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Universidad Técnica del Norte

Vicerrectorado Académico
Sistema de Nivelación y Admisión

Título del trabajo:


“Historia Ecuador Periodo del Militarismo Nacional o Urbinista”

Materia

Sociedad y cultura

Carrera: Pedagogía de las artes y las humanidades


Autores: Lincango Brayan
Docente: Lic. Santiago Otero
Aula: H7

Ibarra, 2019
Historia Ecuador

Periodo del militarismo nacional o urbinista

Derrocado el presidente Flores, Ecuador es gobernado por las sucesivas presidencias de Vicente
Ramón Roca, Manuel Azcazubi y Diego Novoa, de tendencia nacional y civil, frente a la
influencia de la anterior presidencia de un fuerte predominio de los militares venezolanos del
periodo de la independencia próximos a los círculos de Antonio José de Sucre y Juan José Flores.
La primera de ellas, la correspondiente a V. Ramón Roca, estuvo condicionada a los continuos
peligros que tuvo que resistir de los intentos de involución de los sectores floréanos, que
amenazaban la paz con la continua presión de sus partidas tanto desde dentro como desde fuera
del país. Mantuvo unos postulados no tan abiertamente liberales como los que representaba su
oponente electoral, José Joaquín Olmedo, por lo que pasará a denominarse, políticamente, su
gobierno, el roquismo, como “retrogrado” o conservador. Finalizado el periodo presidencial y
celebradas nuevas elecciones, se produce un empate técnico, que no se puede resolver tras
repetidos recuentos, entre los dos candidatos, el general Antonio de Elizalde, apoyado por el
roquismo, y Diego Novoa, por los anti-roquistas. La solución pasa por mantener al vicepresidente
D. Manuel Azcazubi, en la presidencia interina, de la que será desalojado tanto por ser considerada
la situación ilegal y por el talante moderado frente al floreanismo, por el general J. Mª Urbina,
quien nombra a Diego Novoa, primero, Jefe Supremo, y, posteriormente, presidente interino.

El general Urbina fue, verdaderamente, el gestor de este periodo histórico, quien desde
muy temprana edad, inicio una ascendente carrera política y militar, que experimentó un
gran impulso, con motivo de la Revolución Marcista que le llevaría a desempeñar el cargo
de la Secretario General de la Asamblea Nacional Constituyente y de ahí a la Secretaría
General de la Presidencia de Vicente Ramón Roca, a la que seguirán las dignidades de
diputado, senador, jefe de Estado Mayor y Jefe Superior Civil y Militar de Guayaquil,
actuando, finalmente, como moderador entre Diego Noboa y Antonio Elizalde a la máxima
magistratura republicana, mientras se consolidaba como el hombre fuerte del Estado
(Salvador Ceprian, 2004, pág. 1).
Accede a la jefatura de la república como consecuencia de la incapacidad de Novoa para
resolver la situación de hecho, como por la frustración política de los sectores más pre-liberales
del Ecuador, y en especial, de la ambición política del general. Esta presidencia si va a producir
profundos cambios en las estructuras económicas y sociales de la república, prueba de ello son, el
fomento del intercambio comercial y la eliminación de gravámenes a los productos de primera
necesidad.

Las relaciones, en consecuencia, con Estados Unidos se van a incrementar dentro de este nuevo
marco económico, hasta entonces casi inexistentes, y en el que se va a producir la sustitución de
la influencia británica, existente desde los primeros momentos de la independencia hasta esta la
nueva presidencia, por la influencia norteamericana, en la que se pone en práctica la influencia de
la doctrina Monroe, a partir de la cual, Europa va perdiendo poco a poco influencia en el continente
Americano, dando comienzo a lo que será una relación de dependencia, hasta nuestros días.
Hechos relevantes de la presidencia fueron la manumisión de los esclavos negros y la defensa de
las comunidades indígenas. Además, constituye las bases del ejército nacional y profesionalizado,
que demanda la nueva realidad del país, inexistente hasta ese momento.

La expulsión de los jesuitas obedece a dos factores, el primero, como freno al apoyo que
prestan a los sectores floréanos frente a Urbina, y, el segundo, por la influencia colombiana,
que recoge el espíritu anticlerical que enraizará en el liberalismo radical y que es común a
estos movimientos tanto en América como en Europa (Jesús Romero, 2011, pág. 4).

Que había regresado durante la presidencia de Novoa en 1850, si bien los miembros de la
Compañía que regresan son de origen español y poco identificados con la nueva República, lo que
provoca nuevos desencuentros con las autoridades civiles.

La presidencia de Francisco Robles es continuista de la obra del general Urbina, manteniendo


los mismos presupuestos reformistas y democráticos, si bien inicia el periodo de crisis provocado
tanto por los floréanos irreductibles como por sectores urbinistas descontentos.

En el año 1859, bajo la presidencia del general Robles, el Ecuador padece uno de los
momentos más críticos de su historia, que cerca está de llevarla a su práctica desaparición.
El general Castilla, ante la situación de caos que invade la República, ocupa la zona sur del
país. En Quito se produce un alzamiento contra el presidente y se constituye un triunviro
provisional formado por Gabriel García Moreno, Jerónimo Carrión y Pacífico Chiriboga.
Jerónimo Carrión, vicepresidente a la sazón y miembro del triunviro, instaura en Cuenca
un gobierno personal. En Guayaquil, el general Guillermo Franco se alza ante la situación
de deterioro existente y, en Loja, se proclama un gobierno federal encabezado por el
Dc. Manuel Carrión. La situación de insurrección generalizada en todo el país obliga a salir
al general Robles al exilio, mientras que en el sur se firma el Tratado de Mapasingue entre
los generales Franco y Castilla ( Daniel Dimeco, 2008, pág. 8).

La oposición exterior dirigida por el general Ramón Castilla, presidente del Perú, conduce al
Ecuador a una encrucijada histórica próxima a la desintegración con la ocupación militar del país.

Fue un gobierno derrocado por el general Urvina. Desde 1845 hasta 1856 el general Urvina
inspiró todos los movimientos y cambios políticos. El Gral. José María Urvina, gobernó
directamente desde 1851 hasta 1856 primero como dictador y luego como presidente.

En los inicios de los cincuenta, otro conflicto de poder en el gobierno de Noboa provocó
un nuevo arbitraje militar. El “hombre fuerte” del ejército, el general José María Urvina,
se proclamó dictador en 1851. El siguiente año fue designado Presidente por una nueva
Asamblea Constituyente (Enrique Ayala Mora, 2014, pág. 32).

Urvina consolidó una alianza entre la oligarquía latifundista y comercial costeña con el ejército,
comandado por jefes nacionales, A ese agrupamiento se lo llamaba urvinismo, por el apellido de
su caudillo. Llevó adelante un programa de corte liberal, que promovió la apertura económica y el
comercio e incluyó la abolición de la esclavitud, supresión del tributo indígena y medidas a favor
de los campesinos serranos.

Fin de la esclavitud

La existencia de la esclavitud se había considerado desde la Independencia como una


contradicción con las libertades republicanas. Se dieron pasos para suprimirla, como la “libertad
de vientres”, con la cual los niños de padres esclavos nacían libres. También se promovió que los
esclavos compraran privadamente su libertad. Pero, después de dos décadas de la fundación del
Ecuador, todavía había más de 3.000 esclavos negros en el Ecuador.

Uno de los primeros actos de Urvina en 1851 fue decretar la abolición total de la esclavitud
en el país. De inmediato se comenzó a liberar Guayaquil, el centro de la “Revolución
marcista” Rene Charton, 1846 a los esclavos. El año siguiente, la Asamblea destinó los
fondos necesarios para pagar a los dueños de los esclavos. Así terminó esta terrible
situación opresiva. Pero los negros o “afro ecuatorianos” siguen siendo víctimas del
racismo, la pobreza y la discriminación (Enrique Ayala Mora, 2014, págs. 32,33).

Uno de los primeros actos de Urvina en 1852 fue decretar la abolición total de la esclavituden
el país. De inmediato se comenzó a liberar a los esclavos. El siguiente año, la Asamblea destinó
los fondos necesarios para pagar a los dueños de los esclavos.

La crisis

En 1856, a Urvina le sucedió en el poder su aliado y continuador, el general Francisco Robles.


Una desastrosa negociación de la deuda externa y el intento de arrendar Galápagos a extranjeros
fueron motivos para que la oposición contra el gobierno adquiriera fuerza.

El Perú reclamó varios territorios en el Oriente y bloqueó el puerto principal con su marina.
En 1859 varias revueltas seccionales provocaron una crisis de disolución. En Quito,
Guayaquil, Cuenca y Loja se formaron gobiernos autónomos. Los países vecinos
negociaban la partición del país. Llegó un momento en que todo el sistema amenazó venirse
abajo por el peso de las contradicciones entre las oligarquías regionales ( Fernando Balseca,
2014, pág. 33).

La crisis se mantuvo por más de un año. Luego de proponer que el país se convirtiera en un
“protectorado” de Francia, Gabriel García Moreno, a la cabeza de la aristocracia quiteña y ayudado
por Flores, logró triunfar en la Sierra, tomar después Guayaquil y reunificar al Estado ecuatoriano
en 1860.
Referencias
Daniel Dimeco. (2008). Breves Notas Aclaratorias. Quito: slideshare.

Fernando Balseca. (2014). ESTUDIANTE SOCIALES 7mo. En G. R. Nolivos, Gobiernos


“marcistas” (pág. 33). quito: Corporación Editorial Nacional.

Enrique Ayala Mora. (2014). Los primeros años - II. Quito: Corporación Editorial Nacional.
Obtenido de https://educacion.gob.ec/wp-content/uploads/downloads/2014/06/TEXTO-
DE-ESTUDIANTE-SOCIALES-7mo-EGB.pdf

Jesús Romero-Samper. (2011). Historia de la Republica de Ecuado. Chile: arbil.

Salvador Ceprian. (2004). Historia de la Republica de Ecuador (1809 –1976). Quito: Campaña
de autoinculpación. Obtenido de http://www.arbil.org/arbi-d83.htm

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