Está en la página 1de 18

Universidad Nacional de Catamarca

Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación

El presente trabajo pretende ahondar distintas temáticas en torno a la


Sociología de la Educación, deslindar de alguna manera particularidades y
enfoques pertenecientes a misma. Desde la catedra Sociología de la Educación
concerniente a la Carrera de Filosofía y Cs. de la Educación de la Universidad
Nacional de Catamarca se plantea como hilo conductor trabajar las siguientes
temáticas: el Origen del Subjetivismo, Enfoques Clásicos y Contemporáneos
de la Sociología.

Para ello se tomará como anclaje aportes de bibliografías y notas tomados en


clase, esto nos permitirá configurar el marco teórico con bases sólidas con
autores de gran han incidencia en la Sociología de la Educación, Ana María
Brigido en su libro “Sociología de la Educación”.

Por otra parte, es indispensable referir de los colabores de los clásicos


reconocidos como pilares insignes a la apertura de esta ciencia tan joven,
encargados de darle un estatus científico y preeminencia para consolidarse
como una de las ciencias que más aportan al estudio del ser humano,
hablamos de Max Weber, Emile Durkheim y Marx.

Max Weber plantea en su libro “Economía y sociedad” el papel determinante


del sujeto cuando nos dice, que la “acción social” es siempre subjetiva, es
decir, sólo existe en tanto y en cuanto es pensada y realizada por personas, ya
que son esas personas las que le dan a la acción una intencionalidad-
significación, un sentido, un por qué, un para qué. Weber está diciéndonos que
en cualquier fenómeno social siempre se trata de individuos actuando. En todo
caso, habrá que dar cuenta de por qué los distintos individuos actúan de un
modo similar, habrá que dar cuenta de la regularidad de las acciones. La
postura de Weber es subjetivista, pero no individualista, porque, precisamente,
la acción social está orientada por la acción de los demás y de tal forma, el
sentido se construye colectivamente. Su visión es bastante probabilista ya que
habla de asociaciones o instituciones en las que su existencia está dada por la
posibilidad mayor o menor de mantener en el tiempo acciones sociales
recurrentes, esperables. El párrafo que comienza "Siempre se trata de un
sentido empírico y mentado...". Allí Weber hace explícita su diferencia con la
sociología de Durkheim: no hay que sustancializar las figuras sociales. Por eso
la idea de la mera probabilidad de que ciertas conductas sigan siendo
regulares. Por otra parte, Weber ve solamente una “infinitud desprovista de
sentido del acaecer universal”, y en cierto modo la ciencia lo único que puede
venir a hacer es “ordenar” esa multiplicidad multiforme de probabilidades para
que tengamos mayor claridad conceptual, y podamos reconocer, no, lo qué
está bien o lo qué está mal, sino, si los fines que nos proponemos son
adecuados con los medios que elegimos. Esto se basa en la “neutralidad
valorativa”: abstenerse en emitir juicios de valor, a pontificar sobre qué
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
“debería ser”, para concentrarse en “lo que hay”, en las relaciones concretas
entre las distintas acciones sociales que, en última instancia, sólo pueden ser
sostenidas por personas individuales. La herramienta metodológica que es el
“tipo ideal” viene a “poner un poco de orden” a esta realidad social multiforme,
abstrayendo algunos rasgos para clarificar, pero siempre teniendo en cuenta
que ese “tipo ideal”, aunque lógico y coherente, no es más que una
construcción subjetiva que no agota ni define en su totalidad a la realidad, sino
que expresa ciertos aspectos de ella elegidos por el científico social. En una
parte del texto habla de una ciencia social empírica y comprensiva. Como

empírica, debe sustentarse en el registro de acciones concretas (tales personas


hicieron tales cosas; le dieron tales significados en tales situaciones),
apartándose de lo normativo, del “esto es lo que debe ser”, para concentrarse
en “si se hace esto, es muy probable que suceda tal otra cosa en este grupo”.
Como “comprensiva”, debe buscar explicar la sociedad, sin olvidar la
causalidad, pero reconociendo que todo lo que los hombres hacen es algo
individual y tiene un contenido elaborado socialmente pero que no deja de ser
subjetivo. La acción humana no es como los fenómenos naturales, que tienen
causas objetivas externas. La acción humana ocurre por intención y finalidad,
por el significado o el sentido que las personas atribuyen a sus acciones a las
de los demás. De modo que para Weber el sociólogo tendrá que interpretar o
comprender el sentido de las acciones, ya que en el mundo social, a diferencia
del natural, ese sentido subjetivo es el que da las explicaciones. Tenemos
entonces una sociología que busca causas externas objetivas, al modo de las
cosas, y otra que busca interpretar el sentido que los individuos les dan a sus
relaciones.

Por otra parte, el pensamiento Durkhemiano surge con el intento de establecer


una crítica a corrientes de pensamiento social de la época. Mediante esta
postura recurre a una vía histórica para explicar la problemática de la
concepción de la naturaleza del fenómeno social, pero no del modo como Marx
entiende la historia, un proceso dialectico entre la naturaleza y el hombre
(Materialismo histórico), sino la historia de las sociedades y sus leyes morales,
esa especie de todo poderoso que marca, forma y abarca al individuo,
dejándolo en un segundo plano.

Su análisis versa sobre una dicotomía entre la sociedad tradicional y la


sociedad moderna, las que presentan contrastes significativos en las
propiedades de la conciencia colectiva.

Por un lado, se encuentra la sociedad tradicional que estaba regida por una
organización mecanicista, es decir por una solidaridad que se caracteriza por
una total competencia de los individuos en la mayoría de los trabajos
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
colectivos, basada en simbolismos religiosos los que determinaban en ella un
conjunto de valores y creencias fuertemente definidos que configuraban a los
individuos particulares dentro de pautas y normas comunes de la sociedad. Por
otro lado, la sociedad moderna se caracterizaba por una organización
totalmente orgánica e individualista en donde la conciencia colectiva sufre un
desmembramiento y surge la solidaridad orgánica, y la persona asume un rol
cada vez más individual que lo ubica como órgano funcional de la vasta
sociedad. El estado es el organizador principal producto de la individuación
devenida de la historia como proceso social.

A medida que fue pasando el tiempo, la sociedad tradicional en su desarrollo


cede dando paso para que se establezca en su continuidad la sociedad
moderna. Esta última, se caracteriza por la necesaria persistencia de ciertos
valores morales y códigos de conducta que regirán a la sociedad. Rescatamos
que la forma en que Durkheim concibe y caracteriza la sociedad tiene un
carácter eminentemente colectivo, entendiendo que no es la sumatoria de sus
miembros, sino por el contrario un todo establecido y dotado de leyes morales
que podremos comprenderlas teniendo

en cuenta los vínculos y las relaciones entre sus particulares. Además, es el


carácter moral, para Durkheim, lo más importante y que se encuentra por
arriba de todos los miembros particulares y permite distinguir los diferentes
tipos de sociedades.

En cuanto al aporte de Marx, la sociedad para él tiene carácter puramente


capitalista que se divide en dos clases antagónicas, la dominante y la oprimida.
Es decir, los que poseen los medios de producción y del otro lado, los que
venden su mano de obra. La primera de ellas, es la que obtiene todos los
beneficios y con su dominio señorea a partir de una acción más o menos
manipuladora de la conciencia social, conciencia del resultado de las relaciones
de trabajo que permite su perdurabilidad.

Sucede en la sociedad un proceso dialectico, en donde el sujeto no es tomado


como el único factor que determina y modifica el ambiente como lo hace
Weber. A diferencia, Marx afirma que el individuo modifica la naturaleza, pero
que ésta recíprocamente lo modifica a él y además establece vínculos
dialecticos entre sus pares que los diferencia estratificando la sociedad en
clases.

El sujeto después de obtener el beneficio de la naturaleza es marcado para


una ulterior modificación a partir de nuevas necesidades; esta relación
dialéctica forja una lógica organizacional. Este hecho que es esencialmente
cultural. En definitiva, la conciencia es una construcción social que emerge de
un proceso entre individuo y ambiente, y no como lo piensa Hegel, un espíritu
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
absoluto preexistente a la sociedad; o del modo que dice Durkheim, que la
conciencia está determinada por las leyes morales de la sociedad que
preexiste al sujeto. Es así que la conciencia se conforma en el marco de
relaciones sociales que produce el hombre desde su más primitiva cultura,
resultado de etapas históricas que ocurrieron en un lugar y contexto
determinado.

Estas relaciones de producción contribuye predominio de la desigualdad


económica y social, y además, condena al sujeto.

La conciencia, es bien, una construcción puramente social pero en esa


construcción se esconde una ideología dominante la que genera que los
individuos personifiquen ciertos roles sociales sin cuestionamientos. Es así que
Marx distingue dos tipos de conciencia: falsa conciencia y la conciencia
verdadera. La primera conciencia, conciencia en sí, es el resultado de la
incapacidad del hombre de comprender y entender los intereses que le
corresponde. Este tipo de conciencia permite la eternidad del sistema
capitalista. La conciencia verdadera, o conciencia en para sí, se da cuando el
hombre –del proletariado en sí- comprende cuales son los intereses que les
corresponde: roles sociales, políticos y económicos; reclamando lo que le
corresponde y es ahí donde se producirá una revolución y que tiene que dar
por resultado una mejor repartición de los medios de subsistencia. Fin al que
aspira el pensamiento Marxista.

Con el correr de tiempos se han elaborado enfoques que responden a la


corrientes o teorías fundamentales del pensamiento sociológico, aceptando los
mismos supuestos sobre el hombre y la sociedad que sostiene cada una de
ellas, utilizando el mismo marco conceptual y adoptando similares estrategias
metodológicas en la investigación, cabe destacar que estos enfoques actuales
en su surgimiento y desarrollo no son independientes de la problemática social
y educativa del contexto social en el cual emergen, por otra parte el hecho que
puedan coexistir perspectivas tan distintas es una muestra del pluralismo
teórico y metodológico que tanto caracteriza a la sociología contemporánea, en
primer lugar hablamos del enfoque del Funcionalismo estructural, éste ha
dominado el campo de los estudios sociológicos de la educación desde 1950
hasta fines del 70. Sus raíces se encuentran en los trabajos de Spencer, Comte
y Durkheim, entre otros.

Para céntranos en su desarrollo debemos tener en cuenta la particular


situación histórico-política de los EE. UU. en ese momento y la situación de la
propia teoría sociológica. En aquel tiempo, los EE. UU. de la posguerra estaban
cedidos a lograr la hegemonía mundial, para lo cual se requería de una
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
superioridad tecnológica que debía traducirse en superioridad, económica y
militar. El modelo de sociedad que prevalecía era el de una sociedad
meriocratica, de expertos y democrática. Esto implicaba la creencia que el
mérito y el esfuerzo personal, son factores decisivos en el logro de una posición
en la estructura social, también implicaba otorgar al conocimiento científico y
su aplicación tecnológica un lugar clave en el logro del proceso social y
económico, seguido de una valoración de los principios básicos de la vida
democrática. Y para lograr todo esto era necesaria una educación formal que
abarcara esas exigencias que planteaba tal modelo. Por consiguiente, se puso
en el sistema educativo una confianza ciega volcando un enorme esfuerzo
financiero en su desarrollo y la investigación científica, termina produciéndose
una gran expansión de la educación y demanda.

En lo que concierne a la teoría sociológica, esta disciplina adquirió un matiz


marcadamente empirista, en su codicia por lograr un status científico. Ésta
ingresa en el campo de la educación y da lugar a una considerable producción
de conocimiento científico.

Este enfoque toma en consideración a la sociedad como un sistema, donde la


misma puede ser comprendida en términos de las interrelaciones de sus
partes, es decir cada una ópera, trabaja, para asegurar el mantenimiento del
equilibrio y la integridad del sistema. Una modificación en él termina por
provocar cambios, (que si bien el funcionalismo sustenta que el sistema social
tiende a mantener un estado de equilibrio dinámico y a adaptarse suave y
fluidamente al cambio y que en cuanto a las perturbaciones pueden conducir a
una inestabilidad temporaria logrando volver a su equilibrio original) seguido
de que estos cambios provienen de fuentes externas al sistema, ya sea el
crecimiento y la diferenciación estructural o las innovaciones e invenciones que
llevan a cabo los miembros de la sociedad, por eso para asegurar su
supervivencia, es necesario contar con ciertos requisitos funcionales, como
mantenimiento de pautas y manejo de tensiones, la adaptación, el logro de
fines y la integración.

También plantean que existe un consenso general acerca de las normas y los
valores que rigen la superviviencia en el sistema, ayudando a convertir a la
sociedad en una totalidad unida y cohesiva.

El sistema social, como un conjunto complejo de elementos en interacción e


interdependencia, es un sistema abierto que recibe influencia del entorno y, a
su vez actúa sobre él. La educación es percibida como un sistema de esa
naturaleza, entonces todos los fenómenos deben ser vistos en forma de
estructura, una organización de las partes que componen el sistema y de sus
relaciones entre ellas. Cuando se piensa en esas partes se está llamando la
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
atención en un tipo de institución ya sea “la familia”, en tanto pensada como
roles, ya sea “padre, madre”, y finalmente como prácticas y costumbres; esta
relación se da como una especie de analogía en cuanto a la adaptación que se
produce entre las partes de un organicismo viviente. El proceso de
socialización constituye el mecanismo social por excelencia para el
cumplimiento de requisitos funcionales y con ellos, asegurar la supervivencia
de la sociedad. La educación es funcional a la sociedad, sus funciones son la
trasmisión de cultura, preparación para el ejercicio de roles, selección social,
integración, innovación.

Entonces podemos decir que “la sociedad se concibe como un todo” y su


manera de abordarla e interpretarla tiene que ver con esta visión, es decir una
dinámica evolutiva permanente en tanto que sus partes funcionan al unísono
del todo haciendo sus aportes a la colectividad social, por ejemplo que la
escuela cumple un rol, “educar” entonces efectúa la función social que le
corresponde, ésta, claramente es propositiva y regulativa, por ejemplo, cavilar
en la “justicia” o en la institución encargada de regular la sociedad, como la
policía, se hace latente en la situación siguiente, en un lugar público, una
plaza, un individuo realiza un alboroto con ciertas conductas no aprobadas
como dañar elementos de la misma, entonces la policía debe actuar y en tanto
que ésta se manifiesta cumple necesariamente con rol, el de regular y cuidar
del bienestar de todos. Ante un acontecimiento de esa amplitud las
instituciones deben su existencia a partir de que ellas tienen una función que
les corresponde, en este caso, la policía que aplica una multa al sujeto por sus
acciones indebidas en público.

Alonso Hinojal realiza un análisis de la evolución histórica del Funcionalismo en


la Sociología de la Educación, diferencia tres tendencias de las que se
describen brevemente:

Funcionalismo tecnoeconimico: se caracteriza por sus dos líneas


interpretativas, la tecnológica, y la económica, plantea la idea de focalizar
estas líneas en la importancia de la educación en pos de garantizar la
formación de “sociedad de expertos” y de concebirla como algo instrumental y
dependiente respecto de la economía. Esta es la justificación de inversión en
educación y la expansión de los sistemas escolares porque son una industria
decisiva de la sociedad. Entonces en la medida que la sociedad logre expertos,
alcanzando el dominio de la ciencia y la técnica, contribuirá al bienestar de la
sociedad.

Funcionalismo reformista: aborda importantes debates acerca de la


desigualdad social y el papel que juega la educación con respeto a ella, es
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
decir, en qué medida la igualdad de oportunidades contribuye a reducir las
desigualdades sociales, el problema está centrado en la relación entre la
educación y la estratificación social.

Una característica que se plantea acerca de la educación, es que no es posible


que tenga los mismos efectos en los individuos y que alcancen el mismo nivel
de logro, en tanto que hay una historia que lo acompaña, es decir, otros
factores, como el nivel económico entre tantos.

Funcionalismo Crítico: desde esta visión la educación no es un espacio social


inerte a los cambios, y conflictos que la sociedad le toca vivir. Reflexionar de
esta manera nos permite dar cuenta que el ámbito de la educación es
netamente un espacio donde los conflictos culturales, políticos, se hacen
latentes y por tanto determinan, es decir tienen incidencia, basta pensar en las
distintas corrientes pedagógicas a los largo de la historia, que se hacen
notorias en las practicas institucionales. Un cambio, un conflicto a nivel social
se manifiesta en el campo educativo. Se considera que hay una acción
competitiva de los grupos de status en busca de riqueza, poder y prestigio, la
educación trasmite esos componentes y con ello contribuye a definir quiénes
están dentro de ellos y perpetuarlos en esa posición.

Luego se presentara una perspectiva que se ubica dentro de la corriente


conflictivista en la sociología, aquí se afirma la supremacía de la estructura
sobre la superestructura y la determinación de la conciencia por parte de
aquella, además presenta una postura opuesta las anteriores y constituye
variaciones entre autores. Se puede decir de ellos que son actores
comprometidos en la trasformación de la sociedad capitalista, considerándola
injusta y alienante, ese cambio está dirigido a imponer las condiciones
necesarias para el desarrollo de una sociedad socialista, de la que se hace una
defensa dogmática.

Para el marxismo, como se desarrolla al principio del documento, el rasgo


fundamental de la vida social es el conflicto de clases, la lucha entre grupos
con intereses económicos opuestos, los capitalistas de un lado, y los
trabajadores, entonces la función de la educación es la reproducción de la
división capitalista del trabajo. Mediante esta formulación asegura la
reproducción de las condiciones objetivas, subjetivas necesarias para mantener
esa división. Este conflicto de clases, en donde cada uno vela por sus intereses,
la sociedad se organiza ideológica y políticamente; la clase dominante usa la
educación para legitimar las desigualdades sociales, el cambio educativo no es
posible sin un cambio de la estructura social; entonces las reformas educativas
destinadas a corregir las desigualdades sociales no pueden servir a ese
objetivo sino cambia previamente el sistema de relaciones de producción y la
desigualdad inherente al mismo.
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
La sociedad entendida como un conjunto de relaciones de producción,
constituyen la estructura de las sociedad. En el modo de producción capitalista,
estas relaciones se establecen entre los propietarios de los medios de
producción, los capitalistas, y el proletariado, con la fuerza de trabajo.

Por su parte la educación forma la superestructura de la sociedad, resultado de


la estructura, de las relaciones de producción. La misma constituye la manera
en la cual ideológicamente se reproduce la sociedad “la educación es a la
ideología, lo que los medios de producción son a las mercancías”. Si nos
preguntamos cual es la función de la educación, debemos responder que se
trata sencillamente de “reproducir mentalidades y conductas apropiadas para
asegurar la división social del trabajo, trasmite la ideología de la clase
dominante y legitima las desigualdades sociales”. Para cambiar las bases del
orden social existente, debemos suprimir la propiedad privada de los medios
de producción.

Autores como Baudelot y Establet en Francia, (Teoría de reproducción) Bowles


y Gintis en los EE.UU. (Teoría de correspondencia) proporcionan evidencia
empírica para probar el carácter reproductor de la escuela de las sociedades
capitalistas y la estrecha correspondencia entre las relaciones sociales del
modo de producción capitalista y las relaciones de educación, se hablara
brevemente:

La primera refiere a la reproducción de mentalidades, conductas apropiadas, es


decir, la educación es parte de la sociedad y reproduce las condiciones
sociales. Los sujetos están formados esencialmente para un propósito, ya que
el conocimiento que la educación les proveerá sumarse al capitalismo, este
sujeto es acrítico, apolítico, disciplinado como el capitalismo desea,
permitiendo una estabilidad de este último y por tanto sin correr el riego de
verse afectado.

La Teoría de correspondencia en sociología de la educación muestra a partir


de trabajo realizados en la escuela americana una estructura estratificada,
similar a las fábricas, por un lado desarrolla en los hijos de los obreros las
actitudes necesarias para ejecutar las ordenes derivadas de la jerarquía,
mientras que los miembros de las clases dominantes reciben una preparación
adecuada para impartir órdenes y desempeñarse en cargos altos. Entonces, la
división de trabajo productivo se refleja en las sociedades de autoridad
vigentes en las escuelas, por otra parte la alineación de trabajo respeto al
producto y al proceso de su trabajo tienen correspondencia en la alineación del
alumno respeto del contenido y el método de su aprendizaje, con un sistema
de recompensas. Entonces, se manifiesta en la función que cumple, por
ejemplo, las instituciones, hablamos de los maestros, ordenanzas, personal de
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
servicios generales hasta llegar al director, análogamente a una fábrica, donde
encontramos estratos que tiene que ver con el conocimiento.

En cuanto a la Teoría de la resistencia pone en énfasis lo que ocurre dentro de


las escuelas y muestra que no hay una correspondencia sencilla entre las
estructuras económicas y las instituciones educativas. Su preocupación es
descubrir la forma en que surge la hegemonía y los mecanismos mediante los
cuales ella es producida en las escuelas, las interacciones curriculares,
pedagógicas y evaluativas

Desde la perspectiva Subjetivista, el mundo social no es un mundo dado,


construido y objetivo, que se impone al ser humano, sino, que en realidad los
individuos construyen un proceso de interacción en la vida de todos los días, a
través de los significados y el sentido que los actores

atribuyen a sus acciones. Dentro de este marco se pueden ubicar distintas


miradas contemporáneas como el Interaccionismo Simbólico, con Mead, en
Chicago, que concibe a la sociedad como un conjunto de aspectos simbólicos
que son el resultado de las interacciones y comunicación entre los sujetos, ya
que el hombre es un ser maleable y está sujeto a las influencias de la sociedad
y es por medio del proceso de la socialización que el sujeto logra desarrollarse
como persona (persona-self, espíritu-mind, sociedad). Por otra parte, los seres
humanos crean, usan y responden a símbolos para organizarse en el mundo,
en este proceso implica la participación de otros, donde la persona se
constituye en objeto de pensamiento y reflexión para sí mismo, Mead dice que
el desarrollo de la persona se divide en el “yo” y el “mi”. El yo constituye el
conjunto de aspectos de la individualidad, que se incorpora del otro significante
(madre, padre, etc.) y el mi actúa como censor del yo, es el componente social
del self, esta etapa supone el aprendizaje de las expectativas y las reglas de la
sociedad, es la incorporación del otro generalizado (elementos regulatorios de
la sociedad) es el desarrollo del mind (espíritu) la capacidad para reflexionar
sobre su propia conducta. Representa la capacidad de individualizar y definir
los aspectos a los cuales puede referirse la conducta a través de los símbolos
sobre los que se funda la interacción.

Para Mead el lenguaje juega un papel fundamental en la formación del self y el


mind, es el medio por el cual los individuos pueden indicarse mutuamente
como serán sus reacciones a los objetos y atribuir significaciones.

Para este autor la comunicación simbólica es posible porque el significado de


los símbolos es compartido por los individuos socializados en un mismo
contexto.
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
El interaccionismo simbólico dice que la escuela es el escenario donde las
personas ajustan su rol y su desempeño en función del otro, la persona es un
resultado de la convivencia humana, surge de la experiencia social, del proceso
de interacción con otros, de la relación de individuos con ellos y con la
situación que se crea durante este proceso.

Otros de los enfoques contemporáneos que tienen sus auge en la década del
50` en California con H. Garfinkel, es la Etnometodología, coincide con Schutz,
que en el mundo íntersubjetivo la realidad social se construye en la experiencia
de la vida cotidiana de cada individuo, mediante la comunicación, los símbolos,
signos, instituciones sociales, y el conjunto de conocimientos preconstituidos,
de modo que existen tantas realidades sociales como miembros existen en la
sociedad.

Para los etnometodólogos el proceso de interacción es básicamente un proceso


de interpretación de significados, ya que estos no son compartidos, sino que
son negociados en el proceso de interacción. Por otra parte las modalidades de
desenvolvimiento y las características de la interacción social solo pueden ser
comprendidas dentro de un contexto en el cual se manifieste, ya que las
interacciones sociales nunca se presentan de la misma manera
(contextualidad), los actos, gestos, símbolos, frases, palabras, etc., adquieren
significados diferentes según el contexto

en el que están insertos (indexicalidad) y a través de la reflexibilidad los


individuos hacen explicables y razonables sus experiencias de todos los días
usando un conjunto de medios a partir de los cuales la comunicación es posible
(glossing).

Años más tarde tendrá lugar la Nueva Sociología de la Educación que nace en
Inglaterra, a comienzos de la década del 70`, su representante fue Michael
Young y sostiene que el aprendizaje es observado como el producto de
negociaciones entre el maestro y el alumno. No es la adquisición de
competencias o racionalidad en un sentido objetivo, sino la adquisición de un
conjunto de reglas y procedimientos para interpretar el mundo.

Según la Nueva Sociología de la Educación, las escuelas son vistas como


organizaciones donde los maestros intentan imponer a los alumnos ciertos
conocimientos, ya que los conocimientos previos son considerados
irrelevantes.

Este enfoque pone énfasis en recuperar la selección de contenidos, las


propuestas pedagógicas y la evaluación de conocimientos adquiridos.
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
El curriculum es considerado como uno de los mecanismos de distribución
social de los conocimientos. Las materias, disciplinas y programas son
conjuntos de significados que forman la base de las comprensiones
intersubjetivas del mundo de los educadores.

Toma de la Etnometodología, la Nueva Sociología de la Educación, la idea de


que todos los individuos de la sociedad tienen su propia definición de la
realidad, y que las realidades individuales son un resultado de la interpretación
que cada uno hace de sus encuentros sociales previos. Otro elemento
etnometodológico presente en la nueva sociología es la importancia asignada
al lenguaje. En lo que respecta a la educación se pone de manifiesto el
tratamiento del problema de evaluación del aprendizaje de los alumnos.

Del Interaccionismo Simbólico toma la idea de definición de la situación y el


interés por el análisis microsocial. Como los interaccionistas, los nuevos
sociólogos insisten en la naturaleza social del aprendizaje escolar y en la clase
como trabajo en grupo y sostienen que el aprendizaje no depende de las
capacidades intelectuales, sino que es un producto de las negociaciones sobre
significados entre maestros y alumnos.

A partir de todo lo antes expuesto se puede determinar a grandes rasgos, la


influencia de todas estos enfoques actuales, que como lo planteamos al
principio de su descripción, no pierden el hilo conductor de sus pilares firmes y
fundamentales, con ello estamos haciendo alusión a tres autores como Weber,
Marx, y Durkheim, sus aportes y sus distintas maneras de concebir la sociedad
han llevado a que investigadores contemporáneos, a que trabajaran, pulieran
y dieran origen al conglomerado de enfoques, por último, se plantea de
manera breve, los supuestos acerca de la naturaleza de la sociedad y la
relación de esta con el individuo, hablamos de la perspectiva subjetivista y
objetiva y como de esas fuentes ha dado lugar a una mistura, uniéndose y
dando

preeminencia a la perspectiva integradora que conserva en sus postulados


estas dos miradas en una sola.

La perspectiva objetivista: Se considera que el hombre no nace social, sino que


se hace social y que el hombre es precisamente hombre porque vive en
sociedad. Desde Durkheim la socialización implica la interiorización de pautas,
normas y valores que son propias de la sociedad, esto supone: Un individuo
pasivo en el proceso, recibe la acción que otros ejercen sobre él. Es un proceso
que da inicio desde su nacimiento y permanece toda la vida. La que trasmite la
cultura es la sociedad por medio de las generaciones adultas sobre las jóvenes.
En este sentido el individuo es sometido y determinado por su sociedad y como
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
resultado final del proceso de socialización supone la adaptación del individuo
a su sociedad.

Lo más resaltante de la concepción que realiza, es el determinismo, ya que no


podemos dejar de reconocer la enorme influencia que la sociedad tiene sobre
nuestros comportamientos, la forma en que hablamos, lo que nos gusta, lo que
queremos, lo que pensamos, lo que sentimos, concebimos a la socialización
como proceso mediante el cual el individuo es el resultado de ella, el individuo
está predispuesto a adquirir los contenidos prescriptos por la sociedad, quien a
través de su preexistencia, va a determinar su conciencia mediante la
imposición de normas, pautas y valores ya establecidos, permitiendo que la
generación adulta contribuya al proceso de integración tanto física-intelectual
como moral, a la generación joven educándola a imagen y semejanza de la
sociedad y que al trascender la conciencia individual ejerce una enorme
influencia sobre todos sus comportamientos, de este modo se determina todas
las relaciones sociales.

La perspectiva subjetivista insiste en el papel activo del sujeto, en el proceso


de socialización

Para la fenomenología, la sociedad es una construcción social que responde a


la intencionalidad del sujeto. El interaccionismo insiste en la posibilidad que
tiene el individuo de interpretar y crear significados y signos, o de dar
respuestas diferentes a la esperada

El desarrollo se produce en etapas, la primera es la imitación, la segunda es en


el juego en donde el niño actúa creativamente adoptando los roles de los otros
con conciencia de su propio Yo, en este etapa se inicia el desarrollo del niño, el
cual empieza a verse como objeto social. La tercera etapa es la del deporte,
que corresponde al verdadero desarrollo del Mi. El niño asume el rol del otro en
una situación social, el niño participa del juego organizado y sujeto a reglas, al
mismo tiempo que el niño responde a las demandas del “otro generalizado”

Sobre la base de la persona surge el espíritu o sea la inteligencia reflexiva del


hombre, esta se define como la capacidad para reflexionar sobre la propia
conducta, como así también para usar símbolos lingüísticos sobre la que se
funda la interacción.

Para Mead el lenguaje es fundamental es la formación de la persona y el


espíritu, es el medio por el cual el individuo puede indicarse mutuamente como
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
serán sus reacciones a los objetos y cuáles son los significados que se
atribuyen a esos objetos.

El proceso de socialización para Mead, es un proceso donde el individuo tiene


un papel activo: el individuo interpreta los significados de la situación que se
crea por el proceso de interacción, crea activamente sus esquemas de
respuesta y crea de esta manera la situación, no hay un determinismo cultural
y social, sino que las normas y los valores son compartidos, pero cada cual
tiene su propia interpretación de ellos.

Desde la mirada de la perspectiva integradora, el objetivismo y el subjetivismo


hacen su análisis parcial del proceso de socialización, ya que acentúan solo un
aspecto y descuidan otros, lo que determina en ambos casos afirmaciones de
verdades parciales.

La perspectiva integradora de Berger y Luckmann intenta superar estas


dicotomías, en la obra “la construcción social de la realidad” donde los autores
hacen una descripción fenomenológica de la forma en que se construye en
mundo social, integrando los puntos de vista de Durkheim, Weber y Marx, del
Interaccionismo simbólico y la Fenomenología. Para estos autores la sociedad
existe tanto como realidad objetiva como subjetiva, por lo cual, el análisis
sobre ella debe abarcar ambos aspectos.

Estos autores consideran a la sociedad como un continuo proceso dialectico


compuestos de tres momentos: externalización, objetivación e internalización.
De estos tres elementos caracterizan simultáneamente a la sociedad y a cada
sector de ella. De igual manera el miembro individual de la sociedad
externaliza simultáneamente su propio ser y el mundo social y lo internaliza
como realidad objetiva.

Para Berger y Luckman el hombre no nace social, posee tal predisposición


hacia la sociedad. Existe en la vida de todo individuo una secuencia temporal,
en el curso del cual cada uno de nosotros es inducido a participar en la
dialéctica de la sociedad “el punto de partida de este proceso lo constituye la
internalización: en la forma completa de internalización, yo no solo comprendo
los procesos subjetivos momentáneos del otro: comprendo el mundo en que él
vive, y ese mundo se vuelve mío” cuando el niño alcanza este grado de
internalización recién puede considerárselo miembro de la sociedad. A este
proceso los autores lo llaman socialización y lo definen como la inducción
amplia y coherente de un individuo en el mundo objetivo de una sociedad o en
un sector de él.

Este proceso de inducción comienza con el nacimiento y dura toda la vida: se


distinguen en el dos etapas: la socialización primaria y la socialización
secundaria
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación

Socialización primaria: el niño al nacer se encuentra con una estructura social


próxima, generalmente la familia. Se encuentra en un mundo social objetivo,
es decir una estructura social más amplia a la cual debe incorporarse, la
socialización tiene las siguientes características:

Mediatización del mundo por el otro significante: el primer contacto del niño
con lo social no se produce de manera directa. Aquí juegan un papel
importante los otros significantes, que se encargan de mediatizar el mundo
para él y lo modifican en el curso de la mediatización. El mundo aparece
filtrado.

Importancia de los factores afectivos: la socialización primaria lleva una gran


carga emocional, hay una adhesión emocional a los otros significantes y una
verdadera identificación con ellos.

Inevitabilidad del mundo social: también el niño se ve obligado a aceptar las


reglas del juego que le imponen los adultos. Por lo tanto, el mundo se presenta
a los otros significantes, es el único que existe para él, no puede concebir otro,
es el mundo

Relevancia del lenguaje: por medio del lenguaje el niño internaliza las
definiciones de la realidad que se han institucionalizado.

Definición social y condicionamiento biológico de las consecuencias de


aprendizaje: cada sociedad define que debe aprender un niño a una
determinada edad, diferencia aprendizajes de niños con el de las niñas,
además los aprendizajes dependen de cierta madurez neuromotora y
psicológica.

Formación dentro de la conciencia del otro generalizado, al comienzo el niño


asocia roles y las actitudes a la persona del otro significante, a medida que
crece los va abstrayendo hasta convertirlos en roles y actitudes en general.
Esta abstracción de roles y actitudes de otros significados se denomina otro
generalizado. Su formación en la conciencia significa que ahora el individuo se
identifica no solo con otros concretos, sino con una generalidad de otros, o sea,
con una sociedad. La socialización primaria concluye cuando el individuo ha
logrado la formación, dentro de su conciencia, del otro generalizado. A estas
alturas ya es miembro efectivo de la sociedad y está en posesión subjetiva de
un Yo y un mundo.
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
La socialización secundaria: Berger y Luckmenn la define como: la
internalización de submundos instituciones o basados sobre instituciones. El
alcance y las características de este proceso dependen de la complejidad de la
división del trabajo y la distribución que acompaña al conocimiento
especializado, “la socialización secundaria es la adquisición del conocimiento
específico de roles, estando estos directa o indirectamente arraigados en la
división del trabajo además requiere la adquisición de vocabularios especifico
de roles”

En el proceso de socialización secundaria, pierde importancia la figura del otro


significante y la carga emocional disminuye.

Las realidades que se internalizan en la socialización secundaria no son


experimentadas por el sujeto como algo familiar, para hacerlas familiares es
necesario acudir a técnicas pedagógicas. Estas técnicas permiten que los
maestros hacen que los contenidos sean vividos, relevantes interesantes.
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación

Bibliografía.

Brigido, A. (2006) – Sociología de la Educación. Edit. Brujas. Córdoba. Argentina

Giddens, A. (1993). Emile Durkheim. Escritos selectos. Ediciones Nueva Visión.


Buenos Aires

Weber, M. (1984) – Economía y sociedad. Editorial Fondo de Cultura Económica.


Buenos Aires.

Giddens, A. (1994) – El capitalismo y la moderna teoría social. Edit. Labor.


Buenos Aires.
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación

ASIGNATURA:
SOCIOLOGÍA DE
LA EDUCACIÓN
Universidad Nacional de Catamarca
Facultad de Humanidades
Prof. en Filosofía y Cs. de la Educación
DOCENTE: MGTER. MARIO ALANIS

ALUMNO: MARCIAL FERNANDO GABRIEL

M.U. N° 2819

AÑO: 2014

También podría gustarte