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ARROZ

El cultivo del arroz (Oriza sativus L.) es afectado por numerosos y


diferentes enemigos naturales, encontrándose entre éstos un extenso
grupo de agentes infecciosos que causan distintas enfermedades, las
cuales en determinadas condiciones ambientales constituyen uno de los
factores limitantes de mayor importancia en la explotación de este cereal.
La actividad desarrollada por estos entes (hongos, bacterias, virus, etc.) en
los órganos invadidos (hojas, tallos, inflorescencias, semillas) originan
disminuciones, tanto en la calidad como en la cantidad de la cosecha. La
magnitud de las pérdidas económicas se encuentra determinada por los
niveles de susceptibilidad de las variedades sembradas y por el tipo de
manejo agronómico que ellas reciben.

Enfermedades de mayor importancia

En las áreas arroceras de Venezuela las enfermedades causadas por


hongos son las más numerosas, y entre éstas se encuentran la mayoría de
las más importantes. La amplia distribución de alguna de ellas y la
aparición localizada de otras conforman un panorama fitopatológico muy
variable, pero la incidencia y severidad de las más destructivas promueven
reducciones en los rendimientos que pueden alcanzar hasta e170% y
obligan al agricultor a tomar medidas preventivas durante el ciclo de
lluvias.

Según los últimos trabajos de investigación conducidos por los técnicos


del FONAIAP, las enfermedades más comunes e importantes en este
cultivo son las siguientes:

Piricularia (Pyricularia oryzae): constituye el principal problema


fitopatológico del arroz, debido a que el hongo manifiesta gran capacidad
destructiva y desarrolla rápida adaptabilidad en las nuevas variedades ya
los fungicidas específicos. Los ataques críticos ocurren en plántulas y
floración; las lesiones foliares típicas son alargadas con extremos
puntiagudos, de bordes marrón-rojizo y centros grisáceos. La extensión y
confluencia de varias manchas producen secamiento parcial o total de la
lámina foliar. Las lesiones paniculares se localizan en el pedúnculo,
ramificaciones y estructuras florales. Comúnmente la infección ocurre en
la base de la panícula (cuello o nudo ciliar) provocando el necrosamiento y
estrangulamiento del área afectada. Los ataques tempranos, antes de
emerger la panícula, originan granos vanos; mientras que los tardíos, los
producen livianos y yesosos.

Helminthosporiosis (Drechslera oryzae, Bipolaris oryzae,


Helminthosporium oryzae): se encuentra asociada con baja fertilidad del
suelo y daños radicales por insectos. El hongo infecta en cualquier etapa
del cultivo; sin embargo, las incidencias más críticas a la planta ocurren al
final del cultivo. Las lesiones foliares varían desde pequeños puntos hasta
manchas circulares u ovales que se distribuyen casi uniformemente por
toda la lámina foliar; la coloración marrón inicial se torna más clara en el
centro y aparece con frecuencia un halo amarillento. A nivel de panícula el
fitopatógeno invade el cuello, raquis, ramificaciones y granos (glumas),
originando manchas marrones cubiertas por crecimiento del hongo. Esto
disminuye el rendimiento y la calidad molinera. Escaldadura de la hoja
(Rhynchosporium oryzae): es común en todas las áreas arroceras,
particularmente en los últimos años la incidencia y, severidad se ha
incrementado. Aun cuando se reconoce como un fitopatógeno débil, este
hongo produce grandes secamientos de la lámina foliar.

Generalmente, las lesiones se localizan en las puntas de las hojas. Al


principio las manchas presentan una apariencia húmeda, luego se
desarrollan áreas de color verde oliva o marrón claro. Las manchas típicas
presentan una zonificación característica de bandas claras y oscuras.

Pudrición de la vaina (Sarocladium oryzae, Acrocylindrium oryzae): es


una de las pudriciones que se presentan con mayor frecuencia en arroz.
Dado que en los últimos años ha habido un estable incremento en cuanto
a su incidencia, el hongo actualmente merece especial atención en los
programas de mejoramiento del arroz.

Los daños se visualizan en las vainas de las hojas superiores,


particularmente en la llamada bandera, en forma de manchas oblongas
con centros grises y bordes marrones, llegando en algunos casos a cubrir
toda el área de la vaina. En infecciones severas, las panículas no emergen
totalmente o lo hacen parcialmente acompañadas por pudriciones que
impiden la producción de granos. En el lado interno de las vainas
afectadas se desarrolla un polvillo blanco o rosado que corresponde a las
estructuras del hongo.

Manchado del grano, asociado a un complejo de hongos y bacterias


(Helminthosporium, Sarocladium, Alternaria, Epicoccum, Fusarium,
Rhynchosporium, Pseudomonas glumae, P. fuscovaginae, P. siringae pv.
oryzico/a): ocupa un lugar muy significativo en la problemática
fitopatológica de este rubro, debido a que la actividad de tales
microorganismos reducen la viabilidad y rendimiento de la semilla
certificada, particularmente.

Los síntomas en las glumas varían dependiendo de la clase de


microorganismos asociados y el avance de la infección. En, algunos casos
se presentan manchas marrones o negras que cubren parcial o totalmente
la superficie; en otros, se observan pequeños puntos. En nuestras
condiciones, el Helminthosporium oryzae se encuentra con mayor
frecuencia, observándose grandes lesiones cubiertas por estructuras del
hongo.

Hoja blanca: es la única enfermedad del arroz de origen viral conocida en


Latinoamérica, cuyo agente transmisor es el insecto saltahojas llamado
sogata (Sogatodes orizicola). Aun cuando en la actualidad su intensidad es
baja, la presencia del agente causal y de insecto vector sitúa a esta
enfermedad como una de las más importantes, además del efecto
devastador de la misma.

Los síntomas de hoja blanca difieren según la variedad atacada y edad de


la planta infectada. Se caracterizan por áreas cloróticas o lesiones típicas
de un mosaico que al fusionarse forman bandas amarillentas paralelas a la
nervadura central con secamiento de la lámina foliar. En algunos casos la
hoja se torna completamente amarillenta, previo al total secamiento. Es
frecuente observar plantas infectadas con las panículas deformadas, y
torcidas, espiguillas de color marrón y esterilidad parcial o total; de igual
forma se forman granos alargados y delgados. También es frecuente ver
macollas sanas y enfermas en una misma planta, notándose en estas
últimas una coloración más clara, tallos más delgados y menor tamaño
(achaparramiento) en comparación con las macollas sanas.

Enfermedades de menor importancia

Cabe mencionar que, además de las anteriores, se presentan otras


enfermedades con muy baja incidencia, de aparición esporádica o de
ataque en determinadas áreas geográficas, las cuales, en términos
generales, se consideran sin importancia económica. Entre éstas podemos
señalar las siguientes:

Podredumbre de la vaina (Rhizoctonia sola ni): produce lesiones


elípticas o irregulares de color blanco grisáceo en la vaina foliar, encima de
la superficie del agua (riego) o del suelo (secano). Los mayores ataques se
han conseguido en el estado Barinas.

Pudrición del tallo (Sclerotium oryzae o Helminthosporium


signoideum): se inicia en la vaina, cerca del nivel del agua, con lesiones
negras; posteriormente se desarrollan masas oscuras de micelio del hongo
y vetas negras a lo largo del tallo.

Igualmente, aparecen pequeños esclerocios negros en la parte interna y


externa de la vaina afectada. En el estado Guárico (Calabozo) se ha
presentado en niveles altos.

Cercosporiosis (Cercospora oryzae): se caracteriza por lesiones largas y


delgadas de color marrón oscuro, localizadas en el área intervenal de la
lámina foliar.

Mancha ojival (Drechslera gigantea o Helminthosporium oryzae):


deforma oval a irregular con centro necrótico de color claro y borde
marrón oscuro.

Alternaria (Alternaria padwiicki): se caracteriza por una mancha en


forma de anillo de borde marrón y centro claro.

Espiga erecta: es una enfermedad de tipo fisiológico asociada a diversos


factores del suelo, lo cual produce esterilidad total.
Daños causados por nematodos: es muy probable que ciertos síntomas
que esporádicamente se presentan en campo sean producidos por
algunos géneros asociados a este cultivo (Hirsmanniella, Aphelenchoides,
Ditylenchus), tales como amarilleos foliares, pudriciones radicales,
deformaciones y esterilidad de la panícula.

Medidas de Control

El control de las principales enfermedades del arroz se efectúa,


básicamente, mediante la resistencia varietal, aplicación de fungicidas y
prácticas culturales. Fundamentalmente, éstas se dirigen a la piricularia y
al manchado del grano. Las medidas que aquí se apliquen inciden en
mayor o menor grado al resto de las enfermedades. En la actualidad las
variedades que se siembran (Cimarrón, Araure-1 , Araure-4) manifiestan
diversos niveles de susceptiblidad a la piricularia, siendo 'Araure-1' la más
susceptible y 'Araure-4' la más resistente, tanto a nivel foliar como en la
panícula. De igual forma sucede con el manchado del grano, es decir, que
la presencia y daño responde a la época de siembra y la variedad. Sin
embargo, las mayores infecciones se han registrado en 'Araure-4'.

El control químico de piricularia es un método muy efectivo y


comúnmente usado en nuestro país. Aunque puede haber pequeñas
modificaciones, las aplicaciones para proteger la panícula generalmente se
realiza al inicio de la emergencia y, luego, después de siete a diez días. Con
frecuencia, en las variedades muy susceptibles, es recomendable una,
aspersión entre 25 y 30 días de edad del cultivo. En relación con los
fungicidas, existen en el mercado varios productos con ingredientes
específicos para minimizar los daños originados por piricularia, cuyos
rangos de eficacia van, desde mediana hasta altamente eficaces. Los
compuestos kasugamicina (Kasumín) y blasticidina (SLAS) fueron los
primeros fungicidas (antibióticos), después se incorporaron otros como el
edifenphos (Hinosan), el cual es un órganofosforado.

Desde hace varios años se han desarrollado nuevos productos


específicos con alta eficacia, tales como triciclazole (Sin), prochloraz
(Octave), isoprothiolane, probenazole, pyroquilón, fthalide. Algunos de
estos últimos fungicidas se encuentran en el mercado nacional. Dado que
el uso continuo de un mismo ingrediente activo específico contra P.
oryzae pueden originar cepas resistentes, se recomienda la mezcla o
alternancia con otros ingredientes activos. El benomil (Senlate), manzate,
propineb (Antracol), Dithane son algunos de los fungicidas que también se
pueden utilizar para contrarrestar el surgimiento de resistencia.

Los ataques de helminthosporiosis. como constituyente del complejo de


microorganismos asociados con el manchado del grano, se reducen con
las aspersiones de mezclas de carbamatos, edifenphos (Hinosan), después
de emerger las panículas. Recientemente, se ha encontrado con el
fungicida iprodione (Kidan) una alta eficacia en el control del manchado
del grano.

Las prácticas culturales inciden, en mayor o menor grado, en la


intensidad de las enfermedades del arroz. Por lo tanto, el manejo
adecuado provee ciertas condiciones adversas a los agentes causales, lo
cual se transforma en una medida de combate. Cabe destacar que el
manejo apropiado del riego, control oportuno de malezas e Insectos, uso
de semillas certificadas, fertilización adecuada y corrección de micro
nutrimentos, ejercen notable influencia en el desarrollo de las
enfermedades, al retardar la inoculación y diseminación de los patógenos
y reducir la predisposición de las plantas a las enfermedades. Además,
permiten que las variedades cultivadas expresen la máxima productividad.

Foto 1. Lesiones foliares Foto 2. Daños de P.


ocasionadas por P. Oryzae oryzae en el pendúnculo y
(piricularia) nulo ciliar de la penícula
Foto 3. lesiones folianes
Foto 4. Granos manchados
ocasionadas por
por diversos patógenos
H. oryzae (helminthosporiosis)

Foto 5. lesiones foliares Foto 6. Pudrición de la


causadas por R. oryzae vaina foliar causada por
(escaldado) S. oryzae

Enfermedades del el cultivo de la papaya, alteraciones del crecimiento y


desarrollo causadas por microorganismos, nematodos, virus, o
condiciones ambientales adversas. Las variaciones causadas por las
enfermedades en este cultivo, disminuyen considerablemente sus
rendimientos afectando el aporte económico de las plantaciones.
Contenido

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 1 Enfermedades virales en la papaya

o 1.1 Virus de la mancha anular de la papaya (prv raza p).

o 1.2 Manejo de la enfermedad.

 2 Papaya Bunchy Top (PBT).

o 2.1 Síntomas, etiología y epidemiología

 3 Enfermedades bacterianas de la papaya

o 3.1 Síntomas y epidemiología

o 3.2 Manejo de la enfermedad

 4 Enfermedades fungosas

o 4.1 Pudrición del tallo, pie y del cuello

o 4.2 Control

o 4.3 Síntomas y epidemiología

o 4.4 Manejo de la enfermedad

 5 Mancha negra por Cercospora papayae Hansf.

o 5.1 Síntomas y epidemiología

o 5.2 Manejo de la enfermedad

o 5.3 Antracosis (Colletotrichum gloeosporioides)

o 5.4 Control

 6 Mildiu pulverulento

o 6.1 Control

 7 Mancha gris de la hoja


o 7.1 Control

 8 Pudrición de la hoja

o 8.1 Síntomas y epidemiología.

o 8.2 Manejo de la enfermedad

o 8.3 Control

 9 Pudrición del fruto por Botryodiplodia theobromae (Lasiodiplodia)

o 9.1 Síntomas y epidemiología.

o 9.2 Manejo de la enfermedad.

o 9.3 Otras enfermedades

o 9.4 Enfermedades de los frutos:

o 9.5 Síntomas y epidemiología.

o 9.6 Manejo de la enfermedad.

 10 Fuentes

Enfermedades virales en la papaya

Virus de la mancha anular de la papaya (prv raza p).

El virus PRV-p, es un potyvirus que está restringido a las plantas de la


familia Caricaceae, Cucurbitáceas y Chenopodiaceae. Todas las áreas
donde se propaga este cultivo cuentan con la presencia de esta
enfermedad con excepción de África. Es conocida por diferentes nombres:
papaya distortion ringspot y mosaico de la papaya

Los síntomas de esta enfermedad están constituidos por la presencia de


un mosaico amarillo en las hojas de las plantas afectadas y numerosas
rayas aceitosas en los pecíolos de las hojas. El follaje de la planta se hace
más pequeño según la enfermedad progresa debido al desarrollo de hojas
más pequeñas y al onanismo de la planta.
Estos síntomas se reconocen por la aparición de unos anillos verde
oscuros ligeramente hundidos. El número de anillos en la fruta puede ser
variable y se vuelven menos evidentes según la fruta madura y amarilla.
Los frutos usualmente muestran deformaciones que son más evidentes en
las frutas formadas posteriores a la infección del árbol. El rendimiento de
los frutos son marcadamente menores que el de planta sanas. Las plantas
de todas las edades son susceptibles y muestran los síntomas
generalmente después de tres semanas de ocurrida la inoculación. Las
plantas infectadas muy tempranamente nunca producen aunque
raramente mueren. Hay informes de aislados que causan marchites y
muerte de las plantas.

El PRV-p lo diseminan varias especies de Áfidos de forma no persistente.


Aunque las cucurbitáceas son susceptibles al PRV-p, no sirven como
huésped alternativo importante por lo que la diseminación dentro y entre
campos es principalmente de papaya a papaya. Un campo de papayas
puede quedar totalmente infectado en un período de tres a cuatro meses
especialmente cuando se encuentran localizados cerca de campos
infectados y durante los períodos cuando las poblaciones de áfidos son
elevadas.

Manejo de la enfermedad.

Los esfuerzos para el control de la enfermedad han sido dirigidos a:

 Uso de plantas provenientes de viveros sanos (exclusión) y no


mover plantas de viveros de zonas infectadas a libres.

 Monitoreo de la aparición y saneamiento de plantas enfermas en


los campos dos o tres veces por semana.

 Mantener el área limpia de malezas que puedan servir de


hospederos a los áfidos.

 No plantar vegetales que puedan albergar áfidos alrededor de las


plantaciones o como cultivo intercalado.

 Protección cruzada con líneas suaves del virus o mutadas.


 Las nuevas plantaciones deben ser establecidas lo más lejos posible
de plantaciones infectadas.

 Uso de cultivos intercalados como es maíz alrededor del campo y


entre líneas para que los áfidos provenientes de plantas enfermas
pierdan la habilidad de transmitir la enfermedad debido a la forma
no persistente de la transmisión.

 Uso de variedades resistentes.

Papaya Bunchy Top (PBT).

Síntomas, etiología y epidemiología

Entre las enfermedades que afectan a este cultivo se describe el cogollo


arrepollado o Bunchy Top que a su vez es considerada como una de las de
mayor importancia económica. Fue descrita por primera vez en Puerto
Rico en 1931 y actualmente se conoce de su presencia en diferentes
regiones del Caribe desde Las Bahamas hasta Trinidad, en América
Central y América del Sur. En Cuba fue reportada desde 1946 y ha causado
pérdidas económicas considerables.

Su agente causal fue primeramente identificado con un virus,


posteriormente lo asociaron con un fitoplasma y en estudios recientes se
ha determinado que esta patología está relacionada con bacterias
fastidiosas que habitan en las células de los laticíferos de las plantas
infectadas las cuales se identificaron como miembros del subgrupo 1-alfa
de las Proteo bacterias dentro del género Rickettsia. Hasta el momento no
ha sido posible su cultivo “in vitro” lo que ha impedido la verificación de
su patogenicidad a plantas de papaya.

Los síntomas producidos en hojas incluyen: moteado tenue, clorosis


difusa, son finas y rígidas, con acopamiento descendente, clorosis
marginal e internerval y/o necrosis y la reducción de su tamaño. Los
pecíolos son rígidos y se extienden horizontalmente más que los de
plantas sanas lo que da una apariencia de arrosetado y achaparramiento.
Se asocia además la presencia de manchas acuosas discretas (0.5 mm) en
los pecíolos y tallos afectados que se desarrollan en manchas irregulares
de 1-2 mm de diámetro. La planta comienza a desnudarse excepto por la
permanencia de un grupo de hojas en el ápice. Provoca además
disminución del vigor y muerte regresiva. Hay una escasa producción de
flores y frutos y cuando estos últimos se producen son pequeños,
deformes y sin látex.

La transmisión de esta enfermedad es posible mediante injerto y por


insectos vectores, específicamente saltahojas y entre ellos se ha
mencionado a Empoasca papayae Oman, Empoasca stevensi
Young y Empoasca dilitara Delong et Davidson. Estos vectores están
presentes en Cuba,Puerto Rico, República Dominicana y al norte
de Sudamérica.

Enfermedades bacterianas de la papaya

Síntomas y epidemiología

Esta enfermedad ha determinado la limitación del desarrollo del cultivo en


las Antillas francesas, en Java y más recientemente, se informó de una
enfermedad bacteriana que presentaba síntomas similares. La
enfermedad, se manifiesta por el marchitamiento y la necrosis de una
hoja en la parte superior del tallo, manchas angulares acuosas limitadas
por las nervaduras de las hojas más visibles por el envés y manchas
irregulares oscuras acuosas en la inserción del pecíolo y tallo y en los
frutos.

Hay un exudado abundante bacteriano de estas manchas y desde los


frutos. Las manchas se extienden y deprimen alcanzando entre 12–15 cm
de largo y 6-8 de ancho. El centro de las lesiones se seca y se hacen
visibles formando un chancro que expone los tejidos. Los chancros se
forman también alrededor de los pedúnculos. En condiciones de alta
humedad. En los frutos, las manchas inicialmente acuosas, se hacen más
profundas y firmes.

Diversos autores han descrito que la epidemia en Guadalupe aparece en


los meses más lluviosos de Septiembre a Noviembre y que la enfermedad
sigue una progresión logística. La sincronización de las epidemias indica
que éstas son independientes del estado fisiológico de la enfermedad y
que se relaciona con la pluviométria.
El organismo causal ha sido identificado como Erwinia sp. El patógeno es
un habitante transitorio del suelo ya que no sobrevive más de dos
semanas en el mismo ni asociado a las raíces ni a los restos de cosecha.
Permanece sin embargo indefinidamente en los tejidos del tallo y las hojas
de las plantas y se mantiene epifíticamente en el follaje del Tomate. La
contaminación primaria de los papayeros tiene un origen telúrico cuando
el inóculo está presente antes de la plantación; la bacteria penetra por las
raíces y coloniza el sistema vascular de la forma descrita

Manejo de la enfermedad

Los resultados de ciudad Guadalupe y otros países indican que los


tratamientos con Estreptomicina, Cobre, etc., resultan efectivos. Se han
tomado medidas de tipo sanitarias para restringir su diseminación como
son:

En la primera aparición detección de plantas enfermas y destrucción


quemándolas y enterrándolas, etc.

Para limitar la diseminación secundaria, desinfectar las herramientas de


corte entre plantas con Formol, Lejía etc.,

Enfermedades fungosas

Pudrición del tallo, pie y del cuello

Phytophthora palmivora ( Butler)

Esta enfermedad se conoce también como Damping off. La enfermedad


comienza en el tallo a nivel del suelo y avanza con rapidez hacia arriba y
hacia abajo. Cuando se detectan afectaciones en condiciones de vivero, las
raíces de las plántulas jóvenes se observan totalmente podridas. En el
cuello de estas plantas se observan manchas oscuras acuosas, que
provocan su rápida declinación se secan y mueren cuando la necrosis ya
ha rodeado el tallo.

La enfermedad es más frecuente en suelos con mucha materia orgánica,


mal drenaje y poca aireación y cuando el riego es excesivo.

Control
 Utilizar en el cultivo de las plantaciones áreas con buen drenaje
superficial e interno.

 Sembrar en canteros elevados solo en el caso de que se trate de


suelos pesados.

 Realizar subsolación profunda (aproximadamente a 60 cm) en el


sentido del surco.

 Destruir y eliminar frutos enfermos.

 Aplicación de Trichoderma harzianum en las bolsas del vivero y


aplicación en el campo antes de realizar el trasplante.

Síntomas y epidemiología

Este hongo causa la pudrición del pié y de los frutos y persiste en el suelo,
causando problemas al replantar. Las infecciones de las raíces ocurren
durante el desarrollo de las plantas jóvenes causando necrosis de las
raíces, marchites y muerte de las plantas jóvenes en los viveros y la
primera etapa del desarrollo del campo. La enfermedad durante los
períodos húmedos ataca además los frutos produciendo manchas acuosas
en la superficie del fruto que rápidamente se cubren de un moho de color
blanco sucio cubierto de esporas Las lesiones pueden presentarse en
cualquier parte del fruto, incluyendo la base del fruto.

Manejo de la enfermedad

Pudrición de la raíz.

 El establecimiento de plantaciones en los campos infectados puede


ser llevado a cabo llenando los huecos con suelo virgen de áreas no
infectadas o utilizando el antagonista Trichoderma harzianum.

 Mejorar el drenaje de los campos.

Pudriciones de los frutos.

 Los tratamientos con fungicidas de carba matos brindan un buen


control de la enfermedad. Si las condiciones ambientales son muy
favorables y la infección es muy severa pueden utilizarse fungicidas
derivados de Acylamidas.

 Eliminación de los frutos enfermos.

Mancha negra por Cercospora papayae Hansf.

Síntomas y epidemiología

Esta enfermedad se encuentra presente en todas las áreas de cultivo,


ataca los frutos y hojas y es más común en áreas más atendidas y
húmedas. Los síntomas consisten en la presencia de manchas de las hojas
de pequeño tamaño, irregulares en forma y de color blanco grisáceas, el
daño a los árboles es despreciable, pero cuando se presenta una alta
infección puede ocurrir amarillamiento y caída de hojas. En los frutos las
manchas se inician como puntos negros diminutos, que pueden
distinguirse cuando este empieza a amarillear y no conducen a la
pudrición de los frutos.

Manejo de la enfermedad

 Aspersiones de fungicidas a los frutos con una frecuencia quincenal


en dependencia del periodo de lluvia.

Antracosis (Colletotrichum gloeosporioides)

Los síntomas pueden apreciarse sobre los frutos en la misma planta; pero
generalmente en el proceso de maduración se observan pequeñas
manchas redondas, ligeramente deprimidas y de un verde algo más
oscuro que el resto del fruto, las cuales crecen rápidamente y adquieren
un aspecto de cráter, típico de la antracosis.

En el centro de estas manchas aparecen fructificaciones fungosas,


dispuestas a menudo en zonas concéntricas que pueden tener
coloraciones diversas: rosada, gris, verde o salmón. La pulpa en esa zona
es blanda y adquiere un sabor amargo. En algunos días la podredumbre se
generaliza, la pulpa se licua y se manifiestan otros parásitos secundarios.
También el hongo afecta los pecíolos de las hojas que están a punto de
marchitarse. Y cuando son verdes y las esporas están en periodo de
latencia y luego germinan, el micelio permanece inactivo hasta que se den
las condiciones para la aparición de síntomas cuando comience el periodo
de maduración de la fruta.

Control

 Eliminación sistemática de hojas y pecíolos por constituir fuentes de


inóculo para los frutos.

 Aplicación de fungicidas del grupo de los Dithiocarbamatos y


también los derivados del Cobre.

 Los tratamientos con fungicidas se harán a intervalos de 7 a 10 días


a partir de que comience la fructificación.

Mildiu pulverulento

Esta enfermedad afecta las hojas y frutos, así como las plántulas
pequeñas, se presenta en forma de manchas grises, pulverulentas e
irregulares a lo largo del envés de las hojas que se agrandan y se unen
llegando a recubrir el haz y el envés de las hojas con un fino revestimiento
blancuzco. Las hojas afectadas pueden secarse y más tarde se caen. La
enfermedad es muy favorecida por condiciones de alta humedad en el
ambiente y por el viento.

Control

 Se recomienda el uso de Cobre y Azufre

Mancha gris de la hoja

La enfermedad puede afectar tanto hojas como frutos en los que penetra
por el extremo apical, desarrollándose en su cavidad central, lo que hace
que no maduren y que adquieran un color desagradable. Las manchas
sobre las hojas son irregulares verde- grisáceas y se asemejan a las
de Corynespora casiicola

Control

 Aplicar Ditiocarbamatos

Pudrición de la hoja
Síntomas y epidemiología.

El patógeno causa manchas en pecíolos, hojas y frutos. En las hojas, la


enfermedad se presenta en lesiones concéntricas de color pardo
amarillentas con un centro gris, más o menos circulares que miden de 8-
10 mm y que se desarrolla sobre todo en las adultas. También pueden
aparecer en los frutos inmaduros, donde las manchas son negras,
deprimidas y no sobrepasan los 5-7 mm de diámetro. Sobre los pecíolos la
enfermedad adopta una forma característica de manojas largas y elípticas,
cubiertas de un fieltro oscuro Este hongo parece comportarse como un
saprófito activo que invade con rapidez todas las partes muertas de la
planta y en particular los pecíolos y hojas que cuelgan del tallo o los frutos
en proceso de putrefacción.

La enfermedad aparece más frecuentemente en tiempo caluroso y


húmedo que favorece la dispersión del patógeno y las nuevas infecciones.
Los Conidiosse dispersan fácilmente por el viento y las salpicaduras de
lluvias. La infección puede quedar también en los pecíolos infectados.

Manejo de la enfermedad

 Aspersiones cada dos - tres semanas en dependencia de la lluvia


con fungicidas a la columna de frutos.

 Saneamiento de hojas afectadas y viejas para extraer el inóculo de


la plantación.

Control

Aspersiones con dithiocarbamatos

Pudrición del fruto por Botryodiplodia theobromae (Lasiodiplodia)

Síntomas y epidemiología.

El patógeno produce una pudrición de la superficie y base de los frutos. Es


una enfermedad menor pero puede ser importante durante ciertas
condiciones. El hongo es encontrado bien distribuido en Trópicos y
Subtrópicos, causando numerosas enfermedades, pero especialmente
pudriciones de frutos y raíces durante almacenamiento. Aunque las
pudriciones de post-cosecha son las más comunes, los frutos jóvenes en
desarrollo en el campo pueden también infectarse presumiblemente por
heridas.

Los síntomas de Lasiodiplodia theobromae tienen como característica


formar en los frutos chancros negros coriáceos con pudriciones blandas.
Las lesiones esporulantes son de color negro y superficie áspera. Puede
afectar los pecíolos con manchas pardas de bordes amarillos, con aspecto
de chancros, hundidos y alargados.

Este hongo es un organismo de crecimiento rápido y no es inusual para él,


podrir y momificar el fruto entero. Se desarrolla un micelio gris sobre el
área afectada que se torna negra por la presencia de los picnidios del
patógeno. La carne del fruto afectada toma un color azulado en las áreas
acuosas infectadas y se forman bolsas de aire que se llenan del micelio
gris.

Manejo de la enfermedad.

 Las aspersiones de campo con fungicidas protectores deben reducir


los niveles de inóculo y reducir la incidencia de la enfermedad.

 Los tratamientos con agua caliente a 48°C durante 20 min. son


también efectivas en controlar la enfermedad.

Otras enfermedades

Mancha de la hoja causada por Alternaria spp Mancha negra (Phomopsis


papayae) - numerosas manchas negras irregulares en las hojas y en los
frutos Mancha de la hoja causada porMycosphaerella sp Pudrición seca
del fruto (Fusarium solana)

Enfermedades de los frutos:

Mancha por Alternaria alternata

Síntomas y epidemiología.

La mancha del fruto por Alternaria es una de las más importantes


enfermedades de los frutos de papaya. Estas son de forma circular a oval
deprimidas, que se tornan negras como resultado de la esporulación del
patógeno. Están circunscritas a la superficie del fruto y no causan una
pudrición extensa de la carne de l fruto. Sin embargo, pueden cubrir la
superficie completa del fruto. A. alternata, infecta los pecíolos
senescentes de las hojas y produce grandes cantidades de conidias en la
superficie de los frutos. Los frutos mantenidos a temperatura ambiental
raramente desarrollan la infección sin embargo, los a 10 °C por 14 días
pueden presentar hasta un 80% de frutos enfermos.

Manejo de la enfermedad.

 Las aspersiones de fungicidas de contacto, reducen la infección.

 Saneamiento de hojas senescentes.

 La infección puede reducirse con la eliminación de la fuente de


inóculo y las aspersiones semanales con fungicidas.

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