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LA DISTRIBUCION CELULAR
En ocasiones, estos outputs serán productos o servicios finales, otras veces, serán
componentes que habrán de integrarse a un producto final, en cuyo caso, las células que
los fabrican deberán estar situadas junto a la línea principal de ensamble (para facilitar la
inmediata incorporación del componente en el momento y lugar en que se necesita).
A estas hay que recurrir cuando existe algún ítem que no puede ser asociado a ninguna
familia o cuando alguna maquinaria especializada no puede incluirse en ninguna célula
debido a su uso general.
Disminución del material en proceso (una misma célula engloba varias etapas del
proceso de producción, por lo que el traslado y manejo de materiales a través de la
planta se ve reducido).
Simplificación de la planificación.
Inconvenientes
Riesgo de que las células queden obsoletas a medida que cambian los productos y/o
procesos.
Ventajas
Las ventajas se verán reflejadas en un menor costo de producción y en una mejora en los
tiempos y en una mejora en los tiempos de suministro y en el servicio al cliente, incluso,
podrían conseguirse mejoras en la calidad, aunque ello necesitará de otras actuaciones
aparte del cambio en la distribución.
Células piloto:
Se da cuando hay alguna familia de ítems que se produce completamente en una célula,
pero la mayoría se procesa de la forma habitual en el resto de la planta, dicha situación
puede tener un triple origen:
Realización de una prueba piloto para evaluar los beneficios de la producción celular.
Una célula automatizada (o incluso manual) que produce una familia de ítems con alguna
característica especial (por ejemplo; elevado volumen de producción, nivel de calidad
determinado, proceso de producción específico, etc.).
Formación de células:
Los dos primeros pasos pueden realizarse por separado, pero, es frecuente abordarlos
simultáneamente. En relación con la agrupación de productos para su fabricación
conjunta en una misma célula, habrá que determinar primero cual será la condición
determinante que permita la agrupación.
A veces ésta resulta obvia al observar sus similitudes de fabricación, otras veces no lo es
tanto y hay que ver si conviene realizarla en función de la similitud en la forma, en el
tamaño en los materiales que incorporan, en las condiciones medioambientales
requeridas, etc.
Una vez determinadas las familias de productos, la formación de una célula para cada
familia puede ser la mejor solución, aunque ello no sea siempre cierto ( a veces es
incluso una solución imposible). Son muchas las ocasiones en las que es difícil definir las
células sobre la base de idénticos requerimientos en el proceso de producción de las
familias de ítems. Las cuatro aproximaciones utilizadas generalmente para identificar
familias y células son las siguientes:
Clasificación y codificación de todos los ítems y comparación de los mismos entre sí para
determinar las familias, posteriormente, habrá que identificar las células y equipos que
han de producirlas.
Por último, una vez determinadas las células y las familias de productos que en ellas se
elaborarán, hay que detallar la distribución interna de las mismas. Dicha distribución será,
por lo general, muy similar a la de una típica distribución por producto. El número de
máquinas y el cuello de botella determinarán la capacidad de la célula; el manejo de
materiales debe minimizarse y se equilibrará la carga de trabajo tanto como sea posible.
El siguiente ejemplo muestra una de las formas más habituales y simples de formar las
células.
Situarla sola en una célula residual por la que pasen todos los componentes que lo
requieran.
Situarla en una de las células formadas (en este caso parece que la más indicada es la
III) y que los ítems de las otras células pasen por esta.
Algo similar ocurre con el componente C7, que necesitan que las máquinas M11 y M13,
las cuales quedan fuera de su célula. Una solución podría hacerlo pasar también por las
células M11 o M13 o ambas a la vez, por lo que una posible solución sería duplicar M11
en la célula IV y crear una célula residual con M13.
Como se desprende del ejemplo puede aceptarse que un componente no utilice todas las
máquinas del bloque en el que ha quedado englobado, así como que una máquina no
procese todos los componentes de su grupo. Sin embargo, hay que evitar en la medida
de lo posible que algún componente o máquina interactúe, respectivamente, con una
máquina o componente fuera de la célula correspondiente (ello implicaría que en la
matriz, una vez reordenada, quedase alg ú n un o fuera de algún bloque).
Cuando no es posible evitar tal situación habrá que recurrir, bien a la duplicación del
equipo (si ello es factible), bien a la necesidad de tener que procesar el componente en
cuestión en más de una célula para su acabado. En ocasiones extremas, será necesaria
la instalación de alguna célula residual que fabrique algún componente imposible de
encajar en la distribución resultante o que recoja algún equipo de uso general pero que
no puede ser duplicado. En general, las líneas a seguir para reordenar la matriz son las
siguientes: