Está en la página 1de 42

UNIVERSIDAD DE PANAMÁ

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

ESCUELA DE DERECHO

CURSO DE DERECHO DEL TRABAJO II (580ª)

“LA HUELGA”

PROFESOR: FELIPE WAISOME

BICHET, CARLOS 8-798-14

RODRIGUEZ, ECATERINA 8-781-65

SALINAS, ANDRES 4-768-1415

LUNES 4 DE JULIO DE 2011

1
INTRODUCCIÓN

La huelga es sin lugar a dudas uno de los métodos más eficientes con los que
cuentan los trabajadores del mundo entero para la salvaguarda de sus
intereses económicos, sociales y culturales, así como para el aseguramiento de
las mejoras pertinentes en sus condiciones de trabajo.

Más que un derecho o una institución jurídica, la huelga es una reivindicación


en sí, obtenida por los trabajadores no mediante concesión sino a través de
luchas y sacrificios.

En la presente investigación, como parte de nuestro curso de Derecho del


Trabajo II, hemos querido plasmar la realidad jurídica de la huelga en nuestro
medio, pero a la vez hemos hecho una recopilación histórica de lo que ha sido
su evolución hasta nuestros días.

2
I. ANTECEDENTES HISTORICOS DE LA HUELGA.

Tomando en cuenta el marco histórico en el que brotaron el movimiento obrero


y, naturalmente, las libertades colectivas, y que no fueron debilitados ni
extirpados tras la actitud prohibitiva del Estado, podemos recalcar que tales
expresiones sociales constituyeron y siguen constituyendo el contenido
esencial de la principal institución jurídica del derecho del trabajo: la libertad
sindical.

Otros autores consideran que es necesario también buscarle a la huelga raíces


institucionales más profundas en la Bill of Rights de la Constitución de los
Estados Unidos de América de 1971, en la Declaración de los Derechos del
Hombre.

Continuando en ese orden de ideas podemos aseverar, que sicológicamente


hablando, la huelga es producto de la justa inconformidad de los trabajadores
frente a la explotación, al maltrato, a las injusticias y a las inquietudes que creo
desde sus inicios el liberalismo económico a favor de los económicamente
fuertes.

El nacimiento de la huelga se remonta al periodo comprendido entre finales del


siglo XVIII e inicios del siglo XIX. La Revolución Francesa es la que enmarca el
inicio de una nueva etapa para la huelga, ya que estadio como resultado de la
emancipación de una clase social, que se consideraba socialmente
subestimada y excluida de la tutela jurídica. Como señala el connotado autor
panameño Rolando Murgas Torraza: “No hay que olvidar que el sindicalismo,
como sus instrumento, la huelga es la respuesta de los obreros ante los riesgos
a los que los sometió la revolución industrial, las corrientes del liberalismo
económico y la aparición del Sistema Capitalista de Producción”.1

1
MURGAS TORRAZZA, Rolando. ANOTACIONES SOBRE LA HUELGA. Revista Lex Nº3. 1976. Panamá. Pág.
105.

3
De igual forma expresa García Oviedo que señala: “La huelga es realmente un
fenómeno moderno y data del régimen de la libertad industrial.”2

La huelga en un enfoque histórico se presenta como un fenómeno propio de la


Revolución Industrial. Las transformaciones y cambios que trajo consigo la
Revolución Industrial en los albores del siglo XVIII en la vida social, hicieron
posible que se proporcionaran las luchas de clases sociales, permitiendo así la
aparición de la huelga como medio de lucha del sector trabajador, que hasta
entonces había sido víctima de atrocidades, explotación ilimitada, injusticias,
frente al sector detentador del poder económico que consecuentemente
estaba excluida de una protección jurídica.

El derecho a huelga tiene en la legislación europea tres periodos, que la han


caracterizado. Según Mario de La Cueva la periodización comprende el
periodo de la represión o prohibición, el segundo, de la tolerancia y el tercero,
es denominado la protección de huelga.

1.1. PERIODO DE LA REPRESION

Este periodo se caracteriza principalmente por el surgimiento de una legislación


represora y de las asociaciones obreras. Se denominó periodo de la prohibición
o represión, ya que a partir del sistema liberal individualista y con el del triunfo
de la Revolución Francesa, se suprimieron las corporaciones de la Edad
Media, a su vez, se prohibieron los grupos de personas, los gremios.

En este periodo la huelga es considerada como un delito, una violación o


infracción de las normas vigentes, entre los países que respaldaron esta
negativa tenemos a Francia e Inglaterra. Es importante mencionar que se
produjeron otros textos legales que implementaron también la prohibición de
este derecho e incluiso se mantuvieron vigentes hasta el siglo pasado, entre
2
GARCÍA OVIEDO. Citado por NAPOLI, Rodolfo. DERECHO DEL TRABAJO Y DE LA SEGURIDAD SOCIAL.
Editorial La Ley, Buenos Aires, 1969, Pág. 453.

4
ellos podemos mencionar: El Código Francés de Napoleón de 1810, el Código
Español de 1848, el Código Portugués de 1852.

1.2 EPOCA DE TOLERANCIA

En este periodo del Estado, asume una posición tolerante frente al fenómeno
social de la huelga, la acepta pero con las consecuencias que el mismo
trabajador asumiría. Las mismas eran desfavorables toda vez que el patrono lo
podía despedir una vez que entraba en huelga, por el hecho de que
consideraba que era una falta a las obligaciones del contrato individual de
trabajo pudiendo así el empleador dar por el terminado el contrato de trabajo,
sin incurrir en ninguna responsabilidad. El estado no garantizaba este Derecho.

La huelga era concebida como una simple situación de hecho. los trabajadores
tenían el derecho de no trabajar, aunque desde el punto de vista Legal no se
les permito suspender las labores en sus sitios de trabajo.

A raíz de esas circunstancias surgen las denominadas huelgas de solidaridad,


que no eran más que el apoyo de otros trabajadores de otras empresas, a favor
de otros obreros despedidos por sus patronos cuales se manifestaba una vez
que el patrono despidiera vez que el patrono despidiera a un trabajador por
participar en una manifestación de naturaleza reivindicatoria.

Durante esta etapa, para muchos países en donde se prohibía para la clase a
huelga hubo un intervalo de aceptación hasta tal punto en que la misma deja
de considerarse como un delito, pero aun no era considerada como derecho de
los trabajadores, si no como una simple libertad. Esto significó un avance para
la clase trabajadora.

No existía ningún precepto legal que protegiera al sindicato y que sirviera de


garantía de derecho fundamental a la suspensión del trabajo, en apoyo a sus
reivindicaciones.

1.3 LA LUCHA POR LA CONQUISTA DEL DERECHO

5
La huelga se convierte en un fenómeno que va evolucionando en la medida
que la clase trabajadora se va organizado. Al no considerarse la huelga como
delito la clase trabajadora afianza sus movimientos en pro del reconocimiento
de sus aspiraciones laborales. El incremento de su manifestación, el grado de
organización y de solidaridad de los trabajadores, la presión ejercida por ellos,
obligo al Estado a encauzar las huelgas por procedimientos legales, es decir
admitirla por derecho.

En este sentido ya no las prohíbe, sino que los considera como un derecho,
pero como un derecho de carácter individual.

Con la tesis individualista, se da una mutación en el concepto hasta entonces


dominante respecto a la huelga, delito, pasa a ser una situación de hecho, que
siempre, traerá consecuencias jurídicas contrarias a los intereses de los
trabajadores.

Para que la huelga fuera reconocida como derecho se necesitó que la clase
obrera se solidariza, y es de esta toma de conciencia, que se comenzaron a
gestar intensas luchas que al final lograron que la misma se reconociera. Este
movimiento obrero se fortaleció al término de la primera guerra mundial con
gran fuerza, con el Tratado de Paz de Versalles se creó la Organización
Internacional del trabajo ( OIT ), y se contemplaron las principales aspiraciones
de los obreros de la época.

A raíz de esta situación la huelga se convierte en una situación la huelga se


convierte en una situación jurídica debidamente protegida, que pasa a formar
parte del derecho del trabajo, e incluso se consagra dentro de las garantías
constitucionales de muchos países del mundo. Además del derecho de huelga,
también se logró reglamentar el derecho de asociación y de coalición.

1.4 LA HUELGA COMO DERECHO COLECTIVO

6
Dentro del análisis evolutivo como mecanismo de presión social, corresponde
abordar su etapa final, donde el mismo, alcanza el reconocimiento de un
derecho elevado a rango constitucional.

La huelga se convierte en una situación jurídica debidamente protegida, que


pasa a formar parte del Derecho de Trabajo y reconocida por los diversos
países, ya directamente y expresamente a través de la Constitución.

El paso trascendental es la búsqueda de la consagración de la huelga como un


derecho lo encontramos en la nación mexicana, a elevar la huelga como
derecho constitucional, el 5 de febrero de 1917. Esta Constitución establecía en
su artículo 123 que: “Las leyes reconocerán como Derecho de los obreros y de
los patronos la huelga y los paros”.

La huelga, desde aquel momento, encuentra un asidero legal; es un derecho


colectivo y su declaración crea un estado jurídico, protegido por la ley, que
debe ser respetado por todos: la paralización del trabajo en el establecimiento
o establecimientos comprendidos en el conflicto. Con anterioridad dice De la
Cueva, “cada trabajador tenía el derecho individual de no trabajar, pero no
poseía la colectividad, la facultad legal de suspender las labores, a partir de
1917 la huelga se transformó en un derecho colectivo que consiste en la
facultad de suspender totalmente los trabajos en una negociación, cundo se
satisfagan determinados requisitos legales, legislación ordinaria, la doctrina y la
jurisprudencia, afirmaran desde un principio, la nueva idea de la huelga”. 3

La huelga, en consecuencia transformo el sentido que hasta entonces tenían


las relaciones inter obreras, al dar preferencia al derecho de las mayorías y
concluyo con el reinado arbitrario del patrono dentro de la empresa. Pasó,
entonces, a integrar el derecho colectivo del trabajo como una de sus
instituciones. Más tarde es también consagrado derecho de huelga en las
constituciones de Francia y de Italia.

3
DE LA CUEVA, Mario. DERECHO MEXICANO DEL TRABAJO, TOMO II. Editorial Porrúa. México, 1970.
Pág. 763

7
Según Guerrero, Guillermo: “la huelga no puede llevarse a cabo sino cuando
existe un concierto de voluntades, un determinado número de trabajadores que
se une con cierto de voluntades, un determinando número de trabajadores que
se unen con el fin de ejercer presión sobre los patronos. Este es el motivo por
el cual no puede concebirse la huelga como derecho individual sino por el
contrario, como un derecho colectivo, por necesitar de un conjunto de
negativas al trabajo, en forma simultánea, la huelga no se configura como una
suma de ausencias escalonadas, por el cual aparece como un acto de
colectividad.”4

1.5 ANTECEDENTES HISTORICOS DE EXPERIENCIA DE HUELGA EN


PANAMÁ.

Ahora pasaremos a detallar las huelgas en el Canal de Panamá: hay quienes


afirman que en el Canal de Panamá nunca han existido huelgas, es más
atribuyen la no realización de las mismas a la prohibición legal existente en la
vía interoceánica.

Dado que el servicio de transito se ha caracterizado en ser la actividad


económica principal de nuestro país hemos de iniciar el estudio del proceso del
desarrollo de la clase trabajadora, precisamente en las tareas de construcción
ferrocarrilera, a mediados del siglo pasado.

En este periodo donde podemos ubicar una masiva y generalizada explotación


capitalista de la fuerza de trabajo, específicamente en las labores de
construcción del ferrocarril, así como la actividad que se desarrollan en torno al
tránsito transistmico y a la concentración de población en el área.

1.5.1 HUELGAS EN EL FERROCARRIL.

Desde la construcción del ferrocarril y, posteriormente, con la construcción del


Canal por los franceses, durante la segunda mitad del siglo pasado, se

4
GUERRERO, Guillermo. DERECHO COLECTIVO DEL TRABAJO. Editorial Temis. Colombia 1977.

8
empiezan a conformar asociaciones gremiales y a presentarse las constantes
intentonas de declaratoria de huelgas. Es decir, desde finales del siglo pasado,
hasta principios del presente siglos, se vio en nuestra población trabajadora el
despertar de este derecho que venía a reivindicar la situación precaria en que
se encontraban los trabajadores que participaban en la construcción de tan
importante proyecto.

En el ferrocarril de Panamá acontecieron:


1. La huelga declarada por los estibadores contratados por la “Panamá Rail
Road”, el 19 de mayo de 1868, dicha huelga se basaba en la necesidad
de los trabajadores de esta compañía en lograr un aumento de salario.
La superintendencia de la Compañía se niega a acceder a la petición
formulada por los obreros, y en adición a ello deciden: contratar una
cuadrilla que se realizara el trabajo de los huelguistas y presionar
militarmente a los mismos, colocándoles un destacamento militar a sus
alrededores.
2. La segunda huelga de los trabajadores de la Compañía del Ferrocarril se
declara el 6 de febrero de 1880, solicitando un aumento salarial. Esta
huelga se prolonga por diez (10) días, ya que el 19 de febrero el
Gobernador Carlos Bordua notifica a los trabajadores que el salario será
aumentado, a $ 1.20, en razón de un compromiso adquirido con el
entonces superintendente General de la Compañía, el Sr. B. Mosley.
En dicho acuerdo se incluyen a los trabajadores de los vapores y de las
lanchas de la bahía, quienes recibirían $ 1.00, más la comida. Al
respecto, vale mencionar que antes del acuerdo logrado por el
Gobernador, el salario que recibían los trabajadores de la compañía
consistía en $1.00 por día.

3. La tercera huelga convocada por los trabajadores del ferrocarril se da,


producto de que el nuevo superintendente general, H.A. Woods decide
desconocer las conquistas alcanzadas por los trabajadores en febrero
de ese mismo año, cuando se consigue el aumento del salario de $ 1.20
el día, y pretende rebajarle salario a $ 1.00 en detrimento de todo

9
adquirido. En reacción a esta inhumana medida de los obreros del
ferrocarril llaman a una huelga desde el 1 de agosto de 1880, esta
huelga culmina con fuertes enfrentamientos con los llamados
rompehuelgas, quienes eran contratados y pagados por la compañía.

Con relación a este hecho, Marcos Gandásegui hijo y otros, en su libro: Las
Luchas Obreras en Panamá 1850-1903, señala que esta huelga marca un
avance cualitativo de este núcleo obrero y de la clase obrera en general, por
las razones siguientes:

A) Frente al anuncio público hecho por la compañía que intenta


desconocer la reivindicación salarial alcanzada en febrero
pasado, un núcleo de obreros agrupados como los trabajadores
de la compañía del ferrocarril, anuncian la huelga.
B) La disposición firme no se manifiesta solamente a través del
remitido, sino que se concreta también con acciones como son:
1. paralizar con garrotes, machetes, y piedras los trenes donde se
transportaban los rompehuelgas contratados por la compañía.
2. impedir el acceso a los centros de trabajo a otros trabajadores y
empleados de la compañía (trabajadores de trenes, brequeros,
empleados de oficina, etc.)
3. abrir los cambia manos en todos los lugares inmediatos a Panamá.5

Podemos concluir que en ese momento emerge una clase obrera más
organizada en los interinos de la compañía del ferrocarril.

4. La cuarta huelga llevada a cabo por los trabajadores del ferrocarril, se


produce el 3 de noviembre de 1883, la cual se basa en una demanda
exigiendo un aumento salarial, en esta ocasión la compañía procede a
contratar a los rompehuelgas para desvirtuar el acto, pero dicha acción
no logro su cometido. Por su parte los trabajadores continuaron fuertes
en sus medidas y lograron que la compañía accediera a pagarles $ 1.75,

5
GANDÁSEGUI, Marco y otros. LAS LUCHAS OBRERAS EN PANAMÁ (1850-1978). CELA. Panamá 1980.

10
que aunque no era el salario por ellos exigido, si significaba un aumento
en relación con lo que tenían.
5. En julio de 1895 se declara la huelga as larga que se desarrolla en el
ferrocarril la cual tiene una duración aproximada de dos semanas. Esta
huelga es iniciada por los estibadores de colon, exigiendo aumento
salarial, la misma se extiende a los trabajadores de los talleres de
maquinaria, a los cambia vías, a los braceros del muelle, los empleados
de talleres de mecánica, es decir, la mayoría de los obreros que
conforman la fuerza de operaciones de ferrocarril se une a huelga.

1.5.2 HUELGA EN EL CANAL FRANCÉS.

En la construcción del Canal por los franceses también se concretan acciones


huelguísticas, entre ellas, son de obligada mención, las siguientes:

1. El 1 de abril de 1881 los obreros de la compañía del canal se rehusaban


a trabajar, al ser obligados a trabajar los domingos, bajo la amenaza de
que, de no hacerlo, no serían alimentados en los campamentos donde
se alojaban. La compañía jamás considero como válida la petición de los
obreros. Esta huelga no duró más de dos días, debido a que la
compañía no les proporciono los alimentos en los campamentos durante
los días que se mantuvieron en huelga.
2. La segunda huelga en el Canal Francés se declara en abril de 1895.
Esta huelga se fundamenta en lograr una mejora de índole salarial. En
esta ocasión se consigue consagrar un acuerdo con la compañía.
3. En agosto de 1895, los obreros de la compañía del Canal se van a una
huelga exigiendo nuevamente a la compañía un aumento justo del
salario. Pero esta vez la compañía no acepta la petición por considerarla
absurda. Sin conseguir que se les cumplieran sus peticiones los obreros
deciden volver a sus ocupaciones.

1.5.3 HUELGA EN LA COMPAÑÍA DEL CANAL DE PANAMA (E.U)


Durante el periodo de construcción del Canal por los Estados Unidos se
presentan varias huelgas, siendo las mismas atacadas y reprimidas

11
fuertemente. Las huelgas de mayor importancia en este periodo podemos
destacar las siguientes: la de los artesanos y obreros de la Compañía del
Canal, motivadas por la demora de parte de la empresa en el pago de los
salarios, 13 de abril de 1905. después el 27 de abril de 1905,
aproximadamente, 200 trabajadores provenientes de Jamaica, se negaban a
continuar con sus labores debido al mal estado en que se encontraba la calidad
de la comida, estos trabajadores fueron víctimas de las fuerzas represoras de
la policía. A principio de 1907 los obreros provenientes de España se
declararon en huelga, hecho que culminó con la intervención de los
norteamericanos y, peor aún, con la militarización de las obras del Canal.

El 2 de octubre de 1916 debido a la presión de la entonces Unión Marítima del


Istmo, unos 500 trabajadores (aceiteros, fogoneros, gente de mar, etc.) de la
Compañía del Canal se unen en un enorme movimiento huelguístico. Entre las
peticiones formuladas por este reivindicador podemos mencionar: mejoras
salariales, buena alimentación, alojamiento apropiado, buenas relaciones
laborales entre las partes, entre otras. La Compañía del Canal utilizo todas las
medida que se encontraban a su alcance para quebrantar este movimiento, es
decir la compañía ejerció desde el inicio del conflicto una serie de acciones
concretas: patrocinio a los rompehuelgas, arrestos y detenciones con el
objetivo de intimidar a los huelguistas, suspensión de las actividades
vinculadas con el movimiento huelguísticos que le permite posteriormente la
represión de las manifestaciones públicas. Toda esta gama de acciones las
ejecuta la Compañía del Canal, en evidentemente alianza con el gobierno local.

Este movimiento logro expandirse a otras secciones de la Zona del Canal e


inclusive, a otros sectores de trabajadores en Panamá. En este sentido se
declaran en huelga 50 trabajadores antillanos que laboran en el Hospital Santo
Tomas, los conductores y motoristas del tranvía urbano, entre otros. En este
conflicto el movimiento huelguísticos logra que la compañía le conceda la
mayoría de las peticiones esgrimidas.

En 1920, alrededor de unos 17,000 obreros del “Silver Roll” en la extinta Zona
del Canal van a huelga. El llamado a huelga lo realiza una logia (United

12
Brotherhood of Maintenance Way), el comunicado es firmado por su presidente
William Stoute. Es importante mencionar que el hecho de que el llamado a
huelga lo realice una logia implica la existencia de cierto nivel organizativo, que
permite la existencia de cierta coordinación del conflicto por parte de los
obreros. Además que introduce un elemento pasivo en la medida que
promueve mantener la paz capital. Pero a pesar de la intervención de
importantes figuras para lograr un acuerdo, los trabajadores se sienten
presionados por las medida tomadas por la compañía (concentración de
empleados panameños para reemplazar a los huelguistas, prohibición para
alojarse en la Zona del Canal, etc.) y deciden abandonar la acción con el único
logro de saber que sus peticiones iban a ser consideradas.

Desde aquella huelga de 1920, no se registró en la Zona del Canal ningún


movimiento huelguístico de gran magnitud, debido a la presencia en el área de
un fuerte de la clase obrera. Aunque si es pueden mencionar, movimientos
notables en el Istmo que tuvieron, en cierta forma, incidencia en las áreas
adyacentes a la Zona del Canal.

En esta línea podemos señalar la Lucha Inquilinaria de octubre de 1925. En el


periodo de 1963 a 1968, se presentan movimientos huelguísticos de gran
envergadura, en la Ciudad de Panamá, como lo fueron: la huelga de sastres, el
9 de noviembre de 1946, en el cual los operarios del famoso Bazar Francés,
exigían una mejora salarial. En agosto de 1956 se presenta la huelga de los
Chóferes, en la cual estos exigían la rebaja del impuesto que gravaba la
gasolina, esta huelga concluye con un acuerdo entre el gobierno nacional y los
huelguistas.
Dos años después, el 4 de octubre de 1959, en la Ciudad de Colón se inicia la
protesta denominada: la marcha del hambre y la desesperación. En noviembre
de 1960, se desarrolla en la provincia de Bocas del Toro un movimiento
huelguístico, iniciado por los obreros de la Chiriqui Land Company, y aunque
este movimiento logra su cometido pues se consigue pactar una nueva
Convención Colectiva entre la empresa y sus trabajadores, en 1963 se
presenta otra huelga entre los mismos actores, la cual paraliza la empresa por
45 días, y con la cual los trabajadores logran un aumento de salario. El 25 de

13
marzo de 1965, obreros del ingenio azucarero de “Santa Rosa”, provincia de
Coclé, se declararon en huelga solicitando un nuevo contrato colectivo,
aumento de salario, entre otras reivindicaciones.

Una vez represados los movimientos huelguísticos que estremecieron en suelo


patrio en el periodo comprendido entre 1920-1965, vale hacer énfasis en que la
capital norteamericano en alianza con clases dominantes internas, intenta
mantener aislado a este sector de obreros (los de la Zona del Canal), de los
otros núcleos que se encuentran controlados en la incipientes empresas
locales, es decir el gobierno norteamericano y las clases dominantes
panameñas construyeron, con éxito, un cerco de aislamiento, que impedía
forjar una íntima colaboración y solidaridad entre los obreros locales y los
trabajadores en la Zona del Canal.

Durante la segunda guerra conflagración mundial, se iniciaran en Panamá, los


trabajos para la construcción del tercer juego de esclusas con la concentración
de una fuerza de trabajo con más 40,000 obreros entre los cuales había una
cantidad considerable de panameños. En los años de la guerra, los obreros
panameños, junto con los latinoamericanos que laboran en el Canal, son
víctimas de un trato discriminatorio. A raíz de este trato discriminatorio a favor
de los trabajadores norteamericanos se presentan innumerables protestas,
apoyadas por la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de
Organizaciones Industriales comúnmente llamada CIO, quien intenta organizar
a los trabajadores discriminados, pero dicha organización es perseguida por las
autoridades zoneítas, y sus dirigentes expulsados del país.

Podemos concluir, que cualquier acción huelguística que se presentara durante


y después de la construcción del Canal de Panamá fue objeto de una cruel
represión y persecución por parte de las autoridades norteamericanas y
panameñas, y el movimiento obrero víctima de sus inicios de una constante y
una fuerte limitación.

14
II. CONCEPTO DE HUELGA

2.1. EN LA DOCTRINA

Son muchas las definiciones que sobre la huelga se formulan a nivel doctrinal.
Algunos autores se refieren a la huelga como un medio de lucha social utilizado
por los trabajadores contra la clase empresarial o contra el capital.

El jurista Néstor de Buen concibe la huelga “como la suspensión de las labores


en una empresa o establecimiento, decretada por los trabajadores, con el
objeto de presionar al patrón para la satisfacción de un interés colectivo.”6

Otro sector doctrinal equiparara a la huelga a un conflicto colectivo. Entre ellos


encontramos a Eugenio Pérez Botija, Manuel Alonso García, Guillermo
Guerrero Figueroa, etc.

Para el ilustre tratadista Ernesto Krotochin, la huelga “es la interrupción


colectiva y concertada del trabajo por un grupo de trabajadores, con el fin
inmediato de paralizar o perturbar el normal funcionamiento de una o varias
empresas, ejerciendo así la presión sobre la parte patronal o sobre terceros.”7

Los maestros Gerard Lyon-Caen y Jean Pelissier recopilaron las definiciones


que creen derivan de las sentencias jurisprudenciales:

 la huelga es una modalidad en la defensa de los intereses profesionales.


 la huelga es la cesación concertada del trabajo para apoyar
reivindicaciones previamente determinadas, a las que el empresario
rehúsa dar satisfacción.
 La huelga es la interrupción del trabajo para apoyar reivindicaciones
profesionales.
 La huelga es la suspensión del trabajo a efecto de obtener el
mejoramiento de los trabajadores.
6
DE BUEN, Nestor. DERECHO DEL TRABAJO. TOMO II. Editorial Porrúa México. 1985
7
KROTOCHIN, Ernesto. TRATADO PACÍFICO DE DERECHO DEL TRABAJO. TOMO I. Pág. 801.

15
2.2 EN LA LEGISLACION PANAMEÑA

El artículo 69 de la Constitución Nacional se limita a reconocer el derecho a


huelga, el cual literalmente dice lo siguiente:

“Se reconoce el derecho a huelga la ley


reglamentara su ejercicio y podrá
someterlo a restricciones especiales en
los servicios públicos que ella determine”.

Nuestra Carta Magna garantiza el derecho a huelga, salvo en los servicios


públicos que la ley determina. La norma no indica que en todos los servicios
públicos esté prohibido el goce de este derecho, por el contrario, se parte de la
admisión del mismo en los servicios públicos, siempre que el legislador no haya
dispuesto lo contrario. Con la declaración constitucional de la huelga como
derecho, la misma no debe ser entendida como expresión simple de la libertad
de trabajo, pudiéndola definir concretamente como un derecho negativo a
trabajar, pues es en toda instancia un derecho positivo y la posibilidad
reconocida de suspender las labores por razones válidas.

El derecho de huelga en nuestra Constitución Nacional se reconoce y


garantiza, como en la mayoría de las Constituciones de América Latina. Sin
embargo, la Constitución Panameña únicamente restringe su ejercicio en los
servicios públicos, imponiéndole las limitaciones contenidas en la ley, y no la
prohíbe taxativamente.

El Código del Trabajo en su Título IV, Capítulo I, artículo 475, define la huelga
de la forma siguiente:

Artículo 475: “Huelga es el abandono temporal


del trabajo en una o más empresas,
establecimientos o negocios, acordado y
ejecutado por un grupo de cinco o más

16
trabajadores con arreglo a las disposiciones de
este Título”.

Del concepto de huelga dado por nuestro Código de Trabajo, podemos inferir
los elementos necesarios que permiten diferenciar este fenómeno de otros, que
son similares y que están muy lejos de llegar a ser huelga. Estos elementos
son los siguientes:

1. Su Naturaleza Colectiva: por su participación de todos o la mayoría de


los trabajadores de una o varias empresas. La huelga debe llevarse a
cabo por una pluralidad de trabajadores.
2. Suspensión del Trabajo Temporalmente: ya que si esa suspensión
del trabajo por parte de los trabajadores fuese permanentemente
entonces estaríamos hablando de rompimiento de contrato de trabajo y
no de huelga, ya que esta es un medio para conseguir determinados
fines en beneficios de los trabajadores y una vez satisfechos los
mismos, los trabajadores reanudan sus labores en la empresa.
3. Objeto o Finalidad: los cuales están contenidos en el artículo 480, del
Código de Trabajo, que a la letra dice: “La huelga deberá tener alguno
de los siguientes objetivos:
1. Obtener del empleador mejores condiciones de trabajo.
2. Obtener la celebración de una convención colectiva.
3. Exigir el cumplimiento de la convención colectiva de trabajo, del arreglo
directo y el laudo arbitral, en las empresas, negocios o establecimientos
donde hubiere sido violado, y si fuere preciso la reaparición del
incumplimiento.
4. obtener el cumplimiento de disposiciones legales violadas en forma
general y reiteradamente toda o parte de la empresa, negocio o
establecimiento donde hubiere sido violado, y, si fuere preciso, la
reaparición del incumplimiento.
5. apoyar una huelga que tenga por objetivo alguno o algunos de los
ordinales anteriores, en los términos de los artículos 483 y 484.
Se entiende que la huelga se declara por motivo de los objetivos contenidos en
el Pliego de Peticiones. Por último es necesario que se realice el aviso previo, y

17
que se ejecuten las formalidades existentes para conseguir el acuerdo. Con la
presentación del pliego de peticiones se inician los procedimientos de
conciliación; y este deberá presentarse a la Dirección Regional o General de
Trabajo.

La declaratoria de huelga deberá hacerse con una anticipación no menor de


cinco días calendario, que se extenderán a ocho en caso de que la huelga
comprenda servicios públicos.

Diversos autores nacionales que han definido la huelga, dentro de ellos


tenemos al Dr. Cesar A. Quintero (q.e.p.d), quien define la huelga como “la
suspensión colectiva del trabajo llevada a cabo por una pluralidad de
trabajadores con el propósito de alcanzar mejores condiciones de trabajo”. 8

El Dr. Rolando Murgas Torraza considera el derecho de huelga como: “el


medio e instrumento de lucha de la clase trabajadora.” 9 La clase trabajadora,
ha utilizado la huelga como instrumento de lucha y de presión contra los
patronos y el estado. La clase obrera ha dado muestra de resolver algunos
conflictos labórales por vía del arreglos negociado, evitando recurrir a la
huelga, como último recurso para dirimir más controversias laborales.

2.3. En los Convenios sobre Derechos Humanos, Pacto Internacional de


Derecho Económico Social y Culturales y el Protocolo de San Salvador y
la Convención Americana de OIT.

La huelga está incorporada en el Pacto Internacional de los Derechos


Económicos, Sociales y Culturales en el artículo (8,1,d) y en el Protocolo
Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en materia de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales o Protocolo de San Salvador
(8,1,b) y es considerada como un derecho humano.

8
QUINTERO, Cesar. DERECO CONSTITUCIONAL, TOMO I. Panamá. 1967
9
MURGAS TORRAZZA, Rolando. ANOTACIONES SOBRE LA HUELGA. Revista Lex. 1976

18
En la legislación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) no está
incorporada expresamente en ninguno de sus Convenios, tanto la Comisión de
Expertos en la aplicación de Convenios y Recomendaciones como el Comité
de la Libertad Sindical han estimado que la huelga es con sustantiva a la
libertad sindical y, por tanto, las organizaciones de trabajadores y empleadores
pueden tomarla en cuenta al formular su programa de acción o al fomentar y
defender los intereses de los trabajadores o de los empleadores, tal como lo
prescribe el Convenio N 87 de la OIT, a la hora de describir la facultad de
autorregulación intrínseca a la libertad sindical y definir el término
“organización”, en los artículos 3 y 10, respectivamente.

19
III. NATURALEZA JURÍDICA DE LA HUELGA

En sus inicios no se advierte que la huelga era un fenómeno colectivo, sino, se


vio en la huelga más bien el ejercicio de un derecho individual.

La huelga era un derecho que poseía la persona. Se le confundió con sus


libertades más esenciales, lo que permitió considerarlo como un derecho
natural del hombre y la mujer. De esta manera se considera el abandono
colectivo del trabajo como el ejercicio y coincidente de un derecho individual.

Este tema, ha sido discutido y analizado por la doctrina, sin embargo, aún no
se ha dicho la última palabra en cuanto al estudio de esta figura jurídica de la
huelga.

3.1 DOCTRINA QUE CONSIDERA LA HUELGA COMO HECHO

Se trata de un acto humano que, en si según algunos autores, no es ni un


derecho, ni tampoco un delito; un simple hecho o una forma de hacer efectivo
otro derecho, y cuyo principal efecto consiste en una abstención temporal en el
trabajo, previo abandono del lugar de trabajo, hecho, que debe ser interpretado
por jurista con la valorización que corresponda.

Para el expositor de esta teoría, Francisco de Ferrari “el otorgar a la huelga las
características de acto jurídico es ascender los efectos de una abstención de
trabajar a la categoría de una institución reglada por el legislador”. 10

No es en tal sentido, una creación jurídica, una expresión de derecho; sino la


consecuencia de un hecho que tiene sus efectos en el contrato de trabajo. Son
las consecuencias, las que el legislador contempla dentro de las normas
legales, derivados del hecho de la abstención de trabajar.

10
DE FERRARI, Francisco. EL DERECHO DE HUELGA. TOMO 1. Pág. 81.

20
Finalmente podemos señalar que para esta corriente doctrinal, la huelga no es
un derecho, sino una condición indispensable para ejercer derechos, como
loses el objetivo de obtener mejores condiciones de trabajo.

3.2 DOCTRINA QUE CONSIDERA LA HUELGA COMO ACTO


JURIDICO

Su máximo defensor Mario De la Cueva quien señala que “la huelga fue un
hecho, pero ha devenido un acto jurídico.”11

Para De la Cueva la huelga es un acto y no un hecho jurídico, el hecho jurídico


es un acontecimiento puramente material que pueden ser voluntarios y
generadoras de situaciones o efectos jurídicos, mientras que la noción de acto
jurídico, según el tratadista Bonnecase; “es una manifestación exterior de
voluntad, unilateral o bilateral, cuyo fin directo es engendrar, sobre el
fundamento de una regla de derecho o de una institución jurídica a favor o en
contra de una o mas personas, un estado es decir, una situación jurídica
permanentemente y general o un efecto de Derecho limitado y referido a la
transformación, modificación o extinción de una relación de derecho”.12

Con este concepto se explica el tránsito de la huelga, que de ser un hecho


jurídico, productor de efectos siempre contrarios a lo buscado por los
trabajadores, donde estos pretendían imponer su voluntad a los no huelguistas
y al empresario, ha pasado a ser un acto jurídico, que si genera las
consecuencias pretendida por los obreros.

La tesis expuesta por De la Cueva se confirma por que la huelga considerada


como acto jurídico, supone necesariamente una reglamentación, ya que la

11
DE LA CUEVA, Mario. Op. Cit. Pág. 788
12
BONNECASE, Citado por GARAY, Narciso. LECCIONES DE DERECHO CIVIL. Universidad de
Panamá.1992. Pág.11

21
teoría de los derechos absolutos al margen de una normativa jurídica esta
descartada, reglamentación esta corresponde al Estado, para que reunidos los
requisitos de forma y fondo, puedan producirse los efectos que esperan los
trabajadores.

Esta corriente doctrinal tiene gran aceptación, toda vez que la huelga se
enmarca dentro de los lineamientos jurídicos, pues una vez declarada, se
derivan de su ejercicio una serie de efectos jurídicos las cuales obligan a las
partes (obreros y patronos) al cumplimiento de dichas obligaciones dentro del
marco legal sin permitirse actos contrarios a ese orden jurídico establecido.

3.3 DOCTRINA QUE CONSIDERA LA HUELGA COMO UN DERECHO

Quienes defienden este sector de la doctrina afirman que la huelga es un


Derecho, sin embargo no es el derecho individual que posee cada individuo de
no trabajar, sino que es un derecho reconocido a todo aquel que trabaja. Esto
se debe a la evolución que ha tenido el concepto de huelga.

La huelga es entonces un derecho colectivo que posee legítimamente todo


aquel que trabaja u su declaración crea un estado jurídico, protegido por la ley.
Pero como todo derecho, tiene que ceñirse a los lineamientos que imponen las
normas jurídicas que la regulan. En tal sentido Manuel Alonso García; señala
“la huelga supone el ejercicio de un derecho en forma condicionada”. 13

Con esto se afirma que la huelga para que tenga virtual eficacia exige el
cumplimiento de determinadas formalidades, cuya inexistencia condiciona
precisamente la eficacia de la huelga como acto jurídico. Solo cuando se
cumplan con todos los requisitos que la norma jurídica establece para admitir la
validez legal del fenómeno, puede afirmarse que la paralización voluntaria y
colectiva del trabajo consagra el ejercicio de un determinado derecho.

13
GARCIA A., Manuel. DERECHO PROCESAL DEL TRABAJO. TOMO I. Editorial Bosch. Barcelona 1963.

22
Se puede señalar tres circunstancias específicas, existe un hecho: que resulta
en la cesación voluntaria del trabajo, una declaración: de que dicho abandono
significa un propósito determinado que precisamente el de permanecer en
huelga; el incumplimiento de determinados requisitos: los cuales pueden ser
previos o posteriores a la declaración que implica la afirmación de un estado
formal jurídicamente admisible.

Son estos tres factores, que en conjunto, o armónicamente dan una


significación jurídica que se acerca esta figura a la consideración de derecho, si
bien condicionado en su reconocimiento, limitado en su eficacia.

Finalmente se debe entender la huelga como un derecho, entendiendo que


consiste en la facultad que tiene un grupo de trabajadores de suspender
temporalmente el trabajo en una empresa.
En tanto que su eficacia constituye un acto jurídico en sentido estricto, dirigido
a la producción de efectos materiales.

23
IV. EVOLUCION CONSTITUCIONAL DE LA HUELGA EN PANAMÁ

Consideramos pertinente revisar la evolución histórica que ha tenido la huelga


en el ordenamiento jurídico nacional a partir de la separación de Colombia el 3
de noviembre de 1903.

El Dr. Rolando Murgas Torraza, en un ensayo sobre La Huelga en Panamá


expreso lo siguiente: “durante la construcción del Canal por los
norteamericanos se produce varias huelgas, reprimidas con gran dureza”.14

EVOLUCION CONSTITUCIONAL

1.1. Constitución de 1904

La Constitución de 1904, por su carácter Liberal-individualista, no comprendía


un titulo sobre los Derechos Sociales, por lo tanto no existían para la
elaboración de una ley general que reglamentara o regulara el derecho de
huelga. Fue en el periodo de 1914-1940 en el cual se da inicio a la gradual
adopción de la legislación social, que en el fondo contrataba con la
Constitución que debía servir de sustento, ya que como señalamos
anteriormente, la Carta política de1940 no presentaba ningún titulo referente a
los derechos sociales. Fue en este periodo cuando se establecen las primeras
bases jurídicas del derecho de huelga.

Para el año de 1904, los obreros del ferrocarril que trabajaban en los muelles,
se declararon en huelga por razones salariales. Posteriormente, el 13 de abril
de 1094, los artesanos y los obreros al servicio de la Compañía del Canal se
declararon en huelga, en trabajos de construcción, varios lugares, por demora
en el pago de los salarios. Seguidamente, el 27 de abril de 1905, más de 200
trabajadores jamaicanos, que se quejaban por la mala calidad de la comida,
fueron reprimidos a mansalva por la policía15.

14
MURGAS TORRAZZA, Rolando. LA HUELGA EN PANAMÁ. Revista de la OIT, año 1. Ginebra pág. 159.
15
IBID pág 160.

24
En el año de 1907 se desato una huelga, liderada por obreros españoles, que
culminó con la militarización de las obras del canal.

La construcción del canal y la concentración de trabajadores europeos y


latinoamericanos en las ciudades de Panamá y Colon proporcionaron, tal como
lo señala el Dr. H. Ricord, “la dictación de las primeras leyes obreras para los
años, 1914 y 1916; en 1931 se dictó la Ley 8, en la que se estableció la
jubilación a cargo de los patronos; al igual que el pago de las vacaciones”.16

1.2. CONSTITUCION DE 1941

La huelga es un derecho reconocido constitucionalmente, posprimera vez, en la


Constitución de 1941, prohijada por el Dr. Arnulfo Arias Madrid, que dio inicio a
un Estado intervencionista y, además, consagro los derechos sociales, dentro
de los que estuvo el derecho de huelga (Art.54); el cual señala:

Articulo 54: “se garantiza el derecho de huelga,


Salvo en los servicios públicos y los que tengan
Fines exclusivos de solidaridad”.

En términos del Doctor Vasco Torres de León “La Constitución de 1941 le da


un giro a la orientación liberal individualista de la época imprimiendo un
contenido social a la normativa constitucional basado en el concepto de justicia
social”.17

El derecho a huelga es incorporado en la Constitución Nacional de 1941 como


respuesta a las aspiraciones sociales de los trabajadores.

Lo anterior demuestra que el legislador de la época impuso una limitación al


derecho de la huelga excluyendo tal derecho, aquellos que trabajaron en los
servicios públicos y los que tuvieran como fin exclusivo la solidaridad. De tal

16
RICORD, Humberto. LECCIONES DE DERECHO LABORAL PANAMEÑO. Revista Jurídica Panameña. 1973.
17
TORRES, Vasco. TEMAS PREVIOS AL ESTUDIO DEL DERECHO DEL TRABAJ. Panamá. 1998. Pág. 132

25
forma evidenciamos el hecho de que la forma legal aludida reconoció este
derecho social, restringiéndolo en los términos sentados.

En este mismo año se dictan varias leyes y decretos leyes, entre ellos
sobresalen el Decreto Ley N 38 de 28 de julio de 1941: “constituye el primer
intento por codificar la legislación de trabajo en nuestro país”.18

1.3 CONSTITUCION DE 1946

En la Constitución de 1946 por primera vez se asigna un capítulo especial en


materia de trabajo; todo el Capítulo III, del Título III; y de igual forma se
reconocen ciertos derechos que anteriormente le eran negado a la clase
trabajadora.

En efecto, el articulo 68 reconoció el Derecho a huelga a los trabajadores y de


paro a los patronos, con su respectiva reglamentación legal. Sin embargo,
debemos advertir que al derecho de huelga, en cuanto a los servicios públicos,
les impuso las restricciones que determinara la ley.

Articulo 68: “se reconoce el derecho de huelga y de paro.


La ley regulara su ejercicio y podrá someterlo a restriccio
Nes especiales en los servicios públicos que ella determine”.

Como vemos, este artículo de la Constitución hace referencia a que los


servicios públicos pueden ser restringidos más no prohibidos.

El Dr. Rolando Murgas Torraza señalo con respecto a la constitución de 1946


que: antes de la adopción de la constitución de 1946, en 1942, el Decreto 313;
de 31 de enero de ese año; reitero como función de la sección de trabajo y
justicia social; el estudio y consideración de las medidas necesarias para evitar
huelgas y cierres.

18
HOYOS, Arturo. DERECHO DEL TRBAJO. Vol.1. Imprenta LIL. 1982

26
También antes de la mencionada Constitución, el Decreto Legislativo N 31 de
1945, otorgo a la Sección de Supervigilancia y Arbitraje del Ministerio de
Trabajo, Prevención Social y Salud Publica, la función de intervenir en los
conflictos de trabajo para evitar la paralización del trabajo o para obtener su
reanudación, ya sea mediante el entendimiento directo entre las partes o
dirimiendo la querella conforme a lo que dispongan las leyes.

Unos de los aspectos que complemento a la Constitución de 1946, fue que a


través de la Ley 67 de 1947, se adopta el primer código de Trabajo, que entro
en vigencia el uno de marzo de 1948, que regulo tanto el derecho de huelga
como el paro, este último para los patronos.

El Dr. Rolando Murgas Torraza comentando algunos aspectos sobre la huelga


en el Código de trabajo de 1947, expreso los siguiente: “El Código reconoció y
regulo el ejercicio del derecho a huelga, pero lo sometió a normas bastante
rígidas, que comprometieron significativamente las posibilidades reales de
ejércelo. Lo anterior se agravo por una jurisprudencia formalista que recargo de
requerimientos innecesarios el procedimiento de pre huelga. Todo ello condujo
a que en la práctica fueron sumamente limitadas las posibilidades de obtener el
reconocimiento de la legalidad de la huelgas.”19

En el artículo 321 del Código, en lugar de establecer determinadas


restricciones como establecía la Constitución, se prohibió de manera absoluta
la huelga en los servicios públicos, contenidos en una larga lista en el artículo
322.

Mediante sentencia del 7 de marzo de 1950, la Corte Suprema de Justicia


declaró Inconstitucional el artículo 321 y, por ende, la mencionada prohibición
absoluta de la huelga en los servicios públicos. La corte Suprema Justicia
estimo que conforme al artículo 68 de la Constitución de 1946, La Ley podía
someter a restricciones especiales, mas no prohibir, la huelga en los servicios
públicos que ella misma determinarse.

19
MURGAS TORRAZZA, Rolando. Op Cit. Pág. 164

27
1.4 CONSTITUCION DE 1972

Esta Constitución Nacional, reproduce el contenido de la norma constitucional


de 1946, en el artículo 65 (actual 69); sin embargo, eliminó de raíz, de nuestra
Carta Magna, el derecho de paro de los empleadores. Señala lo siguiente:

“Se reconoce el derecho de huelga. La ley


reglamentará su ejercicio y podrá someterlo a
restricciones especiales en los servicios
públicos que ella determine.”

Para efectos didácticos, es menester señalar que cuando los trabajadores de


los entes estatales (IRHE E INTEL), se regían por la Ley 8 de 1975, se les
otorgo un ordenamiento jurídico semejante al Código de Trabajo, que les
permitió organizar sindicatos de trabajadores y negociar convenciones
colectivas de trabajo; sin embargo, se restringió el derecho de huelga.

Es importante señalar, también para fines didácticos, que en nuestro medio


jurídico laboral se ha esgrimido una tesis o criterio con respecto al ejercicio del
derecho de huelga que tienen los servidores públicos, en el sentido que para
ejercerla, es imperativo una norma legal expresa que así lo reconozca.

Esta tesis o criterio jurídico laboral es discutible, toda vez que aunque, el
artículo 65 de la Constitución, reconoce este derecho y nuestro país ha
ratificado los Convenios 87 y 98 de la Organización Internacional del Trabajo
(OIT), no es sino hasta la aprobación de la Ley 9 de 20 de Junio de 1994, que
regula y establece el régimen de Carrera Administrativa, cuando se dicta una
norma expresa sobre el derecho de huelga a los servidores públicos, para los
casos en que la autoridad nominadora incurra en desacato del fallo del tribunal
de arbitraje.

El Dr. Rolando Murgas Torraza, ha planteado, con respecto a las


modificaciones que ha sufrido el derecho de huelga en el Código de Trabajo, lo

28
siguiente: “El régimen de la huelga en el Código de Trabajo, ha sido susceptible
de varias reformas, la mayoría de ellas en lo referente al arbitraje obligatorio.

Son las siguientes:

 Ley 95 de 31 de diciembre de 1976


 Ley 8 de 30 de abril de 1981
 Ley 13 de 11 de octubre de 1990
 Ley 2 de 13 de enero de 1993
 Ley 44 de 12 de agosto de 1995
 Ley 30 de 16 de junio de 2010

Las sucesivas reformadas laborales de las que hemos hecho referencia han
sido complementarias entre si y sistemáticamente disminuyeron los alcances
de las conquistas sociales adquiridas en el Código de Trabajo de 1971. Estas
leyes establecen el arbitraje obligatorio para las huelgas efectuadas en las
empresas de servicio público.

Las reformas al Código no han producido efecto. Se señala que a pesar de


haberse reformado el Código en diferentes ocasiones, este no ha resuelto el
problema.

29
V. TIPOS DE HUELGA

De acuerdo con la doctrina, la huelga admite diferentes tipos de clasificaciones


de acuerdo a diferentes criterios y realidades de los movimientos sociales, para
los efectos del presente trabajo, nos remitiremos a la clasificación brindada or
el Dr. Oscar Vargas Velarde.

Clases de Huelga de acuerdo al cumplimiento de las formalidades legales:

1. Huelga Legal:

La huelga legal, de acuerdo a Murgas Torrazza: “es la que cumple con todos
los requisitos de fondo y forma que exige la ley:”20

El Código de Trabajo exige que la huelga la declaren y la ejecuten al menos


cinco trabajadores y que tal acción tenga el respaldo de la mayoría de los que
laboran en la empresa, el negocio o el establecimiento.

La adopción del acuerdo de huelga requieres, si se trata de un grupo no


organizado de trabajadores, de la voluntad de la mayoría de los interesados. Si
se trata de un sindicato, se necesita la aprobación de la asamblea general y de
la mayoría de votos.

Para la determinación de la mayoría, no serán tomados en cuenta los


trabajadores de confianza, los eventuales, los ocasionales y los que ingresaron
posteriormente a la presentación del pliego de peticiones. Sin embargo, todos
tienen derecho de participar en la huelga.

En caso de que la empresa tenga varios establecimientos, se estima para los


efectos de la mayoría, el total de los trabajadores de la empresa, empero,
cuando la huelga se declara en uno solo de los establecimientos es necesario
la mayoría en cada uno de ellos.

20
MURGAS TORRAZZA, Rolando. Op. Cit. P.185

30
Cuando la huelga la declara un sindicato gremial debe ser aprobada por el
sesenta por ciento de sus miembros en la asamblea general salvo que los
huelguistas constituyan la mayoría de los trabajadores de la empresa o
empresas afectadas. Cuando la huelga sea declarada por un sindicato de
industria en varias empresas se aplica la regla anterior salvo que sea declarada
en una sola empresa o establecimiento en cuyo caso se debe cumplir con el
requisito de mayoría.

La huelga también debe contar con una finalidad, en cuyo caso se declararía
ilegal cualquier huelga que incumpla con los objetivos trazados. En cuanto a los
requisitos formales, la ley laboral indica la obligación de agotar el procedimiento
de conciliación establecido en el Código de Trabajo. Dicho procedimiento se
inicia con la presentación del pliego de peticiones, que puede ser presentado
por un sindicato o un grupo no organizado de trabajadores que cuento con el
apoyo del 30% de los trabajadores de la empresa o establecimiento.

La declaratoria de la huelga debe hacerse dentro de los veinte días hábiles


siguientes a la terminación de la conciliación; sin embrago, la huelga puede
iniciarse hasta dentro de los tres días hábiles luego de vencido el plazo,
siempre que dicha declaratoria se hubiere realizado dentro de los mencionados
veinte días hábiles. La huelga no puede iniciarse de inmediato, por lo que es
necesario un aviso previo de por lo menos cinco días calendario.

De dicha declaratoria de huelga se hará comunicación al Ministerio de Trabajo,


la cual notificará inmediatamente al empleador afectado con una anticipación
no menor a los cinco días mencionados.

Una vez declarada la huelga esta conlleva efectos jurídicos como lo son:
a. Cierre inmediato de la empresa, establecimiento o
negocio afectado. Una vez iniciada la huelga la Dirección
General de Trabajo dará orden inmediato a la autoridad
de policía para que se encargue de esto.

31
b. Suspensión de los efectos del contrato de los
trabajadores que la declaren o adhieran a ella.
Interrumpiéndose las obligaciones de trabajar y de pagar
los salarios.
c. El empleador no puede realizar nuevos contratos de
trabajo salvo aquellos que la Dirección General de
Trabajo considere que son estrictamente necesarios para
la salvaguarda de las máquinas y elementos básicos de
la producción.
Para los efectos de la orden de cierre, la autoridad de trabajo solo verificará si
fueron agotados los procedimientos de conciliación y si el aviso de dio en
tiempo oportuno. El empleador podrá pedir, dentro de las veinticuatro horas
siguientes, un conteo de los huelguistas, para determinar provisionalmente si
reúnen los requisitos de mayoría. Si no existiere dicha mayoría no está
obligado al cierre, pero la huelga solo se considerará ilegal cuando así se
determine mediante el procedimiento previsto en la ley.

De igual manera, a los huelguistas se le garantizan una serie de derechos fuera


del establecimiento como lo son: el derecho a la manifestación pacífica, el
derecho de propaganda, el derecho de establecer piquetes de propaganda y
vigilancia, y el derecho a colectar donativos.

Los trabajadores, aunque la huelga se presume legal, pueden pedirle a los


tribunales de trabajo que declare dentro de los cinco días siguientes a
concluido el proceso de conciliación: que se cumplió con el requisito de
conciliación, que el conflicto cuenta con el apoyo de la mayoría de los
trabajadores, que las quejas contenidas dentro del pliego son las acordes para
la declaratoria de una huelga legal.

2. Huelga Ilegal:

De acuerdo a Guillermo Guerrero Figueroa las huelgas ilegales son: “las que se
llevan a cabo en violación de las formalidades exigidas por el derecho positivo;
se ejerce un derecho creado por el legislador in ajustarse a las normas

32
procesales preestablecidas, constituyendo, por lo tanto, un abuso en el
ejercicio del derecho de huelga.”21

La huelga ilegal, en otras palabras es aquella que no cumple con los requisitos
de fondo o forma. Además, en nuestro derecho, la ilegalidad puede ocurrir
cuando sobrevienen en el transcurso de la huelga actos de violencia física en
contra de personas o propiedades.

Las causas de ilegalidad de la huelga son: el no reunir los requisitos


establecidos en el Código de Trabajo para la huelga legal, si en el transcurso
de la huelga se cometen actos de violencia física en contra de personas y
propiedades acordados o ejecutados por la mayoría de los huelguistas o con
conocimiento de estos.

No podrá declararse la ilegalidad de la huelga por causas diversas a las


anteriores. La huelga ilegal debe ser declarada por las autoridades
jurisdiccionales de trabajo, a petición del empleador. La ilegalidad podrá pedirla
el empleador una vez iniciada la huelga y durante los tres días siguientes. Si no
se solicita dentro del término expresado, será considerada legal para todos los
efectos y con posterioridad solamente podrá pedirse la ilegalidad por
circunstancias sobrevinientes.

Clases de huelga de acuerdo con la justicia de la causa:

1. Huelga No Imputable:

Sobre el particular, Néstor de Buen asevera que “el concepto de imputabilidad


y por ende, de inimputabilidad responde a la necesidad de determinar si la
huelga ha sido el resultado de una acción u omisión empresarial sancionable o
un acto infundado de los trabajadores”.22

21
GUERRERO FIGUEROA, Guillermo. DERECHO COLECTIVO DEL TRABAJO. Tercera Edición. Temis. 1986
p.167.
22
DE BUEN, Néstor. LA HUELGA EN MÉXICO. Op Cit. P.144

33
La inimputabilidad o imputabilidad de la huelga está relacionada con la razón y
la justicia que envuelven las peticiones de los trabajadores. Se trata de
examinar el fondo del conflicto para determinar si las reclamaciones o las
reivindicaciones son verdaderamente fundadas.

La huelga no imputable es aquella en la que el empleador no es el responsable


por la decisión tomada por los trabajadores en su acuerdo y su ejecución. En
este caso, conforme a la ley, no hay justicia ni razón en las pretensiones del
sindicato o el grupo de trabajadores.

2. Huelga Imputable

El término imputable está en conexión con la culpa del empleador por el hecho
huelguístico. Según José de Jesús Castorena: “el término culpa lo tenemos que
referir al concepto ordinario. Es decir, el patrono es culpable de la huelga con
ésta se declara por haber faltado las obligaciones que tiene contraídas. En dos
casos por lo menos, puede darse ese incumplimiento: uno, cuando viola el
contrato colectivo de trabajo y la huelga tienen por objeto exigir su
cumplimiento y el otro, cuando se niega a establecer condiciones justas de
trabajo si lo permiten sus condiciones económicas”. 23

Las causas de imputabilidad son las siguientes: “cuando la huelga decretada


por violaciones a la convención colectiva se fundamente en tales violaciones
posteriormente comprobadas en el proceso de imputabilidad, cuando el
empleador no hubiere contestado el pliego de peticiones o hubiese
abandonado la conciliación, cuando el empleador desobedezca la orden de
cierre, contrata esquiroles, o de cualquier forma entorpezca de manera grave e
injustificada el libre ejercicio del derecho a huelga.”24

La petición de la imputabilidad se tramita mediante proceso abreviado de


trabajo. La imputabilidad de la huelga obliga al empleador al pago de los

23
CASTORENA, José de Jesús. MANUAL DE DERECHO OBRERO. 2ª Edición. México. P.246
24
VARGAS VELARDE, Oscar. DERECHO DEL TRABAJO. Editado por la FSTRP. Panamá Abril 2007

34
salarios caídos de los trabajadores afectados por la medida. Debe aclararse
que todo huelga imputable es legal, mas no toda huelga legal es imputable.

Clases de huelga de acuerdo con su carácter directo o de apoyo.

1. Huelga Directa

De acuerdo a Guillermo Guerrero Figueroa advierte que en la huelga directa


“participan las personas interesadas en el conflicto, o sea, las beneficiadas con
las soluciones satisfactorias a las peticiones formuladas en el respectivo
pliego”.25

La acción de huelga se encamina directamente contra el empleador para los


efectos de alcanzar un resultado favorable a los miembros del movimiento
huelguístico.

2. Huelga Solidaria

La huelga en respaldo a otra “es la huelga por solidaridad, la cual tiene por
objeto apoyar una huelga legal declarada por otro grupo de trabajadores.”26
También es denominada por la doctrina como huelga de apoyo, por simpatía, o
huelga indirecta.

Esta huelga produce idénticos efectos que la huelga directa y está sujeta a los
mismos requisitos legales, aunque no es necesario agotar los procedimientos
de conciliación. La huelga por solidaridad sólo puede ser declarada por una
sola vez y hasta por dos horas.

Esta clase de huelga únicamente están facultados para declararla los


trabajadores pertenecientes a la misma rama o actividad económica o a la
misma profesión u oficio, en centros de trabajo ubicados en un mismo distrito, a

25
GUERRERO FIGUEROA, Guilermo. Op Cit. P.164
26
VARGAS VELARDE, Oscar. Op Cit. P.589

35
menos que se trate de establecimientos, negocios o explotaciones,
pertenecientes a un mismo empleador o empresa.

Clases de huelga de acuerdo con el tipo de actividad.

1. Huelga en Actividades Estrictamente Particulares

La huelga puede tener lugar en actividades industriales o manufactureras,


comerciales, de servicio, informáticas, mineras, agrícolas, pecuarias, cívicas,
culturales etc. En otras palabras, en cualquier actividad organizada en empresa
independientemente si el objeto es lucrativo.

2. Huelga en Actividades del Servicio Público

El Código de Trabajo de Panamá garantiza el derecho de huelga de los


trabajadores de las empresas d servicio público, con las restricciones
correspondientes, en consonancia de lo dispuesto en el artículo 69 de la
Constitución, que en su frase final autoriza a la ley para someter dicho derecho
a restricciones especiales en los servicios públicos que ella determine:27

Esta huelga puede ser sometida por la Dirección General de Trabajo a arbitraje
obligatorio, después que haya comenzado. Igualmente procede este arbitraje
cuando la DGT establezca que por la duración de la huelga, se han deteriorado
gravemente las condiciones socioeconómicas de los habitantes de la región o
del país. La decisión es apelable, en el efecto devolutivo, ante el Ministro de
Trabajo. La resolución que decida someter el conflicto a arbitraje ordenará
inmediatamente la suspensión de la huelga.

En nuestro país la Constitución permite la huelga de los trabajadores en los


servicios públicos sin distinguir si éstos son prestados por empresa particular o
por el Estado. El Código de Trabajo por su cuenta, hace alusión a que
únicamente se ha reglamentado la huelga para los trabajadores que presten

27
VARGAS VELARDE, Oscar. Op Cit. p.591

36
servicios en empresas particulares que manejen la prestación de servicios
públicos. En cuanto a los servidores públicos de Ministerios y Entidades
Autónomas no ha existido una regulación legal.

La comunicación de la declaratoria de huelga debe hacerse por lo menos con


ocho días calendario de anticipación y los huelguistas deberán comunicar a la
Dirección General de Trabajo cuáles son los turnos de urgencia en los centros
afectados por la huelga, para que éstos no se paralicen en forma total.

Al comenzar la huelga los buques, aeronaves, trenes, autobuses y demás


medios de transporte que se encuentren en ruta, deberán conducirse a su
pronto destino.

El Estado está facultado para asumir la dirección y la administración de los


servicios públicos, a cargo de las empresas particulares, por el tiempo
indispensable para evitar perjuicios a la comunidad.

Clases de Huelga de acuerdo con su duración.

1. Huelga por Tiempo Definido

La huelga directa puede declararse expresamente por tiempo determinado.


Este periodo se fija para que dure de una fecha a otra, indicando expresamente
el día del inicio y el de terminación de la huelga. Llegado el día de vencimiento
o vencido el plazo de duración termina la huelga.

Según Murgas Torrazza, “las huelgas por tiempo definido son poco utilizadas
en Panamá porque esa modalidad implicaría que los trabajadores tuviesen que
repetir nuevamente el procedimiento de conciliación previa y los de declaratoria
y aviso previo, para estar en condiciones de acudir a la huelga indefinida o una
nueva huelga por tiempo definido.”28

28
MURGAS TORRAZZA, Rolando. Op Cit. p.183

37
2. Huelga por Tiempo Indefinido

La huelga directa suele ser por tiempo indefinido, siempre que en este evento
se trate de una suspensión temporal y no definitiva del trabajo. Siempre que no
se especifique la duración se entenderá que se declara de esta manera.

Clases de Huelga de acuerdo a su extensión.

1. Huelga General

Dentro del concepto de huelga general hay diversas aristas a saber: en primera
instancia una huelga general implicaría la paralización de todas las empresas
del país, cosa que ocurre de manera muy rara producto de grandes situaciones
de anomia.

Por otro lado, la huelga general decretada por un sindicato industria implicaría
la paralización de trabajadores de diversos oficios y profesiones, sería una
huelga general en la medida que se paralizaría una industria entera.

La huelga general en sentido gremial implicaría la paralización de todo un


gremio o profesión de manera generalizada y la huelga general decretada por
un sindicato de empresa paralizaría de forma generalidad todo el universo de
una empresa.

2. Huelga Parcial

Podemos identificar una huelga parcial cuando declarada la huelga en una


empresa, las demás siguen sus labores normalmente y de igual manera
cuando la huelga en una empresa no afecta a las demás que no son parte ddel
conflicto colectivo.

Clases de huelga de acuerdo con su teleología

1. Huelga Profesional

38
“La huelga profesional es aquella dirigida contra el empleador con finalidad
económica o jurídica”29.

Entre las finalidades económicas podemos mencionar la obtención de mejores


condiciones de trabajo, la celebración de una convención colectiva de trabajo.
Entre las finalidades jurídicas podemos destacar el exigir el cumplimiento de la
convención colectiva de trabajo, del arreglo directo, del laudo arbitral u obtener
el cumplimiento por parte del empleador de disposiciones legales violadas de
forma general y reiterada.

2. Huelga Político-Social

Este tipo de huelga no se encuentra tipificada por los patrones legales,


superando las barreras legales frente al clamor de las masas trabajadoras.

En la huelga política aunque los empleadores resultan afectados por la


suspensión de las labores; la acción va encaminada hacia los poderes públicos
en aras de la obtención de alguna determinada reivindicación de carácter
nacional o acción legislativa concreta.

Es decir, se trata en el fondo de la promoción o la salvaguarda de los intereses


económicos y sociales comunes a los trabajadores cuando corresponde
resolver las peticiones a los Órganos del Estado y no a los empleadores.

29
VARGAS VELARDE, Oscar. Op Cit p.597

39
VI. DE LA TERMINACIÓN DE LA HUELGA

La huelga por tiempo indeterminado o determinado termina siguiendo a Murgas


Torrazza30 por las siguientes causas:

1. Por decisión de los huelguistas, ya sea el sindicato o el grupo no


organizado de trabajadores, derivado de la simple voluntad o para
someter la cuestión a arbitraje.
2. Por la orden de arbitraje obligatorio en el caso de los servicios públicos.
3. Como consecuencia de la declaratoria de ilegalidad mediante sentencia
en firme. Si persiste la paralización los trabajadores no estarían
amparados por los efectos de la legalidad de la huelga.
4. Por acuerdo de las partes, que ponga fin al conflicto o que se someta el
mismo a arbitraje convencional.

30
MURGAS TORRAZZA, Rolando. Op Cit p.196

40
CONCLUSIONES

Sin lugar a dudas la figura de la huelga es una de las más importantes en el


estudio del derecho colectivo del trabajo. Lo que hoy entendemos y estudiamos
a la luz del análisis doctrinal y positivo del derecho panameño fue en su
momento una de las reivindicaciones más importantes de la humanidad y
particularmente de los trabajadores.

En la presente investigación hemos podido hacer un estudio de las


consideraciones históricas y la evolución del derecho a huelga así como
también entrar a valorar y analizar los efectos jurídicos propios de la
declaración de huelga y sus requisitos de fondo y forma.

El principio de interpretación favor libertatis nos indica que los derechos


trazados para la clase trabajadora dentro de nuestro ordenamiento jurídico son
considerados un mínimo y para nada restrictivos, en nuestros días los
trabajadores siguen luchando por más y mejores reivindicaciones. Los embates
del neoliberalismo cada vez requieren de la organización y unidad de los
trabajadores, donde la huelga como medida de presión es un factor
preponderante.

41
BIBLIOGRAFÍA

NAPOLI, Rodolfo. DERECHO DEL TRABAJO Y DE LA SEGURIDAD SOCIAL.


Editorial La Ley, Buenos Aires, 1969.

DE LA CUEVA, Mario. DERECHO MEXICANO DEL TRABAJO, TOMO II.


Editorial Porrúa. México, 1970.

MURGAS TORRAZZA, Rolando. ANOTACIONES SOBRE LA HUELGA.


Revista Lex Nº3. 1976. Panamá

GUERRERO, Guillermo. DERECHO COLECTIVO DEL TRABAJO. Editorial


Temis. Colombia 1977.

GANDÁSEGUI, Marco y otros. LAS LUCHAS OBRERAS EN PANAMÁ (1850-


1978). CELA. Panamá 1980.

CASTORENA, José de Jesús. MANUAL DE DERECHO OBRERO. 2ª Edición.


México. P.246

VARGAS VELARDE, Oscar. DERECHO DEL TRABAJO. Editado por la


FSTRP. Panamá Abril 2007

GARCIA A., Manuel. DERECHO PROCESAL DEL TRABAJO. TOMO I.


Editorial Bosch. Barcelona 1963.

DE BUEN, Nestor. DERECHO DEL TRABAJO. TOMO II. Editorial Porrúa


México. 1985

KROTOCHIN, Ernesto. TRATADO PACÍFICO DE DERECHO DEL TRABAJO.


TOMO I.

42

También podría gustarte