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 E – 36-585-A-10

Anestesia-reanimación en cirugía
cardíaca
D. Lagier, C. Guidon

La cirugía cardíaca es una disciplina en plena mutación. La evolución de las técnicas


quirúrgicas ha permitido ampliar las indicaciones operatorias a pacientes de más edad
y más frágiles. La anestesia-reanimación en este campo presenta importantes especifi-
cidades. El manejo de la circulación extracorpórea es una de ellas. Al mismo tiempo, la
compresión de la fisiopatología de la hemodinámica y el dominio de las nuevas técnicas
de monitorización, como la ecocardiografía, son cruciales. El objetivo de este artículo es
describir las diferentes fases de tratamiento del paciente sometido a cirugía cardíaca,
desde la consulta preanestésica a la reanimación postoperatoria.
© 2018 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: Cirugía cardíaca; Circulación extracorpórea; Ecocardiografía cardíaca;


Asistencia circulatoria

Plan  Introducción
■ Introducción 1 La anestesia-reanimación en cirugía cardíaca presenta
■ Evaluación preanestésica 1 importantes especificidades relacionadas con el trata-
Anamnesis 1 miento de una patología cardíaca avanzada, con los
Evaluación de la función cardíaca 2 aspectos técnicos y fisiopatológicos de la circulación extra-
Otras pruebas complementarias 2 corpórea, así como de la gestión del paciente trasplantado
Síntesis del riesgo quirúrgico: EuroSCORE cardíaco o con una asistencia circulatoria mecánica. El
y EuroSCORE II 2 desarrollo de las técnicas de cardiología intervencionista,
Manejo de los tratamientos preoperatorios 2 menos invasivas, como el implante de válvula aórtica por

vía transarterial (TAVI), conduce al tratamiento de pacien-
Tratamiento peroperatorio 3
tes cada vez más frágiles.
Inducción de la anestesia general 3
Agentes anestésicos 3
Acceso venoso 4
Monitorización peroperatoria 4  Evaluación preanestésica
Prevención del riesgo hemorrágico 6
Prevención del riesgo infeccioso 6 La consulta de anestesia previa a la cirugía cardíaca es
■ Circulación extracorpórea 6 esencial para la evaluación del riesgo quirúrgico. Se trata
Material 6 también de un momento privilegiado para informar al
Diferentes fases de la circulación extracorpórea 7 paciente. La información es clara y justa frente al riesgo

quirúrgico, pero también tiene como objetivo tranquilizar
Especificidades en función de la cardiopatía 8
a los pacientes ansiosos dada la agresividad de la interven-
Patología coronaria 8
ción quirúrgica.
Valvulopatías 8
Patología aórtica 9
Patología del pericardio 9
Endocarditis infecciosa 9 Anamnesis
Trasplante cardíaco 10 En la anamnesis se deben buscar las siguientes informa-
■ Tratamiento postoperatorio 10 ciones convenientes.
Postoperatorio estándar de cirugía cardíaca • Historia de la enfermedad: en particular los síntomas
bajo circulación extracorpórea 10 que condujeron al diagnóstico de la cardiopatía.
Analgesia postoperatoria 10 • Antecedentes de cirugía cardíaca: un contexto de rein-
Complicaciones postoperatorias 10 tervención quirúrgica complica el tratamiento.
■ Conclusión 13 • Situación funcional del paciente: la clasificación de la
New York Heart Association (NYHA) permite evaluar la

EMC - Anestesia-Reanimación 1
Volume 44 > n◦ 2 > mayo 2018
http://dx.doi.org/10.1016/S1280-4703(18)89452-X
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gravedad de la cardiopatía así como el grado de urgencia ecografía Doppler o TC permite la detección de lesiones
de la intervención quirúrgica. carotídeas concomitantes que pueden modificar el trata-
• Antecedentes de coagulopatía o de episodios trombóti- miento (cirugía previa, monitorización de la oxigenación
cos (en particular neurológicos). cerebral). La realización de una radiografía de tórax es
• Antecedentes respiratorios, cuantificando un posible sistemática.
tabaquismo y buscando signos de síndrome obstructivo
o de síndrome de apnea del sueño. Pruebas funcionales respiratorias
• Antecedentes infecciosos recientes o crónicos: las com- y gasometría arterial
plicaciones infecciosas en cirugía cardíaca, en particular
valvulares, suponen una amenaza para el pronóstico No sistemáticas, se deben guiar por la clínica y siguen
vital. estando ampliamente indicadas teniendo en cuenta el
• Antecedentes neurológicos, en particular si se trata al riesgo respiratorio inherente a la cirugía cardíaca.
paciente mediante hemodiálisis.
• Antecedentes alérgicos: insistiendo en la búsqueda de Exámenes biológicos
una posible trombocitopenia inducida por la heparina. La evaluación hematológica es esencial para preparar la
• Evaluación nutricional: pérdida de peso reciente o, por estrategia transfusional, con numeración de los elementos
el contrario, obesidad. formes de la sangre y pruebas de coagulación. También se
• Tratamientos preoperatorios: insistiendo en los fárma- realiza una evaluación de la función renal con determina-
cos antiagregantes plaquetarios y anticoagulantes que ción de concentraciones plasmáticas de urea y creatinina.
pudiesen necesitar una estrategia de sustitución. Igualmente, es útil un estudio de función hepática de refe-
rencia.
Evaluación de la función cardíaca
Electrocardiograma
Síntesis del riesgo quirúrgico:
EuroSCORE y EuroSCORE II
Permite la búsqueda de trastornos de la conducción o
del ritmo así como de trastornos de la repolarización ven- Estos sistemas de clasificación por puntos validados
tricular. Sistemático, constituye un examen de referencia. son, entre otras escalas, los más utilizados para la evalua-
ción pronostica de una intervención de cirugía cardíaca
Ecocardiografía (Cuadro 1). Permiten al equipo médico-quirúrgico prever
La ecocardiografía (transtorácica [ETT] o transesofágica el riesgo de mortalidad perioperatoria. Su cálculo se puede
[ETE]) debería proporcionar una evaluación de las funcio- realizar en la página web de internet www.euroscore.org.
nes sistólicas de los ventrículos derecho e izquierdo, un
análisis morfológico de las diferentes cámaras (dilatación, Manejo de los tratamientos
hipertrofia, aneurismas), una cuantificación de las posi-
bles valvulopatías y de sus repercusiones sobre la función preoperatorios
cardíaca así como una estimación de la presión arterial Fármacos cardiovasculares
pulmonar.
Los betabloqueantes prescritos a largo plazo se conti-
Coronariografía núan en el preoperatorio (la mañana de la cirugía) para la
cardioprotección del paciente coronario y la prevención
La evaluación coronariográfica es casi sistemática en del riesgo de fibrilación auricular postoperatoria [3] . Los
los pacientes que puedan presentar una enfermedad antagonistas del calcio y los digitálicos (salvo sobredosifi-
coronaria concomitante que modificase el tratamiento cación) se continúan también.
preoperatorio (angioplastia) o peroperatorio (injerto de Los diuréticos se interrumpen la mañana de la cirugía
derivación aortocoronaria). En el paciente sano sin facto- debido al riesgo de hipopotasemia y de hipovolemia. Los
res de riesgo cardiovascular, la tomografía computarizada inhibidores del sistema renina-angiotensina-aldosterona
(TC) coronaria es un examen prometedor. exponen a un riesgo de hipotensión arterial peroperato-
ria y de degradación de la función renal. Se recomienza
Cateterismo de las cavidades derechas su interrupción al menos 12 horas antes de la cirugía, en
La realización de este examen se limita a las situaciones particular si el motivo de la prescripción es una hiperten-
de riesgo de hipertensión arterial pulmonar (HTAP) que sión arterial. Es posible mantener un tratamiento prescito
se puedan sospechar por la historia de la enfermedad, la en el marco de una insuficiencia cardíaca grave, aunque
exploración física o la evaluación ecocardiográfica. Es el se debe tener en cuenta el riesgo de hipotensión.
método de referencia para la cuantificación preoperatoria Los antiarrítmicos de clase Ic (flecaína, propafenona)
de las presiones arteriales pulmonares y de las resistencias se debe interrumpir 24 horas antes de la cirugía debido
arteriales pulmonares [1] . a sus propiedades inótropas negativas. En cambio, la
amiodarona y el sotalol se continúan la mañana de la
Determinación de las concentraciones intervención quirúrgica.
plasmáticas del péptido natriurético tipo B El tratamiento con estatinas se debe continuar hasta
la víspera de la cirugía (por la noche) si está prescrito de
(BNP) forma crónica.
La determinación de las concentraciones plasmáticas En la mayoría de los casos, la aspirina se continúa
del BNP permite apreciar la gravedad de la cardiopatía y en los pacientes con endoprótesis coronarias (bajo riesgo
constituye una herramienta pronóstica [2] . hemorrágico). El clopidogrel (5 días), el prasugrel (7 días) y
el ticagrelor (5 días) se interrumpen, salvo que sea impres-
cindible mantenerlos por la implantación reciente de una
Otras pruebas complementarias endoprótesis coronaria activa.
Pruebas de imagen de la aorta torácica Los antagonistas de la vitamina K se interrumpen 5 días
antes de la cirugía; con frecuencia está indicada una
y de los troncos supraaórticos sustitución por heparina. Puede ser necesaria la admi-
La realización de una TC torácica con inyección de nistración de vitamina K en función del valor del índice
producto de contraste permite evaluar la morfología aór- normalizado internacional (INR) preoperatorio. La hepa-
tica. La evaluación de los troncos supraaórticos mediante rina no fraccionada se interrumpe 4 horas antes de la

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Cuadro 1.
Variables del EuroSCORE.
Variable Datos Puntos
Factores de paciente
Edad Por tramos de 5 años después de los 60 años 1
Sexo Mujer 1
EPOC Broncodilatadores o corticoides a largo plazo 1
Arteriopatía Claudicación o estenosis carotídea > 50% o cirugía sobre la aorta abdominal, las 2
carótidas, los miembros inferiores
Patología neurológica Responsable de una incapacidad cotidiana h 2
Cirugía de revisión Sí 3
Creatininemia > 2,26 mg/dl [200 ␮mol/l] en el preoperatorio 2
Endocarditis activa Bajo antibióticos el día de la cirugía 3
Estado crítico preoperatorio Una o más de las situaciones siguientes: taquicardia o fibrilación ventricular, muerte 3
súbita recuperada, masaje cardíaco preoperatorio, ventilación mecánica, inótropos,
balón de contrapulsación intraaórtica, insuficiencia renal aguda (anuria u
oliguria < 10 ml/h)
Factores cardíacos
Ángor inestable Ángor de reposo bajo nitratos intravenosos en el peroperatorio 2
Disfunción sistólica VI Moderada (FEVI 30-50%) 1
Grave (FEVI < 30%) 3
Infarto de miocardio reciente < 90 días 2
HTAP PAPS > 60 mmHg 2
Factores quirúrgicos
Urgencia Día del ingreso 2
Cirugía bajo CEC Salvo bypass coronario aislado 2
Cirugía de la aorta torácica Ascendente, del cayado o descendente 3
CIV postinfarto Sí 4

Un algoritmo (logistic EuroSCORE) permite convertir la puntuación obtenida en mortalidad prevista (en porcentaje). EPOC: enfermedad pulmonar
obstructiva crónica; FEVI: fracción de eyección del ventrículo izquierdo; HTAP: hipertensión arterial pulmonar; PAPS: presión arterial pulmonar
sistólica; CEC: circulación extracorpórea; CIV: comunicación interventricular.

incisión, mientras que las heparinas de bajo peso mole- sobredosis puede aparecer bradicardia e hipotensión. Se
cular se interrumpen 12 horas (profilácticas) o 24 horas tiende a sustituir las técnicas de inducción que utilizan
(curativas) antes. El fondaparinux se interrumpe 48 horas dosis muy altas de opiáceos por técnicas que emplean
antes si la función renal es normal. posologías menores en asociación con un hipnótico. Esta
Con respecto a los nuevos anticoagulantes orales, no anestesia balanceada permite una mejor amnesia y un
es necesaria la sustitución, salvo el caso excepcional de despertar más rápido (concepto fast-track) [4] . El uso de
un riesgo trombótico muy alto. El dabigatrán se debe sufentanilo permite obtener una estabilidad hemodiná-
interrumpir 4-5 días antes de la cirugía (según la función mica satisfactoria y el beneficio de una analgesia durante
renal). El apixaban y el rivaroxaban se deben interrumpir las primeras horas postoperatorias sin prolongar la dura-
72 horas antes de la cirugía. En situaciones de urgencia, ción de la ventilación postoperatoria (a diferencia del
puede ser necesaria la antagonización mediante complejo fentanilo, cuyo tiempo de eliminación es más largo). El
protrombínico. Actualmente, ya es posible el uso de ida- remifentanilo tiene una duración de acción muy corta,
rucizumab, antagonista del dabigatrán. por lo que se debe utilizar en perfusión continua. La exis-
tencia de un modelo farmacocinético validado (modelo
de Minto) permite la administración de la anestesia por
 Tratamiento peroperatorio vía intravenosa con objetivo de concentración (AIVOC).
Debido a su corta duración de acción, la interrupción de la
Inducción de la anestesia general perfusión precisa una administración precoz de morfina.
No se ha demostrado claramente el interés del remifen-
Se trata de una fase de riesgo. Es indispensable la pre- tanilo en la reducción de la duración de la ventilación
sencia en proximidad de un cirujano y de un circuito de postoperatoria [5] .
circulación extracorpórea (CEC). La titulación de dosis
de los agentes anestésicos debe ser sistemática. Se debe
instaurar una vigilancia estrecha de la hemodinámica y Hipnóticos
de la profundidad de la anestesia (respuesta a estímulos
Para la inducción anestésica se suelen utilizar los hip-
progresivamente crecientes, índice biespectral [BIS]). Es
nóticos intravenosos. La administración se debe realizar
necesaria la monitorización invasiva de la presión arterial
con ajuste de dosis, adaptada al peso, la edad y el gasto
previa a la inducción en los pacientes que presentan una
cardíaco del paciente.
falla sistólica ventricular o una HTAP grave, una esteno-
sis aórtica de gradiente muy elevado o un taponamiento Propofol
pericárdico.
El propofol es el agente de elección en el paciente esta-
ble. Induce un leve efecto inótropo negativo, aunque es
Agentes anestésicos responsable de una importante vasodilatación venoarte-
rial. La titulación de dosis es la clave para su uso. Durante
Opiáceos la fase de CEC se puede utilizar el mantenimiento de la
La ventaja de los opiáceos reside en la ausencia de efecto anestesia mediante propofol. La existencia de modelos far-
depresor del inotropismo miocárdico, aunque en caso de macocinéticos permite su administración como AIVOC,

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pertinente si se asocia a una monitorización de la profun- una disminución de las necesidades de hipnóticos y de
didad de la anestesia. relajantes musculares.
Halógenos
Los halógenos son los agentes de elección para el Acceso venoso
mantenimiento de la anestesia en cirugía cardíaca. Su
administración se puede realizar pre, per o pos-CEC. Sus La cirugía cardíaca bajo CEC precisa una vía venosa
propiedades cardioprotectoras se han estudiado exten- periférica de calibre grueso (16 G) para garantizar una
samente en estudios experimentales [6] . El pinzamiento expansión volémica en caso de urgencia. Si existe un
aórtico proximal expone al miocardio a isquemia. El riesgo de transfusión masiva (cirugía de revisión, coagulo-
despinzamiento a su vez da lugar a una reperfusión patía previa), se debe colocar una segunda vía periférica. Se
miocárdica cuyos efectos deletéreos también están bien coloca una vía venosa central en el territorio cavo superior
descritos [7, 8] . El uso de los halógenos, independien- bajo guiado ecográfico para garantizar su correcta posi-
temente del tipo (sevoflurano, desflurano, isoflurano) ción. En cirugía cardíaca siempre existe la posibilidad de
permite realizar un preacondicionamiento y/o un posta- necesidad de apoyo dopaminérgico.
condicionamiento miocárdico farmacológico [9] . Durante
la CEC, la administración de sevoflurano a través del Monitorización peroperatoria
oxigenador optimiza el efecto protector [9] . Está bien
demostrado su impacto sobre la disminución de las tro- Electrocardiograma
poninemias postoperatorias [10] . Recientemente, en un Es necesario el análisis de las derivaciones DII y V5 con
metaanálisis se ha puesto de manifiesto una reducción monitorización del segmento ST para poder detectar una
de la mortalidad postoperatoria [11] . Los halógenos son la complicación coronaria o por trastornos del ritmo.
única estrategia cardioprotectora (aparte de la cardiople-
jía) cuya eficacia está establecida en la actualidad.
Presión arterial invasiva
Otros hipnóticos Indispensable, se puede colocar antes o después de la
El etomidato se reserva para la inducción de los pacien- inducción anestésica. La zona de punción en general es
tes con trastornos hemodinámicos o de los pacientes con radial, salvo que se haya previsto la movilización de un
alto riesgo de falla hemodinámica. La ketamina es un injerto radial para derivación aortocoronaria. Es frecuente
simpaticomimético que puede producir un aumento de un gradiente de presión entre la arteria radial y la aorta.
las resistencias vasculares y taquicardia. Por ello, en el Si se considera que es importante, se coloca un catéter a
paciente coronario no es aconsejable su uso exclusivo. nivel femoral al final de la intervención quirúrgica.
Su uso a baja dosis en el contexto de la analgesia multi-
modal o como agente anestésico complementario parece Presión venosa central
estar desprovisto de efecto hemodinámico. El midazolam
se puede utilizar como agente anestésico complementario Su valor depende de varios factores interdependientes
por sus propiedades amnesiantes y su corta duración de (volemia, presión intratorácica, fuga tricúspide, posición
acción. Los efectos depresores de la función cardiovascular del catéter, etc.). Es útil para el diagnóstico de una eleva-
del tiopental hacen que no sea un fármaco de elección. ción de la presión venosa cava durante una falla cardíaca
derecha o de un taponamiento. Se desaconseja encare-
cidamente su uso para evaluar una dependencia de la
Bloqueantes neuromusculares precarga.
El uso de la curarización es esencial durante la induc-
ción anestésica cuando se utilizan dosis bajas y tituladas Temperatura
de hipnóticos y de morfínicos. Es preferible el uso de un
La temperatura se monitoriza casi siempre a través de
bloqueante neuromuscular de acción intermedia (atra-
la sonda vesical. En caso de hipotermia peroperatoria es
curio, cisatracurio, rocuronio) al del pancuronio. El uso
necesaria una sonda térmica nasofaríngea, ya que es más
de bloqueantes neuromusculares durante el manteni-
representativa de la temperatura cerebral.
miento de la anestesia permite la seguridad de ausencia de
movimiento diafragmático del paciente en las situaciones
de riesgo (canulación de los grandes vasos, anastomosis Monitorización neurológica
coronaria). Su uso debe asociarse a una monitorización El BIS permite limitar las posologías de los hipnóti-
continua de la profundidad anestésica y de la curariza- cos en las situaciones de riesgo hemodinámico y evitar
ción. el riesgo de memorización peroperatoria. El Doppler
transcraneal, el electroencefalograma (EEG) continuo y
Farmacología y circulación extracorpórea la oximetría cerebral presentan aplicaciones posibles en
cirugía cardíaca [12] . La oximetría cerebral (espectroscopia
La hemodilución brusca al inicio de la CEC conduce a del infrarrojo cercano [NIRS]) es la técnica más prome-
una disminución de la concentración libre de los agentes tedora para prevenir las complicaciones neurológicas y
anestésicos. Así, esta fase presenta un riesgo de despertar adaptar la presión arterial durante la CEC [13] . Su uso es
y de descurarización. La dilución de la albúmina puede imprescindible durante la cirugía de la aorta torácica y de
conducir también a un aumento de la concentración libre los troncos supraaórticos.
de los agentes que se unen fuertemente a esta proteína
(midazolam, fentanilo). Las modificaciones del volumen Ecocardiografía transesofágica
de distribución afectarán preferentemente a las moléculas
hidrófilas (bloqueantes musculares) con una dilución más
peroperatoria
importante que los agentes lipófilos. La modificación de La ETE peroperatoria es la herramienta de monitori-
las concentraciones y la prolongación de la semivida son zación primordial en cirugía cardíaca. Permite obtener
también secundarias al secuestro de los agentes anestési- en tiempo real informaciones morfológicas y funciona-
cos por el circuito de CEC (agentes liposolubles como el les indispensables para la resolución de las problemáticas
propofol o el sufentanilo). Secundariamente, puede apa- hemodinámicas. En la actualidad, la formación específica
recer un aumento de la duración de acción debido a la teórica y práctica está bien codificada y hay definido un
disminución del metabolismo y del aclaramiento de los número mínimo de cortes que hay que dominar [14, 15] .
agentes que induce la CEC. La hipotermia también puede Se han realizado recomendaciones que motivan su uso
modificar la farmacología de los agentes anestésicos, con casi sistemático durante la cirugía cardíaca con CEC. Es

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A B C D

E F G H

I J K
Figura 1. Principales cortes en ecocardiografía transesofágica (ETE) perioperatoria (según [15] ).
A. Corte esofágico medio de cuatro cavidades.
B. Corte esofágico medio de dos cavidades.
C. Corte esofágico medio de eje largo.
D, E. Corte esofágico medio de la aorta ascendente.
F. Corte esofágico medio de la válvula aórtica.
G. Corte esofágico medio del ventrículo derecho.
H. Corte esofágico medio bicava.
I. Cortes transgástricos.
J, K. Cortes de la aorta torácica descendente.

importante saber repetir el examen dadas la frecuentes e Corte esofágico medio del ventrículo derecho
importantes modificaciones de las condiciones de carga (Fig. 1G)
durante la fase crítica de la retirada de la CEC. A 70◦ , se visualiza la válvula tricúspide, la pared libre
Los principales cortes que se deben conocer son los y el infundíbulo del ventrículo derecho. La herramienta
siguientes. Doppler (color y continuo) permite una estimación
Corte esofágico medio de cuatro cavidades (Fig. 1A) de la presión arterial pulmonar sistólica si se observa
Permite un análisis ventricular morfológico y funcio- una fuga tricúspide. Se trata del corte de elección
nal, con evaluación de la cinética global y segmentaria para verificar el trayecto de un catéter de arteria
(segmentos laterales, septales y apicales) del ventrículo pulmonar.
izquierdo. Se puede realizar una medición de la fracción
de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI) (método de Corte esofágico medio bicava (Fig. 1H)
Simpson monoplano o biplano). Con el Doppler color se A 90◦ , se observan las dos venas cavas y la aurícula dere-
puede buscar una posible insuficiencia mitral, y el Dop- cha. Se puede verificar la posición de un catéter o de una
pler pulsado transmitral asociado al Doppler tisular en el cánula venosa. Se visualiza el septum interauricular y se
anillo mitral permite evaluar la función diastólica y las busca un posible agujero oval mediante una prueba de
presiones de llenado del ventrículo izquierdo. contraste.
Corte esofágico medio de dos cavidades (Fig. 1B)
A 90◦ , se observan los segmentos inferiores y anteriores Cortes transgástricos (Fig. 1I)
del ventrículo izquierdo. A menudo es accesible el análisis En eje corto (0◦ ) el corte es fácil de obtener y
de la aurícula izquierda. ofrece bastante información. Con este corte es rápida-
Corte esofágico medio de eje largo (Fig. 1C) mente accesible el análisis del volumen telediastólico
y de la cinética global o segmentaria del ventrículo
A 120◦ , se realiza un análisis morfológico y funcional
izquierdo. El volumen del ventrículo derecho y el aspecto
de las válvulas mitral y aórtica. El Doppler color permite
del tabique interventricular pueden indicar una falla
investigar las posibles fugas. Es accesible la cinética de los
ventricular derecha. Por último, puede visualizar un
segmentos inferolaterales, anteroseptales y apicales.
derrame pericárdico importante. En el eje largo (120◦ )
Corte esofágico medio de la aorta ascendente es posible realizar un disparo Doppler pulsado en la
(Fig. 1D, E) cámara de recepción aórtica, acceder al gasto cardíaco
Estos cortes se pueden realizar en eje largo (90◦ ) o corto mediante una medición de la integral tiempo/velocidad

(0 ) y permiten un análisis morfológico de la aorta torácica y evaluar una reserva de la precarga mediante pruebas
ascendente (aneurisma, disección, calcificaciones) y de la dinámicas.
vena cava superior (catéter, colapsabilidad).
Corte esofágico medio de la válvula aórtica (Fig. 1F) Cortes de la aorta torácica descendente (Fig. 1J, K)
A 30◦ , se examina la morfología de las valvas y del anillo Se realiza un análisis morfológico en eje corto (0◦ ) y
de la válvula aórtica. Se puede realizar un análisis Doppler largo (90◦ ) buscando en particular una posible disección
color. aórtica.

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Catéter arterial pulmonar (catéter posología óptima de ácido tranexámico es aún objeto de
de Swan-Ganz) debate, aunque en el paciente con insuficiencia renal es
indispensable una limitación de las dosis. En efecto, una
Permite una monitorización continua del gasto car- sobredosificación de ácido tranexámico puede ser la causa
díaco, de la saturación de oxígeno de la sangre venosa de complicaciones neurológicas postoperatorias del tipo
mixta (SvO2 ), de la presión arterial pulmonar o de la pre- de convulsiones (antagonista de los receptores del ácido
sión de oclusión (en cuña) de la arteria pulmonar, que gamma-amino-butírico [GABA]). La aprotinina, inhibidor
refleja las presiones izquierdas. No se ha demostrado que directo de la plasmina, procedente del pulmón de buey,
el uso sistemático de este tipo de monitorización sea efi- constituía el antifibrinolítico histórico en cirugía cardíaca.
caz para mejorar el pronóstico de los pacientes [16–18] . Su uso se prohibió en 2007 tras la publicación de estudios
Además, el progreso de la ecocardiografía y las compli- que indicaron una mayor incidencia de complicaciones
caciones potencialmente graves de la técnica (trastornos renales y cardiovasculares [22] así como un exceso de mor-
del ritmo y de la conducción, lesiones de la arteria pul- talidad a los 5 años [23] .
monar, lesión tricuspídea, bucles intraventriculares) han
llevado a una limitación de su uso, lo que a su vez ha dis-
minuido el nivel de experiencia de los profesionales en Prevención del riesgo infeccioso
la interpretación de los resultados. No obstante, el catete-
La cirugía cardíaca es una cirugía limpia, aunque las
rismo arterial pulmonar mantiene algunas indicaciones
complicaciones infecciosas pueden poner rápidamente
formales en los pacientes más complejos [19] . Así, esta-
en riesgo el pronóstico vital (endocarditis, mediastinitis).
ría justificada la colocación preventiva de un catéter de
La profilaxis antibiótica se realiza con una cefalosporina
Swan-Ganz en el quirófano cuando existe una HTAP grave
de segunda generación tipo cefamandol (1.500 mg en la
(presión arterial pulmonar sistólica > 50 mmHg) o cuando
inducción, seguidos de 750 mg cada 2 h). En caso de
la FEVI está muy alterada (< 30%). La retirada en el posto-
alergia, se utiliza una inyección única de vancomicina
peratorio debe ser precoz, para disminuir la aparición de
(15 mg/kg).
complicaciones.

Monitorización hematológica
 Circulación extracorpórea
Se mide el tiempo de coagulación activado (TCA) antes
y después de la heparinización, así como tras la inyec- El objetivo de la CEC es asegurar las funciones cardiocir-
ción de protamina. Durante la CEC, el objetivo es un TCA culatoria y respiratoria durante el pinzamiento de la aorta
superior a 400 segundos. La aparición de trastornos de torácica ascendente, del paro cardíaco y de la exanguina-
la hemostasia secundarios a un síndrome hemorrágico ción cardiopulmonar.
debe llevar a una monitorización estrecha que guiará la
administración de plaquetas, factores de la coagulación o
fibrinógeno. La rapidez en la obtención de los resultados
Material
es determinante. Se está evaluando aún el interés médico Cánulas
y económico de los dispositivos de análisis rápido de la
La canulación venosa se realiza mediante una cánula
hemostasia como la tromboelastometría o la tromboelas-
atriocava o mediante una canulación bicava. El calibre
tografía [20] . Por último, la monitorización del hematocrito
de la cánula debe permitir un retorno venoso sufi-
es crucial, especialmente tras la fase de hemodilución
ciente, garantizando el flujo de la bomba. La canulación
inducida por el cebado (priming) de la CEC.
arterial se realiza generalmente a nivel de la aorta torá-
cica ascendente en una zona desprovista de ateromas y
Monitorización de la gasometría bajo un estricto control tensional (presión arterial sistó-
Es indispensable para verificar el correcto funciona- lica < 100 mmHg). La canulación axilar derecha permite
miento del oxigenador y evaluar la perfusión tisular una perfusión cerebral anterógrada protectora en cirugía
(SvO2 , concentraciones plasmáticas de lactato) durante la de la aorta torácica con paro circulatorio en hipotermia.
CEC. Tras la desconexión de la CEC, se debe evaluar la La localización femoral permite la canulación de urgencia.
función pulmonar mediante una gasometría arterial. La
hipotermia modifica las mediciones gasométricas (hipo- Reservorio venoso
capnia secundaria).
Constituye la reserva de precarga venosa utilizable para
la bomba. El retorno venoso se realiza por gravedad.
Prevención del riesgo hemorrágico Depende del tamaño y de la correcta posición de las cánu-
las, de la volemia del paciente, del producto de la descarga
Antes de la inducción se deben verificar las concen- cardiopulmonar (controlada por una pinza sobre la línea
traciones de hemoglobina, la hemostasia preoperatoria y venosa) y del flujo de la bomba. Un sensor de nivel evita
si está actualizada la determinación de grupo sanguíneo. el paso de aire dentro del circuito.
Se debe prever una reserva con disponibilidad inme-
diata de tres unidades de concentrado de hematíes. En
caso de trombocitopenia, de hipotermia programada o
Bomba
de tratamiento con antiagregantes plaquetarios, se debe Su función es extraer la sangre del reservorio venoso
considerar una reserva de concentrados de plaquetas. e inyectarla en el oxigenador. El flujo teórico que se debe
Sistemáticamente debe estar presente un sistema de recu- alcanzar se calcula en función de la superficie corporal del
peración de sangre autóloga (tipo Cell Saver) previamente paciente (2-2,4 l/min/m2 . Se suele utilizar una bomba de
montado y funcional. rodillo. El flujo depende del número de revoluciones por
La cirugía cardíaca con CEC causa una hiperfibrinóli- minuto que realiza la bomba y el diámetro de las tube-
sis de intensidad variable secundaria a la activación de rías. Se trata de una bomba oclusiva independiente de la
la plasmina. Por lo tanto, se recomienda el uso de anti- precarga y de la poscarga y que puede producir una hemó-
fibrinolíticos en las situaciones de riesgo importante de lisis. Protege del riesgo de flujo retrógrado (back-flow) en
sangrado o incluso de forma sistemática. El ácido trane- situaciones de paro de la bomba. Existen bombas ane-
xámico, al unirse a la lisina del plasminógeno, inhibe la xas que permiten administrar la cardioplejía, completar
activación de la plasmina. Generalmente, se administra la descarga ventricular izquierda (venting) o aspirar san-
un bolo antes de la CEC (10-30 mg/kg) seguido de una gre anticoagulada directamente en el reservorio venoso
perfusión continua durante la CEC (1-16 mg/kg/h) [21] . La (Fig. 2).

6 EMC - Anestesia-Reanimación
Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca  E – 36-585-A-10

Cánula venosa Figura 2. Circuito de cir-


Aspiración Cánula arterial culación extracorpórea. Aspi
Expansión
volémica (en amarillo): aspiración
Temp Vent izquierdo en el campo quirúrgico.
V Sensor de presión Cardioplejía
Vent (en marrón): aspira-
SatO2 ción intracardíaca. Temp:
A temperatura; Gaso: gaso-
Gaso
K+
metría; SatO2 : saturación de
Filtro arterial oxígeno.
Monitorización
en línea
PINZA Reservorio
venoso

Detector
de nivel

Intercambiador
térmico Bomba Aspi Vent Cardioplejía
O2/Aire

Oxigenador-intercambiador térmico asegurar la inmovilidad cardíaca y protege al miocardio


frente a la isquemia mediante una reducción masiva de
Se trata de sistemas con membranas semipermeables
sus necesidades de O2 . Está compuesta de soluciones de
que permiten los intercambios gaseosos. El flujo de gas
sangre o de cristaloides ricos en potasio, más o menos
lo proporciona un mezclador que regula la fracción ins-
frías. Se repite cada 20-30 minutos. La actividad eléctrica
pirada de oxígeno (FiO2 ) y el flujo de gas (« barrido »).
cardíaca cesa, por lo que lo esencial de la monitoriza-
El gas rico en CO2 sale por el oficio de ventilación del
ción reside entonces en los parámetros de la CEC: flujo de
oxigenador. La monitorización en línea (on line) de los
bomba, hematocrito, SvO2 , gasometría arterial y venosa
datos gasométricos (presión arterial y venosa de O2 y de
en línea, presión de la línea arterial, nivel del reservorio
CO2 ) permite detectar rápidamente una disfunción del
venoso. En términos de hemodinámica, es necesario man-
oxigenador. Los intercambios térmicos se aseguran a nivel
tener una presión arterial media y una profundidad de
del oxigenador mediante la circulación de agua (entre
anestesia óptima (índice biespectral entre 45-60). El uso
12 y 38 ◦ C) a contracorriente de la sangre. Se respeta una
de vasoconstrictores o vasodilatadores se considerará tras
diferencia de temperatura máxima agua/sangre de 10 ◦ C
eliminar las otras causas de hipo o hipertensión arterial.
para evitar una embolia gaseosa.
Retirada de la circulación extracorpórea
Diferentes fases de la circulación Una vez cerradas las cavidades cardíacas, se inician
extracorpórea las maniobras de eliminación de burbujas mediante el
retorno del funcionamiento cardiopulmonar y la reanu-
Priming y cebado de la circulación dación manual de la ventilación. Tras control con ETE
extracorpórea de la ausencia de burbujas de aire intracardíacas, se des-
pinza la aorta, restableciendo la perfusión coronaria. Tras
La solución de cebado del circuito de CEC se propor-
análisis del ritmo cardíaco, puede ser necesaria la desfi-
ciona mediante un volumen de cristaloides y/o coloides
brilación mediante choque eléctrico interno (5-10 J). En
(alrededor de 1.500 ml para un circuito adulto). No se
caso de trastornos del ritmo, se debe buscar un posible
ha demostrado la superioridad de ninguna mezcla, aun-
trastorno metabólico, una falla de recalentamiento o una
que los datos obtenidos en reanimación han conducido
insuficiente protección miocárdica. En caso de trastornos
al abandono gradual progresivo de los hidroexietilalmido-
de la conducción, el uso de electrodos epicárdicos permite
nes (HEA) o de los coloides en general [24] . Por el contrario,
realizar una electroestimulación auricular, ventricular o
el uso exclusivo de cristaloides conduce a un aporte volé-
auriculoventricular. Se debe investigar una posible hiper-
mico superior y a un aumento de peso peroperatorio. Así,
potasemia o una hipotermia. Por último, se controla la
permanece abierto el debate sobre la mejor solución de
repolarización buscando una posible isquemia miocárdica
priming y de expansión volémica en cirugía cardíaca [25] .
(embolia gaseosa, fracaso de la revascularización corona-
El principal inconveniente del priming es la hemodilu-
ria).
ción, que no debería dar como resultado un hematocrito
A continuación, la retirada de la CEC consiste en el
inferior al 20%.
retorno de la puesta en carga de las cavidades cardíacas
mediante la disminución del flujo de la bomba y la transfe-
Desarrollo de la circulación extracorpórea rencia del volumen restante en el reservorio venoso hacia
Una vez que se ha alcanzado el flujo teórico, se veri- el paciente (pinzamiento progresivo de la línea venosa).
fica el estado hemodinámico (la presión arterial aún es Reaparecerá un volumen de eyección sistólico. Esta reti-
ligeramente pulsátil) y respiratorio (saturación de oxí- rada debe ser progresiva y se realiza bajo inspección del
geno mediante pulsioximetría) confirmando la eficacia ventrículo derecho en el campo quirúrgico y del ventrí-
de la CEC. El CO2 teleespiratorio (EtCO2 ) se desploma culo izquierdo con la ETE. El tratamiento hemodinámico
por la depuración extracorpórea del CO2 . La ventilación se realiza en tiempo real con la adición o retirada de
mecánica se interrumpe o se inicia una ventilación ultra- volumen intracardíaco, la introducción de inótropos, de
protectora (volumen corriente de 3 ml/kg con presión vasoconstrictores o de óxido nítrico.
espiratoria positiva). Tras el pinzamiento aórtico, la pre- La duración del proceso de retirada dependerá de la
sión arterial se vuelve no pulsátil. La cardioplejía permite función ventricular previa, del nivel de presión arterial

EMC - Anestesia-Reanimación 7
E – 36-585-A-10  Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca

pulmonar, de la calidad de la hematosis pulmonar, de estabilización inicial. Se trata de indicaciones potenciales


la duración del pinzamiento aórtico y de la calidad de para la colocación de un balón intraaórtico de contrapul-
la cardioplejía. A menudo, en las situaciones de riesgo sación [26] .
es mejor prolongar esta fase de asistencia intermedia. La
administración de protamina sólo se realiza una vez se ha
descartado el riesgo de reanudar la asistencia. La prota- Valvulopatías
mina se debe administrar lentamente debido al riesgo de La cirugía valvular consiste en la sustitución por una
reacción anafiláctica o de acceso de HTAP. prótesis mecánica o biológica o la reparación (plastia)
En caso de disfunción ventricular grave que haga impo- de una válvula patológica. La selección de una técnica
sible la retirada de la CEC, estará indicado el uso de una determinada depende de diversos factores (posibilidad de
asistencia circulatoria extracorpórea tipo extracorporeal life reparación de la válvula, tamaño del anillo valvular, edad,
support (ECLS). hábitos y preferencias del paciente). La implantación val-
vular aórtica por vía transarterial (TAVI) ha revolucionado
Fase poscirculación extracorpórea el tratamiento de las estenosis aórticas graves [27] .
A pesar de la antagonización de la heparina, es frecuente
una coagulopatía residual. El tratamiento hematológico Estenosis aórtica
debe guiarse por las pruebas de laboratorio y el control Principalmente de origen degenerativo, con frecuen-
del TCA. En función del perfil de la coagulopatía puede cia se acompaña de una hipertrofia ventricular izquierda
ser necesaria la administración de productos sanguíneos compensadora que disminuye gravemente la distensibili-
lábiles, de factores de la coagulación (protrombina, pro- dad de dicho ventrículo. La ecocardiografía preoperatoria
convertina [factor VII], factor Stuart, factor antihemofílico debe proporcionar información sobre las dimensiones y
B [PPSB], fibrinógeno), de una nueva dosis de protamina o la función sistólica del ventrículo izquierdo así como los
de ácido tranexámico. También se debe prestar una aten- valores de superficie y de gradiente de presión transvalvu-
ción particular a la normalización de las concentraciones lar aórtica. Un gradiente « normal » (inferior a 40 mmHg)
séricas de calcio iónico. indica una enfermedad avanzada con degradación de la
El cierre pericárdico y de la esternotomía se puede función sistólica del ventrículo izquierdo, que en este caso
acompañar de una descompensación hemodinámica por puede estar dilatado. El tratamiento hemodinámico antes
lo general secundaria a una disminución del retorno de la corrección quirúrgica se debe centrar en la preserva-
venoso. Generalmente para la estabilización es suficiente ción de las condiciones de carga. Así, una reducción busca
con la expansión volémica que se consigue con el sistema de la precarga (hipovolemia, pérdida de la sístole auricu-
de recuperación peroperatoria. Se colocan los drenajes lar, taquicardia) conduce a una falla hemodinámica. De
mediastínicos en aspiración y se transfiere al paciente a ahí la expresión « lleno, regular, cerrado ».
reanimación tras asegurarse de la ausencia de sangrado Tras la corrección quirúrgica, con frecuencia la inestabi-
patológico. lidad hemodinámica se relaciona con una hipovolemia. El
uso de un inótropo positivo presenta el riesgo de agravar
la disfunción diastólica y producir una obstrucción diná-
 Especificidades en función mica de la cámara de llenado o una insuficiencia mitral
por efecto de movimiento sistólico anterior (SAM, systolic
de la cardiopatía anterior motion). En el postoperatorio de una sustitución
valvular aórtica es clásica la aparición de un bloqueo auri-
Patología coronaria culoventricular. Su persistencia más allá del séptimo día
postoperatorio indica una lesión del fascículo de His; en
Técnicas quirúrgicas este caso, puede estar indicado un marcapasos perma-
Las indicaciones de revascularización quirúrgica siguen nente.
en uso a pesar de los progresos de las técnicas de car- La anestesia de los TAVI presenta los mismos problemas,
diología intervencionista. Esta revascularización se puede a los que se añaden los relacionados con las característi-
realizar como cirugía programada o de urgencia. El injerto cas del paciente (edad, comorbilidades). El tratamiento
de revascularización (bypass) coronario se puede realizar anestésico depende en gran parte de la vía de acceso.
con un injerto venoso o, preferentemente y debido a su Para los implantes por vía percutánea femoral, la anestesia
mejor permeabilidad a largo plazo, con un injerto arte- local o locorregional (bloqueos ilioinguinal e iliohipogás-
rial (arteria mamaria interna, arteria radial). También se trico, bloqueo iliofascial, bloqueo de la rama femoral del
puede utilizar una técnica con el corazón latiendo, sin nervio genitofemoral) ofrece resultados satisfactorios, con
CEC (off-pump). Esta técnica expone a riesgo de inestabi- una menor incidencia de hipotermia peroperatoria y una
lidad hemodinámica relacionada con las manipulaciones mejor tolerabilidad hemodinámica [28] . En caso de acceso
cardíacas y no se ha establecido claramente su superiori- quirúrgico (femoral, transcarotídeo, transapical, etc.), la
dad. anestesia general implica un riesgo de descompensación
hemodinámica, por lo que es necesaria la monitoriza-
Anestesia ción de la presión arterial invasiva. Las complicaciones de
los TAVI son los trastornos de conducción de alto grado,
El contexto es el del paciente ateromatoso. Es indispen- la embolia cerebral, la hemorragia en la vía de acceso,
sable investigar otras posibles complicaciones vasculares. la insuficiencia aórtica y el taponamiento pericárdico. El
El elemento pronóstico mayor es la FEVI peroperatoria. control ecocardiográfico al final del procedimiento debe
Cuando es inferior al 40%, es indispensable la monitoriza- ser sistemático.
ción con ETE. El anestesiólogo debe optimizar la relación
entre aporte y consumo de oxigeno miocárdico. De este
modo se evita la taquicardia, la hipotensión arterial y la
Insuficiencia aórtica
hipoxemia. Es secundaria a una afectación valvular (bicúspide,
Antes una complicación mecánica secundaria al reumatismo articular agudo [RAA]) o supravalvular (enfer-
infarto, como una comunicación interventricular o una medad anuloectasiante). También puede encontrarse
insuficiencia mitral, el tratamiento estará condicionado durante una patología aórtica aguda (endocarditis, disec-
por el estado preoperatorio. Un shock cardiogénico o un ción aórtica). La insuficiencia aórtica avanzada dará
edema agudo de pulmón (EAP) preoperatorio conlleva un origen a una dilatación y una disfunción sistólica
riesgo de retirada compleja de la CEC. Si la situación del ventricular izquierda. Cuando es aguda y masiva, el cua-
paciente lo permite, la intervención se programa tras una dro clínico es del de un EAP y un estado de shock

8 EMC - Anestesia-Reanimación
Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca  E – 36-585-A-10

(ventrículo izquierdo no dilatado). Es preciso mantener un lugar de elección. Es necesaria la monitorización de la


la normovolemia, disminuir la poscarga (vasodilatado- presión arterial en diferentes localizaciones (arteria radial
res o inodilatadores) y evitar la bradicardia, que exponen derecha sistemáticamente, con arteria radial izquierda o
a riesgo de agravar el volumen regurgitado, de ahí la femoral), del NIRS cerebral y de la temperatura esofágica
expresión « rápido, tónico y abierto ». Con frecuencia es y nasofaríngea. La ETE inicial describe la extensión proxi-
necesario el uso de inótropos tras la corrección quirúrgica mal de la disección y busca un posible derrame pericárdico
en caso de afectación ventricular izquierda preoperatoria. o una insuficiencia aórtica. En caso de paro circulatorio
hipotérmico, se debe anticipar el tratamiento de la coagu-
Insuficiencia mitral lopatía mediante la reserva de productos sanguíneos. El
uso de un antifibrinolítico es indispensable. El paro circu-
Casi siempre de origen orgánico (enfermedad de Bar-
latorio puede ser total, con una hipotermia terapéutica a
low, degenerativa, endocarditis o RAA), también puede
18 ◦ C, o estar acompañado de una circulación cerebral de
ser funcional por dilatación del ventrículo izquierdo.
protección a bajo flujo mediante canulación axilar dere-
Las formas agudas son visibles tras endocarditis, ruptura
cha, que permite mantener una hipotermia a 28-30 ◦ C.
degenerativa de cuerdas o infarto de miocardio. La regur-
El riesgo del paro circulatorio, aparte de la isquemia cere-
gitación da lugar a una insuficiencia cardíaca congestiva
bral, es el sufrimiento medular y esplácnico. El principal
izquierda que puede evolucionar a derecha por la HTAP.
factor pronóstico es la duración del paro circulatorio. El
En la forma aguda son clásicos un EAP masivo que mini-
recalentamiento debe ser lento y homogéneo para evi-
miza un síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA)
tar la hipertermia cerebral y la formación de una embolia
o una neumonía. Paralelamente, el aumento del volumen
gaseosa.
telediastólico del ventrículo izquierdo conduce a la dila-
tación y disfunción sistólica. También son frecuentes la
dilatación de la aurícula izquierda y los antecedentes de Patología del pericardio
fibrilación auricular. Se debe buscar sistemáticamente una
posible HTAP peroperatoria (con o sin cateterismo pul- Taponamiento líquido
monar), ya que condiciona la desconexión de la CEC. Se El líquido intrapericárdico constituye un obstáculo al
debe mantener una precarga normal, evitar el aumento retorno venoso que produce una reducción del gasto
de la poscarga y mantener el inotropismo, en particular cardíaco y una hiperpresión venosa (shock obstruc-
tras la CEC (inodilatadores). De ahí la expresión « tónico tivo). Inicialmente, la expansión volémica es eficaz. Si
y abierto ». La existencia de una HTAP puede conducir el aumento del retorno venoso induce una compresión
a añadir óxido nítrico o milrinona. La técnica de elec- del ventrículo izquierdo, se debe interrumpir la expan-
ción, cuando es realizable, es la plastia mitral. Así, la ETE sión volémica y utilizar en vez de ello un vasoconstrictor.
peroperatoria es indispensable para control del montaje La urgencia quirúrgica se caracteriza por la existencia de
quirúrgico. La prescripción en el postoperatorio de ino- un pulso paradójico, intolerancia al decúbito supino o
dilatadores y de diuréticos permite evitar una sobrecarga hipotensión durante la maniobra de Valsalva.
izquierda (respiratoria) o derecha (hepatorrenal). La ventilación mecánica con presión positiva y la induc-
ción de la anestesia pueden precipitar una disociación
Estenosis mitral electromecánica. La colocación de una presión arterial
Con frecuencia secundaria a un RAA o a toma de ano- invasiva antes de la inducción resulta una ayuda valiosa.
rexígenos, da lugar a una elevación de la presión auricular El paciente se coloca en posición semisentada, y se le man-
izquierda y de una HTAP que puede conducir a una degra- tiene consciente durante la fase de preparación del campo
dación de la función del ventrículo derecho. Mantener la quirúrgico.
normovolemia y el ritmo sinusal es esencial para mante- Si el drenaje se puede realizar por vía subxifoidea y
ner el gasto cardíaco. Los pasos a fibrilación auricular se el paciente está en ayunas, se puede mantener la venti-
deben tratar agresivamente. La ventilación mecánica debe lación espontánea y evitar los efectos indeseables de la
vigilar que no aumenten demasiado las presiones intrato- ventilación mecánica en presión positiva. La anestesia
rácicas. Al final de la intervención puede ser necesario el inhalatoria con sevoflurano es particularmente adaptable
uso de vasodilatadores pulmonares y de inodilatadores. en esta situación. La analgesia se realiza mediante anes-
tesia local de la vía de acceso, con o sin opiáceos por vía
Insuficiencia tricuspídea sistémica (alfentanilo, remifentanilo).
Si el paciente tiene el estómago lleno o es necesaria
Puede ser funcional u orgánica (endocarditis, postrau- una esternotomía (contexto postoperatorio), se realiza
mática). La insuficiencia cardíaca derecha y una HTAP una inducción de secuencia rápida con etomidato y un
subyacentes aumentan el riesgo de fallo ventricular dere- relajante muscular de acción rápida. Una vez intubado
cho postoperatorio cuyo tratamiento es particularmente el paciente, se puede respetar la apnea, si se tolera en
complejo. Se deben monitorizar las funciones renal y términos de oxigenación (saturación pulsada de oxígeno
hepática. [SpO2 ]), hasta la evacuación del contenido pericárdico.
En esta situación de alto riesgo, debe estar disponible la
Patología aórtica adrenalina, diluida a 0,1 mg/ml.

Predominan dos contextos: el aneurisma de la aorta Pericarditis crónica restrictiva


torácica en cirugía programada o la disección aórtica de
Los riesgos de esta cirugía, que generalmente se realiza
tipo A en cirugía urgente. El tratamiento quirúrgico con-
sin CEC, son: hemorragia, lesiones del ventrículo derecho,
siste en la sustitución aislado del segmento 1 o, en caso de
trastornos peroperatorios del ritmo (parche de desfibri-
afectación del segmento 0, en una intervención de tipo
lación colocado) y el fallo derecho agudo al eliminar el
Bentall (sustitución valvular aórtica y de los segmentos
obstáculo pericárdico por aumento del retorno venoso. En
0 y 1 de la aorta con reimplantación coronaria) o Tirone-
efecto, en este contexto es difícil la evaluación ecográfica
David (sustitución de los segmentos 0 y 1 de la aorta
peroperatoria de la función ventricular derecha.
con reimplantación coronaria y conservación de la vál-
vula aórtica nativa). La cirugía del cayado aórtico precisa
una canulación periférica y paro circulatorio hipotérmico Endocarditis infecciosa
ante la imposibilidad de un pinzamiento aórtico conven-
cional. Durante el tratamiento anestésico se deben evitar El tratamiento quirúrgico de una endocarditis infec-
los picos hipertensivos. En este contexto, el esmolol tiene ciosa permite tratar una insuficiencia cardíaca grave,

EMC - Anestesia-Reanimación 9
E – 36-585-A-10  Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca

evitar el desarrollo de lesiones cardíacas irreversibles o cuidados intensivo durante 24-48 horas. La alimentación
de embolias graves y reducir el inóculo bacteriano. El por vía oral, la retirada de los drenajes y la movilización
momento de la cirugía depende de la gravedad de la lesión al sillón se inician desde el día siguiente a la cirugía, salvo
y de la existencia o no de complicaciones, en particular complicaciones.
neurológicas (accidentes vasculares cerebrales isquémi- En caso de que esté indicada una anticoagulación
cos embólicos o hemorrágicos). Debería realizarse en el curativa (prótesis mecánica), ésta se inicia a dosis bajas
seno de un equipo pluridisciplinario específico (endocar- mediante heparina no fraccionada por vía intravenosa
ditis team). Para las lesiones menos graves se puede realizar en perfusión continua, a partir de la tercera hora del
el procedimiento en frío tras finalizar la antibioticotera- postoperatorio, y se equilibra rápidamente mediante una
pia. Antes de llevar a cabo la anticoagulación de la CEC monitorización estrecha de la heparinemia (actividad
es indispensable realizar una prueba de imagen cerebral anti-Xa) y del TCA.
(resonancia magnética) así como un « estudio embólico »
(body scanner). La antibioticoterapia, si ya está en curso,
se debe continuar en el per y postoperatorio. El con- Analgesia postoperatoria
texto séptico y la prolongación de la duración de la CEC,
Se asegura mediante una analgesia multimodal utili-
teniendo en cuenta la complejidad de los procedimientos
zando paracetamol, nefopam (no disponible en España)
de reconstrucción, aumentan el riesgo de reacción infla-
y un analgésico de escalón II (tipo nalbufina, codeína
matoria grave (vasoplejía, insuficiencia renal). También
o tramadol). Cuando se realiza la anestesia con remi-
aumenta el riesgo hemorrágico cuando existe una afec-
fentanilo, es indispensable la titulación de morfina en
tación hematológica inflamatoria o en caso de revisión
el postoperatorio. A pesar de su notable eficacia, el uso
quirúrgica (endocarditis sobre válvula protésica). El riesgo
de antiinflamatorios no esteroideos se debe realizar con
respiratorio a la salida de la CEC será más importante si
prudencia, debido a que son frecuentes las contraindi-
existía un EAP antes de la cirugía.
caciones relacionadas con la edad, el riesgo renal o una
coronariopatía avanzada.
Existen muchos estudios sobre el uso de analgesia
Trasplante cardíaco epidural torácica por su posible impacto sobre la apa-
La inducción de la anestesia para trasplante cardíaco rición de complicaciones pulmonares y de arritmias
se realiza en un paciente con una cardiopatía terminal. postoperatorias (efecto antihiperadrenérgico) [29] . A pesar
Por lo tanto, debe responder a todas las medidas de pre- de resultados interesantes, esta estrategia analgésica se
vención relacionadas con este contexto: monitorización enfrenta a los posibles riesgos de hematoma epidural en
de la presión arterial invasiva de entrada, titulación de los el contexto de anticoagulación con heparina a altas dosis
anestésicos y monitorización de la profundidad de la anes- y a la relativa buena gestión del dolor postoperatorio con
tesia. Por último, es frecuente que el paciente tenga un los analgésicos usuales.
estómago lleno. Se cambian los catéteres preexistentes. Es La infiltración cicatricial continua de anestésicos locales
indispensable la monitorización por ETE para evaluación mediante un catéter multiperforado ha suscitado un gran
del retorno de actividad del injerto. interés para el tratamiento del dolor postesternotomía.
El injerto se selecciona según criterios inmunológi- En estudios iniciales de baja potencia se han conseguido
cos (ABO; anticuerpos antileucoplaquetarios [ACAL]), resultados alentadores [30] . Se está en espera de un amplio
morfológicos y hemodinámicos (resistencias vasculares estudio multicéntrico francés (NCT01648777).
pulmonares). El retorno de la función del injerto depende
del tiempo de isquemia fría y de la desnervación del
órgano. El riesgo de bradicardia y de fallo ventricular
Complicaciones postoperatorias
(particularmente derecho) es permanente. Por lo tanto, Complicaciones hemodinámicas
es sistemática la introducción de inótropos y de óxido
nítrico. Se consigue el objetivo de mantener una fre- La realización precoz de objetivos hemodinámicos
cuencia cardíaca alta farmacológicamente (isoprenalina) predefinidos y accesibles mediante una monitorización
o mediante un marcapasos epicárdico. La asistencia cir- adaptada (presión arterial media, índice cardíaco, diure-
culatoria mediante la CEC es prolongada, y su retirada se sis horaria, lactacidemia) corresponde a la estrategia Early
realiza muy progresivamente, evitando la hipervolemia, Goal Directed Therapy. Está bien demostrada la eficacia de
que puede producir una dilatación del ventrículo derecho. este enfoque en el pronóstico de los pacientes [31] .
En caso de disfunción aguda del injerto, puede ser necesa- Hipovolemia
rio el uso de una asistencia circulatoria extracorpórea en Se trata de la principal causa de fallo hemodinámico
espera de una recuperación. La inmunosupresión (cortico- poscardiotomía. En efecto, durante una cirugía cardíaca
terapia) se inicia ya en el quirófano tras el despinzamiento bajo CEC existe una fuga capilar, una vasoplejía y pérdi-
aórtico. Se deben limitar las transfusiones debido al riesgo das por el campo quirúrgico. La hemorragia puede agravar
inmunológico. la hipovolemia. El perfil hemodinámico es de un gasto
cardíaco bajo y una presión venosa central baja. Antes de
la realización de una expansión volémica, se debe eva-
 Tratamiento luar siempre la dependencia de la precarga ventricular
mediante una prueba dinámica (elevación de la pierna,
postoperatorio mini-fluid challenge) y una evaluación del gasto cardíaco
(integral tiempo/velocidad infraaórtica en ecografía, por
Postoperatorio estándar de cirugía ejemplo).
cardíaca bajo circulación extracorpórea No está claramente determinado el tipo de solución de
reposición vascular que utilizar tras una cirugía cardíaca.
En el postoperatorio inmediato se mantiene al paciente Se emplea:
intubado bajo ligera sedación. Se trata de una puerta de • una solución cristaloide equilibrada cuyo poder de
seguridad que permite asegurar la estabilidad hemodiná- expansión es bajo, lo que expone a un riesgo de sobre-
mica y la ausencia de sangrado. El concepto de fast-track carga intersticial, aunque con una buena tolerabilidad
surgery, que implica una extubación precoz (4-6 horas en renal;
el postoperatorio), podría mejorar el pronóstico de los • una solución coloide que ofrece la ventaja de un buen
pacientes y reducir la duración de la estancia en reani- poder de expansión y por lo tanto una reducción de los
mación [4] . Es necesaria la vigilancia en reanimación o aportes volémicos absolutos, aunque su tolerabilidad

10 EMC - Anestesia-Reanimación
Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca  E – 36-585-A-10

renal limita su uso (HEA contraindicados y gelatinas pacientes en tratamiento con betabloqueantes. Se debe
bajo sospecha [32] ). Con las soluciones modernas, los prestar atención a las arritmias y a la vasoplejía.
efectos sobre la coagulación parecen poco importantes; En asociación al tratamiento inótropo, es necesaria la
en cambio, se produce hemodilución [25] . La albúmina, optimización de la volemia y de las resistencias vasculares
a pesar de su elevado coste, podría ser un buen com- (noradrenalina, óxido nítrico, sildenafilo). En el fallo dere-
promiso para la expansión volémica del paciente con cho a menudo es útil la depleción hidrosódica mediante
insuficiencia cardíaca. diuréticos o hemofiltración.
Cuando fracasa el tratamiento médico, puede ser
Shock cardiogénico necesaria una asistencia circulatoria extracorpórea. La
Definición. Se caracteriza por una caída del gasto implantación de esta asistencia debe integrarse necesaria-
cardíaco, descartando una hipovolemia (inferior a mente dentro de un proyecto terapéutico: recuperación
2,2 l/min/m2 ), un aumento de las presiones venosas miocárdica, asistencia circulatoria de larga duración o
izquierdas y/o derechas, un aumento de las resistencias trasplante cardíaco.
vasculares periféricas y una disminución de la SvO2 . Con La ECLS es una técnica eficaz de asistencia circulato-
mucha frecuencia es secundario a una disfunción ventri- ria venoarterial para los síndromes de bajo gasto cardíaco
cular sistólica derecha o izquierda. pos-CEC. Las complicaciones de la técnica son hemorra-
Etiología. En el contexto poscardiotomía, las etiolo- gias, hemólisis, embolias, isquemia de los miembros
gías son múltiples. La más frecuente es la descompen- y sobrecarga ventricular izquierda con EAP. El man-
sación de una disfunción sistólica preoperatoria por la tenimiento de la pulsatilidad, dificultado por el flujo
isquemia-reperfusión miocárdica peroperatoria. La afec- retrógrado aórtico, es necesario para el drenaje de las cavi-
tación miocárdica es más grave cuanto más prolongado dades izquierdas, y se puede conseguir con los inótropos.
es el tiempo de pinzamiento aórtico y peor es la calidad En caso de sobrecarga importante, se han avanzado dife-
de la cardioplejía. No obstante, el aturdimiento miocár- rentes técnicas de descarga izquierda: bomba transaórtica
dico pos-CEC (stunning) por fallo de la cardioplejía tiene tipo Impella, cánula de descarga en la aurícula izquierda.
un buen potencial de recuperación.
Taponamiento pericárdico
Sistemáticamente, y en caso de patología coronaria
conocida o de cirugía coronaria (trombosis de injerto de Con una etiología completamente aparte del shock car-
revascularización), se debe investigar una posible com- diogénico, el taponamiento pericárdico postoperatorio es
plicación coronaria. Las anomalías electrocardiográficas una complicación frecuente cuyo diagnóstico puede ser
(ECG) y una elevación patológica de las concentraciones difícil en caso de baja ecogenicidad o de coágulo pericár-
séricas de troponina deben motivar la realización de una dico compresivo localizado. Esto se confirma mediante
coronariografía. La embolia coronaria (gaseosa, trombó- ecocardiografía. En las situaciones conflictivas, no se
tica, calcárea) es una complicación posible en todos los debe dudar en realizar una ETE, incluso una exploración
tipos de cirugía con CEC. quirúrgica de entrada si persiste la duda. El perfil hemodi-
El shock cardiogénico puede ser de origen valvu- námico es del de un estado de shock con hiperpresión
lar (insuficiencia mitral o aórtica grave). La causa con venosa, taquicardia y oliguria. La repercusión hemodi-
frecuencia es una complicación quirúrgica (fuga peripro- námica depende del impacto de los coágulos sobre las
tésica por aflojamiento de los puntos, fracaso de la plastia, cavidades derechas (bajas presiones) y, por lo tanto, de
trombosis de prótesis mecánica, endocarditis). En este su localización.
caso, es determinante el lugar de la ecocardiografía. Síndrome de respuesta inflamatoria sistémica
Tratamiento. El tratamiento del fallo miocárdico se La CEC induce una liberación de mediadores de la
basa en los inótropos o inodilatadores. Existen indi- inflamación que puede conducir a un síndrome hiperci-
caciones teóricamente preferentes, aunque no se ha nético que se caracteriza por una intensa vasoplejía, un
demostrado la superioridad de una de ellas frente a las aumento del gasto cardíaco y presiones venosas bajas. Para
demás [33] : su tratamiento se utiliza la expansión volémica y vaso-
• la dobutamina (3-20 ␮g/kg/min) es una catecolamina constrictores. La noradrenalina se utiliza como primera
de síntesis, agonista de los receptores ␤-adrenérgicos. línea. En las situaciones de vasoplejía refractaria, los úni-
Su efecto es inótropo y cronótropo positivo (␤1) y vaso- cos tratamientos eficaces son la terlipresina o el azul de
dilatador (␤2). Sus efectos adversos son taquifilaxia, metileno. El síndrome de respuesta inflamatoria sistémica
aumento del consumo miocárdico de O2 y arritmias; (SIRS) generalmente es de resolución espontánea. Cuando
• la adrenalina (0,01-0,3 ␮g/kg/min) es una catecolamina su aparición presenta una desviación respecto a la cirugía,
endógena, agonista ␣ y ␤. Su efecto es por lo tanto inó- no se debe descartar una posible sepsis, cuya presentación
tropo positivo y vasoconstrictor. Su uso se limita a los hemodinámica es idéntica.
estados de shock refractarios a la dobutamina, debido a
sus efectos adversos (vasoconstricción excesiva e hipo- Hipertensión arterial pulmonar
perfusión periférica, arritmogénesis); Se define por una presión arterial pulmonar media
• la isoprenalina, o isoprotenerol (0,02-0,5 ␮g/kg/min), superior a 25 mmHg, puede progresar por episodios
es una catecolamina de síntesis, agonista ß, inodilata- y precipitar una falla ventricular derecha. Los factores
dor, dromótropo positivo y cinco veces más cronótropo que favorecen un episodio de HTAP son la existencia
que la dobutamina. La indicación de elección es la bra- precia de una HTAP precapilar, la duración de la isque-
dicardia por trastornos de la conducción; mia pulmonar peroperatoria, la ventilación con presión
• la milrinona (0,375-0,750 ␮g/kg/min) es un inhibidor positiva, la administración de protamina, la existencia
de la fosfodiesterasa III. Es un inodilatador útil en el tra- de una falla izquierda (HTAP poscapilar), los estímulos
tamiento del fallo ventricular derecho con hipertensión dolorosos (aspiraciones traqueales), embolia pulmonar,
arterial pulmonar. Sus efectos adversos son similares a acidosis, hipercapnia e hipoxemia. El cuadro hemodiná-
los de la dobutamina, con un efecto vasopléjico sisté- mico es el de una falla cardíaca derecha con dilatación
mico más marcado; del ventrículo derecho, tabique paradójico y ventrículo
• el levosimendán es un sensibilizador al calcio: aumenta izquierdo « hipovolémico ». En caso de fallo derecho
la afinidad de las proteínas contráctiles miocárdicas avanzado, los valores de presión arterial pulmonar pue-
al calcio preservando así el consumo miocárdico de den estar falsamente reducidos por defecto de eyección
oxígeno. Es un inodilatador de duración de acción del ventrículo derecho. Las consecuencias hepáticas, rena-
prolongada (10-14 días). Sus indicaciones están en les y esplácnicas evolucionan rápidamente y pueden
desarrollo: fracaso de la retirada de la dobutamina, prea- conducir a un fracaso multiorgánico. El tratamiento se
condicionamiento preoperatorio o tratamiento de los realiza con vasodilatadores pulmonares (NO, sildenafilo),

EMC - Anestesia-Reanimación 11
E – 36-585-A-10  Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca

inótropos (milrinona) y vasoconstrictores sistémicos para Para el tratamiento de la hipoxemia postoperatoria se


evitar la hipoperfusión coronaria. En caso de oliguria, se utiliza oxigenoterapia nasal a alto flujo (tipo Optiflow) y
debe instaurar precozmente la hemofiltración para evi- ventilación no invasiva [42] . Estas técnicas permiten evi-
tar la dilatación ventricular derecha. Por último, en las tar la reintubación en la gran mayoría de casos. Cuando
exacerbaciones es necesaria una sedación profunda y una es necesaria la reintubación, la colocación en decúbito
optimización de la hematosis mediante una ventilación prono permite un excelente reclutamiento alveolar en
mecánica con presiones bajas. los SDRA focales con atelectasias basales y posteriores [43] ,
pero conlleva un riesgo de complicaciones esternales (des-
Trastornos del ritmo
unión).
Las arritmias alteran el correcto funcionamiento de la Por último, son muy frecuentes las complicaciones
bomba cardíaca (pérdida de la sístole auricular durante pleurales de tipo pleuritis reactiva, hemotórax y neumo-
una afección supraventricular), incluso pueden poner en tórax, al igual que en todas las cirugías torácicas. Pueden
peligro la actividad circulatoria (trastornos del ritmo ven- estar indicados el drenaje pleural o una revisión quirúr-
tricular). gica.
La fibrilación auricular postoperatoria es una complica-
ción que se encuentra en el 30% de los pacientes de cirugía
cardíaca [34] . El pico de máxima frecuencia se ve entre los Complicaciones hematológicas
días 2 y 4 del postoperatorio. Se han realizado muchos Síndrome hemorrágico grave
estudios sobre la prevención de la fibrilación auricular en Se define por un sangrado superior a 1,5 ml/kg/k
el postoperatorio de cirugía cardíaca. Parece ser que el durante 6 horas o por la necesidad de una revisión quirúr-
mantenimiento perioperatorio de los betabloqueantes o gica [44] . Siempre se debe sospechar una causa quirúrgica,
de la amiodarona, cuando es posible, es la estrategia más especialmente si el sangrado es importante y de aparición
eficaz [35] . La administración de magnesio, muy generali- brusca. Se debe buscar un posible trastorno de la hemos-
zada, podría ser eficaz en la prevención de la fibrilación tasia mediante pruebas biológicas realizadas de urgencia.
auricular postoperatoria [36, 37] . El tratamiento consiste en Ante una trombocitopenia inferior a 50.000/mm3 o de
el control del ritmo si produce una mala tolerabilidad tratamiento antiagregante, será necesaria la transfusión
hemodinámica. Si la tolerabilidad es buena, el control del de concentrados de plaquetas. Si está presente una hepa-
ritmo no ofrece ninguna ventaja frente al control de la rinemia residual (TCA alargado, actividad anti-Xa) se
frecuencia [38] , ya que la mayoría de las fibrilaciones auri- administra un complemento de protamina (5.000 UI). Si
culares se resuelven por sí mismas en 24 horas. En este el tiempo de protrombina es inferior al 40% o si se observa
caso, la corta semivida del esmolol (9 minutos) es una ven- un aumento del TCA > 1,5 el control, se puede considerar
taja. Si la fibrilación auricular tiene una duración superior la administración de plasma fresco congelado o de facto-
a 48 horas, se debe instaurar una anticoagulación curativa. res de la coagulación tipo complejo protrombínico (PPSB).
Igualmente, se debe buscar siempre un factor desenca- Por último, se utilizan concentrados de fibrinógeno para
denante (anemia, hipopotasemia, hipovolemia, coágulos mantener las concentraciones plasmáticas de fibrinógeno
pericárdicos, hipoxemia, iatrogenia). superiores a 1,5-2 g/l. En caso de hiperfibrinólisis residual,
Trastornos de la conducción puede proponerse una inyección de ácido tranexámico. Es
Ante una bradicardia, se debe realizar un diagnóstico esencial la normalización de las concentraciones de cal-
ECG (bloqueo auriculoventricular, bloqueo sinoauricu- cio iónico. El uso del factor VII activado se debe reservar
lar, bradicardia sinusal) y se debe solicitar una opinión para situaciones de hemorragias extremas, ya que su riesgo
de un cardiólogo especialista en ritmología. Se debe trombótico es real [45] .
respetar un plazo de espera de 7-10 días antes de la Anemia
decisión de implantar definitivamente un marcapasos,
Existe una importante discusión sobre el umbral
ya que estos trastornos postoperatorios con frecuencia
transfusional tras cirugía cardíaca, entre una estrategia res-
son transitorios. La electroestimulación por el marcapa-
trictiva (7 g/dl) y una estrategia liberal (9-10 g/dl) [46, 47] .
sos epicárdico externo o la administración de isoprenalina
Los riesgos relacionados con las transfusiones están bien
permite garantizar un tratamiento sintomático.
descritos, en particular sobre los planos inmunitario
Crisis hipertensivas e infeccioso [48] . Por otro lado, la anemia puede des-
Son frecuentes cuando existe una HTA preoperato- compensar una cardiopatía con frecuencia ya avanzada
ria y conllevan el riesgo de complicaciones quirúrgicas (ancianos, pacientes con patología coronaria). Por ello,
(hemorragias postoperatorias) y de insuficiencia cardíaca parece prudente adaptar las indicaciones transfusionales
izquierda por aumento de la poscarga izquierda (EAP). a los antecedentes del paciente así como a la tolerabi-
Para su tratamiento se utilizan antihipertensivos no lidad hemodinámica de la anemia. El umbral de 7 g/dl
depresores miocárdicos como los antagonistas del calcio está ampliamente aceptado para los pacientes jóvenes sin
o el urapidilo. Si prescribe un betabloqueante, se prefiere cardiopatía avanzada. Para los demás pacientes de cirugía
el esmolol. cardíaca, el objetivo sería un umbral de 8 g/dl [49] .

Trombocitopenia inducida por la heparina de tipo 2


Complicaciones respiratorias Se trata de una complicación temida en el contexto de
La hipoxemia es una complicación frecuente de ciru- la cirugía cardíaca en la que la exposición a la heparina
gía cardíaca [39] . Es de una intensidad variable y raramente es casi constante y donde existe un alto riesgo trombótico
puede llegar hasta el SDRA. Es secundaria a la afectación de (injerto de revascularización coronaria, prótesis valvular
la membrana alveolocapilar por la isquemia-reperfusión mecánica, asistencias circulatorias). El diagnóstico es difí-
y la inflamación pulmonar. La constitución de atelec- cil por la frecuencia de falsos positivos a los anticuerpos
tasias [40] , que posiblemente se ve favorecida por la anti-PF4 tras una CEC [50] . La presencia del conjunto de
interrupción de la ventilación durante la CEC o una pará- argumentos clínicos (trombosis) y biológicos (cinética y
lisis diafragmática postoperatoria, agrava el efecto shunt profundidad de la trombocitopenia) debe conducir a la
y precipita la aparición de neumonías infecciosas [41] . sospecha del diagnóstico e interrumpir la heparina. La
Actualmente se está llevando a cabo un estudio multi- confirmación se realiza mediante pruebas de función pla-
céntrico francés para evaluar el impacto de la ventilación quetaria (agregometría, liberación de serotonina marcada)
a pulmón abierto (open-lung ventilation) y del manteni- y mediante la recuperación de la cifra de plaquetas tras
miento de la ventilación ultraprotectora per-CEC sobre interrumpir la heparina. Para el tratamiento se puede uti-
la evolución respiratoria postoperatoria (NCT02866578). lizar danaparoide o argatroban.

12 EMC - Anestesia-Reanimación
Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca  E – 36-585-A-10

Complicaciones renales intentar prevenir. Es indispensable un perfecto conoci-


miento de las nociones de reanimación hemodinámica,
La insuficiencia renal aguda es una complicación fre-
incluyendo la fisiopatología de las patologías miocárdi-
cuente tras la cirugía cardíaca. En parte es secundaria a la
cas, valvulares y de los trastornos del ritmo. Por último, el
inflamación sistémica y a la isquemia renal peroperatoria.
uso de la ecocardiografía ha revolucionado el tratamiento
El impacto de la función cardíaca también tiene un papel
del paciente operado de cirugía cardíaca. Es esencial una
importante en el desarrollo de un síndrome « síndrome
formación teórica y práctica en el uso de esta herramienta.
cardiorrenal ». Éste puede ser secundario a una hipoper-
fusión renal por bajo gasto cardíaco, pero también a la
congestión venosa por fallo cardíaco derecho [51] .
El diagnóstico se basa siempre en un criterio clínico
(oliguria de menos de 0,5 ml/kg/h durante 6 horas) más
“ Puntos esenciales
o menos asociada a un aumento de la creatininemia
(1,5 × creatinina preoperatoria o + 0,30 mg/dl [27 ␮mol/l]) • La cirugía cardíaca bajo CEC tiene una fisiopa-
según la definición Kidney Disease Improving Global tología específica, que puede producir diferentes
Outcomes (KDIGO) que se utiliza de referencia [52] . El complicaciones postoperatorias.
desarrollo de biomarcadores renales suscita un gran entu- • La prevención de las complicaciones postopera-
siasmo, y la perspectiva de un diagnóstico precoz de la
torias precisa de la comprensión, monitorización
afectación renal que permita la instauración precoz de
y optimización del estado hemodinámico del
medidas de nefroprotección es atractiva. Determinados
biomarcadores como los inhibidores tisulares de las meta- paciente en función de su cardiopatía.
loproteinasas 2 (TIMP-2) y la proteína de fijación del factor • La ecocardiografía y el cateterismo arterial
de crecimiento tipo insulina 7 (IGFBP-7) [53] parecen tener pulmonar son herramientas diagnósticas indispen-
un gran interés teórico, aunque aún está pendiente de sables.
evaluación el impacto médico-económico de su uso. Las • Las técnicas de asistencia circulatoria extra-
medidas preventivas que permiten enlentecer la evolu- corpórea necesitan conocimientos específicos. Su
ción de una insuficiencia renal aguda son limitadas y se implantación se integra en un proyecto terapéu-
basan principalmente en la optimización hemodinámica tico que puede ir de la recuperación al trasplante
y la exclusión de los nefrotóxicos. En caso de sobrecarga
cardíaco. El anestesiólogo tiene una función deter-
volémica con aumento de la presión venosa, puede ser
minante en este proceso.
necesaria la depleción hidrosalina. Aún no está claro el
impacto respectivo de los diuréticos o de la hemofiltra-
ción continua sobre la evolución de la función renal en el
contexto de una sobrecarga venosa [54] .

Complicaciones infecciosas  Bibliografia


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D. Lagier, Assistant hospitalo-universitaire (david.lagier@ap-hm.fr).


C. Guidon, Maître de conférence des Universités, praticien hospitalier.
Service d’anesthésie-réanimation cardiovasculaire, Centre hospitalier universitaire de La Timone, Assistance publique–Hôpitaux de Marsei-
lle, Aix-Marseille Université, 264, rue Saint-Pierre, 13385 Marseille, France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Lagier D, Guidon C. Anestesia-reanimación en cirugía cardíaca.
EMC - Anestesia-Reanimación 2018;44(2):1-15 [Artículo E – 36-585-A-10].

Disponibles en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Videos/ Aspectos Información Informaciones Auto- Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico

EMC - Anestesia-Reanimación 15

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