal; además, no modifica el color propio de los alimentos, cir-
cunstancia que favorece el control de su calidad. Sin embargo, en
muchas ocasiones resulta insuficiente y se complementa con lámparas
de iluminación estancas, hasta alcanzar una intensidad que haga con-
fortable la iluminación (un mínimo de 350 lux).
Dichas fuentes luminosas han de estar colocadas por encima de las
zonas habituales de trabajo, a una altura suficiente para evitar golpes,
y dirigidas de tal modo que se supriman toda posibilidad de sombras.
Su fijación a paredes y techos se hará de tal forma que se facilite su
limpieza y evite la acumulación de polvo. Todo el sistema de ilumina-
ción estará debidamente protegido, de manera que en caso de rotura,
no pueda contaminar a los alimentos.
Ventilación
Es esencial para asegurar unas condiciones de trabajo aceptables y
resulta un problema de capital importancia para el buen funciona-
miento de una cocina caliente. Con cierta frecuencia, el trabajo a rea-
lizar se hace penoso, no sólo por la intensa actividad que se debe des-
plegar, sino también por la atmósfera sobrecalentada, polucionada y
saturada de humedad que hay que soportar. Se hace necesario un acon-
dicionamiento de ese aire, renovándolo unas 20/30 veces por hora.
La magnitud de la ventilación debe ser la apropiada para la capaci-
dad del local y permitir, con eficacia, la rápida evacuación de gases
quemados, vapores pesados, vapores de agua y olores, así como la
renovación del aire fresco. Para conseguirlo, hay que mantener una
ligera depresión en la zona de cocción, en relación con los otros servi-
cio; es decir, se ha de extraer una cantidad de aire siempre superior a
la que se ha de introducir, con un riguroso control de la velocidad de
desplazamiento de ese aire, que no debe ser excesivo. Los sistemas
aplicados pueden responder a dos modos de ventilación diferentes:
natural y artificial (o forzado).
La ventilación natural se realiza a través de campanas con chi-
meneas situadas encima de los aparatos de cocción, aprovechando
48 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Condiciones sanitarias
La adecuación sanitaria es de suma importancia para la dinámica
de trabajo, no sólo en la zona de la cocina caliente, sino en todo el
espacio culinario, donde instrumentos y utensilios deben ser manteni-
dos en un estado de pulcritud perfecto. La limpieza e higiene de todo
el ambiente donde tenga lugar la elaboración de productos cocinados
son la principal garantía de seguridad de todo aquello que se cocina.
Especial atención debe dedicarse a las instalaciones relacionadas
con la higiene del personal, que posibilitará el uso de agua potable,
tanto fría como caliente, y en cantidad suficiente para cubrir todas las
necesidades.
Las aguas residuales abocarán a una red de evacuación dotada de
tuberías y arquetas, apropiadas para conducirlas a la red de alcantari-
llado público. En su defecto, será necesario establecer un sistema de
depuración industrial.
Asimismo, se mantendrán todas las condiciones ambientales de tal
EL ESPACIO CULINARIO 49
Zona de distribución
Locales anejos
Además de las zonas indicadas anteriormente, se debe disponer de
una serie de locales anejos que van a desempeñar un papel de gran
relevancia, tanto en la calidad del trabajo realizado, como en la calidad
de lo producido. Son los economatos (despensas y almacén de comes-
tibles), las cámaras frigoríficas, el cuarto de limpieza, las zonas resi-
duales y material neutro de uso generalizado.
Economatos. Las materias primas alimenticias no perecederas,
que no precisen de frío para su conservación, se guardarán en el eco-
nomato, o almacén de comestibles, y desde ahí se surte a la cocina
caliente. Se recomienda que este lugar sea amplio, fresco y seco, por
lo que las condiciones ambientales deben corresponder a temperatu-
ras de 10-15 °C y una humedad relativa de 40-60 %.
Adquiere toda la importancia que le proporciona el garantizar la
buena marcha de la producción culinaria; sin embargo, no conviene
excederse y tener más de lo suficiente, aun contando con los impre-
vistos. No obstante, hay que aprovechar la mejor época de cada ar-
tículo para hacer una compra que reporte beneficios económicos.
Aquellos productos de uso habitual, aunque lo sean en cantidades
reducidas, se guardan en despensas más pequeñas, pero siempre bajo
las mismas condiciones ambientales.
Las verduras y frutas deben ocupar un espacio aparte, cuyo tama-
ño e importancia varía con la facilidad, mayor o menor, que se tenga
para la adquisición de estos productos. A fin de evitar que incorporen
flavores extraños, las frutas deben estar en compartimentos bien dife-
renciados del de las hortalizas.
Instalaciones generadoras de frío. Por sus características, algu-
nos alimentos perecederos, cuyo uso no va a ser inmediato, requieren
50 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
ratura debe ser de -18 °C, como máximo, según lo establecido por la
legislación alimentaria vigente. Fundamentalmente, se diferencian de
las anteriores en el grosor del aislamiento y en los equipos generado-
res de frío. Puede constar de diversas partes, según los diferentes tipos
de alimentos a conservar.
Aunque el frío es y será uno de los pilares esenciales de cualquier
sistema de restauración, sin embargo, los cambios en las redes de dis-
tribución, transportes, tratamientos, costos, etc. hacen que en la actua-
lidad se prefieran instalaciones más pequeñas, tales como armarios
frigoríficos, abatidores de temperatura y mesas refrigeradas. Los
armarios son muebles destinados a conservar sólo a corto plazo pro-
ductos de uso frecuente e inmediato. Los abatidores son armarios que
permiten reducir de modo rápido la temperatura del plato cocinado,
que en un tiempo máximo de dos horas debe bajar desde 65 °C hasta
los 3-5 °C para evitar la posible proliferación de microorganismos. Las
mesas refrigeradas son muebles que llevan, además de sus sistemas fri-
goríficos, unos cajones que permiten conservar los platos cocinados;
suelen tener gran aceptación por su economía de espacio y tiempo.
Como complemento de estas instalaciones caben citar otras de menor
envergadura, que facilitan el trabajo cotidiano: pequeñas cámaras,
armarios frigoríficos, producción de cubos de hielo, etc. Todas ellas
suelen estar ubicadas en el espacio que corresponde a la cocina calien-
te y se destinan para almacenar en las condiciones adecuadas los géne-
ros de uso inmediato y habituales.
Cuarto de limpieza. Próximo a la zona de cocción debe existir un
lugar bien equipado, donde poder limpiar con pulcritud y eficacia todo el
material usado en cada proceso culinario. También se debe disponer de
un cuarto donde se guarden los instrumentos y productos de limpieza.
Zonas residuales. Son los espacios situados lejos de las zonas de
producción, donde existen contenedores para depositar desperdicios y
basuras, siempre introducidos en bolsas cerradas. Diariamente, los
contenedores deben ser lavados con agua caliente y detergentes. Se
recomienda que esta zona tenga buena ventilación para reducir la acu-
mulación de malos olores y, a ser posible, sea refrigerada, con el fin de
evitar posibles fermentaciones.
Material neutro de uso generalizado. Se denomina así a las insta-
laciones mobiliarias, que complementan el montaje de una cocina. Se
suelen fabricar en acero inoxidable o en plásticos de nueva generación,
que están dando muy buenos resultados: mesas de trabajo, estanterías,
armarios, carros, campanas extractoras, etc.
52 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Sectores principales
Figura 3.3. Esquema del concepto marcha hacia adelante para cualquier sistema de
platos cocinados
PARTE SEGUNDA
OPERACIONES Y PROCESOS
EN TECNOLOGÍA CULINARIA
4
Las operaciones para la
conservación de ingredientes
59
60 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Refrigeración
Pocas son las bacterias que, al ser capaces de crecer bajo estas con-
diciones de frío, perjudican la buena conservación de los alimentos.
No ocurre lo mismo con las reacciones químicas que, si bien reducen
su velocidad de reacción, a la larga terminan por alterar el alimento.
De aquí que el uso de la refrigeración proporcione límites muy varia-
bles para el tiempo adecuado de almacenamiento, que casi nunca supe-
ra el mes.
Congelación
y para que ocurra hace falta llevarse del alimento una cantidad de calor
igual a su calor latente.
Esta cantidad de calor corresponde a cuatro pasos sucesivos:
Todas estas reacciones son tanto más lentas cuanto más baja sea la
temperatura de almacenamiento, de modo especial por debajo de los
-20 °C. Las grasas resultan tanto más sensibles cuanto más ricas sean
en ácidos grasos poliinsaturados; por eso, aves y pescados grasos se
conservan bastante mal y su periodo de conservación se sitúa por deba-
jo de los 4 meses.
También, incluso por razones económicas, hay que evitar cualquier
posibilidad de que se produzcan desecaciones superficiales, porque
conducen no sólo a pérdidas de peso, sino también ejercen una inci-
dencia negativa sobre la calidad gustativa del producto. Estas deseca-
ciones serán tanto mayor cuanto más seca se encuentre la atmósfera,
ya que bajo estas condiciones se favorece la sublimación de los crista-
les de hielo situados en la superficie del alimento. Por el contrario, una
atmósfera demasiado húmeda puede condensar vapor sobre las super-
ficies frías, fenómeno que debe ser evitado porque representa una
fuente importante de agua disponible.
Todavía cabe citar otros tipos de alteraciones físicas, que afectan
a los tejidos de los alimentos: se trata fundamentalmente de las fluc-
tuaciones de temperatura dentro de la cámara, que tienen conse-
cuencias nefastas sobre la estructura del alimento, porque conlleva
fusiones de los cristales de hielo, que vuelven a recristalizar cuando
el alimento recupera la temperatura establecida. Pero esta nueva for-
mación de cristales tiene lugar sobre los núcleos cristalinos ya exis-
tentes, cuyo tamaño crece de modo nada conveniente. De aquí la
importancia de abrir y cerrar, lo menos posible, las cámaras frigorí-
ficas.
El tiempo durante el cual se puede conservar muy bien un alimen-
to congelado dependerá de la temperatura del almacén. Así, la correc-
ta conservación durante un mes a -20 °C, se puede ver reducida a 15
días cuando la temperatura de almacenamiento sube a -12 °C, o por el
contrario, se prolonga a mes y medio si se baja a -30 °C.
LAS OPERACIONES PARA LA CONSERVACIÓN DE INGREDIENTES 67
— tamaño,
— forma,
— conductividad térmica del envase,
— temperatura del fluido calefactor (en general, deben ser inferio-
res a +4 °C o superiores a +65 °C).
vino blanco o vinagre, aceite, pimienta molida y sal. Los líquidos cla-
ros para pescados llevan ajos machacados, orégano, laurel, tomillo,
perejil, sal, vinagre y agua fría. Unos y otros se usan siempre en frío,
durante periodos de tiempo que no deben superar las 48 horas. Hoy
día, el adobado también se realiza en seco.
Finalmente, hay que citar los escabeches, surgidos desde muy anti-
guo para conservar productos, previamente cocinados, que solían pro-
ceder de las capturas de caza y pesca, tales como perdices, truchas,
tencas, etc. Se basa en la introducción del producto, al menos 24 horas
para que adquiera los aromas correspondientes, en un caldo conserva-
dor compuesto principalmente por aceite, vinagre, sal, especias y hier-
bas aromáticas. Algunas veces puede requerir del complemento de la
refrigeración para prolongar la buena conservación, como ocurre en el
caso de los pescados, truchas, bonito, mejillones, etc.
NUEVAS TECNOLOGÍAS
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78 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
OPERACIONES DE SELECCIÓN,
LIMPIEZA Y DIVISIÓN
Para que unos u otros objetivos se alcancen con las máximas garan-
tías resulta conveniente enfriar muy bien el líquido de marinado antes
de introducir el alimento.
En la práctica se distinguen tres tipos de marinadas líquidas y uno
de marinada seca, de acuerdo con la combinación de los tres ingre-
92 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
CONCEPTO DE COCCIÓN
El tratamiento por el calor puede ser considerado, sin duda alguna,
como uno de los modos más antiguos de procesar las materias primas
alimenticias. En el ámbito de la tecnología culinaria, cualquier tipo de
tratamiento térmico que se aplique para la elaboración de un plato
cocinado recibe el nombre genérico de cocción.
Cocer un alimento significa exponerlo a la acción de un foco de
calor, o de unas radiaciones, con el propósito de elevar su temperatu-
ra. Constituye una parte de la tecnología culinaria estrechamente rela-
cionada con el estudio de las respuestas a la acción del calor de los
ingredientes de cada plato, en función de sus propiedades físicas y quí-
micas. Como consecuencia de ese calentamiento, el alimento experi-
menta cambios que pueden ser físicos, químicos, e incluso biológicos,
que implican modificaciones relacionadas con su calidad, tanto orga-
noléptica como nutricional. Tales modificaciones pueden resultar
favorables, o desfavorables, según el tipo de cocción y las condiciones
bajo las que se realice.
Por ello, la cocción puede ser considerada como aquella operación
capaz de transformar de modo físico y/o químico el aspecto, la textu-
ra, la composición y el valor nutritivo de un alimento mediante la
acción del calor, con el fin de satisfacer los sentidos de la vista, del
gusto y del olfato.
En esencia, la cocción es la aplicación de calor que se hace a un ali-
mento con el fin de convertirlo en algo más digerible, apetecible y
sanitariamente seguro.
95
96 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
— Economía de energía.
— Fiabilidad, facilidad de manejo, fortaleza y seguridad.
— Facilidad de limpieza y mantenimiento.
Química
Gas ciudad
Ventajas. Subidas rápidas de las temperaturas, flexibilidad de uso
al permitir bajadas aceleradas de las temperaturas, limpieza.
100 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Gas propano
Ventajas. Subidas y bajadas rápidas de las temperaturas, posibili-
dad de instalación en cualquier lugar geográfico (incluso aislado), lim-
pieza.
Inconvenientes. Necesidad de instalacioness externas para los
depósitos, necesidad de ventilaciones eficaces, riesgos de explosiones,
riesgo de cortes en el suministro (incidencia de huelgas).
Eléctrica
Ventajas. Gasto reducido de instalación, limpieza, control preciso
de la temperatura de trabajo, no produce emanaciones de gases ni olo-
res, no necesita almacenado de combustible. Para el caso de placas de
inducción: economía de energía, no existen sobrecalentamientos, no se
carbonizan las proyecciones de alimentos.
Inconvenientes. Subidas lentas de la temperatura, dificultad para
bajar las temperaturas, material costoso, necesidad de usar utensilios
de cocción elaborados con materiales específicos para las placas de
inducción, que son particularmente caros.
Los modernos adelantos tecnológicos ha permitido la mejora de las
instalaciones, basadas en la aplicación de cuatro variedades en el uso
PROCESOS CULINARIOS CON APLICACIÓN DE CALOR 101
Infrarrojos
Dentro del espectro visible de la luz solar, la zona del rojo es la de
mayor energía calorífica, pero todavía lo es más la zona del infrarro-
jo no visible. Se sitúan en la gama de ondas electromagnéticas con
tres bandas de aplicación: corta (0,76-2 |im), media (2-4 |im) y larga
(4-8 (im). Los infrarrojos, de frecuente uso en los procesos culinarios,
provocan una elevación de la temperatura del alimento en función de
su absorción. Resulta ser un calor que llega al alimento en forma de
energía radiante, sin necesitar de un vehículo de transporte. La canti-
dad de energía radiante que alcanza al producto alimenticio se encuen-
tra directamente relacionada con la distancia que separa ese alimento
de la fuente de irradiación.
Ejemplo de aplicación de la energía infrarroja son las modernas
instalaciones para hornear, las parrillas, los hornos para reconstituir
alimentos congelados, etc. También las lámparas de infrarrojos son
buenas para mantener calientes platos cocinados, porque son capaces
de proporcionar una temperatura constante y adecuada para que el ali-
mento pueda conservar durante muchas horas el contenido en hume-
dad requerido.
Cuarzo
El calentamiento de los alimentos mediante lámparas de cuarzo
puede ser considerado como una variación del anterior, porque las
ondas caloríficas son muy similares. Los tubos de cuarzo difunden
ondas energéticas infrarrojas, dando lugar a una fuente de calor fija y
consistente. Este calor de tipo infrarrojo se origina cuando una carga
eléctrica pasa a través de un filamento de cuarzo situado en un tubo
donde ha sido realizado un vacío. El empleo de tales tubos en los hor-
nos, permite concentrar en el mismo veinte veces más energía que con
otras fuentes infrarrojas, con la ventaja de poder tolerar temperaturas
elevadas.
102 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Microondas
Inducción
El calentamiento por inducción se fundamenta en la creación de un
campo magnético variable en las proximidades de un cuerpo conduc-
tor eléctrico. De este modo, aparecen corrientes inducidas en la masa
metálica, que se calienta bajo su acción.
La cantidad de calor producida dependerá de varios factores vin-
culados a la pieza metálica (conductividad eléctrica, permeabilidad,
forma) y a su emplazamiento. Cuando la bobina adopta la forma de
plato, se puede situar debajo de una placa de vitrocerámica y propor-
cionar un foco calorífico. En este caso, el fogón consiste en placas
sólidas de vitrocerámica conectadas con un campo magnético. Cuando
la placa se cubre con un recipiente de metal ferroso, de inmediato, apa-
rece sobre la placa una energía magnética, que genera calor en el área
cubierta por el recipiente. Desde luego, los recipientes deben ser de
material adecuado (de hierro o de acero; nunca de aluminio, ni de
inoxidable no férrico o de vidrio a fuego) y de fondo totalmente plano,
adaptado a la superficie de la vitrocerámica, para no desperdiciar nada
de energía.
Consume menos energía que los sistemas eléctricos convenciona-
les y el calor se transmite de inmediato a través del recipiente. Las pla-
cas de inducción reaccionan de modo inmediato a la regulación de la
intensidad calorífica y la producción de calor cesa cuando se retira el
recipiente. Ofrece una gran seguridad de trabajo y no sobrecalienta el
ambiente con gases ni con un calor excesivo.
Calentamiento óhmico
Resulta del paso de la corriente eléctrica alterna a través de un pro-
ducto que se calienta en su masa por el efecto Joule sin necesidad de
un fluido caloportador y sin transferencia de calor por conducción. Es
un proceso térmico que tiene como característica principal su homo-
geneidad y rapidez, con mantenimiento de las propiedades sensoriales.
Se puede aplicar a los alimentos más heterogéneos: mezclas viscosas,
líquidos con partículas, etc. Resulta muy útil para productos cárnicos
que incluyen moléculas iónicas como la sal común entre sus compo-
nentes, porque se facilita la propagación de la corriente eléctrica. Hoy
104 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Altas frecuencias
TABLA 6.1
Fuente de energía Medio de transferencia de calor
Química Directo: productos de combustión.
Indirecto: aire, vapor, agua, aceite, metal, cerámica.
Eléctrica Indirecto: aire, vapor, agua, aceite, metal, cerámica,
radiación visible, infrarrojo.
Radiación Directo: microondas, radiación visible, infrarrojo,
electromagnética Indirecto: calor inducido (metal).
Por conducción
Por convección
La convección es un fenómeno propio de líquidos y gases, en los
que el calor acelera la transmisión de la energía calorífica al provocar
movimientos en las moléculas poseídas de energía térmica. La trans-
ferencia de calor tiene lugar a través de moléculas que gozan de una
cierta libertad de movimiento, como ocurre en un gas y, en menor
cuantía, también en un líquido.
Cuando una partícula se calienta, se expande y se hace menos
densa; en consecuencia, se eleva y su lugar es ocupado por otra. Re-
sulta así un movimiento rotacional de partículas que portan y distribu-
yen el calor por toda la masa, líquida o gaseosa. En algunas instala-
ciones en las que se aplica esta modalidad de calentamiento, el movi-
miento por convección de las partículas se puede forzar mediante el
empleo de un ventilador.
Tales corrientes de fluidos son tanto más activas cuanto menor sea
la viscosidad del medio. Esto explica por qué un puré guarda mejor el
calor que un caldo: la menor viscosidad del segundo permite que el
calor se disipe con una mayor rapidez a través de corrientes de con-
vección, mientras que la pastosidad del primero hace que el calor sólo
pueda escapar por conducción.
Por radiación
El calor se mueve a través del espacio en forma de ondas energéti-
cas. El calor irradiado consiste en minúsculas partículas de energía,
PROCESOS CULINARIOS CON APLICACIÓN DE CALOR 107
que fluyen desde un cuerpo caliente hasta otro más frío. Muchas ins-
talaciones de parrillas y tostadores calientan los alimentos mediante
esta modalidad de transferencia de calor.
La máxima cantidad de energía irradiada se obtiene cuando el foco
calorífico alcanza el nivel de calor blanco. Sólo las parrillas que con-
tienen partículas de cerámica pueden alcanzar los niveles de calor
blanco y proporcionar temperaturas muy altas (3.000 °C).
Los objetos incandescentes a nivel de calor rojo sólo emiten algu-
nas radiaciones en la zona de ondas energéticas infrarrojas. Los obje-
tos brillantes reflejan perfectamente el calor irradiado; de ahí, su
empleo en los hornos como reflectores calientes para concentrar la
energía irradiada hacia el alimento. Como los objetos oscuros absor-
ben más calor que los más claros, los recipientes de aluminio destina-
dos a cocinar alimentos congelados suelen tener coloreado de negro su
parte externa para aprovechar mejor el calor que reciben.
Principios generales
tura, que ha de ser elevada y suficiente, para que en ella puedan ocurrir
dos fenómenos: evaporación de las moléculas de agua y que se induz-
can las reacciones de pardeamiento, que se aceleran por la concatena-
ción de una temperatura elevada y un bajo contenido en humedad.
Sin embargo, el proceso térmico no termina aquí: para que la pieza
de carne alcance el grado de cocción requerido (muy hecha, poco
hecha, en su punto), se precisa que en el interior de la misma se con-
sigan, de modo concreto, una temperatura y un contenido acuoso
determinados.
El proceso de cocción se considerará bien precisado, cuando se
hayan establecido los perfiles de las temperaturas y de las humedades
que van desde el exterior del alimento hasta su interior. Tales perfiles
quedarán definidos por el conjunto de unos parámetros tecnológicos,
ajustados a las condiciones de cada sistema y de cada producto.
De acuerdo con lo recogido en el esquema de un proceso de coc-
ción (Fig. 6.1), puede observarse que coexisten dos procesos clara-
Figura 6.2.
— El binomio tiempo-temperatura.
— La actividad de agua del alimento.
118 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
En el volumen
El cambio de volumen puede deberse a tres fenómenos físicos dife-
rentes:
— Tiempos de cocción.
— Temperaturas de cocción.
— Cantidad de grasa contenida en el alimento y su punto de fusión.
En la coloración
Las cocciones pueden modificar el color inicial de los alimentos.
La causa del cambio de color puede responder a los motivos más diver-
sos, aunque siempre en función de algunos de los tres factores siguien-
tes:
En la consistencia
La modificación por el calor de la consistencia de un alimento se
encuentra vinculada a fenómenos muy diversos, debidos principal-
mente a los efectos sobre proteínas y polisacáridos:
En el sabor
Finalmente, el tratamiento térmico provoca en el alimento modifi-
caciones de aroma y de sabor, que se observan a través de los sentidos
del olfato y del gusto:
a) Captación de sabores.
b) Liberación de sustancias volátiles.
c) Desarrollo de sabores característicos, como consecuencia de
reacciones químicas.
d) Volatilización de sustancias aromáticas.
e) Solubilización de sustancias sápidas.
Proteínas
Durante la cocción de los alimentos, sus proteínas sufren una des-
naturalización, con pérdidas de solubilidad, a temperaturas que varían
de acuerdo con el entorno en el que se encuentran: presencia de sales,
azúcar, almidón, grasas, etc.
Cuando las proteínas se encuentran en soluciones coloidales aisla-
das, suele admitirse como regla general que se encuentran totalmente
coaguladas cuando su temperatura alcanza los 65 °C. Sin embargo,
cuando esas proteínas están tomando parte de un sistema alimentario,
estos fenómenos tienen lugar a temperaturas más elevadas, porque
interaccionan con otros componentes del mismo. Así, por ejemplo, en
las cremas de pastelería, normalmente ricas en almidón, las proteínas
no coagulan hasta alcanzar los 95 °C.
Alimentos esencialmente proteicos, como huevos, carnes, pesca-
dos, leches, etc., suelen presentar coagulación de sus proteínas en fun-
ción del tratamiento térmico. Sin embargo, cabe señalar algunas
excepciones importantes en algunas proteínas de sistemas alimenticios
de origen animal: así, por ejemplo, la caseína de la leche se desnatura-
liza en un medio ácido, pero no coagula por el calor suave que suelen
recibir los productos lácteos en los procesos culinarios; el colágeno de
PROCESOS CULINARIOS CON APLICACIÓN DE CALOR 123
Lípidos
El tratamiento térmico de los alimentos da lugar a una fusión de sus
lípidos aunque, por su carácter de mezcla de triglicéridos, sea difícil
establecer con exactitud su punto de fusión: antes de llegar al estado
líquido, pasan por un estado pastoso. Por encima de este punto, cada
tipo de grasa se caracteriza por una determinada temperatura en la que
humean y posteriormente se descomponen. Incluso para calentamien-
tos intensos se puede producir una deshidratación del glicerol, con for-
126 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Hidratos de carbono
Dentro de este grupo de sustancias químicas orgánicas hemos de
distinguir entre lo que ocurre con los azúcares y lo que ocurre con los
polisacáridos. Respecto a los azúcares hay que tener en cuenta si se
encuentran en estado sólido, como azúcar en polvo, o en disolución. El
azúcar puro funde con el calor y después cambia de color, convirtién-
dose en lo que se denomina caramelo. En estado cristalizado pierde sus
propiedades primarias de cuerpo cristalino hacia los 170 °C y pasa al
estado coloidal; en el caso de seguir calentando se carboniza. Por ello,
para la preparación de caramelo se suele humedecer ligeramente el
azúcar cristalizado y calentar sin sobrepasar los 170 °C para obtener
un sabor agradable. El caramelo se solidifica rápidamente al enfriar y
es soluble en el agua.
PROCESOS CULINARIOS CON APLICACIÓN DE CALOR 127
El agua
El tratamiento térmico del alimento hace que el agua contenida en
él participe en dos fenómenos físicos diferentes: de una parte, ebulli-
ción con evaporación; de otra, como medio disolvente.
Además, en algunos tipos de cocción se usa el agua como medio
de transferencia de calor. De acuerdo con la concentración en sustan-
cias disueltas, el agua como medio de cocción puede favorecer los
fenómenos de osmosis en los dos sentidos opuestos: paso de sustancias
solubles del alimento al medio, o viceversa.
La mayor parte de las verduras y hortalizas, ricas en agua y pobres
en sustancias minerales, pierden durante la cocción una gran parte de
su agua de constitución, por pasar al medio de cocción, que a su vez
se enriquece en sustancias solubles: aromas, ácidos orgánicos, proteí-
nas, sales, vitaminas que emigran parcialmente acompañando al agua
que difunde del alimento. Esto hace que las verduras reduzcan su
volumen, pero el plato total se enriquece en cualidades culinarias. En
cambio, los alimentos pobres en agua como las legumbres secas y los
granos de cereales se rehidratan durante la cocción y aumentan de
volumen. Los intercambios de agua entre el medio y el alimento modi-
fican su estructura, su composición y su valor nutritivo.
7
Los tipos de cocción
131
132 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Como una variante del asado en horno existe el asado con espetón,
donde el alimento, atravesado por un eje giratorio, da vueltas bajo la
acción de un calor directo, aportado en muchas ocasiones por un hogar
de madera (sarmientos de vid, olivo, etc.). Se trata de una cocción bajo
calor seco, que se ayuda de la presencia de una grasa para conseguir
los efectos de cocción deseados. A partir de una temperatura inicial
alta, se provoca en la superficie del producto un pardeamiento y una
coagulación compacta de sus proteínas, que dificulta el escape de los
jugos naturales. Después, se debe reducir la temperatura del horno
para que se cueza el interior del producto, sin que se endurezca la su-
perficie.
Con esta metodología, las carnes y los pollos de buena calidad
mejoran de modo notable su blandura y suculencia. El tiempo, en
general prolongado, viene determinado por el tamaño y la calidad de
alimento. Por ser una técnica lenta se suele relegar, hoy día, al caso de
pollos. Sin embargo, aunque pueda parecer una técnica en desuso es la
modalidad de asado que conduce a productos de cualidades organo-
lépticas más apreciadas, al poder desarrollar una costra bastante firme
y olorosa. El horno necesita de un calentamiento previo y la energía
calorífica proporcionada al alimento (temperaturas y tiempo de calen-
tamiento) debe ser bien controlada. Es muy recomendable un horno
que disponga de puertas transparentes, que permita observar la marcha
del proceso de cocción.
136 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
14.0004 / 5404 = 46
Otras técnicas
El gratinado se aplica para dorar la superficie de algunos prepara-
dos culinarios con cierta rapidez. Para ello se hace uso de las denomi-
nadas gratinadoras (también salamandras), constituidas por un mué-
LOS TIPOS DE COCCIÓN 141
APLICACIONES CULINARIAS
Tener un sabor neutro, con el fin de que los alimentos fritos puedan mani-
festar sus sabores característicos.
Soportar sin descomponerse temperaturas elevadas de trabajo, que pueden
oscilar entre los 180 y los 200 °C.
Ser anhidros, es decir, no contener agua, que con el proceso se vaporizaría
y se proyectaría fuera de la cubeta.
Resistir las oxidaciones, que conducen a enranciamientos, surgidas como
consecuencia de calentamientos repetidos y numerosos.
Soportar, sin degradarse, numerosas subidas y bajadas de temperaturas.
Ser muy fluidos en caliente, con el fin de que los alimentos puedan ser bien
escurridos para no quedar empapados de grasa.
Ser pobres en ácidos grasos poliinsaturados, ya que suelen ser los princi-
pales responsables de las oxidaciones que pueden sufrir los cuerpos grasos
en los procesos de frituras, con los consiguientes cambios indeseables: for-
mación de componentes polares y triglicéridos poliméricos, oscurecimien-
to del color, aumento de la viscosidad, etc.
TABLA 7.6
Temperatura Temperatura
Temperatura
Cuerpo graso máxima crítica
de fusión
del baño descomposición
Sin duda alguna, el factor más importante para conseguir una fri-
tura de calidad es el contacto brusco del alimento con la grasa muy
caliente. Como resultado puede distinguirse en el alimento la existen-
cia de tres fenómentos diferentes:
158 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
APLICACIONES CULINARIAS
La temperatura de trabajo
Volumen de fritura
Es conveniente freir de una vez cantidades de alimentos propor-
cionadas al tamaño de la sartén, porque si la cantidad resulta excesiva
se origina una bajada de la temperatura del baño de aceite, sobre todo
cuando se trata de alimentos congelados, con riesgo de varios efectos
negativos: formación de espumas, desbordamiento exterior, incendio
de la grasa, proyecciones peligrosas, incremento de la producción de
vapores, vahos y olores desagradables.
La cantidad de grasa empleada debe ser siempre proporcional a la
cantidad o volumen de alimentos a freír, los cuales deben estar en todo
momento sumergidos en la grasa caliente. Las piezas deben ser intro-
ducidas en el aceite cuando éste se encuentre humeante y bajo la
acción de un foco calorífico vivo, para que pueda recuperar en segui-
da la temperatura adecuada, que se ha reducido como consecuencia de
la inmersión de productos. De este modo la fritura nunca dejará de bor-
botear.
LOS TIPOS DE COCCIÓN 163
APLICACIONES CULINARIAS
COCCIONES MIXTAS
CONSIDERACIONES ESPECÍFICAS
SOBRE ESTOFADOS A PARTIR
DE INGREDIENTES CRUDOS
CONSIDERACIONES ESPECÍFICAS
SOBRE ESTOFADOS EN SU JUGO
CONSIDERACIONES ESPECÍFICAS
SOBRE BRASEADOS
CONSIDERACIONES ESPECÍFICAS
SOBRE GUISADOS
COCCIONES ESPECIALES
Cocción a vacío
Operación culinaria en la que las materias primas (algunas con
alguna ligera cocción previa) se mezclan con los condimentos aromá-
ticos y se introducen en bolsas especiales para estos efectos. Una vez
hecho el vacío y cerradas de modo hermético, reciben una pasteuriza-
ción o una esterilización, en aparatos autoclaves.
Se trata de una nueva tecnología de cocción desarrollada en Fran-
cia hacia finales de los años setenta y surgida a raíz de los ensayos de
un chef de cocina, George Pallus, que intentaba resolver el problema
de las pérdidas de jugos y de peso, cuando elaboraba el foie-gras. Tuvo
la iniciativa de aplicar el principio culinario del papillote (método clá-
sico de cocinado de alimentos envueltos en papel aceitado para retener
mejor aromas y humedad) y, tras varios intentos, consiguió reducir las
pérdidas desde el 40 % hasta sólo un 5 %.
180 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
CONSIDERACIONES ESPECÍFICAS
DE LA COCCIÓN A VACÍO
Preparación
Se trata de la preparación previa de todos los ingredientes (carnes,
pescados, etc.) con sus operaciones de lavado, mondado, troceado,
sazonado, etc. anterior a su cocinado. Es decir, toda una serie de ope-
raciones que también se aplican en cualquier proceso culinario con-
vencional. Hay que subrayar de un modo muy especial la necesidad de
cumplir, en todas y cada una de estas operaciones, con las reglas sani-
tarias más estrictas.
Precocinado
Como el alimento, o la mezcla de ingredientes, no queda expuesto
de un modo directo a la acción del calor radiante, los efectos térmicos
sobre el desarrollo del color resultarán mínimos. De aquí que, en
muchos casos, se haga necesario efectuar esta operación de modo pre-
vio, según la naturaleza de los productos a tratar; por ejemplo, un pasa-
do ligero por parrilla si se trata de una carne. Para que los productos
vegetales no desarrollen aromas inadecuados en las bolsas a vacío,
también deben ser introducidos en ellas después de haber sido escal-
dados.
Empaquetado a vacío
Una vez preparada de modo adecuado la mezcla de ingredientes, se
introduce en la bolsa especial de plástico y se le hace el vacío, en tanto
que se cierra de modo hermético. Al aplicar el vacío, se consigue que
LOS TIPOS DE COCCIÓN 183
Refrigeración rápida
Almacenado en refrigeración
Regeneración o acondicionamiento
Se trata del nuevo calentamiento que se ha de aplicar en el mismo
momento que el producto cocinado vaya a ser servido. Puede tener
lugar con la misma bolsa cerrada con vacío, usando baño de agua
caliente o bien horno con vapor. También puede calentarse introdu-
ciendo el contenido en platos térmicos o usar un horno microondas.
Pero cualquiera sea el método elegido, la temperatura debe alcanzar en
el centro del producto, cuando menos, los 65 °C.
El método puede ser usado perfectamente para una producción
racionalizada de alimentos cocinados, siempre que se aplique a rece-
tas bien probadas y con operaciones muy controladas. Permite dispo-
ner de una carta variada y de calidad para ofrecer a los clientes. En este
sentido, algunas publicaciones hosteleras (documento interno puesto
en circulación por la cadena de Hoteles Hilton en 1985) han resaltado
las siguientes ventajas:
193
194 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
• En primer lugar, saber que siempre existe una parte del agua que
no se congela, aunque será tanto menor cuanto más baja sea la tempe-
208 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
— Polivalencia de aplicación.
— Rapidez de calentamiento.
— Simplicidad y seguridad de manejo.
— Efectos posibles sobre los ingredientes.
— Costes adaptados a los presupuestos.
Fue la primera fórmula que se aplicó para este tipo de oferta de pla-
tos cocinados. Se basa en un desplazamiento del cliente a lo largo de
una cadena de ofertas, a la vez que va eligiendo su menú: entremeses,
platos con guarnición, quesos, postres y bebidas. Paga al final de la
línea, como queda indicado en diagrama incluido en la Figura 8.5.
Modalidad automática
227
228 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Caben citar algunas otras vitaminas del grupo B que también pasan
al medio de cocción en unión de la tiamina: la niacina, estable al calor,
pasa con facilidad al medio de cocción y se reduce sustancialmente en
un 33-50 % con el braseado de la carne; el ácido pantoténico, que en
más de un 50 % se puede encontrar en el caldo cuando la carne se
cuece en gran cantidad de agua; el piridoxal y el ácido fólico también
se reducen al pasar al medio acuoso.
El binomio temperatura-tiempo
Dentro de cada tipo de tratamiento térmico, la estabilidad de los
nutrientes de la carne resulta influida por el binomio temperatura-tiem-
po. Al encontrarse formando parte de complejos estructurales, las vita-
minas de los alimentos pueden aparecer más estables al calor que lo
teóricamente esperado. Por otra parte, los tiempos de cocción más cor-
tos, aun cuando las temperaturas sean más elevadas, contribuyen a una
mejor retención de tiamina.
En relación con los componentes proteicos, se ha comprobado que
las prácticas caseras de cocción de la carne apenas afectan al valor bio-
lógico de sus proteínas, lo que significa una ausencia de modificacio-
nes estructurales en sus aminoácidos esenciales.
Hay que ajustar muy bien el binomio temperatura-tiempo, puesto
que algunas verduras pueden requerir un tratamiento térmico prolonga-
do para mejorar su textura. Otras verduras han de ser sometidas a escal-
dado antes de ser congeladas o enlatadas, para que se inactiven sus enzi-
mas y no desarrollen color, textura y aromas indeseables. En estos casos,
el agua puede extraer algunos nutrientes, aunque no los destruya, pero
siempre supone una pérdida. Un objetivo importante a conseguir en las
cocciones de productos vegetales es minimizar estas pérdidas.
En ocasiones se ha recomendado la adición de bicarbonato sódico, u
otra sal alcalina, al agua de cocción para aumentar la velocidad del pro-
ceso y también mejorar la estabilidad del color. Sin embargo, la cocción
de un vegetal nunca debe realizarse en medio alcalino, porque hay
nutrientes, como la tiamina y el ácido ascórbico, que son especialmente
sensibles al calor cuando se encuentran en un medio con pH básico.
ASPECTOS HIGIÉNICO-SANITARIOS
DE LA CALIDAD
245
246 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
medios necesarios para que en cada fase del proceso se vigile tanto
el cumplimiento de las normas tecnológicas y sanitarias como la ade-
cuación de lo que se produce con los patrones de referencia estable-
cidos.
En el terreno práctico, hay que resaltar cómo el punto final del pro-
ceso está representado por el plato cocinado y servido y, a ese nivel, ya
no caben medidas correctoras de ningún tipo para que lo evaluado
como incorrecto pueda ser modificado. En esta fase, el plato cocinado
sólo puede ser aceptado o rechazado.
Para cubrir todas sus responsabilidades, la dinámica del control de
calidad obliga a poner en práctica diversos tipos de medidas:
— Preventivas: poder prever cualquier tipo de dificultad.
— De verificación: comprobar que se cumple con lo esperado.
— Correctoras: corregir lo inapropiado.
— De confianza: garantizar la buena marcha de todo el proceso.
Cuando los criterios de selección de materias primas son acertados
y los procesos tecnológicos se realizan bajo control riguroso, de acuer-
do con las normas establecidas, apenas será necesaria la inspección del
producto cocinado.
Sin embargo, es importante subrayar que asegurar la calidad abso-
luta del producto cocinado es algo imposible, porque nunca se consi-
gue alcanzar unos resultados perfectos. Por ello es importante que no
se omita ninguna de las medidas señaladas como necesarias para el
efectivo control de todas y cada una de las etapas implicadas en el pro-
ceso. De aquí que sea aconsejable apoyar el control con la medición de
unos parámetros que previamente han debido ser seleccionados con el
fin de comprobar si, en cada caso, sus valores corresponden a los inter-
valos de referencia admitidos como correctos.
Cuando se cumplen todos estos requisitos, la dinámica del control
de calidad se encontrará en las condiciones idóneas para definir la
situación del producto en cada momento de su elaboración. Y a través
de esos conocimientos puede detectar la presencia no esperada de
diversos tipos de defectos, que pueden ser:
— Defectos críticos: porque pueden implicar un riesgo grave para
la salud del consumidor.
— Defectos mayores: porque representan un riesgo sobre la vida
del producto, aunque no afecte a la salud del consumidor.
— Defectos minoritarios: porque aparecen de forma poco frecuen-
te o esporádica.
GESTIÓN Y CONTROL DE CALIDAD EN LAS EMPRESAS... 249
Debe ser considerada como una fase muy relevante en relación con
el proceso global, porque la mayoría de las veces se trata de productos
alimenticios con propiedades muy delicadas y, en bastantes ocasiones,
perecederos. Para llevarla a cabo de modo correcto hace falta disponer
de dos elementos esenciales:
1. Un área de recepción, que tenga fácil acceso y una buena comu-
nicación con las zonas de almacenamiento, además de unas instalacio-
nes adecuadas.
2. Unas fichas de especificaciones de compra, para ser utilizadas
como sistema de control y permitan proceder al rechazo de aquellas
mercancías, cuyas características no se correspondan con los patrones
de referencia fijados.
resultados de los análisis. Por otra parte, estos resultados sólo tienen
capacidad para poner de manifiesto la presencia de unos efectos no
recomendables, pero no permiten identificar las causas, cuyo conoci-
miento resulta esencial para poder controlarlas.
En cambio, el sistema ARICPC representa una metodología de pre-
vención que simplifica bastante la tarea de inspección y, una vez
implantado, resulta muy válida para garantizar la calidad de lo que se
produce. El sistema ofrece un planteamiento racional para poder con-
trolar los posibles riesgos microbiológicos que implica la producción
y servicio de los platos cocinados y evita todos los inconvenientes
indicados en los planteamientos anteriores.
Es un método sistemático y preventivo, que permite evitar aquellos
riesgos vinculados a la seguridad de los productos alimenticios que se
elaboran. Fue desarrollado a partir de 1960, dentro de los programas
de vuelos espaciales, para ser aplicado a la producción de comidas
para los astronautas. En su aplicación a las empresas de restauración,
el sistema exige disponer de un conocimiento profundo tanto de los
productos cocinados como de sus procesos de fabricación y de servi-
cio, con el fin de utilizar tales informaciones para establecer las cau-
telas y los modos de proceder que permitan la solución de los proble-
mas que en algún momento puedan surgir. En definitiva, es un sistema
que permite analizar los peligros potenciales y definir las medidas de
prevención, o de corrección, de esos peligros.
El desarrollo del sistema ARICPC está basado en siete principios
fundamentales, que se corresponden con las diversas etapas exigidas
por el sistema y con la definición de sus principales funciones.
Principio 1. Identificación de los peligros y riesgos, así como
evaluar su gravedad y sus riesgos
Se trata de una primera etapa, que puede ser calificada de esencial,
pues de ella va a depender la validez del sistema. Consiste en una eva-
luación de los procesos implicados, de acuerdo con los conceptos de
peligro, riesgo y gravedad:
Se entiende por peligro toda carga microbiana, sea de origen o sea
por supervivencia después de una cocción, que resulta inaceptable,
porque puede afectar a la inocuidad del consumo del alimento, unas
veces por su patogenicidad, otras por aportar al alimento toxinas pro-
pias de su metabolismo.
Se entiende por riesgo la estimación de la probabilidad para que
pueda sobrevenir un peligro.
GESTIÓN Y CONTROL DE CALIDAD EN LAS EMPRESAS... 259
Figura 10.1. Cuestionario para poder calificar de punto crítico de control a cualquier
tipo de peligro que haya sido identificado.
GESTIÓN Y CONTROL DE CALIDAD EN LAS EMPRESAS... 261
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268 CIENCIA Y TECNOLOGÍA CULINARIA
Normativa legal