3. DÓNDE?

LA OLLA COMUNITARIA:
Surgidas de las luchas populares por resistir en sus territorios
ancestrales, la Olla Comunitaria alzó el vuelo del cóndor de los Andes y
UN ESPACIO PARA INS(CONS)PIRAR
como el libertador Bolívar fue a acompañar las gestas heroicas por la
Escrito por:
liberad de los pueblos.
La ComuNitaria Olla
Así, la Olla Comunitaria llega a las universidades públicas para
alimentar la lucha por la educación pública, gratuita y de calidad. Ella
acompaña los “tropeles” por la autonomía universitaria, por la reforma
académica, por una universidad que se piense el proyecto de una nación 1. QUÉ ES LA OLLA COMUNITARIA?
multicultural, en donde la alimentación, la salud, la educación y el
derecho a la vida sean el medio ambiente en el cual la sociedad pueda Surgida de las comunidades indígenas e campesinas de los Andes,
desarrollar sus potencialidades. La Olla también llegó a los sindicatos, la Olla Comunitaria es una herramienta de encuentro en torno a lo
debilitados y carcomidos por la burocracia interna. Llegó para recordar el común. En estos territorios la única presencia del Estado es a través de la
pasado rebelde que llevamos en los genes, seamos obreros o campesinos. violencia, la cual se expresa de dos formas: i) legalmente, mas sin
Para cuestionar el “acostumbramiento” que nos derrota más que las leyes legitimidad e ii) ilegalmente. La primera corresponde a las acciones
patronales. Para decir que sindicato no es negocio privado, ni plataforma oficiales de la Fuerza Pública sea en la forma de policía o, más usual, en
electoral. Ante la falta de coraje, la Olla alimenta con indignación de se forma de militares que criminalizan a las comunidades rurales,
saber parte de una sociedad basada en la explotación del hombre por el acusándolas de terroristas o narcotraficantes, consiguiendo de esta forma
hombre. crear “falsos positivos” jurídicos o militares; es por esta forma de actuar
La Olla camina a los y por los barrios, a la periferia, allá donde ilegal dentro de la legalidad que las acciones de la Fuerza Pública son
los políticos solo van de cuatro en cuatro años para desnutrir con consideradas ilegitimas por parte de las comunidades. La segunda forma
corrupción y desesperanza. Y la Olla llega y se encuentra con sus corresponde a los llamados grupos paramilitares y narcoparamilitares
ancestros. Abuelas y abuelos que la violencia sacó de sus tierritas, de sus organizados por el Estado para realizar el “trabajo sucio” que legalmente
campos, para llevarlos a nuevos territorios donde colocaron a prueba su no puede hacer; la diferencia entre paras y narcoparas es que los segundo
capacidad de re-inventar. Allá, en los barrios, donde solo habita surgen financiados por los carteles del narcotráfico.
“delincuente”, “carente”, “indeseado”, según una sofisticada palabreria Ante este desierto institucional,
elitista y oficial. En esos barrios la Olla Comunitaria crea nuevas las comunidades del campo
lideranzas de la horizontalidad, estimula el encuentro intergeneracional y históricamente se han organizado en
transgénero. forma autogestionada, esto es,
contando con la fuerza de lo común
para generar economías locales y
resolver democráticamente sus
problemas. Autogestión significa:
confianza en el otro, sus capacidades y
temporalidades, solidaria, capacidad de encuentro con el otro que es
diferente a mi pero con los mismos problemas.
Como espacio autogestionado, la Olla Comunitaria es un espacio
de encuentro entre iguales-diferentes, es el encuentro entre las palabras
silenciadas, es el espacio para repensar constantemente las acciones tanto
individuales como colectivas, repensar los presupuestos que orientan
nuestras prácticas. Por eso decimos que una olla comunitaria es un
sancocho nacional: tod@s junt@s, diferentes, con el calor de los afectos,
cocinamos el alimento que la comunidad necesita para resistir.
2. QUÉ PRODUCE LA OLLA COMUNITARIA?
La Olla es concreta, como concreto son los problemas de las
comunidades, como concreto es el poder que niega pensar alternativas.
En su concreción la Olla alimenta los encuentros. Así, en talleres,
reuniones, encuentros o protestas, quien participa no pasa hambre e
quien gestiona no precisa llamar al Estado para financiar las actividades,
pues ningún Estado dará los medios para su transformación.
La Olla enseña el arte de la autogestión. Traiga sus plátanos, su
zapallo, sus papas, traiga la sal, preste los platos, las cucharas, los vasos;
si no sabe cocinar aquí aprende, si no sabe prender el fogón a leña los
viejos le enseñan. Si no quiere cocinar lave las ollas. Lo importante es
tener la disposición de siempre aprender, mismo que sea “fracasando”.
Es por esto que la Olla es Comun-itaria.
La Olla enseña además las problemáticas y solucionáticas
comunes. El mayor problema es que muchas veces no dimensionamos el
tamaño de nuestros problemas. No relacionamos el valor del agua con la
privatización de la empresa, la falta de oportunidades de unos con la
riqueza de otros. De igual forma, por los diálogos generacionales
interrumpidos, no sabemos que los más viejos ya pasaron por problemas
semejantes y en su infinita creatividad inventaron formas de
solucionarlos sin vender su voto ni su dignidad. Los viejos dicen: ante
una problemática hay siempre una solucionática.
La Olla Comunitaria produce. En el campo, la Olla produce
memoria al recordar tecnologías ancestrales de cultivo, al recuperar
semillas; la Olla refuerza la organización alejando las burocracias y
personalismo; la Olla crea cooperativas y otras formas de asociación. La
Olla Comunitaria, comunaliza la producción de alimentos dentro de un
Sistema Agroalimentar Local, crea ERAS (Empresas de Resistencia
Agroalimentar).
En las universidades la Olla produce cultura, encuentros
musicales, arte, (agro)poesía, discursos. Ella es la correa de transmisión
que une experiencia, palabra y memoria. Ella crea Asambleas y
Constituyentes Universitarias como nuevas formas de tropel y
ocupación. Combate por programas académicos pertinentes al proyecto
de nación y no a estándares internacionales de evaluación.
En los sindicatos la Olla ocupa. Ocupa la calle, la entrada de la
empresa, el esclerosado sindicalismo. Ella, como mujer, se levanta para
denunciar el patriarcado y machismo al interior del marxismo. Nos dice
que no debemos negociar por lo mínimo, mas luchar contra lo imposible
de lo posible. Ella alimenta con revoluciones moleculares al obrero y
obrera, dando nuevas formas organizativas por fuera de la burocracia e
institucionalización sindical, porque los micropoderes también nos
asombran.
En los barrios, la Olla es infinitamente bella. Ella se transforma
en el calor y afecto de la familia ausente. Ella lleva comida a las niños y
niñas con hambre, les lleva la alegría del cine, sea de Chaplin o de Shrek,
así como la música de Beethoven y la Shakira. Arranca risas de los
rostros que solo han conocido el llanto y el desamparo. En estos mismos
barrios, que el cemento no ha inundado completamente, la Olla es abono
para las huertas comunitarias, para la agricultura en la ciudad. Para
recuperar tierra de la especulación. Aquí se producen y reciclan
alimentos, se gestan microempresas populares dentro de un Sistema
Agroalimentar Local.