Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
PUNTOS CLAVE
TABLA 1
Manifestaciones clínicas de la hemorragia intracerebral según la localización
Parálisis Parálisis
Defecto visual
Localización Hemiplejía Hemihipoestesia Afasia de la mirada de la mirada Signos de tronco
campimétrico horizontal vertical
Putamen ++ + Global>motora> + Contralateral – –
conducción (Si gran tamaño) (Sólo si herniación)
Tálamo + ++ + + Contralateral Hacia arriba Desviación oblicua
Afasia talámica (Si gran tamaño) (a veces ipsilateral)
Síndrome de Horner
Síndrome de Parinaud
Pseudoparálisis del VI
Lobar ++ ++ ++ ++ Contralateral – –
(Frontoparietal) (Frontotemporal) (Temporoparietal (Occipital) (frontal) Sólo si herniación
dominante)
Cerebelo – – – – Ipsilateral – Parálisis ipsilateral de
V, VI y VII
Protuberancia +/++ +/++ – – Bilateral – Pupilas puntiformes reactivas
(Bilateral) (Bilateral)
Bobbing
Rigidez de descerebración
Anomalías del ritmo respiratorio.
Coma
Mesencéfalo +/++ –/+ – – –/+ Parálisis unilateral o bilateral
Hacia arriba del III par
Diagnóstico
La neuroimagen, además de darnos el diagnóstico definitivo
de HIC, nos aporta datos morfológicos y de localización de
interés para determinar la etiología. Así, las HIC localizadas
en ganglios de la base y cerebelo suelen ser hipertensivas,
mientras que en las lobares habrá que valorar otras causas.
La TC craneal tiene una sensibilidad cercana al 100% en
la detección de sangrado de pocos milímetros. Desde la pri-
mera hora hasta el tercer o quinto día se observa una masa
parenquimatosa hiperdensa y homogénea (fig. 3). El grado
de atenuación puede verse reducido en situaciones de anemia
severa, coagulopatía o hemorragia activa. Se puede observar
un nivel en los hematomas de gran tamaño al inicio, espe- Fig. 3. Hemorragia intra-
cialmente en los producidos por la toma de anticoagulantes. cerebral a nivel del he-
El edema perihematoma se puede visualizar a las pocas horas misferio cerebeloso iz-
quierdo. Efecto masa.
del evento, y puede continuar creciendo hasta dos semanas
después. Entre el cuarto y noveno día la atenuación del he-
matoma disminuye (desde la periferia hacia el centro) hasta
asemejarse a la corteza, y de dos a tres semanas a la sustancia edema circundante, forma de la hemoglobina y lisis de los
blanca. Por eso, el reconocimiento de una HIC subaguda eritrocitos. Se distinguen 5 estadios evolutivos con las se-
con la TC puede ser difícil. La reabsorción total del hema- cuencias T1 y T2 que se describen en la tabla 2. Por otra
toma origina una cavidad residual indistinguible de un infar- parte, la RM muestra mayor sensibilidad para estudiar he-
to antiguo. La inyección de contraste muestra un realce en morragias secundarias.
anillo por la formación de neovasos entre el séptimo y déci- La secuencia ecogradiente tiene una gran especificidad
mo día que puede persistir hasta los 6 meses. Algunos datos diagnóstica en hemorragias agudas (< 6 horas) mediante la
pueden hacer sospechar de la existencia de una lesión subya- detección del efecto paramagnético de la desoxihemoglobi-
cente: aumento del volumen del sangrado pasadas dos horas na y metahemoglobina (fig. 4). El resultado es un núcleo de
del inicio, contornos irregulares o halo hipodenso ancho, intensidad heterogénea de sangrado reciente con gran can-
anillo hiperdenso sin contraste, calcificaciones dentro del co- tidad de oxihemoglobina rodeada de un halo hipointenso
águlo y hematomas lobulares en pacientes jóvenes no con mayor cantidad de desoxihemoglobina. Además esta
hipertensos. técnica permite detectar microsangrados (< 0,5 cm) que se
Por otra parte, la TC nos permite valorar posibles com- visualizan como lesiones puntiformes hipointensas origina-
plicaciones: efecto masa, hidrocefalia y extravasación a ven- das por el depósito crónico de hemosiderina. Su localización
trículos o espacio subaracnoideo. en estructuras profundas es típica de la enfermedad hiper-
La señal de la hemorragia en la RM cerebral va a depen- tensiva, mientras que las lobares apoyan el diagnóstico de
der de varios factores: técnica, tipo de contraste, localización, AA26.
Tratamiento
La angio RM presenta una sensibilidad del 90% para el
diagnóstico de aneurismas (<3 mm) y MAV (>5 mm), por lo La HIC es hoy por hoy el tipo de ictus menos tratable y el
que parece prudente limitar las indicaciones de la arteriogra- que se asocia a una mayor mortalidad y discapacidad.
fía convencional, sobre todo a técnicas intervencionistas. Actualmente el tratamiento en fase aguda de la HIC se
Basándonos en las recomendaciones de la SEN (Socie- centra en medidas de soporte y de control de complicacio-
dad Española de Neurología) podemos concluir respecto a nes. Cada vez es mayor el esfuerzo científico por encontrar
las pruebas de neuroimagen que37: un tratamiento específico y ya, de hecho, se están obtenien-
1. La TC craneal es la técnica de elección para la valora- do algunos resultados prometedores que pasaremos a co-
ción inicial ante la sospecha de HIC. La RM, incluyendo téc- mentar. El tratamiento quirúrgico tiene algunas indicaciones
nicas de difusión, T2 y ecogradiente en las primeras 6 horas precisas que han quedado consolidadas en un reciente es-
es igualmente precisa (nivel de evidencia I, grado de reco- tudio.
mendación A). A continuación detallamos el tratamiento en función de
2. La angio RM debe valorarse en HIC lobulares en pa- las recomendaciones de la SEN37.
cientes normotensos, sobre todo susceptibles a cirugía, para
descartar cavernomas y como cribado en ancianos no hiper-
tensos y/o en hemorragias lobulares (nivel de evidencia V, Tratamiento médico
grado de recomendación C).
3. La arteriografía debe reservarse a HIC de etiología no Soporte vital
aclarada, sobre todo en jóvenes, candidatos a cirugía. Si el pronóstico funcional es bueno se recomienda la intuba-
Otras pruebas complementarias necesarias para el diag- ción precoz en pacientes con HIC extensa con bajo nivel de
nóstico etiológico incluyen hemograma, estudio de coagula- conciencia (GSC < 8) y disminución de los reflejos que pro-
ción, electrolitos, glucemia, función hepática y renal, elec- tegen la vía aérea (nivel de evidencia V, grado de recomen-
trocardiograma (ECG) y radiografía de tórax. dación C).
Monitorización neurológica
Pronóstico Deben valorarse periódicamente, al menos las primeras 72
horas, el nivel de conciencia (GSC) y el déficit neurológico
Varios son los factores implicados en el pronóstico vital y (National Institutes of Health Stroke Scale [NIHSS])40 (nivel de
funcional tras una HIC. Es importante el nivel de conciencia evidencia V, grado de recomendación C).
al inicio del cuadro, de forma que valores por debajo de 9 en
la Escala de Coma de Glasgow (GCS) implican una mortalidad Mantenimiento de la homeostasis
al mes del 90%. El volumen del hematoma superior a 50 ml Gases sanguíneos. Se recomienda la administración de oxí-
eleva la mortalidad a más del 85%, mientras que volúmenes geno vía nasal o mediante respiración asistida, si está indica-
menores de 30 ml se asocian a una mortalidad inferior al 5%. do, en pacientes con hipoxemia (nivel de evidencia V, grado
La invasión ventricular no siempre indica mal pronóstico, ya de recomendación C).
Nutrición
Se debe instaurar la dieta lo antes posible por vía enteral. Tratamiento quirúrgico
Para los pacientes con hipertensión intracraneal la dieta ha
de tener escaso contenido de líquido (nivel de evidencia V, También ha sido publicado recientemente un estudio multi-
grado de recomendación C). céntrico sobre la eficacia del tratamiento quirúrgico precoz
en la hemorragia cerebral espontánea frente a tratamiento
Prevención de complicaciones conservador (STICH) llegando a la conclusión de que en ge-
Hemorragia digestiva. Se recomienda la utilización de pro- neral no aporta mayores beneficios45.
tectores de mucosa gástrica (nivel de evidencia V, grado de Las recomendaciones de la SEN para el tratamiento qui-
recomendación C). rúrgico descompresivo son: