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Jonás 1.4-17
“Pero el SEÑOR lanzó sobre el mar un fuerte viento, y se desencadenó…” Jonás 1.4
- Primero, la tormenta del mar. La historia de Jonás comienza con una tormenta.
- Si no estuviste el domingo anterior, la historia de Jonás trata acerca de un profeta
llamado Jonás a quién Dios le ordenó que fuera a predicar el mensaje de Dios a una
ciudad mala Nínive, pero Jonás no quiso ir a la ciudad y se fue a otro lugar, muy
opuesto a la ciudad de Nínive.
- Aquí en el v. 3 leemos que Jonás se fue un puerto, Jope (todavía existe es Jaffa) y
pagó su boleto y se embarcó rumbo al puerto de Tarsis, y dice muy claro, “huyendo
así del Señor.”
- Pero Jonás no llegó muy lejos en su huida, porque estando en el mar, pronto llegó
una tormenta del mar, un huracán sobre su barco que hizo que Jonás de detuviera. *
Forrest Gump.
- Una tormenta en el mar era una dura experiencia para los marineros de aquel
tiempo, (y también para nuestros tiempos.) He escuchado historias aquí en nuestra
ciudad acerca de pescadores que salieron a pescar y nunca regresaron por una
tormenta que les llegó por sorpresa.
- Pero esta tormenta en particular dice muy claro, que Dios el Señor le lanzó la
tormenta al barco donde iba Jonás, para detener el viaje de Jonás, dice el v. 4, “Pero el
SEÑOR lanzó sobre el mar un fuerte viento, y se desencadenó una tormenta,” Y el barco
amenazaba en hundirse.
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- Y es aquí cuando leemos acerca del miedo de los marineros que iban en el barco
con Jonás.
- Es muy evidente en el relato que, cuando llegó la tormenta llegó también el miedo.
- El v. 5 dice que los marineros estaban aterrados. Las tormentas nos causan mucho
miedo.
- ¿Qué puede ser una tormenta para nosotros? Cualquier situación difícil y dolorosa.
- Hoy nos pueden llegar toda clase de tormentas. Todos estamos expuestos a las
tormentas de la vida. Una tormenta puede ser cualquier cosa que te cause miedo y
sufrimiento en tu vida. +
- Pero mira como a estos marineros, la tormenta les ayudó a mirar a Dios. Esto es lo
que sigue.
- Anoto: los creyentes en Dios, porque todos los marineros creían en un dios.
- Cuando llegó la tormenta, los marineros tuvieron mucho miedo, “Los marineros,
aterrados,”
- Pero nota esto: ¿qué hicieron ellos cuando tuvieron miedo? Mira el v. 5, “comenzaron
a clamar cada uno a su dios. Y también a echar del barco cosas pesadas.” ¡Todos era
religiosos!
- Entonces es claro que estos marineros eran politeístas, es decir, tenía varios dioses,
y por eso dice que cada uno clamaba a su propio dios, ellos no conocían al Dios de
Jonás, por eso notamos en la Biblia que la palabra “dios” para ellos está con minúscula,
ellos eran creyentes en su dios. Eran creyentes, tenían una religión, ¡le pedían
favores a su dios!
- Y nota también que el capitán del barco vio a Jonás durmiendo y le reclamó y le dijo
que también clamara a su dios, ¡sin saber que era el Dios verdadero! v. 6. ¿Qué
aprendemos aquí?
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- Que todas las personas, cuando les llegan las tormentas a su vida, se vuelven más
religiosos, se vuelven de repente más creyentes en Dios. Pero también, cuando se va
la tormenta, vuelven a su vida normal, y se olvidan de Dios. Así es la idea de la
religiosidad. ¿Vives tú así?
- Ellos sólo eran religiosos. Tenían una religión que sólo usaban en tiempos de miedo
y angustia. Pero esto no es así con el Dios de la Biblia.
- Hoy hay mucha gente que busca a Dios cuando las cosas se ponen difíciles. Pero el
Dios de Jonás, el Dios de la Biblia no es así. Nota que Dios trata todo el tiempo con
Jonás. En la calma y en la tormenta. Igual contigo, el Dios de la Biblia desea tener
contigo una relación personal tanto en los tiempos malos como en los tiempos
buenos. No sólo cuando llegan las tormentas y entonces sí vas a la iglesia.
- Los religiosos creen que cuando se portan bien, entonces Dios los debe proteger.
Ellos usan a Dios para su propio beneficio y conveniencia. Dios es útil cuando
conviene. Por puro interés.
- Los religiosos escuchan siempre el mismo mensaje, “Si tu das dinero, Dios te va a
bendecir y a salvar.” “Si tú ayudas a los demás, Dios te va a cuidar.” “Si tú cumples con
tu religión, Dios te salva.” “Y si no haces todas estas cosas, pues no esperes nada de
Dios.” Pero no es así.
- Estas cosas no funcionan contra el miedo. Los religiosos siguen teniendo mucho
miedo, como los marineros en el barco. Estos siempre tienes miedo en las tormentas
de la vida.
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3. EL SUSTITUTO VOLUNTARIO.
- Pero Mira los que Jonás les dice en medio de la tormenta. v. 12 “—Tómenme y
láncenme al mar.” ¿Qué está Jonás diciendo? ¿Cómo que, échenme al mar?
- Bueno, lo que Jonás dice es que él sabe que es por su culpa que los marineros
están en peligro de muerte. Lo dice enseguida, “Yo sé bien que por mi culpa se ha
desatado sobre ustedes esta terrible tormenta.”
- Jonás sabe que es su error, sabe que él es la causa, y Jonás está dispuesto a morir
por los marineros. Por eso, los marineros le preguntaron a Jonás: —¿Qué vamos a
hacer contigo para que el mar deje de azotarnos? Y Jonás les dice, “estoy de acuerdo
que me sacrifiquen.”
- Este profundo temor a Dios significa tener una actitud de humildad, y no de orgullo, de
asombro por Dios, de alegría por lo que significaba para ellos la salvación de Dios. Y
dice que después le ofrecieron ofrendas al Dios de Jonás, al verdadero Dios de la
Biblia. ¿Por qué este cambio?
- Por el sustituto voluntario. Porque Jonás se ofreció como un sustituto por sus
vidas.
- ¿No te recuerda a alguien que también hizo lo mismo, pero ahora por ti?
- Mucho tiempo después de esto, a Jesús, en Mateo 12.38, le preguntaron por una
señal del cielo.
- Y Jesús les dijo que sólo había una señal de parte de Dios. V. 39-40. Y agregó, “Aquí
tienen a uno más grande que Jonás.” ¡Jesús se comparó con Jonás? ¿En qué?
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- ¿Qué significa? Significa que Jesús al final de su vida, fue tu sustituto voluntario
para que tú tuvieras la salvación de Dios. Él fue a morir a la cruz de manera voluntaria
para salvarte.
- Te pregunto, como pasó con los marineros: ¿Tienes ya una actitud de humildad, de
asombro por Dios, de alegría por lo que significa la salvación de Dios? ¿Has creído en
tu verdadero sustituto, Jesús, que fue a la cruz para salvarte?
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+ Mis miedos: Yo también tengo miedos. Unos de una cosa y otros de otra cosa.
* La película Forrest Gump.
Teniente Dan: “¡Porque no pescamos camarones! ¿Dónde está tu Dios?”
Forrest Gump: “Es curioso que el teniente Dan halla preguntado por Dios, porque cuando el teniente Dan preguntó por Dios, Dios se hizo presente.”
Forrest Gump es una película estadounidense cómica dramática estrenada en 1994. Basada en la novela homónima del escritor Winston Groom, la película fue dirigida
por Robert Zemeckis y protagonizada por Tom Hanks, Robin Wright, Gary Sinise y Sally Field. La historia describe varias décadas de la vida de Forrest Gump, un nativo
de Alabama que sufre de una leve discapacidad intelectual. Ello no le impide ser testigo privilegiado, y en algunos casos actor decisivo, de muchos de los momentos más
transcendentales de la historia de los Estados Unidos en la segunda mitad del siglo XX, específicamente entre 1945 y 1982.
Tom Hanks como Forrest Gump. De niño le detectaron un cociente intelectual inferior a 75, pero su carácter
entrañable y la gran devoción que profesa a su madre y a su deber en la vida le llevarán a numerosas e
interesantes experiencias vitales. Durante su vida conoce a numerosos personajes importantes y se ve inmerso
en acontecimientos históricos destacados.
+ Hay cuatro tipos de tormentas que nos pueden llegar. Tormentas es igual a sufrimientos. T.
Keller.
Primer tipo: Las causadas por nosotros mismos. Son los sufrimientos causados por nuestras
propias fallas, como le pasó a Jonás. Por su desobediencia, por su falta de amor, le llegó una
tormenta.
Segundo tipo: Las causadas por otras personas. Son los sufrimientos que son causados por
los ataques de otros, los daños, las traiciones.
Tercer tipo: Los sufrimientos por pérdidas. Estos son para todos, buenos y malos, no
dependen de nuestras acciones, ni las de otros. Perdemos a un ser querido, perdemos el
trabajo, la salud.
Cuarto tipo: Los sufrimientos misteriosos. Son los que le llegan a alguien que es justo, y no se
puede explicar. Hay todo un libro de la Biblia de este tema. El libro de Job. Un buen cristiano,
puede sufrir, y es un misterio por qué sufre, ¡el más justo de toda la historia sufrió!, fue Jesús.